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Los mártires pasionistas de Daimiel fueron un grupo de sacerdotes y hermanos de

la Congregación Pasionista asesinados durante la Guerra Civil Española en la


provincia de Ciudad Real, víctimas de la violencia anticlerical.

Sucesos

A las 11:30 de la noche del 21 de julio de 1936 un grupo de anarquistas armados


rodeó el monasterio pasionista del Cristo de la Luz de Daimiel3 y obligaron a los
pasionistas a salir.4 El padre provincial, Nicéforo de Jesús y María, reunió a la
comunidad en la iglesia y después les absolvió de sus pecados y les dio la
Comunión. Los pasionistas fueron obligados a salir de la iglesia y los hombres
armados les condujeron hacia el cementerio local.3

El día siguiente, el 23 de julio de 1936, el padre Nicéforo y cuatro pasionistas más


serían fusilados en la cercana población de Manzanares. Otros siete podrían aún
sobrevivir, pero, tres meses más tarde morirían también fusilados.3 Nueve más
fueron enviados en un tren a Ciudad Real, donde fueron encarcelados acusados de
ser religiosos. Después se les llevó por las calles recibiendo burlas y siendo
apedreados por la multitud. Fueron asesinados y enterrados en una fosa común.3
Otros diez pasionistas intentaron ir hacia Madrid en tren o caminando. Éstos, en la
estación de Urda fueron forzados a bajar del tren y en la mañana del 25 de julio
asesinados a tiros.3 Dos más, Juan Pedro de San Antonio y Pablo María de San
José lograron llegar caminando a Carrión de Calatrava, en Ciudad Real, donde se
escondieron durante dos meses. Fueron descubiertos y fusilados.3

Los 26 religiosos pasionistas del convento del Santo Cristo de la Luz, Daimiel, que
dieron su vida por su fidelidad a Cristo y a la Iglesia son:

1. Nicéforo Díez Tejerina, superior provincial y que había sufrido ya persecución y


destierro en México,
2. Germán Pérez Jiménez, superior de la comunidad,
3. Juan Pedro Bengoa Aranguren, que había sufrido también persecución por la
fe en México,
4. Felipe Valcobado Granado,
5. Ildefonso García Nozal,
6. Pedro Largo Redondo
7. Justiniano Cuesta Redondo
8. Pablo María Leoz Portillo,
9. Benito Solana Ruiz,
10. Anacario Benito Lozal
11. Felipe Ruiz Fraile
12. Eufrasio de Celis Santos
13. Maurilio Macho Rodríguez,
14. Tomás Cuartero Gascón
15. José María Cuartero Gascón
16. José Estalayo García
17. José Osés Sáinz
18. Julio Mediavilla Concejero
19. Félix Ugalde Irurzun
20. José María Ruiz Martínez
21. Fulgencio Calvo Sánchez
22. Honorino Carracedo Ramos
23. Laurino Proaño Cuesta
24. Epifanio Sierra Conde
25. Abilio Ramos Ramos, y
26. Zacarías Fernández Crespo.

Pero los vencidos habían sido los vencedores. Según confesaron más tarde los
mismos asesinos, el P. Juan Pedro y el Hno. Pablo María murieron con el crucifijo
en las manos y gritando: "¡Cristo Rey!"

Otra cosa que llama la atención es el gran número de religiosos jóvenes. Dieciséis
de estos Mártires Pasionistas de Daimiel estaban en edades comprendidas entre
los 18 y los 21 años. Ojalá que su ejemplo despierte en nuestros días la conciencia
y el entusiasmo de tantos jóvenes todavía indecisos y les lleve a orientar su vida
hacia ideales altos y nobles, tal vez incluso a consagrarse como ellos a Dios en la
vida religiosa o el sacerdocio.

Estos 26 Mártires Pasionistas de Daimiel fueron beatificados por el papa Juan


Pablo II el día 1 de octubre de 1989. Sus reliquias se conservan y veneran en la
cripta del convento pasionista de Daimiel, convertido en casa de ejercicios y centro
de espiritualidad. La fiesta litúrgica se celebra el día 24 de julio.

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