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COACHING CON PNL

Guia practica para obtener lo mejor de ti mismo y de los demás

¿Cuáles son tus esperanzas de vida?

¿Qué es importante para ti?

¿Tienes todo lo que mereces?

¿Qué es posible para ti?

 Imagina un modo de explorar estas preguntas de la mano de alguien que te ayude a


realizar tus mejores sueños y a convertirse en esa persona que ha deseado ser. Eso es
el coaching

Nosotros poseemos habilidades fantásticas y siempre queremos sacar lo mejor posible de


ellas. Sentimos que nos merecemos ser felices y estamos dispuestos a invertir el tiempo, el
esfuerzo y el dinero necesario para ser mejores y obtener la satisfacción de todo lo que
hacemos.

El coach es nuestro guía en el camino para llegar a lo que queremos llegar a ser. IMÁGENES

La palabra coach procede en un principio del mundo del deporte pero en nuestros días el
coach se ha convertido en una profesión completamente nueva.

El coaching ayuda: a realizar una nueva labor, a mejorar el rendimiento de una profesión
actual o nosotros estudiantes a mejorar nuestro rendimiento, también ayudara a desarrollar
una nueva habilidad o resolver un problema. En términos generales a alcanzar una vida mejor.

1: En el mundo de los negocios , el coaching cobra cada vez cobra, mas importancia por tres
razones.

A) Las empresas se están dando cuenta de que el único modo de mantener a sus
colaboradores consiste en invertir en ellos y en facilitar su desarrollo.
B) Poner al coaching al servicio de los empleados clave constituye la mejor utilización
posible de los recursos de la empresa., puesto que los aplica justo donde necesitan.
C) QUE SE CONSTANTE Y RUTINARIO SINO EL COMPORTAMIENTO SE PIERDE.

PNL
Plan de acción
Para generar cambios en las personas.
Cambiando el programa cambia uno mismo.
Como hablan de lo que se puede hacer o no de lo bueno lo malo y todo se instala en
nostros y lo expresams.
Lenguaje digital y analógico. Y el uso que hacemos de el.
Da una estructura practica y paso a paso para lograr la transformación efectiva que crea
resultados en el ahora y para el futuro.
He tenido un sueño.
Joseph y yo nos encontramos en un gran espacio llano, rodeados por un enorme y
majestuoso edificio cuyas múltiples ventanas parecen atisbarnos de todas las
direcciones. El edificio parece vacío y carente de vida. A medida que avanzamos,
nuestros pasos despiertan el eco en los corredores de altas paredes.
Nos resulta fácil percibir el cielo allá en las altura, tan alto y sobrecogedor es este
edificio. Nunca el cielo nos había parecido tan lejano, distante y remoto.
De vez en cuando la brisa trae el rumor de risas lejanas y sabemos que a pesar de las
apariencias, en algún lugar, más allá del edificio, hay personas moviéndose y
hablando.
Seguimos andando y andando, pero el escenario que nos rodea parece no cambiar
¡Qué lugar más aburrido!- pensamos, y nos preguntamos por el modo de salir de allí.

Llevamos ya mucho tiempo aquí abajo, y comenzamos a preguntarnos cómo podemos


subir a la parte alta del edificio para tener mejor vista. Queremos estar más cerca del
cielo. Suponemos que en algún lugar debe de haber una escalera que nos conduzca
arriba., pero parece que vamos a tener que recorrer todo el edificio para encontrarlas.
Eso va a llevarnos mucho, mucho tiempo, y no sabemos por dónde empezar. No hay
un modo de encontrar el camino dentro de ese edificio.

Empieza a soplar un viento más frío. Atrapada en un laberinto de sombras, la luz del
sol no llega hasta nosotros.
Cuando cae la noche y el lugar se torna oscuro y gélido decidimos movernos.

De repente, una mujer joven aparece ante nosotros. Lleva un vestido largo y su
melena castaña le llega a la cintura. Su mano derecha sostiene una pequeña lámpara
de aceite, cuya llama arroja largas sombras que se mueven como dotadas de vida
propia, mientras las demás sombrar permanecen quietas y muertas.
La joven mujer anda despacio hacia nosotros, se queda mirándonos fijamente, y por
fin nos pregunta:

-¿Qué estáis buscando?


“Podemos confiar en ella”- Nos preguntamos ¿Podemos decirle que queremos? ¿Para
qué quiere saberlo? Ni siquiera la conocemos. Aunque después de todo ¿Por qué no?

-Queremos ir a la parte superior del edificio- Le digo, señalando al lugar al que


queremos llegar.
- Muy bien- Responde- Os ayudaré, pero tenéis que tener cuidado. Hay muchos
peligros.

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