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44 ve some escorts HOYT, KB; SHILO, KR, (1987): Carer Education in transition. Trends future Columbus, Estados Unidos. Ohio State University. Defincién sobre la aparicién del nuevo paradiginateGrico de la o cexplica el conceptoy la sgnifcativcad de la educacign para la ca Acerca de la autora Remet Grau Pilar Sanlorien (psanlorien @campus:uoc.es). Licenciada en Fil de Ta Educaci6n, seccién Psicologia, por la Universidad de Bag baja como asesora psicopedagégica en el EAP del Departament de Ia Generalitat de Catalunya desde el afio 1984. Ha colaba UOG (Universitat Oberta de Catalanya) y con el ICE de la Unt Barcelona como formadora del prefesorad, asi como con el pig tament d'Educaci6. Es master en Int P. 6 tervencién Psicopedagégica iento Curricular, y pose la habiftacién como mediadors bs Cotegio Oficial de Psicologos de Catal Piel asesoramiento psicopedagégico presenta mitiples facetas y permé Bistintos niveles y formas de colaboracién con los centros educativos Ppitulo se ofvece una aproximaci6n al asesoramiento a través de progr: F una forma especifica ~compatible con otras~ de organizar y ejercer la ora, Se intenta delimitar conceptualmente, dentro de 1o posible, este ritica, as earacteristicas que la configura, y las diferencias con otras mo- Hs de intervenci6n. Se muestran distintos ericerios y posibilidades para I cla ide programas, y se comentan las distintasfases en que éstos se desarrollan Pinar analizando los principales beneficios que aporta esta modalidad, asi fcondicionantes que la limitan. Flom cducativial paychologists takes many Zorms and allows many different forms of collaboration between educational institutions to be established. per takes a look at giving such advice through programmes as a specific (al- hot exclusive) way of organising and carrying out this advisory funetion, We Priceptual overview of this practice, including its defining characteristics and {it apart from other forms of intervention. We also give criteria and diffe- ods for classifying programmes and cons der the different phases of these mes. We finish by analysing the main benefits offered by this advice, as well Gsesoramiento psicopedagogico a través de programas: plo y caracteristicas Bde los rasgos que caracterizan la prictica del asesoramiento psicope- -s, sin duda alguna, su grado de complejidad. Prueba de ello la mos en las multiples y variadas categorizaciones a que ha dado lugar 446 Asa assem esonaetoce dicha préctica a lo largo de su trayectoria, en lo referente a los ¢ a veces contrapuestas- modelos 0 enfoques que intentan defini cos, de consulta, de servicios, de programas, humanistas, conduigl Estas distintas denominaciones no siempre corresponden a modd mente predlefinidos: en muchos casos se refieren ms bien a enfogg cluso matices, incluidos dentro de un modelo més amplio, qi generado o han ido evohucionande a tenor de los avances de la Bi a su vez sujeta -y por lo tanto sersible~ a los cambios que la misma va experimentando. Dicha evolucién no es de ningiin modo ajena a la reflexion 4g de los propios profesionales ~psicopedagogos en general, y asesorg pedagégicos en particular-, tanto en relacién con la especialidg misma como sobre el sentido, el lugar y la funcién del asesor psi gico en el marco educativo. Es una realidad constatada su esfucrz6) fe para construir y consolidar una teorfa y una pri calidad, y reducir al propio tiempo su nivel de indefinicion, otra del racteristicas que, junto con la complejidad antes aludida, suelen, ar todavia esta profesi6n. Dentro de este panorama, @iReSinIeH |psieoSEeaw Sue de programas, més que un modelo (concepto a menudo ambiguo, menos dificil de delimitar) (SGU eonSi¢ Erase eomve aod forma conereta de organizar la intervenci6n asesora, Alyuinos 41101 ascoramieno @tendide como Sha inteeticién dé earéctee itl SINGGABUBRORASTEED) por contraposicién al modelo clinico (dl Ter directo e mvidualizado y con finalidades diagndticas 0 erapél Desde una perspectiva de enfoques psicopedagégicos, un asesoranil través de programas tambien se puede identifcar, a nuestro jul conceptos como enfogu educaionaio tambien enfoque interaction (Sl Tomina, 1999; Monereo y Sole, 1696) por la importancia que se tanto los procesos de ensefianzaaprendizaje como al contextod tervencién, Categorias al margen, lo que s'se hace patente de esta modal intervencién psicopedagégica es que conatituye tuna préctica a tinta aunque en absoluto contrapuesa, sino complementaria~ ala produce para casos individuales, le cual constituye el tipo de inte fon la que mas se ha identificado ~y se identifica todavia- la pri sesoramiento psicopedagégico. E)EOREE BES eeieionalisels atender las demandas del profesorado con relacién a determinad hos o alumnas que presentan algsn tipo de difcultad o necesidad va (difcultades de aprendizaje, problemas de conducts.) y suelé también una respuesta individualirada, en fancién del problema lor Fs evident que eta espurestr sere ansInts sept se de aeseOm aststameo ruts asus nico, centrado en el déficit y en elalumno, 0 mas psicopedag6- fesde la perspectiva del contexto y sus interacciones, En cualquier prigen sigue siendo una demanda para un caso individual, aunque jvar -y de hecho sucede~ en un programa, sise dan las circuns- wwosables para cllo. En cambio (ialistsrveneion la] Waves ae\proge fspone, por definicién, una actuaci6n de cardcter global. ta y otras particularidades que la identifican, Bs destacar dos cuestiones relacionadas con esta modalidad aseso- Bfimera es la constatacién de que, en las tiltimas décadas, se ha ralizando y forjandose un lugar dentro de la practica psicope- ‘Y la segunda cuestién es que, en general, se le atribuye un gran Bl como instrumento de ayuda a los centros educativos. jotivo de esta relevancia reside fundamentalmente en que la aten- ‘casos individuales, por sf sola, se demuestra insuficiente para dar faa las miltiples necesidades de asesoramiento y orientaci6n que los bs educativos precisan. La intervencién a través de programas, en cam- falincidir en la globalidad de los alumnos, incide también ~y quizas es- B mentc— en aquellos que presentan necesidades educativas especiales. s pues, admitiendo que siempre habré alumnos y alumnas que pre: gin. una intervenciGn de cardcter individual, nos encontramos ante dos fidades de asesoramiento psicopedagdgico que no s6lo no se exclu- ino que se pueden complementar muy bien. En algunas ocasiones, in- fe dan procesos de reconversi6n: existen numerosas experiencias en Bie una demanda, en principio relacionada con un caso individual, ha Ido en el desarrollo de un programa cuando, analizado el caso y la si- Biiplanteada, se ha visto la necesidad o la conveniencia de generalizar xra particularidad, pues, del asesoramiento a través de programas (0 ya hemos apuntado, en que tiene una finalidad grupal y no grantee se Interviene ton un grupo de docentes- (clrtstro, sutico. Hay que sefialar, sin embargo, que no en toda intervencién se dan los elementos 0 condiciones para poderla considerar un ‘4, por otro lado, esta modalidad posee otros elementos que la ca an y que son los que intentaremos desarrollar aqui, Para empezar, partimos de la constatacidn de que tanto el concepto de Frama como la intervencién por programas pueden resultar dificiles jitar de una forma precisa, En la bibliograffa consultada al respec- a7 hua a sist rsa to aparecen elementos coincidentes y otros en los que cada autor ¢ su concepciGn particular sobre el tema, Veamos algunas de las ide, nos pueden ofrecer una aproximacién a esta definicién conceptual Alvarez Rojo y Hernindez (1998) describen el concepto d deran que puede abarcar cualquier plantcamiento de intervene debe camper exeedhe peep. ud cb tenar cn contenidos explicitos y coherentes tanto con las necenidades de Yq natarios como con el contesto en el que se va a demarollan, Adc Cee aoiy raspy ehehdineomeny roma, elemento de desarrollo profesional para los que la aplican, en la med que aumenta su efectividad y favorece su competencia profesional, recta. Ahi aparece ya un concepto -la planificacién= que es una const en todas las definiciones consultadas. sf pues, junto con la consideracidn de su caricter global y de nalidad basicamente preventiva, la planificacién de la tarca constitye J de los rasgos esenciales que definen cl concepto de programa (Alar Bisquerra, 1996). Finalmente, otra caracteristica con la que existe l acuerdo es la de considerar este ipo de intervencidn como un proces algunas cuestiones relativas a los distintos tipos de programas que deen llevar a la practica en los centros educativos, asi como algunos crite sobre una posible clasificacién, Tipos y ejemplos de programas Las posibilidades de la intervencién psicopedagégica através de progra son tantas y tan diversas como lo es la intervencidn psicopedagégica en ge neral. Por ¢50, los intentos de clasificar de alguna forma los programa lugar a maltiptes criterios, muchas veces entrelazados, y su categorizad sera una u otray probablemente todas igualmente validas~ on funcin dé criterio que se utilice. Veamos algunos ejemplos de estas posibles mané de agruparlos: tse 4s aca B se pueden on ol cual se Fallon vinculados, Por ejemplo, mediante un programa destinado a Br, mejora de algiin rea especitica de aprendizaje (lenguale, mate- Fratiem.) se colabora con el proyecto curricular de un centro. Si, Bn cambio, se tabaja con los docentesun programa sobre cémo tr far in relacion familiescucla, ve esta interviniendo en el marco de su proyecto educativo, (wa posibl fonientaciOn, acciOn tuforial, habltos de autonomfa, ERIE conticwn, relaciones frmiiaescucla, ene oes femas, en los cuales un asesor pslcopedagégico tiene mucho que Boortar por su formacién espectfic ‘Timien so agrapales por dbs de acta Para ilustrar esta Tasiicacion povemos recurs ix perewen de los cquipos de asc- oramiento psicopedagégico de Calaua (EAP) a los cuales se les atrbuyen tres mbites capecificos de intervencion; alummos y fan ctor. Aungue ~como se puede deduce persona: pais sdacaivaricun grupo a ‘primer émbito; un programa destinado a la mejora tutorial o del aprendizaje de la lengua escrta, dentro del se gundo.y en el tercer émbito podriamos incluir un programa ditigi- do a los maestros de educacion especial de la zona, para trabajar algiin tema relacionado con su compstencia profesional Podemos basarnos también en el ongen dela indervencion: mn rO- grama puede partir de una propucats del sscror 0 aacsora, 0 er fruto de una demana de fos destination, Tambten exten pro" ramas promovidoe ~o prescritos~por la Administracion educativa; Gras veces se aplican de forma colaborativa programas de tipo co- ‘unitario en los que, ademis de los cenros educativos, participan insttaciones no propiamente escolars. Un ejemplo de ello son los programas derivados de las Hamadasinteroencionesen red en Tas qe fervicios de distintos ambitos profesionales (educativo, social, sani taro.,) relacionados con la infancia y la adolescencia se unen con «1 propésito de abordar preventivamente y de forma programada temas de interés para los alumnos y sus familias como pueden ser: Prevencién de trastornos alimentarios, programas de acogida de la poblacion inmigrante, programas éestinados a padres, etc. Sin dda, el progresivo aumento de este tipo de intervenciones se debe a las problematicas cada ver mis complejas~¥ eon frecuencia mu ticausales- que afforan en los centres educativos, las cuales, en la medida en que trascienden el marco escola, exigen también un abordaje interdisciplinario, Como es logic, la gestion de dichos 49

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