Está en la página 1de 3

Filosofía del amor

3er Parcial

Eros y Philia:

Eros: locura pasional momentánea, que tiende a evadirse una vez consumado el deseo, y esa
locura, que bloquea nuestra "sensata voluntad", puede llevar al desastre absoluto. Es el amor
erótico, la pasión, el amor más instintivo, conectado con la biología, los impulsos, la
sexualidad, la sensualidad, que busca el placer y el juego

Philia: Lejos de la sensualidad del eros, es el amor valorativo, el encuentro donde se da una
admiración mutua, un amor que comparte ideales, valores, que busca un sentido más allá de la
mera satisfacción individual o de la pareja. Es un amor donde hay un caminar juntos por algo
más grande, más total, más sagrado. También aparece como el amor hacia los amigos; su
traducción directa es "amistad". Este término lo vemos más tratado en Aristóteles, en su
obra Ética a Nicomaco. En pocas palabras, el filósofo defiende la importancia de este amor
para el hombre, tanto a nivel personal como a nivel político.

Agape: es el amor cuidado, ternura, el amor compasivo que da, es la entrega amorosa, la
sensibilidad, el encuentro desde la ternura y el deseo de bienestar del/la otro/a.

No hay un amor mejor o superior al otro…Todos tienen que ver con nuestra humanidad, desde
nuestra dimensión más física y biológica a la más espiritual y sutil. Son expresiones profundas
del ser. Si nos apegamos a una forma y no desarrollamos las otras, la experiencia amorosa se
empobrece, estamos limitando una parte de nosotros. Para amar con toda nuestra
“humanidad”, tenemos que mirarnos y aprender allí donde estamos débiles. Solo el equilibrio
de estos tres amores nos permitirá amar de verdad, en libertad, sin miedo y hacer de la
experiencia amorosa un “amor” donde recuperemos esa capacidad genuina y completa de
amar que está en cada uno de nosotros

1. Lectura: Nussbaum – Repugnancia e Indignación

- La autora investiga en esta obra el papel que juegan emociones como, la repugnancia o
la vergüenza, en la formulación y en la administración de la ley.
- Toma como punto de apoyo para sus análisis el hecho, resaltado por Rousseau, de que
nuestra inseguridad y nuestra vulnerabilidad están antropológicamente acopladas a
nuestra sociabilidad; y, en consecuencia, se justifica nuestra propensión a establecer
vínculos emocionales. Las emociones constituyen recordatorios de la condición común
de humanidad.
- La autora demuestra a lo largo del libro que las emociones no son irracionales, sino
que se encuentran atadas al pensamiento, especialmente a aquellos que versan sobre
lo que más importa en el mundo. Sin ellas, es imposible establecer la estructura
axiológica de la convivencia, o justificar y aplicar la ley, están embutidas en el criterio
moral.
- Repugnancia: Emoción visceral que involucra reacciones físicas a estímulos que tienen,
a menudo, marcadas características corporales. (ejemplo: búsqueda de privacidad al
orinar, o leyes contra la obscenidad) No puede formar base de una argumentación
legal. Si está tan presente, debería ser usada en contra de problemas como sexismo,
racismo, entre otras.
- Indignación: tiene una función constructiva ya que lleva el reconocimiento de que
alguien ha sufrido una injusticia y no debería haberla sufrido.
- En cuanto a la discriminación a partir de la repugnancia, un ejemplo serían los
alemanes y los judíos. Los alemanes crearon un pensamiento de superioridad a partir
de su desprecio a los judíos.

2. Lectura: Resistencia de lo íntimo


- El resistente no anhela el dominio, ni la colonización, ni el poder. Quiere, ante todo, no
perderse a sí mismo pero, de manera muy especial, servir a los demás. Esto no debe
confundirse con la protesta fácil y tópica; la resistencia suele ser discreta
- El mortal debe resistir, aunque sea provisionalmente. […] todo está destinado a
desaparecer; a quedar disuelto por el paso implacable del tiempo y a hundirse en la
oscuridad.
- la resistencia lo es frente al cúmulo de fuerzas (físicas, intelectuales, políticas,
morales…) que asedian nuestra integridad en un afán sostenido de disolución y
exterminio, de allanamiento y barrido de las diferencias que sobresalen, ese relieve
humano (físico, intelectual, político, moral…) que es el hermoso fruto del desarrollo en
libertad, del ejercicio del pensamiento y de la palabra próxima.
- La fortaleza del resistente proviene de su ser más hondo», resume Esquirol, y precisa
a continuación: «La memoria y la imaginación (el trabajo de las ideas) son las mejores
armas del resistente
- La resistencia es íntima pero no narcisista (como sí lo es el poder al que se enfrenta).
El resistente no se aísla ni se desentiende: se hace más fuerte y así más útil a su
comunidad. En esa fortaleza que es la intimidad, se cultivan la confianza en uno
mismo, la autoconciencia y el autocuidado, la responsabilidad y también el autocontrol.
Y de esa gimnasia interior (íntima, mucho mejor), bien musculado en esas espalderas,
el resistente sale y actúa, emprende o continúa o vuelve a empezar, una y otra vez; y
comparte, cuida y ayuda, lucha y suma y sigue.

3. Lectura: Envejecer con sentido – Nussbaum:


- Tomado de la ópera de El caballero de la rosa (Strauss), una mujer madura renuncia al
amor de un joven y, en definitiva, a cualquier tipo de satisfacción amorosa y sexual,
porque, en resumen, “ya no está en la edad”.
- La comparación entre amores jóvenes, con Romeo y Julieta, y maduros, con Antonio y
Cleopatra, no deja lugar a la duda: la capacidad de amar mejora con la edad.
- El cuerpo sólo es una forma atractiva. El desconocimiento de la totalidad entorpece
una relación erótica satisfactoria y su mantenimiento es la causa de rupturas en la
edad adulta. En cambio: “Antonio y Cleopatra transfiguran el mundo desde el interior,
haciendo de la experiencia algo más vívido, divertido y sorprendente” (p. 218).
- El amor en una mujer madura trae o puede traer consigo una percepción del tiempo
que transforma los cuerpos de los amantes en realidades concretas y no en ideales
imaginarios, y esto es profundamente satisfactorio en muchos sentidos, pues implica la
aceptación de una misma y de su propia finitud, así como la del amante (de cualquier
edad. (p. 219)
- Levmore añade el un matiz socioeconómico, y nos dice que las mayores diferencias de
edad, en favor del varón, se producen sobre todo en segundas y terceras nupcias, al
tiempo que los ingresos y la posición ascienden. Recuerdo el chiste: muchos hombres
deben su éxito a su primera esposa, y su segunda esposa a su éxito.
- Nussbaum no desatiende la reducción de las capacidades físicas producidas por la
edad, pero resalta la idea, ya mencionada por Cicerón, de que la disminución es menor
si el mayor se sigue ejercitando, y prácticamente inexistente en el ámbito intelectual.
- A diferencia del progreso de la infancia, que, aunque no es plenamente uniforme, el
progreso del envejecimiento es increíblemente variable entre individuos y muy
diferente en lo que atañe a los diversos aspectos de la vida humana (p.157).

También podría gustarte