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Comentarios al primer Informe anual del Consejo

de Evaluación del Sistema de Educación Pública1


23 de abril de 2019

Síntesis
El presente documento fue solicitado por la Fundación Horizonte Ciudadano con el objetivo de
nutrir el debate y reflexión sobre la construcción de la Nueva Educación Pública. Su contenido
corresponde a un conjunto de comentarios al primer informe anual elaborado por el Consejo de
Evaluación 2 creado para hacer seguimiento a la puesta en marcha del Sistema de Educación Pública
establecido en virtud de la ley n°21.040.

Este Informe da cumplimiento a un hito fundamental de la ley,3 dejando establecido, por un lado,
que la implementación del Sistema de Educación Pública se inició y es una realidad; y, por otro lado,
que se trata de una política pública concreta que debiera ir perfeccionándose a medida que se
despliega gradualmente su puesta en marcha. Asimismo, al ser este el primer Informe de su tipo,
resulta esperable y deseable que pueda admitir perfeccionamientos y complementos, en especial
con miras a sus versiones posteriores y al informe de evaluación de medio término que este mismo
Consejo deberá presentar en 2021, conforme al mandato de la ley.

El Informe realiza una acabada descripción del proceso de puesta en marcha de los cuatro primeros
Servicios Locales de Educación Pública del país, entregando un conjunto de información valiosa
referida a la magnitud y a las principales características del proceso de traspaso desde la educación
municipal al nuevo Sistema, evidenciando, en lo sustantivo, cómo dicho proceso transcurrió durante
el periodo que aborda (noviembre de 2017 a diciembre de 2018). No obstante, y desde una
perspectiva constructiva, cabe destacar que, entre sus deficiencias más importantes, este primer
Informe no logra relevar la puesta en marcha del Sistema de Educación Pública como una de las
mayores y más complejas transformaciones realizadas en Chile, no sólo en el sistema educacional,
sino que en el sector público en su conjunto. Llama la atención que no existan referencias a las
implicancias que tiene para el Estado y para las políticas públicas una transformación de esta
envergadura. Entre otros, no se considera el enorme desafío que implica desarrollar las
competencias y capacidades que requiere el sistema en construcción, ni se hace mención del cambio
que implica para los trabajadores y trabajadoras del área educación de los municipios, pasar a ser
funcionarios de servicios públicos descentralizados y especializados. Tampoco se alude a las
responsabilidades del Sistema (en especial de su Dirección nacional) para el resguardo de los

1 El presente documento comenta el informe que este Consejo entregó al Presidente de la República a fines de enero de
2018 y ha sido elaborado por especial encargo de la Fundación Horizonte Ciudadano. Su confección estuvo a cargo de
profesionales especialistas en políticas públicas y educacionales y que ejercieron cargos directivos tanto en el Ministerio
de Educación como en la Dirección de Educación Pública hasta el año 2018. Su propósito es aportar a la reflexión, debate
y seguimiento de una de las reformas educacionales y políticas públicas de Estado más relevantes de los últimos años,
aportando elementos factuales y análisis para enriquecer el debate técnico y político sobre su implementación.
2 Formalmente el documento publicado por el Ministerio de Educación se denomina “Informe Anual de Seguimiento de la

Puesta en Marcha del Sistema de Educación Pública. Año 2018” y se puede descargar en:
http://www.educacionpublica.cl/wp-content/uploads/2019/03/Informe-Anual-Consejo-Evaluaci%C3%B3n-del-Sistema-
de-Educaci%C3%B3n-P%C3%BAblica_2018.pdf.
3 Otro hito lo constituye la cuenta pública de la Ministra de Educación ante las Comisiones de Educación de la Cámara y

del Senado reunidas (18 de marzo de 2019), de acuerdo con el mecanismo establecido en la misma ley.

1
derechos de los trabajadores en el marco de los traspasos; para el correcto cumplimiento y pago de
las diferentes leyes de incentivo al retiro para docentes y asistentes de la educación; ni para la
implementación de nuevas leyes del sector (por ejemplo: estatuto de los asistentes de la educación
o reconocimiento oficial de jardines infantiles y salas cuna); entre otros.

Por otra parte, el Informe no considera ni el contenido ni el potencial de diferentes desarrollos


llevados a cabo durante el periodo abarcado, los que, sin embargo, se relacionan en varios casos
con las recomendaciones que realiza, relevando las oportunidades de mejoramiento de los
resultados educativos y la gestión educacional que ofrece la reforma, además de guardar directa
relación con la planificación estratégica vigente en los cinco servicios implementados en 2018
(cuatro Servicios Locales y una Dirección nacional). Destacan en estas omisiones las elaboraciones
referidas a: objetivos de calidad que guían al Sistema de acuerdo a los principios y definiciones de
la ley n°21.040 (por ejemplo, logros de aprendizaje integral, trayectorias educativas y ejes sistémicos
de profesionalización y mejoramiento permanente); Plan Nacional de Infraestructura y
Equipamiento; diseño de protocolos de articulación con los organismos del Sistema de
Aseguramiento de la Calidad (SAC); modelo de articulación con el intersector; estudio de
sustentabilidad financiera del Sistema; orientaciones y acciones para asegurar la participación de
las comunidades educativas y locales; variadas herramientas de apoyo a la labor técnico-pedagógica
de los Servicios Locales; estudios sobre línea base y de seguimiento a la implementación temprana;
entre otros.

En un plano general, es notorio en el Informe la ausencia de una visión sistémica que aborde el
conjunto de la nueva institucionalidad y su implementación, incluyendo sus dinámicas, niveles e
interrelaciones. Esto resulta ser relevante en atención a la envergadura y complejidad del cambio
en curso, a sus gradualidades y al rol que en este les cabe a diferentes instituciones del Estado,
empezando por el propio Ministerio de Educación.

Las recomendaciones que se realizan, si bien son muy pertinentes, al ser de carácter general no
orientan la decisión y acción política del Ejecutivo. Tampoco dan señales precisas sobre las áreas
de mejoramiento necesarias, pues no se identifican ni problematizan las lecciones y aprendizajes
del 2018 que resultarían útiles para la puesta en marcha de los siete Servicios Locales que deben
crearse próximamente, ni se logra visualizar el continuo de la implementación. El plan de trabajo
enunciado para 2019 solo entrega algunos lineamientos gruesos y no permite identificar cuáles
serán los indicadores de proceso e implementación que el Consejo va a monitorear ni cómo se
levantará información cualitativa y cuantitativa. Dicho plan tampoco señala el rol de la Dirección de
Educación Pública (DEP) en tanto secretaria técnica del Consejo ni cuáles serán los estudios que se
priorizarán en 2019; tampoco los soportes que se requieren desde las instituciones del SAC o desde
otras reparticiones como JUNAEB, Servicio Civil o DIPRES.

Por otro lado, omisiones como la referida al uso de una línea base y de una caracterización de la
diversidad de realidades que heredan y enfrentan los Servicios Locales, impiden visualizar cómo
se avanzará en la elaboración del informe de evaluación intermedia del año 2021. La ausencia de un
plan de trabajo explícito del Consejo levanta la alerta sobre la exhaustividad y profundidad que se
espera para dicho informe, acorde a la implementación de una ley tan compleja como esta.

Por su parte, la función de la DEP como secretaría ejecutiva no aparece claramente establecida,
pudiendo entenderse que el Consejo no tuvo a la vista toda la información disponible en relación
con el proceso de implementación y a los avances y proyecciones realizados en 2018. Tampoco

2
habría podido sopesar los riesgos y dificultades adicionales que abrió la etapa de subrogancias en
los diferentes niveles y jefaturas del Sistema a partir del 29 de noviembre de 2018, 4 siendo de
público conocimiento las dificultades que, a la fecha y en el marco del inicio del año escolar 2019,
están enfrentando los Servicios Locales.5

En ese contexto, parece recomendable que el Consejo pueda analizar el carácter y rol que le cabe,
así como el alcance de su mandato y las condiciones que se requieren para garantizar su trabajo.
Entre otros, pareciera necesario lograr claridad en los roles y personas del equipo de contraparte
técnica (tanto de la Dirección de Educación Pública como de la Subsecretaría de Educación); la
asignación de recursos humanos y de funcionamiento;6 la definición de un presupuesto para
encargar estudios, consultorías u otros; y, la definición de mecanismos que aseguren que el Consejo
pueda conocer y escuchar con detenimiento a todos los actores del Sistema, así como a otros
actores relevantes en el proceso (jefaturas de otros servicios públicos y ministerios, por ejemplo).

I. Contexto general
El Consejo de Evaluación del Sistema de Educación Pública (en adelante también “el Consejo”) se
encuentra establecido en el artículo séptimo transitorio de la ley N° 21.040, y a través del D.S. N°104
de 2018, del Ministerio de Educación. En dicho artículo, la ley define como objeto específico de este
Consejo el de: “Asesorar al Presidente de la República en la evaluación y análisis del proceso de
implementación de los Servicios Locales.”, precisándose que, “A fin de dar cumplimiento adecuado
a esta tarea, entregará un informe anual de seguimiento de la puesta en marcha del Sistema de
Educación Pública, debiendo presentar, en el año 2021, una evaluación intermedia de este
proceso.”. Por su parte, el inciso quinto del mismo artículo enumera una serie de materias en las
que el Consejo puede entregar recomendaciones al Presidente. Todas ellas están siempre referidas
a la correcta instalación del nuevo sistema, ante posibles problemas de implementación, o bien
están destinadas a su perfeccionamiento.

Siguiendo lo que establece la ley, el Consejo es presidido por el Subsecretario de Educación, señor
Raúl Figueroa, y, a la fecha está integrado, además —de forma ad-honorem y al menos hasta 2021—
, por las señoras Susana Claro y Teresa Florez, y los señores Jorge Barrera, Cristian Bellei, Aldo
Casinelli y Omar Jara. Su constitución data de fines de septiembre de 2018 7 y las funciones de

4 Esta etapa de subrogancias llegaría a su fin el 23 de abril para dos de los cuatro Servicios Locales (Barrancas y Huasco).
5 Ver, por ejemplo, http://tv.senado.cl/tvsenado/comisiones/permanentes/educacion-y-cultura/comision-de-educacion-
y-cultura/2019-04-14/221958.html
6 Entre otros, a manera de ejemplo, la facilitación de viáticos y pasajes que aseguren una participación activa de aquellos

consejeros que viven en regiones distintas a la Metropolitana.


7 La publicación del D.S. N°104 que crea el Consejo y establece sus funciones y atribuciones data del 7 de junio de 2018;

mientras que el D.S. N°279 del 27 de septiembre de 2018 designa a sus integrantes. La tramitación de este último culminó
con su publicación el pasado 13 de abril de 2019 (https://www.leychile.cl/Navegar?idNorma=1130482), señalando la
Contraloría General de la República (CGR) diferentes aspectos formales del mismo y, estableciendo la inhabilidad que
cabría para el ejercicio de la consejera Susana Claro a partir de la fecha en que asumió como integrante del Consejo de la
Agencia de Calidad de la Educación (26 de octubre de 2018). A la fecha no se sabe si el Consejo se ha vuelto a reunir
después de enero 2019 ni tampoco se sabe qué determinación adoptará el Gobierno ante la inhabilidad señalada por la
CGR.

3
secretaría ejecutiva del mismo recaen en la Dirección de Educación Pública (en adelante también
“la DEP”), específicamente en su máxima autoridad.
Este primer informe anual del Consejo de Evaluación abarca el periodo comprendido entre el 24 de
noviembre de 2017 y el 31 de diciembre de 2018 y fue entregado el 31 de enero de 2019 al
Presidente de la República. De acuerdo con el artículo 4 del D.S. N°104, este informe debe integrar
información y análisis de la gestión realizada por los integrantes del Sistema de Educación Pública
(en adelante también “el Sistema”) respecto al diseño institucional, así como las limitaciones
detectadas en su instalación y puesta en marcha. En esa línea, debiera considerar a lo menos los
siguientes hitos: implementación general de la Ley Nº21.040 del 24 de noviembre de 2017;
nombramiento anticipado de cinco Directores de servicio (desde el 29 de noviembre de 2017 y por
el plazo de un año); puesta en marcha de la Dirección de Educación Pública (18 de enero de 2018);
puesta en marcha de los Servicios Locales de Educación Pública (SLEP) de Barrancas y Puerto
Cordillera (1 de marzo de 2018) y de los SLEP de Huasco y Costa Araucanía (1 de julio de 2018); así
como: la conformación de los Comités Directivos Locales de estos cuatro primeros SLEP; la
presentación de los Planes Anuales correspondientes al año 2019 de cada SLEP ante dichos Comités
y ante la DEP; la puesta en práctica de Planes y Convenios de Transición con los municipios que
traspasarán el servicio educativo en los años 2020 y 2021; entre otros temas.

El presente documento de comentarios pretende relevar aspectos que el Informe en comento pudo
haber integrado en su confección de manera a profundizar su análisis y su labor de asesoría para el
mejor desarrollo de la política pública contenida en la ley N°21.040. Tal como se ha señalado, lo
anterior no contradice la valoración respecto de la existencia misma del Informe —muestra de un
proceso en marcha— ni del tiempo dedicado por los Consejeros a dicha labor en un contexto
acotado de pocas semanas y frente a una gran vastedad de ámbitos e información.

II. Comentarios generales


El Informe del Consejo cumple con la formalidad establecida en la ley y el correspondiente
reglamento. En sus primeros cuatro apartados entrega una descripción de la ley n°21.040 y de los
procesos asociados a su puesta en marcha, con especial énfasis en la instalación de los Servicios
Locales de Educación Pública (en adelante también “SLEP” o “Servicios Locales”). Globalmente, el
Informe da cuenta de una implementación que, pese a contar con plazos acotados durante el año
2018, pudo efectivamente materializarse, avanzando en el cumplimiento de los diferentes hitos,
mandatos y propósitos de la ley. De manera concreta, se establece que el Sistema de Educación
Pública logra iniciar su existencia y funcionamiento en cuatro territorios correspondientes a cuatro
regiones del país, proceso que habría ocurrido sin mayores contratiempos ni crisis desde el punto
de vista de la continuidad del servicio educativo y del resguardo de los derechos de los trabajadores
involucrados en los traspasos que la ley obliga. Por último, en su apartado número cinco, el Informe
plantea recomendaciones generales respecto de la implementación, y en el número seis y final, el
Consejo esboza sus lineamientos de trabajo para el año en curso.

Sin perjuicio de lo anterior, y en relación con los contenidos mismos del Informe y a la visión que
establece respecto a la puesta en marcha del Sistema de Educación Pública se detectan un conjunto
de aspectos relevantes no profundizados, así como algunas omisiones importantes, sin que sea
posible para todos los casos distinguir si el Consejo pudo tener o no a la vista tales contenidos y
elementos de análisis.

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En ese sentido, las deficiencias más importantes del Informe dicen relación con las siguientes tres
dimensiones:

1. Ausencia de una visión integral e integrada del Sistema en tanto tal y en proceso de
implementación, es decir, de una visión como sistema en sí mismo y a la vez como conjunto de
relaciones, espacios de participación y organismos articulados que deben insertarse en el Estado
y en el sector educación del país.

2. Ausencia de una visión referida al diagnóstico y proyecciones del servicio educativo


traspasado, considerando las diferencias entre territorios desde su complejidad específica, y
el cómo eso ayuda o dificulta la consolidación de un mejor servicio educativo, con mejores
resultados en trayectorias, aprendizajes y desarrollo integral de los y las estudiantes del
territorio.

3. La escasa mención o abierta omisión a desarrollos, acciones, análisis y propuestas sobre los
cuales se avanzó durante el periodo que abarca el Informe y que constituyen elementos críticos,
ya sea para la correcta implementación del Sistema como para el cumplimiento de sus
propósitos de calidad, equidad e inclusión educativas. Estos elementos se relacionan con los dos
problemas anteriormente señalados y abarcan ámbitos diversos, tales como: visión respecto a
la calidad de la educación, infraestructura y equipamiento educativos, financiamiento, visión
sobre el proceso de implementación y sus etapas, propuestas de articulación y
desburocratización dentro del sector educación, herramientas de apoyo a los directivos y
profesionales de los SLEP, entre otros. Se trata, en definitiva, de aproximaciones concretas a las
oportunidades de mejoramiento educativo que son consubstanciales a la implementación de la
ley n°21.040. Su omisión no permite apreciar si, a juicio de los Consejeros, tales proposiciones
deben verse reforzadas, complementadas, o bien, ser descartadas y reemplazadas por otras,
de acuerdo con su impacto en la puesta en marcha y proyección del naciente Sistema.

A continuación, las falencias detectadas se explican y ejemplifican con mayor detalle.

1. Ausencia de una visión y un análisis sistémicos del Sistema de Educación Pública en


tanto tal y de su implementación

Como se ya se señaló, el énfasis del primer Informe del Consejo se concentra en los SLEP en tanto
proveedores territoriales de educación. Salvo en lo que respecta a los antecedentes, el Informe no
analiza el conjunto del Sistema (MINEDUC, DEP, SLEP, etc.), omitiendo por ejemplo los siguientes
cinco aspectos interrelacionados:

 El proceso de instalación de la DEP como órgano del Ministerio de Educación (Mineduc)


considerando, entre otros, que su propia implementación se lleva a cabo a la par de sus
responsabilidades en la instalación de los Servicios Locales,8 y que se trata de una nueva
estructura dentro del MINEDUC.

8 En su apartado número tres (págs. 23 a 25) el Informe señala que la DEP se dotó, desde enero de 2018, de una
planificación estratégica. No obstante, los contenidos que allí se destacan no son posteriormente profundizados ni
analizados en sus alcances y logros.

5
 La puesta en funcionamiento de los roles y mandatos específicos de cada organismo del
Sistema, tanto en el proceso de implementación durante el primer año, como en el avance
hacia un estado de régimen. Esto se grafica en la ausencia de un análisis referido a la sinergia
de roles que debe existir entre, por ejemplo, los niveles local y nacional del Sistema, los roles
de soporte (y no solo de control) que le corresponden al nivel nacional, o a cada SLEP respecto
a sus establecimientos educacionales; entre otros.

 Los desafíos de articulación que el nuevo Sistema demanda al conjunto del sector educación,
es decir, al MINEDUC y sus dependencias preexistentes —Subsecretaría de Educación
Parvularia, Subsecretaría de Educación y DEG, CPEIP, DIPLAP, gabinetes, SEREMI y DEPROV,
etc.— 9, por una parte; y, al MINEDUC y sus servicios dependientes o relacionados —
Superintendencia de Educación, Agencia de Calidad, JUNAEB, etc.— 10, por otra. En este punto,
como en otros, el Informe carece de una visión sistémica que tenga a la vista los roles de las
instituciones del sector, tanto en régimen como en fase de implementación, y que permita
anticipar posibles nudos críticos y haga recomendaciones respecto de las dificultades
evidenciadas. Un ejemplo crítico es la relación entre los SLEP y JUNAEB, donde se debe pasar
de una coordinación comunal a una de escala territorial.

 Los desafíos de articulación que el nuevo Sistema exige respecto del sector público en general
(lo que incluye también la relación del MINEDUC con dicho sector). Por ejemplo, la existencia
de articulación oportuna y eficaz con organismos que resultan críticos para la
implementación,11 tales como la Dirección de Presupuestos (DIPRES) del Ministerio de
Hacienda, el Servicio Civil, la Contraloría General de la República o la Subsecretaría de
Desarrollo Regional y Administrativo (SUBDERE). De la misma manera, la vinculación eficaz con
una serie de programas a cargo de ministerios como el de Desarrollo Social, Salud, Transportes
y Telecomunicaciones o Interior, representa un imperativo para mejorar la oferta educativa
pública y su funcionamiento. En ambos casos, la calidad de estas diferentes articulaciones tiene
múltiples implicancias, tanto respecto del cumplimiento de los propósitos del Sistema como de
su implementación misma. Para el primer grupo, el Informe apenas hace menciones formales,
y para el segundo, se limita a señalar que existe “falta de información sobre la forma en que
deben articularse” sin analizar el problema (ver punto 3.2 más adelante).

9 Por ejemplo, si bien el informe señala que “se percibe en algunos actores una falta de conocimiento respecto de los roles
que corresponden a las distintas instituciones vinculadas a educación, en particular a MINEDUC, SEREMI y Departamentos
Provinciales de Educación respecto de los Servicios Locales” (punto 4.1.9), no identifica nudos críticos ni realiza
recomendaciones a este respecto. Este punto es relevante a la luz del llamado rol rector del MINEDUC que otorga a este
organismo la responsabilidad de ordenar los diferentes roles institucionales de conformidad a la ley. Un ejemplo crítico
en este punto es la subsistencia, hasta la fecha, de ambigüedades interpretativas y operativas sobre el trabajo de la
supervisión ministerial respecto de los establecimientos educacionales de dependencia de los SLEP.
10 A modo de ejemplo, la coordinación y el rol de facilitación que asuma la Superintendencia resultan ser críticos para el

traspaso de convenios de diferente tipo, así como para sus rendiciones. Lo mismo ocurre respecto a la definición que este
organismo haga sobre el uso del 10% de la Subvención Escolar Preferencial como posibilidad por parte de los SLEP en
simetría con los demás sostenedores escolares, públicos y privados. En la misma línea, el trabajo conjunto con JUNAEB y
la optimización de ciertas políticas y programas para su mejor canalización es algo relevante en el marco de la
implementación del nuevo Sistema.
11 A manera de ejemplo, la definición de los DFL de planta de cada SLEP, de sus presupuestos o de sus posibilidades de uso

de saldos de arrastre, por nombrar solo tres tópicos, dependen de la vinculación oportuna y eficaz con la DIPRES. O bien,
la correcta y mejor realización de los concursos de Alta Dirección Pública, tanto de directores escolares como de los
primeros y segundos niveles jerárquicos de los SLEP, dependen del trabajo con el Servicio Civil. Todos estos aspectos
repercuten de manera directa e indirecta en la calidad del servicio educativo que pueden ofrecer los SLEP.

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 El despliegue de acciones de diverso tipo para asegurar la proyección y continuidad de la
implementación del Sistema, tanto en los servicios ya instalados como en el resto del
territorio, de acuerdo con las fases que establece la ley n°21.040. Este aspecto considera, entre
otros: la gestión territorial y de participación; la gestión administrativa e institucional (política);
la gestión específica para la implementación de las cohortes de SLEP 2019 y 2020; y, la gestión
de los planes y convenios de transición con los diferentes municipios del país. En relación con
estos dos últimos puntos, el Informe omite referirse a la preparación de las siguientes etapas y
subetapas de la implementación, pese a que ello es parte del rol que deben asumir la DEP y
más ampliamente el MINEDUC. No se entrega más información sobre la vinculación de la DEP
y MINEDUC con los municipios del país para trabajar y luego suscribir estos planes y convenios
de transición,12 y no se aprecia un análisis problematizado de la experiencia particular del
primer año en este ámbito,13 distinguiéndola de las acciones que en paralelo se realizaron (o
no) para asegurar las etapas venideras.14

Considerando los cinco puntos aquí señalados, el Informe omite o subutiliza en su análisis,
información sobre diferentes procesos críticos para la puesta en marcha de la nueva
institucionalidad y sobre su impacto en el cronograma del primer año y el cumplimiento de sus
principales hitos. Esto se aprecia tanto a nivel de la DEP y los SLEP, como del MINEDUC y de otras
reparticiones de Estado. Por ejemplo, no se menciona la cantidad y especificidad de reglamentos y
actos administrativos elaborados, sus respectivos tiempos de tramitación y publicación y su impacto
en la implementación.15 Tampoco se señala el número de decretos elaborados y tramitados; la
cantidad de resoluciones y actos administrativos necesarios para el funcionamiento y la ejecución
presupuestaria; los convenios de colaboración suscritos o en carpeta; entre otros aspectos.

Asimismo, cuando se hace una breve descripción de la gestión realizada por los integrantes del
Sistema durante el año 2018 (apartado cuarto), no se identifican los factores críticos observados,
las áreas de mejoramiento ni las lecciones aprendidas en el proceso. Los elementos descritos por el
Informe son más bien genéricos y no permiten visualizar acciones clave para el año 2019 y
siguientes. Lo mismo ocurre respecto a la visión planteada por la DEP en orden a considerar dos
grandes fases complementarias en el proceso de instalación del nuevo Sistema — (i) una fase de
normalización de las condiciones calidad del Sistema; y (ii) una fase de mejoramiento permanente

12 Por ejemplo: número de municipios que manifestaron voluntad de suscribir estos planes o que abiertamente lo
solicitaron; gestiones y procesos llevados a cabo en esa línea por parte de la DEP y el MINEDUC; número de planes suscritos
y experiencia que estos arrojan; entre otros.
13 Considerar, por ejemplo, que los tiempos para utilizar estos instrumentos fueron muy acotados durante el primer año.

Ese no es el caso de municipios que deberán traspasar el servicio educativo a su cargo en dos o más años.
14 El Consejo acentúa el carácter “no obligatorio” de estos planes y convenios, afirmando que “en la práctica, el mecanismo

plan de transición no ha resultado ser suficientemente efectivo en cuanto a ajustar las dotaciones en los establecimientos
ni a sanear las deudas que mantienen algunos municipios en el periodo previo al traspaso (…).” (punto 4.1.7). Precisamente
porque existen buenas razones para sostener que las recomendaciones de revisión que el Consejo hace a este respecto
son del todo pertinentes y necesarias (ver punto 5.1), el tema requiere más información y análisis —en especial de la
gestión política y administrativa llevada a cabo—, considerando que este fue un punto de intenso debate legislativo y que
se relaciona con la viabilidad del proceso de implementación.
15 Un ejemplo crítico de este punto es la tramitación, entre marzo y agosto de 2018, del D.S. N° 101, del Ministerio de

Educación, que aprueba el reglamento sobre Comité Directivos Locales. La duración de dicha tramitación es un factor
principal, aunque no exclusivo, para explicar por qué se llega a un periodo de subrogancias sucesivas en los primeros
cuatro SLEP, el cual se extiende desde fines de noviembre de 2018 hasta la fecha. Este hecho contravino en la práctica el
espíritu de la ley en su artículo cuadragésimo transitorio. Sus consecuencias para la gestión educativa y para la
implementación del nuevo Sistema debieran ser evaluadas por el Consejo en el Informe anual 2019 y siguientes.

7
de la calidad de la educación pública y profesionalización del Sistema—. Si bien el texto señala la
existencia del Manual de Implementación (noviembre de 2018), no sintetiza ni anexa el conjunto de
aprendizajes que este Manual representa. Esto es particularmente notorio en la omisión de lo que
se señaló como diseño de implementación en fase 3.0 y que constituye un tópico principal entre
aquellos abordados por el Director nacional y por los Directores Ejecutivos de los cuatro SLEP en sus
presentaciones ante el Consejo.16 Todos estos contenidos —incluso siendo refutados en su
pertinencia— permitirían aproximarse de mejor manera al carácter sistémico de la implementación,
visualizando además las relaciones y el impacto del conjunto del Sistema sobre el principal nivel
considerado en el Informe (los SLEP); revisando anticipadamente los procesos e indicadores de cada
etapa de traspaso.

Por otra parte, el Informe no considera en absoluto los cambios recientes o inminentes que
impactarán al sector. Por ejemplo, la aplicación de la ley n°21.109 de octubre de 2018 (estatuto de
los asistentes de la educación pública); o bien, el proceso de implementación del Sistema de
Desarrollo Profesional Docente (ley n°20.903), para el cual el Sistema de Educación Pública ofrece
múltiples oportunidades. Otro tanto ocurre con iniciativas que el propio gobierno está impulsando
o que debe implementar, como por ejemplo, aquellas relacionadas con los y las trabajadoras de los
(ex) jardines Vía Transferencia de Fondos (VTF) y el nivel de educación parvularia en general. 17
Tampoco se alude a las responsabilidades del Sistema (en especial de la DEP) en el correcto
cumplimiento y pago de las diferentes leyes de incentivo al retiro para docentes y asistentes de la
educación; y en general, su rol en el resguardo de los derechos de los trabajadores involucrados en
los traspasos. Entre otros, es relevante revisar, por ejemplo, los recursos que durante 2018 el
MINEDUC destinó a establecimientos municipales a través de fondos concursables, comparándolos
con los de otras dependencias.

Finalmente, la ausencia de una visión global respecto al Sistema en su implementación se grafica en


que el Informe no hace alusión alguna a la relación entre las fases de diseño y de implementación,
y no considera un análisis de la ley y de sus principales reglamentos teniendo en cuenta, por
ejemplo, las disposiciones referidas a: i) facilitar la entrada en funcionamiento del Sistema (DEP y
primeros SLEP 2018); ii) hacer posible el traspaso del servicio educativo; iii) respaldar y hacer posible
el proceso de transición para una instalación y traspaso exitoso; iv) resguardar los derechos de los
trabajadores involucrados en estos proceso; v) facilitar la consolidación de los SLEP en tanto
responsables plenos del servicio educativo y su calidad; vi) hacer efectivos los mecanismos de
participación que la ley consagra. De esa manera, muchos de los puntos que el Consejo señala,
especialmente en su apartado cuarto, quedan en calidad de enunciados sin mayor problematización
ni análisis. Al mismo tiempo, no se aprecia ninguna referencia a procesos de reforma del Estado que
puedan resultar semejantes a este.

16 En efecto, tanto el Director de la DEP como los Directores de los SLEP de Barrancas, Puerto Cordillera, Costa Araucanía
y Huasco, en sus presentaciones al Consejo durante los meses de octubre y noviembre, se refirieron en detalle a los hitos
de la puesta en marcha y especialmente a los nudos críticos identificados, las acciones de mejoramiento desarrolladas o
iniciadas bajo su gestión y las lecciones y desafíos para nuevos procesos. El informe no ofrece una síntesis de estos
contenidos ni tampoco ilustra la generalidad y diversidad de casos. Por ejemplo, si bien el informe menciona lo referido a
eventuales sobredotaciones (punto 4.4.1) no señala cómo los Directores Ejecutivos de los SLEP analizaban y proponían
enfrentar el tema, entendiendo que su tratamiento obliga a considerar múltiples complejidades.
17 Por ejemplo: aplicación del reconocimiento oficial a jardines infantiles y salas cuna (ley n°20.832); proyecto de ley que

modifica la subvención para ese nivel (Boletín 12.436-04); entre otras.

8
2. Ausencia de una visión referida al diagnóstico y proyecciones del servicio educativo
traspasado considerando las diferencias entre territorios

Como ya se señaló, el énfasis de este primer Informe se concentra en los SLEP en tanto proveedores
territoriales de educación, adjuntando elementos estadísticos y comentarios descriptivos a ese
respecto, así como una mención a nudos críticos señalados por los primeros Directores Ejecutivos
de los SLEP. No obstante, lo anterior, el Informe no aporta mayores antecedentes analíticos sobre
estos nudos ni sobre la heterogeneidad de los SLEP con respecto a la provisión educacional a su
cargo. Tampoco lo hace en relación con la diversidad territorial en que cada SLEP se inserta (cultura
regional, complejidad urbano-rural, disponibilidad de profesionales y técnicos, etc.), y sobre cómo
esta problemática se abordó o cómo debiera ser considerada a futuro.

El Informe hace escasa mención a los establecimientos educacionales como integrantes del nuevo
sistema. No se aprecian distinciones de análisis por nivel educativo ni por tipo de establecimiento,
y no se hace referencia a las condiciones de estos al momento del traspaso. Si bien se entregan
antecedentes referidos al volumen de los traspasos, señalando la cobertura de matrícula de cada
SLEP y el número de establecimientos educacionales a su cargo, no se entregan mayores
antecedentes de análisis cualitativo ni cuantitativo que permitan comprender el desafío efectivo de
la puesta en marcha, pese a existir diagnósticos elaborados por la DEP e informes de la Agencia de
Calidad al respecto, los que justifican varios de los desarrollos emprendidos durante el periodo 2018
(ver más adelante punto 3).

En general, se aprecia una subutilización de indicadores e información existente, tales como:


número y proporción de establecimientos según categoría de desempeño, estado de los concursos
de directores escolares, docentes según tramo en su carrera profesional, evolución de la matrícula
y características de los estudiantes, estado de la infraestructura y equipamiento educacional, entre
otros. En ese sentido, no se recoge ni se menciona la necesaria “fase de normalización” que fue
propuesta por la DEP como uno de los desafíos de implementación y de gestión del naciente
Sistema. Esto es consistente con la omisión de análisis de los Planes Anuales 2019 de cada SLEP, y
con la omisión de comentarios sobre las propuestas definidas para los concursos ADP de los
Directores Ejecutivos (periodo 2019-2024).

En efecto el Informe no analiza los contenidos y avances de los diferentes instrumentos creados con
el Sistema de Educación Pública, tales como los planes anuales 2019 de cada SLEP 18; los convenios
de desempeño de los cuatro Directores Ejecutivos anticipados (2018); o bien, las propuestas de
perfiles y convenios de esos mismos primeros niveles jerárquicos (periodo 2019-2024). Se trata de
herramientas de gestión educativa nuevas y que juegan un rol principal para orientar el desarrollo
y funcionamiento del Sistema. Al mismo tiempo, son estos instrumentos los que permiten dar
cuenta del carácter descentralizado y a la vez articulado del Sistema, reconociendo las diferencias y
desafíos específicos de cada territorio y el tipo y calidad de las respuestas que éste va construyendo
frente a ellos.

En esa línea, un punto relevante, que el Informe no desarrolla, son las dificultades y diferencias
respecto a capacidades con que los primeros SLEP cuentan en su nacimiento. Por ejemplo: la
disponibilidad de competencias en cada territorio; los tiempos y forma de constitución de los

18Estos planes fueron entregados al MINEDUC en diciembre de 2018. El informe los menciona en el apartado tercero,
pero luego no los analiza, pese a ser un producto relevante del primer año de implementación.

9
diferentes equipos; las competencias para abordar procesos propios del sector público tales como
adquisiciones y rendiciones de cuentas; entre otros; así como las medidas de mitigación,
acompañamiento o fortalecimiento que se consideraron o proyectaron en el marco de este primer
año de implementación, en especial, a la luz de diferentes momentos críticos del año para le gestión
educacional.19 En definitiva, el desarrollo de capacidades como parte de la gestión de
implementación representa un nudo principal de todo el proceso a evaluar, incluidos la acción
oportuna de las autoridades ministeriales así como los requerimientos de articulación que exige a
diferentes niveles y organismos, tanto al interior del Sistema como en el Estado en general.

3. Omisiones respecto a desarrollos, acciones, análisis y propuestas llevadas a cabo


durante el periodo que abarca el Informe.

En el periodo que abarca el Informe se detecta la existencia de un conjunto de trabajos orientados


a dar mejor cumplimiento a la implementación, buscando responder proactivamente a la
complejidad y carácter sistémico de la misma y orientando la paulatina entrada en régimen del
Sistema. Varias de las acciones y análisis emprendidos, en especial desde la Dirección de Educación
Pública en el marco de su planificación estratégica 2018-2019, tienen un carácter crítico a la luz de
las propias recomendaciones que el Consejo realiza en su primer Informe de evaluación. Por lo
mismo, su omisión o mera mención sin desarrollo, disminuye el aporte de este primer Informe y
restringe la amplitud y profundidad de su evaluación y rol asesor. Al mismo tiempo, estos elementos
debieran necesariamente ser considerados a la luz de la evaluación del primer año de
implementación y siguientes. Idealmente, deberían ser aprovechados por la vía de su seguimiento,
modificación o complemento, en una lógica de construcción continua propia de las políticas de
Estado.

A continuación, se señalan algunos de estos desarrollos, propuestas y análisis.

3.1. Identificación de los objetivos de calidad educativa que deben movilizar al Sistema

En base a los principios y definiciones de la ley N°21.040 y de la Ley General de Educación, se


propusieron definiciones operativas que ayudaran a guiar el trabajo de todas las partes y niveles del
Sistema.20 En ese marco, se señalaron tres objetivos fundamentales que orientan la responsabilidad,
desarrollo y trabajo del Sistema de Educación Pública en pos de garantizar el derecho a una
educación de calidad, de conformidad a su mandato constitucional. Estos objetivos se apoyan en
una visión integral y sistémica de la calidad educativa que subyace a la ley y que expresan los
propósitos permanentes del Sistema, explicitando aquello que éste debe asegurar a cada
estudiante, a saber:

 Logros de aprendizaje desde la perspectiva de una formación integral (de desarrollo cognitivo
y psicosocial), los que engloban los ámbitos considerados esenciales en el marco de los desafíos
educativos del S.XXI, y que se encuentran contenidos en la ley general de educación y en las
bases curriculares definidas por el país.

19 Tales como el cierre y apertura del año escolar, procesos para los cuales la DEP habría planificado medidas de
acompañamiento a cada SLEP a partir de noviembre 2018, lo que debiera ser evaluado.
20 Expresadas en el documento “Objetivos fundamentales del Sistema de Educación Pública para garantizar el derecho a

una educación de calidad en el siglo XXI.”, descargable al 11 de abril de 2019 en: http://www.educacionpublica.cl/wp-
content/uploads/2018/10/DOCUMENTO-Objetivos-del-Sistema-de-Educaci%C3%B3n-P%C3%BAblica-05102018.pdf

10
 Trayectorias educativas efectivas, que consideran momentos de entrada y de egreso del
Sistema de Educación Pública, y que se hacen cargo de la permanencia, así como de las
transiciones entre ciclos, niveles y formaciones diferenciadas.
 Condiciones materiales y profesionales —de funcionamiento, desarrollo profesional, liderazgo,
trabajo en red, bienestar y participación, equipamiento e infraestructura, entre otros—
necesarias para asegurar el cumplimiento de los objetivos de trayectoria y logros de aprendizaje
y el mejoramiento permanente de los procesos relacionados a ellos.

3.2. Desarrollos y análisis referidos a la articulación del Sistema de Educación Pública con el sector
educación y con el intersector

A partir de su propia planificación estratégica y de las jornadas de evaluación de implementación


llevadas a cabo en conjunto con los equipos directivos de los Servicios Locales, la DEP emprendió
diversas acciones orientadas a definir una adecuada articulación y precisión de roles dentro del
conjunto del sector educación. Estas acciones incluyeron varias conversaciones sobre el tema con
las autoridades de primera y segunda línea del MINEDUC, así como con sus equipos técnicos.
Asimismo, consideraron la generación de propuestas y la realización de análisis con apoyo de
consultores externos, entre los cuales destacan:

 Análisis y levantamiento de propuestas para desarrollar un marco de actuación y protocolos


que faciliten la coordinación del Sistema de Educación Pública con cada una de las entidades
que forman el Sistema de Aseguramiento de la Calidad (SAC).21 Entre los objetivos de este
trabajo se cuentan los de: i) identificar posibles duplicidades o vacíos normativos en el marco
de la instalación del nuevo Sistema y en su relación con los organismos SAC; y ii) identificar los
requerimientos que estos organismos realizan, tanto a los SLEP como a los establecimientos
educacionales de su dependencia, con foco en identificar la existencia de sobrecarga
administrativa; iii) aportar insumos para la definición del rol que debe cumplir el Sistema en el
SAC; iv) diseñar protocolos de actuación para la relación de la DEP, los SLEP y sus
establecimientos con las instituciones SAC y organizar una agenda de trabajo con ellos.

Entre otros aportes, este trabajo logró identificar 17 cadenas o conexiones funcionales que
permitirían generar una mejor gestión de los procesos, así como nuevos procedimientos y una
reducción de la sobrecarga o burocracia administrativa de algunas tareas o requerimientos que
se generan desde el SAC. Al mismo tiempo, gracias a este trabajo la autoridad política tiene a su
disposición herramientas para precisar de mejor manera los roles y funciones de cada
organismo. Este último punto, también se desarrolló a través de la contribución de la DEP a la
comisión gubernamental “Todos al Aula”.22

21 Este trabajo debiera estar reflejado en los informes de la consultoría: “Diseño y elaboración de instrumentos de apoyo
institucional para la Dirección de Educación Pública en el marco de la coordinación con el sistema de aseguramiento de la
calidad (SAC)”.
22 Expresada en el documento “Oportunidades que la implementación del Sistema de Educación Pública abre para evitar

los efectos que la sobrecarga administrativa y la burocratización tienen sobre la vida y el trabajo de las comunidades
educativas” (septiembre de 2018), descargable en:
http://www.educacionpublica.cl/wp-content/uploads/2018/10/Contribuci%C3%B3n-a-iniciativa-Todos-al-Aula-Sept.-
2018.pdf

11
 Análisis y levantamiento de propuestas para diseñar e implementar un modelo de gestión
intersectorial (público-público y público-privado), con la finalidad de entregar un apoyo
integral y sinérgico a los Servicios Locales de Educación Pública (en educación, salud, protección
social, entre otros), de manera a que éstos puedan contribuir al mejoramiento educativo de los
jardines, escuelas y liceos a su cargo, en el marco de las comunidades y territorios en los cuáles
éstos se insertan.23 Entre los objetivos de este trabajo se cuentan: i) identificación y/o apertura
de flujos de información y posicionamiento de la DEP y SLEP en los modelos intersectoriales
existentes en el país, en sus distintos niveles de gestión (nacional, regional y local); por ejemplo,
los programas Chile Crece Contigo (MIDESO) o Salud Oral (JUNAEB), entre otros; ii) identificación
de actores públicos clave que ejecutan programas sociales vigentes y cuya población objetivo
sea parte de quienes dependen de los SLEP, y, que posean evidencia de resultados favorables;
iii) identificación de alianzas público-privada con propuestas educativas innovadoras; iv) diseño
de protocolos y marcos de actuación para la relación de la DEP, los SLEP y sus establecimientos
con distintas instituciones, y agenda de trabajo para probar dichos protocolos.

Entre los resultados que arroja este trabajo se cuenta una propuesta de modelo que realiza
recomendaciones hacia el trabajo y perfiles profesionales de los SLEP y la DEP, así como criterios
y categorías para evaluar la relevancia de articulaciones y alianzas con programas e iniciativas
públicas y privadas. Por último, un desarrollo complementario a este modelo es la herramienta
para evaluar, seleccionar y monitorear programas e iniciativas propiamente educativas,
externas y/o extraprogramáticas, que se implementan en los establecimientos educacionales
del Sistema, considerando, entre otros, su impacto en los aprendizajes, su relación costo-
beneficio y su pertinencia y adecuación con el PEI y PME de cada establecimiento.24

3.3. Acciones e iniciativas para promover y asegurar la participación en el Sistema

Si bien el Informe señala, en sus apartados tercero (descripción) y cuarto (análisis), lo que denomina
“elementos vinculados a la participación y contextualización territorial”, y destaca los mecanismos
participativos llevados a cabo durante 2018 para dar forma a la propuesta de Estrategia Nacional de
Educación Pública, no se aprecia un desarrollo y profundización sobre el tema. En efecto, a pesar de
ser un aspecto sensible y distintivo del nuevo Sistema, el Informe se limita al mínimo formal y no
problematiza ni analiza si, por ejemplo, las acciones emprendidas a través de la gestión territorial,
o de las acciones de sensibilización y difusión realizadas, etc., fueron adecuadas en calidad y
cantidad.

Durante todo el año 2018, se desplegó un amplio trabajo en pos de la articulación e interlocución
permanente con actores políticos y sociales y con las comunidades educativas de cada territorio, en
orden a informar y facilitar la implementación del Sistema y para dar cumplimiento a los mandatos
que la ley establece respecto a la participación. Esto fue llevado a cabo tanto desde el nivel central
25
como desde (y hacia) cada SLEP en proceso de instalación o en perspectiva cercana (cohortes 2019
y 2020). Entre estas acciones se cuenta la generación del documento “Orientaciones para la
participación de la comunidad en los Servicios Locales de Educación Pública” (de junio 2018) que

23 Este trabajo debiera estar reflejado en los informes de la consultoría: “Diseño y elaboración de instrumentos de apoyo
institucional para la Dirección de Educación Pública en el marco de la instalación y coordinación intersectorial del Sistema
de Educación Pública”.
24 Este trabajo debiera estar reflejado en los informes de la consultoría “Diseño junto a los SLE del sistema de

acompañamiento, monitoreo y evaluación de iniciativas educativas de sus establecimientos educacionales”.


25 A través del Departamento de Gestión Territorial de la División de Implementación de Servicios Locales de la DEP.

12
sistematiza una serie de contenidos y normativas y da un marco para las prácticas participativas en
la gestión educacional que la ley busca asegurar. Así también, el Informe omite todo lo referido a la
conformación del Consejo de la Sociedad Civil de la DEP (ley n°20.500) y lo relacionado con la
estrategia de comunicaciones 26 y de transparencia para el Sistema.

En relación con la organización de los procesos para la constitución de los Comités Directivos y los
Consejos Locales de cada SLEP, pese a mencionarla, el Informe omite hacer una valoración de estos.
No se señalan, por ejemplo, los niveles de participación alcanzados o el compromiso evidenciado
por las autoridades locales y regionales, entre otros. Esto incluye problemas ilustrativos de los
desafíos y barreras que debió enfrentar la implementación del Sistema durante 2018 y que el
Informe no aborda, por ejemplo, en la demora para constituir los Comités Directivos Locales o en
los problemas que contendría el reglamento de los Consejos Locales.27

3.4. Elaboración de herramientas de apoyo a los Directores Ejecutivos y Subdirectores y


profesionales de las subdirecciones de Apoyo Técnico Pedagógico de los Servicios Locales

El Informe señala que la DEP “ha desarrollado en este periodo un primer documento de bases para
un Modelo de Apoyo Técnico Pedagógico”, agregando que “se observa una percepción de que la
gestión pedagógica y el ámbito técnico pedagógico en general, es un desafío pendiente y un aspecto
por trabajar con mayor profundidad que la observada en la primera etapa de instalación (…).”. Esta
apreciación general, pudiendo ser compartida, requiere situarse en contexto. Ella no permite saber
si el Consejo se interrogó y conoció sobre las acciones que en ese ámbito cada SLEP emprendió, o
cómo se constituyeron los equipos técnicos a cargo de esa área, en qué estado estos recibieron el
servicio educativo, qué desafíos debieron enfrentar en prioridad y qué logros podrían destacarse
(por ejemplo, la Conferencia de Directores de Establecimientos Educacionales, mandatada por el
artículo 11 de la ley n°21.040, que el Informe omite).

Tampoco se mencionan una serie de desarrollos y estudios que la DEP emprendió, en colaboración
con los Servicios Locales en la mayoría de los casos, y que son complementarios a las bases para el
modelo de apoyo técnico-pedagógico elaboradas. Se trata de insumos relevantes en el área
educativa, que debieran ser vistos como partes de un todo que podría completarse y enriquecerse
en el futuro cercano, de existir la visión y la voluntad para ello. En efecto, estos desarrollos nacieron
del diagnóstico que, pese a lo acotado de los tiempos, se construyó entre los equipos de nivel central
y los de nivel local, a través de un trabajo articulado que el Informe tampoco valora ni menciona. A
manera de ejemplo, destacan entre estos desarrollos los siguientes:

 Guía metodológica de apoyo Directores de los SLEP en el diseño de los convenios de desempeño
y perfiles de cargo de los directores de establecimientos educacionales, elegidos por Alta
Dirección Pública. 28

26 La que permitió contar, entre otros, con páginas web, una estrategia digital, presencia en redes y una vinculación
permanente entre DEP y SLEP, además de permanentes boletines internos y externos
27 En efecto, el ya mencionado retraso de tramitación del D.S. N° 101 que regula a los Comités Directivos (publicado el 18

de agosto de 2018) determinó que no se realizaran dentro del primer año de gestión los correspondientes concursos de
Alta Dirección Pública para los primeros (y segundos) niveles jerárquicos. Asimismo, el D.S. N° 102 que regula a los
Consejos Locales (publicado el 11 de octubre de 2018) presenta falencias en su confección que dificultan su
implementación, las que en su momento fueron advertidas al Subsecretario por los equipos de la DEP.
28 Descargable al 11 de abril de 2019 en: http://www.educacionpublica.cl/wp-content/uploads/2019/01/GM-para-elab.-

y-seguimiento-de-CD-y-perfil-de-cargo-de-directores.pdf

13
 Herramientas de apoyo a los profesionales de la unidad de apoyo técnico pedagógico de los
SLEP, en el acompañamiento a la gestión de la convivencia en establecimientos educacionales,
en especial, aquellos que presentan desempeño insuficiente.29
 Elaboración y validación de orientaciones nacionales y locales respecto a la gestión y trabajo
colaborativo y en red (en conjunto con la Universidad Católica de Valparaíso).
 Desarrollo de Guías Metodológicas y Banco de Experiencias Destacadas en Mejoramiento
Educativo, tanto para el nivel parvulario como escolar.30
 Levantamiento y registro de información válida y confiable sobre el ambiente de desarrollo de
estudiantes y docentes al interior de los establecimientos educacionales, en miras al desarrollo
de prácticas que aseguren un mejoramiento educativo sostenido (en conjunto con Fundación
Enseña Chile).
 Desarrollo de un diagnóstico para capacidades y necesidades de formación de los líderes
escolares en los Servicios Locales (en conjunto con la Universidad Diego Portales).
 Desarrollo de una Plataforma territorial para analizar y prospectar la oferta educacional pública
(en conjunto con la Universidad Adolfo Ibáñez y el CIAE-UCH).
 Convenios de colaboración con CONICYT-Explora y CNID; Fundación Teatro a Mil; iniciativa de
desarrollo profesional docente Suma y Sigue; entre otros.

3.5. Plan nacional de infraestructura y equipamiento para la calidad de los procesos educativos

Durante el año 2018, la DEP, a través de su Departamento de Infraestructura y Equipamiento


Educativos (DIEE), formuló una estrategia de mediano y largo plazo para el mejoramiento de la
infraestructura y el equipamiento educativos en el Sistema, avanzando en establecer estándares
que favorezcan el aprendizaje y la formación integral de los y las estudiantes, así como la innovación
pedagógica. Dado el carácter crítico de esta dimensión en el sistema público, 31 y de los graves
déficits acumulados en materia de mantención, reparaciones oportunas e inversión periódica, esta
área requiere una significativa inversión de esfuerzo y de tiempo por parte de los equipos directivos
y del nivel sostenedor, que necesariamente necesita de un impulso, monitoreo y apoyo desde el
nivel central. El Informe apenas menciona que los SLEP tendrían dificultades para contar con
personal especializado en esta área, sin embargo, no hace mención alguna a esta planificación ni al
potencial que ello significa para la normalización y mejora educativa del servicio traspasado,
poniendo en acción a todo el Sistema.

3.6. Estudio de sostenibilidad financiera del Sistema

El encargo de este estudio 32 tuvo por objeto desarrollar un marco comprehensivo de la situación y
manejo de las fuentes de financiamiento y bienes públicos de dependencia de los SLEP,
identificando sus ventajas, desafíos y levantando propuestas de mejora; así como generar un
sistema de monitoreo de la gestión financiera de los SLEP, que sea objetivo, confiable y transparente
y, que permita tomar decisiones de gestión, rendir cuentas y tomar medidas preventivas y/o
correctivas oportunas en los casos que corresponda.

29 Descargable al 11 de abril de 2019 en http://www.educacionpublica.cl/wp-content/uploads/2019/01/Herramientas-


para-la-gesti%C3%B3n-de-la-convivencia.pdf
30 Descargables al 11 de abril de 2019 en: http://www.educacionpublica.cl/2019/01/31/articulo-de-interes-guias-para-

identificar-y-mejorar-practicas-educativas-en-el-sector-parvulario-y-escolar/
31 La consulta nacional realizada durante el segundo semestre de 2017 arroja esta dimensión como el problema más

sentido por las comunidades educativas que son parte de la educación pública.
32 Entregado a la DEP en diciembre de 2018.

14
Este trabajo entregó una propuesta de marco para el sistema de control de gestión financiera de los
SLEP, considerando la normativa, instrumentos y roles institucionales vigentes. Asimismo, identificó
un conjunto de desafíos relevantes para la gestión financiera del Sistema, proponiendo indicadores
de gestión asociados al uso de los recursos de los SLEP, los cuales se aplicaron, a modo ilustrativo, a
los primeros cuatro SLEP en funcionamiento y a los municipios que formarán parte de los SLEP de
las cohortes 2019 y 2020. Presenta, además, una propuesta de sistema de análisis y alertas a partir
de los indicadores considerados; propuestas de reportes e informes periódicos que los SLEP y la DEP
debieran producir; y, propuestas de compromisos y metas a incorporar en los convenios de gestión
de los Directores Ejecutivos y de los Subdirectores de Planificación y Administración de SLEP. Integra
también los términos de referencia para un estudio complementario que identifique de manera
definitiva qué elementos del esquema de financiamiento a la educación pública podrían requerir
modificaciones o adecuaciones con el fin de hacer sostenible la operación del Sistema en el mediano
plazo.

3.7. Definición de perfiles de cargo y proceso de reinducción a nivel de la DEP

Durante el año 2018 y una vez implementados los procesos de funcionamiento operativo, el área
de Gestión y Desarrollo de Personas de la DEP inició el trabajo para la elaboración e implementación
de los procesos de desarrollo de personas. Para ello se definieron dos líneas prioritarias de trabajo:
la elaboración de Perfiles de Cargo y la reinducción a los funcionarios(as) DEP.33 Este trabajó significó
un levantamiento de información y entrevistas sucesivas con las jefaturas que arrojó un listado 82
cargos con sus respectivos perfiles y descriptores (propósito, funciones, capacitación requerida,
experiencia requerida, competencias técnicas, etc.). Por su parte, la reinducción a los
funcionarios(as) implicó el diseño de un programa considerando sesiones colectivas de trabajo con
representantes de todas las áreas de la DEP y de los Servicios Locales; la confección de una nómina
de temas y su priorización, más la elaboración de un guion, el diseño del taller presencial y el
desarrollo de contenidos vía e-learning.34

3.8. Estudios “línea base” (desarrollado por la Universidad Católica y el Centro de Estudios
MINEDUC) y “de seguimiento al primer año de implementación” (desarrollado por la Universidad
Católica de Valparaíso y el CIAE a solicitud de la División de Educación General del MINEDUC)

Por último, entre las omisiones destacadas, merecen una mención especial, por una parte, el estudio
“Diseño del Modelo de Evaluación de la Nueva Educación Pública y Levantamiento de Línea Base”,
realizado en 2017 conjuntamente por el CEPPE y el DESUC de la Universidad Católica, por encargo
del Centro de Estudios MINEDUC.35 Este trabajo levantó y analizó información cuantitativa de
diverso tipo, así como información cualitativa entre la que se consideró la percepción de diferentes
actores a partir de una muestra que incluye un grupo control de territorios. Durante el año 2018
este estudio fue presentado a diferentes instancias oficiales, incluyendo en agosto la exposición que
realizó el Centro de Estudios MINEDUC para los Jefes de la DEG y DIPLAP, el Director DEP y el

33 Para ambos proyectos se contó con apoyo especializado (en diseño metodológico y realización de entrevistas).
34 Es importante tener a la vista la existencia de dos procesos previos a este, los cuales fueron iniciados antes del 18 de
enero (fecha de publicación del decreto que establece la DEP). Uno, la definición de perfiles y concursos para el
poblamiento de los Servicios Locales en el marco de los traspasos de personal municipal, trabajo que fue realizado en
conjunto con el Servicio Civil. Y dos, los tres concursos internos del MINEDUC (nivel central) para conformar la dotación
de la DEP, además de los traspasos de los funcionarios del DIE y la UNAM pertenecientes a la DIPLAP-MINEDUC.
35 Disponible en http://ceppe.uc.cl/images/contenido/investigacion/Informes/informe-nep-resumen-ejecutivo.pdf

15
gabinete del Subsecretario de Educación, destacando la importancia de este. Tras su presentación
al Comité Consultivo parta la Estrategia Nacional de Educación Pública (julio 2018) se sugirió que el
estudio fuera complementado con una segunda parte que considerara en detalle la percepción de
las familias y otros actores. En concreto, cabe la pregunta de si este estudio constituye, a juicio del
Consejo, un antecedente y una herramienta relevante para el proceso de implementación del
Sistema y como insumo para el informe de evaluación de medio término que establece la ley. En
esa línea cabe también preguntarse cómo el Consejo establecerá los indicadores de seguimiento e
implementación de la puesta en marcha del Sistema y cómo se realizará el monitoreo de este.

Por otra parte, se encuentra el “Estudio de seguimiento y sistematización de procesos críticos en la


transición de la gestión de la educación pública de los municipios a los Servicios Locales de Educación
(SLEP) –Un estudio de aprendizajes sobre el proceso de instalación de la nueva institucionalidad de
la educación pública chilena–.”, desarrollado durante 2018 e inicios de 2019 por la Universidad
Católica de Valparaíso y el Centro de Investigación Avanzada en Educación (CIAE) de la Universidad
de Chile.36 Este trabajo es parte de las acciones impulsadas por el MINEDUC, en este caso a través
de la División de Educación General (DEG) de la Subsecretaría de Educación, y su finalidad es haber
monitoreado “durante el primer año del periodo de transición aquellos ámbitos y acciones
constitutivas de los cuatro primeros SLEP, tanto en su relación con la DEP, como en su relación con
los Municipios, establecimientos escolares y otras entidades relevantes, en el marco de la
implementación de la Ley de Nueva Educación Pública”. El objetivo es la realización de un
seguimiento temprano a la implementación, identificando aquellos aspectos que la facilitan y
obstaculizan a fin de transmitir oportunamente estos hallazgos y aprendizajes a los Servicios Locales
que se instalarán sucesivamente en los próximos años. Pese a lo relevante de la información y
análisis que este estudio puede aportar a la labor del Consejo, no existe conocimiento de si aquel
pudo conocer el tenor y avances de este, ni cuál sería su opinión al respecto.

III. Comentarios a las recomendaciones del Consejo


En su apartado quinto, el Informe presenta un total de ocho recomendaciones de carácter general.
Se desprende que estas recomendaciones corresponden a aquellos elementos de consenso entre
los seis consejeros y el equipo DEP y MINEDUC. Los puntos planteados parecen pertinentes en su
casi totalidad, pero requieren de mayores precisiones para lograr una interpretación adecuada. Al
mismo tiempo no sugieren responsables precisos ni plazos, ni menos aún acciones o recursos
asociados. Por lo mismo, no es posible prever cómo estas recomendaciones afectarán la operación
de la DEP, de los cuatro SLEP existes, así como de los tres SLEP que deben ponerse en marcha en
2019 y de los cuatro que debieran hacerlo en 2020. Se podría subentender que es deber de la
autoridad ministerial y de la Dirección de Educación Pública considerar dichas recomendaciones y
darles concreción.

A continuación, se presentan comentarios específicos y se plantean algunas interrogantes para cada


una de las ocho recomendaciones del Consejo, especialmente considerando el escenario de
conducción del Sistema existente a la fecha.

36 Este estudio ya debiera estar finalizado, debiendo su versión completa y final estar disponible de manera pública.

16
Recomendaciones del
Comentarios e inquietudes
Consejo (N° y materia)
Como lo muestra el Informe, los cuatro primeros SLEP fueron capaces de instalarse y dar
continuidad al servicio educativo. En ese marco, el proceso de traspaso sufrió ajustes
entre marzo 2018 (Barrancas y Puerto Cordillera) y julio 2018 (Huasco y Costa Araucanía),
planteándose un nuevo conjunto de ajustes y afinamientos para la instalación de los tres
nuevos SLEP 2019 (implementación 3.0). Esta evolución no es analizada en detalle por el
Informe y no queda claro si el Consejo conoce si se están o no adoptando las medidas
para aplicar el enfoque mejorado de implementación. Tampoco se profundiza en
problemas complejos que requieren de planificación y medidas adecuadas (por ejemplo:
sobredotaciones que se verifican en algunos casos).

Los dos primeros puntos de esta recomendación se refieren a realizar un análisis de la


normativa, aunque sin señalar plazos para el mismo. El tercer punto plantea “poner
Relativas al proceso
especial énfasis en los planes de anticipación para los Servicios Locales que se van a
de traspaso desde
5.1 instalar en los próximos años (…)”. Esta recomendación del Consejo se encuentra ante
las municipalidades
un cuadro complejo, pues, en el marco de la fase de subrogancias iniciada a fines de
al nuevo Sistema
noviembre 2018, en marzo 2019 se solicita la renuncia del jefe de la División de
Implementación de Servicios Locales sin que exista a la fecha reemplazo del mismo. De
forma previa, en diciembre 2018 se solicitó la renuncia a la jefa del Departamento de
Gestión Territorial de la misma División. Este cargo aún se encuentra sin jefatura pese a
ser clave en la relación con los actores de los territorios y en la relación con los Comités
Directivos Locales, entre otros.

Considerando que la implementación de Servicios Locales para 2019 ya se inició por


normativa y que la de 2020 está muy próxima, es razonable preguntarse cómo desde la
DEP y el MINEDUC se están enfrentando estos procesos y cómo se está apoyando a los
Directores anticipados de los SLEP de Chinchorro, Andalién Sur y Gabriela Mistral,
recientemente nombrados.37
Esta recomendación corre el riesgo de quedarse en una mera generalidad puesto que,
como ya se detalló más arriba, el Informe omite la mención y análisis de numerosos
desarrollos y acciones cruciales en el área educativa y técnico-pedagógica. Entre esos
elementos se cuentan: el documento sobre los objetivos de calidad que guían al Sistema;
los desarrollos, guías y herramientas que la DEP elaboró en el ámbito técnico
(complementarios a las bases para el modelo de apoyo técnico pedagógico generada);
el estudio de línea base realizado por CEPPE-DESUC en 2017; o bien, una mirada en
profundidad a lo realizado por los SLEP en términos de iniciativas educativas distintivas
Asegurar equilibrio
y con proyección (y que el Informe casi no menciona) o a la Conferencia de Directores de
de los aspectos
5.2 cada SLEP (cuestión que se omite); entre otros.
administrativos con
los pedagógicos
Al no considerar estos elementos ni el trabajo realizado en torno a ellos, obviando el
impacto logrado y potencial, no es posible comprender en profundidad la
recomendación del Consejo, ni conocer cuál es el juicio y orientación que este propone
para el desarrollo del Sistema en el ámbito técnico-pedagógico visto como parte de la
gestión educacional integral que le corresponde a los SLEP y al Sistema en general. En el
caso específico de la División de Desarrollo Educacional el equipo estuvo sin jefatura
durante 3 meses y no fue posible realizar un traspaso de la información, salvo por vía
virtual.

37Cabe señalar que, a diferencia de lo que se hizo en octubre 2017 de acuerdo con lo que señala el Informe (pág. 40), esta
vez no se habría realizado un llamado a concurso para proveer estas tres jefaturas a través del Servicio Civil.

17
Recomendaciones del
Comentarios e inquietudes
Consejo (N° y materia)
La Estrategia Nacional es un instrumento nuevo para el país y el primero en su tipo
establecido por ley, buscando consolidar una mirada de largo plazo y de amplio acuerdo
(visión de Estado) para el mejoramiento de la educación pública. Por lo mismo, su
construcción es un desafío de máxima complejidad e importancia.

Si bien el Informe menciona los hitos de participación realizados durante 2018, no se


sabe cómo la DEP y el MINEDUC usarán la información levantada a través de estos
(diálogos técnicos, comité consultivo, propuesta de diálogos territoriales). Tampoco se
indica el vínculo entre la Estrategia Nacional y el plan nacional de infraestructura o las
orientaciones de calidad desarrolladas en 2018. Asimismo, entre el 27 de marzo y el 17
de abril de 2019 se realizó una segunda consulta nacional online como insumo para la
Dar máxima ENEP, en la cual habrían participado cerca de 20.000 personas. No existe claridad
prioridad a la respecto a las metodologías que se usarán para dar cuenta de esta participación ni si
5.3 Estrategia Nacional serán considerados contenidos planteados también en la primera consulta nacional
de Educación Pública online (2017).38 Asimismo, llama la atención que, siendo una prioridad declarada, el
(ENEP) departamento responsable del desarrollo de la Estrategia Nacional en la DEP lleve cinco
meses sin jefatura.

Por último, si bien el Informe presenta en anexos el Acuerdo del CNED (2018) que
establece los criterios para evaluar la ENEP, no se realiza un comentario o análisis crítico
del mismo en términos de recomendaciones a la DEP y los SLEP. De la misma manera, al
no haber considerado el documento sobre objetivos de calidad del Sistema, tampoco es
posible conocer la visión del Consejo respecto a la pertinencia de la triada propuesta a
partir de la ley n°21.040 (i.e. aprendizajes desde una perspectiva integral, trayectorias
educativas y ejes de profesionalización y mejoramiento sistémico) como base para la
definición de la ENEP.

Esta recomendación si bien es genérica, es de primera importancia tal como lo hace ver
el Consejo. Un sistema acéfalo o con debilidades graves en su conducción no puede
implementarse correctamente, y un debilitamiento de este tipo puede tener
consecuencias hacia el futuro de la gestión educativa y sus posibilidades de logro. Si bien,
Dar máxima el Consejo no tiene responsabilidad en esta situación, esta problemática si es materia de
prioridad a los su trabajo evaluativo.
5.4
concursos de Alta
Dirección Pública En los hechos, el periodo de subrogancias iniciado tras el 29 de noviembre de 2018 se
prolongará, al menos, por seis meses en el caso de los SLEP implementados en 2018. 39
Para los segundos niveles jerárquicos de esos mismos servicios, el tiempo de
subrogancias será más largo pues los procesos de concurso ni siquiera se habrían iniciado
aún (12 cargos en total). En el caso de la DEP, la situación de subrogancia se prolongará

38 En efecto, en dicha consulta participaron cerca de 60.000 personas y su sistematización está en poder de la DEP. Allí
fueron relevadas problemáticas sobre la calidad y misión de la educación pública que resultan pertinentes de ser
consideradas en la ENEP.
39 La concursabilidad para el primer nivel jerárquico de los cuatro SLEP implementados en 2018 se abrió finalmente el 23

de diciembre de 2018 y la etapa de postulaciones se habría cerrado el 14 de enero de 2019, tal como lo consigna el
Informe. Estos concursos debieran estar resueltos antes de fines de abril, y, para el caso de Barrancas y Huasco los
nombramientos ya habrían sido decididos por el Presidente de la República a partir de las ternas propuestas por los
respectivos Comités Directivos Locales (ver: http://www.educacionpublica.cl/2019/04/18/presidente-designa-a-
directores-de-los-servicios-locales-de-educacion-de-barrancas-y-huasco/).

18
Recomendaciones del
Comentarios e inquietudes
Consejo (N° y materia)
al menos hasta junio de 2019.40 Adicionalmente, es importante considerar que entre
diciembre 2018 y marzo de 2019, a nivel de la DEP, se ha solicitado la renuncia —o se la
ha aceptado en algunos casos— de las jefaturas de casi todos los cargos de segundo y
tercer nivel jerárquico de la DEP, no existiendo reemplazos oportunos ni permitiéndose
la realización de un adecuado traspaso y entrega de las líneas de trabajo, y, quedando a
la fecha, en varios casos, cargos y equipos críticos sin liderazgo. A manera de ejemplo, la
División de Desarrollo Educacional estuvo acéfala por más de tres meses y la División de
Implementación de Servicios Locales lleva, al 18 de abril, tres semanas sin jefatura,
perdiendo en ese mismo lapso al menos tres de sus profesionales. 41

Ciertamente, la autoridad ejecutiva tiene todo el derecho de ejercer las prerrogativas


de nombramiento y remoción que le corresponden, pero no se puede obviar que en un
contexto de implementación se entiende que debe existir sentido de urgencia y previsión
para efectuar reemplazos oportunos en cargos y jefaturas críticos. 42 En definitiva, el
Informe no se pronuncia respecto al diseño que MINEDUC decidió utilizar para
minimizar los riesgos asociados a estas situaciones.43 Si bien es cierto que la subrogancia
es un mecanismo propio de la administración del Estado, no es posible obviar que en
este caso se trata de servicios con un año o menos de existencia previa real. Tampoco se
puede minimizar el impacto que esta situación puede llegar a tener en la conducción de
la multiplicidad de procesos macro y micro para una implementación exitosa.

Al no realizar el Informe un análisis respecto del presupuesto, gastos y flujos, ni de los


instrumentos del propio Sistema (planes anuales, convenios de gestión, etc.), o al no
considerar el estudio realizado durante 2018 en este ámbito, no es posible distinguir si
lo que el Consejo recomienda en este punto es la contratación de un estudio al respecto
Revisar la asignación u otra cosa.
de recursos para
traspaso, Tampoco se identifican los recursos aportados por el propio MINEDUC y sus dos
5.5 instalación, puesta Subsecretarias al desarrollo de programas en establecimientos municipales y/o de los
en marcha y Servicios Locales, en lo referido a fondos concursables o de proyectos. Por ejemplo, los
funcionamiento del establecimientos de los Servicios Locales de Educación Pública no fueron priorizados, y
Sistema. en algunos casos fueron excluidos, de los fondos e iniciativas a cargo del Centro de
Innovación, del programa Liceos de Excelencia o de la Secretaria de Educación Técnico
Profesional. Una situación diferente se verificó con la Subsecretaría de Educación
Parvularia, quien si consideró en sus programas a los SLEP y sus establecimientos
educacionales.

40 A cinco meses de haber sido declarado desierto el concurso anterior (noviembre de 2018) se abrió un nuevo llamado
para este primer nivel jerárquico. Su fase de postulaciones se extendió entre el 17 de marzo y el 8 de abril de 2019.
41 En total, cerca de 28 personas han salido de la DEP durante el primer trimestre 2019, principalmente de las Divisiones

de Implementación y Desarrollo Educacional, y de los Departamentos jurídico, tecnología, finanzas y comunicaciones.


42 Es importante reiterar que, a la fecha, la DEP cuenta con perfiles de cargo definidos (ver punto 3.7), los que no han sido

validados por la autoridad subrogante. Esto ha impedido que sean utilizados como insumo para los diferentes procesos
de desarrollo de personas requeridos en todo servicio público. La justificación entregada es que, más allá del recambio
total de jefaturas a marzo 2019, los perfiles obtenidos son una foto de una estructura y funcionalidad de la DEP que se
pretende modificar (por tanto, quedarían obsoletos). El cuadro general es que, al menos hasta abril 2019, no se están
utilizando los insumos disponibles y tampoco se les está reemplazando por otros ni definiéndose cuál sería la nueva
estructura.
43 Este diseño político fue señalado como argumento en sesión del Congreso Nacional y en sesión del propio Consejo de

Evaluación, ambas durante noviembre de 2018.

19
Recomendaciones del
Comentarios e inquietudes
Consejo (N° y materia)
El Informe no distingue cuáles serían las barreras o nudos críticos que se recomienda
Revisar si las
revisar. Tampoco se analizan los procesos e indicadores establecidos en el Manual de
herramientas
Implementación o las propuestas que se realizaron en el estudio sobre sustentabilidad
normativas,
financiera (y que fue omitido).
presupuestarias y de
5.6 gestión de los
Si no se precisa qué debe ser revisado y por qué, esta recomendación queda en la
Servicios Locales, en
generalidad o bien corre el riesgo de ser vista como un mero punto de discusión política
tanto servicios
respecto de qué hacer institucionalmente con la educación pública (en lugar de dar
públicos, son las
cuenta de la implementación de la ley n°21.040, sus dificultades y requerimientos).
adecuadas.
El Informe no hace mención previa a los avances existentes al respecto y a las dificultades
enfrentadas ni a las medidas adoptadas y proyectadas para resolverlas.
Desarrollo de
sistemas de gestión Cabe destacar que en febrero de 2019 la jefa del Departamento de Procesos y Sistemas
5.7 presenta su renuncia al cargo, y que los proyectos que esa unidad venía desarrollando
de información
desde la DEP. se ven paralizados (por ejemplo: estandarización del proceso de remuneraciones y
trabajo conjunto DEP-SLEP para optimizarlo y evitar errores; levantamiento de procesos
críticos para la implementación comprometidos para abril 2019).

Este es un punto del todo relevante y necesario para la continuidad y calidad de la


implementación. Ahora bien, como el informe no destaca lo avanzado en términos
comunicacionales y de transparencia durante 2018 —existencia de sitios web, boletines
Dar mayor difusión y permanentes de la DEP (externo e interno); publicación conjunta con la Universidad de
sensibilización a Chile sobre esta reforma;44 creación del Consejo de la Sociedad Civil de la DEP; entre
5.8
todos los actores del otros— no es posible saber si, a juicio del Consejo, tales esfuerzos van en la dirección
Sistema. correcta o si son insuficientes y por qué. No obstante, en lo fundamental, se requiere
precisar cuál es el rol de MINEDUC en esta fase en orden a fortalecer el Sistema y
desplegar la mayor difusión y sensibilización que el Consejo recomienda.

44 Libro “Nueva Educación Pública. Contexto, contenidos y perspectivas de la desmunicipalización”, disponible en


http://uchile.cl/u149726.

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