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CARRERA: DERECHO
DESVINCULACIÓN CONYUGAL EN EL
MATRIMONIO O LA UNION LIBRE
GRUPO N° 9
GESTION : 2019
SANTA CRUZ-BOLIVIA
I. ANTECEDENTES:
“En el primitivo Derecho Romano, para los matrimonios en que la mujer estaba sujeta a
la manus del marido, es decir, a una potestad marital férrea, equiparando a la mujer a
una hija, sólo el marido tenía el derecho de repudiar a la esposa para disolver su
matrimonio y había por consiguiente la posibilidad de una disolución matrimonial por
voluntad unilateral”
Dicha situación claro está, era injusta y desigual. Sin embargo, posteriormente gracias a
la evolución del Derecho Romano, el derecho de repudiación se concedía a ambos
cónyuges. Esta facultad de repudiación aludía a ciertas causas que implicaban faltas
graves como el adulterio, la corrupción de los hijos, la incitación a cometer actos
delictivos, etc.
El divorcio en Grecia era semejante al de Roma. Una de las diferencias es que había un
contrato matrimonial en el que establecía que si había una disolución de su matrimonio
los bienes comunes estén asegurados, ya que las mujeres solían sufrir un daño
financiero. En este contrato también dice cual debe de ser la conducta sexual del
marido, lo que introduce el impedimiento de llevar a la casa una segunda mujer, tener
hijos con otra dama o vivir en una casa que no sea la suya.
El divorcio se hacía de forma informal, porque bastaba con que el hombre se levantara
con el pie izquierdo para que echara a la esposa del domicilio conyugal. Los hijos
permanecían con el padre.
En la época imperial la escasez del género femenino fue tan intensa que algunas de
ellas podían cambiar de esposo cada año. El usus, era la forma más arcaica del
matrimonio, contemplaba una forma de divorcio inmediato en caso de que la esposa
pasara tres noches seguidas fuera de la vivienda.
II. ETIMOLOGÍA:
Divorcio; “Del latín divortium, del verbo divertere, separarse, irse cada uno por su lado.
Puede definirse como la ruptura de un matrimonio válido viviendo ambos esposos. Ello
señala ya una distinción fundamental entre divorcio y nulidad de matrimonio en que no
cabe hablar de disolución, por no haber existido jamás legalmente, a causa de
impedimentos esenciales e insubsanables”.
III. CONCEPTO:
“Divorcio es la forma legal de extinguir un matrimonio válido en la vida de los cónyuges
por causas surgidas con posterioridad a la celebración del mismo y que permite a los
divorciantes contraer con posterioridad un nuevo matrimonio válido. De acuerdo a su
forma legal, el divorcio sólo puede demandarse por causas previamente establecidas
en la Ley, ante autoridad competente y cumpliendo con todos los requisitos legales del
procedimiento”.
El Divorcio se puede definir también como la disolución del vínculo matrimonial que deja
a los cónyuges en la posibilidad de contraer otro matrimonio. Asimismo, puede ser
definido como "la ruptura del vínculo conyugal, pronunciado por tribunales, a solicitud
de uno de los esposos (divorcio por causa determinada) o de ambos (divorcio por
mutuo consentimiento) sanción resultante de una acción encaminada a obtener la
disolución del matrimonio".
Basado en los conceptos anteriores podemos concluir que la constante estriba en las
palabras ruptura, extinción y disolución del matrimonio legalmente. Entendiéndose por
consecuencia que dicho procedimiento del área familiar no obedece necesariamente a
la destrucción familiar, más que nada al rompimiento del vínculo de pareja ante el mal
entendimiento o las diferentes causas que lo puedan propiciar.
Los antecedentes en Bolivia respecto al divorcio son el Código Civil de 1.831, que
formó parte de los llamados Códigos Santa Cruz, debido al nombre del Presidente que
los promulgó. Atribuía a los tribunales eclesiásticos la competencia para conocer y fallar
sobre el divorcio, pero no reconocía el divorcio absoluto, únicamente estaba permitida
la separación de los cónyuges o divorcio relativo, manteniéndose el vínculo conyugal,
que solo podía disolverse por la muerte real o presunta.
Posteriormente, el día 15 de abril de 1.932 fue sancionada la Ley del divorcio absoluto,
que introdujo la posibilidad en Bolivia de obtener el divorcio absoluto de matrimonios
celebrados en el extranjero, siempre que el país donde se hubiese celebrado admitiese
la desvinculación conyugal.
Respecto a los efectos patrimoniales derivados del divorcio, el primer efecto que se
produce es la división de los bienes gananciales, sistema económico matrimonial que
se adopta desde el momento de su celebración, haciendo partibles por mitad igual para
cada uno de los cónyuges.
Así mismo, se producen efectos de asistencia familiar entre los esposos e hijos. Si el
esposo que no dio motivo para el divorcio carece de medios suficientes para su
subsistencia y los necesita, puede pedir pensión de asistencia familiar conforme al
artículo 143 CF Boliviano.
La fijación de una pensión a favor del esposo no culpable en caso de necesidad, podría
ocasionar situaciones incomodas, sobre todo para la mujer causante del divorcio,
atentando contra la equidad y la justicia.
Con independencia de la asistencia familiar que pueda ser fijada a favor de uno de los
cónyuges, de conformidad con el artículo 144 CF Boliviano, el cónyuge culpable de la
desvinculación conyugal también puede ser condenado al resarcimiento de los daños
materiales y morales que hubiese causado al cónyuge inocente, si bien en la práctica
no es frecuente la solicitud de daños y perjuicios ocasionados por el matrimonio.
Actualmente casi todos los países del mundo admiten el divorcio. Hitoricamente han
existido dos tesis sobre el divorcio que son: las tesis divorcistas y la antidivorcistas.
La aceptación o rechazo del divorcio vincular despertó una verdadera polémica de difícil
solución entre quienes promulgan la desvinculación considerados como divorcistas y
los antidivorcistas que niegan la disolución matrimonial.
VI. FUNDAMENTACIÓN JURÍDICA DEL DIVORCIO:
En el derecho positivo familiar para que la institución del matrimonio se disuelva solo
será posible mediante una acción procesal, es decir implica que el divorcio es una
decisión del Estado.
Esta institución del divorcio en la ley 996 (código de familia derogado) según la doctrina
jurídica es una combinación de la tesis del divorcio sanción y remedio. Donde el divorcio
era regulado por causales porque se consideraba al matrimonio una institución más que
un contrato por lo mismo este es indisoluble si bien se puede regular por la vía legal
(hace referencia a los requisitos a los requisitos exigibles por ley).
Divorcio notarial.
Divorcio por la vía judicial o contencioso.
Divorcio notarial:
Este tipo de divorcio notarial es la novedad que nos trae el nuevo código de las familias
que ratifica al matrimonio como un contrato en el cual para su finalización será
necesario la voluntad de ambas partes.
Aunque se deberán considerar las regularizaciones judiciales para que sea procesa por
esta vía judicial.
Según el Art. 204 del Código de Familia. El matrimonio y la unión libre se extingue por:
Una vez que los cónyuges hayan cumplido con las disposiciones exigidas para el
acuerdo regulatorio de divorcio o desvinculación, la o el Notario de Fe Pública
emitirá testimonio de la escritura pública, para su inscripción en el Servicio del
Registro Cívico y la cancelación respectiva.
Personas que pueden ejercer la acción: de acuerdo al Art. 207: La acción de divorcio
o desvinculación se ejerce por la o el cónyuge o por ambos, por sí o por medio de
representación.
Extinción por reconciliación según el Art. 208 de la Ley 603: La reconciliación pone
fin al proceso y puede oponerse en cualquier estado de la causa, mediante
manifestación verbal o escrita, libre y voluntaria de ambos cónyuges ante la autoridad
judicial, si aún no hay sentencia ejecutoriada.
Nueva acción de divorcio el Art. 209 señala que: En caso de discordia, después de
la reconciliación, la o el cónyuge puede iniciar nueva acción de divorcio o
desvinculación.
II. Citada la parte demandada con o sin contestación, la autoridad judicial los
emplazará a comparecer en el término de tres (3) meses, a objeto de que se
ratifique o desista de su demanda, fijando día y hora de audiencia para la
atención del trámite de divorcio o desvinculación.
III. La autoridad judicial no debe emitir juicio de valor alguno a objeto de una
posible reconciliación o de la prosecución del proceso, bajo su
responsabilidad.
VI. Las partes de mutuo acuerdo tienen la facultad de renunciar al término de tres (3)
meses y solicitar día y hora de audiencia para resolver el trámite de divorcio o
desvinculación.
Representación por poder, según lo establecido en el Art. 213 de la Ley 603 de la Ley
603. El divorcio o desvinculación de la unión, puede realizarse por medio de
representante con poder especial otorgado ante Notaría de Fe Pública o ante autoridad
competente, con la mención expresa de la vía o vías en la que se realizará y la
identificación de la persona de quien la o el poderdante quiere divorciarse o pretender la
desvinculación. La presencia de esta última es indispensable en el acto.
I. Si uno de los cónyuges no tiene medios suficientes por estar en situación de salud
grave o muy grave, la autoridad judicial le fijará la asistencia familiar en las
condiciones previstas por el Artículo 116 del presente Código.
II. Esta obligación cesa cuando la o el cónyuge beneficiario constituye nuevo
matrimonio o unión libre, cuando mejora su situación de salud, por
empeoramiento de la situación económica de la o el cónyuge obligado al
pago, o por fallecimiento o presunción de fallecimiento de cualquiera de los
dos.
Según lo expresado por el Art. 215 de la Ley 603 la autoridad parental, derecho de
visita, supervisión y tutela.
III. En los casos en los cuales la madre o el padre que ha obtenido la guarda no
permita de forma recurrente por tres (3) veces consecutivas el derecho de
visita, previa verificación de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, la
autoridad judicial revocará la guarda y la confiará al otro cónyuge o un
tercero.
IV. En caso de que la o el hijo no quiera compartir con su padre o madre, se debe
respetar su decisión, siempre que existan causas justificadas.
II. El acuerdo establecerá la frecuencia con la que cada progenitor mantendrá una
relación directa y regular con los hijos o hijas y el sistema de asistencia
familiar, bajo la supervisión del equipo interdisciplinario de la Defensoría de
la Niñez y Adolescencia.
Nuevo matrimonio o unión libre de acuerdo al Art. 218 de la Ley 603: Luego de
establecida la desvinculación, las personas pueden volver a constituir matrimonio o
unión libre sin condicionante alguna, con el cumplimiento de los requisitos establecidos
en el presente Código.