Está en la página 1de 3

Lucas 1:18-22

Y dijo Zacarías al Angel: "¿En qué conoceré esto? porque yo


soy viejo y mi mujer está avanzada en días". Y respondiendo el
Angel, le dijo: "Yo soy Gabriel, que estoy delante de Dios, y soy
enviado a hablarte y traerte esta feliz nueva: Y he aquí que
serás mudo, y no podrás hablar hasta el día en que se hagan
estas cosas, porque no creíste a mis palabras, las cuales se
cumplirán a su tiempo". Y el pueblo estaba esperando a
Zacarías, y se admiraba de que tardase en el templo. Y cuando
salió no les podía hablar, y entendieron que había visto visión
en el templo. Y él se lo significaba por señas, y permaneció
mudo. (vv. 18-22)

San Juan Crisóstomo, homiliae 2, De incomprehens. Dei


natura
Teniendo en consideración Zacarías su propia edad, y también
conocida la esterilidad de su mujer, desconfió. Por lo que
añade: "Y dijo Zacarías al ángel: ¿En qué conoceré esto?"
Como si dijese: "¿Cómo se hará esto? Y añade la causa de su
duda: "Yo, pues, soy viejo". La edad extemporánea, la
naturaleza inepta: soy débil para engendrar, la tierra es estéril.
Algunos consideran por esto indigno de perdón a un sacerdote
que hace tantas preguntas, porque cuando Dios indica alguna
cosa, conviene creerla; discutir acerca de ella es propio de un
alma rebelde. De donde prosigue: "y respondiendo el ángel le
dijo: "Yo soy Gabriel que estoy delante de Dios".

Beda
Como si dijese: a un hombre que prometiese tales prodigios,
sería permitido pedirle un signo; pero cuando es un Angel quien
promete, ya no conviene dudar. Sigue: "Y soy enviado a
hablarte", etc.

San Juan Crisóstomo, homiliae 2, De incomprehens. Dei


natura
Para que cuando oigas que soy enviado por Dios, no creas que
hay algo de humano en estas cosas que se te dicen. Y no hablo
por mí, sino que te anuncio lo dicho por Aquel que me ha
enviado. La virtud y la bondad de un enviado, consisten en que
no diga nada de sí propio.

Beda
Debe notarse aquí que el ángel afirma al mismo tiempo que él
está delante de Dios y es enviado a evangelizar a Zacarías.

San Gregorio Magno, homiliae in Evangelia, 34


Porque cuando los ángeles vienen a nosotros, cumplen
exteriormente su ministerio de tal modo que -interiormente-
jamás pierden la contemplación de Dios; porque aun cuando el
ángel es limitado, el Espíritu soberano -que es Dios- no es
limitado. Así los ángeles, aun cuando son enviados, están ante
El, porque a cualquier parte que vengan enviados, siempre
corren dentro de El.

Beda
Le concede la señal que pide para que el que ha hablado no
creyendo, aprenda a creer callando. Y por ello prosigue: "Y he
aquí que tú quedarás mudo".

San Juan Crisóstomo, homiliae 2, De incomprehens. Dei


natura
Para que los vínculos de su impotencia generativa se
trasladasen a las cuerdas vocales. No se le perdona por la
consideración de ser sacerdote, sino que por el contrario, se le
castigaba más, porque debía aventajar en la fe a los otros.

Teofilacto
Mas como la palabra griega κωφός1 puede también significar
sordo, dice bien: "Tú que no crees, quedarás sordo, y no
podrás hablar". Convenientemente sufrió estos dos castigos:
como desobediente, la sordera, y como reacio, la mudez.

San Juan Crisóstomo, homiliae 2, De incomprehens. Dei


natura
Dice "y he aquí", como si dijese: "En este instante". Pero
considera la misericordia del Señor en lo que se sigue: "Hasta
el día en que sucedan estas cosas". Como si dijera: cuando te
demuestre lo que te digo con la realización de los hechos y
conozcas que has sido castigado con justicia, entonces te
sacaré de esta pena. Y manifiesta la causa de la pena cuando
añade. Por lo mismo que no has creído en mis palabras, que se
cumplirán a su tiempo, no atendiendo al poder de Aquel que
me envió y a quien yo asisto. Si es castigado aquel que es
incrédulo acerca de un nacimiento mortal, ¿cómo evitará el
castigo el que rechaza el nacimiento celestial e inefable?

Griego
Mientras pasaban estas cosas dentro del templo, la tardanza
en salir obligaba a admirarse a la multitud que esperaba fuera.
Por ello prosigue: "Y el pueblo estaba esperando a Zacarías y
se maravillaban de que tardase en salir". Como había lugar a
muchas suposiciones, cada uno hablaba a su modo hasta que,
saliendo Zacarías, enseñó con su silencio lo que le había
sucedido en el secreto del templo. Entonces prosigue: "Y
cuando salió no podía hablar".

Teofilacto
Zacarías hacía señas al pueblo, que acaso le preguntaba la
causa de su silencio. No pudiendo expresarla con palabras, la
declaraba con señas. Por eso se añade: "Y él se lo significaba
por señas, y permaneció mudo".

San Ambrosio
Se entiende por seña un acto o movimiento corporal sin
palabras, que tiende a indicar la voluntad sin expresarla.

Notas
1. κωφός : mudo; sordo.

También podría gustarte