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El amor como base de las relaciones humanas

El ser humano a lo largo de su existencia ha creado reglas de urbanidad que han


servido dentro de lo que cabe, para mejorar, desarrollar y mantener las relaciones
dentro de una comunidad. Sin embargo, por la falta de cultura, valores y conciencia
cívica estas reglas no se cumplen o no se llevan a cabo en su totalidad, lo que ha
dado pie a problemas sociales graves tales como la violencia y la falta de respeto
entre individuos.

Empero existe algo mucho mas fundamental que una serie de normas restrictoras
para llevar a otro nivel las relaciones humanas, el amor fraternal, puede sonar
absurdo ya que el amor se identifica únicamente en un contexto de amistad o
noviazgo, en un concepto muchas veces muy simple y en realidad es mucho más
complejo que eso. Primeramente, hay que tener claro lo que es el amor fraternal.

El amor fraternal es, sin duda el primordial en cualquier tipo de amor, ya que es el
amor a la humanidad, a los de nuestra propia carne y sangre, el amor al prójimo,
envuelto inminentemente con el respeto, la solidaridad y compasión hacia el mismo.
Ahora bien, la pregunta es; ¿Porqué es importante que exista el amor fraternal en las
relaciones humanas?

Porque no solo es importante, es elemental, es la base esencial en una sana relación


de cualquier forma con un individuo, así como de comprender que la humanidad es
uno, dejando a un lado las clases sociales, las razas, los géneros, la inteligencia o
habilidades para algo y otras muchas cosas que el ser humano ha creado y que han
dado pie a que no se otorgue el ser humano la oportunidad de amar a sus semejantes.

Surge otra pregunta sustancial en el tema; ¿Cómo lo hago? Ahora que ya se tiene las
bases del amor fraternal, es importante llevarlo a cabo. Antes que nada, para
experimentar este tipo de amor, es necesario que el individuo despeje su mente y
abra su alma, donde se encuentra la esencia del mismo, para lograr una identidad
con la persona que parece tan ajena a él y, del mismo modo, lograr la conexión
penetrando en su interior y encontrando lo que los une.

Creo que el amor fraternal se debe incluir como parte de la educación no solo a
individuos de corta edad, si no a todo ser humano. Y, de esta forma comprendiendo
¿qué es? y ¿cómo funciona?, hacer un pequeño cambio en las personas y disminuir
todos los problemas que se suscitan en la sociedad, así como, el abuso en cualquiera
de sus formas de un ser humano a otro.
Un cambio que comienza pequeño podría ser impresionantemente significativo a
largo plazo en la humanidad. Finalmente concluyo con una de mis frases favoritas.
“El amor solo comienza a desarrollarse cuando amamos a quienes no necesitamos
para nuestros fines personales” (Erich Fromm, 1995)

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