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Bertholet Edouard - El Ministerio de Los Angeles PDF
Bertholet Edouard - El Ministerio de Los Angeles PDF
Sección I.
1. Los Ángeles creados por Dios.....
2. Los Ángeles celebran las alabanzas de Dios y lo adoran.
3. Los Ángeles se encuentran en la presencia de Dios.
4. Los Ángeles no deben ser adorados.
Sección II.
Los Ángeles componen el ejército de los cielos.
Sección III.
Los Ángeles son Espíritus servidores de Dios ; Ellos obedecen su voluntad.
Sección IV.
1. La ley ha sido dada para el ministerio de los Ángeles.
2. Es el Ángel del Eterno quien ha conducido a los Israelitas fuera de Egipto.
Sección V.
Los Ángeles ejecutan los designios y los juicios de Dios.
Rol de los Ángeles de las siete Iglesias.
Sección VI.
1. Los Ángeles han servido a Jesús Cristo antes y durante su encarnación,
luego tras su Resurrección.
2. Separación de los justos de los malvados.
3. Existe gozo entre los Ángeles por un pecador que se arrepiente.
Sección VII.
Los Ángeles hacen conocer la voluntad de Dios y de Cristo.
Sección VIII.
Naturaleza de los Ángeles
1. Los Ángeles son inmortales.
2. Ellos son poderosos.
3. Ellos son santos.
4. Ellos son sabios.
5. Ellos son ejemplos de dulzura.
6. Ellos son innumerables.
7. Ellos son de diferentes Órdenes.
8. Ellos son capaces de equivocarse.
9. Ángeles rebeldes.
Sección IX.
Los Ángeles han anunciado:
1. La concepción de Jesús-Cristo.
2. El nacimiento de Jesús-Cristo.
3. La resurrección del Señor.
4. La Ascensión y la segunda venida del Señor.
5. La concepción de Juan el Bautista.
Sección X.
Ángeles guardianes y Ángeles exterminadores.
Sección XI.
Los fieles han recibido la visita de los Ángeles.
Sección XII.
Los fieles son semejantes a los Ángeles tras la resurrección.
Los malvados no creen en la existencia de los Ángeles.
Sección XIII.
Satán y los Ángeles rebeldes.
Los ángeles malos combaten contra los santos.
Condenación de Satán y de los Ángeles rebeldes.
Sección XIV.
Necesidad y utilidad de la práctica de la caridad, realizada a veces por un
Ángel de Dios sin saberlo.
Sección XV.
Los Ángeles del Juicio Final.
CAPÍTULO II.
Los Ángeles tal como ellos están definidos por los Diccionarios :
1. Moreri;
2. 2. Migne;
3. 3. Trousset;
4. 4. Nuevo Larousse.
CAPÍTULO III.
Los Apócrifos y la angelología:
1. El libro de Enoch ;
2. El Protoevangelio de Santiago;
3. Historia de José, el carpintero;
4. Evangelio de Nicodemo;
5. Historia de San Andrés ;
6. Santiago el Mayor ;
7. Historia de San Juan, el Evangelista ;
8. El Testamento del Bienaventurado Job;
9. Leyendas y fragmentos sobre la Historia de José ;
10. El libro de Tobías ;
11. El Evangelio de la paz de Jesús-Cristo;
12. El libro del Nacimiento, de la Vida y de la Muerte de la Bienaventurada
Virgen María ;
13. El libro del pasaje de la muy santa Virgen María ;
14. El Evangelio del nacimiento de Nuestro Señor ;
15. Daniel Rops y los Evangelios de la Virgen ;
16. El Evangelio de la Vida perfecta;
17. Ascensión de Isaías.
CAPÍTULO IV.
Los Padres de la Iglesia han creído en la existencia de los Ángeles.
Sección I.
1. Tertuliano ;
2. Justino ;
3. Orígenes;
4. La oración de Santa Marcina;
5. San Dionisio, el Areopagita ;
6. Palladius. Historia lausiaca.
Sección II.
Jean Danielou: Las creencias de los Padres en el Ministerio de los Ángeles.
Sección III.
De nuevo la creencia de los Padres en el Ministerio de los Ángeles.
Sección IV.
R. Draguet : Los Padres del desierto y los Ángeles.
CAPÍTULO V.
La Edad Media y la angelología
Sección I.
1. Santo Tomás de Aquino y la angelología
2. El R.P.Berthier y su estudio de la "Suma": Los Ángeles.
Sección II.
1. El R.P.Tomás Pégues: La "Suma" en forma de catecismo;
2. Etienne Gilson y la angelología.
Sección III.
1. Dante y la angelología;
2. Juan Tauler: Una ceguera;
3. San Raimundo Nonato.
Sección IV.
San Bernardo de Clairvaux y sus visiones angélicas.
Sección V.
Santa Juana de Arco, sus Voces y Visiones angélicas.
Sección VI.
San Francisco de Asís y sus visiones angélicas.
CAPÍTULO VI.
El Renacimiento y la angelología
Sección I.
Ars bene moriendi.
Sección II.
San Felipe de Neri.
Sección III.
Robert Fludd: La Muralla mística de la Salud.
Sección IV.
El P. Maldonat: Tratado muy docto de los Ángeles.
Sección V.
Un teólogo del siglo XVII, Guillaume Sherlock y su concepción de la
angelología.
Sección VI.
La angelología de Bossuet.
Sección VII.
La Caballería y la angelología.
Sección VIII.
La Natividad de Nuestro Señor.
CAPÍTULO VII.
Tiempos modernos y manifestaciones angélicas.
Sección I.
1. Aparición del Arcángel Rafael a un trabajador de la Beauce;
2. La Señora Couédon y sus múltiples manifestaciones del Arcángel Gabriel.
Sección II.
El cura de Ars : Manifestaciones angélicas y diabólicas.
Sección III.
1. Juan Raynaud: Tierra y Cielo;
2. Hermana María de la Cruz ;
3. María -Teresa Nobelet;
4. A. van Mons: La angelología y las Beatitudes.
Sección IV.
Las Enseñanzas del Maestro Felipe de Lyón sobre los Ángeles.
Sección V.
El Sar Péladan y la angelología.
Sección VI.
Charles Sauvé: El Ángel y el Hombre íntimo.
Sección VII.
El Dr. Rozier y la angelología.
Sección VIII.
1. Las Visiones de Ana -Catherine Emmerich;
2. Santa Lydwine de Schiedam.
CAPÍTULO VIII.
La angelología del siglo Veinte.
Sección I.
El Abate Feigne: El Ángel guardián.
Sección II.
Irmin Sylvan: El Mundo de los Espíritus.
Sección III.
Joy Snell: La Misión de los Ángeles.
Sección IV.
El R.P.Régamey: ángeles
Sección V.
El Padre Lamy, Apóstol y Místico.
Sección VI.
Léon Savary: Los Ángeles guardianes.
Sección VII.
La angelología del Padre Pío.
Sección VIII.
Santa Gemma Galgani y los Ángeles.
CAPÍTULO IX.
De nuevo la angelología moderna
Sección I.
El Cardenal Lépicier y la angelología.
Sección II.
El P. Serti: ÁNGELES:: El Catecismo de los infieles
Sección III.
Los Ángeles a la luz del Resumen de la doctrina cristiana por el Abate
Boulenger.
Sección IV.
La Conmemoración de los Ángeles en el Calendario católico.
Sección V.
La angelología de Swedenborg.
Sección VI.
H.I. Marron: Un Ángel caído, un Ángel todavía.
Sección VII.
E. Peterson: El libro de los Ángeles.
Sección VIII.
Ania Teilhard: La Dimensión desconocida. Experiencias del Más Allá.
CAPÍTULO X
Tabla sintética de los atributos y carismas de los nueve coros de los
Ángeles
CAPÍTULO XI
Breve iconografía de la angelología de principios del XIX siglo
CONCLUSION
EPILOGO
1. La asistencia angélica y la oración de la fe curando las enfermedades.
2. La grande fe y la oración de San Francisco .
3. Santa Colette de Corbie socorrida por los Ángeles.
4. Santa Marguerite de Cortone y su ángel guardián.
5. Padre Pío: "Es un milagro de Dios. Y para Dios todo es posible. Es suficiente
tener fe."
Prefacio
Al lado de estos seudo sabios, que pensaron poder motivar así su desinterés
de la cuestión, hay una multitud de aquellos que pasan al costado del problema
de la misión de los Ángeles en el mundo, o aún en el cosmos. Hay que
reconocer al fin y deplorar que muchos cristianos, a pesar de la enseñanza
formal de la Biblia, no prestan una atención suficiente a este problema capital;
en efecto, cuando se ha realizado el valor y la realidad de la asistencia de los
Ángeles, notablemente del Ángel guardián que nos es atribuido, toda la
orientación de la Vida cambia ; una serenidad, que ni la materia ni sus goces
ficticios pueden ofrecer, se apodera del ser que, al momento de la meditación
silenciosa, realiza que hay una presencia amiga que lo protege, lo aconseja y lo
guía. También, con el P. Danielou, nosotros diremos : " Es porqué hablar de los
Ángeles no será inoportuno. En adición, nosotros constatamos que los más
grandes de entre los santos y los hombres de Dios vivían en la familiaridad de
los Ángeles, de San Agustín hasta John-Henry Newman. Y la tradición de la
Iglesia le ha hecho siempre un lugar muy grande en su teología."
Finalmente el punto principal, a retener, el P. Danielou hace remarcar que "el
objeto mismo de nuestro estudio es el de mostrar que todo el rol de los Ángeles
es el de conducir a la humanidad al culto del único Dios verdadero."
Por nuestra parte , adoptaremos para nuestra exposición, el mismo plan que
hemos seguido en la presentación de nuestra obra : “El Cristo y la curación de
las enfermedades” ; así daremos desde el principio la enseñanza más completa
de la Biblia sobre la misión de los Ángeles cerca de los individuos, en el Mundo
terrestre y mismo en el cosmos, luego mostraremos sus manifestaciones todo a
lo largo de las edades hasta nuestros días.
Nosotros pensamos y lo mismo esperamos que, de la importante cantidad de
documentos reunidos, verdadera pequeña antología angélica, saldrá una luz,
que revelará una enseñanza perdida, de donde nacerá una certeza nueva,
benefactora e iluminante, a saber : la existencia y la acción constante de los
Ángeles entre los hombres y en el mundo. No se ignora además que cada uno
de nosotros tiene su ángel guardián que le es dado, al cual podemos apelar en
toda ocasión, afín de beneficiarnos de sus juiciosos consejos.
No aspirando de ninguna manera a hacer de esta creación una obra
puramente literaria, no habrá lugar para reprocharnos nuestras numerosas
repeticiones, ellas son deseadas para colocar bajo los ojos del lector los
documentos originales, con frecuencia difíciles de conseguir. Se dará así más
fácilmente cuenta del progreso de la idea y de la acción de los Ángeles a través
de los siglos, desde la más alta antigüedad hasta nuestros días.
No se asombren de encontrar la palabra ángeles con una “A” mayúscula o con
una “a” minúscula, al hacerlo hemos respetado la ortografía adoptada por los
diferentes autores citados.
Ahora abramos la Biblia y veamos entonces la enseñanza que las Santas
Escrituras nos dan sobre la naturaleza y sobre el ministerio de los Ángeles.
En cuanto al valor de las enseñanzas de la Biblia, hay que recordar eso que el
sanador místico Samuel Zeller dijo a sus jueces cuando él era perseguido por
práctica ilegal de la medicina :
“La Biblia no debe ser más que un libro de lectura al uso de los colegios, o
bien, en nuestra pretendida Cristiandad, está de nuevo permitido vivir según
ella ?”
Capítulo primero
Secciones Uno a tres
El ministerio de los Ángeles según la Biblia
SECCIÓN I:
Los Ángeles han sido creados por Dios y están sometidos al Cristo.
En el salmo 33.6, leemos : “Los cielos han sido creados por la Palabra del
Eterno. Y todo su ejército por el soplo de su boca. (Variantes : Es el soplo de su
boca que ha hecho el ejército de las estrellas (M). Y el soplo de su boca ha
producido toda su virtud (et spiritus oris ejus omnes virtus eorum) (V).
misma afirmación en Nehemías (9,6):
¡tú solo eres el Eterno! Eres tú quien ha hecho los cielos, los cielos de los
cielos y todo su ejército.
San Pablo en su Epístola a los Colonienses (1,15-17) precisará:
“Es Cristo quien es la imagen del Dios invisible, el Primero nacido de toda la
Creación. Es en él que todo ha sido, creado en los cielos y sobre la tierra, lo
visible y lo invisible, los tronos, las Dominaciones, las autoridades, las
Potencias ; todo ha sido creado por él y para él. Él está antes de todas las
cosas y todas las cosas subsisten en él.”
En la misma Epístola (Col. 2,10) leemos además: “Cristo es el jefe de toda
soberanía y de toda potencia”.
Lección completada por 1 Pedro 3,22: “Jesús-Cristo, quien, habiendo subido al
cielo, está a la derecha de Dios y le están sometidos los Ángeles, los
principados y las Potencias”.
He aquí los pasajes que confirman esta actitud de los Ángeles hacia Dios :
Nehemías (9,6) ya citado completará : “y el ejército de los cielos se prosterna
delante de ti”.
“Al nombre de Jesús, toda rodilla se flexiona en los cielos y sobre la tierra”
(Filipenses 2,10-11).
Cuando Dios introdujo a su Hijo primero nacido en el mundo, Él dijo : «Que
todos los Ángeles de Dios lo adoren !» De los Ángeles, Él dijo esto: «Él hizo de
sus ángeles vientos y de sus servidores una llama de fuego. »
“Todos ellos se prosternaron delante del Eterno (PS. 97,7); variante: Adoradle
vosotros todos que sois sus ángeles (V).
Bendición al Eterno, vosotros, sus ángeles fuertes y valientes,
Que ejecutan su mandamiento
y que obedecen a su voz !
Bendición al Eterno, vosotros, todos sus ejércitos
Que están a su servicio y que hacen su voluntad (PS. 103,20-22).
Misma enseñanza en el salmo 148,2 :
“Alabad al Eterno, vosotros, todos sus ángeles
Alabadle, vosotros, todos sus ejércitos”.
Variante:
“Alabadle vosotros todos que sois sus ángeles.
Alabadle, vosotros todos que sois sus potencias.
Laudate eum, omnes angeli ejus.
Laudate eum, omnes virtutes ejus. (V.)
Luego de haber tenido por el canal del Ángel de Dios, las revelaciones y las
Visiones que San Juan relata en su Apocalipsis, el apóstol quiso arrojarse a los
pies del Ángel para adorarlo, él lo tomó y recibió este concejo o mas bien esta
orden : «Guárdate tú de hacerlo »; más aún he aquí el episodio completo según
Apocalipsis 19,9-10: «El Ángel me dijo : Escribe : «Felices aquellos que son
invitados al banquete del casamiento del Cordero !» Él me dijo además: «Estas
son las verdaderas palabras de Dios ». Entonces yo me arrojé a sus pies para
adorarlo ; pero él me dijo : «Guárdate tú de hacerlo ; yo soy el servidor de
Dios... Adora a Dios !» El Apocalipsis de Juan toma fin sobre una escena
idéntica :
«Soy yo Juan quien ha visto y escuchado estas cosas. Luego de haberlas
escuchado y visto, yo me arrojé (tumbé para prosternarme [M]) a los pies del
Ángel que me las mostraba, para adorarlo. Pero él me dijo : «Guárdate tú de
hacerlo ! Yo soy servidor de Dios como tú y los profetas... Adora a Dios !» (Apo.
22,8-9).
Bertholet02
SECCIÓN II:
Los Ángeles componen el ejército de los cielos
SECCIÓN III:
Los Ángeles son Espíritus servidores de Dios, obedecen su voluntad.
No solamente los Ángeles obedecen la voluntad de Dios, sino que ellos están
de nuevo sometidos a Jesús Cristo quien es su superior ; leemos en efecto:
Al cual de los Ángeles Dios ha dicho jamás :«Tú eres mi Hijo...»
y cuando él introdujo en el Mundo a su Hijo primogénito, Él dijo : «Que todos
los Ángeles de Dios lo adoren !» Se encuentra una afirmación idéntica en el
salmo 304,4.
De los Ángeles se dijo esto: «Él hizo de sus ángeles vientos y de sus
servidores una llama de fuego. »...
¿Los Ángeles no son todos Espíritus al servicio de Dios, enviados por él para
ejercer un ministerio en favor de aquellos que deben recibir una herencia de
salud?» (Hébr. 1,5-14).
Por orden de Dios, los Ángeles son puestos para custodiar a aquellos que han
encontrado gracia frente al Eterno :
Ningún mal se aproximará a tu morada,
Porque el Eterno ordena a sus ángeles
Protegerte en todas tus empresas.
Ellos te llevarán sobre sus manos,
De modo que tu pie no se lastime contra una piedra(PS. 91,10-12).
Capítulo primero
Secciones Cuatro a Siete
SECCIÓN IV:
La ley ha sido dada para el ministerio de los Ángeles.
Soy yo quien, en la asamblea del desierto, estaba con el Ángel que le habló
sobre el monte Sinaí… y que recibió palabras de la Vida para dárnoslas (Actos
7,38); pero los Judíos al contrario, incircuncisos de corazón y de oídos, se
opusieron al Espíritu Santo, lo que le hizo decir al Apóstol : «Ustedes que han
recibido la ley para el ministerio de los Ángeles y que no la han guardado!»
(Actos 7,53.)
En la Epístola a los Gálatas (3,19) encontramos la misma crítica hacia el
Pueblo de Israel : «La ley ha sido promulgada por los Ángeles y por la
intervención de un mediador ». Y la Epístola a los Hebreos, confirma el hecho,
pone en guardia al Pueblo, porque toda trasgresión de la ley no puede tener
mas que consecuencias desastrosas : «En efecto, si la Palabra anunciada por
los Ángeles se ha cumplido, si toda trasgresión, toda desobediencia ha recibido
su justa retribución, cómo escaparemos si rechazamos una tan grande salud?»
(Héb. 2,2.)
En la época del éxodo, el Ángel del Señor ha recibido en esta ocasión una
misión bien determinada ; y he aquí la prueba : «El Ángel de Dios que
marchaba delante del campo de los Israelitas, pasó detrás de ellos ;
y la columna de nube que les precedía fue a ponerse detrás de ellos, entre el
campo de los Egipcios y el campo de los Israelitas. Ella era para unos una
nube oscura y para los otros, ella iluminaba la noche.» (Éxodo 14,19-20.)
Dios dijo a Moisés : «Ve ahora, conduce el Pueblo allí donde yo te he dicho.
He aquí que mi Ángel marchará delante tuyo.» (Éxodo 32,34.) y más adelante,
leemos además: «Ve, sal de aquí, tú y el Pueblo que tu has hecho salir de
Egipto... Yo enviaré delante tuyo un ángel, y yo cazaré a los Cananeos. »
(Éxodo 33,2.)
SECCIÓN V:
Los Ángeles ejecutan los designios y los juicios de Dios. Rol de los Ángeles de
las siete Iglesias.
Dios envía el Ángel Gabriel a una villa de Galilea, llamada Nazareth cerca de
una Virgen... Esta virgen se llamaba María. El Ángel habiendo entrado en el
lugar donde ella estaba, le dijo :«Yo te saludo María llena de gracias, el Señor
está contigo.» (Luc 1,26-29.) como María estaba inquieta por esta aparición y
por el mensaje que le había dado, el Ángel le dijo :«No te preocupes, María,
porque tú has encontrado gracia ante Dios . He aquí que tu concebirás y
tendrás un hijo a quien tú darás el nombre de Jesús... » Entonces, María dijo al
ángel : «Cómo será eso, puesto que yo no conozco hombre ?» El Ángel le
respondió :«El Espíritu Santo vendrá sobre tí y la potencia del Muy Alto te
cubrirá con su sombra. » (Luc 1,26-35.)
Es de nuevo el Ángel de Dios quien revela a Juan los designios del Señor ; el
último capítulo del Apocalipsis lo indica netamente :
Juan realiza que las profecías anunciadas en ese libro son iluminativas y de
valor: «Entonces el Ángel me dijo : «Estas palabras son ciertas y verdaderas, y
el Señor, el Dios de los Espíritus de los profetas ha enviado su ángel para
mostrar a sus servidores lo que debía llegar.»... Soy yo Juan quien ha visto y
escuchado estas cosas. Y algunas líneas más adelante, aprendemos además:
«Soy yo, Jesús, quien ha enviado mi Ángel a vosotros dando testimonio de
todo aquello delante las Iglesias. (Variante: en relación con las Iglesias [M].)
(Apo. 22,6-16.)
En el Antiguo Testamento numerosas son las referencias que relatan la misión
de los Ángeles ejecutores de los designios de Dios. Dos ángeles han recibido
la orden de destruir Sodoma y Gomorra, ellos vinieron a advertir a Loth y su
familia de tener que huir lo más rápido ; los Ángeles golpearon cegando
aquellos que los seguían y que querían penetrar por la fuerza en la casa de
Loth. (Gen. 19,1-20.)
He aquí de nuevo el caso de una misión punitiva encargada a un ángel, así
como es narrada en II Samuel 24,16-17: La cólera del Eterno se había
levantado contra David y su pueblo, el Ángel de Dios es enviado para cumplir la
sentencia y «el Ángel extendió su mano sobre Jerusalén para exterminarla ; él
envió una peste que hizo 70 000 víctimas ; al cabo de tres días, el Eterno tuvo
compasión y dijo al Ángel que asolaba al Pueblo : «Bastante ! Retira ahora la
mano ». El Ángel del Eterno estaba entonces cerca del lugar de Aravna (alias
Oman [M]), el Jebusiano.
La misma escena es narrada con más detalles en 1 Crónicas 21,14-20:
El Eterno liberó entonces la peste en Israel, perecieron setenta mil Israelitas.
Luego Dios envía un Ángel a Jerusalén para exterminarla. Y como el Ángel se
dedicó en esta obra de destrucción, el Eterno observa. Él se arrepintió frente a
tal calamidad, y él dijo al Ángel destructor : «Bastante !... Retira ahora tu
mano.» El Ángel del Eterno se quedó entonces cerca del lugar de Oman, el
Jebusiano. David habiendo levantado los ojos, vio al Ángel del Eterno que
estaba entre la tierra y el cielo, teniendo en la mano una espada desnuda,
apuntada contra Jerusalén... Oman estando de regreso vio al ángel... El Ángel
del Eterno dijo a Gad, el vidente de David, de Él transmitirá la orden de
construir un altar sobre el espacio perteneciente a Oman. El rey lo compró por
seiscientos siclos de oro y elevó un altar.
En II Reyes 19,35, se relata la asistencia del Ángel de Dios en favor de los
Israelitas : Durante esta misma noche, un Ángel del Eterno fue al campo de los
Asirios e hizo perecer 185 000 hombres. El mismo episodio es relatado en II
Crónicas, 32, 20-21. El rey Ezequías, así como Isaías se pusieron a orar
haciendo subir sus exclamaciones hacia el cielo. El Eterno envía un Ángel
quien extermina todo el ejército del Rey de Asiria en el campo mismo con los
jefes y los generales (M).
Se conoció la terrible Punición del Rey Herodes por su vida culpable y porque
él no había dado gracias a Dios : En el mismo instante Herodes fue golpeado
por un Ángel del Señor... Y él murió. (Actos 12,23.)
Juan, el vidente de Patmos, en su Apocalipsis, menciona los Ángeles de las
siete Iglesias ; una voz imperiosa le había ordenado «Lo que tú vas a ver,
escríbelo en un libro, y envíalo a las siete Iglesias, a Efeso, a Esmirna, a
Pérgamo, a Tiatira, a Sardes, a Filadelfia y a Laodicea. (Apo. 1,11.)
Las siete estrellas que tú has visto en mi mano derecha son los Ángeles de las
siete Iglesias y los siete candelabros de oro son las siete Iglesias. (Apo. 1,20.)
La orden de escribir a los Ángeles de las siete Iglesias es retomado
sucesivamente en Apo, II, 1, 8, 12, 18; Apo. III, 1, 7,14. La orden es librada
idénticamente :
«Escribe al Ángel de la Iglesia de Efeso.
Escribe también al Ángel de la Iglesia de Esmirna.»
Y así sigue en el orden enunciado más arriba.
Los siete ángeles tocan la trompeta. (Apo. 8-6.)
«Yo vi siete ángeles que tenían siete plagas.» (Apo. 15,1.)
«Entonces yo escuché una grande voz que venía del Templo y que dijo a los
siete ángeles : «Id, y echad sobre la tierra los siete golpes de cólera de Dios.»
(Apo. 16,1.) y la operación se hizo de la manera siguiente :
El Primer Ángel da su golpe sobre la tierra; y una úlcera maligna y dolorosa
golpea a los hombres que tenían la marca de la bestia.
El segundo Ángel da su golpe en el mar ; y el mar se convirtió en sangre.
El tercer Ángel da su golpe en los ríos y las fuentes de las aguas ; y las aguas
se cubrieron de sangre.
El cuarto Ángel da su golpe sobre el sol y le fue dado quemar a los hombres
por el fuego.
El quinto Ángel da su golpe sobre el trono de la bestia ; su reinado fue hundido
en las tinieblas.
El sexto Ángel da su golpe sobre el gran río Éufrates ; y el río se secó.
El séptimo Ángel da su golpe en el aire ; y una voz salida del Templo dijo :
«Está hecho !» y hubo relámpagos, truenos y un temblor de tierra tal como
jamás hubo. (Apo. 16,2-18.)
Se ve que la misión de los Ángeles puede ser de las más terribles.
SECCIÓN VI:
Los Ángeles han servido al Cristo antes y durante su encarnación, luego
tras la resurrección.
Nosotros hemos ya expresado que en el Salmo 91, David hizo alusión para
custodiar a los Ángeles ; se recuerda que él dijo esto :« El Eterno ordenará a
sus ángeles protegerte... Ellos te llevarán sobre sus manos, de modo que tu pie
no se lastime contra una piedra».
Este tema ha sido tomado por Satán cuando él tienta al Cristo durante su
ayuno en el desierto. En Mateo 4,6, leemos en efecto: «Luego de haber
transportado a Jesús sobre lo alto del templo, el diablo dijo al Cristo : «Si tú
eres hijo de Dios, arrójate al piso ; porque está escrito : Él dará a sus Ángeles
órdenes sobre esto ; ellos te llevarán sobre sus manos, de modo que tu pie no
se lastime con una piedra». Jesús respondió :«Está también escrito: «Tú no
tentarás al Señor tu Dios ». La continuación del relato de Mateo completa la
tabla de la misión de los Ángeles en relación con Jesús (v. versos 8-11): «El
diablo transporta al Cristo sobre una alta montaña ; él le muestra todos los
reinos del mundo y su gloria, y le dijo :« Yo te daré todos estas cosas, si te
prosternas delante mío, y me adoras ». Entonces Jesús le dijo :«Retírate,
Satán! Porque está escrito : «Tú adorarás al Señor , tu Dios, y tu no rendirás
culto mas que a él solo ». Entonces el diablo lo deja ; y he aquí que los Ángeles
se aproximaron y le sirvieron.»
Marcos, más conciso, relata el mismo incidente e insiste muy especialmente
sobre la misión de servicio de los Ángeles : «Jesús pasa cuarenta días en el
desierto, tentado por Satán; él estaba con las bestias salvajes, y los Ángeles le
servían». (Marc 1,13.)
Entonces el Cristo estaba en oración sobre el monte de los Olivos y pedía que
la copa amarga se apartase de sus labios y que él manifestaba su sumisión
diciendo : «Sin embargo que tu voluntad sea hecha y no la mía!» Un Ángel le
apareció del cielo que lo fortificaba. (Luc 22,43.)
En Juan (1,51) encontramos relatada esta afirmación de Jesús: «En verdad,
en verdad, yo te declaro, tú verás el cielo abierto, y los Ángeles de Dios
subiendo y bajando sobre el hijo del hombre.»
Más aún, Jesús estaba perfectamente consciente de esta asistencia constante
de los Ángeles que él le era suficiente pedir al Padre. En la época del arresto
de Jesús en el jardín de Getsemaní, se recuerda el episodio de un partidario de
Jesús que saca su espada y corta la oreja del servidor del gran sacerdote.
Entonces Jesús le dijo :«Vuelve tu espada a su lugar; porque todos aquellos
que matan por la espada, perecerán por la espada. Crees tú que yo no podría
invocar a mi Padre, quien me daría tantos más de doce legiones de ángeles.»
(Mat.. 26,51-54.)
SECCIÓN VII:
Los Ángeles hacen conocer la voluntad de Dios y de Cristo.
Cuando él fue conducido a Roma para comparecer delante de César, Pablo
había dicho a sus guardias de no poner las velas y de no salir del Puerto donde
ellos se encontraban actualmente, porque él veía que la navegación no sería
sin grandes peligros tanto para las personas, como para el cargamento y para
el navío ; el capitán no quiso tener en cuenta esta sabia advertencia ; y, desde
que ellos estuvieron en alta mar, una furiosa tempestad se desencadenó ;
cuando el navío estaba desamparado, y el cargamento tenía que ser arrojado
fuera de abordo, todos los pasajeros estaban desesperados y creían que su
última hora vino; sin embargo Pablo los conforta y dijo:«Yo los exhorto a tener
coraje ; ninguno de ustedes perecerá, y no habrá pérdida del navío. Esta
noche, en efecto, un Ángel del Señor, a quien yo pertenezco y que yo sirvo, se
me apareció y me dijo :«Pablo no te preocupes ; es necesario que
comparezcas delante César; y he aquí que Dios te ha acordado la Vida de
todos aquellos que navegan contigo.» (Actos 27,14-25.)
Desde el principio del Apocalipsis el autor declara : «Revelación de Jesús
Cristo para mostrar a sus servidores aquello que pronto sucederá ; él lo hizo
conocer enviando su ángel a Juan, su servidor.»
En los Actos (5,20), se dijo que el gran sacerdote había hecho arrestar a los
apóstoles y los había encarcelado en la prisión pública. « pero un Ángel del
Señor le abrió, durante la noche, las puertas de la prisión, los hizo salir y les
dijo:«Id a presentaros en el templo y anunciad al pueblo las palabras de vida.»
Nosotros hemos ya expresado que Juan, el visionario, estaba en comercio
constante con los Ángeles y que al fin de su Apocalipsis, él afirma que el Ángel
de Dios le había asegurado que todas sus palabras eran ciertas y verdaderas.
Capítulo Primero
Secciones Ocho a Quince
SECCIÓN VIII:
Naturaleza de los Ángeles.
Es el Cristo mismo quien hará mención de esta cualidad de los Ángeles de ser
inmortales ; cuestionado por los saduceos sobre las modalidades de la
resurrección, el Maestro respondió :«Aquellos que han sido juzgados dignos de
tener parte en el siglo por venir y en la resurrección de los muertos, no morirán
y no serán dados en matrimonio. Por que ellos no pueden morir mas, porque
ellos son semejantes a los Ángeles y porque ellos son hijos de Dios, siendo
hijos de la resurrección.» (Luc 20,35-36.)
Los videntes de todos los tiempos, una vez elevados en éxtasis, habiendo
podido contemplar las maravillas de los cielos, están todos de acuerdo en
señalar las multitudes de ángeles que componen el ejército celeste. Job dirá:
«A Dios pertenecen el imperio del mundo y la potencia formidable... sus
ejércitos no son ellos innumerables ». (Job 25, 2-3.)
misma indicación dada por David, en el salmo 68, 18: «Las carrozas de Dios
se cuentan por veinte mil, por miles de miles ».
Lo mismo, podemos de nuevo leer en Daniel 7,10: «Cien mil ángeles servían
al Anciano de los días y miríadas de miríadas estaban delante de él».
Nosotros tenemos ya registrada la Palabra de Jesús al momento de su arresto
; si él hubiese querido ser liberado, él no habría tenido mas que invocar la
asistencia de su Padre quien le hubiera «dado tantos más de doce legiones de
ángeles». (Como en esta época una legión estaba compuesta de alrededor de
seis mil hombres, eso hacía ya un ejército de setenta y dos mil ángeles.)
al nacimiento de Jesús, sabemos que una multitud del ejército celeste alababa
a Dios. (Luc 2,13.)
en su Epístola a los Hebreos, San Pablo dijo a sus fieles : «Ustedes se han
aproximado a la montaña de Sión, ciudad del Dios viviente, Jerusalén celeste,
donde se encuentran miríadas de ángeles». (Héb. 12,22.)
Volvamos de nuevo una vez mas al testimonio de Juan puesto en éxtasis : «Yo
escuché las voces de una multitud de ángeles. Había miríadas de miríadas,
miles de millares ». (Apo. 5,11.)
y estas visiones revelando la multitud de los ejércitos celestes no conciernen
solamente los fieles de los tiempos apostólicos, pero ellas son de nuevo
producidas todo a lo largo de las edades hasta nuestros días, dónde, como
nosotros lo veremos más tarde, el P. Pío nos da indicaciones muy
circunstanciadas a este sujeto. Mencionamos esta visión de Ángela de Foglino
puesta en éxtasis : «Yo vi a Jesús Cristo descender del cielo rodeado de
innumerables tropas llameantes... su número era tal que el ojo y el Espíritu se
perdían.»
Hay en efecto las nueve Órdenes o coros, agrupados en tres jerarquías de las
que nos ocuparemos más en detalle en el curso de nuestra exposición. La
Biblia contiene numerosas alusiones a las diferentes Órdenes de ángeles;
tenemos Serafines, Querubines, Dominaciones, Potestades y Arcángeles,
teniendo cada una funciones bien determinadas; hay entonces una jerarquía en
el numeroso ejército de los Ángeles.
Isaías habla de los Serafines que estaban por encima de Dios ; ellos tenían
cada uno seis alas, dos cubriéndose el rostro, dos cubriéndose los pies, dos
sirviéndole para volar... (Isaías 6,2.)
Jesús Cristo tiene jurisdicción sobre los diferentes Órdenes de ángeles:
«Jesús, habiendo subido al cielo, está a la derecha de Dios y le están
sometidos los Ángeles, los principados y las Potencias ». (I Pedro 3,22.)
Jude (5,9) hizo mención del Arcángel Miguel que lucha con el Diablo. Ya se ha
hablado de la misión del Arcángel Gabriel al momento de la concepción del
Salvador.
Es por la voz de un arcángel que el Cristo descenderá del cielo al son de la
trompeta. (I Thés. 4,16.)
El único perfecto es Dios y los Ángeles a los cuales el Señor ha dejado el libre
arbitrio pueden en ocasiones cometer faltas, y las más graves fueron aquellas
de Lucifer y de los Ángeles rebeldes.
Un pasaje de Job es muy explícito en la materia ; él dijo:«El Hombre puede ser
justo ante Dios ? El Hombre será puro enfrente de su Creador ? Puesto que
Dios no se confía de sus servidores y que él encuentra faltas en sus ángeles
mismos ». (Job 4,17-18.)
Dios, en efecto, no alejó a los Ángeles que habían pecado (por orgullo ), él los
ha precipitado en el abismo. (II Pedro 2,4.)
En el Apocalipsis (12,7), vemos a Miguel y sus ángeles combatir contra el
dragón y sus ángeles (rebeldes ) que fueron abatidos.
SECCIÓN IX:
Rol de los Ángeles en relación con Cristo.
El rol que han jugado los Ángeles en relación del Señor es de una tal
importancia que es bueno retomar ciertos pasajes de los Evangelios que dan
claras luces a este sujeto.
Hubo un gran temblor de tierra, porque un Ángel del Señor descendió del cielo,
hizo rodar la piedra y se sentó encima. Él brillaba como un relámpago, y su
vestimenta era blanca como la nieve. Por el temor que él les causó, los
guardias fueron todo agitados y ellos se pusieron como muertos. Pero el Ángel
tomando la Palabra dijo a las mujeres : « a vosotras no temas, porque yo sé
que ustedes buscan a Jesús, que ha sido crucificado. Él no está aquí ; él ha
resucitado como él había dicho.» (Matt. 28,2-7.)
Las mujeres vieron un joven hombre sentado del costado derecho, vestido de
una ropa blanca. Ellas fueron espantadas, pero él dijo :«No teman ! Ustedes
buscan a Jesús de Nazareth que ha sido crucificado, él ha resucitado. Él no
está aquí... Id a decir a sus discípulos y a Pedro que Jesús los precede en
Galilea.» (Marc 16,5-7.)
Algunas mujeres fueron de mañana a la tumba ; luego no habiendo encontrado
el cuerpo, ellas vinieron a decirnos que los Ángeles se les habían aparecido y
les habían declarado que él estaba vivo. (Luc 24,23.)
El Ángel del Señor se presenta a Zacarías y le dijo :«Yo soy Gabriel que estoy
ante Dios ; yo he sido enviado para hablarte y anunciarte una buena nueva : tu
mujer te dará un hijo que tu llamarás Juan. Él será grande delante del Señor, él
no beberá ni vino ni cerveza, y él estará lleno del Espíritu Santo desde el seno
de su madre ». Y el mismo Ángel dirá a María : «He aquí que Elizabet, tu
pariente a también concebido un hijo ». (Luc 1,13-36.)
SECCIÓN X:
Ángeles guardianes y Ángeles exterminadores.
La misión del ángel guardián de los hombres es una de las funciones más
importantes confiadas a estas entidades del Más Allá.
Se conoció la historia de Daniel arrojado en la fosa de los leones de la que
salió indemne, los animales no le hicieron ningún mal ; y Daniel dice al rey que
estaba feliz de verlo de nuevo en vida: «0 rey, puedas tú vivir eternamente! mi
Dios ha enviado su ángel; él ha cerrado la boca de los leones y ellos no me han
hecho ningun mal, porque yo he sido encontrado inocente ante Dios ». (Daniel
6,22.)
Que se retenga bien esta última frase, es la inocencia, la pureza mental y
moral del sujeto y que abre la puerta a todas las intervenciones benéficas del
Ángel guardián. Y ahora, si nosotros queremos beneficiarnos de su asistencia
constante, sabemos que este debe ser nuestro comportamiento de todos los
días.
San Pablo no necesitó enseñar a sus discípulos y a los fieles la existencia de
estos ángeles protectores. «Los Ángeles, dijo él, no son todos Espíritus al
servicio de Dios, enviados por él para ejercer un ministerio en favor de aquellos
que deben recibir en herencia la salud? » (Hébr. 1,14.)
Los Ángeles tienen por misión principal vigilar sobre los hijos de los hombres ;
el hecho surge netamente de muchos pasajes del Antiguo Testamento :
Dos ángeles protegieron a Loth y su familia. (Gen. 19,12.)
Abraham dijo a su servidor : «El Eterno enviará su ángel delante tuyo y tu
tomarás allí una mujer para mi hijo ». (Gen. 24,7-8.)
Jacob bendijo los dos hijos de José y dijo:«Que el Dios que ha sido mi pastor
desde mi nacimiento, justo hasta este día, que el Ángel que me ha librado de
todo mal, bendiga estos niños ». (Gen. 48,16.)
La promesa que se encuentra en el salmo 34,8 debe retener nuestra atención :
El Ángel del Eterno acampa alrededor de aquellos que le temen. Y él los
empuja al peligro.
Nosotros hemos ya mencionado el Salmo 91 (10-12), donde se nos asegura
que el Eterno ordena a sus ángeles de cuidar al justo en todos sus empresas.
la Vida del pecador está librada a los Ángeles exterminadores, pero si él se
encuentra por este hombre un Ángel intercesor, que le haga conocer su deber,
entonces Dios tiene piedad de Él. (Job 33,23-24.)
SECCIÓN XI:
Los fieles han recibido la visita de los Santos ángeles.
SECCIÓN XII:
Estado de los fieles tras la resurrección.
SECCIÓN XIII:
Satán y los Ángeles rebeldes.
SECCIÓN XIV:
De la práctica de la caridad y de la hospitalidad.
Una sola cita servirá para hacer comprender la necesidad, o aún la utilidad de
la práctica de la caridad y de la hospitalidad. La afirmación de San Pablo (Hébr.
13,2) es clara y breve, pero llena de consecuencias : «No olvides la
hospitalidad ; es practicándola que algunos han recibido, en ellos, de los
Ángeles sin saberlo».
SECCIÓN XV:
Los Ángeles del Juicio Final.
Va de suyo que esta tabla no tendrá valor que para aquellos que miran las
Santas Escrituras como siendo la real y verdadera expresión de la voluntad de
Dios. En cuanto aquellos que piensan hacer obra útil, analizando y disecando
por el menu, los textos de la Biblia y que estiman poder esclarecerlos con las
pobres luces de la inteligencia humana, ellos serán llevados muy naturalmente
a criticar nuestra tabla de los Ángeles lo mismo que aquella de sus misiones,
como siendo tachadas de error porque se apoyan sobre los textos cuyo valor
es discutible. Sosteniendo puntos de vista tan diferentes, es bien difícil de
encontrar un terreno de entendimiento.
En relación a esto, nosotros creemos útil citar de nuevo una enseñanza del
Maestro Felipe, enseñanza de naturaleza a hacer reflexionar a los escépticos
endurecidos : «Nosotros vamos, todos aquellos que tienen fe a los palabras del
Evangelio, en tropilla hacia la luz, pero infeliz aquel que no pueda ni ver ni
entender, que rechace las palabras de Cristo ; este morirá, es decir quedará
rezagado, por miles de siglos, en las tinieblas, y será forzado a esperar de
nuevas generaciones.
Capítulo segundo
Los Ángeles tal como ellos están definidos por los Diccionarios
Una incursion a través de los Diccionarios de diferentes épocas nos dará vistas
interesantes sobre la manera de définir la naturaleza de los Ángeles y sobre la
comprensión de su misión en la época de la aparición del Diccionario. Nosotros
comenzaremos por reproducir los detalles circunstanciados que encontramos
en el gran Diccionario histórico de L. Moreri, sacerdote y Doctor en teología.
Esta importante creación en seis volúmenes in-folio, apareció en Baie en 1731,
refleja bien las nociones de angelología de esta época, nociones heredadas de
la Edad Media y del Renacimiento. Estudiemos entonces la enseñanza dada
por este sabio Doctor sobre los Ángeles:
Los filósofos paganos, y sobre todo los Platónicos, han enseñado que hay
seres espirituales por encima de la soberanía divina, que tenían parte en el
gobierno del mundo. Ellos han admitido buenos y malos genios : es eso que se
denomina ángeles y Demonios. Los Samaritanos mismos y los Caraitas no
negaron que los hubiese. Los Mahometanos los admitieron. Jesús Cristo y los
apóstoles han dado testimonio en la existencia de los Ángeles y de los
demonios. Toda la antiguedad cristiana ha creído que existían. Pero la mayoría
de los antiguos Padres han supuesto que ellos tenían cuerpos, aunque sutiles.
Los Teólogos han sostenido, según la definición del Concilio de Letran, que
ellos eran seres puramente espirituales, que Dios había creado antes de crear
el Mundo corporal o al mismo tiempo. Ellos han agitado muchas cuestiones
sobre el nombre, la orden, la naturaleza y las facultades ; cuestiones que no
tienen ninguna solidez, y que no pueden la mayoría ser decididas, ni por la
Biblia, ni por la tradición. El autor de los libros de la Jerarquía celeste, que a
escrito en el fin del Vº siglo y que no es San Dionisio, el Areopagita, es el
primero que ha distinguido los Ángeles en tres Jerarquías, y en nueve Órdenes.
Los Judíos distinguen también diferentes Órdenes de los Ángeles, y ponen a la
cabeza de los Ángeles, un primer Ángel que ellos llaman Metraton, quien es el
San Miguel de los Cristianos. Ellos reconocían a los Ángeles tutelares de las
naciones, y le atribuían el gobierno de los astros ; ellos han honrado los
Ángeles; ellos del mismo modo pusieron este culto muy lejos : los Judíos
modernos los honran además, y les dirigen sus oraciones...
Los cristianos creían que los Ángeles son, como dijo San Pablo, los Ministros
de Dios, que él envia para tener cuidado de las cosas aquí abajo, y que no
solamente los reinos y las provincias, sino aun todos los cristianos en particular
tienen Ángeles guardianes. Este sentimiento no es universal. Ellos enseñan
que todos los Ángeles han sido creados santos y perfectos, muchos son caídos
de este estado por orgullo, y que ellos han sido precipitados en el infierno, y
condenados a penas eternas, mientras que los otros han sido confirmados en
gracia, y que ellos son bienaventurados por siempre... En relación con los
buenos ángeles, uno está persuadido que ellos no trabajan mas que al bien y a
la salud de los hombres, a menos que Dios no les ordene castigar a los
malvados... Los Católico Romanos no honran mas que tres ángeles: Miguel,
Rafael y Gabriel, de los que se hace mención en las Santas Escrituras. Por
Uriel su culto es equivocado.
en el Diccionario enciclopédico teológico de Migne, encontramos, debido a la
pluma del Abate Bertrand, un artículo detallado sobre la naturaleza y el
comportamiento de los Ángeles. Tenemos allí una tabla de las creencias de los
religiosos hacia 1848, fecha de la aparición de este estudio.
en cuanto al Ángel guardián, todo cristiano tiene uno ; Orígenes dijo que este
Ángel es dado al momento del bautismo, mientras que San Gregorio afirma que
todo hombre viniendo al mundo tiene su ángel guardián.
La Iglesia celebra el 29 septiembre la fiesta de San Miguel y de todos los
Ángeles y el 2 octubre aquella de los Ángeles guardianes.
Los Judíos enseñan que cuatro ángeles rodean sin cesar el trono de la
Majestad Divina: Miguel se encuentra a la derecha, Uriel a izquierda, Gabriel y
Rafael detrás. Los Judíos igualmente reconocían diez clases de ángeles:
Khayoth Animales
Ophanim Roues
Erélim Poderosos
Élohim Ellos
Béné-Élohim Hijos de Dios
Chérubim
Khaschmalim Ardientes
Séraphim
Melachim ÁNGELES:
Ischim Hombres
Los Musulmanes profesan las mismas creencias en cuanto a los Ángeles que
los Cristianos. He aquí eso que dijo a este sujeto el Catecismo musulman: En
relación de eso que nosotros debemos creer a los ángeles, nuestra fe será
completa si nosotros creemos de corazón y si confesamos de boca que el Dios
Muy Alto tiene servidores o ministros a los cuales se da el nombre de ángeles,
que son perfectamente nacidos sin pecado, que asisten continuamente ante
Dios , que ejecutan puntualmente sus Órdenes y jamás las desobedecen. Los
Ángeles son cuerpos sutiles y puros, formados de luz... Es necesario de creer
en estos ángeles... Y es también una de las condiciones absolutas de la fe para
amarlos. Aquel que no cree en ellos y no los ama, que él sea tenido por infiel !
Se debe saludar los Ángeles tras la oración dándose vuelta de derecha a
izquierda, y diciendo : ¡Que la paz sea contigo! o: ¡Que la paz y la misericordia
de Dios sea contigo! Los Arcángeles son en número de seis: Gabriel, Miguel,
Azraïl, Îsrafil, Mounkir, Nékir.
Al sujeto de los Ángeles, San Gregorio, Papa, se expresa así : «Sabemos por
las Santas Escrituras, que hay nueve Órdenes de ángeles, a saber: los
Ángeles, los Arcángeles, las Virtudes, las Potencias, los Principados , las
Dominaciones, los Tronos, los Querubines y los Serafines.
Casi todas las páginas sagradas atestiguan que hay Ángeles y Arcángeles.
Los libros de los profetas hablan con frecuencia, como se dijo, Querubines y
Serafines. San Pablo a los Efesios enumera cuatro tipos de jerarquías
angélicas, cuando él dijo:«Por encima de toda Principalidad, de toda Potencia,
de toda Virtud y de toda Dominación ». El mismo escribiendo a los Colonienses
dijo:« sean los Tronos, sean las Dominaciones, sean los Principados , sean las
Potencias ». Así cuando a estas cuatro Órdenes se unen las Virtudes, se
encuentran cinco, y finalmente cuando a los Ángeles y Arcángeles, se unen
Querubines y Serafines, se encuentra necesariamente nueve Órdenes o Coros.
El término Ángel expresa menos la naturaleza que la función por la cual estos
espíritus fueron creados ; a los Arcángeles están reservados los mensajes más
importantes, y esto según su naturaleza:
Oración
Angele Dei, que custos es mei, me tibi commissum pietate superna, illumina,
custodi, rege y guberna. Amen.
Ángel de Dios, que eres mi guardián y a los cuidados del cual yo he sido
confiado por la bondad divina, ilumíname, cuídame, condúceme, gobiérname.
Así sea.
La Iglesia enseña que los Ángeles no existen de toda eternidad : ellos han sido
creados en un estado de felicidad y de gracia, pero con la libertad de elegir
entre el bien y el mal. Es un artículo de fe que un cierto número pecaron y
fueron condenados a un suplicio que no tendrá fin. La opinión común ha visto
en el orgullo la causa de esta caída. Hay también los Ángeles que han
perseverado, o los buenos ángeles y los Ángeles caídos o malos ángeles, que
se denominan también «diablos» o «demonios ». Hay fe que existe relaciones
misteriosas entre el Mundo angélico y el Mundo humano ; los buenos ángeles
ayudan a los hombres en la vía del bien, mientras que los malos los empujan a
aquella del mal. Existe para los cristianos una doctrina cierta, aunque no
definida, que un Ángel es puesto por Dios para custodiar a cada hombre. Se
denomina Ángel guardián. Esta creencia está fundada sobre la enseñanza de
los Padres y de diversos pasajes de la Escritura... Todo reservando la
adoración a Dios solo, la Iglesia Católica rinde a los Ángeles honores religiosos
(culto de dulie, homenaje rendido a los Ángeles y a los santos, por oposición al
culto de latrie, rendido a Dios ). Los protestantes rechazaron a los Ángeles
estos honores.
Se representa a los Ángeles con alas y una vestimenta blanca, para expresar
su esencia inmaterial y la pureza de su naturaleza. En Oriente el color azul,
color celeste, ha prevalecido sobre el blanco como símbolo de pureza.
Capítulo Tercero
Los Apócrifos y la angelología
Allí yo vi al Antiguo de los días, cuya cabeza era como de lana blanca, y con él
otro, que tenía la figura de un hombre. Esta figura estaba llena de gracia, como
aquella de uno de los Santos ángeles. Entonces yo interrogué a uno de los
Ángeles que estaban conmigo y que me explicaron todos los misterios que se
relacionaban con hijo del hombre. Yo le pregunté quien era él, de dónde venía,
y por qué él acompañaba al Antiguo de los días. Él me respondió en estas
palabras :
« Este es el hijo del Hombre para que toda justicia se haga ». (Migne 1/452,
Enoch 46,1-2.)
Yo fui levantado por un torbellino... Y allí mis ojos percibieron los secretos del
cielo y aquellos de la tierra y yo interrogué al Ángel que estaba conmigo. Y el
Ángel me respondió :«Todas estas cosas que tú has visto miran el imperio del
Mesías.» (M. 1/456, En. 51,1-4.)
Yo vi que el cielo de los cielos estaba turbulento, y que las Potencias muy
elevadas, que miles de miles y miríadas de miríadas de ángeles estaban en
una muy grande agitación... Y yo vi al Anciano de los días sentado sobre su
trono de gloria, rodeado de los Ángeles y de los Santos... Yo caí prosternado,
el rostro contra la tierra. Entonces el Ángel San Miguel, otro Santo ángel, fue
enviado para levantarme. (M. 1/460, En. 58,1.)
Entonces el otro Ángel que estaba conmigo me habla. Y me revela los
primeros y los últimos secretos sobre el cielo y sobre la tierra. (M. 1/461, En.
59,1-2.)
En estos días, yo vi de los Ángeles que tenían largas cuerdas y quienes,
llevados sobre sus alas ligeras, volaban hacia el septentrión. Y yo pregunté al
ángel, por qué ellos tenían en las manos estas largas cuerdas ?... Él me
respondió :«Ellos irán a medir.» El Ángel que estaba conmigo me dijo además:
«Estas son las medidas de los justos (que se apoyaron sobre ellas y sobre el
nombre del Señor ).» (M. I/463, En. 60,1-3.)
Capítulo consagrada en la punición de los Ángeles rebeldes. San Miguel dijo a
San Rafael : «Mi espíritu se subleva y se irrita contra la severidad del Juicio
Final contra los Ángeles (rebeldes )»... Y San Miguel dijo además: «Yo no los
defenderé en presencia del Señor, porque ellos han ofendido al Señor de los
Espíritus, comportándose como los Dioses, también la justicia suprema se
ejercerá sobre ellos durante toda la eternidad. Ni el Ángel inocente ni el
Hombre sentirán los efectos, pero solo aquellos que son culpables ». (M. 1/469,
En. 67,1-5.)
Otro episodio : una mujer cristiana del nombre de Trophime, que quería cuidar
su virginidad, fue arrojada en una casa de prostitución a causa de maniobras
maliciosas de la mujer del gobernador Lesbius. Pero Trophime guardó su Biblia
sobre su seno y así protegida, ella escapó a las solicitudes de los hombres ; sin
embargo un joven desvergonzado arranca la vestimenta de Trophine; la Biblia
cae y entonces un Ángel del Señor apareció. El Hombre cae a los pies de la
mujer y murió. (M. 11/79.)
mientras que yo dormía ligeramente, yo escuché una voz que dijo : «Joab!
Joab! Levántate y yo te haré ver aquel que tu deseas conocer...» Habiendo
escuchado estas palabras, yo caí a tierra... Y la voz dijo:«Tú puedes purificar
este lugar, porque he aquí que yo voy a develarte todo eso que el Señor me ha
ordenado decirte, porque yo soy un arcángel de Dios ». El Arcángel le advirtió
en detalle las terribles crueldades que él soportaría en su lucha contra Satán;
entonces Job dice : «Y yo y mis hijas, yo le respondí : «Yo estoy dispuesto a
sufrir por el amor de Dios todo aquello que pudiera llevarme justo hasta la
Muerte y yo no retrocederé ». Entonces el Ángel habiéndome confirmado
(marcado con su sello ) se fue.»
Job habiendo dado un cinturón a cada una de sus tres hijas, le dijo: «Por lo
tanto, mis hijas, hoy, con estos cinturones, no tienen que temer los ataques del
enemigo, ni darle pensamiento en su alma. Por que está aquí la protección y la
protección del Señor. Levántense entonces y colóquense estos cinturones
antes que yo muera, afin que ustedes puedan ver los Ángeles asistir en mi
salida de este mundo y que ustedes admiren las Potencias de Dios.»
Job estaba acostado muy debilitado, pero él no sentía ningún dolor gracias a la
virtud del cinturón que llevaba puesto. Y luego de tres días, Job vió los santos
ángeles que venían a buscar su alma. Entonces él da a sus hijas instrumentos
de música para que ellas glorificasen los santos ángeles que venían a buscar
su alma. (M. 11/417-418.)
ANGEL del AIRE. Busca el aire puro de la foresta o aquel de los campos,
porque es allí que tú encontrarás el Ángel del aire.
Quítate tus ropas afin que el Ángel del aire abrace tu cuerpo.
Respira profundamente afin que el Ángel del aire pueda penetrar en tí.
Yo te lo digo , en verdad, el Ángel del aire quitará de tu cuerpo todas las
impurezas que la ensucian...
Ninguna persona puede presentarse delante del rostro de Dios si el Ángel del
aire no lo deja pasar. Santo es el Ángel del aire.
ANGEL DEL AGUA. Luego del Ángel del aire, busca el Ángel del agua. Deja
que el Ángel del agua abrace todo tu cuerpo. En verdad, el Ángel del agua
quitará de tu organismo todas las impurezas que la ensucian tanto desde fuera
como desde dentro. En verdad, Santo es el Ángel del agua, el purifica todo
aquello que ha sido ensuciado.
Ninguna persona puede presentarse delante del rostro de Dios si el Ángel del
agua no lo deja pasar...
ANGEL DE LA LUZ. Permite que el Ángel de la luz solar abrace todo tu cuerpo.
Pídele al Ángel de la luz ; él quitará de tu cuerpo todas las materias impuras.
Ninguna persona puede presentarse delante del rostro de Dios, si el Ángel de
la luz no lo deja pasar.
Los Ángeles del aire, del agua y del sol son hermanos ; ellos han sido dados a
los hijos del Hombre por su servicio, afin que ellos puedan siempre apelar el
uno al otro.
Todos los pecados, todas las suciedades salen rápido del cuerpo de aquel
quien es alumbrado por estos tres ángeles.
Si tú crees en los Ángeles de la Madre, la Tierra, y si tú respetas sus leyes, tu
fé te sostendrá y tú no verás jamás la enfermedad...
Amaos los unos a los otros, porque Dios es amor, y es así que sus ángeles
conocieron que tú caminas en sus senderos. Y entonces todos sus ángeles
vendrán a tí y te servirán.
Entonces los hombres darán gracias a Dios que les envía sus ángeles por su
salud.
Al momento del bautismo, el Ángel del agua entra en el cuerpo. Esta afirmación
está en relación con un verso del Apocalipsis (16,5): Yo escuché el Ángel de
las aguas que dijo...
Si, en lugar de cometer pecados, tú pasas tus días a ser las obras de Dios,
entonces esto será los Ángeles de Dios que inscriben todos tus buenas
acciones en el libro de tu cuerpo y de tu espíritu...
Y cuando tú aparezcas delante del rostro de Dios, sus ángeles darán
testimonio a vosotros de tus buenas acciones.
ANGEL DE LA TIERRA. No son solamente los Ángeles del aire, del agua o del
sol que pueden reducir tus penas, es necesario recurrir también al Ángel de la
tierra. El barro arcilloso, impregnada de calor solar, hace desaparecer todas las
impurezas y las enfermedades.
Porque la práctica de purificación por la oración, uno llama al Señor para
nuestros cuerpos y sus ángeles y Satan es obligado a huir, porque desde el
momento en que se ha comenzado a ayunar y a orar, los Ángeles de Dios
protegieron el cuerpo y lo sustrajeron a la intención de Satan.
Dirige alabanzas a Dios que ha permitido que sus ángeles te liberen, y en el
futuro no peques más...
ANGEL DEL CALOR Y ÁNGEL DEL FRÍO. Cada vez que tu cuerpo esté frío, tu
Madre, la Tierra, enviará el Ángel del calor a calentarte. Y si tú estás acalorado,
el Ángel del frío.
ÁNGEL DEL AMOR. Luego de haber orado, el Cristo deja sus oyentes diciendo
: «La paz sea con vosotros !» y su paz descendió sobre todos ellos, y en su
corazón tomó lugar el Ángel del amor.
Luego de haber orado de nuevo una vez, Jésus le dijo: «Lo mismo que
vuestros cuerpos han sido regenerados por los Ángeles de tu Madre, la Tierra,
pueda tu espíritu ser regenerado de la misma manera por los Ángeles de tu
Padre celeste.
María habiendo tenido necesidad de agua, tomó su vaso y salió ; como ella se
inclinaba sobre la defensa del pozo para extraer agua, ella escuchó una voz:
«Regocíjate, o llena de gracia, porque el Señor está contigo, y él te ha
bendecido entre las mujeres ». Y la tierra tiembla, pero María no vio persona.
De regreso al templo y estando dispuesta a hilar la púrpura, el Arcángel Gabriel
le apareció y le anuncia cuando ella concebirá por la fuerza del Espíritu Santo
que la alumbraría. Luego viene la escena de José, horrorizado en la vista del
embarazo avanzado de María ; él se pregunta qué debe hacer . Y he aquí que
un Ángel del Señor le apareció y le dijo :«Nada temas, José. La Virgen ha
concebido del Espíritu Santo, y ella dará a luz un hijo, y tu lo llamarás con el
nombre de Jésus».
Durante el viaje a Bethléem, José es intrigado de ver a María a veces
sonriente, a veces triste ; él le pregunta la razón ; María dijo a José : «Es que
yo veo con mis ojos dos pueblos, uno que llora y se golpea de dolor, el otro que
ríe y salta de alegría ». Y José le replica : «He allí vanas palabras». Entonces
un Ángel apareció que dijo : «Por qué tratas tú de vanas las palabras de María
? ella ha visto la suerte que espera a Judíos y Gentiles».
El nacimiento de Cristo es descrito según los Evangelios ; se le añade el
episodio de la incrédula Salomé, cuya mano es curada luego cuando ella hubo
abrazado al niño por el consejo del Ángel que se le había aparecido.
Luego viene la visita de los pastores, de los magos y la fuga a Egipto con las
frecuentes apariciones de ángeles anunciadores y protectores. En el desierto,
episodio maravillas de la palmera que por orden de Jésus se inclina delante su
madre afin de que él pueda recoger los frutos. Entonces Jésus dijo:«Palmera,
yo te otorgaré una gracia. Los Ángeles descenderán a coger una de tus
palmas, y ella será plantada en el Paraíso de mi Padre. Y una palmera utilizará
que será la palmera de la victoria. Es a él que los Ángeles tomarán palmas
para darlas a aquellos que hayan vencido en el combate de la fe.» Alusión a las
palmas otorgadas a los santos y a los futuros mártires cristianos.
Regreso a Israel, por orden dado a José por un Ángel que se le apareció.
Escena de la Muerte del piadoso José :
y el piadoso José murió, lleno de días ; y Jésus y María oraban cerca de Él; y
los Arcángeles Miguel y Gabriel descendieron del cielo, y ellos bendicieron el
anciano muriendo.
El Ángel advirtió la Santa Virgen de su muerte próxima:
Tras la Muerte de su hijo sobre la cruz, la Virgen, sola en su habitación, se
lamenta y, de golpe, ella vio un ángel, espléndido y vestido de luz, que estaba
delante ella. Y el Ángel se inclina y la saluda de estas palabras : «Salud, María
llena de gracia, el Señor está contigo ». Y ella respondió :«Gracias a Dios ». El
Ángel dijo:«Recibe esta palma que el Señor te envía de su Paraíso ; tu la harás
llevar delante tu lecho fúnebre, porque en tres días llegará la hora de tu
asunción. He aquí como con los tronos y los Ángeles y todas las Virtudes
celestes, tu hijo te espera, o Virgen bendecida del Señor.» María pide al Ángel
un favor: que todos los apóstoles sean reunidos cerca de ella. Y el Ángel
dijo:«Hoy, porque la gracia de mi Señor Jesús-Cristo, todos los apóstoles
vendrán hacia tí. El Señor tu Dios te ha dado la bendición eterna.» y diciendo
eso, el Ángel desapareció en una grande esplendor.
Capítulo Cuarto
Los Padres de la Iglesia han creído en la existencia de los Ángeles
Sección 1
1. Tertuliano (vers 160-240), en su De Paenitientia (7, 7-8), habla del rencor del
Diablo y de sus ángeles cuando ellos ven un pecador que se arrepiente :
En efecto, dijo él, nuestro enemigo irreconciliable no ha dado jamás tregua a
su malicia. Y es cuando él siente al Hombre plenamente liberado que él asedia
al más fuerte; es cuando se extingue lo que él incendió mas. Es necesario bien
que él se aflija y que él gima cuando, por el perdón de los pecados, él ve tantas
obras de muerte destruidas en el hombre, tantos jefes apartados de una
condenación que era como su bien propio. Él se aflige al pensar que este
pecador puesto al servicio de Cristo, le juzgará, él y sus ángeles. También él
espía, él ataca, él asedia...
En el De Pudicitia (14,28), del mismo autor, se habla de San Pablo que habría
hecho remisión de su falta a un pecador y que así «será jugado de su espíritu y
del Ángel de la Iglesia y de la virtud del Señor, si él ha revocado la detención
llevada según su consejo».
«Tanto es verdad que debe haber un término para todo, es decir que se
busque, que se golpee, o que se pida ; porque se dará a aquel que demande,
dijo Jesús-Cristo; se abrirá a aquel que golpee, y quienquiera que busque
encontrará. Presten atención, ustedes que buscan siempre sin encontrar,
ustedes buscan donde no se encuentra ; ustedes que golpean siempre sin que
se les abra, ustedes golpean donde no hay persona ; ustedes finalmente que
piden sin que se les otorgue, ustedes piden para que no se les pueda otorgar
nada.»
5. San Dionisio, Obispo de Atenas y de Paris, fue enviado en misión por San
Clemente, el sucesor directo del apostol Pedro ; él murió hacia 121. Denys,
entre otras, compone su libro célebre : De la Jerarquía celeste, libro quien es el
origen de todos aquellos quien, luego de él, han tratado el mismo tema,
notablemente Santo Tomás de Aquino que hizo la base de su exposición sobre
los Ángeles. San Dionisio declaró tener su ciencia de San Pablo llevado al cielo
sobre el camino de Damasco. Para la crítica moderna, el redactor de la
Jerarquía un Pseudo Dionisio.
Resumamos ahora la rica materia de la Jerarquía celeste. En esta obra,
Dionisio (o el Pseudo Dionisio ) habla de las causas segundas que Dios tiene
asociadas, es decir los Ángeles o cooperadores de Dios. Dios es el guía, su
bondad produce las operaciones. Los cooperadores en imitación de la
operación divina forman la Jerarquía.
Jerarquía.
La jerarquía es a la vez orden, ciencia y acción, se conforman, tanto como se
puede, a los atributos divinos y reproducen por sus esplendores originales una
expresión de cosas que son en Dios. Sin embargo, la belleza increada, porque
cuando ella es simple, buena y principio de perfección, es pura también de todo
vil alianza ; sin embargo, y según las disposiciones personales de cada uno,
ella comunica a los hombres su luz, y por un divino misterio, las rehace al
modelo de su soberana e inmutable Perfección.
El Principe de toda jerarquía es «la Trinidad », fuente de vida, bondad
esencial, causa única de todo, y quien, en la efusión de su amor, ha
comunicado a todas las cosas el ser y la perfección. Al seno de su excelencia y
de su bondad infinitas, esta Trinidad indivisible, cuyo modo de existencia,
ignorado por los hombres, no es conocido que ella misma, alimenta el voto de
salvar toda creatura inteligente, los Ángeles y los hombres ; pero la salud no es
posible que por los espíritus deificados, y la deificación no es que la unión y la
semejanza que uno se esfuerza de tener con Dios.
Las órdenes inferiores de las puras inteligencias son instruidas de las cosas
divinas por los Órdenes superiores; y los espíritus del primer rango quienes a
su turno reciben de Dios la comunicación de la ciencia... Esta fuente divina
purificada de toda ignorancia, en comunión cuanto a cada inteligencia, según
su dignidad propia, el conocimiento de los misterios inefables ; ella ilumina
también y, porque la pureza cuando ella da, permite a los espíritus de
contemplar al gran día de esta luz sobre eminente las cosas que ellos no tienen
nuevas vistas ; finalmente ella les perfecciona confirmándolos en la clara
intención de los más magníficos esplendores.
Segunda Jerarquía :
La segunda Jerarquía se compone de las tres Órdenes siguientes :
Dominaciones, Virtudes, Poderes o Potencias.
El nombre de santas Dominaciones designa su espiritualidad sublime y libre de
todo obstáculo material, y su autoridad a la vez libre y severa, que no sufre
jamás la tiranía de ninguna vieja Pasión. Por que no experimentan ni la
verguenza de una abyecta esclavitud, ni las condiciones de una degradante
caída, estas nobles inteligencias no son atormentadas mas que porque la
necesidad insaciable de poseer aquel quien es la Dominación esencial y el
origen de toda Dominación ; ellas se dan forma a sí mismas y modelan a los
espíritus subalternos en la divina semejanza, despreciando todas las cosas
vanas, ellas dan vuelta su actividad hacia el ser verdadero, y entran en
participación de su eterna y Santa Principalidad.
Tercera Jerarquía :
El nombre de los celestes Principados hizo ver que ellos tienen el secreto
divino de comandar con ese buen orden que conviene a las Potencias
superiores; de dirigirse invariablemente a sí mismas y de guiar con autoridad
los otros hacia Aquel que reina por encima de todo ; de formarse, al grado
donde es posible, sobre el modelo de su Principalidad original, y de manifestar
finalmente su autoridad soberana porque la bella disposición de sus propias
fuerzas.
El mismo Macario narra que él había visto una vez un Ángel dar desde el altar
la oblación. «Yo ví, dijo el asceta, solamente la forma de la mano de aquel que
daba ».
Un otro Padre del desierto, Elías es atormentado por la pasión de las mujeres y
por violentos deseos de voluptuosidad ; él es liberado porque la intervención de
tres ángeles; estando en éxtasis, Elías vio uno de los Ángeles, armado de una
navaja, que lo castra ; al momento de la operación, él sintió un vivo dolor, pero
la intervención no era mas que figurada y no real. Sin embargo, al despertar, el
asceta fue librado de sus deseos de voluptuosidad.
El diácono Evagro, muy fuerte en dialéctica contra las herejías, era asistente
del Bienaventurado Nectario ; Evagro tuvo mucho éxito y sus discursos fueron
apreciados no solamente por sus oyentes, pero también por sus las mujeres
que oían. He aquí eso que nos narra a este sujeto Palladius: «En la gran villa,
Evagro estaba floreciendo, poniendo el ardor de la juventud en sus palabras
contra cada herejía. Sucedió que muy honrado porque la villa entera, él fue
enredado por el fantasma de una concuspicencia femenina. A su turno la
fémina se enamoró de Él. Esto siendo, Evagro temiendo a Dios, teniendo el
respeto de su propia conciencia y estando puesto delante de los ojos la
grandeza del acto vergonzoso y el gozo malevolente de las herejías, ora a
Dios, suplicándole de ser impedido por él. Como quiera que sea, la mujer lo
presionó y estando loco, la voluntad de él no tenía la fuerza de retirarse,
retenido por las cuerdas de esta servidumbre. Sin embargo, poco después, su
oración habiendo tenido éxito, antes de llegar a la práctica, se présenta a él
una visión angélica...» Entonces él se vio llevado delante del gobernador y
encargado de los hierros. «Sin embargo el ángel, que le había procurado la
visión, se metamorfosea para representar un amigo auténtico », él le pone en
guardia contra el peligro que él corrió y le hizo jurar sobre la Biblia de salir de la
villa hacia el campo; él fue a Jérusalem; y el relato continúan : «Allí él fue
recibido porque la Bienaventurada Mélanie de Roma. Luego el diablo
habiéndole de nuevo desecado el corazón igual que al Faraón, como él era
joven y lleno de savia por su edad, le vino alguna duda y tuvo hesitación sin
decir nada a nadie ; y entonces, él cambió de nuevo de hábitos y la vanagloria
entumeció también su lenguaje. Pero Dios, que impide nuestro pérdida para
siempre, le lanza en un acceso de fiebre, y después, él la extenúa, en una larga
enfermedad durante un período de seis meses, la pobre carne porque la cual él
estaba detenido. Sin embargo los médicos estando avergonzados, la
Bienaventurada Mélanie le dijo :«Hijo, tu enfermedad que se prolonga no me
complace. Dime entonces lo que hay en tu pensamiento. Por que esta
enfermedad que tú tienes no existe sin Dios ». Entonces él le cuenta el asunto
completo ; ella le hizo prometer de retirarse en el desierto donde el compone un
tratado sobre los maleficios de los demonios, sobre todo el demonio de la
concuspicencia. Un día tres demonios se presentan a él en vestidos de
trabajadores ; ellos querían disputar con él, pero Evagro les domina por su
palabra concisa y por su sabiduría. Él vivió durante dieciséis años de régimen
únicamente crudo y murió en olor de santidad.
Otro episodio que de nuevo es cuestión del ángel : el ermitaño Eulogio viene
con un lisiado del que se ocupaba y del que proyectaba separarse, estando
dado el terrible caracter del enfermo ; el asceta fue a pedir consejo de San
Antonio ; este último le dijo: «No merodees en ninguna parte, vete, no se
separen uno del otro, excepto en tu celda. Es que ya Dios envía hacia tí... No
hagas entonces ninguna otra cosa, y que entonces al llegar, el Ángel no te
encuentre en este lugar ». Antonio deja entender que por ellos dos el fin estaba
próximo. En efecto, cuarenta días luego Eulogio murió y tres días más tarde el
lisiado daba el último suspiro.
Jean Danielou:
La creencia de los Padres de la Iglesia en el Ministerio de los Ángeles.
Si uno quiere ser bien enseñado sobre las creencias de los Padres de la Iglesia
en materia de angelología, es necesario leer el excelente libro del P. Juan
Danielou: Los Ángeles y su Misión según los Padres de la Iglesia. Esta obra,
apareció en 1953, es una rica mina de enseñanzas ; es suficiente de poner
conocimiento de los títulos de diez capítulos para darse cuenta el valor de esta
estudio que ilumina las creencias de los primeros cristianos sobre el misterio de
los Ángeles y sobre sus misiones multiples; mejor que se juzgue :
I. Los Ángeles y la Ley.
II. Los Ángeles y la Religion cósmica.
III. Los Ángeles de la Navidad.
IV. Los Ángeles de la Ascensión.
V. Los Ángeles y la Iglesia.
VI. Los Ángeles y los Sacramentos.
VII. El Ángel guardián.
VIII. Los Ángeles y la Vida espiritual.
IX. Los Ángeles y la muerte.
X. Los Ángeles y la Parusía.
A este sujeto las Escrituras enseñan que el Arcángel Miguel es el Protector del
pueblo judío (Daniel X, 13, 20-22). Pseudo Dionisio se hizo el eco de esta
tradición, porque él dijo:«Miguel es el Ángel del pueblo de Israel ». Los Ángeles
vienen a reconfortar los servidores de Dios en el cumplimiento de su obra. El
Antiguo Testamento ha sido comunicado a los Judíos porque la intermediación
de los Ángeles. Ya en el Deuteronomio (33,2), se encuentra el principio del
desarrollo de la angelología; en efecto, en lugar de leer la traducción habitual :
«Yahweh ha venido del Sinaï; de su derecha salen rayos de luz », el texto
griego dijo:«A su derecha los Ángeles lo acompañan».
San Hilario : «La ley ha sido promulgada por los Ángeles y el Hombre ha
comido el pan de los Ángeles »... Él dijo además: «(En la época de la
crucifixion) honor del velo es removido del Templo, con la protección del Ángel
protector ».
Orígenes: El Ángel vigila sobre la santidad del templo. Esta protección del
Ángel permanece unida al Templo, tanto que la presencia de Dios permanece ;
a la Muerte de Cristo el templo es desafectado y el velo removido. Tras la
Muerte de Cristo, el rol preparatorio de los Ángeles ha variado, desde la época
en que ellos han sido sometidos al Cristo. Orígenes estableció un paralelismo
entre el rol de los Ángeles en la preparación histórica de Cristo y su rol en la
formación primera del alma.
*
**
San Basilio : «Que haya los Ángeles propuestos para las naciones enteras, es
allí la enseñanza de Moisés y de los profetas.»
Orígenes: «Estos son los Ángeles que han dado la filosofía oculta y secreta de
los Egipcios, la religion astral de los Caldeos, de los Romanos, de los Hindúes
relativas a la ciencia de Dios ». Nosotros hemos bien allí, netamente indicado,
una alianza cósmica de Dios con los pueblos para el ministerio de los Ángeles.
Eusebio : « Dios ha distribuido todos las naciones, salvo los Judíos que él está
reservado, a los gobernadores invisibles de las naciones, que son los
Ángeles».
Eusebio : «El Salvador vino hacia los hombres en medicina, trayendo socorro
a sus propios ángeles porque la salud de los hombres ».
Los Ángeles del cielo aparecieron entonces como los Ministros y los servidores
de Cristo.
Por Atanasio, los Ángeles que acompañan el Cristo en su ascensión no son los
Ángeles de la tierra, sino aquellos que habían descendido con él; él dirá : «Los
Ángeles del Señor, que le siguieron sobre la tierra, viéndolo subir, lo
anunciaron a las Virtudes celestes, para que ellas abran sus puertas. Las
Potencias estaban en estupor viéndolo en la carne ».
La entrada del Verbo encarnado al cielo apareció bien como una revelación
extraordinaria hecha a las Potencias celestes. Y Danielou de precisará: «El
verdadero misterio de la Natividad es el abatimiento de la persona divina del
Verbo, «un poco por encima de los Ángeles », de conformidad a esto que
Pablo dijo (Hébr. 2,5-7), «porque no es de los Ángeles que Dios ha sometido el
Mundo por venir... El hijo del hombre, tu lo has hecho por un poco de tiempo
inferior a los ángeles ». Y el verdadero misterio de la Ascensión es la exaltación
de la naturaleza humana por encima de los mundos angélicos.
*
**
Danielou enumera las funciones diversas de los Ángeles guardianes según los
Padres de la Iglesia.
1. Mensajeros e instructores , ellos protegen el alma contra los problemas
exteriores y interiores.
2. Ellos están encargados de retomar y de castigar cuando el alma que se
desvía del derecho camino.
3. Ellos asisten al fiel en su oración y llevan sus demandas a Dios.
Crisóstomo recomienda orar al Ángel de la paz ; Hermas aconseja de apelar al
Ángel de la penitencia y Tertuliano invoca el Ángel de la oración. El Ángel de la
paz es también designado como siendo el Protector de los viajeros ; la
Escritura no nos dice que el Arcángel Rafael fue el compañero y el Protector
del joven Tobías, todo a lo largo de su viaje; el Ángel de la paz protege el alma
contra la acción de los demonios.
Orígenes: «El Cristo a dado orden a sus ángeles de proteger al bautizado.
Estos son los justos que tienen necesidad de ser ayudados por los Ángeles.»
San Hilario : «En los combates que nosotros tenemos contra las Potencias
malvadas los Ángeles nos asisten ».
El Ángel de la paz no protege solamente contra los peligros, él provee también
una ayuda positiva, a ejemplo del Ángel que Lucas nos muestra reconfortando
el Cristo en su agonía. Ese buen Ángel es declarado «suave y apacible» por
Hermas.
Gregorio de Nysse abundará en esta creencia: «El Señor de los Ángeles
procure a aquellos que son dignos la Vida y la paz por sus ángeles».
Atanasio : «La visión de los santos (ÁNGELES:) actúa dulcemente y
apaciblemente, suscitando júbilo y exhultación ».
San Ignacio da la regla del discernimiento de los Espíritus : «Es el propia de
Dios y de sus ángeles, en sus movimientos, de dar el verdadero júbilo y la
exhultación espiritual, alejando la tristeza y el problema que suscita el enemigo
».
En hablando del Ángel de la penitencia, los Padres de la Iglesia no hacen más
que continuar la tradición judía. Hermas enseña que «el Ángel de la penitencia
tiene el diablo bajo su potencia».
En el libro de Henoch, son mencionados los Arcángeles Miguel, Rafael y
Gabriel; a estos tres primeros se añade Phanuel que preside al arrepentido.
El Ángel de la penitencia excita en el alma del pecador el arrepentimiento.
Porque la penitencia no es solamente castigo, pero de nuevo remisión pecados
y restauración de la Salud del alma.
Clemente de Alejandría, hablando de la necesidad de la oración dira: «Misma
cuando el Hombre ora solo, él es unido a los coros angélicos ».
Tertuliano recomienda de no sentarse cuando se ora, por respeto por el Ángel
de la oración que se encuentra al costado de nosotros.
Orígenes precisa : «Los Ángeles se reunen cerca de aquel que ora Dios para
unirse a su oración». Así el Ángel circule constantemente entre el alma y el
cielo.
Danielou trae una tradición antigua concernientes a la actividad simultanea con
los buenos y los malos ángeles en el hombre :
El Hombre tiene simultaneamente un Ángel y un demonio que se ocupan de
Él. Es la doctrina de las dos voces. Cómo distinguir la acción de estos dos
entidades ? Hermas dira: «El Ángel de la justicia es delicado, reservado, suave,
apacible. Cuando él entra en tu corazón, él te habla tantos de justicia, de
santidad, de temperancia, de toda obra justa. Cuando estos pensamientos se
elevan de tu corazón, sepa que el Ángel de la justicia está contigo. El Ángel del
mal es al contrario irascible, lleno de amargura y de demencia. Reconócelo a
sus obras.» Orígenes abunda en este sentido.
Finalmente no olvidemos jamás eso que dijo San Pablo : «El Hombre vió en
espectáculo a los hombres y a los ángeles ». Esta certeza de la presencia
continua de los Ángeles nos debe impedir de actuar mal e incitarnos a hacer el
bien.
*
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VIII. Los Ángeles y la Vida espiritual.
Danielou hará remarcar, según la enseñanza de los Padres, que esta que
aparenta el alma a los ángeles, es su limpieza de la Vida sensible. Y los
hombres son destinados tras la Muerte a participar en la Vida de los Ángeles, e
imitar su pureza.
Método de Felipe : «Las alas de la virginidad conducen a la vecindad de la
Vida de los Ángeles ».
Tomás de Aquino haciendo alusión al proceso de la asunción del alma dijo :
«La gracia de un hombre puede llevarlo al grado de gracia de un orden
angélica, luego a aquella de la orden superior ». Esta enseñanza es conforme
al rol preparador de los Ángeles. No olvidemos que toda la misión de los
Ángeles es el de conducir a las almas al rey de los Ángeles y de desaparecer
delante de él. El alma de regreso primero en el Mundo angélico por la Vida
iluminativa, la supera entrando en la Vida unitiva. Así el alma se eleva de
transformación en transformación, justo hasta la unión a Dios en medio de los
mundos angélicos.
*
**
y Danielou enseña : «Este último servicio de los Ángeles está en relación con
la doctrina cristiana del purgatorio ; el bautismo de fuego, administrado por el
Arcángel Miguel que condujo luego el alma a Dios. Delante la puerta, los
Ángeles examinan los méritos y los deméritos de las almas. En cuanto a los
mártires, lavados en su sangre, ellos no tienen necesidad de pasar por el
Purgatorio y ellos son conducidos a Dios con fuerte júbilo por los Ángeles.
Sucede lo mismo por las vírgenes.
Orígenes pone en paralelo la Ascensión del mártir con aquella de Cristo mismo
; los Ángeles son en admiración delante estos ascensos.
Crisóstomo haciendo alusión a la escalera vista por Jacob, dira; «Observa de
esta escalera espiritual que el Patriarca Jacob ha visto, elevándose de la tierra
al cielo ; por ella los Ángeles descendían ; por ella también los mártires
subían... sus cuerpos ensangrentados más luminosos que el sol. Los mártires
suben al cielo precedidos por los Ángeles y rodeados por los Arcángeles, como
por guardias. Luego las Potencias superiores (coros ) forman una inmensa
escolta para conducir hacia el rey de los cielos el martir ; aquel se mezcla
entonces a los Querubines y a los Serafines, uniéndose a los coros para cantar
los cánticos místicos. Tal es la Liturgia donde los Ángeles rodean los mártires
en su ascension.
Capítulo Cuarta
SECCIÓN III:
San Hilario, Obispo de Poitiers (vers 303-367), enseña que los Ángeles han
sido creados antes que el cielo y la Tierra; que Dios les ha asignado el Primero
cielo por lugar de su morada ; que ellos son espirituales e inmortales por
naturaleza ; que ellos están ocupados en el cielo en meditar las Leyes del
Señor ; que ellos no están jamás pasivos, pero siempre empleados a los
funciones de su ministerio, los unos para cantar las alabanzas de Dios, los
otros para asistir continuamente delante de su trono. Este Santo afirma de
nuevo que el aire está lleno de ángeles que son testimonio de nuestras
voluntades y de nuestras acciones ; que, aunque ellos habitan con nosotros,
ellos no dejan de presentarse todos los días delante del Señor, lo que nos debe
hacer temer el testimonio que ellos le dan de nosotros. Hilario enseña que los
Ángeles, los Arcángeles, los tronos, las Dominaciones, las Potencias, los
Principados son no solamente diferentes en nombres, pero también en
ministerios ; ellos están sin embargo todos inmutables en la observación de las
leyes de Dios, por causa de la inmutabilidad por naturaleza ; además, los
Ángeles vigilan para custodiar a la Iglesia ; ellos ayudan a los fieles en todos
lugares, principalmente contra los ataques de los malignos espíritus, y, sin su
socorro, nosotros sucumbiríamos en estos combates. Hilario hizo salir de
nuevo sobre todo que los Ángeles presiden a nuestras oraciones y que ellos
llevan a Dios nuestros deseos. Eliseo, la Escritura lo relata, merece por sus
oraciones que su servidor vió los Ángeles, porque estos son aquellos que
llevan los justos en el reposo eterno. No hay que perder jamás de vista que
nosotros tenemos necesidad de la intercesión de los Ángeles, cerca de Dios,
en nuestro favor.
He aquí una sentencia de San Hilario habiendo tratado del Ministerio de los
Ángeles :
«Es una verdad fundada sobre la autoridad infalible de la Escritura, que los
Ángeles son establecida para conducirnos, y que ellos ofrecen todos los días a
Dios las oraciones de aquellos que son salvados por Jesús-Cristo.»
Santo Cirilo, Obispo de Jérusalem (vers 315-386), enseña: Los Ángeles gozan
de la visión intuitiva de Dios ; su número es más grande, en proporción que el
cielo es más vasta que la tierra; según el mérito y la perfección de su orden,
ellos están ubicados en diferentes lugares más excelentes los unos que los
otros. Los Ángeles y los Arcángeles son del último orden y en el más bajo ciel;
los Querubines en el más elevado. Los Ángeles son presentes al Bautismo, y
congratulan a los bautizados cantando : Bienaventurados aquellos para que los
pecados son perdonados ! ellos escriben todas nuestras buenas acciones,
borran de encima sus libros aquellos quien, luego de haber sido buenos,
comenten maldades.
San Basilio, Arzobispo de Cesarea (329-379).
Hay quien pone en San Basilio al nombre de los Padres griegos que han
creído que los Ángeles han sido creados antes del mundo. Sin embargo San
Basilio no da ese sentimiento, que además no hiere la fe, solamente como
verosimilmente y no como cierto. Lo que él atestigua creer de más seguro en
relación los Ángeles, es que al mismo tiempo que el Verbo de Dios los creó, el
Espíritu Santo los santificó. Los Ángeles no han llegado entonces por grados
en la purificación, como si ellos hubiesen sido creados en una infancia
espiritual y no hubiesen recibido el Espíritu Santo que luego se hubiesen hecho
dignos ; pero, desde el momento de su creación, ellos han recibido la santidad
por infusion. San Basilio cita diversos lugares de la Escritura para mostrar que
los Ángeles presiden para las naciones enteras, y a las monarquías ; otros
tienen la inspección de las Iglesias ; hay otros que, como los ojos de Dios,
vigilan sobre las acciones de los fieles, y otros finalmente, quien, como sus
orejas reciben sus oraciones, que escriben las palabras vanas de aquellos que
hablan en el templo de Dios, en lugar de cantar su Gloria. Ellos tienen también
la supervisión de aquellos que ayunan. San Basilio dice como una verdad
incontestable y bien marcada en el Evangelio que cada fiel tiene un Ángel
guardián, quien, como un Preceptor y un Pastor, regla su conducta y no lo
abandona, a menos que él lo eche, por así decir, por sus malvadas acciones.
He aquí un pensamiento de San Basilio.
«El Ángel del Señor acampa alrededor de aquellos que le temen. Quienquiera
creyó en Jesús-Cristo, tiene un Ángel que le asiste, si él no lo expulsa de cerca
suyo por alguna mala acción.»
San Gregorio dijo que es el orgullo que ha hecho perder a Satan su luz y su
belleza. Los demonios, estos espíritus envidiosos y repulsivos, hacen todos sus
esfuerzos, y tienen una dirección particular para inspirar a los hombres un amor
carnal, deleitados de tener compañeros de infortunio. De más los demonios son
glotones y impostores. La potencia y la fuerza del nombre de Jesús-Cristo,
cuando se lo invoca, hace temblar los demonios.
San Gregorio hizo remarcar que los diferentes Órdenes que hay entre los
Ángeles, no indican diferencia de naturaleza, sino solamente funciones que no
son las mismas. Aunque ocupados principalmente en alabar a Dios, los
Ángeles son de nuevo empleados al servicio de los hombres ; para defenderlos
contra sus enemigos invisibles, y para introducirlos luego de su muerte en un
lugar de refresco y de reposo. San Gregorio dijo haber aprendido de una
tradición secreta que Dios, viendo el Hombre caído en el pecado, no había
querido abandonarlo, pero que él había dado a cada uno un buen ángel, para
ayudarlo a practicar la virtud; pero el demonio, queriendo hacer este socorro
inútil, envía además a cada hombre un ángel malo para hacerlo caer en el
pecado ; de modo que el Hombre se encuentra solicitado tanto al bien, tanto al
mal! Esta tradición secreta podría estar muy bien fundada sobre el libro del
Pastor (de Hermes ), y sobre la carta que lleva el nombre de San Bernabé. Los
malos ángeles, incorporales como los buenos, desde que ellos no están sujetos
a las necesidades del cuerpo, vagan en los aires. Caídos de la felicidad eterna
y envidiosos de la felicidad de la que los hombres gozan, ellos no cesan de
dañarlos y de empujarlos al crimen. Lucifer, jefe de los Ángeles rebeldes, no
era un simple ángel, sino un Arcángel. Su caída es una prueba que la creatura
no es inmutable de su naturaleza.
Aunque la razón se dice es lo que distingue los hombres de los animales, ella
no le es particular : los Ángeles están dotados de ella. Ellos son inmortales,
pero esta inmortalidad no les es natural, ella no conviene más que a Dios solo;
y si ellos gozan de la inmortalidad, esto les viene de la buena voluntad de su
Creador. Otra es la inmortalidad que es dada, otra es aquella que se sostiene
por ella misma, sin estar sujeta al cambio. San Ambrosio distingue entonces la
inmortalidad natural que no conviene más que a Dios solo, de la inmortalidad
gratuita donde los Ángeles son participantes por la voluntad de su Creador.
Este místico enseña que hay nueve Órdenes de los Ángeles, que su cuidado
no se extiende solamente sobre los herederos de las promesas divinas, pero
de nuevo sobre las Iglesias, porque su número es tan grande que ellos llenaron
el aire, la tierra, el mar, todos los espacios ; ellos se encuentran particularmente
en los lugares santos y nuestro místico exclama: «Quiera Dios que en el
momento que nosotros quemamos el incienso sobre los Altares, y que nosotros
ofrecemos el Sacrificio, los Ángeles aparezcan visiblemente, porque no es
necesario dudar que ellos asisten cuando Jesús Cristo está presente, cuando
él es inmolado! Ministros de la gracia de Dios, los Ángeles son también
ejecutores de su justicia ; pero ellos gimen cuando ellos están constreñidos a
castigar a los hombres. Retengan bien esta afirmación de San Ambrosio : «No
hay que dudar que estaban siempre los Ángeles presentes cuando Jesús
Cristo mismo estaba presente».
San Jerónimo observa también como una opinion constante entre los Doctores
que el aire que está entre el cielo y la Tierra está lleno de malos espíritus. Él
enseñaba que «los Ángeles ven continuamente el rostro del Padre celeste ».
Como los otros Doctores, San Jerónimo atrajo la atención sobre el hecho que
las almas debían ser de una grande dignidad puesto que Dios había delegado
a cada una, desde su nacimiento, un Ángel para cuidarla.
Santo Nél dijo que Santo Crisóstomo, que él llama «la Luz de la Iglesia de
Constantinopla y misma del Universo », vio a toda hora de los Ángeles en la
Iglesia, pero particularmente en el momento del Sacrificio no sangriento. Él
añade que este Padre, lleno de admiración y de gozo, participaba a sus íntimos
amigos, los más espirituales, de estas visiones de ángeles, y que él les dijo que
cuando comenzó la oblación sagrada, él vio descender del cielo muchos de
estos espíritus bienaventurados, revestidos de ropas muy luminosas y con pies
desnudos, que rodeaban el altar con respeto y silencio, observando la mesa
sagrada y el rostro bajado. Santo Crisóstomo le añadió que cuando se había
completado la celebración de los Misterios, y que los Obispos, los Sacerdotes y
los Diáconos distribuían al pueblo el cuerpo y la Sangre preciosa, los Ángeles
les ayudaban en estas funciones, y les sostenían por temor que ellos no se
cansen.
Es sin fundamento que algunos antiguos han creído que por los Ángeles, era
necesario entender los hijos de Dios, de los que se dice en el Génesis que ellos
tuvieron comercio con las hijas de los hombres. Por Hijos de Dios, la Escritura
indica a los descendientes de Seth, que se aliaron con las hijas de los
hombres, es decir, con las hijas de la posteridad de Caïn.
San Juan Damasceno, Moine. Nacido antes que el fin del séptimo siglo,
muerto hacia 754.
Tal fue la enseñanza de este Santo monje: El Ángel es una naturaleza
razonable, inteligente, libre, móvil, incorporal, immortal, no por su naturaleza,
sino por la gracia de Dios. Los Ángeles obtienen su santidad, no de su
naturaleza, sino del Espíritu Santo. Ellos predicen el futuro por la gracia de Dios
que los ilumina. Una de sus funciones es de cuidar ciertas partes del mundo,
de presidir a las naciones y a los Países, y de asistirnos en nuestras
necesidades. Hay diferentes sentimientos expresados sobre el momento de su
creación. Este Padre declara atenerse a esto que dijo San Gregorio de
Naziance, a saber que ellos han sido creados antes del mundo. Los demonios
son de misma naturaleza que los buenos ángeles; si ellos se han hecho malos,
fue por su propia elección. Ellos no tienen poder sobre persona, que Dios no se
los otorga. Algunas veces ellos predicen las cosas futuras, pero como esto no
es que por conjetura, se deduce con frecuencia que ellos mienten. Aunque se
les ha dado permiso de tentar al hombre, ellos no pueden hacer violencia a
persona. Está en nuestro poder de consentir o de resistir a sus sugestiones. El
fuego que debe servir de suplicio a los Demonios no será material como aquel
que está entre nosotros, sino tal como Dios dijo.
La caridad eminente de los Ángeles les hizo descender para consolarnos, para
visitarnos, para ayudarnos, por el amor de Dios, por el amor de nosotros, por el
amor de ellos mismos, afin imitar como ellos le deben la misericordia de Dios
hacia nosotros ; por el amor de nosotros, porque ellos tienen piedad de nuestra
alma, quien es semejante a ellos; por el amor de ellos mismos, porque ellos
esperan con los deseos muy ardientes que nosotros cumplamos lo que falte en
su nombre.
VIGILA y ORA !
Capítulo Cuarta
SECCIÓN IV:
Los Padres del desierto y los Ángeles
En la Vida de Pablo de Tebas, se relata que este joven asceta vivía muy
frugalmente, asistido por los Ángeles.
Un día San Antonio fue presa de un gran deseo de visitar a Pablo de Tebas ; él
se puso en camino y entonces «que él estaba en camino, el vio, en medio
tropas de los Ángeles y entre los coros de los profetas y de los mártires, Pablo,
todo luminoso de una blancura pura y luminosa, subir en el cielo».
Efectivamente el Santo anacoreta estaba muerto en el instante donde Antonio
había sido gratificado de esta visión.
El ser luminoso repitió por tres veces la misma afirmación, luego el desapareció
a los ojos de Pachôme. Su hermano no había visto ni escuchado las palabras
del luminoso enviado de Dios.
Esta decisión tomada, dijo él, yo cerré mi cueva y mi corazón, para no tener
que preocuparme de persona, y yo comencé, de pie, a partir del lunes. Yo di
entonces esta consigna a mi espíritu : «No desciendas de los cielos ! tú estás
allí de los Ángeles, Arcángeles, las Potencias de lo alto, el Señor del Universo ;
no desciendas por encima del cielo!» Yo había estado dos días y dos noches;
pero yo puse de tal manera al demonio en furia que él se hizo llama de fuego y
quemo todo eso que yo tenía en mi cueva; misma la cama sobre la cual yo
estaba fue consumida por el fuego, y yo pensé que yo mismo sería
completamente consumido! Finalmente, estando peor, yo abandoné, el tercer
día; yo no había podido tener concentrado mi espíritu... Yo descendí en la
contemplación del mundo, para no ser tachado de orgullo.
Dos visitantes habían venido a consultarlo, San Antonio les advirtió que su fin
estaba próximo, que ellos iban a recibir sus coronas respectivas y que ellos
debían apurarse para regresar a su domicilio sino el Ángel no los encontraría
en su lugar.
El orgullo es señalado por todos los Padres del desierto como siendo un
defecto capital, alejando al Ángel guardián y abriendo la puerta a todos los
ataques del mal. « Dios aleja de los orgullosos el Ángel de su providencia ; y
cuando el Ángel está desorientado el orgulloso es dominado por el Adversario y
él sucumbe.»
En los Apotegmas (VII, De la paciencia o fuerza), él hizo mención de un Ángel
del Señor que tomó la figura de un gran águila para conducir un solitario a
través del desierto en lugar de su nueva residencia. A la aproximarse del
águila, él le dijo al anacoreta : «He allí tu ángel, levántate y síguelo ».
Al final del mismo capítulo, él hizo mención de un Ángel del Señor quien es
enviado para contar los pasos que un viejo ermita debe hacer para llevar
suministros al agua, y para darle la recompensa de sus esfuerzos.
El capítulo según los Apotegmas enseña que no se debe hacer nada por
ostentación. Se encuentra el relato que ilustra en una cierta manera el dicho
popular ; el que quiso hacer el Ángel hizo la bestia.
El capítulo III/XIII de las Conferencias enseña que no hay más que un Dios
que penetra la sustancia de nuestras almas y que los otros espíritus puros no lo
pueden hacer:
No es necesario creer que, porque un espíritu se mezcla con esta materia
sólida y espesa de nuestros cuerpos, lo que es muy confortable para hacer, él
pueda mezclarse lo mismo con nuestra alma, quien es también un espíritu, y
que él la hace susceptible de su naturaleza. Esto no es posible mas que en
esta augusta Trinidad que puede todo. Es ella que penetra de tal manera todas
las naturalezas espirituales e intelectuales, que ella puede no solamente
rodearlos y poseer todos los de afuera, sino penetrar aún lo denso y
extenderse como un espíritu se extiende en un cuerpos. Por que algunos
espirituales que nosotros llamamos estas naturalezas de los Ángeles,
Arcángeles y otras Potencias del cielo, y de nuestra alma misma, o las partes
las más puras y las más sutiles del aire, no es necesario creer sin embargo que
ellas no sean cuerpos ; porque ellas no dejan de tener un cuerpo que los hizo
subsistir, aunque él es decir más sutil y más ligero que todo eso que nosotros
veamos aquí abajo.
Capítulo V
La Edad Media y la angelología
(395-1453)
SECCIÓN 1
En una otra ocasión Santo Tomás vio un Ángel que le mostró un libro
maravilloso cuyas líneas eran de oro y de azur ; aquellas que eran de oro se
relacionaban con los mártires inscriptos en ese libro de vida.
Cuando él tenia que terminar de dictar sus comentarios sobre las Epístolas de
San Pablo que él apreciaba particularmente, cuando él se encontraba
momentaneamente detenido, él envía sus escribas y, poniéndose en oración, él
era asistido por el apostol mismo , que le daba los esclarecimientos necesarios,
y las ayudas solicitadas, y el dictado retomaba su curso luminoso.
Luego Tomás fue llevado, en éxtasis y se eleva un codo por encima de la tierra.
Hacia el final de su vida, Santo Tomás habiendo sido puesto en éxtasis durante
un cierto tiempo, declara que todo aquello que él había visto era tan
indeciblemente maravilloso y a tal punto que todo aquello que él había escrito
no era mas que pequeñeces. Y desde entonces, él cesó de escribir para gran
desesperación de sus discípulos.
Santo Tomás fue inteligente para descubrir las dificultades del demonio ; un día
un hermano habiendo recibido un pastel de parte de un desconocido, la ocultó
en su cueva cuando los hermanos estaban en la misa ; él pensó que, ninguna
persona lo había visto, él podría gozar todo solo de este dulce, lo que lo habría
hecho caer en el Pecado de gula ; pero terminado el oficio, Tomás se aproximó
a este hermano y le puso en guardia contra la tentación de la que él era
víctima, porque esta tentación estaba suscitada por el diablo.
Algunas días antes de la muerte del Santo, un niño que estaba de guardia
cerca de Tomás extendido sobre su cama, vió una espléndida y luminosa
estrella penetrar por la ventana y detenerse durante un cierto tiempo por
encima de la cabeza del enfermo ; manifestación efectiva de la protección
angélica y divina de la que Tomás era el beneficiario.
Los Ángeles ejercen entonces las actividades de los seres vivientes en los
cuerpos que ellos asumen. Ciertos ángeles han aparecido caminando. Por otra
parte, ellos han comido y bebido.
Estos cuerpos no son sin embargo inutiles, desde que ellos no son formados
para sentir, sino para manifestar por sus órganos las Virtudes espirituales de
los Ángeles.
Sin embargo, los tiempos del movimiento angélico pueden ser discontinuados,
el Ángel puede estar en tal instante aquí, en tal otro instante allá sin que haya
tiempos intermediarios.
Tomás : eso que Dios conoce por un solo principio, las inteligencias inferiores
le conocen por muchos, y menos la inteligencia es elevada, más estos medios
de conocimiento son numerosos. Más un Ángel será elevado, menos
numerosas serán las especies por las cuales él puede tomar la universalidad
de los inteligibles.
Un Ángel puede ver eso que está en la conciencia de otro. Cada Ángel ve a los
otros ángeles y las almas y puede ver los pensamientos.
Todos los seres del Universo son de alguna manera activos, salvo
evidentemente el Primer agente que no lo es de ninguna manera y en que
naturaleza y voluntad son idénticos. Nada impide por consecuencia que el
Ángel es decir actuando en ese sentido que su inlinación natural le es dada por
el autor mismo de la naturaleza... Lo mismo que todo conocimiento natural es
verdadero, lo mismo que toda elección natural es recta, porque el amor natural
es una inclinación de naturaleza que viene del autor de las naturalezas.
Para este punto de vista, cuatro cuestiones se presentan : 1) El Ángel tiene una
cause de su ser ? 2) El Ángel existe de toda eternidad ? 3) El Ángel ha sido
creado antes de la creatura corporal ? 4) Los Ángeles han sido creados en el
cielo empíreo?
A la tercera cuestión: ¿Los Ángeles han sido creados antes que el Mundo
corporal? se le responde : San Jerónimo dijo : «Durante cuanto tiempo, cuantos
siglos, no sería necesario pensar que los Ángeles, los Tronos y las
Dominaciones, las otras Jerarquías celestes estaban ya al servicio de Dios ?»
San Juan Damasceno observa : «algunos dicen que los Ángeles fueron
producidos antes de toda otra creación ». Es igualmente la opinión de Gregorio,
el Teólogo : «En primer lugar Dios concibió las Potencias angélicas y celestes,
y fue allí su obra ».
Hay más de distancia entre la naturaleza angélica y la naturaleza corporal que
entre dos naturalezas corporales diferentes. Pero las naturalezas corporales
han sido creadas una luego de la otra en seis días según el relato del Génesis.
Con mas fuerte razón, la naturaleza angélica ha sido producida antes que toda
la naturaleza corporal.
San Jerónimo se apoya sobre la opinión de los Doctores griegos, dijo que todos
concuerdan en reconocer que los Ángeles han sido creados antes que el
Mundo corporal.
Dios no es una parte del Universo ; él está por encima, y posee la perfección
de una manera eminente. El ángel, al contrario, es parte del Universo.
En la última cuestión: ¿Los Ángeles han sido creados en el cielo empíreo? se
le responde :
Los Ángeles son sustancias incorporales que no dependen de un cuerpo en su
ser, ni por consecuencia en su devenir. Ellos no han sido entonces creados en
un lugar corporal. En la Glosa de Strabon, leemos : En el comienzo Dios creó el
cielo y la tierra. El cielo donde él actuaba no es el firmamento visible, sino el
cielo empíreo — cielo de fuego o cielo espiritual — así denominado no por
causa de su ardor, sino de su esplendor. Y tantos él ha hecho, él los llenó con
los Ángeles.
Nada impide de concebir que los Ángeles superiores teniendo una potencia
más elevada y más universal sobre todos los cuerpos, hayan sido creados en
la parte suprema del mundo material.
Los ministerios de los Ángeles bienaventurados les son utiles, porque ellos son
de una cierta manera parte de su beatitud : difundir su perfección sobre otro
perteneciendo en efecto al ser perfecto en tanto que él es perfecto.
Bien que absolutamente hablando, el Ángel bienaventurado no alcanza el
grado supremo de la beatitud, sin embargo, por eso que es de Él y a causa de
la predestinación divina, él ha llegado al término último y en la cima de su
felicidad. Sin embargo, puede crecer en los Ángeles el gozo que él experimenta
de la Salud de aquellos cerca de los cuales ellos están llamados a ejercer su
ministerio.
Sin ninguna duda, el Ángel ha pecado deseando ser como Dios, pero esto
puede entenderse de una doble manera : es decir por igualdad, es decir por
similitud.
El Ángel ha deseado poseer su beatitud última por sus propias fuerzas, lo que
no pertenece mas que a Dios. Finalmente el Ángel ha deseado igualmente una
cierta Principalidad sobre las criaturas, en lo que él ha querido de una manera
perversa asimilarse a Dios.
Los Ángeles como los hombres, han sido creados por Dios, pero hay hombres
naturalmente malos, de los que se dice en la Escritura : «La malicia les es
natural ». Puede entonces encontrarse también Ángeles naturalmente malos.
¿El diablo ha sido malo por su propia falta desde el primer instante de su
creación ?
En San Juan (8,44), Jésus declara : «El diablo ha sido asesino (homicida)
desde el comienzo ; y él no ha perseverado en la verdad porque no hay verdad
en él». Cuando él profiere la mentira, él habla de su propio fondo porque él es
mentiroso y el padre de la mentira.
El Pecado del Ángel fue posterior en la operación creadora.
¿El más elevado entre los Ángeles pecadores fue también el más elevado
de todos los Ángeles?
Figura en Ezéchiel: «Tú eras un Querubín protector ; yo te había puesto sobre
la montaña Santa de Dios ». Pero, según Dionisio, la orden Querubines es
inferior a aquella de los Serafines. El más elevado de los Ángeles pecadores no
es entonces el más elevado de todos los Ángeles.
Sin embargo San Gregorio escribió que el primer Ángel que ha pecado,
«superior a todas las tropas angélicas, las superaba en claridad y resplandecía
de nuevo mas cuando se lo comparaba a los otros ángeles» (Lucifer).
En conclusion, es necesario considerar dos cosas en el pecado. Por eso que
está de la inclinación, parece que los Ángeles superiores estaban menos
llevados a pecar que los Ángeles inferiores. Es lo que le hizo decir a
Damasceno que, en este caso, «el más grande de los Ángeles » significa, el
superior de la orden terrestre.
Toda la creación corporal es administrada por Dios por medio de los Ángeles.
Nada impide entonces de afirmar que los Ángeles inferiores son puestos por
Dios para la administración de cuerpos inferiores, mientras que los Ángeles
superiores tienen por rol de administrar los cuerpos más elevados ; los Ángeles
supremos estando asistentes al trono de Dios... Aquellos que cayeron hacían
parte de la orden inferior, de nuevo que, misma en esta orden, hubo algunos
que permanecieron fieles.
Si, por otra parte, se considera el motivo que el Ángel tenía de pecar, este
motivo apareció más fuerte en los Ángeles superiores. El Pecado de los
demonios fue en efecto un pecado de orgullo en que el motivo es la propia
excelencia del pecador. Sin embargo esta excelencia estaba mas grande en los
Ángeles superiores. Es por qué San Gregorio afirma que el Primer Ángel
pecador fue el más elevado de todos. Y esta opinion parece la más probable.
Pero nosotros no entendemos prejuzgar de otra opinión, porque ha podido
tener también bien en el Príncipe de los Ángeles inferiores un motivo de pecar.
¿El Pecado del Primer Ángel fue la causa de los pecados de los otros ?
El primer pecado del Ángel no puede ser sino el orgullo y el orgullo buscaba la
excelencia. Sin embargo, él repugna a aquel que desea sobresalir de
someterse a un inferior... En la glosa leemos : «El que era superior a los otros
en su ser se ha convertido también en el más elevado en malevolencia ».
En el Apocalipsis, se lee : «La cola del dragon a llevado con él el tercio de las
estrellas del cielo» (12,4).
El orgulloso, si todas las cosas son iguales además, prefiere someterse a un
superior mas bien que a un inferior... Y porque el Ángel supremo tenía una
potencia natural superior a aquella de los Ángeles inferiores, fue precipitado en
el Pecado con más iolencia.
Sin embargo en la Santa Escritura, los nombres de ciertas Jerarquías, como los
Serafines y los Tronos, no son atribuidos a los demonios, porque estos
nombres son tomados del ardor de la caridad y de la habitación de Dios, los
cuales son incompatibles con el Pecado mortal. Se atribuye, al contrario, los
nombres Querubines, Potestades y Principados a los Ángeles susceptibles de
pecar, porque estos nombres son tomados de la ciencia y de la potencia, los
cuales pueden ser común en los buenos y en los malos ángeles.
Para Dionisio, los dones angélicas acordados a los demonios no han cambiado
; ellos habitan en su integridad y su esplendor. Sin embargo entre estos dones
se encuentra el conocimiento de la verdad.
Todos los Ángeles, al principio, han conocido de alguna manera el misterio del
Reino de Dios que debía ser realizado por el Cristo ; pero sobre todo aquellos
que fueron beatificados en la visión del Verbo que los demonios no conocerán
jamás. Por el hecho de la luz de su naturaleza intelectual los demonios son sin
embargo lúcidos.
¿La voluntad de los demonios es obstinada en el mal?
Tomás : el libre arbitrio perteneciendo en la naturaleza intelectual, habita en los
demonios. Sin embargo el libre arbitrio, por sí y por modo de prioridad, es
inclinado al bien mas bien que al mal. La voluntad de los demonios no puede
entonces ser obstinada en el mal al punto de no poder hacer volver al bien.
La misericordia infinita de Dios es mas grande que la malicia finita del demonio.
El demonio confiesa a veces la verdad diciendo de Cristo : «Yo sé que tu eres
el Santo de Dios ».
Según Dionisio los demonios desean eso que es bueno y aún eso que es
mejor, a saber, el ser, la vida, la inteligencia.
El Pecado cometido al principio habita en el Diablo tanto como él comporta el
deseo de su objeto, bien que el diablo se sepa muy bien en la imposibilidad de
alcanzarlo.
La actividad verdaderamente propia del demonio proviene de una deliberación
de su voluntad; ella es siempre mala en el demonio.
*
**
Por el resumen del capítulo consagrado al estudio de los Ángeles en la Suma
de Santo Tomás de Aquino, se puede ya darse cuenta cuanto este autor ha
estudiado la cuestión bajo todos sus aspectos, y, desde luego, todos aquellos
que abordaron el mismo tema se han referenciado en la opinión del Doctor de
la Escuela o Doctor Angélico.
2. El Rev.. P. J. Berthier y su Estudio de la Suma (Los Ángeles).
En 1893, el Rev.. P.J. Berthier, profesor en la Universidad de Fribourg, ha
hecho aparecer bajo el título «El estudio de la Suma Teológica de Santo Tomás
de Aquino » una serie de lecciones dadas sobre el tomismo y esto en
conformidad con la Encíclica de Léon XIII, tendiendo a promover y recomendar
el estudio de la filosofía tomista. He aquí cómo en este importante estudio es
tratada la cuestión de los Ángeles :
« Dios será el autor de esta sublime jerarquía de los seres : en lo alto, los
puros espíritus, los Ángeles; en lo bajo, el Mundo puramente material; entre los
dos, el Hombre compuesto de un cuerpo y de un espíritu... Cual gradación
lenta y armoniosa (p. 95).»
Entre Dios y el hombre, se elevan las jerarquías angélicas. Los Ángeles son
formas puras, no más destinadas a informar a la materia, como las formas
inferiores, pero a subsistir y para actuar por ellas mismas.»
El P. Berthier retoma una expresión de Santo Tomás que él estima muy justa,
a saber, las «emanaciones sucesivas de la Divinidad »; y dice :
«Santo Tomás comienza por el estudio de los Ángeles y examina
sucesivamente su naturaleza, su inteligencia, su voluntad, su creación.»
Partiendo de este principio que ellos son formas puras, puestas entre Dios y el
hombre, se deduce el magnífico gesto, quien, según algunos, habría merecido
a Santo Tomás su título de Angélico. Él se apodera de los hechos que le
proporcionan la Revelación y la tradición, y hace salir torrentes de luz, sobre la
inmaterialidad de los Ángeles, su manera de actuar sobre el Mundo material, su
modo de crecimiento, la potencia de su voluntad, la hora de su creación, las
gracias que les fueron prodigadas por la munificencia divina, sobre la caída y el
castigo de los Ángeles rebeldes (p. 96).»
Un pasaje de Santo Tomás, tomado por el P. Berthier, muestra que, por este
Doctor de la Iglesia, las manifestaciones que se ubican actualmente bajo la
denominación de espiritismo y de hipnotismo pueden explicarse de dos
maneras : imaginación, halucinación o acción de los Espíritus ; y el autor dice :
«Los espíritus buenos o malos pueden actuar sobre el Mundo material, y desde
la época sobre las imaginaciones » (p. 315). Y el P. Berthier concluye por esta
afirmación : «Santo Tomás atribuía la mayoría de estos fenómenos a los
espíritus angélicos, y le añadió que estas manifestaciones se pueden producir
durante el estado de vigilia, como durante el estado de sueño ».
Nosotros volveremos a encontrar al P. Berthier, traductor y comentador de la
Divina Comedia, cuando trataremos de Dante y de su forma de concebir la
angelología.
Capítulo Quinto
SECCIÓN II
Hay una subordinación de los Ángeles entre ellos; ella es de dos tipos :
jerarquías y Órdenes o coros angélicos.
*
La palabra Jerarquías ignifica Principalidad sagrada; la palabra de
«Principalidad » comprende dos cosas : el Príncipe mismo y la multitud
ordenada bajo él.
*
La «Principalidad sagrada», entendida en su sentido lleno y perfecto, designa
toda la multitud de las criaturas racionales llamadas a participar en las cosas
santas bajo el gobierno único de Dios, Príncipe supremo y rey soberano de
toda esta multitud.
Dios se sirve de los Ángeles para la administración del mundo corporal, porque
este mundo corporal es inferior a los ángeles, y que, en todo gobierno
ordenado, los seres inferiores son regidos por aquellos que les son superiores.
*
Los Ángeles que administran el Mundo corporal pertenecen a la orden de las
Virtudes.
Los Ángeles que sirven para la administración del mundo corporal vigilan el
cumplimiento perfecto del plan providencial y las voluntades divinas en todo lo
que sucede entre los diversos seres que constituyen el Mundo corporal.
Porque la intervención de los Ángeles de la orden de las Virtudes , Dios
cumple todos los cambios que se hacen en el Mundo corporal, y comprendido
mismo los milagros.
El milagro no se cumple por la virtud propia del ángel, sino por la virtud propia
de Dios, sin embargo el Ángel puede y concurre por modo de intercesión o a
título de instrumento.
*
El Ángel puede actuar sobre la imaginación del Hombre y sobre sus otras
facultades sensibles, estas facultades estando ligadas a los órganos, y, por
consiguiente, depende antes del mundo corporal sometido a la acción de los
Ángeles.
por la misma razón, el Ángel puede actuar sobre los sentido exteriores del
Hombre e impresionarlos como a él le place.
*
Los buenos ángeles pueden ser enviados por Dios en ministerio cerca de los
hombres. Dios se sirve de su acción cerca de los hombres para promover el
bien de estos últimos o para la ejecución de sus consejos a su voluntad.
No son todos los buenos ángeles que pueden ser así enviados por Dios en
ministerio cerca de los hombres. Hay quien no son jamás enviados, estos son
aquellos de la primera Jerarquía, porque su privilegio es de tenerse
constantemente ante Dios. Es por qué se les llama los Ángeles que asisten.
Todos los Ángeles de las dos otras jerarquías pueden ser enviados en
ministerio cerca de los hombres, de tal suerte sin embargo que las
Dominaciones presiden la ejecución de los consejos divinos, mientras que los
otros, Virtudes, Potencias, Principalidades, Arcángeles, ángeles atienden
directamente en esta ejecución.
*
Hay de los Ángeles que son enviados cerca de los hombres para protegerlo, la
Providencia del gobierno divino habiendo querido que el hombre, a los
pensamientos y a las voluntades tan cambiantes y tan frágiles, fuese asistido,
en su marcha hacia el cielo, por uno de los espíritus bienaventurados por
siempre fijado en el bien.
*
Esto es, distintamente, un Ángel por cada hombre, que Dios envía en
ministerio cerca de los hombres para cuidarlos, cada alma humana estando
más querida a Dios que no pueden ser las diversas especies de criaturas
materiales, a las cuales sin embargo es puesto un Ángel distinto que vigila para
promover su bien.
*
Los Ángeles que son así diputados por Dios, distintamente, pertenecen todos
al último de los nueve coros de los Ángeles.
*
Todos los hombres, sin excepción, son así confiados por Dios para custodiar a
un de sus ángeles, tanto que ellos vivan sobre esta tierra, en razón del camino
peligroso que ellos deben todos enfrentar antes de llegar al fin.
*
Nuestro Señor Jesús-Cristo, en tanto que hombre, no tiene un Ángel para
protegerlo ; en razón de esta que él era Dios en persona, no le convenía a
Nuestro Señor Jesús Cristo de tener un Ángel para protegerlo, sino que ha
tenido los Ángeles propuestos para el insigne honor de servirle.
*
El Ángel personal para cada hombre es diputado por Dios en el instante mismo
cuando cada hombre viene al mundo.
Nosotros queremos ahora atraer la atención del lector sobre una creación del
profesor Étienne Gilson, quien, en sus Estudios de Filosofía medieval, da una
excelente vista de conjunto de la enseñanza de Tomás de Aquino y más
especialmente del capítulo concerniente a la angelología.
Gilson desde el principio de su exposición comienza por algunas
observaciones de valor primordial:
La orden de las criaturas en que se encuentra realizado el más alto grado de
perfección creada es aquel de los puros espíritus, a los cuales se ha dado
comunmente el nombre de ángeles. Se deduce que los historiadores de Santo
Tomás pasan completamente bajo silencio esta parte del sistema o se
contentent con hacer algunas alusiones. Una tal omisión es tanto más
lamentable que la angelología tomista no constituye, en el pensamiento de su
autor, una búsqueda de orden específicamente teológico. Los Ángeles son
criaturas cuya existencia puede ser demostrada y misma, en ciertos casos
excepcionales, constatada ; su supresión rompería el equilibrio del Universo
tomado en su conjunto ; finalmente la naturaleza y la operación de las criaturas
inferiores, tales que el hombre, no puede ser perfectamente comprendida que
por comparación, y con frecuencia por oposición a aquella del ángel.
Esta posesión innata de las especies inteligibles es común a todos los Ángeles
y característica por naturaleza ; pero todos no llevan en ellos las mismas
especies, y nos atenemos aquí al fundamento de su distinción... En una
palabra, la superioridad de los Ángeles crece a medida que disminuye el
número de las especies que les son necesarias para aprehender la
universalidad de los inteligibles.
La manera en la que Gilson presenta la sucesión de las jerarquías y Órdenes
de ángeles, amerita de ser retenida, porque ella sintetiza bien toda la
angelología de Santo Tomás de Aquino :
En el primer grado encontramos los Ángeles que conocen las esencias
inteligibles en tanto que ellas proceden del Primer Principio universal quien es
Dios. Este modo de conocer perteneciendo por sí a la primera jerarquía que se
extiende inmediatamente a los costados de Dios y en que se puede decir con
Dionisio cuando ella habita en los vestíbulos de la Divinidad. Al segundo grado
se encuentran los Ángeles que conocen los inteligibles en tanto que sometidos
a los causas creadas las más universales, y este modo de conocer conviene en
la segunda Jerarquía. En el tercer grado, finalmente, se encuentran los Ángeles
que conocen las inteligencias como aplicadas a los seres singulares y
provenientes de causas particulares; estos últimos constituyen la tercera
Jerarquía. Hay entonces generalidad y simplicidad decreciente en la repartición
del conocimiento de los Ángeles ; los unos, únicamente tornados hacia Dios,
considerando en él solo las esencias inteligibles; otros considerándolas en las
causas universales de la creación, es decir ya en una pluralidad de objetos ;
otros finalmente considerándolas en su determinación a los efectos
particulares, es decir en una multiplicidad de objetos igual al número de seres
creados.
Capítulo Quinto
SECCIÓN III:
Dante y la angelología
La Divina Comedia
En el verso 13, aprendemos que Dios no ha creado los Ángeles «para adquirir
de las bienes nuevos, lo que no puede ser ». Él les creó en su eternidad, fuera
del tiempo, como él lo quizo, «en nuevos amores se abrió el Eterno amor»; en
una nota explicativa, el P. Berthier dira: «La duración de los Ángeles participe
de la eternidad de Dios ; por los Ángeles especialmente, ella está en relación
con su actividad, y difiere del tiempo. La permanencia de la creación es, como
acto, afuera del tiempo.» «El Eterno amor», sugiere al H. Longno este
comentario : «La afirmación, «eterno amor», es Dios. Los amores que él saca
de su sustancia, son todas sus criaturas : ángeles, hombres, plantas y
materias.»
«El orden fue creado y establecido al mismo tiempo que las sustancias, y
aquellas allí fueron el summum del mundo, en que el acto puro fue producido
(31-33).
En efecto, los Ángeles, puros espíritus o puras formas, no pueden haber sido
creados que por un acto puro, es decir por Dios.
Dante no admite, como lo pretende San Jerónimo, que los Ángeles hayan sido
creados antes que las otras criaturas ; él dirá : Jerónimo a escrito que durante
una larga serie de siglos los Ángeles fueron creados antes que el otro mundo
fuese hecho :
Pero la verdad es escrita en muchos lugares por los escribanos del Espíritu
Santo, y lo verás, tanto como observes.
Por eso que está de la última estrofa, seguiremos la version y la nota relativa
de H. Longnon:
Y el traductor comenta : «La luz divina, que se extiende sobre la multitud de los
Ángeles, es recibida por ella en tantas maneras diversas como hay de ángeles
a los cuales ella se une en particular. Cada Ángel es un individuo, en que el
amor de Dios es proporcionado en la visión que tiene de Él.
Dante:
Yo escuché la « Hosanna » pasar de coro en coro
hasta al punto fijo (Dios ) que los tiene en su lugar,
y los tendrá siempre, donde siempre ellos fueron.
Venimos de ver el ángel de Dios, llegar con una fuerza sobrenatural y una
grande rapidez, luego dirigirse también rápido que él había enido. Y he aquí
cómo Dante describe esta agilidad del ángel :
pero el otro (la milicia de los Ángeles ) que todo en volando ve y canta
la gloria de aquel que la hace amorosa
y la bondad que la hizo tan grande,
luego, en una visión sublime, Dante verá la reina del cielo rodeada de la
cohorte de los Ángeles :
Llegado con su guía en la puerta del Purgatorio, Dante vio al Portero bajo el
aspecto de un Ángel extraordinariamente luminoso :
Yo lo vi sentado sobre el escalón superior,
y tal era su rostro que yo no pude soportarlo.
y él tenía en la mano una espada desnuda,
que reflejaba de tal manera sus rayos hacia nosotros,
que en vano muchas veces yo aparté mi vista.
este Ángel de la puerta del Purgatorio es calificada por Dante, algunas versos
más adelante, del ángel de Dios. Por el P. Berthier, el Ángel radiante de la
puerta simboliza la autoridad sacerdotal y su espada desnuda en la mano,
indica que este Ángel ejerce un ministerio de justicia.
y estos dos ángeles, él dijo, venían «de la encinta de María »; ellos están
vestidos del color verde de la esperanza. El P. Berthier da de nuevo los
esclarecimientos siguientes : «La espada tronchada que permite solamente
golpear es mas bien un arma defensiva que un arma de ataque. Ella indica el
rol de los Ángeles protectores. Los Ángeles, por orden de Dios, llegan al
socorro de las almas fieles en el Purgatorio, según la demanda que se les dirija
se haya cumplido : «Visita, Señor, esta morada, aleja de tí las dificultades del
enemigo ; que tus santos ángeles habiten...» ellos tendrán por misión acabar
con la serpiente maléfica.
Los Ángeles flamígeros alrededor del punto luminoso quien es Dios (Par.
XXVIII, 88-96).
Lo mismo que lanza chispas el hierro
que golpea, así los círculos centellean.
Tras la caída de los Ángeles rebeldes, gloria de los Ángeles fieles (Par. XXIX,
1-69).
Luego de la severa punición de los Ángeles rebeldes que pecaron por orgullo,
los Ángeles fieles recibieron la recompensa de su modestia ;
aquellos que tú ves aquí fueron modestos,
reconociéndoles obra de la bondad
que les había hecho bien dispuestos a entender esta
su vista iluminada por la gracia.
Algunas líneas más adelante, se habla del consistorio que vio Dante y que
representa el consistorio o colegio angélico, formado de los Ángeles fieles.
Es sobre todo tu Ángel para tí, aquel quien es especialmente diputado por Dios
a tu guarda, quien, día y noche, en todo tiempo y en todo lugar, te asiste en
todas tus necesidades y todos tus intereses, te protege contra todas las
tentaciones y las dificultades de los enemigos visibles y sobre todo invisibles; él
te rodea de su solicitud y de su devoción de manera de no alejarse de tí un
instante, no dije? de manera de no poder abandonarte y cesar de tener los ojos
sobre tí. Y es absolutamente necesario que esto sea así, porque tu vives en
medio de una multitud innumerable de enemigos que tu no puedes ver, que te
persiguen sin descanso de su odio terrible, de suerte que tu no escaparías un
solo instante a su furor si tu buen Ángel no estuviera allí para rechazarlos.
Abre entonces los ojos y piensa con reconocimiento en la solicitud llena de una
ternura infinita de tu Padre celeste, mira de cual honor él se ha dignado
colmarte, tú, miserable gusano de tierra, confiándote en la protección de
amigos tan poderosos y tan fieles que te sirven con un cuidado celoso y te
conducen en todos tus caminos. Todos estos espíritus son en efecto de las
servidores enviados en ayuda para aquellos que desean la herencia de la
Salud.
III. En tercer lugar, mira como cierto e indubitable que la afección de los
Ángeles hacia los hombres, aquella de tu Ángel propia hacia vosotros, es de tal
manera grande, de tal manera vive cuando ella pasa, más que no se sabría
decir, toda afección humana. No, jamás madre, tan tierna y simpatizante que te
lo supones, no ha llevado a su Hijo único un amor comparable a aquel que tu
Ángel tiene para tí. Estos espíritus celestes y bienaventurados saben en efecto,
ellos ven claramente de cual amor inmenso, admirable y muy ardiente el Señor
rodea todos los hombres y tí mismo, también ellos quieren, a su turno, amarte
como tú no podrías jamás comprenderlo o expresarlo. He allí por qué tu Ángel
te sirve muy amorosamente, muy dulcemente, muy fielmente, en todo tiempo,
en toda circunstancia, en todos los peligros ; él vigila noche y día para
conducirte, para tu dirección, a tu protección ; él se transporta contigo de un
lugar al otro ; jamás te abandona el más pequeño instante. Es así que siempre
él te persuade o te inspira lo que hay de mejor, de más seguro, de más feliz por
vosotros, él se regocija de una manera indecible de tu progreso y de tus
buenas resoluciones ; él se entristece profundamente de tus defectos y de tus
desagradecimientos ; él desea ardientemente, él pide, él solicita a vosotros
todo aquello que puede serte saludable en este mundo y en el otro ; él mismo
presenta a Dios tus oraciones y tus buenas obras, finalmente él se hizo tu
intercesor continuo y dedicado por tu salud, cerca de Dios.
Rechazando entonces toda ceguera del espíritu, y desvaneciendo la ingratitud,
abre los ojos interiores ; examina en un sentimiento de profunda gratitud todos
estos documentos del amor divino hacia tí. En todo lugar, en todo tiempo, que
tú estés de pie o sentado, en marcha o acostado, estate respetuosamente ante
Dios y sus ángeles; abstente con cuidado de todos los vicios y de todos los
pecados que podrían ofender su mirada.
Ah ! si si tú prestas atención seriamente a estos tres puntos que yo vengo de
señalarte, si tú los juzgas a su justo valor, como tú te conducirías en todas
partes y siempre con esta prudencia, este respeto, esta religion que conviene :
sobria, casta, piadosa, amable, perfecta finalmente ! como tú te esforzarías sin
cesar en mostrarte reconocedor! como tú serías que te asisten a complacer
estos gloriosos y bienaventurados espíritus y sobre todo a tu Ángel guardián,
en todo eso que tú harías y en todo eso que tú dirías !
Ah! sin duda tú irías con felicidad en la Iglesia, porque es allí que se
encuentran reunidos en gran número, los Ángeles, cerca de Nuestro Señor
Jesús Cristo y de sus Sacramentos. Sí, cierto, tú habrías de arrancar el mal de
tí en este en esta augusta, dulce y amable sociedad de los Ángeles, presentes
en el lugar Santo, aun cuando que el Señor y el rey de los Ángeles no estará llí,
presente él también, en su Sacramento.
Ah! que ellos están entonces ciegos, insensibles e ingratos todos aquellos
quien, queriendo parecer religiosos en sus ejercicios, no dejan de ir a la Iglesia,
no solamente sin devoción, sin júbilo y sin amor, pero en una suerte de pereza
y de disgusto. Y sin embargo hélas! o verguenza y o dolor ! ellos son tan
numerosos, un poco por todas partes, estos infelices a quien el demonio ha
cegado el corazón, que no se los puede contar ; y es allí eso que nosotros no
deploramos jamás bastante. Tanto como tú no seas de la multitud de estos
ciegos, será sorprendente, verdaderamente, que, conocedor y viendo estas
cosas, ustedes puedan de nuevo ser tristes, apesadumbrados,
descorazonados, o dejarse dominar por la pusilanimidad y la pereza.
Henos allí entonces ahora fijados sobre la manera en la que un gran místico y
un sabio Doctor en teología considera y comprende la cuestión del ministerio
de los Ángeles y notablemente del Ángel guardián señalado a cada alma
viniendo al mundo.
Y ahora, para tener una tabla completa de la creencia en el Ministerio de los
Ángeles que profesaban los religiosos de la época medieval, será suficiente
consultar la literatura religiosa de los tiempos para encontrar numerosos relatos
de intervención benéfica del Mundo angélico ; nosotros retendremos un
ejemplo típico.
*
San Raimundo Nonato (1204-1240), tuvo desde su más tierna infancia una
devoción toda especial por la Santa Virgen; el tuvo la felicidad de tener las
pruebas tangibles que esta devoción en la Madre causaba a su ángel guardián.
Desde su juventud, el pequeño muchacho manifestaba un vivo deseo de entrar
en las órdenes, pero su padre no lo entendía de esta forma ; el hizo suprimir las
lecciones y envía a su hijo a cuidar las ovejas ; él pensó así desviarlo de su
misticismo ; el niño estaba triste, pero él obedeció la orden de su Padre. Él fue
pronto recompensado de su sumisión a las voluntades paternales ; a corta
distancia del lugar donde él debía hacer pastar sus ovejas, él tenía una iglesia
dedicada a Santo Nicolas de Myre, donde allí se veneraba una bella estatua de
la Virgen ; al Hijo, cada vez que él podía, se iba al santuario para orar y confiar
en la Madre su tristeza de no poder permanecer constantemente en oración a
sus pies. Un día cuando el niño había orado con un inmenso fervor, la Santa
Virgen le apareció y le dijo :«No temas nada Raymond, yo te protegeré. Cada
vez que tu tengas necesidad, recurre con confianza a tu Madre del cielo y tu
seras consolado.» como se puede bien pensar esta aparición y esta promesa
no hizo mas que intensificar la devoción del joven Raimundo y aumentar su
deseo de entrar en las órdenes. Un día que el niño estaba lleno del deseo
imperioso de orar a los pies de la Madre y que le era imposible abandonar la
protección de las ovejas, un joven hombre de una belleza radiante se présenta
súbitamente a él y le ofrece hacer la vigilancia de la tropilla ; el hijo, todo en
lágrimas, agradece con efusión al desconocido y se ocupa de ir a la Iglesia
para manifestar su reconocimiento a los pies de la Virgen. El maravilloso joven
hombre era el Ángel guardián de Raymond. Esta milagrosa intervención no fue
única ; ella se repitió muchas veces, hasta el momento donde el Padre de
Ventant, habiendo sabido lo que sucedía, vino al lugar y fue gratificado de la
visión de la ayuda misteriosa ; el se da cuenta entonces que el deseo de su hijo
de entrar en las órdenes estaba aprobado por el Más Allá y no se opuso más a
la vocación religiosa de su hijo.
La Virgen revela a Raimundo que él debía ir a Barcelone y hacerse recibir en
la orden de Notre-Dame-de-la-Merci para la redención de los cautivos. Luego
de un noviciado lleno de fervor, él fue enviado a África para reunir los
prisioneros ; no teniendo bastante dinero, él se vendió como huesped y tuvo
que sufrir numerosos servicios antes que la suma que debía liberarlo hubiese
arribado. Él fue elevado al cardenalato, pero no tomó el hábito y vivió
modestamente, en oración, en su pobre cueva de monje. Al momento de morir,
él recibió la comunión de las manos mismas de Jesús-Cristo. Su fiesta tiene
lugar el 31 de agosto.
CAPÍTULO QUINTO
SECCIÓN IV:
San Bernardo de Clairvaux (1190-1174);
Sus frecuentes visiones de Cristo, de la Santa Virgen y de los Ángeles
SECCIÓN V:
Santa Juana de Arco (1412-1431), beatificada en 1909, canonizada en 1920.
Sus Voces y Visiones angélicas
SECCIÓN VI:
San Francisco de Asís (1182-1226)
Capítulo IV: Cómo el Ángel del Señor propone una cuestión al hermano Elías;
este último habiendo respondido con soberbia, el Ángel se fue y él vino a
ayudar al hermano Bernard a franquear un río engrosado por las lluvias.
Capítulo XIV: Cómo, cuando San Francisco se ocupaba de Dios con sus
Hermanos, el Cristo apareció en medio de ellos.
Capítulo XXIX: Cómo el diablo se apareció muchas veces al hermano Rufin y
cómo él fue librado por San Francisco y por la intervención de Nuestro Señor.
Capítulo XLIV: cómo la Bienaventurada Virgen María apareció, con San Juan
el Evangelista, al hermano Pedro de Monticello.
Capítulo XLVII: cómo la Santa Virgen apareció a un hermano muriendo y le
trajo tres bastoncillos de incienso con el perfume de los más suaves.
Capítulo XLIX : Cómo el Cristo apareció al hermano Juan de la Alverne. Este
hermano hizo progresos muy rápidos en la devoción, también él nos dijo:
La gracia divina hizo avanzar de día en día este ser evangélico en la virtud,
elevándolo por grado a los diversos estados de la Vida sobrenatural. Es así que
él participa sucesivamente de los esplendores de los Serafines, a los ardores
de los Querubines, a los goces de los Ángeles, y que él fue aún justo mismo
hasta gustar los inefables y amorosos abrazamientos de Cristo.
Hay allí bastante para convencernos que San Francisco y sus compañeros
estaban en relaciones constantes con las entidades del mundo espiritual,
notablemente con el Cristo, la Santa Virgen y los Ángeles.
*
**
nosotros lo vemos por lo tanto, todos los más grandes espíritus, los más
doctos teólogos han creído en la existencia del Mundo angélico y ellos han
admitido su intervención en favor de los humanos ; ellos les han dado un culto
de dulie y no de latrie, reservado a Dios solo. No hay que decir que el pueblo
compartía estas creencias y reverenciaba a los Ángeles como los santos.
Nosotros vamos a ver ahora, en el próximo capítulo, que fue lo mismo durante
el Renacimiento.
(1) por más detalles sobre los casos de esta mística divinamente inspirada, ver
un resumen del estudio de Péladan sobre los casos de la Virgen, en nuestro
libro El pensamiento y los secretos de Péladan (T. II, p. 212-228. Ediciones
Rosicruciennes, P. Genillard, Lausanne 1952).
CAPÍTULO VI
El Renacimiento y la angelología
SECCIÓN 1:
Ars bene moriendi (1430-1478)
Fig. 22. Ars bene moriendi. Plancha 4. Buena inspiración del Ángel para
preservar de la desesperación.
Fig. 23. Ars bene moriendi. Plancha 6. Inspiración del Ángel en materia de
paciencia.
Satan y sus demonios se retiran muy rápido, ellos han sabido que Dios no
abandona jamás aquel que ha sido fiel. Se deduce a la cabeza de la cama del
cristiano con una cohorte de santos y de santas ; el Ángel guardián está allí, el
apacigua el delirio del moribundo ; no le corresponde más a los diablos que
ponerse en fuga; uno precipitado con la cabeza baja, gime : «Labores amisi».
Yo he perdido mis penas. En cuanto al otro que se oculta bajo el lecho, él se
lamenta: «Sum captivatus». Yo estoy hecho cautivo.
Plancha 8. Bona inspiratio angeli contra vanam gloriam. Buena inspiración del
Ángel contra la tentación de vanagloria (voir fig. 24 aquí arriba).
Fig.24. Ars bene moriendi. Plancha 8. Inspiración del Ángel contra la tentación
de la vana gloria.
Antes que él haya sido seducido por los discursos falsos de los Diablos, los
Ángeles claman el moribundo a la humildad : «Sis humilis». Sé humilde !
Satan sabe por experiencia que hay pocos hombres que saben resistir al amor
de las riquezas, también vuelve él una quinta vez a la carga y que busca
suscitar sentimientos de avaricia en el moribundo. «Provideas amicis». Ten
guardia por tus amigos ! «Intende thesauro». Aumenta tus riquezas ! El Hombre
debe poner cuidado de su bien; el grabado nos muestra que hay una bella
casa, una cueva bien guarnecida, un establo para un bello caballo. Moral de la
historia bajo el ángulo diabólico : «Las riquezas hacen el Hombre feliz, todos
sus deseos se cumplen, sus parientes y sus amigos lo aman ; vigila sobre tus
tesoros, si tú quieres gustar la verdadera felicidad ». Pero Satan está de nuevo
rechazado muy rápido ; él ha perdido porque el Ángel guardián vigila sobre el
Hombre del que tiene la guarda.
Plancha 10. Bona inspiratio angeli contra avaritiam. Saludable inspiración del
Ángel para luchar contra los sentimientos de avaricia.
El Ángel guardián viene al rescate : «Inútil de atesorar. Por qué rodearse de
amigos tan interesados y parásitos ? la plata puede procurar algún bienestar a
los cuerpos materiales, pero él no es de ninguna utilidad para el alma. Si tú
quieres ser feliz en la Vida futura : Huye de la avaricia. «No sis avarus.» No te
ocupes de tus amigos. «Ne intendas amicis».
y última monición para no olvidar : «Los pensamientos de avaricia y los deseos
de atesorar son siempre inspirados por el Diablo ». A la oída de estas palabras,
la emisaria de Satan es perturbada ; no sabe qué hacer. «Quid faciam?» Cómo
hacer ? Todos los subterfugios y las tentaciones puestas en acción por el
Diablo se han agotado ; el cristiano ha permanecido fiel a Dios y a sus leyes.
Que hacer en efecto? Mostrar el puño y salir!
Plancha 11. la Muerte edificante del cristiano que ha guardado su fé (voir fig. 25
aquí arriba).
Fig. 25. Ars bene moriendi. Plancha 11. la Muerte edificante del cristiano que
ha guardado su fe.
El final llega, el cristiano va a rendir el alma, esto no es en vano que él haya
seguido los sabios consejos de su ángel guardián, consejos que le han sido
utiles para perseverar en la vía recta ; él va a recoger el precio de sus
esfuerzos ; un monje pone en las manos del moribundo un cilicio bendito ;
luego una última oración al Cristo muriendo sobre la cruz el Paciente es librado
de sus dolores corporales,él da el último suspiro; su alma se escapa por la
boca con su soplo ; ella es recogida bajo el aspecto de un niño recién nacido ;
él es recibido por un Ángel que lo toma en sus brazos para llevarlo al número
de los elegidos. Entonces los esfuerzos del demonio y de sus diablos han sido
vanos, la parte es perdida por ellos; sin poder, ellos no tienen más que salir del
lugar lo más rápido, la parte está perdida ! «Spes nobis mula» dira uno de ellos
: «Para no esperar a ninguno más !» Otro constatará con amargura : «Animam
amisimus». Nosotros hemos perdido la conquista de un alma ! Bullendo de
rabia y de confusion, otro demonio exclama : «Furore consumor». El furor me
quema. Otro debe reconocer la derrota que viene de serle infligida : «Confusi
sumus! » estamos confundidos y alterados ! Finalmente, un último demonio
exclama: «Heu insanio!» Hélas qué locura ! Insensatos que no saben que la
potencia de Dios es infinita. Es sobre esta certidumbre, que Dios no abandona
jamás a su fiel y que él delega sus ángeles para socorrerlo en toda ocasión,
que termina la enseñanza de la Ars bene moriendi. Y allí se asiste a la
apoteosis del buen cristiano.
SECCIÓN II:
San Felipe de Néri (1515-1595)
SECCIÓN III:
Robert Fludd (1574-1637),
«La Muralla mística de la Salud»
Es San Miguel quien ya ha dominado una primera vez al dragón infernal, quien
está encargado de contener las Potencias maléficas y de impedirles de dañar a
los servidores de Dios. Es la razón por la cual los cabalistas consideran a San
Miguel como el más grande protector del alma y del cuerpo del hombre.
Se distingue cuatro vientos principales : el aquilón, el viento del sur, el viento
del Oriente y el viento del poniente ; los vientos no soplan a su voluntad, ellos
son vigilados por cuatro ángeles.
Miguel, mas bien llevado en la clemencia y en la misericordia, ordena al viento
del Oriente.
Gabriel, mas bien inclinado en la justicia y en la severidad, ordena al viento
Boreal, viento del Norte o aquilon.
Rafael, mas bien llevado en la clemencia y en la misericordia, rige el viento del
Occidente o viento del poniente.
Uriel, teniendo mas bien una tendencia a la justicia y a la severidad rige el
viento Auster o viento del Sur.
Dios actúa por su Verbo y estos son los Ángeles que ejecutan su voluntad.
Los ángeles malos son los instrumentos de la venganza que se ejerce sobre
los impíos.
La iolación de la Ley, es decir el pecado, perturba nuestra atmósfera astral y
provoca una ruptura de equilibrio al favor de la cual las entidades malvadas
fuerzan la Muralla de la Salud. Los Ángeles que nos defienden se retiran,
entonces los gérmenes malhechores, diabólicos entran en juego y esto es, la
enfermedad que se declara ; ella sigue su curso justo hasta que el Hombre
vuelva a entrar en la buena vía habiendo reconocido sus errores y demandado
perdón a Dios. Desde este momento, los agentes hostiles y diabólicos no
encontrando más en la ciudadela orgánica los elementos y el medio que les
conviene, no tienen desde ese momento más que retirarse. Entonces los
buenos ángeles vuelven y ellos ayudan a la fuerza vital a reparar las brechas
hechas en la Muralla de la Salud; ellos están todo listos a rechazar un nuevo
ataque de los demonios cuando este se presente.
Por esto que precede, vemos que la fé en una acción efectiva con los buenos
y los malos ángeles en la economía cósmica y humana, estaba compartida por
los más grandes eruditos y por los ocultistas de la época.
En relación con esta noción de ángeles o genios cósmicos, damos dos
grabados extraídos de la iconografía peladana que muestran que esta creencia
en la existencia de ángeles, propuestos en la vigilancia de la marcha del
cosmos, habita de nuevo vivaz en ciertos artistas divinamente inspirados.
Cuando se conoció la opinión de Péladan en materia de producción artística,
ya sea : «Un maestro de obra debe ser una esquina de cielo descendido sobre
la tierra », se comprenderá que dos ilustraciones figuran en su obra y que ellas
hayan sido expuestas en la época del Salon de la Rosa-Cruz en 1912. El
Primer diseño : El Sueño, por Puvis de Chavannes, nos muestra un hombre
profundamente dormido, entonces que su cuerpo sutil se despierta a las cosas
del Más Allá y contempla el trabajo de los Ángeles propuestos en el crecimiento
de los árboles y de los vegetales a los cuales ellos dispensan fuerza, vida y
belleza (ver figura 26)
Fig. 26. El Sueño, por Puvis de Chavannes. ángeles cósmicos fuerza, vida y
belleza a los árboles y a los vegetales.
¿Cómo es que los magos negros puedan dañar a los hombres ? ¿Qué hace en
este caso su Ángel guardián ? el Iniciado responderá : «Los Ángeles
guardianes están siempre cerca de nosotros, dispuestos a ayudarnos para
inspirarnos ; pero ellos no parecen tener éxito siempre, porque los espíritus
groseros de la materia están más cerca de los hombres que los Ángeles. El
mejor medio de preservarnos de las malvadas influencias es desarrollar en nos
la pureza que es una fuerza muy grande para rechazar el mal.
SECCIÓN IV:
El Tratado muy docto de los Ángeles del P. Maldonat (1570)
Por esta exposición, se puede juzgar ya que el docto autor sigue fielmente la
angelología de Santo Tomás de Aquino ; la similitud de pensamiento, de
exposición y de creencia volverá a salir de nuevo más netamente por la
exposición de las cabezas de capítulo que damos aquí:
De los nombres de los Ángeles.
Si existen los Ángeles.
Del origen de los Ángeles.
En cual lugar fueron hechos los Ángeles.
Si todos los Ángeles han sido hechos conjuntamente?
De la Naturaleza de los Ángeles.
Si los Ángeles son compuestos de materia y de forma.
Si tienen los Ángeles alguna composición.
Si los Ángeles son inmortales.
De la diferencia de los Ángeles.
Cómo ellos son diferentes en especie.
De las facultades de los Ángeles.
De las acciones de los Ángeles.
De la manera en la cual los Ángeles conocen.
Si los Ángeles usan de discursos.
Del lugar de los Ángeles.
Del movimiento de los Ángeles.
De los Ángeles particularmente buenos y malos.
Si los Ángeles han sido hechos en gracia.
Si los Ángeles fueron hechos Bienaventurados.
Si los Bienaventurados ángeles pueden pecar.
Si los Bienaventurados ángeles merecen mas grande felicidad.
De la distinción con los buenos ángeles.
De la primera Jerarquía.
De la segunda Jerarquía.
De la tercera Jerarquía.
De los oficios de los Ángeles.
Si las Iglesias tienen también sus ángeles guardianes.
De los demonios.
Si cualquiera de ellos peca primero que los otros.
Si aquel que peca el Primero fue autor de pecado a los otros.
De cual orden eran los Ángeles que pecaron.
Cuanto fue gran el nombre de aquellos que pecaron.
Si le ha sido dado a los Demonios algún tiempo de penitencia.
Se ve que la cuestión de la naturaleza, del estado, funciones de los Ángeles es
explicada en detalle, en la manera y en el Espíritu de Santo Tomás.
El autor afirmará al principio que cuando se da a los Ángeles el nombre de
espíritus, esto se trata de su naturaleza quien es común con aquella de Dios.
Así espíritu debe ser considerado como nombre de naturaleza y Ángel como
nombre de oficio; en efecto el Ángel es todo a la vez un espíritu sirviente y un
mensajero ; él es además toda virtud natural y sobrenatural.
Los Ángeles conocen fácilmente nuestros pensamientos y nuestros deseos.
Los Ángeles se hablan entre ellos y su lenguaje será más bello que el nuestro ;
en ocasiones ellos pueden también hablar el lenguaje de los hombres cuando
ellos tienen un mensaje personal para entregarles. El autor , apoyándose sobre
Damasceno, dijo que por los Ángeles, hablar entre ellos, es el equivalente de
desear.
Ordinariamente, los Ángeles no están en un lugar físico, excepción hecha por
el caso donde ellos tienen una acción para hacer en el Plano físico y donde
ellos revisten un cuerpo material. Los Ángeles «se mueven de lugar en lugar
por su esencia propia quien es de moverse»; este movimiento es incesante de
los tiempos físicos humanos mensurado por el movimiento del cielo.
una función primordial del Ángel es ofrecer nuestras oraciones a Dios, sin
embargo este oficio no es únicamente el hecho de un simple mensajero, pero
él debe también incitar a los hombres a orar y a hacer el bien ; además los
Ángeles son puestos por Dios para distribuir las recompensas a los buenos y
los castigos a los malos.
Finalmente ciertos ángeles tendrían por misión de vigilar, de mantener el
movimiento del cielo y de asegurar la regularidad.
En cuanto a la distribución de los Ángeles en tres Jerarquías, subdivididas a sí
mismas en nueve Órdenes, el autor sigue textualmente la enseñanza de Santo
Tomás de Aquino ; sucede lo mismo por lo que observa la misión del Ángel
guardián atribuido a cada hombre (alma ) al momento del Nacimiento.
El diablo y los demonios pueden en ocasiones materializarse y manifestarse,
pero las evocaciones mágicas efectuadas por los hechiceros y hechicerías son
severamente condenadas ; sucede lo mismo con todas las prácticas mágicas ;
notemos que él no hizo ninguna distinción entre magia negra y magia blanca. A
este sujeto nosotros citaremos un pasaje curioso, bien típico de las luchas
entre Calvinistas y Católicos de la época ; con bastante razón, el autor hizo
salir de nuevo que mucho de estas historias de diablos salieron más de una
imaginación desarreglada que por apariciones reales; más aún he aquí este
pasaje :
Previamente más cerca de Francia ninguna persona que en los montes
Apeninos tuvo (y de nuevo hoy ) tanto como de hechicerías que hay de
mujeres. Y es de tanto como los Valdeses heréticos son habitantes ocultos
hasta el día de hoy. Yo no quiero que ninguno de los Calvinistas se ofendan de
eso que yo voy a decir, a los cuales cierto yo querría mejor ser autor de salud
que de escándalo. En adición, ciertamente yo estimo que estas ilusiones de
diablos de los cuales estamos ahora con frecuencia preocupados, son salidos
del mismo Lago de Ginebra del cual se hicieron nuestras sus herejías. Por que
ha sido verificado que esta villa ha sido la primera en comenzar de ser
enturbiada por los demonios. Y de tanto como la pequeña mosca no es por
ventura capaz de la multitud de molestias crecientes de un día para el otro, yo
estimo que esto sucedió cuando ella estaba también esparcida en nuestras
villas.
Finalmente por el autor , las artes mágicas «seguirán la Herejía ».
Con el Tratado de los Ángeles del P. Maldonat, nosotros tenemos una tabla
précis de la manera en que la mayoría de las teólogos y los católicos de la
época consideraban el ministerio de los Ángeles hacia la humanidad.
SECCIÓN V:
Un teólogo del siglo XVII :
Guillaume Sherlock, su concepción de la angelología
Un siglo tras la aparición del Tratado de los Ángeles del P. Maldonat, que
venimos de analizar, encontramos las mismas creencias expresadas en las
obras de un docto teólogo inglés : Guillaume Sherlock, Doctor en Teología,
Decano de St-Paul, Maestro del Templo y Capellán ordinario de su Majestad.
Nosotros queremos atraer la atención sobre dos obras capitales del sabio
Doctor : Tratado de la Muerte y Tratado del Juicio Final Último, traducidos por
David Mazel y aparecido en Amsterdam en 1696.
Fig. 28. Frontispicio del Juicio Final Último, de Guillaume Sherlock (1696)
SECCIÓN VI:
La angelología de Bossuet
Veamos ahora cómo uno de los más célebres teólogos del siglo XVII, Bossuet,
Obispo de Meaux, apodado el Águila de Meaux (1627-1704), considera la
cuestión de los Ángeles y su ministerio cerca de los humanos.
Para Bossuet, el gozo de los Ángeles es muy grande cuando estamos
renovados por la penitencia ; en proporción de su gozo, su caridad aumenta a
nuestro respecto. No es necesario olvidar que los Ángeles han sido los
anunciadores de paz a los hombres de buena voluntad.
Bien que gustando el verdadero bien en su fuente, la felicidad de los Ángeles
es aumentada por nuestro regreso a la vía recta, y esto gracias a sus
esfuerzos, porque ellos están estimulados por el ejemplo y el sacrificio de
Cristo ; como Él y sobre su orden, ellos están en la búsqueda de las ovejas
alejadas. Se dice que las vías del Señor son misericordia y justicia, es por qué
la penitencia llena a los santos ángeles de gozo.
En una serie de Elevaciones, Bossuet trata de la cuestión de los Ángeles ; la
primera Elevación se reporta en la Creación de los Ángeles.
Dios quien es un puro espíritu, ha querido crear puros espíritus como Él, que
como Él vivían de inteligencia y de amor, es decir de operaciones espirituales e
inmateriales que se pueden ejercer sin estar unido a un cuerpo.
Los Ángeles son innumerables, porque Dios multiplica las cosas las más
excellentes, así que él es proclamado en el salmo CXXXVII:
0 mi Dios ! Yo te adoraré delante de tus santos ángeles; yo cantaré tus
maravillas en su presencia y yo me uniré en fé y en verdad en esta inmensa
multitud de tu Templo, de tus adoradores perpetuos.
Bossuet da continuación Órdenes angélicas comenzando por la jerarquía
inferior:
Bossuet, refiriéndose a Job (XV, 15), constata que nada es inmutable ; mismo
aquellos que Dios había creado para servirle, no no han sido estables y él ha
encontrado la impureza y la depravación en sus ángeles. Sin embargo Dios no
ha salvado a los Ángeles pecadores, pero él los ha precipitado en las tinieblas
infernales (2 Pedro, 11,4).
Para calificar los demonios o Ángeles rebeldes, Bossuet dira: «Tú eres de los
Espíritus privados de amor; tú te has retirado de Dios y Él está retirado de tí.»
Bossuet se refiere al Apocalipsis (XII, 7-8), que narra el gran combate que se
libró en el Cielo; San Miguel y sus ángeles luchan contra el dragón ; y
finalmente el dragón y los Ángeles rebeldes que lo han seguido cayeron. El
combate es asimilado a un conflicto de pensamientos y de sentimientos. El
Ángel de orgullo quien es denominado dragon, sublevó a sus ángeles
diciéndoles : «Nosotros seremos felices en nosotros mismos y nosotros
haremos como Dios con nuestra voluntad». Mientras que San Miguel dijo al
contrario : «Quien es como Dios ? que se puede igualar a Él ?» sin embargo se
dice que esta interrogación es justamente la calificación y el grito de
congregación de San Miguel.
Los Ángeles fieles, con San Miguel a su cabeza, son denominados los Ángeles
elegidos, porque por su libre arbitrio, ellos han perseverado en el bien y ellos
han obtenido la felicidad eterna.
Todo viene de Dios, y el Ángel no tiene que glorificarse en él mismo así que se
dijo en la primera Epístola de Pablo a los Corintios (I, 29-31); toda su gloria
está en Dios. Y Bossuet exclamó:
Sed felices santos ángeles,
Venid a nuestro socorro !
Ángel guardián, rechaza las tentaciones del maligno!
0 San Miguel que yo pueda decir contigo : Quien es como Dios ?
0 Santo Gabriel, denominado «Fuerza de Dios », podamos aprovecharnos de
tus predicaciones !
0 San Rafael, medicina de Dios, cura mi alma de una peligrosa ceguera !
0 Dios, envíanos tu santos ángeles!
En su disertación sobre el Apocalipsis, Bossuet hizo remarcar que en esta
obra, nosotros vemos, antes que ninguna otra cosa, el ministerio de los
Ángeles : sin cesar, ellos van del cielo en la tierra y de la tierra al cielo ; ellos
llevan, interpretan y ejecutan las órdenes de Dios, también bien las órdenes
porque la salud que aquellos para el castigo.
y he aquí una misión muy importante de los Ángeles : ellos se interponen en
todas las acciones de la Iglesia ; un Ángel preside al bautismo, otro interviene
al momento de la oblación, es el Ángel de la Cena ; el Ángel de la oración
presenta a Dios los votos de los fieles. El capítulo octavo del Apocalipsis hizo
salir de nuevo la necesidad de reconocer el ministerio de los Ángeles. Hay
además, el Ángel del incienso, el Ángel del fuego, el Ángel de las aguas y la
mediación de los Ángeles guardianes individuales.
En el Apocalipsis, se habla también de los siete ángeles cósmicos que vierten
sobre la tierra sus siete copas de donde salen siete plagas terribles: estas son
las copas de la cólera de Dios.
En el Apocalipsis de nuevo (VIII, 3), él hizo mención del Ángel que se tiene de
pie delante el Altar. Y Bossuet explica, en este caso, el altar es Jesús-Cristo; es
allí que el Ángel aporta, como de los perfumes, las oraciones que no son
recibidas mas que por él. Así , este ministerio angélico, lejos de debilitar aquel
de Jesús-Cristo, le reconoce y lo honra. Los protestantes querían que este
Ángel es decir Jesús Cristo en persona ; ellos se equivocan, porque Juan dijo
bien un otro Ángel, como los siete de los que se viene de hablar.
en sus discursos sobre la unidad de la Iglesia, Bossuet intercala en buen lugar
el ministerio de los Ángeles. Él dirá en efecto: tras la Divinidad, nada no es más
bello que la Iglesia, donde la unidad divina es representada : «Uno como
nosotros, uno en nosotros ; mira, y hechas según este modelo ». Pero una tan
grande luz nos cegaría : descendamos y consideremos la unidad con la belleza
en los coros de los Ángeles. La luz se distribuye sin dividirse : él pasa de un
orden a otro, de un coro a otro, con una perfecta correspondencia, porque hay
una perfecta subordinación. Los Ángeles no desdeñan de someterse a los
Arcángeles, ni los Arcángeles de reconocer a las Potencias superiores. Es un
ejército donde todo marcha con orden... Los Ángeles habitan unidos a su
Creador bajo el jefe que él les ha dado. Según esta orden admirable, toda la
naturaleza angélica está junta en una inmortal belleza y cada tropa, cada coro
de los Ángeles tiene su belleza particular, inseparable de aquella del todo. Esta
orden ha pasado del cielo sobre la tierra de donde la necesidad de la unidad de
la Iglesia, o aún de su Jerarquía.
SECCIÓN VII:
La Caballería y la angelología
I.Tu creerás en todo esto que enseña la Iglesia, y observarás todos sus
mandamientos.
II. Tu protegerás la Iglesia.
III. Tú tendrás respeto de todos los débiles, y te constituirás en el defensor.
IV. Tu amarás el país donde has nacido.
V. Tu no retrocederás delante del enemigo.
VI. Tú harás a los Infieles una guerra sin tregua y sin misericordia.
VII. Tu tú cumplirás exactamente tus deberes feudales, si ellos no son
contrarios a la ley de Dios.
VIII. Tu no mentirás, y seras fiel en la Palabra dada.
IX. Tu seras liberal, y harás caridad a todos.
X. Tu seras, en todas partes y siempre, el campeón del Derecho y del Bien
contra la Injusticia y el mal.
Se comprenderá sin pena como de tales preceptos no se podía más que crear
una verdadera élite capaz de refrenar la brutalidad de la Feudalidad cuya
Caballería fue el freno.
y es a justo título que L. Gautier dijo:«La realización de la Caballería en la
leyenda, es Rolando y, en la historia, es Godofredo de Bouillon ».
Rito significativo : durante el servicio religioso, al momento de la lectura del
Evangelio, los Caballeros desenvainaban la espada ; lo que significaba : «Si es
necesario defender el Evangelio, estamos allí ».
La constitución de una tal milicia cristiana pone una grave cuestión: prepararse
para la guerra, no es prepararse para matar, sin embargo, en el Decálogo, está
expresamente dicho :«No matarás ».
y venimos de decirlo : La Caballería, es la forma cristiana de la condición
militar, el Caballero, es el soldado cristiano.
En principio, la Iglesia odia la guerra, porque el Cristo dijo bien que «aquel que
mate con la espada perecerá por la espada». Pero la guerra es inevitable. San
Agustín está dado particularmente a este problema ; él dirá notablemente :
«Aquel que puede pensar en la guerra y soportarla sin un gran dolor, aquel ha
verdaderamente perdido el sentido humano... Es necesario sufrir la guerra,
pero querer la paz. »
En 858, los Padres del Concilio de Kiersy, afin de poner un freno a las
querellas de la sociedad feudal Promulgaron : «Nosotros debemos hacer la
guerra a nuestros vicios y la paz con nuestros hermanos ».
A los ojos de la Iglesia, la guerra puede revestir, a la vez o separadamente, el
caracter de un justo castigo, de una expiación útil, de una preparación
providencial. Desde que un pueblo cesa de ser viril y teme el sacrificio, él
deviene capaz de afeminar la permanencia del mundo; entonces Dios suscita
otro pueblo que él lanza contra la nación corrompida ; es el castigo ! La guerra,
en efecto, es rico materia para la expiación : hambre, sed, fatigas, heridas y
misma muerte. También la Iglesia tolera la guerra, pero no la autoriza que esta
cuando ella las llama «guerras justas ». Y es de nuevo San Agustín que nos
definirá lo que él entiende por «guerra justa»: «Una guerra es justa para
castigar una violación del derecho, para castigar un pueblo que se rehusa a
reparar una acción malvada, para restituir un bien mal adquirido, para rechazar
una invasion».
En el XIIIe siglo, Vincent de Beauvais tratando del mismo tema, dira: «Por
cause justa, es necesario entender que no se marcha contra sus hermanos
mas que cuando ellos han merecido un castigo por alguna infracción al Deber,
y la intención recta consiste en hacer la guerra para evitar el mal y para
avanzar el bien».
En cuanto a las guerras injustas, la Iglesia las calificará : «de robo a lo grande».
Es en la Iglesia que vuelve el mérito de haber concebido la Caballería para
organizar la guerra, porque la hace más justo y para limitarla. El código del
Caballero no tendía más que a este objeto.
Hay que reconocer que todos los autores religiosos no han admitido estas
opiniones : la legitimidad de ciertas guerras no puede satisfacerlos, tales como
Tertuliano u Orígenes, quien dirá : «No matarás ! El Hombre es un ser sagrado,
es siempre un crimen el matar ».
No es necesario olvidar que del IVe al Xe siglos nos encontramos en pleno
horror de las invasions bárbaras, sin embargo existió oportunidad de reaccionar
y defenderse. Es de nuevo San Agustín que hace remarcar : «Qué hay de
condenable en la guerra? Sería la Muerte de los hombres que son destinados a
morir tarde o temprano ? Un tal reproche, en verdad, será para el uso de los
perdidos, y no de los hombres verdaderamente religiosos. No, no; lo que hay
de culpable aquí, es el deseo de dañar a los otros hombres ; es el cruel amor
de la venganza ; es este espíritu implacable y enemigo de la paz ; es esta
salvajada de la Caída ; es esta Pasión de la Dominación y del imperio. Es
necesario que tales crímenes sean castigados. »
Es un hecho que debe retener la atención : El Cristo no ha dicho a los soldados
que arrojen sus armas ; él ha sido el amigo y el benefactor del centurión y él no
le ha aconsejado de ninguna manera de renunciar a su cargo militar.
La Iglesia pronto ha comprendido que no había más que guerreros valerosos e
íntegros que podrían regresar la paz en el mundo, de donde sus esfuerzos por
crear una Caballería disciplinada y potente. La guerra estaba reconocida como
malvada, pero convenía, cuando ella era inevitable, de justificar aquellos que la
hacían honestamente y para el solo triunfo del bien. Hildebert dira al Caballero :
«No es la Muerte quien es horrible, sino la verguenza.»
Es instructivo leer la carta de San Bernardo, dirigida a los Caballeros del templo
: «Ellos pueden combatir los combates del Señor, ellos pueden en toda
seguridad, porque ellos son los soldados de Cristo. Que ellos maten al enemigo
o mueran ellos mismos, ellos no tienen que concebir ningún temor. Sufrir la
Muerte por el Cristo o hacerla sufrir a sus enemigos, no hay mas que gloria y
nada de crimen. Esto no es además sin razón que el soldado de Cristo porta
una espada ; es para el castigo de los malvados y la gloria de los buenos. Si él
da la Muerte a un malhechor, el soldado no es homicida, sino «malicida». Y es
necesario ver en él el Vengador que está al servicio de Cristo, y el Liberador
del pueblo cristiano.»
Doon de Maience narra una historia que hizo las delicias de los oyentes en
tiempos del verdadero Caballería :
«Gui de Maience perseguía un ciervo en la foresta profunda. El animal, con
sus últimas fuerzas, se refugia en la cueva de un ermitaño. El ermitaño sale y
pide gracia para el ciervo ; Gui rehusa y lanza su jabalina que se desvía y se
planta en el pecho del religioso que expira al instante ; los Ángeles vienen a
reunir su alma. Gui aterrado, hizo voto de permanecer en la ermita hasta su
muerte. El Pérfido senescal de Gui no viendo regresar a su Amo, piensa que ha
encontrado la Muerte en el curso de su cazería.
Este mal intendente piensa que él puede apropiarse de los bienes de su Amo;
él martiriza a la mujer de Gui y maltrata a sus tres hijos. Doolin, el mayor tiene
el alma y la bravura de un buen Caballero ; él vaga a la aventura y alcanza la
foresta profunda donde él descubre la ermita y encuentra a su padre que se lo
creía muerto; júbilo y abrazos, pero a la audición de la conducta del senescal,
Gui es tomado de una Santa cólera y piensa en romper su voto y regresar
sobre sus tierras para castigar al mal servidor. Pero se dice que el primer deber
de un Caballero es de permanecer fiel a su voto. Para impedir que el viejo
Conde se revista con su armadura, Dios envía un ángel, que desciende del
cielo y golpea a Gui de ceguera. Será entonces Doon, el valeroso hijo que se
convertirá en el guía y el alimentador de su Padre. Muchos años pasaron ;
Doolin crece en valentía y en vigor. Un día, un mensajero del senescal
atraviesa la foresta. Doolin lo encuentra y lo derriba de un golpe de jabalina; él
se apodera del caballo y de la armadura del hombre. Al escuchar de lo hecho
de su hijo, Gui dirige una ferviente oración a Dios para que le de la vista y que
él pueda contemplar a su niño bajo la armadura y consagrarlo Caballero. El
milagro se cumple y el joven Caballero partira solo para castigar al felón.»
SECCIÓN VIII:
Y ahora henos allí bien armados para abordar el estudio de la creencia a los
Ángeles y de sus diversas apariciones y manifestaciones en el curso de los
tiempos modernos.
CAPÍTULO VII
Tiempos modernos y Manifestaciones angélicas
SECCIÓN 1:
Aparición, en 1816, del Arcangel Rafael a un trabajador de la Beauce
El 24 enero, M. Le Curé, puesta al corriente de los sucesos día a día, dijo una
misa del Espíritu Santo para pedir a Dios de iluminar a su parroquiano y de
instruirlo sobre la verdad de esto que él veía ; Martin asiste al oficio con toda su
familia. La respuesta no se hizo esperar ; entrando en él, Martin sube al
granero a buscar trigo y he allí el Arcángel que le apareció y le dijo de una voz
firme: «Haz eso que yo ordeno, es tiempo ». Fue la sola vez donde Martin fue
tuteado por el Arcángel, signo de reprimenda severa.
Durante el mes de febrero, Martin tuvo muchas apariciones del Arcangel que le
dio una serie de directivas y de consejos:
mi amigo, se puso bien lento en eso que yo le he pedido ; he allí todavía los
tiempos de la penitencia y de la reconciliación que se aproximan. No es
necesario creer que es por la voluntad de los hombres que el usurpador ha
venido el año pasado ; este era para castigar la Francia... Toda la familia real
había hecho de las oraciones para volver a tener su legítima posesión ; pero
ella a, por así decir, perdido todo. Luego el segundo exilio, ella de nuevo hizo
votos y oraciones para recuperar sus derechos; pero ella cae en la misma
inclinación.
Martin pregunta a su cura que significaba esta palabra de «inclinación» de la
que él no conocíael sentido. De nuevo una vez, Martin pregunta a su
interlocutor por qué él se dirigía solamente a él para semejante comisión. Le
fue respondido solamente : «Persiste, o mi amigo, y tú llegarás!» He aquí de
nuevo toda una serie de comunicaciones interesantes dadas durante las
apariciones de este mes de febrero :
Tú apareces delante la incredulidad, y tú la confundirás ; yo tengo de nuevo
otra cosa para decirte que les convencerá, y ellos no tendrán nada que
responder.
Toma urgente tu comisión, no se hizo nada de todo eso que yo te he dicho ;
aquellos que tienen el asunto en la mano están enervados de orgullo ; la
Francia está en un estado de delirio ; ella será liberada de todos los tipos de
infortunios.
si no se hace eso que yo he dicho, la mayor parte del pueblo perecerá, la
Francia será liberada en dolor y en oprobio a todas las naciones ; tú les
anunciarás también en qué momento la Francia podrá permanecer en paz ;
estas cosas, yo te las diré cuando sea el momento.
Tú irás a encontrar al Rey; tú le dirás eso que yo te he anunciado ; él podrá
llevar con él su hermano y sus hijos.. Tú serás conducido delante del rey y tú le
descubrirás cosas secretas de los tiempos de su exilio, pero el conocimiento no
te será dado sino en el momento en que tú seas introducido en la presencia del
Rey.
Excedido por todas estas apariciones y estas órdenes, Martin piensa que él
podría encontrar un consolamiento saliendo del país por algún tiempo.
Entonces cuando él se encontraba moliendo el trigo en su granja, el Arcángel
apareció y le sermoneó: «Tú te has formado la intención de partir; pero tú no
irás lejos ; es necesario que tú hagas lo que te he anunciado».
El sábado 24 febrero, entonces que Martin estaba trabajando, nueva aparición
y nueva orden : «Ve a encontrar a tu pastor y toma urgente tu bolso». Como
Martin permaneció en su obra, menos de una hora después, el Arcángel
reapareció y dijo con fuerza: «Desensilla y vete a cumplir eso que te he
ordenado». Martin desensilla y fue a contar esto que se le había dicho.
El 2 de marzo, nueva aparición con una seria advertencia:
La presencia delante del Prefecto tuvo lugar el día siguiente; Martin, sin
perturbarse, vuelve a contar en detalle todo aquello que le había llegado. Luego
de haber discutido con el Cura, el Prefecto decidió enviar a Martin a Paris al
Ministro de la Policía. El día siguiente, Martin partió hacia la capital bajo la
conducta y vigilancia de M. André, lugarteniente de gendarmería. Llegados a
Paris el 7 marzo a la tarde, los viajeros descendieron al hotel de Calais donde
una habitación de dos camas les fue asignada. Al día siguiente, M. Andrés
condujo a Martin al hotel de la Policía general; como ellos se encontraban en la
corte de este edificio, el Arcángel apareció a Martin y le dijo, sin que M. Andrés
viese ni escuchase nada : «Tú vas a ser interrogado de muchas maneras ; no
temas ni te inquietes, sino que di las cosas como ellas son». En efecto, nuestro
trabajador fue cuestionado por diversos secretarios que buscaron desorientar a
Martin, pero sin éxito ; fue lo mismo cuando él fue puesto en presencia del
Ministro de la policía.
Él escribió entre otras: «Yo te dire que yo soy siempre el mismo. Yo tomo
siempre los remedios que se me hace tomar ; pero todo aquello será inútil,
porque yo estoy siempre bien como yo soy, y que esto no venía de mí ; pero la
cosa me es bien complicada ; tanto que mi comisión no será hecha, yo no
estaré tranquilo.»
A esta misma época, el Prefecto de Chartres recibió una carta de Paris
anunciándole que Martin había sido juzgado como loco e internado por orden
de los médicos. El Prefecto comunica el hecho al Cura de Gallardon que
respondió «que él respetaba infinitamente los talentos de los Doctores, pero
que él no podía aceptar su decisión, según el conocimiento que él tenía de su
parroquiano. Y el buen Cura hizo remarcar que si si no se quería detener a
Martin, que se den las órdenes para que sus tierras no permanezcan sin
cultivar. En respuesta a este pedido, el Prefecto respondió por el envío de un
billete de cuatrocientos francos para entregar una ayuda de campaña.
En una carta del 26 marzo a su hermano, Martin relata que el Arcángel viene
de reaparecer y le da este mensaje:
mi amigo, yo te he dicho que yo no volveré más a verte ; yo te aseguro que yo
tendría un gran dolor si mis demandas fueron inutiles. Yo te aseguro que el
más terrible flagelo está listo para caer sobre la Francia, y que él está a la
puerta. Los pueblos al ver llegar estas cosas serán tomados de asombro y
sudarán de temor. Lo que había sido predicho una vez es llegado como él
había sido anunciado ; de misma la cosa llegará, si se no se practica eso que
yo ordeno. La Francia no esta más que en la irreligión, el orgullo, la
incredulidad, la impureza y finalmente liberada a todos los tipos de vicios; si el
Pueblo se prepara en la penitencia, eso que está predicho será detenido ; pero
si no se quiere hacer nada de eso que yo anuncio, eso que está predicho
llegará.
este texto es interesante desde que él fue escrito bajo dictado por Martin por
completo : «El Arcángel me dijo también que yo no podía desear una mejor
salud, que se me hiciera visitar por los Doctores más eruditos, que ellos no
podrían encontrar ninguna enfermedad en mí ; él me dijo también que si yo soy
retenido, es que se quiere hacer una prueba de mí ; él dijo que es una error de
querer probarme, luego todas las cosas que están escritas.»
Naturalmente, antes de llegar al destinatario, esta carta fue leída por los
médicos, por el Director de Charenton, luego transmitida de nuevo en el
Ministerio de la policía, donde ella fue copiada antes de ser enviada a su
destinatario.
Como todos los enfermos del Hospicio, Martin estaba restringido a visitas de
cinco horas ; él se daba perfectamente cuenta que los médicos consideraban
sus dichos como pura imaginación de un espíritu perturbado, también fue sin
entusiasmo que él se sometió en esta formalidad enojosa para él ; los 27 y 28
marzo, él se había demorado en el jardín y había evitado la suerte de lo que él
consideraba como una tarea. El 28 el Arcángel se presenta delante de él y le
dijo :«Por qué no vas a la visita?» y Martin respondió : «Yo voy». Pero su
interlocutor le dijo brevemente : «Ella está hecha». Martin lo sabía bien, pero él
explica que era voluntariamente que él tardaba siempre en ir, porque todas
esas personas allí que estaban de visita se mofaban de Él. Entonces el
Arcángel añadió :
Tú no quieres mentir; es necesario mejor obedecer a Dios que a los hombres.
El Ángel de luz no puede anunciar las cosas de tinieblas ; el Ángel de tinieblas
no puede anunciar las cosas de luz. Que se aproveche de la luz mientras que
haya luz ; a vosotros pon tu confianza en Dios, él no te conducirá a ningún mal.
Un vigilador del asilo, M. Legros, ora a Martin pedir al Arcángel una protección
especial para él ; es eso que quería hacer Martin en la primera aparición del
enviado del cielo, pero aquel le previno y le dijo :«Uno de la casa te ha pedido
que yo lo tome bajo mi protección ; tú le dirás que aquel que practica la religion
tal cual es anunciada, y que tenga una firme creencia, será salvado».
Sin embargo el asunto de Martin hizo ruido y llegó justo hasta la corte. El 29
marzo, M. De la Rochefoucault, acompañado por un Eclesiástico, enviado por
Mgr. el Arzobispo de Reims se dirigieron a Charenton para tomar contacto con
Martin. Aquel expuso claramente toda su historia. Desde el principio, el
Eclesiástico hizo un informe en el cual leemos : «Martin me ha asegurado que
todas las veces que el Arcángel le habla, es siempre con una dulzura inefable,
siempre muy claramente y en pocas palabras. Y concluye : «Yo puedo
atestiguar que habiendo estado largo tiempo con Martin, yo lo he encontrado
en una razón perfecta; su nuevo género de la Vida tan opuesto a las
costumbres que él tenía, no le da la menor inquietud ; él tiene una mujer y
niños, y se pone enteramente en la Santa voluntad de Dios sobre su bienestar
y sobre el suyo. En una palabra, él disfruta de una calma sobrenatural ; él tiene
una gran dulzura, una piedad sin exaltación ; él me dijo que su devoción
consistía en cuidar los mandamientos de Dios y de la Iglesia... Él es de una
inocencia y de una simplicidad que no pueden concebirse. Finalmente está en
paz con todo el mundo. »
Desde entonces el reencuentro de Martin con el rey no podía tarder.
El último domingo (31 marzo) que Martin pasa en el asilo fue marcado por una
manifestación espectacular del Arcangel que le dijo :
Habrá de nuevo discusiones ; los unos dirán que es una imaginación, los otros
que es un Ángel de luz, y otros que es un Ángel de tinieblas. Yo te permito
tocarme.
Martin explica que el Arcángel le ha tomado su mano derecha con su propia
mano derecha y que ha sentido una presión como cuando se cierra la mano de
una persona viviente ; luego cosa más extraña además, Martin narra : «El abre
su abrigo por delante ; cuando este ha sido abierto, esto me ha parecido más
brillante que los rayos del sol y yo no he podido mirarlo. (Martin declara que él
debió poner su mano delante de los ojos.) él cierra su abrigo, y cuando este fue
cerrado, yo no vi nada más que brillase ; él me ha parecido como antes. (Esta
abertura y esta cerradura fueron operadas sin ningún movimiento de su parte.)
él retira su sombrero hacia atrás, y me dijo, tocando su frente con la mano : «El
Ángel rebelde lleva aquí las marcas de su condenación, y mira tú que yo no las
tengo. Da testimonio de eso que tú has escuchado ».
He aquí dos hechos que prueban cuanto Martin estaba desinteresado en todo
este asunto : desde el principio el tuvo mucha pena en disponer de una suma
de dinero que se le remitió de la parte del Rey ; él la acepta solamente luego
que se le hizo remarcar que su rechazo podría ser interpretado como una falta
de respeto por la voluntad del Rey. El segundo hecho es también típico de la
simplicidad y de la derechura de Martin. He aquí el relato hecho por la persona
misma que completó la misión siguiente :
En el comienzo de Enero 1817, una persona de consideración que conocía la
mediocridad del estado de Martin, sabiendo además que su mujer estaba
encinta de un quinto niño, desde su regreso a Gallardon, le ha propuesto ciento
cincuenta francos para ayudar en esta circunstancia. Martin respondió
ingenuamente a la persona que le hizo este ofrecimiento : «Esto no puede
siempre ser mas que por causa de las cosas que me han sucedido que se me
ofrece el dinero ; porque, sin eso, no se hablaría de mí, no se me conocería
siquiera ; pero como la cosa no viene de mí, yo no debo recibirlo por esto ; así
le agradezco bien a su persona ; porque, aunque yo no soy rico, yo no quiero
recibir nada.»
5. Martin ha sostenido siempre de viva voz y por escrito que, a pesar de todo
este que se haría, él llegaría a hablar al Rey; él lo ha repetido a su Majestad,
asegurando que su ángel siempre le había dicho :«Y yo veo bien que tú no me
has fallado, da testimonio delante del rey mismo , puesto que me hallaré hpy
allí contigo ».
6. Martin ha declarado también a su Majestad que le había sido dicho que esta
no se cancelaría por creer lo que le diría ; por lo que el rey estaba convencido
que él no podía cancelarla, puesto que esta era la verdad.
8. Finalmente, Martin ha declarado que una vez que su comisión fuese hecha
cerca del Rey, él no querría nada más y estaría tranquilo; como en efecto él no
vio nada más desde este momento, permaneciendo tranquilo en su país.
Además, Martin de nuevo informó al rey de los hechos que hay certificados no
conocidos mas que por una vía sobrenatural, a saber :
3. Las oraciones que fueron hechas por la Familia real, para volver a tener su
posesión.
De todos estos hechos reunidos, el autor no teme decir : «Resta concluir que
Martin ha sido el instrumento y el órgano de un agente verdaderamente
sobrenatural.
Es verdad que en los ojos de los sabios de este mundo, un hecho de esta
naturaleza no parece solamente merecer que se le detenga ; el más grande
nombre, lejos de soñar, se duda apenas si él ha tenido lugar ; y entre aquellos
que han hablado así, muchos espíritus ligeros, frios e indiferentes, sin dignarse
profundizar nada, encuentran más corto y más cómodo rechazar este hecho
como tantos otros, entre las fábulas buenas para asombrar a los simples, las
cabezas débiles y las almas pusilánimes.
El pueblo no más que los grandes no quiere ser tomado y empujado a ser
penitencia, aun cuando esto sea dicho por un Arcángel.
«Que se junten entonces todas estas circunstancias, dira de nuevo una vez el
autor , y que se vea si es posible de no reconocer un agente verdaderamente
sobrenatural en esta obra extraordinaria hasta nuestros días. Y esta obra no
puede ser mas que la obra de un Ángel de Luz.»
“Lo que hay además de admirable en esta historia, es que Martin, en todo el
curso de esta misión sobrenatural, se encuentra guiado por su ángel, paso a
paso y como de la mano ; él le sigue a todos los lugares, en sus diferentes
visitas, en sus cambios de habitación ; él lo confirma contrpara la impresión que
deben causarle las autoridades superiores que no han sido jamás abordadas;
contra la verguenza donde pueden lanzarle todos las cuestiones insidiosas de
los más hábiles jefes de la policía ; contra las visitas inquietantes y las sutiles
interrogaciones de los médicos más expertos que lo observan y lo estudian ;
contra las burlas de los mofadores ; contra la voluntad de aquellos que
desprecian su misión, no añadiéndose nada menos que a secundarla. Él le
advirtió a cada apso de esto que le iba a suceder y de la conducta que él debía
tener ; al momento de hablar al rey, él lo inmunizó y lo fortificó contra la timidez
tan natural a un simple paisano que se encontraba, por la primera vez, cabeza
a cabeza con su Soberano, y que estaba encargado mantener sobre los puntos
más importantes. Finalmente, él dirige su lengua con una tal facilidad, que
Martin, dejado a sí mismo, no podría expresarse ni más libremente ni más
fácilmente frente a toda otra persona. Su misión cumplida, todo ha terminado
para el buen villero, es Martin como antes, rendido a sus trabajos rústicos.
Las cien primeras páginas de la obra narran los mismos hechos que aquellos
que nosotros hemos reproducido según nuestro documento de 1817,
documento que Lenôtre no parece haber conocido, porque él no lo cita. Por su
estudio, este autor ha consultado los documentos de los archivos, encuentros
de policía, encuentros médicos y cartas de Martin que él reproduce en su texto
original, lleno de numerosas faltas de ortografía, cosa que no hemos creído que
fuera un deber hacer en nuestro documento; el sentido de estas misivas es
idéntico.
Su misión una vez cumplida, de volver a su lugar, Martin lleva una vida
modesta y sin pretensiones ; el Ángel no se manifiesta mas. Sin embargo, su
Historia habiendo sido publicitada, a pesar del secreto con el que se la había
rodeado, Martin recibió muchas visitas y cartas lisonjeras y entusiastas ; al fin,
ellas tuvieron razón de la modestia del paisano ; él sucumbe y fue dominado
por el orgullo. Desde la época él fue una víctima en las manos de los
naundorfistas que pensaron poder utilizar el crédito sobrenatural de que se
beneficiaba el trabajador por causa de sus visiones pasadas.
Sin embargo el ángel, tal como le había dicho desde el principio, no vino mas.
Martin pretendía escuchar voces que lo guiaban y le aconsejaban. Él es
reclutado en la causa de Naundorff y declara misma que el relojero prusiano es
bien Luis Carlos evadido del templo. Y todas los naundorfistas se inflaban para
mejor con su «infalibilidad del visionario de Gallardon». Lo que traerá esta
reflexión bajo la pluma de Lenôtre: «Los partisanos de Naundorff son
inocentes, crédulos, desnudados de espíritu crítico ; su ferviente devoción
inclinada al misticismo ; ellos tienen la debilidad de creer en las visiones y en
los profetas, y, sobre este punto, todo se pone de acuerdo en nutrir su ilusión.»
Sin embargo la voz habría revelado a Martin que Naundorff, «hacia el fin, se
verá abandado de todos sus amigos. » lo que arriva en efecto.
A la tarde de su vida, en 1834, Martin escucha «una voz severa, bien diferente
de la voz milagrosa que le ha hablado en todos los lugares desde hace
dieciocho años». Esta voz le ordenaba renunciar a su misión de anunciador del
Delfin resucitado.
Encontrada en Chartres, a fin abril 1834, Martin cae enfermo y luego de una
corta remisión del mal, muere de indigestión, el 8 de mayo. Se piensa
naturalmente en un envenenamiento, lo que no pudo ser probado (la autopsia
fue muy tardía).
Fascículos
I a III La Vidente de la Calle de Paraíso.
IV La Vidente y las apariciones de Tilly-sur-Seulles.
V La Vidente y las apariciones de Tilly (Eugène Vintras).
VI La Vidente y sus detractores.
VII La Vidente y los últimos eventos de Tilly. El Rey. El Zar.
VIII La Vidente y las casas hechizadas.
IX La Vidente y la historia del mañana.
Es de notar que las catástrofes anunciadas por Srta Couédon tienen una gran
analogía con eso que la Virgen María a revelado, sobre la montaña de la
Salette a Mélanie Calvat, la joven pastora.
Un sacerdote, golpeado por las advertencias del Ángel Gabriel déclara: «El
Ángel ha sido creado para el servicio del Hombre en que debía para
encarnarse el Verbo. Servir el Hombre es su destino, su razón de ser, y Dios no
puede suprimir la libertad del hombre, sin suprimir el Ángel mismo.
Va de suyo que las facultades de Srta Couédon han suscitado las reacciones
diversas y contrarias en el clan médico y religioso. Un miembro de la Academia
de medicina, el Dr. Dumontpallier, declara que la Vidente era una farsante y
una mala mujer; sin embargo Papus habiendo examiné el sujeto, habiendo
constatado las Visiones justos, no temía inscribirse en falso contra esta
condenación sumaria proferida por la Academia. En el clan religioso, se incline
por un caso de posesión. Al escuchar de todos estas críticas prematuras y
superficiales, Gaston Méry hará remarcar : «Es justamente porque el caso de
Srta Couédon perturba a los médicos que la mayoría de entre ellos se
muestran tan contrarios a su respecto." y con un sonreir malicioso, él concluirá :
«Todo lo que ha sido dicho, todo aquello que ha sido impreso, todo aquello que
ha sido tentado por demonizar «el Ángel Gabriel» ha sido dicho, impreso y
tentado en pura pérdida. El Ángel Gabriel se llega a ella y vaticina más que
nunca.»
en cuanto a los eclesiásticos que piensan que el Espíritu que se manifiesta por
el canal de Srta Couédon es demoníaco, el autor somete a su meditación la
comunicación siguiente difícilmente atribuible a un espíritu de la sombra :
«Yo soy enviado por la muy Santa Virgen María para salvar tu tierra y regresar
a Dios los pecadores. Yo vengo a consolar a los desheredados del mundo,
porque es a los pequeños que yo me he dirigido primero. Yo vengo a enseñarte
que la mano que dirige todo ser es la mano de Dios. Yo vengo a recordar para
aquellos que tienen perdida la potencia eterna del Señor, y volverles a decir a
las personas que tienen la duda en ellas. Yo me había ido de la tierra, pero
regreso entre vosotros. Yo recomenzaré por instruirte. Todo eso que yo te digo,
todo eso que yo enseño, todo eso que yo haré por el bien de tu alma emanada
de Dios y de su voluntad, porque Dios ha guardado a vosotros el amor que tú le
has rehusado!»
Por bien hacer salir de nuevo la similitud de la enseñanza del Ángel con aquel
de Jesús-Cristo, el autor pone en paralelo los textos siguientes :
La Biblia : El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha enviado para
anunciar la buena nueva a los pobres. Él me ha enviado a curar a aquellos que
tienen el corazón quebrado. (Lucas IV, 18.)
La Biblia : Jésus dijo:«Id mas bien hacia las ovejas perdidas de la casa de
Israel.» (Matth. X, 6.)
El ángel : Yo soy enviado hacia aquellos que han caido. Es por los extraviados
que Dios me ha enviado.
He aquí de nuevo algunas advertencias del Ángel que nos parece difícil de
atribuir a un Ángel de las tinieblas aunque algunos lo han hecho:
ella va pronto a mostrarse a los pobres hijos en baja edad. Al momento de los
peligros, ella nos protegerá.
Ruega también por aquel que Dios va a enviar, San Miguel ; es su espada que
a vosotros va a golpear...
Yo veo que el Ángel exterminador ha pasado. Yo veo las casas marcadas. Sin
embargo, no es necesario exagerar: habrá quienes se salvarán.
Los ricos sin piedad serán exterminados, pero los buenos quedarán.
Se verá la gruta iluminada, la Virgen mostrarse. Los Ángeles devenidos
familiares, podrán dirigirlos.
SECCIÓN II:
El Santo Cura de Ars (1786-1859) y las manifestaciones angélicas y
diabólicas
Para bien hacer salir de nuevo la potencia de la pureza de los cuerpos, del
alma y de la intención, el cura de Ars daba este ejemplo : «Santa Catarina era
pura ; también ella se dirigía con frecuencia al Paraíso. Cuando ella murió, los
Ángeles llevaron su cuerpo y lo llevaron sobre el monte Sinaï... Dios ha hecho
ver por este prodigio que un alma le es tan agradable, cuando tiene mérito por
su cuerpo mismo, que ha participado en su pureza, es decir enterrada por los
Ángeles.»
Por este místico, «hay en el Hombre dos gritos: el grito del Ángel y el grito de la
bestia. El grito del ángel, es la oración, el grito de la bestia, es el pecado.»
Mis hijos, cuando el alma de un cristiano que ha recibido Nuestro Señor entre
en paraíso, ella aumenta el gozo en el cielo. Los Ángeles y la reina de los
Ángeles vienen delante de ella, porque ellos reconocen el hijo de Dios en esta
alma.
El buen Dios, la Santa Virgen, los Ángeles y los santos nos rodean ; ellos están
a nuestros costados y nos miran. El Pasaje a la otra vida del buen cristiano,
abrumado por la aflicción, es como aquel de una persona que se la ha
transportado sobre un lecho de rosas.
Otra anécdota, sacada de los Encuentros del Cura de Ars, destinada a ilustrar
el Poder y el ministerio de los Ángeles :
Mirad, le añadió suplicando al buen Cura, mirad a Dios que es bueno para
aquellos que lo aman ! Él hizo los milagros por nada, cuando era uno de sus
amigos que se lo pedía. El hombre ve en el Maestro al buen Dios cuando él
tiene una corazón puro. San Francisco de Paula supo un día que se quería
hacer morir a sus padres, porque que se había encontrado un hombre
asesinado en su jardín y que se los acusba de haberlo matado. Entonces San
Francisco de Paula dijo:«Señor, haz que yo me encuentra cerca de ellos
mañana !» La noche, un Ángel le transporta a 400 leguas, del país donde ellos
estaban. Al día siguiente, él dijo delante todo el mundo : «Hagan traer a este
hombre que ha sido muerto». Se lo trajo. Él dijo entonces : «Yo te ordeno, en el
nombre de Dios de declarar si estos son mis padres que te han dado la muerte.
» He allí que el hombre se levanta y que exclama delante todo el mundo : «No,
no son tus padres ». Entonces el Santo dijo de nuevo al Señor : «Hazme llevar
a mi monasterio ». Durante la noche, el Ángel le respondió y lo llevó ; él hizo
así 800 leguas. El buen Dios no puede rehusar nada a un corazón puro.
A su llegada por la primera vez a la parroquia que le había sido asignada, el
joven Cura Vianney exclama : «Qué pequeña !» pero él tuvo al mismo tiempo
un presentimiento que a fin de cuentas, esta parroquia no podría contener
todos aquellos que vendrían más tarde ; entonces, él se arrodilló e invocó al
Ángel guardián de la parroquia.
Y de hecho, a la Muerte del Santo Cura, cinco capillas nuevas han sido
añadidas en la Iglesia primitiva, es decir una dedicada a San Juan el Bautista,
una a Santa Filomena, una al Ecce Homo y una otra finalmente consagrado
para honrar los santos ángeles.
Para la fiesta de Dios de 1818, Monseñor Vianney vestía de blanco los hijos de
su parroquia. «Entonces, decía él, revistiéndolos él mismo de su túnico,
ustedes pensarán que están delante del buen Dios y que tienen el lugar de los
Ángeles.»
Aquellos que tuvieron el Privilegio de asistir a la Muerte del Santo Cura han
contado que al momento del relato del ritual, llegado al pasaje : «que los santos
ángeles de Dios vengan a su encuentro y lo introduzcan en la celeste
Jérusalem», Juan -María -Baptiste Vianney, rindió su alma a Dios sin agonía y
se durmió apaciblemente, a la edad de 73 años.
En 1854, Juan Reynaud publica bajo el título Tierra y cielo, un libro de Filosofía
religiosa tal como él lo precisa. La exposición es concebida como siendo un
diálogo entre un filósofo y un teólogo. Un capítulo especial, el capítulo V, es
consagrado únicamente a tratar de la cuestión de los Ángeles. Nosotros vamos
a dar algunos extractos:
En Signos y Mensajes para nuestro tiempo, R. Cristo hace una exposición del
caso que nos ocupa así como la de numerosas otras místicas habiendo
beneficiado de socorros angélicos o habiendo sido víctimas de los maleficios
del Diablo ; su libro es para leer y nosotros haremos más de un préstamo; a
propósito de María -Teresa Nobelet y de sus luchas con el Maligno, el autor
dira:
Tal fue el caso singular de María -Teresa Nobelet y el autor declara que él
«lanza una luz furtiva sobre un dominio inconocible y que él parece dejarnos
examinar ligeramente uno de los hijos secretos que se entrelazan en las
profundidades del plan divino».
Por dos veces nuestra mística tuvo el beneficio de una curación milagrosa, la
primera vez en Noël 1896, luego de una novena, ella fue súbitamente curada
de una peritonitis que la había conducido a un estado extremo; el médico que
la trataba esperaba el final de su paciente de un momento al otro, la Extrema
Unción había sido dada, y la enferma fue salvada. Naturalmente, el Doctor no
entendía nada en esta curación extraordinaria ; la segunda vez, ella fue curada
en Lourdes, en 1904, de una parálisis consecutiva a una lesión de la columna
vertebral ; el milagro fue oficialmente constatado.
María -Teresa había sabido que para estar en estado de colaborar plenamente
con Dios, le era necesario despojarse de todo apego y dar sin cesar. Ella
conocía el misterio de la estigmatización, es decir «por dolores y de las
pruebas consentidas, por una hora de angustia, un cuarto de hora de agonía,
un pobre pecador vio delante de él el horizonte abrirse y de súbito él se eleva,
rinde gracia y va a morar en el jardín de los Ángeles ».
Hay los buenos ángeles que son los Ministros de Dios. Ellos presiden en el
orden sagrado de la naturaleza. Estos son las energías inteligentes y
benevolentes que mantienen en cada ser su equilibrio y que le imprimen su
direction hacia la Unidad. Estos son los guardianes y los consejeros de los
hombres y de todas las criaturas, los mensajeros que nos claman a toda hora
las órdenes y los designios de la Providencia. Apacigua la tempestad de los
sentidos, el tumulto de las distracciones vanas, haz en tí el silencio, el
verdadero silencio viviente, tú los verás acudir como a las palomas familiares.
Hay los malos ángeles, aquellos que maldicen y que traban la obra de armonía,
los agentes de la dispersion y del desorden, que rompen el concierto, que
silencian la inteligencia, excitan las malas pasiones en las mujeres y las
convulsiones desenfrenadas, que golpearon los hombres de cólera y los hacen
entrechocarse y destruirse entre ellos.
Hay aquel que los conduce, el sutil, el Adversario que pone en obra el Plan de
ruina y de caos...
La Iglesia no ignora la perpetua amenaza de la Serpiente, en la última oración
del día, ella arma contra él a los santos ángeles; y todos los domingos, al fin del
oficio religioso, él pronuncia esta adjuración: «San Miguel Arcángel,
defiéndenos en el combate y sed nuestro socorro contra la malicia y las
dificultades del demonio ».
El P. Dupeyrat ha sido misionero en Papúa. Él ha experimentado el Poder
maléfico de los hechiceros. Él ha llegado a declarar:«Yo creo en la providencia
de Dios que se ocupa de cada uno de nosotros en particular como en general.
Yo creo en la presencia en este mundo de Satan y de los demonios, no
solamente en su presencia, pero en sus acciones sobre los hombres y
especialmente sobre los habitantes de los países primitivos.»
Lucifer (porque este era él ), tenía sin duda conciencia de su fealdad. Con
obstinación, él se desvía de nosotros hacia el muro, y el exorcismo comienza la
lucha. El Obispo ordena neto, seco y claro. Y fue bueno tener un tal Obispo en
momento semejante. A su pedido, yo me puse de rodillas y dije un Pater y un
Ave. Luego él me pidió de ir buscar el Ritual. Yo confieso que a esta instante yo
tuve un poco de vacilación. Yo quería tanto ver lo que seguía! Sin embargo yo
dominé mi curiosidad y me hice un deber el obedecer. Vuelto pronto, yo
encuentro la batalla entablada a fondo:
— Retírate, bestia impura e inmunda.
— no.
— Retírate. Yo te lo ordena, yo soy tu Maestro, por nuestro Señor.
— Déjame tranquilo!
— Retírate. María -Teresa es más fuerte que tú ! ella es de...
— Mía!
— ella es de Dios. Tu no la tendrás jamás !
— Si, yo la tendré !
— En el nombre de Dios, retírate !
— Oh! Yo te odio ! (chirrido terrible).
— En el nombre de Dios, delante del Sacerdote que está aquí, dí quien eres tú
!
... Silencio agitado y enfurecido. El Obispo repite su orden. El demonio se
obstina.
— Eso no te importa !
— Yo te lo ordeno, en el nombre de Dios !
— Lucifer!
y este nombre se escucha como un trueno y parece llenar todo el convento !
Se asombra que al lado, las pequeñas hermanas iban y venían como si no
pasara nada. Este nombre es como gritado y escupido en un chiflido y el
exorcista (él me lo dijo después ) sintió un soplo ardiente.
y la lucha continúa, inexorable. Finalmente el exorcista exclama :
— Vamos, santos ángeles, corregidlo ; castigadlo !
Entonces el cuerpo se sobresalta y se agita torciéndose y alejándose, todo
como un hombre atado estuviera bajo los golpes que llovían. Y cuando el
exorcista impone las manos sobre la frente y sobre el pecho, la cabeza y el
cuerpo disminuyen, se reducen, pareciendo querer desaparecer. El rostro toma
la expresión de una rabia desesperada, de una feroz malevolencia retorcida e
impotente.
— Id, santos ángeles, si les place a ustedes.
Y entonces esto que se vio, es un espectáculo del infierno...
— Ahora, en el nombre de la muy Santa Trinidad, retírate !
Y ha terminado. De un solo golpe. Está aliviada. Respira mejor. Sobre la
almohada blanca reposa la cabeza toda pálida, muy fina, muy dulce y muy
calma ! Es de nuevo nuestra querida pequeña Madre.
ella parecía dormida, pero ella estaba sin conciencia. Se la dejó reposar un
momento: luego, una flor de jasmin ofrecida a su ángel y aproximada a sus
labios, e hizo nacer tanto la angélica sonrisa así esperada, tan reconfortante,
tan benigna ! Los ojos, de una pureza radiante, sonreían también...
En los «Carnets» de Mgr de Boismenu, se puede relevar cantidad de escenas
de exorcismo que tienen poco la misma descripción ; el diablo luego de una
resistencia encarnizada termina siempre por abandonar el lugar, afirmando su
odio contra María -Teresa que cada día le arranca las almas. Ella le hizo
mucho mal, confiesa él, y dice : « ella ha salvado a seis este día allí, otro día
siete, al día siguiente nueve, una otra vez trece, de las que dos eran
sacerdotes; así de seguido ; cinco vocaciones establecidas... Un sacerdote...
Un oficial... Un magistrado... Una religiosa...»
En cuanto a las compensaciones beatíficas de las que fue gratificada María -
Teresa, ellas fueron numerosas ; Cristoflour se hizo el eco : «En lo más hondo
de su abandono, la Virgen le ha hablado en voz baja, los santos pequeños
ángeles la tienen acunada. Ella ha sentido sus toques ligeros, ella ha
distinguido su rostro luminoso. Ella ha denominado la ayuda contra Satan;
entonces, dijo ella, un relámpago atravesó su habitación; ella ha escuchado un
soplo y un grito, luego una nueva luminosidad ha sido seguida de un silencio y
de una gran paz». En la ausencia del sacerdote, a veces un Ángel vino poner
sobre sus labios la hostia consagrada.
4. Alfred van Mons. Estudio sobre los Ángeles y las Beatitudes (1903).
En la revista del mundo Invisible (años 1903-1904), han aparecido muchos
artículos, debidos a la pluma de Alfred van Mons, considerando la cuestión de
los Ángeles en relación con los dones del Espíritu Santo y con las Beatitudes.
He aquí cómo el autor sitúa el Problema :
Los Ángeles, como toda cosa además, fueron creados en el Espíritu Santo
quien, desde su origen, fecunda este mundo infinito de espíritus, así como él
fecundó la materia universal en el primer día de la creación. Y “spiritus Dei
ferebatur super aguas”. Pero de nuevo en los siglos eternos este espíritu de
amor y de virtud, este espíritu de las operaciones multiformes, este espíritu de
sabiduría, de ciencia y de fuerza, este espíritu de toda palabra y de todos los
carismas esta con los Ángeles tan cerca como con el Verbo, tanto la unión es
estrecha entre este espíritu esencialmente infinito y estos espíritus
infinitamente numerosos ; él opera en ellos quasi como en el Cristo en ese
sentido que operando en los Ángeles este divino espíritu tine más relación en la
conveniencia que en una necesidad.
Este serán todos los carismas que brillarán en forma superlativa en los
Ángeles. La variedad de los carismas ilumina el rol y los diversos ministerios de
los Ángeles en el universo. Concebido bajo este ángulo de los carismas, el
ministerio de los Ángeles se ilumina de un nuevo aspecto tal como el autor lo
remarca :
Veamos ahora cómo se puede concebir en los Ángeles y primero en los nueve
coros de la Iglesia triunfante, los carismas que esparcía el Espíritu Santo sobre
los santos de la primitiva Iglesia.
No hay ni más ni menos que nueve carismas o gracias que hace actuar
sobrenaturalmente a aquellos que ellos afectan, y esto no más en la intimidad
del Espíritu como por la producción de los Hechos interiores, pero
exclusivamente en lo exterior, bajo forma de relaciones, es decir en favor de
relaciones de individuo a individuo...
Todo eso que es divino siendo sobrenatural a toda especie de creatura y por
consecuencia en la naturaleza angélica como en la naturaleza humana, los
Ángeles tienen necesidad de socorro sobrenaturales especiales para cumplir
los grandes misterios de expiación, de la iluminación y del perfeccionamiento...
Y no habrá relación numérica entre los nueve carismas y los nueve coros,
como entre la augusta Trinidad y la tríada de estas celestes Jerarquías, lo
mismo que en él existe una entre tantas tríadas de las que abundan en la
creación ? — En otros términos, si cada uno de los Ángeles posee los nueve
carismas del Espíritu Santo a ejemplo de Cristo que los posee todos, es
admisible que estas gracias sean de otra manera compartidas entre los nueve
coros celestes, de modo que cada orden excelente particularmente en uno de
los carismas, pueda actuar sobre las otras Órdenes según las operaciones
propias a este carisma.
Serafines Sabiduría
Querubines Ciencia
Tronos Fe
Dominaciones Profecía
Virtudes Prodigios
Potencias Curaciones
Principalidad Discernimiento
Arcángeles Interpretacion
ÁNGELES: Lenguas
La interpretación de los discursos será una claridad divina que les ayuda a
entender mejor las verdades que enuncia el Señor en su habla.
La gracia de las curaciones será por ellos aquella que los ha inmunizado contra
el Pecado que es la peor de las enfermedades !... Las curaciones milagrosas
surgen de la potencia de los Ángeles ; de otra manera dicha por los Ángeles
estos no hacen milagros, sino por la acción de sus poderes naturales ; y hay
mismo un coro celeste, aquel de las Virtudes , de la que los espíritus tienen por
misión especial de producir los milagros sobre la tierra y en el universo.
El don de profecía será por los Ángeles una revelación de cosas que ellos no
pueden conocer por ellos mismos. Los que están más arriba se servirán para
advertir de eventos futuros aquellos que son por encima de ellos, según que les
sugiera el Espíritu Santo que los llena.
Dios sabe qué de conversiones in articulo mortis los Ángeles operan entre los
pecadores, dictándoles un acto de contricción perfecta...
«Santas Dominaciones, espíritus sublimes que reinan sobre todas las cosas
en las alturas afin de regresar todo a Dios, ordena a los Ángeles tender una
mano auxiliadora al verdadero pueblo de Dios. Que las Virtudes soberanas
hagan un nuevo esfuerzo, susciten un prodigio nuevo antes del fin de los
tiempos ; que las Potencias con San Miguel rechazen en el abismo los espíritus
malignos de la que los cristianos son asediados de todas partes, y conserven al
cordero la raza de su sangre. »
Oh! Ayudadnos, Potencias de los cielos, volad a nuestro socorro ; asiste a los
pobres pecadores en defensa de los miserables de este mundo cuyo más
grande es el mal que les contiene todos (corrupción, seducción, tentaciones
innumerables que nos asedian de todas partes, para abatirse sobre nuestra
alma cuando menos lo pensamos). Mi Dios, acuérdate de nuestra profunda
miseria, y despacha para nuestro socorro los Ángeles, estos espíritus muy
fuertes y muy poderosos a los cuales entre todos ustedes han dado por misión
especial de rechazar los demonios en el abismo de las penas eternas.
Los Ángeles tienen las Virtudes infusas, sin embargo, virtud quiere decir
fuerza. Las Virtudes son las fuerzas sobrenaturales del alma y el precio de sus
esfuerzos constantes en la práctica del bien.
Virginidad, inocencia, pureza son las tres Virtudes primordiales que nos abren
la puerta de los cielos ; también nosotros debemos orar a las Potencias de los
Ángeles para ayudarnos y sostenernos :
El acto virtuoso que produce cada Ángel en particular, es, según el autor ,
comparable a un manojo de relámpagos que, fulgurando de un solo golpe,
vendría a destruir a las cohortes del mal.
Sin embargo, la paz habita entre los coros de las celestes Jerarquías.
Y voto último: «O santos ángeles órdenes superiores siempre en paz con
aquellas Órdenes inferiores, obtened la paz a los hijos de Dios !
SECCIÓN IV:
He aquí desde el principio una declaración neta del Maestro Felipe refiriéndose
a la existencia de los Ángeles : «Los Ángeles. Querubines, Serafines, etc.,
creados al principio, antes que el hombre, existían bien.
*
Entre el Hombre y los Ángeles, está Dios, porque Dios esta por todos lados.
Pero están también los Dioses ; y entre ellos están quienes se creen muy
grandes y que no son nada.»
*
En la enseñanza del Maestro Felipe, enseñanza de llevar a la práctica y de
ninguna manera dogmática, él hace frecuentemente mención de la existencia
del Ángel guardián y de los servicios que él está nominado a darnos, si
nosotros nos mostramos dignos, y sobre todo si estamos atentos a sus
consejos. En la época de una de las numerosas sesiones de instrucción dadas
por el Maestro a sus fieles, se le había presentado la cuestión: «Por qué
tenemos nosotros Ángeles guardianes ?» En su estilo propio, el Maestro
respondió :«Si tú comprendes eso que es el alma, tú no harías esta cuestión.
Imagina que tú tienes un muy pequeño niño. Lo dejarías ir solo, o pondrías
cerca de él a personas de más edad para conducirlo?»
En todo caso, si ustedes piden enseñanzas a los Invisibles, misma por los
medios un poco ilícitos, esto les obliga a obedecerles, bajo pena de dificultades
ulteriores más grandes que aquellas a las cuales ustedes han querido escapar.
El Ángel indica a José el nombre que debe llevar el niño milagroso. Hay allí
una razón muy neta : la importancia oculta del nombre.
*
A propósito de la acción de los demonios en el mundo, Sédir retomará casi
textualmente la enseñanza del Maestro Felipe :
así los demonios, adversarios, como los Ángeles servidores de Cristo existían
todos; ellos han sido creados antes que el hombre ; el Espíritu de este último
es uno de sus principales campos de batalla. Nosotros tenemos todos en
nosotros del bien o del mal innato; nosotros recibimos también las visitas más o
menos largas de los soldados de la Luz y de los soldados de las tinieblas.
Nuestra misión consiste en utilizar los auxilios intelectuales, morales, síquicos
que nos traigan los Ángeles, para hacer evolucionar a los demonios que son
los huéspedes temporarios de nuestro espíritu. Una de las recompensas de
nuestros trabajos, es que el mal o la representación del mal que tenemos que
purificar, termina por devenir una parte integrante de nosotros mismos. Y este
poder inmenso dado al Hombre se extiende de las profundidades de sus
organismos internos justo hasta los tres reinos de la naturaleza terrestre, justo
hasta las Jerarquías invisibles de las que tenemos los guías (o bien mas bien
no son estas las jerarquías que son nuestros guías y mensajeros servidores ?)
Una injuria, lo mismo que no importa cual acto, no es viable que por el
sentimiento cardíaco que le ha dado nacimiento. Este sentimiento es un acto o
una palabra en su plan, en el corazón universal, en esta vía central quien es el
lugar del Verbo y de sus agentes. Los seres enviados por Aquel para nuestra
protección, los Ángeles guardianes, conocen nuestras acciones por los
sentimientos cardíacos que los determinan. Ellos ven entonces la ofensa, la
venganza o el Perdón. La paz no puede luego concluirse que entre cuatro
personas, los dos hombres y sus dos guías ; y como nosotros cambiamos de
guía, sin cesar, si este perdón no es dado luego, él será necesario, porque es
valioso, esperar en la enredo de la vida, que el destino nos ponga en presencia
de nuestro enemigo, y que nos reencontremos cada uno el Ángel que nosotros
tuvimos en la época del insulto.
Sobre la tierra progresamos todos hacia el bien y para cada período donde
nuestra alma se perfecciona se da un paso por nuestro adelanto, nosotros
cambiamos de guía y, aquel que viene es a su turno más avanzado que el
Precedente.
*
Piensas tú que, cuando Dios quiso enviarte a este mundo, Él los ha enviado
solos? no. Cuando Dios ha creado el hombre. Él lo ha creado simple e
ignorando toda cosa. Somos seguidos desde nuestra más tierna infancia hasta
más allá de la tumba.
*
Porque nosotros no estamos jamás solos; nosotros hemos tenido siempre con
nosotros nuestro guía, nuestro Ángel guardián. Él es nuestro consolador.
Cuando estamos tentados por el mal, él emplea todos los medios posibles para
detenernos ; es la voz que nos dijo:«No hagas eso, es malo ». Él no reclama de
nosotros mas que un poco de buena voluntad. Si nosotros sucumbimos en la
tentación, nosotros le damos pena y él llora.
Este Ángel preside nuestro nacimiento ; está a nuestra cabecera, y nos sigue
durante nuestra vida justo hasta nuestra muerte. Allí otro viene a nosotros.
*
El alma es juzgada delante un acusador, nuestro ángel malo, y un defensor,
nuestro Ángel guardián.
*
Ustedes se asombrarían que, a pesar de la existencia y la protección de
nuestro Ángel guardián, nosotros cometemos de nuevo faltas. Supon que tú
eres un muy pequeño niño y que se te ha confiado a los cuidados de una ama;
ella ella te llevará por un terreno accidentado donde se encuentran piedras y
rocas. Pero cuando ella te da la mano, tú tropiezas a veces, tú caes y tú te
levantarás, pero no será este el único medio para que tu reflexiones, para que
tú aprendas a caminar y para que te fortalezcas.
*
Si tú no quieres tener el ángel guardián, progresa y se te lo retirará.
*
Alfred Haehl trae una anécdota contada por el Maestro Felipe en la época de
una de las reuniones en el local, calle cabeza de oro ; ella esta llena de
significación ; ella nos enseña que del otro lado se ocupan mucho más de
nuestros hechos y gestos que lo que nosotros creemos:
Un día llegó al lugar un gran agente (de policía ) rubio, un burgués. Al momento
en que yo había orado las personas se levantaron como de costumbre, él ha
permanecido sentado, el sombrero sobre la cabeza. Él sacó un cigarrillo y se
puso a fumar. En este momento, yo he visto un Ángel que atravesaba el techo
de la sala y que llegó hasta él y lo había marcado sobre el libro de muerte. Tres
días después, él estaba muerto. Y es bien diferente de no ser marcado sobre el
libro de la Vida y de ser marcado sobre el libro de la muerte.
La descripción por el Maestro Felipe de la Ascensión de Cristo es para
recordar ; recordemos, si nosotros queremos darnos cuenta del valor de la
declaración del Maestro, que este enviado de Dios tenía la facultad de moverse
en los tres planos y leer las imágenes astrales : «Cuando el Cristo subió al cielo
delante de sus apóstoles, Él estaba sentado de costado en un trono. Los
Ángeles lo rodeaban y él era llevado sobre nubes blancas, rojas y negruzcas,
por causa de la espesura. Él sostenía una mano levantada, tres dedos en el
aire.»
Como nosotros ya lo hemos estudiado. Maestro Felipe creía en la existencia
del Diablo y en aquella de los demonios, seres queridos y tolerados por Dios :
Dios, cuando él ha creado el mundo, ha creado seres inofensivos ; Él ha
creado también seres infernales. Él los ha creados conscientemente. Todo eso
que Dios ha hecho. Él lo hizo en conocimiento de causa.
*
El demonio existe, es cierto y nosotros no debemos negar la existencia de los
Espíritus infernales, esto sería negar los espíritus benevolentes, pero no es
necesario ser supersticioso.
*
Están los demonios dados en la materia, otros al aire, que son ya bastante
malvados ; ellos producen las tormentas, etc... Otros en el mental; ellos atacan
a los hombres ya fuertes, los santos, por las tentaciones.
*
Nosotros tenemos el bien y el mal en nosotros. El mal no es otra cosa que el
demonio, y nosotros mismos no somos mas que Ángeles caídos.
Las ideas de mal que nosotros tenemos son bien de las ideas del demonio ;
pero no tenemos que hacerlo así.
Nosotros hemos ya sabido que el Santo Cura de Ars creía en la existencia de
los Ángeles tutelares y de los demonios perseguidores ; es interesante levantar
una anécdota narrada por Maestro Felipe de donde surge que sus poderes
extraordinarios han sido conocidos largo tiempo por adelantado por el Cura de
Ars:
El Cura de Ars, nos dijo un día M. Felipe, había enviado un pastor para
proteger las ovejas. Un día vino a él una madre con su niño alcanzado desde
largo tiempo de doble Parálisis infantil ; él no caminaba sino con las muletas. El
cura de Ars lo examina y dijo:«Por nosotros, no podemos hacer nada que
impedir el mal de aumentar, pero en algún tiempo tú encontrarás un joven
hombre que le curará ». La mujer partió y, más tarde, en Lyon, ella vino por
casualidad a encontrarme. El niño estaba sentado sobre una silla ; yo ví que él
estaba curado. Yo dije entonces a la mujer de ir con su hijo a Fourvière y de
suspender las muletas en ex-voto, y como la mujer me respondía que él no
podía, yo dije al niño que se levantara y caminara y él lo hizo pronto.
Sección V:
El Sar Péladan y la angelología
Esta Gran Oración por la Victoria ha sido insertada por Péladan en una
creación publicada en 1917, “El Arte y la guerra” (pp. 359-367); ella está
presente bajo el título de “Oración medieval a los nueve Coros” y constituye por
sí misma un remarcable ejemplo de literatura religiosa y mística.
Antes de dar el texto integral de su Oración, Péladan ha juzgado útil
introducirle algunas observaciones explicativas, afin de hacer mejor
comprender el sentido y el espíritu. En esta exposición, se encuentran
expresiones idénticos a aquellas de la carta ; leemos en efecto: «marquetería
piadosa de epítetos tradicionales »; el autor especifica bien que esta oración no
es de invención pura, porque ella está compuesto según el estilo y el Espíritu
de la Edad Media : «No hay nada de nuevo aquí, dijo él, que el arreglo que
distribuye para cada uno de los nueve Coros, los rasgos que le caracterizan, en
lugar que estos rasgos se encuentran fundidos y colectivos en las oraciones ».
Péladan hizo remarcar que esta distribución es fácil para aquel que consulta el
libro de la Jerarquía Celeste (compuesto por San Dionisio ), así que algunos
manuscritos del fondo en latin de la Biblioteca nacional. Además los magníficos
vitraux de Chartres y de Bourges son muy instructivos en materia de
angelología. He aquí en adición cómo Péladan completa su pensamiento :
I. A los SERAFINES
Genios del fuego, espíritus incandescentes, vivientes incensarios de la Divina
Majestad, espejos de la inefable complacencia ; y al cercel Perfecto, supremas
perfecciones.
corazones salidos del corazón adorable, tú los suavisas, tú los haces arder ;
ustedes los primeros benditos de entre los seres ; ustedes de los que no se ve
mas que la cabeza, rostros del misterio, calurosos y profundos.
0 tú que sonríes sin cesar, esfinge feliz de la caridad, suspende tus gozos
estáticos ; y mira si no existió jamás una piedad mas grande que hoy, la piedad
de la Francia.
Al nombre del Eterno amor que te abraza, Serafines, obtened para nosotros la
victoria !
La derrota de los Francos será el abatimiento de la Tierra, o rojos Serafines !
V. A las Virtudes
fuerzas morales, divinas costumbres, regla de los Santos, disciplinas de los
justos, saludables austeridades por las cuales el cielo del Hombre se realiza,
lámparas siempre llenas de aceite, certidumbres, claridades, ramas luminosas
de la inmortalidad, o flores y frutos del alma, aspectos del Absoluto ; Prismas
de las perfecciones, prestigios que son suficientes con la encarnación ;
excelencias que abren las puertas de alegría, parcelas de misterio y moléculas
de infinito.
0 vosotros, alegremente curbados bajo tu cruz de gloria, deten tus santos
ejercicios, y mira si no existió jamás una piedad mas grande que hoy, la piedad
de la Francia.
En el nombre de esta obediencia que te mueve, obten, para nosotros, la
victoria !
La derrota de los Francos será el triunfo de los vicios, o Virtudes !
Mensajeros del Misterio, invisiblos soldados de las batallas divinas, por el que
rostro centellea como la estrella de la mañana, y que Dante los ha visto a todos
tan bellos, pero diferentes cada uno de esplendor y de prestigio.
Portadores de gracias y manejadores de espada, deliciosos y terribles, suaves
y trágicos, porque tú puedes llevar de un mismo movimiento los puros al cielo y
los malos al infierno ; aquí tú anuncias los nacimientos bendecidos, allí tú
exterminas las hordas de Sinnakirib.
Tú que manifiestas vuelta a vuelta la benignidad del perdón o la implacabilidad
de la justicia.
a la obra por lo tanto ! Mira si no existió jamás una mas grande piedad que
hoy, la piedad de la Francia.
En el nombre de esta guardia Santa, en la que tu nos tienes, obtened, por
nosotros, la victoria !
La derrota de los Francos será el fin de tu culto, o cohortes del Verbo, legiones
del cielo. Benditos los ángeles !
Coros enervados de la contemplación divina que calienta e ilumina el reflejo de
la Trinidad ; tú que fuerzas el amor al corazón del amor misma,
bienaventurados sin esfuerzos y amantes sin disgustos; tú que planeas en el
incesante éxtasis, adoradores sin intermedios, pájaros espirituales en el soplo
increado, peces que se gozan en el Océano de gracia, cantores de canciones
sin fin, ecos siempre vibrantes del Santo de los Santos, deten tus rondas
concéntricas, escucha el grito de la tierra.
ella ha hecho su esfeurzo, haz tú el milagro !
Danos la victoria !
La derrota de los Francos será la derrota de Cristo, o Coros celestes !
Así sea.
*
Si se realiza, la lectura atenta de esta Gran Oración por la paz indica
netamente los atributos de los nueve Coros, así como su ministerio cerca de
los hombres. El fin de esta invocación a los nueve Coros está puesta en
paralelo con una apelación semejante a las mismas entidades que se
encuentra en otra creación de Péladan, “La Antorcha reversada”; nosotros
queremos hablar de la escena de la purificación de la Iglesia de la Part-Dios,
efectuada por el mago Mérodack, alias Péladan ; nosotros daremos el texto
integral algunas páginas más adelante. Hay grandes chances por que la
composición de estas dos exposiciones daten de la misma época, es decir un
año antes de la muerte de Péladan, “La Antorcha reversada” siendo una obra
póstuma. De donde es evidente que la angelología de Péladan no ha variado
en el curso de su carrera, porque nosotros encontramos las mismas
enseñanzas esparcidas todo a lo largo de su obra monumental.
En el prefacio de un libro lleno de enseñanzas y de vistas profundas sobre el
devenir humano, “La Tierra de la Esfinge”, Péladan, exponiendo la secuencia
de las numerosos obras que tiene la intención de publicar, hizo una nota bien
reveladora de su convicción en la asistencia perpetua del Ángel guardián ;
habiendo presentado en principio que él escribiría, entre otras, una Historia de
las Ideas y de las formas, él dijo:«La escribiré ? — su ángel lo sabe, no él ». En
el “Último Bourbon”, duodécimo romance de la Etopea, el autor , espantado por
ciertos signos anunciadores de la decadencia latina, exclama :
Finis latinorun!
— que esperar?
— nada de hombres ! pero allí en lo alto, exclama Ghuibor, los nueve Coros
tiemblan de una indignación Santa que sube a través de las esferas hasta los
pies del Todo Poderoso. Los Ángeles esperan una señal para aparecer con la
espada de fuego.
Cuando se dijo que el último Bourbon apareció en 1895, esta exclamación de
Péladan toma un encanto profético, como la permanencia de muchos otros
pensamientos que esmaltan toda su obra.
Nosotros vamos ahora a reproducir, del Breviario de la Rosa-Cruz, toda una
serie de pasajes, extraídos de la obra peladana y habiendo tratado del
Ministerio de los Ángeles :
Los Ángeles, puros espíritus, confirmados en la gracia y cuya voluntad se
funde con la voluntad divina, forman la escalera de Jacob, entre el cielo en la
tierra y el Hombre a Dios.
*
Los Elohim del Génesis, literalmente Ellos de Él, forman el Hombre según su
sombra llegada. El Hombre será así la sombra del ángel.
Los Elohim (los Ángeles) son nuestros Creadores inmediatos, ellos nos han
modelado. Qué además lógica que la de invitarlos a la salud, a la corrección,
en la conservación y en la perfección de su obra. Los santos están en la mayor
parte, más adelante de nosotros que los Ángeles, estando más arriba, porque
hay méritos desconocidos a los ángeles : Aquel que triunfa en la Vida dolorosa
sobrepasa la Vida angélica.
*
La serie sobrenatural al hombre, la ANGÉLICA, que ha inventado nuestra
forma, se inclina con amor sobre la obra de sus manos y el Ángel guardián de
la devoción figura un adorable misterio.
*
Algunos seres sobreeminentes han tentado de obtener de los Espíritus
celestes, inspiración, bendición, iluminación : y las obras son allí para
testimoniar que hay comunión posible de ellos a nuestras y cuan fecunda.
*
La serie humana comunica con las dos otras que son vecinas, en lo alto como
en lo bajo, y, para el metafísico, el Hombre es la crisálida de un Ángel y no el
avatar de un gorila.
*
Como nuestros cuerpos tienen un olor, nuestra alma produce un halo fluídico
que tiene a nuestras como la aureola y el nimbo a Dios y a sus santos en los
frescos.
*
sin profundizar la cuestión del Ángel guardián, es de fé que se puede conciliar
los Ángeles por la práctica de las Virtudes que les son queridas. Ellos aprecian
por encima de todo la castidad, la devoción a la Virgen y la fuga del mundo.
Los medios de atraerlos son las Virtudes , esta práctica, misma si él no se
corona de visiones, no sabría ser perdido.
*
Hay una serie espiritual inmediatamente superior al hombre ; y la religion
asegura que relaciones de oración y de gracia, es decir de caridad, pueden
existir entre los Ángeles y los hombres.
Habrá siempre más de honor al concebir las figuras del cielo que a copiar
aquellas de la tierra y a pintar los Ángeles que a los hombres.
Los sujetos espirituales solos merecen de tentar los verdaderos artistas, no
sería por su dificultad. Este que se desdeña en la realidad, que se le desdeña
también en el Arte.
En la obra, la regla es la belleza, resultante de la triple Perfección de la forma,
el sentimiento y la idea.
Se comienza por la belleza exterior, y se puede felicitarse de alcanzarlo, luego
que se libera el alma.
una obra se compone, como un hombre, de cuerpo, de alma y de espíritu.
*
Se podría définir la belleza : la búsqueda de las formas angélicas.
*
Detrás de la belleza de la obra y la voluntad del hombre, están los Ángeles,
que a veces se impacientan y cambian el curso de la estupidez humana.
*
Admirar, es participer a la luz de las obras maestras y asociarse en la serie
angélica.
*
Brillar la belleza y la benevolencia es para la mujer un oficio magnífico ; es allí
una función angélica, un rol providencial, alguna cosa de tan fecundante que la
realización sería casi sacerdotal.
*
en la cuna del Salvador, se presentan los dos tipos de la humanidad : los
pastores y los magos.
Los pastores han sido llevados por los Ángeles; los magos han llegado por
ellos mismos.
Un recogimiento en una casa de Dios, con oraciones a los Ángeles
protectores, hizo descender la sombra que bendijo.
*
Ten guardia al maligno, mi hijo ! él circula obstinadamente alrededor de los
monasterios, estas fortalezas elevaas para defender la tierra de las cóleras del
cielo.
Otro episodio instructivo, este coloquio entre los dos interlocutores precedentes
: «Ah! hermano, el secreto de los secretos reside en la facultad de ver el ideal,
afuera de nuestras facultades... Saber lo que correspondería hacer, puede ser
que implique el voto, he allí las verdaderas superioridades. Es necesario decirlo
algunas veces para no infatuarse, a propósito de ciertos fenómenos de
intelección donde el Hombre se creyó un Ángel y donde él lo es tal vez, pero
evidentemente como el Ángel es hombre, cuando él toma la forma y por una
breve misión.
«El gran arte de la vida, concluyó Alta, será entonces el de realizar un acto
angélico, cuando la Providencia lo permite.»
Nos resta poner bajo los ojos del lector dos capítulos importantes de “La
Antorcha reversada”; ellos muestran cuanto Péladan había enseñado sobre las
entidades que pueblan el Plano Astral y el Plano espiritual ; he aquí la primer
imagen : La Iglesia encantada (chap. X).
Alta piensa tener instituido en su iglesia un culto de la tarde a la intención de
las almas del Purgatorio ; Mérodack en duda.
lo menos y el mago, sentado sobre el primer banco y tornados hacia el Altar,
escuchando cada uno su pensamiento en la Abadía llena de sombra.
Mérodack dijo :
— lo que desciende del cielo, figura, perfume, palabra, maldición o bendición
prestamos a los ángeles, a los mensajeros, sus alas. Lo que sube de la tierra,
pensamientos, lágrimas, oraciones, súplicas o adoración prestamos estas
mismas alas. Allí donde no hay traza angélica, el cielo falta, y en la ascensión
de las oraciones como en la venida de las gracias.
Los Coelicoles (ÁNGELES:) vienen ellos de parte de Dios ? En este caso tú
eres bendito y tu obra santa recibió la tercera Jerarquía.
Esta hospitalidad de noche por almas errantes toca a un grado tan raro de la
caridad, que tu Ángel guardián, que no sabría desinteresarse de tus obras, ha
debido señalarla a sus radiantes camarades. Estos bellos espíritus asisten en
la misa, invisibles y adorantes, no dejando ningún lugar de caridad sin la
bendición de su presencia. Entonces si se coincide con tu noble deseo, en
buscando piadosamente, nosotros descubriremos la inmanencia angélica.
Eso que está en lo alto es como eso que está en lo bajo. Este arcano del
díptico de identidad entre lo espiritual y lo material te es familiar, toda vida se
manifiesta por el ternario ; y el arcano del dualismo, se aumenta así : eso que
está en medio está a la vez como eso que está en lo alto y como eso que está
en lo bajo. Ejemplo, el Purgatorio entre el cielo y el infierno participa en la
esperanza del primero y en el sufrimiento del segundo...
— En el Otro Mundo, hay los puros espíritus por esencia, los espíritus en
estado de purificación y aquellos que son purificados, justos o santos.
La Muerte no corta el destino tan rápido que se le dijo ; no se cae al infierno
como por una trampa, no se sube al cielo por un cabrestante de teatro. Muchas
almas mediocres quedan suspendidas entre los dos destinos... El genio ha
adivinado eso que la teología más explícita no dijo.
Alta trae un estilete sin mango, encontrado en los restos del edificio y el
incensario y su cazoleta.
El mago tomó el estilete y por golpes vivos golpea el borde de la nube que se
dividió como de vidrio. A medida que él repetía su gesto los copos de algodón
se dividían y también se evaporaban. Fue un largo trabajo; el mago que había
estado tan frío todo el tiempo, sudaba y soplaba, mientras que Alta observaba
su rito desaparecer bajo estos golpes dados en el vacío que semejaban las
gesticulaciones de la demencia y que todavía dividían a la vista de ojo el brillo y
las formaciones incluidas.
Mérodack: «Son tuyos estos bancos ? Puedes reemplazarlos ?
- Yo puedo reemplazarlos !
Nosotros vamos a quemarlos. Tu iglesia no teniendo mas que muros no corre
ningún peligro y así serán abolidos los únicos objetos impregnados de estas
larvas.
Se verán las llamas, y todos vendrán !
-Ellos llegarán muy tarde. Tus pobres lámparas no son ellas a petroleo ?
Nosotros vamos a preparar una verdadera hoguera ; pero primero enciende el
carbón del incensario y mientras que yo pico de nuevo las escamas fluídicas,
vienes detrás mío y inciensa a medida. Los efluvios profanos no soportan el
incienso o si tú quieres una otra explicación : su humo resinoso aglutina las
moléculas fluídicas como la cera hace con el polvo.
Si yo pudiera traería aquí cerdos, el Evangelio los indica como excelentes para
recibir los fluidos desordenados... Otros animales son verdaderas esponjas de
la luz astral: los sapos.
Los bancos una vez rociados de petroleo ardieron rápidamente y el incienso,
esparcido a profusión, purifica toda la Iglesia de sus aglomeraciones fluídicas.
Y Mérodack dice :
-Tu abadía permanecerá odorizada por largo tiempo... Voy a hacer sonar el
angelus yo mismo, en piedad por los Ángeles que nosotros hemos invocado y
que han disipado nuestra vacilación.»
Este capítulo de “La Antorcha reversada” es una lección remarcable que
enseña perfectamente sobre la existencia de ciertos seres de lo astral, sobre
sus poderes más o menos maléficos y sobre la asistencia de los Ángeles en
casos de obsesión. La precisión de detalles dados por Péladan prueba que ha
experimentado por sí mismo esta toma de contacto con las aglomeraciones de
fluidos deletereos que pululan en el astral inferior. Esta tabla nos enseña
también sobre el Poder descoagulante de las puntas y también sobre el valor
purificador del incienso.
Esto nos permite poner conocimiento de otro capítulo del mismo volumen; él
es la contra parte del precedente ; intitulado “el verdadero Espiritismo”, él tiene
por objeto hacernos conocer el mejor medio de conciliar la asistencia de los
Ángeles. Se encontrarán muchos afirmaciones ya citadas cuando nosotros
hemos hablado de la angelología peladana tal como ella apareció en el
Breviario de la Rosa-Cruz. Esta vez de nuevo la escena sucede en la misma
abadía dotada de sus Nuevos bancos y purificada por el fuego y el incienso.
Los dos amigos, el Padre Alta y Mérodack, devienen, sentados sobre uno de
los bancos nuevos y vírgenes de toda impresión maléfica.
Mérodack dice :
Mérodack ora con fervor, ofreciéndose sufrir algunas penas por la realización
de su oración:
Almas impotentes para acelerar tu júbilo eterno, almas tanto más alteradas que
la fuente refrescante esta próxima, almas delirantes de impaciencia, ustedes
tocan los ríos de eternidad. Almas potentes para conjurar los males terrestres,
almas reconocedoras de la menor oración, almas que van a aliviar por la
constante intercesión que hacen, que celebrará cada día el Santo sacrificio en
tu favor y con un fervor único, yo te suplico en el nombre tuyo, de dirigir a los
Ángeles una oración ardiente, afin que mi temeridad no sea castigada y que
estando empujado por vosotros, yo no desoiga el alma de este sacerdote que
se ofrece a vosotros, y quien, en su soledad, se consagrara enteramente a tu
salud ! Soportad el efecto de sus misas, de sus oraciones, del oficio nocturno
que él relatará, mirad qué consuelos, y misma la salud para muchos de entre
vosotros.
Al orar por las almas del Purgatorio, estos dos espíritus experimentaron un
apaciguamiento delicioso, como si el consuelo que ellos querían dar, los había
rendido luego, con este alivio que produce la limosna, y todo acto de caridad.
Su oración había llegado y fue con confianza que ellos abordaron la segunda
parte del rito.
La bóveda cada vez repercute con la sílaba divina, con la fonética, el, aêl, iel!
Mérodack extendió los brazos y grita el nombre de la primera Jerarquía :
Hypofanía!
Hyperfanía!
Y él creyó ver un fragmento de Arco Iris por encima del Altar ; él tenía la forma
de un gran collar formando un pórtico ; el primer escalón era de esmeraldas, el
segundo de zafiros, y el tercer de onyx.
Finalmente él gritó el nombre de la más alta Jerarquía :
Epiphania!
y él creyó ver tres ruedas concéntricas que giraban, mezclando los destellos
de las crisolitas, de los diamantes y de los carbunclos.
Sus ojos vieron también alguna cosa, porque ellos los levantaron hacia el
tabernáculo con la intensidad de un radiante asombro. Sus corazones
experimentaron finalmente un sentimiento nuevo, porque en un necesidad
irresistible de expansion, ellos se levantaron para abrazarse...
Sentados lado a lado, tomándose las manos, con una ternura profunda, ellos
se amaron como no se habían amado jamás. Ninguna palabra tendría que
añadirse a su muda intimidad ; su pensamiento, por lo demás, escapó a la
expresión... Ellos sobreabundaban de calma, de buena voluntad, de lucidez,
misma de salud. Jamás ni uno ni el otro se habían sentido así dispuestos. Su
cuerpo, más sutil, pesaba menos sobre el alma.
habiendo gozado de esta beatitud interior, los dos amigos salieron de la Iglesia
; y Mérodack dice :
Los Ángeles han venido... Ellos volverán hasta el día en que iré a reunirme con
ellos !... Yo te bendigo Mérodack.»
El mago respondió :
«Yo recibo con gratitud tu bendición, verdadero sacerdote, por que yo he sido
la ocasión de la divina aventura. Los Ángeles han llegado porque tú les has
ofrecido un pacto digno de ellos. Estos adorables espíritus no pueden ser
vencidos, en el intercambio de las caridades...
Alta respondió : «Tu has purificado el Altar de Dios y vivificado mi alma. Tú que
tanto has aportado, hermano, qué llevas tú ?»
La estatua es comprada en efecto; ella fue puesta en lugar con el gran gozo del
buen Padre Alta. Al día siguiente en la mañana como el Sacerdote estaba
retardado por el pequeño desayuno, un commensal hizo observar : «Él debe
adorar su ángel». Y de hecho, el mago encontró a su amigo en éxtasis delante
de la vieja estatua. Entonces Mérodack la reconoció a penas ; ella parecía
vivificada. Quitando la tierra de la superficie y las capas de cal superpuestas en
diversas épocas, Alta había vuelto a la bella figura la sonrisa de los ojos, la
sonrisa de la boca, la redondez del cuello, y sorpresa, la larga túnica
bizarramente despedazada. Entre los pies apareció ahora un par de alas
podadas sobre el frente del cuerpo ; otro par de alas igualmente cerradas, en
túnica, vestía la espalda de la estatua y con las alas añadidas que se elevaban
por encima de cada hombro, se revelaba el Serafín, el Ángel de las seis alas.
Alta se sentía inmensamente asombrado y llevó a Mérodack a formular este
voto :
Y “La Antorcha reversada” se termina con este pensamiento : «El mago se fue
hacia nuevos trabajos, servidor de esta muy Santa armonía que rige los
Ángeles y las estrellas ».
el aprendiz leyó desde las seis horas hasta la medianoche ; entonces el diablo
juzgó que era tiempo de mostrarse.
Capítulo Séptimo
SECCIÓN VI:
Carlos salvado. El Ángel y el Hombre intimo
(Vie y Amat, Paris 1900)
El autor comienza por declarar que el tema del ministerio de los Ángeles ya ha
sido con frecuencia tratado y notablemente con una competencia particular por
Mgr. Chardon que ha publicado sucesivamente : “Memorias de un Ángel
guardián” (Paris 1886), “Memorias de un Serafin” (Paris 1886) e “Imitación de
los Ángeles” (Paris 1893). No se ocupará jamás bastante y sin provecho directo
de la frecuentación angélica y el autor de poner en principio : «Por encima de
Dios, se escuchan y se despliegan los ejércitos angélicos, luminosos de
belleza, ardientes de amor, eternamente vibrantes de actividad. Estos ejércitos
celestes combaten mejor por Dios que no lo hicieron jamás los ejércitos
cristianas más potentes.» en su exposición, el autor nos dijo que él desea
«mostrar los principios que deben guiar la contemplación cuando ella se aplica
a los ángeles ». Él seguirá paso a paso al Doctor angélico (Santo Tomás ),
porque «con él, nosotros tendremos una enseñanza, sino siempre cierta, al
menos siempre segura ». Apoyándose igualmente sobre M. Olier, el autor pone
en efecto : «La primera salida del Ser infinito, su dilatación la más pura se hizo
en los Ángeles, de las que su unión representa su grandeza inmensa. Cada
uno en particular marca algún grado de este Ser infinito, y le es especialmente
consagrado. En los unos se ve su fuerza; en otros Su amor; en otros su
firmeza. Cada uno es la reproducción de una belleza del original divino ; cada
uno lo adora y lo alaba en la perfección de la que él es la imagen... Y todas las
criaturas, sobre todo los Ángeles, son verbos creados que dicen con una
elocuencia además en más perfecta las perfecciones de la Divinidad. Y citar de
nuevo M. Olier:
«Los coros de los Ángeles y los Ángeles que los componen, estos son como
nueve constelaciones diferentes formadas cada una por miles de estrellas (se
dice que en la simbólica de la Biblia, la estrella es el símbolo del ángel )... Cada
Coro, cada Ángel debe primero adorar, honrar, por el solo hecho de su
existencia y por su amor un atributo especial de Dios. Eso que los Ángeles
reflejándose y honran en Dios por su creación, es el atributo que nos toca de
más cerca, su bondad en relación con cada uno de nosotros... Y es entre los
seres de bondad y de ternura que son reclutados los Ángeles guardianes. La
bondad de los Ángeles va encontrarse más perfecta en los Arcángeles,
representantes nacidos de las revelaciones celestes. En cuanto a los
Principados que son superiores a los Arcángeles, ellos son la imagen del
gobierno de Dios. Según San Dionisio, aquellos para que Dios confie alguna
autoridad deberían tener un gran devoción a las Principalidades ; ellos
pondrían en esta devoción de las gracias de luz, de autoridad dada y fuerte. »
En la primera jerarquía (ÁNGELES:, Arcángeles, Principalidades ), Dios
manifiesta su bondad, su luz y su autoridad en relación de los hombres ; en la
Jerarquía superior (Potencias, Virtudes, Dominaciones ), Él va a manifestar su
justicia, su majestad y su dignidad. Las Potencias, por el hecho mismo de su
existencia, representan la justicia divina, atributo formidable ; San Ignacio les
llama « las espadas de la justicia divina». Según Olier estos son los que han
echado del Paraíso a los espíritus rebeldes y que cierran las puertas del
abismo sobre los reprobados... el coro de Virtudes representa la fuerza de
Dios, la cual encierra eminentemente en sí todas las Potencias de la
naturaleza. Estas potencias, dijo San Dionisio elevan hacia Dios y se inclinan
también hacia las esencias inferiores para transformarlas. Las Dominaciones
expresan el dominio de Dios sobre toda creatura que ha evocado o que él
puede evocar de la nada. Invocación hace este coro depositario de la plena
autoridad de Dios :
Lo mismo que los Ángeles se hablan dirigiéndose los unos hacia los otros sus
pensamientos por la voluntad, así es suficiente que nosotros queramos abrir
nuestra alma a los Ángeles para que ellos vean con claridad.
Los Ángeles son afuera y por encima del espacio ; ellos no son de las criaturas
corporales ; ellos no tienen nada que ver con la materia ; estos son puros
espíritus quienes, si no fuera por Dios, no podrían caer en el espacio. Y porque
ellos son independientes del espacio, ellos no tienen que querer aplicarse para
tal o tal lugar del espacio y desde luego, ellos están presentes. Así un Ángel
puede encontrarse naturalmente presente por su ser como por su pensamiento
en toda una casa, en todo un Templo, en toda una ciudad, y, por milagro en los
puntos del espacio muy alejados uno del otro. Más los Ángeles son perfectos,
más es vasta su esfera natural de actividad y de presencia. Los Ángeles son
verdaderamente por encima del tiempo.
El autor cita una visión en estado de éxtasis de Santa Francisca romana donde
le fue revelado la creación y la santificación de los Ángeles. «Los Ángeles, dijo
ella, salían de las manos del Creador en hileras tan apretadas y tan espesas
que parecía ver una de estas nieves abundantes, pero de una blancura y de un
esplendor esplendente. Los Ángeles son inmaculados por naturaleza. »
El P. Charles salvado examina luego las diversidades de las gracias angélicas
:
Si, como Santo Tomás lo tiene pensado, cada Ángel forma una especie a
parte, las gracias de los Ángeles no se asemejan mas, ellas son infinitamente
diversas. Y el autor cita a P. Faber: «El Príncipe de la corte celeste, nuestro
Ángel guardián quien, en este mismo momento, está a nuestros costados, es, a
él solo, un mundo de gracia ; y que podría hablar dignamente de San Miguel,
de San Gabriel, de San Rafael y de las cuatro otras que se encuentran sin
cesar en presencia de Dios ? Trata de sondear este vasto abismo de la gracia
angélica a todos sus grados y en todos sus variedades.»
sin embargo, la gracia de los Ángeles fue acompañada de todos los dones
naturales.
Desde el origen, Jésus ha vivido en medio de los Ángeles y sobre todo desde
la encarnación.
Los Ángeles habiendo recibido el libre arbitrio, hubo, por cierto, un escollo ;
rechazando servir por orgullo, fue el Preludio de la caída de los Ángeles
rebeldes ; por el contrario, los buenos ángeles no habiendo resistido en la
orden establecida por Dios y no habiendo abusado de la primera gracia de
Dios, ellos obtuvieron de las gracias más abundantes.
y ahora veamos cómo nuestro autor comprende el ministerio de los Ángeles :
en principio, ellos asisten en la creación y en la santificación del hombre. Luego
ellos ven desarrollarse todo el Plan de Dios sobre la tierra; ellos están
inmiscuidos en toda nuestra historia. Su rol en el Antiguo Testamento, si se
pudiera escribirlo, será más interesante para nosotros que toda historia
humana. Cuanto el gozo de los Ángeles fue vivo al visitar a los patriarcas y de
inspirar a los profetas ! Uno no se imagina las alegrías del Ángel Gabriel
cuando él anuncia a María el gran misterio de la encarnación, y aquellas de las
legiones angélicas cuando ellas cantan sobre la cuna del divino Niño : «Gloria a
Dios en lo más alto de los cielos y paz sobre la tierra a los hombres de buena
voluntad». Sería necesario poder seguir los santos ángeles en cada misterio,
desde Noël justo hasta la Muerte de Nuestro Señor y a su Resurrección,
finalmente a su Ascension.
Sería necesario ver también con cual amor ellos asisten al nacimiento de la
Iglesia y se mezclan con su vida; cómo ellos se esparcen por el Mundo por
preparar las vías en la verdad y en la Vida divina en las almas. En cuanto a los
demonios, ellos son los exiliados perpetuos del amor. Perversos, ellos le están
en este punto que no uno solo, luego de una falta, no está arrepentido.
El autor expone de nuevo el rol de los Ángeles, ya sea : La contemplación
deliciosa de Dios que es su ocupación principal, y esto no solamente por los
Ángeles de la Jerarquía superior, o jerarquía de asistencia, sino por todos los
Ángeles.
para hablarse, los Ángeles no tienen que dirijir sus pensamientos hacia los
otros ángeles. Es como un rayo de luz espiritual y todo sigue su pensamiento
es comprendido. Así los buenos ángeles se iluminan los unos a los otros. Los
buenos ángeles se aman, porque hay en el cielo Potestades de ternura, de
devoción y de union, insospechables sobre la tierra; el amor de Dios circula en
medio de estos bienaventurados espíritus.
en el cielo, una lucha implacable ha comenzado entre los buenos y los malos
ángeles; ella continúa sin descanso sobre la tierra y se proseguirá hasta el
último día del mundo. En todas partes donde los ángeles malos no son tenidos
en falta por nuestras oraciones y por los buenos ángeles, ellos atizan en cada
uno de nosotros los malos pensamientos y los fuegos pasionales, porque ellos
trabajan para desunir a los pueblos, a hacer imposible su aproximación, a
fomentar entre ellos y en el seno de cada uno de ellos los malentendidos y los
odios. Oh! Que nosotros debemos implorar los santos ángeles afin que ellos
neutralicen esta acción cegadora y corruptora de los demonios !
y ahora abordamos la cuestión del rol de los Ángeles a nuestro respecto;
Los buenos ángeles tienen por nuestras almas el amor más tierno. Ellos
entienden nuestras oraciones , pero, entre todas las tareas de las que la
amistad de los santos ángeles se encarga a nuestro respecto, ninguna no es
más interesante que su rol de mensajeros de la tierra al cielo y del cielo en la
tierra, y, sobre la tierra de un alma a otras almas, aunque ellas mismas
estuviesen muy alejadas ; ellos las reúnen de nuevo de la tierra al purgatorio ;
finalmente su principal rol es aquel de guardianes ; sus buenos oficios son
prefigurados por la escalera vista por Jacob donde los Ángeles suben y
descienden en un flujo ininterrumpido.
Mencionamos el Ángel de la oración, señalado para venir a reunirse con
nuestras oraciones , gracias a su intervención, «nuestras oraciones suben, dijo
San Juan, de la mano del Ángel justo hasta el rostro de Dios » (Apo. 8,4).
Los Ángeles de nuevo traen los mensajes del cielo en la tierra: Mensajes de
luz, de perdón, de paz, de gozo, de consolación, de coraje, de fuerza; ellos son
los mensajeros de todas las gracias de las que podemos tener necesidad.
Los Ángeles se encargan de hablar a las almas alejadas que nosotros
querríamos alcanzar y esto les lleva un rayo celeste de caridad y de
consolación ; es interesante de retener que encontramos la misma afirmación,
emitida por un gran místico moderna, el Padre Pío, de las que nosotros
hablaremos más en detalle pronto (ver Chap. VIII, Sección VII).
Los Ángeles toman a cargo más particularmente tal nación, tal Iglesia, sin
embargo este amor y esta vigilancia de los santos ángeles sigue un plan fijado
y dirigido por Dios.
Ah! Que sería necesario orar a los Ángeles de los tabernáculos de suplir a
nuestras ausencias, a nuestras indiferencias, a nuestras languideces!
Lo que es cierto, es que no hay un alma que no tenga su ángel guardián. Así ,
no solamente cada uno de nosotros puede ser apadrinado por toda la corte
celeste, sino que tiene de nuevo su ángel particular. Ah! Si yo pienso mas en
esta conducta admirable de la Providencia, si yo forjara una íntima alianza con
este espíritu, elegido por Dios, para ser el mejor amigo de mi alma ! Oh! Cual
amistad nosotros deberíamos tener por nuestro Ángel guardián ! con cual
respeto nosotros deberíamos vivir en su presencia por no ofender este Príncipe
del cielo, tan noble y tan delicado ! En adición, nuestro buen Ángel quiere bien
ser también nuestro servidor ; él es Príncipe en la corte del Rey de la
humanidad, pero él es humilde ; nosotros podemos, sin temor de ofenderla,
solicitar en todas las cosas el socorro de este amigo fiel. El caracter de este
Ángel guardián responde tal vez al propio caracter de nuestra alma, por una
similitud de estado vibratorio. En cuanto aquellos que han elegido cumplir una
misión espiritual, religiosa o sacerdotal, de los Ángeles guardianes especiales
les son delegados. Hay de los Ángeles de la pureza, de la paciencia, de la
dulzura, de la Luz y de la caridad ; invoca entonces estos ángeles, afin de
aspirar a sus cualidades !
Se debe pensar mas a su ángel guardián afin de morar continuamente bajo su
protección y afin de poder aprovechar de sus consejos.
en cuanto a los demonios, su tarea se limita a insuflar el odio de Dios en
nuestras almas. No es necesario perder de vista que la potencia natural de los
demonios es espantosa.
Finalmente, último punto para estudiar : el rol de los Ángeles en relación del
mundo inferior.
Los santos ángeles, bien que ellos no pierden jamás de vista el rostro de Dios,
llenaron la Naturaleza material : “Pleni sunt coeli y terra gloria tua”. Los cielos y
la tierra son llenos de tu gloria!
Los Ángeles gobiernan el Mundo material; ellos son depositarios de la antigua
tradición , confirmada por Jesús-Cristo. Todos los Doctores de la Ley, enseñan
que los Ángeles ejercen una acción y una suerte de intendencia sobre el
Mundo exterior y sensible. Ellos presiden al movimiento de las esferas de las
que ellos son tal vez las Leyes vivientes. En el seno del mundo material, con
frecuencia los santos ángeles obtienen pequeños milagros en respuesta a
nuestras oraciones. Él es natural que nosotros seamos ayudados por ellos
desde que ellos son poderosos y que somos los hermanos sin poder. El Ángel
Rafael, entre todos los Ángeles es el médico celeste. A retener su salutación a
Tobías : «Que el gozo esté siempre contigo !» paz y gozo, he allí eso que los
santos ángeles nos traen ; también, nosotros debemos mucho pensar en los
Ángeles e invocarlos cada día con la Iglesia :
Omnes angeli y arcángel li intercedite pro nobis.
Vosotros todos los Ángeles, Arcángeles, interceded en nuestro favor !
Es necesario ser reconociendo al P. Charles salvado por esta útil y clara
síntesis que ha hecha para presentar la naturaleza y el ministerio de los
Ángeles.
*
**
SECCIÓN VII:
El Dr. Rozier y la angelología
El Dr. F. Rozier fue un ocultista muy advertido, habiendo estudiado a fondo las
posibilidades de las ciencias métanormales; él ha consignado su posición en
frente de lo oculto en un libro que merece ser leído y meditado: “Las Potencias
invisibles, los Dioses, los Ángeles, los santos, los Egrégoros”, Santa Filomena
(C. Chaumont, Paris 1907). En esta exposición rica en documentos y en
exámenes resumidos sobre el Mundo del Más Allá, hay mucho para escarbar.
Nosotros haremos sin embargo una restricción ; él nos parece que el Dr. Rozier
se muestra injusto hacia al buen Cura de Ars quien, según él, no habría tenido
el coraje de mantener su condenación de Maximin, el pastor de la Salette;
nuestro Doctor estima que la aparición de la Virgen en la Salette es una
superchería fomentada por el sacerdocio ! es lamentable que un ocultista tan
bién documentado sobre otros temas, haya cometido un error tal, al negar al
Cura de Ars cuya devoción a Santa Filomena hubiera debido preservarlo de los
relámpagos del Dr Rozier, puesto que este último también se reclama de la
protección y de la inspiración diaria de la misma Santa.
Un punto a retener, a este sujeto : el Dr. Rozier nos confía que ha tenido la
infelicidad de perder sus padres muy pronto. Él no ha debido tener jamás
conocido las caricias de una madre ; él dijo en efecto: «Desde mi infancia, yo
he sentido la presencia de Dios, yo lo he amado y yo he aspirado a Él. Yo he
sentido toda mi vida la necesidad de amar y de ser amado... Pero alguien me
ha dado las consolaciones, me ha lisonjeado y ha impedido mi corazón de
desecarse. Yo ví algunas veces, muy raramente a mi pesar, una joven persona,
muy bella, que me tomó por la mano, sonriéndome. Yo no se quien era ella, y
je no me preocupaba. Esto no es que bien más tarde que yo supe que esta
protectora era Santa Filomena ». De donde la grande admiración y devoción
del Doctor por esta Santa ; y el autor precisa además: «A partir del momento
donde ella me ha debido alcanzar en su santuario, los milagros, o al menos lo
que se denominan de este nombre, se han sucedido sin interrupción». Y señala
notablemente un gran número de curaciones obtenidas en casos parecidos, a
la vista humana, desesperados.
a los dichos del doctor, cuando Santa Filomena viene a Él, ella es
acompañada de Serafines y otros ángeles de los diferentes coros.
El Dr. Rozier, cristiano convencido, por experiencia personal vivida, ocultista,
psiquista, espiritualista y místico, desde su introducción a su obra, dira: «Nada
aleja los espíritus (sean los Ángeles) como el no ocuparse de ellos».
luego el Doctor precisará: «De todo tiempos se ha constatado, no solamente
que hay de las inteligencias en lo invisible, mas; de nuevo que había de
diferentes naturalezas, y que ellas tenían una cierta potencia, variable según su
naturaleza. Uno se da cuenta que estas inteligencias se ocupan de nosotros...»
Los espíritus son numerosos, mucho más numerosos que los hombres ; ellos
se dividen en un gran número de clases y el Dr. Rozier da dos imágenes
interesantes resumiendo la angelología de los hebreos y la angelología
cristiana.
Angeología Cristiana
Entre los místicos, estos son aquellos o aquellas que han llevado en su carne
los estigmas de Cristo que han sido favorecidos de múltiples Visiones y
coloquios tanto angélicos como divinos. Nosotros vamos a dar un ejemplo
típico resumiendo la Vida extraordinaria de Ana -Catarina Emmerich, mística
quien, desde su más joven edad, tuvo encuentros constantes con su ángel
guardián. Existe una amplia literatura proponiéndonos de seguir día a día el
desarrollo espiritual de esta mística que termina por recibir los estigmas con
todos los dolores físicos y morales que les acompañan, sin olvidar los
hostigamientos y servicios de las autoridades materialistas de la época.
Para tener claro sobre este caso, vale la pena leer las obras siguientes :
Vida de Ana -Catarina Emmerich, por el P. E. Schmoeger, traducción Francesa
por E. De Cazès; 3 vol. in-8. Paris, 1868-1872.
Vida maravillosa, interior y exterior de Ana -Catarina Emmerich, por el P.
Tomás Wegener, 0. S. Aug. Postulador de la causa de beatificación. Paris
1894.
Vida de Nuestro Señor Jesús Cristo según las Visiones de Ana -Catarina
Emmerich, religiosa agustina del convento de Dulmen, recogida por Clemente
Brentano. Paris s. D. (1858), 6 vol. in-12.
Visiones de Ana -Catarina Emmerich sobre la Vida de nuestro Señor Jesús
Cristo y de la Muy santa Virgen, por el R. P Fr. José -Alvare Duley, trad. fr. Por
Ch. De Ebeling; 3 vol in-8, Paris 1930.
La Vida y las tribulaciones de esta mística son tan extraordinarias que el lector
tendrá todo para ganar tomando conocimiento de estas obras ricas en efectos
bien observados y en documentos de primera mano.
Anne-Catarina nació el 8 septiembre 1774, en la aldea de Flamske, cerca de
Coesfeld, país de Munster. Sus padres eran de pobres paisanos que apenas
tenían para vivir del producto de su pedazo de tierra; la familia, profundamente
religiosa, asistía regularmente a los oficios.
He aquí cómo Anne-Catherine, en una visión del 8 septiembre 1821, describe
los sentimientos que ella tuvo en su nacimiento y en la época de su bautismo :
Yo me sentía un niño recién nacido... Yo tenía verguenza de sentirme tan
pequeña, tan débil y de ser sin embargo tan anciana...
Yo me sentía con la plena conciencia de mí misma llevada durante todo el
camino desde nuestra casa de campo en Flamske justo hasta la Iglesia
parroquial de Santo Santiago en Coesteld; yo siento todo y yo ví a todo
alrededor de mí. Yo vi realizarse en mí todas las Santas ceremonias del
bautismo y mis ojos y mi corazón se abrieron de una manera maravillosa. Yo vi,
cuando yo fui bautizada, mi Ángel guardián y mis patronas, Santa Ana y Santa
Catarina asistir para la administración del Santo bautismo, yo vi la Madre de
Dios con el pequeño niño Jésus y yo fui casada con él por la presentación de
un anillo.
Imbuidos de nuestras ideas modernas que pretenden explicar todo, la ciencia
experimental, en la sicología, en el sicoanálisis, él será tentado de considerar
las Visiones de Ana -Catarina como pura confabulación histerica o necesidad
de hacer hablar de ella ; y sin embargo, aquellos que la han examinado sin
tomar partido, notablemente Clemente Brentano, concuerdan en decir que ella
era incapaz de toda trampa : «ella dijo todas estas cosas , acuerdan ellos en
observar, con la inocencia de un niño inocente que haría la descripción de su
jardín». No es necesario perder de vista esta consideración cuando se trata de
apreciar las múltiples Visiones de esta mística.
Un día, una piadosa viuda pregunta a Lydwine de ver su ángel; nuestra mística
dirige un instante una oración a Dios para que él autorice esta manifestación ;
el permiso fue acordado y la viuda vio al ángel, vestido de blancas vestimentas,
más blancas que la nieve ; ella fue asombrada por la visión del ángel, recuerda
de una dulzura inefable.
Menos macabra fue la visita que hizo a Lydwine el Dr. Godfried de Haga. Este
médico, de los más caritativos, había tomado la grande ley del equilibrio divino.
Él vino un día a la cabeza de la cama de Lydwine. Fue el único que vió justo en
este caso. Él declara sin ambages que la paciente no requería de un
tratamiento médico material, porque como Paracelso, él estimaba y dijo : « Es
necesario saber que toda enfermedad es una expiación y que si Dios no la
considera como terminada, ninguna medicina puede interrumpirla... El médico
no cura mas que si su intervención coincide con el fin de la expiación
determinada por el Señor.
CAPÍTULO VIII
La angelología en el Siglo Veinte
Sección 1:
El Ábate P. Feigne, «El Ángel Guardián »,
Ejercicio en treinta Meditaciones, dedicado a las Almas piadosas (P. Téquien,
Paris 1910)
*
0 María, yo tomo la resolución de agradecer a mi buen ángel, muchas veces
en el día, de su grande bondad a mi respecto.
*
0 María, yo tomo la resolución de hacer hoy todas mis oraciones en union con
mi buen Ángel y con un fervor todo particular.
*
0 María, yo tomo la resolución de pedir muchas veces hoy a mi Ángel guardián
de venir en mi ayuda al momento de la muerte.
*
0 María, yo tomo la resolución de pasar lo más santamente posible este nuevo
día, afin de testimoniar bien mi amor a mi Ángel guardián.
*
0 María, yo tomo la resolución de evitar hoy todo pecado, el mas venial, por
respeto a mi Ángel guardián, y de examinarme seriamente esta noche sobre la
manera en la que yo habría cumplido mi resolución.
*
0 María, yo tomo la resolución de decir mi rosario hoy para agradecer a mi
Ángel guardián de su bondad hacia mí.
*
0 María, yo tomo la resolución de invocar mi Ángel guardián antes de las
principales acciones de este nuevo día.
*
0 María, yo tomo la resolución de ser hoy un modelo de ayuda hacia todo el
mundo, y de imponerme esta noche una penitencia, si yo no he sido fiel a mi
resolución.
*
0 María, yo tomo la resolución de invocar el Ángel guardián de las personas
con las cuales yo estaré en relación hoy.
*
0 María, yo tomo la resolución de recordarme muchas veces en la jornada la
humildad de mi Ángel guardián y estas cuatro verdades :
Yo no soy nada...
Yo no tengo nada...
Yo no pido nada...
Yo no quiero nada...
Esta lección de humildad está en perfecto acuerdo con la enseñanza de Cristo
y con aquella del Maestro Felipe.
Se lo ve, los motivos de buenas resoluciones a poner de acuerdo con la
devoción a los Ángeles no faltan.Y para terminar, detengámonos en esta
reflexión del Ábate Feigne:
«Eh bien! Aunque la Iglesia no ha hecho de nuevo de esta consolante e
indiscutible verdad un dogma de fe, sin embargo ella creyó y enseña que todos
nosotros tenemos un Ángel guardián. Mirad el celo cuando ella despliega para
afirmar la fé de sus hijos en la existencia y en los buenos oficios de estos
espíritus Bienaventurados. Mirad con cual entusiasmo ella celebra cada año la
fiesta de los Ángeles guardianes. Mirad como ella es feliz de aprobar, de
recomendar, de enriquecer de indulgencias las oraciones, las asociaciones en
su honor.
Sección II:
«El Mundo de los Espíritus », por Irmin Sylvan
(H. Daragon, Paris 1910)
M. Sylvan desea sobre todo presentar el rol que los buenos y los ángeles
malos juegan en el universo. A ejemplo de Santo Tomás de Aquino, el autor
procederá por preguntas y por respuestas, como en el catecismo.
Los Ángeles pueden percibir la razón de las cosas, en Dios, y según que ellas
emanan de Dios, primero y universal principio. Es el Privilegio de la primera
Jerarquía.
Los Ángeles pueden percibir la razón de las cosas en las causas universales
creadas, que se denominan «leyes generales» de la naturaleza. Es la categoría
de espíritus formando la segunda Jerarquía.
Los Ángeles pueden percibir estas razones en las Leyes particulares que rigen
las creaturas o causas segundas aplicadas a los seres individuales
provenientes de estas causas. Así conocen los espíritus de la tercera
Jerarquía.
Esta organización jerárquica sagrada tiende a un solo objetivo : la
manifestación de las luces eternas, la purificación de las inteligencias y su
perfeccionamiento. Para llegar a este fin, tres operaciones son necesarias :
primero la consideración del fin de todas las cosas ; ella perteneciendo en la
primera Jerarquía, inundada inmediatamente de la claridad infinita de Dios ; en
segundo lugar, la disposición universal de los medios generales por su
realización ; ella es atribuida a la segunda Jerarquía que ejerce una alta
inspección y una jurisdicción general; en tercer lugar, la puesta en obra o la
ejecución actual de los medios ordenados y fijados en el Plan de la sabiduría
increada ; es la parte de la tercera Jerarquía.
Las luces, extraídas del seno de Dios mismo, por los espíritus superiores, son
comunicadas a aquellos de la segunda Jerarquía, transpuestas luego a los
Ángeles de la tercera. A estos es encargada la misión de enseñarlas a los
hombres. Es en este intercambio de luz y de acción, es en esta comunicación
no interrumpida de los fuegos celestes, es en este fluido incesante y por la Vida
que desciende de la fuente imperecedera y divina y pasa de una Jerarquía a la
otra que consiste toda la perfección angélica.
Se puede resumir estas nociones como sigue:
Primera Jerarquía
El Privilegio dado a esta Jerarquía es de ser siempre cerca de la adorable
esencia divina para contemplar, amar, cantar sus encantos infinitos. Esta
Jerarquía comprende:
Los Serafines
Serafin es una palabra hebrea en plural. El singular «séraph» significa
encendido, inflamado. Estas celestes criaturas, las más sublimes que Dios ha
extraído de la nada, deben su nombre a las llamas de su amor. Puestos en la
cima del Mundo angélico, los Serafines tocan, tanto como lo finito puede tocar
hasta lo infinito, a la Trinidad divina, amor por esencia y hogar de todo amor.
Ellos están delante del Ser Supremo como tizones ardientes, que no se
consumen jamás y cuyas llamas abrazan todo aquello que los rodea.
Los Querubines
Querubines es una palabra hebrea en plural. El singular «chénib» significa
etimológicamente lleno de sabiduría según los unos y lleno de intrepidez según
los otros. Los Querubines son los príncipes de la ciencia. Según San Dionisio,
este nombre designa cuatro cosas : primeramente, que estos espíritus ven Dios
perfectamente ; segundo, que ellos reciben esta luz plenamente e
inmediatamente ; en tercer lugar, que ellos contemplan en él la belleza de la
creación entera, tal como ella es concebida en el pensamiento divino; cuarto,
que la plenitud de su ciencia se expande sobre la corte celeste de ríos de luz.
Ellos son hechos depositarios de los secretos de Dios para que ellos puedan
comunicarlos en tiempos oportunos, a los Ángeles inferiores que tienen por
misión manifestarlos a los hombres.
Los Tronos
Esta palabra viene del griego thronos, asiento. Los Tronos son así llamados
porque ellos están como la nube de perfume sobre la cual reside el Eterno.
Elevación, belleza, solidez, tales son las tres ideas que presenta para el
espíritu el nombre de «trono», sobre el cual se colocan los monarcas en las
ocasiones solemnes. Ningún nombre puede mejor convenir al tercer orden de
la primera Jerarquía. Ellos son Tronos, porque, brillantes de belleza, dominan
los coros de las otras Jerarquías, ellos están inmediatamente por encima de la
majestad formidable de Dios, y semejan ser el trono sobre el cual ella se
reposa eternamente.
Segunda Jerarquía
La segunda Jerarquía angélica comprende los Ángeles que se ocupan del
mundo. Estos ángeles disponen de los medios generales que concurren a este
gobierno. Ellos tienen sobre los Coros inferiores una alta inspección y
jurisdicciones generales. Los coros de esta Jerarquías son:
Las Dominaciones
Del latin dominus Maestro superior, jefe.
Las Dominaciones, como su nombre lo indica, están a la cabeza de los
administradores. La responsabilidad de la inmensa administración del Universo
pesa sobre ellos. Animados del ardiente deseo de secundar la misericordiosa
Providencia de Dios y de contribuir por una parte al establecimiento de su reino
sobre todas las criaturas, ellos no escatiman ni su celo, ni sus esfuerzos por
alcanzar este objetivo. Sin embargo, ellos gozan, en su alto empleo, de una
calma celeste y divina. De allí esta libertad perfecta, alejada de la sujeción
degradante tanto como de la opresión tiránica. De allí este gobierno firme y
derecho que no se deja arrastrar ni a las debilidades, ni al despotismo. De allí
esta soberana abnegación que vio Dios al cabo de todas sus obras.
Los Principados
Esta palabra viene del latin, «princeps» que quiere decir príncipe, soberano
militar.
A los Principados es encargada una plena autoridad sobre los imperios, los
Reinos, las naciones ; ellos asumen la realización de los designios de Dios
sobre toda la familia humana. Su nombre nos hizo comprender que ellos
ejercen una jurisdicción general sobre las Órdenes angélicas puestos por
encima de ellos. Ellos son los príncipes y los jefes de la milicia celeste ; ellos
representan los oficiales superiores que comandan las grandes evoluciones a
los oficiales subalternos, que siguen las prescripciones del general en jefe.
Estos ángeles ejercen un gran poder sobre los demonios más malvados. Ellos
son los defensores de la Iglesia y deshacen los complots que la infidelidad
urdió contra ella.
Las Virtudes
Virtud, viene de vis. Virtus, que significa, en latin, fuerza, energía, coraje
masculino; en griego, dunamis: dinamismo, potencia.
Las Virtudes ejercen en un alto grado bajo el consentimiento de Dios, un
imperio maravilloso sobre la naturaleza corporal. Es a estos espíritus quien
está atribuida la potencia de los milagros. Su nombre expresa el vigor
masculino e inquebrantable que ellos despliegan, primero, para cumplir todas
las funciones que Dios les asigna, y, en este caso, nada puede resistirle ; luego
por recibir todas las luces que le vienen de lo alto, se aproxima a Dios sin
temor, lo que supone una gran fuerza de alma. Las Virtudes presiden
inmediatamente el mantenimiento de las leyes que rigen la creación material, y
gobiernan el orden que nosotros admiramos. Cuando la gloria de Dios lo exige,
las Virtudes, como nosotros lo hemos dicho, suspenden el curso de estas leyes
y operan los milagros.
Tercera Jerarquía
La tercera Jerarquía comprende los Ángeles ejecutores ordinarios de los
decretos divinos ; estos ángeles tienen por función la puesta en obra, o la
ejecución actual de los medios ordenados y fijados en el Plan de la sabiduría
increada. Esta Jerarquía comprende:
Las Potencias
En latin «potestates» de «potens», fuertes, poderosos.
Las Potencias participan de los dones hechos a los Ángeles de las dos
primeras categorías, en un grado inferior. Nosotros los compararemos a los
oficiales de tercer orden, encargados de vigilar y de favorecer a la ejecución de
las leyes del Supremo Legislador ; en las provincias que componen un Reino,
vigilar la seguridad de los habitantes, rechazar los ataques de los enemigos
particulares que quieren los bienes, en la libertad, en la seguridad de las villas
por cuyo gobierno les son compartidas. A ellos pertenecen el cuidado de vigilar
a elección los hombres llamados a llenar puestos eminentes, en la Iglesia o en
el Estado. Estos son los guardianes de las villas, de las sociedades, de las
comunidades piadosas, de la Salud y de los bienes de la tierra.
Los Arcángeles
Esta palabra es compuesta de dos expresiones griegas : “archôn” que significa
jefe, y “aggelos” que quiere decir enviado, mensajero.
Los Arcángeles son los príncipes de los Ángeles ; los mensajeros
extraordinarios de Dios ; sus enviados en las circunstancias importantes. A
ellos es confiado el ministerio más elevado en la asistencia actual cuya Iglesia
tiene necesidad para la revelación de los misterios de la fe. Ellos asisten los
asuntos superiores en el gobierno y la dirección de sus subordinados. La
castidad y la pureza son Virtudes amadas por los Arcángeles. Ellos elevan el
Espíritu y el corazón de los fieles hacia las cosas celestes, y desdeñan que
vuelvan a los bienes y a los placeres de aquí abajo. Ellos son los guardianes de
las Vírgenes, de las viudas castas, de las familias donde reina la piedad, la
modestia, la decencia, las buenas costumbres. Ellos nos defienden contra los
demonios tan formidables de la lujuria.
Los Ángeles
Del griego “aggelos”, que significa enviado, mensajero.
En relación inmediata y habitual con el hombre, los Ángeles vigilan para
custodiar nuestra doble vida (vida del cuerpo y vida del alma ); ellos nos traen
para cada hora, para cada instante, las luces, las fuerzas, las gracias de las
que nosotros tenemos necesidad, desde el nacimiento justo hasta la tumba. Es
en este orden que se reclutan los Ángeles guardianes.
Se observarà que en esta enumeración de los atributos de los Coros, los
Principados , las Virtudes y las Potencias no ocupan el lugar indicado por la
mayoría de los autores. Eso, por lo demás, no disminuye en nada el valor de
esta exposición sintética de los atributos de los nueve Coros.
Es generalmente admitido que cada hombre tiene su ángel guardián ; parece
aùn mismo que muchos ángeles pueden sucederse en la protección del mismo
hombre, así que le fue revelado a la visionaria María Lataste y a otros místicas.
Los Ángeles guardianes protegieron mismo nuestros cuerpos físicos, alejando
de nosotros los peligros que lo amenazaban y preservándonos de una multitud
de accidentes. Nosotros veremos un ejemplo típico cuando nosotros
hablaremos de las experiencias del P. Lamy con el Mundo de los Ángeles.
Nuestro Ángel guardián impide los demonios de nos perjudiquen. Ellos
sugieren piadosos pensamientos para hacer el bien y evitar el mal, y sobretodo,
ellos llevan nuestras oraciones a Dios. La dignidad de los Ángeles guardianes
varía con la dignidad de aquel del que él se ocupa ; hay entonces grados
diversos en la dignidad de los Ángeles guardianes. Los religiosos tienen un
Ángel guardián de un grado superior a aquel de un simple cristiano.
Luego de haber estudiado el ministerio con los buenos ángeles, Sylvan se
ocupa al problema de los Espíritus malos y de sus obras nefastas. En efecto, la
Escritura Santa y la Tradiciones son unánimes en afirmar la existencia de
espíritus malos que no son otros que los Ángeles repulsivos. Y he aquí la
diferencia que hay entre los buenos y los malos ángeles: Los buenos ángeles
se encuentran unidos a Dios, quien es el Principe iluminador de su inteligencia
y el Principe Director de sus operaciones, al mismo tiempo que el fin donde
viene a lograr toda su actividad. Los malos ángeles, por el contrario, no reciben
de Dios ninguna iluminación ; y, tomando todo en él su actividad como toda
criatura, ellos van en contra del plan divino que ellos intentan sublevar sin
poder tener éxito.
SECCIÓN III:
«La Misión de los Ángeles sobre el Plano terrestre y en el Más Allá »,
por Mme Joy Snell (Jeheber, Ginebra, 1935)
Mme Joy Snell es una enfermera quien, desde su infancia, tuvo la facultad de
ver los espíritus y los Ángeles y hablar con ellos; ella recibió muchas
enseñanzas sobre las modalidades de la Vida en el Más Allá. He aquí cómo
ella narra su primera experiencia en la materia :
«Es a la edad de doce años que tuvo lugar la primera de mis numerosas y
curiosas experiencias, que me han probado que por momentos yo veo cosas
invisibles y que yo escucho cosas imperceptibles en la mayoría de los
humanos... Una noche, despertándome, yo vi la cámara inundada de una luz
brillante como el sol y saturada de un perfume de flores jamás respirado sobre
la tierra. Yo escuché un ruido parecido al batir de alas y de golpe yo vi dos
formas espiritualizadas en medio de la habitación... Sus vestimentas eran de un
blanco inmaculado.»
Es interesante leer el prólogo que el Vicario de Brockenhurst, Arthur
Chambers, ha escrito para presentar el libro de Mme Snell:
Todo hombre que creyó en las afirmaciones de la Biblia y en las enseñanzas
de Nuestro Señor Jesús Cristo es forzado de aceptar el hecho que existe una
intervención de los Ángeles.
Su misión cerca de la humanidad, y especialmente en la Vida de Cristo, es
inseparable de las enseñanzas de la Biblia.
Pero hay muchos cristianos que no conocen mas que imperfectamente esta
verdad. Ellos creían que han habido manifestaciones de ángeles en la Navidad,
en la Tentación, en la Transfiguration, en la Muerte y en la Resurrección... Pero
que todo aquello ha pasado hace muy largo tiempo. La creencia en un
ministerio de los Ángeles parece no tener mas que poco o nada de valor
práctico cuando se trata de experiencias contemporaneas... Y sin embargo, la
misión de los Ángeles no es un hecho menos actual que lo que era en los
tiempos de los autores de la Biblia.
Yo creo que ningún lector atento y receptivo dejará de leer esta narración de
experiencias personales... Sin darnos cuenta mas del amor y la solicitud de
Dios, el Padre, por sus criaturas.
Esta opinion de un religioso, sobre el libro de Mme Snell y sobre su valor, nos
indica ya toda la cantidad de experiencias del autor que son de naturaleza para
revelar en nosotros el interés que se debe tener en la misión de los Ángeles
sobre la tierra y al Más Allá. Como nosotros ya lo hemos hecho resaltar, Mme
Snell ha estado en relación directa con los planos del Más Allá y con los seres
que lo habitan ; ella ha igualmente visto en muchas partes a su ángel guardián
que le ha hablado y revelado ciertos misterios del otro mundo. Entonces
cuando joven de nuevo y sin experiencia en estas materias, ella pensaba que
estas visiones eran un presagio de muerte, ella se confia a una vieja amiga que
era igualmente una Vidente ; ella le dijo, basándose sobre su propia
experiencia : «Aquellos que Dios ha elegido están bien custodiados; tu no
tienes nada que temer ; pero yo te consolaré cuidando estas cosas para tí.
Considéralas como un depósito sagrado ; hay pocas personas que las
comprenderían.»
Constantemente, Mme Snell sentía la presencia de su ángel guardián que la
consolaba y la socorría en toda ocasión, pero escuchémosla mas bien :
Yo siento la dulce dirección de mi guardián invisible. Con frecuencia yo me
daba cuenta que este era él que me ayudaba en tareas muy pesadas y me
impedía cometer imprudencias en mi ardor por aliviar algún enfermo. A veces
me parecía que una mano se posaba sobre la mía para impedir un gesto muy
vivo. En otros momentos, una voz murmuraba en mi oreja : «No lo hagas así ;
hazlo como te digo!» instantaneamente yo comprendía eso que yo tenía que
hacer.
Mme Snell narra un hecho típico de asistencia del Ángel sanador en un caso
que, a la vista humana, parecía desesperado. Se trataba de una mujer
gravemente accidentada ; el médico, luego del examen, había declarado la
Muerte imminente; pero como la enfermera se inclinaba sobre la enferma para
prodigarle sus cuidados, ella vio al Ángel aparecer a la cabeza del lecho, la
mano levantada, promesa de curación ; y Mme Snell precisará:
Los Ángeles me han dicho que los espíritus, luego de haber arrojado la
envoltura terrestre, entran en la esfera de existencia correspondiente a su
estado de evolución. Esto corresponde a una ley en la cual todos los espíritus
deben obedecer, y que se podría comparar a la ley de la gravitación sobre la
tierra. La Vida llevada aquí abajo determinará el adelanto o el retroceso allí en
lo alto. Si ella ha sido buena, el Espíritu entrará a una esfera de reposo y de
felicidad donde él podrá progresar. Luego de una vida malvada, el Espíritu
deberá sufrir, porque se recoge siempre eso que se ha sembrado. Hay
diferentes esferas de purificación.
Está allí perfectamente descrita la ley de karma, bien conocida de los Hindúes
y de los ocultistas. Pero la condenación no es sin retorno y el Ángel dira a Mme
Snell: «Un tiempo vendrá, más o menos lejano, para estas almas cautivas,
donde ellas tendrán una nueva ocasión de salud y la posibilidad de encontrar la
paz ». Alusión a la ley de reencarnación.
Una noche, nuestra Vidente fue introducida, siempre en cuerpo astral, por su
Guía, en un templo del Parque Celeste, sirviendo a los Ángeles como templo
de meditación ; ellos estaban reunidos muy numerosos y recibían de parte del
Muy Alto todo aquello que enriquecía al alma ; vestidos de blanco y brillantes
de luz, ellos cantaban himnos gloriosos, traduciendo los sentimientos que les
animaban. Luego llenos del amor divino, estos ángeles tienen por misión de
revelar al Hombre el sentido de este amor.
En conclusion, como sigue a su experiencia, Mme Snell proclamará su
creencia en la asistencia continua de los Ángeles y notablemente del Ángel
guardián : «Gracias a los dones síquicos extraordinarios, dirá ella, que yo tengo
el Privilegio de poseer, yo he podido hablar de las revelaciones recibidas sobre
la misión de los Ángeles, sobre la tierra y el Más Allá. Pero la comprensión de
las cosas síquicas no es obligatoria por las experiencias que yo he hecho, y el
socorro de los Ángeles es acordado a todos. » En efecto, el rol de los Ángeles
es «de inspirar a los hombres la fé así que de buenos y caritativos
pensamientos».
Y retengamos de nuevo esta seguridad consolante: «Nuestros pesares serían
aliviados aquí abajo, y la Vida iluminada, si nosotros podemos darnos cuenta
de la presencia de los Ángeles que nos rodean... Su ayuda nos será preciosa
para librar el buen combate... Dios ama a todas sus criaturas de un mismo
amor y sus ángeles están al servicio de todos... Pocos hombres se dan cuenta
de donde les viene tal pensamiento luminoso, que renueva la esperanza y
vuelve a dar coraje para rehacer el juego. Si los hombres sienten que ellos
están siempre acompañados de ángeles, las tentaciones serían más fácilmente
vencidas; su espíritu evolucionaría y ellos estarían llenos de paz.
Finalmente, última enseñanza del Ángel guardián : «Si los infelices habitantes
de la tierra sienten cual ayuda y cual consolación ellos podrían obtener de sus
ángeles, su escepticismo será cambiado en júbilo y sus problemas serían
disipados. Ellos realizarían el amor infinito de Dios y comprenderían que «el
Reino de Dios está dentro de ellos ».
SECCIÓN IVa:
«ÁNGELES:», por el P. Régamey
(Ediciones Pedro Tisné, Paris 1946)
«Yo tengo un Ángel guardián increíble! él es de nuevo más maligno que yo, mi
viejo ! Yo soy custodiado. Yo no logro escapar de su custodia. Tres veces yo lo
he sentido aferrarme, me ha atrapado en la voluntad, para los hechos
meditados, preparados, queridos. Él tiene trucos increíbles.»
Esta confesión de Péguy sugiere al P. Régamey algunas reflexiones :
Por lo ordinario, el Ángel guardián es más discreto, pero no menos eficaz. Él
nos presta servicios. Ríe, si tú quieres. Mejor valdría que, viviendo en confianza
con este amigo divino, fueses tú mismo a constatar sus atenciones. Pasa por la
autosugestión, cuando es a él que se pone para ser sacado del sueño a
tiempo, porque la asonada del despertar es interrumpida. Pero la frecuencia y
la precisión de los reencuentros que él arregla, cuando se le ora y que se
trabaja por la gloria de Dios !... Cuantos de entre nosotros, que trabajan en vivir
como hijos de Dios, pueden testimoniar de esta que él combina, cuando
nosotros lo vemos aparecer delante nuestro! Los males de los que él nos saca
y las afirmaciones que él arregla nos deben dar una idea de su servicio
espiritual, que nos importe bien mas, a él y a nosotros.
En su estudio intitulado «Vistazos sobre la sicología de los Ángeles », el autor
emitió algunas proposiciones para recordar : «Con los Ángeles, en lugar de
haber asunto en las inteligencias que dependen como las nuestras, de los
sentidos, es necesario fuertemente figurarnos como puros espíritus, cuyo
conocimiento ordena las cosas sensibles. Para nosotros que somos Espíritus
encarnados, todo debe pasar por nuestros sentidos, mientras que un puro
espíritu recibió todo de la inteligencia suprema, de Dios.
El conocimiento del Ángel se asemeja a aquella de Dios, en eso que en cada
uno de sus conceptos todas las nociones particulares que este concepto
abrace le aparecen de una manera clara y distinta, esto en los grados menores
al suyo y a medida que se desciende en el orden de las jerarquías el
conocimiento angélico se hizo por un modo intuitivo y perfecto. La historia del
Ángel mismo es una sucesión de actos espirituales.
Los Ángeles han recibido por reino, la más humilde de las mujeres de la tierra,
la Virgen María. En cuanto a su jefe, el Cristo triunfante, los Ángeles la han
visto elevándose a través de todos sus coros.
Es una creencia común de la Iglesia, que los santos están mezclados con los
Ángeles en sus diferentes coros. El último día del mundo, el Cristo enviará sus
ángeles con una trompeta retintineante y ellos separarán los buenos de los
malvados. A este propósito, el P. Régamey muestra un tema gótico del fin de
los tiempos ; él no es bíblico, pero es interesante por ciertas aproximaciones
que se puede hacer con las creencias de la Grecia y del Egipto : es San Miguel
que pesará las almas y su prototipo es Anubis teniendo la balanza.
En el fin de los tiempos, nosotros veremos en el triunfo completo de la verdad,
la acción benefactora de los Ángeles. Entonces, en comunión con el universo
que nos será finalmente un paraíso, en la luz divina, gustaremos con los
Ángeles «la gloriosa libertad de los niños de Dios ».
Cómo tantas almas cristianas pueden mostrarse tan mezquinas, tan encogidas
en la preocupación de su pequeña historia individual. La fé en los Ángeles
debería hacer imposible la «espiritualidad» sin horizonte de los hombres. Los
Ángeles nos dicen que nosotros tenemos un alma y que tenemos que salvarla.
Los Ángeles abren todas nuestras ventanas. Ellos nos ponen fuera ;
haciéndonos salir de nosotros mismos, ellos nos hacen ver nuestro pequeño
asunto en el gran plan de la Salud. Nos bañamos en un inmenso medio divino
que nos sostiene, nos lleva, nos empuja, nos enseña, nos penetra, nos
alimenta ; un medio de vivientes afectuosos... Estamos «en espectáculos a los
ángeles ». Mas, nosotros estamos asociados : ellos y nosotros, somos
«compañeros de servicio ».
Capítulo Octavo
Sección IVb;
Pie-Raimundo Régamey, 0. P.:
Los Ángeles en el cielo y entre nosotros,
Paris 1961
El mismo autor, doce años más tarde, volverá sobre el tema y hará aparecer
en las Ediciones Artema Fayard, en la Enciclopedia del católico del XXe siglo,
colección Yo sé - Yo creo, un estudio teniendo por título : Los Ángeles en el
cielo y entre nosotros (imprimatur, déc. 1958, salido de imprenta julio 1961).
un golpe de ojo sobre la tabla de materias enseñará sobre la importancia de
este nuevo estudio de angelología moderna por un sabio teólogo.
«No se puede iniciar el estudio de este mundo invisible de los Espíritus sin
comenzar por ver quien hizo el problema y cómo. Los no cristianos no son los
únicos en dudar o en negarlo. Él es, para muchos «fieles », una de estas zonas
de increencia que ellos dejaban extenderse peligrosamente en ellos. Cuantos
van justo hasta pensar que la Iglesia, continuando en enseñar esta existencia,
es la esclava de viejas costumbres...
Hay que reconocer la fuerza de las dificultades que esta afirmación (la
existencia de los Ángeles ) supone. Es necesario situarlas, precisarlas. Y es
necesario hacer poner conciencia de esto que, por un gran parte, ellas
proceden de una enfermedad del sentido espiritual. Justamente, la doctrina
cristiana relativa a los Ángeles debe entregar ciertas virtualidades de nuestro
espíritu muy generalmente ignoradas, anonadadas.
A propósito del Ángel o de los Ángeles del Santuario, Péladan ha tenido esta
palabra verdaderamente iluminativa : «El templo no es solamente el lugar del
milagro, él es también el lugar del maestro de obra, donde los Ángeles habitan,
reciben y reconfortan tanto a los piadosos del Bien como a los siervos de lo
Bello».
Capítulo Octavo
SECCIÓN V a
Apóstol y Místico, el Padre Lamy (1853-1931)
Una aparición de la Santa Virgen es para recordar, porque ella tiene por objeto
de ser una enseñanza sobre el valor del relato del rosario. Escuchemos el
relato hecho por el P. Lamy:
“Sobre su pecho se le apareció un rosario con los Pater y los Ave, cuyos
granos semejaban a las perlas blancas. Él estaba dispuesto en forma de
corazón, pero terminaba en nada. Por debajo, como si tuviera una pequeña
herida abierta en el lugar del corazón, saliendo, a cada instante, una llama roja
y una llama verde que subían y que marcaban su respiración, y este detalle me
ha tocado profundamente, me ha hecho bien reconocedor. El rosario es el
símbolo de la fe; una llama roja, esta era la caridad ; una llama verde, este era
la Esperanza. La llama subía y se alejaba, subía y se alejaba. Yo comprendí
que la oración en union con la muy Santa Virgen tenía un gran poder sobre el
corazón de Dios. «Yo no tengo qué pedir, dijo ella, yo escucho la oración
humilde y confiada de los pequeños ». Mostrándome este rosario sobre su
corazón, la muy Santa Virgen ha querido mostrar cuanto ella es dada a la
oración del rosario. «Nosotros nos unimos a los Ángeles para recitarlo».
Una otra vez, la Santa Virgen apareció en la capilla de La Courneuve con San
Luciano, patron de la Iglesia y una sesentena de ángeles. Ella se entretuvo con
el P. Lamy en temas personales y antes de partir, ella dijo además: «Sí, yo le
daré mucho».
Nueva aparición un domingo del verano 1913 o 1914 antes de las vísperas.
Los hijos habiendo recitado el rosario con más atención y cantado la canción
que el P. Lamy había aprendido en su infancia :
Madre de la Santa Esperanza
0 sov, cuyo nombre es tan suave,
Sensible a nuestra confianza,
Reina de los cielos, ruega por nosotros.
El P. Lamy siente la presencia de la Santa Virgen, pero, por humildad, él no
osa mirarla. Él anuncia esta presencia a los hijos que preguntan : «Cómo la
sientes tú, mi Padre ?» — «Oh! su presencia se siente bien. Ella es para el
alma como el perfume es para el cuerpo ; no se equivoca.» Lucifer que estaba
allí en la época de una otra aparición de la Virgen le pregunta, haciendo alusión
a esta escena : «Si él la hubiera mirado, qué habrías hecho ?» ella ha
respondido : «Si él hubiera levantado los ojos, él me habría visto ». Ella ha
añadido riendo : «Mis ángeles han cantado al cielo una canción sobre el aire de
aquel que yo venía de escuchar ». Y el Padre precisará: «Este era todavía una
pobre canción, con pobres palabras ! Al cielo, los Ángeles han repetido el aire,
pero no las palabras. Desde el día donde ella me ha dicho eso, nosotros hemos
cantado este cántico todos las domingos en la Courneuve.»
El P. Lamy ha dejado entender que él había tenido muy numerosas
conversaciones con la muy Santa Virgen, pero él no ha revelado mas que una
ínfima parte, la permanencia estando muy personal o fuera de estación. Un
ejemplo entre muchos : «La muy Santa Virgen me dijo que sin ella, yo me
habría muerto cien vez cuando yo hacía las cabriolas en el Poirier cerca de
nuestra casa. Luego, ella me había salvado la Vida cuando yo tenía la fiebre
tifoidea. Ni el médico, ni mi madre han conocido la enfermedad que fue curada
en un día por pan con agua. Ella me dijo también que había puesto el fuego en
nuestra casa.»
El 16 Enero 1924, vino una joven hija de 18 a 19 años, muy digna de interés.
Ella había perdido sus dientes de delante que se habían vuelto negros y
arruinados. El P. Lamy la envía en Peregrinaje a Nuestra Señora del Bosque,
donde ella ora y obtiene un poco de agua de la fuente. Los dientes han
recomenzado a salir y siete a ocho meses más tarde, la joven persona vino a
mostrar a su Cura su maxilar superior con una hilera de dientes sanos. «Yo le
he dicho: aquello no sirve de nada, tú no puedes masticar. Retorna y pide a la
muy Santa Virgen los dientes de abajo. Ella fue y todas los dientes del maxilar
inferior fueron repuestos ; la joven hija tuvo entonces una dentición nueva y
completa.» He allí un caso a hacer notar a un dentista, o aún más de un
medico !
En otro orden de ideas, la muy Santa Virgen ha levantado por su fidelidad una
esquina del velo que oculta el futuro. El P. Lamy ha tenido numerosas visiones
del que él no ha revelado mas que una ínfima parte; escuchemos mas:
«La paz será dada al mundo, pero yo no veré aquello... Cuando la paz haya
sido restablecida en el mundo, que de cosas serán cambiadas ! La plena
industria, es la guerra. La fabricación de los aviones, la explotación de las
minas, el trabajo del hierro, todo aquello disminuirá. No habrá más estas
grandes usinas donde la moralidad degenera y desaparece. Los obreros serán
bien obligados a lanzarse sobre la tierra. El trabajo de la tierra retomará una
gran extension. La tierra volverá muy querida. Cuando la paz será dada al
mundo, la industria se retraerá en los proporciones menores y quedará. Todo
disminuirá. Ellos van delante de lo inevitable ; ellos llegarán todos a lo mismo.
Habrá un gran esfuerzo a dar por la conversion de los hombres tras la paz
dada en la tierra. Habrá muchas dificultades... El estado de alma del primer
cristiano volverá además, pero él tendrá entonces tan pocos hombres sobre la
tierra! y habrá de nuevo un florecimiento magnífico de Órdenes y de
congregaciones.
Capítulo Octavo
SECCIÓN V b
Apóstol y Místico, el Padre Lamy (1853-1931)
El P. Lamy ha visto llorar una vez a la estatua de la Virgen del Bosque. Este
era el anuncio para él de tribulaciones nuevas. Al día siguiente, las marcas de
las lágrimas se veían de nuevo sobre el rostro de la estatua. Y el Ábate Lamy
dijo que las lágrimas de desesperación del Arcangel caído hacían más mal en
ver que las lágrimas todas puras de la Virgen.»
Él había escuchado entre la Virgen y el demonio, dira el Conde Biver, de
diálogos asombrosos (de los que solo, creemos nosotros, una teología
superficial podría escandalizarse ; porque los Ángeles hablan entre ellos y con
los Bienaventurados ; y la Virgen ordena a su adversario (ejecutor, a su
manera, de las Órdenes de Dios ). He aquí un diálogo escuchado entre la
Virgen y el demonio : « Es por causa tuya que yo he caído», dijo Lucifer con
rabia. Y la Virgen : «Cuando no había nacido...» — «Tù me has combatido
siempre, siempre vencido.» La Santa Virgen con tristeza : «Esto no es sin
desperdicio...»
Un día ella previno al P. Lamy: «Presta atención, Lucifer te sigue la pista».
Esto nos permite estudiar las múltiples Visiones angélicas de los que fue
favorecido el P. Lamy desde su infancia. Según sus funciones respectivas, él
distingue diferentes especies entre los Ángeles.
Los Ángeles del santuario : «Yo veo generalmente las Santas Especies
rodeados de luz. Se siente una dulzura, una suavidad extraordinarias. Sí, en
estos momentos, no se piensa más en la tierra, se siente alguna cosa de tal
manera celeste ! Es el efecto de la presencia de Nuestro Señor. Yo siento
también la presencia del Santo Ángel que me asiste en la misa, sin embargo
siempre.»
«Que buen olor reina en la capilla, calle del Bac, donde apareció la Santa
Virgen! En todos los lugares donde ella aparece, se siente el perfume de las
Virtudes de la muy Santa Virgen. Este perfume no tiene nada de terrestre,
como la permanencia aquella de las flores del cielo. Se dijo que él se parece al
olor de las rosas, de los lirios... Estos son figuras groseras.
«En cuanto a los ángeles, ellos están bien mejor como apariencia que la Santa
Virgen. Con estos bellos reflejos, que cambian incesantemente de lugar sobre
sus vestimentas blancas, ellos tienen el aire de brillantes oficiales alrededor de
ella, tan simple. Yo hablo de la muy Santa Virgen independientemente de su
luz. Cuando ella se muestra en eso que yo podría llamar su Grande Gloria, ella
es un poco deslumbrante, porque el sol no es mas que una luz al lado. Eso que
yo decía, es cuando ella conserva solamente su pequeña Gloria.»
«Con cual simplicidad y cual atención los Ángeles la rodean. Dios Le ha dado
miles y millares. Ella les conoce a todos por su nombre. Ellos no la conocen
mas que bajo un nombre : «Reina». Cada uno de ellos tiene su fisonomía
particular, pero todos son también bellos. Los Ángeles la llaman «Reina» con
un tono muy respetuoso, y cuando ella se relaciona con el Arcángel, ella dice
muy simplemente : «Gabriel», con un tono muy maternal. Ella mira los Ángeles
con una mirada suave y directa.
Retengamos esta afirmación del Conde Biver sobre la facultad de su amigo, el
Santo sacerdote, de ver los Ángeles y de conversar con ellos :
El rasgo el más remarcable de la figura del P. Lamy fue, tras su devoción
extraordinaria a María, la confianza que él tenía en los santos ángeles y la
familiaridad en la cual él vivía con ellos. Sus íntimos le han visto todos hablar a
seres invisibles, y, en raras excepciones, todos también han escuchado las
voces de los Espíritus celestes que le respondían ; a veces aún, les ha sido
dado distinguir algunas palabras de los Santos ángeles.
He aquí a este sujeto, un caso típico vivido por el Conde Biver, el 19
noviembre 1924; notemos que esta observación tiene bien el valor probante de
un hecho real, porque el testigo era a la vez Doctor en letras y licenciado en
ciencias, entonces espíritu abierto y capaz de observer un hecho sin idea
preconcebida.
Entonces esta noche de noviembre, el Conde y el P. Lamy se dejan para
regresar a cada uno su cámara para acostarse respectiva. «À diez horas un
cuarto, declara el Conde, yo soy al lecho y apago mi luz. Él sucede tal vez dos
a tres minutos, y, a través de las dos puertas que son ligeras, yo escucho una
conversación animada en la cámara del viejo sacerdote. Tres voces de hombre
toman parte, netas y distintas al posible en el silencio absoluto de la noche.
Este fenómeno me intriga inmediatamente en lo más alto punto y yo escucho
toda la llegada. A pesar de la temperatura glacial, yo me siento sobre mi lecho
para escuchar mejor. Ningún ruido, ninguna otra persona... Al salir el anciano,
sobre el suelo de su habitación, yo he visto que estaba libre de todo ocupante.»
Vale la pena de reproducir por entero el Pasaje de la relación del Conde Biver
donde se produce del timbre de las voces escuchadas :
El P. Lamy habla de momento en momento, respondiendo a un interlocutor
cuya voz es neta, cálida, de un timbre muy viril y muy agradable, que se
expresa sin rastro de acento y en un tono afirmativo. Yo escucho ciertas
sílabas, pero no llego a entender una sola de las palabras que él pronuncia.
Por discreción, yo no oso salir de mi lecho para escuchar en la puerta. El tercer
interlocutor tiene una voz un poco sorda, y, por lo tanto, menos agradable, pero
perfectamente normal ; él habla con mucho más cautela ; sus palabras son
más raras y dichas en un tono menos perentorio. Mi huesped se expresa Muy
Alto; el diapason de su voz es intermediario entre aquel del primero y del
segundo de sus interlocutores... Yo escucho netamente el acento de los tres
interlocutores. Ellos se expresan todos en francés ; una sola voz el acento del
terror, aquella del Padre que empuja sobre las « a » y sobre ciertas sílabas.
En la mañana del día siguiente, hacia las cinco horas, sobre el camino de la
Iglesia, yo hice la pregunta : «Mi Padre, ayer noche, luego de haberme dicho
nuenas noches, usted ha hablado. Yo he escuchado también otras voces...
Eran los santos ángeles?» él sonrió y me respondió : «Tal vez bien. Ellos son la
consolación de la tarde ».
En el día, tuve nuevas cuestiones que yo le hice, mi huesped me responde
que yo he escuchado las voces de San Gabriel y aquella de su ángel guardián.
«Solamente, dijo él, yo las escucho tan fuertes la una como la otra. Esto
depende de la manera en la que ellos han querido hacerse entender de tí...
Cuando el Santo Arcángel quiere hablar confidencialmente, él habla bajo. No
digas una palabra de estas cosas que yo no he pasado el Puente del Más
Allá.»
Y el Conde Biver concluye como él había comenzado : «La devoción del P.
Lamy a los santos ángeles, a los Ángeles guardianes, a los Ángeles
protectores de cada hogar, de cada ciudad, de cada provincia, de cada Estado,
a los Ángeles de las categorías superiores, comunmente llamados Arcángeles,
lo incitó a propagar su devoción ; él tenía el hábito de decir : «Nosotros no
damos a los Ángeles la importancia que ellos tienen ; nosotros no les oramos
bastante ! Los Ángeles son muy emocionados cuando nosotros les oramos.
Hay una gran utilidad en orar a los Ángeles.» y repitió de nuevo en una otra
ocasión : «Nuestros ángeles guardianes, nosotros no les oramos
suficientemente. Qué se hace por ellos ? Un pequeño trozo de oración la
mañana, un pequeño trozo de oración la tarde ; he allí todo! su misericordia es
bien grande a nuestro respecto, y, con frecuencia, nosotros no la utilizamos
bastante.
Una nota del P. Lamy es para recordar ; ella nos enseñará sobre la extensión
de las facultades de visión del Santo sacerdote: «Yo no les he dicho la décima
de eso que yo he visto. Hay bien cosas que yo no pondré. Hay cosas que no es
bueno decir, misma en cuarenta años de aquí. Y luego, la época es tal vez la
menos propicia que haya existido para las revelaciones. Yo no hablo de una
fracción del pueblo, de los católicos fervientes; aquellos de allí justamente no
tienen necesidad de revelaciones.»
En una otra ocasión, el P. Lamy dará guardia contra la propension manifestada
por ciertas personas siempre a la búsqueda de visiones y de fenómenos
supranaturales : «Jamás es necesario construir su existencia sobre las
visiones, y sobre todo sobre aquellas de los otros. En las cosas materiales, no
es necesario conocer mas que el buen sentido. Y en las cosas espirituales, es
necesario de nuevo del buen sentido ; pero allí, nosotros no sabríamos
engañarnos, teniendo las reglas infalibles que Dios nos ha marcado. Es
necesario defenderse de lo místico.»
El P. Lamy siempre se muestra muy desafiante en relación de las
manifestaciones sobrenaturales de la que él era el objeto desde su infancia.
«Yo desconfío de mi meditación, decía él, porque el alma trabaja. Nosotros
partimos algunas veces con una idea preconcebida ; no es necesario ya sea
tomado por una conversación con Nuestro Señor. Yo me guardo siempre bien,
porque nosotros podríamos hacer a la vez cuestiones y respuestas. Con
frecuencia nosotros pensamos tener una meditación encorcetada, y es vaga.»
Ahora que nosotros conocemos el valor intelectual, moral y aún místico (bien
que él se defiende ), del Santo sacerdote, nos será provechoso levantar
algunas de sus enseñanzas.
A propósito de educación de los niños, el P. Lamy dira: «En el patronato, a la
obra de juventud, se saludaba por estas palabras : «Vive Jésus en nuestros
corazones !» Se respondía: «Por siempre ». Y esto misma en la gimnástica.
Para ciertos hijos, la cosa ha sido buena. Es muy difícil tener la idea constante
de Dios cuando no se ha habituado desde niño.»
La preocupación mayor del P. Lamy ha sido la salud de las almas. «Las almas,
exclamaba él, las almas no ven lo que ellas han costado a Nuestro Señor.
Entonces se le juzga a un alto precio.»
En sus oraciones, el Santo Cura intercedía por todos aquellos que se le
aproximaban, y la vista de las almas, de la que él estaba con frecuencia
favorecido le incitaba continuamente. «El estado de mis vecinos, decía él, yo lo
conozco bastante con frecuencia, pero no absolutamente siempre. Yo golpeo
en la puerta de las almas...» y él le añade : «De ver las almas, es un don que
yo no les deseo.Nada no es más pesado que este don... Algunas veces yo he
tenido tristezas como para morir ! Cuando yo veo de las almas, para que yo
desee todo el bien que se pueda, de las almas que me ha parecen como
bastones desecados. Yo me digo ciertamente : «Ellos han entrado en la «Casa
de Dios »; ellos han sacado lo que ellos han «llevado»? Cuantas veces, yo he
pedido a la muy Santa Virgen de no verlo, de no constatarlo.» a este propósito,
el cura hablará del olor de pecado que él percibe y que le incomoda con
frecuencia algunas horas luego de la partida de la persona. A veces, nos confió
él, esto le perturbó por todo el día. Pero por encima de todo, es necesario tener
el respeto de las almas, el respeto de sus faltas mismas. El alma del cristiano
es un santuario que no debe ser violado.
Alrededor del altar donde están las Santas especies, rodeados de luz, él ve la
Santa Virgen, los Ángeles y aún el demonio.
La Santa Virgen es la reina de los Ángeles ; estos la salkudan con grande
reverencia.
Cuando el P. Lamy se iba, portanto en sus brazos la estatua de la Virgen en la
capilla que devendrá Nuestra Señora de los Bosques, una procesión de
ángeles y de espíritus lo acompañaba ; entre los espíritus, una centena de
buenos personas de su infancia devenidos ahora de los santos en el cielo,
estaban presentes. Él reconoció su padre y su madre, su abuelo, los amigos de
su vecindario.
Devenido casi ciego, el P. Lamy estaba guiado por los santos ángeles. Y de
hecho, estos Enviados de Dios lo han ayudado mucho, y se explica fácilmente
la devoción del querido pastor a su voluntad. El buen Cura no cesa de recordar
que no rendimos suficientemente homenaje a nuestros ángeles, especialmente
a nuestro Ángel guardián. «Qué se hace por ellos ? apenas un lugar de
oración.» ellos querrían sin cesar ayudarnos, como se ayuda a pequeños
hermanos indigentes. No se los trastorna bastante. No se les ayuda, con el
objeto de olvidarlos.
El P. Lamy, él, no los olvidaba y ellos le dan bien su amistad. Se diría que ellos
están sin cesar rodeándolo con sus precauciones. Algunas veces, él les
escucha sin verlos, y les reconoce al sonido de su voz. Otras veces, ellos
revolotean alrededor de Él como de los soles. Ellos lo protegieron contra los
peligros, ellos le prodigaron los consejos en los asuntos difíciles, o
simplemente, ellos vienen a visitarle en su cámara tras la oración de la tarde y
dialogar con él cosas celestes.
San Gabriel y los Arcángeles se distinguen de las otras por su talla; es el signo
de su superioridad. Todos son admirablemente bellos y su rostro radia de
benevolencia por los hombres.
En efecto, nadie es más fiel que un angel!
Capítulo Octavo
SECCIÓN VI
Léon Savary y los Ángeles guardianes
Es con fruto que se lee el folleto de Léon Savary, intitulado «Los Ángeles
guardianes », aparecido en Georg, en Ginebra, en 1953. Este estudio sobre la
angelología y notablemente sobre la creencia en la asistencia del Ángel
guardián es de nuevo pretexto a un pequeño tratado de la amistad que merece
atención y meditación ; ciertos «pedantes» no gustarán tal vez el tono ligero o
sarcástico adoptado por el autor para presentarnos un tema tan grave ; no se
podrá más que lamentarlo, porque hay múltiples lecciones a extraer de este
folleto que comienza por una Epístola liminar a mi Ángel guardián, de las que
vale la pena levantar ciertos puntos iluminativos ; y he aquí el principio :
Querido Ángel guardián,
Debo a ustedes dar la Excelencia, como a nuestros señores los obispos quien,
reivindicando esta apelación diplomática, son devenidos los iguales de los
embajadores terrestres ?
Yo confieso que yo lo ignoro. El Protocolo celeste me es desconocido. Yo
tendré toda la eternidad para aprenderlo, y esto será suficiente, sin duda. Pero
cree que al momento de escribirte, yo he sentido la dificultad de mi obra. Este
pequeño detalle — una formula de cortesía que yo no sé — muestra a él solo
cuanto es difícil de tratar con las Potencias de lo alto. Por qué los catecismos
no nos enseñan «la manera de dirigirse con respeto a su ángel guardián »?
1. Ellos alejan los peligros que amenazan nuestros cuerpos o nuestra alma y
las causas que se oponen a nuestro progreso espiritual.
2. Ellos nos incitan a hacer el bien y a evitar el mal.
3. Ellos rechazan a los demonios y disminuyen la gravedad de las tentaciones
que estos nos infligen. (Y que sería esto, gran Dios ! si ellos no los
rechazaran?)
4. Ellos presentan a Dios nuestras oraciones.
5. Ellos oran por nosotros.
6. Ellos nos castigan cuando esto nos resulta saludable.
Los Teólogos han escrito muy bellas cosas sobre los Ángeles guardianes, pero
sus respuestas no son satisfactorias a voluntad de M. Savary que no teme
decir :
Se avanza aquí, sin temor de complacer todo un sector de doctores,
escandalizados bajo sus bueyes de cuatro cuernos, que es necesario otra
cosa, otra cosa de nuevo que estos textos y estos testimonios, que estas
hipótesis y estas glosas, que estas deducciones y estas suposiciones, por
explicar humanamente una creencia tan anclada, tan tenaz, también
indeclinable, y, delante de la razón, también absurda, que la creencia en los
Ángeles guardianes.
«Yo escucho bien que no es necesario que una creencia sea razonable para
ser fundada.»
esto no es sin razón que el autor hizo salir de nuevo que cuando estamos
presa de sombría desesperación, a los ataques de sombras hostiles, de
fantasmas mismos, «nos será suficiente invocar nuestro Ángel guardián.
Pronto, él regresará. Es su oficio, luego todo; él no puede salir sin desertar ; y
la desertación es castigada también por el código de las milicias celestes. »
Finalmente, para poner la disposición, he aquí una simple y magnífica
explicación y una síntesis todo a la vez de la angelología; rechazando todo
mode dubitatif, el autor concluirá :
Dios se hizo hombre por que nosotros pudiéramos ponerle un rostro, de las
manos y de las pies. Él ha tomado las apariencias del pan y del vino por que
nosotros pudiésemos comerlo y beberlo. Él ha puesto cerca de nosotros a los
Ángeles guardianes afin que nosotros tuviésemos el sentimiento de esta
presencia quasi humana, de la que nosotros sentimos el murmullo — yo no oso
decir : la caricia — y que, aún traicionados y ridiculizados por aquellos que nos
eran queridos, nos quedaba este último recurso.
yo lo acepto, a causa de los Padres griegos y latinos, a causa de los Doctores
de la Edad Media, a causa de los místicos de todos los tiempos. Del punto de
vista de Dios, el Ángel guardián es el Protector que nos ayuda a alcanzar la
salud. Pero yo no temo de ninguna manera adelantar que, del punto de vista
humano, que es el nuestro, es la imagen del amigo perfecta que nosotros
hemos buscado y que nosotros no hemos encontrado.
Desde luego, el autor abundará el tema más particular de la existencia y de la
misión del Ángel guardián para escribir un pequeño tratado más completo de la
Amistad. Nosotros extraeremos algunos pasajes que darán el deseo de
encontrarse con el original, a las vistas y reflexiones tan perfectamente
enriquecedoras. Veamos los pensamientos que sugiere a nuestro autor, la
amistad del rico y del pobre:
Capítulo Octavo
SECCIÓN VII
La angelología del Padre Pio
De estos tiempos de pruebas que tuvo que sufrir el Padre Pio, Maria Winowska
trae la juiciosa observación del Padre espiritual de Fra Pio: si el demonio se
ocupa con una tal insistencia de él, es que él esta destinado a grandes cosas,
eso que la secuencia prueba abundantemente.
«Esperando el joven hermano se diese cuenta solo. Eh sí, ahí tenía, como
justo, su ángel guardián, para darle una mano ! con su buen sentido robusto,
Fra Pio sabía recurrir a la ayuda siempre disponible de estos compañeros de
viaje que nosotros nos olvidamos de invocar piadosamente. Los Ángeles
continúan jugando un muy gran rol en su vida.
A este propósito, se me ha contado una historia encantadora. Una noche,
cuando el trabajo había sido particularmente duro, Fra Pio invoca a su buen
Ángel en vano. Que quieren ustedes ! aún los Ángeles pueden tener algunas
distracciones... pero Fra Pio no lo entendía así. No se tiene, tal vez (quiera
Dios), un Ángel guardián para los antojos! Cuando, hacia la mañana,
finalmente él se presenta, Fra Pio, enojado, le da vuelta la espalda. Es que
realmente sus noches eran agitadas.»
Como el Santo Cura de Ars, el Padre Pio fue en defensa durante toda su
carrera de las persecusiones de Satan; pero él tenía potencia sobre los
espíritus del mal y liberaba a los poseídos. Así una dama, completamente
desesperada, había hecho llamar al P. Pio. Ella le vió una noche en la
cabecera de su cama y se sintió inmediatamente aliviada. Más tarde, cuando
ella estuvo en presencia del Padre, ella le agradece y aquel dice : «Yo he
echado los malos espíritus. Yo no he echado los diablos fuera de vosotros, sino
lejos de tí.»
En una otra ocasión, el P. Pio había dicho :«El demonio es como un perro
encadenado ; si tú guardas distancia, tú no serás mordido ». Y de nuevo esta
otra advertencia : «Tentaciones, tareas, preocupaciones, son las armas de
nuestro enemigo. No lo olviden ; si él hizo tanto ruido, es signo que él está
fuera y no dentro. Lo que nos debe asustar, es que la paz y la armonía reinen
entre nuestra alma y el demonio.»
He aquí una escena de exorcismo realizada por el P. Pio, tal como ella es
narrada por Mortimer:
En septiembre 1947, una pobre Italiana, poseída del demonio, fue conducida a
la fuerza por su hijo en la misa del Padre Pio. Desde cuando ella fue en la
Iglesia, ella se puso a lanzar aullidos como cada vez cuando ella veía una
Iglesia, una cruz o misma un cruce de caminos.
La mujer fue arrojada a tierra. muerta ? no. Este era el diablo que estaba knock
out. Al cabo de algunos segundos, la mujer se levanta, perfectamente calma, y
va a sentarse sobre un banco, liberada de las cadenas del mal.
«Padre Pio es más potente que San Miguel », aseguraba ella cada vez que
narraba su triste historia.
y Mortimer concluye con bastante razón : «No nos asombremos de este poder
suprahumano acordado por Dios al humilde monje del Gargano.
Asombremonos mas bien que todos los Sacerdotes exorcistas no lo posean.»
Nosotros hemos dicho que el Padre Pio es el primer sacerdote llevando en su
carne los estigmas de su Maestro, el Cristo ; el hecho se produjo el 20
septiembre 1918, cuando el Padre Pio se encontraba en oración y puesto en
éxtasis delante del gran Cristo de la capilla ; sus condiscípulos escucharon un
grito doloroso (1) y ellos vieron el P. Pio gimiendo inanimado sobre el suelo,
teniendo en las manos y a los pies llagas que sangraban. Estos estigmas,
«heridas de amor» fueron producidas por la lanza de fuego de un Séraphin.
este indicente hizo pensar en la descripción de la estigmatización de San
Francisco de Asís tal como la describe su discípulo Celano:
«San Francisco vió por encima de Él una aparición inefable, un hombre con
seis alas extendidas, como un Séraphin, los pies juntos, clavados en cruz...
Hundido en el éxtasis, Francisco sentía imprimirse sobre sus manos y sus pies
las marcas de los clavos.»
En cuanto a los dolores inherentes a las lesiones que sangraban
continuamente y que se exacerbavan el viernes, el Padre Pio fue liberado, es
bien el caso de decirlo, a los médicos, obstinados en descubrir un origen
patológico y no espiritual a estas lesiones, que sin embargo no entraban en
ningún cuadro de la patología. Se vendaron las heridas, se sellaron los
vendajes oclusivos que fueron muy dolorosos, naturalmente sin ningún éxito ;
las llagas persistían en su estado primero ; una medica declara que el borde de
las llagas era muy doloroso al tocar y que se podía casi retirar la piel del dorso
de la mano con aquella de la palma a través del canal de la herida ; y, bien que
este examen se fuese revelado de lo más doloroso por el Paciente, él fue
renovado en muchas apariciones ; en tal objeto, se le pide. Y se piensa muy
naturalmente en esta frase del Dr Encausse diciendo que los hechos, dones y
poderes supranormales «desconciertan e irritan a los médicos ». Las llagas de
las manos y de los pies, así como aquella del costado izquierdo (no derecho,
como lo han escrito ciertos autores ), han persistido sin cambio justo hasta
presente y continúan sangrando, mientras que llagas ordinarias de la piel,
consecutivas a una operación de hernia y a la extirpación de un quiste del
cuello, se curan normalmente por primera intención, para gran asombro de los
médicos. El Dr. Festa, uno de los examinadores, lo reconoce lealmente en su
libro consagrado a los casos del Padre Pio, libro que él no ha temido de llamar :
Misterio de ciencia y luces de la fe. «Las heridas, tanto en su aspecto que en
su evolución, dijo él, no pueden ser explicadas por ninguna ley anatomo-
pathológica, conocida a este día por la medicina oficial.» y, querer explicarla
como ciertos materialistas impenitentes lo han intentado, habiendo recurrido al
efecto de la sugestión o de la autosugestión en una persona nerviosa, o aún
histérica, no es, en los casos del P. Pio, mas que siniestra complacencia o
mala fé insigne.
Retengamos estos dichos del autor que encontramos en Padre Pio 1: «Sí, yo
tengo verdaderamente mucha suerte, mucha suerte, yo creo (de haber un día
reencontrado el Padre Pio), mi Ángel guardián puede testimoniar bien que yo
me hago con frecuencia esta reflexión : Grande bondad de Dios !» no pretendo
que el hecho sea una coincidencia, porque «la coincidencia, sobre todo cuando
se trata de un reencuentro de dos hombres, no es jamás accidental o fortuita.
Gracias a la acción invisible de nuestros ángeles guardianes, los reencuentros
son preordenados, organizados o queridos por el justo, el alerta, el sabio
espíritu divino; estos son reencuentros providenciales.» entonces no hay
destino ciego, ni de azar, en el reencuentro del P. Pio con G. P. Siena, y este
encuentro fue para el autor la ocasión de una transformación radical ;
escuchemos mejor:
« así para mí, fue una vida nueva, una experiencia nueva e insolita, que debía
transformarme profundamente ; el Hombre que yo había sido, con sus instintos
y sus malvadas costumbres, debía recibir los primeros golpes saludables, para
ceder el lugar a un ser Nuevo, menos indigno de la visión de Dios y de la
vecindad de su ángel Guardián.»
He aquí algunos episodios vividos por G. P. Siena cerca del P. Pio:
«Los peregrinos que vienen a San Giovanni Rotondo saben que el Padre les
sigue cada uno paso a paso, ligados a él por hilos invisibles, sólidos y seguros.
Ellos saben que ellos tienen con ellos los santos ángeles, Mensajeros fieles,
muy obedientes y llenos de perseverancia.»
Un día, G. P. Siena sintió un impulso irresistible que lo condujo a retornar a la
librería Abrescht donde él había estado la mañana previa ; una voz interior
insistante le dijo : «Ve ! ve !» Yo fui obligado de seguir esta voz, contra mi
corazón, para darme cuenta poco luego que ella me había venido del exterior o
mas bien — esto de lo que yo estoy absolutamente seguro — de mi Ángel
Guardián. Había allí un joven periodista venido para «demoler el mito del Padre
Pio!»
En el curso de la entrevista, el joven reportero pregunta a su camarada : «Por
qué los comunistas no hablan mas que del mal de Padre Pio?» G. P. Siena
respondió por una propia palabra de P. Pio: «Ellos están como ciertos
enfermos que no pueden soportar la luz del día y aman permanecer en la
penumbra de una cámara con ventanas cerradas».
Este joven redactor había venido, pagado por dos periódicos de tendencia
fuerte diferente : una hoja comunista y un diario, órgano de la masonería. Una
fuerte Suma le había sido prometida por los artículos de «demolición» del P.
Pio; G. P. Siena remarca a este sujeto que: «Comunismo y masonería, estas
dos fuerzas que se combaten sobre muchos puntos, se coaligan por luchar
contra el mismo inquietante enemigo : el Padre Pio y, a través él, contra Dios,
los valores del Espíritu y la religion de Cristo.
Se sentirá golpeado al saber, tal como lo dijo el G. P. Siena: «que el Padre Pio,
mundialmente conocido, respetado, solicitado y amado, no es querido en San
Giovanni Rotondo, donde una mitad de la población se desinteresa de las
cuestiones religiosas ». Sobre una población de veinte mil almas, hay nueve mil
electores de los que cuatro mil son comunistas. Sin embargo, estos últimos,
como el P. Pio lo había predicho, no tuvieron la mayoría. Y G. P. Siena dice :
«El no es querido de aquellos quien, más que los otros, deberían tener
conciencia del deber sacro-Santo de amarlo, porque, en el curso de la última
guerra, gracias a las oraciones del P. Pio, ruinas, masacres y bombardeos
fueron alejados de la ciudad. Se conoció esta declaración de un oficial aviador,
en misión de bombardeo con su escuadrilla : el vio, en los aires, un enorme
fantasma que lo obligó a dar media vuelta y a lanzar su cargamento de bombas
en un campo donde ella no hizo a ningún mal ; luego del armisticio, el oficial
reconoció en Padre Pio la forma que se le había aparecido en el cielo. »
Esto no es sin razón que G. P. Siena declara : «Padre Pio nos ha sido dado
por Dios en un período particularmente difícil de la historia humana. Él es, se
nos han dicho, en la medida de nuestro tiempos sublevados. Él no ha sido
suscitado sino por la Providencia cuya influencia de su grande personalidad se
hace sentir en Italia solamente.»
Un milagro donde G. P. Siena vio la intervención directa del P. Pio, o de su
ángel Guardián, nos es contada con fuertes detalles : El hermano de un
Director técnico de la mina de bauxita que se encuentra al pie del Gargano,
había súbitamente caído enfermo de una inflamación de la oreja, con grave
mastoiditis ; el médico propuso una operación inmediata, visto el peligro de
meningitis. Las lesiones han sido constatadas por dos radiografías. No
pudiendo decidirse a someterse a la operación, el joven hombre escribió a su
hermano de ir ver el P. Pio y de suplicarle de obtener su curación ; de otra
parte una amiga de la familia le había dado una fotografía de P. Pio y le había
aconsejado de dejarla durante la noche sobre su oreja. a la mañana un pus
abundante y cálido salió de la oreja ; entonces los dolores cesaron. Una nueva
radiografía confirma la completa curación, y el Doctor lo reconoce lealmente :
«He aquí un hecho que no me ha ocurrido nunca, en el curso de mi larga
carrera. Usted sufría realmente de una mastoiditis, las primeras radiografias lo
afirman sin equívoco. Pero usted no tiene más nada.» Entonces el joven
hombre habla de la carta enviada a su hermano y de la colocación de la
fotografía del P. Pio sobre la oreja enferma. Y el médico dice : «Yo tengo la
impresión que tu puedes agradecer al Padre Pio. Solo un milagro podría hacer
aquello.»
el joven hombre vino a San Giovanni Rotondo para agradecer al P. Pio, pero él
quería también tentar una experiencia para adquirir la certeza que su curación
era bien debida a la intercesión del taumaturgo. También abordando al P. Pio,
él le pregunta sobre la curación de su mastoiditis. Pero el Sacerdote le
descubre el juego y le dijo sonriendo : «Mi hijo, ve a agradecer a la Virgen ;
ustedes ya han obtenido su gracia». Se sintió la emoción del milagro. Además,
la protección del Padre Pio o aquella de su ángel Guardián se extendió sobre el
joven hombre de nuevo algunos instantes más tarde ; él quería ver a su
hermano para contar su curación espectacular. G. P. Siena resume el incidente
como sigue: «Los comunistas, que habrían rehusado, en tiempo normal, un
lugar para el hijo del Director, cuando él era piloteado por un anti-comunista
notable, de mi especie, aceptaron sin decir nada al huesped nuevo. Es
necesario creer que el P. Pio estaba con nosotros o el Ángel del Señor, porque
de todos los obreros, ninguno frunció el entrecejo, ninguno se volvio
interrogativamente hacia su vecino ; ellos observaban todo delante de ellos, en
nuestra dirección, con la más serena indiferencia, como si un velo se hubiera
de súbito abatido sobre sus ojos. En cuanto al conductor, el hombre más
disciplinado, puntilloso hasta la exasperación, que no hubiera aceptado, por
todo el oro del mundo, de hacer el menor gesto susceptible de provocar la
cólera de los obreros, él se puso en cuatro para satisfacernos e hizo un lugar al
lado de Él para el joven hombre.»
Pero lo más feliz de la historia permanece por decir. En Italia como en Francia,
las bandas de saqueadores entraban entonces en las casas de los
condenados... Bajo pretexto de buscar explosivos. Al momento preciso donde
muchos de estos bandoleros desquiciados estaban en tren de desvalijar el
apartamento de la joven hija bajo los ojos aterrorizados de su hermana, un
«Basta!» sonoro e imperial los hizo detenerse. Ellos se miraron llenos de
espanto, porque la voz parecía emanar de un potente megáfono de quien ellos
no veían traza. Un Nuevo «Basta!», de nuevo más pronunciado y replicante les
hizo poner sobre el campo la pólvora de la escapada. Cuando la condenada
estuvo de regreso en la casa, su hermana se precipita agitada en sus brazos.
«Este era la voz del Padre Pio! dijo ella, es el quien ha puesto en fuga a los
bandidos!»
Algunos meses más tarde, cuando se pudo circular, la joven hija en cuestión
tomó el tren a San Giovanni Rotondo. El Padre Pio la acogió sonriendo :
«Lo que tú me has hecho correr, mi hija, con tu fe !
Y él se queda corto dando amplias explicaciones.
Esta historia que habría podido terminar en tragedia, sin el socorro inmediato
del Padre Pio, hizo pensar a una enseñanza que él tenía la costumbre de
repetir con frecuencia : la angustia, la inquietud, el desencanto son heridas del
alma de las que es necesario guardarse. «La angustia es un más grande mal
que el mal mismo... Marchad con simplicidad en la vía del Señor y no torturez
tu espíritu !... El peor insulto que nosotros pudiésemos hacer a Dios, es de
dudar de Él...
por consiguiente, alejemos toda solicitud y toda inquietud en el soporte de las
tribulaciones espirituales o temporales de cualquier lado que ellas lleguen...
Esta ansiedad inútil no hará sino fatigarte el Espíritu y hacer tu pensamiento
inapto para detenerse sobre los puntos de tu meditación. Es necesario frenar la
ansiedad, porque es una de las limitaciones más formidables de la verdadera
virtud y de la verdadera vida interior.»
Una enseñanza preciosa del Padre Pio nos es transmitida por María Winowska;
se trató de esta palabra del Padre a un universitario :
«En los libros se busca a Dios. En la oración, se lo encuentra.»
El mismo autor relata una meditación del Padre Pio sobre la Pasión de Cristo,
meditación que él compone todo al principio de su carrera. Se encuentra ya su
ardiente deseo de vivir tan exactamente como sea posible la Pasión del
Maestro. Se hace una oración de este género : «Mi Ángel Guardián, guarda
mis facultades todas recogidas en Jésus que sufrió afin que jamás ellas se
desprendan». Llegado al punto culminante de la Pasión, P. Pio exclamará: «Y
he aquí que el Padre envía al Cristo un Ángel Consolador. Cual confortamiento
un Ángel puede ofrecer al Dios fuerte, al Dios Invencible, al Dios Todo
Poderoso ?... Jésus ora a su padre para que lo salve, pero él debe morir por
nosotros. Yo pienso que el Ángel se prosterna delante de la Belleza Eterna.»
Durante la última enfermedad del Padre Pio, en 1959, enfermedad que fue muy
grave, poniendo su vida en peligro, y cuyo curso desconcertó a los médicos, él
había sufrido una enfermedad expiatoria en favor de la paz del mundo y en
relación con el viaje de la Virgen de Fatima a Italia. En efecto, la indisposición
del P. Pio comienza desde la partida de la Virgen de Fatima para poner fin a la
época de volver de la Madre a España. He aquí una opinion bien reveladora de
la devoción del Padre por la Virgen de Fatima: «La celeste Viajera, que
desciende como una «señal del cielo», se adelanta a través de los caminos del
mundo, atenta a las invocaciones y a las ofrendas reparadoras de los justos.
En todas partes donde ella aparece, rodeada de miríadas de ángeles, las
sombras de la Muerte se disipan.»
Muchas veces durante esta enfermedad del Padre Pio, los médicos debieron
punzar la cavidad pleural que se llenaba de agua, operación muy dolorosa.
También, con una expresión de malicia, al buen Padre llamaba a los hombres
del Arte sus tiranos, sus ejecutores, y él le añade : «Tres males afligen la
humanidad : los médicos que retardan la curación de los enfermos , afin de
ganar mas; los abogados, interesados ellos también en hacer durar el proceso ;
finalmente los confesores sin escrúpulos.»
Por otra parte, una mística, muerta en olor de santidad, en 1952, había
declarado que el Señor le había revelado que el Padre Pio viviría justo hasta
una edad avanzada afin que él pueda conducir muchas almas a Dios.
Cuando se tuvo seguridad finalmente que el Padre estaba bien curado, fue un
sentimiento unanime entre sus fieles : «El quedará con nosotros para continuar
rezando a los Ángeles y la Iglesia, trayendo los extraviados entre los
creyentes».
Citemos una palabra del P. Pio que afirmaba que la realización de los
Sacramentos no son símbolos, sino puertas según la palabra del Maestro
Felipe ; Padre Pio tenía la costumbre de decir : «Será más fácil en la tierra
quedarse sin el sol que sin la Santa Misa».
Una declaración del P. Pio debe dar para reflexionar : una persona caritativa se
había ofrecido un día a él para poner sobre ella una parte de su sufrimiento. Él
dijo:«Para parar los golpes como yo lo hago, te sería necesario una piel más
dura que aquella del cocodrilo».
Un incidente que tiene una cierta analogía con la protección de las que se
beneficia el Padre Lamy al momento de ser dado vuelta por un ciclista, es para
señalar: Un día, Mario Brasioli, caminando sobre la calzada, fue arrojado al
fozo por un motociclista. Este último partió a buscar socorro hacia la villa
vecina, pero cual no fue su sorpresa de ver al accidentado, sostenido por una
persona desconocida (materialización del Padre o de su Angel), que
desapareció cuando el accidentado hubo sido puesto en las manos de sus
padres. Cuando, más tarde, Mario vino a agradecer al Padre por su socorro, él
obtuvo esta respuesta : «Agradece a la Madre por el milagro cuando ella ha
operado en tu favor ».
Muchos se han asombrados de oír el P. Pio recomendarse a las oraciones de
ciertos de sus visitantes y esto con una perfecta humildad. El Dr. Festa, en la
obra que ha consagrado a los casos del Padre Pio, nota esta profunda
humildad del estigmatizado y da la respuesta del P. Pio a este sujeto : «Es para
ti un gran asombro mi deseo y mi súplica ? todos aquellos que estan en
presencia del Señor tienen necesidad de oraciones. La ayuda que se puede
prodigar uno al otro es de un gran socorro ; nuestro corazón puede más
fácilmente recorrer la vía ascendente que conduce al Dios Supremo.
IV. La Caída.
Los Ángeles recibieron al principio, con la gracia santificante, la libertad de
elección. «À este efecto, los Ángeles fueron puestos en una posición tal que
ellos pueden determinarse libremente, querer y actuar sin obligación ni
restricción de ningún tipo. La libertad, que es uno de los más grandes y de los
más estimables atributos divinos, era uno de los presentes de quien ellos
fueron provistos. Gracias a este don, los Ángeles debían ganar el Paraíso,
aspirando libremente, en un estado de espíritu de completa humildad así que
de gratitud, de reconocimiento, de amor y de adoración hacia su Señor y
Benefactor. Tal fue la prueba. Hubo sin embargo entre ciertos ángeles un
resentimiento, una falta de amor que provocó su caída ; pero veamos mas bien
cómo es descrita la caída de Lucifer y cual fue la causa :
Por encima de todos los espíritus angélicos, había uno de nuevo más
espléndido y potente, «Sello de semejanza, lleno de sabiduría y de una belleza
perfecta», Lucifer. Habiendo tenido conocimiento de su propia dignidad y de su
propia nobleza natural, él la gozó, la admira y termina por caer en el amor de Él
mismo, yendo justo hasta enorgullecerse... Pero allí donde nacen la
complacencia y la estime de sí, donde existían el egoismo y el orgullo, se
extinguen la generosidad y disminuye el amor de otro. Lucifer se puso entonces
a no mas amar a Dios, a oponer el amor de sí al amor que le había hecho
nacer privilegiado, insigne, por encima de todos los seres creados.
El orgullo creciente con el amor por sí le hizo olvidar su dependencia en
relación con Dios. Él creyó poder llegar en la beatitud sobrenatural confiando
únicamente en los propias fuerzas de su naturaleza, sin la gracia divina.
Luego fue la caída, San Miguel con sus cohortes ángeles fieles precipita a
Lucifer en el abismo al grito de «Quis ut Deus?» Quien es como Dios ?
Porque la ley de traslación de la gracia, el Arcángel Miguel asume el
ordenamiento de las legiones angélicas en el lugar de Lucifer y él fue, así que
los otros Ángeles fieles, enriquecido de las gracias y de las prerrogativas que
Dios no había podido esparcir sobre los rebeldes... Los Ángeles fueron
hundidos hacia los misterios del infinito y ellos tuvieron el Privilegio de ver a
Dios frente a frente.
Este perdón implica un sacrificio fuera de medida, que será la prueba del amor
infinito del Señor. El abismo creado entre la creatura y el Creador será llenado
por la encarnación, la Pasión y la Muerte del Verbo. El precio del perdón será
dado al mundo y en la Justicia divina, por una mujer:
La Madre, Virgen, Santa, Inmaculada, que será también llamada la Madre de
Dios.
Y por que el Espíritu del Mal no aproveche de la debilidad del hombre, el
Señor en su misericordia confia su defensa a los cuidados atentos de sus
Ángeles fieles. Así fue constituida la protección angélica.
Por tres veces San Miguel se manifesta sobre el Gargano donde él quiso que
una gruta profunda le fuese consagrada, dónde, mientras, él mismo la consacra
y donde el sacerdocio vino oficial luego con una gran pompa. Pero la aparición
la más espectacular tuvo lugar cuando Siponte, villa marítima al pie del
Gargano, estaba asediada por un ejército pagano. El Arcángel prometió al
Obispo Maiorano la victoria. En efecto, desde que los asediados, enardecidos
por la promesa del Arcángel, intentaron una salida, el mar se desencadena, el
rayo y los relámpagos ponen el ejército asediante en fuga luego de haber
sufrido de numerosas pérdidas. El hecho que la gruta se encuentra cerca del
convento del P. Pio no es cierto una simple coincidencia.
X. Tu ángel.
G. P. Siena comienza por hacernos una confesión ; él ha adquirido la certeza
de la ayuda del Ángel guardián a causa de la experiencia siguiente : entrando
hacia la medianoche, él habría bien querido asistir a la misa del Padre Pio a las
cinco horas, pero, teniendo un sueño muy profundo, él temió no despertarse ;
entonces, poniendo a prueba la enseñanza del Padre, él confia a su ángel
guardián la misión de despertarlo a las cuatro horas de la mañana, luego él se
durmió profundamente. Y he aquí la secuencia del relato, de ninguna manera
de naturaleza para convencer a aquellos que piensan que todo es sugestión o
autosugestión, pero que fue, como nosotros vamos a verlo, una experiencia
concluyente y fructífica el alumno del P. Pio:
a una cierta hora de la noche, yo sentí un pequeño dolor insistente al costado
derecho. Al profundo sueño sucede un estado de somnolencia donde intentaba
sin embargo aflorar el recuerdo de la misa en la cual yo quería de tal manera
asistir. Yo pienso el origen probable de este pequeño dolor insólito. Ella
dependía tal vez de alguna posición incómoda tomada durante el sueño. Yo me
daba vueltas en mi cama, pero en esta posición, como en la otra, el misterioso
pequeño dolor continuaba lacerándome el costado. En breve, yo tuve que
sentarme sobre mi lecho y encender mi lámpara de cabecera ; el péndulo
marcaba cuatro horas precisas, ni un minuto más, ni un minuto de menos. Y
cosa extraña, el dolor cesa como por encantamiento.
Un día, un alumno de San Juan Bosco trabajaba sobre un andamio con otros
obreros. Él fue milagrosamente salvado cuando él hizo una caída de la altura
de un cuarto piso, las planchas del andamio habían cedido. Recordándose la
enseñanza de Don Bosco, el niño hizo llamar a su ángel guardián quien,
efectivamente, amortiguó la caída, cuando los dos otros obreros fueron
aturdidos por el golpe.
En cuanto a los casos de Santa Gemma Galgani, que no puede ser golpeada
por la constancia de su comercio con su ángel guardián ? G. P. Siena,
relatando la historia de esta Santa, consagra una página iluminativa :
Se puede decir que no hay ninguno episodio de su vida al cual no participe su
ángel. Gemma lo veía, lo tocaba ; como con un amigo ella se ocupaba con él,
él oraba, razonaba sobre Dios, y entreveía las maravillas del Paraíso. El Ángel
le pareció estando de rodillas, es decir flotando en el aire...
no había demanda, duda, problema, a los cuales él no respondió con una
emotiva complacencia, al buen Ángel guardián.
El Padre espiritual de Gemma, el P. Pasionista Germain de San-Stanislas,
escribió: «Muchas veces, cuando yo dialogaba con ella y que yo le preguntaba
si su ángel guardián estaba siempre a su lado, protegiéndola, Gemma daba
vuelta con una encantadora desenvoltura su mirada hacia él, y la mirada
permanecía en éxtasis, los sentidos alienados, durante todo el tiempo cuando
ella le contempla». Según una viva expresión de la Santa niña, el Ángel «la
espiaba» continuamente.
Al acostarse, a la noche, ella le pedía quedarse al frente y vigilar su cabecera,
luego habiendo recibido la seguridad, ella se revolvía del otro costado para
dormir. Al día siguiente, al despertar, ella tenía la consolante sorpresa de verlo
allí, de nuevo cerca de ella.
Y si Gemma se despertaba por una razón o por otra, ella veía siempre su
ángel a su lado. Ella dijo amar a su ángel porque le enseñaba la humildad y
mantenía la paz en su corazón. También G. P. Siena dice : «Querido lector,
pide en las librerías católicas el diario, las Cartas y la Vida de Gemma escritas
por el Padre Germain».
Esta lectura no puede sino traer buenos frutos para el fiel que la emprenda.
Sin embargo, a pesar de todas nuestras búsquedas, nos fue imposible
procurarnos estas obras. Analizaremos más en detalle el caso en Sección VIII
de este presente capítulo.
Se podría de nuevo recordar el caso de Santa Francisca romana que vivió en
encuentros estrechos con su ángel guardián. Este, radiante de luz celeste, le
permitía leer el oficio y dedicarse a sus ocupaciones a pesar de la oscuridad.
Además de su ángel ordinario, ella vio un segundo de nuevo más
resplandeciente, de la que ella apenas podía soportar el brillo y que dijo venir
del segundo Coro angélico.
Finalmente, volvamos, por un tiempo, al principio de la era cristiana. G. P.
Siena resumirá el caso de Policarpio que tuvo un comercio constante con los
Ángeles. Como joven hombre previo, él había sido acusado de dilapidar el bien
de su amo Calisto. Él había en efecto distribuido todas las reservas a los
necesitados, y cuando su amo, prevenido por un delator, vino a examinar la
cámara de las provisiones, las jarras estaban llenas y los sacos de harina
llenos. «He aquí, dijo el joven hombre que había orado antes con fervor por que
un milagro se cumpliese en su favor, he aquí, por su ángel, el Señor te rinde
todos tus bienes para que tú puedas compartirlos de nuevo con los
desheredados.»
Así , Santa María Magdalena de Pazzi leía en el Espíritu de sus novicios y les
revelaba sus malos consejos ; Santa Catarina de Sienne poseía este don de
discernimiento al punto cuando ella conocía los secretos del corazón de su
confesor mejor que él mismo y que a veces ella lo apostrofaba : « Por qué
quererme ocultar una cosa que yo veo más claramente que tú mismo ?» Fue
igualmente el caso de San José de Copertino que había enseñado
inmediatamente sobre el estado mental de aquellos que se le aproximaban o
que él cruzaba en la calle ; y él no faltaba de reconvenirlos y decirles : «Vé a
lavarte el rostro ». Expresión que nosotros encontramos en el Padre Pio. Don
Bosco había inmediatamente enseñado sobre los hechos y gestos de sus
pequeños y grandes alumnos que no pueden cometer una falta sin que su
Padre espiritual fuese informado . En cuanto al Padre Pio, he aquí lo que decía
G. P. Siena:
«Los hechos de este género (discernimiento de los Espíritus ) ocurren con
una frecuencia casi cotidiana en San Giovanni Rotondo, en el secreto del
confesional, en la sacristía , en las escaleras y los corredores del Convento , en
todas partes donde los peregrinos pueden requerir al Padre Pio y cambiar dos
palabras con él.»
Numerosos periodistas hicieron la experiencia a sus costas ; Angioletti
escribía en La Stampa de Turin (9 agosto 1950): «Los hombres no lo hacen
peor , porque una estupefaciente capacidad de penetración le pone en medida
de evaluar sobre el campo sus Virtudes y sus debilidades .» Artieri, redactor en
el diario romano II Tempo, confiesa que él fue severamente apostrofado por el
P. Pio; él fue tratado de «católico renuente y no practicante , muy mal cristiano
, al corazón eternamente en lucha con la inteligencia.»
Otro periodista , Attilio Crêpas, escuchó decir: «Por qué piensas tú en tu
oficina y en vuestras hojas de papel ? Ustedes se ocupan de hacer ruido
alrededor de un sacerdote que ora .» y sin embargo el periodista no había
pronunciado ninguna palabra.
He aquí a este sujeto una pequeña historia que no falta de condimento ,
nosotros la damos tal como G. P. Siena la relata:
«Muy sabrosa es esta anécdota de las que un paisano de Bénévent fue el
Protagonista . Este , una noche , tomado de un violento dolor de dientes , tomó
un zapato y lo lanza contra la fotografía del Padre Pio que estaba a la cabeza
de la cama de su cama. Porqué ? porque el Padre Pio permaneció sordo a la
insistencia de sus invocaciones desesperadas. Algunos meses después , el
Paisano estaba en San Giovanni. Él no pensaba más en este gesto
inconsiderado . Una vez en el confesionario , él iba a decir sus primeras faltas
cuando el Padre , con una voz dura y los ojos brillantes , lo apostrofa : «Y
usted tiene esta audacia , luego de haberme enviado este zapato que ha
llegado hasta mi cueva!»
Lo que sorprende aquí, es de ver el Padre revelar un secreto que el
Paisano había ya olvidado desde largo tiempo.
Un sacerdote de Lille, el Ábate Benoît, teniendo que salir de San Giovanni,
oró al P. Pio de bien querer contrafirmar para él una imagen piadosa que él
llevaba . En lugar de firmar el papel que se le tendía , el Padre Pio pregunta al
Ábate por su breviario . Luego de haber buscado una página blanca , el Padre
inscribió algunas palabras. Cual no fue la estupefacción del Ábate encontrando
en el escrito del P. Pio, una respuesta a un problema espiritual espinoso que,
desde hacía años , le atormentaba . Y, fue más sorprendente el Ábate Benoît,
puesél no había más pensado en su problema desde que él había llegado a
San Giovanni. Y G. P. Siena hace notar :
El corazón humano no tiene secretos para el Padre Pio. Esta es la razón por
la cual todos, grandes y pequeños, son tan intimidados en su presencia. Esta
es la razón por la cual yo me siento , yo también , siempre tomado de una
suerte de invencible temblor cuando yo lo encuentro y dondequiera que sea .
He allí diez años que yo lo miro regularmente casi todos los días y yo no llego
de nuevo a permanecer delante de él perfectamente tranquilo y desenvuelto .
Con frecuencia , durante la confesión , el Padre Pio ayuda a... retirar las
papas del fuego, como se dice ; él enumera aún los pecados del penitente y
va justo hasta dar las circunstancias exactas en los cuales ellos han sido
cometidos . Y si el Penitente ha olvidado una falta, no es raro que el Padre se
la recuerde .
Otras veces , él diagnosticará los males físicos y sugerirá el remedio
oportuno mejor que no importa cual especialista.
G. P. Siena ha hecho lo mismo , a sus costas , la experiencia de este
poder de discernimiento de los Espíritus y de los pensamientos . Con
frecuencia el Padre lo ha tratado duramente para «ponerlo en su lugar» según
su expresión imaginada .
Estas facultades extraordinarias de discernimiento , los místicos
concuerdan en reconocer que ellos las deben a la acción mediadora de los
Ángeles. Es por las voces o locuciones de los santos ángeles que los hombres
de Dios pueden revelar los secretos del corazón humano.
Con frecuencia el cura de Ars dijo a un penitente o a una penitente :
«Este pecado , es tu Ángel guardián que me lo ha revelado ». Teresa
Neumann, de su propia confesión, reconoce que las enseñanzas que ella
tiene sobre los pensamientos íntimos de los habitantes que vienen a su
contacto le son proporcionados con más frecuencia por las locuciones de su
ángel guardián que ella escucha hablar al costado de ella.
Un caso bien típico de discernimiento del P. Pio es el siguiente : una fiel
que quería enviar al Padre los votos por su aniversario , llegó muy tarde , la
carta no pudo llegar a tiempo. Sin embargo su ángel , adelantándoe al envío ,
había advertido al Padre Pio del contenido de la misiva y el Padre respondió
antes de haber recibido el mensaje . En otro caso bastante semejante , se
había enviado una carta al Padre para pedirle un consejo urgente, pero el
sobre no contenía mas que una hoja blanca , lo que no impidió al Padre
responder la cuestión que había sido enviada ; el Ángel guardián de la persona
se había encargado de transmitir el mensaje al Padre Pio. Esta es la razón por
la cual con frecuencia el Padre dijo a sus fieles que ellos no tenían necesidad
de venir en persona a presentar sus pedidos , sino que ellos no tenían mas que
encargar a su Ángel guardián transmitir directamente su demanda.
Habiendo dado estos hechos indubitables, observados y vividos por un
gran número de personas, G. P. Siena tiene a bien subrayar la importancia
doctrinal y experimental de un tan gran número de observaciones . Él dijo:
«Esto ya es un hecho de revelación verdadero y auténtico , que una vez
más los racionalistas no pueden explicar — que ellos le reconocían al menos
— y que hizo quebrar las estructuras doctrinales de todos aquellos que niegan
a Dios , la inmortalidad del alma y las entidades espirituales amigas y aliadas
de los hombres. Es de nuevo un hecho que no puede explicarse que gracias a
la luz divina transmitida a los ángeles , y que aquellos -estos, a su turno ,
transponen a los hijos de Dios.»
Capítulo Octavo
SECCIÓN VIII A
Santa Gemma Galgani y su comercio constante con el Cristo , la Santa Virgen
y los Ángeles
Durante los últimos días de la enfermedad , los hijos han sido puestos con el
padre. Cuando se anuncia a Gemma la muerte de su madre tan querida , ella
hizo muestra de un gran coraje y de profunda comprensión : «Madre está en el
paraíso ; por qué llorar?» La hija tenía ocho años.
Sobre la pregunta muchas veces repetida , del hijo que había caído
enfermo, su primera comunión fue adelantada. Ella tuvo lugar el 17 junio
1887, día de la fiesta del sagrado corazón de Jésus. Se había enseñado a
Gemma que aquel que se alimentaba del pan de Cristo viviría de su vida. Al
momento de la comunión , la niña declara sentir un fuego interior que la abrasa
.
He aquí la primera gracia obtenida por la oración ferviente de esta niña :
Un día, la religiosa dijo a sus alumnas : «Un sacramento rehusa el
Sacerdote. Es necesario obtener del buen Dios la salud de esta alma. Oremos
por este hombre.» Durante la oración, fue Gemma la más ferviente y la más
recogida. Tanto luego que Gemma exclama : «Mi hermana , la gracia es
obtenida ». Y, de hecho , se supo que el hombre se había recuperado y había
nombrado a un sacerdote en su cabecera .
Un episodio característico de la Vida de la joven hija muestra cuanto del
otro Lado , se la quería exenta de toda pequeña vanidad femenina , bien
natural a su edad : La madrina de Gemma le había hecho don de una cruz de
oro con una cadena . La hija la toma , la puso a su cuello en el deseo de ser
cumplimentada . Sin embargo, su ángel guardián , con la cual ella vivía en
gran intimidad , se muestra a ella por la primera vez y, observándola
severamente , le dijo :«Las únicas joyas que embellecen a la esposa de un rey
crucificado son las espinas y la cruz ». Gemma se lo tuvo por dicho, puso la
joya en su escritorio , ella no lo llevó jamás . Más aún , su ropa fue siempre de
las más modestas , ropa negra con estola de mismo color .
De complexion delicada, la niña estaba con frecuencia enferma, pues
sufría de tuberculosis hereditaria , caracterizada por los accesos de fiebre
alarmantes. Gemma no estaba de ninguna manera espantada; al contrario ,
ella estaba feliz , pensando en que así ella estaría pronto cerca de Jesús-
Cristo. Ella se cura sin embargo y pregunta al Maestro por qué él no la había
llevado a Él ? He aquí cual fue la respuesta : «Mi hija, es porque durante la
Vida yo te daré muchas ocasiones de mérito duplicando tú el deseo del cielo y
dándote la gracia de soportar la Vida con paciencia ».
Al principio de 1899, nueva enfermedad grave; Gemma acepta de hacer
una novena invocando la ayuda de la Bienaventurada Margarita-María
Alacoque, en la esperanza de obtener una pronta curación perfecta o una
muerto que le abriría el cielo. He aquí cómo la futura Santa narra la gracia de
la que ella fue el objeto :
Algunos instantes antes de medianoche , yo escuché un ruido de rosario ,
luego una mano se posa sobre mi frente y una voz dice nueve veces seguida
un Pater, Ave, Gloria. Es apenas que yo puedo responder , tan débil estaba.
Luego , esta voz me dijo : «Quieres curarte ? — esto me es indiferente ,
respondí yo . — Tú te curarás , respondió ella . Invoca con fervor cada tarde el
corazón de Jésus. Yo vendré cerca de tí todos los días de la novena y
nosotros oraremos juntos .» Este era el Venerable Gabriel que regresó , en
efecto, cada tarde . Él me ponía siempre la mano sobre la frente y decíamos
las oraciones al Sagrado Corazón de Jésus. Él me hizo añadir tres Gloria en
honor de la Bienaventurada María Margarita . La novena se termina el Primer
viernes del mes . Yo me confesé y en la mañana en buena hora he recibido ,
siempre acostada en el lecho , la Santa comunión. Oh! Los momentos
deliciosos que yo pasé con Jésus. Él me repetía : «Gemma, quieres curarte ?»
yo, de emoción , yo no podía responder . Yo dije entonces del corazón :
«Jésus, como quieras tú mismo ». La gracia estaba acordada , yo estaba
curada . Dos horas no habían transcurrido desde la comunión que yo estaba
de pie . Aquellos de mi familia lloraban de felicidad. Yo también estaba
contenta , no de haber recobrado la Salud, sino porque Jésus me había
llamado su hija. En efecto, antes de salirme esta tarde , él me dijo al corazón
de una voz penetrante : «Mi hija , tras la gracia que tu acabas de recibir , tu me
seguirás con más de ardor además. Yo estaré siempre contigo , yo te serviré
de Padre y de madre , hela aquí (él me mostró la Virgen dolorida). Mi
asistencia paternal no puede hacer defecto a aquel que se abandona entre mis
manos ; nada entonces te faltará , en la época misma que se te quite toda
consolación y todo apoyo sobre la tierra.»
Gemma fue permanentemente gratificada con otros carismas. Un día, ella fue
vista en levitación , abrazando un gran Cristo en cruz que se encontraba sobre
la pared de la habitación. El rostro de la joven hija estaba irradiado por un
sonreir angélico.
En muchas apariciones , Gemma implora la gracia de numerosos
pecadores. A este sujeto , he aquí una página típica de su biógrafo ; la joven
hija estaba en éxtasis , sentada sobre su lecho:
El P. Germano acudió por la invitación de la tía Cecilia. Sin duda se debía
haber recomendado a la piadosa hija de orar por un pecador. Resuelto a
arrancar esta alma del infierno , ella discutió con el Salvador. Se escuchaban
las súplicas de la Vidente y, según sus interjecciones , se adivinaba que Jésus,
en vez de esperar el regreso del pecador , quería abandonarlo . Gemma
luchaba con su Maestro, recordándole su misericordia , diciendo en alta voz :
«Si él te ha ofendido en esto y en esto ( así conocía las faltas de este infeliz ),
no te has ofrecido a tu Padre para tal y tal satisfacción?... No te he ofendido yo
mas bien mas, yo a quien tú has colmado de gracias ?... Y tu misericordia no
se dejará conmover ?... Pídeme todo eso que tú quieras , pero salva a este
pobre pecador.» El Señor no cedió .(Sin duda , él era muy feliz de ser
combatido por las oraciones de su sirviente , el que desea la salud de todos. )
Gemma, angustiada , no sabía más cual argumento hacer valer . Entonces ,
súbitamente , ella suplica : «Salva a esta alma en el nombre de tu Madre que
te lo pide . Podrías decirle que no ?»
La misma noche , un hombre se presenta en la oficina del P. Germano. Él
manifestaba el deseo de confesarse . El Penitente se arrodilló y se acusó de
todas las faltas reveladas en la Vidente a éxtasis. Así la ardiente oración de
Gemma había recibido satisfacción, un alma había sido salvada del infierno.
Como todas las verdaderas místicas, futuros santos y santas , Gemma fue
en defensa en los asaltos repetidos del demonio y de sus acólitos , pero ella
fue siempre protegida por su ángel guardián. Un día, afin de causarle graves
fastidios , el demonio buscó hacer pasar a Gemma por mala mujer. Ella le
pide a su ángel y a fin de cuentas , la luz se hizo. El demonio fue por sus
penas inutiles.
Una otra vez, el demonio se ingenia para excitar los sentidos de Gemma
quien, «espantada , corrió al jardin dónde, sin dudar , ella se lanza en una
pieza de agua para quebrar de un solo golpe la tentación. Su ángel la ayuda y
el Diablo , vergonzoso de su falta la deja . » Es tal como el biógrafo de la
Santa narra una de estas tentativas del Diablo para perder a la joven hija.
Muchas veces el Diablo tomó la figura de un hombre , acostando a la joven hija
en las escaleras de la casa y asestándole golpes de bastón sobre la nuca . Ella
no gritaba y se retiraba prontamente en su habitación. El P. Germano creyó
reconocer bajo los rasgos del incalificable Personaje la figura del demonio que
se dedicó a estos ataques sucesivos . Gemma se interesó en la fundación de
las religiosas de Lucques, donde un lugar debía serle reservado, «San Gabriel
de la Adolorida le indica los tiempos que durará la construction del convento ,
las pruebas que la acompañarán y el buen resultado de esta fundación querida
de Dios ».
Más aún , la Santa Virgen la había asegurada que todo terminaría bien, a
pesar de los ataques del demonio para detener esta fundación .
Veamos al pasar una definición sugestiva de los santos emitida por el
biógrafo de Gemma, «estas son nuestros pararrayos delante de la justicia
divina». Al resto, he aquí el hecho que ha motivado esta apreciación del rol
protector de los santos hacia la humanidad todo entera :
Esta hija delicada y fragil quien, debilitada por la tuberculosis , habría tenido mil
razones para vigilar su salud , hizo en realidad todo aquello que él necesitaba
para destruirla. Se podría preguntar si se ignoraba que el Señor llama a ciertos
de sus elegidos a ser contrapesados por su martirio voluntario al
desbordamiento desenfrenado de los pecados de otros hombres.
Guardémonos de criticar las exageraciones de los Santos , ellos son nuestros
pararrayos delante de la justicia divina.
Gemma tenía conciencia de su estado y de la necesidad , o mientras , del
valor purificador del sufrimiento : «Yo gozo y yo sufro al mismo tiempo , dijo
ella , sin embargo yo no quiero renunciar a vivir tan intensamente .»
No son solamente los estigmas y los dones sobrenaturales de Gemma
que cumplen un sujeto de estudio de los más interesantes ; como nosotros ya
lo hemos señalado al principio , estos son los Encuentros constantes de esta
mística con las entidades del Más Allá , con el Cristo , la Virgen , los Ángeles,
muy especialmente con su ángel guardián , y misma con el demonio. El libro
del P. Germano nos enseñará plenamente a este sujeto : «La joven Virgen
estaba largamente favorecida de íntimos coloquios con el Señor , porque ella
casi no tenía éxtasis donde no se hiciera escuchar la voz divina. El Verbo
eterno le descubría sus grandezas infinitas, los designios de su providencia , el
estado de algunas almas en particular ; él le indicaba una obra a realizar en la
Iglesia , un abuso a extirpar .»
Al principio , Gemma estaba muy confusa de estos frecuentes coloquios
con Jésus; ella vio bien al Señor , ella le hablaba , pero ella dudaba para
creer en la realidad de estas apariciones y al valor de estas advertencias ; y
Jésus le reprochaba dulcemente , pero ella respondió humildemente : «Yo
dudo porque los otros dudan. Si tú eres Jésus, debes tú conocer como yo lo
deseo ... el confesor me dijo que tú no eres Jésus.»
Gemma, en su deseo de ser toda a su Dios , había pedido a Jésus de no
ser más enturbiada por las sensaciones , gustativas o otras; ella fue
consolada. Desde este momento, ella perdió toda sensibilidad , las comidas
más finas , las bebidas más agradables le fueron insípidas . De una modestia
a toda prueba, absorbida por su contacto constante con el Cristo , con la Virgen
y los Ángeles, Gemma no hablaba mas que cuando ella era interrogada .
Una vez, Jésus le apareció crucificado , sus llagas sangrando . Él dijo
entonces a Gemma : «Observa , mi hija y aprende cómo se ama . Todo es
obra de amor , de amor infinito... He allí justo hasta cual punto yo te he amado.
Quieres tú amarme ahora ? Aprende primero a sufrir ; el sufrimiento sabe
cómo amar .» A causa de esta vision, Gemma cae en éxtasis y queda
Inconsciente durante muchas horas . Esta necesario sufrimiento redentor
volverá en muchas apariciones. En la época de un coloquio con Jésus, Gemma
dira: «Por lo tanto, Jésus, para dejar de amar , es necesario dejar de sufrir .
Ah! Yo veo ahora que la efusión de tu sangre ha sido la obra del amor. Oh! Si
tú me quieres , Jésus, je me ofrezco voluntaria por víctima.» y, de hecho , para
salvar una madre de familia gravemente enferma, ella pide poner sobre ella
los dolores de esta madre ; la encinta se cura , pero, durante largos meses,
Gemma sufrió el martirio. De una carta a su Director , vemos este pasaje : «Yo
poseo a Jésus cuando yo me repliego sobre mi corazón. Yo siento que yo soy
feliz misma en medio de las desolaciones .» además , ella se declaró «feliz ,
en este mar de desolaciones físicas y morales, de aliviar así al hombre de los
dolores », lo que le permitió así elevarse siempre más arriba en la pura región
del amor divino y de expiar por su parte los pecados del mundo. Un día, tras
la Santa comunión , Gemma pregunta a Jésus por qué él no se la llevó ? ella
obtuvo esta respuesta : «Mi hija , yo quiero darte en el curso de tu existencia
muchas ocasiones de enriquecerte , de merecer ; yo avivaré siempre tu deseo
del Cielo». Cuando nuestra mística se lamentaba a Jesús de no poder más orar
por causa de sus atroces sufrimientos físicos, su ángel guardián que estaba
presente le dijo :«Si Jésus te aflige en tu cuerpo , es por mejor purificar tu alma
; ten paciencia !» Un día, Jésus había dicho a Gemma que, por el ejemplo de
su heroica virtud, ella trabajaba por la salud de los hombres. Ella escribió a
su Director : «El Ángel me dijo que esta noche, Jésus me haría sufrir alguna
cosa además en favor de un alma del purgatorio ».
Hay lugar de retener que con frecuencia los mensajes enviados a Gemma
estaban bajo pliego cerrado ; ella no podía entonces conocer el contenido y
sin embargo las respuestas llegaban claras y netas ; el Ángel se había
concienzudamente absuelto de su misión.
En toda ocasión , el Ángel se ocupa de Gemma, él la protege y le evite de
las caídas peligrosas ; con frecuencia , cuando ella escuchaba pronunciar el
nombre de Dios , Gemma caía en éxtasis y se deslizaba de su silla ; entonces
el Ángel sostenía la cabeza de la joven hija afin de que ella no se lastime en el
suelo; en la calle, cuando Gemma estaba hundida en su meditación y cuando
ella no se preocupaba de los contingences exteriores, era de nuevo su ángel
que la cuidaba y le evitaba caídas y colisiones .
Sin embargo esta asistencia continua del Ángel no fue solamente un
ministerio de protección ; en ocasiones , el Ángel hará reprimendas a Gemma
por todas las faltas que ella podría cometer , misma fuesen ellas de las más
ligeras.
Como todas las místicas, Gemma tuvo que defenderse de las
persecusiones del demonio ; un día que el diablo la había de tal manera
golpeado , Gemma no podía hacer mas ningun movimiento, tales eran sus
sufrimientos ; su ángel vino en su socorro ; él la consuela, la ayuda a ponerse
en el lecho y durante la noche , él hizo buena guardia de su cabecera .
He aquí dos intervenciones angélicas en favor de Gemma, relatadas por el
P. Germano:
Un día, bien cuando ella estaba muy sufriente , Gemma hizo acto de
contrición , «con vivos lamentos por sus innumerables pecados ». El Ángel
vino muy cerca de su lecho y le dijo :«Jésus te trae un gran afecto, ámalo
mucho ». Luego de haberla bendecido , él desapareció.
Otra confidencia de Gemma: «Mientras que yo hacía mis oraciones de la
tarde , el Ángel guardián se me había aproximado ; emocionandome sobre el
hombro , él me dijo :«Gemma, cómo tienes tanto de disgusto en la oración? —
esto no es de disgusto , yo le respondí , hace dos días que yo no me siento
bien.» él la reprende : «Haz tu deber con aplicación , y Jésus te amará mas».
Yo oré pidiéndole a Jesús el permiso de pasar la noche cerca de mí. Él
desapareció pronto , y, el permiso obtenido , él regresó a mi lado. Oh! Que se
había mostrado bueno ! como era el momento de partir, yo le pregunté de
permanecer más. «Yo no puedo, me respondió él , conviene que yo me vaya .
— Eh, id , saluda a Jésus por mí !»
Con frecuencia Gemma hablaba de «Su Ángel que la espiaba». Ella dijo
además: «Parece que mi Ángel guardián mismo está avergonzado de estar a
mi lado. Mi Ángel no se hace ver así a los otros. » ella pensaba en efecto que
todo el Mundo veía a su ángel como ella lo percibia.
«El verdadero Director de Gemma, tenía la costumbre de decir el P.
Germano, es el espíritu -Santo, que se complace en poner el gobierno
inmediato de ciertas almas privilegiadas; es el divino esposo , Jésus con su
celeste Madre , que actúa por el canal del Ángel guardián.»
En efecto, el Ángel guardián estaba encargado de transmitir la enseñanza
de Dios que se resumía así : «Obediencia ! Obediencia ciega ! Si tu no te haz
violentado por ejecutar las órdenes recibidas , yo no te apareceré más », dijo
el Ángel guardián.
Un día el Ángel guardián apareció a Gemma ; él sostenía en las manos
dos coronas, una de espinas, la otra de lis de una maravillosa blancura ; él le
ofrece la elección. Ella opta por la corona de espinas: «Yo quiero ir hacia
Jésus, ella sola me complace. Viva la cruz de Jésus!» El Ángel le da la corona
de espinas que ella besa con fervor. Se recordará que en una otra ocasión ,
cuando Gemma se había puesto modestas joyas, el Ángel le había dicho :«Las
únicas joyas que embellecen la esposa de un rey crucificado son las espinas
de la cruz ».
He aquí una comunicación recibida por Gemma donde se trata de los Ángeles
del altar y de los graves pecados cometidos por ciertos ministros del Santo
Evangelio ; en la época de un éxtasis , el Señor dijo a nuestra mística : « Yo
tengo necesidad de una expiación inmensa, particularmente por los pecados
y los sacrilegios de los que yo he sido ultrajado por los ministros del santuario...
Si yo no hubiera confiado en los Ángeles que rodean mis Altares , cuanto
habría sufrido sobre ese lugar!»
Sobre la pregunta de su confesor , Gemma se esforzó en describir el
estado en el cual ella se encontraba al momento del éxtasis o union mística ,
estado casi imposible de analizar y de describir con palabras humanas.
Gemma dira: «Hoy yo no soy más en mi, yo estoy con mi Dios , toda para él ;
y él es todo en mí y por mí. Jésus esta conmigo y es todo mío ...» Aquellos que
han visto a Gemma al momento de sus éxtasis concuerdan en decir que a este
momento ella no es más una creatura humana , su rostro es aquel de un
Serafin aureolado de las claridades eternas. Se dice que el éxtasis es una
atracción potente del alma hacia Dios y esta atracción se manifiesta a veces
de una manera visible provocando la levitación del sujeto; fue el caso de
nuestra mística. Cada vez que se le pedía a Gemma en describir este cuando
ella ressentía al momento del éxtasis , ella respondía que la Palabra humana
era impotente para describir este estado , como ella es impotente de tener la
noción de Dios ; para ella , la beatitud cuando la experimenta al momento de la
unión mística es una felicidad comparable solamente a la beatitud eterna de los
Ángeles.
Escuchemos a Gemma esforzarse en describir este estado maravilloso y
supraterrestre :
«Imagine una luz de un infinito esplendor , que envuelve a todos los seres
, les penetra y los ilumina , los anima y los vivifica ; ellos no existen mas que
por esta luz ; en ella y por ella , ellos tienen la vida; es así que yo veo a mi
Dios y las creaturas en él.
«Imagine un incendio llenando el universo y extendiéndose infinitamente
por fuera , que abarca todo sin nada consumir, y abrazando , ilumina y se
expande su vigor ; aquellos que rodean estas llamas son los más felices y
desean más ardientemente ser quemados ; es así que yo veo nuestras
almas en Dios.» Sobre el tema de la Santa Trinidad , ella dijo : «Me parece ver
tres personas en una luz inmensa , unidas en una sola esencia ; Trinidad en
la Unidad , unidad en la Trinidad ; y, como única es la esencia de esta
Trinidad , única también es su belleza , única su beatitud. Lo más bello de la
Trinidad , permanece sin palabras.»
Hablando de los éxtasis de Gemma, su biógrafo nos dira que se los puede
dividir en tres categorías : imperfectas, perfectas, extraordinarias.
Los éxtasis imperfectos, los más frecuentes ocurren muchas veces en el
día , desde que su espíritu es llevado hacia Dios , Jésus, la Santa Virgen o los
Ángeles; ellas se producen también durante la oración o la lectura del breviario
; en este momento, bien que pareciendo insensible , Gemma volvía sin
embargo las páginas de su libro de misa según su desarrollo normal. Este
estado duraba poco .
Los éxtasis perfectos eran menos frecuentes, pero más profundos y de
más larga duración; ellos se producían sobre todo tras la Santa Comunión ,
quien, por Gemma, tenia una participación efectiva en los cuerpos de su divino
Maestro.
Los éxtasis extraordinarios , mucho más profundos, se producen
periódicamente dos veces por semana , la tarde del jueves hacia las ocho
horas y el viernes hacia las tres horas después del mediodía. Durante estos
momentos Gemma estaba «asociada , aún corporalmente , dira el P. Germano,
a los dolores de la Pasión del Salvador ».
Escuchar pronunciar el nombre de Dios o aquel de Cristo provocaba en
Gemma un éxtasis más o menos profundo ; por el contrario , las blasfemias
provocaban inmediatamente las lágrimas de sangre; y estas lágrimas eran
tanto más abundantes y dolorosas cuando las injurias estaban dirigidas a
Cristo , su Bien-Amado ; en este caso , la sangre corría lentamente de los ojos
y se coagulaba sobre las mejillas de las que se le caían por grumos .
En su capítulo consagrado al don de oración de Gemma, el P. Germano
pondrá el acento sobre el hecho que: «Aproximando el alma a Dios , la oración
la hace capaz de una vida espiritual intensa y la encamina hacia la perfección
cristiana ». Fue notablemente el caso de Gemma. Y este capítulo importante
llega a su fin con estas juiciosas conclusiones :
«El Señor en su sabiduría infinita conduce a las almas en vías siempre
armonizadas con su naturaleza y la diversidad de sus facultades. A todos , él
imparte la gracia , bajo las formas y en medidas diferentes y proporcionalmente
a su fidelidad .
«Sin duda , todos los cristianos no son llamados a la contemplación
mística , pero no es menos cierto , según la observación del autor de la
Imitación de Jesús-Cristo, que este don sublime de oración no es tan raro hoy ,
que porque muy poco buscan en hacerlos dignos.» Tenemos allí una luminosa
explicación de la carencia del Mundo moderno de verdaderos místicos,
aspirando a la espiritualidad más elevada.
Por eso es que de las tentaciones y persecuciones diabólicas de las que
nosotros hemos ya dado algunos ejemplos , es para observar , según los
dichos de Gemma, que estas pruebas eran propuestas y queridas ; he aquí a
este sujeto una confidencia que ella hizo a su confesor : Jésus le dijo un día:
«Prepárate , mi hija; sobre mis Órdenes, el demonio te va a declarar la guerra,
y poner así mismo la última mano a la obra que yo realizo en tí». Y, de hecho
, las persecuciones , o aún las violencias no faltaron .Satan le apareció bajo las
formas más horribles: un monstruo amenazante , un hombre feroz , un perro
enfurecido. Luego de haber así tratado de aterrorizarla , él se precipitó sobre
ella , la golpeó , la desgarró , la lanzó como un paquete en la habitación,
tomándola por los cabellos y martirizándola de todos maneras. Crucifijo en
mano, Gemma hizo apelación a la Virgen y a su ángel guardián. Estos ataques
del demonio pueden durar horas enteras, o aún mismo toda la noche ; a la
mañana , se veían las trazas visibles sobre el cuerpo de la joven hija. Cuando
ella escribía a su confesor , el diablo tomaba la pluma y rompía el papel . «Una
noche , dijo ella , este «maldito» me ha querido matar.»
La violencia permaneciendo sin efecto sobre el comportamiento de
Gemma, el diablo le apareció bajo los rasgos luminosos de su ángel guardián ,
diciéndole : «Jura obedecerme !» a pesar de la resplandeciente luz que
aureolaba la aparición , Gemma sentía un malestar que le revela la presencia
del Maligno; espantada , ella hizo apelación a la Virgen y descubre la figura
de este falso ángel. Él desapareció bajo la forma de una gran llama roja,
dejando sobre el piso un conjunto de cenizas .
Otro día, en la Iglesia , el diablo le apareció bajo los rasgos de su confesor ;
como él le aconsejaba de limitar sus austeridades y sus maceraciones , ella
tuvo dudas sobre la identidad del personaje ; ella le lanza el agua bendita en la
figura. La aparición desapareció al instante.
Estas perpetuas vejaciones diabólicas no alcanzaban a enturbiar la paz
interior de Gemma. «Bien que él me combata siempre , dijo ella , yo no tengo
mayor temor del diablo. Yo sé que es Jésus que le permite molestar mi cuerpo
, pero él no puede nada contra mi alma.»
Consciente de la utilidad de las pruebas y del sufrimiento , jamás Gemma
se lamentaba o pedía un alivio .
Muchos días antes del deceso de Gemma, el diablo usó de una curiosa
estratagema para envenenar los últimos momentos de la Vida terrestre de
esta mística . Su cuerpo devino de una tal pesadez que un hombre fuerte era
incapaz de levantarla , cuando ella era de una delgadez tal que ella pesaba
apenas una cuarentena de kilos. Cuando la Muerte sobrevino , el despojo
mortal volvió a su peso normal. Se la pudo levantar con la mas grande
facilidad.
Bajo pretexto de confesión general, por orden de su Director , Gemma
había, con la ayuda de su ángel guardián , escrito su biografía . En efecto , el
director quería tener un documento donde estuvieran consignadas todos los
instantes de la Vida de esta mística extraordinaria. El manuscrito terminado
había sido enviado por Gemma a Mme Cecilia quien, antes de poder darlo al P.
Germano como estaba convenido , lo había colocado en un mueblke de su
secretaría. Al cabo de algunos días , el demonio apareció a Gemma . Él tenía
un sonreir sarcástico y tenía en la mano el manuscrito de Gemma. Él gritaba :
«Guerra, guerra, tu manuscrito está entre mis manos !» Gemma hizo parte de
su visión a Madame Cecilia, su madre adoptiva . Búsquedas hechas , el
manuscrito , bien guardado , había desaparecido. A continuación de las
oraciones y de los exorcismos del P. Germano, el diablo fue obligado a traer el
documento. Él fue reencontrado en su lugar en el mueble, pero en un estado
lamentable, desgarrado , roto , ennegrecido y quemado en parte, sobre todo
allí donde los secretos importantes estaban revelados a Gemma por las
entidades del Más Allá.
Gemma tenía el discernimiento de las almas y de los Espíritus , y su
biógrafo consagra toda una sección de su libro para demostrar que Nuestro
Señor se servía de Gemma para hacer conocer a otros su voluntad. He aquí
lo que dijo en relación a esto y que nos hará mejor conocer el comportamiento
de la Santa :
Gemma, de una reserva excesiva , sabía vencerla cuando Nuestro Señor
la hacía hablar o cuando ella creía deber hacerlo de su propia iniciativa . Que
fue a un sacerdote, a una superior de convento , o a algún persona cuando ella
no conocía , ella superaba su timidez y obedecía a su conciencia.
«Actúa con más dulzura en tu gobierno », dijo ella a una superior muy
autoritaria .
«Si tú perseveras en resistir a las inspiraciones que el Señor te envía , te
atraerás sobre tu familia religiosa los castigos del cielo», dijo ella a otra .
El don de leer en las almas le estaba dado con claridad : «Una luz brilla
en mi espíritu », dijo ella .
Las personas en estado de pecado suscitaban en ella una repugnancia y
una dolor que se manifestaban sobre su rostro .
Este don de discernimiento lleva uno o el otro de sus confesores a consultarla
sobre sus penitentes , y el futuro probaba que Gemma había dicho la verdad...
Gemma se vio consultada por personas que ella no conocía : «Qué debo
hacer para santificarme ?» — «Que es lo que el Señor desea de mí?» La Santa
se recogía para dar consejo de Jésus y en toda derechura respondía algunas
palabras breves , luego regresaba a su bienaventurado silencio.
Blasfemias o alabanzas dejaban a Gemma perfectamente indiferente . En
cuanto a su caracter , tal es la opinión de un miembro de su familia: «Yo no
pude jamás constatar que ella hubiese pecado contra la humildad , la caridad ,
la paciencia , la moderación . Durante todo el tiempo que ella habitó con
nosotros, jamás le escuché pronunciar una palabra inútil o superflua, ni hacer
su propia alabanza, ni aquella de su familia. En todas las desgracias y los
dolores de su vida, ella conserva siempre una igualdad de humor asombrosa
.»
Gemma rindió su alma a Dios , el Sábado Santo (11 abril 1903), a las trece
horas. Numerosas curaciones y conversiones póstumas tuvieron lugar gracias
a la intervención de la Santa que fue canonizada el 2 mayo 1940, por S. S. Pio
XII. En esta Santa se aplica perfectamente esta palabra de San Pablo (Galates
VI, 14): Yo me glorificaré en la cruz de Nuestro Señor Jesús-Cristo.
CAPÍTULO IX
SECCIÓN 1
El Cardenal Lépicier y la angelología
SECCIÓN II
Capítulo Noveno
SECCIÓN III
Escritura Santa :
Tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento , es con frecuencia
cuestión de los Ángeles.
En el Antiguo Testamento : un Ángel custodia la entrada del Paraíso
terrestre luego de la expulsion de Adam y de Eva; un Ángel apareció a
Abraham en el momento en que él iba a inmolar a Isaac; un Ángel reconforta a
Elías en el desierto. El Ángel Rafael acompaña a Tobías en su viaje .
En el Nuevo Testamento : el Arcángel Gabriel anuncia a Zacarías el
nacimiento de San Juan el Bautista y a María que será la Madre de Dios. A
los pastores , los Ángeles anunciaron el nacimiento del Salvador ; un Ángel
asiste Jésus en su agonía en el jardin de los Olivos ; estos son de nuevo los
Ángeles que anunciaron la Resurrección a las santas mujeres. Un Ángel libera
a San Pedro de la prisión.
Tradición :
La existencia de los Ángeles nos es atestiguada : 1) por los símbolos que
llaman a Dios «Creador del cielo y de la tierra», o «Creador de cosas visibles
e invisibles»; el cielo y las cosas invisibles designan evidentemente las
creaturas espirituales , se dice los Ángeles; 2) la existencia de los Ángeles es
de nuevo atestiguada por los escritos de los Padres de la Iglesia y por las
definiciones de los Concilios (IV Concilio de Letrán y Concilio del Vaticano).
Razón :
La razón , sin poder demostrar el hecho (1) encuentra una cierta
conveniencia en la existencia de los Ángeles. Nos es fácil en efecto constatar
que hay una gradación en la escalera de los seres creados ; abajo de la
escala , las creaturas puramente materiales, bajo su triple forme, gaseosa ,
líquida y sólida; luego los seres organizados , los vegetales ; por encima de las
vegetales , los animales , cuyas especies más perfeccionadas se aproximan al
Hombre por el cuerpo ; luego, el Hombre compuesto a la vez de un cuerpo y
de un espíritu. Por qué no habrian naturalezas puramente espirituales para
hacer seguir a la naturaleza humana y formar así un intermediario entre Dios
y el hombre ? Se podría añadir , por otra parte , que numerosos fenómenos
extraordinarios , como las posesiones , semejan bien revelar la existencia de
espíritus invisibles.
Jerarquía
Según una tradición que se apoya sobre ciertos textos de la Santa
Escritura (Is. VI, 2 ; Ez. X, 3 ; Col. 1,16; Eph. 1,20,21; 1 Thess. IV, 15; Rom.
VIII, 38), los Ángeles, cuyo número es muy grande, se dividen en tres
Jerarquías, subdivididas ellas mismas , cada una en tres coros. La primera
jerarquía que contempla a Dios , comprende los Serafines , los Querubines y
los Tronos. La segunda, que se ocupa del gobierno del mundo, se compone
de Dominaciones , Virtudes y Potestades. La tercera , que ejecuta las órdenes
de Dios , está formada por las Principalidades , los Arcángeles y los Ángeles.
Los demonios , luego su caída , han guardado su naturaleza, existe
también entre ellos un cierto orden según su grado de perfección natural.
Prueba
Tantos creados , los Ángeles fueron elevados en la orden sobrenatural ; su
primer estado fue entonces un estado de justicia y de santidad , el estado de
gracia. Pero, antes de otorgarles la felicidad del cielo (la visión beatífica ), Dios
quiso ponerles una prueba, para que ellos fuesen merecedores de su destino.
Sin embargo de esta prueba, los unos salieron vencedores , mientras que los
otros sucumbieron . Cual fue la naturaleza de la prueba y cual fue el Pecado
de los malos ángeles? se creyó comunmente que fue un pecado de orgullo que
dividió así los Ángeles en dos campos: de un lado , aquellos quien, a causa de
Lucifer, hicieron escuchar este grito de revuelta : «Yo seré semejante al Muy
alto »; de la otra , aquellos que siguieron al Arcángel San Miguel y
respondieron : «Quien es semejante a Dios ?»
Tantos luego de esta prueba, los buenos ángeles fueron confirmados en
su estado de gracia y admitidos en la gloria eterna. Los otros , los demonios ,
considerados enemigos de Dios , fueron precipitados en el infierno,
especialmente creado para ellos en la hora de su caída.
Capítulo Noveno
SECCIÓN IV
Pero este homenaje nosotros lo debemos sobre todo por la creación de estos
puros espíritus sobre los cuales él tiene más especialmente estampado los
rasgos de su imagen. Enriqueciendo los tesoros de su gracia , él les ha
comunicado el don precioso de la santidad , y los ha hecho dignos de habitar
eternamente en su Reino.
La naturaleza de los puros espíritus es superior a aquella de los hombres.
Estos no ocupan mas que el segundo rango en las clases de seres razonables;
si ellos tienen relaciones con el Mundo espiritual, ellos las tienen también con el
Mundo material; por su alma , ellos tienen a las inteligencias celestes ; pero por
sus cuerpos , ellos participan de las cualidades de la materia. Es entonces
verdadero decir que los hombres son esencialmente inferiores a los puros
espíritus del lado de las perfecciones naturales; lo que impide que la gracia no
pueda llevar a los primeros por encima de los segundos. Y este es llegado en
relación con la Santa Virgen, que la Iglesia pone en un rango muy superior a
aquel de las más distinguidas de las inteligencias celestes.
Dios , creando los puros espíritus, los puso en un estado donde ellos
pueden merecer y desmerecer. Muchos que tenían Lucifer a su cabeza ,
abusaron de su libertad y se dieron al orgullo. Su crimen fue castigado sobre el
campo. Dios les precipita de lo alto del cielo en un abismo de miserias ; y es a
ellos que se da el nombre de espíritus malhechores o de Demonios. Para
aquellos que perseveraron en la justicia , ellos recibieron la inmutabilidad de
esta perseverancia . Ellos fueron confirmados en gracia y coronadas de una
gloria eterna. Se les llama buenos Hijos.
Es evidente por muchos pasajes de la Escritura , que Dios emplea con
frecuencia el ministerio de los Espíritus celestes en la ejecución de los
decretos de su providencia , por relación al mundo en general, y sobre todo por
relación a los hombres. De allí el nombre de ángeles o de Enviados que les es
dado ; nombre que no designa su naturaleza, sino su oficio. Él es atribuido sin
embargo de una manera especial a un cierto orden de espíritus
bienaventurados.
Aquí el autor menciona las nueve Órdenes de los Ángeles , según los
Padres y los libros santos. En su enumeración , los Principados quien, según
la gradación generalmente admitida, están a la cabeza de la tercera Jerarquía
, están encima de las Virtudes ; y los Principados son puestos en medio de la
segunda Jerarquía. Los Serafines representan el amor infinito de Dios y los
Querubines glorifican la todo potencia de Dios. En cuanto al número de los
Espíritus , es innumerable tal como surge de la enseñanza de las Escrituras. Y
el autor precisa la naturaleza de los Ángeles :
Los Ángeles (y bajo esta denominación comprendemos a todos los
espíritus bienaventurados ), los Ángeles son sustancias immateriales, y que
por consecuencia no tienen ninguna de las propiedades de los cuerpos , tales
como la extensión , la divisibilidad , la figura, el color , etc.
Sigue de allí que los Ángeles son de una naturaleza más excelente que
todos los seres que habitan este mundo. Ellos la llevan de nuevo sobre ellos
por las propiedades de esta naturaleza, y por todas las ventajas que son las
siguientes, como por la sutileza , la rapidez de su penetración , la extensión de
sus conocimientos. No es menos cierto que ellos tienen la facultad de
comunicar sus pensamientos los unos a los otros...
Los Ángeles se hablan los unos a los otros por el deseo interior o por la
voluntad que ellos tienen de comunicar sus pensamientos y sus sentimientos.
Como ellos se entienden entre ellos , ellos entienden también el lenguaje de
nuestras almas , sobre todo cuando nosotros nos dirigimos a ellos , y que les
interesa conocer lo que sucede en las nuestras. Por la misma razón , nuestros
ángeles guardianes pueden en un instante instruir de lo que nos sucede a los
espíritus que están alejados de nosotros.
Partiendo de la afirmación que se encuentra en el Evangelio (Luc XV, 7-
10) que existe gozo en el cielo entre los Ángeles por un solo pecador que se
arrepiente , el autor concluyó que los Ángeles se interesan caritativamente en
nuestra felicidad ; luego él continúa su exposición :
Inútilmente intentaríamos concebir la actividad de los Ángeles. Ellos tienen
el Poder de transportarse de un lugar a otro ; y este transporte se hace con una
rapidez de la que no hay ningún ejemplo en las cosas visibles. Él necesita
infinitamente menos tiempo para venir de lo alto del cielo a los lugares más
bajos de la tierra que lo que necesita la luz del sol para llegar hasta nosotros ...
El empleo de los Ángeles durante toda la eternidad será de adorar a Dios sin
cesar , de alabar , de bendecir y de glorificar su nombre.
En el estado de imperfección donde nosotros estamos , no podemos
tener sino una muy débil idea del poder de los Espíritus. Pero la revelación ha
suplido el defecto de nuestras luces , y ha quitado una parte del velo que nos
robaba el conocimiento del mundo immaterial. Es ella que nos enseña que los
malos espíritus emplean mil medios para hacernos caer en el pecado , y que
nos ordena en consecuencia vigilar y tenernos en guardia , afin que nosotros
pudiésemos garantizarnos de la seducción de sus mentiras . Es ella que nos
enseña al mismo tiempo que Dios encarga con frecuencia a los buenos
ángeles del cuidado de asistirnos ; que estas santas Inteligencias se interesan
vivamente en nuestra santificación , y que nosotros recibimos de su caridad los
socorros eficaces .
Si nosotros hemos llevado una vida Santa , los Ángeles, a nuestra muerte
, nos conducirán al lugar de gloria.
En cuanto a San Miguel , Arcángel , que la Iglesia honra en este día (8
mayo), es el Príncipe de los Ángeles fieles que se opusieron a Lucifer y a sus
compañeros de revuelta ; su nombre en hebreo significa : Quien es semejante
a Dios ? Divisa que él adopta como signo de congregación contra los apóstatas
que se creían «semejantes a Dios ». Y es así como él reprime su orgullo. A la
hora actual , el Arcángel protege de nuevo los hombres contra los asaltos del
demonio. San Miguel es también el Protector de la Iglesia , primero de la
Sinagoga , luego de la Iglesia cristiana. Ella le atribuye las numerosas
victorias que ella ha tenido sobre sus enemigos. De allí esta devoción con la
cual los fieles invocan su socorro ; devoción que está acreditada por las
diferentes apariciones del Santo Arcángel. Una de las más célebres es aquella
donde él se manifesta sobre el monte Gargan. Se dijo en las Escrituras que
San Miguel vendrá en el fin de los tiempos a defender la Iglesia contra las
persecusiones del Anticristo.
Combatamos con San Miguel a los Ángeles apóstatas ; pero sepamos que
la humildad y la caridad son las armas que le aegurarán la victoria. Estas
palabras , quien es semejante a Dios , pronunciadas con fe, ponen en fuga a
los demonios más encarnizados en nuestra pérdida.
Se lo ve , la enseñanza dada por este día conmemorativo es completa; él
nos incite a jamás olvidar que uno de los oficios de los Ángeles es vigilar
nuestra seguridad material y sobre todo moral.
Veamos ahora la segunda lección sobre el mismo tema, tal que nos la da
la fuente (B) contemporanea.
El autor trae que Constantino erigió una Iglesia en honor de San Miguel ,
iglesia denominada el Miguelion , devino celebre por muchos milagros que
tuvieron lugar. Y el autor continua su exposición de naturaleza para ilustrar la
significación de la fiesta :
Aunque San Miguel se dice llamado solo en el título de esta fiesta , parece
por las oraciones de la Iglesia , que todos los santos ángeles tienen el objeto .
Nosotros debemos , para celebrarla bien : 1. Agradecer a Dios de la gloria de
la que él llena a los Ángeles, y unirnos a la felicidad de que ellos gozan. 2.
Testimoniar nuestro reconocimiento al Señor que por su misericordia , él a
confiado el cuidado de nuestra salud a estos espíritus celestes que nos hacen
sentir continuamente los efectos de su zelo y de su ternura. 3. Unirnos a ellos
para alabar y adorar a Dios , para pedirle la gracia de hacer su voluntad sobre
la tierra, como los Ángeles lo hacen en el cielo, y de trabajar a nuestro
santificación imitando la pureza de estos espíritus bienaventurados a los cuales
estamos unidos de una manera tan íntima . 4. Honrarlos no solamente con
fervor , sino implorar de nuevo el socorro de su intercesión .
El culto supremo , llamado de Latría , no pertenece mas que a Dios , y no
se podría darle a la criatura , sin caer en la más monstruosa Idolatría , y sin
devenir culpable del crimen de alta traición contra la Majestad divina. Se es
Idólatra , cuando se ofrece el sacrificio a un ser que no es Dios , y que se le
atribuye de una manera directa o indirecta, algún atributo de la Divinidad. Pero
es un honor de un orden inferior que se debe a ciertas criaturas por causa de
su superioridad o de su excelencia. Tal es aquel que la ley misma de Dios nos
ordena de hacer a nuestros padres , a los Príncipes, a los Magistrados , y a
todas las personas confirmadas en dignidad ; tal es de nuevo este honor
mezclado de sentimientos de religion que, según los libros santos y la ley
natural , es debido a los Sacerdotes o Ministros del Muy alto , y que los Reyes
, aún los más malvados , rendían con frecuencia a los Profetas, aunque ellos
fuesen hombres oscuros y abyectos a los ojos del mundo.
Este honor , se lo ve , difiere infinitamente de aquel que no pertenece mas
que a Dios ; a él no se lo puede injuriar; él se reporta a las criaturas , en tanto
que sus perfecciones son los dones de la bondad divina. Cuando
testimoniamos el respeto a un embajador , honramos al Maestro que lo ha
hecho depositario de una parte de su autoridad ; y es el Maestro quien es el fin
ulterior de los sentimientos que manifestamos . La Escritura viene, en este
punto, en apoyo de la ley natural : Da a todos los hombres eso que les es
debido ... El honor , a quien el honor pertenece . (Rom. XIII, 7.)
Honor siendo un testimonio rendido a la excelencia de algún objeto ,
quien puede negar que nosotros lo debemos a los espíritus celestes, cuya
naturaleza es tan perfecta , la excelencia tan sublime , la santidad tan eminente
, la gloria tan luminosa ?... El derecho que los santos ángeles tienen a nuestro
respeto, está fundado sobre muchas razones . La primera se saca de la
excelencia de su naturaleza que los eleva muy por encima de los hombres ;
estos son puros espíritus, en los cuales no se encuentra ningún rastro de
nuestra debilidad ; ellos están dotados de facultades más nobles, y que no
conviene mas que a seres incorporales. En segundo lugar , ellos tienen los
dones sobrenaturales, proporcionados a su excelencia ; cuando la Escritura
habla de ellos , ella les acuerda sobre los hombres una superioridad absoluta ,
aunque algunos Santos particulares puedan ser de una mas grande felicidad ,
como la Santa Virgen, quien es elevada en gloria por encima de todos los
espíritus celestes. Ellos no pueden sin embargo vanagloriarse de un honor
semejante a aquel que nos ha procurado el misterio de la encarnación ; el hijo
de Dios no ha tomado la naturaleza Angélica , sino la naturaleza humana ; y es
como hombre que su padre lo ha establecido Señor de todas las criaturas.
Finalmente los Ángeles merecen nuestra veneración , porque ellos gozan de
un estado de gloria y de felicidad que nada los puede conmover; porque ellos
están sin cesar en la presencia de Dios , que ellos rodean siempre su trono, y
que ellos ejecutan fielmente los decretos de su voluntad suprema. Pero lo que
debe principalmente excitar nuestra veneración por los santos ángeles, es su
invariable fidelidad por el Señor... El ardor de su celo por su gloria y por el
cumplimiento de su voluntad... Penetrados de la humildad más profunda, ellos
reconocen que a él solo la gloria pertenece ... Siempre ardientes de amor ,
siempre inflamados del deseo de hacer estallar sus transportes , ellos repiten
sin cesar sus divinas canciones con un ardor siempre nuevo.
(B) 29 de setiembre :
San Miguel Arcángel y todos los santos ángeles
Capítulo Noveno
SECCIÓN V
La angelología de Swedenborg
(1688-1772)
A título documentario , y, bien que alejándose mucho de la angelología
cristiana oficial o bíblica , nosotros queremos dar algunas ejemplos resumidos
de la angelología del famoso «Profeta del Norte»: Swedenborg. Elevado a las
nubes por unos que vieron en él un nuevo enviado de Dios para la salvación
del mundo, presa del materialismo negador, él fue violentamente rechazado
por los racionalistas del decimo octavo siglo ; menos mal intencionados , lo
consideraron como un suave soñador ; sin embargo la crítica fue mucho más
adelante. El Dr. Gilbert Ballet, profesor agregado de la Facultad de medicina
de Paris, en un estudio , publicado en 1899, no teme decir de Swedenborg «un
loco, víctima de sus alucinaciones visuales y auditivas ».
Lo mental natural puede ser elevado hasta la luz del cielo, en la cual están los
Ángeles, y percibir naturalmente eso que los Ángelas perciben espiritualmente,
así , no tan plenamente como los Ángeles; pero sin embargo lo mental natural
del Hombre no puede ser elevado en la Luz Angélica misma. Por su mental
natural elevado a la luz del cielo, el Hombre puede pensar con los Ángeles, y
mismo hablar con ellos , pero entonces el pensamiento y el lenguaje de los
Ángeles influyen en el pensamiento y el lenguaje naturales del hombre , y no
recíprocamente. Esta es la razón por la cual los Ángeles hablan con el Hombre
en una lengua natural , que es la lengua propia del hombre.
Hay grados del amor y de la Sabiduría en los Ángeles de los tres Cielos .
Los Ángeles del tercer cielo la llevan en amor y en sabiduría sobre los Ángeles
del segundo cielo, y estos sobre los Ángeles del Último cielo, al punto que
ellos no pueden ser reunidos; los grados del amor y de la Sabiduría los
distinguen y los separan ; de allí viene que los Ángeles de los cielos inferiores
no pueden subir hacia los Ángeles de los cielos superiores; y si les es dado de
subir , ellos no los ven.
La ciencia de lo sagrado es como una llave para abrir las causas de las
cosas y entrar.
Me ha sido dado de ver algunas veces que los Ángeles del Último cielo
subían hacia el tercer Cielo; y cuando ellos estaban elevados con esfuerzo , yo
los escuchaba lamentarse que ellos no veían a ningún ángel.
Me ha sido dado de ver con mis ojos la Luz espiritual en la que está el
sonido los Ángeles. La Luz en los Ángeles de los cielos Superiores es de una
blancura tan esplendorosa que ella no puede ser descrita , ni siquiera por la
blancura de la nieve , y además tan luminosa que ella no puede ser mas
descrita , ni aún por el brillo del sol del mundo; en una palabra , esta Luz
sobrepasa miles de vez la luz del mediodía sobre la tierra. Pero la Luz en los
Ángeles de los cielos inferiores puede de alguna manera ser descrita por las
comparaciones ; sin embargo ella sobrepasa la luz mas grande de nuestro
mundo.
De nuevo una vez, hay tres grados en los Ángeles: Celeste , espiritual y
natural. El grado Celeste corresponde al amor , el grado espiritual, a la
Sabiduría y el grado natural, a las costumbres.
Me ha sido dado de conocer por experiencia , que entre los Ángeles de los
cielos superiores y los Ángeles de los cielos inferiores , hay una tal diferencia
de las afecciones y de los pensamientos , y por consecuencia del lenguaje ,
que ellos no tienen nada de común , y que la comunicación se hace solamente
por los correspondencias , que existían por el influjo inmediato del Señor en
todos los cielos , y por el influjo mediato por el cielo supremo en el cielo ínfimo.
Como estas diferencias son tales , ellas no pueden ser expresadas por una
lengua natural , ni por consecuencia ser descritas, porque los pensamientos de
los Ángeles no caen en las ideas naturales, puesto que estos pensamientos
son espirituales ; ellas pueden solamente ser expresadas y descritas por ellos
en sus lenguas , sus palabras y sus escrituras, y no por las lenguas , las
palabras y las Escrituras de los hombres ; de allí viene que se dijo que en los
cielos se escuchan y se ven cosas inefables. Estas diferencias pueden ser
tomadas algún poco por estas, que los pensamientos de los Ángeles del cielo
supremo o tercer cielo son los pensamientos finos ; los pensamientos del cielo
medio o segundo cielo, los pensamientos de las Causas ; y los pensamientos
de los Ángeles del cielo ínfima o primero cielo, los pensamientos de los
efectos. Es necesario que se sepa que, otra cosa es pensar según los fines , y
otra cosa pensar sobre los fines, luego otra cosa es pensar según las causas ,
y otra cosa es pensar sobre las causas ; y también otra cosa es pensar según
los efectos , y otra cosa es pensar sobre los efectos; los Ángeles de los cielos
inferiores piensan sobre las causas y sobre los fines , pero los Ángeles de los
cielos superiores piensan según las causas y según los fines , y pensar según
las causas y según los fines perteneciendo a la sabiduría superior , mientras
que pensar sobre las causas y sobre los fines pertenece a la sabiduría inferior.
Pensar según los fines , es de la sabiduría ; pensar según las causas , es de la
inteligencia ; y pensar según los efectos , es de la ciencia. Por estas
explicaciones , es evidente que toda perfección sube y desciende con los
grados y según los grados.
Capítulo noveno
SECCIONES VI y VII
Sección VI
Un Ángel caído , un Ángel todavía...
En saber que Satan, como los otros demonios , porque él no es mas que uno
de ellos , de nuevo que el Primero , es un ángel. Ángel rebelde Prevaricador y
caído , ya sea ; un Ángel todavía, creado por Dios con y entre los otros
espíritus celestes y para que su caída misma , la caída que ella ha impulsado
, no ha podido quitar esta naturaleza angélica que definió su ser .
Para el teólogo , los demonios caen al tratarse de Angeles; hay allí una doctrina
que pertenece a la tradición más sólidamente establecida ; ella apareció,
netamente expresada , desde los Apologistas del IIº siglo ; la Iglesia no ha
cesado de reafirmarla con fuerza, cada vez que se renueva el peligro dualista
lo que la ha llevado a precisar su frontera de esta lado.
*
* *
SECCIÓN VII
E. Peterson
El libro de los Ángeles (1954)
Erik Peterson, profesor de literatura cristiana antigua en el Instituto
pontifical de Roma , es un especialista de todo aquello que toca en la literatura
de los Padres de la Iglesia ; él ha sido naturalmente dirigido por sus lecturas a
estudiar en detalle la angelología tal como la comprendían y la enseñaban los
Padres ; él ha consignado el fruto de sus lecturas en un libro de alto interés
por su abundante documentación : “El libro de los Ángeles” , con una prefacio
de Juan Danielou, que afirma que nadie estaría mejor calificado que el Profesor
Peterson para hablar con competencia de un tal tema. «Es un tratado de
liturgia, dijo Danielou; la idea principal del libro está en efecto que el culto
cristiano es una participación en la Liturgia de los Ángeles. Y también que los
Ángeles están presentes en el culto cristiano. Sobre este último aspecto, tan
importante por la inteligencia de la liturgia, Peterson trajo numerosos
testimonios de los autores cristianos antiguos, en particular en lo que
concierne la asistencia de los Ángeles en el bautismo , su rol en la eucaristía.
Es todo un aspecto de la Vida litúrgica , perdida y desconocida , quien está
aquí develada.» Esta primera constatación es de las más importantes, porque
ella pone luz en el valor y la utilidad del libro de Peterson; además , el gran
valor de esta exposición muestra bien de nuevo el aspecto místico de la
cuestión; y Danielou observa bien : «Peterson ha sido siempre atraído por las
cuestiones de espiritualidad. Porque la angelología comporta un aspecto
espiritual. En efecto, para toda la tradición antigua, la Vida mística es una
participación en la Vida de los Ángeles. No que el Hombre deviene un ángel,
como lo ha creído Orígenes. Él guarda su naturaleza propia. Pero él lleva una
vida semejante a aquella de los Ángeles y él deviene su compañero . La Vida
espiritual es ya una anticipación de la Vida celeste.»
Una primera afirmación de Peterson será de naturaleza para reflexionar :
«en medio de todo el sufrimiento de este siglo , entre todos los cambios y las
luchas demoníacas que se libran al interior de esta época , hay alguna cosa de
eterna y de inmutable : el culto que los Ángeles hacen para el Eterno , y en el
cual participa la Iglesia terrestre. El «mundo eterno» del que habla el
Apocalipsis es «el cielo », donde se encuentra el trono de Dios. Y allí , los
Ángeles cantan continuamente el Sanctus. Y de hecho , el «mundo eterno »
converge hacia la alabanza de Dios. Sobre este tema Peterson emitió una
constatación a retener : «No son los Serafines , que quedan a una cierta
distancia de Dios , que cantan el Trisagion (el tres veces Santo ), sino los
cuatro animales que llevan el trono de Dios y están por consecuencia mucho
más cerca de Él. La alabanza de Dios es immanente al mundo Eterno, donde
está el trono Dios , y esta es la razón por la cual ellos dicen sin cesar , día y
noche : «Santo, Santo, Santo es Dios , el Señor ». En el Apocalipsis , estos
son los Ángeles del trono — y no los Serafines — que dicen : « Santo, Santo,
Santo ».
El autor insiste sobre un hecho que él dijo que era importante de recordar :
“La Liturgia de la Iglesia terrestre se une en la Iglesia celeste ». Y esto para el
ministerio de los Ángeles. Cómo en el capítulo V del Apocalipsis.
«La porción central de esta pieza está sacada de Isaías , capítulo VI (visión del
Profeta en el Templo).» Sin embargo en la Liturgia cristiana esta visión de
Isaías ha sufrido una modificación significativa ; cuando el Profeta vio la gloria
del Señor «en el Templo », la Liturgia cristiana la vio «en el cielo »; y esto en
relación con el hecho que la Ascensión de Cristo , quien es elevado por
encima de toda denominación , ha tenido lugar.
La visión de Isaías es ampliada y la Liturgia cristiana añade los Ángeles,
los Arcángeles , los Querubines en más Serafines. Hay de nuevo una otra
diferencia entre la Liturgia judía y la cristiana : «El judaismo (nosotros
pensamos aquí en el judaismo ortodoxo ) no tiene conocido mas que una
organización militar del Mundo angélico , pero no una verdadera jerarquía de
los Ángeles.
Para los Judíos , el Sanctus de los Ángeles está ligado al templo de
Jérusalem, mientras que, para los Cristianos , desde la Ascensión de Cristo el
Sanctus resuena en la Jérusalem celeste. Porque la Iglesia en su Liturgia se
une al Trisagion de los Ángeles , porque desde la Muerte y la Ascensión de
Cristo , «la gloria de Dios no habita más en el templo de Jérusalem, sino en el
templo del cuerpo de Cristo , quien subió al cielo ». A este propósito, Peterson
emitirá la observación siguiente :
Es igualmente remarcable que la Liturgia cristiana no se ha contentado de
repetir simplemente la expresión del Profeta (Isaias), según la cual los
Serafines «claman y dicen : Santo, Santo, Santo es el Señor Sabahoth»; en
lugar de eso, la expresión tiene una riqueza asombrosa «De una boca
infatigable, con las alabanzas que no se callan jamás , ellos se claman uno al
otro el Himno de victoria , tres veces Santo, cantando la gloria, cantando ,
glorificando , gritando y diciendo: Santo, Santo, Santo es el Dios de los
ejércitos , el cielo y la tierra son llenos de tu gloria». Por relación a Isaías , es la
duración eterna del Trisagion que es puesta de relieve aquí ... La expresión
verbal misma de la «santificación » de Dios por los Ángeles es bien más
diferenciada en la Liturgia que en Isaías . Encontramos : «Ellos claman
glorificando , gritaron y dicen ». Esta riqueza de la expresión no es un
producto tardío de la evolución de la liturgia; nosotros encontramos este
fenómeno curioso desde el principio del Cristianismo.
Esta riqueza de expresión corresponde a aquella del Apocalipsis de San
Juan , donde se dijo esto :«Gloria, honor , y acción de gracias y además:
«Bendición , gloria, sabiduría , acción de gracias , honor, fuerza y potencia».
Ahora «los Serafines no son los únicos en «santificar » a Dios , todo el Mundo
angélico participa». La Ascensión de Cristo habiendo abierto el cielo , Peterson
llegará a esta conclusion:
El cielo de los Ángeles no es, si se puede expresar así , la parte más
central, la más espiritual del Universo ? También, misma si la alabanza del sol ,
de la lune, de las estrellas, etc., puede ser suprimida de la Liturgia (como en los
Prefacios de la misa romana ), jamás el Himno de los Ángeles podrá
desaparecer del culto de la Iglesia , porque es el que da en la alabanza de la
Iglesia la profundidad y la transcendance que exige el caracter de la revelación
cristiana. El culto de la Iglesia , culto escatológico , es emitido , no de una
naturaleza cerrada sobre ella misma , sino del ser del hombre , trascendido por
una jerarquía de seres más elevados , aquella de los Ángeles , y quien, por
ponerse él a alabar a Dios , tiene necesidad de y ser incitado por la alabanza
del mundo de los Espíritus.
Capítulo Noveno
SECCIÓN VIII
Ania Teillard: La Dimension Desconocida
Experiencias del Más Allá
(La Baconnière, Neuchâtel 1960)
«A los Indios y a las Indias solamente , dira Mme Teillard, se les han
aparecido las Divinidades hindúes: Brahma, Krishna y Radha.» Visiones
identificadas por los yoghis de Pondichéry. El autor se pregunta si estas
apariciones han sido facilitadas por su presencia en India . Es posible dijo ella ,
pero no necesario ; en efecto, ella ha tenido numerosas visiones de los Dioses
del Olimpo sin jamás haber estado en Grecia.
Llegada a Dilip Kumar Roy, Mme Teillard encontró a una Vidente
extraordinaria : Indira Devi; este sujeto metagnomo recibía continuamente los
mensajes del Más Allá ; Indira está en comunicación íntima con Mira, la
princesa mendiga hindú del XV siglo ; inspirada por Mira Baï, Indira compone
poemas en lengua sánscrita medieval ; estos poemas son de una gran belleza
y de inspiración mística más elevada. Por intermedio de esta Vidente , que
había sido advertida por Mira de la venida en India de Mme Teillard, el autor
recibió mensajes personales . A noter que siete años más tarde , en Europa,
Mme Teillard ha sido favorecida con una aparición de esta princesa con la
cual ella estuvo ligada en la época de una encarnación anterior . Y he aquí una
certeza apaciguadora en la cual el autor llegó a causa de sus experiencias del
Más Allá : « Ciertos seres celestes nos guían con una seguridad sin defecto.
Cuando se hace una cuestión de orden espiritual, no se permanece jamás sin
respuesta. Estas son con frecuencia expresadas simbólicamente , en
imágenes o en palabras, en sueños y en estados apropiados , a veces
inmediatamente luego de nuestra pregunta , a veces más tarde. Todo depende
de nuestra receptividad , de nuestra concentración ... Todo aquello que existe
en estas regiones , todo aquello que se vive , es la expresión de un valor
síquico. Este valor , esta existencia , estos imponderables, no son para apreciar
de otra manera que por los medios síquicos , jamás por la vía intelectual.
Como lo dijo Aurobindo: « El supraconsciente no puede ser mensurado sino
con el Supraconsciente». El autor tiene la convicción que se está siempre
socorrido en el momento cuando se tiene verdaderamente necesidad , ya sea
por el descubrimiento de un libro útil , la venida de una persona auxiliadora o
un consejo juicioso dado en el momento propicio . «La vida, dijo el autor , esta
llena de milagros , porque la esfera superior , aquella que contiene la clave de
la Vida terrestre , comienza a penetrar en la Vida cotidiana ». Y esto sobre
todo cuando por la oración, por la meditación , por la caridad , uno se abre a la
acción de esta fuerza de vida.
Para Mme Teillard, los datos de la astrología son relativamente , pero no
absolutamente valorables , porque cuando un ser se desvía de la Vida
cotidiana para dirigirse hacia un objeto espiritual, las predicciones astrológicas
cesan de ser justos. Hay una potencia que viene de las Esferas superiores
sobre la cual las Leyes del destino quedan sin efecto. El autor tuvo
confirmación de este caso por la declaración de una astrologa católica
habiendo hecho la misma constatación : « Luego de una conversion auténtica ,
un horóscopo no es más verdadero, aún indicado anteriormente loss datos
justos ».
Es interesante e instructivo de poner conocimiento de las calificaciones de
los diferentes Dioses olímpicos y planetarios , realizados por las Visiones y
experiencias métanormales de Mme Teillard; mejor que se juzgue :
Jupiter: Dios para la Eterna juventud , de una gran bondad y calor de
corazón ; alegría y júbilo de vivir . De una belleza viril, él es el Prototipo de la
armonía de las formas y de los colores ; es el Dios que preside el genio
artístico y la grandeza cósmica.
Eros: en el magnífico jardín de Jupiter, Eros los deleitaba por los sonidos
encantores de su flauta ; él es el más joven de los Dioses , tan profundo como
ligero , él une y destruye , alivia y hace doler .
Uranus: El más intelectual , el más matizado , el más difícil de los Dioses.
Dios solitario , él no quiere poseer nada , no ser dado a nada ni a persona ; él
vive según la inspiración del momento; él es dotado de un espíritu lúcido e
implacable ; es un inventor génial, revolucionario , Creador y destructor a la
vez, porque él aspira a crear siempre de nuevo. Él no ama los honores , los
observa con un sonreir de piedad , un poco burlón .
Neptuno: Dios de los sueños y de todas las intoxicaciones ; de una
sensibilidad extrema , es el vidente y el poeta .
Saturno : Este Dios no es el anciano de la tradición , es un hombre en la
flor de la edad , en relación íntima con los destinos humanos. «Este Dios de
una sombría grandeza no es una fuerza maléfica así descrita por numerosos
astrólogos . Él quiere que el Hombre encuentre su verdadera naturaleza, su yo
profundo, y esto a través de los sufrimientos y la soledad. Él no castiga , pero
incorpora la pesadez , el Karma tan pesado a llevar , el cáliz a beber justo
hasta las heces . Nuestras pruebas no son castigos, sino la secuencia lógica
de nuestros actos y de nuestros pensamientos , conocidos por Saturno , sin
embargo él no los olvida jamás. Él es Chronos, el tiempo que devora sus hijos
en la idea de hacerlos resucitar un día. Gran alquimista , él transforma el
Plomo humano sin embargo en conocimiento . Señor del Karma, él da la
pobreza voluntaria del místico. Él es sombrío, pensativo y severo , pero radia
sin embargo el Espíritu y el amor ... En el astral , Saturno sabe mostrar a los
hijos la vía para penetrar en el seno de una nueva madre , y, sobretodo ,
cómo ellos deben elegir a sus padres.»
Mercurio : Este Dios tiene un cierto parentezco con Saturno ; él está
dotado de una inteligencia brillante y vasta como Saturno igualmente , pero
esta inteligencia es más fácil, más elegante , el pensamiento es más fluido ,
ella comprende y une espontaneamente los seres y las cosas . «Bajo la gracia
de Mercurio , el más angélico de los Dioses , se oculta el Psicopompo , la
Divinidad misteriosa que guía las almas de la Vida terrestre en el
Renacimiento , a través de la muerte. » Habría allí un paralelo interesante a
ser con las Enseñanzas del Bardo Thôdol, el libro de los muertos tibetano ; se
sabe que un lama se pone cerca del moribundo o del muerto y que le sopla en
la oreja los consejos juiciosos , indicando al alma el camino para seguir una
vez separada del cuerpo.
Lucifer: Es el Arcángel , rey de las tinieblas ; él es de una belleza
resplandeciente; él aparece brillante como un sol de oro ; el más elegante
entre los personajes celestes, él es lleno de ironía y de desdén por las
conductas patéticas de ciertos Dioses; él disimula su sensibilidad extrema bajo
un orgullo agresivo . Su palacio es suntuoso ; con Apolo y las Musas , él es el
Espíritu del Arte ; él representa una potencia creadora en el dominio de la
música y de las artes plásticas ; él es el alma de la naturaleza, el Espíritu de
los elementos , el Espíritu dionisíaco ; amando la vida, él la protege y busca en
perfeccionarla. No es necesario confundirlo con el Satán cristiano , dira Mme
Teillard. De Lucifer, ella ha tenido esta definición : «Saturno desea la
humanización de Dios y este quiere la divinización del hombre ». En muchas
apariciones , Mme Ania Teillard ha tenido visiones de Lucifer; ella resumirá su
impresión así : « Este era el rostro de Lucifer, en su esencia angélica , eterna,
en su pureza de Arcangel ».
Todos ellos no son aptos para ser vistos por los hombres. Algunos de
entre ellos se han separado del globo terrestre.
Los Ángeles, los sabios y ellos saben todo lo que sucede sobre la tierra.
Ellos perciben los colores de las almas y pueden seguir de lejos o de cerca la
evolución de un ser según las variaciones de su tonalidad luminosa.
Y he aquí los colores que pueden tener las almas : el amarillo muy brillante
es el índice de la más alta espiritualidad; luego el naranja por toda una gama se
pasa al azul calmante , suavizante , que nos abre el cielo. El rojo en todos sus
matices expresa la Pasión devoradora justo hasta la más delicada ternura , el
rosa muy claro es el símbolo del amor síquico y espiritual; en cuanto al verde,
es el índice de la fertilidad y del crecimiento , entendido igualmente como
crecimiento de las facultades espirituales.
Ellos perciben a los humanos no solamente por su forma exterior , pero de
nuevo y sobre todo por el color y el olor de las almas ; y es para recordar que
ellos no ven solamente la perla aislada de nuestra existencia actual , sino el
rango entero de las perlas del collar , se dice del individuo o el alma en la
totalidad de sus existencias.
Cuando él sube a una esfera superior , un Dios puede salir de sus
funciones cósmicos y transmitirlas a un sucesor .
De sus numerosas experiencias supranormales, Mme Teillard ha llegado a
esta conclusion: «Hay una ligazón constante entre los diferentes planos o
mundos, pero los mediadores por excelencia entre las esferas son los
Ángeles». También, visto la importancia del tema, el autor consagra una
treintena de páginas , en el décimo capítulo de su obra ; nosotros vamos a dar
un resumen tan fiel como sea posible. Y desde el principio esta declaración:
«Cuando yo me encontré por la primera vez en presencia de un ángel, yo
ignoraba todo de la realidad de estos seres. Esta ignorancia me fue mas bien
favorable, porque yo podía abrirme a esta experiencia sin ideas preconcebidas.
Más tarde , evolucionando , yo profundicé mis conocimientos leyendo todo eso
que yo pude encontrar tratándose de las Jerarquías celestes. » Mme Teillard
comienza su capítulo por esta declaración preliminar , notando la dificultad que
hay de dar a palabras humanas las Visiones angélicas ; esta dificultad ha sido
señalada por todos las místicos, para comenzar por San Pablo que no sabe
justo en qué cuerpo él ha sido llevado al tercer cielo (II Cor. XII, 2-4).
«Para describir a los Ángeles, sería necesario una paleta toda especial:
sus rostros tienen la pureza del cristal, la dulzura de la alabastro rosa pálido , el
nacar y el ópalo palidecen al lado de ellos... Los Ángeles están más allá de los
valores terrestres.
«Los Ángeles son bisexuales , pero no hermafroditas ; siendo andróginos
, ellos están más allá de la polaridad masculino-femenino; ellos han consumado
el matrimonio sagrado interior. Más me hundo en la atmósfera angélica , mas
considero a los Ángeles como de esencia masculina . Ellos han perfectamente
asimilado el «femenino » en el sentido más vasto de la palabra. Ellos tienen
Yang y Yin, según la concepción china; el Yin es la esencia femenina receptiva
del polo opuesto cósmico , biológico, suprapersonal y personal del Yang, el
elemento Creador masculino.
« En presencia de un ángel, no se tiene mas que un solo deseo : verlo
además, entender indefinidamente el mensajero divino, su voz cristalina
llenando el corazón de gozo , temor y de nostalgia . Yo no he visto jamás
ángeles adultos sin vestidos , pero yo he visto con frecuencia a los Ángeles
hijos , su cuerpo perfectamente rosado y desnudo, tal como los pintan los
artistas. La vestimenta de los Ángeles adultos comporta variantes infinitas en
cuanto a la forma y el color .»
Los pintores creyentes , tales como Fra Angelico, Filippo Lipi y Giovanni
Bellini han visto a los Ángeles; el Ángel del Titien es el mensajero más célebre
que creó jamás un artista. .. Es erroneo creer que solo una época o una
creencia religiosa detenta la gracia de percibir a los mensajeros divinos. Hoy
como en el pasado , los Ángeles estan listos para la incursion en nuestra
esfera.
Cuando un hombre es apto para recibir la visión pura, entonces el
Ángel aparece en los sueños. Es asombroso ver el número de personas que
reciben visitantes celestes en sus sueños.
El Ángel conoce nuestra capacidad de comprensión ; él tiene el poder
de pesar nuestras almas.
Ángeles encarnados: existen Ángeles que viven sobre la tierra ,
desconocidos. Ellos se reconocen entre ellos , pero los hombres , en general,
ignoran todo de su estadía. Muchos destinadao enigmáticos a nuestros ojos ,
se iluminan de golpe si admitimos que los Ángeles pueden encarnarse. Este
pueden llegar por error: separados , ellos han caído en la materia , pero ellos
pueden también descender deliberadamente sobre la tierra ; el Hombre solo
pudiendo acceder al conocimiento , los Ángeles deben para alcanzar este
objetivo , recorrer la vía dolorosa del humano . Su lucha con la materia es
terrible; ellos mueren jóvenes . Con frecuencia estos son Creadores, genios.
De los dramas , de los suicidas estallando alrededor de ellos , porque los
hombres se rompen tratando de alcanzar su sustancia angélica indestructible,
ya sea para poseerla , ya sea para destruirla. Que se piensa de la Vida
atormentada de ciertos genios : Rafael Sanzio, Mozart, Chopin, Wagner, Juana
de Arco , Edgar Poe, Byron, Shelly, Verlaine, Rimbaud, y cuanto otros
además.
Aquel que porta en él la sustancia angélica no puede ocultarla
enteramente , mismo cuando él intenta disimularla de la curiosidad humana.
Esta esencia se revela en la obra de numerosos artistas y poetas y da la clave
de ciertas biografías.
El autor estima que conviene meditar un poco sobre los casos
extraordinarios de la Virgen : «Se encuentran reunidos en Juana todos las
atributos de los Ángeles guerreros, y no fue el Arcángel Miguel mismo , el jefe
de la milicia celeste , que le apareció para transmitirle su misión divina? Si
Juana no hubiera sido mas que una simple mortal , las cohortes angélicas se
abrían puesto bajo sus Órdenes? Los Ángeles no pueden obedecer mas que a
un ser de su rango o alguien superior a ellos , lo mismo que Juana obedecía ,
cuando sus Voces se lo pedían .
«Lo mismo cuando sus Voces le predicen que ella caerá entre las manos
del enemigo , ella se somete , llena de dolor y de angustia. A fin de cuentas , la
esencia angélica en ella la llevaba siempre a la victoria sobre la debilidad
humana. Pero, que esta debilidad existía hizo la figura de la Virgen de nuevo
más motivadora.»
A retener el hecho que el Ángel guardián protege nuestra alma contra
los peligros viniendo del exterior como contra aquellos viniendo de nosotros
mismos. Él nos procura la paz interior , él nos exhorta a la oración y a la
penitencia. Finalmente , él nos conduce hacia la iluminación.
El Ángel trae siempre una consolación , pero transmite también un orden
imperioso . Él pide el máximo de lo que puede el humano ; él le muestra lo que
él es y exige que él desarrolle lo mejor en él. La fuerza angélica que él
transmite debe ser transportada sobre la tierra.
Llegado al término de este análisis del libro capital de Mme Teillard, sobre
la dimension desconocida , no podemos mas que aconsejar al lector a
reportarse al original, porque hay de nuevo muchos datos enriquecedores para
escarbar en esta obra.
Por nuestro parte, el hecho que Mme Teillard llega a la certeza de la
existencia de las cohortes angélicas uniendo los mundos , en la creencia en la
existencia de numerosas entidades poblando los mundos supraterrestres , (y
llegando por un canal distinto que aquel de la mística pura), constituye una
enseñanza preciosa e iluminativa; él nos muestra la evidencia que la verdad
es una y que se puede alcanzarla por las vías mas diversas; más aún , el Cristo
nos ha dicho que hay muchos moradas en la casa del Padre ; entonces debe
haber muchos caminos que conduceen allí.
Mme Teillard tiene conciencia del valor y del alcance de sus experiencias
del Más Allá , valor no solamente personal , sino de nuevo enseñanza para
cada uno que se preocupa de la cuestión del destino y del devenir de las
almas. Y he aquí la conclusión finale, de acuerdo con las declaraciones dadas
de todos los místicos y en fin de cuenta con aquellas de todos los ocultistas
serios :
«Yo creo que un dato esencial surge de estas experiencias , aquella que
somos capaces , a través de nuestro siquismo , de vivir cosas en las cuales no
podemos participar a través del intelecto.»
Dicho de otra manera, no es através del intelecto que es necesario
dirigirse si nosotros queremos ser informados sobre la naturaleza, la existencia
y el devenir de nuestra alma.
Por el contrario , cuando se llega a eliminar del campo de la conciencia las
preocupaciones del plano terrestre , entonces , en el momento de la meditación
silenciosa , el alma se libera de su prisión de materia , la intuición se despierta
, se desarrolla y nos pone en contacto directo con la fuerza todo poderosa del
Espíritu y con los seres que pueblan los mundos superiores : ángeles,
Arcángeles y otras entidades en vía de evolución o de transformación.
Es allí, la sola, el verdadero conquista de «la Dimension desconocida ».
CAPÍTULO X
Primera parte
Tabla sintética de los atributos y Carismas de los nueve coros de los Ángeles
Nosotros pensamos que será útil al lector preparar en una sola tabla
sintética los atributos y carismas de los nueve coros de los Ángeles tal como
nosotros los encontramos esparcidos en la Biblia así como en los escritos
de los Padres y de los Doctores de la Iglesia. Se tendrá así una mejor vista de
conjunto del ministerio de los Ángeles en la economía celeste y terrestre.
La primera noción dada por todos los autores es que hay entre los Ángeles
tres Jerarquías, compuestas cada una de tres Órdenes o Coros.
Los Serafines son todo amor , eterno amor , inflamados de Amor divino.
Ellos son los primeros benditos de entre los seres ; urnas de amor , ellos
exhalan la Todo potencia divina.
Séraphim significa : espíritus ardientes de zelo y ardientes.
Genios del fuego, brillantes como el fuego .
Ellos nos purifican por el fuego celeste y nos inflaman de amor por Dios.
Ellos cantan sin fatigarse las alabanzas de Dios , repitiendo sin cesar el
Trisagion , el tres veces santo.
Ellos son detentores de la sabiduría y de las ciencias sagradas.
Ellos corresponden al elemento fuego de los alquimistas y de los ocultistas.
Referencia bíblica , Biblia : Isaías VI, 1-2.
Réf. Script. Biblia : 1 Pedro 11,9. El apostol habla del « Pero vosotros sois linaje
escogido, real sacerdocio, Nación santa, pueblo adquirido, para que anunciéis las
virtudes de aquel que os ha llamado de las tinieblas a su luz admirable.».
He aquí dos imágenes de los siete Asistentes , uno visto por un psiquista , el
Dr. Rozier, el otro por un ocultista , sabio cabalista y martinista, Miguel de
San-Martin.
Los siete Arcángeles
Miguel Quien es como Dios ?
Gabriel Fuerza de Dios. Hombre de Dios o Hombre -Dios
Rafael Fuerza mediadora de Dios. Dios cura o Medicina de Dios
Uriel Luz , fuego de Dios o fuego del Señor
Seatiel ?
Jehudiel ?
Barachiel ?
CAPÍTULO XI
Breve iconografía de la angelología de principios del XIXe siglo
CONCLUSIONES
Llegado al término de nuestro estudio sobre el misterio y el ministerio de los
Ángeles , nosotros pensamos que el lector que nos halla seguido , paso a paso
, todo a lo largo de nuestra exposición habrá ganado una certidumbre , fuente
de coraje, de paz y de gozo , certeza que existen numerosos intermediarios
entre el Hombre y Dios ; las cohortes angélicas son una realidad lo mismo que
la existencia de nuestro Ángel Guardián , cuya misión en todo instante es la de
asistirnos , de guiarnos a través de las dificultades de la Vida y de protegernos
eficazmente contra los ataques del mal.
La Piedra Asesina
tres pequeños pastores hacían un día pastar sus tropillas sobre el alpe
Stuffel, valle de Viège. Hacia la hora de retirarse, como las vacas , fatigadas
de pastar , estaban acostadas bajo los árboles de la foresta , ocupadas en
rumiar , los hijos estaban sentado sobre la hierba , a la sombra de un abeto .
Cada uno de estos chicos se divertía solo, sin llamar a sus camaradas a
compartir su juego.
El Primero de los niños , acostado en medio de un mechón de
rododendros , cavaba en el cesped pequeños agujeros, para el camino de las
almas.
Una excavación practicada en el suelo representa este bajo mundo.
Pequeñas escaleras indican el camino del Cielo; otros escalones que
descienden en el suelo, son la vía del purgatorio y del infierno. El trabajo
realizado , se lanza en el aire el cuchillo , como en el juego de azar se lanza
un dado y según la manera en la que él cae, el alma sube hacia el Paraíso o
desciende hacia el abismo. Los hijos de las montañas aman mucho este juego,
pero ellos lo realizan lejos de los ojos de la Madre que no quiere verlos jugar
sobre un tema tan grave.
El segundo niño reacomodaba su calzado que ofrecía numerosos
agujeros, mientras que la tercera — una niña — tejía un calcetín .
El zapatero Amador rompió de golpe el silencio y dijo a sus compañeros
mostrando un bloc de roca que amenazaba el teatro de sus juegos : «Si esta
piedra grande apareciera súbitamente del suelo y ella rodara sobre nosotros ,
que haríamos ?» El otro niño respondió :«Yo me salvo , porque yo no estoy de
nuevo en el purgatorio ». El interpelador respondió :«Yo, yo vuelvo a mi lugar y
yo me salvo ». La hija piensa : «Yo, yo me recomiendo a mi Ángel guardián ».
En el mismo instante la Piedra se desprende y rueda sobre el grupo de
hijos. Ella aplasta a los dos hombres. La joven hija sola escapa como por
milagro.
*
En la misma obra , se encuentra relatada una leyenda de Gruyère: Los
cisnes del Lago negro . Veamos este encantador pasaje :
«Hacía una hora que el niño dormía a la sombra de un abeto ; bajo el
encanto de un sueño delicioso , él veía suaves rostros , llenos de sonrisas,
inclinarse hacia él .
«Su Ángel guardián agitaba sus alas para refrescar el aire que él
respiraba , y tres otros ángeles le presentaban ramos tan brillantes que ellos
semejaban estar hechos de pedrería.»
*
Nuestro narrador, M. El Pastor Alfred Cérésole, en “Leyendas de los
Alpes vaudenses”, ha consignado una oración particular , en patois, que ha
recogida en ciertos caseríos alejados de las montañas:
En mi blanco lecho yo me acosté ; tres ángeles encontré que me dijeron
que durmiese bien, que no tuviese miedo , ni del fuego, ni de la llama , ni de la
muerte subita, ni del acero templado , ni de la madera puntiaguda , ni de
piedras quebradas...
Dios bendiga los listones y las vigas y todo aquello que hay en la casa.
En la misma obra , se encuentra todo un capítulo consagrado al estudio
del Diablo y de los demonios , tal como ellos eran entonces comprendidos y
temidos entre el Pueblo.
EPILOGO
Una última vez nosotros nos detuvimos. Jésus dijo : «Es el tercer cielo». El
Ángel que había conducido el viaje me tomó por la mano y me condujo hacia la
ciudad de Dios... Una gran puerta estaba largamente abierta y yo la franqueé
con el ángel , caminando sobre una ruta de oro luminoso. Había campanarios ,
brillantes como diamantes , que daban la hora . El Ángel me tomó por la mano
y me mostró un gran árbol que llevaba frutas y, al lado , un río claro como el
cristal...
Entonces el Ángel me coloca delante de un trono, que parecía tan grande
como una montaña y hecho de oro puro. Sobre este trono, Jesús estaba
sentado . La luz de su rostro era tan luminosa que yo caí a sus pies. Él me
dirigió palabras de confortamiento y dijo al ángel : «traeme el vaso de aceite ».
En este momento mi marido se encontraba a mi lado. Jésus vierte el aceite
sobre nuestras dos cabezas diciendo : «Yo los he ungido a los dos por una
obra particular. Ustedes traerán la Liberación al pueblo en sufrimiento . Yo
tengo un trabajo especial para darles ... La enfermedad deberá salir cuando tú
ores por las enfermedades y los atormentados . Ustedes deben permanecer
humildes para que yo pueda trabajar a través de ustedes.»
El alma de nuestra mística habría bien querido permanecer disfrutando las
delicias del tercer cielo , pero ella debía volver a descender para cumplir la
tarea que le estaba destinada ; y he aquí cómo el retorno al cuerpo terrestre
sucede :
Estamos descendiendo de la misma manera que nosotros hemos subido .
Yo volví a entrar en mi cuerpo y yo me encontré en el lugar donde me había
arrodillado .
Cuando yo abrí los ojos , yo vi a mi marido con el Presidente de la
Escuela y un doctor. El Doctor declara que él no había encontrado ninguna
pulsación antes que yo abriese los ojos y él estaba de lo más perturbado .
Desde la época durante las numerosas campañas de Despertar , multiples
y diversas fueron las curaciones obtenidas por la imposición de las manos de
estos dos místicos que no se cansaban de repetir y proclamar que «el Señor
libera al Pueblo de todo tipo de enfermedades y sufrimientos , lo confirman los
prodigios y los milagros ».
El Evangelista Wilbur R. Ogilvie, él también ha visto al Señor , pero él no
sabe cómo expresarlo , «porque esto sobrepasa nuestras posibilidades
humanas... Me es imposible describírtelo , las palabras me faltan . Los profetas
y los Apóstoles han tratado de hacerlo y ellos se encontraban pocos medios de
expresión.» En la presencia del Señor , se siente un gran miedo ; sus amigos
estaban asombrados de su comportamiento y estaban desilusionados de no
ver nada , pero sin embargo , ellos declararon haber sentido poderosamente la
presencia del Señor. Ogilvie ha tenido muchas visiones semejantes, siempre el
rostro del Señor estaba «resplandeciente y los rayos de su Persona eran más
blancos que la nieve ». Para recordar , cuando el Evangelista estaba
favorecido de la visión y de un coloquio con el Señor , él volvía con «el rostro
brillante, como el rostro de Moisés había resplandecido cuando él habla con el
Señor sobre el monte Sinaí (Exodo 34, v. 29-39).
Sin embargo , piensa él , los Romanos del Señor son formales: los carismas ,
notablemente aquel de curación de las enfermedades , son prometidos para
aquellos que tienen la fe. Entonces por qué no podía él mismo , él también ,
curar por la imposición de las manos ? su fé estaba en este punto deficiente ?
Él tuvo depresión nerviosa. El médico ordenó seis meses de reposo, pero los
medios financieros del pastor no le permitían tales vacaciones ; es cuando él
asistió a los reuniones del Rev. William Branham, en Kanzas City. Él vio
numerosas curaciones espectaculares . Su fé fue vivificada y él gritó a Dios por
obtener su curación . Una vez consolado y restablecido , él se consagra
enteramente a su Iglesia . Pero la Providencia tenía otras vistas sobre su
servidor. Cuando durante sus vacaciones él asistía a un Despertar , el Cristo le
apareció y le dijo que él debía abandonar el servicio de su iglesia y
consagrarse al Ministerio de curación ; él lo promete , sin embargo él estaba
angustiado por lo que pensaría su mujer. Pero ella había sido divinamente
advertida de la cosa .
Algunos extractos de « Dios les habla», las visiones angélicas y divinas
que son relatadas son de naturaleza para confirmar la Palabra de Cristo , dada
en conclusión de su testimonio , por el Rev. Vinyard: él es el mismo ayer, hoy
y eternamente.
Una noche de verano del año 1216, Francisco en oración recibió la orden de ir
a pedir la gracia siguiente al Papa Honorius: Aquel que visitara , luego de ser
confesado , la pequeña iglesia (la Portioncule), obtendría que todas las penas
temporales debidas a sus pecados le fuesen perdonadas . Como el Papa
dudaba en acordar este privilegio , Francisco le dijo entonces : «MonSeñor , la
pregunta no viene de mí mismo, sino de Aquel que me ha enviado , nuestro
Señor Jesús-Cristo». Honorius habiendo finalmente acordado la indulgencia ,
Francisco se inclina para salir y él iba alejarse cuando el Papa le dijo :«Simple
de espíritu , dónde vas ? Cómo vas tu a probar que ustedes han recibido esta
indulgencia ?» Francisco respondió :«Yo no pido otros documentos . La Santa
Virgen es el documento , el Cristo es el notario , y los Ángeles son los testigos
(1).»
Puesto que nosotros regresamos una vez más sobre los encuentros
íntimos del Pobre con las cohortes angélicas , por qué no citar la oración de
San Francisco , oración de las que la inspiración es perfectamente Crística y
de las más angélicas :
ORACIÓN DE SAN FRANCISCO
Señor , haz de mí
un instrumento de tu paz.
Allí donde hay odio , que yo ponga el amor ;
Allí donde haya ofensa , que yo ponga el perdón ;
Allí donde haya discordia , que yo ponga la unión ;
Allí donde haya error, que yo ponga la verdad ;
Allí donde haya duda , que yo ponga la fé ;
Allí donde haya desesperación , que yo ponga la esperanza ;
Allí donde haya tristeza , que yo ponga el gozo ;
Allí donde haya tinieblas , que yo ponga tu luz.
Porque;
Es dando ............ Que se recibe ;
Es olvidando ........... Que se encuentra ;
Es perdonando ......... Que se es perdonado ;
Es en sacramento ........... Que se resucita
A LA VIDA ETERNA.
El Padre Pio tenía horror que se hablase delante de él de los milagros que
él cumplía diariamente y cuando sus amigos le ponían sobre este tema , él
desviaba la conversación. Un día que se le preguntó , en ocasion de la fiesta
de San Antonio de Padua , lo que él pensaba de las bilocaciones de este
Santo , él respondió :«Estos son milagros de los que Dios se sirve para llegar
a sus fines». se insistió y se le pregunta si los santos en bilocación tienen
conciencia de sus desplazamientos : «Seguramente , dijo él , ellos lo tienen en
cuenta. Ellos pueden no saber si es su cuerpo o su alma que se desplaza ,
pero ellos están muy concientes de esto que les sucede y ellos saben donde
ellos van .» Los amigos del Padre, no de nuevo satisfechos , insistieron ;
entonces el Padre excedido , deja caer sobre ellos , de Muy Alto, estas
palabras : «Imbéciles ! no conviene apelar a la razón. Es un milagro de Dios. Y
para Dios todo es posible.»
«Es un milagro . Es suficiente tener fe.»
*
*