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Doi: http://dx.doi.org/10.12804/acdi8.1.2015.03
Introducción
1
Cárdenas, Fabián, “A Call for Rethinking the Sources of International Law: Soft Law and
the Other Side of the Coin”, Anuario Mexicano de Derecho Internacional, 2013, 33, pp. 355-403.
contemporánea.
Para el desarrollo satisfactorio de la presente investigación y con mi-
ras a poner en contexto los planteamientos que se expresarán en el tercer
aparte, en primera medida, se hará una reconstrucción dogmática del con-
cepto clásico de la costumbre internacional junto con sus dos componen-
tes tradicionales (sección 1), para, en una segunda instancia, profundizar la
teoría relativa al elemento subjetivo: la opinio juris (sección 2). Finalmente, se
pondrá a prueba tal definición detallada de la opinio juris en el contexto dado
en la parte inicial, a fin de determinar su vigencia conceptual; este proceso
se llevará a cabo no solo con contrastes desarrollados a partir de la doctrina
jurídica clásica y contemporánea, sino mediante el análisis de los desarrollos
propios de la jurisprudencia internacional, en particular de la cij, uno de los
tribunales con mayor legitimidad y reconocimiento para el di.
El trabajo no pretende darle una solución definitiva a los problemas
epistemológicos de la costumbre, ya que esto sería más que ilusorio, no obs-
tante, como resultado final, se espera discernir si la teoría de la costumbre
internacional necesita ser replanteada y si es un debate que necesita profun-
dizarse en el derecho internacional contemporáneo; igualmente, se busca
discernir si el concepto tradicional de opinio juris es insuficiente o no para
explicar la práctica social internacional contemporánea, y si esta eventual-
mente sugiere que en la actualidad la receta de la costumbre está compuesta
por un solo ingrediente: la opinio juris.
2
El Doctorado en Ciencias Jurídicas es adelantado en la Pontificia Universidad Javeriana
bajo la supervisión del profesor Rafael A. Prieto Sanjuán de este claustro y el profesor Jean
D’Aspremont de la Manchester University, con la financiación de Colciencias.
3
Koskenniemi, Martti, From Apology to Utopia: The Structure of International Legal Argument,
Cambridge University Press, 2005, p. 398.
4
Thirlway, Hugh, “The Sources of International Law”, in Evans, Malcolm (ed.), Interna-
tional Law, 1st ed., Oxford University Press, New York, 2003, p. 124. Ver también: D’Amato,
Anthony, “Trashing Customary International”, American Journal of International Law, 1987,
(101), en http://anthonydamato.law.northwestern.edu/adobefiles/a87a-trashing.pdf
5
Shaw, Malcolm, International Law, 6th ed., Cambridge University Press, New York,
2008, p. 73.
6
Ibíd., p. 73.
7
El Estatuto es tomado del Estatuto de la Corte Permanente de Justicia Internacional y
fue adoptado después de la terminación de la Segunda Guerra Mundial y durante la creación
de la Organización de las Naciones Unidas. Thirlway en Evans, supra nota 4, p. 120.
8
Evans, supra nota 4, p. 124. Ver también: Malanczuk, Peter, Modern Introduction to Interna-
tional Law, 7th ed., Routledge, New York, 1997, p. 36.
9
Artículo 38 del Estatuto de la cij.
10
Por ‘law ascertainment’ o ‘criterios de determinación del derecho’ han de entenderse los
parámetros formales preestablecidos para establecer la existencia de una norma jurídica, es
decir, una regla secundaria en términos hartianos. De la existencia de dicha regla deriva el
formalismo del derecho internacional contemporáneo. Ver al respecto la extensiva argumen-
tación de D’Aspremont, Jean, Formalism and the Sources of International Law: A Theory of the
Ascertainment of Legal Rules, Oxford University Press, Oxford, 2011, p. 38, en http://papers.
ssrn.com/sol3/papers.cfm?abstract_id=1969795
En contraste con el concepto de ‘law ascertainment’, el de ‘law making’ o de ‘elaboración
11
del derecho’ hace referencia a la manera específica como una regla primaria en concreto es
producida atendiendo a los criterios formales de la regla secundaria de ‘law ascertainment’ que
establecen los parámetros de existencia. Al respecto, ver, por ejemplo: Boyle, Alan & Chinkin,
Christine, The Making of International Law, Foundations of Public International Law, Oxford
University Press, Oxford, 2007, p. 263.
12
D’Aspremont, supra nota 10, p. 5. “It (this research) aims at raising awareness of the cost and
contradictions of the non-formal law-ascertainment that lies behind sources like customary law”.
Mendelson, Maurice, The Formation of Customary International Law, The Hague Academy
13
Collected Courses, Martinus Nijhoff, The Hague, vol. 272, 1998, p. 173.
14
Mendelson, Maurice, “The Sources and Evidences of International Law”, in Fitzmaurice,
Malgosia (ed.), Fifty Years of The International Court of Justice, Cambridge University Press, 1996,
p. 71. El profesor Mendelson trata el tema de la costumbre particular.
15
Asylum (Perú vs. Colombia), icj, fallo del 20 de noviembre de 1950; Right of Passage over
Indian Territory (Portugal vs. Indica), icj, fallo del 12 de abril de 1960.
Shaw, supra nota 5, p. 120; Evans, supra nota 4, p. 120.
16
17
North Sea Continental Shelf (República Federal Alemana vs. Alemania/Dinamarca), icj,
fallo del 20 de febrero de 1969.
Shaw, supra nota 5, p. 120; Evans, supra nota 4, p. 120.
18
19
Malanczuk, supra nota 8, p. 40. Esto, por supuesto, no obsta para que una norma de jus
cogens pueda ser modificada mediante el surgimiento de otra norma de jus cogens, la cual origi-
nalmente también requerirá práctica.
Mendelson, supra nota 13, p. 170; Thirlway en Evans, supra nota 4, p. 128.
20
21
Koskenniemi, supra nota 3, p. 398; Shaw, supra nota 5, p. 93; D’Amato, supra nota 5,
p. 3.
Dinstein, Yoram, The Interaction Between Customary International Law and Treaties, The Hague
22
Academy Collected Courses, Martinus Nijhoff, The Hague, vol. 322, 2006, p. 325.
D’Amato, supra nota 4, p. 3.
23
Uribe Vargas, Diego, La paz es una tregua: solución pacífica de las controversias internacionales,
25
Ibíd., p. 124.
28
Ibíd., p. 125; Dinstein, supra nota 22, p. 265. Ver también: Shaw, supra nota 5, p. 74.
30
31
Uribe, Diego & Cárdenas, Fabián, Derecho internacional ambiental, Fundación Universitaria
Jorge Tadeo Lozano, Bogotá, 2010, p. 140; Malanczuk, supra nota 8, p. 39.
Shaw, supra nota 5, p. 82.
32
33
Mendelson, supra nota 13, p. 198; Hillier, Tim, Source on Public International Law, Cavendish
Publishing Limited, London, 1998, p. 71.
Asylum (Perú vs. Colombia), supra nota 15, p. 15; Shaw, supra nota 5, p. 76; Uribe &
34
Cárdenas, supra nota 31, p. 122; Hillier, supra nota 33, p. 71.
Fisheries (Reino Unido de la Gran Bretaña vs. Noruega), icj, fallo del 18 de diciembre de
35
1951, p. 8. Ver también: Shaw, supra nota 5, p. 77; Malanczuk, supra nota 8, p. 43.
Malanczuk, ibíd., p. 45; Uribe & Cárdenas, supra nota 31, p. 140.
36
Koskenniemi, supra nota 3, pp. 309, 389; Uribe & Cárdenas, supra nota 31, p. 140.
38
39
Cheng, Bing, “United Nations Resolutions on Outer Space: ‘Instant’ International Cus-
tomary Law?”, The Indian Journal of International Law, 1965, pp. 23-112.
Right of Passage over Indian Territory, supra nota 15; Fisheries, supra nota 35.
41
42
“… the Court is bound to hold that the Norwegian authorities applied their system of delimitation
consistently and uninterruptedly from 1869 until the time when the dispute arose”. Fisheries (Reino Unido
vs. Noruega), ibíd., p. 26; “… The Court, therefore, concludes that, with regard to private persons, civil
officials and goods in general there existed during the British and post-British periods a constant and uniform
practice allowing free passage between Daman and the enclaves”. Right of Passage over Indian Territory
(Portugal vs. India), ibíd., p. 38.
Shaw, supra nota 5, p. 82; Malanczuk, supra nota 8, p. 39.
43
44
Military and Paramilitary Activities in Nicaragua (Nicaragua vs. ee. uu.), icj, fallo del 27 de
junio de 1986.
45
“In order to deduce the existence of customary rules, the Court deems it sufficient that the conduct of
states should, in general, be consistent with such rules, and that instances of state conduct inconsistent with
a given rule should generally have been treated as breaches of that rule, not as indications of the recognition
of a new rule”. Military and Paramilitary Activities in Nicaragua, ibíd., párr. 186.
Dinstein, supra nota 22, par. 64.
46
Goldsmith, Jack & Posner, Eric, “A Theory of Customary International Law”, in John
47
M. Olin Law & Economics Working Paper, Nº 63, University of Chicago, 1998, p. 12.
Ibíd., p. 27.
48
El nombre técnico por la doctrina a este elemento es el de: opinio iuris sive necessitatis. Hiller,
49
supra nota 27, p. 75; Thirlway en Evans, supra nota 4, p. 125; Shaw, supra nota 5, p. 75.
Shaw, ibíd., p. 75. El factor psicológico, la creencia por parte de un Estado que se com-
50
portó de una manera determinada debido a que estaba bajo la obligación de actuar de esa
manera.
Lotus (Francia vs. Turquía), icpj, fallo del 7 de septiembre de 1927.
51
En este caso, la práctica a la que hizo referencia Francia en los casos de colisión de em-
52
“El límite exterior del mar territorial está constituido por una línea, cada uno de cuyos
56
puntos está más próximo a la línea base, a una distancia igual a la anchura del mar territorial”.
Artículo 6º de la Convención de Ginebra sobre Mar Territorial y Zona Contigua, 29 de abril
de 1958.
North Sea Continental Shelf, supra nota 17, par. 61.
57
Es decir, una norma que puede ser o que debería ser en un futuro. Malanczuk, supra
58
nota 8, p. 35.
North Sea Continental Shelf, supra nota 17, par. 77.
59
Este punto sería confirmado nuevamente por la icj en el caso de Military and Paramilitary
61
64
“For a new customary rule to be formed, not only must the acts concerned ‘amount to a settled practice’,
but they must be accompanied by the opinio juris sive necessitatis. Either the States taking such action or other
States in a position to react to it must have behaved so that their conduct is ‘evidence of a belief that this practice
is rendered obligatory by the existence of a rule of law requiring it. The need for such a belief, i.e. the existence
of a subjective element, is implicit in the very notion of the opinio juris sive necessitates”. Ibíd., par. 77.
Asylum, supra nota 15, y North Sea Continental Shelf, supra nota 17.
65
66
“It is of course axiomatic that the material of customary international law is to be looked for primarily
in the actual practice and opinio juris of States, even though multilateral conventions may have an important
role to play in recording and defining rules deriving from custom”. Continental Shelf (Malta vs. Libya), icj,
fallo del 3 de junio de 1985, par. 27.
67
D’Amato considera que realizar esto sería revertirla de opinio juris, lo cual significaría que
la convención no tiene un contenido independiente a la costumbre internacional. D’Amato,
supra nota 4, p. 2.
Dinstein, supra nota 22, par. 72.
68
national Humanitarian Law: Do Not Say What You Do or Do Not Do What You Say?”, in
Van Steenberghe, R. (ed.), Droit international humanitaire: un régime spécial de droit international?,
Bruylant, 2013, en http://papers.ssrn.com/sol3/papers.cfm?abstract_id=2230345
71
Sharma, Surya, “Territorial Sea”, in Bernhardt, R. (ed.), Encyclopedia of Public International
Law, Max Planck Institute for Comparative Public Law and International Law, vol. 11, p. 328.
75
“The Court does not consider that, for a rule to be established as customary, the corresponding practice
must be in absolutely rigorous conformity with the rule. In order to deduce the existence of customary rules,
the Court deems it sufficient that the conduct of States should, in general, be consistent with such rules, and
that instances of State conduct inconsistent with a given rule should generally have been treated as breaches
of that rule, not as indications of the recognition of a new rule”. Ibíd., par. 188.
76
“The Court has however to be satisfied that there exists in customary international law an opinio juris
as to the binding character of such abstention. This opinio juris may, though with all due caution, be deduced
from, inter alia, the attitude of the Parties and the attitude of States towards certain General Assembly
resolutions, and particularly resolution 2625”. Ibíd.
Según Dinstein, la costumbre internacional depende de la sumatoria de la opinio juris y la
77
práctica, debido a que de otro modo el estado de práctica sería solo ‘usage’. Dinstein, supra
nota 18, p. 294. Ver también: Swaine, Eduard, “Rational Custom”, Duke Law Journal, 2002,
52, p. 559, en http://papers.ssrn.com/sol3/papers.cfm?abstract_id=342900
78
Shaw, supra nota 5, p. 85; Thirlway en Evans, supra nota 4, p. 124; Mendelson en Fitz-
maurice, supra nota 14, p. 63.
Koskenniemi, supra nota 3, p. 147.
79
80
Shelton, Dinah, “International Law and ‘Relative Normativity”, in Evans, supra nota
4, p. 151; Hanspeter, Neuhold, “Variations on the Theme of ‘Soft International Law”, in
Crawford, James (ed.), International Law Between Universalism and Fragmentation, Martinus Nijhoff
Publishers, The Netherlands, 2008, p. 343.
Koskenniemi, supra nota 3, p. 170.
81
Ídem.
82
los sujetos trasfieren su voluntad (si la hay) de generar una verdadera norma
jurídica, y no solo un ideal político no vinculante; esto es lo que se conoce
como la paradoja temporal del derecho consuetudinario.83
Adicionalmente, es claro que la obligatoriedad de una norma de cos-
tumbre internacional ya establecida no depende más de forma directa de la
voluntad de los sujetos de di, sino de su carácter jurídico normativo.84 De
ahí que los postulados de la escuela crítica (cls) según los cuales las normas
de costumbre deben ser generales y uniformes están regidos por un están-
dar de igualdad material,85 lo cual significa que una norma consuetudinaria
necesariamente se impone a todos los sujetos de la comunidad internacional
a pesar de la situación particular de cada uno en el proceso de creación nor-
mativa (law making),86 donde pudo no haber intervenido, salvo que se haya
configurado una oposición persistente.87
Aun así, la teoría critica también se queda corta al momento de afron-
tar la existencia de normas consuetudinarias particulares, ya que niega las
formas que dinamizan la creación de la norma consuetudinaria, en donde
la contradicción es parte sustancial del debate para la creación de la costum-
bre internacional, debido a que esta no es resultado de un consentimiento
general de los sujetos de di.88
83
Bradley, Curtis, “The Chronological Paradox, State Preferences, and Opinio Juris”,
Duke-Geneva Institute of International Law, Geneva, 2013, en http://law.duke.edu/cicl/
pdf/opiniojuris/panel_1-bradley-the_chronological_paradox,_state_preferences,_and_opi-
nio_juris.pdf. Ver también: Malanczuk, supra nota 8, p. 44; Koskenniemi, supra nota 3, pp.
241, 291; Shaw, supra nota 5, p. 74.
Mendelson en Fitzmaurice, supra nota 14, pp. 63-64.
84
Koskenniemi, supra nota 3, p. 393. Ver también: Shaw, supra nota 5, p. 75.
85
86
“… by its very nature, must have equal validity for all members of the international community, and
cannot therefore be the subject of any right of unilateral exclusion”. Koskenniemi, supra nota 3, p. 393.
“Whereas this cannot be so in the case of general or customary law rules and obligations which, by their very
nature, must have equal force for all members of the international community, and cannot therefore be the
subject of any right of unilateral exclusion exercisable at will by any one of them in its own”. North Sea
Continental Shelf, supra nota 17, par. 69.
Stein, T., “The Approach of the Different Drummer: The Principle of the Persistent
87
89
Roberts, Anthea, “Traditional and Modern Approaches to Customary International Law:
A Reconciliation”, American Journal of International Law, 2001, 95, pp. 757-791.
Ibíd., p. 758.
90
Ibíd., p. 788.
91
94
Ver, por ejemplo: Mendelson, supra nota 13; Koskenniemi, supra nota 3, p. 393; Shaw,
supra nota 5, p. 75.
95
Elias, Olufemi, “Nature of the Subjective Element in Customary International Law”,
The International and Comparative Law Quarterly, 1995, 44, (3), pp. 501-520, en http://www.
jstor.org/discover/10.2307/761200?uid=3737808&uid=2129&uid=2&uid=70&uid=4&s
id=21103260829721
Ibíd., p. 501.
96
Military and Paramilitary Activities in Nicaragua, supra nota 44; Dinstein, ibíd., par. 297.
98
Elias, supra nota 95, p. 513; Van Hoof, J. H., Rethinking the Sources of International Law,
100
Kluwer Law and Taxation, The Netherlands, 1983, p. 76. Ver también: D’Amato, Anthony,
“The Concept of Special Custom in International Law”, American Journal of International Law,
2010, 63, p. 211, en http://papers.ssrn.com/sol3/papers.cfm?abstract_id=1713426
Ídem.
102
104
“The sense of legal obligation, as opposed to motives of courtesy, fairness or morality, is real enough,
and the practice of states recognize a distinction between obligation and usage”. Elias, supra nota 95,
p. 506.
Koskenniemi, supra nota 3, p. 393. Ver también: Mendelson, supra nota 13, p. 272.
105
106
El proceso de determinación de la costumbre internacional. Koskenniemi, supra nota 3,
p. 396.
De ser así, el tribunal internacional sería otro de los factores para tener en cuenta al mo-
107
international custom”.109
Es necesario tener en cuenta que la costumbre internacional pue-
de crearse de la omisión solo si se encuentra fundada en una creencia de
obligatoriedad,110 ya que la omisión puede ser resultado de la discrecionali-
dad o la conveniencia política del sujeto de di. Y es allí donde el elemento
subjetivo es el que toma el papel principal en law making de la costumbre
internacional, al llevar una situación jurídica indeterminada hasta convertirla
en una norma de di.111
En el proceso de creación normativa (law making) de la costumbre in-
ternacional, se encuentran diversas contradicciones debido a que no siempre
se obedece a los estándares introducidos por el artículo 38 del Estatuto de la
Corte, así como a la lectura tradicional respecto de las fuentes del di. De este
modo, se cree que en algunos casos la opinio juris se presenta como el único
elemento utilizado para la construcción de la norma de di, sobre todo cuando
la costumbre internacional no corresponde a la voluntad (directa y evidente)
de los Estados y demás sujetos del di, sino que es la cristalización de las pre-
ocupaciones de la comunidad internacional –res communis, global concerns–,112
así como de las normas imperativas o perentorias del di (jus cogens).113
112
Cárdenas, Fabián & García, Felipe, “Desafíos interpuestos por el derecho internacional
ambiental al derecho internacional clásico”, Anuario Colombiano de Derecho Internacional, 2009,
2, p. 159.
Shaw, supra nota 5, p. 75. Ver también: Mullerson, Rein, “The Interplay of Objective
113
and Subjective Elements in Customary Law”, in Wellens, Karel, International Law: Theory and
Practice, Martinus Nijhoff Publishers, The Netherlands, 1998, p. 161.
Ver la comprensiva reconstrucción conceptual que hace Abello, Ricardo, “Introducción
114
117
“The concept of jus cogens is based upon an acceptance of fundamental and superior values within the
system and in some respects is akin to the notion of public order or public policy in domestic legal orders”.
Shaw, supra nota 5, p. 125.
Ídem.
118
Verdross, Alfred, Les principes généraux du droit dans la jurisprudence internationale, The Hague
119
Academy Collected Courses, Martinus Nijhoff, The Hague, vol. 52, 1935.
Pulp Mills (Argentina vs. Uruguay), icj, fallo del 20 de abril de 2010.
120
Baker, Roozbeh, “Customary International Law in the 21st Century: Old Challenges and
122
New Debates”, European Journal of International Law, 2010, 21, (1), pp. 173-204, en http://ejil.
oxfordjournals.org/content/21/1/173.full#sec-11
Uribe & Cárdenas, supra nota 31, p. 54; Shaw, supra nota 5, p. 123; Thirlway en Evans,
123
En otra ocasión, se ha sugerido que la lista del artículo 38 del Estatuto de la cij es apenas
125
Como se afirma en el libro de derecho internacional ambiental, esto presenta una contra-
128
dicción, porque reconoce la existencia de obligaciones erga omnes, pero permite únicamente
los alegatos de responsabilidad por parte de un sujeto de di afectado. Ibíd.
Adoptada y abierta a la firma y ratificación, o adhesión, por la Asamblea General en su
129
que contiene disposiciones del derecho natural como efectos del derecho positivo. Supra
nota 3, p. 47.
mientos con graves efectos adversos para el medio ambiente por parte de
diversos sujetos de di,133 la indignación global y preocupación común de la
humanidad expresada a través de los canales políticos, diplomáticos, así
como a través de los medios de comunicación tradicional y 2.0, han con-
figurado poco a poco una conciencia universal manifestada por medio de
la opinio juris que ha permitido la emersión de las normas consuetudinarias
vigentes que componen el dia contemporáneo. Algunos de dichos principios
y conceptos básicos generales no solo se han construido con una carencia
de práctica, sino que en ocasiones se han generado pese a la manifestación
expresa de voluntad.
El desarrollo del dia ha sido producto de la creencia de obligatorie-
dad de principios de protección, los cuales se han desarrollado mediante
instrumentos políticos y decisiones de los tribunales internacionales. Este
proceso, sin lugar a duda, contradice las tesis clásicas de creación de fuen-
tes del derecho internacional que plantean la imposibilidad de creación de
normas de costumbre internacional ante la ausencia de una práctica inter-
nacional.134
Respecto de las fuentes formales que regulan el dia en la actualidad,
es significativo mencionar que la importancia de la costumbre internacional
radica en que fue precisamente esta la que permitió sentar los fundamentos
originarios del campo de estudios. Como lo hemos puesto de presente in
extenso en otro espacio,135 fue precisamente una regla consuetudinaria desa-
rrollada en el connotado Trial Smelter Case la que sentó las bases primigenias
del dia sobre las cuales se construyó el corpus juris de esta especialidad.
“Under the principles of international law, as well as the law of the United
States, no State has the right to use or permit the use of its territory in such a manner
as to cause injury by fumes in or to the territory of another or the properties of persons
Ibíd., p. 74.
132
Trail Smelter Arbitration (U.S. vs. Can.) March 1941, Reports of International Arbitration Awards,
136
un, 2006.
137
Maljean-Dubois, Sandrine, “The Making of International Law Challenging Environ-
mental Protection”, in Kerbrat, Yann & Maljean-Dubois, Sandrine (eds.), The Transformation
of International Environmental Law, A Pedone & Hart, 2011, p. 29.
Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático, en http://www.ipcc.ch/, consulta
138
142
Hey, Ellen, Teaching International Law, State-Consent as Consent to a Process of Normative De-
velopment and Ensuing Problems, Kluwer Law International, The Hague, 2003, p. 12.
143
Ver concepto de reglas primarias y secundarias en Hart, Herbert, The Concept of Law, 2nd
ed., Clarendon Press, Oxford, 1994, pp. 79-91.
Ídem.
145
eventual inseguridad jurídica: “At the cost of a certain legal insecurity, the set of rules
is not rigid but evolving and perfectible depending on current scientific knowledge and its
improvements, as well as the gravity of the attacks against the natural environment”.148
Sin lugar a dudas, el dia ubicado en la posmodernidad es producido
normativamente a partir de una teoría de la costumbre internacional que
difiere de los imaginarios iniciales de los redactores del Estatuto de la cij,
la cual se funda esencialmente en el elemento subjetivo (mens rea). En todo
caso, este proceso de construcción de opinio juris que –de manera muchas
veces solitaria– da origen a las reglas primarias consuetudinarias en materia
ambiental trabaja en coordinación con los tratados internacionales mediante
una relación mutualista de ‘fertilización’ y ‘mutua polinización’.149
Ibíd., p. 43.
149
150
“Some writers deny that custom can be significant today as a source of law, noting that it is too
clumsy and slow-moving to accommodate the evolution of international law any more”. Shaw, supra
nota 5, p. 73.
Esta fórmula clásica sigue siendo el punto de partida de los debates más actuales, como
151
aquel que se sostiene en la Comisión de Derecho Internacional de la onu cuyo reporte ha-
ce la correspondiente construcción binaria. Ver Comisión de Derecho Internacional de las
Naciones Unidas, Segundo reporte sobre la identificación de la costumbre internacional, Michael Wood,
Relator Especial, mayo de 2014.
Sharma, supra nota 71, p. 328.
152
Bradley, supra nota 83. Ver también: Lefkowitz, David, “(Dis)solving the Chronological
153
Paradox in Customary International Law”, Canadian Journal of Jurisprudence, 2008, xxi. Ver
también: Shaw, supra nota 5, p. 590.
la gran duda de cómo los sujetos pueden pensar que tal comportamiento
corresponde al cumplimiento de una obligación legal preexistente a no ser
que en efecto dicha obligación ya existiera. En otras palabras, si verdade-
ramente se cumple el requisito de la opinio juris en el caso hipotético dado,
quiere decir que la norma jurídica no era nueva, sino que ya existía, y porque
existía con anterioridad es que los sujetos piensan que su comportamiento
se ajusta a la creencia de que simplemente están actuando conforme a una
obligación jurídica vinculante. Entonces, la norma de costumbre no era
nueva, sino que existía desde antes.
Ahora, si efectivamente la costumbre internacional no preexistía, no
hay una explicación lógica que identifique la razón por la cual los sujetos de
di pudieran pensar que su comportamiento corresponde al cumplimiento
de una obligación jurídicamente vinculante. ¿Cuándo exactamente se mo-
difica el pensamiento en las mentes de los sujetos de derecho internacional
de forma que los haga creer que su comportamiento ya no obedece a una
decisión discrecional, sino al cumplimiento de una obligación jurídica vincu
lante? No se sabe, o por lo menos la teoría clásica no lo explica. Eso es lo
que se conoce como la paradoja cronológica de la costumbre, que hace el
concepto tradicional de opinio juris insuficiente.
Así mismo, la jurisprudencia internacional también se enfrentó a casos
reales donde era fácil deducir una opinio juris, pero la práctica era inexistente,154
imposible de probar155 o, peor aún, contraria a ella,156 de la misma manera
como se dieron casos de deducción de costumbre únicamente fundados en
una cantidad importante de práctica de la cual se presumía o se consideraba
implícita la opinio juris, sin que fuera necesario hacer un análisis independien-
te de esta.157 En resumen, la práctica no es uniforme. De hecho, es apenas
natural que no lo sea, de modo que un marco conceptual de la costumbre
debe ser tan comprensivo que abarque sin contradicciones todos los posibles
eventos reales. La teoría clásica de los dos ingredientes que se enseña en los
Military and Paramilitary Activities in Nicaragua, supra nota 44, par. 186.
156
158
Shaw, supra nota 5, p. 77; Malanczuk, supra nota 8, p. 43; Evans, supra nota 2, p. 120.
No obstante es importante reiterar que la definición de tratado exige que sea por escri-
159
to: “Un acuerdo internacional celebrado por escrito entre Estados y regido por el derecho
internacional, ya conste en un instrumento único o en dos o más instrumentos conexos, y
con independencia de denominación particular”. Convención de Viena sobre el Derecho de
los Tratados, 1969.
160
Ver: Cassese, Antonio, The Human Dimension of International Law: Selected Papers, Oxford
University Press, 2008, “The Statute of International Criminal Court”, p. 499. El profesor
Cassese explica el proceso que llevó a la consolidación de la International Criminal Court
(icc).
“The Kyoto Protocol to the 1992… this instruments reflect new thinking in the approach to internatio-
161
nal regulation and the role of various actors, including the private sector”. Sands, Philippe, Principles of
International Environmental Law, 2nd ed., Cambridge University Press, New York, 2003, p. 64.
162
Informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos del 6 de junio de 2013, en http://www.
oas.org/es/cidh/informes/anuales.asp; Informes de la Comisión Africana de Derechos Humanos y
de los Pueblos, en http://www.achpr.org/search/
Basta con observar los casos en los tribunales penales internacionales ad hoc de la Antigua
163
Yugoslavia (1993), Ruanda (1994), o la Corte Especial para Sierra Leona (2002), en http://
www.icrc.org/spa/war-and-law/international-criminal-jurisdiction/ad-hoc-tribunals/index.jsp
164
Geiss, Robin & Bulinch, Noemie, Cuadro comparativo de los tribunales penales internacionales e
internacionalizados, en http://www.icrc.org/spa/assets/files/other/irrc_861_geiss.pdf
165
La destrucción generalizada del hábitat marino es un claro reflejo, debido a que afecta
los estuarios que son fundamentales para la reproducción de las especies marinas y, al mismo
tiempo, son vitales para la subsistencia económica de los habitantes en las zonas costeras. En
http://www.nationalgeographic.es/el-oceano/cuestiones-criticas-sobre-la-destruccion-del-
habitat-marino/cuestiones-criticas-sobre-la-destruccion-del-habitat-marino
Ver también los informes del GEO-5, supra nota 133.
Supra nota 131.
166
Henckaerts, Jean Marie & Beck, Louise, Customary International Humanitarian Law, Cam-
167
creación de un Tribunal Internacional Militar (tim). Ver también: supra nota 132.
Not only must the acts concerned amount to a settled practice, but they must also be
such, or be carried out in such a way, as to be evidence of a belief that this practice
is rendered obligatory by the existence of a rule of law requiring it. The need for
such a belief, i.e., the existence of a subjective element, is implicit in the very notion
of the opinio juris sive necessitatis. The States concerned must therefore feel that they
are conforming to what amounts to a legal obligation. The frequency or even habitual
character of the acts is not in itself enough.170
Byers, Michael, Custom, Power and the Power of Rules, Cambridge University Press, New
171
173
Weisburd, Arthur, “Customary International Law: The Problem of Treaties”, Vanderbilt
Journal of Transnational Law, 21, p. 10.
174
Finnis, John, Natural Law and Natural Rights, Oxford University Press, Oxford, 1980,
p. 180.
Lepard, Briam, Customary International Law: A New Theory with Practical Applications, Cam-
175
177
“Con el fin de proteger el medio ambiente, los Estados deberán aplicar ampliamente el
criterio de precaución conforme a sus capacidades. Cuando haya peligro de daño grave o
irreversible, la falta de certeza científica absoluta no deberá utilizarse como razón para poster-
gar la adopción de medidas eficaces en función de los costos para impedir la degradación del
medio ambiente”. Principio 15. Declaración de Río de Janeiro, Conferencia de las Naciones
Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo, 1992.
Wilches Durán, Rafael, “Principio ambiental de precaución y contratación mercantil en
178
derecho colombiano. Planteamiento del problema”, Vniversitas, 2011, 123, pp. 283-314; Uribe
& Cárdenas, supra nota 31, p. 185.
Sands, supra nota 161, p. 266.
179
South West Africa (Etiopía vs. Sudáfrica), cij, fallo del 18 de julio de 1966, par. 91.
180
Ver: Garzón Valdés, Ernesto, “Two Models of Legal Validity”, in Paulson, Stanley (ed.),
182
Normativity and Norms: Critical Perspective on Kelsenian Themes, Oxford University Press, New
York, 1999, p. 263; Kammerhofer, Jorg, “Hans Kelsen in Post Modern International Legal
Scholarship”, in D’Aspremont, Jean (ed.), International Legal Positivism in a Post-Modern World,
Cambridge University Press, 2014, en http://papers.ssrn.com/sol3/papers.cfm?abstract_
id=2154526
Lotus, supra nota 51, par. 28.
183
Conclusiones
Sanjuán, Rafael (ed.), Derecho de los litigios internacionales, Pontificia Universidad Javeriana, 2015
(por publicarse).
2003.
Uribe, Diego & Cárdenas, Fabián, Derecho internacional ambiental, Fundación
Universitaria Jorge Tadeo Lozano, Bogotá, 2010.
Van Hoof, J. H., Rethinking the Sources of International Law, Kluwer Law and
Taxation, The Netherlands, 1983.
Verdross, Alfred, Les principes généraux du droit dans la jurisprudence internatio-
nale, The Hague Academy Collected Courses, Martinus Nijhoff, The
Hague, vol. 52, 1935.
Weisburd, Arthur, “Customary International Law: The Problem of Treaties”,
Vanderbilt Journal of Transnational Law, 21, p. 10.
Wilches Durán, Rafael, “Principio ambiental de precaución y contratación
mercantil en derecho colombiano. Planteamiento del problema”,
Vniversitas, 2011, 123, pp. 283-314.
Casos