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DEL SENTIMIENTO TRAGICO DE LA VIDA

Chemita esto es lo que dire del pensamiento filosofico de la obra.

Pon esto en el powerpoint :

Del sentimiento trágico de la vida es, según dijo el propio Unamuno su mejor obra y el mayor
exponente de su pensamiento filosófico. La colisión entre el pensamiento científico, incapaz de
dar un sentido a la vida, y la moral religiosa carente de justificación personal provoca en
Unamuno la cuestión urgente del sentido de la existencia. Es uno de uno de los más destacados
ensayos filosóficos de Miguel de Unamuno, publicado en 1912. Bajo la influencia de Søren
Kierkegaard y de San Ignacio de Loyola, entre otros, el que fuera eximio Rector de la Universidad
de Salamanca, hace una profunda incursión en la problemática existencial del hombre
contemporáneo, distanciándose radicalmente del Motor Inmóvil aristotélico y afirmando la
necesidad espiritual de creer en un dios personal.

Y esto es. lo que dire:

Unamuno, en su espléndido libro El sentimiento trágico de la vida, habla del hombre de carne y
hueso.

Del sentimiento trágico de la vida es, según dijo el propio Unamuno su mejor obra y el mayor
exponente de su pensamiento filosófico. La colisión entre el pensamiento científico, incapaz de
dar un sentido a la vida, y la moral religiosa carente de justificación personal provoca en
Unamuno la cuestión urgente del sentido de la existencia. Es uno de uno de los más destacados
ensayos filosóficos de Miguel de Unamuno, publicado en 1912. Bajo la influencia de Søren
Kierkegaard y de San Ignacio de Loyola, entre otros, el que fuera eximio Rector de la Universidad
de Salamanca.

No sé por qué tanta gente se escandalizó, o hizo que se escandalizaba cuando Brunetiére volvió
a proclamar la bancarrota de la ciencia. Porque la ciencia, en cuanto sustitutiva de la religión, y la
razón, en cuanto sustitutiva de la fe, han fracasado siempre. La gente podrá satisfacer, y de
hecho satisface en una media creciente, nuestras crecientes necesidades lógicas o mentales,
nuestro anhelo de saber y conocer la verdad; pero la ciencia no satisface nuestras necesidades
afectivas y volitivas, nuestra hambre de inmortalidad, y lejos de satisfacerla, contradícela. La
verdad racional y la vida están en contraposición. ¿Y hay acaso otra verdad que la verdad
racional?

Unamuno, M. de: Del sentimiento trágico de la vida.

El fragmento habla de las relaciones entre la razón y el sentimiento, la ciencia y la religión. En él


pueden observarse algunos de los temas más carismáticos de su pensamiento.

En el texto se observan algunos argumentos, que ordenamos como sigue:

1. El conocimiento meramente racional no puede sustituir a la fe, tampoco la ciencia podrá


sustituir nunca a la religión.

2. La razón y la ciencia pueden satisfacer la necesidad lógica del ser humano, pero nunca podrán
satisfacer sus necesidades afectivas.

3. Uno de los afectos o sentimientos más importantes del ser humano es su deseo de
permanencia e inmortalidad. Y tanto la razón como la ciencia contradicen el hambre de
inmortalidad, propio del ser humano.

4. Por ello, puede afirmarse que la verdad racional y los sentimientos de la vida humana se
encuentran en contradicción.

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La imagen unamuniana del hombre es sencilla. Antes que nada, el hombre es preocupado y
consciente. La filosofía pone atención primero en ciertas necesidades e inquietudes del hombre.
Inquietudes y necesidades que surgen desde el momento en que éste nace. A medida que crece
y se desarrolla, van surgiendo nuevas necesidades. El hombre que presenta Unamuno es el
hombre concreto, el existente. Es un individuo que se hace preguntas acerca de su objetivo o
finalidad en el mundo. ¿Por qué y para qué vive? ¿Por qué y para qué está aquí? Obviamente
estas interrogantes están ligadas con la preocupación por la existencia humana, su sentido, su
destino y la inquietud por la culminación de sus días. El hombre vive, pues, en una constante
preocupación. Una preocupación en torno al sentido de su existencia. He aquí la principal
cuestión para él: la incertidumbre ante el destino individual tras la muerte.

En Del sentimiento trágico de la vida, 3 Unamuno define al hombre como un ser que está
determinado por un principio de unidad y continuidad en el tiempo. Dicho principio quiere decir
que el hombre se encuentra en el Mundo, está en un cierto espacio y se mueve en él, él mismo,
solo, como un individuo independiente, como un ser que vive a lo largo del tiempo. . Y en cuanto
a las acciones, deben conducirse siempre hacia un propósito, aunque luego lo cambiemos.
Además el hombre de Unamuno quiere seguir siendo El mismo y sólo él podría cumplir su rol en
la sociedad. Nadie más sabría hacerlo. Son posibles los cambios en el modo de sentir o pensar
pero tendrán sentido únicamente cuando éstos converjan en la unidad y continuidad de su
espíritu. 6 Es el hombre de carne y hueso: "el que nace, sufre y muere"; "el que come y bebe y
juega y duerme y piensa y quiere". Y este hombre existente, concreto, es el "sujeto y supremo
objeto a la vez de toda filosofía".
La filosofía que tiene como punto de partida al hombre en este sentido gira alrededor de la
gran cuestión de la vida de ultratumba. . El hombre de carne y hueso es, precisamente, el que se
preocupa por "la gran cuestión", Es el que se enfrenta al problema de la incertidumbre que
implica el tener que morir, la preocupación por el más allá, por el destino de la conciencia, por el
tema de la inmortalidad del alma.

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