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Carla Chízmar

Allys Lu
Mireya Correa

Plantas de uso folclórico


y tradicional en Panamá
Carla Chízmar
Allys Lu
Mireya Correa

Plantas de uso folclórico


y tradicional en Panamá
J. Francisco Morales
Editor científico
581.9728.7
C564p Chízmar Fernández, Carla
Plantas de uso folclórico y tradicional en Panamá /
Carla Chízmar Fernández, Allys Lu Modestin y Mireya D.
Correa Arroyo – 1 ed. – Santo Domingo de Heredia, Costa
Rica: Instituto Nacional de Biodiversidad, INBio, 2009.
132 p.; 15 cm x 23 cm.

ISBN 978-9968-927-49-9

1. Plantas. 2. Panamá. 3. Biodiversidad. 4. Botánica.


I. Título.

Esta publicación ha sido posible gracias al proyecto “Desarrollando


capacidades y compartiendo tecnologías para la conservación de la
biodiversidad en Centroamérica”, en el cual el Gobierno de Noruega
y el Instituto Nacional de Biodiversidad de Costa Rica trabajan con
otras instituciones de la región. Su objetivo principal es integrar el
conocimiento sobre las plantas de la región a procesos de desarrollo
socioeconómico.

El Herbario de la Universidad de Panamá pertenece a la Red de


Herbarios de Mesoamérica y el Caribe.

Gerente editorial: Fabio Rojas Carballo


Autoras: Carla V. Chízmar F., Allys Lu M. y Mireya D. Correa A.
Editor científico: J. Francisco Morales
Editora: Alexandra Meléndez
Diseño gráfico: Rodrigo A. Granados Jiménez
Fotografías: Rafael Aizprua, Reyes Carranza, Carla Chízmar, Alejandro De Sedas,
Alex Espinoza, Armando Estrada, Fermín Hernández, Carmen Galdames,
Alicia Ibáñez, Allys Lu, Laurencio Martínez, Noris Toribio, German Vega.

Impreso en / Printed in: Litografía e Imprenta LIL, S.A.

Primera edición, 2009


© Instituto Nacional de Biodiversidad (INBio)
Hecho el depósito de ley.
Reservados todos los derechos.
Prohibida la reproducción total o parcial de este libro.

Hecho en Costa Rica por la


Contenido

Presentación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7

Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9

Lista de especies incluidas en esta guía . . . . . . . . . . . . . 11

Descripción de especies y usos . . . . . . . . . . . . . . . . 13

Bibliografía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 117
Índice de nombres científicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 126
Índice de nombres comunes . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 128
Presentación

La Universidad de Panamá, a través de su herbario, presenta el libro Plantas


de uso folclórico y tradicional en Panamá, como un aporte a la popularización del
conocimiento sobre los usos de las plantas que crecen en el país y su relación con
la cultura nacional.

Esta publicación es parte del trabajo que el herbario ha venido realizando


en conjunto con otros herbarios de la región centroamericana en el marco
del proyecto “Desarrollando capacidades y compartiendo tecnologías para
la conservación de la biodiversidad en Centroamérica”, coordinado por el
Instituto Nacional de Biodiversidad de Costa Rica (INBio), con el apoyo del
Gobierno de Noruega.

El proceso de buscar, identificar y almacenar información botánica en


el herbario, da ahora la posibilidad de integrar el conocimiento científico y
el popular, con el objeto de promover oportunidades de uso sostenible de la
biodiversidad.

Randall García
Coordinador del Proyecto

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Introducción

En Panamá, si bien muchas plantas se conocen por su uso como alimento,


también tienen muchos otros usos, entre ellos, son empleadas para elaborar
productos artesanales como fuente de ingreso. El artesano obtiene la materia
prima necesaria y útil para su trabajo de lo disponible en el bosque y no se
preocupa del nombre científico de la planta, en todo caso, quizás del nombre
común, lo importante es que sabe para qué le sirve. No obstante, el artesano,
como un científico empírico, basado en las características que reconoce, puede
encontrarla cuando necesita usarla.

Como parte de nuestro patrimonio cultural, es de suma importancia


documentar los usos tradicionales de nuestras plantas para el conocimiento de
las futuras generaciones y como oportunidad para nuevos artesanos.

Aunque en Panamá existen publicaciones sobre el uso artesanal de las plan-


tas, pocas presentan la validación botánica de la especie empleada.

Este trabajo es una contribución preliminar para dar testimonio de algunas de


las especies de plantas utilizadas tradicionalmente por los artesanos panameños.

El libro está organizado en 37 fichas y cada una corresponde a una especie


con su respectiva familia, nombre científico y nombre común. Adicionalmente,
presenta una breve descripción de las características morfológicas más importan-
tes para poder reconocer la especie, su distribución y fenología, el uso artesanal,
tradicional o folclórico y el procesamiento, entre otros, así como los informantes
y autoras de la ficha técnica.

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También se incluyen fotos a colores de la especie, el producto y el procesa-
miento para la obtención de la artesanía.

Esta publicación podrá servir como incentivo para la realización de trabajos


similares, que constituyan un beneficio para los artesanos y representen una re-
tribución al trabajo esforzado, y a la vez artístico, que realizan. Además, este traba-
jo contribuirá a la mayor divulgación del uso artesanal y tradicional de nuestras
plantas, cuya información, en la mayoría de las ocasiones, se ha transmitido de
generación a generación, pero no se ha documentado de forma impresa.

Mireya Correa
Directora del Herbario
Universidad de Panamá

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Lista de especies incluidas en esta guía

FAMILIA ESPECIE
Anacardiaceae Anacardium excelsum (Bertero & Balb. ex Kunth) Skeels
Mangifera indica L.
Astronium graveolens Jacq.
Araceae Heteropsis oblongifolia Kunth
Arecaceae Astrocaryum standleyanum L.H. Bailey
Cocos nucifera L.
Phytelephas seemannii O.F. Cook
Bignoniaceae Arrabidaea chica (Humb. & Bonpl.) B. Verl.
Arrabidaea corallina (Jacq.) Sandwith
Crescentia cujete L.
Bixaceae Bixa orellana L.
Bombacaceae Ochroma pyramidale (Cav. ex. Lam.) Urb.
Bromeliaceae Aechmea magdalenae (André) André ex Baker
Burseraceae Bursera simaruba (L.) Sarg.
Cucurbitaceae Lagenaria siceraria (Molina) Standl.
Cyclanthaceae Carludovica palmata Ruiz & Pav.
Dilleniaceae Curatella americana L.
Euphorbiaceae Hura crepitans L.
Fabaceae Dalbergia retusa Hemsl.
Entada gigas (L.) Fawc. & Rendle
Enterolobium cyclocarpum (Jacq.) Griseb.
Erythrina berteroana Urb.

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FAMILIA ESPECIE
Fabaceae Gliricidia sepium (Jacq.) Kunth ex Walp
Mucuna ssp.
Samanea saman (Jacq.) Merr
Meliaceae Cedrela odorata L.
Moraceae Poulsenia armata (Miq.) Standl.
Piperaceae Piper peltatum L.
Poaceae Bambusa vulgaris Schrad. ex J.C. Wendl.
Coix lacryma-jobi L.
Gynerium sagittatum (Aubl.) P. Beauv.
Proteaceae Roupala montana Aubl.
Rubiaceae Genipa americana L.
Guettarda odorata (Jacq.) Lam.
Sapindaceae Melicoccus bijugatus Jacq.
Sterculiaceae Guazuma ulmifolia Lam.
Tiliaceae Apeiba tibourbou Aubl.

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Descripción de
especies y usos
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Anacardiaceae

Anacardium excelsum
(Bertero & Balb. ex Kunth) Skeels
Espavé, Espavel, Jabillo, Caracolí
Descripción: árbol de hasta 40 m de altura, el tronco es recto y cilíndrico, con
savia acuosa y aromática. Hojas simples, alternas, agrupadas en los extremos ter-
minales de las ramitas, con láminas de 9-40 x 4,5 x 16 cm, de obovadas a elíptico-
obovadas, glabrescentes, los bordes son enteros. Inflorescencias de hasta 45 cm
de largo, con muchas flores de colores verde, amarillento o blanco. Los frutos son
nueces con forma de riñón, que cuelgan de un pedúnculo curvo y carnoso en
forma de “S”, de 2,5 a 3,6 cm de largo.
Distribución y fenología: desde Honduras hasta Colombia, Venezuela y
Ecuador. En Panamá esta especie se ha registrado en todo el país, donde es co-
mún encontrarla en bosques ribereños, a lo largo de los cursos de los ríos
y los riachuelos, en áreas bajas y de mediana elevación. Florece y fructifica
de febrero a mayo.
Reyes Carranza

14
Alejandro De Sedas

15
Uso artesanal, tradicional o

Allys Lu
folclórico: la madera se utiliza
para la confección de bateas, pilones,
monturas, figuras, botes, muebles y
formaletas para la construcción.
Procesamiento: Bateas: se cor-
tan ramas del árbol y se sacan tucas
cuadradas. Luego se utiliza un com-
pás para medir el área donde se va
a curvear la madera para la elabora-

Allys Lu
ción de la batea. Enseguida se usan
la azuela llana y la azuela curva (he-
rramientas utilizadas en el interior
del país) para cavar la madera hasta
obtener el resultado deseado. Des-
pués se alisa con un cepillo o una lija.
Si las bateas van a ser usadas como
artesanías, la madera se sella y pinta
con colores brillantes. Por último, se
secan al sol para evitar rajaduras. Si se
van a usar como utensilios domésti-
cos no se emplea barniz para evitar
cualquier tipo de intoxicación.
Pilones: se corta el árbol completo
y se talla manualmente el pilón con
el hacha y el machete. Por último, se
utiliza la azuela o navaja curva para
cavar la madera.
Muebles: se recolecta la madera en
el bosque, se cortan las tucas que se
van a utilizar y se les extraen las cor-
tezas. Luego de este proceso se ponen a secar al sol por varios días; se lijan y se
curan con químicos. Enseguida se procede a armar el mueble, dependiendo del
gusto del artesano o del comprador. Se puede utilizar solo madera de espavé o
se pueden hacer mezclas con otros tipos de madera. Los troncos más grandes
forman el esqueleto principal, los más delgados se usan para armar el respaldar
y el asiento.

16
Reyes Carranza

Información adicional: se cree que por su altura esta especie era utilizada
durante la época de la conquista para ver de lejos la presencia del enemigo, de ahí
su nombre común “espavé”, abreviación que se deriva de la frase “es para ver”.
Además del espavé se utilizan otras maderas para la confección de bateas y mue-
bles como el cedro amargo (Cedrela odorata, Meliaceae), el sangrillo (Ptero-
carpus officinalis, Fabaceae), el mango (Mangifera indica, Anacardiaceae), el
laurel (Cordia alliodora, Boraginaceae), el chumico (Curatella americana, Di-
lleniaceae) y el espino blanco (Guettarda odorata, Rubiaceae).
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): las semillas tostadas en el fuego
son comestibles, pero si se comen crudas resultan tóxicas, debido a que contie-
nen un aceite volátil llamado cardol. Este aceite está presente en la mayoría de las
especies de la familia Anacardiaceae y se utiliza para la fabricación de plásticos,
resinas, insecticidas, entre otros.
Algunos grupos indígenas empleaban la corteza para envenenar los ríos o que-
bradas y, de esta manera, se facilitaba la captura de peces.
Informantes: José González, artesano, Barrigón, provincia de Coclé, Rep.
de Panamá. Ambrosio Herrera, artesano, Copecito, provincia de Coclé, Rep.
de Panamá. Manuel de Jesús Herrera, artesano, Copecito, provincia de Coclé,
Rep. de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.

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Anacardiaceae

Mangifera indica L.
Mango

Alejandro De Sedas
Descripción: árbol de hasta 25 m
de altura, los tallos tienen una secre-
ción acuosa, que se torna de color
rojo poco tiempo después del con-
tacto con el aire. Hojas simples, al-
ternas, con láminas de 9-36 x 2-7 cm,
angostamente elípticas, glabras y con
los bordes enteros. Inflorescencias
de 15 a 50 cm de largo, con muchas
flores de color amarillo y diminutas.
El fruto es una drupa carnosa, de co-
lor verde cuando está joven, tornán-
dose amarilla o roja cuando madura,
con una sola semilla en su interior,
variables en tamaño.
Alejandro De Sedas

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Distribución y fenología: es una especie nativa del sur de Asia, pero ha sido
cultivada y se ha naturalizado en todos los trópicos del mundo. En Panamá se
encuentra en todas las provincias y es un árbol muy común, pero se adapta mejor
a los climas de tierras bajas. Florece y fructifica durante el verano o época seca y
cuando comienza la estación lluviosa (de enero a julio).
Uso artesanal, tradicional o folclórico: en el interior de Panamá se
utiliza para elaborar pilones (para pilar arroz), bateas y, en especial, para el fuste
(armazón de la silla de montar). También se decoran trozos de madera general-
mente con dibujos de paisajes y animales.
Fermín Hernández

Procesamiento: Elaboración del fuste: primero se dibuja sobre las lámi-


nas de madera con un compás y una regla, usualmente se utiliza un molde con el
tamaño de la montura que se desea. Después la madera se corta con una segueta
en piezas delgadas pero lo suficientemente resistentes para que no se quiebren.
Estas piezas se arman para dar la forma final a la montura, luego se clavan o se
pegan y, por último, se le coloca la esterilla (tejido de fibra vegetal que se utiliza
como sudadera para las monturas), encima va la montura hecha de cuero. En
algunos lugares de pocos recursos se deja solo con la esterilla.

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Fermín Hernández

Maderas pintadas: se leña (cortar en tajadas) y se deja secar durante un mes o


más, de acuerdo con el tamaño. Se le aplica un insecticida y luego sellador, depen-
diendo de la pintura que se va a utilizar (óleo, aceite o acrílico); en caso de usar
lápiz no se aplica sellador. Después se dibuja el diseño y se pinta. Una vez finali-
zado este proceso se deja secar nuevamente, se le aplica poliuretano y se hornea
con luces durante 2 ó 3 días.
Información adicional: las flores son polinizadas por insectos y las semillas
son dispersadas por animales.
El mango es una de las frutas más codiciadas en el mercado internacional, por lo
cual es ampliamente cultivado y presenta muchas variedades.
La madera es fuerte, pesada y resistente.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): la madera es de alta calidad y
se aprovecha para construir pilones, adornos, bateas, muebles, mangos de herra-
mientas, tablas de picar alimentos, entre otros artículos.
Los frutos son comestibles y con ellos se elaboran chichas, jaleas, dulces, ensala-
das, etc. Se comen verdes y maduros.
Las hojas, la resina y las flores se utilizan en la medicina tradicional, especialmen-
te en el tratamiento de enfermedades y llagas o heridas de la piel, enfermedades
digestivas y del aparato respiratorio.
Informantes: Fermín Hernández, Universidad de Panamá, ciudad de Pana-
má, Panamá. José Trujillo, Artesano. Mercado de Artesanías. El Valle de Antón,
provincia de Coclé, Rep. de Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

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Anacardiaceae

Astronium graveolens Jacq.


Cucaracho, Ron ron, Tigrillo, Zorro, Zorrillo
Descripción: árbol de 10 a 35 m de altura, la corteza es de color gris o negra
y se exfolia en pequeñas placas circulares. Hojas alternas compuestas, de 20 a 35
cm de largo, con 9 a 15 folíolos, con láminas de 4-11 x 4,5-9 cm, de obovados a
obovado-elípticos, de glabros a pubescentes, con los bordes dentados y aromáti-
cos al estrujarse. Inflorescencias de hasta 25 cm de largo, con numerosas flores di-
minutas de color verde o amarillo. El fruto es una nuez, de color negro al madurar,
de 1 a 1,2 cm de largo, con una sola semilla.
Distribución y fenología: desde México hasta Paraguay y el norte de Ar-
gentina. En Panamá se ha registrado en las provincias de Chiriquí, Coclé, Colón,
Darién y Panamá, donde crece en bosques tropicales de clima seco y lluvioso.
Florece y fructifica de febrero a junio.
Carmen Galdames

Uso artesanal, tradicional o folclórico: la madera de zorro es de exce-


lente calidad y se utiliza principalmente en ebanistería, para la confección de todo
tipo de muebles, pero sobre todo de acabados finos. También se hacen adornos,
instrumentos de escritura y otras artesanías de alta calidad.

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Fermín Hernández

Procesamiento: Ebanistería: se escoge la madera, se seca, se talla y


se le da la forma deseada. Luego se trata con químicos para evitar el ataque
de insectos y, finalmente, se lija, se pule y se barniza para darle un acabado
fino y brillante.
Instrumentos de escritura: se elaboran bolígrafos hechos con tagua y made-
ra de zorro; para este trabajo se requiere de mucha destreza al tallar y se le da un
acabado pulido y brillante.
Información adicional: la resina ácida que expele la madera cuando se tra-
baja puede producir dermatitis de contacto.

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Los folíolos se tornan de color rojo antes de caer durante la estación seca. Las
flores son visitadas por insectos y las semillas son dispersadas por el viento y los
animales.
En Panamá existe una compañía que elabora instrumentos de escritura y ador-
nos hechos con maderas exóticas, tagua y oro. Las vasijas y adornos de madera
son elaborados con madera de zorro principalmente.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): la madera de zorro se emplea
en otros usos que incluyen desde durmientes de ferrocarril, intrumentos de caza,
hasta bolos de boliche, entre otros. Es una madera versátil, duradera y fácil de
trabajar, que tiene colores naturales y no necesita ser teñida.
Como es costumbre, en Panamá todas las maderas que se utilizan en ebanistería,
construcción o artesanías deben ser cortadas en días de luna llena para evitar que
se pudra. Es creencia popular que si no se procede de esta manera la madera no
se seca y se pudre.
Se utiliza en apicultura, como repelente, para leña, para hacer jabón y se dice que
la corteza es medicinal.
Autoras: Carla V. Chízmar F.
Carla Chízmar

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Araceae

Heteropsis oblongifolia Kunth


Bejuco real, Sargi (kuna)
Descripción: lianas usualmente epifitas, con tallos delgados y sin savia lecho-
sa. Hojas simples, alternas, con láminas de 10,5-21 x 2,7-7,2 cm, angostamente
elípticas, glabras y con los bordes enteros. Inflorescencias solitarias, con la espata
y el espádice de 3,5 a 6 cm de largo, con flores aglomeradas y de color blanco a
blanco-verdoso. Los frutos son rojos al madurar, diminutos, con 1 a 4 semillas.
Distribución y fenología: desde Nicaragua hasta Perú, Bolivia y Brasil. En
Panamá esta especie ha sido reportada en las provincias de Bocas del Toro, Chiri-
quí, Colón, Darién, Panamá y San Blas, donde crece en bosques húmedos tropi-
cales. Flores y frutos se producen de enero a junio.
Fermín Hernández

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Fermín Hernández

Uso artesanal, tradicional o folclórico: el tallo del bejuco real se utili-


za para extraer fibras con las que se confeccionan cuerdas, motetes o jabas (cestas
de carga), canastas, entre otros artículos.
Procesamiento: Motetes o jabas: primero se recolecta la planta y se pone a
secar al sol, enseguida se raspa el tallo seco hasta obtener tiras de más o menos 1
a 2 cm que luego se tejen para elaborar los motetes.
Cuerdas: se extraen las fibras raspando el tallo seco hasta obtener tiras que se
deshilachan en hilos delgados para luego trenzarlos hasta formar una cuerda
gruesa y resistente.
Información adicional: los motetes o jabas se utilizan para transportar
frutos, semillas y leña, entre otros artículos. Se puede usar como una mochila
que se carga en la espalda o se coloca a ambos lados de la montura de los caba-
llos de carga.
Por su flexibilidad y resistencia las cuerdas hechas de bejuco real se usan para ama-
rrar las vigas de las casas (de barro o quincha) y ranchos con mucha frecuencia
(como sustituto de los clavos), especialmente entre las comunidades indígenas

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(Ngöbe Buglé y Kunas). También

Fermín Hernández
se usan para amarrar la leña.
De acuerdo con informes de la
FAO, un rollo de bejuco trae ge-
neralmente doce bejucos de 3 a
4 yardas de largo, y cuesta aproxi-
madamente $0,75 el rollo. Para la
construcción de una casa se utili-
zan cerca de 55 rollos. Además esta
especie está siendo sobreexplotada
en los bosques primarios, ya que
también se emplea para la fabrica-
ción de muebles de mimbre.
Informante: Fermín Hernán-
dez, Universidad de Panamá, ciu-
dad de Panamá, Rep. de Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F.
Reyes Carranza

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Arecaceae

Astrocaryum standleyanum L.H. Bailey


Chunga, Chonta, Palma negra, Coquillo
Descripción: palma de 5 a 15 m de altura, de tronco con espinas negras y pla-
nas de hasta 20 cm de largo. Hojas pinnadas, agrupadas al final del tronco y de
varios metros de largo, con espinas, con 100 a 110 hojuelas por lado, agrupadas y
dispuestas en diversos planos. Inflorescencias en racimos colgantes, de más de 1
m de largo, con muchas flores de color blanco o amarillo. Los frutos son de color
anaranjado cuando maduran, de 3,3 a 4,5 cm de largo, con una sola semilla.
Alejandro De Sedas

Carla Chízmar
Alejandro De Sedas
Alejandro De Sedas

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Distribución y fenología: desde Costa Rica hasta Colombia y Ecuador. En
Panamá se ha registrado en las provincias de Colón, Darién, Panamá, San Blas
y Veraguas, donde es común encontrarla en bosques muy húmedos de tierras
bajas. Florece y fructifica de enero a septiembre.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: las fibras extraídas de las hojas
jóvenes (cogollos) son utilizadas por los indios Emberá-Wounaan para tejer sus
famosas cestas, platos, máscaras y figuras de animales. Otros artesanos usan las
fibras que tiñen de color negro para trenzar las pintas del sombrero pintado. Los
tallos se usan en la confección de bastones e instrumentos de caza como la cerba-
tana y las flechas utilizadas por los indígenas.
Procesamiento: Extracción de fibras: se corta la hoja de la palma y se elimi-
na el raquis, luego se extrae la fibra retirando la vena media del folíolo. Las fibras se
lavan con agua de lluvia o agua con jabón y se ponen a blanquear al sol. Por últi-
mo, se tiñen con tintes naturales. Las fibras se tejen para hacer sombreros, canastas,
máscaras y platos, y se utilizan diseños muy coloridos de animales o plantas. El pre-
Carla Chízmar

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Carla Chízmar

Carla Chízmar
cio varía de acuerdo con la calidad de la artesanía, pues entre más fuerte y ceñido
sea el tejido, mejor es la calidad y, asi mismo, el precio. Dependiendo del tamaño y
el tejido de la cesta puede durarse en la elaboración desde una semana hasta 1 año,
y ocuparse de 2 a 5 palmas, además, puede alcanzar precios de miles de dólares.
Bastones: se cortan tallos jóvenes y delgados de chonta. Se les quitan las espinas
con un machete o algún utensilio filoso. Luego se cortan del tamaño deseado y se
lijan. Aparte se recolectan semillas de tagua y se remojan en agua para ablandar
la cáscara. Por último, se toma la semilla de tagua, se pule con lija, se le hace un
hueco y se coloca en uno de los extremos de la vara.
Instrumentos de caza: el canuto de la cerbatana y sus dardos, así como las fle-
chas que se lanzan con los arcos, se elaboran con el tronco de la chunga. El tronco es
de gran resistencia y muy duro, por lo que los dardos y las flechas no se rompen.
Información adicional: las flores son polinizadas por insectos y los frutos
son dispersados por mamíferos.
Estudios realizados en la isla Barro Colorado en Panamá encontraron que la ar-
dilla de cola roja (Sciurus granatensis) es la principal predadora de estas semillas
en la isla.
De acuerdo con experiencias de cultivo en Panamá se observó que el crecimien-
to de la chunga es lento y que la tasa de mortalidad es baja.
El color natural de las fibras que se extraen de las hojas tiernas de la chunga luego de
ser eliminada la epidermis y de lavarlas con agua de lluvia y secarlas al sol es blanco.

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Carla Chízmar

De acuerdo con un informe de la FAO, en Darién trabajan unas 750 mujeres que
producen 50 mil piezas de artesanía por año. Los precios varían de $10 a $50, con
un promedio de $25, lo que representa un total en ventas anuales de $1 250 000.
Anteriormente las puntas de las flechas se envenenaban para que fueran más efecti-
vas en la caza de animales en el bosque. Se empleaba el veneno de animales (ranas)
y plantas.
En la elaboración de las cestas (hösig di) tradicionales de los Emberá-Wounaan,
se utilizaban los colores blanco, rojo y negro. Durante los años 80 se populariza la
confección de canastas con colores vivos y diseños modernos, que se construyen
especialmente para coleccionistas, de ahí que hoy exista una variedad muy grande
de diseños, colores y tamaños.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): los frutos son comestibles tanto
para las personas como para los animales.
Las fibras también se utilizan para hacer correas y sogas, además para decorar
bastones y flautas ceremoniales.
El tallo y las espinas se utilizan para fabricar flechas, petardos, bastones, palos de
escobas, trompos, pisos y postes de viviendas.
Debido a que el tallo de la chunga es muy resistente se utiliza en la elaboración de
otras múltiples artesanías.
Informante: Elizabeth Leigh, botánica, Gamboa, provincia de Panamá, Rep.
de Panamá. Santiago Guayora, Grupo Emberá, provincia de Darién, Rep. de
Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F. y Allys J. Lu M.

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Arecaceae

Cocos nucifera L.
Coco, Palma de coco, Coconut palm
Descripción: palma de 10 a 30 m de altura, con tronco delgado, a menudo en-
sanchado e inclinado en la base, sin espinas. Hojas pinnadas y agrupadas al final
del tallo, de varios metros de longitud, sin espinas, con 75 a 125 hojuelas por lado,
regularmente espaciadas y arregladas en un solo plano. Inflorescencias de 1 a 2 m
de longitud, con muchas flores de color crema o amarillento. El fruto es una nuez,
con una cáscara fibrosa de color pardo claro, con colores variados que van desde
verde o amarillo-ocre hasta rojo-naranja, de 20 a 40 cm de diámetro.
Alejandro De Sedas

Alejandro De Sedas

Distribución y fenología: de origen desconocido, pero es muy probable que


sea originaria del Pacífico occidental, está ampliamente distribuida en los trópicos
y subtrópicos de todo el mundo. En Panamá se encuentra en zonas de elevación
media y baja de todo el país. Flores y frutos se producen durante todo el año.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: con el fruto se tallan figuras
de todo tipo y tamaño, desde animales como monos y gallinas hasta figuras hu-
manas. Con la corteza se elabora toda clase de accesorios, tales como collares,
correas, anillos, pendientes, pulseras, ganchos de cabello, entre otras artesanías.
Con las hojas se confeccionan sombreros que son muy utilizados en las fiestas
de carnaval.

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Alejandro De Sedas

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Carla Chízmar
Carla Chízmar

Carla Chízmar

Procesamiento: Accesorios: en un recipiente con agua se dejan remojando


las cáscaras de coco durante 10 a 15 minutos, luego la parte interna se limpia con
un cuchillo dejándola totalmente limpia de estopa y la parte externa se raspa con
una cuchara. Después se inicia el proceso de pulido a mano con lija hasta lograr
una pieza bien acabada. Se sacan los moldes (en cartulina) de las piezas que se
van a elaborar y se procede a marcarlos sobre el coco. Una vez marcadas las piezas
se cortan con una caladora o segueta y si es necesario se les abre un hueco con un
taladro. Finalmente se pulen para darles brillo.

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Carla Chízmar

Carla Chízmar
Figuras: con un cuchillo especial o con una segueta se talla el fruto seco, luego
se le aplica un sellador hecho de hielo seco y “thinner”.
Información adicional: el coco es una de las palmas más culltivadas e im-
portantes a nivel mundial. La fruta madura puede flotar durante 3 ó 4 meses sin
que la semilla pierda viabilidad, por lo tanto, puede ser propagada a grandes dis-
tancias por las corrientes marinas.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): se utiliza como ornamental
principalmente en áreas cerca de la playa y lugares turísticos.
Las hojas se usan para techos, mamparas, canastas, sombreros y para la construc-
ción de paredes temporales.
Su fruto es comestible y de él se obtiene el aceite de coco utilizado para elaborar
jabones, cosméticos, margarinas, entre otros productos.
Medicinalmente tiene multitud de aplicaciones; en muchos países tropicales se
emplea como remedio popular contra el asma, bronquitis, contusiones, quema-
duras, estreñimiento, disentería, tos, fiebre, gripe, etc.
La estopa del coco se usa para hacer esteras, colchones, cuerdas, alfombras, bro-
chas, escobas y bolsas.
Con la cáscara se elaboran varios utensilios, tales como tazones, tazas, cucharas y
cucharones, pipas para fumar, ceniceros, floreros, cajas y juguetes.
Informante: Misael Arias, artesano, Feria Nacional de Artesanías, Panamá,
Rep. de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.

34
Arecaceae

Phytelephas seemannii O.F. Cook


Tagua, Marfil vegetal, Vegetable ivory, Ivory nut
Descripción: palma de hasta 3 m de altura, con tronco decumbente o trepa-
dor, casi no visible. Hojas pinnadas, alternas, que crecen densamente agrupadas
cerca del suelo, sin espinas, de varios metros de largo, con más de 100 hojuelas
por lado. Inflorescencias en racimos de cerca de medio metro de largo, con va-
rias flores diminutas. Frutos de color marfil o blanco, con pocas semillas (hasta
9) en el interior.
Alejandro De Sedas

35
Alejandro De Sedas
Distribución y fenología:
desde Panamá hasta Colombia.
En Panamá esta especie se re-
gistra en las provincias de Bocas
del Toro, Colón, Darién, Pana-
má, Veraguas y la Comarca de
San Blas, donde crece en tierras

Carla Chízmar
bajas de bosques húmedos. Flo-
res y frutos se producen durante
todo el año.
Uso artesanal, tradicio­
nal o folclórico: las semi-
llas de tagua se usan para el ta-
llado de figuras y confección de
joyería (collares, aretes, pulseras,
sortijas, entre otros artículos).

Carla Chízmar
También se utilizan como ador-
no en bastones y para la confec-
ción de instrumentos de escri-
tura (bolígrafos y accesorios).
Procesamiento: Tallado de
tagua: se recolectan semillas
grandes y recién caídas, porque
son más fáciles de tallar, que no
sean deformes y bien rellenas, que no sean quebradizas ni demasiado duras. Lue-
go se remojan en agua antes de empezar el tallado para ablandar la cáscara. Para
tal fin, se utilizan principalmente un bisturí y un cincel, con los que se tallan en la
semilla figuras de animales, plantas y escenas de la naturaleza. Después se pulen
con lija y se pintan con tintes naturales extraídos de la tierra y las plantas, em-
pleando el método tradicional para teñir cestería.
Bastón: se recolectan las semillas y se remojan en agua para ablandar la cáscara.
Luego se pulen con lija, se les hace un hueco y se colocan en uno de los extremos
de las varas confeccionadas con tallos de chunga (Astrocaryum standleyanum,
Arecaceae).
Información adicional: estas palmas crecen muy lentamente y pueden du-
rar hasta 15 años para dar sus primeros frutos.

36
Antes que la tagua fuese desplazada por la aparición del plástico en los años 30,
los países tropicales exportaban grandes cantidades de este material a Estados
Unidos y Europa, para la confección de botones y joyería.
La actividad del tallado de tagua es más común entre los indios Wounaan, ya que
es uno de los grupos con más experiencia en el trabajo y representa la principal
fuente de ingreso de muchas familias.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): su fruto es comestible.
Las hojas se utilizan para armar techos.
Informantes: Trucman Zarco, Feria de Artesanías, Panamá, Rep. de Panamá.
Elizabeth Leigh, botánica, Panamá, Rep. de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.
Carla Chízmar

37
Bignoniaceae

Arrabidaea chica (Humb. & Bonpl.) B. Verl.


Chisná, Chicá (Ngöbe Buglé), Digó, Bejuco nimi, Magueb (kuna)
Descripción: bejuco leñoso, con zarcillos o ramitas enroscadas, los tallos son
más o menos cilíndricos. Hojas opuestas, compuestas, de 10 a 15 cm de largo,
con 2 a 3 folíolos, con láminas de 1-12,5 x 1,8-5,5 cm, de ovados a elípticos, de
color rojizo al secar, glabros, los bordes son enteros. Inflorescencias de hasta 20
cm de largo, con muchas flores de forma campanulada, de color rojo o morado.
El fruto es una cápsula de color chocolate al secar, de 11 a 25 cm de largo, con
muchas semillas aladas.
Reyes Carranza

38
Carla Chízmar

Distribución y fenología: desde México hasta Argentina. En Panamá


esta especie se ha registrado en zonas bajas y de elevación media en todo el
país, donde crece principalmente en bosques húmedos tropicales y bosques
húmedos premontanos. Flores y frutos se producen de enero a mayo y de
agosto a octubre.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: de la hoja se extrae un tinte
de color rojo utilizado comúnmente por los indígenas Emberá-Wounaan de

39
la provincia de Darién en la fabricación de cestas (hösig di), platos y máscaras.
También se usa para el teñido de chácaras, bandejas, camisillas, fibras de diversas
plantas, semillas, maderas, cuero, entre otros artículos.
Procesamiento: Tintes: se recolectan las hojas verdes, se maceran y se coci-
nan junto con las fibras que se van a teñir durante 30 minutos o 1 hora, luego se
escurren y se ponen a secar al aire libre.
Para obtener el color negro característico de los sombreros pintados se sigue el
procedimiento descrito anteriormente, pero una vez que las fibras se han teñido
de rojo, se escurren y luego se entierran en lodo negro. Se dejan allí durante una
noche o hasta 48 horas, según el tono del color que se desee. Después se sacan y
se lavan con agua.
Información adicional: en la estación seca, cuando no se encuentran ho-
jas verdes, se pueden utilizar hojas secas de color rojo-marrón para la extracción
del colorante.
Actualmente, los indígenas experimentan con toda clase de tintes artificiales de
colores vivos que usan en refrescos en polvo (kool aid), papel crespón (crepé),
bolsas plásticas, etc.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): el tinte también se emplea
como un remedio medicinal contra la picadura de mosquitos.
Se ha usado como planta ornamental por sus vistosas flores.
Informantes: Reinaldo Quiroz, artesano, La Pintada, provincia de Coclé,
Rep. de Panamá. Trucman Zarco, artesano, Emberá-Wounaan, provincia de
Darién, Rep. de Panamá. Sirinia Apochito, artesana, Emberá-Wounaan, provin-
cia de Darién, Rep. de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M. y Carla V. Chízmar F.

40
Bignoniaceae

Arrabidaea corallina ( Jacq.) Sandwith


Bejuco colorado
Descripción: bejucos trepadores, los tallos son más o menos cilíndricos. Hojas
opuestas y compuestas, de 13 a 18 cm de largo, con dos o tres folíolos, con lámi-
nas de 3-16 x 2,5-10 cm, ovados, glabros o pubescentes en el envés, los bordes
son enteros. Inflorescencias de hasta 18 cm de largo, con varias flores de color
rojo-púrpura. Los frutos son cápsulas lineares y largas, de 11 a 41 cm de largo, con
muchas semillas aplanadas y aladas.
Distribución y fenología: desde México hasta el norte de Argentina. En
Panamá se ha registrado en las provincias de Colón, Los Santos, Panamá y Vera-
guas, donde crece en bosques tropicales secos y premontanos. Florece de febrero
a abril y fructifica de abril a julio.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: se utiliza para la extracción de
fibras con las que se elaboran principalmente nasas y motetes.
Procesamiento: Nasas: se coloca el bejuco en agua para que se suavice. Una
vez que se saca del agua, se separan en filamentos o tiras utilizando un cuchillo.
Luego se alisa el filamento raspándolo

Fermín Hernández
con el cuchillo hasta que quede del gro-
sor adecuado. Finalmente se usa un des-
hojador de maíz (hecho con hueso de
pata de vaca o con cuernos de venado)
como aguja para tejer la nasa.
Motetes: se utiliza la misma metodo-
logía, pero se le da una forma distinta y
la base se refuerza, ya que se usan para
transportar carga.
Información adicional: las nasas
se utilizan para capturar camarones de
río, para lo cual se coloca adentro la
carnada y piedras para que no flote y se
coloca desde la noche anterior en el si-
tio deseado, el producto se recoge en la
mañana siguiente.

41
Fermín Hernández

Los camarones pueden entrar pero no


salir. La carnada que se emplea usual-
mente es pescado en descomposición,
pero también se usan restos de gallina o
huesos de vaca.
El nombre común de esta planta se de-
riva del color rojizo que toman las hojas
al secarse.
Informante: Fermín Hernández,
Fermín Hernández

Universidad de Panamá, ciudad de Pa-


namá, Rep. de Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

42
Bignoniaceae

Crescentia cujete L.
Calabazo, Totuma
Descripción: árbol de 5 a 10 m de altura, con corteza de color blanco o grisá-
ceo. Hojas simples, alternas, fasciculadas (que se agrupan en los nudos o yemas
de las ramas), de 4-26 x 1-7,5 cm, obovadas, glabras y con los bordes enteros.
Inflorescencias nacen en los troncos y ramas, con flores de color amarillo-verdo-
so. Los frutos son calabazos globosos o alargados, verdes cuando están jóvenes,
tornándose negros al madurar, hasta de 50 cm de largo o diámetro, en el interior
tiene una pulpa de olor desagradable que envuelve muchas semillas.
Reyes Carranza

43
Reyes Carranza

Fermín Hernández
Distribución y fenología: desde México hasta Nicaragua. En Panamá esta
planta se ha registrado en todo el país, donde crece principalmente en regiones
húmedas y secas, de bajas elevaciones. Florece y fructifica durante todo el año.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: el fruto se utiliza para la
confección de totumas (envases domésticos empleados principalmente para
tomar líquidos). También se usa para la elaboración de maracas y otros instru-
mentos musicales.
Procesamiento: Totumas: se cosecha el fruto, se corta por la mitad con una
segueta o un machete filoso. Luego se saca la pulpa con una cuchara y se raspa
con una hoja de chumico (Curatella americana, Dilleniaceae) o con un cuchi-
llo hasta que la superficie quede blanca. También se le pueden tallar dibujos, lijar,
pintar y barnizar de acuerdo con el gusto del artesano.
Maracas: se cosecha el fruto maduro y se pone a hervir. Luego se le abre una bo-
quilla y se extrae la pulpa. Dependiendo del acabado se talla y se pinta. Después
se rellena con piedritas o semillas. Para finalizar, se sella la boquilla con un palito
o vara que servirá de mango.
Información adicional: sus flores son polinizadas por murciélagos.
Para saber si el fruto está maduro para trabajar se toca la cubierta con la uña, si no
penetra la cáscara, entonces el calabazo está en óptimas condiciones para su uso.
Hoy es muy popular la decoración de totumas como artesanía con dibujos de
paisajes y animales.

44
Antes se elaboraban carteras hechas con el fruto de esta especie.
En Penonomé, provincia de Coclé, se confecciona la ronquina o zambomba, ins-
trumento utilizado en la fiesta de Nochebuena.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): la pulpa del fruto se utiliza para
curar enfermedades cutáneas y la erisipela, también es purgativa y expectorante.
Informante: luis Fernández, artesano, Mercado de Artesanías, El Valle de
Antón, provincia de Coclé, Rep. de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.
Reyes Carranza
Reyes Carranza

Fermín Hernández

45
Bixaceae

Bixa orellana L.
Achiote
Descripción: arbusto o árbol pequeño, de 2 a 5 m de altura, con savia de color
anaranjado, pegajosa y ligeramente amarga. Hojas simples, alternas, con láminas
de 7-24 x 4,5-13 cm, ovadas y glabrescentes. Inflorescencias de 7 a 15 cm de largo,
con numerosas flores grandes y vistosas, de colores rosado, rojizo y blanco. El fru-
to es una cápsula ovoide, glabrescente, de 5 a 7 cm de largo, de color pardo-rojizo,
con pequeños aguijones delgados y blandos, con numerosas semillas rojas.
Alejandro De Sedas

46
Alejandro De Sedas

Alejandro De Sedas
Mireya Correa

Distribución y fenología: es una especie nativa de América tropical, que


se distribuye desde México hasta Brasil y Argentina, también se encuentra en el
Caribe. En Panamá se ha registrado en todo el país, donde crece en climas cálidos
y húmedos. Florece y fructifica de enero a noviembre.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: se extrae un tinte natural
color rojo que se utiliza para teñir hilos de algodón y fibras de diversas plantas
(chunga, bellota, cortezo, etc.). Estas fibras teñidas se emplean en la fabricación
de cestas y platos o máscaras hechas por los indígenas Emberá-Wounaan de la
provincia de Darién.

47
Mireya Correa

Procesamiento: para obtener el color rojo se secan las semillas, luego se pul-
verizan y se cocinan en agua. Las fibras se sumergen en este líquido hasta que
adquieran la tonalidad de rojo deseada.
Información adicional: es polinizada por insectos y se multiplica mediante
semillas o esquejes. Es rica en vitamina C.
Los colores blanco, rojo y negro son tradicionales en la elaboración de las cestas
(hösig di) de los indígenas Emberá-Wounaan de la provincia de Darién.
Para obtener el color rojo de manera natural también se puede utilizar el coralillo
(Hamelia patens, Rubiaceae).
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): el achiote es muy importante
en la gastronomía y en Panamá se utiliza para darle color al arroz.
Los indígenas Kunas lo empleaban en la fabricación de cosméticos, uso medici-
nal, para teñirse el cuerpo y en sus ceremonias religiosas.
Informantes: Trucman Zarco, artesano, Emberá-Wounaan, provincia de
Darién, Rep. de Panamá. Sirinia Apochito, artesana, Emberá-Wounaan, provin-
cia de Darién, Rep. de Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

48
Bombacaceae

Ochroma pyramidale (Cav. ex. Lam.) Urb.


Balso, Lano
Descripción: árbol de 10 a 30 m de altura, la corteza es de color grisáceo y
ligeramente rugosa. Hojas simples, alternas, con láminas de 16-37 x 15-32 cm,
ovadas, pubescentes por el envés, los bordes son enteros. Flores solitarias, axila-
res, grandes y llamativas, de color blanco o amarillento. El fruto es una cápsula,
de 14 a 20 cm de largo, que posee en su parte interior un material de consistencia
similar al algodón, el cual envuelve las semillas.
Distribución y fenología: desde México y las Antillas hasta Bolivia. En Pa-
namá esta especie se ha registrado en todo el país, donde crece en tierras bajas, en
climas secos y lluviosos y es de rápido crecimiento. Florece y fructifica durante
todo el año, pero principalmente de noviembre a marzo.

Reyes Carranza

49
Reyes Carranza

Uso artesanal, tradicional o folclórico: la madera se utiliza para el ta-


llado de figuras, especialmente de animales; los motivos más populares son las
aves como loros, guacamayas y tucanes. También es empleada para la confección
de instrumentos musicales como el tambor y la tambora.
Procesamiento: Figuras: generalmente se cortan ramas o árboles comple-
tos, dependiendo del tamaño de la labor que se va a realizar. Se elimina la corteza
con un machete y se utiliza la madera fresca para el tallado. Una vez terminado el
tallado se barniza o se pinta y se pone al sol para evitar rajaduras.
Tambor: se corta el árbol escogido
y se pone a secar, cuando está bien Carla Chízmar
seco, se le da el tamaño y forma utili-
zando un machete hasta obtener las
dimensiones requeridas. Luego se
cava con un instrumento conocido
como formón, se le quita la corteza
y se pone a secar al sol para que no
se raje el tronco. Se forra la boca del
tambor con cuero sujetándolo con
amarras de soga o correas en forma
de “V”, las cuales se templan con cu-
ñas hechas de laurel (Cordia allio-
dora, Boraginaceae) o espino blanco
(Guettarda odorata, Rubiaceae).

50
Carla Chízmar

Información adicional: sus hojas adultas se tornan de color rojo-naranja


antes de caer.
El balso se caracteriza por tener una madera suave, liviana y muy fuerte, razón
por la cual, era utilizado por los indios Emberá para confeccionar estructuras ci-
líndricas donde transportaban sus instrumentos de caza, las cuales pintaban con
diseños geométricos o de animales y plantas.
Los indios Kunas tallan figuras que utilizan en ceremonias religiosas y culturales.
Para tambores con finos acabados se utilizan otras maderas como la del nazareno
(Peltogyne purpurea, Fabaceae), el espavé (Anacardium excelsum, Anacardia-
ceae), el cedro espino (Pachira quinata, Bombacaceae), entre otras.
El balso fue utilizado en la construcción de los aviones bombarderos ingleses en
la Segunda Guerra Mundial.
Los cilindros donde se cargan las flechas de los indios son hechas de balso por ser
una madera liviana. Ademas se decoran con pinturas de diseños geométricos o
de animales y plantas para venderse como artesanias.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): el algodón del fruto se utiliza
para rellenar almohadas.
La madera también es empleada para la confección de flotadores.
Informantes: José González, artesano, Barrigón, provincia de Coclé, Rep. de
Panamá. Néstor Martínez, artesano, El Valle de Antón, provincia de Coclé, Rep.
de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.

51
Bromeliaceae

Aechmea magdalenae (André) André ex Baker


Pita, Pita gancho, Kigá (Ngöbe)
Descripción: planta terrestre de 1 a 3,5 m de altura, sin formar un tallo visible.
Hojas densamente agrupadas en forma de roseta, con finas líneas pálidas en el
centro, con láminas de hasta 1,8 m de largo, finamente pubescentes por el envés,
con espinas en los bordes. Inflorescencias dispuestas en el centro de la roseta, de
forma globosa o subglobosa, con muchas brácteas de colores rosado a rojo, las
flores son amarillas. El fruto es una baya amarilla, de color naranja cuando madu-
ra, de hasta 3 cm de largo.
Distribución y fenología: desde México hasta Ecuador. En Panamá esta
planta se ha registrado en las provincias de Bocas del Toro, Chiriquí, Colón, Da-
rién, Panamá, Veraguas y la Comarca de San Blas, donde crece principalmente en
tierras bajas de climas húmedos. Florece y fructifica durante todo el año.
Alejandro De Sedas

52
Laurencio Martinez

Uso artesanal, tradicional o folclórico: las fibras que se obtienen de


las hojas se utilizan para confeccionar las famosas chácaras e hilos para coser
diversos sombreros, en especial, el sombrero pintado y el sombrero de junco
o amarillo. También se usan para hacer sogas, hamacas, redes de pescar, entre
otros trabajos.
Procesamiento: Chácaras: se corta la hoja de pita y se coloca sobre un
tronco de balso (Ochroma pyramidale, Bombacaceae), al cual se le ha removido
la corteza quedando completamente liso. Luego se frota la hoja con un pedazo
de bambú (Bambusa spp., Poaceae) cortado a la mitad, hasta obtener las fibras.
Estas se lavan con agua y se ponen al sol para que se sequen y blanqueen; cuando
alcanzan un color amarillento están listas para utilizarse. Algunas se tiñen con
tintes naturales como achiote (Bixa orellana, Bixaceae) para el color naranja,
chicá (Arrabidaea chica, Bignoniaceae) para el rojo, jagua (Genipa americana,
Rubiaceae) para el negro, entre otros. Posteriormente, se comienzan a hacer las
hebras de hilo frotando de 3 a 5 fibras contra el muslo hasta obtener una sola
hebra. Una vez listo el hilo se selecciona el estilo de tejido y se empiezan a tejer

53
las chácaras con agujas metálicas o simplemente doblando las puntas de los
hilos. Una artesana con experiencia puede durar un mes completo para tejer una
chácara mediana de complejo diseño.
Hilos: se corta la hoja de pita y

Allys Lu
se raspa con una cuchara hasta
obtener los filamentos. Estos
se lavan con agua y se ponen al
sol para que se sequen y blan-
queen; cuando alcanzan un co-
lor amarillento están listos para
utilizarse. Posteriormente, se
comienzan a tejer en cantidades
de acuerdo con el grueso del
hilo que se va a emplear en la
confección de los sombreros.
Información adicional: a
pesar de que da frutos, la forma
de reproducción más utilizada
es por medio de rizomas.
La fibra extraída de la pita es muy resistente al agua de mar y a la putrefacción.
Los indios Ngöbe Buglé utilizan las chácaras para cargar alimentos de granja, pes-
cados, herramientas, ropa y niños hasta los 3 años.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): el fruto es comestible.
Informantes: Ana Navas, artesana, Barrigón, provincia de Coclé, Rep. de
Panamá. Reinaldo Quiroz, artesano, La Pintada, provincia de Coclé, Rep. de
Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.

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Burseraceae

Bursera simaruba (L.) Sarg.


Indio desnudo, Cholo pelao, Indio en cuero, Almácigo, Carate
colorado, Naked indian
Descripción: árbol de 5 a 20 m de altura, con corteza exterior de color roji-
zo, exfoliante, en láminas delgadas, con resina aromática que se cristaliza al secar.
Hojas compuestas, alternas, con 9 a 13 folíolos, con láminas de 4,5-9 x 4-7,8 cm,
de elípticos a ovado-elípticos, glabros o glabrescentes, los bordes son enteros. In-
florescencias racemosas de hasta 15 cm de largo, con varias flores de color verde
o amarillo. Los frutos son cápsulas ovoides o elipsoides, de 0,8 a 1,3 cm de largo,
tornándose rojizos al madurar.
Distribución y fenología: desde la Florida central (Estados Unidos) hasta
las Bahamas y las Antillas, también se encuentra desde el sur de México hasta
Perú y Brasil. En Panamá esta especie se registra en las provincias de Coclé, Chiri-
quí, Colón, Darién, Herrera, Los Santos, Panamá y Veragua, donde crece en bos-
ques tropicales húmedos. Florece y fructifica de marzo a octubre.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: se utiliza principalmente para
cercas vivas en fincas y potreros de todo el país.
Procesamiento: se siembran estacas de árboles o arbustos a una distancia de 1
ó 2 m entre sí, sostenidas por líneas de alambre de púas. Las estacas se siembran a
lo largo de los límites de fincas, potreros, cultivos y parcelas. Al poco tiempo estas
estacas producen raíces, crecen y forman las cercas vivas.
Información adicional: durante la época seca pierde sus hojas y las repone
en la época lluviosa.
Reyes Carranza

Reyes Carranza

55
Carla Chízmar

Las flores son polinizadas por insectos.


Presenta un crecimiento rápido y se adapta a todo tipo de condiciones y suelos.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): todas las partes del árbol tienen
uso medicinal, principalmente para cicatrizar heridas.
Es repelente de insectos.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

56
Cucurbitaceae

Lagenaria siceraria (Molina) Standl


Tula, Churuca, Murú (Ngöbe Buglé) (en Panamá) calabaza (en
otros países), Pilgrim bottle
Descripción: liana trepadora con zarcillos, de tallos herbáceos. Hojas simples,
alternas, con láminas de 10-20 x 10-20 cm, de ovadas a reniformes, con 3 a 7
lóbulos, algo pubescentes por el envés, con los bordes sinuado-denticulados. Flo-
res solitarias, grandes de color blanco. Los frutos son bayas de 10 a 110 cm de
largo, muy variables en formas y tamaños y están rellenos de una pulpa blanca
que envuelve las numerosas semillas grises.
Distribución y fenología: es una planta ampliamente cultivada en todo el
mundo, aunque probablemente es originaria de África tropical. En Panamá se
ha registrado en las provincias de Coclé, Colón y Panamá (es probable que en
todo el país), donde crece en bosques tropicales de clima húmedo y seco. Flores
y frutos se producen de septiembre a marzo.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: la tula se utiliza principal-
mente para la elaboración de lámparas e instrumentos musicales (güiro, mara-
cas y chekere). Anteriormente se empleaba para elaborar vasijas para transpor-
tar agua.
Carla Chízmar

57
Reyes Carranza

Procesamiento: lámparas: se deben escoger los frutos con formas redondas


y con cuello en forma de gancho, usualmente de unos 30 a 40 centímetros de
alto. Se les perfora un hueco y se dejan sumergidos en agua durante 30 días para
que la pulpa se pudra y se drena el contenido por el hueco. Una vez vacíos por
dentro se dejan secar al sol hasta que no tengan ningún olor fétido. Luego se per-
foran los huecos donde van las canicas (bolitas de vidrio de diferentes colores) y
por donde pasarán los cables para el foco que va a alumbrar la lámpara. Se pintan,
se barnizan y, por último, se colocan las canicas a presión y las conexiones para
el foco.
Güiro o churuca: se utiliza la misma técnica para secar que en el caso de las
lámparas, pero para hacer las churucas se escogen frutos más largos y menos re-
dondos. Una vez secos se les hacen unas rayas poco profundas al frente en forma
de canales horizontales separados por unos 2 milímetros.
Maracas: se usan tulas pequeñitas, se secan y se les perfora un hoyito por donde
se introducen las semillas para que suenen y luego este se sella.
Chekere: el proceso es igual al que se usa para confeccionar lámparas, pero sin
perforaciones y se cubre con una red de cuentas que al chocar con la tula emiten
un sonido parecido al de las maracas.

58
Allys Lu

Información adicional: la tula es una planta heliófila (requiere de que el sol Allys Lu
le penetre directo para crecer).
El sonido del güiro proviene al raspar una varilla de madera dura o de metal con-
tra las rayas. El sonido con el metal es más vibrante que con la madera.
El chekere es un instrumento de percusión de origen afrocubano.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): en otros países se considera co-
mestible (dependiendo del cultivo), cuando el fruto está inmaduro o verde se
consume como una verdura similar al zucchini o la calabaza.
Se cree que la pulpa del fruto tiene efectos laxativos, eméticos y purgativos.
Informante: Enrique Bernal, artesano, María Vicenta, provincia de Panamá,
Rep. de Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

59
Cyclanthaceae

Carludovica palmata Ruiz & Pav.


Bellota, Paja toquilla, Palma sombrero, Cogollo, Palmita,
Jipijapa, Atadero
Descripción: planta herbácea de 1,5 a 2,5 m de altura, sin un tallo visible. Hojas
simples, agrupadas y forman una roseta, con láminas de hasta 65 cm de largo, en
forma de abanico, plegadas y con los bordes aserrados. Inflorescencias fusifor-
mes, con muchas flores diminutas de color blanco-crema, con filamentos muy
largos y evidentes. El fruto es carnoso, de color verde y al abrir presenta colora-
ción anaranjada, de hasta 15 cm de largo.
Distribución y fenología: desde México hasta Bolivia. En Panamá se ha
registrado en zonas bajas de todo el país, donde crece en forma silvestre en los
bosques tropicales. Floración y fructificación ocurren durante todo el año.
Fermín Hernández

60
Uso artesanal, tradicional o

Fermín Hernández
folclórico: de la hoja más joven
(cogollo), se obtienen fibras que se
utilizan en la confección del sombre-
ro pintado, que es un accesorio del
vestido típico panameño. También
se tejen cestas, carteras, jabas, alfom-
bras, entre otros artículos.
Procesamiento: para la elabora-
ción del sombrero pintado se cortan
las hojas tiernas y se separan las ner-
vaduras, la parte blanda se hierve du-
rante 1 ó 2 horas y luego se lavan con
agua fría y limpia. Las fibras se ponen
al sol y al sereno sucesivamente para
obtener el color blanco, aquellas que no blanquearon completamente se tiñen de
negro hirviéndolas con chisná (Arrabidaea chica, Bignoniaceae) y sumergién-
dolas en lodo bien oscuro durante 24 horas. Para la confección de los sombreros
se escogen las fibras de acuerdo con la calidad que se le dé y se forma la crizneja
Allys Lu

61
(trenza de fibras). Se procede a confeccionar el sombrero utilizando un molde
u horma de sombrero hecha de cedro (Cedrela odorata, Meliaceae), espavé
(Anacardium excelsum, Anacardiaceae) o corotú (Enterolobium cyclocarpum,
Fabaceae) y luego se cose con hilo de pita (Furcraea cabuya, Agavaceae).
Carla Chízmar

Información adicional: el sombrero pintado adquiere su nombre por las


pintas que lleva entre los tejidos y consta de tres partes: la plantilla (parte supe-
rior), la copa (parte media) y el ala.
Para la confección del sombrero se prefieren plantas jóvenes (12 a 18 meses),
que se deben cosechar en luna llena, porque se cree que si se hace en otro perío-
do, la planta se seca y no produce más hojas.
Un sombrero rústico y barato se teje con fibra gruesa y puede costar aproxima-
damente $4, por el contrario, un sombrero fino se teje con fibra más blanca y
delgada y llega a costar desde $300 hasta miles de dólares.
Actualmente algunas mujeres tiñen las fibras con tintes de cabello.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): esta especie se utiliza como
planta ornamental.
Informantes: Ana Navas, artesana, Barrigón, provincia de Coclé, Rep. de
Panamá. Reinaldo Quiroz, artesano, La Pintada, provincia de Coclé, Rep. de
Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.

62
Dilleniaceae

Curatella americana L.
Chumico, Chumico de palo
Descripción: árbol de 3 a 10 m de altura, con la corteza de color gris y el tron-
co retorcido. Hojas simples, alternas, con láminas de 5-15 x 2,5-11 cm, de ovadas
a elípticas, ásperas al tacto, los bordes son ondulados. Inflorescencias axilares,
de 4 a 7 cm de largo, con pocas flores de color blanco o rosado. El fruto es un
folículo de 4 a 8 mm de largo, bilobulado, con 1 ó 2 semillas negras, cubiertas de
un arilo blanco.
Distribución y fenología: desde México hasta Brasil, también se encuentra
en las Antillas. En Panamá esta especie se ha registrado en las provincias de Coclé,
Colón, Chiriquí, Panamá y Veraguas, donde crece en climas secos y húmedos.
Flores y frutos se producen de enero a septiembre.
Alejandro De Sedas

Uso artesanal, tradicional o folclórico: la madera del chumico es muy


utilizada por los artesanos panameños para la confección de muebles rústicos.
Procesamiento: para la confección de muebles se recolecta la madera en el
bosque, se cortan las tucas que se van a utilizar y se les extraen las cortezas. Estas
se ponen a secar al sol durante varios días dependiendo de la humedad de la

63
Reyes Carranza

64
Reyes Carranza

madera. Luego se lijan y se curan con químicos. Posteriormente se procede a


armar el mueble de acuerdo con el gusto del artesano o del comprador.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): las hojas del chumico se utili-
zan como lija para pulir objetos de madera y fregar utensilios de cocina.
Con los tallos y las hojas se preparan infusiones contra la artritis, la diabetes y la
baja presión sanguínea.
Informantes: Ambrosio Herrera, artesano, Copecito, provincia de Coclé,
Rep. de Panamá. Manuel de Jesús Herrera, artesano, Copecito, provincia de
Coclé, Rep. de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.

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Euphorbiaceae

Hura crepitans L.
Tronador, Nuno, Ceibo, Coquillo macho, Barrigón de espino,
Jabillo, Sand-box tree, White cedar
Descripción: árbol de hasta 40 m de altura, el tronco tiene espinas cónicas y
secreción acuoso-lechosa. Hojas simples, alternas, de 5-15 x 4-12 cm, ovadas,
glabras o pubescentes, con los bordes dentados o crenados. Las inflorescencias
masculinas son espigas de 2 a 5 cm de largo, con numerosas flores diminutas de
color rojo, las flores femeninas son solitarias y de color rojo-púrpura. Los frutos
son cápsulas leñosas y explosivas, de color verde a marrón cuando maduran, de 3
a 5 cm de diámetro, con varias semillas.
Distribución y fenología: nativa desde Nicaragua y las Antillas hasta Boli-
via y el sur de Brasil. Plantada en Estados Unidos, Europa, África y Asia. En Pana-
má esta planta se encuentra en las provincias de Bocas del Toro, Chiriquí, Colón,
Darién, Los Santos, Panamá y Veraguas, donde crece en climas húmedos y secos.
Florece y fructifica durante todo el año.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: se usa en la construcción de
canoas, carpintería en general (cajones, molduras, muebles, entre otros artículos),
diques, postes de cerca, leña y carbón.
Reyes Carranza
Reyes Carranza

66
Procesamiento: para la construcción de canoas primero se deben escoger di-
rectamente del bosque aquellos árboles de gran altura y diámetro superior a 1 m.
Luego se tala y se raspa la corteza hasta dejar un cilindro de madera. En este se
dibuja la forma de la canoa y se corta hasta darle una forma rústica. Se procede a
vaciar el interior del tronco y se talla en forma de canoa. Usualmente estas plan-
Reyes Carranza

67
Reyes Carranza

tas crecen en colinas, a lo largo de quebradas y ríos, por esta razón, la canoa sin
terminar se arroja por el barranco para facilitar el transporte y evitar que se dañe
el trabajo. Cuando se tiene a la orilla del río, se le coloca una pieza de metal en el
fondo para evitar que la madera se raspe con las piedras de los ríos y se pinta por
dentro y por fuera con pintura sintética.
Información adicional: las cápsulas tienen forma de mandarina (Citrus sp.,
Rutaceae) y explotan cuando se secan.
El látex (secreción acuosa) es tóxico.
Los campesinos en Panamá celebran cada vez que se lanza una canoa al río, la
cual tiene una durabilidad entre 5 y 7 años.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): las semillas y el látex se han
empleado en el tratamiento de enfermedades, pero no se recomienda ingerirlos,
porque pueden ser tóxicos.
Los frutos secos se usan para hacer artesanías (adornos).
El látex se ha utilizado como barbasco en la captura de peces.
Informante: Fermín Hernández, Universidad de Panamá, ciudad de Pana-
má, Rep. de Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

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Fabaceae (Papilionoideae)

Dalbergia retusa Hemsl.


Cocobolo, Rosewood
Descripción: árbol de hasta 20 m de altura, la corteza es fisurada y de color gri-
sáceo oscuro. Hojas compuestas, alternas, con 7 a 15 folíolos, con láminas de 3-9
x 2-4,5 cm, de elípticos a ovados, glabros y con los bordes enteros. Inflorescencias
de 4 a 10 cm de largo, con numerosas flores de color blanco. Los frutos son secos
y aplanados, de 6 a 17 cm de largo, delgados, de verdes a marrón cuando madu-
ran, cada uno tiene usualmente una semilla.
Distribución y fenología: desde el oeste de México hasta Panamá. En el
país se encuentra en las provincias de Coclé, Colón, Darién y Panamá, donde
crece en bosques húmedos tropicales. Flores se producen de febrero a mayo y los
frutos se reportan entre abril y junio.
Carmen Galdames

69
Carla Chízmar

Uso artesanal, tradicional o folclórico: su principal artesanía son


las figuras talladas hechas por los indígenas Emberá-Wounaan de la provincia
de Darién. También se extraen tintes naturales que se utilizan para teñir de co-
lor marrón hilos de algodón, fibras de diversas plantas, tejidos, semillas, made-
ras y cuero.
Procesamiento: Figuras talladas: los árboles se talan, se limpian y luego se
cortan en pedazos o en láminas de acuerdo con el uso que se les vaya a dar. Para
las esculturas se cortan en pedazos grandes dependiendo del tamaño de la figura.
Los diseños se tallan directamente en la pieza de madera, con un punzón, un cu-
chillo y algunas veces con herramientas eléctricas, pero usualmente se hace todo
el trabajo a mano. Luego se les da brillo, puliéndolos a presión con las manos (al-
gunas veces con una máquina de pulir), sin necesidad de usar barniz o sellador.
Las esculturas son elaboradas por los índígenas Emberá-Wounaan principal-
mente, quienes se inspiran en la naturaleza para hacer los diseños. Hoy estas
esculturas son muy valoradas en el Mercado de las Artesanías y sus precios

70
Carla Chízmar

pueden variar dependiendo del tamaño y la dificultad, llegan a costar incluso


cientos de dólares.
Tinte negro: se cocinan las fibras de la chunga en agua con raspados de la
madera de cocobolo, luego se entierran en tierra negra, con agua, hasta formar
un lodo negro. Los taninos del material vegetal en descomposición terminan
de teñir las fibras. En algunos casos se reemplaza el cocobolo por jugo de jagua
(Genipa americana, Rubiaceae), que se extrae de los frutos verdes y una vez ex-
puesto al aire se oxida y se torna negro, luego se entierra en lodo y éste intensifica
el color. Si se deja por poco tiempo y se lava, la tonalidad resultante es gris-celeste
o lavanda.
Información adicional: el corazón del tronco tiene varias tonalidades que
van de rojizo-marrón, amarillo y negro. La madera es muy brillante y no necesita
que se barnice, pues posee una sustancia aceitosa que la hace brillar naturalmen-
te. Es de muy buena calidad, dura, pesada y resistente.
El aserrín puede provocar irritaciones en la piel.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): se utiliza en la fabricación de
muebles, cajas de joyería, artículos deportivos, mangos de paraguas y bastones,
herramientas, entre otros artículos.
Los Kunas de Alto Bayano emplean el tronco completo para hacer los horcones
que sostienen la estructura principal de sus viviendas.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

71
Fabaceae (Mimosoideae)

Entada gigas (L.) Fawc. & Rendle


Corazón de mono
Descripción: bejucos leñosos y trepadores, con tallos lenticelados. Hojas bi-
pinnadamente compuestas, alternas, con 3 a 6 folíolos, con láminas de 2-6,5 x
1,5-3 cm, asimétricamente elípticos, glabrescentes, con márgenes enteros. Inflo-
rescencias en racimos, de 7 a 25 cm de largo, con varias flores de color blanco-
verdoso. Frutos leñosos y fibrosos de hasta 2 m de largo, con semillas de 5 a 7 cm
de diámetro, de color café.
Distribución y fenología: desde el sur de México hasta Colombia, Ecuador
y Venezuela, también se encuentra en África y Madagascar. En Panamá se registra
en las provincias de Bocas del Toro, Colón, Darién, Panamá y Veraguas, donde
crece en bosques tropicales húmedos y secos. Las flores se producen de septiem-
bre a diciembre y los frutos de octubre a febrero.
Fermín Hernández

72
Uso artesanal, tradicio­

Reyes Carranza
nal o folclórico: las semi-
llas de esta especie se emplean en
la fabricación de collares, correas,
carteras y otros accesorios feme-
ninos. Se utilizan solas o mezcla-
das con otras especies.
Procesamiento: primero se
recolectan las semillas directa-

Reyes Carranza
mente del bosque o se compran
a personas que se dedican a este
trabajo. Luego se limpian, laván-
dolas con agua y jabón. Poste-
riormente se secan y se les aplica
un insecticida para evitar que los
insectos las dañen. Después se
perforan con un pequeño taladro
y se arma el accesorio mezclando
diferentes semillas. Se puede usar
hilo de algodón o nailon.
Información adicional: el
corazón de mono produce las
vainas más grandes entre las le-
guminosas, debido al tamaño de
sus semillas.
Crece en las alturas del dosel del
bosque.
Sus semillas se dispersan por
medio del agua (dispersión hi-
drócora).
Informante: Sergio Valdés,
artesano, Mercado de Artesanías,
El Valle de Antón, provincia de
Coclé, Rep. de Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

73
Fabaceae (Mimosoideae)

Enterolobium cyclocarpum ( Jacq.) Griseb.


Corotú
Descripción: árbol de 20 a 30 m de altura, ramas y fuste con la corteza exterior
de color gris y con lenticelas de color marrón-rojizo. Hojas alternas, bipinnada-
mente compuestas, de hasta 25 cm de largo, con 15 a 30 folíolos por pinna, con
láminas de 0,8-1,5 x 0,2-0,4 cm, linear-elípticos, pubescentes en el envés, con los
bordes enteros. Inflorescencias solitarias o fasciculadas, de hasta 2 cm de largo,
con numerosas flores de color blanco. Fruto de color negro al madurar, de 8 a 38
cm de largo, de olor fétido y con varias semillas en su interior.
Reyes Carranza

74
Distribución y fenología: desde México hasta Colombia, también se en-
cuentra en Venezuela, Ecuador y Bolivia. En Panamá esta especie se ha registrado
en todo el país, donde crece en lugares secos y húmedos. Florece y fructifica de
diciembre a mayo.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: las semillas de esta especie se
utilizan en la fabricación de collares, pulseras, anillos, aretes, correas, carteras y
otros accesorios femeninos. Su madera en trozos se decora generalmente con
dibujos de paisajes y animales, en especial tucanes y guacamayas.
Procesamiento: Confección de collares: primero se recolectan las se-
millas directamente del bosque o se compran a personas que se dedican a este
trabajo. Posteriormente se secan y se les aplica un insecticida para evitar que los
insectos las dañen. Después se perforan con un pequeño taladro o simplemente
Reyes Carranza

75
con una aguja gruesa y caliente y se arman los collares mezclando diferentes se-
millas. Se utiliza cualquier tipo de hilo (algodón, nailon, entre otros).
Decoración de madera: se busca

Reyes Carranza
la madera en el bosque, se leña (cor-
tar en tajadas) y se deja secar durante
un mes o más, según el tamaño y la
humedad de la madera. Se le aplica
un insecticida y luego sellador, de-
pendiendo de la pintura que se va
a utilizar (óleo, aceite o acrílico); en
caso de usar lápiz no se aplica sella-
dor. Después de escoger el tipo de
pintura y sellar la madera, se procede
a hacer el diseño y pintar. Una vez
finalizado este proceso, la pintura se
deja secar nuevamente, se le aplica
poliuretano y se hornea con luces
durante 2 ó 3 días.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): la madera de esta especie se uti-
liza para múltiples fines, como por ejemplo, la confección de muebles.
Los frutos se pueden usar como sustituto del jabón; cuando maduran sirven de
alimento para el ganado.
Las semillas son comestibles.
El exudado del tronco tiene fines medicinales.
Informantes: José Trujillo, artesano, Mercado de Artesanías, El Valle de An-
tón, provincia de Coclé, Rep. de Panamá. Sergio Valdés, artesano, Mercado de
Artesanías, El Valle de Antón, provincia de Coclé, Rep. de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M. y Carla V. Chízmar F.

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Fabaceae (Papilionoideae)

Erythrina berteroana Urb.


Palo santo, Palo de pito
Descripción: árbol de hasta 10 m de altura, las ramitas tienen aguijones. Hojas
compuestas alternas, trifolioladas, con folíolos de 5-17 x 5-15 cm, ovados, usual-
mente glabros, con bordes enteros. Inflorescencias en pseudorracimos de 25 a 40
cm de largo, con varias flores rojas llamativas. Frutos de hasta 20 cm de largo con
varias semillas de color rojo.
Reyes Carranza

Distribución y fenología: desde México hasta Perú y las Antillas. En Pa-


namá se ha registrado en zonas de elevaciones medias y bajas de todo el país.
Florece de diciembre a abril y fructifica de mayo a noviembre.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: las semillas de esta especie se
utilizan en la fabricación de collares, pulseras, anillos, aretes, correas y carteras. Se
usan solas o mezcladas con otras especies.

77
Reyes Carranza

Procesamiento: primero se recolectan las semillas directamente del bosque o


se compran a personas que se dedican a este trabajo. Posteriormente se les aplica
un insecticida para evitar que los insectos las dañen. Por último, se perforan con
un pequeño taladro o aguja caliente y se arman los accesorios mezclando diferen-
tes semillas. Se puede usar hilo de algodón o nailon.
Información adicional: Crece en distintos tipos de suelo y es resistente al
viento y la sombra.
La madera es muy suave, no sirve para construir y rara vez se utiliza como leña.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): se utiliza como cerca viva.
Sirve de forraje para el ganado.
Informante: Sergio Valdés, artesano, Mercado de Artesanías, El Valle de An-
tón, provincia de Coclé, Rep. de Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

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Fabaceae (Papilionoideae)

Gliricidia sepium ( Jacq.) Kunth ex Walp


Mata ratón, Bramadero, Balo, Madera negra, Mother of cocoa
Descripción: árbol de 5 a 15 m de altura, la corteza es de color gris, fisurada.
Hojas compuestas, de 12 a 20 cm de largo, con 5 a 19 folíolos, con láminas de
2-7 x 1-3 cm, de ovados a elípticos, glabros, con bordes enteros. Inflorescencias
en racimos de 4 a 15 cm de largo, con varias flores de color rosado a lila. Los fru-
tos son legumbres aplanadas, de 10 a 20 cm de largo, tornándose amarillentos y
dehiscentes al madurar, con varias semillas en el interior.
Distribución y fenología: desde México hasta Colombia, también se en-
cuentra en Venezuela, Guyana y

Alejandro De Sedas
Brasil. En Panamá se ha registra-
do en las provincias de Bocas del
Toro, Chiriquí, Colón, Darién,
Herrera, Los Santos, Panamá,
San Blas y Veraguas, donde crece
en bosques tropicales húmedos
y secos. Florece y fructifica de
diciembre a mayo.
Uso artesanal, tradicio­
nal o folclórico: se utiliza
principalmente para cercas vivas
en fincas y potreros de todo el país.
Procesamiento: se siembran estacas de árboles o arbustos a una distancia de 1
ó 2 m entre sí, sostenidas por líneas de alambre de púas. Las estacas se siembran a
lo largo de los límites de fincas, potreros, cultivos y parcelas. Al poco tiempo estas
estacas producen raíces, crecen y forman las cercas vivas.
Información adicional: durante la época seca pierde sus hojas y las repone
en la época lluviosa.
Las flores son polinizadas por insectos.
Las vainas (frutos) tienen la capacidad de abrirse de manera violenta y expulsar
las semillas hasta 25 m de distancia.
Presenta un crecimiento rápido y se adapta a todo tipo de condiciones y suelos.

79
Carla Chízmar

Otros usos (medicinal, comestible, etc.): todas las partes de la planta po-
seen sustancias tóxicas que se utilizan como veneno para matar ratones.
Por sus flores se ha utilizado como ornamental y en otros países, se comen fritas,
cocidas y en conservas.
Anteriormente en la región de Azuero, se usaban las hojas para hervir la ropa por-
que le da buen olor y, además, desinfectan.
Sirve como planta de sombra en plantaciones de cacao, café, té, vainilla y pimien-
ta negra.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

80
Fabaceae (Papilionoideae)

Mucuna ssp.
Ojo de buey, Ojo de venado, Pica pica
Descripción: bejucos, de tallos gla-

Fermín Hernández
brescentes o pubescentes. Hojas com-
puestas, alternas, trifolioladas, con folío-
los de ovados a elípticos. Inflorescencias
terminales, usualmente pendulosas, con
varias flores aglomeradas en su extremo
terminal. Frutos gruesos y acostillados,
cubiertos a veces por una capa de pelos
irritantes (tricomas), con pocas semillas
grandes y globosas de colores oscuros.
Distribución y fenología: es un gé-
nero pantropical. En Panamá la especie
más común es la M. mutisiana (Kunth)
DC. y se ha registrado en elevaciones
bajas y medias de todo el país, también
existen otras especies, pero su distribu-
ción en Panamá es más limitada. Flores y
Mucuna pruriens
frutos se producen durante todo el año.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: las semillas de esta especie se
utilizan en la fabricación de collares, pulseras, aretes, correas y carteras. Se usan
solas o mezcladas con otras especies, en algunos casos no se puede determinar
con certeza la especie, pues están peladas, quemadas, raspadas o pulidas.
Armando Estrada
Armando Estrada

Mucuna sp. Mucuna sp.

81
Noris Toribio

Mucuna mutisiana

Procesamiento: primero se recolectan las semillas directamente del bosque


o se compran a personas que se dedican a este trabajo. Luego se limpian, laván-
dolas con agua y jabón. Posteriormente se secan y se les aplica un insecticida
para evitar que los insectos las dañen. Después se perforan con un pequeño tala-
dro y se arma el accesorio mezclando diferentes semillas. Se puede usar hilo de
algodón o nailon.
Información adicional: los frutos del ojo de buey pueden causar serias irri-
taciones por sus tricomas urticantes.
Como la mayoría de las especies de leguminosas son fijadoras de nitrógeno.
Son polinizadas por murciélagos.
Usualmente crecen en el dosel del bosque.
Informante: Sergio Valdés, artesano, Mercado de Artesanías, El Valle de An-
tón, provincia de Coclé, Rep. de Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

82
Fabaceae (Mimosoideae)

Samanea saman ( Jacq.) Merr


Guachapalí, Guachapalí rosado, Árbol de lluvia
Descripción: árbol de 20 a 35 m de altura, la corteza exterior es de color gris
o negra, fisurada y exfoliante en placas irregulares. Hojas bipinnadamente com-
puestas, alternas, de 15 a 20 cm de largo, con folíolos de 6 a 9 por lado de cada
pinna, con láminas de 2-6,5 x 1-2,9 cm, de obovados a rómbicos, pubescentes en
el envés, con bordes enteros y bases desiguales. Inflorescencias fasciculadas de 4 a
8 cm de diámetro, con numerosas flores de color rosado-púrpura. Los frutos son
legumbres, de 10 a 22 cm de largo, tornándose negros e indehiscentes al madurar,
con pocas semillas rodeadas de una pulpa de sabor dulce.
Distribución y fenología: desde México hasta Brasil. En Panamá se ha re-
gistrado en las provincias de Bocas del Toro, Colón, Herrera, Panamá y Veraguas,
donde crece principalmente en climas secos y húmedos. Florece y fructifica de
diciembre a mayo.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: los trozos de madera los de-
coran los artesanos con dibujos de paisajes y animales, especialmente aves como
tucanes y guacamayas.
Fermín Hernández

83
Fermín Hernández

Procesamiento: para la decoración de trozos se busca la madera en el bosque,


se leña (cortar en tajadas) y se deja secar durante un mes o más. Se le aplica un
insecticida y luego sellador, lo que dependerá de la pintura que se vaya a utilizar.
Los tipos de pinturas más comunes son: óleo, aceite o acrílico. También se em-
plean lápices de madera, pero en este caso no se aplica sellador. Después de haber
escogido el tipo de pintura y aplicado el sellador, se procede a dibujar y pintar.
Una vez finalizado este proceso se dejan secar nuevamente, se les aplica poliure-
tano y se hornean con luces durante 2 ó 3 días.
Información adicional: las semillas, las hojas y el tallo del guachapalí son
tóxicos, porque poseen el alcaloide conocido como pitecolobina.
Además de esta especie, en la decoración de maderas también se utilizan
otras plantas como el corotú (Enterolobium cyclocarpum, Fabaceae), el
mamón (Melicoccus bijugatus, Sapindaceae) y el mango (Mangifera indica,
Anacardiaceae).
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): el guachapalí es utilizado como
ornamental.
Los frutos maduros sirven de alimento para el ganado.
Informante: José Trujillo, artesano, Mercado de Artesanías, El Valle de An-
tón, provincia de Coclé, Rep. de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.

84
Meliaceae

Cedrela odorata L.
Cedro amargo, Cedro, Spanish cedar
Descripción: árbol de 20 a 40 m de

Reyes Carranza
altura, la corteza es de color blanco o
grisáceo y con fisuras longitudinales,
el tronco es cilíndrico. Hojas com-
puestas y alternas, de 20 a 70 cm de
largo, con 10 a 30 folíolos, con lámi-
nas de 7-16 x 3-7 cm, de ovados a
ovado-elípticos, de glabros a pubes-
centes, con los bordes enteros y olor
fétido al estrujarse. Inflorescencias de
20 a 50 cm de largo, con muchas flo-

Reyes Carranza
res diminutas de color blanco-crema.
El fruto es una cápsula que se abre al
secarse, de 1,5 a 4 cm de largo, con
muchas semillas aladas.
Distribución y fenología: des-
de México y las Antillas hasta el norte
de Argentina. En Panamá esta especie
se ha registrado en todo el país, donde
crece principalmente en climas secos
y húmedos de elevaciones bajas y
medias. Flores se producen de octu-
bre a enero y los frutos de diciembre
a mayo.
Uso artesanal, tradicional o
folclórico: la madera del cedro
amargo es muy popular para la con-
fección de muebles, canoas, pisos,
cajas de cigarros, construcción de interiores, instrumentos musicales, así como
para el tallado de figuras artesanales como cayuquitos y muñecos. Con los frutos
secos y abiertos se hacen arreglos artesanales.

85
Procesamiento: Tallado de figuras: primero se selecciona el pedazo de ma-
dera, luego se dibuja con un lápiz la silueta de la figura para que sirva de guía, se
comienza a dar una forma general utilizando las herramientas adecuadas y después
se confeccionan las líneas definitivas. Se lija la madera para alisar y dar una textura
uniforme a la figura. Por último, se barniza para darle un acabado perfecto.
Alejandro De Sedas

86
Reyes Carranza

Confección de muebles: se recolecta la madera en el bosque, se cortan las


tucas que se van a utilizar y se les extraen las cortezas. Después se ponen a secar al
sol durante varios días. Luego se lijan y se curan con químicos. Enseguida se pro-
cede a armar el mueble. Los troncos más grandes forman el esqueleto principal,
los más delgados se usan para elaborar el respaldar y el asiento.
Información adicional: el cedro amargo es muy conocido por su madera
y tiene una gran demanda en el comercio internacional, ya que se usa principal-
mente para la fabricación de muebles.
La madera es naturalmente resistente a las termitas y a la pudrición.
La mayoría de los artesanos panameños lijan los muebles a mano.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): la infusión de las hojas se utiliza
para aliviar el dolor de muelas y oídos. La raíz, el tallo y las hojas se usan cocidos
para bajar la temperatura, tratar problemas como diarrea, dolor de estómago y
parásitos intestinales.
Informantes: Reyes Carranza, botánico, provincia de Panamá, Rep. de Pa-
namá. Ambrosio Herrera, artesano, Copecito, provincia de Coclé, Rep. de Pa-
namá. Manuel de Jesús Herrera, artesano, Copecito, provincia de Coclé, Rep.
de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.

87
Moraceae

Poulsenia armata (Miq.) Standl.


Cucuá, Cocuá, Mastate, Ñumi, Majagua
Descripción: árbol de 15 a 40 metros

Alejandro De Sedas
de altura, los tallos y las ramas jóvenes
algunas veces tienen espinas cortas,
con savia color blanco o crema, la cor-
teza es lisa, de color gris o negro. Hojas
simples, alternas, dísticas, con láminas
de 2-28 x 2-11 cm, ovadas, glabras, con
bordes enteros. Inflorescencias soli-
tarias de hasta 2 cm de diámetro, con
numerosas flores diminutas, de color
amarillo o naranja. Frutos aquenios de
hasta 3 cm de diámetro, pequeños, glo-
bosos, de color amarillo a chocolate.
Distribución y fenología: desde
México hasta Bolivia. En Panamá se ha
registrado en las provincias de Bocas
del Toro, Coclé, Colón, Darién, Pana-
má y la Comarca de San Blas, donde
crece en tierras bajas y de mediana
elevación, en climas húmedos y muy
húmedos. Florece y fructifica durante
Reyes Carranza

Reyes Carranza

88
la época lluviosa, es decir, de

Carla Chízmar
mayo a diciembre.
Uso artesanal, tradicio­
nal o folclórico: en la
región de Coclé, las fibras se
utilizan para elaborar el vestido
típico de la danza de los Dia-
blos Cucuá. También se usan
para hacer hamacas, cobijas,
petates, alfombras, cestos, ropa
para vestir, monederos y otros
tipos de artesanías.
Procesamiento: para elabo-
rar el vestido típico primero se
cortan segmentos del tronco o
ramas gruesas y se les hace un
corte recto de extremo a extre-
mo con un hacha. Luego se me-
ten dos estacas para despegar la
corteza. Finalizado este proceso
se raja la parte exterior e inte-
rior, de manera que se puedan
extraer las fibras completas, se
pasan por agua caliente, se lavan
y ponen a secar al sol. Antes de
confeccionar las prendas (cha-
queta y pantalón), las fibras se
golpean con un mazo de madera para darle la textura adecuada y facilitar su cos-
tura con hilos que se obtienen de la pita (Aechmea magdalenae, Bromeliaceae)
y la cabuya (Furcraea cabuya, Agavaceae). Luego ambas prendas se decoran con
dibujos geométricos pintados con tintes vegetales como el azafrán de las Indias
(Curcuma longa, Zingiberaceae) para el color amarillo; el achiote (Bixa orella-
na, Bixaceae) para el naranja; la jagua (Genipa americana, Rubiaceae) para el
negro; la chisná (Arrabidaea chica, Bignoniaceae) para el rojo, entre otros.
Información adicional: esta especie es caducifolia y renueva su follaje du-
rante la época seca.

89
Carla Chízmar

La tradicional Danza del Cucuá se

Carla Chízmar
remonta de los años 1850 a 1940 y
se representa en la fiesta del Corpus
Christi.
Los diseños se hacen con una pun-
tilla de caña blanca (Gynerium sa-
gittatum, Poaceae).
El proceso de la vestimenta com-
pleta lleva un trabajo de 18 días y la
prenda alcanza un costo aproxima-
do de $150.
Para la confección de la máscara se
utiliza la quijada de un saíno y la osa-
menta de un venado.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): los frutos son comestibles.
La madera se utiliza para la construcción, elaboración de muebles, entre otros
artículos.
Autoras: Allys J. Lu M.

90
Piperaceae

Piper peltatum L.
Santa María
Descripción: arbusto de 1 a 3 m de altura, con tallos múltiples de color verde
pálido y entrenudos a veces de color rojizo. Hojas simples, alternas, con láminas
de hasta 25 x 25 cm, de ovadas a suborbiculares, glabras o glabrescentes, con bor-
des enteros. Inflorescencias compuestas, paniculadas o umbeladas, de hasta 20 cm
de largo, con numerosas flores diminutas, de color blanco. Frutos anaranjados y
punteados al madurar.
Rafael Aizprua

91
Distribución y fenología: desde México hasta Bolivia. En Panamá se ha re-
gistrado en climas húmedos de zonas bajas y elevaciones medias en todo el país.
Flores y frutos se producen durante todo el año.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: se extrae un tinte natural co-
lor verde que se utiliza para teñir hilos de algodón y fibras de diversas plantas
(chunga, bellota, cortezo, entre otras).
Procesamiento: se machacan las hojas jóvenes (usualmente) y el líquido que
se extrae se utiliza para teñir y también se hierven las hojas con las fibras que se
desean teñir.
Información adicional: es muy común especialmente en la fabricación de
cestas, platos y máscaras hechas por los indígenas Emberá-Wounaan de la pro-
vincia de Darién. En la elaboración de las cestas (hösig di) tradicionales de los
Emberá-Wounaan, se utilizaban los colores blanco, rojo y negro.
Durante los años 80 se populariza la confección de canastas con colores vivos
y diseños modernos hechas especialmente para coleccionistas, de ahí que hoy
exista una variedad muy grande de diseños, colores y tamaños.
Para obtener el color verde los indígenas utilizan una gran variedad de plantas,
pero la Santa María es una de las más comunes.
Informantes: Trucman Zarco, artesano, Emberá-Wounaan, provincia de
Darién, Rep. de Panamá. Sirinia Apochito, artesana, Emberá-Wounaan, provin-
cia de Darién, Rep. de Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

92
Poaceae

Bambusa vulgaris Schrad. ex J.C. Wendl.


Bambú, Bambú amarillo, Cañaza
Descripción: hierba de poste arbustivo de 6 a 20 m de altura, con tallos múl-
tiples, rígidos, erectos, huecos, al principio verdes, tornándose amarillos con el
transcurso del tiempo. Hojas de las ramas simples, alternas, con láminas de 9-26
x 0,9-3,4 cm. Inflorescencias una serie de pseudoespiguillas sésiles, con muchas
espiguillas de color amarillo-verdoso, con flósculos de 5 a 10 por espiguilla.
Distribución y fenología: se desconoce su sitio de origen, pero es muy
probable que sea originaria del sur de Asia; hoy es ampliamente cultivada en los
trópicos y subtrópicos del mundo. En Panamá esta especie se ha reportado en las
Alejandro De Sedas

93
provincias de Colón, Veraguas y Pa-

Alejandro De Sedas
namá, donde crece mejor en suelos
húmedos y bien drenados, en bos-
ques tropicales y subtropicales. Esta
planta solo florece una vez en la vida,
luego muere.
Uso artesanal, tradicional o
folclórico: en Panamá, el bambú
se utiliza para hacer diferentes tipos
de artesanías, tales como lámparas,
velas, collares, adornos colgantes, pi-
pas, quemadores de aceite, biombos,
cajas, figuras talladas, muebles, entre

Carla Chízmar
otros artículos.
Procesamiento: Velas: se cor-
ta un pedazo de bambú y se rellena
con cera.
Adornos: se utilizan pedazos de
diferentes tamaños y diámetros, al-
gunas veces se pintan o se queman
los extremos para darle una tonali-
dad más oscura. También se deco-
ran con semillas, hilos de diferentes
colores e incluso con cascabeles para
que suenen con el viento.
Quemadores de aceite: se cor-
ta el bambú en trozos, se le abren
aberturas a los lados y se coloca una
pequeña copita de metal en la parte
superior, donde se pone el aceite
aromático y debajo una velita para
calentar.
Pipas: se hacen con canutos pe-
queños y angostos de bambú, a los
cuales se les pega una semilla de
alguna palma (por ejemplo, tagua

94
[Phytelephas seemannii, Arecaceae]),

Carla Chízmar
se le abre un agujero en el centro y se
coloca en el extremo inferior. Esta se-
milla o fruto sirve para poner el tabaco.
Usualmente estas pipas se decoran con
masilla de colores.
Información adicional: las plantas
producen flores y frutos cada 100 años
(más o menos), luego mueren. Debido
a esto, se propaga vegetativamente por
medio de rebrotes de las raíces.
Otros usos (medicinal, comesti­
ble, etc.): los brotes de bambú son
comestibles.
Sirve para producir pulpa para papel.
Es muy utilizado como planta ornamen-
tal, en ebanistería y en construcción.

Carla Chízmar
Informante: Veryca Joyería Artesa-
nal y Bambú Arte, Feria Nacional de
Artesanías, ciudad de Panamá, Rep. de
Panamá. Sergio Valdés, artesano, Mer-
cado de Artesanías, El Valle de An¬tón,
provincia de Coclé, Rep. de Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F.
Carla Chízmar

95
Poaceae

Coix lacryma-jobi L.
Lágrimas de María
Descripción: planta herbácea de 1 a 3

Fermín Hernández
m de altura, los tallos sólidos, con varias
hojas a lo largo. Hojas simples, alternas,
con láminas de 9-51 x 1,8-5,7 cm, linea-
res, glabrescentes. Inflorescencias en
espigas terminales y axilares, con pocas
flores, con el involucro inflado y duro.
Frutos de colores negro, rojo o grisáceo
cuando maduran.
Distribución y fenología: es una
planta muy cultivada, originaria de Asia
tropical, actualmente se distribuye en
todos los trópicos del mundo. En Pana-
má es muy probable que se encuentre en
todo el país, en especial en climas cálidos
y elevaciones medias y bajas. Flores y fru-
tos se producen durante todo el año.
Fermín Hernández

96
Uso artesanal, tradicional

Noris Toribio
o folclórico: los involucros
se utilizan para la confección de
collares, pulseras, rosarios, sortijas,
cortinas y correas.
Procesamiento: para la fabrica-
ción de collares se recogen los in-
volucros directamente de las plan-
tas, luego se les abren orificios con
un pequeño taladro, a través de los
cuales se pasa el hilo (nailon, algo-
dón, etc.). Finalmente se le da la
forma necesaria para confeccionar
los collares, sortijas, carteras, entre
otros accesorios.
La mayoría de los accesorios son

Noris Toribio
confeccionados mezclando se-
milllas de diferentes especies, en-
tre ellas el jaboncillo (Sapindus
saponaria, Sapindaceae), algunas
acacias (Acacia ssp., Fabaceae) y el
corotú (Enterolobium cyclocar-
pum, Fabaceae).
Información adicional: los
involucros óseos en forma de lá-
grimas generalmente se confun-
den con los frutos o las semillas.
Otros usos (medicinal, co­
mestible, etc.): se utilizan en
la fabricación de maracas, confec-
cionadas con totumas (Crescentia cujete, Bignoniaceae), para este propósito se
colocan dentro de la totuma para producir el sonido característico.
Informante: Anayansi Bernaza, Santa Fe, provincia de Veraguas, Rep. de
Panamá. Noris Toribio, STRI, ciudad de Panamá, Rep. de Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

97
Poaceae

Gynerium sagittatum (Aubl.) P. Beauv.


Caña blanca, Caña brava, Carrizo
Descripción: hierba de hasta 6 m de altura, con tallos múltiples erectos, leño-
sos y sólidos. Hojas dispuestas en un abanico terminal en el ápice del tallo, con
láminas de 0,5-2,2 m x 2-9 cm, con márgenes escabrosos. Inflorescencias pani-
culadas, de hasta 1,5 m de largo, con numerosas espiguillas, con dos flósculos
usualmente cada una.
Distribución y fenología: desde México hasta Paraguay, también se en-
cuentra en las Antillas. En Panamá se ha registrado en elevaciones bajas y medias
de todo el país. Esta planta es fértil durante todo el año.
Uso artesanal, tradicio­

Reyes Carranza
nal o folclórico: el tallo
se utiliza principalmente como
material de construcción (pare-
des y techos de casas y ranchos,
fogones, mesas, camas, sillas, en-
tre otros enseres) y para la elabo-
ración de artesanías (jaulas para
pájaros, esqueletos de cometas y
adornos como aviones o estre-
llas). Los indígenas lo usan para
hacer instrumentos de caza como el arco y la flecha.
Procesamiento: Construcciones: los campesinos utilizan los tallos para la
construcción de sus casas. Primero se les quitan las hojas con un machete hasta
que queden limpios, luego se seleccionan tallos de tamaños similares y se pro-
cede a clavarlos en maderas colocadas como moldes de las paredes de las casas.
Los indígenas (principalmente Kunas) emplean la caña blanca para construir las
paredes y techos de sus ranchos. A diferencia de los campesinos; después de lim-
piar los tallos, los colocan uno al lado del otro uniéndolos solamente por medio
de bejucos, como el bejuco real (Heteropsis oblongifolia, Araceae), sin necesidad
de más estructuras.
Jaulas: se cocinan los pedúnculos con agua caliente, para que tomen un color
más claro y se dejan secar al sol. Después de 8 días están listos para utilizarse. Para

98
Noris Toribio

confeccionar las jaulas los pedúnculos se cortan del tamaño deseado y se les abre
un hueco con una varita de metal. Se van uniendo con tiritas de bambú hasta
obtener el producto final.
Cometas: se corta el tallo de caña blanca, se arma el esqueleto de la cometa y
se amarra con hilo. Luego se le pega papel de seda de diversos colores, según el
ingenio y creatividad de quien la confecciona. Por último, se le agrega una larga
cola hecha de retazos de tela.
Arco para flecha: el arco para lanzar las flechas se elabora con el tallo del birulí
y una cuerda tensada. Las flechas se confeccionan de chunga y se transportan en
un cilindro construido de balso.
Información adicional: la caña blanca crece usualmente en lugares abiertos
con suelos húmedos, aunque presenta una flexibilidad ecológica notable y se ha
adaptado tanto a zonas áridas como a áreas inundables.
Las jaulas, a pesar de su tamaño, son más fáciles de armar que otros adornos
como los aviones y las estrellas.
Las cometas hechas del birulí eran muy populares años atrás, ahora son más co-
tizadas las cometas de plástico.

99
Actualmente el arco y la flecha no se

Reyes Carranza
utilizan con frecuencia, por lo que
los indígenas Emberá los han con-
vertido en una artesanía decorativa.
Esta especie es especialmente útil
para hacer instrumentos de caza, ya
que es liviana y puede ser transpor-
tada con facilidad.
Otros usos (medicinal, comes­
tible, etc.): la espiga se utiliza para
hacer flechas de pescar.
Las flores secas se usan para hacer
arreglos florales y adornos para de-

Noris Toribio
corar.
Las hojas se emplean para obtener
fibras con las que se construyen al-
fombras, canastas y el “sombrero de
cañita”.
El bagazo se les da como forraje a los
caballos cuando escasea el pasto.
Algunos le atribuyen cualidades me-
dicinales como diurético.
Informantes: Enrique Abrego,
Santa Fe, provincia de Veraguas, Rep.
de Panamá. Ana Navas, artesana,
Barrigón, provincia de Coclé, Rep.
de Panamá. Eliasar de la Cruz
Sánchez, artesano, El Valle de An-
tón, provincia de Coclé, Rep. de Pa-
namá. Santiago Guayora, Grupo
Emberá, provincia de Darién, Rep.
de Panamá. Noris Toribio, STRI,
ciudad de Panamá, Rep. de Panamá.
Autoras: Carla V. Chízmar F. y Allys J. Lu M.

100
Proteaceae

Roupala montana Aubl.


Carne asada
Descripción: árbol de 5 a 20 m de altura, la corteza es de color gris oscuro a
gris-chocolate. Hojas alternas, en las plantas juveniles las hojas son compuestas y
los folíolos con los bordes dentados; en los árboles adultos las hojas son simples,
con láminas de 4-10 x 1,9-7 cm, de ovado-elípticas a elípticas, glabras, en brotes,
con bordes enteros o dentados, con un fuerte olor a carne al estrujarlas. Inflo-
rescencias en espigas, con muchas flores olorosas y de color blanco a amarillo.
Los frutos son folículos aplanados, de color negro al madurar, de 2,5 a 3,8 cm
de largo.
Distribución y fenología: desde México hasta Brasil. En Panamá esta es-
pecie se registra en las provincias de Coclé, Colón, Chiriquí, Darién, Herrera,
Panamá y Veraguas, donde crece en tierras bajas y de mediana elevación, fre-
cuentemente en vegetación de sabanas y suelos pobres. Florece de enero a abril y
produce frutos de marzo a junio.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: las hojas se tiñen con tintes
artificiales para confeccionar arreglos florales o adornos. También se usan en
áreas rurales para barrer patios.
Procesamiento: para la tinción se recolectan las hojas y se ponen a hervir jun-
to con el color de tinte deseado. Se dejan secar y se confeccionan los arreglos o
adornos.
Alicia Ibáñez

101
Carla Chízmar

Información adicional: los


arreglos o adornos confeccionados
pueden durar hasta 2 años.
Para esta artesanía también se uti-
lizan las flores del maíz (Zea spp.,
Poaceae), la hortensia (Hydrangea
macrophylla, Hydrangeaceae), el
tabaquillo (Bocconia frutescens, Pa-
paveraceae) y cualquier otra flor que
se pueda teñir sin que se dañe.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): también se utilizan como pos-
tes en áreas ganaderas.
Se emplean para construcción de bohíos.
Informante: Juan Rodríguez, Mercado de Artesanías, El Valle de Antón, pro-
vincia de Coclé, Rep. de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.

102
Rubiaceae

Genipa americana L.
Jagua, Nuncito, Guayatil colorado, sabdur, Abugui (kuna),
kipará (emberá-wounaan)
Descripción: árbol de 10 a 25 m de altura, la corteza exterior es lisa y de color
grisáceo. Hojas simples, opuestas, agrupadas en los extremos de las ramas, con lá-
minas de 10-42 x 4-19 cm, de elípticas a obovadas, glabras o algo pubescentes, los
bordes son enteros. Inflorescencias de hasta 12 cm de largo, con varias flores ama-
rillas y aromáticas. Los frutos son bayas globosas, de 4 a 11 cm de largo, de color
verde o gris claro, tornándose amarillentos al madurar, con numerosas semillas ro-
deadas por una pulpa de color crema, que al oxidarse toma un color azul oscuro.
Carla Chízmar

Reyes Carranza

Distribución y fenología: originario de la región noreste de América del


Sur, probablemente de la Cuenca Amazónica, pero ahora distribuido desde la
Florida (Estados Unidos) hasta Paraguay y el norte de Argentina, también se en-
cuentra en las Antillas (excepto en Jamaica). En Panamá crece en todo el país, en
elevaciones bajas y medianas, con climas secos y húmedos. Florece y fructifica de
mayo a octubre, pero los frutos persisten en el árbol durante todo el año.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: la pulpa que rodea las semillas
se utiliza como pintura corporal. Con ella también se tiñen las fibras con las que
se elaboran cestas artesanales y el vestido típico de la danza de los Diablos Cucuá
en Coclé. Además su madera es usada para tallar y decorar con pinturas.

103
Alex Espinoza

Procesamiento: Pintura corporal: el fruto verde se pela y luego se ralla.


La pulpa se exprime con la mano para obtener un líquido claro que después de
ser expuesto al aire o cocido, toma un color morado oscuro o negro. Para que el
color de la pintura quede fijo se puede mezclar con ceniza de balso (Ochroma
pyramidale, Bombacaceae). Luego se pintan tatuajes temporales con la ayuda
de cepillos hechos de palma de sombrero (Carludovica palmata, Cyclantha-
ceae) o patrones tallados en madera de balso. La pintura dura aproximadamente
ocho días.
Información adicional: los indios Kunas utilizan esta pintura en la ceremo-
nia de la pubertad femenina, donde se pinta por completo a la joven que entra en
esta etapa.
En Chiriquí arriba, provincia de Coclé, además de que se usaba en el vestido de
los Diablos Cucuá se empleaba para teñir algunas telas y pintar flores secas; en la
actualidad se utilizan tintes artificiales.

104
Carla Chízmar

Otros usos (medicinal, comestible, etc.): sus frutos verdes son comes-
tibles y medicinalmente poseen propiedades astringentes, antiinflamatorias y
antianémicas. Se descubrió que son una fuente natural de hierro, riboflavina y
sustancias antibacterianas.
La madera se utiliza para construcciones rurales y para confeccionar mangos
para herramientas. Así como para confeccionar cajas, embarcaciones pequeñas,
ebanistería y carpintería.
De sus flores se extraen aceites esenciales.
Autoras: Allys J. Lu M.

105
Rubiaceae

Guettarda odorata ( Jacq.) Lam.


Espino blanco
Descripción: arbusto de hasta 3,5 m de altura, la corteza es de color grisáceo.
Hojas simples, opuestas, con láminas de 2-5,5 x 1-2,5 cm, elípticas, esparcida-
mente pubescentes, los bordes son enteros. Inflorescencias de 3 a 5 cm de largo,
con pocas flores blancas o rojas. Los frutos son drupas, de 0,7 a 1 cm de largo,
globosas, verde-grisáceas al madurar.
Distribución y fenología: desde Panamá hasta Colombia. En Panamá se ha
registrado en las provincias de Coclé, Colón, Chiriquí, Darién, Herrera, Panamá
y Veraguas, donde crece en bosques muy húmedos de zonas bajas. Floración y
fructificación ocurren de manera esporádica durante el año.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: la madera de esta especie se
utiliza para la confección de muebles rústicos.
Procesamiento: para la confección de muebles primero se recolecta la made-
ra en el bosque, se cortan las tucas que se van a utilizar y se les extraen las cortezas.
Estas se ponen al sol por varios días hasta que estén bien secas. Luego se lijan y se
curan con químicos. Se procede a confeccionar el mueble, dependiendo del gus-
to del artesano o del comprador. Los muebles se pueden construir solo de esta
Reyes Carranza

106
Reyes Carranza

madera o se pueden hacer mezclas con otros tipos de madera como el chumico
(Curatella americana, Dilleniaceae), el cedro amargo (Cedrela odorata, Me-
liaceae) y el espavé (Anacardium excelsum, Anacardiaceae). Los troncos más
grandes forman el esqueleto principal, los más delgados se usan para armar el
respaldar y el asiento.
Información adicional: actualmente son muchas las especies utilizadas
para la elaboración de muebles rústicos, lo importante es la calidad de la madera.
Dependiendo del tamaño del mueble, la confección puede durar una semana o
más. La mayoría de los artesanos panameños lijan los muebles a mano.
Informantes: Ambrosio Herrera, artesano, Copecito, provincia de Coclé,
Rep. de Panamá. Manuel de Jesús Herrera, artesano, Copecito, provincia de
Coclé, Rep. de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.

107
Sapindaceae

Melicoccus bijugatus Jacq.


Mamón
Descripción: árbol de hasta 30 m de altura, la corteza es de color grisáceo o
blanco-grisáceo. Hojas compuestas, alternas, de 15 a 25 cm de largo, con 4 a 8
folíolos, con láminas de 6-13 x 3-6,5 cm, de elípticos a ovado-elípticos, glabros,
los márgenes son enteros. Inflorescencias de hasta 25 cm de largo, con numero-
sas flores diminutas y agrupadas de color blanco-verdoso. Los frutos son drupas
de 2 a 3 cm de diámetro, de color verde a amarillo claro, con una sola semilla en
su interior.
Distribución y fenología: desde México y las Antillas hasta Colombia y
Venezuela, introducido en la Florida (EE. UU.). En Panamá se ha registrado en
elevaciones medias y bajas de todo el país. Flores se producen de abril a junio y
los frutos de julio a octubre.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: se decoran trozos de madera
generalmente con dibujos de paisajes y animales como tucanes y guacamayas.
Alejandro De Sedas

108
Alejandro De Sedas

109
Alejandro De Sedas

Procesamiento: Decoración de trozos: se busca la madera en el bosque,


se leña (cortar en tajadas) y se deja secar durante un mes o más, dependiendo de
lo húmeda que esté. Se le aplica un insecticida y luego sellador, de acuerdo con la
pintura que se va a utilizar: óleo, aceite o acrílico; en caso de usar lápiz no se aplica
sellador. Después se hace el diseño y se pinta. Una vez finalizado este proceso se
dejan secar nuevamente, se les aplica poliuretano y se hornean con luces durante
2 ó 3 días.
Información adicional: se ha reportado que las hojas del mamón se utilizan
para matar pulgas.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): el fruto es comestible.
La madera es utilizada para la confección de muebles.
Las hojas se emplean como medicina para aliviar fiebre, dolores de garganta y
diarrea.
Informante: José Trujillo, artesano, Mercado de Artesanías, El Valle de An-
tón, provincia de Coclé, Rep. de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.

110
Sterculiaceae

Guazuma ulmifolia Lam.


Negrito, Guácimo, Guácimo negrito, Guácimo ternero
Descripción: árbol de 10 a 25 m de altura, la corteza es fisurada y de color
oscuro, con savia mucilaginosa. Hojas simples, alternas, con láminas de 9-40 x
4,5-16 cm, de ovadas a elíptico-ovadas, pubescentes, con los bordes dentados. In-
florescencias de 0,5 a 3 cm de largo, con pocas flores pequeñas y amarillas. Frutos
capsulares con protuberancias cónicas, tornándose negros al madurar, de 18 a 25
cm de largo, con numerosas semillas en su interior.
Distribución y fenología: desde México y las Antillas hasta el norte de Ar-
gentina. En Panamá se registra en las provincias de Bocas del Toro, Coclé, Chiri-
quí, Colón, Darién, Herrera, Los Santos, Panamá, San Blas y Veraguas, donde cre-
ce en bosques tropicales húmedos y secos. Florece y fructifica de enero a julio.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: se utiliza principalmente para
cercas vivas en fincas y potreros de todo el país.
Procesamiento: consiste en sembrar estacas de árboles o arbustos a una dis-
tancia de 1 ó 2 m entre sí que sostienen líneas de alambre de púas. Las estacas se
Carla Chízmar

111
Fermín Hernández

Alejandro De Sedas
siembran a lo largo de los límites de fincas, potreros, cultivos y parcelas. Al poco
tiempo estas estacas producen raíces, crecen y forman las cercas vivas.
Información adicional: las flores son polinizadas por insectos.
Los frutos son susceptibles a daños por coleópteros.
La especie es de rápido crecimiento y se adapta a distintas condiciones ambien-
tales y edáficas, en especial a suelos secos y áreas abiertas.
Las cercas vivas poseen múltiples beneficios: son de bajo costo, sirven como fo-
rraje para alimentar animales, sombra para el ganado y para producción de ma-
dera y frutas.
Pueden ser sencillas o tener varios estratos, en este último caso se pueden
mezclar especies de diferentes tamaños, así como árboles maderables, frutales y
ornamentales.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): el fruto verde es dulce y se
come crudo o cocido. El fruto maduro es duro y leñoso, tiene un sabor dulce y
un aroma especiado y agradable. En otros países se mezcla con el chocolate o se
muele para hacer una bebida semejante al café. Se puede preparar un sirope dulce
con los frutos verdes.

112
Fermín Hernández
Alejandro De Sedas

La madera se utiliza en ebanistería.


Se le han adjudicado múltiples usos medicinales, que van desde el tratamiento
contra la fiebre y diarrea hasta la sífilis y el paludismo.
También se emplea en apicultura, para leña, para hacer jabón (ceniza), como fo-
rraje para el ganado, entre otros usos.
Autoras: Carla V. Chízmar F.

113
Tiliaceae

Apeiba tibourbou Aubl.


Peine de mono, Peine de mico, Cortezo, Majagua, Monkey
comb
Descripción: árbol de 5 a 25 m de altura, la corteza es de color gris. Hojas sim-
ples, alternas, con láminas de 10-35 x 5,5-15 cm, elípticas, de obovadas a ovadas,
pubescentes, los bordes son ligeramente aserrados. Inflorescencias de hasta 10
cm de largo, con pocas flores grandes y amarillas. El fruto es una cápsula, de 5,5 a
8,5 cm de diámetro, de color chocolate oscuro o negro cuando madura, cubierto
de espinas flexibles, con un aspecto parecido al erizo de mar, con varias semillas
en su interior.
Carla Chízmar

114
Alejandro De Sedas
Carla Chízmar

Carla Chízmar

Distribución y fenología: desde México hasta Bolivia. En Panamá se ha


registrado en todo el país, donde crece en tierras bajas, en climas secos y muy
húmedos. Floración y fructificación ocurren durante todo el año, pero principal-
mente de mayo a diciembre.
Uso artesanal, tradicional o folclórico: de la corteza se extrae fibra
para tejer hamacas, mochilas, sogas y chácaras. Los frutos se emplean para hacer
arreglos florales y decorar diferentes tipos de artesanía.
Procesamiento: para la extracción de fibras y tejido de hamacas se cortan ra-
mas de cortezo y se sumergen en el río de 15 a 25 días, lo que permite que la

115
Carla Chízmar

corteza se desprenda del tronco. Después de este proceso, se extraen las fibras
manualmente, se dejan secar y luego se pueden teñir con tintes naturales. Ense-
guida se friccionan pequeñas cantidades de hebras contra las pantorrillas y mus-
los hasta formar hilos y de esta forma se pueden utilizar para tejer las hamacas.
Información adicional: las raíces producen retoños que pueden convertir-
se en árboles.
Los frutos son consumidos por los monos aulladores.
La fibra extraída del cortezo es sumamente flexible, lo que permite que se tejan
con facilidad.
Este árbol es de rápido crecimiento y puede ser utilizado para reforestación, ma-
dera, fines ecológicos o restauración de zonas degradadas.
Otros usos (medicinal, comestible, etc.): de las semillas se extrae un acei-
te que se utiliza para dar brillo al cabello.
La madera también es utilizada para extraer pulpa para la fabricación de papel.
Informante: Teófilo Magallón, artesano, Mercado de Artesanías, El Valle de
Antón, provincia de Coclé, Rep. de Panamá.
Autoras: Allys J. Lu M.

116
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Informantes
Ambrosio Herrera. Artesano. Copecito, provincia de Coclé, Rep. de Panamá.
Ana Navas. Artesana. Barrigón, provincia de Coclé, Rep. de Panamá.
Anayansi Bernaza. Artesana. Santa Fe, provincia de Veraguas, Rep. de Panamá.
Eliasar de la Cruz Sánchez. Artesano. El Valle de Antón, provincia de Coclé, Rep.
de Panamá.
Elizabeth Leigh. Botánica. Panamá, Rep. de Panamá.

124
Enrique Abrego. Santa Fe, provincia de Veraguas, Rep. de Panamá.
Enrique Bernal. Artesano. María Vicenta, provincia de Panamá, Rep. de Panamá.
Fermín Hernández. Universidad de Panamá, Rep. de Panamá.
José González. Artesano. Barrigón, provincia de Coclé, Rep. de Panamá.
José Trujillo. Artesano. Mercado de Artesanías. El Valle de Antón, provincia de
Coclé, Rep. de Panamá.
Juan Rodríguez. Mercado de Artesanías. El Valle de Antón, provincia de Coclé,
Rep. de Panamá.
Luis Fernández. Artesano. Mercado de Artesanías. El Valle de Antón, provincia
de Coclé, Rep. de Panamá.
Manuel de Jesús Herrera. Artesano. Copecito, provincia de Coclé, Rep. de
Panamá.
Misael Arias. Artesano. Feria Nacional de Artesanías. Panamá, Rep. de Panamá.
Néstor Martínez. Artesano. El Valle de Antón, provincia de Coclé, Rep. de
Panamá.
Reinaldo Quiroz. Artesano. La Pintada, provincia de Coclé, Rep. de Panamá.
Reyes Carranza. Universidad de Panamá. Panamá, Rep. de Panamá.
Santiago Guayora. Grupo Emberá, Prov. de Darién, Rep. de Panamá.
Sergio Valdés. Artesano. Mercado de Artesanías. El Valle de Antón, provincia de
Coclé, Rep. de Panamá.
Sirinia Apochito. Artesana Emberá-Wounann. Provincia de Darién, Rep. de Pa-
namá. (Foto de las fibras teñidas).
Teófilo Magallón. Artesano. Mercado de Artesanías. El Valle de Antón, provincia
de Coclé, Rep. de Panamá.
Trucman Zarco. Artesano Emberá-Wounann. Provincia de Darién, Rep. de Pa-
namá.
Veryca Joyería Artesanal y Bambú Arte. Feria Nacional de Artesanías. Panamá,
Rep. de Panamá.

125
Índice de nombres científicos

A Coix lacryma-jobi 12, 96


Cordia alliodora 17, 50
Acacia ssp. 97 Crescentia cujete 11, 43, 97
Aechmea magdalenae 11, 52, 89 Cucurbitaceae 11, 57
Agavaceae 62, 89 Curatella americana 11, 17, 44, 63, 107
Anacardiaceae 14, 17, 18, 21, 51, 62, 84, Curcuma longa 89
107 Cyclanthaceae 11, 60, 104
Anacardium excelsum 11, 14, 51, 62, 107
Apeiba tibourbou 12, 114
D
Araceae 11, 24, 98
Arecaceae 11, 27, 31, 33, 36, 95 Dalbergia retusa 11, 69
Arrabidaea chica 11, 38, 53, 61, 89 Dilleniaceae 11, 17, 44, 63, 107
Arrabidaea corallina 11, 41
Astrocaryum standleyanum 11, 27, 36
E
Astronium graveolens 11, 21
Entada gigas 11, 72
B Enterolobium cyclocarpum 12, 62, 74,
84, 97
Bambusa spp. 53 Erythrina berteroana 11, 77
Bambusa vulgaris 12, 93 Euphorbiaceae 11, 66
Bignoniaceae 11, 38, 41, 43, 53, 61, 89, 97
Bixaceae 11, 46, 53, 89
F
Bixa orellana 11, 46, 53, 89
Bocconia frutescens 102 Fabaceae 11, 12, 17, 51, 62, 69, 72, 74, 77,
Bombacaceae 11, 49, 51, 53, 104 79, 81, 83, 84, 97
Boraginaceae 17, 50 Mimosoideae 72, 74, 83
Bromeliaceae 11, 52, 89 Papilionoideae 69, 77, 79, 81
Burseraceae 11, 55 Furcraea cabuya 62, 89
Bursera simaruba 11, 55
G
C
Genipa americana 12, 53, 71, 89, 103
Carludovica palmata 11, 60, 104 Gliricidia sepium 11, 79
Cedrela odorata 12, 17, 62, 85, 107 Guazuma ulmifolia 12, 111
Citrus sp. 68 Guettarda odorata 12, 17, 50, 106
Cocos nucifera 11, 31 Gynerium sagittatum 12, 90, 98

126
H Piperaceae 12, 91, 117
Piper peltatum 12, 91
Hamelia patens 48 Poaceae 12, 53, 89, 90, 93, 96, 98, 102
Heteropsis oblongifolia 11, 24, 98 Poulsenia armata 12, 88
Hura crepitans 11, 66 Proteaceae 12, 101
Hydrangeaceae 12, 102 Pterocarpus officinalis 17
Hydrangea macrophylla 102
R
L
Roupala montana 12, 101
Lagenaria siceraria 11, 57 Rubiaceae 12, 17, 48, 50, 53, 71, 89, 103-
106
M Rutaceae 68
Mangifera indica 11, 17, 18, 84
Meliaceae 12, 17, 62, 85, 107 S
Melicoccus bijugatus 12, 84, 108 Samanea saman 12, 83
Moraceae 12, 88 Sapindaceae 12, 84, 97, 108
Mucuna mutisiana 81, 82 Sapindus saponaria 97
Mucuna pruriens 81 Sciurus granatensis 29
Mucuna ssp. 12, 81 Sterculiaceae 111

O T
Ochroma pyramidale 11, 49, 53, 104 Tiliaceae 12, 114

P Z
Pachira quinata 51 Zea spp. 102
Papaveraceae 102 Zingiberaceae 89
Peltogyne purpurea 51
Phytelephas seemannii 11, 35, 95

127
Índice de nombres comunes

A chicá 38, 53
chisná 38, 61, 89
abugui 103 cholo pelao 55
acacias 97 chonta 27, 29
achiote 46, 48, 53, 89 chumico 17, 44, 63, 65, 107
almácigo 55 chumico de palo 63
árbol de lluvia 83 chunga 27, 29, 30, 36, 47, 71, 92, 99
atadero 60 churuca 57, 58
azafrán de las Indias 89 coco 31
cocobolo 69, 71
B coconut palm 31
cocuá 88
balo 79 cogollo 60, 61
balso 49, 51, 53, 99, 104 coquillo 27
bambú 53, 93, 94, 95, 99 coquillo macho 66
bambú amarillo 93 coralillo 48
barrigón de espino 66 corazón de mono 72, 73
bejuco colorado 41 corotú 62, 74, 84, 97
bejuco nimi 38 cortezo 47, 92, 114, 115, 116
bejuco real 24, 25, 98 cucaracho 21
bellota 47, 60, 92 cucuá 88, 104
bramadero 79
D
C
digó 38
cabuya 89
calabaza 57, 59
calabazo 43, 44 E
caña blanca 90, 98, 99 espavé 14, 16, 17, 51, 62, 107
caña brava 98 espavel 14
cañaza 93 espino blanco 17, 50, 106
caracolí 14
carate colorado 55
carne asada 101 G
carrizo 98 guachapalí 83, 84
cedro 62, 85 guachapalí rosado 83
cedro amargo 17, 85, 87, 107 guácimo 111
cedro espino 51 guácimo negrito 111
ceibo 66 guácimo ternero 111

128
guayatil colorado 103 mandarina 68
mango 17, 18, 20, 84
H marfil vegetal 35
mastate 88
hilo de pita 62 mata ratón 79
hortensia 102 monkey comb 114
mother of cocoa 79
I murú 57

indio desnudo 55 N
indio en cuero 55
ivory nut 35 naked indian 55
nazareno 51
J negrito 111
nuncito 103
jabillo 14, 66 nuno 66
jaboncillo 97
jagua 53, 71, 89, 103 Ñ
jipijapa 60
ñumi 88
K
O
kigá 52
kipará 103 ojo de buey 81, 82
ojo de venado 81
L
P
lágrimas de María 96
lano 49 paja toquilla 60
laurel 17, 50 palma de coco 31
palma de sombrero 104
M palma negra 27
palma sombrero 60
madera negra 79 palmita 60
magueb 38 palo de pito 77
maíz 41, 102 palo santo 77
majagua 88, 114 peine de mico 114
mamón 84, 108, 110 peine de mono 114

129
pica pica 81 T
pilgrim bottle 57
pita 52, 62, 89 tabaquillo 102
pita gancho 52 tagua 22, 23, 29, 35, 36, 37, 94
tigrillo 21
totuma 43, 44, 97
R tronador 66
ron ron 21 tula 57
rosewood 69
V
S vegetable ivory 35
sabdur 103
sand-box tree 66 W
sangrillo 17
Santa María 91, 92 white cedar 66
sargi 24
spanish cedar 85 Z
zorrillo 21
zorro 21, 22, 23

130
L a Universidad de Panamá, a través de su herbario presenta
Plantas de uso folclórico y tradicional en Panamá, como un
aporte a la popularización del conocimiento sobre los usos de
las plantas que crecen en el país y su relación con la cultura
nacional.

Este trabajo es una contribución preliminar para dar testimo-


nio de algunas de las especies de plantas utilizadas tradicional-
mente por los artesanos panameños. Está organizado en 37
fichas y cada una corresponde a una especie con su respectiva
familia, nombre científico y nombre común. Adicionalmente,
presenta una breve descripción de las características morfo-
lógicas más importantes para poder reconocer la especie, su
distribución y fenología, el uso artesanal, tradicional o folcló-
rico, el procesamiento, entre otros, así como los informantes y
autoras de la ficha técnica.
9 789968 927499
ISBN 978-9968-927-49-9

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