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PROGRAMA DE DOCTORADO:
RECERCA EN L’ACTIVITAT FÍSICA I L’ESPORT: TEORIA I MÉTODES.
BIENIO 1997-1999
ENTRENAMIENTO DE LA
MUSCULATURA ABDOMINAL
Directora:
DECLARA:
AGRADECIMIENTOS
ABREVIATURAS Y GLOSARIO
RESUMEN
INTRODUCCIÓN...............................................................................1
OBJETIVOS......................................................................................4
Capítulo 1
Capítulo 2
2.1. CONCEPTO...........................................................................................28
2.2. EN OTROS MÚSCULOS.......................................................................28
Capítulo 3
3.1. INTRODUCCIÓN....................................................................................37
3.3. SIT-UP...........................................................................................….....39
3.4. CURL-UP........................................................................................…....45
Capítulo 4
4.1. INTRODUCCIÓN....................................................................................62
Capítulo 5
5.1. INTRODUCCIÓN....................................................................................92
5.10. EL MUSCLELAB™............................................................................105
Capítulo 6
LA ELECTROMIOGRAFÍA
6.1. INTRODUCCIÓN..................................................................................110
PARTE EMPÍRICA
1. INTRODUCCIÓN.........................................................................123
2. MATERIAL Y MÉTODO...............................................................124
3. RESULTADOS.............................................................................132
4. DISCUSIÓN..................................................................................145
1. INTRODUCCIÓN.........................................................................151
2. MATERIAL Y MÉTODO..............................................................152
3. RESULTADOS............................................................................155
4. DISCUSIÓN.................................................................................156
1. INTRODUCCIÓN.........................................................................162
2. MATERIAL Y MÉTODO..............................................................164
3. RESULTADOS............................................................................166
4. DISCUSIÓN.................................................................................167
CONCLUSIONES.........................................................................173
RETOS DE FUTURO....................................................................176
BIBLIOGRAFÍA............................................................................177
ANEXOS
cm: centímetros
m: metros
mm: milímetros.
N: newtons
RA: recto abdominal. RA1, RA2, RA3, RA4: de la porción más caudal a la más
craneal.
seg: segundo
V: velocidad
W: watios
RESUMEN
En esta tesis se pretende, por un lado, establecer el estado de la cuestión y las
posibles líneas de investigación a realizar en el futuro mediante la revisión crítica de los
estudios y aspectos más relevantes relacionados con el entrenamiento de la musculatura
abdominal. Para ello se analiza la anatomía funcional de dicha musculatura, la
diferenciación funcional neuromuscular, los ejercicios abdominales y su prescripción en
distintas poblaciones, la teoría y metodología del entrenamiento abdominal, los tests de
valoración funcional abdominal y la electromiografía como técnica de investigación.
Por otro lado se incluyen, en una parte empírica, tres estudios sobre el tema. En
primer lugar, se valora la hipótesis de la existencia de una diferenciación funcional en el
músculo recto abdominal en sujetos experimentados. En caso negativo, no tendría sentido
diferenciar entre ejercicios para solicitar más a cada una de las regiones abdominales.
Seguidamente, se comparan dos métodos de entrenamiento abdominal a corto plazo, con
el objeto de observar si producen mejoras en la fuerza y resistencia abdominal en tan sólo
dos semanas. Finalmente, se valora la hipótesis de si la secuencia de ejecución de
ejercicios “inferior-oblicuo-superior” es más eficaz que la contraria a la hora de aumentar
la fuerza y resistencia abdominal.
Se concluye, en el primer estudio, que el músculo recto abdominal presenta una
diferenciación funcional en al menos dos de sus porciones. Las velocidades de ejecución
en los ejercicios cercanas a las habitualmente seguidas por cada sujeto facilitan la
consecución de dicha diferenciación. El enrollamiento de tórax incide de manera
preferente sobre las porciones mas craneales del recto abdominal, mientras que el
enrollamiento de pelvis lo hace sobre las porciones más caudales aunque de forma
menos evidente.
En el segundo estudio se concluye que los programas de entrenamiento
empleados parecen ser eficaces para desarrollar la fuerza y resistencia abdominal en un
período de tan sólo dos semanas, no observándose diferencias significativas entre la
efectividad de un programa dinámico y otro estático-dinámico.
En el tercer estudio se concluye que el orden de ejecución inferior-oblicuo-superior
no parece ser significativamente más eficaz que la secuencia contraria en la mejora de la
fuerza y resistencia abdominal en el período de entrenamiento estudiado. Sin embargo, el
programa de entrenamiento más similar al test de valoración es el que mayores mejoras
produce en el mismo.
Julio Tous Fajardo Entrenamiento de la musculatura abdominal Introducción
INTRODUCCIÓN
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Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
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Julio Tous Fajardo Entrenamiento de la musculatura abdominal Introducción
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Julio Tous Fajardo Entrenamiento de la musculatura abdominal Objetivos
OBJETIVOS
DE LA PARTE TEÓRICA
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Julio Tous Fajardo Entrenamiento de la musculatura abdominal Objetivos
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PARTE TEÓRICA:
ESTADO DE LA CUESTIÓN
Julio Tous Fajardo Anatomía de la musculatura abdominal Capítulo 1
En una región donde el esqueleto sólo está representado por los apéndices
costiformes de las vértebras lumbares, la musculatura abdominal juega un
papel importantísimo. Esta falta de esqueleto proporciona al tronco una gran
movilidad y provoca que al menor contacto la musculatura abdominal se
contraiga de manera refleja.
Los músculos abdominales los podemos clasificar de varias maneras. Orts
(1969), los clasifica en grupo ventral o anterior (recto abdominal y piramidal),
grupo lateral (transverso, oblicuo interno y externo) y grupo posterior o
profundo (cuadrado lumbar).
Otra clasificación más funcional, que incluye a todos los músculos del tronco,
la ofrece Bergmark (1989), categorizando a la musculatura abdominal y lumbar
en dos sistemas musculares según su papel estabilizador sobre la columna
vertebral. De esta manera, el sistema muscular local incluye a los músculos
profundos y a las porciones profundas de algunos músculos que tienen su
origen o inserción en las vértebras lumbares. Estos músculos controlan la
rigidez y relaciones intervertebrales de los segmentos espinales así como la
postura de la zona lumbar. Por otro lado, el sistema muscular global incluye a
los músculos más largos y superficiales del tronco. Estos músculos no sólo
actúan moviendo la columna sino que también son responsables de transferir
las cargas recibidas entre la caja torácica y la pelvis. Por lo tanto, la principal
función se estos músculos, desde este punto de vista, es compensar las cargas
externas aplicadas sobre el tronco de forma que las fuerzas residuales
transferidas a la zona lumbar puedan ser manejadas por el sistema local.
Oblicuo externo
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Tabla 1.1. Clasificación de los músculos del tronco según su papel estabilizador en la zona
lumbar (Bergmark, 1989)
Sistema estabilizador local Sistema estabilizador global
• Intertransverso • Dorsal largo porción torácica
• Interespinoso • Iliocostal (porción torácica)
• Multífidos • Cuadrado lumbar (fibras laterales)
• Dorsal largo (porción lumbar) • Recto abdominal
• Iliocostal (porción lumbar) • Oblicuo externo
• Cuadrado lumbar (fibras mediales) • Oblicuo interno
• Transverso abdominal
• Oblicuo interno (fibras que se insertan
en la fascia toracolumbar)
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Julio Tous Fajardo Anatomía de la musculatura abdominal Capítulo 1
Figura 1.2. Porcentaje de cada región con respecto a la masa corporal total (A) y radio del
centro de masas en el plano frontal (B) y sagital (C). Estos valores pueden variar si se trata de
deportistas (Erdmann, 1997).
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Julio Tous Fajardo Anatomía de la musculatura abdominal Capítulo 1
1.1.1. ORIGEN
Cuerpo del pubis, en el intervalo comprendido entre la espina y el ángulo, en
la vertiente anterior del borde superior y en la cara anterior del hueso. Mediante
un tendón aplanado y cuadrilátero (de unos 25-30 mm tanto de anchura como
de altura) se fija en el labio anterior del borde superior del pubis y a menudo,
sobre todo cuando no existe el piramidal, en su cara anterior (Testut y Latarjet,
1977).
1.1.2. INSERCIÓN
Al llegar al tórax, se divide en tres lengüetas terminales que van a insertarse
en:
-Lengüeta externa: la más ancha y alta de las tres, en el borde inferior del
cartílago de la quinta costilla.
-Lengüeta media: en el borde inferior del cartílago de la sexta costilla.
-Lengüeta interna: la más baja, en el borde inferior del cartílago de la séptima
costilla, en el ligamento costoxifoideo e incluso, en algunos casos, en el
apéndice xifoides.
1.1.3. RELACIONES
Este músculo se encuentra cubierto por una vaina fibrosa muy resistente:
aponeurosis del abdomen, que está formada por las aponeurosis de inserción
de los oblicuos y el transverso. Por medio de esta vaina presenta las siguientes
relaciones:
-Cara anterior: músculo piramidal.
-Cara posterior: relacionada con la fascia transversalis, el tejido celular
subperitoneal, el peritoneo y las vísceras abdominales. También en esta cara
pero en el interior de la vaina, se encuentran anastomosadas dos arterias
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Figura 1.4. Diferente disposición de los músculos relacionados con el recto abdominal
dependiendo del lugar escogido (Kendall y Kendall, 1985)
1.1.4. ACCIÓN
Enrollar el tórax sobre la pelvis cuando se toma como punto fijo el pubis y
enrollar la pelvis sobre el tórax cuando se toma como punto fijo las costillas
(Testut y Latarjet, 1977).
Este músculo describe, en la mayoría de los sujetos, un trayecto curvilíneo
con la concavidad dirigida hacia atrás. La contracción endereza esta curvatura,
lo que ocasiona que se compriman las vísceras, favoreciendo así la expulsión
de orina (micción), materias fecales (defecación), del contenido del estómago
(vómitos) y del contenido del útero (parto) (Testut y Latarjet, 1977).
Para Caix et al (1984), en el recto abdominal predomina una actividad
motora tónico-postural debido a la composición de sus fibras.
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Julio Tous Fajardo Anatomía de la musculatura abdominal Capítulo 1
1.1.5. INERVACIÓN
Está inervado por 6 pares de nervios diferentes (nervios intercostales VII al
XII, entre T6 y L1) y por la rama abdominal del abdominogenital mayor
(iliohipogástrico). Los seis últimos nervios intercostales se dividen antes de
llegar a la vaina del recto. Las ramas de división, después de haber perforado
la vaina, emiten filetes que, una vez anastomosados, se distribuyen en el
músculo, en el que penetran a la altura de la mitad externa de la cara posterior,
en la proximidad de los vasos. La metamería nerviosa intercostal parece ser
relativamente respetada en este músculo. De esta forma, el séptimo nervio
inerva al segmento superior; el octavo, al segundo segmento; el noveno, al
tercer segmento; el décimo, undécimo y duodécimo, a la parte inferior del
músculo. La rama abdominal del abdominogenital mayor, anostomosada
frecuentemente con el duodécimo nervio intercostal, inerva a la parte inferior
del recto abdominal y al piramidal (Testut y Latarjet, 1977).
Otros autores han encontrado que la inervación en el recto abdominal no se
rige por bases estrictamente segmentarias (Monkhouse y Khalike, 1986). Estos
mismos autores encontraron cómo los nervios intercostales T7, T8 y T12
estaban más frecuentemente libres de ramas comunicantes procedentes de
otros nervios. En aquellos nervios donde existía comunicación con los vecinos
(sobre todo T9 a T10), las conexiones no se realizaban en una región
particular, estando algunas situadas lateralmente a la línea semilunar y otras
una vez los nervios habían perforado ya la fascia del recto.
En un estudio más reciente, Sakamoto et al (1996) encontraron que el recto
abdominal está inervado por los nervios intercostales de T7 a L1. Por otro lado,
la porción más inferior viene inervada por el nervio iliohipogástrico. Se
encontraron dos tipos de inervación: 1° nervios directos al recto; 2° nervios que
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1.1.6. VASCULARIZACIÓN
Está irrigado por la arteria epigástrica y la mamaria interna, que se
anastomosan por inoculación en el interior del músculo. La epigástrica se divide
en ramas internas (se dirigen en sentido transversal) y externas (se dirigen en
sentido oblicuo). La mamaria interna, por su rama abdominal, se divide también
en una serie de ramas colaterales, internas y externas, que se extienden
verticalmente en la dirección de las fibras.
Por otro lado, se ha observado que las intersecciones tendinosas del
músculo están más irrigadas que los propios vientres, encontrándose una
media de 1,09 perforaciones por cm2 frente a 0,18 perforaciones por cm2
respectivamente (Whetzel y Huang, 1996) (ver tabla 1.3).
Figura 1.5. Esquema representativo del recto abdominal que divide sus vientres e
intersecciones en distintas zonas. Las zonas 1, 3, 5 y 7 representan a los segmentos
musculares y las zonas 2, 4 y 6 representan a las intersecciones tendinosas superior, media e
inferior. Estas zonas presentan distinta vascularización (Whetzel y Huang, 1996).
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Julio Tous Fajardo Anatomía de la musculatura abdominal Capítulo 1
Tabla 1.3. Sumario del número de perforaciones vasculares contenidas en las intersecciones
tendinosas así como en los vientres, donde se puede observar cómo las zonas más caudales
están más irrigadas (Whetzel y Huang, 1996).
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1.1.9. VARIANTES
En algunos sujetos se encuentra ausente (Bergman et al, 1988). Dentro de
este grupo se encontrarían los que padecen del síndrome prune belly (vientre
mutilado), caracterizados por la ausencia de los músculos abdominales,
criptorchidismo (carencia de testículos) y malformaciones del tracto urinario con
una función renal variable (Ewig, Griscom y Wohl, 1996). Aproximadamente un
95% de estos casos se han encontrado en varones (Lam y Mehdian, 1999).
Lógicamente, a este síndrome se le asocian anormalidades
musculoesqueléticas entre las que predomina la escoliosis (Tuch y Smith,
1978, Joller y Séller, 1986, Brinker et al, 1995).
Por otro lado, se ha encontrado por duplicado y con distintas extensiones
que van desde la cuarta (2%) hasta la octava costilla (10%). Se inserta siempre
en dos o tres costillas, aunque según Loth, presenta seis tipos de inserción:
1) Costillas cuarta y quinta
2) 4, 5 y 6
3) 5 y 6
4) 5, 6 y 7 (67%)
5) 6 y 7 (20%)
6) 6, 7 y 8 (10%)
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Julio Tous Fajardo Anatomía de la musculatura abdominal Capítulo 1
1.2.1.ORIGEN
Cara anterior de la rama horizontal y de la sínfisis del pubis, mediante unas
fibras tendinosas cortas de 2-3 cm de anchura por 3-5 mm de espesor.
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1.2.2. INSERCIÓN
Sus haces siguen una dirección hacia arriba y adentro terminando en la
línea alba, a mitad de distancia entre pubis y ombligo o más abajo. Esta
inserción es muy variable, pudiendo tener lugar más o menos cerca del ombligo
y ser distinta en ambos lados (Spalteholz, 1976, Orts, 1969), oscilando así su
longitud entre 20 y 138 mm (Testut y Latarjet, 1977, Bergman et al., 1988).
Como variación rara, se le ha visto llegar hasta el apéndice xifoides del
esternón o cerca de él (Orts, 1969) y en un caso presentaba, como el recto
abdominal, una intersección aponeurótica (Testut y Latarjet, 1977).
1.2.3. ACCIÓN
Tensar la línea alba estando el cuerpo en posición vertical y cuando la
musculatura abdominal se encuentra relajada provoca la aparición de un surco
en la línea media debajo del ombligo (Spalteholtz, 1976). Otros autores
consideran que esta función es insignificante (Orts, 1969) o bien cuestionan la
utilidad de la misma (Testut y Latarjet, 1977).
1.2.4. INERVACIÓN
Duócedimo nervio intercostal y también eventualmente por ramas
procedentes de L1 y L2 ó solamente de este último (Spalteholz, 1976). Según
Orts (1969), además del 12º nervio intercostal, su inervación procede de una
ramita del nervio iliohipogástrco, que entra en la vaina del recto por su borde
lateral y penetra en el músculo por su cara superficial. Testut y Latarjet (1977)
añaden que frecuentemente viene inervado exclusivamente por el 12º nervio
intercostal, pero que bastante a menudo (18 veces de 32 casos) más de uno de
los troncos nerviosos de la región inguinoabdominal: 12º nervio intercostal,
iliohipogástrico, genitocrural, etc..., son los encargados de la inervación.
Por otro lado, Sakamoto et al (1996) encontró que el nervio proviene de L1 y
que aunque se le ha considerado muy ligado al recto abdominal, su nervio es
una continuación de una rama del oblicuo interno y del nervio ilioinguinal lo que
hace al nervio del piramidal completamente independiente del recto.
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Julio Tous Fajardo Anatomía de la musculatura abdominal Capítulo 1
Figura 1.6. Inervación del piramidal (py1: proveniente de una rama del oblicuo; py2:
proveniente del ilioinguinal (Sakamoto et al, 1996)
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Toma origen, por arriba, en la cara externa y el borde inferior de las siete u
ocho últimas costillas, por otras tantas digitaciones que se entrecruzan
regularmente, a la manera de los dedos de las manos, con otras análogas del
serrato mayor (por arriba) y del dorsal ancho (por abajo).
Posee unas inserciones un tanto complejas. Los fascículos inferiores se
insertan directamente o por medio de fibras tendinosas en el labio externo de la
cresta iliaca. El resto de fascículos (los que se originan de la sexta a la décima
costilla) terminan en el borde externo de una ancha lámina fibrosa, mal
denominada aponeurosis del oblicuo externo. Este auténtico tendón terminal
del músculo se fija en los siguientes puntos: 1° en la cresta iliaca; 2° en el
borde anterior del coxal; 3° en el pubis; 4° en la línea alba (Testut y Latarjet,
1977).
En cuanto a su acción, por lo general toma como punto fijo la pelvis. En ese
caso su activación: 1° baja las costillas; 2° flexiona el tórax sobre la pelvis; 3°
comprime las vísceras abdominales. Si se contrae de un solo lado, imprime
además al tórax un ligero movimiento de rotación que inclina hacia el lado
contrario su cara anterior.
Al tomar como punto fijo el tórax, actúa sobre la pelvis, a la que eleva
además de flexionar hacia las costillas. Si se contrae de un solo lado, imprime
a la columna lumbar un movimiento de rotación que dirige la cara anterior de la
pelvis hacia el músculo que se contrae.
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Julio Tous Fajardo Anatomía de la musculatura abdominal Capítulo 1
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efectúa por largas fibras tendinosas, de dirección oblicua, que se fusionan con
la fascia toracolumbar (Testut y Latarjet, 1977).
Se inserta en la aponeurosis del oblicuo menor. Desde esta extensa línea
de inserción inferior, los fascículos se expanden a modo de abanico, cuya base
se extiende desde la duodécima costilla al apéndice xifoides y desde aquí al
pubis.
Su acción difiere poco de la del oblicuo externo. Baja las costillas, flexiona el
tórax y comprime las vísceras abdominales. Cuando se contrae de un sólo
lado, imprime al tórax un movimiento de rotación que lo atrae hacia sí (Testut y
Latarjet, 1977), aunque se ha encontrado actividad bilateral durante
movimientos de rotación (Carman, 1972). Se le atribuye una influencia en el
aumento de la presión intra-abdominal aunque Cresswell et al (1992) no
encontraron este hecho de manera consistente.
La porción del oblicuo interno que se inserta en la fascia torcacolumbar,
aunque no presente en todos los sujetos (Bogduk, 1984), actúa en conjunto
con el transverso para estabilizar localmente la zona lumbar (Bergmark, 1989).
Está inervado por los cuatro nervios intercostales inferiores y por las dos
ramas abdominogenitales del plexo lumbar. Los filetes entran en el músculo por
su cara profunda (Testut y Latarjet, 1977). Sakamoto et al (1996), han
encontrado que viene inervado por los nervios que van de T10 a L1.
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Julio Tous Fajardo Anatomía de la musculatura abdominal Capítulo 1
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Julio Tous Fajardo Anatomía de la musculatura abdominal Capítulo 1
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bolsa serosa. La inserción se efectúa por medio de una recio y largo tendón
que se extiende desde la región pelviana a la cara posterior del muslo.
Porción iliaca: desde su amplia superficie de origen, los fascículos
convergen al mismo canal que el psoas en el borde anterior del coxal. Casi
todos los fascículos terminan en el lado externo del tendón del psoas y por
medio de éste terminan en el trocánter menor. No obstante, algunos de ellos,
los fascículos externos e inferiores, se dirigen directamente al fémur, siguiendo
el borde inferior del tendón del psoas. Estos últimos fascículos se diferencian
en muchos casos formando un pequeño músculo distinto: el músculo iliaco
menor (Testut y Latarjet, 1977).
En cuanto a su acción, con los orígenes fijos, el psoasilíaco flexiona la
articulación de la cadera al flexionar la cadera sobre el tronco y puede ayudar a
la rotación externa y a la abducción de la articulación de la cadera (Kendall y
Kendall, 1985). La función rotadora del psoas es motivo de controversia.
Skyrme et al (1999), encontraron que en la posición anatómica la tracción
longitudinal aplicada provocó la flexión de la cadera pero ningún componente
rotacional. Con la cadera en abducción, la tracción produjo flexión, aducción y
rotación lateral del fémur en la articulación de la cadera. Con la cadera en
aducción, la tracción sobre el psoas produjo sólo la flexión a nivel de la
articulación de la cadera sin ninguna rotación. Ante una flexión máxima, la
tracción produjo además aducción.
Con la inserción fija, y actuando bilateralmente, el psoasiliaco flexiona la
articulación de la cadera al flexionar el tronco sobre el fémur, como ocurre en la
incorporación hasta la posición sedente a partir de la posición supina. Al actuar
bilateralmente con las inserciones fijas, puede aumentar la lordosis lumbar;
actuando unilateralmente ayuda a la flexión externa del tronco hacia el mismo
lado (Kendall et al, 1983)
En la bipedestación, combina su acción con la de los músculos abdominales,
extensores vertebrales y pelvicrurales, para asegurar el equilibrio del tronco
sobre las caderas. Es para algunos, un músculo importante en la estática del
tronco (Testut y Latarjet, 1977), aunque otros cuestionan su actividad postural
en bipedestación (Laban, Raptou y Jonson, 1965, Andersson et al, 1995).
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Julio Tous Fajardo Anatomía de la musculatura abdominal Capítulo 1
de toda función activa. Está inervado por ramas muy delgadas que proceden
del plexo lumbar.
Como variante, Hanson et al (1999) observaron su ausencia en un 91% de
21 sujetos de raza negra, y sólo en un 13% de 23 sujetos de raza blanca. Seib
(1934), observó su ausencia en un 50% en la raza oriental, en un 57% en la
raza blanca y en un 67% en la raza negra (Hanson, 1999).
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Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional neuromuscular Capítulo 2
2.1. CONCEPTO
2.2.1. DELTOIDES
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D1 D1
D2 D2
D3 D3
D4 D4
D5 D5
<10% MVC
D6 11-25% MVC D6
26-35% MVC
D7 D7
>35% MVC
Abducción Aducción
Figura 2.1 Intensidad de la activación de las unidades motoras (normalizada con respecto a la
MVC) en los diferentes segmentos del deltoides durante el desarrollo de un movimiento de
abducción y aducción isométrico. (Wickham y Brown, 1998)
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Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional neuromuscular Capítulo 2
Figura 2.2. Lugar de colocación de electrodos para el bíceps braquial (Cram y Kasman, 1998)
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
1 1 1
2 2 2
3 3 3
4 4 4
5 5 5
6 6 6
Figura 2.3. Patrones de activación en el dorsal ancho durante la extensión desde tres
posiciones de flexión diferentes al 70% de la MVC (Patton y Brown, 1995).
Figura 2.4. Lugares de colocación de los electrodos en el dorsal ancho (Cram y Kasman, 1998)
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Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional neuromuscular Capítulo 2
2.2.3. TRAPECIO
Figura 2.5. Lugares de colocación de los electrodos en la porción superior del trapecio (Cram Y
Kasman, 1998)
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Figura 2.6. Registros electromiográficos de las porciones clavicular (PMC) y esternal (PMS) del
pectoral mayor, junto con el deltoides anterior (ADE) y posterior (PDE), durante la flexión del
brazo, un fondo en silla y llevando la palma derecha al oido izquierdo (aducción horizontal )
(Cram y Kasman, 1998)
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Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional neuromuscular Capítulo 2
Figura 2.7. Lugares de colocación de los electrodos en el tensor de la fascia lata (Cram y
Kasman, 1998)
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
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Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional neuromuscular Capítulo 2
significativamente superior a las separaciones más cercanas que hay que tener
en cuenta a la hora de comparar diferentes estudios.
Sin embargo, la mayoría de estudios informan de una mayor actividad en las
porciones superiores independientemente del ejercicio, lo cual refleja ya una
diferenciación funcional del recto abdominal (Walters et al, 1957, Lipetz y Gutin,
1970, Girardin, 1973, Ekholm, 1979, Guimaraes et al, 1991, Moraes et al, 1995,
Sarti et al, 1996, Beim et al, 1997, Warden et al, 1999). De otra manera, se
hubiera encontrado que todas las porciones presentan la misma actividad. En
el estudio de Sousa y Furlani (1974) se concluye que el recto abdominal se
activa en su totalidad en la gran mayoría de los casos, apareciendo la actividad
parcial de una o dos porciones en raras ocasiones (en este caso cuando se
flexionó sólo la cabeza). Son conclusiones, como las del grupo de Sarti,
Monfort y colaboradores, que sorprenden, ya que no se acepta como una
posibilidad lo que en sus estudios se ha encontrado ocasionalmente. De este
modo, creemos que es más conservador seguir investigando los factores que
pueden conducir a aceptar o rechazar la hipótesis de diferenciación funcional
en el recto abdominal que rechazarla aún habiendo observado algunos indicios
para aceptarla.
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Julio Tous Fajardo Los ejercicios abdominales Capítulo 3
3.1. INTRODUCCIÓN
AERÓBIC
100% 20% 10%
Recto abdominal
Curl-up Sit-up Máquina de res. Variable
Elevación segmentos inferiores Sit-up con discos
Elevación segmentos superiores
Ejercicio “V”
Curl-up con discos
Oblicuos
Curl-up con giro
Movilización seg. inf
Tabla 3.1. Ejercicios abdominales realizados por los practicantes de aeróbic (Gallardo y
Rodrigo, 1999).
ATLETISMO
100% 35% 10%
Recto abdominal
Curl-up Ejercicio “V” Sit-up
Elevación segmentos inferiores Curl-up con discos Sit-up con discos
Elevación segmentos superiores Ejercicio “V” con balón med.
Curl-up con balón medicinal
Oblicuos
Curl-up con giro Movilización seg. Inf
Movilización seg. Inf + discos
Tabla 3.2. Ejercicios abdominales realizados por los practicantes de atletismo (Gallardo y
Rodrigo, 1999).
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BALONCESTO
100% 25% 20% 10%
Recto abdominal
Curl-up Sit-up Elevac. seg. inf
Elevación seg. inf. Curl-up + discos
Curl-up + balón basket
Oblicuos
Mov. tronco Mov. seg. Inf.
Tabla 3.3. Ejercicios abdominales realizados por los practicantes de baloncesto (Gallardo y
Rodrigo, 1999).
BALONMANO
100% 35%
Recto abdominal
Curl-up Sit-up
Elevación segmentos inferiors Curl-up + balón medicinal
Ejercicio “V”
Curl-up + balón balonmano
Oblicuos
Movilización tronco Movilización tronco + balón medicinal
Movilización segmentos inferiores
Movilización tronco + balón balonmano
Tabla 3.4. Ejercicios abdominales realizados por los practicantes de balonmano (Gallardo y
Rodrigo, 1999).
FÚTBOL
100% 20% 10%
Recto abdominal
Curl-up Sit-up
Elevación segmentos inferiores Ejercicio “V”
Curl-up + balón fútbol Elevación miemb. inf.
Sit-up + discos
Curl-up + balón medicinal
Oblicuos
Mov. tronco Movilización seg. inf Mov. tronco + balón med.
Mov. tronco + balón fútbol Mov. tronco + barra
Tabla 3.5. Ejercicios abdominales realizados por los practicantes de fútbol (Gallardo y Rodrigo,
1999).
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Julio Tous Fajardo Los ejercicios abdominales Capítulo 3
3.3. SIT-UP
la cadera desde donde poder actuar (Ricci et al., 1981, Kendall, 1985, Norris,
1993). Por lo tanto, en el sit-up tradicional, la función principal de la
musculatura abdominal es ayudar a estabilizar la zona lumbar. El músculo
transverso y el oblicuo interno son los que tienen un mayor rol estabilizador
(Twomey y Taylor, 1987; Miller y Medeiros, 1987).
Halpern y Bleck (1979), encontraron cómo en distintos sit-ups se observaba
una brusca subida en la actividad de la musculatura abdominal al principio del
movimiento, seguida de un período de inactividad que sólo se interrumpe al
final del recorrido excéntrico. De esta manera, en el sit-up con piernas
extendidas el recto abdominal presenta actividad durante un 34% de la
repetición, mientras que el oblicuo externo lo hacía durante un 25% (lado
derecho) y un 20% (lado izquierdo). Cuando se flexionaban las piernas la
duración pasaba a ser 48%, 40% y 30% respectivamente. Por el contrario,
cuando se realizó un curl-up (definido por ellos como un sit-up con piernas
flexionadas donde sólo de levantan las escápulas), el recto abdominal presentó
actividad durante un 93% de la repetición, mientras que ambos oblicuos lo
hicieron durante un 90%. Resultados similares habían sido encontrados
anteriormente por Girardin (1973), aunque en este estudio se comparaban un
sit-up como el de la figura 3.1 y otro como el de la figura 3.2.
Figura 3.1. El sit-up con piernas flexionadas y pies sujetos. En los primeros 45º de flexión y
los segundos 45º de extensión, la musculatura abdominal actúa como principal (recorrido
en azul). En los segundos 45º de flexión y primeros 45º de extensión, los flexores de la
cadera actúan como principales (recorrido en rojo). La flexión de piernas parece no reducir
la actividad del psoasilíaco como se pensaba (ver texto). La fijación en los pies aumenta la
actividad en el tibial anterior, cuadriceps y psoasiliaco, siendo esta la razón por la que
muchas personas son incapaces de completar un sit-up sin sujeción. (Gráfico: Baechle,
1994)
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Julio Tous Fajardo Los ejercicios abdominales Capítulo 3
EMGrms
400
ra1
300
ra2
EMG[%]
200
ra3
100
rf
0
3.6 4.2 4.7 5.3
Time[s]
Figura 3.2. El sit-up hasta alcanzar las rodillas con el pecho ha demostrado ser un ejercicio
más intenso para el recto abdominal y seguro para la zona lumbar al ser muy difícil que se
produzca una hiperextensión en la misma por la desventaja mecánica de los flexores de la
cadera. Además, su amplio ROM lo hace interesante para población atlética (Girardin, 1973)
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Figura 3.3. Actividad del psoasiliaco durante un sit-up con piernas flexionadas o extendidas
indicada mediante el área sombreada (Laban, Raptou y Jonson, 1965).
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Julio Tous Fajardo Los ejercicios abdominales Capítulo 3
en los pies, el curl-up sería una opción más segura, ya que así se evita el
trabajo extra de los flexores de la cadera además de implicar una mayor
intensidad en el recto abdominal (Juker et al, 1998, Vanderthommen, Demblon
y Crielaard, 1999).
Resultante de fuerzas
I del miembro superior
N (Fms)
T
E Distancia al eje de
N giro (cadera)
S
I Prolongación eje de giro
D
A
D
Momento de fuerza = Fms x d
Figura 3.4. A medida que se alejan los brazos del eje de giro (cadera) aumenta el momento de
fuerza a aplicar y por lo tanto la intensidad del ejercicio.
ra1
0.20
0.15 oblinf
EMG[mV]
0.10
ra3
0.05
oblsup
0.00
6.1 6.8 7.5 8.2
Time[s]
Figura 3.5. Los sostenimientos de lado tanto estáticos como dinámicos son ejercicios poco
habituales que implican mucho a la musculatura oblicua (en azul; fundamental en la
recuperación de patologías lumbares) sin implicar compresión en la zona lumbar (Axler y
McGill, 1997, Juker et al, 1998). Además, activa considerablemente al cuadrado lumbar que
parece tener un gran papel en la estabilización lumbar (McGill, 1996a)
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Julio Tous Fajardo Los ejercicios abdominales Capítulo 3
3.4. CURL-UP
Como consecuencia de los efectos nocivos que podían causar los sit-ups a
nivel lumbar y observando mediante electromiografía integrada (iEMG) que la
musculatura abdominal actuaba como principal sólo en los primeros 45º de
flexión y en los segundos 45º de extensión del tronco (Flint y Gudgell, 1965;
Laban et al., 1965; Ricci, et al, 1981; Mutoh, et al., 1983, Bankoff y Furlani,
1984) se optó por modificar el ejercicio y crear el denominado curl-up
(encogimiento de tórax hasta que las escápulas se despegan del suelo). Los
estudios de iEMG demostraron que este ejercicio implicaba a la musculatura
abdominal con una intensidad igual o mayor que el sit-up, de ahí el que se
produjese una especie de destierro total al sit-up (Flint y Gudgell, 1965; Gutin y
Lipetz, 1971; Halpern y Bleck, 1979; Robertson y Magnusdottir, 1987, entre
otros), que como se ha visto anteriormente tiene su papel en la prescripción a
ciertos sujetos.
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Figura 3.6. El curl-up con flexión de piernas y cadera a unos 90º parece ser el ejercicio más
recomendable para minimizar los efectos nocivos que pueden ocasionar los flexores de la
cadera .
En este ejercicio se observó mediante iEMG que tan pronto como la cabeza
se despega del suelo se observa actividad en el recto del abdomen y como
consecuencia la caja torácica se hunde anteriormente. Por lo tanto, para
conseguir una mayor intensidad en la contracción se recomienda flexionar
(enrollar) el cuello a la vez que el tronco (Bankoff y Furlani, 1984, Streib et al,
1986, Shirado et al, 1995).
200
100
0
0 1 2 3 4 5
Time[s]
200
150
100
50
0
0 1 2 3 4
Time[s]
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Julio Tous Fajardo Los ejercicios abdominales Capítulo 3
Aparte del curl-up, se debería realizar la variante con giro para implicar más
a la musculatura oblicua. Según Plowman (1992), la clave de la salud lumbar
es una buena musculatura oblicua, ya que al insertarse -el oblicuo interno- en
la fascia toracolumbar reduce la carga que recibe la zona lumbar. En la
ejecución de este ejercicio es importante no unir la flexión con la rotación, ya
que esto produciría una asimetría entre las dos superficies vertebrales que
puede ocasionar un bloqueo de las carillas (Caillet, 1968, op. cit. Segal, 1983).
Se ha de indicar al sujeto que sólo levante una escápula del suelo lentamente,
realizando una contracción isométrica al terminar el recorrido. Se recomienda
en esta población una duración de tres segundos por cada encogimiento de
tronco con o sin giro, para que el sujeto tenga un control total sobre el
movimiento (Alexander, 1985; Johnson y Reid, 1991). La focalización en el
trabajo de oblicuos es fundamental, siendo muy útil emplear la palpación sobre
la zona para tener feedback (ver figura 3.8 y apartado específico en capítulo 4).
Existen ejercicios que si no son realizados de manera controlada no tienen
incidencia sobre los músculos oblicuos (ver figura 3.9)
EMGrms
0.30
ra1
0.25
0.20
oblinf
EMG[mV]
0.15
0.10 ra3
0.05
oblsup
0.00
0.5 1.4 2.3 3.2
Time[s]
Figura 3.8. Curl cruzado para incidir sobre el oblicuo externo (azul oscuro) empleando el
método de palpación (datos personales no publicados).
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Julio Tous Fajardo Los ejercicios abdominales Capítulo 3
EMGrms
0.30
ra1
0.25
0.20
oblinf
EMG[mV]
0.15
0.10 ra3
0.05
oblsup
0.00
0.5 1.6 2.7 3.8
Time[s]
Figura 3.9. Los giros con palo son un ejercicio eficaz para los oblicuos siempre y cuando se
realicen de manera controlada y focalizada (datos personales no publicados).
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150
100
50
0
0 1 2 3 4 5 6
Time[s]
Figura 3.10. Descensos de piernas desde decúbito supino. 1 Durante los primeros 45º el recto
abdominal actúa como principal y el recto femoral sinérgicamente. 2 En los segundos 45º el
recto abdominal pierde activación, mientras que el recto femoral la gana. 3 Comienzo de la
fase concéntrica. 4 Durante los primeros 45° el recto femoral alcanza su máxima actividad. 5
En los segundos 45° el recto femoral pierde actividad y el recto abdominal la gana (datos
personales no publicados).
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Julio Tous Fajardo Los ejercicios abdominales Capítulo 3
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EMGrms
0.25
RA1
0.20
0.15 RA2
EMG[mV]
0.10
RA3
0.05
RA4
0.00
20.2 21.0 21.8 22.6
Time[s]
Figura 3.12. Enrollamiento pélvico o curl invertido. Es importante que el movimiento se haga
lento y controlado, evitando los balanceos (datos personales no publicados).
Velocity Force Power 180
80.0
53.3 135
Cadera[Deg/s]
26.7
90
0.0
-26.7 45
-53.3
0
-80.0
0.0 0.5 1.0 1.5 2.0 2.5
200
EMG[%]
150
100
50
0
0.0 0.5 1.0 1.5 2.0 2.5
Time[s]
Figura 3.13. Dinámica de un enrollamiento pélvico (“pelvic roll”). RF = recto femoral; RA = recto
abdominal en sentido caudo-craneal. La línea discontinua separa la fase excéntrica de la
concéntrica (datos personales no publicados).
Figura 3.14. Ejercicio de descenso de piernas, al que debería sumarse una flexión de rodillas
para población con lumbalgias. Las manos siempre deberían colocarse debajo de los glúteos
para alinear la zona lumbar. (Brungardt, 1993).
a b
a EMGrms EMGrms
b
0.30 0.5
ra1 ra1
0.25
0.4
0.20
oblinf 0.3 oblinf
EMG[mV]
EMG[mV]
0.15
0.2
0.10 ra3 ra3
0.1
0.05
oblsup oblsup
0.00 0.0
12.45 13.51 14.56 15.62 20.9 22.1 23.2 24.4
Time[s] Time[s]
Figura 3.15. Movilización de miembros inferiores para trabajar los oblicuos. Se realizan
movimientos en forma de parabrisas donde al seguir la dirección de las fibras (b) la actividad es
mayor que cuando se realiza en el plano frontal (a). Ojo escala (valores máx: Oblinf:0,266(a),
0,407(b); oblisup: 0,097(a), 0,224(b); ra1: 0,090(a), 0,198(b); ra3: 0,047(a), 0,056(b).
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Figura 3.16. a: descenso de piernas con isométrico a 45°. b: enrollamiento con elevación
Figura 3.16. Elevación de piernas desde posición suspendida. El recorrido mostrado en las dos
figuras es el más efectivo para el desarrollo de la musculatura abdominal pero sólo realizable
por personas con una musculatura abdominal sobresaliente.
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EMGrms
0.30
ra1
0.25
0.20
oblint
EMG[mV]
0.15
0.10 ra3
0.05
oblsup
0.00
11.7 12.9 14.1 15.4
Time[s]
Figura 3.17. Ejercicio de “meter barriga” (“abdominal hollowing”) como primer paso para
enseñar a reducir la curvatura pélvica. En el electromiograma se puede observar cómo se
solicita casi exclusivamente al oblicuo interno (azúl) (datos personales no publicados). Sin
embargo, hay que tener en cuenta que en esta acción es el músculo transverso el que más se
activa (Strohl et al, 1981, DeTroyer et al, 1990), empleándose en ocasiones como test para
valorar la función de la musculatura abdominal profunda (Richardson et al, 1999). Su carácter
no superficial nos ha impedido registrar la actividad mioeléctrica en el transverso .
Figura 3.19. Levantamiento con rodillas y cadera formando un ángulo de 90º (la zona lumbar
permanece en contacto con la espaldera) (Norris, 1993)
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Julio Tous Fajardo Los ejercicios abdominales Capítulo 3
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Figura 3.22. Ejercicios posturales consistentes en meter el vientre hacia adentro (“abdominal
hollowing”) (Norris, 1997)
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Julio Tous Fajardo Los ejercicios abdominales Capítulo 3
Figura 3.24. (a) Ejercicio con monitorización de la presión ejercida por la zona lumbar contra un
dispositivo de feedback. (b) Ejercicio con superficies inestables (pelota gigante) para trabajar la
musculatura profunda (Richardson et al, 1999).
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Julio Tous Fajardo Los ejercicios abdominales Capítulo 3
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Cuadro 3.1. Cadena motriz de trabajo abdominal. RF = resistencia a la fuerza. OBL = oblicuos.
Fexp = fuerza explosiva.
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Julio Tous Fajardo Teoría y metodología del entrenamiento abdominal Capítulo 4
4.1. INTRODUCCIÓN
Por otro lado, cuando se les preguntó con qué objetivo trabajaban esta
musculatura, un 49 % respondió que su objetivo era básicamente preventivo y
el 51% restante que el objetivo era tanto preventivo como para mejorar la
fuerza específica en su deporte. Sin embargo, al analizar por deportes se
encontró que tanto en aeróbic como en atletismo, todos los entrenadores
afirmaban tener el doble objetivo, mientras que en balonmano un 80% tenían el
doble objetivo y el 20% restante únicamente el objetivo preventivo. Por el
contrario, tanto en fútbol como en baloncesto prácticamente todos los
preparadores físicos realizaban el entrenamiento abdominal con un objetivo
preventivo (Gallardo y Rodrigo, 1999).
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Julio Tous Fajardo Teoría y metodología del entrenamiento abdominal Capítulo 4
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durante las tres primeras. Por otro lado, el grupo de Cresswell (1994), estudió
el efecto de un entrenamiento de rotaciones de tronco durante 10 semanas,
encontrando que en las primeras cinco semanas se mejoró más la fuerza
rotadora del tronco que en las segundas cinco. Se ha de tener en cuenta que
este último estudio y el de Smidt et al (1989) administraron un test isocinético
(resistencia acomodada), el de Bell y Laskin (1985) un test de cadencia
abdominal (dinámico) y el de Alon et al (1987) un test isométrico, lo cual podría
explicar las diferencias en los resultados. Es bien conocido que la
administración de un test de valoración que implique una dinámica o acción
muscular diferente al tipo de entrenamiento seguido puede influir de manera
importante en los resultados obtenidos (Sale y McDougall, 1981, Graves et al,
1989). Así, se suelen emplear test isocinéticos por su alta reproducibilidad para
valorar los efectos provocados por un entrenamiento dinámico, siendo las
condiciones de ambos muy diferentes (ver discusión en capítulo 5).
Un comentario aparte requiere el estudio de DeMichele et al (1997) por su
diseño y el tipo de resultados ofrecidos. En esta investigación sólo se ofrecen
resultados al principio, mitad y final de las 12 semanas de entrenamiento
relativos al peso medio movilizado para mantenerse en una zona de porcentaje
de la carga máxima de 8-12RM (ver tabla 4.2). Aunque sólo se ofrezcan los
resultados obtenidos en la fuerza isométrica máxima al inicio y al final y no a
las seis semanas de entrenamiento, los datos del rendimiento con una carga
submáxima también nos pueden servir para sacar conclusiones. Como puede
observarse en la tabla 4.2, los grupos que siguieron una frecuencia de
entrenamiento de 2 y 3 sesiones por semana mejoraron más durante las
primeras seis semanas que durante las segundas. Por el contrario, el grupo de
menor frecuencia, lógicamente necesita más tiempo para lograr mejoras
sustanciales y sus incrementos son mayores en la segunda mitad del período
de entrenamiento.
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Julio Tous Fajardo Teoría y metodología del entrenamiento abdominal Capítulo 4
Tabla 4.2. Peso (kgs) medio movilizado en una máquina de resistencia variable de rotación de
tronco para mantenerse en una zona de entrenamiento que suponga realizar entre 8 y 12RM.
Se incluye el resultado antes, en el punto medio y al final del período de entrenamiento.
*Grupos B y C significativamente superiores a C (p < 0,05) (adaptado de DeMichele et al,
1997).
ESTUDIO MARX (MSSE 2001)
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Julio Tous Fajardo Teoría y metodología del entrenamiento abdominal Capítulo 4
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Tabla 4.4. Número de repeticiones semanales realizadas durante el período competitivo según
60 entrenadores de distintos deportes (Gallardo y Rodrigo, 1999)
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Julio Tous Fajardo Teoría y metodología del entrenamiento abdominal Capítulo 4
4.3.4. PERIODIZACIÓN
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Tabla 4.2. Orden de ejecución de los ejercicios seguido por distintos entrenadores o
preparadores físicos de cinco modalidades diferentes (Gallardo y Rodrigo, 1999).
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Julio Tous Fajardo Teoría y metodología del entrenamiento abdominal Capítulo 4
suelo”. Además se les palpó la zona baja del abdomen para ofrecer
estimulación muscular táctil mientras realizaban la fase de descenso de un curl-
up. Los sujetos que siguieron este programa aumentaron más su actividad en
el oblicuo interno que un grupo control.
Es importante subrayar que la concentración o focalización de la atención
del sujeto es un aspecto fundamental en el entrenamiento de la musculatura
abdominal. Mayhew (1983) comprobó cómo, en el levantamiento de piernas
extendidas desde decúbito supino (ejercicio contraindicado por autores como
Silvermetz, 1990, o Kendall, 1983), si el sujeto relajaba sus extremidades
inferiores y fijaba de ésta manera la pelvis, la implicación de los músculos
abdominales era mayor. También se ha comprobado a este respecto la eficacia
de la imaginación ideocinética (ideokinetic imagery), una técnica de desarrollo
postural que implica la utilización de imágenes para mejorar el control
subcortical sobre la musculatura raquídea. Introducido por Sweigard en 1974,
el objetivo de este método es mejorar la alineación y equilibrio de las
estructuras esqueléticas por medio de técnicas de visualización (Fairweather y
Sidaway, 1993). Estos autores, realizaron un interesante estudio sobre esta
técnica a la que unieron ejercicios de concienciación cinestésica (kinesthesic
awareness) que focalizaban la atención sobre la musculatura abdominal. Así,
se comparó la influencia de estas técnicas con la de un programa combinado
de flexibilidad y ejercicios abdominales clásicos en la mejora de la lordosis
lumbar. Después de tres semanas de entrenamiento, se encontró que el
programa de visualización provocó una corrección postural (produciendo un
ángulo más obtuso entre la región lumbar y la sacra) y redujo el dolor en la
zona lumbar. Por el contrario, el programa que combinó ejercicios de
flexibilidad con ejercicios abdominales, no produjo efectos positivos sobre los
ángulos espinales. Parece ser, según estos autores, que se necesita un mayor
tiempo de aplicación para observar los efectos de este tipo de programas.
Debido al interés de este método se expone a continuación la dinámica del
mismo:
Los sujetos realizaron 15 minutos de entrenamiento, tres días a la semanas,
durante 3 semanas. Antes de realizar las técnicas específicas, se realizaron
ejercicios de relajación de la musculatura profunda. La primera actividad
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Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
intentaba dirigir la atención hacia la respiración. Se les dijo a los sujetos que, al
exhalar, sus pechos se hacían más y más pesados. La segunda actividad
implicó la alternancia de acciones excéntricas y concéntricas de varias regiones
corporales. Estas acciones fueron mantenidas durante 5 seg y al reducir la
tensión se les pidió que sintiesen pesadez en la región previamente activada
mientras exhalaban. El orden de los ejercicios de tensión fue: manos, piernas,
glúteos y abdominales para finalizar con la cara, el cuello y los hombros.
Después se les pidió a los sujetos que imaginasen su lugar favorito, un lugar en
el que les gustaría estar solos sin ninguna preocupación. Se les pidió imaginar
los sonidos, olores y escenarios típicos de ese lugar para disfrutar de 1 minuto
de relajación total.
Después de la relajación y antes de la imaginación ideocinética, se les
colocó dos objetos en la zona abdominal durante 20 segs indicándose su peso.
El primer objeto fue un balón medicinal de 1,8 kgs y el segundo un volante de
bádminton. Se les dijo que, con la práctica, durante la exhalación podían hacer
que ambos objetos se notasen más pesados y que la espalda baja debía estar
ahora totalmente en contacto con el suelo. Después de estos ejercicios, se
realizaron cuatro técnicas de visualización siguiendo el protocolo de Sweigard
(1974). Primero, los sujetos visualizaron sus glúteos como barras de pasta
cruda que se deslizaban hacia los talones. Después, se imaginaron echados en
un tobogán de forma que su parte curva final presionase contra sus muslos. En
esta posición después imaginaron sus glúteos deslizándose hacia abajo para
ajustarse a la parte curva del tobogán, aumentando así la presión de la curva
final de éste contra la parte trasera de los muslos y el abdomen. En tercer
lugar, visualizaron sus troncos como un sándwich; con una base, una capa de
relleno y una tapa. Empleando esta visión, después imaginaron que la base se
deslizaba hacia abajo. Finalmente, los sujetos imaginaron cada lado de su
pelvis como una noria de agua moviéndose en el sentido de las agujas del reloj
hacia la cabeza.
Se concluye por lo tanto en que el método de imaginación ideocinética en
combinación con ejercicios de concienciación cinestésica corrige las malas
posturas y reduce el dolor de espalda baja.
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Julio Tous Fajardo Teoría y metodología del entrenamiento abdominal Capítulo 4
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Figura 4.2. Analogía de la columna con un mástil multisegmentado soportado por cuerdas y
conexiones entre los segmentos (Richardson et al, 1999)
Los ejercicios que inciden sobre estas regiones son analizados con más
detalle en el capítulo 3.
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Julio Tous Fajardo Teoría y metodología del entrenamiento abdominal Capítulo 4
Ideado por este autor italiano debido a las exigencias de atletas, adultos
sedentarios, mujeres tras el embarazo y adolescentes, con el objeto de
recuperar en corto tiempo y de manera permanente el tono de la musculatura
abdominal (Mangano, 1996). Sigue una dinámica similar al método Legendary
Abs en cuanto al orden de ejecución de los ejercicios aunque intercala entre los
ejercicios dinámicos, ejercicios estáticos (ver figura 4.3).
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4.9.1. AB-FLEX
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Figura 4.5. El diseño de algunos balancines elimina los primeros grados de flexión del tronco y
aumenta la inercia, por lo que la intensidad y el control del ejercicio pueden disminuir.
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EMGrms
EMGrms
0.8
0.8
RA1
RA1
0.6
0.6
RA2
EMG[mV]
RA2
EMG[mV]
0.4
0.4
RA3 RA3
0.2 0.2
RAL2 RAL2
0.0 0.0
7.30 7.87 8.44 9.01 10.57 11.05 11.54 12.02
Time[s] Time[s]
Figura 4.6. Registro electromiográfico al realizar a la velocidad personal del sujeto un curl-up
(izquierda) y un curl-up con balancín (datos personales no publicados). Se puede comprobar
cómo la porción más craneal (en verde) se destaca de las demás cuando se emplea el
balancín.
4.9.3. ELECTROESTIMULADORES
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Julio Tous Fajardo Teoría y metodología del entrenamiento abdominal Capítulo 4
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Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
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Julio Tous Fajardo Teoría y metodología del entrenamiento abdominal Capítulo 4
Figura 4.9. Los trajes de plástico (izquierda) y las fajas de neopreno (derecha) prometen una
reducción de grasa que parece contradecir todo argumento fisiológico.
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Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
adiposo (Thomas y Ridder, 1989; Katch et al., 1984). Sin embargo, también es
cierto que ninguno de los estudios consultados ha puesto a prueba un
programa con un gran volumen de repeticiones durante un largo período de
tiempo. Son conocidos los casos de deportistas que realizan miles de
repeticiones diarias, por lo que sería interesante observar qué adaptaciones
provoca este tipo de entrenamiento y si realmente es necesario.
Los ejercicios abdominales al ser localizados requieren un gasto energético
reducido que limita la movilización de grasa El gasto calórico de 20
repeticiones de un curl-up es de unas 9 Kcal (Brungardt, 1993). Un
entrenamiento intensivo de 27 días con un total de 5004 repeticiones significó
sólo un gasto total de 1400 Kcal. (Katch, et al., 1984).
Sin embargo, es evidente que una buena musculatura abdominal
mantendrá más firme la zona que si estuviese flácida. Mediante el
fortalecimiento de los músculos oblicuos se puede conseguir aplanar la zona
abdominal. Estos músculos poseen una disposición opuesta en la dirección de
sus fibras, lo cual produce, si se hipertrofian éstas, un tirón lateral que logra
arrastrar hacia adentro el recto abdominal. Así, se forma un corsé alrededor del
abdomen que es el responsable del contorno abdominal (Kapandji, 1973;
Zatsiorsky, 1995).
Algunos autores como Despres, et al. (1985) o Nindl, et al. (1996) han
observado cómo los ejercicios aeróbicos son capaces de influir en la
movilización de grasa abdominal en una mayor proporción que en otras
regiones corporales. Este hecho se debe en parte a la mayor cantidad de
receptores β-adrenérgicos (activadores) que hay en la zona abdominal
(Stefanick, 1993, DiPietro, 1995). Si a los ejercicios aeróbicos le unimos una
dieta hipocalórica habrá una mayor reducción en el % de grasa corporal
(Pavlou et al., 1985).
Por lo tanto, parece evidente que para contestar a la pregunta propuesta,
deberíamos diseñar un plan de entrenamiento con sesiones aeróbicas de entre
30 y 45 minutos (valdría en un principio la marcha rápida) unidas a una dieta
hipocalórica. El fortalecimiento de la musculatura oblicua puede ayudar en el
aspecto estético al desarrollar el contorno abdominal (ver figura 4.8).
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Julio Tous Fajardo Teoría y metodología del entrenamiento abdominal Capítulo 4
Figura 4.8. Demostración de cómo los músculos oblicuos forman el talle abdominal por la
disposición de sus fibras. En los gráficos inferiores observamos cómo si la disposición fuera
paralela la forma del talle sería cilíndrica. (Kapandji, 1973)
Página 91
Julio Tous Fajardo Test de valoración funcional abdominal Capítulo 5
5.1. INTRODUCCIÓN
Página 94
Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
a) Dinámicamente:
-Test de tiempo (a 30 segs, 1min., etc...) controlando o no (all-out) la cadencia.
-1RM en máquina isoinercial (resistencia variable) o de resistencia constante.
c) Isocinéticamente:
-Kin Com Test (dinamómetro isocinético; resistencia acomodada).Utilizado por
Hall et al (1992).
-Cybex II (introducido por Davies y Gould en 1982)
Página 95
Julio Tous Fajardo Test de valoración funcional abdominal Capítulo 5
FUENTE SUJETOS TESTS VALIDEZ FIABLIDAD OBSERVACIONES
1.Sit-up cualitativo, 4
Smidt et al.(1986) 38v (25a.)+43h (25a). grados.
2.Descenso piernas
cualitativo, 5grados.
Página 95
Julio Tous Fajardo Test de valoración funcional abdominal Capítulo 5
Página 94
Julio Tous Fajardo Test de valoración funcional abdominal Capítulo 5
Página 96
Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Página 97
Julio Tous Fajardo Test de valoración funcional abdominal Capítulo 5
Página 98
Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Este test al requerir una técnica de ejecución peculiar necesita de una fase
de aprendizaje para evitar que las mejoras obtenidas después de un programa
de entrenamiento sean debidas a una mejor ejecución técnica y familiarización
con el test en lugar de a la propia intervención. Además, presenta el problema
añadido de que los sujetos pueden engañarnos y realizar un movimiento de
hombros en lugar de a nivel del tronco sin casi darnos ni cuenta. Asimismo,
ciertos sujetos tienen la habilidad para realizar movimientos explosivos creando
una inercia durante el test que les permite realizar una mayor cantidad de
repeticiones que otros sujetos con un tono abdominal mucho mayor. Por otro
lado, se le ha criticado el no ser un test de valoración de la fuerza y resistencia
Página 99
Julio Tous Fajardo Test de valoración funcional abdominal Capítulo 5
Página 100
Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Figura 5.6. Test de enrollamiento de tórax parcial propuesto por Jetté et al (1984)
Página 101
Julio Tous Fajardo Test de valoración funcional abdominal Capítulo 5
Hombres (n = 2178)
20-29 30-39 40-49 50-59 60-69
Excelente >42 >34 >30 >26 >20
Por encima de la media 31-42 27-34 22-30 20-26 14-20
En la media 22-30 21-26 16-20 14-19 7-13
Por debajo de la media 20-21 15-20 10-16 6-13 1-6
Pobre <20 <15 <10 <6 0
Mujeres (n = 672)
20-29 30-39 40-49 50-59
Excelente >30 >30 >25 >17
Por encima de la media 24-30 21-30 19-25 11-17
En la media 20-23 16-20 11-18 6-10
Por debajo de la media 12-19 9-15 3-10 1-5
Pobre <12 <9 <3 0
Tabla 5.2. Clasificación por grupos de nivel, edad y sexo según el número de repeticiones
realizado (Sidney y Jetté, 1990)
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Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Figura 5.7. Izquierda: Test de Knudson y Johnston (1995) para medir la resistencia abdominal.
Consiste en flexionar el tronco, hasta que los codos toquen los muslos, tantas veces como sea
posible durante dos minutos. Creado como alternativa a los problemas de control y
estandarización que pueden acontecer en el test de Robertson, peca de no tener en cuenta las
diferencias antropométricas entre los sujetos; aquellos que posean una distancia acromio-radial
desproporcionada con respecto a la longitud del tronco tendrán que realizar un mayor o menor
recorrido en cada repetición. Por lo tanto, no se podrán comparar los datos entre distintos
sujetos y de igual manera no podrán compararse los efectos de varios programas de
entrenamiento.
Derecha: Test del Georgia Institute of Technology (Sparling et al, 1997) para medir la
resistencia abdominal. Consiste en realizar flexiones del tronco, hasta que los codos toquen un
punto de la zona media del muslo, durante 3 minutos y con una cadencia de movimiento de 25
repeticiones por minuto. No solucionando el mismo error antropométrico del test anterior, la
inclusión de una cadencia de movimiento tan lenta descarta su utilización en atletas, ya que
éstos son capaces de realizar más de 80 repeticiones en un minuto (Tous y Balagué, 1997).
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Julio Tous Fajardo Test de valoración funcional abdominal Capítulo 5
Página 104
Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Figura 5.9. Niveles de dificultad del test de descenso de piernas extendidas (Guilleard y Brown,
1994)
5.9. EL MUSCLELAB
5.9.1. INTRODUCCIÓN
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Julio Tous Fajardo Test de valoración funcional abdominal Capítulo 5
Página 106
Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
- Fuerza isométrica.
Página 107
Julio Tous Fajardo Test de valoración funcional abdominal Capítulo 5
Página 108
Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
5.9.3. FIABILIDAD
Página 109
Julio Tous Fajardo Electromiografía Capítulo 6
6. ELECTROMIOGRAFÍA (EMG)
6.1. INTRODUCCIÓN
Página 110
Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Página 111
Julio Tous Fajardo Electromiografía Capítulo 6
Figura 6.1. Electrodo de aguja concéntrico (coaxial). El cable central suele tener 100 nm de
diámetro, siendo el diámetro de la aguja de unos 0,6 mm. En un sitio determinado del músculo,
el cable central es capaz de detectar la señal en algunas de las fibras pertenecientes a 20 o
más unidades motoras. En el gráfico se muestran los registros obtenidos durante un esfuerzo
ligero, sin embargo, durante una contracción potente, los impulsos son tan densos y complejos
que las descargas de las unidades individuales no pueden ser distinguidas (McComas, 1996)
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Tierra
X 1000
Figura 6.2. La EMG de superficie emplea un par de electrodos que se colocan en el vientre
muscular. Un tercer electrodo (de tierra) se utiliza para reducir las interferencias (Latash, 1998).
Página 113
Julio Tous Fajardo Electromiografía Capítulo 6
De Luca (1997) clasifica los factores que pueden influenciar en la señal EMG
en tres categorías: factores causativos, intermediarios y determinísticos.
-La distancia entre las superficies detectoras de los electrodos, que determina
el ancho de banda de la configuración diferencial de los electrodos.
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Figura 6.3. Influencia de la colocación de los electrodos en la amplitud de la señal EMG. El sitio
más recomendado es el centro geométrico del vientre muscular (Adaptado de De Luca, 1997,
Claris y Cabri, 1993).
Página 115
Julio Tous Fajardo Electromiografía Capítulo 6
6.5.1.2.8. Otros factores que faltan por identificar, como la longitud de la zona
de despolarización y los flujos iónicos a través de la membrana.
6.5.2.1. El filtrado del paso de banda del electrodo, que es inherente a las
características de la configuración diferencial de los electrodos.
Página 116
Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Son aquellos que tienen una influencia directa sobre la señal EMG y la
fuerza registrada. En estos se incluyen:
Página 117
Julio Tous Fajardo Electromiografía Capítulo 6
Consenso general
6.6.1. FILTRADO
Debido a que los potenciales de acción son fenómenos muy rápidos, que
suelen cambiar cada pocos milisegundos, es necesario realizar un filtrado de
cara a eliminar posibles interferencias. El filtro de paso alto elimina todas las
frecuencias menores o iguales a 60Hz, con lo que las interferencias con estas
frecuencias son reducidas. El filtro de paso bajo se emplea en el caso de que el
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
6.6.2. RECTIFICADO
6.6.3. INTEGRACIÓN
EN es la EMG normalizada, EMG es una integral de la señal de interés, EMGst es una integral
durante el mismo período de tiempo en una tarea estándar.
Registro crudo
Registro
rectificado
Registro
integrado
Fuerza
Figura 6.4. El registro crudo electromiográfico una vez rectificado e integrado se asemeja
mucho a los cambios de fuerza (Enoka, 1994).
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Tierra
X 1000
Página 121
Julio Tous Fajardo Electromiografía Capítulo 6
-Número de canales: 4
-Onda verdadera RMS (conversión continua analógica)
-Frecuencia de muestreo: 100 Hz
-Resolución 10 bits A/D convertidor
Electrodos activos de EMG amplificados:
-Tensión de alimentación: +/- 5VDC
-Impedancia de entrada: 2 Gohms
-Nivel de ruido de entrada (banda 1kHz): 3 Vcc
-Tensión de salida: +/- 4 V
-Ganancia a 100 Hz: 600
-* 3 dB frecuencia de corte baja: 6 Hz
-* 3 dB frecuencia de corte alta: 1500 Hz
Página 122
PARTE EMPÍRICA
Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
1. INTRODUCCIÓN
Página 123
Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
2. MATERIAL Y MÉTODO
Muestra
Veinte sujetos (25,8 ± 5,25 años de edad; 72,9 ± 7,1 kgs de peso corporal;
174,8 ± 5,6 cm de estatura) experimentados en la ejecución de ejercicios de
aislamiento abdominal aceptaron participar en este estudio voluntariamente.
Como criterio de inclusión se seleccionaron sujetos con cuatro porciones en el
recto abdominal que estuvieran perfectamente visibles. Previamente a la
adquisición de los registros fueron informados del protocolo de la investigación.
Nivel de experiencia
Los sujetos fueron divididos en tres grupos según su procedencia y nivel de
experiencia. En el grupo 1 se incluyó a aquellos sujetos con cierta experiencia
(entre 3 y 5 años) en la realización de ejercicios de aislamiento abdominal. En
el grupo 2 se incluyó a aquellos sujetos (estudiantes y licenciados en E.F. que
además practicaban algún deporte o actividad física) con una gran experiencia
(más de 5 años) en la realización de ejercicios de aislamiento abdominal. En el
grupo 3 se incluyó a aquellos sujetos (culturistas o practicantes de fitness) con
una gran experiencia (más de 10 años) en la realización de ejercicios de
aislamiento abdominal.
Instrumento de evaluación
Se ha empleado el MuscleLab (Ergotest, Ltd. Noruega) y más
concretamente los canales de EMG (electromiografía) y el encoder
(velocímetro) lineal de movimiento que se incluyen en este laboratorio portátil
(ver apartado 5.9). El software (versión 5.86) incluido en este dispositivo
almacena los registros en una base de datos de fácil acceso que ofrece valores
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Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
EMGrms EMGrms
0.8 200
RA1 RA1
0.6 150
RA2 RA2
EMG[mV]
EMG[%]
0.4 100
RA3 RA3
0.2 50
RA4 RA4
0.0 0
0.0 10.8 21.7 32.5 0.0 10.8 21.7 32.5
Time[s] Time[s]
Position Velocity
30 0.5
0.4
25
0.3
0.2
20
Velocity[m/s]
0.1
Load pos Velocity
15 0.0
-0.1
10
-0.2
-0.3
5
-0.4
0 -0.5
0.0 10.8 21.7 32.5 0.0 10.8 21.7 32.5
Time[s] Time[s]
Power Force
25 60
20
55
15
10
50
5
Power[W]
Force[N]
Power Force
0 45
-5
40
-10
-15
35
-20
-25 30
0.0 10.8 21.7 32.5 0.0 10.8 21.7 32.5
Time[s] Time[s]
Figura E1.1a. Gráficos que ofrece el software de las señales EMG arbitraria (mv) y normalizada
(%), posición, velocidad, potencia y fuerza.
Página 125
Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Registros electromiográficos
Página 126
Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
Página 127
Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Página 128
Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
Ejercicios
Los sujetos realizaron los dos ejercicios de aislamiento abdominal
fundamentales: enrollamientos de tórax (curl-ups) y pelvis (pelvic roll). Estos
dos ejercicios se mostraron en estudios pilotos como los más eficaces de cara
Página 129
Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Página 130
Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
Protocolo
Se realizaron 10 repeticiones de cada uno de los ejercicios en cada una de
las velocidades de ejecución seleccionadas. Se optó por este número para
evitar que la fatiga acumulada influenciára en la señal EMG y más
concretamente en la amplitud de la misma. Asimismo, por la razón anterior, se
realizó entre cada serie un descanso de al menos 2 minutos controlado por
medio del MuscleLab.
Velocidad de ejecución
Se emplearon tres velocidades de ejecución diferentes que fueron guiadas
por medio de un metrónomo (Taktell Piccolo; Wittner, Alemania). Las
velocidades seguidas fueron las siguientes:
-60 beats por minuto. De forma que se tarda 1 seg en realizar cada una de las
dos fases del ejercicio, es decir, 2 seg por repetición.
-120 beats por minuto. De forma que se tarda 0,5 seg en realizar cada una de
las dos fases del ejercicio, es decir, 1 seg por repetición.
-Personal. De forma que cada sujeto realiza los ejercicios a la velocidad con la
que normalmente los ejecuta. En este caso, no se empleó metrónomo ni ningún
otro tipo de referencia para la ejecución.
Antes de cada una de las series los sujetos realizaron unas cuantas
repeticiones de cara a familiarizarse con el ritmo impuesto por el metrónomo.
Las tres velocidades fueron controladas por medio del encoder lineal del
MuscleLab, con una frecuencia de muestreo de 100 Hz y una precisión en la
medida inferior a 0,075 mm. En el ejercicio de enrollamiento de tórax, el
extremo del hilo del encoder, unido a una arandela, fue sostenido por los
sujetos con el dedo anular de la mano derecha. En el ejercicio de enrollamiento
pélvico dicha arandela fue sujetada a los pantalones de los sujetos por medio
de los cordones situados en los mismos.
Tratamiento estadístico
Se trataron tanto los datos normalizados como los arbitrarios para
comprobar sus posibles diferencias. Se realizó la prueba MANOVA para
comparar las medias de los registros en el recto abdominal en los tres grupos
Página 131
Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
de sujetos cuando realizaron los dos tipos de ejercicios con tres velocidades de
ejecución diferentes. De esta manera, cada ejercicio (2) fue considerado como
una variable dependiente y las porciones (4), velocidades (3) y niveles de
experiencia (3) como variables independientes. En caso de que este análisis
resultase significativo al nivel de p < 0,05, se emplearon los contrastes a
posteriori HSD-Tukey, cuando las varianzas fueron homogéneas y de Games-
Howell, cuando las varianzas no fueron homogéneas. La homogeneidad de las
varianzas fue testada mediante la prueba de Levene.
Sólo se analizó específicamente la interacción porción*velocidad,
observándose el efecto del factor velocidad (3 niveles) en la activación de las
distintas porciones mediante la prueba ANOVA de medidas repetidas. Para
testar las diferencias particulares de cada porción en cada velocidad de
ejecución y ejercicio, se realizó la prueba one-way ANOVA, tomando como
variable independiente la porción. Para los contrastes a posteriori se siguió la
misma dinámica que en la prueba MANOVA.
Para comparar la respuesta de cada porción en los dos ejercicios se realizó
la prueba ANOVA de medidas repetidas (dos niveles: curl y pelvic para cada
porción) con los factores velocidad y nivel de experiencia. En este caso sólo se
utilizaron los datos arbitrarios ya que la normalización fue realizada con un
valor de referencia diferente en ambos ejercicios.
RESULTADOS
Página 132
Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
MÁXIMOS MÍNIMOS
RA1 RA2 RA3 RA4 RA1 RA2 RA3 RA4
CV1 - 3 5 5 7 2 1 3
CV2 3 3 3 4 8 2 1 2
CVP 1 4 4 4 7 3 1 2
PV1 5 1 4 3 2 3 4 4
PV2 5 2 4 2 1 4 3 5
PVP 3 5 3 2 1 5 4 3
Tabla E1.1. Número de casos de máximos y mínimos por cada velocidad y ejercicio para cada
porción del recto abdominal (C = curl-up; P = pelvic-roll; V1 = 60 b/m; V2 = 120 b/m; VP =
velocidad personal.
FACTOR PORCIÓN
Al considerar sólo el factor porción en todos los registros se encuentran los
valores de las figuras E1.6, E1.7 (normalizados) y E1.8, E1.9 (arbitrarios).
101,3 95,89 93,9
41,6
RA4
Porciones
23,45
RA3
40,5
RA2
72,07
21,8
RA1
Figura E1.6. Valores normalizados obtenidos en el curl up en cada una de las porciones sin
diferenciar entre las distintas velocidades.
0,177
0,077
RA4
Porciones
0,086
0,16
RA3
0,13
0,07
RA2
0,117
0,054
RA1
Figura E1.7. Valores arbitrarios (en milivoltios) obtenidos en el curl up en cada una de las
porciones sin diferenciar entre las distintas velocidades.
Página 133
Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
16,28
83,2 85,6 84,9
RA4
Porciones
RA2
89,3
RA1
0 20 40 60 80 100 120
EMG (%)
Figura E1.8. Valores normalizados obtenidos en el pelvic-roll en cada una de las porciones sin
diferenciar entre las distintas velocidades.
0,055
0,11
RA4
Porciones
0,052
RA3
0,1 0,095
0,046
RA2 0,059
0,11
RA1
Figura E1.9. Valores arbitrarios (en milivoltios) obtenidos en el pelvic roll en cada una de las
porciones en cada una de las porciones sin diferenciar entre las distintas velocidades.
Se puede observar cómo las diferencias entre las distintas porciones del
recto abdominal son cuantiosas en el enrollamiento de tórax y escasas en el
enrollamiento pélvico. Existen diferencias significativas (p < 0,05) entre la
activación de alguna de las cuatro porciones pero sólo al realizar el ejercicio de
enrollamiento de tronco, tanto en los datos normalizados como en los arbitarios
Al realizar los contrastes a posteriori (prueba Games-Howell, al no ser las
varianzas homogéneas) para el factor porción, se encuentran diferencias
significativas, al tratar los datos normalizados, entre la porción 1 y la 2, 3 y 4.
En los datos arbitrarios existen diferencias significativas entre la porción 1 y la 3
y 4, además de entre la 2 y la 4.
Página 134
Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
FACTOR VELOCIDAD
Al considerar el factor velocidad exclusivamente, sin tener en cuenta la
respuesta en las diferentes porciones o niveles se obtienen los datos de las
tablas E1.10 a E1.14.
88,85
33,4
VP
Velocidades
99,5
V2
41
83,8
26,9
V1
0 50 100 150
EMG (%)
Figura E1.10. Valores normalizados en el curl-up teniendo en cuenta sólo el factor velocidad
0,142
0,07
VP
Velocidades
0,161
0,08
V2
0,136
0,07
V1
Figura E1.11. Valores arbitrarios en el curl-up teniendo en cuenta sólo el factor velocidad
86,4
23,3
VP
Velocidades
87,1
V2
21
84,17
23,1
V1
0 20 40 60 80 100 120
EMG (%)
Figura E1.12. Valores normalizados en el pelvic-roll teniendo en cuenta sólo el factor velocidad
Página 135
Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
0,103
0,046
VP
Velocidades
0,108
0,057
V2
0,105
0,057
V1
Figura E1.13. Valores arbitrarios en el pelvic-roll teniendo en cuenta sólo el factor velocidad
FACTOR NIVEL
25,7
N3
Niveles
99,18
41,8
N2
92,4
31,4
N1
0 50 100 150
EMG (%)
Figura E1.14. Valores normalizados en el curl-up teniendo en cuenta sólo el factor nivel
Página 136
Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
0,098
0,054
N3
Niveles
0,189
0,078
N2
0,151
0,07
N1
Tabla E1.15. Valores arbitrarios en el curl-up teniendo en cuenta sólo el factor nivel
92,39
21,5
N3
Niveles
22,07
81,4
N2
84,9
22,5
N1
0 20 40 60 80 100 120
EMG (%)
Figura E1.16. Valores normalizados en el pelvic-roll teniendo en cuenta sólo el factor nivel
0,032
0,09
N3
Niveles
0,139
0,062
N2
0,091
0,047
N1
Figura E1.17. Valores arbitrarios en el pelvic-roll teniendo en cuenta sólo el factor nivel
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Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
PORCIÓN * VELOCIDAD
Al analizar los registros con respecto a la velocidad y cada una de las
porciones en cada ejercicio se obtienen los datos de las figura E1.18 a E1.29.
96,9
38,5
RA4
Porciones
15,6
87,4
RA3
84,8
27,9
RA2
67,5
11,4
RA1
0 50 100 150
EMG (%)
Página 138
Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
0,168
0,08
RA4
Porciones
0,079
0,15
RA3
0,119
0,057
RA2
0,111
0,05
RA1
46,3
RA4
Porciones
104,1
31,2
RA3
107,5
49,8
RA2
82,9
32,5
RA1
0,08 0,1
RA4
Porciones
0,173
RA3
0,147
0,08
RA2
0,133
0,06
RA1
Página 139
Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
101,5
42,6
RA4
.
Porciones
19,2
95,3
RA3
94,7
38,5
RA2
65,8
11,2
RA1
0,07
RA4
Porciones
0,163
0,08
RA3
0,124
0,06
RA2
0,107
0,04
RA1
18,7
RA4
Porciones
32,5
RA3
86
80,4
19,3
RA2
85,7
21,7
RA1
0 50 100 150
EMG (%)
Página 140
Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
0,114
0,062
RA4
Porciones
0,106
0,06
RA3
0,094
0,04
RA2
0,11
0,06
RA1
14,2
RA4
Porciones
26,6
88,1
RA3
85,1
18,7
RA2
94,8
22,1
RA1
0 50 100 150
EMG (%)
0,05 0,05
RA4
Porciones
0,106
RA3
0,099
0,05
RA2
0,123
0,07
RA1
Página 141
Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
80,2
25,7 21,6
RA4
Porciones
83,7
RA3
90,1
32
RA2
88,9
20,1
RA1
0 50 100 150
EMG (%)
0,05
RA4
Porciones
0,04
0,1
RA3
0,095
0,04
RA2
0,109
0,05
RA1
Página 142
Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
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Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
0,18
0,16
0,14
0,12
0,1
EMG (mv)
0,08 Curl-up
0,06 Pelvic-roll
0,04
0,02
0
RA1 RA2 RA3 RA4
Porciones
Figura E1.30.Valores arbitrarios en las distintas porciones del recto abdominal al cambiar de
ejercicio
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Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
DISCUSIÓN
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Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
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Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
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Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
o dos tiempos musicales con velocidades de 120 bpm o 140 bpm. Se observó
que los ejercicios realizados a un tiempo indistintamente de la velocidad y los
ejecutados a una velocidad de 120 bpm fueron los que mayor actividad
eléctrica presentaron. Sin embargo, no se comprobó la diferencia con una
velocidad o ritmo de ejecución no impuesto.
La normalización de los datos demostró ser clave en este estudio ya que al
tratarse los datos arbitrarios no se encontraron diferencias tan cuantiosas entre
las porciones de forma que el análisis de la varianza no encontró diferencias
estadísticamente significativas sino en el enrollamiento de tórax realizado a una
velocidad de una repetición cada dos segundos. Se ha de tener en cuenta que
se daban casos donde la diferencia entre alguna de las porciones era evidente
cuando se empleaban datos arbitrarios y al normalizarlos se equiparaban, pero
también casos donde ocurría lo contrario y los datos normalizados eran los que
evidenciaban las diferencias. La normalización de los datos presenta además la
ventaja de que disminuye al máximo la influencia del factor grasa subcutánea.
La grasa actúa como aislante, reduciendo así la amplitud de la señal
electromiográfica. En un músculo como el recto abdominal donde la grasa no
se deposita de manera homogénea en sus distintas porciones, al normalizar los
datos, la capa de grasa debería permanecer constante con respecto al ejercicio
dinámico por lo que su influencia debería ser mínima (McGill, 2000;
comunicación personal).
Por otro lado, no se comprobó la posible diferencia en los resultados al
emplear la técnica de procesamiento RMS o la promediada (average EMG)
empleada en otros estudios. Sin embargo, parece ser que la primera
representa la potencia de la señal y por lo tanto tiene un significado físico más
claro que el valor promediado y rectificado (medición del área bajo la señal) (De
Luca, 1997).
La colocación de los electrodos es un factor importante que genera
numerosas dudas con respecto a otros estudios anteriores. Así, pudimos
comprobar cómo la clásica colocación en paralelo al sentido de las fibras
musculares, ocasionaba numerosos problemas. Por un lado, la separación de
las superficies detectoras de la piel durante los ejercicios fue más frecuente
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Julio Tous Fajardo Diferenciación funcional del recto abdominal Estudio1
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Tesis doctoral El entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
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Julio Tous Fajardo Comparación entre dos métodos a corto plazo Estudio 2
1. INTRODUCCIÓN
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Julio Tous Fajardo Comparación entre dos métodos a corto plazo Estudio 2
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Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
2. MATERIAL Y MÉTODO
Muestra
Doce (varones) jóvenes jugadores de baloncesto (12,4 años, DS : 0,51) sin
ninguna experiencia en el entrenamiento sistemático de la musculatura
abdominal y cinco (3 hembras y 2 varones) sujetos practicantes de alto nivel
internacional de aeróbic de competición (22,0 años, DS :1,87) aceptaron
participar voluntariamente en el estudio.
Instrumento de valoración
Después de realizar un calentamiento general de 10 minutos (carrera
continua, ejercicios calisténicos y estiramientos) y una práctica de
familiarización con la ejecución del test, se les valoró mediante el RCUT. El
protocolo del RCUT es el siguiente:
a) en posición supina, brazos a los lados, antebrazos en pronación, codos
bloqueados, dedos extendidos y sin sujeción en los pies.
b) el objetivo es flexionar la cabeza y la espalda alta manteniendo los brazos en
contacto con un marco especial (que puede sustituirse por cinta adhesiva,
como es el caso de este estudio) situado a 3" (7,62 cm) del dedo más largo de
cada mano y después volver atrás de nuevo de manera que la espalda alta
toque el suelo mientras los dedos, pies y glúteos se mantienen en contacto con
el suelo tanto al subir como al bajar.
c) el resultado es el número de toques completos en 60 segundos.
d) un compañero estabiliza el marco colocándose encima y contando el número
de repeticiones.
Programas de entrenamiento
Los resultados obtenidos en el test permitieron dividir homogéneamente a
los sujetos en 4 grupos (2 grupos de jugadores de baloncesto y 2 de aeróbic de
competición) mediante el método ABBA (Vincent, 1995). Los programas de
entrenamiento fueron asignados de forma aleatoria a cada grupo (BD :
baloncesto programa dinámico ; BSD : baloncesto programa estático-dinámico ;
AD : aeróbic programa dinámico ; ASD : aeróbic programa estático-dinámico).
Todos los sujetos siguieron sus respectivos programas durante dos semanas
(BD y BSD, 3 sesiones por semana ; AD y ASD, 4 sesiones por semana). Los
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Julio Tous Fajardo Comparación entre dos métodos a corto plazo Estudio 2
ejercicios incluidos en cada programa así como la dinámica del mismo fue
explicada a los sujetos de manera detallada. Todos los programas siguieron la
secuencia de ejercicios inferior-oblicuos-superior.
El programa seguido por el grupo BD fue el siguiente (L es velocidad lenta;
1 rep cada dos seg; M es velocidad media; una rep cada seg; R es velocidad
rápida; dos reps cada seg: (1) 20 elevaciones de rodilla desde posición
suspendida (espaldera) a una velocidad de 1 repetición por segundo (M);
descanso de 10 segundos; (1) 15 repeticiones del mismo ejercicio; (2) 20
descensos de piernas desde 90 a 45° en posición decúbito supino (M);
descanso de 10 segundos; (2) 15 repeticiones del anterior ejercicio pero a una
velocidad de 1 repetición cada 2 segundos (L); (3) 30 enrollamientos de tronco
con piernas flexionadas (L); (4) 10 encogimientos con rodillas y caderas a 90º a
una velocidad de 2 repeticiones cada segundo (R).
El programa seguido por el grupo BSD fue el siguiente: (5) 15 elevaciones
de piernas desde 45° a 90° en decúbito supino (L); (6) mantener las piernas
elevadas a unos 45° durante 15 segundos; descanso de 10 segundos; (7) 15
tijeras a 45° con las piernas extendidas en decúbito supino (L); (8) 30
encogimientos de tronco oblicuos (L); descanso de 10”; (6); (4) 20 reps (R).
El programa seguido por el grupo AD fue el siguiente: (9) 10 elevaciones de
piernas semiflexionadas desde posición suspendida; (1) 5 reps; descanso 10”;
(9); (1) 5 reps; (2) 30 reps (M); 10 segundos de descanso; (2) 25 reps (M); (3)
35 reps (L); (4) 15 reps (R); (10) 15 elevaciones de pelvis desde decúbito
supino con rodillas tocando el pecho (M).
El grupo ASD siguió el siguiente programa: (7) 20 reps (L); (6) 10”;
descanso de 15”; (5) 10 reps (M); (6) 20”, (8) 40 reps (L); (6) 20”; descanso de
10”; (11) 20 elevaciones de brazos, apoyado sobre un costado con piernas
cruzadas (M); (4) el mayor nº de repeticiones posibles a una velocidad de 2
repeticiones por segundo (ejercicio nº 8 del programa ASD); (6) 15”.
Se informó a los sujetos de que no realizaran ningún tipo de ejercicio
abdominal adicional durante las dos semanas de entrenamiento. La supervisión
del grupo no experimentado se realizó durante todo el período de
entrenamiento para asegurar una correcta ejecución en los ejercicios así como
la completa realización de los programas. Sin embargo, el grupo
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Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
BD BSD AD ASD
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Julio Tous Fajardo Comparación entre dos métodos a corto plazo Estudio 2
Análisis estadístico
En primer lugar se comprobó la normalidad de las muestras empleadas
mediante la prueba de Kolmogorov-Smirnov. Después, se aplicó el test T de
Student de datos apareados para comparar los resultados de cada uno de los
grupos en el RCUT antes y después de realizar los programas de
entrenamiento. De esta manera se puede comprobar si las mejoras obtenidas
por cada grupo en el test post-entrenamiento son significativas. Por otro lado,
se utilizó el test T de datos independientes para comparar los resultados
obtenidos entre los grupos no experimentados (dinámico y estático-dinámico)
por una parte y los grupos experimentados (dinámico y estático-dinámico) por
otra parte. Se aceptó como significación estadística la p < 0,05. Se empleó el
paquete estadístico SPSS 9.0.
3. RESULTADOS
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Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Tabla E2.2. Resumen de los resultados en los distintos grupos de entrenamiento con sus
correspondientes desviaciones estándar (DS).
∗
100
Promedio RCUT ∗ ∗
80
(reps / min)
60
Antes
40 Después
20
0
BD BSD AD ASD
4. DISCUSIÓN
Todos los sujetos mejoraron sus resultados en el RCUT después de las dos
semanas de entrenamiento. El efecto fue mayor en aquellos sujetos que
presentaban unos valores iniciales inferiores y menor en los que presentaban
valores iniciales mayores. Este hecho es usual en el entrenamiento muscular y
también ha sido encontrado en otros estudios sobre entrenamiento abdominal
(Hemborg et al, 1983).
Sin embargo, no se observaron diferencias significativas entre los dos
programas (dinámico y estático-dinámico) en ambos grupos de sujetos. Con
anterioridad al estudio, se podían esperar mayores incrementos en el grupo de
élite que realizó el programa estático-dinámico, debido a la transferencia con
respecto al test de valoración que podía tener el ejercicio nº 8. Este consistía
en realizar tantas repeticiones, a una velocidad de 2 por segundo, como fuera
posible. En cuanto a la posibilidad de haber cometido un resultado falso
negativo a la hora de comparar los dos métodos de entrenamiento, éste
creemos que se debería principalmente al corto período de aplicación de los
programas y en menor medida a la falta de potencia estadística (inferior a 0,5)
ocasionada por la escasa muestra empleada. Durante las dos primeras
semanas de entrenamiento difícilmente podrán observarse diferencias en la
efectividad de distintos programas con volúmenes e intensidades de
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Julio Tous Fajardo Comparación entre dos métodos a corto plazo Estudio 2
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Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
neural, en la sincronización entre las dos cabezas. De este modo, sería muy
interesante comprobar mediante EMG la posible sincronización de los
diferentes músculos abdominales para crear una mayor tensión después de un
período de entrenamiento.
En cuanto a las mejoras debidas a la familiarización con el test, ya Stokes et
al (1989), encontraron que la repetición de un test -sin entrenamiento de por
medio- para medir la flexión del tronco durante 6 semanas, provocó unas
mejoras en el máximo momento flexor voluntario isométrico de un 16,8%. Sin
embargo, el tipo de test empleado difiere bastante al empleado en esta
investigación, ya que en el estudio citado la posición era de pie y podría entrar
en juego otro tipo de musculatura. Si bien es cierto que en nuestra
investigación un grupo que no hubiese seguido ningún programa de
entrenamiento podría haber controlado en parte las mejoras debidas al
aprendizaje en el test, por lo que esta sería una de las limitaciones de este
estudio.
Los grandes incrementos obtenidos por los sujetos no experimentados
pueden ser debidos en parte a los valores más bajos que obtuvieron al
principio, así como a una mejor ejecución técnica en el post-test. En este
sentido, Bell y Laskin (1985), encontraron mejoras incluso más dramáticas en
sujetos no experimentados (media de 57,5 años) que partían de valores medios
comprendidos entre 14,0 y 27,4 reps en un test consistente en la realización de
enrollamientos de tórax a una cadencia de 25 reps / seg. Después de sólo tres
semanas de entrenamiento las mejoras oscilaron entre un 46,7% y un 60,2%.
También Legg (1981), encontró mejoras de un 64,3% después de dos semanas
de entrenamiento abdominal intenso. De esta manera, los sujetos es posible
que desarrollen una estrategia de reclutamiento más eficiente, quizás
aprendiendo a relajar la musculatura extensora (inhibición recíproca) de forma
que se necesita menos actividad abdominal para superar la fuerza de esta
musculatura antagonista (Stokes et al, 1989). Por otro lado, los factores
motivacionales también pueden haber influenciado en los resultados, ya que en
estas edades y ambientes (equipo federado) el espíritu competitivo se
encuentra muy acuciado entre los sujetos, lo cual pudo ser constatado durante
la administración de los tests.
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Julio Tous Fajardo Comparación entre dos métodos a corto plazo Estudio 2
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Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
datos que no podemos comparar con ningún otro estudio de los consultados,
por lo que es una futura línea de investigación totalmente abierta. Sin embargo,
nos puede dar una idea aproximada de la considerable solicitación del
metabolismo glucolítico a pesar de que tradicionalmente han sido considerados
como ejercicios “localizados”, aunque se ha de tener en cuenta que requieren
la movilización de una gran cantidad de masa como la que se halla en la
cabeza (5% del total), el cuello (3%), las extremidades superiores (12%) o
inferiores (32%), el tórax (11%), el abdomen (16%) y la zona pélvica (11%)
(Erdmann, 1997). Por lo tanto, cuando se realiza un ejercicio del grupo de
movilización del tren superior se desplaza aproximadamente un mínimo de un
41% de la masa corporal total, pudiendo llegar a un 57% en el caso de un sit-
up, donde además se eleva el abdomen. Si se realiza un ejercicio del grupo de
movilización del tren inferior, se desplaza aproximadamente un mínimo de un
43% de la masa corporal total que, en el caso de movilizar también el abdomen
como ocurre en un pelvic-roll, puede elevarse a un 59%.
El grupo de Häkkinen, advertía en sus clásicos estudios que, en otro tipo de
musculatura, las mejoras en deportistas de élite tardaban más en aparecer y
eran más difíciles de alcanzar por encontrarse éstos más cerca de su nivel
máximo de rendimiento (Häkkinen et al, 1987, Häkkinen y Kauhanen, 1989,
Häkkinen et al, 1991). Sin embargo, en este estudio se ha podido comprobar
cómo los atletas de alto nivel investigados tienen todavía un margen de mejora
considerable con respecto a la fuerza y resistencia abdominal. Esto puede
explicarse porque su objetivo suele ser más estético que funcional, empleando
así grandes volúmenes de repeticiones que persiguen una supuesta mayor
definición muscular. De esta manera, estos deportistas, parecen tener un gran
margen de mejora, sobre todo a nivel de potencia abdominal.
Por otro lado, los sujetos no experimentados tuvieron dificultades en
completar los programas de entrenamiento durante las dos semanas, aunque
no informaron de ningún tipo de dolencia. Se ha de tener en cuenta que estos
sujetos no habían entrenado nunca la musculatura abdominal de manera
sistemática y continuada.
Los resultados de este estudio son útiles para la preparación de aquellos
sujetos que tienen que superar pruebas de aptitud física para ingresar en algún
organismo o institución. Algunas de estas pruebas de ingreso incluyen tests
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Julio Tous Fajardo Comparación entre dos métodos a corto plazo Estudio 2
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Julio Tous Fajardo Influencia del orden de los ejercicios Estudio 3
INTRODUCCIÓN
Aunque los diferentes autores están de acuerdo en la dificultad de aislar
completamente las porciones superior (URA) e inferior (LRA) del recto
abdominal, la preferenciación o diferenciación funcional de ambas porciones
mediante tareas específicas parece darse en este músculo tal y como se
detalla en el estudio 1 de esta tesis. Por lo tanto, al haber encontrado algunos
autores que es posible incidir más sobre una porción del recto abdominal que
sobre la otra o bien activar más la musculatura oblicua o el transverso
mediante determinados ejercicios (ver referencias en capítulo 3), se pueden
considerar cuatro grupos de ejercicios abdominales atendiendo a sus objetivos:
-Ejercicios que implican más a la porción inferior.
-Ejercicios que implican más a la porción superior.
-Ejercicios que implican más a la musculatura oblicua.
-Ejercicios que implican más al transverso abdominal.
En este sentido, se ha sugerido que seguir un orden de ejecución
determinado provoca mayores mejoras en la función abdominal. De esta
manera, se afirma que la secuencia: ejercicios de aislamiento de la porción
inferior del recto abdominal, ejercicios de aislamiento de la musculatura oblicua,
ejercicios de aislamiento de la porción superior del recto abdominal, es más
efectiva que seguir la que implica el orden contrario (Robinson y Miller, 1997).
El orden defendido por estos autores (inf-obl-sup) no es otra cosa que el
método de pre-fatiga empleado en programas de musculación, progresando de
las porciones o músculos teóricamente más débiles a las/os teóricamente más
fuertes (Tous y Balagué, 1998).
A pesar de ser técnicas muy difundidas y practicadas en el mundo de la
musculación y el culturismo, son contados los estudios científicos que hayan
puesto a prueba su supuesta eficacia. Sforzo y Touey (1996) realizaron un
interesante estudio que intentaba comprobar el efecto inmediato sobre el
rendimiento muscular de la variación en el orden de ejecución de los ejercicios.
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
HIPÓTESIS
El programa que presente una mayor similitud con el test de valoración
abdominal será el que provoque unas mayores mejoras en los sujetos que lo
practiquen.
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Julio Tous Fajardo Influencia del orden de los ejercicios Estudio 3
MATERIAL Y MÉTODO
Muestra
Cuarenta y cinco estudiantes (27 hombres y 18 mujeres) de Educación
Física de segundo ciclo (Hombres: 23,7±2,16 años de edad; 175,7±5,2 cm de
estatura; 72,9±7,1 kgs de peso; Mujeres: 23,2±1,51 años de edad; 163,9±3,8
cm de estatura; 58,8±5,9) aceptaron participar voluntariamente en este estudio.
Una vez establecidos los resultados iniciales, los sujetos fueron divididos en 4
grupos siguiendo el método ABBA (Vincent, 1995), para intentar que cada
grupo partiese con una media de repeticiones similar. Todos tenían experiencia
previa en la realización de ejercicios abdominales. Ninguno alegó algún tipo de
patología o dolor en la zona lumbar que impidiese la normal realización de los
programas de entrenamiento.
Instrumento de valoración
La valoración de la musculatura abdominal se realizó mediante el test de
Robertson y Magnusdottir (1987) (ver figura E3.1 y capítulo 5). Con el objeto de
intentar evitar que las mejoras en el test después de la intervención fueran
debidas a una mejora técnica en el mismo, los sujetos, después de un período
de familiarización, repitieron el test tres veces, dejando un día de descanso
entre la realización de cada test. Aquellos sujetos que obtuvieron una diferencia
entre alguno de los tres test igual o superior a un 10%, repitieron el test tantas
veces como fue necesario hasta estabilizar sus resultados. Se consideró como
puntuación inicial en el test la media de los tres resultados más cercanos.
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Programas de entrenamiento
Los grupos en los que se intervino siguieron los programas de entrenamiento
durante 6 semanas, con una frecuencia semanal de 3 sesiones.
El grupo A (13 sujetos) realizó un programa de entrenamiento con el orden
inferiores-oblicuos-superiores; dicho programa incluía las siguientes triseries a
tres ejercicios de 60 repeticiones con 20 segundos de descanso entre cada
triserie: (1ª triserie: LRA: porción inferior del recto abdominal) 20 reps de pelvic-
roll a una velocidad de 1 rep cada dos segundos (VL: velocidad lenta); 20 reps
de descensos de piernas de 90º a 45º a VL; 20 reps de elevaciones de glúteos
a VL; (2ª triserie: oblicuos) 20 reps de curl cruzado a VM (velocidad media: 1
rep por segundo); 20 reps de parabrisas a VL; 20 reps de side roll a VM; (3ª
triserie: URA) 25 reps de curl-ups a VM, 15 reps de curl-ups con rodillas
elevadas a VR (velocidad rápida: 2 reps por segundo) y 20 reps de sit-ups
hasta 45º a VL.
El grupo B (13 sujetos) siguió un programa que incluía los mismos ejercicios
pero con las triseries realizadas en el orden contrario.
El grupo C (14 sujetos) realizó un programa con el mismo volumen de
repeticiones pero más parecido al RCUT que incluía 3 series de 60 curl-ups a
la máxima velocidad con un descanso de 1 minuto entre cada serie.
Por otro lado, un grupo D (5 sujetos) no realizó ningún tipo de
entrenamiento abdominal durante el período establecido, sirviendo como grupo
control.
Cada sujeto recibió una hoja en la cual se ilustraban los programas de
entrenamiento y se les preguntaba acerca de algunos datos personales (ver
anexos).
Después de las seis semanas de entrenamiento se volvió a administrar el
RCUT, en una sesión diferente a la última donde se realizó entrenamiento.
Análisis estadístico
Los datos fueron tratados mediante las pruebas estadísticas coeficiente de
correlación intraclase (fiabilidad en el test previo), t de Student de datos
apareados (mejoras en cada grupo) y one-way ANOVA (comparación
porcentaje de mejoras), estableciéndose el nivel de significación en una p <
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A
20”Desc
TRISERIE
20”Desc
TRISERIE
2
20L CROSS CURL-UPS 20M SIDE ROLLS 20L KNEE ROLLS
TRISERIE
3
25M CURL-UPS 15H CURL-UPS 20L 45º SIT-UPS
B 20”Desc
TRISERIE
1
25M CURL-UPS 15H CURL-UPS 20L 45º SIT-UPS
20”Desc
TRISERIE
2 20L CROSS CURL-UPS 20M SIDE ROLLS 20L KNEE ROLLS
TRISERIE
3
20L PELVIC ROLLS 20L LYING-LEG THRUSTS 20L PELVIC RAISES
C
SERIE
60”Desc
1
60 ALL-OUT CURL-UPS
SERIE
2 60”Desc
60 ALL-OUT CURL-UPS
SERIE
60”Desc
3
60 ALL-OUT CURL-UPS
Julio Tous Fajardo Influencia del orden de los ejercicios Estudio 3
RESULTADOS
En los tests previos al entrenamiento se obtuvo una fiabilidad (coeficiente de
correlación intraclase) de 0,97 en los sujetos que realizaron el test 3 veces (29
sujetos) y de 0,84 en los que lo realizaron 4 veces (16 sujetos). Los valores
medios fueron de 76,95 reps/min ± 10,12; 79,08 ± 11,37; 80,45 ± 11,11, en el
primer caso y 64,81 ± 10,1; 71,75 ± 9,8; 79,18 ± 8,2 y 76,87 ± 7,5 en el
segundo caso.
De los 45 sujetos, 31 realizaron el test después del período de
entrenamiento. La pérdida de sujetos se debió a lesiones ajenas a los
programas de entrenamiento o bien no fueron justificadas. Asimismo, tan sólo
15 sujetos realizaron un mínimo de 16 sesiones de las 18 previstas. Por lo
tanto, sólo fueron analizados los resultados de 20 sujetos (5 en cada grupo de
entrenamiento y 5 en el grupo control; con 3 hombres y 2 mujeres en cada
grupo).
Todos los grupos mejoraron sus resultados en el test (ver tabla E3.1), siendo
estas mejoras significativas, al realizar la prueba t de muestras dependientes
(pre-post), en los grupos A (11,3% ± 5,83; p = 0,007; t = -5,2) y C (20% ± 5,29; p
= 0,01; t = -7,8).
Al comparar los porcentajes de mejoras de los cuatro grupos se obtuvieron
diferencias significativas (p < 0,001; F = 11,01). Los contrastes a posteriori
detectaron diferencias significativas entre los grupos A (inf-obl-sup) (p < 0,001)
y C (3 series de 60 enrollamientos de tronco) (p < 0,05) con respecto al grupo
D (control). No se obtuvieron diferencias significativas entre los grupos A y B
(sup-obl-inf).
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Tabla E3.1. Resultados antes y después en el RCUT (reps / min) en los distintos grupos de
entrenamiento y el grupo control (D).
DISCUSIÓN
En este estudio se volvió a encontrar, como en otros dos estudios pilotos
que no pudieron finalizarse por falta de muestra, una escasa adherencia
(pérdida experimental) a los programas de entrenamiento abdominal. Las
pérdidas, cuando no fueron justificadas, pueden deberse a que la mayoría de
sujetos estudiados no acostumbraban a realizar programas de entrenamiento
abdominal sistematizados. Así, la intensidad de los programas pudo ser
excesiva para algunos sujetos que no estaban dispuestos a ejercitarse
duramente.
Al comparar los resultados con el estudio 2 de esta tesis se puede observar
cómo las mejoras en los grupos A y B están por debajo de lo que se podía
esperar en un principio. Este hecho puede deberse a que en este estudio de
realizó una mayor familiarización previa con el test, de forma que cada sujeto
realizó el test un mínimo de 3 veces y en el caso de obtener algún resultado
dispar lo repitió tantas veces como fuera necesario hasta estabilizar los
resultados. Así, en el estudio 2 de esta tesis, los espectaculares incrementos
pudieron deberse en gran parte a una mejora de la ejecución técnica en el test,
ya que la familiarización no fue tan exhaustiva. Desafortunadamente, no se
pudieron administrar los tests, como estaba previsto, a las dos semanas de
entrenamiento para comparar estos resultados con los del estudio 2. En este
sentido, Smidt et al (1989), estudiaron los efectos de un programa de
entrenamiento isocinético (resistencia acomodada) tanto para los flexores como
para los extensores del tronco, encontrando cómo durante las dos primeras
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Julio Tous Fajardo Influencia del orden de los ejercicios Estudio 3
semanas de entrenamiento las mejoras fueron mayores que durante las cuatro
últimas semanas. Similares resultados también encontraron Moritani y DeVries
(1979), aunque en los flexores del codo. En éste último estudio, las mejoras
debidas a los factores estructurales (hipertrofia muscular) pasaron a tener más
relevancia que las neurales en el período comprendido entre la tercera y la
quinta semana. Sin embargo, en el estudio que mayor similitud presenta con el
presente, al haber comparado varios programas de entrenamiento abdominal
empleando un test similar aunque de cadencia, las mejoras no fueron
significativas entre la primera y tercera semana y sí entre la primera y la sexta
así como entre la tercera y la sexta (Bell y Laskin, 1985).
Por otro lado, no se han observado diferencias significativas entre seguir el
programa A, con el orden inferior-oblicuo-superior, y el contrario de cara a
mejorar los resultados en el RCUT. Este hecho no significa que realmente no
haya diferencias entre estas dos secuencias, ya que tanto la muestra (potencia
estadística inferior a 0,5) como el tiempo de aplicación de los programas
podrían ser insuficientes para observar las supuestas diferencias. En este
sentido la muestra necesaria para encontrar unas diferencias de un 30% en los
porcentajes de mejora con una potencia de 0,8 sería de 14 sujetos por grupo.
De hecho, se observa una tendencia a que el A es un programa más efectivo
que el B (superior-oblicuo-inferior), ya que éste incluso no provoca mejoras
significativas después del período de entrenamiento. Sin embargo, no creemos
que por norma general sea más eficaz el orden del programa A; probablemente
algunos sujetos se beneficiarán más de esta secuencia y otros de la contraria o
de las múltiples combinaciones que se pueden dar y que no pudieron ser
comparadas en este estudio por falta de muestra. En este sentido, si la lógica a
seguir esta secuencia A se debe a que existe una predominancia de la porción
superior con respecto a la inferior y la oblicua en todos los ejercicios y, por lo
tanto, se dice es más fuerte, se ha de tener en cuenta que esto no ocurre
siempre así. En estudios electromiográficos se pudo comprobar cómo
determinados sujetos presentaban una mayor activación en la porción inferior
en todo momento, ya sea realizando enrollamientos de tronco o de pelvis (Tous
y Balagué, 1998). Uno de estos sujetos, practicante de aeróbic de competición
de élite internacional, nos indicó que su entrenamiento incluye muchos más
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Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
ejercicios para localizar la porción inferior del recto abdominal, debido a que
ésta es muy valorada por los jueces. Es una prueba de que con el
entrenamiento se puede llegar a cambiar la habitual predominancia de la
porción superior sobre la inferior. Por otro lado, los sujetos muy entrenados
podrían beneficiarse más de una secuencia en postfatiga en determinados
momentos de su proceso de entrenamiento. Estos son factores de mucho
interés a valorar en futuras investigaciones.
Además, se ha de tener en cuenta que el test de valoración empleado puede
no ofrecer toda la información sobre las adaptaciones que han provocado los
diferentes programas en las distintas porciones o músculos. Aunque, debido a
la velocidad máxima de ejecución requerida, durante el RCUT se activan las
porciones superior e inferior del recto abdominal, y la musculatura oblicua,
parece ser necesario elaborar distintos tests para valorar las diferentes
porciones. El propio instrumento de valoración sería por lo tanto una de las
mayores limitaciones de este estudio y una de las futuras líneas de
investigación que urge llevarse a cabo.
Mediante la EMG se podría llegar a observar las supuestas adaptaciones
específicas provocadas por cada método de entrenamiento, aunque en este
estudio no fue posible realizar este tipo de valoraciones. Por lo tanto, la
utilización del MuscleLab™ para valorar los efectos de un entrenamiento
abdominal puede resultar muy útil ya que el encoder lineal de movimiento
permite adaptarse de manera bastante aproximada al tipo de movimiento
requerido, un enrollamiento que ningún ergómetro parece ser capaz de
reproducir. Por lo tanto, las futuras investigaciones con este dispositivo están
garantizadas.
Un aspecto importante que puede haber influido en la adherencia y
resultados de este estudio es la no supervisión de todos los sujetos durante las
seis semanas de entrenamiento. Algunos sujetos fueron supervisados durante
todas las sesiones y otros no por incompatibilidad de horarios. Aunque todos
aseguraron haber realizado las sesiones requeridas, no sé puede saber
realmente si este fue el caso.
Sin embargo, a tenor de los resultados obtenidos, parece ser que la variable
especificidad de ejecución de los ejercicios influye más que el orden de
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Julio Tous Fajardo Influencia del orden de los ejercicios Estudio 3
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que los sujetos realizaron enrollamientos de tronco (cada grupo con una
variante diferente) durante dos sesiones de 10 minutos al día y a una cadencia
de 25 reps / min. Por lo tanto, se puede deducir que realizaron una dinámica
muy similar al test de valoración, lo que ayuda a explicar también las grandes
mejoras. Este hecho está de acuerdo con los resultados del presente estudio,
reforzando la hipótesis de especificidad del entrenamiento.
Demont et al (1999), realizaron un estudio con un diseño muy similar al
presente pero con objetivos muy diferentes. De esta manera, se compararon
tres programas de entrenamiento abdominal durante 6 semanas (18 sesiones):
uno que empleaba únicamente enrollamientos de troncos, otro que empleaba
un ab-flex y un tercero que empleaba un ab-roller (ver capítulo 4 para ver
descripción de estos aparatos). No se observaron diferencias significativas
entre los valores obtenidos antes y después del período entrenamiento. Sin
embargo, los instrumentos de valoración empleados son bastante discutibles;
una prueba isométrica y otra isocinética (peak torque en MVC) que difícilmente
pueden detectar las mejoras en un programa dinámico después de 6 semanas
de entrenamiento. Así, esta sería una de las ventajas que posee el tan criticado
RCUT ya que ha demostrado ser sensible a las adaptaciones que sufre la
musculatura abdominal como consecuencia de un entrenamiento.
Se necesita seguir investigando sobre los efectos de distintos programas de
entrenamiento abdominal a largo plazo en la función de dicha musculatura.
Según los estudios 2 y 3 de esta tesis los programas de alta intensidad y
volumen moderado parecen ser muy eficaces para mejorar la fuerza y
resistencia abdominal a corto y medio plazo. De ahí que sería muy interesante
comparar estos programas con los más comúnmente utilizados, que incluyen
un gran volumen de repeticiones y lógicamente con la combinación de ambos,
periodizándolos a lo largo de una temporada. Sin embargo, parece necesario el
diseño de un nuevo test que corrija los defectos del RCUT, ya que se ha
observado cómo la discriminación entre sujetos que realizan frecuentemente un
entrenamiento sistemático de la musculatura abdominal y los que no, parece
no quedar siempre del todo clara. Así, ciertos sujetos presentan una especial
habilidad para obtener unos elevados resultados en el test que no se
corresponden con su nivel de entrenamiento o desarrollo en la musculatura
Página 173
Julio Tous Fajardo Influencia del orden de los ejercicios Estudio 3
abdominal. Sin embargo, en los estudios pilotos previos a esta tesis se intentó
administrar otro test, el de Knudson y Johnston (1995), pero se dio el caso de
que varios sujetos no lograban llegar a tocar sus muslos (al poseer brazos muy
cortos) y otros realizaban recorridos mínimos (al poseer brazos muy largos),
por lo que finalmente se desestimó, optándose por el test de Robertson (ver
discusión en capítulo 5).
En conclusión, el orden de ejecución de los ejercicios abdominales “inferior-
oblicuo-superior” no parecer ser más eficaz que la secuencia contraria para
mejorar la fuerza y resistencia en un período de 6 semanas. Por el contrario, un
programa con el mismo volumen de repeticiones pero con una mayor
especificidad con respecto al test de valoración, fue el que provocó mayores
mejoras.
Página 174
Julio Tous Fajardo Entrenamiento de la musculatura abdominal Conclusiones
CONCLUSIONES
DE LA PARTE TEÓRICA
-Los ejercicios que inciden más sobre el músculo oblicuo interno y el transverso
abdominal parecen ser los más recomendables para la prevención y
rehabilitación de patologías lumbares.
-Los sujetos con una musculatura abdominal débil deberían realizar ejercicios
donde se redujese al mínimo el estrés en la zona lumbar y la incidencia sobre
los flexores de la cadera como los enrollamientos de tronco o pelvis.
Página 175
Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
-Los sujetos con una musculatura abdominal fuerte deberían realizar ejercicios
donde se maximizase la incidencia sobre la musculatura abdominal como el
ejercicio “v” abdominal o la elevación de miembros inferiores desde posición
suspendida.
DE LA PARTE EMPÍRICA
-El enrollamiento de tórax incide de manera preferente sobre las porciones mas
craneales del recto abdominal, mientras que el enrollamiento de pelvis lo hace
sobre las porciones más caudales aunque de forma menos evidente.
Página 176
Julio Tous Fajardo Entrenamiento de la musculatura abdominal Conclusiones
Página 177
Tesis Doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
RETOS DE FUTURO
Página 178
Julio Tous Fajardo Bibliografía Capítulo 8
8. BIBLIOGRAFÍA
Página 179
Tesis doctoral Entrenamiento de la musculatura abdominal Universidad de Barcelona
Una vez localizados los centros donde se encontraban las revistas buscadas
se acudió a la biblioteca de los mismos para fotocopiar los artículos
referenciados. Dichos centros son:
-INEFC Centre de Barcelona.
-D.G.E. (Biblioteca de l’Esport) (Esplugues de Llobregat)
-INEF de Madrid.
-FCAFD de Las Palmas de Gran Canaria.
-FCAFD de Granada.
-CNID (Centro Nacional de Investigación Deportiva) (Madrid).
-Hospital de La Paz (Madrid)
-Hospital del Vall d’Hebron (Barcelona).
-Hospital Clínic (Barcelona).
-Hospital de Bellvitge (Barcelona)
-ICATME (Institut Dexeus) (Barcelona).
-Instituto para la Seguridad y la Salud en el Trabajo (Barcelona).
-Institut de Ciencies de l’Esport (Barcelona).
-Escuela de Fisioterapia de la Universitat Ramon Llull (Barcelona).
-Colegio de Médicos de Barcelona.
-INEFC de Lérida.
En el extranjero se acudió a los siguientes centros:
-The Miller Nichols Library. The University of Missouri, Kansas City, USA.
-The Archie R. Dykes Library of the Health Sciences. The University of Kansas
City Medical Center.
-The School of Medicine Library. The University of Missouri, Kansas City, USA.
Los precios por página fotocopiada oscilaron entre las 2,5 ptas y las 40 ptas.
Ninguna de las referencias fue solicitada por correo.
Página 180
Julio Tous Fajardo Bibliografía Capítulo 8
8.4. REFERENCIAS
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ANEXO 1
CURSO DE ABDOMINALES
“SINERGISMO”
UNIVERSIDAD DE STANFORD
(no se incluye en versión .pdf)
ANEXO 2
HOJA DE PROGRAMAS DE
ENTRENAMIENTO DEL ESTUDIO 3
NOMBRE: ROBERTSON:
ALTURA:
PESO:
EJERCICIOS A REPETICIONES VELOCIDAD BORG
PELVIC ROLL 20 1 / 2 Seg
DESCENSO 90º-45º + 20 1 / 2 SEG
MANTENER 3”
ELEVACIÓN GLUTEOS 20 1 / SEG
Descanso 15”
CURL + TWIST 20 1 cada 2 segs
CURL P. CRUZADAS 20 1 / seg
PARABRISAS 20 1 cada 2 segs
Descanso 15”
CURL P.FLEX. 25 1 cada seg
CURL C. FLEX 90 15 2 cada 1 seg
CURL HASTA 45º 20 1 cada 2 segs
20 L 20 L 20 L 20 L 20 M 20 L
45º
15 R
25 M 20 L
0 Inapreciable 6 –
0,5 Extremadamente débil 7 Muy duro
1 Muy débil 8 –
2 Débil o ligero 9 –
3 Moderado 10 Extremadamente duro
4 Algo duro * Máximo
5 Duro
¿Practicas usualmente ejercicios abdominales? ¿Hace cuánto que no? ¿Otro tipo de A.F.?
1. Media global
2. PORCION
3. VELOCIDA
4. EJERCICI
5. PORCION * VELOCIDA
6. PORCION * EJERCICI
7. VELOCIDA * EJERCICI
9. NIVEL
Suma de
cuadrados Media
Fuente Variable dependiente tipo III gl cuadrática F Sig.
Modelo corregido CURL 56078,169a 35 1602,233 1,474 ,064
PELVIC 16982,799b 35 485,223 ,959 ,541
Intercept CURL 1234249,073 1 1234249,1 1135,278 ,000
PELVIC 1144405,884 1 1144405,9 2262,424 ,000
PORCION CURL 18937,958 3 6312,653 5,806 ,001
PELVIC 678,285 3 226,095 ,447 ,720
VELOCIDA CURL 6160,583 2 3080,291 2,833 ,063
PELVIC 638,410 2 319,205 ,631 ,534
NIVEL CURL 10144,134 2 5072,067 4,665 ,011
PELVIC 3580,402 2 1790,201 3,539 ,032
PORCION * VELOCIDA CURL 1023,292 6 170,549 ,157 ,987
PELVIC 1196,899 6 199,483 ,394 ,881
PORCION * NIVEL CURL 13443,496 6 2240,583 2,061 ,063
PELVIC 3947,458 6 657,910 1,301 ,262
VELOCIDA * NIVEL CURL 3081,731 4 770,433 ,709 ,588
PELVIC 6135,450 4 1533,863 3,032 ,020
PORCION * VELOCIDA CURL 1482,518 12 123,543 ,114 1,000
* NIVEL PELVIC 1617,898 12 134,825 ,267 ,993
Error CURL 130461,323 120 1087,178
PELVIC 60699,810 120 505,832
Total CURL 1470623,038 156
PELVIC 1228802,739 156
Total corregido CURL 186539,492 155
PELVIC 77682,609 155
a. R cuadrado = ,301 (R cuadrado corregido = ,097)
b. R cuadrado = ,219 (R cuadrado corregido = -,009)
a
Contraste de Levene sobre la igualdad de las varianzas error
Games-Howell
Intervalo de confianza al
Diferencia 95%.
entre Límite
Variable dependiente (I) PORCION (J) PORCION medias (I-J) Error típ. Sig. Límite inferior superior
CURL 1,00 2,00 -21,8231* 7,4668 ,022 -41,3264 -2,3197
3,00 -23,5515* 7,4668 ,000 -37,0283 -10,0747
4,00 -29,2259* 7,4668 ,001 -49,1324 -9,3194
2,00 1,00 21,8231* 7,4668 ,022 2,3197 41,3264
3,00 -1,7285 7,4668 ,996 -21,5435 18,0866
4,00 -7,4028 7,4668 ,856 -31,8425 17,0369
3,00 1,00 23,5515* 7,4668 ,000 10,0747 37,0283
2,00 1,7285 7,4668 ,996 -18,0866 21,5435
4,00 -5,6744 7,4668 ,880 -25,8855 14,5368
4,00 1,00 29,2259* 7,4668 ,001 9,3194 49,1324
2,00 7,4028 7,4668 ,856 -17,0369 31,8425
3,00 5,6744 7,4668 ,880 -14,5368 25,8855
PELVIC 1,00 2,00 4,8767 5,0931 ,779 -8,6453 18,3987
3,00 4,2233 5,0931 ,867 -10,1746 18,6212
4,00 6,6192 5,0931 ,414 -4,6188 17,8572
2,00 1,00 -4,8767 5,0931 ,779 -18,3987 8,6453
3,00 -,6533 5,0931 ,999 -15,8711 14,5644
4,00 1,7426 5,0931 ,982 -10,5688 14,0539
3,00 1,00 -4,2233 5,0931 ,867 -18,6212 10,1746
2,00 ,6533 5,0931 ,999 -14,5644 15,8711
4,00 2,3959 5,0931 ,964 -10,8849 15,6767
4,00 1,00 -6,6192 5,0931 ,414 -17,8572 4,6188
2,00 -1,7426 5,0931 ,982 -14,0539 10,5688
3,00 -2,3959 5,0931 ,964 -15,6767 10,8849
Basado en las medias observadas.
*. La diferencia de medias es significativa al nivel ,05.
Comparaciones múltiples
Games-Howell
Intervalo de confianza al
Diferencia 95%.
entre Límite
Variable dependiente (I) NIVEL (J) NIVEL medias (I-J) Error típ. Sig. Límite inferior superior
CURL 1,00 2,00 -6,7619 6,2472 ,607 -23,6211 10,0972
3,00 14,0002* 6,5443 ,038 ,6479 27,3525
2,00 1,00 6,7619 6,2472 ,607 -10,0972 23,6211
3,00 20,7621* 6,7540 ,011 4,1189 37,4054
3,00 1,00 -14,0002* 6,5443 ,038 -27,3525 -,6479
2,00 -20,7621* 6,7540 ,011 -37,4054 -4,1189
PELVIC 1,00 2,00 3,5010 4,2612 ,686 -6,5393 13,5413
3,00 -7,4170 4,4639 ,210 -17,7932 2,9593
2,00 1,00 -3,5010 4,2612 ,686 -13,5413 6,5393
3,00 -10,9180* 4,6069 ,042 -21,5383 -,2976
3,00 1,00 7,4170 4,4639 ,210 -2,9593 17,7932
2,00 10,9180* 4,6069 ,042 ,2976 21,5383
Basado en las medias observadas.
*. La diferencia de medias es significativa al nivel ,05.
MANOVA DATOS ARBITRARIOS
Suma de
cuadrados Media
Fuente Variable dependiente tipo III gl cuadrática F Sig.
Modelo corregido CURLARB ,368a 35 1,051E-02 2,264 ,001
PELVARB ,115b 35 3,288E-03 1,199 ,234
Intercept CURLARB 3,306 1 3,306 712,506 ,000
PELVARB 1,774 1 1,774 647,149 ,000
VEL CURLARB 1,408E-02 2 7,039E-03 1,517 ,223
PELVARB 4,707E-04 2 2,353E-04 ,086 ,918
NIV CURLARB ,201 2 ,101 21,710 ,000
PELVARB 7,647E-02 2 3,823E-02 13,944 ,000
PORC CURLARB 9,555E-02 3 3,185E-02 6,865 ,000
PELVARB 8,761E-03 3 2,920E-03 1,065 ,367
VEL * NIV CURLARB 1,061E-02 4 2,653E-03 ,572 ,684
PELVARB 6,643E-03 4 1,661E-03 ,606 ,659
VEL * PORC CURLARB 2,016E-03 6 3,360E-04 ,072 ,998
PELVARB 1,969E-03 6 3,282E-04 ,120 ,994
NIV * PORC CURLARB 4,270E-02 6 7,117E-03 1,534 ,173
PELVARB 1,899E-02 6 3,166E-03 1,155 ,335
VEL * NIV * PORC CURLARB 3,667E-03 12 3,056E-04 ,066 1,000
PELVARB 2,480E-03 12 2,067E-04 ,075 1,000
Error CURLARB ,557 120 4,639E-03
PELVARB ,329 120 2,742E-03
Total CURLARB 4,284 156
PELVARB 2,198 156
Total corregido CURLARB ,924 155
PELVARB ,444 155
a. R cuadrado = ,398 (R cuadrado corregido = ,222)
b. R cuadrado = ,259 (R cuadrado corregido = ,043)
a
Contraste de Levene sobre la igualdad de las varianzas error
Games-Howell
Intervalo de confianza al
Diferencia 95%.
entre Límite
Variable dependiente (I) NIV (J) NIV medias (I-J) Error típ. Sig. Límite inferior superior
CURLARB 1,00 2,00 -3,8108E-02* 1,319E-02 ,028 -7,2791E-02 -3,43E-03
3,00 5,304E-02* 1,319E-02 ,000 2,448E-02 8,159E-02
2,00 1,00 3,811E-02* 1,319E-02 ,028 3,425E-03 7,279E-02
3,00 9,115E-02* 1,390E-02 ,000 5,834E-02 ,1240
3,00 1,00 -5,3038E-02* 1,319E-02 ,000 -8,1595E-02 -2,45E-02
2,00 -9,1146E-02* 1,390E-02 ,000 -,1240 -5,83E-02
PELVARB 1,00 2,00 -4,7567E-02* 1,014E-02 ,000 -7,3540E-02 -2,16E-02
3,00 8,917E-04 1,014E-02 ,993 -1,7641E-02 1,942E-02
2,00 1,00 4,757E-02* 1,014E-02 ,000 2,159E-02 7,354E-02
3,00 4,846E-02* 1,069E-02 ,000 2,415E-02 7,277E-02
3,00 1,00 -8,9167E-04 1,014E-02 ,993 -1,9425E-02 1,764E-02
2,00 -4,8458E-02* 1,069E-02 ,000 -7,2768E-02 -2,41E-02
Basado en las medias observadas.
*. La diferencia de medias es significativa al nivel ,05.
Comparaciones múltiples
Games-Howell
Intervalo de confianza al
Diferencia 95%.
entre Límite
Variable dependiente (I) PORC (J) PORC medias (I-J) Error típ. Sig. Límite inferior superior
CURLARB 1,00 2,00 -1,3359E-02 1,542E-02 ,784 -5,0777E-02 2,406E-02
3,00 -4,5564E-02* 1,542E-02 ,036 -8,8883E-02 -2,25E-03
4,00 -6,0103E-02* 1,542E-02 ,001 -,1012 -1,90E-02
2,00 1,00 1,336E-02 1,542E-02 ,784 -2,4059E-02 5,078E-02
3,00 -3,2205E-02 1,542E-02 ,281 -7,9207E-02 1,480E-02
4,00 -4,6744E-02* 1,542E-02 ,039 -9,1720E-02 -1,77E-03
3,00 1,00 4,556E-02* 1,542E-02 ,036 2,245E-03 8,888E-02
2,00 3,221E-02 1,542E-02 ,281 -1,4797E-02 7,921E-02
4,00 -1,4538E-02 1,542E-02 ,869 -6,4400E-02 3,532E-02
4,00 1,00 6,010E-02* 1,542E-02 ,001 1,902E-02 ,1012
2,00 4,674E-02* 1,542E-02 ,039 1,767E-03 9,172E-02
3,00 1,454E-02 1,542E-02 ,869 -3,5323E-02 6,440E-02
PELVARB 1,00 2,00 1,805E-02 1,186E-02 ,443 -1,3611E-02 4,971E-02
3,00 9,538E-03 1,186E-02 ,875 -2,3698E-02 4,277E-02
4,00 1,872E-03 1,186E-02 ,999 -3,2298E-02 3,604E-02
2,00 1,00 -1,8051E-02 1,186E-02 ,443 -4,9713E-02 1,361E-02
3,00 -8,5128E-03 1,186E-02 ,872 -3,7906E-02 2,088E-02
4,00 -1,6179E-02 1,186E-02 ,506 -4,6647E-02 1,429E-02
3,00 1,00 -9,5385E-03 1,186E-02 ,875 -4,2775E-02 2,370E-02
2,00 8,513E-03 1,186E-02 ,872 -2,0881E-02 3,791E-02
4,00 -7,6667E-03 1,186E-02 ,923 -3,9777E-02 2,444E-02
4,00 1,00 -1,8718E-03 1,186E-02 ,999 -3,6042E-02 3,230E-02
2,00 1,618E-02 1,186E-02 ,506 -1,4288E-02 4,665E-02
3,00 7,667E-03 1,186E-02 ,923 -2,4444E-02 3,978E-02
Basado en las medias observadas.
*. La diferencia de medias es significativa al nivel ,05.
Comparaciones múltiples
Games-Howell
Intervalo de confianza al
Diferencia 95%.
entre Límite
Variable dependiente (I) VEL (J) VEL medias (I-J) Error típ. Sig. Límite inferior superior
CURLARB 1,00 2,00 -2,4058E-02 1,336E-02 ,269 -6,0830E-02 1,271E-02
3,00 -5,7308E-03 1,336E-02 ,913 -3,9192E-02 2,773E-02
2,00 1,00 2,406E-02 1,336E-02 ,269 -1,2714E-02 6,083E-02
3,00 1,833E-02 1,336E-02 ,478 -1,9153E-02 5,581E-02
3,00 1,00 5,731E-03 1,336E-02 ,913 -2,7730E-02 3,919E-02
2,00 -1,8327E-02 1,336E-02 ,478 -5,5807E-02 1,915E-02
PELVARB 1,00 2,00 -3,1538E-03 1,027E-02 ,957 -2,9818E-02 2,351E-02
3,00 1,865E-03 1,027E-02 ,982 -2,2457E-02 2,619E-02
2,00 1,00 3,154E-03 1,027E-02 ,957 -2,3510E-02 2,982E-02
3,00 5,019E-03 1,027E-02 ,876 -1,9283E-02 2,932E-02
3,00 1,00 -1,8654E-03 1,027E-02 ,982 -2,6188E-02 2,246E-02
2,00 -5,0192E-03 1,027E-02 ,876 -2,9322E-02 1,928E-02
Basado en las medias observadas.
MEDIDAS REPETIDAS PARA COMPARAR CURL-UP Y PELVIC-ROLL
Estadísticos descriptivos
Medida: MEASURE_1
Suma de
cuadrados Media
Fuente EJERC tipo III gl cuadrática F Sig.
EJERC Lineal 5,041E-05 1 5,041E-05 ,045 ,834
EJERC * VEL Lineal 5,733E-04 2 2,867E-04 ,254 ,777
EJERC * NIV Lineal 9,638E-03 2 4,819E-03 4,267 ,023
EJERC * VEL * NIV Lineal 1,989E-03 4 4,973E-04 ,440 ,778
Error(EJERC) Lineal 3,388E-02 30 1,129E-03
Medida: MEASURE_1
Variable transformada: Promedio
Suma de
cuadrados Media
Fuente tipo III gl cuadrática F Sig.
Intercept 1,024 1 1,024 194,019 ,000
VEL 6,135E-03 2 3,067E-03 ,581 ,565
NIV 3,188E-02 2 1,594E-02 3,020 ,064
VEL * NIV 2,893E-03 4 7,231E-04 ,137 ,967
Error ,158 30 5,279E-03
RA 2 ES SIGNIFICATIVAMENTE MAYOR EN CURL QUE EN PELVIC
Medida: MEASURE_1
Suma de
cuadrados Media
Fuente EJERC tipo III gl cuadrática F Sig.
EJERC Lineal 2,221E-02 1 2,221E-02 15,363 ,000
EJERC * VEL Lineal 1,847E-03 2 9,236E-04 ,639 ,535
EJERC * NIV Lineal 2,955E-02 2 1,477E-02 10,221 ,000
EJERC * VEL * NIV Lineal 2,526E-03 4 6,314E-04 ,437 ,781
Error(EJERC) Lineal 4,337E-02 30 1,446E-03
Medida: MEASURE_1
Variable transformada: Promedio
Suma de
cuadrados Media
Fuente tipo III gl cuadrática F Sig.
Intercept ,982 1 ,982 220,384 ,000
VEL 3,892E-03 2 1,946E-03 ,437 ,650
NIV 4,765E-02 2 2,382E-02 5,349 ,010
VEL * NIV 5,156E-03 4 1,289E-03 ,289 ,883
Error ,134 30 4,454E-03
Comparaciones múltiples
Medida: MEASURE_1
DHS de Tukey
Intervalo de confianza al
Diferencia 95%.
entre Límite
(I) NIV (J) NIV medias (I-J) Error típ. Sig. Límite inferior superior
1,00 2,00 -3,0458E-02 1,828E-02 ,235 -7,5518E-02 1,460E-02
3,00 3,254E-02 1,828E-02 ,193 -1,2518E-02 7,760E-02
2,00 1,00 3,046E-02 1,828E-02 ,235 -1,4601E-02 7,552E-02
3,00 6,300E-02* 1,927E-02 ,007 1,550E-02 ,1105
3,00 1,00 -3,2542E-02 1,828E-02 ,193 -7,7601E-02 1,252E-02
2,00 -6,3000E-02* 1,927E-02 ,007 -,1105 -1,55E-02
Basado en las medias observadas.
*. La diferencia de medias es significativa al nivel ,05.
RA 3 ES SIGNIFICATIVAMENTE MAYOR EN CURL QUE EN PELVIC
Medida: MEASURE_1
Suma de
cuadrados Media
Fuente EJERC tipo III gl cuadrática F Sig.
EJERC Lineal 5,899E-02 1 5,899E-02 21,884 ,000
EJERC * VEL Lineal 2,066E-03 2 1,033E-03 ,383 ,685
EJERC * NIV Lineal 2,157E-02 2 1,079E-02 4,001 ,029
EJERC * VEL * NIV Lineal 8,793E-04 4 2,198E-04 ,082 ,987
Error(EJERC) Lineal 8,087E-02 30 2,696E-03
Medida: MEASURE_1
Variable transformada: Promedio
Suma de
cuadrados Media
Fuente tipo III gl cuadrática F Sig.
Intercept 1,359 1 1,359 196,778 ,000
VEL 1,899E-03 2 9,497E-04 ,138 ,872
NIV 7,201E-02 2 3,600E-02 5,214 ,011
VEL * NIV 3,536E-03 4 8,839E-04 ,128 ,971
Error ,207 30 6,906E-03
Comparaciones múltiples
Medida: MEASURE_1
Games-Howell
Intervalo de confianza al
Diferencia 95%.
entre Límite
(I) NIV (J) NIV medias (I-J) Error típ. Sig. Límite inferior superior
1,00 2,00 -2,8658E-02 2,276E-02 ,510 -9,2766E-02 3,545E-02
3,00 4,788E-02* 2,276E-02 ,022 6,576E-03 8,919E-02
2,00 1,00 2,866E-02 2,276E-02 ,510 -3,5450E-02 9,277E-02
3,00 7,654E-02* 2,399E-02 ,008 2,146E-02 ,1316
3,00 1,00 -4,7883E-02* 2,276E-02 ,022 -8,9191E-02 -6,58E-03
2,00 -7,6542E-02* 2,399E-02 ,008 -,1316 -2,15E-02
Basado en las medias observadas.
*. La diferencia de medias es significativa al nivel ,05.
RA 4 ES SIGNIFICATIVAMENTE MAYOR EN CURL QUE EN PELVIC
Medida: MEASURE_1
Suma de
cuadrados Media
Fuente EJERC tipo III gl cuadrática F Sig.
EJERC Lineal 8,318E-02 1 8,318E-02 25,915 ,000
EJERC * VEL Lineal 1,923E-03 2 9,616E-04 ,300 ,743
EJERC * NIV Lineal 1,528E-03 2 7,640E-04 ,238 ,790
EJERC * VEL * NIV Lineal 3,384E-03 4 8,461E-04 ,264 ,899
Error(EJERC) Lineal 9,629E-02 30 3,210E-03
Medida: MEASURE_1
Variable transformada: Promedio
Suma de
cuadrados Media
Fuente tipo III gl cuadrática F Sig.
Intercept 1,655 1 1,655 375,638 ,000
VEL 1,985E-04 2 9,926E-05 ,023 ,978
NIV ,126 2 6,289E-02 14,273 ,000
VEL * NIV 3,040E-03 4 7,600E-04 ,172 ,951
Error ,132 30 4,406E-03
Comparaciones múltiples
Medida: MEASURE_1
DHS de Tukey
Intervalo de confianza al
Diferencia 95%.
entre Límite
(I) NIV (J) NIV medias (I-J) Error típ. Sig. Límite inferior superior
1,00 2,00 -8,6075E-02* 1,818E-02 ,000 -,1309 -4,13E-02
3,00 2,050E-03 1,818E-02 ,993 -4,2765E-02 4,687E-02
2,00 1,00 8,608E-02* 1,818E-02 ,000 4,126E-02 ,1309
3,00 8,813E-02* 1,916E-02 ,000 4,089E-02 ,1354
3,00 1,00 -2,0500E-03 1,818E-02 ,993 -4,6865E-02 4,277E-02
2,00 -8,8125E-02* 1,916E-02 ,000 -,1354 -4,09E-02
Basado en las medias observadas.
*. La diferencia de medias es significativa al nivel ,05.
ESTADÍSTICA PORCIÓN * VELOCIDAD
DATOS NORMALIZADOS
Estadístico
de Levene gl1 gl2 Sig.
CURLVEL1 6,692 3 48 ,001
CURLVEL2 1,195 3 48 ,322
CURLVELP 4,401 3 48 ,008
ANOVA
Suma de Media
cuadrados gl cuadrática F Sig.
CURLVEL1 Inter-grupos 5877,771 3 1959,257 2,969 ,041
Intra-grupos 31676,399 48 659,925
Total 37554,170 51
CURLVEL2 Inter-grupos 5115,253 3 1705,084 1,023 ,391
Intra-grupos 80017,175 48 1667,024
Total 85132,428 51
CURLVELP Inter-grupos 9994,236 3 3331,412 3,445 ,024
Intra-grupos 46413,155 48 966,941
Total 56407,391 51
Prueba de análisis de la varianza para testar la diferencias entre las medias de los
registros de las distintas porciones del recto abdominal. Se puede observar cómo
en las variables curlvel1 y curlvelp hay diferencias significativas.
.
Comparaciones múltiples
Games-Howell
Intervalo de confianza al
95%
Diferencia de Límite
Variable dependiente (I) PORCION (J) PORCION medias (I-J) Error típico Sig. Límite inferior superior
CURLVEL1 1,00 2,00 -17,2915 10,0761 ,207 -41,2656 6,6825
3,00 -19,9515* 10,0761 ,006 -34,9023 -5,0008
4,00 -29,4408 10,0761 ,080 -61,7858 2,9042
2,00 1,00 17,2915 10,0761 ,207 -6,6825 41,2656
3,00 -2,6600 10,0761 ,990 -27,6668 22,3468
4,00 -12,1492 10,0761 ,794 -48,8003 24,5019
3,00 1,00 19,9515* 10,0761 ,006 5,0008 34,9023
2,00 2,6600 10,0761 ,990 -22,3468 27,6668
4,00 -9,4892 10,0761 ,843 -42,5041 23,5256
4,00 1,00 29,4408 10,0761 ,080 -2,9042 61,7858
2,00 12,1492 10,0761 ,794 -24,5019 48,8003
3,00 9,4892 10,0761 ,843 -23,5256 42,5041
CURLVEL2 1,00 2,00 -24,5869 16,0145 ,462 -70,6825 21,5087
3,00 -21,1846 16,0145 ,349 -55,7093 13,3400
4,00 -22,4238 16,0145 ,496 -66,0996 21,2519
2,00 1,00 24,5869 16,0145 ,462 -21,5087 70,6825
3,00 3,4023 16,0145 ,997 -42,2497 49,0543
4,00 2,1631 16,0145 ,999 -49,9321 54,2583
3,00 1,00 21,1846 16,0145 ,349 -13,3400 55,7093
2,00 -3,4023 16,0145 ,997 -49,0543 42,2497
4,00 -1,2392 16,0145 1,000 -44,4315 41,9530
4,00 1,00 22,4238 16,0145 ,496 -21,2519 66,0996
2,00 -2,1631 16,0145 ,999 -54,2583 49,9321
3,00 1,2392 16,0145 1,000 -41,9530 44,4315
CURLVELP 1,00 2,00 -28,9638 12,1967 ,096 -62,0843 4,1566
3,00 -29,5185* 12,1967 ,001 -46,8166 -12,2203
4,00 -35,7669* 12,1967 ,049 -71,3865 -,1473
2,00 1,00 28,9638 12,1967 ,096 -4,1566 62,0843
3,00 -,5546 12,1967 1,000 -35,0975 33,9883
4,00 -6,8031 12,1967 ,974 -51,2650 37,6589
3,00 1,00 29,5185* 12,1967 ,001 12,2203 46,8166
2,00 ,5546 12,1967 1,000 -33,9883 35,0975
4,00 -6,2485 12,1967 ,962 -43,1524 30,6555
4,00 1,00 35,7669* 12,1967 ,049 ,1473 71,3865
2,00 6,8031 12,1967 ,974 -37,6589 51,2650
3,00 6,2485 12,1967 ,962 -30,6555 43,1524
*. La diferencia entre las medias es significativa al nivel .05.
Estadístico
de Levene gl1 gl2 Sig.
PELVICV1 ,888 3 48 ,454
PELVICV2 ,708 3 48 ,552
PELVICVP 1,459 3 48 ,238
ANOVA
Suma de Media
cuadrados gl cuadrática F Sig.
PELVICV1 Inter-grupos 256,058 3 85,353 ,152 ,928
Intra-grupos 27041,336 48 563,361
Total 27297,393 51
PELVICV2 Inter-grupos 1462,743 3 487,581 1,111 ,354
Intra-grupos 21058,008 48 438,708
Total 22520,750 51
PELVICVP Inter-grupos 822,197 3 274,066 ,429 ,733
Intra-grupos 30681,593 48 639,200
Total 31503,789 51
Prueba de análisis de la varianza para testar la diferencias entre las medias de los
registros de las distintas porciones del recto abdominal. Se puede observar cómo
no existen diferencias significativas entre las distintas porciones.
DATOS ARBITRARIOS
Prueba de homogeneidad de varianzas
Estadístico
de Levene gl1 gl2 Sig.
CV1A 2,536 3 48 ,068
CV2A ,684 3 48 ,566
CVPA 3,028 3 48 ,038
PV1A ,557 3 48 ,646
PV2A ,853 3 48 ,472
PVPA ,616 3 48 ,608
ANOVA
Suma de Media
cuadrados gl cuadrática F Sig.
CV1A Inter-grupos 2,759E-02 3 9,197E-03 1,964 ,132
Intra-grupos ,225 48 4,684E-03
Total ,252 51
CV2A Inter-grupos 2,302E-02 3 7,674E-03 1,013 ,395
Intra-grupos ,364 48 7,579E-03
Total ,387 51
CVPA Inter-grupos 4,290E-02 3 1,430E-02 3,018 ,039
Intra-grupos ,227 48 4,738E-03
Total ,270 51
PV1A Inter-grupos 2,852E-03 3 9,506E-04 ,281 ,839
Intra-grupos ,163 48 3,387E-03
Total ,165 51
PV2A Inter-grupos 3,977E-03 3 1,326E-03 ,389 ,761
Intra-grupos ,164 48 3,407E-03
Total ,168 51
PVPA Inter-grupos 2,590E-03 3 8,635E-04 ,370 ,775
Intra-grupos ,112 48 2,335E-03
Total ,115 51
Comparaciones múltiples
HSD de Tukey
Intervalo de confianza al
95%
Diferencia de Límite
Variable dependiente (I) PORCION (J) PORCION medias (I-J) Error típico Sig. Límite inferior superior
CV1A 1,00 2,00 -7,6923E-03 2,684E-02 ,992 -7,9135E-02 6,375E-02
3,00 -3,8462E-02 2,684E-02 ,486 -,1099 3,298E-02
4,00 -5,6923E-02 2,684E-02 ,161 -,1284 1,452E-02
2,00 1,00 7,692E-03 2,684E-02 ,992 -6,3751E-02 7,914E-02
3,00 -3,0769E-02 2,684E-02 ,663 -,1022 4,067E-02
4,00 -4,9231E-02 2,684E-02 ,270 -,1207 2,221E-02
3,00 1,00 3,846E-02 2,684E-02 ,486 -3,2981E-02 ,1099
2,00 3,077E-02 2,684E-02 ,663 -4,0674E-02 ,1022
4,00 -1,8462E-02 2,684E-02 ,901 -8,9905E-02 5,298E-02
4,00 1,00 5,692E-02 2,684E-02 ,161 -1,4520E-02 ,1284
2,00 4,923E-02 2,684E-02 ,270 -2,2212E-02 ,1207
3,00 1,846E-02 2,684E-02 ,901 -5,2981E-02 8,990E-02
CV2A 1,00 2,00 -1,3077E-02 3,415E-02 ,981 -,1040 7,780E-02
3,00 -4,0000E-02 3,415E-02 ,648 -,1309 5,088E-02
4,00 -5,3077E-02 3,415E-02 ,414 -,1440 3,780E-02
2,00 1,00 1,308E-02 3,415E-02 ,981 -7,7798E-02 ,1040
3,00 -2,6923E-02 3,415E-02 ,859 -,1178 6,395E-02
4,00 -4,0000E-02 3,415E-02 ,648 -,1309 5,088E-02
3,00 1,00 4,000E-02 3,415E-02 ,648 -5,0875E-02 ,1309
2,00 2,692E-02 3,415E-02 ,859 -6,3952E-02 ,1178
4,00 -1,3077E-02 3,415E-02 ,981 -,1040 7,780E-02
4,00 1,00 5,308E-02 3,415E-02 ,414 -3,7798E-02 ,1440
2,00 4,000E-02 3,415E-02 ,648 -5,0875E-02 ,1309
3,00 1,308E-02 3,415E-02 ,981 -7,7798E-02 ,1040
CVPA 1,00 2,00 -1,7692E-02 2,700E-02 ,913 -8,9550E-02 5,417E-02
3,00 -5,6154E-02 2,700E-02 ,174 -,1280 1,570E-02
4,00 -7,1538E-02 2,700E-02 ,051 -,1434 3,189E-04
2,00 1,00 1,769E-02 2,700E-02 ,913 -5,4165E-02 8,955E-02
3,00 -3,8462E-02 2,700E-02 ,491 -,1103 3,340E-02
4,00 -5,3846E-02 2,700E-02 ,204 -,1257 1,801E-02
3,00 1,00 5,615E-02 2,700E-02 ,174 -1,5704E-02 ,1280
2,00 3,846E-02 2,700E-02 ,491 -3,3396E-02 ,1103
4,00 -1,5385E-02 2,700E-02 ,941 -8,7242E-02 5,647E-02
4,00 1,00 7,154E-02 2,700E-02 ,051 -3,1891E-04 ,1434
2,00 5,385E-02 2,700E-02 ,204 -1,8011E-02 ,1257
3,00 1,538E-02 2,700E-02 ,941 -5,6473E-02 8,724E-02
PV1A 1,00 2,00 1,538E-02 2,283E-02 ,906 -4,5363E-02 7,613E-02
3,00 3,846E-03 2,283E-02 ,998 -5,6902E-02 6,459E-02
4,00 -4,6154E-03 2,283E-02 ,997 -6,5363E-02 5,613E-02
2,00 1,00 -1,5385E-02 2,283E-02 ,906 -7,6132E-02 4,536E-02
3,00 -1,1538E-02 2,283E-02 ,957 -7,2286E-02 4,921E-02
4,00 -2,0000E-02 2,283E-02 ,817 -8,0748E-02 4,075E-02
3,00 1,00 -3,8462E-03 2,283E-02 ,998 -6,4594E-02 5,690E-02
2,00 1,154E-02 2,283E-02 ,957 -4,9209E-02 7,229E-02
4,00 -8,4615E-03 2,283E-02 ,982 -6,9209E-02 5,229E-02
4,00 1,00 4,615E-03 2,283E-02 ,997 -5,6132E-02 6,536E-02
2,00 2,000E-02 2,283E-02 ,817 -4,0748E-02 8,075E-02
3,00 8,462E-03 2,283E-02 ,982 -5,2286E-02 6,921E-02
PV2A 1,00 2,00 2,385E-02 2,290E-02 ,726 -3,7088E-02 8,478E-02
3,00 1,615E-02 2,290E-02 ,894 -4,4781E-02 7,709E-02
4,00 1,692E-02 2,290E-02 ,881 -4,4011E-02 7,786E-02
2,00 1,00 -2,3846E-02 2,290E-02 ,726 -8,4781E-02 3,709E-02
3,00 -7,6923E-03 2,290E-02 ,987 -6,8627E-02 5,324E-02
4,00 -6,9231E-03 2,290E-02 ,990 -6,7857E-02 5,401E-02
3,00 1,00 -1,6154E-02 2,290E-02 ,894 -7,7088E-02 4,478E-02
2,00 7,692E-03 2,290E-02 ,987 -5,3242E-02 6,863E-02
4,00 7,692E-04 2,290E-02 1,000 -6,0165E-02 6,170E-02
4,00 1,00 -1,6923E-02 2,290E-02 ,881 -7,7857E-02 4,401E-02
2,00 6,923E-03 2,290E-02 ,990 -5,4011E-02 6,786E-02
3,00 -7,6923E-04 2,290E-02 1,000 -6,1704E-02 6,017E-02
PVPA 1,00 2,00 1,385E-02 1,895E-02 ,884 -3,6599E-02 6,429E-02
3,00 9,231E-03 1,895E-02 ,962 -4,1214E-02 5,968E-02
4,00 -3,8462E-03 1,895E-02 ,997 -5,4291E-02 4,660E-02
2,00 1,00 -1,3846E-02 1,895E-02 ,884 -6,4291E-02 3,660E-02
3,00 -4,6154E-03 1,895E-02 ,995 -5,5061E-02 4,583E-02
4,00 -1,7692E-02 1,895E-02 ,787 -6,8138E-02 3,275E-02
3,00 1,00 -9,2308E-03 1,895E-02 ,962 -5,9676E-02 4,121E-02
2,00 4,615E-03 1,895E-02 ,995 -4,5830E-02 5,506E-02
4,00 -1,3077E-02 1,895E-02 ,900 -6,3522E-02 3,737E-02
4,00 1,00 3,846E-03 1,895E-02 ,997 -4,6599E-02 5,429E-02
2,00 1,769E-02 1,895E-02 ,787 -3,2753E-02 6,814E-02
3,00 1,308E-02 1,895E-02 ,900 -3,7368E-02 6,352E-02
LISTADOS ESTADÍSTICOS ESTUDIO 2
AD ASD BD BSD
N 2 3 6 6
Parámetros normales a,b Media 85,0000 85,0000 59,6667 64,0000
Desviación típica
5,6569 6,2450 8,3825 12,6965
Diferencias relacionadas
Intervalo de confianza
Desviación Error típ. de para la diferencia
Media típ. la media Inferior Superior t gl Sig. (bilateral)
Par 1 PRE - POST -17,1667 3,4303 1,4004 -20,7665 -13,5668 -12,258 5 ,000
Prueba de Levene
para la igualdad de
varianzas Prueba T para la igualdad de medias
Intervalo de confianza
Diferencia Error típ de para la diferencia
F Sig. t gl Sig. (bilateral) de medias la diferencia Inferior Superior
PRE Se han asumido
,495 ,498 -,698 10 ,501 -4,3333 6,2111 -18,1725 9,5059
varianzas iguales
No se han asumido
-,698 8,663 ,504 -4,3333 6,2111 -18,4676 9,8009
varianzas iguales
POST Se han asumido
,408 ,538 -1,265 10 ,235 -6,5000 5,1386 -17,9496 4,9496
varianzas iguales
No se han asumido
-1,265 8,990 ,238 -6,5000 5,1386 -18,1263 5,1263
varianzas iguales
Diferencias relacionadas
Intervalo de confianza
Desviación Error típ. de para la diferencia
Media típ. la media Inferior Superior t gl Sig. (bilateral)
Par 1 PRE - POST -7,5000 3,5355 2,5000 -39,2655 24,2655 -3,000 1 ,205
Diferencias relacionadas
Intervalo de confianza
Desviación Error típ. de para la diferencia
Media típ. la media Inferior Superior t gl Sig. (bilateral)
Par 1 PRE - POST -7,0000 2,6458 1,5275 -13,5724 -,4276 -4,583 2 ,044
Prueba de Levene
para la igualdad de
varianzas Prueba T para la igualdad de medias
Intervalo de confianza
Diferencia Error típ de para la diferencia
F Sig. t gl Sig. (bilateral) de medias la diferencia Inferior Superior
PRE Se han asumido
,126 ,746 ,000 3 1,000 ,0000 5,5277 -17,5916 17,5916
varianzas iguales
No se han asumido
,000 2,470 1,000 ,0000 5,3852 -19,4190 19,4190
varianzas iguales
POST Se han asumido
2,813 ,192 -,122 3 ,911 -,5000 4,0995 -13,5463 12,5463
varianzas iguales
No se han asumido
-,147 2,760 ,893 -,5000 3,4034 -11,8847 10,8847
varianzas iguales