Está en la página 1de 650

TEMAS DE

MEDICINA INTERNA
TEMAS DE
MEDICINA INTERNA
Tomo 3

DR. REINALDO ROCA GODERICH

Dr. Varan V. Smith Smith


Dr. Eduardo Paz Presilla
Dr. Jorge Losada Gómez
Dra. Bertha Serret Rodríguez
Dr. Narciso Llamos Sierra
Dr. Ernesto Toirac Lamarque
Dra. María E. Noya Chaveco
Dr. Ricardo Morales Larramendi
Dra. Dania Cardona Garbey

4ta. edición

La Habana, 2002
Datos CIP-Editorial Ciencias Médicas

Roca Goderich, Reinaldo


Temas de Medicina Interna / Reinaldo
Roca Goderich, Varan V. Smith Smith,
Eduardo Paz Presilla... [y otros].
La Habana: Editorial Ciencias Médicas; 2002.
3t. 1815p. ilus.

Incluye bibliografía al final de cada parte.


Cada tomo tiene un índice.
ISBN: 959-7132-82-6
959-7132-85-0

1. MEDICINA INTERNA 2.EDUCACIÓN MÉDICA


3. LIBROS DE TEXTO I. Smith Smith Varan V.
II. Paz Presilla Eduardo.
WB 18

EDICIÓN: Zeila Robert Lora


Guadalupe Hechavarría Rivera
DISEÑO: Orlando Hechavarría Ayllón
REALIZACIÓN DE CUBIERTA: Sergio Daquín
COMPOSICIÓN: Virginia Pacheco Lien

El trabajo editorial fue realizado por la Editorial Oriente del Instituto Cubano del libro.

Primera edición, 1967


Segunda edición, 1975
Tercera edición, 1985

© Reinaldo Roca Goderich, 2001


© Sobre la presente edición:
Editorial Ciencias Médicas, 2002

Editorial Ciencias Médicas


Centro Nacional de Información de Ciencias Médicas
Calle E No. 452 e/ 19 y 21, El Vedado
Ciudad de La Habana, 10400, Cuba.
Correo electrónico: ecimed@infomed.sld.cu
Fax: 333063. Télex: 0511202
Telef: 325338, 324519 y 324579
AUTORES

DR. REINALDO ROCA GODERICH


Director del libro. A cargo de las secciones de enfermedades cardiovasculares,
renales y de geriatría.
Dr. en Ciencias Médicas. Profesor de Mérito. Profesor Titular y Consultante de
Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba.
Especialista de Segundo grado en Medicina Interna del Hospital Provincial Clini-
coquirúrgico Docente Saturnino Lora. Jefe del Departamento Docente de Ciencias
Clínicas de la Facultad de Medicina No. 1 del Instituto Superior de Ciencias Médi-
cas de Santiago de Cuba.

Dr. Varan V. Smith Smith


A cargo de la sección de enfermedades infecciosas.
Dr. en Ciencias Médicas. Profesor de Mérito. Profesor Titular y Consultante de
Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba.
Especialista de Segundo Grado en Medicina Interna de la Facultad de Medicina
No.1 del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba.

Dr. Eduardo Paz Presilla


A cargo de las secciones de enfermedades del sistema nervioso, reumáticas y del
colágeno, e inmunología y alergia.
Profesor Auxiliar y Consultante de Medicina Interna del Instituto Superior de Cien-
cias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina In-
terna del Hospital General Santiago, Santiago de Cuba.

Dr. Jorge Losada Gómez


A cargo de la sección del sistema hemolinfopoyético.
Profesor Titular de Laboratorio Clínico del Instituto Superior de Ciencias Médicas
de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Hematología y Jefe del
Servicio de Hematología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora,
Santiago de Cuba.

Dra. Bertha Serret Rodríguez


A cargo de las secciones de bioética, genética y atención primaria.
Profesora Titular de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas
de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina Interna de la
Facultad de Medicina No.1 del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago
de Cuba. Profesora de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de
Enfermería de la Universidad Autónoma de Querétaro, México.

Dr. Narciso Llamos Sierra


A cargo de la sección de enfermedades infecciosas.
Profesor Auxiliar y Consultante de Medicina Interna del Instituto Superior de
Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Me-
dicina Interna del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Ambrosio Grillo, San-
tiago de Cuba.

Dr. Ernesto Toirac Lamarque


A cargo de la sección de enfermedades del sistema respiratorio.
Profesor Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina Inter-
na del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. María E. Noya Chaveco


A cargo de la sección de enfermedades digestivas.
Profesora Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina Inter-
na del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Ricardo Morales Larramendi


A cargo de las secciones de medio interno, intoxicaciones y enfermedades por
agentes físicos.
Profesor Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina Inter-
na verticalizado en Medicina Intensiva y Urgencias. Jefe de Servicio de la
Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Sa-
turnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. Dania Cardona Garbey


A cargo de la sección de enfermedades del sistema endocrino y del metabolismo.
Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado y Jefa del Servicio de Endo-
crinología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago
de Cuba.
COLABORADORES

Dr. Ramón Abella Linares


Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna. Jefe del
Servicio de Oxigenación Hiperbárica del Hospital General Santiago, Santiago
de Cuba.

Dra. Soraida Cándida Acosta Brooks


Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del Hos-
pital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Osvaldo Aguilera Pacheco


Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Neurología. Jefe del Ser-
vicio de Neurología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora,
Santiago de Cuba.

Dr. Carlos M. Angulo Elers


Especialista de Primer Grado en Cardiología. Responsable de Ecocardiogra-
fía del Servicio de Cardiología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Satur-
nino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Alfredo Aput Majfud


Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del Hos-
pital Oncológico Conrado Benítez, Santiago de Cuba.

Dra. Sandra Ayala Serret


Especialista de Primer Grado en Genética del Hospital Infantil Sur Docente,
Santiago de Cuba.

Dra. Mabel Blanco Granda


Profesora Auxiliar de Anatomía Patológica del Instituto Superior de Ciencias
Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Anatomía
Patológica. Jefa del Departamento de Anatomía Patológica del Hospital Cli-
nicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.
Dr. Juan Blasco Casanova
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna. Espe-
cialista de Segundo Grado en Reumatología. Jefe del Servicio de Reumatolo-
gía del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Max Santiago Bordelois Abdo


Profesor Auxiliar de Medicina Interna de la Facultad de Ciencias Médicas de
Guantánamo. Especialista de Segundo Grado en Medicina Interna, verticalizado
en Medicina Intensiva. Jefe del Servicio de Cuidados Intensivos del Hospital
Docente Agostinho Neto, Guantánamo.

Dr. José Orlando Bosch Castellanos


Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del Hos-
pital Clinicoquirúrgico Docente Dr. Ambrosio Grillo, Santiago de Cuba.

Dra. Omaida Candebat Fernández


Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Nefrología. Jefa del
Servicio de Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora,
Santiago de Cuba.

Dr. Juan Castellanos Tardo


Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Cardiología del
Cardiocentro del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santia-
go de Cuba.

Dra. Lilian Cordiés Jackson


Profesora Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias
Médicas de La Habana. Especialista de Segundo Grado en Medicina Interna
del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Hermanos Ameijeiras, Ciudad de La
Habana.

Dra. María Teresa Cordiés Jackson


Profesora Titular de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina Inter-
na del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Sixto B. Corona Mancebo


Profesor Titular de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de La
Habana. Especialista de Segundo Grado en Cirugía General del Hospital
Clinicoquirúrgico Docente Hermanos Ameijeiras, Ciudad de La Habana.

Dra. Eva Crespo Mengana


Asistente de Pediatría del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago
de Cuba. Especialista de Primer Grado en Pediatría. Jefa del Departamento de
Medicina General Integral de la Facultad de Medicina No.1 del Instituto Su-
perior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba.

Dr. Juan de la Cruz Fernández


Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Cardiología. Jefe del Ser-
vicio de Hemodinámica del Cardiocentro del Hospital Clinicoquirúrgico Do-
cente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Mauro Cuba de la Cruz


Especialista de Primer Grado en Medicina General Integral. Especialista de
Primer Grado en Nefrología del Hospital Lucía Íñiguez, Holguín.

Dr. Héctor del Cueto Espinosa


Doctor en Ciencias Médicas. Profesor Titular – Consultante de Cirugía del
Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de
Segundo Grado en Cirugía General. Director del Cardiocentro del Hospital
Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Oscar Cutié Bresler


Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna.
Vicedirector de Epidemiología Clínica del Hospital Clinicoquirúrgico Docen-
te Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Humberto Díaz García


Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del Hos-
pital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Ernesto Díaz Trujillo


Asistente de Medicina Interna de la Facultad de Ciencias Médicas de Guantá-
namo. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna, verticalizado en
Medicina Intensiva del Hospital Docente Agostinho Neto, Guantánamo.

Dr. Carlos Felipe Domínguez Eljaiek


Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna. Jefe del
Departamento de Especialización de la Dirección Provincial de Salud, Santia-
go de Cuba.

Dr. Rafael Domínguez Peña


Especialista de Primer Grado en Neurocirugía del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Guido Elías Leyva


Asistente de Cirugía de la Facultad de Ciencias Médicas de Guantánamo. Es-
pecialista de Primer Grado en Cirugía General del Hospital Docente Agostinho
Neto, Guantánamo.
Dra. Nilia Victoria Escobar Yéndez
Profesora Titular de Medicina Interna y Vicerrectora de Investigaciones del
Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de
Segundo Grado en Medicina Interna.

Dr. Antonio Felizola Rodríguez


Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Cardiología. Jefe del
Servicio de Cuidados Intensivos del Cardiocentro del Hospital Clinicoquirúr-
gico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. Reina Genellys Fernández Camps


Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna.
Farmacoepidemióloga del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora,
Santiago de Cuba.

Dr. Juan José Ferrer Ramos


Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Nefrología del Hospital
Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Justo Filiú Ferrera


Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna.
Vicedirector Clínico del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora,
Santiago de Cuba.

Dra. Juana Adela Fong Estrada


Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna. Espe-
cialista de Segundo Grado en Geriatría. Jefa del Servicio de Geriatría del
Hospital Clinicoquirúrgico Docente Dr. Ambrosio Grillo, Santiago de Cuba.

Dr. Francisco Gómez Álvarez


Especialista de Primer Grado en Neurología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Omar González de la Cruz


Profesor Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina In-
terna del Hospital Militar Docente Joaquín Castillo Duany, Santiago de Cuba.

Dr. Pedro O. González Corona


Profesor Auxiliar de Laboratorio Clínico del Instituto Superior de Ciencias
Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Laboratorio
Clínico del Hospital General Santiago, Santiago de Cuba.
Dr. Orestes González Martínez
Profesor Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna.
Vicedirector Docente del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Dr. Ambrosio
Grillo, Santiago de Cuba.

Dra. Florángel Guasch Saint-Félix


Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del Hos-
pital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. Xiomara Hechavarría Masabeau


Especialista de Primer Grado en Gastroenterología del Hospital Clinicoqui-
rúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Enrique Emilio Jiménez López


Especialista de Primer Grado en Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. Mirtha Laguna Delisle


Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del Hos-
pital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Román Lannes Sansó


Especialista de Primer Grado en Anestesiología y Reanimación, verticalizado
en Medicina Intensiva, Nutriólogo de la Unidad de Cuidados Intensivos e
Intermedios del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago
de Cuba.

Dr. José Antonio Lamotte Castillo


Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del Sanatorio del SIDA,
Santiago de Cuba.

Dra. Anelis Rosalía León Columbié


Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Gastroenterología. Jefa
del Servicio de Gastroenterología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Sa-
turnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Walter Lizardo León Goire


Profesor Auxiliar de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Jefe del Departamento Docente de Cirugía de la Facultad
de Medicina No. 1 del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de
Cuba. Especialista de Segundo Grado en Cirugía General del Hospital Clini-
coquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.
Dr. Aniceto León Moreno
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Cardiología. Responsable
de Ergometría y Rehabilitación del Servicio de Cardiología del Hospital
Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. José Ramón Malleuve Palancar


Especialista de Segundo Grado en Cardiología. Jefe de la Unidad de Cuidados
Intensivos Coronarios del Servicio de Cardiología del Hospital Clinicoquirúr-
gico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Eduardo Márquez Capote


Especialista de Primer Grado en Medicina Interna, verticalizado en Medicina
Intensiva. Intensivista de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Cli-
nicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Jorge Miranda Quintana


Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna.
Vicedirector Clínico del Hospital General Santiago, Santiago de Cuba.

Dr. Carlos Miyares Rodríguez


Profesor Auxiliar y Consultante de Medicina Interna del Instituto Superior de
Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Me-
dicina Interna de la Facultad de Medicina No. 2 del Instituto Superior de Cien-
cias Médicas, Santiago de Cuba.

Dr. Noel L. Moya González


Profesor Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina Inter-
na. Jefe del Servicio de Medicina Interna del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. Daysi Antonia Navarro Despaigne


Doctora en Ciencias Médicas. Asistente de Medicina Interna del Instituto Su-
perior de Ciencias Médicas de La Habana. Especialista de Segundo Grado en
Endocrinología del Instituto Nacional de Endocrinología, Ciudad de La Ha-
bana.

Dr. Artemio Ortiz Sánchez


Asistente de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago
de Cuba. Especialista de Primer Grado en Cirugía General del Cardiocentro
del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. Cristina Julieta Pastó Pomar


Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del
Departamento de Medicina General Integral de la Facultad de Medicina No. 1
del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Máster en
Atención Primaria de Salud, Santiago de Cuba.

Dra. Cecilia Teresa Peña Sisto


Especialista de Primer Grado en Medicina General Integral. Especialista de
Primer Grado en Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturni-
no Lora, Santiago de Cuba.

Dra. Doris Perdomo Leyva


Profesora Auxiliar de Farmacología del Instituto Superior de Ciencias Médi-
cas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Farmacología de
la Facultad de Medicina No. 1 del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba.

Dra. Olga Lidia Pereira Despaigne


Especialista de Primer Grado en Medicina General Integral. Especialista de
Primer Grado en Endocrinología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Sa-
turnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Arístides Pérez Pérez


Doctor en Ciencias Médicas. Profesor Titular de Medicina Interna del Institu-
to Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer
Grado en Medicina Interna del Hospital Militar Docente Joaquín Castillo
Duany, Santiago de Cuba.

Dr. Ernesto Piferrer Ruiz


Especialista de Primer Grado en Medicina Interna, verticalizado en Medicina
Intensiva. Intensivista de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Cli-
nicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Luis Roberto Piña Prieto


Instructor de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago
de Cuba. Especialista de Primer Grado en Cirugía General del Hospital Cli-
nicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. Marjoris Piñera Martínez


Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del Hos-
pital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. Carolina Plasencia Azorey


Doctora en Ciencias Médicas. Instructora de Medicina General Integral del
Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de
Primer Grado en Medicina General Integral. Jefa del Departamento de Medi-
cina General Integral de la Facultad de Medicina No. 2 del Instituto Superior
de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba.
Dra. Cecilia del Pozo Hessing
Especialista de Primer Grado en Medicina Interna, verticalizada en Medicina
Intensiva. Jefa de la Unidad de Cuidados Intermedios del Hospital Clinico-
quirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Ángel Prado Legrá


Profesor Auxiliar de Laboratorio Clínico del Instituto Superior de Ciencias
Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Laboratorio
Clínico. Jefe del Servicio de Laboratorio Clínico del Hospital General Santia-
go, Santiago de Cuba.

Dr. Adolis Puig Rivas


Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del Hos-
pital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Alberto Manuel Puig Rosell


Especialista de Primer Grado en Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. María Caridad Pujadas Figueras


Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Neumología del Hospital
Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Modesto Quiala Romero


Especialista de Primer Grado en Medicina General Integral. Especialista de
Primer Grado en Endocrinología del Hospital General Santiago, Santiago de
Cuba.

Dr. Delmar Ramos Arias


Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Neumología. Jefe del Ser-
vicio de Neumología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Dr. Ambrosio
Grillo, Santiago de Cuba.

Dr. Agustín Jorge Ravelo Viñuela


Especialista de Primer Grado en Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Orestes Rodríguez Arias


Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Endocrinología. Jefe del
Departamento Docente de Ciencias Clínicas del Hospital Militar Docente Joa-
quín Castillo Duany, Santiago de Cuba.

Dra. Zoraida Rodríguez Bell


Especialista de Primer Grado en Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.
Dr. Aurelio Rodríguez Fernández
Especialista de Primer Grado en Medicina Interna, verticalizado en Medicina
Intensiva. Máster en Toxicología Clínica. Intensivista de la Unidad de Cuida-
dos Intermedios del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, San-
tiago de Cuba.

Dr. Zenén Rodríguez Fernández


Profesor Auxiliar de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Cirugía General del
Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. Inés María Rodríguez Hechavarría


Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna.
Vicedirectora de Asistencia Médica de la Dirección Provincial de Salud, San-
tiago de Cuba.

Dr. Inocente Rodríguez Reyes


Especialista de Primer Grado en Hematología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Luis P. Rodríguez Sánchez


Profesor Auxiliar de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Cirugía General. Jefe del
Servicio de Cirugía General del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturni-
no Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Nicolás Rojas Aldana


Especialista de Primer Grado en Medicina Interna, verticalizado en Medicina
Intensiva. Intensivista de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Cli-
nicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Luis Felipe Rosillo Correa


Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna. Jefe del
Servicio de Medicina Interna del Hospital Clinicoquirúrgico Docente
Dr. Ambrosio Grillo, Santiago de Cuba.

Dr. Arturo Sánchez Borges


Profesor Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Cardiología.
Jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Sa-
turnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. María Teresa Santiago Sierra


Especialista de Primer Grado en Endocrinología del Hospital Clinicoquirúrgi-
co Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.
Dr. Justo Tamayo Velázquez
Especialista de Primer Grado en Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. María Victoria de la Torre Rosés


Asistente de Medicina Interna de la Facultad de Ciencias Médicas de Guantá-
namo. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna. Jefa del Departa-
mento de Medicina General Integral de la Facultad de Ciencias Médicas de
Guantánamo.

Dr. Sergio del Valle Díaz


Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del Hos-
pital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dra. Monserrat Vázquez Sánchez


Asistente de Medicina General Integral del Instituto Superior de Ciencias
Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina
General Integral. Máster en Atención Primaria de Salud. Vicedecana de Aten-
ción Primaria de la Facultad de Medicina No. 1 del Instituto Superior de Cien-
cias Médicas de Santiago de Cuba.

Dr. Miguel Ernesto Verdecia Rosés


Especialista de Primer Grado en Medicina Interna, verticalizado en Geriatría.
Jefe del Servicio de Geriatría del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturni-
no Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Luis Vergés Callard


Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna,
verticalizado en Reumatología. Reumatólogo del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. Juan Enrique Yara Sánchez


Profesor Titular de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de San-
tiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Angiología del Hospital
Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba.

Dr. René Zambrano González


Especialista de Primer Grado en Endocrinología del Centro de Atención al
Diabético, Santiago de Cuba.
ÍNDICE

Primera parte. PRINCIPIOS DE INMUNOLOGÍA


1. Introducción a la inmunología/ 25
2. Inmunoglobulinas/ 31
3. Complemento/ 35
4. Respuesta inmune/ 38
5. Alergia/ 43
6. Alergia medicamentosa/ 49
Shock anafiláctico/ 54
Enfermedad del suero/ 56
7. Aspectos inmunolólogicos del trasplante de órganos/ 58
Bibliografía/ 62

Segunda parte: ENFERMEDADES DE LAS ARTICULACIONES Y DEL


COLÁGENO
8. Aspectos generales de las artropatías/ 65
9. Inflamación/ 70
Inflamación aguda/ 71
Inflamación crónica/ 74
10. Artritis reumatoidea/ 83
11. Artritis infecciosa aguda/ 95
Algunas formas etiológicas de artritis infecciosa/ 98
Artritis tuberculosa/ 98
Artritis viral/ 99
Artritis piógena crónica/ 99
12. Osteoartritis, artrosis o enfermedad degenerativa articular/ 101
13. Gota e hiperuricemia/ 107
Artritis gotosa aguda/ 109
Gota tofácea crónica/ 111
14. Artritis reactivas/ 115
Síndrome de Reiter/ 116
Otras artritis reactivas/ 119
Artritis reactivas de origen gastrointestinal/ 119
Artritis reactivas trasmitidas sexualmente/ 119
15. Aspectos generales de las colagenosis/ 122
16. Lupus eritematoso diseminado/ 127
17. Esclerodermia/ 135
18. Dermatomiositis y polimiositis/ 140
19. Síndromes vasculíticos/ 146
Poliarteritis nudosa/ 147
Arteritis temporal/ 150
Granulomatosis de Wegener/ 151
Angeítis alérgica granulomatosa o enfermedad de Churg-Strauss/ 153
Síndrome de superposición/ 154
Angeítis por hipersensibilidad/ 154
20. Púrpura trombocitopénica trombótica/ 156
21. Enfermedad mixta del tejido conectivo/ 159
Bibliografía/ 162

Tercera parte: ENFERMEDADES DEL SISTEMA ENDOCRINO Y


ALTERACIONES DEL METABOLISMO
22. Regulación neuroendocrina/ 167
23. Acromegalia/ 171
Gigantismo/ 175
24. Diabetes insípida/ 177
Diabetes insípida central o neurogénica/ 177
Diabetes insípida nefrogénica/ 178
25. Bocio eutiroideo/ 181
Bocio endémico/ 182
Bocio esporádico/ 184
26. Hipertiroidismo/ 185
Bocio tóxico difuso/ 185
Tiroiditis silente (Hashitoxicosis)/ 187
Otras formas de hipertiroidismo/ 187
Tiroiditis posparto/ 187
27. Hipotiroidismo en el adulto/ 192
28. Tiroiditis/ 197
Tiroiditis subaguda, granulomatosa o De Quervain/ 197
Tiroiditis autoinmune/ 198
29. Neoplasias del tiroides/ 200
30. Enfermedades de las paratiroides/ 204
Hipoparatiroidismo/ 204
Hiperparatiroidismo primario/ 208
31. Diabetes mellitus/ 211
Cetoacidosis diabética/ 234
Coma diabético hiperosmolar no cetósico/ 243
Acidosis láctica/ 246
Diabetes y embarazo/ 248
Diabetes y cirugía/ 251
32. Hipoglicemia/ 253
33. Hiperfunción corticosuprarrenal/ 257
Síndrome de Cushing/ 257
34. Insuficiencia corticosuprarrenal/ 264
Enfermedad de Addison/ 265
Insuficiencia corticosuprarrenal aguda. Crisis adrenal/ 268
35. Enfermedades de las gónadas/ 270
Hipogonadismo masculino/ 271
Hipogonadismo masculino primario/ 272
Disgenesia de los túbulos seminíferos/ 272
Hipogonadismo masculino secundario/ 274
Hipogonadismo femenino/ 276
Hipogonadismo femenino prepuberal primario/ 277
Disgenesia gonadal/ 277
Hipogonadismo femenino pospuberal secundario/ 280
Síndrome de Sheehan/ 280
Hirsutismo y virilización/ 281
Ginecomastia/ 282
36. Obesidad/ 284
37. Trastornos del metabolismo de los lípidos. Las hiperlipoproteinemias/ 289
Lipoproteínas/ 289
Alteraciones del metabolismo de las lipoproteínas. Hiperlipoproteinemias/ 293
Hiperlipoproteinemias secundarias/ 294
Hiperlipoproteinemias primarias/ 294
Hiperlipoproteinemias mixtas primarias/ 295
Otras hiperlipoproteinemias (dislipoproteinemias) normolipémicas/ 295
38. Esteroides corticosuprarrenales/ 303
Glucocorticoides/ 303
Mineralocorticoides/ 305
Sexosteroides/ 306
Bibliografía/ 307

Cuarta parte: ENFERMEDADES DEL SISTEMA HEMOLINFOPOYÉTICO


39. Recuento anatomofisiológico del sistema hemolinfopoyético/ 315
40. Anemias/ 318
41. Anemias ferropénicas/ 321
42. Anemias megaloblásticas/ 327
Déficit de vitamina B12/ 329
Déficit de ácido fólico/ 330
43. Anemia aplástica/ 333
44. Síndrome mielodisplástico/ 338
45. Neutropenia/ 341
Agranulocitosis/ 342
46. Anemia poshemorrágica aguda/ 344
47. Anemias hemolíticas/ 346
48. Anemias hemolíticas intracorpusculares/ 351
Anemias por defecto del hematíe/ 351
Esferocitosis hereditaria/ 351
Ovalocitosis o eliptocitosis/ 353
Anemias por defecto de la hemoglobina/ 354
Anemia drepanocítica/ 355
Enfermedad por hemoglobina C/ 363
Talasemias/ 364
Talasemia alfa/ 364
Talasemia beta/ 365
Estado heterocigoto o talasemia menor/ 365
Estado homocigoto o talasemia mayor/ 365
Talasemia beta-delta/ 366
Persistencia hereditaria de hemoglobina fetal/ 366
Hemoglobinuria paroxística nocturna/ 366
49. Anemias hemolíticas extracorpusculares/ 369
Anemias hemolíticas isoinmunes/ 369
Enfermedad hemolítica del recién nacido/ 369
Transfusión de sangre incompatible/ 369
Anemias hemolíticas autoinmunes/ 369
AHAI por anticuerpos calientes/ 370
AHAI por anticuerpos fríos/ 372
Hemoglobinuria paroxística a frigore/ 373
AHAI inducidas por drogas/ 373
Anemia hemolítica por trauma mecánico/ 374
50. Anemias hemolíticas mixtas/ 376
Anemias hemolíticas enzimopénicas/ 376
Deficiencia de glucosa-6- fosfato deshidrogenasa/ 377
Deficiencia de piruvatoquinasa/ 378
51. Policitemia/ 379
Policitemia absoluta primaria/ 379
Policitemia absoluta secundaria/ 381
Policitemia relativa/ 382
Metaplasia mieloide agnogénica/ 382
52. Hemostasia/ 385
53. Diátesis hemorrágicas/ 390
Púrpura de Schönlein-Henoch/ 391
Púrpura trombocitopénica idiopática/ 392
Hemofilia/ 396
Enfermedad de von Willebrand/ 400
54. Coagulación intravascular diseminada/ 402
55. Transfusión de sangre/ 406
56. Leucemias/ 413
Leucemias agudas/ 414
Leucemia mieloblástica aguda/ 418
Leucemia promielocítica aguda (M3)/ 419
Leucemia linfoblástica aguda/ 423
Leucemia mieloide crónica/ 426
Leucemia linfoide crónica/ 429
Leucemia de células vellosas/ 433
57. Linfomas/ 435
Enfermedad de Hodgkin/ 442
Linfomas no Hodgkin/ 447
Linfomas no Hodgkin de identidad especial/ 449
Linfomas MALT/ 449
Linfomas del manto/ 449
Linfoma de Burkitt/ 449
Linfomas no Hodgkin cutáneos de células T/ 450
Micosis fungoide / síndrome de Sézary/ 450
Linfoma / leucemia de células T del adulto/ 450
Linfadenopatía angioinmunoblástica/ 451
58. Hiperesplenismo/ 453
59. Discrasia de células plasmáticas/ 455
Macroglobulinemia de Waldenström/ 456
Mieloma múltiple/ 457
Enfermedad de cadenas pesadas/ 466
Gammapatía monoclonal de significación indeterminada/ 466
Amiloidosis/ 467
60. La terapéutica de las enfermedades malignas/ 471
Bibliografía/ 478

Quinta parte: ENFERMEDADES MICROBIANAS Y PARASITARIAS


61. Mecanismos de defensa contra las infecciones/ 485
62. Síndrome febril/ 494
63. Infección nosocomial/ 503
64. Tétanos/ 514
65. Fiebre tifoidea/ 518
66. Enfermedad diarreica aguda/ 524
Shigelosis/ 524
Amebiasis intestinal/ 526
67. Brucelosis/ 533
68. Actinomicosis/ 536
69. Sepsis/ 538
70. Cólera/ 551
71. Peste bubónica/ 555
72. Un acercamiento a las enfermedades virales y su tratamiento/ 558
73. Mononucleosis infecciosa/ 561
74. Rabia o hidrofobia/ 564
75. Fiebre amarilla/ 570
76. Dengue/ 573
Fiebre por dengue/ 575
Dengue secundario/ 576
77. Infección-enfermedad por VIH/SIDA/ 579
78. Paludismo/ 596
79. Algunas enfermedades producidas por distintos tipos de gérmenes que no
existen en Cuba/ 604
Filariasis/ 604
Filariasis linfática/ 605
Oncocercosis y filariasis cutáneas/ 606
Toxoplasmosis/ 607
Leishmaniasis/ 608
Leishmaniasis visceral o kala-azar/ 608
Esquistosomiasis o bilharziasis/ 609
Pinta/ 611
Tripanosomiasis/ 611
Tripanosomiasis africana/ 611
Tripanosomiasis americana o enfermedad de Chagas/ 613
Tracoma. Conjuntivitis granular. Oftalmía egipcia/ 614
80. Parasitismo intestinal/ 616
Ascariasis/ 616
Enterobiasis/ 617
Tricocefaliasis/ 618
Necatoriasis y anquilostomiasis/ 619
Enfermedades causadas por tenias/ 621
Teniasis/ 621
Equinococosis/ 622
Giardiasis/ 623
81. Leptospirosis/ 625
82. Micosis profundas o sistémicas/ 630
Histoplasmosis/ 632
Candidiasis (moniliasis)/ 633
Aspergilosis/ 636
Criptococosis o torulosis/ 638
83. Antibióticos/ 640
Bibliografía/ 651
Primera Parte

PRINCIPIOS DE INMUNOLOGÍA
1
INTRODUCCIÓN A LA INMUNOLOGÍA

La inmunidad, concebida primitivamente como la Los linfocitos T son los encargados de la inmunidad
propiedad del animal vivo de defenderse y vencer celular, e interactúan de forma directa con el antíge-
las infecciones, comprende hoy, además, los méto- no o por medio de la elaboración de sustancias quí-
dos para prevenirlas, el estudio del trasplante de ór- micas que no son anticuerpos. Tanto los linfocitos B
ganos, el uso de la sangre y sus derivados, así como como los T reaccionan específicamente con un antí-
la determinación de hormonas, medicamentos, etc., geno determinado, el cual tiene regiones molecula-
en los líquidos corporales. res de configuración especial que se conocen como
La patología humana y la animal estudian las en- epitopos, de las que depende su especificidad.
fermedades que tienen un sustrato etiopatogénico en Entre los linfocitos B y T, los macrófagos, las
la inmunidad alterada, bien sea por exceso (enfer- células dendríticas y las células de Langerhans, se
medades por hipersensibilidad) o por defecto (en- establece una cooperación funcional que se estudia-
fermedades por inmunodeficiencias), y aún más, el rá más adelante. En la figura 1.1 se resume lo que se
cáncer, en algunas de cuyas variedades se demues- conoce en la actualidad acerca del origen, el de-
tra un factor inmunológico presente. sarrollo y la diferenciación de los linfocitos B y T.
El cuerpo humano posee un sistema especializado Las células mayores multipotenciales se convierten
al cual corresponden las funciones inmunológicas.
en linfocitos B o T inmaduros, y otras células hema-
Éstas permiten al organismo reconocer y responder
topoyéticas. Los linfocitos T inmaduros emigran al
específicamente a las sustancias o células nocivas
timo, donde maduran. Las células B inmaduras se
(antígenos) que proceden del exterior, o que surgen
transforman en linfocitos B maduros en la médula
dentro de él (célula cancerosa, por ejemplo). Cuan-
ósea. Cada célula inmunocompetente tiene progra-
do el sistema inmunológico entra en contacto por
mado en su génesis el antígeno contra el cual debe
primera vez con un antígeno, generalmente "guarda
memoria" de éste, y en encuentros futuros con él, la reaccionar. Esta propiedad se la otorga el receptor
respuesta es más intensa y rápida. de antígeno, cuyo gen tiene la capacidad de reorga-
La inmunidad se logra por la concatenación de nizarse y combinarse de manera potencialmente ili-
una serie de factores, celulares y humorales, que han mitada.
ido apareciendo progresivamente en el desarrollo El contacto con el antígeno trae aparejada la acti-
filogenético. Estos factores o mecanismos inmuni- vación de células T o B mediadoras de la inmunidad
tarios son específicos (linfocitos, células plasmáti- celular y humoral, respectivamente. Algunos linfo-
cas, inmunoglobulinas) e inespecíficos (properdina, citos T necesitan la participación de los macrófagos
activación del complemento, fagocitosis y las cito- u otra célula presentadora de antígeno para su acti-
cinas). vación, mientras que algunos linfocitos B requieren
Los linfocitos son las células inmunocompeten- de linfocitos T como auxiliares de la respuesta in-
tes. Se han identificado dos grandes grupos de ellos: mune, o como supresores de ésta.
los B y los T. Los linfocitos B son los encargados de Los mecanismos inmunológicos son fisiológicos,
la inmunidad humoral, mediante la producción de y por lo tanto, protectores. Sus alteraciones produ-
anticuerpos directamente y mediante su transforma- cen enfermedades. La inmunología clínica se encarga
ción en células plasmáticas. Los anticuerpos son in- del estudio de éstas y constituye uno de los campos de
munoglobulinas que interaccionan con el antígeno. más impetuoso avance de la medicina contemporánea.

25
Célula madre
autorregeneradora

Progenitora
mieloide Célula madre Progenitora linfoide
pluripotencial

Megaca-
riocito Linfocito B Timo Célula NK

Eritrocito Eosinófilo Linfocito T

Basófilo
Granulocito-
monocito

Neutrófilo Monocito-
macrófago

Fig. 1.1. Origen, desarrollo y diferenciación de los linfocitos B y T.

Todo órgano o sistema puede ser afectado por una genos y autoanticuerpos). Sin embargo, el estudio y
enfermedad o por alteración de la inmunidad. desarrollo posterior de la inmunología han permitido
demostrar la existencia de autoanticuerpos, aun en
Tolerancia y autoinmunidad condiciones, si no fisiológicas, al menos no relacio-
Un carácter esencial y básico del sistema inmuno- nadas con enfermedad, hecho observado con relati-
competente es el reconocimiento de las sustancias va frecuencia en las edades avanzadas de la vida.
propias del organismo y la distinción de las ajenas, Además, la patología y en particular la etiopatoge-
por lo cual reacciona destruyendo éstas y respetan- nia se han enriquecido con el conocimiento de los
do y tolerando aquéllas. Este reconocimiento de lo mecanismos y las lesiones autoinmunes.
propio se desarrolla durante la vida fetal y en el Las enfermedades autoinmunes se consideran
como el resultado de una perturbación de la toleran-
neonato, períodos en que va madurando el sistema
cia inmunológica, que no es más que el estado de no
inmunitario paralelamente a la "presentación" de
respuesta específica a sustancias que normalmente
todos los antígenos propios.
la producen. Esta tolerancia es un proceso activo fi-
En la experimentación animal, durante la vida
siológico y depende de dos factores fundamentales:
fetal o al nacimiento, si a un animal se le injerta piel
la forma física y la dosis del antígeno.
de otro de la misma especie, posteriormente en la Los antígenos cuya molécula es un nanómero in-
vida de este animal aceptará y tolerará injertos de ducen tolerancia con mayor facilidad que aquéllos
piel del mismo donante porque su sistema inmuno- en que dicha molécula está constituida por polímeros.
lógico reconoce como propios los antígenos que le Cuando las cantidades de antígeno son muy bajas o
fueron presentados mientras no había alcanzado la muy grandes se produce tolerancia; a la primera se
madurez. Cuando se rompe este estado de reconoci- le conoce como tolerancia de zona baja y a la se-
miento de lo propio o tolerancia se desarrolla la en- gunda, tolerancia de zona alta o parálisis inmunoló-
fermedad autoinmune. gica.
A finales del siglo XIX y comienzos del XX, Ehrlich En el hombre, la respuesta de células B necesita
expresó el concepto del "horror autotóxico", que- de células T inductoras o auxiliares, de donde se
riendo significar con ello la no producción de anti- deduce que la producción de autoanticuerpos impli-
cuerpos dirigidos contra los tejidos propios del ca directamente un trastorno del control inmunorre-
organismo, que actuarían como antígenos (autoantí- gulador de las células T.

26
Se logra tolerancia con más facilidad en el recién 1. Antígenos ocultos o aislados del sistema inmu-
nacido que en el adulto, por inmadurez y desarrollo nitario liberados por un traumatismo, una in-
incompleto del sistema inmunológico. El "horror fección u otra causa. Es el caso de la oftalmía
autotóxico" se explica hoy como una tolerancia in- simpática, los anticuerpos antimúsculo cardía-
munológica desarrollada en el feto y en el período co, etc.
posnatal, al entrar en contacto todos los antígenos 2. Alteración física, química o biológica de lo pro-
corporales con el sistema inmunitario inmaduro. En pio que se convierte en autoantígeno. Por ejem-
el ratón MRL (laboratorio), que padece una enfer- plo, la fotosensibilidad en el desarrollo de
medad autoinmunitaria parecida al lupus eritemato- autoanticuerpos a una proteína cutánea altera-
so, se ha demostrado un defecto en la molécula de da por los rayos ultravioleta de la luz solar.
superficie (fas/APO-1) de la célula T, necesaria para 3. Antígenos exógenos que comparten similitud
la muerte en el timo de linfocitos autorreactivos, que química con componentes orgánicos normales,
se "siembran" en los órganos linfoides periféricos. por ejemplo, el antígeno estreptocócico y el
Se piensa que en el ser humano pudiera ocurrir algo corazón, en la fiebre reumática; la vacuna anti-
similar en síndromes lupoides del niño. rrábica y el encéfalo, en la encefalitis posvacu-
Probablemente la reacción autoinmune sea repri- nal.
mida por la acción de poblaciones específicas de 4. Cambio estructural y funcional de células in-
células T supresoras, que al fallar en sus funciones munocompetentes con producción de autoan-
permiten a la autoinmunidad manifestarse. Otro ticuerpos por factores conocidos como, por
mecanismo propuesto es una perturbación en la ejemplo, en el lupus eritematoso, o los anticuer-
regulación de la actividad de los anticuerpos anti- pos monoclonales que se observan ocasional-
diotipo (anticuerpo dirigido contra el sitio de com- mente en enfermos con linfoma.
binación de un anticuerpo y el antígeno).
Los factores genéticos tienen importancia en la El fenómeno autoinmune es a veces un epifenó-
autoinmunidad: los familiares de enfermos tienen meno, y la patogenia primaria, el resultado de una
una alta frecuencia de enfermedades autoinmunes respuesta inmune a un antígeno no conocido (virus,
con el mismo tipo de anticuerpos; las enfermedades por ejemplo).
autoinmunes son más comunes en gemelos idénti- Las enfermedades autoinmunes pueden ser de
órganos, como la hepatitis crónica, la tiroiditis de
cos; las mujeres se afectan más que los hombres; la
Hashimoto, etc.; o sistémicas, como el lupus erite-
influencia genética es de predisposición y sobre ella
matoso diseminado. No siempre la reacción autoin-
deben actuar factores ambientales e inmunológicos.
mune implica un daño anatómico. En ocasiones los
Los autoanticuerpos se producen después del daño
problemas son funcionales, como en la enfermedad
a los tejidos (por ejemplo, anticuerpo antimúsculo de Graves-Basedow, en la que un autoanticuerpo, el
cardíaco después de un infarto, o también cuando el estimulador tiroideo de acción prolongada (LATS),
sistema inmunitario entra en contacto con antígenos contra un antígeno específico de la membrana celu-
corporales que fueron aislados anatómica y funcio- lar, estimula la producción de hormonas tiroideas.
nalmente durante el desarrollo fetal, por ejemplo, la El antígeno sobre el que se fija el LATS es el recep-
tiroglobulina y la mielina. Todos estos antígenos tor de la tirotropina.
quedan expuestos en ocasión de un traumatismo, una
infección, etc.). Células inmunocompetentes
Los virus influyen mucho en el desarrollo de la Las células inmunocompetentes se organizan en ór-
autoinmunidad, pues lesionan el sistema inmunoló- ganos específicos del tejido linfoide, como el timo,
gico y estimulan la producción de autoanticuerpos. los ganglios linfáticos y el bazo. También hay gran
Los antígenos virales también suelen quedar expues- acumulamiento de estas células en órganos no pro-
tos en las membranas de las células infectadas y ser piamente linfoides, como las amígdalas, las placas
el blanco de anticuerpos, que destruyen la célula. de Peyer del intestino delgado y el apéndice; ade-
En resumen, teóricamente la autoinmunidad se más, se las encuentra en los lugares de actividad in-
desarrolla por cuatro mecanismos posibles. flamatoria.

27
Hay dos variedades de linfocitos, los que depen- Los linfocitos B constituyen el 15 % de los linfo-
den del timo o linfocitos T y los que dependen de la citos circulantes en la sangre, el 75 % de la médula
bursa de Fabricio, órgano de las aves, cercano a la ósea y el 50 % del bazo. Son las células principales
cloaca o linfocitos B. de los centros germinales de la corteza y los cordo-
Si a un pájaro se le extirpa el timo, las funciones nes medulares de los ganglios linfáticos. Se identi-
de inmunidad celular cesan y el nivel de inmunoglo- fican mediante la tinción inmunofluorescente, que
bulinas desciende algo; pero si se le extrae la bursa, permite definir los receptores y las inmunoglobuli-
las funciones de la inmunidad celular se conservan nas a ellos adheridas.
y prácticamente desaparecen las inmunoglobulinas.
Se acepta que en el ser humano la médula ósea es el Linfocitos T
equivalente de la bursa de Fabricio de las aves. Son más pequeños que los B, y a ellos corresponden
la inmunidad celular y la regulación de la respuesta
Linfocitos B inmune humoral por acción auxiliar facilitadora o
Son las únicas células capaces de producir anticuer- supresora de ésta. Son las células responsables del
pos. En su membrana portan los receptores de antí- rechazo de trasplantes y de la eliminación de las
geno. En el 75 % de los linfocitos B el receptor es células tumorales. Junto a los macrófagos, actúan
IgM e IgD, en el 24 % IgG, y en el 1 % IgA. Estas contra el bacilo de la tuberculosis, las infecciones
inmunoglobulinas se fijan por el fragmento Fc de su por hongos, los virus, los protozoarios y en general,
molécula y queda disponible la parte que reacciona contra microrganismos intracelulares.
con el antígeno. Esta interacción del antígeno con el Sus receptores para antígenos son moléculas de
receptor de membrana activa la célula B, que se de- membrana estructuralmente relacionadas con los
sarrolla y secreta activamente anticuerpos. La for- anticuerpos, pero diferentes. El receptor de antíge-
ma más evolucionada de la célula B activada es la no de la célula T (TCR) está codificado por los genes
célula plasmática, verdadera fábrica para la síntesis de la superfamilia de las Ig. Este receptor reconoce
y secreción de anticuerpos. sólo antígenos peptídicos unidos a proteínas codifi-
La diferenciación y multiplicación del linfocito B cadas por los genes del complejo mayor de histo-
forma un clono de células plasmáticas que sinteti- compatibilidad que se expresan en la superficie de
zan el anticuerpo específico para el antígeno con que
otras células.
tiene programado reaccionar. El antígeno, por lo tan-
Cuando entran en contacto con el antígeno, los
to, selecciona al linfocito B que puede responder a
linfocitos T sensibilizados elaboran sustancias quí-
su estímulo (teoría de la selección clonal).
micas conocidas como citocinas, que al actuar so-
Además de los receptores de membrana para el
bre los macrófagos, neutrófilos, linfocitos B y otras
antígeno, que son inmunoglobulinas, los linfocitos B
células T, regulan y amplifican la respuesta inmuni-
poseen receptores del componente 3 activado del
taria. Las citocinas son producidas también por los
complemento (C3b), así como de otros componen-
macrófagos, los linfocitos B y otras células más.
tes de éste (C4, C1g). Los receptores de membrana
Las principales son:
no son fijos, y cuando se unen al antígeno se reorga-
• Interferón, especialmente el gamma.
nizan en zonas de los polos celulares (capping); des-
de aquí son incorporados y estimulan la síntesis de • Factor de necrosis tumoral alfa y beta (FNTα y
Ig y la multiplicación y diferenciación clonal. FNTβ).
Algunos linfocitos (T y B) estimulados por el an- • Interleucina (IL), de las cuales se conocen per-
tígeno evolucionan a células de memoria (linfocitos fectamente 18 variedades.
de memoria), capaces de sobrevivir 20 o más años, • Factor transformador de crecimiento.
quizás mantenidas por una estimulación crónica de
• Factores estimulantes del crecimiento de las cé-
baja intensidad por antígenos ambientales persisten-
lulas hematopoyéticas (son las CSF, del inglés
tes, que presentan reacción cruzada con el antígeno
Colony Stimulator Factor).
original. El desarrollo de estas células es esencial
para el éxito de la vacunación como método pre- • Las que actúan sobre los macrófagos:
ventivo de las infecciones. a) Factor quimiotáctico.

28
b) Factor inhibidor de la migración. por anticuerpos, que algunos atribuyen a la célula
c) Factor activador. citocida natural (célula NK, del inglés natural killer).
Los linfocitos T constituyen el 70 u 80 % de los
• Las que actúan sobre los granulocitos:
linfocitos circulantes en la sangre y el 90 % de los
a) Factor quimiotáctico.
del conducto torácico. Se sitúan en las áreas corti-
b) Factor inhibidor de la migración. cales profundas de los ganglios linfáticos y en las
• Factor activador de los osteoclastos. periarteriolares de la pulpa blanca esplénica.
• Factor inhibidor del crecimiento de las células
diana (células sobre las que se ejerce la acción Células citocidas naturales
inmunológica). (células NK)
• Quemocinas: Inducen quimiotaxia y emigración Estas células siempre han sido consideradas linfoci-
de leucocitos, de las que se conocen 4 varie- tos que al carecer de marcadores de membrana B o T,
dades. fueron llamadas células "nulas". Son linfocitos gran-
des, con numerosos gránulos citoplasmáticos, capa-
ces de producir la lisis de diferentes células tumorales
Los linfocitos se subdividen en poblaciones fun-
y las infectadas por virus y por Salmonella tiphy.
cionalmente distintas y las mejor definidas son las
No requieren de anticuerpos o complemento para
células T colaboradoras o auxiliares (TH, del inglés
ejercer su acción lítica, y su receptor para el antíge-
helper) y las T citolíticas o citotóxicas. Las células T
no es miembro de la superfamilia de las Ig, que tie-
supresoras no parecen ser una población distinta a
nen un receptor de Fc de la IgG, identificado con el
las anteriores, pues no está aclarado si la supresión
CD16. Constituyen el 10 % de los linfocitos de la
de la respuesta inmunitaria está mediada por células T,
sangre y el bazo, y son raras en los ganglios linfáti-
que en disímiles situaciones funcionan como célu-
cos. No necesitan expresión de productos del com-
las supresoras, citolíticas o colaboradoras.
plejo mayor de histocompatibilidad (CMH) con la
Ha sido muy importante el descubrimiento de es-
célula diana, y si se logra que ésta exprese dichos
tas células T, que al mostrar en sus membranas pro- productos puede inhibirse la acción de la célula NK.
teínas diversas permiten su identificación. Así, la
mayoría de las células T colaboradoras expresan la Células presentadoras de antígeno
proteína CD4, y la mayoría de las citolíticas la pro-
Son células que reciben el antígeno, lo procesan, lo
teína CD8 (CD significa "agregados de diferencia-
mezclan con productos del CMH y lo exteriorizan
ción", del inglés cluster of differentiation).
en su superficie donde es reconocido por el linfoci-
De la ruptura de linfocitos T sensibilizados y del to T. Las principales células presentadoras de antí-
sobrenadante del cultivo de dichos linfocitos, se geno son las siguientes:
obtiene una sustancia de bajo peso molecular, lla-
mada factor de transferencia porque cuando se ad- Macrófagos
ministra a otro organismo le trasmite inmunidad Son células que provienen de la estirpe monocítica
celular. En cultivo las células T se transforman en de la médula ósea. Los monocitos circulantes (3 a 8 %
células blásticas cuando se las pone en contacto con de los leucocitos) están incompletamente desarro-
el antígeno. llados. Hay más monocitos adheridos a las superfi-
Los linfocitos T poseen receptores de membrana cies endoteliales que circulando (3 a 1). Cuando ellos
para los eritrocitos de carnero. Cuando ambos se pasan a los tejidos se convierten en macrófagos. Aquí
incuban juntos se observa una roseta de hematíes reciben nombres especiales que designan localiza-
alrededor de un linfocito T. ciones específicas. Así, son las células de la microglia
En la superficie de la membrana de algunos de del sistema nerviosos central; las células de Kupffer
ellos existe un receptor molecular del fragmento Fc en los sinusoides hepáticos; macrófagos alveolares
de la IgM; otros, tienen además un receptor de mem- en los pulmones y los osteoclastos en el hueso. Pue-
brana para el fragmento Fc de la IgG. De estas célu- den activarse por una gran variedad de estímulos,
las, que son citotóxicas o citolíticas, depende una especialmente por las citocinas. Ellos a su vez pro-
variedad de inmunidad celular particular mediada ducen y segregan citocinas.

29
Los macrófagos destruyen bacterias, hongos y y están dispersas por la epidermis, donde reciben el
células tumorales. Poseen receptores de membrana nombre de células de Langerhans.
para IgG y C3b por medio de los cuales fijan e in- Se originan a partir de precursores en la médula
corporan complejos inmunes. Ellos procesan y pre- ósea de estirpe mononuclear. Son las células pre-
sentan el antígeno a los linfocitos T y B. Se ha sentadoras a los linfocitos TCD4+ colaboradores y
observado como un puente entre ambas células por a las células T inmaduras. Las células de Langerhans
el que pasaría ARNm del macrófago al linfocito para captan el antígeno en la piel y lo transportan al gan-
"informarlo e instruirlo" sobre la molécula del antí- glio linfático vecino.
geno. La otra variedad de la célula dendrítica es la foli-
cular. Se encuentra en los centros germinales de los
Células dendríticas folículos linfoides de los ganglios linfáticos, el bazo
Se identifican morfológicamente por tener proyec- y el tejido linfático, asociada a mucosas. Estas célu-
ciones membranosas o espinosas. La variedad las no derivan de precursores de la médula ósea y
interdigitante está presente en el intersticio de la no están emparentadas con las células interdigitan-
mayoría de los órganos, en las zonas donde abun- tes. Atrapan antígenos unidos a anticuerpos o pro-
dan las células T en los ganglios linfáticos y el bazo, ductos del complemento y las presentan a las células B.

30
2

INMUNOGLOBULINAS

Desde los trabajos de Tiselius (1937) se conoce que Tipos de inmunoglobulinas


cada proteína sérica tiene una carga eléctrica espe- La inmunoelectroforesis ha permitido identificar has-
cífica, así, si se coloca suero en un campo eléctrico, ta el momento cinco tipos de inmunoglobulinas. Al
se podrán separar unas proteínas de otras; a la albú- inicio hubo una gran confusión en relación con la
mina corresponde la mayor movilidad y a la gam- nomenclatura, hasta que un comité se reunió en Pra-
maglobulina la menor. Con este método, Tiselius ga (1964) y recomendó designar las inmunoglobuli-
logró separar cuatro fracciones: albúmina, alfaglo- nas con el símbolo Ig seguido con una letra específica
bulina, betaglobulina y gammaglobulina. para cada clase, así: IgG, IgA, IgM, IgD e IgE.
Posteriormente, con la introducción del papel IgG. Constituye cerca del 70 % del total de inmu-
como medio de soporte (electroforesis de zona), este noglobulinas (700 a 1 500 mg %). Tiene la propie-
método se popularizó. En un inicio se pensó que la dad de atravesar la placenta, y por lo tanto, es esencial
fracción gamma era más o menos homogénea, pero en la defensa contra las infecciones en las primeras
con el advenimiento de la ultracentrífuga, ideada por semanas de la vida. Difunde bien al espacio extra-
Svedberg (1940), fue posible el estudio del peso vascular, donde es el arma principal para neutralizar
molecular de estas proteínas. Se encontraron gam- toxinas bacterianas. La IgG es la inmunoglobulina
maglobulinas con un peso molecular de alrededor más importante en la respuesta inmune secundaria,
de 1 000 000 que correspondían a una constante de y de ella existen cuatro subtipos denominados IgG1,
sedimentación de 19 a 20 s (unidades ultracentrífuga IgG2, IgG3 e IgG4. No todos ellos pueden fijar com-
Svedberg), mientras que otras, con un peso molecu- plemento, pues se ha demostrado que sólo lo hacen
lar distinto, también tenían diferentes constantes de la IgG1 e IgG3, y débilmente, la IgG2.
sedimentación. Por lo tanto, se comenzó a conside- IgM (macroglobulina). Representa alrededor del
rar que estas gammaglobulinas no eran tan homo- 7 % de las inmunoglobulinas (50 a 190 mg %). Está
géneas como se creía al principio. compuesta por cinco subunidades que contienen diez
En 1953, Grabar y Williams elaboraron un nue- cadenas pesadas y diez cadenas ligeras (Fig. 2.1).
vo método y lo denominaron inmunoelectroforesis, Los anticuerpos IgM son los primeros que aparecen
el cual permitió demostrar definitivamente la hete- en el desarrollo humano, se producen precozmente
rogeneidad de las gammaglobulinas. Al conocerse en la respuesta inmune y están en especial bien
su importancia fundamental en el funcionamiento dotados para la aglutinación y la fijación del com-
del sistema inmunológico humoral, se les dio el nom- plemento. En este grupo se encuentran las isohema-
bre de inmunoglobulinas. glutininas (Anti A y Anti B), las aglutininas en frío
y el factor reumatoideo. Son las inmunoglobulinas
Concepto de mayor peso molecular. Es probable que tengan
Las inmunoglobulinas constituyen un grupo com- un papel de particular importancia en los casos de
plejo de proteínas con actividad de anticuerpo, que bacteriemia.
varían en sus funciones de acuerdo con la diferen- IgA. (Fig. 2.2). Constituye cerca del 21 % de las
cia en su estructura química. inmunoglobulinas (140 a 420 mg %). Está presente

31
IgD. Compone cerca del 0,2 % de las inmunoglo-
bulinas (3 a 40 mg %) y tiene una vida media muy
corta en el plasma (2,8 días). El descubrimiento de

Fig. 2.1. Representación esquemática de la molécula de IgM. Fig. 2.3. Representación esquemática de la molécula de IgA con
la pieza secretora (azul oscuro).

en el suero, principalmente en forma de monómero,


IgD en la superficie de algunos linfocitos, a menudo
pero tiende a formar polímeros con la llamada cade-
con IgM, ha hecho pensar que ambas moléculas ac-
na J. Existe una forma de IgA llamada secretora
túan de manera coordinada como receptoras de an-
con propiedades antibacterianas y antivirales, que
tígenos y controlan la activación o supresión del
predomina en la mayor parte de las secreciones
corporales (saliva, lágrima, calostro, secreciones in- linfocito. Funciona casi exclusivamente como una
testinales y respiratorias) y que consiste en dos mo- inmunoglobulina unida a las membranas y muy poca
léculas de IgA (Fig. 2.3) y una estructura proteica es secretada en el plasma.
adicional llamada pieza secretora. La IgA se sinteti- IgE. Se encuentra en tan pequeñas cantidades que
za en las células plasmáticas de la lámina propia de ha sido difícil su identificación. Tiene un papel im-
la mucosa y la pieza secretora, en las células epite- portante como mediadora de una serie de reaccio-
liales. Los anticuerpos IgA recubren a los microrga- nes alérgicas en el hombre. Se une a receptores de
nismos e inhiben su adherencia a la superficie de las superficie de los mastocitos, con desgranulación de
células de la mucosa y de esta manera impiden su éstos y liberación de aminas vasoactivas. Sus nive-
entrada a los tejidos del organismo. les aumentan en la infección por ciertos parásitos,
Los agregados de IgA pueden activar la vía alter- particularmente helmintos.
nativa del complemento. En la actualidad se descri-
ben dos subtipos, denominados IgA1 e IgA2. Estructura de las inmunoglobulinas
Hay tres categorías de variaciones estructurales de
las inmunoglobulinas que forman determinantes
antigénicos, y que son usados para clasificarlas.
Isotipos: Sirven para distinguir entre las princi-
pales clases de anticuerpos de una especie dada y
son los mismos en todos los individuos normales de
esa especie. Por lo tanto, son reconocidos por anti-
cuerpos de una especie distinta (suero heterólogo)
pero no por anticuerpos de la misma especie (suero
homólogo). Hay cinco isotipos de cadenas pesadas
(M, G, A, D y E) y dos isotipos de cadenas ligeras
(kappa y lambda).
Alotipos: Son determinantes distintos que refle-
Fig. 2.2. Representación esquemática de la molécula de IgA. jan pequeñas diferencias entre individuos de la mis-

32
ma especie, en la secuencia de aminoácidos de in- Cada cadena, tanto las ligeras como las pesadas,
munoglobulinas similares. Estas diferencias están de- tiene una región constante y una variable (Fig. 2.5),
terminadas por genes alélicos. especificadas por genes distintos, sintetizadas sepa-
Idiotipos: Son únicos para las moléculas genera- radamente y ensambladas en una molécula intacta
das por un clono de células productoras de anticuer- de anticuerpo.
pos. Cada molécula de IgG (Fig. 2.4) consta de cuatro
cadenas de polipéptidos: dos son cadenas ligeras y regiones variables regiones hipervariables
cadena
dos son cadenas pesadas. La unión entre estas cade- ligera
cadena
nas se efectúa fundamentalmente a través de puen- pesada
tes disulfuro ( S – S ) y están alineadas de tal manera Fab
que las regiones variables son adyacentes. Hay dos regiones
hipervariables
tipos de cadenas ligeras en los seres humanos, que
puente disulfuro
se han designado como κ ( kappa ) y λ ( lambda ). regiones constantes
Ambas pueden estar presentes en todas las clases de Fc

inmunoglobulinas, pero una molécula de inmuno-


globulina intacta estará compuesta por un solo tipo Fig. 2.5. Prototipo de IgG con sus regiones constantes y varia-
de cadena ligera, es decir, de dos cadenas kappa o de bles.
dos cadenas lambda, pero no de una kappa y una
lambda. Las regiones variables forman el sitio de recono-
cimiento del antígeno de la molécula de anticuerpo
y su estructura única tiene un particular ordenamiento
Cadena ligera
CO de determinantes, o idiotipos, que son marcadores
NH2 S
seguros de un clono específico de células, ya que
S
Cadena pesada cada anticuerpo es creado y secretado por un solo
NH2 clono celular.
S CO
Para especificar las regiones variables de las in-
S munoglobulinas cada clono produce un reagrupa-
Cadena pesada
S
miento génico secuencial único, cuyo resultado es
S
una única molécula de inmunoglobulina.
Cadena ligera
IgG como prototipo
Fig. 2.4. Representación esquemática de la molécula de IgG.
de inmunoglobulina
Las cadenas pesadas son específicas para cada En el modelo de Edelman-Gally de la molécula de
clase de inmunoglobulina y determinan la particu- IgG, que se representa en la figura 2.6, se observa
laridad inmunoquímica de ésta. Su denominación es en la parte superior la molécula completa con sus
la siguiente: cadenas pesadas ( H ) y ligeras ( L ). Poster demos-
tró que la hidrólisis con papaína la divide en tres
IgG γ (gamma) fragmentos, dos de los cuales se denominan frag-
IgA α (alfa) mentos Fab y el otro fragmento Fc.
IgM µ (my) Como se puede observar, el fragmento Fc está
IgD δ (delta) compuesto por fragmentos de ambas cadenas pesa-
IgE ε (épsilon) das, mientras que el fragmento Fab se compone de
una cadena ligera y del resto de una de las cadenas
A su vez, cada tipo de cadena pesada tiene varios pesadas, cuya otra porción es parte del fragmen-
subtipos, como se observa a continuación: to Fc.
La reducción y alquilación del fragmento Fab lo
Tipo γ α µ δ ε
fracciona en sus dos componentes: por una parte,
Subtipo 1; 2; 3; 4 1; 2 1; 2 1; 2 __ una cadena ligera completa (que puede ser kappa o

33
lambda ) y una parte mayor de cadena pesada que se Especificidad antigénica
ha denominado fragmento Fd.
Hay especificidades antigénicas presentes en las
H H
moléculas de inmunoglobulinas, diferentes entre los
individuos de una misma especie, que representan
L L
la diversidad genética de ellas. De la misma manera
que existen varios grupos sanguíneos, con una par-
ticularidad antigénica del eritrocito de un ser humano
dado, también hay distintas especificidades antigé-
fragmento fragmento fragmento nicas para cada inmunoglobulina.
Fab Fc Fab Existen dos grandes grupos de factores antigénicos
fragmento de las inmunoglobulinas:
Fd

L 1. Grupo Gm, presente sólo en la cadena pesada


de la IgG.
Fig. 2.6. Modelo de Edelman-Gally de la molécula de IgG.
2. Grupo Km, presente sólo en las cadenas li-
El fragmento Fab es el que posee el sitio de unión geras.
con el antígeno, mientras que el fragmento Fc, es el
responsable de una serie de propiedades biológicas Se ha descrito también un grupo adicional (Oz)
de las inmunoglobulinas (interacción con el comple- en las cadenas ligeras.
mento, fijación a la piel y a los macrófagos, regula- Dentro de cada grupo existen varios subgrupos,
ción del catabolismo de las inmunoglobulinas, etc.). cada uno de ellos gobernados por factores genéticos.

34
3

COMPLEMENTO

Vía clásica
Concepto
El sistema del complemento comprende un grupo C1 C4 C2
de más de 30 proteínas séricas y de la superficie
celular, que interactúan entre ellas mismas y con C3 C5;6;7 C8 C9 (lisis celular)
otras moléculas del sistema inmunitario. Poco des-
pués del descubrimiento de los anticuerpos, Bordet
demostró que si a las bacterias se les añadía un sue- Vía alternativa
ro fresco que contenía un anticuerpo bacteriano a En 1968, un comité internacional de nomenclatu-
37°C, se producía la lisis de éstas. Pero si el suero ra definió 11 componentes del complemento, que se
se calentaba a 56°C o más, perdía su capacidad de designan con la letra C y un número arábigo del 1
producir lisis. Como los anticuerpos son termoesta- al 9. El C1 está formado por 3 subunidades que se
bles, Bordet concluyó que el suero debía contener denominan C1q, C1r y C1s. El número indica su po-
un componente termolábil que ayudaba o “com- sición en la secuencia de activación, con excepción
plementaba” la función de producir lisis de los del C4, que actúa entre el C1 y el C2. Los compo-
anticuerpos, y a este componente lo denominó com- nentes enzimáticos activos se designan con una
plemento. barra encima de los símbolos (C1s significa C1s ac-
Estas proteínas séricas interactúan de una mane- tivado).
ra altamente específica y a pesar de su baja concen- Los fragmentos que provienen de los componen-
tración, constituyen un sistema biológico de extrema tes originales se designan con una letra minúscula
complejidad e importancia. Su mecanismo de ac- (C3a, C3b, C4a, etc.) y a las formas inactivas se les
agrega la letra i (C3bi). Los componentes que inter-
ción recuerda a la cascada enzimática de la coagu-
vienen en la vía alternativa han sido denominados
lación, pues la activación del primer componente
B, D y P (properdina).
C1 provoca la activación en secuencia y amplifica-
Todos los componentes tienen bajas concentracio-
da del resto de los componentes, de manera que la nes séricas y entre ellas el de más alta concentración
entrada al sistema de una sola molécula de C1 ori- es el C3 (1 200 mg /ml). Los genes que intervienen
gina la activación de miles de moléculas de los últi- en la regulación de la síntesis de los componentes
mos componentes. del complemento, tienen relación con los que regu-
Como se verá más adelante, existen dos vías de lan la síntesis de los antígenos del sistema mayor de
activación del complemento. La vía filogenética más histocompatibilidad.
antigua de ambas se denomina vía alternativa por-
que fue la segunda que se descubrió. La otra vía se Activación del complemento
denomina vía clásica y ambas convergen en una vía Los componentes del complemento están presentes
final común que da lugar al llamado complejo de en el plasma de una forma no activada. Su activa-
ataque a la membrana. ción sucesiva se efectúa por dos vías: la clásica y la
El componente más importante es el C3, punto alternativa.
de unión común para la vía clásica y la alternativa, Vía alternativa. Se activa en ausencia de anticuer-
como se expone en el esquema siguiente: pos y es, por lo tanto, un mecanismo de la inmunidad

35
innata. Se pone en marcha cuando el C3 es convertasa de C3 de la vía clásica, que actuando
hidrolizado por el agua y se forma un complejo ines- sobre este último lo escinde en C3a y C3b. Esto da
table denominado C3i. La proteína llamada factor B, lugar a un nuevo complejo, el C4b2a3b, convertasa
unida al C3i, se hace susceptible a la proteína factor D, de C5 en la vía clásica. Ésta inicia la activación de
que escinde al factor B y libera un fragmento pe- los componentes terminales del sistema del comple-
queño Ba y otro más grande Bb, que está asociado mento, que culmina con la formación del complejo
al C3i. El complejo C3Bb es inestable, pero se esta- de ataque de la membrana. Este proceso se inicia
biliza si se une a otra proteína, la properdina. por la escisión de C5 en C5a y C5b por la ya descri-
El C3b es generado continuamente en la circula- ta convertasa de C5. El C5b activa consecutivamen-
ción, a través de la fase fluida de la vía alternativa. te a C6, C7, C8 y C9, forma el complejo C5b; 6; 7;
El complejo C3bBb es la convertasa de C5 de la 8; 9; con capacidad de lisis, y poros en la membrana
vía alternativa. celular, que permiten la entrada de potasio y calcio,
Después de esta fase, las vías clásica y alternati- y provocan un flujo de agua al interior de las célu-
va convergen y ocurre la misma secuencia terminal las, con su lisis osmótica o muerte por las altas con-
en la activación del complemento. centraciones de calcio.
Vía clásica. Es uno de los principales mecanis-
mos efectores de la inmunidad humoral. Es activada Acciones biológicas del sistema
por la unión del C1 a la porción Fc del anticuerpo del complemento
que se ha unido al antígeno.
Las acciones biológicas del sistema del complemento
La IgA, IgD e IgE no pueden activar la vía clási-
son aspectos individuales de un sistema integrado,
ca. Por otra parte, sólo ciertas subclases de IgG son
que es capaz de producir inflamación y de facilitar
activadores eficaces de C1; las IgG3 e IgG1 tam-
la localización del agente infeccioso.
bién lo son. La IgG2 es un activador débil y la IgG4
Los fragmentos C3a, C4a y C5a son conocidos
no activa al complemento. Una sola molécula de C1
como anafilotoxinas, los cuales favorecen la per-
debe unirse a la vez, como mínimo, a dos porciones
meabilidad vascular, la liberación de aminas vaso-
de Fc de la IgG. La IgM, que es un pentámero, pue-
activas, tales como la histamina de las células
de asociarse con mucha más eficacia al complemento
cebadas y de los basófilos, e inducen la liberación
que la IgG, que es un monómero. Únicamente los
de enzimas lisosomales de los granulocitos. Ade-
complejos antígeno-anticuerpo, y no los anticuer-
más, el C5a induce la migración de leucocitos en el
pos libres, activan al complemento.
área de activación del complemento.
El C1 es un complejo trimolecular formado por
las subunidades C1q, C1r y C1s, el cual necesita de EFECTOS BIOLÓGICOS DE PRODUCTOS
iones de calcio. El C1q es la pieza de unión de este DEL COMPLEMENTO
complejo a la inmunoglobulina; después de la cual
se activa C1r, que a su vez activa al C1s y le confie- C3a, C4a, C5a Liberación celular de aminas
vasoactivas
re actividad de esterasa.
Facilitación de la permeabilidad vascular
Existe un grupo de moléculas, denominadas Contracción del músculo liso
agrupinas, que se asemejan al C1q y pueden activar Inducción de la liberación de enzimas
el complemento independientes del anticuerpo, o lisosomales
bien se unen a receptores de C1q de los leucocitos,
C5a Quemotaxis
plaquetas, células endoteliales, etc., y estimulan la Agregación granulocítica
actividad fagocítica de los leucocitos. Estimulación del metabolismo oxidativo
El C1s activa el C4, que es escindido en C4a y
C4b; este último tiene una importancia particular, Evidencia de la importancia biológica de este
pues se une a las superficies celulares y garantiza la sistema de defensa del organismo, es la marcada
activación del complemento de una manera estable susceptibilidad a las infecciones y a procesos in-
y eficaz en el lugar donde se localiza el anticuerpo. munológicos, que caracterizan a las deficiencias
A continuación, C4b activa el C2 que posteriormente congénitas o adquiridas de componentes del com-
es escindido en C2a y C2b. El complejo C4b2a es la plemento.

36
La activación del complemento exige una ade- inactivador del C1, lleva a una incontrolada activa-
cuada regulación en el lugar de la infección. Si sus ción de la vía clásica que produce el cuadro clínico
componentes son consumidos, no habrá activación del edema angioneurótico en estos enfermos.
de éstos en otros lugares de infección y por otra par- Deficiencias de otros componentes se observan
te, en un individuo normal puede haber una activa-
en el lupus eritematoso diseminado, en algunas glo-
ción inadecuada que produzca la destrucción de las
células. merulonefritis y en pacientes con infecciones repe-
En otras ocasiones el fallo reside en el sistema tidas.
regulador. Por ejemplo, un déficit congénito del

37
4

RESPUESTA INMUNE

Cuando una sustancia extraña penetra en el campo B, aunque este último es fundamentalmente produc-
de las defensas inmunológicas del organismo, el sis- tor de anticuerpos. Estas células que expresan en su
tema inmunitario responde y produce anticuerpos superficie moléculas clase II del CMH, se encargan
específicos, activa linfocitos T mediadores de la in- del procesamiento de antígenos extracelulares y su
munidad celular o provoca tolerancia. presentación a los linfocitos TCD4.
La sustancia extraña es el antígeno y reacciona Por otra parte, casi todas las células nucleadas del
con anticuerpos o linfocitos T. Algunos compues- organismo son capaces de expresar moléculas clase
tos químicos de peso molecular bajo (< 2 000) no I del CMH, comportarse como CPA y participar prin-
pueden inducir por sí solos una respuesta inmune, cipalmente en la presentación de antígenos intrace-
pero su unión con una proteína transportadora les lulares a los linfocitos TCD8. El complejo antígeno-
confiere antigenicidad. Estas sustancias se conocen producto clase I del CMH, en la superficie de la CPA,
como haptenos. es “reconocido” por el receptor (TCR) del linfocito
La respuesta inmune depende de varios factores, TCD8, que se activa convirtiéndose en célula diana
como la dosis del antígeno y su vía de entrada, así a través de citotoxicidad directa o por activación de
como de la respuesta del huésped. Por ejemplo, cuan- los mecanismos de apoptosis de dicha célula. Estos
do se administra la vacuna antipoliomielítica por vía mecanismos revisten especial importancia en la de-
oral, la respuesta inmune se origina en el intestino fensa antiviral y antitumoral.
mediante la producción de anticuerpos IgA, mien- En el caso de antígenos unidos a moléculas clase
tras que, administrada por vía parenteral, los anti- II del CMH en la superficie de la CPA, el complejo
cuerpos creados son IgG. así formado será reconocido por el linfocito TCD4,
La respuesta del huésped al antígeno está bajo que al activarse se convertirá en célula productora
el control genético del complejo mayor de histo- de citoninas, encargadas de activar otros grupos ce-
compatibilidad (CMH). El linfocito T es incapaz de lulares participantes en la respuesta inmune (macró-
reconocer los antígenos en su forma natural, y reco- fagos, neutrófilos, eosinófilos, etc.), a los linfocitos B
noce sólo a aquellos que se le presentan como pe- para su transformación en células plasmáticas pro-
queños péptidos lineales unidos a moléculas clase I ductoras de Ig, y a linfocitos TCD8 (células cito-
y clase II del CMH en la superficie de la célula pre- tóxicas), cuyo crecimiento y maduración favorecen
sentadora de antígeno (CPA). las interacciones producidas entre los distintos
Como es lógico, esto requiere de una elaboración subgrupos. Por las citocinas que segregan servirán
conocida como procesamiento antigénico, median- de autorregulación dinámica de todo el proceso. Una
te el cual las proteínas son en parte digeridas en el subpoblación pequeña de células TCD4 puede trans-
interior de la CPA; se seleccionan luego los frag- formarse en células citotóxicas con funciones simi-
mentos capaces de unirse a las moléculas clase I o lares a los linfocitos TCD8.
clase II y se traslada el complejo así formado a la Como se expuso anteriormente, la capacidad de
superficie de la CPA para su posterior presentación diferenciar lo ajeno de lo propio es una cualidad in-
al linfocito T. En el organismo, como ya se expuso, herente a las células T, hecho que justifica su posi-
existen 3 tipos celulares que se comportan como CPA ción determinante en la regulación y control de ambas
“profesionales”, que son el monocito macrófago, las vertientes de la respuesta inmune (humoral y celu-
células dendríticas y de Langerhans y el linfocito lar). Aunque el linfocito B es capaz de reconocer

38
antígenos a través de sus inmunoglobulinas de su- En estudios recientes se ha demostrado la exis-
perficie, no podrá activarse del todo para la produc- tencia de múltiples familias de cadenas beta en la
ción de anticuerpos sin la cooperación de la célula porción variable de la molécula del TCR, algunas
TCD4; dicha cooperación se lleva a efecto median- de las cuales son capaces de reaccionar con este
te las interleucinas IL-4, IL-5 y otras. superantígeno. La expresión selectiva de ciertas fa-
Estos mecanismos de la respuesta inmune, que se milias de cadena beta en pacientes con artritis reu-
han expuesto de forma general, son muy complejos; matoidea y enfermedad de Kawasaki, ha hecho
funcionan cohesionadamente estableciendo un sin- pensar que los microrganismos pudieran inducir el
número de relaciones funcionales que escapan a los desarrollo de estas enfermedades.
objetivos de este libro.
Mecanismos de daño inmunológico
Variedad de respuesta inmune La respuesta inmune, celular o humoral, representa
Cuando una célula inmunocompetente, B o T, se filogenéticamente una etapa superior en las defen-
expone por primera vez al antígeno específico, pa- sas orgánicas a la respuesta inflamatoria y la fagoci-
tosis, mecanismos defensivos primitivos cuyas bases
san varios días antes de que pueda detectarse una
son la opsonización, la activación del complemento
respuesta inmune, humoral o celular: es la respuesta
y la desgranulación de las células cebadas. Esta res-
primaria. Una vez pasada ésta, el organismo guarda
puesta debe concluir con la eliminación de la mate-
“memoria” (célula de memoria B o T). Una segun-
ria ajena que la originó, a través de la interacción
da exposición al antígeno provoca una respuesta in-
dinámica producida entre los elementos del sistema
mune poderosa, humoral o celular, en 4 o 5 días, a
inmune y las células y sustancias solubles mediado-
base de anticuerpos IgG o de células efectoras. Es la
ras de la respuesta inflamatoria (fagocitos, cascada
respuesta anamnésica o secundaria.
de la coagulación, complemento, etc.).
Los linfocitos B que reaccionan ante su antígeno
Este mecanismo consta de cuatro etapas:
específico, durante los primeros días de la respuesta
inmune primaria, producen IgM, que va siendo sus- a. Migración de leucocitos.
tituida progresivamente por IgG. El título de anti- b. Reconocimiento específico y no específico del
cuerpos alcanza su acmé entre la segunda y la cuarta antígeno por los linfocitos, macrófagos y com-
semanas, y luego desciende poco a poco; aunque se plemento.
conservan pequeños niveles por meses o años. El c. Amplificación de la respuesta inflamatoria por
cambio de IgM a IgG, IgA e IgE requiere la coope- la activación de efectores específicos e inespe-
ración de linfocitos T. Si ésta no tiene lugar, el úni- cíficos.
co anticuerpo que se produce es IgM. d. Destrucción del antígeno con participación de
Algunos antígenos provocan respuesta inmune linfocitos, macrófagos y neutrófilos, seguida de
humoral sin que sea necesaria dicha cooperación. la fagocitosis.
Son polímeros lineales y se degradan con lentitud
en el organismo. Ejemplo de ellos son polisacáridos La disfunción de cualquiera de estas fases puede
de neumococo, antígeno polimerizado de salmonella producir daños a los tejidos del huésped. Incluso,
y lipopolisacáridos. Ellos nada más estimulan a lin- una respuesta normal es capaz de producir daño
focitos B productores de IgM. hístico, como ocurre en los casos de la meningoen-
Generalmente, los antígenos son capaces de acti- cefalitis TB y la neumonía por Neumocistis carinii.
var un linfocito T por cada 10 000. Pero hay molé- La llegada de los linfocitos y de las otras células
culas antigénicas capaces de activar a más del 20 % de la inflamación y la fagocitocis, está mediada por
de las células T periféricas: son los superantígenos. la expresión de moléculas de adhesión por las célu-
En este grupo se incluyen las enterotoxinas estafilo- las endoteliales y los linfocitos.
cócicas, productos bacterianos diversos y proteínas Bajo el influjo del factor de necrosis tumoral
de retrovirus. Este fenómeno es el responsable del (FNT) y otras citocinas originadas por las células T
shock tóxico por estafilococos, pues provoca una li- y los macrófagos, se producen sustancias vasodila-
beración masiva de citocinas. tadoras, como la prostaciclina y el óxido nítrico; en

39
una región especializada de la vénula (llamada en En este momento puede observarse el desarrollo de
inglés high endothelial venule = HEV), se expresan “ampollas” en la membrana plasmática (zeiosis),
moléculas de adhesión, que unen los leucocitos al que constituye una señal para la fagocitosis por los
endotelio y facilitan su retención y posterior salida macrófagos. No se produce derrame del contenido
al tejido a través de éste. La célula endotelial, por celular al exterior y por ende no hay inflamación.
acción del FNT, produce quemocinas, favorecedo- La apoptosis es un proceso activo, capaz de sufrir
ras de dicha adhesión y de la migración linfocitaria. alteraciones y ocasionar enfermedad.
La inducción anormal de moléculas de adhesión Hay una enzima, la Bcl-2, que la inhibe. Si un
ha sido relacionada con la aparición y mantenimiento linfocito expresa la enzima, no se afecta por apopto-
de la inflamación en varias enfermedades inflama- sis, no muere y persiste. Se piensa que éste sea el
torias crónicas. El tratamiento con bloqueadores de mecanismo operante en el linfoma de células B.
estas moléculas ha evitado el desarrollo de diabetes
En la apoptosis participa una molécula de unión,
mellitus tipo I experimental, lo que abre un horizon-
que la favorece. Muchas células la expresan y se le
te promisorio en esta enfermedad y otras, como la
denomina Fas, identificada con el CD95. La combi-
artritis reumatoidea, tiroiditis de Hashimoto, enfer-
nación de moléculas de Fas la activa y es éste el
medad de Graves-Basedow, esclerosis múltiple, en-
mecanismo principal por el cual el linfocito citotóxi-
fermedad de Crohn y colitis ulcerativa idiopática.
El interferón gamma, la IL-1 e IL-10 son citoci- co mata la célula diana. Teóricamente, la ausencia
nas que con el FNT inducen la expresión de molé- de Fas en el linfocito puede llevar a su persistencia
culas de adhesión. y a linfadenopatía masiva y autoinmunidad. El sín-
drome de Canale-Smith se presenta en seres huma-
Resolución de la respuesta inmune nos que tienen anormalidad del Fas linfocitario.
La respuesta inmune necesita un control crítico, de Ciertos órganos, como la retina y el testículo, ex-
lo contrario la activación de los linfocitos T y B lle- presan una densidad alta de portadores de Fas en la
varía a la autodestrucción. El paso fundamental de superficie celular. Al linfocito que ataque estos ór-
esta regulación es la eliminación del antígeno. Al ganos le sobrevendrá la combinación de su Fas con
cesar la estimulación antigénica cesa la activación estos ligandos (portadores) de Fas, y sufrirá apopto-
del linfocito T (CD8 y CD4) y del linfocito B, y por sis. Se piensa que esta facultad de “ evasión inmu-
tanto, cesa también la producción de inmunoglobu- nológica” es utilizado en muchas células cancerosas.
linas y citocinas.
Como regulación adicional está el desarrollo de Reacciones por hipersensibilidad
anticuerpos antidiotipo, ya conocido por el capítulo Los mecanismos específicos de la inmunidad am-
introductorio a la inmunología. Cada uno de ellos plían y activan a los inespecíficos (inflamación, fa-
tiene idiotipos generadores a su vez de anticuerpos,
gocitosis, etc.) y de esa manera cumplen su función
que llegan a bloquear los receptores de las células
de protección y defensa.
B y T.
La entrada al medio interno de los antígenos es
Este fenómeno es la base de la prevención de la
impedida por una serie de barreras, anatómicas y
enfermedad por incompatibilidad Rh del recién na-
cido. funcionales, pero cuando éstas son franqueadas, el
Otro mecanismo, al que se le da mucha importan- antígeno es destruido por los procesos inmunológi-
cia, es la muerte celular programada o apoptosis, que cos. Sin embargo, estos procesos fisiológicos a ve-
proliferó durante la respuesta inmune. ces se hacen patológicos por exageración de la
La apoptosis es muy común en los invertebrados respuesta inmune y producen entonces daño infla-
y en el embrión de animales superiores. La célula matorio en los tejidos. Se habla así de reacción
que sufre este proceso pasa por diversos cambios hipersensible o reacciones por hipersensibilidad.
morfológicos; el primero es la condensación de la Desde 1960 las reacciones por hipersensibilidad
cromatina por la activación de una endonucleasa se clasificaron en cuatro tipos o variedades, aunque
endógena que degrada el ADN; a esto sigue la rup- posteriormente se le añadió un quinto tipo, no acep-
tura del núcleo colapsado en pequeños fragmentos. tado por todos:

40
1. Reacción tipo I o anafiláctica. La célula diana puede sufrir lisis por el complejo
2. Reacción tipo II citotóxica o citolítica. de ataque de la membrana (C5b-9) del complemen-
3. Reacción tipo III o por complejos inmunes. to. Ejemplos de enfermedades mediadas por la re-
4. Reacción tipo IV o mediada por células. acción tipo II son la anemia hemolítica autoinmune,
5. Reacción tipo V o por interferencia de sustan- la reacción por transfusión de sangre incompatible,
cias biológicas. la eritroblastosis fetal, la púrpura trombocitopénica
inmunológica, el síndrome de Goodpasture y otras.
Las reacciones tipo I, II, III y V se denominan En el caso de la citotoxicidad hematológica, la
reacciones de tipo inmediato, mientras que las de célula forme de la sangre es destruida por la fagoci-
tipo IV, por tener un curso más demorado, se cono- tosis en los órganos reticuloendoteliales. Los hema-
ce como hipersensibilidad retardada. tíes a su paso por el bazo u otro órgano rico en
Las manifestaciones clínicas de las reacciones por elementos reticuloendoteliales, son atacados por los
hipersensibilidad dependen de uno de los tipos ex- macrófagos y pierden porciones de su membrana,
puestos anteriomente o de la combinación de varios. por lo cual adquieren forma esférica, que los hace
Reacción tipo I. Este tipo de reacción es mediada vulnerables por la disminución de la resistencia me-
por anticuerpos IgE, producidos por el sistema in- cánica y osmótica.
munocompetente cuando se establece contacto con El síndrome de Goodpasture se caracteriza por
el antígeno por primera vez, los cuales se unen a la vasculitis pulmonar y glomerulonefritis. Estos cam-
superficie de la célula cebada o mastocito y al
bios inflamatorios del glomérulo y de los vasos
basófilo. El próximo encuentro con el antígeno pro-
pulmonares son producidos por la reacción antíge-
voca la desgranulación de los mastocitos y la libera-
no-anticuerpo que ocurre a nivel de la membrana
ción de sustancias mediadoras preformadas (triptasa,
basal glomerular y los vasos pulmonares.
histamina) o generadas de novo (leucotrienos, pros-
Reacción tipo III. La reacción antígeno-anticuer-
taglandinas), además de interleucinas 4 y 13. Estas
po forma complejos inmunes que circulan en la san-
sustancias producen vasodilatación, permeabilidad
gre, hasta que son atrapados por el filtro renal o se
capilar aumentada, hipersecreción glandular, espas-
mo del músculo liso e infiltración hística por eosi- depositan en los tejidos y las paredes vasculares. Al
nófilos y otras células inflamatorias. depositarse se activa el complemento, lo que provo-
Son ejemplos de enfermedades mediadas por la ca inflamación de los tejidos. Los neutrófilos fago-
reacción tipo I, el shock anafiláctico, el edema an- citan a los complejos inmunes y se liberan enzimas
gioneurótico, la urticaria, la rinitis alérgica, el asma lisosómicas potentes, responsables del grave daño
bronquial, la dermatitis atópica y otras. de los tejidos. La relación que haya entre la canti-
Reacción tipo II. En esta variedad, el antígeno se dad de antígeno y anticuerpo es decisiva. En caso
sitúa en la superficie de la membrana de una célula. de exceso de anticuerpos el complejo inmune for-
Puede ser un antígeno endógeno (autoantígeno) o mado precipita en el órgano donde se localiza el
exógeno. De estos últimos son muy importantes los antígeno o es fagocitado por los macrófagos y no
medicamentos que adquieren categoría de hapteno. hace daño. En presencia de exceso de antígenos el
El sistema inmunológico responde con la produc- complejo inmune es más soluble, causa reacción sis-
ción de anticuerpos IgM e IgG. Cuando el IgM témica o se deposita y se produce inflamación.
reacciona con el antígeno, se activa el complemen- La enfermedad del suero es el prototipo de la
to, lo cual conduce a la inflamación y la fagocitosis. reacción por hipersensibilidad tipo III. El lupus eri-
Cuando el anticuerpo IgG reacciona con el antígeno tematoso diseminado agudo, la neumonía por hiper-
puede que no se produzca activación del comple- sensibilidad y la endocarditis infecciosa subaguda,
mento, ya que los fagocitos (macrófagos y neutrófi- son otros ejemplos de enfermedades con mecanis-
los) poseen receptores de membrana para la porción mo patogénico de este tipo.
Fc de la IgG, con lo cual se promueve la fagocitosis Reacción tipo IV. Esta reacción de hipersensibi-
y la muerte celular. También la citotoxicidad me- lidad es la mediada por células T, que cuando se
diada por anticuerpos tiene importancia en esta re- ponen en contacto con el antígeno, se activan y se
acción. En este último caso, la célula efectora es la convierten en células efectoras o productoras de ci-
citocida natural (linfocito NK). tocinas, que en definitiva ocasionan inflamación y

41
promueven la fagocitosis, lo que resulta en daño de somiasis y reacción a toxinas como la beriliosis;
los tejidos. La capacidad de activar a los macrófa- además de las citadas más arriba.
gos es la base de la reacción tipo IV. Son ejemplos Reacción tipo V. Esta ocurre por la formación de
de enfermedades por ella la sinovitis de la artritis anticuerpos que reaccionan con sustancias biológi-
reumatoidea, la tiroiditis de Hashimoto, la dermati- camente activas que estimulan o anulan su función.
tis de contacto, el rechazo de trasplante renal, la en- Es lo que sucede con los autoanticuerpos contra el
fermedad de transplante contra huésped (trasplante factor intrínseco (anemia perniciosa), contra el re-
de médula ósea y otras). ceptor de acetilcolina en la unión neuromuscular
Este tipo de reacción de hipersensibilidad desem- (miastenia grave), anticuerpos de la membrana ce-
peña un papel fundamental en enfermedades como lular (resistencia a la insulina), el estimulador pro-
la tuberculosis, lepra, histoplasmosis, linfogranuloma longado tiroideo (enfermedad de Graves-Basedow),
venéreo, infecciones helmínticas como la esquisto- etcétera.

42
5

ALERGIA

Las reacciones alérgicas son eventos orgánicos en pués de la administración de algunos medicamen-
los cuales los tejidos normales son dañados por re- tos, ser picados por una abeja o comer ciertos ali-
acciones de hipersensibilidad, similares a los meca- mentos.
nismos por los que el sistema inmune defiende al
organismo. Los linfocitos y las otras células del sis- Diagnóstico
tema inmunocompetente, y los anticuerpos, son los Nunca se insistirá bastante en la importancia de una
causantes de ellas, como en la transfusión sanguí- buena historia clínica en el diagnóstico de las enfer-
nea, enfermedades autoinmunes, rechazo de trasplan- medades alérgicas. Los antecedentes patológicos
te de órganos, etc. Cuando se usa este término, la personales y familiares deben investigarse exhausti-
mayoría de los autores quiere significar reacciones vamente. La modificación de los síntomas y signos
mediadas por anticuerpos de la clase de la inmuno- según la estación del año, el cambio de domicilio,
globulina E, unidos a los basófilos de la sangre y a etcétera, tienen una importancia excepcional. Los
los mastocitos de los tejidos, que al encontrarse con medicamentos que ha usado el paciente antes de la
su antígeno específico (en este caso llamado alerge-
enfermedad alérgica y durante ésta, son de obligato-
no), liberan sustancias químicas que lesionan los
rio conocimiento. Con la orientación previa recogida
tejidos vecinos. Un alergeno puede ser una partícu-
en la historia clínica se realizan las pruebas diagnós-
la de polvo, el polen de una planta, un medicamen-
ticas in vivo e in vitro.
to, un alimento, etc., que estimula una respuesta
Las pruebas in vivo en las enfermedades por hi-
inmune.
persensibilidad, comprenden:
Enfermedad atópica (atopia)
A. Pruebas cutáneas.
Comprende un grupo de entidades, generalmente
1. Dentro de la piel.
hereditarias, mediadas por IgE, como la rinitis y el
asma bronquial alérgicas. La enfermedad atópica es a) Directas.
notable por su tendencia a producir anticuerpos IgE • Escarificación.
a inhalantes inofensivos, como pólenes, caspas de • Punción.
animales, hongos, ácaros del polvo, etc. La derma- • Intradérmicas.
titis atópica es una enfermedad de esta clase, aun- b) Indirectas.
que el papel de los anticuerpos IgE en ella es menos • Prausnitz – Kustner (P-K).
evidente. 2. Sobre la piel.
Las reacciones alérgicas varían desde ligeras a a) Epicutánea.
muy severas. La mayoría consiste en prurito ocular, b) Parche.
lagrimeo, estornudos, etc., pero otras pueden poner B. Conteo de eosinófilos.
en peligro la vida del enfermo por dificultad respi- 1. En la sangre.
ratoria, disfunción cardiovascular, hipotensión ar- 2. En secreciones mucosas.
terial y estado de shock. Este último tipo de reacción a) Conjuntival.
es la anafilaxia, que tiene lugar en personas sensibi- b) Nasal.
lizadas en situaciones variables, por ejemplo, des- c) Bronquial.

43
Las pruebas in vitro son: Tamaño del habón (la Resultado
1. Radioalergeno absorbencia (RAS). presencia de seudópodos
2. Prueba de transformación blástica. aumenta la positividad
en una cruz)

A continuación se describirán algunas de las prue- Del tamaño del Negativo (-)
bas mencionadas. control (4 mm)
Algo mayor que el Dudoso (+-)
control (4,5 mm)
Pruebas in vivo Entre 4,5 y 9 mm Positivo (+)
Pruebas dentro de la piel. Consisten en la inyección Entre 10 y 14 mm Positivo (++)
dentro de la piel de soluciones acuosas esterilizadas De 15 mm o más Positivo (+++)
del extracto alergénico en diferentes concentracio-
nes, las que se ponen en contacto con el tejido Pruebas sobre la piel. La más utilizada es la de
reactivo del corion. Las más utilizadas en la prácti- parche, que consiste en poner la superficie de la piel
ca diaria son la escarificación, la punción y la prue- en contacto con los alergenos que rodean al indivi-
ba intradérmica. duo, o en relación directa con él cotidianamente:
perfumes, cosméticos, metales, colorantes, vegeta-
La escarificación. Previa limpieza de la piel les, medicamentos, etc.
con alcohol y secado con una torunda estéril, se Sobre el lado adherente de un pedazo de esparadra-
raspa la capa superficial de la epidermis, sin que po de 3 cm2, se coloca un pedazo de celofán de 1 cm2
llegue a sangrar, con una aguja, un bisturí o una y sobre éste una cantidad de la sustancia de prueba
(si es líquida, se aplica con una motica de algodón
lanceta y se hacen una serie de escarificaciones
en el celofán); se adhiere entonces el esparadrapo a
de 3 a 5 mm de longitud con una distancia de
la piel con la que queda en contacto el alergeno. El
2,5 cm entre ellas; después se coloca el extracto
sitio de elección para esta prueba es la espalda, aun-
especialmente preparado para escarificación y se
que también se puede aplicar cerca de la zona lesio-
realiza la lectura a los 5 o 20 minutos.
nada y su lectura se realiza a las 24; 48 y 72 horas.
La punción (prick test) requiere enmarcar con Debe tenerse cuidado con las sustancias irritantes y
un bolígrafo la zona de la piel (cara interna de los aplicar las diluciones apropiadas.
brazos) donde se hará la prueba y aplicar en ella La lectura de esta prueba ofrece los resultados si-
una gota del extracto alergénico. A continuación guientes:
se realiza la punción en el centro de la gota y se
esperan 20 minutos para hacer la lectura. Magnitud del enrojecimiento Resultado
La prueba intradérmica consiste en inyectar en en el área de la prueba
la dermis 0,02 ml de un extracto alergénico dilui- Igual al parche de control Negativo (-)
do adecuadamente. Para ello se utiliza una serie Enrojecimiento débil Dudoso (+-)
de jeringuillas de tuberculina y agujas número 26 Enrojecimiento uniforme Positivo (+)
Enrojecimiento y pápula Positivo (++)
de 6 a 7 mm de longitud, colocadas en un orden
Enrojecimiento, pápula y Positivo (+++)
riguroso de acuerdo con el extracto que contenga vesícula
cada una, en una bandeja de acero inoxidable de Enrojecimiento, pápula y Positivo (++++)
diseño especial para este trabajo. Se aplican las vesícula que sobrepasan el
inyecciones sin pasar de 15 a 18 y se hace la lec- área de la prueba
tura a los 20 o 30 minutos. El sitio de elección
para realizarla puede ser la espalda o la cara ex- Pruebas in vitro
terna de los brazos. Estas pruebas sólo se realizan en centros altamente
Para interpretar las pruebas cutáneas se requiere especializados.
una prueba de control con el diluente de los ex- Radioalergeno absorbencia o radioinmunovalo-
tractos, que debe ser negativa, y otra con histami- ración. Utilizada para determinar el contenido de
na, que debe ser positiva; su lectura arroja los IgE total y específica contra un alergeno, se hace en
resultados siguientes: el suero o en las secreciones. Su determinación per-

44
mite establecer una mejor correlación con los sínto- ción de la sensibilidad de forma transitoria o dura-
mas del paciente que la de IgE total. Esta técnica es dera. A esta IgG se le denomina anticuerpo blo-
útil solamente en los casos de reacciones por hiper- queador.
sensibilidad inmediata. La hiposensibilización específica está indicada
Prueba de transformación blástica. Los linfoci- cuando el agente causal de la enfermedad resulta
tos sanguíneos son portadores de información imposible de eliminar del medio donde se desen-
inmunogenética que les permite reconocer al aler- vuelve el paciente, por varios motivos: ubicuidad
geno específico, y al cultivarse con éste pueden trans- del agente (perenne o estacional), razones de índole
formarse en células blásticas; esta propiedad sirve profesional, o de índole terapéutica. Este método tie-
como medio de diagnóstico para muchas enferme- ne las contraindicaciones siguientes:
dades alérgicas donde las pruebas cutáneas básicas
han fallado: alergia microbiana, alimentaria y medi- 1. Procesos inflamatorios de causa infecciosa.
camentosa. 2. Embarazo.
La prueba es muy fiel, sensible, específica y re- 3. Tuberculosis, particularmente ocular, pues pue-
producible, y ofrece la gran ventaja de que también de desencadenar fenómenos inespecíficos de
se realiza in vitro, lo cual es muy valioso en alergia tipo Swartzman-Sanarelli.
medicamentosa, ya que el paciente no corre riesgos. 4. Algunas enfermedades internas, sobre todo las
Es útil en los dos tipos de hipersensibilidad: inme- asociadas a mecanismos autoinmunes que afec-
diata y retardada. tan hígado, riñón, tiroides o encéfalo, por el
mismo motivo que en la tuberculosis.
Tratamiento
Evitar un alergeno es mejor que tratar una reacción El tratamiento difiere en cuanto a las vías de ad-
alérgica. Las medidas profilácticas son: suspender ministración, concentración del alergeno que se uti-
un medicamento, instalar acondicionadores de aire liza, intervalo entre las dosis y duración de éstas.
con filtros, prescindir de un animal doméstico, eli- Generalmente se aplican de 4 a 6 concentraciones
minar de la dieta un alimento, cambiar de centro de del extracto alergénico: se comienza por la más di-
trabajo y de actividad laboral, de domicilio y de lugar luida, hasta llegar a la máxima concentración tole-
de residencia, etc. rada por el paciente, la cual se utiliza como dosis de
Otras medidas consisten en reducir la exposición mantenimiento por un período no menor de 2 años.
al alergeno, por ejemplo, eliminar en la habitación Se inicia con 0,1 ml y se aumenta 0,1 ml cada vez, a
del enfermo el mobiliario que guarda el polvo casero razón de 1 o 2 inyecciones semanales hasta 0,9 ml,
con facilidad, así como cortinas y alfombras; forrar en que se recomienza de la misma forma con la con-
colchones y almohadas con material plástico; lim- centración siguiente.
pieza de la habitación con frazadas humedecidas, La dosis de mantenimiento dependerá de si el aler-
reducir la humedad en toda la casa con deshumecta- geno es perenne o estacional. Algunos autores reco-
dor, instalar filtros de aire de alta eficiencia, etc. miendan que sea igual o algo más pequeña que la
Debido a que no todos los alergenos son evita- máxima tolerada, y se administra a intervalos varia-
bles, es posible bloquear la respuesta alérgica y supri- bles, cada 2 a 6 semanas. La vía subcutánea es la
mir o aliviar los síntomas mediante la inmunoterapia más utilizada.
y los medicamentos antihistamínicos. Debido a la posibilidad de reacciones adversas,
el paciente permanecerá en la consulta por lo me-
Inmunoterapia o hiposensibilización específica nos 20 min después de la inyección. Pueden apare-
Cuando un individuo es hipersensible a un antígeno cer estornudos, tos, flushing (rubor), sensación de
dado, se ha demostrado que al administrarle dosis pinchazos, prurito, opresión torácica, sibilancias y
pequeñas y repetidas de éste, se estimula la genera- ronchas. Las reacciones ligeras se tratan con anti-
ción de IgG que se une a él e impide su vínculo con histamínicos; las más severas, con adrenalina.
la IgE de los mastocitos y basófilos; así se evita la Antihistamínicos. Se emplean en todas las oca-
aparición de una reacción anafiláctica o la disminu- siones en que esté presente una reacción de tipo I.

45
Son efectivos en el alivio del prurito y se pueden Algunos de los antihistamínicos citados deben ser
utilizar por vía oral o parenteral. administrados con precaución y en menor dosis, si
Todos los antihistamínicos realizan la misma ac- el enfermo padece de insuficiencia hepática o renal
ción terapéutica, pero difieren en sus efectos colate- (soratidina, astemizola, cetirizina).
rales adversos, por ejemplo: algunos producen mayor
sedación que otros, aunque en este caso es impor- Otros medicamentos
tante la susceptibilidad individual; los llamados efec- Los corticosteroides son muy útiles por sus propie-
tos anticolinérgicos, especialmente la sequedad de dades antinflamatoria e inmunodepresora en las re-
las mucosas, se aprovechan para suprimir o aliviar acciones por hipersensibilidad de tipo II, III y IV;
en las de tipo I acortan el tiempo de duración de los
la rinorrea serosa del catarro común; casi todos tien-
síntomas; no obstante, su uso se limitará a situacio-
den a causar somnolencia, confusión, sensación de
nes de respuesta nula a los otros medicamentos y
“cabeza ligera”, boca seca, constipación, trastornos
cuadro clínico que presagie gravedad y peligro para
miccionales y visión borrosa, sobre todo en el adul-
la vida del enfermo.
to mayor. Estos efectos colaterales suelen ser mini- Los broncodilatadores (aminofilina, salbutamol y
mizados si se inicia la terapéutica con pequeñas similares, etc.) deben utilizarse según la necesidad.
dosis, y se aumentan progresivamente hasta contro- En cuanto a la terapéutica analgésica y antinfla-
lar los síntomas. La industria farmacéutica ha desa- matoria, hay que tomar todas las precauciones ne-
rrollado antihistamínicos de acción prolongada, que cesarias cuando se vayan a utilizar, debido a la
facilitan la aceptación del tratamiento por el pacien- relativa frecuencia con que estos enfermos reaccio-
te. Los principales y sus dosis se exponen a conti- nan de manera adversa a estos medicamentos.
nuación.
Enfermedades causadas
• Difenhidramina: vía oral, 25 a 50 mg cada 6 u 8 h; por reacciones alérgicas
vía parenteral, 10 a 50 mg cada 3 o 4 h.
• Clorfeniramina: vía oral, 2 a 4 mg cada 4 o 6 h. • Rinitis alérgica estacional.
• Dexclorfeniramina: vía oral, 2 mg cada 6 u 8 h. • Rinitis alérgica perenne.
• Triprolidine: vía oral, 2,5 mg cada 4 o 6 h. • Conjuntivitis alérgica.
• Bromofeniramina: vía oral, 4 a 8 mg cada 4 • Alergia alimentaria.
o 6 h; vía parenteral (IM o EV), 5 a 20 mg • Anafilaxia.
cada 6 a 12 h. • Urticaria.
• Clemastine: vía oral, 1,34 a 2,68 mg cada 8 o 12 h. • Edema angioneurótico o angioedema.
• Asma bronquial alérgica.
• Tripelenamina: vía oral, 25 a 50 mg cada 4 o 6 h.
• Dermatitis atópica.
• Hidroxicina: vía oral, 25 a 100 mg cada 6 u 8 h;
vía parenteral, 25 a 100 mg cada 4 o 6 h.
Otras enfermedades que tienen como base pato-
• Prometazina: vía oral, 12,5 a 25 mg cada 6 h;
génica la desgranulación de los mastocitos y basófi-
vía rectal, 12,5 a 25 mg cada 4 o 6 h; parente-
los, con la liberación de histamina y otras sustancias
ral, 12,5 a 25 mg cada 6 h. vasoactivas, pero no por reacción antígeno-anticuer-
• Metilhidilazina: vía oral, 8 mg cada 6 a 12 h. po IgE, son las siguientes:
• Trimeprazina: vía oral, 25 mg cada 6 h.
• Ciproheptadina: vía oral, 4 mg cada 6 u 8 h. • Angioedema hereditario.
• Difenilpiralina: vía oral, 5 mg cada 12 h. • Mastocitosis.
• Azatadina: vía oral, 1 a 2 mg cada 12 h. • “Alergia física”.
• Astemizola: vía oral, 10 mg cada 24 h. • Reacciones “alérgicas” inducidas por el ejerci-
• Terfenadina: vía oral, 60 mg cada 12 h. cio.
• Soratidina: vía oral, 10 mg cada 24 h. • Intolerancia alimentaria.
• Fexofenadina: vía oral, 60 mg cada 12 h.
• Cetirizina: vía oral, 5 a 10 mg cada 24 h. A continuación se describirán someramente las
• Ketotifeno: vía oral, 1 mg cada 12 h. alergias por intolerancia alimentaria, la física y la

46
inducida por el ejercicio. Las demás entidades lestia cuando come el pan u otro alimento elaborado
alérgicas, verdaderas y falsas, se estudian en otros a base de harina.
capítulos de este libro y en diferentes asignaturas de Diagnóstico. Las pruebas cutáneas a veces son
la carrera. útiles; un resultado negativo prácticamente niega la
hipersensibilidad a ese alimento en particular, pero
Intolerancia y alergia alimentaria un resultado positivo no significa de necesidad que
Una alergia alimentaria es una reacción de hiper- el enfermo sea alérgico a dicha sustancia. Después
sensibilidad a un alimento en particular. La intole- de tal resultado debe realizarse una prueba oral para
rancia alimentaria, mucho más común, es un efecto el diagnóstico definitivo; si luego de ella no se de-
indeseable que se produce al consumir un alimento sarrollan los síntomas, el paciente no es alérgico al
dado. alimento en cuestión.
Los enfermos con intolerancia suelen carecer de Una dieta de eliminación ayuda a identificar la
una enzima necesaria para la digestión del alimento causa de la alergia. El paciente detiene la ingestión
en cuestión, y experimentan sensación de malestar, de los posibles alimentos causantes de los síntomas.
gases intestinales o gástricos, náuseas, diarreas, etc. Luego éstos son reintroducidos, uno cada vez. La
En general la reacciones alérgicas no producen es- dieta inicial debe ser estrictamente a base de alimen-
tos síntomas. La alergia alimentaria con frecuencia tos puros naturales, durante 5 a 7 días. Los alimen-
comienza en la infancia y es frecuente la alergia tos más alergizantes son mariscos, pescado, huevos,
chocolate, tomate, frutas cítricas, leche, maíz, trigo,
atópica en los familiares. La primera sospecha de
plátanos, maní y nueces.
una predisposición alérgica es un rash cutáneo que
Tratamiento. No hay otro tratamiento posible para
se acompaña o no de síntomas digestivos. Con fre-
la alergia alimentaria que dejar de comer el produc-
cuencia, el rash consiste en una dermatitis atópica y
to alergénico. Desensibilizar al paciente exponién-
para el primer año de vida la situación ha mejorado
dolo a pequeñas cantidades del alimento o extractos
mucho, pero ciertos niños a medida que crecen de-
de éste no ha dado resultados satisfactorios.
sarrollan otras enfermedades atópicas (asma, rinitis
Los antihistamínicos no son útiles como preven-
alérgica estacional). Los mayores de 10 años y los tivos, pero sí lo son en caso de urticaria, angioede-
adultos excepcionalmente desarrollan síntomas res- ma, prurito, etc.
piratorios; sin embargo, las pruebas cutáneas conti-
núan siendo positivas. Alergia física
Algunos pacientes tienen una severa reacción ante Es una reacción en la que los síntomas se presentan
alimentos con alergenos específicos potentes (como en respuesta a un estímulo físico, como el frío, la
nueces, legumbres, semillas y mariscos) capaz de luz solar, el calor o un pequeño traumatismo. Los
llegar al shock anafiláctico, aun ante la ingestión de más frecuentes son prurito, ronchas y manchas cu-
cantidades mínimas. táneas. El árbol bronquial puede tener espasmos y
Las sustancias que se adicionan a los productos se auscultan estertores secos. Una reacción intensa
para conservarlos, a veces provocan reacción alérgica a la luz solar produce signos de fotosensibilidad, a
o intolerancia; determinados alimentos contienen veces favorecida por el uso de ciertas sustancias y
toxinas o sustancias, como la histamina, que son res- medicamentos aplicados a la piel.
ponsables de reacciones adversas no alérgicas. Com- La sensibilidad al calor desarrolla en ocasiones
puestos como el monoglutamato de sodio no causa lo que se conoce como urticaria colinérgica, que
alergia; en cambio, el metabisulfito y la tartrazina consiste en la aparición de pequeñas ronchas indivi-
han desencadenado crisis de asma y urticaria en per- duales, muy pruriginosas, rodeadas por un halo eri-
sonas sensibles. Otros desarrollan crisis de migraña tematoso. Esta urticaria surge por el ejercicio, el
cuando ingieren ciertos alimentos. stress emocional o cualquier actividad que provo-
La digestión aparentemente previene respuestas que sudoración.
alérgicas a muchos alergenos ingeridos, sobre todo Los síntomas de sensibilidad al frío son ronchas,
en adultos; ejemplo de esto es el “asma del panade- induración edematosa de la piel, asma, rinorrea
ro”, que provoca crisis de asma al inhalar el polvo serosa y obstrucción nasal, que aparecen después de
de harina de la panadería, en cambio, no sufre mo- exposición al frío.

47
Tratamiento. No se deben usar cosméticos, cre- La anafilaxia inducida por la ejercitación es mu-
mas, lociones y aceite, y observar si algunos de és- cho más rara; en ciertos casos ocurre solamente des-
tos están agravando la alergia. Puede tomarse un pués de comer un alimento específico antes de
antihistamínico para alivio de los síntomas. La realizarla.
ciproheptadina se recomienda para las ronchas cau- Tratamiento. En los asmáticos, el control de su
sadas por el frío, y la hidroxicina es efectiva para enfermedad casi siempre previene la crisis inducida
aquéllas provocadas por el stress. Pero la mejor ma- por el ejercicio.
nera de suprimir o aliviar la alergia física es evitar La inhalación de un medicamento beta adrenér-
gico 15 min antes de comenzar, por lo general pre-
el agente que la causa.
viene el asma. El cromoglicato de sodio es efectivo
en algunos pacientes.
Reacciones alérgicas inducidas por el ejercicio
El enfermo con anafilaxia provocada por el ejer-
El ejercicio causa a veces en algunas personas un cicio debe evitar éste y el alimento que la induce.
episodio de asma o una reacción anafiláctica. Algunos recomiendan la realización de ellos con
El asma inducida por él ocurre en enfermos que intensidad lentamente creciente, con resultados be-
padecen la afección, pero nada más la sufren cuan- neficiosos.
do hacen ejercicios. La crisis se presenta 5 o 10 mi- Quien padezca esta reacción anafiláctica debe lle-
nutos después de concluidos éstos, y ocurre con más var consigo una jeringuilla con epinefrina para au-
facilidad cuando el aire es frío y seco. toadministración, como tratamiento de emergencia.

48
6

ALERGIA MEDICAMENTOSA

Los medicamentos son sustancias biológicamente a) Por idiosincrasia.


activas, preparadas mediante técnicas farmacológi- b) Por mecanismo inmunológico o alérgico.
cas adecuadas para su utilización con fines profi- • Tipo I
lácticos o curativos. En la actualidad la mayoría de • Tipo II
las enfermedades se tratan con ellos. • Tipo III
Las reacciones medicamentosas indeseables se • Tipo IV
producen por interacciones de los medicamentos,
sus metabolitos y sus productos de conservación, Reacción que depende del medicamento
con los enfermos a quienes se les administran. És- Por efecto farmacológico. Es el efecto relacionado
tas, tanto por sus efectos adversos como por las mo- con la actividad biológica del medicamento en dosis
dificaciones que producen en los cuadros clínicos terapéuticas para el promedio de la población. El
de las enfermedades, conducen a errores diagnósti- efecto principal es el buscado y el colateral el no
cos y terapéuticos; contribuyen a la aparición de deseable, como la somnolencia causada por los anti-
dichas reacciones el surgimiento de fármacos nue- histamínicos.
vos cada día más potentes y la gran diversidad de Por efecto tóxico. En general hay dosis por enci-
éstos, que dificulta su conocimiento en detalle por ma de las cuales los medicamentos son tóxicos. La
el médico, así como la automedicación y el uso pro- dosis terapéutica máxima es variable en cada enfer-
filáctico de ellos. mo o para un medicamento dado y depende de una
Las reacciones medicamentosas alérgicas co- serie de circunstancias, entre ellas, la propia enfer-
menzaron a diferenciarse de otras reacciones me- medad, otros fármacos usados, etc. Por ejemplo, la
dicamentosas a principios del pasado siglo, con la terapéutica anticoagulante produce efectos tóxicos
aparición de la llamada enfermedad del suero en los cuando hay afectación hepática o renal, o cuando se
individuos a los cuales se les administraba suero an- administra con antiagregantes plaquetarios.
tidiftérico heterólogo equino. Actualmente la posi-
bilidad de estas reacciones en la población general Reacción que depende del enfermo
es del 3 % y en pacientes hospitalizados, alrededor Por idiosincrasia. Es una interacción no deseable
del 6 %. entre un medicamento y algunos individuos que
constituyen una pequeña parte de la población con
Clasificación características diferentes, manifestada por una sus-
La clasificación más aceptada de las reacciones ceptibilidad exagerada y alterada para el medicamen-
medicamentosas es la que tiene en cuenta si la reac- to, el cual resulta inocuo cuando se administra en
ción depende del medicamento o del enfermo. iguales cantidades y condiciones a la población ge-
neral. La idiosincrasia está determinada en general
1. Reacción que depende del medicamento. genéticamente. Otras veces la causa es desconocida.
a) Por efecto farmacológico. A continuación se mencionan ejemplos de esta ca-
• Principal racterística particular de algunos individuos.
• Colateral La succinilcolina es hidrolizada con rapidez por
b) Por efecto tóxico. la seudocolinesterasa del suero, y su efecto bloquea-
2. Reacción que depende del enfermo. dor neuromuscular dura pocos minutos, pero existen

49
enfermos con una variante de esta enzima determi- son más susceptibles al desarrollo de alergia medi-
nada por un gen autosómico recesivo, que hidroliza camentosa de tipo I.
con lentitud el medicamento, por lo cual los efectos Estados morbosos. Las infecciones y las hipogam-
de éste se prolongan durante horas. maglobulinemias (por la frecuencia con que predis-
La hidralacina, la isoniacida y la procainamida ponen a las infecciones) han sido señaladas como
son metabolizadas por acetilación. La enzima aceti- responsables de la alergia a los agentes antimicro-
ladora depende de un gen autosómico dominante, bianos. Lo contrario ocurre con la sarcoidosis, en la
pero hay enfermos con una enzima inactiva deter- que la susceptibilidad a la alergia tipo IV está dis-
minada por un gen recesivo, que padecen reacciones minuida.
de idiosincrasia (hepatopatías, neuropatías, síndro-
me lupoide). Factores de riesgo que dependen del medicamento
Los enfermos con déficit de glucosa -6- fosfato Estructura química. Los medicamentos, sus meta-
deshidrogenasa, padecen de crisis hemolíticas cuan- bolitos o las impurezas derivadas de su preparación,
do se les administran medicamentos como la quini- son sustancias generalmente de bajo peso molecu-
lar, que para producir sensibilización necesitan unirse
na y sus derivados, sulfonamidas, nitrofurantoína,
a una macromolécula (proteína y tal vez polisacári-
cloranfenicol, aspirina y azul de metileno, entre
dos o polinucleótidos) mediante enlaces covalentes
otros.
estables e irreversibles, dentro o fuera del organis-
Por mecanismo inmunológico. Se trata de reac-
mo. Los enlaces reversibles, como los que se produ-
ciones no deseables producidas por la interacción
cen en la sangre entre los medicamentos y la
entre un medicamento y los individuos de un pe- seroalbúmina que les sirve de transporte, no indu-
queño grupo de población con características inmu- cen sensibilización.
nológicas específicas, que se manifiestan por una Alergenicidad cruzada. Es la que se produce en-
respuesta alterada de éstos al medicamento, inocuo tre sustancias químicas diferentes, pero con grupos
en iguales cantidades y condiciones para la pobla- químicos idénticos. Estas reacciones pueden ocurrir
ción general. Se diferencia de la idiosincrasia por la entre sustancias medicamentosas y no medicamen-
necesidad de una exposición previa al medicamento, tosas, y el ejemplo más típico lo constituye la aler-
y porque el mecanismo de producción de la reacción gia al grupo “para”, de grupos aminos en el anillo
es de tipo inmunológico. La alergia medicamentosa bencénico como las sulfonamidas, tolbutamida, PAS,
puede adoptar cualquiera de las variedades de la cla- PABA, parafenienodinamina, algunos colorantes
sificación de Yell y Coombs de las reacciones de para el cabello, colorantes sintéticos, reveladores fo-
hipersensibilidad. tográficos y anestésicos locales derivados del ácido
paraaminobenzoico (benzocaína, procaína, novocaína
Factores de riesgo en la alergia y pantocaína). Otros ejemplos de sensibilizaciones
medicamentosa importantes son las que ocurren entre la penicilina y
Los factores de riesgo son de dos tipos: los que de- las cefalosporinas; entre la neomicina, kanamicina,
framicetina, paromomicina y la bacitracina; o entre
penden del enfermo y los que dependen del medica-
la neomicina y la estreptomicina, así como entre los
mento.
derivados de la fenotiacina (cloropromacina) y com-
puestos análogos. La amplitud de una sensibilidad
Factores de riesgo que dependen del enfermo cruzada no se puede predecir en un individuo deter-
Edad. La alergia por medicamentos ocurre en todas minado. Se llama alergeno primario a la sustancia
las edades, aunque se observa con mayor frecuencia que originalmente crea la sensibilización, y secun-
en los niños y en los adultos entre 40 y 50 años. dario, al que reacciona posteriormente. Cuanto más
Sexo. Ambos sexos son afectados, sin embargo, intensa es la sensibilización al alergeno primario,
se ha encontrado un predominio en el femenino, lo mayor será la posibilidad de ésta a uno o varios de
que se ha relacionado con factores hormonales. los alergenos secundarios.
Antecedentes atópicos personales y familiares. Dosificación. La posibilidad de sensibilización a
Las personas con antecedentes personales o fami- un fármaco es mayor cuanto más elevada sea la do-
liares de rinitis, asma bronquial o dermatitis atópica, sis y más prolongada la administración.

50
Vía de administración. No suele tener importan- que al actuar en enfermos predispuestos (idiosincra-
cia, a menos que sea la cutánea en caso de una der- sia), producen una respuesta de tipo I (shock, asma,
matitis de contacto medicamentosa. urticaria, rinitis, conjuntivitis) que no está mediada
Vehículos de depósito. Sensibilizan por las carac- por reacción antígeno-anticuerpo en los mastocitos
terísticas de sus estructuras químicas; por ejemplo, y basófilos. Los medicamentos citados y los con-
la protamina, proteína de pescado usada como de- trastes yodados provocan la liberación de histamina
pósito en los preparados de insulina. y otros mediadores que actúan directamente sobre
Hormonas. En este caso, los riesgos de sensibili- la membrana mastocitaria.
zación, y por lo tanto de resistencia al medicamen- La aspirina es probable que actúe influyendo en
to, pueden deberse a factores como la especie, el el metabolismo de las prostaglandinas. Además, todo
tamaño y la estructura. Las hormonas procedentes parece indicar que es capaz de activar directamente
de especies animales difieren en sus estructuras quí- el sistema del complemento, con la generación de
micas, lo que favorece la antigenicidad, y por tanto, fragmentos de éste (anafilotoxinas) que provocan li-
las reacciones alérgicas a ellas. La insulina porcina,
beración de histamina.
con una constitución de aminoácidos muy parecida
a la humana, es menos antigénica que la de carnero. Diagnóstico
La insulina humana obtenida por nudos de ingenie-
El diagnóstico clínico se basa en un alto índice de
ría genética no es alergénica, pero su costo es alto.
sospecha por parte del médico, es decir, siempre,
Las hormonas de bajo peso molecular (ACTH, in-
sulina, glucagón), suelen ser menos alergénicas que ante cualquier manifestación clínica inesperada o
las de mayor peso, como la de crecimiento. No se poco usual en un paciente con enfermedad definida,
ha encontrado sensibilización a la gonadotropina y al que se le están administrando medicamentos, se
coriónica, tal vez porque la exposición a ésta duran- debe pensar que puede ser expresión de una alergia
te la vida fetal desarrolla un estado de tolerancia medicamentosa.
etiológica. Una vez surgida la sospecha diagnóstica se trata-
rá de confirmar con pruebas de laboratorio in vivo e
Etiología in vitro.
Todos los medicamentos son capaces de provocar La reacción alérgica medicamentosa ocurre sólo
una alergia medicamentosa, pero aquellos que con en un escaso número de pacientes que usan el medi-
mayor frecuencia la producen en la práctica diaria camento, cuyas manifestaciones no son las propias
son: penicilina, sulfas, tetraciclinas y otros antimi- de su acción farmacológica, generalmente hay una
crobianos; fenilbutazona, sales de oro, aspirina, di- exposición previa a éste o se ha usado durante 7
fenilhidantoína, fenobarbital, cloroquina, quinacrina, a 10 días previos a la aparición del cuadro clínico;
quinidina, alfametildopa, hidralacina, procainami- debe desaparecer de manera más o menos rápida
da, propiltiouracilo, heparina, insulina, yoduros, an- después de suspender el fármaco.
titoxina tetánica y suero antirrábico. También la Pruebas in vivo. Se realizan para confirmar reac-
bromosulftaleína. ciones alérgicas medicamentosas de tipo I y III (prue-
bas dentro de la piel: escarificación, punción e
Cuadro clínico intradérmica) y de tipo IV (sobre la piel: epicutánea
Las manifestaciones clínicas de la alergia medica- y de parche), pero con el inconveniente de que pue-
mentosa son variadas, y en la práctica todos los ór- den poner en peligro la vida del paciente.
ganos y sistemas del organismo humano ocasionan Las pruebas dentro de la piel se hacen con los
síntomas y signos. Las manifestaciones clínicas más medicamentos en una dilución, por lo general al 1/10
frecuentes por sistemas, junto a la reacción de hi- o mayor, si los antecedentes de la reacción han sido
persensibilidad más probable, y los medicamentos graves. Los más frecuentemente probados son peni-
causales más frecuentes, se resumen en la página cilina, anestésicos locales y contrastes radiográficos
siguiente. yodados. En relación con los anestésicos locales, la
Hay medicamentos como la aspirina, la indome- hipersensibilidad es rara a pesar de la frecuencia con
tacina y los otros AINE, la morfina y la codeína, que se envían estos casos al alergista. Lo habitual

51
Sistema Tipo Mecanismo Ejemplos
probable

Multisistémico Anafilaxia I Penicilina


Enf. del suero III, I (?) Antitoxinas, Gal1
Fiebre III (?), IV (?) Penicilina, barbitúricos, Convulsín2
Vasculitis III, IV (?) Penicilina, sulfa-alopurinol
(3)
LED III (?) Hidralacina, procainamida, isoniacida,
Convulsín
Hemolinfopoyético Anemia hemolítica II Penicilina, metildopa, quinidina,
Coombs + fenacetina
Trombocitopenia II Quinina, quinidina, sulfas, heparina
Neutropenia II (?) Butacifona, penicilina, antitiroideos
Linfadenitis ? Convulsín
Pulmonar Asma IV (?) Nitrofurantoína
Infiltrados por eosinófilos ? Penicilina, sulfas, cromoglicato

Hepático Hepatitis IV (?) Halotano, isoniacida, metildopa


Colestasis ? Fenotiacinas

Renal Nefritis intersticial aguda II (?), IV (?) Penicilina, meticilina

Nefritis intersticial crónica ? Fenacetina, aspirina


Síndrome nefrótico IV Parametadiona, tridiona, sales de oro
Neurológico Encefalomielitis IV
Meningitis ? Vacunas de virus vivos
Polineuropatía IV (?)
Reacciones psicóticas ?

Dermatológica Urticaria, angioedema I, II (?) Penicilina, sulfas


Maculopapular, morbiliforme ? Ampicillín, barbitúricos, sulfas
Sensibilidad de contacto IV Neomicina, antihistamínicos
Erupción fija medicamentosa IV (?) Fenolftaleína, barbitúricos, tetraciclina
Eritema multiforme ? Sulfas, penicilina, barbitúricos, AINE4
Necrólisis epidérmica tóxica ? Sulfas, butacifona
Eritema nudoso ? Anticonceptivos orales, yoduros
Dermatitis exfoliativa ? Metales pesados, sulfas
Erupciones por
fotosensibilidad IV Sulfas

1
Globulina antilinfocítica
2
Difenilhidantoína
3
Lupus eritematoso diseminado
4
Analgésico antinflamatorio no esteroideo

52
son las reacciones farmacológicas a los simpatico- 2. Extremar las medidas de precaución cada vez
miméticos mezclados con los anestésicos. que se utilicen medicamentos con capacidad po-
Los contrastes radiográficos yodados provocan tencial de producir shock anafiláctico.
reacciones “seudoalérgicas” de cierto grado en todas 3. Usar fármacos que tienen menos posibilidades
las personas, y se manifiestan cuando la cantidad de producir alergia medicamentosa (sueros
del contraste es grande o el ritmo de administración hiperinmunes humanos, hormonas peptídicas
rápido, o la persona receptora es intensamente va- sintéticas, insulina humana o monocompo-
sorreactiva a los mediadores. nente).
Las pruebas cutáneas con los medicamentos pre- 4. Utilizar con reserva los medicamentos que por
sentan al médico un doble problema al tratar de es- la amplitud de su uso o la posibilidad de anti-
tablecer cuándo una sustancia en particular está genicidad cruzada, puedan producir sensibili-
causando una reacción alérgica o no; primero, por-
zaciones inadvertidas para el paciente o el
que la inyección en la piel no garantiza que el medi-
médico.
camento se unirá a una proteína para poder actuar
5. Si fuera necesario, aplicar las inyecciones pre-
como antígeno, en este caso, hapteno. En segundo
ferentemente en las regiones distales, por la po-
lugar, el medicamento que se prueba quizás no sea
sibilidad de usar torniquetes.
el responsable antigénico, sino uno o varios de sus
metabolitos que actúan como haptenos e inducen la 6. En caso de antecedentes de alergia medicamen-
respuesta. tosa, sustituir la medicina que se va a utilizar
Pruebas in vitro. En las reacciones por hipersen- por otra de estructura química diferente, pero
sibilidad de tipo I se ha utilizado la radioalergeno con el mismo efecto farmacológico. Cuando el
absorbencia (RAS), aunque sus resultados no han medicamento alergizante es de procedencia
sido superiores al de las pruebas cutáneas; en las de animal se debe sustituir por uno obtenido de
tipo II se emplean las pruebas de aglutinación para otra especie.
detectar grupos sanguíneos; en caso de anemias he- 7. Usar profilácticamente los antihistamínicos en
molíticas se recomienda la prueba anticomplemento caso de síntomas sospechosos de alergia medi-
de Coombs y en las granulocitopenias, la determi- camentosa.
nación de leucoaglutininas séricas, y como método 8. Explicar a todo paciente afecto de una hiper-
más fidedigno, la opsonización de neutrófilos nor- sensibilidad medicamentosa, el pronóstico de
males por el suero de pacientes neutropénicos. su padecimiento y entregar una certificación
En todos los tipos de hipersensibilidad medica- acreditativa del tipo de enfermedad, fármacos
mentosa se realiza la prueba de transformación que la producen y posibilidad de reacciones
blástica, la cual es útil cuando faltan las pruebas cruzadas con otros.
cutáneas, pues tiene un alto grado de confiabilidad, 9. Realizar hemogramas periódicos cuando se
es específica y ofrece la ventaja de que no hace correr administren drogas que acostumbran producir
riesgo a los pacientes. reacciones alérgicas hematológicas.
También como pruebas in vitro se utilizan las de
rosetas espontáneas y de la inhibición de la migra- Tratamiento de la enfermedad
ción del basófilo, así como la determinación de IgE Comprende tres tipos de medidas:
y las otras inmunoglobulinas, linfocinas y otras ci-
tocinas, conteo de eosinófilos, etc.
1. Suspensión del o los medicamentos causales.
Tratamiento 2. Tratamiento sintomático de urgencia inmedia-
Tratamiento profiláctico to, como se especifica a continuación en el epí-
Comprende las medidas siguientes: grafe “Shock anafiláctico”.
3. Hiposensibilización.
1. Prescribir los medicamentos guiándose sólo por
un criterio científico.

53
SHOCK Patogenia
La concentración de células cebadas en la piel,
ANAFILÁCTICO pulmones y tracto gastrointestinal oscila entre 10 000
y 20 000 por mm3 de tejido; estas células y sus si-
Concepto milares en la circulación, los basófilos, pueden ser
inducidas a liberar los mediadores químicos de ana-
El shock anafiláctico es una manifestación clínica filaxia por la interacción de algunos agentes con sus
de anafilaxis, y constituye una emergencia médica receptores de membrana. En individuos genética-
que puede llevar al enfermo a la muerte en pocos mente programados, ciertas proteínas y antígenos
minutos. Los mediadores químicos liberados por glicoproteícos (alergenos) estimulan la producción
súbita desgranulación de los basófilos y las células de anticuerpos IgE, que se fijan a los receptores de
cebadas (mastocitos) en la circulación de los teji- alta afinidad en las células cebadas y los basófilos.
dos, provocan vasodilatación periférica difusa, au- En una nueva exposición al alergeno, éste se une al
mento de la permeabilidad capilar y espasmo de la anticuerpo IgE en la membrana de dichas células y
musculatura lisa. La vasodilatación y la disminución desencadena la desgranulación y la liberación de
del volumen sanguíneo eficaz por escape de líquido diversas sustancias vasoactivas. Se trata sobre todo
hacia los tejidos, junto a la hipoxemia y la disfunción de la histamina, prostaglandinas D2, leucotrienos C4,
cardíaca primaria, llevan al colapso cardiovascu- B4, D4 y E4, y el factor activador de las plaquetas.
lar o shock anafiláctico, generalmente secundario a Estas sustancias vasoactivas o mediadores quími-
cos de anafilaxia, causan vasodilatación y aumen-
la administración parenteral de fármacos y a reac-
tan la permeabilidad vascular, con escape de líquido
ción a tóxicos inoculados por picaduras de insectos.
hacia los tejidos, que, junto a la hipoxemia y la dis-
función cardíaca, llevan al colapso cardiovascular.
Etiología La histamina tiene acción inotrópica y cronotrópica
Los agentes causales más frecuentes son los medi- directa sobre el músculo cardíaco; además, estas
camentos, sustancias de bajo peso molecular que no sustancias provocan contracción del músculo liso de
son antigénicas por sí mismas pero que actúan como las vías respiratorias y gastrointestinal, con la apari-
haptenos y se tornan antigénicas cuando reaccionan ción de laringospasmo, broncospasmo y síntomas
con proteínas del huésped. Se incluyen los antibió- digestivos.
ticos, anestésicos locales, vitaminas y reactivos para También activan los sistemas del complemento,
diagnóstico. Aunque el shock anafiláctico por lo de la coagulación y de las cininas. La bradicinina es
general se debe a la administración parenteral de un péptido que también contribuye al shock anafi-
medicamentos en personas muy sensibles, ocurre láctico y se genera por la segmentación del cininó-
también por un fármaco suministrado por vía oral o geno por enzimas llamadas calicreínas contenidas
en los basófilos y las células cebadas.
por la ingestión de algún alimento. Dentro de los
Las cininas son vasodilatadores periféricos, cau-
antibióticos están las penicilinas, sulfonamidas, ce-
san hipotensión sistémica y contracción de los va-
falosporinas, tetraciclinas, anfotericín B y los ami-
sos coronarios.
noglucósidos.
Las proteínas constituyen un grupo muy diverso Cuadro clínico
de alergenos causales de shock anafiláctico e inclu- Se inicia segundos o minutos después de adminis-
yen sueros heterólogos, hormonas (insulina, ACTH, trarse el fármaco; los cuadros más graves comien-
vasopresina y paratormona), enzimas y venenos de zan por lo común en el transcurso de 5 a 10 minutos.
insectos del orden de los himenópteros. En fecha Los primeros síntomas suelen ser cutáneos, en
más reciente se ha observado reacción anafiláctica forma de eritema difuso y calor, urticaria generali-
al látex de guantes quirúrgicos en el personal de la zada y dificultad respiratoria progresiva por edema
salud o pacientes sometidos a intervenciones qui- laríngeo, broncospasmo o ambos. Se presentan náu-
rúrgicas frecuentes. seas, vómitos, cólicos y la manifestación clínica fun-

54
damental la constituye el colapso cardiovascular, que gas ocurre con más frecuencia y gravedad con la
a veces concomita con isquemia del miocardio y administración parenteral, siempre que sea posible
arritmias ventriculares por efecto de la hipotensión se darán por vía oral. Los enfermos por picadura de
arterial severa. insectos serán enviados a un alergista para inmuno-
terapia alergena.
Diagnóstico Los individuos con alto riesgo de reacción anafilácti-
Diagnóstico positivo ca deben llevar consigo un equipo para su tratamien-
El diagnóstico del shock anafiláctico resulta evidente to, con varias dosis de epinefrina y antihistamínicos
cuando hay antecedentes de exposición al material masticables.
antigénico extraño, se conoce la hipersensibilidad a Toda reacción a drogas, alimentos o agentes bio-
dicha droga o sustancia y se presenta una secuencia lógicos es de notificación obligatoria a las autorida-
de síntomas y signos compatibles con el síndrome. des sanitarias.
Para confirmarlo es necesario demostrar el anticuer-
po IgE contra la sustancia, mediante pruebas cutá- Tratamiento del shock
neas o por prueba de radioabsorbencia (RAS). Ante una reacción anafiláctica, la utilización tem-
prana de adrenalina resuelve pronto casi todas las
Diagnóstico diferencial manifestaciones. Una vez establecida la permeabi-
Deben considerarse como posibilidades el infarto del lidad respiratoria, se administra adrenalina en dilu-
miocardio, la embolia pulmonar o una reacción ción al 1:1 000 en dosis de 0,01 ml/kg de peso, por
vasovagal. En esta última hay bradicardia, hipoten- vía subcutánea (máximo de 0,5 ml) que se repetirá
sión, piel fría y ausencia de urticaria. cada 20 min según sea necesario. Debe suspenderse
la exposición a la sustancia agresora. Cuando la re-
Evolución acción anafiláctica se inicia por una inyección en el
El paciente evoluciona de forma muy rápida y si no brazo o en la pierna, se aplica un torniquete en el
se actúa precozmente, la muerte sobreviene en poco sitio proximal al inyectado, que se afloja cada 10 o
tiempo. 15 min, para limitar la absorción del antígeno. En
el shock hipovolémico se administrará rápidamente
Tratamiento líquido EV, con preferencia la solución de lactato
Tratamiento preventivo Ringer o una similar. Puede darse 0,5 mg (5 ml)
Los pacientes que han presentado episodios anafi- de adrenalina en dilución al 1: 10 000 EV, despacio
lácticos deben usar siempre un brazalete de alerta y repetirse cada 5 o 10 min. Hay que vigilar el pulso,
médica e informar los detalles referentes a sus reac- la presión arterial, la frecuencia respiratoria y si es
ciones a fármacos antes de recibir cualquier droga. posible se conectará al paciente un monitor car-
Cuando existen antecedentes o sospecha de alergia díaco.
a un medicamento, conviene sustituirlo por otro que Si la hipotensión sigue, se debe continuar con lí-
no tenga reacción cruzada, siempre que sea posible. quidos EV y se instalará un catéter para determinar
El médico debe conocer los fármacos con antíge- la presión venosa central, o mejor, la presión en cuña
nos de reacción cruzada. Por ejemplo, en los pacien- de la arteria pulmonar. Si la presión venosa central o
tes con alergia a las sulfas hay que evitar otras la presión en cuña en la arteria pulmonar son meno-
sustancias que las contengan, como los diuréticos res de 5 cm de H2O o de 6 mm Hg, respectivamente,
tiazídicos, furosemida, sulfonilureas y dapsone. Hay se administrará líquido EV. Si en el mismo orden
riesgo de reacción a las cefalosporinas en pacientes son mayores de 15 cm de H2O o de 18 mm Hg, se
alérgicos a las penicilinas, incluso las de segunda y emplearán agentes inotrópicos del tipo de la dopa-
tercera generación, con excepción del aztreonán. mina, de 2 a 20 µg/kg/min. La dopamina en dosis
En pacientes que han tenido reacción anafiláctica baja aumenta el gasto cardíaco y mejora el flujo san-
al contraste yodado y requieren su uso, el tratamiento guíneo visceral, y en dosis alta estimula los recepto-
previo con antihistamínicos H1 y corticosteroides res alfa y causa vasoconstricción y aumento de la
bloquea una futura reacción. Como la alergia a dro- presión arterial. Si la hipotensión persiste, estaría

55
indicada la inserción de una bomba de balón los tejidos y es activado el sistema del complemen-
intraórtica. to. Fragmentos del complemento activados inducen
Si el paciente usaba beta-bloqueadores adrenér- la inflamación, la que se limita a la piel o es sisté-
gicos previo a la reacción anafiláctica, está indicado mica.
el glucagón, de 1 a 5 mg EV lentamente (puede cau-
sar vómitos). Cuadro clínico
Hay que administrar oxígeno para reducir la hi- Primero aparecen algunas manifestaciones prodrómi-
poxemia. Si existe cianosis por obstrucción de las cas (prurito y rubicundez en el sitio de la inyección,
vías aéreas superiores, se requerirá la intubación malestar vago y signos de deficiencia circulatoria)
endotraqueal o la traqueotomía de urgencia para res- tras las cuales se presenta un aparatoso síndrome,
tablecer la permeabilidad respiratoria. Si aparece rara vez completo, pues generalmente se agrupan
broncospasmo, se tratará con simpaticomiméticos B2 algunos síntomas con intensidad y topografía dispa-
por vía inhalatoria (aerosoles o nebulizadores) y res, según sea la especial disposición reactiva de los
aminofilina EV en dosis de 6 mg/kg en 20 o 30 min, tejidos.
seguida de 0,5 a 1 mg/kg/h. Síntomas generales. Astenia y fiebre, que en oca-
La administración de antihistamínicos por vía EV siones alcanza hasta 40º C.
al inicio del episodio agudo, suele aliviar el prurito, Manifestaciones cutáneas. Urticaria, angioedema
la urticaria y el angioedema. Se suministrará di- y rash escarlatiniforme.
fenhidramina (Benadrilina), de 50 a 100 mg en 5 Manifestaciones mucosas. Tumefacción de la len-
o 10 min. gua y faringe, con disfagia.
Manifestaciones cardiovasculares. Taquicardia e
hipotensión arterial.
ENFERMEDAD Manifestaciones artromioarticulares. Mialgia,
artralgia y artritis.
DEL SUERO Manifestaciones digestivas. Náuseas, vómitos y
diarrea.
Tejido linfático. Las adenopatías, limitadas co-
Concepto múnmente a las regiones más próximas al sitio de la
La enfermedad del suero (ES) es un síndrome que inyección, son bastante frecuentes. A veces se pro-
se caracteriza por la presencia de fiebre, rash, linfa- duce infarto esplénico.
denopatía, artralgias o artritis, que aparece de 6 a 14 Manifestaciones renales. Oliguria y albuminuria.
días después de la inyección de suero heterólogo o Manifestaciones nerviosas. Cefalalgias, raquial-
la exposición a diversas drogas. El rash puede ser gias, meningismo y polineuritis.
urticariano (limitado al sitio de inyección o genera- Otras. Pueden aparecer orquitis e ictericia.
lizado) y a veces un eritema semejante al de la es-
carlatina. Estos síntomas duran de unos días a 2 o 3 Evolución pronóstico
semanas. La ES suele durar alrededor de 8 días. Cuando su
curso es prolongado, lo que casi nunca ocurre, evo-
Etiopatogenia luciona por brotes. Por lo general tiene buen pro-
La ES es causada por la inyección de suero heteró- nóstico, sólo ensombrecido cuando después de una
logo (suero hiperinmune antirrábico, antídotos con- segunda exposición al agente etiológico se produce
tra veneno de serpientes, antitoxina diftérica, etc.) o la reacción inmediata con cuadro de shock semejan-
por la reacción a diversas drogas como penicilinas, te al anafiláctico y capaz de llevar a la muerte.
cefalosporinas, sulfamidados, carbamazepina, hierro-
dextrán, etc. Esta afección es el prototipo de la reac- Tratamiento
ción por hipersensibilidad tipo III o de los complejos Tratamiento profiláctico
inmunes, cuando una gran cantidad de antígenos y Es necesario tener en cuenta los factores de riesgo
anticuerpos en forma de inmunocomplejos solubles, que dependen del medicamento y del enfermo, y rea-
se fijan a los receptores en el endotelio vascular de lizar las pruebas diagnósticas de sensibilidad in vivo

56
tomando siempre las precauciones necesarias con el zole (Hismanal). Éstos se pueden consumir solos,
enfermo. Si el agente causal de la reacción está sien- pero se prefiere la combinación con la prednisona
do administrado al inicio de los síntomas, debe ser en dosis de 1 mg por kg por día, o dosis equivalente
suspendido. de otros corticosteroides. La mejoría usualmente ocu-
rre dentro de las 72 horas de iniciado el tratamiento;
Tratamiento de la enfermedad entonces los corticosteroides se retiran en un perío-
Se recomiendan los antihistamínicos; en la actuali- do de 2 o 3 semanas. El antihistamínico se continúa
dad los más usados son los bloqueadores de recep- por un tiempo más largo y se suspenderá poco a poco.
tores H1 de larga acción, como la hidroxyzine, Los dolores osteomioarticulares se tratan con pa-
cetivizine (Zyvtec), lonatadine (Claritín) y astemi- racetamol, indometacina o ácido acetilsalicílico.

57
7

ASPECTOS INMUNOLÓGICOS
DEL TRASPLANTE DE ÓRGANOS

El trasplante de órganos constituye uno de los ma- Tal proceder desencadena una serie de mecanismos
yores logros en la historia de la medicina. Esta apa- específicos e inespecíficos encaminados a eliminar
sionante aventura científica desarrollada a lo largo ese cuerpo extraño que para el organismo del recep-
del siglo XX, fue posible gracias al avance alcanza- tor es el injerto.
do en las distintas disciplinas de la medicina, la ci- Como se ha expresado en capítulos anteriores, es
rugía y la biología. Hoy en día el trasplante es una el sistema inmunológico el responsable de recono-
opción terapéutica que permite mantener con vida a cer lo ajeno en el contexto de lo propio y esta fun-
muchos pacientes. ción, tan beneficiosa cuando se trata de luchar contra
Las posibilidades de éxito de un trasplante guar- las bacterias y otros agentes patógenos, resulta el
dan relación directa con el tipo de injerto del que se principal obstáculo en la realización de aloinjertos
trate. Cuando un órgano es cambiado de posición exitosos.
dentro de un mismo individuo, se dice que se ha Numerosos estudios experimentales ponen en
realizado un autoinjerto. Si el trasplante se realiza evidencia la participación fundamental del sistema
entre individuos genéticamente iguales (gemelos inmunológico en la reacción de rechazo; y en el hu-
mano, el estudio del trasplante renal ha permitido
univitelinos, cepas puras), se dice que se trata de un
verificar los trabajos experimentales realizados en
isoinjerto.
ratas.
Cuando la operación se efectúa entre individuos
Sobre la base de estas investigaciones se han iden-
de la misma especie pero con diferente constitución
tificado los denominados antígenos de trasplante,
genética, se le denomina aloinjerto, mientras que si
responsables de la estimulación de la respuesta in-
se realiza entre individuos de diferentes especies,
mune.
se le llama xenoinjerto.
Si se hace un autoinjerto o un isoinjerto, éste re- Antígenos de trasplante
sulta bien tolerado por el receptor; esto no ocurre
El sistema ABO constituye el sistema menor de com-
con el aloinjerto, que en la mayoría de los casos es patibilidad. Existen anticuerpos naturales contra los
rechazado, y mucho menos con el xenoinjerto, que antígenos de este sistema, responsables de que las
siempre lo es. transfusiones de sangre incompatibles sean rechaza-
De los diferentes tipos de injertos, el que más das rápida y bruscamente, al igual que pueden serlo
importancia tiene por su mayor utilización, es el los trasplantes de órganos ABO incompatibles.
aloinjerto, y a él se hará referencia cada vez que se Los antígenos de trasplante, llamados fuertes o
emplee el término injerto en el resto de este capítulo. dominantes, constituyen el sistema principal de his-
tocompatibilidad y por haberse estudiado en los leu-
Rechazo de un aloinjerto cocitos se le denomina HLA (human leucocyte
El trasplante de órganos y tejidos entre individuos antigens). Este sistema dota a cada individuo de una
de una misma especie o de especies diferentes, cons- personalidad antigénica propia.
tituye una violación de las leyes biológicas, pues a Estos antígenos están codificados por genes que
excepción de los gemelos homocigotos, cada indi- se localizan en el brazo corto del 6to par de cromoso-
viduo posee características antigénicas diferentes. mas y están repartidos en regiones cromosomales o

58
loci (plural del latín locus). A éstos se les denomina por ejemplo la ciclosporina, con propiedades nefro-
locus A, B y C (antígenos de clase I, expresados en tóxicas cuando se utiliza en altas dosis, han compli-
la superficie de todas las células nucleadas del orga- cado la interpretación histológica de éste.
nismo) y DR, DP y DQ (antígenos clase II, se encuen- El diagnóstico exacto de rechazo es esencial, no
tran restringidos a las células del sistema inmune, sólo para mantener la función del injerto con un tra-
como son los linfocitos B y los monocitos). Los an- tamiento adecuado, sino también para comparar los
tígenos codificados por el locus C no tienen impor- resultados clínicos de las distintas modalidades de
tancia para el trasplante, mientras que los de los locus tratamiento; esto ha hecho que los criterios histoló-
DR y B (y algo menos A) son los más importantes. gicos utilizados por diferentes centros se hayan es-
Los genes que codifican a estos antígenos se he- tandarizados.
redan en bloque o haplotipos. De los dos haplotipos En 1993 en Banff, Canadá, se reunieron nefrólo-
de que consta un individuo, uno es heredado de la gos, patólogos y cirujanos, y surgió una nueva cla-
madre y otro del padre. De esta manera, entre los sificación: clasificación de Banff:
hijos de los mismos padres existe un 25 % de pro-
babilidades de que dos sean iguales para estos antí- grado I: Histología normal.
genos (HLA idénticos), un 25 % de que sean grado II: Rechazo hiperagudo.
completamente distintos y un 50 % de haplotipos grado III: Cambios limítrofes.
idénticos, es decir, iguales para la mitad de estos grado IV: Rechazo agudo.
antígenos.
grado V: Nefropatía crónica del injerto.
En el trasplante de órganos en general se pueden
grado VI: Otros cambios.
postular tres leyes:
El rechazo hiperagudo ocurre dentro de las pri-
1. Compatibilidad ABO.
meras 72 horas que siguen al trasplante y se debe a
2. Compatibilidad entre donante y receptor para
la existencia de anticuerpos preformados contra el
los antígenos HLA (A, B y DR).
órgano injertado. Desde el punto de vista histológi-
3. Ausencia de anticuerpos anti HLA preformados
co se caracteriza por la presencia de microtrombos
en el suero del paciente, dirigidos contra antí-
en las arteriolas y glomérulos, así como por la infil-
genos del donante.
tración por polinucleares.
Mecanismos y tipos de rechazo Para el rechazo agudo el esquema de Banff enfa-
tiza la existencia de tubulitis y arteritis de la íntima
El futuro de los tejidos y órganos trasplantados de-
como criterios principales. La diferencia entre cam-
pende de numerosos factores, pero la respuesta del
receptor a los antígenos del tejido trasplantado cons- bios limítrofes y rechazo agudo está basada funda-
tituye el factor central. mentalmente en el número de linfocitos por sección
El estudio de la reacción de rechazo del injerto tubular y la extensión del infiltrado intersticial; la
renal ha completado las investigaciones experimen- arteritis de la íntima no está presente.
tales llevadas a cabo con los injertos de piel y de Las lesiones vasculares y glomerulares ayudan a
tumores sólidos. El rechazo es una reacción inmu- definir el tipo de nefropatía crónica y la presencia
nológica y está mediada por mecanismos celulares de fibrosis arterial oclusiva orienta hacia el diag-
y humorales, es decir, que en la reacción de rechazo nóstico de rechazo crónico.
participan la inmunidad celular y la mediada por
anticuerpos. La participación mayor o menor de cada Supervivencia de los aloinjertos
una de ellas depende de la existencia o no de la sen- Los factores que influyen en la supervivencia de un
sibilización previa y el tiempo de evolución del in- injerto son:
jerto.
Durante toda la evolución del trasplante han exis- • Experiencia del centro o grupo de trasplante.
tido diferentes clasificaciones del rechazo. El adve- • Tipaje HLA.
nimiento de nuevas drogas inmunosupresoras, como • Tratamiento inmunosupresor.

59
• Diagnóstico y tratamiento precoz del rechazo. Los diferentes centros de trasplante de órganos
• Uso de antibióticos potentes. han escogido sus propias combinaciones y se han
creado así diferentes esquemas de tratamiento.
Está demostrado que una mayor identidad de los
antígenos del sistema HLA entre donante y recep- Aspectos clínicos del trasplante
tor, se acompaña de una mayor supervivencia del de órganos
injerto a largo plazo. Los antígenos más importan- La dificultad en la obtención de los donantes consti-
tes, como ya se expresó, son los de los locus B y DR. tuye sin lugar a dudas una de las limitantes clínicas
El efecto de las transfusiones sanguíneas previas no inmunológicas del trasplante de órganos. Los de
al injerto ha sido un tema muy discutido durante donante cadáver son los más utilizados, aunque en
muchos años y se ha señalado que el no adminis- el caso del trasplante renal la posibilidad de emplear
trarlas ejerce un efecto negativo sobre la vida del donantes vivos (familiares del receptor) aumenta la
injerto; sin embargo, con el surgimiento de potentes supervivencia del injerto.
drogas inmunosupresoras, su beneficio ha sido re- Actualmente la demanda de órganos para trasplan-
valorado, aunque su uso ha disminuido por temor a tes crece por año, sin embargo, el número de órga-
la trasmisión de enfermedades virales, como hepati- nos donados se ha estabilizado y en algunos lugares,
tis, SIDA, etc. incluso ha disminuido; esto ha obligado a los cientí-
Un elevado porcentaje de pacientes transfundidos ficos a investigar sobre la utilización de órganos pro-
desarrollan anticuerpos anti HLA; esto ha hecho que cedentes de animales para trasplantar a humanos
las transfusiones de sangre sean consideradas como (xenotrasplante). Sin embargo, el trasplante de ór-
un procedimiento evaluativo a la hora de seleccio- ganos vascularizados entre animales que son gené-
nar a los receptores, que pone en evidencia la exis- ticamente diferentes produce un rechazo hiperagudo.
tencia o no en éstos de una determinada capacidad Esta agresiva y fulminante forma de rechazo no pue-
de respuesta inmune, es decir, es un proceso de se- de ser modificada por los medicamentos inmunosu-
lección que le permitió a Terasaki dividir a los re- presores disponibles, por lo que se requiere de
ceptores en dos grupos: técnicas más complejas.
Existen aloinjertos que por tener características
a) Grupo I o respondedores: constituido por per- especiales son poco rechazados, aun sin inmunosu-
sonas que producen títulos muy altos de anti- presión ; tal es el caso de los trasplantes de córnea y
cuerpos citotóxicos y por tanto, rechazan el de cartílago.
injerto. El renal es el más común, decenas de miles de
b) Grupo II o no respondedores, el cual incluye a pacientes han recibido un injerto renal en el mundo.
personas que a pesar de ser politransfundidas La posibilidad de utilizar un solo riñón para cada
producen anticuerpos en cuantía inferior; la receptor, el hecho de que la insuficiencia renal cró-
mayor parte de ellos se denominan de “fa- nica produce cierta inmunodeficiencia y la posibili-
cilitación”, pues bloquean las determinantes dad de los donantes vivos, así como la de sustituir la
antigénicas, no permiten la acción de los anti- función del órgano durante una crisis de rechazo, ha
cuerpos citotóxicos y toleran bien el injerto. hecho posible que el trasplante de riñón se convier-
ta prácticamente en el tratamiento de elección de la
La azatioprina y los esteroides constituyeron los insuficiencia renal crónica.
pilares sobre los cuales descansó el tratamiento in- Los injertos de corazón, hígado, pulmón y pán-
munosupresor del trasplante. En la actualidad se creas han recibido un gran impulso en la actualidad.
cuenta con un gran número de medicamentos capa- Los de médula ósea requieren de una marcada com-
ces de bloquear la respuesta inmune en algunos de patibilidad del sistema HLA, por lo que se prefiere
sus escalones, y de prolongar la supervivencia del a los hermanos del paciente como donantes. La po-
injerto; entre ellos tenemos: la ciclosporina, rapa- sibilidad de una reacción del injerto contra el recep-
micina, micofenolato mofetil, anticuerpos monoclo- tor es un hecho que hay que tener en consideración
nales, globulina antilinfocítica, etc. cuando se realiza este tipo de trasplante.

60
Otros aspectos biológicos dades se encuentran relacionadas con antígenos del
importantes del sistema principal sistema HLA.
En resumen, este sistema no sólo es indispensa-
de histocompatibilidad
ble para la realización de los injertos, sino que cada
El sistema principal de histocompatibilidad se ha día parece ganar más relevancia en el estudio e in-
utilizado también como marcador genético en el es-
terpretación de las distintas enfermedades que tie-
tudio de poblaciones y como prueba de identifica-
nen como denominador común una alteración de la
ción en casos de paternidad dudosa. Por otro lado,
se ha demostrado que un gran número de enferme- respuesta inmune.

61
BIBLIOGRAFÍA

1. ADELMAN, D. C. and A. TERR: “Allergic disease”, 7. ————: “Enfermedad del suero”, en Current
en L. M. Tierney, S. J. McPhee and M. A. Therapy, 50. ed. WB Saunders, Philadelphia,
Papadakis, Current Medical Diagnosis and USA, 1998; 742.
Treatment, 35 ed., Stamford CT, Appleton and 8. DIASIO, R. B.: “Principios de la farmacoterapia”,
Lange, 1996; 710-18. en Cecil, Tratado de Medicina Interna, 20 ed.,
2. _________: “Immunoglobulins and antibodies. t. 2, Editorial Ciencias Médicas, La Habana,
Cellular immunity. Autoimmunity”, en L. M. 1998; 103-17.
Tierney, S. J. McPhee and M. A. Papadakis,
9. HAYNES, B. F. and A. S. FACECI: “Bases celulares
Current Medical Diagnosis and Treatment, 35
y moleculares de la inmunidad”, en Harrison,
ed., Stamford CT, Appleton and Lange, 1996;
694-703. Principios de Medicina Interna, 13 ed., t. 2; In-
3. _________: “Allergic and immunological teramericana, McGraw-Hill, Nueva York, 1994;
disorders”, en L. M. Tierney, S. J. McPhee and 1775-93.
M. A. Papadakis, Current Medical Diagnosis and 10. KAPLAN, A. P.: “Anafilaxis”, en Cecil, Tratado
Treatment, 35 ed., Stamford CT, Appleton and de Medicina Interna, 20 ed., t. 1, Editorial Cien-
Lage, 1996; 710-19. cias Médicas, La Habana, 1998; 1637-40.
4. ALISTAIR, J., J. WOOD: “Reacciones adversas a los 11. LICHTENSTEIN, L. M.: “Allergic Reactions”, en
fármacos”, en Harrison, Principios de Medicina The Merck Manual of Medical Information,
Interna, 13 ed., t. 1, Madrid, Interamericana, Pennsilvania Merck Research Laboratories,
McGraw-Hill, Nueva York, 1994; 473-81. 1997; 823-32.
5. AUSTERN, K. F.: “Enfermedades por hipersensibi- 12. ROCA GODERICH, R.: “Enfermedad del suero”, en
lidad de tipo inmediato”, en Harrison, Princi- Temas de Medicina Interna, 3 ed., t. 3, Ed. Pueblo
pios de Medicina Interna, 13 ed., t. 2, y Educación, Ciudad de La Habana, 1985; 28.
Interamericana, McGraw-Hill, Nueva York, 13. V AN A RSDEL , J R . P. P.: “Disorders due to
1994; 1874-84.
hypersensitivity”, en The Merck Manual, 16 ed.,
6. DESHAZO, R. D.: “Anafilaxia”, en Current Therapy,
Rahway NJ, Merck Research Laboratories, 1992;
50 ed., WB Saunders, Philadelphia, USA, 1998;
318-42.
740.

62
Segunda Parte

ENFERMEDADES
DE LAS ARTICULACIONES
Y DEL COLÁGENO
8

ASPECTOS GENERALES
DE LAS ARTROPATÍAS

Las articulaciones tienen dos funciones básicas: pro- una membrana serosa y contienen un líquido idénti-
mover el movimiento y estabilizar el cuerpo para co al sinovial.
que aquél sea eficiente y económico. Los músculos El cartílago articular es elástico y amortigua los
realizan el movimiento y la cápsula articular, los li- impactos que reciben las superficies articulares. No
gamentos, los tendones y los músculos fijadores o contiene vasos nutricios ni nervios y alcanza su máxi-
tonígenos, hacen estable el resto del cuerpo huma- mo espesor en los puntos de más presión. En la peri-
no. Algunas articulaciones (tobillos, rodillas, cade- feria se continúa con la membrana sinovial y en el
ras, sacroilíacas, etc.) soportan el peso del cuerpo, interior, con el hueso. Histológicamente está consti-
lo que representa una sobrecarga funcional más para tuido por células (condrocitos) inmersas en la sus-
ellas. tancia fundamental, a la que atraviesan una serie de
Se conocen tres tipos de articulaciones: fibrillas que tienen dirección perpendicular a la su-
perficie al insertarse en el hueso, pero paralela a ella
1. Diartrosis o articulaciones verdaderas: son muy en el seno de la sustancia fundamental. Esta sustan-
móviles, como el codo, la rodilla y las interfa- cia es un condromucoide de proteínas y ácido con-
lángicas. drointinsulfúrico; este último es el resultado de la
2. Sinartrosis: son inmóviles, como la de los hue- combinación de dos moléculas de galactosamina y
sos del cráneo. una de ácido glucurónico.
3. Anfiartrosis: son semimóviles; algunas no tie- El cartílago funciona como un cojinete amortigua-
nen cartílago articular, como la articulación dor y a medida que envejece pierde agua y se vuelve
tibioperonea, pero otras sí, como la sínfisis menos elástico y, por lo tanto, más frágil. Su estre-
pubiana y los discos intervertebrales. cha relación con el hueso lo hace participar en los
procesos patológicos de éste. Se nutre de la diáfisis
Recordemos sucintamente la anatomía y la fisio- ósea y sobre todo de la sinovia articular.
logía de las diartrosis, por ser las más importantes La cápsula articular está formada por tejido co-
según los objetivos de este libro. nectivo rico en colágeno. En ciertos lugares se
Las articulaciones verdaderas o diartrosis están refuerza con ligamentos resistentes pero poco elás-
formadas por dos o más huesos, con un cartílago ticos, por lo cual puede romperse. Su cara interna
articular más o menos importante íntimamente li- está tapizada por la membrana sinovial, que se refle-
gado a los extremos de éstos, los que se mantienen ja a nivel de la inserción de la cápsula en el hueso y
unidos por una cápsula articular reforzada en deter- tapiza los cartílagos; así se forman los fondos de sa-
minados lugares por ligamentos, según la articula- cos sinoviales. Esta membrana reviste también los
ción de que se trate. La superficie interna de la tendones intrarticulares.
cápsula está recubierta por la membrana sinovial, La membrana sinovial forma vellosidades en su
serosa, que secreta un líquido viscoso llamado superficie, las cuales en estado patológico constitu-
sinovia. En algunas articulaciones existen unas for- yen la base del pannus articular. Es rica en vasos
maciones denominadas bursas (o bolsas), que en sanguíneos y linfáticos y en nervios, y tiene capaci-
forma de cojinetes se interponen entre las estructu- dad reparadora, por lo cual puede recuperarse de las
ras capsuloligamentosas y los tendones que atravie- lesiones, y de manera importante, en la artritis. Las
san la articulación. Las bursas están tapizadas por células sinoviales tienen aspecto epitelioide, pero son

65
células diferenciadas del tejido conjuntivo. A través sea por desuso o por afección muscular inflamatoria
del lecho sinovial se difunde el líquido sinovial, que de vecindad.
es un dializado de plasma con gran cantidad de mu- Todas las articulaciones deben ser sistemática y
cina, la que le confiere viscosidad y a lo que se debe cuidadosamente exploradas. Cuando se hace, cada
su función lubricante. una se coloca en la postura que menos dolor y es-
pasmo provoque. La deformidad que se observe puede
Síntomas y signos de las artropatías ser causada por inflamación, subluxación, contrac-
Dolor: Es un síntoma muy frecuente que se localiza tura o anquilosis. El contorno articular se examina
con relativa facilidad y suele irradiarse a lo largo de teniendo en mente el conocimiento previo de la lo-
uno de los miembros que componen la articulación. calización de la cápsula articular. Es muy importan-
El dolor articular es de dos tipos, mecánico e infla- te el color de la piel y el estado de ésta sobre la
matorio. articulación. La palpación debe ser muy delicada
El primero se desencadena al entrar en función para determinar el dolor en la piel, músculos, bursas,
la articulación y desaparece con el reposo, como en tendones, ligamentos, almohadillas adiposas y cáp-
la artropatía traumática. El segundo persiste aun con sula articular. Normalmente la membrana sinovial
el reposo, se intensifica durante la noche o al des- no es palpable; cuando está engrosada se siente “pas-
tosa”, con la consistencia del fango blando en las
pertar por la mañana y se atenúa con el movimiento.
partes blandas articulares. En caso de derrame sino-
Impotencia funcional. Síntoma importante y fre-
vial, hermatrosis o cualquier acumulación líquida,
cuente, generalmente acompañante del dolor, pero
se busca la fluctuación comprimiendo con una mano
que puede producirse por déficit muscular (trastor-
un lado de la articulación para percibir con la otra,
nos tróficos reflejos, miositis de vecindad), obstá-
colocada en el lado opuesto, la onda que se genera.
culo mecánico (osteofitos marginales), etc.
Es necesario precisar el grado de limitación del
Signos inflamatorios. Al igual que en otras es-
movimiento articular y tratar de determinar si es por
tructuras, la inflamación articular se identifica por
espasmo muscular, fibrosis (por cuerpos sólidos
los síntomas y signos cardinales: dolor, calor, rubor extraños en la cavidad) o anquilosis ósea. Debe bus-
y tumefacción. carse la presencia o ausencia de crepitaciones articu-
Las características del dolor ya fueron explica- lares.
das. La rubicundez regional se debe a dilatación
vascular. Este mismo mecanismo explica el calor o Clasificación de las artropatías
aumento de la temperatura. La tumefacción es el Este aspecto de las enfermedades articulares es muy
aumento de volumen circunscrito, producido por difícil, por la diversidad de enfoques que existen
edema inflamatorio y derrame sinovial. según los autores. A continuación se expone un bos-
Deformidades. Son muy frecuentes en la patolo- quejo que sirve como orientación clínica al momen-
gía articular. Son agudas y pasajeras (hemartrosis, to de abordar un enfermo con síntomas articulares.
derrame sinovial) o crónicas y permanentes (engro-
samiento e hipertrofias sinoviales, subluxaciones). 1. Trastornos del tejido conectivo de base inmu-
Las deformaciones dependen de retracciones liga- nológica (enfermedades del colágeno).
mentosas o tendinosas, que crean una actitud vicio- a. Fiebre reumática
sa permanente (pie varoequino). b. Artritis reumatoidea
Limitaciones de los movimientos. Los movimien- c. Lupus eritematoso diseminado
tos deben ser explorados y comparados con los de la d. Esclerodermia
articulación simétrica. Siempre se explorará el mo- e. Dermatomiositis
vimiento activo y el pasivo. Ambos tienen general- f. Poliarteritis nudosa
mente la misma limitación, excepto en los casos de g. Púrpura trombocitopénica trombótica
dolor y de ruptura, en los que la motilidad activa h. Síndrome de Sjögren
está más reducida. i. Enfermedad mixta del tejido conectivo
Trastornos tróficos: Los músculos vecinos a una 2. Artritis asociadas a espondilitis.
articulación enferma tienen tendencia a atrofiarse, a. Espondilitis anquilopoyética

66
b. Síndrome de Reiter b. Tumores óseos yuxtarticulares
c. Artritis psoriásica c. Metástasis
d. Artritis asociada a enfermedad crónica in- d. Mieloma múltiple
flamatoria intestinal e. Leucemias y linfomas
e. Enfermedad de Whipple f. Osteocondromatosis
f. Espondiloartropatía seronegativa asociada al
SIDA Consideraciones diagnósticas
3. Artritis infecciosas. en las artropatías
a. Gonocócica
b. Estafilocócica Al establecerse el diagnóstico de una afección ar-
c. Salmonelósica ticular, es útil considerar dos grandes variedades
d. Tuberculosa atendiendo a la base histopatológica de las artropa-
e. Brucelósica tías: las inflamatorias y las no inflamatorias, pues
f. Posrubéola tienen traducción clínica y del líquido sinovial to-
g. Hepatitis viral (por virus B) talmente distintas.
4. Enfermedad degenerativa articular o artrosis. Las artropatías inflamatorias son las artritis, de
5. Artropatías traumáticas. muy frecuente observación en la práctica y de causa
6. Artropatías endocrinometabólicas. múltiple. Pueden ser agudas o crónicas. En las artri-
a. Gota tis agudas son muy intensos los signos inflamato-
b. Seudogota rios y frecuente el derrame articular; este último se
c. Ocronosis instala en el curso de pocas horas o días. Las que
d. Acropaquia más se presentan en la práctica diaria son la fiebre
e. Acromegalia reumática, la artritis infecciosa y la artritis gotosa.
f. Hiperparatiroidismo Es posible que a la artritis aguda sigan las cróni-
g. Enfermedad de Wilson cas y a su vez, la evolución de éstas produzca un
h. Hemocromatosis brote inflamatorio agudo. La más frecuente de ellas
7. Artropatías neurógenas (articulación de Char- es la poliartritis crónica progresiva o artritis reuma-
cot). toidea, que por lo general afecta, al comienzo, a las
a. Neuropatía diabética pequeñas articulaciones de manera simétrica; otra
b. Tabes dorsal variedad es la tuberculosa, de observación infrecuen-
c. Siringomielia te en nuestros días. La deformidad o tumefacción
d. Mielomeningocele articular de las artritis crónicas obedece más a proli-
8. Artropatías asociadas a enfermedades del sis- feración sinovial, subluxaciones, formaciones pato-
tema hemolinfopoyético. lógicas, etc., que a edema inflamatorio o derrame
a. Hemoglobinopatías sinovial.
b. Hemofilia El diagnóstico de una artritis se enfoca también
c. Agammaglobulinemia considerando ésta desde el punto de vista de la mag-
9. Artropatías asociadas a reacciones alérgicas. nitud de la articulación dañada, pues las diartrosis
a. Enfermedad del suero pueden ser grandes, como la rodilla, el tobillo, la
b. Púrpura de Schönlein-Henoch cadera, el hombro, etc., y pequeñas, como las arti-
10. Otras. culaciones interfalángicas, metacarpofalángicas, etc.
a. Reumatismo palindrómico El reumatismo articular agudo o fiebre reumáti-
b. Eritema nudoso ca, la hemartrosis hemofílica, la artritis infecciosa
c. Eritema multiforme piógena y otras artropatías, afectan generalmente a
d. Osteoartropatía pulmonar hipertrófica las grandes articulaciones, al menos al inicio de la
e. Sinovitis vellosa pigmentada enfermedad.
f. Síndrome hombro-mano La forma de afectación de las articulaciones de la
11. Tumores articulares. mano posee valor diagnóstico importante; así, las
a. Sinoviomas articulaciones metacarpofalángicas son respetadas

67
por la artrosis, las articulaciones interfalángicas del látex es positiva en un alto porcentaje de los en-
distales se afectan característicamente por la artrosis fermos de artritis reumatoidea, pero suele ser positi-
y la artritis psoriásica, mientras que la artritis reu- va igualmente en la cirrosis, sarcoidosis, endocarditis
motoidea ataca a las articulaciones interfalángicas infecciosa subaguda, tuberculosis y algunas colage-
proximales. En el síndrome de Reiter se producen nosis. Los anticuerpos antinucleares son a veces po-
cambios sinoviales, periarticulares y periósticos en sitivos en la artritis reumatoidea, síndrome de
algunas articulaciones interfalángicas distales, proxi- Sjögren, esclerodermia, lupus eritematoso disemi-
males y metacarpofalángicas de manera asimétrica. nado y otras enfermedades. Si la sospecha de lupus
La gota también toma las articulaciones interfalán- es muy fuerte, la determinación de anticuerpos anti
gicas distales de forma asimétrica, y ocurren depó- ADN de doble cadena, anti Sm, antirribonucleopro-
sitos periarticulares tofáceos, algunos de los cuales teína y los niveles de complemento sérico, serán muy
pueden ser vistos debajo de la piel como manchas útiles para el diagnóstico. La creatinfosfoquinasa
de color carmelita pálido. La osteoartropatía pulmo- sérica y la transaminasa glutámico oxalacética se
nar hipertrófica incluye los dedos en palillo de tam-
elevan en la miositis.
bor y el dolor a la presión en la porción distal del
Los exámenes radiológicos son muy útiles para
radio y del cúbito por la periostitis de éstos.
el estudio de síntomas localizados mal definidos,
El comienzo hiperagudo de una artritis mo-
pues detectan tumores primitivos, metastásicos,
noarticular es propio de la gota, la seudogota y el
osteomielitis, infartos óseos, calcificaciones periar-
reumatismo palindrómico. Además de la artritis, tam-
ticulares y otros cambios de tejidos profundos. El
bién producen dolor y aumento de volumen de las
articulaciones, la hemartrosis, hemofílica o no, la estrechamiento del espacio articular, erosiones y
hidrartrosis, las fracturas óseas y la rasgadura o rup- quistes son típicos de la artritis reumatoidea cróni-
tura del cartílago articular. ca, pero pueden observarse en la gota y en la artrosis.
Algunas artritis agudas son principalmente mo- La TAC y la RMN se usan para aclarar imágenes
noarticulares, por ejemplo, la artritis infecciosa complejas no bien definidas en los rayos X.
supurada, la gota (en estadios tempranos) y la seu- Otros estudios útiles en pacientes seleccionados
dogota. También ciertas artritis crónicas tienden a son la biopsia sinovial quirúrgica o por aspiración
ser monoarticulares, tales son la artritis tuberculosa con aguja, el ultrasonido, la artroscopia, el gamma-
y la artritis de la sífilis terciaria (gomosa). grama o scanning óseo y de médula ósea, la electro-
Existen variedades de artritis migratorias y es la miografía, la velocidad de la conducción nerviosa,
fiebre reumática el prototipo de ellas. También la la termografía y la biopsia de músculo y hueso.
artritis gonocócica en sus primeros días o semanas El estudio del líquido sinovial brinda importantes
es muy semejante a la fiebre reumática, por su ca- datos de orientación diagnóstica: el líquido normal
rácter migratorio. Otras veces, el cuadro clínico es es de color claro, transparente y de una viscosidad
semejante al de la artritis reumatoidea. Cuando es alta; tiene una cifra de leucocitos inferior a 200 por
supurada, generalmente afecta a una sola articula- mm3 con menos de 25 % de neutrófilos y su conte-
ción y el líquido sinovial debe cultivarse en medios nido en glucosa es similar al de la sangre extraída al
especiales para detectar el gonococo. La tenosinovitis mismo tiempo que el líquido sinovial. El líquido de
de las manos, muñecas y pies es más común en la las artropatías no inflamatorias tiene un color ama-
artritis gonocócica que en cualquier artropatía. rillo transparente y una viscosidad alta. El número
de celulas es inferior a 2 000 por mm3 con menos de
Estudios diagnósticos un 25 % de neutrófilos y la cantidad de glucosa es
Los exámenes de laboratorio son útiles para el diag- similar a la de la sangre extraída al mismo tiempo
nóstico de cada tipo específico de artropatía. La ace- que el líquido sinovial. En las artropatías inflamato-
leración de la eritrosedimentación y el aumento de rias el líquido tiene un color amarillo translúcido y
la proteína C reactiva, son típicos de las artropatías una viscosidad baja. La cifra de leucocitos oscila
inflamatorias. Los niveles sanguíneos de ácido úrico entre 2 000 y 100 000 por mm3 con más de 50 % de
están elevados en la gota y en la terapéutica con dosis neutrófilos. Su contenido en glucosa es inferior
bajas de aspirina, diuréticos y alcohol. La prueba en 25 mg o menos al de la sangre obtenida al mismo

68
tiempo que el líquido sinovial. El color del líquido En los capítulos que siguen se describen la artri-
de la artritis piógena varía según el germen y el tiem- tis reumatoidea (aunque es una colagenosis, predo-
po de evolución de la enfermedad; es opaco y por lo minan en ella y tienen características propias las
general poco viscoso. La cifra de leucocitos sobre- manifestaciones articulares), la artritis infecciosa, la
pasa los 100 000 por mm3, con una proporción de enfermedad degenerativa articular, la gota, las ar-
neutrófilos superior a 75 %, y la de glucosa es infe- tropatías reaccionales y las enfermedades del
rior a la de la sangre extraída al mismo tiempo, en colágeno. En otras partes de esta obra se describen
más de 25 mg. El cultivo microbiológico frecuente- la fiebre reumática, la colitis ulcerativa, etc., y se
mente es positivo. exponen las características esenciales de la afección.

69
9

INFLAMACIÓN

El médico clínico se enfrenta diariamente a nume- de el comienzo de ésta y, sobre todo una vez termi-
rosos ejemplos de inflamación en sus pacientes y nada la respuesta aguda, se ponen en marcha una
que tienen muy diversas causas. Esto se pone de serie de complejos procesos que, en lo posible, tra-
manifiesto, unas veces a través de la constatación tarán de restituir el tejido dañado.
directa de los signos clásicos inflamatorios, como Debe entonces quedar perfectamente aclarado que
sucede en la afectación de estructuras superficiales, la inflamación es, primero y en esencia, una reac-
tales como articulaciones y piel, y en otras ocasio- ción de defensa. Habría que preguntarse entonces
nes, mediante síntomas indirectos que traducen in- por qué ante estas circunstancias nos empeñamos en
flamación de órganos y tejidos profundos, como combatirla con una amplia gama terapéutica y a tra-
hígado, pulmón, etc. vés de diversos procedimientos.
Una definición exacta de la respuesta inflamato- La respuesta es, como ya se dijo, que el propio
ria que abarque los muchos fenómenos que la cau- mecanismo inflamatorio es capaz de dañar al hués-
san, sería extensa y controvertida. Teniendo en ped y convertirse en una reacción peligrosa. Por
cuenta esta característica y siguiendo conceptos bá- ejemplo, el exudado presente en la zona inflamada
sicos, se puede decir que la inflamación es una re- es un elemento de extraordinaria importancia para
acción del tejido conjuntivo vivo y vascularizado combatir una infección bacteriana, pero se converti-
ante una agresión. ría a su vez, en un factor agresor muy peligroso en
Existen otros mecanismos de defensa aislados que algunas estructuras anatómicas como la laringe, y
están presentes en los organismos vivos carentes de
por otra parte, en enfermedades como la artritis reu-
sistema vascular y que se conservan en el humano,
matoidea, carece de función útil. Otro ejemplo que
como son: la fagocitosis del agente nocivo, el
debe tenerse en cuenta lo constituyen las respuestas
englobamiento de irritantes por células especializa-
inflamatorias autoinmunes, que pueden llevar a una
das y otros, pero éstos no constituyen, como tal, el
severa agresión de los tejidos afectados y donde los
fenómeno inflamatorio. Tampoco se enmarcan en
mecanismos de reparación originan cicatrices y
este concepto las respuestas de los epitelios y pa-
fibrosis deformantes que limitan la movilidad de di-
rénquimas, que se limitan a dos formas principales:
la degeneración y la hiperplasia. Por último, vale la versas estructuras o dificultan la función de diferen-
pena resaltar, que para que se produzca la respuesta tes órganos, como ocurre en las colagenopatías y otras
inflamatoria es imprescindible la presencia de los enfermedades autoinmunes. Por último, las reaccio-
vasos sanguíneos, por lo que las estructuras normal- nes inflamatorias agudas son la base de la respuesta
mente no vascularizadas, tales como el cartílago anafiláctica ante las picaduras de insectos y algunos
interarticular y la córnea, no pueden inflamarse sin fármacos.
vascularización previa. Hunter, en 1793, estableció que la inflamación no
La inflamación está en íntima relación con el era una enfermedad sino una reacción inespecífica
mecanismo de reparación. Es una realidad que, me- ante una agresión. Por lo tanto, es posible conside-
diante el proceso inflamatorio, el organismo huma- rarla, con algunas particularidades distintas en cada
no se defiende de las agresiones, pues se produce caso, como una respuesta estereotipada desde el pun-
una verdadera batalla no exenta de causar daños a to de vista morfológico, con características muy si-
las propias estructuras del huésped, por lo que des- milares para cualquier agente etiológico.

70
En los momentos inmediatos a la acción de un se mantiene desde algunos minutos hasta pocos días
agente agresor, se produce una respuesta vascular y se caracteriza, en sentido general, por la produc-
con salida de células y líquido del espacio intravas- ción de edema debido a la exudación de líquidos y
cular hacia la zona lesionada. Este acontecimiento proteínas plasmáticas y la emigración de leucocitos,
es denominado inflamación aguda y continuará hasta sobre todo, neutrófilos.
que el agente agresor sea eliminado y los mecanis- La forma clínica de la respuesta inflamatoria agu-
mos de reparación actúen y resuelvan los daños oca- da pasa por dos fases consecutivas:
sionados. 1. Respuesta vascular.
Si el agente causal de la agresión no es suprimi- 2. Respuesta leucocitaria.
do, se perpetúa el mecanismo inflamatorio y adopta a. Respuesta leucocitaria primaria.
características más definidas, según la causa y el te- b. Respuesta leucocitaria tardía.
jido dañado. Este proceso, prolongado en el tiempo,
donde concomitan la respuesta inflamatoria y los me- Respuesta vascular
canismos de reparación, se conoce con el nombre Los fenómenos que sucesivamente acontecen en el
tejido conjuntivo vascularizado ante la presencia de
de inflamación crónica, y en algunos casos aparece
un agente lesional inflamatorio, se basan en la interac-
desde el principio con características distintivas.
ción entre diferentes agentes químicos, tanto proce-
Causas de la inflamación dentes del propio foco inflamatorio, como presentes
en el plasma, y de la expresión de diversas molécu-
La inflamación se produce como respuesta a los las de membrana. Los mecanismos neurogénicos
agentes agresivos que se conocen y de hecho es parecen mediar sólo en las fases muy iniciales de la
posible afirmar que, todo agente que sea capaz de inflamación (vasoconstricción).
producir lesión celular puede desencadenar el me- La primera respuesta vascular durante el meca-
canismo inflamatorio. nismo inflamatorio se caracteriza por una vasocons-
Agentes desencadenantes clásicos son: tricción pasajera de arteriolas. De inmediato se
I. Exógenos. produce vasodilatación (Fig 9.1), que afecta inicial-
a. Físicos (traumatismos, heridas, cambios tér- mente a las arteriolas, seguida de una apertura de
micos, etc.). los esfínteres precapilares, lo que propicia un incre-
b. Químicos (ácidos, alcoholes, fenoles, etc.). mento del flujo sanguíneo a través de los sistemas
c. Radiaciones (luz ultravioleta y radiaciones antes establecidos y de la apertura de nuevos lechos
ionizantes). capilares, que ocasiona la hiperemia.
d. Microrganismos (bacterias, virus, hongos, La hiperemia condicionará un aumento de la pre-
etcétera). sión hidrostática, responsable de la trasudación ini-
II. Endógenos. cial de líquido pobre en proteínas hacia el espacio
a. Reacciones inmunológicas alteradas (reac- extravascular. Este fenómeno se asocia a un aumen-
ciones de hipersensibilidad y autoinmuni- to de la permeabilidad capilar y de las vénulas, oca-
dad). sionado por las sustancias que participan en la
b. Privación del aporte sanguíneo (isquemia, respuesta inflamatoria y se produce un exudado rico
tejido infartado, etc.). en proteínas, característico de esta fase de la infla-
c. Líquidos orgánicos escapados de su lugar de mación.
origen (bilis, orina, sangre y líquido sino- La capa endotelial, normalmente impermeable, es
vial). afectada durante el proceso inflamatorio y es enton-
d. Neoplasias. ces atravesada por líquido y proteínas. Este proceso
se ha tratado de explicar a través de los siguientes
INFLAMACIÓN AGUDA mecanismos.

Como se explicó antes, la presencia de una agresión 1. Contracción de las células endoteliales, que
con independencia de su causa, originará un meca- amplían las hendiduras intercelulares.
nismo de defensa conocido como inflamación agu- 2. Retracción de las uniones intercelulares endo-
da. Este proceso es de duración relativamente corta, teliales.

71
Normal

Flujo de líquidos

Arteria. Esfínter Vénula


precapilar

Lecho capilar

Inflamación
Salida de líquidos y
proteínas al espacio
extravascular

Dilatación Dilatación de las


arterial Apertura vénulas
del esfínter Expansión del
precapilar lecho capilar
Fig. 9.1. Fase vascular de la inflamación aguda.

3. Lesión endotelial directa, que produce escurri- endoteliales, proceso que se denomina migración
miento vascular. (Fig. 9.2).
4. Lesión endotelial dependiente de leucocitos ac- El fenómeno de quimiotaxis lleva a los polimor-
tivados. fonucleares y macrófagos hacia el lugar de la lesión,
5. Incremento de la transcitosis a través de una los que se mueven a través de un gradiente de con-
vía vesículo-vacuolar intracelular. centración de sustancias con participación de una
serie de elementos que tienen capacidad para indu-
cir la migración leucocitaria al interactuar con los
La salida de proteínas y líquido condiciona un
receptores específicos en las membranas de estas
aumento de la viscosidad sanguínea, con enlenteci-
células.
miento del flujo vascular (estasis) y alteración de la
La llegada de leucocitos al sitio de la lesión ini-
relación espacial de las células sanguíneas al situar-
ciará uno de los procesos más importantes de la res-
se los eritrocitos en una posición central en el vaso puesta inflamatoria, la fagocitosis. Este fenómeno
sanguíneo y disponerse los leucocitos en la periferia implica la adhesión de los leucocitos al agente pató-
de éste. geno y presenta varias formas de interacción:

Respuesta leucocitaria 1. Reconocimiento de algunos elementos carac-


En la respuesta leucocitaria primaria o inicial, los terísticos de los agentes patógenos, como por
leucocitos, fundamentalmente neutrófilos y mono- ejemplo, componentes de la pared bacteriana.
citos, son empujados hacia la periferia del vaso san- 2. Reconocimiento de determinadas proteínas del
guíneo, se adhieren a las paredes de éste y se deslizan huésped, como son inmunoglobulinas, fraccio-
a lo largo de la supeficie endotelial, fenómeno que nes del sistema de complemento, etc., proceso
se conoce como marginación y rodamiento leucoci- que se denomina opsonización y que favorece
tario (como se verá más adelante, en este paso de la la identificación del agente inflamatorio.
respuesta inflamatoria desempeñan un importante 3. Ingestión inespecífica del agente causal por los
papel las moléculas de adhesión). polimorfonucleares.
A continuación, estos leucocitos abandonarán el
vaso sanguíneo a través de un mecanismo activo que Una vez fagocitado el agente agresor, la mem-
los llevará a atravesar las uniones intercelulares brana limitante de la vacuola fagocitaria se fusiona

72
Moléculas de adhesión leucocitaria
Polimorfonuclear VLA-4
Monocito
MAC-1
LFA-1

Selectina (SL) Glicoproteína


Sialil-Lewis
(GSL)
CD-34 PECAM-1
GL y CAM-1
(GC)

Selectina P (SP) Selectina E (SE) ICAM-1 VCAM-1


(ELAM-1)

Célula endotelial
1
2

(SL) (GSL) LFA-1 PECAM-1


(GC) VLA-4
MAC-1

CD-34 SP SE ICAM-1 VCAM-1

Fig. 9.2. Migración leucocitaria: 1. adhesión laxa de leucocitos con participación de moléculas de selectinas, 2. adhesión firme y
rodamiento leucocitario sobre la superficie endotelial con la participación de integrinas y moléculas de la superfamilia de las
inmunoglubinas, 3. diapédisis con participación de PECAM-1, molécula de la superfamilia de las inmunoglobulinas.

con la membrana limitante del gránulo lisosómico; ponen en contacto con los antígenos de histocom-
se forma así el fagolisosoma, donde se vierten patibilidad de clase II; se comportan entonces los
enzimas lisosómicas encargadas de destruir al ele- macrófagos como células presentadoras de antígenos.
mento inflamatorio. Este sistema se considera como El reconocimiento de estos epítopos por los lin-
independiente de oxígeno y no está exento de riesgo focitos T, unido a todo un sistema estimulador pro-
para el huésped, pues algunas de estas enzimas pue- ducido por el propio macrófago, pone en marcha la
den escapar del leucocito fagocitario hacia el medio respuesta inmunológica con producción de inmuno-
externo, ocasionar daño hístico y amplificar la res- globulinas específicas y células activadas dirigidas
puesta inflamatoria. a neutralizar y destruir totalmente al agente lesivo.
Como se planteó antes, en el proceso de margina-
Otro mecanismo importante que se produce en el
ción, rodamiemto, adhesión y transmigración de los
seno de la vacuola de fagocitosis, es la activación
leucocitos a través de las células endoteliales en la
del complejo enzimático generador de radicales de
zona inflamada, las moléculas de adhesión leucoci-
oxígeno. Estos procesos unidos van encaminados a taria (cuadro 9.1) ejercen un papel fundamental. Se
la destrucción total de la agresión. han identificado tres grandes familias de estas mo-
En una etapa más tardía de la respuesta leucocita- léculas: selectinas, integrinas y superfamilia de las
ria, se producirá un estímulo inmunológico. Si bien inmunoglobulinas.
los neutrófilos mueren durante el enfrentamiento con Las selectinas son glucoproteínas transmembra-
el agente agresor, no sucede así con los macrófagos. nales constituidas por una sola cadena polipeptídi-
Estos últimos fragmentarán al agente inflamatorio y ca. Estas moléculas desempeñan un rol principal en
lo expresan en su superficie como epítopos, que se las primeras etapas de la adhesión de leucocitos

73
CUADRO 9.1
PRINCIPALES MOLÉCULAS DE ADHESIÓN PARTICIPANTES EN LA RESPUESTA INFLAMATORIA

Molécula Familia Expresión Ligando Función


1. Selectina L Selectina Leucocitos GL y CAM-1 Migración de leucocitos, adhesión
CD-34 laxa y transitoria. Rodamiento.
2. Selectina P Selectina Endotelio activado Mol.Sialil- Reclutamiento de leucocitos.
Lewis Rodamiento.
3. Selectina E Selectina Endotelio activado Mol.Sialil- Reclutamiento de leucocitos.
(ELAM-1) Lewis Rodamiento.
4. LFA-1 Integrina Leucocitos ICAM-1 Adhesión firme de leucocitos.
5. MAC-1 Integrina Leucocitos ICAM-1 Adhesión firme de leucocitos.
6. VLA-4 Integrina Leucocitos VCAM-1 Adhesión firme de leucocitos.
7. ICAM-1 Superfamilia de las Células endotelias LFA-1 Adhesión firme de leucocitos.
inmunoglobulinas y otras MAC-1
8. VCAM-1 Superfamilia de las Células endotelias VLA-4 Adhesión firme de leucocitos.
inmunoglobulinas y otras
9. PECAM-1 Superfamilia de las Células endotelias PECAM-1 Diapédesis de leucocitos al espacio
inmunoglobulinas y otras extravascular.

polimorfonucleares, monocitos y linfocitos al endo- Las moléculas endoteliales de adhesión, inclui-


telio y plaquetas y en el proceso de rodamiento de das en el grupo de la superfamilia de las inmunoglo-
estas células sobre la superficie endotelial. El reco- bulinas más importantes en el proceso inflamatorio,
nocimiento de sus respectivos ligandos (receptores) son: ICAM-1 (molécula 1 de adhesión intercelular)
se produce a través del dominio tipo lectina presen- y VCAM-1 (molécula 1 de adhesión de las células
te en su extremo aminoterminal (de ahí su nombre vasculares).
de selectina), y es dependiente de calcio. Esta fami- Las integrinas expresadas en la superficie leuco-
lia de moléculas es responsable de la adhesión laxa citaria, que funcionan como receptores para las mo-
léculas endoteliales, son: para ICAM-1, la LFA-1 y
y transitoria entre los leucocitos y las células endo-
MAC-1, mientras que VCAM-1 se une a la VLA-4.
teliales.
A través de la acción de estas moléculas, los leu-
Las principales selectinas son: selectina L, que se
cocitos se adhieren de forma estable a la superficie
expresa en linfocitos, neutrófilos y monocitos e in- endotelial del vaso sanguíneo en la zona lesionada y
teracciona con las adhesinas GL y CAM-1 y CD-34, atraviesan ésta hacia el espacio extravascular (dia-
expresadas por las células endoteliales; la selectina E pédesis). Este último paso se piensa que esté media-
(también conocida por ELAM-1), limitada al endo- do por PECAM-1 (molécula 1 para la adhesión de
telio activado por citoquinas y sus ligandos en las células endoteliales a las plaquetas, también cono-
células sanguíneas, manifiesta oligosacáridos del cido por CD-31), molécula perteneciente a la
grupo Lewis y Sialil-Lewis, y por último, la selectina superfamilia de las inmunoglobulinas.
P, presente sobre el endotelio y plaquetas, y se com-
porta de forma similar a la selectina E.
Las selectinas, en condiciones normales, se en- INFLAMACIÓN
cuentran en concentraciones muy bajas o están au-
sentes, y se evidencian solamente ante estímulos CRÓNICA
relacionados con el proceso inflamatorio, por lo que
su acción está limitada a las zonas lesionadas del Ante determinadas circunstancias el proceso infla-
organismo. matorio persiste semanas, meses o años, como ocurre
El proceso de adhesión firme y diapédesis de los con algunas infecciones y reacciones inmunológicas
polimorfonucleares y monocitos sobre las células que se perpetúan. En este caso se constituye la lla-
endoteliales, se produce a través de la participación mada inflamación crónica, con características pro-
de moléculas endoteliales de adhesión de la superfi- pias que la identifican; puede ser consecutiva a una
cie de las células leucocitarias. inflamación aguda que se prolonga o en algunos

74
casos, comenzar con los elementos clásicos de la cro- Las células plasmáticas son las responsables de
nicidad. En cualquier situación, la inflamación acti- la producción de anticuerpos contra antígenos pre-
va con sus particularidades concomita con el proceso sentes en el foco inflamatorio o contra componentes
de reparación. hísticos alterados. Los eosinófilos participan en el
Los mecanismos fundamentales para explicar la proceso de inflamación crónica en relación con in-
aparición de la inflamación crónica son los si- fecciones parasitarias, ya que los gránulos de estas
guientes: células contienen una proteína básica mayor con
carga catiónica elevada de alta toxicidad para los
1. Inflamación aguda que se prolonga por persis- parásitos, o en reacciones inmunológicas mediadas
tencia del estímulo desencadenante o ataques
por IgE, como ocurre en los procesos alérgicos.
repetidos de ésta, como ocurre en las colecisti-
Un elemento distintivo dentro de la inflamación
tis y pielonefritis recurrentes.
crónica lo constituye la inflamación granulomatosa,
2. Comienzo insidioso de un proceso inflamato-
producida por una agregación de macrófagos acti-
rio de baja intensidad que nunca llega a pre-
sentar los elementos típicos de la inflamación vados que han adquirido un aspecto de células
aguda, como ocurre en las infecciones persis- escamosas agrandadas llamadas epitelioides. Las
tentes por organismos intercelulares, en la tu- causas de su formación son variadas, y es la tuber-
berculosis, en la exposición prolongada a culosis la más distintiva de la enfermedad granulo-
sustancias no degradables, en la silicosis, y por matosa, aunque también se ve como respuesta a otras
último, en las reacciones inmunes contra los infecciones bacterianas como la lepra, cuerpos ex-
tejidos propios, como se observa en las enfer- traños, parásitos, o de causa desconocida, como en
medades autoinmunes. la sarcoidosis.

A diferencia de la inflamación aguda, donde la El sistema linfático en la inflamación


respuesta es estereotipada con predominio de poli- Los vasos y ganglios linfáticos desempeñan un pa-
morfonucleares y un típico carácter exudativo, en la pel limpiador del espacio extravascular donde se ha
inflamación crónica las características son más de- producido un proceso inflamatorio. A través del flujo
finidas según el agente etiológico, su intensidad y linfático aumentado en estos casos, drena el líquido
las propiedades del huésped. Las células que predo- acumulado por el edema que se forma consecutivo a
minan en esta fase son los monocitos, macrófagos, los distintos fenómenos acontecidos durante la in-
linfocitos y células plasmáticas. Acompaña a este flamación, y arrastra, además, leucocitos extravasa-
infiltrado celular la proliferación de fibroblastos, dos y desperdicios celulares.
pequeños vasos sanguíneos y aumento del tejido
Los linfáticos también suministran antígenos y lin-
conectivo, procesos morfológicos que conducen a
focitos T y B hacia los ganglios de este sistema, don-
la producción de fibrosis.
de la reunión de dichos elementos provoca el inicio
Como consecuencia de la activa participación de
de una respuesta inmunológica. Así se convierten,
macrófagos y linfocitos en la inflamación crónica,
en este proceso cobra una mayor importancia la res- junto al sistema mononuclear, en una línea secunda-
puesta leucocitaria tardía explicada en la inflamación ria de defensa que actúa cuando ha fallado la reac-
aguda, que consolida una respuesta inmunológica ción inflamatoria local.
encaminada a enfrentar al agente etiológico y que Sin embargo, el drenaje linfático también puede
en esta fase será, lógicamente, más prolongada. tener un papel negativo al facilitar, en algunos ca-
Esta interacción macrófago-linfocito está regula- sos, la diseminación del agente nocivo, por lo que
da por la acción de un importante número de ele- se desarrolla una reacción inflamatoria capaz de abar-
mentos donde predominan la interleuquina 1 (IL-1) car tanto los vasos como los ganglios linfáticos.
y el factor de necrosis tumoral alfa (FNT-α), secre- Cuando estas líneas defensivas se vuelven inefi-
tados por macrófagos y que son estimuladores de caces para neutralizar al agente agresor, y por lo tan-
los linfocitos y, por otra parte, el interferón gamma to, son rebasadas por éste, los organismos infecciosos
(INF-γ), liberado por los linfocitos activados, que pueden alcanzar el torrente circulatorio, provocar una
es un estimulador de macrófagos. bacteriemia y sistematizar el proceso inflamatorio.

75
Mediadores de la reacción La histamina se produce fundamentalmente en las
células cebadas (que predominan en las áreas peri-
inflamatoria vasculares) y basófilos, mientras que la serotonina
Según los postulados de sir Henry Dale, en 1929, se encuentra en mayores cantidades en las plaque-
las sustancias consideradas como mediadoras de la tas. Ambas aminas se almacenan en los gránulos
inflamación deben reunir los siguientes requisitos: citoplasmáticos y se liberan ante diferentes estímu-
los como son: agentes físicos (traumatismos y ca-
1. Inducción de algún signo inflamatorio. lor), anafilotoxinas (C5a y C3a), reacciones de
2. Liberación durante el proceso inflamatorio. hipersensibilidad (participación de IgE), citocinas
3. Reducción de su actividad con antinflamato- (IL-1 e IL-8) y neuropéptidos (sustancia P).
rios conocidos. El papel de las aminas vasoactivas en las distin-
tas fases de la inflamación es variado, y depende de
Siguiendo esta idea, los principales mediadores los receptores celulares específicos sobre los que
de la reacción inflamatoria conocidos en la actuali- actúen en cada caso, de su concentración plasmática
dad, son: y del grado de integridad del endotelio.
En sentido general, se puede decir que estas sus-
1. Aminas vasoactivas. tancias ejercen su acción al provocar la vasodilata-
2. Proteasas plasmáticas. ción inicial de la respuesta inflamatoria y favorecer,
3. Lípidos bioactivos. por tanto, el aumento de la permeabilidad capilar al
4. Citocinas. causar contracción del endotelio y ampliación de las
5. Enzimas lisosómicas. uniones celulares interendoteliales.
6. Radicales libres.
Proteasas plasmáticas
Aminas vasoactivas
Este sistema (Fig. 9.3) incluye tres factores estre-
Las dos principales aminas vasoactivas liberadas chamente interrelacionados y vinculados todos con
durante la respuesta inflamatoria son: la histamina y la activación inicial del factor Hageman (factor XII
la serotonina (5-hidroxitriptamina). de la cascada intrínseca de la coagulación):
Factor XII

Factor XIIa

Sistema plasmático de las cininas


Precalicreína Calicreína plasmática Factor XI a Factor XI

Bradicina Cininógeno
Sistema de la coagulación
de alto PM
Procalicreína Calicreína hística Trombina Protrombina

Kalidina Cininógeno de bajo PM

Sistema hístico de las cininas Plasminógeno

Plasmina Fibrina Fibrinógeno


C3a C3
Desdoblamiento Fibrinopéptidos
Sistema del C3b de la fibrina
complemento sérico
C3a C5

Complemento de C5b
ataque de membrana C6
C7
C8
C9
Fig. 9.3. Sistema de las proteasas plasmáticas.

76
a. Sistema de la coagulación sanguínea. 1. Aumento de la permeabilidad vascular.
b. Sistema de las cininas. 2. Incremento de la adhesividad del leucocito al
c. Sistema del complemento sérico. endotelio.
3. Quimiotaxis de los leucocitos.
Sistema de la coagulación sanguínea 4. Desdoblamiento del componente C3 del com-
El factor Hageman es una proteína plasmática sinte- plemento sérico.
tizada en el hígado que, en estado natural, circula en
el torrente sanguíneo en su forma inactiva. Es acti- Sistema de las cininas
vado de manera no específica por un gran número El sistema de las cininas está formado por dos com-
ponentes fundamentales que actúan de forma con-
de agentes que se encuentran, frecuentemente, en
junta:
los lugares donde se ha producido una lesión endo-
telial.
1. Sistema plasmático: está integrado por el cini-
SUSTANCIAS ACTIVADORAS DEL FACTOR
nógeno de alto peso molecular y la precalicreí-
HAGEMAN EN LA INFLAMACIÓN na, dos precursores que circulan juntos en el
plasma. Ante la acción del factor XIIa de la
1. Endotoxinas. coagulación, la precalicreína se convierte en
2. Colágena. calicreína, enzima que a su vez actúa sobre el
3. Elementos de la membrana basal y plaquetas activadas.
cininógeno y lo convierte en bradicinina, que
4. Cristales de ácido úrico.
5. Cristales de pirofosfato de calcio. es una sustancia activa.
6. Componentes degradados del cartílago articular. 2. Sistema hístico: está formado por el cininóge-
7. Otras sustancias contenidas en el líquido sinovial. no de bajo peso molecular y la procalicreína.
Su activación se produce ante la acción de la
calicreína plasmática sobre la procalicreína y
La activación del factor XII desencadena una cas- la convierte en calicreína hística. Esta enzima
cada proteolítica que a su vez activa a la trombina actúa sobre el cininógeno de bajo peso molecu-
(factor II a), que por un lado desdobla al fibrinóge- lar y origina la lisilbradicinina, también cono-
no para generar un coágulo de fibrina, mientras que cida con el nombre de kalidina, que es la otra
por otro incrementa la adhesividad de los leucocitos sustancia activa de este sistema.
al endotelio. Los fibrinopéptidos resultantes del des-
doblamiento del fibrinógeno, aumentan la permeabi- Los efectos fundamentales de las cininas en el
lidad capilar y son quimiotácticos para los leucocitos; proceso inflamatorio se producen debido a su ac-
estas acciones son parte del proceso inflamatorio. ción sobre los receptores B2, lo que ocasiona resul-
Al unísono y como un mecanismo regulador, el tados similares a los de las aminas vasoactivas que
propio factor XIIa activa al sistema fibrinolítico para incluyen:
evitar una coagulación masiva del torrente sanguí-
a. Vasodilatación.
neo. En el contexto de la inflamación, el proceso de
b. Aumento de la permeabilidad vascular.
fibrinólisis también participa como un mecanismo
c. Irritación neuronal responsable del dolor.
facilitador de ésta a través del desdoblamiento del
plasminógeno (proteína unida al coágulo de fibrina) Sistema del complemento sérico
en plasmina, proteasa que además de descomponer El sistema del complemento consta de una serie de
la fibrina, incrementa la permeabilidad vascular y proteínas presentes en el plasma de forma inactiva,
desdobla el componente C3 del complemento para que son activadas por estímulos diversos, tales como
producir C3a (ver más adelante). inmunocomplejos, endotoxinas, productos bacteria-
En resumen, el sistema de la coagulación sanguí- nos, etc.
nea participa directamente en el proceso inflama- Este proceso implica la activación del factor C3,
torio a través del factor Hageman mediante los elemento común a las vías clásica y alternativa del
mecanismos siguientes: complemento, lo que produce el desdoblamiento de

77
esta molécula en dos fragmentos: C3b, que perma- cipación del sistema del complemento como ampli-
nece unido al agente que originó su activación y C3a, ficador de esta respuesta, se puede resumir a través
que es liberado al plasma. de las siguientes acciones:
Un gran número de células, pero fundamentalmen-
te las fagocíticas, poseen receptores para C3b, por 1. Favorecer la fagocitosis de agentes inflamato-
lo que este factor actúa como opsonina favorecien- rios (opsonización).
do la fagocitosis de agentes inflamatorios. Por otro 2. Lisis directa de células extrañas mediante el
lado, esta molécula continúa la activación del com- complejo de ataque.
plemento a través de la vía común y produce la libe- 3. Favorecer la liberación de aminas vasoactivas.
ración de otros factores colaterales, como el C5a y 4. Aumento de la adhesividad de leucocitos al en-
forma el complejo de ataque C5-Ca, capaz de pro- dotelio.
ducir la lisis de la célula extraña que inició la res- 5. Quimiotaxis de los leucocitos.
puesta inflamatoria. 6. Activación de la vía hipoxigenasa del AA.
Por su parte, los fragmentos C3a y C5a poseen Lípidos bioactivos
capacidad anafilotóxica y degradan los mastocitos
En este grupo de mediadores se destacan, en primer
y, por ende, favorecen la liberación de aminas vaso-
lugar, los productos derivados del metabolismo del
activas. Además, estas moléculas aumentan la AA (Fig. 9.4) conocidos como eicosanoides, los
adhesividad de los neutrófilos y de las células mo- cuales desempeñan un papel muy activo en el me-
nonucleares al endotelio, actúan como quimioatrac- canismo de la respuesta inflamatoria. El AA es un
tantes para dichas células y activan la vía de la ácido graso polinsaturado componente de los fosfo-
hipoxigenasa del ácido araquinódico (AA) (ver más lípidos de la membrana celular y es liberado debido
adelante). Los factores C3a y C5a también son activa- a la acción de fosfolipasas celulares activadas por
dos por enzimas proteolíticas (hidrolasas lisosómi- distintos factores, entre los que se destacan los estí-
cas y plasmina) presentes en el exudado inflamatorio mulos mecánicos, físicos o químicos, o por media-
y autoperpetúan la respuesta inflamatoria; la parti- dores inflamatorios, como el C5a.

Fosfolipasa A2

Ácido araquidónico

Cicloxigenasa Lipoxigenasa

PGG2 5 HPETE

5 HETE LTA4
PGH2

Prostaglandina
sintetasa Tromboxano
sintetasa LTB4 LTC4

Prostaciclina
sintetasa LTD4

PGE2 PGI2 TXA2


LTE4
PGD2
PGF2α TXB2

Fig. 9.4. Metabolismo del ácido araquidónico.

78
El metabolismo del AA incluye dos vías dife- 3. Aumenta la generación de radicales libres.
rentes: 4. Modula la síntesis de eicosanoides.
1. Vía de la cicloxigenasa. 5. Estimula la secreción de citocinas proinflama-
2. Vía de la lipoxigenasa. torias.
6. Induce la retracción de las células endoteliales,
La vía de la cicloxigenasa incluye una serie de lo que aumenta la permeabilidad vascular.
prostaglandinas como son: PGE2, PGD2, PGF2α, 7. Incrementa la adhesión de los leucocitos a tra-
PGI2 (prostaciclina) y tromboxano, derivadas cada vés de la integrina por cambios morfológicos.
una de ellas de la acción de enzimas específicas que 8. Estimula la desgranulación del leucocito.
predominan en distintas células y tejidos del orga-
nismo. Citocinas
En sentido general, estas prostaglandinas infla- Las citocinas son polipéptidos segregados por dife-
matorias tienen una potente acción vasodilatadora rentes tipos de células (endotelio, células del tejido
(a excepción del tromboxano, que produce vasocons- conectivo, etc.), pero fundamentalmente relaciona-
tricción), potencian la formación de edema al au- dos con la inmunidad a través de los linfocitos y
mentar la permeabilidad vascular y son capaces de macrófagos. Tienen como característica común que
ocasionar fiebre y dolor por irritación neuronal. actúan modulando la función de otros tipos de célu-
Los estudios recientes sobre la cicloxigenasa re-
las e incluyen las clásicas interleucinas, interferones,
velaron dos tipos de esta enzima: COX1 y COX2.
factor de necrosis tumoral alfa y los factores esti-
(Ver antinflamatorios no esteroideos en “Artritis
mulantes de colonias. Este grupo de moléculas con-
reumatoidea”.)
templa una amplia variedad de elementos muy
En la vía de la lipoxigenasa, la 5-lipoxigenasa es
relacionados entre sí, pero en particular se conside-
la enzima predominante en los neutrófilos. A través
ran citocinas inflamatorias la IL-1, el FNT-α, la IL-
de la acción de esta enzima sobre el AA se forma 5-
6, la IL-12 y las intercrinas. La secreción de estos
HPETE (5-hidroperoxi de AA), que dará lugar a dos
mediadores es estimulada por endotoxinas, comple-
grupos de derivados: el 5-HETE, que tiene acción
jos inmunes, toxinas, lesión física y numerosos mo-
quimiotáctica sobre los neutrófilos, y una familia de
duladores de la respuesta inflamatoria.
compuestos llamados leucotrienos (LT).
La IL-1 y el FNT-α son capaces de estimular la
El primer LT formado es el LTA4, que por un lado
expresión de moléculas de adhesión, secreción de
da lugar al LTB4, potente agente quimiotáctico de
otras citocinas (sobre todo IL-6 e IL-8) y produc-
neutrófilos (la síntesis de LTB4 es inhibida por la
ción de eicosanoides y de óxido nítrico. Por otra
colchicina), y por otra parte, al LTC4 y sus metabo-
parte, también favorecen la aparición de respuestas
litos subsecuentes LTD4 y LTE4, causantes de vaso-
sistémicas como fiebre, pérdidas metabólicas que
constricción, espasmo bronquial e incremento de la pueden llevar a la caquexia, hipotensión arterial, al-
permeabilidad vascular. teraciones del ritmo sueño-vigilia y producción de
El otro biolípido importante en el proceso infla- reactantes de fase aguda.
matorio es el factor activador de plaquetas (PAF), Específicamente, el FNT-α a altas concentracio-
que es un conjunto de, al menos, 16 especies molecu- nes produce una intensa vasodilatación con altera-
lares que comparten un mismo esquema estructural. ción de la permeabilidad vascular, tanto por acción
Durante la inflamación, el PAF puede ser sintetiza- directa como a través de la inducción de factores
do y liberado por todos los tipos de leucocitos poli- endoteliales vasodilatadores, como prostaciclina y
morfonucleares y por las células del sistema óxido nítrico.
mononuclear fagocítico. La IL-6 participa en la activación de linfocitos T
La participación del PAF en la respuesta inflama- y B, estimula el crecimiento de queratinocitos (por
toria comprende las siguientes acciones: lo que se ha vinculado a la patogenia de la psoriasis)
y produce proliferación de células mesangiales (pue-
1. Estimula la liberación de neuropéptidos (sus- de provocar el desarrollo de una glomerulonefritis
tancia P). mesangial). De forma similar a IL-1 y FNT-α, tam-
2. Aumenta la quimiotaxis de los leucocitos. bién produce respuesta sistémica y es el principal

79
inductor de los reactantes de fase aguda. En cuanto desapareado o impar en la órbita externa, lo que les
a este último efecto, las citocinas antes menciona- confiere una configuración espacial que genera una
das (IL-1, IL-6 y FNT-α), actúan sobre los hepato- alta inestabilidad. La investigadora argentina Rebe-
citos vigilando la producción de varias proteínas ca Gerschman sugirió por primera vez que los RL
plasmáticas, entre las que se destacan la proteína C eran agentes tóxicos y planteó que, el desequilibrio
reactiva, α1- antitripsina, α2 globulinas y otras). entre oxidantes y antioxidantes era capaz de gene-
Las intercrinas, atendiendo a su estructura, se di- rar afecciones.
viden en dos grupos: α y β. Las principales inter- Entre las especies reactivas relacionadas con el
crinas α son: IL-8, factor 4 plaquetario y la β- oxígeno se reconocen las siguientes: anión superóxido,
tromboglobulina, que ejercen su efecto induciendo peróxido de hidrógeno, radical hidroxilo y oxígeno
quimiotaxis y expresión de receptores de membra- singulete. De éstas, la más potente es el hidroxilo y
na en los neutrófilos. Por otro lado, las intercrinas β el menos reactivo es el peróxido de hidrógeno.
incluyen a las proteínas inflamatorias macrofágicas Los polimorfonucleares constituyen una fuente
(MIP-1 y MIP-2) y la molécula RANTES (regulated importante de RL cuando se activan por diversos
on activation normal T expressed and secreted), que mecanismos (complemento, interleukina, etc.,) como
estimulan el sistema mononuclear fagocítico e in- ocurre en la inflamación. Estos leucocitos poseen
ducen quimiotaxis, proliferación de macrófagos en su membrana la enzima NADPH oxidasa gene-
hísticos y secreción de otras citocinas macrofágicas. radora de oxígeno, que produce radical superóxido
en las membranas plasmáticas y en las vacuolas de
Enzimas lisosómicas
los fagocitos. La interacción de dos moléculas de
La fagocitosis macrofágica y la destrucción de los superóxido-dismutasa, genera peróxido de hidróge-
neutrófilos polimorfonucleares en el foco inflama- no que, aunque no es un verdadero radical libre, es
torio, generan la liberación de gran número de
capaz de provocar lesión celular por su capacidad
enzimas lisosómicas (proteasas).
de formar hidroxilo en presencia de metales, como
Las proteasas ácidas por lo general sólo son acti-
el hierro.
vas dentro de los fagolisosomas, pero las proteasas
Los RL pueden ejercer efectos tóxicos sobre las
neutras (elastasa, colagenasa y catepsina) son acti-
membranas celulares a través de los siguientes me-
vas también en la matriz extracelular y provocan
canismos:
lesiones hísticas por descomposición de la elastina,
1. Daño endotelial (trombosis y aumento de la
colágena, membrana basal y otras proteínas; ade-
permeabilidad).
más, tienen la propiedad de activar otros sistemas
que participan en la reacción inflamatoria, como son: 2. Activación de proteasas e inactivación de anti-
proteasas.
1. Activación enzimática del complemento (des- 3. Lesión directa a otros tipos celulares.
doblamiento de C3 y C5 en C3a y C5a ).
2. Estimulación de péptidos similares a la bradi- Como es común en los mediadores de la respues-
cinina a partir del cininógeno, al mediar en el ta inflamatoria, la generación de RL es un fenóme-
paso de precalicreína a calicreína. no fisiológico relacionado fundamentalmente con la
defensa antibacteriana. Sin embargo, al ser vertidos
Estos efectos son controlados por una serie de en el medio extracelular son capaces de lesionar las
antiproteasas presentes en el suero y la matriz extra- estructuras próximas, por lo que el organismo dis-
celular, que incluyen a la macroglobulina α2 y la pone de sistemas antioxidantes como catalasa, su-
α1 antitripsina. El déficit de estos inhibidores en el peróxido dismutasa (SOD) y glutatión, así como de
pulmón, por ejemplo, condiciona una activación sos- sustancias exógenas, como las vitaminas E y C.
tenida de las proteasas de leucocitos, lo que provoca Hace poco se ha demostrado que algunas células
enfisema pulmonar. que participan en la inflamación, en particular las
del sistema mononuclear fagocítico, producen es-
Radicales libres pecies reactivas que incluyen nitrógeno en su estruc-
Se considera radical libre (RL) a aquellas moléculas tura. La mejor estudiada es el óxido nítrico, que es
que en su estructura atómica presentan un electrón un gas soluble en forma de radical libre de acción

80
fugaz, liberado en lo fundamental por el endotelio 1. Complemento.
vascular. V. Destrucción 2. Enzimas lisosómicas.
El óxido nítrico desempeña múltiples papeles en celular 3. Radicales libres.
la inflamación, entre los que se destacan: 4. Óxido nítrico.

1. Relajación del músculo liso vascular (vasodi- 1. IL-1.


latación). VI. Activación de 2. IL-6.
2. Antagonismo de todas las etapas de activación leucocitos 3. FNT-α.
de plaquetas. 4. PAF.
3. Agente microbicida en los macrófagos acti-
vados.
Manifestaciones clinicobiológicas
Resumen de los mediadores químicos de la inflamación
de la inflamación La naturaleza inflamatoria de una lesión es reconoci-
Como se ha visto anteriormente, los mediadores da por el sufijo itis (hepatitis, artritis, meningitis, etc.),
químicos que participan en la inflamación son di- y sus signos clínicos cardinales fueron descritos
versos y actúan en distintas etapas de ésta. Por otra por Celso desde épocas tan tempranas como el año
parte, muchos de ellos interaccionan entre sí y faci- 30 a.n.e. Estas manifestaciones clínicas son: calor,
litan o retardan diferentes procesos, de manera tal rubor, tumor y dolor, a las que posteriormente se
que elementos estimulantes de algún paso del fenó- agregó la impotencia funcional.
meno inflamatorio, a su vez pueden servir de meca-
nismos de control en otros. 1. Calor. El aumento de calor en la zona inflama-
A continuación se ofrece un resumen de los prin- da es provocado por la acumulación de sangre
cipales mediadores químicos y su acción según las y el incremento de la actividad metabólica.
distintas etapas de la inflamación. 2. Rubor. Esta manifestación se atribuye, funda-
mentalmente, a la dilatación de pequeñas arte-
1. Aminas vasoactivas. rias y venas, arteriolas, vénulas y capilares, así
2. Prostaglandinas. como al estasis sanguíneo característico del área
I. Vasodilatación 3. Óxido nítrico. de inflamación.
4. Cininas. 3. Tumor. La tumefacción se explica por el ede-
5. IL-1 y FNT-α ma localizado en la zona inflamada debido al
aumento de la permeabilidad vascular. También
II. Aumento de la 1. Aminas vasoactivas. participa en el desarrollo de este importante
permeabilidad 2. Prostaglandinas. signo el aumento de células inflamatorias en la
3. IL-1 y FNT-α. región afectada.
4. Leucotrienos. 4. Dolor. El dolor se produce por irritación de las
5. PAF. fibras nerviosas del área de lesión, bien sea por
6. Cininas. el aumento de tensión de los tejidos distendidos
por el edema, como por la acción de algunos
III. Aumento de la 1. Factor Hageman. mediadores del proceso inflamatorio, como la
adhesión 2. Complemento sérico. bradicinina, PGE2 y otros.
leucocitaria 3. PAF. 5. Inpotencia funcional. Todos los mecanismos
4. IL-1 y FNT-α explicados anteriormente, de una manera u otra,
limitan la función del área inflamada.
1. Complemento sérico.
IV. Quimiotaxia de 2. Leucotrienos. Estos signos son locales y sólo son evidentes en
leucocitos 3. PAF. aquellas zonas que pueden ser observadas por el
4. Factor Hageman. médico. Junto con ellos aparecen manifestaciones
5. IL-8. sistémicas ocasionadas, en lo fundamental, por la

81
acción de las interleukinas y, que por regla general, como la velocidad de sedimentación globular
son proporcionales a la intensidad y duración del y la electroforesis de proteínas.
proceso inflamatorio. Entre las principales, tenemos: En la producción de estas proteínas desempe-
ña un papel fundamental la cascada de citocinas
1. Fiebre. La fiebre es, dentro de las manifesta- inflamatorias. El FNT-α induce la producción
ciones sistémicas de la inflamación, una de las de IL-1 y ésta a su vez estimula la formación
más frecuentes e importantes. La IL-1, el FNT-α de IL-6, elementos que actúan de forma con-
y la IL-6 actúan sobre el centro hipotalámico junta sobre el hepatocito y estimulan la sínte-
termorregulador y desencadenan la elevación sis de los reactantes de la fase aguda.
de la temperatura por producción de PGE2.
2. Alteración del patrón habitual sueño-vigilia. En Consideraciones finales
la inflamación se produce la inducción de un Como se ha podido observar, el tejido vivo vascula-
estado de somnolencia mantenida. rizado en todo el organismo humano dispone, a tra-
3. Anemia. Se conoce con el nombre de anemia vés de la respuesta inflamatoria, de un formidable
de los trastornos crónicos y habitualmente es mecanismo de defensa ante las diversas agresiones
normocítica y normocrómica. Su mecanismo que suele recibir, tanto procedentes del entorno,
de producción no se conoce con exactitud y se como de su propio medio interno. Sin embargo, a
ve en la inflamación prolongada. pesar de todo lo que se ha avanzado en los últimos
4. Cuadro general de astenia, anorexia y pérdida años en el conocimiento de la inflamación, aún per-
de peso, en los procesos inflamatorios intensos sisten muchos puntos oscuros que deberán ser acla-
o duraderos. rados para una mejor comprensión de los detalles
5. Neutrofilia. Por lo común, se produce un mar- de este complejo y fascinante fenómeno.
cado aumento de los neutrófilos circulantes por El propio hecho de que los elementos que forman
estímulo directo de la liberación por la médula parte de esta respuesta puedan convertirse en deter-
ósea de precursores inmaduros. Sin embargo, minados momentos y ante circunstancias especia-
algunos procesos específicos pueden cursar con les, en agresivos para el organismo, obliga a disponer
neutropenia, eosinofilia o linfocitosis. de medicamentos capaces, no sólo de controlar y
6. Inducción de síntesis de reactantes de fase agu- modular la inflamación, sino de llegar a erradicarla.
da. Como ya fue explicado antes, en el proceso Sólo el mejor conocimiento de las fases del fenó-
inflamatorio agudo se produce la liberación de meno inflamatorio y de sus mediadores permitirá
proteínas conocidas globalmente como reactan- llegar a disponer en un futuro de las drogas antinfla-
tes de fase aguda, que incluyen la proteína C matorias ideales en cada caso, de acuerdo con las
reactiva, α1-antitripsina, α2-globulina y otras, etapas del proceso que más estén imbricadas en las
medibles a través de pruebas de laboratorio, reacciones del tejido inflamado.

82
10

ARTRITIS REUMATOIDEA

La artritis reumatoidea (AR) es una enfermedad puntos fundamentales: factores genéticos del hués-
sistémica crónica de causa no precisada, cuyas ca- ped (hay pruebas de la relación genética de la AR y
racterísticas más llamativas son las lesiones infla- lo más caracterizado ha sido el sistema HLA); facto-
matorias articulares persistentes, de distribución res iniciadores y perpetuadores (está planteado pero
simétrica, que conducen a la destrucción de las arti- no demostrado un agente infeccioso como factor ini-
culaciones afectadas y de las estructuras periarticu- ciador de la AR); y factores inmunorreguladores (los
lares. Evoluciona de manera progresiva en la macrófagos del infiltrado inflamatorio de la mem-
mayoría de los enfermos, tiene un curso fulminante brana sinovial producen citocinas, responsables en
en otros y menos frecuentemente se limita a unas última instancia de la destrucción hística caracterís-
articulaciones con escaso daño y curso breve. El tica).
proceso reumatoideo lleva a la anquilosis articular. Es relativamente frecuente encontrar que el inicio
Aunque el hecho más acusado lo constituye la de la enfermedad esté relacionado con la pérdida de
inflamación proliferativa de la membrana sinovial, un familiar querido, una intervención quirúrgica u
se observan anormalidades pulmonares, cardiovas- otras situaciones de stress. A veces la artritis se ini-
culares, hematológicas y neurológicas en el curso cia después de una infección local o general, sin que
de ella. Se le conoce también por poliartritis cróni- haya mayor relación en este sentido con ningún ger-
ca progresiva, reumatismo crónico deformante, ar- men en particular. Sin embargo, en la actualidad se
tritis crónica primaria, etc. toma en consideración la causa viral (virus de Epstein-
Barr, virus de inclusión citomegálica, parvovirus,
Frecuencia rubéola), o por micoplasma y bacterias (estafiloco-
La prevalencia es aproximadamente de 8 por 1 000 co, estreptococo). Éstos u otros agentes infectantes
habitantes y varía según la población entre 3 y 21 desencadenarían una reacción inmunológica en el
por 1 000. En mayor o menor proporción, esta en- tejido sinovial, que sería la responsable de todos los
fermedad se encuentra en todas las latitudes, aun- cambios histopatológicos de la enfermedad, si la in-
que es más frecuente en los climas templados que fección es persistente o produce sustancias que se
en los trópicos, y su incidencia es tres veces mayor retienen en la articulación.
en la mujer que en el hombre. Aparece, por lo co- A algunos de estos productos, especialmente de
mún, entre los 30 y los 60 años, aunque no resulta bacterias gramnegativas, se les ha hallado semejan-
extraño encontrar casos que comiencen después de za con las moléculas de HLA-DR; otros actuarían
los 60 años. Afecta a todas las razas. como “superantígenos” con la capacidad de ligarse
a moléculas del mismo antígeno de histocompatibi-
Etiopatogenia lidad. Pero todo lo dicho permanece en el terreno de
Se desconoce la causa de la AR, no obstante, se acep- la investigación.
tan varios factores capaces de desencadenar el El 70 % de los enfermos de AR tienen el antígeno
cuadro, mientras otros son considerados como pre- HLA-DR4 (sólo el 28 % de la población sana lo por-
disponentes. En la actualidad existen datos relevan- ta). En los grupos poblacionales donde no se mani-
tes relacionados con la inmunopatogenia de la fiesta esta asociación, se ha comprobado, en cambio
enfermedad y la investigación se ha centrado en tres la frecuencia significativa del antígeno HLA-DR1 o

83
del HLA-DW 16. Éstas y otras moléculas del com- CUADRO 10.1
plejo mayor de histocompatibilidad asociadas a la PRINCIPALES ACCIONES DE LAS CITOCINAS
DETECTADAS EN LA SINOVIAL REUMATOIDEA
AR, comparten la misma secuencia de aminoácidos
en la tercera región hipervariable de la cadena b de Citocina Acciones
la molécula en las posiciones 67 a 74.
Otros genes que no pertenecen al complejo HLA IL-1 y FNT- α • Hiperplasia de la capa bordeante de
tienen importancia en la patogenia de la AR. De ellos, los sinoviocitos.
sólo se citarán los que controlan la expresión del • Producción de colagenasa y PGE2.
• Reclutamiento de células inflamato-
receptor en las células T y de ambas cadenas, lige-
rias.
ras y pesadas, de la molécula de inmunoglobulina. • Desmineralización.
Los factores genéticos son muy importantes, pero
GM-CSF • Activación de macrófagos.
sobre ellos deben actuar otros de tipo ambiental que • Expresión de antígenos de clase II
también participan de la etiopatogenia de la enfer- del complejo mayor de histocompa-
medad, tales como el clima y la urbanización. Los tibilidad.
factores atmosféricos se encuentran entre los desen- IL-6 • Inhibición de la acción de
cadenantes más comunes. La exposición al frío, a la metaloproteasas.
humedad y al agua por largo tiempo, son precipitan- • Síntesis de proteínas de fase aguda.
tes de la enfermedad. • Producción de inmunoglobulinas.
El primer evento que desencadena el proceso si- IL-8 • Migración de polimorfonucleares.
novial parece ser una lesión microvascular con trom- TGF-B • Estímulo de mecanismos
bosis de los pequeños vasos, edema e infiltración de regeneradores.
células mononucleares. La exposición del endotelio • Inhibición de la función de las célu-
vascular se produce por la acción sobre éste de las las T.
citocinas, que facilitan la entrada de las células en PDGF (factores de • Hiperplasia de la capa bordeante
los tejidos. crecimiento deriva- de sinoviocitos.
Hay varios tipos de células mononucleares, pero dos de las plaquetas)
predomina el linfocito TCD4+, aunque también es-
tán los linfocitos TCD8+. Ambos se encuentran en Los complejos inmunes activan el complemento
la proximidad de los macrófagos y de las células con la formación de anafilotoxinas y factor quimio-
dendríticas. La gran mayoría de los linfocitos TCD4+ táxico de los leucocitos y estimulan la activación de
son células de memoria, agrupadas fundamentalmen- las células endoteliales de las venas poscapilares,
te alrededor de las vénulas. Tanto las células TCD4+ que las hacen más eficientes en la adhesión de célu-
como las TCD8+ muestran el antígeno de activa- las circulantes.
ción CD69. El líquido sinovial refleja la inflamación de la
También los linfocitos B están presentes en la
membrana, pero la célula predominante es el leuco-
articulación inflamada y se diferencian en células
cito polimorfonuclear, que con su rica dotación en-
plasmáticas, que producen inmunoglobulinas poli-
zimática produce metabolitos oxidantes.
clonales, y el factor reumatoideo. La consecuencia
Las gammaglobulinas de la articulación reuma-
de esto es la formación de complejos inmunes. Los
fibroblastos activados originan colagenasa y catep- toidea tienen caracteres similares a las del plasma,
sinas, enzimas que atacan la sustancia fundamental pero en cambio actúan como antígenos. Estas gam-
de los tejidos articulares, y con los osteoclastos cau- maglobulinas antigénicas o factor reumatoideo pue-
san la erosión del hueso. den ser IgM, IgA, IgG, IgD e IgE y reaccionan con
Las moléculas de citocinas segregadas por los lin- la IgG por el fragmento Fc. La experimentación ani-
focitos, macrófagos, fibroblastos y células endote- mal ha demostrado que la IgG que actúa como antí-
liales, son las responsables de la inflamación de la geno, está alterada (alteración que la hace antigénica)
membrana sinovial y de su proliferación, así como como resultado de su combinación con un antígeno
del daño del cartílago y el hueso; y junto con los que puede haber actuado crónicamente o durante
complejos inmunes, de las manifestaciones sistémi- cierto tiempo. Se presume que éste sea una bacteria
cas de la enfermedad (cuadro 10.1). o más probablemente un virus.

84
El factor reumatoideo IgM es el más abundante y El debilitamiento y la destrucción de estas estruc-
al reaccionar con la IgG (cuya constante de sedi- turas articulares y el desequilibrio muscular que los
mentación es 7S) forma un complejo soluble, con acompaña, provoca luxaciones, inestabilidad, etc.,
una nueva constante de 22S. y el desarrollo de tejido fibroso entre ambas super-
Los factores reumatoideos IgA e IgG también for- ficies articulares lesionadas da lugar a anquilosis
man complejos solubles al reaccionar con la IgG, articular.
pero de constante de sedimentación comprendida La formación de folículos linfocitarios en la mem-
entre 75 y 195; ellos no son detectados por los mé- brana sinovial es muy característica de la AR.
todos de laboratorio clínico en uso, pero pueden es- No sólo ocurre destrucción articular, sino también
tar presentes en el suero de los enfermos con factor atrofia precoz de los músculos periarticulares, inde-
reumatoideo negativo (seronegativos) y desempe- pendientemente del desuso que imponga la enfer-
ñan un importante papel patogénico en las manifes-
medad, y quizás a causa de alteraciones vasculares
taciones sistémicas de la enfermedad. Algunos de
que se producen y que comprometen la nutrición de
estos complejos reaccionan y se forman en el líqui-
esas estructuras.
do sinovial, donde encuentran un pH y una tempe-
Una lesión muy característica la constituye el
ratura adecuados.
La formación de complejos inmunes consume nódulo subcutáneo y su estudio histopatológico per-
complemento. Ellos se depositan en la sinovial y en mite observar un tejido granulomatoso. El granulo-
el cartílago articular y luego son fagocitados con la ma reumatoideo está constituido por una zona de
consecuente liberación de enzimas. Después de ser necrosis fibrinoide central y detritus celulares, y una
fagocitados, se observan en el microscopio de fase corona de varias cubiertas de grandes células mono-
unos gránulos redondeados, refringentes, de color nucleares. Alrededor de esta última existe infiltra-
verdoso y situados en la periferia del fagocito; son ción linfocitaria y monocítica abundante. Este nódulo
las células de la AR que, aunque se las ve con fre- se encuentra en los pulmones, la pleura, las cuerdas
cuencia, no son exclusivas de esta afección. vocales y el corazón (válvulas, miocardio).
Los hechos patogénicos expuestos son muy atra- La arteritis de la AR varía desde una acumulación
yentes, mas la verdadera causa permanece oscura. focal linfocitaria periarterial, en arterias de media-
No obstante, parece haber quedado demostrado que no y pequeño calibre, hasta una arteritis necrotizante
los enfermos con AR presentan una mayor inciden- con necrosis fibrinoide, en la que se demuestra por
cia de alteraciones psicosomáticas e hipocondríacas, inmunofluorescencia el depósito de inmunoglobuli-
y que están mal dotados psicológicamente para re- na y complemento. Se observa en la piel (úlceras),
solver situaciones emocionales fuertes. lecho ungueal, vasa nervorum (polineuropatía) y ar-
terias cerebrales, coronarias e intestinales. Sin em-
Anatomía patológica bargo, no afecta a las arterias renales.
Como ya se dijo, la inflamación constituye la alte-
ración que inicia y domina la escena en la AR. Al Cuadro clínico
principio el cuadro se caracteriza por la turgencia El cuadro clínico de la AR varía considerablemen-
inflamatoria de las articulaciones y por la toma de te. A veces se instala en forma brusca, en ocasión de
sus estructuras: membrana sinovial, cápsulas, liga- una situación de tensión, pero por lo general las pri-
mentos, etc. El carácter proliferativo de la sinovial
meras manifestaciones son vagas. Casi siempre co-
articular es lo habitual en la inflamación reuma-
mienza con dolores erráticos no muy intensos, en
toidea.
distintos sitios, que suelen durar semanas o meses,
La membrana proliferada forma numerosas eva-
ginaciones que se extienden hacia la cavidad articu- hasta que se localizan. Otras veces la enfermedad se
lar y el cartílago, y lo destruye, lo mismo que ocurre inicia con un ataque articular, acompañado de sínto-
posteriormente con el hueso subcondral comenzan- mas generales que pueden llevar hasta la postración
do por los bordes de la superficie articular. y la caquexia. La anorexia es frecuente.
La extensión del proceso inflamatorio a la cápsu- Las manifestaciones clínicas tienen la mayor
la y los ligamentos y aun a los tendones, completa el importancia y se agrupan en articulares y extrarticu-
cuadro histopatológico. lares.

85
Manifestaciones articulares
El ataque comienza generalmente por las pequeñas
articulaciones, a menudo en forma simétrica, pero
puede afectarlas a todas, aun las grandes. La toma
articular se acompaña de signos flogísticos (aunque
el eritema es de escasa observación) y el dolor muy
intenso a la movilización. Estos ataques acaban pro-
duciendo deformidades articulares típicas, algunas
tempranas, otras tardías, pero que siempre ocurren.
Una señal muy característica de actividad reuma-
toidea, mientras hay función articular útil, es la rigi-
dez matinal, de más de una hora, y que desaparece
gradualmente a medida que el enfermo mejora. Es
Fig. 10.1. Desviación cubital de los dedos, subluxación de las
posible conocer la actividad del proceso en las arti- articulaciones metacarpofalángicas y nódulos subcutáneos.
culaciones de la mano por la fuerza de su apretón, Tomado de Ilustraciones diagnósticas en Reumatología de V.
que débil en la artritis activa, va recuperándose con Wright y A.R. Harvey, Interamericana-Mc Graw-Hill, 1987.
la curación.
Las articulaciones afectadas con mayor frecuen-
cia son las metacarpofalángicas y las interfalángi-
cas proximales; le siguen la muñeca, el codo, la
rodilla, el tobillo y el hombro.
Son tan típicas las alteraciones de la mano que se
consideran como la tarjeta de presentación del reu-
matoideo. Muchas veces las manos no pueden cerrar-
se por completo, esto constituye la mano en embudo.
Otras, los dedos se desvían hacia fuera, deformidad
conocida como mano en ráfaga o desviación cubital
de los dedos (Fig. 10.1). Cuando las articulaciones
interfalángicas toman aspecto fusiforme, se está ante
los dedos en huso; y cuando se afectan las articu-
laciones metacarpofalángicas, éstas muestran una Fig. 10.2. Pulgar en Z en una artritis reumatoidea.
marcada prominencia dorsal. El pulgar en Z es poromaxilar manifiesta la afección por dolor y difi-
secundario a la toma del extensor corto del pulgar cultad para la masticación y apertura de la boca. No
(Fig. 10.2). es raro que el dolor irradie hacia el oído y la
Los pies sufren deformidades diversas, entre las orofaringe, y a veces se perciba en estos órganos.
cuales el hallux valgus es una de las más comunes. La AR afecta a todo el organismo, por lo cual sus
El resto de las articulaciones dañadas adquiere di- manifestaciones extrarticulares se encuentran en casi
versas formas. todos los órganos y sistemas.
Los músculos relacionados con las articulaciones
se atrofian con rapidez. Esto depende de irritacio- Manifestaciones extrarticulares
nes desencadenadas por el proceso articular, vascu- Generales. Hay anorexia y adelgazamiento, en oca-
litis, miositis y en grado menor por la inactividad siones muy marcado. No es rara una febrícula de
que la inflamación impone. alrededor de 380C; cuando la temperatura sea ma-
La columna vertebral participa escasamente del yor debe buscarse una infección, articular o extrar-
proceso, excepto el segmento cervical; en él se ticular.
produce en ocasiones subluxación de la articulación Piel. Suelen observarse efélides, vitiligo y erite-
atlantoaxoidea con compresión de la médula por la ma. La piel de la mano puede estar lisa, brillante y
apófisis odontoides del axis. La articulación tem- seca, con aspecto esclerodérmico, y el dorso hiper-

86
pigmentado, lo que significa mal pronóstico. Las ca mucocutánea, retinopatía con ingurgitación
manchas pardas, pequeñas, agrupadas en el lecho venosa y hemorragia y disfunción neurológica con
ungueal, los pliegues cutáneos periungueales y en toma episódica o progresiva de la conciencia, hasta
el pulpejo digital, así como úlceras isquémicas de el coma. El diagnóstico del síndrome se confirma
las extremidades inferiores, necrosis de la dermis y con el viscosímetro de Ostwald, que arroja cifras
gangrena digital, son todas manifestaciones cutáneas superiores a 2.
de la vasculitis reumatoidea. En la AR se observa también crioglobulinemia
Al igual que en la fiebre reumática, aparecen de tipo mixto, que se expresa clínicamente por pete-
nódulos subcutáneos, generalmente asociados a ac- quias y otras manifestaciones purpúricas cutaneomu-
tividad de la enfermedad y a factor reumatoideo cosas recidivantes. En casos de larga duración se
positivo. Se localizan en las superficies extensoras desarrolla una hiperpigmentación en las extremida-
(codo y carpo) y en el dorso de los dedos y de la des inferiores. El laboratorio pone en evidencia las
nariz. Son poco dolorosos, a veces se ulceran y cons- crioglobulinas, inmunoglobulinas que precipitan a
tituyen un foco de infección. temperaturas cercanas a 0ºC y se disuelven al ser
Sistema respiratorio. El pulmón es alguna que otra recalentadas.
vez asiento de nódulos reumatoideos susceptibles de Las alteraciones del hemograma se describen en
cavitarse. Por lo general se desarrollan en zonas pre- “Exámenes complementarios”.
viamente dañadas, como en el caso de AR con neu- Manifestaciones oftálmicas. La afección más fre-
moconiosis (síndrome de Caplan), en que los nódulos cuente es la queratoconjuntivitis seca debida a un
asientan en las zonas de fibrosis pulmonar. La parti- síndrome de Sjögren secundario. En alguno de los
cipación pleural (pleuritis) casi siempre es tardía y casos se encuentra una episcleritis moderada y tran-
cursa con un derrame serofibrinoso. El líquido pleu- sitoria, o una escleritis que compromete las capas
ral, al igual que el de la pericarditis reumatoidea, se profundas; es muy seria, similar a un nódulo reuma-
caracteriza por disminución de la cifra de glucosa toideo y en algunos pacientes lleva a una esclero-
(menos de 25 mg %) y aumento de la fosfatasa y de malacia perforante. A veces se encuentra una iritis o
la deshidrogenasa láctica, las células son escasas en una uveítis.
número y las proteínas tienen una concentración Síndrome de Felty. Es toda AR con esplenomega-
superior al 30 %. La cifra de complemento es baja. lia y leucopenia. También puede haber anemia y
Se observan células gigantes multinucleadas. trombocitopenia, de patogenia compleja, pues el hi-
Sistema cardiovascular. Ya se ha mencionado la peresplenismo que se sospechaba lo producía no cura
afectación miocárdica y valvular por los nódulos con la esplenectomía. A veces hay adenopatías múl-
reumatoideos, pero son raros los cuadros de valvu- tiples. Este síndrome aparece sobre todo en pacien-
lopatía (insuficiencia aórtica) e insuficiencia cardíaca tes seropositivos y HLA-DR4 positivos con artritis
por esta causa. El lecho coronario puede afectarse severa de larga evolución.
por la vaculitis reumatoidea y producirse insuficien- Síndrome de Caplan. Consiste en la asociación
cia coronaria. La lesión cardiovascular más frecuente de AR con fibrosis muscular y neumoconiosis.
es la pericarditis con derrame, que muy rara vez cau- Manifestaciones renales. El riñón se afecta raras
sa taponamiento cardíaco. veces. El deterioro de la función renal, cuando apa-
Sistema neuromuscular. Se describe una polineuri- rece, por lo general es causado por vasculitis, depó-
tis o una neuritis múltiple en el curso de la vasculitis sitos de amiloide o toxicidad farmacológica.
reumatoidea. Otras veces se presentan manifestacio-
nes de una miopatía, con signos electromiográficos. Exámenes complementarios
Sistema hemolinfopoyético. Aparecen adenopatías, Radiología. Al principio ofrece pocos datos, pues
sobre todo axilares y epitrocleares. El bazo aumenta sólo se detecta una imprecisión de los contornos del
de tamaño en el 10 % de los enfermos. En algunos espacio interarticular, con ligera o moderada osteo-
casos se detecta el síndrome de hiperviscosidad en aso- porosis de los huesos vecinos. Más tarde, cuando en
ciación con grandes complejos intermedios (polímeros etapas avanzadas queda destruido el cartílago articu-
macromoleculares de factor reumatoideo), el que se lar, entran en contacto las superficies adyacentes,
manifiesta clínicamente por una diátesis hemorrági- las que parecen soldadas. Ya en este momento hay

87
atrofia y rarefacción del hueso esponjoso, por dis- parecida a la de las infecciones crónicas, cuyo me-
minución de calcio. A veces hay lesiones en saca- canismo reside en un bloqueo a la liberación del
bocados. En los estadios más avanzados sobreviene hierro del sistema reticuloendotelial.
la anquilosis y los límites de las articulaciones se Los leucocitos aumentan hasta llegar durante los
pierden. .
brotes a 15,0 109/L y más, con desviación izquier-
En ocasiones, sobre todo en los casos tratados con da. Fuera de la crisis, la cifra se mantiene normal
corticosteroides, se revela una necrosis aséptica de con ligera linfocitosis. Algunos señalan eosinofilia
la cabeza del fémur y del húmero. frecuente.
Reacciones serológicas. La detección del factor Conteo de plaquetas. La cifra de plaquetas es ge-
reumatoideo se realiza por las pruebas de floculación neralmente normal.
del látex, la de aglutinación de la bentonita y la de Eritrosedimentación. Está casi siempre acelerada
reacción de los glóbulos rojos de carnero sensibili- cuando existe actividad.
zados (prueba de Waaler-Rose). Estas pruebas sólo Reactantes de fase aguda (proteína C reactiva,
detectan el factor reumatoideo IgM y resultan posi- ceruloplasmina). Aumentan cuando existe actividad.
tivas entre el 50 y 90 % de los casos, particularmen- Examen del líquido sinovial. Es anormal durante
te en el primer año de evolución de la enfermedad. la inflamación articular y puede ser turbio; es esté-
Los seropositivos en general tienen mayor severi- ril, la viscosisdad está disminuida y el conteo celu-
dad y peor pronóstico que los seronegativos. Los lar oscila entre 2 000 y 50 000 leucocitos por ml,
enfermos con nódulos y vasculitis casi siempre son predominantemente polimorfonucleares, pero podría
seropositivos. Otras pruebas son la inmunofluores- contener hasta un 50 % de linfocitos y otras células
cencia, más sencilla y que ofrece títulos más altos mononucleares. Es posible que los leucocitos ten-
que la prueba de Waaler-Rose; inmunoabsorción gan inclusiones citoplasmáticas, que no son exclu-
(mide todos los tipos de factor reumatoideo); test de sivas de la AR. El complemento del líquido sinovial
la roseta reumatoidea; radioinmunoanálisis (méto- está disminuido (30 % menor que en el suero del
do muy caro y contaminante); ELISA (enzyme linked enfermo). El factor reumatoideo es positivo con mu-
inmunoabsorbent assay), con una sensiblidad muy cha frecuencia.
superior a la prueba de Waaler-Rose).
El factor reumatoideo a título mayor de 1/160 no Diagnóstico
es patognomónico de la AR, pues se observa en otras Diagnóstico positivo
enfermedades del colágeno, infecciones crónicas, El diagnóstico de la AR se basa en los criterios si-
estados disproteinémicos y en la población normal guientes:
(hasta 4 % de positividad en menores de 60 años y 1. La tendencia a aparecer en adultos jóvenes.
un mayor porcentaje en personas que sobrepasan esta 2. La participación articular simétrica.
edad). 3. La presencia de signos de inflamación articu-
Proteínas plasmáticas. Están normales, altas o lar.
bajas, con inversión del índice serina-globulina y 4. Las lesiones metacarpofalángicas y en las fa-
disminución de la albúmina. La electroforesis de pro- langes proximales ocasionan los característicos
teína muestra aumento de la alfa-2-globulina y de la dedos fusiformes.
gammaglobulina y la inmunoelectroforesis, lo evi- 5. La presencia de deformidades y anquilosis en
dencia en la IgM, la IgG y la IgA. Ya se ha expuesto los casos graves.
lo referente a la aparición de crioglobulinas de tipo 6. Reacciones serológicas positivas.
mixto.
Aparece positividad de la célula LE hasta en el El American College of Rheumatology ha pro-
20 % de los enfermos y con mayor frecuencia son puesto (y se ha aceptado universalmente) criterios
detectados anticuerpos antinucleares. Así mismo, es para el diagnóstico de la AR, dirigidos a servir como
posible encontrar anticuerpos anti ADN desnatura- guía para el entendimiento y comunicación entre los
lizados. investigadores (clínicos y epidemiológicos), y son
Hemograma. Con mucha frecuencia hay anemia utilizados también en el diagnóstico clínico. Estos
normocítica hipocrómica, más o menos intensa, muy criterios son los siguientes:

88
1. Rigidez matinal (de más de una hora). plos cardiovasculares cambiantes, la corea, el erite-
2. Artritis en 3 o más áreas articulares. ma marginado, etc.
3. Artritis de las articulaciones de la mano (mu- La artritis infecciosa es monoarticular u oligoar-
ñeca, metacarpofalángica o interfalángica ticular (en este caso asimétrica). EL diagnóstico lo
proximal). da el hallazgo del germen en el cultivo del líquido
4. Artritis simétrica. sinovial y el conteo de células superior a 100 000
5. Nódulos reumatoideos. por mm3.
6. Factor reumatoideo por un método de labora- El síndrome de Reiter se caracteriza por la toma
torio que arroje resultados positivos en menos asimétrica del talón, articulaciones sacroilíacas y
del 5 % de los sujetos controles normales. grandes articulaciones del miembro inferior; además
7. Cambios radiográficos típicos de la AR, que de uretritis, conjuntivitis, iritis, úlceras bucales in-
deben incluir erosiones o descalcificación ósea dolentes, balanitis circinada y queratodermia ble-
inequívoca. norrágica. El complemento sérico y del líquido
sinovial está elevado a menudo.
Para el diagnóstico de AR deben estar presentes La artritis de la soriasis es asimétrica, afecta a
cuatro síntomas y los del 1 al 4 permanecer durante veces las articulaciones interfalángicas distales y
seis semanas o más. presenta artritis mutilante. La diferenciación sólo la
Algunos enfermos con artritis inducida por cris- hacen las lesiones dermatológicas
tales cumplen con estos requisitos de diagnóstico;
La gota es mono o poliarticular, con recupera-
en estos casos el examen del líquido sinovial aclara-
ción completa entre las crisis. La artropatía gotosa
rá las dudas.
crónica puede parecerse a la AR, pero el hallazgo
Cuando el diagnóstico de AR sea dudoso, se rea-
en el líquido sinovial de los cristales de urato mono-
lizará biopsia de un nódulo subcutáneo, que podrá
sódico, confirma el diagnóstico. La respuesta a la
diferenciarlo del tofo gotoso, la amiloidosis y otros
colchicina es negativa, pero también ocurre en otras
nódulos.
artropatías. Lo que se ha dicho hasta ahora se aplica
por igual a diferentes artritis inducidas por el depó-
Diagnóstico diferencial
La AR tiene manifestaciones clínicas semejantes a sito de cristales.
otras colagenosis, particularmente el lupus eritema- La osteoartritis con frecuencia toma las articu-
toso diseminado, del cual se diferencia por las ca- laciones interfalángicas distales, la primera articulación
racterísticas lesiones dermatológicas en las regiones carpometacarpiana y la primera tarsometatarsiana,
expuestas a la luz solar, la alopecia temporofrontal, las rodillas y la columna vertebral. La presencia de
las lesiones de las mucosas oral y nasal, el líquido signos de inflamación, inestabilidad articular, y de
sinovial con células por debajo de 2 000 por mm3, la quistes subcondrales (a los rayos X), confunden a
toma renal y anticuerpos anti ADN de doble cadena. veces el diagnóstico, pero el factor reumatoideo es
La poliarteritis, la esclerodermia sistémica y la negativo, no hay nódulos reumatoideos y el conteo
dermatomiositis tienen también síntomas y signos celular en el líquido sinovial es menor de 2 000 por
que suelen observarse en la AR, por lo que es muy mm3. En la osteoartritis se nota un aumento del hue-
difícil en ocasiones llegar al diagnóstico nosológico. so (a los rayos X) con neoformación. Sin embargo,
A estos casos se les denomina síndrome de superpo- debe tenerse presente que algunas apariciones tar-
sición. días de la AR se instalan sobre articulaciones artró-
Cuando la enfermedad de Whipple, la amiloidosis sicas, lo que es relativamente común después de los
y la sarcoidosis se presentan con toma articular, sólo 50 años.
la biopsia de la región apropiada diferencia a estas Rara vez la artritis que precede a la hepatitis viral
enfermedades. B y la que sigue a la rubéola, plantearán un proble-
La fiebre reumática se distingue por el carácter ma de diagnóstico diferencial, que se resolverá en el
migratorio de la artritis, que generalmente es asimé- primer caso, a los pocos días o semanas por la apari-
trica y de grandes articulaciones; además, por el ción del cuadro hepático y en el segundo, por la his-
antecedente de una infección estreptocócica, los so- toria clínica.

89
El período inicial o prodrómico de fatiga, males- nes piógenos acaban con la vida de un importante
tar, artromialgias erráticas, etc., se puede confundir número de casos. La amiloidosis secundaria los com-
con los estados psicodepresivos, especialmente en plica aunque es causa poco frecuente de muerte.
la mujer. Sólo la evolución permite establecer el diag-
nóstico de AR. Tratamiento
Las modalidades de tratamiento disponibles consis-
Evolución y pronóstico ten en:
Cuando la enfermedad comienza en forma brusca
suelen presentarse remisiones duraderas, pero cuan- 1. Terapia física y ocupacional.
do lo hace en forma insidiosa, es frecuente la evolu- 2. Medidas generales.
ción progresiva hacia las deformidades y anquilosis. 3. Tratamiento medicamentoso.
Sin embargo, cualquiera que sea su forma de co- 4. Terapia biológica y drogas experimentales.
mienzo, tiene tendencia a remitir por períodos más 5. Cirugía.
o menos largos. De todas maneras, el resultado final
de cada brote es la toma de nuevas articulaciones y Todas se complementan, pero no logran detener
la formación de otras deformidades. el curso progresivo de la enfermedad (aunque sí lo
Los signos pronósticos con alta probabilidad de enlentecen) ni son curativas.
desarrollar anormalidades articulares son:
Terapia física
• Más de 20 articulaciones inflamadas Se encamina a mantener buenas condiciones físicas
• Eritrosedimentación muy acelerada en el enfermo: fuerza muscular, un grado máximo
• Erosiones óseas a los rayos X de movimiento de las articulaciones y la protección
• Nódulos reumatoideos presentes de éstas. Para ello se diseña un programa de ejerci-
• Factor reumatoideo positivo a títulos elevados cios que debe ser guiado por un fisiatra con expe-
• Limitación funcional riencia en el tratamiento de la AR.
• Persistencia de los signos inflamatorios
• Edad de comienzo avanzada Medidas generales
• Presencia de otras enfermedades Reposo. Durante los brotes agudos se recomienda
• Bajo nivel educacional que el enfermo haga el reposo hospitalario, y si di-
• Bajo nivel económico cho brote se acompaña de fiebre, será absoluto, en
• Presencia de antígeno HLA- DRb1* 0401 o la cama hasta tanto remita ésta. Luego se permitirán
HLA- DRb1* 0404 algunas libertades para evitar la anquilosis tempra-
na y las atrofias por desuso. El reposo nocturno no
En general, del 10 al 15 % de los enfermos ten- será nunca menor de 8 a 10 h diarias y el enfermo
drán uno o dos brotes y curarán de la afección. Otro deberá dormir en cama rígida para evitar las actitu-
porcentaje igual seguirá un curso progresivo y en des viciosas. Además, descansará en cama 1 h des-
pocos años estará inválido. Entre ambos extremos pués de almuerzo y comida; no se colocan almohadas
se observan todas las gradaciones evolutivas posi- debajo de las regiones poplíteas.
bles, que constituyen del 70 al 80 % de los casos. Se debe proporcionar tranquilidad mental (no
El embarazo mejora la AR, al extremo que la pa- siempre fácil de lograr) con psicoterapia de apoyo y
ciente generalmente puede suspender el tratamien- educación sobre su enfermedad.
to. Esto se debe al aumento de una mayor producción Dieta. Será equilibrada y rica en vitaminas y mi-
de IL10 por la placenta, las hormonas sexuales, los nerales. Como quiera que los pacientes frecuente-
corticoides y las proteínas de la zona del embarazo; mente están bajos de peso, se tratará de corregir esta
sin embargo, la mayoría tienen una recaída durante situación pero evitando la obesidad.
el puerperio. Tratamiento de la anemia. De no poderse lograr
La expectativa de vida de estos enfermos se acor- la corrección de la anemia con la terapéutica mar-
ta alrededor de un 10 %. Aproximadamente el 25 % cial, se recurrirá a las transfusiones de glóbulos o de
de ellos fallece por AR. Las infecciones por gérme- sangre total.

90
Tratamiento medicamentoso creatinina sérica y nefritis intersticial. Los pacien-
Antinflamatorios no esteroideos (AINE) tes con alergia a la aspirina pueden presentar los
Constituyen la piedra angular en el tratamiento de mismos síntomas con estos medicamentos.
la AR. Estos fármacos reducen los síntomas y sig- Ninguno de ellos es superior al otro y el fracaso
nos de la inflamación, aunque por sí mismos no eli- terapéutico de uno no impide el éxito con otro.
minan las causas subyacentes de la enfermedad. Son Estas drogas bloquean la actividad de la enzima
de dos tipos: los salicilatos y los AINE no salicilatos. cicloxigenasa, lo cual parece ser la causa de muchos
Salicilatos. Son relativamente seguros, baratos, de los efectos inadecuados que ellas producen. In-
analgésicos y antinflamatorios. La aspirina, que para vestigaciones recientes apuntan hacia la existencia
muchos es el medicamento de elección, se adminis- de otras enzimas separadas, la cicloxigenasa 1 y 2.
tra en dosis de 3 a 6 g diarios, en cuatro tomas con La primera está presente en muchas células y teji-
los alimentos. Las tabletas con cubierta entérica se dos, incluyendo las plaquetas y el estómago, mien-
utilizan en caso de gastritis o hernia hiatal y se dan tras que la segunda se activa específicamente en
junto con misoprostal como profilaxis de la gastritis respuesta a estímulos inflamatorios. La inhibición
erosiva o de la úlcera péptica sangrante. Existe la de la cicloxigenasa 2 produce los efectos antinfla-
preparación de acción sostenida, que se ingiere al matorios y la inhibición de la cicloxigenasa 1 induce
acostarse; en ocasiones es necesario suministrar una muchos de los mecanismos tóxicos. Los medicamen-
dosis adicional a las 2 o 3 a.m. tos AINE inhiben ambas cicloxigenasas, por lo que
Los salicilatos no acetilados (salsalato, salicilato en la actualidad se trabaja en el desarrollo de nue-
de colina y magnesio) tienen menos efectos gastro- vos medicamentos inhibidores específicos de la
intestinales y no interfieren con la formación pla- cicloxigenasa 2, con los que se lograrán beneficios
quetaria, pero el efecto antinflamatorio es menor. terapéuticos con menos toxicidad.
Antinflamatorios no esteroideos no salicilatos
(AINE). Estos AINE más modernos no han probado Medicamentos antirreumatoideos que modifican la
superioridad sobre la aspirina en sus efectos antin- enfermedad
flamatorios, lesión gastrointestinal y acción antipla- Estos medicamentos tienen la capacidad de alterar
quetaria. Los principales se muestran a continuación. el curso de la AR y comprenden las sales de oro, la
D-penicilamina, los antipalúdicos de síntesis y la
Medicamentos Dosis diaria (mg) sulfasalazina. Se indican junto con los anteriores
Indometacina 150-200 cuando éstos no han sido capaces de controlar com-
Ibuprofén 1 600-3 200 pletamente la inflamación, y ante un curso evoluti-
Naproxén 250-1 250 vo rápido y agresivo. Cada vez son más los que
Fenoprofén 1 200-2 400
Tolmetín 1 000-2 000 recomiendan su aplicación temprana, solos o com-
Sulindac 300-400 binados.
Meclofenamato 200-400 Sulfasalazina. (azulfidina). Se aconseja iniciar el
Ketoprofeno 150-300 tratamiento con 500 mg 2 veces al día, que se au-
Flurbiprofén 200-300
mentan a 1g 2 veces al día en 7 a 14 días, si el hemo-
Diclofenac 150-200
Piroxicán 20 (una vez al día) grama y el examen parcial de orina son normales y
no hay evidencia de reacción alérgica. En 3 a 6 se-
La dosis de estos medicamentos se aumenta cada manas la dosis llega a alcanzar 1g 3 veces al día, si
dos semanas, a partir de la mínima recomendada. El la mejoría es escasa o nula; muchos enfermos sanan
incremento concluye cuando se obtienen los resul- y desaparecen todos los signos de artritis. Si a los
tados deseados o se alcanza la dosis máxima esta- 6 meses persiste la cura se reduce gradualmente la
blecida. dosis del medicamento hasta 1g diario. Si al año el
Estos AINE suelen producir síntomas gastroin- paciente permanece en remisión, se suspende la dro-
testinales y sangramiento digestivo. Otros aspectos ga con vigilancia cuidadosa.
desagradables son cefalea, confusión, vértigos, em- Sales de oro. Son compuestos de oro para admi-
peoramiento de la hipertensión arterial, edema, au- nistración IM (Miocrisina, Solganal) y oral (Aura-
mento de las enzimas hepáticas, elevación de la mofín), capaces de producir remisiones clínicas y

91
disminuir la formación de nuevas erosiones óseas. El medicamento se utiliza ante el fracaso de la
Se suministran semanalmente 10 mg la primera se- crisoterapia, con respuesta favorable en un 50 % de
mana, 25 la segunda y, si no se ha producido una los enfermos. Al igual que con las sales de oro, el
reacción cutánea, y el hemograma, las plaquetas y paciente debe ser consultado cada 15 días cuando
el examen parcial de orina, son normales, se conti- menos y controlado con sedimento urinario, hemo-
núa con 50 mg IM cada semana hasta una dosis total grama y conteo de plaquetas. Debe suspenderse la
de 1g. El medicamento se puede seguir administran- droga a la menor señal de toxicidad.
do. Otros recomiendan 20 o 25 mg semanales hasta Antipalúdicos. La hidroxicloroquina puede con-
llegar a 500 mg y mantener la dosis. La enfermedad trolar los síntomas de la AR moderadamente activa.
suele quedar controlada, pero casi siempre recidiva La dosis inicial es de 200 mg 2 veces al día, en el
de 3 a 6 meses después de suspendido el fármaco. desayuno y la cena. La terapéutica se continúa por
Las sales de oro están cotraindicadas en caso de 6 meses. Si no hay mejoría evidente se suspende,
afección hepática, renal o discrasia sanguínea. An- pero si hay respuesta, la dosis se reduce a 200 mg
tes del consumo semanal de éstas debe hacerse un diarios y se continúa mientras sea efectiva. Es nece-
hemograma completo, un conteo de plaquetas y un sario un examen oftalmológico antes de iniciar el
examen de orina, así como un interrogatorio cui- tratamiento y repetirlo cada 6 meses después mien-
dadoso al enfermo en relación con lesiones de la piel tras se administre el medicamento, debido a las
y prurito, durante el primer o segundo mes. Des- opacidades corneales que provoca (reversibles ante
pués se hará cada 15 o 21 días. la suspensión del producto) y la degeneración
retiniana irreversible, su principal acción indesea-
Las manifestaciones secundarias son: exantemas,
ble. Además, es causa de gastritis, exantemas, cefa-
estomatitis, depresión medular, púrpura, albuminu-
lea, depresión medular y miopatía.
ria, hematuria, síndrome nefrótico, dermatitis, etc.
Otros medicamentos. Sólo mencionamos la mi-
Hay que detectar la toxicidad a tiempo y el fármaco
nociclina y el temidap.
debe suspenderse a la primera señal de ésta.
Con el compuesto oral, en dosis de 6 mg diarios,
Medicamentos citotóxicos e inmunosupresores
las diarreas y otros síntomas gastrointestinales son
Metotrexate. A pesar de que es un antifólico, la ma-
los efectos indeseables más frecuentes, ya desde la yoría de los autores lo utilizan como medicamento
primera o segunda toma. supresor o modificador de la enfermedad, por sus
El tiosulfato de sodio y oro, de uso EV, es poco buenos resultados, tolerancia, rapidez en producir
recomendado en la actualidad. alivio de los síntomas y comodidad de su adminis-
D-penicilamina. Su administración a los enfermos tración.
con AR seropositiva es capaz de disminuir el título La dosis inicial es de 7,5 mg una vez a la semana,
de factor reumatoideo y mejorar la inflamación y el por vía oral o IM; si a las 4 semanas no hay una
dolor articular en un porcentaje elevado de pacien- mejoría evidente, la dosis se aumenta cada 2 a 4 se-
tes. Se la considera tan efectiva como las sales de manas progresivamente hasta 15 mg semanales, y
oro en el tratamiento de la AR. Se da por vía oral a se considera un fracaso terapéutico si en 12 a 16 se-
razón de 250 mg diarios durante 30 a 90 días; la manas no se ha obtenido alivio de los síntomas y
dosis se incrementa a 500 mg diarios por un período disminución ostensible de la inflamación. Debe evi-
de tiempo similar, y si no hay mejoría, se aumenta a tarse su uso en alcohólicos y diabéticos. Es necesa-
750 mg diarios por 60 días. Cuando el paciente res- rio vigilar la función del hígado y en ocasiones hay
ponde, la dosis debe ajustarse al nivel mínimo sufi- que practicar una biopsia de este órgano, si su uso
ciente para mantenerlo sin molestias importantes. se prolonga, para detectar a tiempo la fibrosis hepá-
La toxicidad de este fármaco se expresa por tras- tica que provoca. El hemograma y el conteo de pla-
tornos del sentido del gusto (ageusia, sabor metáli- quetas se realizarán cada 2 a 4 semanas, por la posible
co), prurito, erupciones cutáneas, cólicos y diarreas, depresión medular. Una complicación a veces fatal
nefritis (albuminuria, hematuria, síndrome nefróti- es la neumonitis. La dispepsia y las ulceraciones ora-
co), pancitopenia, miastenia grave, síndrome de les son manifestaciones colaterales frecuentes.
Goodpasture, polimiositis, un síndrome parecido al Parece haber consenso en la utilización prematu-
lupus y pénfigo. ra del metotrexate, por su rapidez de acción, solo o

92
combinado con otras drogas modificadoras del cur- do es la triamcinolona en su forma de hexacetónido.
so de la enfermedad, como oro, D-penicilamina, La dosis es de 40 a 80 mg para las articulaciones
azatioprina, antimaláricos y sulfazalacina. La ten- mayores (rodilla, hombro, tobillo) y de 20 a 30 mg
dencia actual es abandonar la estrategia terapéutica para las medianas (codo o muñeca). Se debe admi-
de indicar los fármacos de forma escalonada, en nistrar una inyección cada vez y repetirla 2 o 3 ve-
piramide, y muchos autores recomiendan iniciar el ces al año, si es necesario.
tratamiento con los AINE en los casos de actividad Existen evidencias que señalan la utilidad de los
limitada y pasar inmediatamente al uso de estos me- esteroides sistémicos para tratar la erosión del hue-
dicamentos —como ya se adelantó— en distintas so. La dosis es de 7,5 mg de prednisona o similar,
combinaciones, en aquellos pacientes que no mues- diaria.
tren una pronta respuesta al tratamiento inicial o Las dosis altas de esteroides ya no son en general
cuando la enfermedad presente, desde el comienzo, recomendadas, excepto por corto tiempo en caso de
una importante actividad inflamatoria con tenden- intensas manifestaciones extrarticulares (pericardi-
cia a la rápida destrucción articular. Debe señalarse tis, pleuresía, vasculitis, etc.). Tampoco se recomien-
que la combinación de metotrexate, sulfazalazina e da la terapéutica en días alternos con doble dosis.
hidroxicloroquina, es la única que se ha comproba-
do efectiva en los ensayos terapéuticos realizados. Terapia biológica y drogas experimentales
Después de suspendido, el enfermo tiene a veces Las terapias radicales como plasmaféresis, leucofé-
una recaída severa. resis, linfoféresis, drenaje del conducto torácico e
Azatioprina. Se inicia el tratamiento con dosis irradiación linfoide total, están en fase experimen-
de 1 mg por kg de peso por día, en una o 2 tomas. tal en la AR y limitadas a unidades hospitalarias al-
Seis u 8 semanas después puede aumentarse 0,5 mg tamente calificadas.
por kg por día cada 4 semanas, hasta alcanzar la dosis Anticuerpos monoclonales contra las citocinas,
máxima recomendada, que es de 2,5 mg por kg por
especialmente el FNT-α y la inhibición de la
día.
interleucina 1 (IL-1).
Los efectos indeseados principales son los hema-
Inmunomoduladores. El interferón gamma y qui-
tológicos (depresión medular) y con el uso prolon-
zás la interleucina 2 (IL-2).
gado, el desarrollo de linfoma no Hodgkin.
Terapia antigénica. Contra autoantígenos (colá-
Ciclosporina. Se administra en dosis de 5 mg
gena de tipo II, proteína de shock, proteoglicanos, etc.)
por kg de peso, por día, con efectos terapéuticos bue-
y antígenos externos (bacterianos, virales).
nos, pero a los 6 a 12 meses de utilizarlo, la función
renal estará severamente comprometida. Por esta ra- Terapia con genes. El primer tratamiento genéti-
zón se ensayó su uso a razón de 2,5 mg por kg por co en reumatología, efectuado con 2 genes recepto-
día, con lo cual se consiguió menos daño renal pero res de IL-1 (IL-1Ra y IRAP) por vía intrarticular,
también modestos resultados. Sólo se recomienda produjo resultados alentadores al proteger la degra-
hoy en los enfermos con formas moderadas de vas- dación del cartílago articular.
culitis reumatoidea.
Cirugía
Corticosteroides. Después del entusiasmo inicial
con el uso de los esteroides, éste decayó y fueron Sólo se hará mención de las diversas técnicas que
prácticamente proscritos en la AR. Por último se les también son utilizadas en estos enfermos.
ha reconocido de nuevo utilidad con dosis bajas (5 a Sinovectomía. Por artroscopia o a “cielo abier-
10 mg diarios) en pacientes resistentes al tratamien- to”. El alivio de la inflamación es temporal.
to y en situaciones especiales, como vasculitis, pleu- Artroplastia con prótesis sustitutiva. Se indica
ritis, pericarditis, etc., en las que sí deben emplearse cuando el daño de la articulación limita severamen-
dosis mayores. En cualquier momento de la evolu- te la función de ésta. Este tipo de intervención es
ción de la AR suele haber un número escaso de muy útil en la cadera y la rodilla.
articulaciones en las que no ceda la inflamación y Intervención sobre las articulaciones metatarso-
es aquí donde encuentra indicación la inyección falángicas subluxadas y dolorosas. En algunos ca-
intrarticular de corticosteroides. El más recomenda- sos permite la recuperación de la marcha.

93
Fusión del pulgar. Mejora grandemente la acción Tratamiento de la osteoporosis. La osteoporosis
de la pinza digital. es muy frecuente en las artritis, por la actividad físi-
Fusión de la columna vertebral cervical. Se rea- ca disminuida y el uso de esteroides; por eso a estos
liza en caso de compresión de la médula. pacientes debe administrárseles suplementos de cal-
La plastia sobre la mano. Es capaz de mejorar cio y vitamina D, y a los que toman esteroides, al-
grandemente la estética y la función. gunos de los bifosfonatos (Didronel, alendronato o
La cirugía puede efectuarse mientras la enferme- pamidronato). Pueden utilizarse la calcitonina y los
dad está activa. estrógenos.

94
11

ARTRITIS INFECCIOSA AGUDA

La artritis infecciosa aguda es una afección caracte- Drogadicción. En los drogadictos la artritis infec-
rizada por una monoartritis u oligoartritis acompa- ciosa muestra predilección por sitios atípicos, como
ñada de manifestaciones generales tales como fiebre son la articulación sacroilíaca o esternoclavicular y
elevada, casi siempre superior a 39º C, escalofríos, en segundo lugar, hay gran tendencia a la pioartrosis
astenia y anorexia. por gérmenes gramnegativos, a pesar de que los co-
cos grampositivos siguen siendo el agente etiológi-
Factores predisponentes co más común.
Una gran variedad de factores predisponen a que se Inmunosupresión. Es consecutiva al uso de corti-
produzca una artritis infecciosa en el adulto. Tales costeroides, drogas citotóxicas o ambos, que produ-
cen depresión inmunológica con el consiguiente
son:
riesgo de padecer infecciones generalizadas y loca-
Enfermedades subyacentes. Las personas con
les, entre ellas, artritis infecciosa.
enfermedades crónicas y debilitantes están predis-
Yatrogenia. La punción intrarticular practicada sin
puestas a padecer artritis infecciosa. Entre dichas
guardar todas las condiciones de asepsia y antisep-
enfermedades están las neoplasias, la diabetes me-
sia, así como las venipunturas femorales traumáti-
llitus y la artritis reumatoidea.
cas, son causas de artritis infecciosa.
En las neoplasias, como el mieloma múltiple y la
leucemia linfocítica, hay una disminución de la ca- Etiología
pacidad de respuesta de los anticuerpos, con la con-
En el adulto joven sigue siendo Neisseria gonorrheae
siguiente predisposición a las infecciones. Por lo
el agente etiológico más frecuente, ya que es res-
general el agente etiológico encontrado es un
ponsable de aproximadamente el 65 % de los casos
gramnegativo, en especial, pseudomonas.
en esta edad. En el adulto mayor se atribuye a los
En el caso de la diabetes mellitus, los pacientes cocos grampositivos el 75 % de las artritis agudas.
son propensos a padecer de úlceras tróficas en los El estafilococo dorado produce más de la mitad de
miembros inferiores que secundariamente se infec- las artritis sépticas no gonocócicas y alcanza hasta
tan; además, la hiperglicemia inhibe el mecanismo las tres cuartas partes de los casos de artritis infec-
de la fagocitosis por los neutrófilos. ciosas que afectan a pacientes portadores de una ar-
Está demostrado que en la artritis reumatoidea tritis reumatoidea.
hay una disminución de la capacidad quimiotáxica Los gérmenes gramnegativos son responsables de
de los neutrófilos, y también se reduce la actividad la quinta parte de las sepsis intrarticulares, sobre todo,
antimicrobiana del líquido sinovial. como ya se vio en los factores predisponentes, en
Una infección extrarticular puede provocar una aquellos sujetos portadores de una enfermedad cró-
diseminación hematógena hasta la membrana sino- nica de tipo consuntivo.
vial y producir una artritis infecciosa. En la artritis infecciosa que se produce en una ar-
Alcoholismo crónico. En estos pacientes hay ticulación con prótesis, lo más frecuente es que el
disminución del complemento sérico, y además, apa- agente etiológico sea un germen poco virulento, como
rece un inhibidor sérico de la quimiotaxis leucoci- el estafilococo epidérmico, estreptococo alfa-hemo-
taria debido a la hepatopatía crónica que suele lítico o difteroides, introducidos en la articulación
concomitar. durante el acto quirúrgico. Pero se describen casos

95
cuyos agentes etiológicos son gérmenes agresivos rodilla, mientras que en la infección de la articula-
como el estafilococo dorado, el neumococo, estrep- ción sacroilíaca, el dolor es referido a la región lum-
tococo betahemolítico y gérmenes gramnegativos. bar baja, las nalgas o la zona de inervación del
ciático.
Patogenia Si se trata de la infección gonocócica, es frecuen-
La invasión bacteriana articular se produce por tres te la participación de varias articulaciones. Los pa-
vías: cientes suelen presentarse con fiebre importante, un
rash eritemato-pápulo-pustuloso distal, poliartralgia
• Vía hematógena, que es la más frecuente migratoria y tenosinovitis. Ocasionalmente hay pre-
• Por contigüidad dominio de la toma de una articulación.
• Por inoculación directa intrarticular La poliartritis séptica no gonocócica es poco común,
aunque los pacientes portadores de artritis reuma-
En la vía hematógena las bacterias invaden el ca- toidea, LED o aquéllos que están inmunodeprimi-
pilar de la membrana sinovial, que no tiene mem- dos, son propensos a padecerla; en este caso causada
brana basal limitante, y en un período de algunas por gérmenes gramnegativos o por estafilococo do-
horas provocan una infiltración sinovial por neutró- rado. En estos enfermos los signos de artritis son
filos, los cuales junto con las bacterias penetran en opacados por los signos más drásticos de la enfer-
la cavidad articular. Posteriormente, las bacterias se medad de base.
adhieren al cartílado articular, que comienza a de- La infección de una prótesis articular se mani-
gradarse a las 48 horas como consecuencia del au- fiesta de dos formas distintas:
mento de la presión intrarticular, la liberación de
citocinas y proteasas procedentes de los condrocitos 1. Con una artritis aguda febril, purulenta, que
y la invasión del cartílago por bacterias y células toma una articulación protésica que tenía un
inflamatorias. buen funcionamiento.
2. Como una infección menos aguda, con sínto-
Anatomía patológica
mas crónicos durante meses o años, con fre-
Los estudios anatomohistológicos muestran al car- cuencia secuela de organismos que fueron
tílago y la membrana sinovial recubiertos por bacte- introducidos durante el acto quirúrgico.
rias. Además, se observa la presencia de abscesos
extendidos hacia el interior de la cavidad articular, Diagnóstico
que en los casos severos, alcanzan el hueso sub-
Diagnóstico positivo
condral.
El diagnóstico positivo se plantea ante la toma de
La proliferación sinovial se traduce en la forma-
una articulación, preferentemente grande, que se
ción de un pannus sobre el cartílago y trombosis de
acompaña de fiebre alta, escalofríos y síntomas
los vasos sinoviales inflamados.
toxinfecciosos generales.
Cuadro clínico
Diagnóstico diferencial
La artritis infecciosa aguda suele tener un comienzo
brusco con dolor y signos flogísticos a nivel de la El diagnóstico diferencial debe hacerse con todas
articulación tomada; además, se encuentra impoten- aquellas artritis agudas monoarticulares u oli-
cia funcional. Junto a los síntomas articulares hay goarticulares con fiebre, escalofríos y toma del es-
fiebre elevada (39º C o más), escalofríos, astenia y tado general. Entre ellas se encuentran:
anorexia. Éstos son los signos de sepsis articular más Fiebre reumática. Puede ser monoarticular u oli-
confiables, pero la infección en articulaciones pro- goarticular, aunque por lo general es poliarticular y
fundas, como la de la cadera o la sacroilíaca, con con carácter migratorio. El antecedente de una in-
alguna frecuencia cursa oculta debido a la falta de fección amigdalina previa en un paciente joven, y
evidencias inflamatorias superficiales. evolutivamente la afectación articular acompañada
En la infección de la articulación de la cadera el de fiebre, así como las posibles manifestaciones car-
dolor es referido a la cara anterior del muslo o a la diovasculares, ayudarán al diagnóstico diferencial.

96
Artritis reumatoidea. Es poliarticular, muestra incubado en un medio para anaerobios; además, hay
predilección por las pequeñas articulaciones y al que obtener y cultivar muestras de todas las posi-
evolucionar produce deformidad. bles puertas de entrada: uretra, recto, cuello uterino
Gota. La hiperuricemia y los cristales de uratos y faringe.
en el líquido sinovial, elementos que no se encuen- Hemocultivo. Es particularmente útil en los casos
tran en la artritis infecciosa aguda, permiten su diag- de septicemia, pues permite aislar el agente etioló-
nóstico. gico.
Artritis de la fiebre tifoidea. Suele presentarse más Contrainmunoelectroforesis. En aquellos casos en
en el período de convalecencia de la enfermedad; es que la artritis es secundaria a una diseminación he-
monoarticular y muestra preferencia por la articula- matógena, es posible que al iniciarse la toma articu-
ción de la rodilla o la cadera. En la fase aguda de la lar ya existan anticuerpos circulantes en el suero del
fiebre tifoidea puede existir toma poliarticular, que paciente, y se detectan con esta técnica.
no es expresión de colonización bacteriana sino de Cromatografía. Es un procedimiento sensible y
un fenómeno reactivo. específico que permite identificar pequeñas canti-
Síndrome de Reiter incompleto (sólo con artritis dades de constituyentes moleculares de las bacte-
y uretritis). Sugiere el diagnóstico de artritis gono- rias, en el suero o en el líquido sinovial.
cócica, que se rectifica al no ceder el cuadro articu- Estudios imagenológicos. Al inicio de la enfer-
lar con la antibioticoterapia. medad la radiografía es, por regla general, normal o
muestra cambios dados por distensión de la cápsula
Exámenes complementarios articular y aumento de volumen del tejido periar-
Hemograma. Muestra leucocitosis con desviación ticular. Estudios evolutivos muestran signos de daño
izquierda. articular: evidente desmineralización ósea yuxtar-
Eritrosedimentación. Está acelerada. ticular, disminución de la interlínea articular por des-
Examen del líquido sinovial. Es el estudio más trucción del cartílago, así como erosiones óseas;
importante. El líquido es turbio, serosanguinolento pasadas 2 o 3 semanas es posible encontrar signos
o francamente purulento. El recuento leucocitario de osteomielitis y periostitis. Pueden ser necesarios
arroja una leucocitosis mayor de 100 000 por mm3, estudios con vistas especiales para el reconocimien-
con 90 % o más de polimorfonucleares. Los niveles to de una artritis esternoclavicular, esternocostal,
de proteína y deshidrogenasa láctica están elevados, sacroilíaca o de la sínfisis del pubis. Cuando los es-
mientras que la glucosa generalmente está disminui- tudios radiológicos no aportan datos de interés, como
da; a pesar de ello, no es imprescindible la determi- sucede, por regla general, en la artritis infecciosa
nación de estos valores para hacer el diagnóstico. aguda de las articulaciones antes mencionadas, es
En el líquido sinovial también debe buscarse la pre- útil indicar una gammagrafía ósea con Tc99, la cual
sencia de cristales, pues se sabe que la gota y seudo- facilita la identificación de la articulación afectada.
gota son capaces de semejar una artritis aguda La tomografía lineal, o mejor aún, la TAC, están
infecciosa. Por otro lado, también debe realizarse indicadas cuando se desea poner en evidencia lesiones
un frotis teñido con coloración de Gram, en el cual destructivas articulares, sobre todo en las articula-
podrá visualizarse, en un porcentaje elevado de ca- ciones esternoclavicular, esternocostal, coxofemoral,
sos, la presencia de bacterias. Es necesario recordar sacroilíaca y de la sínfisis del pubis.
que la tinción de Gram es capaz de arrojar hasta
un 35 % de falsos negativos, pero además puede dar
Evolución y pronóstico
resultados falsos positivos como consecuencia del La evolución y el pronóstico de los pacientes con
contenido rico en mucopolisacáridos del fluido si- artritis infecciosa aguda han mejorado con la preco-
novial. cidad en el diagnóstico y el uso correcto de los anti-
El cultivo del líquido sinovial no puede obviarse, bióticos. En términos generales, los síntomas y
porque es positivo en un gran número de casos. Si signos clínicos comienzan a ceder a los pocos días
se sospecha una artritis gonocócica, el líquido sino- de iniciada la terapéutica, seguidos de una mejoría
vial debe ser cultivado en medio de agar sangre, agar clínica, humoral y radiológica con recuperación pro-
chocolate y medio de thioglicolato; y también ser gresiva y total de la función articular.

97
Complicaciones talina en dosis de dos millones EV cada 4 h. Si se
sospecha que el agente etiológico sea productor de
Se producen cuando el diagnóstico es incorrecto o
penicilinasa, entonces se utilizará meticillina
tardío, o cuando el tratamiento es demorado o insu-
(Celbenín) en dosis de 8 a 12 g diarios por vía EV,
ficiente.
subdivididos en 4 o 6 inyecciones. Una combina-
La osteomielitis se presenta entre 10 días y 2 se-
ción de antibióticos útil es el uso de una cefalosporina
manas después de iniciada la infección articular y
de tercera generación (cefotaxime o ceftriaxone en
se detecta mediante estudios radiológicos seriados
dosis de 1 g EV cada 8 h para el primero y 0,5 a 1 g
de la articulación afectada, en los cuales se encuen-
EV cada 12 h para el segundo), asociado a oxacillín
tran lesiones osteolíticas o elevación del periostio.
o nafcillín en dosis de 2 g cada 4 h. Si se trata de un
Cuando la infección articular aguda tiene un mes o
estafilococo dorado meticillina resistente, se susti-
más de evolución sin tratamiento adecuado, pueden
tuye dicho antibiótico por la vancomicina a la dosis
producirse una deformidad en flexión y anquilosis
de 0,5 a 1 g EV cada 12 h.
articular.
Si la tinción de Gram demuestra bacilos gramne-
Tratamiento gativos (enterococo, H. influenzae, P. aeruginosa),
se utilizará una cefalosporina de tercera generación,
La terapéutica de la artritis infecciosa aguda des-
como cefotaxime o ceftriaxone, en igual dosis que
cansa en el empleo adecuado de antibióticos por vía
las señaladas anteriormente asociada a un amino-
sistémica y en el tratamiento local intensivo de la
glucósido como tobramicina, gentamicina o amika-
articulación afectada.
cina, de 5 a 6 mg/kg/día, por vía IM o EV, divididos
La elección del antibiótico está en relación direc-
en 3 dosis para cualquiera de ellos.
ta con el resultado del frotis del líquido sinovial to-
El tratamiento local intensivo consiste en el dre-
mado al inicio, con indepedencia de que después los
naje de la colección purulenta intrarticular y lavado
resultados de los cultivos del líquido sinovial y los
de la articulación a fin de disminuir la presión en
hemocultivos, así como la evolución clínica, confir-
ésta y además, remover las enzimas proteolíticas
men lo adecuado o no del antibiótico elegido.
En el caso de que la tinción de Gram no muestre depositadas en el cartílago. Este drenaje, que debe
gérmenes de ningún tipo y se trate de un paciente realizarse con trócar grueso, se repite pasados va-
joven, sexualmente activo, debe sospecharse el ori- rios días, pero si el proceder falla está indicado rea-
gen gonocócico de la artritis y en consecuencia, el lizar artroscopia con el fin de descomprimir y lavar
tratamiento se inicia con penicilina cristalina en do- la articulación.
sis de dos millones c/4 h por vía EV. Debe recordarse La artrotomía se hace cuando es necesario elimi-
que con bastante frecuencia el gonococo se muestra nar flóculos purulentos o desbridar la membrana si-
resistente a la penicilina y en ese caso se empleará novial infectada, el cartílago o el hueso.
una cefalosporina de tercera generación, ya sea La inmovilización no es necesaria, excepto si el
cefotaxime o ceftriaxone, en dosis de 1 g EV cada 8 h dolor es muy importante. Debe hacerse fisioterapia
para el primero y 0,5 a 1 g EV cada 12 h para el pasiva a fin de conservar una plena movilidad
segundo. Después de 3 o 4 días de tratamiento por articular.
vía parenteral, se cambia para la vía oral con
cefixime, 400 mg; ofloxacín, 400 mg o ciprofloxacín,
500 mg cada 12 h. En los pacientes alérgicos a las ALGUNAS FORMAS
penicilinas o a las cefalosporinas, se utiliza specti-
nomicín, 2 g IM cada 12 h; ofloxacín, 400 mg EV ETIOLÓGICAS DE
cada 12 h, o ciprofloxacín, 500 mg EV cada 12 h.
Si por el contrario, se trata de un paciente mayor ARTRITIS INFECCIOSA
y con algún factor predisponente, entonces se valo-
ra la posibilidad de que el agente etiológico sea un
germen grampositivo, como el estafilococo, o un
gramnegativo, como una enterobacteria.
Artritis tuberculosa
Si la tinción de Gram muestra cocos grampositi- La artritis tuberculosa ocurre en el 1 % de todos los
vos, debe iniciarse el tratamiento con penicilina cris- casos de tuberculosis. La infección llega a la articu-

98
lación por vía hematógena y permanece inactiva en 2. Al provocar una reacción inmunológica que
el hueso subcondral, hasta que al activarse el proceso involucra las articulaciones
se propaga a la cavidad articular. Tienen importan-
cia los factores predisponentes, como enfermedades En la hepatitis B, antes de que aparezca el íctero,
crónicas (diabetes), alcoholismo, etc. pueden observarse episodios de rash, urticaria, fie-
A diferencia de la osteomielitis tuberculosa, que bre y artralgia. Menos frecuente es la aparición de
típicamente afecta la columa dorsal o lumbar, la ar- artritis simétrica de las manos, muñecas, codos o
tritis tuberculosa primaria involucra las articulacio- caderas y rigidez matinal, que recuerda la artritis
nes que soportan peso, como el tobillo, rodilla y reumatoidea.
cadera, y sólo de manera excepcional las pequeñas Dos semanas después de haber padecido paroti-
articulaciones, que no soportan peso. Clínicamente, ditis, es posible el desarrollo de una monoartritis
esta artritis cursa de forma oligosintomática o con autolimitada o una poliartritis migratoria. Esta se-
un cuadro polisintomático acompañado de dolor y cuela es más común en hombres que en mujeres.
limitación de los movimientos de la articulación to- Más del 50 % de las mujeres presentan artritis
mada, ya que es una artritis monoarticular. La exis- después de sufrir una infección por parvovirus
tencia de actividad tuberculosa pulmonar es poco B-19. En los adultos, algunas veces la artropatía
común. ocurre en ausencia de fiebre y rash. Hay dolor, y
En el examen físico se encuentra una articulación rigidez acompañada de aumento de volumen prime-
con aumento de volumen y de la temperatura, con
ro en las manos, pero también en muñecas, rodillas
los músculos pararticulares atróficos; además, pue-
y caderas; usualmente cura en algunas semanas, aun-
den haber adenopatías que evolutivamente se
que un pequeño número de pacientes evoluciona
caseifican y llegan a fistulizarse, pero con poco o
hacia una artropatía crónica.
ningún dolor. Si en el examen se detecta un derrame
En los pacientes infectados con el virus de inmu-
articular abundante, se debe dudar del diagnóstico,
nodeficiencia humana (VIH) se asocia con frecuen-
mientras que el padecimiento previo de tuberculo-
cia un síndrome artrítico grave.
sis, aumenta la sospecha. En el 50 % de los casos es
En la época previa a la vacunación era también
posible encontrar el antecedente de un traumatismo
articular. común la artritis de la rubéola, pero hoy resulta muy
El estudio del líquido intrarticular muestra una rara. Es poliarticular, simétrica, de pequeñas articu-
leucocitosis de hasta 20 000/mm3, con aproximada- laciones, semejante a una artritis reumatoidea; apa-
mente 50 % de neutrófilos. La coloración de Ziehl- rece al desvanecerse el rash y se prolonga por varios
Neelsen es negativa la mayoría de las veces, a días, a veces hasta 6 u 8 semanas.
diferencia del cultivo del pus o del tejido sinovial
obtenido mediante biopsia, que es positivo hasta en Artritis piógena crónica
el 80 % de los casos. Esta forma de artritis aparece a continuación de una
Los estudios radiográficos revelan la presencia de
artritis piógena aguda que no se trató o se hizo de
osteoporosis, estrechamiento de la interlínea articu-
forma inadecuada.
lar, áreas de rarefacción ósea y tardíamente aparece
La artritis infecciosa crónica produce cuadros clí-
destrucción del cartílago y erosión subcondral y
nicos variables pero característicos, porque la infec-
cortical.
ción se activa en forma continua o recurrente. En la
En el tratamiento se utilizan las drogas antitu-
forma continua hay dolor local perenne, así como
berculosas específicas en igual dosis, vías y tiempo
signos flogísticos y deformidad creciente de la arti-
de administración que en la tuberculosis pulmonar.
culación. En la forma recurrente el cuadro puede
simular una curación después del tratamiento con
Artritis viral antibióticos, pero pasado algún tiempo reaparecen
Los virus producen artritis por dos mecanismos: los síntomas y signos con una evolución tórpida e
insidiosa.
1. Por afectación del tejido sinovial en el curso de Los estudios radiológicos muestran destrucción
una infección sistémica progresiva del cartílago articular, estrechamiento de

99
la interlínea articular y erosiones o cavitaciones El tratamiento será médico-quirúrgico y consisti-
óseas. rá en la administración de antibióticos según el re-
El diagnóstico diferencial se hace con la artritis sultado de los cultivos, y en la fijación quirúrgica de
infecciosa crónica no piógena (tuberculosa, bruce- la articulación (artrodesis), o la sustitución de ésta
lósica, etc.), así como con la gota y la artritis reuma- por una prótesis.
toidea.

100
12
OSTEOARTRITIS, ARTROSIS
O ENFERMEDAD DEGENERATIVA
ARTICULAR
La osteoartritis, también llamada enfermedad ocurrir en el momento de la contusión o con poste-
degenerativa articular o artrosis, es el resultado de rioridad a ésta, y con el uso de la articulación afecta-
cambios degenerativos del cartílago articular, da el cartílago normal degenerará si la articulación
espesamiento del hueso subcondral, remodelación es inestable.
ósea y formación de osteofitos; constituye la forma Profesión. Está demostrado que la profesión tiene
más común de artropatía. un papel importante en la aparición de osteoartritis:
Algunos autores prefieren el nombre de osteoar- es frecuente en la articulación de la cadera en los
tritis cuando los cambios en la articulación se acom- bailarines de ballet; también, en el hombro y el codo
pañan de manifestaciones sintomáticas y el de de los lanzadores (béisbol) o en la muñeca de los
osteoartrosis cuando existen cambios anatómicos y luchadores.
radiológicos sin manifestaciones clínicas. Tabaquismo. Se ha comprobado que el hábito de
fumar y la osteoporosis guardan una relación nega-
Factores de riesgo tiva con la osteoartritis, pero se desconoce la razón.
Hay que tener en cuenta una serie de factores que
contribuyen al desarrollo de esta enfermedad, son Etiopatogenia
los llamados factores de riesgo, entre los que tene- El cartílago articular cumple dos funciones funda-
mos: mentalmente mecánicas:
Edad. La enfermedad es considerada una conse-
cuencia del envejecimiento, con la consiguiente 1. Provee superficies articulares bruñidas que per-
senescencia del condrocito y descenso de su activi- miten su movimiento armónico con el líquido
dad metabólica; no obstante, las articulaciones acu- sinovial como lubricante.
mulan numerosos traumatismos durante la vida y la 2. Asimila y concentra el stress, de manera que
distinción entre el envejecimiento y la lesión por las superficies articulares no se desgarren cuan-
desgarramiento es imperceptible. Después de la ma- do la articulación recibe carga; esto es, actúa
durez ocurre una reducción moderada de la como un amortiguador que soporta y difunde
celularidad en el cartílago articular normal y en ge- la carga hacia los tejidos vecinos.
neral, las células permanecen metabólicamente ac-
tivas. Ningún factor solitario actúa como disparador del
Obesidad. Desde hace mucho tiempo este factor proceso, cuya traducción clínica es la destrucción
de riesgo ha sido asociado con una prevalencia ele- del cartílago y la neoformación ósea.
vada de osteoartritis de las rodillas, las caderas y las La osteoartritis funciona a través de estas dos vías:
manos. En aquellos sujetos obesos que aún no pa-
decen osteoartritis, se ha demostrado que una dis- a. La carga excesiva articular causa fallo de los
minución del peso en 5 kg se asoció con la reducción tejidos, independientemente de que las propie-
en un 50 % de la posibilidad de padecer una osteoar- dades del hueso subcondral y el cartílago sean
tritis sintomática. normales.
Traumatismos. Los traumatismos que se repiten b. El hueso subcondral y el cartílago son de cali-
sobre una articulación constituyen un factor de riesgo dad inferior y fallan a pesar de que la carga ar-
importante. El daño al cartílago articular puede ticular no sea excesiva.

101
Clasificación • Evolutivamente hay pérdida de condrocitos en
todos los niveles.
La enfermedad degenerativa articular se clasifica en
• Adelgazamiento intenso de la matriz del cartílago.
primaria y secundaria. La primaria se caracteriza
porque en ella es imposible demostrar desgaste anor- • Desarrollo de fibrocartílago en lugar del cartíla-
mal o sobrecarga articular. Se piensa que es provo- go hialino perdido.
cada por los cambios bioquímicos que se producen • En las fases tardías de la enfermedad, los frag-
en el cartílago y hueso subcondral. La enfermedad mentos de cartílago a veces desencadenan le-
secundaria es la expresión del desgaste articular re- siones inflamatorias sinoviales focales sin el
sultado de tensiones anormales, que pueden asociarse pannus progresivo y destructor que se observa
con lesiones o traumatismos articulares, obesidad o en las artropatías inflamatorias típicas.
cualquier otra de las afecciones ya señaladas.
I. Primaria o idiopática.
Cuadro clínico
a. Osteoartritis circunscrita. La enfermedad cursa sin síntomas clínicos y mues-
b. Osteoartritis generalizada. tra solamente cambios radiológicos, o por el contra-
c. Osteoartritis erosiva. rio, evoluciona con manifestaciones clínicas entre
II. Secundaria. las que sobresale el dolor, descrito con frecuencia
a. Resultante de un mecanismo articular incon- como “un malestar profundo” que se intensifica
gruente. cuando se utilizan las articulaciones afectadas; sue-
1. Postraumática. le irradiarse a las estructuras vecinas y se alivia con
2. Congénita o del desarrollo: enfermedad el reposo en los estadios iniciales de la enfermedad.
de Legg-Calvé-Perthes, displasias epifi- A veces se encuentra crepitación a causa de la des-
sarias, necrosis isquémica, osteocondritis, trucción del cartílago articular y la hipertrofia ósea,
anormalidades del cuello del fémur. que producen pérdida de la alineación normal de la
b. Resultante de una enfermedad inflamatoria articulación. En algunos casos aparece un derrame
previa: artritis reumatoidea, artritis gotosa, intrarticular no inflamatorio (trasudado).
seudogota, artritis infecciosa. Puesto que la enfermedad afecta diferentes arti-
c. Resultante de desórdenes metabólicos: he- culaciones, los síntomas y signos clínicos serán des-
mocromatosis, ocronosis, enfermedad de critos en relación con éstas.
Wilson. Columna cervical. Los síntomas aparecen por lo
d. Consecutiva a endocrinopatías: diabetes me- común después de los 25 años de edad. La enferme-
llitus, acromegalia, anomalías de las hormo- dad predomina en el sexo masculino, sobre todo en
nas sexuales, etc. individuos que están sometidos a esfuerzos, depor-
e. De causas diversas: osteonecrosis y hemar- tes rudos o que soportan grandes pesos sobre su ca-
trosis asociadas a enfermedades hematoló- beza o mantienen ésta flexionada hacia adelante (leer,
gicas. escribir, coser, etc.).
El paciente refiere dolor cervical o en la nuca,
Anatomía patológica intensificado con los movimientos, mejora con el
La osteoartritis es un proceso patológico que pasa reposo, evoluciona con períodos de remisiones y
por varias etapas desde el punto de vista histopato- exacerbaciones; la intensidad del dolor también au-
lógico. Los cambios histológicos consisten en: menta con los esfuerzos que implican una maniobra
de Valsalva (toser, estornudar, defecar, etc.).
• Pérdida de la matriz del cartílago articular. El examen físico puede mostrar rigidez en la nuca,
• Pérdida de los condrocitos en las capas superfi- crujidos articulares a los movimientos de ésta y do-
ciales del cartílago articular. lor en una de las escápulas y brazo del mismo lado,
• Cambios reactivos en los condrocitos más pro- acompañado de parestesias en los dedos. Como con-
fundos, que se manifiestan por división celular secuencia de la compresión de las raíces raquídeas a
y clonación en un aparente esfuerzo de repara- nivel del agujero de conjunción, aparece dolor seg-
ción. mentario.

102
Cuando las neoformaciones óseas (osteofitos En el examen físico suele encontrarse limitación
marginales) son muy marcadas, se produce compre- en mayor o menor grado de los movimientos articu-
sión de la arteria vertebral, y al cuadro clínico antes lares dorsales, así como crujidos articulares.
descrito se añaden las manifestaciones propias de la Columna lumbar. Los síntomas pueden deberse a
disminución del riego sanguíneo encefálico por com- la formación de osteofitos marginales y consisten
presión de esta arteria: pérdida del equilibrio, vérti- en dolor que aumenta con los esfuerzos y mejora
gos, parestesias, alteraciones auditivas y visuales, con el reposo, e impotencia funcional con limita-
así como trastornos de la sensibilidad. ción en los movimientos articulares. Otras veces los
Otras veces los síntomas que se presentan son síntomas son consecuencia de la protrusión de los
consecuencia de la irritación de las terminaciones discos intervertebrales degenerados hacia la región
simpáticas del vaso comprimido: entonces se encuen- posterolateral, lo que produce compresión de las raí-
tra dolor retrorbitario y occipital; en los oídos, gar- ces nerviosas de la cola de caballo. Los discos
ganta y ojos, acompañado de lagrimeo, obstrucción intervertebrales dañados con mayor frecuencia son
nasal y escotomas, lo que induce a veces al diagnós- los correspondientes a los niveles L4-L5 y L5-S1.
tico erróneo de migraña. El disco herniado ocasiona dolor lumbar mode-
En otras oportunidades la sintomatología es con- rado o muy intenso o recurrente, que se irradia a
secuencia de una hernia del núcleo pulposo cervi- cualquiera de los miembros inferiores, y crece su
cal. Los discos intervertebrales dañados con mayor intensidad con los movimientos o el ejercicio, prin-
frecuencia, son los de los niveles C5-C6 y C6-C7, y cipalmente cuando el movimiento es por flexión
más raramente C7-D1. Cuando está comprimida la hacia el lado del dolor. Además, suele encontrarse
quinta raíz cervical, el dolor no sobrepasa el codo. hipersensibilidad paravertebral y aumento del dolor
Si se afecta la sexta raíz, éste se localiza en la región al realizar las maniobras de Rossigne y Valsalva, así
bicipital y a lo largo del borde radial del antebrazo, como por la tos y el estornudo. Las maniobras de
y a veces llega hasta los dedos pulgar e índice. Si Lassegue y Braggard son positivas (lumbociatalgia).
está comprimida la séptima raíz cervical, se produ- Hombro. La osteoartritis del hombro se ve con
ce en la región tricipital, así como en las zonas me- alguna frecuencia. Se recogen antecedentes de tra-
dianas flexoras y extensoras del antebrazo, y en la bajos rudos que originan cambios degenerativos
mitad radial de la mano, acompañado, en esta últi- del cartílago. Otras veces, existen precedentes de
ma de parestesias. traumatismos, deformaciones o malformaciones
En algunos pacientes la hernia discal produce congénitas. En el hombre es importante investigar
compresión de la arteria espinal anterior, una de cu- antecedentes de trabajo con martillo neumático. El
yas ramas es la arteria surcocomisural, de la cual cuadro clínico se caracteriza por dolor, que aumenta
nacen los vasos que irrigan el cuerno anterior y el en intensidad con la abducción y rotación externa y
cordón lateral de la médula. Cuando ocurre esta even- se acompaña de crujidos al ejecutar movimientos con
tualidad, se encuentran trastornos del trofismo da- la articulación. Además, no es raro encontrar cierto
dos por atrofia de los miembros superiores que grado de atrofia del músculo deltoides. Con frecuen-
comienza en las manos y asciende progresivamen- cia la osteoartritis se asocia a retracción del man-
te. La afectación de los haces piramidales ocasiona guito rotador y periartritis.
cuadriparesia espástica con hiperreflexia osteoten- Codo. Los cambios degenerativos en esta articu-
dinosa, clonus de la rodilla y del pie, así como sig- lación se presentan aislados o junto con manifesta-
nos de Babinski y de Hoffman. ciones de lesión en otras articulaciones, como las
Columna dorsal. Los síntomas son variables. Hay del hombro o la muñeca. Generalmente hay pocos
dolor, intensificado con el ejercicio y se alivia con síntomas clínicos. Es más frecuente en el sexo
el reposo. A veces se irradia a la espalda, pero en masculino en la medianía de la vida, en pacientes
otras oportunidades lo hace hacia la cara anterior que refieren historia de sobrecarga en esta articula-
del tórax; en algunos casos se acompaña de cierto ción, como ocurre en carpinteros, herreros, trabaja-
grado de opresión torácica y dificultad respiratoria dores con martillo neumático, pitchers, etc.
que asustan al enfermo y lo obligan a visitar al mé- Manos. La manifestación clásica de la enferme-
dico, en la creencia de que padece alguna enferme- dad degenerativa articular en las manos está repre-
dad pulmonar o cardiovascular. sentada por los nódulos de Heberden (Fig. 12.1).

103
Éstos consisten en prominencias óseas que se en- Las manifestaciones clínicas suelen ser bilatera-
cuentran en el borde dorsal de las articulaciones in- les, aunque generalmente los síntomas predominan
terfalángicas distales. Inicialmente muestran una en una articulación. Los pacientes refieren que co-
consistencia quística y son dolorosos cuando se in- menzaron a sentir sensación de cansancio o dolor
flaman. Los crónicos se caracterizan por el creci- en la región inguinal afectada, el cual aparecía du-
miento óseo y las deformaciones angulares. rante la marcha y aumentaba en intensidad con las
sobrecargas, como subir escaleras, acompañado de
rigidez en la articulación. Más adelante, el dolor se
intensificaba al reiniciar la marcha después de un
reposo prolongado. Este dolor se irradia a la cara
anterolateral externa del muslo y con menor frecuen-
cia, a la cara interna de la pierna.
El examen físico demuestra limitación de los
movimientos articulares y dolor que se irradia hacia
la pantorrilla en su porción media cuando se levan-
tan pesos.
Con el decursar de la enfermedad el paciente ad-
quiere una actitud en la cual mantiene la pierna en
flexión, con rotación externa y abducción, así como
Fig. 12.1. Osteoartrosis. Toma de las articulaciones interfalán- el tronco inclinado hacia adelante y hacia el lado
gicas y no afectación de las metacarpofalángicas. Nódulos de enfermo. La mayoría de los pacientes quedan seria-
Heberden (distales) y de Bouchard (proximales). Aumento del
hueso, que representa formación de osteofitos. Tomado de Ilus- mente incapacitados, debido al dolor y a la restric-
traciones diagnósticas en Reumatología de V. Wright y A.R. ción de los movimientos articulares.
Harvey, Interamericana-Mc Graw-Hill, 1987. Rodilla. La afectación de la rodilla es la causa
más frecuente de impotencia o incapacidad en la
Junto a los de Heberden se pueden encontrar los enfermedad degenerativa articular. El cuadro co-
nódulos de Bouchard, localizados en las articulacio- mienza con dolor ligero y sensación de rigidez arti-
nes interfalángicas proximales. La afectación de las cular al reiniciar la marcha, luego de un período de
pequeñas articulaciones metacarpofalángicas es poco reposo prolongado, sobre todo sentado. Evolutiva-
frecuente. mente el dolor aumenta su intensidad y llega a ser
Cadera. La toma de las caderas por la enferme- continuo en algunos casos avanzados.
dad degenerativa articular adopta dos variedades: En el examen físico se encuentra cierto grado de
flexión y ligera deformidad en varo. A veces la pal-
1. Coxoartrosis primaria. En esta modalidad no pación es dolorosa, sobre todo a nivel de la línea
se encuentra afectación previa de la cadera ni articular interna, en el sitio donde tiene lugar la in-
ningún otro hecho que predisponga a la apari- serción del músculo sartorio. En ese mismo lugar es
ción de cambios degenerativos en la articula- posible también palpar osteofitos y nódulos mioge-
ción coxofemoral. Suele presentarse después lósicos, así como signos inflamatorios secundarios
de la cuarta década de la vida. al pellizcamiento sinovial. En ocasiones, los movi-
2. Coxoartrosis secundaria. Aparece en articula- mientos articulares provocan una crepitación palpa-
ciones predispuestas por algún padecimiento ble tan intensa, que se hace audible.
previo, como la displasia congénita, necrosis En algunos casos se detecta el signo del cepillo,
aséptica de la cabeza del fémur, artritis séptica dolor que se provoca cuando se comprime la rodilla
de la cadera, etc. Todas estas alteraciones son en sentido anteroposterior y se desplaza la rótula
llamadas cambios preartrósicos de Hockenbach. hacia arriba y abajo. Esto ocurre por el reblandeci-
Se presentan en las primeras décadas de la vida miento posterior de la rótula (condromalacia patelar)
y en ambos sexos, aunque parecen estar favo- y de la superficie de carga femoral y tibial. Los cam-
recidas por la menopausia. bios rotulianos suelen ocurrir en personas jóvenes,

104
que en ocasiones presentan formación de osteofitos diagnóstico diferencial con la artritis reumatoidea.
(osteoartrosis patelar). Si la toma articular es en la rodilla y existe neofor-
Osteoartritis erosiva. Ocurre fundamentalmente mación ósea marcada con deformación articular, ha-
en mujeres posmenopáusicas y afecta las articula- brá que hacer el diagnóstico diferencial con la
ciones interfalángicas proximales y distales, y en articulación de Charcot o artropatía neurogénica,
algunos casos se extiende hasta las articulaciones afección asociada tradicionalmente a la tabes dor-
metacarpofalángicas. La inflamación es mucho más sal, pero que también se presenta en la diabetes, la
marcada que en el paciente portador de nódulos de degeneración medular combinada de la anemia per-
Heberden. La deformidad puede ser severa y sobre- niciosa, la siringomielia, así como en las lesiones de
venir la anquilosis, y el examen de la sinovial mos- la médula espinal y de los nervios periféricos y por
trar infiltración por linfocitos y monocitos. la administración prolongada intrarticular de hidro-
Alrededor del 15 % de los pacientes con osteoar- cortisona. El examen neurológico mostrará dismi-
trosis erosiva evoluciona hacia una artritis reuma- nución o pérdida de la sensibilidad dolorosa y
toidea, a pesar de que el factor reumatoideo sea térmica o de la profunda, en dependencia de la afec-
negativo. ción responsable.
El estudio radiológico muestra colapso y erosio- No debe olvidarse que otras entidades clínicas que
nes del platillo subcondral, además de los hallazgos tienen o pueden tener un carácter sistémico, suelen
típicos de la radiología de la osteoartritis. acompañarse de dolor articular, como sucede en el
LED, el mieloma múltiple, las metástasis de carci-
Exámenes complementarios nomas como el de la próstata, la osteoporosis, los
trastornos en el metabolismo del calcio, etc., y tam-
Radiología. En los estadios iniciales los exámenes
bién en algunos casos, será necesario realizar el diag-
radiológicos por lo común no muestran alteracio-
nóstico diferencial con ellas. Serán de utilidad el
nes. Evolutivamente se encuentra disminución de la
cuadro clínico y los hallazgos radiológicos, humo-
interlínea articular como expresión de la pérdida de
rales, histológicos, etc.
cartílago. Otras características radiológicas incluyen
Existen dos afecciones muy parecidas a la artro-
esclerosis del hueso subcondral, quistes subcondra-
patía degenerativa, que tienen puntos afines con ésta
les y osteofitos marginales como hecho frecuente
y con las cuales hay que establecer también el diag-
característico.
nóstico diferencial: osteoartritis hipertrófica prima-
Cuando la enfermedad lleva tiempo de evolución,
ria generalizada y osteoartritis generalizada.
es posible hallar una radiocondensación acentuada Osteoartritis hipertrófica primaria generalizada.
en la articulación dañada como consecuencia de la Consiste en un cuadro primario poliarticular que
calcificación del cartílago y de la presencia de hue- generalmente involucra las manos y en el cual hay
so de neoformación, que en ocasiones obliga a ha- una reacción inflamatoria mayor que la que se pre-
cer el diagnóstico diferencial con las tumoraciones senta en la enfermedad degenerativa articular. Apa-
óseas, sobre todo metastásicas. rece en la medianía de la vida, con mayor frecuencia
Exámenes humorales. Por regla general no mues- en el sexo femenino y es evidente un patrón fa-
tran alteraciones. El hemograma y la eritrosedimen- miliar.
tación son normales e igualmente el líquido sinovial Osteoartritis generalizada. Al igual que el ante-
en lo referente a aspecto, viscosidad y conteo de leu- rior, es un cuadro poliarticular consecutivo al des-
cocitos. A veces, en éste se identifican fragmentos gaste por el uso. Esta afección es considerada por
de cartílago articular. muchos autores como parte del proceso involutivo
fisiológico, ya que se presenta en la edad media de
Diagnóstico la vida y predomina en las articulaciones sometidas
El diagnóstico no es difícil cuando la enfermedad se a mayor sobrecarga. Clínicamente se caracteriza por
presenta con su cuadro típico de dolor articular, au- dolor que aparece después del reposo y que cede
sencia de síntomas clínicos de otros sistemas y nor- con el ejercicio y la aplicación de calor local; en el
malidad en los estudios humorales. examen físico se detecta, en ocasiones, crepitación
Cuando predomina la afectación de las pequeñas y agrandamiento articular secundario al crecimien-
articulaciones de las manos es necesario hacer el to óseo.

105
Tratamiento ción de las terminaciones nerviosas de sustancia P,
No se conoce ningún medicamento capaz de dete- un neuropéptido mediador del dolor, alivia éste.
ner el proceso patológico básico, que como ya se Las sales de oro, los antipalúdicos y la penicila-
sabe consiste en la degradación del cartílago, así mina no tienen indicación en el tratamiento de la
como tampoco existe ninguno para intensificar la osteoartritis. Los esteroides sólo son utilizados por
síntesis de éste. Las medidas que se adopten depen- vía intrarticular y no se repetirán las inyecciones más
den de la articulación tomada y del grado de defor- de 3 o 4 veces al año.
midad articular existente.
El tratamiento incluye cuatro aspectos: Tratamiento rehabilitador (fisioterapia)
Su objetivo es reducir los esfuerzos aplicados al tra-
1. Tratamiento general. bajo articular y además, mantener la estabilidad de
2. Tratamiento medicamentoso. la articulación a través del alineamiento de ésta y la
3. Tratamiento rehabilitador. realización de movimientos adecuados.
4. Tratamiento quirúrgico. Los ejercicios isométricos, más que los isotónicos,
están indicados para mantener y mejorar el tono y el
Tratamiento general trofismo muscular a fin de disminuir la carga sobre
Está encaminado a mejorar al paciente y consiste en el cartílago articular.
reposo y dieta. El reposo será relativo y se prohibirá
El empleo del calor o el frío local ha demostrado
toda actividad física que implique esfuerzos exage-
eficacia variable como método para mitigar el do-
rados o traumatismos. El esfuerzo postural se dis-
lor, al igual que la estimulación nerviosa transcutá-
minuirá al mínimo y si fuere necesario se indicarán
soportes o fajas adecuadas para las mamas o el ab- nea, ha sido útil para aliviar la dorsalgia.
domen péndulo. El empleo de calzado acojinado y muletas ha pro-
La dieta será agradable y aportará las calorías bado su utilidad para disminuir los síntomas articu-
necesarias para mantener al paciente en su peso ideal. lares de los miembros inferiores.
En caso de obesidad la dieta ha de ser hipocalórica,
a fin de obtener disminución del peso corporal y con Tratamiento quirúrgico
ello reducir la carga sobre la articulación dañada. La cirugía de mínimo acceso, a través de la artros-
copia, es útil cuando se trata de reparar defectos in-
Tratamiento medicamentoso trínsecos de la rodilla, el hombro y el tobillo, así
Está dirigido fundamentalmente a aliviar el dolor, y como para que sean retirados fragmentos sueltos del
no es necesario administrar medicamento alguno si cartílago articular.
éste es poco intenso. Dicho alivio se logra con el La osteotomía está indicada para algunos indivi-
uso de analgésicos simples, como el acetaminofén duos con alteraciones en la alineación de la extre-
en dosis de 0,5 a 1g 4 veces al día; paracetamol de midad y osteoartritis temprana de una rodilla o
igual forma; tramadol: 50 mg por vía oral, 3 o 4 veces cadera.
al día; propoxifeno, combinado con acetaminofén, Cuando la enfermedad está muy avanzada, o cues-
una tableta cada 4 o 6 h. Los AINE pueden ser
ta mucho trabajo aliviar el dolor, o la impotencia
utilizados, porque han demostrado ser útiles por sus
funcional es muy importante, está indicada la susti-
efectos analgésicos más que por sus efectos antin-
tución articular total, la artroplastia, la cual debe
flamatorios. Pero no se deben olvidar sus consecuen-
cias indeseables sobre el tractus digestivo, el sistema hacerse de elección en sujetos mayores de 60 años
hemolinfopoyético y el riñón (para medicamentos y con buena fuerza muscular. En los pacientes meno-
dosis, ver “Artritis reumatoidea”). res de 60 años no se recomienda la intervención qui-
Está demostrado que el tratamiento tópico con rúrgica debido a la posibilidad, real aunque pequeña,
capsaicina en crema, sustancia que produce deple- de fracaso a largo plazo.

106
13

GOTA E HIPERURICEMIA

Concepto Mecanismo de producción


La gota es una enfermedad que tiene relaciones di- de la hiperuricemia
rectas con el depósito de cristales de urato monosó- Debido a la importancia metabólica de las purinas
dico en los tejidos (fundamentalmente en el interior en la formación de las nucleoproteínas celulares, el
de la cavidad articular), cuyas manifestaciones ca- individuo no sólo las consigue a partir de los ali-
racterísticas son los episodios de inflamación articu- mentos que la contienen, sino que es capaz de sinte-
lar, en general, autolimitados y recurrentes. Los tizarlas, principalmente a partir de los aminoácidos,
cristales de urato monosódico se encuentran siempre purinosíntesis de novo.
en el líquido sinovial de las articulaciones inflama- Antes de la pubertad, los niveles séricos de ácido
das y también formando agregados extrarticulares, úrico son muy bajos, y los niños, salvo defectos en-
palpables con facilidad, denominados tofos. A todo lo zimáticos excepcionales, no padecen gota; al llegar
anterior pueden asociarse afectación renal y cálcu- a la pubertad, los varones alcanzan los valores que
los urinarios. se mantendrán a lo largo de la vida, aunque con los
años éstos suelen ir en aumento. En las mujeres, con
Ácido úrico sérico y cristales de urato la pubertad se produce un incremento moderado de
monosódico los niveles de uricemia, después de la menopausia
hay un segundo incremento y se alcanzan cifras
La precipitación de cristales de urato monosódico
próximas (aunque algo menores) a la de los varones.
ocurre cuando de forma continua los niveles séricos
Esta distribución de los niveles de ácido úrico expli-
de ácido úrico se elevan por encima del nivel de
ca la observación de Hipócrates de que las mujeres
saturación, que coincide con el que clínicamente se no padecen gota antes de la menopausia.
considera de hiperuricemia (alrededor de 7 mg/100 ml Los niveles séricos de ácido úrico se elevan por
o 400 mmol/L. dos mecanismos:
El ácido úrico es el catabolito final de las purinas
en el ser humano, algunos primates superiores y las a. Aumento de la síntesis (suele acompañarse de
aves. Sólo en algunas personas con dichos niveles un incremento de la excreción renal y mayor
séricos elevados, se depositan cristales de urato incidencia de nefrolitiasis).
monosódico en las articulaciones; se ignora el por- b. Disminución de la excreción renal (es el meca-
qué no sucede en otras, y el porqué los episodios de nismo más común).
inflamación son esporádicos a pesar de que los cris-
tales permanecen de manera indefinida en las articula- El pool de ácido úrico es el resultado de un equi-
ciones (al menos mientras los niveles de ácido úrico librio entre los uratos formados procedentes de los
no se reduzcan con tratamiento farmacológico). orígenes 1; 2 y 3, y los que se excretan en I y II. La
No siempre la hiperuricemia se acompaña de gota. entrada diaria de ácido úrico en el pool es la misma
La frecuencia de aquélla en la población general os- que sale. Así, pues, la mitad de éste es remplazada
cila entre 5 y 20 % para la población masculina y diariamente.
entre 0,5 y 1 % para la femenina, y de ambas pade- En el paciente gotoso, el pool de uratos está au-
cen gota de un 10 a 15 %. mentado de 2 a 25 veces.

107
Ingreso Egreso
1. Catabolismo de las nucleoproteínas Eliminación urinaria (I)
ingeridas Pool de ácido (es la principal vía de excreción)
2. Purinosíntesis de novo úrico
3. Catabolismo de los ácidos nucleicos hísticos (uratos) Uricolisis (II)
Por bacterias intestinales

La síntesis de los compuestos purínicos a partir f) Enfermedades linfoproliferativas y mie-


de diversas moléculas no purínicas o purinosíntesis loproliferativas
de novo, es la principal fuente de ácido úrico (for- g) Anemia hemolítica
mación), y el órgano regulador de la excreción para 3. Transitoria
mantener el pool constante, es el riñón. a) Alcoholismo
1. Hiperuricemia por aumento de la síntesis de b) Ejercicio muscular intenso
ácido úrico. c) Ayuno
a. Defectos enzimáticos. Los dos defectos enzi- d) Cetoacidosis
máticos asociados a un aumento de la excre- La ingestión de alcohol (con disminución de la
ción renal y nefrolitiasis son: la ausencia total excreción renal de ácido úrico) aumenta la
o parcial de hipoxantina guanina – fosforribosil uricemia al incrementar la síntesis de ácido
transferasa, cuya consecuencia fundamental es úrico acelerando el catabolismo del ATP; la
la no reutilización de las purinas rescatadas de cerveza es, de las bebidas alcohólicas, la que
la vía catabólica para sintetizar nuevos nucleó- más aumenta la uricemia por su alto contenido
tidos, por lo que aumentan las purinas que lle- en guanosina.
gan al final de esta vía y con ello, la cantidad
de ácido resultante; y el aumento de la activi- 2. Hiperuricemia por defecto en la excreción re-
dad de la 5 fosforribosil 1 – pirofosfato sinte- nal de ácido úrico.
tasa, que resulta en un aumento de la síntesis
En la mayoría de los individuos con hiperuricemia
de 5 – fosforribosil – 1 – pirofosfato intracelu-
existe un defecto en la excreción renal de ácido úrico.
lar, factores importantes en la síntesis de ácido
Éste, evacuado junto con la orina, es el resultado del
úrico.
equilibro entre la filtración glomerular de dicho áci-
b. Aumento del catabolismo de las purinas. La
do, su reabsorción tubular y la secreción activa tu-
causa más común de hiperuricemia por incre-
bular posreabsortiva, pero no se conoce en qué o en
mento en la síntesis de ácido úrico, es la que se
cuáles de estos pasos se encuentra el problema.
produce al aumentar la cantidad de purinas que
La hipouricemia asociada a la cetoacidosis dia-
son catabolizadas.
bética o a las acidosis lácticas de los alcohólicos o
Hiperuricemia por aumento del catabolismo desnutridos, se debe a que otros ácidos orgánicos
de las purinas: compiten con el ácido úrico para su excreción renal.
1. Primitiva El uso de diuréticos es la causa identificable más
• Gota común de hiperuricemia, pues originan una deple-
2. Secundaria ción de volumen que determina una disminución de
a) Drogas la filtración glomerular y un aumento de la reabsor-
• Diuréticos ción tubular de ácido úrico.
• Etambutol Otros fármacos como el ácido acetilsalicílico en
• Ácido acetil-salicílico dosis bajas (en dosis altas es uricosúrico), el ácido
• Pirazinamida nicotínico y el etambutol, son causas de hiperurice-
• Citostáticos mia por disminución de la excreción renal; la pirazi-
b) Insuficiencia renal namida también la disminuye, al inhibir la secreción
c) Hemoptisis tubular de ácido úrico.
d) Psoriasis La hiperuricemia que acompaña al hipotiroidis-
e) Neoplasias mo, hiperparatiroidismo, hipoparatiroidismo y al

108
seudohipoparatiroidismo, probablemente tienen tam- matorios; casi siempre la toma es monoarticular en
bién origen renal. los primeros ataques, aunque a veces es poliar-
La insuficiencia renal por déficit de filtración glo- ticular.
merular se acompaña de hiperuricemia, pero gene- La inflamación articular o de otras estructuras
ralmente no se asocia con gota clínica. sinoviales, como las bursas de deslizamiento tendi-
nosas o las vainas tendinosas, son características de
Formas clínicas la gota.
1. Artritis gotosa aguda La podagra (inflamación aguda de la primera ar-
2. Gota tofácea crónica. ticulación metatarsofalángica) es la manifestación
3. Período intercrítico inicial de la enfermedad en el 60 % de los pacientes;
en los restantes se inicia con una monoartritis aguda
del tarso, tobillo, rodilla, muñeca o alguna articula-
ción metacarpofalángica o bien con inflamación del
ARTRITIS GOTOSA tendón de Aquiles o de la bursa olecraneana.
AGUDA La articulación afectada está muy roja, caliente y
en extremo dolorosa, tanto que el simple contacto
con la sábana duele nucho y molesta; esto dura de 3
Sus factores desecadenantes son:
a 7 días y cuando van mejorando los signos infla-
a. Traumatismos. La primera articulación meta-
matorios hay una descamación de la piel que recubre
tarsofalángica está sujeta a tensión crónica y al
dicha articulación. Este ataque agudo cede espontá-
caminar está expuesta a la mayor presión por neamente con alguna frecuencia (autolimitado).
centímetro cuadrado que cualquier otra articu-
lación del cuerpo. Existen casos en que los ata- Fisiopatología
ques siguen a un traumatismo tan pequeño
Un estudio reciente sugiere que los cristales de urato
como el que proviene de largas caminatas, las
son capaces de comportarse como antígenos y dar
prácticas de golf o excursiones de caza.
lugar a la producción de anticuerpos; esto podría
b. Ingestión de bebidas alcohólicas. Está la artri-
constituir una matriz nucleadora sobre la cual se for-
tis gotosa después del banquete de bodas o la
marían nuevos cristales de uratos.
fiesta mayor por bebidas con exceso de alco- La presencia de estos cristales intrarticulares pue-
hol; las más dañinas son las fermentadas. de ser asintomática, pero eventualmente este depó-
c. Drogas. Entre ellas, las que provocan eleva- sito ocasiona un proceso inflamatorio, caracterizado
ción brusca del ácido úrico, como los diuréti- por una acumulación de leucocitos y de otras célu-
cos (tiacidas, diurético de asa), aspirina en bajas las mesenquimatosas en el lugar donde se produzca
dosis, extractos de hígado, vitamina B12; o des- el daño hístico o donde se localicen microrganis-
censos bruscos como el alopurinol, probene- mos (infección). Ver capítulo “Inflamación”.
cid, etc. Los factores quimiotácticos y la activación endo-
d. Cirugía. El 30 % de los gotosos intervenidos telial mediados por la IL–1 y el FNT-α, determinan
quirúrgicamente tienen un ataque agudo entre la migración de los polimorfonucleares hacia el foco
el tercer y el quinto días. inflamatorio y al entrar en contacto con los cristales
e. Causas varias. de urato, promueven una mayor liberación de facto-
• Dietas con exceso de purinas o proteínas, de res quimiotácticos y esto hace que lleguen más poli-
vitamina C, o un ayuno prolongado morfonucleares, lo que perpetuaría la inflamación
• Hemorragia digestiva gotosa.
• Infecciones en general A partir del foco inflamatorio aparecen en la circu-
lación IL-1, IL-6, IL-8 y FNT-α, posibles causantes
Cuadro clínico de algunas manifestaciones sistémicas que se pre-
El ataque comienza bruscamente y se establece en sentan, entre ellas, fiebre, leucocitosis y eritrosedi-
pocas horas, a menudo en el curso de la noche. En mentación acelerada; la proteína C reactiva se hace
general, empieza el dolor y luego los signos infla- positiva y la alfa-2-globulina se eleva.

109
La artritis gotosa aguda es un proceso autolimita- en los pies que en las manos y en ocasiones avanzan
do en la mayoría de los casos; el dolor, tan intenso y hasta una lisis de toda la falange, lo que suele ocurrir
agudo, suele ceder en pocos días espontáneamente, en la etapa tardía de la enfermedad.
debido a una producción masiva de citocinas, que al También el colesterol y los lípidos totales están
inicio ejercen un efecto proinflamatorio, pero más aumentados en la sangre.
tarde estimulan la liberación de sustancias con efecto
contrario. Las células inflamatorias activadas tam- Criterios diagnósticos
bién generan sustancias con propiedades antinfla-
A. Presencia de cristales de urato monosódico en el
matorias, como la prostaglandina de la serie E; éstas
líquido sinovial.
inhiben la síntesis de IL-1 y de FNT-α y también la
B. Un tofo en el que se haya demostrado la existen-
concentración de proteína C reactiva y la apolipo-
proteína B. Dado que ésta última ejerce un efecto cia de cristales de urato por un procedimiento qui-
inhibitorio sobre la activación de los leucocitos, es rúrgico o con el microscopio de luz polarizada.
posible que el recubrimiento de los cristales de urato C. Presencia de seis de los siguientes hallazgos clí-
con ella constituya un elemento esencial en la fina- nicos, de laboratorio o radiológico, o de ambos.
lización del proceso inflamatorio.
1. Más de un ataque de artritis aguda
Exámenes complementarios 2. Inflamación articular máxima en 24 horas
El ácido úrico en la sangre está generalmente eleva- 3. Ataque de artritis monoarticular
do, aunque puede ser normal (7 mg/dl o 420 µmol/L) 4. Enrojecimiento de la piel que recubre la ar-
en los primeros episodios agudos o cuando el ata- ticulación
que inicial es poliarticular. 5. Dolor o inflamación de la primera articula-
El hallazgo de los cristales de urato monosódico ción metatarsofalángica
en el líquido sinovial es diagnóstico y patognomó- 6. Artritis unilateral que afecta la primera articu-
nico de gota. La demostración de esto se realiza so- lación metatarsofalángica
bre unas gotas de líquido sinovial recién extraído, 7. Afectación unilateral del tarso
situadas entre el portaobjeto y el cubreobjeto de un 8. Sospecha de tofo
microscopio provisto de filtros polarizados; el cam- 9. Hiperuricemia
po del microscopio se oscurece y los cristales de 10. Tumefacción asimétrica radiológica de partes
urato monosódico se destacan por su brillo. Su for- blandas
ma más común es en aguja o en bastones de 3 a 20 µ 11. Demostración radiológica de la presencia de
de largo y tienen una intensa birrefringencia con quistes subcorticales sin erosiones
elongación negativa. 12. Cultivo negativo del líquido sinovial
Los cristales de urato monosódico se identifican
en el material extraído de un tofo mediante una pun- Riñón y gota
ción con aguja. Esto no es importante para el diag-
La afectación renal presenta dos tipos: la litiasis y la
nóstico y sí para valorar el tratamiento que se le va a
nefropatía por urato.
indicar al paciente en los períodos intercríticos. Los
1. Litiasis renal. Se observa en el 20 al 30 % de
valores normales son de 3 a 6 mmol/L.
los pacientes gotosos; en general son pequeños
En el examen radiológico lo que se ve con fre-
cálculos de ácido úrico, radiotransparentes, que se
cuencia es un aumento de volumen de las partes blan-
expresan clínicamente por un cólico nefrítico.
das. El tofo tiene la misma densidad que el tejido
blando. Los hallazgos más sugestivos de una gota 2. Nefropatía por urato. En un gran porcentaje de
son zonas de lisis ósea bien definidas, que general- pacientes con gota avanzada existe algún signo de
mente tienen 5 mm o más y que se observan con sufrimiento renal, como proteinuria, hematuria mi-
mayor frecuencia en el hueso subcondral, en las ba- croscópica o leucocituria, pero los signos de insufi-
ses o las cabezas de las falanges; son más comunes ciencia renal son poco frecuentes.

110
3. Mejorar las lesiones resultantes del depósito
GOTA TOFÁCEA de urato en los tejidos o de ácido úrico en el
CRÓNICA sistema excretor renal.
4. Actuar sobre posibles enfermedades asociadas
(obesidad, HTA, hiperlipemia, DM, ateroscle-
Los tofos, manifestación tardía de la gota, son agre-
rosis).
gados de cristales de ácido úrico detectables por la
exploración clínica; tienden a crecer lentamente Tratamiento de la artritis gotosa aguda
mientras el paciente mantiene niveles elevados de a. El paciente debe hacer reposo y la dieta será po-
este ácido y al normalizarse mediante tratamiento bre en purinas. No se deben prescribir fármacos
farmacológico, disminuyen de tamaño hasta des- hipouricemiantes que al modificar bruscamente
aparecer. Cuando se hace un diagnóstico precoz y la concentración sérica de ácido úrico sean capa-
correcto en general el enfermo no tiene tofos. ces de perpetuar la crisis aguda. A excepción del
Algunas localizaciones extrarticulares de ellos, ácido acetilsalicílico, la mayoría de los AINE y
son: el hélix (Fig. 13.1), sobre el tendón de Aquiles la colchicina no modifican la uricemia.
y en la superficie de extensión del codo; si se sitúan b. Colchicina. Existen múltiples esquemas para su
en el interior de una articulación o cerca de ella, pro- uso: entre ellos, 1 mg de entrada (las tabletas son
ducen erosiones que pueden conducir a una destruc- de 0,5 y de 1 mg) y luego 1 mg cada 2 h hasta dar 4
ción ósea. o 5 mg, o hasta la remisión del ataque o hasta que
aparezcan manifestaciones gastrointestinales
(diarreas, vómitos);o dar 0,5 mg por h hasta 5 o
6 mg. Otro método, que es el recomendable ac-
tualmente, es con dosis moderadas de 0,5 a 1 mg
cada 8 h, ya que la administración de más de 3 mg
diarios de colchicina produce efectos secundarios
gastrointestinales, con frecuencia más perturba-
dores que la propia artritis aguda.

También se administran 3 mg de colchicina EV,


que suelen tener un efecto espectacular sin pro-
vocar los trastornos gastrointestinales que se pre-
sentan cuando se usa en tabletas. Ella disminuye
la expresión de la selectina L por los polimorfo-
nucleares y del ICAM-1 (moléculas de adhesión
intercelular 1) por las células endoteliales, así
como la adhesión de los polimorfonucleares al
endotelio mediados por la selectina E; también
reduce la extravasación de leucocitos.
Fig. 13.1. Tofo gotoso de la oreja. Tomado de Ilustraciones
diagnósticas en Reumatología de V. Wright y A.R. Harvey, Todos los autores están de acuerdo en que el
Interamericana-Mc Graw-Hill, 1987. tratamiento es más eficaz cuanto más precozmente
es empleado, hasta el punto de que para algunos
la colchicina sería el tratamiento de elección al
Tratamiento de la gota inicio del ataque; en cambio, en los establecidos
Los objetivos del tratamiento de la gota son: serían más eficaces los AINE o los esteroides.
1. Resolver el episodio de artritis aguda lo antes Además existe el preparado comercial Colchi-
posible. max, que contiene 0,5 mg de colchicina y 5 mg
2. Prevenir la aparición de nuevos episodios de de clorhidrato de diciclomina (un antiespasmódi-
artritis aguda. co) que permite prevenir el vómito y las diarreas.

111
Hiperuricemia

Asintomático Litiasis renal


Manifestaciones articulares (por ácido úrico)
típicas
No tratar Tratar con inhibidores
de la producción
Clasificar de acuerdo con
el ácido úrico en orina de 24 h

Más de 6,4 mmol/L Menos de 6,4 mmol/L


(Hiperexcretor) (Hipoexcretor)

Inhibidores de la Uricosúricos (aumentan la


producción excreción de ácido úrico
por el riñón)

El fabricante recomienda 8 comprimidos el pri- nas, ya que ellas disminuyen muy poco la
mer día, 6 el segundo, 4 el tercero y 2 el cuarto y uricemia y existen medicamentos potentes y
los tres días siguientes. efectivos que se emplean en estos casos. De
c. Entre los AINE, el de elección es la indometaci- todos modos, es conveniente suprimir los
na, 50 mg cada 6 h por 72 h y luego 25 mg cada 8 h. alimentos que contengan de 150 a 1 000 mg
También se usa la fenilbutazona en dosis de de purinas por 100 g, entre ellos: hígado, ri-
600 mg el primer día y luego disminuirla progre- ñones, mollejas, anchoas, sardinas, arenques
sivamente. y extractos de carne.
Otros AINE que pueden ser usados son: b. Es importante que el paciente obeso sea lle-
• Diclofenaco, 200 mg diarios vado a su peso ideal, pero no bruscamente,
• Naproxeno, 1 500 mg diarios ya que esto podría desencadenar la crisis
• Piroxicam, 40 mg diarios
aguda.
• Ibuprofeno, 3 000 mg diarios por 48 h y lue-
c. Evitar la vida sedentaria con ejercicios físi-
go disminuir la dosis de mantenimiento
cos programados.
d. Evitar la ingestión excesiva de bebidas alco-
Los AINE disminuyen la adhesión de los poli-
morfonucleares al endotelio vascular. hólicas y en particular la cerveza, por la gran
d. Corticosteroides. Se administran de 10 a 15 mg cantidad de guanosina que contiene.
de prednisona diarios, aunque generalmente las II. Medidas específicas.
medidas antes expuestas son tan efectivas que casi 1. Medicamentos que promueven la excreción
nunca es necesario el uso de éstos en la artritis de ácido úrico (uricosúricos).
gotosa aguda. Éstos inhiben parcialmente la reabsorción
Los esteroides actúan reduciendo la adhesión tubular del urato filtrado y secretado y au-
de los polimorfonucleares al endotelio vascular mentan de este modo la excreción urinaria
por un mecanismo diferente a los AINE. de ácido úrico, lo que reduce el nivel plas-
mático de éste.
Tratamiento para prevenir la aparición de nuevos a. Probenecid, de 500 mg a 3 g. Por lo gene-
episodios de artritis gotosa aguda ral se comienza con 1 g diario y se au-
I. Medidas generales. menta la dosis cada 15 días; su vida media
a. En la actualidad no se aconsejan las dietas se extiende de 6 a 12 h. Éste se absorbe
severamente restrictivas de purinas y proteí- con facilidad en el tracto gastrointestinal.

112
Efectos secundarios. El probenecid Interacción con otras drogas. Las acti-
ejerce otros efectos que pudieran ser de vidades biológicas de análogos de las
significación fisiológica, ya que bloquea purinas, como la 6-mercaptopurina y la aza-
el transporte de serotonina y dopamina tioprina, que son inactivadas por la
fuera del líquido cefalorraquídeo, y en al- xantino-oxidasa, son potenciadas por la
gunas personas produce una diuresis mo- inhibición de esta enzima, al asociarlas con
derada de sal y agua. la administración de alopurinol.
Interacciones entre drogas. El probe- A causa de la prolongada vida media
necid demora la excreción renal de ácido biológica de su metabolito activo (oxipu-
salicílico y éste bloquea su efecto urico- rinol), no es necesario dividir la dosis y
súrico, por lo que no se pueden usar en ésta puede ser suministrada en dosis única.
conjunto. Las indicaciones del alopurinol son:
b. Sulfinpirazona (Anturán). Se administran • Pacientes hiperexcretores
100 o 200 mg cada 12 h. • Pacientes con tofos
Es un derivado del metabolito de la fe- • Nefrolitiasis por ácido úrico
nilbutazona y responsable de sus propie-
• Insuficiencia renal
dades uricosúricas; es uno de las más
Toxicidad. Los posibles efectos secun-
potentes que se conocen y se absorbe rá-
darios del alopurinol son gastrointestina-
pidamente en el tracto gastrointestinal.
les, exantema cutáneo, toxicidad medular,
Efectos secundarios. Una de las accio-
discreto aumento de las transaminasas que
nes de la sulfinpirazona de significación
revierte en 3 a 6 meses, fiebre y un sín-
terapéutica, es la reducción de la función
drome de hipersensibilidad caracterizado
de las plaquetas.
Toxicidad. La incidencia de síntomas por una vasculitis severa con afección cu-
gastrointestinales se ve en un 10 a 15 % tánea, hepática y renal (síndrome de hi-
de los casos. persensibilidad al alopurinol). Tiene una
c. Benzobiomarona. Es un poderoso urico- mortalidad de 16 a 26 %, pero puede pre-
súrico y su dosis diaria es de 25 a 100 mg. venirse interrumpiendo la administración
Su toxicidad inicial se debía a su conteni- del medicamento.
do de yodo, el que fue sustituido por b. Tiopurinol. Reduce la concentración
bromo; está indicado en pacientes hipo- plasmática de urato y los valores de la ex-
excretores. Se recomienda que la diuresis creción del ácido úrico.
sea superior a 1 500 ml/24 h y alcalinizar c. Acifugán es la combinación de alopurinol,
la orina para favorecer la solubilidad del 100 mg + bensobromarona, 20 mg, o sea,
ácido úrico y evitar su precipitación en el la unión de un inhibidor de la xantino-
sistema excretor renal. oxidasa con un medicamento uricosúrico;
2. Medicamentos que disminuyen la síntesis de lleva al paciente a niveles normales de
ácido úrico. uricemia más rápido que los compuestos
a. Alopurinol. Viene en tabletas de 100 y administrados aisladamente.
300 mg. Se debe comenzar con 100 mg Los efectos secundarios, interacciones
diarios y aumentar la dosis cada 2 sema- y toxicidad son los de ambos compuestos
nas hasta llegar a 300 o 400 mg/día; cuan- por separado.
do el paciente tiene una gota tofácea se Cuando se usan medicamentos para re-
debe comenzar con dosis muy bajas, de ducir la uricemia se deben dar dosis pro-
25 a 50 mg y aumentarla más lentamente. filácticas de colchicina, de 0,5 a 1 mg
Los pasos finales en la síntesis del áci- diario, pues al disminuir la concentración
do úrico son la conversión de la hipoxan- de ácido úrico se puede provocar una cri-
tina en xantinas y de éstas en ácido úrico sis de artritis gotosa aguda; esto se hace
por la acción de la enzima xantino- hasta que el paciente se mantenga un año
oxidasa, que es inhibida por el alopurinol. sin crisis.

113
Si el primer ataque de gota aparece des- 3. Medicamentos que producen mayor destruc-
pués de los 65 años, no se usan fármacos ción del ácido úrico.
que disminuyan la uricemia y sólo se apli- Se ha demostrado que una infusión de
can durante las crisis agudas, por lo gene- uricasa altamente purificada causa una re-
ral poco frecuentes en estos pacientes, ya ducción transitoria del ácido úrico, pero por
que el costo-beneficio es muy poco y ade- lo común se desarrollan con rapidez anticuer-
más, pueden producir efectos secundarios. pos contra esta enzima.

114
14

ARTRITIS REACTIVAS

La relación entre diferentes microrganismos (bac- diagnostica 182 casos de síndrome de Reiter (SR)
terias, virus, hongos, etc.) y las enfermedades arti- posuretritis venérea no gonocócica, que representó
culares, puede resumirse, en términos generales, en el 0,8 % de su estudio de 22 000 pacientes afectados
cuatro posibilidades. por este tipo de enfermedad.
1. Artritis infecciosa o séptica. El microrganismo En el período comprendido entre 1962 y 1965,
causante de la enfermedad se aloja en las arti- varios autores relacionan las AReac con la infección
culaciones o en la sangre. humana por el género Chlamydia y desde 1973 se
2. Artritis aséptica por depósitos de inmunocom- estableció una estrecha relación entre algunas varian-
plejos. Se produce como parte del cuadro clí- tes de aquéllas con la presencia de un patrón genéti-
nico de una enfermedad infecciosa y en la camente determinado por el HLA-B27.
articulación sólo se detecta el antígeno corres-
pondiente al inmunocomplejo. Características comunes
3. Artritis reactivas. Son artritis asépticas deter-
1. Existe un período de latencia asintomática en-
minadas por fenómenos inmunes consecutivos
tre la infección local a distancia (amigdalitis,
a una enfermedad infecciosa previa.
uretritis, etc.) y la aparición de la artritis, cuya
4. Colagenopatías y otras enfermedades reumáti-
duración varía entre una semana y un mes.
cas. Capítulo oscuro donde se ha planteado, en
2. El germen causante de la enfermedad infeccio-
el plano teórico, la posible etiología infeccio-
sa no se aísla en el medio articular ni en la san-
sa (virus, bacterias, etc.) de enfermedades de
gre en el momento de aparición de la artritis
causa aún desconocida, como la artritis reu-
matoidea, LED, espondilitis anquilopoyética y 3. La causa directa de este tipo de artritis se des-
otras. conoce.
4. Son enfermedades autolimitadas y generalmente
El conocimiento de las artritis reactivas (AReac), cursan sin secuelas articulares (excepto el SR).
tema que nos ocupa en este capítulo, ha ganado en 5. Existe una predisposición individual o familiar
importancia en los últimos tiempos debido al sensi- para que se desarrolle este tipo de artritis. En
ble aumento de las infecciones de trasmisión sexual, los casos de Yersinia enterocolítica, salmonella
con las que algunas de ellas están íntimamente rela- y SR, se ha podido determinar la presencia del
cionadas. HLA-B27, y en la fiebre reumática, un marca-
dor genético establecido por el aloantígeno 883.
Historia 6. El tratamiento con antibióticos no ejerce nin-
Los reumatismos posdiarreicos fueron conocidos por guna influencia sobre la evolución de la ar-
Hipócrates, pero no es hasta 1501, que Pierre Van tritis.
Forest describe los reumatismos posblenorrágicos.
En plena I Guerra Mundial se produjo una epide-
Clasificación etiológica
mia de disentería seguida de conjuntivitis, uretritis I. Gérmenes gastrointestinales.
no gonocócica y artritis, descrita por un lado, por Salmonella enteriditis
Hans Reiter en 1916, y por otro lado, por Noel Salmonella tyhimurium
Fressinger y Charles Leroy. En 1918, Csonka Yersinia enterocolítica

115
Campilobacter yeyuni dos de algunos agentes patógenos y la estructura del
II. Gérmenes genitourinarios. HLA-B27. Esto podría explicar porqué sólo deter-
Chlamydia trachomatis minados tipos de agentes y no todos, producen
Ureoplasma ureolytim AReac en personas HLA-B27 positivo.
Neisseria gonorrheae El SR, cuyas principales características se verán
III. Otros gérmenes. a continuación, es uno de los ejemplos más comu-
Bacterias. Estreptococo beta hemolítico grupo A nes de AReac, y se llega incluso, en ocasiones, a
(fiebre reumática) utilizar ambos términos en forma indistinta.
Neisseria meningitidis
Brucella abortus
Brucella melitensis SÍNDROME DE REITER
Brucella suis
Micobacterium tuberculosis
Virus
Concepto
Hepatitis B El SR se define por la tríada clínica que incluye la
Rubéola presencia de artritis, conjuntivitis y uretritis (cistitis
Parotiditis en mujeres), a la que algunos autores añaden la
Varicela zóster diarrea consecutiva a una infección del tracto geni-
Mononucleosis infecciosa tourinario o digestivo. Sin embargo, la existencia de
Adenovirus numerosos casos con cuadros incompletos de la en-
Arbovirus fermedad, llevó al Colegio Americano de Reumato-
Citomegalovirus logía a establecer criterios menos rígidos que sólo
Actualmente se han planteado otros gérmenes, incluyen la artritis de más de un mes de distancia
sin que exista consenso internacional sobre ellos, con uretritis o cervicitis (o ambas), pero que no son
como son: aceptados en forma universal.
Protozoarios. Endoameba histolytica y Giardia
lamblia. Epidemiología
Helmintos. Estrongyloides stercoralis y Taenia La distribución geográfica del SR es heterogénea,
saginata. pero ha sido reportado en todo el mundo siguiendo
IV. Causa desconocida. la frecuencia del HLA-B27, que lo hace preponde-
Síndrome de Reiter. rante en los caucásicos. Es más frecuente en adultos
jóvenes con edades comprendidas entre 18 y 40 años,
Patogenia aunque también se han descrito casos en edades
Tradicionalmente se ha planteado que las AReac se pediátricas. Su relación con el sexo es controvertida
producen por reacciones inmunológicas a una infec- si se tiene en cuenta lo difícil que es precisar la exis-
ción distante de una articulación. Sin embargo, hace tencia de uretritis en las mujeres; sin embargo, su
poco se ha demostrado que antígenos microbianos relación hombre/mujer ha ido cambiando con el
persisten en el tejido articular de pacientes con ar- tiempo al grado de que, inicialmente, fue considera-
tritis poschlamydia y posyersinia. da una enfermedad exclusiva de los hombres y en la
Estos descubrimientos han llevado a plantear que actualidad se establece una correlación de 5 a 1.
ciertos agentes infecciosos pueden invadir transito- Los datos de morbilidad son inexactos, por lo ines-
riamente las articulaciones sin llegar a producir cuadro pecífico de sus criterios diagnósticos y el descono-
séptico en ellas, pero sí determinar la permanencia cimiento de su causa, pero diversos estudios plantean
allí de algunos componentes bacterianos, que actuan- que el SR se ve entre el 2 y el 3 % de los pacientes
do como antígenos podrían perpetuar el proceso in- con disentería y que puede llegar hasta el 20 % cuan-
flamatorio articular. do esté presente el HLA-B27; así como en el 3 % de
Algunas investigaciones han demostrado también los casos con uretritis no gonocócica secundaria a
áreas de analogías entre la secuencia de aminoáci- chlamydia.

116
Cuadro clínico Manifestaciones genitourinarias. Aparecen en
Forma de comienzo. La aparición de las manifesta- etapa temprana de la enfermedad. La uretritis suele
ciones clínicas de la enfermedad oscila entre 1 y 3 ser benigna, con una secreción mucoide que oca-
semanas después de presentarse la uretritis o la sionalmente es purulenta y muy rara vez teñida de
diarrea. El cuadro por lo general comienza con un sangre.
ataque artrítico febril, seguido de conjuntivitis, alte- El examen del pene muestra eritema y edema del
raciones urogenitales y diarrea. meato urinario en un 10 % de los casos. La balanitis
Manifestaciones articulares. La artritis es la ma- circinada se encuentra entre el 25 y el 50 % de los
nifestación clínica esencial del SR. En su forma más pacientes, con presencia de numerosas vesículas que
frecuente es oligoarticular, asimétrica y predomina se rompen y forman úlceras superficiales y placas
en las rodillas, tobillos y pies, aunque en algunos sobre el glande. La prostatitis acompaña casi siem-
casos adopta la forma monoarticular y en otros, cur- pre a la enfermedad. En las mujeres es frecuente el
sa como un síndrome inflamatorio francamente hallazgo de salpingitis y cervicitis. Las manifesta-
poliarticular. ciones genitourinarias del SR por lo común son tran-
Una característica típica es la artritis de las articu- sitorias, pero a veces hay complicaciones como
laciones interfalángicas, acompañada de tendinitis retracción de la vejiga, cistitis hemorrágica aguda e
y entensitis condicionantes de los llamados “dedos hidronefrosis consecutiva a estenosis uretral.
en salchichas”, observables en uno o más dedos de Manifestaciones cutáneas. La queratodermia ble-
los pies. Otros puntos de asiento de entensopatías norrágica es la más típica y consiste en una erup-
son: el tendón de Aquiles, borde anterior de la tibia,
ción papuloescamosa indolora localizada en la palma
fascia plantar y las inserciones costocondrales ante-
de las manos, planta de los pies, cráneo, tronco, escro-
riores. La alteración más frecuente de la columna
to y pene. Evolutivamente se vuelve hiperquerató-
vertebral es la lumbalgia inflamatoria, que cursa con
marcada limitación de la movilidad del tronco oca- sica y se ve en más o menos el 10 % de los casos.
sionada por espasmos musculares, entensitis y afec- En pacientes de larga evolución hay cambios
ción de las propias articulaciones intervertebrales. ungueales como onicólisis, hiperqueratosis y para-
La dorsalgia constante también se observa en un nú- queratosis subungueal. Las lesiones de la mucosa
mero importante de pacientes. La toma sacroilíaca oral son tempranas y se caracterizan por vesículas
se ve entre el 2 y el 25 % de los casos, aunque superficiales que se rompen y forman úlceras indo-
algunos autores, como Mason, la reportan hasta en loras.
un 54 %. Manifestaciones gastrointestinales. La diarrea es
La afección persistente puede llevar a deformida- una manifestación frecuente del SR. Puede ser mo-
des de los pies, metatarsofalángicas, de los talones, derada, grave o leve y ocasionalmente sanguinolen-
columna lumbar y rodillas. ta, y aunque responde a diversas posibles causas,
Manifestaciones oculares. La conjuntivitis se pre- por lo general los estudios de laboratorio y los culti-
senta en el 40 % de los pacientes con este síndrome. vos son negativos.
Tiende a ser bilateral y se acompaña de dolor, pruri- Manifestaciones cardiovasculares. Están presen-
to, fotofobia y secreción estéril; se resuelve en pocos
tes en menos del 10 % de los casos y son en lo fun-
días para reaparecer nuevamente de forma recurrente
damental trastornos del sistema específico de
y evolucionar, en ocasiones, hacia episcleritis,
conducción del corazón, que suelen ser asintomáti-
queratitis y úlceras corneales.
La uveítis anterior aguda no granulomatosa que cos. En etapas tardías aparece a veces una insufi-
acompaña al SR, se ha asociado con la positividad ciencia aórtica indistinguible de la observada en la
del HLA-B27 y se observa en un 10 % de los casos. espondilitis anquilopoyética.
La iritis se constata entre el 10 y el 20 % de los Otras manifestaciones. La fiebre se constata en
pacientes, y en un reducido número de ellos se ha el 75 % de los casos, es de intensidad y duración
reportado neuritis óptica, retinitis, edema papilar y variables y oscila entre 37,5 y 39ºC. Cuando el cua-
neuritis retrobulbar, pero la disminución permanen- dro febril se prolonga, puede acompañarse de ane-
te de la visión se ha producido en menos del 3 %. mia y pérdida de peso moderada.

117
Ocasionalmente se detectan esplenomegalia, lin- la espontáneamente, viscosidad muy disminuida y
fadenopatía y tromboflebitis de las extremidades coágulo de mucina pobre. Los leucocitos están au-
inferiores. mentados, entre 1 000 y 50 000/mm3, con predomi-
La afectación pulmonar es rara y se han descrito nio de los polimorfonucleares en la fase aguda y los
neumonitis, pleuritis o infiltrados pulmonares fu- linfocitos en pacientes crónicos. Los niveles de com-
gaces. plemento sérico son elevados, y técnicas de avanza-
Las lesiones neurológicas también son poco fre- da, como la reacción de polimerasa en cadena, han
cuentes y se limitan a polineuritis, parálisis de pares identificado partículas bacterianas.
craneales y trastornos de la esfera psíquica. Cultivos microbiológicos. La identificación de la
fuente de infección, una vez desencadenado el cua-
Anatomía patológica dro articular, es muy rara, por lo que urocultivos,
En los primeros estadios los cambios histológicos coprocultivos, hemocultivos, cultivos de las secre-
recuerdan a una infección piógena leve. La mem- ciones uretrales, prostáticas y conjuntivales, y del
brana sinovial está intensamente hiperémica y líquido sinovial, son negativos; ocasionalmente en
edematosa. La reacción inflamatoria se encuentra en el SR posdiarrea es posible detectar coprocultivos
la zona vascular superficial, donde hay un infiltrado positivos a shiguella, salmonella, etc.
celular con predominio de leucocitos neutrófilos y Es obligado en todo caso de SR realizar pruebas
linfocitos, acompañado de proliferación de células serológicas para la sífilis (VDRL) y técnicas de
del tejido conectivo. ELISA para VIH.
Las alteraciones histológicas del SR crónico son Estudios radiológicos. En los estudios realizados
indistinguibles de las de una artritis reumatoidea. en estadios precoces no se encuentran signos radio-
lógicos de importancia, pero en etapas tardías apa-
Exámenes complementarios recen erosiones pararticulares, que suelen ser graves
Las alteraciones que muestra el laboratorio son las y mutilantes en las metatarsofalángicas y adoptan
propias de una enfermedad inflamatoria serone- un aspecto llamado por Rotés Querol “en sierra”.
gativa. Las erosiones y periostitis afectan también la tube-
Hemograma. Hay una discreta anemia de tipo hi- rosidad isquiática, trocánteres, tendón de Aquiles y
pocrómica. El recuento leucocitario se eleva entre fascia plantar. Es frecuente la osteoporosis yuxtarti-
. .
18 000 y 32 000/mm3 (18 109 y 32 109/L) con cular en casos avanzados.
predominio de polimorfonucleares, aunque en algu- La toma de las articulaciones sacroilíacas se ob-
nos casos se mantiene dentro de límites normales. serva en un 20 % de los casos y llega hasta un 60 %
Eritrosedimentación. Por lo general está muy ace- en algunos casos tardíos. Se altera fundamentalmente
lerada y a veces llega hasta 140 mm/h durante el el tercio inferior de la articulación (porción sino-
ataque agudo; luego disminuye lentamente a medi- vial) y por lo general es unilateral o asimétrica. Los
da que se reduce la actividad de la enfermedad. cambios radiológicos evolucionan hacia la esclero-
Proteína C reactiva. Es positiva. sis y la anquilosis.
Electroforesis de proteínas. Hay una elevación de En la columna vertebral se observan sindesmófitos
las alfa-2 globulinas con una discreta disminución de disposición asimétrica.
de la albúmina. Como se ha podido ver, el SR es un cuadro
Factor reumatoideo. Es negativo (seronegativo). reactivo de características clínicas bien definidas,
Ácido úrico en sangre. Está dentro de límites nor- donde concomitan con igual importancia diagnósti-
males. ca las alteraciones articulares y extrarticulares, y que
Célula LE. Es negativa. puede ser causado por cualquiera de los gérmenes
Anticuerpos antinucleares. Son negativos. antes mencionados relacionados con las AReac o
HLA-B27. Es positivo entre 75 a 83 % de los mantener una etiología incierta. En el resto de los
casos. casos que se verán a continuación, se demostrará la
Estudio del líquido sinovial. Las características presencia de alguno de estos gérmenes seguida de
del líquido articular son compatibles con un exuda- un cuadro reactivo donde predominarán francamen-
do inflamatorio inespecífico: aspecto turbio, coagu- te las manifestaciones articulares.

118
dro reumático. La artritis es tanto monoarticular
OTRAS ARTRITIS como poliarticular, y afecta principalmente las gran-
REACTIVAS des articulaciones de los miembros inferiores.
Desde el punto de vista de los exámenes de labo-
ratorio, el hemograma y la eritrosedimentación
muestran alteraciones similares a las de la yersinia,
Artritis reactivas de origen al igual que el líquido articular, que es aséptico y de
características inflamatorias. El diagnóstico etioló-
gastrointestinal gico se realiza con el coprocultivo y las pruebas de
Yersinia enterocolítica. Es un bacilo gramnegativo seroaglutinación típicas. Los pacientes presentan
cuya vía de trasmisión al humano es la oral. Su rela- HLA-B27 positivo o uno de los antígenos de reacción
ción con cuadros de AReac parece haber quedado cruzada, como HLA-B60, en 14 de cada 15 casos.
demostrada por el hallazgo de la bacteria en el ma- La radiología es negativa.
terial de biopsia intestinal de pacientes con espondi- El cuadro cede espontáneamente en pocos días o
loartropatías seronegativas al someterse a estudios semanas sin dejar invalidez permanente.
con inmunofluorescencia indirecta. También se han Shigella. Entre 0,2 a 2 % de los individuos afec-
encontrado partículas parecidas a la estructura de la tados por shiguellas desarrollarán una AReac, pero
yersinia en la membrana sinovial de estos enfermos. sólo Shigella flexneri tiene la capacidad de producir
El cuadro agudo abdominal suele comenzar con esta complicación.
fiebre de características no bien definidas, dolor en Las características clínicas del cuadro abdominal
el vientre y diarreas de intensidad variable que por y reumático son muy similares a los descritos para
lo general duran de una a dos semanas. Le sigue un los gérmenes anteriores y es típico que la enferme-
período asintomático de una a tres semanas hasta la dad diarreica desaparezca completamente antes del
aparición del cuadro reumático. inicio de los síntomas articulares.
La artritis es de inicio súbito y aunque toma cual-
quier articulación, las más afectadas son los tobillos
y las rodillas. Es frecuente la aparición de lumbalgias
Artritis reactivas
y tendinitis aquiliana. El eritema nudoso se ve en
el 10 % de los casos.
trasmitidas sexualmente
En los estudios de laboratorio se detecta una leu- Se acepta que en las SARA (del inglés Sexually
cocitosis ligera y una eritrosedimentación acelera- acquired reactive arthritis) el agente disparador de
da. En el coprocultivo se aísla Yersinia enterocolítica la enfermedad puede imbricar a más de un micror-
durante la fase abdominal y las pruebas de seroa- ganismo, y cualquiera de ellos será considerado
glutinación son positivas. El líquido articular es de como el agente etiológico. Los factores ambientales
carácter inflamatorio y estéril. La radiografía no y genéticos que favorecen esta infección son com-
aporta datos de interés. plejos, pero se conoce que el HLA-B27 incrementa
La artritis cede espontáneamente en unos 4 me- hasta en 50 veces más el riesgo de padecerla.
ses como máximo en la mayoría de los enfermos, Chlamydia. Muchos patógenos se han implicado
sin dejar secuelas importantes. como causantes de SARA, pero entre ellos Chla-
Salmonella. De todas las salmonellas capaces de mydia trachomatis ha sido el mejor estudiado. En la
afectar al hombre, sólo Salmonella typhimurium y artritis poschlamydia se constata un tiempo prome-
Salmonella enteriditis conducen a una AReac. Esta dio de 12 días entre el contacto sexual y la aparición
complicación se reporta en el 0,3 % de los pacientes de la uretritis, y de 28 días entre el contacto y el
afectados por salmonelosis. comienzo de la artritis; es raro que éste exceda los
El cuadro comienza, al igual que en la infección 70 días.
por yersinia, por un ataque agudo de diarrea, dolor Esta bacteria es la responsable de aproximada-
abdominal y fiebre seguido de un período de latencia mente el 50 % de los casos de uretritis no gonocóci-
que puede ser más largo, y que se extiende desde ca y es causa también de otras enfermedades del
6 días hasta 3 meses, luego del cual aparece el cua- aparato urogenital, como epididimitis, cervicitis,

119
salpingitis y otras. Ella se ha reportado en la mem- previsible. Algunos casos se conducen como las de-
brana sinovial de estos pacientes, pero la sinovitis más AReac y casi siempre evolucionan hacia la cu-
continúa en ausencia de microrganismos, lo que con- ración, mientras que entre 20 y 50 % mantienen un
firma una vez más el carácter inmunológico de esta curso prolongado, con artritis persistente y secuelas
enfermedad; esto se refuerza por la demostración de articulares.
anticuerpos anti-chlamydia y de un incremento en Los ataques recurrentes son comunes, aunque la
la reactividad celular contra elementos de este ger- reinfección no siempre precipita la artritis. La muerte
men por pruebas de transformación linfocitaria rea- sólo es atribuible a complicaciones cardíacas y ami-
lizadas en dichos enfermos. loidosis.
El cuadro de la enfermedad reumática es similar Mención aparte merece el SR asociado al SIDA,
al descrito para otras AReac, aunque cursa con ma- donde el pronóstico es muy desfavorable y las com-
yor agresividad en los pacientes HLA-B27 posi- plicaciones frecuentes.
tivos.
Neisseria gonorrheae. Es otro germen productor Tratamiento
frecuente de infecciones genitales y se reporta en un Tratamiento preventivo
10 % de los pacientes con AReac trasmitidas sexual- Aunque se desconocen muchos de los aspectos que
mente. relacionan las infecciones digestivas y genitourina-
El cuadro clínico es idéntico al de las infecciones rias con los cuadros subsiguientes de AReac, no se
no gonocócicas, a excepción de que los síntomas en puede desestimar el impacto lógico que ocasiona
la mayoría de los casos son más precoces. Algunas sobre la incidencia de estas enfermedades el efecti-
teorías plantean que cuando la artritis aséptica se pro- vo tratamiento de las infecciones primarias, y mejor
duce en relación con la blenorragia, un agente in- aún, la profilaxis de éstas mediante la aplicación de
feccioso no gonocócico asociado actuó como “agente las medidas higiénico-epidemiológicas indicadas y
disparador”, pues no está claro si el gonococo es a través de una adecuada educación sanitaria, diri-
capaz, por sí mismo, de causar AReac. gida fundamentalmente a los grupos de riesgo.
Artritis reactivas vinculadas al VIH. En 1987,
Winchester y colaboradores reportaron 5 casos de Tratamiento de la enfermedad
VIH positivos y AReac; a partir de ese momento se 1. Antinflamatorios no esteroides (AINE). Se po-
ha hecho evidente la aparición de artritis en estos drá utilizar cualquiera de los AINE disponibles
enfermos, que puede llegar hasta un 10 % por sólo 1 % en la actualidad en las dosis indicadas, en es-
en la población general. El cuadro clínico suele ser pecial la indometacina, 75 a 250 mg diarios,
más agresivo y duradero, con artritis severa, fascitis, con la que se han obtenido buenos resultados
entensopatías y manifestaciones extrarticulares a sobre la artritis.
menudo. 2. Corticosteroides. Están indicados los esteroides
La frecuencia del HLA-B27 positivo en los en- locales mediante infiltraciones intrarticulares
fermos VIH positivos afectos de AReac, fluctúa en- y periarticulares en regiones con inflamación
tre 50 y 75 %, y en las poblaciones africanas, donde persistente. Su uso sistémico se reservará para
se ha detectado un importante número de casos con los casos crónicos o recidivantes, en los que se
HLA-B27 negativo, se ha demostrado la asociación utiliza la prednisona por vía oral, en dosis de
con el HLA-B7 CREG. 20 a 40 mg diarios.
El pronóstico es reservado, las complicaciones son 3. Antibioticoterapia. La terapéutica con antibió-
comunes y la respuesta terapéutica es desfavorable. ticos en las AReac es sumamente controverti-
da. Su indicación no se discute en los casos en
Evolución y pronóstico que los cultivos arrojan resultados positivos,
En sentido general el pronóstico de las AReac es pues entonces se debe realizar un ciclo com-
bueno, pues se comportan de forma autolimitada, lo pleto de tratamiento con el antibiótico indicado.
que implica una evolución hacia la curación en un Algunos autores plantean haber obtenido
período de tiempo que habitualmente no es mayor logros con la utilización de tetraciclinas como
de 3 meses. Por su parte, la evolución del SR es im- doxiciclina, minociclina y especialmente,

120
limeciclina, en pacientes con AReac poschla- aunque hay menos experiencia con este medi-
mydia, y reportan una mejor evolución de la camento.
artritis. Por otra parte, también se ha reco- 5. AReac y SIDA. En los pacientes donde conco-
mendado el uso de la sulfasalacina en dosis de mitan la AReac y el SIDA, la respuesta a los
1 a 2 g diarios desde etapas tempranas de la AINE y esteroides es desfavorable, y por otra
enfermedad, sobre todo en las AReac pos- parte, los inmunosupresores mencionados an-
diarrea o donde se demuestren signos de infla- tes producen un empeoramiento notable del
mación intestinal. SIDA. Como alternativa se ha utilizado la ci-
4. Inmunosupresores. Tienen indicación en el SR closporina en dosis de 200 mg diarios y la
crónico o agresivo. El más utilizado es el me- bromocriptina en dosis de 7,5 a 15 mg diarios,
totrexate, que produce con frecuencia remisio- pero sin resultados espectaculares.
nes completas. Las dosis indicadas oscilan entre
5 a 15 mg por vía oral, una vez a la semana, en Rehabilitación
ciclos terapéuticos de 3 a 6 meses de duración, Está indicada en casos prolongados y se utiliza el
aunque en ocasiones es preciso recurrir a do- calor sobre las regiones afectadas combinado con
sis elevadas de 25 a 50 mg semanales. Alterna- gimnasia apropiada, para conservar una adecuada
tivamente también se ha utilizado la azatioprina, movilidad articular.

121
15

ASPECTOS GENERALES
DE LAS COLAGENOSIS

La denominación de colagenosis o enfermedades del 1. Lupus eritematoso discoide.


colágeno cada día es menos usada en los libros y 2. Lupus eritematoso diseminado.
revistas de Medicina Interna, Reumatología, Inmu- 3. Lupus eritematoso inducido por drogas.
nología, etc. El término que la ha sustituido es el de D. Esclerodermia.
conectivopatía o enfermedades del tejido conecti- 1. Localizada.
vo, que también tiene sus inconvenientes, pues de- a) Morfea.
ben ser incluidas enfermedades congénitas del tejido b) Lineal.
conjuntivo que poco o nada tienen que ver con las 2. Sistémica.
características clínicas, genéticas, inmunológicas, a) Esclerodermia difusa.
bioquímicas y otras, de las enfermedades que un b) Síndrome CREST (sigla de calcinosis,
clínico evoca cuando habla de colagenosis. Raynaud, discinesia esofágica, esclerodac-
La demostración por Hargraves de las células LE tilia y telangiectasia).
constituyó la primera aportación sobre la naturale- 3. Esclerodermia inducida por drogas o agen-
za autoinmune de estos procesos. En la actualidad tes químicos.
el estudio de las conectivopatías supone un impor- E. Fascitis difusa con o sin eosinofilia.
tante avance en la consideración biológica de la clí- F. Polimiositis.
nica, pues la respuesta autoinmune conforma 1. Polimiositis (propiamente dicha).
diferentes patrones de expresión. 2. Dermatomiositis.
3. Polimiositis o dermatomiositis asociada con
Clasificación malignidad (neoplasia).
4. Polimiositis o dermatomiositis asociada con
A continuación se expone una clasificación de las
vasculitis.
conectivopatías recomendada en 1983, y que con
G. Vasculitis necrosante y otras formas de vascu-
muy ligeras variaciones, conserva su valor concep- lopatía.
tual y práctico. 1. Poliartritis nudosa.
A. Artritis reumatoidea. a) Asociada al virus de la hepatitis B.
1. IgM factor reumatoideo positivo. b) No asociada al virus de la hepatitis B.
2. IgM factor reumatoideo negativo. 2. Granulomatosis alérgica (Churg-Strauss, po-
B. Artritis reumatoidea juvenil. liarteritis nudosa con afección pulmonar).
1. Sistémica. 3. Angeítis por hipersensibilidad.
2. Poliarticular. a) Enfermedad del suero.
a) IgM factor reumatoideo positivo. b) Púrpura de Schönlein-Henoch.
b) IgM factor reumatoideo negativo. c) Crioglobulinemia mixta.
3. Oligoarticular. d) Asociada a neoplasias malignas.
a) Asociada a uveítis crónica y anticuerpos e) Vasculitis hipocomplementémicas.
antinucleares. 4. Artritis granulomatosa.
b) Asociada con HLA-B27. a) Granulomatosis de Wegener.
c) IgM factor reumatoideo positivo. b) Arteritis temporal con o sin polimialgia
C. Lupus eritematoso. reumática.

122
c) Arteritis de Takayasu. medades del estómago, el corazón, los riñones, etc.,
5. Enfermedad de Kawasaki (síndrome adeno- se comenzó a pensar en la posibilidad de que un te-
pático mucocutáneo) incluyendo la poliar- jido enfermara y que sus manifestaciones clínicas
tritis infantil. desbordaran los límites de un órgano para expresar-
6. Enfermedad de Behçet. se en todos los órganos con el tejido enfermo en cues-
7. Síndrome de Sjögren. tión.
a) Primario. Las concepciones de Bichat demoraron en acep-
b) Secundario: asociado a otras conectivo- tarse y generalizarse.
patías. A comienzos del siglo XX dio un gran impulso a
H. Síndromes de superposición. sus ideas la descripción del granuloma de Aschoff
1. Enfermedad mixta del tejido conectivo. en la fiebre reumática, considerado como patogno-
2. Otros. mónico de ésta. Llamó poderosamente la atención
I. Diversas. de los investigadores la sustancia amorfa y anhista
1. Polimialgia reumática. del centro del granuloma, que por poseer caracterís-
2. Paniculitis recidivante (enfermedad de ticas quimicotintoriales parecidas a la fibrina, fue
Weber-Christian). denominada fibrinoide por Klinge (1935). Este au-
3. Policondritis recidivante. tor demostró la existencia de esta sustancia en el
4. Granulomatosis linfomatoide. nódulo subcutáneo de la artritis reumatoidea, en los
5. Eritema nudoso. capilares de la enfermedad del suero y en otros pro-
cesos. En 1942, Klemperer, Pollack y Baehr, sobre
Dentro de esta clasificación están incluidas las la base de determinados caracteres histopatológicos
entidades que desde 1942 constituyen el capítulo de comunes encontrados en diversas enfermedades has-
las colagenosis, con la excepción de la fiebre reu- ta entonces conceptuadas como independientes, plan-
mática y la púrpura trombocitopénica trombótica; tearon considerarlas dentro de un mismo grupo. Los
esta última, junto a la enfermedad mixta del tejido hallazgos histopatológicos se encontraban en el te-
conectivo, nueva entidad descrita en 1972, constitu- jido conectivo y tenían, como elemento fundamen-
yen objeto de estudio en este capítulo. tal, la degeneración o necrosis fibrinoide descrita por
En conclusión, dentro de las colagenosis se estu- Klinge. Se pensó que ésta dependía de las fibras
dian diversas entidades nosológicas, de las cuales colágenas y así surgió la denominación de enferme-
unas son muy comunes y otras no. Entre las prime- dades del colágeno o colagenosis. Este término, por
ras se señalan la fiebre reumática y la artritis reuma- ser más restringido, resulta más preciso que el de
toidea (explicadas en las secciones de enfermedades conectivopatías, donde habría que incluir enferme-
cardiovasculares y de las enfermedades articulares, dades hereditarias de este tejido, como la de Marfán,
respectivamente). Entre las menos comunes se in- Ehler-Danlos, la osteogénesis imperfecta, el seu-
cluyen el lupus eritematoso diseminado, escleroder- doxantoma elástico y el gargoilismo, u otras locali-
mia, dermatomiositis, poliarteritis nudosa, púrpura zadas como el queloide y ciertas fibrositis.
trombocitopénica trombótica y enfermedad mixta del
tejido conectivo. Tejido conectivo
Es conocida la importancia del tejido conectivo El tejido conectivo está formado por combinacio-
como sostén, armazón y soporte de la estructura pa- nes diversas de colágena, elastina, proteoglicanos y
renquimatosa de todos los órganos de la economía, otras glicoproteínas. Las proporciones y la distribu-
así como que las arterias, los capilares, las venas y ción peculiar de estos componentes confieren a los
los linfáticos transitan por todo el cuerpo inmersos diferentes órganos sus cualidades particulares. La
en este tejido. colágena es sintetizada por todas las células mesen-
En el siglo XIX, el clínico francés Bichat enunció quimatosas y por cierto tipo de célula epitelial. Al
la teoría de las enfermedades de tejido, como con- ser liberadas de la célula, las moléculas se reúnen
cepto complementario al de las enfermedades de para formar fibrillas que adoptan una compleja dis-
órganos, hasta ese momento las únicas afecciones posición helicoidal triple. Es la proteína más abun-
consideradas en la medicina. Así, junto a las enfer- dante del organismo, y la eliminación urinaria de la

123
hidroxiprolina sirve como índice aproximado del casa en fibrina en las colagenosis que en las enfer-
recambio de colágena. medades no colágenas.
De las variedades genéticas de la colágena, la tipo I En los vasos es característico un proceso de vascu-
se encuentra sólo en el hueso, la dentina y los tendo- litis, variable en su composición celular, vasos afec-
nes, y mezclada con otros tipos en muchos otros te- tados y estadio lesional presente según la entidad
jidos; la colágena tipo II predomina en el cartílago nosológica de que se trate y que será estudiado en el
articular; la de tipo III, en la piel y vasos sanguí- capítulo correspondiente.
neos; y la tipo IV, en las membranas basales. La co- Las técnicas de inmunofluorescencia permiten
lágena es degradada por colagenasas, que existen detectar sustancias determinadas en los tejidos o en
en tejidos mesenquimatosos, ciertos epitelios y leu- las células y dadas las alteraciones de la inmunidad
cocitos polimorfonucleares. humoral en las colagenosis, también anticuerpos
Los proteoglicanos desempeñan en el tejido co- circulantes y depósitos de inmunoglobulinas y de
nectivo un papel similar al del cemento en el con- diferentes factores del complemento.
creto. Son sintetizados por tejidos mesenquimatosos El hallazgo más típico es la banda lúpica, que se
en un complicado proceso en el cual intervienen la caracteriza por la presencia de una gruesa banda
reunión de polisacáridos, la sulfatación y el enlace inmunofluorescente en la cámara dérmica del límite
covalente con el núcleo de proteína. Son degrada- dermo-epidérmico. Los depósitos suelen ser inmu-
dos por hidrolasas ácidas de los lisosomas, como las noglobulinas, especialmente IgG o IgM y algunos
catepsinas C y B. Es muy acentuada la destrucción factores del complemento (C1, C3 y C4), muy su-
de proteoglicanos por la reacción inflamatoria en el gestivos, pero no patognomónicos (ver “Lupus eri-
tejido conectivo. tematoso diseminado”).
En el tejido conectivo hay células propias y otras En la enfermedad mixta del tejido conectivo, la
derivadas de la sangre: banda inmunofluorescente es típica, constituida por
1. Fibroblastos (forman fibras y sustancia funda- IgM y raramente IgG y C3.
mental). El resto de las enfermedades del colágeno no pre-
2. Histiocitos. sentan banda inmunofluorescente de valor diagnós-
3. Células reticulares indiferenciadas. tico. Los elementos lesionales (del tejido conjuntivo
4. Células plasmáticas. intersticial, vasos y fibras musculares) se disponen
5. Linfocitos. de distinta manera en cada una de las afecciones del
6. Macrófagos. grupo y su descripción se hará en el estudio particu-
7. Mastocitos. lar de cada una de ellas.
Anatomía patológica Diagnóstico
La degeneración o necrosis fibrinoide constituye un Diagnóstico positivo
rasgo histopatológico observado en varias colage- De causa desconocida hasta el presente (excepto la
nosis. La hematoxilina-eosina tiñe la sustancia fi- fiebre reumática), las enfermedades del colágeno tie-
brinoide de color rosa pálido, el PAS la colorea de nen una serie de rasgos clínicos comunes. Nos refe-
rojo púrpura y el Mallory, de rojo violeta. Se en- rimos a su condición de sistémicas, cronicidad
cuentra de forma difusa en los vasos, un infiltrado evolutiva con episodios de actividad o agudización
celular de linfocitos, macrófagos, células plasmáti- y manifestaciones clínicas variadas, como:
cas, neutrófilos y eosinófilos alrededor de la sustan-
cia fibrinoide. Esta última está constituida sobre todo Fiebre de origen indeterminado ...... ARJ*, LED,
por fibrina y probablemente tiene una respuesta no PN, ARJ
específica del tejido conectivo a la agresión. No es del adulto
específica o patognomónica, ya que se observa en Eritema, nódulos, urticaria, púrpura..LED, DM,
otras enfermedades (enfermedad del suero, púrpura ARJ
de Schönlein-Henoch, hipertensión arterial malig- Úlceras mucosas ............................. LED
na, etc.). Algunos investigadores refieren que esta Síndrome de Raynaud ..................... ES, LED,
sustancia es más rica en inmunoglobulina y más es- EMTC, DM

124
Iritis, uveítis, episcleritis, queratitis..ARJ, AR, ma resumen de los más relevantes, a reserva de su
PN explicación en el estudio de cada una de estas enfer-
Serositis ......................................... LED, AR, medades. Es bueno aclarar que de los antígenos nu-
ES, EMTC cleares, existen varios que pueden extraerse del
Fibrosis pulmonar .......................... ES, AR, DM núcleo utilizando una solución salina fisiológica; a
Disfagia ......................................... ES, DM, ellos se les denomina antígenos nucleares extracta-
EMTC bles, cuya sigla en inglés es ENA.
Nefropatía ..................................... LED, PN, En el cuadro 15.1 se presenta la frecuencia en por-
ES, EMTC centaje de estos autoanticuerpos en algunas colage-
Convulsiones ................................. LED, PN nosis.
Polineuritis .................................... PN, LED, Un aspecto que se debe tener en cuenta en la va-
DM loración diagnóstica, es la frecuencia con que las
Hipertensión maligna ..................... PN, ES, distintas colagenosis tienen síntomas y síndromes
LED clínicos y de laboratorio considerados como típicos
*
ARJ: Artritis reumatoidea juvenil. de una de ellas, pero que también aparecen en otras.
LED: Lupus eritematoso diseminado.
En ocasiones es tal la diversidad de manifesta-
PN: Poliartritis nudosa.
DM: Dermatomiositis. ciones en un enfermo, que no es posible identificar
ES: Esclerodermia. la entidad nosológica presente; se recurre entonces
EMTC: Enfermedad mixta del tejido conectivo. a los términos de conectivopatía fronteriza, síndro-
AR: Artritis reumatoidea
me de superposición, o simplemente colagenosis,
Además de lo expresado, las entidades señaladas práctica que debe evitarse al máximo, pues entre
pueden tener, en algún momento de su evolución: otros inconvenientes, es capaz de conducir al escaso
interés y poco esfuerzo médico por el diagnóstico.
• Autoanticuerpos. No debe olvidarse que un paciente con alguna de
• Reacción serológica de la sífilis falsa positiva. las enfermedades del colágeno puede tener síntomas
• Esplenomegalia y adenopatías. que muchas veces corresponderán a una fase de ac-
• Anemia hemolítica y púrpura trombocitopénica. tividad de la afección que padece, pero en otras po-
• Síndrome de Sjögren. drían ser expresión de una intoxicación o reacción
• Meningitis aséptica. medicamentosa, una infección intercurrente (siem-
• Intolerancia medicamentosa. pre peligrosa en estos casos), una dolencia no rela-
• Síndrome tóxico-constitucional. cionada con la enfermedad de base (tumor cerebral,
• Fotosensibilidad. por ejemplo, que provoca convulsiones en un paciente
• Neumonitis e infiltrados pulmonares. con lupus eritematoso diseminado, o un derrame
pleural tuberculoso), o la toma inmunopatológica de
Es muy importante para el diagnóstico de cada un órgano no afectado (por ejemplo, el desarrollo
entidad el estudio de los anticuerpos antinucleares, de una tiroiditis de Hashimoto que complica a una
por lo que al final de la página se expone un esque- esclerodermia o lupus eritematoso).

AAN*

ADNn Histona Sm RPNn SS-B/LA SS-A/RO Scl-70

LED LIF LED EMTC Sjörgren (LED) ES


*
AAN: Anticuerpos antinucleares. LIF: Lupus inducido por fármacos.
ADNn: Ácido desoxirribonucleico nativo ( doble cadena). EMTC: Enfermedad mixta del tejido conectivo.
RPNn: Ribonucleoproteína nuclear. ES: Esclerosis sistémica.
LED: Lupus eritematoso diseminado.

125
CUADRO 15.1
FRECUENCIA (%) DE AUTOANTICUERPOS EN LAS COLAGENOSIS

ANA Anti FR* Anti Anti SS-A Anti SS-B Anti Anticen- Anti ANCA* Anti
ADNn Sm Ro La Scl-70 trómero Jo-1 RNPn

Artritis 30 - 60 0 - 5 72 - 85 0 0-5 0-2 0 0 0 0 -


reumatoidea
LED 95 - 100 60 20 10 - 30 15 - 20 5 - 20 0 0 0 0 -1 -
Sjögren 95 0 70 0 60 - 70 60 - 70 0 0 0 0 -
Escleroder- 80 - 95 0 25 - 33 0 0 0 33 1 0 0 -
mia sistémica
CREST 80 - 95 0 25 - 33 0 0 0 20 50 0 0 -
Polimiositis 80 - 95 0 33 0 0 0 10 0 20 - 30 0 -
Granulomato- 0 - 15 0 50 0 0 0 0 0 0 93 - 96 -
sis de Wegener

EMTC 95 0 50 20 - 25 0 0 0 0 0 0 95

FR: Factor reumatoideo. ANCA: Anticuerpo anticitoplasma de los neutrófilos.

Diagnóstico diferencial 8. Endocarditis abacteriana.


El diagnóstico de enfermedad del colágeno o cola- 9. Intoxicación o reacción medicamentosa.
genosis debe hacerse después de un exhaustivo y 10. Hepatitis crónica activa y otras hepatopatías
detallado análisis de todos los datos clínicos y de crónicas.
laboratorio, radiología, histopatología, etc., que pue- 11. Nefropatías agudas y crónicas.
dan obtenerse, pues no son las únicas enfermedades
con manifestaciones sistémicas que se presentan en Pronóstico
la práctica médica. Así , hay que establecer el diag- Una identificación más temprana y la concepción
nóstico diferencial con: patogénica actual han permitido un diagnóstico pre-
coz de estas enfermedades, que unido a las nuevas
1. Infección local o generalizada (septicemia por drogas y métodos terapéuticos, han mejorado la su-
gérmenes piógenos inespecíficos). pervivencia y la calidad de vida al lograr una más
2. Infección local o generalizada por gérmenes rápida y completa remisión de los períodos de agu-
específicos: dización.
a) Tuberculosis. En términos generales, el pronóstico vital está
b) Sífilis. condicionado por las siguientes situaciones:
c) Brucelosis.
d) Enfermedad de Hansen. • Infecciones sobreañadidas.
e) Mononucleosis infecciosa. • Glomerulopatía e insuficiencia renal.
3. Amiloidosis y otras discrasias de células plas- • Vasculitis cerebral.
máticas. • Hipertensión arterial maligna.
4. Linfoma. • Neumopatía aguda.
5. Leucemias agudas. • Miocardiopatía con o sin insuficiencia cardíaca.
6. Síndromes paraneoplásicos no metastásicos. • Abdomen agudo.
7. Sarcoidosis. • Episodio de agudización incontrolable.

126
16

LUPUS ERITEMATOSO DISEMINADO

Concepto cuerpos característicos: el C4AQO, un alelo defec-


tuoso del CMH clase III falla en la codificación de
El lupus eritematoso diseminado (LED) es una en-
la proteína C4A, que es el marcador genético más
fermedad que produce manifestaciones clínicas
común asociado al LED en numerosos grupos
variadas, con extensas alteraciones cutáneas y
étnicos; esto se ha encontrado en el 40 a 50 % de los
viscerales ocasionadas por lesiones del tejido co-
pacientes en comparación con el 15 % de los contro-
nectivo en el sistema vascular, la dermis, superfi-
les sanos. Algunos genes no pertenecientes al HLA
cies serosas, riñones y articulaciones.
también confieren susceptibilidad.
Factores genéticos, inmunológicos, ambientales
Los anticuerpos presentes, los niveles séricos ba-
y endocrinos provocan una regulación deficiente del
jos del complemento, la demostración de complejos
sistema inmunocompetente, con producción de au-
inmunes y de complemento depositado en los teji-
toanticuerpos y formación de complejos inmunes.
dos, etc., son pruebas convincentes del papel de los
Su curso clínico se caracteriza por exacerbaciones
fenómenos autoagresivos. La respuesta inmune anor-
agudas y remisiones, a veces prolongadas. El pro-
mal se debe a hiperactividad antigénica específica
nóstico es fatal a pesar de los adelantos en el cono-
de linfocitos T y B, con regulación inadecuada, que
cimiento de su patogenia y de su tratamiento con provoca una producción sostenida de autoanticuer-
corticosteroides e inmunodepresores. pos y complejos inmunes. Las células CD4+CD8¯,
CD4¯CD8+ y CD4¯CD8¯ cooperan con la producción
Etiopatogenia
de los autoanticuerpos por defectos en la tolerancia,
Algunas personas están genéticamente predispues- apoptosis, red de idiotipos, aclaramiento de los com-
tas a padecer LED. Los genes son múltiples y cuan- plejos inmunes, generación de las células regulares
do el portador se expone a factores ambientales y la producción de autoanticuerpos que afectan la
lesivos, se desarrollan diversos cuadros clínicos que cantidad y la función de las células vivas.
cumplen los criterios diagnósticos del LED. Todo Uno de los anticuerpos, una gammaglobulina 7S
este proceso se ve muy influenciado por el sexo fe- (IgG), es el factor LE, anticuerpo antinucleoproteína
menino. La causa o factor desencadenante de la en- termolábil. Además del lupus, aparece en otras en-
fermedad es variable y probablemente difiere según fermedades con alteración del mecanismo inmuni-
el enfermo. Es más frecuente entre los 18 y 50 años tario. Este factor ataca el núcleo de las células
en casi el 90 % de los casos. susceptibles y desaloja la histona de la nucleoproteína
Existe un factor hereditario en esta afección que se celular; el núcleo es así expulsado de la célula y
reduce por la incidencia elevada de la enfermedad fagocitado por un leucocito polimorfonuclear (célu-
en gemelos idénticos (24 a 58 %) en oposición a las LE). Es decir, que la célula LE no es más que un
gemelos dicigóticos (0 a 6 %). Se han reportado en- leucocito polimorfonuclear con la inclusión en su
fermos de lupus u otras colagenosis en varios miem- citoplasma de una masa homogénea y esférica (res-
bros de una familia (10 a 15 %), y la presencia de to nuclear), que en la tinción con hematoxilina-eosina
anormalidades subclínicas (serológicas) en fami- toma un color rojo púrpura, y rechaza el núcleo del
liares de enfermos. Los genes del complejo mayor leucocito, el cual aparece adosado a la membrana
de histocompatibilidad (CMH) de clase II y III, se celular. Los anticuerpos antinucleares pueden poner-
han correlacionado con la enfermedad y con anti- se en evidencia por medio de métodos de tinción

127
inmunofluorescente. De esta manera se han detecta- arteriolas, los capilares y las vénulas (vascu-
do diferentes formas de distribución de la fluores- litis).
cencia dentro del núcleo celular; así, unas veces la La lesión cutánea del lupus consiste en una
distribución es homogénea, mientras que en otras degeneración de la capa basal de la epidermis,
está localizada en la periferia del núcleo. Se puede ruptura de la unión dermoepidérmica e infil-
observar la fluorescencia limitada al nucléolo; en tración de células mononucleares alrededor de
ocasiones toma un aspecto moteado. los vasos y anexos cutáneos en la dermis supe-
Aunque algunos investigadores atribuyen a de- rior. Se observan depósitos de Ig y complemen-
terminado patrón nuclear valor diagnóstico en rela- to en la unión dermoepidérmica en 80 a 100 %
ción con determinada enfermedad, e incluso basan de la piel lesionada, y en 50 % de la no lesio-
su apreciación de la actividad del proceso en este nada.
dato, todavía las opiniones son contradictorias. No
obstante, la mayoría de los autores acepta que la for- Cuadro clínico
ma difusa y la periférica representan la actividad del Síntomas generales. Es frecuente la fiebre, a veces
anticuerpo anti-ADN nativo y, por tanto, son muy como única manifestación durante un período pro-
característicos del lupus; la forma moteada se ob- longado de tiempo, lo que plantea el diagnóstico di-
serva en la enfermedad mixta del tejido conectivo, ferencial de un síndrome febril; cuando la fiebre se
el síndrome de Sjögren, la esclerodermia y algunos acompaña de escalofríos debe pensarse en una com-
procesos agudos; finalmente, la forma nucleolar se plicación infecciosa. Otros síntomas generales son
presenta en la esclerodermia y en el síndrome de astenia, anorexia y pérdida de peso.
Sjögren. Lesiones cutáneas y mucosas. De las lesiones cu-
Los anticuerpos antinucleares considerados espe- táneas es muy característico, aunque no constante
cíficos del LED son el anti-ADN nativo (ácido ni patognomónico, el eritema en “alas de maripo-
desoxirribonucleico de doble cordón), el anti-NPS sa”, lesión maculopapulosa típica, de bordes bien
(desoxirribonucleoproteína soluble) y el anti-SM delimitados, que asienta en las mejillas y se extien-
(antígeno nuclear soluble de naturaleza glucoproteíca de al dorso de la nariz (Fig.16.1).
extraído de células tímicas).

Anatomía patológica
En términos generales, las lesiones anatómicas se
circunscriben a un cambio focal del colágeno en el
tejido conectivo del corazón, glomérulo e intersti-
cio renal, piel, bazo, ganglios linfáticos, serosas
(pleura, pericardio, membrana sinovial), etc., y
adoptan las formas de presentación siguientes:

1. Cuerpos hematoxilínicos. Son formaciones ova-


les o redondeadas, de 4 a 10 mµ, teñidas de
rojo por la hematoxilina, que se originan por la
alteración de los núcleos de las células mesen-
quimatosas. Se hallan principalmente en los
ganglios linfáticos, el subendocardio y el riñón.
2. Degeneración fibrinoide (Klinge) o colageno-
sis (Klemperer). Es un material transparente o
hialino, eosinófilo o rosa pálido en los cortes
teñidos por hematoxilina-eosina, y rojo púrpu-
ra intenso en los preparados por el ácido
peryódico de Schiff; se adosa a la membrana Fig. 16.1. Lesiones en “alas de mariposa” características del
basal de los glomérulos y a las paredes de las lupus eritematoso diseminado.

128
Otras veces el eritema se localiza alrededor de La terapéutica esteroidea favorece la necrosis
los labios, o detrás de las orejas, en la espalda, el aséptica de la cabeza femoral.
cuello, la palma de las manos, antebrazos y espa- Manifestaciones respiratorias. Aparecen esputos
cios interdigitales. También se observan habones hemoptoicos y en ocasiones hemoptisis fulminante.
urticarianos y edema angioneurótico. Muy caracte- La pleuresía serofibrinosa aislada o formando parte
rístico es el eritema lineal a lo largo del borde de los de una poliserositis no es rara; a veces es recurrente,
párpados. En la región periungueal y yema de los y con relativa frecuencia, seca.
dedos se encuentran las lesiones ulceradas de la La neumonitis intersticial lúpica no es común; pro-
vasculitis lúpica. duce fiebre, disnea y tos seca. Responde a los glu-
Con frecuencia todas las lesiones cutáneas men- cocorticoides, pero debe tenerse precaución con su
cionadas aparecen al inicio de un brote de actividad uso, ya que la causa más frecuente de signos clínicos
de la enfermedad y muestran extraordinaria fotosen- radiológicos pulmonares en el lupus es la infección.
sibilidad. La alopecia es muy común. Puede producirse fibrosis pulmonar intersticial con
En las mucosas no son raras ulceraciones recurren- insuficiencia respiratoria restrictiva e hipertensión
tes, particularmente en la porción central del pala- pulmonar. Las manifestaciones radiológicas respi-
dar duro, cerca de la unión con el paladar blando, en ratorias plantean a veces el diagnóstico diferencial
las encías y en la mucosa yugal; también, la porción con una tuberculosis miliar.
anterior del tabique nasal. Lesiones cardiovasculares.Clásicamente se des-
Las lesiones cutáneas del lupus discoide crónico cribe la endocarditis verrugosa de Libman-Sacks,
y del lupus eritematoso cutáneo subagudo, son raras que es un hallazgo común en la necropsia de los
en el LED. enfermos de lupus; no es así en la clínica. Evolucio-
Lesiones osteomioarticulares. Las manifestacio- na como una endocarditis lenta con hemocultivo
nes osteomioarticulares son muy frecuentes (hasta negativo. Las válvulas pulmonar y tricúspide se to-
en el 90 % de los casos). Consisten en artralgias o man con mayor frecuencia que las demás, aunque
artritis simétricas, a veces migratorias, que afectan también se afectan la aórtica y la mitral, sin que apa-
a las grandes articulaciones. En ocasiones se pre- rezcan grandes alteraciones estetoacústicas ni hemo-
sentan como artritis crónica de las pequeñas articu- dinámicas. La pericarditis lúpica se ve en ocasiones,
laciones, con deformidades. A veces hay derrame aislada o acompañando a una poliserositis.
sinovial como signo dominante; este líquido tiene Más serias son las vasculitis de las coronarias y
menos de 3 000 leucocitos por ml, con predominio la miocarditis fibrosante. La hipertensión arterial está
de linfocitos; puede observarse la célula LE, hecho relacionada con el compromiso renal y la terapéuti-
que es casi patognomónico de LED. El complemen- ca esteroidea. Se producen cambios degenerativos
to está disminuido paralelamente a niveles séricos. arteriales después de años de exposición a los com-
La artropatía lúpica es causada por depósito de plejos inmunes circulantes y la hiperlipemia que
complejos inmunes en la membrana sinovial. Los complica a los corticosteroides. El fenómeno de
trastornos articulares a veces existen por años antes Raynaud es, a menudo una manifestación inicial del
de que aparezcan otras manifestaciones de la enfer- LED. Consiste en el cambio de coloración de los
medad. Cuando la afección tiene largo tiempo de dedos de las manos y los pies, el cual comienza por
evolución se producen erosiones óseas en el sitio de palidez seguida de cianosis y finalmente de rubicun-
inserción de la cápsula articular con marcada defor- dez, acompañado de dolor urente y entumecimien-
midad (artropatía de Jaccoud) de las articulaciones to. Ocurre casi siempre ante la exposición al frío y
metacarpofalángicas. dura pocos minutos.
Los quistes de Baker se suelen desarrollar en el La trombosis vascular, en vasos de cualquier ca-
espacio poplíteo y su disección o ruptura simulan libre, puede constituir una severa complicación. La
una tromboflebitis. vasculitis lúpica predispone a ella, pero cada día se
En algunos se produce tenosinovitis, y una diagnostica más el síndrome antifosfolípido, cuya
miopatía difusa de las cinturas pelviana y escapular tendencia a producir trombosis, arterial o venosa sin
que elevan las enzimas musculares, a diferencia de inflamación vascular, es uno de sus hechos más so-
la miopatía esteroidea. bresalientes.

129
Manifestaciones renales. La participación renal estado de coma, tienen particular gravedad y casi
ocurre en el 60 a 75 % de los enfermos. siempre terminan con la vida del enfermo. El líqui-
Los síntomas y signos, las alteraciones del sedi- do cefalorraquídeo muestra hiperproteinorraquia y
mento urinario y las pruebas de función renal, se pleocitosis linfocítica. Se encuentran bandas oligo-
relacionan con la anatomía patológica con notable clonales, síntesis aumentada de Ig y anticuerpos
aproximación, pero existen divergencias. antineurona.
En ocasiones, la enfermedad se manifiesta como La base anatomopatológica de todas las manifes-
una glomerulonefritis aguda o crónica. El síndrome taciones neurológicas es la vasculitis o el síndrome
nefrótico se observa con relativa frecuencia y no antifosfolípido. Ocurren infartos de gran tamaño o
constituye una excepción que un LED evolucione pequeños, hemorragias ligeras pero diseminadas por
como una nefritis rápidamente progresiva. La albu- el tejido nervioso.
minuria, casi siempre presente, varía en intensidad. Las manifestaciones oculares pueden ser severas,
En el sedimento urinario se observan hematíes, ci- pues producen ceguera por vasculitis retiniana. El
lindros hemáticos y granulosos y a veces la célula LE. examen del fondo de ojo muestra arteriolas estre-
La histopatología de la lesión renal varía desde chadas y cuerpos citoides (infiltrados algodonosos
una glomerulitis focal a una glomerulonefritis mem- laminares, centrales y perivasculares).
branoproliferativa difusa. Manifestaciones del sistema hemolinfopoyético.
Síntomas digestivos. Entre éstos se encuentran Hay esplenomegalia moderada con relativa frecuen-
dolor abdominal, vómitos, diarreas (a veces un sín-
cia, cuyo sustrato histológico es la proliferación con-
drome de malabsorción), ulceraciones mucosas, he-
céntrica de la íntima de las arteriolas penicilares, con
matemesis, melena o hematoquecia (enterorragia).
imagen en “tela de cebolla”; también, adenopatías
La vasculitis lúpica es la mayor amenaza que tienen
medianas y pequeñas.
estos enfermos, pues es capaz de llevarlos a una per-
A veces la enfermedad comienza con un cuadro
foración intestinal con una peritonitis muy grave.
purpúrico petequial indistinguible de una púrpura
En raras ocasiones se produce una pancreatitis agu-
trombocitopénica inmunológica. Puede desarrollar-
da. Con frecuencia se comprueba hepatomegalia y
se un hiperesplenismo secundario.
alteración de la función hepática. Por lo general, las
La anemia es común, aunque con mayor frecuen-
transaminasas aumentan poco.
cia se debe a un trastorno en la utilización del hierro.
Histológicamente se observa una hepatitis reac-
Cuando es hemolítica, la prueba de Coombs es po-
cional y esteatosis hepática. Los trastornos de la
motilidad intestinal, desde el punto de vista clínico sitiva.
y radiológico, son indistinguibles de los de la escle- Una manifestación rara del lupus es el síndrome
rodermia. hemofagocítico agudo, que cursa con fiebre y pan-
Manifestaciones neurológicas. Las manifestacio- citopenia fulminante; ha sido descrito en asiáticos,
nes neuropsiquiátricas alcanzan hasta un 25 o 30 %: particularmente descendientes de chinos radicados
ansiedad, trastornos de la memoria, alucinaciones, en países occidentales, entre los cuales el LED tiene
cuadros psicóticos, etc. una alta incidencia. El estudio de la médula ósea
Las crisis convulsivas, casi siempre generaliza- muestra una histiocitosis reactiva con fagocitosis de
das, son frecuentes, y a veces preceden a la instau- células hematopoyéticas. No hay evidencia de in-
ración del cuadro clínico durante años. fección y la respuesta a la terapéutica esteroidea es
La cefalea es muy común. La diplopia se debe a buena.
la parálisis de los nervios oculomotores. Se han re-
portado parálisis de prácticamente todos los pares
Exámenes complementarios
craneales. Hemograma. Por lo común hay anemia y leucope-
El síndrome hemipléjico, y otros muchos focales, nia. Existe linfopenia, que ha sido señalada como
son parte de esta afección. Se presentan paraplejías muy característica del LED. La leucocitosis en un
medulares por mielitis, también nistagmo y por ex- enfermo de lupus casi siempre significa que está re-
cepción una neuropatía (polineuritis). Los cuadros cibiendo terapéutica corticosteroidea o que hay una
meningoencefálicos, por lo general acompañados de infección presente.

130
Eritrosedimentación. Está acelerada en los perío- Los anticuerpos anti-ADN de doble cadena, o
dos de actividad; los niveles de proteína C reactiva nativos, son altamente específicos de LED, pero al
pueden ser sorprendentemente bajos, aun con cifras igual que los anti-SM, la sensibilidad es baja.
de eritrosedimentación superiores a 100 mm/h. Complemento sérico. Entre los factores del
Prueba de Coombs. Es positiva con frecuencia, complemento que tienen utilidad en el laboratorio clí-
hasta en ausencia de anemia hemolítica. nico, están el CH50 (complemento hemolítico fun-
Electroforesis de proteínas. Muestra una hiper- cional total), el C3 y el C4. El primero es muy
gammaglobulinemia de tipo policlonal (Fig. 16.2). sensible, pero está sujeto a errores de laboratorio.
Los factores C3 y C4 son menos sensibles para la
PROTEÍNAS
detección de la actividad del complemento. Niveles
% g/100 ml altos de anticuerpos antinucleares y anti-ADN nati-
A 27,2 2,29 vo con complementos bajos, reflejan actividad lúpica
α1 5,3 0,45
α2 12,9 1,09
renal, pulmonar, articular, etc. Cuando se asocian
β 11,9 1,01 CH50 muy bajo, C3 normal y anticuerpos antinu-
γ 42,7 3,59 cleares negativos, se está en presencia de un defecto
T 100,0 8,43 A heredado de uno de los componentes del comple-
mento.
γ
Biopsia de piel. Ver epígrafe “Anatomía patoló-
gica”.
Anticoagulante lúpico. Fue descrito en el LED,
α2
pero se ve también en otras enfermedades no rela-
cionadas. Interfiere con la función procoagulante de
β los fosfolípidos. No hay sangramiento excesivo, pero
α1 los enfermos están en riesgo de trombosis venosa y
arterial; entre éstos, los vasos placentarios, lo que
conduce al aborto en el primer o tercer trimestre.
Luego se ha descrito otro anticuerpo antagonista
de la protrombina, que produce hipoprotrombine-
mia. Los enfermos con esta variedad sangran con
facilidad y profusamente. Los corticosteroides con-
trolan el cuadro clínico y la producción del anticoa-
Fig. 16.2. Electroforesis de proteínas en un paciente con un gulante. El coagulograma corriente detecta en el
lupus eritematoso diseminado. Hay un patrón electroforético
primer caso una prolongación del tiempo parcial de
de aumento de las gammaglobulinas de base ancha.
tromboplastina (TPT), que debe llevar a la realiza-
Serología. Las reacciones de la sífilis arrojan un ción de la prueba de laboratorio del anticoagulante
resultado falso positivo en el 10 a 12 % de los pa- lúpico, sobre todo si el TPT no se corrige con la
cientes; en otros preceden por meses al desarrollo adición de plasma normal. En el caso del anticuerpo
de la enfermedad. a la protrombina, además de la prolongación del TPT,
Factor reumatoideo. Es positivo en la cuarta par- está prolongado el tiempo de protrombina.
te de los pacientes. Frecuentemente hay un descenso no específico de
Célula LE. Se encuentra hasta en el 90 % de los los factores VIII, IX, XI y XII. Se piensa que el an-
casos en algún momento de su evolución. Según ticoagulante lúpico, en cualquiera de sus varieda-
Damesheck, es necesario una cifra normal de pla- des, puede reaccionar con las proteínas C, S y otros
quetas, y según Pollack, un nivel determinado del antígenos.
complemento sérico para que aparezca la célula LE.
Anticuerpos antinucleares. El test de inmunofluo- Diagnóstico
rescencia es positivo en el 98 % de los enfermos. Es Diagnóstico positivo
usado como prueba de despistaje, ya que es poco El diagnóstico del LED es extraordinariamente difí-
específico. cil sin la concurrencia de varios síntomas o signos

131
que orienten hacia tal enfermedad. A semejanza de Diagnóstico diferencial
los criterios de Jones para el diagnóstico de la fiebre Según la forma clínica de presentación, el LED puede
reumática, se ha elaborado el siguiente esquema para plantear el diagnóstico diferencial con artritis o ar-
el lupus. tralgias, síndrome nefrótico, síndrome febril, púrpura
trombocitopénica, anemia hemolítica, endocarditis,
A. Signos mayores: serositis, convulsión, meningoencefalitis, corea, es-
1. Células LE, anticuerpos antinucleares o am- clerodermia, hepatitis crónica activa, reaccción
bos alérgica medicamentosa, etc.
2. Manifestaciones articulares El hallazgo de células LE, aunque de máxima
3. Lesiones cutáneas típicas importancia diagnóstica, no significa que el paciente
4. Nefropatía tenga lupus, pues se las ha visto en casos de lepra
lepromatosa, hepatitis viral persistente, hepatitis
5. Serositis, pleuritis, pericarditis o ambas
crónica activa, cirrosis posnecrótica, carcinosis pe-
B. Signos menores:
ritoneal, tuberculosis miliar, artritis reumatoidea, es-
.
1. Leucopenia menor de 4 109/L (< 4 000/
clerodermia, anemia perniciosa y leucemia. Diversos
mm3).
medicamentos han sido señalados como agentes
2. Trombocitopenia menor de 100 109/L . causales de las células LE, y a veces, del desarrollo
(< 100 000/ mm3). de un cuadro parecido al del lupus. Los principales
3. Anemia hemolítica (Coombs positivo) son: hidralacina, isoniacida, alfametildopa, levodopa,
4. Reacción serológica de la sífilis falsa positiva anticonceptivos orales, penicilina, sulfamidas, anti-
5. Fenómeno de Raynaud convulsivos, procainamida, propiltiouracilo,
6. Manifestaciones inexplicables del sistema metiltiouracilo, reserpina, fenilbutazona, estreptomi-
nervioso central cina, tetraciclina, clorpromazina, D-penicilamina,
quinidina e interferón alfa.
La asociación de tres signos mayores, o la com- Los más frecuentes son la procainamida y la hi-
binación de dos signos mayores y tres menores, es dralazina. Existe una predisposición genética (ace-
muy sugestiva de LED. tiladores lentos) en estos enfermos que desarrollan
El American College of Rheumatology emitió los un cuadro clínico parecido al lupus pero con pocas
siguientes elementos para establecer el diagnóstico manifestaciones renales y neurológicas. Todos los
de LED, de los cuales cuatro deben estar presentes pacientes tienen anticuerpos antinucleares y anti-
en el enfermo. cuerpos antihistona, sin embargo, no hay hipocom-
Eritema malar plementemia ni anticuerpos anti-ADN de doble
Rash discoide cadena.
Fotosensibilidad
Úlceras orales Evolución y pronóstico
Artritis El LED se caracteriza por una evolución en la que
Serositis generalmente alternan períodos de remisión y de
Nefropatía exacerbación. En cada brote se afectan diversos ór-
.
Leucopenia (<4 109 /L) ganos o sistemas a la vez. La enfermedad no tiene
.
Linfopenia (<1,5 109/L) cura, pero el pronóstico ha mejorado en los países
.
Anemia hemolítica o trombocitopenia (<100 109/L) subdesarrollados y se informan supervivencias de
Enfermedad neurológica 63 a 75 % a los 20 años. En ocasiones adopta una
Anticuerpo anti-ADN, anticuerpo anti-SM o evi- forma fulminante.
dencia de anticuerpo antifosfolípido (en uno de El síndrome nefrótico, la insuficiencia renal, las
varios ensayos) manifestaciones encefalíticas y la endocarditis de
Anticuerpos antinucleares con título elevado Libman-Sacks, son hechos ominosos para la vida de
A veces es necesario que pasen varios años para los enfermos. En cambio, un hematócrito normal,
que un paciente cumpla los requisitos para ser clasi- una albuminuria mínima o nula, un título bajo de
ficado como enfermo de LED. anticuerpos anti-ADN y un nivel de complemento

132
sérico normal, son signos pronósticos excelentes. El “pulsos” cíclicos de 500 mg EV mensuales, por 6 a
desarrollo de un síndrome antifosfolípido (trombosis 12 meses, en dependencia de la respuesta renal y de
venosa y arterial recurrentes, abortos espontáneos, la tolerancia hematológica.
pérdida fetal tardía, trombocitopenia y anticuerpos La ciclofosfamida debe administrarse según el
antifosfolípidos, entre ellos el anticuerpo anticardio- siguiente protocolo:
lipina), ensombrece el pronóstico.
1. En 50 ml de solución salina fisiológica mez-
Tratamiento clar 10 mg de ondasetrón* y 10 mg de dexame-
El tratamiento del LED depende de la severidad de tasona. Pasarlo EV en 30 min.
sus manifestaciones clínicas. Se le considera leve 2. A 250 ml de solución salina fisiológica, añadir
en caso de fiebre, artritis, pleuresía, pericarditis, eri- 250 mg de mesna**. Pasarlo EV en 1 h.
tema cutáneo y cefalea (como expresión de toma neu- 3. A 250 ml de solución salina fisiológica añadir
rológica); y severo o grave, que amenaza la vida del 500 ml de ciclofosfamida. Pasarlo EV en 1 h.
enfermo, cuando hay anemia hemolítica, púrpura 4. Después del paso 3, esperar 2 h. Añadir a 250 ml
trombocitopénica, pleuropericarditis con derrame de solución salina fisiológica 150 mg de mesna.
masivo, nefropatía, vasculitis de las extremidades o Pasar EV en 1 h. Al mismo tiempo pasar por
del aparato gastrointestinal y manifestaciones neu- otra vena, 500 ml de solución salina fisiológi-
rológicas. Siempre debe tenerse presente que el cur- ca en 1 h o menos.
so evolutivo es, no obstante lo anterior, impredecible. 5. A la mañana siguiente administrar ondasetrón,
La enfermedad leve puede no requerir tratamien- 8 mg por vía oral.
to. La artropatía se trata con AINE; la aspirina es
La vasculitis aguda y la afección del sistema ner-
eficaz, especialmente como terapéutica antiagregante
vioso se tratan como la nefropatía.
en el síndrome antifosfolípìdo, pero las dosis altas
La respuesta clínica que se obtenga será compa-
suelen ser causa de hepatotoxicidad en estos en-
rada con los indicadores de laboratorio (anti-ADNn),
fermos.
complemento sérico, eritrosedimentación, hemo-
Los antipalúdicos son útiles en la artritis y en las
grama, creatinina, filtrado glomerular, albuminu-
lesiones cutáneas, en dosis igual a las recomenda-
ria, etc.). Los esteroides comenzarán a ser retirados
das en la artritis reumatoidea, y con las debidas pre-
lentamente (10 % de la dosis cada 2 a 4 semanas).
cauciones que se exponen en dicho capítulo.
Cuando se alcance la dosis de 15 mg diarios, se
La dihidroepiandrosterona se utiliza en dosis de
tratará de pasar al régimen de días alternos o a la
50 a 200 mg diarios. Puede disminuir la necesidad
dosis mínima recomendada de prednisona: 5 mg en
de otros medicamentos, como los esteroides.
la mañana y 2,5 mg en la tarde, o una dosis equiva-
La enfermedad debe ser tratada inmediatamente lente de otro corticoide sintético. Es conocido el efecto
con esteroides. Las dosis recomendadas, según las “ahorrador de esteroides” de los inmunosupresores,
manifestaciones clínicas, son las siguientes (Schu- los antipalúdicos y los AINE.
macher). Se recomienda que al inicio del tratamiento, la
• Anemia hemolítica. 60 mg diarios. dosis de prednisona u otro, sea suministrada de 2 a 4
• Púrpura trombocitopénica. 40 a 60 mg diarios. veces al día. Posteriormente se pasa a la modalidad
Las plaquetas demoran 4 a 6 semanas en au- de una sola dosis en la mañana, o mejor, a dos ter-
mentar. cios en la mañana y un tercio por la tarde o la noche.
• Poliserositis grave. 20 a 60 mg diarios. La res- Los síndromes producidos por el LED según el
puesta se observa a los pocos días. órgano dañado, serán tratados con las mismas medi-
• Nefropatía lúpica. 40 a 60 mg diarios, en com- das utilizadas en los enfermos que no padecen lupus.
binación con inmunodepresores. La mejoría co- La insuficiencia renal irreversible se maneja con
mienza entre 4 y 12 semanas. diálisis y trasplante renal.
La medicación inmunosupresora más recomen- *
Ondasetrón es un antiemético bloqueador selectivo (por
dada es la azatioprina, en dosis de 2,5 mg/kg dia- antagonismo) del receptor 5-HT3.
rios. Pero cada vez se usa más la ciclofosfamida en **
Mesna es m ercaptoetansulfonato sódico.

133
Los pacientes deben ser advertidos de los efectos subcutánea (10 000 U 2 veces al día) o aspirina en
adversos de la luz del sol, para que eviten la exposi- dosis antiagregante; pero si aparecieran fenómenos
ción sin protección. trombóticos venosos o arteriales, la heparina se usa-
La mujer fértil enferma de lupus debe usar méto- rá a dosis plena.
dos anticonceptivos mientras el proceso esté activo, Los corticosteroides, excepto la dexametasona y
y durante los primeros 3 años de diagnosticada la la betametasona, son inactivados por las enzimas
afección. El embarazo tiende a producir exacerba- placentarias, por lo que pueden usarse sin riesgo para
ciones de la enfermedad, y menos frecuentemente, el feto.
Cuando se inicie el trabajo de parto, se adminis-
remisiones. La mortalidad fetal, bien sea por aborto
trará hidrocortisona EV en dosis de 100 mg cada 8 h,
o por parto prematuro con feto muerto intraútero, es
que se mantendrá 48 h después de aquél. Con este
de un 25 a 35 %. Las manifestaciones renales se
proceder, las exacerbaciones posparto se han limi-
agravan y se produce retención nitrogenada. tado a la mínima expresión.
Las embarazadas deben ser tratadas con una do- El síndrome lúpico inducido por drogas desapa-
sis diaria de corticosteroide, que se incrementa según rece a las pocas semanas o meses después de la sus-
lo aconsejen las circunstancias, y que se mantendrá pensión del medicamento. Excepcionalmente
durante 6 u 8 semanas después del parto. Si hay his- persiste, con remisiones y exacerbaciones, por años.
toria de síndrome antifosfolípido o se demuestra En este caso se procederá como con el enfermo de
anticoagulante lúpico, se hará profilaxis con heparina LED.

134
17

ESCLERODERMIA

Concepto telangectasia). Otro anticuerpo hallado con frecuen-


cia en los pacientes con esclerodermia difusa que
La esclerodermia es una enfermedad crónica de cur-
tienen enfermedad vascular periférica y fibrosis pul-
so progresivo de causa desconocida, caracterizada
monar intersticial, es el antitopoisomerasa I (ASCL-
por fibrosis difusa y anormalidades vasculares en la
70 A).
piel, las articulaciones y los órganos internos, espe-
El hecho sobresaliente de la esclerodermia es la
cialmente el esófago, el tubo digestivo, los pulmo-
enorme producción y acumulamiento de fibras
nes, el corazón y los riñones.
colágenas y otras proteínas de la matriz extracelular,
Etiopatogenia de la piel y otros órganos. La fibrosis es precedida
por daño vascular en las pequeñas arterias, arteriolas
La causa es desconocida. Predomina en el sexo fe- y capilares de las células endoteliales y la lámina o
menino, en proporción de 4:1; afecta a todas las ra- membrana basal, que provoca engrosamiento de la
zas, y aparece con mayor frecuencia entre los 30 íntima y estrechamiento de la luz que llega a veces a
y 50 años. La herencia no está aclarada, pues si bien la obliteración; esto da lugar a un estado de isque-
hay casos en una misma familia, aumento de las mia crónica. Los capilares restantes proliferan y se
enfermedades del colágeno y positividad de los an- dilatan hasta convertise en telangiectasias.
ticuerpos antinucleares y otros anticuerpos en los Los mecanismos que se presume producen el daño
familiares de enfermos, también es cierto que hay vascular son complejos y todavía no aclarados com-
un aumento de los propios anticuerpos en las espo- pletamente. Sólo se mencionará el factor citotóxico
sas de pacientes esclerodérmicos, lo que sugiere la endotelial secretado por linfocitos T activados; la
existencia de factores ambientales. proteína sérica granzyme-A; la citotoxicidad endo-
No se ha demostrado asociación de la enferme- telial mediada por anticuerpos; anticuerpos antien-
dad a antígenos HLA. doteliales; FNT; endotelina 1 (vasoconstrictora,
Su incidencia es mayor en hombres que trabajan estimuladora de los fibroblastos y de la célula mus-
en minas de carbón; hay datos que sugieren que el cular lisa); factor endotelial relajante (EDRF, óxido
polvo de sílice puede ser un factor predisponente y nítrico); factores mediadores de la activación pla-
lo mismo sucede con el cloruro de polivinilo y al- quetaria (entre ellos, el factor VIII /Von Willebrand),
gunos hidrocarburos aromáticos, como la bencina y que aumenta la permeabilidad capilar; el factor de
el tolueno —a los cuales están expuestos algunos crecimiento derivado de las plaquetas, etc.
obreros— que son sustancias capaces de producir Estas citocinas (y otras más) estimulan la fibrosis
un cuadro parecido a la esclerodermia. Algo así de la íntima y de la adventicia, que junto a una defi-
ocurrió en España en una intoxicación masiva pro- ciencia del factor hístico activador del plasminóge-
ducida por aceite de colza adulterado. La pentazo- no, provocan una coagulación intravascular, que
cina y la bleomicina son susceptibles de originar un cuando es extensa puede producir anemia hemolíti-
cuadro esclerodermiforme. ca microangiopática, con el riesgo del desarrollo de
Estos enfermos poseen un anticuerpo anticentró- insuficiencia renal aguda.
mero (especialmente quienes padecen el síndrome Las alteraciones de la inmunidad mediada por cé-
CREST, constituido por calcinosis, fenómeno de lulas desempeñan un papel importante en la esclero-
Raynaud, discinesia esofágica, esclerodactilia y dermia. Los monocitos y los linfocitos infiltran los

135
alrededores de los vasos, aun en la piel sana que ción de linfocitos y células plasmáticas, pero es muy
rodea las áreas de fibrosis. Los linfocitos T4 son los característica una gruesa capa de fibrina que cubre e
predominantes y se demuestran niveles altos de infiltra la sinovial y que luego se vuelve fibrótica.
interleucina 2 (1L-2) y sus receptores, y deaminasa La fibrina se deposita en la superficie de los tendo-
de adenina (lo que prueba la activación de T4). Tam- nes y en la fascia.
bién están elevadas IL-4 e IL-6. La proporción T4/ Sistema digestivo. Los cambios histopatológicos
T8 crece por aumento de T4, etc. Las otras sustan- son similares a los descritos, pero con algunos as-
cias que se encuentran por encima de lo normal en pectos adicionales. Las alteraciones principales se
la esclerodermia y prueban la activación de la in- encuentran en los dos tercios inferiores del esófago,
munidad celular en la patogenia, escapan a los obje- donde se observa atrofia de la muscularis mucosae,
tivos de este libro. y en el colon, donde aparecen divertículos de boca
ancha (seudodivertículos).
Anatomía patológica Pulmones. Hay una fibrosis intersticial, engrosa-
Ya se ha expuesto que la lesión inicial se encuentra miento de la membrana alveolocapilar, fibrosis
en las arterias finas que miden entre 150 y 500 µ de peribronquial, ruptura septal con formación de pe-
diámetro, y consiste en una degeneración mixoma- queños quistes y áreas de enfisema buloso, engrosa-
tosa con proliferación endotelial y reduplicación de miento por hipertrofia muscular, fragmentación de
la íntima. Además, hay un infiltrado de mononuclea- la elástica y aumento de espesor de la íntima de las
res en la adventicia, no constante. Las lesiones cutá- arteriolas y pequeñas arterias pulmonares.
neas y viscerales se relacionan con las lesiones Riñones. Están afectados en la mitad de los en-
arteriales. fermos y los cambios consisten en hiperplasia de la
Piel. Una epidermis fina cubre compactos haces íntima de las arterias interlobares, necrosis fibrinoi-
de fibras colágenas que se extienden paralelamente de de las arteriolas aferentes, que incluye el pena-
a aquélla. Se observan proyecciones digitiformes de cho glomerular, y engrosamiento de la membrana
la dermis en el tejido muscular subcutáneo. Los basal glomerular. La histopatología es indistingui-
anexos de la piel están atrofiados. En los primeros ble de la hipertensión arterial maligna, pero pueden
estadios hay un aumento de las células T, monoci- observarse depósitos de fibrinógeno y complemento.
tos, células plasmáticas y mastocitos en la dermis
de la piel afectada. Los fibroblastos, aun en cultivo Cuadro clínico
de tejidos, conservan la propiedad de sintetizar las
Hay formas cutáneas de esclerodermia que caen en
fibras colágenas en cantidad excesiva, aunque de es-
el campo del dermatólogo (lineal, en sablazo, en pla-
tructura y composición normales. La sustancia fun-
damental muestra edema mucinoso y degeneración cas, etc.). La esclerodermia que nos interesa ha re-
fibrinoide. cibido con más propiedad el nombre de esclerosis
El lecho capilar está reducido en número, a veces sistémica progresiva, porque las lesiones histopato-
considerable, y los capilares que quedan están muy lógicas atacan a todos los órganos y sistemas y su
dilatados. Con rareza el riñón está afectado por una curso es progresivo; sin embargo, se observan dos
arteriolitis necrotizante, casi idéntica a la de la HTA variedades clínico- evolutivas, que no obstante,
maligna. muestran algún grado de superposición.
Sistema osteomioarticular. Los músculos mues- Una es la esclerodermia en línea difusa, que se
tran los cambios de una miopatía primaria con una caracteriza por un rápido engrosamiento simétrico,
infiltración linfocítica intersticial y perivascular, proximal y distal, de la piel de las extremidades, la
degeneración de la fibra muscular y fibrosis inters- cara y el tronco; en estos enfermos se desarrollan
ticial. En ocasiones, la histología de los músculos precozmente lesiones renales y en otros órganos.
proximales es idéntica a la de la polimiositis (sín- La otra variedad es la esclerodermia cutánea li-
drome de superposición esclerodermia-polimiositis). mitada, en la que hay engrosamiento cutáneo simé-
La membrana sinovial de las articulaciones en los trico de las porciones distales de las extremidades y
pacientes con artritis, es semejante a la de la artritis la cara, así como síndrome CREST. Esta variedad
reumatoidea en fase temprana, con edema e infiltra- tiene mejor pronóstico que la primera.

136
Es bueno señalar que ha sido descrita la esclero- disbacteriosis. Radiológicamente hay un enlenteci-
dermia sistémica progresiva sin esclerodermia, en miento del tránsito intestinal y dilatación de las asas
alusión a los raros casos que presentan el compro- delgadas. En el colon por enema se observan diver-
miso visceral de la enfermedad sin lesiones de la tículos saculares y también, a veces, neumatosis in-
piel. testinal.
Manifestaciones cutáneas. Las lesiones cutáneas Manifestaciones cardiovasculares. En el corazón
comienzan en forma progresiva, asientan sobre todo se producen trastornos del ritmo, insuficiencia car-
en las extremidades y afectan particularmente a los díaca rebelde y pericarditis. El substrato histopato-
dedos (acrosclerosis o esclerodactilia). Semanas o lógico es una fibrosis cardíaca más o menos extensa,
meses antes hay edema de la dermis en las manos, por lesión de las ramas de la coronaria intramurales
los antebrazos, el tronco, etc. Con frecuencia apare- menores de 1mm de diámetro.
cen trastornos vasomotores que originan el fenóme- El vasospasmo inducido por el frío en las manos
no de Raynaud. En opinión de muchos, es la primera (fenómeno de Raynaud), provoca trastornos de la
manifestación de la afección, que precede a los cam- perfusión miocárdica observados en los estudios
bios cutáneos por meses o años. gammagráficos con talio. La hipertensión arterial
Los dedos se afinan poco a poco y la piel que los sistémica y pulmonar son causas de insuficiencia
cubre se adelgaza y adhiere a los planos profundos. ventricular izquierda y cor pulmonale, respectiva-
Se producen ulceraciones isquémicas que se infec- mente.
tan con facilidad; son muy dolorosas y difíciles de El examen del lecho ungueal con un oftalmosco-
cicatrizar. Las uñas se afectan y en la radiografía de pio revela disminución del número de capilares y la
las manos puede haber resorción de la falange distal. dilatación de los restantes.
Finalmente, la mano se momifica y adopta la forma Manifestaciones renales. En ocasiones hay albu-
de garra, con pérdida del juego articular. minuria, y en los casos avanzados, insuficiencia re-
La facies adquiere un aspecto rígido, desaparecen nal acompañada de HTA. A veces se desarrolla una
los pliegues nasolabiales y mentonianos, y también insuficiencia renal rápidamente evolutiva. Estos pa-
los del cuello. Los labios y párpados se adelgazan. cientes presentan encefalopatía hipertensiva, cefa-
La piel del rostro se torna tan tensa que dificulta la lea severa, convulsiones, retinopatía e insuficiencia
apertura de la boca, así como la masticación y la ventricular izquierda. El mecanismo de esta “crisis
deglución. renal” es la activación del sistema renina-angioten-
Las lesiones progresan con el tiempo y afectan sina.
los brazos y los antebrazos. Los pies, los tobillos y Antes del desarrollo de fármacos antihipertensi-
las piernas también participan del proceso. La piel vos potentes, la mayoría de estos pacientes morían
pierde el vello, las glándulas sebáceas y las sudorí- en 6 meses. Su único tratamiento era la nefrectomía
paras, por lo que se engruesa y reseca; la del tórax y bilateral y el trasplante renal.
el abdomen se altera tardía o precozmente, según la Manifestaciones respiratorias. La participación
variedad de que se trate. No es rara la dispareunia del sistema respiratorio es muy frecuente y es posi-
por sequedad vaginal. ble detectar precozmente el síndrome obstructivo de
Manifestaciones digestivas. Las lesiones esofági- las vías aéreas finas en el curso de la enfermedad
cas, muy frecuentes, se manifiestan subjetivamente mediante pruebas funcionales respiratorias especia-
por disfagia y pirosis, y en el examen radiológico se les. La participación del intersticio pulmonar da lu-
observa que no hay peristaltismo esofágico en la gar a una insuficiencia respiratoria restrictiva con
mitad o dos tercios inferiores del órgano. El esófago síndrome de bloqueo alveolocapilar. Se desarrolla
se vacía con lentitud y en la mucosa suelen verse broquiectasias y la fibrosis pulmonar es capaz de
erosiones y ulceraciones. adquirir un curso subagudo. En el estudio del líquido
La constipación puede ser pertinaz; en otros ca- del lavado bronquial se hallan signos de una alveo-
sos alterna con crisis de diarrea. A veces se advierte litis, con una gran infiltración celular. La radiogra-
un síndrome de malabsorción en el que inciden so- fía de tórax muestra imágenes reticulonodulares
bre todo dos factores patogénicos: la discinesia y la diseminadas o el pulmón en “panal de abejas”.

137
Manifestaciones osteomioarticulares. Son muy otras causas de este síndrome. Cuando la participa-
frecuentes, pues más de la mitad de los casos las ción muscular es prominente, el diagnóstico con la
presentan. Es común una poliartritis simétrica de pe- dermatomiositis y otras colagenosis se tendrá en
queñas articulaciones al comienzo de la enferme- cuenta.
dad, muy parecida a la de la artritis reumatoidea. A menudo se planteará el diagnóstico diferencial
Existe atrofia muscular, por desuso pero también con la artritis reumatoidea y el lupus eritematoso di-
consecutiva a miositis. seminado, lo que en ocasiones es imposible de defi-
Suelen aparecer depósitos cálcicos subcutáneos, nir; se habla entonces de síndrome de superposición,
difusos o en forma de nódulos, que a veces se abren en el cual la enfermedad mixta del tejido conectivo
al exterior. Ya se hizo mención del síndrome CREST. ha adquirido personalidad propia y se estudia en ca-
Hay pocas manifestaciones del sistema nervioso en pítulo aparte.
la esclerodermia.
Pronóstico
Exámenes complementarios En general, las mujeres evolucionan mejor que los
La eritrosedimentación está poco acelerada en el 75 % hombres. La raza negra y la edad que sobrepasa a
de los casos. Un gran aumento de la sedimentación los 60 años son los factores de peor pronóstico. Los
globular implicaría mal pronóstico. En el hemogra- primeros 5 años son decisivos, puesto que darán la
ma se encuentra anemia, ya sea por déficit de hierro pauta evolutiva.
o por sangramiento digestivo oculto a causa de Con frecuencia el curso es lentamente progresi-
esofagitis y divertículo sangrante, etc. Cuando hay vo, pero muchos enfermos darán muestra de com-
disbacteriosis y malabsorción se produce déficit de promiso visceral. El pronóstico es malo si hay
ácido fólico o vitamina B12. La anemia microangio- manifestaciones cardíacas, pulmonares o renales. El
pática puede preceder y acompañar a la insuficien- síndrome de CREST puede permanecer estaciona-
cia renal. rio durante años, pero a veces se desarrolla una hi-
El factor reumatoideo es positivo en la tercera pertensión pulmonar por lesión vascular, y una
parte de los casos y en más del 60 % se encuentran cirrosis biliar.
anticuerpos antinucleares o antinucleolares. Estos
últimos, al igual que los antitopoisomerasa I (SCL-70) Tratamiento
y los anticentrómeros se consideran específicos de Terapéutica local
la esclerodermia. En las ulceraciones digitales se deben administrar
Se observa hipergammaglobulinemia con frecuen- antibióticos de amplio espectro de uso tópico (mu-
cia, especialmente a expensas de la IgG. pitocina, por ejemplo). Además, usar vendajes hi-
drocoloides semioclusivos, que promueven la
Diagnóstico cicatrización. El ungüento de nitroglicerina aplica-
A pesar de ser una afección poco corriente, por lo do a la piel que rodea la úlcera también es útil.
general no hay dificultad para establecer el diagnós-
tico. Una biopsia de piel, del esófago o del duodeno Terapéutica sistémica
pone en evidencia las alteraciones, tales como la en- Cuando las úlceras digitales se tornan muy doloro-
fermedad que complica el trasplante de médula ósea, sas, generalmente están infectadas, casi siempre por
reacción de injerto contra receptor, carcinoma bron- estafilococo, por lo que se debe emplear alguno de
coalveolar, porfiria, amiloidosis, y especialmente, la los antibióticos específicos para éste.
enfermedad mixta del tejido conectivo. Los bloqueadores de los canales de calcio son los
En la forma difusa se hará el diagnóstico diferencial medicamentos de elección para tratar el síndrome
con la insuficiencia cardíaca de origen oscuro, la in- de Raynaud: la nifedipina de acción sostenida en
suficiencia respiratoria y renal, la fibrosis pulmo- dosis de 30 mg diarios es muy eficaz, el amlodipino,
nar, la hipertensión pulmonar y la HTA acelerada. diltiazem, felodipino, isradipino y nicardipino. Tam-
La enfermedad evoluciona a veces en su comien- bién se recomiendan los bloqueadores de los recep-
zo como un síndrome de Raynaud solitario, por lo tores alfa-adrenérgicos periféricos (prazosina,
que el diagnóstico diferencial tendrá en cuenta las terazosina y doxazocina).

138
La terapéutica antiagregante plaquetaria, como la Los síntomas digestivos se tratarán con alcalinos,
combinación de ASA (80 a 325 mg por día) y dipi- bloqueadores H2, comidas pequeñas y repetidas en
ridamol (50 a 100 mg 3 a 4 veces al día), es muy el día, y en caso de síntomas esofágicos, se elevará
recomendada. la cabecera de la cama; antibióticos de amplio es-
La pentoxifilina, a razón de 400 mg 2 o 3 veces al pectro, en caso de malabsorción; y laxantes suaves,
día, es usada por algunos. También la terapéutica en caso de estreñimiento.
anticoagulante clásica, y desde hace poco la heparina Si se diagnosticara la fase de alveolitis del pul-
de bajo peso molecular, en inyección subcutánea, món esclerodérmico, se usará ciclofosfamida. Las
3 veces a la semana. infecciones respiratorias deben ser tratadas con ener-
Recientemente se recomienda el antagonista de gía. El uso de esteroides suprarrenales se ha descar-
la serotonina ketanserina, y están bajo investigación tado de esta neumopatía.
el péptido relacionado con el gen de la calcitonina y Para la afección renal los inhibidores de la enzi-
la relaxina. ma convertidora de la angiotensina son los medica-
Los corticosteroides encuentran indicación en la
mentos de elección (captopril, enalapril, lisinopril,
primera fase (edematosa) de la enfermedad, en do-
etcétera), que controlan la hipertensión con mucha
sis de 10 a 20 mg diarios; en la miositis del síndro-
efectividad. Otros medicamentos hipotensores va-
me de superposición y en la pericarditis, a razón de
sodiladores son efectivos también: minoxidil,
1 mg por kg de peso, por día, hasta controlar el cua-
bloqueadores alfa-adrenérgicos periféricos y cen-
dro clínico; se disminuye entonces la dosis sema-
trales, etc.
nalmente en 5 mg hasta suspenderla.
Cuando no puede prevenirse la insuficiencia re-
Existe ya experiencia suficiente con la penicila-
mina para recomendar su uso por tiempo prolonga- nal terminal, se realizará diálisis y trasplante renal.
do, en dosis de 500 a 1 000 mg diarios, por vía oral.
Se comienza con 200 mg diarios y se aumenta la Terapéutica quirúrgica
dosis cada mes, hasta alcanzar los efectos benefi- Se han practicado la simpatectomía cervical y la
ciosos que se desean. Debe administrarse 1 hora antes simpatectomía digital microquirúrgica, con resulta-
o después de los alimentos, para garantizar su ab- dos buenos, pero pasajeros.
sorción. Durante las primeras semanas de tratamiento
hay que chequear semanalmente el hemograma, las Tratamiento fisioterapéutico
plaquetas y la orina, porque es nefrotóxica y mielo- Es obligado, con el objetivo de preservar la fuerza
tóxica. Después se hace una vez al mes. muscular y evitar las contracturas articulares.

139
18

DERMATOMIOSITIS Y POLIMIOSITIS

Las miopatías inflamatorias constituyen un grupo El compromiso del sistema inmune celular se evi-
de enfermedades poco comunes que afectan prima- dencia por un amplio infiltrado inflamatorio de cé-
riamente al músculo esquelético y se caracterizan lulas T en el músculo, que puede ser perivascular,
por el hallazgo, en el estudio histológico de este úl- alrededor de los fascículos musculares o infiltrando
timo, de necrosis y fenómenos inflamatorios. Mu- éstos, y dentro de las células musculares individua-
chas de ellas tienen causa conocida (víricas, les. En la PM y miositis con cuerpos de inclusión
bacterianas, fúngicas, parasitarias y tóxicas, por ci- (MCI), la necrosis de la fibra muscular resulta de la
tar algunas), de otras sólo se conocen algunos as- activación de linfocitos T CD8 (citotóxicos), mien-
pectos patogénicos y se denominan miopatías tras que en la DM predominan linfocitos T CD4
inflamatorias idiopáticas (MII), entre las cuales la (auxiliares) y depósito de inmunoglobulinas y com-
dermatomiositis (DM) y la polimiositis (PM) son plemento sobre los vasos sanguíneos, que aparecen
las variedades mejor conocidas. Consideradas den- precozmente, antes de existir destrucción muscular
tro de las enfermedades del colágeno y de probable o afección cutánea.
génesis autoinmune, en ambas el músculo esquelé- Aunque no se ha podido demostrar la presencia
tico es lesionado por un proceso inflamatorio no de material genético vírico en estos enfermos, se han
supurativo, en el cual predominan la infiltración lin- señalado a los picornavirus y paromixovirus (nucleo-
focítica y la presencia habitual de autoanticuerpos. cápsida) como punto de partida de una reacción au-
El término polimiositis se utiliza cuando la afec- toinmune.
ción no daña la piel y el de dermatomiositis cuando
la primera se acompaña de un rash cutáneo caracte- Anatomía patológica
rístico. La histología característica del músculo consiste en
infiltrados de células inflamatorias (linfocitos, ma-
Epidemiología crófagos, células plasmáticas, y más raramente, eosi-
La incidencia estimada es de 10 casos por cada nófilos y neutrófilos), así como degeneración y
1 000 000 de habitantes, y su prevalencia, de 60 por regeneración de las fibras musculares con reacción
igual tasa. En forma global tienen una distribución fagocítica y atrofia muscular. Hay pérdida de las
bimodal respecto a la edad de aparición, con picos estriaciones transversales, cambios hialinos y granu-
entre los 10 y 14, y 45 y 65 años, y una proporción lares, núcleos picnóticos y fragmentación celular. La
2 veces mayor en la mujer. regeneración es típica, con cambios basófilos en el
citoplasma y núcleos grandes y numerosos.
Patogenia En la PM suele presentarse el infiltrado celular
Aunque la patogenia de estos trastornos no está bien inflamatorio perivascular (sobre todo perivenular),
caracterizada, los mecanismos autoinmunes son los mientras que el intersticial resulta más inespecífico.
más importantes. Por otro lado, la ocurrencia fami- En la DM es clásico encontrar atrofia perifascicular
liar de estas afecciones y la frecuencia elevada de y microinfartos musculares, que pueden ser conse-
antígenos HLA-DR3 y DRw52 en dichos pacien- cutivos a daño vascular consistente en pérdida de
tes, sugieren una predisposición genética e inmu- capilares por necrosis celular endotelial, principal-
nológica subyacente. mente perifascicular. Estos hallazgos también han

140
sido descritos en la PM, pero las lesiones capilares alto o peinarse, abandonar la posición de agachado
son de menor importancia. En la PM o DM asociada o arrodillado, subir o bajar escaleras, entrar o salir
con otras enfermedades del tejido conectivo también de un vehículo o levantar su cabeza sobre una almo-
se observa vasculitis. hada. En ocasiones, la lesión se circunscribe al cue-
Se han identificado depósitos de inmunoglobuli- llo, el hombro o los músculos cuádriceps. Los
nas y complemento (IgG, IgM y C3) en las paredes enfermos tienen dificultad para deglutir, que se ex-
vasculares de las arterias de músculos esqueléticos. presa por alimentos atascados en la garganta, farin-
A través de técnicas de anticuerpos monoclonales ge y esófago superior o regurgitación de líquidos
se ha encontrado un predominio de linfocitos B en por la nariz. Cuando aparecen síntomas de disfagia
enfermos con DM y de linfocitos T en pacientes y debilidad de los músculos flexores del cuello en
con PM. una persona con miopatía crónica, debe sospechar-
se la presencia de polimiositis. El comienzo es agu-
Clasificación de las miositis do o insidioso: el primero predomina en los niños.
Este esquema de clasificación se basa en los datos Los síntomas generales como fiebre, fatiga y pérdi-
distintivos de inflamación del músculo esquelético da de peso por lo común son importantes, especial-
y debilidad muscular. mente en el niño.
Polimiositis. Se caracteriza por debilidad muscu- Un menor porcentaje de enfermos tiene manifes-
lar proximal, que afecta las cinturas escapular y taciones extraesqueléticas, de las cuales la enferme-
pelviana, el cuello y la musculatura faríngea, de for- dad pulmonar intersticial es la más común y peligrosa
ma más o menos generalizada y con progresión gra- (30 %), y ocurre aproximadamente en el 70 % de
dual. pacientes con anticuerpos anti-Jo-1. La neumonitis
Dermatomiositis. Difiere de la polimiositis en que intersticial cursa con disnea y tos, y evoluciona con
la piel es lesionada de forma similar al músculo. diferentes grados de severidad y rapidez, pruebas
Miositis asociada con neoplasia. Puede ser una de función respiratoria anormales y mortalidad ele-
manifestación paraneoplásica y el cáncer desarro- vada.
llarse antes o después del diagnóstico de miositis. El 30 % de los pacientes presentan alteraciones
Miositis juvenil. Aquí la miositis se presenta en cardíacas, que incluyen grados variables de bloqueo,
la infancia. trastornos del ritmo como taquicardias auriculares y
Miositis con cuerpos de inclusión. En este tipo ventriculares y síndrome del seno enfermo, cambios
específico se detectan inclusiones citoplasmáticas e electrocardiográficos y, más raramente, fallo cardía-
intranucleares características en las muestras de biop- co consecutivo a necrosis de las fibras miocárdicas,
sia muscular. así como miocarditis o pericarditis.
Miopatía con enfermedad del colágeno asociada Las artralgias y el fenómeno de Raynaud son poco
(usualmente artritis reumatoidea, esclerosis sistémica comunes y a veces aparece una artritis inflamatoria
progresiva, lupus eritematoso, enfermedad mixta del simétrica moderada en las manos, muñecas y rodi-
tejido conectivo). llas.
De igual forma, la toma gastrointestinal por de-
Manifestaciones clínicas bajo del esófago es bastante rara, pero capaz de cau-
Polimiositis sar úlcera, sangramiento y perforación; y en menor
Este grupo representa alrededor de la tercera parte proporción, diarrea o incontinencia rectal.
de los casos y las manifestaciones musculares cons-
tituyen la expresión cardinal de la enfermedad. Evo- Dermatomiositis
luciona con carácter insidioso en semanas, meses e Este grupo comprende más de un tercio de los casos
incluso años; aparece a cualquier edad y predomina de miositis y los cambios en la piel pueden preceder
en las mujeres. o seguir a la debilidad muscular en varios meses o
Los pacientes comienzan a notar debilidad de los años. Las lesiones cutáneas son específicas de la DM,
músculos proximales de los miembros, especialmen- aunque las consideradas como patognomónicas son
te caderas y muslos, y experimentan limitaciones el clásico “eritema en heliotropo” y las “pápulas de
para alzar objetos sobre sus cabezas, colocarlos en Gottron”. El primero es una lesión edematosa de

141
color eritematopurpúreo, que se localiza sobre los fectuosa de la prednisona. La calcinosis se presenta
párpados, algunas veces sólo sobre el borde del pár- en casi la tercera parte de los casos juveniles y se
pado superior y otras sobre todo el párpado, lo que asocia con excreción urinaria elevada de ácido
confiere la apariencia de “ojo de búho o lechuza”. Las g-carboxiglutámico.
pápulas de Gottron constituyen lesiones papuloeri- En los pacientes tratados resistentes a la predni-
tematosas elevadas y ocasionalmente descamativas, sona, el metotrexate parece reducir la morbilidad y
situadas en el dorso de las manos y articulaciones mortalidad de este grupo de enfermos.
metacarpofalángicas e interfalángicas, así como en
los codos y rodillas. Miositis con cuerpos de inclusión
A veces aparecen telangiectasias y lesiones Se caracteriza por cambios patológicos de vacuolas
poiquilodérmicas. El eritema casi siempre deja atro- definidas, que contienen depósitos de sustancia
amiloide, cuerpos de inclusión citoplasmáticos e
fia, vitiligo o una cicatriz.
intranucleares y un cuadro clínico típico. Es posible
la degeneración y regeneración de fibras muscula-
Dermatomiositis o polimiositis asociada con neo-
res, pero los infiltrados inflamatorios son escasos o
plasia
nulos. Esta enfermedad es más frecuente en hom-
La miositis asociada al cáncer representa un proble-
bres de edad avanzada, con curso lento y progresivo,
ma diagnóstico difícil y abarca cerca del 8 % de los niveles relativamente bajos de enzimas musculares,
casos de miositis, cuyos cambios en la piel y mús- debilidad muscular distal y asimétrica, con toma
culos no difieren de los observados en los grupos ya precoz y prominente de los flexores de dedos, mu-
descritos. Resulta poco frecuente la asociación de la ñecas y antebrazos, y extensores de los miembros
miositis juvenil y de los trastornos del tejido conec- inferiores. Para algunos autores, los pacientes con
tivo a la neoplasia. Ésta puede preceder el comienzo polimiositis que no responden bien al tratamiento
de la miositis o aparecer dos años después; su inci- con prednisona es posible que tengan una miositis
dencia es mayor en personas de más de 40 a 60 años con cuerpos de inclusión.
de edad.
Las localizaciones habituales corresponden a Polimiositis o dermatomiositis con enfermedad del
mama, ovario, útero o tracto gastrointestinal en mu- colágeno asociada
jeres, y a pulmón, próstata o colon en varones, y La PM, como parte de un síndrome de superposi-
más raramente, a trastornos linfoproliferativos. Hay ción, comprende alrededor de la quinta parte de to-
que hacer al enfermo una historia clínica detallada y dos los casos asociados a diversas enfermedades del
un examen físico cuidadoso de la mama, ginecoló- tejido conectivo, entre las que figuran: esclerosis
gico y rectal, y completarlo con una batería de prue- sistémica progresiva, artritis reumatoidea, enferme-
bas complementarias. La extirpación del cáncer dad mixta del tejido conectivo y lupus eritematoso
pudiera remitir o mejorar la miopatía, aunque ocurren como las más comunes.
remisiones espontáneas con independencia de la
evolución del tumor. Exámenes complementarios
Las enzimas musculares séricas aumentan como re-
Miositis juvenil sultado de la necrosis del músculo, sobre todo la
El patrón de debilidad muscular en estos pacientes creatinofosfocinasa (CPK), que es el indicador más
se asemeja al del adulto, pero tiene varios rasgos específico de daño muscular, porque se limita al
característicos, entre los cuales sobresalen la apari- músculo y tejido neural. En dependencia del grado
ción frecuente de vasculitis y calcinosis. Además, de lesión del músculo, la CPK y sus isoenzimas es-
los dos sexos se afectan por igual y en cerca del 90 % tán elevadas, particularmente en la DM, puesto que
de los casos la piel está lesionada. evoluciona con infartos musculares múltiples. Otras
La vasculitis daña particularmente la piel, los enzimas relacionadas con el músculo, como aldolasa,
músculos y el tracto gastrointestinal, donde produce transaminasas (TGO y TGP) y LDH también son
ulceración de la mucosa (a veces se perfora) y malab- indicativas de afectación (aunque menos específi-
sorción, que puede conducir a una absorción de- cas que la primera).

142
La eritrosedimentación está acelerada en un cier- Diagnóstico
to número de casos, y las α−2 globulinas aumenta-
Diagnóstico positivo
das, y es posible encontrar mioglobina en la orina
cuando la destrucción muscular tiene un carácter Los criterios diagnósticos de la enfermedad deben
agudo y extenso, pero muy raramente la PM aguda plantearse ante un paciente con:
da lugar al síndrome completo de rabdomiólisis y • Debilidad muscular
mioglobinuria. En cerca del 40 % de los pacientes, • Rash
la electromiografía (EMG) muestra una irritabilidad • Enzimas elevadas
muscular acompañada de la típica tríada miopática • Biopsia
de los potenciales de acción de la unidad motora. • Electromiograma que muestra:
Respecto a las reacciones autoinmunes, se ha iden- • Fibrilación espontánea, potenciales positivos
tificado un gran número de autoanticuerpos contra agudos e irritabilidad insercional aumentada
antígenos nucleares y citoplásmicos, que facilitan la • Potenciales polifásicos cortos durante la con-
diferenciación entre las MII, algunos de los cuales tracción muscular
no son específicos de miositis y otros sí. Entre los
• Descargas de alta frecuencia, bizarras y re-
primeros figuran los autoanticuerpos contra ribonu-
petitivas, durante la estimulación mecánica
cleoproteína nuclear (anti–RNPn) y anti–Sm, fre-
cuentes en la PM asociada a lupus eritematoso; los
anticuerpos contra antígeno nuclear tímico (PM–1, Diagnóstico diferencial
también denominado PM–Scl) y anti–Scl-70, obser- El cuadro clínico clásico de debilidad muscular
vados en miositis concomitante con esclerosis sisté- proximal con lesiones cutáneas, es característico de
mica progresiva; anti-Ro (denominado SS-A) y la DM, pero cuando la piel no está comprometida,
anti-La (conocido como SS-B), particularmente co- es necesario descartar otras enfermedades a través
munes en el síndrome de Sjögren y lupus eritemato- de una correcta valoración clínica y de los exáme-
so; y el anticuerpo contra una ribonucleoproteína nes complementarios pertinentes, que se agrupan
nuclear (anti-U1RNP), típico de la enfermedad mix- como sigue:
ta del tejido conectivo. Por otro lado, los autoanti-
cuerpos específicos de miositis comparten la a) Debilidad muscular progresiva subaguda o cróni-
propiedad de reaccionar contra antígenos nucleares
ca, entre cuyas causas figuran:
de moléculas ligadas a la síntesis de proteínas. De
• Enfermedades degenerativas de la vía motora
ellos, hay 3 grupos bien definidos: autoanticuerpos
voluntaria (particularmente la esclerosis late-
contra aminoacyl-tRNA sintetasa (anti-tRNA), con-
tra partículas reconocedoras de señales (anti SRP) y ral amiotrófica).
contra antígeno nuclear Mi-2. • Distrofias musculares.
El diagnóstico se confirma con la biopsia muscu- • Miopatías metabólicas (enfermedades por alma-
lar, que debe tomarse de dos músculos afectados y cenamiento de glucógeno).
mediante el seccionamiento seriado discontinuo de • Miopatías endocrinas (hipertiroidismo, mixede-
todas las muestras, la cual mostrará los elementos ma, hipercorticismo, hiperparatiroidismo, hipo-
característicos de degeneración y regeneración de paratiroidismo, amiotrofia diabética).
las fibras musculares e inflamación linfocítica. b) Debilidad muscular con fatiga inducida por ejer-
Las imágenes de RMN son útiles para identificar cicio intenso:
los sitios del músculo dañado y seleccionar el lugar • Enfermedades de la unión neuromuscular (mias-
idóneo para la biopsia. Ha de tenerse en cuenta que tenia grave y síndrome de Lambert-Eaton).
los músculos utilizados recientemente en EMG o
c) Debilidad muscular aguda:
inyecciones intramusculares, no deben ser escogi-
• Neuropatías agudas generadas por el síndrome
dos para la biopsia por el riesgo de obtener resulta-
dos falso positivos, pues aunque esta prueba verifica de Guillain-Barré, neurotoxinas y alcoholismo.
el diagnóstico en las dos terceras partes de los ca- • Trastornos electrolíticos: hipocaliemia, hiper-
sos, es posible que no arroje alteración alguna en natremia e hiponatremia, hipercalcemia, hipo-
cerca del 10 % de los afectados. calcemia, hipofosfatemia e hipomagnesemia.

143
d) Miopatía inducida por drogas: actividad. Después de este período inicial, se ad-
• Entre las más frecuentes se encuentran: anfote- ministra una dosis diaria única en la mañana para
ricín B, ácido epsilón-aminocaproico, cocaína, minimizar sus efectos colaterales y se disminuyen
heroína, diuréticos, azathioprina, zidovudine 5 mg cada 4 semanas hasta llegar a una dosis de
(que se utiliza en el tratamiento del SIDA), mantenimiento de 5 o 10 mg diarios, durante 6 a
cimetidina, cloroquina, D-penicilamina, colchi- 8 meses.
cina, ciclosporina, hormona del crecimiento, En pacientes con formas moderadas de la enfer-
ketoconazol, fenitoína, hipolipemiantes, inhi- medad se puede ensayar el uso de glucorticoides en
bidores de la enzima HMG-CoA reductasa y días alternos. Se ha informado que la aplicación EV
fibratos. de 0,5 a 1 g/día de metilprednisolona por 1 o 3 días,
e) Dolor al movimiento y sensibilidad a la palpa- repetida a intervalos de 1 a 4 semanas, es más ven-
ción muscular: tajosa que la prednisona oral diaria, debido a que
Estas manifestaciones ocurren en pacientes con logra una remisión más rápida, con menor toxicidad
estados depresivos (neuróticos, histéricos). El medicamentosa y una frecuencia mayor de remisio-
diagnóstico diferencial incluye: nes. Entre los efectos indeseables más severos de la
• Polimialgia reumática. terapia con esteroides figuran: aspecto cushingoide,
• Fibrositis y fibromialgia. fracturas por compresión o necrosis avascular, cata-
• Síndrome de fatiga crónica. ratas e infecciones.
Los inmunosupresores se utilizan en pacientes con
• Síndromes paraneoplásicos.
respuesta no satisfactoria después de 3 meses de tra-
Pronóstico tamiento con prednisona, o en sustitución de los es-
teroides cuando ocurre una miopatía esteroidea como
La supervivencia de los pacientes con miositis ha
resultado de la terapéutica. No obstante, existen evi-
mejorado en los últimos tiempos y en casi el 75 % de
dencias de que el resultado mejora cuando se adi-
ellos llega a 8 años después del diagnóstico. El pro- ciona un agente inmunosupresor desde el inicio del
nóstico depende de que la edad sea mayor de 45 años tratamiento con glucocorticoides, usualmente me-
al momento de su detección, exista una lesión pul- totrexate o azathioprina, que están indicados en
monar o cardíaca, una enfermedad maligna asocia- particular en enfermos con rápido deterioro, dificul-
da o efectos terapéuticos indeseables. Los afectados tad para tragar o lesión pulmonar intersticial. El
por la forma juvenil tienen, por lo general, un buen metotrexate se administra en dosis inicial de 7,5 a
pronóstico. 10 mg cada semana, por vía oral, y se va aumentan-
Las remisiones totales y permanentes son poco do poco a poco hasta 25 mg.
comunes y la mortalidad global es de aproximada- A medida que se eleva la dosis de metotrexate, la
mente 20 % después de un quinquenio. Cerca del 25 de prednisona se va reduciendo; pero hay que tener
a 30 % de los enfermos evolucionan hacia la croni- en cuenta sus efectos secundarios, sobre todo la toxi-
cidad, con debilidad muscular residual, y alrededor cidad hepática y la pulmonar. La combinación de
del 50 % se recupera en los 5 años posteriores a la prednisona y azathioprina alcanza resultados fun-
aparición de los síntomas. cionales mejores y se requieren dosis menores de
prednisona. La dosis inicial de azathioprina es de 25
Tratamiento a 50 mg/día, que se aumenta gradualmente hasta un
Los glucocorticoides constituyen por lo general el máximo de 200 mg/día para minimizar su toxici-
tratamiento de elección. Se debe comenzar con pred- dad, que incluye trastornos gastrointestinales, depre-
nisona, 1 a 2 mg/kg/día, en forma fraccionada du- sión de la médula ósea e infecciones.
rante 3 meses o hasta que aparezca mejoría clínica o Los agentes alquilantes, como ciclofosfamida y
los niveles de enzimas musculares se normalicen. clorambucil se han usado poco por sus efectos tóxi-
La determinación enzimática periódica es fundamen- cos.
tal para monitorear el tratamiento. No obstante, las En la miositis resistente a los esteroides se han
enzimas a veces son negativas en la enfermedad cró- utilizado otras opciones, tales como: ciclosporina A,
nica con atrofia, a pesar de que ésta se encuentre en tacrolimus, inmunoglobulina EV, plasmaféresis,

144
leucoféresis, irradiación corporal total e irradiación Durante la fase aguda de la afección se recomien-
ganglionar, con resultados variables. da reposo en cama e iniciar la fisioterapia tan pronto
La inmunoglobulina EV en dosis alta se ha em- como se controle el componente inflamatorio, dado
pleado con buenos resultados, sobre todo en las formas que ésta influye decisivamente en la rehabilitación
juveniles de la enfermedad; sin embargo, la mejoría de dichos enfermos; se comienza con ejercicios pa-
suele ser transitoria y el medicamento es costoso.
sivos para evitar contracturas musculares y se conti-
Cuando las lesiones cutáneas no desaparecen con
núa más tarde con los de resistencia activa y otras
las restantes manifestaciones, puede prescribirse
medidas físicas útiles para la recuperación de la fuer-
hidroxicloroquina en dosis de 200 a 400 mg/kg/día,
con vigilancia oftalmológica. za muscular.

145
19

SÍNDROMES VASCULÍTICOS

Bajo este nombre se incluye un amplio espectro de • Vasculitis relacionadas con enfermedades in-
enfermedades que tienen en común el poseer distin- fecciosas.
tos grados de infiltrado inflamatorio en los vasos • Vasculitis relacionadas con neoplasias.
sanguíneos, lo que se traduce por necrosis de inten- • Vasculitis relacionadas con enfermedades del
sidad variable de la pared vascular capaz de ocasio- tejido conectivo.
nar estrechamiento, oclusión o trombosis de la luz • Vasculitis relacionadas con otras enfermeda-
del vaso, o de favorecer la formación y ruptura de des subyacentes.
aneurismas. Todo lo anterior lleva aparejado la is- • Deficiencias congénitas del sistema del com-
quemia hística de la zona irrigada por el vaso dañado. plemento.
Las vasculitis y sus consecuencias pueden ser la D. Otros elementos.
expresión primaria de una enfermedad o por el con- • Síndrome mucocutáneo de ganglios linfáticos
trario, ser un componente secundario de cualquier (enfermedad de Kawasaki).
otra afección primaria. • Enfermedad de Behçet.
Durante muchos años estas vasculitis necrosantes • Tromboangeítis obliterante (enfermedad de
fueron clasificadas bajo el término genérico de po- Buerger).
liarteritis nudosa, hasta la década de los años 50 en • Vasculitis aisladas del sistema nervioso cen-
que Zeek hizo notar que desde la descripción inicial tral.
de la entidad por Kussmaul y Mail en 1886, ese tér- • Eritema nudoso.
mino diagnóstico había sido una especie de “cajón • Eritema multiforme.
de sastre” donde se incluían todas las vasculitis. • Vasculitis diversas.

Clasificación Etiopatogenia
A. Grupo de la poliarteritis nudosa. En todas las vasculitis se invocan mecanismos in-
• Poliarteritis nudosa. munológicos, en especial los depósitos de inmuno-
• Angeítis alérgica granulomatosa (enfermedad complejos circulantes, que han sido considerados
de Churg-Strauss). directa o indirectamente responsables de muchas
• Síndrome de superposición. formas de la afección. No obstante, estos inmuno-
B. Vasculitis granulomatosa. complejos circulantes en algunas vasculitis pueden
• Granulomatosis de Wegener. ser un epifenómeno secundario de cualquier otro
• Arteritis de células gigantes. mecanismo primario subyacente, capaz de producir
• Arteritis craneal o temporal. daño vascular e hístico.
• Arteritis de Takayasu. En muchas oportunidades la composición del su-
• Lesiones inmunoproliferativas. puesto inmunocomplejo circulante se desconoce y
C. Vasculitis por hipersensibilidad. la frecuencia con que ésta se determina es variable;
• Púrpura de Schönlein-Henoch. sin embargo, en algunos casos se han identificado el
• Enfermedad del suero y reacciones de tipo antígeno de la hepatitis B e inmunoglobulinas en la
enfermedad del suero. zona inflamada de la pared arterial, junto con la

146
presencia de complejos de anticuerpos virales y dis- dos los casos. El examen histológico muestra el daño
minución del complemento sérico. Esta combinación vascular en alguno de los estadios señalados antes.
de hallazgos es una evidencia fuerte de que la pa- Músculos. El examen microscópico revela con
togenia esté mediada por inmunocomplejos. Otras gran frecuencia las lesiones vasculares típicas.
infecciones virales, como las producidas por cito- Articulaciones. Hay lesiones de tipo arterítico en
megalovirus, mononucleosis infecciosa, virus de in- los vasos de la membrana sinovial.
munodeficiencia humana, etc., se han asociado Corazón. Puede encontrarse aumentado de volu-
también con fenómenos de vasculitis que pueden ha- men y presentar zonas de esclerosis y de infarto, así
ber sido causadas por mecanismos inmunológicos. como afección de los vasos coronarios. En el peri-
cardio se halla a veces una pericarditis fibrinosa.
Sistema respiratorio. Las lesiones se localizan en
POLIARTERITIS los vasos bronquiales.
Sistema digestivo. Las alteraciones vasculares se
NUDOSA ubican con preferencia en la unión del meso con el
intestino. También están afectados los vasos pancreá-
Concepto ticos, vesiculares, hepáticos, etc.
Sistema genitourinario. El estudio microscópico
La poliarteritis nudosa (PAN) es una afección clíni- del riñón detecta zonas de infarto o cicatrices. Los
ca caracterizada por inflamación y necrosis que
cortes histológicos muestran toma glomerular con
involucra exclusivamente a vasos arteriales de me-
formación de medialunas epiteliales, adherencias del
diano y pequeño calibre. Es una enfermedad poco
ovillo glomerular a la cápsula de Bowman e infil-
frecuente, con una incidencia de 1 por 100 000, que
trado polinuclear. La lesión vascular no glomerular
afecta al sexo masculino 2:1 en relación con el fe-
afecta fundamentalmente a las arterias interlobula-
menino y que comienza a cualquier edad.
res y arcuatas. En los testículos, próstata, ovarios y
Anatomía patológica útero se encuentran las lesiones arteriales caracte-
rísticas.
Macroscópicamente se encuentran pequeñas nudo- Sistema hemolinfopoyético. En el bazo las lesio-
sidades duras, localizadas en la bifurcación vascu- nes son desde una inflamación de la cápsula hasta
lar, que a veces se palpan. zonas de infarto necróticas.
Las lesiones histológicas se observan en los va-
Sistema nervioso. En el encéfalo se descubren
sos arteriales de mediano y pequeño calibre, en los
alteraciones de tipo isquémico por infarto o de tipo
que la pared necrótica es sustituida por una sustan-
hemorrágico por ruptura de pequeños aneurismas ar-
cia amorfa, eosinofílica, que recuerda la fibrina (ne-
teriales. Los nervios periféricos constituyen la por-
crosis fibrinoide); además, hay un gran infiltrado
ción del sistema nervioso que se afecta con mayor
inflamatorio con predominio de polimorfonucleares.
frecuencia, al extremo de que pueden existir cam-
Algunas veces los cambios histológicos no abarcan
bios histológicos no acompañados de síntomas clí-
toda la circunferencia del vaso y la pared remanente
nicos. La neuropatía es consecuencia de la afectación
está normal o poco dañada. La proliferación fibrosa
de los vasa nervorum; los cambios histológicos va-
de la capa íntima de las arterias y capilares, y las
rían desde poco importantes, como el edema peri-
cicatrices a nivel de la capa media, constituyen el
estadio final de la lesión vascular; en ocasiones se neural o la proliferación de las células de Schwann,
encuentra, además, alguna fibrosis de la adventicia hasta otros más graves, como la neuritis parenqui-
con infiltrado mononuclear que produce engrosa- matosa degenerativa con reacción de las células de
miento del vaso. La coexistencia de lesiones activas Schwann, que en casos extremos llega hasta la
y curadas en el mismo vaso o en vasos adyacentes fibrosis de las fibras nerviosas.
es un hallazgo exclusivo de la poliarteritis.
Cuadro clínico
Alteraciones orgánicas Las manifestaciones clínicas de la PAN son varia-
Piel. Los nódulos subcutáneos son característicos, bles y extensas; algunas veces los síntomas apare-
pero de aparición tardía y no se les encuentra en to- cen de forma abrupta, pero por lo general la

147
enfermedad se hace patente después de un proceso necrosis hepática de mayor o menor extensión. En
recurrente, como una infección respiratoria o una ocasiones se producen infartos hepáticos, cuya tra-
reacción medicamentosa. En otros casos la afección ducción clínica es dolor en el hipocondrio derecho
de un órgano, como una nefritis o una neuritis, cons- y un roce o frémito en dicha zona.
tituyen la primera evidencia de una poliarteritis. La Sistema genitourinario. Las manifestaciones de
fiebre, astenia, mialgias, anorexia y pérdida de peso, este sistema están presentes en el 75 % de los pa-
pueden constituir los síntomas iniciales. cientes portadores de una PAN. La glomerulonefri-
Manifestaciones en la piel y las mucosas. En al- tis aguda es muy frecuente con hematuria macro o
gunos enfermos aparecen nódulos pequeños en la microscópica y proteinuria, y posible evolución ha-
piel y el tejido celular subcutáneo, aislados o en gru- cia la insuficiencia renal aguda. También ocurren
pos en cualquier parte del cuerpo, o distribuidos en infartos renales y ruptura de arterias intraparenqui-
forma lineal siguiendo el trayecto de los vasos. matosas. Si se lesionan los vasos vesicales se pro-
Las hemorragias subungueales en forma de asti- duce hematuria, que a su vez puede ser señal de una
llas, al igual que los infartos periungueales, son ca- cistitis hemorrágica. Los infartos del testículo son
racterísticos, aunque no están presentes siempre. comunes con gran dolor y atrofia posterior de la glán-
También aparecen otras manifestaciones como ur- dula.
ticaria, rash intenso, livedo reticularis, petequias, La insuficiencia renal es la causa de fallecimien-
edema localizado en la cara, el tronco, las extremi- to en el 50 % de los casos fatales.
dades, etc. Sistema hemolinfopoyético. Aunque la espleno-
Manifestaciones mioarticulares. Son frecuentes megalia no es corriente, en algunos pacientes se de-
las mialgias y artralgias, a veces muy intensas. tecta una pequeña; así como, en un número reducido
Durante su evolución el paciente aqueja debilidad de ellos, aparecen el infarto esplénico o la hemorra-
muscular marcada, acompañada o no de atrofia. gia periesplénica. Las adenomegalias no son pro-
Sistema cardiovascular. La hipertensión arterial pias de la PAN.
(HTA) se presenta aproximadamente en el 55 % de Sistema nervioso. Las alteraciones del SNC se
los casos y evoluciona como una HTA maligna con presentan en una fase tardía de la enfermedad y son
órganos diana en el corazón, el riñón y el cerebro. menos comunes que las del sistema nervioso perifé-
Los síntomas de afectación cardíaca se deben a la rico. Según donde esté localizada la lesión vascular,
oclusión coronaria parcial o total y la insuficiencia se originan cuadros monopléjicos, hemipléjicos,
cardíaca izquierda es consecuencia de la acción de afásicos o convulsiones de tipo jaksoniana. Otras
la HTA sobre el corazón o de un infarto en un pa- veces se producen accidentes vasculares múltiples
ciente previamente hipertenso. Esta insuficiencia que aparecen por brotes, con ubicación variable en
causa la muerte o contribuye a ella en el 17 a 50 % el SNC.
de los casos. La participación del pericardio produ- La irritación meníngea, que remeda a una menin-
ce síntomas de pericarditis seca o con derrame. goencefalitis con los cambios propios en el LCR,
Sistema respiratorio. Los trastornos respiratorios puede ser también expresión de una hemorragia suba-
se traducen por un cuadro bronquítico con tos y ex- racnoidea.
pectoración. Los episodios neumónicos son pasaje- El trastorno neurológico más frecuente es la neu-
ros o progresivos y en ocasiones se acompañan de ritis, ya sea una mononeuritis o una multineuritis
hemoptisis y dolor pleurítico. con toma del mediano, cubital, radial, tibial, o ciático;
Sistema digestivo. Los síntomas digestivos como pero lo habitual es la polineuritis clásica, sensitivo-
dolor abdominal, vómitos y diarreas sanguinolentas, motora y casi siempre circunscrita a los miembros
son generalmente consecuencia de accidentes vas- inferiores. La asociación polineuritis-nefritis debe
culares oclusivos o hemorrágicos por ruptura de un hacer sospechar la enfermedad.
aneurisma. Entre los signos oculares propios de esta dolen-
La afección de la vesícula, el páncreas o el apén- cia están los nódulos coroideos y los desprendimien-
dice simula a veces un ataque agudo de cualquiera tos retinianos, generalmente bilaterales y múltiples,
de esos órganos. La participación del hígado va des- que tienden a solucionarse de forma espontánea y
de una hepatomegalia con o sin íctero, hasta una sin afectar mucho la visión.

148
Exámenes complementarios bronquial y en las lesiones hay gran cantidad de eosi-
nófilos y numerosas células inflamatorias y gigan-
Hemograma. Casi siempre hay anemia ferropénica,
tes en el granuloma.
por los sangramientos (digestivo, hematuria, etc.) o
En la granulomatosis de Wegener el estudio ra-
por trastorno de la incorporación del hierro a la mo-
diológico del pulmón muestra zonas radiopacas den-
lécula de protoporfirina (insuficiencia renal). El leu-
sas y nódulos de tamaño variable, así como zonas
cograma muestra leucocitosis y desviación izquierda.
de cavitación, y en la biopsia del pulmón hay una
Eritrosedimentación. Siempre está acelerada.
vasculitis necrotizante con formación de granulomas.
Conteo de plaquetas. Muestra cifras elevadas.
En algunos casos de artritis reumatoidea con le-
Orina. Se puede encontrar hematuria macroscó-
siones ulceradas y neuropatía periférica suelen en-
pica o microscópica, proteinuria, piuria o cilindruria.
contrarse nódulos reumatoideos prominentes y un
Proteínas plasmáticas. Hay aumento de las glo-
título elevado de factor reumatoideo.
bulinas, con inversión del índice serina/globulina.
Existen pacientes en los que es necesario hacer el
Electroforesis de proteínas. Muestra hipergamma-
diagnóstico diferencial con el síndrome de Goodpas-
globulinemia.
ture, que presenta síntomas afines con la poliarteri-
Antígeno de superficie para hepatitis B (HBsAg).
tis como la fiebre, los síntomas generales y la
Es positivo en el 30 % de los pacientes.
participación renal y pulmonar, pero en aquél la he-
Anticuerpos anticitoplasma de los neutrófilos
moptisis tiene un valor primordial para realizar el
(ANCA). Son anticuerpos dirigidos contra ciertas
diagnóstico.
proteínas del citoplasma de los neutrófilos. Sus títu-
los para el tipo P se encuentran elevados en algunos Pronóstico
pacientes portadores de PAN.
El curso de la enfermedad es inexorable hacia la
Complemento sérico. Es normal o está disminuido.
muerte, bien por medio de brotes que evolucionan
Factor reumatoideo. Es positivo en algunos pa-
en forma aguda o de manera lenta y progresiva. Ella
cientes.
sobreviene como consecuencia de fallo renal, por
Estudios arteriales contrastados. Pueden mostrar
causas cardiovasculares o digestivas, como infarto
dilataciones aneurismáticas u otras irregularidades
y perforación de asas intestinales.
vasculares. En el 13 % de los pacientes se ha reportado hasta
Biopsia. Hay que tomar la muestra en algún teji- 5 años de supervivencia sin tratamiento. Este por-
do u órgano afectado, como piel, músculo o testícu- centaje llega hasta el 40 % con el uso de glucocorti-
lo, pues cuando se obtiene de tejidos no dañados coides.
generalmente sus resultados son negativos.
Tratamiento
Diagnóstico
Se han obtenido resultados extremadamente favora-
La poliarteritis debe sospecharse en un paciente por- bles con el uso de glucocorticoides asociados con
tador de un síndrome febril prolongado o crónico, drogas inmunosupresoras. Se recomienda adminis-
acompañado de pérdida de peso y participación trar prednisona en dosis de 1 mg/kg/día, durante el
multisistémica. También hay que sospecharla en un primer mes de tratamiento. En el segundo mes se
portador de un cuadro de polineuritis o mononeuritis utiliza igual dosis, pero en días alternos y del tercer
con HTA y alteraciones renales. mes en adelante se comienza a disminuir poco a poco
El diagnóstico diferencial se realiza con las otras el uso del esteroide para suspenderlo después de unos
enfermedades del tejido conectivo en las que exis- 6 meses de tratamiento; a éste se asocia ciclofosfa-
tan fenómenos de arteritis. Así, el LED se distingue mida en dosis de 2 mg/kg/día, que se reajusta según
con bastante facilidad, pues presenta un síndrome los resultados del conteo leucocitario, el cual no debe
artrálgico febril y es más frecuente en el sexo feme- .
descender de 3 000 por mm3 (3 109/L). El medica-
nino. mento se administra de continuo por un año después
En la granulomatosis alérgica hay participación de la inducción de la remisión y será disminuido de
pulmonar importante, se recogen episodios de asma forma gradual hasta suspenderlo totalmente. Con este

149
esquema se han logrado hasta 90 % de remisiones El segundo estadio se caracteriza por el surgimien-
prolongadas. to de trastornos visuales, inicialmente secundarios a
En pacientes con PAN asociada con antigenemia una neuritis óptica de tipo isquémico o por isquemia
para hepatitis B, se han obtenido buenos resultados con retiniana. Puede haber ceguera unilateral o bilateral
el uso de Vidarabine (antiviral) en combinación precedida por un episodio de pérdida temporal de la
con plasmaféresis, con o sin adición de glucocorti- visión. El tercer estadio se corresponde con las ma-
coides. Igual ha sido favorable el uso de interferón nifestaciones sistémicas y en él se produce la poli-
alfa 2b y plasmaféresis. mialgia reumática, cuadro clínico que se presenta
en forma gradual a lo largo de varias semanas y ca-
racterizado por molestias y rigidez matutina en los
ARTERITIS TEMPORAL hombros, cadera, parte proximal de las extremida-
des, el cuello y el dorso. En los casos leves o inicia-
les los síntomas pueden regresar 1 o 2 horas después
La arteritis temporal (AT), también llamada arteritis de levantarse el paciente por la mañana, para reapa-
craneal, arteritis de células gigantes o enfermedad recer luego de un período de inactividad, pero por
de Horton, es una inflamación de las arterias media- regla general la molestia se hace tan intensa que in-
nas y grandes; involucra una o más ramas de la arte- terfiere las actividades normales del enfermo y lo
ria carótida y muestra predilección por la arteria obligan a guardar cama. Otros síntomas propios de
temporal, de ahí su nombre, aunque se trata de una este estadio son la claudicación de las extremida-
enfermedad sistémica que afecta arterias de múlti- des, infartos, aneurismas y disección aórtica.
ples localizaciones. Está estrechamente asociada a
la polimialgia reumática. Exámenes complementarios
Hemograma. Muestra una anemia normocítica nor-
Anatomía patológica
mocrómica o ligeramente hipocrómica.
La capa elástica interna se encuentra fragmentada y Eritrosedimentación. Está acelerada.
a su alrededor aparecen células gigantes que contie- Conteo de plaquetas. Están aumentadas.
nen en su interior fragmentos de la propia capa. Hay, Fosfatasa alcalina. Se encuentra elevada.
además, zonas de necrosis con desorganización de Electroforesis de proteínas. Muestra hipergamma-
la arquitectura vascular y fibrosis e hiperplasia de la globulinemia.
íntima. En la adventicia se hallan nódulos o placas Inmunoelectroforesis de proteínas. Los niveles de
inflamatorias, en cuyo interior se observan células IgG son altos.
gigantes. Complemento sérico. Se encuentra elevado.
Biopsia de la arteria temporal. Se detectan las
Cuadro clínico alteraciones anatomohistológicas antes descritas. La
La enfermedad se caracteriza por fiebre, anemia, muestra de biopsia debe ser tomada de la arteria tem-
eritrosedimentación acelerada y cefalea, en adultos poral del lado donde hay manifestaciones oculares.
mayores. Además, hay síntomas generales que in-
cluyen astenia, fatiga, anorexia y pérdida de peso. Tratamiento
De manera clásica, los síntomas y signos pasan La AT es sumamente sensible a la terapia esteroidea,
por tres estadios clínicos: en el primero hay un pre- esté o no asociada al cuadro de polimialgia reumáti-
dominio de la cefalea, de carácter terebrante, casi ca. Debe administrarse prednisona en dosis de 40 a
siempre más intensa en un lado de la cabeza y su- 60 mg al día durante un mes. De ahí en adelante se
mamente resistente al tratamiento. Después de 2 o 3 comienza a reducir de manera gradual la dosis de
semanas con cefalea y síntomas generales, los va- ataque hasta llegar a una de 7,5 a 10 mg por día, que
sos temporales se vuelven prominentes y tensos, será la dosis de mantenimiento. Cuando se atiende a
aparecen nódulos dolorosos en su trayecto, y a ve- un adulto mayor, el tratamiento debe hacerse en días
ces pulsan. Es posible la aparición de dolor en el alternos a fin de alejar los efectos indeseables que
cuero cabelludo y claudicación de la mandíbula y la pueden presentarse con el uso prolongado de drogas
lengua. esteroideas.

150
Para evitar recaídas, este fármaco debe mantenerse qué relación directa guardan con la patogenia de la
por un término que oscila entre 1 y 2 años y la eri- entidad.
trosedimentación sirve como indicador de actividad La presencia de granulomas con abundantes cé-
inflamatoria. Es importante saber que a veces se pro- lulas gigantes multinucleadas, particularmente en el
duce un ligero aumento de la eritrosedimentación tejido pulmonar, sugiere hipersensibilidad retarda-
cuando se inicia la reducción de la dosis de ataque da o reacción por cuerpo extraño. No obstante, tam-
del medicamento, lo cual no constituye en modo al- poco hay evidencias directas de que alguno de estos
guno expresión de exacerbación de la arteritis, so- dos mecanismos participe en la patogenia.
bre todo si el paciente permanece asintomático. En los pacientes afectos de granulomatosis de
Wegener se demuestra la presencia de anticuerpos
Pronóstico anticitoplasma de neutrófilo tipo c (c-ANCA), pero
Con el uso de los glucocorticoides el pronóstico es al igual que en otros tipos de vasculitis no hay evi-
generalmente bueno y se logra una remisión com- dencia clara de que estos anticuerpos ocupen un lu-
pleta de la enfermedad en una gran cantidad de pa- gar importante en la patogenia de la enfermedad.
cientes, la cual se mantiene después de haber
Anatomía patológica
suspendido la terapéutica.
El sello distintivo de esta dolencia es la vasculitis
necrotizante que afecta a las pequeñas arterias y
vénulas, con formación de granulomas intra o ex-
GRANULOMATOSIS travasculares.
DE WEGENER En el sistema respiratorio alto, nasofaringe y se-
nos perinasales, es clásica la presencia de inflama-
ción, necrosis y formación de granulomas, con
Descrita en 1931 por H. Klinge y en 1936 por F.
vasculitis o sin ella. En las vías aéreas bajas (pul-
Wegener, es una entidad poco frecuente que se ca-
mones) se halla un infiltrado nodular cavitado, múl-
racteriza por lesiones granulomatosas necrotizantes tiple y bilateral, que en la biopsia siempre revela la
en las vías respiratorias altas y bajas, vasculitis ne- existencia de la típica vasculitis granulomatosa ne-
crotizante en las arterias y venas, tanto pulmonares crotizante. En el aparato bronquial se encuentra
como extrapulmonares, y glomerulonefritis. La en- fibrosis, que a veces produce estenosis importante y
fermedad es rara en pacientes de la raza negra y co- atelectasia.
mienza a cualquier edad, aunque con frecuencia lo En el riñón la histología muestra una glomerulitis
hace después de la cuarta década de vida. No tiene focal y segmentaria, que en ocasiones evoluciona
predilección por sexo alguno. hacia una glomerulonefritis rápidamente progresi-
va. No es frecuente observar la formación de granu-
Patogenia lomas renales.
El mecanismo de producción de la afección no está
esclarecido, pero la participación de las vías respi- Cuadro clínico
ratorias altas y bajas sugiere una respuesta hiper- La enfermedad suele comenzar con síntomas gene-
sensitiva aberrante ante el estímulo de un antígeno rales como fiebre, astenia, anorexia, pérdida de peso,
exógeno o endógeno, que penetra a través de o resi- artralgias y mialgias, y en su evolución aparecen sín-
de en las vías respiratorias superiores. El estafiloco- tomas de otros aparatos y sistemas.
co dorado, cuando habita de forma crónica en la Sistema respiratorio. El paciente se queja de ma-
rinofaringe, ha sido reportado como coadyuvante en nifestaciones respiratorias altas, que se deben a una
múltiples recaídas de la enfermedad, sin embargo, rinosinusitis hematopurulenta, con alteración de la
no hay evidencias de que el microrganismo desem- mucosa nasal o sin ella. Evolutivamente el tabique
peñe algún papel en la patogenia. De igual forma ha nasal se perfora, a veces con la consiguiente defor-
sido puesta en evidencia la existencia de inmuno- midad de la nariz, o la formación de fístulas nasopa-
complejos, pero tampoco ha podido ser demostrada latina o nasorbitaria. Puede producirse también una

151
otitis media como consecuencia de la obstrucción Proteína C reactiva. Está elevada.
de la trompa de Eustaquio. Títulos de anticuerpos anti-citoplasma de neutró-
Junto a las manifestaciones respiratorias altas apa- filo (c-ANCA). Muestra títulos elevados.
recen síntomas respiratorios bajos, como tos y ex- Estudios imagenológicos de pulmones y senos
pectoración mucopurulenta, hemoptisis, disnea y perinasales. Los rayos X de tórax y senos perinasa-
malestar torácico. No son raros los síntomas y sig- les evidencian las alteraciones específicas consisten-
nos relacionados con la obstrucción de las vías aé- tes en áreas radiopacas densas y nódulos de tamaño
reas como expresión de estenosis traqueobronquial, variable en los pulmones, así como zonas de cavita-
producto de cicatrizaciones. No debe olvidarse que ción o radiopacidad de los senos.
en algunas oportunidades el pulmón es afectado por Biopsia. La biopsia de pulmón, obtenida preferi-
infiltrados asintomáticos. blemente mediante toracotomía, revela de manera
Sistema genitourinario. Su participación ocurre invariable la vasculitis granulomatosa. En la biop-
en el 77 % de los enfermos y aunque el daño renal sia de la mucosa nasal también se pone de manifies-
parece latente en algunos casos, con una glomerulitis to la inflamación granulomatosa con necrosis, pero
no siempre vasculitis, y la renal, la presencia de glo-
ligera, proteinuria y hematuria, está claro que una
merulonefritis.
vez ocurrido el empeoramiento de la función renal
sobreviene rápidamente la insuficiencia del órgano, Diagnóstico
sobre todo en pacientes que no llevan tratamiento.
El diagnóstico se sospecha ante un paciente con una
Sistema cardiovascular. En el 8 % de los casos
enfermedad sistémica con participación de las vías
aparece pericarditis, vasculitis coronaria y más ra-
respiratorias altas, bajas o ambas, glomerulonefritis
ramente, miocardiopatías.
y vasculitis, y se confirma mediante los exámenes
Piel. Las lesiones son pápulas, vesículas, úlceras,
complementarios, sobre todo con los hallazgos his-
púrpura palpable o nódulos subcutáneos.
tológicos a través de la biopsia de pulmón, nasal o
El estudio histológico muestra fenómenos de vas-
renal.
culitis, granulomas o ambos.
El diagnóstico diferencial se hace con el granulo-
Sistema nervioso. Se presenta neuritis, ya sea una
ma idiopático de la línea media y las neoplasias de
neuritis craneal o una mononeuritis periférica y más las vías aéreas superiores y para ello ayudan las le-
raramente, una vasculitis cerebral. siones destructivas que comúnmente afectan la piel
Ojos. Se produce conjuntivitis, dacriocistitis, de la cara, lo que no sucede en la vasculitis de
escleritis, epiescleritis granulomatosa, vasculitis de Wegener.
los vasos ciliares y masas retrorbitarias que favore- La granulomatosis de Wegener también debe ser
cen la aparición de proptosis. distinguida de la granulomatosis linfomatoide. En
ésta las lesiones se encuentran localizadas en el pul-
Exámenes complementarios món, piel, SNC y riñones, en los que habrá un infil-
Hemograma. Se detecta anemia y leucocitosis. En trado invasivo de linfocitos y plasmocitos atípicos
el 50 % de los casos aparece eosinofilia. (células linfocitoides y plasmocitoides).
Eritrosedimentación. Está acelerada. En el diagnóstico diferencial también debe incluir-
Conteo de plaquetas. Pueden estar aumentadas en se el síndrome de Goodpasture, pero en éste la he-
los episodios de agudización. moptisis tiene gran valor distintivo. Otras afecciones
Proteínas totales. Muestra inversión del índice que hay que tener en cuenta a la hora de hacer el
serina-globulina. diagnóstico diferencial serán el LED y las infeccio-
Electroforesis de proteínas. Hay hipergammaglo- nes, ya sean bacterianas, micobacterianas o micó-
bulinemia. ticas.
Inmunoelectroforesis de proteínas. La IgA está
aumentada. Pronóstico
Sedimento urinario. Cuando hay participación Hubo un tiempo en que se consideró que la enfer-
renal aparece proteinuria, hematuria y cilindruria. medad siempre tenía una evolución fatal, pero con la
Factor reumatoideo. Es positivo. combinación de glucocorticoides e inmunosupresores

152
se logra mejoría en el 90 % de los casos y remisión Cuadro clínico
en el 75 %. Sin embargo, se produce recaída en
La enfermedad suele iniciarse, al igual que otras
aproximadamente la mitad de los que logran remi-
vasculitis, con síntomas inespecíficos, tales como
sión, en un tiempo que fluctúa entre menos de un
fiebre, astenia y pérdida de peso. En su evolución se
año y 15 a 20 años.
recogen antecedentes de infecciones respiratorias y
Tratamiento ataques de asma bronquial.
Con elevada frecuencia se encuentran elementos
El tratamiento de la granulomatosis de Wegener es que permiten plantear la existencia de una insufi-
el mismo que se emplea en la poliarteritis nudosa. ciencia cardíaca consecutiva a una miocarditis. Hay
afectación cutánea, pues a veces aparecen púrpura y
nódulos cutáneos o subcutáneos localizados en el
ANGEÍTIS ALÉRGICA cuero cabelludo, el tronco o las extremidades. Tam-
bién pueden aparecer erupciones urticariformes o
GRANULOMATOSA edemas indurados. El sistema hemolinfopoyético
participa con esplenomegalia ligera y adenopatías
O ENFERMEDAD pequeñas. La toma renal no es frecuente y cuando
DE CHURG-STRAUSS se presenta es menos severa que en la PAN. El siste-
ma nervioso participa con falta de atención y con-
centración, convulsiones, accidentes vasculares
Descrita en 1951 por Churg y Strauss, es una enfer- cerebrales o síntomas polineuríticos.
medad que se caracteriza por presentar una vasculi-
tis granulomatosa de múltiples órganos y sistemas y Exámenes complementarios
por mostrar gran predilección por el pulmón. Es poco Hemograma. Hay una gran leucocitosis y en el leu-
frecuente en nuestro medio, aparece alrededor de la cograma, una eosinofilia importante.
cuarta década de la vida con preferencia en el sexo Eritrosedimentación. Está acelerada.
masculino en una relación de 1,3:1. Sedimento urinario. Se encuentra albuminuria y
hematuria, si existe participación renal.
Patogenia Rx de tórax. Se observan infiltrados pulmonares
Es desconocida pero su fuerte asociación con el asma recurrentes que a veces toman el aspecto de una
bronquial, sus manifestaciones anatomohistológicas neumonitis intersticial.
que sugieren la existencia de un fenómeno de hiper- Biopsia. Muestra los hallazgos típicos antes des-
sensibilidad y su gran similitud en muchos aspectos critos.
con la PAN, apuntan hacia un fenómeno inmunoló- Otros exámenes humorales que pueden indicarse
gico aberrante. generalmente tienen resultados muy similares a los
de la PAN.
Anatomía patológica
Las alteraciones anatomohistológicas son casi simi- Diagnóstico
lares a las encontradas en la PAN, con algunas dife- El diagnóstico positivo se sospecha por el cuadro
rencias, tales como: clínico y se confirma con los exámenes complemen-
tarios, específicamente la biopsia, que mostrará las
• Participación pulmonar importante. alteraciones anatomohistológicas típicas de la enfer-
• Involucra, además de las arterias de mediano y medad.
pequeño calibre, a los capilares y vénulas. El diagnóstico diferencial se hará con la PAN, la
• El granuloma puede estar presente en los teji- granulomatosis de Wegener, la sarcoidosis y la
dos, además de en las paredes vasculares. aspergilosis broncopulmonar.
• Hay numerosas células inflamatorias y gigantes
en el granuloma. Pronóstico
• Hay infiltrado eosinofílico importante en las le- Es pobre y se reporta una supervivencia de 5 años en
siones. el 25 % de los pacientes sin tratamiento. Las causas

153
de fallecimiento están en relación con procesos car- La lesión anatomopatológica típica es la presen-
diovasculares o pulmonares. Con el uso de los glu- cia de vasculitis en los vasos pequeños, sobre todo
cocorticoides el pronóstico ha mejorado y se logran las vénulas, aunque las arteriolas y los capilares par-
supervivencias a los 5 años hasta en el 50 % de los ticipan con cierta frecuencia. Esta vasculitis está
casos. caracterizada por una leucocitoclastia, término que
quiere significar que los desechos de los neutrófilos
Tratamiento
han infiltrado la circunferencia del vaso en los esta-
El medicamento de elección es la prednisona, en dios agudos. En los subagudos o crónicos hay pre-
dosis de 40 a 60 mg por día. En aquellos pacientes
dominio de las células mononucleares y en ciertos
en los que el esteroide falla o que se presentan con
subgrupos se ve infiltración por eosinófilos. Los eri-
un cuadro clínico fulminante, se utiliza la ciclofos-
trocitos se escapan de los vasos dañados y se produ-
famida en igual dosis que para la PAN.
ce una púrpura palpable. Es característico que la
mayoría de las lesiones vasculares muestren el mis-
mo tiempo de evolución.
SÍNDROME
DE SUPERPOSICIÓN Patogenia
Los depósitos de inmunocomplejos han sido consi-
En muchos pacientes portadores de una vasculitis derados tradicionalmente como el mecanismo inmu-
sistémica los síntomas y signos no pueden ser in- nopatogénico de este tipo de vasculitis, sin embargo,
cluidos en ningún cuadro clínico específico, ya que no han sido establecidas pruebas evidentes de que
se presentan síntomas superpuestos de poliarteritis, éste sea el caso para todos los subgrupos. El grupo
angeítis alérgica, granulomatosis de Wegener, arte- de las vasculitis con predominio cutáneo se subdivi-
ritis de Takayasu y vasculitis por hipersensibilidad. de de manera empírica en dos subgrupos, según el
Este subgrupo tiene como base una vasculitis sisté- origen del antígeno sensibilizante; en el primero el
mica con todas sus potencialidades para producir antígeno es extraño al huésped y en el segundo es
lesiones multisistémicas irreversibles. El diagnósti- endógeno.
co, el pronóstico y el tratamiento son similares a los
de la poliarteritis nudosa crónica, la angeítis alérgica Cuadro clínico
y la granulomatosis de Wegener.
Lo principal es la presencia en la piel de una púrpura
palpable que, aunque es la alteración característica,
aparecen también otras lesiones, como máculas,
ANGEÍTIS POR pápulas, vesículas, bulas, nódulos subcutáneos, úl-
HIPERSENSIBILIDAD ceras y urticaria crónica. Las lesiones dermatológicas
son a veces pruriginosas, dolorosas o con sensación
urente. Acompañan a las manifestaciones cutáneas
Esta afección, descrita por Zeek y colaboradores en
síntomas generales como fiebre, astenia, anorexia y
1945, también recibe los nombres de vasculitis pre-
dominantemente cutánea y vasculitis cutánea leu- mialgias.
cocitoclástica. Tiene como denominador común la Las lesiones se encuentran comúnmente en la parte
participación de los vasos pequeños de la piel. El baja de los miembros inferiores de los pacientes que
síndrome presuntamente está asociado con una reac- deambulan, y en la región sacra de los encamados,
ción por hipersensibilidad aberrante hacia un antí- debido a la presión hidrostática en las vénulas pos-
geno, tal como un agente infeccioso, una droga o capilares. Puede haber edema y la hiperpigmenta-
cualquier otra sustancia exógena extraña; no obs- ción ocurre en sitios donde las lesiones son crónicas.
tante, en múltiples oportunidades no es posible des- Con independencia de que las lesiones cutáneas
cubrir ningún antígeno y la enfermedad permanece son las predominantes, otros órganos y sistemas tie-
idiopática. nen participación en grado variable.

154
Exámenes complementarios otros órganos o sistemas, además de la piel, se han
empleado diferentes esquemas terapéuticos con re-
No hay exámenes complementarios de laboratorio
específicos para el diagnóstico de esta categoría de sultados variables, ya que a diferencia de las otras
vasculitis. vasculitis, la asociación de glucocorticoides y ciclo-
Hemograma. Muestra leucocitosis y eosinofilia fosfamida no ha tenido la respuesta esperada.
en mayor o menor grado. Cuando un estímulo antigénico es reconocido
Eritrosedimentación. Se encuentra acelerada. como factor precipitante de la vasculitis, hay que
Factor reumatoideo. Puede estar elevado. eliminarlo, e igualmente tratar cualquier enferme-
Título de crioglobulinemia. Por lo general es po- dad subyacente. Si la afección persiste o se acompa-
sitivo. ña de disfunción orgánica progresiva, como sucede
Determinación del complemento. No tiene patro- en las vasculitis asociadas a conectivopatías, debe
nes definidos. instituirse tratamiento como en una vasculitis necro-
tizante. En este caso se utiliza la terapéutica con glu-
Diagnóstico cocorticoides, usualmente con prednisona en dosis
El diagnóstico positivo se sospecha ante un pacien- de 1 mg/kg/día, con la intención de disminuirla rá-
te con una vasculitis cuyas manifestaciones predo- pido, siempre que sea posible, hasta llevarla a la ad-
minan en la piel, y se confirma mediante la biopsia ministración en días alternos y por último, suspender
de ésta donde aparecen las lesiones características. el medicamento.
En los pacientes refractarios al esteroide con dis-
Tratamiento función orgánica o sistémica importante, puede agre-
Muchos casos de vasculitis predominantemente cu- garse la ciclofosfamida, aunque, como ya se expresó,
táneas se resuelven de manera espontánea y otros esta asociación medicamentosa no tiene respuestas
mejoran para al final remitir por completo; en los espectaculares. La plasmaféresis ha sido utilizada
que no ocurre así o que tienen también afectados con algún resultado en casos fulminantes.

155
20

PÚRPURA TROMBOCITOPÉNICA
TROMBÓTICA

Concepto
Las manifestaciones de la PTT se explican por el
La púrpura trombocitopénica trombótica (PTT) es
depósito localizado de trombos plaquetarios y fibrina
un síndrome clinicopatológico caracterizado por
en el endotelio de las pequeñas arterias, arteriolas y
hemólisis microangiopática, trombocitopenia y una
capilares, que son ocluidos como resultado de la
alta frecuencia de disfunción orgánica, en particu-
marcada hiperplasia de la íntima y el depósito de
lar cerebro y riñones, causada por trombosis micro-
fibrina en la región subendotelial. Esto ocasiona una
vascular. Considerada antes como una entidad de
hemólisis microangiopática (anemia hemolítica por
desarrollo rápidamente progresivo y curso fatal, en
trauma mecánico) con la presencia de fragmentos
la actualidad el tratamiento con plasma ha modifi-
de glóbulos rojos, como hematíes “en casco”, trian-
cado la mortalidad, de un 80 % en casos no tratados gulares y trombocitopenia. La hipoxia hística resul-
a menos de 20 % en los casos tratados. Fue descrita tante causa la disfunción orgánica, con mayor
por Moschcowits en 1925, quien la calificó como frecuencia en el cerebro y los riñones.
rara y de particular morfología patológica.
Se conoce también con los nombres de trombosis Anatomía patológica
plaquetaria generalizada, trombosis trombótica di- Desde el punto de vista macroscópico aparecen zo-
seminada, púrpura trombohemolítica trombocitopé- nas de infarto en el cerebro, riñones, intestino, híga-
nica y microangiopatía hiperérgica. do, corteza suprarrenal, etc.
Al microscopio hay una lesión característica: el
Etiopatogenia
depósito de trombos hialinos dentro de la luz de las
La causa de la enfermedad permanece desconoci- pequeñas arterias y capilares, que se muestran lle-
da, aunque algunos mecanismos han sido implica- nos de material hialino, probablemente fibrina y pla-
dos en su patogenia, como son: quetas degeneradas. Una sustancia similar puede
verse en la región subendotelial.
1. La inducción de un fenómeno de Schwartzman La microscopia electrónica ha permitido el estu-
generalizado por microrganismos o por endo- dio del material mucopolisacárido encontrado, res-
toxinas, con participación del factor de von ponsable de la agresión al endotelio, que da lugar a
Willebrand y el factor activador de las plaque- la alteración primaria de los vasos, con la gran proli-
tas. feración endotelial que acompaña al trombo. Suelen
2. Una predisposición genética o familiar. observarse microaneurismas de las arteriolas.
3. La deficiencia de sustancias antiagregantes Estudios de inmunofluorescencia muestran la pre-
plaquetarias (por ejemplo, la prostaciclina). sencia de complemento e inmunoglobulinas en las
4. La presencia de complejos inmunes, anticuer- arteriolas, así como el depósito de fibrinógeno.
pos antiplaquetarios, y su asociación con otras
entidades como embarazo, LED, síndrome de Cuadro clínico
inmunodeficiencia adquirida, esclerodermia y La PTT aparece a cualquier edad y sexo, pero pre-
el síndrome de Sjögren, sugieren un origen domina en los adultos jóvenes (entre 20 y 40 años) y
autoinmune. el sexo femenino.

156
Por lo general tiene un comienzo agudo; sin em- Sistema respiratorio. Se limitan a hemoptisis y
bargo, puede estar precedida de pródromos, como excepcionalmente infiltrado inflamatorio.
astenia, cefalea, náuseas, anorexia, artralgias, etc. Fiebre. Es un síntoma común después del inicio
Su presentación clásica se caracteriza por anemia de la enfermedad y por lo general es moderada.
hemolítica, hemorragias, manifestaciones neuroló-
gicas difusas, insuficiencia renal y fiebre. Estos Exámenes complementarios
síntomas y signos cambian, en dependencia de la in- Hemograma. Muestra anemia y leucocitosis, a ve-
tensidad y localización de la lesión microvascular. ces con reacción leucemoide. En la lámina periféri-
Anemia. Hay palidez cutaneomucosa con icteri- ca se observan las alteraciones de los hematíes ya
cia leve. La anemia varía y es ligera o intensa. mencionadas. Pueden verse eritroblastos. Hay reticulo-
Hemorragias. Su presencia es casi obligada, pero citosis.
a veces faltan. Tienen carácter progresivo y se ma- Conteo de plaquetas. La trombocitopenia es casi
nifiestan por petequias, equimosis, epistaxis, hemop- constante y su magnitud generalmente es proporcio-
tisis, melena, hematuria y hemorragias retinianas. nal a la anemia.
La intensidad depende de la cifra de plaquetas, que Medulograma. Hay hiperplasia eritroblástica, y
oscila entre normal y muy baja. en ocasiones megaloblastosis.
Manifestaciones orgánicas. Constituyen la prin- Bilirrubina. Existe aumento de la fracción indi-
cipal causa de muerte. Las más frecuentes son las recta.
neuropsiquiátricas y las renales, usuales cuando la Urea y creatinina. Se elevan desde el inicio pa-
.
trombocitopenia es inferior a 30 109/L (30 000/ ralelamente al fallo renal.
mm3), pero también están involucrados otros apara- Deshidrogenasa láctica. Se eleva como resultado
tos o sistemas. de la hemólisis intravascular.
Manifestaciones neuropsiquiátricas. Se encuen- Fenómeno LE y anticuerpos antinucleares (ANA).
tran en casi todos los enfermos y están presentes en Son positivos en aproximadamente el 20 % de los
el 90 % de los fallecidos, evolucionan por brotes y casos.
muchas veces son los primeros síntomas en apare- Biopsia de piel, músculo, encía y ganglio linfático.
cer. El enfermo muestra confusión, delirio, intran- Muestra las anormalidades microvasculares descri-
quilidad y alucinaciones, somnolencia, estupor o tas antes.
coma. Por lo general son transitorias, alternan con Estudio de la coagulación. El tiempo de pro-
períodos de lucidez y en ocasiones hacen pensar en trombina, el tiempo parcial de tromboplastina, la
un trastorno psiquiátrico primario. Junto a lo ante- concentración de fibrinógeno y los productos de su
rior surgen signos neurológicos focales, como vérti- degradación, son normales o están algo alterados.
gos, parálisis motora, parestesias, afasias, defectos Si estos productos indicaran un consumo de facto-
en los campos visuales y son raras las convulsiones. res de la coagulación, el diagnóstico de PTT sería
El fondo de ojo casi siempre es normal, pero son dudoso.
posibles estasis y más difícil, papiledema. Líquido cefalorraquídeo. Por lo común es nor-
Manifestaciones renales. Son más frecuentes en mal, pero a veces hay un ligero aumento de las pro-
los niños. Se caracterizan por hematuria microscó- teínas, Pandy positivo e incremento del número de
pica, leucocituria, cilindruria y albuminuria. Se ob- células.
serva oligoanuria con azotemia, como expresión de
fallo renal agudo. Diagnóstico
Sistema circulatorio. La oclusión de las arterias La combinación de anemia hemolítica por trauma
coronarias suele ser causa de muerte súbita. El 10 % mecánico, trombocitopenia, manifestaciones neu-
de los enfermos desarrollan una endocarditis trom- ropsiquiátricas y renales, pruebas de coagulación
bótica abacteriana. normales y fiebre, es patognomónica de la PTT. La
Sistema digestivo. Son corrientes la anorexia, náu- biopsia de piel, músculo y encía, confirmarán el diag-
seas, vómitos, diarreas, dolor abdominal secundario nóstico al demostrar las anormalidades arteriolares
a isquemia gastrointestinal o pancreatitis aguda. características.

157
El diagnóstico diferencial se plantea en ocasio- Tratamiento
nes con el LED, la poliarteritis nudosa, y sobre todo
con el síndrome urémico-hemolítico. Este último es Se recomienda como tratamiento óptimo la plasma-
más común en las edades extremas de la vida (niños féresis con plasma crioprecipitado, que es más efec-
y ancianos), cursa con anemia hemolítica por trau- tiva que con el plasma administrado por infusión.
ma mecánico, trombocitopenia e insuficiencia renal, Debe ser agresiva y recambiarse a diario 1,5 veces
pero a diferencia de la PTT raramente presenta mani- el volumen plasmático calculado del paciente. El
festaciones neuropsiquiátricas y es desencadenado plasma crioprecipitado carece del factor von Wille-
con frecuencia por infecciones gastrointestinales brand, razón que lo hace superior al plasma conge-
(Echerichia coli o Shigella). Las lesiones suelen li- lado. La respuesta favorable es señalada por el
mitarse a los riñones y se caracterizan por trombo- aumento de las plaquetas, la ausencia de glóbulos
sis focales de las arteriolas y capilares glomerulares, rojos fragmentados y la disminución de los niveles
con necrosis de la corteza renal. séricos de LDH. El riesgo de recaída se disminuye
Cuando existe papiledema y manifestaciones neu- manteniendo la plasmaféresis durante semanas o
ropsiquiátricas, se habla de la forma seudotumoral
meses.
de la PTT.
Como tratamiento adicional se recomiendan la
Evolución y pronóstico prednisona (100 a 200 mg diarios) y los antiagre-
gantes plaquetarios (ASA, 325 mg diarios; dipirida-
Hasta hace poco esta dolencia era fatal, pero con el
mol, 40 mg diarios). Estos últimos no deben utilizarse
uso adecuado de la plasmaféresis, más del 80 % de
los enfermos logran salvarse. La PTT generalmente .
si el conteo de plaquetas es inferior a 50 109/L
es aguda, pero su curso muchas veces se prolonga (50 000/mm3). La inmunosupresión con vincristina
por días, semanas y hasta meses. o ciclofosfamida ha sido empleada en casos que no
Hay riesgo de recurrencia en 20 a 30 % de los responden a la plasmaféresis.
enfermos que se recuperan de una PTT. La disfun- Si hay recurrencia, se procederá como al comien-
ción orgánica (cerebro, riñones u oclusión corona- zo. La esplenectomía reduce el riesgo de recaídas
ria) es la mayor causa de muerte de estos pacientes. frecuentes.

158
21

ENFERMEDAD MIXTA
DEL TEJIDO CONECTIVO

Entre las enfermedades del colágeno se describen del glomérulo y del sarcolema, así como en las pare-
algunas con escasas manifestaciones clínicas o se- des vasculares.
rológicas, que no reúnen los criterios propuestos para Existe proliferación de la íntima e hipertrofia de
el diagnóstico de ninguna de estas afecciones. la media de las arterias pulmonares, renales, corona-
Otros enfermos muestran rasgos distintivos de uno rias y arteriolas de órganos.
o más de los procesos reumáticos, que aunque no
son enmarcados fácilmente en una categoría diag- Cuadro clínico
nóstica en particular, tienen síntomas sugestivos de Las manifestaciones clínicas de la EMTC son diver-
lupus eritematoso diseminado, esclerodermia, poli- sas. Uno de los síntomas más precoces es el fenóme-
miositis y artritis reumatoidea, que justifican una no de Raynaud, en ocasiones persistente y grave, con
denominación especial: enfermedad mixta del teji- aparición de gangrena en las puntas de los dedos.
do conectivo (EMTC). De modo que, descrita por Casi todos los pacientes tienen artralgias, mialgias y
Sharp en 1972, constituye un síndrome de superpo- fatiga; en algunos el comienzo es agudo con fiebre y
sición caracterizado por la combinación de elemen- a veces aparece un síndrome febril como expresión
tos clínicos y humorales correspondientes a los cardinal de la enfermedad. Cerca de las dos terceras
citados trastornos y la presencia de títulos muy al- partes experimentan una artritis parecida a la reu-
tos de anticuerpos circulantes contra una ribonu- matoidea, aunque usualmente sin erosión ósea y no
cleoproteína nuclear, ahora referida como antiU1- deformante.
RNP, que permite distinguir a estos pacientes de los La afectación cutánea recuerda la observada en el
que padecen otras enfermedades reumáticas y defi- lupus eritematoso o en la polimiositis, pero la más
nirla como entidad clínica independiente. característica es la esclerodactilia, con tumefacción
Se presenta en cualquier raza o latitud y afecta de los dedos en forma de salchicha y aumento de
con mayor frecuencia a la mujer (80 %) alrededor volumen del dorso de las manos. Los cambios escle-
de la cuarta década de la vida, aunque se ve tam- rodérmicos se limitan casi siempre a las extremida-
bién en niños y viejos. des distales y a veces a la cara. No son raras las
telangiectasias y la calcinosis.
Etiopatogenia Más de la mitad de los casos presentan miositis,
La EMTC tiene una patogenia antoinmune deter- dada por una miopatía proximal con dolor a la pal-
minada por trastornos de la inmunidad humoral y pación y debilidad, niveles elevados de enzimas
reflejada en la positividad de inmunocomplejos musculares, así como cambios electromiográficos e
circulantes (ANA, anti RNP, anti U1–RNP). Los tí- histológicos en la biopsia muscular, similares a los
tulos altos y la especificidad del anticuerpo contra que se aprecian en la polimiositis.
U1–RNP le confieren individualidad clínica a esta La afectación gastrointestinal ocurre aproximada-
entidad. Estos anticuerpos se asocian con HLA–DR4, mente en el 70 % de los casos y se asemeja a la de la
pero no con DR2 y DR3 como ocurre en el LED. esclerodermia; lo más común es la disfunción esofá-
Las tinciones con inmunofluorescencia han de- gica, que consiste en una disminución del peristal-
mostrado depósitos granulares de inmunoglobulina tismo en sus dos tercios inferiores con reflujo, aunque
y complemento (IgG, C3 y C4) en la membrana basal estos hallazgos pueden ser asintomáticos.

159
En un número elevado de pacientes (cerca del gicos; no obstante, su presencia se sospechará si apa-
80 %) se produce lesión de los pulmones, que redu- recen los síntomas y signos cardinales aun en au-
ce la capacidad de difusión de estos órganos, aun- sencia de los anticuerpos específicos, ya que éstos
que no siempre acompañada de síntomas; pero en pueden manifestarse después. El electromiograma
los casos más graves es posible la aparición de dis- refleja una miopatía inflamatoria.
nea asociada a infiltrados pulmonares visibles en la Los criterios de diagnóstico son:
radiografía de tórax, así como lesión pleural, fibrosis
pulmonar difusa, enfermedad pulmonar intersticial • Criterios serológicos: títulos elevados de anti-
e hipertensión pulmonar; esta última es la causa de cuerpos anti U1-RNP (>1/600).
muerte más frecuente en la EMTC. • Criterios clínicos: entre los que prevalecen ede-
Cerca del 20 a 30 % de los enfermos presentan ma de las manos, artritis, miositis, fenómeno
pericarditis y en ocasiones miocarditis. de Raynaud y acrosclerosis.
Aunque el daño renal no es común en estos enfer-
mos y suele ser ligero, ocurre en aproximadamente Para el diagnóstico definitivo de la enfermedad,
un 25 % de los casos, y la biopsia renal arroja glo- el criterio serológico es imprescindible.
merulonefritis de tipo mesangial, nefritis focal o glo-
merulonefritis membranosa difusa. Evolución y pronóstico
El compromiso del SNC también es poco frecuen- La evolución de la EMTC varía y en algunos pa-
te y la neuralgia del trigémino constituye el hallaz- cientes se hace crónica, ya que por lo común apare-
go neurológico más corriente. A veces aparece cen simultáneamente manifestaciones típicas de
meningitis aséptica, que responde bien a los gluco- LED, esclerodermia y polimiositis o se desarrollan
corticoides y, más raramente, confusión transitoria, en el transcurso de meses o años.
infarto cerebral, neuropatía periférica y psicosis. El pronóstico depende de la naturaleza y grave-
Se encuentran menos linfadenopatías y síndrome dad de la afectación de los órganos principales,
de Sjögren. de manera que en más de la mitad de los casos la
enfermedad evoluciona con carácter benigno y buen
Exámenes complementarios pronóstico, aunque en ocasiones son posibles com-
Entre los hallazgos de laboratorio predominantes plicaciones fatales como resultado de hipertensión
figuran una velocidad de sedimentación globular pulmonar progresiva refractaria al tratamiento, mio-
acelerada, leucopenia e hipergammaglobulinemia carditis y daño renal consecutivo a glomerulonefri-
policlonal. En oportunidades hay anemia hemolíti- tis por complejos inmunes, o a una vasculopatía
ca con prueba de Coombs positiva extrema y trom- similar a la observada en la esclerodermia, capaz de
bocitopenia. conducir a la insuficiencia renal.
Los marcadores serológicos característicos de la La mayoría de los enfermos con EMTC desarro-
EMTC son los anticuerpos contra antígeno RNP (anti llan, unos 5 años después de su presentación, crite-
RNP), con resultados muy positivos y en particular rios clínicos de una de las afecciones del síndrome
del recientemente conocido como anticuerpo contra de superposición, más a menudo, esclerodermia o
U1-RNP (anti U1-RNP). lupus eritematoso. La supervivencia aproximada es
Es posible encontrar títulos altos de anticuerpos de 10 años en alrededor del 80 % de los casos, pero
antinucleares (ANA) con patrón moteado, que sue- varía en dependencia de la enfermedad del tejido
len desaparecer cuando la remisión es prolongada. conectivo que se desarrolle.
El factor reumatoideo resulta positivo en poco me-
nos de la mitad de los casos. Tratamiento
La mayor parte de los pacientes con EMTC respon-
Diagnóstico de bien a la terapia con corticosteroides, aunque en
En los pacientes con EMTC a veces convergen mu- algunos ensayos controlados no ha sido así.
chos síntomas de “superposición”, es decir, de dos o La dosis inicial fluctúa entre 15 y 30 mg/día, con
más afecciones del tejido conectivo, pero el diag- la cual mejoran habitualmente las manifestaciones
nóstico debe basarse en criterios clínicos y seroló- inflamatorias como miositis, artritis, serositis, fiebre

160
o tumefacción de las manos. Las pruebas que reve- Los síntomas ligeros de la afección por lo general
lan anormalidades de la función pulmonar y esofá- desaparecen con el uso de los AINE, pero la forma
gica arrojan mejores resultados con esta dosificación. florida de la enfermedad es comúnmente más resis-
No obstante, las alteraciones esclerodermiformes, tente al tratamiento y la gravedad de la inflamación
como engrosamiento de la piel, esofagitis o fenó- articular puede requerir uno similar al aplicado en
meno de Raynaud, suelen ser persistentes e incluso
el lupus eritematoso.
no responder a la terapéutica.

161
BIBLIOGRAFÍA

1. ADELMAN, D. C. and A. TERR: “Autoimmune 12. GONZÁLEZ FLECHA, B.: “Estrés oxidativo en pa-
disease”, en L. M. Tierney, D. J. McPhee and tología humana. Métodos de estudio de aplica-
M. A. Papadakis: Current Medical Diagnosis ción clínica”, Acta Bioq. Clin. Lat., 1990; 24:
and Treatment, 25th ed., Stamford CT, Appleton 67–74.
and Lange, 1996; 704–6. 13. GRANFORS, K.: “Persistence of yersinia antigens
2. Anónimo: Vademecum Internacional Médica, in peripheral blood cell from patients with
38ª ed., 1997; 664-1358. yersinia enterocolitica 0:3 infection with or
3. BEKARAC ALCALDE, J.: “Inflamación y AINE”, without reactive arthritis”, Arth. Rheum., 1998,
Reumatología, 1993, vol 9(2): 31–5. May; 41(5): 855–62.
4. CALIN, A.: “Diagnostic criteria (new and old) 14. HAHN, B. H.: “Systemic Lupus Erythematosus”,
for the spondyloarthropathies”, Clin. and Exp. en Harrison, Principles of Internal Medicine,
Rheum., 1987; 5: 101–2. 14 ed., CD-ROM, New York, McGraw-Hill,
5. CRONSTEIN, B. N., G. WEISSMANN: “The adhesion 1998.
molecules of inflammation”, Arthritis Rheum., 15. HALLINELL, B., J. M. C. GUTTERIDGE: Free radicals
1993; 36: 147. in biology and medicine, Oxford, Clarendon
6. DAVIES, K. J.A.: “Protein damage and degrada- Press, 1989; 142.
tion by oxygen radicals”, J. Biol. Chem., 1987; 16. HELLMAN, D.B.: “Systemic lupus erythemato-
20: 9895. sus”, en L. M. Tierney, S. J. McPhee and M. A.
7. FERNÁNDEZ, S., R. MUCHINECHI, S. B. GAPSKI, J.
Papadakis: Current Medical Diagnosis and
E. CAMARGO FILHO, S. ADIL MUHIB: “Crise renal
Treatment, 35 ed., Stamford, CT, Appleton and
esclerodermica na doenta mista do tecido
Lange, 1996; 742–45.
conjuntivo: relato de caso”, Rev. Bras.
17. __________: “Arthritis and musculoskeletal
Reumatol., 1997; 37(6): 339–42.
disorders. Diagnosis and evaluation. Pain
8. FONT FRANCO, J., R. CERVERA SEGURA: “Enfer-
Syndromes”, en L. M. Tierney, S. J. McPhee
medad mixta del tejido conjuntivo y síndrome
and M. A. Papadakis: Current Medical Diag-
de solapamiento”, en Rozman Farreras, Medi-
nosis and Treatment, 35 ed., Stamford, CT,
cina Interna, Sección 7. Reumatología y enfer-
medades sistémicas, 13 ed., (CD-ROM),1996; Appleton and Lange, 1996; 719–36.
1102–3. 18. HERRERO BEAMOT, G., E. MARTIN MOLA, J. L.
9. FREIRE GONZÁLEZ, M.: Criterios diagnósticos y RIESTRA WONEGA, J. TORNERO MELINA: Manual
de clasificación de las enfermedades reumáti- de enfermedades reumáticas, Ed. Dogma 1992;
cas, Grama AG., Madrid, 1995; 65–66. 339–48.
10. G ALLIN , J OHN : Inflammation. Fundamental 19. HORIKI, T., G. FUYUNO, M. ISHIIM, T. SASAO, M.
Immunology, 3 ed., New York, Raven Press, SHIBUYA, N. YAGAGIMACHI et al: “Fatal alveolar
LTD, 1993; 1015–32. hemorrhage in a patient with mixed connetive
11. GILLILAND, B. C.: “Systemic sclerosis (Sclero- tissue disease presenting polymyositis features”,
dermia)”, en Harrison, Principles of Internal Intern. Med., 1998; 37(6): 554–60.
Medicine, 14 ed., CD-ROM, New York, 20. ITOH, O., T. NISHIMAKI, M. ITOH, H. OHIRA, A.
McGraw-Hill, 1998. IRISAWA, S. KAISE et al: “Mixed connetive tissue

162
disease with severe pulmonary hypertension and 33. OLIVEROS CID, A., E. MARTÍNEZ VILA, J. CASTI-
extensive subcutaneous calcification”, Inter. LLO: “Enfermedades autoinmunes sistémicas con
Med., 1998; 37(4): 421–5. afectación cutaneoneural”, Rev Neurol, 1997;
21. IKEDA, M., D. T. YU: “The pathogenesis of HLA- 25 (sup 3): 294–308.
B 27 arthritis: role of HLA-B 27 in bacterial 34. PASCUAL, E.: “Persistence of monosodium urate
defense”, Am. J. Med. Sci., 1998, Oct; 316(4): crystal and low grade inflammation in the
257–63. synovial fluid of untreated gout”, Arthritis
22. JAYNE, R. W., M. D. KAZATCHKINE, C. MARTIN- Rheum, 1999; 34: 141–45.
LOCKWOOD: “Molecular pathology of autoimmu- 35. PAUL, S. A., N. C. BRUCE and S. B. KRAMER:
nity in systemic vasculitis”, en C. Bona, K. “Systemic lupus erythematosus in a patient with
Siminovitch, M. Zanet, A. Theofilopoulus: The Reiter’s Syndrome”, Arthritis Rheum, Nov.,
molecular pathology of autoimmune disease, 1983; 26(11): 1405–8.
Halowood Academic publishers, 1993; 425–35. 36. PÉREZ ARELLANO, J. L., S. DE CASTRO: “Etiopato-
23. KALLENBERG, C. G.: “Overlapping syndromes, genia general. Inflamación”, en J. Rodés, J.
undifferentiated connetive tissue disease and Guardia, El Manual de Medicina, Barcelona,
other fibrosing conditions”, Curr. Opin. Masson-Salvat Medicina, 1993; 21–8.
Rheumatol., 1993; 5: 809–15. 37. RALPH SCHUMACHER, H., H. J. KLEPPEL, W. J.
24. K IRCHNER , J. T.: “Reiter’s Syndrome. A KOOPEMAN: Primer on the rheumatic disease,
possibility in patients with reactive arthritis”, 10 ed., Arthritis Foundation; 1993, 209–18.
Postgrad. Med., 1995, Mar; 97(3): 111–22. 38. RESTREPO, M.: “Criterios diagnósticos y clasifi-
25. KUIPERS, J. G. et al: “Detection of Chlamidia cación de las enfermedades reumáticas”, Rev
Trachomatis in peripheral blood leukocytes of Colom Reumat, 1997; 4(4): 180–92.
reactive arthritis patients by polymerasa chain 39. RICHARD, N. M., S. C. RAMZ: “Inflamación agu-
reaction”, Arth-Rheum, 1998, Oct; 41(10): da y crónica”, en Robbins, Patología humana,
1894–5. 6 ed., McGraw-Hill Interamericana, México,
26. L IPSKY , P. E.: “Rheumatoid Arthritis”, en 1997; 27–50.
Harrison, Principles of Internal Medicine, 14 40. ROSENSTEIN, B. N., G. PEDRAZA: “Moléculas de
ed., CD-ROM, New York, McGraw-Hill, 1998. adhesión. Tráfico celular y comunicación
27. MARGAUX, J., G. HAYEM, E. PALAZZO, P. CHAZE- interleucocitaria”, Rev Mex Reumat, 1996; vol.
RAIN, et al: “Clinical usefulness of antibodies to 11(2): 52–8.
U1-RNP proteins in mixed connetive tissue di- 41. SCHUMACHER, JR JR: “Systemic sclerosis”, en The
sease and systemic lupus erythematosus”, Rev. Merck Manual, 17 ed., West Point, PA. Merck
Rheum. Engl. Ed., 1998; 65(6): 378–86. Research Laboratories, 1999; 431–3.
28. MC GILL, N. W., P. A. DIEPPE: “Evidence for a 42. ———: “Systemic lupus erythematosus”, en The
promotes of urate crystal formation in gouty si- Merck Manual, 17 ed., West Point, PA. Merck
novial fluid”, An Rheum Dis, 1991; 50: 558–61. Research Laboratories, 1999; 426–31.
29. MORRISON, E., P. E. MC GILL, J. E. JELLIS: “Viral 43. SCHWARZ, M. I., M. R. ZAMORA, T. N. HODGES, E.
infections: arthritis in the human immunodefi- D. CHAN, R. P. BOWLER, R. M. TUDER: “Isolated
ciency virus (HIV) infected patient”, Baillieres pulmonary capillaritis and diffuse alveolar
Clin Rheumatol, 1995 Feb; 9(1): 133–441. hemorrhage in rheumatoid arthritis and mixed
30. MUKER, J. I., J. G. HARDIN: “Undifferentiated, connetive tissue disease”, Chest, 1998; 113(6):
overlapping and mixed connetive tissue disea- 1609–15.
se”, Am J Med Sci, 1993; 305: 114–9. 44. SHARP, J. T.: “Rheumatoid arthritis”, en R. E.
31. M ÜLLER , W., F. S CHILLING , K. L. S CHMIDT : Rakel, Conn’s Current Therapy, 50 ed., Phila-
Rheumatic therapy in medical practice, Ed. delphia, WB Saunders Company, 1998; 973–
Roche, Basel 1990; 136–38. 79.
32. NIETO, S. E., M. A. AGUAR, C. SEPULVEDA: “An- 45. SIAM, A.R. AND M. HAMMOUDEH: “Staphylococ-
ticuerpos anticélula endotelial en clínica”, Reu- cus aureus triggered reactive arthritis”, Ann
matología, 1993, vol. 9 (2): 37–40. Rheum, Feb., 1995; 54(2): 131–3.

163
46. SONTEIMER, R. D.: “Autoimmune connetive tissue 49. WARREN, R. W.: “Juvenile rheumatoid arthritis”,
disorders. Scleroderma”, en R. E. Rakel, Conn’s en R. E. Rakel, Conn’s Current Therapy, 50 ed.,
Current Therapy, 50 ed., Philadelphia, WB Philadelphia WB, Saunders company, 1998;
Saunders company, 1998; 795–96. 979–83.
47. TOUSSIROT, E., P. PLESIAT, D. WENDLING: “Reiter’s
50. W ESTON , S., M. T HUMSHIRN , J. W ISTE , M.
Syndrome induced by gardenella vaginalis”,
Scand J Rheumatol, 1998; 27(4): 316–7. CAMILLERI: “Clinical and upper gastrointestinal
48. VERSCHUSEN, F., P. HAINAUT, L. DELHAYE, J. J. motility features in systemic sclerosis and
RODZYNEK: “Poststreptococcal reactive arthritis: related disorders”, Am J Gastroenterol, 1998;
a form of acute rheumatic fever in adulthood”, 93(7): 1085–9.
Acta Clin Belg, 1995; 50(1): 28–30.

164
Tercera Parte

ENFERMEDADES DEL SISTEMA


ENDOCRINO Y ALTERACIONES
DEL METABOLISMO
22
REGULACIÓN NEUROENDOCRINA

La homeostasis de los organismos superiores se algunos procesos biológicos, mientras que otros re-
mantiene en virtud de tres sistemas de comunica- quieren de la interacción de varias.
ción extracelular: el sistema nervioso, el endocrino Ellas se dividen en dos grandes grupos: las llama-
y el inmunológico. das peptídicas, categoría que incluye polipéptidos de
La relación entre los sistemas nervioso y endo- gran tamaño, como la hormona luteinizante, péptidos
crino se pone en evidencia porque: de tamaño intermedio como la insulina, péptidos pe-
queños como las hormonas tiroideas y aminoácidos
1. Ambos controlan casi todas las actividades me- como las catecolaminas. Estas hormonas se sinteti-
tabólicas y homeostáticas del individuo, deter- zan mediante un mecanismo similar a la síntesis
minan el crecimiento y desarrollo, influencian proteica; habitualmente el proceso incluye la for-
muchas formas de conducta y regulan la repro- mación de una gran molécula que por sucesivas di-
ducción. visiones libera otras más pequeñas hasta llegar a la
2. La mayoría de las secreciones endocrinas es- forma activa de la hormona. Las demás hormonas
tán controladas directa o indirectamente por el son esteroideas y en ellas existe un grupo constitui-
cerebro, y casi todas las hormonas pueden in- do por un núcleo esteroidal intacto, como ocurre con
fluenciar la actividad cerebral. los esteroides adrenales y gonadales, y otro en que
3. Las células del sistema nervioso y las de las el anillo B del esteroide ha sido roto en varios meta-
glándulas endocrinas tienen atributos en común, bolitos. Estas hormonas son sintetizadas a partir de
como son función secretora y capacidad de pro- precursores más pequeños.
pagación de acciones y de actuar sobre sus cé- Las hormonas viajan en el plasma en su forma
lulas diana mediante mediadores químicos. libre, que es la menor cantidad y a la vez representa
su forma activa, y unidas a las proteínas, como la
Estas razones condujeron a borrar la distinción albúmina considerada una molécula general, y la
entre control neural y control endocrino y favore- transteretina, antigua prealbúmina. Existe, además,
cieron el desarrollo de la Neuroendocrinología, que un sistema de transporte específico para cada una,
se encarga no sólo de la relación entre los sistemas de manera que tenemos: la globulina transportadora
nervioso y endocrino, sino que también incluye el de hormonas tiroideas (TBG), la globulina transpor-
estudio de las secreciones cerebrales con indepen- tadora de esteroides sexuales (SexBG) y la globulina
dencia de que entren o no en el torrente sanguíneo. transportadora de corticoides (CBG); ellas tienen
sitios de unión restringidos y con alta afinidad.
Hormonas Para ejercer su acción, las hormonas peptídicas
Las hormonas intervienen en la reproducción, el cre- se unen a receptores (proteínas relativamente gran-
cimiento y el desarrollo, mantienen el medio inter- des que poseen sitios de unión específicos para cada
no y la producción, utilización y depósito de la hormona) situados en la membrana de la célula; este
energía. Sus efectos son complejos, de manera que complejo hormona-receptor se "internaliza" por
a veces una única hormona puede tener varios y di- endocitosis y va al núcleo, donde se activarán los
ferentes efectos en distintos tejidos y aun en el mis- mecanismos necesarios para que se exprese el efec-
mo en diferentes momentos de la vida, o controlar to hormonal; por su parte, las hormonas esteroideas

167
penetran de forma pasiva a través de la membrana hipotálamo. La proyección central de esta estructu-
citoplasmática, se unen a un receptor citosólico, este ra se llama eminencia media, y junto con la porción
complejo se liga al ADN y origina la activación de alta del tallo constituyen un complejo neurovascular
los genes. de extrema importancia, cuyo componente vascular
Además de la relación funcional descrita, el sis- está constituido por ramas de la carótida interna que
tema endocrino y el sistema nervioso tienen una re- parten del sifón carotídeo; estas ramas se dividen en
lación anatómica que se expresa en la unidad penachos capilares que establecen contacto con el
hipotálamo-hipofisaria. componente nervioso formado por las neuronas
hipotalámicas peptidérgicas, encargadas de la sínte-
Unidad hipotálamo-hipofisaria sis de las hormonas de liberación hipofisarias. Al
El hipotálamo (Fig. 22.1) es la porción del sistema drenar estos capilares al sistema porta hipofisario se
nervioso comprendida entre el cerebro y el tronco produce el transporte de estas últimas sustancias. Así,
cerebral, que forma las paredes anterior, ventral y la eminencia media se relaciona con la regulación
laterales del III ventrículo. Participa en el control de de la hipófisis anterior.
la temperatura corporal, en la ingestión de alimen- La eminencia media es atravesada por fibras de
tos, la motivación, el aprendizaje y la memoria, así las neuronas supraópticas y paraventriculares que
como en la regulación hidromineral, el ciclo van hacia la neurohipófisis, algunas de las cuales
menstrual, el inicio y mantenimiento de la lactancia terminan en ella y en la parte alta del tallo. Se ha
y las contracciones uterinas durante el trabajo de identificado en esta estructura una serie de termina-
parto, entre otras. ciones nerviosas de neuronas monoaminérgicas, así
III Ventrículo como células ependimarias especializadas llamadas
1 Arteria tanicitos, que se extienden desde el III ventrículo
hipofisaria superior
2 hasta la parte más extensa de la eminencia media y
4
5 Adenohipófisis o cuya función es el transporte de hormonas hipotalá-
Infundibulum o lóbulo anterior micas desde el ventrículo hasta las células de la
tuber cinereum adenohipófisis.
3 Vena
Neurohipófisis o La hipófisis se divide en una porción glandular
lóbulo posterior (adenohipófisis o lóbulo anterior), una porción in-
termedia (lóbulo intermedio) y un lóbulo posterior
6 de origen nervioso (neurohipófisis); esta última se
origina del diencéfalo, está formada por terminacio-
nes nerviosas, células amielínicas provenientes de
los núcleos supraóptico y paraventricular, capilares,
tejido de sostén y células semejantes a la glía, no
Lóbulo secretoras llamadas pituicitos. Su secreción princi-
Arteria
intermedio
pal está en relación con la hormona antidiurética
Arteria Arteria (ADH), y oxitocina; además, produce hormona
hipofisaria inferior hipofisaria anterior liberadora de tirotropina (TRH), hormona liberadora
Fig. 22.1. Relaciones del hipotálamo con la hipófisis: 1. neu- de corticotropina (CRH), péptido intestinal vasoac-
rona neurotrasmisora de tipo monoaminérgico que actúa di- tivo (VIP) y neurotensina.
rectamente sobre una neurona peptidérgica hipofisotropa; 2. El lóbulo intermedio se origina de la bolsa de
neurona neurotrasmisora de tipo monoaminérgico; 3 y 4. neu- Rathke, es vestigial en el humano adulto, en el que
ronas que elaboran las hormonas peptidérgicas hipofisotropas;
5. neuronas supraópticas y paraventriculares, que producen no parece tener mucha importancia, aunque se con-
oxitocina y vasopresina; 6. eminencia media. sidera que sus células producen propiomelanocortina
(POMC) y así estimulan las células corticotropas de
El conjunto de neuronas hipotalámicas que da la adenohipófisis.
origen a la neurohipófisis toma forma de embudo, La adenohipófisis constituye el 80 % de la
por lo cual se le ha llamado infundibulum o tuber hipófisis y se origina también de la bolsa de Rathke.
cinereum, estructura que constituye la base del La circulación portal proporciona aproximadamen-

168
te entre 80 y 90 % de la sangre, y el resto es aporta- bre la hormona trópica correspondiente en la adeno-
do por las arterias hipofisarias superiores. hipófisis, excepto la regulación de la secreción de
Cada hormona adenohipofisaria es producida por prolactina, que se produce gracias a la acción de un
un tipo particular de células, conocidas como soma- factor inhibitorio (PIF) y una amina biógena (la do-
totropas (producen somatotropina u hormona de cre- pamina), cuya secreción es favorecida por la TRH.
cimiento), lactotropas (producen prolactina), Otros neuropéptidos son la encefalina, la sustan-
corticotropas (producen corticotropina), tirotropas cia P, el VIP, la neurotensina, los que actúan como
(producen tirotropina) y gonadotropas [célula común neurotrasmisores o como neuromoduladores y sus
para las hormonas foliculoestimulante (FSH) y efectos son mediados a través del SNC o directa-
luteinizante (LH)]. La secreción de estas células se mente sobre la hipófisis. Uno o más neuropéptidos
realiza en forma pulsátil. coexisten con un neurotrasmisor.
El mecanismo de feed back o retroalimentación
Regulación hipotalámica constituye el método más típico de regulación de la
de la hipófisis función de las glándulas periféricas; el sistema fun-
Las neuronas tuberohipofisarias son la vía final co- ciona de la siguiente manera: el nivel plasmático de
mún mediante la cual el sistema nervioso actúa so- una hormona o determinado metabolito (variable
bre la hipófisis anterior, lo que ocurre a través de sensible) modifica la secreción de otra hormona (va-
neurotrasmisores, como acetilcolina, dopamina, se- riable controlable) y existe, además, una señal de
rotonina, epinefrina y norepinefrina, histamina, error que determina el cierre del sistema.
glutamato y ácido gamma amino butírico, los que La liberación de la mayoría de las hormonas, así
actúan sobre la adenohipófisis de la siguiente mane- como de casi todas las actividades homeostáticas,
ra: la dopamina interviene en la secreción de la hor- son rítmicas. Los ritmos endocrinos son regulados
mona liberadora de gonadotropinas (GnRH), que es por el cerebro, en su mayoría tienen un período de
responsable de la inhibición tónica de la prolactina alrededor de 24 horas y son llamados circadianos.
(Prl). La serotonina tiene un efecto inverso en rela- Las neuronas también interactúan con péptidos
ción con estas hormonas, mientras que la norepin- regulatorios, como citocinas derivadas de las glías,
efrina y la histamina estimulan prácticamente todas y con sustancias parecidas a la morfina (endorfinas),
las neurohormonas. También intervienen diversas un tipo particular de encefalinas conocidas como
citocinas. opioides endógenos, los que en sentido más amplio
El control neuroendocrino de la adenohipófisis se sirven para agrupar cualquier péptido con acción
realiza, además, por neuropéptidos encargados de semejante a la morfina. Los primeros fueron la met
convertir la información neural en información y la leu encefalina y hoy en día se describen ade-
bioquímica, lo que ocurre gracias a la acción de neu- más, la alfa endorfina y la beta endorfina. Entre sus
rohormonas como la oxitocina y la ADH, ambas acciones endocrinas están la liberación de somato-
octapéptidos originadas en los núcleos paraven- tropina y prolactina, la inhibición de la liberación
tricular y supraóptico, respectivamente, y se alma- de tirotropina y gonadotropinas, así como la libera-
cenan en la neurohipófisis; la TRH, un tripéptido ción de hormona antidiurética.
que se produce en la vecindad de la comisura ante-
rior y hacia el núcleo hipotalámico dorsomedial; la Regulación neuroaxial
hormona inhibidora de la somatotropina (somatos-
El ganglio cervical superior envía fibras a la hipófisis
tatina), un tetradecapéptido proveniente de la emi-
y por este mecanismo puede ejercer una acción
nencia media; la GnRH o la LHRH, un decapéptido
inhibitoria a través de un efecto vasomotor.
que se localiza en el área preóptica y basal media
del hipotálamo y en el órgano vasculosum lamina Regulación nerviosa autónoma
terminalis; la CRH, polipéptido de 41 aminoácidos;
y la hormona liberadora de somatotropina (GHRH) de las glándulas periféricas
que tiene 44 aminoácidos y se localiza en la región Es evidente en cada glándula una regulación ner-
del núcleo ventromedial. Estas hormonas alcanzan viosa neurovegetativa. La inervación autonómica
el sistema portal hipofisario y ejercen su acción so- está coordinada por centros reguladores superiores

169
situados en el hipotálamo e intervienen en la vaso- nivel del receptor explicarían también la producción
motricidad y en la secreción de las glándulas endo- de tumores hipofisarios, pues los receptores de mem-
crinas. brana desempeñan un importante papel en el inicio
El sistema neurovegetativo interviene en la fun- y mantenimiento de los estados de neoplasias ma-
ción endocrina influyendo sobre los receptores ce- lignas a través de la relación entre oncogenes y pro-
lulares de las hormonas, sobre los tejidos de toncogenes.
almacenamiento de éstas y sobre órganos como el Las lesiones hipotalámicas originan disregulación
hígado, los riñones y el intestino, que son los encar- visceral, una función mental y comportamiento anor-
gados del metabolismo intermediario y de la excre- males, o modificación de la función de la hipófisis,
ción de las hormonas. lo que dependerá de la velocidad con que se desarro-
lle la lesión y del lugar de ésta. Desde el punto de
Respuesta integrada neuroendocrina vista endocrino, las consecuencias serán una defi-
Estímulos procedentes del ambiente (sensitivos, sen- ciencia (como en la diabetes insípida vasopresín
soriales o psíquicos) establecen una interacción con sensible), o excesos hormonales (como en la acro-
órganos del sistema nervioso, lo que origina una res- megalia o hipersomatotropinismo); también las le-
puesta endocrina que puede estar localizada a nivel siones pueden ser orgánicas (tumorales o no) o
central (unidad hipotálamo-hipofisaria), a nivel de funcionales (como ocurre en la amenorrea hipota-
la médula adrenal o a nivel de una glándula periférica. lámica por obesidad o delgadez extremas).
Estímulos sensitivos como la succión del pezón, Algunos medicamentos como la reserpina, las
actúan a través de la médula espinal y originan libe- fenotiacidas, la metoclopramida (producen hiper-
ración de la secreción de prolactina y de oxitocina, prolactinemia con la consecuente amenorrea-ga-
y con ello la bajada de la leche posparto. lactorrea), el ácido valproico (provoca disminución
Estímulos sensoriales: en ciertas especies la se- de CRH-ACTH, lo que es útil en el tratamiento de
creción de las hormonas hipofisarias está influida la enfermedad de Cushing), etc., son capaces de mo-
por la luz, la temperatura, el tacto, el olfato (ferhor- dificar los niveles de hormonas hipofisarias y origi-
monas) y otros estímulos incluyendo el sonido. nar manifestaciones clínicas variables, en ocasiones
Estímulos psíquicos son capaces de inhibir la se- con utilidad terapéutica.
creción de determinadas hormonas, como ocurre en
el retardo del crecimiento secundario a la supresión Neuroendocrinoinmunología
afectiva. La función del sistema inmune está sujeta a modu-
En resumen, la secreción de las hormonas depen- lación hormonal y neural, los linfocitos tienen re-
de de la unión de los siguientes aspectos: estímulos ceptores para GH, Prl y hormonas proteicas, para
externos, la necesidad de los tejidos periféricos y el neuropéptidos y además, las linfoquinas pueden in-
patrón de secreción endógeno; la acción hormonal fluir la función neuroendocrina y los glucocorticoi-
estaría en relación con la interacción entre los nive- des son capaces de inhibir la mayoría de los aspectos
les plasmáticos de hormona libre con su receptor y de la respuesta inmune.
el efecto hormonal sería el resultado de la interac- Se considera que la función gonadal module el
ción o respuesta posreceptor. proceso inmune, lo que podría explicar las diferen-
cias existentes entre los sexos en las enfermedades
Enfermedades neuroendocrinas autoinmunes. Esta nueva rama de la ciencia consi-
Existen trastornos de la función neuroendocrina que dera el efecto de las hormonas y péptidos sobre el
traducen o son consecuencia de alteraciones a nivel sistema inmunológico, así como el efecto de las
del receptor, lo que ocasiona la pérdida del efecto linfoquinas sobre la función neuroendocrina, las
hormonal, como ocurre en el nanismo tipo Laron hormonas y los neuropéptidos producidos por el sis-
(resistencia a la somatotropina); modificaciones a tema inmune.

170
23

ACROMEGALIA

Concepto tico es de 42 a 44 años. La distribución por sexos es


similar.
Es la enfermedad que resulta de la elevación cróni-
ca, inapropiada y mantenida de los niveles circu- Etiología del hipersomatotropismo
lantes de hormona de crecimiento (GH), que per se,
o al generar la síntesis y liberación de los factores 1. Exceso de secreción de GH.
de crecimiento (somatomedinas, IGF-I) promueve a. Hipófisis.
el desarrollo grotesco y exagerado de las partes • Adenoma de células de GH densas y escasa-
acrales y las vísceras en el individuo adulto. Este mente granulado.
crecimiento desproporcionado se acompaña de un • Adenoma mixto de células de GH y Prl.
importante trastorno metabólico resultante de la ac- • Adenoma de células somatomamotrópicas.
ción de la GH sobre el metabolismo intermediario, • Células madres acidófilas.
el proceso normal y programado de la replicación • Adenoma plurihormonal.
celular, así como sobre la función visceral (miocar- • Silla turca vacía.
dio, tiroides, etc.) que confieren a la afección una b. Tumor hipofisario ectópico. Seno esfenoidal o
trascendental relevancia biológica, más allá del nue- parafaríngeo.
vo aspecto estético del paciente. c. Tumor extrahipofisario. Páncreas, pulmón, ova-
rio, mama.
Historia 2. Exceso de secreción de hormona liberadora de
Esta entidad fue descrita en 1886 por el neurólogo hormona de crecimiento (GHRH).
francés Pierre Marie. Veintidos años antes, un a. Eutópico.
patólogo italiano, A. Verga, había reseñado un cua- • Hamartoma hipotalámico.
dro de “desfiguración” en el que predominaba el b. Ectópico.
prognatismo, al cual denominó “prospectasia”, y • Carcinoide.
apuntó que en la necropsia la silla turca estaba agran- • Tumor de células pancreáticas.
dada. La sospecha del origen hipofisario fue comu- • Cáncer de células pequeñas del pulmón.
nicada por Minkowski en 1887, aunque su • Adenona adrenal.
vinculación con una hiperfunción hipofisaria la co- • Feocromocitoma.
municó el neurocirujano Harvey Cushing en 1909.
Etiopatogenia
Epidemiología La inmensa mayoría de los casos de acromegalia
La acromegalia es una enfermedad más bien rara, (99 %) tienen como origen un adenoma hipofisario
cuya frecuencia exacta se desconoce. Alexander, productor de GH.
en 1980, señalaba una prevalencia de cuarenta ca- La patogenia del hipersomatotropismo no está
sos por millón de habitantes, y una incidencia de definitivamente esclarecida, aunque las evidencias
tres nuevos pacientes por millón de personas por más recientes apuntan hacia un trastorno hipofisario
año. primario.
Se presenta entre la tercera y quinta décadas de Observaciones clínicas detalladas y las actuales
la vida y la edad media en el momento del diagnós- técnicas de biología molecular, sugieren que el origen

171
de la acromegalia es primero hipofisario. En contra de Hipersecreción de GH
la teoría del origen hipotalámico está el hecho de que Cuando comienza la hipersecreción de GH, los
la afección se cura tras la adenomectomía quirúrgi- cartílagos de conjunción ya están cerrados, por lo
ca y la población somatotropa adyacente al tumor que no es posible el crecimiento longitudinal; como
no evidencia signos de hiperplasia. Además, la di- consecuencia se produce inicialmente un aumento
námica secretora de GH se normaliza tras la cura- de los tejidos blandos, y con posterioridad, de las
ción quirúrgica. porciones extremas del esqueleto. El grosor cutáneo
Técnicas de biología molecular han sugerido un aumenta de manera generalizada, lo que origina un
defecto genético en una determinada población incremento y profundización de los pliegues. La piel,
somatotropa, en la que se expresa un oncogen especialmente la facial, se vuelve aceitosa por hi-
estimulador o se inactiva un factor local inhibidor persecreción sebácea, los poros se hacen muy no-
de la replicación celular, cuyo resultado es el creci- tables y aparecen manchas e incluso fibromas
miento anárquico generador del adenoma. cutáneos. La hipersudación suele ser importante.
La nariz, los labios, las orejas, la lengua, las ma-
Anatomía patológica nos y los pies, la mandíbula, los arcos superciliares
Los tumores hipofisarios productores de GH suelen y cigomáticos, experimentan un crecimiento progre-
ser macroadenomas (mayores de 10 mm de diáme- sivo, notable en los casos avanzados, lo que da lugar
tro), con alguna frecuencia invasivos, y acidófilos o a un aspecto facial característico con engrosamien-
cromófobos con tinciones clásicas. to y tosquedad de los rasgos, prognatismo, maloclu-
Mediante inmunohistoquímica se distinguen ade- ción dentaria (diastema), y también aumenta de
nomas GH-exclusivos con variedades densa y poco tamaño la cabeza. El paciente nota como progresa
granular, adenomas mixtos productores de GH y Prl, el número de zapatos, guantes, anillos y sombrero
y adenomas plurihormonales que originan varias (Fig. 23.1 a, b y c).
hormonas: GH, Prl y por lo común una glicoproteína. Hay hirsutismo sin masculinización en la mujer y
Los adenomas densamente granulados son acné en individuos más jóvenes.
acidófilos al microscopio de luz con las tinciones
clásicas y las células son similares a las de los so-
matotropos normales. Los numerosos gránulos es-
féricos que tienen GH son electrodensos y su
tamaño es de 300 a 600 nm (nanómetros) y la
gran mayoría mide 350 a 450 nm. Los adenomas
poco granulados son cromófobos al microscopio de
luz; las células no se semejan a las de los somatotro-
pos normales, tienen tamaño y forma variables, y
miden de 100 a 250 nm.

Cuadro clínico
La acromegalia suele comenzar entre las tercera y
quinta décadas de la vida, de una manera insidiosa,
con cambios muy sutiles que frecuentemente pasan
inadvertidos para el paciente y las personas que lo
rodean. Desde el comienzo de la afección hasta su
diagnóstico transcurren a menudo más de diez años.
Las manifestaciones se derivan de los dos hechos
fisiopatológicos fundamentales de la enfermedad: hi-
persecreción de GH y crecimiento tumoral hipofi-
sario, con la posibilidad de compresión de estructuras
vecinas. Fig. 23.1 a Acromegalia: aspecto típico del paciente.

172
raíces vertebrales. Hay aumento de volumen de las
vísceras: corazón, hígado, colon y riñones.
La HTA es más frecuente que en la población
normal. En el 25 a 60 % de los pacientes existen
alteraciones en el metabolismo de los glúcidos y dia-
betes franca, sólo en el 10 %. Las articulaciones se
afectan constantemente, y se ha hablado de una “ar-
tropatía acromegálica” en los casos avanzados. La
cifosis dorsal se produce como consecuencia del cre-
cimiento y compresión en cuña de los cuerpos ver-
tebrales.
Es común la presencia de bocio, en general
multinodular no tóxico, y las manifestaciones psi-
quiátricas reactivas a los cambios morfológicos.
Hay una mayor incidencia de pólipos intesti-
nales.

Manifestaciones compresivas locales( producidas


por el adenoma)
Los adenomas somatotropos, aunque a veces expan-
didos más allá de los confines de la silla turca, no
suelen ser muy grandes; la clínica dependiente de la
hipersecreción de GH hace que se diagnostiquen más
Fig. 23.1 b. facies. temprano, sin dar lugar a que se desarrollen fenó-
menos compresivos. Cuando existen, lo que más
ocurre es la afectación de la vía óptica con una cua-
drantanopsia o hemianopsia bitemporal. Con menor
frecuencia, la expansión hacia abajo produce rinorrea
y toma de los pares craneales tercero, cuarto y sexto.
La cefalea constituye otro hecho local destacable,
más común en la acromegalia que en el resto de los
tumores hipofisarios. La insuficiencia adenohipofi-
saria por compresión tumoral no es habitual. La lí-
nea celular implicada al inicio es la gonadotropa y
por lo general ocurre en adenomas grandes. Sin em-
bargo, las alteraciones menstruales en la mujer, la
impotencia en el varón y la disminución de la libido
en ambos sexos son relativamente frecuentes debi-
Fig. 23.1 c. manos.
do a hiperprolactinemia o a concentraciones eleva-
La debilidad muscular, especialmente proximal, das de GH. En ocasiones hay galactorrea en la mujer.
y la astenia suelen ser muy manifiestas, sobre todo
cuando la enfermedad está avanzada, aunque al prin- Diagnóstico
cipio puede ocurrir lo contrario. Diagnóstico positivo
El crecimiento de los tejidos blandos y los huesos Resulta fácil diagnosticar la acromegalia cuando la
origina a veces compresiones nerviosas en las zonas enfermedad está claramente establecida, sin embargo,
de paso de los nervios, como en la muñeca (síndro- es difícil en sus estadios iniciales. Este hecho hace
me del túnel carpiano o en casos de menor intensi- que su descubrimiento se retrase una media de 5
dad, simplemente parestesias en las manos) y de las a 10 años desde el comienzo de la sintomatología.

173
El diagnóstico se realiza por: alguna frecuencia tiene extensión fuera de la silla
1. Evidencia por la típica apariencia clínica. turca. Rara vez existe un microadenoma.
2. Su confirmación mediante la realización de Cuando la TAC no demuestra un adenoma hipo-
pruebas bioquímicas y técnicas de imagen. fisario, debe descartarse la presencia de un tumor
ectópico productor de GHRH mediante TAC de tórax
Confirmación bioquímica y abdomen, y tránsito intestinal en busca de carci-
Determinación plasmática de GH. valores norma- noide, si los dos primeros estudios resultan ne-
les: 5 ng (nanógramos)/ml en el varón y 10 ng/ml en gativos.
la mujer.
Los niveles elevados pueden responder al stress Exámenes radiológicos que se deben realizar cuan-
de la venopunción o a la coincidencia de uno de los do la determinación de GH no es posible
picos de GH. No obstante, cifras superiores a 50 ng/ml a. Telecardiograma. Hay cardiomegalia con pre-
establecen el diagnóstico. dominio ventricular izquierdo.
Prueba de sobrecarga de glucosa con determina- b. Rx de cráneo y cara. Se encuentra un aumento
ción de GH. Constituye la prueba diagnóstica por en los senos frontales, mastoideos y etmoidales.
excelencia en la acromegalia. En los individuos sa- La silla turca está aumentada de diámetro.
nos la hiperglicemia reduce los niveles de GH por c. Perfilograma. Hay un aumento de las partes
debajo de 2 mcg/L (4 ng/ml), sin embargo, en los blandas. Prognatismo.
d. Columna vertebral. El crecimiento óseo pre-
pacientes con acromegalia, los niveles elevados de
domina en la cara anterior de las vértebras. La
GH no disminuyen, e incluso en la mayoría de los
cápsula articular y los ligamentos relacionados
casos muestran una marcada elevación paradójica
con ella están engrosados y fibrosos. Hay os-
entre los 30 y 120 minutos de tomada la muestra.
teoporosis.
Determinación plasmática de somatomedina C
e. Manos y pies. Las partes blandas están aumen-
(IGF-I). Es quizás, la segunda prueba de elección
tadas. Las falanges distales tienen forma de
en la confirmación diagnóstica tras la PTG-O. Un
punta de flecha y hay una osteoporosis con en-
solo valor elevado establece el diagnóstico de la acro-
grosamiento del periostio.
megalia activa. f. Examen oftalmológico. La campimetría y la
Determinación de GH después de administrar perimetría suelen mostrar alteraciones en el
hormona liberadora de tirotropina (TRH) u hormo- campo visual. En ocasiones se encuentran dis-
nas liberadoras de gonadotropinas (LHRH o GnRH). minuidas.
Las respuestas anómalas se consideran como prue-
bas complementarias y su valor será reconocido sólo Diagnóstico diferencial
cuando haya discordancia en los resultados de las 1. Acromegaloidismo o seudoacromegaloidismo.
pruebas diagnósticas principales. Hay rasgos acromegálicos típicos con GH y
Determinación de GH en el líquido cefalorraquí- somatomedina C normales y sin evidencia de
deo. Se utiliza como índice de expansión supraselar tumor hipofisario. Se especula que un factor
del tumor. humoral distinto de GH, somatomedina C, fac-
Una vez demostrada la acromegalia, se deben tores de crecimiento nervioso, de fibroblasto y
estudiar las demás hormonas hipofisarias: Prl, de plaquetas, sean responsables de la entidad.
ACTH, TSH, LH y FSH. 2. Adolescentes en fase puberal con crecimiento
Otros hallazgos bioquímicos: hiperfosfatemia, rápido, pueden presentar respuesta de la GH a
hipercalcemia, hiperglicemia basal, diabetes o tole- sobrecarga oral de glucosa y TRH similares a
rancia a la glucosa alterada. las características de la acromegalia; no obs-
tante, carecen de rasgos típicos y no existe tu-
Estudios imagenológicos moración hipofisaria.
TAC de hipófisis. Se debe realizar siempre con cor- 3. Otras enfermedades: gigantismo cerebral, prog-
tes coronales y axiales, y si es necesario, sagitales. natismo simple, enfermedad de Paget de crá-
El hallazgo habitual es un macroadenoma que con neo y mandíbula, y paquidermatosis.

174
Tratamiento Tratamiento farmacológico
Se reserva para cuando hay alguna contraindicación
Las tres modalidades terapéuticas actuales en la acro-
para la cirugía, después que ésta haya fracasado o
megalia son cirugía, radioterapia y tratamiento far-
sea parcialmente eficaz, durante el prolongado pe-
macológico. Todas son potencialmente eficaces, pero
ríodo de tiempo en que la radioterapia muestre su
ninguna lo es del todo desde el punto de vista evolu-
efectividad y en el preoperatorio. Esta opción está
tivo si se tienen en cuenta los criterios actuales de
indicada además, cuando el paciente expresa su de-
curación; por lo tanto, la elección del tratamiento
seo de no ser tratado con un método drástico.
debe individualizarse y en la mayoría de los casos
Hoy se dispone de dos tipos fundamentales de
es obligatoria la terapia combinada.
agentes farmacológicos:
• Agonistas dopaminérgicos: bromocriptina.
Tratamiento quirúrgico
• Análogos de la somatostatina: octeotride.
a. La adenomectomía selectiva del adenoma pro-
Bromocriptina. Dosis: 10 a 60 mg 3 veces al día
ductor de GH es la terapia de elección, sobre
por vía oral. Es menos efectiva que el octeotride y la
todo cuando el tumor está circunscrito al área
disminución de la GH a 5 ng/L se alcanza en el 20 %
selar (vía transesfenoidal).
de los pacientes.
b. La cirugía transcraneal se realiza cuando exis-
Octeotride (SMS-201-995). Dosis terapéutica ha-
te crecimiento supraselar.
bitual en la acromegalia: 100 mcg 3 veces al día,
c. La resección del tumor ectópico se efectúa en
por vía subcutánea. La respuesta es individual y la
los casos donde se confirma localización
dosis ha de ajustarse según la supresión de los nive-
extrahipofisaria.
les de GH. La reducción del volumen tumoral se ha
comunicado entre el 30 y el 50 % de los casos.
En el posoperatorio inmediato se administra
hemisuccinato de hidrocortisona (100 mg cada 8 h
Tratamiento sintomático
por vía parenteral) durante 48 h; luego se sustituye
Los acromegálicos requieren tratamiento sustituti-
por glucocorticoides por vía oral en dosis sustitu- vo de las esferas adrenal, gonadal y tiroidea cuando
tivas: cortisona 37,5 a 50 mg/día o prednisona 5 se les destruye la hipófisis por el crecimiento del
a 7,5 mg/día. Más tarde, en consulta externa, se va- adenoma o como consecuencia del tratamiento
lorará si es necesario mantener el tratamiento con causal.
glucocorticoides.
Tratamiento psicológico
Radioterapia Las deformidades producidas por la acromegalia dan
Un número considerable de pacientes se beneficia lugar con frecuencia a que los pacientes tengan des-
con el tratamiento quirúrgico, sobre todo por el efecto ajustes emocionales o trastornos psíquicos más gra-
descompresivo de la cirugía, sin embargo, los crite- ves, que pueden ser atendidos por su médico y si
rios de curación clínica no se alcanzan con esta mo- fuese necesario, consultar al psicólogo o al psi-
dalidad terapéutica; en estos pacientes el siguiente quiatra.
paso en la estrategia curativa es la irradiación hipo-
fisaria externa con radioterapia condicional: cobal-
to 60, de 180 a 280 radiaciones diarias, o acelerador
lineal de partículas: dosis total 6 000 rad.
GIGANTISMO
Indicación del tratamiento con radiaciones.
1. Contraindicación de la cirugía hipofisaria. Concepto
2. Fallas en la microcirugía. Es una afección que se presenta cuando existe una
3. Pacientes que no requieren descompresión del secreción exagerada de GH en el joven antes de la
aparato óptico. fusión epifisaria, en la cual el crecimiento lineal se
4. Resistencia o intolerancia a la terapéutica mé- ve incrementado con el cortejo sindrómico metabó-
dica. lico y orgánico asociado.

175
Epidemiología • La diabetes mellitus es infrecuente y a menudo
Es una enfermedad rara y existen tan solo casos ais- se observa tolerancia a la glucosa alterada.
lados, incluso en las grandes series de acromegalia. • TAC de la silla turca. Los tumores productores
de GH tienden a ser mayores en los niños y
Cuadro clínico adolescentes que en los adultos, por lo que es
En el gigantismo, la hipersecreción de GH se pro- posible detectar la afectación supraselar, tanto
duce cuando aún están abiertos los cartílagos de con- por medio de la TAC como de la RMN.
junción, con importante aceleración del crecimiento
lineal; habitualmente la talla está por encima de Tratamiento
3 desviaciones estándar. Existe casi siempre un hi-
• Consiste en la adenomectomía transesfenoidal,
pogonadismo asociado.
complementada con radioterapia o tratamiento
La neuropatía periférica y la debilidad muscular
suelen ser severas, y el tumor grande, lo que provo- farmacológico.
ca alteraciones en el campo visual. • Mientras que los rasgos acromegálicos no pue-
den prevenirse, el gigantismo excesivo se evi-
Diagnóstico ta administrando esteroides gonadales para
• Determinación de IGF-I: Es difícil de interpre- acelerar la fusión epifisaria. Las niñas se tratan
tar en los adolescentes. con estradiol y los varones con testosterona.

176
24

DIABETES INSÍPIDA

Concepto infancia y se debe a un proceso degenerativo que


afecta a las neuronas magnocelulares hipotalámicas.
La diabetes insípida (DI) es una enfermedad produ-
Se ha descrito la presencia de DI central en el 30 %
cida por la incapacidad para concentrar la orina, que
de los casos con síndrome de Wolfram (DIDMOAD),
se caracteriza clínicamente por una poliuria de baja
síndrome autosómico recesivo caracterizado por la
densidad y una polidipsia compensadora. Este estado
presencia de diabetes insípida, diabetes mellitus, atro-
clínico puede ser secundario al déficit de secreción
de ADH (diabetes insípida central o neurogénica) o fia del nervio óptico, sordera nerviosa y malforma-
bien a una insensibilidad del túbulo renal a las ac- ciones renales.
ciones fisiológicas de la ADH (diabetes insípida
nefrogénica). Principales causas de DI central o neurogénica
1. Idiopática familiar.
• Autosómica dominante.
• Autosómica recesiva (síndrome de DIDMOAD).
DIABETES INSÍPIDA 2. Traumática.
CENTRAL • Accidental.
• Quirúrgica.
O NEUROGÉNICA 3. Tumoral.
a. Primaria.
• Coristoma.
Frecuencia • Hamartoma.
Es una enfermedad poco frecuente, que tiene una • Glioma.
incidencia estimada de uno por cada 25 000 indivi- • Craneofaringioma.
duos. No existe predilección por el sexo ni por la • Gangliocitoma.
edad. Aparece como consecuencia del déficit de la • Macroadenoma hipofisario.
secreción de ADH o bien por un defecto a nivel de • Meningioma.
los osmorreceptores hipotalámicos. b. Secundaria.
• Linfoma.
Etiología
• Infiltrado leucémico.
En el 30 a 45 % de los casos, la DI central es idiopá- • Pulmón, mama, colon.
tica; en el 30 % de estos pacientes se han detectado
• Nasofaringe (invasivo).
anticuerpos circulantes frente a las neuronas mag-
4. Enfermedades granulomatosas.
nocelulares hipotalámicas, lo que indica un proba-
ble origen autoinmune. • Sarcoidosis.
El 25 % son secundarios a tumores cerebrales • Histiocitosis.
hipofisarios; el 20 %, a cirugía hipofisaria o hipota- • Granulomatosis de Wegener.
lámica y el 16 %, a traumatismos craneoencefáli- • Xantoma diseminado.
cos. 5. Infecciosas.
Existe una forma rara de DI central familiar de • TB.
carácter autosómico dominante, que aparece en la • Sífilis.

177
• Meningoencefalitis. • Uropatía obstructiva.
6. Vasculares. • Pielonefritis crónica.
• Hemorragias (intraventricular, subaracnoidea). • Amiloidosis.
• Aneurisma (polígono de Willis). • Sarcoidosis.
• Apoplejía hipofisaria. • Insuficiencia renal crónica.
• Bypass aortocoronario. • Anemia de células falciformes.
7. Otras. • Nefropatía por analgésicos.
• Encefalopatía hipoxémica.
• Malformaciones congénitas. A continuación se describen aspectos de la dia-
betes ínsipida en general.

Cuadro clínico
DIABETES INSÍPIDA
Las lesiones neurohipofisarias no producen obliga-
NEFROGÉNICA toriamente una DI. Para que esto ocurra, es necesa-
rio que la lesión sea tan alta como para afectar el
tracto supraóptico hipofisario, y por consiguiente,
Etiología desarrollar una degeneración neuronal bilateral de
los núcleos supraópticos y paraventriculares del
Puede ser adquirida o congénita. La primera es mu-
hipotálamo; además, para que se desarrolle el cua-
cho más frecuente que la segunda, sin embargo, muy
dro clínico es preciso la destrucción al menos del 80 %
rara vez es severa (diabetes insípida parcial), y se
de las neuronas magnocelulares hipotalámicas con
asocia típicamente a un síndrome poliúrico modera-
capacidad secretora de la hormona.
do (3 a 4 litros al día). Entre las causas más comu-
nes se destacan la hipercalcemia, hipocaliemia, Los síntomas cardinales de la DI son la poliuria
enfermedades tubulointersticiales renales y algunos persistente y la polidipsia. Las manifestaciones clí-
fármacos (litio, anfotericín B, gentamicina, furose- nicas son tan espectaculares que no es extraño que
mida). los pacientes recuerden el día exacto, incluso la hora,
La congénita se trasmite de forma recesiva, liga- en que comenzaron la poliuria y la polidipsia.
da al cromosoma X. Se manifiesta por la aparición El grado de poliuria varía considerablemente en
poco después del nacimiento de una poliuria, poli- relación con la intensidad de la afección. Así, en la
dipsia e hipostenuria pronuciadas, que suele cursar DI parcial el volumen de diuresis oscila entre los 2
con una deshidratación hipertónica y el consiguien- y 6 litros/día, mientras que en los casos graves al-
te daño cerebral. canza un máximo de 18 litros por día, lo que obliga
a efectuar la micción cada 30 o 60 min. Por ello, la
Principales causas de DI nefrogénica nicturia está casi siempre presente.
1. Familiar. La densidad de la orina es por lo general de 1 001
• Recesiva ligada al cromosoma X. a 1 005.
2. Adquirida. El buen funcionamiento del centro de la red ase-
a. Fármacos. gura un adecuado aporte de líquidos y evita la des-
• Litio. hidratación. Sin embargo, en aquellos casos en los
• Colchicina. que el paciente está incapacitado para beber, como
• Anfotericín B. ocurre durante los períodos de inconsciencia secun-
• Gentamicina. daria a traumatismos craneoencefálicos, anestesia ge-
• Furosemida. neral u otros procesos comatosos, se desarrolla una
• Gliburide. deshidratación intensa que provoca debilidad, fie-
b. Trastornos hidroelectrolíticos. bre, trastornos psíquicos, postración y posteriormen-
• Hipocaliemia. te, muerte.
• Hipercalcemia. La DI secundaria a cirugía hipofisaria o hipotalá-
c. Enfermedad renal. mica evoluciona de forma transitoria, permanente o
• Enfermedad poliquística renal. trifásica. En ocasiones predominan los síntomas re-

178
lacionados con el proceso primario que desencade- b. Formas completas de DI central.
nó la DI, tales como trastornos visuales, cefalea y • La osmolaridad urinaria no sobrepasa la
otros síntomas atribuibles a una disfunción hipota- plasmática.
lámo-hipofisaria. • La osmolaridad plasmática, al final de la prue-
ba, no es mayor de 300 mosmol/L.
Diagnóstico c. Formas parciales de DI central y DI nefrogé-
Los datos clínicos son suficientes en la mayoría de nica.
los casos para hacer el diagnóstico de un síndrome • La osmolaridad plasmática es superior a 295
poliúrico-polidípsico. Si existen dudas, se indica mosmol/L
medir la diuresis y la ingestión de líquidos durante 2 • La orina se concentra algo más que en las for-
o 3 días; se considera poliuria una diuresis diaria de mas completas (entre 300 y 700 mosmol/L).
3 litros o más. 4. Determinación plasmática de ADH bajo estímulo
La orina recogida en estos días también se utiliza osmótico. Establece el diagnóstico de la enferme-
para medir la osmolaridad y la densidad, que permi- dad pero no está disponible en todos los centros.
tirán diferenciar las poliurias de alta densidad por 5. Estudio radiológico de las vías urinarias. Es útil
sobrecarga de solutos (ósmóticas), de las de baja den- en los pacientes que tienen algún tiempo de evo-
sidad. lución y en aquéllos con grandes poliurias, ya que
1. Hay sospecha clínica cuando se encuentra: puede desarrollarse una dilatación progresiva de
• Diuresis superior a 3 o 4 litros diarios. las vías urinarias con todas sus consecuencias ad-
• Densidad urinaria inferior a 1 010. versas.
• Osmolaridad urinaria baja (inferior a 300 6. Indicar PTG y estudio de los lípidos. La DI se
mosmol/kg). asocia con cierta frecuencia a diabetes mellitus e
• Osmolaridad plasmática elevada (superior a hiperlipoproteinemia.
299 mosmol/kg). 7. Una vez hecho el diagnóstico funcional de DI, es
2. Hay confirmación diagnóstica: Cuando se deter- necesario hacer el diagnóstico causal, si es po-
minan los niveles plasmáticos de ADH (técnica sible.
muy laboriosa y que no se realiza de forma ruti-
naria).
Tratamiento
3. Prueba de supresión de líquidos o prueba de la Tratamiento causal
sed. Por su sencillez y fiabilidad, sigue siendo Como es lógico, será específico de cada caso y de-
esencial en el diagnóstico de la DI. penderá de la causa de la afección: extirpación de
Interpretación. El sujeto normal tolera bien la un tumor, tratamiento de una infección, etc., segui-
prueba, su diuresis es considerablemente menor do, si es necesario, del tratamiento sustitutivo.
y aumenta la densidad urinaria. No hay variación
importante del peso (reducción menor del 5 %), Tratamiento sintomático
ni del hematócrito, ni del ionograma. 1. Si la diuresis es superior a 4 L/día:
En la DI no disminuye la diuresis, ni aumenta Tratamiento de elección:
la densidad, pero el peso sí disminuye en más del • Desmopresina (desamino-8-D-arginina [vaso-
5 % y aumentan el hematócrito y la concentra- presina DDAVP]), análogo sintético de la va-
ción de electrólitos. En ocasiones aparecen sig- sopresina. Gran efectividad y prolongado
nos de deshidratación y la prueba, en general, es efecto antidiurético (de 12 a 24 h). Dosis: 10 a
muy mal tolerada. 20 mcg (0,1 a 0,2 ml) 1 o 2 veces por día, por
En algunas instituciones esta prueba se realiza vía intranasal, aunque es permisible alcanzar
midiendo la osmolaridad plasmática y urinaria. 40 mcg. Es conveniente tantear la dosis y vi-
gilar evolutivamente la diuresis diaria y la
Resultados natremia.
a. Respuesta normal. La osmolaridad urinaria al • El tanato de pitresina y la solución acuosa de
final de la prueba supera los 800 mosmol/L, pitresina de origen animal se han sustituido por
mientras que la osmolaridad plasmática no so- la DDAVP debido a su menor antigenicidad,
brepasa los 295 mosmol/L. acción más prolongada y menor efecto presor.

179
• Vasopresina acuosa. Dosis: 5 a 10 U IM cada 6 h. La utilización de estos fármacos ha disminuido
Está indicada en circunstancias como incons- en la actualidad, ya que se prefiere el uso de DDAVP
ciencia o período posoperatorio neuroquirúr- por considerarlo el tratamiento de elección.
gico inmediato.
Tratamiento de la diabetes insípida nefrogénica
En estas situaciones también se emplea una for-
1. Indometacina. Dosis: 100 mg/día. Fármaco antin-
ma parenteral de DDAVP, en dosis de 1 o 2 mcg
cada 12 o 24 h por vía SC o IM. Está indicado repetir flamatorio no esteroideo, capaz de potenciar el
la dosis si persiste la poliuria (> 2 ml/ kg/h). efecto de la ADH a nivel renal a través de la sín-
tesis intrarrenal de prostaglandinas.
2. En las formas parciales de DI pueden utilizarse 2. Diuréticos como clorotiacida, hidroclorotiacida y
fármacos que aumentan la secreción y acción de clortalidona, disminuyen la poliuria en pacientes
la ADH. con DI nefrogénica y neurogénica.
• Clorpropamida. Dosis: 250 a 500 mg/día. Actúa Estas drogas provocan depleción de sodio, re-
por un mecanismo de acción doble; por un lado ducen el filtrado glomerular y aumentan la reab-
potencia el efecto de la ADH endógena a nivel sorción en el túbulo proximal disminuyendo así
del túbulo renal y por otro, estimula su secre-
la cantidad de sodio que llega a la rama ascen-
ción hipotalámica. La clorpropamida es más
dente del asa de Henle y, por tanto, la capacidad
potente que el clofibrato, aunque tiene el in-
conveniente de que origina hipoglicemia. de dilución de la orina. Para que se mantenga el
• Clofibrato. Dosis: 1 a 3 g/día. Este medicamen- efecto terapéutico es necesario indicar una dieta
to estimula la secreción hipotalámica de ADH. pobre en sodio.

180
25

BOCIO EUTIROIDEO

Concepto 4. El coloide es fagocitado y en el interior de la célu-


la folicular, mediante un mecanismo de proteólisis,
Constituye la afección tiroidea más frecuente y se
se separan las hormonas activas (T3 y T4) del res-
entiende como tal a todo aumento de volumen del
to de la molécula de tiroglobulina y son secretadas
tiroides, liso o nodular, que no origine disfunción
a la circulación.
tiroidea. Su incidencia es mayor en la mujer y su
5. Una vez en el plasma la T3 y T4 viajan en dos
importancia e interés radican en aspectos relacio-
fracciones, la más pequeña en forma libre, mien-
nados con su etiología, sus implicaciones sociales
tras que la otra constituye una reserva pues va
(endémico o esporádico) y sus posibilidades tera-
unida a proteínas, fundamentalmente globulina
péuticas.
(conocida como transportadora de hormonas
Patogenia tiroideas o TBG), prealbúmina, albúmina y en oca-
siones por los glóbulos rojos.
Para entender por qué se produce el bocio eutiroideo, 6. Se sabe que la T3 es la verdaderamente activa de
y como paso previo al estudio de las afecciones del las hormonas tiroideas; se forma a partir de la T4,
tiroides, es necesario tener presente el mecanismo sobre todo en la periferia (hígado, riñón, tejido
fisiológico de control de la función tiroidea y la re- adiposo), en virtud de una enzima, la desyodinasa,
lación existente entre yodo y actividad tiroidea. mediante un mecanismo conocido como desyo-
dación, proceso que facilita la reutilización del
Hormonosíntesis tiroidea yoduro extraído de la T4.
Las hormonas tiroideas se forman según el esque- 7. El hígado capta las hormonas en exceso, las de-
ma siguiente: grada y las elimina a través de las heces; a este
nivel se libera cierta cantidad de yodo que puede
1. El yoduro inorgánico es captado por la glándula ser reutilizado por el organismo.
en virtud de un mecanismo conocido como bom- 8. Los niveles plasmáticos de T4 y T3 son regulados
ba de yoduro (captación). por un mecanismo de retroalimentación, de manera
2. Con posterioridad este ion es oxidado por acción que la disminución de ellas origina un incremento
de una peroxidasa; estos cambios ocurren en el en los niveles de TRH de origen hipotalámico, que
interior de la célula folicular, en el ámbito de la actúa promoviendo la liberación de TSH por la
interfase coloide; el yoduro se une con el ami- adenohipófisis, cuya función es estimular todos
noácido tirosina de la molécula de tiroglobulina los pasos de la hormosíntesis tiroidea y favorecer
y forma la monoyodo y la diyodotirosina; ambos la liberación de hormonas activas, con lo cual se
procesos son consecutivos, prácticamente simul- produce la inhibición del mecanismo. Además de
táneos, y se les llama organificación. este control, los niveles de TSH tienen un ritmo
3. A continuación se forman las hormonas tiroideas circadiano caracterizado por mayores niveles a las
activas, es decir, triyodotironina (T3) por la unión 8:00 h y menores alrededor de la media noche.
de una monoyodo con una diyodotirosina, y
tetrayodotironina (T4) por la unión de dos molécu- Autorregulación tiroidea
las de diyodotirosina, mecanismo conocido como Este mecanismo tiene como función mantener esta-
acoplamiento. ble el contenido (pool intratiroideo) de yodo en el

181
interior de la glándula con independencia de las va- pervivencia fetal; desde el punto de vista socioeco-
riaciones en el aporte de este ion: cuando disminuye nómico la población de las zonas con déficit de yodo,
el yodo todos los pasos de la hormonosíntesis tiroidea al ser mentalmente más lenta y menos vigorosa, debe
aumentan (mecanismo reversible), en especial, la ser menos productiva, tener menor motivación so-
captación; pero cuando existe saturación intratiroi- cial, y por otra parte, como el déficit afecta también
dea, estos mecanismos disminuyen su eficiencia en la reproducción animal, estas zonas tienen menor
virtud de una inhibición de la organificación, fenó- posibilidad para la alimentación. En ellas se reporta
meno que puede ser vencido por la TSH. un incremento en la frecuencia de carcinoma papilar
del tiroides.
Clasificación del bocio eutiroideo La distribución irregular del yodo en la superfi-
Según su causa, el bocio eutiroideo se clasifica de la cie terrestre está en relación con la erosión de los
manera siguiente: suelos por las aguas, pues el nuevo suelo que emerge
1. Causas ambientales. como resultado de esta acción es pobre en el
• Déficit o exceso ambiental de yodo (bocio metaloide.
endémico). El ingreso normal diario de yodo debe ser de
• Medicamentos: yoduro inorgánico, yoduro 200 mg en 24 horas. Desde el punto de vista fisioló-
orgánico, litio, tiocianatos, sulfonamidas, gico el yodo es captado en magnitud similar por el
sulfonilurea, antitiroideos de síntesis, resor- tiroides y por el riñón, de manera que su excreción
cinol, cobalto, aminoglutetimida, fluoruros. urinaria o yoduria es la mejor expresión de la dispo-
• Calcio, magnesio (aguas duras). nibilidad del ion por el organismo humano.
• Alimentos: yuca, soya, habas (sustancias
bociogénicas). Diagnóstico
2. Causas inmunológicas. Según la OMS, el diagnóstico de bocio se puede rea-
• Tiroiditis autoinmunes. lizar clínicamente, para lo cual se aconseja emplear
• Anticuerpos estimulantes del crecimiento la clasificación siguiente:
tiroideo.
3. Causas genéticas. 1. No bocio o bocio grado 0. Ausencia de palpa-
• Dishormonogénesis tiroidea. ción del tiroides.
• Síndrome de resistencia periférica a las hor- 2. Bocio grado 0b. El tiroides es palpable, pero
monas tiroideas. sus lóbulos no son mayores que la última fa-
4. Causas infecciosas (virales). lange del dedo mayor o pulgar del examinado.
• Tiroiditis subaguda. 3. Bocio grado I. El tiroides es visible con el cue-
llo extendido o es palpable, con lóbulos que
En general, casi todas las afecciones que produ- cuadriplican el lecho ungueal del examinado.
cen bocio eutiroideo originan también hipotiroi- 4. Bocio grado II. Bocio visible con el cuello en
dismo. posición normal o con nódulos, aunque su ta-
maño sea menor que el anterior.
5. Bocio grado III. Tiroides visible con el cuello
BOCIO ENDÉMICO en posición normal o a distancia del examinado.

Por su importancia social y epidemiológica se ana- Otro método más sensible para el diagnóstico del
lizará brevemente el bocio endémico, el tipo de bo- bocio es el ultrasonido. En las áreas sin déficit de
cio más común en el mundo, aunque hoy en día este yodo se consideran como volúmenes normales va-
término tiende a ser sustituido por el de enfermedad lores de 8,7 por 3,9 mm para las mujeres y de 12,7
por déficit de yodo, que además incluye la presen- por 4,4 mm para el hombre.
cia del daño cerebral permanente, retraso mental en Para considerar una zona como endémica se ne-
niños, fallo reproductivo y disminución de la su- cesita que más del 10 % de la población total o más

182
del 20 % de aquellas personas entre 0 y 20 años, Exámenes complementarios
tengan bocio grado I o más. En dicha zona el hecho Como expresión de una mayor avidez de yodo se
clínico de mayor relevancia lo constituye el aumen- encuentra:
to de volumen del tiroides, pues lo habitual es que la
mayor cantidad de individuos tenga una función • Captación de I131 aumentada (normal de 15 a 45 %).
tiroidea normal. En estas áreas se puede encontrar • Niveles plasmáticos de T4t (total) y T3t (total)
cretinismo endémico (bocio, baja talla, retardo men- normales (T4, 52 a 145 nmol/L o 4 a 10 µg/dl;
tal), y cretinismo neurológico (retardo mental, pará- T3, 1 a 3 nmol/L o 70 a 190 ng/dl), excepto que
lisis espástica, sordera, estrabismo). exista hipotiroidismo, en cuyo caso estarán bajas.
La intensidad de la endemia se define por la fre- • Relación T4t y T3t aumentada.
• Excreción urinaria de yodo disminuida.
cuencia del bocio y sobre todo por el nivel de excre-
• Niveles plasmáticos de TSH normales.
ción del I127, de manera que ante yodurias mayores
de 90 µg en orina de 24 h se considera que existe un Tratamiento
aporte adecuado de yodo, valores entre 25 y 50 µg / Tratamiento preventivo
24 h sugieren un déficit moderado y yodurias me- Este es el tratamiento ideal, lo que significa un aporte
nores de 25 µg /24 h expresan un déficit intenso de adecuado de yodo en la dieta y eliminar el uso de
yodo ambiental. bociógenos y la malnutrición.
ESQUEMA DIAGNÓSTICO ANTE UN BOCIO

Bocio
(sospecha de disfunción)

Indicar T4t

Elevada Baja Normal

Hipertiroidismo Hipotiroidismo Eutiroidismo


(Buscar causa) Indicar TSH (Buscar causa)
TSI* Anticuerpos antitiroideos
Captación de I131 y I127 en orina

Elevada Baja Normal

Hipotiroidismo Hipotiroidismo Eutiroidismo


primario secundario

(Buscar causa)

TSI: Inmunoglobulinas estimuladoras del tiroides.

183
Tratamiento curativo mas de disfunción, aunque en ocasiones existe sen-
Se debe utilizar sal yodada, o consumir agua o pan sación de opresión cervical, a veces al levantar los
yodado, lo que dependerá de las características de brazos sobre la cabeza, disfagia y disfonía
la población. También es posible emplear aceite
yodado por vía intramuscular. Con este tratamiento Exámenes complementarios
se logra disminuir de tamaño el bocio pero no se Pruebas de función tiroidea: Los niveles plasmáti-
modifican los cambios neurológicos ni el daño ce- cos de T4t y T3t, así como de TSH, son normales.
rebral. Pruebas para precisar la causa. Determinar los
Como efecto adverso existe el Jod-Basedow o hi- niveles de yoduria, de anticuerpos antitiroideos, de
pertiroidismo yódico. calcitonina, de antígeno carcinoembrionario, entre
El tratamiento quirúrgico, la tiroidectomía subtotal
otros.
o total está indicada cuando existen síntomas obs-
tructivos por el tamaño del tiroides o por la posibili- Tratamiento
dad de una neoplasia maligna del tiroides.
El tratamiento preventivo consiste en el uso adecuado
de yodo y de drogas bociógenas.
El tratamiento curativo tiene dos opciones: la pri-
BOCIO ESPORÁDICO mera consiste en administrar hormonas tiroideas en
dosis supresiva (2 a 2,5 µg/kg de peso ideal/día), lo
Concepto que se aconseja ante la presencia de bocio pequeño,
Es todo aumento de volumen difuso o nodular del de reciente diagnóstico, en pacientes adolescentes y
tiroides, cuya frecuencia en una zona es menor que jóvenes de ambos sexos. Durante la gestación y en
la establecida para el diagnóstico de bocio endémico. el paciente anciano se emplearán las hormonas
tiroideas en dosis sustitutiva (1,7 a 1,9 µg/kg de peso
Cuadro clínico ideal/día).
Hay un bocio de tamaño variable, nodular o no, de La otra opción es el tratamiento quirúrgico, la
consistencia por lo común elástica, de crecimiento tiroidectomía subtotal o total, que está indicada en
habitualmente lento, que no se acompaña de sínto- las mismas situaciones que en el bocio endémico.

184
26

HIPERTIROIDISMO

Concepto fuso (BTD) o enfermedad de Graves-Basedow, la que


junto con el hipotiroidismo primario y la tiroiditis
El término tirotoxicosis se aplica al cuadro clínico
crónica forman parte de la llamada enfermedad au-
que resulta de un exceso en los niveles plasmáticos
de hormonas tiroideas, y se reserva el epónimo hi- toinmune del tiroides. El BTD se considera una afec-
pertiroidismo para el origen tiroideo de éstas. ción autoinmune órgano específica, donde el aumento
de los niveles plasmáticos de T4t y de T3t resulta de
Etiopatogenia la acción de las TSI, inmunoglobulinas estimulantes
del receptor tiroideo para la TSH, las que se forman
La etiopatogenia de la enfermedad a partir del me-
por la interacción entre los linfocitos B y el antígeno
canismo de regulación hipotálamo-hipófiso-tiroideo
se esquematiza en la clasificación siguiente: tiroideo, que en este caso es el receptor de TSH. Es
cuatro veces más frecuente en la mujer que en el
Clasificación etiopatogénica hombre.
I. Tirotoxicosis con hipertiroidismo.
1. Hipertiroidismos dependientes de TSH y sus-
Cuadro clínico
tancias similares. Como en toda disfunción tiroidea, las manifestacio-
• Adenoma hipofisario productor de TSH. nes clínicas son universales, es decir, que afectan a
• Mola hidatiforme. todo el organismo y se caracterizan en el caso de
• Coriocarcinoma. BTD por: nerviosismo, polifagia, pérdida de peso,
2. Hipertiroidismos independientes de TSH. intranquilidad, incapacidad para la concentración,
palpitaciones, cambios en el hábito intestinal, into-
• Por destrucción tiroidea: tiroiditis silente,
lerancia al calor, sudoración, depresión, trastornos
tiroiditis subaguda, y posadministración
de I131. menstruales, disfunción sexual eréctil, debilidad
muscular, fotofobia y sensación de arenilla ocular.
• De causa autoinmune: bocio tóxico difuso,
Con cierta frecuencia, previo al inicio de los sínto-
tiroiditis crónica (Hashitoxicosis).
mas, existe un stress psíquico (familiar, laboral) o
• Causa no bien precisada: adenoma tóxico, va-
físico (enfermedad personal).
riante única o multinodular, Jod-Basedow.
Entre los familiares de primera línea no es raro
II. Tirotoxicosis sin hipertirodismo.
encontrar antecedentes de tiroidopatías y otras afec-
1. Tirotoxicosis facticia.
ciones de origen autoinmune.
2. Struma ovárico.
3. Metástasis de carcinoma tiroideo. En el examen físico las mucosas pueden estar
hipocoloreadas. La piel es fina, húmeda y caliente, a
veces con zonas de hiperpigmentación o vitiligo; es
BOCIO TÓXICO posible la caída del cabello, del vello axilar y pubiano
y onicólisis. En algunos pacientes aparece un edema
DIFUSO pretibial duro, firme, de difícil godet, acompañado
de hiperpigmentación y de piel con aspecto de cás-
En nuestro medio y a cualquier edad, la causa más cara de naranja conocido como mixedema pretibial
frecuente de hipertiroidismo es el bocio tóxico di- (Fig 26.1).

185
tría cuando existe una diferencia mayor de 2 mm
entre ambos ojos o una lectura mayor de 18 mm)
(Fig 26.2 a y b).

Fig. 26.2 a. Paciente con gran exoftalmos, retracción palpe-


bral y poca reacción periocular.

Fig. 26.1. Mixedema pretibial en un paciente con hipertiroi-


dismo. Nótese el aumento de volumen en el tercio inferior de
ambas piernas y también el aumento de la pigmentación.

En el aparato cardiovascular hay taquicardia, fi-


brilación auricular, hipertensión arterial sistólica,
soplos cardíacos y en ocasiones insuficiencia car-
díaca de gasto aumentado.
En el aparato digestivo se puede encontrar hepa-
tomegalia.
En el sistema hemolinfopoyético hay a veces
adenomegalias generalizadas y esplenomegalia, so- Fig. 26.2 b. Exoftalmos con predominio izquierdo, paresia del
bre todo en pacientes jóvenes y adolescentes. recto externo izquierdo y retracción principalmente del párpa-
En el sistema nervioso se encuentran hiperreflexia, do inferior.
hipercinesia, temblor fibrilar de las manos y párpa-
dos y atrofia de la musculatura proximal de las ex- El tiroides está aumentado de tamaño y sus ca-
tremidades. Como síntomas psicológicos están la racterísticas suelen orientar hacia la causa, de ma-
disminución de la concentración y la atención, así nera que si es difuso (Fig. 26.3), liso o multinodular,
como depresión y ansiedad. indoloro, de consistencia elástica y acompañado de
Las alteraciones oculares consisten en mirada bri- soplo y thrill , el diagnóstico apunta hacia Graves-
llante, ausencia de parpadeo, signo de von Graefe Basedow, o tiroiditis silente, así como hacia afec-
(al desviar la mirada hacia abajo, el párpado supe- ciones que producen TSH o sustancias similares,
rior no sigue al movimiento del globo ocular y que- como la gonadotropina coriónica. La presencia de
da al descubierto la esclerótica), enrojecimiento un nódulo único sugiere una enfermedad de Plummer
conjuntival, edema periorbitario, paresia o parálisis (Fig. 26.4); mientras que si existe dolor, se debe pen-
de los músculos extrínsecos del ojo, acompañadas o sar en una tiroiditis subaguda. La ausencia de bocio
no de exoftalmos (definido mediante exoftalmome- sugiere que la producción de hormonas proviene de

186
otras fuentes (ovario, testículo, administración pación, taquicardia, fibrilación auricular e insuficien-
exógena). cia cardíaca de difícil control.
La gestación constituye otra situación fisiológica
en que clínicamente resulta difícil establecer el diag-
nóstico de hipertiroidismo, por lo que se deberá sos-
pechar ante antecedentes de disfunción tiroidea,
pérdida de peso, palpitaciones, astenia, hiperemesis
gravídica o intolerancia al calor acompañados o no
de bocio.

TIROIDITIS SILENTE
(HASHITOXICOSIS)
En esta afección existe, en muchos pacientes, el an-
tecedente de bocio con eutiroidismo y a veces con
hipotiroidismo, así como tiroidopatías familiares. La
enfermedad es autolimitada (dura más o menos 2 me-
ses) y se caracteriza porque los síntomas de hiperti-
roidismo son ligeros, acompañados de aumento de
volumen del tiroides, de consistencia firme, bien
delimitado, superficie lisa o irregular, no doloroso,
con soplo y a veces thrill. En el 50 % de los casos
Fig. 26.3. Aumento de volumen difuso del tiroides.
existen anticuerpos antitiroglobulina y antimicroso-
males, así como pobre captación de I131.

OTRAS FORMAS
DE HIPERTIROIDISMO
Tiroiditis posparto
Es una tiroiditis silente que se desarrolla entre 3
y 12 meses después del parto y ocurre en pacientes
con una afección tiroidea previa, que habitualmente
mejora durante el embarazo en virtud de la inhibi-
ción inmunológica propia de la etapa. La enferme-
dad atraviesa por tres momentos: uno inicial de
destrucción glandular, que origina tirotoxicosis; otro
de recuperación expresado como hipotiroidismo y
una etapa posterior de curación, para la cual no se
requiere tratamiento por no existir disfunción
Fig. 26.4. Aumento de volumen circunscrito del lóbulo izquier- tiroidea. El diagnóstico se puede establecer en cual-
do (nódulo) del tiroides.
quier momento, pero por lo general se hace durante
la fase de hipotiroidismo. Existe una fuerte asocia-
Si el paciente tiene más de 60 años, los síntomas ción entre esta afección y los antígenos de histocom-
cardinales son depresión, apatía, anorexia, consti- patibilidad HLA Dr3 y HLA Dr5.

187
Captación de I131. Se encuentra elevada en: el
Tormenta tiroidea BTD, el adenoma tóxico e hipertiroidismo de TSH
Es la complicación más temida y por suerte casi o similares. Está disminuida en: las tiroiditis subagu-
erradicada de la hiperfunción tiroidea, que de no da y silente, así como cuando la tiroxicosis depende
recibir tratamiento oportuno tiene un desenlace fa- de la administracción de yodo u hormonas tirodeas.
tal; se considera como una hiperrespuesta generali- Niveles plasmáticos de anticuerpos antitiroideos
zada a las hormonas tiroideas, aunque no se conoce antitiroglobulina y antiperoxidasa (conocidos como
el nivel que deben alcanzar dichas hormonas en el antimicrosomales). Su presencia sugiere tiroiditis
plasma para que ocurra este cuadro. Se caracteriza crónica; las TSI elevadas confirman la enfermedad
por un comienzo brusco con nerviosismo extremo, de Graves-Basedow.
hiperpirexia, sudoración profusa, náuseas, vómitos, Radiografía de cráneo. TAC de la región hipofi-
temblor generalizado, disnea, deshidratación, hipo- saria o la laparoscopia, según se piense en las tres
tensión arterial y a veces edema pulmonar. Habi- causas del síndrome.
tualmente es desencadenada por un stress físico, Por último, para precisar la repercusión del hi-
psíquico, quirúrgico, parto o posadministración pertiroidismo, así como para buscar la presencia de
de I131. otras enfermedades autoinmunes, se debe indicar
hemograma, glicemia, ECG, calcemia, anticuepos
Orbitopatía de Graves antipared gástrica y antiadrenales, entre otros.
Se entiende como tal al exoftalmo o protrusión uni
Diagnóstico diferencial
o bilateral del globo ocular que acompaña a pacien-
Se deberá hacer con:
tes con BTD, aunque también se puede presentar en
Pacientes con bocio eutiroideo y síndrome ansio-
pacientes eutiroideos y aun con hipotiroidismo. Es
so, donde la anorexia, la sudoración fría, la taqui-
considerada como una entidad independiente, tam-
cardia que cede con la maniobra de Valsalva o con
bién de origen autoinmune, donde el órgano diana
el sueño y la ausencia de soplo tiroideo, acompaña-
es el tejido retrorbitario (se cree que existen molécu-
dos de niveles normales de T4t, permiten definir el
las comunes entre el tiroides y este tejido, que per-
diagnóstico.
miten un fenómeno de entrecruzamiento). La
Pacientes con diabetes mellitus insulinodepen-
reacción antígeno-anticuerpo origina infiltración de
dientes de debut, en los que la hiperglicemia en ayu-
los músculos extraoculares por una matriz de
nas establecerá la diferencia entre ambos.
glucosamicoglicanos, que son secretados por fibro-
Feocromocitoma, donde las características de la
blastos bajo la influencia de citocinas, tales como el
hipertensión arterial, la ausencia de bocio y niveles
gamma interferón producido por linfocitos locales;
normales de las catecolaminas en sangre y orina,
esta acumulación hace fallar la actividad muscular al
definen el diagnóstico final.
producir fibrosis, al igual que origina hiperplasia del
tejido adiposo retrorbitario. Tratamiento
Tratamiento preventivo
Acropaquia tiroidea Evitar el uso de las sustancias yodadas en los pa-
Se le llama así a la unión del mixedema pretibial, cientes con bocio eutiroideo, sobre todo en su va-
oftalmopatía de Graves y uñas en vidrio de reloj. riante nodular.
Tratamiento curativo
Diagnóstico de la tirotoxicosis Con excepción de aquellos casos dependientes de
Diagnóstico positivo TSH y sustancias similares y del adenoma tóxico,
Se hará, ante la sospecha clínica, un IT (índice de donde la extirpación de la fuente produce la cura del
tirotoxicosis) >19 (cuadro 26.1) y se confirmará al hipertiroidismo, el objetivo del tratamiento en el
encontrar niveles elevados de tiroxina, determinada BTD es controlar la hiperfunción tiroidea y dismi-
como hormona libre o como índice de T4l (libre). nuir la cantidad de tejido tiroideo funcionante; para
Para buscar la causa, se indicará: ello se dispone de:

188
CUADRO 26.1
DIAGNÓSTICO DE LA TIROTOXICOSIS

1. Clínico: emplear el índice de tirotoxicosis (IT)

Síntomas Presentes Signos Presentes Ausentes

Astenia +2 Bocio +3 -3
Disnea de esfuerzo +1 Soplo tiroideo +2 -2
Palpitaciones +2 Hiperquinesia +4 -2
Prefiere frío +5 Temblor +1 0
Prefiere calor -5 Manos calientes +2 -2
Sudoración +3 Manos húmedas +1 -1
Nerviosismo +2 Pulso > 90/min +3 0
Apetito aumentado +3 Pulso < 80/min 0 -3
Apetito disminuido -3 F. auricular +4 0
Aumentado de peso -3 Signo von Graefe +1 0
Pérdida de peso +3 Retracción palpebral +2 0
Exoftalmos +2 0
< 10 eutiroidismo; e/ 11 y 19 dudoso; >19 hipertiroidismo
2. Químico: T4l, > 11 µg/dl (> 145 nmol/L); T3l, > 190 ng/dl (> 3nmol/L) o índice de T4l > 12.
3. Etiológico:
• Determinar TSH basal.
• Realizar estudios imagenológicos de la región hipofisiaria.
• Determinar anticuerpos antitiroideos (anti Tg, MC y TSI).
• Determinar I127 en orina.
• Captación tiroidea de I131, > 45 % a las 24 h.
• PBI, > 7 µg/dl (> 546 nmol/L).
1. Medidas transitorias o medicamentosas llegar a la dosis que mantenga el eutiroidismo,
2. Medidas definitivas, como el I131 y la cirugía como promedio 100 a 150 mg/día, la que se man-
tendrá durante 2 años; luego se suspende y se
Medidas transitorias observa la evolución. Si reaparece el cuadro de
Antitiroideos de síntesis (ATS). Son los fármacos hiperfunción tiroidea cuando se esté disminuyen-
fundamentales en el manejo terapéutico del hiperti- do la dosis o antes de 6 meses después de termi-
roidismo y pueden ser empleados como único trata- nado el ciclo con ATS, se deberá pasar a cualquiera
miento en el embarazo, en niños, adultos jóvenes de los tratamientos definitivos.
con bocios pequeños y en las recidivas, previo a la b) Como coadyuvante de I131. Se suspenderá una se-
cirugía o a la administración de I131. mana antes de administrar el radiofármaco y se
El propiltiouracilo o el metiltiouracilo se usan en reiniciará una semana después, en dosis decrecien-
dosis única o fraccionada, de 300 a 450 mg/día, y el te (50 mg/mes) hasta suspenderla. Según la evo-
metimazol, 30 a 45 mg/día, que se mantienen hasta lución clínica posterior y los niveles de T4t, se
lograr el eutiroidismo, aproximadamente entre 6 u aplicará o no una nueva dosis del radioyodo.
8 semanas. A continuación, el manejo dependerá de c) Previo a la cirugía. Una vez logrado el eutiroi-
si se emplean como único tratamiento, como coadyu- dismo se deberá asociar 7 o 10 días antes, Lugol,
vante al I131 o previo a la cirugía. 1 gota (8 mg) 3 veces al día; aumentar 1 gota c/
día hasta 5 gotas 3 veces al día antes de la opera-
a) Único tratamiento. En este caso se disminuyen ción. Al iniciar el Lugol se podrán suspender los
50 mg (5 mg si es metimazol) mensuales hasta antitiroideos.

189
Betabloqueadores. Mejoran rápidamente la sin- En algunos pacientes de difícil control se podrá
tomatología del paciente y se emplean asociados a indicar la tiroidectomía subtotal durante el segundo
los ATS, antes y con posterioridad al uso de I131, y trimestre.
para lograr el eutiroidismo necesario para la cirugía
tiroidea. El más empleado es el propranolol, en do- Hipertiroidismo del anciano
sis promedio de 120 mg/día. En caso de ser el único El tratamiento de elección es el I131 (dosis entre 60 y
medicamento previo a la cirugía, esta dosis se debe 90 Gy), precedido del uso de ATS hasta lograr el
mantener hasta una semana después de la tiroidec- eutiroidismo. Los ATS deben suspenderse la sema-
tomía. na antes de recibir el radiofármaco y reiniciarlos una
Si se asocia al I131 se puede administrar durante semana después. Con independencia del tipo, causa
todo el período entre una y otra dosis. del hipertiroidismo y edad del paciente, se recomien-
Carbonato de litio. El paciente mejora con rapi- da un ambiente sosegado, una dieta hipercalórica e
dez y es muy útil cuando existe depresión asociada. hiperproteica rica en elementos del complejo B, y el
Disminuye los niveles plasmáticos de tiroxina, pero uso de sedantes, como benzodiazepinas, o hipnóticos
entre 6 y 8 semanas se pierde la inhibición por lo como el fenobarbital.
que reaparecen los síntomas. Se emplea como
coadyuvante en el tratamiento con I131. Se adminis- Tormenta tiroidea
tra en dosis de 200 mg c/8 h, durante 6 semanas como El tratamiento de esta complicación tiene dos obje-
máximo. tivos: controlar la severa tirotoxicosis y eliminar el
Medidas definitivas factor desencadenante.
Cirugía. Cada vez es menos empleada. La opera-
A. Medidas generales para controlar la tirotoxi-
ción propuesta es la tirodectomía subtotal y estará
indicada en casos de hipertiroidismo en niños, en cosis.
pacientes con grandes bocios o bocios nodulares, El paciente debe ser ingresado en un servicio de
ante el fracaso del tratamiento con ATS o cuando se terapia intensiva y tomar las siguientes medidas ge-
sospeche malignidad. Como efectos indeseables se nerales de apoyo:
le señalan hipotiroidismo definitivo, sangramientos,
sepsis de la herida, hipoparatiroidismo, parálisis 1. Vigilancia médica y de enfermería constante.
recurrencial y recidiva, entre otros. 2. Pasar una sonda de Levine.
I131. Se considera un método muy efectivo para el 3. Corregir la deshidratación y la hipernatremia
control de la enfermedad y es posible aplicarlo sin el con soluciones glucosadas.
control inicial del hipertiroidismo, si éste no es muy 4. Añadir a los sueros grandes cantidades de vi-
severo. Habitualmente se indica ante el fracaso del taminas del complejo B.
tratamiento con ATS y está contraindicado en niños 5. Llevar un control estricto del balance hidro-
y embarazadas. La dosis propuesta es de 6 000 rads mineral.
(60 Gy) de inicio y si es necesario, dosis subsiguien- 6. Combatir la hiperpirexia, en los casos lige-
tes de 30 Gy con una frecuencia media de 9 meses. ros, con acetaminofén; en casos severos em-
plear paños fríos, hielo, ambiente frío, etc.
Hipertiroidismo y gestación
7. Administrar oxígeno.
El tratamiento ideal es la administración de ATS. Se 8. Si hay insuficiencia cardíaca, se deben em-
utiliza el propiltiouracilo, 300 a 450 mg/día, hasta plear digitálicos y diuréticos. Hay que tener
lograr el eutiroidismo; luego disminuir hasta dar la cuidado con el empleo de propranolol en esta
menor dosis posible; se puede asociar a betabloquea-
situación.
dores (para mejorar los síntomas rápidamente).
9. Sedantes: 200 mg de fenobarbital por vía IM,
Como efectos indeseables tenemos la no lactancia
cada 6 u 8 h.
materna (sobre todo cuando se emplean dosis ma-
10. Antibióticos profilácticos, sin preferencia por
yores de 100 mg/día), e hipotiroidismo con bocio en
el feto. alguno en particular.

190
Medicamentos roidismo se prefiere como tratamiento definitivo la
1. Propiltiouracilo, 300 o 450 mg cada 4 h, tritu- tiroidectomía total. En segundo lugar estará prote-
rados, a través de la sonda de Levine. ger los ojos mediante el uso de lentes oscuros, la no
2. Solución de Lugol, 5 gotas cada 4 h, a través exposición al sol ni a ambientes secos, usar lágri-
de la sonda, o yoduro de sodio o potasio, 1g en mas artificiales, así como cubrirlos con gasa al dor-
24 h en una venoclisis. mir. Como medidas específicas se aconsejan los
3. Dexametasona, 2 mg por vía EV cada 8 h. inmunosupresores (Imurán, glucocorticoides), radio-
4. Propranolol, 40 a 80 mg cada 6 h (oral) o 2 mg terapia externa o cirugía descompresiva de la orbita.
cada 8 h por vía EV.
Rehabilitación
B. Medidas para eliminar el factor desencadenante.
Dependerán de cada caso en particular. En general, estos pacientes quedan sin limitación
física ni psíquica, excepto cuando existe oftalmopatía
Oftalmopatía maligna, donde se proscriben trabajos con exposi-
En primer lugar, es necesario obtener y garantizar ción al sol, polvo, ambiente seco, escasa ilumina-
una función tiroidea normal; en casos de hiperti- ción y que requieran gran precisión.

191
27

HIPOTIROIDISMO EN EL ADULTO

El hipotiroidismo constituye en nuestro medio la • Lesiones vasculares: arteriris, aneurisma ca-


tercera causa de consulta por afecciones del tiroides, rotídeo.
es más frecuente en el sexo femenino, se puede pre- • Infecciones: TB, sífilis.
sentar a cualquier edad y constituye una de las cau- • Agentes físicos: poscirugía, radioterapia, trau-
sas evitables de retraso mental. matismo de la región hipofisaria.
3. Terciario (constituyen una causa poco fre-
Concepto cuente).
El hipotiroidismo es el cuadro clínico que expresa • Craneofaringiomas, hamartomas, gliomas.
la disminución en la producción o en la utilización 4. Periférico.
periférica de las hormonas tiroideas. Se considera • Resistencia generalizada a las hormonas
primario cuando el sitio afectado es el tiroides; se- tiroideas.
cundario, cuando la lesión asienta en la hipófisis, es • Resistencia periférica a las hormonas tiroideas.
decir, que existe un déficit de tirotrofina; terciario,
cuando falta la hormona liberadora de tirotrofina Cuadro clínico
debido a daño en el hipotálamo; y periférico, cuan- Las manifestaciones clínicas del hipotiroidismo pri-
do existe una resistencia de los tejidos diana a la mario dependen de:
acción de las hormonas tiroideas.
1. La edad del paciente
Etiología 2. La causa del hipotiroidismo
1. Primario. 3. El tiempo de evolución
• Anomalías del desarrollo del tiroides: hiper- 4. La intensidad del déficit hormonal.
plasia, aplasia, localizaciones anómalas.
• Idiopático. El cuadro clínico del hipotiroidismo primario
• Defectos en la hormonosíntesis tiroidea (dé- idiopático, de manera general, tiene una instauración
ficit de captación, organificación, proteóli- insidiosa y gradual, por lo tanto, deben tanscurrir
muchos años para que se exprese en toda su magni-
sis).
tud. En algunos enfermos aparecen pocos síntomas
• Déficit (bocio endémico) o exceso de yodo
y signos.
(bocio yódico).
El paciente aqueja decaimiento, aumento de peso,
• Tiroiditis: autoinmunes, de Quervain. disminución del apetito, constipación, dificultad para
• Bociógenos. hablar, pérdida de la iniciativa y de la memoria, som-
• Postiroidectomía o I131. nolencia, letargia, depresión, ceguera nocturna, hi-
• Yatrogénico: por drogas antitiroideas, carbo- poacusia y calambres. Hay cambios en el patrón
nato de litio u otras sustancias antitiroideas. menstrual, en especial, sangramiento intermenstrual;
• Enfermedades infiltrativas del tiroides: sar- existe disminución de la libido e infertilidad. Modi-
coidosis, linfomas. ficación del patrón del sueño (sueño diurno e insom-
2. Secundario. nio nocturno). Las heridas cicatrizan lentamente. El
• Macrotumores hipofisarios. crecimiento de las uña es lento y hay cambios en la

192
calidad del pelo (pierde el ondulado y está seco), así Es infrecuente que una paciente con hipotiroidismo
como aumento de la sensibilidad al frío. logre un embarazo, sin embargo, ocurre en casos
En el examen físico se encuentra una facies abo- con antecedentes de bocio, presencia de anticuerpos
tagada, caída de la cola de las cejas, piel seca, páli- antitiroideos circulantes, o antecedentes de haber
da, descamativa y amarillenta. El cuadro clínico recibido tratamiento por un hipertiroidismo. En es-
típico es fácil de reconocer, pues se caracteriza por tas enfermas es necesario el estudio de la función
infiltración del tejido celular subcutáneo, fundamen- tiroidea, pues el embarazo podría favorecer la pre-
talmente de la cara, dorso de las manos y pies y re- sencia de hipotiroidismo, tanto en la madre como en
gión supraclavicular, que origina edema duro de el feto. Las manifestaciones clínicas resultan difíci-
difícil godet (mixedema), e impresión de obesidad. les de reconocer, pues algunas veces se confunden
Hay caída del vello en los miembros inferiores. con síntomas propios de la gestación, a saber: de-
Cuando existe hipotiroidismo secundario, la piel caimiento, anemia, constipación, irritabilidad y poco
está menos afectada y se acompaña de zonas de apetito, entre otros.
despigmentación, sobre todo en la aréola y el pe- El hipotiroidismo periférico es una enfermedad
zón; las mucosas están pálidas y la voz es ronca,
hereditaria que afecta por igual a ambos sexos y for-
grave y opaca.
ma parte del espectro clínico de la resistencia peri-
En la región anterior del cuello es posible encon-
férica a las hormonas tiroideas; en su forma o
trar aumento de volumen del tiroides, de tamaño y
variedad completa, se sospecha ante la presencia de
consistencia variables, superficie lisa o irregular y
retardo del crecimiento, dificultad para el aprendi-
habitualmente no doloroso. Las características del
zaje, hiperactividad y taquicardia.
bocio ayudan a precisar la causa del hipotiroidismo,
pues será blando y de tamaño moderado (aproxima- La presencia de algunos síntomas de hipofunción
damente 60 g) en los pacientes con defectos en la tiroidea o hipotiroidismo subclínico, en pacientes con
hormonosíntesis tiroidea; en los pacientes con défi- antecedentes de tiroidopatías, con bocio difuso o
cit o exceso de yodo, con tiroiditis autoinmune o no, nodular, hiperlipoproteinemia y enfermedades au-
el bocio estará entre 40 y 60 g, tendrá consistencia toinmunes como vitiligo y anemia perniciosa, obli-
aumentada y la superficie puede ser irregular y mu- gará a excluir dicho hipotiroidismo mediante
chas veces nodular. exámenes complementarios correspondientes.
El examen del aparato cardiovascular muestra
aumento de la silueta cardíaca y ruidos cardíacos Exámenes complementarios
apagados y bradicárdicos. El pulso es lento y lleno. Estarán encaminados a:
Es posible hipertensión arterial. 1. Confirmar el diagnóstico del hipotiroidismo
En el sistema nervioso hay bradipsiquia, bradilalia Determinar los valores plasmáticos de T4t o de PBI
y reflejos osteotendinosos disminuidos. (yodo unido a las proteínas, normal: 3 a 7 µg% ),
A veces hay hipoacusia, que cuando se acompa- que en estos casos estarán disminuidos, excepto
ña de defecto en la organificación, origina el síndro- en el hipotiroidismo subclínico (se encontrarán
me de Pendred. dentro de los límites normales) y en el periférico
En ocasiones ocurre una hipertrofia muscular se- (pueden estar elevados).
vera, lo que da origen al síndrome de Kocher- Además, es posible determinar la captación de
Semaligne-Debré o síndrome de Hoffman. T3 (CT3) como medida de la saturación de la pro-
El cuadro clínico en el anciano resulta difícil de teína transportadora de tiroxina, que dará valores
reconocer, pues muchas de las características bioló- > 110. Con esta determinación se podrá obtener
gicas propias de esta época de la vida, como son el índice de tiroxina libre, según la fórmula si-
aumento de la sensibilidad al frío, constipación, piel guiente:
seca e insomnio, entre otras, sugieren hipotiroi-
dismo, por lo que éste se deberá buscar activamente
ante la presencia de hipercolesterolemia, depresión
.
T4t 100 < 40, para valores normales de T4t
CT3 entre 52 y 145 nmol/L, lo que confir-
de difícil explicación y resistencia al tratamiento
maría el hipotiroidismo.
habitual para la hipertensión arterial.

193
QRS.
2. Realizar la localización anatómica de la le- c. Determinaciones enzimáticas: creatinina,
sión quinasa, transaminasa oxalacética, lactodes-
Se miden los niveles de TSH plasmática (de pre- hidrogenasa, las que estarán elevadas.
ferencia emplear un método ultrasensible). Los d. Además, se puede encontrar hiperuricemia
valores aumentados confirmarán la lesión tiroidea e hiponatremia.
o primaria, mientras que los disminuidos sugie- e. Hemograma, cuyo resultado es varibale y se
ren que la lesión podría estar en la hipófisis o en encuentran: anemias normocítica normocró-
el hipotálamo. Para establecer la diferencia se eva- mica, microcítica hipocrómica e incluso,
luará la respuesta de TSH a la TRH (200 µg en un macrocítica.
bolo EV) y se determinarán los niveles de Y todos aquellos exámenes complementarios ne-
tirotrofina a los 0; 20; 30 y 60 min; si el incre- cesarios para establecer el criterio del cuadro clíni-
mento en esta última muestra es mayor de 2,5 co del paciente.
veces el valor basal, la lesión será hipotalámica,
y si no hay respuesta, el daño será hipofisario. Tratamiento
3. Precisar la causa del hipotiroidismo Está dirigido a suprimir las manifestaciones clíni-
a. El origen autoinmune se determinará al pre- cas y humorales del hipotiroidismo.
cisar los niveles plasmáticos de anticuerpos
antitiroideos antiperoxidasa (antiMC) o an- Tratamiento preventivo
titiroglobulina (antiTg). Hay que evaluar la función tiroidea en todo recién
b. Medir la excreción urinaria de I127 permitirá nacido. Evitar el uso indebido de yodo y sustancias
decidir si existe o no déficit de yodo, pues en
bociógenas, sobre todo en mujeres embarazadas; y
las zonas con déficit de éste los valores están
administrar el yodo radiactivo en las dosis adecua-
disminuidos; lo contrario ocurrirá si existe ex-
das y realizar la resección quirúrgica necesaria en
ceso de ingestión de yodo.
los pacientes con hipertiroidismo.
c. La gammagrafía tiroidea servirá para poner
de manifiesto la presencia de alteraciones
Tratamiento sintomático
anatómicas del tiroides, como aplasia nodular
Consiste en la administración de hormonas tiroideas
y tiroides lingual, entre otros.
en dosis suficiente para mantener al paciente euti-
d. La TAC y la RMN de la región hipotálamo-
roideo y sin efectos secundarios indeseables.
hipofisaria están indicadas en aquellos pacien-
Aunque de manera general el tratamiento de este
tes en que exista hipotiroidismo secundario;
en estos casos también se deben realizar es- síndrome es de por vida, existen situaciones en que
tudios neuroftalmológicos, como fondo de los medicamentos pueden ser administrados por un
ojo, campo visual, pericampimetría y poten- tiempo, como sería en los pacientes con un hipoti-
ciales evocados visuales. roidismo originado por sustancias bociógenas, des-
e. El ultrasonido del tiroides servirá para la lo- pués de la administración de I131, de la cirugía del
calización anatómica, así como para evaluar tiroides, luego de la fase de destrucción de la tiroiditis
el patrón ecocéntrico de la glándula (una hi- subaguda y de la tiroiditis posparto.
poecogenicidad difusa sugiere tiroiditis au- Para iniciar la terapéutica se deberá tener en cuenta
toinmune) y la presencia de nódulos y sus la edad del paciente, el tiempo de evolución e inten-
características. sidad del hipotiroidismo, el momento fisiológico y
4. Evaluar la repercusión periférica del hipoti- las enfermedades asociadas.
roidismo
Se podría indicar: Paciente menor de 50 años, sin enfermedades aso-
a. Niveles de colesterol total plasmático, que ciadas. El objetivo del tratamiento es lograr el euti-
suelen dar valores elevados. roidismo, para lo cual se emplea levotiroxina sódica
b. Electrocardiograma con microvoltaje, pro- en dosis de 1,6 a 1,7 mg/kg de peso, ideal como do-
longación del intervalo PR, y disminución sis total, que podrá ser indicada desde el principio,
en amplitud de la onda P y del complejo pues el hipotiroidismo es un síndrome que se esta-

194
blece lentamente y para su recuperación clínica se féricas de hipofunción tiroidea (hipercoleste-
necesita de un tiempo que como promedio es de 9 rolemia, bradicardia, depresión, entre otros). En
meses. Otra pauta terapéutica sería iniciar con la otras situaciones biológicas se sugiere mante-
mitad de la dosis calculada, realizar reevaluación ner una conducta expectativa, lo que significa
clínica entre 6 y 8 semanas y entonces indicar el determinar semestral o anualmente los niveles
total de la dosis calculada. de T4t y TSH.
Esta pauta no excluye el esperar entre 6 y 9 me- b) Cirugía: El hipotiroidismo constituye un fac-
ses o más para la erradicación completa de los sín- tor de riesgo quirúrgico, pues predispone a de-
tomas clínicos, algunos de los cuales, como la piel presión respiratoria posanestesia, sepsis, lenta
seca o las modificaciones en los pelos y en las uñas, recuperación anestésica, cicatrización lenta de
a veces no son reversibles. las heridas, sangramientos e íleo paralítico; sin
Para confirmar que se administra la dosis óptima embargo, la ausencia de eutiroidismo no cons-
de levotiroxina se aconseja emplear la determina- tituye una contradicción para la cirugía de ur-
ción de los niveles plasmáticos de TSH, que deben gencia. En caso de cirugía electiva sí es
estar entre los límites normales. En casos de hipoti- aconsejable el control del hipotiroidismo pre-
roidismo secundario o terciario, se aconseja emplear vio a ésta.
el T4t, cuyos valores se corresponderán con el límite c) Embarazo: Si la paciente está eutiroidea al
normal alto. comienzo del embarazo, se necesitará incre-
Pacientes con más de 60 años y complicaciones mentar la dosis de levotiroxina sódica aproxi-
cardiovasculares. En estos pacientes el objetivo del madamente en 50 µg (determinar niveles de
TSH en cada trimestre). Recordar que medica-
tratamiento será mejorar el estado metabólico, por
mentos como el hierro y el hidróxido de aluminio
ello se empezará con la dosis mínima de levotiroxi-
interfieren en la absorción de la levotiroxina,
na sódica (125µg aproximadamente), que se incre-
por lo que se recomienda no ingerirlos al mis-
mentará cada 6 u 8 semanas según el paciente tolere
mo tiempo.
las manifestaciones cardiovasculares.
d) Epilepsia: Dado que drogas como la fenitoína
En los ancianos, la dosis total de levotiroxina
y la carbamazepina aumentan el catabolismo
sódica necesaria para lograr el eutiroidismo es me-
de la tiroxina, es posible que sea necesario
nor que en las edades anteriores. reevaluar la dosis de sustitución con levotiroxi-
Pacientes con hipotiroidismo intenso o de largos na en aquellos pacientes que estando eutiroi-
años de evolución. Se aconseja añadir al tratamien- deos requieran del empleo de estos agentes
to acetato de cortisona en dosis de 37,5 mg/día has- anticonvulsivantes.
ta tanto se alcance la dosis total de levotiroxina (para
evitar una crisis adrenal por el cambio metabólico Seguimiento
inducido por la administración de las hormonas En el hipotiroidismo primario las consultas se reali-
tiroideas). La levotiroxina se iniciará con dosis ba- zarán cada 4 o 6 semanas, lo que estará en depen-
jas (25 µg/día), que se incrementarán cada 6 u 8 se- dencia de las características del paciente. Estas
manas según la tolerancia al medicamento. consultas se irán espaciando cada 3 o 6 meses, hasta
lograr la dosis óptima de levotiroxina sódica y la
Hipotiroidismo y situaciones especiales desaparición del cuadro clínico; a partir de ese
a) Subclínico: Se define así un paciente con nive- momento las consultas serán anuales, excepto que
les plasmáticos normales de hormonas tiroideas ocurra gestación o algunas de las contingencias fi-
y un ligero aumento de la tirotropina. En estos siológicas antes mencionadas.
casos se debe instituir tratamiento con levoti- En cada consulta hay que evaluar la mejoría del
roxina sódica en las dosis necesarias para nor- cuadro de hipotiroidismo y la presencia de efectos
malizar los niveles de TSH en los enfermos indeseables de las hormonas tiroideas, y de ser ne-
jóvenes, niños, adolescentes, y durante el em- cesario se indicará:
barazo.
En los mayores de 50 años la terapéutica se 1. Niveles de tirotropina (en los casos de hipoti-
aplicará si se demuestran consecuencias peri- roidismo primario); recordar que el objetivo

195
será normalizar estos valores. tensiva.
2. Niveles del índice de T4l, o colesterol plasmá- Sus pilares fundamentales son:
tico (sólo será de utilidad en aquéllos en que
esté elevado antes de iniciar el tratamiento con • Medidas generales en todo paciente grave; ex-
hormonas tiroideas) en pacientes con hipotiroi- tracción de sangre para realizar gasometría,
dismo secundario o terciario. glicemia, y niveles de T4t, entre otros.
• Reposo en posición de Trendelenburg u hori-
Entre los efectos indeseables de las hormonas zontal.
tiroideas están nerviosismo, palpitaciones, pérdida • Medir la presión venosa central.
de peso, diarreas y sudoraciones. • Monitoreo de los signos vitales.
• Control de la diuresis.
Coma mixedematoso
• Control de la temperatura del paciente sin el
Representa la última etapa de un hipotiroidismo de empleo de mantas de calor; se deberá controlar
larga evolución y habitualmente ocurre durante los la temperatura ambiental.
meses de invierno y en ancianos. En general no se • Realizar balance hidromineral y administrar so-
conoce su patogenia. La presencia de estupor-coma, lución salina hipertónica en glucosa al 50 %,
hipotermia, hiporreflexia, hipotensión arterial, bra- en la dosis necesaria para evitar la hipoglice-
dicardia y convulsiones, acompañados de depresión mia y la insuficiencia cardiaca congestiva
respiratoria en un paciente con antecedentes de hi- (aproximadamente 1 500 ml en 24 h).
potiroidismo o enfermedad tiroidea sin tratamiento, • Precisar y tratar la causa desencadenante.
hace sospechar el diagnóstico de coma mixedema-
toso. Como factores desencadenantes están la expo- Medidas específicas
sición al frío, las infecciones, los traumatismos y el Se administrará por vía EV de 300 a 500 µg, en bolo,
uso de sedantes. de levotiroxina sódica, seguida de 50 a 100 µg por
día, hasta revertir el coma.
Tratamiento Hidrocortisona, 100 mg EV cada 8 h o mantener
El tratamiento del coma mixedematoso requiere la una infusión continua con 300 mg que debe durar
presencia de un equipo multidisciplinario (intensi- 24 h.
vistas, internistas, endocrinólogos), colocado a la De no contarse con levotiroxina parenteral, pue-
cabecera del paciente, en un servicio de terapia in- de emplearse la triyodotironina (por sonda nasogás-
trica), 50 o 100 µg cada 4 o 6 h.

196
28

TIROIDITIS

Las tiroiditis comprenden un conjunto de afeccio-


nes del tiroides cuya frecuencia es variable y pue-
TIROIDITIS SUBAGUDA,
den ser infecciosas (bacterianas específicas o no, GRANULOMATOSA
virales), autoimunes o inflamatorias (origen físico
y químico). O DE QUERVAIN
Se clasifican, teniendo en cuenta la rapidez de su
inicio y duración, en tiroiditis aguda, subaguda y Concepto
crónicas. La tiroiditis subaguda constituye una afección infla-
matoria autolimitada del tiroides, que dura desde una
1. Tiroiditis aguda supurada o no supurada. semana hasta varios meses. Presenta tendencia a las
Esta forma de tiroiditis es rara y se debe a la in- recidivas y cursa con una fase de disrupción folicular,
vasión del tiroides por microrganismos no espe- seguida por otra de depresión de la hormonosíntesis
cíficos. tiroidea, y a continuación, una fase de recuperación.
2. Tiroiditis subaguda, granulomatosa o de Quervain.
3. Tiroiditis crónicas Etiología y frecuencia
• Origen autoinmune Se ha sugerido la posibilidad de que se trate de una
Tiroiditis linfocítica afección de origen viral o de alguna forma de reac-
Tiroiditis oxifílica ción inmunitaria o alérgica, desencadenada por una
Tiroiditis crónica de Hashimoto infección de las vías respiratorias superiores.
Tiroiditis no específica Algunos casos parecen deberse al virus de las pa-
• Origen no autoinmune peras, a los virus Coxsackie, de la gripe, virus ECHO
y los adenovirus.
Sarcoidosis
Es poco frecuente y afecta más a las mujeres que
Tuberculosis
a los hombres. Se presenta generalmente entre
Sífilis los 30 y 50 años de edad.
Micosis generalizadas
Amiloidosis Anatomía patológica
• Tiroiditis de Riedel La glándula tiroides aparece hipertrofiada. Micros-
cópicamente se observan las típicas lesiones en par-
La radiación, y raras veces las lesiones directas ches o en placas con distribución variable en la
sobre la glándula, producen tiroiditis. glándula; hay infiltración de los folículos por célu-
Por ser las de mayor frecuencia se describirán: la las mononucleares, disrupción folicular y pérdida del
tiroiditis subaguda y las tiroiditis autoinmunes. coloide. Un hallazgo característico es la célula gi-
gante multinucleada, es decir, un núcleo central de
coloide rodeada de células gigantes, que puede evo-
lucionar hacia un granuloma. Una vez curada la afec-
ción, el tiroides recobra su aspecto normal.

197
Cuadro clínico aproximadamente 6 semanas, luego se suspende y
se reevaluará la función tiroidea.
La enfermedad puede ser asintomática y descubrir-
la casualmente el propio paciente o el médico, como
un aumento difuso del tiroides o como una tumefac-
ción localizada, con cierta sensación de dificultad al TIROIDITIS
tragar o dolor a la deglución. Generalmente habrá
fiebre ligera, malestar general y fatiga. Durante las
AUTOINMUNE
primeras dos semanas son posibles síntomas suges-
tivos de tirotoxicosis, como nerviosismo, palpitacio- Constituye un grupo de afecciones tiroideas con va-
nes, temblores y aumento de la sudoración; con riada expresión clínica, que tienen en común la pre-
posterioridad surge decaimiento, constipación y caí- sencia de anticuerpos contra el receptor tiroideo para
da del cabello, entre otros, que no se presentarían si la TSH, contra la tiroglobulina o contra la tirope-
se administran hormonas tiroideas como tratamiento. roxidasa. Se presentan con mayor frecuencia en el
La enfermedad dura aproximadamente 6 sema- sexo femenino y en general su debut se relaciona
nas, aunque a veces hay recurrencias de intensidad con la menarquia, los embarazos o la menopausia.
variable que abarcan períodos de varios meses. La variedad conocida como tiroiditis de Hashimoto,
junto con la enfermedad de Graves-Basedow y el
En el examen físico se detecta aumento de volu-
hipotiroidismo primario idiopático, se conocen como
men del tiroides con consistencia normal; el tamaño
enfermedad autoinmune del tiroides, la que también
es variable, puede ser liso o irregular y sobre todo
se asocia con otras enfermedades autoinmunes ór-
doloroso, y no se acompaña de soplo ni de thrill.
gano-específicas o no.
Exámenes complementarios Anatomía patológica
Hemograma. Hay leucocitosis moderada.
Varía con el tipo clínico; en general existe infiltra-
Eritosedimentación. Está acelerada.
ción linfocitaria difusa, obliteración de los folículos
Electroforesis de proteínas. Hay aumento de la
tiroideos y fibrosis. A veces hay destrucción de las
alfa-2-globulina.
células epiteliales; en otros casos existe hiperplasia
Captación de I131. Está disminuida.
epitelial, así como degeneración y fragmentación de
Determinación de T4t. Está elevada o disminuida,
la membrana basal de los folículos. Las células epi-
según el momento del estudio. teliales restantes pueden ser mayores y mostrar al-
Determinación de TSH. Está disminuida o eleva- teraciones oxifílicas en el citoplasma (células de
da, según el momento del estudio. Askanazy). El coloide es escaso.
Determinación de anticuerpos antitiroideos
antitiroglobulinas. Están ligeramente elevados. Formas clínicas
Punción aspirativa del tiroides. Muestra las ca-
El bocio constituye el elemento más llamativo, y
racterísticas células gigantes.
varía según la forma clínica:
Tratamiento Tiroiditis linfocítica. Ocurre en adolescentes, se
presenta como un bocio pequeño de consistencia
En los casos leves, la aspirina, 4 o 5 g diarios, o elástica, no doloroso, bien limitado y sin síntomas
cualquier antinflamatorio no esteroideo, suele bas- de disfunción tiroidea ni de compresión. En ocasio-
tar para controlar los síntomas, pero se debe mantener nes se detectan títulos bajos de anticuerpos antipe-
hasta varias semanas después de la fase inflamato- roxidasa.
ria. En los más graves, 15 a 20 mg diarios de predni- Tiroiditis oxifílica. Aparece en mujeres entre 30
sona alivian dichas manifestaciones. Cuando existe y 60 años, con un bocio de crecimiento relativamente
tirotoxicosis se emplea el propranolol, 80 a 120 mg rápido que se acompaña de presión cervical, sin dis-
diarios durante 14 a 21 días. Si existe aumento de función tiroidea. El bocio es de consistencia firme,
volumen muy notable del tiroides, se aconseja em- puede ser irregular y poco doloroso. Cursa con títu-
plear hormonas tiroideas (levotiroxina sódica en los positivos de anticuerpos contra la tiroglobulina
dosis supresiva), tratamiento que se mantendrá y la tiroperoxidasa.

198
Tiroiditis crónica o fibrosa. Se ve en mujeres Determinación de anticuerpos antitiroglobulina.
mayores de 40 años, cursa con un bocio pequeño de Están elevados (constituyen el aspecto más impor-
consistencia firme no dolorosa, a veces nodular. No tante: son específicos de la tiroiditis de Hashimoto).
existen síntomas compresivos; sí los hay de tirotoxi- También los anticuerpos antiperoxidasa son a veces
cosis ligera (Hashitoxicosis) o en ocasiones un hi- positivos, sobre todo en la forma linfocítica).
potiroidismo evidente, cuando se ven por primera Serología. A veces hay reacciones falsas posi-
vez en la consulta. tivas.
Varios trabajos sugieren que la incidencia de neo-
Biopsia por punción tiroidea con aguja fina. Con-
plasia tiroidea está aumentada en la enfermedad de
firmará la presencia de infiltrado linfocítico, u otras
Hashimoto; en la mayoría de los casos la neoplasia
alteraciones propias de la entidad.
es de tipo papilar y de bajo grado de malignidad. La
enfermedad de Hashimoto puede coexistir con afec-
Tratamiento
ciones de base autoinmune organoespecífica o no,
como anemia perniciosa, adrenalitis autoinmune, sín- En muchos de los casos no se requiere tratamiento
drome de Sjögren, lupus eritematoso diseminado y alguno. Ante un bocio mediano durante la pubertad
diabetes mellitis insulinodependiente. se aconseja el uso de hormonas tiroideas en dosis
Factores constitucionales. Hay una predisposición supresiva, hasta tanto termine este período o desapa-
familiar y una asociación con el sistema HLA, de rezca el bocio.
manera que el HLA DR3 y HLA DR5b se asocian Durante el embarazo hay que emplear dosis sus-
con las formas atrófica y bociógena, respectivamen- titutivas de hormonas tiroideas.
te, de la tiroiditis crónica. En el paciente geriátrico se debe utilizar esta do-
sis si el bocio es mayor de 60 g y sobre todo, si no
Exámenes complementarios existe contraindicación para ésta.
Electroforesis de proteínas: En algunos casos hay En los casos de dolor en la región tiroidea se de-
aumento de las gammaglobulinas, sobre todo en la ben emplear glucocorticoides asociados a las hor-
forma crónica. monas tiroideas.
Captación de I131. Los resultados son variables, y
Si se trata de hipotiroidismo, se emplean dosis
es normal o está disminuida.
sustitutivas de hormonas tiroideas de por vida.
Niveles plasmáticos deT4t y de TSH. Están nor-
El tratamiento quirúrgico (tiroidectomía subtotal)
males, elevados o disminuidos, según el estado de
la función tiroidea. se justifica si existen síntomas compresivos.

199
29

NEOPLASIAS DEL TIROIDES

Los tumores del tiroides son neoplasias endocrinas 3. La presencia de anomalías citogenéticas comu-
muy frecuentes, que habitualmente se presentan nes en los carcinomas de origen folicular y no
como un nódulo o como un bocio nodular en un en los papilares (carcinomas o adenomas), su-
paciente eutiroideo, esto último es muy común en giere un fallo en el control del ciclo celular aso-
la población adulta; desde el punto de vista patogé- ciado a pérdida de la función de uno o más genes
nico, pueden ser expresión de un quiste, un adenoma, supresores localizados en los cromosomas 3;
un carcinoma, o un lóbulo único de tejido tiroideo 10; 11 y 17.
normal, entre otros. Los nódulos, aumentos circuns-
critos del tejido tiroideo, se detectan al examen físi- Clasificación histológica
co cuando tienen un tamaño mayor de 2 cm de Desde el punto de vista histológico los tumores del
diámetro. tiroides se clasifican en:
Todo nódulo del tiroides hace sospechar la pre-
sencia de un carcinoma, aunque en menos del 1 % A. Tumores primarios epiteliales
de ellos se confirma una neoplasia maligna; en ge- 1. Tumores de células foliculares
neral, cuando existen antecedentes de su crecimiento a. Benignos
reciente, de algún familiar con bocio o cáncer del • Adenoma de tipo folicular, fetal, micro y
tiroides, de radiación en la región cervical, o cuan-
macrofolicular y papilar
do el nódulo se presenta particularmente duro o se
b. Malignos
acompaña de adenopatía satélite, en sujetos en eda-
• Carcinoma diferenciado: papilar o folicular
des extremas de la vida (menor de 20 o mayor de
70 años de edad), debe sospecharse un proceso ma- • Carcinoma pobremente diferenciado
ligno. • Carcinoma indiferenciado
2. Tumores de células parafoliculares
Patogenia • Carcinoma medular del tiroides
Estudios experimentales en animales y la observa- 3. Tumores de células foliculares y de células C
ción clínica, sugieren que la hormona tirotropa tie- • Carcinoma folicular-medular
ne una influencia significativa en el desarrollo y B. Tumores primarios no epiteliales
progresión de las neoplasias tiroideas, y aunque no 1. Sarcomas
existe evidencia que demuestre la transformación 2. Linfomas
de un adenoma en carcinoma, hechos como los si- 3. Otros
guientes establecen una asociación entre ambos C. Tumores secundarios.
eventos:
Histológicamente, los adenomas tienen la propie-
1. La mayoría de los adenomas y carcinomas dad de estar bien encapsulados, no invadir los teji-
foliculares son de origen monoclonal. dos subyacentes ni producir metástasis en áreas
2. La activación por mutación o translocación del contiguas, muestran pocas mitosis y el resto del teji-
oncogene RAS es más común en los adeno- do glandular es normal. Teniendo en cuenta sus ca-
mas que en los carcinomas foliculares, lo que racterísticas histopatológicas, se clasifican como
apoya el papel en la tumorogénesis temprana. adenomas embrionario, fetal (cuya apariencia recuer-

200
da el tejido tiroideo en esas etapas de la vida), mi- familiar, un amigo o el médico durante el examen
crofolicular y macrofolicular; esta última variedad físico, descubren por casualidad. Por lo común no
se conoce como adenoma coloide y en ella existen se acompañan de síntomas de disfunción tiroidea,
folículos bien formados, por lo común grandes, lle- aunque en algunos sujetos podrían detectarse sínto-
nos de coloide y con epitelio plano. mas de compresión. Su crecimiento es lento, por lo
El adenoma de Hurthle es una lesión poco fre- que el paciente no es capaz de señalar con precisión
cuente, compuesta por grandes células acidófilas, desde cuando lo tiene. También se muestran como
pálidas y con gran cantidad de mitocondrias en el bocio uni o multinodular; en este último se debe
citoplasma, al que le dan un aspecto granular y su- acompañar de un nódulo dominante.
gieren un carácter de oncocitoma
El aspecto histológico de los carcinomas depen- Tumores malignos
derá del tipo celular que predomine, de manera que: Carcinoma papilar. Es la más frecuente de las neo-
plasias malignas del tiroides, y aunque se ve a cual-
1. Los papilares están constituidos por epitelio ci- quier edad, predomina en los jóvenes (menores de
líndrico, con pliegues que forman proyeccio- 40 años) y en las mujeres (Fig. 29.1). En ocasiones
nes papilares con tallos de tejido conectivo; en hay antecedentes de radioterapia cervical y su cre-
ocasiones se observan células de citoplasma cimiento es lento.
pálido y acidófilo (células de Hurthle) y puede
haber focos de carcinoma en otras partes del
tiroides por diseminación linfática intra-
glandular.
2. En los foliculares el tumor es encapsulado, su
apariencia varía y va desde un tiroides aparen-
temente normal hasta la presencia de células
que muestran mitosis de distinto grado; los
folículos son pequeños, hay células de Hurthle
y elementos papilares de grado variable, e in-
vasión de los vasos y del parénquima tiroideo
adyacente.
3. En el carcinoma medular, tumor no encapsula-
Fig. 29.1. Aumento de volumen del istmo y lóbulo izquierdo
do, existe un patrón celular variable, pero como
del tiroides.
característica hay abundante estroma de tejido
conectivo hialino que muestra reacciones de Produce metástasis linfáticas intraglandulares y
tinción de la sustancia amiloide; pueden exis- en los ganglios pericapsulares y regionales, lo que en
tir focos de carcinoma en otras partes del algunos casos es el signo inicial de la enfermedad.
tiroides, así como invasión de los vasos san- Carcinoma folicular. Se presenta después de los
guíneos. 40 años, tiene un crecimiento más rápido que el car-
4. En el carcinoma indiferenciado se presentan cinoma papilar y produce metástasis por vía sanguí-
células atípicas con numerosas mitosis y pre- nea en el pulmón, el cerebro y los huesos. A veces
dominio de células fusiformes y gigantes existe el antecedente de un bocio o nódulo tiroideo.
multinucleadas, con frecuentes áreas de necro- Carcinoma anaplásico. Ocurre en personas ma-
sis e infiltración polinuclear de estructuras ve- yores de 50 años, en mujeres y se caracteriza por el
cinas (piel, músculo, vasos sanguíneos, entre crecimiento rápido y doloroso de un bocio existen-
otros). te. La masa origina disfagia, disfonía y estridor res-
piratorio; habitualmente es de consistencia pétrea,
Cuadro clínico está adherida a las estructuras vecinas y se acompa-
Tumores benignos ña de adenomegalias regionales.
Clínicamente los adenomas aparecen como un au- Carcinoma medular. Es algo más frecuente en mu-
mento circunscrito del tiroides, que el paciente, un jeres, se presenta después de los 50 años, como un

201
nódulo o una masa tiroidea o como una adenopatía
regional acompañada de hipertensión arterial, y a
veces tiene carácter familiar, lo que ocurre en suje-
tos jóvenes; en estos casos es bilateral y tiene mejor
pronóstico. En ocasiones se acompaña de síntomas
de hipercortisolismo y de hipercalcemia, pues se
asocia con el síndrome de Cushing, el feocromocito-
ma, la hiperplasia paratiroidea y con tumores hipo-
fisarios al formar parte de las neoplasias endocrinas
múltiples.

Diagnóstico y estudios
complementarios Fig. 29.2. Ultrasonido en el caso de la figura anterior. Nódulo
mixto quístico y sólido del lóbulo izquierdo.
El diagnóstico se realiza por antecedentes clínicos
(irradiación cervical, familiares con cáncer del
tiroides, hipertensión arterial, patrón de crecimien-
to del tumor, etc.), así como por la inspección y la
palpación de la región anterior del cuello y estructu-
ras vecinas; no obstante, la confirmación de la le-
sión se hará por examen histológico de la pieza.
Biopsia por aspiración con aguja fina (BAAF) del
tiroides. Constituye el recurso diagnóstico más im-
portante para el estudio de la causa del nódulo del
tiroides, aunque es necesario señalar que su valor
dependerá de la experiencia del citólogo. Se deberá
realizar en el nódulo si es único, o en el nódulo do-
minante en casos de bocios multinodulares. En nues- Fig. 29.3. Gammagrafía en el mismo paciente. Nótese la au-
tro medio el informe sería: bocio, tejido tiroideo sencia de capatación (nódulo frío) del lóbulo izquierdo. El re-
normal, sospecha de malignidad o se define el tipo sultado final del estudio histológico fue un carcinoma papilar
del tiroides.
de neoplasia maligna (carcinoma papilar, carcino-
ma folicular, carcinoma medular del tiroides).
En presencia de un nódulo tibio se deberá esta-
Previo a la BAAF se sugiere realizar un ultraso-
blecer su dependencia o no de tirotropina, para lo
nido del tiroides (Fig. 29.2), que definirá el carácter
cual se hará la prueba de inhibición con liotironina.
ecogénico o ecolúcido de la lesión. En este último Se administran 150 µg de L-T3 diarios durante 7 días,
caso dará una idea aproximada del volumen del con- se hace una gammagrafía posterior y si el nódulo se
tenido; además, podrá señalar la presencia de halo inhibió, significa que es dependiente de TSH; de no
de seguridad, complejidad ecogénica de la lesión y inhibirse (es decir, continúa captando I131 post L-T3),
desplazamiento de vasos y otras estructuras locales, significa independencia y se deberá considerar como
así como la presencia de adenomegalias regionales. un nódulo caliente. En este último caso es necesario
Otro recurso diagnóstico es la gammagrafía determinar si existe o no resto del tejido tiroideo,
tiroidea (Fig. 29.3), que servirá para evaluar la ca- para lo cual se podrán emplear el ultrasonido tiroideo
pacidad del nódulo para captar el I131. Esto permitirá o la prueba de estimulación con TSH; de demostrar-
clasificarlo en frío (cuando la captación es nula), se tejido tiroideo, se trata entonces de un nódulo au-
fresco (cuando la captación es similar a la del resto tónomo (posible enfermedad de Plummer); en el caso
del tejido tiroideo), tibio y caliente (cuando el nó- contrario, pensar en agenesia de un lóbulo o exére-
dulo tiene mayor captación que el resto del tiroides). sis del resto del tiroides.
La malignidad es más frecuente en los nódulos fríos Para establecer la presencia de compresión regio-
y frescos que entre los tibios y calientes. nal se podrán indicar estudios radiológicos simples

202
de tórax y cuello, así como laringoscopia en busca gammagrafía de la región anterior del cuello a las
de signos de desplazamiento, calcificaciones regio- 4 semanas; si se comprueba tejido tiroideo rema-
nales, etc. nente, entonces se recurre al I131 para su destrucción.
La presencia de tejido tiroideo en el estudio his- Luego de una semana de la administración del
tológico de un ganglio regional, es diagnóstico de radioyodo y en aquellos pacientes con tiroidecto-
metástasis de un carcinoma tiroideo, aun en ausen- mía total por neoplasia maligna de origen epitelial,
cia de bocio o de nódulo. se iniciará tratamiento con hormonas tiroideas en do-
En casos de pacientes donde exista la sospecha sis supresiva (levotiroxina sódica de 2 a 2,5 µg/kg de
de un carcinoma medular del tiroides se deberán peso/día).
determinar los niveles plasmáticos de calcitonina Cada 6 meses se realizará una gammagrafía
basales o posestimulación con pentagastrina, ade- tiroidea o se determinarán los niveles plasmáticos
más de determinaciones plasmáticas de paratormona, de tiroglobulina sérica, con el objetivo de definir la
cortisol, catecolaminas, entre otros estudios. Es ne- presencia de metástasis, particularmente con quie-
cesario evaluar anatómicamente las adrenales, la nes tengan carcinomas papilares y foliculares; de de-
hipófisis y el páncreas. mostrarse éstas se empleará nuevamente I131 . Este
procedimento se repite cada 6 meses, siempre y
Conducta frente cuando se detecten metástasis; de no existir 2 años
a un nódulo tiroideo después del período de observación, se hará anual
los siguientes 5 años y quinquenal, el resto de la
Después de analizar los resultados de la clínica, la vida.
BAAF y otros exámenes complementarios, se deci- Si el paciente rechaza la cirugía o tiene alto ries-
dirá la conducta quirúrgica ante todo paciente con: go quirúrgico, se podría utilizar I131 en dosis ablativa
En aquéllos con carcinoma medular del tiroides
1. Sospecha clínica de malignidad se hará una determinación de calcitonina plasmática
2. Resultados de la BAAF positivos o sospecho- basal, o luego de la estimulación con pentagastrina
sos de malignidad se podrán precisar los niveles de antígeno carcinoe-
3. Metástasis ganglionar. mbriogénico, sobre todo si previo a la intervención
quirúrgica se conocieron éstos. De existir metásta-
La intervención propuesta será la hemitiroidecto- sis se decidirá con el oncólogo la conducta que se
mía o la tiroidectomía total, lo que dependerá de los debe seguir; lo mismo ocurre en aquéllos con carci-
resultados de la biopsia por congelación, pues de nomas no epiteliales del tiroides o con tumores se-
ser positiva, se realizará esta última, así como la ex- cundarios.
tirpación de todos los ganglios afectados; en los ca- En los enfermos con carcinoma indiferenciado del
sos en que fuese negativa pero el estudio posterior tiroides la conducta terapéutica será tiroidectomía
confirme una neoplasia maligna del tiroides, se re- total seguida de radioterapia externa, aunque en oca-
comienda una segunda intervención quirúrgica para siones sólo es factible realizar istmectomía descom-
completar la ablación total, sobre todo si se corres- presiva o una traqueostomía.
ponde con un carcinoma folicular del tiroides; de Ante un nódulo caliente o tibio no dependiente
ser un carcinoma papilar, se emplea el I131 en dosis de TSH se pudiera realizar una adenectomía (pacien-
ablativa para completar la tiroidectomía. La abla- tes jóvenes) o administrar I131 previa protección del
ción total se indicará en los pacientes con metásta- tejido tiroideo normal con hormonas tiroideas en do-
sis ganglionar , tengan o no bocio. sis supresivas, 3 semanas antes del radioyodo y has-
Una semana después de la intervención se sugie- ta 2 meses después de éste.
re una dosis ablativa de I131, con el objetivo de des- En casos de pacientes con neoplasias malignas del
truir posibles restos del carcinoma en el lecho tiroides a los cuales no es posible intervenir ni apli-
quirúrgico. Algunos autores prefieren demostrar pri- car I131 , se emplearán dosis supresivas de hormonas
mero la presencia de éstos, para lo cual realizan una tiroideas.

203
30

ENFERMEDADES DE LAS PARATIROIDES

Las paratiroides están situadas en la cara posterior D en su metabolito activo; la calcitonina, hormona
de los lóbulos laterales de la glándula tiroidea en que se opone a la acción de la PTH, ya que disminu-
número de cuatro; son pequeñas formaciones un ye la resorción de calcio y fosfato tanto en el hueso
poco aplanadas, ovaladas o alargadas y de color como en el riñón; y la vitamina D, cuyo efecto se
amarillo pardo. La dimensión longitudinal de cada ejerce a través de la estimulación de la PTH aumen-
paratiroides es de 4 a 8 mm, la transversal de 3 tando la absorción de calcio en el intestino. De esta
a 4 mm, el espesor de 1,5 a 3 mm y un peso de 0,05 forma se mantiene la homeostasia fosfocálcica a di-
a 0,09 g. ferentes niveles de organización, desde el molecular
Ellas se derivan del revestimiento endodérmico (primer nivel), hasta el sistémico (quinto nivel) pa-
del intestino primitivo que cubre los arcos branquia- sando por el intracelular (segundo nivel), hístico (ter-
les y forma las bolsas faríngeas III y IV. Cada para- cer nivel) y orgánico (cuarto nivel).
tiroides está cubierta por una cápsula del tejido
conjuntivo que la separa del tiroides, su parénqui-
ma está formado por una acumulación de células HIPOPARATIROIDISMO
epiteliales dispuestas en cordones y de ellas se dis-
tinguen tres tipos: principales, que son las encarga-
das de la síntesis y secreción de la hormona
Concepto
paratiroidea (PTH); células oxífilas y células inter- Es el síndrome caracterizado por una secreción defi-
medias inactivas o claras. ciente de PTH, cuya consecuencia es la presencia de
Un sistema endocrino complejo y altamente inte- síntomas de hiperactividad neuromuscular y, bioquí-
grado mantiene la homeostasia de calcio, fosfato y micamente, de hipocalcemia, hiperfosfatemia y PTH
magnesio en todos los vertebrados. Incluye una in- disminuida o ausente en la circulación.
terrelación entre las acciones de dos hormonas
polipeptídicas, PTH y calcitonina, liberada esta úl- Etiología
tima por las células parafoliculares del tiroides, así Existen tres tipos etiológicos principales en el hipo-
como de una hormona esteroidea, la 1,25 dihidro- paratiroidismo: los de causa quirúrgica, que son los
colecalciferol (metabolito activo de la vitamina D). más frecuentes y por lo común se presentan después
El calcio en el organismo es indispensable para de cualquier operación en la parte anterior del cue-
la formación de los dientes y los huesos, al igual llo, tales como tiroidectomía, eliminación de las glán-
que para la coagulación sanguínea; además, regula dulas paratiroides anormales o escisión de neoplasias
la permeabilidad de la membrana celular y la exci- del cuello; los funcionales, que se presentan en aque-
tabilidad neuromuscular, y mantiene el ritmo car- llos pacientes con largos períodos de hipomagnese-
díaco. El nivel de calcio ionizado en el plasma mia por malabsorción intestinal o alcoholismo, ya
permanece entre límites estrechos por la acción in- que se requiere de magnesio para la liberación de la
tegrada de varios factores: la PTH, que aumenta en PTH por la glándula, y en el hipoparatiroidismo
el hueso la resorción de calcio y fosfato, y en el neonatal en hijos de madres con hiperparatiroidismo
riñón, incrementa la resorción de calcio y reduce la primario; y los idiopáticos, entre los que se conside-
de fosfato, y estimula la conversión de la vitamina ran los de aparición en edad temprana y en edad tardía,

204
la ausencia congénita de las paratiroides (síndrome Tetania. Se caracteriza por contracciones muscu-
de DiGeorge), y aquéllos asociados a enfermedades lares espontáneas; en ocasiones es latente y se evi-
autoinmunes que forman parte del síndrome poli- dencia por medio de diversas maniobras, tales como:
glandular autoinmune como es el caso del hipopara-
tiroidismo unido a la enfermedad de Addison. • Signo de Chvostek: Es una contracción perioral
que se produce al golpear el nervio facial un
Patogenia centímetro delante del lóbulo de la oreja; la res-
Al originarse un déficit absoluto o relativo en la puesta va desde la torsión del labio en la comi-
producción de PTH habrá una disminución de la re- sura de la boca hasta la contracción de todos
sorción ósea, de la excreción de fosfato renal y con- los músculos de la cara del lado estimulado.
secutivamente, aumento del fosfato sérico, reducción La torsión simple de la comisura labial se pre-
de la 1,25 dihidrocolecalciferol y de la absorción senta en un 25 % de los sujetos normales, pero
intestinal de calcio y aumento de su excreción por el una contracción más extensa es un signo
riñón, lo que tiene como consecuencia hipocalce- confiable de tetania latente.
mia; se produce un incremento de la excitabilidad • Signo de Trousseau. Consiste en la provocación
neuromuscular, inclusive tetania y rara vez convul- de un espasmo típico del carpo al insuflar el
siones, en ocasiones alcalosis por bajar la excreción manguito del esfigmomanómetro 20 mmHg por
encima de la presión sistólica durante 3 mi-
de bicarbonato, y si la hipocalcemia es crónica, apa-
nutos. Después del espasmo, la relajación se
recerá calcificación de los ganglios basales, trastor-
presentará en 5 a 10 segundos en los casos po-
nos psiquiátricos, anomalías de la piel, el cabello y
sitivos, en los negativos ocurre al instante.
las uñas, alteraciones en el desarrollo dental y en
casos raros bloqueos cardíacos y prolongación de
En la forma manifiesta, el paciente, con previo
los intervalos QT y ST en el ECG.
aviso o súbitamente, presenta una convulsión tónica
Anatomía patológica o más bien una contractura espasmódica de los cua-
tro miembros, que es siempre bilateral y simétrica;
Aunque no se ha establecido, es probable que estén
los brazos se encuentran pegados al tronco, los an-
presentes pequeños restos de paratiroides viables en
tebrazos algo flexionados y las muñecas también en
muchos pacientes con hipoparatiroidismo quirúrgi- flexión con los dedos semiextendidos y unidos for-
co; aquéllos con síndrome poliglandular autoinmu- mando un cono. Los miembros inferiores están ex-
ne pueden tener un infiltrado linfocítico y fibrosis tendidos con los pies en posición varoequina y los
glandular. En algunos enfermos con hipoparatiroi- dedos en flexión, todo lo que constituye los llama-
dismo idiopático de inicio tardío se han encontrado dos espasmos carpopedales.
infiltración grasa, fibrosis y atrofia.
Los casos de hipoparatiroidismo de larga dura- Convulsiones. Las convulsiones, mucho más
ción tienen calcificaciones características de los te- frecuentes en los jóvenes, son de dos tipos: tetania
jidos blandos, en el cristalino y en los ganglios generalizada seguida por espasmos tónicos prolon-
basales del cerebro. Están disminuidos todos los ti- gados, y convulsión típica epileptiforme (gran mal,
pos de células óseas, así como la superficie de for- jacksoniana, focal o pequeño mal).
mación y resorción ósea. Hiperventilación. Debido al stress resultante de
la tetania los enfermos pueden hiperventilar y se-
Cuadro clínico cretar cantidades crecientes de adrenalina.
Manifestaciones neuromusculares Signos extrapiramidales. Los síndromes neuro-
La irritabilidad neuromuscular se produce ante ni- lógicos extrapiramidales, incluso el parkinsonismo
veles bajos de calcio sérico. clásico, aparecen en personas con hipoparatiroidis-
Parestesias. El paciente refiere calambres muscula- mo crónico; se piensa que tales manifestaciones es-
res, adormecimiento y hormigueo alrededor de la tán relacionadas de algún modo con la calcificación
boca, punta de los labios y a veces en los pies. de los ganglios basales.

205
Otras manifestaciones 24 h los valores retornan a los niveles basales. En el
Neurológicas: Edema de la papila y seudotumor ce- hipoparatiroidismo la caída de la calcemia a las 2 h
rebral, pérdida de memoria, alteraciones de la fun- es mayor de un 30 % y no hay recuperación normal
ción cognoscitiva y alteraciones psicóticas. a las 8 y ni a las 24 h.
Cardíacas: Susceptibilidad para la insuficiencia Estudio radiológico y TAC. Permiten detectar las
cardíaca congestiva, resistencia a la digital. zonas ectópicas de calcificación en el tejido celular
Oculares: Catarata subcapsular. subcutáneo, en los núcleos grises de la base, corte-
Cutáneas: Piel seca, cejas despobladas, uñas frá- dad de los metatarsianos y metacarpianos, y aplasia
giles, impétigo herpetiforme o psoriasis pustulosa dentaria.
de von Zumbuch, candidiasis mucocutánea. ECG. Presenta alargamiento del intervalo QT y
Dentarias: Hipoplasia dentaria, retraso en la erup- ondas T aplanadas.
ción dentaria, irregularidad de la dentina, proclivi-
dad a las caries. Diagnóstico
Diagnóstico positivo
Exámenes complementarios El diagnóstico de hipoparatiroidismo se establece
Determinación de calcio y fósforo en la sangre y la ante la presencia de tetania y la asociación de
orina. Para hacer este estudio se necesita de una dieta hipocalcemia con hiperfosfatemia, siempre que la fun-
fija en calcio y fósforo (Ca, 0,8 g y P, 1 g) durante ción renal sea normal; y lo complementan los nive-
los 3 días previos y durante la prueba. Se realizan les bajos de la hormona paratiroidea y la sensibilidad
extracciones por 3 días consecutivos. Los valores aumentada a su administración.
normales son: en la sangre, Ca:2,3 a 2,63 mmol/L
(8,7 a 10,6 mg/dl); P: 1,13 a 1,61 mmol/L (2 a 4,3 mg/dl); Diagnóstico diferencial
en la orina, Ca: 1,3 a 3,8 mmol/L; P: 4,8 a 14,5 mmol/L. Se establece con otras causas de hipocalcemia, tales
En el hipoparatiroidismo existe hipocalcemia e como insuficiencia renal, alteraciones en el metabolis-
hipocalciuria con hiperfosfatemia e hipofosfaturia. mo de la vitamina D, pancreatitis aguda, minerali-
Determinación de PTH en el plasma. Está dismi- zación ósea rápida (síndrome del hueso hambriento),
nuida (valores normales: 20 a 90 pg (picógramos)/ml. hipoalbuminemia con hipofosfatemia, síndrome del
Prueba de sensibilidad a la PTH. Normalmente shock tóxico; algunos medicamentos, como mitra-
hay un incremento en la excreción de fósforo de 5 a micina, calcitonina, sangre citratada e intoxicación
6 veces las cifras basales . En el hipoparatiroidismo por flúor, así como hipocalcemia neonatal. En todos
se produce un aumento de 10 o más veces las cifras estos casos existen síntomas de hipocalcemia, pero
basales. hay cifras de PTH normales o altas, así como sínto-
Prueba de la hipocalcemia inducida por ácido mas y signos específicos de cada entidad.
etilendiaminotetracético disódico (EDTA). Esta prue- Se deberá establecer con el seudohipoparatiroi-
ba se basa en el hecho de que el EDTA disódico dismo, condición de origen genético que se hereda
disminuye la calcemia al intercambiar el calcio con con carácter dominante y en la que hay una falta en
el sodio de esta sustancia. la respuesta del túbulo renal a la PTH, lo que oca-
Procedimiento: El paciente se mantiene en ayu- siona trastornos clínicos y bioquímicos propios del
nas y se le extrae sangre (20 ml) para conocer la hipoparatiroidismo, pero que presenta alteraciones
calcemia. Se administran a continuación 50 mg de morfológicas y esqueléticas propias.
EDTA disódico por kilogramo de peso en una solu-
ción de 500 ml de dextrosa al 5 %, a la que se aña- Seudoseudohipoparatiroidismo
den 20 ml de novocaína y se pasa en 2 h. Se Es un cuadro clínico de origen genético que se here-
determina el calcio en la sangre a las 2 h, una vez da con carácter dominante, caracterizado por altera-
terminada la venoclisis, y a las 8 y 24 h de comen- ciones morfológicas y esqueléticas particulares del
zada ésta. Normalmente, la calcemia a las 2 h no seudohipoparatiroidismo, pero con respuesta renal
desciende más de 30 % de las cifras basales, a las 8 h normal a la PTH, y por lo tanto, sin alteraciones clí-
existe una recuperación no menor de un 10 % y a las nicas ni bioquímicas del hipoparatiroidismo.

206
Otras causas de tetania Preparados de calcio Contenido de calcio/g de la sal
Tetania por vómitos. Al perderse hidrogeniones se
establece un cuadro de alcalosis metabólica, y aun- Carbonato de calcio 400 mg
que las cifras de calcio son normales o están poco Cloruro de calcio 270 mg
alteradas, la fracción iónica disminuye por la alca- Lactato de calcio 124 mg
losis.
Fosfato tribásico de 400 mg
Tetania por hiperventilación. Al disminuir dióxido calcio
de carbono por hiperventilación se produce una al-
calosis respiratoria y aparece tetania por el mismo
En caso de tetania aguda hay que administrar cal-
mecanismo anterior.
cio por vía EV, de 10 a 20 ml de gluconato de calcio
Tétanos. Hay hiperreflexia osteotendinosa, pero
al 10 %, lentamente (no más de 10 ml en 2,5 min).
no espasmos carpopedales ni tampoco signos de
En casos graves se puede repetir la dosis 30 min o 1 h
Chvostek ni de Trousseau.
después. El calcio debe administrarse con precau-
Tratamiento ción, diluido, ya que produce irritación en las ve-
nas, y en los pacientes digitalizados predispone a
En teoría, el tratamiento más adecuado para el hipo-
intoxicación digitálica y arritmias. Se utilizan tam-
paratiroidismo sería el remplazo fisiológico de la
bién derivados de la vitamina D (ergocalciferol), en
PTH, pero existen limitaciones prácticas a este en-
dosis única de 400 000 a 600 000 U.
foque, incluso, la necesidad de administrar parente-
Se está usando además, recientemente, PTH por
ralmente la hormona y el alto costo actual de
vía IM o EV, 300 a 1 000 U. El extracto de paratiroi-
preparaciones comerciales útiles de PTH humana. des ha sido descontinuado y en su lugar está dispo-
El objetivo esencial del tratamiento es mantener nible la PTH humana sintética.
una calcemia normal, lo que se logra en la mayoría En caso de espasmo de la glotis hay que proceder
de los casos con derivados de la vitamina D y un a permeabilizar las vías aéreas.
suplemento de calcio por vía oral. Debe hacerse un El objetivo en la tetania crónica es mantener el
seguimiento del calcio sérico, al inicio semanal y calcio sérico próximo a lo normal y evitar a la vez
luego mensual, hasta hacer ajustes en la dosis para los peligros de sobredosificación (hipercalciuria, in-
evitar los efectos tóxicos de la hipercalcemia. toxicación por vitamina D).
Debe cuidarse la ingestión de alimentos con ele-
Preparados de Presentación Dosis diaria
vitamina D vado contenido de fosfatos, por lo que hay que limi-
tar el consumo de leche (medio litro o menos al día),
Ergocalciferol (ergos- Cápsulas de 25 000 25 000 a pescado, frijoles, vísceras y carnes rojas.
terol, vitamina D2) y 50 000 U; solu- 200 000 U
Tan pronto quede establecido el diagnóstico, se
ción de 500 U/ml
suministra calcio oral a través de los diferentes su-
Dihidrotaquisterol Tabletas de 0,125, 0,2 a 1 mg
plementos de sus sales, en dosis de 1 g en pacientes
0,2 y 0,4 mg
menores de 40 años y de 2 g en los mayores de 40.
Calcifediol Cápsulas de 20 y 20 a 200 mg
50 mg
En casos refractarios al tratamiento anterior con vi-
tamina D y sales de calcio, a veces son de utilidad 1
Calcitriol Cápsulas de 0,25 y 0,25 a 5 mg
o 2 g al día de magnesio o hidroclorotiazida, 50 a
0,5 mg
100 mg diarios. Debe investigarse, además, si se
están administrando medicamentos antagonistas de
El tratamiento del hipoparatiroidismo debe esta- la vitamina D, como la difenilhidantoína y el feno-
blecerse según la causa sea aguda o crónica. barbital. En casos de hipotiroidismo, éste debe tra-
tarse adecuadamente para mejorar la efectividad
terapéutica de la vitamina D.
Puede usarse el gel de hidróxido de aluminio, que
disminuye la absorción del fosfato en la dieta.

207
tiene que reponer el calcio perdido en exceso por la
HIPERPARATIROIDISMO orina, a expensas del calcio óseo. Así se explican la
PRIMARIO osteoporosis y la osteítis quística. La cantidad exce-
siva de calcio filtrado a través del glomérulo da lu-
gar a que este mineral se deposite en el tejido renal,
de ahí la nefrocalcinosis y la nefrolitiasis. La poliuria
Concepto es posiblemente osmótica y la debilidad e hipotonía
El hiperparatiroidismo primario representa un gru- muscular parecen obedecer a la hipercalcemia,
po de síndromes entrelazados que son provocados hipofosfatemia e hipocaliemia.
por una secreción excesiva y hasta cierto punto in-
controlable de PTH, por una o más glándulas parati- Anatomía patológica
roideas hiperfuncionantes. Glándulas paratiroides. Histológicamente, las
glándulas paratiroides de los portadores del hiper-
Frecuencia paratiroidismo primario presentan una hiperplasia
En el pasado, esta afección era considerada rara, sin adenomatosa o maligna. Las paratiroides alcanzan
embargo, es relativamente frecuente y su incidencia un peso de 0,2 a 2 g y en ocasiones hasta más de 10 g,
se estima en 250 casos nuevos por millón de habi- tienen un color amarillo rojizo y apariencia saliente
tantes. Este incremento en la detección de enfermos in situ. El tipo celular más abundante en la mayor
se debe en lo fundamental a la introducción de la parte de las glándulas anormales son las células prin-
determinación rutinaria de los niveles de calcio en cipales, que se agrupan en forma de hojas, cordones
el plasma. o folículos. Las células claras y oxífilas pueden es-
El 85 % de los pacientes diagnosticados superan tar mezcladas y en casos raros predominar una de
los 30 años de edad; es, por lo tanto, una enferme- éstas.
dad de adultos. Para cualquier edad, el hiperparati- Hueso. Se observa un aumento de la resorción en
roidismo primario es más común en mujeres, con la superficie ósea y de los osteoclastos, osteólisis
una relación de 2:1 frente a los hombres; las posme- osteocítica y algunas veces, fibrosis de la médula
nopáusicas constituyen el grupo de riesgo más ele- ósea. En la enfermedad de largo tiempo de evolu-
vado, con una aparición en éstas 5 veces superior a ción hay quistes óseos clásicos y fracturas.
la de la población general. Riñón y otros órganos. Del 20 al 30 % de los pa-
cientes tienen nefrolitiasis, que con frecuencia se
Etiología complica con pielonefritis. No es corriente la nefro-
La causa más frecuente de hiperparatiroidismo pri- calcinosis importante o la calcificación de la papila
mario es un adenoma único en las paratiroides; le renal. Se ha observado calcificación de otros órga-
sigue en orden la hiperplasia con dos variantes his- nos, tales como estómago, pulmón, corazón y vasos
tológicas: hiperplasia de células principales e hiper- sanguíneos.
plasia de células claras. Ambos tipos pueden
aparecer de forma esporádica, pero los casos de hi- Cuadro clínico
perparatiroidismo primario familiar aislado o asocia- Síntomas
do a las neoplasias endocrinas múltiples tipo I o tipo Quienes padecen hiperparatiroidismo primario son
IIA y tipo IIB, donde participan tumores o hiperpla- relativamente asintomáticos o tienen síntomas no es-
sia de otras glándulas endocrinas como hipófisis, pán- pecíficos, como debilidad y fatiga fácil; cuando se
creas, suprarrenales, se asocian casi exclusivamente presentan éstos se atribuyen a una de las dos causas
a hiperplasia de las células principales. Rara vez el siguientes:
hiperparatiroidismo es causado por un carcinoma o
por adenomas dobles de las paratiroides. 1. Hipercalcemia con hipercalciuria asociada.
2. Osteítis fibrosa quística.
Patogenia
La PTH provoca una hipercalcemia con la consi- Hipercalcemia con hipercalciuria. Afecta diver-
guiente hipercalciuria. De esta manera el organismo sos órganos y sistemas como el nervioso central: ac-

208
tividad mental deteriorada, pérdida de la memoria Hidroxiprolina en la orina. Está aumentada.
para sucesos recientes, inestabilidad emocional, de- Aclaramiento renal de fósforo. Es mayor de
presión, anosmia, somnolencia e incluso coma; sis- 15 ml/min.
tema neuromuscular: debilidad muscular (en especial Reabsorción tubular de fósforo. Es inferior a 80 %.
la musculatura proximal), tendinitis calcificante y Prueba de supresión de la calcemia por cor-
condrocalcinosis; piel: prurito por calcificación me- ticoides. La hipercalcemia cuya causa no sea un
tastásica y necrosis cutánea; sistema digestivo: ano- hiperparatiroidismo primario, disminuye con la ad-
rexia, náuseas, constipación, úlcera péptica y ministración de corticoides, mientras que en aquél
pancreatitis aguda; y sistema renal: poliuria, nicturia, se hace resistente. Se determina la calcemia basal,
cólicos renales debido a litiasis, hematuria y nefro- se administran 40 mg de prednisona durante 5 días
calcinosis que algunas veces lleva a la insuficiencia y se mide cada día.
renal. Prueba de sobrecarga de calcio. Normalmente la
Osteítis fibrosa quística. Los pacientes pueden infusión de calcio por vía EV provoca descenso en
quejarse de dolor óseo difuso o muy rara vez tener el índice de secreción hormonal y por tanto, dismi-
una fractura patológica debido a un quiste óseo. nución de la excreción urinaria de fosfato. En el hi-
perparatiroidismo los niveles de fósforo sérico no
Examen físico ascienden como ocurre en las personas sanas, por
La mayoría de los afectados no muestran signos de ser autónoma la producción de PTH.
enfermedad, pues éstos usualmente están confina-
Determinación de PTH por radioinmunoanálisis
dos al sistema neuromuscular o a los órganos en los
(RIA). La elevación de los niveles de hormona
cuales existe calcificación de los tejidos blandos.
paratiroidea, sobre todo si no se suprime con una
Las anomalías neurológicas no son específicas e
sobrecarga de calcio, es índice de hiperparatiroidis-
incluyen deterioro y depresión mental, psicosis, dis-
mo primario.
minución de los reflejos tendinosos y pérdida sen-
Estudios imagenológicos. Los signos radiográfi-
sorial de la percepción del dolor.
cos más importantes son:
La calcificación de los tejidos blandos suele dar
como resultado artritis (condrocalcinosis y tendinitis
calcificante), conjuntivitis y queratopatía de banda. • Renoureterales: Nefrolitiasis o nefrocalcinosis,
Es infrecuente que los pacientes presenten hiper- uni o bilateral.
sensibilidad y deformidad ósea al examen, fracturas • Osteoarticulares: Disminución de la densidad
a causa de un quiste óseo, un épulis (tumor de la ósea y del espesor de la cortical de los huesos
encía) y seudodedos en palillos de tambor debido a largos por osteoporosis y por lesiones de
falanges terminales colapsadas. osteólisis, como: cráneo apolillado de aspecto
moteado (sal y pimienta), lesiones quísticas
Exámenes complementarios (quistes óseos verdaderos y tumores pardos), y
Calcio y fósforo. De todos los procedimientos diag- una forma rara de presentación, el épulis de lo-
nósticos el más confiable es la demostración de la calización en la mandíbula o en el maxilar su-
elevación en la sangre del calcio y la disminución perior; además, osteomalacia, fracturas y
del fósforo, en muestras seriadas (3 días) previa die- pérdida de la lámina dura de los dientes.
ta fija en calcio (1 g al día) y fósforo (0,8 g al día) y Otros exámenes que se indican para hacer
en ausencia de enfermedad renal. Hay hipercalce- estudios de localización solo serán menciona-
mia e hipofosfatemia. El calcio y el fósforo están dos.
aumentados en la orina. • No invasivos:
Fosfatasa alcalina. A menudo está elevada, so- Gammagrafía con selenio-metionina.
bre todo en los pacientes con enfermedad ósea ma- Ecografía.
nifiesta. Esofagografía.
Cloro en sangre. Está elevado, por encima de Tomografía axial computadorizada.
102 meq/L. Gammagrafía de sustracción talio-tecnesio.
Reserva alcalina. Está disminuida. Resonancia magnética nuclear.

209
• Invasivos: ta, neurofibromatosis, déficit de vitamina D, entre
Angiografía por sustracción digital. otras.
Arteriografía selectiva.
Venografía selectiva con determinación de Tratamiento
gradientes de PTH. El tratamiento de elección es la cirugía. Los princi-
pales problemas que plantea son la localización de
Diagnóstico la lesión paratiroidea y la diferenciación entre el
Diagnóstico positivo adenoma e hiperplasia de las paratiroides. Debido a
El hiperparatiroidismo es una afección en la que no ello, la cirugía debe llevarse a cabo siempre por un
se piensa a menudo y al analizar un enfermo, su diag- cirujano experto en cuello.
nóstico resulta difícil a menos que se presente con Existen dos situaciones en las que el hiperparati-
todo su cuadro: trastornos de la personalidad, dolo- roidismo primario requerirá de tratamiento médico:
res óseos, poliuria y polidipsia, así como fracturas cuando el paciente no quiera o no pueda someterse
espontáneas; éste se completa con la demostración a la operación y en los casos de crisis paratiroidea
de hipercalcemia y un índice de actividad paratiroi- hasta el momento de la intervención.
dea aumentado, lo que se determina mediante la En estos últimos la conducta será: administración
cuantificación de PTH por el método de RIA. de líquidos abundantes, solución salina isotónica, 1
000 ml a pasar en 8 h; furosemida (ámpulas de 40
Diagnóstico diferencial
mg) 20 a 40 mg cada 8 h EV; fosfato de potasio, de
Debe establecerse con otras causas de hipercalce-
2 a 4 g /día por vía oral, divididos en varias dosis;
mia. Entre ellas están la neoplasia de mama y pul-
calcitonina, 40 U EV 2 veces al día y se puede lle-
món, mieloma múltiple, tirotoxicosis, insuficiencia
gar hasta 100 U/día. Los estrógenos se han usado en
suprarrenal, feocromocitoma, enfermedades granu-
lomatosas y la ingestión de algunos medicamentos dosis de 50 mg IM diario, y en caso de mujeres pos-
(tiazidas, vitaminas D y A, estrógenos y litio). En menopáusicas con hiperparatiroidismo, 0,625 a 1,25
cada entidad nosológica hay síntomas específicos mg/día, ya que disminuyen la resorción ósea y el
que la diferencian del hiperparatiroidismo primario; calcio sérico.
además, no siempre existe hipofosfatemia, ni tam- Recientemente se ha introducido el tratamiento
poco elevación de la hormona paratiroidea, y la prue- con bifosfonatos, ya que inhiben los osteoclastos.
ba de supresión de la calcemia con esteroides es Los más utilizados son el etidronato por vía EV en
negativa. dosis de 7,5 mg/kg, en 250 ml de solución salina y
Existen otras afecciones que cursan con lesiones el pamidronato, de 60 a 90 mg en una venoclisis de
óseas pero en las que siempre el calcio es normal, y cloro-sodio.
además no son frecuentes en nuestro medio, como Esta terapéutica no sólo se empleará durante la
la enfermedad de Paget, enfermedad de Albright o crisis paratiroidea sino también en la fase preopera-
displasia fibrosa poliostótica, osteogénesis imperfec- toria y en casos en que se contraindique la cirugía.

210
31

DIABETES MELLITUS

Concepto a un perro, después a un paciente diabético juvenil y


finalmente a una enfermera. Con este descubrimien-
La diabetes mellitus (DM) es una enfermedad de
to se marcó un hito en la historia de la diabetología.
etiología múltiple caracterizada por hiperglicemia
En los años 40 Jambon y Loubatiere descubrieron
crónica con trastornos del metabolismo de carbohi-
el efecto hipoglicemiante de las sulfonilureas, aun-
dratos, grasas y proteínas a causa de la deficiencia
que ya en 1926 Frank había modificado la molécula
en la secreción de insulina por la destrucción de las
de la guanidina y obtenido la diguanidina, que fue el
células beta de los islotes del páncreas y la conse-
primer antidiabético oral. En 1954, Franker y Fuchs,
cuente ausencia de la hormona o de su acción (por
en Alemania, ensayaron una nueva sulfonamida cons-
el aumento de la resistencia periférica a la insulina
tituida por una sulfonilurea, entre cuyas reacciones
debido a una variedad de causas, no todas conoci-
secundarias estaban los signos patognomónicos de
das) o de ambas.
la hipoglicemia.
La hiperglicemia crónica produce a largo plazo
Entre 1955 y 1956 se inició un hecho histórico en
lesiones que ocasionan daño, disfunción e insufi-
la era de la terapéutica antidiabética, al introducirse
ciencia de varios órganos. Los síntomas caracterís-
los antidiabéticos perorales; fueron lanzados al mer-
ticos son sed, poliuria, visión borrosa y pérdida de cado por dos laboratorios farmacéuticos, el compues-
peso y en la forma más grave, cetoacidosis que pue- to BZ 55, la carbutamida, que fue muy eficaz en la
de llevar al estupor, al coma y, a menos que se insti- diabetes de la vejez, y poco tiempo después el D860
tuya un tratamiento efectivo, a la muerte. o tolbutamida, que constituyó un medicamento cla-
ve en el tratamiento de las personas con diabetes
Historia
mellitus tipo 2 al liberarlas de las inyecciones de in-
La DM es casi tan antigua como la humanidad. Así sulina.
lo demuestran una serie de documentos, como los En 1969 apareció la glibenclamida o HB 419,
escritos de Demetrio de Apomea en el siglo III a.n.e.; como una nueva sulfonilurea, que presenta una in-
y el “papiro de Ebers”, 1 550 años a.n.e., en el Im- tensa acción hipoglicemiante con una dosis mínima
perio de los Faraones, en los cuales se describen los en relación con los anteriores fármacos.
síntomas de la enfermedad y su tratamiento. El estudio de las biguanidas se comenzó desde
Areteo de Capadocia (siglo II) fue el primero que 1920, pero fueron abandonadas enseguida por su
utilizó el nombre de diabetes, que significa literal- toxicidad hepática y renal. Son tres los principales
mente “pasar a través de” o “correr a través de un derivados de las biguanidas que han adquirido im-
sifón”. Más adelante, Tomás Willis le añadió la pa- portancia terapéutica: la fenformina, la butformina
labra mellitus, que significa miel. y la metformina, pero su utilización disminuyó en la
En 1696 Morton señaló el factor hereditario de década de los 60, por la frecuente asociación de su
esta enfermedad. uso con casos fatales de acidosis láctica, y fueron
Investigadores como Bernard, Langerhans, Star- restringidas severamente en muchos países.
ling, Minkowsky y Merine, colaboraron con inten- En los últimos años se han desarrollado otros fár-
sidad, para que Best, Banting y Beltran Collip macos, como los inhibidores de la alfa-glucocidasa
lograran preparar un extracto de páncreas que fue intestinal (acarbosa), que participan en la digestión
aplicado con éxito por primera vez en el año 1921, de los sacáridos para su absorción posterior como

211
monosacáridos y producen un retraso en la absor- 3. Diabetes mellitus: no requiere insulina.
ción de éstos, con la subsecuente disminución de la 4. Diabetes mellitus: requiere insulina para el con-
glicemia. trol.
Las tiazolidenionas se están estudiando en dife- 5. Diabetes mellitus: requiere insulina para sobre-
rentes centros de Estados Unidos y Europa; en estos vivir la tolerancia a la glucosa.
momentos se comercializa la troglitazona.
Epidemiología
Clasificación etiológica La DM constituye en la actualidad un grave proble-
De acuerdo con los criterios de un comité de exper- ma en la salud pública mundial con un elevado índi-
tos auspiciado por la Organización Mundial de la ce de morbimortalidad, tanto en países desarrollados
Salud, desde 1999 se propuso una nueva clasifica- como en vías de desarrollo; en 1994 había cien mi-
ción etiológica: llones de diabéticos en el mundo, y en el 2000, cien-
I. Diabetes tipo 1 (DM tipo 1) (destrucción de las to sesenta y cinco millones, de los cuales 80 o 90 %
células β/ insulinodeficiencia absoluta). correspondían a DM tipo 2; se calcula que en el 2010
A. Autoinmune. habrán doscientos treinta y nueve millones y en el
B. Idiopática. 2025, trescientos millones. Con tales datos se justi-
II. Diabetes tipo 2 (DM tipo 2) (Resistencia a la in- fica por tanto calificarla de “pandemia mundial”.
sulina / deficiencia relativa de insulina o defecto Desde finales de 1960 la DM se encuentra entre
secretor con o sin resistencia a la insulina). las 10 primeras causas de muerte en Cuba. En el año
III. Otros tipos específicos. 1997 la tasa era de 18,4 por 100 000 habitantes y
A. Defectos genéticos en la función de las células constituía la séptima causa de muerte; en 1998 fue
beta: cromosoma 20, HNF-4 alfa (MODY 1), de 15,1 por 100 000 habitantes y ocupó el octavo
cromosoma 7, glucokinasa (MODY 2), cro- lugar. En ese año, según el Registro Nacional de Dis-
mosoma 12, HNF-1 alfa (MODY 3), etc. pensarizados para la DM, existían 219 095 diabéti-
B. Defectos genéticos en la acción insulínica: re- cos, para una tasa de 19,7 por 1 000 habitantes;
predominaban la DM tipo 2, el sexo femenino y la
sistencia a la insulina tipo 1, leprechaunismo,
edad mayor de 60 años.
diabetes lipoatrófica, etc.
En la provincia de Santiago de Cuba la caracte-
C. Enfermedades del páncreas exocrino: pan-
rística epidemiológica es muy parecida a la del res-
creatopatía fibrocalculosa, fibrosis quística,
to del país. La mortalidad por diabetes en ella pasó
pancreatitis, neoplasias, etc.
de 15,9 por 100 000 habitantes en 1997, en que ocu-
D. Endocrinopatías: síndrome de Cushing, acro-
pó el sexto lugar, a 9,12 por 100 000 habitantes en
megalia, glucagonoma, feocromocitoma, etc.
1998, en el octavo lugar.
E. Inducida por medicamentos o químicos: áci-
Según estudios recientes llevados a cabo en esta
do nicotínico, glucocorticoides, tiazidas, hor- provincia para determinar el comportamiento y las
monas tiroideas, dilantín, etc. proyecciones de la mortalidad por DM en el perío-
F. Infecciones: rubéola congénita, citomegalovi- do de 1989 a 1998, se pudo conocer que la mortali-
rus, otras. dad en personas con diabetes se incrementa a partir
G. Formas raras de trastornos inmunes específi- de los 45 años y alcanza las tasas superiores en aqué-
cos: síndrome de autoinmunidad insulínica, llas con más de 65 años, en relación directa con el
anticuerpos antirreceptores de insulina, etc. envejecimiento de la población y el mayor tiempo
H. Otros síndromes genéticos a veces asociados de exposición a los factores de riesgo relacionados
con diabetes: síndrome de Down, ataxia de con la enfermedad.
Friedreich, corea de Huntington, etc. En cuanto a las causas de muerte, el 42,8 % obe-
IV. Diabetes gestacional. deció a infecciones, entre las que las bronconeumo-
nías bacterianas constituyeron el 35,6 %, seguida
Estadios de la diabetes mellitus por los trastornos arterioscleróticos (25,5 %), infar-
1. Normal. to agudo del miocardio (16,0 %) y los accidentes
2. Tolerancia a la glucosa alterada. vasculares encefálicos (8,89 %). El resto correspon-

212
dió a otras enfermedades no atribuibles a la diabe- se II de dicho complejo, incluyen los loci HLA -
tes, como úlceras, cirrosis hepática, neoplasias, en- DR, -DQ y -DP. Sin embargo, ningún alelo HLA
tre otras. por sí solo o en combinación es específico en cuan-
to a la susceptibilidad a la DM tipo 1. Cabe destacar
Etiopatogenia que nada más una proporción de las personas gené-
ticamente susceptibles contraerán DM tipo 1. Los
Etiopatogenia de la DM tipo 1 alelos DR3 y DR4 del locus HLA - DR aparecen con
La DM tipo 1 incluye la mayoría de los casos que se más frecuencia en personas de origen europeo con
deben principalmente a la destrucción de las células diabetes de tipo 1, y se registra un aumento des-
beta. Tiene dos formas etiológicas: la autoinmune y proporcionado en el heterocigoto DR3 / DR4 (de 30 a
la idiopática. En la primera hay evidencias claras de 40 % con diabetes de tipo 1, en comparación con
una autoinmunidad, como lo prueba la presencia de sólo 3 % de la población general). Alrededor de 95 %
los anticuerpos de las células de los islotes, anticuer- de estas personas son DR3, DR4 o DR3 / DR4; la pre-
pos anti-GAD (acido glutámico descarboxilasa) y disposición se relaciona también con los alelos HLA-
autoanticuerpos de insulina. En la segunda, los su- DQ, y estas asociaciones son uniformes en todos los
jetos son fenotípicamente idénticos, suelen ser jó- grupos étnicos. Así, la predisposición específica a
venes, desarrollan cetoacidosis y mueren si no la DM tipo 1 en los de origen europeo se asocia con
reciben una terapia de insulina, pero no hay pruebas HLA - DR 3, DQW 2 (conocido también como
de que haya un proceso autoinmune. DQB1*0201) y con HLA - DR4, DQW8(conocido
La patogénesis de la DM tipo 1 incluye una pre- también como DQB1*0302).
disposición genética a la enfermedad, y también fac- La DM tipo 1 se encuentra estrechamente rela-
tores desencadenantes de naturaleza ambiental que cionada con determinados heterodímeros codifica-
pueden activar mecanismos que conducen a la pér- dos HLA - DQ. La asociación más estrecha para este
dida progresiva de las células beta de los islotes del tipo de diabetes en quienes tienen este origen, es
páncreas. con DQA1*0501 - DQB1*0302. Por otra parte, al-
gunos alelos del complejo de histocompatibilidad
Factores genéticos principal confieren protección contra la aparición de
Las pruebas de predisposición genética proceden de la DM tipo 1. Entre ellos figuran HLA - DR2 y HLA -
estudios de gemelos que muestran una tasa de con- DQB1*0602. Los alelos protectores tienen predomi-
cordancia más elevada para la DM tipo 1 en gametos nio sobre los alelos de susceptibilidad
monocigóticos (25 a 30 %) que en gemelos dicigóti-
cos (5 a 10 %). Además, el riesgo empírico de con- Factores ambientales
traer diabetes del tipo 1 aumenta en los parientes en Existen importantes diferencias étnicas y geográfi-
primer grado de las personas estudiadas con la en- cas en la prevalencia e incidencia de la DM tipo 1.
fermedad. En los EE.UU., entre personas de la raza La tasa más elevada de casos notificados se registra
blanca, el riesgo general es de 0,2 a 0,4 %; sin em- en los países nórdicos, y es Finlandia el de mayor
bargo, en los hermanos de los que tienen DM tipo 1, incidencia (35 casos por año por cada 100 000 per-
éste crece a cerca del 5 %, mientras que en los hijos sonas del grupo de 0 a 14 años), y la incidencia más
de padres diabéticos es del 2 a 3 % si la madre sufre baja se registra en Asia (0,5 a 1,3 casos por año por
la enfermedad, y de 5 a 6 % si el afectado es el pa- cada 100 000 habitantes); también son bajas las ta-
dre. La diabetes de tipo 1 es la más común en las sas notificadas por África y América Latina. La di-
poblaciones de origen caucásico. ferencia de 20 a 60 veces probablemente se deba a
La principal predisposición genética la confieren la diversidad de factores determinantes ambientales
los genes situados en el brazo corto del cromosoma 6, y genéticos.
ya sea dentro del complejo de histocompatibilidad Otra posible influencia ambiental es la nutrición
principal, es decir, en la región HLA, o muy cerca durante el período neonatal y los primeros meses.
de él. Los genes de la región HLA que confieren El consumo de las proteínas contenidas en la leche
riesgo de DM tipo 1 regulan la respuesta inmunita- de vaca, especialmente en la etapa inicial de la vida,
ria. Ellos, conocidos también como alelos de la cla- puede aumentar la susceptibilidad a la DM tipo 1.

213
Además, se ha demostrado que varias sustancias nóstico de la DM tipo 1. Es interesante mencionar
químicas tóxicas poseen el potencial de iniciar la que inicialmente se encontró una secuencia de 17
lesión de las células beta del páncreas. Se considera aminoácidos de la albúmina sérica de bovino, lo cual
que varios factores virales desempeñan un impor- ha dado lugar a la tesis de que la exposición a la
tante papel en la patogénesis de la DM tipo 1, como proteína de la leche de vaca puede constituir un fac-
el virus de la rubéola congénita, el Coxsackie B, ci- tor desencadenante ambiental que dé inicio al ata-
tomegalovirus y retrovirus. La exposición de una per- que inmunitario contra las células beta.
sona a diversos virus parece influir en la aparición La mayoría de los anticuerpos detectados hasta
de este tipo de diabetes. Hasta un 20 % de los niños ahora (especialmente los anticuerpos citoplasmáticos
con rubéola congénita la contraen; en este caso, la contra las células insulares), parecen ser marcado-
exposición intrauterina es remota con respecto al co- res circulatorios que reflejan el daño de las células
mienzo clínico de la enfermedad. Además, varios beta, o la existencia de una actividad inmunitaria
virus que atacan al ser humano son capaces de in- continua.
fectar y lesionar a las células beta insulares in vitro.
La función que podrían desempeñar los virus en su Prediabetes
patogenia no se ha aclarado aún y es preciso realizar Los familiares en primer grado de quienes padecen
estudios más exhaustivos al respecto. DM tipo 1 corren un riesgo mayor de contraer la
enfermedad. Se ha comprobado que en ellas las al-
Factores inmunitarios
teraciones estructurales inmunitarias de los islotes,
Si bien la destrucción de las células beta del pán-
comienzan a veces varios años antes del inicio clí-
creas guarda relación con factores inmunitarios, aún
nico de la dolencia. En estudios prospectivos efec-
no están bien definidos los mecanismos correspon-
tuados entre parientes en primer grado de personas
dientes. Tampoco se conocen las células, ni las vías
con DM tipo 1, se ha demostrado la existencia de
involucradas en el ataque inicial o primario. Ade-
anticuerpos citoplasmáticos contra las células insu-
más, en la respuesta subsiguiente podrían haber va-
lares, autoanticuerpos contra la insulina y anticuer-
rias secuencias patogénicas diferentes que conducen
pos contra la glutamato descarboxilasa, hasta 10 años
a la destrucción de las células beta. Algunas pare-
cen ser específicas para los antígenos y suponen la antes del comienzo clínico de la diabetes, señalado
destrucción de las células mediadas por los linfoci- por la aparición de la hiperglicemia.
tos T. La identificación de la persona con prediabetes y
Otras secuencias patogénicas pueden constituir la pesquisa correspondiente, exigen la determinación
respuestas inflamatorias no específicas, por ejem- de marcadores genéticos, inmunitarios y metabóli-
plo, la producción por los macrófagos de citocinas cos en individuos asintomáticos. En poblaciones de
que inducen la liberación de oxígeno libre y radica- origen caucásico la prevalencia de la DM tipo 1 es
les de óxido nítrico, a los cuales las células beta po- de aproximadamente 0,2 a 0,5 % en general, mien-
drían ser especialmente vulnerables. Mediante tras que entre parientes en primer grado con esta
estudios de anticuerpos citoplasmáticos contra las enfermedad, es de alrededor de 3 a 6 %. En conse-
células insulares, de autoanticuerpos contra la insu- cuencia, en lugar de programas de población para la
lina y de anticuerpos contra la glutamato descarboxi- detección de marcadores genéticos, es posible con-
lasa, se han identificado varios autoantígenos que centrar la atención en los parientes en primer grado
podrían ser importantes iniciadores del proceso. A de personas enfermas como grupo de alto riesgo.
menudo, estos antígenos se hallan presentes en una No obstante, aun en los grupos de población con
etapa temprana de la enfermedad, antes del diag- un índice de riesgo 10 veces superior, la gran mayo-
nóstico clínico. ría (95 a 97 %) no contraerán la enfermedad. Ade-
Se ha encontrado así mismo reactividad de los lin- más, entre 85 y 90 % de quienes se enferman con
focitos T ante la glutamato descarboxilasa. Otra po- DM tipo 1 no tienen familiares en primer grado afec-
sibilidad la constituye la proteína p69 de la superficie tados, y en los programas dirigidos a tales pacientes
de las células beta pancreáticas, contra las que se éstos serán pasados por alto. De todas maneras, se
encuentran a veces anticuerpos al momento del diag- debe alentar la detección de las personas señaladas

214
de alto riesgo, siempre que los individuos con re- vincula estrechamente con diversos grupos de pre-
sultados positivos sean referidos a centros que suntos factores de riesgo cardiovasculares, entre ellos
participan de estudios cooperativos en otras investi- la HTA, dislipoproteinemia (nivel elevado de trigli-
gaciones científicas céridos y bajo de colesterol de la lipoproteína de den-
En la identificación de personas en cualquiera de sidad elevada), obesidad generalizada y central, e
las etapas de la prediabetes, es preciso realizar acti- inactividad física, así como hiperuricemia, microal-
vidades de detección en masa. Aún así, se debe te- buminuria y elevación del inhibidor-1 del activador
ner en cuenta que no todas las personas identificadas del plasminógeno y del fibrinógeno.
de este modo van a contraer la enfermedad clínica. La obesidad (superior al 30 %) está presente en
Además, no está indicado llevar a cabo programas más del 50 % de los hombres y el 70 % de las muje-
de detección en la población en general, debido a su res con DM tipo 2 y predispone mucho a la enfer-
enorme costo y al valor de predicción relativamen- medad. La obesidad del tronco, llamada troncal o
te bajo que poseen los métodos actuales (42 %, en central, como depósito de grasa visceral, es en par-
comparación con 88 % en los familiares en primer ticular importante en la producción de insulinorre-
grado). sistencia y está asociada con el síndrome de
tolerancia a la glucosa (hipertensión arterial, enfer-
Etiopatogenia de la DM tipo 2 medad cardiovascular y dislipemia, y por extensión,
Es la forma más común de diabetes, caracterizada disfunción endotelial); ello puede inducir la insuli-
por un grado de hiposecreción de insulina y por una norresistencia por medio de la secreción incremen-
mayor contribución de la resistencia a ésta; la ma- tada por la grasa del FNT-α, el que inhibe la actividad
yoría de quienes la padecen son obesos, lo que em- del receptor de la insulina.
peora la resistencia a la insulina. La obesidad En la historia natural de la DM tipo 2, la secre-
abdominal es un problema mayor que la obesidad ción de insulina se aumenta inicialmente y sobrepa-
periférica. sa los efectos de la insulinorresistencia, pero después
Existen por lo menos tres factores importantes: falla y permite la elevación de los niveles de gluco-
sa, que produce al inicio su intolerancia y al final la
1. Factores genéticos individuales o étnicos que aparición de la enfermedad.
causan susceptibilidad. La causa del fallo de las células beta es descono-
2. Defectos en la función de las células beta del cida; se ha sugerido un efecto tóxico de los productos
páncreas. de éstas, así como el posible efecto del polipéptido
3. Acción disminuida de la insulina en los tejidos amiloideo (amilyn), que se cosegrega junto a la in-
sensibles a ella (resistencia a la insulina), que sulina al depositarse alrededor de dichas células.
incluye los músculos esqueléticos, el hígado y La principal causa de hiperglicemia basal en la
el tejido adiposo. DM tipo 2 es el aumento de la salida de la glucosa
hepática que resulta de la destrucción del glucógeno,
Se han postulado varias hipótesis en relación con y particularmente de la gluconeogénesis; ambas ac-
los mecanismos celulares que causan el aumento de ciones son resistentes a la inhibición que realiza la
la resistencia a la insulina, entre ellas la disminu- insulina.
ción de la activación de enzimas (por ejemplo, la En el diabético tipo 2 ocurren las siguientes alte-
glucocinasa y la sintetasa de glucógeno), niveles raciones en la secreción insulínica: disminución re-
reducidos de transportadores de glucosa en la mem- lativa de la secreción basal, disminución de la primera
brana celular y niveles aumentados de ácidos grasos y segunda fases de secreción tras el estímulo gluco-
circulantes; la resistencia a la insulina se acentúa en sado y disfunción selectiva del glucorreceptor.
las personas con obesidad generalizada u obesidad La oleada precoz de insulina ejerce un efecto
central y en los físicamente inactivos, y tal vez es moderador sobre el aumento de glicemia pospran-
importante en la génesis de la tolerancia a la gluco- dial; su defecto, por tanto, participa en la aparición
sa alterada (TGA). de la hiperglicemia posprandial que parece desem-
La resistencia a la insulina y la hiperinsulinemia peñar un importante papel en la patogenia de la dia-
relacionada con ella en la TGA y en la DM tipo 2, se betes tipo 2, así como en sus complicaciones.

215
Cierta proporción (5 a 15 %) de las personas de realizados recientemente se ha constatado que la ac-
edad madura y avanzada que sufren de DM tipo 2 tividad física se asocia con un menor riesgo de con-
(especialmente las que son obesas), poseen indica- traer DM tipo 2.
dores genéticos o inmunitarios similares a los que Además, la actividad física tiene efectos benefi-
caracterizan al proceso de la diabetes del tipo 1, pero ciosos sobre los lípidos sanguíneos, la presión arte-
pueden vivir mucho tiempo sin volverse dependien- rial, el peso y la distribución de la grasa corporal, es
tes de la insulina. decir, sobre numerosos aspectos del “síndrome me-
La TGA es un estado heterogéneo que incluye tabólico crónico” y en consecuencia, puede también
varios grupos de personas: las que están en el extre- prevenir las enfermedades cardiovasculares.
mo superior de la distribución de la tolerancia nor-
mal a la glucosa, las que están en el extremo inferior Peso corporal y distribución de la grasa
de la distribución de la DM tipo 2, las que están en En estudios transversales y longitudinales se ha in-
transición del estado normal a la DM tipo 2 y las culpado a la obesidad como factor de riesgo de la
que están estabilizadas en la categoría de TGA. Esta DM tipo 2; así, en numerosos grupos étnicos el índi-
última condición comparte presuntos factores etio- ce de masa corporal se asocia positivamente con un
lógicos con la DM tipo 2; la principal diferencia es aumento del riesgo de contraer esta diabetes en los
que en la TGA se conserva mejor la secreción de dos sexos. En ambos estudios se ha señalado que la
insulina. distribución centralizada de la grasa corporal (grasa
visceral), también constituye un factor de riesgo para
personas de distinto origen y se ha demostrado una
Factores genéticos
asociación entre la tolerancia a la glucosa y la obe-
La DM tipo 2 tiene gran agregación familiar. Estu-
sidad abdominal, lo cual indica que la distribución
dios realizados con familiares y con gemelos han
de la grasa es importante para determinar la posibi-
aportado pruebas convincentes de que el papel que
lidad de sufrir grados menores de intolerancia a la
desempeña el componente genético es relativamen-
glucosa.
te importante. La enfermedad parece ser la conse-
cuencia de una interacción entre la susceptibilidad Factores nutricionales
genética y la exposición a los factores ambientales. En los últimos decenios se ha puesto de manifiesto
Se han mencionado varios genes como posibles en el mundo industrializado, y en muchos países en
marcadores de la DM tipo 2, pero hasta la fecha, desarrollo, los efectos negativos a largo plazo que
aparte de los indicios de anormalidades en los genes para la salud acarrea la adopción de una alimenta-
de la adenosina desaminasa y la glucocinasa en al- ción “opulenta” caracterizada por un exceso de ali-
gunos familiares afectados por la diabetes juvenil mentos de alta densidad energética, ricos en grasas
iniciada en la edad madura, no se han encontrado (especialmente saturadas), azucares refinados y sim-
otras anormalidades uniformes. ples, y pobres en carbohidratos complejos (fibras).
Existen pruebas surgidas de estudios de laboratorio
Factores ambientales y epidemiológicos en diversas poblaciones de que
Se ha sugerido que varios factores ambientales se el consumo abundante de grasas saturadas y el esca-
encuentran relacionados con el riesgo de contraer so consumo de fibras, pueden provocar disminución
DM tipo 2. Entre ellos está la actividad física y se de la sensibilidad a la insulina y una tolerancia anor-
ha demostrado que practicada en forma regular au- mal de la glucosa.
menta la sensibilidad a la insulina y mejora la tole- Las personas difieren en cuanto a su susceptibili-
rancia a la glucosa. En varios estudios transversales dad a los efectos adversos de factores dietéticos es-
se ha comprobado que la prevalencia de la DM de pecíficos. Dicha dieta conduce también a otros
tipo 2 es de dos a cuatro veces mayor en las perso- cambios, tales como la HTA, la dislipemia y la obe-
nas menos activas que en las más activas. Este pare- sidad.
ce ser el caso en varios grupos étnicos, incluidos Si bien existe consenso en el sentido de que la
grupos de origen europeo, indígenas estadouniden- modificación de la alimentación y el ejercicio de-
ses, indios, chinos, creoles de Mauricio, polinesios, ben ser los pilares de la prevención de la diabetes y
micronesios y melanesios. En estudios prospectivos del tratamiento de los diabéticos, la naturaleza

216
precisa del régimen alimentario es aún discutible. constituye una entidad característica, ya que son le-
En fecha reciente se ha postulado que la malnutri- siones similares a las que se encuentran en la arte-
ción durante el comienzo de la vida puede predispo- riosclerosis.
ner más tarde a anormalidades metabólicas y a Existen una serie de factores de riesgo aterogéni-
aumentar las posibilidades de contraer tolerancia a cos comunes tanto para el diabético como para el no
la glucosa alterada y DM tipo 2. En estudios reali- diabético: hipertensión arterial, hipercolesterolemia,
zados hace poco, se encontró que los niños nacidos tabaquismo, sedentarismo, stress y obesidad.
con bajo peso presentan mayores probabilidades de Otros factores de riesgo son propios de la diabe-
contraer diabetes en la edad adulta que los que na- tes, entre los que se señalan hiperglicemia, hiperin-
cen con peso normal. La malnutrición materna (o sulinemia, aumento de la hormona de crecimiento,
insuficiencia placentaria) podría dificultar el de- aumento de la adhesividad y de la agregación
sarrollo de las células beta del páncreas en el feto. plaquetarias, aumento del factor de von Willebrand,
disminución de los niveles de la prostaciclina y dis-
Otros factores minución de la fibrinólisis.
• Stress intenso o prolongado. Varios estados de stress
Dentro de las complicaciones macrovasculares
se relacionan con la intolerancia a la glucosa in-
están la cardiopatía isquémica, la enfermedad cere-
ducida por efectos hormonales en el metabolis-
brovascular y la vasculopatía periférica
mo de ésta y en la secreción y acción de la insulina.
• Medicamentos y hormonas. Se ha compilado una Control metabólico y complicaciones
larga lista de medicamentos que dificultan el
metabolismo de la glucosa. Entre otros están la El paciente afectado del síndrome diabético de-
fenitoína, los diuréticos (particularmente los tia- sarrolla a lo largo de su padecimiento severas com-
zídicos), los corticosteroides, algunos esteroides plicaciones vasculares, propias de la hiperglicemia
empleados en los anticonceptivos y los agentes sostenida. El control adecuado de la diabetes dismi-
bloqueadores de los receptores β- adrenérgicos. nuye la incidencia y progresión de éstas, tal como lo
demostró el Ensayo sobre el Control y las Compli-
Microangiopatía y macroangiopatía caciones de la Diabetes (DCCT) que pretendía co-
diabéticas nocer si un tratamiento insulínico intensivo en los
diabéticos tipo 1 podía influir en la prevención y
La primera es una lesión anatomopatológica especí-
desarrollo de las complicaciones tardías, en compa-
fica de la DM; la segunda se ve también en indivi-
ración con un grupo de diabéticos tratados con el
duos no diabéticos.
método insulínico convencional. Participaron en este
estudio 29 hospitales de Estados Unidos y Canadá y
Microangiopatia diabética
La microangiopatía diabética afecta a los pequeños más de 600 profesionales de la salud. Se selecciona-
vasos (capilares, arteriolas y vénulas) de todo el or- ron 1 441 pacientes con DM tipo 1; 726 sin retino-
ganismo, lo que se produce por varios mecanismos: patía ni otras complicaciones dependientes de la
factores metabólicos como glucosilación no enzimá- diabetes y una duración media de 3 años (preven-
tica de proteínas (ocasiona cierto grado de hipoxia ción primaria) y 715 con retinopatía mínima o mo-
celular), derivación metabólica de la vía de los derada y una duración media de la diabetes de 9 años
polioles (disminuye la velocidad de conducción ner- (prevención secundaria). Al grupo con tratamiento
viosa) y aumento de glucoproteínas en la membrana convencional se les administró 1 o 2 inyecciones de
basal (se acumulan de manera irreversible y ocluyen insulina al día, y al grupo con tratamiento insulínico
los microvasos); y factores no metabólicos, como intensivo, 3 o más dosis de insulina al día, o bombas
alteraciones sanguíneas y del endotelio vascular; de infusión continua de insulina.
factores genéticos y factores inmunológicos. Los controles glicémicos fueron estrictos. La edad
de los pacientes fluctuó entre 13 y 39 años, se si-
Macroangiopatia diabética guieron por un período medio de 6,5 años, y la apa-
La macroangiopatía diabética es la lesión que apa- rición y progresión de retinopatía y de otras
rece en las arterias de mediano y gran calibre. No complicaciones, evaluadas regularmente. La terapia

217
intensiva redujo de forma significativa la retinopa- placa ateromatosa, lo que incrementa la probabili-
tía clínica entre 39 y 76 %. La retinopatía no proli- dad de la enfermedad del corazón en los diabéticos.
ferativa y la terapia con láser, en un 45 % y la El infarto silencioso, muy frecuente en este en-
aparición de cualquier signo inicial de retinopatía, fermo adulto, es aquel que se presenta sin dolor o
en un 27 %. También disminuyó el desarrollo de mi- escasos síntomas y se ha confirmado en el 16 % de
croalbuminuria en el 35 %; la nefropatía clínica, en las autopsias de diabéticos. Otras manifestacio-
el 56 % y la neuropatía clínica, en el 60 %. nes clínicas cardiovasculares las constituyen la mio-
El estudio del DCCT demostró sin lugar a duda cardiopatía diabética y la neuropatía autonómica
que el tratamiento insulínico intensivo es capaz de cardiovascular, esta última resultante de la afección
retrasar la aparición de complicaciones tardías de la de los nervios simpático y parasimpático del cora-
zón. La afectación parasimpática conduce a la va-
diabetes, así como de enlentecer su progresión en la
riabilidad del latido cardíaco y clínicamente se
mayoría de ellas, si no de todas, en los diabéticos
evidencia por la taquicardia persistente en reposo
insulinodependientes.
mayor de 90 latidos/min y ausencia de dolor ante la
Cuadro clínico y complicaciones isquemia miocárdica; la alteración simpática produ-
ce pérdida de los reflejos que mantienen la presión
El inicio de la DM puede ser brusco, agudo o insi- arterial durante la bipedestación y sus síntomas son
dioso. El debut brusco lo hace la diabetes tipo 1, en hipotensión arterial con descensos inferiores a 30 mm
la cual el proceso se manifiesta en días y la enfer- de Hg de la presión arterial sistólica acompañada de
medad a veces se evidencia por la presencia de ce- sensación vertiginosa, mareos y visión borrosa cuan-
toacidosis con toda una serie de síntomas específicos. do el paciente se pone de pie.
La diabetes tipo 2 suele comenzar de forma insidio- La prevalencia de la hipertensión en pacientes
sa y la sintomatología es tan escasa que en ocasio- diabéticos aumenta con la edad. Las condiciones
nes sólo resalta a través de sus complicaciones. predisponentes se observan con más frecuencia en
Los síntomas principales o predominantes son: el hombre que en la mujer antes de los 50 años y en
poliuria, en un 73 % de los casos; polidipsia en las mujeres después de esta edad; aumenta en la raza
el 67 %, polifagia, astenia y aumento o pérdida de negra y en las capas socioeconómicamente menos
peso. favorecidas.
Entre los síntomas generales se presentan a veces
Manifestaciones oftalmológicas
infecciones cutáneas recidivantes, vulvovaginitis,
balanopostitis, retraso en la cicatrización de heridas, La DM es capaz de afectar separada o simultánea-
mente diferentes estructuras oculares. A continua-
acroparestesias, somnolencia posprandial, estupor y
ción se expondrán las posibles complicaciones
coma.
oculares según la estructura dañada, y se enfatizará
Manifestaciones cardiovasculares solamente en aquéllas que por su frecuencia y gra-
vedad comprometen de alguna manera la visión del
Los pacientes de tipo 2 tienen dos veces más proba-
enfermo.
bilidad de padecer enfermedades coronarias que las
personas sin diabetes. El sistema cardiovascular suele
1. Párpados: blefaritis y xantelasma.
afectarse precozmente en el diabético, aun antes de 2. Músculos extraoculares: oftalmoplejías.
que aparezca la alteración del metabolismo de los 3. Córnea: aumento de la pigmentación, reduc-
glúcidos. ción de la sensibilidad, queratopatía puntata y
La presencia de moléculas de P- selectina en la pliegues en la membrana de Descemet.
superficie de células endoteliales activadas determina 4. Pupila: pupila de Argyll- Robertson o de tama-
que los leucocitos, que normalmente fluyen con ra- ño anormal.
pidez a lo largo de las arterias coronarias, lo hagan 5. Iris y cuerpo ciliar: rubeosis (presencia de va-
más despacio. Esto da a otro grupo de moléculas sos de neoformación que conducen a la hiper-
—las integrinas— la oportunidad de atraerlos hacia tensión ocular); glaucoma (2 % en la población
las paredes de los vasos y dar lugar al inicio de una general y 5 % en los diabéticos).

218
6. Cristalino: catarata, con progresión más rápida c. Después de 15 años de DM tipo 1 el 80 %
en los diabéticos que en la población general; tiene retinopatía, con un 25 % en fase proli-
trastornos de refracción, pues la hiperglicemia ferativa.
repercute sobre el cristalino y produce una mio- 4. El embarazo: Durante éste se agravan conside-
pía transitoria. rablemente las retinopatías prexistentes.
7. Vítreo: licuefacción.
8. Retina: retinopatía, oclusión venosa, lipemia y La Academia Americana de Oftalmología la cla-
desprendimiento. sifica en:
9. Nervio óptico: atrofia óptica.
a. Retinopatía diabética no proliferativa, que puede
Retinopatía diabética. Es una verdadera mi- ser leve, moderada y severa, según la cantidad
croangiopatía que afecta todos los niveles del árbol y magnitud de hemorragias, microaneurismas
vascular retiniano, pero fundamentalmente la micro- y exudados retinianos.
circulación, y provoca: b. Retinopatía con edema macular.
c. Retinopatía proliferativa, en la que tienen lu-
1. Proliferación y necrosis de las células endote- gar: proliferación de nuevos vasos, hemorra-
liales. gia vítrea y desprendimiento de la retina.
2. Desaparición progresiva de las células murales
(pericitos). El diagnóstico se establece con:
a. Examen del fondo de ojo
3. Engrosamiento de la membrana basal con de-
b. Angiografía fluoresceínica
pósitos de material lípido y proteico a este
c. Exámenes electrofisiológicos
nivel.
Manifestaciones cutáneas
La retinopatía diabética es la mayor causa de ce-
La hiperglicemia en el diabético produce diversas
guera en muchos países, incluso industrializados, en alteraciones en la piel. Son frecuentes las infeccio-
estos momentos. nes por diversos gérmenes, especialmente estafilo-
A pesar de que no se conoce con exactitud la gé- cocos, que se evidencian como furúnculos, foliculitis,
nesis de los problemas que conducen a la formación erisipela y abscesos; infecciones por hongos (Can-
de esta complicación, existen en la literatura algu- dida albicans) a nivel de la vulva y vagina en la
nos factores que de una forma u otra están ligados a mujer, y del glande y el prepucio en el varón; los
la aparición y desarrollo de ésta. Entre ellos se en- hongos atacan la mucosa de la boca, uñas y pliegues
cuentran: cutáneos.
El prurito o comezón se presenta en los genitales
1. Tipo de diabetes. La retinopatía es más frecuen- y en todo el cuerpo. Son frecuentes los xantomas
te en las personas diabéticas del tipo 1. tuberosos, hipercarotinemia, necrobiosis lipoídica y
2. Control de la diabetes. Se ha demostrado que la lipodistrofia en los sitios de la inyección, que apare-
un buen control metabólico y de la hiperten- ce como atrofia o hipertrofia, causada por la inyec-
sión (si está presente) puede reducir el riesgo ción de insulinas no purificadas. Otra manifestación
de afectación retiniana en ambos tipos de dia- es la alergia a la insulina, caracterizada por el típico
betes (1 y 2). rash cutáneo, local o generalizado.
3. Duración de la diabetes. Se ha encontrado que El daño de los pequenos y grandes vasos produce
mientras más tiempo se prolonga la enferme- atrofia de la piel que junto con la neuropatía, consti-
dad, mayor es el riesgo de desarrollo de esta tuyen el terreno adecuado para la formación de úl-
complicación, así: ceras en los pies.
a. Después de 5 años el 25 % de los diabéticos
tipo 1 tiene alguna retinopatía. Manifestaciones renales
b. Después de 10 años el 60 % la tiene. Son infecciosas y no infecciosas.

219
Manifestaciones renales infecciosas plante renal. La aparición de la insuficiencia renal
Las infecciones de las vías urinarias constituyen terminal está precedida por un largo período, en oca-
complicaciones frecuentes y severas de la DM y siones subclínico, en el cual es preciso intervenir,
comprenden: no sólo con el objetivo de prevenir la enfermedad,
1. Pielonefritis. Sólo se diferencia de la pielone- sino con el fin de detener la progresión de las alte-
fritis habitual de los pacientes no diabéticos en su raciones estructurales y funcionales del riñón diabé-
mayor resistencia al tratamiento. tico.
2. Cistitis. Complicación frecuente que en el dia- Se llama nefropatía diabética a la presencia de
bético puede ser un factor desencadenante de la aci- proteinuria persistente en las pruebas de despistaje
dosis. Se acompaña muchas veces de necrosis y se de albúmina (con tiras reactivas) o a la de una ex-
agrava con los cateterismos vesicales efectuados sin creción urinaria de albúmina (EUA) mayor de 300 mg/
los cuidados requeridos. L/24 h en ausencia de enfermedad renal conocida u
3. Papilitis necrotizante. Es una de las complica- otros factores capaces de afectar los niveles de esta
ciones más graves y su evolución depende del diag- eliminación.
nóstico precoz. Aparece fundamentalmente en los Moogense ha propuesto cinco estadios en la
diabéticos con pielonefritis severa y evoluciona en evolución natural de la afección en el diabético tipo 1.
forma aguda o subaguda. Se debe, como su nombre Estadio I (hipertrofia o hiperfunción renal). Exis-
lo indica, a la necrosis de la papila renal, bien por te un incremento en el tamaño renal y en la tasa de
sepsis in situ (necrosis séptica) o bien por isquemia filtración glomerular; microscópicamente se obser-
(necrosis isquémica). El cuadro clínico se caracteri- van un volumen glomerular y área de superficie ca-
za por fiebre con escalofríos, piuria, a veces hema- pilar aumentadas en los diabéticos tipo 1. En este
turia; puede evolucionar a la insuficiencia renal. Se estadio suele presentarse aumento ligero de la EUA,
sospechará la papilitis necrotizante en los casos si- lo que se normaliza con un adecuado control de la
guientes: enfermedad.
Estadio II (lesión renal asintomática). Aparece un
a. Diabéticos con sepsis en los que se instalan brus- mayor engrosamiento de la membrana basal, tubu-
camente síntomas o signos urinarios. lar y capilar. El filtrado glomerular permanece ele-
b. Diabéticos que caen en coma con retención de vado y la EUA no se modifica ni se detecta por los
urea. métodos habituales de despistaje.
c. Diabéticos pielonefríticos cuya afección renal Estadio III (nefropatía incipiente). Después de 7
empeora de momento. a 15 años de evolución de la diabetes tipo 1 el 25 a
d. Diabéticos con hematuria o cólico nefrítico. 40 % de los pacientes presentan aumento moderado
e. Diabéticos que después de haber superado un en la EUA (microalbuminuria), detectable por ra-
coma diabético, tienen una recidiva de éste con dioinmunoensayo (0,03 g/L o 20 a 200 µg/min).
niveles sanguíneos de urea progresivamente Diversos estudios epidemiológicos prospectivos han
crecientes. demostrado que la microalbuminuria tiene valor pro-
nóstico en la progresión y desarrollo de la nefropatía
Una vez que se sospecha esta complicación debe diabética, sobre todo en los primeros 15 años de
intensificarse el tratamiento antibiótico, adecuar el evolución.
control metabólico, regular de modo estricto el equi- Estadio IV (nefropatía clínica). La proteinuria per-
librio hidromineral y si el proceso es unilateral, prac- sistente mayor de 300 mg/día se considera que está
ticar nefrectomía de urgencia. presente entre 35 y 40 % de los diabéticos tipo 1 con
30 años o más de la enfermedad. Clínicamente se
Manifestaciones renales no infecciosas encuentra pérdida progresiva de la tasa de filtración
Nefropatía diabética. Se ha estimado que en EE.UU. glomerular y aparición de la hipertensión arterial.
y en menor proporción en Europa, la enfermedad En el diabético tipo 2 la proteinuria persistente apa-
renal diabética constituye una de las primeras cau- rece más temprano y se estima que entre 15 y 40 %
sas de inclusión en los programas de diálisis y tras- progrese hacia la nefropatía diabética clínica.

220
Estadio V (insuficiencia renal terminal). Cuando Neuropatía diabética periférica
la nefropatía clínica se establece, la tasa de filtra- Es la presencia de síntomas y signos de disfunción
ción glomerular comienza a decrecer y la presión nerviosa periférica en personas con DM después de
arterial aumenta progresivamente. Se ha demostra- la exclusión de otras causas (cuadro 31.1). Consti-
do que a los 10 años de aparecer la enfermedad, la tuye la complicación más frecuente y más precoz de
insuficiencia renal terminal se presenta en el 75 % la diabetes, así como la más diagnosticada; la pre-
de los diabéticos tipo 1. En la diabetes tipo 2 la valencia aumenta con la duración y severidad de la
progresión hacia la insuficiencia renal es menos fre- hiperglicemia y tras 20 años de duración de la DM
cuente. más del 50 % de los enfermos muestran signos clí-
nicos de neuropatía.
Neuropatía diabética
La neuropatía diabética puede presentar síntomas Clasificación clínica de la neuropatia diabética pe-
tanto en el sistema nervioso periférico como en el riférica
autónomo.
I. Neuropatías progresivas.
Patogenia 1. Polineuropatía simétrica distal (es la polineuri-
La patogenia de la neuropatía diabética se expone tis diabética clásica).
en la figura 31.1.

Diabetes

Glucosa en el nervio

Formación de productos Actividad de la vía del Formación de


finales de la glucosilación poliol radicales libres

Absorción de óxido Producción de óxido


nítrico nítrico

Vasoconstricción Ácido gamma linoleico Diabetes

Endotelio

Coagulación de la sangre Engrosamiento de la


Diabetes Oclusión de los
Reactividad plaquetaria membrana basal
capilares
Rigidez de los glóbulos Edema endotelial
endoneurales
rojos

Hipoxia en el Diabetes
nervio

Daños estructurales Velocidad de la


Neuropatía irreversible conducción nerviosa
Fig. 31.1. Patogénesis de la neuropatía diabética.

221
CUADRO 31.1
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
DE LA NEUROPATÍA DIABÉTICA PERIFÉRICA
O SIMÉTRICA DISTAL

Sintomas Signos Complicaciones

•Asintomático •Posible ausencia de signos anormales •Ulceraciones neuropáticas


•Pérdida de la sensibilidad •Disminución de la sensibilidad vibratoria •Artropatía de Charcot
dolorosa, adormecimiento •Ausencia del reflejo aquiliano •Edema neuropático
•Frialdad •Disminución de la sensibilidad •Disfunción autonómica a menudo
•Hormigueo térmica y dolorosa inicialmente presente
•Dolor atenuado, urente, lancinante •Atrofia y debilidad muscular (son más
o parecido a calambre raros)
•Disestesia

2. Neuropatía de fibras pequeñas (daño selectivo uremia, beri-beri; déficit de piridoxina, de áci-
de fibras nerviosas pequeñas: pérdida de la sen- do pantoténico y de vitamina E.
sibilidad, daño autonómico, hipotensión pos- • Agentes infecciosos: síndrome de Guillain-
tural, sudoración anormal, etc.; artropatía de Barré, sífilis, difteria, SIDA.
Charcot, úlceras en los pies, etc.). • Neuropatía alcohólica.
II. Neuropatías reversibles. • Endocrinas.
Parálisis de los nervios craneales: • Mixedema.
• Motor ocular común (III par). • Acromegalia.
• Motor ocular externo (VI par). • Lesiones de la médula espinal.
• Facial (VII par). • Insuficiencia vascular periférica.
Mononeuropatía.
Neuropatía motriz proximal (amiotrofia diabéti- Neuropatía reversible
ca). Hay atrofia muscular del cuádriceps, con fas- Esta forma de neuropatía se caracteriza por la afec-
ciculaciones y dolor. ción de uno o varios nervios con distribución asi-
Radiculopatía (neuropatía intercostal o del tronco). métrica; suele tener una instauración rápida, en
Neuropatía por compresión. general predominan el dolor y los síntomas muscu-
• Nervio mediano (síndrome del tunel carpiano). lares, y en la mayoría de los casos se produce una
• Nervio cubital. recuperación espontánea en semanas o meses.
• Nervio radial.
• Nervio cutáneo lateral. Parálisis de los nervios craneales
Es común, sobre todo en ancianos, pero puede ob-
Diagnóstico diferencial de la neuropatía diabética servarse en jóvenes con neuropatía difusa y simétri-
periférica ca o sin ella. Los nervios que se afectan con más
Hay que diferenciar la neuropatía diabética periféri- frecuencia son el tercero, el cuarto y el sexto pares;
ca de las afecciones siguientes: también el séptimo. La lesión del tercer par produce
una oftalmoplejía unilateral con alteración de la mo-
• Neuropatías debidas a medicamentos: isoniacida, tilidad ocular y función pupilar indemne. Se carac-
nitrofurantoína, vincristina. teriza por un comienzo brusco, con ptosis palpebral,
• Neuropatías debidas a enfermedades del tejido parálisis de los movimientos oculares, diplopia,
conectivo. estrabismo y dolor ocular. Se debe a la isquemia de
• Neuropatías debidas a productos tóxicos y defi- la porción central del nervio motor ocular común.
ciencias vitamínicas: arsénico, mercurio, talio, Las fibras del constrictor pupilar son periféricas y

222
no suelen afectarse. La recuperación es completa de bil; finalmente se establece una incontinencia uri-
forma espontánea en 1 a 3 meses. naria por pérdida del esfínter y el paciente orina por
rebosamiento.
Neuropatía diabética autónoma Neuropatía autónoma cardiovascular (Ver “Ma-
Es la toma de los nervios parasimpáticos y simpáti- nifestaciones cardiovasculares” de la diabetes).
cos, que afecta la inervación visceral, en especial de
los sistemas gastrointestinal, genitourinario y car- Criterios diagnósticos de diabetes
diovascular. mellitus
Son los siguientes:
Neuropatía autónoma gastrointestinal
1. Glucosa plasmática en ayunas mayor o igual a
Comprende fundamentalmente la gastropatía y la
126 mg/ dl o 7 mmol/L.
enteropatía diabéticas:
2. Una prueba de tolerancia a la glucosa oral con
Gastropatía diabética. Se ve en algunos diabéti-
un valor de glucosa plasmática mayor o igual a
cos tipo 1. Esta alteración está relacionada con los
200 mg/dl u 11,1mmol/L a las 2 h postsobre-
mecanismos autoinmunes de la enfermedad. La neu-
carga.
ropatía gástrica cursa con atonía, dilatación, retraso
de la evacuación y disminución de la secreción áci-
La presencia de síntomas, con glucosa plasmática
da. Clínicamente se manifiesta por dolor abdomi-
al azar mayor o igual a 200 mg/dl u 11,1 mmol/L,
nal, retención gástrica, pesadez posprandial, náuseas,
define el diagnóstico de diabetes. En ausencia de
vómitos, anorexia y control metabólico irregular con
síntomas, cualquiera de estos valores debe ser con-
frecuente hipoglicemia.
firmado por una nueva determinación en los días si-
Enteropatía diabética. La enteropatía diabética
guientes para establecer el diagnóstico definitivo.
cursa con crisis intermitentes de diarrea posprandial,
La dosis de carbohidratos en la prueba de tole-
con movimientos anormales por lo común acompa-
rancia a la glucosa es de 75 g para hombres y muje-
ñados de incontinencia fecal nocturna. A menudo
res no embarazadas. Esta prueba, de gran utilidad
existe sobreinfección y mejora de forma espectacu-
en el diagnóstico de la DM, se indica en los casos
lar tras la administración de antibióticos de amplio
sospechosos con alto riesgo de padecer diabetes y
espectro.
en los que los resultados de la glicemia en ayunas y
Entre los episodios diarreicos a veces hay un cua-
posprandial sean normales o dudosos.
dro de estreñimiento cada vez más severo y el grado
de atonía puede ser tan intenso que es capaz de oca-
sionar un megacolon.
CRITERIOS DIAGNÓSTICOS (ESTADIOS CLÍNICOS)
Neuropatía autónoma genitourinaria DE LA DIABETES MELLITUS
Y OTRAS CATEGORÍAS DE HIPERGLICEMIA
La denervación parasimpática impotencia orgánica SEGÚN LA GLUCOSA PLASMÁTICA
mientras que la afección simpática por pérdida del
esfínter posterior, es responsable de la eyaculación Ayunas 2 horas
mmol/L (mg/dl) postsobrecarga
retrógrada. mmol/L (mg/dl)
La vejiga neurógena diabética se produce por de-
nervación de las fibras simpáticas aferentes, así como Normoglicemia < 6,1 (110) < 7,8 (140)

de las fibras parasimpáticas eferentes que inervan el Alteración de la 6,1−7,0 (110−126)


glicemia en ayunas
músculo detrusor. El síntoma más precoz es la pér- (AGA)
dida de la sensación vesical con aumento del inter-
Tolerancia a la gluco- < 7,0 (126) 7,8-11,1 (140-200)
valo entre las micciones y del volumen de orina sa alterada (TGA)
matutina. Después se afectan las fibras motoras, lo Diabetes mellitus ≥ 7,0 (≥ 126) ≥ 11,1 (≥ 200)
que da lugar a atonía y pérdida de la fuerza del (DM)
músculo detrusor. El chorro de orina es lento y dé-

223
Bases generales del tratamiento La planificación del programa educativo y tera-
péutico se hace de manera conjunta entre el equipo
de la diabetes mellitus de salud y el enfermo, lo que redundará en una me-
El tratamiento de la DM descansa sobre las siguien- jor responsabilidad.
tes bases: Educación profunda. Después de 3 o 4 semanas
1. Educación diabetológica del comienzo, el paciente está en condiciones de am-
2.Dieta pliar y profundizar sus conocimientos sobre la dia-
3. Ejercicios betes. Pasado el impacto de saber que tiene una
4. Autocontrol enfermedad crónica para toda su vida, puede darse
5. Medicamentos cuenta de las dificultades que le impiden cumplir
• Compuestos hipoglicemiantes orales bien con el tratamiento adecuado, lo que por otra
• Insulina parte estimula su motivación por el aprendizaje.
• Terapia combinada de insulina más compues- Educación continuada. La filosofía de todo pro-
tos hipoglicemiantes orales grama de educación diabetológica debe incluir la
6. Tratamiento de otras condiciones asociadas: instrucción continuada del paciente y de los profe-
• Hiperlipoproteinemia sionales de la salud, como una forma de actualizar-
• Hipertensión arterial se con los nuevos conceptos que surjan y revisar la
• Obesidad información fundamental existente.
• Infecciones Hay diferentes formas de adiestrar y educar al
• Hábito de fumar diabético: la educación individual, que tiene la ven-
taja de responder a inquietudes personales y apro-
Educación diabetológica vechar la relación médico-paciente, de tradicional
Muy pocas afecciones exigen un conocimiento tan prestigio y estima en el binomio salud-enfermedad.
cabal de ella por parte del enfermo y sus familiares Tiene como desventajas que no favorece el espíritu
como la DM. Esto se debe a que desde el momento de trabajo del grupo, consume tiempo, es más cos-
de su presentación clínica, el paciente se convierte tosa y requiere mejor preparación pedagógica por
en el principal actor de un drama que lo acompañará parte del educador.
toda su vida. La educación en grupos llega a más pacientes y
La educación del diabético persigue como objeti- lo más importante, promueve la interacción y apoyo
entre ellos mediada por el profesional. Esta forma
vos principales proporcionar información y conoci-
es muy útil si se aplican métodos pedagógicos; es
mientos diabetológicos; entrenar y adiestrar en la
un magnífico instrumento de socialización. Entre sus
adquisición de habilidades y hábitos; pretende crear
desventajas se señala la imposibilidad de atender ne-
en el enfermo una real conciencia de su problema,
cesidades individuales estrictamente personales. Las
que le permita lograr cambios en su estilo de vida, combinaciones de diferentes formas producen resul-
para una mejor atención de su estado de salud. tados exitosos en el proceso educativo.
La educación debe ser amena y sencilla, con
Etapas de la educación diabetológica lenguaje claro y comprensivo, sin términos muy
Educación inicial. Al ser detectada la diabetes en el técnicos.
paciente, éste necesita una educación que le permita
llevar a cabo la atención inmediata, lo que induda- Dieta
blemente tiene importancia en el diabético tipo 1. Es uno de los pilares fundamentales del tratamiento
La información estará dirigida al diagnóstico, ca- de la DM, independientemente de su tipo clínico,
racterísticas básicas del síndrome, autocontrol de la pues resulta imposible lograr una regulación óptima
glucosa en sangre y en orina, dieta, administración del metabolismo de los carbohidratos, grasas y pro-
de la insulina o compuestos orales y complicacio- teínas sin una base nutricional adecuada.
nes agudas. Es un momento propicio para hacer lle- El tratamiento dietético debe individualizarse y
gar al paciente y familiares la necesidad de su su objetivo, mantener el peso corporal lo más próxi-
participación en el tratamiento. mo que se pueda al ideal y alcanzar valores de he-

224
moglobina glucosilada, glicemia y lípidos plasmáti- del colon. La dieta rica en fibras es capaz de mejo-
cos en los límites de sus valores normales. rar la elevación posprandial de la glicemia, reduce
Estos procederes no deben provocar desnutrición la glicemia basal y permite una mayor ingestión de
ni comprometer su salud, desarrollo y crecimiento, carbohidratos, lo que facilita disminuir las grasas,
y hay que adecuarlos a su momento fisiológico (pu- los requerimientos de insulina y de compuestos hi-
bertad, embarazo, lactancia). poglicemiantes orales, y los niveles de colesterol
plasmático y de lipoproteínas de baja densidad.
Composición de la dieta Agentes edulcorantes. Los edulcorantes sintéti-
La dieta convencional para el diabético implica la cos y los sustitutos del azúcar han sido empleados
siguiente distribución en carbohidratos, grasas y pro- no sólo por la población diabética, sino también por
teínas. sujetos portadores de obesidad e hiperlipoproteine-
Carbohidratos. Deben constituir de un 55 a 60 % mia. Pueden clasificarse en dos grupos:
del total del aporte calórico, de los cuales no menos a. Calóricos: sacarosa, fructosa, sorbitol, silitol,
del 66 % serán carbohidratos complejos, es decir, manitol y aspartame.
aquéllos que producen curvas posprandiales de gli- b. Acalóricos: sacarina y ciclamatos.
cemia poco elevadas. Los alimentos fuentes de car- Cálculo de los requerimientos energéticos. Los
bohidratos complejos son: los cereales de grano requerimientos energéticos se calculan de acuerdo
entero, las leguminosas, vegetales y algunos frutos con el estado nutricional (peso real) y la actividad
y tubérculos. física del paciente multiplicando el peso ideal por
Hay que limitar los carbohidratos simples y refi- los factores siguientes:
nados de absorción rápida que dan lugar a curvas
muy elevadas. Los alimentos fuentes de carbohidra- Actividad Actividad Actividad
tos simples son: azúcar, dulces, malta y miel de abe- sedentaria moderada marcada
jas. No se recomienda más del 10 % de las calorías
totales en forma de carbohidratos de este tipo. Peso normal 30 35 40
Grasas. Deben constituir de un 25 a 30 % del to- Sobrepeso 20 25 30
Bajo peso 35 40 45
tal de las calorías, y menos de un 10 % serán de
ácidos grasos saturados, como el aceite de coco, las
Según la fórmula:
grasas de origen animal, etc. Las grasas polinsatura-
das, como el aceite de girasol, maíz, soya, etc., cons- .
peso ideal actividad física = No. de calorías
tituirán hasta un 10 % y el resto, en forma de ácidos
grasos monoinsaturados, como el aceite de oliva. El peso ideal se obtiene en tablas según la talla y
Proteínas. A las proteínas corresponde un 15 a 20 % el peso. En su defecto, por la fórmula de Broca:
del total de las calorías y las dos terceras partes de la
Talla (cm) - 105 = Peso ideal (kg)
ración proteica debe ser de alto valor biológico; este
último requisito lo cumplen las proteínas de origen El consumo total calórico se reparte en 1/5 en el
animal, en cuya composición se encuentran concen- desayuno, 2/5 en el almuerzo 2/5 en la comida, y se
traciones considerables de grasas saturadas. Consti- separan pequeñas fracciones para la merienda y an-
tuye una excepción la carne de pescado, que contiene tes de acostarse.
altas concentraciones de ácidos grasos polinsatu-
rados. Lista de intercambio de los alimentos
Las proteínas evitan grandes oscilaciones de la
glicemia y al igual que las fibras dietéticas, retrasan Intercambios de leche
el vaciamiento gástrico. En el diabético adulto el
Cada intercambio es igual a:
consumo debe ser de 0,8 g/kg/día y 0,6 g/kg/día cuan-
Carbohidratos 14 g
do se detecta microalbuminuria o cuando se padece LISTA 1 Proteínas 7g
más de 15 años esta enfermedad. Grasas 6g
Fibra dietética. Las fibras de la dieta pudieran Calorías 130
evitar o combatir gran variedad de trastornos que Leche fresca 1 taza 240 ml
Leche evaporada 1/2 taza 120 ml
van desde la DM, la arteriosclerosis hasta el cáncer

225
Leche en polvo 3 cdas. 30 g Jugo de limón 1/2 taza 100 g
Yogur 1 taza 240 ml Piña 1/3 taza 80 g
Leche condensada 2 cdas. 96 g* Anón 1/2 taza 50 g
* Por el alto contenido en sacarosa de la leche condensada, Masa de coco tierna 1/3 taza 20 g
2 cdas. de ésta equivalen a 3 g de proteínas, 2 g de grasa Guayabas 2 pequeñas 50 g
y 27 g de carbohidratos. Chirimoya 1/2 de una mediana
Caimito 1
Intercambios de vegetales Zapote 1 75 g

Cada intercambio es igual a: Intercambios de azúcar, dulces y helados


Carbohidratos 3g
LISTA 2 A Proteínas 2g Cada intercambio es igual a:
Grasas 0g Carbohidratos 12 g
Calorías 18 LISTA 3 B Proteínas 0g
Lechuga 1 taza Grasas 0g
Berro 1 taza Calorías 46
Acelga 1 taza Azúcar 1 cda. 12 g
Col 1 taza Mermelada 1 cda. 26 g
Apio 1 taza Dulce en almíbar 1 cda. 25 g
Chayote 1 taza Pasta de frutas 1 cda. 30 g
Berenjena 1 taza Helado coppelia 1 1/2 cdas. 22 g
Coliflor 1 taza Helado regular 3 cdas. 30 g
Tomate 1 unidad (mediano) Arroz con leche 2 cdas. 45 g
Pepino 1 taza Natilla 2 cdas. 56 g
Rábano 1 taza Flan 2 cdas. 25 g
Pimiento 1 taza Pudín de pan 2 cdas. 52 g
Quimbombó 1/2 taza Compota 4 cdas. 59 g
Habichuelas 1/2 taza Panetela 1/2 onza 15 g
Espinaca 1 taza Gelatina (postre) 1/2 taza (1 1/2
Berza 1 taza cda. del polvo) 10 g
Nabo 1 taza
Intercambios de pan, galletas, viandas, cereales y granos
Cada intercambio es igual a:
Carbohidratos 7g Cada intercambio es igual a:
LISTA 2 B Proteínas 2g Carbohidratos 15 g
Grasa 0g LISTA 4 Proteínas 2g
Calorías 30 Grasas 0g
Cebolla cocinada 1/2 taza 100 g Calorías 70
Cebolla cruda 1/3 taza 80 g
Remolacha 1/2 taza 75 g LISTA 4 A Pan y galletas
Zanahoria 2/3 taza 75 g
Pan suave y redondo 1 unidad 30 g
Intercambios de frutas Pan de flauta 1 rebanada de 4 cm 30 g
Pan de molde 1 rebanada de 2 cm 30 g
Cada intercambio es igual a: Galletas de sal o de soda 4 unidades 30 g
Carbohidratos 8g
LISTA 3 A Proteínas 1g LISTA 4 B Viandas
Grasa 0g
Calorías 35 Malanga 1/3 taza 75 g
Naranja 1 mediana 100 g Boniato 1/3 taza 75 g
Mandarina 1 grande o 2 Plátano 1/3 taza 75 g
pequeñas 100 g Yuca 1/3 taza 70 g
Toronja 1/2 unidad 125 g Calabaza 1 taza 80 g
Mango 1/2 pequeño 50 g Papa 2/3 taza 100 g
Melón de castilla 1 taza 100 g
Melón de agua 1 taza 150 g LISTA 4 C Cereales y granos
Fruta bomba 1 taza 100 g
Plátano fruta 1 pequeño 40 g Arroz 1/3 taza o 3 cdas. 70 g
Mamey 1/4 de uno Pastas alimenticias 1/3 taza o 3 cdas. 70 g
pequeño 50 g Harina de maíz 1/3 taza 66 g

226
Avena 8 cdtas. 120 g Ejercicios físicos
Hojuelas de maíz 3/4 taza 18 g
Crema de arroz 2 cdas. Desde que en 1926 Lawrence demostró que el ejer-
Harina lacteada 5 cdtas. 15 g cicio potenciaba la acción de la insulina, éste se en-
Gofio 2 cdtas. 28 g
cuentra totalmente incorporado al tratamiento del
Maicena 2 cdas.
Chícharos 1/4 taza del grano diabético.
solo 60 g El tipo de ejercicio que se recomienda depende
Frijoles negros 1/4 taza del grano de la edad, preparación física y preferencia del indi-
solo 60 g viduo; conviene que sea aeróbico y de intensidad
Frijoles colorados 1/4 taza del grano
solo 60 g
moderada y se desaconsejan los demasiado intensos
Garbanzos 1/4 taza del grano y cortos porque empeoran el control metabólico en
solo 60 g las horas siguientes a su realización. Lo más impor-
Lentejas 1/4 taza del grano tante es que se hagan de forma regular.
solo 60 g
Todo programa de ejercicios dirigido al diabético
Frijoles blancos 1/4 taza del grano
solo 60 g requiere de su evaluación individual. Por tanto, es
Judías 1/4 taza del grano imprescindible practicar un examen físico completo
solo 60 g y precisar si existen o no complicaciones agudas o
crónicas y evaluar el grado de control metabólico.
Intercambios de carne
En los pacientes mayores de 35 años es obligatoria
Cada intercambio es igual a: la realización de un ECG con el propósito de des-
Carbohidratos 1g cartar la existencia de una cardiopatía isquémica clí-
LISTA 5 Proteínas 7g nica o subclínica. Otras complicaciones, tales como
Grasas 4g
hipertensión arterial, neuropatía autonómica cardio-
Calorías 75
Carnes de res, cerdo, car- vascular e hipotensión postural, deben ser investi-
nero, ave, lengua, vísceras, gadas.
pescado, jamón 1 onza 30 g Algunos beneficios del ejercicio físico son:
Mariscos: cangrejo,
langosta, calamar, camarón 1/4 taza 30 g
Huevo 1 unidad 50 g
1. Disminuye la glicemia durante y después del
Quesos blanco, amarillo y ejercicio.
proceso 1 onza 30 g 2. Aumenta la sensibilidad a la insulina.
Sardinas (3 pequeñas 3. Disminuye los triglicéridos y el colesterol LDL
o 1 grande) 1 onza 30 g y aumenta el colesterol HDL.
Embutidos: butifarra
campesina, chorizo, 4. Mejora la hipertensión media moderada.
mortadella, salami, 5. Aumenta el gasto energético, contribuye a la
jamonada, etc. 1 onza 30 g pérdida de peso, de grasa y al mantenimiento
Perro caliente 1 unidad de la masa corporal delgada.
Intercambios de grasas
6. Mejora la función cardiovascular.
7. Da mayor sensación de bienestar y calidad de
Cada intercambio es igual a: vida al diabético.
Carbohidratos 0g
LISTA 6 Proteínas 0g Autocontrol
Grasas 4g
Calorías 36 Es la realización por el propio paciente, en su domi-
Aceite 1 cdta. 5g cilio bajo la orientación y supervisión periódica de
Manteca 1 cdta. 5g su médico, de una serie de análisis sencillos, rápi-
Mantequilla 1 cdta. 5g
Mayonesa 1 cdta. 5g dos, confiables, en la orina y en la sangre, lo que
Queso crema 2 cdtas. permitirá incluso la modificación de su tratamiento
Tocino 1 lasca cuando los resultados así lo requieran.
pequeña 15 g
Maní 15 unidades
Aguacate 1/4 lasca de uno 1. Glucosuria. Para la determinación rápida de la
pequeño 50 g glucosa en la orina se emplean las cintas reactivas o

227
en su defecto, la reacción de Benedict. Se mez- 4. Perfil glicémico. Es la determinación de la gli-
clan 5 ml de reactivo con 8 gotas de orina y se deja cemia capilar antes y 2 horas después de las tres co-
hervir durante 5 minutos; se pueden producir los co- midas principales; su realización es recomendable
lores siguientes: rojo ladrillo (++++), lo cual corres- una vez a la semana como mínimo en diabéticos tipo
ponde a una glucosa superior al 2 %; anaranjado 1 y una vez al mes en diabéticos tipo 2 tratados con
(+++), entre 1 y 2 %; amarillo (++), entre 0,5 y 1 %; insulina.
verde (+), a menos de 0,5 % y azul (0). 5. Otro examen que, de estar al alcance del pa-
Debe tomarse orina recién emitida, previo vacia- ciente, puede utilizarse como autocontrol, es la he-
miento vesical, para no incurrir en errores de inter- moglobina glucosilada (HbA1).Actualmente, la
pretación por orina acumulada. Un Benedict positivo hemoglobina glucosilada es la variable más impor-
en un momento del día es un índice indirecto de cómo tante para definir un buen control metabólico de la
se metabolizó la comida anterior y por lo tanto, de diabetes y establecer un pronóstico. Este examen
la eficiencia metabólica hasta ese momento. Lógi- deberá determinarse cada 3 meses.
camente, en los casos de un umbral renal alto por la
edad o nefropatía, la glucosuria pierde considerable Hemoglobina glucosilada A1 y A1c
valor para el diagnóstico y el seguimiento. Son componentes de la hemoglobina que se forman
La medición de la glucosuria debe practicarse por la reacción de la glucosa con la hemoglobina; se
antes del desayuno, almuerzo, comida y antes de produce una “glucosilación no enzimática” que de-
acostarse, a diario, y los resultados deben ser anota- pende de la concentración en el plasma de la gluco-
dos por el paciente para mostrarlo al médico en cada sa. El porcentaje de Hb glucosilada formado indica
consulta. los valores aproximados de la glicemia en los 120 días
2. Cuerpos cetónicos en la orina. Se determinan que anteceden a la determinación (corresponde a la
con cintas reactivas, tabletas, o en su defecto, a tra- vida media del hematíe y refleja los valores
vés de la reacción de Imbert. glicémicos de ese lapso). En la práctica clínica se
La reacción de Imbert es un indicador de la pre- toman en cuenta únicamente 60 días de la determi-
sencia o no de cuerpos cetónicos en la orina, por lo nación y no los 120. Una HbA1c dentro de los lími-
tanto, no exige la medición de los productos que la tes normales significa una óptima compensación de
componen. Se vierte en un tubo de ensayo un aproxi- la diabetes.
mado de 20 gotas de reactivo de Imbert (nitropru-
siato de sodio y nitrato de amonio) en 5 ml de orina Medicamentos
y se deslizan por las paredes del tubo unas gotas de Se utilizan dos tipos de drogas: hipoglicemiantes
amoníaco; cuando la orina contenga cuerpos cetó- orales e insulina.
nicos, en la superficie de contacto entre ella y el amo-
níaco se formará un anillo de color rosa o violeta Compuestos hipoglicemiantes orales
intenso, tanto más intenso en color cuanto mayor Existen diferentes grupos de compuestos hipoglice-
sea la cetonuria. Esta reacción tiene valor diagnósti- miantes orales. Los derivados de las sulfonilureas
co en la orina recién emitida, previo vaciamiento (primera, segunda y tercera generación, cuya dife-
vesical. rencia más importante se encuentra en su potencia
Pueden haber falsos positivos en pacientes trata- de acción a dosis más bajas), las biguanidas,
dos con salicilatos. En los verdaderos positivos, el tiazolidenionas, inhibidores de la alfa-glucosidasa,
anillo desaparecerá con el calor, lo que no ocurre y derivados del ácido benzoico (cuadro 31.2).
con los falsos positivos. Indicaciones de los hipoglicemiantes orales:
3. Glicemia capilar. Es un método sencillo que Sulfonilureas
permite dosificar la glucosa existente en la sangre. 1. Diabéticos tipo 2 no obesos con falla del con-
Los diabéticos de tipo 1 y tipo 2 tratados con insuli- trol con dieta y ejercicio (donde no se consi-
na necesitan por lo menos una glicemia basal diaria; guen los objetivos en cuanto a niveles de
los de tipo 2 al menos una glicemia semanal o las glicemia y de HbA 1c). No utilizarlos con
veces que sean necesarias si se encuentran enfermos. glicemias mayores de 300 mg/dl.

228
CUADRO 31.2
HIPOGLICEMIANTES ORALES UTILIZADOS EN EL TRATAMIENTO DE LA DM TIPO 2

Hipoglicemiantes Dosis diaria Duración de acción


(horas)
Sulfonilureas (1ra. generación)
• Tolbutamida (Rastinón-Promidia) 500 mg - 3 000 mg 6 - 12
• Clorpropamida (Diabinese, Melitase) 125 - 500 mg + 48
• Acetoexamida (Dimelor) 250 - 1 500 mg 8 - 12
• Tolazomida (Tolinase) 100 - 1 000 mg 12 - 18

Sulfonilureas (2da. generación)


• Glibenclamida (Daonil, Eglucón, Glucolón, 2,5 - 20 mg 12 - 15
Norglicen, Libanil, Malix)
• Glipizida (Monodeab, Glibinese) 2,5 - 20 mg 12 - 15
• Gliclazida (Diamicrón) 80 - 320 mg 12 - 15

Sulfonilureas (3ra. generación, ?)


• Glimepirida (Amaril) 1 - 8 mg 5-8

Biguanidas
• Metformina (Glucophage) 500 -3 000 mg 12 - 24

Tiazolidenionas (Troglitazone, Pioglitazone, 200 - 600 mg 9


Rociglitazone)

Inhibidores de la alfa-glucosidasa (Acarbosa, 50 - 300 mg 3


Miglitol)

Derivados del ácido benzoico 0,5 - 16 mg 1


• Repaglinide (Prandín)

2. Diabéticos tipo 2 obesos con pérdida acelerada Tiazolidenionas


de peso y aumento significativo de la glicemia Cualquier cuadro con resistencia a la insulina, pero
pero clínicamente estables. en el que existe todavía producción endógena o apor-
3. Diabéticos tipo 2 que no presentan cetosis, con te exógeno de ésta.
Actualmente no se recomiendan por la Comisión
glicemia superior a 250 mg/dl y HbA1c mayor
Nacional de Diabetes, pues se han reportado casos
de un 10 %.
de hepatopatías graves producidas por su toxicidad.
4. En combinación con las biguanidas y los inhi- Su uso implica un chequeo frecuente de la función
bidores de la alfa-glucosidasa, cuando no se al- hepática.
canza un adecuado control metabólico a pesar
de la reducción de peso. Inhibidores de la alfa-glucosidasa
1. Diabéticos tipo 2 obesos que no responden ade-
Biguanidas (metformina) cuadamente a la reducción de peso y ejercicio.
1. Diabéticos tipo 2 obesos que no respondan al 2. Diabéticos tipo 2 obesos tratados con sulfonilu-
tratamiento con dieta y ejercicios. rea sin respuestas clínica y de laboratorio acep-
tables.
2. Personas con intolerancia a la glucosa.
3. Diabéticos tipo 2 con normopeso, y sin control
3. Pacientes con otras formas de resistencia a la metabólico adecuado a pesar de la dieta, el ejer-
insulina. cicio y las sulfonilureas.
4. En combinación con inhibidores de la alfa- 4. Diabéticos tipo 2 en etapas tempranas.
glucosidasa o las sulfonilureas, en diabéticos 5. Se pueden combinar con biguanidas o sulfonilu-
obesos y con normopeso desde el inicio que no rea, si no hay una respuesta adecuada a ellos
responden únicamente a las biguanidas. cuando se utilizan solos.

229
CRITERIOS DE CONTROL EN DIABÉTICOS TIPO 2 TRATADOS CON DIETA SOLA,
HIPOGLICEMIANTES ORALES O CON INSULINA

Bueno Aceptable Malo


mmol/L (mg/dl) mmol/L (mg/dl) mmol/L (mg/dl)

Glicemia (ayunas) < 6,1 (110) 6,1 - 7 (110-140) >7 (126)


Glicemia posprandial (2-3 h) < 7,8 (140) 7,8 - 10 (140−180) > 10 (180)
HbA1 <8% 8,1 - 10 % > 10 %
HbA1c < 6,5 % 6,6 - 7,5 % 7,5 %
Glucosuria 0 5 g/L > 5 g/L
Cetonuria 0 0 +
Colesterol total < 5,2 (200) 5,2 - 6,2 (200-239) > 6,2 (240)
HDL - colesterol:
hombres 0,9 (35) 0,9 (35) < 0,9 (35)
mujeres 1,2 (45) 1,2 (45) < 1,2 (45)
LDL - colesterol < 3,4 (130) 3,4 - 4,1 (130-159) > 4,1 (160)
Triglicéridos < 1,7 1,7 - 2,2 > 2,2
Índice de masa corporal:
hombres 20-25 kg/m2 27 kg/m2 > 27 kg/m2
mujeres 19-24 kg/m2 26 kg/m2 26 kg/m2
Presión arterial 130/85 mmHg 140/90 mmHg > 140/90 mmHg

Repaglinide las reservas pancreáticas, por lo que muchas veces


1. Las indicaciones son las mismas que las de las hay que combinar diferentes tipos de fármacos anti-
sulfonilureas. diabéticos, como sulfonilureas con biguanidas o in-
2. Se puede utilizar en la diabetes del anciano y hibidores de la alfa glucosidasa más sulfonilureas; a
en los pacientes con nefropatía diabética. veces biguanidas más acarbosa o insulina más anti-
Contraindicaciones de los hipoglicemiantes orales diabéticos orales.
• Sulfonilureas: embarazo, lactancia, alergia pre- La utilización de insulina de acción intermedia (o
via a una sulfonamida, insuficiencias renal y basal de tipo ultralenta) con compuestos de la fami-
hepática, infección, DM tipo 1 y descompen- lia de las sulfonilureas en pacientes diabéticos tipo 2,
sación aguda. representa una alternativa terapéutica; hay autores
• Biguanidas: embarazo, lactancia; insuficiencias que ocasionalmente la usan cuando se desea lograr
hepática, respiratoria, renal y cardíaca, y úlce- un buen control de la glicemia con un menor consu-
ras gastrointestinales activas. mo de insulina en enfermos con fallo secundario a
• Inhibidores de la alfa-glucosidasa: embarazo, la sulfonilurea y la insulina, en monoterapia durante
lactancia, trastornos crónicos de la digestión y 6 meses y terapia combinada después (insulina más
la absorción intestinal y úlceras del intestino glibenclamida); esto parece ofrecer beneficio al al-
grueso.
canzar un control metabólico adecuado, con dismi-
• Tiazolidenionas: en lesión hepática (se necesita
nución sustancial en los niveles de HbA 1c. La
control estricto de la función hepática en los
combinación de insulina con metformina también
primeros 6 meses y bimensual, en los segun-
dos 6 meses). Actualmente ya no se utiliza el tiene efectos beneficiosos con menor utilización de
troglitazone, pues produce necrosis hepática. insulina en obesos con diabetes tipo 2.
• Repaglinide: embarazo, lactancia, alergia pre- Sustancias vegetales con posibles efectos
via a una sulfonamida, insuficiencia hepática,
hipoglicémicos
diabetes tipo 1 y descompensación aguda.
En el Instituto Nacional de Endocrinología se in-
Terapia combinada vestigan los efectos similares a la insulina del ex-
No existe el medicamento ideal que pueda restable- tracto de albahaca morada con las plantas en
cer la secreción fisiológica de insulina sin disminuir floración.

230
Insulina CUADRO 31.3
CARACTERÍSTICAS DISTINTIVAS
La introducción de la insulinoterapia en el arsenal DE LAS INSULINAS DISPONIBLES
terapéutico del diabético cambió radicalmente el
Origen • Bovino
pronóstico de estos pacientes y mejoró su calidad
• Porcino
de vida. • Humano
• por recombinación del ADN
Características de las insulinas disponibles • por reacciones de transpepti-
Las características de las insulinas disponibles guar- dación
dan relación con su origen, grado de purificación, Grado de purificación• No purificadas (> 25 ppm)*
concentración, biodisponibilidad y solubilidad (cua- • Mejoradas de pico único
dro 31.3). (10-25 ppm)
• Altamente purificadas o mono-
Según su biodisponibilidad se conocen 4 tipos fun- componentes (10 ppm)
damentales de insulina: de acción rápida, semilenta,
Concentración • 500 unidades
lenta y de acción prolongada. Los regímenes habi- • 100 unidades
tuales de tratamiento utilizan combinaciones o mez- • 80 unidades
clas de productos de acción rápida con los preparados • 40 unidades
de acción lenta o prolongada. La razón del empleo Biodisponibilidad • Acción corta
de dicha mezcla se basa en el período de inicio, ac- • Acción intermedia
ción máxima y duración de los efectos de los dife- • Acción prolongada
rentes tipos de insulina. Solubilidad • Soluble
La vía ideal para la administración de la insulina • Insoluble
• En amortiguador de fosfato
sería la portal, por ser la más fisiológica, pero en la
• En amortiguador de acetato
práctica esto es imposible, lo que ha determinado
que en la clínica se utilicen las vías subcutánea, endo- * ppm: partes por millón.
venosa, intramuscular, intraperitoneal e intranasal.

TIPOS DE INSULINA Y SU ACCIÓN

Tipos de insulina Inicio Pico Duración Aspecto


(h) (h) (h)
De acción rápida
Lis Pro 0,15 - 0,35 1-3 3-5 Transparente
Regular 0,50 - 1 2-4 5-8 Transparente

Semilenta 1-2 4 - 10 8 -16 Turbia

Lenta
Isophane NPH 2-4 4 - 12 12 - 24 Turbia
Lenta PZI 3-4 6 - 15 18 - 24 Turbia
Mezclas fijas
Rápida + NPH
10 - 90 0,5 2-8 22 - 24 Turbia
20 - 80 0,5 2-8 22 - 24 Turbia
30 - 80 0,5 2-8 22 - 24 Turbia
40 - 80 0,5 2-8 22 - 24 Turbia
50 - 50 0,5 2-8 22 - 24 Turbia
Lis Pro + NPH
25 - 75 0,15 1-3 22 - 24 Turbia

Acción prolongada
Prolongada 2-4 No 12 - 24 Turbia
Ultralenta 4-8 12 - 24 20 - 30 Turbia

231
Por lo general se utilizan jeringuillas de insulina y optimizados mediante múltiples dosis o sistemas de
agujas finas de calibre 27 y 28. infusión de insulina (cuadro 31.4).

Indicaciones absolutas del tratamiento insulínico Dosificación de la insulina rápida


1. Diabéticos tipo 1. En condiciones de ayunas y preprandiales se puede
2. Situaciones de urgencia en el diabético: cetoaci- calcular la cantidad de insulina que se va a adminis-
dosis diabética, coma hiperosmolar, acidosis trar según distintas fórmulas, pero en general se con-
láctica. sidera de forma más práctica que se requiere 1U de
3. Diabéticos tipo 2 que no obtienen buen control insulina rápida por cada 100 kcal de alimento inge-
metabólico con dieta, o en fallo secundario de rido, o 1 a 2U por cada 20 g de hidratos de carbono
los compuestos hipoglicemiantes orales. contenidos en el alimento que se debe ingerir, y que
4. En la gestante diabética. se necesitan de 0,5 a 1,5U de insulina rápida en pa-
5. En la diabetes complicada por infecciones, trau- cientes diabéticos compensados metabólicamente y
matismos, cirugía , etc. de 1,5 a 3U, en los descompensados para que la
6. Diabetes con bajo peso o pérdida excesiva de glicemia disminuya entre 30 y 50 mg/dl.
peso con hipoglicemia no controlada (sin En cualquier caso, la dosificación calculada se
cetosis y asistencia mantenida). administrará cada 4 o 6 h por vía SC. En el cuadro
31.5 se describe el algoritmo de las dosis de insuli-
Un problema importante del tratamiento insulíni- na rápida, tanto por vía SC a nivel ambulatorio u
co ha sido la aparición de fenómenos relacionados
con el origen de las insulinas utilizadas. CUADRO 31.5
La diferencia estructural de la insulina animal y ALGORITMO DE DOSIFICACIÓN DE LA INSULINA
RÁPIDA SEGÚN LOS NIVELES DE GLICEMIA
de los péptidos contaminantes en la insulina inicial-
mente comercializada, han sido responsables de la Glicemia mg/dl SC cada 4-6 h EV cada h
llamada complicación autoinmune del tratamiento (mmol/L) (infusión continua)
insulínico. Como componentes de ella se describen
las alergias localizadas, alergia generalizada, lipodis- 120 (6,7) 0U 0,05 a 0,1 U/kg
trofia insulínica, insulinorresistencia por anticuerpos 120 a 200 1 a 2U 0,2 U/kg
antinsulínicos y la crisis hipoglicémica. (6,7 - 11,1)
200 a 250 2a4U 0,3 U/kg
Formas de utilización de las insulinas (11,1 - 13,9)
Los pacientes diabéticos deben recibir orientación
250 a 300 4a6U 0,4 U/kg
adecuada sobre las diversas modalidades de utiliza- (13,9 - 16,7)
ción de las insulinas. Éstas comprenden el empleo
300 a 400 6 a 8U 0,5 U/kg
de tratamientos ordinarios mediante dosis única y (16,7 - 22,2)
dosis dividida o en combinación con compuestos ora-
400 (22,2) 8 a 10 U 0,6 U/kg
les hipoglicemiantes; además, los tratamientos

CUADRO 31.4
PRINCIPALES VARIANTES DEL TRATAMIENTO INSULÍNICO OPTIMIZADO

Horario de administración

Tipos de insulina Antes del Antes del Antes de Antes de


desayuno almuerzo comida acostarse

De acción intermedia (AI) + de acción corta (AC) AI + AC AI + AC AI


AI + AC AC AI + AC
AC AC AC AC + AI
De acción prolongada o intermedia AC + AP o
(AP, AI) + de acción corta (AC) AC AC AC AC + AI

232
CRITERIOS DE CONTROL EN DIABÉTICOS DE TIPO 1 TRATADOS CON INSULINA

Bueno Aceptable Malo


mmol/L (mg/dl) mmol/L (mg/dl) mmol/L (mg/dl)

Síntomas Asintomático Sintomas ligeros, Retardo del crecimiento; pubertad


hipoglicemias ocasionales retardada; pobre ganancia de peso;
síntomas de hiperglicemia severa.
Glicemia (ayunas) 4,0 - 7,0 7-8 >8
Glicemia posprandial (2-3 h) 5,0 - 11,0 11,1 - 14,0 > 14
Glicemia nocturna 3,6 - 6,0 3,6 - 11,0 < 3,0 o > 11,0
HbA1c < 7,6 % 7,6 - 9 % > 9,0 %
HbA1 8,0 % 8,1 - 10 % > 10 %
Glucosuria < 5% 5 - 10 % > 10 %
Cetonuria 0 0 +
Colesterol total < 5,2 (200) 5,2 - 6,2 (200-239) > 6,2 (240)
HDL-colesterol:
hombres 0,9 (35) 0,9 (35) < 0,9 (35)
mujeres 1,2 (45) 1,2 (45) < 1,2 (45)
LDL-colesterol < 3,4 (130) 3,4 - 4,1 (130-159) > 4,1 (160)
Triglicéridos < 1,7 1,7 - 2,2 > 2,2
Índice de masa corporal:
hombres 20 - 25 kg/m2 27 kg/m2 > 27 kg/m2
mujeres 19 - 24 kg/m2 26 kg/m2 > 26 kg/m2
Presión arterial 130 - 85 mmHg 140/90 mmHg > 140/90 mmHg

hospitalario, como por vía EV en infusión continua 4. A las 24 o 48 h, cuando disminuyen los niveles de
en situaciones clínicas agudas severas de descom- glicemia (y desaparece la cetosis, caso de estar
pensación hiperglicémica o de cirugía mayor. presente) se introduce la insulina intermedia (lenta
y semilenta), un cuarto de la dosis total diaria de
Conducta terapéutica que se debe seguir la insulina rápida que se utilizaba, por la noche al
en la práctica con un paciente diabético acostarse, con un vaso de leche; el resto de la in-
sulina rápida se divide en 3 partes, que se dan
Diabéticos tipo 1
antes de desayuno, almuerzo y comida. También
1. Son tributarios de insulina y deben ser ingresados
se puede inyectar la insulina intermedia por la
para comenzar la insulinización debido a la for-
mañana.
ma en que debutan (cetosis con frecuencia). Las
5. De ahí en adelante, según la evolución y respues-
dosis son variables y específicas para cada uno y
ta del paciente (persistencia durante dos días de
no responden a esquemas prefabricados; se mo- la alteración del control glicémico a pesar del buen
difican durante el tratamiento, más en función de cumplimiento de la dieta, con determinación de
los resultados de las glicemias que de las gluco- la glicemia, glucosuria y administración correcta
surias. de la insulina) se va aumentando la dosis de insu-
2. Se les enseña la técnica de autoinyección y que la lina intermedia añadiéndole a la inicial o básica
insulina rápida (simple o regular) se inyecta 30 min una cantidad igual a las dos terceras partes de la
antes de las comidas y la NPH de acción interme- dosis promedio diaria de insulina rápida utilizada.
dia se utiliza en 1 o 2 dosis diarias, 30 a 60 min 6. Por lo general, en este tipo de diabético y dada la
antes del desayuno y la comida, o al acostarse. duración de la acción de la insulina lenta, habrá
3. La dosis inicial de insulina rápida en el paciente que hacer distintos tipos de combinaciones con
que debuta es de 0,6 a 0,7 U/kg de peso, repartida insulina rápida o añadir otra inyección de insuli-
en 4 inyecciones cada 6 h, antes de desayuno, al- na lenta en el horario nocturno para evitar la hi-
muerzo y comida, y al acostarse, previa glicemia perglicemia en ayunas.
y prueba de Benedict. Según el resultado de és- 7. Al alta, el paciente quedará con diferentes regí-
tas, se decide la dosis. menes, según el caso, pero habitualmente con dos

233
inyecciones de insulina intermedia diarias, una por b. Administración de medicamentos que favore-
la mañana y otra por la noche o al acostarse (66 % cen la perfusión hística y protegen la pared
de la dosis total diaria por la mañana y 33 % por vascular.
la noche). La dosis antes del desayuno se divide c. Tratamiento a base de fotocoagulación con lá-
en 1/3 de insulina rápida y 2/3 de insulina de ac- ser, que en la actualidad ha demostrado ser el
ción intermedia. único instrumento verdaderamente eficaz para
evitar el agravamiento de retinopatías no pro-
Diabéticos tipo 2 liferativas de determinada severidad y retino-
1. El tratamiento se inicia, salvo cuando debutan con patías proliferativas.
una hipoglicemia marcada, con dieta y ejercicios.
Tratamiento de la neuropatía periférica
Si éstos fracasan, se indican entonces los hipogli-
cemiantes orales. Tratamiento preventivo
2. En los pacientes no obesos: • Control glicémico optimizado.
• Glibenclamida, 1/2 tableta (2,5 mg) en el de- • Inhibidores de la aldosa-reductasa: epalrestat,
sayuno y si es necesario, se aumenta la dosis 150 mg/día.
a 1 tableta (5 mg); si no se logra el control, se • Ácidos grasos esenciales (aumentan la produc-
sigue incrementando de igual forma en el al- ción de prostanoides): ácidos gamma linoleico
muerzo y luego en la comida, cada 3 a 7 días, y linoleico.
hasta un máximo de 15 a 20 mg/día. • Medicamentos vasodilatadores: bloqueadores de
• En los ancianos se comienza con tolbutamida los canales del calcio, antagonistas noradrenér-
(Diabetón), 1 tableta de 500 mg en el desayu- gicos, inhibidores del sistema renina-angioten-
no, y si es necesario se aumenta la dosis en la sina, nitratos y prostanoides vasodilatadores.
comida y posteriormente en el almuerzo; con
Tratamiento de la enfermedad
la misma secuencia se puede llegar hasta un
Medidas generales
máximo de 3 g/día.
• Mejorar el control glicémico.
• El resto de los hipoglicemiantes orales se utiliza • Excluir o tratar otros factores contribuyentes:
según las necesidades de cada caso.
exceso de alcohol, deficiencia de vitamina B12,
3. En los pacientes obesos:
uremia.
• Biguanidas (metformina). La dosis inicial es • Explicar, comprender al paciente y tranquili-
de 450 a 850 mg diarios, una vez al día, y se zarlo.
aumenta en intervalos semanales, hasta que se
alcance el control glicémico. La dosis máxima Tratamiento medicamentoso. Las drogas que se
es de 2 500 a 3 000 mg/día, repartidos en tres exponen en el cuadro de la página siguiente se esco-
tomas, antes de las principales comidas. gen según los síntomas dominantes.
• La acarbosa es también una opción terapéutica
en estos casos. Tratamiento de otras condiciones
4. La insulina está indicada en pacientes con glicemia asociadas
> 15 mmol/L; en caso de marcada pérdida de peso,
cetosis o síntomas de hiperglicemia aguda; fallo Las entidades asociadas se explican en otros capítu-
de la respuesta a las sulfonilureas y no pueda uti- los, por lo que no es necesario hacerlo aquí.
lizarse la metformina; en urgencias diabéticas y
diabéticos enfermos por otra causa. Se adminis-
tran entre 0,1 y 0,5 U/kg/día (en el anciano se dan CETOACIDOSIS
las dosis más bajas) de insulina de acción inter-
media. Antes del desayuno se inyectan 2/3 de la DIABÉTICA
dosis total calculada y 1/3 por la noche.
La cetoacidosis diabética (CAD) constituye la com-
Tratamiento de la retinopatía diabética plicación aguda más grave de la DM, con una fre-
a. Control metabólico. cuencia que va de 5 a 15 %. En la década de 1911 a

234
Dolor urente Dolor lancinante Otros síntomas

Medicamentos tricíclicos Anticonvulsivos Dolor por contacto

• Imipramina, 25-100 mg vía oral/día. • Carbamazepina, 800-1 000 mg/día. • Película plástica (Opsitex en las
• Amitriptilina, 25-50 mg/día. • Fenitoína, 100-800 mg/día. piernas).
• Capsaicina, ungüento al 0,075 %, 4 veces • Valproato de sodio, 100-500 mg,
al día. 1-3 veces al día. Malestar en las piernas
• Mexiletine, 200 mg c/8 h. • Benzodiazepina, 0,5-1 mg/día.
Agentes tricíclicos • Clonazepán 0,5-1mg/día.
Otros tratamientos • Capsaicina (ungüento).
• Venoclisis de suero fisiológico + procaína, • Mexiletine, 200 mg c/8h. Calambres dolorosos
1 g + heparina, 100 mg. • Sulfato de quinina, 300 mg/día.
• Acupuntura, oxígeno hiperbárico, traudolapil,
gabapentín.

1920 fue la primera causa de muerte en los diabéti- el enfermo tiene todas las condiciones metabólicas
cos (40 % de los casos). para entrar en coma en cualquier momento.
En la actualidad el coma diabético sólo constitu-
ye la causa de muerte en 1 a 2 % del total de diabé- Factores desencadenantes
ticos, debido al progreso en el enfoque terapéutico, Los factores desencadenantes de la CAD se resu-
por lo que la mayoría de estos enfermos mueren a men a continuación:
causa de complicaciones tardías. 1. Debut de la diabetes mellitus (sobre todo en
los menores de 20 años).
Concepto y clasificación 2. No administración de insulina o dosis insufi-
La CAD es una descompensación grave de la DM, ciente de ésta.
una urgencia médica consecutiva a una deficiencia 3. Infecciones en general: piodermitis, abscesos,
de insulina, con aumento de la concentración de hi- pielonefritis, enfermedad diarreica aguda o
drogeniones debido a una elevación de la cetonemia, respiratoria, pancreatitis aguda, tromboflebi-
causada por la acumulación de cuerpos cetónicos tis aguda.
(ácidos acetoacético e hidroxibutírico) por encima 4. Transgresiones dietéticas.
de la capacidad de los sistemas de autorregulación 5. Stress físico o psíquico.
del equilibrio acidobásico, acompañada de hipergli- 6. Infarto agudo del miocardio.
cemia y glucosuria, trastornos electrolíticos y dife- 7. Accidentes cerebrovasculares.
rentes grados de deshidratación. 8. Hipertiroidismo.
En la cetosis, las cifras de cetonemia son superiores 9. Tratamiento con esteroides, o diuréticos del
a 2 mg % pero no mayores de 5, con hiperglicemia, tipo de las tiazidas.
cetonuria, reserva alcalina (RA) superior a 15 meq/L 10. En 10 a 20 % de los casos no es posible preci-
(mayor de 30 vol % de CO2) y bicarbonato estándar sar la causa desencadenante.
entre 15 y 20 meq/L. En la cetoacidosis moderada
la RA está entre 9,1 y 15 meq/L (20 a 30 vol % de Fisiopatología
CO2), el bicarbonato estándar entre 9,1 y 15 meq/L, En la CAD, el déficit absoluto de insulina junto con
y la cetonemia por encima de 5 mg %. En la ce- el aumento en la concentración de glucagón, produ-
toacidosis severa, grave (coma diabético), la RA es cen alteraciones sobre todo en el metabolismo hi-
menor de 9 meq/L (menor de 20 vol % de CO2), el drocarbonado y graso.
bicarbonato estándar está por debajo de 9 meq/L, el Cuando falta la insulina, los tejidos del organismo
pH sanguíneo es inferior a 7,3 y la cetonemia está disminuyen la captación y utilización periférica de
por encima de 5 mg %. En esta situación, indepen- la glucosa; como compensación ocurre un incremen-
dientemente de como esté su estado de conciencia, to de la producción hepática de ésta al aumentar la

235
glucogenólisis y al intensificarse la gluconeogé- Por este motivo, a causa del agua que sale cons-
nesis a partir del carbono procedente de los ami- tantemente de las células, el sodio se encuentra nor-
noácidos derivados de la degradación proteica. Por mal y hasta diluido (hiponatremia por dilución), a
lo tanto, su mala utilización por un lado y su super- pesar de la diuresis osmótica antes mencionada, es
producción por el otro (crece unas 3 o 4 veces por decir, diuresis con mayor pérdida de agua que de
encima del valor normal), provocan la hiperglice- sales. Además, los vómitos repetidos del paciente
mia. Intervienen también en su patogenia los ácidos contribuyen a la hiponatremia. Esta hiponatremia
grasos libres (AGL), los cuales tienen un efecto que acompaña a la hiperglicemia es más aparente que
inhibidor sobre la utilización periférica de la glucosa. real. La inconsciencia que se inicia en esta fase pue-
Cuando la glicemia sobrepasa las cifras de 150 de ser producida por la deshidratación intracelular
a 160 mg/dl (8,2 a 8,9 mmol/L), el túbulo proximal de las células cerebrales.
no es capaz de reabsorber toda la glucosa que filtra Alteraciones del potasio. La CAD causa una pér-
el glomérulo, es decir, que se satura su capacidad de dida importante de potasio. El déficit de insulina
reabsorción y aquélla se elimina por la orina cada favorece su salida del espacio intracelular al
vez en mayores cantidades. Esta glucosuria arrastra extracelular y hacia la orina. Por otro lado, la hipo-
grandes volúmenes de agua, pues al constituir la glu- volemia y la depleción de sodio estimulan la libera-
cosa un soluto no reabsorbible, produce una diure- ción de aldosterona, la que actúa a nivel renal
sis osmótica. En el coma diabético grave se suelen propiciando la pérdida de potasio; también ésta se
perder por la diuresis de 4 a 8 litros de líquido en 24 incrementa por la presencia de vómitos. Sin embar-
horas, y aproximadamente 400 meq de iones de sodio
go, al principio este ion se encuentra normal o algo
y 300 de potasio, así como cloro, fosfato, magnesio
elevado en la sangre, lo que se debe a varias causas:
y nitrógeno. Como consecuencia de esta pérdida de
1. La glucogenólisis, que libera 1 meq de potasio
agua aparece la deshidratación, que si es intensa, da
por cada 3 g de glucógeno degradado.
lugar a hemoconcentración, hipovolemia, y colapso
2. La gluconeogénesis a expensas de proteínas,
circulatorio periférico; esto provoca una deficiente
que libera 3 meq de potasio por cada gramo de
oxigenación de los tejidos, y puede llevar a una aci-
nitrógeno que se degrada.
dosis láctica que agravaría más el cuadro. Los nive-
les de 2-3 difosfoglicerato están muy disminuidos, 3. La acidosis metabólica, al tratar de compensar
lo que se traduce en una merma de la oxigenación por sí misma la acidosis extracelular, facilita
hística, que se ha relacionado con la aparición de un intercambio de hidrogeniones de este espa-
una complicación del coma diabético cetoacidótico: cio por potasio intracelular.
la coagulación intravascular diseminada (CID). 4. Disminución funcional u orgánica de la fun-
Si la deshidratación es intensa, en los diabéticos ción renal.
con una nefropatía de base se evidencia una insufi-
ciencia renal desde el principio. En los que no exis- Metabolismo de las grasas. El déficit de un nivel
te nefropatía, de no resolverse la deshidratación, la efectivo de insulina causa, entre otras alteraciones,
hipovolemia provocaría una disminución de la cir- un aumento de la lipólisis con la consiguiente ele-
culación periférica renal con la aparición de oligu- vación de los AGL circulantes, procedentes del teji-
ria o anuria y uremia extrarrenal, las que desaparecen do graso de depósito. Estos AGL son el sustrato
cuando se restablece el equilibrio hidromineral. principal que permite la formación de cetonas en el
La hiperglicemia creciente hace cada vez mayor organismo y se necesita un suficiente aporte de ellos
el poder osmótico de la sangre, y por lo tanto, de los y la activación de su oxidación para que el hígado
espacios extracelulares. Normalmente, la presión produzca cantidades significativas de cuerpos cetó-
osmótica que ejerce la glucosa es pequeña, pero si nicos.
la glicemia aumenta a 27 o 33 mmol/L, también di- El glucagón es el inductor principal de la oxida-
cha presión se elevará de forma notable y se creará ción acelerada de los ácidos grasos en el hígado, lo
un desequilibrio con el espacio intracelular. En es- que se produce por su acción sobre el sistema
tas condiciones el agua comienza a escapar de las enzimático de la palmitoil transferasa de carnitina
células, se origina el estímulo de la sed y se diluye (transporta los ácidos grasos al interior de las mito-
en parte el espacio extracelular. condrias).

236
Cuando los ácidos grasos de cadena larga llegan niones intercambiándose por sodio, este intercambio
al hígado, se esterifican y forman la coenzima A no es adecuado, y por lo tanto, se pierde este ion.
(CoA). La acil-CoA grasa no puede atravesar las La acidosis metabólica creciente con el consi-
membranas mitocondriales hasta que no se esterifica guiente derrumbe del equilibrio del medio interno,
con carnitina; la palmitoil transferasa de carnitina I contribuye a la obnubilación de la conciencia y al
transesterifica la acil-coenzima A grasa y forma acil- estado de coma en que culmina la acidosis diabética.
carnitina grasa, que atraviesa la membrana mitocon- Está demostrado que el déficit insulínico es fun-
drial interna por acción de la translocasa. damental en la aparición y mantenimiento de la
Luego, catalizada por la palmitoil transferasa de CAD; va a favor de ello la ausencia o disminución
carnitina II, la reacción se invierte en la matriz mi- marcada de las concentraciones de péptido C.
tocondrial y la acil-CoA grasa es oxidada y se for- En la cetoacidosis se encuentran niveles altos de
man los cuerpos cetónicos: ácido acetoacético, que cortisol, que promueven la lipólisis y la cetogénesis,
por reducción se transforma en ácido betahidroxi- y activan la glucogénesis para inhibir la utilización
butírico y éste, a su vez, por descarboxilación, en periférica de la glucosa. Se eleva además la hormo-
acetona. na del crecimiento, la cual tiene cierto efecto
Otro factor que contribuye al aumento de la cetogénico.
cetonemia es la disminución de la utilización peri-
férica de los cuerpos cetónicos en los diabéticos. Cuadro clínico
Estos cuerpos producen vasodilatación cutánea, aun El paciente, bien de forma aguda (horas) o insidiosa
en presencia de colapso vascular periférico, lo que (durante días o semanas), refiere un agravamiento
también contribuye a una mayor pérdida de líquido de los síntomas de descompensación diabética:
por la piel. poliuria, polidipsia, pérdida de peso, astenia y ano-
Tan pronto como los cuerpos cetónicos aumen- rexia, prurito vaginal, visión borrosa y parestesias,
tan, los amortiguadores de la sangre reaccionan con con náuseas y vómitos que llevan a la deshidrata-
ellos en un intento por neutralizarlos. En este proce- ción y a la cetosis. No falta la epigastralgia, la cual
so tiene capital importancia el sistema bicarbonato- es intensa y puede irradiarse al resto del abdomen y
ácido carbónico, que neutraliza la invasión ácida. confundirse con un abdomen agudo.
Entre los cuerpos cetónicos y los amortiguadores A medida que avanza el cuadro se encontrarán,
de la sangre ocurre lo siguiente: el ácido diacético además de los síntomas anteriores, cefalea, ansie-
reacciona con el bicarbonato de sodio y se forma dad, torpeza intelectual, disnea, hipotensión, taqui-
diacetato de sodio y ácido carbónico; éste, a su vez, cardia y afectación variable de la conciencia, que va
se desdobla en agua y dióxido de carbono. Así, el desde la normalidad hasta un estupor ligero. En la
organismo ha neutralizado un ácido transformándo- fase de descompensación total se encontrará un
lo en una sal, que es como se elimina por la orina. enfermo grave, con deshidratación severa, lengua
Al final, esto origina una disminución del bicarbo- seca y tostada, globos oculares hundidos, enrojeci-
nato, lo cual altera la relación bicarbonato-ácido car- miento facial, piel seca y masas musculares fláccidas.
bónico y cae el pH. Se produce, por lo tanto, una Es clásico el olor acetónico del aliento en estos pa-
acidosis metabólica. cientes.
El pH disminuido estimula al centro respiratorio Se llega, por último, al coma clínico, precedido
e induce la hiperventilación característica (disnea de de confusión o letargo. Las convulsiones no son fre-
Kussmaul), en un intento del organismo por elimi- cuentes y constituyen un índice de mal pronóstico
nar el dióxido de carbono. Esta expulsión del dióxido cuando están presentes.
de carbono es beneficiosa y perjudicial a la vez, pues Es común la hipotermia, debida a la pérdida de
la hiperventilación lleva también a más pérdida de calor como consecuencia de la vasodilatación peri-
líquido por evaporación. férica cutánea por la acidosis, por lo que la fiebre
Los cuerpos cetónicos amortiguados (diacetato y sugiere la existencia de una sepsis, que bien puede
betahidroxibutirato de sodio y potasio) provocan la haber sido la responsable de esta complicación.
eliminación de bases por la orina, pues aunque sale Debe señalarse que el estado de conciencia de
por el túbulo distal una gran cantidad de hidroge- estos enfermos no guarda relación con los niveles

237
de glicemia, cetonemia, iones hidrógeno o electróli- normalizado; ello explica la presencia de una
tos, sino con el grado de osmolaridad plasmática. El cetonuria varios días después, a pesar de un trata-
coma diabético, a causa de la deshidratación intra- miento correcto.
celular intensa producto de la diuresis osmótica por Hoy se cuenta con tiras reactivas que permiten
la hiperglicemia existente, es catalogado como un conocer los valores de cetonemia con sólo una gota
coma seco. de sangre.

Exámenes complementarios Diagnóstico positivo


Es necesario, para un manejo terapéutico adecuado, La CAD constituye un cuadro frecuente en todo cuer-
realizar antes de su comienzo la toma de una muestra po de guardia, por lo que el médico debe estar alerta
de sangre para hemograma, glicemia, urea, creatini- para detectar rápidamente tal contingencia, ya que
na, ionograma, cetonemia, gasometría y amilasa; to- la vida del enfermo depende de un tratamiento pre-
marle también una muestra de orina para determinar coz e intensivo.
en ella glucosa, cuerpos cetónicos y el sedimento Todo paciente deshidratado, con epigastralgia y
urinario. Además, se le realiza una radiografía del vómitos, que presente torpeza intelectual, aunque sea
tórax y un ECG. mínima, debe ser sospechosa, y mucho más si hubo
Es importante el control horario de la glucosuria, polidipsia y poliuria en los días anteriores. De igual
cetonuria, cetonemia y gasometría, así como el manera, deberá sospecharse este diagnóstico ante un
monitoreo del ECG. El ionograma debe repetirse a coma de instalación progresiva, con antecedentes o
las 2 y a las 5 h después de iniciado el tratamiento. no de diabetes, deshidratación con respiraciones pro-
Hemograma. Hay una leucocitosis muy intensa, fundas, hipotonía de los globos oculares y arreflexia
por la acidosis metabólica osteotendinosa. Tanto en un caso como en el otro,
Glicemia. Es mayor de 16,5 mmol/L (300 mg/dl). una reacción de Benedict y de Imbert realizadas en
Glucosuria. Siempre muy intensa. el propio cuerpo de guardia por el médico o la en-
Cetonuria. Aparece en grados variables. fermera, confirmarán el diagnóstico.
Cetonemia. Es superior a 2 mg/dl. Sería improcedente esperar por el resultado de una
Reserva alcalina. Es mayor de 15 meq/L (> 30 vol % glicemia, que no es decisiva y porque un diabético
de CO2) en los casos que sólo presentan cetosis. con hiperglicemia puede tener un coma de otra na-
En la cetoacidosis moderada o severa, además de turaleza.
las cifras de glicemia, cetonemia, glucosuria y
cetonuria elevadas, se encuentran: DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
Reserva alcalina. Está por debajo de 15 meq/L. DE LA CETOACIDOSIS DIABÉTICA
Gasometría. Los resultados expresan la acidosis
metabólica: pH arterial y capilar < 7,35, venoso 1. Coma hipoglicémico
< 7,28; bicarbonato estándar (BS) arterial, capilar y 2. Coma hiperosmolar
venoso < 21 meq/L; exceso de bases (EB) arterial, 3. Acidosis láctica
capilar y venoso < 2,5 meq/L; PCO2: baja; PO2: nor- 4. Cetoacidosis alcohólica
5. Intoxicaciones (metanol, barbitúricos)
mal o baja, y saturación de la Hb: normal o baja.
6. Traumatismos encefálicos
Se debe resaltar que si bien en la CAD hay un 7. Accidentes vasculares encefálicos
aumento de los ácidos acetoacético, beta-hidroxibu- 8. Coma urémico
tírico y acetona, hay ocasiones en que aquélla sólo 9. Coma hepático
se debe al ácido beta-hidroxibutírico, lo que trae di- 10. Cuadro de abdomen agudo
ficultades en el diagnóstico, pues las pruebas utili-
zadas para comprobar la presencia de cetonuria dan
resultados positivos muy débiles e incluso negati- Pronóstico
vos con este ácido. En los pacientes jóvenes, sin complicaciones aso-
Otra característica es que los valores de acetona ciadas, la CAD tiene un excelente pronóstico; lo
en la sangre pueden permanecer altos hasta 40 ho- ensombrecen la edad avanzada, la intensidad de la
ras luego de que los otros cuerpos cetónicos se han hiperglicemia, la profundidad del coma y la presen-

238
cia de infecciones o de enfermedades cardiovascu- 3. Cuando la glucosuria disminuya, los intervalos
lares. de inyección se espacían cada 2 a 4 h.
4. Si la glucosuria es ligera (Benedict verde (+) o
Tratamiento amarillo (1 %) (++) se suspende la insulina y
La cetosis y la CAD son urgencias médicas que re- se comienza la alimentación precoz (jugo de
quieren un diagnóstico precoz y un tratamiento de frutas o leche) para evitar hipoglicemias y con-
preferencia en una Unidad de Cuidados Intensivos tribuir al aporte de líquidos.
(UCI). 5. Identificar la causa de la descompensación y
tratarla adecuadamente.
6. Evitar el progreso hacia la cetoacidosis o al
OBJETIVOS FUNDAMENTALES
DEL TRATAMIENTO
coma diabético.
DE LA CETOACIDOSIS DIABÉTICA
Cetoacidosis moderada o grave
1. Compensar el déficit de insulina con la dosis adecua- Insulina. La insulina simple o regular es la de elec-
según la situación presente. ción en la CAD. En la actualidad se preconiza la
2. Corregir el desequilibrio acidobásico, el estado de administración de insulina en dosis bajas (microdo-
deshihidratación y el shock (si existiera).
sis) con el objetivo de restablecer la normalidad me-
3. Prevenir la hipoglicemia y la hipocaliemia.
tabólica del paciente de un modo uniforme y con el
mínimo de riesgo.
El tratamiento no es igual para todos los enfer- Los argumentos que se plantean para la utiliza-
mos, es dinámico e individual y debe tenerse en cuen- ción de la insulina en dosis bajas son los siguientes:
ta la edad, su estado cardiovascular, la presencia de
infección, grado de acidosis y duración. El médico 1. Disminución o ausencia de complicaciones que
que va a atender a un paciente con cetoacidosis tie- surgen en el tratamiento con dosis altas de
ne que hacerlo de una forma personal y constante, y insulina, sobre todo hipoglicemia tardía, hipo-
permanecer al lado de él hasta su total recuperación. caliemia, hiperlactacidemia, hipomagnesemia,
Al paciente con CAD se le debe realizar una grá- hipofostafemia y aumento de la resistencia
fica evolutiva (cuadro 31.6), donde se controlen de insulínica (aumento de hormonas antinsulínicas).
forma horaria los aspectos clínicos importantes que 2. Uso racional del medicamento. La administra-
expresen su estado real y los datos que conciernen a ción de dosis elevadas de insulina produce va-
la evolución y el tratamiento, de manera que en todo lores plasmáticos de 250 a 300 mU/ml, mientras
que en un sujeto normal las concentraciones
momento se tenga un control de lo acontecido y de
séricas de insulina plasmática exceden excep-
la situación actual.
cionalmente las 50 mU/L; además, aumentos
de 10 a 20 mU/L inhiben la lipólisis, la gluco-
Cetosis
genólisis y la gluconeogénesis, por lo que no
El diabético insulinodependiente conocido, sin vó-
estaría justificado el uso de grandes dosis de
mitos ni hiperventilación, consciente, se puede aten-
insulina.
der en el cuerpo de guardia de cualquier hospital:
Existen varios esquemas de tratamiento con mi-
1. Se le da agua bicarbonatada fría (125 ml con crodosis y el médico debe tener dominio de ellos,
5 g de bicarbonato de sodio) con una fre- para que pueda garantizar el manejo adecuado del
cuencia horaria; si tiene vómitos, se le ad- paciente.
ministran 1 500 ml/m2 de superficie corporal
de solución salina al 0,9 % por la vía EV. 1. Uso de la insulina simple por vía EV. La dosis
2. Insulina regular (simple) a razón de 0,1 U/kg inicial usual es de 6 a 10 U/h en perfusión con-
de peso corporal/h, por vía IM, en los brazos, tinua (0,1U/kg/h). Se diluye la insulina en una
hasta resolver la cetosis. solución salina al 0,9 % en una proporción

239
CUADRO 31.6
GRÁFICA DE EVOLUCIÓN DE LA CETOACIDOSIS DIABÉTICA

Datos clínicos (al ingreso) 1ah 2a h 3a h 4 ah 5 ah 6a h 7a h 8 ah 9 ah 10ah


Conciencia *
FR
Kussmaul
Temperatura
P
TA
Lengua **
Piel
Vómitos
Diuresis

Datos de laboratorio y Rx
Glucosuria
Cetonuria
Cetonemia
Glicemia
RA meq/L
K meq/L
Na meq/L
Cl meq/L
pH
CO2
Brecha aniónica
Osmolaridad
Hematócrito
Leucocitos
Creatinina
ECG
Rx tórax

Tratamiento
Hidratación
• Sol. salina
• Dextrosa 5 %
Insulina
• Regular
• EV
• IM
Potasio
Bicarbonato
Otros
Total de líquidos
Antibióticos

1er apellido 2do apellido Nombre HC Cama Sala Servicio


*1. Alerta. ** Seca.
2. Somnolencia. Tostada.
3. Estupor.
4. Coma ligero.
5. Coma.

240
de 1 U/ml, a la que se añaden 4 ml de seroal- Actualmente se plantea que como se des-
búmina (o en su defecto 5 ml de sangre del pa- conoce qué pacientes con CAD van a tener una
ciente) para prevenir la adherencia de la insulina resistencia a las microdosis de insulina regu-
a las paredes del sistema de perfusión. Una vez lar, se debe comenzar el tratamiento con 25 a
que se prepara la solución (por ejemplo, 100 U 50 U en bolo, seguido de un goteo con 15 a 25 U
en 100 ml) se inyecta en la vena por medio de de insulina por hora hasta lograr que desapa-
una bomba de perfusión o por medio de un rezca la CAD. Se plantea como ventaja que se
microgotero. asegura la saturación de los receptores en el
De no contarse con estos aditamentos, se caso de que hayan cuerpos competitivos u otros
utiliza la vía EV para infusión continua con: factores que propicien la resistencia.
500 ml de solución salina fisiológica, más 50 U Al iniciar la infusión de dextrosa, general-
de insulina simple y 4 ml de albúmina humana mente a la sexta hora o antes, se comenzará a
(o 5 ml de sangre del paciente). Esta infusión administrar la insulina regular en dosis de 6 U
continua, a 20 gotas por min, debe aportar de 4 por vía IM cada 2 h.
a 6 U de insulina por h. En la CAD es preferible la vía IM a la EV y
De esta manera la glicemia desciende por la subcutánea, por ser más simple y segura; al
debajo de 13,87 mmol/L (250 mg/dl) en 6 o 12 h; igual que la infusión EV, cuando se cuenta con
se indica entonces la insulina regular por vía bomba de infusión, a la inyección directa en
vena, ya que este último método implica una
IM, pero la perfusión EV no se debe suspender
vida media de insulina circulante muy corta y,
hasta por lo menos 1 h después de este cambio
por lo tanto, variabilidad importante en las con-
en la vía de administración. La dosis de insuli-
centraciones y la acción insulínica.
na perfundida se modifica en dependencia de
Cuando se comience con la vía oral se apli-
la evolución de los estudios bioquímicos, con
cará un esquema de insulina simple por vía sub-
el objetivo de conseguir una disminución de la
cutánea, cada 4 h según la glucosuria:
glicemia entre 3,3 y 5,5 mmol/h (60 a 100 mg/h).
Con una velocidad de perfusión de la insuli-
Rojo ladrillo (> 2 %): 0,20 U/kg...... + 14 U
na de 6 U/h, se logran concentraciones plas- Naranja (2 %): 0,15 U/kg......... + 10 U
máticas de ésta de 120 mU/ml, las que son Amarillo (1 %): 0,10 U/kg......... + 7 U
óptimas para lograr los resultados metabólicos
deseados, Si a las 3 h no ha disminuido la La insulina lenta U-100 debe administrarse
glicemia de forma significativa, se duplica la lo más precozmente posible, por lo general al
velocidad de perfusión, previa comprobación día siguiente de haber salido el paciente de la
de que la hidratación y la conexión del sistema CAD, y mantener un esquema de insulina sim-
a la vena del enfermo son correctas. ple antes de las tres comidas, según la escala
2. Uso de la insulina simple por la vía IM. Se del Benedict siguiente:
puede comenzar con 10 o 20 U de insulina sim-
ple o monocomponente (actrapid) como dosis Rojo ladrillo........................10 U
de ataque, por vía IM, en la región deltoidea. Anaranjado.......................... 8 U
A continuación se administra 0,1 U/kg de peso Amarillo, verde o azul......... 0 U
cada h. Con este proceder se logran descensos
de la glicemia de 75 mg/dl/h (4,1 mmol/L/h). A las 10:00 p.m. se realiza la reacción de
Si a las 3 h la glicemia no disminuye y la hi- Benedict, pero no se debe inyectar insulina.
dratación es adecuada, hay que pensar en la
presencia de factores causantes de insulinorre- Con este último esquema se mantiene protegido
sistencia; se pasa entonces a la primera moda- al e nfermo hasta alcanzar sus necesidades de in-
lidad explicada de insulina simple EV y se sulina.
duplica la velocidad de perfusión cada 2 h has- Hidratación y reposición de electrólitos. La can-
ta alcanzar los niveles de glicemia deseados. tidad total de líquidos que se debe administrar en las

241
primeras 24 h es de unos 5 500 a 8 000 ml, aunque y se mantiene el potasio plasmático entre 4 y 5 meq/L.
esto es individual y estará en dependencia del grado Si en cualquier momento está por debajo de 3 meq/L,
de deshidratación y la respuesta al tratamiento. En se aumenta la solución a 39 meq/h y si está entre 3
los pacientes seniles con insuficiencia cardíaca, con y 4 meq/L, a 26 meq/h; si se encuentra entre 5 y
infarto del miocardio o shock, es necesario utilizar 6 meq/L, disminuirla a 13 meq/h. Cuando se halla
la presión capilar pulmonar (PCP) o en su defecto la por encima de 6 meq/L, hay que detener su infu-
presión venosa central (PVC), para poder emplear sión. Al inicio del tratamiento debe utilizarse el clo-
la hidratación con mayor efectividad y evitar la des- ruro de potasio, para luego pasar al fosfato potásico;
compensación cardiovascular. cada mmol de esta sal equivale a 1,5 meq de potasio.
Se utiliza solución isotónica porque la mayoría Bicarbonato de sodio. Su uso tiene el riesgo de
de ellos tienen valores de sodio plasmático bajos o producir una alcalosis de rebote, una hipocaliemia y
normales. Éstos son corregidos por el nivel de la
el desplazamiento repentino hacia la izquierda de la
glicemia.
curva de disociación de la oxihemoglobina, con dis-
Corrección
de la natremia
= Na + 1,6 . glicemia (mm/L) – 5,5 minución del aporte de oxígeno a los tejidos; pero
también la acidosis tiene sus riesgos, como la de-
5,5
presión del SNC, el inotropismo cardíaco negativo,
o la vasodilatación periférica y la hipotensión arterial.
Por eso está indicado cuando la RA es menor de 9 meq/L
Na + 1,6 . glicemia (mg/dl) – 100/100 o el pH menor de 7,1.
La cantidad de miliequivalentes que se deben ad-
100
ministrar se calcula de la forma siguiente:
Las soluciones hipotónicas sólo tendrían indica-
ción si hubiera hipernatremia marcada (> 150 meq/L). meq = peso (kg) . exceso de bases . 0,3
Inicialmente se utiliza la solución salina al 0,9 %, a
razón de 1 500 ml en la primera hora, para continuar Si no se dispone de estudios gasométricos, se calcu-
con 1 000 ml en la segunda y 2 000 ml entre la ter- la la cantidad necesaria de bicarbonato de sodio al 4 %
cera y sexta horas, a razón de 50 ml/h ajustando la con la fórmula clásica:
hidratación según la respuesta clínica.
Generalmente, a la sexta hora o antes se obtiene una
respuesta favorable: glicemia por debajo de 250 mg/dl
.
ml = peso (kg) [35- reserva alcalina (vol %)] 0,6.
(13,87 mmol/L) o glucosuria de una o dos cruces, o
con flujo urinario abundante; en este momento se
administra dextrosa al 5 %: 500 ml cada 4 h, con el
propósito de evitar la aparición de hipoglicemias tar-
. .
ml = peso (kg) [(9 – reserva alcalina (meq/L)] 0,6
días. Se recomienda utilizar no menos de 100 g en
Se debe comenzar con la mitad de la dosis total, y
las primeras 24 h, con un ajuste de la dosis de insu-
de acuerdo con la respuesta clínica y gasométrica,
lina. La mayor parte del déficit de sodio se recupera
optar o no por la administración del resto. Al iniciar
después de 4 o 5 h de tratamiento, sin embargo, el
el tratamiento con el bicarbonato hay que añadir
déficit de agua corporal total debe restablecerse de
500 ml de solución salina normal con 25 meq de
forma más gradual.
potasio adicionales, en una hora. No se elevará la
Tan pronto el paciente tolere la vía oral se sus-
pende la EV y se comienza una dieta como se expli- RA en más de 15 meq, ni el pH por encima de 7,10;
ca más adelante. si con estas dosis, en presencia de una hidratación
Potasio. Se usa desde la primera hora si se cono- adecuada, no se produce una elevación del pH, se
cen sus valores plasmáticos. De lo contrario, se co- sospechará acidosis láctica.
mienza su administración cuando se sepa que hay Fósforo. De emplearse fósforo en el tratamiento,
buen funcionamiento renal (diuresis adecuada). Se se hará en forma de fosfato potásico EV en dosis de
emplea a razón de 20 meq/h guiándose por el ECG, 1 a 2 mmol/kg de peso corporal y en un período de 6

242
a 12 h; así se restituyen el fósforo y el potasio. En cada 2 h). Una vez controlada la cetoacidosis, se
los pacientes con disminución de la función renal ordena una dieta blanda, baja en grasas (carbohidra-
no se debe usar el fósforo, pues una dosis excesiva tos, 150 g; proteínas, 50 g; grasas, 50 g). Después se
puede provocar una hipocalcemia severa; en todo volverá gradualmente a la dieta adecuada.
caso, su utilización requiere controlar la calcemia.
En el cuadro 31.7 se exponen otras medidas ge-
nerales que se indican en el paciente con CAD y en COMA DIABÉTICO
el cuadro 31.8 se señalan las complicaciones del tra-
tamiento. HIPEROSMOLAR
NO CETÓSICO
CUADRO 31. 7
MEDIDAS GENERALES EN EL TRATAMIENTO
DE LA CETOACIDOSIS DIABÉTICA Los pacientes diabéticos, principalmente los no in-
sulinodependientes, presentan como complicación
1. Sonda vesical en los casos imprescindibles (pérdida de aguda el coma hiperosmolar no cetósico (CDHnC),
la conciencia o si la diuresis no se produce espontá-
neamente). cuya mortalidad es alta, entre el 40 y el 70 %. Por
2. Lavado gástrico en todo paciente inconsciente, regla general el diagnóstico es tardío, lo cual en-
estuporoso, con distensión o bazuqueo gástrico y vó- sombrece aún más su pronóstico.
mitos; dejar 200 ml de una solución bicarbonatada La hiperosmolaridad es una urgencia médica que
(3 cucharadas de bicarbonato por litro de agua) en la
cavidad. se ve en diferentes enfermedades, y es la DM una de
3. Si hay shock o hipotensión arterial sistólica por debajo las más importantes.
de 80 mmHg, se transfunde sangre fresca o glóbulos
lavados. Concepto
4. Si existen signos de infección, antibioticoterapia de am-
plio espectro. El CDHnC es un síndrome clínico-bioquímico que se
5. Mantener la temperatura corporal del paciente dentro caracteriza por una hiperglicemia severa (> 600 mg/dl)
de la normalidad. (> 33,3 mmol/L), con un aumento de la osmolari-
6. En enfermos inconscientes o con una grave hiperosmo-
laridad plasmática (> de 380 mosmol/L), es obligato- dad plasmática (> 350 mosmol/L), ausencia de
rio el uso de heparina, 25 mg EV c/4h.
7. Si la PO2 está por debajo de 80 mmHg, hay que admi-
nistrar oxígeno a razón de 5 L/min. FACTORES DESENCADENANTES DEL COMA
DIABÉTICO HIPEROSMOLAR NO CETÓSICO

CUADRO 31.8 1. Debut de la diabetes mellitus tipo 2


COMPLICACIONES DEL TRATAMIENTO 2. Presencia de infecciones
DE LA CETOACIDOSIS DIABÉTICA 3. Administración de algunos medicamentos
• Esteroides
1. Cetosis y acidosis con hipoglicemia • Tiazidas
2. Hipoglicemia sin cetosis • Furosemida
3. Alcalosis y tetania • Diazóxido
4. Acidosis hiperclorémica • Beta bloqueadores
5. Anuria • Cimetidina
6. Hipocaliemia o hipercaliemia • Clorpromazina
7. Recurrencia del coma • Difenilhidantoína
8. Edema cerebral • Inmunosupresores
9. Alcalosis metabólica 4. Stress
10. Edema pulmonar • Quemaduras
• Cirugía mayor
• Infarto del miocardio
La alimentación oral debe iniciarse cuando co- • Accidentes cerebrovasculares
mience a disminuir la cetosis, siempre que no exis- 5. Sobrecarga excesiva de carbohidratos
tan náuseas ni vómitos; se dan alimentos líquidos • Aporte oral o EV de glucosa hipertónica
como jugos de frutas diluidos con agua, leche o cal- • Diálisis peritoneal
• Hemodiálisis
dos sin pasar de 10 g de carbohidratos/h (250 ml

243
cetosis, marcada deshidratación, depresión del sen- Cuadro clínico
sorio y signos neurológicos variables.
El cuadro se instala de forma insidiosa, habitualmen-
Epidemiología te en un paciente diabético anciano o de edad me-
diana, con poliuria y polidipsia de varios días de
Aparece con mayor frecuencia en los pacientes dia- evolución, que se agrava por algunos de los factores
béticos tipo 2 de mediana o avanzada edad, y del desencadenantes ya señalados, con alteraciones neu-
sexo femenino. rológicas variables que van desde la obnubilación,
alucinaciones visuales, afasia, nistagmo, convulsio-
Patogenia
nes a veces de tipo jacksoniano, arreflexia osteoten-
En la etiopatogenia del CDHnC intervienen varios dinosa, signo de Babinski, hemiplejías, hasta llegar
mecanismos. al coma (80 % de los casos). Algunos pacientes tie-
La ausencia de cetosis se ha tratado de expli- nen una mínima alteración de la conciencia con
car por: manifestaciones neurológicas focales, las que des-
aparecen cuando se indica un tratamiento adecuado.
1. La presencia de secreción residual de insulina En no pocas ocasiones el cuadro clínico lleva a
endógena con insulinemia periférica, suficien- diagnosticar erróneamente una afección neurológi-
te para inhibir la lipólisis, pero inadecuada para ca primaria, sobre todo en aquéllos en coma o con
la utilización periférica de la glucosa. signos de focalización neurológica.
2. La hiperosmolaridad y la deshidratación por sí Se observa marcada deshidratación, que se agra-
mismas son capaces de inhibir la liberación de va por la disminución de la sensibilidad de los cen-
ácidos grasos libres procedentes del tejido adi- tros de la sed y se eleva la viscosidad del plasma,
poso. Realmente, en el CDHnC, aunque se han que a veces provoca trombosis arteriales y venosas.
encontrado elevados los AGL, son menores que Puede haber hemorragias, causadas por CID, hipo-
en la CAD, y este déficit de sustratos reduce la tensión arterial y shock.
formación de cuerpos cetónicos. Hay ausencia de aliento cetónico y de cetonuria.
3. Concentraciones mayores de insulina en la La respiración acidótica de Kussmaul sólo está pre-
circulación hepática pero insuficientes en la pe- sente cuando hay una acidosis láctica, complicación
que agrava el pronóstico del paciente.
riférica, lo que evita la activación completa del
La frecuencia de infecciones es elevada, sobre
sistema de la palmitoil transferasa de carnitina,
todo neumonías bacterianas por gérmenes gramne-
por lo que los ácidos grasos de cadena larga no
gativos y pancreatitis, entre otras.
pueden ponerse en contacto con las enzimas
Un diagnóstico tardío pudiera deberse a que esta
de β-oxidación para formar los cuerpos cetó-
complicación se presenta en ancianos con cierto gra-
nicos. do de demencia senil, con disminución de la sensa-
ción de sed y de la función renal, sin vómitos, ni
El déficit insulínico en estos enfermos produce cetosis, por lo que el médico está obligado a pensar
una hiperglicemia severa, responsable de la diuresis en ella frente al cuadro clínico ya explicado, para
osmótica persistente, poliuria e intensa deshidrata- así lograr un mejor pronóstico.
ción, pero sin pérdida de iones de sodio y cloro. La
marcada sobrecarga renal de glucosa en esos pa- Exámenes complementarios
cientes induce una disminución de la filtración glo- El paciente con CDHnC debe ser ingresado en una
merular. Todo lo anterior lleva al shock, que en UCI e indicársele de inmediato osmometría, glice-
ocasiones se asocia a fenómenos trombóticos. mia, gasometría, ionograma, hemograma, ácido lác-
Las manifestaciones neurológicas presentes en tico, cetonemia, creatinina, sedimento urinario,
esta complicación se correlacionan con la hiperos- cetonuria, glucosuria, ECG, radiografía de tórax y
molaridad plasmática y la hipocaliemia severa, así coagulograma. La punción lumbar para el estudio
como con los trastornos de la perfusión encefálica del LCR se hará cuando el cuadro clínico haga pen-
provocados por la gran deshidratación. sar erróneamente en un accidente cerebrovascular.

244
Cada una hora se debe realizar glicemia, urea, CUADRO 31.9
SIGNOS DE MAL PRONÓSTICO EN EL COMA
ionograma, osmometría, gasometría, glucosuria,
HIPEROSMOLAR NO CETÓSICO
cetonuria y cada 12 h, radiografía de tórax y ECG.
Glicemia. Hay una intensa hiperglicemia, mayor • Osmolaridad plasmática > 350 mosmol/L
de 600 mg/dl (33,3 mmol/L); en ocasiones alcanza • Hipernatremia > 170 mmol/L
55 mmol/L (1 000 mg/dl) • Creatinina > 450 mmol/L
Osmolaridad sérica. Está elevada, mayor de • Hipoxemia: PO2 > 60 mmHg
• Ácido láctico > 2 mmol/L
350 mosmol/L. Si no se cuenta con un osmómetro, • Shock
la osmolaridad se calcula mediante la fórmula: • Edema cerebral
• Elevación de la PVC
Osmolaridad plasmática (osm) = 2(Na+K séricos) • Trombosis
(meq/L) glicemia (mg/dl) urea (mg/dl) • Alteraciones de la coagulación
+ + • Infarto agudo del miocardio
18 2,8

Ionograma. El Na generalmente está elevado Tratamiento


(150 meq/L), normal o bajo; el K está bajo, aunque El CDHnC es una urgencia médica que debe diag-
al inicio puede estar alto o normal; la RA está por nosticarse precozmente y tratarse en una UCI.
encima de 30 vol %; en 1/3 de los casos está por
debajo de los 30 vol %. OBJETIVOS DEL TRATAMIENTO DEL COMA
Gasometría. Es normal o hay cierto grado de aci- HIPEROSMOLAR NO CETÓSICO
dosis metabólica por la presencia de aniones no 1. Corregir la hipovolemia y la hiperosmolaridad por me-
mensurables; pH: 7,35 a 7,45; PCO2: 35 a 45 mm Hg; dio de la hidratación
bicarbonato estándar: 21 a 25 meq/L; exceso de ba- 2. Normalizar la glicemia con insulina
ses: + 2,5 meq/L. 3. Corregir los déficit electrolíticos si existen
4. Investigar y tratar el factor desencadenante
Si la concentración de bicarbonato es inferior
5. Prevenir las complicaciones
a 10 meq/L y no hay aumento de los cuerpos cetóni-
cos en el plasma, se plantea que existe una acidosis
Hidratación.La pérdida de líquidos es por térmi-
láctica.
no medio de 10 a 11 litros y en personas de edad
Hemograma. Hay hemoconcentración. El hema-
avanzada puede llegar hasta el 50 % del peso cor-
tócrito a veces llega hasta 90 vol %. poral.
Urea. Hay hiperazoemia. Aunque estos pacientes lo que necesitan es agua,
Creatinina. Está elevada. las soluciones salinas hipotónicas (0,45 g/dl de NaCl)
Electrocardiograma. Muestra las alteraciones se- no deben ser utilizadas en las primeras horas del tra-
cundarias a la concentración sérica de potasio. tamiento, pues ocasionan disminuciones bruscas en
Radiografía de tórax. Permite descartar una la osmolaridad plasmática que se expresan por hi-
neumopatía inflamatoria. potensión arterial y agravamiento de la insuficien-
Líquido cefalorraquídeo. Se encuentra hiperglu- cia renal. Sólo se indican si el sodio es superior
corraquia y albuminorraquia. a 155 mmol/L y el enfermo no está hipotenso.
Coagulograma mínimo. Se indica para descartar
una CID. 1. Se administra solución salina isotónica: 2 000 ml
Debe determinarse el cociente láctico/pirúvico en en 2 h, luego se continúa con solución salina hi-
los pacientes con una respiración de tipo Kussmaul; potónica a un ritmo de 1 000 ml cada 2 h. La can-
resultados por encima de 20 definen la presencia de tidad varía según el estado de hidratación.
una acidosis láctica. 2. Cuando la glicemia haya descendido a 250 o
300 mg/dl (13,8 a 16,6 mmol/L), se continúa con
Pronóstico dextrosa al 5 %.
En el cuadro 31.9 se agrupan los signos de mal pro- Se debe sustituir la mitad del déficit de agua en
nóstico en el CDHnC. las primeras 12 h y el resto durante las 24 h

245
siguientes. A veces es necesario administrar de 6 Otras medidas terapéuticas
a 8 litros. 1. Uso profiláctico de heparina en dosis de 5 000 U
3. En caso de hipotensión o shock: SC c/12 h, cuando la osmolaridad sea > 380
a. Pasar un catéter de Swan-Gans para medir la mosm/L.
PCP, siempre que el paciente no tenga una val- 2. Bicarbonato de sodio si existe acidosis láctica.
vulopatía mitral o un tromboembolismo pul- 3. Antibióticos de amplio espectro, si hay infec-
monar. Los valores normales para la PCP son ción.
de 12 a 16 mmHg; menores de 12 significan 4. Oxígeno, si la PO2 < 65 mmHg.
hipovolemia y hay que administrarle plasma, 5. Sonda nasogástrica y vesical.
sangre o expansores plasmáticos. Valores ma- 6. Catéter para medir PCP o PVC.
yores de 16 mmHg traducen hipervolemia, y
en esta situación se indican 40 mg de nitropru-
siato de sodio en 500 ml de solución salina fi- ACIDOSIS LÁCTICA
siológica al 0,45 %, a pasar de 6 a 7 gotas/min
durante 24 h; además, se debe digitalizar al pa- Una causa frecuente de acidosis metabólica es la
ciente. acidosis láctica (AL), que se presenta en pacientes
b. Si no se dispone del catéter para medir la PCP, diabéticos complicados con CAD o con CDHnC y
es valiosa la medición de la PVC (valor nor- ensombrece su pronóstico, por lo que se debe diag-
mal: 15 cm de H2O): cuando está por debajo de nosticar y tratar precozmente, única forma de evitar
15 hay hipovolemia y cuando está por encima un desenlace fatal. Esta complicación no sólo se ve
hay hipervolemia; el enfoque terapéutico es si- en los diabéticos.
milar al antes referido para la PCP.
Concepto
Insulina. Insulina regular (simple), 20 U por vía Es la acidosis metabólica que se produce por au-
EV de inicio y continuar con 0,1 U/kg de peso mento de la glucólisis anaeróbica a causa de la hi-
corporal /h EV hasta que la glicemia disminuya a poxia hística ocasionada por algunas enfermedades,
250 mg/dl (13,8 mmol/L). Si a las 4 h la glicemia no drogas, o ambas; éstas provocan un trastorno en la
ha disminuido en la forma esperada, se estaría en conversión del lactato en piruvato, con un incremento
presencia de una insulinorresistencia y se pasa a la en la concentración del primero (> 5,0 meq/L) y la
variante de altas dosis: 20 U por vía IM y 20 U por consiguiente disminución del bicarbonato y descen-
vía EV; si el paciente está hipotenso o en shock, se so del pH.
administra toda la dosis por vía EV (40 U) y se con-
tinúa con 20 o 30 U EV cada 1 o 2 h, de acuerdo con Clasificación etiológica
el caso, hasta lograr el valor de la glicemia antes En el cuadro 31.10 se exponen la clasificación y al-
señalado. gunas causas de la acidosis láctica.
Potasio. Debe utilizarse más temprano que en la
CAD, ya que al no existir acidosis, durante el trata- Patogenia
miento el K del plasma entra más rápidamente al El origen de la AL es la hipoxia celular, que estimu-
medio intracelular. la la fosfofructoquinasa, enzima que aumenta la
Si el paciente tiene menos de 3,5 meq/L de K, glucólisis anaeróbica, y por tanto los niveles de
con diuresis adecuada, se indican 20 meq/L de sales lactato.
de potasio en solución. Si tiene entre 3,5 y 5 meq/L, se Realmente es en la diabetes complicada donde
le indican 10 meq/L de K/h, sin pasar de 250 meq/24 h. aparece hiperlactatemia y a veces AL. Existen va-
Si el K está por encima de 5 meq/L, se suspende su rias situaciones en el enfermo diabético capaces de
administración. llevarlo a este estado.
El déficit de fosfato puede resolverse indicando 1. Alteraciones en la curva de disociación del oxí-
fosfato potásico, 1 o 2 mmol/L en 6 o 12 h vigilando geno de la hemoglobina, causa de hipoxia
la calcemia. hística.

246
2. Actividad de la enzima piruvato deshidrogena- Ion indeterminado (anion gap o brecha aniónica).
sa disminuida, que a su vez produce una mer- Si mayor de 25 meq/L, es sugestivo de acidosis (ver
ma de la oxidación del lactato. capítulo “Alteraciones del equilibrio acidobásico”).
3. Presencia de shock, ingestión de alcohol en ex- Cuerpos cetónicos en sangre. Están ausentes, aun-
ceso, infarto agudo del miocardio y tratamien- que puede existir un ligero aumento de ellos.
to con biguanidas. Gasometría arterial. Se obtienen los resultados
siguientes: pH bajo < 7,35; PCO2 baja < 35 mmHg;
CUADRO 31.10 bicarbonato estándar bajo < 21 meq/L; y exceso de
CLASIFICACIÓN Y ALGUNAS CAUSAS
DE ACIDOSIS LÁCTICA
bases bajo < 2,5 meq/L.
Ionograma. Los resultados son variables. El Na
1. Acidosis láctica de tipo A (hipoxia hística) es normal, pero a veces está elevado o disminuido;
a. Shock el K está aumentado en ocasiones; el Cl es normal o
• Cardiogénico bajo y la RA está disminuida.
• Hipovolémico Creatinina. Está elevada
b. Insuficiencia cardíaca congestiva Glicemia. Es normal o baja, pero a veces está ele-
c. Asfixia
vada.
d. Anemia grave
2. Acidosis láctica de tipo B
a. Trastornos sistémicos
Diagnóstico positivo
• Diabetes mellitus Se debe pensar en la AL ante un paciente con CAD,
• Enfermedades neoplásicas que tiene una acidosis grave que cursa con cetonuria
• Insuficiencia hepática débil o negativa y es rebelde al tratamiento habi-
• Infecciones generalizadas tual.
b. Fármacos
Pronóstico
• Biguanidas
La mortalidad es alta (más del 50 %) y se relaciona
• Etanol
con las cifras plasmáticas de ácido láctico; cuando
• Salicilatos
es mayor de 10 mmol/L, la supervivencia es sólo
• Isoniacidas del 10 %.
c. Errores innatos del metabolismo o fosforilación
oxidativa defectuosa
Tratamiento
3. Acidosis láctica idiopática
La AL es una urgencia médica que debe ser maneja-
da en una UCI. Es importante la identificación del
Cuadro clínico factor causal, vigilar el estado cardiopulmonar del
El inicio puede ser agudo y cuando es insidioso sue- paciente, tratar el shock y la insuficiencia cardíaca
le no sospecharse; el paciente con AL está grave- de estar presentes y lograr una ventilación adecuada.
mente enfermo, presenta náuseas, vómitos, palidez El bicarbonato de sodio, independientemente de
o cianosis, taquicardia, taquipnea que lleva a una los riesgos ya mencionados, es parte fundamental
respiración de Kussmaul sin aliento cetónico (ex- del tratamiento de la AL grave. Existen 2 fórmulas
cepto en los pacientes con CAD), deshidratación, para el cálculo de la dosis de bicarbonato.
hipotermia, hipotensión que llega al shock de em- a. Total de meq que se debe administrar: (peso en
peorar la acidosis; estupor, y grado variable de coma. . .
kg EB) 0,3.
A todo lo anterior se suman las manifestaciones
clínicas de la afección o situación que desencadenó
b. Total de ml que se debe administrar: 1,8 kg.
(35 – reserva alcalina).
la acidosis. En nuestro hospital se utiliza el bicarbonato
de sodio al 4 % (ámpulas de 20 ml, que contie-
Exámenes complementarios nen 9,5 meq de bicarbonato).
Ácido láctico en sangre. Es mayor de 5 mmol/L; Modo de empleo: Se pasa la mitad de la do-
normal (0,5 a 1,5 mmol/L). sis calculada, a menos que la acidosis sea muy

247
grave (pH de 7,15). A los 30 min se evalúa el • Hiperglicemia posprandial, antagonizada por una
estado de acidosis, y según sea el resultado, se tendencia a la hipoglicemia en ayunas.
utiliza o no el resto de la dosis. • Consumo continuo de aminoácidos y glucosa
El pH debe mantenerse por encima de 7,2. por el feto.
• Cambios que ocurren en el metabolismo de las
El azul de metileno se administra de 1 a 5 mg/kg grasas.
de peso, en infusión continua EV durante 3 h, o en
una sola inyección EV (ámpulas de 20 ml al 1 %) La concurrencia de diabetes y embarazo entraña
(200 mg/ámpula). No pasar de 300 mg/24 h. En es- tres posibilidades:
tos momentos ya se plantea que no ha demostrado 1. La paciente diabética que concibe un embara-
su eficacia como agente reductor. zo (diabetes pregestacional).
En relación con el uso del dicloroacetato de sodio 2. La paciente que durante el embarazo desarro-
aún no hay experiencia acumulada. lla un estado hiperglicémico al exponerse el
De estar presente la AL en un paciente con CAD, páncreas materno a un esfuerzo no acostum-
se debe usar la insulina regular mediante bomba de brado (diabetes gestacional), y que al terminar
infusión (7 U/h) y restablecer el equilibrio hidromi- aquél regresan los valores de glicemia a la nor-
neral. malidad.
En la acidosis láctica causada por la fenformina 3. La paciente que debuta su DM durante la ges-
están indicadas la hemodiálisis y la diálisis perito- tación; se diferencia del caso anterior si al tér-
neal amortiguada con bicarbonato. mino del embarazo las cifras de glicemia no
regresan a la normalidad.

DIABETES Durante el embarazo se encuentran oscilaciones


del control metabólico en dependencia de la edad
Y EMBARAZO gestacional; así tenemos:
• En el primer trimestre hay una disminución de
las necesidades de insulina por la presencia de
El embarazo es, al menos en potencia, diabetogéni- vómitos simples o complicados, y se puede lle-
co. La DM puede agravarse durante el embarazo y gar a la cetosis.
la gestacional es una entidad que sólo aparece en • En el segundo y el tercer trimestres aumentan
estas mujeres. progresivamente las necesidades de insulina a
La diabetes gestacional afecta aproximadamente medida que la placenta incrementa su acción
a 1 por cada 500 gestaciones. Su prevalencia está diabetogénica.
íntimamente relacionada con factores étnicos y so-
cioeconómicos. La enfermedad tiene repercusión, tanto en la madre
Podría decirse que desde el punto de vista fisioló- como en el feto. En la primera suelen presentarse:
gico, la madre se convierte en otra mujer durante el • Mayor frecuencia de preclampsia-eclampsia.
embarazo, puesto que de hecho todos sus sistemas • Mayor incidencia y gravedad de las pielone-
sufren cambios dados los efectos de las hormonas y fritis.
las demandas nutricionales del feto. • Hidramnios.
La adaptación materna se resume de la siguiente • Retinopatía.
forma: • Nefropatía diabética.

• Tendencia a la resistencia insulínica o actividad Mientras que sobre el feto son posibles:
aumentada de ésta.
• Secreción de proinsulinas o sustancias simila- • Abortos más frecuentes.
res (lactógeno placentario) con efectos contra- • Mayor número de muertes intraútero, general-
rios a la insulina. mente en las últimas semanas de gestación, pre-
• Factores alteradores de la intolerancia a la glu- cedidas por una caída inexplicable de las
cosa como es el cromo. necesidades de insulina.

248
• Macrosomía: Ha sido durante años el exponente precedentes a la planificación del embarazo, a
del hijo de madre diabética. El control meta- través de perfiles glicémicos y de hemoglobi-
bólico durante el embarazo reduce su posibili- na glucosilada (HbA1c) periódicas.
dad. Sin embargo, permanece oscuro el hecho • Consulta multidisciplinaria de Salud Reproduc-
de que a veces aparece en embarazos previos tiva con el endocrinólogo, clínico, ginecobste-
al diagnóstico de diabetes y constituye un an- tra, dietista y psicólogo, para su control y
tecedente obstétrico de interés. orientación.
• Malformaciones congénitas. Es la causa más • Examen físico completo con minuciosidad en la
común de muerte del hijo de madre diabética y parte neurológica y fondo de ojo; examen de la
se señala una estrecha relación con la hipergli- boca, e imprescindibles de laboratorio, con la
cemia materna en el período organogénico, finalidad de detectar complicaciones precoz-
donde desempeña un importante papel el con- mente y decidir si se aconseja o no el embarazo.
trol preconcepcional. • Educación diabetológica a la paciente y fami-
liares, donde se incluye el cálculo de la dieta
Factores de riesgo en el caso según edad, peso e índice de masa corporal, y
de diabetes gestacional orientaciones higiénicas entre otras, tanto en
a) Familiares diabéticos de primera línea (padres, consulta como en el Centro de Atención al Dia-
hermanos e hijos). bético.
b) Gigantismo fetal previo (más de 4 200 gramos). • Administración de insulina en dosis fracciona-
c) Sobrepeso corporal del 20 % o más del peso das para lograr perfiles glicémicos inferiores
ideal o índice de masa corporal mayor de 27. a 6,7 mmol/L y HbA1c menor de 8 %.
d) Edad superior a 30 años. • Ingresos periódicos en un centro especializado
e) Diabetes gestacional en embarazo anterior. para la atención de la embarazada diabética in-
f) Glucosuria (fundamentalmente en ayunas). mediatamente después de la captación, entre
g) Mortalidad perinatal inexplicable. las 24 y 26 semanas y a partir de la semana 34
h) Multiparidad. hasta el momento del parto, a menos que exis-
i) Malformaciones congénitas previas. ta una complicación o falle el control metabó-
j) Hallazgos necrópsicos fetales (hiperplasia e hi- lico, donde se realizará un perfil glicémico y
pertrofia de los islotes pancreáticos) sin ante- se ajustarán las dosis de insulina.
cedentes de conflicto Rh. • Criterios de buen control cuando los perfiles en
k) Glicemia aleatoria ocasional superior a 4,4 mmol/L ayunas sean iguales o menores de 5,5 mmol/L
en sangre total o 5,5 mmol/L en plasma venoso. y los posprandiales realizados 2 h después de
l) Antecedente de enfermedad tiroidea autoin- desayuno, almuerzo y comida, sean iguales o
mune. menores de 6,7 mmol/L; HbA1c < 8,5 %;
fructosamida < 300 mmol/L y ausencia de
Diagnóstico de la diabetes gestacional hipoglicemias severas.
• Programación de fecha probable del parto, la
El diagnóstico de diabetes gestacional se basa en la
cual no debe sobrepasar la semana 40 y comen-
presencia de valores de glicemia en ayunas por en-
zar una vigilancia intensiva del estado de salud
cima de 7,0 mmol/L, o 7,8 mmol/L 2 h después de
fetal a partir de la semana 32.
una carga oral de 75 g de glucosa.
• El modo del parto estará determinado por con-
Para su detección es útil el flujograma de Valdés-
diciones obstétricas, y preferentemente la vía
Furhman-Márquez (Figs. 31.2a y 31.2b).
será vaginal.
Conducta en el caso de diabetes
El embarazo en la mujer diabética se desaconseja
pregestacional cuando existe:
• La mujer diabética que desea embarazarse debe 1. Retinopatía proliferativa.
tener controles estrictos desde los 3 o 4 meses 2. Nefropatía con insuficiencia renal.

249
Gestante con factores de riesgo (60 % de la población)

Glicemia aleatoria al momento de la captación

< 4,4 mmol/L > 4,4 mmol/L

Repetir entre 24 y 26 semanas PTGO

< 4,4 mmol/L > 4,4 mmol/L (+) (-)

PTGO entre PTGO Ingreso Repetir PTGO


30 y 32 semanas entre 24 y 26 semanas

(+) (-) (+) (-) (+) (-)

Ingreso Fin Ingreso Repetir PTGO Ingreso Repetir PTGO


30 y 32 semanas 30 y 32 semanas

(+) (-) (+) (-)

Ingreso Fin Ingreso Fin


a

Fig. 31.2 a. Flujograma de Valdés-Furhman-Márquez para la detección de la diabetes gestacional en


gestante con factores de riesgo.

Gestante sin factores de riesgo (40 % de la población)

Glicemia aleatoria al momento de la captación

< 4,4 mmol/L > 4,4 mmol/L

Repetir entre 30 y 32 semanas PTGO

< 4,4 mmol/L > 4,4 mmol/L (+) (-)

Fin PTGO Ingreso Repetir PTGO


entre 30 y 32 semanas

(+) (-) (+) (-)

Ingreso Fin
b Ingreso Fin

Fig. 31.2. b. Flujograma de Valdés-Furhman-Márquez para la detección de la diabetes gestacional


en gestante sin factores de riesgo.

250
3. Cardiopatía coronaria. En los diabéticos que utilizan compuestos hipo-
4. Hipertensión arterial que no responde al trata- glicemiantes del tipo de la sulfonilurea, en particu-
miento. lar la clorpropamida, cuya vida media es prolongada,
5. Gastroenteropatía severa. hay que suspender esta medicación por lo menos 6 h
6. Neuropatía autónoma cardiovascular severa. antes de la intervención quirúrgica para evitar crisis
hipoglicémicas.En dichos casos se prefiere sustituir
En caso de diabetes gestacional, se ingresará a la la medicación oral por insulina.
paciente inmediatamente después del diagnóstico en Cuando se trata de diabéticos que ingresan en los
el centro especializado para la atención a la gestante
servicios de urgencia se corrige la hiperglicemia con
diabética y la conducta que se sigue es igual a la
monodosis de insulina regular, y nunca debe ser in-
diabetes pregestacional.
tervenido quirúrgicamente si tiene cetoacidosis dia-
bética o coma hiperosmolar, a no ser que haya peligro
inminente para su vida.
DIABETES Y CIRUGÍA
Manejo anestésico
El objetivo principal del tratamiento de la diabetes El acto quirúrgico debe programarse en el primer
durante la cirugía, es la recuperación rápida del stress turno, en horas tempranas de la mañana, para que el
quirúrgico con un mínimo de problemas intercurren- paciente no permanezca durante mucho tiempo en
tes relacionados de forma directa con el trastorno
ayunas; este proceder permite sustituir los carbohi-
metabólico, como la cetoacidosis o la hipoglicemia,
dratos que acostumbra ingerir en el desayuno con la
o indirectamente, como las infecciones, la cicatri-
primera inyección de glucosa, y así se previene la
zación de las heridas y los problemas cardio-
vasculares. aparición de hipoglicemia.
El tratamiento depende de si se trata de una ope- Hay que evitar el empleo de anestésicos con efecto
ración electiva o urgente, de una cirugía mayor o glucogenolítico intenso, ya que pueden incrementar
menor, de un paciente diabético tipo 1 o tipo 2. los niveles de glicemia. Aunque no existe un anés-
tesico idóneo para el diabético, ninguno de los dis-
Valoración preoperatoria ponibles tiene contraindicación absoluta.
Se debe precisar con exactitud el tipo de diabetes y La anestesia local, la troncular y la raquídea o
recordar que entre 20 y 30 % de los diabéticos tipo 2 epidural, en la práctica clínica, no parecen tener efec-
utilizan insulina para lograr su control, pues es co- tos importantes sobre el metabolismo hidrocarbo-
mún un aumento de la resistencia a ella, por lo que nado; la anestesia general aplicada con todo el
se hace necesario emplear altas dosis; además, en cuidado ya señalado anteriormente suele ser bien to-
estos diabéticos disminuye la secreción de esta hor- lerada por todos los diabéticos.
mona en el período perioperatorio. En los diabéti- Es necesario mantener una oxigenación adecua-
cos tipo 1 hay que definir la dosis y la frecuencia da durante la operación, pues se conoce que los pro-
con que se administrará la insulina, conocer los re- cederes quirúrgicos hipoxémicos constituyen un
sultados del automonitoreo de la glicemia y evaluar factor favorecedor para la acidosis láctica. El tiem-
los de la determinación de la hemoglobina glucosi-
po operatorio debe ser lo más corto posible, en par-
lada previa.
ticular en los portadores de neuropatía autonómica.
Es importante identificar la presencia de afecta-
El diabético quirúrgico presenta como complica-
ciones microangiopáticas, macroangiopáticas y neu-
rológicas (especialmente las de tipo autonómico), ciones, crisis de hipotensión postural y paro cardio-
factores que puedan influir de forma determinante rrespiratorio debidos a una neuropatía autonómica,
en la mortalidad de estos pacientes. En el caso de por lo que la evaluación preoperatoria (internista o
que haya hipertensión arterial, es preciso su trata- endocrinólogo, anestesiólogo, reanimador y ciruja-
miento adecuado, y de existir infecciones evidentes no) es de vital importancia. En el diabético tipo 2 el
y ocultas, deben tratarse con energía para evitar com- coma hiperosmolar no cetósico es una posible com-
plicaciones sépticas futuras. plicación de la cirugía mayor.

251
Insulinoterapia en el paciente lar horaria transitoriamente hasta su recuperación
diabético quirúrgico total.

Hay que ingresar a todo paciente que va a ser some- Cirugía de urgencia
tido a una cirugía, de 24 a 48 h antes para optimizar
De existir la imperiosa necesidad de operar de ur-
el control metabólico. En los diabéticos tipo 1 y en
gencia, como son los casos de fractura, accidentes
los de tipo 2 que se controlan con insulina, se man-
de tránsito, traumatismos por caída, apendicitis agu-
tiene este tratamiento. Se deben lograr cifras de
da, úlceras pépticas perforadas, abdomen agudo qui-
glicemia entre 125-200 mg/dl (6,9-11,1 mmol/L); y
rúrgico, etc., situaciones en las cuales si no se opera,
en la cirugía electiva, valores de hemoglobina glu-
el paciente puede fallecer, serán atendidos inmedia-
cosilada menores del 10 %.
tamente por el internista o el endocrinólogo, quie-
El paciente diabético quirúrgico necesita ser ma-
nes tomarán las medidas respectivas como si se
nejado por un equipo coordinado (cirujano, inter-
tratara de un coma diabético; esto significa iniciar
nista o endocrinólogo, anestesiólogo y enfermera),
el tratamiento con insulina de acción rápida y
lo que redundará en una mejor atención y éxito.
El esquema acordado de administración de insu- monitoreo de la glucosa cada 1 o 2 h, antes y des-
lina y dextrosa, se mantendrá durante el posopera- pués del acto quirúrgico, hasta que el enfermo se
torio hasta que el enfermo admita una dieta adecuada recupere y empiece a alimentarse adecuadamente por
por vía oral; entonces se iniciará uno de insulina re- vía oral, momento en el cual se deberá iniciar el tra-
gular antes del desayuno, almuerzo y comida y una tamiento con insulina de acción intermedia o lenta y
dosis nocturna de acción intermedia. en las dosis habituales utilizadas antes de la opera-
ción.
Cirugía en el diabético tipo 2
Cirugía menor en el paciente
Los diabéticos que mantienen un buen control con
la dieta y compuestos hipoglicemiantes orales, no diabético
necesitan el empleo de insulina cuando se someten Por lo general se mantiene el tratamiento habitual
a cirugía menor. Es recomendable remplazar cada hipoglicemiante oral o con insulina, en la dosis, ti-
comida omitida por 50 g de glucosa por vía EV. En pos y momento. Es necesario determinar la glicemia
el caso de cirugía mayor hay que suspender siempre antes del inicio de la intervención y posteriormente
los hipoglicemiantes orales y utilizar insulina regu- cada 2 o 4 h.

252
32

HIPOGLICEMIA

La hipoglicemia constituye la urgencia endocrina • Insuficiencia suprarrenal.


más frecuente, debido al gran número de pacientes • Déficit de catecolaminas.
diabéticos sometidos a terapéutica hipoglicemiante, • Déficit de glucagón.
pero a pesar de que los no diabéticos que sufren esta 2. Defectos enzimáticos.
situación contribuyen en forma escasa a incremen- • Glucosa- 6- fosfatasa.
tar su prevalencia, su importancia es notoria. En esta • Fosforilasa hepática.
condición lo más importante es la privación al sis- • Piruvato carboxilasa.
tema nervioso de su principal sustrato energético: • Fosfoenolpiruvato carboxicinasa.
la glucosa. • Fructosa 1,6 bifosfatasa.
• Glucógeno sintetasa.
Concepto
3. Déficit de sustrato.
La hipoglicemia no es una enfermedad, sino una • Desnutrición grave.
manifestación de un trastorno de la homeostasis de • Emaciación muscular.
la glucosa por causa diversa. Para su diagnóstico • Fase final del embarazo.
clínico se necesita cumplir con la triada de Whipple: 4. Enfermedades hepáticas
• Congestión hepática.
1. La disminución en sangre de la glucosa verda-
• Hepatitis grave.
dera por debajo de 2,2 mmol/L (40 mg/dl) en
• Cirrosis.
menores de 60 años y de 2,8 mmol/L (50 mg/dl)
5. Fármacos
en mayores de esa edad.
• Alcohol.
2. La presencia de síntomas y signos compatibles
• Propranolol.
con este diagnóstico.
• Salicilatos.
3. El alivio de éstos con la normalización del ni-
II.Trastornos debidos fundamentalmente al ex-
vel de la glucosa en sangre.
ceso de utilización de la glucosa.
Clasificación 1. Hiperinsulinismo.
A. Hipoglicemia posprandial (reactiva). • Insulinomas.
• Hiperinsulinismo alimentario. • Sulfonilureas.
• Intolerancia hereditaria a la fructosa. • Enfermedades inmunitarias con anticuer-
• Galactosemia. pos contra la insulina o receptor de in-
• Idiopática. sulina.
• Hipoglicemia verdadera. • Sepsis.
• Seudohipoglicemia. 2. Niveles adecuados de insulina.
B. Hipoglicemia de ayuno. • Tumores extrapancreáticos:fibromas,
I. Trastonos debidos fundamentalmente a la sarcomas.
producción insuficiente de glucosa. • Déficit sistémico de carnitina.
1. Deficiencia de hormonas. • Déficit de enzimas de oxidación grasa.
• Hipopituitarismo. • Caquexia con agotamiento de la grasa.

253
En general, las hipoglicemias más frecuentes que se El 50 % de la glucosa producida es consumida
presentan en individuos no diabéticos son casi siem- por el cerebro, y su transporte a través de la barrera
pre producidas por un exceso de insulina (hipoglice- hematoencefálica es facilitado por proteínas trans-
mia espontánea por hiperinsulinismo funcional), en portadoras, además de la difusión simple por el gra-
pacientes habitualmente inestables, dinámicos, tensos, diente de concentración. Ya en el interior de la célula
y ansiosos; a los que se les asocian manifestaciones nerviosa, el metabolismo de ella y el consumo del
de hiperactividad del sistema nervioso autónomo, oxígeno están estrechamente ligados.
como hiperacidez e hipermotilidad intestinal. Los Si se produce un estado de ayuno de más de 24
síntomas aparecen de 2 a 4 h luego de la ingestión a 72 h, la concentración de insulina y de glucosa en
de alimentos. la sangre disminuyen, lo que limita el consumo de esta
Los tumores de las células beta del páncreas última por los tejidos insulinodependientes; mien-
tras que el tejido nervioso lo limita a 1 mg/kg/min y
(insulinomas) producen la hipoglicemia por secre-
obtiene el resto de sus necesidades energéticas del
ción exagerada de insulina. Son benignos o malig-
metabolismo de los ácidos grasos y de los cuerpos
nos y la hipoglicemia se presenta antes del desayuno
cetónicos.
o de 2 a 4 h después de una comida.
Es por todo lo anterior que se puede resumir que
Los errores del metabolismo llevan a la hipogli-
el mantenimiento de un nivel constante de glucosa
cemia por déficit absoluto o relativo en la produc- plasmática constituye un aspecto esencial de la ho-
ción de glucosa y son más frecuentes en niños, meostasis, que es el resultado de dos grupos de pro-
mientras que la hipoglicemia por el alcoholismo, casi cesos fisiológicos:
siempre se asocia al ayuno que acompaña al consu-
mo de bebidas. a. Los que adicionan glucosa a la sangre, como la
absorción de carbohidratos, la gluconeogéne-
Fisiopatología sis y la movilización de glucosa a partir del
Después de la ingestión de los alimentos se diferen- glucógeno (glucogenólisis).
cian dos períodos, el posprandial y el posabsortivo b. Los que sustraen glucosa de la sangre, porque
(6 h después de la alimentación). El período pos- la utilizan, como el músculo, el tejido adiposo,
prandial se caracteriza por un aumento en la sangre el hígado, el cerebro y otros órganos, modifi-
de la glucosa y de hormonas intestinales que provo- cada de acuerdo con las necesidades hísticas,
can la secreción de insulina, la que suprime la glu- el grado de actividad física y del control hor-
cogenólisis y la neoglucogénesis e incrementa la monal.
utilización de la glucosa por el hígado y los tejidos
periféricos. Durante este período el hígado fabrica La hipoglicemia espontánea es la consecuencia
una reserva de glucosa que deposita en forma de de alteraciones del sistema regulador del nivel san-
glucógeno. guíneo de glucosa, que dan por resultado un exceso
En el período posabsortivo los niveles de glucosa de sustracción de glucosa a la sangre, mayor que el
disminuyen en el organismo y aparecen cambios aporte de ésta.
hormonales adaptativos, como son las secreciones Al producirse la hipoglicemia se ocasiona tam-
bién una descarga adrenérgica (epinefrina y norepi-
de glucagón, cortisol, catecolaminas y de hormona
nefrina), que posteriormente es seguida por una
del crecimiento. En estado de reposo, la glucosa se
descarga hormonal contrainsular que trata de nor-
metaboliza a razón de 2 mg/kg/min y su consumo
malizar los niveles de glucosa en la sangre (gluca-
viene determinado tanto por los tejidos insulinode-
gón, cortisol y hormona del crecimiento). De todas
pendientes (músculo, grasa, etc.), como por los no
formas, los umbrales de activación de estas hormo-
insulinodependientes (tejido nervioso, hematíes y nas reguladoras son superiores al umbral para la sin-
médula renal). Esta glucosa procede fundamental- tomatología, por lo que comienzan a liberarse con
mente de la glucogenólisis y la gluconeogénesis he- niveles de 3,3 a 2,8 mmol/L, mientras que los sínto-
pática, aunque el tejido muscular también provee de mas aparecen con niveles de glucosa en sangre de 3
sustrato para la nueva producción de glucosa. a 2,8 mmol/L. En los pacientes diabéticos estos um-

254
brales pueden estar alterados e inclusive presentar- (neuroglucopenia), como a la adrenergia acompa-
se una disfunción cognoscitiva, sin percibir las ma- ñante (cuadro 32.1).
nifestaciones de hipoglicemia.
CUADRO 32.1
Anatomía patológica SÍNTOMAS DE HIPOGLICEMIA
En el cerebro se encuentran lesiones de necrosis is-
Adrenérgicos Neuroglucopénicos
quémica, sobre todo a nivel del centro vasomotor.
Existe tendencia a la producción de alteraciones Palpitaciones Cefalea
importantes de la corteza cerebral, los ganglios Ansiedad Incapacidad para concentrarse
basales y del hipocampo. Particularmente en las Sudoración Fatiga
crisis agudas aparecen petequias diseminadas, con- Temblor Confusión
Hambre Visión borrosa
gestión y edema de las células nerviosas, que expe- Irritabilidad Incoordinación
rimentarán después una serie de transformaciones Náuseas Comportamiento anormal
degenerativas con desaparición posterior, incluso, de Palidez o flushing Parestesias
cierto número de neuronas, sobre todo en la zona Hemiplejía
laminar. Se observan numerosas áreas de reacción Afonía
Dificultad en despertar
glial y desmielinización y encefalomalacia. Además, Convulsiones
es común una degeneración nerviosa periférica. Aun- Coma
que casi siempre las lesiones de la hipoglicemia se
producen en el cerebro, conducen también al infarto
del miocardio, sobre todo en diabéticos de edad avan- Los síntomas neuroglucopénicos se manifiestan
zada. en dependencia del origen filogenético de las estruc-
turas nerviosas, de forma tal que en las más tardía-
Manifestaciones clínicas mente desarrolladas, aquéllos aparecerán primero
La hipoglicemia puede presentarse en personas sa- (cuadro 32.2).
nas sometidas a un ejercicio físico extremo, así como
en aquéllas que se exponen a un hipoglicemiante en CUADRO 32.2
SÍNTOMAS Y SIGNOS DE LAS DISTINTAS FASES
forma accidental, criminal o suicida. En las expues-
DE LA HIPOGLICEMIA
tas a hipoglicemiantes las manifestaciones clínicas
iniciales son con alguna frecuencia inesperadas, o a. Cortical Somnolencia, sudoración,
no son reconocidas a tiempo, lo que agrava el cua- hipotonía, temblor.
dro clínico. b. Diencefalosubcortical Pérdida del conocimiento, mo-
En pacientes que reciben tratamiento con insuli- vimientos primitivos (succión,
na el riesgo de hipoglicemia se incrementa con el muecas, asimiento), crispamien-
to, quietud, espasmos clónicos,
ejercicio, la ingestión de alcohol, en caso de gastro- respuestas exageradas al dolor,
paresia o de hipopituitarismo, y durante el período hipertonía simpática (taquicar-
del posparto inmediato. Entre los hipoglicemiantes dia, eritema, sudoración,
orales que provocan un riesgo mayor (aparentemen- midriasis).
te) se encuentran la clorpropamida y la gliburida. c. Mesencefálica Espasmos tónicos, desviaciones
oculares no conjugadas, Babinski.
La percepción de los síntomas de hipoglicemia
d. Premiencefálica Espasmo de los extensores. La
puede estar enmascarada por el uso de alcohol, se- rotación de la cabeza origina
dantes y agentes bloqueadores betadrenérgicos. espasmo extensor del lado ha-
Aunque la hipoglicemia es a veces relativamente cia el que apunta la barbilla y
asintomática, existe un patrón de manifestaciones espasmo flexor del lado opuesto.
clínicas propias de cada individuo, sin una estricta e. Miencefálica Coma profundo, respiración
superficial, bradicardia, ausen-
correspondencia entre ellas y el nivel de glucosa san- cia de respuesta pupilar a la luz,
guínea. hipotermia, atonía, hiporre-
El cuadro clínico resulta proteico e inespecífico y flexia, ausencia de reflejo
los síntomas más importantes de la entidad son de- corneal.
bidos tanto a la hipoglicemia del sistema nervioso

255
Si se administra glucosa antes de que la fase mien- absorbibles. Si el paciente se encuentra consciente
cefálica haya durado más de 15 min, remitirán todas y la crisis es ligera, basta con la ingestion de 10 g de
las manifestaciones; pero si se demora la adminis- carbohidratos en forma de 100 ml de jugo de naran-
tración de carbohidratos, será preciso que transcurran ja o de caramelos. Si la situación es más grave, se
horas o días para alcanzar la restauración total, o pueden suministrar hasta 20 o 30 g de carbohidra-
aparecerán lesiones permanentes del sistema nervio-
tos. Si el afectado no coopera, se le hace tomar una
so, tales como deterioro mental, esquizofrenia, tras-
solución concentrada de carbohidratos estimulando
tornos afectivos, hemiplejía, afasia, movimientos
coreiformes, parkinsonismo, epilepsia, síndrome de la deglución mediante la percusión hacia abajo de la
locked-in (absorto, encerrado en sí mismo) y narco- garganta; esto puede resolver la crisis. En enfermos
lepsia. La muerte puede sobrevenir en minutos, días inconscientes se hace pasar la solución concentra-
o meses. da, tibia, por sonda nasogástrica; pero lo mejor es
inyectar dextrosa al 50 % por vía EV en cantidad
Exámenes complementarios suficiente para lograr la recuperación.
Además de los resultados de la glicemia expresados En pacientes en los que la canalización venosa no
en los criterios de Whipple, son necesarios el estu- sea practicable, se utilizan de 1 a 2 mg de glucagón
dio de la función hepática, así como la imagenología por vía subcutánea (moviliza el glucógeno hepático)
del tórax y del tubo digestivo en busca de neopla- o 0,5 ml de solución al 1/1 000 de adrenalina (epi-
sias. Es importante enfatizar que no debe esperarse nefrina), esto incrementará la glicemia lo suficiente
la determinación de la glicemia durante la crisis agu- como para que el paciente recupere el conocimiento
da para el diagnóstico.
y coopere. Este efecto de ambos medicamentos es
La prueba de sobrecarga de agua y la determina-
pasajero, por lo que resulta imprescindible la admi-
ción de 17-cetosteroides y de 17-hidroxicorticoste-
roides ayudan a descartar las causas hipofisarias o nistración de carbohidratos después de su uso.
suprarrenales. Si la hipoglicemia es secundaria al tratamiento
El EEG es a veces necesario para diferenciarla de insulínico o por hipoglicemiantes orales, debe
una epilepsia. precisarse su causa, hacer un ajuste de las dosis ul-
Las pruebas dinámicas tienen como objetivo po- teriores y mantener una venoclisis de dextrosa al 10 %
ner de manifiesto un hiperinsulinismo. Por medio para evitar la recurrencia.
de las dieta de Conn y del ayuno, así como la prueba En caso de un insulinoma se recurre a la cirugía,
de tolerancia a la glucosa en 6 h, es posible en la pero si ésta no es practicable, el tratamiento con
mayoría de los casos precisar el diagnóstico; aun- diazóxido (bloquea la secreción de insulina) en do-
que quizás sean necesarias las pruebas de tolbuta- sis de 600 a 800 mg EV diarios, contribuye al mane-
mida endovenosa, glucagón, sensibilidad a la leucina,
jo médico de la situación.
y determinación de la actividad semejante a la insu-
En el hiperinsulinismo funcional, el uso de una
lina en un número menor de pacientes.
dieta hiperproteica, hipergrasa, hipocalórica y frac-
Tratamiento cionada (de 6 comidas), ayuda a mejorar el cuadro.
En el tratamiento de la crisis aguda resulta esencial En las restantes entidades debe hacerse el tratamiento
la administración de carbohidratos rápidamente causal, además del general de las crisis agudas.

256
33

HIPERFUNCIÓN
CORTICOSUPRARRENAL

La corteza suprarrenal sintetiza a partir del colesterol, • Síndrome de Batter


y mediante una serie de conversiones enzimáticas, • Vómitos
glucocorticoides, mineralocorticoides y hormonas • Diuréticos
sexuales. La hormona corticotropa (ACTH) regula • Isquemia renal
la síntesis de cortisol, y los niveles plasmáticos de • Trastornos edematosos
éste regulan a nivel hipotalámico la síntesis de la b. Hiperaldosteronismo primario (independiente
hormona liberadora de ACTH, el CRH. De esta for- del sistema renina-angiotensina)
ma se establece un sistema de retrocontrol que fun- • Adenoma secretor de aldosterona
ciona íntegramente a nivel del hipotálamo, hipófisis • Tumor secretante de DOCA o corticoste-
y suprarrenal controlando la síntesis y biodisponi-
rona
bilidad periférica de cortisol.
• Carcinoma suprarrenal
La hiperfunción de la corteza suprarrenal resulta
• Hiperplasia micronodular bilateral (supri-
de las siguientes causas:
mible o no suprimible por glucocorticoi-
1. Hipersecreción predominante de cortisol des)
a. Con ACTH elevado • Enzimopatías: déficit de 11-B hidroxieste-
• Hiperplasia suprarrenal nodular o micro- roides deshidrogenasa
nodular (enfermedad de Cushing) • Intoxicación por regaliz (ácido glicímico,
• Síndrome de ACTH ectópico del tabaco para mascar, que inhibe la en-
• Síndrome de CRH ectópico zima 11- B HSD)
• Cushing familiar 3. Exceso de andrógenos
b. Con ACTH bajo • Tumores virilizantes suprarrenales (adenomas
• Adenoma o carcinoma suprarrenal o carcinomas)
• Yatrogénico 4. Exceso de estrógenos
c. Con ACTH normal • Tumores corticosuprarrenales feminizantes
• Hipersensibilidad suprarrenal a cantidades (adenomas)
normales de ACTH
• Hipersensibilidad del tejido periférico a
cantidades normales de cortisol
• Estimulador cortical de naturaleza autoin-
SÍNDROME
mune DE CUSHING
• Disminución de la globulina transporta-
dora
2. Exceso de mineralocorticoides Es el cuadro clínico que resulta de una exposición
a. Hiperaldosteronismo secundario (dependien- excesiva y prolongada a la acción de las hormonas
te del sistema renina-angiotensina) glucocorticoideas. En las formas endógenas puede
• Tumores secretores de renina haber un aumento en la secreción de mineralocorticoi-
• Otros tumores ectópicos (nefroblastoma y des, andrógenos o estrógenos suprarrenales. El síndro-
adenocarcinoma pancreático) me de Cushing exógeno se debe a la administración

257
de glucocorticoides naturales o sintéticos, o de La causa hipotalámica está avalada por la pérdi-
ACTH. da del ritmo de secreción diario de ACTH y de otros
El término ya clásico de síndrome de Cushing se péptidos derivados de la propiomelanocortina, y por
reservó para aquellos pacientes cuyo hipercortiso- la relativa resistencia de la hipersecreción de ACTH
lismo era primariamente de origen suprarrenal, mien- al retrocontrol del cortisol. Existiría una alteración
tras que para los portadores de tumor hipofisario, en la secreción de CRH, la cual sería responsable de
que presentaban una secreción aumentada de ACTH, los tumores hipofisarios y del aumento de secreción
se acuñó el término de enfermedad de Cushing. Hoy de ACTH. La escasa confirmación de los niveles
día aún se siguen utilizando estos términos, pese a aumentados de CRH o la demostración de que la
que la determinación de ACTH ha permitido clasi- inhibición farmacológica de éste no ocurre o mejore
ficar a los hipercortisolismos en ACTH dependien- la enfermedad, pone en duda esta hipótesis.
tes y ACTH independientes, clasificación puramente La teoría de que una alteración del SNC inicia el
fisiopatológica, ya que desde el punto de vista clíni- proceso, está sostenida por la depleción dopaminér-
co es muy difícil separar ambos cuadros.
gica, o el aumento de la serotonina, o ambos, fenó-
Frecuencia menos que a través de un incremento en la secreción
de CRH ocasionarían los hechos que se desarrollan
El síndrome de Cushing es la causa más frecuente en forma de cascada. Esta teoría encuentra su mejor
de hipercortisolismo endógeno espontáneo en el
apoyo en el buen rendimiento obtenido por medica-
adulto y representa alrededor del 70 u 80 % de los
mentos como la ciproheptadina o la bromocriptina
casos no yatrogénicos, sin embargo, durante la in-
sobre la liberación de ACTH.
fancia y la adolescencia es más común este último
Lo único incuestionable y que refuerza la teoría
origen.
del origen hipofisario es la existencia de tumores de
Los tumores suprarrenales productores de cortisol
este tipo en la mayoría de los casos de enfermedad
representan el 15 % de los casos. En los niños me-
de Cushing (entre el 70 u 80 % de los casos).
nores de 7 años, el carcinoma suprarrenal constitu-
ye la primera causa; en los adultos, los adenomas y La producción autónoma de ACTH por un tumor
carcinomas tienen una incidencia similar. Alrede- no hipofisario no es común; tumores pulmonares,
dor del 95 % de los carcinomas suprarrenales son adenomas bronquiales y carcinomas tiroideos, son
funcionantes; el 50 % produce predominantemente los más frecuentemente implicados en esta posi-
cortisol; el 30 %, andrógenos y el 12 %, estradiol. bilidad.
La producción ectópica de ACTH se presenta en
el 10 o 15 % de los pacientes reportados de síndro- Cushing ACTH independiente. Síndrome de Cushing
me de Cushing. La producción autónoma y excesiva de cortisol por
un tumor suprarrenal es la base fisiopatológica de
Fisiopatología este cuadro clínico; ella inhibe la secreción hipofi-
Cushing ACTH dependiente. Enfermedad de saria de ACTH, lo que induce la atrofia del tejido
Cushing que rodea al tumor y de la suprarrenal opuesta.
Actualmente se considera como enfermedad a todos Junto a los adenomas y carcinomas, también se
aquellos cuadros con hipercortisolismo ACTH de- ha descrito como entidad anatomopatológica res-
pendientes, presenten o no un adenoma hipofisario. ponsable de esta secreción de cortisol, la displasia
Se incluyen todas las formas de hipercortisolismo micronodular primitiva. En esta afección la produc-
secundario a un incremento en la secreción de ción autónoma es por parte de pequeños nódulos de
ACTH, ya sea de origen hipofisario, ectópico o in- tejido suprarrenal. Es más frecuente en mujeres, exis-
determinado. Todas estas entidades clínicas cursan te familiaridad, predominan los haplotipos A1B8 o
con hiperplasia bilateral de las suprarrenales, DR3, y se encuentran familiares en los que sin pre-
hiperproducción de cortisol, pérdida del ritmo nor- sentar síntomas, los niveles plasmáticos de cortisol
mal secretor de éste e incremento de la amplitud, son resistentes a la supresión con dexametasona. Es
aunque no del número, de los pulsos de secreción muy difícil la observación de estos nódulos por mé-
de ACTH. todos radiológicos y la mayor parte de las veces se

258
constatan por anatomía patológica tras la extirpa-
ción de la glándula. Aparte de los nidos de células
características con pigmentos oscuros, se puede en-
contrar una infiltración linfocítica, que ha permiti-
do pensar en una posible etiología inmune. Su
incidencia es mínima y representa un 6 % del total
de los casos de Cushing primariamente suprarre-
nales.

Cushing yatrogénico
Aparece relacionado con el uso de corticoides
fluorados, pero también se ha descrito con esteroi-
des tópicos y con los inhalados. Determinadas cir-
cunstancias favorecen su aparición, tales como dosis
superiores a 20 mg/m2 de superficie corporal, admi-
nistración prolongada y cierto grado de susceptibi-
lidad. La mayoría de ellas son obligada consecuencia
del tratamiento de enfermedades, más que de mala
práctica médica.

Cuadro clínico
Dado el desarrollo alcanzado por el Sistema Nacio-
nal de Salud, la observación del cuadro clínico com- Fig. 33.1. Síndrome de Cushing: facies característica donde
pleto de este síndrome es infrecuente. Una obesidad resaltan la redondez de la cara (“cara de luna llena”) y el acné.
central, algunas estrías purpúricas, hipertensión ar-
terial, hiperglicemia, y trastornos menstruales, pu-
dieran ser los síntomas iniciales.
Es habitual la distribución central de la grasa, que
abarca el tronco, el abdomen, la cara y el cuello. La
cara de estos pacientes es redondeada (“cara de luna
llena”), con las mejillas pronunciadas y rubicundas.
El cuello es más ancho y corto por acumulación de
grasa en las regiones supraclaviculares y dorsocer-
vicales (“cuello de búfalo”) (Figs. 33.1 y 33.2).
En general coexisten aumentos del apetito y de
peso, pero otras veces este último se mantiene o dis-
minuye al cursar la afección con inapetencia; su in-
cremento podría estar relacionado con una mayor
cantidad de insulina, que estimularía la lipogénesis.
La debilidad muscular es común, generalmente
atribuible a una miopatía esteroidea proximal de las
extremidades, a veces con toma adicional de los
glúteos. Esta miopatía es más intensa en los casos
de ACTH ectópicos, y llega a ser muy severa al
agravarse en estos casos por la frecuente hipocalie-
mia. La debilidad muscular proximal se valora me-
jor al comprobar la incapacidad del paciente para Fig. 33.2. Hábito externo característico de la enfermedad
elevarse sin ayuda desde una posición en cuclillas. (nótense las vergetures en el abdomen y las mamas).

259
La piel es fina por pérdida del tejido graso subcu- adenocarcinomas suprarrenales por lo general no hay
táneo y enrojecida por transparencia de los vasos trastornos menstruales.
subcutáneos y por la policitemia. Las vergetures y La hipertensión arterial con renina baja y presio-
estrías purpúricas del abdomen (Fig. 33.3), muslos, nes diastólicas superiores a 95 o 100 mmHg, es bas-
caderas, mamas y la parte alta de los brazos, forman tante habitual. Probablemente está relacionada con
surcos profundos en la piel que se palpan con los la expansión del volumen extracelular, el incremen-
dedos. Son más intensas y frecuentes en los pacien- to de la síntesis de angiotensinógeno, y la actividad
tes jóvenes. Igualmente, las equimosis y hematomas de renina plasmática, lo que conduce a un aumento
que aparecen con traumatismos mínimos, son tam- de la angiotensina I y II. Otros factores planteados
bién frecuentes. Las heridas curan con dificultad y son hipersensibilidad a la acción presora de la nora-
es característica su evolución tórpida, con lenta ci- drenalina y el incremento de la concentración de la
catrización. feniletanolamida N-metil transferasa, enzima
reguladora de la biosíntesis de las catecolaminas.
Los edemas son más frecuentes en los casos de
Cushing por ACTH ectópico, en los que suele haber
una combinación de aumento de secreción de
cortisol, corticosterona y 11-DOCA. Existen dos
formas clínicas del síndrome de ACTH ectópico: la
primera, igual a la descripción clásica de Harvey
Cushing, es la forma anabólica, porque se relaciona
con aumento de peso y la obesidad central caracterís-
ticas del trastorno, casi siempre por tumores benig-
nos de crecimiento lento (carcinoides bronquiales);
la segunda forma, la catabólica, no tiene ninguna de
las características del síndrome clásico, y la pérdida
de peso, hipertensión arterial, edemas o hipocalie-
mia, predominan en el cuadro clínico.
Manifestaciones psíquicas como depresión, labi-
lidad emocional, irritabilidad a veces acompañada
de ansiedad, accesos de pánico e incluso cuadros
paranoides, son síntomas posibles. No es raro el in-
somnio relacionado con la variación nocturna del
cortisol.
Hay intolerancia a la glucosa, en ocasiones con
hiperglicemia de ayuno. La diabetes mellitus se pre-
Fig. 33.3. Vergetures del abdomen. senta en el 10 o 15 % de los casos.
La osteoporosis es común, aun en los pacientes
En los enfermos de Cushing con secreción aumen- jóvenes. En la displasia suprarrenal micronodular la
tada de ACTH y de otros péptidos más pequeños osteoporosis puede ser muy intensa, con aplastamien-
con actividad melanotrópica, se incrementa la pig- tos vertebrales y fracturas costales o de otras locali-
mentación cutánea, especialmente en las zonas ex- zaciones, por traumatismos mínimos.
puestas a la luz. Esta hiperpigmentación es más Debe sospecharse la posibilidad de un adenoma o
intensa en los casos de ACTH ectópico. carcinoma suprarrenal cuando la aparición del cua-
En las mujeres y en presencia de exceso de dro clínico es brusca y la evolución acelerada, o
andrógenos, esta enfermedad y algunos carcinomas cuando se presenta durante la infancia. Por lo gene-
suprarrenales pueden cursar con seborrea, acné o ral, los carcinomas son unilaterales y grandes al mo-
hirsutismo; además, debido a este exceso, la oligo- mento del diagnóstico, casi siempre con diámetro
menorrea y la amenorrea se relacionan con la inhi- mayor de 6 cm, y producen más de una hormona
bición de las gonadotropinas. En los casos de esteroidea.

260
Exámenes complementarios bajas, menos de 20 pg/ml, indican un tumor suprarre-
nal autónomo secretor, mientras que valores mayo-
Si el cuadro clínico es intenso, las altas concentra-
res de 200 pg/ml sugieren una neoplasia ectópica
ciones de cortisol son adecuadas para el diagnósti-
secretora de ACTH.
co; si es ligero, la excreción de cortisol libre en la
Gasometría. Hay una alcalosis hipoclorémica.
orina debe estar por encima de los valores que se
encuentran en los casos de causas “fisiológicas” de Otros análisis. La hipercalciuria es constante,
activación suprarrenal, como el stress y la depresión. acompañada en ocasiones de hipofosforemia, hipo-
Por lo general, este nivel se considera de 250 mg/día. calcemia y aumento de la fosfatasa alcalina.
Hemograma. Hay poliglobulia, neutrofilia, des-
censo relativo de los linfocitos y disminución de los Pruebas dinámicas
eosinófilos. Estimulación con ACTH. Se administran 25 unida-
Glicemia. Se obtiene una curva de glicemia de des de ACTH en venoclisis en 8 h; por lo regular se
intolerancia o de diabetes mellitus. realiza una estimulación diaria por 2 días. Normal-
Ionograma. Hay hipernatremia e hipocaliemia mente, con la estimulación aumentan los 17-cetos-
Lipidograma. Se encuentran distintos tipos de teroides 1 o 2 veces su valor basal y los 17-OH
hiperlipoproteinemias. corticoides, 2 o 3 veces.
Determinación de los 17-hidroxicorticoides en la Inhibición con 2 mg de dexametasona. Se admi-
orina. Se encuentran valores aumentados (norma- nistran 2 mg de dexametasona diarios, fraccionados
les: 3 a 12 mg/24 h en varones y 1 a 9 mg/24 h en las en dosis cada 6 h y se comparan los 17-hidrocorti-
hembras). coides y 17-cetosteroides del segundo día de inhibi-
Determinación de los 17-cetosteroides en la ori- ción con los basales.
na. Están aumentados (normales: 15 + 5 mg/24 h en Inhibición con 8 mg de dexametasona. Se realiza
varones y 10 + 5 mg/24 h en las hembras). de igual manera, pero con 8 mg.
Determinación del cortisol libre en la orina y en Prueba de metopirona. Bloquea la 11-hidroxilasa
el plasma. Están aumentados (normales: > 140 mmol/L (enzima de la esteroidogénesis suprarrenal) y aumen-
en el plasma; muy variable en la orina). ta el ACTH. La respuesta mide la reserva de este
Determinación de la dihidroepiandosterona último y la integridad del eje corticotropo.
(andrógeno de origen casi específicamente suprarre- Prueba de CRH. Se utiliza para diferenciar la cau-
nal). Los valores muy elevados son un índice de sos- sa hipofisaria de las ectópicas en el síndrome de
pecha de tumor suprarrenal funcionante (normales: Cushing. En sujetos con enfermedad de Cushing, la
1 a 3 mg en el hombre y 0,5 mg en la mujer). administración de CRH aumenta más la concentra-
Determinación de la concentración de ACTH. Los ción de ACTH y cortisol, en contraste con los pa-
pacientes con enfermedad de Cushing tienen valo- cientes con síndrome de ACTH ectópico, que casi
res normales o levemente elevados, que van de 40 nunca muestran respuesta de ACTH o cortisol a
a 200 pg/ml (normal de 10 a 50 pg/ml). Las cifras CRH.

PRUEBAS DINÁMICAS EN EL SÍNDROME DE CUSHING

Pruebas Hiperplasia Adenoma Carcinoma Síndrome de ACTH


suprarrenal bilateral suprarrenal suprarrenal ectópico

• Supresión con
dexametasona
2 mg No supresión No supresión No supresión No supresión
8 mg Supresión parcial No supresión No supresión No supresión
• Metopirona Normal o exagerada No responde No responde Puede o no responder
• Estimulación Normal o exagerada No responde No responde Puede o no responder
con ACTH

261
Imagenología De existir una hiperplasia adrenal sin tumor hi-
Los estudios radiográficos muestran osteoporosis de pofisario demostrable, se debe pensar que el origen
la columna vertebral y nefrolitiasis. de ésta es hipotálamo-hipofisario, en cuyo caso pue-
La cateterización selectiva simultánea y bilate- den adoptarse dos conductas terapéuticas:
ral de los senos petrosos inferiores, se indica en au- 1. Tratamiento medicamentoso
sencia de una lesión clara de adenoma. 2. Hipofisectomía por microcirugía transesfenoi-
Cateterización selectiva del seno cavernoso sin dal (es el método más utilizado)
necesidad de aplicar estimulación con CRH. Después de la intervención aparece una insufi-
La TAC, la RMN y el US de las suprarrenales son ciencia suprarrenal que se usa como criterio para
útiles para diagnosticar tumores o hiperplasia bila- predecir el resultado del tratamiento.
teral difusa. La irradiación hipofisaria también se ha emplea-
Gammagrafía de las suprarrenales con yodo do con dosis de 4 200 a 4 500 Rad.
metil- nor-colesterol. Se utiliza para detectar nódulos
unilaterales y para localizar tejido suprarrenal ectó- Tumor adrenal (adenoma o carcinoma)
pico o restos suprarrenales después de la suprarre- En los adenomas se procede a su extirpación por
nalectomía bilateral. medio de la suprarrenalectomía unilateral por vía
abdominal, y aunque el adenoma bilateral es raro,
Evolución y complicaciones se explora la glándula contralateral. En los carcino-
mas se realiza extirpación quirúrgica, siempre que
Si bien se han descrito remisiones espontáneas o
sea posible. En los pacientes con metástasis, por lo
inducidas con tratamiento médico, la evolución del
general en hígado y pulmón y estado general muy
síndrome de Cushing es progresiva sin tratamiento;
afectado, se aconseja recurrir a los anticortisólicos
con el tiempo se produce una exacerbación de todas
de síntesis.
sus manifestaciones clínicas que conducen a la muer-
te, en general, por enfermedades cardiovasculares.
Síndrome de ACTH ectópico
Sus formas intensas suelen producir rápidamente os-
El tratamiento del síndrome de producción ectópica
teoporosis grave con fracturas y deformaciones
de ACTH consiste, siempre que sea posible, en la
óseas, que excepto en individuos jóvenes, mejora al
extirpación del tumor responsable. Con raras excep-
curar la enfermedad, pero no siempre desaparece.
ciones, entre las que se encuentran los carcinomas
Está bien demostrado que estos pacientes tienen una bronquiales, en la mayoría de los casos el tumor es
frecuencia elevada de complicaciones: diabetes me- inoperable en el momento del diagnóstico: cuando
llitus de difícil control con resistencia a la insulina, esto ocurre, se utiliza la quimioterapia, la radiotera-
hipertensión arterial intensa y trastornos electrolíti- pia o ambas.
cos graves, que ponen en peligro sus vidas.
Tratamiento medicamentoso
Tratamiento
El tratamiento médico puede estar indicado como
Depende de la causa del hipercortisolismo. preparación a la cirugía hipofisaria o suprarrenal en
El tratamiento preventivo sólo es aplicable a los pacientes en los que el hipercortisolismo es muy in-
pacientes con síndrome de Cushing yatrogénico, por tenso; también en espera de la aparición de los efec-
lo que debe evitarse la utilización indiscriminada de tos beneficiosos de la radioterapia, al igual que en
corticoides en dosis elevadas y mantenidas. aquellos enfermos en los que ha fracasado la cirugía
o no son candidatos a la ella.
Enfermedad de Cushing El ketoconazol, derivado del imidazol, inhibe en
Extirpación del adenoma hipofisario. Dada la mejo- gran medida la biosíntesis de los esteroides supra-
ría de los pacientes con enfermedad de Cushing que rrenales en dosis de 0,8 a 1,2 g/día. La metopirona
tienen un microadenoma hipofisario intraselar, el (3 a 4,5 g/día) y la aminoglutetimida (1 g/día o más)
tratamiento de elección es la adenomectomía selec- inhiben la enzima citocromo p 450; se administran
tiva transesfenoidal (70 a 80 % de curaciones). por vía oral, mientras que el etomidato se emplea en

262
perfusión (0,1 mg/kg/h) durante 10 h para controlar de algodón que se utiliza como espermicida. La do-
con rapidez los casos con hipercortisolismos intensos. sis propuesta oscila entre 30 y 70 mg/día y como
Se han usado fármacos de acción central, como efectos secundarios se han descrito íleo abdominal,
la reserpina (siempre asociado a la radioterapia), xerostomía, elevación de las transaminasas, fatigas
ciproheptadina, valproato de Na, bromocriptina y y frecuentes hipocaliemias por pérdidas reales de
análogos de la somatostatina de larga duración, en- potasio.
tre los que el octeotride es el de elección. Es posible
obtener un control más eficaz del hipercortisolismo Tratamiento preoperatorio
con menos efectos colaterales mediante el uso com- Debe ser manejado por el endocrinólogo con el uso
binado de estos medicamentos. de enantato de testosterona de acción prolongada, 3
Por último, como terapia coadyuvante en el car- o 4 semanas antes de la intervención para contrarres-
cinoma suprarrenal o tras los procederes neuroqui-
tar la acción catabólica del exceso de cortisol, así
rúrgico y radioterapéutico en la enfermedad de
como acetato de cortisona en las 12 y 2 horas pre-
Cushing, se puede emplear el mitotano (orto p DDD),
vias. Además, hay que suministrar potasio 3 o 4 se-
fármaco adrenalítico que en dosis de 4 g al día du-
manas antes del tratamiento quirúrgico.
rante 4 a 9 meses llega a producir una destrucción
suprarrenal con conservación de la secreción de al-
dosterona (destruye las zonas fascicular y reticular). Tratamiento transoperatorio y posoperatorio
La terapia con mitotano está limitada por la respuesta Inmediatamente después de realizar la incisión se
retardada, que toma semanas o meses, y por sus efec- administrarán 100 mg de hemisuccinato de hidro-
tos colaterales frecuentes. cortisona por vía EV y se continúa con dosis decre-
En el carcinoma suprarrenal se han utilizado la cientes por un espacio de 3 semanas, para luego
quimioterapia y la radioterapia, con poco éxito. reducirla a dosis de sostén con acetato de cortisona,
Recientemente se ha recomendado el tratamiento 37,5 mg diarios divididos en 25 mg en la mañana y
con gossypol, obtenido del aceite crudo de semilla 12,5 en la noche.

263
34

INSUFICIENCIA
CORTICOSUPRARRENAL

Concepto 8. Posadrenalectomía por:


• Síndrome de Cushing.
Es el déficit global o parcial de la corteza adrenal
• Síndrome adrenogenital (más frecuente).
para secretar la cantidad de hormonas corticosu-
9. Insuficiencia adrenal transitoria.
prarrenales en relación con las necesidades del or-
ganismo, ya sea en situación basal o de stress. 10. Trombosis adrenal bilateral.
Puede ser debida a la destrucción de la corteza 11. Terapia anticoagulante.
adrenal (insuficiencia adrenal primaria o enferme- 12. Diátesis hemorrágica.
dad de Addison), a un déficit de secreción hipofisa- B. Crónica.
ria de adrenocorticotropina (ACTH) (insuficiencia 1. Primaria (enfermedad de Addison).
adrenal secundaria), o a una insuficiente secreción a. Idiopática (adrenalitis autoinmune).
hipotalámica de la hormona liberadora de cortico- b. Tuberculosis suprarrenal bilateral.
tropina (CRH) u otros secretagogos de ACTH (in- c. Otras causas infrecuentes.
suficiencia adrenal terciaria). • Trombosis venosa.
• Infarto bilateral.
Clasificación • Metástasis.
I. Global. • Micosis o infecciones fúngicas.
A. Aguda: • Amiloidosis, sarcoidosis, hemocro-
1. Aplasia. matosis.
2. Hemorragia adrenal del recién nacido. • Hemorragias.
3. Hipoplasia adrenal congénita. • Ablación quirúrgica (suprarrenalec-
4. Infecciones fulminantes. tomía bilateral).
• Meningococemia (síndrome de Water- • Enfermedad de Hodgkin, leucemias.
house-Friderischsen). • Reticuloendoteliosis.
• Estafilococias. • Enfermedades autoinmunes.
• Difteria. • Agentes citotóxicos.
• Fiebre tifoidea. • SIDA.
• Septicemia por diversos gérmenes. 2. Secundaria:
5. Supresión brusca de terapia corticosteroi- a. Hipopituitarismo.
dea. • Global.
• DOCA. • Parcial.
• Esteroides. • Selectivo de ACTH.
6. Super stress. b. Reserva limitada de ACTH.
• Enfermedad crónica no específica. 3. Terciaria.
• Cirugía. II. Parcial.
• Quemaduras graves. 1. Hipocortisolismo.
• Crisis por agotamiento de la capacidad 2. Hipoaldosteronismo.
de síntesis adrenal. • Hipoaldosteronismo hiporreninémico.
7. Enfermedad de Addison. • Hipoaldosteronismo transitorio tras la su-

264
prarrenalectomía unilateral por adenoma síndrome de Waterhouse-Friderischsen y se descri-
productor de aldosterona. bió asociado a Neisseria meningitides, aunque pue-
• Déficit de secreción de aldosterona secun- den producirlo otros gérmenes.
daria a la administración de fármacos o En los pacientes con SIDA, la insuficiencia
de otras sustancias. adrenal es ocasionada por citomegalovirus (adrena-
litis necrotizante por CMV) o por Mycobacterium
avium intracelular, y más raramente por Criptococ-
ENFERMEDAD cus y sarcoma de Kaposi.

DE ADDISON Fisiopatología
La producción disminuida de cortisol a nivel de la
Thomas Addison describió en 1855 las manifesta- corteza adrenal, provoca un menor feed back (re-
ciones clínicas, la historia natural y los hallazgos troalimentación) negativo a nivel del hipotálamo y
necrópsicos de la enfermedad que lleva su nombre. de la hipofisis, lo que da lugar a una mayor libera-
Su incidencia es sólo de 40 a 60 casos por millón de ción de péptidos derivados de la propiomelanocortina
adultos, ocurre a cualquier edad y afecta con igual (POMC): ACTH, betalipotropina (LPH), y el frag-
mento NH2 terminal.
frecuencia a ambos sexos.
El aumento de ACTH estimula la adrenal rema-
Etiopatogenia nente y mantiene al principio niveles de cortisol su-
ficientes que luego van disminuyendo a medida que
La destrucción de la glándula adrenal se debe a dis-
la enfermedad progresa.
tintas causas. Las tres más comunes son: la adrena-
Los niveles disminuidos de mineralocorticoides
litis autoinmune, las infecciones y la enfermedad
provocan pérdida de sodio y retención de potasio.
metastásica. Otra posible causa es una hemorragia
La hiponatremia produce liberación de renina y pro-
suprarrenal.
ducción de angiotensina II que, junto con el potasio,
La forma idiopática (adrenalitis autoinmune) es estimulan a la capa glomerulosa restante para pro-
la causa más usual de fallo adrenal primario y repre- ducir más aldosterona. Pero también este mecanis-
senta el 75 % de los casos. Puede ocurrir de forma mo resulta inadecuado según progresa la destrucción
esporádica, familiar o formar parte del síndrome po- adrenal.
liglandular autoinmune tipos I y II. La destrucción Cuando el desarrollo de la afección es gradual,
está confinada a la corteza, sin afectar la médula. En existe una fase caracterizada por una secreción basal
más del 50 % de los pacientes se encuentran anti- de cortisol normal, pero con incapacidad para res-
cuerpos circulantes contra las suprarrenales, y a ponder al stress, que se conoce como reserva adrenal
menudo anticuerpos contra otros tejidos (tiroides, disminuida.
paratiroides, etc.).
La etiología tuberculosa representa el 20 % de Anatomía patológica
los casos, con mayor incidencia en países donde la Varía según la causa de la enfermedad.
enfermedad es común. La destrucción de la médula Tuberculosis suprarrenal. Están afectadas la cor-
adrenal explica la frecuencia y severidad de sínto- teza y la médula. Las glándulas suprarrenales pre-
mas ortostáticos. Normalmente se desarrolla con sentan necrosis caseosa y en ocasiones hay sólo un
mayor rapidez que la forma autoinmune. grado pequeño de reacción granulomatosa. Es fre-
Las suprarrenales son sitio habitual de metásta- cuente la calcificación de las suprarrenales.
sis, que por lo general producen sólo un déficit par- Insuficiencia adrenocortical autoinmunitaria. La
cial. Éstas se presentan sobre todo en los tumores infiltración linfocitaria de la corteza adrenal es la
del pulmón, mama, estómago y melanomas. característica histológica clave. Las suprarrenales
Las tres causas de hemorragia son la septicemia son pequeñas, atróficas y la cápsula aparece engro-
fulminante, la anticoagulación y el traumatismo. sada. La médula se preserva, aunque las células cor-
Cuando se debe a una sepsis recibe el nombre de ticales están ausentes en gran medida.

265
Hemorragia suprarrenal bilateral. Las adrenales (MSH), la cual provoca la acción de la tirosina, que
son masivas, hay sustitución de la médula y la cor- en los melanocitos determina la transformación de
teza interna por hemorragia y necrosis sistémica de tironina en melanina.
la corteza externa, de manera que sólo sobreviven Adelgazamiento. La pérdida de peso (97 %) es
unas pocas células corticales subcapilares. progresiva. Por lo general son enfermos delgados,
En el resto de las causas de Addison, el cuadro aunque si antes eran obesos puede faltar la delga-
histológico mostrará las características propias de dez, pero en la historia clínica siempre se recoge el
ellas. dato de haber disminuido de peso. Se explica por la
anorexia, la deshidratación que ocasionan los fre-
Cuadro clínico
cuentes vómitos y, a veces, las diarreas, así como
El cuadro clínico plenamente desarrollado compren- por la desaparición del tejido muscular.
de los siguientes síntomas y signos. Síntomas digestivos. En algunos casos constitu-
Debilidad (adinamia). Es un síntoma constante yen los síntomas de presentación de la enfermedad
(99 %) por lo general precoz. Al principio puede ser (90 %). Varían desde anorexia unida a una sensa-
esporádica y más notoria en los períodos de stress. ción de repugnancia por los alimentos, junto con náu-
Conforme se deteriora la función suprarrenal la de- seas, vómitos y diarreas, hasta un cuadro doloroso
bilidad progresa y se incrementa a lo largo del día, abdominal agudo con vómitos pertinaces y diarreas
lo que la diferencia de la astenia funcional o psicó- fulminantes que ponen en peligro la vida del paciente.
gena, y el reposo nocturno no consigue su recupera- Hipotensión arterial. Ésta, con un fuerte com-
ción; hasta que en estados avanzados, el paciente no ponente ortostático, es frecuente en esta afección.
es capaz de realizar trabajo muscular y estará confina-
La presión sistólica rara vez supera los 110 mmHg
do a la cama. La patogenia de la astenia es comple-
y generalmente oscila entre 80 y 90 mmHg.
ja, pues intervienen los trastornos hidroelectrolíticos,
Las causas de la hipotensión radican en el déficit
así como las alteraciones del metabolismo de los car-
de glucocorticoides por una parte, y por otra, en la
bohidratos y de las proteínas (déficit de mineralo-
disminución de la aldosterona, que conduce a la pér-
corticoides y glucocorticoides).
dida de sodio por el túbulo renal, y por consiguien-
Hiperpigmentación cutaneomucosa. Signo nota-
te, al descenso del volumen plasmático circulante.
ble de la enfermedad de Addison, presente en el 82
Síntomas gonadales. La reducción de los andró-
a 98 % de los casos. La pigmentación cutánea au-
genos corticales tiene escasa repercusión en el va-
menta (melanodermia), y se caracteriza por un bron-
rón. La mujer suele presentar amenorrea y con más
ceado difuso de la piel, más manifiesto en las zonas
frecuencia, caída del vello axilopubiano.
expuestas a la luz, aréola de los pezones, línea alba,
Hipoglicemia. Está en el 50 % de los pacientes.
regiones genitales y perianal, cicatrices formadas
Constituyen síntomas típicos la debilidad, las crisis
después de la enfermedad (pero no en las anterio-
res) y zonas del cuerpo sometidas a la presión, como sudorales, el temblor de las manos y la sensación de
las rodillas, los codos y los nudillos. Como signo hambre.
temprano, en ocasiones los pacientes refieren un La prolongación de la hipoglicemia se explica
bronceado demasiado prolongado después de expo- porque como consecuencia del déficit de glucocor-
nerse al sol. También aparecen pigmentaciones en ticoides, está acelerada la contrarregulación autóno-
forma de máculas o bandas de tonalidad azul oscuro ma mediante la gluconeogénesis y la movilización
o parda, en la mucosa de los labios y la boca, sobre de glucógeno hepático.
todo en la línea interdental de la mucosa de las me-
jillas, en las encías y en el paladar. Máculas pig-
Diagnóstico
mentarias similares surgen en las mucosas de la Se realiza con los antecedentes, el cuadro clínico y
vagina y del recto. La ausencia de hiperpigmenta- los exámenes complementarios.
ción en un paciente determinado no excluye el diag- I. Estudios específicos
nóstico. La melanosis cutaneomucosa addisoniana Estudios basales
se debe a la hiperproducción de ACTH, cuya molécu- Cortisol plasmático. Está disminuido (menor
la incluye la hormona estimulante de los melanocitos de 10 mcg/100 ml a las 8:00 a.m.).

266
ACTH plasmático. Está aumentado, lo que • Con calcificaciones en las formas tubercu-
tiene gran valor diagnóstico. losa, hemorrágica y micótica.
Cortisol libre en la orina. Disminuido. II. Estudios no específicos
17-hidroxicorticoides (17 OH C5) en orina a. Hemograma. Anemia hipocrómica o normocí-
de 24 h. Es menor de 2 mg (disminuido). tica y normocrómica. Leucopenia con neutro-
Prueba de sobrecarga de agua. Es útil en penia y linfocitosis y eosinofilia.
lugares donde no se dispone de mediciones hor- b. Eritrosedimentación. Está acelerada (más fre-
monales específicas. cuente en la forma tuberculosa).
En la insuficiencia adrenal la diuresis total c. Ionograma. El sodio está disminuido y el
es inferior al 70 % del agua ingerida y ninguno potasio aumentado. El índice Na+/K+< 30 (nor-
de los volúmenes horarios supera la diuresis mal: 32).
nocturna. d. Gasometría. Se encuentra una acidosis meta-
Prueba de estimulación con ACTH. Incluye bólica moderada.
distintos tipos de estimulación (rápida, pro- e. Colesterol. Está disminuido.
longada, y estándar de estimulación), todas ba- f. Electroforesis de proteínas. Las gammaglobu-
sadas en la excitación de las glándulas adrenales linas están aumentadas.
con ACTH y drogas de efecto adrenocortico-
trópico para luego determinar los niveles de Diagnóstico diferencial
cortisol en la sangre y orina. En ellas la Hay que diferenciar la enfermedad de Addison de
cortisolemia y el cortisol libre en la orina, es- las siguientes enfermedades:
tán disminuidos.
La prueba de estimulación con CRH (corti- 1. Insuficiencia suprarrenal secundaria. Se dife-
cotropin releasing hormone) es útil para dife- rencia porque no hay pigmentación cutaneomu-
renciar las formas adenohipofisarias de las cosa, la función mineralocorticoide está intacta,
hipotalámicas. hay alteración de otras hormonas adenohipofi-
sarias y el ACTH está disminuido.
Estudios para determinar la causa del proceso
2. Otras enfermedades que producen hiperpigmen-
Rx de tórax. Para buscar una lesión tubercu-
tación: acantosis nigricans, neurofibromatosis,
losa, micótica o neoplásica.
síndrome de Albright, melanosarcoma, pigmen-
Determinación de anticuerpos antisuprarrena-
tación por medicamentos (atebrina, metales
les. Si son positivos y confirman una adrenali-
pesados), avitaminosis (pelagra, esprue).
tis autoinmune, hay que explorar la actividad
3. Si predomina en el cuadro clínico la debilidad,
inmunológica en otras glándulas.
hay que establecer la diferencia con la miaste-
Prueba funcional de la médula suprarrenal
nia grave y la anorexia nerviosa.
con 2 desoxi-D-glucosa (2-D-G). En los de cau-
sa tuberculosa, como hay destrucción global de 4. En ocasiones hay que diferenciarla de la ente-
la glándula, no se obtiene respuesta a la esti- ritis regional (si predominan las diarreas), la
mulación de la médula. insuficiencia renal crónica y la esclerodermia.
Cuando la causa es autoinmune, existe indem-
Tratamiento
nidad del tejido medular, lo que se comprueba
al obtener un incremento en la eliminación uri- Tratamiento hormonal
naria de catecolaminas. Terapia glucocorticoidea. Debe individualizarse de
TAC de las glándulas suprarrenales. Permi- acuerdo con la situación clínica. Administrar dia-
te precisar el tamaño de las suprarrenales, que riamente, en orden de preferencia:
se encuentran:
• Aumentadas en las formas tuberculosas, 1. Acetato de cortisona: 25 a 37,5 mg/día, por vía
micóticas y metastásicas. oral.
• Disminuidas en las formas autoinmune y 2. Hidrocortisona: 20 a 30 mg/día, por vía oral.
tuberculosa de larga evolución. 3. Prednisona: 5 a 7,5 mg/día, por vía oral.

267
Se administran 2/3 de la dosis total en el desayu- • Posteriormente, utilizar 50 mg de hidrocortiso-
no y 1/3 en la cena, y por su efecto en la mucosa na EV o IM c/6 u 8 h durante las primeras 24 h.
gástrica, se recomienda tomarla con alimentos o En los días siguientes, según la evolución, ir
antiácidos. disminuyendo hasta alcanzar la dosis de man-
Si persiste la astenia o la hiperpigmentación, se tenimiento.
aconseja un incremento de la dosis, y si aparece
hipercortisismo, DM o HTA, hay que reducirla. Tratamiento etiológico
Déficit de mineralocorticoides. El medicamento Es posible cuando se conoce la causa. Los casos de
de elección es la 9 alfa-fluorhidrocortisona (tabletas etiología tuberculosa se tratan con antibióticos y
quimioterapia específica; al igual que la sífilis y otras
de 0,1mg), en dosis de 0,05 a 0,2 mg/día, por vía
infecciones. Cuando no puede eliminarse la causa,
oral.
la terapéutica descansa en el tratamiento hormonal.
En su defecto, indicar corticosterona (DOCA) en
ámpulas de 5 mg, en dosis de 5 mg IM, 2 o 3 veces/
semana, o aldosterona (ámpulas de 0,5 mg/ml), en
dosis de 1 mg IM o EV.
INSUFICIENCIA
El ajuste de las dosis debe realizarse en función
de si existe o no hipotensión ortostática, de las ci-
CORTICOSUPRARRENAL
fras de potasio y de la actividad de renina plasmática. AGUDA. CRISIS
Tratamiento higienodietético ADRENAL
Las restricciones dietéticas, antes tan necesarias, que
estaban basadas sobre todo en la disminución de la Constituye una grave emergencia que pone en inmi-
ingestión de potasio y en el aporte suplementario de nente peligro de muerte al paciente, si no es diag-
sodio, han quedado atrás desde que es posible efec- nosticada y tratada con prontitud.
tuar una terapia correcta de sustitución hormonal.
No obstante, debe recordarse la conveniencia de Cuadro clínico
efectuar un aporte complementario de sodio al Casi siempre, después de un stress, el enfermo pre-
addisoniano en algunas situaciones especiales, como senta extrema debilidad, acompañada de irritabili-
el ejercicio físico intenso, temperaturas muy eleva- dad, cefalea y dolor abdominal; además, náuseas,
das, gran sudación y alteraciones gastrointestinales. vómitos, diarreas, pérdida de peso y deshidratación.
Al progresar el cuadro aparecen cianosis, piel fría
Circunstancias especiales y pegajosa, pulso débil y rápido, hipotensión arte-
rial, respiración rápida y coma que provoca la muerte.
• Si hay fiebre, extracción dentaria o stress me-
En el síndrome de Waterhouse-Friderischsen, pro-
nor, el paciente debe duplicar la dosis del tra-
ducido por una sepsis por meningococo, surgen cia-
tamiento habitual.
nosis periférica y abundantes lesiones petequiales y
• Si existen vómitos, diarreas, traumatismos o purpúricas que aumentan de tamaño rápidamente;
stress mayor, debe contactar al médico lo antes en el caso de una crisis provocada por la supresión
posible e instaurar tratamiento sustitutivo por brusca de glucocorticoides, aparecen dolores arti-
vía parenteral: inicialmente 50 mg de hidrocor- culares y musculares generalizados y una tendencia
tisona por vía IM o EV c/8 h. a la hipoglicemia; hay poco colapso vascular y en
cambio, los vómitos, las náuseas, la fiebre y la aste-
Cirugía nia, son intensos.
• Deben corregirse previamente los niveles de
electrólitos, la TA y la hidratación, si es nece- Diagnóstico
sario. Es clínico y debe basarse en los antecedentes, sinto-
• Administrar 100 mg de hidrocortisona EV antes matología y exámenes complementarios, donde se
de entrar al quirófano. encuentran hipoglicemia, hiponatremia, hipercalie-

268
mia y diversas alteraciones relacionadas con la des- en caso de situación favorable se establece a
hidratación. partir del segundo día.
Hay que determinar de inmediato la cortisolemia 2. Si se mantiene la hipotensión arterial, se utili-
para comprobar el diagnóstico con posterioridad, zan aminas presoras (noradrenalina).
pero no debe haber dilación para iniciar la terapéu- 3. Si se sospecha o comprueba una infección lo-
tica, una vez que se ha establecido la sospecha diag- cal o generalizada, hay que administrar anti-
nóstica. bióticos.
4. De considerarse necesaria la terapia mineralo-
Tratamiento corticoidea (cuando la dosis de hidrocortisona
1. Para corregir el déficit de cortisol, agua y sodio, es menor de 100 mg/día), utilizar:
se utiliza: • DOCA: De 2 a 3 mg IM una vez y 2 a 4 mg
• Hemisuccinato de hidrocortisona: 100 mg EV (dosis posterior).
de inicio. • La 9-fluorhidrocortisona, 0,1 a 0,3 mg/día,
• Hidratación: Suero glucofisiológico, no menos por vía oral, cuando el estado del paciente
de 3 000 ml en forma rápida (2 a 4 h). Poste- lo permita.
riormente, según el estado de hidratación y los • Aldosterona: 1 mg IM o EV como dosis ini-
valores de los electrólitos plasmáticos, se pue- cial, que se repite de ser necesario en las 24 h,
de llegar hasta 8 L en 24 h. independientemente de la edad.
Si hay signos clínicos y bioquímicos de hi- 5.Medidas generales:
poglicemia, se añaden 50 ml de dextrosa al 40 • Mantener una vía endovenosa en las prime-
o 50 % a cada venoclisis. ras 24 h, hasta que el paciente esté fuera del
Se continúa con hemisuccinato de hidrocor- shock y la TA se mantenga sin dificultad.
tisona: 100 mg EV c/4 o 6 h, en la venoclisis. • Comenzar la vía oral tan pronto como sea po-
El aporte de líquidos después de rebasada sible; añadir a los alimentos cloruro de sodio:
la fase crítica se limita a restaurar las pérdidas 100 mg/kg de peso, para cubrir los requeri-
del paciente. La reducción del glucocorticoide mientos mayores.

269
35

ENFERMEDADES DE LAS GÓNADAS

El sexo comprende los elementos diferenciales en- Sexo psíquico o mental. Lo constituye el impulso,
tre el varón y la hembra y se puede considerar des- que normalmente debe llevar a la búsqueda del sexo
de distintos aspectos, que se detallan a continuación: opuesto. Comprende la libido, que expresa la inten-
Sexo anatómico. Los genitales externos de la hem- sidad del impulso.
bra tienen elementos característicos bien precisos Sexo social. Es determinado por el medio, y re-
con respecto a los del varón. presenta la identificación desde el punto de vista
Sexo cromosómico. La hembra tiene 44 autoso- sexual que da la sociedad al individuo.
mas y 2 cromosomas sexuales (XX). De estos últi-
mos, uno es activo y el otro inactivo. El varón Diferenciación y desarrollo sexuales
presenta 44 autosomas y 2 cromosomas sexuales
(XY). El cromosoma X del varón es activo. En la
normales
hembra es necesaria una constitución XX para el La diferenciación sexual tiene lugar en tres etapas,
desarrollo de los ovarios funcionantes y en el varón que incluyen la gónada, los conductos genitales y el
una constitución XY para el desarrollo de los sexo urogenital (sexo embrionario, que comunica el
testículos. sistema urinario y el aparato genital), y los genitales
Sexo genético. Los cromosomas X activos no se externos. Normalmente, las características de todas
visualizan con los colorantes, pero los inactivos sí. las estructuras sexuales corresponden al sexo gené-
Los cromosomas inactivos se observan en las tico, establecido en el momento de la fertilización.
células de la mucosa oral en forma de un corpúscu-
lo plano convexo adosado a la membrana del nú- Origen de la gónada
cleo, que recibe el nombre de corpúsculo de Barr. Desde la cuarta semana de gestación, los caracteres
En la mucosa oral, la positividad la da el hallazgo sexuales comienzan a formarse a partir de los plie-
de un 20 % de células con este corpúsculo.
gues gonadales y son invadidos en la sexta semana
Estos cromosomas se ven también en los leuco-
por las células germinativas.
citos de la sangre periférica, como una prolonga-
La gónada embrionaria bipotencial hasta la sexta
ción del núcleo en forma de raqueta, conocida en la
semana, presenta un componente cortical, uno
literatura angloamericana como drumstick (palillo
medular y células germinales bipotenciales. La dife-
de tambor). En los leucocitos la probabilidad del
hallazgo de células con esta prolongación es de un renciación ulterior en ovario y testículo dependerá
12 %. La hembra es cromatín positivo y el varón de la presencia de genes específicos localizados en
cromatín negativo. el cromosoma X o en el Y, según el caso. Cuando la
Sexo hormonal. Los ovarios producen estrógenos gónada va a ser un testículo comienza a diferenciar-
y progesterona y los testículos, andrógenos. se sobre la séptima u octava semana de la vida em-
Sexo hipotalámico. Desde el punto de vista de brionaria: el componente medular evoluciona y el
las hormonas gonadales, el hipotálamo de la hem- cortical involuciona. Si la gónada va a ser ovario
bra es cíclico y el del varón, acíclico. Esta caracte- comienza a diferenciarse con posterioridad a cuan-
rística del hipotálamo es adquirida en la vida do va a ser testículo: el componente cortical evolu-
intrauterina. ciona y el medular involuciona.

270
Origen de los genitales internos y externos les externos. La testosterona es elaborada por las
En fase temprana de la gestación se inician los pro- células de Leydig y su producción dependerá de la
cesos que de manera progresiva van a conducir a la gonadotropina coriónica humana (HCG) placentaria
diferencia morfológica y funcional, masculina o fe- en el primer semestre del embarazo y posteriormen-
menina, de los caracteres sexuales del feto. Esta te de la LH hipofisaria fetal.
maduración ontogénica es bastante compleja, e in- Los genitales externos (próstata, desarrollo del
tervienen en ella numerosos factores de naturaleza pene, fusión escrotal de los labios) se forman me-
hormonal, endocrina y paracrina, dirigidos por genes diante los andrógenos vertidos en la circulación fe-
situados en los cromosomas sexuales y en los auto- tal e indirectamente por su transformación en
somas. dihidrotestosterona (DHT), catalizada por la enzi-
La estructura embrionaria primitivamente indife- ma 5-alfa-reductasa en el interior de las células, y
renciada, que es el origen de las gónadas y de los cuya actividad es detectable a partir de la octava
órganos genitales, tiene una tendencia inactiva a la semana del embarazo. En efecto, es este último
expresión fenotípica femenina; si no existieran cier- andrógeno el responsable del desarrollo de los geni-
tos factores que lo impidiesen, las gónadas evolu- tales externos. Tanto la testosterona como la DHT,
cionarían a ovarios, se desarrollarían las estructuras promueven sus acciones a través del mismo recep-
derivadas de los conductos de Müller (trompas, úte- tor específico citosólico (tiene más afinidad para la
ro y tercio superior de la vagina) y los genitales ex- DHT que para la testosterona) cuyo gen se localiza
ternos adoptarían una morfología femenina. Esto en el cromosoma X de ambos sexos.
siempre sucede así cuando el genotipo es femenino
y no hay presencia de cromosona Y (si bien se re-
quiere la presencia de dos cromosomas X para una HIPOGONADISMO
completa diferenciación ovárica). El cromosoma Y
en los fetos con dotación masculina, contiene los MASCULINO
genes que impiden la evolución gonadal y fenotípica
femenina.
La evolución a testículo de la gónada indiferen-
Concepto
ciada se lleva a cabo por el factor determinante tes- Se le da el nombre de hipogonadismo tanto al défi-
ticular (TDF), codificado por un gen situado en el cit testicular endocrino, como al exocrino, pero es
brazo corto del cromosoma Y (SRY), cercano a la conocido que la mayoría de los pacientes con defi-
región seudoautosómica de este mismo cromosoma, ciencia en la espermatogénesis no tienen insuficien-
aunque es muy probable que intervengan también cia hormonal ostensible. Por tanto, es preferible
otros genes distintos del SRY en la diferenciación utilizar el nombre de hipogonadismo sólo cuando
testicular. El testículo fetal es el responsable de la existe merma de la función endocrina del testículo y
diferenciación fenotípica masculina merced a la ela- considerar al déficit exocrino como un trastorno ais-
boración de dos productos de secreción: la hormona lado de la fertilidad o la espermatogénesis.
antimulleriana (MIH) y la testosterona. La primera La época en que se produce la deficiencia gonadal
es un dímero de naturaleza glucoproteica sintetiza- en relación con la pubertad, determina amplias va-
do por las células de Sertoli y fetales, y que como su riaciones clínicas, por lo que estas alteraciones de-
nombre señala anula específicamente el desarrollo ben considerarse en dos estadios distintos, prepuberal
de los conductos de Müller. Su elaboración comien- y pospuberal. También existe diferencia según el
za entre la sexta y la séptima semanas de gestación trastorno afecte las gónadas (hipogonadismo prima-
y actúa por mecanismo paracrino sobre el conducto rio), la hipófisis (hipogonadismo secundario) y la
de Müller ipsilateral. región hipotalámica (llamado por algunos hipogo-
La testosterona se encarga también de dos misio- nadismo terciario).
nes fundamentales, la estimulación de los conductos
de Wolff para su evolución a estructuras masculinas Clasificación
(epidídimo, conducto deferente, vesícula seminal y I. Hipogonadismo masculino hipergonadotrópico
conducto eyaculador) y la virilización de los genita- (primario)

271
1. Síndrome de Klinefelter y sus variantes 7. Síndrome YY
2. Atrofia testicular 8. Síndrome de Noonan
• Posorquítica 9. Enfermedades cerebrales
• Postraumática 10. Enfermedades endocrinas
• Yatrogénica • Macroprolactinomas (?)
• Autoinmune • Síndrome de Cushing (?)
• Idiopática • Hipotiroidismo primario (?)
• Posinfecciosa
3. Castración funcional Para establecer la diferencia entre el hipogo-
• Infecciones nadismo primario y el secundario, hay que apoyar-
• Agentes físicos se en:
• Enfermedades malignas 1. La anamnesis.
• Enfermedades degenerativas 2. El examen de las gónadas. En los primarios las
4. Castración traumática o quirúrgica gónadas son pequeñas y duras, y en el secun-
5. Síndrome de Noonan1 dario, blandas.
6. Síndrome YY 3. Los caracteres sexuales secundarios están me-
7. Hombres 46, XX jor desarrollados en los primarios que en los
8. Testículos rudimentarios1 secundarios. El pene es de buen tamaño en los
9. Anorquías1 primarios y pequeño en los secundarios, sobre
10. Distrofia miotónica (?) todo en los de comienzo prepuberal.
11. Síndrome de Werner 4. Ginecomastia. Propia de los primarios.
12. Mutación inactivadora del gen del receptor 5. La cromatina sexual es negativa en los secun-
de LH1 darios y positiva en un 80 % de los primarios.
13. Mutación inactivadora del gen del receptor de 6. Los 17 – cetosteroides están más bajos en los
andrógenos1 primarios que en los individuos normales, pero
II. Hipogonadismo masculino hipogonadotrópico más altos que en los secundarios.
(secundario y terciario) 7. Las gonadotropinas urinarias se encuentran ele-
1. Déficit selectivo de FSH y LH vadas en los primarios y bajas en los secunda-
• Traumatismos rios.
• Tumores 8. Biopsia de testículo: varía según la etiopatoge-
• Infecciones nia. En los secundarios hay ausencia de
• Enfermedades degenerativas espermatogénesis, con excepción del eunuco
• Hipofisitis autoinmune fértil.
• Yatrogenia
• Isquemia hipofisaria Hipogonadismo masculino
• Idiopática
2. Displasia olfatogenital1 primario
3. Panhipopituitarismo*
4. Hipopituitarismo parcial*
Disgenesia de los túbulos
5. Enfermedad diencefálica o hipotalámica seminíferos
• Síndrome de Laurence-Moon-Biedl1 En 1942 Klinefelter, Reifenstein y Albrigth descri-
• Síndrome de Prader-Willi1 bieron las principales características del trastorno que
• Síndrome de Frölich1 hoy lleva el nombre de síndrome de Klinefelter, y
• Distrofia adiposo-genital1 que se caracteriza por ginecomastia, testículos pe-
6. Déficit de LH (eunuco fértil)1 queños, azoospermia, grados variables de eunucoi-
dismo y títulos elevados de gonadotropinas (Gn)
1
Habitualmente ocasiona hipogonadismo prepuberal. urinarias. En estos pacientes se han comprobado di-
? Habitualmente ocasiona hipogonadismo pospuberal. versos grados de insuficiencia tubular seminífera y
*
Las mismas causas del déficit selectivo. una función disminuida de las células de Leydig.

272
Etiopatogenia ficiente de la masa muscular. La ginecomastia consti-
tuye uno de los motivos de consulta más frecuentes.
Existe un fallo en la gametogénesis que produce un
cigoto por lo general con XXY. Se considera que la
presencia de un cromosoma X supernumerario es el
factor etiológico subyacente fundamental. Los cam-
bios observados en los túbulos seminíferos y en las
células de Leydig, son atribuidos a la existencia de
números anormales de cromosomas X en el tejido
testicular.

Anatomía patológica
Hay engrosamiento de la membrana de los túbulos
seminíferos con ausencia de las fibras elásticas,
fibrosis e hialinización de los túbulos, disminución
de la espermatogénesis en la fase prepuberal y pos-
teriormente, acumulación de las células de Leydig.

Enfermedades asociadas
Se ha sugerido la posibilidad de una mayor frecuen-
cia de ciertas enfermedades en el síndrome de
Klinefelter; entre las más comunes se encuentran la
DM, enfermedades broncopulmonares y del tiroi-
des, cierta variedad de neoplasias, trastornos alérgicos
o autoinmunes, várices de los miembros inferiores,
síndrome diarreico crónico, diverticulosis del colon
y hernia esofágica.

Frecuencia Fig. 35.1. Síndrome de Klinefelter. Paciente de 20 años con


La frecuencia de la disgenesia de los túbulos hábito eunucoide y el pene de tamaño normal, que presenta
una esplenomegalia (marcada en la foto) por padecer también
seminíferos es de 1 por cada 500 varones nacidos de esferocitosis herederitaria.
vivos.

Cuadro clínico Se han descrito diversos tipos de anomalías


La presencia de unos testículos firmes, pequeños e esqueléticas como cifosis, escoliosis y lordosis, pies
insensibles, ginecomastia y androgenicidad disminui- planos, cúbito valgo, y alteraciones oculares y
da, sugieren un síndrome de Klinefelter (Fig. 35.1). bucodentarias. Las características del sistema pilo-
Sus manifestaciones clínicas más sobresalientes se so están determinadas por factores raciales, genéti-
encuentran en la etapa prepuberal: alta talla, des- cos e individuales y además, por el influjo hormonal,
proporción entre los segmentos y alteración de los sobre todo el androgénico.
genitales externos; se destaca la baja escolaridad, lo La brazada es mayor que la talla y la mayoría de
cual es un índice de retraso mental o de trastornos los pacientes presentan proporciones eunucoides.
de la personalidad, muy comunes en este síndrome. Los índices de sexualidad que relacionan el diámetro
Pueden existir diferentes grados de eunucoidismo, biacromial y el bitrocantéreo, así como la circunfe-
lo que está en dependencia de la severidad del défi- rencia torácica y de la cadera, están alterados.
cit androgénico, y por tanto, algunos signos de hi- Uno de los signos clínicos que más llama la aten-
pogonadismo, como distribución ginecoide de la ción en este síndrome, es la normalidad del pene en
grasa, facies hipogonádica e infantil y desarrollo de- más del 90 % de los casos, lo que contrasta con la

273
maduración deficiente del escroto, que tiene poco por lo general presente. Habitualmente se debe co-
desarrollo y una pigmentación y rugosidad dismi- menzar con una dosis de impregnación equivalente
nuidas; la próstata es pequeña. al doble o triple de la de mantenimiento.
La preparación más utilizada es el enantato de
Variantes del síndrome de Klinefelter testosterona por vía IM, que se presenta en ámpulas
El cariotipo ha permitido correlacionar la sintoma- oleosas de 100 mg. La dosis de mantenimiento es
tología de cada paciente con su fórmula cromosó- de 100 mg 2 veces al mes.
mica. La forma clásica presente es cariotipo 47, En pacientes con hipogonadismo primario que
XXY. Los casos con mosaicismo cromosómico, en consultan por primera vez en la quinta década de la
los que existe una línea celular normal 46, XY, pre- vida, hay que ser más conservador en el tratamiento
sentan un cuadro clínico menos florido, y en aqué- sustitutivo por la posibilidad de provocar trastornos
llos con más de dos cromosomas X, los cambios psiconeuróticos. En esta situación, poco común, es
patológicos son más graves y extensos. preferible indicar la dosis de mantenimiento desde
el inicio, aunque la androgenización se demore más
Exámenes complementarios tiempo.
La cromatina sexual es positiva en el 80 % de los Las preparaciones más usadas, vías de adminis-
casos. tración, presentación y dosis de mantenimiento, se
El cariograma aporta frecuentemente XXY y en relacionan a continuación.
el espermograma aparece oligozoospermia severa o
Preparación Vías de Presentación Dosis de
azoospermia.
adminis- mantenimiento
El dermatoglifo (trazado de las líneas y crestas tración
palmares) está alterado.
La determinación de la testosterona plasmática Enantato de IM Ámpulas 1-2 veces/mes
es útil como índice de función testicular y su valor testosterona 100 mg
es aún mayor cuando se determina durante las prue- Cipionato de IM Ámpulas 2 veces/mes
bas dinámicas. testosterona 50 mg
Los niveles de FSH y de LH suelen estar ele- Undecanato de IM Ámpulas 250 1 vez/mes
vados. testosterona y 500 mg 1 vez/2 meses
La determinación de estrógenos plasmáticos es Propionato de IM Ámpulas 1 vez/día
más útil que la de 17-cetosteroides, ya que el 80 % testosterona 25 mg
de ellos tienen un origen testicular. Undecanato de Oral Tabletas De 40-120 mg/
Las pruebas dinámicas tienen mayor utilidad que testosterona 40 mg día
las determinaciones aisladas, pues ofrecen datos so- Fluoximesterona Oral Tabletas 2 – 10 mg/día
bre la capacidad funcional de la glándula que se in- 2 y 5 mg
vestiga; las más utilizadas son las estimulaciones con Testosterona Parches 2-3 veces/
gonadotropina coriónica humana (HCGn) y con hor- transdérmica semana
mona liberadora de gonadotropina (LHRH). En el
síndrome de Klinefelter no debe haber respuesta a Si hay desajustes emocionales, es necesario pres-
la estimulación con HCGn. tarle atención y solicitar la cooperación del psicólo-
go o del psiquiatra.
Evolución La ginecomastia puede hacer aconsejable una ci-
Los pacientes llevan una vida normal, aunque con rugía reconstructiva, ya que no existe ningún trata-
capacidad física limitada. Conservan el deseo sexual y miento médico capaz de resolverla.
sus relaciones de este tipo son normales pero im-
productivas; por lo común no mueren de la enfermedad. Hipogonadismo masculino
Tratamiento secundario
El tratamiento sustitutivo con andrógenos es nece- El hipogonadismo masculino secundario se debe a
sario con el fin de corregir el déficit androgénico, una disminución de la función testicular con niveles

274
de Gn hipofisarias circulantes bajas o en el límite nen un retraso del crecimiento que se acentúa sobre
inferior normal, y como consecuencia de esto, un los 2 años de edad. Tienen un aspecto grácil, cara de
déficit androgénico. joven viejo, dientes apretujados por maxilares pe-
queños y una inteligencia normal. Pocas veces se
Etiología comprueba incidencia familiar.
Entre las causas más frecuentes de hipogonadismo Cuando el déficit de Gn se instaura en el período
masculino secundario se encuentran el adenoma hi- pospuberal, se produce una regresión más o menos
pofisario, el craneofaringioma, el infarto de la manifiesta de los caracteres sexuales secundarios y
hipófisis, aneurisma carotídeo, granulomatosis (tu- se presentan cambios en la piel, el sistema piloso, el
berculosis, histiocitosis), atrofia idiopática, hemo- tejido conjuntivo y el panículo adiposo, pero el es-
cromatosis, defectos de desarrollo, enfermedades queleto no sufre modificación alguna, lo que permi-
crónicas acompañadas de inanición y mixedema, te distinguir la época en que comenzó. La potencia
concentraciones anormales de hormonas, infección y el deseo sexual pueden mantenerse algún tiempo,
y DM. pero éstos van disminuyendo lenta y cada vez más
La deficiencia de la función gonadotrópica se de acuerdo con la intensidad de la merma hormonal.
observa como defectos aislados o acompañados de El hipogonadismo hipofisario selectivo de Gn es
alteraciones de otras hormonas de la hipófisis. relativamente raro en varones adultos y lo que se
Cuadro clínico observa con mayor frecuencia es un grado variable
de panhipopituitarismo. A medida que transcurre el
Las manifestaciones clínicas varían con la edad de tiempo se instala primero la falla gonadal, luego la
comienzo, el grado de la deficiencia y la ausencia o tiroidea y por último, la adrenal, con la expresión
no de otras hormonas trópicas. clínica de estas deficiencias.
Cuando el hipogonadismo se instaura en el perío-
do prepuberal, los caracteres sexuales secundarios Exámenes complementarios
no se desarrollan. El pene es pequeño, el escroto
FSH y LH. Están disminuidas. Niveles normales de
infantil, liso y no pigmentado, la próstata y las vesí-
ellas no niegan que existen alteraciones; en este caso
culas seminales son pequeñas, y los enfermos care-
será necesario realizar pruebas dinámicas.
cen de potencia y deseo sexual. La piel de la cara es
lisa, de aspecto infantil y sin barba. El vello pubiano Testosterona plasmática. Tiene más valor cuando
y el axilar están ausentes o muy disminuidos. se determina durante las pruebas dinámicas.
El crecimiento óseo se prolonga al faltar la ac- Pruebas dinámicas. Son más útiles que las deter-
ción de los sexosteroides sobre los cartílagos de cre- minaciones hormonales aisladas, pues nos informan
cimiento, por lo cual estos pacientes alcanzan con sobre la capacidad funcional de la glándula que se
frecuencia una estatura mayor que la normal. Se de- investiga. En el hipogonadismo masculino secunda-
sarrollan proporciones corporales de tipo eunucoide, rio se utilizan dos pruebas fundamentales: la prueba
con predominio del segmento inferior sobre el su- de estimulación con HCGn y la prueba de estimula-
perior y de la cintura pélvica sobre la escapular. ción con LHRH. En el hipogonadismo secundario
El tejido conjuntivo es hipotrófico, y por ello sur- hay respuesta a la prueba de estimulación con HCGn,
gen tempranamente pliegues cutáneos que a los jó- pero no a la prueba de estimulación con LHRH.
venes les da apariencia geriátrica. La grasa se Estudio hipofisario anatómico. Radiografía de
deposita según el patrón femenino y aparece adipo- cráneo y silla turca, exámenes de fondo de ojo, de la
mastia. Desde el punto de vista psíquico suelen ser agudeza y del campo visual, y EEG; si fuese nece-
personas tímidas, con frecuentes alteraciones de la sario se indicarán otros, como TAC y RMN.
personalidad, por lo que rara vez logran adaptarse Estudio hipofisario funcional. Se indica para de-
del todo al medio social. terminar si existe déficit de otras esferas o ejes en-
El hipopituitarismo que ocurre durante la infan- docrinos.
cia, denominado enanismo hipofisario, tiene por con- En la figura 35.2 se presenta un algoritmo sim-
secuencia un enanismo armónico, con infantilismo plificado para el diagnóstico del hipogonadismo
sexual completo. Estos pacientes por lo general tie- masculino.

275
En algunos pacientes hipogonádicos secundarios
Hipogonadismo
masculino prepuberales se administra un tratamiento con HCGn
durante un tiempo prolongado, habitualmente no
menos de 12 semanas, para mejorar el tamaño testicu-
lar. Las dosis varían según la respuesta, por lo que se
Determinación de Aumentadas H. primario
gonadotropinas (testicular)
ajustan a cada individuo, y oscilan entre 1 500 y
3 000 UI, 1 a 3 veces por semana. Al lograr el au-
mento del testículo se continúa el tratamiento susti-
Normales o tutivo con andrógenos en la forma descrita antes.
disminuidas
Para los pacientes hipogonádicos que presenten
desajuste emocional y trastornos psíquicos, se debe
Prueba de LHRH No respuesta H. secundario solicitar la cooperación de un psicólogo o de un psi-
(hipofisario) quiatra.

Respuesta
HIPOGONADISMO
Prueba de HCGn Respuesta H. terciario
(hipotalámico)
FEMENINO
No respuesta
Concepto
Se denomina hipogonadismo femenino al déficit de
la función hormonal del ovario. La época de su apa-
H. primario
(testicular) rición y su relación con la pubertad determinan una
amplia variación clínica y por ello se considera a
esta alteración en dos estadios diferentes: prepuberal
Fig. 35.2. Algoritmo para el diagnóstico del hipogonadismo
masculino. y pospuberal.
Igualmente existen diferencias según se afecte la
Tratamiento región ovárica (hipogonadismo primario o hipergo-
nadotrópico), la hipófisis (hipogonadismo secunda-
Tratamiento de la causa
rio) o el hipotálamo (hipogonadismo terciario); los
El tratamiento del hipogonadismo masculino secun-
dos últimos son hipogonadismos hipogonadotró-
dario debe ser causal siempre que sea posible, por
picos.
ejemplo: resección quirúrgica de un tumor hipofisa-
rio, de tumores, infección, etc., el cual es seguido Clasificación
por el tratamiento sustitutivo.
I. Hipogonadismo femenino hipergonadotrópico
Tratamiento sustitutivo (primario)
El tratamiento con andrógenos es necesario en la gran 1. Disgenesia gonadal turneriana y sus variantes1
mayoría de los hipogonadismos secundarios. Al ini- 2. Disgenesia gonadal pura1
cio se utiliza una dosis de impregnación que equi- 3. Síndrome de Noonan
vale al doble o el triple de la de mantenimiento. Sus 4. Hipoplasia ovárica constitucional
efectos pueden observarse en el primer mes, pero 5. Polisomía gonosómica
generalmente no se alcanza una buena androgeniza- 6. Castración funcional
ción hasta después de 2 a 4 meses; los pacientes con • Infecciones
déficit de largo tiempo de evolución suelen respon- • Autoinmune
der en forma más lenta, por ello debe individualizarse • Agentes físicos
la duración del tratamiento de impregnación y man- • Enfermedad maligna
tenerlo hasta que se alcance un desarrollo satisfac-
torio de los caracteres sexuales secundarios. 1
Habitualmente ocasiona hipogonadismo prepuberal.

276
• Enfermedad degenerativa En 1938, Turner describió pacientes con baja ta-
• Idiopática lla, infantilismo sexual, cubitus valgus, pterigium
7. Castración quirúrgica2 colli y defectos congénitos múltiples.
8. Agenesia ovárica1
9. Distrofia miotónica2 Etiopatogenia
10. Síndrome de Werner2 Existe un fallo en la gametogénesis (no disyunción
11. Síndrome de ovarios resistentes2 durante la meiosis o pérdida de un cromosoma); se
12. Mutación inactivadora del gen del receptor produce generalmente una fórmula 45,XO, por lo
de FSH1 que se altera la maduración sexual. Hay pacientes
13. Mutación inactivadora del gen del receptor que presentan distintas líneas celulares y diferentes
de LH1 números y tipos de cromosomas, lo que recibe el
II. Hipogonadismo femenino hipogonadotrópico (se- nombre de mosaicismo.
cundario-terciario)
1. Síndrome de Sheehan2 Enfermedades asociadas
2. Panhipopituitarismo* El síndrome de Turner se asocia a DM, tiroiditis de
3. Hipopituitarismo parcial* Hashimoto, neurofibromatosis, acromegalia, HTA,
4. Hipopituitarismo selectivo de gonadotropina anaclorhidia y envejecimiento precoz.
• Traumatismo
• Tumores Frecuencia
• Infiltraciones
La frecuencia en recién nacidos hembras es de 0,4 %,
• Enfermedades degenerativas
pero disminuye al avanzar la edad a causa de la
• Hipofisitis autoinmune
muerte temprana por las malformaciones congéni-
• Yatrogenia
tas en muchos casos.
• Idiopática
5. Hiperprolactinemia2 Cuadro clínico
6. Enfermedades endocrinas
• Síndrome de Cushing2 Las enfermas con síndrome de Turner consultan por
• Hipotiroidismo2 distintas razones y el motivo suele estar relacionado
7. Displasia olfatogenital1 con la edad en que acuden al facultativo por primera
8. Enfermedades diencefálicas o hipotalámicas vez. En la etapa de recién nacida y primera infancia,
• Síndrome de Lawrence-Moon-Biedl la causa habitual es alguna malformación congéni-
• Síndrome de Prader-Willi ta; en la segunda infancia y en la época prepuberal
• Síndrome de Frölich es común la baja talla, además de algunas malfor-
9. Enfermedades cerebrales maciones, y durante el período puberal y pospube-
10. Mutación inactivadora del gen del receptor de ral consultan por la ausencia de maduración sexual
GnRH y la amenorrea primaria. Las pacientes turnerianas
rara vez tienen sangramiento vaginal espontáneo,
Hipogonadismo femenino éste es más frecuente en los casos que no poseen
cariotipo 45,XO, sobre todo si tienen línea celular
prepuberal primario 46,XX al nivel de la gónada; en éstas la amenorrea
secundaria puede ser la causa de consulta. En un
Disgenesia gonadal bajo porcentaje de enfermas existe retardo mental.
La baja talla, ya mencionada, es característica en
La disgenesia gonadal tiene distintas expresiones,
los casos XO.
una de las cuales es el síndrome de Turner, escogido
Las pacientes con síndrome de Turner presentan
como modelo para la descripción del hipogonadis-
un gran número de malformaciones congénitas
mo femenino prepuberal primario.
somáticas, esqueléticas y viscerales (Fig. 35.3).
1
Habitualmente ocasiona hipogonadismo prepuberal. Malformaciones de la piel y tejido celular subcu-
2
Habitualmente ocasionan hipogonadismo pospuberal. táneo. Entre los hallazgos dermatológicos están los
*
Las mismas causas del déficit selectivo. nevos pigmentados y el livedo reticularis de la piel;

277
se han señalado vitiligo, manchas café con leche y En la boca, la comisura de los labios está desvia-
raramente neurofibromas. En el tejido celular sub- da hacia abajo, en forma de “V” invertida o boca de
cutáneo hay edema de origen linfático, que no deja pez; se observa micrognalia, malformaciones y api-
godet, localizado en el dorso de la mano y pie, y ñamiento de los dientes o ausencia de algunos de
además, en piernas, rodillas y cuello. ellos, paladar alto u ojival y úvula bífida.
Del cuello. Hay pterigium colli y cuello alado o
palmado.
Del tórax. Es común el tórax escutiforme y en
algunos casos es infundibuliforme (pectus exca-
vatum).
De las extremidades. Las más frecuentes son el
cúbito valgo y la cortedad del cuarto metacarpiano;
otras anomalías son levodactilia, clinodactilia,
braquimetacarpianismo y deformidad de Madelung;
los dedos de la mano son cortos, anchos y romos,
con tendencia a ser iguales en toda su longitud.
En las extremidades inferiores hay alteraciones
de las rodillas (genu valgum, genu varum y genu
recurvatum); los pies pueden ser cortos y anchos,
los dedos en martillo y superpuestos y aparece
sindactilia; se encuentran pie varo, varo equino,
hallus valgus y cortedad de los metatarsianos.
Esqueléticas. Hay retraso de la edad ósea entre 2
y 4 años. En la mitad de los casos se encuentra
osteoporosis ligera o rarefacción del esqueleto,
especialmente en la columna vertebral y la pelvis,
malformaciones de la columna vertebral, cifosis,
escoliosis, alas del sacro pequeñas, epífisis verte-
bral, espina bífida a distintos niveles, hipoplasia de
vértebras, apófisis transversal prominente y sacrali-
zación de la quinta vértebra lumbar.
Fig. 35.3. Síndrome de Turner. Paciente de 17 años de talla
Viscerales. Las anomalías viscerales más conoci-
disminuida, ausencia de caracteres sexuales secundarios, boca
de pez, tendencia al pterigion coli y abundancia de lunares. das son las que afectan al aparato cardiovascular,
entre las que se encuentran la coartación y la este-
Anomalías nosis aórtica; otras menos frecuentes son la comu-
Del sistema piloso y de las uñas. El pelo y las cejas nicación interventricular, transposición de grandes
son abundantes y hay una implantación baja del ca- vasos, dextrocardia, ductus arterioso, estenosis pul-
bello en la nuca y frente. El vello sexual suele ser monar e HTA.
escaso o estar ausente. Las uñas son hipoplásicas, También se han hallado telangiectasias intestina-
estrechas, de forma rectangular, con aumento de la les, especialmente en el intestino delgado, que pue-
curvatura lateral y el borde distal elevado. den dar lugar a sangramiento digestivo.
De la cara. Las pestañas son largas y están mal Renoureterales. Las manifestaciones del tracto
implantadas; los ojos, grandes y “almendrados”, en urinario son mucho más corrientes. Las anomalías
posición antimongoloide, con hipertelorismo, epi- comunes son las de los uréteres (duplicación, obs-
canto, estrabismo y ptosis palpebral. Ocasionalmente trucción ureteropiélica y ausencia de los uréteres),
hay exoftalmos idiopático, enoftalmos, coloboma y alteraciones pielocaliciales (pelvis bífida, duplica-
catarata congénita. Orejas malformadas con implan- ción, dilataciones y reflujo pielocalicial) y malfor-
tación baja, nariz estrecha y delgada y raíz nasal de- maciones renales (riñón en herradura, malrotación
primida o aplanada, son otras alteraciones faciales. ectópica, ptosis quística e hidronefrosis).

278
Caracterización de los genitales y mamas. Los
genitales externos son infantiles y habitualmente se Hipogonadismo
femenino
halla hipoplasia o hipopigmentación de los labios
mayores y menores, clítoris de pequeño tamaño y
vagina estrecha pero de longitud normal.
No hay desarrollo mamario y en la edad pospu- H. primario
Determinación de Aumentadas
beral es notoria la hipoplasia e hipopigmentación de gonadotropinas (ovárico)
la auréola y el pezón. Se encuentran distintas ano-
malías en los pezones, como aplanamiento o inver- Normales o
sión y además, en más de la mitad de los casos, disminuidas
teletelia. H. secundario
Prueba de LHRH No respuesta (hipofisario)
Exámenes complementarios
Estudio citogenético. El 80 % de los casos son croma- Respuesta
tina sexual negativos, y el resto, por supuesto, cro-
matina positivos. El cariotipo más frecuente es 45,XO. Prueba de HMGn Respuesta H. terciario
Dermatoglifos. Investigación muy especializada (hipotalámico)
que tiene gran valor para el diagnóstico.
Gonadotropinas plasmáticas y urinarias. Se en- No respuesta
cuentran aumentadas.
H. primario
Examen radiológico. Llama la atención la osteo-
(ovárico)
porosis, el poco retraso óseo, la silla turca pequeña,
el ángulo carpal disminuido, el cuarto metacarpiano
corto y el desplazamiento del platillo tibial interno Fig. 35.4. Algoritmo simplificado para el diagnóstico de loca-
por hiperplasia del cóndilo femoral. lización anatómica del hipogonadismo femenino.
Ultrasonido ginecológico y laparoscopia. Son de
utilidad para precisar el grado de desarrollo de los Se utiliza también algún contraceptivo que con-
genitales internos y las características macroscópi- tenga cantidades iguales o superiores a 50 µg de
cas de las gónadas. etinilestradiol o equivalente a una dosis 2 a 3 veces
Citología funcional. La presencia de un extendi- mayor que la de mantenimiento, durante el tiempo
do atrófico es característico del hipogonadismo. necesario.
En la figura 35.4 se presenta un algoritmo sim-
plificado para el diagnóstico del hipogonadismo Dosis de mantenimiento
femenino. Etinilestradiol: 30-50 µg diarios durante 21 días del
ciclo menstrual, combinado con acetato de medroxi-
Tratamiento progesterona, 10 mg diarios los últimos 10 días, por
El tratamiento consiste en la sustitución hormonal vía oral, u otra progesterona equivalente. Se comien-
de la función ovárica. Es necesario utilizar inicial- za nuevamente a partir del quinto día del próximo
mente una dosis de impregnación estrogénica, para ciclo, con el mismo esquema.
la cual se administra estrógeno en forma continua Estrógenos conjugados: 0,625 a 1,25 mg diarios
en dosis 2 a 3 veces superior a la de mantenimiento durante 21 días del ciclo y acetato de medroxipro-
durante 3 a 6 meses o hasta alcanzar el desarrollo gesterona, 10 mg diarios durante los días 12 a 21 de
adecuado de los caracteres sexuales secundarios. cada ciclo o progesterona equivalente.
Contraceptivos orales: con 50 o más µg de
Dosis de impregnación etinilestradiol o equivalente en forma cíclica duran-
Se usa uno de los siguientes compuestos: te 21 días a partir del quinto día del ciclo.
Etinilestradiol: 100 o 200 µg diarios por vía oral. Por la acción que tienen los estrógenos sobre la
Estrógenos conjugados: de 2,5 a 3,75 mg diarios función epifisaria se recomienda iniciar el tratamiento
por vía oral. lo más tardíamente posible, cuando la maduración

279
de la epífisis esté próxima a su terminación, si no una trombosis venocapilar, con el consiguiente in-
existen factores psicológicos en contra. farto hemorrágico. Otros autores consideran que el
Algunas han obtenido crecimiento lineal con el síndrome resulta de los infartos isquémicos ocasio-
uso de esteroides anabólicos previo a la medicación nados por una coagulación intravascular disemina-
estrogénica. da, que puede acompañar a ciertas complicaciones
Hay casos en que es necesario un tratamiento obstétricas (placenta previa).
ortopédico por las anomalías esqueléticas; en otros, Desde el punto de vista anatomopatológico la le-
son recomendables las correcciones de las malfor- sión resultante es una fibrosis de la hipófisis con
maciones somáticas por un especialista en cirugía pequeños nidos residuales de células.
estética, y a veces hay que realizar tratamiento qui-
rúrgico de algún trastorno visceral. Cuadro clínico
La extirpación quirúrgica de las gónadas se reco- Hay diferencias en el grado de afectación hipofisa-
mienda en las pacientes con signos de virilización y ria, y la rapidez de comienzo depende del volumen
en aquéllas que presentan un cromosoma Y en su y de la índole de la lesión. Existe imposibilidad para
fórmula cromosómica, por la posibilidad de que se la lactancia posparto, amenorrea, atrofia genital, dis-
desarrollen cambios carcinogenéticos. minución del deseo sexual y pérdida del vello axilar
Es importante el manejo adecuado de la esfera y pubiano. Como expresión del déficit de ACTH se
psíquica. produce astenia, anorexia, pérdida de peso, náuseas,
El tratamiento con hormonas de crecimiento pue- vómitos, hipoglicemia, hipotensión arterial y colap-
de ser útil para incrementar la talla. so circulatorio. El déficit de TSH produce piel fría y
seca, constipación, intolerancia al frío, retardo en la
Hipogonadismo femenino ideación, pulso lento y tensión arterial baja.
Con gran frecuencia ocurren episodios hipogli-
pospuberal secundario cémicos atribuibles al fallo corticoadrenal o soma-
totrópico. La causa de muerte es la insuficiencia
Síndrome de Sheehan corticosuprarrenal, con infección precipitante o sin
ella.
Se escoge el síndrome de Sheehan como modelo para
la descripción del hipogonadismo pospuberal secun- Exámenes complementarios
dario. La necrosis hipofisaria posparto (síndrome de
Sheehan) supone actualmente menos del 25 % de Exámenes generales
Hemograma. Muestra un grado variable de anemia.
los casos de hipopituitarismo del adulto. La mejora
Glicemia. Hay hipoglicemia, generalmente en
en la asistencia obstétrica ha influido en la disminu-
ayunas.
ción de su incidencia.
Colesterol. Está elevado.
El hipopituitarismo es un síndrome caracterizado
Ionograma. Se encuentran hiponatremia e hiper-
por el fallo en la secreción de las hormonas sinteti-
caliemia.
zadas en el lóbulo anterior hipofisario, el cual se
Electrocardiograma. Hay bajo voltaje.
caracteriza por atrofia secundaria de las gónadas, la
glándula tiroides y la corteza suprarrenal. Se ha uti- Exámenes específicos endocrinos
lizado el término panhipopituitarismo para indicar Función tiroidea. La T4 plasmática, el PBI y la cap-
la ausencia total de toda la secreción hipofisaria. tación de I131 en 24 h, están disminuidos. Se encuen-
tran valores bajos o normales de TSH.
Etiopatogenia y anatomía patológica Función adrenal. El cortisol plasmático y los 17-
Sheehan relacionó este cuadro con accidentes obs- cetosteroides muestran cifras bajas y la prueba de
tétricos graves acompañados de hipovolemia y sobrecarga de agua es anormal.
shock, que conducirían a un espasmo arteriolar en • El ACTH plasmático se halla disminuido.
el seno de una hipófisis hipertrófica a expensas de • En la prueba de hipoglicemia inducida por la
las células lactotropas (células del embarazo). El insulina no hay aumento del ACTH ni del
espasmo produciría una isquemia de la glándula o cortisol plasmático.

280
Función gonadal tituido fundamentalmente por hirsutismo hipertrófico
• El extendido vaginal es hipotrófico o atrófico. del clítoris, amenorrea u oligomenorrea, atrofia
• Los estrógenos plasmáticos y urinarios están mamaria, voz grave, acné y calvicie.
disminuidos.
• Las Gn plasmáticas y urinarias están por debajo Clasificación
de lo normal. 1. Hirsutismo idiopático
2. Hirsutismo de base genética o constitucional
Tratamiento a. Familiar
Tratamiento preventivo b. Racial
Evitar las hemorragias posparto y poslegrado. c. Enfermedades genéticas con malformaciones
somáticas
Tratamiento hormonal sustitutivo • Síndrome de Cornelia de Lange
La primera y más importante hormona que se debe • Enanismo con cabeza de pájaro de Seckel
remplazar es el cortisol. La hidrocortisona es el • Trisomía E
glucocorticoide de elección, en dosis de 20 a 30 mg/ • Síndrome de Hurler (gargolismo)
día, repartidos en 3 tomas, o bien suministrar dos • Hipertrofia gingival congénita
tercios de la dosis por la mañana y el resto, 12 h des- 3. Hirsutismo por administración de medicamentos
pués. La paciente debe ser instruida para doblar la a. Con virilización
dosis en situación de enfermedades febriles meno- • Androgénica
res. En caso de afecciones graves o de intervención • Progestágenos
quirúrgica, se administra hidrocortisona, 100 o 200 mg • Esteroides anabólicos con acción androgénica
por vía EV cada 8 h. b. Sin virilización
El tratamiento del déficit de TSH se realiza con • Difenilhidantoína
levotiroxina sódica, en dosis de 1,5 a 2 µg/kg/día;
• Diazóxido
en cardiópatas la dosis es de 25 µg/día.
Déficit de gonadotropina. En la mujer menor
• Hexaclorobenceno
de 40 años, se emplean preparados secuenciales con • Corticosteroides
etinilestradiol, 0,1 µg/día y se añade medroxipro- • ACTH
gesterona, 5 a 10 mg/día los días 12 al 21 del ciclo. • Cobalto
• Estreptomicina
• Penicilamina
HIRSUTISMO 4. Hirsutismo de causa endocrina
a. De origen hipotálamo-hipofisario
Y VIRILIZACIÓN • Enfermedad de Cushing
• Acromegalia
Concepto • Hiperprolactinemia
• Stress
Hipertricosis. Es la presencia de vellos de cualquier
b. De origen adrenal
tipo en mayor abundancia de lo normal en sitios de
• Tumor adrenal virilizante (síndrome adreno-
crecimiento habitual; no se considera como expre-
genital)
sión de hipersecreción androgénica o hiperrespuesta
periférica. • Síndrome de Cushing
Hirsutismo. Es el crecimiento excesivo de vello • Adenoma suprarrenal
de cualquier tipo en sitios no habituales o fuera del • Carcinoma suprarrenal
tiempo normal de aparición. También puede defi- • Síndrome de ACTH ectópico
nirse como brotes de vello ambisexual en el niño o • Hiperplasia adrenal congénita virilizante de
del vello sexual en la mujer. comienzo prepuberal o pospuberal
Virilización. Es el cuadro clínico producido por c. De origen gonadal
exceso de hormonas androgénicas en la mujer, cons- • Tumores ováricos virilizantes

281
• Arrenoblastoma Clasificación
• Tumor de la teca y la granulosa I. Ginecomastia que se presenta en estados fisioló-
• Tumores de células hiliares gicos
• Cistoadenoma mucinoso 1. Del recién nacido
• Carcinoma metastásico 2. De la pubertad
• Disgerminoma 3. De la senectud
• Gonadoblastoma II. Ginecomastia que se presenta en el curso de di-
• Síndrome de ovarios poliquísticos versas enfermedades
• Hipertecosis ovárica 1. Aumento de la producción de estrógenos
• Disgenesia gonadal mixta a. Aumento de la producción testicular de
• Hiperplasia de células hiliares estrógenos
• Perimenopausia • Tumores testiculares
• Seudohermafroditismo masculino con feno- • Carcinoma broncogénico y otros tumores
tipo femenino productores de HCGn, hermafroditismo
d. Otras enfermedades endocrinas verdadero
• Lipodistrofia generalizada congénita b. Aumento del sustrato por la aromatasa
• Hipotiroidismo juvenil extraglandular
• Síndrome de Stewart-Morell-Morgani • Enfermedad suprarrenal (tumor, hiperpla-
5. Otras causas o asociaciones: sia)
a. Obesidad • Enfermedad hepática
b. Carcinoma del endometrio • Ayuno
c. Porfiria • Tirotoxicosis
•Cutánea tardía c. Aumento de la actividad de las aromatasas
• Intermitente glandulares
d. Anorexia nerviosa • Obesidad
e. Inanición • Congénito
f. Diabetes mellitus 2. Aumento de la producción de andrógenos
a. Hipogonadismo hipergonadotrópico
• Anorquia congénita
GINECOMASTIA • Síndrome de Klinefelter
• Alteraciones de la biosíntesis de testoste-
Concepto rona
• Infección testicular adquirida (orquitis,
Es el aumento de tamaño de la glándula mamaria traumatismos, irradiación, quimioterapia,
del varón, con un incremento concéntrico del tejido
enfermedades neurológicas o granuloma-
glandular.
tosas)
Se trata de un trastorno frecuente, pues el 70 %
b. Hipogonadismo hipogonadotrópico
de los varones en edad puberal desarrollan gineco-
mastia y el 30 % de los hombres mayores de 40 años
• Deficiencia aislada de gonadotropinas
presentan cierto grado de mamas palpables. El tras- • Panhipopituitarismo
torno es unilateral o bilateral. La acumulación de 3. Resistencia a la acción de los andrógenos
tejido adiposo puede confundirse con la ginecomas- • Síndrome de insensibilidad a los andrógenos
tia, por lo que para el diagnóstico real se requiere la • Síndrome de Rifestein y relacionados (Dubbs,
palpación clara del tejido glandular. Rosewarters, Dreyfus)
El grado de ginecomastia es muy variable y abar- 4. Ginecomastia de alimentación
ca desde la presencia de un botón subareolar de pe- 5. Misceláneas
queño tamaño, hasta el desarrollo de las mamas con • Hiperprolactinemia
similares características a las de la mujer adulta. • Acromegalia

282
• Síndrome de Cushing • Clomifeno
• Traumatismo local • Testosterona (enantato y propionato)
• Enfermedad crónica (diabetes, Tb pulmonar) • Ketoconazol
• Macromastia puberal persistente • Metronidazol
6. Medicamentos • Cimetidina
• Dietiletilbestrol • Espirolactona
• Anticonceptivos orales • Captopril
• Digitálicos • Diazepam.
• Gonadotropinas

283
36

OBESIDAD

Concepto obesidad, está basado en la existencia de un mayor


número de individuos obesos dentro de agrupacio-
La obesidad, definida como un exceso de tejido adi-
nes familiares con estos antecedentes (cuando un pro-
poso, que siempre se manifiesta por un peso inade-
cuado, es una condición que afecta a sujetos de todas genitor es obeso, la posibilidad de que un hijo lo sea
las edades y sexos; además, se asocia o favorece la es del 50 %; cuando ambos progenitores lo son, ésta
aparición de otros procesos patológicos como dia- se eleva al 80 %); esto ha sido desmostrado en los
betes, hipertensión arterial, hiperlipoproteinemias, estudios realizados en gemelos monocigotos adop-
artrosis y afecciones respiratorias, lo cual hace que tados en la primera infancia, en los que la instala-
la morbimortalidad del obeso sea superior a la del ción de obesidad se relaciona con antecedentes de
sujeto con normopeso, hecho intuido y puesto de este tipo en los padres biológicos, sin guardar rela-
manifiesto ya por Hipócrates hace dos mil años, ción con la de los padres que los adoptaron ni con
quien manifestaba que “la muerte súbita es más fre- sus hábitos dietéticos.
cuente en el sujeto obeso que en el delgado”. Por otro lado, existen numerosas evidencias que
demuestran la influencia del ambiente (estilo de vida,
Fisiopatología patrón de conducta, etc.) en su aparición y manteni-
Al referirnos a la obesidad hay que hacerlo, o al miento, influencia que, por otro lado, muestra im-
menos pensarlo, en plural, ya que son diversos los portantes diferencias individuales que hacen admitir
cuadros englobados en este concepto. Evidentemen- la existencia de herencias susceptibles de convertir
te, la acumulación patológica de grasa en el tejido a un individuo en obeso en presencia de determina-
adiposo, que caracteriza a cualquier tipo de obesi- das condiciones de conducta y estilo de vida; así, el
dad, tiene como base un desequilibrio en el balance ingreso de energía no sólo incluye el contenido ca-
energético: el gasto de energía por el organismo lórico total, sino que tiene en cuenta otros aspectos,
siempre es menor que la ingestión calórica. como la composición de la dieta en macronutrientes
y micronutrientes, su palatabilidad, la metabolización
FACTORES PATOGÉNICOS DE LA OBESIDAD de los alimentos y la influencia del apetito y de la
saciedad.
• Alteraciones de la ingestión Factores neuroendocrinos. La ingestión de alimen-
• Factores génetico-ambientales tos es un acto voluntario que el individuo efectúa
• Factores neuroendocrinos cuando experimenta la sensación de apetito, regula-
• Alteraciones del gasto energético (termogénesis ) do por mecanismos neurohormonales dirigidos por
• Metabolismo basal el SNC, el cual responde a diferentes estímulos. Es-
• Termogénesis inducida por el ejercicio tudios experimentales en animales han permitido
• Termogénesis inducida por la dieta diferenciar dos áreas hipotalámicas perfectamente
• Termogénesis adaptativa definidas, cuya misión es contrapuesta: el núcleo
ventromedial o “centro de la saciedad” y el núcleo
Alteraciones de la ingestión lateral o “centro del hambre”. En los últimos años se
Factores genético-ambientales. El papel de los fac- ha conocido la influencia positiva o negativa que
tores heredados en la aparición y perpetuación de la sobre el apetito tienen ciertas hormonas y neurotras-

284
misores, así como la participación del sistema ner- composición de la dieta, con la probada participa-
vioso simpático, tanto en la regulación del apetito a ción del músculo esquelético, hígado y tejido adi-
nivel del hipotálamo, como en las consecuencias poso marrón situado en diferentes partes del cuerpo
endocrinometabólicas derivadas de su alteración; (área interescapular, subescapular, axilar, nuca, pa-
no olvidar, además, la acción de determinadas hormo- quetes intercostales, etc.), regulado por factores
nas a diferentes niveles, lo cual justifica la patogenia neuroendocrinos (sistema nervioso autónomo, sis-
de la obesidad en ciertas enfermedades endocrinas tema nervioso central, insulina, glucagón, catecola-
(síndrome de Cushing, hipotiroidismo, insulinoma, minas). La alteración de uno o varios de estos
ovario poliquístico, etc.). mecanismos responsables en la producción de ca-
lor, puede hacer que exista en algunos obesos un
Alteraciones del gasto energético auténtico ahorro energético.
La obesidad no siempre está asociada a hiperfagia y
ello induce a pensar que el gasto de energía está al- Clasificación
terado en estos individuos. La obesidad se clasifica desde cuatro puntos de
Metabolismo basal. A la vista de los resultados vista:
actuales, es probable que determinados factores ge- a. El grado de obesidad
néticos influyan en el metabolismo basal (gasto ca- b. El tipo celular
lórico en reposo empleado en el mantenimiento de c. La distribución de la grasa
las funciones vitales), menor en el sujeto obeso que d. La etiología
en el delgado; si tenemos en cuenta que este gasto
comporta el 60 al 75 % del total, puede deducirse Según el grado de obesidad
que pequeñas alteraciones en él podrían suponer una En la actualidad se maneja fundamentalmente el ín-
fuente de ahorro calórico. dice de masa corporal (IMC) o índice de Quetelet,
Termogénesis inducida por el ejercicio. Global- por su gran fiabilidad y facilidad de cálculo.
mente, el 30 % de la energía gastada a diario por El IMC se halla mediante la ecuación:
una persona se debe al ejercicio físico, pero en el
paciente obeso el sedentarismo es la norma, y a IMC = Peso (kg)
mayor peso existen menos facultades físicas para el Talla (m)
ejercicio. Aunque no hay diferencias entre el sujeto
obeso y el delgado, respecto al gasto requerido du-
rante el ejercicio (según el estudio de Bouchard rea- Según el IMC se clasifica a los sujetos en cuatro
lizado en gemelos, quedó establecida una diferencia grados:
significativa, genéticamente condicionada, en el gas- Grado 0: normopeso, IMC = 20-24,9
to en respuesta al ejercicio), no es posible descartar Grado 1: sobrepeso, IMC = 25-29,9
que esta alteración genética sea en parte responsa- Grado 2: obesidad, IMC = 30-39,9
ble de la aparición de la obesidad. Grado 3: obesidad mórbida, IMC > 40
Termogénesis inducida por la dieta. El efecto tér- Esta gradación coincide con la propuesta por
mico de los alimentos supone un gasto energético Garrow en 1981.
que varía entre el 15 y el 20 % del total diario, aso-
ciado a la digestión, absorción, transporte y asimi- Según el tipo celular
lación de nutrientes. Los datos disponibles en la De acuerdo con el patrón de celularidad adiposa, la
actualidad son contradictorios, aunque hay trabajos obesidad se clasifica en hiperplásica, que se distin-
que señalan que la termogénesis inducida por la dieta gue por un aumento del número de adipocitos (de
es defectuosa en determinados individuos y por tamaño normal) y por su inicio en la primera infan-
lo tanto, contribuye en parte al desarrollo de la obe- cia; e hipertrófica, caracterizada por el aumento del
sidad. tamaño y también del número de adipocitos cuando
Termogénesis adaptativa. Se define como tal el se llega a un peso crítico que se ha estimado en un
consumo de energía en respuesta a determinados exceso del 75 % del peso ideal o un IMC > 35. Este
estímulos, como la exposición al frío o la propia patrón celular sería particular de la obesidad del adulto

285
y además guarda relación con el morfotipo androide Sistema cardiovascular. Hay disnea en el 80 %
(obesidad visceral). de los pacientes, hipertensión arterial, ateromatosis,
insuficiencia coronaria, accidentes vasculares ence-
Según la distribución de la grasa fálicos, insuficiencia vascular periférica y várices.
Fue Vague, en 1947, quien dio una clasificación ana- Sistema respiratorio. Las manifestaciones respi-
tómica con los términos androide y ginecoide, por ratorias se han englobado dentro del conocido sín-
ser características del hombre y de la mujer, respec- drome de Pickwick (obesidad, hipersomnia, disnea,
tivamente, aun cuando ambos tipos se pueden mani- cianosis, poliglobulia, cor pulmonale crónico y res-
festar indistintamente en ambos sexos (la obesidad piración periódica). En la actualidad, asociado al
androide se caracteriza por un aumento de la grasa síndrome de Pickwick se habla con preferencia del
en el tronco y el abdomen, mientras que la ginecoide síndrome de apnea del sueño (SAS), cuyas expre-
distribuye la grasa en la región femoroglútea). Estu- siones clínicas se resumen así:
dios recientes iniciados por Larsson han puesto de a. Hipersomnia diurna brusca.
manifiesto que la obesidad androide o abdominal, b. Ronquidos.
determinada por la ecuación perímetro cintura/ca- c. Apneas durante el sueño de 30 o más segundos
dera > 0,95 cm en el hombre, o > 0,80 cm en la de duración y movimientos anormales, como
mujer, constituye un factor de riesgo cardiovas- sacudidas de brazos y piernas, relacionados con
cular de primera magnitud. otras alteraciones: trastornos del nivel de con-
ciencia al despertar, cefalea matutina y altera-
Según la etiología ciones psicopatológicas que van desde la
La obesidad exógena o por sobrealimentación (in- irritabilidad fácil hasta una auténtica depresión
dependientemente de cómo se encuentren los meca- reactiva. A pesar de su gravedad, el SAS que
nismos termogénicos de estos sujetos o cuál sea su aparece en el obeso mejora espectacularmente
carga genética), constituye más del 99 % de todas con la reducción ponderal.
las obesidades y a ella deberán encaminarse nues-
tros esfuerzos terapéuticos; sin embargo, no hay que Sistema genitourinario. A veces hay impotencia
olvidar que un pequeño porcentaje se debe a enfer- y esterilidad.
medades, sobre todo endocrinas (hipotiroidismo, sín- Sistema osteomioarticular. Se encuentran dolor
drome de Cushing, insulinoma, hipogonadismos, óseo y articular, deformidades, hiperuricemia que
ovarios poliquísticos, etc.) y genéticas (síndromes causa ataques repetidos de gota y artrosis que pre-
de Laurence-Moon-Biedl, de Prader-Willi y de domina en los miembros inferiores y la columna
Alstroms), o es secundario a la ingestión de diferen- vertebral. El sedentarismo entra a formar parte del
tes medicamentos, como esteroides, psicofármacos ciclo vital del obeso, de tal manera que se entra en
y contraceptivos, entre otros. un círculo vicioso difícil de romper (obesidad-
artrosis-sedentarismo-obesidad).
Manifestaciones clínicas
El síntoma capital lo constituye el sobrepeso. En el Exámenes complementarios
examen físico de todo paciente obeso se encuentran No se requieren investigaciones para realizar el diag-
síntomas característicos. nóstico de obesidad exógena. Se indicarán para de-
Piel. Está húmeda, fría, sudorosa y friable (tro- tectar complicaciones, diferenciarla de otras causas
fismo disminuido). Es frecuente la acantosis nigri- de obesidad y evaluar el tratamiento.
cans (estrías negruzcas en el cuello y pliegues) Hemograma. Es habitual una poliglobulia.
asociada a diabetes e insulinorresistencia; eccema, Gasometría. Hay hipoxia e hipercapnia.
piodermitis, intertrigo, celulitis y úlceras. Pruebas funcionales respiratorias. Muestran una
Sistema digestivo. Con frecuencia hay constipa- insuficiencia ventilatoria restrictiva.
ción por atonía y distensión abdominal, hernias, he- Acido úrico. Está elevado en los casos de gota..
morroides, alteraciones hepáticas por infiltración Alteraciones de los lípidos y lipoproteínas plas-
grasa y colelitiasis. máticas. Hay una hipertrigliceridemia por aumento

286
de las VLDL (lipoproteínas de muy baja densidad, dades leves o moderadas (IMC:25 a 35). No
aterógenas por excelencia). necesitan suplemento vitamínico o mineral y
En los sujetos de 30 años o más, se indicará una las bebidas edulcoradas y el alcohol quedan
PTG (prueba de tolerancia a la glucosa) y en mayo- prohibidos. Se aconseja respetar al máximo el
res de 40 años, un electrocardiograma; evaluación número de comidas (5 tomas por día) para evi-
psicológica, en los casos con alteraciones psíquicas. tar que el paciente esté demasiadas horas sin
comer, con lo cual la sensación de hambre au-
Complicaciones menta.
La obesidad es tan común en la diabetes mellitus no • Dietas de muy bajo contenido calórico. Contie-
insulinodependiente (DMNID) que sus efectos me- nen entre 500 y 800 kcal/día si se utilizan ali-
tabólicos se funden con la enfermedad de base. La mentos naturales; las comerciales proveen
insulinorresistencia es una característica, tanto de la alrededor de 400 kcal/día con proteínas de alto
obesidad como de la DMNID. La hiperinsulinemia valor biológico. Están indicadas en aquellos ca-
es el elemento común que explica la asociación de sos en los que la pérdida de peso es relativa-
obesidad, DMNID, hipertrigliceridemia, hipercoles- mente urgente (SAS, insuficiencia respiratoria,
terolemia, hiperuricemia, hipertensión arterial e in- artrosis invalidante). El uso de este tipo de die-
tolerancia a la glucosa, es decir, el denominado tas tan restrictivas se acompaña casi siempre
síndrome X (síndrome de resistencia insulínica). El de hiperuricemia, artritis gotosa, hipotensión
patrón general de alteraciones del síndrome X es un ortostática, o dolor abdominal, que, sin embar-
perfil de riesgo altamente aterogénico, con aumento go, suelen ser mínimos con la adecuada admi-
de la presencia de enfermedad cardiovascular. Estas nistración de líquidos acalóricos (2 a 3 litros
alteraciones metabólicas y las osteoarticulares, so- por día) y de alopurinol.
bre todo de los miembros inferiores, constituyen los Con respecto a las dietas de ayuno, es un
factores que ensombrecen el pronóstico del obeso tratamiento inaceptable en la actualidad por sus
por las repercusiones que tienen sobre la expectati- efectos indeseables.
va de vida. El paciente obeso es más propenso a su-
frir accidentes, y a su vez, éstos representan mayor Ejercicio físico. La práctica diaria de cualquier
peligro, y por lo tanto, peor pronóstico. Además, el ejercicio físico es una indicación necesaria en el tra-
obeso constituye un paciente quirúrgico de alto riesgo. tamiento para sacar al obeso del hábito sedentario,
muchas veces inducido por la propia condición de
Tratamiento obesidad. En ocasiones, se recomienda realizar es-
Tratamiento profiláctico tas actividades en grupo.
Hay que mejorar los hábitos nutricionales de la po- Fármacos. Son de dos tipos: anorexígenos y
blación y promover una vida sana que incluya la dieta termogénicos.
y la práctica de ejercicios. Si es difícil modificar las • Anorexígenos. Dentro de estos fármacos se dife-
costumbres y el estilo de vida del individuo adulto, rencian dos grupos. Los derivados de las anfeta-
al menos debe intentarse crear un estado de concien- minas (actúan por mediación de catecolaminas);
cia que permita un cambio de hábitos en individuos su uso queda bastante restringido a aquellos pa-
jóvenes. cientes tranquilos, somnolientos y normoten-
sos. El segundo grupo son los mediados por la
Tratamiento de la afección serotonina (sustancia que liberada en la termi-
Dietoterapia. Constituye siempre el primer paso que nación sináptica, tiene un potente efecto
se debe seguir en el tratamiento de la obesidad. La anorexígeno); están indicados en obesos
dieta podrá ser el único recurso o prescribirse acom- hiperactivos, con un gran componente de an-
pañada de otras medidas coadyuvantes que procu- siedad y tendencia a la bulimia; no existe con-
ren una mayor tolerancia y adhesión. traindicación para utilizarlos en la obesidad
• Dieta baja en calorías. Se define como aquélla asociada a diabetes e hipertensión.
que provee entre 800 a 1 500 kcal por día y • Termogénicos o calorígenos. Dentro de este tipo
está fundamentalmente indicada en las obesi- de fármacos se incluyen las hormonas tiroideas

287
y el dinitrofenol, que ya no se utiliza en la ac- CIRUGÍA DE LA OBESIDAD
tualidad; los agentes simpaticomiméticos
(efedrina) y los agonistas beta-3 adrenérgicos 1. Bloqueo del eje hipotálamo-digestivo
no deben utilizarse indiscriminadamente, por • Vagotomía troncular
lo que sus indicaciones son bastante restrin- 2. Reducción de la capacidad gástrica
gidas. • Gastroplastia vertical en anillo
• Gastroplastia horizontal
Tratamiento quirúrgico • Balones intragástricos
3. Aceleración del tránsito intestinal
En algunos casos en que el tratamiento médico no
• By-pass (yeyunocólico, yeyunoilial, gastroilial)
es totalmente efectivo, la cirugía puede aportar al- 4. Reducción del volumen de grasa
gún beneficio. Son numerosas las técnicas ideadas, • Dermolipectomía
pero hay que tener en cuenta que son cruentas y no • Liposucción
exentas de graves riesgos, por lo que su determina- 5. Bloqueo de alimentos sólidos
ción debe fundamentarse en bases muy sólidas. • Cerclaje mandibular
Indicaciones de la cirugía. La cirugía está indi-
cada en las situaciones siguientes: Terapia psicológica y conductual
La obesidad es una enfermedad crónica y como tal
1. Fracaso del tratamiento médico. necesitará un soporte médico continuo. Es necesa-
2. Obesidad grave o mórbida, como tratamiento rio que el obeso se reafirme en su motivación para
coadyuvante en pacientes muy afectados por perder peso con el apoyo del psicólogo, que le ayu-
problemas articulares, cardiovasculares, respi- dará a superar momentos difíciles y actuará en la
ratorios, etc. modificación de la actitud del individuo frente al
3. Edad superior a 20 años e inferior a 60. alimento.

288
37
TRASTORNOS DEL METABOLISMO
DE LOS LÍPIDOS.
LAS HIPERLIPOPROTEINEMIAS
Aunque el origen de la esclerosis es multicausal, se fundamentales de las membranas y organelas celu-
ha demostrado que existe una estrecha relación en- lares, así como la mayor fuente de energía metabóli-
tre ella y las alteraciones de las concentraciones de ca. Además, algunos de ellos son precursores de
las lipoproteínas (LP) plasmáticas. Por otro lado, sustancias importantes como las prostaglandinas y
las consecuencias clínicas de la aterosclerosis, tales la vitamina D; así, el colesterol constituye el sustra-
como: cardiopatía isquémica, enfermedad cerebro- to sintético para la formación de hormonas esteroi-
vascular y arteriopatía periférica, constituyen las deas y ácidos biliares en tejidos especializados.
principales causas de morbilidad y mortalidad en Los principales lípidos del organismo son los tri-
los países desarrollados. Así, las alteraciones vascula- glicéridos (TG), el colesterol y los fosfoslípidos (FL).
res ateroscleróticas son favorecidas por diversos Al no poder circular libremente en un medio hidro-
factores, cuatro de los cuales figuran como factores salino como la sangre, se necesita de un sistema de
de riesgo de primer orden, es decir, patógenos por transporte que posibilite la solubilización de los
sí mismos: las hiperlipoproteinemias (HLP), diabe- lípidos en el plasma, para lo cual ellos forman com-
tes mellitus (DM), hipertensión arterial (HTA) y el plejos con proteínas especializadas llamadas apoli-
tabaquismo. Sin embargo, la aterogenicidad difiere poproteínas. Los complejos formados por un lípido
según las diversas clases de LP. No obstante, ensayos y una apolipoproteína se denominan LP.
clínicos multicéntricos, controlados, aleatorios y Las LP plasmáticas son una serie de macromolé-
enmascarados de miles de pacientes, han demostrado culas complejas o grandes agregados de lípidos y
que existe una relación causal entre la hipercoleste- proteínas, cuya función es empaquetar los lípidos
rolemia y la aterosclerosis, y que la normalización insolubles en el plasma y transportarlos desde los
de los lípidos plasmáticos ha reducido de manera lugares de síntesis (intestino e hígado) hasta los de
significativa el riesgo de cardiopatía coronaria, tan- consumo o almacenamiento, es decir, a los tejidos
to en pacientes con enfermedad coronaria previa periféricos y desde éstos, devolver el colesterol al
como en aquéllos que no la tenían al inicio del estu- hígado para su eliminación en forma de ácidos
dio. Por otro lado, el mejoramiento de las técnicas biliares.
para las determinaciones de los lípidos y la impor- Su estructura se caracteriza por poseer un núcleo
tancia de las HLP, dada su relación con las enfer- central o core hidrófobo formado por lípidos no po-
medades vasculares, ha motivado un interés lares (colesterol esterificado y triglicéridos) y una
creciente por su diagnóstico. capa superficial o corteza que contiene compuestos
más polares (colesterol no esterificado, fosfolípidos
y apoproteínas). Las apoproteínas no sólo desempe-
LIPOPROTEÍNAS ñan un papel fundamental en el mantenimiento de la
estructura de la partícula lipoproteica, sino que tam-
bién intervienen en el metabolismo de éstas, en el
Concepto y estructura que ejercen distintas funciones, ya que actúan como
Los lípidos se definen como sustancias orgánicas activadoras o inhibidoras de enzimas e interaccionan
insolubles en agua, indispensables para el organis- con receptores celulares específicos. Las partículas
mo ya que constituyen componentes estructurales lipoproteicas se diferencian entre sí por la distinta

289
proporción de colesterol, triglicéridos y fosfolípidos CARACTERÍSTICAS FISICOQUÍMICAS
que contienen, así como por las diferentes apopro- DE LAS PRINCIPALES CLASES DE LP
teínas en su estructura, todo lo cual les confiere dis-
tintas propiedades fisicoquímicas. En la actualidad Lipoproteína Densidad Contenido de lípidos (%)
(g/dl)
las LP se clasifican según su densidad específica (me- TG Colesterol FL
diante centrifugación) o su movilidad electroforética
(por electroforesis) en diferentes familias o clases. Quilomicro- 0,95 80 - 95 2-7 3-9
nes
La densidad de las LP aumenta al disminuir su
VLDL 0,95 a 1,006 55 - 80 5 - 10 10 - 20
contenido en TG y al aumentarlo en proteínas, por IDL 1,006 a 1,019 20 - 50 20 - 40 15 - 25
lo que al separar una mezcla de LP por ultracentri- LDL 1,019 a 1,063 5 - 15 40 - 50 20 - 25
fugación se obtienen 4 fracciones; las menos densas HDL 1,063 a 1,210 5 - 10 15 - 25 20 - 23
que el agua flotan en la superficie. (Fig. 37.1 a).
Por su movilidad en un campo eléctrico, las par- Lipoproteínas de densidad intermedia (IDL, inter-
tículas migran en un medio (papel, gel) en condicio- mediate density lipoproteins), de 1,006 a 1,019 g/dl.
nes habituales desde el electrodo negativo al positivo Lipoproteínas de baja densidad (LDL, low density
y aumentan la velocidad de migración en propor- lipoproteins), de 1,019 a 1,063 g/dl. Están compuestas
ción inversa a su tamaño y directa a la carga negati- en su mayoría por colesterol (casi el 50 %) y FL.
va de éstas (Fig. 37.1 b). Lipoproteínas de alta densidad (HDL, high density
Las principales familias o clases de LP son: lipoproteins), de 1,063 a 1,210 g/dl. Están constitui-
das en un 50 % por proteínas, mientras que los fos-
folípidos y los ésteres de colesterol constituyen los
Ultracentrifugación Electroforesis principales componentes de los lípidos. Al poseer la
Quilomicrones - Quilomicrones (Q) mayor densidad, ocupan el fondo de la muestra
VLDL lipoproteica total y tienen movilidad electroforética
LP βeta (LDL) alfa (alfalipoproteínas).
LDL Lipoproteína (a) o Lp (a), es un nuevo tipo de LP
LP Pre βeta (VLDL)
HDL
que ha cobrado especial relevancia en los últimos
LP Alfa (HDL) años, porque se va configurando cada vez más como
+ factor de riesgo independiente. Es parecida a la LDL,
a b pero su molécula de Apo-B100 está unida de forma
covalente por puentes disulfuro a una gran glico-
Fig. 37.1 Separación de las lipoproteínas por: a. ultracentrifu-
gación y b. electroforesis.
proteína adicional, la apo (a). Esta modificación de
la Apo-B100 hace que la Lp (a) siga rutas metabólicas
diferentes a las de la LDL, que no son bien conoci-
Quilomicrones (Q) son las partículas de mayor
das aún. La Apo (a) es homóloga al plasminógeno y
tamaño y menor densidad (d < 0,95 g/dl). Más del
es posible que interfiera con el enlace de éste a sus
95 % de su peso corresponde a TG y menos del 1 %
receptores, y por tanto, inhiba la formación de la
a proteínas. Son las que flotan en la superficie. Tie-
plasmina y la trombólisis. Su densidad oscila en-
nen escasa o nula movilidad electroforética. Sólo tre 1,050 y 1,150 g/dl y su tamaño es de aproxima-
aparecen en el plasma normal después de una comi- damente 25 nm.
da grasa. Por su parte, las apoproteínas están compuestas
Lipoproteínas de muy baja densidad (VLDL, de polipéptidos monocatenarios; se han descrito siete
del inglés very low density lipoproteins), de 0,95 formas libres de apoproteínas primarias, y las más
a 1,006 g/dl. Estas partículas son más pequeñas que importantes son:
los Q, con menor tamaño y mayor densidad y movi-
lidad electroforética. Se depositan por debajo de los • Apo B. Se presenta en dos variantes, Apo B100
quilomicrones, y por electroforesis se inscriben en (síntesis hepática), con un peso molecular de
la fracción prebeta (prebeta lipoproteína). 540 000; es la principal apoproteína de las

290
VLDL y la única de las LDL; la Apo-B48 tuidos por los Q, los cuales son sintetizados en la
(síntesis intestinal) tiene un peso molecular de mucosa intestinal durante el proceso de absorción
250 000 y es la principal apoproteína de los Q. de la grasa dietética, a partir de los lípidos alimenti-
• Otras apoproteínas son: Apo A (AI, AII, AIV), cios y las apoproteínas (apo-B48, apo-AI, apo-AII,
Apo C (CI, CII, CIII), Apo D, apo E ( EI, EII, apo-AIV y trazas de apo-C). Los Q así formados
EIII) y Apo F. son secretados al sistema linfático de la mucosa in-
testinal, de donde alcanzan el conducto torácico y
Algunas de estas apoproteínas no son intercam- finalmente, el torrente circulatorio y los lechos ca-
biables y permanecen siempre en la LP en que han pilares periféricos. En este recorrido pierden apo-
sido secretadas, pero en otras, sí existe un continuo AI y AIV y adquieren apo C, sobre todo apo CII, y
intercambio y pueden trasladarse de unas partículas apo-E. En la superficie de las células del endotelio
a otras en función de su situación metabólica, ya capilar de ciertos tejidos como el adiposo, el muscu-
que ellas aseguran el transporte de los lípidos. De lar y otros, los Q maduros circulantes están en con-
esta forma, una LP capta o cede moléculas de TG, tacto con la enzima lipoproteína-lipasa (LPL), la cual
colesterol y FL e incluso, intercambia sus apopro- es activada por la apo-CII (cofactor de la LPL) y da
teínas para asegurar la regulación de los ataques lugar a la hidrólisis de los TG, presentes en los Q,
enzimáticos. ácidos grasos y glicerina. Los primeros penetran en
el tejido adiposo para el almacenamiento de ener-
Transporte y metabolismo gía, o en el muscular, para la producción de ésta. El
de las lipoproteínas resultado son unas partículas proteicas de menor ta-
El metabolismo de las LP es complejo y está estre- maño, con menor contenido en TG, pero conservan
chamente regulado por múltiples sistemas enzimá- casi la totalidad de los ésteres de colesterol y se de-
ticos. nominan “quilomicrones residuales o remanentes de
Las LP siguen tres vías metabólicas fundamen- quilomicrones”, los que son captados rápidamente
tales: por el hígado a través de un receptor específico, el
LRP (proteína de gran tamaño relacionada con el
1. Transporte de los lípidos de origen exógeno. receptor LDL), que reconoce la apo-E de la partícu-
2. Transporte de los lípidos de origen endógeno. la como potencial receptor de las células hepáticas.
3. Transporte inverso o centrípeto de colesterol. Estas partículas son metabolizadas por último en el
hígado.
O sea, el transporte de la grasa exógena prove-
niente de la dieta, desde el intestino al hígado, está Transporte de los lípidos endógenos
mediado pricipalmente por Q. El transporte de los Los hepatocitos sintetizan los TG endógenos a par-
lípidos desde el hígado hacia los tejidos periféricos tir de los ácidos grasos que no siguen la vía oxidativa
y de éstos nuevamente al hígado, está mediado por para la producción de energía o cuerpos cetónicos,
las interconversiones metabólicas de las restantes li- que son esterificados. Estos TG junto a ésteres del
poproteínas (VLDL, IDL, LDL y HDL). colesterol, determinados FL y la síntesis de apopro-
teínas B-100, C y E, forman las partículas VLDL,
Transporte de los lípidos exógenos las que en condiciones normales alcanzan el torren-
La fracción más importante de los lípidos de la dieta te circulatorio, sus moléculas son escindidas por
está constituida por TG, que experimentan lipólisis acción de la enzima LPL mediada por la apo C-II, y
en el momento de penetrar en la luz intestinal por la las partículas resultantes son de menor tamaño, pues
acción enzimática de la lipasa pancreática, la que han perdido la mayor parte de sus TG y contienen
los hidroliza y dan lugar a ácidos grasos y 2-mono- apo-E y Apo-B100, denominadas IDL (o remanen-
glicéridos. Los ácidos grasos de cadena corta siguen tes de VLDL).
una ruta independiente del metabolismo lipoproteico, Las IDL siguen dos vías diferentes. Una parte de
pero los de cadena larga son rápidamente esterifica- ellas es captada por el hígado a través del receptor
dos y forman TG. Estos TG exógenos están consti- Apo-B100/E (de Goldstein y Brown), que reconoce

291
su apo-E. El resto de las IDL se transforma en LDL c. Activación de la acilcolesterolacitransferasa
a través de mecanismos aún no bien definidos, en (ACAT), enzima que esterifica el colesterol y
que ellas pierden TG y prácticamente toda la enzi- permite su almacenamiento en el citoplasma.
ma, la triglicérido-lipasa hepática. Así se originan
unas partículas muy ricas en ésteres de colesterol y Así, con la puesta en marcha de estos procesos, la
que contienen apo B-100 como única apoproteína, entrada de colesterol a la célula está perfectamente
denominadas LDL, cuyo metabolismo reviste gran regulada sin que se produzcan acumulaciones de éste.
trascendencia en las afecciones humanas. Las LDL No obstante, las LDL pueden ser catabolizadas por
transportan aproximadamente el 75 % del coleste- otras vías a través de un receptor de membrana dis-
rol plasmático a los tejidos periféricos y al hígado, tinto al LDL, que se denomina receptor scavenger,
donde es catabolizado. Aunque su síntesis proviene presente sobre todo en los macrófagos y células
de la conversión metabólica VLDL-IDL-LDL, tam- musculares lisas.
bién existe secreción hepática directa de ellas. Del 60 al 75 % del colesterol plasmático es trans-
La mayor parte de las LDL salen de la circula- portado en forma de LDL, desde el hígado a los te-
ción por receptores LDL, que consisten en glico- jidos periféricos, a las paredes arteriales inclusive,
proteínas específicas de la membrana celular, cuya donde puede lesionar el endotelio, infiltrar la íntima
función es “internalizar” esta LP en la célula me- e inducir la proliferación de células musculares li-
diante un mecanismo perfectamente regulado para sas, es decir, que estas LDL se comportan como un
evitar la sobrecarga celular del colesterol. Es decir, agente químico nocivo y por tanto, se les considera
dichos receptores están sometidos a síntesis y de- “lipoproteínas aterógenas”.
gradación permanentes, y la tasa de síntesis está
adaptada a la necesidad interna de colesterol. Transporte inverso de colesterol
En casi todas las células corporales, los recepto- Puesto que el organismo no dispone de ningún sis-
res específicos reconocen las partículas LDL por su tema enzimático capaz de degradar la molécula de
apoproteína B (apo-B) y las captan. No obstante, colesterol en los tejidos extrahepáticos, éste debe ser
transportado nuevamente hacia el hígado para ser
determinadas células, como las de las cápsulas su-
excretado con la bilis. Esta ruta metabólica que lle-
prarrenales y de los ovarios poseen muchos recep-
va el colesterol sobrante de los tejidos periféricos
tores LDL, ya que ellas necesitan abundante
hacia el hígado, se denomina transporte reverso, in-
colesterol para la síntesis de hormonas esteroideas;
vertido o centrípeto de colesterol. Esta vía de trans-
el tejido adiposo también lo necesita para el alma-
porte está a cargo de las HDL, cuyo metabolismo es
cenamiento de lípidos y el hígado para el metabolis-
complejo y aún no del todo esclarecido. Los precur-
mo graso y la producción de sales biliares.
sores de ellas son sintetizados en el intestino y el
La homeostasis celular del colesterol está estre-
hígado, y las LP nacientes, de forma discoidal, son
chamente controlada por factores que determinan,
transformadas de inmediato en HDL3 por acción de
en caso de disminución de su contenido, producir la lecitín colesterol acetiltransferasa (LCAT), que
un aumento de su biosíntesis, y viceversa. esterifica el colesterol libre y da lugar a unas partí-
De esta forma, la célula utiliza el colesterol de la culas circulantes esféricas, densas (HDL3), las cua-
LDL para realizar sus funciones en la medida en que les se convierten en HDL2 gracias a la incorporación
lo necesita, mientras que el exceso de colesterol que de más ésteres de colesterol por la acción continua
no es utilizado activa una serie de mecanismos en- de la LCAT. Las HDL2 maduras son captadas y de-
caminados a evitar una sobrecarga de la célula, tales gradadas finalmente por el hígado.
como: Pero la formación de HDL2 a partir de HDL3 está
asociada a la lipólisis de los Q y de las VLDL, que
a. Disminución de la síntesis intracelular de co- pueden ceder TG y éstos ser hidrolizados mediante
lesterol. la lipasa hepática, se incrementa la densidad de sus
b. Disminución del aporte extracelular de coles- partículas y se reconvierten las HDL2 en HDL3, que
terol. son buenos aceptadores de colesterol celular.

292
El tipo I se caracteriza por el predominio de Q
ALTERACIONES DEL (hiperquilomicronemia).
METABOLISMO DE LAS El tipo IIa corresponde a la hipercolesterolemia
pura, con TG normales. La LP en exceso es la LDL
LIPOPROTEINAS. y se inscribe en la banda beta de la electroforesis
de LP.
HIPERLIPOPROTEINEMIAS El tipo IIb se caracteriza por un incremento pre-
dominante de colesterol, pero también de TG. Las
Las alteraciones del metabolismo de las LP se LP en exceso coresponden a LDL y VLDL. Hay
clasifican en cualitativas y cuantitativas. Las prime- aumento de las bandas beta y prebeta.
ras son las mejor conocidas y de ellas se dispone de En el tipo III las cifras de colesterol y TG están
mayor evidencia respecto a que predisponen a pa- aumentadas y se les denomina “enfermedad de beta
decer ciertas enfermedades, principalmente vascu- ancha o de beta flotante”, porque existe una VLDL
lares. No obstante, se ha demostrado que incluso con anormal con movilidad electroforética beta que ofre-
concentraciones de lípidos dentro de los límites de ce una banda ancha en la zona correspondiente a las
la normalidad, se originan alteraciones en la com- betalipoproteínas.
posición relativa de las partículas lipoproteicas o acu- El fenotipo IV corresponde a la hipertrigliceride-
mulaciones de algunas subclases de LP con mia pura, con cifras normales de colesterol. Hay un
trascendencia clínica, como es el caso de concentra- aumento de las VLDL y por tanto de las prebetali-
ciones elevadas de Lp (a) o de apo-B. Respecto a poproteínas en la electroforesis.
los trastornos cuantitativos de las LP, es muy difícil En el fenotipo V están aumentadas las concentra-
definir cifras umbrales de concentraciones de coles- ciones de Q y de TG con colesterol normal o eleva-
terol y TG que permitan separar la normalidad de la do. Hay presencia de Q y de VLDL. Hay aumento
anormalidad en poblaciones diferentes. Por tal mo- de prebetalipoproteínas y las betalipoproteínas es-
tivo, las “cifras aconsejables” —más que normales— tán normales o aumentadas.
para la población general, según las recomendacio- Aunque esta clasificación es una primera aproxi-
nes de las sociedades española europea y americana mación al paciente, desde el punto de vista diagnós-
de arteriosclerosis, son: colesterol total inferior a tico tiene varios inconvenientes: no especifica el
200 mg/dl (5,2 mmol/L) y TG inferiores a 200 mg/dl mecanismo etiopatogénico de la HLP ni la frecuen-
(2,3 mmol/L). te modificación fenotípica que suele aparecer en la
evolución clínica de un mismo enfermo.
Clasificación de Frederickson
de las hiperlipoproteinemias Clasificación etiopatogénica
La clasificación inicial de Frederickson se basa en
de las hiperlipoproteinemias
las concentraciones de colesterol y TG y el aspecto Las HLP se clasifican desde el punto de vista etio-
del lipidograma. patogénico en primarias y secundarias.
De acuerdo con ella, se distinguen 5 tipos de HLP, En las HLP primarias se constata un trastorno del
el segundo de los cuales fue desdoblado por la OMS metabolismo de los lípidos condicionado por un
en dos subclases diferentes. defecto genético, no tratable etiológicamente. Com-
prenden las hipercolesterolemias, hipertrigliceride-
Fenotipo LP en exceso Electroforesis de LP mias e hiperlipoproteinemias mixtas primarias. Las
secundarias son aquellas en las que el aumento en la
I (Q) Punto de aplicación (no
migran)
concentración de los lípidos no se debe a la presen-
IIa LDL banda beta cia de alteraciones propias del metabolismo de las
IIb LDL + VLDL banda beta y prebeta LP. No obstante, en ocasiones coexiste una enfer-
III VLDL anormal banda ancha o beta
medad capaz de provocar una HLP secundaria (dia-
ancha
IV VLDL banda prebeta betes, hipotiroidismo), y un trastorno primario de
V Q + VLDL banda prebeta + quilo- dicho metabolismo, que en este caso es frecuente
micrones que se exacerbe. Las HLP secundarias aparecen en

293
casi 3 a 5 % de la población adulta y se calcula que CUADRO 37.1
alrededor del 40 % de ellas son de origen secunda- CAUSAS SECUNDARIAS
rio. Desde el punto de vista clínico resulta impor- DE HIPERLIPOPROTEINEMIAS
tante su identificación, ya que pueden implicar una
I. Hipercolesterolemia.
evolución, terapéutica y pronóstico diferentes, así
• Hipotiroidismo.
como la detección de formas familiares permite re- • Enfermedad hepática obstructiva.
conocer precozmente a individuos de alto riesgo. • Síndrome nefrótico.
• Anorexia nerviosa.
Hiperlipoproteinemias • Porfiria aguda intermitente.
• Drogas: progestágenos, ciclosporina, tiazidas.
secundarias II. Hipertrigliceridemia.
• Obesidad.
Se deben a diversos factores: • Diabetes mellitus.
• Insuficiencia renal crónica.
a. Causada por un error dietético: consumo exce- • Lipodistrofia.
• Enfermedad por almacenamiento de glucógeno.
sivo de carbohidratos, alcohol o grasa animal. • Alcohol.
b. Inducida por fármacos; entre los de mayor • Bypass quirúrgico ileal.
transcendencia clínica figuran: las hormonas • Stress.
sexuales (andrógenos, anticonceptivos hormo- • Sepsis.
nales, estrógenos) y antihipertensivos (diuréti- • Hepatitis aguda.
• Lupus eritematoso diseminado.
cos tiazídicos y beta bloqueadores). • Gammapatía monoclonal: mieloma múltiple.
c. Como consecuencia de otras enfermedades: • Linfomas.
• Endocrinometabólicas: DM, gota, obesidad •Drogas: estrógenos, betabloqueadores, glucocorti-
exógena, acromegalia, hipofunción tiroidea, coides, resinas de intercambio de ácidos biliares,
tiazidas.
hiperadrenocorticismo, glucogenosis, hipo-
pituitarismo, hipercalcemia, lipodistrofia.
• Hipercolesterolemia familiar
• Renales: insuficiencia renal crónica, síndro-
Es una enfermedad hereditaria que se trasmite de
me nefrótico.
forma autosómica dominante, debida a mutaciones
• Hepáticas: insuficiencia hepatocelular, íctero
en el gen del receptor LDL (o apo-B/100/E), lo que
obstructivo intra o extrahepático, cirrosis bi- provoca su alteración funcional y como consecuen-
liar primaria, hepatocarcinoma. cia, la acumulación de LDL en el plasma. Se pre-
• Tóxicos: sales de mercurio y uranio. senta bajo la forma del fenotipo IIa de Frederickson.
• Stress: shock quirúrgico, quemaduras. En su forma heterocigota ocurre en uno de
• Otras: alcoholismo, amiloidosis, LED, dispro- cada 500 individuos, cursa con niveles elevados de
teinemias (mieloma múltiple), pancreatitis colesterol total y LDL-colesterol, niveles plasmáti-
aguda y crónica. cos de TG normales, y niveles de HDL-colesterol
normales o bajos. El colesterol total oscila entre 7
En el cuadro 37.1 se exponen las causas secunda- y 13 mmol/L (250 a 500 mg/dl); clínicamente cursa
rias de HLP y se particularizan las que producen con xantomas tendinosos, tuberosos o ambos, xan-
hipercolesterolemias e hipertrigliceridemias, respec- telasmas y arco corneal, y se asocia a enfermedad
tivamente. cardíaca coronaria precoz.
En su forma homocigota la enfermedad ocurre
Hiperlipoproteinemias en uno de cada un millón de individuos y cursa
con niveles plasmáticos de colesterol superiores
primarias a 13 mmol/L (> 500 mg/dl), grandes xantelasmas y
xantomas planos y tendinosos prominentes, se aso-
Hipercolesterolemias primarias cia a enfermedad coronaria prematura y puede ma-
Comprenden las siguientes modalidades: nifestarse en la infancia.

294
• Otras: deficiencia familiar de apo B-100, hiper- • Hiperlipemia familiar combinada
colesterolemia poligénica. Fue descrita por Goldstein y colaboradores en 1973
como un síndrome dislipémico identificado al estu-
Hipertrigliceridemias primarias diar los jóvenes recuperados de un infarto del mio-
Éstas comprenden: cardio agudo (IMA). Puede presentarse con tres
fenotipos distintos: IIa, IIb o IV. Aparece cardiopa-
• Hipertrigliceridemia familiar tía isquémica en edades tempranas y a veces se aso-
Es una afección que parece trasmitirse con carácter cia a obesidad centrípeta, DM, gota, HTA y síndrome
autosómico dominante pero cuyo mecanismo mole- plurimetabólico con resistencia y descenso del HDL-
cular reponsable no se conoce bien, aunque se seña- colesterol.
la un aumento en la síntesis hepática de TG, lo que
determina que las VLDL vertidas al plasma sean de • Disbetalipoproteinemia familiar
mayor tamaño y con mayor contenido en TG que en Se corresponde con la HLP tipo III y se caracteriza
los sujetos sanos; también se ha observado una dis- por la acumulación plasmática de partículas conoci-
minución del catabolismo de las VLDL. La enfer- das como lipoproteínas beta-VLDL. También es
medad es con frecuencia asintomática y se detecta conocida como enfermedad de beta ancha o de beta
por el aumento de los TG plasmáticos después de la flotante.
pubertad (200 a 500 mg/dl; 2,3 a 5,7 mmol/L), se
presenta como un fenotipo IV de la clasificación de
la OMS y a menudo se asocia a HTA, hiperurice- Otras
mia, intolerancia a la glucosa, DM y obesidad.
La hipertrigliceridemia es en ocasiones masiva, con
hiperlipoproteinemias
acumulación de Q en el plasma además del aumento (dislipoproteinemias)
de las VLDL, y se expresa por tanto con un fenotipo V
de la clasificación de la OMS. En tales casos apare- normolipémicas
cerá el cuadro clínico florido del síndrome quilomi-
cronémico, caracterizado por: hipertrigliceridemias Aumento de lipoproteína (a)
superiores a 2 000 mg/dl (23,0 mmol/L); crisis de La Lp (a) es un complejo macromolecular circulan-
dolor abdominal generalmente consecuencia de pan- te en el plasma, su aumento se asocia a cardiopatía
creatitis aguda, que tiene carácter recurrente; he- isquémica precoz, reestenosis posderivación coro-
patomegalia, esplenomegalia, infiltración de la naria, enfermedad vascular cerebral y otras formas clí-
médula ósea por células espumosas, xantomas nicas de arteriosclerosis, así como unos xantomas
eruptivos en nalgas, rodillas, o generalizados, y en subcutáneos característicos que no se han observa-
los casos más severos se observa la lipemia retinalis, do en ninguna otra forma de HLP y que por lo gene-
que se distingue por una retina pálida y el aspecto ral se asocian a xantomas tendinosos. El hígado es
blanquecino que ofrecen los vasos del fondo del ojo la fuente de producción de Lp (a) y su catabolismo
por la riqueza en quilomicrones de la sangre que circu- no es bien conocido. Los niveles plasmáticos de
la por ellos. Lp (a) permanecen bastante estables a lo largo de la
• Otras variantes. Deficiencia familiar de lipo- vida, no guardan relación con el tipo de dieta y el
proteín-lipasa, deficiencia familiar de apoproteína
riesgo de aterosclerosis se eleva cuando son supe-
CII, etcétera.
riores a 20 o 30 mg/dl. La Lp (a) puede comportarse
como un reactante de fase aguda, que se eleva tran-
Hiperlipoproteinemias sitoriamente en el IMA, intervenciones quirúrgicas,
descompensación diabética y en el síndrome nefróti-
mixtas primarias co. El tratamiento de sus aumentos, ya sea con dieta
La hipercolesterolemia concomitante con hipertri- o con fármacos hipolipemiantes, es poco satisfac-
gliceridemia ocurre en dos trastornos: torio.

295
Cuadro clínico • Si es turbio, debe hacerse la prueba del frío.
de las hiperlipoproteinemias
Prueba del frío o turbiedad
En sentido general, las HLP se traducen clínicamente Para realizar esta prueba se deja una porción del plas-
por determinados síntomas y signos tales como: ma en reposo toda la noche a 4 ºC durante 12 a 24 h
xantomas, xantelasmas y arco corneal, cuya presen- y se obtendrán las siguientes variantes.
cia debe conducir a su búsqueda activa. No obstan- • Capa cremosa sobrenadante (debido a que los Q
te, con frecuencia éstos no están presentes, al menos flotan en la superficie por su menor densidad y
durante un período de tiempo más o menos largo, ofrecen esa superficie blanca) y el resto del
por lo cual las HLP deben investigarse con regulari- suero claro: corresponde a la HLP tipo I.
dad en sujetos que presentan enfermedades que sue- • Capa cremosa sobrenadante y el resto del líqui-
len estar asociadas a trastornos del metabolismo de do turbio: corresponde a la HLP tipo V; el as-
las LP como DM, obesidad exógena, cardiopatía is- pecto turbio del suero es conferido por los TG
quémica y HTA, entre otras.
endógenos en forma de VLDL, que también
La sospecha de una HLP primaria (condicionada
están aumentados en esta HLP.
genéticamente) se puede confirmar mediante la
• Suero uniformemente turbio (sin capa cremosa),
anamnesis familiar, edad de aparición, crisis dolo-
que puede corresponder a las HLP tipo IIb, III
rosas abdominales en niños, antecedentes de otros
o IV. Para su diferenciación habrá que realizar
familiares con HLP o su detección, en el transcurso
las pruebas siguientes:
de la exploración de los miembros de la familia. La
a. Determinación de colesterol y TG plasmáti-
medición directa del defecto enzimático o del re-
cos, con lo cual se identifica si se trata de
ceptor en algunas de las HLP primarias, sólo se rea-
una HLP tipo IIb o IV.
liza en laboratorios especializados.
Niveles de colesterol. Colesterol deseado:
Exámenes complementarios 5,1 mmol/L; colesterol limítrofe: 3,8 a 6,5 mmol/L
y colesterol excesivo o patológico: mayor
En todos los casos, el paciente debe mantenerse en de 6,5 mmol/L.
ayunas durante 12 h, tomar una cena ligera la noche Cifras de triglicéridos. Niveles normales:
anterior y una dieta exenta de grasas el día anterior 0,34 a 1,70 mmol/L.
a los estudios. b. Separación de las LP por uno de estos méto-
dos (para la identificación de la HLP tipo III):
Aspecto del suero (Fig. 37.2)
Ultracentrifugación, precipitación y electro-
• Si es claro o transparente, obedece a que no existe foresis de lipoproteínas.
HLP o a que hay un aumento exclusivo del coles-
terol (IIa). Niveles de HDL-colesterol
Valores normales: mujer: > 1,32 mmol/L; hombre:
Claro
> 1,19 mmol/L.
Capa cremosa
Turbio
Determinación de apoproteínas (por métodos de
radioinmunoensayo o enfoque isoeléctrico).
Normal II a Turbio Prueba del frío Determinación de receptores de LDL (utilizando
cultivos de fribroblastos cutáneos o linfocitos aisla-
dos).
Estas dos últimas pruebas se hacen en centros es-
pecializados.
Para descartar HLP secundarias se realizan las si-
I V II b, III, IV Determinar guientes pruebas de laboratorio, en dependencia del
colesterol y TG cuadro clínico del paciente: glicemia basal o PTG
Electroforesis de (excepto en DM o tolerancia a la glucosa alterada);
lipoproteínas estudio de la función hepática; determinación de
Fig. 37.2. Diagnóstico de las hiperlipoproteinemias. proteínas totales y fraccionadas, así como electro-

296
foresis de proteínas; estudio de la función renal, áci- cadera, presencia de arco corneal (particularmente
do úrico, ECG, telecardiograma, entre otros. significativo en menores de 50 años), xantomas
Para el pezquizaje de HLP en poblaciones se uti- eruptivos, tuberosos o tendinosos, xantelasmas,
lizarán dos indicadores: lipemia retinalis, etcétera.

• Índice beta-prebeta. Ofrece valores altos tanto Detección y control


para LDL como para VLDL, o sea, que permi- de las hiperlipoproteinemias
te la demostración cualitativa de un aumento
La detección de las HLP tiene como finalidad ins-
de las lipoproteínas sin aportar datos que per-
taurar un tratamiento adecuado que permita retrasar
mitan la diferenciación ni clasificación de
o prevenir el desarrollo de la arteriosclerosis y sus
éstas.
consecuencias clínicas, fundamentalmente la cardio-
• Turbiedad. Mostrará un mayor o menor grado
patía isquémica, en personas que hasta ese momen-
de enturbiamiento o lactescencia del suero por
la presencia de TG (exógenos o endógenos). to no tenían diagnosticada una HLP. Por otro lado,
La turbidez del suero aparece en las HLP, con la identificación y el tratamiento de las hipertrigli-
excepción de la tipo IIa, en que éste es claro ceridemias graves evitan el riesgo de pancreatitis
porque sólo está aumentado el colesterol. aguda.
Para detectar las HLP se pueden seguir dos estra-
Diagnóstico positivo tegias:
La detección de una HLP debe enfocarse como un
1. Detección oportunista, que consiste en anali-
aspecto más de la valoración del riesgo cardio-
zar los lípidos sanguíneos a los adultos mayo-
vascular del individuo y basarse en la anamnesis, el
res de 20 años que acuden a una consulta
examen físico y los exámenes complementarios que
médica por otra causa; aquí desempeñaría un
permitan identificar un trastorno primario o la causa
papel importante la atención primaria de salud.
de una HLP secundaria.
2. Detección de individuos de alto riesgo, median-
La anamnesis debe profundizar en los siguientes
aspectos: te el análisis de los lípidos sanguíneos en pa-
cientes que ya padecen una complicación
• Indagar los hábitos personales relacionados con arteriosclerótica, tienen antecedentes familia-
el consumo de tabaco o alcohol, dieta, estilo res positivos de HLP o de arteriosclerosis pre-
de vida, stress, variaciones del peso corporal y coz, son hipertensos o diabéticos, o presentan
ejercicio físico practicado. xantomas o arco corneal prematuro.
• Precisar los medicamentos que se hayan consu-
mido o se estén consumiendo, sobre todo aqué- El diagnóstico de HLP debe confirmarse al me-
llos que pueden influir sobre los lípidos, la nos en dos análisis de lípidos compatibles, realiza-
glicemia y la presión arterial. dos durante un período de 2 a 3 semanas. En la
• Investigar sistemáticamente los antecedentes pa- detección oportunista, si se trata de individuos sa-
tológicos personales buscando manifestaciones nos y sin factores de riesgo cardiovascular, se pue-
subjetivas de isquemia como: angina, claudica- den medir sólo los niveles de colesterol y si los
ción intermitente, isquemia cerebral transitoria; resultados son normales se deben repetir para con-
antecedentes de HTA, DM, hipotiroidismo, etc., firmarlos. En los pacientes de alto riesgo se aconseja
y otras causas frecuentes de HLP. determinar en ayunas colesterol total y LDL-coles-
• Buscar antecedentes patológicos familiares terol, TG y HDL-colesterol, y si los resultados son
(APF) de arteriosclerosis, HLP, HTA, DM y normales, se valorarán los objetivos terapéuticos en
obesidad. La presencia de enfermedad corona- dependencia del riesgo cardiovascular.
ria en los APF constituye un factor de riesgo
para el paciente. Tratamiento
Los objetivos terapéuticos que deberán plantearse
El examen físico incluirá: determinación del pul- ante una HLP están en dependencia de la valoración
so, tensión arterial, peso, talla, perímetro cintura/ global del riesgo cardiovascular en cada paciente.

297
Si se trata de prevención primaria, en individuos Las bases fundamentales de la terapéutica de las
clínicamente libres de complicación de la arterios- HLP son las siguientes:
clerosis, se ha demostrado que la reducción de los 1. Medidas higienodietéticas, que incluyen acti-
niveles elevados de colesterol plasmático es capaz vidad física, dieta y moderar el consumo de al-
de retrasar la aparición de cardiopatía coronaria y se cohol.
intentará en primer lugar, la modificación de estilos 2. Tratamiento farmacológico.
de vida conducentes a aumentar el riesgo coronario, 3. Otros procederes (invasivos).
tales como: dieta, hábito de fumar, sedentarismo.
Cuando estas medidas no permitan obtener los efectos Medidas higienodietéticas
deseados o el riesgo cardiovascular sea importante, Ejercicio físico aeróbico (marcha, carrera, natación,
se valorará el uso de fármacos hipolipeminantes. ciclismo, etc.). Éste influye favorablemente sobre
En caso de prevención secundaria, cuando las el metabolismo de los lípidos porque estimula la ac-
complicaciones de la arteriosclerosis ya se han pro- tividad de la enzima LPL y facilita la lipólisis. La
ducido (pacientes con cardiopatía coronaria mani- transferencia de colesterol desde los Q y las VLDL
fiesta, recuperaciones de un IMA, operados de a las HDL aumenta, y se elevan los niveles de HDL-
derivación coronaria, etc.), la normalización de las colesterol. Se ha demostrado que la práctica del ejer-
concentraciones séricas de colesterol también los cicio físico sistemático en la población general, en
puede beneficiar. No obstante, la actitud terapéutica dependencia de la edad y las condiciones persona-
es más enérgica en la prevención secundaria, donde les del individuo, es un método sencillo, asequible y
por lo común se administran fármacos hipolipemian- eficaz para elevar el HDL-colesterol y reducir la tri-
tes, ya que éstos suelen inducir regresión de las le- gliceridemia y el LDL-colesterol, lo que disminuye
siones, disminuir los accidentes coronarios y mejorar el riesgo coronario y ayuda a normalizar el peso
la calidad de vida de estos pacientes. corporal.
Por otro lado, el manejo terapéutico integral de Dieta. Es el principal factor exógeno que influye
las HLP debe acompañarse de la detección y con- sobre los lípidos plasmáticos y el pilar fundamental
trol de otros factores de riesgo que con frecuencia en el tratamiento de la HLP. Por tanto, la medida
se le asocian; entre los más importantes figuran la inicial ante esta enfermedad debe ser la modifica-
DM, obesidad, HTA y el tabaquismo; ellos por sus ción de la dieta ajustando su contenido calórico a
diferentes mecanismos, potencian el riesgo cardio- cada paciente para que conduzca a la reducción del
vascular, y deben controlarse para que el tratamien- peso corporal en los obesos.
to hipolipemiante sea más efectivo. El contenido dietético de colesterol en las HLP
Lo anterior conduce a hacer una adecuada selec- debe ser inferior a 300 mg/día. La absorción intesti-
ción de los hipotensores teniendo en cuenta aqué- nal del colesterol aportado por la dieta es aproxima-
llos que no afectan el metabolismo de los lípidos, en damente del 50 %, pero sus valores elevados no se
particular los antagonistas del calcio y los inhibido- modifican con facilidad por medidas dietéticas; no
res de la enzima conversora de la angiotensina. obstante, hay que restringir o suprimir sus principa-
Ante una HLP, debe considerarse si los valores les fuentes, como: sesos y vísceras, yema de huevo,
de lípidos plasmáticos están suficientemente eleva- carnes grasas, maní, aguacate, algunos mariscos, etc.
dos como para requerir fármacos liporreductores, los Con respecto a las grasas la capacidad intestinal
cuales difieren en sus mecanismos de acción y efi- para su absorción es prácticamente del 100 %. Las
cacia, pero por lo común hay que usarlos por perío- grasas saturadas (animal, de coco y palma) elevan
dos de tiempo prolongados. el LDL-colesterol, por lo cual deben sustituirse por
Hay autores que recomiendan una terapéutica grasas polinsaturadas presentes en pescados, grasas
agresiva en los pacientes con múltiples factores de vegetales (aceite de germen de maíz y aceite de gi-
riesgo, que incluyen enfermedad coronaria prema- rasol), así como por las grasas monoinsaturadas; la
tura (antes de los 55 años en el hombre y de los 65 en más importante de ellas en nuestra alimentación es
la mujer), HTA, hábito de fumar (más de 10 cigarri- el ácido oleico (aceite de oliva).
llos por día), DM y niveles bajos de HDL-colesterol Se recomienda que la dieta contenga alrededor
(< 0,9 mmol/L o < 35 mg/dl). del 30 % de calorías derivadas de las grasas; menos

298
de 8 a 10 % de grasas saturadas; 10 a 12 % de las mismo tiempo, la lipólisis. En sujetos normales se
polinsaturadas y el resto, de las monoinsaturadas, recomienda un consumo inferior a 30 g/día de etanol,
así como menos de 300 mg/día de colesterol, con lo lo cual no eleva el riesgo coronario ni modifica los
cual la colesterolemia debe reducirse en un 10 a 15 %. lípidos. En los pacientes con hipertrigliceridemia,
La hiperquilomicronemia debe ser combatida con además de la restricción de los CHO, hay que poner
una marcada restricción de las grasas. fin al consumo de alcohol.

RECOMENDACIONES DIETÉTICAS Tratamiento farmacológico


EN LAS HIPERLIPOPROTEINEMIAS La decisión del tiempo que durará el tratamiento
dietético como única forma terapéutica en estos pa-
Preferir los alimentos siguientes:
Adobos con ajo, cebolla, especias, limón, mostaza, naranja
cientes, se basará en la severidad de la HLP y el
agria, tomate, vegetales, verduras, vinagre, vino seco; cal- grado de riesgo cardiovascular. Por ejemplo, si un
dos desgrasados; carnes magras; cereales (arroz, maíz); clara paciente con cardiopatía coronaria tiene solo mode-
de huevo; dulces caseros; frutas y jugos; galletas de soda; radamente elevado el LDL-colesterol (< 2,6 mmol/L
gelatina; grasas polinsaturadas; granos; infusiones: té, café;
o 130 mg/dl) y la finalidad es un nivel de éste infe-
leche descremada y derivados; pan tostado; pavo, pollo, pes-
cado (sin piel); y vegetales y sus jugos, verduras. rior a 2,6 mmol/L (100 mg/dl), se puede mantener
la dieta por 4 o 6 semanas antes de adicionar fár-
Restringir o suprimir los alimentos siguientes: macos.
Aceites (coco y palma); carnes (naturales y procesadas: en- En pacientes de edad avanzada sin enfermedad
latados, jamón, embutidos, tocino); farináceos elaborados:
coronaria y con sólo otro factor de riesgo, además
dulces, galletas, pan, pizza, panqué; frutos (aceitunas, agua-
cate, avellanas, cacao, maní, nuez); huevos (yema); leche de LDL-colesterol elevado, la terapia dietética úni-
entera y derivados (fresca y procesada: queso, helado, man- ca por largo tiempo suele ser suficiente. Sin embar-
tequilla); margarina; mariscos (camarón); mayonesa, hue- go, si los niveles plasmáticos de LDL-colesterol son
vos de pescado (caviar); pastelería; piel animal y vísceras muy altos y concurren múltiples factores de riesgo,
(hígado, molleja, riñon, seso).
o si existe evidencia de cardiopatía coronaria mani-
fiesta, el tratamiento farmacológico debe instituirse
La acción de los hidratos de carbono (CHO) so-
de inmediato conjuntamente con la dieta.
bre la colesterolemia se considera neutra, aunque una
Algunos autores recomiendan que si al cabo de 6
dieta muy rica en ellos puede elevar la trigliceride-
a 12 semanas de dieta no se han alcanzado los obje-
mia y reducir los niveles de HDL-colesterol.
tivos terapéuticos deseados, se pase a otra más es-
Es recomendable la ingestión de hidratos de car-
tricta (que aporte menos del 7 % de las calorías
bono dentro de los límites adecuados (50 a 60 % del
aporte calórico diario) y su consumo deberá limitar- derivadas de grasas saturadas y menos de 200 mg/
se especialmente en las hipertrigliceridemias. día de colesterol), o se inicie la administración pre-
La fibra dietética es un término que designa a di- coz de fármacos hipolipemiantes. Estas orientacio-
versos carbohidratos complejos como celulosa, nes son modificables acordes con las características
metilcelulosa, lignina, lectina, etc., no digeribles por de cada paciente en particular.
el intestino humano y que se encuentran, sobre todo, El uso de hipolipemiantes siempre acompañará a
en las frutas o verduras. Es aconsejable aumentar el la dieta prescrita y nunca la sustituirá.
consumo en la dieta de alimentos ricos en ella, hasta También requiere la valoración adecuada de sus
30 o 40 g/día, ya que esto reduce el LDL-colesterol indicaciones y controles sucesivos para monitorear
y evita la hipertrigliceridemia inducida por hidratos la respuesta en particular.
de carbono.
Las proteínas no suelen modificar la concentra- Tratamiento de la hipercolesterolemia
ción de los lípidos plasmáticos en el hombre y de- Se recomiendan tres tipos de agentes hipolipemian-
ben aportar el 10 o 15 % de las calorías de la dieta. tes como fármacos de primera línea contra la hiper-
Alcohol. El alcohol etílico (etanol) es una causa colesterolemia:
importante de HLP secundaria, cuya ingestión pro-
duce hipertrigliceridemia al bloquear la oxidación 1. Resinas de intercambio con los ácidos biliares.
hepática de los ácidos grasos libres y estimular, al Secuestradores de ácidos biliares.

299
2. Niacina. exantema, urticaria, toxicidad hepática (hepatitis
3. Inhibidores de la HMG-CoA-reductasa (las colestásica), etc., limitan su aceptación. Para redu-
estatinas). cir dichos efectos se comienza con dosis bajas y se
aumenta gradualmente. La dosis habitual es de 1 g
Los derivados del ácido fíbrico (los fibratos) aquí cada 8 h, junto con las comidas principales. Se reco-
son considerados agentes de segunda línea, por ser mienda el monitoreo de enzimas hepáticas y de la
más efectivos para reducir los TG. uricemia. No debe administrarse en diabéticos no
Resinas de intercambio con los ácidos biliares. insulinodependientes.
Estas sustancias (colestiramina, colestipol) se usan Inhibidores de la HMG-CoA- reductasa. Este gru-
como hipolipemiantes desde hace alrededor de tres po incluye: lovastatina, simvastatina, pravastatina,
décadas. Ellas interfieren en la reabsorción intesti- fluvastatina, atorvastatina y cerivastatina. Son los
nal de ácidos biliares interrumpiendo la circulación hipolipemiantes más recientes. Actúan inhibiendo
enterohepática de éstos; estimulan la síntesis de re- por competición, de forma parcial y transitoria, la
ceptores LDL y aumentan la captación hepática de HMG-CoA-reductasa, enzima limitante de la sínte-
LP ricas en colesterol, que son necesarias para la sis de colesterol, con lo cual reducen el contenido
síntesis de nuevos ácidos biliares y reducen así el de éste en el hígado, activan la síntesis de recepto-
LDL-colesterol. Son las drogas de elección para el res LDL y aumentan el aclaramiento de las LDL por
tratamiento de pacientes con LDL elevado y TG su receptor y bajan así la concentración plasmática
normales, y aunque suben moderadamente el HDL- de estas LP. También disminuyen un poco la sínte-
colesterol, tienen como limitante su tendencia a ele- sis hepática de VLDL, lo que explica su moderado
var los niveles de TG debido a un incremento efecto hipotrigliceridemiante.
compensador en la síntesis hepática de VLDL, por Las estatinas están relativamente libres de efec-
lo que no se administran en individuos hipertrigli- tos secundarios, en comparación con otros fárma-
ceridémicos. cos; no obstante, con altas dosis se pueden producir
En sus efectos secundarios figuran los trastornos elevaciones transitorias y moderadas de las enzimas
gastrointestinales como constipación, flatulencia, hepáticas, por lo que se recomienda la monitoriza-
náuseas y además, interfieren en la absorción de al- ción de las aminotransferasas a las 6 semanas de
gunos fármacos (como ácido fólico, tiroxina, digoxi- iniciado el tratamiento, a los 3 meses, y luego, cada
na, warfarina y vitaminas liposolubles), los cuales 6 meses. Uno de sus efectos adversos más serios es
se utilizan 2 h antes o después de la ingestión de las la miopatía, con elevaciones de la fosfocreatinoqui-
resinas. Su administración debe comenzarse con nasa (CPK) más de 10 veces su valor normal con
dosis bajas (4 g de colestiramina 2 veces al día o 5 g peligro de miositis grave, rabdomiólisis e insuficien-
de colestipol 2 veces al día), preferiblemente antes de cia renal aguda, sobre todo si se usan en combina-
las comidas principales. La dosis habitual es, de ciones con gemfibrozilo, niacina o ciclosporina, en
colestiramina: 12 a 16 g/día y de colestipol: 15 a cuyo caso debe interrumpirse su administración.
20 g/día. En sentido general, las estatinas disminuyen el
Niacina (ácido nicotínico). Es un fármaco eficaz colesterol total en 25 a 40 % y el LDL-colesterol en
y seguro, que ha sido usado durante casi 30 años. Su un 35 a 45 %, lo cual las convierte en los hipocoles-
mecanismo de acción no es del todo conocido, pero terolemiantes más potentes. También descienden los
parece que inhibe la secreción hepática de LP que TG en un 10 o 20 % y elevan el HDL-colesterol en
contienen apoB100. un 5 a 10 %.
Reduce los niveles de colesterol total, LDL-co- La combinación de estatinas y resinas posee un
lesterol, VLDL y eleva los de HDL; y en algunos efecto sinérgico y produce reducciones aún mayo-
estudios se reporta que también reduce la Lp (a), de res de LDL-colesterol, y es particularmente útil en
manera tal, que sus efectos sobre estas tres LP prin- heterocigotos con hipercolesterolemia familiar.
cipales, lo convierten en un fármaco óptimo. Sin La dosis habitual de lovastatina es de 10 a 80 mg/día
embargo, sus efectos secundarios tales como: rubor y la de sinvastatina y de pravastatina de 5 a 40 mg/
facial por vasodilatación periférica, prurito, moles- día. La cerivastatina, el inhibidor más potente de la
tias gastrointestinales, hiperglicemia, hiperuricemia, HMG-CoA-reductasa por unidad de peso, está indi-

300
cada en la hipercolesterolemia grave primaria o se- un incremento en la formación de cálculos biliares.
cundaria. Reduce el colesterol total y el LDL-coles- Los fibratos son eficaces en la dislipemia diabética,
terol con dosis orales muy bajas, de 0,05 a 0,3 mg al ya que reducen los niveles de los ácidos grasos li-
día. bres y mejoran el control glicémico. La dosis reco-
No es aconsejable el uso de estatinas en menores mendada de bezafibrato es de 200 mg 3 veces al día;
de 16 años y en mujeres fértiles hasta disponer de la de fenofibrato, 100 mg 3 veces al día, y la de
pruebas de la seguridad de su empleo a largo plazo. gemfibrozilo, de 600 mg 2 veces al día.

Combinaciones terapéuticas Otros fármacos


Las combinaciones de resinas e inhibidores de la Probucol. Reduce el LDL-colesterol en un 10 o 15 %
reductasa (estatinas), son efectivas para el tratamien- y el HDL-colesterol en un 15 o 20 %, pero carece de
to de elevaciones aisladas y severas de LDL-coles- efecto sobre los TG y es un potente antioxidante.
terol; las de resinas y niacina o de estatinas y niacina, Este último efecto es el que se busca en la terapia
son útiles para el tratamiento de niveles altos de combinada. La dosis habitual es de 500 mg 2 veces
LDL-colesterol y bajos de HDL-colesterol. Cuando al día.
estos últimos niveles y los de TG son elevados, con Aceite de pescado. Las cantidades altas de ácidos
HDL generalmente reducido, la mezcla de resinas grasos omega 3, de cadena larga y muy insaturados,
es muy atractiva y la de resinas con fibratos (gemfi- presentes en los peces de agua fría, reducen ligera-
mente los TG o a veces aumentan el LDL-coleste-
brozilo) es una alternativa. Las combinaciones de
rol, sin afectar el HDL-colesterol. Los estudios
inhibidores de la reductasa, ya sea con niacina o con
comparativos sobre su eficacia e inocuidad aún re-
gemfibrozilo, deben reservarse para pacientes con
sultan insuficientes.
enfermedad coronaria y HLP combinada.
PPG (policosanol). Está compuesto por una mez-
cla de alcoholes alifáticos primarios, aislados y pu-
Tratamiento de la hipertrigliceridemia
rificados a partir de la caña de azúcar. Su mecanismo
La hipertrigliceridemia (HTG) generalmente se tra-
de acción es inhibir la síntesis de colesterol e incre-
ta cuando los niveles de TG plasmáticos son mayo-
mentar la unión del LDL-colesterol a sus recepto-
res de 5,6 mmol/L (> 500 mg/dl), en los cuales el
res, lo que conduce a un incremento de la velocidad
riesgo de pancreatitis aumenta.
catalítica, por lo tanto, disminuyen los niveles plas-
La asociación de HTG con niveles bajos de HDL-
máticos de LDL-colesterol y de colesterol total con
colesterol constituye un factor de riesgo importante un aumento de HDL-colesterol. Además, tiene otros
de arteriosclerosis, que requiere tratamiento enérgico. efectos como antiagregante plaquetario, antitrombó-
Niacina. Es una droga de primera línea en el ma- lico y antisquémico.
nejo terapéutico de la HTG, especialmente cuando La dosis recomendada es de 5 mg/día por 3 me-
se combina con HDL bajo. Su capacidad para incre- ses y se incrementa hasta 10 mg/día por 3 meses
mentar el HDL-colesterol aumenta su utilidad. más, de ser necesario.
Fibratos. Los más utilizados son gemfibrozilo,
bezafibrato, binifibrato y fenofibrato; de ellos, el Procederes invasivos
primero es el más utilizado en los Estados Unidos. LDL-aféresis. Se utiliza en pacientes con hiperco-
El mecanismo de acción de los fibratos es sólo par- lesterolemia familiar homocigota y en los que res-
cialmente conocido; parece que estimulan la enzi- ponden pobremente a la dieta y al tratamiento
ma LPL, lo que favorece la hidrólisis de partículas farmacológico, o en quienes no toleran las drogas.
ricas en TG y la donación del colesterol de las VLDL Este proceder, a intervalos de cada 7 a 14 días, pue-
y los TG en un 40 % o más, mientras que sus efectos de reducir con intensidad los niveles de LDL-coles-
sobre las LDL son variables y los niveles de HDL- terol. Su seguridad y eficacia a largo plazo no están
colesterol son por lo común bien tolerados, y entre bien establecidas, pero sólo debe ser considerado en
sus efectos secundarios están la intolerancia diges- pacientes con pocas opciones terapéuticas.
tiva y la potenciación del efecto de la warfarina, y a Bypass ileocecal parcial. Interrumpe la circula-
largo plazo suelen hacer a la bilis más litogénica con ción enterohepática de los ácidos biliares con efecto

301
similar, pero más pronunciado, que las drogas se- se midan cada 5 o 10 años a partir de los 30 años, a
cuestradoras de ácidos biliares. causa de su relación con la aterogénesis humana.
Plasmaféresis. Es poco fisiológica y muy costo- En los pacientes con HLP moderada [colesterol to-
sa. Priva al plasma no sólo de las LDL, sino también tal: 250 a 300 mg/dl (6,5 a 7,8 mmol/L); TG: 200
de las HDL. a 400 mg/dl (2,3 a 4,6 mmol/L) ] que llevan trata-
miento dietético, los lípidos se deben medir cada 3 me-
Por último, la frecuencia con que se deben repetir ses, y una vez establecidos los indicadores, cada 6
las determinaciones de lípidos dependerá de cada o 12 meses. Los enfermos tratados con hipolipemian-
situación individual. Se recomienda que en adultos tes se chequearán cada 6 u 8 semanas y posterior-
sanos y sin HLP conocida, los lípidos plasmáticos mente, según la evolución individul cada 3 o 6 meses.

302
38
ESTEROIDES
CORTICOSUPRARRENALES

Se denominan esteroides corticosuprarrenales o cor- Mecanismo de acción


ticosteroides a las hormonas producidas por la cor- Los glucocorticoides actúan a través de la síntesis
teza suprarrenal. proteica, pues se unen a receptores específicos
En ella se sintetizan tres tipos de esteroides: los citoplasmáticos y realizan un número de funciones,
glucocorticoides, en la capa intermedia o fascicu- dentro de las cuales están:
lar, los mineralocorticoides en la externa o glomeru-
lar y los sexosteroides en la capa interna o reticular; En el metabolismo de los carbohidratos
estos últimos se sintetizan además en las gónadas 1. Aumentan los niveles de glucosa en la sangre.
(ovarios y testículos). La hipófisis regula directa- 2. Aumentan la gluconeogénesis.
mente la secreción de los glucocorticoides y sexos- 3. Disminuyen la síntesis de mucopolisacáridos
teroides suprarrenales a través del ACTH (hormona ácidos.
adrenocorticotrópica), la que a su vez es controlada 4. Disminuyen la utilización de glucosa (acción
por el cortisol libre mediante un mecanismo de diabetogénica).
retroalimentación negativa. Sin embargo, los mine-
ralocorticoides son regulados por el sistema renina- En el metabolismo de las proteínas
1. Disminuyen la síntesis proteica.
angiotensina-aldosterona (SRAA), por cambios en
2. Aumentan el catabolismo proteico (balance
los niveles de sodio y potasio plasmáticos y por el
nitrogenado negativo).
flujo sanguíneo.
3. Aumentan los aminoácidos libres en la sangre.
4. Aumentan la producción de ácido úrico.

GLUCOCORTICOIDES En el metabolismo de las grasas


1. Promueven la movilización de grasas hacia la
Los glucocorticoides se denominan hormonas este- región faciotroncular.
roideas y se sintetizan a partir del colesterol, esti- 2. Aumentan los ácidos grasos libres y el glicerol
mulados por el ACTH en circunstancias específicas en el plasma.
3. Estimulan la lipólisis.
en el organismo. Las suprarrenales se diferencian
de otras glándulas endocrinas porque son capaces
En el metabolismo electrolítico
de sintetizar y liberar al unísono sus productos hor-
En dosis altas pueden causar retención de sodio y
monales; el principal de ellos es el cortisol, que tie- pérdida de potasio.
ne un ritmo de secreción circadiano que se instaura
desde el primer año de vida, y consiste en que sus En el tejido linfoide y timo
niveles en sangre aumentan entre las 6:00 y 9:00 a.m., 1. Linfólisis.
disminuyen durante el día, tienen concentraciones 2. Intervienen en la involución del timo.
muy bajas durante la noche y comienzan a elevarse
a las 2:00 a.m. Es transportado por proteínas plas- En el sistema hemolinfopoyético
máticas, principalmente la albúmina. 1. Estimulan la hematopoyesis.

303
2. Disminuyen la coagulación sanguínea. 1. Insuficiencia suprarrenal aguda (síndrome de
3. Disminuyen los linfocitos (actividad inmuno- Waterhouse-Friderichsen o hemorragia aguda
supresora). de las suprarrenales).
4. Disminuyen el número de eosinófilos. 2. Enfermedad de Addison.
3. Después de la adrenalectomía por síndrome de
En el sistema osteomioarticular Cushing.
1. Producen osteoporosis (disminuyen la forma- 4. Después de la extirpación de tumores de la cor-
ción de matriz ósea y la proliferación de fibro- teza suprarrenal.
blastos y osteoblastos). 5. Panhipopituitarismo con insuficiencia suprarre-
2. Ocasionan alteraciones en la formación de la nal secundaria.
sustancia fundamental, ácido hialurónico y fi-
bras colágenas. Además, son utilizados para suprimir la activi-
3. Suprimen la respuesta inflamatoria a la infec- dad excesiva o anormal de la corteza suprarrenal y
ción bacteriana. para frenar la actividad del ACTH.
4. Suprimen la respuesta inflamatoria a las agre-
siones químicas y mecánicas, lo que perturba Afecciones no específicamente causadas por disfun-
la curación de las heridas. ción adrenal en que están indicados los glucocorti-
coides
Hipersensibilidad e inmunidad 1. Trastornos agudos de hipersensibilidad o aler-
1. Protegen a las células de la lesión resultante de gia.
la reacción antígeno – anticuerpo. a. Enfermedad del suero, reacciones de sensi-
2. No impiden la reacción antígeno – anticuerpo. bilidad a fármacos, eritema nudoso.
3. No impiden la unión del anticuerpo con el antí- b. Dermatitis venenata, eritema multiforme
geno. buloso.
c. Asma bronquial.
Otros efectos generales d. Fiebre del heno.
1. Normalizan el índice serina – globulina. e. Eccema.
2. Tienen efectos psicológicos (excitación; esta- 2. Enfermedades del colágeno.
do de bienestar, confort, euforia; disminuyen a. Fiebre reumática aguda.
la depresión). b. Artritis reumatoidea.
3. Estimulan la formación de angiotensinógeno. c. Poliarteritis nudosa, lupus eritematoso dise-
4. Intervienen en los mecanismos de adaptación. minado, dermatomiositis.
5. Aumentan la secreción de ácido clorhídrico y 3. Afecciones oculares.
disminuyen la producción de moco en el estó- a. Iridociclitis aguda, coroiditis, neuritis óptica
mago, con lo cual predisponen a la úlcera y neuritis retrobulbar.
péptica. b. Queratitis tuberculosa, uveítis (las aplicacio-
6. Aumentan el filtrado glomerular. nes tópicas son de valor para las enfermeda-
des de la porción anterior del ojo).
Acción sobre otras glándulas endocrinas 4. Trastornos sanguíneos.
1. Inhiben la acción de las hormonas tiroideas. a. Púrpura.
2. Disminuyen la secreción de GH (hormona del b. Anemias hemolíticas adquiridas.
crecimiento). c. Leucemias.
3. Poseen efecto supresivo sobre el ACTH y la d. Anemias hipoplásticas primarias.
hormona estimulante de los melanocitos. e. Artritis gotosa aguda.
f. Hipoglicemias agudas en general.
Indicaciones 5. Otros.
Los glucocorticoides se emplean como terapéutica a. Síndrome nefrótico.
sustitutiva en la insuficiencia suprarrenal en las si- b. Sarcoidosis.
guientes situaciones: c. Esprue idiopático.

304
d. Hipercalcemia. Triamcinolona 4
e. Hiperostosis cortical infantil. Dexametasona 0,75
f. Hepatitis crónica. Betametasona 0,60
g. Coma hepático.
h. Síndrome de Hamman-Rich. La dosis de mantenimiento siempre será de una
i. Crisis tiroidea. tableta por la mañana y media tableta por la noche,
j. Meningitis. para conseguir un ritmo de acción similar al circa-
k. Coma mixedematoso e hipofisario. diano normal de los glucocorticoides.
Contraindicaciones
1. Tuberculosis pulmonar activa. MINERALOCORTICOIDES
2. Diabetes mellitus (en caso necesario deben usar-
se bajo estricto control metabólico).
La aldosterona, el más importante de los mineralo-
3. Úlcera péptica.
corticoides, es secretada por la capa glomerular o
4. Psicosis.
más externa de la corteza suprarrenal y promueve la
5. Hipertensión arterial con insuficiencia renal.
reabsorción de sodio en el túbulo contorneado distal,
Complicaciones al mismo tiempo que se eliminan iones de potasio e
hidrogeniones.
Pueden ser severas, comunes y ocasionales.
Para su secreción, la aldosterona depende de va-
rios factores:
Complicaciones severas
1. Hipertensión arterial.
2. Glucosuria. 1. Sistema renina-angiotensina-aldosterona. Me-
3. Convulsiones. diado por cambios en el volumen plasmático y
4. Úlcera péptica. filtrado glomerular, la disminución de éstos
5. Tromboflebitis. produce estimulación de la renina; ésta actúa so-
6. Enmascaramiento de las infecciones. bre el angiotensinógeno producido por la glán-
7. Inhibición del crecimiento en los niños. dula hepática y lo convierte en el decapéptido
angiotensina I, que es rápidamente convertido
Complicaciones comunes por enzimas situadas en el pulmón (enzima con-
Edema, obesidad, acné, cara de luna, hirsutismo, vertidora de angiotensina) en angiotensina II y
vergetures. esta última estimula la síntesis y liberación de
aldosterona.
Complicaciones ocasionales 2. Concentraciones de potasio en la sangre: si au-
Debilidad, insomnio, equimosis, irritabilidad, depó- menta el potasio estimula su secreción, y
sito de grasa en las fosas claviculares. si disminuye, la inhibe.
Los glucocorticoides se usan por vía oral o pa- 3. Concentraciones de sodio en la sangre: si dis-
renteral, el ACTH sólo puede emplearse por vía pa- minuye la concentración de sodio plasmático
renteral (IM o EV). se produce estimulación, y si aumenta se pro-
A continuación se exponen los glucocorticoides duce su inhibición.
más utilizados en la práctica en orden de efectivi- 4. Ritmo diurno de secreción (que parece depen-
dad y dosis correspondientes: der del ritmo de renina): aumenta en la maña-
na y disminuye en la tarde.
mg 5. Adrenoglomerulotropina (se produce en la glán-
Cortisona 25 dula pineal).
Hidrocortisona 20 6. Péptido atrial natriurético.
Prednisona 5 7. ACTH. Últimamente se plantea que éste en al-
Prednisolona 5 tas dosis, con un efecto transitorio, se relacio-
Metilprednisolona 4 na mucho con la secreción fisiológica de

305
aldosterona que ocurre después de traumatismos gonadal y otros órganos sexuales accesorios, des-
y otras formas de stress. censo del testículo y diferenciación psicosexual.
Durante la infancia presentan una disminución
Mecanismo de acción plasmática, para luego en la fase puberal aumentar
La aldosterona ejerce su acción efectora sobre la de nuevo sus niveles en la sangre.
célula tubular utilizando la síntesis proteica. Una vez Los sexosteroides son gobernados por hormonas
que llega a la célula se une en la membrana de ésta procedentes de la hipófisis anterior (adenohipófisis):
con su aporreceptor, con el cual penetra en el cito- ACTH para los sexosteroides procedentes de la cor-
plasma, se dirige hacia el núcleo y desencadena una teza suprarrenal, y las gonadotropinas (FSH y LH)
serie de mecanismos para realizar sus funciones es- para los sexosteroides procedentes de las gónadas,
pecíficas. las que son capaces de inhibir y estimular a éstos
últimos en determinadas circunstancias en el orga-
Uso terapéutico nismo y éstos a su vez ejercen un efecto retroali-
Los mineralocorticoides tienen las indicaciones si- mentario.
guientes:
Uso terapéutico
1. Hiperplasia adrenal congénita. Las hormonas sexuales femeninas (estrógenos y
2. Insuficiencia corticosuprarrenal primaria (agu- progesterona) se emplean como tratamiento susti-
da o crónica). tutivo y contraceptivos orales, en la hiperplasia
3. Hipotensión arterial postural o de causa no pre- endometrial, cáncer de la próstata, trastornos mens-
cisada. truales, etc.
Los estrógenos se utilizan para desarrollar los ca-
Los medicamentos más utilizados son: racteres sexuales secundarios en la mujer, también
DOCA (acetato de desoxicorticosterona), que vie- en los estados menopáusicos como prevención de la
ne en ámpulas de 5 mg para inyección IM 2 o 3 ve- osteoporosis posmenopáusica y enfermedades car-
ces por semana. diovasculares, entre otras.
La 9- alfa fluorhidrocortisona, que se presenta Los medicamentos más utilizados son:
en tabletas de 0,1 mg y se administran de 0,05 a
0,2 mg al día, por vía oral. • Etinilestradiol: tabletas de 50 mg.
• Estrógenos conjugados equinos: tabletas de
0,625 mg.
SEXOSTEROIDES • Piperazina estrona: tabletas de 0,65 mg.
• 17 B-estradiol: parches, gel, implantes.
Los esteroides sexuales se encuentran en el grupo • Medroxiprogesterona: tabletas de 5 mg (proges-
de las hormonas esteroideas, ya que tienen como tágenos).
precursor común al colesterol; son sintetizados tanto • Norgestrel: tabletas de 0,075 mg.
en la capa interna (zona reticular) de la corteza su-
prarrenal como en las gónadas (ovarios y testículos). Las hormonas sexuales masculinas (andrógenos)
se usan en el hombre para provocar el desarrollo de
Mecanismo de acción los caracteres sexuales secundarios y como trata-
Son transportados en el plasma a través de una pro- miento sustitutivo.
teína transportadora de hormonas sexuales llamada Los medicamentos más utilizados son:
SHBG. Una vez en las células diana se liberan y se
unen a los receptores específicos en el citoplasma • Enantato de testosterona: ámpulas de 100 mg.
celular, donde son encargados de realizar sus fun- • Fluoximesterona: tabletas de 2 y 5 mg.
ciones específicas. Estas hormonas ejercen su efec- • Propionato de testosterona: ámpulas de 25 mg.
to desde la vida intrauterina en la diferenciación • Undecanato de testosterona: tabletas de 5 mg,
sexual e influyen directamente en el desarrollo parches, implantes.

306
BIBLIOGRAFÍA

1. ACTON, G., D. O’HALLORAN: “Neuropatía auto- 11. BLÁZQUEZ, E.: “Revisión general del metabolismo
nómica en la Diabetes Mellitus”, en Diabetogra- lipídico. Estructura y clasificación de las lipo-
phia, una publicación médica internacional de proteínas”, en Metabolismo lipídico, Investiga-
Senior, Irlanda, Universidad de Cork-Wilto, ción en Biomedicina, Fundación Jiménez Díaz,
1999, No. 19; 7–8. Universidad Autónoma, Madrid; 1994; 1–14.
2. A DAMIETZ , T.A., M.S. S CHIEMANN , J.G. 12. BLEVINS, L.S., G.S. WAND: “Diabetes insipidus”,
PETKAUSKAS, F. SCHEMAN, H.D. BOTCHER: “Prog- Crit. Care. Med., 1992; 20: 69–79.
nostic factors and the effect of radiotherapy in 13. BRAY, G.: “Pathophysiology of Obesity”, Am. J.
the treatment of differentiated thyroid carcino- Clin. Nutr., 1992; 55:4; 884–945.
mas”, Strehlenther Onkol, 1998; 174: 618–23. 14. BOSL, G., R.S.K. CHANGANTI: “The use of tumor
3. ALDANA PADILLA, D.: “Evaluación de la atención markers in germ cell malignancies”, Hematolo-
al paciente diabético en un área de salud”, Rev. gy/Oncology, 1994; 8: 573–87.
Cub. de Salud Pública, 1997, vol. 23 (1–2): 15. BOUCHARD, C.: “Genetics of body fat, energy
78–87. expenditure and adipose tissue matabolism”, en
4. ÁLVAREZ E., S. BLANCA: “Bocio tóxico difuso y Berry, F.M.; Blondheim, S.H.; Eliabou, H.E. et
gestación: aspectos generales”, Rev. Cubana al.: Recents advances in obesity research, V.
Med., 1997; 28: 1224–31. London: Jonh Libbey Co.; 1992; 16–25.
5. ÁLVAREZ, E.: “Embriología funcional normal y 16. BOUCHARD, C., A. TRENBLAY, A. NADEAU et al:
patológica del tiroides”, en Navarro, D., E.
“Genetic effect in resting and exercise metabolic
Álvarez (Eds), La glándula tiroides, Ed. Cien-
rates”, Metabolism, 1992; 38: 364 – 70.
cias Médicas, Cuba, 1992; 1–13.
17. BUCHFELER, M., R. FAHLBUCH, E.F. ADAMS, F.
6. ______: “Sistema nervioso y disfunción
KIESEWETTER, P. THIERAUF: “Proliferation para-
tiroidea”, en Navarro, D., E. Álvarez (Eds), La
meters of pituitary adenomas”. Acta Neurochir,
glándula tiroides, Ed. Ciencias Médicas, Cuba,
1996, Suppl 65: 18–21.
1992; 123–30.
18. CAPUTO, D.G., F. VILLAREJO, G.B. VALLE, P. DÍAZ,
7. AMEMIYA, S.: “Constant infused glucose regimen
C.J. APEZTEGUIA: “Hidratación en la cetoacido-
during the recovery phase of diabetic ketoaci-
dosis in children and adolescent with IDDM” sis diabética. ¿Cómo influye la velocidad de in-
[letter: comment], Diabetes Care, Apr., 1998; fusión?”, Medicina, B. Aires, Ene–Feb, 1997;
21(4): 676–7. 57(1): 15–20.
8. ÁNGEL, M.: “Tratamiento de la enfermedad de 19. CARDONA GARBEY, D.: “Eje hipotálamo-hipófiso-
Graves-Basedow”, Med. Clin. (Barc), 1990; 90: testicular en pacientes con hiperlipoproteinemia
748–54. primaria”, [Trabajo para optar por el título de
9. ARCE, B., R.S. PADRÓN DURÁN, S.A. BORON: “As- especialista de primer grado en Endocrinología],
pectos ginecológicos y estudio gonadal de la Instituto Nacional de Endocrinología, Ciudad de
disgenesia gonadal femenina”, Rev. Cub. Med., La Habana, 1988.
1981; 20: 29. 20. CLEARE, A.J., A. MCGREGOR, S. CHAMBERS, S.
10. BARNETT, A.H., D.R. OWENS: “Insulin analogue”, DAWLIG, V. O’KEANNE: “Thyroxine replacement
The Lancet, 1997; 349(9044): 47–51. increases central 5-hydroxitriptamine activity

307
and reduces depressive symptoms in hypothyroi- McGraw-Hill Interamericana, Madrid, 1998;
dism”, Neuroendocrinology, 1990; 64: 66–9. 2341–64.
21. COMPSTOM, J.E.: “Thyroid hormones therapy and 34. FROGNEL, P., G. VELTIO, P. PASSA, D. COHEN:
the skeleton”, Clin. endocrinology, 1993; 39: “Genetic determinations of type 2 diabetes me-
519–20. llitus lesson learned from family studies”, Dia-
22. CUBA: Encuesta Nacional de Factores de Riesgo betes Metabolism, 1993; 19: 1–10.
y Actividades preventivas, MINSAP, La Haba- 35. F ROHMAN , L.A.: “Therapeutic options in
na, 1995; 12–14. acromegaly”, J. Clin. Endocrinol. Metab., 1991,
23. _______: Estado actual del Programa Nacional 72: 1175–1181.
de Diabetes Mellitus, MINSAP, La Habana, 36. GARCÍA GONZÁLEZ, R., R. SUÁREZ PÉREZ: “La edu-
1996. cación al paciente diabético”, Ed. Ciencias Mé-
24. C HACRA, A.R., M. S ADZINSKY, C. O RELLANA dicas, La Habana, 1991; 15–20.
SÁENZ, M. TAGLE LUZARRAGA: “Complicaciones 37. GAVIN, L.A.: “Thyroid crises”, Med. Clin. North
tardías”, [Sección 11], en Orellana Sáenz, C.; Amer., 1991; 75: 179–93.
Robalino Velasco, J., Diabetología para el próxi- 38. GINSBERG, H.N., I.J. GODBERG: “Disorders of
mo milenio, Ediciones Orellana-Robalino, Qui- intermediary metabolism”, cap. 341, en
to, 1999; 194–213. Harrison’s, Principles of Internal Medicine
25. DE LA PIEDRA, C., R. TORRES: “Utilidad de los [monograph on CD-ROM] 14 ed., McGraw-Hill,
marcadores bioquímicos de remodelación ósea London, 1998.
en el diagnóstico y seguimiento de la enferme- 39. GOLDGERG, R.B., R. MACHADO: “Atypical ketoaci-
dad ósea de Paget, hiperparatiroidismo prima- dosis in type 2 diabetes”, Hosp-Pract-Off-Ed,
rio, hipercalcemia tumoral y osteoporosis Mar 15, 1998; 33(3): 105–8; 111–2; 117–8.
postmenopáusica”, An. Med. Inter., 1990; 7: 480. 40. G ONZÁLEZ , J.: “Estudio citogenético de la
26. DELMAS, P.D.: “Biochemical markers of bone disgenesia gonadal femenina”, Rev. Cub. Med.,
turnover: methodology and clinical use in os- 1981; 20: 266.
teoporosis”, Am. J. Med., 1991; 91(5B): 59S–63S. 41. GREENSPAN, F.S.: “The problem of the nodular
27. ESCOBAR, O., F. LIFSHITZ, F. MIMOUNI: “Dynamics goiter”, Med. Clin. North. Amer., 1991; 75: 195–
of ionized magnesium and ionized calcium 209.
during recovery from diabetic ketoacidosis 42. GRUDEVA-POPOVA, J., I. SIRAKOVA: “Effect of fectin
managed with conventional treatment”, Magnes on some electrolytes and trace elements in
Res, Jun., 1998; 11(2): 111–5. patients with hyperlipoproteinemia”, Folia Med,
28. EVANS, R.M.: “The steroid and thyroid receptor Plovdiv, 1998; 40(1): 41–5.
superfamily”, Science, 1998; 2240: 889–96. 43. GUIJO, L.: “Antidiabéticos orales. ¿Qué hay de
29. Ezzat, S., R. Josse: “Autoimmunohypophysitis”, nuevo?”, Educ. Diabet. Profesional, 1999; 9(1):
TEM, 1997; 8: 74–80. 3–5.
30. FAHLBUSH, R., J. HONNEGER, M. B UCHFELDER: 44. HEATH, H. III.: “Primary hyperparathyroidism:
“Surgical management of acromegaly”, Endo- Recent advances in pathogenesis, diagnosis and
crinology and Metabolism Clinics of North management”, Adv. Intern. Med., 1992; 37: 275.
America, 1992; 21: 669–92. 45. HELFAND, M., L. CRAPO: “Screening for thyroid
31. FEUSSNER, G., V. FEUSSNER, M.M. HOFFMANN, J. disease”, Annals Int med (1990); 112: 840–49.
LOHRMANN, H. WIELAND, W. MARZ: “Molecular 46. HERNÁNDEZ YERO, A., R. LAGE GONZÁLEZ: “Agen-
basis of type III hyperlipoproteinemia in Ger- tes farmacológicos actuales en el tratamiento de
many”, Hum Mutat, 1998; 11(6): 417–23. la diabetes mellitus no insulinodependiente”,
32. FIGUEROLA, D., E. REYNALS: “Diabetes Mellitus”, Rev. Cubana Med. Gen. Integr., 1997; 13(6):
en Farreras-Rozman, Medicina Interna [ed. 596–609.
en CD-ROM], 13 ed., Barcelona [s.n], 1996: 47. HUNDAHL, S.A., I.D. FLEMING, A.M. FREMGEN,
1 933–64. H.R. M ENCK : “National Cancer Data”, Base
33. FOSTER, D.W.: “Diabetes Mellitus”, en Harrison, Report on 53 856 cases of thyroid carcinoma
Principios de Medicina Interna, 14 ed., t. 2, treated in the US Cancer (1998); 83: 2638–48.

308
48. HUNG, S.: “Hallazgos de laboratorio en el Sín- 64. MALLEA SÁNCHEZ, L.: “Diferenciación sexual”,
drome de Klinefelter”, Rev. Cub. Med., 1976; en Padrón Durán, R.S., Temas de reproducción
15: 571. masculina y diferenciación sexual, Ed. Ciencia
49. ISGIHARA, K., H.M. SZERLIP: “Anion gap acido- y Técnica, La Habana, 1990; 97–114.
sis”, Semin. Nephrol.; Jan., 1998; 18(1): 83–97. 65. MANDUIP, PAULSENT et al: “Cytokine and free
50. J ACOBS , T.O., R.T. W ITHLOCK , J. E DSALL : radicals as effects molecular in the destruction
“Addisonian crisis while taking high dose of pancreatic cells”, en Baekllekon, S., Housen,
glucocorticoids”, JAMA, 1988; 260: 2082–84. D. eds: Human diabetes, genetic enviromental
51. J AFFE , C.A., A.L. B ARKEN : “Treatment of and autoimmune etiology and immunology, Tei-
acromegaly with dopamine agonist”, Endocri-
delberg, Springer, Verlay, 1990; 169–93.
nology and Metabolism Clinics of North
66. MARTÍNEZ-VALLS, J.F.: “Fisiopatología y trata-
America, 1992; 21: 669–92.
miento de la obesidad”, Medicine, 1993; 6(36):
52. JAMES, V.H.T. (editor): The adrenal gland, 2ed.,
1549–60.
Raven Press, 1992.
53. KELESTIMUR, FAHRETIU: “Epidemiología y factores 67. MARTÍNEZ-VALLS, J.F., R. CARMENA: “Clínica y
de riesgo para la diabetes mellitus no insulino- tratamiento de la obesidad”, Medicine, 1993;
dependiente”, en Diabetografía, una publicación 6(40): 1621–28.
médica internacional de Server, Turkia, Univer- 68. MAS DÍAZ, J.: “Hirsutismo”, en Padrón Durán,
sidad de Ercuyes, 1999; 15: 2–5. R.S. Temas de Reproducción femenina, Ed. Cien-
54. KLEE, G.G., I. D. HAY: “Biochemical testing of tífico Técnica, 1990; 155–74.
thyroid function”, Endocrinol. Metab. Clin. H. 69. MATEO DE ACOSTA, O., R.S. PADRÓN DURÁN, J.
Amer., 1997; 26: 763–75. MÁS DIAZ: “Ginecomastia”, cap. X. en O. Mateo
55. KLEIN, I.: “Thyroid hormones and the cardiovas- de Acosta, R.S. Padrón Durán, S. Más Díaz, Ma-
cular system”, Am. J. Med., 1990; 88: 631–36. nual de diagnóstico y tratamiento en endocri-
56. LANDENSON, P.W.: “Recognition and management nología y metabolismo, Ed. Científico Técnica,
of cardiovascular disease related to thyroid La Habana, 1985; 72–82.
dysfunction”, Am. J. Med., 1990; 88: 636–41. 70. MATEO DE A COSTA, O., R.S. PADRÓN DURÁN:
57. _______: “Disease of the thyroid gland”, Clin. “Hiperlipoproteinemias”, en Manual de diagnós-
Endocrinol. Metab., 1993; 14: 145–74. tico y tratamiento en endocrinología y metabo-
58. LARA CAPELLÁN, S.L.: “Importancia de la fisio- lismo, La Habana, 1985: 377–87.
patología del déficit de la primera fase de secre- 71. MAZZAFERRI, E.: “Evaluation and management
ción de insulina en la diabetes tipo 2”, Educ. of common thyroid disorders in women”, Am. J.
Diabetol. Profesional, 1999; 9(1): 13–9. Obstet. Gynecol., 1997; 176: 507–14.
59. LICEA, M.: “Cetoacidosis Diabética”, en Trata-
72. MELMED, S.: “Etiology of pituitary acromegaly”,
miento de la Diabetes Mellitus, 2ed., La Haba-
Endocrinology and Metabolism Clinics of North
na, 1995; 86–94.
America, 1992; 21: 539–51.
60. _______: “Coma hiperosmolar”, en Tratamien-
73. MELLER, J., M. CONRAD, T. B ECH, S. GRATZ :
to de la Diabetes Mellitus, 2ed., La Habana,
1995; 95–101. “Differentiated thyroid gland carcinoma in
61. _______: “Acidosis Láctica”, en Tratamiento de children and adolescents”, Klin Paediatr (1998);
la Diabetes Mellitus, 2ed., La Habana, 1995; 210: 373–78.
108–113. 74. METZER, D., J.H. WHITE, P. CHAMBOM : “The
62. _______: “Ejercicio”, en Tratamiento de la Dia- human oestrogen receptor functions”, Nature
betes Mellitus, Brostl Ideal, 1995; 314–40. (1998); 334: 31–5.
63. MADEJ, A, B. OKOPIEN, J. KOWALSKI, M. ZIELINSKI, 75. MINDERMANN, T., CH. B. WILSON: “Pituitary ade-
J. W YSOCKI , B. S ZYGULA , et al: “Effects of nomas in childhood and adolescense”, J.
fenofibrate on plasma cytokine concentrations Paediatr. Endocrinol. Metab. (1995); 8: 79–83.
in patients with atherosclerosis and hyperlipo- 76. M OLITCH , M.E.: “Clinical manifestation of
proteinemia II b”, Int. J. Clin. Pharmacol., 1998; acromegaly”, Endocrinology and Metabolism
36(6): 345–9. Clin. of North America, 1992; 21: 597–614.

309
77. MUIR, A., D.A. SCHATZ, N.K. MACHAREN: “The 90. _______: “Correlación cariotipo fenotipo en el
pathogenesis, prediction and prevention of Síndrome de Klinefelter”, Rev. Cub. Med.,
insulin-dependent diabetes mellitus”, Endocri- 1977; 16: 597.
nology and Metabolism Clin.of North Am., 1992; 91. _______: “Hipogonadismo hipogonadotrófico
21: 199–219. en el hombre y en la mujer”, Temas de Repro-
78. NAVARRO, D.: “Enfermedad autoinmune del ti- ducción masculina y disfuncción sexual, Ed.
roides”, en Navarro, D., E. Álvarez: La glándu- Cintífico Técnica, La Habana, 1990; 64–76.
la tiroides, Ed. Ciencias Médicas, Cuba, 1992; 92. P ADRÓN D URÁN , R.S., J. R OME G ALLARDO :
40–48. “Síndrome de Turner y sus variantes”, Temas
79._______: “Función tiroidea en el viejo”, Rev. Cu- de reproducción masculina y diferenciación
bana Med., (1989) 28: 115–18. sexual, Ed. Científico Técnica, La Habana,
80. N AVARRO , D., H. C ÁCERES : “Hipotiroidismo 1990; 119–42.
postratamiento del bocio tóxico difuso. Compli- 93. POCOTTE, S.I. et al: “Regulation of parathyroid
cación o evolución”, An. Med. Inter., Madrid, hormone secretion”, Endocr. Rev., 1991; 12: 291.
1990; 7: 575–77. 94. P OST , K.P.; M C C ORMIEK , P.C., S.P. B ELL :
81. NAVARRO, D., R. LEONARD: “Hipotiroidismo pri- “Differential diagnosis of pituitary tumors”,
mario del adulto”, Rev. Cubana Endocr., 1989; Pituitary tumors, diagnosis and management.
1: 73–8. Endocrinol. Metab. Clin., Mleted ME ed., 1987;
82. NAVARRO, D., F. RIPOLL, R. VENTURA: “Anticuer- 16: 609–46.
pos antitiroideos y disfunción tiroidea en pobla- 95. PRICE, C.D.: “Radioisotopic evaluation of the
ción mayor de 60 años”, Medicina Geriátrica, thyroid and parathyroid”, Radiologic. Clin.
1991; 4: 27–30. North Amer., 1993; 31: 991–1015.
83. NEW, M., N. SASSON: “Disorders of gonadal 96. RABIN, D.S.: “Hyperprolactinemia and autoim-
differentation and congenital adrenal hyperpla- munity”, Immunology and Allergy Clin. N.
sia”, Endocrinol. Metab. Clin. of North Am., Amer., 1994; 22: 163–75.
1986; 17: 3339–46. 97. REEVES, W.B., T.E. ANDREOLI: “The posterior
84. NOVOROLI FERNÁNDEZ, F., A.J. MACHADO CURBELO: pituitary and water metabolism”, en Wilson,
“Fisiopatología del eje hipotálamo–hipofisotes-
J.D., D.W. Foster eds., Williams Textbooks of
ticular”, en Padrón Durán, R.S. Temas de Re-
Endocrinology (8 th ed), Philadelphia: WB
producción masculina y diferenciación sexual,
Saunders Company, 1992; 311–56.
Ed. Científico Técnica, La Habana, 1990; 1–14.
98. REICHLIN, S.: “Neuroendocrine regulation of
85. ORELLANA SAENZ, C., J. ROBALINO VELASCO: “Por-
prolactine secretion”, Sdv Biosch (1998), 69:
tadas” [Sección 1], Diabetología para el próxi-
277–92.
mo milenio, Ediciones Orellana-Robalino, Quito,
99. RITZ, E.: “Nephropathy in type 2”, Diabetes J.
Ecuador, 1999; 27–28.
Med., 1999; (245): 111–26.
86. _______: “Situaciones especiales”, [Sección 15].
100. ROBERTSON, G.L., T. BERL: “Pathophysiology
Diabetología para el próximo milenio, Edicio-
of water metabolism”, en Brenner, B.M.; Rec-
nes Orellana-Robalino, Quito, 1999; 252–53.
tor FC eds., The Kidney (4th ed), Philadelphia:
87. ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD: Prevención
WB Saunders Company, 1991; 677–736.
de la Diabetes Mellitus. Serie de informes téc-
101. ROCA GODERICH, R.: “Obesidad”, Temas de Me-
nicos, Informe de un grupo de estudio de la OMS,
Ginebra, OMS, 1994; 24–30. dicina Interna, 3ª ed., Ed. Pueblo y Educación,
88. ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD. “Dia- La Habana, 1985, vol. III; 9: 192–4.
betes”, en La salud en las Américas, Publica- 102. ROSS MCDOUGALL, I.: “Graves disease. Current
ción Científica No. 569, Washington, 1998, vol. concepts”, Medical Clin. North. Amer. (1991),
1: 183–5. 75: 79–95.
89. PADRÓN, R.S.: “Características clínicas del sín- 103. RUÍZ, M., M. CARDERELLI: “Pautas en la pre-
drome de Klinefelter”, Rev. Clin. Esp., 1977; vención, diagnóstico y tratamiento de la
147: 259. nefropatía diabética”, Revista de la Asociación

310
Latinoamericana de Diabetes, Buenos Aires, coronary heart disease”, American J. of Med.,
Argentina, 1998, vol. VI, No. 3; 168–72. 1997; 103: 152–62.
104. SAFRIT, H.F.: “Thyroid disorders”, en Handbook 114. STEWART, A.F., A.E. BROADUS: “Hipercalcemia
of Clinical Endocrinology, Fitzgerald PA (Eds.), humoral neoplásica”, en Mazzaferri, E.L., R.S.
California, Appleton Lange, 1992; 156–226. Bar, R.A. Kreisberg: Avances en endocrinolo-
105. SANDERS, L.E., M. SILVERMAN: “Folicular and gía y Metabolismo, Ancora SA, Barcelona,
Hurtle cell carcinoma: predicting outcome and 1991: 1–2.
directing therapy”, Surgery (1998); 124: 967–74. 115. STOKING, J.R.: “Thyroid disease”, Med. J. Aust.
106. S ANTANA P ÉREZ , F., R.S. P ADRÓN D URÁN :
(1993); 158: 77–114.
“Epidemiología de la infertilidad”, en Padrón
116. TAYLOR, A.L., L.M. FISHMAN: “Corticothropin
Durán, R., Infertilidad femenina, Ed. Científi-
releasing hormone”, N. Engl. J. Med., 1988;
co Técnica, La Habana, 1998; 11–17.
107. SCLAFI, L., A. COLTORTI, F. CONTALDO: “Food 319: 213–22.
induced thermogenesis and the pathogenesis of 117. UKPDS Group: Intensive blood glucosa con-
human obesity”, en Belfiore, F., B. Jeanrenaud, trol with sulphonylurea or insulin compared
D. Papalia, Obesity concepts and clinical with conventional treatment and risk of com-
aspects front diabetes. Basel: Karger 1992; 11: plications in patient with type 2 diabetes, The
78–84. Lancet, 1998; 352: 837–53.
108. SHARMA, S.C., A. BHATTACHAYYA: “Diabetic ke- 118. VALENTINI, O.: “El especialista y el médico ge-
toacidosis in non-insulin-dependent diabetes neral en el tratamiento coordinado de la diabe-
mellitus”, JR-Soc-Med., 1998, Jan., 91 (1): 34–5. tes tipo II”, en Diabetografía, Servier, Hospital
109. SHEPPARD, M.C., J.A. FRANKLIN: “Management Municipal de Bresca, Italia, 1999, No. 5; 6–7.
of the single thyroid nodule”, Clin. Endocrinol. 119. ZAK, A., M. ZEMAN, E. TVRZICKA: “Fatty acid
(1992); 37: 398–401. composition of plasma phosphatidilcoline and
110. S NYDER , P.T.: “Clinically nonfunctioning levels of lipids and lipoproteins in hyperlipo-
pituitary adenomas”, Endocrinol. Metab. Clin. proteinemia II. Relation with B lipoproteins”,
N. Amer. (1993); 22: 163–75. Cass Lek Cesk, 1998; 137(13): 400–3.
111. SOLOMON, B.L., L. WARTOFSKY, K.D. BURMEN: 120. _______: “Fatty acid composition of phospha-
“Adjunctive cholestiramine therapy for
tidilcoline and levels of lipids and lipoproteins
thyrotoxicosis”, Clin. Endocrinol. (1993); 38:
in hyperlipoproteinemia I. Relation to HDL
39–44.
lipoprotein”, Cas Lek Cesk, 1998; 137(12):
112. SOTOS, J.F., F. BELLO: “Diabetes insipidus”, en
Bardin, C.W. Current Therapy in Endocrino- 368–71.
logy and Metabolism. 4th ed., Philadelphia: BC 121. WHO: Definition, Diagnosis and Classification
Decker Inc, 1991; 1–8. of Diabetes mellitus and its complications,
113. STEVEN, M.H.; HEICK, M.: “Insulin resistance [Report of WHO consultation], Génova, 1999;
implication for type 2 Diabetes Mellitus and 1–10.

311
Cuarta Parte

ENFERMEDADES DEL SISTEMA


HEMOLINFOPOYÉTICO
39
RECUENTO ANATOMOFISIOLÓGICO
DEL SISTEMA HEMOLINFOPOYÉTICO

Estructura de la sangre ellas son las proveedoras de todas las células san-
guíneas en un momento dado.
La sangre es una mezcla de elementos complejos,
aunque relativamente constantes, que está consti- Estructura de la médula ósea
tuida por:
En el momento del nacimiento la medula ósea se
encuentra en el interior de todos los huesos del orga-
1. Sólidos: células sanguíneas (eritrocitos, leuco-
nismo, pero a medida que el niño crece se requiere
citos, plaquetas) y productos minerales u or-
un volumen menor para cubrir las necesidades fisio-
gánicos disueltos en el plasma. lógicas y se produce una regresión centrípeta, de
2. Sustancia líquida: el plasma, con un 90 % de modo que en el adulto la médula hematopoyética
agua. activa (médula roja), se encuentra en el cráneo, las
3. Gases: oxígeno y dióxido de carbono. vértebras, las costillas, el esternón, las crestas ilíacas
y las epífisis proximales de los huesos largos. Es-
Las células de la sangre son producidas por los quemáticamente, está formada por los senos veno-
órganos hematopoyéticos, por lo tanto, la mayoría sos y los cordones hematopoyéticos (Fig.39.1). La
de las alteraciones sanguíneas son el reflejo de lo arteria nutricia irriga estos cordones y más tarde drena
que sucede en el lugar donde se originan estas célu- en los senos venosos a través de las fenestraciones
las. En ocasiones, sin embargo, la afección ocurre de la membrana basal de estos últimos. Dicha mem-
en el mismo torrente circulatorio sin un trastorno brana está cubierta en su interior por células endote-
primario de los órganos hematopoyéticos, como es liales y en su parte externa por células reticulares.
el caso de la anemia hemolítica inmunológica. La Estas últimas emiten proyecciones que subdividen
médula ósea es el órgano hematopoyético de la vida Vena central
adulta que produce las células de la sangre: eritroci-
tos, granulocitos, plaquetas y linfocitos. Diariamente
se originan allí unos doscientos billones de hema-
tíes y setenta billones de leucocitos neutrófilos.
Seno venoso
La sangre, como sistema dinámico, se renueva
constantemente. Sus células nacen y mueren en tiem-
po breve, pero su caudal citofisiológico se mantie-
ne por la existencia de mecanismos reguladores que
provocan un funcionamiento continuo de los órga-
nos productores de células sanguíneas para sumi-
nistrar a la sangre la cantidad necesaria de eritrocitos,
leucocitos, plaquetas, etc., equivalente siempre a la Arteria nutricia
cantidad que se destruyó. Un glóbulo rojo vive unos
120 días, una plaqueta de 7 a 10 días y un granulocito
Espacio hematopóyetico
de 6 a 8 horas. Se acepta que la mayoría de las célu-
las madres están en reposo y que sólo un grupo de Fig. 39.1. Estructura de la médula ósea.

315
los cordones y sirven de sostén a las células hema- intrauterina. Durante las primeras semanas del em-
topoyéticas. brión circulan sólo elementos parecidos a los mega-
Los nervios son abundantes y se piensa que los loblastos de la anemia perniciosa. A partir del tercer
cambios de presión causados por la multiplicación mes, el hígado y el bazo son los principales órganos
celular se trasmiten por ellos a las paredes de los hematopoyéticos. Ya en este momento el saco
vasos sanguíneos y actúan como un mecanismo vitelino ha desaparecido. Con el inicio de la hema-
autorregulador del flujo de la sangre, y por lo tanto, topoyesis en el hígado, aparecen en la circulación
permiten la proliferación y maduración normales de los elementos de la generación normoblástica, que
las células hematopoyéticas en los cordones hema- remplazan a los megaloblastos, los cuales se divi-
topoyéticos. den, maduran y llegan a eritrocitos adultos con
Los megacariocitos se hallan cerca de la pared de desaparición total del núcleo; hay un breve período de
los senos venosos, al igual que los eritroblastos. Es- transición (de la sexta a la octava semanas) en que
tos últimos se encuentran formando verdaderas “is- circulan ambos elementos y luego desaparecen to-
las” alrededor de un macrófago central. Cuando la talmente.
célula eritroide está madura, pasa al seno y en ese El hígado, con función mieloide completa, pro-
momento pierde su núcleo. Los megacariocitos vier- duce las tres series: eritrocítica, leucocítica y trom-
ten las plaquetas ya formadas dentro de los senos bocítica.
venosos. A partir del quinto mes, el hígado y el bazo co-
Las células granulopoyéticas están situadas más mienzan a disminuir su función hematopoyética. En
profundamente en el cordón hematopoyético y co- el séptimo mes cesa la del bazo y al nacimiento, la
mienzan a migrar hacia los senos cuando llegan al del hígado. Entre el cuarto y el quinto mes la médu-
estado de metamielocito. El granulocito ya maduro la asume la función rectora hematopoyética, y la
permanece en la mélula varios días, según las nece- mantendrá toda la vida.
sidades en la sangre circulante. Durante el período embrionario y fetal la hema-
Las células adiposas ocupan un 50 % del espacio topoyesis tiene modalidades propias en cada etapa
medular y es probable que sólo sirvan de material del desarrollo. Se distinguen tres períodos:
de relleno.

Etapas y órganos de la hematopoyesis I. Embrionario o prehepático: del primero al ter-


cer mes.
Clásicamente se ha dividido la hematopoyesis en una II. Hepático o hepatosplénico: del tercer al quin-
etapa prenatal y otra posnatal (Fig. 39.2). to mes.
III. Medular: del quinto mes en adelante.
HEMATOPOYESIS PRENATAL HEMATOPOYESIS POSNATAL

100 Hematopoyesis posnatal o del adulto. Después del


sea
saco v

vértebra
nacimiento, la hematopoyesis se realiza definitiva-

s
esternó
CELULARIDAD EN %

75 hígado
dul

n
mente en la medula ósea. Esta última, en el momen-
itelino

costilla
50
s to del nacimiento, se observa de forma uniforme
bastante roja y activa. A medida que el individuo
tibia
fémur

25 crece, como ya se explicó, se necesita un volumen


bazo de médula menor para cubrir las necesidades fisio-
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 20 30 40 50 60 70 80
lógicas y se produce la regresión centrípeta de ésta.
MESES FETALES NACIMIENTO EDAD EN AÑOS Se ha postulado que la baja temperatura de los
huesos periféricos condiciona la regresión centrípe-
Fig. 39.2. Etapas de la hematopoyesis.
ta de la médula hacia los huesos centrales del cuer-
Hematopoyesis prenatal (período embrionario y po. Hoy se cree que la temperatura es una de las
fetal) tantas variables que controlan la vascularización y
Como se observa en la figura, las células sanguí- que precisamente la densidad vascular determina la
neas iniciales se forman en el saco vitelino del em- actividad hematopoyética; dicha densidad es mucho
brión y duran aproximadamente dos meses de la vida más baja en las áreas periféricas del organismo.

316
Dado el abundante espacio medular, es rara en la PROGENIES CELULARES
vida adulta una reactivación compensatoria en lu- SISTEMA ERITROPOYÉTICO
gares extramedulares. Cuando esto sucede, se debe
más bien a una producción inapropiada de los ele-
Proeritroblasto
mentos formes sanguíneos que a una compensatoria.
Eritroblasto basófilo
Origen de los elementos formes
de la sangre Eritroblasto policromatófilo
En el pasado hubo discusiones acerca del origen de
los elementos formes de la sangre. Algunos plan- Eritroblasto ortocromático o normoblasto
teaban que todas las células sanguíneas derivaban
Reticulocito
de una célula madre, mientras que otros opinaban
que había células madres específicas para una línea
Eritrocito
celular determinada.
Hoy está totalmente aceptado, que todas las células
SISTEMA GRANULOPOYÉTICO
que circulan en la sangre descienden de un número
muy reducido de células madres pluripotenciales, Mieloblasto Monocito / Macrófago
que comprenden menos del 0,01 % de las células
nucleadas de la medula ósea. Éstas poseen la capa- Promielocito
cidad de dividirse y una parte de ellas perpetúan las
células madres pluripotenciales, otras derivan hacia Mielocito
un conjunto de células madres unipotenciales que
Juvenil
están “obligadas” a seguir una línea celular defini-
da, continúan proliferando y diferenciándose cada
Stab
vez más, hasta dar origen a células con morfología
propia y con funciones muy especializadas. Granulocito
En los últimos años se han estado estudiando in-
tensamente los mecanismos que regulan la prolife- Neutrófilo Basófilo
ración dentro de cada progenie de los distintos
Eosinófilo
elementos formes de la sangre. Se han elaborado téc-
nicas que permiten el crecimiento y diferenciación
SISTEMA MEGACARIOPOYÉTICO
de líneas mixtas o aisladas de acuerdo con los facto-
res requeridos para su desarrollo. De manera gené- Megacarioblasto
rica se han denominado unidades formadoras de
colonias (UFC). En este proceso se han descrito mu- Promegacariocito
chas citocinas necesarias y de ellas se pueden citar,
el factor de células madres, la interleucina 3 (IL-3), el Megacariocito
factor estimulante de colonia de granulocitos y
Plaquetas
macrófogos (GM – FSC), el factor estimulante de
colonias macrófagas (M – FSC), la eritropoyetina,
SISTEMA LINFOPOYÉTICO
etcétera.
Por medio de la técnica del ADN recombinante, Linfoblasto
algunos de ellos ya se utilizan en la clínica.
Escapa a los fines de este libro la descripción de Prolinfocito
todas las citocinas y sus funciones, sólo se quiere
dejar constancia de su existencia y de la importan- Linfocito
cia que seguramente tendrán en el futuro todas estas
sustancias.

317
40
ANEMIAS

Aunque la palabra anemia se usa diariamente en la Síndrome anémico


práctica médica, no existe una definición sencilla
Se denomina síndrome anémico al conjunto de sín-
para ella. Este término sin otro calificativo no es un
tomas y signos determinados por la anemia.
diagnóstico satisfactorio ni ofrece una base útil para
La función principal del hematíe es transportar
el tratamiento, ya que en la mayoría de los casos el
oxígeno a los tejidos, la cual estará afectada en este
síndrome anémico se presenta como una complica-
síndrome. Los síntomas dependerán de una serie de
ción de enfermedades de causas muy variadas. En
factores:
general, se dice que existe anemia cuando el nivel
de hemoglobina circulante en un paciente es menor
que en las personas sanas de la misma edad, grupo 1. Enfermedad causal.
y sexo y además, del mismo entorno. 2. Rapidez con que se desarrolle la anemia.
La opinión de Wintrobe de que la anemia en me- 3. Grado de disminución de la hemoglobina y del
dicina clínica se define como una reducción, por de- volumen total de sangre.
bajo de los límites normales, del número de hematíes 4. Estado previo del sistema cardiovascular.
por milímetro cúbico, de la cantidad de hemoglobi-
na en gramos por ciento y del volumen del hemató- Si la anemia se desarrolla con mucha rapidez sin
crito, a pesar de que parece útil, comporta ciertas permitir adaptaciones fisiológicas, los síntomas son
dificultades. Así, deja fuera un cuadro tan impor- intensos y tempranos. Por el contrario, si comienza
tante como la anemia poshemorrágica aguda, en la de forma insidiosa, la adaptación puede ser tan bue-
que en las primeras horas después del sangramiento na que la hemoglobina llegue hasta 60 o 70 g/L sin
no se alteran las anteriores pruebas. Pero donde pa- causar trastornos funcionales importantes hasta la
rece residir la mayor dificultad es en la ausencia de aparición de la anoxia. Por lo tanto, el grado de re-
valores normales conocidos en una población dada ducción de la capacidad transportadora de oxígeno
para estas mediciones. Empíricamente se han acep- y la capacidad del organismo para adaptarse a esta
tado en nuestro medio, como cifras normales de situación, son los factores fundamentales que deter-
hemoglobina, entre 130 y 150 g/L para el hombre y minan las manifestaciones clínicas comunes a todas
entre 120 y 140 g/L en la mujer. las anemias.
Hay que señalar que el examen físico en algunas Al síndrome anémico se añaden a veces ciertas
ocasiones resulta engañoso. Todos los médicos po- peculiaridades que dependen de las alteraciones fi-
drán diagnosticar con facilidad la anemia en un pa- siopatológicas propias de cada variedad o grupo de
ciente cuya hemoglobina es menor de 60 g/L, afecciones, lo que confiere a los cuadros clínicos
muchos otros la estimarán correctamente cuando es matices determinados. Por ejemplo:
inferior a 80 g/L, pero sobre este límite el diagnós-
tico no siempre es obvio. 1. En la pérdida aguda de sangre (anemia poshe-
Por último, debe señalarse que el hallazgo de una morrágica aguda) predomina la hipovolemia y
anemia no puede ser en modo alguno un diagnósti- el cuadro fudamental estará dominado por el
co definitivo, sino simplemente un punto de partida shock hipovolémico.
para buscar su causa. No se hace nada tratándola, si 2. En las anemias hemolíticas, los derivados de la
no se elimina, siempre que sea posible, su origen. destrucción eritrocítica causan las diferencias,

318
la hemoglobina liberada determina hemoglo- El signo físico que permite identificar la existen-
binemia, que si alcanza un nivel capaz de tras- cia de una anemia es la palidez cutaneomucosa. Ésta
pasar el umbral renal produce hemoglobinuria. debe observarse fundamentalmente en el lecho
La bilirrubina, resultado de la degradación de ungueal, en la palma de las manos y planta de los
la hemoglobina, aumenta en su forma no con- pies, mucosa de los labios, boca, lengua y conjunti-
jugada (indirecta) y determina la característica vas. Conviene recordar que estas últimas son a ve-
ictericia acolúrica. ces asiento de inflamaciones enmascaradoras. Hay
que tener en cuenta las glositis de algunas anemias,
Mencionados estos dos ejemplos, se describirá de donde se aprecia el contraste entre el rojo de la len-
modo esquemático el síndrome anémico en general. gua y la palidez de otras mucosas. Palidez no signi-
Los trastornos fisiopatológicos fundamentales se fica siempre anemia, ya que la vasoconstricción (en
producen en el sistema cardiorrespiratorio, porque el shock, por ejemplo) también la produce. Por últi-
debe funcionar con una sangre cualitativamente de- mo, no debe olvidarse la coexistencia de anemia con
ficiente para satisfacer los requerimientos de oxígeno cianosis, ictericia, edema, grado de exposición al sol,
en los tejidos. Con el fin de superar esta deficiencia, pigmentación y grosor de la epidermis, etc.
actúan los mecanismos compensadores.
Clasificación
1. La ventilación alveolar debe aumentar y para Dada la variedad y distinta naturaleza de las ane-
ello el volumen minuto respiratorio y el traba- mias y como no constituyen por sí solas una enfer-
jo de la respiración. Esto explica la aparición medad, sino que son la consecuencia de una serie de
de disnea sólo cuando la anemia alcanza deter- afecciones, su clasificación se hace difícil. Son mu-
minada intensidad: primero, al esfuerzo, pero chas las que de ellas se han elaborado, basadas en
si la anemia es muy intensa o si existe una afec- criterios clínicos, etiológicos, patogénicos, hemato-
ción cardiorrespiratoria previa, puede haber lógicos, terapéuticos, etc. Todas adolecen de defec-
disnea permanente. tos y a su vez tienen algo de utilidad; en sentido
2. El gasto cardíaco aumenta a expensas de la fre- general las anemias son causadas por alguno de los
cuencia ( taquicardia y su expresión subjetiva, mecanismos siguientes:
palpitaciones al esfuerzo o permanentes) y del
volumen sistólico. La velocidad circulatoria 1. Incapacidad de la eritropoyesis para compen-
también aumenta y el tiempo de circulación dis- sar la pérdida anormal de eritrocitos (anemias
minuye. Esto, unido a la menor viscosidad de por hemorragias o por aumento de la destruc-
la sangre, explica la presencia de soplos fun- ción de los hematíes).
cionales, por lo general sistólicos, usualmente 2. Incapacidad de la médula ósea para compensar
suaves y no intensos (pero no siempre) y la apa- la pérdida diaria normal de eritrocitos ( ane-
rición de ruidos venosos sobre todo al auscul- mias por menor producción de sangre).
tar el cuello (murmullo del diablo). El fallo
circulatorio puede generar un cuadro de insu- Esta clasificacion tiene la ventaja de la sencillez,
ficiencia cardíaca congestiva o un síndrome de pero a su vez es poco útil desde el punto de vista
insuficiencia coronaria, sobre todo en ancianos clínico, ya que cualquiera de estos mecanismos
cardioescleróticos con anemia intensa. engloba una enorme cantidad de procesos cuya pa-
togenia es distinta.
Si hay hipovolemia aguda, ya se dijo que el cua- Una clasificación clásica es la basada en las lla-
dro es el del shock hematógeno. madas constantes corpusculares. Su mayor proble-
En el sistema neuromuscular aparecen diversos ma es el índice de error tan grande que tiene el conteo
síntomas que dependen de la hipoxemia sistémica: de hematíes, por lo que se aconseja efectuarlo sólo
cefalea, vértigos, desfallecimientos, aumento de la cuando se tenga un contador de células electrónico.
sensibilidad al frío, ruidos en los oídos, escotomas, Otra forma muy utilizada se basa en el tamaño
debilidad, fatiga, irritabilidad, pérdida del poder de del glóbulo rojo, que en las anemias puede ser nor-
concentración, inquietud, estupor, parestesias, etc. mal (normocítica) o más pequeño que el normal

319
(microcítica) o más grande que el normal (macrocí- c) Infecciones
tica); y el grado de hemoglobinización que puede d) Mieloptisis
ser normal (normocrómica) o menor que el normal e) Otras (en el curso de anemias hemolíticas
(hipocrómica). No habrá hipercromía ya que no exis- crónicas, timomas, etc.)
te la sobresaturación de la hemoglobina. III. Anemias posmedulares.
Aunque la causa más importante de la anemia A. Por pérdida de sangre aguda y crónica (poshe-
microcítica hipocrómica es el déficit de hierro, hay morrágicas).
otras entidades que también están asociadas a gló- B. Por destrucción aumentada de hematíes (he-
bulos rojos hipocrómicos (talasemias, infecciones mólisis).
crónicas, intoxicación por plomo, etc.). Igual suce- 1. Intracorpusculares
de con las anemias macrocíticas, por lo que se nece- a) Hemoglobinopatías
sitan otros estudios para hacer el diagnóstico b) Esferocitosis congénita hereditaria
definitivo. c) Talasemia
No es necesaria la exposición de todas las clasifi- d) Hemoglobinuria paroxística nocturna
caciones propuestas hasta el momento, algunas de e) Enzimopénicas
ellas muy completas, pero con el inconveniente de 2. Extracorpusculares
su complejidad. Es más oportuno agrupar las ane- a) Inmunes (por anticuerpos)
mias según su patogenia. A continuación se presen- • Isoinmunes
tan una clasificación etiopatogénica y una etiológica,
• Autoinmunes
esta última muy útil por su sencillez.
b) Sintomáticas (infecciones, intoxicaciones,
Clasificación etiopatogénica (modificada) agentes físicos, etc.)
I. Anemias premedulares o carenciales (por dificul- Clasificación etiológica
tad en la formación de los hematíes).
A. Anemias por deficiencias de los diferentes ele-
A. Dificultad en la formación de hemoglobina.
mentos que intervienen en la maduración eritro-
1. Deficiencia de hierro
cítica.
2. Deficiencia de proteínas
1. Deficiencia de vitamina B12
B. Falta de biocatalizadores que favorecen la
2. Deficiencia de ácido fólico
eritropoyesis.
1. Deficiencia de vitamina B12 3. Deficiencia de hierro
2. Deficiencia de ácido fólico 4. Deficiencia de otros factores (proteínas, vita-
3. Deficiencia de otras vitaminas mina B6, etc.)
4. Anemias endocrinas B. Anemias por alteración medular primaria.
II. Anemias medulares, aplásticas o hipoplásticas 1. Idiopáticas
(por destrucción o inhibición de la eritropoyesis 2. Secundarias
medular). a) Tóxicos
A. Congénitas. b) Radiaciones
1. Anemia aplástica constitucional de Fanconi c) Infecciones
2. Aplasia roja pura de Blackfan – Diamond d) Mieloptisis
B. Adquiridas. e) En el curso de anemias hemolíticas cróni-
1. Idiopáticas cas, timomas, etc.
2. Secundarias C. Anemias por pérdida aguda de sangre.
a) Tóxicos D. Anemias por destrucción aumentada de hema-
b) Radiaciones tíes.

320
41
ANEMIAS FERROPÉNICAS

Cuando un organismo se va depletando de hierro como las infecciones crónicas, neoplasias, enferme-
ocurre lo siguiente: dades del colágeno, etc., se encuentran pacientes con
una hipocromía en la sangre periférica, traducción
1. Pérdida de hierro en los depósitos. de una hemoglobinización defectuosa del hematíe,
2. Disminución del hierro sérico. y en ocasiones con un hierro sérico y una capacidad
3. Disminución de la cifra de hemoglobina, cuya de saturación de transferrina bajos. Cuando se les
traducción en la sangre periférica es la hipo- practica un medulograma, la coloración azul de
cromía del hematíe. Prusia resulta positiva, lo cual refleja la existencia
de una buena cantidad de hierro en los depósitos,
Hacer el diagnóstico en la tercera etapa es relati- pero que no puede incorporarse a la molécula de
vamente fácil y se consigue con exámenes de labo- hemoglobina. Es la llamada anemia de los trastor-
ratorio de ejecución sencilla. Sin embargo, el nos crónicos. Hay una serie de citocinas inflamato-
problema se complica cuando se trata de hacer el rias (FNT, IL – 1, interferón β y γ), que son capaces
diagnóstico en los dos primeros estadios. de suprimir la secreción de eritropoyetina, la proli-
La primera etapa se conoce con el nombre de feración de precursores eritroides y el trasporte de
déficit latente de hierro y el paciente no aqueja nin- hierro a la médula.
gún síntoma atribuible a la ferropenia. Si se consi- En los falsos déficits de hierro, la terapéutica mar-
dera que el 30 % del hierro corporal se encuentra en cial no resuelve ningún problema e incluso es capaz
los depósitos (médula, hígado, bazo), es fácil ima- de agravarlo. Solamente tratando la enfermedad de
ginar el precario estado de estos enfermos si por al- base se logra mejorar la cifra de hemoglobina.
guna causa aumentan las pérdidas de este elemento
(intervención quirúrgica, pérdida de sangre por cual- Concepto
quier motivo, etc.). Este estado es imposible de diag- Se denominan anemias ferropénicas a aquéllas cau-
nosticar, a menos que se le realice un medulograma sadas por una deficiencia de hierro en el organismo,
por otra causa y se encuentre que sus depósitos lo cual impide la eritropoyesis medular normal.
medulares están exhaustos.
El segundo estadio, en el cual además de no ha- Etiopatogenia
ber hierro en los depósitos, se encuentra disminui- La deficiencia de hierro es la causa más común de
do el hierro sérico, con poca o ninguna alteración anemia en el mundo y se ha señalado como el tras-
de la cifra de hemoglobina, es más frecuente de lo torno orgánico más frecuente en la práctica médica,
que a menudo se piensa. Aquí se presentan algunos exceptuando quizas las caries dentales y la ateros-
síntomas, como se verá más adelante. clerosis.
En el tercer estadio ya hay una franca anemia por Su mayor prevalencia se encuentra en países sub-
déficit de hierro y es la de más fácil diagnóstico, desarrollados, sin embargo, algunos estudios han de-
basado en una serie de investigaciones que se des- mostrado una frecuencia también elevada en los
cribirán en el desarrollo de este capítulo. países desarrollados. Según la OMS se calcula que
Debe llamarse la atención sobre el falso déficit el 20 % de la población mundial sufre de ferropenias
de hierro. Durante una serie de enfermedades tales lo bastante intensas como para que su capacidad de

321
trabajo resulte mermada. Actualmente, más de mil del intestino. Un elemento importante es el conteni-
millones de seres humanos presentan muestras evi- do del hierro hem de la dieta, cuya absorción es más
dentes de malnutrición debido a una ingestión in- fácil que sus formas inorgánicas. Los vegetales y
adecuada de proteínas, calorías, hierro, yodo o los granos contienen fosfatos y fitatos que inhiben
vitamina A; por lo menos doce millones sufren de la absorción del hierro; por el contrario, la vitamina C,
secuelas que acarrean una invalidez permanente y que está presente en los cítricos, la favorece.
cada año mueren millones de personas malnutridas. Dicha absorción por el intestino delgado proxi-
Las causas de anemias ferropénicas son funda- mal es un proceso cuidadosamente regulado y ajus-
mentalmente las siguientes: tado por los niveles de hierro en depósito y la
demanda de la eritropoyesis. Su deficiencia se ob-
1. Deficiencia en el ingreso serva en los síndromes de malabsorción (esprue, en-
a) Déficit de ingestión fermedad celíaca, etc.) y en general, en cualquier
• Hipoalimentación proceso caracterizado por diarreas crónicas.
• Malos hábitos dietéticos
• Ablactación incorrecta Aumento de las necesidades
b) Déficit de absorción El aumento de las necesidades de hierro tiene parti-
• Síndromes de malabsorción (esprue, enfer- cular importancia en el embarazo, durante sus se-
medad celíaca, etc.) gundo y tercer trimestres en que estas necesidades
• Gastrectomía se multiplican 5 o 6 veces. Esto sólo se compensa
• Resecciones intestinales con una dieta cuyo contenido en hem sea alto o con
2. Aumento de las necesidades un suplemento terapéutico.
a) Embarazo La madre cede al feto unos 300 mg y pierde alre-
dedor de 100 a 200 mg en el parto. Además, existe
b) Adolescencia
una pérdida adicional de 100 mg en el período de
3. Aumento de las pérdidas
lactancia.
a) Parasitismo
La adolescencia también aumenta sus requeri-
b) Sangramiento crónico (metrorragias, ulcus
mientos, sobre todo en las hembras durante la
péptico, hemorroides, neoplasias, etc.)
menarquia. Es de interés histórico la clorosis des-
crita en jovencitas, llamada así por la peculiar pali-
Deficiencia en el ingreso de hierro
dez con un matiz verdoso, como consecuencia de la
Deficiencia en la ingestión. Clásicamente se la ha
anemia ferropénica que padecían.
considerado como una causa infrecuente de deficien-
cia de hierro, por lo pequeño de las necesidades dia- Incremento de las pérdidas de hierro
rias de este metal (10 a 20 mg diarios, de los cuales Generalmente es consecuencia de un sangramiento
se absorbe un 5 o un 10 %). Se calcula que con la crónico y mantenido. En la mujer la menometrorragia
absorción de 1 mg diario se cubren las pérdidas nor- representa la causa más común. El parasitismo tiene
males por la orina, las heces fecales, el sudor y la una gran importancia en los países subdesarro-
descamación de la piel. Por supuesto, cuando au- llados.
mentan las necesidades se incrementa la absorción. En el hombre, la hemorragia del tubo digestivo
La dieta sí puede constituir una causa importante constituye una causa notable de deficiencia de hierro
en la deficiencia de hierro en grupos de población (ulcus péptico, hemorroides, hernia diafragmática,
con situaciones económicas que llevan a una neoplasias, etc.). Ésta es a veces oculta y puede ha-
hipoalimentación o que conducen a malos hábitos cer perder hasta 30 ml de sangre diarios en la parte
dietéticos. Muchas veces una ablactación incorrecta alta del tubo digestivo y sin embargo, resultar nega-
es causa de deficiencia de hierro en niños de 6 a tiva una prueba de sangre oculta en heces fecales.
24 meses de edad.
Deficiencia en la absorción. La cantidad de hierro Absorción del hierro
absorbido depende de la clase de comida ingerida, Todo el intestino tiene la capacidad de absorber
del aporte calórico y de la capacidad de absorción hierro, pero la máxima actividad se encuentra en el

322
duodeno y en la primera porción del yeyuno. Como das las células del organismo, y transportarlo hasta
ya se dijo, con la absorción de 1 mg diario se cubren los depósitos (hígado, bazo, médula ósea, etc.) o di-
las pérdidas normales de este metal. rectamente a las células medulares que sintetizan he-
El hierro de los alimentos está presente en forma moglobina (sistema eritropoyético); se almacena
de conjugados, principalmente en estado férrico, que como ferritina o como hemosiderina.
debe ser reducido al estado ferroso antes de ser ab-
sorbido. El jugo gástrico, en condiciones normales, 1. Ferritina. Molécula compuesta de un núcleo
desempeña un papel importante pero no decisivo en central de hierro, rodeado de una proteína lla-
la absorción del hierro. Éste, unido al hem que pro- mada apoferritina. El hierro contenido en la
cede de la hemoglobina, mioglobina, etc., es absor- ferritina se reduce de férrico a ferroso cuando
bido intacto por las células epiteliales de la mucosa, es requerido en otros sitios. Esto es mediado
con independencia de los sistemas reductores. En la por la enzima xantina – oxidasa. Existe una
mucosa intestinal, el hierro es liberado del anillo cantidad de ferritina circulante que está en
porfirínico y pasa al plasma. Las células epiteliales equilibrio con la ferritina de los tejidos y por lo
admiten nada más lo necesario para cubrir las pérdi- tanto, los niveles de ferritina sérica se corre-
das, sin permitir que haya un exceso o una deficien- lacionan con los depósitos de hierro del orga-
cia en la absorción. nismo.
2. Hemosiderina. Cuando aumentan los niveles
Transporte y almacenamiento de hierro, la ferritina dispersa se concentra en
del hierro vacuolas. En esta situación ocurre la desnatu-
El hierro que entra en el plasma proviene no sólo ralización de la matriz de apoferritina y bio-
del intestino, sino también de la hemoglobina del químicamente el compuesto se convierte en
sistema reticuloendotelial, del que se encuentra al- hemosiderina. Por lo tanto, el factor más im-
macenado en los tejidos y de las enzimas. A través portante en la distribución de hierro entre
del plasma, el hierro es transportado a la médula ósea ferritina y hemosiderina, es la concentración
donde se efectúa la síntesis de hemoglobina. de hierro almacenado.
Alrededor del año 1940 se descubrió que el
hierro se unía en el plasma a una proteína específi- La transferrina transporta su hierro hasta recep-
ca, con movilidad electroforética de una beta–1– tores situados en la superficie de las células rojas
globulina, a la cual se le denominó transferrina. Cada nucleadas y de los reticulocitos (están ausentes en
molécula de transferrina se une a dos átomos de los eritrocitos maduros) y después retorna vacía a
hierro en forma férrica. El nivel normal de hierro los macrófagos a cargarse de nuevo de este metal.
unido a la transferrina se conoce con el nombre de Una vez dentro de la célula, el hierro va a la mito-
hierro sérico, y es de 50 a 150 µg/dl en el hombre y condria y es incorporado al hem. Al mismo tiempo
un 10 % menor en la mujer. Después se demostró que se va formando globina en los ribosomas. Una enzi-
la transferrina sólo está saturada hasta el 25 o 50 % y ma determinará la unión del hem a la globina y se
la cantidad extra que pudiera ser aceptada por ella formará así una molécula de hemoglobina.
ha sido llamada capacidad latente de saturación. La
Reutilización del hierro
suma del hierro sérico y de la capacidad latente de
saturación es lo que se conoce como capacidad total Los glóbulos rojos envejecidos son captados por los
de saturación y representa, por lo tanto, la cantidad macrófagos, principalmente en el bazo, el hígado y
total de hierro que puede unirse a la transferrina. Su la médula ósea. En los macrófagos, la hemoglobina
cifra normal oscila entre 300 y 360 µg/dl. es desdoblada en sus dos componentes esenciales:
El hierro se une fuertemente a la transferrina, por hem y globina. El hierro se libera del hem y el resto
lo cual no hay hierro iónico libre en el plasma. de este compuesto, la porfirina, es convertido en bi-
La transferrina tiene la propiedad de pasar con lirrubina. Luego el hierro gana de nuevo el plasma,
facilidad del espacio intravascular al extravascular, donde se une a la transferrina y es otra vez utilizado
por lo tanto, es capaz de intercambiar hierro con to- en la síntesis de hemoglobina.

323
El hierro recién liberado del hem es el utilizado La coiloniquia (uñas en cuchara) se señala como
preferentemente en la formación de “nueva” hemo- común por algunos autores, pero en realidad sólo se
globina. Es decir, el usado hoy en la formación de manifiesta en las deficiencias de hierro muy severas
hemoglobina, es el mismo que ayer fue liberado de y prolongadas.
un glóbulo rojo envejecido. Los trastornos menstruales son corrientes en las
Aun en condiciones normales, una pequeña can- mujeres.
tidad de glóbulos rojos se destruye en el torrente Es importante señalar que entre las mayores con-
circulatorio. La hemoglobina liberada de dichos gló- secuencias del déficit de hierro, se encuentran una
bulos se une a una proteína plasmática llamada capacidad reducida de trabajo, una disminución de
haptoglobina, que la transporta hasta el sistema re- la evolución neurológica en el niño en crecimiento
ticuloendotelial, donde seguirá el proceso normal de y también una adversa evolución del embarazo.
La deficiencia de hierro, además, puede producir
su catabolismo.
una alteración de la inmunidad mediada por células.
Cuadro clínico
Exámenes complementarios
En general, las anemias ferropénicas tienen una ex-
Hemograma. La hemoglobina y el hematócrito es-
presión clínica pobre. Algunos pacientes severamen-
tán disminuidos. Con frecuencia se encuentra una
te anémicos presentan pocos síntomas, lo que no se
cifra de plaquetas elevada, que comienza a dismi-
correlaciona con el grado de anemia. El comienzo
nuir cuando se administra hierro. En su inicio los
es insidioso con debilidad, fatiga fácil, insomnio y hematíes son normales y sólo cuando la anemia pro-
cefalea. Ciertos autores consideran estos síntomas gresa aparecen la microcitosis y con posterioridad
como manifestaciones de deficiencia de hierro en la hipocromía (Fig. 41.1).
las enzimas respiratorias de los tejidos y que cuan- Constantes corpusculares. Clásicamente la ane-
do se trata al paciente, el primer hierro absorbido se mia ferropénica es microcítica hipocrómica.
incorpora a estas enzimas y las normaliza. Esto pue- Conteo de reticulocitos. Está normal o bajo.
de explicar la observación frecuente de que cuando
a dichos enfermos se les administra hierro, se sien-
ten mejor, aun antes de que el ascenso de la cifra de
hemoglobina explique la mejoría.
Además de la palidez cutaneomucosa y de los sín-
tomas comunes a toda anemia crónica, hay una se-
rie de síntomas y signos que se describirán por su
interés.
No resulta extraño encontrar una glositis con atro-
fia de las papilas linguales, caracterizada por lengua
roja, lisa, brillante y dolorosa. Es rara la llamada
disfagia sideropénica (síndrome de Plummer –
Vinson). En ocasiones se encuentra una gastritis, con
atrofia de la mucosa y también anaclorhidria. Estos
pacientes tienen el pelo fino y quebradizo. Además
suele aparecer una estomatitis angular, con erosión,
hiperestesia y tumefacción de los ángulos de la boca.
La pica, perversión del apetito caracterizada por
la ingestión compulsiva de sustancias no alimenti-
cias, ha sido asociada frecuentemente a ferropenia.
Se han descrito la pagofagia (hielo), la amilofagia
(almidón), la geofagia (tierra), etc.
Se plantea la presencia de una esplenomegalia Fig. 41.1. Lámina de sangre periférica de una anemia por defi-
discreta, aunque en realidad esto es raro. ciencia de hierro. Nótese la gran hipocromía de los hematíes.

324
Hierro sérico. Se encuentra disminuido. Como ya Después de establecida la causa y tratada dentro
se expuso, la cifra normal en el hombre es de 50 a de lo posible, se inicia la ferroterapia. En la mayoría
150 µg/dl y un 10 % menor en la mujer. de los enfermos se prefiere la vía oral.
Capacidad total de saturación. En las anemias Existen varios medicamentos que contienen hierro
ferropénicas hay una gran insaturación de la trans- en forma de sales ferrosas. Entre los más usados te-
ferrina; por lo tanto, la capacidad total de saturación nemos:
estará elevada.
Ferritina sérica. El hombre adulto tiene unos ni- • Gluconato ferroso.Se presenta en tabletas de
veles de ferritina entre 50 y150 µg/L, mientras que 300 mg que contienen un 12 % (36 mg) de
la mujer tiene niveles entre 15 y 50 µg/L. Cuando el hierro elemental.
hierro de los depósitos se depleta, los niveles de • Sulfato ferroso. Disponible en tabletas de 300 mg
ferritina descienden por debajo de 15 µg/L. con un 20 % (60 mg) de hierro elemental.
Protoporfirina IX. La protoporfirina es una mo-
lécula fabricada por las mitocondrias y a la cual se En el mundo hay una serie de compuestos que
une el hierro para formar hem. Por lo tanto, niveles contienen hierro en forma única o asociado a un com-
altos de ella reflejan un inadecuado aporte de hierro plejo vitamínico. Se deben administrar 200 a 300 mg
a los precursores eritroides. Los valores normales de hierro elemental diariamente entre las comidas
son de 30 µg/dl en los glóbulos rojos. En el déficit para su mejor absorción. A medida que aumenta la
de hierro, los valores están por encima de 100 µg/dl. cifra de hemoglobina, disminuirá la cantidad de hierro
Medulograma. Es un método sensible para iden- absorbido, por lo que la dosis se reduce.
tificar la deficiencia de hierro. Se encontrará una Después que la cifra de hemoglobina del pacien-
hiperplasia del sistema eritropoyético con presencia te esté dentro de límites normales, hay que mante-
de normoblastos pequeños (micronormoblastos). Los ner la terapéutica durante 3 a 6 meses para lograr
sistemas granulopoyético y megacariopoyético es- una total reposición de los depósitos. Si la causa de
tán normales. La coloración con ferricianuro de la deficiencia de hierro no puede eliminarse, se debe
potasio (azul de Prusia), que tiñe especialmente al continuar con la ferroterapia.
hierro, ha sido de gran utilidad para determinar si lo La respuesta al tratamiento se comprueba con el
hay en los depósitos y siempre se encontrará negati- conteo de reticulocitos. Cuando es adecuado se ob-
va en el caso de una deficiencia. serva una respuesta reticulocitaria entre el quinto y
Respuesta a la terapéutica. Es en última instan- el séptimo días, con el nivel mayor alrededor del
cia la prueba más demostrativa de una deficiencia décimo día.
de hierro. Si no hay dificultad en la absorción de Las sales de hierro a veces provocan reacciones
este elemento, si no existe una enfermedad sistémi- de intolerancia en el enfermo, tales como mareos,
ca que retarde la respuesta a la terapéutica y si hay estreñimiento, náuseas, vómitos, dolor abdominal,
la seguridad de que el paciente siguió bien el trata- gastritis, etc., que en ocasiones obligan a disminuir
miento, la respuesta a la ferroterapia constituye una la dosis o abandonar la vía oral. Debe comenzarse
prueba inequívoca de que el diagnóstico era correcto. con una tableta diaria e ir aumentando paulatinamen-
El conteo de reticulocitos debe subir en 5 a 7 días, te la dosis hasta llegar a la deseada.
la hemoglobina comenzará a aumentar en 2 o 3 se- La administración parenteral de hierro se utiliza
manas y la anemia se corregirá aproximadamente en los pacientes con una intolerancia total o en aqué-
en 2 meses. llos que tienen una malabsorción; para ellos el hierro
dextrán (Inferón) por vía parenteral es el más usado
Tratamiento (un complejo de hidroxiloférrico y dextrán) que con-
Un diagnóstico de anemia ferropénica sin una con- tiene 50 mg de hierro por cada mililitro. La dosis
firmación etilógica suele ser la mitad del diagnósti- total se calcula de la siguiente manera:
co, por lo tanto, una terapéutica marcial en estos
casos, sin un tratamiento etiológico, es sólo la mitad .
Hb ideal – Hb del paciente 0,255 =
del tratamiento de dicho paciente. Hierro que se debe administrar en mg

325
Se aplican 100 mg diarios en días alternos. Suele el tratamiento tanto por vía oral como parenteral,
causar molestias y cambios de coloración en el sitio logrará un aumento de la hemoglobina de un 1 g
de la inyección, además de mareos, cefalea y artral- cada semana.
gias. Hay dos tipos de compuestos, uno que contiene
El hierro parenteral no es más eficaz en corregir fenol, sólo para uso IM, y otro que no tiene fenol y
un déficit de hierro que un tratamiento oral óptimo. que puede usarse por vía IM y EV.
Si el paciente tiene efectivamente una deficiencia,

326
42
ANEMIAS MEGALOBLÁSTICAS

Las anemias megaloblásticas se deben fundamen- En una anemia megaloblástica severa, el 90 % de


talmente a un déficit de ácido fólico o de vitamina los precursores eritroides se destruye dentro de la
B12 y se caracterizan por los elementos siguientes: médula, pero en el individuo sano se destruye sólo
el 10 o 15 %. Este proceso de hemólisis intramedu-
1. Cambios megaloblásticos en la médula ósea. lar (eritropoyesis inefectiva) origina un aumento de
2. Anemia macrocítica, leucopenia y trombocito- la bilirrubina indirecta en la sangre y es el responsa-
penia. ble de la discreta ictericia en estos enfermos. Tam-
3. Asociación frecuente con lesiones bucales, gas- bién por la hemólisis se deposita una gran cantidad
trointestinales y neurológicas. de hierro en la médula ósea.
4. Respuesta hematológica favorable al tratamien- El metabolismo perturbado del ADN afecta tam-
to con vitamina B12 o con ácido fólico. bién la maduración de los granulocitos y megacarioci-
tos, y como consecuencia se originan células grandes
Las células megaloblásticas tienden a ser gran- en el sistema granulopoyético (stabs y metamielocitos
des, debido a que la multiplicación celular es lenta, gigantes) y en el megacariopoyético (megacarioci-
mientras que el desarrollo del citoplasma prosigue tos en rosario y plaquetas gigantes).
normal, con un cociente ADN/ARN aumentado. Vitamina B12. La cobalamina no puede ser sinteti-
zada por el organismo y tiene que ser aportada por
Fisiopatología los alimentos. La fuente dietética son los productos
Tanto el ácido fólico como la vitamina B12 partici- de origen animal: carnes, huevos, pescado, leche, etc.
pan en una serie de reacciones bioquímicas del or- Durante la digestión, la cobalamina se libera de los
ganismo y en cierto modo sus funciones están alimentos y se une a una serie de proteínas denomi-
interrelacionadas. Ambos intervienen significativa- nadas genéricamente R – binders (R, rápida movili-
mente en la síntesis del ADN y su déficit origina dad electroforética y binder, se une o enlaza), que se
trastornos en la división celular, no sólo de las célu- encuentran en el jugo gástrico, saliva, bilis y otros
las hematopoyéticas, sino también de otras, sobre líquidos orgánicos con una estructura proteica co-
todo de las que tienen una rápida proliferación. Qui- mún, pero difieren en su contenido de carbohi-
zás una excepción sea el sistema nervioso, que aun- dratos.
que no está constituido por un tejido proliferante, Al llegar al duodeno, el complejo cobalamina–R-
tiene importantes requerimientos de vitamina B12. binder se separa y la primera se une al factor intrín-
Mientras que en las anemias megaloblásticas la seco (FI), que es producido por las células parietales
síntesis de ADN es lenta o está interrumpida, la for- del estómago, y forma una nuevo complejo (cobala-
mación de ARN está poco o nada perturbada y por mina – FI). Debido a su resistencia a la digestión pro-
lo tanto, la síntesis de hemoglobina continúa reali- teolítica, llega al íleon distal donde existen receptores
zándose normalmente. Esto provoca un asincronis- específicos en el borde en cepillo de la mucosa, que
mo entre la maduración del núcleo y el citoplasma, fijan el complejo cobalamina – FI y permiten la ab-
lo que da origen a una célula grande con un cito- sorción de la vitamina, es decir, el FI actúa como
plasma bien evolucionado y un núcleo que muestra una proteína transportadora. Una vez que el comple-
una cromatina inmadura. jo cobalamina – FI se une al receptor y es absorbido a

327
nivel del íleon, el FI se destruye y la cobalamina se de monoglutamatos a poliglutamatos. Este fenóme-
une a la transcobalamina II (TCII), otra proteína de no se explica por la llamada “trampa de folatos” o
transporte. El complejo cobalamina – TCII pasa a la “trampa de metilo”. La vitamina B12 actúa quitán-
circulación y es captado por el hígado, la médula dole el grupo metilo al tetrahidrofólico por la ac-
ósea y otras células del organismo. Aunque la TCII ción de las enzimas meteoninsintetasa, lo que permite
es la aceptadora de la vitamina B12, la mayoría de que penetre en las células. Por esta falta de folatos
ella circula unida a la TCI, que se deriva de los leu- en el interior de las células, en los casos de déficit
cocitos. Esto se explica porque la TCII desaparece de vitamina B12, hay una escasa conversión de
rápidamente de la circulación, no así la TCI, que se deoxiuridilato a timidilato y consecuentemente tam-
elimina después de varios días. La TCIII contiene bién de síntesis de ADN.
una fracción menor de la vitamina B12 del plasma.
Ácido fólico. El ácido fólico es el nombre común Clasificación de las anemias
del ácido pteroilmonoglutámico, que se obtiene de megaloblásticas
la unión de un ácido pteroico con una molécula de
ácido L – glutámico. La principal fuente de folatos A. Déficit de vitamina B12
la constituyen las frutas, vegetales verdes, carnes, I. Aporte insuficiente: dieta vegetariana (raro)
etcétera. La dieta normal aporta cerca de 600 µg/día II. Malabsorción
de ácido fólico y las necesidades son de 50 a 100 µg a) Producción insuficiente de FI
diarios, aunque puede aumentar en situaciones como • Anemia perniciosa
prematuridad, embarazo, infecciones, diarreas o he- • Gastrectomía
mólisis. • Ausencia congénita o alteraciones funcio-
Este ácido de los alimentos se presenta en forma nales del FI (raro)
de poliglutamatos y en el intestino éstos son desdo- b) Enfermedades del íleon terminal
blados por la enzima folatoconjugasa y convertidos • Esprue tropical
en mono y diglutamatos para su mejor absorción por • Esprue no tropical
el yeyuno proximal. En el plasma, los folatos están • Enteritis regional
fundamentalmente bajo la forma de N5 metiltetrahi- • Resección intestinal
drofolato, un monoglutamato, que es transportado • Neoplasias y procesos granulomatosos
al interior de las células donde vuelve a convertirse (raro)
en poliglutamato. • Malabsorción selectiva de cobalamina (sín-
El depósito total de ácido fólico en el organismo drome de Imerslund, raro)
de un individuo sano es de 5 a 20 µg, la mitad de los c) Factores que compiten con la cobalamina
cuales se encuentra en el hígado. Este depósito es • Céstodes de pescado (Diphyllobothrium
relativamente bajo y una supresión brusca de la ab- latum)
sorción de dicho factor originará en pocos meses, • Bacterias : síndrome del “asa ciega”
una anemia megaloblástica. d) Fármacos
Se ha demostrado en la práctica, que los pacien- • Ácido para-aminosalicílico
tes con déficit de vitamina B12 muestran una respues- • Colchicina
ta hematológica a grandes dosis de ácido fólico, • Neomicina
aunque los síntomas y signos neurológicos pueden III. Otros
empeorar. Esta interrelación ha sido aclarada en los • Óxido nitroso
últimos años. Se ha observado que los niveles plas- • Déficit de transcobalamina II
máticos de metil FH4 están elevados en los pacien- B. Déficit de ácido fólico
tes con déficit de vitamina B12, mientras que los I. Aporte insuficiente: dieta inadecuada
niveles intracelulares de folatos, en forma de poli- II. Aumento de las necesidades
glutamatos, están disminuidos. Se piensa que esto a) Fisiológicas
se debe a que la vitamina B12 interviene en la capta- • Embarazo
ción celular de metil FH4 o quizás en la conversión • Lactancia

328
• Prematuridad variedad de productos de origen animal: carne, hue-
• Hiperemesis gravídica vos, pescado, mantequilla, leche, queso, etc. Ocurre
b) Patológicas casi exclusivamente en personas con hábitos vege-
• Neoplasias malignas tarianos. Los requerimientos diarios son mínimos
• Hemodiálisis (1 a 5 µg). El organismo almacena entre 2 000 y 5 000 µg
• Procesos exfoliativos crónicos de la piel y las pérdidas diarias son muy pequeñas. Es por ello
• Anemias hemolíticas crónicas que los primeros signos de anemia megaloblástica
III. Malabsorción por déficit de vitamina B12, se observan de 10 a
a) Sin alteraciones de la mucosa intestinal 20 años después de la falta de ingestión o de absor-
• Algunos fármacos ción de esta vitamina.
• Barbitúricos
b) Con alteraciones de la mucosa intestinal Malabsorción
• Esprue tropical Existen varias causas de déficit de absorción de vi-
• Esprue no tropical tamina B12:
• Enteritis regional
IV. Alteraciones del metabolismo 1. Producción insuficiente de FI
a) Inhibidores de la hidrofolatorreductasa: me- 2. Trastornos del íleon terminal
totrexate–pirimetamina 3. Factores que compiten con la vitamina B12
b) Alcohol 4. Drogas
c) Deficiencias enzimáticas (dihidrofolato 5. Déficit de TCII
reductasa)
C. Otras causas Producción insuficiente de FI
I. Fármacos que alteran el metabolismo del ADN Gastrectomía. La gastrectomía total puede producir
a) Antagonistas de las purinas: 6-mercaptopu- una anemia megaloblástica 5 o 6 años después de
rina, azatioprina realizada y la gastrectomía parcial, aunque no oca-
b) Antagonistas de la pirimidina: 5-fluoracilo, siona depleción total de FI, es capaz de originar cam-
citosina arabinósido bios megaloblásticos con el curso de los años.
c) Otros: procaibacina, aciclovir, AZT, anticon- Anemia perniciosa. Aunque en nuestro medio es
vulsivantes una causa no común de anemia magaloblástica, por
II. Trastornos metabólicos (raro) su importancia histórica se describirá a continuación.
a) Oroticoaciduria hereditaria Se trata de una anemia de carácter crónico, carac-
b) Otros terizada por un comienzo insidioso, macrocitosis,
III. Anemias megaloblásticas de causa descono- aquilia gástrica y ciertas perturbaciones gastrointes-
cida tinales y neurológicas, así como manifestaciones de
a) Anemia megaloblástica refractaria una destrucción sanguínea superior a lo normal.
b) Síndrome de Digluglielmo (eritroleucemia En ella existe una deficiencia de vitamina B12 con-
aguda) dicionada por la incapacidad del fundus gástrico para
c) Anemia diseritropoyética congénita secretar cantidades adecuadas de factor intrínseco,
indispensables para la absorción de aquélla.
Antes de la institución de la vitaminoterapia, la
DÉFICIT evolución de esta enfermedad era fatal, de ahí el
nombre de anemia perniciosa con que se denominó.
DE VITAMINA B12 Aunque resulta inadecuado en la actualidad, el tér-
mino ha sido sancionado por el uso y se debe seguir
utilizando, pero solamente en la anemia megaloblás-
Dieta inadecuada tica en la cual falte el factor intrínseco.
Es una causa infrecuente de anemia megaloblástica, Esta anemia se presenta con frecuencia en euro-
ya que esta vitamina está presente en una amplia peos de origen nórdico, y se dice que afecta sobre

329
todo a individuos de pelo prematuramente cano, ojos mente a las regiones superiores del intestino delga-
claros, constitución robusta y sangre del grupo A. do (duodeno y yeyuno), donde mejor se absorben
Alcanza su mayor incidencia después de los 40 años, los folatos.
aunque también se ha descrito una variedad juvenil. También son capaces de producir anemias mega-
Afecta por igual a ambos sexos. No es rara en varios loblásticas por déficit de vitamina B12, resecciones
miembros de una misma familia y la aclorhidria es intestinales que afectan el íleon terminal, al igual
más común en los parientes de los que padecen de que enfermedades de esta región: ileítis, tuberculo-
esta anemia que en la población general. Además, sis, linfomas, etc.
en el 40 % aparecen anticuerpos contra el factor in- El síndrome de Imerslund es una ausencia congé-
trínseco. nita del receptor específico del íleon terminal y cau-
En 1928, Castle logró una mejoría evidente en sa anemia megaloblástica en los niños.
enfermos de anemia perniciosa, al administrarle a
través de una sonda gástrica el contenido estomacal
Factores que compiten con la vitamina B12
de una persona sana extraído una hora después de la
Hay una serie de alteraciones anatómicas del intes-
ingestión de 300 g de carne magra. Los experimen-
tino que originan estasis del contenido intestinal e
tos de este investigador demostraron que la anemia
hipercrecimiento bacteriano y compiten con la utili-
perniciosa guardaba relación estrecha con alguna
zación de la vitamina B12. Entre ellas se encuentran
carencia nutritiva. Previamente había fracasado en
obtener respuesta hematopoyética al dar a los enfer- el síndrome del asa ciega, las estenosis, las fístulas,
mos la misma cantidad de carne, pero no predigerida los grandes divertículos, los cortocircuitos intesti-
en un estómago normal. nales, etc. La terapéutica con antibióticos hace
Hoy se sabe que el factor extrínseco es la vitami- desaparecer el déficit de vitamina B12, lo que apoya
na B12 y que el factor intrínseco de Castle, ausente la hipótesis de que la utilización bacteriana de esta
en el estómago de los pacientes con anemia perni- vitamina es la causa de su déficit. Se invoca un me-
ciosa, es una glicoproteína secretada por las células canismo semejante en la anemia megaloblástica por
parietales del estómago y cuya función no es trans- Diphyllobothrium latum, que compite con el hués-
formar la vitamina B12 en una tercera sustancia, sino ped por el complejo vitamina B12–FI.
unirse a ella formando un complejo vitamina B12–FI.
Hay una serie de datos que apoyan la teoría auto- Drogas
inmune en la patogenia de esta anemia. En el 90 % Ciertas drogas como la neomicina, la colchicina y
de los adultos que la padecen se han encontrado an- los paraminosalicilatos, interfieren en la absorción
ticuerpos contra el citoplasma de las células parieta- de vitamina B12.
les gástricas y también anticuerpos contra glándulas
endocrinas, en particular contra las células acinares Déficit de transcobalamina II
del tiroides. El 60 % tiene anticuerpos contra el FI. Es una causa rara de anemia megaloblástica.
Por otra parte, existe una fuerte asociación entre ane-
mia perniciosa y enfermedades autoinmunes: enferme-
dad de Graves, tiroiditis de Hashimoto, mixedema,
vitiligo, enfermedad de Addison, diabetes mellitus
DÉFICIT DE ÁCIDO
tipo I, agammaglobulinemia adquirida, colitis FÓLICO
ulcerativa, etc.
Dieta inadecuada
Trastornos del íleon terminal
El esprue tropical afecta a zonas extensas del epite- La dieta inadecuada es una causa relativamente fre-
lio intestinal, sobre todo del intestino delgado y en cuente de anemia megaloblástica por déficit de áci-
ocasiones también del colon, por lo cual es frecuen- do fólico. Se debe recordar que los depósitos de éste
te en esta enfermedad, tanto el déficit de ácido fólico en el organismo son escasos y cualquier causa que
como el de vitamina B12. Sin embargo, el esprue no origine reducción en su ingestión o absorción, con-
tropical (enteropatía por gluten) afecta más severa- duce con rapidez a una anemia megaloblástica.

330
Aumento de las necesidades reflejos atenuados o exaltados. Son frecuentes los
Durante el embarazo los requerimientos de folatos síntomas cerebrales tales como apatía, irritabilidad,
aumentan de 5 a 10 veces. La placenta posee un nú- torpeza, pérdida de la capacidad de concentración y
mero elevado de receptores para ellos, y esto facili- alteraciones del gusto y del olfato.
ta el transporte al feto en detrimento de la madre; su Los signos neurológicos, cuando están presentes
déficit durante el embarazo puede causar defectos en toda su magnitud, constituyen la llamada enfer-
del tubo neural en el feto, de ahí la necesidad del medad combinada, por la toma de los cordones pos-
aporte de suplemento de ácido fólico a la embarazada. teriores y laterales de la médula.
La médula ósea y la mucosa intestinal, que se Los pacientes con déficit de ácido fólico tienen
multiplican muy rápido, necesitan mucho folato, por las mismas manifestaciones hematológicas que en
eso los pacientes con eritropoyesis muy intensa, el déficit de vitamina B12, aunque tienen mayor ten-
como sucede en las anemias hemolíticas, sufren de dencia a padecer de malnutrición. Las manifestacio-
déficit de ácido fólico. También los pacientes so- nes gastrointestinales son más frecuentes, y sin
metidos a hemodiálisis requieren de suplemento de embargo, no existen alteraciones neurológicas.
ácido fólico para reponer las pérdidas originadas a
través de los líquidos de diálisis. Exámenes complementarios
Hemograma. Hay una disminución de la cifra de
Malabsorción
hematíes, con frecuencia por debajo de dos millo-
Las causas de malabsorción de ácido fólico son casi nes por mm³. La principal característica de la sangre
las mismas que en el caso de la vitamina B12. es la macrocitosis (Fig. 42.1), o sea, la presencia en
Cuadro clínico la sangre periférica de glóbulos rojos anormalmente
grandes, de forma circular u oval. Hay también una
Los síntomas comunes a todas las anemias megalo- marcada anisocitosis y poiquilocitosis. Se observan
blásticas están en relación con el síndrome anémi-
co, habitualmente bien tolerado por su evolución
lenta. Aunque existe disminución de los leucocitos
y de las plaquetas, esto por lo general no produce
manifestaciones clínicas.
Estos síntomas consisten en debilidad, vértigo,
palpitaciones y en casos graves, insuficiencia car-
díaca congestiva. En el examen físico el paciente se
encuentra pálido, con un ligero tinte ictérico; en oca-
siones el pulso es rápido, existe cardiomegalia y se
auscultan soplos funcionales.
Las manifestaciones gastrointestinales son: ano-
rexia, pérdida de peso, lengua dolorosa, lisa y enro-
jecida, y a veces diarreas. En cuanto a la anemia
perniciosa, en algún momento de la evolución de la
enfermedad aparecen trastornos neurológicos, que
en ocasiones son los primeros síntomas. Los pacien-
tes aquejan parestesias en las manos y los pies con
sensación de embotamiento y debilidad. El más fre-
cuente y precoz de los signos neurológicos es la pér-
dida de la sensibilidad vibratoria, y le sigue la de la
batiestesia o sentido de posición.
Hay debilidad de los miembros inferiores, con Fig. 42.1 Lámina de sangre periférica en una anemia megalo-
inestabilidad para la marcha y signo de Romberg blástica, donde se observan abundantes macrocitos. Compáre-
positivo. Pueden existir trastornos esfinterianos, con se el tamaño de ellos con los glóbulos más pequeños, normales.

331
normoblastos en la sangre circulante y los eritroci- 2. Sistema granulopoyético. Es característica la
tos pueden contener punteado basófilo, corpúsculos presencia de stabs y metamielocitos gigantes.
de Howell–Jolly y anillos de Cabot. 3. Sistema megacariopoyético. Algunas de las cé-
Generalmente existe leucopenia con neutropenia lulas muestran varios núcleos que se colocan
y los neutrófilos tienen un núcleo hipersegmentado en su periferia (megacariocitos en rosario).
(pleocariocitos).
Plaquetas. El número de plaquetas casi siempre El azul de Prusia es positivo (hierro medular) a
es bajo. menos que coexista un déficit de hierro.
Reticulocitos. El conteo de reticulocitos está dis- Bilirrubina. Se encuentra elevada a expensas de
minuido. Después de 7 a 10 días de tratamiento se
la fracción indirecta, por la eritropoyesis inefectiva
produce un aumento en la cifra de estas células.
como ya se explicó.
Medulograma. Los tres sistemas medulares sue-
Hierro sérico. Está elevado.
len encontrarse afectados:
Dosificación de vitamina B12 en el suero. Los va-
1. Sistema eritropoyético. Hay marcada hiperpla- lores normales son 200 a 900 pg/ml. Por debajo de
sia con una gran cantidad de megaloblastos. 100 pg/ml hay un déficit significativo.
Estos últimos son células grandes con croma- Dosificación de ácido fólico. Los valores norma-
tina finamente granular y citoplasma basófilo les son de 6 a 20 ng/ml. Cifras por debajo de 4 ng/ml
(Fig. 42.2). indican un déficit de folatos.
Secreción de ácido clorhídrico libre. La falta de
secreción de ácido clorhídrico libre, tras la estimu-
lación máxima con histamina, es característica de la
anemia perniciosa. En general, la secreción gástrica
se halla muy reducida. En la gastroscopia se aprecia
la atrofia de la mucosa del estómago.

Tratamiento
Déficit de vitamina B12. Dosis de ataque: 100 µg de
vitamina B12 IM diarios, durante 1 semana, luego se
disminuye la frecuencia a días alternos hasta com-
pletar los 2 000 µg en las primeras semanas.
Siempre que sea necesaria una dosis de manteni-
miento, se administrarán 100 µg IM mensualmente
de por vida.
Déficit de ácido fólico. La dosis habitual es de
1 mg diario, pero pueden necesitarse dosis mayo-
res, de 5 mg diarios, cuando el déficit es provocado
por malabsorción.
La duración del tratamiento depende de la causa
que lo determina, pues existen pacientes crónicos
en los cuales éste se mantiene de por vida.
El ácido fólico no debe emplearse en la anemia
perniciosa, pues favorece la aparición o el agrava-
Fig. 42.2 Medulograma de un paciente con anemia megalo- miento de las manifestaciones neurológicas.
blástica en el cual se observan varios megaloblastos.

332
43
ANEMIA APLÁSTICA

Concepto Clasificación de las anemias aplásticas


La anemia aplástica descrita por Ehrlich en 1888, I. Congénitas
es un síndrome de fallo medular caracterizado por a. Anemia de Fanconi ( asociada a anomalías con-
pancitopenia e hipoplasia medular. Las células ma- génitas múltiples )
dres hematopoyéticas son incapaces de proliferar y b. Disqueratosis congénita
diferenciarse para dar origen a células maduras de c. Síndrome de Blackfan - Diamond
la sangre y sus precursores. El progreso industrial d. Anemia aplástica familiar
con el incremento de agentes con propiedades II. Adquiridas
mielotóxicas, explica el aumento de la frecuencia a. Idiopática
de esta enfermedad. b. Secundarias
1. En el curso de anemias hemolíticas crónicas
Patogenia (drepanocitemia, esferocitosis congénita, etc.).
Generalmente sólo se afecta el sistema eri-
Desde que Ehrlich describió el primer caso de ane-
tropoyético
mia aplástica hasta nuestros días, mucho se ha es-
2. Tumores tímicos (por lo común sólo se afecta
peculado sobre el posible mecanismo de producción
el sistema eritropoyético)
de esta afección.
3. Infecciones: hepatitis, parvovirus, virus de
La patogenia es compleja y hasta hoy sólo par-
Epstein–Barr
cialmente comprendida, a pesar de que en esta últi-
4. Radiaciones
ma década se ha realizado un gran progreso con la 5. Drogas
identificación de la fuente de las células hematopo- • Agentes que siempre producen mielotoxi-
yéticas y de los genes que regulan la evolución de cidad cuando se administran en dosis su-
la hematopoyesis. ficientes (citostáticos)
En la mayoría de los casos, la falla reside en la • Agentes que ocasionalmente se asocian con
célula madre hematopoyética, o se debe a un defec- aplasia medular: cloranfenicol, fenilbu-
to intrínseco adquirido de esta célula, o bien a un tazona, ASA, difenilhidantoína, propil-
mecanismo inmune, o a ambos. tiouracilo, etc.
Hay poca evidencia de que un daño en el micro- 6. Hemoglobinuria paroxística nocturna
ambiente medular sea una causa frecuente de insu- 7. Reacción transfusional injerto–contra–
ficiencia medular. Sin embargo, hay datos suficientes huésped
para plantear que hay un defecto intrínseco en el 8. Trasplante de hígado por hepatitis fulminante
comportamiento hematopoyético y esto está demos- 9. Embarazo
trado por el éxito del trasplante de médula ósea. Con 10. Fascitis eosinofílica
el tiempo, se ha hecho más evidente que la mayoría
de los pacientes tienen un componente inmunológi- La etiología de las anemias aplásticas, congénitas
co en su fallo medular. La buena respuesta a agen- o adquiridas, tiene como común denominador una
tes inmunosupresores es una confirmación de este inadecuada proliferación o diferenciación de las cé-
trastorno inmunológico. lulas madres hematopoyéticas. Aproximadamente en

333
el 50 % de los casos no es posible identificar el agente Hemoglobinuria paroxística nocturna ( HPN ).
etiológico y hay que incluirlas en el grupo de idio- La relación de la anemia aplástica con la HPN se
páticas. describe en el capítulo correspondiente a esta últi-
Drogas. Algunas drogas originan depresión me- ma afección.
dular siempre que se administren en dosis suficientes Embarazo. Algunas mujeres debutan con una ane-
(citostáticos); otras, sólo la originan en ocasiones. mia aplástica en el curso de su embarazo. En otras
Entre estas últimas está el cloranfenicol, antibiótico se ha resuelto el problema con la interrupción de
capaz de producir dos tipos de efectos tóxicos sobre éste, aunque puede recurrir en próximas gestaciones.
la médula ósea: Radiación. La exposición a altas dosis de radia-
ción a veces ocasiona anemia aplástica, que por lo
general es irreversible.
1. El que aparece en forma precoz y es reversible,
provocado por la administración de dosis ele- Cuadro clínico
vadas en corto período de tiempo y que depende
Clínicamente, el cuadro de la anemia aplástica esta-
fundamentalmente de la constitución química
rá en relación con la toma mayor o menor de las
del fármaco. En estos enfermos se observan
líneas celulares hematopoyéticas:
eritroblastos vacuolados, reticulocitopenia y
aumento del hierro sérico, alteraciones que des- 1. Palidez intensa, traducción de la anemia severa
aparecen cuando se suprime la droga. que llega a la cifra del millón o menos de hema-
2. Se manifiesta más tardíamente, a menudo de .
tíes por milímetro cúbico (1,0 109/L).
carácter irreversible y en el cual interviene una 2. Trastornos hemorrágicos tales como epistaxis,
idiosincrasia del paciente al medicamento. Pue- gingivorragia, púrpura, metrorragia, hematu-
de ser independiente de la dosis utilizada y, aun- ria, etc. a causa de la trombocitopenia.
que por lo general, se observa en los casos a 3. Cuadro séptico con escalofríos, fiebre de 39-
los que se les ha administrado este antibiótico 40 °C y estado lipotímico capaz de llegar al
por largos períodos de tiempo, no resulta ex- shock. Surgen a menudo anginas graves, celu-
traño el antecedente de su uso en dosis ínfimas. litis, ulceraciones y necrosis en la mucosa oral,
vulvar y anoperineal. Todo esto en relación con
Existe una gran cantidad de drogas que han sido la neutropenia.
implicadas como responsables de producir anemia
aplástica en pacientes con idiosincrasia a ellas, en- La mayoría de las veces el inicio es lento e insi-
tre las que están fenilbutazona, indometacina, dioso y se caracteriza por sensación de lasitud, fe-
brícula y gingivorragia. Poco después aparecen el
ibuprofén, anfotericín, ASA, fenacetinas, propiltioura-
cuadro séptico y las grandes hemorragias. Otras ve-
cilo, sulfas, diuréticos, captopril, clorodiazepóxido
ces la anemia aplástica tiene un comienzo brusco,
y muchas más, cuya lista sería interminable. En al-
con una sepsis intensa a la que rápidamente se su-
gunas la asociación con anemia aplástica es lo sufi-
man la anemia y las hemorragias.
cientemente fuerte como para sospechar su papel Las adenopatías son raras, a menos que sean pro-
etiológico. En otras esta asociación sólo es esporá- ducidas por un proceso séptico local. Así mismo,
dica y resulta difícil establecer su significación como resulta poco frecuente la presencia de hepatosple-
causa de dicha anemia. nomegalia, lo que la distingue de las leucosis agu-
Infecciones. Ciertas infecciones virales han sido das, que por lo demás tienen un cuadro inicial muy
señaladas como productoras de anemia aplástica, y parecido.
la más común de ellas es la hepatitis. Se ha sugerido Las hemorragias en el fondo de ojo constituyen
un mecanismo inmune por la buena respuesta que un hallazgo común.
han tenido algunas de estas anemias poshepatíticas La severidad de la anemia aplástica está definida
a las drogas inmunosupresoras. También han sido en los criterios de Camitta, que han tenido amplia
incriminados el virus de Epstein – Barr, el parvovi- aceptación.
rus 19 y el VIH. Se cataloga como severa cuando se encuentra:

334
1. Médula ósea con menos de un 25 % de
celularidad
2. Dos o más de los siguientes criterios:
.
• Conteo de neutrófilos < 500 109 / L
.
• Conteo de plaquetas < 20 109 / L
• Anemia con conteo de reticulocitos corregi-
.
do de menos de 10 10-3.

Es muy severa cuando el conteo de neutrófilos


.
resulta menor de 0,2 109/L.
En los estadios finales de algunos casos se obser-
va piel bronceada y atrofia testicular, ambas como
consecuencia de la hemosiderosis por la gran canti-
dad de transfusiones administradas.
Los supervivientes de anemia aplástica están en
alto riesgo de padecer después de trastornos malig-
nos, fundamentalmente síndromes mielodisplásticos
y leucosis aguda.

Exámenes complementarios
Hemograma. Existe anemia marcada con una cifra
de hemoglobina muy reducida. Se observa, además,
leucopenia a expensas de los granulocitos. Es fre- Fig. 43.1. Medulograma en una aplasia medular. Nótese la gran
cuente la macrocitosis. pobreza de elementos medulares y la abundancia de grasa.
Plaquetas. Están disminuidas, casi siempre por
. .
debajo de 50 109/L (> 50 000 mm3). Durante la Hay que diferenciar la anemia aplástica de todas
fase de recuperación la cifra de plaquetas es la últi- las afecciones capaces de ocasionar una pancitope-
ma en volver a la normalidad y en ocasiones se man- nia, ya que sus síntomas pueden ser muy parecidos.
tiene baja por años. Así, es posible confundirla con una leucosis aguda
Reticulocitos. Por lo común se encuentran por aleucémica. La comprobación de adenopatías y de
hepatosplenomegalia hará pensar en esta última y el
debajo de las cifras normales.
medulograma será definitivo al mostrar una infiltra-
Hierro sérico. En la mayoría de los pacientes está
ción por células blásticas. La anemia megaloblásti-
por encima de los valores normales.
ca produce a menudo pancitopenia. La presencia de
Medulograma. Examen con valor definitivo en el
glositis y de manifestaciones neurológicas inclinará
diagnóstico de anemia aplástica. La celularidad está el diagnóstico hacia esta afección, la que se confir-
muy disminuida o prácticamente ausente y se obser- mará con el medulograma al mostrar la típica madu-
van muchos espacios grasos vacíos con pocas célu- ración megaloblástica.
las hematopoyéticas. Hay un aumento de linfocitos, La HPN a veces comienza como una aplasia me-
células plasmáticas y basófilos hísticos (Fig. 43.1). dular, por lo cual siempre hay que tener en mente
La biopsia medular permite un mejor análisis de esta posibilidad. En caso de duda debe efectuarse la
la celularidad, así como de células tumorales y prueba de Ham.
fibrosis.
Pronóstico
Diagnóstico El pronóstico está muy relacionado con el conteo de
El diagnóstico se basa en las manifestaciones clíni- neutrófilos al inicio de la enfermedad y por supues-
cas producidas por la pancitopenia (palidez, cuadro to, ha mejorado mucho con la introducción en el tra-
séptico y trastornos hemorrágicos) y los hallazgos tamiento del trasplante de médula ósea y de drogas
ya señalados en el medulograma. inmunosupresoras.

335
Sólo con transfusiones, el 80 % de los pacientes drógenos, además de las medidas generales de sos-
mueren en 18 o 24 meses. Con el trasplante de do- tén. Estudios controlados han demostrado que tie-
nantes histocompatibles suelen haber remisiones has- nen una modesta eficacia y en algunos enfermos.
ta en un 80 %, aunque muchos sufren una forma Hoy nada más se utilizan en adición a otras terapéu-
crónica de enfermedad de injerto–contra–huésped. ticas y nunca solos; el único tratamiento curativo
para la anemia aplástica es el trasplante de células
Tratamiento madres de un hermano histocompatible. Las demás
Tratamiento profiláctico posibilidades terapéuticas son paliativas, ya que por
Vigilancia de los centros industriales donde el con- lo general no se logra una normalidad cuanti–cuali-
tacto con distintos agentes ofensivos medulares pue- tativa de la hematopoyesis.
de provocar la afección. Con el trasplante de médula histocompatible se
han logrado supervivencias de un 70 u 80 % a los
1. Insistencia en el uso racional de ciertos fárma- 10 años en pacientes menores de 30 años que no han
cos que tienen efectos tóxicos potenciales me- sido transfundidos. Hay centros que los incluyen
dulares, sobre todo el cloranfenicol. hasta de 45 o 50 años. Por encima de esta edad es
2. Separación del paciente lo antes posible del pre- frecuente y muy severa la enfermedad de injerto–
sunto agente causal. contra–huésped. Por otra parte, desafortunadamen-
te sólo el 25 o 30 % de los enfermos tienen hermanos
Tratamiento de la aplasia ya constituida histocompatibles.
Medidas generales. Deben evitarse las transfusio- Uno de los mayores problemas del trasplante
nes y sólo administrarlas cuando el paciente está muy medular ha sido el rechazo del injerto que oscila
sintomático o la hemoglobina se encuentra por deba- entre 10 y 40 % en pacientes previamente transfun-
didos. Así mismo, otro riesgo importante es la en-
jo de 70 g/L, ya que si es candidato a un trasplante
fermedad del injerto–contra–huésped. El uso de
medular, el pronóstico es peor en los enfermos trans-
hemoglobina antitimocito como parte del régimen
fundidos. Sobre todo evitar las transfusiones de fa-
condicionante pretrasplante, así como de ciclospo-
miliares, porque la formación de anticuerpos contra
rina, ha logrado resultados promisorios en la lucha
antígenos menores de histocompatibilidad, aumen-
contra esta temida complicación.
ta el riesgo del rechazo. Si es imprescindible, se su-
Con mejores medidas de acondicionamiento
ministran glóbulos rojos lavados.
pretrasplante en pacientes con anemia aplástica y el
La transfusión de plaquetas se utiliza cuando la
uso de otras fuentes de células madres hematopoyé-
.
cifra sea menor de 10 109/L o en caso de un san-
ticas, el trasplante medular irá ganando cada día más
gramiento activo por trombocitopenia. Las reaccio- aceptación como tratamiento de elección para estos
nes transfusionales a concentrado de plaquetas son enfermos.
un problema grave en el manejo de estos enfermos Como se señaló en la patogenia, hay evidencias
y en este caso deben buscarse donantes HLA com- de mecanismos inmunes en esta enfermedad. Por lo
patibles. tanto, han sido utilizados métodos inmunosupreso-
La transfusión de leucocitos tiene modestos be- res con buenos resultados en pacientes mayores
neficios. de 45 años y en aquéllos que no tenían donantes
A las mujeres que menstruan se les dan pastillas histocompatibles.
de control de la natalidad para evitar severas pérdi- En los años 80 se comenzó a usar globulina
das de sangre. intravenosa, aunque hoy hay muchas dudas de su
No deben emplearse antibióticos de manera profi- efectividad en estos enfermos.
láctica, sino cuando exista un cuadro infeccioso bien Actualmente existen una serie de trabajos que
definido, y antes se realizarán cultivos con antibio- demuestran el efecto beneficioso de la globulina
gramas. Siempre que sea posible se evitará la expo- antilinfocito (GAL) y de la globulina antitimocito
sición de los pacientes a infecciones. (GAT), con mejoría en un 40 a 80 % de los pacientes.
Hasta hace poco tiempo, el tratamiento de la ane- La GAL o la GAT se administra en una dosis total
mia aplástica consistía en la administración de an- de 100 a 160 mg / kg de peso corporal, en 4 a 10 días.

336
Su toxicidad incluye fiebre, rash cutáneo, broncos- Se han reportado buenos resultados con el uso de
pasmo, alteración de la función hepática, trombo- factores de crecimiento hematopoyético, tanto en el
citopenia, hipotensión, etc. Hay quienes reportan trasplante medular como con el tratamiento inmu-
mejores resultados con una mezcla de globulina nosupresor. Los más utilizados han sido el factor es-
antilinfocítica, metilprednisolona (1mg/kg/día) y timulante de colonias de granulocitos (G–CSF) y el
ciclosporina (12 mg/kg/día por 3 a 6 meses, ajustan- factor estimulante de colonias granulocito–macró-
do la dosis a la cifra de creatinina en sangre), aun- fago (GM – CSF). Ambos pueden incrementar el
número de neutrófilos e incluso, la celularidad me-
que no parece acrecentar la supervivencia.
dular en determinados pacientes.
La terapia inmunosupresora produce una mejoría
Los glucocorticoides en altas dosis producen al-
hematológica y en la supervivencia en la mayoría guna respuesta en una pequeña cantidad de enfer-
de los pacientes, pero éstos probablemente no estén mos.
curados y en muchos se producen recaídas; y además, No se ha probado que las hormonas masculinas
tienen un alto riesgo de padecer después enferme- sean efectivas en la aplasia medular, aunque en oca-
dades clonales malignas (síndromes mielodisplásti- siones, ciertos pacientes han mejorado con este tra-
cos, leucosis aguda, HPN). tamiento.

337
44
SÍNDROME MIELODISPLÁSTICO

El síndrome mielodisplástico (SMD) es un trastor- CUADRO 44.1


no clonal adquirido que afecta la célula madre CLASIFICACIÓN FAB
DE LOS SÍNDROMES MIELODISPLÁSTICOS
hematopoyética.
En los años cuarenta del siglo pasado comenza- Subtipos Blastos Blastos Otros
ron a aparecer publicaciones con la descripción de en sangre en médula hallazgos
cuadros hematológicos que precedían a una leucemia periférica ( % ) (%)
aguda, y fueron denominados preleucemias. Poste- AR <1 <5
riormente se le asignaron distintos nombres: displa- ARSA <1 <5 Sideroblastos
sia hematopoyética, anemia refractaria con exceso en anillos
de blastos, leucemia mieloide subaguda, leucemia AREB <5 5 – 20
oligoblástica, etc.
AREB - t > 5 20 – 30 Bastoncillos
En el año 1982 el Grupo Cooperativo Franco– de Auer en
Americano–Británico (FAB) propuso una clasifica- precursores
ción para uniformar las bases del diagnóstico de los granulocíticos
SMD, así como los subtipos. Esta clasificacion está LMMC <5 5 – 20 Monocitos
basada en características morfológicas: conteo de en sangre
blastos en la sangre periférica y médula, conteo de periférica
monocitos, presencia de sideroblastos en anillos y .
> 1 109 / L
de bastoncillos de Auer.
Fueron divididos en 5 subtipos:
pero con una doble población eritrocitaria y sidero-
blastos en anillos en la médula ósea.
AR: Anemia refractaria
ARSA: Anemia refractaria con sideroblastos en Anemia refractaria con exceso de blastos (AREB).
anillos Hay menos de un 5 % de blastos en la sangre perifé-
AREB: Anemia refractaria con exceso de blastos rica y de un 5 a 20 % en la médula ósea. Suelen
AREB-t: Anemia refractaria con exceso de blastos haber signos de dishemopoyesis en los tres sistemas
en transformación medulares.
LMMC: Leucemia mielomonocítica crónica Anemia refractaria con exceso de blastos en
transformacion (AREB-t). Hay más de un 5 % de
A continuación se describirán las principales blastos en la sangre periférica, entre un 20 y 30 % en
características de cada uno de estos subtipos: (cua- la médula ósea y presencia de bastoncillos de Auer
dro 44.1) en precursores granulocíticos. El riesgo de transfor-
Anemia refractaria (AR). Fundamentalmente se
mación en una leucemia aguda es mayor.
manifiesta como un síndrome anémico, con menos
Leucemia mielomonocítica crónica (LMMC). La
de un 1 % de blastos en la periferia y menos de un
5 % en la médula ósea. Es habitual que se encuen- médula es igual que en AREB, pero con presencia
tren signos de diseritropoyesis. de promonocitos. Su contenido en blastos puede ser
Anemia refractaria con sideroblastos en anillo inferior al 5 %, pero en algunos casos llega al 20 %. Se
(ARSA). Los mismos hallazgos que en la anterior, .
observa una monocitosis absoluta mayor de 1 109/L.

338
Algunos plantean que la LMMC es una entidad fermos, en los períodos de AREB y AREB-t, tienen
hematológica con características propias y que se un cuadro clínico entre una leucemia mieloide cró-
acerca más a un síndrome mieloproliferativo que a nica y una leucemia mieloblástica.
los mielodisplásticos. La supervivencia media y la transformación en
El grupo FAB propuso distinguir dos subgrupos una leucemia aguda varían según el subtipo.
de LMMC, en dependencia del conteo total de leu-
cocitos: SUPERVIVENCIA MEDIA
.
Un tipo mielodisplástico con menos de 13,0 109/L. Y TRANSFORMACIÓN EN LMA

.
Un tipo mieloproliferativo con más de 13,0 109/L. Subtipos del FAB
El SMD se presenta de dos maneras distintas: el
primario, que ocurre en cualquier edad, pero es más AR ARSA AREB AREB-t LMMC
común en ancianos entre 70 y 80 años, y uno secun-
Supervivencia
dario, en personas más jóvenes. media (meses) 43 73 12 5 20
Su causa es desconocida, aunque hay enfermeda-
des congénitas con un mayor riesgo de padecer un Transformación
síndrome mielodisplástico (Síndrome de Down, ane- en LMA (%) 15 5 40 50 35
mia de Fanconi, enfermedad de von Recklinghau-
sen) y además, aparece con mayor frecuencia en La hepatosplenomegalia es rara y si está presen-
pacientes que han sido tratados con radiaciones o te, es moderada, excepto en la LMMC.
quimioterapia.
Exámenes de laboratorio
Patogenia
Los cambios displásticos que se observan en este
En este síndrome la médula tiene una inadecuada síndrome se relacionan en el cuadro 44.2.
producción de células maduras y esto trae como re-
sultado una médula celular, pero con pancitopenia CUADRO 44.2
en la sangre periférica. Esta hematopoyesis inefectiva CAMBIOS DISPLÁSTICOS
EN LOS SÍNDROMES MIELODISPLÁSTICOS
ocasiona la muerte celular intramedular prematura
de los precursores mieloides, o sea, en esta enfer- Diseritropoyético Granulopoyético Megacariopoyético
medad está incrementada la apoptosis o muerte ce-
Multinuclearidad Hipogranulación Micromegacariocitos
lular programada. Fragmentación Hiposegmen- Multinuclearidad
nuclear tación Hipolobulación
Cuadro clínico Cromatina densa
Este síndrome era desconocido hasta hace 20 años y Núcleos de forma
bizarra
hoy es quizás el trastorno clonal más frecuente en Sideroblastos
hematología. en anillos
En los estadios tempranos el paciente está asinto- Cuerpos de
mático y no es raro que se haga el diagnóstico du- Howell–Jolly
Hemoglobinización
rante un examen físico rutinario o un examen de la defectuosa
sangre periférica, donde se puede encontrar anemia, Punteado basófilo
trombocitopenia o leucopenia, o ambas.
Predomina en los varones y en pacientes viejos. Hemograma: La anemia es de moderada a seve-
El debut por debajo de 50 años es infrecuente, excep- ra. Se encuentran neutrófilos hipogranulados. En de-
to en los casos precedidos por irradiación o quimio- pendencia de la variedad se observan blastos. Suele
terapia. Los afectados generalmente mueren por haber hipocromía y macrocitos gigantes. En el caso
infecciones y hemorragias, debido a la neutropenia de una leucemia mielomonocítica crónica hay pre-
y trombocitopenia asociadas. Es importante enfati- sencia de monocitos.
zar en este punto, ya que los SMD amenazan la vida Plaquetas: Son a menudo grandes y agranulares
de ellos, con independencia de si evolucionan o no y en ocasiones se detectan micromegacariocitos en
hacia una leucemia aguda. Por lo general estos en- la periferia. Generalmente hay trombocitopenia.

339
Medula ósea: Por lo común la médula es normo o frecuentes, y en los que padecen de infecciones, debe
hipercelular, aunque a veces es hipocelular. El conteo considerarse la administración de antibióticos.
de blastos y el número de sideroblastos en anillos es Uno de los medicamentos más utilizados es la
importante para definir el subtipo de SMD. Hay una citosina–arabinósido en dosis bajas: 10 mg/m² cada
pobre maduración granulocítica, y se observan me- 12 h subcutánea por 14 días. La respuesta no ha sido
gacariocitos enanos bilobulados y sideroblastos en buena y en ocasiones se ha producido una depresión
anillos. En algunos casos hay eritropoyesis megalo- medular intensa.
blastoide. La presencia de blastos, de bastoncillos Hay que señalar que el trasplante medular es la
de Auer y de promonocitos depende del subtipo del única medida curativa, pero ha sido reservado para
SMD, como ya se ha explicado. pacientes menores de 40 años, con hermano histo-
Hierro sérico: Está elevado compatible. Por desgracia, los pacientes con estas
Ferritina sérica: Está elevada características son escasos.
Estudios citogenéticos: La mitad de los SMD prima- Últimamente se ha utilizado el factor estimulante
rios y el 75 % de los secundarios tienen alteraciones de colonias granulocítico-macrófago (GM-FSC) y
cromosómicas. No hay una anomalía específica pero la eritopoyetina humana recombinante.
las más frecuentes son la monosomía 7, 5 q – y la Los resultados con el tratamiento a base de ácido
trisomía 8. retinoico, corticosteroides, andrógenos, etc., han sido
En el caso del 5 q – hay una deleción aislada del en general desalentadores.
brazo largo del cromosoma 5. El síndrome 5 q – sólo Se ha sugerido que la modulación de la respuesta
evoluciona hacia una leucemia aguda en el 25 % de inmune puede ser útil en el tratamiento de las mie-
los pacientes, con predominio en mujeres. La ane- lodisplasias. Se han utilizado la globulina antiti-
mia es la principal manifestacion de este síndrome, mocito (GAT) y la ciclosporina, con resultados
la neutropenia es moderada y el conteo de plaquetas promisorios.
a menudo está aumentado. Los factores de crecimiento hematopoyético se
han convertido en un importante apoyo en estos en-
Tratamiento fermos. La G–CSF y la GM–CSF aumentan en un
Algunos pacientes, fundamentalmente los de AR y 80 % el nivel de los neutrófilos y disminuyen el ries-
ARSA, tienen un curso indolente y quizás la mejor go de infección. Así mismo, el tratamiento con eri-
opción es tratarlos sólo con medidas de sostén. Otros tropoyetina reduce el requerimiento de transfusiones.
pueden ser manejados con transfusiones ocasiona- En conclusión, la agresividad del tratamiento de-
les de glóbulos, sin necesidad de un nuevo tipo de pende de la enfermedad y el tratamiento de sostén
terapéutica. Sin embargo, en aquéllos que tienen un es el fundamental en la mayoría de estos pacientes
curso clínico agresivo se requiere de transfusiones de edad avanzada.

340
45
NEUTROPENIA

Los leucocitos constituyen uno de los elementos el pulmón y en el bazo. Esta gran reserva medular
fundamentales para la defensa del organismo ante de neutrófilos puede ser movilizada en caso de una
la agresión de agentes extraños. Su división clásica infección. Al aumento del número de ellos se le lla-
en granulocitos (neutrófilos, eosinófilos y basófi- ma neutrofilia y a la disminución, neutropenia.
los), monocitos y linfocitos, es justa desde el punto Los granulocitos, después de pasar a la circula-
de vista morfológico, pero poco nos dice de la fun- ción, permanecen en ella pocas horas antes de mi-
ción que realiza cada uno de ellos. Es por esto, que grar a los tejidos. Cualquier lesión inflamatoria libera
sin abandonar en modo alguno la clasificación an- leucotaxinas, que aumentan la permeabilidad capi-
terior, es útil conocer también su participación en la lar y provocan la migración local de los granulocitos;
defensa de nuestra economía y su división en dos éstos después que pasan a los tejidos, se destruyen
grandes grupos: los fagocitos y los inmunocitos. en acciones de defensa o mueren por vejez al cabo
Función de los leucocitos. de 2 o 3 días.
Por otra parte, el monoblasto también sufre un
El granulocito neutrófilo proceso de proliferación y maduración hasta conver-
Los inmunocitos (linfocitos) fueron estudiados en tirse en monocito adulto; entra en la circulación, per-
el capítulo correspondiente a la inmunidad. A los manece en ella unas horas antes de pasar a los tejidos,
fagocitos corresponden dos grandes grupos: los donde se convierte en un macrófago. Algunos de
granulocitos y los monocitos. Como se explicó an- éstos son móviles, como los que se encuentran en
tes, ambas células tienen un progenitor medular los alvéolos pulmonares, la cavidad peritoneal y los
común. exudados inflamatorios. Otros son fijos en los teji-
La célula más primitiva del sistema granulocítico
dos, como en el hígado y en el bazo. Su vida media
es el mieloblasto, que por maduraciones sucesivas
es larga, en particular la de los fijos, que viven me-
se convierte en el granulocito adulto. Los granulo-
ses e incluso años.
citos se van acumulando en la médula y se transfor-
Tanto los monocitos como los macrófagos produ-
man en la llamada reserva medular. Al salir a la
cen factores estimulantes de colonias, que son hor-
circulación se establecen dos grupos de aproxima-
damente igual tamaño, uno circulante y otro margi- monas requeridas para el crecimiento de monocitos
nal, llamado este último así porque las células se y neutrófilos en la médula ósea.
acumulan en las márgenes del vaso sanguíneo. A la disminución de la cifra de granulocitos por
.
La médula produce 1,3 1011 neutrófilos por día debajo de 3 000/mm³ se le denomina granulocitope-
en una persona de alrededor de 80 kg de peso. En nia, aunque todavía alrededor de este nivel, el nú-
condiciones normales la reserva medular de granu- mero de granulocitos es adecuado para las defensas
locitos es de un 90 % del total de estas células, de normales del organismo, pero cuando desciende a
las que un 2 o 3 % corresponde a los grupos circu- 1 000/mm³, el organismo es muy vulnerable a los
lante y al marginal, y el resto se encuentra en los ataques microbianos y por debajo de 500/mm³, el
tejidos. La vida media de los neutrófilos en la circu- riesgo es muy alto.
lación es de 6 a 7 horas. Los neutrófilos viejos son El término agranulocitosis debe ser reservado para
eliminados de la circulación por los macrófagos en el cuadro de la neutropenia aguda descrita por

341
Schultz, en el cual hay una granulocitopenia severa
por depleción, tanto de los granulocitos de la circu-
AGRANULOCITOSIS
lación como de los de la médula ósea.
Como ya se dijo, la agranulocitosis produce una neu-
La reducción de granulocitos en la sangre perifé-
tropenia de gran magnitud, que se caracteriza por la
rica (neutropenia) se debe a muchas causas y tiene
desaparición o disminución intensa de los granulo-
como consecuencia fundamental, una predisposición
citos y la conservación de otros elementos de la san-
a las infecciones. Por lo común tiene dos grandes gre y clínicamente por un cuadro agudo y grave de
causas: sepsis intensa, con lesiones ulceronecróticas locali-
zadas, sobre todo en la mucosa bucofaríngea.
1. Granulopoyesis inadecuada o inefectiva, que
se debe a: Etiopatogenia
a. Supresión de la granulopoyesis después de Fue descrita por Werner Schultz en 1922. Afecta por
la exposición a ciertas drogas. lo común a personas entre 30 y 60 años de edad y se
b. Granulopoyesis inefectiva, como sucede en reporta como más frecuente en la mujer (3: 1).
las anemias megaloblásticas y en los síndro- Hay una gran cantidad de medicamentos que han
mes mielodisplásticos. sido implicados como causa de agranulocitosis:
c. Supresión de la granulopoyesis, como ocurre duralgina, fenilbutazona, sulfas, cloranfenicol, pro-
en la anemia aplástica o en las infiltraciones piltiouracilo, etc. Se aceptan dos mecanismos fun-
medulares. damentales de producción: el inmune y el tóxico.
En el mecanismo tóxico, cuando se suprime la
d. Condiciones heredadas (Síndrome de Kost-
droga hay una recuperación en pocos días de la neu-
mann).
tropenia.
2. Eliminación acelerada de neutrófilos en la san-
En la patogenia inmune, el medicamento se une a
gre periférica debida a: un compuesto proteico del granulocito, lo cual pro-
a. Exposición a drogas o por daño inmunológi- voca la producción de anticuerpos contra el com-
co, idiopático o adquirido (LED, síndrome plejo célula–droga. Esto conduce a la aglutinación
de Felty, etc.). de los leucocitos, que son destruidos a su paso por
b. Infecciones bacterianas, micóticas, etc. el pulmón, hígado, bazo, etc.
c. Secuestro esplénico. Generalmente hay es-
plenomegalia y la destrucción también afecta Cuadro clínico
a los glóbulos rojos y a las plaquetas. La agranulocitosis comienza casi siempre en forma
aguda y violenta, y el enfermo se postra rápidamen-
Las neutropenias más importantes son las ocasio- te. En la gran mayoría de los casos, tres tipos de
nadas por drogas y aunque muchas la producen por manifestaciones fundamentales constituyen su cua-
supresión medular, algunas lo hacen por la unión de dro clínico:
complejos inmunes en la superficie de los granulo-
1. Sepsis. Se expresa por escalofríos, fiebre de 39
citos.
o 40 ° C, cefalea, taquicardia, vómitos y toma
Una causa común de neutropenia por drogas es el del sensorio.
uso de citostáticos, que depende del producto usado 2. Lesiones ulceronecróticas. Se presentan gene-
y de las dosis utilizadas. Con frecuencia se afectan ralmente en las regiones ricas en gérmenes: pa-
también los eritrocitos y las plaquetas. El factor es- ladar, lengua, amígdalas, pared posterior de la
timulante de colonia recombinante granulocítica– faringe y mucosa vulvar o anal.
macrófago, puede acelerar la recuperación mieloide 3. Neutropenia. Constituye el signo cardinal de la
después de altas dosis de quimioterapia. agranulocitoisis.
Todas las enfermedades que producen neutrope-
nia son tratadas en el curso de esta obra. En el examen físico se constata la pobreza de sig-
nos con la abundante sintomatología subjetiva. Ade-

342
más de las lesiones ulceronecróticas ya descritas, agranulocitosis. Por supuesto, como medida profi-
puede haber taquicardia con hipotensión arterial, que láctica hay que evitar el empleo indiscriminado de
en ocasiones llega al shock séptico. La ictericia, drogas con potencial mielotóxico. En ocasiones se
cuando está presente, indica mal pronóstico. Pocas dificulta la identificación del fármaco responsable,
veces hay hepatomegalia y cuando se palpa una es- por lo cual es necesario suspender todos los medi-
plenomegalia ésta tiene un origen séptico. En los camentos que el enfermo estaba tomando hasta el
estados finales, el enfermo se inquieta, con confu- momento en que se realizó el diagnóstico.
sión mental y en ocasiones, obnubilación y coma. Se obtendrán muestras para cultivo y antibiograma
lo más rápidamente posible para tratar de identificar
Exámenes complementarios
el agente causal.
Hemograma. Los hematíes se encuentran poco o La sepsis, sobre todo por gérmenes gramnegati-
nada afectados. Como se explicó, la neutropenia vos, es la complicación más temible en esta afec-
constituye el signo cardinal de la agranulocitosis.
ción y la causa de muerte en la mayoría de los casos.
Los granulocitos casi siempre oscilan entre 1 y 5 %,
Por ello, mientras se espera por el resultado del
y los pocos que se observan presentan granulaciones
cultivo y el antibiograma, se deben administrar an-
tóxicas evidentes y vacuolas en su citoplasma.
tibióticos contra gérmenes grampositivos y gram-
Plaquetas. El conteo es normal.
Eritrosedimentación. Está acelerada. negativos en dosis amplias. Una vez recibido el
Medulograma. Los sistemas megacariopoyético resultado, éste pautará la conducta que se ha de
y eritropoyético se encuentran indemnes. El siste- seguir.
ma granulopoyético está prácticamente ausente de La dieta será blanda y de fácil deglución y se cui-
la médula. dará de la limpieza bucal.
Dada la gran susceptibilidad de los enfermos a
Tratamiento las infecciones, es recomendable el aislamiento. El
La identificación del posible agente causal y su su- personal en contacto con ellos debe guardar riguro-
presión inmediata constituyen la primera medida samente las medidas de asepsia para evitar trasmi-
terapéutica que debe aplicarse a los pacientes con tirles agentes infecciosos.

343
46
ANEMIA POSHEMORRÁGICA AGUDA

Concepto Desde el inicio de la hemorragia, el organismo


desencadena mecanismos compensadores para man-
La anemia poshemorrágica aguda es la que se pro-
tener el transporte de oxígeno a los tejidos. El medio
duce por la pérdida rápida de una gran cantidad de
ácido de los tejidos hipoperfundidos provoca una
sangre.
desviación a la derecha de la curva de disociación
Etiología de la hemoglobina, lo cual facilita la liberación de
oxígeno. Por otra parte, los hematíes aumentan su
Las causas que ocasionan estas anemias son múl-
producción de 2-3 difosfoglicerato, que favorece tam-
tiples:
bién el paso de oxígeno a los tejidos.
La magnitud de la hipovolemia que caracteriza este
1. Grandes hemorragias externas por ruptura
proceso estará determinada por:
vascular traumática.
2. Hemorragias por enfermedades de diversos sis-
1. La rapidez e intensidad de la pérdida de sangre.
temas:
2. La restitución de la volemia por los mecanis-
a. Hemorragias de las cavidades serosas.
mos compensadores (movilización de sangre de
• Hemoperitoneo (embarazo ectópico roto).
• Hemotórax traumático. los depósitos del bazo, hígado, etc. y de los lí-
b. Hemorragias del sistema respiratorio. quidos extravasculares al compartimento intra-
• Grandes epistaxis. vascular).
• Grandes hemoptisis.
c. Hemorragias del sistema digestivo. Es bueno recordar que se toleran mejor pérdidas
• Hematemesis (várices esofágicas, ulcus mayores de sangre en tiempo largo, que pérdidas
péptico). menores en breve tiempo. Por lo común se soporta
• Melena y hematoquecia (enterorragia). hasta cerca de un 50 % de pérdida de la sangre total
d. Hematuria (tumores vesicales, renales, etc.). si la hemorragia se produce en un período de varios
e. Hemorragias del aparato genital femenino días, pero si se pierde la sangre con mucha rapidez,
(metrorragias, menorragias). puede ocurrir la muerte con sólo el 30 %. Si no se
f. Ruptura de aneurismas de grandes vasos. restituye la volemia por los mecanismos compensa-
3. Hemorragias de diversa localización, que de- dores o por la terapéutica, el shock entra en una fase
penden de discrasias sanguíneas o diátesis he- irreversible y ocasiona la muerte al paciente.
morrágicas (plasmopáticas, trombopáticas,
vasculopáticas). Cuadro clínico
La presentación de los síntomas depende de la magni-
Fisiopatología tud de la hemorragia, de su rapidez y de si es externa
Los trastornos dependen de la hipovolemia y no de u oculta. Generalmente el paciente está postrado, con
la eritrocitopenia. Esta última sólo influirá en la fase una respiración rápida y superficial y se queja de
de recuperación, donde los fenómenos serán simi- sed intensa; hay fatiga, inseguridad postural, lipoti-
lares a los de una anemia crónica (por deficiencia mia, síncope, visión borrosa, zumbidos de oídos,
de hierro). escotoma centelleante, bostezos y convulsiones. Al

344
final, pérdida de la conciencia, la que puede reco- cendiendo por hemodilución.
brarse con la posición horizontal. Todas estas mani- Las proteínas plasmáticas comienzan a restituir-
festaciones dependen de la hipoxia cerebral. se al tercer día. Pasada esta fecha, aparecen abun-
En el examen físico se encuentran alteraciones dantes reticulocitos y hematíes policromatófilos,
de distinto orden: pues la médula compensa la pérdida mediante su
hiperplasia, por el estímulo que origina la hipoxe-
1. Generales: palidez cutaneomucosa, sudoración, mia y la subsecuente liberación de eritropoyetina por
piel fría. el riñón. Puesto que la médula es un órgano que res-
2. Respiratorias: polipnea. ponde como un todo, también produce una gran can-
3. Circulatorias: taquicardía, pulso débil, hipoten- tidad de leucocitos y plaquetas, los cuales aumentan
sión arterial de grado diverso, soplos funcio- en la sangre periférica. Esta hiperproducción de gló-
nales. bulos rojos puede conducir a un agotamiento de los
4. Renales: oliguria. depósitos de hierro y posteriormente del hierro plas-
5. Digestivas: a veces incontinencia de heces. mático y originar como consecuencia una anemia
6. Neurológicas: midriasis y convulsiones en ca- por deficiencia de hierro.
sos graves por hipoxia cerebral.
Tratamiento
En la fase de recuperación los síntomas depen- Son tres las medidas fundamentales:
den sobre todo de la eritrocitopenia. Detención del sangramiento. Las medidas en este
sentido dependen de la causa.
Exámenes complementarios Restitución de la volemia y corrección del shock.
Recién producido el cuadro, el hematócrito, el conteo La transfusión de sangre es el método idóneo. La
de eritrocitos y la hemoglobina son prácticamente mayoría de las veces no hace falta restituir la canti-
normales, ya que al mismo tiempo que se pierden dad total perdida. La respuesta del paciente y su evo-
hematíes también se pierde plasma, de manera que lución serán los mejores índices de la cantidad de
la proporción entre éste y las células no cambia, pues sangre que debe transfundirse. Se utilizan transfu-
todavía la hemodilución compensadora no ha teni- siones de glóbulos, plasma, sustitutos sintéticos del
do tiempo de producirse. En las horas siguientes sí plasma, etc.
se refleja la situación y existe un paralelismo entre Restitución del hierro perdido. En el período de
las cifras de hemoglobina, hematócrito y eritrocitos recuperación debe administrarse terapéutica marcial,
y el volumen de sangre perdido. Durante los prime- ferroterapia oral si se tolera o parenteral en caso
ros tres o cuatro días, aunque no ocurra una nueva contrario. Además, una dieta adecuada en proteínas,
pérdida de sangre, estos valores suelen seguir des- vitaminas, etcétera.

345
47
ANEMIAS HEMOLÍTICAS

Las anemias hemolíticas se caracterizan por un con- cientos mil millones de hematíes al día y mantiene
junto de síntomas y signos, entre los que predomi- una cifra de cuatro y medio a cinco millones por
nan palidez, ictericia y esplenomegalia (síndrome mililitro cúbico en la sangre periférica del hombre y
hemolítico), cuya base fisiopatológica principal es de cuatro a cuatro y medio millones por milímetro
un acortamiento de la vida media eritrocitaria a causa cúbico en la mujer. Si se pudiesen desplegar todos
de una destrucción acelerada de los glóbulos rojos, los hematíes, uno al lado del otro, cubrirían un área
lo que condiciona un esfuerzo regenerativo del sis- de 200 m2. Esto explica el fácil recambio de gases al
tema eritropoyético medular para compensar las pasar por el pulmón y los tejidos.
demandas aumentadas. La disminución del número de eritrocitos causa
hipoxia celular y por medio de un mecanismo de re-
Etiología troalimentación se libera eritropoyetina, en particu-
Aunque posteriormente se dará una clasificación más lar por el riñón. Ella actúa tanto sobre la célula
completa de las anemias hemolíticas, como regla unipotencial, ya obligada a seguir la línea eritropo-
general se puede aceptar que el acortamiento de la yética, como sobre el proeritroblasto. Esta última
vida eritrocitaria se debe a uno de los mecanismos célula tiene de 20 a 25 mµ de diámetro, con un nú-
siguientes: cleo que ocupa el 75 % del volumen celular. El cito-
plasma es basófilo y el núcleo contiene uno o varios
1. Alteraciones globulares: anemias hemolíticas nucléolos. Después esta célula sufre varias divisio-
eritropáticas o intracorpusculares. nes mitóticas y las células hijas van madurando y
2. Alteraciones extraglobulares: anemias hemo- pasan sucesivamente por las etapas de eritroblasto
líticas plasmopáticas o extracorpusculares. basófilo, policromatófilo y ortocromático.
3. Alteraciones mixtas: donde una alteración con- En el estadio de normoblasto, la célula pierde la
génita eritrocítica latente se evidencia en pre- facultad de sintetizar ADN y por lo tanto no es ca-
sencia de un factor plasmático adquirido. paz de dividirse.
A través de todo el proceso de maduración y
El glóbulo rojo divisón, la célula roja va formando hemoglobina,
Antes de exponer la fisiopatología y el cuadro clíni- constituyente imprescindible para la principal fun-
co de las anemias hemolíticas, se describirá breve- ción del hematíe adulto: el transporte de oxígeno y
mente el glóbulo adulto y sus precursores, lo cual dióxido de carbono. Por lo tanto, el mayor esfuerzo
permitirá comprender mejor los resultados que se de la célula roja nucleada en evolución es la síntesis
derivan de la destrucción precoz de este elemento del hem y de la globina. La capacidad de producir
forme de la sangre. estos dos elementos la mantiene hasta el reticulocito,
Como ya se señaló, el sistema eritropoyético de el cual también puede captar hierro e incorporarlo a
la médula ósea es el responsable de la producción la hemoglobina. Estas funciones se pierden en el
de hematíes. Existe un equilibrio entre la formación hematíe adulto.
y destrucción de los eritrocitos, el cual permite que En resumen, puede decirse que la función funda-
la cantidad de éstos en la sangre se mantenga dentro mental del tejido eritropoyético y del glóbulo rojo
de cifras normales. La médula produce unos dos- circulante es la síntesis, el transporte y la protección

346
de las moléculas de hemoglobina, de manera que se que tienden a su destrucción. Disminuye su conte-
garantice un adecuado aporte de oxígeno a los te- nido enzimático y en glucosa y con ello su potencial
jidos. energético; disminuye también su contenido en
Metabolismo del hem. El hem es un complejo potasio y el glóbulo se hace sensible a la lisis
metálico que consiste en un átomo de hierro en el osmótica. Los metabolitos se van acumulando den-
centro de una estructura porfirínica. A él se debe el tro de la célula y este hematíe envejecido es captado
color rojo de la hemoglobina. por el sistema reticuloendotelial, donde se destruye.
La biosíntesis del hem se realiza en la mitocondria Algunos glóbulos rojos sufren hemólisis en ple-
y en el citoplasma celular, y a lo largo de ella se no torrente circulatorio y liberan la hemoglobina,
forman una serie de compuestos, uno de los cuales, que se une a una proteína plasmática llamada hapto-
la proporfirina 9, es fundamental. Esta última, por globina, la cual se combina con toda la hemoglobi-
medio de una enzima llamada hemsintetasa, se une na plasmática disponible, siempre que ésta no
a un átomo de hierro y da origen al hem. sobrepase la cifra de 100 o 140 mg por 100 ml de
Existen una serie de enfermedades (anemias si- plasma. El complejo hemoglobina-haptoglobina es
deroacrésticas, saturnismo, porfiria, etc.), en las que captado por el sistema reticuloendotelial, donde se
están alterados uno o varios pasos en la síntesis libera la hemoglobina que luego es degradada.
del hem. Ya en el sistema reticuloendotelial se inicia la de-
Síntesis de la globina. La globina, parte proteica gradación de la hemoglobina. El hierro pasa al plas-
de la hemoglobina, está compuesta por dos pares de
ma, el cual es transportado por la transferrina a los
cadenas polipeptídicas, cada una de las cuales se sin-
depósitos o a la médula, donde entrará a formar par-
tetiza en los ribosomas y consta de una secuencia de
te de nuevas moléculas de hemoglobina. La globina
aminoácidos que es siempre la misma para cada ca-
liberada se degrada y sus constituyentes van a en-
dena. Estas cuatro cadenas de aminoácidos se unen
grosar las reservas de aminoácidos del organismo.
a cuatro hem y dan lugar a una molécula de he-
El resto de la molécula se convierte en bilirrubina
moglobina.
no soluble en agua, y pasa al plasma, donde viaja
Metabolismo del glóbulo rojo. Como es conocido,
unida a la albúmina; al llegar al hígado es captada
el glóbulo rojo tiene un promedio de vida de 120 días.
Hasta hace un tiempo se pensaba que era una célula por el hepatocito, donde se conjuga fundamental-
metabólicamente inactiva por carecer de núcleo. Hoy mente con el ácido glucurónico. Es excretada en-
se sabe que esto dista mucho de ser verdad y que el tonces por la bilis al intestino, donde por acción
glóbulo rojo adulto contiene una impresionante can- bacteriana se convierte en urobilinógeno (esterco-
tidad de enzimas, proteínas, carbohidratos, lípidos, bilinógeno fecal), que se oxida y se convierte en el
electrólitos, agua y por supuesto, hemoglobina. grupo de las urobilinas.
Resulta interesante el hecho de que el eritrocito La mayor proporción de las urobilinas se excreta
sea la única unidad biológica que no necesita gastar por las heces, alguna cantidad se absorbe y vuelve
energía para realizar su función principal, que es el al hígado, de donde se reexcreta (circulación ente-
transporte de oxígeno y dióxido de carbono. Por las rohepática) o se elimina por la orina.
características de la hemoglobina, esta función es
Fisiopatología
pasiva y sólo gasta energía en el mantenimiento del
estado funcional de la célula. Esta energía proviene Como la destrucción excesiva de hematíes es co-
del metabolismo de la glucosa a través de dos vías mún a todas las anemias hemolíticas, los hallazgos
importantes: la de Embden-Meyerhof y la de las clínicos muestran una serie de semejanzas en este
pentosas. En ambas vías intervienen numerosas grupo de enfermedades.
enzimas, cuya ausencia provoca una deficiencia La hemólisis puede ser intravascular o extravas-
energética del hematíe, que lo hace vulnerable a una cular; entre ambos extremos existe una gama de pro-
serie de agentes y produce su destrucción. A medi- cesos en que las dos formas de hemólisis están
da que el eritrocito envejece va perdiendo su inte- presentes.
gridad funcional y, por lo tanto, su capacidad de Cuando el glóbulo rojo se destruye en el torrente
proteger a la hemoglobina de una serie de cambios circulatorio, la hemoglobina libre es rápidamente

347
fijada a la haptoglobina, lo cual impide que se filtre diastino posterior se observan en las radiografías del
por el riñón y aparezca en la orina. Este proceso tie- tórax, a menudo se consideran erróneamente como
ne sus límites, y como ya se expuso, cuando la he- malignos.
moglobina liberada en el plasma excede de 100 o Una consecuencia de la producción aumentada de
140 mg %, se agota la haptoglobina y aparece he- hematíes es la utilización excesiva de ácido fólico,
moglobinuria. La hemoglobina unida a la haptoglo- cuyas reservas en el organismo llegan a agotarse.
bina es retirada de la circulación y catabolizada en La maduración megaloblástica es un hallazgo co-
el sistema reticuloendotelial. Por lo tanto, un nivel mún en los pacientes con anemia hemolítica, que en
bajo de haptoglobina es un índice indirecto de he- caso de ser extrema lleva a la llamada crisis mega-
mólisis. loblástica, muy grave si no se diagnostica a tiempo.
El catabolismo de la hemoglobina da lugar a una Por otra parte, en estos enfermos se producen a ve-
mayor producción de bilirrubina indirecta, respon- ces crisis aplásticas que se suponen sean causadas
sable de la ictericia observada en estos enfermos, por infecciones virales. Por lo común sólo afectan
incremento generalmente discreto, ya que el hígado el sistema eritropoyético y dan lugar a una aplasia
conjuga y excreta al intestino la mayor parte de ella. selectiva de la serie roja, aunque en ocasiones hay
La excreción aumentada de bilirrubina provoca una depresión de lo tres sistemas medulares.
eliminación fecal de estercobilinógeno por encima
de sus valores normales (250 mg en 24 h), lo cual da Cuadro clínico
lugar a heces más coloreadas, o sea, pleocromía
Clásicamente el cuadro clínico de las anemias he-
fecal.
molíticas se caracteriza por la tríada anemia, icteri-
La reabsorción de estercobilinógeno intestinal está
cia y esplenomegalia. En realidad, la anemia siempre
aumentada y también la eliminación de éste por la
llama más la atención que la ictericia, que casi siem-
orina, que será hipercoloreada, pero nunca colúrica,
pre es discreta. Es habitual que los pacientes sean
pues no existe eliminación de bilirrubina directa (ic-
asténicos, débiles y propensos a las infecciones in-
tericias acolúricas).
tercurrentes. Durante las crisis hemolíticas puede
Como consecuencia de la mayor destrucción de
aparecer un cuadro febril intenso, que por lo gene-
glóbulos rojos y del metabolismo de la hemoglobi-
ral cede al cesar aquéllas.
na liberada, el hierro sérico se eleva y se producen
El examen físico arroja los hallazgos siguientes:
depósitos anormales de éste (hemosiderosis).
La médula ósea y en particular el sistema eritro-
poyético, responden a la demanda creciente de he- 1. Palidez cutaneomucosa.
matíes con una hiperplasia e invasión de zonas donde 2. Ictericia generalmente discreta.
normalmente sólo existe médula grasa. Se produce 3. Esplenomegalia frecuente, asociada a veces a
ensanchamiento de la cavidad medular del hueso, hepatomegalia.
que cuando tiene origen desde la infancia, como es 4. Pleocromía fecal.
el caso de las anemias hemolíticas congénitas, da 5. Orinas hipercoloreadas.
lugar a algunas de las malformaciones óseas que se 6. Alteraciones cardiovasculares funcionales que
encuentran en estos enfermos (cráneo en torre, as- concurren en todas las anemias crónicas, taqui-
pecto radiado de las trabéculas óseas, etc.). cardia, soplos, reforzamiento de los ruidos,
La gran necesidad de elementos rojos en la san- pulso capilar, etc.
gre periférica hace que la médula libere enormes can-
tidades, células aún no del todo maduras; de ahí la A menudo el cuadro se complica con una colecis-
reticulocitosis que acompaña a estas anemias. En titis crónica calculosa en relación con la gran elimi-
ocasiones la demanda es tan intensa que en la circu- nación de bilirrubina, lo que facilita la formación de
lación aparecen elementos rojos nucleados (normo- cálculos de bilirrubinato.
blastos). En las anemias hemolíticas hereditarias se pre-
En algunos casos se desarrollan focos eritropoyé- senta una serie de alteraciones somáticas caracterís-
ticos extramedulares que dan origen a masas ticas y comunes a todas ellas: paladar ojival,
tumorales blandas. Cuando estos tumores del me- turricefalia, hipertelorismo, úlceras maleolares, etc.

348
Cuando la hemólisis es predominantemente intra- Estercobilinógeno fecal. Determinación importan-
vascular, se produce una hemoglobinuria precedida te en toda anemia o ictericia que se sospeche sea
de malestar general, fiebre, escalofríos y dolor hemolítica. Consiste en la recolección de las heces
lumbar. fecales durante 24 h y la determinación del esterco-
Por último, debe decirse que cada anemia hemo- bilinógeno presente, que no debe exceder normal-
lítica en particular presenta por lo común manifes- mente de 250 mg y que estará siempre elevado en
taciones clínicas propias (como la oclusión de la las anemias hemolíticas.
microcirculación por los drepanocitos en la anemia Orina. Se demostrará la ausencia de sales y
de células falciformes), que serán desarrolladas en pigmentos biliares y el aumento de la urobilina. Ade-
los capítulos correspondientes a cada una de ellas. más, se apreciará la existencia de hemoglobinuria
en las crisis intravasculares intensas. En toda ane-
Exámenes complementarios mia hemolítica crónica y sobre todo en la hemoglo-
Los exámenes de laboratorio son de primordial im- binuria paroxística nocturna, puede demostrarse la
portancia en el estudio de las anemias hemolíticas, presencia de hemosiderinuria.
pues éstas constituyen uno de los capítulos de la Me- Hierro sérico. A causa del gran catabolismo de la
dicina donde la clínica y el laboratorio deben marchar hemoglobina, la cifra de hierro sérico es alta (nor-
unidos para lograr un diagnóstico definitivo. Se mal de 80 a 140 mg %). La hemólisis intravascular
mencionarán y analizarán los exámenes comple- es también responsable de la hemoglobinemia (he-
mentarios en el orden aproximado en que deben moglobina en plasma mayor de 5 mg %).
indicarse. Haptoglobina. Se encuentra disminuida.

Exámenes en relación con la anemia Otros exámenes para el estudio de las anemias he-
Hemograma. Hay una anemia más o menos intensa, molíticas
que en la crisis hemolítica se acompaña de leucoci- Electroforesis de hemoglobina. La sustitución de un
tosis con desviación a la izquierda. aminoácido en una de las cadenas de globina condi-
Estudio de la lámina. Es de suma importancia, ciona un cambio en su carga eléctrica; por lo tanto,
pues en la lámina se observan las alteraciones de si se pone hemoglobina en un campo eléctrico, ésta
forma y tamaño de los glóbulos rojos, algunas de se desplazará más o menos de acuerdo con la carga
las cuales son características de determinadas ane- eléctrica que posea. Esta prueba es muy importante
mias (drepanocitos, glóbulos en diana, etc.), y otras en el diagnóstico de las hemoglobinopatías.
comunes a todas ellas, tales como anisocitosis, Prueba de Huck. La privación de oxígeno a los
poiquilocitosis, policromatofilia, etc. hematíes que contienen hemoglobina S, les hará
Conteo de reticulocitos. Siempre está elevado a adoptar la forma de media luna (drepanocitos). Esto
causa de la hiperfunción eritroblástica medular. Hay es independiente de la cantidad de hemoglobina S
que recordar que en las crisis aplásticas en el curso que contengan; por lo tanto, la prueba será positiva
de una anemia hemolítica, el conteo de reticulocitos tanto en los heterocigotos (AS) como en los homo-
se encuentra relativamente bajo. cigotos (SS), así como en cualquier combinación
Constantes corpusculares. En general las anemias de la hemoglobina S con otra hemoglobina anor-
hemolíticas son normocíticas normocrómicas, aun- mal (SC).
que puede haber excepciones (talasemia). Prueba de la resistencia osmótica. Es fundamen-
Medulograma. Muestra como detalle fundamen- tal en el diagnóstico de la esferocitosis hereditaria,
tal una hiperplasia normoblástica del sistema eritro- donde la resistencia globular osmótica está dismi-
poyético. nuida, sobre todo cuando los glóbulos rojos se incu-
ban 24 h a 37 ºC.
Exámenes en relación con el aumento de la destruc- Determinación del promedio de vida eritrocita-
ción de hematíes ria. Por definición, se encuentra acortado en todas
Bilirrubina. Se encuentra elevada a expensas de la las anemias hemolíticas. Se realiza con varios
bilirrubina indirecta o no conjugada. isótopos; el más usado es el Cr51.

349
Prueba de Coombs. Es importante en el diagnós- importantes que se encuentran en la práctica médica
tico de las anemias hemolíticas de causa inmunoló- diaria.
gica, en las cuales la presencia de anticuerpos contra I. Anemias hemolíticas intracorpusculares.
los hematíes condiciona la destrucción prematura de A. Por defecto del hematíe.
éstos. La prueba de Coombs directa detectará los 1. Esferocitosis hereditaria.
anticuerpos unidos a los hematíes, mientras que la 2. Ovalocitosis o eliptocitosis.
indirecta detectará los anticuerpos libres en el plas- B. Por defecto de la hemoglobina.
ma. Un ejemplo claro lo constituye la eritroblastosis 1. Anemia drepanocítica.
fetal, donde el Coombs directo será positivo en el 2. Enfermedad por hemoglobina C.
recién nacido y el Coombs indirecto, en la madre. 3. Síndromes talasémicos.
Radiología. En toda anemia hemolítica, sobre todo C. Hemoglobinuria paroxística nocturna.
en las de tipo congénito, está indicado un estudio II. Anemias hemolíticas extracorpusculares.
radiológico óseo completo, donde se puede encon- A. Por factores inmunológicos.
trar: cráneo en cepillo, engrosamiento cortical, ne- 1. Isoinmunes.
a. Enfermedad hemolítica del recién nacido.
crosis aséptica de la cabeza femoral, etc.
b. Transfusión de sangre incompatible.
2. Autoinmunes.
Pruebas específicas
a. Por anticuerpos calientes.
Existen otras pruebas encaminadas a detectar la causa
• Idiopática.
de cada anemia en cuestión, tales como la prueba de
• Secundaria: leucemia linfoide crónica,
Ham y Crosby, la prueba de Brewer, la autohemóli- linfomas, lupus eritematoso disemina-
sis, etc., que serán explicadas en los capítulos corres- do, etcétera.
pondientes. • Inducida por drogas.
b. Por anticuerpos fríos.
Clasificación • Síndrome de aglutininas de frío.
Intentar una clasificación de las anemias hemolíti- • Hemoglobinuria paroxística a frigore.
cas no resulta tarea fácil. Prácticamente cada autor B. Anemia hemolítica por trauma mecánico.
que se ha dedicado a este tema, tiene una clasifica- III. Anemias hemolíticas mixtas.
ción propia y diferente en algunos aspectos de las A. Anemias hemolíticas enzimopénicas (intracor-
demás. Todas tienen algo útil y a la vez todas adole- pusculares), que necesitan casi siempre de la
cen de defectos. Aquí se ofrece una que si bien es presencia de un agente externo (extracorpuscu-
incompleta, incluye las anemias hemolíticas más lar) para desencadenar la hemólisis.

350
48
ANEMIAS HEMOLÍTICAS
INTRACORPUSCULARES

microcitemia, al creer que se trataba de glóbulos


ANEMIAS atróficos en vías de destrucción.
POR DEFECTO En 1900, Minkowski describió sus impresiones
clínicas mediante el estudio de ocho casos corres-
DEL HEMATÍE pondientes a tres generaciones de una misma fami-
lia, y más tarde Chauffard precisó los caracteres
hematológicos y comunicó la fragilidad osmótica de
En este grupo de anemias se describirán la esferoci-
los eritrocitos en esta enfermedad. Guido Banti,
tosis hereditaria y la ovalocitosis, particularmente
en 1912 y Eppinger en 1913, preconizaron la esple-
la primera por ser la más representativa de las ane-
nectomía como medio de curación.
mias hemolíticas por defecto de la membrana del
En estos últimos años se ha mejorado notablemen-
hematíe.
te el conocimiento de los procesos patogénicos en el
hematíe.
Esferocitosis hereditaria
La esferocitosis hereditaria (EH) es una enferme- Etiopatogenia
dad trasmitida por un gen autosómico dominante, La forma que adoptan los eritrocitos (esferocitos) en
aunque la ausencia de anormalidades hematológi- la EH, sugirió a los primeros investigadores que ob-
cas en un 20 % de los pacientes sugiere una heren- servaron este fenómeno, que eran estas células las
cia autosómica recesiva, o rara vez una mutación responsables del proceso hemolítico.
espontánea. En 1943 Dacie y Mollinson demostraron:
Se encuentran casos muy graves con síntomas
prácticamente desde el nacimiento, hasta otros con 1. Que los eritrocitos de las personas sanas no eran
manifestaciones clínicas muy discretas. Casi siem- destruidos por el bazo de los pacientes con EH.
pre evoluciona por brotes con ictericia y espleno- 2. Que los esferocitos eran destruidos por el bazo
megalia. En la sangre periférica se detectan hematíes de personas sanas. Esto confirmó que el papel
pequeños y redondos (esferocitos), cuya fragilidad del bazo era secundario y que el defecto prima-
osmótica está aumentada. rio residía en el glóbulo rojo.

Historia Hoy se sabe que el defecto reside en la membrana


Esta enfermedad fue llamada EH por el Comité de eritrocitaria. En esta membrana existe una serie de
Aclaración de la Nomenclatura en 1950, aunque se proteínas que constituyen una malla, la que forma
le conoce también por otros nombres como microes- una lámina en la superficie interna del hematíe. Es-
ferocitosis hereditaria, síndrome de Minkowski- tas proteínas son la espectrina, ancirina y proteína 3.
Chauffard, ictericia congénita del adulto, etc. Casi todos los pacientes tienen una deficiencia de
La primera descripción fue hecha en 1871 por espectrina. El 50 % tiene un defecto de la ancirina y
los médicos belgas Vanlair y Masius, quienes al el 25 % tiene una mutación de la proteína 3.
observar el pequeño tamaño de los hematíes, las lla- Estos defectos confieren al hematíe un contorno
maron células enanas y nombraron a la enfermedad esferoidal y una estructura rígida que le dificulta

351
atravesar el bazo. Este órgano es el lugar más difícil va por colelitiasis, complicación que a veces se pre-
para la circulación del hematíe, que debe tener sufi- senta en los pacientes con esferocitosis.
ciente superficie de membrana para poder sufrir una La esplenomegalia varía de un enfermo a otro e
deformación extrema impuesta por el tránsito a tra- incluso, en un mismo paciente se acentúa durante
vés de dicho órgano. El eritrocito que no sea fácil- las crisis hemolíticas. Por lo general se trata de una
mente deformable es atrapado y luego destruido. esplenomegalia moderada, con un bazo firme y li-
Después de la esplenectomía persisten los tras- geramente doloroso a la palpación.
tornos del hematíe, pero la supervivencia de éste es Al igual que en otras anemias hemolíticas heredi-
prácticamente normal, o sea, que se logra la cura- tarias, en los pacientes con esferocitosis se encuen-
ción clínica. tran anomalías constitucionales como turricefalia y
facies orientaloide. Algunos casos presentan úlce-
Cuadro clínico ras maleolares, que curan con la esplenectomía. Es
rara la hepatomegalia.
Existen diferencias entre las expresiones de su cua-
dro clínico. En ocasiones la enfermedad se mani- Exámenes complementarios
fiesta desde los primeros días del nacimiento, lo cual
Hemograma. Ya se señaló que la cifra de hemoglo-
hace difícil su diagnóstico diferencial con la incom-
bina varía y en ocasiones es normal. Es típica la pre-
patibilidad materno fetal del sistema ABO, por la
sencia de esferocitos (Fig. 48.1), que son hematíes
gran cantidad de esferocitos que suelen encontrarse pequeños, densos, sin área clara central y cuyo nú-
en esta última. Por lo general, las manifestaciones mero cambia en cada paciente.
comienzan en la edad escolar, a veces el diagnósti-
co se realiza en la adolescencia y por excepción en
la edad adulta, casi siempre en este último caso por
el chequeo a familiares de un niño afectado por la
enfermedad. Se reporta como más frecuente en la
raza blanca que en la negra.
Clásicamente se describe la tríada sintomática del
síndrome hemolítico: anemia, ictericia y esplenome-
galia.
La anemia es de grado variable, por lo común,
moderada en las etapas latentes de la enfermedad e
intensa durante las crisis hemolíticas o como conse-
cuencia de una aplasia medular del sistema eritro-
poyético por parvovirus, como cualquier anemia
hemolítica crónica. En ocasiones la médula hiper-
funcionante proporciona una compensación adecua-
da, por lo cual en estos casos hay una cifra de
hemoglobina normal. Durante la crisis se presenta
con frecuencia dolor abdominal, a veces localizado
en el hipocondrio izquierdo por aumento de tamaño
del bazo. Pueden haber vómitos y fiebre. Las crisis
duran alrededor de una semana, tras la cual la he- Fig. 48.1. Lámina de sangre periférica en una esferocitosis
hereditaria, donde se observan abundantes esferocitos junto a
moglobina comienza a elevarse hasta alcanzar los
eritrocitos normales.
valores habituales.
La ictericia por lo general es ligera. La hiper- El esferocito tiene menor diámetro y mayor gro-
bilirrubinemia se produce a expensas de la bilirru- sor que el hematíe normal, ya que ha perdido su
bina no conjugada o indirecta. Las orinas son oscuras biconcavidad; por ello el volumen corpuscular me-
y las heces pleocrómicas. Cuando las heces apare- dio generalmente está dentro de los límites de la nor-
cen claras, se debe pensar en una ictericia obstructi- malidad.

352
Contiene hemoglobina en concentración mayor En 24 horas En 48 horas
que la normal, por lo cual la concentración hemo-
Sin adición de glucosa 0,05 - 0,5 % 0,4 - 4,5 %
globínica corpuscular media está aumentada.
Con adición de glucosa 0 - 0,4 % 0,03 - 0,4 %
Reticulocitos. Están aumentados como en toda
anemia hemolítica.
En la EH la hemólisis a las 48 horas llega a ser
Bilirrubina. Se eleva a expensas de la no conju-
hasta de un 20 a 40 %. La adición de glucosa antes
gada o indirecta. de la incubación reduce la autohemólisis a veces a
Hierro sérico. Está alto como expresión del acen- niveles normales.
tuado metabolismo de la hemoglobina. La vida media eritrocitaria está acortada.
Heces fecales. La excreción del estercobilinóge-
no fecal en 24 h es superior a lo normal. Evolución y pronóstico
Medulograma. Se halla una hiperplasia de la se- La evolución y el pronóstico de la EH dependen de
rie eritropoyética como respuesta a la mayor des- la magnitud del cuadro clínico y hematológico. En
trucción de los hematíes. los casos leves la afección suele ser asintomática y
Fragilidad osmótica. Constituye uno de los exá- descubrirse sólo en ocasión de un chequeo familiar.
menes de laboratorio más importantes en el diag- Los casos graves, sin embargo, por lo común están
nóstico de la EH. severamente afectados. Se observan úlceras maleo-
La demostración de un incremento de la fragili- lares y la litiasis vesicular ya mencionadas. Tam-
dad osmótica de los hematíes no es patognomónica bién se presentan crisis aplásticas, así como procesos
de esta enfermedad, ya que esta fragilidad aumen- infecciosos a los cuales son muy propensos estos
tada depende de la presencia de esferocitos, lo que enfermos. Hay la posibilidad de kerníctero en el re-
también se debe a otras causas. Normalmente la lisis cién nacido. En el niño mayor hay con frecuencia
inicial o resistencia mínima comienza con concen- un retraso pondoestatural, así como un desarrollo
tración de 0,45 % de NaCl y la lisis es completa, o tardío de los caracteres sexuales secundarios.
sea, que se alcanza la resistencia máxima en la con-
centración de 0,30 % de NaCl. Tratamiento
En los pacientes con EH la lisis se inicia con con- La esplenectomía constituye el tratamiento de elec-
centraciones mucho más altas y se observa incluso ción, ya que cura clínicamente a casi todos los ca-
entre 0,65 y 0,70 %. sos. Por supuesto, el defecto congénito del eritrocito
Fragilidad osmótica después de la incubación no desaparece, pero se elimina el mecanismo hemo-
a 37°C durante 24 horas. Tiene gran utilidad, sobre lítico condicionado por el bazo. La operación debe
todo cuando la resistencia no incubada ofrece du- realizarse con preferencia después de los 4 años de
das. En los casos normales la lisis comienza en con- edad. Sus resultados son excelentes, ya que la cifra
centraciones más altas que en la no incubada (0,50 de hemoglobina y el hematócrito vuelven a la nor-
a 0,55 %), mientras que en la esferocitosis esta lisis malidad. Hay quien recomienda la intervención qui-
inicial es extrema y se observa en concentraciones rúrgica incluso en pacientes con edad avanzada por
de 0,80 a 0,85 % y aun mayores. el peligro de las crisis aplásticas.
Prueba de la autohemólisis. Esta prueba combi-
nada con la anterior, permite hacer un diagnóstico Ovalocitosis o eliptocitosis
correcto en la mayoría de los pacientes con EH. En el individuo sano suelen encontrarse glóbulos ro-
Cuando se incuba sangre normal a 37°C no se pro- jos de forma elíptica u oval, que nunca sobrepasan
duce lisis o ésta es muy pequeña durante las prime- en el 10 % del total de hematíes. Pero otras veces
ras 24 horas. A las 48 horas la lisis sigue siendo esta anomalía de la forma es consecuencia de un tras-
pequeña y si se le ha añadido glucosa, disminuye torno hereditario de carácter autosómico dominan-
aún más. En la EH la lisis se inicia antes y progresa te, en cuyo caso el porcentaje de hematíes anormales
con mayor rapidez que en la sangre normal, y si se es mucho mayor (Fig 48.2).
añade glucosa, disminuye grandemente. En algunos pacientes hay una deficiencia de la
Los límites normales de autohemólisis son: proteína 4.1, que es importante en la estabilización

353
La médula ósea muestra una hiperplasia eritropo-
yética como en toda anemia hemolítica.
La fragilidad osmótica es normal o está aumenta-
da en los pacientes con franca hemólisis.
La esplenectomía ha resultado útil en la mayoría
de los pacientes, por lo cual siempre se debe inten-
tar esta medida terapéutica en los casos con mani-
festaciones clínicas.

ANEMIAS
POR DEFECTO
DE LA HEMOGLOBINA
El estudio de la parte globínica de la hemoglobina
recibió un gran impulso después de los trabajos de
Pauling en 1949 acerca de la hemoglobina S. El con-
cepto de enfermedad molecular surgió al demostrarse
que la anormalidad en la hemoglobina del paciente
con anemia drepanocítica se debía a un intercambio
de aminoácidos en su estructura proteica. La globina
está compuesta por dos pares de cadenas de poli-
Fig. 48.2. Lámina de sangre periférica en una ovalocitosis, péptidos. Cada una de éstas se sintetiza en los
donde se ven hematíes de forma oval. ribosomas y consta de una secuencia de aminoáci-
dos que siempre es la misma para cada una. La in-
de la espectrina y actina en el citoesqueleto. En otros formación acerca de la secuencia de estas cadenas
hay un defecto de la proteína 3. reside en el ADN contenido en el núcleo, trasmitida
La expresividad clínica de la afección es varia- al ribosoma por medio de un ARN, llamado por este
ble; así, se encuentran pacientes casi asintomáticos motivo ARN mensajero. La síntesis de cada cadena
y otros en los cuales hay un compromiso hemolítico de hemoglobina está gobernada por genes distintos.
importante. Se observa en todas las razas. El cuadro Cada ser humano hereda 4 genes para las cadenas
clínico es similar al de las anemias hemolíticas con- alfa (α) y dos para las cadenas beta (β) y gamma (γ).
génitas, pero menos grave. Es frecuente que la en- Los genes para las alfa y betaglobinas están en
fermedad se descubra en un chequeo sanguíneo cromosomas diferentes, y por lo tanto, son regula-
rutinario. La anemia es generalmente moderada y a dos independientemente. En condiciones normales
veces se detecta una discreta ictericia. El grado de se forma la misma cantidad de globinas alfa que de
hemólisis no se correlaciona con el porcentaje de beta, o sea, que esta síntesis está balanceada.
eliptocitos. Se han reportado pacientes con úlceras La hemoglobina en el feto tiene dos pares de ca-
en las piernas y litiasis vesicular. denas alfa y dos pares de cadenas gamma, y recibe
La destrucción de hematíes predomina en el bazo, el nombre de hemoglobina fetal (F). En el momento
que está aumentado en los pacientes más sinto- del nacimiento se inactiva el gen que produce cade-
máticos. nas gamma y se activa uno diferente que produce
El diagnóstico se establece por la observación en cadenas beta. Por lo tanto, la hemoglobina del adulto
la sangre periférica de un 25 % o más de hematíes (A) tendrá dos cadenas alfa y dos cadenas beta. Ya
de forma oval. En los casos severos hay reticuloci- en el cuarto mes de la vida extrauterina casi toda la
tosis y aumento de la bilirrubina no conjugada o in- hemoglobina es de tipo A, pues sólo un 10 % corres-
directa y del estercobilinógeno fecal. ponde a la F. Normalmente se siguen produciendo

354
pequeñas cantidades de hemoglobina fetal a través Historia
de toda la vida adulta.
Fue descrita por Herrick en 1910, al reportar un jo-
Por último, existe un gen en el adulto que condi-
ven de 20 años, de la raza negra, que tenía en su
ciona la producción de una pequeña cantidad de ca-
sangre periférica eritrocitos en media luna y que pre-
denas delta, que al unirse a dos cadenas alfa darán
sentaba las características clínicas y hematológicas
origen a la hemoglobina A2. Por lo tanto, las hemo-
de esta anemia. Hück reportó que la adopción de
globinas normales en el adulto son:
esta forma anormal dependía del glóbulo rojo y no
A: α2β2 (97 %) del plasma.
F: α2γ2 (0,5 – 1 %) Fueron Pauling, Itano, Singer y Wills en 1949,
A2: α2δ2 (2,5 %) los que demostraron mediante sus trabajos que la
drepanocitemia era una enfermedad molecular y
Las alteraciones en la síntesis de las cadenas de abrieron a la investigación este amplio campo de la
aminoácidos que dan origen a las hemoglobinopa- medicina.
tías, son fundamentalmente de dos tipos: Ingram comprobó que la hemoglobina S difería
de la normal A, porque en la cadena beta un ácido
1. Producción de una cadena anormal, que en glutámico es sustituido por una valina. Posteriormen-
el 90 % de los casos es el resultado de la susti- te el estudio de otros investigadores ha contribuido
tución de un aminoácido por otro. de una manera decisiva al mejor conocimiento de la
2. Disminución en la síntesis de una de las cade- fisiopatología de esta afección.
nas, como sucede en las talasemias.
Fisiopatología
Hasta el momento se han descrito muchas hemo- La simple sustitución de un ácido glutámico por
globinas anormales (S, C, D, G, etc.). Algunas pro- valina en la posición 6 de la cadena beta de la he-
ducen trastornos en los heterocigotos, aunque por moglobina, confiere a esta última características es-
fortuna esto no es frecuente. peciales que son la causa principal de las graves
En la hemoglobina S hay sustitución de un ácido manifestaciones clínicas de esta enfermedad.
glutámico por valina en la cadena beta. Si ésta se Cuando la hemoglobina S se desoxigena, se poli-
produce en una sola cadena beta y la otra se mantie- meriza y forma un gel muy viscoso que distorsiona
ne normal, ocurre el estado heterocigoto (AS); si se el glóbulo rojo y disminuye su flexibilidad. Esta
presenta en ambas cadenas beta, el resultado se co- gelificación depende en gran medida de la concen-
noce como estado homocigoto (SS). Es posible que tración de hemoglobina S. En la formación de
cada una de las cadenas sufra una sustitución dife- polímeros existe un tiempo de demora, durante el
rente y dé origen a lo que se conoce con el nombre cual no se produce polimerización y después es se-
de doble heterocigoto (SC). Todo lo anteriormente guida por una explosiva aparición de éstos.
expuesto es aplicable a cualquier hemoglobina Las células que no contienen hemoglobina poli-
anormal.
merizada en la circulación arterial, pasan a través
de la microcirculación sin adoptar la forma de hoz o
Anemia drepanocítica pueden hacerlo en los capilares o en las vénulas. Por
La anemia drepanocítica (sickle cell anemia, lo tanto, es muy importante la relación entre el tiempo
sicklemia) es una anemia hemolítica congénita de de demora para producirse la gelificación y el tiem-
causa intracorpuscular, que ocasiona graves fenó- po que tarda el hematíe en atravesar el capilar. En
menos vasoclusivos capaces de afectar cualquier estudios realizados se ha calculado que cerca del 10 %
órgano de la economía. Se caracteriza por la presen- de los hematíes en la sangre arterial y el 20 % en la
cia de hematíes en forma de hoz (falciformes) o de sangre venosa se han vuelto sensiblemente falci-
media luna en la sangre periférica, que son los res- formes, lo que indica que un 10 % ha sufrido la
ponsables de las manifestaciones clínicas y hemato- deformación como resultado del paso por la micro-
lógicas de la enfermedad. circulación.

355
La polimerización puede ser reversible, pero cuan- como el bazo, la médula renal, la médula ósea, etc.,
do ya el hematíe ha sufrido suficiente daño, ésta se aunque cualquier órgano puede serlo.
hace irreversible y aquél no puede recuperar su for-
ma normal; esto ocure entre 2 y 30 % en el ho- Cuadro clínico
mocigoto. La enfermedad drepanocítica es un término genéri-
Los pacientes con anemia drepanocítica tienen una co que se caracteriza por una predominancia de la
gran diferencia en sus manifestaciones clínicas. hemoglobina S e incluye una serie de entidades cu-
Mientras algunos presentan síntomas ligeros, otros yos síndromes más comunes son los siguientes:
tienen crisis frecuentes y daño severo de los órga- Anemia drepanocítica — SS
nos. Esto no depende únicamente de la gelificación Hemoglobinopatía SC — SC
de la hemoglobina, pues existen otros factores que S – β+ talasemia — Sβ+
influyen en estas diferencias, como el efecto epistá- S – βº talasemia — Sβº
tico de la hemoglobina S. Se entiende por epistasis Hemoglobina SO arab — SO arab
el fenómeno mediante el cual, genes ligados o no, Hemoglobina SD — SD
afectan la expresión de un gen normal o que ha Otras combinaciones — SX
mutado. Un ejemplo de lo expuesto es la asociación
de la hemoglobina SS con la alfa talasemia. Estos Todas estas entidades son mejor clasificadas por
pacientes tienen menos anemia, menor concentra- su genotipo.
ción de hemoglobina corpuscular media y menor vo- Hay dos genes para la cadena beta, localizados
lumen corpuscular medio que los pacientes SS sin
en el cromosoma 11 y cuatro genes para la cadena
alfa talasemia.
alfa localizados en el cromosoma 16.
La vasoclusión se inicia y mantiene por la interac-
El rasgo drepanocítico (AS) y la anemia drepa-
ción entre los drepanocitos, las células endoteliales
nocítica (SS) se han observado casi exclusivamente
y constituyentes del plasma.
en la raza negra. La frecuencia del gen S varía se-
Las interacciones adhesivas entre los drepanocitos
gún las diferentes regiones del mundo. Se encuentra
y las células endoteliales ocurren como resultado del
en más o menos el 8 % de los negros norteamerica-
daño a la membrana celular. Esta adherencia de los
nos. En Cuba la distribución en algunas regiones es
drepanocitos a las células endoteliales enlentece el
flujo sanguíneo, lo suficiente para que se produzcan la siguiente:
sucesivos procesos de polimerización, formación de
Región %
drepanocitos y vasoclusión, antes de que se com-
plete el paso de la sangre a través de la microcircu- Habana 3,04
lación. Además, la desoxigenación produce salida Santiago de Cuba 5,59
del potasio con aumento de la densidad de la célula Guantánamo 10,6
y la tendencia de la hemoglobina S a polimerizar.
Villa Clara 2,12
Los granulocitos interactúan con los drepanocitos y
las células endoteliales y son estimulados a liberar Cuba 3,08
citocinas dañinas. Igual sucede con las plaquetas ac-
tivadas y los reticulocitos. En los primeros meses de la vida el paciente no
La polimerización de la hemoglobina S también presenta síntomas, ya que un elevado porcentaje de
está influenciada por la cantidad de hemoglobina su hemoglobina es de tipo fetal, que como se sabe
fetal que contiene el eritrocito. no contiene cadenas beta. A partir del cuarto o quinto
En la anemia drepanocítica, todos estos mecanis- mes, casi todas las cadenas gamma de la hemoglo-
mos son capaces de producir obstrucción de la mi- bina fetal han sido sustituidas por las cadenas beta
crocirculación, con estasis circulatorio y anoxia, con patológicas y es a partir de este instante que empie-
mayor formación de drepanocitos y acidosis local, zan a manifestarse los signos y síntomas dependien-
que favorecerá el proceso de falciformación, con lo tes del proceso hemolítico. Aparece la ictericia, la
que se establece un verdadero círculo vicioso. Al- hemoglobina comienza a descender y la enferme-
gunas áreas del cuerpo serán más afectadas que otras, dad sigue un curso más o menos estable al entrar en

356
juego los mecanismos de compensación de toda ane- en cualquier sitio de la economía, los síntomas va-
mia crónica. rían. Las crisis más comunes son las osteoarticulares,
Con frecuencia estos pacientes tienen un hábito abdominales, torácicas y lumbares. Puede haber fie-
característico: extremidades largas, manos y dedos bre y manifestaciones inflamatorias en el sitio afec-
alargados, cráneo en torre y paladar ojival. Presen- tado.
tan un tinte ictérico, que por lo general no es muy Entre los lugares más involucrados están los hue-
intenso, mucosas pálidas y úlceras localizadas ge- sos. Cuando las áreas de infarto son pequeñas y la
neralmente en las regiones maleolares. circulación de la corteza no se encuentra compro-
Es infrecuente la esplenomegalia después de metida, el dolor es referido como un dolor óseo pro-
los 8 años, ya que los continuos infartos esplénicos fundo y no hay afectación de los tejidos blandos;
producen cicatrices y retracciones de este órgano, pero cuando las lesiones obstructivas son grandes y
que llega prácticamente a desaparecer. Esto consti- se lesiona la cortical del hueso, hay signos de reac-
tuye la autoesplenectomía de los enfermos con ane- ción inflamatoria perióstica con aumento de volu-
mia drepanocítica. En un estudio realizado por men de las partes blandas y dolor a la presión de
ultrasonografía en el hospital Saturnino Lora de éstas. Si se localiza en el abdomen es confundible
Santiago de Cuba, sólo el 5 % de los adultos tenía con un abdomen agudo.
esplenomegalia. Es mucho más frecuente en la Recientemente se ha planteado que la crisis dolo-
hemoglobinopatía SC. rosa es el resultado de un aumento de la presión in-
Los pacientes son muy susceptibles a las infec- tramedular, debido a una respuesta inflamatoria
ciones y se han reportado alteraciones de la inmuni- causada por la necrosis avascular de la médula ósea.
dad en ellos.
Desde el punto de vista fisiopatológico, en la ane- Síndrome torácico agudo
mia drepanocítica hay dos hechos importantes: Es más común en los niños pero más severo en el
a. Anemia hemolítica crónica. adulto. Se caracteriza por dolor torácico, disnea, tos,
b. Oclusión vascular. fiebre y la presencia de infiltrados pulmonares en
las radiografías de tórax. Los signos y síntomas va-
Algunos cuadros de oclusión vascular son agu- rían desde ligeros hasta muy graves con riesgo para
dos (crisis vasoclusivas, síndrome torácico agudo, la vida.
dolores osteomioarticulares) y otros son crónicos El síndrome tiene las causas siguientes: infarto
(retinopatía, necrosis aséptica de la cabeza del pulmonar, neumonía, infarto del esternón o costi-
fémur). llas, embolismo graso y embolismo pulmonar.
En los primeros 2 o 3 días el examen radiológico
Crisis vasoclusiva o dolorosa (CVO) suele ser normal, sobre todo si el paciente está
Es la manifestación más frecuente en el enfermo con deshidratado. En el 15 % de los casos se acompaña
anemia drepanocítica y se presenta con síntomas li- de un derrame pleural.
geros que se agravan paulatinamente o por el con- El diagnóstico diferencial entre estas entidades es
trario, tienen un comienzo brusco. Se origina por con frecuencia difícil y en ocasiones coexisten más
fenómenos recurrentes de oclusión vascular, que de una causa en el mismo paciente y de ahí el nom-
producen hipoxia regional, con acidosis que aumen- bre genérico de síndrome torácico agudo. Para rea-
tará la falciformación y la isquemia hística. lizarlo deben indicarse radiografía de tórax, cultivo
Estas crisis se desencadenan por diversos facto- de sangre y esputos, monitoreo de los gases sanguí-
res: infecciones, deshidratación, exposición al frío, neos, hemoglobina y conteo diferencial de leucoci-
ejercicio físico exagerado, etc. Por lo general duran tos, examen de grasa en esputo, orina y lavado
de 4 a 6 días, pero en ocasiones persisten mucho bronquial y si es posible, una gammagrafía pul-
más. La frecuencia es muy variable, tanto en el mis- monar.
mo paciente como en pacientes distintos. Unos pa- Una PO2 de menos de 75 mmHg en adultos, es un
san años sin tenerlas, mientras que otros la tienen a signo de mal pronóstico.
menudo. Los ataques repetidos de infarto pulmonar pue-
El dolor es la manifestación clínica predominan- den llevar a una hipertensión pulmonar con insufi-
te y como la oclusión de la microcirculación ocurre ciencia y distress respiratorio.

357
Hay que indicar analgésicos y evitar el uso de nar- El tratamiento inicial es el reposo en cama y los
cóticos que conduzcan a una hipoventilación pul- analgésicos, que deben prolongarse por lo menos
monar. Se debe hidratar al paciente, pero recordando 6 meses. Si no se resuelve el problema, hay que re-
que la sobrehidratación es tan peligrosa como la currir a la tracción de partes blandas, osteotomía con
deshidratación, y administrar oxígeno y antibióticos. rotación, e incluso remplazo quirúrgico de la cabe-
La combinación de una cefalosporina con un ami- za del fémur por una prótesis. La cámara hiperbári-
noglucósido es una buena elección y después se ajus- ca, sobre todo en los estadios iniciales, suele dar
ta el tratamiento según los resultados de los cultivos. buenos resultados.
La heparina sólo debe utilizarse cuando haya cer-
teza de un embolismo pulmonar. Síndrome del cuadrante superior derecho
Se ha reportado como beneficioso el uso de dexa- Los pacientes con este síndrome se quejan de dolor
metasona (0,3 mg/kg cada 12 h, por 4 dosis). en el hipocondrio derecho. Las causas que lo provo-
Si en 48 o 72 horas el cuadro no mejora o hay una can son: CVO, colecistitis, secuestro hepático agu-
enfermedad rápidamente progresiva o hay eviden- do y crisis hepática.
cia de un embolismo graso, se debe realizar una En la CVO, ésta es parte de una crisis más ge-
exsanguinotransfusión. neralizada, con dolor en las extremidades, colum-
na, etc. y el diagnóstico es relativamente fácil.
Sistema óseo y necrosis aséptica de la cabeza del Si se trata de una colecistitis, el hallazgo por ultra-
sonografía de una litiasis vesicular ayuda a esclarecer
fémur
el diagnóstico. Hoy día el uso de la colecistectomía
Tanto los huesos como las articulaciones son sitios
laparoscópica es segura y efectiva y con menos ries-
habituales de localización del dolor en las CVO. La
gos para el paciente.
hiperplasia de la médula ósea, por la anemia hemo-
La litiasis vesicular es muy frecuente en la ane-
lítica que padecen estos enfermos, ocasiona las de-
mia drepanocítica y entre nosotros la paceden el
formidades óseas ya descritas (cráneo en torre,
46,1 % de los pacientes. Por lo común es asintomá-
paladar ojival, hiperplasia del maxilar superior, etc.).
tica, aunque en ocasiones produce síntomas (náu-
En los huesos largos se observa ensanchamineto del
seas, vómitos, dolor en el hipocondrio derecho y
canal medular y osteoporosis. La vértebra bicóncava
sensación de plenitud gástrica). El ultrasonido ab-
(en cola de pescado) es un hallazgo común entre los dominal es el método diagnóstico de elección.
pacientes adultos capaz de producir un cuadro de El secuestro hepático agudo se caracteriza por un
dolor lumbar crónico. aumento de volumen del hígado, con caída de los
Otra complicación ósea de la anemia drepanocí- niveles de hemoglobina y con una función hepática
tica es la necrosis avascular de la cabeza del fémur no alterada. Se debe al secuestro de los drepanocitos
o del húmero; es más frecuente la primera. Aparece en los sinusoides hepáticos.
por lo general entre los 25 y 35 años de edad y ocurre La crisis hepática, también llamada colestasis
por el limitado aporte sanguíneo a estas áreas y por intrahepática, se caracteriza por un dolor de apari-
la pobreza de la circulación colateral, lo que las hace ción brusca en el hipocondrio derecho, hepatome-
muy vulnerables a la falciformación y consecuente- galia progresiva, aumento de la cifra de bilirrubina,
mente al daño óseo. En nuestro medio se encontró sobre todo de la conjugada, prolongación del tiem-
un 4,6 % de necrosis aséptica de la cabeza del fémur po de protrombina y elevación de las enzimas hepá-
en 293 pacientes con anemia drepanocítica estudia- ticas, aunque sin alcanzar los niveles que se observan
dos. Los primeros síntomas son dolor en la cadera y en la hepatitis aguda. En los casos graves debe indi-
claudicación al caminar. La movilización de la ca- carse sin demora una exsanguinotransfusión total,
dera se hace muy dolorosa. En los estadios iniciales cuando los niveles de bilirrubina total sobrepasen
el estudio radiológico es normal, pero a la larga, el los 50 mg/dl (855 µmol/L).
peso del cuerpo lleva al aplastamiento y contorno
irregular de la cabeza del fémur. Crisis aplástica
La RMN y la TAC pueden hacer el diagnóstico Se observa no sólo en la anemia drepanocítica, sino
en etapas tempranas. también en cualquier anemia hemolítica crónica. Hay

358
una supresión de la eritropoyesis causada por la cepa largo tiempo de evolución el fondo contiene un exu-
B19 del parvovirus y como el drepanocito tiene una dado fibrinopurulento, con cambios tróficos en la
vida media acortada, la cifra de hemoglobina dismi- piel que rodea la úlcera.
nuye con rapidez. Como ya se apuntó, son muy difíciles de curar y
El paciente se queja de mucha astenia y da la im- por lo tanto, el tratamiento más efectivo es el man-
presión de estar agudamente enfermo. Las mucosas tenimiento de las zonas maleolares limpias y evitar
tienen una intensa palidez y la cifra de hemoglobina los traumatismos con el uso de medias y zapatos ba-
puede llegar hasta 30 o 40 g/L (3 o 4 g/dl). Muy jos. Cuando ya aparece la úlcera, debe ser tratada
importante es que el conteo de reticulocitos está bajo rápidamente y tomar muestras para cultivo. La me-
y esto obliga a realizar un medulograma, que con- dida más efectiva es el reposo con elevación de la
firmará el diagnóstico por estar ausente el sistema pierna y por supuesto, la cura local con soluciones
eritropoyético, con integridad de los demás. antisépticas débiles y antibióticos. Los vendajes hú-
Por lo general el problema se resuelve en 7 o 10 medos han dado buenos resultados.
días, aunque casi siempre hay que utilizar la trans- Se han reportado beneficios con transfusiones que
fusión de glóbulos rojos. llevan la cifra de hemoglobina hasta 100 g/L, y re-
ducen la hemoglobina S a menos de un 30 %.
Priapismo En las úlceras recalcitrantes se puede utilizar el
El priapismo en la anemia drepanocítica puede ser injerto de piel. En ocasiones, la ozonoterapia local y
agudo (recurrente y prolongado) y crónico.
el oxígeno hiperbárico han sido útiles.
En el agudo recurrente, el paciente sufre de una
erección dolorosa que cede de manera espontánea.
Alteraciones del sistema nervioso central
En el agudo prolongado la erección se mantiene por
La CVO del SNC es una complicación muy grave
horas y días y requiere de un tratamiento agresivo.
de la anemia drepanocítica. Se debe a la estenosis u
Se debe realizar una exsanguinotransfusión para
oclusión de la carótida interna o de una de las arte-
llevar los niveles de hemoglobina S por debajo de
rias cerebrales. Es común que estén afectados los
un 20 %. Con relativa frecuencia, esto último no re-
segmentos distales intracraneales de la arteria
suelve el problema y se requerirá de tratamiento qui-
rúrgico, el cual es seguido por impotencia sexual carótida interna y los proximales de las arterias ce-
completa o parcial. rebrales media y anterior. Las lesiones aparentan
En el priapismo crónico, las erecciones dolorosas progresar por meses o años antes de que produzcan
son repetitivas pero reversibles y el paciente las su- síntomas cerebrales y por lo tanto, hay una oportu-
fre generalmente al despertarse por la mañana. Al- nidad para detectarlas antes del infarto.
gunos reportan buena respuesta con el uso del Las manifestaciones clínicas dependen del sitio y
diazepam y otros prefieren utilizar un régimen de extensión de la oclusión vascular. Aparecen hemi-
transfusiones para mantener bajo el porcentaje de plejías, convulsiones, alteraciones visuales y coma;
hemoglobina S. además, parálisis de los pares craneales, signos
meníngeos y trastornos de la conducta. A veces se
Úlceras en las piernas producen espasmos vasculares con síntomas neuro-
Casi siempre aparecen después de los 15 años de lógicos transitorios y hemorragia intracerebral o
edad y su frecuencia es variable; en Ciudad de La subaracnoidea.
Habana ésta varía entre 27 y 36 % y en Santiago de Las lesiones estenóticas se demuestran por angio-
Cuba, es de un 42 %. grafía cerebral y recientemente por RMN y US
Se localizan más en las regiones laterales de los Doppler intracraneal. El método de elección es la
maléolos, pero también se ven en otras áreas de la US Doppler, ya que es segura, no invasiva, de bajo
pierna y en el dorso de los pies. Son únicas o múlti- costo y bien tolerada. Por este método se mide la
ples. Algunas cicatrizan rápido, pero otras se man- velocidad del flujo en los grandes vasos del polígo-
tienen por años y son de difícil tratamiento. no de Willis. Las estenosis severas están asociadas a
Estas úlceras llegan a ser muy dolorosas y se una velocidad de flujo dos o tres veces por encima
acompañan a menudo de celulitis reactiva. En las de del valor normal.

359
El tratamiento debe instaurarse rápido, si es posible hemorragia vítrea y al desprendimiento de la retina,
en una unidad de cuidados intensivos. Las convul- con posible ceguera posterior. La fotocoagulación
siones se tratan con terapéutica anticonvulsivante. por láser es efectiva y tiene pocas complicaciones.
Se debe realizar exsanguinotransfusión para Si es necesario el tratamiento quirúrgico, se debe
disminuir la hemoglobina S por debajo del 30 %. efectuar primero una exsanguinotransfusión para
Posteriormente se establecerá un programa de hi- evitar el hifema, que es muy peligroso en estos pa-
pertransfusión que la mantenga así sin exceder la cientes, ya que las condiciones propias del humor
concentración de hemoglobina de 120 g/L y un acuoso favorecen la falciformación y causan hiper-
hematócrito de 36 %. Las transfusiones se repiten tensión intraocular.
cada 3 o 4 semanas. No está definido cuanto tiempo
hay que continuar con el régimen de hipertransfu- Síndrome mano–pie
sión, aunque algunos lo mantienen por 5 años. Tam- Se ve en niños menores de 5 años en los que se pro-
poco está claro, si después de suprimir este régimen duce un aumento de volumen doloroso del dorso de
el paciente vuelve a recurrir. Con este tratamiento las manos, de los pies o de ambos, que se acompaña
hay que hacer transfusiones con genética de grupo de fiebre e irritabilidad y dura 1 o 2 semanas.
para evitar la aloinmunización, y si se utiliza por Al inicio el estudio radiológico es negativo, pero
más de un año, deben emplearse agentes quelantes si se prolonga por más de una semana aparecen las
del hierro. lesiones: distorsión del patrón trabecular, osteólisis
y reacción perióstica. Por lo general, el cuadro cede
Manifestaciones renales espontáneamente y las manifestaciones radiológicas
Hay áreas de la circulación que dada sus caracterís- desaparecen, pero si se repite, puede llevar al acor-
ticas facilitan la falciformación y una de ellas es la tamiento de los dedos.
médula renal. Las manifestaciones más frecuentes En estos casos la cifra de hemoglobina no sufre
son la hipostenuria y la hematuria. La hipostenuria cambios y el conteo de reticulocitos se mantiene ele-
trae como consecuencia una poliuria, lo que hace al vado.
paciente susceptible a la deshidratación, que es una
causa precipitante de la CVO. La hematuria afecta Secuestro esplénico
al riñón izquierdo en el 80 % de los casos. Se trata Es otra complicación en los niños y está caracteri-
con hidratación parenteral y ácido epsilón aminoca- zada por anemia severa, esplenomegalia, shock hi-
proico (2 a 8 g al día); si no mejora debe realizarse povolémico y muerte súbita. Es inusual después de
una exsanguinotransfusión. los 3 años, aunque también ocurre en pacientes adul-
La proteinuria se ve hasta en el 50 % de los pa- tos con hemoglobina SC o con Sβ+ talasemia, cuyos
cientes. Un pequeño número de éstos suelen evolu- bazos están aumentados de tamaño. La trombocito-
cionar hacia un síndrome nefrótico y a continuación penia es común debido a un atrapamiento esplénico
hacia una insuficiencia renal. de las plaquetas. El conteo de reticulocitos es alto.
La infección del tracto urinario es común en la El tratamiento debe estar dirigido a combatir la
drepanocitosis y se debe tratar con terapéutica anti- hipovolemia con expansores plasmáticos, seguido
biótica adecuada. de transfusiones de glóbulos. En niños con dos o
tres episodios de este tipo debe valorarse la esple-
Manifestaciones oculares nectomía y algunos la recomiendan después del pri-
La afectación de la red vascular superficial de la con- mer episodio. La educación de los padres acerca de
juntiva bulbar es frecuente en la anemia drepanocí- los síntomas y la palpación esplénica, son particu-
tica. Se observan fragmentos capilares en forma de larmente importantes para hacer un diagnóstico
coma, sobre todo en la parte inferior de la conjunti- precoz.
va bulbar cubierta por el párpado.
La lesión oclusiva arteriolar de la retina lleva en Anemia drepanocítica y embarazo
algunos casos a la formación de microaneurismas y El embarazo en la anemia drepanocítica siempre es
a la neovascularización con la llamada retinopatía un riesgo, sobre todo en pacientes muy sintomáticas
drepanocítica. Ésta evoluciona a veces hacia una y que han mantenido, en toda su evolución, cifras

360
muy bajas de hemoglobina; sin embargo, con un buen ADN extraído de las células del líquido amniótico.
seguimiento y un tratamiento precoz de cualquier La amniocentesis se hace a las 16 o 20 semanas de
complicación que se presente (CVO, sepsis urina- gestación y el riesgo de pérdida fetal es de un 0,5 %.
ria, etc.), el pronóstico ha mejorado de forma signi- Si el resultado del estudio del líquido amniótico
ficativa, tanto para la madre como para el niño. resulta positivo, se sugiere interrumpir el embarazo,
Se debe hacer un estudio al inicio del embarazo cuya decisión final, por supuesto, es potestativa de
para conocer si la paciente está aloinmunizada y to- la pareja.
mar las medidas precisas si necesita ser transfundi-
da. No se realiza de rutina exsanguinotransfusión y Exámenes complementarios
sólo se indica ante cualquier complicación que re- Hemograma. Como en toda anemia, la hemoglobi-
quiera este proceder. Se le informa a la paciente que na y el hematócrito estarán bajos. El examen de la
acuda de inmediato al hospital si presenta algún pro-
sangre periférica muestra hipocromía, anisocitosis,
blema en relación con su embarazo o con su enfer-
células en diana, policromatofilia y drepanocitos
medad de base.
(Fig. 48.3). Es frecuente la presencia de normoblas-
En nuestra institución se han atendido más de
tos, así como de una discreta leucocitosis.
150 pacientes embarazadas con hemoglobinopatías
Conteo de reticulocitos. Se encuentra elevado.
SS y SC en los últimos 7 años, con una mortali-
dad de 1,6 %. Estercobilinógeno fecal. Está aumentado.
Bilirrubina. Está aumentada a expensas de la no
Portador de hemoglobina S (AS) conjugada. Cuando hay un daño hepático o una ic-
El portador de hemoglobina S (AS) es prácticamen- tericia obstructiva serán elevadas ambas fracciones.
te asintomático, sin embargo, a veces tiene hematu-
ria, hipostenuria, y aumento de la sepsis urinaria en
la mujer embarazada. En otro tipo de manifestacio-
nes no se ha comprobado que sean consecuencia de
su gen S, y se debe llegar a la conclusión de que el
rasgo sicklémico es una condición benigna y que sólo
en raras ocasiones (muy baja tensión de O2, deshi-
dratación intensa, acidosis) puede tener efectos ad-
versos sobre la salud.
La hematuria se trata con hidratación y ácido
epsilón aminocaproico.
Cuando va a sufrir una intervención quirúrgica,
se le debe oxigenar e hidratar adecuadamente antes,
durante y después del acto quirúrgico.

Diagnóstico prenatal
La prevención de la anemia drepanocítica se viene
aplicando en Cuba desde 1983 a través de un pro-
grama de carácter nacional.
Para realizar el diagnóstico prenatal es necesario
primero detectar las parejas de alto riesgo, por lo
general compuestas de dos heterocigotos y en las
cuales la probabilidad de tener un hijo enfermo es de
un 25 %. Para ello se analizan las mujeres embara-
zadas y las portadoras de una hemoglobina anormal;
se cita al esposo, y se le realiza una electroforesis de Fig. 48.3. Lámina de sangre periférica en una anemia por he-
hemoglobina. Si resulta ser una pareja de alto ries- matíes falciformes (anemia drepanocítica), donde se observan
go, se efectúa el diagnóstico prenatal estudiando el varios drepanocitos.

361
Eritrosedimentación. Estará retardada, ya que la do. Con un seguimiento adecuado, muchos de estos
forma del eritrocito impide la formación de pilas de enfermos llegan y sobrepasan la quinta década.
monedas. Ellos deben ser atendidos en consulta con una
Prueba de Hück. Es positiva. Debe recordarse que periodicidad de 1 a 3 meses, en dependencia de su
también lo es en el heterocigoto y que por lo tanto, cuadro clínico.
la positividad de esta prueba no hace el diagnóstico Se les administra ácido fólico (1 mg/día) y se es-
de anemia drepanocítica. tablece una estrecha relación con otras especialida-
Test de solubilidad de la hemoglobina. Es positivo. des (Ortopedia, Oftalmología, etc.). El viaje en
Hemoglobina fetal. Puede estar aumentada. aviones presurizados no suele tener problemas, pero
Medulograma. Fundamentalmente se encuentra es preferible que lo hagan en tren u ómnibus.
una hiperplasia normoblástica del sistema eritropo- Se les debe impartir consejo genético y a las muje-
yético, al igual que en toda anemia hemolítica. El res advertirles el peligro que corren en el embarazo.
azul de Prusia es positivo.
Electroforesis de hemoglobina. Es el examen com- Tratamiento de las crisis vasoclusivas
plementario fundamental y mostrará la típica movi- En las CVO las medidas más importantes son la hi-
lidad de la hemoglobina SS. dratación y el alivio del dolor.
Estudio radiológico óseo. Con frecuencia se de- Las crisis ligeras o moderadas se tratan en el ho-
tectan alteraciones óseas del tipo de cráneo con as- gar del enfermo con reposo, analgésicos e hidrata-
ción orales. En caso de crisis severa, el paciente debe
pecto “en cepillo”, vértebras osteoporóticas y
acudir a un departamento de urgencias, donde se
bicóncavas, necrosis aséptica de la cabeza del fé-
iniciará rápidamente la hidratación parenteral con
mur, etc.
glucosa al 5 % o suero salino fisiológico y se le ad-
En pacientes en crisis se han reportado niveles
ministrarán por lo menos 3 o 4 litros por día, aunque
elevados de IL–8.
por supuesto, la cantidad depende de su estado y
Tratamiento cuadro clínico.
El otro punto importante en el manejo de estas
Como ya se expuso, en Cuba existe un programa personas es el alivio del dolor. En la crisis severa,
nacional para la prevención de las hemoglobinopa- éste es intenso y cuando no cede a la dipirona o a los
tías, y se efectúa electroforesis de hemoglobina a AINE, debe valorarse el uso de morfina o de codeína.
todas las embarazadas y en caso necesario a sus es- No se recomienda la meperidina, ya que uno de sus
posos, para diagnosticar a las parejas de alto riesgo. metabolitos (normeperidina) a veces causa convul-
Cuando el feto está afectado se le sugiere la interrup- siones.
ción del embarazo. Se pretende con este programa No se ha podido demostrar que el paciente se be-
erradicar en algunos años, la anemia drepanocítica neficie con el uso del bicarbonato de sodio.
en nuestro país. Si hay alguna infección sospechosa de ser la desen-
En regiones donde haya una alta incidencia del cadente de la CVO, debe ser tratada con antibióti-
gen S, debe haber una consulta especializada para cos. Además, ésta puede estar acompañada de
atender a estos enfermos. Hay que explicar al pa- cualquiera de las complicaciones antes descritas y
ciente y a sus familiares las principales característi- su tratamiento ya fue enunciado.
cas de la enfermedad, así como la importancia de un Si a pesar del tratamiento la crisis se prolonga,
régimen higienodietético adecuado y de la ingestión hay que pensar en una exsanguinotransfusión.
frecuente de abundantes líquidos para evitar la des- Es dudosa la utilidad de la metilprednisona.
hidratación. Se recomienda evitar el frío y la utili- El uso de la cámara hiperbárica y la ozonoterapia
zación de medias y un calzado bajo para prevenir la ha tenido buenos resultados en algunos enfermos.
aparición de úlceras maleolares. No debe tener una
ocupación en la cual sufra tensiones físicas ni emo- Usos de la transfusión
cionales, ni realizar trabajos nocturnos o que obli- Hay quienes consideran a la transfusión como parte
guen a estar mucho tiempo en la misma posición. integral del tratamiento, ya que aumenta la capaci-
No está contraindicado un ejercicio físico modera- dad de O2 de los tejidos y al mismo tiempo baja la

362
fracción de eritrocitos que contienen hemoglobina S. respuesta de los pacientes a dicho medicamento, así
Sin embargo, es mejor que ésta se administre cuan- como en la elevación de la hemoglobina fetal y en
do sea necesario (crisis aplástica y secuestro, ane- la depresión de la médula ósea.
mia severa que produzca angina, insuficiencia renal, Las dosis empleadas también han sido muy va-
CVO del sistema nervioso central, etc.) y no sólo riables. Se pueden administrar 15 mg/kg/día y lue-
por subir la cifra de hemoglobina en el paciente. Hay go aumentar 5 mg/kg/día, a menos que se detecte
que recordar que una transfusión no está exenta de una depresión medular. Hay quienes utilizan dosis
peligros, pues trasmite enfermedades infecciosas, mayores.
aumenta la viscosidad de la sangre y por ende, el Otros puntos que se deben dilucidar son los posi-
peligro de una CVO, sobrecarga al corazón por au- bles riesgos teratogénicos en padres y madres po-
mento del volumen sanguíneo y tiene el peligro de tenciales, así como la posibilidad de que aumente la
aloinmunización, que complica el uso de la sangre, incidencia (al parecer mínima) de procesos malig-
quizás cuando ésta sea más necesaria. En nuestro nos en el paciente.
hospital, el 23,1 % de los pacientes con anemia dre- El trasplante de médula ósea se ha realizado en
panocítica están aloinmunizados. casos escogidos, con cuadros clínicos muy graves.
La exsanguinotransfusión está indicada cuando es
necesario disminuir rápidamente el porcentaje de Enfermedad
hemoglobina S a menos de un 30 %. Tales son los
casos: por hemoglobina C
En la hemoglobina C, la lisina remplaza al ácido
1. Crisis hepática grave. glutámico en la posición 6 de la cadena beta.
2. CVO del sistema nervioso central.
3. Síndrome torácico agudo. Cuadro clínico
4. Priapismo que no responde al tratamiento. El estado heterocigoto AC es asintomático.
5. CVO que se prolonga. Los homocigotos (CC) cursan con una hemólisis
6. Embolismo graso. de carácter leve, anemia moderada y una ictericia
discreta. Por lo común tienen esplenomegalia. La
En pacientes que van a ser sometidos a una inter- hemólisis probablemente se deba a una cristaliza-
vención quirúrgica con anestesia general, se debe ción espontánea de la hemoglobina C, que convierte
elevar el hematócrito a un 30 %. al eritrocito en una célula rígida y facilita su atrapa-
miento y destrucción por el bazo. La hemoglobina
Otros tratamientos C tiende a depositarse en el centro del hematíe, por
Han sido muchos los intentos de inhibir o revertir lo cual le confiere la forma en diana tan frecuente
el proceso de falciformación y su consecuencia, la en esta hemoglobinopatía.
oclusión vascular. Con este fin se han utilizado anti- En nuestro medio la frecuencia de AC es de 1,34 %
coagulantes, alcalinizantes, inhibidores de la poli- de la población y en el país es de 0,52 %. En los
merización de la hemoglobina, como la urea, etc. servicios de Santiago de Cuba se han diagnosticado
Ninguno de ellos ha dado buenos resultados. 17 pacientes con hemoglobina CC, de ellos 13 mu-
El descubrimiento de que algunos citostáticos jeres y 4 hombres.
aumentan la hemoglobina fetal, por mecanismos aún La asociación de hemoglobina C con hemoglobi-
no bien dilucidados, ha abierto nuevos horizontes na S (SC) es la segunda hemoglobinopatía más co-
en el tratamiento de la anemia drepanocítica. mún en Cuba. En la población de Santiago de Cuba
Numerosos trabajos han aparecido en la literatu- se estudiaron algo más de 150 casos. El cuadro clí-
ra médica reportando el uso de la hidroxiurea en estos nico es generalmente más moderado que en la ane-
enfermos. Los resultados han sido buenos, con dis- mia drepanocítica (SS), sin embargo, algunos
minución de las CVO en el año, en el síndrome to- pacientes son muy sintomáticos y se ha reportado
rácico agudo y en la necesidad de transfusiones. Sin que el síndrome torácico agudo y las alteraciones
embargo, no hubo reducción de la mortalidad ni de oculares son más severas que en la anemia drepano-
las CVO del SNC. Hay mucha variabilidad en la cítica.

363
En el cuadro 48.1 se exponen las complicaciones unirse, produce daño a la célula y causa su muerte,
de los SS y de los SC en el servicio de hematología y por lo tanto, una anemia hemolítica.
del hospital Saturnino Lora de Santiago de Cuba. Se puede producir la supresión total de la síntesis
de una cadena globínica (α°, β°, δ°, etc.) o la supre-
CUADRO 48.1
sión parcial (α+, β+, δ+, etc.).
COMPLICACIONES EN LOS PACIENTES SS
Y EN LOS SC Debe recordarse que la información necesaria para
la síntesis proteica está contenida en el ADN y ésta
SS % SC % la transfiere al ARNm (transcripción), quien deter-
minará la secuencia de aminoácidos (traducción). Por
Litiasis vesicular 46,1 14,7
lo tanto, en las talasemias hay deleción de genes o
Aloinmunización 23,1 12,5 mutaciones de éstos, en el proceso de transcripción
Esplenomegalia 5,0 47,7 o de traducción. Está fuera del objetivo de este libro
Úlcera maleolar 42,0 2,2 el describir cada una de estas posibilidades, por lo
que sólo se hará con los principales tipos de tala-
Necrosis aséptica 4,6 2,9
de la cabeza del fémur
semia.
Éstas se caracterizan por una extraordinaria hete-
El diagnóstico se realiza por electroforesis de la rogeneidad clínica y hematológica, de manera que
hemoglobina. se ven casos muy graves que producen la muerte en
la infancia e incluso dentro del claustro materno, y
En la lámina de la sangre periféria se observan
otros que cursan prácticamente asintomáticos.
drepanocitos y muchas células en diana. Tanto la
cifra de hemoglobina como el hematócrito están
bajos, pero no tanto como en la anemia drepanocíti-
Talasemia alfa
ca. El conteo de reticulocitos está elevado. En el control de las cadenas alfa intervienen 4 genes
(genotipo αα/αα).
Talasemias La deleción de un solo gen produce el genotipo
(αα / -α), que antes se conocía con el nombre de α
Las talasemias constituyen un grupo heterogéneo de talasemia 2. Son los llamados portadores silentes,
anemias congénitas, caracterizadas por la disminu- de muy difícil diagnóstico en el adulto, con altera-
ción o ausencia de una o más cadenas globínicas. ciones hematológicas menores o ausentes.
Por lo tanto, cada tipo de talasemia toma el nombre Cuando la deleción afecta a ambos genes en un
de la cadena cuya síntesis está afectada: cromosoma produce el genotipo (- - / αα), que se
identificaba como α talasemia 1. Puede haber hipo-
1. talasemia α (cuando está afectada la cadena cromía y microcitosis. Hay una ausencia completa
alfa) de producción de cadenas alfa del cromosoma afec-
2. talasemia β (cuando está afectada la cadena tado. Las hemoglobinas A2 y la fetal son normales.
beta) También existe la delección de un solo gen en am-
3. talasemia δ (cuando está afectada la cadena bos cromosomas con el genotipo (- α / - α).
delta) Si hay un solo gen funcional se produce el genotipo
4. talasemia γ (cuando está afectada la cadena (- - / - α), que se denominaba hemoglobina H. En es-
gamma) tos casos, al nacimiento se encuentra un 20 % de
5. talasemia β δ (cuando están afectadas las cade- hemoglobina Bart (β 4). Luego aparece la Hb H (5 a
nas beta y delta) 10 %) con una mayor movilidad electroforética que
6. talasemia γ δ β (cuando están afectadas las ca- la hemoglobina A. Esta enfermedad se caracteriza
denas gamma, delta y beta) por esplenomegalia, una anemia de ligera a mode-
rada, que generalmente se presenta en la niñez y un
Los dos tipos más frecuentes son las talasemias frotis con hematíes microcíticos e hipocrómicos. Si
alfa y beta. Cuando hay una disminución de las ca- se incuba la sangre de estos pacientes con azul bri-
denas alfa o de las cadenas beta, la acumulación de llante cresil por 4 horas, la hemoglobina H se preci-
la globina no afectada, que no tiene cadena a quien pita y forma cuerpos de inclusión. No hay tratamiento

364
específico para esta afección, aunque debe adminis- Exámenes complementarios
trarse ácido fólico (1mg/día). Si se encuentra un hi- En la sangre periférica se observan microcitosis, hi-
peresplenismo, hay que hacer una esplenectomía. pocromía, células en diana y punteado basófilo mo-
Cuando hay deleción de todos los genes se pro- derado.
duce el fenotipo (- - / - -), lo que trae como conse- La hemoglobina fetal es normal o ligeramente ele-
cuencia el hidrops fetal y la muerte en el útero o vada.
poco después del nacimiento. Hay hepatosplenome- El diagnóstico se confirma con el hallazgo de un
galia, anemia severa y edemas generalizados. Se en- aumento de la cantidad de hemoglobina A2 por en-
cuentra hasta un 80 % de hemoglobina Bart, con cima de un 3,2 %.
pequeñas cantidades de hemoglobina H y de hemo- La resistencia osmótica de los hematíes está au-
globina Portland. mentada con disminución del volumen corpuscular
medio (VCM) y de la hemoglobina corpuscular
Talasemia beta media (HbCM).

Es el resultado de una síntesis defectuosa de cade- Tratamiento


nas beta. El estado heterocigoto se denomina talase- No requiere tratamiento, aunque debe darse consejo
mia menor y el homocigoto talasemia mayor o genético y administrar ácido fólico durante el em-
anemia de Cooley. En las talasemias beta hay un barazo.
exceso relativo de producción de cadenas alfa. Es-
tas últimas tienen la solubilidad disminuida, lo que Estado homocigoto
lleva a la formación de inclusiones en los precurso- o talasemia mayor
res eritroides que provocan su destrucción por los
La disminución o ausencia en la síntesis de ambas
macrófagos. Es decir, que en las talasemias beta ha-
cadenas beta, trae como consecuencia un exceso de
brá una lisis eritroide intramedular (eritropoyesis
cadenas alfa insolubles. Estas últimas se precipitan
inefectiva) y al mismo tiempo una disminución de
y forman los llamados cuerpos de Fessas, que lesio-
la vida media de los hematíes que pasan a la circula- nan la membrana celular y producen lisis de las cé-
ción (hemólisis). lulas eritropoyéticas en la médula y en la sangre
periférica.
Estado heterocigoto
o talasemia menor Cuadro clínico
Como ya se dijo, se conoce también como anemia
En el estado heterocigoto los pacientes heredan un de Cooley y sus primeras manifestaciones clínicas
gen que da por resultado la producción normal de (anemia, vómitos, diarrea, etc.) aparecen después de
cadenas beta y un gen de talasemia beta que condu- los tres meses de edad. Con el progreso de la afec-
ce a una síntesis menor o ausente de dichas cadenas. ción, las alteraciones óseas se hacen evidentes y dan
un aspecto mongoloide al paciente, con retraso en el
Cuadro clínico crecimiento y del desarrollo sexual. Los huesos de
La enfermedad se caracteriza porque los pacientes la cara, el cráneo y las manos se engruesan. En el
tienen pocas manifestaciones clínicas o son asinto- estudio radiológico óseo, la bóveda craneal tiene as-
pecto de pelos de punta (“cráneo en cepillo”), por la
máticos. Por lo general presentan una anemia mo-
disposicion perpendicular que toman las trabéculas
derada, a veces tienen una esplenomegalia ligera y
óseas. En los huesos largos hay ensanchamiento de
también un íctero discreto. A menudo son conside- la médula y afinamiento de la corteza.
rados como anémicos por deficiencia de hierro y tra- En el examen físico, además de la palidez, se de-
tados como tales y el fallo terapéutico obliga a un tecta una gran hepatosplenomegalia.
estudio más detallado, hasta que el análisis familiar Para mantenerlos con vida, estos enfermos reciben
y el hallazgo de una hemoglobina A2 elevada aclara transfusiones continuas; esta sobrecarga de hierro
el diagnóstico. produce una serie de manifestaciones clínicas en

365
distintos órganos de la economía. Así, habrá trastor- Por último, hay que brindar consejo genético a
nos cardíacos (arritmias, insuficiencia cardíaca), en- los padres por la posibilidad de realizar diagnóstico
docrinos (diabetes mellitus, hipotiroidismo), en el prenatal si desean tener otro hijo.
hígado (cirrosis), en la piel (coloración bronceada), etc.
Talasemia beta-delta
Exámenes complementarios
En este tipo de talasemia existe una síntesis defec-
La hemoglobina siempre muestra valores muy tuosa de cadenas beta y delta.
bajos. Los heterocigotos presentan anemia ligera o son
En la lámina de periferia se observan microcitos, asintomáticos. La forma homocigota es conocida
hipocromía, células en diana, poiquilocitosis, y como como F–talasemia, con un cuadro clínico menos se-
en toda anemia hemolítica severa, se encuentran vero que la talasemia mayor. El 100 % de la hemo-
normoblastos, policromatofilia, reticulocitosis, hiperbi- globina es fetal.
lirrubinemia a expensas de la bilirrubina no conju-
gada y hierro sérico aumentado; en el medulograma Persistencia hereditaria
hay una hiperplasia del sistema eritropoyético con
azul de Prusia positivo. En el β° / β° el 100 % de la de hemoglobina fetal
hemoglobina es fetal y en el β° / β + o en el β + / β + En este trastorno se siguen sintetizando cadenas
la hemoglobina fetal está entre 5 y 50 %. Después gamma durante toda la vida adulta.
de la esplenectomía se observan corpúsculos de El porcentaje de hemoglobina fetal en el hetero-
Howell-Jolly en la sangre periférica. cigoto se encuentra entre 15 y 35 % y en el homoci-
goto es de 100 %. Éste es el único trastorno en que
Tratamiento dicha hemoglobina se encuentra distribuida de for-
El diagnóstico prenatal de las formas severas de ta- ma homogénea en los eritrocitos, es decir, que todos
lasemia ha reducido el número de casos nuevos en los hematíes la poseen. En los otros casos descritos
varios países, aunque siguen naciendo niños con esta antes, en los cuales hay un aumento de la hemoglobi-
enfermedad. na fetal, ésta se haya distribuida de forma heterogé-
Los homocigotos para talasemia beta necesitan nea , o sea, que hay glóbulos que la tienen y otros no.
de transfusiones, por supuesto, con todas las com- Tanto el heterocigoto como el homocigoto son clí-
plicaciones que trae aparejadas dicho tratamiento nicamente asintomáticos.
(aloinmunización, aumento de los depósitos de
hierro, etc.). Hemoglubinuria paroxística
Hoy día se realiza el llamado régimen de hiper- nocturna
transfusión, que consiste en transfundir al paciente
cada 3 o 4 semanas para mantener la hemoglobina La hemoglobinuria paroxística nocturna (HPN) o
alrededor de 100 g/L. Debe comenzarse en el pri- enfermedad de Marchiafava–Micheli, ofrece un gran
mer año de vida. Hay que iniciar precozmente el interés ya que es un trastorno intracorpuscular pro-
tratamiento de sobrecarga de hierro. Las inyeccio- ducido por un defecto adquirido a nivel de la célula
nes subcutáneas de desferroxamina reducen de for- madre hematopoyética. Su descripción fue hecha por
ma dramática la morbilidad y mortalidad causadas Strübing en 1882, pero no adquirió características
por la hemocromatosis que ocasionan las transfu- de entidad nosológica hasta los trabajos de Marchia-
siones. fava (1911) y Micheli (1931).
El trasplante de médula ósea ha tomado fuerza en
la actualidad, ya que ofrece una esperanza de cura, Etiopatogenia
pero la morbilidad y mortalidad asociadas a este La HPN se caracteriza por una hemólisis intravas-
proceder son factores importantes en la decisión, cular que se manifiesta por una anemia hemolítica
aunque trabajos recientes muestran excelentes crónica, trombosis venosa y una hematopoyesis de-
resultados.La terapia génica debe ser el futuro en el ficiente. Es causada por una mutación de la célula
tratamiento de estos enfermos. madre pluripotencial hematopoyética. Las células

366
derivadas de este clono anormal son deficientes en de la enfermedad, por lo que no debe esperarse su
proteínas de superficie que normalmente anclan en aparición para plantear el diagnóstico.
la superficie de la membrana por el glicosil–fosfati- Las células dañadas se originan al lado de otras
dil–inositol. Se ha encontrado, hasta el momento, normales, y esto crea un mosaico hematológico, en
una falta de cerca de 20 proteínas de este tipo en las el cual la proporción de eritrocitos anormales en la
células sanguíneas de pacientes con HPN. sangre, determina la severidad de la enfermedad;
Los eritrocitos tienen en su superficie estas pro- después de diagnosticada ésta la supervivencia es
teínas, que los protegen del ataque del complemento. de alrededor de 10 años, aunque algunos sobrevi-
En la HPN éstas faltan y ellos son sensibles en gra- ven hasta 25 años.
do sumo a la lisis por el complemento. Un problema clínico serio lo constituyen las trom-
El clono de células madres normales y su descen- bosis venosas, capaces de provocar la muerte en
dencia no desaparece por completo y la proporción muchos casos. Afecta hasta el 40 % de los pacientes
de células que son anormales varían de un paciente en un momento u otro. Aparecen frecuentemente en
a otro y de tiempo en tiempo en el mismo paciente. brazos y piernas, pero también en las venas intrabdo-
Además de los glóbulos rojos, son afectados los minales (hepáticas, porta, mesentérica, etc.), o en
leucocitos y las plaquetas. La activación del com- cualquier parte de la economía (cerebro, riñón,
plemento indirectamente estimula la agregación pla- bazo, etc.).
quetaria y la hipercoagulabilidad. Es probable que En ocasiones se produce la exacerbación de la
esto sea responsable de la tendencia a la trombosis hemoglobinuria por infecciones, ejercicios, interven-
en la HPN. El gen causante de esta afección es el ciones quirúrgicas, etc. En algunos pacientes la se-
PIG – A, localizado en el cromosoma X. Es impor- veridad de la enfermedad disminuye con el tiempo
tante señalar que hay una relación muy estrecha en- y otros tienen una remisión clínica completa, aun-
tre HPN y aplasia medular, que fue reportada por que las anormalidades en las pruebas de laboratorio
primera vez en 1944. También se han reportado los persisten por años.
síndromes mielodisplásticos y la leucemia aguda
mieloblástica en pacientes con HPN. Exámenes complementarios
Cuando la enfermedad se inicia con una pancitope-
Cuadro clínico nia, los exámenes complementarios serán los de una
Por lo general, la enfermedad se presenta entre las anemia aplástica. Aun en este período, si se sospe-
tercera y quinta décadas de la vida. El comienzo casi cha la HPN, deben hacerse los exámenes de labora-
siempre es insidioso con debilidad, palidez y disnea torio que se especifican más adelante, pues es posible
de esfuerzo. Muchos sufren de crisis de dolor abdo- hacer el diagnóstico en este momento. Ya en plena
minal, como cólicos, acompañadas de vómitos. La fase de anemia hemolítica se indicarán todos los
cefalea constituye un síntoma frecuente. exámenes que se describen en el capítulo correspon-
La mayoría de las veces lo primero que llama la diente.
atención es la presencia de una pancitopenia perifé- Existen tres pruebas de laboratorio que son casi
rica. Al realizar el medulograma se comprueba la exclusivas de esta enfermedad:
depresión de los tres sistemas y se hace el diagnósti- Test de HAM. Demuestra la sensibilidad de los
co de aplasia medular. hematíes del enfermo frente a un suero acidificado
El paciente puede permanecer meses y aun años y en presencia de complemento.
con este cuadro, hasta que una noche presenta es- Test de Crosby. Al suero acidificado se le agrega
calofríos, fiebre y dolor lumboabdominal y al día trombina y aumenta la hemólisis de los glóbulos del
siguiente, orinas rojizas características de la hemo- paciente.
globinuria. En estos momentos es posible encontrar Test de sucrosa. Se realiza añadiendo agua azu-
en el laboratorio anemia hemolítica y en el examen carada a una suspensión de hematíes. En caso de
físico, una ictericia no muy intensa y una espleno- una HPN se producirá hemólisis.
megalia discreta. Además de las pruebas anteriores, se buscará la
La hemoglobinuria no es un signo constante en hemosiderinuria, que resultará positiva en la mayo-
esta afección, ya que a veces falta en todo el curso ría de los casos; ésta los lleva a una depleción de

367
hierro, contrario a lo que sucede en las demás ane- Cuando hay déficit de hierro debe indicarse tera-
mias de este tipo. Siempre frente a una anemia he- péutica marcial, aunque en estos casos suele obser-
molítica con pancitopenia periférica, hierro sérico varse un aumento de la hemólisis por la formación
bajo y ausente en los depósitos, debe buscarse una de un gran número de glóbulos rojos sensibles al
HPN. complemento. Esto puede minimizarse con predni-
sona.
Diagnóstico Hay que administrar rápidamente heparina en los
La enfermedad se sospecha en un paciente con ane- casos de trombosis y mantenerla por varios días an-
mia hemolítica, leucopenia, trombocitopenia, evi- tes de cambiar a anticoagulantes orales (ver “Enfer-
medad tromboembólica venosa”).
dencia de hemólisis intravascular (hemoglobinemia,
Así mismo se emplea el tratamiento trombolítico
hemoglobinuria, hemosiderinuria) y deshidrogena-
con activador hístico del plasminógeno en la trom-
sa láctica (LDH) de tipo eritrocitario elevado.
bosis de las venas abdominales y en la trombosis
Tratamiento cerebral, con buenos resultados.
Se ha empleado la globulina antitimocito en la
La transfusión es útil y necesaria en muchos casos, aplasia medular en dosis de 150 mg/kg de peso cor-
pero hay que tener en cuenta la frecuencia de reac- poral por 4 a 10 días; los corticosteroides se usan en
ciones transfusionales con sangre aparentemente dosis moderadas (25 o 30 mg de prednisona en días
compatible, por lo que siempre que se necesite trans- alternos), para reducir la hemólisis.
fundir al paciente, debe hacerse con glóbulos rojos Hoy la única medida curativa es el trasplante
lavados. medular, aplicado en pacientes jóvenes con herma-
También se utilizan los concentrados de plaque- no histocompatible, pero esto sólo será posible en
tas en casos de hemorragias causadas por trombo- un pequeño número de casos y está asociado, ade-
citopenia. más, con una sustancial morbilidad y mortalidad.

368
49
ANEMIAS HEMOLÍTICAS
EXTRACORPUSCULARES

Dentro de estas anemias se consideran las anemias ducción en la madre de anticuerpos contra antígenos
hemolíticas por factores inmunológicos, que pue- eritrocitarios del feto.
den ser isoinmunes y autoinmunes, y la anemia he- Clínicamente se manifiesta por cualquiera de los
molítica por trauma mecánico. cuadros siguientes:

1. Anasarca fetoplacentaria.
ANEMIAS HEMOLÍTICAS 2. Ictericia.
3. Anemia.
ISOINMUNES
Una de las pricipales complicaciones de esta afec-
Se caracterizan por la producción de anticuerpos ción es el temible kerníctero, debido a la impregna-
contra hematíes ajenos al paciente, pero de la pro- ción del sistema nervioso central por la bilirrubina
pia especie. Comprenden la enfermedad hemolítica indirecta.
del recién nacido y la transfusión de sangre incom- En el recién nacido se encontrarán las alteracio-
patible. nes hematológicas características de las anemias he-
molíticas y además, una prueba de Coombs directa
Enfermedad hemolítica del positiva. En la madre sensibilizada, la prueba de
Coombs indirecta será positiva y resulta de mal
recién nacido pronóstico la elevación del título en el curso del
embarazo.
El estudio de la enfermedad hemolítica del recién
Existen otros métodos más precisos para determi-
nacido compete a la pediatría, sin embargo, es con-
nar la afectación fetal en estos casos, pero que esca-
veniente recordar someramente algunos aspectos
pan a los objetivos de este libro.
básicos de ella.
Ésta es el resultado de una incompatibilidad en-
tre los antígenos del grupo sanguíneo del feto y los
Transfusión de sangre
de la madre. Sólo un pequeño número de antígenos incompatible
presentes en los eritrocitos del feto son capaces, al
penetrar en el torrente circulatorio de la madre, de El lector debe remitirse al capítulo donde se explica
estimular la formación de isoanticuerpos, que al po- todo lo concerniente a la transfusión de sangre.
nerse en contacto con los eritrocitos del niño, pro-
vocan su destrucción.
Los antígenos Rh son los más importantes y en- ANEMIAS HEMOLÍTICAS
tre ellos el D ocupa sin lugar a dudas el primer lu-
gar. También la incompatibilidad al grupo ABO AUTOINMUNES
puede ocasionar este cuadro clínico.
En realidad, el término enfermedad hemolítica del Al igual que en toda anemia hemolítica, en las de
recién nacido es más amplio, pero en este tema sólo tipo autoinmune hay un acortamiento de la vida me-
se hace referencia a la hemólisis causada por la pro- dia eritrocitaria, lo cual se debe en este caso a la

369
presencia en la superficie de los hematíes de autoan- cuanto mayor sea el número de moléculas de anti-
ticuerpos contra los propios hematíes, de comple- cuerpos en la superficie de aquéllos.
mento o de ambos a la vez. La destrucción de los
hematíes puede ocurrir en el propio torrente circu- Clasificación de las anemias
latorio (hemólisis intravascular) o en el hígado y el hemolíticas autoinmunes
bazo cuando los eritrocitos son captados por sus Se dividen en tres grandes grupos: (cuadro 49.1).
macrófagos (hemólisis extravascular), que es lo más
frecuente. CUADRO 49.1
Con la descripción hecha por Coombs y la in- ANEMIAS HEMOLÍTICAS AUTOINMUNES

troducción de la prueba que lleva su nombre, estas 1. AHAI por anticuerpos calientes
anemias adquirieron individualidad propia. Dicha A. Primaria ( idiopática)
prueba es fundamental para el diagnóstico de la B. Secundaria
hemólisis por procesos inmunes. Existen sueros de • Trastornos linfoproliferativos
Coombs con especificidad para inmunoglobulinas o • Enfermedades del tejido conectivo (especialmente
para el complemento: el gamma se utiliza para iden- LED)
tificar inmunoglobulinas y el no–gamma para la iden- • Neoplasias no linfoides (tumores del ovario)
tificación del complemento. Hoy existen sueros de • Enfermedad inflamatoria crónica (colitis ulcerativa)
este tipo con una gran especificidad, que permiten
2. AHAI por anticuerpos fríos
incluso la identificación de subclases de inmunoglo- A. Enfermedad por aglutininas en frío primaria (idiopática)
bulinas. La prueba de Coombs directa detecta anti- B. Enfermedad por aglutininas en frío secundaria
cuerpos o complemento unidos al eritrocito, mientras • Trastornos linfoproliferativos
que la indirecta detecta anticuerpos presentes en el • Infecciones ( M. pneumoniae, mononucleosis infec-
suero. ciosa)
Aunque no se sabe por qué el organismo, en un • Hemoglobinuria paroxística a frigore (primaria o aso-
momento determinado, es capaz de producir anti- ciada a sífilis)
cuerpos contra sus propios hematíes, no existen dudas • Anemia hemolítica de Donald – Landsteiner (asocia-
de que hay una alteración del sistema inmunológi- da con síndromes virales)
co. Es bien conocida la asociación de las anemias
3. Anemias hemolíticas inmunes inducidas por drogas
hemolíticas autoinmunes (AHAI) con una serie de
• Hapteno / droga adsorción
enfermedades, incluido el síndrome linfoprolifera-
• Complejo ternario (inmune)
tivo: leucemia linfoide crónica, linfomas, etc. Tam-
bién es relativamente frecuente su asociación con • Verdadera inducción de anticuerpos
otras enfermedades autoinmunes, como el lupus eri-
tematoso diseminado, la colitis ulcerativa, etc. AHAI por anticuerpos
El mecanismo por el cual los glóbulos rojos son
captados y destruidos, sobre todo por el bazo, co- calientes
menzó a aclararse con el descubrimiento de que los En la AHAI por anticuerpos calientes, más frecuen-
macrófagos tienen receptores de superficie para la te que la producida por anticuerpos fríos, si no puede
porción Fc de las inmunoglobulinas y también re- ser reconocida una enfermedad de base, es designa-
ceptores para el componente C3b del complemento. da como primaria o idiopática, y cuando es una ma-
Los macrófagos esplénicos y en ocasiones los hepá- nifestación o complicación de otra afección, se le
ticos, captan por sus receptores de superficie a los conoce con el nombre de secundaria. En la cuarta
hematíes que tienen inmunoglobulinas o comple- parte de los pacientes se encuentra una enfermedad
mento en su superficie. Esta unión eritrocito – ma- de base, en particular neoplasias del sistema inmu-
crófago puede ocasionar pérdida de la superficie del ne (leucosis linfoide crónica, linfomas no–Hodgkin,
primero y causar esferocitosis o destrucción del he- enfermedad de Hodgkin), enfermedades del coláge-
matíe. La captación y eventual destrucción de los no, especialmente lupus eritematoso diseminado y
glóbulos rojos por los macrófagos será más fácil enfermedades por inmunodeficiencias congénitas.

370
El anticuerpo es por lo común una IgG y rara vez, Fragilidad osmótica. Aunque en la mayoría de
una IgM. Suelen tener especificidad para el sistema los casos la fragilidad osmótica aumenta solo dis-
del grupo sanguíneo Rh e interaccionan con los eri- cretamente, puede estarlo en forma marcada, en de-
trocitos del mismo paciente a la temperatura corpo- pendencia del grado de esferocitosis observado en
ral (37 °C). la sangre periférica.
Cuando los anticuerpos sobre la superficie eritro- Prueba de Coombs. La prueba directa es positiva
citaria son escasos, no se produce fijación del com- en más del 90 % de los casos. En casi todos ellos se
plemento. En los casos en que hay una gran cantidad detecta una IgG sobre la superficie eritrocitaria. A
de anticuerpos en la superficie del hematíe, pueden veces es positiva la prueba de Coombs no – gamma,
haber dos de estas moléculas tan cerca una de la otra, que como se dijo, detecta complemento. Cuando hay
como para que se fije el complemento, y esto facili- anticuerpos en el suero, también dicha prueba indi-
ta su captación por los macrófagos. También es po- recta será positiva.
sible, cuando esta cantidad es grande, que la prueba Por lo tanto, un Coombs indirecto positivo debe
de Coombs indirecta sea positiva, lo cual refleja que acompañarse de un Coombs directo positivo. Si hay
los anticuerpos no sólo están en la superficie eritro- un Coombs indirecto positivo con uno directo ne-
citaria, sino también en el suero del paciente. gativo, probablemente el paciente no tenga un pro-
La AHAI por anticuerpos calientes se presenta ceso autoinmune, sino más bien un aloanticuerpo
en cualquier edad de la vida, pero es más común en por transfusiones o embarazo.
la adultez. Las mujeres son más frecuentemente afec-
En una pequeña cantidad de pacientes la prueba
tadas que los hombres. El cuadro clínico y el curso
de Coombs directa, tanto la gamma como la no –
de la enfermedad varían y los síntomas son en lo
gamma, será negativa. Debe recordarse que es posi-
fundamental debidos a la anemia. El comienzo es
tiva cuando hay más de 500 moléculas de anticuer-
casi siempre insidioso, pero también debuta de ma-
pos por hematíe. Si la cantidad es menor, la prueba
nera súbita con fiebre, palidez, hiperpnea, taquicardia,
suele ser negativa. La sensibilidad puede aumentar-
y pueden aparecer hemoglobinemia, hemoglobinu-
se tratando los hematíes con enzimas (tripsina,
ria y shock.
papaína).
En el examen físico se encuentra al paciente pá-
lido, con discreta ictericia y esplenomegalia mode- Siempre que sea posible, debe identificarse el an-
rada, en ocasiones dolorosa en los episodios agudos; ticuerpo con la utilización de un panel de glóbulos
en otras, se palpa una hepatomegalia discreta. En que contenga todos los antígenos eritrocitarios co-
los casos secundarios, la enfermedad de base es ca- nocidos. Se encuentran con mayor frecuencia los que
paz de enmascarar la anemia hemolítica; en otros actúan sobre antígenos del sistema Rh.
evolucionan en forma crónica, con crisis de exacer-
baciones y posible recuperación espontánea.
Tratamiento
El tratamiento de las anemias hemolíticas por anti-
Exámenes complementarios cuerpos calientes consiste en transfusiones, corticos-
Hemograma. La hemoglobina y el hematócrito se teroides, esplenectomía y drogas inmunosupresoras.
encuentran bajos. Tiene importancia la presencia de Transfusión. La mejor guía para la necesidad de
esferocitos, que a veces son muy abundantes. En los una transfusión es la condición clínica del paciente,
casos muy intensos aparecen normoblastos. No es más que el nivel de la hemoglobina y el hematócri-
raro observar monocitos y neutrófilos con eritroci- to. Es importante tener en cuenta que el anticuerpo
tos fagocitados en su interior. Esto se conoce con el suele reaccionar contra todos los glóbulos del donan-
nombre de eritrofagocitosis. te. Por lo tanto, se deben administrar los glóbulos
Reticulocitos. Están aumentados. más compatibles. Hay que transfundir poco a poco
Bilirrubina. Aumenta a expensas de la no conju- buscando evidencias de una reacción hemolítica
gada o indirecta. transfusional.
Plaquetas. En algunos pacientes el cuadro se aso- Corticosteroides. Constituyen la primera línea
cia a una trombocitopenia inmune, combinación que de tratamiento de esta afección. Se comienza con
se denomina síndrome de Evans – Fisher. prednisona en dosis de 1 a 2 mg/kg/día. Entre el 60

371
y 70 % de los pacientes tienen una respuesta en po- ferativas o como complicación de una neumonía por
cos días, reflejada por la caída del conteo de reticu- micoplasma o en la mononucleosis infecciosa.
locitos y aumento de la cifra de hemoglobina. En el síndrome por aglutininas en frío, el anti-
Cuando haya respuesta se disminuirá la dosis con cuerpo es una IgM que fija complemento y reaccio-
rapidez a 30 mg/día y después de modo más lento, na de una manera optima a 4 °C.
hasta llegar a 15 o 20 mg diarios. En caso de una Las aglutininas en frío a veces se detectan en sue-
recaída se debe intentar un nuevo ciclo con predni- ros normales con títulos entre 1: 8 al 1: 32, pero en
sona. pacientes con este síndrome se encuentran títulos mu-
En pacientes críticamente enfermos se utiliza cho más altos, de hasta 1: 1 000 000. Se hallan a
metilprednisona, 2 a 4 mg/kg en dosis divididas en temperaturas entre 0 y 10 °C, y cuando son muy
las primeras 24 o 48 h, por vía EV. abundantes son capaces de ampliar su espectro tér-
Esplenectomía. Existen tres situaciones en que mico hasta 30 °C.
debe realizarse la esplenectomía: Casi siempre tienen especificidad para el antíge-
no I que está presente en la mayoría de los eritroci-
1. Pacientes a los que no se pueden administrar tos del adulto.
las dosis indicadas de prednisona, por la into-
lerancia o por alguna contraindicación formal Cuadro clínico
para el uso de este medicamento. En ciertos enfermos, por lo común ancianos, esta
2. Aquéllos que no respondan a los corticosteroi- anemia sigue un curso crónico con un componente
des y necesiten transfusiones frecuentes para monoclonal en la electroforesis de proteínas, pero
mantenerse con vida. algunos pacientes tienen episodios agudos con he-
3. Los que requieran dosis altas de corticosteroi- moglobinuria.
des para mantenerse asintomáticos. Por ejem- Se presenta acrocianosis con un fenómeno de
plo, más de 20 mg diarios. Raynaud intenso, capaz de afectar no sólo a los de-
dos de las manos y los pies, sino también los lóbu-
Alrededor de las dos terceras partes de los enfermos los de las orejas y la punta de la nariz. En casos
tienen una remisión completa o parcial, sin embar- extremos se produce gangrena en las zonas afec-
go, las recaídas son comunes. Los esplenectomiza- tadas.
dos requieren después prednisona, en dosis por lo Hay palidez e ictericia moderadas. La espleno-
general baja. megalia es rara, al igual que la hepatomegalia. En
Drogas inmunosupresoras. Estas drogas se utili- ocasiones hay hemoglobinuria, particularmente en
zan sólo en los pacientes que no respondan a los el invierno.
glucocorticoides o a la esplenectomía, o en aquéllos La hemólisis en pacientes con M. pneumoniae
con un alto riesgo quirúrgico. Las más comúnmente puede surgir de forma aguda cuando se están reco-
utilizadas son: ciclofosfamida : 1,5 a 2,0 mg/kg/día brando de la neumonía y a veces se mantiene entre
e imurán: 1,5 a 2,0 mg/kg/día. 1 y 3 semanas. En la mononucleosis infecciosa, la
Si el paciente tolera la droga, hay que esperar por anemia hemolítica, si aparece, lo hace en cualquier
una respuesta terapéutica hasta 6 meses; cuando res- momento dentro de las 3 primeras semanas de en-
ponde, se disminuye poco a poco en 2 o 3 meses. fermedad.
Siempre se deben monitorear con conteos sanguí- La hemólisis es debida a la acción hemolítica del
neos frecuentes. En esta enfermedad también se ha complemento. Los eritrocitos recubiertos por el com-
utilizado la plasmaféresis, altas dosis de gammaglo- ponente C3b de éste son captados por las células
bulina EV y el danazol. reticuloendoteliales del hígado y destruidos por este
órgano, aunque también son liberados intactos.
AHAI por anticuerpos
Exámenes complementarios
fríos Examen de la sangre periférica. Es posible que se
Este tipo de anemia hemolítica autoinmune suele produzca una autohemaglutinación cuando el am-
observarse en el curso de enfermedades linfoproli- biente del laboratorio es frío. En esta situación se

372
calienta a 37 °C todo el material que se va a utilizar Cuadro clínico
(jeringuillas, tubos, láminas, etc.) para poder reali- Esta anemia afecta por igual a ambos sexos en cual-
zar las pruebas. Los esferocitos abundan menos que quier edad. Algunos casos como ya dijimos, están
en la anemia hemolítica por anticuerpos calientes o relacionados con la sífilis.
están ausentes. Los síntomas se manifiestan inmediatamente o va-
Conteo de reticulocitos. Está elevado, siempre en rias horas después de la exposición al frío y consis-
relación directa con el grado de hemólisis. ten en fiebre, escalofríos, dolor lumboabdominal,
Bilirrubina indirecta o no conjugada. Se eleva cefalea, náuseas, vómitos, etc. Se asocian a hemoglo-
moderadamente. binemia y hemoglobinuria. La postración suele ser
Orina. En los casos graves se comprueba una he- profunda. Luego el paciente se encuentra muy dé-
moglobinuria. bil, pálido y con discreta ictericia. A veces se detec-
Prueba de Coombs. La prueba de Combs directa tan manifestaciones dérmicas: urticaria, acrocianosis
anticomplementaria (no gamma) es positiva. Siem- y ronchas.
Durante la crisis suele palparse el bazo, que des-
pre debe realizarse a 4 °C y en caso de ser muy alto
aparece luego de algunos días. La orina toma un as-
el título de aglutininas, se obtiene aglutinación con
pecto rojizo por la hemoglobinuria.
temperaturas hasta de 30 °C, como ya se explicó.
Entre los episodios el paciente está asintomático.
La prueba de Donath–Landsteiner es positiva.
Tratamiento
Hay que evitar la exposición al frío y si son necesa- Tratamiento
rias las transfusiones, se recomienda calentar pre- Cuando es debida a la sífilis, responde al tratamien-
viamente la sangre a 37 °C. to de esta afección.
Al igual que en toda anemia hemolítica crónica, Se utilizan los corticosteroides y si no hay mejo-
se indica la administración de ácido fólico. ría, se intenta la terapéutica inmunosupresora (imu-
La terapéutica inmunosupresora ha tenido resul- rán o ciclofosfamida).
tados en algunos casos. El clorambucil y la ciclo- No responden a la esplenectomía.
fosfamida son los agentes más empleados. Cuando la enfermedad acompaña a una infección
Los glocucorticoides son de limitado valor. La es- viral, generalmente es autolimitada. Siempre debe
plenectomía casi nunca es útil en este trastorno. evitarse la exposición del paciente al frío.

Hemoglobinuria paroxística AHAI inducidas


a frigore por drogas
En la actualidad es una enfermedad rara. Era mucho Del 15 al 20 % de las anemias hemolíticas inmunes
más frecuente cuando había una alta prevalencia de adquiridas están relacionadas con tratamientos me-
sífilis terciaria. Es por lo general secundaria a infec- dicamentosos.
ciones virales. Su manifestación principal consiste La patogenia obedece en lo fundamental a uno de
en la presencia de hemoglobinuria después de una los mecanismos que se describirán a continuación.
exposición al frío. Es causada por un anticuerpo En los dos primeros, el eritrocito es en realidad un
IgG que se demuestra por la prueba de Donath– espectador inocente, ya que los anticuerpos se diri-
Landsteiner. gen contra el fármaco, mientras que en el tercer tipo
La hemólisis se produce en dos fases: una fría y se producen anticuerpos con especificidad contra los
otra caliente. Durante la fase fría, por debajo de 20 °C, antígenos eritrocitarios.
el anticuerpo se fija al hematíe en las zonas periféri-
cas del organismo en presencia del complemento. 1. Las penicilinas y cefalosporinas son los me-
En la fase caliente se produce la hemólisis en las dicamentos prototipos de los mecanismos de
partes centrales del organismo, a 36 °C. absorción. Estos antibióticos se unen a la mem-
brana eritrocitaria y provocan la formación de

373
un anticuerpo IgG que actuará sobre el com- instrumento. El daño muscular puede causar mio-
plejo droga–eritrocito. globinuria, pero sin afectación renal.
2. Mecanismo de tipo complejo inmune (quinidi- En el caso de las marchas, esto se evita con el uso
na, quinina). Las drogas se asocian a una pro- de zapatos con suela blanda.
teína plasmática y dan origen a la formación Hemólisis macrovascular por fragmentación.
de un anticuerpo. El complejo droga–proteína– También se conoce con el nombre de anemia he-
anticuerpo se une al eritrocito, fija complemen- molítica macroangiopática y se observa hasta en el
to y provoca una hemólisis intravascular. 10 % de los pacientes con prótesis valvular, además,
3. Mecanismo de tipo autoinmune verdadero (me- en reparaciones con parches prostéticos de comuni-
tildopa). La droga induce la formación de un caciones cardíacas, y en el bypass aortofemoral.
anticuerpo IgG, que actúa directamente sobre Las cifras de hemoglobina y de haptoglobina dis-
los hematíes y no sobre ella.Más o menos el 10 % minuyen, hay un aumento discreto de la bilirrubina
de los pacientes que reciben metildopa tienen no conjugada o indirecta y presencia de glóbulos ro-
pruebas positivas de antiglobulina directa, aun- jos fragmentados en la sangre periférica. También
que menos del 1 % presenta hemólisis. se encuentra hemoglobinemia con hemoglobinuria.
La médula muestra una hiperplasia eritropoyética,
Anemia hemolítica por como en toda anemia hemolítica.
La pérdida de hierro por la orina lleva a un déficit
por trauma mecánico de éste, que debe ser corregido con la administra-
Los eritrocitos pueden romperse por un trauma me- ción de hierro oral. La limitación de la actividad fí-
cánico en la circulación y producirse una hemólisis sica suele disminuir el grado de hemólisis.
intravascular, con la presencia en la sangre periféri- En caso de fallar todas las medidas, se debe valo-
ca de glóbulos rojos fragmentados, conocidos como rar el remplazo de la válvula.
esquistocitos. Hemólisis microvascular por fragmentación.
También se conoce con el nombre de anemia hemo-
Variantes etiológicas de la anemia lítica microangiopática (AHM). Este término fue in-
hemolítica por trauma mecánico troducido en la literatura médica, en el año 1962,
por Brain, Dacie y Hourihane, para describir un tipo
Este tipo de anemia hemolítica se produce en tres
de anemia hemolítica en la cual se produce una des-
situaciones clínicas:
trucción mecánica de los hematíes, al chocar éstos
con una pared vascular alterada.
1. Cuando los glóbulos rojos atraviesan la micro-
El hallazgo típico lo constituye la presencia en la
circulación sobre prominencias óseas y luego
sangre periférica de hematíes fragmentados (esquis-
ocurre un impacto externo durante una activi-
tocitos), en forma de casco (helmet cells), con pro-
dad física.
yecciones espinosas en su superficie (burr cells),
2. Cuando los hematíes, mediante un gradiente
triangulares, etc., como se observa en la figura 49.1.
de presión, pasan a través de válvulas enfer-
mas o prótesis valvulares (macrovascular). Enfermedades productoras de anemia
3. Cuando depósitos de fibrina en la microcircula-
ción exponen a los glóbulos rojos a un impedi- hemolítica microangiopática
mento físico que los fragmenta (microvascular). Las principales enfermedades, que en su evolución
pueden presentar anemia hemolítica microangiopá-
Impacto externo. En una pequeña cantidad de tica, son:
individuos, se produce una hemoglobinemia con he-
moglobinuria cuando realizan una marcha prolon- • Púrpura trombocitopénica trombótica (PTT).
gada, sobre una superficie compacta y usando • Síndrome urémico – hemolítico.
zapatos de suela dura. También se ha observado en • Carcinomatosis.
deportistas que practican kárate y en músicos per- • Hipertensión arterial (HTA), tanto en la fase ace-
cusionistas que utilizan sus dedos para golpear el lerada como en la maligna.

374
ligna, drogas como mitomicina y otras utilizadas en
el tratamiento del cáncer, terapéutica con ciclospo-
rina, en el VIH, etcétera.
Generalmente en el niño aparece después de
diarreas sanguinolentas causadas por E. coli 0157:
H7 (otras cepas también la producen) y se piensa
que las lesiones se deben a la elaboracion de toxinas
(shiga toxinas), que se unen al endotelio de la
vasculatura renal.
El paciente presenta hipertensión, leucocitosis,
oligoanuria y edemas. Las manifestaciones neuro-
lógicas son infrecuentes.
En la orina, la hematuria es común así como los
cilindros hemáticos. La proteinuria es moderada.
La sangre periférica tiene esquistocitos o fragmen-
tocitos (burr cells, helmet cells, etc.) y trombocito-
penia.
El conteo de reticulocitos está elevado, así como
la bilirrubina no conjugada o indirecta.
La mayoría de los pacientes tienen hemoglobinu-
ria o anuria y deben ser tratados con plasmaféresis,
diálisis y transfusiones. Algunos añaden drogas
inmunosupresoras y antiagregantes plaquetarios.
La mortalidad en los niños es de un 5 a 20 %,
pero es más alta en adultos, sobre todo en aquéllos
que han sido tratados con mitomicina u otros agen-
Fig. 49.1. Lámina de sangre periférica en una anemia hemolí- tes citotóxicos.
tica por trauma mecánico. Obsérvense varios hematíes de for- En casi todas las afecciones mencionadas, los
mas irregulares (esquistocitos).
depósitos de fibrina en las arteriolas y capilares cons-
• Eclampsia. tituyen un hallazgo común.
• Coagulación intravascular diseminada (CID). En la carcinomatosis complicada con AHM, las
células tumorales invaden y dañan la íntima de los
Síndrome urémico-hemolítico pequeños vasos sanguíneos y el continuo choque con
Hay quienes consideran que la PTT y el síndrome el endotelio dañado produce la destrucción mecáni-
urémico–hemolítico son la misma cosa. Ambas en- ca del hematíe.
tidades se caracterizan por la presencia de una AHM En las enfermedades relacionadas antes, se nece-
y trombocitopenia y en las dos se produce depósito sita especial empeño en la búsqueda de eritrocitos
de fibrina en el subendotelio capilar y formación de fragmentados y de células con proyecciones espi-
microtrombos. En la PTT estas alteraciones están nosas en su superficie en la sangre periférica.
más generalizadas, se constituyen trombos en va- El grado de hemólisis inducido por estas dolen-
rios órganos, mientras que en el síndrome urémico– cias es usualmente moderado, aunque el número de
hemolítico es común que el daño esté limitado al fragmentocitos en la periferia puede ser grande. En
riñón, aunque también se afectan otros órganos. algunos pacientes, la trombocitopenia es severa. En
El síndrome urémico–hemolítico se ve con más todos los casos, la terapéutica debe ser dirigida a la
frecuencia en los niños que en los adultos. Se ha enfermedad de base.
asociado a infecciones (virus y bacterias), embara- La PTT, la HTA y el CID se describen en los ca-
zo, uso de contraceptivos orales, hipertensión ma- pítulos correspondientes.

375
50
ANEMIAS HEMOLÍTICAS MIXTAS

Esto fue el inicio de una serie de trabajos que han


ANEMIAS conducido al conocimiento de otras deficiencias en-
HEMOLÍTICAS zimáticas de los eritrocitos y de diferentes células
del organismo.
ENZIMOPÉNICAS El hematíe adulto es, desde el punto de vista me-
tabólico, una célula activa pero con capacidad limi-
tada, ya que al carecer de núcleo y por lo tanto de
En la primera mitad del siglo XX, el médico se en-
ADN, no puede sintetizar proteínas, entre las cuales
contraba en su práctica diaria con una serie de pa-
tienen un interés biológico básico las enzimas. Su
cientes que presentaban un síndrome hemolítico y a
energía la obtiene del metabolismo de la glucosa por
pesar de todos los estudios realizados no podía lle-
dos vías diferentes, la glicolítica anaeróbica de
gar a un diagnóstico definitivo. La ausencia de
Embden –Meyerhof y la aeróbica de las pentosas.
esferocitos en la sangre periférica diferenciaba cla-
Por la vía anaeróbica, que metaboliza cerca del
ramente este síndrome de la esferocitosis heredita-
90 % de la glucosa del hematíe, se genera funda-
ria y dio origen al término de anemia hemolítica no
mentalmente ATP, indispensable entre otras cosas
esferocítica, bajo el cual se agruparon estos enfer-
para mantener el alto contenido de potasio y bajo de
mos.
sodio del glóbulo rojo, en contra de los gradientes
Uno de los primeros intentos para clasificar estas
de concentración del plasma que lo rodea. Por otra
anemias hemolíticas no esferocíticas, fue realizado
parte, a pesar de que la vía de las pentosas sólo
por Selwyn y Dacie, quienes se basaron en la prue-
metaboliza el 10 % de la glucosa eritrocitaria, es tam-
ba de la autohemólisis.
bién esencial para la integridad del hematíe, ya que
En el año 1953 se comenzó a aclarar la patogenia
representa la única fuente de generación de adenina
de este nuevo grupo de anemias hemolíticas duran-
dinucleótido fosfato reducido (NADPH) que convier-
te la investigación de un cuadro de hemólisis intra-
te el glutatión oxidado (GSSG) en glutatión reducido
vascular aguda que se presentó a continuación de la
(GSH). Este último es imprescindible para mante-
administración de primaquina, en un grupo de re-
ner la integridad funcional del hematíe, lo que pro-
clutas del ejército norteamericano. El estudio cul-
tege a la hemoglobina de su desnaturalización.
minó con el descubrimiento realizado por Carson y
Además, se requiere de NADPH en la reducción a
colaboradores en 1956, de que el trastorno residía
hemoglobina de la pequeña cantidad de metahemo-
en una deficiencia de glucosa–6–fosfato deshidro-
globina formada.
genasa (G6FD) de los eritrocitos.
En las dos vías metabólicas actúan una serie de
enzimas cuya deficiencia cuantitativa o cualitativa
PRODUCTOS QUE SON PRECIPITANTES
condiciona el heterogéneo grupo de las llamadas
DE HEMÓLISIS
anemias hemolíticas enzimopénicas. Todas tienen en
Acetanilida Sulfapiridina común la presencia de hematíes que difieren muy
Azul de metileno Sulfametoxasol poco, desde el punto de vista morfológico, de los
Acido nalidíxico Nitrofurantoína normales, la ausencia de esferocitos y de hemoglo-
Sulfanilamida Primaquina binas patológicas y desde el punto de vista terapéu-
Sulfacetamida
tico, el escaso o ningun valor de la esplenectomía.

376
La mayoría tiene un patrón de herencia autosó- es activo en la mujer, por lo tanto, en estos casos se
mico recesivo, por lo que los individuos heterocigotos comporta como inactivo el cromosoma X normal.
no están clínicamente afectados, ya que conservan Se ha estimado que al menos cuatrocientos millo-
cerca del 50 % de la actividad enzimática, lo que es nes de personas son portadoras de la enfermedad,
suficiente para sus requerimientos metabólicos. Por con alrededor de cuatrocientas variantes descritas.
otra parte, la deficiencia de G6FD (la más frecuen- Aunque el gen se expresa en todos los tejidos, el
te) y la de fosfoglicerato kinasa se encuentran liga- efecto es más severo en los eritrocitos, posiblemen-
das al cromosoma X y el aumento de la adenosina te debido a su larga vida como célula no nucleada y
deaminasa (ADA) se trasmite de forma autosómica quizás porque las proteasas de los hematíes degra-
dominante. dan la enzima mutante más rápido que las proteasas
También se han reportado enzimopenias adquiri- de otros tejidos. Por lo tanto, la anemia es la mani-
das que desaparecen al corregirse la causa que las festación clínica más frecuente de la deficiencia de
originan. G6FD, aunque el déficit enzimático afecta también
En la actualidad se conocen 14 deficiencias enzi- a otras partes de la economía (leucocitos, plaquetas,
máticas eritrocitarias, pero sólo se describirán las cristalino, etc.).
dos más frecuentes: la deficiencia de G6FD y la de Algunas variantes de la G6FD no están asociadas
piruvatoquinasa. con una actividad enzimática reducida en los eritro-
citos y no tienen consecuencias clínicas.
Deficiencia de glucosa-6- Las manifestaciones clínicas difieren según la
variante genética de la enzima, de la cual hay dos
fosfato deshidrogenasa tipos electroforéticos normales que se designan con
las letras A+ y B+. El signo más (+) indica actividad
La G6FD es la primera enzima de la vía de las enzimática normal ( 65 a 150 %). Por lo tanto, el
pentosas que cataboliza el paso de la glucosa 6 a hombre sano es A o B, mientras que las mujeres
fosfato – 6 – fosfoglucónico. pueden ser homocigotos AA o BB, o heterocigotos
Como ya se explicó, esta vía es fundamental para AB. Los negros norteamericanos tienen ambos ti-
mantener la integridad funcional del hematíe. Su pos de enzimas, mientras que en los individuos de la
ausencia total o casi total es capaz de producir una raza caucásica (cuenca del mediterráneo) sólo se en-
hemólisis permanente. En otros casos, se requiere la cuentra la de tipo B. El signo menos (-) significa
presencia de un agente desencadenante para que di- actividad enzimática menor de un 25 %.
cha hemólisis se presente. Entre las drogas que la
causan en personas con esta deficiencia se encuen- Cuadro clínico
tran algunos antipalúdicos, sulfamidas, antipiréticos, En Cuba se han descrito 3 formas clínicas de la de-
analgésicos, etc. ficiencia de G6FD:
Aunque la anemia hemolítica suele estar induci-
da por la administracion de drogas, la hemólisis pre- 1. Episodios hemolíticos inducidos por primaquina
cipitada por procesos infecciosos es también una u otros agentes oxidantes.
causa común de crisis hemolítica en estos pacientes. La deficiencia de G6FD fue descubierta en 1956
El gen que controla la herencia de la G6FD está por Carson y colaboradores en negros norteameri-
ligado al cromosoma X. Los varones afectados lo canos sometidos a profilaxis antipalúdica con pri-
están en el único cromosoma X que poseen y por lo maquina. El cuadro clínico que ellos observaron se
tanto, se comportan como homocigotos. Las muje- parece mucho al que produce la ingestión de otras
res pueden ser homocigotos o heterocigotos, según drogas, por lo cual se le considera como prototipo.
tengan afectados los dos o uno solo de los cromoso- La crisis hemolítica se desencadena por lo gene-
mas X, respectivamente. Aunque la mayoría de las ral al segundo o tercer día, aunque a veces aparece
heterocigotos son asintomáticas, en ocasiones el gen antes, persiste varios días y dado su carácter intra-
tiene una expresión completa, o sea, que se compor- vascular se acompaña de dolor lumboabdominal, fie-
tan como homocigotos. Esto se ha explicado por la bre, oliguria, ictericia y hemoglobinuria. Alrededor
tesis de Lyon, según la cual un solo cromosoma X de los 14 o 15 días cesa la hemólisis, a la que sigue

377
una fase de resistencia de unos 2 meses, durante la encontró que el 9 % de ellos, hombres de la raza
cual un nuevo contacto con la droga no desencade- negra, tuvieron pruebas positivas.
nará una nueva crisis. Esto se debe a que el conteni- La inducción de cuerpos de Heinz es también una
do enzimático del hematíe está en relación con su prueba simple para detectar pacientes con deficien-
edad y como consecuencia de la crisis hemolítica, la cia de G6FD.
médula enviará a la circulación una gran cantidad El diagnóstico definitivo estará en manos de un
de reticulocitos con un alto contenido enzimático. laboratorio especializado, capaz de determinar no
A medida que la célula envejece va disminuyendo sólo la cantidad de enzima presente, sino también
su nivel de enzimas, por lo cual es en los hematíes sus características fisicoquímicas.
más viejos donde esta deficiencia alcanza su máxi-
Tratamiento
ma expresión.
Así se explica no sólo la resistencia mencionada, Cuando se trate de la variedad inducida por drogas,
sino también lo difícil que resulta hacer el diagnós- hay que suprimir el contacto con ellas.
tico cuando el paciente está en la crisis hemolítica, En la ictericia neonatal debe realizarse exsangui-
notransfusión cuando la bilirrubina no conjugada
ya que en ese momento tiene un nivel enzimático
alcance valores de 220 µm/L (20 mg %), para evitar
alto.
la terrible ictericia nuclear ( kerníctero).
Se ha ensayado la esplenectomía en la variedad
2. Anemia hemolítica congénita.
con hemolísis crónica. Los resultados han sido desalen-
Algunos pacientes presentan una ictericia severa al
tadores.
nacimiento. En los pacientes deficientes de esta enzima, las
En Cuba se han descrito subtipos de la G6FD aso- infecciones deben ser tratadas rápidamente.
ciados a anemia hemolítica congénita (variante
Varadero, Girón y Ciudad Habana).
Deficiencia
3. Ictericia del recién nacido. de piruvatoquinasa
Además de las formas clínicas ya mencionadas, en
La piruvatoquinasa es una enzima importante de la
algunos casos se produce una ictericia neonatal ca-
vía glicolítica y después de la deficiencia de G6FD,
paz de complicarse con un kerníctero. La ictericia
la suya es la causa más frecuente de anemia hemolí-
se inicia generalmente en el primero o segundo día
tica enzimopénica. Esta enzima cataliza la conver-
de nacido y alcanza su nivel máximo entre el terce-
sión de fosfoenolpirúvico a pirúvico en la vía de
ro y el quinto. Puede ser necesaria la exsanguino- Embden–Meyerhof.
transfusión. Está presente al menos en cuatro formas o isoen-
zimas: M1 (músculo), M2 (leucocitos y feto), L (hí-
Diagnóstico gado) y R (glóbulos rojos). Suele comenzar en la
Una vez verificado el diagnóstico de anemia hemo- primera o segunda infancia, aunque se han reporta-
lítica, la causa de ésta se comprueba dosificando la do casos con inicio en la edad adulta.
enzima G6FD. También es útil efectuar exámenes Es común la ictericia neonatal intensa, así como
de despistaje, que sirven para detectar a los indivi- la litiasis biliar. A veces se encuentra hipertelorismo
duos con deficiencias enzimáticas. En nuestro me- ocular. Por lo general hay esplenomegalia y en oca-
dio se utiliza el test de Brewer y el test con azul de siones una hepatomegalia moderada. La expresión
metileno. En un estudio realizado en donantes del clínica varía desde una intensa anemia hasta formas
banco provincial de sangre de Santiago de Cuba, se latentes.

378
51
POLICITEMIA

El término policitemia significa un aumento, por en-


cima de los valores normales, del número de glóbu-
POLICITEMIA
los rojos en la sangre periférica. Debido a esto ABSOLUTA PRIMARIA
algunos prefieren el término de eritrocitosis para la
policitemia absoluta secundaria a un estímulo co- También conocida con el nombre de policitemia vera
nocido (generalmente hipoxemia) y eritremia para (PV) o enfermedad de Vaquez–Osler, es un trastorno
la policitemia absoluta de causa desconocida (poli- clonal, que afecta la célula progenitora multipoten-
citemia vera). cial, en la cual hay una sobreproducción de eritroci-
Por otra parte, además de la policitemia absoluta, tos, granulocitos y plaquetas, aunque mucho más
en la cual hay un crecimento de la masa total eritro- marcada en la serie roja, en ausencia de un estímulo
citaria, se encuentra la policitemia relativa (también fisiológico reconocible.
llamada espúrea), cuando ocurre por una pérdida de Es el más común de los síndromes mieloprolife-
rativos, más frecuente en hombres que en mujeres y
fluidos o plasma.
usualmente aparece con preferencia entre los 40
Clasificación y 60 años.
El nivel de eritropoyetina sérica está por debajo
A. Policitemias absolutas de los valores normales y esto puede ayudar a dis-
1. Primaria o policitemia vera tinguir la PV de la policitemia secundaria.
2. Secundaria En circunstancias normales, la eritropoyesis es
a. Hipóxica (fisiológica o compensadora) regulada por la hormona eritropoyetina, que en el
• Grandes alturas adulto es producida sobre todo en los riñones y una
• Enfermedades cardiopulmonares pequeña cantidad en el hígado; ella favorece la pro-
• Obesidad (síndrome de Pickwick) liferación de los progenitores eritroides y facilita su
• Intoxicación por monóxido de carbono diferenciación. Su nivel alto en el plasma excluye la
b. No hipóxica policitemia vera como causa de eritrocitosis.
• Tumores (hepatoma, carcinoma renal, En condiciones normales, la masa globular eri-
hemangiomas cerebelosos, feocromocito- trocitaria se mantiene alrededor de 30 ml/kg de peso
corporal. En la policitemia vera, al estar elevada esta
mas, etc.)
cifra, se producirá un aumento de la viscosidad san-
• Quistes renales guínea, con enlentecimiento del flujo circulatorio.
• Hidronefrosis Esto último es en parte responsable de la tendencia a
B. Policitemias relativas la trombosis que tienen estos pacientes. Su causa es
1. Hemoconcentración (diarreas, quemaduras, su- desconocida y aunque no se han encontrado anor-
doración profusa, tratamiento con diuréticos) malidades cromosómicas consistentes, sí se ha de-
_
2. Síndrome de Gaisböck. tectado trisomía 8 o 9 y 20 q .

379
Cuadro clínico evoluciona hacia una mielofibrosis con hematopo-
yesis extramedular.
El cuadro clínico cambia desde la ausencia de sínto-
mas hasta manifestaciones muy variadas. La mayo- Exámenes complementarios
ría de las veces, el primer signo es un aumento de la
Hemograma. El número de glóbulos rojos casi siem-
hemoglobina y el hematócrito. El color de la piel y
el aspecto de la facies son muy típicos en el período
.
pre oscila entre 70 y 80 109/L (7 u 8 000 000/
mm3), aunque también se encuentran cifras mayo-
de estado de la enfermedad. Los párpados y las con-
res. La hemoglobina está muy elevada, entre 160 y
juntivas oculares están hiperémicos, y en general,
240 g/L y el hematócrito a veces llega hasta 70 u 80 %.
todas las mucosas tienen un color violáceo.
La esplenomegalia es un signo clínico importan-
La cifra de leucocitos oscila entre 10,0 y 25,0 .
109/L (10 000 y 25 000/mm3), a veces ricos en
te, aunque no existe al principio de la enfermedad
fosfatasa alcalina. Los basófilos casi siempre están
en un 30 % de los pacientes.
elevados.
La eritrocitosis incontrolada lleva a síntomas neu-
Plaquetas. Su número suele rebasar la cifra de
rológicos tales como vértigo, cefalea y trastornos
visuales. Hay un aumento de la presión sistólica, pero
.
400 109/ L (400 000/mm3). Se observan formas
gigantes y fragmentos de megacariocitos en la san-
la diastólica no se eleva más que en el resto de la
gre periférica.
población sana.
Hierro sérico. A veces está disminuido.
La hipervolemia e hiperviscosidad de la sangre
Vitamina B12. Su cifra en el suero es mayor de
provocan una estasis venosa severa con trombosis y
900 pg/ml.
producción de émbolos. Estos cuadros son muy gra-
Eritropoyetina. Sus valores generalmente son
ves cuando se originan en el cerebro, las coronarias,
bajos.
el hígado y el intestino, y podrían causar la muerte
Ácido úrico. En la mayoría de los pacientes está
al paciente.
elevado.
Los trastornos vasculares periféricos, que con fre-
Medulograma. Puede ser normal. En el período
cuencia aparecen en el curso de la enfermedad, son
de estado hay hiperplasia de los tres sistemas, sobre
del tipo eritromelalgia (eritema, calor, dolor y oca-
todo del eritropoyético. El azul de Prusia llega a
sionalmente infartos digitales) o de fenómeno de
negativizarse, indicativo de que el hierro de los de-
Raynaud, lesiones gangrenosas, etc.
pósitos está agotado.
La elevación en la producción de histamina es una
Masa globular. Es mayor de 36 ml/kg de peso en
posible explicación para el aumento de ulcus péptico
el hombre y de 32 ml/kg de peso en la mujer. Estos
en estos pacientes y el prurito asociado a esta enfer-
resultados de ml/kg se han puesto en duda, sobre
medad.
todo en pacientes con sobrepeso y en los obesos.
También se encuentran sangramiento fácil, epis-
Basado en estos conceptos, Pearson propone otras
taxis y hemorragia gastrointestinal.
cifras que se exponen en el cuadro 51.1.
El sistema respiratorio está predispuesto a la
laringotraqueobronquitis, con tos y expectoración.
CUADRO 51.1
En el fondo de ojo hay notable ingurgitación de
RECOMENDACIONES PARA DETERMINAR
los vasos retinianos. LA MCR Y LA VP EN EL ADULTO
A causa del aumento de la eritropoyesis se pro-
duce una mayor utilización del hierro, por lo cual Hombres: MCR* (ml) = (1 486 S) – 825.
los depósitos pueden quedar exhaustos. Este déficit VP (ml) = 1 578 S .
.
Mujeres: MCR (ml) = (1,06 edad) + (822 . S)
de hierro se agrava por el uso terapéutico de las
flebotomías y por las epistaxis y sangramientos di-
VP (ml) = 1 395 S .
gestivos.
En un 15 a 20 % de los pacientes con policitemia *MCR=Masa celular eritrocitaria.
vera se desarrolla un cuadro terminal de leucemia VP= Volumen plasmático.
aguda no – linfocítica, que se ha relacionado con el S = Superficie corporal ( m² ).
uso de P32, del busulfán y del leukerán. Otro grupo Edad = en años.

380
El Grupo Nacional para el estudio de la PV en do otros agentes para la mielosupresión, fundamen-
EE.UU., ha postulado los siguientes criterios para talmente la hidroxiurea, sobre todo cuando hay un
hacer el diagnóstico de esta enfermedad: .
elevado conteo de plaquetas (> 800,0 109/L). Se
dan 500 a 1 500 mg/día, aunque esta dosis puede
A. Volumen de la masa globular eritrocitaria. aumentarse o disminuirse de acuerdo con la respuesta
Hombres: ≥ 36 ml/kg del enfermo.
Mujeres : ≥ 32 ml/kg También se ha utilizado el interferón alfa recom-
B. Saturación normal de oxígeno (≥ 92 %). binante, que tiene actividad mielosupresora y sin el
C. Esplenomegalia. riesgo posterior de leucemia.
La trombocitosis se ha tratado con anagrelide y
.
1. Trombocitosis: Conteo de plaquetas > 400 109/L se han obtenido buenos resultados, aunque está con-
.
2. Leucocitosis: > 12,0 109/L (ausencia de fie- traindicado en pacientes viejos con insuficiencia co-
bre o infección) ronaria.
3. Fosfatasa alcalina de los leucocitos: > 100 El alopurinol no debe utilizarse de rutina, pero sí
4. Vitamina B12 en el suero: > 900 pg/ml cuando se aplica quimioterapia para reducir la es-
plenomegalia o la leucocitosis.
La PV se diagnostica si están presentes los pun- El prurito que no responde a los antihistamínicos
tos A, B y C. En caso de no haber esplenomegalia, puede ser regulado con hidroxiurea o psoralén aso-
la sustituyen dos de los puntos 1; 2; 3 y 4.
ciado a luz ultravioleta.
Es posible que algunos pacientes en los estadios
A la larga el paciente se vuelve anémico, por lo
iniciales quizás no cumplan los requisitos señala-
que se trata con ácido fólico y hierro.
dos, por lo cual deben ser observados evolutiva-
mente.

Tratamiento POLICITEMIA
La PV es por lo común un trastorno indolente que
suele durar décadas.
ABSOLUTA
Flebotomía. El paso inicial es la flebotomía para SECUNDARIA
reducir el hematócrito por debajo de 45 %, y así
evitar las complicaciones trombóticas asociadas con
La ocasiona un aumento en la producción de eri-
una masa eritroide elevada.
tropoyetina. En los pacientes con este tipo de poli-
La flebotomía se realiza 1 o 2 veces a la semana,
citemia, está disminuida la saturación arterial de
aunque no es un proceder por completo inocuo y a
menudo incrementa el grado de trombocitosis, aun- oxígeno.
que debe recordarse que no hay una correlación en- En la mayoría de los casos, dicho aumento es una
tre trombocitosis y trombosis y sin embargo, sí la consecuencia de la hipoxia celular, por lo tanto, el
hay entre eritrocitosis y trombosis, por lo que el ob- incremento en la producción de glóbulos rojos será
jetivo principal del tratamiento debe ser disminuir un mecanismo útil en el mantenimiento de un apor-
las cifras de hemoglobina y de hematócrito. te adecuado de oxígeno a los tejidos.
En la mayoría de los pacientes con PV, una vez
que se produce un déficit de hierro, es usual la fle- Eritrocitosis hipóxica
botomía espaciada a intervalos de 3 meses. Grandes alturas. En las grandes alturas, además de
Los salicilatos sólo se emplean para tratar la haber una menor concentración del oxígeno inspi-
eritromelalgia y no deben utilizarse los anticoagu- rado, la presión atmosférica es muy baja y se hace
lantes orales. más difícil el paso de oxígeno a los tejidos. La hi-
Los agentes alquilantes y el P32 son leukemóge- poxia celular provoca una mayor liberación de eri-
nos y algunos los contraindican en la PV, ya que tropoyetina, que a su vez incrementa la producción
aumentan el riesgo de una leucosis aguda, en particu- de glóbulos rojos y favorece la capacidad de trans-
lar después de 5 a 7 años de tratamiento. Se han usa- porte del oxígeno por la sangre. El aumento de los

381
glóbulos rojos eleva el volumen sanguíneo con dila- centración que se corrige con la administración ade-
tación y apertura de nuevos vasos, lo que mejora la cuada de agua y electrólitos. En estos casos la masa
perfusión de los tejidos. Los niveles de eritropoyeti- total eritrocitaria no está aumentada.
na, tanto en el plasma como en la orina, se elevan. Dentro de este grupo se ha incluido la llamada
El retorno a nivel del mar revierte los síntomas. eritrocitosis de alarma, que se observa en hombres
Enfermedad pulmonar. En la enfermedad pulmo- activos, en sobrepeso, de edad mediana, hiperten-
nar crónica, la hipoxia, como ya se señaló, aumenta sos, grandes fumadores, y con estado de ansiedad.
la liberación de eritropoyetina, con la consecuente No tienen esplenomegalia ni leucocitosis. Este cua-
eritrocitosis. dro fue descrito por Gaisböck a principios del siglo
Enfermedad cardiovascular. Ocurre por la mez-
pasado y ha sido denominado síndrome de Gaisböck.
cla de la sangre venosa con la sangre arterial, como
En tales personas la masa total de glóbulos rojos es
en la fístula arteriovenosa, la permeabilidad de los
normal y el volumen plasmático está disminuido.
tabiques, tetralogía de Fallot, etc.
Además, dentro del grupo de policitemias relati-
Obesidad masiva. Se conoce con el nombre de
síndrome de Pickwick. Los pacientes son obesos y vas, se ha añadido la policitemia de los fumadores,
presentan somnolencia, cianosis e hipercapnia. Pue- donde una alta concentración de carboxihemoglobi-
den llegar a la insuficiencia cardíaca derecha. Se debe na puede causar un pequeño incremento en la masa
a condiciones ventilatorias anormales, que causan de glóbulos rojos, lo cual está asociado a menudo a
una insaturación arterial. También se ve en pacien- una volemia plasmática reducida. Debe desconti-
tes no obesos, en el llamado síndrome de apnea del nuarse el hábito de fumar.
sueño, en el cual quizás desempeñe un papel impor-
tante la disminución de la sensibilidad del centro res-
piratorio al CO2. METAPLASIA
Trastornos de la hemoglobina. Se ha descrito una
eritrocitosis en individuos con ciertas hemoglobinas MIELOIDE
anormales, en las que la sustitución de aminoácidos
en la molécula de globina, interfiere en la liberación AGNOGÉNICA
de O2 a los tejidos.
Concepto
Eritrocitosis no hipóxica
La metaplasia mieloide agnogénica (MMA), tam-
A este grupo pertenece una serie de tumores, tales
como el hipernefrona, hemangioma cerebeloso, bién llamada mielofribosis idiopática, es un trastor-
feocromocitoma, hepatoma, etc., y también enferme- no clonal de la célula progenitora hematopoyética
dades no malignas como hidronefrosis, quistes re- que afecta los progenitores eritroides, mieloides,
nales, mioma uterino, etc. En estos casos hay una megacariocíticos y ocasionalmente linfoides, carac-
producción de eritropoyetina por el tumor, o de una terizado por fibrosis de la médula ósea y hematopo-
sustancia parecida a ella. La eritrocitosis desapare- yesis extramedular, en particular en el bazo, cambios
ce después de su extirpación. leucoeritroblásticos en la sangre y una evolución len-
ta. Aunque no corresponde exactamente a una poli-
citemia, tiene de común con ella la proliferación
POLICITEMIA anormal de la célula madre multipotencial.
Afecta con mayor frecuencia a personas en la edad
RELATIVA media de la vida y en la senil y se presenta por igual
en ambos sexos.
La policitemia relativa es una consecuencia de la
disminución del volumen plasmático, cuando ocurre Etiopatogenia
una gran pérdida de líquidos por diarreas, vómitos, Como ya se dijo, es producida por un trastorno clonal
quemaduras extensas, acidosis diabética, tratamien- de la célula progenitora hematopoyética. Se cree que
to con diuréticos, etc. Se produce una hemocon- la proliferación fibroblástica es debida a la libera-

382
ción de factores de crecimiento (plaquetarios, tumo- Los leucocitos por lo general están aumentados,
rales). Algunos plantean sobreproducción de colá- hasta cifras que hacen confundir a esta afección con
geno tipo III. una leucemia mieloide crónica. Se ha reportado neu-
Pueden haber anormalidades en al cariotipo (de- tropenia en el 25 % de los casos. Los neutrófilos son
leción de 13q y 20q y trisomía parcial de 1q). ricos en fosfatasa alcalina.
Plaquetas: La cifra de plaquetas varía entre ele-
Cuadro clínico vada, normal o disminuida, aunque en los estadios
Los síntomas iniciales más comunes de la MMA son: finales de la enfermedad es frecuente la trombocito-
debilidad, fatiga, anorexia, pérdida de peso y mo- penia. A veces se observan plaquetas gigantes.
lestias dolorosas en el hipocondrio izquierdo causa- Tiempo de sangramiento: Puede estar alargado por
das por la gran esplenomegalia que padecen estos la trombocitopenia o por un trastorno funcional de
enfermos.El bazo es a veces doloroso por los infar- las plaquetas.
tos esplénicos y se detectan roces en dicha región Reticulocitos: En ocasiones están discretamente
por la presencia de periesplenitis. Generalmente hay aumentados, sobre todo en casos raros que se aso-
hepatomegalia moderada. cian a una anemia hemolítica autoinmune.
Ácido úrico: Suele estar elevado en la sangre, lo
La presión en la vena porta aumenta a causa de
que a veces se acompaña de gota o nefropatías por
varios factores, como son el incremento del flujo
uratos.
sanguíneo esplénico, la trombosis de la vena porta y
Examen radiológico óseo: Se descubren cambios
la obstrucción intrahepática por el tejido hematopo-
osteoscleróticos en la mitad de los casos, sobre todo
yético extramedular. Como consecuencia de la hi-
en la parte proximal de los huesos largos y en los
pertensión portal aparecen ascitis, várices esofágicas
cuerpos vertebrales.
y sangramiento digestivo. Además, masas de tejido
Biopsia de la médula ósea: La aspiración de la
hematopoyético producen compresión de la médula
médula ósea es muy difícil y casi siempre ineficaz,
espinal, obstrucción intestinal o uretral, tampona- por lo que se recurre a su biopsia, donde se halla
miento cardíaco, etc. En ocasiones el paciente se fibrosis de los espacios medulares, aumento del nú-
queja de eritromelalgia (sensación quemante en mero de megacariocitos y mielopoyesis con desvia-
manos y pies). ción izquierda.
La anemia progresiva es parte de la enfermedad y Bazo: El bazo muestra características de hemato-
es causada por una combinación de hemodilución poyesis extramedular en la pulpa roja.
por aumento del volumen plasmático, destrucción LDH y fosfatasa alcalina. Por lo general están ele-
de eritrocitos en el bazo, hipoplasia eritroide en la vadas.
médula fibrótica y eritropoyesis inefectiva.
El conteo de plaquetas se comporta de una manera Diagnóstico
errática, y es tan común la trombocitosis, que oca- El diagnóstico de MMA se sospecha siempre ante
siona trombosis, como la trombocitopenia con ma- un paciente con esplenomegalia masiva. Su confir-
nifestaciones hemorrágicas tales como petequias, mación sólo se establece por medio de la biopsia de
equimosis, etc. médula ósea.
La leucemia mieloide crónica constituye la en-
Exámenes complementarios fermedad que más se confunde con la metaplasia
Hemograma: Hay anemia en la mayoría de los ca- mieloide, de tal manera que en ocasiones la diferen-
sos. Son frecuentes las alteraciones en la morfolo- cia resulta difícil. Un valor bajo de fosfatasa alcalina
gía eritrocitaria, como los hematíes en lágrima, de los leucocitos, la presencia de cromosoma Ph y
células en diana, poiquilocitos, hematíes fragmen- pocas alteraciones en la morfología del glóbulo rojo,
tados, etc. inclinan hacia el diagnóstico de leucemia mieloide
No es rara una reacción leucoeritroblástica en la crónica.
sangre periférica (células rojas nucleadas, plaquetas También a veces hay que realizar el diagnóstico
gigantes y células mieloides inmaduras). Pocas ve- diferencial con una reacción leucoeritroblástica cau-
ces se observan blastos. sada por una médula metastásica.

383
Tratamiento En algunos enfermos, pequeñas dosis de radiote-
rapia sobre el bazo son capaces de reducir el tamaño
La MMA es una enfermedad cuyo tratamiento de- de este órgano.
pende en lo fundamental del manejo de las situacio- El interferón alfa es útil en pacientes con trombo-
nes clínicas que se presenten. citosis y también para reducir el tamaño del bazo. Si
Para éste se han utilizado los andrógenos y última- hay hiperuricemia se administra alopurinol (100 mg
mente la eritropoyetina, 10 000 unidades por vía 3 veces al día).
subcutánea 3 veces a la semana por 1 o 2 meses. Se ha intentado el tratamiento con glucocorticoi-
des pero en realidad sin grandes resultados. Esta
Debe trasfundirse al paciente siempre que sea nece-
enfermedad entra en ocasiones en una fase agresiva
sario.
(aumento del tamaño de los órganos, anemia pro-
Si la esplenomegalia produce muchas molestias, gresiva y trombocitopenia), igual que ocurre en la
es recomendable el busulfán en dosis de 2 a 4 mg/ crisis blástica de la leucosis mieloide crónica.
día por varias semanas o meses. También se emplea Puede realizarse la esplenectomía, pero es muy
la hidroxiurea en dosis de 20 a 30 mg/kg/día. peligrosa en los pacientes viejos por la posibilidad
Hay que tener en cuenta que la hematopoyesis en de que se produzca trombocitosis con hemorragia,
estos pacientes por lo común es muy sensible a di- trombosis o ambas. Se valorará en caso de anemia
chas drogas y cuando se utilizan debe haber una es- hemolítica asociada a trombocitopenia.
trecha vigilancia hematológica. El trasplante de médula ósea es la única opción
terapeútica potencialmente curativa.

384
52
HEMOSTASIA

La sangre cumple dos funciones importantes que plaquetario, reforzamiento de éste con la aparición
parecen irreconciliables: mantenerse líquida, de del tapón fibrinoplaquetario y al final su elimina-
manera que pueda llegar a la intimidad de los teji- ción a través del sistema fibrinolítico.
dos y asegurar su nutrición, y al mismo tiempo, tener Desde el punto de vista didáctico, hay quienes
la facultad de solidificarse, es decir, de transformarse dividen la hemostasia en primaria y secundaria.
rápidamente de un sol en un gel, en caso de lesiones La hemostasia primaria es el nombre que se da al
vasculares, para evitar una pérdida peligrosa del proceso de formación del tapón plaquetario en el si-
preciado líquido. tio del daño vascular. Ocurre en segundos y tiene
El eficaz funcionamiento del mecanismo de la máxima importancia para detener la pérdida de san-
coagulación de la sangre tiende a suprimir la hemo- gre en los capilares pequeños, arteriolas y vénulas.
rragia a partir de los tejidos lesionados, al formar La hemostasia secundaria consiste en reacciones del
una red estable de fibrina o coágulo, que atrapa los sistema de coagulación plasmático que lleva a la for-
elementos figurados de la sangre, cierra la herida y mación de fibrina y esto ocurre en minutos. Estas
proporciona un medio para la reparación de aqué- mallas de fibrina fortalecen el tapón plaquetario for-
llos. La formación de este coágulo de fibrina es el mado en la hemostasia primaria.
punto final visible de una serie de reacciones en
cadena en la cual intervienen diversos factores. Des- Factor vascular
pués el sistema fibrinolítico eliminará el coágulo y Cuando se rompe un pequeño vaso sanguíneo, se
se restablecerá el flujo sanguíneo en el vaso dañado. produce primero una vasoconstricción refleja tran-
Normalmente se están produciendo en el orga- sitoria, limitada a la zona de la herida. Esta primera
nismo pequeños traumatismos capaces de alterar la vasoconstricción facilita el enlentecimiento del flu-
integridad de los vasos sanguíneos. El cuerpo hu- jo de la sangre en la zona de la herida y el contacto
mano ha perfeccionado un complejo mecanismo entre la pared del vaso dañado, las plaquetas y los
hemostático que corta la salida de la sangre del le- factores plasmáticos.
cho vascular: para ello, la pared vascular ha de te- La superficie endotelial normal no es trombogé-
ner la resistencia y contractilidad adecuadas, y las nica, de manera que las plaquetas no se adhieren a
plaquetas y los numerosos factores que participan las células endoteliales y los factores de la coagula-
en el proceso de la coagulación deben ser normales, ción no son activados. Esto en modo alguno niega ni
no sólo en número y concentración, sino también que el endotelio vascular sea altamente activo ni que
en cuanto a su actividad, para que pueda llegar a posea sustancias coagulantes que promueven la
formarse un coágulo útil de manera rápida. Este fe- hemostasia y la reparación vascular (tromboplastina,
nómeno no debe exceder de un límite, pues de lo factor VIII, factor de von Willebrand, etc.) y otras
contrario se produciría una trombosis intravascular que le dan el carácter de impermeabilidad a la pared
extensa y para evitarla, el organismo cuenta con me- vascular (prostaglandina I2 o prostaciclina, antitrom-
canismos muy bien definidos, la acción de los an- bina III, activador hístico del plasminógeno). Poste-
ticoagulantes existentes y la del sistema fibrinolítico. riormente, otras sustancias como el tromboxano A2
En esquema, la secuencia de reacciones es la si- y la serotonina, son responsables de una vasocons-
guiente: vasoconstricción localizada, adhesión y tricción más generalizada, que sustituye a la prime-
agregación plaquetarias con formación del tapón ra vasoconstricción neurógena.

385
Función de las plaquetas La liberación de ADP origina cambios en la con-
formación de la glucoproteína IIb – IIIa, que se une
Las plaquetas desempeñan un papel muy importan-
al fibrinógeno y facilita la unión de las plaquetas al
te, tanto en la hemostasia como en la reparación vas-
tapón hemostático. El factor de crecimiento plaque-
cular. Sus funciones fundamentales en la formación
tario estimula el crecimiento y la migración de los
del tapón hemostático son: adhesividad, agregabili-
fibroblastos y células musculares lisas en la pared
dad y reacción de liberación.
del vaso, que es una parte importante del proceso de
La adhesividad plaquetaria es la propiedad que
reparación.
tienen las plaquetas de adherirse a la fibrina del co-
Los fosfolípidos de la membrana, particularmen-
lágeno en el subendotelio vascular, segundos des-
te la fosfatidilserina, que es un factor principal de la
pués de producirse el daño del vaso. Esto se efectúa
actividad procoagulante de la membrana, ofrece la
por medio de un receptor (glucoproteína I a – II a),
superficie lipídica necesaria para la interacción de
que es un miembro de la familia de las integrinas.
los factores de la coagulación. Esta fosfatidilserina
Esta interacción es estabilizada por el factor de von
se encuentra en la capa interna de la membrana de
Willebrand, que provoca una unión del receptor Ib/
la plaqueta no activada y sufre una migración hacia
Ix y fibras del colágeno del subendotelio.
la capa externa cuando la plaqueta está activada. Este
Al producirse la herida vascular, la tromboplastina
proceso ha sido denominado flip – flop.
que está en la pared del vaso entra en la circulación
y genera la producción de una pequeña cantidad de Factores plasmáticos
trombina. Esta última, junto con otros agonistas
de la coagulación
como la epinefrina y el colágeno, se unen a los re-
ceptores de la superficie plaquetaria, y activan la El Comité Internacional sobre Hemostasia y Trom-
fosfolipasa C y la fosfolipasa A2, que catalizan la bosis adjudicó un número romano a cada uno de los
liberación de ácido araquidónico, uno de cuyos me- componentes reconocidos del sistema de la coagula-
tabolitos es el tromboxano A2 (TxA2), considerado ción, para establecer cierto orden al unificar el criterio
como uno de los más poderosos agentes agregantes de nomenclatura. Estos factores son los siguientes:
in vivo.
Factores Denominación
Por otra parte, la hidrólisis de los fosfolípidos de
la membrana produce sustancias facilitadoras del flu- I Fibrinógeno
jo de calcio dentro de las plaquetas, lo que contribu- II Protrombina
ye al cambio de éstas de su forma discoide habitual III Tromboplastina
a esferas con seudópodos, que les permiten interac- IV Calcio
tuar con otras plaquetas. V Factor lábil
La fosforilización de las proteínas intracelulares VI No existe
regula la secreción de los gránulos plaquetarios. VII Factor estable
Como ya se dijo, en el metabolismo del ácido ara- VIII Globulina antihemofílica
quidónico se produce TxA2, poderoso agente IX Componente tromboplastínico
del plasma (CTP)
agregante, pero también prostaglanodina I2 o pros-
X Factor Stuart–Power
taciclina, que es un potente inhibidor de la agrega-
XI Antecedente tromboplastínico
ción plaquetaria. del plasma (ATP)
Las plaquetas agregadas contraen sus seudópodos, XII Factor Hageman
lo que provoca la retracción de las mallas de fibrina XIII Factor estabilizador de la fibrina
(retracción del coágulo). Después de la activación, Precalicreína Factor Fletcher
éstas secretan sus gránulos al plasma. Los gránulos Quininógeno de alto Factor Fitzgerald
densos segregan: calcio, serotonina, ADP, ATP, epi- peso molecular
nefrina y el factor plaquetario 4 (FP4). Los gránulos
alfa secretan entre otros: factor de crecimiento pla- Los factores I , II, III y IV continúan llamándose
quetario, fibronectina, trombospondina, el factor de por sus nombres comunes bien definidos. El factor
von Willebrand y fibrinógeno plaquetario. VI no existe.

386
A los factores iniciales se han unido el cininóge- comparten los pasos finales de la coagulación pero
no de alto peso molecular (CAPM) y la precalicreí- difieren en la manera de iniciar el proceso de ésta.
na (PK). Ambos intervienen en la fase inicial de La trombina, formada por el sistema extrínseco, ac-
contacto, sus deficiencias no ocasionan diátesis he- túa sobre las plaquetas y las labiliza, ellas entonces
morrágicas y no se les han asignado números roma- liberan los fosfolípidos plaquetarios que actúan so-
nos porque son bien conocidos por su intervención bre el sistema intrínseco.
en otros sistemas biológicos.
Vía intrínseca Vía extrínseca
El coágulo lo constituye en lo fundamental la Calicreína Tromboplastina + VIIa
fibrina, la cual engloba entre sus mallas a los ele- Quininógeno de alto
mentos figurados de la sangre. La fibrina se forma peso molecular
cuando el fibrinógeno es sometido a la acción de la
XII XIIa
trombina. Lógicamente, esta trombina no existe cir-
culando en condiciones normales ni tampoco la
fibrina, pero sí el fibrinógeno, elaborado por el hí- XI XIa
gado.
La trombina es una enzima con actividad proteolí-
tica que libera dos pares de fibrinopéptidos (A y B) IX IXa + VIIIa + fosfolípidos
de la molécula de fibrinógeno y forma un monómero
soluble de fibrina. Los monómeros se polimerizan y
forman el coágulo. En el plasma hay un factor esta- X Xa + Va + fosfolípidos
bilizador de la fibrina (factor XIII), el cual transfor-
ma la malla tenue de los monómeros en una gruesa
y densa malla de fibrina. Protrombina Trombina
La trombina deriva de la protrombina, la cual es
elaborada por el hígado en presencia de vitamina K. Fibrinógeno Fibrina
Morawitz propuso en su teoría formulada a prin-
cipios de 1900, que la protrombina se transforma en
XIII
trombina por la acción de la tromboplastina y el cal-
cio, pero esta transformación no es tan simple, ya Fig. 52.1. Mecanismo de la coagulación.
que en ella intervienen una serie de factores. Éstos
se enumeran de acuerdo con la fecha de su descu- Vía intrínseca
brimiento y no por la secuencia de su participación Esta vía es iniciada por la activación del factor XII
en el mecanismo de la coagulación. (XIIa) por la calicreína. El quininógeno de alto peso
La tromboplastina hística es una lipoproteína de molecular facilita la activación.
alto peso molecular que consta de dos fracciones El factor XIIa cataliza la conversión del factor XI
activas: una fracción proteínica termolábil y una a su forma activa XIa; y éste, en presencia de cal-
porción lípida termoestable relacionada con la cio, lleva el factor IX a su forma activa IXa. Este
cefalina. Se halla distribuida en todo el organismo, último forma un complejo con el factor VIIIa y los
pero se la encuentra en mayores proporciones en fosfolípidos, presentes en la superficie de la mem-
ciertos órganos como el cerebro, los pulmones, la brana, en presencia de Ca. Dicho complejo convier-
placenta, el timo y los testículos. Su presencia se te el factor X en su forma activa Xa, que se une al
demuestra en cualquier herida o daño a los tejidos. factor Va en la superficie de la membrana y en pre-
Ciertos productos, como el veneno de víbora de sencia de iones de calcio, forma un complejo cono-
Russell, tienen una gran actividad tromboplástica. cido con el nombre de protrombinasa. Este complejo
Estudios de laboratorio han permitido identificar convierte la protrombina en trombina, que actúa so-
dos vías principales que llevan a la producción del bre el fibrinógeno y libera los fibrinopéptidos A y B
factor convertidor de la protrombina, conocidos en y monómeros de fibrina. Estos últimos se polimeri-
la actualidad con los nombres de sistema intrínseco zan y forman un coágulo de fibrina, que es estabili-
y extrínseco de la coagulación (Fig. 52.1). Ambos zado por el factor XIII en presencia de calcio.

387
Desde el punto de vista del laboratorio, la fase Fibrinólisis
intrínseca de la coagulación puede ser evaluada por Después de cumplir su función hemostática, el coá-
el tiempo parcial de tromboplastina (TPT), al cual se gulo de fibrina necesita ser eliminado. El sistema
le añaden partículas cargadas negativamente, como fibrinolítico es esencial en la disolución del coágulo
el kaolín, para activar el factor XII. sanguíneo y en la recanalización de los vasos
ocluidos por los trombos y por lo tanto, facilita la
Vía extrínseca reperfusión de los tejidos (Fig. 52.2).
Esta vía se inicia con la formación de un complejo El sistema fibrinolítico comprende una proenzima
entre la tromboplastina hística y el factor VIIa, que inactiva (plasminógeno), que es convertida en una
al actuar sobre el X lo activa a Xa. Desde ese mo- enzima activa (plasmina).
mento toda la activación posterior sigue el mismo
mecanismo de la vía intrínseca. No está claro cómo Inhibidor del activador
Activadores del plasminógeno
se activan pequeñas cantidades iniciales de factor del plasminógeno
VII a VIIa. Ya con posterioridad, el factor Xa con-
vierte mayores cantidades de VII a VIIa. α2 antiplasmina
Plasminógeno Plasmina α2 macroglobulina
En el laboratorio, la fase extrínseca se evalúa por
el tiempo de protrombina.
Este esquema de la hemostasia, con las vías in-
Fibrina Productos de degradación
trínseca y extrínseca, permite conocer la formación
de la fibrina
del coágulo in vitro, así como el diagnóstico y trata-
miento de los trastornos de la coagulación. Sin em- Fig. 52.2. Sistema fibrinolítico.
bargo, no deja saber exactamente lo que sucede in
vivo. ¿Por qué, si la deficiencia de factor XII, pre- Hay dos activadores fundamentales del plasmi-
calicreína y quininógeno de alto peso molecular, nógeno:
prolongan el TPT, no producen, sin embargo, san-
gramientos en el paciente? ¿Por qué el déficit de fac- 1. El activador hístico del plasminógeno (t–PA),
que es el más importante.
tor XI no está siempre asociado a un sangramiento?
2. El activador del plasminógeno llamado uroqui-
¿Por qué el déficit de factor VIII o IX produce san-
nasa (u–PA).
gramientos tan dramáticos, si la vía extrínseca per-
manece intacta? Tanto el t–PA, como el u–PA difunden de las cé-
Hoy se plantea que la vía extrínseca desempeña lulas endoteliales y convierten el plasminógeno, que
un rol más importante del que se le había reconoci- ha sido absorbido en el coágulo de fibrina, en plas-
do antes y que el factor VIIa tiene un papel signifi- mina. Esta última actúa sobre la fibrina y la con-
cativo en la activación de los factores IX y X. A esta vierte en pequeños fragmentos que son eliminados
nueva interacción del sistema extrínseco se le ha lla- por el sistema reticuloendotelial.
mado vía alternativa de la coagulación. La activación El t–PA se encuentra en cantidades muy peque-
inicial del factor IX por el VIIa es muy importante, ñas en la circulación (4,0 ± 1,8 ng/ ml).
ya que una vez formadas las primeras moléculas del Hay también inhibidores de los activadores del
plasminógeno (los llamados PAI) e inhibidores de
factor Xa, su unión con el inhibidor del factor hístico
la plasmina (la α2 antiplasmina y la α2 macroglo-
provoca la inactivación progresiva de VIIa; queda
bulina).
así sólo el factor IXa como activador del factor X, Todo el anterior proceso de coagulación y fibri-
que convirte los factores VIII y IX en los regulado- nólisis, se localiza en el lugar del daño vascular y no
res dominantes de la generación de trombina. Esto se propaga más allá de este sitio. Esto es importan-
podría explicar la ausencia de manifestaciones he- te, ya que existe potencial de coagulación suficiente
morrágicas en pacientes con déficit de XII, Fletcher en 1 ml de sangre, para coagular todo el fibrinógeno
y Fitzgerald. del organismo en sólo 10 o 15 segundos. Esto se

388
evita por el mismo flujo sanguíneo, que reduce la Proteína C (PC). La PC, cuya síntesis hepática
concentración de los reactantes y por la presencia depende de la vitamina K, es un elemento importan-
de numerosos inhibidores o moduladores en el plas- te en la regulación de la hemostasia.
ma. Entre los más importantes se encuentran la anti- En el endotelio vascular, la trombina forma un
trombina III (AT–III ), la proteína C, la proteína S y complejo con la trombomodulina. Este complejo
el inhibidor del factor hístico.
activa la PC (PCa), que a su vez inactiva los facto-
Antitrombina III (AT–III ). La AT–III es una gli-
res Va y VIIIa en la superficie plaquetaria. La PC
coproteína y probablemente el mayor inhibidor fi-
siológico de la trombina y del factor Xa. También además actúa sobre la fibrinólisis e inhibe el activa-
inhibe a los factores XIIa, XIa, IXa, las calicreínas dor del plasminógeno.
y la plasmina. Se sintetiza por el hígado y tiene una Proteína S (PS). Se sintetiza en el hígado y es
vida media de 55 horas. vitamina K dependiente.
La AT–III se une a la heparina (de ahí su nombre La PCa necesita de la PS para su acción anticoa-
de cofactor de la heparina) y esta unión aumenta gulante, por lo que ésta ha sido llamada cofactor de
unas 2 000 veces la velocidad de interacción de la la PC.
AT–III con la trombina. También incrementa varias Niveles reducidos o no funcionantes de AT–III,
veces esta capacidad de reacción con el factor Xa. PC o PS, traen como consecuencia un estado de hi-
La heparina de bajo peso molecular tiene una ma- percoagulabilidad con propensión a las trombosis.
yor actividad anti Xa y la de alto peso molecular
Una forma anormal de factor V, el llamado factor V
más efecto antitrombínico.
Leyden, es resistente a la inhibición por la PCa y
El valor normal de la AT–III en el plasma es de
0,8 a 1,2 unidades por mililitro. Niveles por debajo por lo tanto, estos pacientes son también suscepti-
de un 60 % predisponen a las trombosis. bles a las trombosis.

389
53
DIÁTESIS HEMORRÁGICAS

Cuando falla alguno o algunos de los mecanismos a. Congénitas


hemostáticos explicados en el capítulo anterior, so- • Síndrome de Bernard – Soulier
brevienen una serie de alteraciones que se traducen • Enfermedad de von Willebrand
por un cuadro hemorragíparo. Si se tiene en cuenta b. Adquiridas
la complejidad de dichos mecanismos, resulta fácil • Uremia
comprender que sean múltiples las vías a través de • Enfermedad de von Willebrand adqui-
las cuales pueden fallar. rida
En ciertos casos es un solo factor el que se en- 2. Trastornos de la agregación
cuentra afectado, como en la púrpura vascular agu- a. Congénitas
da de Schönlein-Henoch, pero la mayoría de las • Tromboastenia de Glanzmann
veces no es así, pues hay compromiso de más de • Afibrinogenemia
uno. Por ejemplo, en la púrpura trombocitopénica b. Adquiridas
idiopática, además de la disminución del número • Ingestión de drogas (antiagregantes)
de plaquetas existe aumento de la fragilidad vascular. • Disproteinemia
Clasificación 3. Trastornos en la liberación de gránulos
a. Congénitas
I. Diátesis hemorrágicas vasculares • Albinismo oculocutáneo
A. Congénitas • Síndrome de Chediak – Higashi
1. Telangiectasia hemorrágica hereditaria • Síndrome de la plaqueta gris
2. Síndrome de Ehlers–Danlos
b. Adquiridas
3. Ataxia telangiectasia
• Drogas (ASA – agentes antinflamatorios
4. Síndrome de Marfán
no esteroideos)
B. Adquiridas
• Trastornos mieloproliferativos
1. Inmunes
B. Por trastornos cuantitativos de las plaquetas
a. Púrpura alérgica
b. Púrpura inducida por drogas 1. Trombocitopenias idiopáticas y secundarias.
2. Infecciosas 2. Trombocitemias.
a. Púrpura fulminans III. Diátesis hemorrágicas por trastornos de los fac-
b. Bacterias tores de la coagulación
c. Virus A. Congénitas
d. Otros 1. Ligada al sexo
3. Otros a. Hemofilia A
1. Escorbuto b. Hemofilia B
2. Enfermedad de Cushing 2. Autosómico recesivo
3. Administración de esteroides a. Afibrinogenemia
4. Púrpura mecánica b. Déficit de II, V, VII, X, XI, XII y XIII
II. Diátesis hemorrágicas plaquetarias 3. Autosómico dominante o recesivo
A. Por trastornos cualitativos de las plaquetas a. Enfermedad de von Willebrand
1. Trastornos de la adhesión B. Adquiridas

390
1. Déficit de factores dependientes de vitami- Se ha sugerido que la activación del complemen-
na K. to es por la vía alternativa.
a. Enfermedad hemorrágica del recién nacido. El aumento de inmunocomplejos circulantes IgA,
b. Síndrome de malabsorción. así como de sus niveles séricos, provocan una exa-
c. Hepatopatías. gerada respuesta humoral a antígenos que penetran
d. Drogas antagonistas de la vitamina K. a través de las mucosas. Entre ellos se han señalado
e. Terapéutica antibiótica prolongada. una serie de drogas que incluyen aspirina, fenaceti-
f. Íctero obstructivo. nas, penicilina, tetraciclina, diuréticos, así como ali-
2. Inhibidores de la coagulación. mentos, picadura de insectos, inmunización, etc.
a. Inhibidores específicos de factores de la
Es relativamente común el antecedente de una in-
coagulación.
fección del tracto respiratorio superior.
b. Lupus eritematoso diseminado.
En muchos casos no se encuentra el factor causal.
3. Destrucción acelerada de factores de la coa-
gulación. Cuadro clínico
a. Coagulación intravascular diseminada.
b. Hiperfibrinólisis. La púrpura de Schönlein-Henoch ocurre en cual-
quier edad, pero la mayoría de los casos se ve en la
A continuación se describirá un cuadro típico re- infancia y adolescencia. Hay un predominio de 1,5 : 1
presentativo de cada una de las diátesis hemorrágicas en el sexo masculino. Tiene cuatro formas clínicas
según su etiopatogenia. fundamentales: purpúrica, articular, abdominal y
renal. Éstas se presentan a menudo combinadas, aun-
que ocasionalmente lo hacen en forma aislada. En
PÚRPURA DE la mayoría de los casos la púrpura inicia el proceso
y le siguen los síntomas articulares y abdominales.
SCHÖNLEIN-HENOCH Forma purpúrica: Se inicia con petequias y equi-
mosis, unas veces confluentes y otras papuliformes.
La púrpura de Schönlein-Henoch, también llamada Al principio las lesiones son urticarianas en algunos
púrpura anafilactoide, es una vasculitis sistémica que casos, pero horas después hacen su aparición las ma-
se manifiesta por lesiones cutáneas bastante típicas, nifestaciones hemorrágicas, casi siempre bilaterales,
acompañada en ocasiones de dolores articulares y que se encuentran sobre todo en los glúteos y miem-
abdominales, así como de un daño renal que puede bros inferiores, aunque no es raro que se extiendan
ser importante. Cursa con valores trombocitarios a los superiores, el tronco y la cara. Las lesiones
normales y un estado coagulatorio sin particulari- purpúricas a veces comienzan con brusquedad y en
dades. ocasiones son francamente hemorrágicas, que pue-
Fue reportada por Wilson en 1808 y después por den evolucionar a flictenas y sufrir necrosis.
Schönlein en 1837 y Henoch en 1874. Forma abdominal: Se caracteriza por cólicos ab-
dominales debidos a la extravasación serosanguínea
Etiopatogenia en la pared de los intestinos. Cualquier segmento
Esta afección, de cierta frecuencia, tiene como ha- intestinal es afectado, aunque los más frecuentes son
llazgo patológico característico una vasculitis de pe- el yeyuno y el íleon. En algunos casos los síntomas
queños vasos, sobre todo de vénulas poscapilares gastrointestinales preceden al rash característico.
con depósitos de IgA y C3 en sus paredes. El cólico suele acompañarse de náuseas, vómi-
El atrapamiento vascular de inmunocomplejos tos, diarreas o constipación y más comúnmente por
circulantes IgA con activación del complemento, da el paso de sangre y mucus por el recto. En los niños
origen primero a una vasodilatacion, más tarde a se presenta una invaginación intestinal como com-
edema y diapédesis y a veces, ruptura con hemorra- plicación del proceso.
gias. Esto explica que en la piel de estos enfermos Forma articular: Las manifestaciones articulares
se vean distintos tipos de lesiones elementales: varían desde una simple artralgia hasta verdaderas
petequias, eritemas, urticaria, etc. poliartritis, que casi siempre se resuelven sin dejar

391
secuelas. La inflamación, periarticular por lo gene-
ral, se extiende a más de una articulación (rodillas,
PÚRPURA
tobillos y codos, sobre todo), aunque también se afec- TROMBOCITOPÉNICA
tan las pequeñas articulaciones.
Forma renal: La toma renal varía mucho en se- IDIOPÁTICA
veridad, desde sólo anormalidades en el sedimento
urinario hasta una nefritis aguda capaz de progresar La púrpura trombocitopénica idiopática (PTI) o en-
a una insuficiencia renal y en raras ocasiones hasta fermedad de Werlhof, es una afección que se pre-
senta con mayor frecuencia en la infancia y adultos
la muerte del enfermo.
jóvenes, caracterizada por trombocitopenia, asocia-
En todas las formas clínicas puede haber fiebre
da a un número normal o aumentado de megacario-
moderada y se ha descrito en el adulto afectación citos en la medula ósea, un acortamiento de la vida
del miocardio. media de las plaquetas y ausencia de una enferme-
dad de base como causa de la plaquetopenia.
Diagnóstico En la actualidad se sabe que responde a una pa-
El diagnóstico de la púrpura de Schönlein-Henoch togenia inmunológica y el factor responsable de la
tiene su base esencial en la clínica, ya que las inves- disminución de los trombocitos es un anticuerpo di-
tigaciones de laboratorio no ayudan. El estudio de rigido contra algunos de los constituyentes de la
la coagulación es negativo, aunque la prueba del lazo membrana plaquetaria, por lo que se ha incluido
(Rumpel–Leede) es moderadamente positiva en el dentro de las llamadas trombocitopenias inmunes;
sin embargo, la demostración de estos anticuerpos
25 % de los casos.
antiplaquetarios no siempre es posible, incluso ni
Cuando hay participación renal se encuentran pro- con el empleo de las técnicas de laboratorio más
teinuria y hematuria microscópica, con cilindros modernas, por lo que en una pequeña proporción de
hemáticos. En la mitad de los pacientes hay un au- casos (10 o 20 %), éstos no son detectados.
mento del IgA sérico. Anteriormente se consideró a este trastorno como
una entidad única y se le llamó púrpura trombocito-
Evolución y pronóstico pénica esencial, primaria o idiopática, pero luego,
El pronóstico es bueno y la mayoría se recobra es- con el desarrollo de la inmunología, se demostró que
pontáneamente, aunque en ocasiones recurre por se- la trombocitopenia producida por anticuerpos podía
manas y meses. La aparición de síntomas viscerales asociarse a otras enfermedades (cuadro 53.1).
importantes, sobre todo renales, ensombrece el pro- CUADRO 53.1
CLASIFICACIÓN
nóstico.
DE LA TROMBOCITOPENIA INMUNE

Tratamiento A. Producida por autoanticuerpos


1. Primaria o idiopática
El tratamiento consiste en medidas sintomáticas hasta
• PTI aguda o crónica
que la enfermedad se resuelva. 2. Secundaria
En caso de que las manifestaciones sean severas • Infecciones agudas (bacterianas y virales)
se puede administrar prednisona, en dosis de 1mg/ • Colagenopatías (LED, artritis reumatoidea, etc.)
• Proceso linfoproliferativo [LLC, linfoma no-
kg/día, que alivia los signos articulares y abdomina-
Hodgkin (LNH), etc.]
les, aunque no tiene efecto sobre la duración de la • Inducida por fármacos (quinina, quinidina, hepa-
enfermedad ni sobre la recurrencia de ésta. rina, digitoxina, metildopa, rifampicina, sulfami-
dados, PAS, Convulsín, etc.)
En los pacientes con glomerulonefritis rápidamen-
• Asociada a la infección por VIH (SIDA)
te progresiva se han reportado beneficios con la plas- • Posinjerto de médula ósea
maféresis combinada con drogas inmunosupresoras. B. Producida por aloanticuerpos
Cuando se comprueba una alergia a drogas o ali- • Postransfusional (rara)
mentos, éstos deben ser suprimidos. También hay • Púrpura neonatal (incompatibilidad plaquetaria ma-
terrno–fetal)
que combatir toda manifestación séptica.

392
Etiopatogenia En los niños no se ha encontrado diferencia en cuanto
al sexo, pero en los adultos predomina en el femenino.
Por las alteraciones que produce en la hemostasia
En un porcentaje de casos se demuestra el ante-
primaria, la trombocitopenia constituye la causa más
cedente de una enfermedad exantemática previa o
frecuente de enfermedad hemorrágica. una infección de las vías respiratorias superiores, 2
Desde los trabajos clásicos de Harrington existen a 3 semanas antes del comienzo de las manifesta-
argumentos a favor de una etiopatogenia inmunoló- ciones purpúricas.
gica en esta afección. Hoy se sabe que la PTI es Las hemorragias cutaneomucosas integran el sig-
inmunohematológica caracterizada por el desarro- no más llamativo del cuadro clínico y tienen dife-
llo de anticuerpos dirigidos contra antígenos situa- rentes expresiones: petequias, equimosis y víbices.
dos en la superficie de la membrana plaquetaria. En La distribución de la púrpura es difusa en el tronco
casi todos los enfermos se demuestran anticuerpos y extremidades. Las hemorragias mucosas asientan
IgG y en menor cantidad IgM o complemento, o sobre todo en la cavidad bucal. Son frecuentes las
ambos, recubriendo las plaquetas, que opsonizadas epistaxis y la gingivorragia y puede haber sangra-
son fagocitadas por las células del sistema reticulo- miento vaginal, sobre todo en pacientes jóvenes. En
endotelial (SRE) del bazo y en menor proporción en ocasiones esta metropatía hemorrágica constituye el
el hígado. único síntoma de la enfermedad. A veces aparecen
Clásicamente se han descrito dos formas clínicas hemorragias conjuntivales. También están descritas
bien definidas de la enfermedad: una aguda, más fre- las hemorragias gastrointestinales y la hematuria. Los
cuente en niños con el antecedente de una infección sangramientos en el SNC e intraperitoneales son
viral, y otra crónica o del adulto, causada por dife- raros.
rentes mecanismos inmunológicos. Las manifestaciones purpúricas suelen ser más
La PTI aguda es producida por inmunocomple- intensas en el período inicial de la enfermedad, po-
jos, formados por anticuerpos sintetizados contra siblemente en relación con alteraciones vasculares
que concomitan con la trombocitopenia, sin que exis-
antígenos virales que se depositan sobre la superfi-
ta una correlación exacta entre las manifestaciones
cie plaquetaria o se han unido a receptores Fc de las
clínicas y el número de plaquetas.
plaquetas.
La esplenomegalia es infrecuente y cuando está
La PTI crónica es provocada por la generación de
presente es de pequeño tamaño, por lo que un bazo
autoanticuerpos dirigidos contra antígenos estruc- palpable obliga a analizar otras posibles causas.
turales de la superficie de las plaquetas. Ellos reac- Cuando los síntomas hemorrágicos son muy inten-
cionan con los antígenos diana, situados en el sos el paciente muestra palidez cutaneomucosa.
complejo de las glicoproteínas IIbIIIA o IbIX de la
membrana plaquetaria, y pueden causar una trom- Formas clínicas
boastenia adquirida, además de la trombocitopenia. A continuación se exponen las dos formas clínicas
Dado que el anticuerpo que aparece generalmen- de esta enfermedad.
te en la PTI es del tipo IgG, atraviesa la barrera
placentaria durante la gestación y ocasiona trombo- Forma aguda
citopenia al recién nacido, incluso aunque la madre • Predomina en niños de 2 a 8 años de edad.
tuviera una cifra de plaquetas normales. • El comienzo del cuadro clínico es brusco.
La trombocitopenia de naturaleza inmunológica • Por lo común está precedida de una enfermedad
a veces se asocia a una anemia hemolítica autoin- viral.
mune, lo que constituye el llamado síndrome de • Afecta a ambos sexos por igual.
Evans–Fisher. • Manifestaciones purpúricas floridas en un niño,
por lo demás sano.
Cuadro clínico • La trombocitopenia es habitualmente severa: in-
La enfermedad se inicia de manera brusca o por el .
ferior a 50 000/mm3(< 50 109/L).
contrario, de una forma más o menos lenta y casi • La trombocitopenia es causada por inmunocom-
siempre en niños, adolescentes y adultos jóvenes. plejos, formados por anticuerpos contra antígenos

393
virales que se unen o depositan en la superficie de un proceso hematológico primario (leucemias,
de las plaquetas. linfomas, mieloma, mielofibrosis, etc.), por lo que a
• En más del 90 % de los casos evolucionan a la estos pacientes se les debe realizar un examen de
curación espontánea. médula ósea (medulograma), así como la determi-
• La mayoría de los pacientes no requiere trata- nación de anticuerpos antinucleares, inmunocomple-
miento. jos circulantes y electroforesis de proteínas.
En aquellos casos que presenten fiebre, hepatos-
Forma crónica plenomegalia, adenopatías o linfocitos atípicos en
• Predomina en adultos entre los 20 y 40 años de el leucograma, deben indicarse pruebas encamina-
edad. das a descartar una hepatitis, mononucleosis infec-
• El comienzo de las manifestaciones clínicas es ciosa o un SIDA.
lento e insidioso. Como medida práctica, se considera una PTI a
• No existen antecedentes previos de infección todo estado trombocitopénico que reúna los siguien-
viral. tes criterios:
• Afecta sobre todo al sexo femenino (3 : 1).
• La trombocitopenia habitualmente es moderada • Síndrome purpúrico con cifras de plaquetas in-
.
(entre 50 y 100 109/L). .
feriores a 100 109/L (< 100 000/ mm3).
• La trombocitopenia es causada por la genera- • Medulograma con integridad o hiperplasia del
ción de anticuerpos dirigidos contra antígenos sistema megacariopoyético y ausencia de alte-
estructurales de la membrana plaquetaria (au- raciones en los sistemas granulopoyético y eri-
toanticuerpos). tropoyético.
• La cura espontánea de la enfermedad es poco • Ausencia de antecedentes o signos físicos que
frecuente (< 10 % de los casos). hagan sospechar una trombocitopenia secun-
• La mayoría de los pacientes requieren de trata- daria.
miento (corticosteroides, esplenectomía, inmu- • Ausencia de esplenomegalia.
nosupresores, etc.). • Demostración de anticuerpos antiplaquetarios
(aunque éstos pueden ser positivos en otras
Diagnóstico trombocitopenias autoinmunes secundarias).
El diagnóstico de la PTI depende en gran medida de Evolución y pronóstico
la exclusión de una serie de enfermedades causan-
La enfermedad es por lo común bien tolerada y la
tes de disminución de las plaquetas.
muerte por hemorragias es excepcional. Los sangra-
Como en toda trombocitopenia, el tiempo de san-
mientos se presentan con mayor intensidad en el
gramiento está prolongado, el coágulo es hipo o
período inicial de la afección. Las complicaciones
arretráctil y la prueba del lazo positiva. En el medu-
más temidas son las hemorragias en el SNC.
lograma el sistema megacariopoyético está íntegro
La PTI puede evolucionar durante meses o años
o hiperplástico con megacariocitos pequeños y ba- y caracterizarse por remisiones y recaídas más o
sófilos. menos frecuentes.
Para establecer el diagnóstico de esta enferme- En los niños, la forma aguda evoluciona a menu-
dad inmunohematológica, resulta de gran interés la do a la curación espontánea, generalmente en los
demostración de los anticuerpos antiplaquetarios, primeros 6 meses y el pronóstico es mejor en aqué-
aunque esto no es posible en el 100 % de los casos. llos con el antecedente de una infección viral pre-
También es conveniente medir el tiempo de vida de via. Hay enfermos que han presentado remisiones
las plaquetas circulantes (valores normales de 7 espontáneas algunos años después del comienzo de
a 10 días), marcadas con un isótopo radiactivo (Cr 51 las manifestaciones clínicas. Estas remisiones tar-
o Iridio 111), así como el sitio donde éstas se des- días son mucho más comunes en niños que en adul-
truyen. tos. En realidad, la evolución de una PTI es muy
La trombocitopenia constituye en ocasiones la variable y se han reportado numerosas formas evo-
primera manifestación de un LED, o el primer signo lutivas.

394
La mortalidad es baja, causada casi siempre por Esplenectomía. Con la esplenectomía se consi-
una hemorragia intracraneal. guen remisiones prolongadas en alrededor del 60
Constituye una situación especial la mujer emba- o 70 % de los casos. Esto obedece a que con este
razada con una PTI. Lo habitual es el diagnóstico de procedimiento se elimina uno de los sitios funda-
embarazo en una mujer con PTI previa. Más rara- mentales donde se produce el secuestro de las pla-
mente la enfermedad aparece durante el embarazo y quetas y a su vez, una de las fuentes principales de
en este caso las manifestaciones hemorrágicas son producción de anticuerpos.
más graves y es peor el pronóstico para la vida del De cualquier forma, de fracasar el tratamiento con
feto. La mortalidad materna es baja, no mayor que corticosteroides, está indicado el quirúrgico, aunque
la de la PTI en general. éste requiere de una cuidadosa valoración, en la que
se tendrá en cuenta la edad del paciente, enfermeda-
Tratamiento des concomitantes que representen un alto riesgo
Consideraciones generales para la cirugía, actividad física y laboral y alteracio-
Por lo común, los recuentos de plaquetas de más de nes secundarias al tratamiento con corticosteroides.
.
30 109/L no se asocian a manifestaciones hemo- La esplenectomía tiene una mortalidad operatoria muy
rrágicas significativas, a no ser que estén presentes baja (menos del 1 %) y la mayoría de los pacientes
otras alteraciones de la hemostasia. Las hemorra- tendrán un recuento de plaquetas normal o incluso
gias cutaneomucosas aparecen con facilidad cuan- alto, a la semana siguiente de la intervención. Algu-
do el número de plaquetas desciende por debajo de nos enfermos no responden bien a la esplenectomía
.
20 109/L (< 20 000/ mm3). porque quedan con un bazo accesorio que luego cre-
Los pacientes con trombocitopenia severa y ten- ce, o porque se forma un nuevo foco esplénico a
dencia al sangramiento, deben evitar los traumatis- partir de células esplénicas diseminadas durante la
mos, las inyecciones por vía IM y las técnicas operación, lo que provoca la reaparición de la trom-
invasivas de investigación o tratamiento (endosco-
bocitopenia. En cualquier caso, la presencia de teji-
pias, biopsias, cateterismos, cirugía, etc.), así como
do esplénico funcional se diagnostica buscando en
los medicamentos que inhiban la agregación plaque-
los frotis de sangre periférica los cuerpos de Howell–
taria.
Jolly, que aparecen en pacientes con asplenia. Tam-
bién se puede confirmar la existencia de tejido
Terapéutica específica
esplénico por gammagrafía. La posibilidad de reali-
Para el tratamiento de la PTI se cuenta en la actuali-
zar la esplenectomía de urgencia, en enfermos gra-
dad con los corticosteroides, la esplenectomía y los
inmunosupresores, además de la plasmaféresis y las ves por sangramiento masivo y necesidad de una
transfusiones con concentrado de plaquetas. rápida recuperación de las cifras de plaquetas, ha
Corticosteroides. La prednisona constituye la dro- sido señalada, pero en esas condiciones el riesgo
ga de elección y se utiliza en dosis de 1 a 2 mg/kg/ operatorio es mucho mayor.
día, repartida en 2 o 3 tomas que se mantendrán has- Inmunosupresores. Existe un cierto número de
ta que se consiga la remisión clínica y hematológica enfermos (10 o 20 %), que a pesar del tratamiento
de la enfermedad, lo cual generalmente se logra en con corticosteroides y la esplenectomía, continúan
un plazo de 2 a 4 semanas. Después se reduce la presentando trombocitopenia y hemorragias sinto-
dosis poco a poco hasta alcanzar una dosis mínima máticas y recurrentes. En estos pacientes se han uti-
o de sostén (alrededor de 10 mg/día) que se manten- lizado con resultados variables y efectos a veces
drá de 3 a 6 meses en dependencia de la respuesta. transitorios, los inmunosupresores.
Si pasado este período de tiempo no se consigue una La azatioprina (Imurán) y la ciclofosfamida (En-
.
respuesta (plaquetas > 50 109/L) o se produce una doxán) en dosis de 3 mg/kg/día y de 100 a 150 mg/
recaída, lo que ocurre con frecuencia cuando se re- kg/día, respectivamente, utilizados por períodos has-
duce la dosis de prednisona, se practica la esplenec- ta de 6 meses o un año, figuran entre los más em-
tomía. pleados, aunque también se han usado los derivados
En caso de remisión completa (conteo de plaque- de la vinca (vincristina y vinblastina), la mercapto-
.
tas > 150 109/L), el paciente debe ser chequeado purina y la tioguanina. Pero la mayoría de estos fár-
periódicamente. macos presentan una toxicidad elevada y efecto

395
mielodepresor que hace peligroso su empleo, por lo anormal. El gen que codifica el F VIII está situado
que se recomienda el manejo exclusivo por un per- en el brazo largo del cromosoma X.
sonal experimentado. La enfermedad se trasmite por ambos sexos, pero
También se han utilizado, aprovechando su menor con ciertas características de uno a otro. La mujer
toxicidad pero con resultados similares a los inmu- portadora casada con un hombre sano, eventualidad
nosupresores, altas dosis de dexametasona (40 mg/ más frecuente, la trasmite a la mitad de sus hijos, de
día, por 4 días, oral, o EV cada 4 semanas) y el lo que resultan varones hemofílicos y hembras por-
danazol en dosis de 400 a 800 mg/día, asociado o no tadoras, así como hijos sanos (figura 53.1). El hom-
a la prednisona, con algunas respuestas satisfac- bre hemofílico casado con una mujer sana, tendrá
torias. una descendencia en la cual todas las hembras son
Por último, existen pacientes refractarios a todo portadoras y los varones sanos. Finalmente, la unión
tipo de tratamiento, los cuales se benefician con la de un hombre hemofílico y una mujer portadora, ten-
plasmaféresis y la administración de gammaglobu- drá una descendencia en la cual la mitad de los hijos
lina G de uso EV, en dosis de 0,5 a 1 mg/kg/día, con varones será sana y la otra mitad hemofílica. De las
respuestas temporales de 1 a 3 meses de duración. hembras, la mitad será portadora y la otra mitad
Esta droga se utiliza en pacientes que van a ser so- hemofílica.
metidos a una intervención quirúrgica mayor o en
XX XY
las gestantes con alto riesgo antes del parto y en el
alumbramiento. Resultados similares se han obteni-
do con gammaglobulina anti–D endovenosa .
Las transfusiones de concentrados de plaquetas
tienen un valor muy limitado en el tratamiento de
esta enfermedad, debido a la rápida destrucción pe-
riférica de éstas una vez transfundidas. Cuando se
utilizan, se hace en dosis de una unidad por cada 10 kg
de peso. XX XY XX XY

XX: Mujer portadora. XX: Mujer sana.


HEMOFILIA XY: Hombre hemofílico. XY: Hombre sano.

Fig. 53.1. Esquema que representa las posibilidades de trasmi-


sión de la hemofilia A, en el caso de una mujer portadora casa-
Concepto da con un hombre sano.
La hemofilia es una enfermedad hereditaria ligada
al cromosoma X, que causa una ausencia, una dis- Hoy día ya no se justifica la antigua suposición
minución o un defectuoso funcionamiento del fac- de que el estado homocigoto era siempre fatal para
tor VIII (hemofilia A) o del factor IX (hemofilia B) el embrión, pues en más de una ocasión han sido
de la coagulación. Aproximadamente el 85 % de los reportadas mujeres con hemofilia A.
pacientes padecen de hemofilia A, que es la que se El F VIII es producido en las células parenqui-
describirá en este capítulo. matosas hepáticas y circula en el plasma en un com-
plejo monovalente con el factor de von Willebrand,
Etiopatogenia una propiedad que favorece su síntesis, lo protege
El trastorno se caracteriza sobre todo por hemorra- de la proteólisis y lo concentra en el sitio de la he-
gias en los tejidos blandos, músculos y articulacio- morragia. Este factor no puede formar parte del com-
nes, y hay una estrecha correlación entre la gravedad plejo VIIIa – IXa – fosfolípidos, a menos que sea
clínica y la concentración plasmática de factor VIII liberado del factor de von Willebrand, debido a que
(F VIII). Se reporta en todos los países y en todas la unión a este último inhibe su unión a los fosfolí-
las razas. Una tercera parte de los casos son el resul- pidos. La separación de F VIII del factor de von
tado de una mutación reciente y espontánea, ya que Willebrand necesita de la escisión de las cadenas
no se encuentra una historia familiar de sangramiento ligeras del primero por la trombina o por el factor

396
Xa. Esto posibilita que el F VIII se una a la superfi- gestión venosa o lesión isquémica de los nervios; a
cie de los fosfolípidos. Aunque éste es sintetizado veces las grandes masas de sangre se calcifican y se
como una cadena polipeptídica, muy pronto después confunden con sarcomas de tejido blando (seudo-
de la síntesis una proteasa lo divide, de modo que el tumores). Son particularmente peligrosas las he-
F VIII plasmático es un heterodímero. morragias orofaríngeas porque pueden precisar
intubación de urgencia, y las del SNC, poco frecuen-
Cuadro clínico tes, pero en muchos casos fatales.
Como ya se dijo, hay una estrecha correlación entre Alguna que otra vez el sangramiento ocurre en la
la gravedad clínica y la concentración de F VIII en mucosa bucal, epistaxis y hematuria y cuando es en
el plasma. Es importante enfatizar, que tal como el músculo psoas simula una apendicitis aguda.
debía esperarase, la hemofilia A tiene una clínica Es posible que en los hemofílicos leves no haya
heterogénea, debido a la gran cantidad de diferentes historia de sangramiento y sólo se reconozcan des-
defectos moleculares en el gen del F VIII. pués de un traumatismo o cirugía.
Se califican como graves, aquellos enfermos que
tienen menos de un 1 % de actividad del factor; ellos Exámenes complementarios
sangran frecuentemente, incluso con traumatismos Tiempo de coagulación. No es una prueba sensible
no identificables. Son considerados moderados cuan- para el diagnóstico de hemofilia, ya que suele en-
do la actividad del factor está entre 1 y 5 %, y tienen contrarse dentro de límites normales cuando existe
una enfermedad más tolerable con menos episodios un 2 a 3 % de actividad del F VIII, aunque en los
de sangramiento. Es leve en aquéllos con valores hemofílicos graves siempre está prolongado.
superiores al 5 % , con sangramientos por lo general
Tiempo de sangramiento. Es normal.
secundarios a traumatismos o a cirugía.
Tiempo de protrombina. Es normal.
Aunque se requiere un mínimo de 25 % de F VIII
Prueba del lazo. Es negativa.
para una hemostasia normal, la mayoría de los
Consumo de protrombina. Está acortado a menos
pacientes sintomáticos tienen menos de un 5 % del
de 20 segundos.
factor.
Tiempo parcial de tromboplastina. Está prolon-
Las hemorragias constituyen el síntoma más re-
gado. La prueba se realiza con facilidad y resulta
levante de la hemofilia A y aparecen en relación con
muy útil para el diagnóstico.
traumatismos, pero muchas veces dan la impresión
Test de generación de tromboplastina. Prueba sen-
de ser espontáneas, porque éstos son tan leves que
sible pero complicada, que permite clasificar el tipo
pasan inadvertidos ( una simple contracción muscu-
de hemofilia.
lar puede provocarlas).
Dosificación del factor VIII. El diagnóstico de
Los pacientes con hemofilia A se diagnostican
laboratorio se establece con la dosificación cuanti-
usualmente poco después del nacimiento, debido a
un cefalohematoma o a un profuso sangramiento por tativa del F VIII.
una circuncisión. En otras ocasiones no se diagnos-
tica hasta que comienzan a caminar, por los trauma- Tratamiento
tismos que sufren en el aprendizaje. El Instituto de Hematología de Cuba tiene normado
Es frecuente que los hemofílicos sangren en las el tratamiento de la hemofilia, por lo que se resumi-
articulaciones (hemartrosis), ya que los vasos sino- rán estas normas.
viales tienen paredes finas. Las articulaciones más En primer lugar, para lograr un manejo adecuado
afectadas son rodillas, caderas, codos, tobillos y del paciente hemofílico es necesaria la integración
hombros. Esto causa inflamación sinovial, que de un grupo de trabajo, compuesto por un hemató-
erosiona el cartílago articular, con anquilosis de la logo, un ortopédico, un estomatólogo y un psicólo-
articulación y a la larga, atrofia muscular. go. El enfermo debe ser tratado no sólo durante los
La hemorragia puede afectar cualquier órgano y episodios hemorrágicos, sino también entre ellos (tra-
al acumularse la sangre, ésta presiona sobre los teji- tamiento estomatológico preventivo, el ortopédico
dos adyacentes y ocasiona necrosis muscular, con- corrector de secuelas y la orientación psicológica).

397
Hay que tener en cuenta que la vida media del F El tratamiento sustitutivo debe individualizarse sin
VIII es de 12 a 18 horas y el nivel hemostático es de olvidar que el nivel del factor necesario para asegu-
25 a 30 %. rar la hemostasia después de un traumatismo, es
Debe evitarse el uso de aspirina, ya que ésta afec- mayor que el indicado para el control del sangra-
ta la agregación plaquetaria y puede agravar la he- miento espontáneo.
morragia.
Es importante iniciar precozmente el tratamiento CUADRO 53.2
de los pacientes hemofílicos. Los materiales tera- ACTIVIDAD DE MATERIALES TERAPÉUTICOS
péuticos utilizados en él son : sangre total, plasma Y NIVELES DE F VIII QUE SE PUEDEN ALCANZAR
CON SU USO
fresco, crioprecipitado, concentrado de factor VIII
y factor VIII recombinante. Material Promedio de Nivel de F VIII
Sangre fresca. Eleva muy poco el F VIII y sólo terapéutico U / ml de F VIII que puede ser al-
debe emplearse en casos de hipovolemia y de ane- canzado (porcen-
mia intensa. taje del normal)
Plasma fresco. Hasta 1964 sólo se disponía de Plasma fresco 0,6 15 a 20
plasma fresco, que elevaba el nivel del F VIII hasta
un 20 % y actualmente se utiliza en traumatismos Crioprecipitado 4,0 Niveles normales
pequeños.
Concentrado 25,0 Niveles normales
Crioprecipitado. En 1964 se descubrió el criopre- de F VIII
cipitado, que puede llevar la concentración de F VIII
a niveles normales. Una bolsa contiene aproxima- El cálculo de las dosis se hace con la siguiente formula:
damente 100 unidades de F VIII y una cantidad va-
Dosis (U) =
riable de fibrinógeno y de factor von Willebrand.
Concentrado de factor VIII. Se obtiene en gene-
.
Peso del paciente ( kg ) aumento deseado del F VIII ( % )
K
ral con plasma de más de 20 000 donantes. Se ha K = constante para cada material terapéutico: si plasma = 2; si
utilizado en los últimos 25 o 30 años y aunque ha crioprecipitado = 1,5; si concentrado de F VIII = 1,5.
mejorado la facilidad y efectividad del tratamiento,
también ha incrementado las complicaciones pos-
transfusionales. Muchos trabajos indican que entre
El nivel del F VIII obtenido después de la trans-
1979 y 1984, entre el 60 y 80 % de los hemofílicos
tratados con concentrado de F VIII, son seropositivos fusión y el que se mantiene a las 24 h en los distintos
para el VIH, el 80 % son seropositivos para anti- tipos de sangramiento, se señalan en el cuadro 53.3.
cuerpos del virus de la hepatitis B y el 25 % tienen A continuación se expone la conducta que debe
una disfunción hepática grave. seguirse en las complicaciones más frecuentes de la
Este peligro ha disminuido mucho con la intro- hemofilia A.
ducción de técnicas para la inactivación por el calor
del VIH y también por el análisis de la sangre del Hemartrosis aguda
donante. • Elevar el nivel del F VIII de 5 a 20 % por algu-
Factor VIII recombinante. Este factor se logró nas horas. Cuando es postraumática deben
obtener en los últimos años, es un agente terapéuti- alcanzarse niveles entre 15 y 30 % por 24 a 48 h.
co efectivo y evita todas las posibles complicacio- • Bolsa de hielo. Provoca vasoconstricción y re-
nes del concentrado del F VIII. Se ha reportado que duce las demandas metabólicas de los tejidos.
sólo en algunos pacientes tratados con este nuevo • Inmovilización con férula de yeso. Cuando es
producto aparecieron inhibidores y siempre con un
muy dolorosa y existe deformidad en flexión,
título bajo.
es recomendable la tracción de partes blandas.
En el cuadro 53.2 se muestra la actividad de los
• Prednisona, 1 a 2 mg/kg durante una semana.
diferentes materiales terapéuticos, así como los ni-
veles de F VIII que se alcanzan con su uso. También • Después de la etapa aguda, comenzar con pro-
se ofrece la fórmula para calcular la dosis. grama de rehabilitación.

398
CUADRO 53.3 Se viene realizando la terapéutica sustitutiva pro-
NIVELES DE F VIII EN RELACIÓN filáctica, con la infusión de F VIII 3 veces a la se-
CON LA TRANSFUSIÓN
mana.
Tipo de Nivel de F VIII Nivel aproximado Desde 1985 ha sido posible el diagnóstico prena-
sangramiento necesario inmedia- de F VIII a las 24 h tal en las semanas 8va a 10ma del embarazo, por aná-
tamente después de la transfusión lisis del ADN obtenido por amniocentesis o material
de la transfusión (% del normal)
(% del normal) de las vellosidades coriónicas.
También es posible el diagnóstico de la mujer
Espontáneos 5 a 20 0,5 portadora, que usualmente produce suficiente F VIII
musculares para logar una hemostasia normal, pero en ocasio-
y articulares
nes puede tener un nivel de F VIII por debajo de un
Postraumáticos 20 a 40 5 a 10 50 %, por inactivación al azar del cromosoma X. En
importantes estos casos, suelen sangrar cuando se someten a ci-
rugía mayor.
Extracciones 30 a 50 5 a 15
dentarias
En el futuro, la terapéutica génica debe represen-
tar la cura de esta enfermedad.
Cirugía mayor, 100 a 150 25 a 40
accidentes Tratamiento del paciente hemofílico con inhibi-
graves, hema-
tomas en sitios
dores
peligrosos Uno de los problemas más graves en el manejo de
los pacientes con hemofilia A, es el desarrollo de
inhibidores. Son anticuerpos IgG dirigidos contra al-
gunas regiones específicas de la molécula del F VIII
Extracciones dentarias y se encuentran en 10 o 20 % de los enfermos.
• Crioprecipitado inmediatamente antes de la ex- Los pacientes con inhibidores se han dividido en
tracción, para obtener un nivel entre 30 y 50 % dos grandes tipos:
del factor.
• Ácido epsilón-aminocaproico, 0,1 mg/kg cada • Tipo I: Altos respondedores: cuando el título
6 h por 10 días. de inhibidores aumenta con rapidez después de
• Si se produce sangramiento, debe repetirse la la administración de F VIII.
dosis de crioprecipitado. • Tipo II: Bajos respondedores: cuando el título
asciende lentamente.
Intervenciones quirúrgicas
• Mantener los niveles de F VIII tan cerca de la Los altos respondedores constituyen un verdade-
normalidad como sea posible y acortar el tiem- ro problema terapéutico. En caso de urgencia, el
po entre las dosis (cada 6 u 8 h) en el primer y control de la hemorragia necesita en ocasiones de
una plasmaféresis que elimina del 60 al 80 % del
segundo días después de la intervención.
inhibidor.
• Dosificación de inhibidores.
Se utilizan inmunosupresores: prednisona: 150
• Mantener durante 10 a 14 días niveles de F VIII
a 200 mg/día, y ciclofosfamida: 40 mg/kg en 10 o
entre 25 y 30 %, según la evolución.
12 días.
A lo anterior se puede añadir el ácido epsilón
En la hemofilia moderada se ha utilizado el acetato aminocaproico: 0,1 g/kg cada 6 h.
de desmopresina: 0,3 µg/kg en infusión durante 3 h. Los pacientes de tipo I no deben recibir F VIII. El
Incrementa los niveles de F VIII de 3 a 5 veces sus control del sangramiento puede requerir la infusión
niveles basales. de este producto de origen porcino.
No se deben utilizar los antifibrinolíticos en la También se ha empleado el concentrado del com-
hematuria, por la posible formación de coágulos en plejo protrombínico, el cual es capaz de acortar el
el tracto urinario. tiempo de coagulación sin la infusión de F VIII.

399
En los bajos respondedores es posible controlar Clasificación
el sangramiento con altas dosis de F VIII (50 a 100
Los intentos de clasificar la EvW han sido compli-
U/kg).
cados, por la variabilidad en los síntomas y en las
La dosificación de inhibidores debe realizarse
pruebas de laboratorio.
cada 6 meses a todos los pacientes hemofílicos.
En general pueden considerarse dos variantes: una
que se debe a una deficiencia cuantitativa (tipos I y
III) y otra ocasionada por una anormalidad estruc-
ENFERMEDAD DE VON tural cualitativa o funcional del FvW (tipo II).
Tipo I. Es la forma más común de la enfermedad
WILLEBRAND (70 a 80 % de los casos) y está asociada a una dis-
minución cuantitativa, de discreta a moderada, del
La enfermedad de von Willebrand (EvW) es un tras- FvW (niveles entre 20 y 50 % del valor normal). En
torno hemorrágico heredado, con una gran hetero- este tipo los niveles plasmáticos de F VIII, FvW y
geneidad desde el punto de vista clínico y genético, FvW: Ag (antígeno) pueden estar reducidos, o ser
causado fundamentalmente por una deficiencia o normales y el tiempo de sangramiento estar prolon-
anormalidad del factor de von Willebrand (FvW). gado o normal.
Esto trae como resultado una defectuosa interacción El tiempo parcial de tromboplastina (TPT) puede
de las plaquetas con la pared vascular. también ser normal. Por lo tanto, un tiempo de san-
El FvW es sintetizado por las células endoteliales gramiento y un TPT normales no descartan el diag-
vasculares y los megacariocitos, y es secretado en nóstico de esta afección.
el plasma como una serie de formas multiméricas Tipo II. En el tipo II hay una anormalidad cuali-
de diferente tamaño. Además del plasma, este factor tativa del FvW, lo que trae como resultado una in-
se encuentra en las plaquetas, las células endote- teracción defectuosa entre las plaquetas – FvW –
liales y en la membrana basal de los vasos sanguí- pared del vaso.
neos. Sus valores normales en el plasma son de 5 a Los niveles plasmáticos de F VIII y FvW están
10 µg/ml. usualmente reducidos y el FvW: Ag a veces es cuan-
El factor VIII / factor von Willebrand forman un titativamente normal.
complejo macromolecular con dos componentes: Hay dos subtipos fundamentales:
1. Una proteína de alto peso molecular, detectada IIA. Aquí los multímeros de alto y mediano peso
por antisueros precipitantes, cuya actividad molecular están ausentes en el plasma y en las pla-
biológica está relacionada con la interacción quetas. Se ha reducido la agregación plaquetaria por
plaqueta – endotelio y con la agregación pla- ristocetina.
quetaria con ristocetina. Está disminuida o al- IIB . Hay ausencia en el plasma de los multímeros
terada en la EvW y se encuentra bajo control de alto peso molecular y una agregación de las pla-
autosómico. quetas con cantidades pequeñas de ristocetina (0,3–
2. Una proteína de menor peso molecular que tie- 0,5 mg/ml), que por lo común no provocan agrega-
ne actividad coagulante (F VIIIC), la cual se ción en plaquetas normales. Puede haber una dis-
encuentra alterada en la hemofilia A y es con- creta trombocitopenia.
trolada por el cromosoma X. Además de los 2 anteriores, se han descrito el IIC,
IID, IIE, IIF, IIG y IIH.
En el proceso de la coagulación, el FvW liberado Tipo III. Es una forma severa de EvW con una
de las plaquetas se une a la glicoproteína Ib en la marcada disminución de los niveles de FvW en el
superficie plaquetaria y a componentes de la mem- plasma y plaquetas. Generalmente no se detecta ac-
brana basal. Es necesario para la adhesión de las pla- tividad de FvW y FvW: Ag y hay una marcada dis-
quetas al área dañada. Posteriormente, junto con otras minución del F VIII (< 10 %). El tiempo de
proteínas adhesivas (fibrinógeno, fibronectina y sangramiento está prolongado.
trombospondina), interacciona con el receptor pla- También se ha descrito un seudo von Willebrand
quetario IIb - IIIa y contribuye a la agregación pla- tipo plaquetario, en el cual hay un trastorno en el
quetaria. receptor plaquetario del FvW y además la EvW tipo

400
Normandía, en la cual hay formación alterada del Una observación que contribuye al diagnóstico
complejo FvW / F VIII. es la respuesta característica a la infusión de F VIII
que, a diferencia de la hemofilia, provoca una ele-
Manifestaciones clínicas vación de este factor en el plasma de los enfermos
En 1926 Eric von Willebrand describió la enferme- por más de 24 horas.
dad que hoy lleva su nombre. Es posiblemente el
Tratamiento
trastorno hemorrágico hereditario más frecuente,
aunque sólo ciertos casos tienen una significación Los que tienen un cuadro clínico severo deben ser
clínica. tratados, al igual que los hemofílicos, por un equipo for-
Su severidad varía desde pacientes casi asinto- mado por hematólogo, ortopédico, estomatólogo y
psicólogo. En estos pacientes las manifestaciones clí-
máticos hasta otros cuya sintomatología es muy flo-
nicas se diferencian poco de la hemofilia clásica,
rida.
pero como ya se dijo, tienen una mejor respuesta a
Los enfermos con los tipos I y II tienen sangra-
la infusión de factor VIII; una dosis diaria de éste es
mientos moderados con hemorragias gastrointesti-
suficiente en la mayoría de los casos. Los prepara-
nales y en regiones mucocutáneas, en ocasiones sólo
dos terapéuticos utilizados son plasma, crioprecipi-
después de cirugía, traumatismos o extracciones
tado y concentrado de F VIII.
dentales. Es posible epistaxis y en las mujeres,
Plasma: 10 a 15 ml/kg. En general, esto es sufi-
metrorragias. ciente para detener la mayoría de los episodios he-
En los casos severos (tipo III) el cuadro clínico se morrágicos.
diferencia poco de una hemofilia clásica. Puede Crioprecipitado: 8 a 12 U/kg. Es capaz de dete-
comenzar al nacimiento con sangramiento por el cor- ner las manifestaciones hemorrágicas más frecuen-
dón umbilical y no son raros los hematomas profun- tes en estos enfermos.
dos y la hemartrosis. Concentrado de F VIII: Sólo se utiliza en casos
El cuadro clínico en ocasiones mejora durante el muy severos con sangramientos intensos.
embarazo, el uso de contraceptivos orales y con la Generalmente hay que mantener el tratamiento por
edad. 48 o 72 h para asegurar una hemostasia óptima.
Aunque la mayoría de los casos de EvW son he- La menorragia recurrente se trata con contracep-
redados, hay también formas adquiridas, que se ob- tivos orales que supriman la menstruación.
servan en las siguientes afecciones: gammapatías Durante la cirugía o en caso de traumatismo ma-
monoclonales, trastornos linfoproliferativos y mie- yor, los pacientes deben recibir crioprecipitado o
loproliferativos, enfermedades autoinmunes, tumo- concentrado de F VIII 2 veces al día.
res sólidos y algunas drogas. Por lo general son En la hemartrosis, además del tratamiento susti-
causados por anticuerpos que inhiben la función del tutivo, se deben utilizar bolsa de hielo, inmoviliza-
FvW o por tumores que lo absorben de forma se- ción con férula de yeso y prednisona: 2 mg/kg/día
lectiva. durante una semana.
En las extracciones dentarias, además del trata-
Diagnóstico miento sustitutivo, se administra ácido epsilón ami-
no caproico, 0,1 g/kg cada 6 h durante 8 a 10 días.
El diagnóstico se confirma con el hallazgo de nive- Otra opción terapéutica es el uso de DDAVP
les reducidos de FvW, FvW: Ag, F VIII y un tiempo (Desmopresín), 0,2 a 0,3 µg/kg EV en 30 min dilui-
de sangramiento prolongado. Por otra parte, hay do en una solución de 50 a 100 ml, que aumenta los
casos en que estas cuatro pruebas de laboratorio son niveles del FvW y de F VIII.
normales o sólo una de ellas es anormal, lo que difi- El tratamiento en la forma adquirida debe inten-
culta el diagnóstico de esta entidad. tar controlar la enfermedad de base, ya que los deri-
Estas pruebas se repiten cada cierto tiempo, ya vados del plasma y el DDAVP son poco efectivos.
que los resultados cambian, algunas veces, en cues- Se han reportado buenos resultados, en algunos ca-
tión de semanas. sos, con el uso de altas dosis EV de gammaglobulina.

401
54
COAGULACIÓN INTRAVASCULAR
DISEMINADA

La coagulación intravascular diseminada (CID) no festaciones de la actividad patológica de todo este


constituye por sí misma una entidad nosológica, sino fenómeno.
un síndrome que complica a muchas enfermedades. Se debe recordar que cuando la sangre se coagu-
Se define como una excesiva generación de trombina la, ciertos factores plasmáticos de la coagulación se
en el torrente circulatorio, lo que produce una ex- consumen en este proceso. Dicho de otro modo, el
tensa coagulación de la sangre que circula por el plasma se convierte en suero, el cual no puede coa-
árbol vascular, con disminución de las plaquetas y gular por haber pérdido el fibrinógeno, casi toda la
los factores plasmáticos de la coagulación (de ahí el protrombina, las plaquetas y algunos factores plas-
nombre de coagulopatía de consumo con que tam- máticos de la coagulación, sobre todo el V y el VIII.
bién se la conoce) y conversión del fibrinógeno en El mecanismo de la hemostasia no termina con la
fibrina (hipofibrinogenemia); se obstruye así la mi- producción del coágulo de fibrina, pues se requiere
crocirculación en diversos órganos de la economía que éste sea disuelto para que el vaso se recanalice y
y surgen las manifestaciones clínicas que depen- se restituya el aporte sanguíneo a los tejidos afecta-
den de: dos. Esto se logra por el mecanismo fisiológico co-
nocido como fibrinólisis, por el cual una proenzima
1. La hemorragia causada por el consumo de fac- llamada plasminógeno se convierte en la enzima plas-
tores. mina, responsable de la disolución del coágulo.
2. El territorio afectado por las microtrombosis. En la CID se produce un exceso de fibrina que se
deposita en los vasos sanguíneos y como respuesta,
En general, trombosis y hemorragias han sido el organismo reacciona y pone en marcha el meca-
consideradas como condiciones diametralmente nismo fibrinolítico, de intensidad variable y que en
opuestas, sin embargo, ambas se encuentran muy ocasiones predomina incluso en el cuadro clínico.
relacionadas en este síndrome. Luego se activa el Esto se conoce como fibrinólisis secundaria, aunque
mecanismo de la fibrinólisis encargado de destruir sería mejor llamarla defensiva o reaccional.
los microtrombos, pero que en ocasiones es exage-
rado y puede causar también sangramientos. Afecciones que son causa de CID
Son múltiples las afecciones capaces de provocar una
Fisiopatología CID, en el cuadro 54.1 se relacionan las principales;
Cuando se produce la ruptura de un vaso sanguí- en la clínica, ésta puede presentarse en una serie de
neo, se pone en marcha el mecanismo de la hemos- enfermedades en apariencia no relacionadas.
tasia, ya explicado en el capítulo correspondiente, Es de interés hacer un resumen de la reacción de
una de cuyas fases es la producción de una malla de Shwartzman–Sanarelli, que ha ayudado a entender
fibrina que yugule la pérdida de sangre. El centro los cuadros clínicos de esta entidad. Estos autores
de esta fase lo constituye la conversión de protrom- observaron que cuando se le inyectaba a un conejo
bina en trombina. Esta última es una enzima muy una pequeña dosis de endotoxina, ésta era tolerada
potente que con gran especificidad elimina los poli- perfectamente y no daba lugar a ninguna alteración.
péptidos del fibrinógeno, el cual se polimeriza y Pero si a las 24 horas se repetía la dosis, el animal
forma la fibrina. Los síndromes de CID son mani- sufría un colapso y moría. En la autopsia encontra-

402
CUADRO 54.1 beneficiosos mediante la activación de la fibrinóli-
CAUSAS DE COAGULACIÓN INTRAVASCULAR
sis después de la segunda inyección de endotoxina.
DISEMINADA
Es evidente que la reacción de Shwartzman–Sanarelli
1. Infecciones copia exactamente los hallazgos de la coagulación
• Bacterianas intravascular diseminada, es decir, hemorragias y
• Virales
trombosis.
• Parasitarias
• Micóticas
Es necesario señalar que no todo depósito de
2. Obstétricas fibrina intravascular significa CID y que, por otra
• Desprendimiento placentario parte, la falta de evidencia morfológica de fibrina
• Embolismo del líquido amniótico depositada en los vasos no excluye el diagnóstico
• Eclampsia de esta afección, ya que el sistema fibrinolítico de-
• Retención de feto muerto fensivo o reaccional es capaz de digerir toda la fibrina
• Infección intrauterina formada, por lo que es imposible de detectar con el
3. Enfermedades malignas microscopio óptico.
• Leucemia promielocítica aguda Como se ve en el cuadro 54.1, hay una larga lista
• Otras neoplasias de enfermedades capaces de complicarse con una
4. Hemólisis intravascular CID. En cada caso se ha identificado un mecanismo
• Transfusión de sangre incompatible desencadenante tentativo. Por ejemplo, en los tumo-
• Malaria res y en el tejido traumatizado se liberan factores
• Síndrome urémico–hemolítico hísticos a la circulación, mientras que en las sepsis,
• Válvulas mecánicas cardíacas las endotoxinas bacterianas activan algunos pasos
• Circulación extracorpórea en la cascada de la coagulación. Otros elementos
5. Alteraciones circulatorias favorecen la aparición de una CID, como sucede en
• Hemangioma gigante el embarazo, donde existe una disminución de la ac-
• Aneurisma aórtico tividad fibrinolítica unida al aumento de algunos fac-
6. Otras afecciones tores de la coagulación.
• Síndrome de aplastamiento Además, existen situaciones agravantes suscepti-
• Venenos de serpientes bles de acentuar el proceso de CID, lo que hace más
• Quemaduras de tercer grado peligrosos aún sus consecuencias. Tales son, la in-
• Traumatismos severos suficiencia circulatoria, ya que el enlentecimiento
• Rechazo a injertos de órganos de la microcirculación favorece la organización de
• Necrosis hepática aguda trombos de fibrina; la disminución de la síntesis
proteica por un estado de shock, pues ésta impediría
ron hemorragias viscerales y focos de necrosis en la elaboración de los factores de la coagulación con-
distintos órganos, como consecuencia de la forma- sumidos en este proceso, y la supresión de la activi-
ción difusa de trombos de fibrina y plaquetas en la dad fibrinolítica fisiológica por un tratamiento
microcirculación. incorrecto de agentes antifibrinolíticos.
Al parecer, la primera dosis produce una lesión
endotelial, la cual activa el factor XII y desencade- Cuadro clínico
na el mecanismo intrínseco de la coagulación. El No todos los pacientes afectados por una de las en-
sistema reticuloendotelial entra en función y elimi- fermedades citadas antes tendrán un cuadro de CID.
na de la circulación a la fibrina formada. La segun- También es válido el concepto de que un organismo
da dosis encuentra en plena labor a dicho sistema, y sano puede tolerar un proceso moderado de coagu-
por lo tanto, la fibrina no puede ser eliminada de la lación intravascular con ninguna o pocas manifesta-
circulación y se deposita sobre los endotelios daña- ciones, por lo tanto, los efectos clínicos dependen
dos y oblitera la luz vascular. Si antes de la segunda fundamentalmente de la magnitud y potencia del me-
dosis se administra heparina, se evita la coagulación canismo detonante y en menor grado de los factores
intravascular. También se han comunicado efectos desencadenantes y agravantes.

403
Como ya se dijo, sus dos principales expresiones Se puede sospechar clínicamente, pero el diag-
son el sangramiento y la trombosis. Según el equili- nóstico definitivo y la conducta terapeútica correcta
brio entre las fuerzas de la fibrinólisis y de la coagu- descansan en su mayor parte en los resultados de las
lación, predominará el sangramiento o la trombosis. pruebas de coagulación.
Sin embargo, en la CID severa puede predominar el En la CID es posible que se consuman casi todos
sangramiento. los factores de la coagulación. Por ello, el plasma de
El síndrome se presenta de forma aguda o cróni- la sangre circulante de los pacientes con esta afec-
ca. La forma aguda se observa comúnmente en las ción tiene propiedades similares a las encontradas
complicaciones obstétricas y en las infecciones por en el suero, es decir, que los factores I, II, V y VIII,
gérmenes gramnegativos. Es frecuente en la sepsis así como las plaquetas, se han agotado. También sue-
del recién nacido y en los abortos sépticos. La ma- le haber disminución de otros factores de la coagu-
yoría de los pacientes tienen sangramientos en la piel lación.
y mucosas (manifestados por petequias y hemorra- Frente a un enfermo en el cual se sospeche la
gias) en múltiples sitios de la economía (comunes presencia de este síndrome y se encuentre un fibri-
en incisiones quirúrgicas, en las venipunturas o en
nógeno y un conteo de plaquetas bajos, un tiempo
el sitio de implantación de catéteres).
de protrombina y un TPT – kaolín prolongados (por
El cuadro de alteraciones funcionales por la
deficiencia de factor V y factor VIII, respectiva-
microtrombosis puede estar localizado en distintos
mente), debe sospecharse con mucha fuerza este
órganos: en los riñones con anuria, en los pulmones
diagnóstico.
con un distress respiratorio del adulto, en el SNC
con estados confusionales, en el hígado con necro- La dosificación de los factores de la coagulación
sis hepatocelular, en el corazón con isquemia del es lo ideal y debe realizarse siempre que se pueda.
miocardio, etc. La conversión de la protrombina en trombina li-
La forma crónica se observa sobre todo en las bera de la primera un fragmento inactivo, llamado
neoplasias malignas y en los hemangiomas gigan- fragmento 1 + 2, que se puede detectar en el plasma
tes, generalmente con pocas manifestaciones clínicas. y es indicación de la formación de trombina; ésta
libera del fibrinógeno, para transformarlo en fibrina,
Examenes complementarios el fibrinopéptido A, cuya presencia incrementada en
El concurso del laboratorio de coagulación es fun- el plasma está indicando también actividad trom-
damental en el diagnóstico de una CID. bínica.
La antitrombina III se une a la trombina para
inactivarla, por lo que estará disminuida en este sín-
PRUEBAS DE COAGULACIÓN EN LA CID
drome, en el cual hay una gran producción de
trombina.
Tiempo de protrombina Prolongado La prueba del sulfato de protamina es un indica-
dor de la existencia de monómeros de fibrina circu-
TPT – kaolín Prolongado
lantes.
Fibrinógeno Descendido La lisis de la fibrina por la plasmina dará lugar a
PDF Aumentados la formación de altas cantidades de dímeros D, de
Dímeros D Aumentados gran valor diagnóstico en la CID.
Se observa la presencia de esquistocitos o frag-
Tiempo de trombina Prolongado
mentocitos en la sangre periférica, que son la conse-
Fibrinopéptido A Aumentado
cuencia del pasaje de los eritrocitos por las mallas
Conteo de plaquetas Disminuido de fibrina producidas por las microtrombosis. La
Monómeros de fibrina Positivos ausencia de fragmentación de células rojas no ex-
Antitrombina III Descendida cluye el diagnóstico de CID.
Hay que recordar que en todos estos pacientes hay
Esquistocitos Generalmente
presentes
una fibrinólisis defensiva o reaccional y que la plas-
mina formada no sólo digiere a la fibrina, sino tam-

404
bién al fibrinógeno, por lo tanto, en la fibrinólisis se gulación faltantes se tratan con plasma fresco con-
encuentran aumentados además, los productos de gelado, se utiliza el tiempo de protrombina y el TPT–
degradación del fibrinógeno–fibrina. kaolín como guías terapéuticas.
Como la fibrinólisis puede predominar e incluso Si la fibrinogenopenia es muy importante y ame-
dominar el cuadro clínico, tiene importancia capital naza la vida del paciente, se utiliza el crioprecipita-
distinguir una fibrinólisis primaria (muy rara) de la do en dosis de 1 unidad por cada 3 o 5 kg de peso
fibrinólisis defensiva o reaccional que sigue a una corporal. Recordar que este producto también apor-
CID. O sea, con la fibrinólisis defensiva existe la ta factor VIII y FvW.
llamada fibrinólisis primaria, en la cual se desenca- .
Cuando es severa la trombocitopenia (< 10 109/ L)
dena patológicamente este mecanismo sin que me- se utilizan transfusiones de plaquetas (1 unidad por
die una CID previa. En estos casos se produce una cada 10 kg de peso corporal).
gran cantidad de plasmina, que no sólo actuará so- Como la CID es causada por un exceso de gene-
bre la fibrina y el fibrinógeno, sino que será capaz ración de trombina en el torrente circulatorio, una
de destruir factores plasmáticos de la coagulación. droga como la heparina, que es una potente anti-
El cuadro se parece mucho al de una CID, excepto trombina, podría ser un medicamento muy útil en
en que las plaquetas se mantienen normales. Las estos casos. Sin embargo, su uso está todavía en el
entidades nosológicas que con mayor frecuencia terreno polémico. Algunos autores la recomiendan
desencadenan de forma primaria este mecanismo, sólo en situaciones muy especiales, como la leucemia
aguda promielocítica, la púrpura séptica fulminante
son la cirrosis hepática y las neoplasias del páncreas
y las enfermedades malignas; también en pacientes
y de la próstata.
con acrocianosis o gangrena incipiente por la mi-
Como ya se señaló antes, la fibrinólisis primaria
crotrombosis. Se administra en infusión continua en
es muy rara y siempre que se sospeche en un pa-
dosis de 2 a 5 U/kg/h. Otros la utilizan en bolo (1 000
ciente, debe hacerse todo el esfuerzo posible para
o 2 000 U), seguido de 500 U/h por bomba de infu-
descubrir una CID, la cual nos indicará que aquélla
sión continua.
no es primaria sino defensiva o reaccional. Esto tie-
Hay quienes la aconsejan en las complicaciones
ne importancia desde el punto de vista terapéutico, obstétricas ya mencionadas, aunque debe repetirse
ya que la fibrinólisis primaria siempre se debe tra- que su uso es polémico y otros creen que agrava el
tar, mientras que en la defensiva o reaccional lo que cuadro clínico con sangramientos más intensos.
se trata es la coagulación intravascular. Es necesario recalcar que la fibrinólisis reaccio-
nal es beneficiosa para el paciente y que inhibir este
Tratamiento proceso puede empeorar la evolución del enfermo.
Uno de los pilares en la terapéutica de la CID lo No obstante, si con un tratamiento correcto no cesa
constituye el reconocimiento y tratamiento de la en- la hemorragia, si los factores de la coagulación no
fermedad de base. Esto es posible en casos, como se han recuperado, o si los productos de degrada-
en la sepsis, que debe ser tratada con antibióticos ción del fibrinógeno siguen aumentando y los
adecuados, o en las causas obstétricas, donde es ne- dímeros D sólo están moderadamente incrementa-
cesario corregir el problema rápidamente, pero en dos, se puede pensar en la utilización de un agente
otras ocasiones no se puede controlar la enfermedad antifibrinolítico, como el ácido epsilón-aminocaproi-
primaria, como ocurre en los tumores metastásicos. co, en dosis de 4 a 6 g por vía oral cada 6 h.
Junto a lo anterior es imprescindible administrar pro- Hay reportes de haber obtenido buenos resulta-
ductos sanguíneos para suplir los déficits que tiene dos con la administración de antitrombina III en es-
el paciente en ese momento: los factores de la coa- tos enfermos.

405
55
TRANSFUSIÓN DE SANGRE

La importancia de la sangre fue reconocida por el pero los de mayor importancia clínica son los siste-
hombre desde los primeros tiempos, pues observó mas ABO y Rh.
que cuando ésta se perdía sobrevenía la muerte y
por tal razón le otorgó poderes sobrenaturales. Con Sistema ABO
el descubrimiento de la circulación sanguínea por Generalmente, los anticuerpos contra antígenos de
William Harvey en 1616, se concibió la idea de grupos sanguíneos se producen después de una ex-
administrar la sangre directamente en el torrente posición previa al antígeno, bien sea por embarazo o
circulatorio. Se comenzó transfundiendo sangre de por transfusiones. Una excepción a esta regla es el
animales a seres humanos, con resultados catastró- sistema ABO; en él se crean anticuerpos contra los
ficos. Después se utilizó sangre de seres humanos, antígenos que no se poseen, por ejemplo, un recién
pero también esto fue abandonado por lo engorroso nacido que sea del grupo A, es decir, que sus eritro-
citos tengan antígenos A, a partir de los 3 a 6 meses
del procedimiento y los resultados desafortunados
desarrolla anticuerpos anti-B, que estarán presentes
que se presentaban.
durante toda su vida.
El descubrimiento del sistema sanguíneo ABO
Su frecuencia fenotípica es diferente en distintos
por Landsteiner en 1900 y la introducción del citrato
lugares del mundo.
de sodio como anticoagulante en 1944, hicieron A continuación se expone esta frecuencia, encon-
posible el empleo cada vez mayor de las transfusio- trada por González Corona en una población de do-
nes de sangre en la práctica médica. nantes de sangre en Santiago de Cuba.
Grupos sanguíneos FENOTIPOS DEL SISTEMA ABO
Los antígenos de las células rojas son glicoproteí-
nas o glicolípidos, localizados en la superficie de la Eritrocitos Plasma
A Anti-B
membrana celular. Cada individuo hereda de sus B Anti-A
padres los genes que determinan los antígenos pre- AB -
sentes en dichas células. O Anti-A-B
Los anticuerpos son proteínas (inmunoglobulinas) Frecuencia fenotípica (%)
que se encuentran en el plasma sanguíneo. Ellos se Número O A B AB
producen después de la exposición a un antígeno de donantes
que el individuo no posee. El sistema inmune del 68265 52,10 31,18 13,40 3,32
organismo lo reconoce como extraño y responde con
Sistema Rh
la producción de anticuerpos. La combinación de Fue descubierto por Landsteiner y Wiever en 1940
un antígeno con un anticuerpo en la superficie de la como resultado de sus trabajos experimentales con
célula, inicia una serie de reacciones que pueden el mono Macacus rhesus. El anticuerpo elaborado
llevar a la destrucción de ésta. El principio básico por conejos inmunizados con hematíes del macacus,
de una transfusión efectiva es evitar transfundir un fue denominado anti Rh (las dos primeras letras del
antígeno a un receptor que posee anticuerpos con- apellido del mono). El 85 % de los individuos cau-
tra él. Existen numerosos antígenos diferentes en la casoides expresan este factor y se denominan Rh po-
superficie de los eritrocitos, asociados en sistemas, sitivos y cuando no ocurre así, Rh negativos.

406
El sistema Rh está constituido hasta el presente Sangre completa o total
por unos 44 antígenos distintos, 5 de los cuales re-
Una unidad de sangre completa o total contiene
visten una importancia especial, y son, según la no- 450 ml + 45 ml de sangre, más 63 a 70 ml de solu-
menclatura de Fisher-Race, los siguientes: D, C/c y ción anticoagulante-conservadora. Las soluciones
E/e (los dos últimos se disponen en pares). El antí- anticoagulante-conservadoras contienen más citrato
geno D (factor Rho) de los individuos Rh negativos de sodio del que se requiere y éste capta los iones de
produce anti-D, si reciben sangre Rh positivo. De- calcio del propio paciente, lo que hace su sangre tem-
bido a que los antígenos C y E no son tan inmuno- poralmente incoagulable. Esto no tiene mayores con-
génicos como el D, no se determinan en las pruebas secuencias si se administran hasta tres unidades de
de rutina para la compatibilidad sanguínea. sangre total o plasma, pero si hay que continuar
Existen otros sistemas de grupos sanguíneos transfundiendo, deberán aportarse 5 ml de glucona-
eritrocitarios, pero son el sistema ABO en primera to de calcio por cada unidad adicional de sangre o
instancia y el factor Rho (D) dentro del sistema Rh plasma que sea necesario administrar.
los de mayor importancia clínica, pues están invo- Hay una reducción gradual de la viabilidad de los
lucrados en reacciones hemolíticas transfusionales hematíes relacionada con el tiempo de almacena-
y en casos de enfermedad hemolítica del recién na- miento. Ellos, conservados durante 3 semanas en
cido. Esto no quiere decir que el resto de los siste- citrato fosfato de dextrosa (CPD) o 5 semanas en
mas de grupos no tengan ninguna significación citrato fosfato de dextrosa adenina (CPDA), repre-
clínica, y de hecho, algunos de sus anticuerpos han sentan una recuperación media del 70 %, que es la
probado ser “asesinos”. Sin embargo, la existencia mínima aceptable. Por otra parte, el metabolismo ce-
de estos anticuerpos es comparativamente rara, por lular durante el período de conservación produce una
lo que no se investigan de rutina en los procedimien- disminución del pH al aumentar la concentración de
tos previos a la transfusión. ácido láctico, por lo que se elevan los niveles plas-
máticos de potasio y disminuyen las tasas de ATP y
Preparados de sangre de uso clínico 2, 3 –DPG (difosfoglicerato).
La sangre total está indicada en aquellos pacien-
La sangre ha sido transfundida con éxito durante más
tes con hemorragia aguda masiva, que necesitan los
de 60 años. En este tiempo la práctica transfusional
hematíes para el transporte de oxígeno y el plasma
ha cambiado radicalmente debido al desarrollo de para la expansión del volumen. Una pérdida aguda
los métodos de extracción y conservación de la san- de sangre hasta un tercio del volumen sanguíneo total
gre. Los anticoagulantes y las soluciones conserva- del paciente (1 600 ml para un adulto de 70 kg),
doras que se emplean en la actualidad hacen posible podría ser manejada con soluciones de electrólitos y
preservarla por largos períodos. La separación coloides. Los adelantos en el uso de componentes
aséptica de sus componentes, tanto celulares como de la sangre han convertido la utilización de sangre
plasmáticos, ha sido facilitada por la introducción total en una rareza.
de sistemas cerrados de material plástico que pre-
vienen la contaminación durante el proceso de ex- Componentes de la sangre
tracción y elaboración de ellos. El término componente sanguíneo generalmente
Las células sanguíneas dependen de un delicado hace referencia a un elemento separado de una uni-
equilibrio bioquímico para lograr su integridad du- dad de sangre total. Derivado plasmático indica un
rante el almacenamiento, y tienen especial impor- producto separado de un gran volumen de plasma
tancia la concentración de glucosa y trifosfato de mezclado, mediante un proceso de fraccionamien-
adenosina (ATP) y el pH del medio. Para los hema- to. A continuación se exponen los principales com-
tíes, este balance es más efectivo si se conservan a ponentes de la sangre utilizados en la práctica
una temperatura entre 1 y 6ºC, mientras que para las médica.
plaquetas y granulocitos es mejor la temperatura am- Concentrado de hematíes (CH). Este preparado
biente (20 a 24ºC). La preservación de los factores se obtiene al extraer gran parte del plasma de una
lábiles de la coagulación es satisfactoria a una tem- unidad de sangre total. A los concentrados de hema-
peratura de –18ºC, y aún mejor a – 30ºC o más baja. tíes se les ha removido el 90 % del plasma y se les

407
han añadido 100 ml de una solución especial que Productos de sangre irradiados. Son productos
contiene preservativos adicionales para incremen- de la sangre que se han expuesto a una cantidad de-
tar el tiempo de almacenamiento y disminuir la vis- terminada de radiación (25 Gy) con el irradiador de
cosidad. rayos gamma, para que los linfocitos T sean incapa-
Los CH se transfunden para aumentar la capa- ces de replicarse. Éstos se rotulan con la palabra
cidad de transporte de oxígeno a los pacientes con “irradiado”, y no ofrecen peligro para el transfusio-
anemia, que no necesitan expansión del volumen san- nista o el receptor.
guíneo. Elevan el hematócrito en 3 % y la hemoglo- Plasma fresco congelado (PFC). Se trata de plas-
bina en 10 g/L. Cada unidad debe administrarse en ma obtenido de un solo donante por donación nor-
2 o 3 h (no exceder de las 4 h). Sólo se puede añadir mal o plasmaféresis y congelado dentro de las 6 h
solución salina fisiológica al 0,9 % para disminuir después de extraída la sangre a una temperatura de
–30ºC o menos. Contiene todos los factores de la
la viscosidad.
coagulación. Después de descongelado puede man-
Concentrado de hematíes pobre en leucocitos. Son
tenerse a 4 + 2ºC por no más de 24 h.
CH a los cuales se les ha disminuido el contenido de
El PFC no debe administrarse como expansor del
.
leucocitos a menos de 5 108. Se utilizan para pre-
volumen, ni como aporte nutricional de proteínas ni
venir la recurrencia de reacciones febriles no hemo- para mejorar la curación de heridas.
líticas. En la actualidad, la mayoría de los bancos de Plasma congelado. Éste es el plasma separado de
sangre eliminan rutinariamente la capa leucoplaque- la sangre total dentro de las 12 h después de la ex-
taria en el proceso de elaboración de los componen- tracción. Contiene como mínimo el 50 % de los
tes y todos los CH son pobres en leucocitos. factores V y VIII iniciales y puede conservarse a –
Productos plaquetarios. El plasma rico en pla- 30ºC durante un período de 12 meses.
quetas (PRP) se obtiene después de la centrifugación Crioprecipitado (crío). Está compuesto por 80 a
de la sangre total. A partir de este PRP se logra el 120 unidades de factor VIII, 250 mg de factor de
concentrado de plaquetas mediante una segunda von Willebrand, 20 a 30 % del factor XIII presente
centrifugación. Los concentrados plaquetarios (CP) en una bolsa de sangre y fibronectina. Puesto que el
.
contienen aproximadamente 6 1010 plaquetas. Se- crío contiene anticuerpos ABO, debe administrarse
gún la bolsa de plástico utilizada, éstas son viables como plasma ABO compatible, pero sólo cuando el
durante 5 días o más si se mantienen a 22ºC someti- volumen que se va a emplear es grande en relación
das a una agitación horizontal constante. Los CP con- con la masa de eritrocitos del receptor.
tienen pocos eritrocitos y no se requiere que sean Concentrado de factor VIII. Se prepara a partir
ABO compatibles; sin embargo, cuando lo son se me- de grandes volúmenes de plasma normal y también
jora la recuperación y sobrevida de las plaquetas. puede obtenerse por tecnología recombinante. Los
Los CP pueden almacenarse en congelación a concentrados de factor VIII constituyen el tratamien-
-80ºC con el método del dimetilsulfóxido como to de elección para los casos severos de hemofilia A.
Concentrado de factor IX. En las últimas dos dé-
crioconservante. Más o menos las dos terceras par-
cadas el complejo protrombínico fue empleado en
tes de los pacientes que reciben transfusión de pla-
el tratamiento de las deficiencias congénitas o ad-
quetas, a largo plazo desarrollan anticuerpos contra
quiridas de los factores II, VII, IX y X. El concen-
los antígenos plaquetarios. Estos anticuerpos des-
trado de factor IX preparado en la actualidad sólo
truyen con rapidez las plaquetas transfundidas y el contiene trazas de los factores II, VII y X.
paciente no responde al tratamiento (paciente refrac- Concentrados de factor VII. Estos concentrados
tario). derivados del plasma y recombinantes están dispo-
Transfusión de granulocitos. El uso de transfu- nibles para el tratamiento de las deficiencias de este
siones de granulocitos (únicos leucocitos utilizados factor.
para ellas), en enfermos adultos ha disminuido en la Concentrados de factor XIII. Son preparados de
actualidad, debido a la disponibilidad de nuevos an- plasma o placenta y se emplean para corregir los
tibióticos, las reacciones adversas que se presentan déficits de éste.
con su empleo y el advenimiento de factores de cre- Agentes oncóticos. Las soluciones de albúmina
cimiento recombinantes. (94 % de albúmina y 4 % de otras proteínas del plas-

408
ma) están disponibles en dos tipos de preparados: CUADRO 55.1
SELECCIÓN DE COMPONENTES CELULARES
solución al 5 %, que es oncóticamente equivalente
DE LA SANGRE COMPATIBLES
al plasma, y también al 25 %. La fracción proteica PARA TRANSFUSIÓN
del plasma tiene un 83 % de albúmina y un 17 % de
otras proteínas, es un elemento intermedio entre la Opción de componentes celulares
albúmina y el plasma y está disponible en solución
Receptor A B O AB Rh Rh
al 5 %. positivo negativo
Estos productos están indicados para proveer ex-
A 1rª 2dª
pansión del volumen en aquellas situaciones en que
B 1rª 2dª
las soluciones de electrólitos no sean adecuadas.
La albúmina al 25 % se usa en las condiciones O 1rª
que requieren la extracción de líquido de los tejidos. AB 2dª 3rª 4tª 1rª
Inmunoglobulinas séricas (IgS). Es una solución Rh positivo 1rª 2dª
acuosa concentrada de gammaglobulinas con títulos
Rh negativo 1rª
altos de anticuerpos. Se utiliza para proveer inmu-
nidad pasiva o para tratar hipo o agammaglobuline-
mias, e infecciones bacterianas y virales en pacientes CUADRO 55.2
SELECCIÓN DE COMPONENTES PLASMÁTICOS
inmunodeprimidos. DE LA SANGRE
Las IgS inespecíficas se obtienen de un grupo
grande de donantes no seleccionados y se emplean Opción de componentes plasmáticos
para aumentar los niveles de globulinas gamma y
facilitar la respuesta inmune. Las IgS específicas se Receptor A B O AB Rh Rh
preparan de donantes seleccionados que poseen tí-
Positivo negativo
tulos altos de anticuerpos contra antígenos conoci-
A 1rª 2dª
dos (hepatitis B, rabia, rubéola, parotiditis, etc.).
B 1rª 2dª
Selección de sangre O 2dª 3rª 1rª 4tª
para transfusiones AB 1rª
Siempre que sea posible, los pacientes deben recibir Rh positivo 1rª 2dª
componentes sanguíneos isogrupo (del mismo grupo Rh negativo 1rª
ABO y factor Rh); sin embargo, existen circunstan-
cias en que es necesario adoptar soluciones alterna-
tivas: el empleo de sangre heterogrupo. no existe disponibilidad de estos componentes, los
Cuando se utiliza sangre total o completa, se se- médicos de asistencia y del servicio de transfusio-
lecciona la del mismo grupo ABO del paciente. Si nes, de común acuerdo, valorarán el estado del en-
se transfunden componentes que contienen eritroci- fermo y seleccionarán la alternativa más aconsejable.
tos, éstos tienen que ser compatibles con el plasma Si se decide emplear componentes celulares Rh po-
del receptor (cuadro 55.1). Cuando el componente sitivos en receptores Rh negativos, existirá la posi-
contiene plasma, éste debe ser compatible con los bilidad de aloinmunización al factor Rho (D) en un
eritrocitos del receptor (cuadro 55.2). Ni los CP ni 70 u 80 % de los casos. En mujeres Rh negativo en
el crío requieren ser compatibles. edad reproductiva que sean transfundidas con com-
Los receptores Rh positivos reciben rutinariamen- ponentes Rh positivos, hay que considerar el sumi-
te sangre Rh positiva. Puede emplearse sangre Rh nistro de inmunoglobulina Rh (IgRh) en dosis
negativa en enfermos Rh positivos sólo en circuns- adecuadas para prevenir la inmunización al factor
tancias especiales [urgencia extrema, pacientes D- Rho (D). La administración de IgRh deberá realizar-
parcial (antiguo Du)], pero ésta debe reservarse para se antes de transcurridas 72 h de la transfusión.
los Rh negativos. A los receptores negativos se les Sustitutos de hematíes. Los transportadores sinté-
transfunde sangre Rh negativo. En los casos en que ticos de oxígeno todavía están en etapa experimental.

409
Los sustitutos de sangre en desarrollo se dividen en Las complicaciones que parecen ser específicas
tres categorías principales: de las transfusiones masivas son:

1. Productos que utilizan hemoglobina libre en 1. Agravamiento de la anoxia hística. Se ha plantea-


forma de moléculas en solución. do que el uso de concentrados de hematíes con-
2. Hemoglobina microencapsulada en liposomas. servados, pobres en 2,3 DPG, es la causa de la
3. Suspensiones de perfluocarbonos. insuficiente oxigenación de los tejidos después de
transfusiones masivas (curva de disociación del
Los más estudiados hasta el presente son los ba- oxígeno desviada a la izquierda).
sados en modificaciones de la hemoglobina. La di- 2. Alteraciones metabólicas. La administración
ferencia con la sangre natural es que su permanencia masiva de sangre almacenada provoca una hiper-
en la circulación es de 48 h como máximo, por lo caliemia que por lo general no constituye un pro-
que no se pueden considerar como remplazos abso- blema, a menos que el paciente ya presente esta
lutos de la sangre. alteración antes de la transfusión. También suele
Transfusión de sangre incompatible conocida. En haber toxicidad debida al citrato e hipocalcemia.
ocasiones, los médicos tienen que transfundir a un Deben añadirse 10 ml de gluconato de calcio al
paciente para el cual no existe sangre compatible. 10 % a cada litro de sangre citratada suministrada.
Deben realizarse esfuerzos para determinar la causa 3. Hipotermia. La rápida infusión de una gran canti-
dad de sangre a 4ºC puede provocar un descenso
de la incompatibilidad, que muchas veces es moti-
de la temperatura central y originar trastornos del
vada por un autoanticuerpo, aloanticuerpo contra un
ritmo e incluso paro cardíaco. Esto se previene si
antígeno de alta incidencia, múltiples anticuerpos de
se calienta la sangre antes de utilizarla.
diferentes especificidades o por una anomalía técnica.
4. Transfusiones de microagregados. Cuando la san-
Se debe valorar el riesgo-beneficio de la transfu-
gre es almacenada 5 días o más a 4ºC se forman
sión y decidir cual alternativa terapéutica es la más
numerosos microagregados (plaquetas degenera-
conveniente. En caso de extrema urgencia, se em-
das, leucocitos o sus residuos). Para algunos esto
plearán concentrados de hematíes incompatibles del no tiene mucha importancia, pero otros describen
mismo grupo ABO y factor Rho (D) que el paciente. insuficiencia pulmonar con hipoxia.
Ante tal coyuntura se realiza una “prueba cruzada 5. Alteraciones de la hemostasia. Se debe a la dilu-
biológica”: para ello se administran 25 a 50 ml de ción de los factores de la coagulación, ya que la
las células incompatibles, se observa la respuesta clí- sangre almacenada contiene bajos los factores V
nica del enfermo y se chequea una muestra postrans- y VIII, y las plaquetas no son funcionales.
fusional a los 30 min en busca de suero teñido de
hemoglobina. Si no hay síntomas adversos o hemó- Reacciones transfusionales
lisis, se administra el resto de la unidad lentamente Aproximadamente un 3 % de los individuos que re-
con un monitoreo cuidadoso. Si la necesidad de san- ciben transfusiones sanguíneas experimentan un
gre es vital, la unidad se utiliza sin ninguna prueba efecto adverso llamado reacción transfusional. Estas
especial, pero el equipo médico responsable debe reacciones se producen por mecanismos inmunoló-
estar preparado para tratar cualquier reacción que gicos y no inmunológicos (cuadro 55.3). Toda indi-
se presente. cación de transfusión constituye un riesgo para el
paciente, por lo que se deberá contraponer con los
Transfusiones masivas beneficios terapéuticos que se deseen alcanzar y se-
Se dice que una transfusión es masiva cuando el apor- gún el resultado de este análisis, proceder a la trans-
te de sangre en el transcurso de 24 horas se aproxi- fusión en caso de que los beneficios sobrepasen sus
ma o excede el volumen sanguíneo del paciente. Los riesgos potenciales.
problemas clínicos que sobrevienen en quien la re- Las reacciones transfusionales que se presentan
cibe son debidos, en primer lugar, a la condición durante la administración del producto o componente
que provoca la hemorragia y en segundo lugar, a la sanguíneo, o poco tiempo después (minutos u ho-
calidad y cantidad de la sangre administrada. ras), se llaman inmediatas; las que se producen

410
CUADRO 55.3 la perfusión y en la región lumbar, y sensación de
REACCIONES TRANSFUSIONALES opresión torácica. A veces hay hipotensión, hemo-
I. Inmunológicas globinuria y hemorragia, e incluso hay casos que
Inmediatas Retardadas evolucionan hacia la insuficiencia renal aguda y
• Hemolítica aguda • Hemolítica tardía muerte.
• Febriles • Aloinmunización Cuando hay sospecha de RHTA se procede de la
• Daño pulmonar • Enfermedad injerto- siguiente manera:
• Anafilaxia contra-huésped
• Alérgicas • Púrpura postransfu-
sional 1. Detener la transfusión, pero mantener canalizada
la vena.
II. No inmunológicas 2. Comprobar los registros administrativos para ase-
Inmediatas Retardadas
gurarse de que el paciente está recibiendo la san-
• Hemólisis no inmunológicas: • Trasmisión de
• Inyección a presión excesiva enfermedades: gre correcta.
• Perfusión con aguja • Bacterianas 3. Tomar una muestra de sangre del paciente para
demasiado fina • Virales comprobar el grupo ABO y observar si existe he-
• Sobrecalentamiento • Parasitarias moglobina libre. Realizar la prueba directa de
• Congelación previa de los hematíes
• Hematíes con anomalías congénitas
antiglobulina y repetir la prueba cruzada.
• Hematíes alterados por sepsis 4. Es conveniente comprobar de nuevo los grupos
• Septicemia sanguíneos de la sangre del donante. Hacer un
• Embolismo estudio microbiológico de la unidad de sangre y
• Sobrecarga circulatoria
• Transfusiones masivas:
un hemocultivo del paciente. Investigar si hay o
• Deficiencia de 2, 3 DPG no CID y vigilar la función renal.
• Hiper e hipocaliemia
• Toxicidad al citrato e hipocalcemia Reacciones febriles no hemolíticas. Son las más
• Hipertermia
• Microagregados
frecuentes y se presentan en alrededor del 2 % de
• Coagulopatía dilucional las transfusiones. Hay fiebre con escalofríos que se
inicia en los casos severos a los 30 min de comenzar
la transfusión, pero que a veces aparece al cabo de
transcurrido algún tiempo (días, años) se denomi-
varias horas o después de finalizada ésta. Puede ha-
nan retardadas.
A continuación se describen algunas de las reac- ber cefalea, enrojecimiento, ansiedad y dolor mus-
ciones transfusionales más importantes. cular. Usualmente responde bien a los antibióticos.
Reacción hemolítica transfusional aguda (RHTA). Daño pulmonar agudo asociado a transfusión.
Por lo general tiene lugar después de la administra- Cuando el edema pulmonar complica una transfu-
ción de sangre ABO incompatible. La causa de este sión, por lo general se debe a hipervolemia, pero en
accidente es a menudo la identificación incorrecta ocasiones aparece en pacientes que han sido aloin-
del paciente o de la muestra de sangre. Las reaccio- munizados a antígenos leucocitarios. Los síntomas
nes más severas ocurren cuando los hematíes trans- respiratorios (distress) están precedidos de fiebre y
fundidos interactúan con los anticuerpos del receptor escalofríos, y el edema pulmonar se produce sin que
(donante A o B o un receptor O). La interacción de exista evidencia de insuficiencia cardíaca. La radio-
anticuerpos transfundidos con los hematíes del re- grafía de tórax muestra infiltrados pulmonares sin
ceptor raramente produce síntomas, sin embargo, a cardiomegalia, originados por agregados leucocita-
veces se observa un incremento en la destrucción de rios que obstruyen la circulación pulmonar. Allí
hematíes. producen una reacción en la que interviene el com-
Las reacciones hemolíticas agudas por incompa- plemento, que es la causa del edema pulmonar. Si
tibilidad ABO son las más graves, no obstante, anti- se sospecha una reacción pulmonar aguda, la trans-
cuerpos de otros sistemas de grupos sanguíneos fusión debe detenerse inmediatamente y no reanu-
pueden ocasionar este tipo de reacción (Rh, Kell, darla aunque desaparezcan los síntomas. Esta
Duffy, etc.), pero casi nunca son tan serias. El pa- complicación se trata con adrenalina, corticoides y
ciente suele quejarse de fiebre, dolor en el lugar de oxígeno, y a veces requiere de asistencia ventilatoria.

411
Reacciones alérgicas. La urticaria constituye el agentes con mayor prevalencia en una población
segundo tipo más frecuente de reacción postransfu- determinada; sin embargo, no todos ellos son detec-
sional y se presenta en el 1 % de las transfusiones. tados por estas pruebas, lo que depende del grado
Se caracteriza por exantema, ronchas y prurito, sur- de sensibilidad de éstas y del momento en que se
gidas durante la transfusión o después de ésta, sin hacen demostrables los marcadores serológicos en
acompañarse de fiebre u otros síntomas. el donante (período de ventana). Por lo tanto, pro-
Tienen su causa en anticuerpos del receptor que ductos sanguíneos con resultados negativos en las
reaccionan con antígenos solubles en el plasma del pruebas de tamizaje pueden trasmitir una infección
donante. Se interrumpe la transfusión y se administra determinada al receptor, por lo que siempre deberá
un antihistamínico oral o parenteral; si los síntomas
evaluarse con rigurosidad el riesgo-beneficio ante
desaparecen con la medicación, puede reanudarse.
la indicación de una transfusión.
Si la urticaria es intensa, es prudente interrumpirla
Fuentes alternativas de sangre para transfusión.
definitivamente.
Con el descubrimiento del contagio del SIDA por
Septicemia. Casi 3 de cada 1 000 unidades de san-
gre o de componentes sanguíneos están contamina- transfusión, fue tomando fuerza la utilización de
dos con una pequeña cantidad de bacterias. Esto por fuentes de sangre más seguras, entendiéndose por
lo general no constituye un problema, ya que la ma- tal aquélla que es incapaz de trasmitar enfermeda-
yor parte de los productos sanguíneos se almacenan des infecciosas al receptor. Se denomina sangre
a temperaturas que inhiben el crecimiento de estos autóloga a la obtenida de la misma persona que va
microrganismos. Las manifestaciones clínicas inclu- a recibir la transfusión. Existen varias modalidades
yen fiebre, escalofríos, hipotensión y muerte. La de ella.
transfusión debe detenerse de inmediato y tratarse
el shock séptico del enfermo. a. La donación preoperatoria. Se utiliza principal-
Trasmisión de enfermedades. La trasmisión de mente en cirugía electiva en pacientes seleccio-
agentes infecciosos ha devenido una de las compli- nados.
caciones más temibles en la práctica de las transfu- b. La hemodilución intraoperatoria. La sangre se
siones de sangre, sobre todo después de la aparición colecta al comienzo de la cirugía y luego se
del SIDA en la pasada década de los 80, y el conoci- transfunde durante o al final del acto quirúrgico.
miento de su contagio a través de ellas. Esto condu- c. Recuperación intraoperatoria. La sangre se aspira
jo a un alerta en la conciencia de los médicos y del campo operatorio y después de filtrarla o la-
pacientes con respecto a las complicaciones infec- varla (por medios mecánicos o manuales) se
ciosas de la transfusión, así como hacia la búsqueda transfunde al paciente.
de la llamada “sangre segura” para realizarla.
d. Recuperación posoperatoria. La sangre se colecta
Los agentes infecciosos causantes de enfermeda-
de los dispositivos de drenaje y se reinfunde al
des trasmitidas por transfusión pueden ser virus,
paciente.
bacterias o protozoos, que comparten las siguientes
características: permanencia prolongada en la cir-
culación sanguínea, lo que da lugar al estado de por- Una variante intermedia entre la utilización de
tador o de infección latente; provocan enfermedades sangre alógena y sangre autóloga, es la donación
con largos períodos de incubación; son capaces de dirigida (designada), en la cual la sangre que se ob-
causar infecciones asintomáticas y de ser estables tiene de un donante es para ser transfundida a una
en la sangre almacenada, y en muchos casos, en las persona determinada. En esta modalidad de transfu-
fracciones plasmáticas. sión, el paciente solicita sangre de sus familiares o
En la mayoría de los países existen pruebas sero- amigos asumiendo que ésta es más segura que la de
lógicas adecuadas para el tamizaje masivo de los los donantes voluntarios.

412
56
LEUCEMIAS

Las leucemias son la proliferación de un clono anor- Por lo general, no es posible hacer el diagnóstico
mal de células hematopoyéticas que a menos que clínico de leucemia, a menos que la masa tumoral
sean tratadas, conducen a la muerte del paciente en sea, por lo menos de 109 células. Esto tiene gran im-
un corto período de tiempo. portancia, porque después del tratamiento se puede
Sus características esenciales son: llegar a la conclusión de que el paciente está en re-
misión completa, y sin embargo, todavía tiene mu-
1. Pobre respuesta a los mecanismos reguladores chas células leucémicas que no son detectables por
normales. métodos clínicos. Con la utilización de la reacción
2. Disminuida capacidad de la diferenciación ce- en cadena de la polimerasa (PCR) se descubre una
lular normal. célula maligna entre 100 000 sanas y ha mejorado
3. Su habilidad para expandirse a expensas de las mucho el hallazgo de enfermedad residual mínima.
líneas normales mieloides y linfoides y por
Frecuencia y etiología
ende, impedir el crecimiento de las células he-
matopoyéticas normales. Todas las variedades de leucemia se presentan a cual-
quier edad, sobre todo en el sexo masculino, aunque
Las células hematopoyéticas pierden su capaci- este predominio es menor en las agudas, pero sin
dad de diferenciación, pero continúan proliferando lugar a dudas esta forma es más frecuente antes de
de una manera incontrolada y provocan la acumu- los 30 años, disminuye después y vuelve a aumentar
lación de células inmaduras en la médula ósea, en las edades finales de la vida. La aguda linfoblás-
tica es más común en los niños y la no linfoblástica,
mieloides en el caso de la leucemia mieloblástica y
en los adultos. La leucemia mieloide crónica se ma-
linfoides en la leucemia linfoblástica. Estas células,
nifiesta sobre todo entre los 25 y 45 años, mientras
llamadas blastos, después de remplazar al tejido he-
que la linfoide crónica aparece después de los 45.
matopoyético normal, pasan al torrente circulatorio
Los avances en los estudios citogenéticos y mole-
e infiltran los órganos, como el bazo, el hígado, los
culares están aportando datos sobre la etiología de
ganglios linfáticos, etc., y luego entran de nuevo a las leucemias, y se han implicado los virus, las ra-
la circulación. diaciones, los agentes alquilantes y otras drogas, etc.
En el individuo sano, las células mieloides siguen Los agentes virales son causa de leucemia en algu-
una secuencia fija, se dividen hasta la etapa del nos animales y por lo menos en una leucemia huma-
mielocito y a partir de entonces se diferencian, pa- na (la de células T adultas).
san a la circulación y mueren mediante un mecanis- Radiaciones ionizantes. Hay una alta incidencia
mo llamado apoptosis (muerte celular programada). de leucemia entre los pobladores de Hiroshima y
En las células leucémicas la apoptosis es parcial- Nagasaki, así como en pacientes tratados con radia-
mente suprimida y la célula es capaz de dividirse ciones.
casi de forma indefinida. El resultado es una masa Agentes alquilantes. Han sido reportados muchos
celular cada vez mayor que no muere en una secuen- casos de aparición de leucemia aguda en pacientes
cia ordenada y que retiene su capacidad de creci- con enfermedades malignas tratados con citostáti-
miento; ella lleva al paciente a una aplasia funcional, cos, sobre todo con drogas alquilantes. Otras, como
y provoca su muerte por hemorragia o infección. el cloranfenicol, el benceno, la fenilbutasona, etc.,

413
pueden producir aplasia medular, con la presenta- leucemia linfoblástica aguda (LLA) y 8 en la leuce-
ción posterior, en quienes sobreviven, de una leuce- mia mieloblástica aguda (LMA).
mia aguda.
Herencia. Se conoce la mayor incidencia de leu- 1. Leucemia linfoblástica
cemias en la trisomía de Down, la anemia de Fanconi, L1: Leucemia aguda de la niñez
el síndrome de Bloom, etc. L2: Leucemia aguda del adulto
Mutaciones cromosómicas. Se han descrito múl- L3: Leucemia tipo Burkitt
tiples alteraciones cromosómicas en casi todos los 2. Leucemia mieloblástica
tipos de leucemia. M0: Mielocítica mínimamente diferenciada
En la actualidad se invocan 2 mecanismos impor- M1: Mielocítica sin maduración
tantes en la transformación celular maligna: M2: Mielocítica con maduración
1. Los protoncogenes M3: Promielocítica
2. Los genes supresores de tumores M4: Mielomonocítica
M5: Monocítica
Los protoncogenes normalmente intervienen en M6: Eritroleucemia
el crecimiento y diferenciación de las células nor- M7: Megacariocítica
males, y los genes supresores de tumores, como su
nombre indica, suprimen el desarrollo de células ma- En la práctica se han encontrado dificultades para
lignas. Cuando por cualquier motivo (radiaciones,
la diferenciación de algunos de estos subgrupos. En
agentes quimioterapéuticos, etc.), estos mecanismos
la actualidad los criterios prevalecientes son los si-
se alteran, el resultado es la transformación maligna.
guientes:
L1: Corresponde a linfoblastos pequeños, muy
parecidos unos a otros, con citoplasma escaso y au-
LEUCEMIAS AGUDAS sencia de nucléolos o poco definidos. Se observa
más en niños.
Clasificación L2: Se compone de linfoblastos más grandes que
los del tipo I, baja relación núcleo-citoplasma,
Las leucemias agudas se dividen en dos grandes gru-
nucleólo prominente e irregularidad de la membra-
pos: leucemia aguda linfoblástica y leucemia aguda
no linfoblástica o leucemia mieloblástica aguda. La na nuclear. Se presenta sobre todo en adultos.
primera responde mejor al tratamiento que la segunda. L3: Está compuesto también por células grandes
En el adulto, alrededor del 10 % de las leucemias pero homogéneas, con citoplasma abundante y
agudas son linfoblásticas y el resto no linfoblásti- vacuolas. Nucléolos prominentes.
cas. En realidad, tanto unas como otras constituyen Los tipos L1 y L2 comprenden más del 95 % de
un grupo heterogéneo de trastornos, cuya clasifica- todas las LLA. Los pacientes con L3 tienen una ca-
ción dependía en el pasado del estudio morfológico. tegoría diferente y no deben ser considerados como
Hoy, el mejor conocimiento de las líneas celulares una LLA sino clasificados como un linfoma no
hematopoyéticas y la utilización de nuevas técni- Hodgkin del tipo de células pequeñas no hendidas y
cas, ha permitido clasificaciones más útiles de estas dividido en el tipo Burkitt o no Burkitt, según sus
entidades nosológicas. características morfológicas.
En 1976, el Grupo Cooperativo Franco–Ameri- En cuanto a los 8 subgrupos en que el grupo co-
cano–Británico (FAB), basándose en la morfología operativo FAB clasifica a las leucemias agudas no
de las células leucémicas, tanto en la médula como linfoblásticas o mieloblásticas (cuadro 56.1), algu-
en la sangre periférica, y utilizando el método de nos de ellos son bien conocidos en la literatura mé-
tinción de Romanowsky y algunas técnicas citoquí- dica desde hace años.
micas, hizo una clasificación de las leucemias agu- M0: Mieloblastos mínimamente diferenciados, a
das, modificada en posteriores reuniones del mismo veces difícil de diferenciar de la L2.
grupo. La clasificación FAB acepta la heterogenei- M1: Mieloblastos sin maduración. No tienen grá-
dad de estas leucemias y reconoce 3 subgrupos en la nulos ni bastoncillos de Auer.

414
CUADRO 56.1
CLASIFICACIÓN FAB DE LAS LEUCEMIAS MIELOBLÁSTICAS AGUDAS

Subtipo Morfología Citogenética Histoquímica Citometría flujo

M0 Mieloblastos indiferenciados MPO -


NSE - CD 13; 33
PAS -
M1 Pocos mieloblastos con Trisomía 8
gránulos y bastoncillos de Monosomía 5; 7 MPO + CD 13; 33; 34
Auer NSE - HLA – DR +
PAS -

M2 Mieloblastos con Trisomía 8 MPO + CD 13; 15; 33; 34


diferenciación Monosomía 5; 7 NSE - HLA – DR +
t ( 8; 21 ) PAS -

M3 Promielocitos. Abundantes t (15; 17) MPO ++ CD 13; 15; 33


bastoncillos de Auer NSE - HLA – DR -
PAS -
C+

M4 Mielomonocítica Trisomía 8 MPO + CD 11b; 13; 14; 15; 33


Monosomía 5; 7 NSE + HLA – DR +
Inv 16 (variante eosinofílica) C +

M5 Monocítica t (4; 11) MPO - CD 11b; 13; 14; 15; 33


t (9; 11) NSE + HLA – DR +
PAS +
C-

PAS +
M6 Eritroleucemia Trisomía 8 Glicoforina A+ CD 33
Monosomía 5; 7 Espectrina + HLA – DR +

MPO -
M7 Megacariocítica PAS +
FvW + CD 33; 41
GPIb, IIb / IIIA+

MPO = Mieloperoxidasa C = Cloroacetato


NSE = No específica esterasa FvW = Factor de von Willebrand
PAS = Ácido peryódico de Schiff GPIb, IIb / IIIA+ = Marcadores de superficie plaquetarios

M2: Mieloblastos con maduración. El 50 % de las monoblastos en la sangre periférica y otra muy
células son mieloblastos y promielocitos y el poco diferenciada con blastos de gran tamaño
resto son otras de la serie granulocítica. y nucléolos prominentes.
M3: Más del 80 % son promielocitos con granula- M6: Eritroleucemia. Es común encontrar una gran
proporción de eritroblastos en la médula ósea
ciones azurófilas y numerosos bastones de Auer.
y también en la sangre periférica. Ellos mues-
Hay una variante hipogranular.
tran anormalidades (núcleos múltiples y de for-
M4: Mielomonocítica. Se caracteriza por una mez- ma anormal, formas megaloblastoides, etc.).
cla de mieloblastos y monoblastos. En la san- Hay también mieloblastos y promielocitos. A
gre periférica hay más de un 20 % de monocitos medida que progresa la enfermedad, van dis-
y promonocitos. minuyendo los eritroblastos y por último son
M5: Monocítica pura. Adopta dos formas. Una bien remplazados casi en su totalidad por mielo-
diferenciada con promonocitos, monocitos y blastos.

415
M7: Leucemia aguda megacarioblástica. Ésta fue ocasiones se encuentra una infección respira-
definida como un nuevo subtipo de las leuce- toria o del tracto genitourinario, pero por lo
mias agudas no linfoblásticas por el Grupo Co- común no se puede precisar la causa de ésta.
operativo FAB en 1985. 3. Manifestaciones bucales preponderantes. Existe
Es posible que comprenda muchos casos gingivitis, hemorragias y sepsis oral, que res-
diagnosticados previamente como mielofibrosis ponden mal al tratamiento local.
aguda. La médula ósea es con frecuencia 4. Dolores óseos y articulares. Estas expresiones,
fibrótica y casi imposible de aspirar. Los pa- más frecuentes en los niños, se suelen confun-
cientes tienen pancitopenia, mielofibrosis y dir con un reumatismo articular agudo o me-
médula infiltrada de megacarioblastos. Por lo nos probable con una artritis reumatoidea. A
general no hay esplenomegalia. Los blastos lle- veces hay dolor a la presión en las partes óseas,
gan a ser el 30 % o más de las células de la sobre todo en el esternón.
médula. Son 2 o 3 veces más grandes que los 5. Hemorragias. No es raro que la primera mani-
linfocitos normales y se asemejan a los mielo- festación que note el paciente y que lo hace
blastos indiferenciados; pueden ser binucleados consultar a su médico, sea la aparición de pete-
y con vacuolas en el citoplasma. Rara vez se quias, epistaxis o cualquier otra manifestación
ven nucléolos. La respuesta al tratamiento con hemorrágica.
citostáticos es mala. El trasplante alogénico es
6. Linfadenopatías. Se presentan principalmente
la mejor opción.
en las leucemias linfoblásticas del niño.
7. Participación de otros sistemas. No es frecuen-
La mieloperoxidasa y la cloroacetato esterasa son
te como inicio de la enfermedad, pero también
útiles para distinguir las células mieloides de las
se encuentran síntomas atribuibles a infiltracio-
linfoides. La esterasa no específica tiñe las células
nes del sistema nervioso central, ojos, tracto
monocíticas incluyendo los monoblastos. La glico-
digestivo, etc.
forina A y la espectrina se encuentran en los blastos
8. Comienzo insidioso. El paciente nota debili-
en la M6 y los antígenos plaquetarios en la M7.
dad progresiva, pérdida de peso, febrícula y pa-
Cuadro clínico lidez.
Se expondrá el cuadro clínico que se encuentra en
En el período de estado de la enfermedad, el cua-
cualquier tipo de leucemia aguda. Cuando se des-
criban en particular las mieloblásticas y las linfo- dro clínico estará dado por la intensificación de los
blásticas, se hará referencia a los síntomas y signos síntomas de comienzo o por la adición de otros
particulares de algunos subtipos de esta afección. nuevos.
Los síntomas de la leucemia aguda dependen en La anemia, uno de los fenómenos más constan-
primer lugar del grado de afectación de la hemato- tes, es de grado variable, aunque generalmente es
poyesis y en menor grado de la invasión de otros intensa. Su establecimiento depende de varios fac-
órganos de la economía. Muchas veces el inicio de tores: insuficiente producción de sangre, hemólisis,
la enfermedad es brusco y permite sospechar el diag- hemorragias o una combinación de ellos.
nóstico, pero en otras, el cuadro inicial es más insi- Las hemorragias, por lo común frecuentes, hacen
dioso y las manifestaciones clínicas de comienzo muy dramático el estado del paciente. Se deben so-
confunden, por lo cual es útil relacionar las distintas bre todo a una trombocitopenia severa, aunque
formas en que la leucemia aguda se presenta: también se encuentra una CID en las leucemias
promielocíticas. Otras alteraciones descritas son:
1. Comienzo típico. Se caracteriza por palidez, anormalidades de la función plaquetaria, anticoagu-
trastornos hemorrágicos, fiebre, cefalea y he- lantes circulantes, defectos aislados de factores, etc.
patosplenomegalia. El nivel crítico del número de plaquetas por de-
2. Cuadro infeccioso agudo. Predominan la fie- bajo del cual se producen sangramientos, es difícil
bre, la cefalea y la toma del estado general. En de definir, ya que además de la trombocitopenia, tam-

416
bién influyen en estos sangramientos otros déficits La invasión de otros órganos y tejidos por las célu-
de la coagulación. No obstante, se considera que las leucémicas hacen muy complejo el cuadro clíni-
30 000 por mm³ es un nivel crítico y por debajo de co. En los pulmones se ven infiltrados miliares y a
10 000 por mm³ siempre habrá hemorragias. veces están también afectadas las pleuras, sobre todo
La fiebre puede depender de un estado de hiper- en los estadios finales, lo que da lugar a derrames.
metabolismo y destrucción celular, pero por lo ge- Los dolores óseos son frecuentes y en ocasiones
neral se debe a una infección presente desde el se producen infiltración subperióstica y necrosis, así
comienzo de la afección o que complica la evolu- como lesiones osteolíticas por infiltrados leucémicos
ción de ésta. Cualquier germen es capaz de causarla, o infartos óseos. Son raras las fracturas patológicas.
pero no hay que olvidar que por el uso de corticos- Se encuentran infiltrados en cualquier región del sis-
teroides, citostáticos y antimicrobianos, o bien por tema genitourinario, que cuando afectan los riñones
el mismo proceso de la enfermedad, estos pacientes originan hematuria. Los testículos muchas veces es-
están inmunodeprimidos y microrganismos que nor- tán afectados, sobre todo en los niños con LLA.
malmente no son patógenos, ocasionan graves in- El aumento de volumen de las encías constituye
fecciones. un hecho frecuente en la forma monoblástica, aun-
Las adenopatías faltan a veces y no constituyen que no es exclusivo de ella. La afectación del tracto
un hallazgo importante en el examen físico, aunque gastrointestinal se acompaña de dolor y ulcera-
se encuentran en cualquier tipo de leucemia aguda. ciones.
Pueden ser dolorosas, sobre todo cuando hay un pro- En el tipo M6 hay artralgias y fenómenos autoin-
ceso infeccioso vecino. Es frecuente la hepatosple- munes. Los cloromas (sarcoma granulocítico) pre-
nomegalia. ceden o acompañan a la LMA. Se trata de tumores
Las lesiones habituales de la piel son las purpúri- de mieloblastos encontrados mucho más en mamas,
cas; en ocasiones está infiltrada por una lesión que vulva, huesos, peritoneo y pleura. Cuando la locali-
hace relieve, difusa y de color púrpura; otras veces zación es retrorbitaria suelen producir exoftalmos.
se observan lesiones inespecíficas como eritemas,
dermatitis, etc. Se ha descrito una dermatosis febril Exámenes complementarios
neutrofílica, llamada síndrome de Sweet, caracteri- Hemograma. La anemia no falta nunca en las leuce-
zada por placas dolorosas de la piel; la biopsia mues- mias agudas y en algunos casos llega a ser muy se-
tra un infiltrado de neutrófilos maduros (no blastos). vera. Es habitual la presencia de normoblastos en la
Responde bien al tratamiento sistémico con corti- sangre periférica.
costeroides. El número de leucocitos está elevado, normal o
La afectación del sistema nervioso se produce por bajo. Cuando sucede esta última eventualidad, el
infiltración, por compresión tumoral o por hemorra- diagnóstico por el estudio de una lámina de sangre
gia y es capaz de originar una gran variedad de cua- periférica es difícil. Como ya se dijo, la infección es
dros clínicos. En algunos casos hay infiltración una complicación común en la leucemia aguda y
meníngea desde el inicio de la enfermedad o duran- constituye un peligro importante cuando los neu-
te el curso de ésta. En las leucemias linfoblásticas .
trófilos tienen un recuento inferior a 0,5 109/ L
de los niños, la toma meníngea es frecuente y exige (< 500/mm3). En los casos más típicos se halla en la
tratamiento profiláctico. sangre periférica un tipo predominante de células
Los síntomas más comunes son cefalea, letargia, jóvenes, que permite hacer el diagnóstico de la va-
náuseas y vómitos y dependen de una hipertensión riedad de leucemia aguda observada, y un grupo
intracraneal. Puede haber edema de la papila y sig- variable de células adultas con ausencia de formas
nos meníngeos. No son excepcionales las parálisis celulares intermedias (hiatus leucémico).
de los pares craneales. La presencia de bastoncillos de Auer en el cito-
Son corrientes hemorragias retinianas, aunque és- plasma de estas células permite clasificar la leuce-
tas también se presentan en la conjuntiva y en otras mia como mieloblástica.
partes del ojo. La sordera y el vértigo se deben a Plaquetas. La trombocitopenia constituye un he-
hemorragia del laberinto o infiltración del VIII par. cho casi constante. Se acompaña de un tiempo de

417
sangramiento prolongado, coágulo irretráctil, prue-
ba del lazo positiva y consumo de protrombina pa-
tológico. Los megacariocitos pueden derivar del
clono leucémico y producir plaquetas con alteracio-
nes de su función.
La leucemia promielocítica se acompaña a me-
nudo de CID, que también se presenta en la M4 y en
la M5.
Se han reportado déficit aislados de factores de la
coagulación.
Medulograma. Es fundamental para el diagnósti-
co. En ocasiones resulta difícil obtener material por
aspiración, ya que la infiltración masiva del espacio
medular aumenta la fuerza de cohesión. Sin embar-
go, algunos pacientes con leucemia aguda y pan-
citopenia, tienen una médula ósea hipocelular, lo que
indica que la dificultad en este proceder no se debe
sólo al apelotonamiento de las células leucémicas,
sino que estas últimas inhiben directamente la he-
matopoyesis medular.
Por otra parte, en la M7, la mielofibrosis también
impide la obtención de dicho material.
La médula muestra una infiltración monomórfica
Fig. 56.1. Medulograma en una leucemia aguda mieloblástica de blastos leucémicos y una reducción marcada de
(M2), donde se observan mieloblastos con granulaciones.
los elementos normales (figuras 56.1 y 56.2).
Hoy en día se prefiere la biopsia medular al me-
dulograma por aspiración, ya que ofrece muchos más
datos para un diagnóstico preciso.
El medulograma es útil además en el curso del
tratamiento para evaluar el resultado de éste.
Ácido úrico. Con frecuencia está elevado, sobre
todo después del tratamiento con citostáticos por la
gran destrucción celular. Esto puede provocar una
gota secundaria o una insuficiencia renal.
La función hepática es anormal en el 20 % de los
pacientes.
Actualmente, el diagnóstico del tipo de leucemia
se basa en una combinación de características
morfológicas, inmunofenotípicas y citoquímicas, así
como en la evidencia de alteraciones genéticas es-
pecíficas, cuando están presentes.

Leucemia mieloblástica
aguda
La LMA comprende el 80 % de las leucemias del
adulto y no existe predilección por género o raza.
Fig. 56.2. Medulograma en una leucemia aguda linfoblástica, En los últimos años ha habido un incremento de su
donde se observan varios linfoblastos. incidencia como posible consecuencia de la terapéu-

418
tica de algunas enfermedades malignas (Hodgkin, CUADRO 56.2
FACTORES PRONÓSTICOS EN LA LEUCEMIA
mieloma múltiple, cáncer del ovario, etc.).
MIELOBLÁSTICA AGUDA
Un factor pronóstico muy importante es la obten-
ción de una remisión completa (RC). Un intervalo Factor Buen pronóstico Mal pronóstico
sintomático prolongado precediendo al diagnóstico,
Edad < 45 años < 2 > 60 años
produce bajos promedios de RC y una superviven-
cia corta. La rapidez con que desaparezcan las célu- Antecedentes _ Leucemias
las blásticas de la periferia después de la terapéutica secundarias
y aquéllos que alcanzan la RC siguiendo al primer Mielodisplasia
previa
ciclo de inducción, la tienen más largas que quienes
necesitan de varios ciclos de inducción para obte- Leucocitos < 25 000 > 100 000
nerla. También tienen buen pronóstico los pacientes
con menos de un 1 % de blastos en la médula después Cromosomas Translocación (8; 21) Deleción del 5 o 7
Translocación (15; 17) Trisomía del 8
de la RC. Las leucemias secundarias a tratamiento en la promielocítica
con citostáticos o irradiación, o en la evolución de Inv 16
un síndrome mieloblástico o en la crisis blástica de
una leucemia mieloide crónica, responden mal al tra- Inmunofenotipo _ Presencia del
antígeno CD - 34
tamiento y por lo tanto tienen un mal pronóstico.
En el cuadro 56.2 se muestran los factores pro- Variedad FAB M3, M4 con M0 – M6 – M7
nósticos más importantes en la LMA. eosinofilia
Los antígenos CD 13, CD 14, CD 33 y CD 34
Leucemia _ Presente
están presentes en las células blásticas de la mayo- extramedular
ría de los pacientes con LMA, excepto en las va-
riantes M6 y M7, que tienen antígenos restringidos LDH Normal Aumentada
a las líneas eritroide y megacariocítica.
Las alteraciones cromosómicas más frecuentes en
la LMA están en el cromosoma 8 (trisomía) y en el Leucemia promielocítica aguda
7 y 5 (deleciones), aunque ninguna de éstas son es-
pecíficas de una variedad. Sin embargo, en la M3 es
(M3)
específica la t (15; 17), en la M4 con eosinofilia la La clasificación FAB distingue 2 formas: una hiper-
Inv 16 y en la M2 la t (8; 21). granular y una hipogranular. Ambas presentan la
La edad por encima de 60 años, el conteo de leu- misma aberración cromosómica, que es específica
cocitos mayor de 100 000 por mm³ y la presencia de para este tipo de leucemia aguda t (15; 17) y la fu-
hepatosplenomegalia, son índices de mal pronóstico. sión PML / RAR α.
Con excepción de la leucemia promielocítica Aunque la leucemia promielocítica aguda sólo re-
(M3), los subtipos de la clasificación FAB no deter- presenta un 10 % de todas las LMA, ha suscitado un
minan cambios en el tratamiento. gran interés por su respuesta al ácido retinoico
En la mielomonocítica (M4) es común la afecta- (ATRA). En esta leucemia el gen para el receptor
ción de sitios extramedulares (encía, piel, SNC) y del ácido (RAR-α), que está normalmente en el
no es infrecuente la CID. La variante eosinofílica brazo largo del cromosoma 17, es translocado al cro-
tiene mejor pronóstico y está acompañada por in- mosoma 15, al sitio del gen PML. Dicha transloca-
versión, deleción o translocación del cromosoma 16. ción lleva a la fusión de estos dos genes (PML/RAR
En la monocítica (M5) es común también la toma α). Si a esto se agrega el descubrimiento de que el
de sitios extramedulares (encías, piel, SNC, hepa- ATRA causa la diferenciación de los promielocitos,
tosplenomegalia). Casi siempre debuta con leucoci- es lógico suponer los dramáticos cambios que han
tosis intensa. ocurrido en el manejo de este tipo de leucemia.
Hay una variante de la M2 con basofilia medular Clínicamente la leucemia promielocítica se carac-
intensa y t (6; 9). teriza por episodios hemorrágicos debidos a la CID

419
y la fibrinólisis, con una infiltración medular por las tres primeras semanas del tratamiento y se pre-
promielocitos (Fig. 56.3). senta en el 25 % de los enfermos: fiebre, disnea,
dolor torácico, infiltrados pulmonares, derrame pleu-
ral y pericárdico e hipoxemia progresiva. Si no se
trata, puede ser rápidamente fatal. Se administran
10 mg de dexametasona por vía EV cada 12 h por lo
menos durante 3 días, así como oxígeno, y se apli-
can medidas generales. Las personas con leucocito-
sis suelen ser muy susceptibles a este síndrome,
aunque también se ha reportado en casos con leuco-
penia.
Después de la quimioterapia, los pacientes deben
permanecer tomando ATRA.
Es importante la PCR para buscar leucemia resi-
dual, ya que su positividad indica que la enfermedad
no ha sido erradicada y se debe mantener la tera-
péutica. Si hay leucemia residual se puede recurrir
al trasplante alogénico de médula ósea o incluso al
trasplante autólogo si se almacenaron células ma-
dres de la periferia cuando el paciente tenía una PCR
negativa.
Recientemente ciertos trabajos reportan que dosis
Fig. 56.3. Medulograma en una leucemia aguda promielocítica bajas de trióxido de arsénico son capaces de inducir
(M3). Se observa un promielocito con bastoncillos de Auer en remisión en quienes tienen leucemia promielocítica
empalizada. aguda que han sufrido una recaída.
Las hemorragias en esta entidad se tratan con
El ácido retinoico, un derivado de la vitamina A,
heparina y ácido epsilón aminocaproico.
con marcados efectos en la evolución y diferencia-
ción celular, es capaz de inducir la maduración
en las células de la leucemia promielocítica aguda. Tratamiento de la leucemia
La terapéutica comienza con ATRA en dosis de mieloblástica aguda
45 mg/m². Por lo general, en 30 o 40 días el 80 % de Antes de exponer el tratamiento de las leucemias
los pacientes tienen una RC. Un número considera- agudas, tanto de las mieloblásticas como de las lin-
ble de ellos desarrollan una hiperleucocitosis debi- foblásticas, conviene precisar los conceptos de re-
do a un incremento de células maduras inducidas misión y recaída en dichas afecciones para utilizarlo
por acción del medicamento.Esta remisión es muy
de manera más racional.
corta, por lo que debe ser seguida con la terapia de
Se entiende por remisión completa (RC) que la
inducción de la LMA con antraciclina y citosina.
médula ósea contenga menos de un 5 % de blastos
Algunos recomiendan, si hay leucocitosis de inicio,
comenzar con ambos esquemas: ATRA + antraci- (M1), que la sangre periférica no muestre blastos,
clina y citosina. tenga más de 1 500 neutrófilos/mm3, más de 100 000
Los efectos secundarios del ATRA generalmente .
plaquetas/mm3 (>100 109/L) y que no existan sín-
no son severos: cefalea, boca seca, dolores óseos, tomas ni signos atribuibles a la leucemia, incluyen-
fiebre y prurito, aunque en ocasiones hay toxicidad do un LCR normal.
hepática e insuficiencia cardíaca congestiva. Se ha Se considera remisión parcial cuando hay una in-
reportado también un cuadro de seudotumor cere- filtración medular entre 5 y 25 % de blastos (M2).
bral. Respuesta nula (N): Corresponde a una médula
Mucho más serio es el llamado síndrome del áci- ósea con una infiltración blástica superior al 25 %
do retinoico, que por lo general aparece dentro de (M3). Hay recaída hematológica cuando después de

420
haber obtenido una remisión completa, la médula catéter venoso central para facilitar, tanto la admi-
ósea contiene más de un 5 % de blastos. nistración de medicamentos como la toma de mues-
La recaída meníngea ocurre cuando el LCR, ob- tras de sangre.
tenido por punción lumbar, tiene más de 5 células y Transfusión de sangre. Se indican transfusiones
hay presencia de blastos claramente identificables o de glóbulos depletados de leucocitos, siempre que
cuando existen síntomas y signos atribuibles a afec- sea posible, para mantener la cifra de hemoglobina
tación del SNC. En estos casos debe realizarse un por encima de 85 g/L.
examen del fondo de ojo, punción lumbar con Los productos hemáticos deben ser irradiados para
manometría, estudio citoquímico del LCR, radiogra- evitar la enfermedad de injerto – contra – huésped.
fía de cráneo y EEG. Transfusiones de plaquetas. Algunos preconizan
Con la PCR, a los criterios anteriores se agrega el utilizar las transfusiones de plaquetas para mante-
de remisión molecular, ya que cuando se produce la
RC hematológica, aún hay una gran cantidad de célu-
.
ner una cifra por encima de 20 000/mm³ (> 20 109/L),
sobre todo en pacientes febriles o que tengan san-
las leucémicas que esta técnica detecta fácilmente. gramientos. Se recomienda utilizar donantes histo-
También es importante lograr la desaparición de
compatibles al sistema HLA, ya que las transfusiones
las alteraciones cromosómicas, porque la persisten-
repetidas de donantes múltiples originan la apari-
cia de éstas llevará tarde o temprano a una recaída
ción de anticuerpos que hacen inefectivas las trans-
de la enfermedad.
fusiones posteriores.
Es necesario conocer los factores de riesgo, pues
Complicaciones infecciosas. El tratamiento actual
ellos influyen en la evolución y tratamiento (cua-
dro 56.3). Como se ve, se incluyen en los pacientes de la leucemia aguda mieloblástica provoca una
de alto riesgo varios subtipos de la clasificación FAB, aplasia medular en el enfermo, y como consecuen-
así como los que no alcancen la remisión en los días cia una citopenia, que lo hace muy susceptible a las
15 al 21. infecciones, causa importante de morbimortalidad.
Medidas generales La mayoría de éstas son causadas por gérmenes que
Las medidas generales han adquirido gran impor- colonizan en la piel y tubo digestivo, por lo que se
tancia en el tratamiento de las leucemias agudas. recomienda:
Comienzan por tratar a los pacientes en centros con
condiciones y experiencia en el manejo de la enfer- • Uso de tapabocas
medad, con habitaciones para un aislamiento pro- • Lavado cuidadoso de las manos
tector simple. Otra medida es la implantación de un • Aislamiento del enfermo
• Utilización de antibióticos profilácticos
• Ácido nalidíxico: 500 mg cada 6 h
CUADRO 56.3 • Sulfaprín: 2 tabletas cada 12 h
FACTORES DE RIESGO EN LA LEUCEMIA
NO LINFOCÍTICA O MIELOBLÁSTICA AGUDA
Es aconsejable la nistatina oral o el clotrimazole
Riesgo estándar para prevenir la candidiasis local.
FAB M1 y M2 con bastones de Auer (por lo menos un bas- En un paciente con fiebre, siempre se sospechará
tón de Auer por cada 1 000 células leucémicas). que ésta es consecuencia de un proceso infeccioso y
FAB M3. se comienza de inmediato el tratamiento con anti-
FAB M4 con eosinofilia. bióticos. Se prefiere la combinación de antibióticos
de amplio espectro. Es aconsejable la utilización de
Todos los pacientes deben haber experimentado una reduc-
ción en el número de blastos a menos de 5 % en la médula un aminoglucósido con una cefalosporina de terce-
ósea, del día 15 al 21 (no es decisivo en la M3). ra generación e iniciar la búsqueda de la causa de la
Riesgo alto fiebre. En neutropénicos, cuya fiebre se mantiene
Todos los otros subtipos de FAB: M0 y M4 sin eosinofilia, por más de 7 días a pesar del tratamiento con anti-
M5, M6 y M7. bióticos, se debe emplear el anfotericín B.
Pacientes con riesgo estándar que no alcanzan la remisión La leucemia meníngea en adultos es menos co-
del día 15 al 21. mún en la LMA (7 %) que en la LLA (40 %). Cuando

421
ocurre, la siguiente combinación es la mejor: meto- rápida e inducir la RC hematológica y clínica. Una
trexate, 12 mg + dexametasona, 4 mg (intratecal). vez obtenidos estos resultados, deben ser aplicadas
Las náuseas y los vómitos están entre los efectos otras estrategias para prolongar la supervivencia y
más desagradables en los pacientes con quimiotera- lograr la cura si es posible. Es importante señalar
pia (citostáticos o citotóxicos) del cáncer. Se han uti- que el patrón citogenético virtualmente determina
lizado drogas antieméticas para prevenir estos cual paciente tendrá una prolongada RC.
síntomas, pero en algunos casos estos medicamen- Con este fin el tratamiento se ha dividido en 3
tos son ineficaces y hacen intolerables los días que fases:
siguen a la administración de los citostáticos. La uti- 1. Fase de inducción
lización del granisetrón (3 mg EV antes de la qui- 2. Fase de consolidación
mioterapia) combinado con dexametasona (8 mg EV 3. Fase de intensificación
previo a la quimioterapia, más 4 mg oral también
antes de los medicamentos) ha dado buenos resul- Fase de inducción. La inducción requiere más de
tados. un mes de hospitalización y por 20 o 30 días el pa-
Actualmente se utilizan los factores de crecimiento ciente estará en aplasia medular con el peligro de
hematopoyético recombinantes después de la qui- infecciones severas.
mioterapia. Se usa tanto el factor estimulante de co- El régimen de inducción más utilizado hoy día
lonias granulocíticas (G–CSF) como el factor consiste en una combinación de citosina arabinósi-
estimulante de colonias granulocito–macrófago (GM do y una antraciclina. Esto es válido para todos los
-CSF). Este tratamiento ha disminuido los días de subtipos de la clasificación FAB, excepto para la M3.
granulocitopenia, aunque algunos dudan que reduz- Se usa el llamado esquema 3/7:
ca las infecciones de manera significativa. Citosina arabinósido: 100 mg/m²/día EV, por
Hiperuricemia. En la leucemia aguda, el ácido 7 días.
úrico puede elevarse en la sangre, sobre todo como Daunorrubicina: 45 a 60 mg/m²/día EV, días 1
consecuencia de la quimioterapia. En ocasiones esto al 3.
produce una insuficiencia renal por precipitación de Hay quienes sustituyen la daunorrubicina por
las sales de urato en los túbulos renales. Esta com- la idarrubicina, que es menos cardiotóxica, en
plicación se trata con alopurinol (100 mg cada 8 h), dosis de 12 mg/m²/día EV, por 3 días.
además de una buena hidratación y alcalinización Después que los conteos en la sangre periféri-
de la orina. ca se normalicen, se efectúa un medulograma. Con
Psicoterapia. Ésta es una enfermedad de curso este esquema se obtiene un 65 o 70 % de RC,
fatal y es importante para el tratamiento el apoyo generalmente dentro de las 4 semanas de inicia-
emocional que deben recibir, tanto el enfermo como ción de la terapéutica.
sus familiares.
Para el control de la hiperleucocitosis (conteo de Si no se obtiene la RC se repite el esquema 3/7.
leucocitos > 50 000 en M4 y M5 y > 80 000 en el Algunos autores sustituyen la daunorrubicina
resto), se debe utilizar la leucoféresis y la hidroxiu- por mitoxantrone, 10 o 12 mg/m2/3 días.
rea en dosis de 3 g/m². Hay trabajos en que se administran altas dosis
de citosina como primer tratamiento de inducción
Tratamiento específico en los que se reportan RC de más duración. La
En el momento del diagnóstico, la masa leucémica toxicidad es mayor que con el esquema 3/7.
suele ser de 1012 células. La mayor parte de los es- Como ya se dijo, la asociación de G – CSF y
quemas de tratamiento actuales es probable que des- GM – CSF, comenzando 12 h después de com-
truyan el 99,9 % de estas células, pero todavía pletada la quimioterapia, acelera la recuperación
quedarían millones capaces de proliferar y provocar del paciente.
una recaída del enfermo. La curación sólo se logra- Si se obtiene la RC se pasará a la siguiente fase
rá al eliminar todas las células malignas. Por lo tan- y si no, se considerará el caso como refractario y
to, el fin principal es erradicar la leucemia de forma se indicará otro esquema.

422
Fase de consolidación. Después de la RC, se con- En pacientes en recaída después de un trasplante
tinúa con la fase de consolidación, que consiste en medular, un segundo trasplante tiene éxito en el 20
las mismas drogas utilizadas en la inducción, para o 25 % de los casos y es una opción favorable en
como su nombre indica, consolidar la remisión ob- quienes recaen 6 meses después del injerto inicial.
tenida en el paciente. En el período de posremisión se han efectuado
Citosina arabinósido: 100 mg / m² / día EV, los trabajos que comparan la quimioterapia intensiva y
días 1 y 2; 100 mg / m² EV cada 12 h, los días 3 el trasplante medular y hay autores que no han po-
al 5. dido detectar ventaja de uno sobre otro en cuanto a
Daunorrubicina: 45 a 60 mg / m² EV, los días la supervivencia, aunque parece haber alguna a fa-
1 y 2. vor del trasplante.
Se han utilizado también inmunomoduladores del
Fase de intensificación. Se utiliza con el fin de tipo IL–2 y ciclosporina.
eliminar la enfermedad residual: 2 ciclos con inter-
valo de 4 o 5 semanas. Tratamiento de las recaídas
Citosina arabinósido: 750 mg/m² EV, durante 3 h Los que recaen después de 12 meses de RC pueden
cada 12 h, los días 1; 3 y 5. obtener otra remisión con el mismo régimen utiliza-
Daunorrubicina: 45 a 60 mg / m² EV, los días 1 y 2. do en la inducción inicial. Cuando la recaída ocurre
antes de los 12 meses deben utilizarse nuevas dro-
Entre 4 a 6 semanas después del segundo ciclo de gas: mitroxantone o altas dosis de etopósido y de
intensificación se reevaluará al enfermo para deter- ciclofosfamida, combinadas.
minar la posibilidad de trasplante medular. También puede intentarse el trasplante medular.

Trasplante medular LMA relacionada con la terapéutica


El trasplante medular es la mejor oportunidad de Una LMA es capaz de aparecer después de varios
supervivencia larga e incluso de curación en estos años de la administración de agentes alquilantes o
pacientes. El tipo alogénico puede prolongar la su- de la irradiación en el tratamiento de trastornos mie-
pervivencia libre de enfermedad en el 45 o 50 % de loproliferativos (policitemia vera, trombocitemia
los casos; sin embargo, un número sustancial de ellos esencial), en la enfermedad de Hodgkin o en otros
no tiene un donante histocompatible. En estos últi- tipos de enfermedades malignas. Este trastorno se
mos se ha utilizado cada vez más el trasplante ha llamado LMA relacionada con la terapéutica, y
autólogo, con una supervivencia de 3 años en el 25 es precedido en ocasiones por un síndrome mielo-
a 50 % de los enfermos. displástico con citopenias y anemia refractaria con
Con el trasplante alogénico se logra el efecto adi- sideroblastos en anillos. No responde bien a la qui-
cional de injerto – contra – leucemia, con la elimi- mioterapia y se obtienen remisiones sólo en un 20
nación de mieloblastos leucémicos por los linfocitos o 30 % de los casos, las cuales son además muy cor-
alorreactivos del donante y al que ya se ha hecho tas. Si el paciente tiene menos de 50 años y un her-
referencia en otros temas. mano histocompatible, debe valorarse el trasplante
En el Hospital Hermanos Ameijeiras de nuestro medular.
país siguen el siguiente esquema:
Trasplante alogénico – Pacientes de menos de Leucemia linfoblástica
45 años con donante HLA idéntico. En este caso
utilizan un esquema condicionante a base de busul-
aguda
fán, ciclofosfamida e irradiación corporal total. La leucemia linfoblástica es menos común en el adul-
Trasplante autólogo – Pacientes entre 45 y 55 años to que la mieloblástica, su pronóstico no es tan malo
o menores de 45, sin donante HLA idéntico. Utili- y en niños es una enfermedad altamente curable.
zan un esquema condicionante a base de ciclofosfa- Su cuadro clínico es semejante al de la LMA, ex-
mida, VP – 16 e irradiación corporal total. cepto que la afectación del SNC es más frecuente
El trasplante medular aún tiene una alta morbi- que en ésta.
mortalidad y es una complicación temible la llama- La quimioterapia de inducción en la LLA depri-
da enfermedad injerto – contra – huésped. me severamente la capacidad gonadal reproductiva,

423
pero no la funcional en pacientes masculinos. En el Entre las anormalidades genéticas favorables está
sexo femenino no afecta ninguna de las dos. la hiperdiploidia (> 50 cromosomas por célula) aso-
No hay acuerdo total para definir los criterios de ciada casi siempre a un conteo bajo de leucocitos.
riesgo. Muchas variables clínicas y biológicas que En los adolescentes y adultos tienen mal pronóstico
se pensaban eran predicciones útiles, a la larga se ha la presencia de reagrupamiento MLL, la t (4; 11),
probado que tienen poco valor, a medida que ha t (8; 14) o la presencia de cromosoma Ph t (9; 22).
mejorado el tratamiento. Por ejemplo, no se ha de- Se ha comprobado que la caracterización mole-
mostrado que la raza negra tenga pobre pronóstico. cular representa la información pronóstica más re-
En general, se pueden definir dos tipos de riesgo: levante para determinar el riesgo del paciente en el
momento del diagnóstico. La lenta desaparición de
Riesgo estándar. LLA de células precursoras B las células leucémicas de la sangre periférica o de la
Edad: 1 a 9 años médula durante la fase temprana de la terapéutica,
Conteo de leucocitos por debajo de 50 000/mm³ es un índice de mal pronóstico. Otro elemento im-
Alto riesgo. Otro grupo de edades portante es la medición de la enfermedad residual
Conteo de leucocitos por encima de 50 000/mm³ después de la inducción, por medio de la PCR.
Se dice que hay remisión molecular o inmunoló-
En el adulto, todos deben ser considerados como gica cuando el paciente tiene menos de 0,01 % de
de alto riesgo y tratados en consecuencia. Los me- células leucémicas, de todas las células nucleadas
nores de 30 años tienen un mejor pronóstico que los de la médula ósea. A continuación se muestra el
que tienen de 30 a 59 y en éstos a su vez el pronós- inmunofenotipo de las células pre B, las células T y
tico es mejor que en los mayores de 60 años. las células B maduras. El CD10 es también conoci-
Los factores pronósticos de la LLA se resumen do como antígeno común de la LLA (CALLA).
en el cuadro 56.4. Las variedades L1 y L2 tienen
mejor pronóstico que la L3, aunque ya se explicó Tipo celular Inmunofenotipo
que esta última debe ser considerada como un
Células pre B (62 %) CD19+, CALLA+, HLA–DR+, CD 20-
linfoma no Hodgkin.
Células T (33 %) CD2+, CD7+
CUADRO 56.4
FACTORES PRONÓSTICOS DE LA LEUCEMIA Células B CD19+, CD20+, HLA–DR+
LINFOBLÁSTICA AGUDA maduras (5 %)

Factor Buen pronóstico Mal pronóstico

Conteo de .
< 50 000 (< 50 109) > 50 000 (> 50 . 10 )
9
Tratamiento de la leucemia
leucocitos linfoblástica aguda
Edad Adulto joven Adulto viejo El hallazgo de una terapéutica efectiva, sobre todo
FAB L1 – L2 L3 en niños, de la LLA es uno de los éxitos más gran-
Sexo Femenino Masculino
des en la clínica hematológica moderna. Esta enfer-
medad, que una vez fue fatal, hoy día con el uso de
Cromosomas Hiperdiploidia Hipodiploidia
Trisomía 4 y 10 Translocación (9; 22)
los regímenes multidrogas, se ha convertido en cu-
Translocación (12; 21) Gen MLL (11q; 23) rable en un alto número de niños que la padecen.
Translocación (8; 14) Después de clasificar al enfermo en riesgo están-
Translocación (8; 12) dar o riesgo alto, se seguirá el siguiente esquema:
Translocación (4; 11)
I. Grupo de riesgo estándar
Estudio Ausencia de blastos Presencia de blastos
Fase 1: Inducción (4 semanas)
del LCR
• Prednisona: 60 mg/m²/día, oral, dividida
Antígeno Presente Ausente
en 3 dosis durante 28 días. Disminuir a
CALLA
30 mg/m²/día por 4 días; 15 mg/m²/día por
Respuesta al Rápida Lenta o ausente
tratamiento
4 días; 7,5 mg/m²/día por 3 días; 3,75 mg/
m²/día por 3 días.

424
• Vincristina: 1,5 mg/m², EV, por 4 días. Días • Doxorrubicina (adriamicina): 25 mg/m²,
1; 8; 15 y 22 (dosis máxima única de 2 mg). EV, por 4 días, los días 1; 8; 15 y 22.
• Rubidomicina: 25 mg/m², EV, por 4 días. • L– asparaginasa: 10 000 U/m², IM, por 4
Días 1; 8; 15 y 22. veces.
• L–asparaginasa: 6 000 U/m², IM, 3 veces • Antibioticoterapia profiláctica: Igual.
por semana por 9 veces (lunes, miércoles
y viernes o días 1; 3; 5; 8; 10; 12; 14; 17 y Fase 5: Reintensificación (2 semanas)
19). • Ciclofosfamida: 1 000 mg/m², EV, día 1.
Para la profilaxis del SNC: • Citosina arabinósido: 75 mg/m², SC, dia-
• Metotrexate, 12 mg + dexametasona, 4 mg, rios, por 4 días, por 2 semanas. Días 1 al
intratecal por 2 dosis (días 1 y 14). 4 y 8 al 11.
Además se administrará: • 6-mercaptopurina: 60 mg/m² diarios, oral,
• Alopurinol: 300 mg/día. por 14 días.
• Antibioticoterapia profiláctica: Profilaxis del SNC:
Sulfaprín: 2 tabletas cada 12 h. • Metotrexate: 12 mg + dexametasona, 4 mg,
Ketoconazole: 200 mg/día. intratecal por 2 dosis. Días 1 y 8.
• Antibioticoterapia profiláctica: Igual.
Fase 2: Intensificación (4 semanas) Después de finalizar esta fase, los pacientes serán
• Ciclofosfamida: 1 000 mg/m², EV, día 1. evaluados para decidir su inclusión en el programa
• Citosina arabinósido: 75 mg/m², SC dia- de trasplante de médula ósea, o la continuación de
rios, 4 días a la semana por 4 semanas. la fase 6.
Días 1 al 4; 8 al 11; 15 al 18 y 22 al 25.
• 6-mercaptopurina: 60 mg/m², oral, diarios Fase 6: Continuación (30 meses)
por 28 días. • 6-mercaptopurina: 60 mg/m² diarios, oral,
Profilaxis del SNC: por 30 semanas*.
• Metotrexate, 12 mg + dexametasona, 4 mg, • Metotrexate: 20 mg/m², una vez por sema-
intratecal por 4 dosis, días 1; 8; 15 y 22. na, oral o IM, por 30 semanas**.
• Antibioticoterapia profiláctica: Igual que
en inducción. Refuerzos trimestrales por 6 meses; el primero a
los 3 meses de finalizar la fase de reintensificación
Fase 3: Mantenimiento (10 semanas) (Fase 5).
• 6-mercaptopurina: 60 mg/m² diarios, oral,
por 8 semanas*. • Vincristina: 1,5 mg/m²/día, EV. Día 1.
• Metotrexate: 20 mg/m² una vez por sema- • Prednisona: 40 mg/m²/día, oral, días 1 al 8.
na, oral o IM, por 8 semanas. • Profilaxis del SNC:
Metotrexate 12 mg + dexametasona, 4 mg
Dos semanas de descanso sin quimioterapia an- (intratecal día 1).
tes de comenzar la próxima fase.
II. Grupo de riesgo alto
Fase 4: Reinducción (4 semanas) • Las fases del tratamiento son iguales a las
• Dexametasona: 10 mg/m², oral, por 7 días; del grupo de riesgo estándar.
8 mg/m², oral, por 7 días; 6 mg/m², oral, • En la fase 1 (inducción) se comienza con
por 7 días; 4 mg/m², oral, por 7 días; prednisona por 2 días, al tercer día se agrega
2 mg/m², oral, por 3 días y 1 mg/m², oral, la vincristina y el día 4 la daunorrubicina y
por 3 días. la L – asparaginasa.
• Vincristina: 1,5 mg/m², EV, por 4 días. Días • En la fase 3 (mantenimiento), en la semana 8
1; 8; 15 y 22 (dosis máxima única de 2 mg). se comenzará radioterapia craneal en dosis
.
*Ajustar las dosis a las cifras periféricas de leucocitos tratando de mantenerla entre 2 000 o 3 000/mm³ (2 o 3 109/L).
**Ajustar las dosis igual que en la fase 3.

425
de 2 400 cGy dividida en 200 cGy diarios pacientes sufre una transformación aguda (crisis
por 12 sesiones, junto con metotrexate, blástica) con un curso fatal rápido.
12 mg + dexametasona, 4 mg intratecal por
2 veces. Cuadro clínico
La LMC generalmente comienza de una manera in-
En el esquema descrito, el trasplante medular sidiosa. El paciente acude al médico por debilidad
alogénico se utiliza después de la fase 5; sin embar- progresiva y palidez, o por molestias abdominales,
go, se puede emplear en pacientes que no respondan como sensación de pesadez y dolor en el cuadrante
al tratamiento inicial de inducción y en aquéllos que superior izquierdo, donde él mismo se palpa una
tienen una segunda remisión luego de una recaída. masa dura. Otras veces está asintomático y es en el
También se ha efectuado trasplante de células curso de un examen de sangre fortuito que se sospe-
madres del cordón umbilical y trasplante autólogo. cha por el hallazgo de una gran leucocitosis.
En estos casos disminuye la enfermedad injerto–con- Se reconocen 3 estadios de la enfermedad:
tra–huesped, pero se pierde el efecto injerto–con- • Fase crónica estable
tra–leucemia. • Fase acelerada
En pacientes en los cuales no se ha obtenido una • Fase de crisis blástica
RC después de concluida la fase 1 o con una recaída
precoz en cualquiera de las fases, se puede recurrir Fase crónica estable (2 a 5 años)
al siguiente esquema: En esta fase los síntomas se relacionan con el hiper-
• Citosina arabinósido: 1 g/m² cada 6 h por 6 dosis. metabolismo (pérdida de peso, sudoración noctur-
• Rubidomicina: 30 mg/m² diarios, por 3 días. na, fiebre, fatiga) y la esplenomegalia. Esta última
se detecta en aproximadamente el 80 % de los casos
al inicio de la enfermedad. Es grande, su polo infe-
LEUCEMIA MIELOIDE rior puede llegar a nivel del ombligo y en ocasiones
rebasarlo y alcanzar la fosa ilíaca izquierda. Su au-
CRÓNICA sencia pone en duda el diagnóstico de LMC, pero
esto es posible cuando la dolencia se descubre en
La leucemia mieloide crónica (LMC) está incluida una fase muy temprana.
dentro del llamado síndrome mieloproliferativo. Es A veces se asocian episodios de infartos espléni-
una enfermedad clonal de la célula madre hemato- cos con dolor espontáneo, que se exacerba a la pal-
poyética que afecta las líneas mieloide, eritroide, pación y pueden auscultarse roces en esa zona. En
megacariocítica y linfoide. la mitad de los casos se palpa una hepatomegalia.
Más del 90 % de los pacientes tienen el cromosoma En el varón aparece priapismo por trombosis de
Philadelphia (Ph), el cual se origina por una translo- los cuerpos cavernosos, sobre todo en los casos con
cación del protoncogene Abelson (abl) del cromo- gran leucocitosis, aunque este hallazgo no es común.
soma 9, a la región bcr del cromosoma 22, con la Hay dolores óseos, sobre todo en el esternón. El
formación de un gen de fusión denominado BCR – estudio radiológico de los huesos generalmente es
ABL. Esta fusión causa un retardo en la maduración negativo, aunque en ocasiones se encuentran infil-
y en la muerte celular programada (apoptosis) y au- traciones que producen defectos osteolíticos, proli-
mento de la respuesta de factores del crecimiento. feraciones osteoperiósticas, tumores óseos, etc., pero
El cromosoma acortado 22 o Ph se detecta por con menor frecuencia que en las formas agudas.
técnicas citogenéticas. La piel. Se afecta menos que en la leucemia
La enfermedad tiene una incidencia mayor entre linfoide crónica, no obstante, algunas veces apare-
los 30 y 60 años, aunque pueden ser afectados ni- cen infiltraciones nodulares de tipo urticariano y
ños, y es más frecuente en el sexo masculino que en otras alteraciones inespecíficas llamadas leucémides.
el femenino. Evoluciona con una gran esplenome- No es rara una anemia moderada con presencia
galia y elevada leucocitosis, y un alto porcentaje de de normoblastos en la sangre periférica. Es común

426
. .
una gran leucocitosis (50,0 109 a 300,0 109/L) y La PCR puede detectar una célula Ph positiva que
se observa toda la estirpe mieloide, desde el mielo- expresa BCR–ABL, en 100 000 células normales.
blasto hasta el neutrófilo, plaquetas grandes y no es Esto ha provocado una reclasificación en la respuesta
rara una trombocitosis. Hay basofilia y eosinofilia. al tratamiento, y a la remisión completa clínica y
En estos momentos la médula es hipercelular con hematológica se ha unido la remisión completa
un sistema granulopoyético desviado a la izquierda citogenética y molecular. La hematológica indica
y aumento de la relación mieloide–eritroide. un retorno a la normalidad de la periferia y médula,
Son factores de buen pronóstico: juventud, bazo mientras que las citogenética y molecular exigen
.
pequeño, plaquetas por debajo de 600 109/L y baja la desaparición del cromosoma Ph y la fusión
proporción de blastos. Esta fase crónica suele durar BCR–ABL.
muchos años con un promedio de 3 a 5.
Clasificación
Fase acelerada ( 6 a 18 meses) Actualmente la LMC, de acuerdo con los estudios
En esta etapa la terapéutica que hasta entonces era citogenéticos y de biología molecular, se clasifica
eficaz, se vuelve menos efectiva. como aparece en el cuadro 56.5. El gen de fusión
La hepatosplenomegalia comienza a crecer, la ane- BCR-ABL se encuentra también en casos con ca-
mia se hace progresiva y aparece trombocitopenia. racterísticas clínicas y de laboratorio típicas de la
Aumentan la basofilia y la eosinofilia. LMC, pero sin la presencia del cromosoma Ph y hay
El paciente se queja de dolores óseos, sudoración casos de formas atípicas que son tanto Ph como BCR-
nocturna, pérdida de peso y fiebre. ABL negativos. Estos últimos tienen una historia
Surgen localizaciones extramedulares en los natural, una evolución y un pronóstico diferentes y
ganglios, los huesos y la piel. recuerdan más a un síndrome mielodisplástico (leu-
cemia mielomonocítica crónica).
Fase de crisis blástica ( 6 a 10 meses)
CUADRO 56.5
En realidad no hay una franca delimitación entre la
CLASIFICACIÓN DE LA LEUCEMIA MIELOIDE
fase acelerada y la fase blástica; todos los signos y CRÓNICA
síntomas se hacen más pronunciados y el diagnósti-
co se confirma con la presencia de un 30 % de blastos Grupo Ph BCR/ABL Pronóstico
y promielocitos en la sangre periférica o en la mé- LMC clásica + + Sobrevida 5 años
dula. Lo habitual es que sean de origen mieloide (70
a 80 %), pero pueden ser de origen linfoide (20 a 30 %). LMC Ph- , BCR/ABL+ - + Sobrevida 4 años
En casos más raros se catalogan como indiferencia-
LMC atípica - - Sobrevida 18–24
dos o tienen un doble patrón, incluso se les ha re- meses
portado con marcadores de líneas eritroide o
megacariocítica.
Exámenes complementarios
Fisiopatología molecular Hemograma. Es habitual encontrar una marcada
El dignóstico de LMC está basado en la detección leucocitosis, generalmente más de 100,0 109/L .
del cromosoma Philadelphia (Ph). (> 100 000/mm3) leucocitos, con eosinofilia y baso-
Como ya se dijo, el cromosoma Ph es el resultado filia. A diferencia de la leucemia aguda, donde en la
de una translocación recíproca entre los cromoso- sangre periférica sólo se observan blastos y células
mas 9 y 22 con una fusión BCR-ABL que ocasiona adultas (hiatus leucémico), en este tipo de leucemia
una actividad elevada de la tirosinoquinasa, y afecta aparecen todos los elementos que constituyen la se-
el crecimiento y la diferenciación celular. rie granulocítica, desde el mieloblasto hasta el granu-
En la fase blástica ocurren cambios cromosómi- locito adulto. Por lo común hay menos de un 5 % de
cos, que incluyen duplicación del cromosoma Ph y mieloblastos, y pueden encontrarse normoblastos en
trisomía 8. la sangre periférica.

427
Como ya se dijo, en la fase blástica la anemia se En ocasiones surgen dudas cuando desde el pun-
intensifica y hay más de un 30 % de mieloblastos en to de vista hematológico se tiene que diferenciar la
la sangre y médula ósea. LMC de tipo granulocítico de otras afecciones del
Plaquetas. Alrededor del 50 % de los pacientes llamado síndrome mieloproliferativo. En estos ca-
tiene trombocitosis, que en ocasiones llega a cifras sos, la fosfatasa alcalina de los granulocitos, que se
muy elevadas. En la fase blástica hay trombocito- encuentra baja, y el hallazgo del cromosoma Fila-
penia. delfia, orientan hacia el diagnóstico de una LMC.
Medulograma. Muestra una gran hiperplasia del
sistema granulopoyético con desviación izquierda
Evolución
(predominio de juveniles, mielocitos y promieloci- La duración promedio de la fase crónica es aproxi-
tos). No es raro que los sistemas eritropoyético y madamente de 3 a 5 años. La crisis blástica de la
megacariopoyético también estén hiperplásticos. En LMC es de muy difícil manejo, con una superviven-
algunos casos se ven células de tipo Gaucher, cuyo cia de 3 a 6 meses.
origen es similar a las verdaderas, pues el aumento
del catabolismo de los granulocitos conduce a un
Tratamiento
exceso de cerebrósidos. Fase crónica estable
En la fase blástica la suma de blastos y promielo- Durante la fase crónica se requiere de terapia
citos es por lo menos de un 30 %. citorreductora para evitar complicaciones trombóti-
Fosfatasa alcalina de los leucocitos. Se encuen- cas, que son el resultado de los altos niveles circu-
tran valores bajos y en ocasiones no es posible lantes de neutrófilos.
detectarla. La terapéutica convencional utiliza la hidroxiurea
Vitamina B 12 . Está elevada, al igual que la y el busulfán (Mylerán o Mielosán). La primera se
transcobalamina I y III. considera superior, ya que prolonga la supervivencia
Ácido úrico. Está aumentado y en el curso del tra- y causa menos reacciones adversas que el busulfán.
tamiento con citostáticos sus valores suelen elevar- Se administra en dosis de 20 a 40 mg/kg/día por vía
se aun más e incluso ocasionar una gota secundaria. oral, la que se ajusta para mantener un conteo de
La nefropatía por uratos no es frecuente.
. .
leucocitos entre 5,0 109 y 10,0 109/L. Puede pro-
ducir diarreas, mucositis o erupción cutánea, pero
Cromosoma Filadelfia. Se le halla en el 90 % de
que se toleran bien.El busulfán se utiliza en dosis de
los pacientes con LMC. Su presencia en todas las
2 a 8 mg/día con ajuste de ésta igual que con la
líneas celulares de la médula ósea, sólo puede signi-
hidroxiurea. Esta droga ha resultado ser muy tóxi-
ficar que la enfermedad se origina en la célula ma-
ca; produce fibrosis pulmonar, aplasia medular, pig-
dre. Sin embargo, no está claro por qué las células
mentación de la piel, un síndrome que recuerda a la
mieloides predominan en la fase crónica de la en-
enfermedad de Addison e infertilidad permanente.
fermedad.
Recientemente el interferón alfa ha ganado con-
Es probable que algunos de los enfermos Ph ne-
siderable interés. Algunos lo han utilizado al inicio
gativos sean en realidad portadores de un síndrome del tratamiento como primera droga, lo que produce
mielodisplástico. normalización del conteo leucocitario, reducción de
la esplenomegalia, supresión del cromosoma Ph en
Diagnóstico el 20 o 30 % de los pacientes y un aumento del tiem-
Desde el punto de vista clínico, el diagnóstico dife- po de supervivencia. La dosis ha sido variable, pero
rencial se plantea con las afecciones capaces de pro- en general se comienza con 3 000 000 de unidades
ducir una esplenomegalia masiva. Hay que establecer por vía subcutánea por día durante 3 semanas y si el
las diferencias con la metaplasia mieloide agnogé- conteo de leucocitos no baja, se aumenta a 5 000 000
nica, la leucemia linfoide crónica, los linfomas y la de unidades por día. Este tratamiento es caro y pro-
esplenomegalia en el curso de una cirrosis hepática duce muchas reacciones adversas: un síndrome pa-
y el paludismo, en los países donde exista esta últi- recido a la gripe con fiebre y mialgias, leucopenia,
ma enfermedad. trombocitopenia, síntomas neurológicos, neuropsi-

428
quiátricos, gastrointestinales, alteración de la fun- Después de la quimioterapia de inducción se culti-
ción hepática, etc. Algunos plantean que el interfe- van células Ph negativas durante la fase de recupe-
rón alfa es la primera línea terapéutica en pacientes ración, y se trasplantan con posterioridad; sin
con LMC que no son elegibles para trasplante embargo, es inevitable que resurjan células Ph posi-
alogénico de médula. tivas, quizás porque no se pudieron remover la tota-
En esta fase crónica el elevado conteo de leucoci- lidad de ellas y además, porque no es posible obtener
tos puede causar trombos en el pulmón, el cerebro, el efecto injerto–contra–leucemia.
la retina, etc., lo que produce hemorragias e infar- La sangre del cordón umbilical es una atractiva
tos. En estos casos se usa la hidroxiurea (750 mg/ nueva fuente de células madres hematopoyéticas
m²/cada 6 h), hasta que baje el conteo de leucocitos alogénicas. Es probable que reduzca la severidad de
a menos de 50 000/mm³. Hay que hidratar bien al la enfermedad injerto–contra–huesped y en la ac-
paciente y la hiperuricemia debe ser controlada con tualidad se han reportado buenos resultados en
alopurinol (300 mg/día). Hay autores que han uti- la LMC.
lizado en estos casos la doxorrubicina en dosis de En conclusión, el trasplante de médula está hoy
60 mg/m², la cual causaría una rápida caída del establecido como el tratamiento de elección en la
conteo leucocitario. También se utiliza la leucofo- LMC, pero sólo una pequeña cantidad de pacientes
resis. se benefician de él, por la edad y por la falta de dis-
El trasplante alogénico de médula ósea de un her- ponibilidad de donantes adecuados.
mano histocompatible, en pacientes por debajo de
50 años, es el único tratamiento curativo de que se Fase acelerada y crisis blástica
dispone en la actualidad; se consiguen superviven- En la fase acelerada, tanto el aumento de la dosis de
cias a largo plazo libre de enfermedad, en el 50 a 60 % hidroxiurea como de busulfán han sido por lo gene-
de los pacientes en fase crónica. Se plantea que a ral insatisfactorios. El trasplante medular es menos
menor intervalo entre el diagnóstico y el trasplante, efectivo, aunque se debe intentar si hay un hermano
mayor será la supervivencia. Sin embargo, el riesgo histocompatible.
de morbilidad y mortalidad asociado al transplante En general, la estrategia es usar los mismos me-
es alto, por lo que algunos prefieren comenzar con dicamentos que en la leucemia aguda, aunque la
interferón alfa o con hidroxiurea. Por otra parte, las respuesta no es buena; se ha utilizado la citosina ara-
dos terceras partes de los pacientes no tienen her- binósido en altas dosis con mala respuesta y gran
manos histocompatibles o son demasiado viejos para toxicidad.
tolerar un trasplante. En caso de que la crisis sea mieloblástica, se pue-
Con este proceder se establece una severa com- de utilizar el mismo tratamiento que se describió en
plicación que ha sido llamada injerto–contra–hués- el capítulo de la leucemia aguda mieloblástica. En
ped, cuyo cuadro se describe en el capítulo de las aquellos pacientes cuya crisis blástica sea linfoblás-
leucemias agudas. Por otra parte, existe una rela- tica (TdT positivas) se usa vincristina (1,4 mg/m²,
ción entre esta complicación potencialmente fatal, y EV, con una dosis máxima de 2 mg) y prednisona,
el éxito a largo plazo del trasplante. Este fenómeno 60 mg/ m²/día. Si hay buena respuesta, se sigue con
se denomina injerto–contra–leucemia. Su importan- el esquema de una leucemia linfoblástica.
cia se pone de manifiesto cuando se hace un tras- Por supuesto, el enfermo requiere hospitalización
plante con médula ósea depletada de linfocitos T. Si y apoyo con productos hemáticos (sangre, plaque-
bien es cierto que se reduce la mortalidad de injer- tas, etc.).
to–contra–huesped, también es cierto que las recaí-
das llegan a un 60 %.
Estos resultados demuestran que los linfocitos T LEUCEMIA LINFOIDE
de la médula del donante, constituyen un ingredien-
te crítico en el éxito del trasplante alogénico en pa- CRÓNICA
cientes con LMC.
De igual modo se utiliza el trasplante autólogo en La leucemia linfoide crónica (LCC) es un trastorno
enfermos que no tienen donantes histocompatibles. clonal maligno de linfocitos morfológicamente

429
maduros, con predominio de linfocitos B, aunque Esplenomegalia: Al inicio hay una esplenome-
en el 5 % de los casos son linfocitos T. galia moderada, aunque a veces es enorme.
En los de tipo B el clono anormal, o remplaza a Hepatomegalia: El hígado suele estar ligeramen-
las células B normales o inhibe su crecimiento y ma- te aumentado de tamaño.
duración, deprime los niveles de inmunoglobulinas Piel: Las manifestaciones cutáneas son más co-
y altera la inmunidad humoral. Es el tipo de leuce- munes que en la LMC y se ven lesiones inespecífi-
mia más común en el hemisferio occidental. cas o leucémides (eritema, urticaria, vesículas, etc.),
En el 50 % de los casos se ha encontrado una o específicas por infiltración leucémica de la piel.
trisomía 12 en las células B malignas. También se Trastornos inmunológicos: La LLC ocasiona con
frecuencia alteraciones en la esfera inmunológica,
han reportado anormalidades en otros cromosomas.
por lo cual no resulta extraño encontrar en su evolu-
Cuadro clínico ción anemias hemolíticas y trombocitopenias inmu-
nes, así como infecciones, a veces de difícil control,
El hallazgo principal en la LLC es el conteo au- que complican el curso de esta enfermedad. En un
mentado de leucocitos, con un 80 % de linfocitos reducido número de pacientes se halla una gamma-
pequeños. patía monoclonal por IgM. En los estadios tardíos
Presenta un amplio espectro de signos y síntomas hay fiebre, sudoración nocturna y rápido agranda-
que corre paralelo a las grandes variaciones del cur- miento de masas tumorales, tanto ganglionares como
so de esta enfermedad. Con frecuencia se detecta en extraganglionares.
un examen fortuito de sangre a un individuo asinto- La crisis blástica ocurre rara vez. Pocos pacien-
mático. Otras veces el paciente asiste a la consulta tes evolucionarán hacia una enfermedad más agre-
del médico por haber notado crecimiento del bazo o siva, en particular un linfoma de células grandes
de los ganglios linfáticos, palidez, debilidad, pérdi- (síndrome de Richter) o hacia una leucemia prolin-
da de peso y anorexia. focítica.
La edad media del diagnóstico es de 55 años, con El sistema de clasificación FAB propone tres ti-
sólo un 10 o 15 % por debajo de 50 años. Afecta pos morfológicos, basados en la proporción de lin-
más a los hombres que a las mujeres. focitos atípicos en la sangre:
A medida que la afección progresa el conteo de
leucocitos se incrementa, aparece la anemia y la 1. Leucosis linfoide crónica típica (más del 90 %
trombocitopenia y hay una progresiva infiltración de linfocitos son pequeños).
medular. Puede instalarse un hiperesplenismo o un 2. Leucemia prolinfocítica (proporción de prolin-
fenómeno autoinmune. Los ganglios linfáticos au- focitos entre 11 y 54 %).
3. Leucemia linfoide crónica atípica (morfología
mentan de volumen y aparecen en nuevas regiones,
heterogénea de células linfoides, pero con una
y se presentan infecciones recurrentes.
proporción de prolinfocitos de menos del 10 %).
En el examen físico se encuentran las alteracio-
nes siguientes: Algunos consideran que estos criterios son arbi-
Adenopatías: Constituyen las manifestaciones ob- trarios y que la leucemia prolinfocítica no debe ser
jetivas más características y constantes, son mucho considerada como una variante de la LLC, sino como
más frecuentes que en la LMC y pueden constituir una entidad propia que está caracterizada por un ele-
el primer signo de alarma para el enfermo. Se trata vado conteo de leucocitos en la sangre periférica,
de adenopatías superficiales, cuyo tamaño oscila un fenotipo típico, esplenomegalia, resistencia a la
entre el de un frijol y el de una nuez, indoloras a la terapéutica y linfadenopatía mínima.
palpación, de consistencia elástica, firmes, bien Se han propuesto varios sistemas de estadio ba-
delimitadas y no adheridas a planos superficiales ni sados en el concepto de que los factores de mayor
profundos, y que en ocasiones forman conglomera- pronóstico son: el número de áreas ganglionares afec-
dos duros. Cuando están afectados los ganglios me- tadas, la extensión de la hepatosplenomegalia y el
diastinales llegan a producir síntomas de compresión; grado de anemia y trombocitopenia. En los cuadros
la oclusión de los uréteres es rara. 56.6; 56.7 y 56.8 se exponen los más utilizados.

430
CUADRO 56.6
ETAPAS DE LA LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
SEGÚN RAI Y COLS.

Etapa clínica Supervivencia


media en meses

Etapa 0 Linfocitosis absoluta < 15 000. > 150

Etapa I Linfocitosis absoluta + linfadeno- 105


patía .
Etapa II Linfocitosis absoluta y linfadeno- 71
patía con aumento del hígado, del
bazo o de ambos.
Etapa III Linfocitosis absoluta y linfadeno- 19
patía más anemia ( Hb < 110 g / L).
Etapa IV Linfocitosis absoluta y linfadeno- 19
patía más trombocitopenia
.
(< 100,0 109/L).

CUADRO 56.7
CLASIFICACIÓN INTERNACIONAL Fig. 56.4. Lámina de sangre periférica en una leucemia linfoide
DE LA LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA crónica. Se observan abundantes linfocitos maduros.

Grupo A: Menos de tres áreas linfoides aumentadas de ta- Medulograma: Cuando se diagnostica la enfer-
maño sin anemia ni trombocitopenia.
Grupo B: Tres o más áreas linfoides aumentadas de tama-
medad por lo común la infiltración medular por
ño sin anemia ni trombocitopenia. linfocitos es discreta y se mantienen íntegros los sis-
Grupo C: Anemia o trombocitopenia, o ambas. temas medulares. Después aumenta la infiltración
medular, con depresión variable de los sistemas eri-
Se consideran como áreas linfoides: hígado, bazo, adeno-
patías en las regiones laterocervicales, axilares e inguinales.
tropoyético, granulopoyético y megacariopoyético.
Prueba de Coombs: Es positiva en caso de que
aparezca una anemia hemolítica autoinmune.
CUADRO 56.8 Electroforesis de proteínas: El 25 % de los pa-
COMBINACIÓN DE LA CLASIFICACIÓN RAI
Y LA INTERNACIONAL DE LA LEUCEMIA
cientes tiene hipogammaglobulinemia y el 10 % hi-
LINFOIDE CRÓNICA pergammaglobulinemia. Un pequeño número de
casos tiene una gammapatía monoclonal IgM que
Grupo A ( 0, I, II ) se asemeja a la gammapatía producida en la macro-
Grupo B ( I, II )
Grupo C ( III, IV )
globulinemia de Waldenström.
Inmunofenotipo: Hay presencia de inmunoglobu-
linas de superficie de membrana de baja densidad,
Exámenes complementarios CD5+, CD19+, CD20+ y CD23+, entre las princi-
Hemograma: La leucocitosis es frecuente y gene- pales. Se considera que en los enfermos cuyos lin-
ralmente no tan intensa como en la LMC, aunque no focitos no expresen el CD5+, el diagnóstico debe
son raros conteos de 100,0 109 L.. ser cuestionado.
En la fórmula leucocitaria hay un predominio de
linfocitos pequeños (entre 80 y 90 %), muy seme- Diagnóstico
jantes unos a otros (Fig. 56.4). La LLC se sospecha ante un paciente mayor de
En el comienzo de la enfermedad no hay anemia 50 años con un cuadro de adenopatías generaliza-
ni trombocitopenia, pero ambas van apareciendo y das y esplenomegalia. Los hallazgos ya descritos en
acentuándose a medida que la afección progresa. la sangre y la médula confirman el diagnóstico.

431
Hay que establecer el diagnóstico diferencial con normales y se restaura cuando hay recaída. Las res-
las reacciones leucemoides linfoides, los linfomas, puestas completas son raras.
la leucemia prolinfocítica y la leucemia de células Hoy día se prefiere el tratamiento con los análo-
vellosas. gos de la purina, que son muy activos en esta enfer-
medad.
Evolución Monofosfato de fludarabina: 25 mg/m²/día, por
El curso es variable y mientras algunos tienen una vía EV, a pasar en 30 min, durante 5 días consecuti-
larga supervivencia, otros mueren en los 5 años pos- vos cada 4 semanas. Produce mielosupresión, neu-
teriores a hacerse el diagnóstico. Aquéllos con anor- ropatía de bajo grado y profunda inmunodepresión
malidades cromosómicas viven menos. con peligro de infecciones y además, puede poten-
Debe recordarse que la aparición de una anemia ciar la aparición de una anemia hemolítica autoin-
hemolítica, una trombocitopenia inmune y sobre todo mune. Con este tratamiento una tercera parte de los
de infecciones, ensombrecen el pronóstico; y éste pacientes tienen una remisión completa.
empeora en la transición hacia un linfoma de célu- La prednisona aumenta la posibilidad de infec-
las grandes (síndrome de Richter). ciones oportunistas, por lo que no se recomienda
asociarla a los análogos de la purina.
Tratamiento Clorodeoxyadenosina: Se utiliza en dosis de 0,12
Hasta el momento no hay un tratamiento curativo a 0,14 mg/kg/día, por vía EV, suministrada en 2 h,
para la LLC, aunque el diagnóstico de ésta en sus por 5 días. El ciclo se repite cada mes.
inicios no implica la necesidad de terapéutica; tam- Deoxicoformicino (Pentostatín): Se administran
poco es probable que lo requieran pacientes en esta- 4 mg/m² por vía EV, en bolo cada 14 días. También
dio A de la clasificación internacional, con un conteo se da ciclofosfamida: 300 mg/m² diarios por vía oral,
.
de leucocitos de menos de 30,0 109/L, una concen- durante 5 días, o 750 mg/m² por vía EV, en una
tración de hemoglobina mayor de 130 g/L y una dosis repetida cada 4 semanas.
histología medular no difusa. Hay autores que utilizan la quimioterapia combi-
Los pacientes con enfermedad inicial estable sue- nada:
len sobrevivir tanto tiempo como los sujetos norma- COP (ciclofosfamida–vincristina–prednisona), o
les de la misma edad. Por otra parte, en esta fase el CHOP (ciclofosfamida–adriamicina–vincristina–
tratamiento es capaz de retardar su progresión, pero prednisona), pero los resultados no han sido mejo-
no prolonga la supervivencia. res que con la fludarabina.
En los estadios I y II de la clasificación Rai, si En caso de anemia hemolítica autoinmune o de
los pacientes están estables, puede diferirse el trata- púrpura trombocitopénica inmunológica se da pred-
miento, pero si hay afectación progresiva de áreas nisona en dosis de 60 mg diarios por vía oral, por 2
ganglionares, la hemoglobina y las plaquetas des- o 3 semanas.
cienden y hay síntomas relacionados con la afec- La esplenectomía puede se útil en la LLC. Sus
ción (pérdida de peso, fatiga, fiebre, sudoración indicaciones son las siguientes:
nocturna), necesitan de terapéutica.
En los estadios III y IV siempren hay que tratar al • Esplenomegalia dolorosa
paciente. • Anemia profunda
Ha sido tradicional que la primera línea del tra- • Aumento de requerimientos transfusionales
tamiento sea el clorambucil (Leukerán), en dosis de • Trombocitopenia importante
6 u 8 mg/día, vía oral o 0,4 a 0,8 mg/kg, oral, cada
2 semanas. Algunos añaden la prednisona, 80 mg/ Se ha sugerido el tratamiento con gammaglobuli-
día, oral, por 5 días. Recientemente se ha planteado na EV como profilaxis para las infecciones, pero es
que la asociación de clorambucil con prednisona no bastante cara y la efectividad ha sido cuestionada.
tiene mejores resultados que el primero solo. La lisis tumoral masiva es muy rara en la LLC;
Por lo general, el tratamiento es descontinuado sus manifestaciones más importantes son una sus-
cuando el conteo de leucocitos y el diferencial son tancial reducción de la masa tumoral palpable, fie-

432
bre, malestar general y disminución rápida del conteo El cuadro clínico de la LCV se caracteriza funda-
de leucocitos. La creatinina se eleva y se puede pro- mentalmente por esplenomegalia, pancitopenia e
ducir una insuficiencia renal aguda. Por lo tanto, en infecciones causadas por alteración de las defensas
presencia de un gran tumor se debe utilizar alopurinol del huésped.
profiláctico, adecuada hidratación y chequeo de la La célula B maligna infiltra la médula y también
función renal antes de comenzar el tratamiento. el bazo y causa esplenomegalia. Esta asociación de
En caso de grandes esplenomegalias que causen infiltración medular y esplénica ocasiona una pan-
muchas molestias al enfermo, se utiliza la irradia- citopenia (a veces monocitopenia).
ción local del bazo con fines paliativos. La neutropenia produce infecciones, la compli-
La anemia intensa a veces responde a la eritropo- cación más grave en estos enfermos y que casi
yetina: 150 U/kg subcutánea, 3 veces a la semana, siempre es originada por micobacterias atípicas (tu-
que de ser necesario se incrementan gradualmente a berculosis, neumonitis por Legionella, nocardosis,
300 U/kg con igual frecuencia. toxoplasmosis, histoplasmosis, etc.).
El trasplante de médula ósea debe ser considera- El 30 % tiene un trastorno vasculítico asociado
do en pacientes jóvenes con LLC de alto riesgo. (eritema nudoso, nódulos subcutáneos y una afecta-
ción visceral similar a la periarteritis nudosa). Esta
vasculitis suele responder al interferón alfa.
LEUCEMIA DE Con posterioridad, en el curso de la enfermedad
puede haber infiltración de los pulmomes, ganglios,
CÉLULAS VELLOSAS piel, riñón, cerebro, huesos, páncreas, etc.

Bourovele, en 1958, describió la leucemia de célu- Exámenes complementarios


las vellosas (LCV), aunque fue Schrek en 1966 quien Hemograma. La anemia es común, por lo que estos
denominó a la célula patognomónica “célula vello- enfermos requieren de frecuentes transfusiones de
sa” o “célula peluda”, por sus típicas prolongacio- sangre. En ella intervienen tanto el secuestro esplé-
nes citoplasmáticas. Desde entonces han aparecido nico de hematíes como la disminución de la función
en la literatura una gran cantidad de trabajos acerca eritropoyética medular. Se han descrito casos con
de nuevos casos de esta enfermedad. anemia hemolítica inmune. La pancitopenia está pre-
Es una forma rara de leucemia que se observa sente en la mayoría de los enfermos y son muy fre-
sobre todo en pacientes viejos, del sexo masculino, cuentes la granulocitopenia y la monocitopenia.
y que cursa con una gran esplenomegalia, adenopa- El número de células vellosas es variable y puede
tías (infrecuentes), pancitopenia y la aparición en la llegar hasta el 90 % en la sangre circulante. Estas
sangre periférica y médula de células con proyec- células conocidas también con el nombre de trico-
ciones citoplasmáticas parecidas a pelos. Tiene por leucocitos, miden de 10 a 20 µm de diámetro y po-
lo general un curso crónico con empeoramiento pro- seen un núcleo excéntrico y citoplasma espumoso.
gresivo del enfermo. En la mitad de los casos se observa un nucléolo.
El trastorno es casi siempre ocasionado por linfo- Las prolongaciones citoplasmáticas, que le dan
citos B neoplásicos, que expresan y a menudo pro- mombre a la célula, por lo común son finas e irregu-
ducen inmunoglobulina monoclonal. Incluyen, como lares, pero otras veces son amplias y romas; se ven
todo linfocito B, marcadores tales como CD19 y mejor con el microscopio de fase. Estas células se
CD20. tiñen positivamente con la fosfatasa ácida tartrato–
Se han descrito variantes de células T, aunque son resistente.
raras. Plaquetas.En cerca de la mitad de los casos hay
trombocitopenia al inicio de la enfermedad.
Cuadro clínico Medulograma. La aspiración de la médula ósea
La mayoría de los pacientes son mayores de 40 años, raras veces tiene éxito a causa de la fibrosis de
con una edad media de 55, y el 80 % pertenecen al reticulina y debe acudirse a la biopsia medular. Otras,
sexo masculino. la no obtención de material hace que por error se

433
diagnostique como una anemia aplástica o una La introducción de la 2-clorodeoxiadenosina ha
mielofibrosis primaria. tenido el mayor impacto, ya que produce remisión
completa en cerca del 80 % de los enfermos. La do-
Evolución y pronóstico sis utilizada es de 0,1mg/kg/día en infusión conti-
La evolución es crónica casi siempre, aunque en al- nua de 24 h por 7 días. Su toxicidad es moderada y
gunos pacientes la enfermedad sigue con rapidez un por lo general produce fiebre, pero provoca leuco-
curso fatal si no se trata adecuadamente. La progre- penia y trombocitopenia algunas veces.
sión de la anemia y las infecciones son dos de los La deoxicoformicina (Pentistatín) es capaz de pro-
problemas más importantes que se deben considerar ducir remisión completa hasta en un 75 % de los
en estos enfermos. casos. Se utiliza en dosis de 4mg/m², EV, en sema-
El pronóstico ha mejorado con la introducción de nas alternas por 3 a 6 meses. Es más tóxica que la
nuevas drogas que se describirán a continuación. droga anterior.
Tratamiento .
El interferón alfa se utiliza en dosis de 2 106
UI/m², por vía subcutánea 3 veces a la semana. Pro-
En el 25 % de los casos no hay síntomas importan- duce buenas respuestas, pero al costo de su toxi-
tes en el inicio de la enfermedad, por lo que éstos no cidad.
requieren tratamiento inmediato. Se han utilizado cursos cortos de glucocorticoi-
Hasta hace poco la base fundamental del trata- des para controlar la vasculitis o las manifestacio-
miento era la esplenectomía, pero hoy ha sido susti-
nes autoinmunes.
tuida por medicamentos que han tenido un gran éxito
Las infecciones se deben tratar enérgicamente y
en el manejo de estos pacientes, aunque mantiene
como la neumonitis por Legionella es frecuente, al-
su indicación en situaciones de citopenias que supo-
gunos recomiendan en pacientes con infiltrados pul-
nen una amenaza para la vida. Hay que recordar que
la cirugía tiene riesgos y que los esplenectomizados monares administrar eritromicina en altas dosis.
siempre están necesitados de ulterior tratamiento con No está definido aún el papel de los factores esti-
fármacos. mulantes de colonia.

434
57
LINFOMAS

Los linfomas constituyen un grupo heterogéneo de conocimientos cada vez más avanzados de la com-
enfermedades malignas, caracterizadas por la proli- posición y estructura de los ganglios linfáticos, en
feración neoplásica de la porción linforreticular del relación con sus funciones inmunológicas. Probable-
sistema reticuloendotelial, que afecta sobre todo a mente se cometen más errores diagnósticos con ellos
las células de la serie linfocítica e histiocitos. que con cualquier otro órgano del cuerpo. La des-
cripción morfológica del ganglio linfático ha sido
Etiología interpretada como algo estático, sin tener en cuenta
Los linfomas se dividen en dos grandes grupos su constante respuesta a los estímulos, aun en au-
—enfermedad de Hodgkin y linfomas no Hodgkin—, sencia de enfermedad crónica. De esta forma se ha
han sido descritos en todas las razas y grupos étnicos evolucionado de la contemplación morfológica a las
y no se ha encontrado un agente etiológico en la técnicas de inmunohistoquímica y de biología molecu-
mayoría de los casos. La ocurrencia de enfermedad lar, que han permitido el conocimiento más detalla-
de Hodgkin (EH) en varios miembros de una mis- do de la maduración de los linfocitos en cada etapa
ma familia, inclina a pensar que tanto los factores clonal, y dado origen al descubrimiento de subtipos
genéticos como los del medio ambiente pueden ser diferentes de linfomas, con clínica, morfología y pro-
importantes en su patogenia. Se ha sugerido que la nóstico independientes, de los cuales se conoce cada
EH es producida por un virus que posee un poten- vez más. Todo esto hace pensar que mientras más se
cial oncógeno bajo, que aumenta con la edad. Por desarrollen las nuevas técnicas, más entidades se
otra parte, hay una asociación muy estrecha entre el añadirán al ya extenso grupo de linfomas, en espera
Burkitt y el virus de Epstein–Barr (VEB), y la leu- de que esto redunde en su mejor diagnóstico y
cemia humana de células T y el virus HTLV-1. Los tipificación y al final, en un mejor tratamiento.
pacientes con mononucleosis infecciosa, enferme-
dad asociada a una exposicion al VEB, tienen un Arquitectura normal del ganglio linfático
mayor riesgo de padecer de EH. Estructuralmente, los ganglios tienen forma oval o
Se ha demostrado un incremento de linfomas no reniforme y su diámetro oscila entre 1 y 25 mm. Su
Hodgkin en trastornos inmunológicos congénitos, contorno es convexo, rodeado de una cápsula de te-
ataxia-telangiectasia, inmunodeficiencia severa jido conjuntivo y fibras elásticas, excepto en el hilio,
combinada y síndrome de Sjögren. Por otra parte, por donde entran y salen los vasos sanguíneos y los
en el SIDA o en el uso continuado de agentes inmu- linfáticos eferentes (Fig. 57.1).
nosupresores que siguen a los trasplantes, también El ganglio linfático está dividido en tres grandes
se ha reportado un aumento de estos linfomas. regiones: corteza, paracorteza y médula. La corteza
En pacientes con EH no tratados, se encuentra un está situada por debajo de la cápsula y contiene un
trastorno de la inmunidad que persiste después de gran número de folículos. La médula, cerca del hilio,
su curación. es rica en vasos linfáticos y sanguíneos, con un con-
tenido menor de linfocitos. Ambas, la corteza y la
Anatomía patológica médula, están representadas por los linfocitos B (zona
La interpretación microscópica de las biopsias gan- B), que son los responsables de la respuesta inmune
glionares alcanza una nueva dimensión a raíz de los humoral. El aspecto de los folículos varía según su

435
Folículos linfoides
secundarios
Corteza parafolicular (Zona cel. B) Vasos
(Zona cel. T) linfáticos
aferentes

Senos periféricos

Cápsula
Folículo linfoide
Trabécula primario

Médula Vasos Arteria Sinusoides de la


linfáticos y médula
vena
eferentes

Fig. 57.1. Arquitectura normal del ganglio linfático.

estado de actividad. Los primarios constituyen un o difusos, provienen en un 90 % de los casos de lin-
conglomerado de linfocitos; los secundarios apare- focitos B y el resto corresponde a los linfocitos T y
cen por estimulación antigénica y están caracteriza- en contadas ocasiones a histiocitos.
dos por la presencia de los centros germinales. Las Se dividen en dos grandes grupos: linfomas de
células presentes en esta formación son los linfoci- Hodgkin y linfomas no Hodgkin.
tos B y se conocen como células centrofoliculares A continuación se exponen las características
(centroblastos o centrocitos, o como células peque- morfológicas de los más importantes, con las equi-
ñas o grandes, hendidas o no hendidas), macrófagos valencias entre la clasificación REAL y la Working
y células dendríticas reticulares. El centro germinal Formulation (WF), siempre que sea posible. Tam-
está rodeado por pequeños linfocitos B, lo que da bién se señalará el inmunofenotipo y el genotipo,
lugar a la zona del manto. En condiciones de aunque de estos últimos sólo se hará referencia a
reactividad se acumulan linfocitos B por fuera de la los más importantes.
zona del manto, y ocupan la región denominada zona
marginal de células B. I. Enfermedad de Hodgkin.
La médula está constituida por elementos celula- Afecta al tejido linfoide, en particular el ganglio,
res semejantes a los de la corteza, pero su ordena- y rara vez es extraganglionar. La célula que lo iden-
miento es distinto; las células linfoides forman tifica es la de Reed-Sternberg, en un entorno infla-
cordones densos, de los cuales algunos se continúan matorio, acompañada en ocasiones de tejido fibroso
con los nódulos corticales. La región más profunda proliferativo.
contiene, además, numerosas células plasmáticas y 1.Predominio linfocítico. Muestra células en pa-
escasos linfocitos. lomitas de maíz, aspecto nodular del ganglio y
La paracorteza es la zona situada entre la corteza pocas células T, las cuales forman rosetas alre-
y la médula, donde están ubicados los linfocitos T; dedor de las células de Hodgkin.
está también presente la célula reticular interdigi- 2. Esclerosis nodular. El cuadro morfológico está
tante. constituido por la célula lacunar y bandas de
Toda esta estructura celular está sostenida por una colágeno. A su vez, dentro de la esclerosis
armazón reticular. nodular se distinguen 4 variantes o subtipos his-
tológicos:
Morfología de los linfomas a. Fase celular sin esclerosis y áreas inter-
Los linfomas constituyen neoplasias malignas de los foliculares con células de Reed-Sternberg y
ganglios linfáticos, que adoptan patrones foliculares lacunares (Figs. 57.2 y 57.3).

436
Fig. 57.2. Enfermedad de Hodgkin de tipo esclerosis nodular,
en la que se observan bandas de colágeno y numerosas células
lacunares. (Las microfotografías de linfomas fueron gentilmente
facilitadas por el Dr. Abel Blanco Fernández, especialista de Fig. 57.4. Enfermedad de Hodgkin. Variante pleomórfica de
1er. grado en Anatomía Patológica del hospital clinicoquirúr- una esclerosis nodular. Nótese el tamaño y pleomorfismo ce-
gico docente Saturnino Lora, Santiago de Cuba, tomadas del lular, que recuerda a los tumores metastásicos.
III y IV Cursos de Hematopatología; Tortosa, Barcelona, Es-
paña, 1997.) b. Variante sincitial con predominio de las cé-
lulas pleomórficas (Fig. 57.4).
c. Subtipo histiocítico con predominio de
histiocitos.
d. Subtipo xantomatoso o xantogranulomatoso
con necrosis intensa.
Estas variantes pueden desarrollar una fase
obliterativa total con fibrosis progresiva y desa-
parición de los nódulos tumorales.
3. Celularidad mixta. Muestra aspecto granulo-
matoso y es rica en eosinófilos, células plas-
máticas, linfocitos, neutrófilos y abundantes
células de Reed-Sternberg (Fig. 57.5).
4. Depleción linfocítica. Es menos frecuente y más
agresiva, sarcomatosa, con escasos linfocitos
y focos de necrosis.

II. Linfomas no Hodgkin.


1. Neoplasias precursoras de células B.
• Leucemia / linfoma linfoblástico de células B
(REAL).
• Linfoma linfoblástico (WF).
Fig. 57.3. Enfermedad de Hodgkin. Inmunohistoquímica CD15+ Las células tumorales son de tamaño in-
con patrón de Golgi y de membrana en una esclerosis nodular. termedio, entre linfocitos pequeños y blastos

437
Fig. 57.5. Enfermedad de Hodgkin de tipo celularidad mixta. Fig. 57.6. Linfoma no Hodgkin, con centro de proliferación
En el centro se observa una célula de Reed-Sternberg. prolinfocítica.

grandes, con citoplasma escaso y núcleos con


abundante mitosis.
Inmunofenotipo: TdT+, CD10+.
Genotipo: no anormalidades consistentes.
2. • Linfoma de linfocitos pequeños (REAL).
• Linfoma de linfocitos pequeños (WF).
Las células que predominan son los linfoci-
tos pequeños o medianos, con núcleo redondo
y citoplasma escaso (Fig. 57.6).
Inmunofenotipo: CD5+, CD19+, CD20+.
Genotipo: Trisomía 12, t (11; 14).
3. • Linfoma de células del manto (REAL).
• Linfoma difuso o nodular de células peque-
ñas hendidas (WF).
Los linfocitos son de pequeño a mediano ta-
maño, con citoplasma escaso y núcleos y
nucléolos pequeños. En muchos casos el nú-
cleo es irregular o hendido (Fig. 57.7).
Inmunofenotipo: CD20+, CD10-, CD23-,
CD5+.
Genotipo: t (11; 14).
4. • Linfoma centrofolicular/folicular (REAL)
(Fig. 57.8).
Fig. 57.7. Linfoma no Hodgkin de células del manto. Obsér-
• Linfoma folicular de células pequeñas hendi- vense las células de aspecto centrocítico (células pequeñas
das o mixto (WF). hendidas, WF).

438
Fig. 57.8. Linfoma no Hodgkin de tipo folicular. Nótese el pa- Fig. 57.9. Linfoma no Hodgkin de células grandes. Existe un
trón nodular y ausencia del manto. predominio de células centroblásticas e índice mitótico elevado.

Tienen un patrón folicular que afecta a todo Genotipo: Reordenamiento del gen bel-2 y
el ganglio y está compuesto por células centro- c-myc en algunos casos; en otros, trasloca-
foliculares; centrocitos o centroblastos, con pre- ción (14;18) que sugiere origen folicular; a
dominio de los primeros. veces se produce un reordenamiento en las
Inmunofenotipo: Expresan antígenos asocia- Ig a nivel de las cadenas ligeras y pesadas.
dos a células B, IgS, CD10+, CD5-. 7. Linfoma de Burkitt (REAL).
Genotipo: t (14;18) (q32: q21).
Linfoma de células pequeñas no hendidas
5. • Linfoma de células B de la zona marginal
Burkitt (WF) (Fig. 57.10).
nodal/extranodal (REAL).
Micosis fungoide / síndrome de Sézary
• Sin equivalente (WF).
(REAL).
Afecta al tejido linfoide asociado a las
Micosis fungoide (WF) .
mucosas. Ver en este capítulo linfomas MALT.
6. • Linfoma B difuso de células grandes (REAL). 8. Linfoma de células T y de células natural killer.
• Linfoma difuso de células grandes hendidas • Leucemia / linfoma linfoblástico precursor T
o no hendidas, o inmunoblástico. Ocasional- (REAL).
memente difuso mixto de células pequeñas • Linfoma linfoblástico (WF).
o grandes (WF). Las células corresponden a linfoblastos que
Está compuesto por células grandes, núcleo por su morfología es imposible diferenciarlos
vesicular, nucléolo prominente y citoplasma del linfoblástico de células B.
basófilo. Pueden haber células grandes hendi- Inmunofenotipo: CD7+ y CD3+ en la ma-
das o multilobuladas y células grandes anaplá- yoría de los casos y antígenos asociados a
sicas. Hay un subtipo con células grandes rico células B.
en células T (Fig. 57.9). Genotipo: Reordenamiento variable de los
Inmunofenotipo: IgS+, CD19+, CD20+, genes TCR e IgH, así como anormalidades
CD10+. citogenéticas y Tdt+.

439
Fig. 57.10. Linfoma de Burkitt, constituido por células peque- Fig. 57.11. Linfoma no Hodgkin periférico de células T, con
ñas no hendidas, índice mitótico elevado e imagen en cielo patrón angiocéntrico.
estrellado.

9. Linfoma periférico de células T. hasta células anaplásicas que infiltran la mu-


Incluye 4 subtipos. cosa.
a. Angioinmunoblástico de células T (REAL). d. Leucemia / linfoma de células del adulto
Linfoma difuso mixto de células grandes y pe- (REAL).
queñas. Inmunoblástico (WF). Linfoma difuso de células pequeñas hendidas.
La población celular mixta es parecida a la Difuso mixto de células grandes. Inmunoblás-
de la enfermedad de Hodgkin tipo celularidad tico (WF).
mixta. Células de pequeño tamaño con núcleos Afecta al ganglio de manera difusa con células
irregulares y nucléolos pequeños. de mediano a gran tamaño, polimorfas, con nú-
b. Linfoma angiocéntrico (REAL) (Fig. 57.11). cleos hiperlobulados. Está asociado al virus
Linfoma difuso de células pequeñas hendidas. HTLV-1.
Difuso mixto de células grandes y pequeñas.
Difuso de células grandes (WF). Cuadro clínico
Infiltración angioinvasiva de linfocitos, in-
munoblastos, células plasmáticas y en ocasio- A continuación se describirán las manifestaciones
nes eosinófilos e histocitos. Invasión de paredes clínicas y los exámenes complementarios que son
vasculares por células linfoides. comunes a ambos tipos de linfomas y después se
c. Linfoma intestinal de células T con o sin hará referencia a las características especiales de cada
enteropatía (REAL). uno de ellos.
Linfoma difuso de células pequeñas hendidas. Las distintas variedades de linfomas tienen sín-
Difuso mixto de células grandes y pequeñas. tomas y signos que guardan semejanza entre sí; no
Difuso de células grandes (WF). obstante, existen algunas diferencias entre los linfo-
Úlceras malignas en el yeyuno. Mezcla de mas Hodgkin y no Hodgkin que se irán señalando
células de tamaño pequeño, mediano y grande, en el desarrollo de este capítulo.

440
Los linfomas se originan en los ganglios linfáti- embargo es raro en la enfermedad de Hodgkin con
cos o en el tejido linfoide del parénquima de órga- la misma toma.
nos como el intestino, pulmones, piel, etc. En la Las adenopatías intrabdominales pueden produ-
enfermedad de Hodgkin el proceso se inicia en un cir ictericia obstructiva por el mismo mecanismo
90 % de los casos en los ganglios linfáticos y en un (adenopatías en el hilio hepático), síndrome de malab-
10 %, fuera de ellos, a diferencia de los no Hodgkin, sorción por toma de los ganglios mesentéricos, obs-
en los cuales el 75 % tiene origen ganglionar y el trucción de la vena cava inferior, etc.
25 % extraganglionar. Cuando el tejido extragan- Fiebre. Suele presentarse en todos los tipos de
glionar está involucrado, el cuadro clínico depende- linfomas y constituye, en ocasiones, el síntoma más
rá de la víscera afectada. prominente. Aparece con mayor frecuencia en la en-
Por lo general, los síntomas iniciales son los si- fermedad de Hodgkin que en el linfoma no Hodgkin
guientes: y aunque se ha descrito como característica la fiebre
1. Aumento de volumen indoloro de los ganglios ondulante de Pel–Ebstein (períodos febriles que al-
linfáticos cervicales, axilares o inguinales, prin- ternan con otros subfebriles), en realidad adopta
cipalmente. cualquier tipo. Otras veces, la fiebre se debe a un
2. Fiebre prolongada sin causa aparente. proceso infeccioso, muy común en estos pacientes
3. Aumento de volumen del bazo y del hígado. y una causa importante de muerte en esta afección.
4. Palidez cutaneomucosa, prurito, intensa sudo- Manifestaciones generales. Son definidas como
ración nocturna y pérdida de peso. síntomas B en la clasificación de Ann Arbor, la pér-
dida mayor de un 10 % del peso corporal, fiebre
Adenopatías. En la EH constituyen la primera inexplicable y persistente, y sudoración nocturna
manifestación de la afección en la gran mayoría de profusa durante los 6 meses previos al diagnóstico.
los casos. Es frecuente que el aumento de volumen La fiebre mantenida de origen desconocido obliga a
de los ganglios linfáticos sea indoloro y que estas la búsqueda de adenopatías mediastinales e intrab-
adenopatías sean notadas por el mismo paciente o dominales. Se debe a la elaboración de citocinas por
por el médico en un examen físico rutinario. Por lo las células neoplásicas.
general son móviles y de consistencia elástica, más Sistema respiratorio. La infiltración pulmonar se
localizadas en las regiones cervical y supraclavicular, manifiesta de diversas formas: atelectasia, derrame
aunque también se palpan en las regiones axilar e pleural, lesiones de forma nodular o reticular que
inguinal. El descubrimiento accidental de una masa recuerdan a la linfangitis carcinomatosa, etc.
mediastínica asintomática en una radiografía de tó- Sistema óseo. La invasion ósea por lo general
rax no es un hecho inusual. Al inicio son únicas y ocurre tardíamente y se evidencia por tumor o dolor
circunscritas, pero más tarde, al aparecer otras, tien- de la región afectada. En los rayos X las lesiones
den a formar verdaderos paquetes ganglionares. pueden ser de tipo osteolítico, que a veces ocasio-
Como ya se expresó, en los linfomas no Hodgkin nan fracturas patológicas.
el origen es extraganglionar en el 25 % de los casos Sistema nervioso. La invasión y compresión de
y es frecuente la infiltración de la médula. los nervios periféricos producen dolores intensos y
Es necesario examinar la orofaringe por medio trastornos motores. A causa de las fracturas y aplas-
de la laringoscopia indirecta para visualizar el ani- tamiento de los cuerpos vertebrales se presentan
llo de Waldeyer. La afectación del tejido linfoide de síndromes de compresión medular con paraplejías,
esta zona anatómica es más común en los linfomas trastornos sensitivos y dolores radiculares. La afec-
no Hodgkin. tación del SNC por linfomas no Hodgkin ha aumen-
Las adenopatías en el mediastino se manifiestan tado, posiblemente por la presencia del SIDA en
por síntomas y signos que dependen de la compre- personas jóvenes.
sión y obstrucción de las diversas estructuras que se Piel. En el 10 a 15 % de los casos hay prurito que
encuentran en esta zona; así, se puede constatar llega a ser severo y muy molesto para el enfermo.
disfonía, cianosis, edema en esclavina, etc. Un sín- Se han descrito otras alteraciones dermatológicas
drome mediastinal no es infrecuente en el linfoma no específicas, como hiperqueratosis, lesiones pso-
no Hodgkin con afectación de esta región y sin riasiformes, eritema nudoso, etc. En los linfomas no

441
Hodgkin existen variedades con manifestaciones La linfografía bipedal es cada vez menos utiliza-
primarias de la piel (micosis fungoide, síndrome de da y su información puede ser sustituida por la que
Sézary, etc.) que serán descritas más adelante. En ofrece la TAC.
los linfomas en general, pero en especial en los no Se deben realizar los estudios radiológicos con-
Hodgkin, hay una elevada incidencia de herpes trastados que exija el cuadro clínico del paciente
zoster. (estómago y duodeno, tránsito intestinal, colon por
enema, cavografía, urograma, etc.).
Exámenes complementarios Biopsia medular. Para buscar infiltraciones en la
Es habitual que las pruebas sean normales en el médula ósea.
momento del diagnóstico, sobre todo en la EH en TAC. De tórax, abdomen y pelvis para precisar la
estadios tempranos. extensión de la afección.
Hemograma. Casi siempre aparece anemia en el Ácido úrico. Suele estar elevado en los estadios
curso de la enfermedad y se debe a una insuficiente avanzados. En los pacientes con grandes masas tu-
producción de sangre, a hiperesplenismo o a la for- morales la terapéutica provoca en ocasiones un au-
mación de anticuerpos contra los hematíes (anemia mento considerable del ácido úrico, con insuficiencia
hemolítica autoinmune). En este último caso la prue- renal y artritis gotosa.
ba de Coombs es positiva. Gammagrafía con Ga67 (galio). Su utilidad radi-
En el 15 % de los enfermos hay eosinofilia, aun- ca en la detección de enfermedad residual, en par-
que ésta no es muy intensa. A veces hay una reac- ticular en el mediastino, después del tratamiento.
ción leucemoide, que en algunos es muy marcada. RMN. Es provechosa, sobre todo para valorar la
La presencia de normoblastos en la sangre periféri- enfermedad residual después de tratado el paciente.
ca es por lo general expresión de la toma medular Biopsia ganglionar. Constituye la investigación
por la enfermedad. La invasión de la sangre por cé- obligada en todos los linfomas, que permite estable-
lulas malignas es rara, se puede observar en los es- cer el diagnóstico definitivo. Las técnicas de tinción
tadios avanzados y es característica del síndrome de usuales deben complementarse con las de inmuno-
Sézary. El hallazgo de una pancitopenia se debe a histoquímica y biología molecular para precisar el
invasión medular por el tumor, a un hiperesplenis- diagnóstico. Los hallazgos histopatológicos se ex-
mo o a la depresión de la médula por el tratamiento pusieron en el epígrafe “Anatomía patológica”.
impuesto.
Fosfatasa alcalina sérica. Está elevada en los
Plaquetas. Al inicio de la enfermedad los valores
pacientes con enfermedad avanzada.
son normales o se encuentra una discreta tromboci-
La cirugía de mínimo acceso por laparoscopia
tosis. La trombocitopenia es reflejo de la afectación
permite realizar biopsias hepática y ganglionar, y
de la médula ósea por el tumor o consecuencia del
esplenectomía sin gran riesgo para el paciente.
tratamiento.
Eritrosedimentación. Está acelerada. Tiene valor
para seguir el curso y la actividad de la afección.
Electroforesis de proteínas. La mitad de los casos ENFERMEDAD
con EH muestra una hipergammaglobulinemia en el
período de estado de la enfermedad y también en
DE HODGKIN
ocasiones un aumento de la alfa–2 globulina. El 5 %
de los linfomas no Hodgkin tienen un componente La EH es una afección maligna primaria del tejido
monoclonal en el suero, así como la presencia de linfoide, de causa desconocida, cuyo diagnóstico se
proteinuria de Bence-Jones. basa en la presencia de una célula tumoral patogno-
Radiología. En la placa de tórax se encuentran mónica de origen aún discutido, la célula de Reed -
las imágenes policíclicas mediastinales de las ade- Sternberg. Tiene una curva de distribución bimodal
nopatías, derrame pleural e infiltraciones pulmonares, con un pico inicial entre 15 y 35 años, y un segundo,
y en el estudio radiológico óseo, lesiones osteolíti- después de los 50. Representa el 1,1 % de todos los
cas u osteoblásticas en la columna vertebral, pelvis, casos de cáncer en nuestro país. En un principio es
costillas, etc. una neoplasia localizada en un área ganglionar y se

442
extiende por contigüidad de una región a otra y ra- CUADRO 57.1
ras veces lo hace por vía hemática. ESTADIOS ANN ARBOR DE LA ENFERMEDAD
DE HODGKIN (MODIFICADA
EN LA CONFERENCIA DE COTSWOLDS)
Clasificación
La clasificación histopatológica utilizada hasta el Estadio I. Afectación de una región nodular aislada (I) o
momento es la de la Conferencia de Rye, que consi- afectación localizada de un órgano o sitio extralinfático
dera los siguientes tipos histológicos: (I E).
Estadio II. Afectación de dos o más regiones ganglionares
al mismo lado del diafragma o afectación localizada de un
1. Predominio linfocítico (PL). órgano o sitio extralinfático asociado a sus ganglios regio-
2. Esclerosis nodular (EN). nales, con o sin afectación de otras regiones ganglionares
3. Celularidad mixta (CM). en el mismo lado del diafragma (II E).
4. Depleción linfocítica (DL). Estadio III. Toma de ganglios linfáticos a ambos lados del
5. Inclasificable (I). diafragma, lo cual puede estar acompañado por la afecta-
ción localizada de un órgano o sitio extralinfático asociado
(III E) o del bazo (III S) o de ambos (III ES) (S de spleen,
La clasificación REAL (ver más adelante) consi-
bazo).
dera al quinto tipo como una entidad provisional y Este estadio se subdivide en:
la denomina enfermedad de Hodgkin rica en linfo- III 1. Afectación del abdomen limitada al abdomen su-
citos. Hoy se consideran 2 variantes del subtipo pre- perior, por encima de la vena renal.
dominio linfocítico, una difusa y otra nodular; tiene III 2. Afectación de ganglios pélvicos o paraórticos.
mejor pronóstico esta última. Estadio IV. Afectación diseminada (multifocal) de uno o
El subtipo esclerosis nodular se ve fundamental- más órganos extralinfáticos con o sin invasión de ganglios
de un órgano extralinfático aislado con toma ganglionar dis-
mente en el adulto joven y puede presentarse como
tante (no regional).
una masa mediastínica de gran tamaño. Es el tipo A: ausencia de síntomas generales.
más común y junto con la celularidad mixta com- B: presencia de síntomas generales.
prende el 80 % de las EH. La depleción linfocítica E: sitio extranodal único por contigüidad.
aparece en pacientes de más edad y con frecuencia X: masa mediastínica > 1/3 del diámetro máximo del
está diseminada en el momento del diagnóstico. Es tórax o cualquier área ganglionar > 10 cm.
la menos común y un considerable número de pa-
cientes que se pensaba tenían esta variedad, en rea- Estudios hematológicos: hemograma, eritro-
lidad padecían un linfoma difuso de células grandes. sedimentación, biopsia de médula ósea y coa-
gulograma.
Estadios Laparoscopia con biopsia hepática.
Tiene suma importancia establecer la etapa evoluti- Biopsia de cualquier zona sospechosa.
va del paciente, ya que el enfoque terapéutico será Química sanguínea: glicemia, creatinina, bi-
diferente. La determinación original de estadios Ann lirrubina, Ca, P, TGP, TGO, LDH y electrofore-
Arbor sufrió algunas modificaciones en la conferen- sis de proteínas.
cia de Cotswolds en 1989. Se introdujo el sufijo X Estudios serológicos: VDRL, VIH, VHB.
para quienes tenían una gran masa tumoral y se sub- Otros: prueba de Coombs, grupo sanguíneo.
dividió el estadio III de acuerdo con la toma abdo-
minal en III1 y III2 (cuadro 57.1). Algunos consideran necesaria la laparotomía en
Para determinar el estadio se procede de la si- pacientes con estadios IA y IIA, pero otros opinan
guiente manera: que no, ya que el uso de factores pronósticos permi-
te seleccionar a un grupo de pacientes de baja posi-
Interrogatorio: presencia de síntomas (B). bilidad de enfermedad abdominal. Además, estos
Examen físico: hígado–bazo–áreas gangliona- estadios pueden ser tratados con poliquimioterapia.
res periféricas, anillo de Waldeyer. A esto se suma que la laparotomía retrasa el inicio
Imagenología: rayos X de tórax; TAC de tórax del tratamiento y se asocia a una morbilidad impor-
si anomalía en rayos X simple; TAC de abdomen tante.
y pelvis y US de abdomen, pelvis y áreas gan- Después de establecido el diagnóstico y estudia-
glionares periféricas. do el paciente, se decide la conducta terapéutica.

443
Factores pronósticos con estadios IA y IIA. Otros prefieren la quimiote-
rapia debido a los buenos resultados obtenidos.
El pronóstico de un paciente determinado tiene gran
Se usan 3 tipos de campos de irradiación (Fig. 57.12):
importancia para proporcionarle el tratamiento más
adecuado y depende del reconocimiento de diver-
sos factores; entre los principales están la presencia 1. La radioterapia en campo limitado, que trata
o ausencia de síntomas generales y el estadio de la sólo la masa tumoral con un margen mínimo
enfermedad. Además, existen otros considerados de tejido normal.
desfavorables: 2. La radioterapia en manto, que irradia a los
ganglios cervicales, axilares, mediastínicos y
• Gran masa tumoral mediastinal o de ganglios paraórticos superiores o en Y invertida, dirigi-
periféricos. da a los ganglios retroperitoneales como un
• Toma esplénica masiva (≥ de 5 nódulos). campo único.
• Toma extraganglionar. 3. La irradiación ganglionar total, que combina la
• Variedad histológica de celularidad mixta o de- radiación tipo manto con la Y invertida.
pleción linfocítica.
• Edad > 50 años. Quimioterapia. La aparición del esquema MOPP
• Eritrosedimentación > 50 mm. fue una verdadera revolución en el tratamiento de
• Toma de ≥ 3 áreas ganglionares. pacientes con EH, con un alto índice de RC y de
• Mala respuesta al tratamiento y duración corta supervivencia global. Sin embargo, el problema fun-
de la respuesta. damental del MOPP es su severa toxicidad (esterili-
dad permanente, desarrollo de segundas neoplasias,
Criterios de respuesta terapéutica flebitis, neuropatías), que hizo buscar esquemas con
Remisión completa (RC). Ausencia de evidencias igual eficacia, pero menos tóxicos. El esquema
de enfermedad clínica, radiológica o de otro tipo, ABVD fue diseñado para tratar a pacientes en recaí-
evaluadas 4 semanas o más después de terminar el das con el MOPP, pero su baja toxicidad y magnífi-
tratamiento programado. cos resultados han hecho que muchos lo utilicen
Remisión completa no confirmada (RCn). Pacien-
tes asintomáticos en los cuales hay persistencia de
alguna anormalidad radiológica en sitios con enfer- 1
medad previa.
Remisión parcial (RP). Disminución de un 50 %
o mayor del diámetro de las lesiones mensurables.
Progresión. Incremento de un 25 % o más en el
tamaño de una o más de las lesiones mensurables.

Tratamiento
La EH es quizás la afección neoplásica con mayor 2
índice de curaciones, pues aproximadamente el 75 %
de los pacientes deben lograrla. A pesar de esto no
existe un criterio unánime para todos los estadios de
la enfermedad, porque pacientes tratados con radio-
terapia y que sufren una recaída, pueden ser cura-
dos con quimioterapia. Por otra parte, los efectos
secundarios del tratamiento han hecho cambiar al-
gunas opciones terapéuticas que parecían estableci- 1. Parte superior. Zona del manto.
das con solidez. 2. Parte inferior. Y invertida y campo esplénico.
Radioterapia. Fue durante muchos años el trata- 3. Ambas. Irradiación total nodal.
miento de elección en la mayoría de los pacientes Fig. 57.12. Campos de irradiación.

444
como esquema inicial en la EH, sobre todo en pa- Estadios IB y IIB
cientes en estadios III y IV. La incidencia de esteri- Siempre serán tratados con radioterapia y quimio-
lidad permanente con ABVD es muy baja, así como terapia combinadas, con los mismos esquemas te-
el riesgo de segundas neoplasias. rapéuticos.
En relación con los esquemas MOPP y ABVD, Estadio IIIA
se han hecho múltiples combinaciones (MOPP/AVB, Estadio III1A: En este estadio los pacientes pue-
ABVD/MOPP, etc.), sin que se hayan encontrado den ser tratados de manera eficaz con radiotera-
ventajas significativas con su uso. pia o combinada con citostáticos aunque la
La mayoría de los pacientes requieren 6 ciclos, quimioterapia aislada resulta ligeramente superior
pero un 15 o 20 % necesitan un tratamiento más lar- a la radioterapia sola. Ahora bien, en casos con
go. Se deben dar 2 ciclos adicionales desde el mo- gran masa mediastinal siempre debe administrar-
mento en que haya una documentada erradicación se radioterapia en esa zona después de la quimio-
de la enfermedad. terapia.
El mediastino está afectado en ≥ 50 % de los pa- Estadio III2A: Quimioterapia y radioterapia en
cientes con EH. Anormalidades mediastinales resi- grandes zonas tumorales.
duales persisten en un 64 a 88 % de los pacientes Esquemas posibles de quimioterapia:
después del tratamiento. Esto no implica EH persis- MOPP : 6 ciclos
tente. Si tales anormalidades son estables por un mes ABVD : 6 ciclos
después de la radioterapia o 2 ciclos de quimiotera- MOPP / ABV : 8 ciclos
pia, no se recomienda hacer biopsia ni mantener la
terapéutica. Estadios IIIB y IV
A continuación se expone el tratamiento aconse- Son tributarios de quimioterapia. A los pacientes
de este grupo con gran masa tumoral (X) se les
jable según el estadio encontrado, luego de finaliza-
añadirá radioterapia en estas áreas ganglionares
do el estudio.
después de concluir la quimioterapia.
Estadios IA y IIA (supradiafragmático):
Esquemas posibles de quimioterapia: Igual que
Sin toma mediastinal: radioterapia en manto.
el anterior. Los criterios de respuesta son simila-
Si hay signos desfavorables se puede añadir la
res a los de la EH.
quimioterapia.
Con toma mediastinal sin gran masa tumoral:
Tratamiento de las recaídas
Si PL y EN, radioterapia en manto; si CM y
• Los enfermos en estadios I y II que hayan reci-
DL, radioterapia en manto y paraórtica. bido sólo radioterapia, serán tratados con qui-
Con toma mediastinal y gran masa tumoral: ra- mioterapia de primera línea.
dioterapia + quimioterapia. • A los pacientes en estadios III y IV a los que ya
Quimioterapia: esquemas terapéuticos posibles se les administraron citostáticos y presentan
y total de ciclos (cuadro 57.2 ). una recaída precoz (antes del año), se les apli-
MOPP: 6 ciclos cará otro esquema de quimioterapia y serán eva-
AVBD: 6 ciclos luados para trasplante.
VBM: 6 ciclos • A aquéllos que con anterioridad hayan recibido
Estadios IA y IIA (infradiafragmático) citostáticos y tengan una recaída tardía (después
Con menos de 5 nódulos esplénicos y con la del año), se les tratará con el mismo esquema
variedad predominio linfocítico: radioterapia en de quimioterapia inicial y serán evaluados para
Y invertida. En el resto de los casos: radioterapia trasplante.
y quimioterapia.
Esquemas posibles: Complicaciones tardías de la EH
MOPP : 6 ciclos 1. Sepsis por neumococos
AVBD : 6 ciclos 2. Infertilidad
MOPP / AVB : 6 ciclos 3. Amenorrea
VBM : 6 ciclos 4. Cardiotoxicidad por rubidomicina

445
CUADRO 57.2 Ciclofosfamida 750 EV 15
ESQUEMAS TERAPÉUTICOS QUE SE UTILIZAN Adriamicina 50 EV 15
EN EL TRATAMIENTO DE LOS LINFOMAS Prednisona 1 EV 15 y 22

Drogas Dosis Ruta Días del ciclo CHOP–BLEO (cada 21 días)


mg/m²
Ciclofosfamida 750 EV 1
MOPP (cada 28 días) Adriamicina 50 EV 1
Vincristina 1,4(máximo2) EV 1
Mostaza nitrogenada 6 EV 1y8
Prednisona 100 Oral 1 al 5
Vincristina 1,4 EV 1y8
Bleomicina 15 EV o 1 al 5
Procarbacina 100 Oral 1 al 14
IM
Prednisona 40 Oral 1 al 14
CHOP– BLEO (cada 28 días) (reducido)
ABVD (cada 28 días)

Doxorrubicina 25 EV 1 y 15 Ciclofosfamida 600 EV 1


Bleomicina 10 EV 1 y 15 Adriamicina 25 EV 1
Vinblastina 6 EV 1 y 15 Prednisona 40 Oral 1 al 5
Dacarbacina 375 EV 1 y 15 Vincristina y bleomicina igual que el esquema CHOP–BLEO

MOPP/ABV (híbrido ) (cada 28 días) COP (cada 28 días)

Mostaza nitrogenada 6 EV 1 Ciclofosfamida 650 EV 1


Vincristina 1,4 EV 1 Vincristina 1,4(máximo 2) EV 1
Procarbacina 100 Oral 1 al 7 Prednisona 100 Oral 1 al 7
Prednisona 40 Oral 1 al 14
Doxorrubicina 35 EV 8 Leukerán + prednisona (cada 28 días)
Bleomicina 10 EV 8
Vinblastina 6 EV 8 Leukerán 0,25 Oral 1 al 5
Prednisona 40 Oral 1 al7
COPP (cada 28 días)
ESHAP (cada 21 días)
Ciclofosfamida 650 EV 1y8
Etopósido 60 EV 1 al 4
Vincristrina–procarbacina y prednisona igual que el MOPP Metilprednisolona 500 EV 1 al 4
Ciplastino 25 EV 1 al 4
MVPP (cada 28 días) Citosina–arabinósido 2 g/m² en 2 h EV 5 días después
del ciplastino
Vinblastina 6 (máximo 10) EV 1y8
EPOCH (cada 21 días)
Mustargén, procarbacina y prednisona igual que el MOPP
Etopósido 50 EV 1 al 4
VBM (cada 28 días ) Vincristina 0,4 EV 1 al 4
Adriamicina 10 EV 1 al 4
Vinblastina 6 EV 1y8 Ciclofosfamida 750 EV 6
Bleomicina 10 EV 1y8 Prednisona 60 Oral 1 al 6
Metotrexate 30 EV 1y8
MACOP – B (cada 28 días)
Esquemas de rescate
Metotrexate (rescate 400 (100 en EV 2;6;10
ABDIC (cada 6 semanas)
con ácido folínico, bolo y 300
Adriamicina 45 EV 1 imprescindible, a EV en 4 h)
Bleomicina 6 EV 1 las 24 h)
DTIC 200 EV 1y5 Adriamicina 50 EV 1;3;5;7;9;11
CCNU 50 Oral 1 Ciclofosfamida 350 EV 1;3;5;7;9;11
Prednisona 40 Oral 1 al 5 Vincristina 1,4(máximo 2) EV 2;4;6;8;10
Prednisona 75 Oral 1 al 12
CHOP (cada 28 días)
Bleomicina 10 U/ m² IM 4;8;12
Metotrexate 120 (con res- EV 1 al 8
cate folínico) Ácido folínico: 15 mg/ m²/EV u oral cada 6 h, 6 dosis

446
5. Pericarditis aguda y crónica después de la ra- CUADRO 57.3
diación CLASIFICACIÓN. WORKING FORMULATION
FOR CLINICAL USAGE (WF) DE LOS LINFOMAS
6. Neumonitis por radiación y fibrosis crónica res- NO HODGKIN
trictiva
7. Segundo cáncer. Leucemia aguda no linfocíti- A. Linfomas no Hodgkin
ca, síndrome mielodisplástico, tumores sólidos. I. Bajo grado
A. Linfoma de linfocitos pequeños
B. Linfoma folicular predominantemente de células
pequeñas hendidas
LINFOMAS C. Linfoma folicular mixto de células pequeñas hen-
didas y células grandes
NO HODGKIN II. Grado intermedio
D. Linfoma folicular de células grandes
E. Linfoma difuso de células pequeñas hendidas
Los linfomas no Hodgkin (LNH) son un grupo hete- F. Linfoma difuso mixto de células pequeñas y
rogéneo de síndromes linfoproliferativos tumorales grandes
cuyo denominador común es la expansión monoclo- G. Linfoma difuso de células grandes
nal de linfocitos malignos B o T. El 85 % de los III. Alto grado
LNH se originan de linfocitos B. En la actualidad se H. Lifoma inmunoblástico
señala un aumento en su incidencia, con una afecta- I. Linfoma linfoblástico
J. Linfoma de células pequeñas no hendidas
ción mayor en el sexo femenino.
Misceláneas:
Su causa no está bien definida, excepto en el
1. Linfomas compuestos
linfoma de Burkitt, que se ha asociado al virus de 2. Micosis fungoide
Epstein–Barr (VEB) y en la leucemia-linfoma de 3. Histiocítico
células T con el retrovirus humano HTLV–1. 4. Plasmocitoma extramedular
5. Inclasificable
Diagnóstico 6. Otros
B. Enfermedad de Hodgkin
El diagnóstico es siempre histopatológico y requie- 1. Predominio linfocítico
re de una biopsia preferiblemente de ganglio. Esto 2. Celularidad mixta
puede ser complementado con otros estudios, como 3. Esclerosis nodular
el inmunofenotipo para determinar la célula de ori- 4. Depleción linfocítica
gen y el reordenamiento de los genes de las inmu-
noglobulinas en las células B o de los loci de los cación conocida con el nombre de “Working For-
genes receptores de las células T para determinar la mulation for Clinical Usage” (WF) (cuadro 57.3).
Fue adoptada casi de manera unánime en el conti-
clonalidad.
nente americano y prácticamente todos los trabajos
Clasificación publicados en esta parte del mundo a partir de esa
fecha se basaban en ella. No sucedía así en otros
La EH ha mantenido una clasificación estable en los lugares, sobre todo en Europa, donde se siguió pre-
últimos años, sin embargo, la de los no Hodgkin ha firiendo la de Kiel.
sido polémica por mucho tiempo y fuente de frus- En estos momentos, uno de los problemas impor-
tración tanto de clínicos como de patólogos. tantes que tiene la WF es que las categorías fueron
Son numerosas las clasificaciones histológicas que definidas basados en la supervivencia de los pacien-
se han elaborado en todos estos años (Kiel– Dorf- tes de acuerdo con los tratamientos utilizados hace
mann–Rappaport–WHO–Lukes–Collins, etc.). A 15 o 20 años y que por supuesto no tenían en cuenta
medida que se conocían nuevas entidades iban los nuevos protocolos empleados en la actualidad.
apareciendo nuevas clasificaciones, lo que causaba Por otra parte, muchos de los avances obtenidos en
confusión, ya que trabajos realizados con un orde- el estudio de los linfomas en los años recientes se
namiento determinado no podían ser comparados con basan en estudios inmunológicos y genéticos, que
otros que utilizaban uno distinto. no existían cuando fue propuesta la WF. Todos los
En 1982, un equipo de patológos se reunió para anteriores argumentos llevan a la conclusión de que
tratar de poner un poco de orden y publicó una clasifi- hoy la WF es impracticable.

447
En 1993, un grupo de hematopatológos se reunió CUADRO 57.5
para analizar todas estas clasificaciones y llegar a COMPARACIÓN ENTRE LA CLASIFICACIÓN REAL
un consenso sobre las categorías de las neoplasias Y LA WF DE LOS LINFOMAS NO HODGKIN
linfoides que podían reconocerse en esos momentos
Clasificación REAL Working Formulation
a la luz de los conocimientos actuales. Publicaron
sus proposiciones en 1994 insistiendo en que ellos Indolente (clínicamente) A. Linfoma de linfocitos
pequeños
no pretendían remplazar ninguna clasificación, sino
LLC de células T / leucemia A. Linfoma de linfocitos
compilar los conocimientos existentes de una forma prolinfocítica pequeños
práctica y por eso la llamaron “Clasificación Revi- E. Linfoma difuso de células
sada Europea–Americana de Linfomas” (REAL) pequeñas hendidas
(cuadro 57.4). Sus autores reconocen que es com- Leucemia linfocítica de A. Linfoma de linfocitos
pleja y en ella pueden existir errores, por lo que debe células granulosas pequeños
ser revisada cada cierto tiempo para incorporar la E. Linfoma difuso de células
pequeñas hendidas
nueva información obtenida. En el cuadro 57.5 se Leucemia de células vellosas
exponen las equivalencias entre la WF y la REAL, Linfoma centrofolicular B. Linfoma folicular predo-
siempre que ha sido posible. (grado I) minante de células peque-
ñas hendidas
Linfoma centrofolicular C. Linfoma folicular mixto
CUADRO 57.4
(grado II) de células pequeñas hen-
CLASIFICACIÓN REVISADA EUROPEA–
AMERICANA DE LINFOMAS (REAL) didas y células grandes
Linfoma de zona marginal de
células B (nodal / MALT
I. Neoplasias de células B precursoras extranodal)
• Leucemia / linfoma linfoblástico o de células B precur-
Micosis fungoide
soras
II. Neoplasias de células T precursoras Agresivo (clínicamente)
• Leucemia / linfoma linfoblástico de células T precurso- Linfoma centrofolicular D. Linfoma de células
ras (grado III) grandes.
III. Neoplasias de células B periféricas Linfoma de células del manto F. Linfoma difuso mixto de
• Leucemia linfocítica crónica / linfoma de linfocitos pe- células pequeñas y grandes
G. Linfoma difuso de células
queños
grandes
Linfoma linfoplasmocítico
H. Linfoma inmunoblástico
Linfoma de células del manto
Linfoma primario mediastinal G. Linfoma difuso de células
• Linfoma folicular
(tímico) de células B grandes
Citología grado I
Linfoma periférico de F. Linfoma difuso mixto de
Citología grado II
células T células pequeñas y grandes
Citología grado III
G. Linfoma difuso de células
• Linfoma de zona marginal grandes
• Linfoma de células vellosas H. Linfoma inmunoblástico
• Plasmocitoma / mieloma de células plasmáticas Linfoma angioinmunoblástico
• Linfoma difuso B de células grandes de células T
• Linfoma de Burkitt Linfoma / leucemia de células
IV. Neoplasias periféricas de células T y células natural killer T del adulto
• Leucemia linfocítica crónica de células T
Linfoma intestinal angiocén-
• Leucemia linfocítica de células grandes granulares trico de células T
• Micosis fungoide y síndrome de Sézary
Linfoma anaplásico de células H. Linfoma inmunoblástico
• Linfoma periférico de células T grandes
• Linfoma angioinmunoblástico de células T
Linfoma linfoblástico de célu- I. Linfoma linfoblástico
• Linfoma angiocéntrico (linfoma natural killer de célu-
las T/ B precursoras
las T)
Leucemia linfoblástica de células T/B precursoras
• Linfoma intestinal de células T
• Linfoma / leucemia de células T del adulto Linfoma de Burkitt J. Linfoma de células peque-
• Linfoma anaplásico de células grandes ñas no hendidas Burkitt.

448
Estadios cir regresiones del linfoma; por lo tanto, además de
la cirugía y la quimioterapia, el tratamiento debe
Siempre debe efectuarse la determinación de la ex-
acompañarse de la erradicación de microrganismos.
tensión de la enfermedad con los estadios relaciona-
El seguimiento de estos pacientes se hará con con-
dos para la EH en el cuadro 57.1
trol endoscópico frecuente.
El sistema Ann Arbor con las modificaciones de
Cotswalds también se aplica a los LNH. Sin embar-
go, tiene algunas limitaciones debido a que omite
Linfomas del manto
una serie de factores como el sitio de la enferme- Este tipo de linfoma se deriva de una proliferación
dad, el grado de masa tumoral y la extensión de la maligna de linfocitos B de la zona del manto de los
afectación extraganglionar. Además, los síntomas (B) folículos linfoides. Como su nombre indica, las cé-
tienen menos importancia en el pronóstico y la toma lulas tumorales recuerdan a las normales de la zona
de una decisión terapéutica. del manto que rodean los centros foliculares. Se pre-
senta en pacientes de alrededor de 60 años, con li-
Linfomas no Hodgkin de gero predominio masculino. Son frecuentes las
adenopatías generalizadas y la afectación esplénica
identidad especial y de la médula ósea. La enfermedad extranodal es
Existen una serie de LNH de identidad especial, que también relativamente común.
es importante describir, aunque de forma breve, en Puede adoptar 3 patrones de infiltración: manto–
este capítulo. zona, nodular y difusa, con peor pronóstico las dos
últimas.
Linfomas MALT La alteración genética más característica es t (11; 14).
El término fue propuesto para designar un conjunto Tiene mala respuesta a los tratamientos conven-
de linfomas derivados del tejido linfoide asociado a cionales y en pacientes jóvenes se debe pensar en el
las mucosas (mucosal-associated lymphoid tissues: autotrasplante o en el trasplante alogénico.
MALT). En la clasificación REAL constituye la va-
riante extranodal del linfoma de la zona marginal. Linfoma de Burkitt
Esta última es una zona externa a la del manto, re- Existen dos formas clínicas: la endémica africana y
conocible con facilidad en el bazo y en las placas de la esporádica no endémica.
Peyer, pero de difícil diferenciación en los ganglios La forma endémica afecta a niños africanos entre
linfáticos. Existen diferentes localizaciones, y aun- 5 y 10 años. Se caracteriza por masas ganglionares
que la más frecuente es la forma gástrica, también sobre todo en la mandíbula, que se diseminan a re-
se observan en las glándulas lagrimales y salivales, giones extraganglionares, por lo común el sistema
tiroides, mama y en el pulmón. nervioso, testículos, mama y la médula ósea. Existe
Este linfoma aparece en zonas donde no es habi- evidencia de infección por el virus de Epstein–Barr
tual el tejido linfoide, el cual es previamente adqui- (VEB) en la mayoría de los casos, lo que sugiere su
rido a través de un estímulo antigénico mantenido. implicación en la patogenia de este tipo de linfoma.
Por lo tanto, estos linfomas MALT suelen ser prece- La forma esporádica se ha visto generalmente en
didos de sialoadenitis, tiroiditis de Hashimoto o in- EE.UU. y en Europa, y su presentación es por lo
fección por Helycobacter pylori en las glándulas general abdominal con grandes masas ganglionares
salivales, tiroides y en el estómago, respectivamen- y ascitis. En el 20 a 30 % de los casos se demuestra
te. Los fenómenos de autoinmunidad desempeñan una infección por el VEB.
un papel importante en el desarrollo de esta neopla- Desde el punto de vista histopatológico se obser-
sia. En los gástricos afecta a individuos de edad me- van células linfoides inmaduras y grandes histiocitos,
diana con un cuadro de dispepsia y en el 90 a 100 % lo que produce el típico patrón en “cielo estrella-
de los casos está presente Helycobacter pylori. do”. En el 80 % de ambas formas se encuentra una
En los estadios tempranos la supervivencia es lar- t (8; 14).
ga e incluso a veces curan. El linfoma de Burkitt es muy agresivo pero tiene
Se ha demostrado que la eliminación por medio posibilidad de curación con las nuevas formas tera-
de antibioticos de Helycobacter pylori puede indu- péuticas.

449
sando, con la aparición de adenopatías, seguida por
Linfomas no Hodgkin diseminación extracutánea a cualquier órgano de la
cutáneos de células T economía. La primera causa de muerte se debe a la
infección y la segunda, a la invasión visceral.
Se trata de un grupo heterogéneo de trastornos que El síndrome de Sézary se considera como la
comprenden del 10 al 15 % de los LNH. Debutan “leucemización” de la micosis fungoide, con la in-
casi siempre en edades adultas de la vida y la mayo- vasión de la sangre periférica por células con nú-
ría se diagnostican en estadios avanzados de la en- cleos de aspecto cerebriforme.
fermedad. Es frecuente la afectación extraganglionar
en la piel, hígado, pulmón, médula ósea, etc., así Tratamiento
como su asociación con el VEB. Son ellos: Se han descrito muchas modalidades para el trata-
miento de la micosis fungoide. En las etapas inicia-
1. Micosis fungoide
les es útil la aplicación de luz ultravioleta– psoralén.
2. Síndrome de Sézary
El 8 – methoxypsoralén inhibe la síntesis del ADN
3. Linfoma–leucemia de células T del adulto
y el ARN, pero solamente es activo si el tejido que
(HTLV – 1)
contiene psoralén es expuesto a luz ultravioleta. Por
4. Linfoma periférico de células T
lo tanto, se administra la droga y 24 h después se
5. Papulosis linfomatoide
aplica la luz ultravioleta.
6. Granulomatosis linfomatoide
El tratamiento tópico con mostaza (10 o 20 mg de
7. Linfadenopatía angioinmunoblástica
mustargén en 50 o 100 ml de agua) suele producir
8. Trastornos linfoproliferativos gamma T
en las etapas iniciales hasta un 90 % de remisiones.
Los pacientes con enfermedad limitada a la piel
Todos tienen en común una presentación inicial
con afectación de la piel, pero difieren en su etiolo- se tratan con irradiación total de ésta con ondas de
gía, apariencia histológica, pronóstico y tratamien- electrones. En los casos ya diseminados también se
to. Aquí se describirán sólo los más comunes de estos utiliza este método, pero como tratamiento paliativo.
trastornos linfoproliferativos: la micosis fungoide, Quimioterapia sistémica. Debe ser reservada para
el síndrome de Sézary, la leucemia del adulto de quienes están en recaída o enfermedad visceral avan-
celulas T y la linfadenopatía angioinmunoblástica. zada. Se ha usado la quimioterapia combinada con
CHOP o COP – BLEO. Otros ponen en práctica
Micosis fungoide / Síndrome de modalidades terapéuticas mezcladas: irradiación to-
tal con ondas de electrones, más quimioterapia com-
Sézary binada.
Al principio se pensó que la micosis fungoide era Se ha utilizado también el interferón alfa, pero
sólo una enfermedad hematológica, pero después se por lo general como droga de segunda línea.
confirmó que podía diseminarse de la piel a las vís-
ceras. En su fase dermatológica inicial suele con- Linfoma / leucemia de células T
fundirse con una psoriasis o con un eccema. La piel del adulto
se infiltra por linfocitos T facilitadores (CD4), aun-
que hay casos descritos con infiltración por linfoci- Aunque los retrovirus fueron descubiertos hace ya
tos T supresores (CD8). Conglomerados de estas muchos años, su relación con enfermedades huma-
células malignas, junto con detritus y células infla- nas se remonta sólo a los años 80 del pasado siglo
matorias en la epidermis, producen los característi- con el estudio de las células malignas del linfoma /
cos microabscesos de Pautrier. leucemia de células T del adulto. Las células en esta
Se ve en hombres, generalmente de edad media y enfermedad estaban infectadas con un retrovirus que
su evolución característica es en fases: eritematosa– fue llamado HTLV – 1 (virus linfotrópico de célu-
placas– tumores. La lesión inicial eritematosa se las T humanas). Con posterioridad, en 1985, se des-
convierte en placas, que se agrandan hasta producir cubrió que una paraparesia espástica era también
masas tumorales que a veces se ulceran, con o sin causada por este virus, que se conoce hoy con el
infecciones secundarias. La enfermedad va progre- nombre de mielopatía por HTLV–1.

450
Aunque la infección por este retrovirus es nece- Se administra radioterapia en el campo afecta-
saria para la aparición de la enfermedad, tanto en la do. La asociación de CVP o de CHOP con ra-
leucemia /linfoma del adulto de células T como en dioterapia mejora los resultados.
la mielopatía, sólo aparece en una pequeña propor- • Estadios III y IV
ción de los sujetos infectados. El 98 % permanece En pacientes asintomáticos sin grandes masas
como portador asintomático. Aunque la afección fue ganglionares con hemograma normal, se pro-
descrita inicialmente en el Japón, se han encontrado cede a la observación hasta que haya evidencia
focos importantes en el Caribe y en los Estados Uni- de progresión.
dos. En estas regiones se ve sobre todo en negros en En pacientes sintomáticos o con grandes ma-
edades entre 30 y 50 años, que evolucionan con un sas ganglionares o con citopenia, se administra
síndrome adénico, hepatosplenomegalia y afectación leukerán + prednisona o se utilizará el esque-
cutánea. Puede haber infiltración del SNC. Es muy ma COP.
característica la hipercalcemia, capaz de causar la Puede emplearse radioterapia local en las
muerte del enfermo, así como las infecciones. áreas de grandes masas ganglionares o con mo-
lestias físicas o con síntomas compresivos.
Linfadenopatía 2. Pacientes ≤ 50 años
angioinmunoblástica • Estadios I y II
Se utiliza el esquema CHOP – BLEO (4 ci-
En un principio esta enfermedad fue descrita como
clos) seguido de radioterapia en el campo
benigna, pero hoy está incluida dentro de los linfo-
afectado y con posterioridad otros 4 ciclos de
mas T. Se caracteriza por un rash con linfadenopa-
CHOP – BLEO.
tía generalizada, fiebre, pérdida de peso y presencia
• Estadios III y IV
de una hipergammaglobulinemia. Desde el punto
Esquema CHOP – BLEO (8 ciclos). Al finali-
de vista morfológico, hay una gran proliferación
zar el tratamiento programado se estudian y si
vascular con infiltrado de leucocitos y células plas-
están en RC, se evalúan para trasplante de mé-
máticas.
dula ósea.
Determinación del estadio inicial
Linfomas de histología agresiva
en los linfomas no Hodgkin 1. Pacientes ≤ 60 años
Se efectúa igual que en la EH, excepto que la • Estadios localizados I y II
laparotomía no está indicada en el caso de los LNH. Se utiliza el esquema MACOP – B o CHOP –
BLEO (6 ciclos), aunque algunos plantean
Tratamiento de los linfomas no mejores resultados con tres ciclos de CHOP
Hodgkin en general seguidos de radioterapia en el campo afectado.
Los pacientes son divididos de acuerdo con la va- • Estadios III y IV
riedad histológica, en LNH de histología no agresi- Se usa quimioterapia con MACOP – B o CHOP
va, que comprenden las variedades de bajo grado de – BLEO (6 ciclos de inducción y 2 de consoli-
la WF, y los LNH de histología agresiva, que inclu- dación).
yen las variedades de grado intermedio y de alto Los pacientes que obtengan RC o RCn se
grado, los linfomas del manto, todos los linfomas T incluirán en el programa de trasplante de mé-
(excepto la micosis fungoide / síndrome de Sézary) y dula autólogo. Los que obtengan RP recibirán
otros linfomas no agresivos no incluidos en la W F. radioterapia en el campo afectado y se reeva-
En los pacientes con localizaciones extraganglionares luarán para trasplante. Los que no obtengan
se adoptará una conducta particular, al igual que en remisión serán tratados con esquema de rescate.
los linfomas linfoblásticos y en el linfoma de Burkitt. 2. Pacientes > 60 años
• Estadios localizados I y II
Linfomas de histología no agresiva Se utiliza el esquema CHOP – BLEO (4 ci-
1. Pacientes > 50 años clos) seguido de radioterapia en el campo afec-
• Estadios I y II tado.

451
• Estadios III y IV Estómago. Gastrectomía (parcial o subtotal) si las
Se utiliza el esquema CHOP ( 8 ciclos ). condiciones del paciente lo permiten. Además, citos-
Se ha evaluado en los linfomas el tratamiento con táticos, y algunos agregan radioterapia.
anticuerpos monoclonales contra antígenos especí- Intestino. Se indica cirugía si el proceso está bien
ficos de linfocitos. Estos anticuerpos a veces van localizado o hay evidencias de obstrucción o san-
unidos a toxinas, agentes quimioterapéuticos, radio- gramiento controlado. Además, se agregan citostá-
isótopos o moléculas inmunoterapéuticas, aunque sus ticos.
resultados han sido muy limitados. Glándulas salivales y tiroides. Si la lesión es mí-
El interferón alfa después de la quimioterapia y
nima se puede utilizar radioterapia sola, aunque en
administrado por 18 meses, prolonga la remisión
general se recomienda asociar quimioterapia.
aunque no la supervivencia.
SNC. Se aconseja radioterapia craneal con tera-
Localizaciones extraganglionares pia intratecal. Quimioterapia intensiva.
La clasificación de Ann Arbor, con algunas modifi- Testículo. Radioterapia local y algunos recomien-
caciones, ha sido utilizada en los LNH extranodales: dan también contralateral. Se añaden citostáticos y
profilaxis del SNC.
I E. Lesión extranodal localizada. Pulmón. Tatamiento con citostáticos.
II E. Localización extranodal, más afectación de Huesos. Radioterapia y citostáticos.
ganglios adyacentes (el gástrico se subclasifica en Nasofaringe y senos perinasales. Radioterapia y
II1E, si los ganglios son contiguos, o IIEB, si no lo quimioterapia con profilaxis del SNC.
son).
III y IV. Representan la enfermedad diseminada, Recaída o resistencia
pero no hay ninguna diferencia entre estos estadios, Si hay recaída o resistencia, se utilizan esquemas
por lo que algunos autores los consideran como III con nuevas drogas, y con altas dosis como se expu-
solamente. so en el cuadro 57.2.
Siempre debe incluir tratamiento con quimiote-
Actualmente son varios los esquemas de rescate
rapia de acuerdo con el grupo histológico.
utilizados. También en este cuadro se exponen el
Anillo de Waldeyer. Radioterapia más quimiote-
ESHAP, el EPOCH y el MACOP–B.
rapia.

452
58
HIPERESPLENISMO

El hiperesplenismo es un término de límites impre- pulpa roja hacia el sistema venoso. Una pequeña
cisos, cuyo concepto ha estado siempre un poco cantidad va a la zona marginal de la pulpa blanca,
confuso en la literatura médica. Se le ha empleado que actúa como un filtro e impide el progreso de los
para describir la pancitopenia hallada en el curso de glóbulos rojos severamente dañados. En la pulpa roja
esplenomegalias muy variadas y también para de- los glóbulos rojos van a través de los cordones, que
nominar un supuesto trastorno esplénico, en el que son ricos en macrófagos, y pasan a los senos a través
el bazo, en principio afectado, parece ser el respon- de diminutas fenestraciones que existen entre las cé-
sable de dicha pancitopenia. Además, el hecho de
lulas de los senos. Éstas miden unos 3 µm y el gló-
que dentro de los límites del hiperesplenismo se ha-
bulo rojo, que llega a 4,5 µm, debe deformarse para
yan incluido en el pasado enfermedades como la es-
poder atravesarlas; los que no pasan esta prueba son
ferocitosis hereditaria y la púrpura trombocitopénica
inmunológica, contribuyó a que la confusión fuese ingeridos por los macrófagos y destruidos. Cuando
aún mayor. hay una esplenomegalia, esto se incrementa. Por lo
En realidad, la inclusión de una serie de afeccio- tanto, el bazo es muy eficiente en atrapar y destruir
nes dentro del llamado hiperesplenismo primario las células sanguíneas que tengan pequeños defec-
resulta difícil de sostener sobre la base de nuestros tos por su particular anatomía vascular ya descrita.
conocimientos actuales. Según Dameshek, el diagnóstico de un hiperes-
Se sabe, que aunque el bazo propicia la adopción plenismo debe basarse en los hallazgos siguientes:
por el hematíe de la forma de esferocito en la esfe-
rocitosis hereditaria, el defecto básico reside en la 1. Esplenomegalia.
membrana del glóbulo rojo. La existencia de anti- 2. Anemia, leucopenia y trombocitopenia.
cuerpos plaquetarios en la púrpura trombocitopéni- 3. Médula ósea con celularidad normal o incre-
ca inmunológica es algo del todo comprobado, al mentada.
igual que los anticuerpos eritrocitarios en la anemia 4. Corrección del cuadro clínico por esplenec-
hemolítica autoinmune. Por lo tanto, el hiperesple- tomía.
nismo primario ha desaparecido en el momento en
que se ha detectado la enfermedad de base que pro-
Desafortunadamente, el último punto, que es el
vocó el crecimiento del bazo.
que tiene mayor validez, ya que si el paciente no
Por otra parte, no deja de ser cierto que en oca-
cura con la esplenectomía es que no tenía un hiperes-
siones se presentan pacientes con esplenomegalia y
diversos grados de pancitopenia, que mejoran o cu- plenismo, sólo puede comprobarse después de con-
ran cuando se realiza la esplenectomía. sumado el hecho. En el 80 % de los enfermos en los
El bazo es un órgano esencial en la hemocateresis cuales se cumplen los tres primeros postulados de
y es probable que cualquier enfermedad capaz de Dameshek, hay curación de la pancitopenia con la
producir un agrandamiento de éste, implique un esplenectomía, pero en el 20 % de los casos esta te-
aumento en la destrucción de los elementos formes rapéutica falla, lo que demuestra que tuvieron un
de la sangre. diagnóstico equivocado.
La sangre que circula a través del bazo fluye de Entre las principales afecciones que cursan con
las arteriolas en la pulpa blanca o de los senos de la hiperesplenismo secundario se encuentran: enfermedad

453
de Hodgkin, cirrosis hepática, síndrome de Banti, linfoma en fase terminal, no procede la esplenecto-
enfermedad de Gaucher, etc. mía, aunque se sospeche un hiperesplenismo. Por
otra parte, no se debe pensar en este tratamiento como
Indicaciones de la esplenectomía último recurso. En quienes el juicio clínico indique
que la esplenectomía pueda ser beneficiosa, la ope-
Aunque el hiperesplenismo tiene límites imprecisos, ración se realizará antes de que el estado tan dete-
la experiencia clínica ofrece un buen fundamento riorado del paciente la convierta en un alto riesgo.
para decidir la esplenectomía en un caso determina- Cuando el hiperesplenismo constituye una compli-
do. La decisión quirúrgica se sustentaría en la natu- cación permanente o progresiva de una enfermedad,
raleza de la enfermedad de base y en el estado general nada se gana con retardar la decisión quirúrgica una
del paciente; así, cuando haya una cirrosis o un vez que se ha llegado al diagnóstico.

454
59
DISCRASIA DE CÉLULAS PLASMÁTICAS

El término de discrasia de células plasmáticas fue de generar este patrón, han sido denominadas gam-
introducido por Osserman para agrupar una serie mapatías monoclonales.
de procesos patológicos que son el reflejo de un tras-
torno en la proliferación de las células productoras A
de las inmunoglobulinas. Se considera como tal a la
proliferación excesiva de un solo clono de células
plasmáticas, lo que origina la síntesis de grandes PROTEÍNAS
cantidades de una sola proteína relacionada con una % g/100 ml
de las principales clases de inmunoglobulinas, o A 57,8 4,31
bien, la síntesis de cantidades excesivas de una α1 5,3 0,40
α2 7,4 0,55
subunidad de polipéptidos (por lo general de tipo β 12,1 0,90
de Bence–Jones), o la asociación de los dos fenó- γ 17,4 1,29
menos. T 100,0 7,45

Patogenia
En la actualidad se sabe que las células plasmáticas γ
β
intervienen en la producción de inmunoglobulinas. α2
α1
En el individuo normal se elaboran todos los tipos
de inmunoglobulinas, cada una por un grupo o clono
celular propio (Fig. 59.1) Hay enfermedades que
provocan una proliferación de todos los clonos pro-
ductores de inmunoglobulinas y como cada una de
ellas tiene una carga eléctrica diferente, se despla-
Fig. 59.1. Electroforesis de proteínas en un adulto normal.
zarán en la electroforesis en una zona relativamente
ancha de la fracción de las gammaglobulinas y Es importante el concepto de que una célula
originarán un patrón electroforético de aumento de plasmática produce un único tipo de inmunoglobuli-
las gammaglobulinas de base ancha. Por tal razón, na. Si se considera que la gammapatía monoclonal
a estas enfermedades se les ha denominado gam- es la proliferación de una célula productora de in-
mapatías policlonales. Tal es el caso de la cirrosis munoglobulina como resultado de la mutación de un
hepática, el lupus eritematoso diseminado, las in- solo clono celular, resulta lógico que la consecuen-
fecciones crónicas y otras. cia natural sea la síntesis de una inmunoglobulina
Por otra parte, mediante mecanismos que aún se homogénea. La reproducción de este clono celular
desconocen puede ocurrir la proliferación de un solo provoca una disminución en la producción del resto
clono celular, productor por lo tanto de inmunoglo- de las inmunoglobulinas, lo que explica la suscepti-
bulinas de un mismo tipo, las que al tener igual car- bilidad a las infecciones de los pacientes con discra-
ga eléctrica migrarán juntas en la electroforesis y sias de células plasmáticas. Esto se trató de explicar
darán origen a una zona electroforética elevada (en considerando nada más que las células plasmáticas
pico) y de base estrecha. Las enfermedades capaces normales eran desplazadas por el clono neoplásico,

455
pero hoy se invocan también otros mecanismos dis- des de macroglobulinas (IgM). Los afectados mues-
tintos, entre ellos, deficiencia de los receptores de tran anemia variable, manifestaciones hemorrágicas
superficie de los linfocitos B, citocinas que estimu- y síntomas relacionados con la presencia de estas
lan la proliferación de las células plasmáticas, etc. macroglobulinas en el suero, más viscoso de lo co-
En 1958, Riva llamó a la zona electroforética es- mún, con cifras elevadas de gammaglobulinas y un
trecha y elevada, componente M, ya que se observa peso molecular de alrededor de 1 000 000, tal y como
fundamentalmente en el mieloma y en la macroglo- lo describió Waldenström en sus primeros casos
bulinemia de Waldenström. Este último autor, en en 1948.
1962, basado en la teoría de la selección clonal de
Burnet, sugirió para este componente M la designa- Cuadro clínico
ción de gammapatía monoclonal, ya que era un solo Padecen esta dolencia los hombres entre la quinta y
clono celular el responsable de la producción de un sexta décadas de la vida con un comienzo insidioso
mismo tipo de inmunoglobulina. caracterizado por debilidad, pérdida de peso, cefa-
lea y parestesias transitorias. Algunos tienen una
Características de las discrasias
neuropatía periférica antes de la aparición de la en-
de células plasmáticas fermedad. Por lo general no causa lesiones óseas ni
Según Osserman, las características que debe tener hipercalcemia. Solamente una quinta parte de los
una discrasia de células plasmáticas son: pacientes excretan cadenas ligeras y por lo tanto, la
participación renal no es común.
1. Proliferación de células plasmáticas. En el período de estado se encuentran adenopa-
2. Presencia de un componente M en la electrofo- tías y hepatosplenomegalia, y el cuadro clínico es
resis. parecido al de un linfoma maligno. Esta enferme-
3. Asociación frecuente de una deficiencia en la dad se incluye entre los síndromes linfoprolifera-
síntesis de los otros tipos de inmunoglobulina. tivos.
Las macroglobulinas tienen propiedades fisico-
Los procesos patológicos que reúnen las condi- químicas específicas que explican algunas de las
ciones anteriores, son: manifestaciones de los pacientes con este tipo de
discrasia:
1. Macroglobulinemia de Waldenström.
2. Mieloma múltiple. 1. Insolubilidad en frío (crioglobulinas), causan-
3. Enfermedad de cadenas pesadas. te del fenómeno de Raynaud y de oclusión vas-
4. Gammapatía monoclonal de significación in- cular con gangrena, después de la exposición
cierta. al frío.
5. Amiloidosis. 2. Aumento de la viscosidad, que da origen al lla-
6. Plasmocitoma solitario y extramedular. mado síndrome de hiperviscosidad, caracteri-
zado por hemorragias, trastornos visuales,
También se han descrito picos monoclonales en manifestaciones neurológicas (cefalea, convul-
otras enfermedades, sobre todo en trastornos linfo- siones, parálisis, sordera, vértigos y el llamado
proliferativos como linfomas y leucemia linfoide coma paraproteinémico). Puede haber descom-
crónica. pensación cardíaca.
3. Capacidad de formar complejos con los factores
de la coagulación y otras proteínas plasmáti-
MACROGLOBULINEMIA cas, factor importante en la diátesis hemorrá-
gica (epistaxis, hemorragia gingival, púrpura).
DE WALDENSTRÖM
Exámenes complementarios
Esta enfermedad, incluida en las discrasias de célu- Hemograma: Suele haber anemia, que es normocí-
las plasmáticas, es una proliferación monoclonal de tica normocrómica. Se observa el fenómeno de
células linfoides B, que sintetizan grandes cantida- rouleaux.

456
Pruebas de la coagulación. Pueden ser normales En pacientes con síndrome de hiperviscosidad se
o existir alteraciones del fibrinógeno, la protrombi- realizará plasmaféresis.
na, el factor V, VIII, etc. El 50 % de los pacientes
con manifestaciones hemorrágicas tienen trombo-
citopenia. MIELOMA MÚLTIPLE
Orina. Hay proteinuria de Bence–Jones en el 10 %
de los casos.
El mieloma múltiple (MM), la más representativa y
Eritrosedimentación. Está muy acelerada.
frecuente de las gammapatías monoclonales, es una
Serología. A veces se encuentran reacciones se- enfermedad maligna caracterizada por una prolife-
rológicas falsas positivas. ración neoplásica de un solo clono de células plas-
Examen radiológico. En ocasiones hay una os- máticas, las cuales elaboran cantidades anormales
teoporosis generalizada. Las lesiones osteolíticas son de un tipo homogéneo de inmunoglobulina. Afecta
raras. en especial a pacientes mayores de 40 años y cursa
Electroforesis de proteínas. Muestra el típico com- con dolores óseos, lesiones osteolíticas, anemia y
ponente M de todas las gammapatías monoclonales. una eritrosedimentación acelerada.
La inmunoelectroforesis evidenciará el aumento es- La denominación de MM se debe a que al princi-
pecífico de la IgM, de la cual debe realizarse una pio fue considerada como una enfermedad generali-
cuantificación. El 10 % de las macroglobulinas son zada de la médula ósea. Después se describieron
crioglobulinas. casos de mieloma con localización única (plasmoci-
Prueba de Sia. Las macroglobulinas son insolu- toma solitario) y otros en que este tumor se había
bles en agua destilada. Esta prueba es también posi- desarrollado fuera del esqueleto, plasmocitoma ex-
tiva en el mieloma múltiple, el lupus eritematoso tramedular.
diseminado, la leucemia linfoide crónica, etc.
Medulograma. Revela la presencia predominan- Historia
te de linfocitos; el número de células plasmáticas En 1846, dos médicos escoceses, Watson y McIntire,
está normal o aumentado. En ocasiones se ven célu- enviaron por separado muestras de orina al químico
las reticulares. Algunos autores prefieren llamar a Bence–Jones, uno de los más famosos de Inglaterra
este tipo de célula, morfológicamente intermedia en aquella época. Dichas muestras pertenecían a un
entre un linfocito y una célula plasmática, célula mismo enfermo, un rico comerciante que orinaba
linfoplasmocitoide, por la apariencia morfológica turbio. Dos años más tarde, Bence–Jones comuni-
común a ambos tipos celulares. caba a la Real Sociedad de Medicina de Londres, el
Fondo de ojo. Se observa segmentación vascular, hallazgo de una “sustancia animal” en la orina de
dilatación de las venas retinianas, hemorragias, dos pacientes, sin saber que se trataba del mismo
exudados, desprendimiento de la retina y edema de caso. Bien lejos estaba de imaginar que el estudio
la papila. de esa orina lo inmortalizaría.
Posteriormente Kahler precisó el cuadro clínico
Evolución y pronóstico de la enfermedad. El descubrimiento de la inmuno-
El promedio de vida oscila entre 4 y 5 años, aunque electroforesis por Grabar y el de la ultracentrífuga
existen pacientes con un curso más crónico y una por Svedberg, han sido decisivos en el estudio de
supervivencia hasta de 10 años. esta enfermedad.
Haría interminable esta descripción la mención
Tratamiento de todos los investigadores, que de una manera u
Estos enfermos han sido tratados con clorambucil otra han contribuido al mejor conocimiento del MM,
en dosis de 8 a 10 mg por día. pero no se puede dejar de mencionar a Waldenström,
Actualmente se prefiere el tratamiento con flu- cuyos estudios en Malmo (Suecia) a través de las
darabina, en dosis de 25 mg/m²/día, por 5 días cada últimas décadas, tuvieron una influencia decisiva en
4 semanas o de cladribina en dosis de 0,1mg/kg/día los conceptos actuales de las por él llamadas gam-
por 7 días, cada 4 semanas. mapatías monoclonales.

457
Etiología y frecuencia El 50 o 60 % de los pacientes con MM produce
IgG y alrededor del 20 %, IgA. Hay pocos casos
La causa del MM se desconoce. Se ha visto con
mayor frecuencia en los supervivientes del ataque descritos de IgD y aún menos de IgE e IgM.
atómico en la II Guerra Mundial y también en gran- Un hallazgo importante en esta afección lo cons-
jeros, trabajadores con maderas, cueros y petróleo. tituye la disminución de la síntesis de inmunoglo-
Desde la introducción por Arinquin (1929) de la bulinas normales, lo que hace muy susceptible a los
técnica de la punción esternal, la enfermedad se diag- pacientes a las infecciones. Hoy se acepta que la en-
nostica más a menudo. Incide sobre todo en edades fermedad de cadenas ligeras es sólo una variante del
por encima de los 50 años y es rara antes de los 40. MM que ocurre en el 20 % de los casos; en ellos el
Nuestro paciente más joven tenía 31 años. Predomi- pico monoclonal se encuentra en la orina y está cons-
na en el sexo masculino. Se reporta con mayor fre- tituido por cadenas ligeras de tipo kappa o lambda.
cuencia en la raza negra y se han descrito casos en En contraste con otros tumores de células B, no
casi todos los lugares del mundo. han sido encontradas en pacientes con MM altera-
ciones cromosómicas consistentes, aunque se han
Patogenia reportado múltiples anormalidades citogenéticas: N
La patogenia del MM parte del concepto de que una – ras, c – myc, bel – 1 y en los genes supresores p53
célula plasmática produce un solo tipo de inmu- y Rb – 1.
noglobulina, de manera que cuando por razones aún
no conocidas ocurre una proliferación neoplásica de Cuadro clínico
un grupo o clono celular, el resultado será la síntesis El cuadro clínico del MM tiene una sintomatología
de un solo tipo de inmunoglobulina. El MM es una variada de acuerdo con el órgano afectado. Así, ha-
enfermedad maligna clonal de células B, en la cual brá síntomas generales, óseos, neurológicos, rena-
las más maduras (células plasmáticas) constituyen les e infecciosos.
generalmente el fenotipo predominante, aunque cé- Síntomas generales. El comienzo de la enferme-
lulas B más inmaduras están también afectadas. dad es solapado en la mayor parte de los casos: aste-
Recientes estudios de biología molecular han he- nia, anemia moderada y frecuentes dolores de tipo
cho posible identificar los precursores de las células reumatoideo o neuralgiforme. Otras veces es una
del mieloma y elucidar los mecanismos de su proli- fractura espontánea la que inicia el cuadro general.
feración y diferenciación. La fiebre, que se presenta acompañando a las infec-
Se ha demostrado la importancia de las molécu- ciones, completa el cuadro general.
las de adhesión celular, en su interacción célula – Manifestaciones óseas. Las lesiones del esquele-
célula y célula–matrix, en la evolución del MM.
to causan sobre todo dolores y con menor frecuen-
Las células del MM se unen a las del estroma de
cia deformidades y fracturas. El dolor en la espalda
la médula ósea a través de las moléculas de adhe-
es el síntoma de presentación habitual y se incre-
sión y estimulan la secresión de IL–6 por las células
menta con el movimiento; puede ser gravativo,
estromales de la médula. Como la IL–6 es un factor
neuralgiforme, etc. y afecta sobre todo la columna
estimulante de osteoclastos, esta adhesión puede in-
crementar la destrucción ósea. Por otra parte, se dis- lumbosacra y la pelvis, y cuando tiene un comienzo
minuye la actividad osteoblástica y se inhibe la brusco, casi siempre se debe a una fractura patoló-
formación de nuevo hueso. Una resorción ósea au- gica. Las destrucciones óseas, en particular las del
mentada junto a una disminución de la formación, cráneo, pueden no producir dolores. Las deformida-
es la causa fundamental de la osteoporosis y de las des afectan la columna dorsal, las costillas, las cla-
lesiones osteolíticas. Por otra parte, la IL–6 es un vículas y el esternón. En ocasiones aparece una
potente factor de crecimiento de células plasmáticas. cifoscoliosis moderada.
También se han planteado como contribuyentes a Manifestaciones neurológicas. Por lo general es-
las lesiones osteolíticas los llamados “factores tán en relación con las fracturas óseas y las lesiones
activantes de osteoclastos” (IL–1 y FNT), que son osteolíticas. Las más importantes son: paraplejía con
segregados por las células plasmáticas. trastornos esfinterianos, radiculalgia, ciática y neu-

458
ralgia intercostal. La sustancia amiloide suele infil- mastia, diabetes mellitus y fallo gonadal con ame-
trar los nervios periféricos y el sistema nervioso cen- norrea o impotencia
tral. Gammapatía monoclonal en el suero.
La hipercalcemia provoca náuseas, constipación, En la piel los cambios más importantes son: hi-
confusión mental, diversos signos neurológicos, le- perpigmentación, hipertricosis, engrosamiento, fe-
targia y eventualmente coma. nómeno de Raynaud, etc.
Se han descrito pocos casos con invasión menín- El papiledema es común en el síndrome de
gea por células plasmáticas en el curso de un mieloma. POEMS y los hallazgos patológicos en algunos pa-
Los pacientes evolucionan con estado semiestupo- cientes recuerdan mucho a la enfermedad de Castle-
roso, convulsiones y con posterioridad, coma pro- man de tipo plasmocítico.
fundo. Muchas veces no se encuentran los cinco trastor-
Manifestaciones renales. La insuficiencia renal es nos descritos en este síndrome sino sólo dos o tres.
multifactorial, pero las causas más importantes son No está claro para algunos si el síndrome de POEMS
la hipercalcemia, la nefropatía por cadenas ligeras o y el mieloma osteosclerótico son entidades distin-
ambas. tas, aunque es indudable que existen diferencias en-
El daño tubular asociado a la excreción de cade- tre ellos.
nas ligeras está casi siempre presente. La manifes- En 1984 se reportó desde el Japón un síndrome
tación más temprana del daño tubular es el síndrome que fue llamado de Crow–Fukase, muy parecido al
de Fanconi del adulto con un aumento de la pérdi- de POEMS, pero diferente en algunos aspectos pues
da de glucosa, aminoácidos y defectos en la habi- no tiene lesiones escleróticas ni requiere de todos
lidad del riñon para acidificar y concentrar la orina. los componentes del POEMS; además, posee ele-
También son frecuentes las sepsis urinarias. mentos ausentes en este último.
El llamado mieloma osteosclerótico es una Por ejemplo, en el síndrome de Crow–Fukase es
discrasia de células plasmáticas caracterizada por frecuente, además de la neuropatía, el edema. Es im-
lesiones óseas escleróticas y polineuropatía desmie- portante una paraproteinemia de tipo lambda, de una
linizante progresiva. En la médula se encuentran me- inmunoglobulina IgG o IgA. Otros elementos signi-
nos de un 5 % de células plasmáticas. ficativos son la baja concentración del componente
Manifestaciones infecciosas. Son frecuentes las monoclonal, las concentraciones normales de las
infecciones, sobre todo en el sistema respiratorio y otras inmunoglobulinas y la discreta plasmocitosis
el urinario y siguen siendo el motivo más común de medular. En la tercera parte de los casos no hay le-
muerte. Sus causas son múltiples: depresión profunda sión esquelética. Puede haber ginecomastia e impo-
de las funciones de las células T y B, infiltración de tencia.
la médula por las células plasmáticas, la inmunode-
presión por los citostáticos, disminución de las in- Exámenes complementarios
munoglobulinas normales, etc. El examen de la sangre periférica demuestra anemia
Por otra parte, Barwick, en 1980, utilizó el que, aunque moderada al inicio, por lo general se
acrónimo POEMS para describir un síndrome con intensifica a medida que avanza el curso de la enfer-
las siguientes características: polineuropatía, orga- medad. Usualmente es normocítica normocrómica.
nomegalia, endocrinopatía, gammapatía monoclo- A pesar de la infiltración medular por las células
nal (monoclonal gammapathy, en inglés) y lesiones tumorales, la granulocitopenia y la trombocitopenia
en la piel (skin lesions). no son frecuentes, por lo menos en los primeros es-
La polineuropatía es fundamentalmente desmie- tadios de la afección. Pueden haber alteraciones cua-
linizante de tipo sensitivo–motora. litativas de las plaquetas, así como de los factores
Organomegalia: hepatomegalia, esplenomegalia de la coagulación, por su interacción con el compo-
y adenomegalia nente monoclonal.
Endocrinopatía: el hipotiroidismo es el trastorno La eritrosedimentación está por lo general muy
endocrino que más se encuentra, pero también se acelerada, no siendo raras cifras por encima de 100 mm
detectan hipogonadismo, hipertiroidismo, gineco- en 1 hora. El medulograma tiene capital importancia.

459
La presencia de por lo menos un 15 % de células
plasmáticas (Fig. 59.2) es el criterio mínimo para el
diagnóstico de MM, pero hay que recordar que las
células plasmáticas malignas no están distribuidas
de manera uniforme en la médula. La biopsia medu-
lar es un método más seguro que la aspiración de la
médula ósea.

Fig. 59.3. Lámina periférica en un paciente con una llamada


leucemia de células plasmáticas, en la que se observa una cé-
lula plasmática.

Fig. 59.2. Medulograma de un paciente con un mieloma múlti-


ple. Se observan plasmoblastos y células plasmáticas.

En algunos pacientes se encuentran células plas-


máticas en la periferia y en contados casos el número
.
está por encima de 2,0 109/ L, lo que constituye la
llamada leucemia de células plasmáticas (Fig. 59.3).
Estos enfermos cursan con hepatosplenomegalia,
anemia intensa y responden mal al tratamiento.
El examen radiológico muestra osteoporosis y
sobre todo lesiones osteolíticas en “perdigonazos”
(Fig. 59.4). El cráneo, las costillas, las vértebras y
las escápulas aparecen como apolilladas. Las vérte-
bras están aplastadas. Es frecuente observar una vér- Fig. 59.4. Radiografía del cráneo de un paciente con un
tebra colapsada entre dos sanas, lo cual le da el mieloma.Nótense las lesiones esteolíticas en “perdigonazos”,
características de la enfermedad.
aspecto de “emparedado”.
A veces el único dato radiológico lo constituye La afectación de la órbita es inusual en el MM y
una osteoporosis generalizada y en algunos casos cuando se produce, la proptosis ocular es una mani-
raros no se hallan lesiones óseas. En el mieloma festación temprana.
osteosclerótico son parte importante del cuadro clí- La RMN es muy útil para detectar lesiones torá-
nico las lesiones escleróticas en el esqueleto. cicas, vertebrales y compresión de la médula espinal.

460
La TAC es capaz de descubrir lesiones osteolíticas PROTEÍNAS
β
iniciales. % g%
A 23,2 2,12
Alteraciones humorales: Las proteínas plasmáti- α1 5,1 0,47
cas están elevadas en la mayoría de los pacientes y α2 10,2 0,93
sus cifras oscilan entre 90 y 150 g /L (9 y 15 g %). β 53,7 4,90
γ 7,8 0,71
Existe una pequeña cantidad de casos con cifras nor-
T 100,0 9,13
males o bajas.
La electroforesis de proteínas tiene gran valor, y
mostrará la banda estrecha y elevada, propia de las A
gammapatías monoclonales (Figs. 59.5 y 59.6). Se
ha propuesto que una concentración del componen-
te M de 30 g/L es mínima para un criterio diagnósti-
co de MM, aunque se encuentran casos con valores
menores. Es importante hacer mediciones seriadas α2
del componente M. γ α1

Con la introducción de la inmunoelectroforesis


por Grabar y Williams, se ha podido identificar el
tipo de inmunoglobulina específica que está aumen-
tada en el paciente. Ya se explicó que el mieloma
más frecuente es el IgG (Fig. 59.7) y le sigue el IgA
(Fig.59.8). Las inmunoglobulinas se cuantifican por Fig. 59.5. Electroforesis de proteínas en el suero de un pacien-
diferentes métodos. te con un mieloma múltiple, en la que se observa un pico mo-
Se puede determinar la viscosidad del suero, so- noclonal en la región de las betaglobulinas.
bre todo en los casos del síndrome de hiperviscosi-
dad. Normalmente el suero es 1,8 veces más viscoso
que el agua; en este síndrome dicho valor se multi-
plica hasta 5 o 6 veces. γ
PROTEÍNAS
La prueba de Sia suele ser positiva, tanto en la
% g%
enfermedad de Waldenström como en el MM.
A 20,2 2,13
La hipercalcemia es frecuente y secundaria a la α1 7,4 0,78
destrucción ósea. Es la causa más común de insufi- α2 10,1 1,06
β 9,8 1,03
cencia renal en estos pacientes. El ácido úrico se γ 52,5 5,54
eleva en ocasiones.
T 100,0 10,54
La fosfatasa alcalina sérica casi siempre es nor-
mal. La β2 microglobulina está elevada y valores A
altos (6 mg/L) están asociados a una supervivencia
corta.
Se realiza la cuantificación de las proteínas en
orina de 24 horas, así como una electroforesis de α2
éstas. α1
β
La proteína de Bence–Jones, constituida por ca-
denas ligeras de tipo kappa o lambda, debe ser bus-
cada en orina fresca; ella precipita a 40 o 60 °C y se
redisuelve cuando la orina comienza a hervir. Si se
la deja enfriar vuelve a precipitar a 40 o 60 °C. La
presencia aislada de proteinuria de Bence–Jones no
es patognomónica de mieloma, ya que suele obser- Fig. 59.6. Electroforesis de proteínas en el suero de un pacien-
varse en pacientes con amiloidosis, macroglobuli- te con un mieloma múltiple. Existe un pico monoclonal en la
nemia, linfoma, leucemia linfoide crónica, etc. región de las gammaglobulinas.

461
CUADRO 59.1
CLASIFICACIÓN EN ESTADIOS
DEL MIELOMA MÚLTIPLE DE ACUERDO
CON EL VOLUMEN DE LA MASA TUMORAL

Estadio Criterios Masa celular


.
mielomatosa ( 1012/ m²)
I Presencia de todos los
criterios siguientes:
Fig. 59.7. Resultado de la inmunoelectroforesis de un paciente 1. Hemoglobina > 100 g/L
con mieloma múltiple de tipo IgG. Muestra la banda engrosa- 2. Calcio sérico normal: < 12 mg/dl (< 3 mmol/L)
da del suero del paciente (parte superior) y la banda de un 3. Rx del esqueleto óseo
suero normal (parte inferior). normal o lesión
osteolítica solitaria < 0,6 (baja)
4. Paraproteínas
a. IgG < 50 g/L
b. IgA < 30 g/L
c. Proteinuria < 4 g / 24 h
II Criterios intermedios
entre I y III 0,6 – 1,2 ( intermedia)
III Uno o más de los
criterios siguientes:
1. Hemoglobina < 85 g/L
2. Calcio sérico > 12 mg/dl (> 3 mmol/L)
3. Lesiones osteolíticas
avanzadas
4. Paraproteína > 1,2 (alta)
a. IgG > 70 g/L
Fig. 59.8. Resultado de la inmunoelectroforesis de un paciente b. IgA > 50 g/L
con mieloma múltiple de tipo IgA. Nótese el engrosamiento c. Proteinuria > 12 g/24 h
del arco en el suero del paciente (parte superior) en compara- A. Función renal normal
ción con la banda del suero normal (parte inferior). B. Creatinina >2 mg/dl (> 177 µm/L)

Estadios
precursor del ADN, como son la timidina tritriada o
En la determinación del pronóstico del paciente tie- la bromodeoxyuridina y traduce la malignidad in-
ne gran importancia el volumen de la masa tumoral. trínseca del tumor. En el MM el índice de marcaje
La clasificación en estadios de Durie y Salmon (cua- es mayor de un 1 %.
dro 59.1) correlaciona la masa tumoral con diferen- Si ambas variables están disminuidas, los pacien-
tes indicadores clínico–humorales y es de utilidad tes se consideran de bajo riesgo y la supervivencia
para la distribución de los enfermos en categorías es de alrededor de 6 años.
de pronóstico bueno y malo; todos estos estadios Cuando una sola de las variables está alta, el ries-
pueden a la vez ser subdivididos basados en la fun- go es intermedio y la supervivencia de 40 meses y
ción renal. cuando ambas están altas se considera de alto ries-
Los pacientes en los diferentes estadios tienen la go con una supervivencia de algo más de 1 año.
supervivencia media siguiente, determinada en me- La proteína C reactiva ha resultado una alternati-
ses: el IA, 61; el IIA y el IIB, 55; el IIIA, 30 y el va para el pronóstico del enfermo. Cuando ésta se
IIIB, sólo 15. encuentra elevada junto con la β2 microglobulina,
La determinación de la β2 microglobulina (pro- el pronóstico es malo con una supervivencia de
teína con un peso molecular de 11 000, que es una 6 meses. Cuando ambas están bajas la superviven-
expresión del tamaño del tumor) y del índice de mar- cia puede elevarse hasta algo más de 4 años.
caje (Index labeling) se correlaciona con el estadio La escala de Karnofsky (cuadro 59.2) sirve para
de Durie–Salmon. Este índice expresa el procentaje la evaluación del estado general del paciente, que
de células plasmáticas en fase S, o sea, el tanto por ha sido resumida por el ECOG (Eastern Cooperative
ciento de células que es capaz de incorporar un Oncology Group) (cuadro 59.3).

462
CUADRO 59.2 Diagnóstico
ESCALA DE KARNOFSKY PARA EVALUAR
EL ESTADO GENERAL DEL PACIENTE El diagnóstico del MM se sustenta en la siguiente
CON UN MIELOMA MÚLTIPLE tríada:
Estado general % Características clínicas
1. Aumento del número de células plasmáticas
medulares.
Capaz de desarrollar 100 Normal. Sin síntomas ni 2. Lesiones osteolíticas.
una actividad normal. evidencias de enfermedad. 3. Componente M en el suero o en la orina.
No se necesita de
cuidados especiales. 90 Capaz de una actividad nor-
mal con ligeros síntomas y de La presencia en un paciente de dolores óseos, una
signos de enfermedad. eritrosedimentación acelerada, anemia y creatinina
80 Actividad normal con esfuer- elevada, debe hacer pensar en un MM.
zos, algunos signos y sínto- Hay dos variantes del MM, los plasmocitomas
mas de la enfermedad
solitario y extramedular, que a veces ofrecen difi-
Incapacitado para el 70 Capaz de atenderse por sí cultades para su diagnóstico, ya que el componente
trabajo. Puede hacer mismo. No puede desarrollar
las actividades do- una actividad normal o hacer
M se encuentra en menos del 30 % de los casos.
mésticas. La mayor un trabajo. El diagnóstico diferencial más difícil es con la
parte de las personas gammapatía monoclonal benigna o también llama-
requieren cuidados; 60 Requiere asistencia ocasional, da gammapatía monoclonal de significación inde-
la cantidad de asis- puede atender a la mayor
tencia requerida es parte de sus necesidades. terminada. En ésta hay menos de un 10 % de células
variable. plasmáticas en la médula y menos de 30 g/L del com-
50 Necesita considerable asisten- ponente M. No hay lesiones osteolíticas, ni protei-
cia y cuidados médicos fre-
cuentes.
nuria de Bence–Jones ni anemia.
Es también posible confundir el MM con la ma-
Incapacitado para 40 Incapacitado. Requiere cuida-
atenderse por sí dos especiales y asistencia.
croglobulinemia de Waldenström, pero en esta última
mismo, necesita el medulograma mostrará las células linfoplasmocí-
cuidados hospitala- 30 Muy incapacitado. Está indi- ticas, la poca presencia de lesiones osteolíticas y en
rios o su equivalente; cada la hospitalización, aun- la electroforesis de proteínas habrá un aumento de
la enfermedad puede que la muerte no es inminente.
progresar rápida- la IgM.
mente. 20 Muy enfermo. Hospitaliza-
ción necesaria. Necesitado de Tratamiento
tratamiento de sostén intensivo.
Al igual que en otras enfermedades malignas, la te-
10 Moribundo. Progresión rápida. rapéutica del MM tiene como objetivos mejorar la
calidad de vida e incrementar la supervivencia: el
0 Muerte. inicial es aliviar el dolor y animar al paciente a que
sea lo más activo posible para evitar una mayor
CUADRO 59.3
CLASIFICACIÓN DEL ECOG
desmineralización del esqueleto.
PARA DETERMINAR EL ESTADO GENERAL Es necesario prestar gran atención a las infeccio-
DEL PACIENTE CON UN MIELOMA MÚLTIPLE nes a las cuales son tan susceptibles estos enfermos;
éstas serán investigadas y tratadas con rapidez.
Grado Estado Escala de Karnofsky
La ingestión de líquidos debe ser alrededor de los
0 Totalmente activo 100 - 90 % 3 000 ml diarios, requeridos para la excreción de
1 Ambulatorio con síntomas, cadenas ligeras, ácido úrico, calcio, etc.
capaz de trabajo ligero 80 - 70 % En general, se debe dirigir la atención al paciente
2 En cama < 50 % del tiempo 60 - 50 % con MM en dos grandes líneas:
1. Tratamiento de las células tumorales.
3 En cama > 50 % del tiempo 40 - 30 %
2. Tratamiento de las complicaciones de la enfer-
4 Encamado todo el tiempo 20 - 10 %
medad.

463
Tratamiento de las células tumorales En la actualidad se ha demostrado la superiori-
El régimen con melfalán (Alkerán) y prednisona dad de la quimioterapia en altas dosis sobre la tera-
(MP) fue introducido en los años 60 y consiste en el péutica convencional en la supervivencia libre de
siguiente esquema: síntomas y en la global, sobre todo si se combina
Melfalán: 9 mg/m², los días 1 al 4 con factores de crecimiento hematopoyético y apo-
Prednisona: 100 mg los días 1 al 4 yo con trasplantes de células madres periféricas.
Para pacientes en recaída, el esquema VAD (vin-
El esquema MP se repite cada 4 o 6 semanas al cristina–adriamicina–dexametasona) del cuadro 59.4
menos por 1 o 2 años. Prolongar la terapéutica no se ha convertido en una buena alternativa. Este ré-
tiene valor, ya que suelen obtenerse nuevas respues- gimen ha demostrado la utilidad de las altas dosis
tas cuando el paciente sufre una recaída. Los ali- de glucocorticoides. Se han probado otros alternati-
mentos interfieren en la absorción del melfalán por vos del VAD, que incluyen una antraciclina o
lo que deben administrarse 30 min antes de las co- mitoxantrone, también con dosis elevadas de corti-
midas. Si la respuesta no es buena se sube la dosis coides.
a 12 mg/m², si el conteo de leucocitos es mayor de Es indudable que ninguno de los regímenes tera-
.
1,5 109/L y el de plaquetas mayor de 100 109/L.. péuticos antes mencionados curan la enfermedad y
Para prevenir el daño renal se debe garantizar, por que los mejores resultados con estas drogas no al-
lo menos, la ingestión de 3 litros de líquido al día. canzan un 25 % de supervivencia a los 5 años. Por
Una remisión completa se define como una mé- ejemplo, el esquema MP es útil en menos del 50 %
dula ósea normal y la desaparición del componente M; de los enfermos.
la reducción de este último al 50 % se considera como Hoy día se plantea que en pacientes por debajo
una buena respuesta clínica. Tarda de 4 a 6 semanas de 50 a 60 años con MM, es eficaz el tratamiento
en descender, mientras que la excreción de cadenas con quimioterapia ablativa con o sin irradiación cor-
ligeras puede hacerlo en la primera semana. Poste- poral total y trasplante alogénico de médula, con el
riormente, en los años 70, se añadió al esquema MP que alrededor de un 20 % de los atendidos permane-
la ciclofosfamida y después la vincristina. cen libres de enfermedad de 3 a 6 años después del
También se comenzaron a usar drogas alternantes trasplante, aunque la mortalidad es alta. En compa-
con diferentes modos de acción y así surgió el es- ración con el trasplante autólogo, el alogénico lo
quema VMCP/VBAP (cuadro 59.4), y otros muchos aventaja en no tener células tumorales capaces de
que son recogidos por la literatura. causar una recaída y además, se aprovecha el efecto

CUADRO 59.4
REGÍMENES TERAPÉUTICOS EN EL MIELOMA MÚLTIPLE

Quimioterapia Drogas Días Intervalo


( días )
1 2 3 4 5 6 7

VMCP / VBAP Vincristina, 0,03 mg/kg, EV X


Melfalán, 5 mg/m², oral X X X X X X X 28 días
Ciclofosfamida, 100 mg/m², oral X X X X X X X
Prednisona, 60 mg/m², oral X X X X X X X
Alternando con:
Vincristina, 0,03 mg/kg, EV X 28 días
BCNU (carmustine), 30 mg/m², EV X
Adriamicina, 30 mg/m², EV X
Prednisona, 60 mg/m², oral X X X X X X X

VAD Vincristina, 0,4 mg/ 24 h X X X X


Adriamicina, 9 mg/m²/ 24 h X X X X 28 días
Dexametasona, 40 mg, oral, se da en X X X X
cursos de 4 días repetidos, los
días 9 y 17

464
injerto–contra–tumor; mientras que el autólogo se paranasales, sin toma medular. Ambos tumores
puede realizar a un número considerable de enfer- responden muy bien a la terapéutica de irradiación
mos. Se reportan remisiones completas hasta en un local en dosis de alrededor de 40 Gy. Si hay com-
25 a 50 % con una mortalidad de sólo 5 %. ponente M debe desaparecer después del tratamien-
Una posible estrategia en el tratamiento del MM to. El plasmocitoma óseo solitario puede recurrir en
sería la siguiente: otros sitios óseos o evolucionar a un mieloma, mien-
tras que el extramedular es muy raro que recurra o
• Por encima de 70 años es preferible la terapéu- progrese.
tica con melfalán–prednisona.
• En pacientes entre 55 y 70 años se debe utilizar Tratamiento de sostén
la quimioterapia en altas dosis, aunque por su Las medidas de sostén son muy importantes en
toxicidad nada más que la mitad completa el el MM.
programa. Algunos complementan este esque- El control del dolor es indispensable y se logra
ma con infusión de células madres periféricas cuando se establece una terapéutica efectiva. No hay
y factor estimulante de colonias granulocíticas. derecho alguno a dejar que el paciente sufra, cuan-
En este grupo de edad el MP tiene una única do se le puede brindar alivio. En el caso de dolor
indicación: aquellos pacientes que por sus con- persistente puede utilizarse la irradiación local.
diciones clínicas no soportarían altas dosis de Como ya se dijo, todos los enfermos deben ser esti-
citostáticos. mulados a ser tan activos como sea posible y los
• En pacientes por debajo de 55 años, que sólo analgésicos serán indicados de manera generosa
representan alrededor del 10 % del total de en- como paliativo.
fermos con mieloma, debe utilizarse, siempre Se administrarán las transfusiones de sangre cuan-
que sea posible, el trasplante alogénico. En esta do sea preciso. El uso de la eritropoyetina para el
edad no está justificado el empleo de MP. tratamiento de la anemia ha reportado buenos resul-
tados.
El tratamiento con interferón alfa después del En la leucemia de células plasmáticas se debe
comenzar una quimioterapia intensa y considerar el
trasplante suele mejorar los resultados. En general,
trasplante, sobre todo en pacientes jóvenes.
éste se ha usado como mantenimiento después de
cualquiera de los esquemas descritos en dosis de Tratamiento de las complicaciones
3 000 000 de U/m², 3 veces a la semana. Los resulta-
Infecciones
dos apuntan hacia una mayor duración en el control
El manejo de las infecciones es fundamental en es-
de la enfermedad, pero sin mejorar la supervi- tos enfermos; las neumonías y las pielonefritis son
vencia. las más comunes. Requieren de antibióticos de am-
Hay que señalar que el esquema MP no se debe plio espectro. Hay que tener en cuenta las infeccio-
utilizar en pacientes con insuficiencia renal; es pre- nes virales y micóticas. Algunos recomiendan el uso
ferible el VAD porque la excreción de las drogas de inmunoglobulinas en altas dosis.
utilizadas en este último esquema no es predomi-
nantemente renal. Por otra parte, el uso prolongado Hipercalcemia
del melfalán puede producir daño medular y en po- • Hidratación con solución salina fisiológica (ex-
tencia mielodisplasia o leucemia mieloblástica. cepto que exista una contraindicación), como
Cuando se considera un trasplante autólogo, las mínimo, 3 000 ml en 24 h.
células madres periféricas deben ser colectadas an- • Furosemida: 40 mg cada 6 u 8 h, después que
tes de utilizar un agente alquilante o interferón, para esté corregida la deshidratación. Los pacientes
evitar el daño de ellas. refractarios pueden ser tratados con dosis ma-
El plasmocitoma óseo solitario es una lesión yores (80 mg cada 2 h), pero bajo estricto con-
osteolítica sin plasmocitosis medular. El plasmoci- trol médico.
toma extramedular usualmente afecta a la submuco- • Prednisona: 40 a 60 mg/m²/día, por vía oral, o
sa del tejido linfoide de la nasofaringe o senos dexametasona, 6 a 9 mg/m²/día, por vía EV.

465
Los esteroides deben reducirse y suspenderse La enfermedad de cadenas pesadas alfa se reseñó
lo antes posible. por primera vez en 1968. La mayoría de los pacien-
• Iniciar la quimioterapia específica sin dilación. tes reportados con posterioridad corresponden a
• Se pueden usar los biofosfonatos si fallan los adultos jóvenes y niños. Es la más frecuente de las
medios anteriores. enfermedades de cadenas pesadas y el órgano más
afectado lo constituye el intestino y ocasionalmente
Insuficiencia renal el sistema respiratorio. El hallazgo clínico funda-
• Mantener una ingestión adecuada de líquidos. mental es un síndrome de malabsorción con dolor
• Evitar algunos estudios radiológicos, como la abdominal y tumoraciones abdominales palpables.
Por lo general está afectado todo el intestino delga-
pielografía endovenosa y el colon por enema.
do y se encuentran adenopatías mesentéricas. Hay
• Alopurinol (300 mg/día) si existe hiperuricemia.
infiltración de linfocitos y células plasmáticas en el
• En caso de insuficiencia renal aguda se utiliza intestino y en los ganglios linfáticos.
la hemodiálisis o la diálisis peritoneal; es más El diagnóstico clínico es imposible y se requiere
útil la primera. de inmunoelectroforesis con anticuerpos específicos
de las cadenas pesadas.
Trastornos neurológicos
A los pacientes con síntomas neurológicos (paraple-
jía) debe realizárseles una mielografía de urgencia y
terapia paliativa con irradiación, a la cual se adicio- GAMMAPATÍA
na dexametasona en dosis de 6 a 9 mg/m²/día, por
vía EV.
MONOCLONAL
DE SIGNIFICACIÓN
ENFERMEDAD INDETERMINADA
DE CADENAS PESADAS También ha sido llamada gammapatía monoclonal
benigna e indica la presencia de una proteína mono-
La enfermedad de cadenas pesadas se caracteriza por clonal en individuos asintomáticos y sin criterios de
una producción excesiva de fragmentos de éstas, MM. El componente monoclonal es inferior a 30 g/L
sobre todo de la fracción Fc de las inmunoglobuli- y la presencia de células plasmáticas en la médula
nas. Hasta el momento se han descrito tres tipos de es inferior al 10 %.
esta enfermedad, que corresponden a las inmuno- El empleo de la electroforesis de proteínas del
globulinas G, M y A, cuyas cadenas se denominan suero como análisis de laboratorio sistemático, ha
respectivamente gamma, my y alfa. permitido descubrir componente M en personas asin-
En 1964, Franklin describió el primer caso de tomáticas.
enfermedad de cadenas pesadas gamma. El cuadro Muchos son los trabajos publicados sobre este
clínico semeja a un linfoma con adenopatías, hepa- tema y hay una opinión unánime de que esta gam-
tosplenomegalia, fiebre, pérdida de peso y suscepti- mapatía es más frecuente que el MM y se plantea
bilidad a las infecciones. Las lesiones osteolíticas que es una condición estática donde si la prolife-
son raras. Algunos de los pacientes tienen asociadas ración prosiguiera, llevaría a una lesión destructiva
enfermedades autoinmunes, como lupus eritemato- maligna, o sea, a un mieloma. La posibilidad de trans-
so diseminado, artritis reumatoidea, tiroiditis, etc. formación maligna oscila, según diferentes autores,
La primera aparición de enfermedad de cadenas entre un 8 y un 20 %.
pesadas my se reportó en 1965 y hasta el momento Se observa sobre todo en individuos de edad
se han descrito algunos casos adicionales. La mayo- avanzada y se reporta con una frecuencia hasta de
ría han sido diagnosticados como leucemia linfoide un 3 % en personas mayores de 70 años.
crónica con hepatosplenomegalia y raras veces con El único método seguro de determinar si un pa-
adenopatías. Además de linfocitos, en la médula se ciente permanece estable o si por el contrario evolu-
encuentran células plasmáticas vacuoladas. cionará a un MM, es el seguimiento periódico.

466
complicación de una serie de enfermedades cróni-
AMILOIDOSIS cas (tuberculosis, osteomielitis, etc.). Posteriormente
se describieron infiltrados similares, aunque con una
Las amiloidosis son un grupo de enfermedades ad- distribución diferente, en pacientes sin evidencia de
quiridas o hereditarias que tienen como característi- supuración crónica o de otra enfermedad manifies-
ca el depósito en la pared vascular o extracelular de ta. A esta última variante se le denominó amiloido-
una sustancia de naturaleza proteica que con la sis primaria oponiéndola a la descrita por Virchow,
tinción de rojo Congo adquiere una birrefringencia que se llamó secundaria.
de color verde manzana en el microscopio de luz Después de más de 150 años del descubrimiento
polarizada. La microscopia electrónica pone de ma- de la amiloidosis, este nombre se ha mantenido, a
nifiesto que la sustancia amiloide se compone de una pesar de que hoy se sabe que todos los tipos de sus-
red de fibrillas no ramificadas. El término amiloi- tancia amiloide son proteínas de estructura fibrilar
dosis fue creado por Virchow para describir los de- y no carbohidratos como fue postulado por Virchow.
pósitos de un material amorfo y eosinofílico que tenía Hoy día se conocen muchos tipos de amiloidosis,
la propiedad de dar frente al yodo la misma reac- cuya clasificación más reciente, ofrecida por la OMS,
ción pardo–rojiza que el almidón vegetal. En un ini- y basada en la naturaleza de la sustancia precursora,
cio estos depósitos amiloideos se observaron como se expone en el cuadro 59.5.
CUADRO 59.5
CLASIFICACIÓN DE LA AMILOIDOSIS

Tipo de amiloide Proteína precursora Distribución Síndromes clínicos asociados

AL Cadenas ligeras Sistémica Amiloidosis primaria sistémica


Amiloidosis asociada al mieloma
AH Cadenas pesadas Sistémica Macroglobulinemia
AA Apo - SAA Sistémica Amiloidosis secundaria reactiva
Fiebre mediterránea familiar
Síndrome de Muckle-Wells
ATTR Transtirretina Sistémica Amiloidosis hereditaria
Polineuropatía amiloidótica familiar
Cardiomiopatía amiloidótica familiar (Danish)
AApo A1 Apolipoproteína A1 Sistémica Polineuropatía amiloidótica familiar (Iowa)
Agel Gelsolina Sistémica Polineuropatía amiloidótica familiar (Finnish)
Aβ2M β2 microglobulina Sistémica Asociada a diálisis
Aβ Precursor β proteína Cerebro Enfermedad de Alzheimer
ACys Cistatina C Cerebro Síndrome de Down
Hemorragia cerebral hereditaria con amiloide (tipo
dutca)
Hemorragia cerebral hereditaria con amiloide (tipo
Icelandic)
AScr Proteína precursora Cerebro Encefalopatía espongiforme
scrapie (Kura-C.Jacob)
ACal (Pro) calcitonina Tiroide Carcinoma medular del tiroides
AANF Factor atrial natriurético Corazón Amiloide atrial aislada
AIAPP Péptido aislado a los islotes Páncreas Amiloide de los islotes
Diabetes mellitus tipo II
ALys Lisozima Sistémico Amiloide sistémico hereditario no neuropático
AFib Fibrinógeno A α Sistémico / riñon Amiloide renal hereditario

467
En dependencia de las características bioquímicas el MM prevalecen las kappa, que pueden ser depo-
de estas proteínas precursoras, las fibrillas de sitadas como cilindros en los túbulos renales o como
amiloide pueden depositarse localmente o afectar a depósitos puntiformes en la membrana basal glo-
todos los órganos de la economía. merular.
Aquí se hará énfasis en las llamadas amiloidosis Hay que aclarar que no todas las cadenas ligeras
por cadenas ligeras (AL) y en la secundaria (AA), y poseen una estructura amiloidogénica, o sea, que la
breves alusiones a las heredofamiliares. frecuencia de cadenas ligeras o fragmentos de ellas,
no siempre provoca la formación de amiloide en los
Etiopatogenia tejidos. Esta propiedad amiloidogénica se asocia a
Aunque la patogenia de esta enfermedad no está del la región variable de estas cadenas.
todo aclarada, se acepta que todas las proteínas
fibrilares amiloides sistémicas tienen un precursor B–Amiloidosis secundaria (AA)
plasmático. En la amiloidosis AA la proteína precursora es la
En la pasada década se han realizado importantes Apo–SAA y los síndromes clínicos asociados son:
avances en los conocimientos sobre los mecanismos amiloidosis secundaria, fiebre mediterránea familiar
de agregación proteica, tanto en lo que se refiere y síndrome de Muckle–Wells.
a la proteína misma como a factores propios del La Apo–SAA se produce en el hígado y durante
huésped. el proceso inflamatorio se originan citocinas, como
Además de la sustancia amiloide fibrilar, en las la IL–6 y el FNT, que estimulan la síntesis hepática
placas amiloideas existe una glicoproteína no fibrilar de esta sustancia que circula en el plasma asociada a
que ha sido llamada sustancia P por el aspecto de lipoproteínas de alta densidad. En situaciones de in-
pentámero que adopta al microscopio electrónico. flamación, infección o neoplasia, sus niveles pue-
También se asocian al amiloide, glucosaminoglica- den aumentar hasta mil veces el valor normal.
nos en una proporción del 2 % y la apolipoproteína E. En el caso de la fiebre mediterránea familiar apa-
Las citocinas tienen igualmente un papel impor- recen depósitos de proteína AA como consecuencia
tante en la patogenia de estos síndromes, en particu- de episodios inflamatorios recurrentes. El tratamiento
lar la IL–6 y el FNT. del proceso inflamatorio con colchicina bloquea la
La sustancia amiloide tiene propiedades especia- síntesis del precursor.
les y una de ellas es su resistencia a la proteólisis, La amiloidosis secundaria ocurre a menudo como
que es responsable de la continua acumulación en
complicación de una enfermedad inflamatoria cró-
los tejidos, con posible interferencia en las funcio-
nica. Las más frecuentes son la tuberculosis, la os-
nes celulares.
teomielitis y la lepra. También en los procesos
A–Amiloidosis de cadenas ligeras (AL) articulares crónicos, como la artritis reumatoidea.
Como se observa en el cuadro 59.5, en este tipo de Cuadro clínico
amiloidosis las proteínas precursoras son las cade-
nas ligeras de las inmunoglobulinas, que producen El depósito de fibrillas de amiloide puede no tener
dos síndromes clínicos, la llamada amiloidosis pri- aparentemente consecuencias clínicas o producir
maria y la asociada al MM. Del 15 al 20 % de las severos cambios fisiopatológicos y no es raro que la
cadenas ligeras son amiloidogénicas, dado que tie- enfermedad caiga entre estos dos extremos. Por lo
nen la capacidad de precipitar en forma fibrilar. Me- general el diagnóstico se realiza cuando la afección
nos de la quinta parte de los pacientes con AL tienen está muy avanzada.
MM y por otro lado un número similar con esta en- A. Amiloidosis primaria y asociada al mieloma.
fermedad están afectados con amiloidosis. La edad media de presentación es de 65 años,
En estas entidades las células plasmáticas produ- y es muy rara por debajo de los 40. Afecta más
cen cadenas ligeras (lambda o kappa), que son las a los varones que a las hembras (2: 1). La su-
responsables de la sustancia amiloide y a las que los pervivencia media es de algo más de un año,
macrófagos procesan y degradan. En la AL predo- pero disminuye en los pacientes que presentan
minan las cadenas ligeras lambda, mientras que en una insuficiencia cardíaca congestiva.

468
B. Amiloidosis secundaria. síndrome de malabsorción. En otras hay sangramien-
Se presenta por lo general entre los 40 y 70 años, tos gastrointestinales así como ulceraciones y sínto-
aunque algunos casos se ven en niños, sobre mas de obstrucción intestinal. La amiloidosis del
todo la asociada a artritis crónica juvenil. Los estómago simula a veces un carcinoma gástrico.
hombres son más afectados que las mujeres, Sistema nervioso. Su participación es común en
con una proporción de 3 : 2. las formas heredofamiliares. Aparece una neuropa-
Como ya se expuso, además de los procesos tía periférica con trastornos sensitivos y debilidad
infecciosos crónicos (tuberculosis, osteomieli- en las piernas. También se han descrito hipotensión
tis, etc.), también se observan en las enferme- postural, impotencia, dishidrosis, ronquera e incom-
dades de origen reumático (artritis reumatoidea, petencia esfinteriana.
espondilitis anquilosante, artropatía psoriásica, Sistema osteomioarticular. La infiltración de los
lupus eritematoso diseminado, dermatomiosi- ligamentos del carpo produce el llamado síndrome
tis, etc.). del túnel carpiano, con compresión del nervio me-
La afectación renal es más frecuente y en diano o insuficiecia arterial de las manos.
algunos trabajos se ha reportado una alta inci- En ocasiones la toma de las articulaciones simula
dencia de toma de las suprarrenales. una artritis reumatoidea, aunque a diferencia de esta
última, la rigidez muscular y la limitación de movi-
A continuación se exponen las manifestaciones mientos en general no son dolorosos. La afectación
orgánicas de la amiloidosis sistémica. de los hombros origina el llamado “signo de la hom-
Riñon. La afectación renal es la más común y la brera”. La invasión amiloide de los músculos pro-
causa de muerte en estos pacientes. Aparece más en duce una miopatía seudohipertrófica.
la amiloidosis AA que en la amiloidosis AL. Piel y tejido celular subcutáneo. Las lesiones de
En la mayoría de los casos hay proteinuria y es la piel son muy características de la amiloidosis pri-
habitual la insuficiencia renal. Del 50 al 60 % de los maria aunque también se observan en la secundaria.
enfermos evolucionan hacia un síndrome nefrótico Consisten en pápulas o placas ligeramente elevadas,
y no resulta excepcional el hallazgo de una amiloi- comunes en las axilas, región anal o inguinal, cue-
dosis en pacientes con este síndrome. llo, cara, pabellón auricular y lengua.
La hipertensión arterial es rara, excepto cuando Son frecuentes las hemorragias subcutáneas y la
la amiloidosis es de larga evolución. púrpura, y características, las equimosis periorbi-
Puede haber infiltración amiloidea en los uréteres, tarias.
vejiga, etc. Sistema respiratorio. El proceso infiltra los senos
Corazón. La amiloidosis cardíaca es común en la paranasales, la laringe, la tráquea y los pulmones.
forma primaria y rara en la secundaria. Cuando la sustancia amiloide se localiza en los bron-
Casi siempre está afectado el miocardio, pero tam- quios o en el parénquima pulmonar, se confunde con
bién se toman el endocardio, las válvulas y el peri- una neoplasia.
cardio. Hay cardiomegalia con insuficiencia cardíaca Sistema endocrino. Se encuentran alteraciones en
congestiva que responde mal al tratamiento con la glándula tiroides, las suprarrenales, la pituitaria y
digital, a la cual son muy sensibles. Las arritmias el páncreas. Los depósitos locales de amiloide
son comunes y en el electrocardiograma se observa acompañan casi siempre al carcinoma medular del
bajo voltaje y bloqueo auriculoventricular. A veces tiroides.
se produce un cuadro que se confunde con una peri- Sistema hemolinfopoyético. A veces se hallan
carditis constrictiva (endocarditis restrictiva). En el fibrinogenopenia, fibrinólisis y deficiencia de fac-
ecocardiograma se puede observar engrosamiento tores de la coagulación, sobre todo del IX y el X. El
de la pared posterior del ventrículo izquierdo, hipo- daño endotelial y las alteraciones de la coagulación
quinesia y contracción sistólica disminuida. suelen producir sangramiento.
Sistema digestivo. La hepatomegalia es frecuente
con poca repercusión funcional. Se encuentra esple- Diagnóstico
nomegalia en el 10 % de los pacientes. En ocasio- El diagnóstico depende de la demostración de los
nes hay macroglosia, disfagia y diarreas con un infiltrados amiloideos por medio de una biopsia, para

469
la cual deben preferirse las áreas lesionadas de la 1. Reducir la producción de precursores.
piel y los músculos. Cuando no haya zonas visibles 2. Inhibir la síntesis y el depósito extracelular de
afectadas, el lugar indicado es la grasa subcutánea amiloide.
del abdomen, que es positiva en el 80 % de los ca- 3. Promover la lisis o movilización de los depósi-
sos, y si es negativa, se debe realizar la biopsia del tos de amiloide existentes.
recto, que resulta positiva en el 70 % de los enfer-
mos. Si éstas fueron negativas se puede realizar una Por desgracia, no hay una terapéutica actual ca-
biopsia de cualquier órgano afectado, aunque en es- paz de lograr los anteriores requisitos.
tos casos se han reportado hemorragias severas. Des- Como ya se dijo, la colchicina ha sido útil en el
pués que la amiloide haya sido identificada por los tratamiento de la fiebre mediterránea familiar.
colorantes habituales, debe ser clasificada química- En pacientes con amiloidosis AL, la utilización
del melfalán y prednisona solamente mejora un 20 o
mente por estudios de proteínas y por inmunohisto-
25 % de los casos, con un tiempo de respuesta muy
química. Se ha utilizado además el microscopio
corto. En la amiloidosis por MM, se ha utilizado la
electrónico y la secuencia de aminoácidos de la ca-
dexametasona en altas dosis y mantenimiento con
dena proteica.
alfa interferón. Las dosis recomendadas son:
Si se trata de un MM se realizan estudios elec- Dexametasona: 40 mg en los días 1 al 4; 9 al
troforéticos e inmunoelectroforéticos en el suero y la 12; 17 al 20, repetida cada 35 días por 3 a 6
orina. ciclos.
Las principales causas de muerte son las insufi- IFN: 3 000 000 a 9 000 000 de unidades 3 veces
ciencias cardíaca y renal. Es frecuente la muerte sú- a la semana.
bita posiblemente por arritmias.
Está en uso reciente una nueva antraciclina (4' iodo
Tratamiento 4' deoxydoxorrubicina) para evitar la formación de
El tratamiento de la amiloidosis es poco eficaz y en fibrillas y favorecer la reabsorción de éstas.
primer lugar, debe estar dirigido a corregir los tras- La utilización de la hemodiálisis y el trasplante
tornos funcionales de los órganos afectados por la renal ha mejorado el pronóstico de la amiloidosis
enfermedad, es decir: renal.

470
60
LA TERAPÉUTICA
DE LAS ENFERMEDADES MALIGNAS

La mortalidad por tumores malignos ocupa el se- • Se usan en forma de poliquimioterapia, en fase
gundo lugar como causa de muerte en Cuba y aun- más temprana del tratamiento y junto a la ciru-
que sin duda alguna es la prevención la piedra gía y la radioterapia.
angular de su control, el tratamiento continúa hoy • Existe mejor comprensión de los mecanismos
siendo vital en la lucha contra la enfermedad. de resistencia de las células tumorales.
La terapéutica actual descansa en varios pilares y
su éxito depende del uso de dos o más de estas Así, ahora con la quimioterapia no sólo se consi-
modalidades (multimodal), donde se combinan la guen efectos paliativos, sino también remisiones
cirugía, la radioterapia, la quimioterapia y la inmu- completas y en algunas neoplasias, hasta curaciones.
noterapia; sin embargo, el mejor conocimiento de
la biología de las células cancerosas ha permitido
Clasificación
innumerables opciones para el tratamiento (terapia La diversidad de medicamentos disponibles para el
génica, antiangiogénicos, moduladores de la res- tratamiento de las enfermedades malignas, dado por
puesta biológica, hormonas, etc.). el desarrollo de elementos citotóxicos y endocrinos
En su inicio, los fármacos antineoplásicos se iden- novedosos, así como por la introducción de la tera-
tificaban con sustancias químicas sintéticas y pro- péutica biológica (tratamiento con biomoléculas o
ductos naturales contra sistemas tumorales en bioterapia), dificulta la clasificación uniforme de
animales de experimentación. Los medicamentos de estos fármacos; sin embargo, a continuación se ex-
este tipo, descubiertos en los primeros veinte años pone una manera práctica de agruparlos.
de quimioterapia oncológica (1950-1970), interac-
I. Fármacos anticancerosos con acción sobre el ci-
túan en gran medida con el ADN o sus precursores,
clo celular (citotóxicos).
inhiben la síntesis de nuevo material genético o cau-
A. Fármacos con acción específica sobre una fase
san daño irreparable al propio ADN. En la actualidad
del ciclo celular (CCS).
la identificación de nuevas drogas se ha ampliado
• Antimetabolitos (citarabina, fluoracilo, me-
desde el área de los productos naturales y sustan-
totrexate, mercaptopurina, hidroxiurea).
cias semisintéticas hasta campos de investigación
• Bleomicina.
totalmente nuevos que aportan recientes conoci- • Alcaloides de origen vegetal (vincristina, vin-
mientos en el ámbito de la biología oncológica. blastina, etopósido, taxol).
Hoy día los protocolos clínicos de tratamiento B. Fármacos con acción inespecífica sobre una fase
exploran la genoterapia, la manipulación del siste- del ciclo celular (CCNS).
ma inmunitario, la estimulación de los elementos • Agentes alquilantes (busulfán, ciclofosfamida,
hematopoyéticos normales, la inducción de diferen- mecloretamina, melfalán, tiotepa, cloram-
ciación en tejidos tumorales e inhibición de la bucil).
angiogénesis, entre otras novedosas técnicas; no • Antibióticos (dactinomicina, daunorrubicina,
obstante, la utilidad o eficacia terapéutica de los doxorrubicina, mitomicina).
citotóxicos o citostáticos no ha mermado, al contra- • Compuestos del platino (cisplatino y carbo-
rio, se ha incrementado por varias razones: platino).

471
• Nitroureas (BCNU, CCNU). cen sus efectos antitumorales e intensifican la res-
• Dacarbacina. puesta inmunitaria.
• Mitoxantrone. Interferones. Es una familia de proteínas muy bien
• L-asparaginasa. estudiadas que están registradas para su uso en más
II. Fármacos que modifican la respuesta biológica de 17 enfermedades oncológicas y virales. Se cono-
(MRB). cen dos variedades: tipo I (alfa 1, alfa 2 y beta) y
• Citocinas: interferones, interleucinas, eritropo- tipo II (gamma). Poseen acción antiproliferativa,
yetina. citotóxica y aumentan los antígenos de superficie, y
• Anticuerpos monoclonales (AcM). de manera indirecta activan las células citotóxicas
• Antiangiogénicos. efectoras, modulan la producción de anticuerpos e
• Vacunas. inducen la apoptosis. Se sabe que con su uso se lo-
• Factores de crecimiento. gra detener las células en fase GO (de no prolifera-
III. Otros. ción).
• Hormonas. Interleucina. Es una citocina inmunomoduladora
que interviene en los precursores de las células T,
• Reversores de la resistencia.
mientras que el levamisol es un antihelmíntico que
ha mostrado sus propiedades inmunomoduladoras
Mecanismos de acción sobre la inmunidad mediada por células.
Farmacodinamia Anticuerpos monoclonales. Hoy día se mantienen
Al tratarse de enfermedades caracterizadas por un en fase de investigación, muchos de ellos en ensa-
crecimiento anormal de las células y su transforma- yos clínicos; se cuenta con resultados alentadores
ción en malignas, los medicamentos eficaces están en algunos tipos de cáncer.
diseñados para interferir algún momento del ciclo Antiangiogénicos. Los más conocidos son la
celular o para actuar sobre el mecanismo del hués- angiostatina y la endostatina; inhiben la formación
ped o del tumor en una forma que detenga el creci- de nuevos vasos sanguíneos y comprometen la
miento (antiproliferación). vascularizacion del tumor, con lo que detienen su
Los fármacos del primer grupo (citotóxicos) ac- crecimiento.
túan inhibiendo: Vacunas. Se han podido obtener gracias a la posi-
1.La síntesis de ADN, ARN y proteínas. bilidad de identificar antígenos tumorales y produc-
2. La síntesis de ácidos nucleicos. tos de oncogenes.
3. La mitosis. Antagonistas de factores de crecimiento. En esen-
cia logran excluir el factor de crecimiento de su
Los antimetabolitos son compuestos análogos receptor para inducir la apoptosis, ejemplo: la sura-
estructurales de los metabolitos normales o de las mina.
Reversores de la resistencia (quimiosensibiliza-
coenzimas e interfieren el metabolismo mediante la
dores). Logran interrumpir los mecanismos de re-
sustitución del sustrato normal. Otros, como los
sistencia desarrollados por las células malignas, sin
agentes alquilantes, la actinomicina, la bleomicina,
interferir la acción intracelular del citotóxico. Con
la mitomicina, los antibióticos y los compuestos del
estas propiedades ya han sido usados el verapamilo,
platino, actúan inhibiendo la síntesis de ácidos la ciclosporina, la quinidina y la quinina, pero aún
nucleicos y ejercen una acción directa sobre ellos o se buscan productos más eficaces. Previenen el de-
interrumpen el proceso de replicación, transcripción sarrollo de la resistencia multidroga (MDR, multi-
y traslación. Finalmente, ciertos fármacos tienen la drug resistant).
división celular en otras formas, como los alcaloides No se deben dejar de mencionar las novedosas
de la vinca. terapias anticancerosas basadas específicamente en
En el segundo grupo (fármacos que modulan la la biología molecular del cáncer, que abarcarían el
respuesta biológica) las acciones son disímiles pero campo de la Farmacología Molecular. Están des-
dirigidas al mismo fin. Se trata de sustancias que critas: la terapéutica antigénica, con el uso de la
actúan de manera directa o indirecta sobre las célu- inhibición antisentido, y el de oligonucleótidos
las tumorales (agentes de diferenciación) y produ- productores de triplicados y ribosinas; la terapia

472
dirigida a productos génicos: inhibidores de los fac- lo individual del enfermo), producto del estado fun-
tores de crecimiento, los bloqueadores de los recep- cional de los órganos que intervienen en la farmaco-
tores de factores de crecimiento, los anticuerpos cinética de la droga, o en el transcurso del tratamiento
monoclonales (ya mencionados) y la terapéutica como consecuencia de los efectos adversos que es-
genética: inmunopotenciación (uso del FNT), resti- tos fármacos producen en distintos niveles (ejem-
tución de genes, quimioterapia génica y profárma- plo: hematopoyéticos, renales, hepáticos, etc.), por
cos inactivos. lo que el monitoreo de la función de éstos debe ser
Estas modalidades terapéuticas aún enfrentan una una práctica habitual en el seguimiento de dichos
rigurosa evaluación clínica, pero no dejan de ser el enfermos.
futuro de la oncología; por tanto, serán sometidas a Son recomendados los siguientes regímenes de
ensayos clínicos que cumplan con las consideracio- tratamiento:
nes bioéticas pertinentes y enfrenten los dilemas éti- • Uso de combinaciones entre fármacos que no
cos de este tipo de investigación en salud. tienen mecanismos de resistencia comunes ni
similares reacciones adversas.
Farmacocinética • Empleo de dosis lo más similares a sus dosis
Comprende todos los procesos por los que atravie- individuales máximas.
san los medicamentos en el organismo hasta su eli- • Uso con una frecuencia de administración ade-
minación y por supuesto, cada fármaco exhibe sus cuada para anular la proliferación tumoral.
particularidades. Factores como la vía de adminis- Tiene vital importancia que la destrucción
tración, biodisponibilidad, metabolismo y elimina- neoplásica sea máxima en cada ciclo, para lo
ción, son importantes en la terapéutica del cáncer al cual se requiere utilizar la mayor dosis posible
tratarse de medicamentos con un margen terapéuti- y repetirla con la frecuencia con que sea tole-
co estrecho y elevada toxicidad. rada.
La vía de administración oral no es confiable por-
que no garantiza niveles estables del medicamento Factores que intervienen
en la sangre (notables variaciones de la absorción en la respuesta al tratamiento
que afectan la biodisponibilidad). Es preferida la vía Para evaluar la respuesta a la terapéutica resulta in-
de administración EV, porque además de lograr cuestionable conocer su finalidad. Una vez diagnos-
niveles óptimos del medicamento reduce el incum- ticada la enfermedad la intención del tratamiento es
plimiento del tratamiento. La vía subcutánea pro- curativa y tratar de eliminar el 100 % de las células
porciona valores constantes de fármacos específicos cancerosas para garantizar sobrevida y calidad de
en el plasma y la administración local o regional con vida; pero si es paliativa, entonces los elementos más
cateterismo ha tenido sus éxitos según las diferentes importantes son manejar el dolor o controlar las com-
localizaciones; ejemplo: la vía intraperitoneal en la plicaciones.
carcinosis peritoneal. Está demostrado que las mejores respuestas se
La dosis es el otro elemento que se debe comen- obtienen cuando son valorados de forma adecuada
tar. Su cálculo correcto es imprescindible y lo más los tres elementos básicos del problema: el huésped
aceptado es basarse en la superficie corporal del en- (enfermo), el tumor, y la terapia antineoplásica.
fermo. De forma general, cada droga trae descrita
Huésped
su dosis para tratamiento único (monoterapia), pero
cuando se emplean combinados es necesario en oca- (1)
siones reducir las dosis de todos o algunos de ellos;
de ahí la importancia de utilizar tratamientos que
sigan un protocolo y nunca improvisados para cual-
quier localización.
En oportunidades es necesario realizar ajustes en
las dosis desde el inicio del tratamiento (usando (3) (2)
nomogramas según los niveles de modificación de
los indicadores evaluados o fórmulas para el cálcu- Terapia antineoplásica Tumor

473
En el enfermo habrá que tener en cuenta la edad, Las células nuevas pueden seguir el camino o ini-
el sexo, el estado general (índice de Karnofky), es- ciar un nuevo ciclo, salir de la reproducción o entrar
tado nutricional, la presencia de otras enfermedades en un estado no reaccional (GO) del cual pudieran
metabólicas o no, la posible afectación de los órga- salir con un estímulo adecuado. Después, las drogas
nos según la farmacocinética de los medicamentos antitumorales causarán daño letal o bloquearán la
(riñón, hígado, etc.) y los estados inmunológico y progresión del ciclo celular, pero esto está muy re-
psíquico (voluntad del enfermo). lacionado con la concentración del producto. La des-
En relación con el tumor, será necesario conocer trucción celular con citotóxicos sigue una cinética
su localización y características biológicas y hacer de primer orden, por eso el tratamiento es cíclico y
un acertado diagnóstico de naturaleza (histológico) lleva un cálculo adecuado de dosis.
y de extensión (carga de tumor y grado de afección). Los anticancerosos de acción inespecífica tienen
En relación con la terapéutica antineoplásica sólo mayor efecto sobre las células que se encuentran en
se hará referencia al tratamiento farmacológico. Una el ciclo que en las que no lo están, pero el uso com-
buena selección de fármacos anticancerosos depende- binado de agentes específicos con los no específi-
cos ha permitido, además del sinergismo, reducir la
rá del dominio que se tenga sobre su farmacodinamia,
resistencia y la toxicidad de esta terapéutica, y ha-
la farmacocinética, el perfil de efectos indeseables
cerla más eficiente.
y la posibilidad del desarrollo de resistencia.
El conocimiento de las características del ciclo Resistencia farmacológica
celular ha proporcionado a esta terapéutica la posi-
Como es conocido, las células cancerosas son capa-
bilidad de hacer una selección más específica y a la
ces de desarrollar mecanismos con los cuales impi-
vez combinar drogas con las que se logra sinergismo
den su muerte para garantizar la supervivencia; en
y por ende mejores resultados.
la actualidad se sabe que la mayor parte de la resis-
El ciclo de reproducción celular se basa en la ne-
tencia depende del índice alto de mutaciones espon-
cesidad de duplicar el material genético, para lo cual
táneas de dichas células, que las lleva a acrecentar
es preciso la replicación del ADN. Todo este ci-
subpoblaciones heterogéneas.
clo, hasta completar la división, consta de 4 fases
Los mecanismos generales de resistencia descri-
que son: tos son los siguientes:
• Disminución de la penetración de fármacos por
• Presíntesis (G1), fase en la que las células
transporte activo.
acopian todo el material necesario para garan-
• Aumento de la producción de sustancias
tizar la fase siguiente. Período desarrollado
nucleofílicas (como glutatión, que compite con
entre M y S.
el ADN).
• Síntesis (S), etapa en la que con todo el mate-
• Aumento de la actividad de enzimas reparado-
rial disponible y preparado previamente las cé-
ras de ADN.
lulas se dedican a sintetizar el ADN.
• Postsintética (G2), fase de intervalo premitótico.
Sin embargo, uno de los mecanismos de resisten-
• Mitosis (M), que cuenta a su vez con profase,
cia más importantes por lo dañino a la respuesta al
metafase, anafase y telofase.
tratamiento es el que aparece ante múltiples fármacos
• GO, fase de no proliferación. Período entre M y S. (MDR), mediado por una glicoproteína de la mem-
brana celular (la glicoproteína p), que funciona como
una bomba de salida dependiente de energía que eli-
S mina activamente de las células diversos fármacos
Síntesis de ADN G2 M citotóxicos.

Reacciones adversas a las drogas


G1
antitumorales
GO Se trata, por supuesto, de todas las manifestacio-
nes indeseables que aparecen con el uso de estos

474
medicamentos y que se presentan dentro del mar- cuadro 60.1 se hace referencia a las reacciones
gen terapéutico. Para su mejor comprensión pue- adversas específicas producidas por las drogas más
den ser divididas en generales y específicas. En el usadas.

CUADRO 60.1
REACCIONES ADVERSAS ESPECÍFICAS DE LOS ANTINEOPLÁSICOS
(TOMADO DE GUÍA DE ATENCIÓN PRIMARIA DE SALUD EN CUBA)

Fármacos Toxicidad aguda Toxicidad crónica

Agentes alquilantes
Busulfán Náuseas y vómitos, diarrea. Depresión medular; fibrosis pulmonar; hiperpig-
mentación cutánea; alopecia, ginecomastia, este-
rilidad; exantema, azoospermia.
Ciclofosfamida Náuseas y vómitos; anafilaxia. Depresión medular, alopecia, cistitis hemorrági-
ca, esterilidad (puede ser temporal), fibrosis pul-
monar, hiperpigmentación, neoplasias secundarias,
secreción inadecuada de hormona antidiurética.
Clorambucil Depresión medular, neurotoxicidad; azoospermia.
Melfalán Náuseas leves. Depresión medular (sobre todo plaquetas), posi-
ble fibrosis pulmonar.

Tiotepa Náuseas y vómitos; dolor local. Depresión medular, alopecia.


Mostaza nitrogenada Fiebre, erupción cutánea, mareos, diarreas. Amenorrea, estomatitis; depresión medular,
hepatotoxicidad, nefrotoxicidad.
Antimetabolitos
Citarabina Náuseas y vómitos, diarreas; síndrome Depresión medular, megaloblastosis, úlceras
hipertérmico y erupción después de la bucales, hepatotoxicidad.
administración EV o SC.
Fluoracilo Náuseas y vómitos, diarrea. Depresión medular, ulceración bucal y gastroin-
testinal; estomatitis, déficits neurológicos, gene-
ralmente cerebelosos; hiperpigmentación; alope-
cia; dermatitis.
Mercaptopurina Náuseas y vómitos. Depresión medular: hepatotoxicidad; úlceras
bucales.
Metotrexate Náuseas y vómitos, diarrea; estomatitis. Ulceraciones bucales y gastrointestinales; depre-
sión medular, hepatotoxicidad, incluso con cirro-
sis; nefrotoxicidad; infiltrados pulmonares; osteo-
porosis; alteraciones del SNC tras administración
intratecal; anemia megaloblástica.
Tioguanina Náuseas y vómitos ocasionales. Depresión medular; posible hepatotoxicidad.

Productos naturales y derivados semisintéticos

Asparraginasa Náuseas; fiebre; hipersensibilidad, posible Depresión del SNC; hiperexcitabilidad; pancrea-
anafilaxia; dolor abdominal, defectos titis; hiperglicemia que puede conducir al coma.
de la coagulación; nefrotoxicidad;
hepatotoxicidad.
Bleomicina Náuseas y vómitos; fiebre; anafilaxia. Neumonitis y fibrosis pulmonar; reacciones cutá-
neas; estomatitis; alopecia.
Daunorrubicina Náuseas y vómitos, diarrea; orina roja Depresión medular y cardiotoxicidad (que pue-
(no hematúrica); lesión local intensa y ne- den ser irreversibles); alopecia, estomatitis;

475
crosis si hay extravasación; cambios transi- anorexia; diarrea; fiebre y escalofríos.
torios del ECG; reacciones anafilactoides.
Doxorrubicina Náuseas y vómitos; orina roja (no hematú- Depresión medular y cardiotoxicidad (que pue-
rica); grave lesión hística local por infiltra- den ser irreversibles); alopecia, estomatitis; alte-
ción; diarrea; cambios transitorios en el raciones hepáticas, toxicidad cutánea, nefrotoxi-
ECG. cidad.
Actinomicina D Náuseas y vómitos; si hay extravasación, Depresión medular (acumulativa); estomatitis;
reacción local; fiebre; diarrea. toxicidad renal; alopecia; hepatotoxicidad.
Vinblastina, sulfato Náuseas y vómitos; si se extravasa, reac- Depresión medular; alopecia, estomatitis; pérdi-
ción local y flebitis; íleo paralítico. da de reflejos tendinosos profundos; dolor
mandibular; íleo paralítico; neuropatía; mialgias.
Vincristina, sulfato Si se extravasa, reacción local. Neuropatía periférica; dolor neurítico; alopecia;
depresión medular (leucopenia); constipación
que da lugar a íleo paralítico; diabetes insípida;
secreción inadecuada de ADH.
Otros productos sintéticos
Dacarbacina Náuseas y vómitos graves. Depresión medular; síndrome semejante a la gri-
pe; alopecia, alteración renal; elevación transito-
ria de las enzimas hepáticas.
Hidroxiurea Náusea y vómitos; fiebre. Leucopenia y trombocitopenia tardías (4-6 sema-
nas) que pueden ser duraderas; estomatitis;
nefropatía.
Procarbacina Náuseas y vómitos; depresión del SNC Depresión medular; estomatitis; dermatitis; neu-
ropatía periférica.
Cisplatino Náuseas y vómitos; diarrea; hipomagne- Depresión medular; insuficiencia renal;
semia. ototoxicidad.
Hormonas
Estrógenos (dietilestilbes- Náuseas y vómitos; calambres. Retención de líquidos; hipercalcemia;
trol, etinilestradiol) feminización; hemorragia uterina; aumento de la
incidencia de accidentes vasculares.
Antiestrógenos Náuseas, vómitos; sofocos. Hemorragia y flujo vaginal; exantema; hipercal-
(tamoxifeno) cemia; aumento del dolor óseo y tumoral.
Progestágenos Absceso local; dolor; náuseas (raras). Retención de líquidos; hipercalcemia; ictericia
(megestrol, acetato de colostática.
medroxiprogesterona,
hidroxiprogesterona)
Andrógenos Virilización; retención de líquidos; hipercalce-
(testosterona, drostano- mia; ictericia colestásica; hipertrofia dolorosa del
lona) clítoris; hirsutismo.
Aminoglutetimida Erupción cutánea. Vértigo; insuficiencia suprarrenal.
(inhibidor de la síntesis
de esteroides suprarrenales)
Inmunosupresores
Azatioprina Dermatitis; fiebre; náuseas y vómitos. Depresión medular; alopecia; hepatotoxicidad.
Ciclosporina Reacciones de hipersensibilidad; pareste- Nefrotoxicidad; hirsutismo; hepatotoxicidad;
sias; hiperestesias; náuseas; dolor epigás- neurotoxicidad (temblor, retención urinaria,
trico; astenia; hipertensión. cuadriparesia, ataxia, etc.); gingivitis; hidroade-
nitis.

476
Las reacciones adversas generales comprenden aumenta con la edad y con la presencia de in-
efectos comunes a la mayoría de los antitumorales, suficiencias hepática y renal.
las que se derivan de la falta de selectividad de su • Infecciones. Son secundarias a la neutropenia e
acción y a su avidez por las células de crecimiento inmunosupresión que causan los citostáticos.
rápido; se dañan con frecuencia la médula ósea, el Casi siempre cursan con cuadros solapados que
epitelio gastrointestinal, la piel y raíces pilosas, las implican un retraso en su diagnóstico.
gónadas y el embrión. Están descritas las reaccio- • Trastornos gastrointestinales. Son habituales la
nes indeseables agudas (aparecen en horas o días anorexia, las naúseas y los vómitos, inclusive
después de la administración de los medicamentos) a las pocas horas de la administración.
y las crónicas (se ponen de manifiesto a la semana y • Alopecia. Es un efecto que daña mucho la esfera
meses posteriores al uso de los fármacos). psíquica en los enfermos. Depende de la dosis
Son efectos adversos generales comunes los si- y puede llegar a ser total, pero reversible. Ocurre
guientes: también caída del vello axilar, pubiano, de la
barba, cejas y párpados, pero más raramente.
• Hipoplasia y aplasia medular. Se trata de un • Fiebre.
efecto que depende de la dosis, generalmente • Hepatotoxicidad.
reversible al suprimir el tratamiento y con re- • Otros: Hiperuricemia, hipercaliemia, teratogé-
cuperación gradual. El riesgo de que aparezca nesis, trastornos de la coagulación etc.

477
BIBLIOGRAFÍA

1. ADAMS, R. J. et al.: “Prevention of a first stroke 11. ATTAL M. et al.: “A prospective randomized trial
by transfusions in children with sickle cell ane- of autologous bone marrow transplantation and
mia and abnormal results on transcranial doppler chemotherapy in multiple myeloma”, N. Eng. J.
ultrasonography”, N. Eng. J. Med., 1998; 339; Med.,1996; 335; 91-97.
5-11. 12. ATTAL, M. AND J. L.H AROUSSEAU: “Standard
2. _________: “The use of transcranial ultrasono- therapy versus autologous transplantation in
graphy to predict stroke in sickle cell disease”, multiple myeloma”, Hematol. Oncol. Clin. Med.
N. Eng. J. Med., 1992; 326; 605-610. N. Am., 1997 (11) 133-146.
3. AEXANIAN, R. AND DIMO POULOS M.: “The treat- 13. AUCOUTURIER, P. et al.: “Brief report: Heavy-chain
ment of multiple myeloma”, N. Eng. J. Med., deposition disease”, N. Eng. J. Med., 1993; 329;
1994; 334; 484-489. 1389-1393.
4. AGUIRRE ERRASTI, C. et al.: “Amiloidosis”, Medi- 14. B AWER , K. A.: “Hypercoagulability. A new
cine, 1997; 7 (6) 2453-2460. cofactor in the protein C. Anticoagulant path-
5. AISEMBERG, AC.: “MOPP, ABVD or both to treat-
way”, N. Eng J. Med., 1994; 330; 566-567.
ment of Hodgkin‘s disease”, N.Eng.J. Med.,
15. BACHIR, D.: “Management of adults with sickle
correspondence, 1993; 328; 1 045.
cell anemia”, Pathol. Biol., 1999; 47; 39-45.
6. ALMAGRO, D.: “Hemostasia. Componentes del
16. BARRETT, J. et al.: “Bone marrow transplants from
mecanismo hemostático”, Pediatría, 1997; 3;
HLA-identical siblings as compared with che-
34-51.
motherapy for children with acute lymphoblastic
7. ALLAND, D.; A. H. DIN et al.: “Laparoscopic cho-
leukemia in a second remission”, N. Eng. J. Med.,
lecystectomy and appendectomy with sickle cell
disease”, Surg. Laparosc. Endosc., 1998; 8; 1994; 331; 1253-1258.
380-383. 17. BARLOGIE B.: “Toward a cure for multiple myelo-
8. ANDERSEN, J. W. AND R. V. SMALLEY: “Interferon ma”, N. Eng. J. Med., 1991; 325; 1304-1306.
alfa plus chemotherapy for non Hodgkin‘s 18. BENNET. J. M. et al.: “The french-american-
lymphoma: five year follow-up.”, N. Eng. J. bristish (FAB) cooperative group proposals for
Med., correspondence, 1993; 329; 1821-1822. the classification of chronic (Mature) B and T
9. ANSELMO, A. P.; E. CAVALIERI; R. M. ENRICI; V. lymphoid leukemias”, J. Clin. Pathol., 1989; 42;
DONATO; E. PESCARMONA; C. BIAGINI et al.: “Com- 567-584.
bined modality therapy in advanced Hodgkin‘s 19. BEISTHER, E.: “Glucose-6-phosphate dehydroge-
disease: a report on 218 patients with a median nase deficiency”, N. Eng. J. Med., 1991; 324;
follow-up of eight years”, Haematologica, 1998; 169-174.
83; 645-650. 20. BERNELL, P. et al.: “Recombinant human granu-
10. ASTER, J. AND V. KUMAR: “Leucocitos, ganglios locyte-macrophage colony stimulating factor in
linfáticos, bazo y timo”, en R. Cotran, V. Kumar, combination with standard induction chemother-
T. Collins, S. Robbins, Patología estructural y fun- apy in acute myeloid leukemia evolving from
cional, 6ta. ed., España, S.A.U., Mc Graw-Hill- myelodysplastic syndromes: a pilot study”, Leu-
Interamericana, 2000; 681-706. kemia, 1994 (8) 1631-1939.

478
21. BESINGER, W. I. et al.: “Allogenic stem cell trans- 35. CANTON, M. M.: “Laboratory diagnostic profile”,
plantation for multiple myeloma”, Clin. Med. N. Dic. Lab. Medica, 1991; 8; 15-22
Am., 1997; 11; 147-157. 36. CANELLOS, G. P., J R. ANDERSON, K. J. PROPERT,
22. BERGSTROM, S. K. et al.: “Arsenic trioxide in the N. NISSEN, M. R. COOPER, E. S. HENDERSON et
treatment of a patient with multiple recurrent, al.: “Chemotherapy of advanced Hodgkin‘s di-
ATRA resistant promyelocytic leukemia: a case sease with MOPP, ABVD, or MOPP alternating
report”, J. Pediatr. Hematol. Oncol., 1998; 20; with ABVD”, N. Eng, J. Med.,1992; 327; 1478-
545-547. 1484.
23. BERNINI, J. C. et al.: “Beneficial effect of intra- 37. CABANILLAS, F. AND E. A. GEHAN: “Treatment of
venous dexamethasone in children with mild to micosis fungoides”, N. Eng. J. Med., 1990; 322;
moderately severe acute chest syndrome com- 1470-1471.
plicating sickle cell disease”, Blood, 1998; 92; 38. CLINE, M. J.: “The molecular basis of leukemia”,
3082-3089. N. Eng. J. Med., 1994; 330; 328-336.
24. BIONDI, A. AND G. MASERA: “Molecular pathoge- 39. CORTES, J. et al.: “Suppression of cytogenetic
nesis of childhood acute lymphoblastic leuke- clonal evolution with interferon alfa therapy in
mia”, Haematologica, 1998; 83; 651-659. patients with Philadelphia cromosome-positive
25. B ISHOP, J. F.: “Intensified therapy for acute chronic myelogenous leukemia”, J. Clin. Oncol.,
myeloid leukemia”, N. Eng. J. Med., 1994; 331; 1998; 16; 3279-3 285.
941-942.
40. COTTMAN, C. A. AND S. DAHLBERG: “Treatment
26. BLADE, J.: “Mieloma múltiple y otras gammapa-
related leukemia”, N. Eng. J. Med., 1990; 332;
tías monoclonales”, Medicine, 1997;7 (61):
52-53
2838-2842.
41. COHEN, A. R.: “Sickle cell disease. New treat-
27. BOCCADORO, M. AND A. PILERI: “Diagnosis, prog-
ment New questions”, N. Eng. J. Med., 1998;
nosis and standard treatment of multiple myelo-
339; 42-44.
ma”, Hematol. Oncol. Clin. Med. N. Am., 1997;
42. CURRAN, T. J. et al.: “Laparoscopy improves
11; 111-131.
28. BOW, E. J.: “Acute myeloid leukemia in Manito- outcomes for pediatric splenectomy”, J. Pediat.
ba”, Cáncer, 1994; 74; 52-60. Surg., 1998; 33; 1498-1500.
29. BRADEN , D. S. et al.: “Cardiovascular function 43. CUNEO, A. et al.: “Towards a clinically relevant
during rest and exercise in patients with sickle cytogenetic classification of chronic lymphocytic
cell anemia and coexisting alpha thalassemia- leukemia and related disorders”, Haematologica,
2”, Amer. J. Hematol., 1996; 52; 96-102. 1998; 83; 577-579.
30. BUCHNER, T. et al.: “Recombinant human granu- 44. CHARACHE, S.: “Hidroxyurea as treatment for
locyte-macrophage colony-stimulating factor sickle cell anemia”, Hemat. Oncol. Clin. Med.
after chemotherapy in patients with acute N. Am., 1991; 5; 571-583.
myeloid leukemia at higher age of after relapse”, 45. _________: “Effects on hemoglobin F produc-
Blood, 1991; 78; 1190-1197. tion in patients with sickle cell anemia”, Blood,
31. _________: “The role of hematopoietic growth 1992; 79; 2555-2565.
factors in the treatment of cancer and leukemias”, 46. CHARACHE, S. et al.: “Effect of hidroxyurea on
Acta Haematol, 1994; 25; 71-83. the frequency of painful crisis in sickle cell ane-
32. CACKOVIC, M. et al.: “Leg ulceration in the sickle mia”, N. Eng. J. Med., 1995; 332; 1317-1322.
cell patient”, J. Am. Coll Surg., 1998; 187; 307- 47. CHESON, B.D. et al.: “Treatment of hairy cell leu-
309. kemia with 2- chlorodeoxyadenosine via de
33. CAVÉ, M. et al.: “Clinical significance of minimal group C protocol mechanisms of the National
residual disease in childhood acute lympho- Cancer Institute. A report of 979 patiens”, J. Clin.
blastic leukemia”, N. Eng. J. Med., 1998; 339; Oncol., 1998; 16; 3007-3 015.
591-598. 48. DANN, E. J. et al.: “Brief report: Tumor lysis
34. CASTAGNOLA, C. et al.: “Management of acute syndrome following treatment with 2- chloro-
promyelocytic leukemia relapse in the ATRA deoxyadenosine for refractory chronic lympho-
era”, Haematologica, 1998 (83): 714-717. cytic leukemia”, N. Eng. J. Med., 1993; 329; 331.

479
49. DE VITA, V. T. AND S . M. HUBBARD: “Hodgkin‘s 63. FISHER, R. L., E .R. GAYNOR, S. DAHLBERG, M.
disease”, N. Eng. J. Med., 1993; 328; 560-565. M. OKEN, T. M. GROGAN, E. M. MIZE et al.:
50. DHODAPKAR, M. V. et al.: “Biology and therapy “Hodgkin‘s lymphoma”, N. Eng. J. Med., 1993;
of immunoglobulin deposition diseases”, Hema- 328; 1002-1006.
tol. Oncol., 1997; 11; 89-110 64. FLECKNOE-BROWN S.: “Bone marrow transplan-
51. DIEHL, V. AND H. TESCH: “Hodgkin‘s disease. tation versus chemotherapy in non-Hodgkin‘s
Environmental on genetic”, N. Eng. J. Med., lymphoma”, N. Eng. J. Med., 1995;333;727-728.
1995; 332; 461-462. 65. FRICKHOFEN, N. et al.: “Treatment of aplastic ane-
52. DIEBOLD, J. et al.: “Bone marrow pathology in mia with antilymphocyte globulin and methyl-
relapsing polichondritis high frecuency of prednisolone with or without cyclosporine”, N.
myelodysplastic syndromes”, Brit. J. Haematol., Eng. J. Med., 1991; 324; 1297-1304.
1995; 89; 820-830. 66. GARCIA-CONDE, J. BRU, M. J. TEROL CASTERÁ, M.
53. DOROSHOW, J. H.: “Doxorubicin-induced cardiac TORMO DÍAZ E I. BENET MONFORTE: “Linfomas
toxicity”, N. Eng. J. Med., 1991; 324; 843-845. no Hodgkin”, Medicine, 1997; 7(61), 857-861.
54. DULTS, A. J. et al.: “Elevated IL-8 levels during 67. GERMING, U.: “Problems in the classification of
sickle cell crisis”, Fur. J. Haematol., 1998; 61; CMML-dysplastic versus proliferative type”,
302-305. Leuk. Res., 1998; 22; 871-878.
55. DUBOIS, C. et al.: “Modulation of IL-18, IL-1B 68. GLUCKMAN, E.: “The therapeutic potential of fe-
and G-CSF secretion by all-trans-retinoic-acid tal and neonatal hematopoietic stem cells”, N.
in acute promyelocytic leukemia”, Leukemia, Eng. J. Med., 1996; 335; 1839-1840.
1994; 8; 1750-1757. 69. G OLDBERG , M. A. et al.: “Hidroxyurea and
56. DUFFY, T. P.: “The many pitfalls in the diagnosis erythropoietin therapy in sickle cell anemia”,
of myeloma”, N. Eng. J. Med., 1992; 326; 394- Seminars in oncology, 1992; 19; 74-81.
396. 70. GORDON, LL., D. HARRINGTON, J. ANDERSEN, J.
57. DUSENBERY, K. E. et al.: “Randomized compar- COLGAN, J. GLICK, R. NEIMAN et al.: “Compar-
ison of cyclophosphamide-total body irradiation ison of a second-generation combination chemo-
therapeutic regimen (m-Bacod) with a standard
versus busulfan-cyclophosphamide conditioning
regimen (CHOP) for advanced diffuse non
in autologous bone marrow transplantation for
Hodgkin‘lymphoma”, N. Eng. J. Med., 1992;
acute myeloid leukemia”, Jut J. Radiation
327; 1342-1349.
Oncology Biol. Phys., 1995; 31; 119-128.
71. GÓMEZ ALMAGUER, D. et al.: “Intermitent inter-
58. ENRICI, R. M., A. P. ANSELMO, V. JACARI, M. F.
feron alfa in the treatment of hairy cell leuke-
OSTI, M. SANTORO, V. TOMOBOLINI et al.: “The
mia”, Rev. Invest. Clin., 1998; 56; 331-334.
risk of the non-Hodgkin‘lymphoma after
72. GRIFFIN, T. C. et al.: “High dose intravenous
Hodgkin‘s disease with special reference to
methylprednisolone therapy for pain in children
splenic treatment”, Haematologica, 1998; 83; and adolescents with sickle cell disease”, N. Eng.
636-644. J. Med., 1994; 330; 733-737.
59. EPSTEIN, J.: “Myeloma stem cell phenotype. 73. GUINAN, E.C.: “Clinical aspects of aplastic ane-
Implications for treatment”, Clin. Med. N. Am., mia”, Hematol. Oncol. Clin. N. Am., 1997; 11;
1997; 11; 43-49. 1025-1044.
60. ESTRADA, M.: “Bases moleculares de las eritroen- 74. HAMMER SCHMIDT, D. E. AND M. T. WILD CREA:
zimopatías”, Rev. Cub. Hematol. Inmunol. “Anthracycline based therapy of the novo acute
Hemote., 1992, 8, 76-86. myeloid leukemia in adults: failure of first cycle
61. EVAN, T.: “Development biology of haemopoi- cytoreduction to predict second cycle outcome”,
esis”, Hematol. Oncol. Clin. N. Am., 1997; 11; Am. J. Hematol., 1994; 47; 172-177.
1115-1 148 75. H ANCOCK , S. L., R .S. C OX AND I. R. M.C.
62. FEINMAN, R. et al.: “Citogenetics and molecular DOUGALL: ”Thyroid diseases after treatment of
genetics in multiple myeloma”, Hematol. Oncol. Hodkin‘s disease”, N. Eng. J. Med., 1991; 325;
Clin. Med. N. Am., 1997; 11; 1-25. 599-605.

480
76. HARRIS, N. L., E. S. JAFFE, H. STEIN, P. M. BANKS, 90. KALDOR, J. M., N. E. DAY, E. A. CLARICE, F. E.
J. KC. CHAN, M. L. CLEARY et al.: “A revised LEEUWEN, M. HENRY-AMAR, M. V. FLORENTINO et
european-american classification of lymphoid al.: “Leukemia following Hodgkin‘disease”, N.
neoplasms: A proposal from the international Eng. J. Med., 1990; 322; 7-13.
lymphoma study group”, Blood, 1994; 84; 1 361- 91. KAMEL, O. W. E., M. VAN DE RYN, L. M. WEISS,
1392. G. J. DELZOPPO, P. K. HENCH., B. A. ROBBINS et
77. HEHLMANN, R. et al.: “Randomized comparison al.: “Brief report: Reversible lymphomas asso-
of interferon alfa with busulfan and hidroxyurea ciated with Epstein-Barr virus occuring during
in chronic mielogenous leukemia”, Blood, 1994; methotrexate therapy for rheumatoid asthritis and
84; 4064-4077. dermatomyositis”, N. Eng. J. Med., 1993; 328;
78. HEANEY, M. L. AND D. W.GOLDE: “Myelodispla- 1317-1321.
sia”, N. Eng. J. Med., 1999; 340; 1649-1660. 92. KAMINSKI, M. S., K. R. ZASADNY, I. R. FRANCIS,
79. HIGUCHI, T.: “Coagulation patterns of CID in A. W. MILIK, C. W. ROSS, S. D. MOON et al.:
acute promyelocitic leukemia”, Hematol.Oncol., “Radioimmunotherapy of B-cell lymphoma with
1997; 15; 209-217. (131 I) anti-B1 (anti-cd 20) antibody”, N. Eng.
80. HILLMEN, P. et al.: “Natural history of paroxysmal J. Med., 1993; 329; 459-465.
nocturnal hemoglobinuria”, N. Eng. J. Med., 93. KANTARJIAN, H. M. et al.: “Prolonged survival in
1995; 333; 1253-1258. chronic myelogenous leukemia after cytogenetic
81. HOYER, L.W.: “Hemophilia”, A. N. Eng. J. Med., response to interferon-alfa-therapy”, Ann Inter.
1994; 330; 38-47. Med., 1995; 122; 254-261.
82. HÖLLSBERG, P. AND D. A. HAFTER: “Pathogenesis 94. KEUNG, Y. K. et al.: “Acute myeloid leukemia
of diseases induced by human lymphothropic vi- subtypes and response to treatment among ethnic
rus type I infection”, N. Eng. J. Med., 1993; minorities in a large US urban hospital”, Acta
328; 1173-1182. Haematol., 1994; 92; 18-22.
83. HUMMEL, M., K. ZIEMANN, H. LAMMERT, S. PILERI, 95. KIPPS, T. J.: “Chronic lymphocytic leukemia”,
E. SABATTINI AND H. N. STEIN: “Hodgkin‘s dis-
Curr. Opin. Hematol., 1998; 5; 244-253.
ease with monoclonal and polyclonal populations
96. KLUIN, P. M.: “Bcl-6 in lymphoma-sorting out
of Reed-Stemberg cells”, N. Eng. J. Med., 1995;
of waste basket”, N. Eng. J. Med., 1994; 331;
333; 901-906.
116-118.
84. ITALIAN COOPERATIVE STUDY GROUP ON CHRONIC
97. KUMAR, L.: “Leukemia: management of relapse
MYELOID LEUKEMIA : “Interferon alfa-2a as
after allogenic bone marrow transplantation”, J.
compared with conventional chemotherapy for
Clin. Oncol., 1994; 12; 1710-1717.
the treatment of chronic myeloid leukemia”, N.
Eng. J. Med., 1994; 330; 820-825. 98. KURSTZBERG, J. et al.: “Placental blood as a
85. JEHN, U. et al.: “Long term outcome of hairy cell source of hematopoietic stem cells for transplan-
leukemia treated with 2 chlorodeoxyadenosine”, tation into unrelated recipients”, N. Eng. J. Med.,
Ann Hematol., 1999; 78; 139-144. 1996; 335; 157-166.
86. JOHNA, S. et al.: “Laparoscopic management of 99. KWAK, L. W., M. J. CAMPBELL, D. K. CZERWINSKI,
gallbladder disease in children and adolescents”, S. HART, R. A. MILLER AND R. LEVY: “Induction
J. Soc. Laparoendos. Surg., 1997; 1; 241-245. immune responses with B-cell lymphoma against
87. JORGE, E. et al.: “Current drug treatment strategies the surfaces inmunoglobulin idiotype expressed
for Dic.”, Drugs., 1998; 55; 766-777. by their tumors”, N. Eng. J. Med., 1992; 327;
88. JULIUSSON, G. et al.: “Prognostic subgroups in 1209-1215.
B-cell chronic lymphocytic leukemia defined by 100. Kyle, R. A. AND M. A. Gertz: “Primary systemic
specific chromosomal abnormalities”, N. Eng. amyloidosis: clinical and laboratory features in
J. Med., 1990; 323; 720-724. 474 cases”, Semin.Hematol., 1995; 32; 45-49.
89.__________: “Response to 2-chlorodeoxyaden- 101. LAPORTE, J. P. et al.: “Cord-blood transplanta-
osine in patients with B-cell chronic lymphocy- tion from an unrelated donor in an adult with
tic leukemia resistant to fludarabine”, N. Eng. J. chronic myelogenous leukemia”, N. Eng. J.
Med., 1992; 327; 1056-1061. Med., 1996; 335; 167-170.

481
102. LO COCO, F. et al.: “Acute promyelocitic leuke- 115. RONDEAU, E. AND M. E. PERALDI: “Escherichia
mia: A curable disease”, Leukemia, 1998; 12; coli and hemolytic-uremic syndrome”, N. Eng.
1866-1880. J. Med., 1996; 335; 660-662.
103. LUSHER, J. M., S. ARKIN, C. F. ABILDGAARD, R. 116. ROSENFELD, S. et al.: “Intensive immunosuppres-
S. SCHWARTZ et al.: “Recombinant factor VIII sion with antithymocyte globulin and ciclospor-
for the treatment of previously untreated patients ine as treatment for severe aplastic anemia”,
with hemophilia A”, N. Eng. J. Med., 1993; 328; Blood, 1995; 85; 3058-3065.
453-459. 117. R OZMAN, C. AND E. MONTSERRAT: “Chronic
104. MAYER, R. J. et al.: “Intensive postremission lymphocytic leukemia”, N. Eng. J. Med., 1995;
chemotherapy in adults with acute myeloid leu- 333;1052-1057.
kemia”, N. Eng. J. Med., 1994; 331; 896-903. 118. SAWYERS, C. L.: “Chronic myeloid leukemia”,
105. MELONI, G. et al.: “Chronic lymphocytic leu-
N. Eng. J. Med., 1999; 340; 1331-1340.
kemia: From palliative therapy to curative
119. SCHWARTZ, R. S.: “Pig-A, the target gene in
intent”, Haematologica, 1998; 83; 660-662.
paroxysmal nocturnal hemoglobinuria”, N. Eng.
106. MEYER, R. M., I. C. QUIRT, J. R. SKILLINGS, M.
J. Med., 1994; 330; 283-284.
C. CRIPPS, V. H. C. BRAMWELL, B. H. WEINERMAN
et al.: “Hodgkin‘s lymphoma”, N. Eng. J. Med., 120. SERJEANT, G. R. et al.: “Risk factors for the
1993; 329; 1770-1776. painful crisis of SS disease: new data”, III cong.
107. MILLER, T. P., S. DAHEBERG, J. R. CASSADY, D. J. Nac. y V Jorn. Lat.Am. Hematol. Inmunol,
ADELSTEIN, C.M. SPIER, T. M. GROGAN et al.: Hemoter., Resumen S-085, Habana, 1997.
“Chemotherapy alone compared with chemo- 121. SILBERSTEIN, L. E. AND L. C. JEFFERIES: “Placental
therapy plus radiotherapy for localized inter- blood banking, a new frontier in transfusion
mediate and high grade non-Hodgkin‘s medicine”, N. Eng. J. Med., 1996; 335; 199-201.
lymphoma”, N. Eng. J. Med., 1998; 339; 21-26. 122. TALLMAN, M. S. et al.: “Treatment of hairy cell
108. MIYATA et al.: “Abnormalities of Pig-A trans- leukemia: Current views”, Semin. Hematol.,
cripts in granulocytes from patients with 1999; 36; 155-167.
paroxysmal nocturnal hemoglobinuria”, N. Eng. 123. TEROL CASTERÁ, M. J., M. TORMO DÍAZ Y J.
J. Med., 1994; 330; 249-255. GARCÍA-CONDE BRU: “Linfomas de identidad es-
109. MORIRY, A.: “Quantifying leukemia”, N. Eng. pecial: Linfomas MALT, Linfomas del Manto,
J. Med., 1998; 339; 627-629. Linfoma de Burkitt, Linfomas T periféricos y
110. NISHIMOTON et al.: “Myeloma biology and NK, Linfoma en los estados de inmunodeficien-
therapy. Present status and future develop- cia”, Medicine, 1997; 7(61): 2818-2825.
ments”, Hematol. Oncol. Clin. Med. N. Am., 124.___________: “Linfoma de Hodgkin”, Medi-
1997; 11; 159-172. cine, 1997; 7(61): 2805-2811.
111. OKPAZA, I.: “The management of crisis in sickle 125. VAN GENDEREN, P. J.: “Acquired von Willebrand
cell disease”, Eur. J. Haematol., 1998; 60; 1-6. disease”, Bailleres Clin. Haematol., 1998; 11;
112. Pui, C. H. AND W. E. Evans: “Drug therapy: 319-330.
acute lymphoblastic leukemia”, N. Eng. J.Med., 126. WHITE, L. A. AND M. CHISHOLIN: “Gastro-intes-
1998; 339; 605-615.
tinal bleeding in acquired Von Willebrand‘s di-
113. RIVERA, G. K. et al.: “Treatment of acute lym-
sease: efficacy of high-dose immuno-globulin
phoblastic leukemia”, N. Eng. J. Med., 1993;
where substitution treatments failed”, Brit. J.
329; 1289-1295.
Haematol., 1993; 84; 332-334.
114. ROSAS URIBE, A., N. STEVENSON Y M. E. RUIZ:
127. Young, N. S. AND A. J. Barret: “The treatment
“Linfomas gastrointestinales: Características clí-
nicas e histológicas en 110 pacientes venezola- of severe acquired aplastic anemia”, Blood,
nos”, Patología, 1997; 35; 249-259. 1995; 85; 3367-3377.

482
Quinta Parte

ENFERMEDADES MICROBIANAS
Y PARASITARIAS
61
MECANISMOS DE DEFENSA CONTRA
LAS INFECCIONES

Los microrganismos que se encuentran a diario en Inmunidad innata


la vida de un individuo sano sólo ocasionalmente El primer contacto entre el huésped y el germen sue-
causan enfermedad perceptible, ya que en condicio- le ser una superficie cutánea o mucosa y la mayor
nes normales existe un perfecto equilibrio en la in- parte de los microrganismos son contrarrestados al
teracción del hombre con los gérmenes presentes principio, en todos los vertebrados, por mecanismos
en la piel, las mucosas o el aire. de defensa innatos que existen en todos los indivi-
Muchos factores específicos del huésped influ- duos y actúan de manera inmediata (de 0 a 4 h); es-
yen sobre la probabilidad de adquirir una enferme- tos mecanismos no son antígeno-específicos y no
dad infecciosa, entre los que figuran: edad (sobre requieren un período prolongado de inducción. Sólo
todo las extremas), historia de inmunización, enfer- cuando un elemento infeccioso sea capaz de violar
medades previas o asociadas, nivel de nutrición, estas líneas tempranas de defensa innata, se necesita
embarazo y factores endocrinos, ambientales o te- de una respuesta inmune con la generación de célu-
rapéuticos. las efectoras antígeno-específicas que actúan sobre
el agente agresor, y células de memoria que evitan
La infección se produce cuando el citado equili-
la infección subsiguiente con el mismo patógeno.
brio se rompe como resultado de un aumento del
La superficie del cuerpo humano es defendida por
número de bacterias, o por la aparición de un agen-
epitelios que constituyen una eficiente barrera natu-
te nuevo frente al cual el huésped carece de inmuni- ral (mecánica, química y microbiológica) contra la
dad específica, o por un defecto de los mecanismos infección (cuadro 61.1).
de defensa de éste ante la infección. Estos mecanis- La barrera mecánica incluye el epitelio cornificado
mos están constituidos por: a) la piel y las mucosas; resistente de la piel; los revestimientos de las estruc-
b) las células fagocíticas, representadas en primer turas tubulares del cuerpo, como los tractos gastro-
lugar por los leucocitos polimorfonucleares neutró- intestinal, respiratorio y genitourinario; el epitelio
filos y los monocitos macrófagos; c) los anticuer- ciliado, así como el flujo de secreción de las glándu-
pos; d) el sistema de complemento, y e) la actividad las mucosas; todo lo cual proporciona una barrera
de los linfocitos T. física entre el medio interno y el mundo exterior que
A pesar de los grandes avances en la prevención contiene gérmenes. De esta manera, las personas que
y tratamiento de las enfermedades infecciosas en tienen secreción defectuosa de mucus o inhibición
del movimiento ciliar, en quienes el microrganismo
las últimas décadas, éstas continúan siendo una causa
puede colonizar la superficie epitelial, desarrollan
importante de morbilidad y mortalidad en todo el
con frecuencia infecciones pulmonares.
mundo; por otra parte, el huésped inmunocompro- La superficie epitelial del cuerpo constituye tam-
metido constituye una proporción significativa de bién una barrera química ante la infección, ya que
la población severamente infectada. Y como los produce sustancias que son microbicidas o inhiben
agentes patógenos difieren bastante en sus tipos de el crecimiento microbiano, tales como el medio am-
vida y mecanismos patogénicos, el huésped requie- biente ácido del estómago y la vejiga urinaria, las
re, de igual forma, un grupo diverso de respuestas enzimas digestivas del tracto gastrointestinal supe-
defensivas. rior, y los péptidos antibacterianos denominados

485
CUADRO 61.1 por activación de la vía alternativa del complemen-
INMUNIDAD INNATA. BARRERA NATURAL to y, en segundo lugar, ellos pueden ser reconocidos
CONTRA LAS INFECCIONES
y englobados directamente por fagocitos macrófa-
A) Mecánica: gos y neutrófilos con receptores comunes para com-
• Epitelio cornificado de la piel. ponentes bacterianos.
• Revestimiento epitelial de estructuras tubulares. El sistema monocítico-macrofágico comprende:
• Flujo longitudinal de aire o líquido a través del epite- células fagocíticas derivadas de los monocitos, quie-
lio.
nes abandonan la circulación para migrar hacia los
• Movimiento de mucus por los cilios, tos y estornudo.
• Mecanismo de “lavado o arrastre” por lágrimas, saliva tejidos y transformarse en macrófagos; se encuen-
y orina. tran en grandes cantidades en el tejido conectivo, en
B) Química: asociación con el tracto gastrointestinal, en el híga-
do (células de Kupffer), pulmón (tanto intersticial
• Ácidos grasos, ácido láctico (piel). como alveolar), riñón (células mesangiales), cere-
• Enzimas: lisozima (saliva, sudor, lágrimas); espermina bro (microglia), el bazo y nódulos linfáticos, que
(semen).
eliminan los gérmenes circulantes.
• Pepsina (intestino).
La segunda familia importante de fagocitos son
• pH bajo (estómago y vejiga urinaria).
los neutrófilos o polimorfonucleares neutrófilos, que
• Péptidos antibacterianos: criptidinas (intestino).
constituyen la población de reserva de la médula ósea
C) Microbiológica: y son producidos y destruidos en grandes cantida-
• Flora normal. Sustancias antimicrobianas. des cada día. En respuesta a la invasión bacteriana y
a través de diversos estímulos específicos, gran par-
“criptidinas”, que son elaborados por células de te de ellos pasan a la sangre periférica y constituyen
Paneth, las que residen en la base de las criptas de las células más abundantes desde el inicio de la in-
las células epiteliales del intestino delgado. Entre fección. Ambas células fagocíticas desempeñan un
las sustancias bactericidas naturales y solubles más papel clave en todas las fases de defensa del huésped.
abundantes y extendidas que existen normalmente En el área de inflamación, los neutrófilos, en res-
en los tejidos y líquidos orgánicos, cabe destacar la li- puesta a estímulos quimiotácticos, se marginan y
sozina, enzima muramidasa que descompone la adhieren entre sí y al endotelio de pequeñas vénulas,
pared mucopeptídica de las bacterias susceptibles y cruzan entre las células endoteliales (diapédesis), se
existe en grandes concentraciones en la saliva, el desplazan y se dirigen hacia el microbio y lo fagoci-
sudor, las lágrimas y los neutrófilos, y en menor can- tan. La fagocitosis es el proceso mediante el cual la
tidad, en el suero humano normal. materia, en partículas o soluble, orgánica o no, que
Sin embargo, la mayor parte del epitelio se asocia constituye un irritante más de los tejidos, es
con una flora bacteriana no patogénica (la microflora englobada por las células fagocíticas del organismo
normal del cuerpo) que compite con microrganis- y eliminada. Estas células poseen un elevado poten-
mos patógenos por nutrientes y hace más difícil la
cial antimicrobiano, pero es necesario que entren en
colonización y ayuda a prevenir la infección. Ade-
contacto con el germen para iniciar la fagocitosis.
más, la flora normal puede producir sustancias
antimicrobianas, tales como las colicinas (proteínas El granulocito desempeña su función fagocítica
antibacterianas elaboradas por E. coli), que evitan en tres fases:
la colonización de otros bacilos.
Por tanto, la primera fase de defensa del huésped 1. Desplazamiento activo (quimiotactismo) hacia
se denomina inmunidad innata, la cual comprende el foco infeccioso.
aquellos mecanismos que están presentes y listos 2. Ingestión de los microrganismos o fagocitosis
para atacar un invasor en cualquier momento. Cuan- propiamente dicha.
do los patógenos logran vencer la barrera epitelial, 3. Provocación de la muerte y degradación bacte-
son enfrentados por dos líneas inmediatas de defen- riana (mecanismo bactericida), precedidas por
sa: en primer lugar, son objeto de ataque humoral el fenómeno de la desgranulación.

486
Cuando un granulocito llega al foco infeccioso y de la flora normal, y en aquellos individuos que no
reconoce una partícula como extraña, la ingiere, pro- tienen neutrófilos, tales infecciones escapan con fre-
ceso en el que intervienen factores extragranuloci- cuencia del sitio local para producir septicemia con
tarios (opsoninas). Una opsonina es una sustancia amenaza para la vida.
sérica que actúa sobre las partículas y las hace más Un microrganismo se vuelve dañino cuando de-
susceptibles a la fagocitosis (el término opsonizar sarrolla mecanismos que evitan el englobamiento por
procede de la palabra griega que significa “preparar los fagocitos o, como la micobacteria, establece
para comer”). modos de crecimiento dentro del fagosoma. Muchas
Por otro lado, el carácter hidrófilo del material bacterias extracelulares suelen revestirse con una fina
capsular de algunas bacterias dificulta la fagocito- capa de polisacáridos que no es reconocida por nin-
sis, y aunque tanto los macrófagos como los neutró- gún receptor fagocítico.
filos son capaces de destruir gérmenes sin ayuda Otro efecto importante de la interacción de los
“atrapándolos” contra una superficie, ellos funcio- fagocitos con los patógenos es la secreción de cito-
nan con mayor eficiencia cuando los patógenos son cinas, que se piensa sea inducida por unión con los
primero opsonizados, o sea “preparados para comer” mismos receptores usados para englobarlos. Las ci-
por componentes derivados de la activación del tocinas son componentes importantes de la primera
complemento (como C3b y C3bi), o por anticuerpos fase de la defensa del huésped e inhiben el creci-
específicos que se fijan a la vez en la superficie de miento de los gérmenes o estimulan su muerte por
la bacteria y a receptores del leucocito y que se com-
los macrófagos y linfocitos citotóxicos.
portan como opsoninas.
Por último, los macrófagos con sus receptores,
Es decir, que los fagocitos engloban las partícu-
así como las citocinas liberadas por ellos, desempe-
las opsonizadas revestidas con anticuerpo o com-
ñan un papel importante en la inducción de la res-
plemento, pero también reconocen e ingieren muchos
puesta inmune y en la variedad de reacción que ésta
gérmenes directamente. Los mismos receptores de
adopta.
complemento por los cuales ellos engloban las par-
Los monocitos-macrófagos realizan tres fun-
tículas opsonizadas, reconocen varios constituyentes
ciones:
o sustancias microbianas, tales como: lipopolisacá-
ridos bacterianos, el lipofosfoglicano de Leishmania,
los filamentos de hemaglutinación de la Berdetella a) Recogida de restos celulares y de tejidos.
y estructuras de levaduras, como cándidas o histo- b) Defensa frente a los microrganismos por su
plasma. También poseen sobre su superficie otros capacidad fagocítica, ya que disponen de siste-
receptores capaces de reconocer componentes co- mas microbicidas similares a los de los neutró-
munes a muchos microrganismos. Los neutrófilos filos.
tienen gránulos que contienen enzimas, proteínas, c) Interacción con los linfocitos, pues procesan o
péptidos y mediadores moleculares pequeños, los elaboran la molécula del antígeno y la presen-
cuales pueden mediar una respuesta antibacteriana tan a éstos, los cuales resultan así informados
del huésped cuando son liberados, así como causar de aquélla.
daño hístico.
Los neutrófilos producen varias sustancias tóxi- Existen defectos o trastornos cualitativos de la fun-
cas y bacteriostáticas, de manera que los microbios ción del neutrófilo que pueden interferir en esta lí-
fagocitados son destruidos con rapidez. La combi- nea de defensa ante la infección, entre los que
nación de metabolitos tóxicos de oxígeno (O2), oxi- figuran: disminución de la adherencia del neutrófilo
do nítrico (NO), proteasas, fosfolipasas y proteínas al endotelio vascular; defectos graves de la qui-
antibacterianas es capaz de eliminar bacterias miotaxis y de la fagocitosis debidos a un déficit de
grampositivas y gramnegativas, hongos, y a veces inmunoglobulinas o del complemento, con la consi-
algunos virus. Los pacientes con defectos inheren- guiente reducción en la capacidad de opsonización;
tes a la maduración de los neutrófilos o sus funcio- trastornos en la opsonización y del propio leucocito
nes antibacterianas, sufren infecciones recurrentes o de la actividad microbicida intracelular por una
a menudo por bacterias y hongos que forman parte reducción en su metabolismo oxidativo; defectos de

487
la actividad bactericida del neutrófilo de patogenia mente algunos invasores bacterianos formando un
mal definida; así como alteraciones cuantitativas de complejo que interrumpe la integridad de la mem-
los neutrófilos, en particular la neutropenia. brana bacteriana y causa así la lisis de las bacterias.
El complemento proporciona otra primera línea Otros componentes del complemento, tales como
de defensa o de respuestas del huésped frente a la C5a, actúan como “quimioatrayentes” de los poli-
infección, que interviene en la inmunidad innata, ya morfonucleares.
que su desarrollo posibilita que el fagocito entre en La respuesta innata produce mediadores inflama-
contacto con el microrganismo. torios cuya función es reclutar nuevas células
El sistema del complemento consiste en un grupo fagocíticas y moléculas efectoras al sitio de la in-
de proteínas séricas que funcionan como una coo- fección, a través de la liberación de citocinas y otros
perativa regulando por sí mismas la cascada de mediadores de la inflamación.
enzimas que se adhieren y, en algunos casos, in- Las citocinas secretadas por los fagocitos en res-
terrumpen la superficie de organismos invasores. puesta a la infección, comprenden un grupo diverso
Este sistema del complemento participa en la defen- de moléculas que tienen efectos locales y sistémicos
importantes. Los fagocitos liberan otras proteínas con
sa frente a la infección de la forma siguiente:
efectos locales potentes, como: prostaglandinas, ra-
dicales de oxígeno, peróxidos, NO, leucotrienos, en
A) Facilita la opsonización.
particular el leucotrieno B4(LTB4) y el factor acti-
B) Ejerce un efecto quimiotáctico sobre los leuco-
vador de plaquetas.
citos.
Algunas de las citocinas liberadas por los
C) Favorece la respuesta inflamatoria local. fagocitos, tales como el FNT-α, IL-1 e IL-6, tienen
D) Desarrolla una acción microbicida directa. un amplio espectro de actividades biológicas (cua-
dro 61.2) que ayudan a coordinar las respuestas del
Algunas de las proteínas adheridas a la superficie organismo, uno de cuyos efectos más importantes
del patógeno (ejemplo: C3b), actúan como opsoni- es el inicio de una conocida como respuesta de fase
nas para la destrucción de éste por los fagocitos. aguda, para lo cual activan hepatocitos con la fina-
Los componentes más tardíos o “terminales” del lidad de sintetizar proteínas de fase aguda y el endo-
complemento (C7, C8 y C9) pueden eliminar directa- telio de la médula ósea para liberar neutrófilos.

CUADRO 61.2
ACTIVIDADES BIOLÓGICAS DE ALGUNAS CITOCINAS RELACIONADAS CON LAS RESPUESTAS
DE DEFENSA DEL HUÉSPED

IL-1/ IL-6/ FNT - α

Hígado Endotelio de la Hipotálamo Grasa, músculo Linfocitos B y T


médula ósea

Proteínas de fase Movilización de Aumento de la tempera- • Movilización de Activación aumentada.


aguda. neutrófilos. tura corporal. proteínas y energía.
• Aumento de la tem-
peratura corporal.

Activación de com- Fagocitosis. • Replicación viral y bacteriana disminuidas.


plemento. • Elaboración aumentada de antígeno.
• Respuesta inmune específica aumentada.

488
Estas proteínas, cuya síntesis es inducida por las La inmunidad celular comprende: linfocitos T, la
citadas citocinas, son denominadas proteínas de fase actividad efectora de los monocitos-macrófagos y
aguda, de las que hay dos de interés particular por- las NK, que combaten primariamente los patógenos
que remedan la acción de anticuerpos: la proteína C intracelulares.
reactiva y la lectina. En la respuesta de fase aguda,
los niveles de algunas proteínas plasmáticas dismi- Inmunidad adquirida
nuyen, mientras que los de otras aumentan de ma- Es una característica exclusiva de los animales ver-
nera notable. tebrados y una respuesta que origina la adquisición
Las proteínas de fase aguda actúan como opsoni- de una “memoria inmunológica”.
nas, mientras la disposición de patógenos opsoniza- Existen dos grandes tipos de inmunidad adquiri-
dos se incrementa por mayor reclutamiento de da, pasiva y activa, cada una de las cuales puede ser,
neutrófilos de la médula ósea. a su vez, natural o espontánea e inducida o artifi-
Estas tres citocinas son, además, pirógenos endó- cial.
genos que actúan sobre el hipotálamo y alteran la
TIPOS DE INMUNIDAD ADQUIRIDA
regulación de la temperatura corporal, y sobre los
músculos y células grasas y modifican la moviliza-
Natural Anticuerpos homólogos:
ción de energía para elevar la temperatura corporal. anticuerpos maternos
A altas temperaturas, la replicación bacteriana y viral por transferencia
disminuye, mientras la elaboración del antígeno está placentaria; inmunoglo-
bulinas calostrales por
aumentada. absorción intestinal.
Un efecto distante final de las citocinas es inducir Pasiva
una leucocitosis; o sea, los neutrófilos circulantes
se incrementan a expensas de la médula ósea, de la Inducida Protección por anticuer-
Inmunidad pos heterólogos o
cual son liberados los leucocitos maduros en gran- adquirida o gammaglobulina
des cantidades, y de sitios en los vasos sanguíneos específica homóloga.
donde ellos están anexados de forma laxa a células Natural Exposición a la infec-
endoteliales. ción clínica o subclí-
Por último, los efectos de las citocinas produci- Activa nica.
das en respuesta a la infección contribuyen a su con-
Inducida Inmunización con vacu-
trol, hasta que la respuesta inmune se comienza a nas: toxoide, organismos
desarrollar. muertos y atenudos: ac-
Aunque la participación del complemento y de la ción de los adyuvantes.
inmunidad humoral y celular en la respuesta inmu-
ne se detalla en el capítulo de “Inmunología”, se Inmunidad adquirida pasiva
puede decir que las inmunoglobulinas ejercen su fun- Es la que se trasmite a un individuo no inmune me-
ción antimicrobiana por varios mecanismos: diante la sangre u otros líquidos orgánicos de otro
individuo activamente inmunizado. Esta inmuniza-
a) Neutralización de virus, toxinas y enzimas se- ción pasiva confiere protección temporal contra las
cretoras. infecciones y proporciona anticuerpos de otro indi-
b) Fijación antimicrobiana por varios mecanismos. viduo de la misma especie o de diferente especie;
c) Citotoxicidad mediada por anticuerpos, lleva- son los anticuerpos homólogos o heterólogos, de
da a cabo por las células asesinas naturales forma respectiva. Entre los primeros están los anti-
(NK). cuerpos maternos, que se trasmiten por la vía
d) Resistencia a la colonización, mediada por la placentaria, y los que contiene el calostro, que se
IgA secretora, que se fija a antígenos víricos o absorben a través del intestino.
bacterianos específicos e interfiere en la adhe- Dado el lento desarrollo del sistema linfoide, esta
rencia, la colonización y el posterior paso del inmunización pasiva natural es importante en la
germen a través de la mucosa. protección del recién nacido contra la difteria, el

489
sarampión, las paperas y otras enfermedades de esa En ciertos casos, la inmunidad duradera depende
etapa de la vida. de la persistencia del agente causal en forma latente
La inmunidad adquirida pasiva artificial o indu- durante años en el individuo, después de eliminada
cida depende de gammaglobulinas homólogas obte- la enfermedad clínica; tal es el caso de la tuberculo-
nidas de un donante inmune, las cuales son valiosas sis. La adquirida activamente a través de la vacuna-
puesto que atenúan los efectos del sarampión, téta- ción es menos duradera e intensa que la consecutiva
nos, etc., sobre todo cuando hay respuestas inmunes a infecciones.
pobres, como ocurre en prematuros, niños con in- El término vacunación designa a los fenómenos
munodeficiencias primarias o personas que reciben de inmunización en los que se emplea una suspen-
tratamiento con corticosteroides. Se pueden admi- sión de agentes infecciosos o parte de ellos, deno-
nistrar a contactos de enfermos con hepatitis infec- minada vacuna, para provocar una resistencia
ciosa y viruela para conferirles protección. El efectiva frente a una enfermedad infecciosa, median-
material inmunizante debe inyectarse por vía IM, te el establecimiento de una población sensibilizada
ya que tiende a formar agregados que, si son admi- de células que se amplía de forma rápida ante una
nistrados por vía EV, pueden conducir a reacciones exposición al antígeno.
anafilácticas graves. Se han empleado muchas técnicas para atenuar la
También se han empleado anticuerpos heterólogos virulencia de los microrganismos con fines de va-
en forma profiláctica, como inmunoglobulinas de cunación, ya que no se puede dañar al antígeno, sino
caballo que contienen antitoxina tetánica y diftérica, modificar sus efectos patógenicos, sin que se pro-
o en casos no protegidos que han sufrido heridas duzca una pérdida notable de su antigenicidad.
tetanígenas, así como anticuerpos contra el saram- Los tipos de vacuna son varios:
pión y las paperas, o en la prevención de hepatitis
viral, rubéola, poliomielitis, viruela e hidrofobia. 1. Toxoide. Las exotoxinas bacterianas pueden ser
Hoy en día, el procedimiento terapéutico que uti- destoxificadas sin que se destruyan sus princi-
liza inyecciones de suero para proporcionar al pa- pales propiedades antigénicas (difteria, tétanos,
ciente las ventajas de una respuesta específica gangrena gaseosa). La vacunación con el
inmediata es de uso limitado, por la complicación toxoide provoca la formación de anticuerpos
de tipo enfermedad del suero que ocurre como res- que neutralizan la toxina y facilitan su elimi-
puesta a las proteínas extrañas. nación por los fagocitos. Por lo general, el
toxoide suele administrarse adsorbido en hi-
Inmunidad adquirida activa dróxido de aluminio, que actúa como un adyu-
Hace ya muchos años se sospechó que las personas vante, el cual facilita la producción de altos
recuperadas de ciertas enfermedades no podían su- títulos de anticuerpos (se entiende por adyu-
frir de nuevo éstas, porque quedaban inmunizadas. vante aquella sustancia incorporada al antíge-
Hoy se sabe que esta inmunidad puede ser adquiri- no o inyectada simultáneamente que refuerza
da por el propio individuo de forma natural o espon- la respuesta inmune).
tánea, después de padecer una infección clínica 2. Organismos muertos. Las bacterias y los virus
evidente o subclínica, y de forma artificial o induci- muertos por medios físicos o químicos consti-
da, mediante la vacunación. tuyen un antígeno seguro para la inmunización
La infección clínica confiere una resistencia efec- (vacunas preparadas con Salmonella typhi, S.
tiva y duradera en un grupo de afecciones como dif- paratyphi, Bordetella pertussis, y vacunas de
teria, escarlatina, fiebre tifoidea y tosferina, o cólera y de virus poliomielíticos muertos). La
enfermedades virales como viruela, varicela, paro- inmunidad conferida por estas vacunas es in-
tiditis, fiebre amarilla, sarampión, poliomielitis, etc. ferior a la causada por agentes vivos, a pesar
En otras enfermedades, la inmunidad es relativa y de los adyuvantes.
breve, como la neumonía neumocócica, el catarro 3. Organismos atenuados. Pasteur fue el primero
común, la influenza y la disentería bacilar, por razo- en atenuar el bacilo del cólera del pollo y del
nes desconocidas. Las infecciones subclínicas o carbunco, y en conferir inmunidad mediante la
inaparentes producen también inmunidad, efectiva infección con estos organismos. Esto es el
y duradera o relativa y breve. principio de la vacunación con BCG (bacilo de

490
Calmette-Guérin), que representa una cepa vi- CUADRO 61.3
rulenta de M. tuberculosis atenuada y se utiliza SITIOS DE INFECCIÓN POR LOS PATÓGENOS
ampliamente para la vacunación de niños con-
Compartimientos Sitios de infección Patógenos
tra la tuberculosis y de adultos tuberculino-ne- del cuerpo
gativos.
Citoplasmático Virus
También son empleadas las vacunas atenuadas de Clamydias
Rickettsias
la poliomielitis (Sabin-Chumakov), sarampión y L. monocytogenes
rubéola. Protozoos
Es preciso enfatizar que las campañas de vacuna-
Intracelular Micobacterias
ción emprendidas por muchas comunidades, han S. typhi
erradicado enfermedades como la difteria, la virue- Leishmanias
la y la poliomielitis. En ciertos casos de vacunas Listeria
(contra la rabia o la viruela) existe un pequeño ries- Vesicular Tripanosomas
Legionellas
go de complicaciones, como encefalitis, de modo Criptococos
que el peligro de éstas debe ser valorado contra la Histoplasmas
probabilidad de evitar la enfermedad. Hay dificul- Yersinia
tades para producir vacunas contra los virus respi- Espacios intersticia- Virus
ratorios, por las múltiples variantes antigénicas que les, sangre, linfa Bacterias
éstos tienen. Parásitos
Extracelular Hongos
Mecanismos de defensa contra Superficies N. gonorrheae
las infecciones por bacterias, virus epiteliales M. pneumoniae
V. cholerae
y parásitos E. coli
Helmintos
Los agentes vivos que causan enfermedades infec-
Candida albicans
ciosas pertenecen a cuatro grupos: bacterias, virus, H. pylori
hongos y parásitos (estos últimos agrupan protozoos
y helmintos), y crecen en varios compartimientos
del cuerpo; los dos principales son el intracelular y canismos por medio de los cuales ellos dañan los
el extracelular (cuadro 61.3). Los patógenos intra- tejidos. Estos mecanismos de daño hístico por los
celulares se subdividen, además, en los que se repli- microbios son directos e indirectos. Entre los pri-
can libremente en la célula, como los virus y ciertas meros, los gérmenes extracelulares suelen causar en-
bacterias, por ejemplo: especies de clamydia, fermedad mediante liberación de productos tóxicos
rickettsia y listeria; y aquellos que se reproducen en específicos o toxinas, mientras que los agentes in-
vesículas celulares, como las mycobacterias (Salmo- fecciosos intracelulares con frecuencia lo hacen da-
nella typhi, Legionella y Yersinia) entre las bacte-
ñando las células en las cuales viven, es decir, por
rias, hongos (cryptococos e histoplasmas) y algunos
efecto citopático directo (cuadro 61.4).
parásitos (leishmanias y tripanosomas). Por otro
Los mecanismos indirectos de daño hístico por
lado, muchos microrganismos se multiplican en
los patógenos pueden ser:
espacios extracelulares, ya sea dentro del cuerpo
(espacios intersticiales, sangre, linfa) o sobre las su-
perficies epiteliales. En el primer caso figuran: vi- a) A través de complejos inmunes, como en el
rus, bacterias, hongos, protozoos y helmintos, y en virus de la hepatitis B, bacterias (estreptococo
el segundo se encuentran bacterias como Neisseria piógeno, treponema pálido) o parásitos (palu-
gonorrhreae, Mycoplasma pneumoniae, Vibrio dismo).
cholerae, E. coli, Helicobacter pylori, parásitos (hel- b) Por anticuerpos antihuésped, como el estrep-
mintos) y hongos (Candida albicans). tococo piógeno y Mycoplasma pneumoniae.
Muchos agentes infecciosos producen enferme- c) Por medio de la inmunidad mediada por célu-
dades muy diferentes debido a la variedad de me- las, como se observa en las mycobacterias (M.

491
CUADRO 61.4 han desarrollado mecanismos de resistencia (forma-
MECANISMO DE DAÑO HÍSTICO ción de cápsulas). Por ejemplo, los cocos gramposi-
POR LOS PATÓGENOS
tivos encapsulados crecen en espacios extracelulares
Mecanismos patogénicos Patógenos y resisten la fagocitosis por medio de su cápsula de
polisacáridos, pero si este mecanismo de resistencia
Producción de Estreptococo piógeno es vencido por la opsonización, mueren con rapidez
exotoxina S. aureus después de su ingestión por células fagocíticas.
C. difteriae
Virtualmente todos los microbios tienen una fase
Clostridium tetani
V. cholerae extracelular donde son vulnerables a mecanismos
efectores mediados por anticuerpos; sin embargo, la
Producción de E. coli
endotoxina H. influenzae
fase intracelular no es accesible al anticuerpo y és-
Mecanismos S. typhi tos son atacados por células T. Por otra parte, mi-
directos Shigelas crorganismos en potencia patogénicos son capaces
P. aeruginosa de vivir en simbiosis con el huésped colonizando,
Yersinia pestis pero no infectando, por períodos amplios. Resulta
Efecto citopático Viruela importante para la pericia clínica el distinguir la co-
directo Varicela zoster lonización de la infección. Por ejemplo, E. coli está
Hepatitis B presente de forma normal en grandes cantidades en
Poliovirus
el colon, donde contribuye a la síntesis de vitamina
Influenza
Herpes simple K e induce inmunidad natural hacia otras bacterias.
Sólo cuando E. coli atraviesa las barreras mucosas y
Complejos inmunes Hepatitis B
Paludismo
entra a sitios estériles, se convierte en un patógeno
Estreptococo piógeno oportunista. La penetración de E. coli dentro del pe-
Treponema pálido ritoneo a través de una brecha mecánica en la pared
Mecanismos Anticuerpos Estreptococo piógeno
del intestino, su entrada en la vejiga urinaria y su
indirectos anti-huésped M. pneumoniae invasión al torrente sanguíneo, son eventos asocia-
dos con infección y enfermedad.
Inmunidad mediada M. tuberculosis
por células M. leprae
Algunos gérmenes elaboran toxinas y enzimas que
VIH facilitan la invasión del huésped y a menudo son
Schistosoma mansoni responsables del estado de enfermedad. El vibrión
Herpes simple colérico elabora una toxina potente y bien caracteri-
zada, que penetra en los enterocitos del huésped a
tuberculosis y M. leprae), virus (de inmunode- través de un receptor específico y así activa por vía
ficiencia humana, herpes simple) y parásitos enzimática el sistema de la adenil-ciclasa de las cé-
(Schistosoma mansoni, etc.). lulas del huésped. Este evento, a su vez, permite la
secreción copiosa de electrólitos y líquidos por el
Inmunidad contra las infecciones bacterianas enterocito y condiciona la diarrea acuosa volumino-
Cuando el mecanismo de daño hístico utilizado por sa que es característica del cólera.
la bacteria es la producción de exotoxinas, éstas son El estafilococo áureo produce una gran cantidad
liberadas por gérmenes que actúan sobre la superfi- de proteínas extracelulares que contribuyen a la va-
cie de las células del huésped, por ejemplo, unién- riedad de estados patológicos asociados con esta
dose a receptores, entre los que figuran: estreptococo bacteria. Las enterotoxinas causan intoxicación
piógeno, estafilococo áureo, Corynebacterium alimentaria estafilocócica, aunque los organismos
difteriae, Clostridium tetani, etc. En cambio, las en- viables nunca entran al huésped. La toxina pertusis
dotoxinas activan a los fagocitos para que liberen daña la capacidad del epitelio ciliado de eliminar el
citocinas, las cuales causan síntomas locales o sisté- microrganismo del árbol bronquial del huésped. Las
micos, y en este grupo se encuentran: Echerichia bacterias enteropatógenas como E. coli y V. cholerae
coli, Haemophilus influenzae, Salmonella typhi, son ejemplos de gérmenes productores de toxinas
Pseudomona aeruginosa y Yersinia pestis. que normalmente no acostumbran invadir, en con-
Las bacterias extracelulares son por lo común sus- traste con otras que son capaces de promover inva-
ceptibles de ser destruidas por fagocitos y por ello sión y diseminación. Las bacterias que no poseen

492
ácido siálico en su cápsula, como algunos estrepto- interferones. En muestras celulares de tejido no in-
cocos del grupo B, Neisseria meningitidis de los gru- fectado previamente se encontró que dichas proteí-
pos B y C y el serotipo K1 de E. coli, son en particular nas interferían con la replicación viral y se piensa
patógenas, sobre todo para el recién nacido. que los interferones desempeñan un papel similar in
También enzimas extracelulares del estreptococo vivo al bloquear la diseminación de virus a células
piógeno, como hialuronidasa, facilitan el movimien- no infectadas. Estos interferones antigripales llama-
to a través de planos hísticos y las estreptolisinas O dos interferón-α (IFN-α) e interferón-β (IFN-β) son
y S interrumpen la membrana de los leucocitos y así sintetizados por muchos tipos celulares después de
dañan la defensa del huésped. la infección viral y uno de sus efectos más evidentes
Los componentes integrantes del microrganismo e importantes es la inducción de un estado de resis-
con frecuencia son responsables de muchos estados tencia a la replicación viral en todas las células.
patológicos que resultan en infección, por ejemplo:
lipopolisacáridos de bacterias gramnegativas actúan Inmunidad contra las infecciones por parásitos
como una potente endotoxina (entendiéndose en este Algunos parásitos también han desarrollado meca-
caso que los lipopolisacáridos son parte de la mem- nismos para escapar de la inmunidad del huésped y
brana bacteriana y no un producto secretado), la cual suelen emplear la respuesta inmune de éste como
es la causa inmediata del síndrome de sepsis. Las una estrategia de supervivencia, por ejemplo:
paredes celulares de las bacterias grampositivas pa- Schistosoma mansoni reconoce la citocina denomi-
rece que despiertan una respuesta inflamatoria del nada FNT-α y responde a éste depositando huevos.
huésped similar. Los patógenos anaeróbicos, como Después de una infección por protozoarios, éstos
Bacteroides fragilis, poseen una cápsula de polisa- pueden ser erradicados por completo y el huésped
cárido que promueve la formación de abscesos en el quedar inmune a una nueva infección (inmunidad
huésped. estéril). Pero a veces no son erradicados del todo y
algunos siguen “acantonados”; también en este caso
Inmunidad contra las infecciones virales el huésped es capaz de resistir a una nueva infec-
Muchos virus ejercen un efecto citopático directo ción. La función de la inmunidad humoral y celular
como mecanismo patogénico de daño hístico, es en la defensa contra los protozoarios no está bien
decir, que lesionan de forma directa las células que aclarada.
infectan, como ocurre en la viruela, varicela zoster, Parece que los anticuerpos circulantes protegen
virus de la hepatitis B, poliovirus, virus del saram- contra las formas que invaden el torrente sanguíneo,
pión, influenza y virus simple. como en el caso de la tripanosomiasis, mientras que
Los linfocitos T citotóxicos están implicados so- frente a los parásitos que viven dentro de los teji-
bre todo en la destrucción de las células infectadas dos, como las leishmanias, interviene la inmunidad
por virus, sobre todo encapsulados (grupo herpes, celular. En las formas hemáticas, los parásitos esca-
hepatitis B, gripe) y tienen un papel destacado, tan- pan de los anticuerpos circulantes por fenómenos
to en la erradicación de los virus como en el mante- de variación antigénica, o sea, alterando su consti-
nimiento de la infección latente (grupo herpes). Las tución genética.
células asesinas naturales constituyen de manera Los helmintos tienen un ciclo de vida complejo,
probable la primera línea de defensa contra algunos que ha limitado el estudio de la respuesta inmune en
virus, ya que no requieren el concurso de anticuer- ellos; sin embargo, se ha señalado como caracterís-
pos ni la colaboración de los linfocitos T para llevar tica importante el alto título de anticuerpos (reaginas)
a cabo su acción citotóxica. que se produce. Se han encontrado, sobre todo en el
Ciertos virus (ejemplo: herpes virus) viven en el hombre, niveles aumentados de IgE en el suero, lo
tejido durante la vida del huésped y causan escaso cual indica la intervención de ésta en la defensa. En
daño mientras el sistema inmune de éste está intac- caso del tripanosoma también ocurren muchas va-
to, pero producen enfermedad sintomática severa si riantes antigénicas que dificultan la respuesta inmune.
aquél se altera. En general, parece que aumentan todas las clases
Por otra parte, la infección de células por virus de inmunoglobulinas cuya síntesis sea estimulada
induce la producción de proteínas conocidas como de forma inespecífica.

493
62
SÍNDROME FEBRIL

Como base útil para el estudio de la fiebre desde el 2. Aumento del metabolismo:
punto de vista clínico y como introducción al estu- • Por actividad muscular.
dio de las enfermedades infecciosas, donde la fie- • Por efecto de la tiroxina.
bre está casi siempre presente, sirvan de inicio • Por la noradrenalina y la estimulación simpá-
algunos comentarios sobre su concepto y pato- tica.
genia.
La fiebre es una elevación de la temperatura cor- Pérdida de calor
poral por encima de la variación circadiana normal, El organismo pierde calor por tres mecanismos: por
como consecuencia de cambios en el centro radiación, que significa pérdida de calor en forma
termorregulador (CTR) de la región anterior del de rayos infrarrojos (60 %); por conducción (15 %)
hipotálamo. Por otra parte, se conoce como hiper- y por evaporación por los pulmones (22 %). Cuando
termia al aumento de la temperatura corporal por el agua se evapora de la superficie corporal se pier-
encima del punto de ajuste hipotalámico debido a den 0,58 calorías/g de agua evaporada.
una insuficiente disipación del calor, como ocurre Cuando la temperatura corporal es muy alta, el
después del ejercicio físico, en los ambientes calu- cuerpo utiliza mecanismos para reducirla, que se re-
rosos y en algunas enfermedades.
sumen:
La temperatura corporal en personas normales es
de 36,8 ºC + 0,4 ºC, con valores que disminuyen en
• Vasodilatación intensa en toda la piel del orga-
horas de la mañana y aumentan en las de la tarde;
nismo.
se acepta que toda temperatura matutina superior
a 37,2 ºC o vespertina mayor de 37,7 ºC puede de-
• Aumento de la frecuencia respiratoria.
finirse como fiebre. La temperatura rectal es de 0,5 • Estimulación enérgica de la sudoración, lo que
a 0,6 ºC, más elevada que la bucal. En una mujer aumenta la pérdida de calor por evaporación.
que menstrua, aumenta medio grado durante la ovu- • Inhibición de la termogénesis por mecanismos
lación y se mantiene de esa forma hasta la mens- químicos.
truación.
La temperatura corporal varía en dependencia de Se debe recordar que la deshidratación es otro fac-
situaciones fisiológicas como la edad, el embarazo, tor que puede elevar de forma considerable la tem-
estados endocrinos y en el período posprandial. peratura corporal, casi con seguridad por acción sobre
los centros hipotalámicos.
Producción y regulación del calor
En el cuerpo se produce constantemente calor como
Patogenia
consecuencia de las reacciones metabólicas, pero Los compuestos que producen la fiebre se denomi-
también se pierde de forma continua, pues pasa al nan pirógenos, y son exógenos y endógenos. Mien-
medio vecino. tras los exógenos son ajenos a la persona, los
Los principales productores de calor del organis- endógenos son el resultado de una respuesta del hués-
mo son: ped a estímulos provenientes sobre todo de procesos
1. Metabolismo basal de todas las células del or- infecciosos o inflamatorios que se encuentran afec-
ganismo. tando al organismo. Hoy se señala que el pirógeno

494
exógeno más conocido es la endotoxina que elabo- res epigástricos, lengua saburral, diarreas, etc., y
ran las bacterias gramnegativas, aunque las gram- cuanta expresión en su funcionamiento es capaz de
positivas también los producen. Estos pirógenos exteriorizar este aparato.
exógenos inducen, cuando entran al organismo, la Tal vez el sistema cuyas manifestaciones acom-
síntesis de otros (endógenos) por las células del hués- pañan con mayor asiduidad a la fiebre es el car-
ped, en especial a nivel de los monocitos y macró- diorrespiratorio. En efecto, la taquicardia, con
fagos. extrasístoles o no, expresada a través de palpitacio-
Clásicamente existen dos pirógenos endógenos, nes, la HTA moderada y los trastornos vasomotores
que son la IL-1α y la IL-1 β, que son producidas por (congestión o palidez cutánea), constituyen elemen-
las células fagocitarias, células endoteliales, linfo- tos que se encontrarán en los pacientes con fiebre, y
citos B, fibroblastos y otras células del organismo. es lógico que si durante ésta se produce un hiper-
Hoy se acepta el término citocina para los llamados metabolismo, también haya una circulación más ac-
pirógenos endógenos, que son varios e incluyen, ade- tiva.
más de los antes señalados, los FNT alfa y beta, el Por cada grado que se incrementa la temperatura
interferón alfa y otros. corporal, el consumo de oxígeno aumenta en un 13 %,
El CTR, localizado en el hipotálamo anterior, re- al igual que la demanda de calorías y líquidos. En
cibe dos tipos de estímulos a través de los nervios muchos procesos alejados del aparato respiratorio
periféricos que proceden de los receptores de frío y que cursan con fiebre, se presenta tos más o menos
calor, y de otra parte por el paso de la sangre que intensa y polipnea, expresión esta última del mayor
perfunde esa región, la que tiene un nivel dado de intercambio gaseoso alveolar que obligadamente
temperatura. De ahí que este centro mantenga un produce la fiebre.
nivel de temperatura corporal “normal” o en su de- En el sistema renal tienen lugar dolores lumbares,
fecto ocurra un aumento o descenso de ella. oliguria y orinas muy concentradas, sin que esto sig-
La llegada de los pirógenos al CTR estimula la nifique que la fiebre sea causada por un proceso de
entrada de calcio a sus células y se libera la PGE2, esta localización.
prostaglandina derivada del ácido araquidónico, con- Las artromialgias son la expresión del sistema
siderada la del efecto febril más potente; es enton- osteomioarticular, al igual que las raquialgias, pre-
ces que se produce la fiebre. sentes en una gran mayoría de procesos febriles.
Los órganos genitales tienen a veces participa-
Manifestaciones clínicas ción sintomática en la fiebre; una falta menstrual,
Resulta difícil que algún aparato o sistema del or- una metrorragia o el anticipo de una menstruación
ganismo no participe en el cuadro febril de un pa- son molestias que también aparecen en algunas pa-
ciente. cientes.
En el sistema nervioso, con seguridad el más abun- Casi siempre en el caso de una fiebre se presen-
dante de toda la economía en localizaciones funcio- tan síntomas de orden general, como astenia, ano-
nales, no sólo es el CTR el que manifiesta su rexia, escalofríos, sudoraciones y, si aquella se
estimulación, sino que aparece una serie de sínto- prolonga, adelgazamiento por el incremento del
mas correspondientes a las diferentes regiones afec- metabolismo y la anorexia.
tadas o a distintas funciones interferidas. La cefalea, De todo lo anterior se infiere que en cualquier
el vértigo, la obnubilación, las convulsiones (tan fre- fiebre, además de los síntomas propios de la enfer-
cuentes en todas las fiebres durante la infancia), las medad causante, sea ésta un proceso infeccioso, in-
alucinaciones, el coma, las neuralgias, etc., son sólo flamatorio o tumoral, haya que tener presente la
una muestra de cuantas manifestaciones por parte significación clínica de otros síntomas y signos que
del sistema nervioso, tanto central como periférico, no le son propios, y darles el valor que merecen para
pueden presentarse en cualquier proceso infeccioso llegar a un diagnóstico correcto. Como ejemplo para
o inflamatorio por invasión directa o por reacciones reafirmar esto se puede señalar el tétanos. Cuando
a distancia localizadas en otros sitios del cuerpo. se relacionan todos los síntomas que en gran núme-
El sistema digestivo aporta también sus elemen- ro de casos se encuentran, con seguridad no hay ór-
tos clínicos: náuseas, vómitos, constipación, dolo- gano ni sistema que esté ausente de la lista; pero

495
entre ellos, unos son muy poco frecuentes y otros tencia de algunas causas particulares de hipertermia,
tan ubicuos, que se les suele hallar en casi todas las a las que el médico se puede enfrentar en algún mo-
demás infecciones. Sin embargo, las contracturas y mento; dentro de ellas se señalarán dos: la hiperter-
las mal llamadas convulsiones con los caracteres in- mia maligna, que es una anomalía hereditaria del
trínsecos y evolutivos que se presentan en el paciente retículo endoplásmico del músculo esquelético, que
tetánico, es muy difícil que se vean en otra afec- aumenta el calcio intracelular en respuesta a
ción; por sí solos ellos identifican la enfermedad, anestésicos inhalados, tales como el halotano o a la
mientras que todas las otras manifestaciones es po- succinil-colina, y el síndrome maligno por neuro-
sible adscribirlas a la toxemia general que existe. lépticos de tipo de las fenotiacinas, como el
Analizadas las principales manifestaciones clíni- haloperidol.
cas de un síndrome febril y antes de comenzar con
el estudio de la clasificación según el tiempo de du- Clasificación
ración de éste, es necesario exponer los cuatro pila- La fiebre se presenta en una variedad tan amplia de
res básicos en los cuales descansa la valoración procesos patológicos, que si no se le clasifica de al-
inicial de un síndrome febril, con el objetivo de que guna manera, la orientación diagnóstica ante ella se-
se puedan hacer conclusiones diagnósticas en el or- ría punto menos que imposible, ya que las tres cuartas
den clínico. partes de las enfermedades conocidas decursan con
fiebre en algún momento de su evolución. Aun con-
1. Adecuada historia clinicoepidemiológica, don- siderando sólo los procesos infecciosos, sería cues-
de se debe resaltar la cronología y duración del tión de revisar el aspecto inflamatorio de todos los
episodio febril, curva febril, síntomas acompa- órganos y tejidos de la economía, que pueden, sin
ñantes, medicamentos administrados, profe- excepción, sufrir una invasión microbiana y cuya
sión, contacto con animales, picaduras de simple enumeración sería inacabable.
insectos, viajes, lugar de residencia, consumo Con el objeto de aportar al estudio de este síndro-
me un enfoque útil en la práctica clínica, se debe, en
de sustancias tóxicas, conducta sexual, hábitos
primer término, precisar el tipo de síndrome febril
alimentarios y contactos con enfermos fe-
“puro”, sin localización detectable. Se trata del sín-
briles.
drome febril que se presenta en un paciente en quien
2. Examen clínico exhaustivo, que debe compren-
el examen físico por los procedimientos habituales
der una exploración física completa; sin pasar
de la clínica corriente no logra poner de manifiesto
por alto un adecuado examen genital y gineco-
ninguna anomalía orgánica fuera de los componen-
lógico, otorrinolaringológico, dental, fondo de tes habituales del síndrome febril. Y ésta no es una
ojo y tacto rectal. definición académica y artificial, sino una realidad
3. Valoración de la enfermedad de base si existiere clínica muy frecuente con que se tropieza muy a
insistiendo en los posibles antecedentes de in- menudo el médico, cualquiera que sea el lugar don-
suficiencia renal, hepática, cardíaca o respira- de ejerza sus funciones.
toria, diabetes mellitus, inmunosupresores, Frente a un síndrome febril, ante todo se le debe
neutropenia, utilización de medicamentos, clasificar en uno de los tres tipos siguientes:
adicción a drogas y presencia de cualquier tipo
de prótesis (cardíaca, ortopédica, vascular, de- 1. Síndrome febril de corta duración, de un máxi-
rivación de LCR, etc.) y de sondas. mo de 5 días.
4. Elementos que expresan gravedad del enfer- 2. Síndrome febril prolongado, de evolución en-
mo, tales como alteración del nivel de concien- tre 6 y 21 días.
cia, shock, deterioro del estado general, disnea, 3. Fiebre de origen desconocido (FOD), más
hipotensión arterial, alteraciones hidroelectro- de 21 días, que puede prolongarse durante me-
líticas y deterioro de las funciones renal o he- ses o años y cuyos criterios se expondrán más
pática. adelante.

No es posible finalizar este aspecto de las mani- Hay que aclarar, sin embargo, que estos límites
festaciones clínicas sin hacer referencia a la exis- artificiales no son rigurosamente rígidos y que el

496
buen juicio permite, en los casos limítrofes, colocar man un síndrome febril reciente, ya que a menudo
de forma debida en una u otra situación un caso par- orientan de forma conveniente hacia el diagnóstico,
ticular. Por lo demás, esta separación es indispensa- y en primer lugar la edad. Las infecciones virales
ble, porque en la gran mayoría de los casos actúan propias del niño y del joven, tales como varicelas,
diversas causas en los diferentes períodos señalados. sarampión, parotiditis, etc., deben presumirse des-
de 2 hasta 14 o 15 años. En toda fiebre que sobre-
Síndrome febril de corta viene en individuos de edad mediana y en los
duración ancianos, hay que buscar con atención las linfadeni-
tis que parten de lesiones micóticas de los pies. Los
En el síndrome febril de reciente instalación está ancianos, prostáticos en gran número, sufren con fre-
presente toda la patología febril existente. Hasta los cuencia de infección urinaria, aun sin signos fun-
procesos que luego serán prolongados o fiebre de cionales aparentes. No hay que olvidar la escasa
origen desconocido son primero cortos. La experien- reacción biológica del anciano, quien puede tener
cia enseña que, durante estos pocos primeros días, una grave neumonía sin apenas modificar la tempe-
la gran mayoría de los casos está representada por ratura.
infecciones fugaces de regiones limitadas de la piel Si se trata de un paciente diabético, es necesario
o las mucosas, de formaciones linfáticas ocultas que la infección renal esté siempre presente en la
(adenoides, ganglios mesentéricos, etc.), imposibles mente del médico, así como la tuberculosis pulmo-
de identificar, así como, sobre todo en los jóvenes, nar y las infecciones cutáneas.
la multitud de virosis conocidas y desconocidas, para Pero con independencia de las consideraciones an-
las que no se dispone de medios adecuados de diag- teriores, casi nunca es posible hacer planteamientos
nóstico. Todo esto hace que, además de la imposibi- diagnósticos certeros de orden puramente clínico
lidad, sea inútil la mayoría de las veces poner en frente a un síndrome febril corto, por lo que más
acción todos los medios de investigación por un sín- importante resulta estudiarlo lo mejor posible por si
drome febril que es muy probable desaparezca po- rebasa los límites señalados y pasa a la categoría de
cos días después. prolongado. Hay que reiterar que la fugacidad de
La presunción diagnóstica debe sustentarse en es- gran número de síndromes febriles, no justifica que
tos casos en la característica particular de la fiebre o de forma sistemática se apliquen para su diagnósti-
del síndrome en total. Es bien conocida, por ejem- co los medios de investigación de que se dispone;
plo, la forma de presentarse una crisis palúdica, con los resultados de la mayor parte de ellos llegarían
sus escalofríos violentos, pirexia exagerada, sudo- cuando ya la fiebre haya desaparecido. Además,
res profusos y la intermitencia clásica. De la misma es tan frecuente en el seno de una población la
manera, una fiebre remitente acompañada de esca- ocurrencia de un síndrome febril corto, que el estu-
lofríos hará sospechar una sepsis generalizada. Pero dio exhaustivo de cada uno de ellos haría incosteable
muy pocas afecciones son identificadas desde el prin- la práctica de la medicina. La experiencia ha demos-
cipio por el cuadro febril; sólo el profundo conoci- trado en estos casos que el hemograma, la gota gruesa
miento de la enfermedad y la experiencia del médico y el examen de orina constituyen las investigacio-
serán de utilidad en estas situaciones. nes apropiadas, pues además de suministrar una
También el estado epidemiológico regional es muy orientación diagnóstica muy útil, son de ejecución
importante en el diagnóstico de la fiebre, ya que la rápida y de bajo costo.
endemia o epidemia reinante debe pesar en el juicio La importancia del hemograma no requiere ape-
médico. Por ejemplo, un paciente joven que convi- nas explicación. La serie roja manifiesta el aspecto
ve con una familia o conglomerado donde se han cuantitativo y cualitativo de los hematíes, cuyas al-
presentado varios casos de sarampión, tiene que ser teraciones pueden ser el resultado de procesos que
considerado como sospechoso de esta enfermedad al descubrirse ponen sobre la pista de diagnósticos
si sufre un síndrome febril cuya causa no se explica específicos (hemólisis, leucosis, eritrosis) o, por el
de otra manera. contrario, suelen ser el terreno que favorezca o per-
En fin, conviene tener en cuenta ciertas circuns- mita determinadas infecciones (anemia perniciosa,
tancias, tanto fisiológicas como patológicas, que for- anemia de células falciformes, etc.).

497
Más fecundo aún en sugerencias diagnósticas es do no se aprecia, puede ser evidente al día siguiente.
el estudio de los leucocitos. Sería interminable la Todo paciente afectado de un síndrome febril debe
enumeración de todas las posibilidades o vías diag- considerarse todos los días como un enfermo nue-
nósticas que ofrece el estudio de la serie blanca del vo. Cada día que pasa sin diagnóstico conmina al
hemograma, que constituye de por sí una disciplina médico a ser más acucioso en su examen y a explo-
médica que todo clínico debe conocer de forma pro- rar regiones con frecuencia descuidadas: oídos, se-
funda, aunque a modo de ejemplo conviene señalar nos paranasales, cada uno de los cuerpos vertebrales
algunas situaciones. accesibles, genitales, región interglútea, etc. Y la per-
En patología resulta de gran utilidad clasificar una severancia tendrá como recompensa el descubri-
infección determinada según esté acompañada o no miento de un foco hasta entonces inaparente, oculto.
de leucocitosis. En el primer caso se trata por lo ge- Podrían citarse ejemplos por millares de descubri-
neral de una infección bacteriana, sobre todo por co- mientos insospechados de causas de síndromes fe-
cos, y en el segundo se encuentran las infecciones briles.
virales. Más aún, cierto grado de leucopenia carac- Mientras no se tenga diagnóstico, en principio no
teriza a las infecciones por enterobacterias. La pre- debe administrarse tratamiento medicamentoso al-
sencia de gránulos tóxicos, vacuolas, etc., expresa guno para el síndrome febril, salvo las medidas
la severidad del proceso. El aumento de la propor- higienodietéticas generales favorecedoras de la re-
ción de las formas jóvenes (stabs, juveniles, paración orgánica, cualquiera que sea la enferme-
mielocitos) y la desviación a la izquierda, como se dad: reposo, buena alimentación, supresión de
le llama de forma común, provee de elementos para tóxicos, alejamiento de conflictos, etc. Aun los me-
valorar la intensidad de la reacción medular. Es ob- dicamentos paliativos, como son los analgésicos y
vio recalcar el carácter decisivo de la investigación los antipiréticos, deben darse sólo cuando realmen-
que nos ocupa en el estudio de las enfermedades de te el paciente se siente muy mal sin ellos, por ejem-
la sangre propiamente dichas, donde destacan por plo, ante una cefalea torturante, escalofríos
su malignidad las leucemias. A tal punto es impor- insoportables, pirexias amenazadoras, etc.; pero en
tante el hemograma en el manejo de un síndrome gran número de casos estos productos pueden
febril, que no se concibe el estudio de éste sin la suprimirse o reducirse a un mínimo insignificante.
realización de aquél. Por supuesto, con mucho menos fundamento debe
En regiones donde la endemia palúdica es eleva- pensarse en medicación específica antinfecciosa.
da, la gota gruesa, también rápida, económica, de La razón de la restricción de fármacos resulta bien
alto rendimiento signológico, detecta una infección clara, ya que la enfermedad es una entidad biológi-
grave que tantas veces adopta el disfraz de cualquier ca que manifiesta su existencia por una serie de al-
otra entidad nosológica. El examen de orina es con teraciones, entre las cuales está la fiebre, cuya
seguridad uno de los más sencillos y menos costo- diversidad, secuencia o combinación la definen y,
sos de todos los análisis de laboratorio. Por medio por consiguiente, su reconocimiento sirve de identi-
de él se orienta de forma adecuada el diagnóstico ficación del proceso, lo que en clínica se llama el
sobre infecciones urinarias, tan frecuentes como cau- diagnóstico. Si como medida de complacencia o por
sas de síndromes febriles cortos; la presencia de dia- temor el médico suprime la fiebre, elimina las sen-
betes, compensada o no; la coluria aclara algunos saciones desagradables o anormales y, peor aún, si
problemas de origen hepático, etc. por desorientación bloquea las posibilidades de de-
En cuanto a la actitud del médico ante el síndro- sarrollo de la enfermedad o introduce en el organismo
me febril de corta duración, aparte de las investiga- agentes capaces de añadir, directa o indirectamente,
ciones ya señaladas, se podría calificar de sencilla manifestaciones extrañas al proceso que se quiere
de acuerdo con todo lo expresado con anterioridad: identificar, como las pueden provocar los antibióti-
observar al paciente y no imponer tratamiento hasta cos intempestivos, mal empleados o inútiles; si, en
que se presenten ciertas características especiales una palabra, se desfiguran o deforman las caracte-
consideradas más adelante. rísticas usuales de la incógnita que se trata de des-
Observar al enfermo quiere decir examinarlo to- pejar, no se está haciendo más que añadir dificultades
dos los días, pues lo que en un momento determina- al ya difícil problema del diagnóstico.

498
Una neumonía sin fiebre por la dipirona indica- péutica. Por estas razones, la conducta del médico
da, unas varicelas complicadas con vómitos por la en similares circunstancias debe ser más enérgica e
tetraciclina ingerida y una fiebre medicamentosa, inquisitoria de lo que era en el período anterior.
prolongada después de la curación de una simple Son diversas las causas por las que un síndrome
linfangitis tratada con altísimas dosis de penicilina, febril pasa a ser prolongado y hasta una FOD sin
son unos pocos ejemplos encontrados al azar. que el examen físico más prolijo descubra un foco
Por otra parte, si después de un tratamiento “a que lo explique en algún órgano. En primer lugar,
ciegas” el síndrome febril no cede, ¿qué hacer?, ¿au- puede ocurrir que tal foco no exista. Se trata de un
mentar la dosis?, ¿recurrir a otra droga?; y si coinci- estado séptico en el que el germen causante no se
diendo con el tratamiento el síndrome febril localiza en sitio alguno, sino que invade la sangre.
desaparece, ¿cómo estar seguro de que la curación Así sucede en la fiebre tifoidea, el paludismo y en
se debe al tratamiento empleado? Y, por otro lado, todas las sepsis generalizadas, en gran número de
¿qué enfermedad hemos curado? Es fácil compren- las cuales la puerta de entrada suele ser inaparente o
der que esta actitud no es científica ni provechosa pequeña (meningococia, neumococia, etc.) y duran-
para el médico, que jamás perfeccionará de este te cierto tiempo o definitivamente no dar tampoco
modo su sentido clínico ni llegará a conocer sus focos secundarios. Como se comprende, no hay po-
medidas terapéuticas. sibilidades de demostrar en estas circunstancia foco
Sin embargo, no hay que olvidar la posibilidad alguno.
que se presenta a veces de un síndrome febril de una Otras veces durante un tiempo más o menos pro-
violencia extrema, con compromiso muy marcado longado, el foco original del síndrome febril, infec-
del estado general del paciente, en el que todo pare- cioso o no, reducido de tamaño, asienta en el espesor
ce indicar que la actuación inmediata, polifacética y de parénquimas de órganos o regiones poco accesi-
masiva sería la única medida que salvaría al enfer- bles a la exploración; sin embargo, estos focos son
mo. En estos casos es aconsejable poner en práctica capaces de provocar la toxemia febril sin alterar la
todos nuestros recursos y al mismo tiempo realizar función del órgano que lo alberga ni la de los veci-
las investigaciones pertinentes que, en definitiva, da- nos. Así ocurre en los primeros momentos en que se
rán la pauta final que se debe seguir. Pero se debe forma un absceso hepático o cerebral, un linfoma
saber que en el síndrome febril de corta duración, mediastinal o mesentérico, etc. Por otra parte, un
tal como aquí se ha definido, esta eventualidad es examen hecho en un período más adelantado de la
muy poco frecuente en el adulto. La mayor parte de evolución de estas lesiones, podrá poner de mani-
las veces en que se trata de justificar un tratamiento fiesto un tumor hepático, un síndrome encefálico con
“de múltiple efecto” y de dosis inusitadas, es el mé- hipertensión intracraneal o no, o un síndrome me-
dico quien, falto de experiencia y contagiándose con diastinal, etc., que entonces denuncien el proceso.
la desesperación de la familia, ha actuado sin la se- La prolongación del síndrome febril se debe en
renidad debida, actitud poco científica que se debe otras ocasiones a la naturaleza misma de su germen
evitar. causal. Se conoce la tendencia a la cronicidad de las
afecciones tuberculosas, así como las producidas por
Síndrome febril prolongado la brucelosis, entidades nosológicas que se deben
Pasados los 6 primeros días, el síndrome febril se tener muy en cuenta, sobre todo la primera, en todos
considera prolongado. Las infecciones virales o bac- los síndromes febriles prolongados, más en nues-
terianas de curso fugaz y pronóstico benigno que tros tiempos, donde hay un alza de la enfermedad
constituyen el grueso de las fiebres de corta dura- en todas las latitudes.
ción, ya han debido extinguirse. Todo paciente que Pero con mucha mayor frecuencia de lo que de-
mantiene un estado febril más de 5 días, puede estar biera ocurrir, se encuentra como causa de la “pure-
afectado por cualquiera de los grandes procesos za” de un síndrome febril, es decir, ausencia del foco
patológicos infecciosos o no, en los que la fiebre es que explique la fiebre, la insuficiencia del examen
un componente de importancia y cuyo pronóstico, a físico. Son incontables los ejemplos en que fiebres
menudo grave, exige un diagnóstico lo más precoz inexplicables mantenidas durante 12, 14 o más días,
y preciso posible, único medio de escoger la tera- se han identificado con facilidad al examinar con

499
cuidado al paciente desnudo y podido demostrar una ma completo con conteo diferencial, gota gruesa, eri-
orquitis que no llamaba la atención del propio indi- trosedimentación, proteína C reactiva, hemocultivos
viduo, una metroanexitis cuya leucorrea la enferma (con preferencia en accesos febriles), reacción de
interpretaba sin importancia, una celulitis inguino- Paul-Bunnell y las de cuantos antígenos de enfer-
perineal, etc. Por estas razones hay que insistir en medades capaces de producir fiebre se disponga, exa-
que el examen físico debe ser repetido, exhaustivo, men de orina simple, urocultivos y coprocultivos.
si no se quieren ignorar diagnósticos a veces fáciles. No olvidar el test de leptospiras, el VIH, cituria y
Una vez depurado el síndrome febril, convencido conteo de Addis, y otros estudios serológicos según
el médico de que no hay localización descubrible, el criterio del médico ante su enfermo, y una radio-
es preciso primero hacer un planteamiento diagnós- grafía de tórax simple. Cada una de estas investiga-
tico presuntivo, razonable, y después actuar en el ciones se repetirán las veces que se estime necesario.
sentido de las investigaciones y a veces también en Más adelante y de acuerdo con la evolución del caso,
el de la terapéutica. las sospechas que surjan y las posibilidades dispo-
En primer lugar es preciso hacerse un plantea- nibles, conviene investigar células LE, anticuerpos
miento diagnóstico presuntivo para dirigir mejor las antinucleares (ANA), inmunocomplejos circulantes
investigaciones, ya que existe un grupo de pruebas y estudios del complemento, tomar biopsia de piel y
que se deben aplicar de igual forma a todos los ca- músculos y de ganglios (si existieren adenopatías), etc.
sos y, por otra parte, para enfocar con algún funda- En un buen número de casos, mediante la atenta
mento una terapéutica que se estime obligada a
observación y el examen diario del enfermo, los da-
instituir, si como ocurre en no raras ocasiones, no es
tos suministrados por los medios de diagnóstico y la
posible llegar a un diagnóstico seguro. Este plantea-
propia evolución del paciente, se logra al fin deter-
miento diagnóstico debe basarse en las característi-
minar el agente causal o la enfermedad en cuestión,
cas propias del síndrome. Los conocimientos y la
lo que permitirá instituir el tratamiento específico
experiencia del médico de asistencia deben permi-
correspondiente.
tirle una tentativa racional basándose en datos como
En otro porcentaje de casos, que con seguridad
la presencia o no de escalofríos y la repetición de
incluye la mayoría de los pacientes, el enfermo cura
éstos, la altura de la fiebre en la gráfica y sus carac-
de manera espontánea con sólo el reposo en cama,
terísticas evolutivas (continua, intermitente, ondu-
sin que de ninguna manera se pueda sospechar qué
lante, recurrente, etc.), la relación del pulso con la
temperatura, la mayor o menor toma del estado ge- causa produjo el síndrome febril y sin que todas las
neral, la valoración juiciosa de los síntomas de ór- investigaciones realizadas, que a veces desesperan
ganos o sistemas más sobresalientes o significativos al paciente, hayan podido esclarecer el diagnóstico.
que siempre existen en el síndrome febril, aunque Es ésta una eventualidad que debe siempre tener pre-
no sean expresión de una verdadera localización, y sente el médico al valorar el tratamiento que en de-
otros detalles cuya apreciación constituye parte de terminadas circunstancias, justificadas o no, se
la experiencia clínica. decida imponer a un síndrome febril. Porque, en rea-
También ha de tenerse en cuenta la epidemiolo- lidad, toda vez que el síndrome febril no es una en-
gía regional o nacional y la presencia de vectores tidad nosológica, sino un aspecto, una manifestación
que no existían o han aumentado (Aedes aegypti); de muchas enfermedades con causas tan disímiles
las estadísticas de los servicios hospitalarios, en como una infección, una neoplasia, una colageno-
particular de las enfermedades infecciosas, pueden sis, etc., no parece lógico aplicar tratamiento algu-
servir de base a una jerarquización de las posibili- no, salvo las medidas de orden general para facilitar
dades diagnósticas, lo que unido a las consideracio- las funciones orgánicas: reposo, adecuado aporte de
nes del párrafo anterior, constituyen un sólido apoyo líquidos y de alimentos y nada más. Es por esto que
para formular la hipótesis diagnóstica. la primera y más enfática recomendación que se pue-
Inmediatamente después debe iniciarse la búsqueda de hacer al estudiante de medicina como conducta
del agente etiológico del síndrome febril por todos que debe seguir frente a un síndrome febril sin loca-
los medios disponibles. Las investigaciones deben lización, es no aplicar tratamiento alguno, salvo en
indicarse de forma sistemática; éstas son hemogra- una de las tres circunstancias siguientes: cuando se

500
hace el diagnóstico, cuando no es posible hacer el La mayoría de los pacientes con FOD no son por-
diagnóstico o cuando la situación del paciente sea tadores de enfermedades raras, sino que sufren dis-
tan precaria, que se tema un desenlace fatal si algo turbios comunes que se presentan de modo atípico.
no interrumpe su empeoramiento progresivo. Los estudios demuestran que alrededor del 40 % de
La primera eventualidad es lógica y no merece los casos son producidos por enfermedades infec-
explicaciones; pero no así la falta de diagnóstico, ciosas, donde se destacan los abscesos abdominales
que parece contradecir cuanto se ha expuesto hasta (hepático, subfrénico, subhepático y otros) y
ahora, por lo cual merece un comentario. En efecto, pélvicos; la tuberculosis, sobre todo en su forma
con frecuencia se ven pacientes que tienen un sín- miliar; la endocarditis infecciosa; infecciones por el
drome febril durante semanas o meses, y a los cua- VIH, por Cytomegalovirus y por el virus de Epstein-
les se les han realizado múltiples investigaciones, Baar, y las micosis profundas (histoplasmosis, as-
muchas de ellas traumatizantes y peligrosas; sin pergilosis, etc.).
embargo, a pesar de todos estos procedimientos no El segundo grupo de las causas (20 %) corres-
se ha podido descubrir la causa de su fiebre, que día ponde a las neoplasias primarias o metastásicas, he-
a día los depaupera. En estas circunstancias es hu- matológicas o de órganos, donde la fiebre puede estar
mano actuar de una manera más positiva, con lo que relacionada con el propio tumor o ser producida por
parezca más conveniente, o mejor aún, con todo lo una infección sobreañadida, obstrucción local por
que se disponga para tratar de dar solución al pro- el tumor y por complicaciones quirúrgicas, en el caso
blema del enfermo, incluso a costa de ignorar la cau- de que el paciente haya sido intervenido. Aquí hay
sa de su fiebre. que pensar en linfomas, leucemias, hipernefroma y
El mismo razonamiento se aplica a la tercera po- tumores del hígado, páncreas y colon.
sibilidad, cuando desde temprano en el curso de su Las enfermedades del tejido conectivo colágeno
evolución, aún con las investigaciones incompletas y las vasculitis son también un grupo común de en-
o inexistentes, el desarrollo extraordinariamente tidades que caen en esta categoría; por tanto, no re-
maligno del síndrome hace alarmante la situación . sulta infrecuente que un LED, la enfermedad de Still,
las vasculitis por hipersensibilidad a fármacos, la ar-
Fiebre de origen desconocido teritis de células gigantes y la polimialgia reumáti-
(FOD) ca, hagan su debut de esta forma. Por otro lado, la
Esta variedad de fiebre resulta un verdadero reto al esclerodactilia y la poliarteritis nudosa lo hacen con
médico en general y al clínico en particular; su defi- menos frecuencia.
nición fue hecha en 1961 por dos médicos norte- Por último, a pesar de todos los esfuerzos, alrede-
americanos, Petersdorf y Beeson, los que plantearon dor de un 10 % de los pacientes queda sin un diag-
tres criterios diagnósticos en un artículo que se con- nóstico o éste se hace muy tarde. Existe en este grupo
sidera clásico: una gran cantidad de enfermedades, entre las que se
deben resaltar la sarcoidosis, fiebre medicamento-
a) Fiebre de 38,3 ºC o más en varias ocasiones. sa, embolias pulmonares múltiples y tiroiditis.
b) Más de 3 semanas de duración. Más recientemente, en 1991, Durack y Street,
c) Paciente cuyo diagnóstico etiológico perma- además de la llamada FOD clásica que se acaba de
nece desconocido después de una semana de describir, han categorizado por su importancia diag-
estudio hospitalario. nóstica la FOD en el curso de la infección por el
VIH en pacientes neutropénicos y en la infección
Hoy el tercer criterio es motivo de controversias nosocomial; esta última es la que aparece en enfer-
y no se adapta a la realidad, ya que muchos enfer- mos ingresados para cuidados agudos, que se en-
mos con FOD pueden ser estudiados en un medio contraban afebriles y sin evidencia de infección en
extrahospitalario. El propio Petersdorf, en 1992, el momento de su admisión, en los que se detecta
admitió como una alternativa a su antiguo criterio fiebre igual o mayor de 38,3 ºC en varias ocasiones
“una semana de investigación ambulatoria intensi- y que tras 3 días de estudio no se aclara el diagnós-
va e inteligente”. tico (incluye 2 días de cultivos microbiológicos).

501
POSIBLES CAUSAS DE FIEBRE DE ORIGEN de investigación iguales para todos los enfermos, por
DESCONOCIDO lo que se impone una individualización que depen-
de en gran medida de un buen juicio clínico, que
Enfermedades infecciosas Colagenosis-vasculitis
evitará la realización innecesaria de numerosos es-
Abscesos abdominales y Arteritis de células gigantes. tudios complementarios, algunos de ellos caros,
pélvicos. Vasculitis por hipersensibi- molestos y no exentos de riesgos.
Infección de vías biliares. lidad. De todas formas, es lógico que deba existir un
Tuberculosis miliar y Lupus eritematoso diseminado.
orden en el estudio de los pacientes, pero no es preci-
extrapulmonar. Enfermedad de Still.
Endocarditis infecciosa. Poliarteritis nudosa. so realizarlos todos; deben ser seleccionados tenien-
Enfermedad pélvica do en cuenta el contexto clínico y epidemiológico,
inflamatoria. Otras además del estado del enfermo.
Osteomielitis.
Se debe comenzar con un estudio básico de labo-
Infección por Cytomega- Sarcoidosis.
lovirus. Tiroiditis subaguda. ratorio, que incluya: hemograma completo, eritro-
Infección por virus de Colitis ulcerativa idiopática. sedimentación, examen parcial de orina, proteína C
Epstein-Baar. Enfermedad de Crohn. reactiva, título de ASO, electroforesis de proteínas,
SIDA. Microembolismos pulmo- urocultivos, coprocultivos y hemocultivos (3 mues-
Paludismo. nares.
tras de sitios diferentes); heces fecales, prueba de
Micosis profundas. Fiebre medicamentosa.
Mantoux, gota gruesa, factor reumatoideo, ANA,
Neoplasias VIH y estudios imagenológicos; rayos X de tórax y
ecografía abdominal y cardíaca.
Linfomas.
En una segunda etapa, después de la reevaluación
Leucemias.
Tumores hepáticos. clínica del enfermo, se deben indicar otros estudios
Cáncer del colon. inmunológicos, hacer TAC y RMN en dependencia
Hipernefroma. del criterio médico, medulograma con medulocultivo
Metástasis.
y estudios biópsicos y laparoscópicos; en algunos
Cáncer del páncreas.
casos habrá que llegar a exámenes con radioisótopos
El abordaje diagnóstico de una FOD se basa en y angiográficos.
los 4 principios ya señalados para el síndrome febril Siguiendo estos pasos, la mayoría de las veces el
en general; no obstante, en este tipo de pacientes resultado final será el éxito en la búsqueda etiológica
hay particularidades que los caracterizan. No es po- y la instauración de la terapéutica correspondiente a
sible ni factible la creación de patrones o protocolos la enfermedad descubierta.

502
63
INFECCIÓN NOSOCOMIAL

Desde el surgimiento de la medicina, ésta enfrentó medad, fue capaz de identificar una diferencia, en
un obstáculo que aún le ha sido imposible vencer en apariencia insignificante, entre las dos salas de Obs-
su totalidad: la infección. Las enfermedades infec- tetricia: los partos en la sala con mortalidad baja eran
ciosas siguen constituyendo un capítulo importante atendidos por parteras, mientras que en la de alto
de la patología y de ellas, la historia de las infeccio- riesgo los llevaban a cabo estudiantes de medicina y
nes nosocomiales (IN), es decir, de aquellas origi- médicos; además, esta sala se hallaba al lado de la
nadas durante el proceso asistencial hospitalario en dedicada a las autopsias. Al analizar estos hechos,
su forma endémica o epidémica, es tan antigua como llegó a la conclusión de que las manos contamina-
la historia del hospital, y han existido desde el mo- das, “no lavadas” de estudiantes y médicos que se
mento en que por primera vez se agrupó a los enfer- trasladaban desde la sala de necropsias a la de par-
mos para proporcionarles los cuidados necesarios. tos, eran los vehículos potenciales para trasmitir la
No obstante, aunque en la actualidad se conside- infección a las pacientes. Semmelweis insistió en-
ra que el hospital es una institución asistencial, do- tonces en que el personal sanitario se lavara las ma-
cente y de investigación donde se aplican los nos después de las necropsias y antes de examinar a
servicios diagnósticos y terapéuticos más modernos, cada enferma. De inmediato, la mortalidad en la sala
también constituye un sitio peligroso para los en- de riesgo se redujo a cifras inferiores a las de la otra
fermos, porque el desarrollo de la tecnología médi- sala.
ca implica riesgos, de los cuales el más grave es la Por tanto, la investigación sobre sepsis puerperal
aparición de infecciones intrahospitalarias, cuyo de este médico húngaro en el siglo XIX constituye,
estudio sistemático se inició en los años 50 del pa- sin dudas, el primer ejemplo histórico de la vigilan-
sado siglo, primero con un enfoque descriptivo y cia moderna de estas infecciones. Así, se considera
después con investigaciones multicéntricas que po- a Semmelweis como el iniciador de la campaña para
sibilitaron el diseño de programas específicos para controlar las sepsis en los hospitales, y todavía, en
su prevención y control. los inicios del siglo XXI, sigue siendo válida su insis-
Cuando en la Edad Media se crearon por primera tencia en el lavado de manos de todos los que pro-
vez hospitales en Europa, eran principalmente si- porcionan cuidados asistenciales, ya que son
tios para moribundos y al ser las instalaciones pri- vehículos potenciales para trasmitir los agentes
mitivas, las infecciones se diseminaban con facilidad patógenos.
de un paciente a otro y los hospitales adquirieron la
despreciable apreciación de “casas de peste”. La infección nosocomial como
En tales circunstancias, a mediados del siglo XIX,
un médico húngaro, Ignaz Phillip Semmelweis, en-
problema de salud
contró que la mortalidad en las dos salas de Obste- La IN representa un problema de salud debido a su
tricia (que tenían características similares) del elevada frecuencia, prolongada estadía, consecuen-
Hospital General de Viena, era muy diferente y que cias fatales y alto costo hospitalario, que permite
esto se debía a la sepsis puerperal. Y aunque medir la eficiencia de un hospital junto a otros indi-
Semmelweis enunció sus hallazgos antes de formu- cadores de morbilidad, mortalidad y aprovechamien-
larse la teoría de los gérmenes como causa de enfer- to de recursos.

503
Por estas razones, en fecha reciente la OMS reco- dida de prestigio de la institución y disminución de
noció que las IN constituyen un problema de salud la clientela.
pública internacional importante y las tasas de in- Estadísticas internacionales reflejan, en sentido
fección intrahospitalaria (IIH) representan un indi- general, que las infecciones respiratorias generan una
cador sensible de la calidad asistencial, de manera mortalidad directa estimada en 5 a 10 %, con 8 días
tal, que determinados niveles de infección deben con- adicionales de hospitalización por IN, mientras que
siderarse como un resultado inadecuado de la es- las infecciones del torrente sanguíneo contribuyen
tructura y organización hospitalarias, ya que los de manera directa a la muerte en un 25 % aproxima-
errores en el control de estas infecciones parten del damente y originan alrededor de 14 días de sobrees-
desconocimiento de la Unidad de sus propios pro- tancia hospitalaria, lo cual da una idea de su
blemas y de la forma de enfrentarlos, lo cual se re- magnitud.
duce de manera significativa en la medida en que la Un problema relacionado con las IIH que no ha
gerencia hospitalaria consolide el programa de con- sido estudiado lo suficiente es el de las infecciones
nosocomiales múltiples (INM), por lo que se carece
trol de las IN.
de datos sobre sus características epidemiológicas
Se estima que en los EE.UU., por cada 100 ingre-
más importantes. Este término se refiere a la pre-
sos en un hospital de cuidados agudos ocurren de 5
sencia de dos o más infecciones en el mismo pa-
a 8 infecciones nosocomiales, lo que origina de 2
ciente y algunas estadísticas reportan que las INM
a 4 millones de esta eventualidad por año. Algunas
representan cerca del 11 % de todas las IN que apa-
IIH son más notables que otras, pero consideradas
recen en los hospitales y suelen prevalecer en pa-
en su conjunto, se estima que requieren más de 6 cientes mayores de 60 años, en particular las
millones de días de permanencia adicional en un infecciones dobles procedentes de servicios quirúr-
hospital al año y contribuyen a la mortalidad de nu- gicos, UCI y hemato-oncología; los principales mi-
merosos pacientes. crorganismos aislados son las enterobacterias y el
Se calcula que el costo directo anual de las IN en género estafilococo.
los EE.UU. sobrepasa los 1 000 millones de dólares
y los costos indirectos podrían doblar esta cifra; sue- Concepto
len originar un promedio de 1,3 a 26,3 días adicio- Se denomina IIH o IN a aquella que no estaba pre-
nales de hospitalización, que junto al elevado sente en el período de incubación en el momento
consumo de medicamentos, obliga a invertir más del ingreso en el hospital, que se manifieste clínica-
de 1 000 millones de pesos en el país por este con- mente, o sea, descubierta por la observación duran-
cepto. Aun en países desarrollados, alrededor del 6 te la cirugía, procederes diagnósticos o esté basada
a 7 % de los pacientes ingresados adquieren una IN en el criterio clínico. Se incluyen aquellas que por
y el 3 % de ellas constituyen causa directa de muerte. su período de incubación aparezcan con posterioridad
En nuestro país, la Dirección Nacional de Hospi- al alta del paciente y se relacionen con los procede-
tales propuso en marzo de 1997 una tasa de IIH en- res o actividad hospitalaria (lo cual es relativamente
tre 4,5 y 7 %, y para los principales servicios, en frecuente en las infecciones de la herida quirúrgi-
Medicina, 2,7 a 3,2 %; Cirugía 3,0 a 4,0 % y en ca), así como las que tienen que ver con los servi-
UCI/UCIM, 4,5 a 10,9 %. Sin embargo, la aparición cios ambulatorios.
de una IIH no indica por sí sola que el hospital o el Debe tenerse en cuenta la posibilidad de una IN
personal sanitario sean responsables de ésta, ya que presente desde el mismo momento del ingreso, si
muchas de ellas no son evitables, pero los proble- está vinculada de forma directa con un ingreso
mas medicolegales surgen cuando se demuestra que previo.
en la institución se actuó con negligencia respecto Excepto en pocas situaciones especiales que se
al cumplimiento de las normas adecuadas de su cui- señalarán más adelante, no se toma un tiempo espe-
dado, lo cual en países capitalistas representa un se- cífico durante o después de la hospitalización para
rio problema económico, pues las IN determinan determinar si una infección debe ser confirmada
procesos legales de indemnización, tanto en clíni- como intrahospitalaria si existe evidencia que la re-
cas privadas como en hospitales estatales, con pér- lacione con la hospitalización.

504
Por otro lado, no se considera IIH aquella que se las corynebacterias. Un problema reciente es la par-
asocia con complicación o extensión de infecciones ticipación de los hongos en las IN, en especial del
presentes al ingreso, a menos que un cambio de agen- género Cándida, cuya identificación como patóge-
te patógeno o de síntomas sugiera la adquisición de no oportunista es cada vez más frecuente, sobre todo
una nueva infección. Se estima IN la que se presen- en UCI, en sujetos con nutrición parenteral e inmu-
ta en el recién nacido como resultado del paso por el nosuprimidos.
canal del parto, pero no es así aquella infección que Un agente con particular relevancia actual y futu-
es conocida o está probado que haya sido adquirida ra es el Mycobacterium tuberculosis, dado el incre-
por vía trasplacentaria (herpes simple, toxoplasmo- mento de casos de tuberculosis —como enfermedad
sis, rubéola, Ciytomegalovirus, sífilis) y que comien- reemergente— en pacientes con inmunosupresión,
za precozmente tras el nacimiento. sobre todo con SIDA y otras causas, lo cual repre-
De no tenerse en cuenta estas particularidades, se senta un grave riesgo dentro del hospital.
pueden introducir datos no fidedignos en la medi- En la década de 1990 y hasta el momento actual,
ción de este indicador. el médico enfrenta IIH por agentes multirresistentes
con altísima mortalidad, de todo lo cual se infiere
Epidemiología que aquéllas han cambiado en respuesta a los ade-
Los patógenos de mayor prevalencia en las IN han lantos científicos y tecnológicos de la medicina y,
variado como consecuencia de muy diversos facto- por tanto, su frecuencia ha estado ligada al desarro-
res a lo largo de las pasadas décadas. La bibliogra- llo de la atención hospitalaria, de forma tal, que se
fía médica de los siglos XVIII y XIX contiene establece una relación directa entre esta complica-
descripciones de infecciones de heridas que alcan- ción y la incorporación de procedimientos diagnós-
zan el 50 % o más, debidas por lo general a estrep- ticos y terapéuticos cada vez más invasivos.
tococos y estafilococos. La introducción de la De esta manera, la tecnología capaz de salvar la
penicilina en 1941 controló las infecciones por es- vida, sobre todo los numerosos implementos utili-
treptococos, pero los estafilococos se hicieron resis- zados, como tubos endotraqueales, endoscopios y
tentes a este fármaco y a toda una serie de catéteres intravasculares, sondas intracraneales, dre-
antimicrobianos introducidos en los años siguien- najes de heridas quirúrgicas y sondaje vesical, así
tes. Por tanto, las IN en los decenios de 1950 y 1960 como el envejecimiento de la población y el incre-
fueron casi sinónimos de infección estafilocócica y mento de las intervenciones médicas y quirúrgicas
se produjo un incremento alarmante de sepsis agresivas, que incluyen trasplantes de órganos, im-
globales pandémicas graves por Staphylococcus plantación de cuerpos extraños y xenotrasplantes y
aureus en unidades quirúrgicas y pediátricas de nu- el uso de poderosos inmunosupresores, han creado
merosos hospitales americanos y europeos. una cohorte de personas en extremo susceptibles que,
Por razones no claras, en 1970 disminuyó el pre- entre otros factores, pueden considerarse como es-
dominio de gérmenes grampositivos, sobre todo S. padas de doble filo, ya que amplifican el potencial
aureus, como agentes etiológicos de IIH, y los mi- de colonización por patógenos nosocomiales e in-
crorganismos gramnegativos llegaron a ser los prin- crementan de forma significativa la vulnerabilidad
cipales patógenos nosocomiales, en particular E. coli, para la infección. Así, los tres gérmenes grampositi-
P. aeruginosa y el grupo Klebsiella, Enterobacter y vos nosocomiales más comunes en la última déca-
Serratia. da: S. aureus, estafilococo coagulasa negativa y
En la década de 1980 hubo otro cambio: resur- enterococos, acumularon el 34 % de las IIH, y los
gieron los cocos grampositivos, estafilococos en cuatro principales gramnegativos: E. coli, P. aeru-
general (ahora resistentes a la meticillina e incluso a ginosa, Enterobacter spp y Klebsiella pneumoniae,
la vancomicina) y enterococos, como los agentes representaron el 32 % de éstas.
predominantes en enfermos con dispositivos, próte- Además, en los últimos 30 años se han desarro-
sis y líneas vasculares, y en pacientes quirúrgicos e llado unidades especializadas de alto riesgo, como
inmunosuprimidos; así como gérmenes previamen- las de Hemodiálisis y Trasplante renal, Neonatolo-
te inocuos o contaminantes de rutina, tales como los gía, etc.; pero sobre todo las UCI/UCIM, donde se
estafilococos coagulasa-negativa mucus-positivo y concentran los enfermos más graves e inestables en

505
sus constantes fisiológicas y en las cuales la IIH mal a los microrganismos; el uso a veces indis-
adopta características específicas con un riesgo ma- criminado de los antimicrobianos favorece la
yor de complicación y muerte. La medicina del pa- aparición de gérmenes resistentes a los antibió-
ciente crítico se ha vuelto equivalente a medicina de ticos utilizados y, por tanto, son más difíciles
alta tecnología con monitorización hemodinámica y de combatir. Por otro lado, todo procedimiento
metabólica meticulosa de líquidos y electrólitos, invasor, sea diagnóstico o terapéutico, aumen-
apoyo ventilatorio con equipos complejos, nutrición ta el peligro de infección porque viola la barre-
parenteral o enteral, hemodiálisis, monitoreo de la ra cutánea o mucosa a la invasión microbiana
presión intracraneal, etc; además, un gran número y permite la presencia de cuerpos extraños, con
de estos individuos padecen enfermedades subya- las consecuencias que de ello se derivan. No
centes que comprometen la resistencia del huésped obstante, los riesgos varían según el grado de
junto a los cambios de la flora que acompañan a las invasividad.
afecciones graves o son condicionadas por el uso a 3. Exposición del sujeto a un ambiente hospitala-
veces indiscriminado de antimicrobianos que pre- rio. Por supuesto que esto implica una mayor
disponen al enfermo a la colonización por micror- posibilidad de contacto con bacterias patógenas
ganismos multirresistentes o afectan los mecanismos provenientes de este medio, de otro paciente o
de defensa del huésped. Esto trae como resultado del propio personal sanitario.
que la tasa de IN en adultos y niños atendidos en las
UCI es de forma aproximada tres veces mayor que
Estos factores de riesgo se clasifican, a su vez,
en otros servicios. Los pacientes en esas unidades
en intrínsecos y extrínsecos.
son específicamente vulnerables a sufrir bacteriemias
primarias, la mayoría vinculadas a un acceso vascu-
Factores intrínsecos
lar, o relacionadas con intubación endotraqueal y
• Edades extremas (neonatos o mayores de 60
ventilación mecánica; infecciones intrabdominales
años).
secundarias a cirugía o traumatismo e infecciones
• Enfermedades neoplásicas.
del tracto urinario de origen micótico, sobre todo por
Candida. • Diabetes mellitus.
• Enfermedad respiratoria crónica.
Factores predisponentes • Malnutrición por defecto o por exceso (desnu-
trición u obesidad).
Los factores que determinan el riesgo de un pacien-
te para adquirir una IIH, se agrupan en tres catego- • Enfermedades hematológicas (sobre todo ane-
rías principales: mia).
• Enfermedades neurológicas.
1. Resistencia inherente del individuo a la infec- • Malformaciones anatómicas y desórdenes fun-
ción. Está condicionada por características de cionales.
edad, sexo, estado nutricional, naturaleza y gra- • Quemaduras.
vedad de la enfermedad subyacente e integri- • Herida traumática.
dad de los mecanismos de defensa del huésped • Otras.
ante la infección, en particular de la piel y
mucosas. Factores extrínsecos
2. Modificación de la susceptibilidad intrínseca • Alteración (accidental o yatrogénica) de la piel
del paciente por las manipulaciones diagnós- y mucosas.
ticas y terapéuticas que recibe. Los tratamien- • Tratamientos previos (antibioticoterapia, citos-
tos farmacológicos pueden elevar el riesgo de táticos, corticoterapia, radioterapia).
infección; por ejemplo, la quimioterapia del • Sondaje vesical y otras instrumentaciones del
cáncer elimina casi todos los neutrófilos circu- tracto genitourinario.
lantes en el enfermo; los regímenes de inmu- • Vías de acceso intravascular (aguja metálica,
nosupresión utilizados en el trasplante de trócar, mocha, catéter venoso o arterial, veno-
órganos anulan la respuesta inmunológica nor- disección).

506
• Ventiloterapia (catéter para oxígeno, nebuliza- Modos de trasmisión
dor, aerosol, ventilación mecánica, intubación Los patógenos nosocomiales se encuentran en obje-
endotraqueal, bolsa con máscara). tos tanto animados como inanimados del entorno
• Encamamiento. hospitalario; sin embargo, la contaminación del
• Diálisis peritoneal, hemodiálisis o ambas. medio inanimado hospitalario no contribuye de for-
• Transfusiones. ma apreciable al desarrollo de las IN, y sí ha aumen-
• Intervención quirúrgica. tado de manera relevante la incidencia de la
• Otros procederes diagnóstico-terapéuticos ta- participación de dispositivos médicos contaminados;
les como: inyección intramuscular; punción éste es un riesgo que se puede contrarrestar con el
lumbar, abdominal, pleural, pericárdica; tra- desarrollo de protocolos para su desinfección apro-
queostomía; endoscopias como laparoscopia, piada.
cistoscopia, etc. De esta forma, el entorno animado del hospital es
la fuente principal de IN, y está constituido por los
Aparte de los factores descritos, existe una serie pacientes y quienes los atienden, de ahí que el modo
de elementos epidemiológicos secundarios que ac- de trasmisión más frecuente de éstas es el de perso-
túan como cofactores: na a persona, y el contacto estrecho que implica el
cuidado del enfermo tiene a veces como resultado
• La administración inadecuada de antimicrobia- un intercambio mutuo de la flora microbiana. Por
nos debida a profilaxis incorrecta, su utiliza- ejemplo, un patógeno clásico de hospitales es Sta-
ción en procesos virales y la tendencia al phylococcus aureus, mucho más común en el perso-
empleo de antibióticos novedosos. Esta pres- nal hospitalario que en la población general; estos
cripción inadecuada trae como consecuencia “estafilococos de hospital” son más resistentes a los
dos hechos negativos: el cambio ecológico den- antibióticos que el estafiloco dorado adquirido en la
tro de la flora comensal del paciente y la apari- comunidad con gran capacidad virulenta.
ción de microrganismos resistentes, así como Se acepta que las IN pueden tener un origen en-
dógeno, cuando el paciente contrae la infección a
la inducción per se de IN.
partir de su propia flora, y uno exógeno, en el cual
• La violación de las medidas principales de asep-
los microrganismos proceden de otra fuente distin-
sia y antisepsia, cuyo buen cumplimiento in-
ta al propio enfermo.
fluye en la interrupción de los mecanismos de
De esta forma, el contacto directo a través de las
trasmisión, y el ejemplo principal lo constitu-
manos sigue siendo el medio de diseminación más
ye el lavado de manos por parte del personal
común de agentes infecciosos a los enfermos (de ori-
sanitario entre pacientes y después de cualquier
gen exógeno). En ocasiones los patógenos provie-
maniobra, medida de eficacia demostrada des-
nen de la flora de quien cuida al paciente. A veces,
de hace más de 100 años. las manos de enfermeras y médicos se contaminan
• La infraestructura sanitaria, ya que el diseño de forma pasajera cuando atienden a una persona, y
arquitectónico debe evitar la aparición de si- a continuación llevan los gérmenes al siguiente en-
tuaciones que favorezcan el desarrollo de IN. fermo, lo cual se denomina “infección cruzada”.
• Insuficiencia de personal y de recursos, pues Éstos son los medios de diseminación de la flora
en situaciones de urgencia o de sobrecarga de grampositiva de la piel (S. aureus y S. epidermidis),
trabajo puede ser difícil simultanear éste con bacilos gramnegativos (Enterobacter y Serratia) y
una buena práctica de las normas de preven- algunos virus (Sincitial respiratorio, rotavirus). De
ción y control de las infecciones, particularmen- todo lo cual se infiere, que la medida más eficaz para
te si existe cambio frecuente o constante de interrumpir la trasmisión consiste en el lavado de
personal (en especial de enfermería), de modo las manos, lo cual debe ser considerado en el diseño
tal que nunca se llegue a disponer de un equipo constructivo de los hospitales, así como la disponi-
multidisciplinario entrenado en el cuidado de bilidad de desinfectantes específicos, sobre todo en
dichas normas. áreas de alto riesgo.

507
El papel de algunos virus debe ser siempre valo- la clínica clásica del síndrome miccional, define la
rado, sobre todo por el peligro que implica su tras- condición de IVU, aunque ésta sólo aparece en el 25
misión para el personal sanitario y los pacientes, a 35 % de los enfermos sondeados. En los casos asin-
como es el caso del virus de la hepatitis A, B y C, tomáticos, la presencia de piuria ayuda a diferenciar
infección por VIH y virus sincitial respiratorio, que la infección de la mera colonización.
tienen sus modos particulares de trasmisión. El diagnóstico se basa en el cultivo de la orina,
Otros microrganismos de gran capacidad pato- obtenida de forma adecuada, que en el paciente con
génica son las pseudomonas en general y la P. aeru- sonda se debe recoger mediante punción del catéter
ginosa en particular, debido a que son capaces de vesical. Un conteo mayor de 100 000 unidades
sobrevivir con un mínimo de requerimientos nutri- formadoras de colonias de un solo germen por
cionales, lo que les permite desarrollarse, incluso, mililitro de orina en ausencia de sonda vesical, es
en agua destilada. Estas características hacen factible indicativo de infección. En enfermos con sonda
que colonicen jabones y soluciones desinfectantes, vesical, conteos inferiores de colonias/ml pueden
por lo cual representan un peligro en la inhaloterapia. tener el mismo significado, e incluso, se suelen en-
Algunos brotes debidos a infección por Legionella contrar bacteriurias polimicrobianas hasta en un 15 %
o Aspergillus constituyen ejemplos donde el ambien- cuando la muestra de orina se obtiene con una técni-
te inanimado general de un hospital suele ser foco ca aséptica.
de IN. Legionella puede multiplicarse en agua ca- El sondaje vesical forma parte del cuidado médi-
liente y se le encuentra en regaderas, tinas y reser- co estándar y en la actualidad, a más del 10% de los
vorios de agua en los hospitales infectando a los pacientes ingresados se les indica una sonda vesical
pacientes por el aerosol de agua contaminada y cuya en algún momento de su estancia hospitalaria. Tan-
erradicación de los sistemas institucionales de agua to en enfermos agudos como crónicos, ésta es res-
requiere el tratamiento con altas concentraciones de ponsable del 80 % de las IVU nosocomiales, y un 5
cloro o por calentamiento a elevadas temperaturas. a 10 % adicional ocurre tras otras manipulaciones
Con respecto a Aspergillus, sus conidias se dis- del tracto genitourinario.
persan en el ambiente y los humanos se infectan al Los factores que predisponen al desarrollo de esta
inhalarlas, sobre todo los inmunosuprimidos. La tras- infección y que definen un grupo de población, hos-
misión aérea, aunque no es un factor significativo pitalizada o no, con alto riesgo de IVU, son intrínse-
en la diseminación de patógenos en el hospital, ha cos y extrínsecos. Entre los primeros figuran: sexo
producido brotes ocasionales de varicela y tubercu- (mayor riesgo en el femenino), edad, enfermedad
losis; esta última es en particular importante ante la de base, historia de infecciones urinarias previas y
posibilidad de que se trate de cepas multirresistentes, colonización del meato uretral. Los extrínsecos in-
en general asociadas a la infección por VIH. cluyen el sondaje vesical y otras instrumentaciones
vesicouretrales.
Tipos de infección nosocomial La magnitud de la IVU nosocomial es aún mayor
De las IN más comunes, se abordarán los principa- en ancianos internados en asilos, centros de rehabi-
les aspectos referentes a su definición, epidemiolo- litación y unidades de cuidado prolongado donde se
gía, diagnóstico, tratamiento y profilaxis. atienden pacientes neurológicos con secuelas de en-
fermedad cerebrovascular o paraplejía. De ahí que
Infección de las vías urinarias (IVU) exista un 10 o 20 % de IVU de “aparición espontá-
La IVU nosocomial es la más frecuente de las infec- nea”, que está relacionada con los factores predis-
ciones adquiridas en el hospital y representa cerca ponentes señalados como intrínsecos.
del 40 % de éstas. La sonda vesical es un sitio de adherencia y per-
El término de bacteriuria se refiere a la coloniza- sistencia bacteriana, la cual destruye la capa de
ción del tracto urinario por bacterias, sin invasión mucopolisacáridos que recubre la vejiga, daña el
hística y por definición, estos pacientes no presen- revestimiento epitelial de la pared vesical e induce
tan síntomas. La aparición de éstos, que reflejan la una reacción inflamatoria, además de impedir un
participación inflamatoria de la vejiga o riñones con vaciamiento vesical completo.

508
Aunque las INVU suelen ser asintomáticas o le- Bacteriemia
ves, curan con poco o ningún tratamiento después La bacteriemia se define como la presencia de bacte-
de extraer la sonda y sólo prolongan en 1 o 2 días la rias en estado de multiplicación activa en el torrente
estancia en el hospital, son importantes porque en sanguíneo, con liberación de productos tóxicos para
ocasiones se agravan y 1 de cada 200 infecciones de el huésped y capacidad de producir infecciones en
este tipo da lugar a bacteriemia, y además, porque diversos órganos y sistemas. La bacteriemia noso-
muchas de ellas son causadas por cepas de bacterias comial representa el 3 a 5 % de todas las sepsis
resistentes a los antibióticos. La mortalidad global adquiridas en el hospital, pero también son las más
es baja (menor de 3 %). graves, con una alta mortalidad, que llega a ser
Los microrganismos más frecuentes en la IVU del 25 al 60 %.
nosocomial son: E. coli, enterococos, especies de Las bacteriemias nosocomiales son: a) secunda-
pseudomona y Enterobacter (Klebsiella). En los rias a un foco específico de infección reconocido en
enfermos debilitados y con sonda vesical permanen- el paciente (cerca del 70 %), cuyos sitios más fre-
te, se encuentran estafilococo coagulasa negativo, cuentes son: infección quirúrgica intrabdominal o
Morganella morganii y Candida albicans. de las vías urinarias, neumonía o infección de partes
Con respecto al manejo terapéutico de estos pa- blandas, y b) primarias, en las que no existe un foco
cientes, ante una infección urinaria espontánea es primario identificable por métodos clínicos y las
recomendable instaurar tratamiento. En el hospita- asociadas a dispositivos o catéteres intravascula-
lizado con sonda, éste está indicado si existe una res (30 % restante).
enfermedad de base que implique riesgo (neutrope- El cuadro clínico es similar al de toda bacterie-
nia, obstrucción de las vías urinarias o del sistema mia y tiene un comienzo súbito, con escalofríos, ta-
de drenaje, trasplante renal, etc.), o en caso de reti- quicardia, taquipnea, fiebre de 38,5 a 40 ºC y
rada del catéter, ya que resulta inefectivo tratar de manifestaciones encefálicas (sobre todo en el ancia-
erradicar la bacteriuria manteniendo la sonda, pues no), que de prolongarse puede llegar a un estado de
sólo conduce a la aparición de cepas más resisten- shock séptico, con hipotensión, oliguria y fallo or-
tes. La antibioticoterapia se basará en la experiencia gánico múltiple, cuya confirmación microbiológica
clínica y los agentes etiológicos aislados. se basará en el hemocultivo.
Las medidas básicas para la prevención de las IVU El diagnóstico clínico de la sepsis asociada a dis-
por sondaje vesical son las siguientes: positivos intravasculares constituye un problema
mayor. La vía intravenosa para la aplicación de me-
• Instalar sondas sólo cuando sea de estricta ne- dicamentos y soluciones se emplea hasta en el 30
cesidad y de calibre apropiado. a 50 % de los pacientes hospitalizados, y los catéteres
• Emplear técnicas correctas de inserción arteriales periféricos y pulmonares se utilizan con
aséptica, equipo estéril, fijación adecuada de gran frecuencia en el manejo de enfermos graves de
la sonda y sus cuidados de mantenimiento. las UCI, responsables de la tercera parte de las
• Utilizar sistemas de drenaje estériles y por com- bacteriemias nosocomiales. Con independencia del
pleto cerrados, siempre por debajo del nivel de tipo de implemento intravascular que sea usado, to-
la vejiga. dos tienen factores de riesgo comunes para la infec-
• Reducir el tiempo de permanencia de la sonda. ción, que son:
Valorar la cateterización intermitente (sobre
todo en sondeos prolongados). • Se pierde el mecanismo de defensa constituido
• Obtener las muestras para urocultivo con téc- por la piel íntegra.
nica aséptica. • Los microrganismos que forman parte de la
• Mantener el flujo de la orina libre de obstruc- flora cutánea normal del paciente y bacterias
ciones. adquiridas en el hospital, tienen un acceso al
• Hacer énfasis en el lavado de las manos inme- interior de la vena o arteria.
diatamente antes y después de cualquier mani- • La capacidad de algunas bacterias para adhe-
pulación de la sonda o de los componentes del rirse al material de la cánula o catéter les permi-
sistema de drenaje. te que evadan la acción de células fagocíticas,

509
factores bactericidas del suero o la acción de sí deberá instituirse en caso contrario o cuando per-
antibióticos, y así pueden diseminarse por el sista la fiebre.
torrente sanguíneo. Las medidas profilácticas para la bacteriemia no-
• El coágulo fibrinoleucocitario que se forma en socomial están dirigidas fundamentalmente a las re-
la vena o arteria sobre la superficie externa de lacionadas con los dispositivos intravasculares, para
la cánula o catéter suele infectarse no sólo por lo cual existen protocolos estrictos de enfermería;
microrganismos de la piel, sino también por no obstante, se hacen las recomendaciones siguien-
aquellos procedentes de infecciones a distan- tes:
cia o por líquidos o medicamentos previamen-
te contaminados que pasan a través de la cánula. 1. Emplear la vía endovenosa (EV) sólo con indi-
caciones diagnósticas o terapéuticas precisas.
Por tanto, al valorar a un paciente febril que sea 2. Guardar una asepsia rigurosa en la colocación
portador de un dispositivo o línea intravascular, de- de catéteres que contemple la adecuada elec-
ben tenerse en cuenta datos indirectos como flebitis
ción y preparación del punto de inserción; los
o inflamación en el sitio de inserción, ausencia de
procedimientos posteriores a su inserción, como
otros focos sépticos, émbolos pulmonares o distales
fijación y aplicación de apósito estéril para cu-
en caso de cateterismo arterial, sepsis “refractaria”
brir dicho sitio, el reemplazo de cánulas peri-
a la antibioticoterapia adecuada y resolución del pro-
féricas de plástico cada 48 a 72 h y su estrecha
ceso febril al retirar el catéter.
vigilancia en busca de complicaciones, son de
En la actualidad, la contaminación intrínseca de
rigor.
una línea intravenosa por el fabricante es bastante
3. Tener en cuenta los procedimientos especiales
rara; casi todos los episodios de sepsis relacionados
con venoclisis obedecen a contaminación extrínse- que deben llevarse a cabo para la inserción de
ca, es decir, son causados por patógenos que pene- catéteres cuyas puntas se localizan en los gran-
tran en el sistema durante su uso y el sitio principal des vasos centrales (catéteres centrales).
de infección es el de la canulación, el cual puede ser 4. Adoptar medidas que garanticen el manteni-
purulento y evidente la flebitis, o producirse una miento de los equipos de administración de so-
tromboflebitis supurativa. luciones, como son: los tubos de uso EV deben
Los agentes etiológicos más comunes en las renovarse cada 48 h y se cambiarán después de
bacteriemias nosocomiales son los bacilos gramne- la administración de sangre y sus derivados o
gativos, sobre todo las enterobacterias y especies de emulsiones de lípidos. Entre los cambios de
pseudomonas, seguidas de los cocos grampositivos, componentes, el equipo para uso EV debe man-
sobre todo S.aureus y S. epidermidis (coagulasa-ne- tenerse lo más hermético posible y en caso de
gativos), Pseudomona aeruginosa y otros bacilos infección o flebitis, se renovará todo el equipo
gramnegativos (Klebsiella, Enterobacter, Serratia); y la cánula de sitio.
Candida albicans puede identificarse en pacientes 5. Hacer énfasis en el lavado de las manos antes y
con nutrición parenteral o inmunosuprimidos. El después de toda instrumentación EV.
pronóstico depende de varios factores, como son: 6. Entrenar en especial a grupos de profesionales
tipo de microrganismo, estado previo y edad del que se dediquen al manejo de los equipos EV.
enfermo, aparición de complicaciones, repercusión
sistémica, idoneidad y precocidad del tratamiento y Neumonía nosocomial (NN)
la posibilidad de abordar el foco de origen cuando Ver epígrafe correspondiente en el capítulo “Neu-
corresponda. mopatías inflamatorias agudas con tuberculosas”.
La estrategia terapéutica se estudia en los capítu-
los correspondientes del libro. Cuando se asocia a Infecciones de heridas quirúrgicas (IHQ)
un catéter vascular, la principal conducta es su reti- A pesar del gran avance en la cirugía contemporá-
rada definitiva y la administración de antibióticos nea, la IHQ representa un grave problema para el
no es necesaria si aquél se retiró unas horas después paciente en el período posoperatorio, ocupa en casi
de iniciada la sintomatología y ésta ha cedido, pero todas las series publicadas el segundo lugar en

510
frecuencia y es una de las infecciones más costosas, 1. Edad mayor de 60 años.
cuyas consecuencias van desde molestias mínimas 2. Defensas generales del huésped disminui-
hasta la muerte. Las IHQ se dividen en incisionales das por enfermedades asociadas: cáncer,
y profundas. DM, desnutrición, obesidad, hipoproteine-
Se define como IHQ incisional aquella que ocurre mia, insuficiencia renal o hepática, inmuno-
en el sitio quirúrgico dentro de los primeros 30 días suprimidos en general.
después de la cirugía, que involucra piel, tejido ce- 3. Condiciones locales: presencia de hemato-
lular subcutáneo o músculos localizados por encima mas, seromas, cuerpos extraños, gasas, pró-
de la aponeurosis, y que presente cualquiera de las tesis, suturas, tejidos necróticos isquémicos
características siguientes: y macerados.
4. Existencia de otros tipos de infección que
• Secreción purulenta de la incisión o de algún no se hayan tratado o resuelto antes de la
drenaje colocado en el tejido subcutáneo. cirugía electiva, como enfermedad periodon-
• Aislamiento de microrganismos en el cultivo tal crónica, urosepsis, prostatitis crónica, etc.
de la secreción de la herida. 5. Cirugía de urgencia y la reoperación, debido
• Herida que el cirujano considera infectada por a que la mayor parte de estos tipos de ciru-
el juicio clínico, aun con cultivo negativo de la gía son contaminados o sucios, como la gas-
secreción. trointestinal, especialmente la del colon.
6. Estancia preoperatoria intrahospitalaria pro-
Se define como IHQ profunda aquella que longada, ya que los pacientes se exponen y
involucra los espacios y tejidos del área quirúrgica son colonizados por patógenos del hospital,
específica y se encuentran por debajo de la
más resistentes a los antimicrobianos.
aponeurosis, dentro de los primeros 30 días después
B. Factores relacionados con la cirugía:
de la cirugía si no se colocó ningún implante, o den-
1. La experiencia del cirujano, cuya habilidad
tro del primer año si se colocó aquél. Se define como
permitirá mejores técnicas quirúrgicas, lo
implante al cuerpo extraño de material sintético co-
cual se refleja en: menor traumatismo al te-
locado de modo permanente en el paciente durante
jido, mejor hemostasia, menos tiempo qui-
la cirugía, por ejemplo: prótesis articulares, vascu-
rúrgico, menor interrupción innecesaria del
lares, etc. Dichas heridas deben presentar cualquie-
riego sanguíneo, etc.
ra de las situaciones siguientes:
2. Condiciones generales de esterilización del
• Secreción purulenta del drenaje colocado por instrumental; arquitectura, control del aire,
debajo de la aponeurosis. limpieza, desinfección y capacidad del
• La herida se abre de manera espontánea o es quirófano; número de personas durante la
abierta deliberadamente por el cirujano cuan- intervención, entradas y salidas.
do el paciente tiene fiebre mayor de 38ºC o dolor 3. Medidas generales de higiene, en particular
localizado, aun con cultivo negativo de la se- las del equipo quirúrgico (lavado correcto
creción. de las manos, uso de guantes, mascarillas).
• Presencia de absceso o cualquier evidencia de 4. Extensión del procedimiento quirúrgico, su
infección observada durante los procedimien- sitio anatómico y clasificación de la herida
tos diagnósticos. quirúrgica según el grado de contaminación
• El cirujano diagnostica infección. bacteriana y el riesgo de infección, el cual
varía desde menos del 2 % en heridas lim-
La infección quirúrgica se inicia casi siempre en pias, pasando por las limpias contaminadas,
el quirófano. La adquirida en el posoperatorio es hasta el 30 % en heridas sucias.
menos frecuente e importante.
Los factores de riesgo que contribuyen a la IHQ, Respecto a los agentes etiológicos, cuando se tra-
se dividen en dos categorías: ta de infecciones exógenas son causadas por lo ge-
A. Factores relacionados con el huésped: neral por una flora monomicrobiana en la que

511
predominan: S. aureus y S. epidermidis, este último Otras infecciones intrahospitalarias
sobre todo si se usa material protésico; estreptoco- Otras localizaciones menos comunes de IIH com-
cos, Clostridium spp, P. aeruginosa, E. coli, entero- prenden: infección de la articulación o la cápsula
cocos, lo que depende en gran medida del órgano del espacio discal y vertebral, infección arterial o
que se opera. Cuando la infección es de origen en- venosa, endocarditis, miocarditis o pericarditis; me-
dógeno, es más usual que la produzca una flora diastinitis, onfalitis, endometritis (posparto, posce-
polimicrobiana que incluye gérmenes anaerobios y sárea), sepsis de la episiotomía y corioamnionitis
aerobios. aguda. En fecha reciente se ha reconocido la impor-
Las principales medidas para disminuir la IHQ tancia de la diarrea infecciosa nosocomial con fre-
cuencia secundaria a Clostridium difficile en el
comprenden:
adulto, como consecuencia de la antibioticoterapia;
pueden ocurrir epidemias de queratoconjuntivitis por
1. Establecimiento de un programa de vigilancia adenovirus que se suelen propagar a través de
prospectiva de heridas quirúrgicas, con infor- tonómetros o manos contaminadas de oftalmólogos,
mación periódica a cada cirujano de su frecuen- así como meningitis secundaria a la colocación de
cia de infección en cirugía limpia. La meta de derivaciones en los ventrículos cerebrales, entre
cualquier servicio quirúrgico debe ser reducir otras. Por otro lado, se debe mencionar que la expo-
el porcentaje de infección de heridas limpias a sición en el hospital a la sangre, hemoderivados y
menos del 1 %. otros líquidos corporales contaminados con el VIH
2. Métodos rigurosos de asepsia para pacientes y o el virus de la hepatitis B, han originado el riesgo
cirujanos. de adquirir éstas como infecciones nosocomiales.
3. Cuidados especiales en operaciones realizadas
Programa de Prevención y Control
en personas mayores de 60 años o con enfer-
medades subyacentes.
de las Infecciones Nosocomiales
4. Reducir la estancia preoperatoria. Realizar la La mayor parte de las instituciones no confecciona-
mayor parte de pruebas diagnósticas de forma ron un programa organizado y activo de control de
extrahospitalaria, ingresar al paciente el mis- las infecciones hasta la década de 1960, hecho que
resulta imprescindible para asegurar su acreditación.
mo día de la intervención y, si es posible, pre-
Un aspecto central del programa es la existencia de
ferir la cirugía ambulatoria.
un Comité de Control de Infecciones. En Cuba, des-
5. Preparación mecánica del tracto gastrointes- de la década del 70 comenzaron las primeras activi-
tinal. dades de investigación y control de las IIH, con la
6. Técnica quirúrgica de excelencia evitando la introducción progresiva de la Enfermería de Vigi-
contaminación de los tejidos. lancia Epidemiológica.
7. Tiempo quirúrgico tan breve como lo permita En 1983 se creó un Grupo Técnico Nacional Ase-
una técnica meticulosa. sor. En enero de 1996, la Dirección Nacional de Epi-
8. Uso adecuado de antibióticos profilácticos por demiología del MINSAP y la Carpeta Metodológica
lapsos breves (a menudo no más de 24 h), que del Ministro, culminaron con la actualización de di-
sean eficaces contra los patógenos más proba- cho programa.
bles en el sitio quirúrgico y que se administren El Comité de Prevención y Control de las Infec-
ciones Intrahospitalarias es el órgano del hospital
en dosis efectivas y en el momento más opor-
que organiza, dirige y controla las actividades que
tuno, lo cual origina poca toxicidad farmaco-
se desarrollan para el cumplimiento del programa
lógica y menos resistencia bacteriana. No de prevención y control de las IIH. Está subordina-
obstante, los antibióticos profilácticos nunca do al Consejo de Evaluación de la Calidad; sus miem-
podrán sustituir la pericia en la técnica quirúr- bros son representantes de la administración del
gica, en la selección del paciente y en el proce- hospital y de las diferentes disciplinas profesiona-
dimiento quirúrgico que se va a realizar, así les, preferiblemente deben ser permanentes y con
como en el manejo médico posoperatorio. interés o dedicación personal a la tarea. El Comité

512
debe garantizar el cumplimiento de un conjunto de 3. Estudio de los informes sobre susceptibilidad bac-
acciones de índole organizativa, de investigación, teriana, revisión del empleo de los antimicrobianos
control y prevención, normativas y de docencia y y valoración de los patrones de resistencia a ellos
formación. En la actualidad, una parte importante del gasto hos-
Una vez organizado, este Comité tendrá las si- pitalario se atribuye al empleo de antimicrobianos,
guientes funciones: ya que de forma aproximada 1 de cada 2 pacientes
hospitalizados recibe uno o más antibióticos y el ries-
1. Vigilancia epidemiológica de las IIH go de usarlos de manera indiscriminada conduce a
Es el conjunto de técnicas que tiene como objeto la la aparición de organismos resistentes. Precisamen-
detección de los casos y el estudio de su distribu-
te, la resistencia antimicrobiana ha sido un hallazgo
ción en el hospital, así como de las circunstancias y
de capital importancia en las IN y es motivo de
factores que influyen de manera positiva o negativa
preocupación mundial. El Comité puede hacer una
en su producción. A través de este sistema de vigi-
serie de recomendaciones prácticas útiles, al elegir
lancia, cada hospital podrá conocer sus niveles endé-
micos de infección; el patrón de los microrganismos una terapéutica frente a un proceso infeccioso de-
causales de las infecciones (circulación de gérme- terminado a través de la educación continuada y la
nes de IN) y su resistencia a los antimicrobianos; revisión crítica periódica de la utilización de anti-
podrá evaluar las tareas de control y obtener de for- bióticos, que incluye la información adecuada a los
ma periódica los siguientes indicadores: tasa de IN profesionales sobre el mapa microbiológico o circula-
global del centro y por servicios o áreas, de infec- ción de gérmenes por servicio y hospital, la suspen-
ción quirúrgica (en cirugía limpia y por cirujano), sión automática o reposo de determinado fármaco
distribución porcentual de las infecciones según las por un período de tiempo, etc.
principales localizaciones y porcentaje de los más Todos los procederes relacionados con el desarro-
importantes patógenos aislados. llo potencial de infecciones (colocación de catéteres
o sondajes, circulación en quirófanos, lavado de ma-
2. Investigaciones epidemiológicas, así como el es- nos, esterilización y desinfección de equipos, etc.),
tudio y control de brotes y epidemias intrahospita- deben ser revisados y aprobados por el Comité.
larios
Un brote de IIH consiste en la aparición de dos o 4. Establecimiento de programas de educación con-
más casos en una sala, servicio o institución de sa- tinua
lud que guarden relación entre sí, que se comprue- 5. Formulación de recomendaciones al nivel supe-
be que son producidos por un agente común en un rior que corresponda, el cual las estudia y hace a su
período determinado de tiempo y que excede los lí-
vez las proposiciones pertinentes a la dirección del
mites de incidencia habitual. Si éste incluye un nú-
hospital
mero elevado de casos, se convierte en una verdadera
Aunque la erradicación de las IN es prácticamente
epidemia. La detección precoz, la investigación de
imposible, la existencia de programas efectivos y
sus causas, así como las recomendaciones de las me-
didas que se deben tomar, competen al equipo de seguros de prevención y control de éstas, conduce a
control de infecciones con el apoyo especial de la una reducción significativa en los índices de IIH,
administración, ya que por definición, todas las epi- que oscila entre 30 y 40 %, y si bien constituye un
demias intrahospitalarias son evitables, y la mayo- requisito legal en algunos países, se debe exigir como
ría de las veces se relacionan con bacteriemias y garantía de calidad asistencial en cualquier hospital
septicemias. del mundo.

513
64
TÉTANOS

Concepto ca; la espora tetánica resiste la ebullición y sólo es


destruida por el calor húmedo a presión (autoclave
El tétanos es una enfermedad aguda producida por
a 120 ºC).
la tetanospasmina, poderosa neurotoxina elaborada
El bacilo elabora una exotoxina extremadamente
por Clostridium tetani cuando prolifera en medios
potente, de gran peso molecular y de naturaleza
anaerobios en el sitio de una lesión, y que se carac-
teriza por la presencia de espasmos musculares muy proteica denominada tetanospasmina, que es la res-
intensos e intermitentes y de una marcada rigidez ponsable de las manifestaciones clínicas, y una
generalizada. hemolisina sin importancia clínica. Desde el punto
de vista antigénico, se han podido catalogar unas diez
Historia especies de bacilos tetánicos, pero la toxina es la
misma para todas las especies.
Esta afección se conoce desde los primeros tiempos
Además de los sitios mencionados, el bacilo
de la humanidad y ha sido identificada con facilidad
tetánico se encuentra en el polvo de la calle, en el
en todas las épocas por su síntoma predominante en
la mayoría de los casos: el trismo (contracción tóni- aire, en el interior de las casas, en los objetos conta-
ca de los músculos masticadores, que produce la minados con heces de animales o humanos, en la
oclusión forzosa de la boca). De naturaleza desco- superficie corporal de las personas y de los animales
nocida, la enfermedad fue considerada como con- e incluso en quirófanos, etc. Contrasta la relativa
secuencia frecuente de los traumatismos de guerra, rareza del tétanos con la ubicuidad de su agente etio-
hasta que Nicolaier demostró su carácter infeccio- lógico. Las condiciones de anaerobiosis tal vez ex-
so (1884) y Kitasato, unos años más tarde, logró pliquen este hecho, ya que se necesitan requisitos
aislar y cultivar su agente causal. particulares para la colonización y desarrollo del
Trabajando con la toxina tetánica, Behring des- bacilo en el organismo. De todos modos, la enfer-
cubrió la inmunización de animales por dosis pro- medad dista mucho de ser excepcional en los países
gresivas y, por último, Ramón preparó la anatoxina subdesarrollados; en el nuestro, como consecuencia
o toxoide que produce la inmunización en el humano. de la campaña de vacunación permanente llevada a
cabo por el Ministerio de Salud Pública en toda la
Etiología población, ha sido definitivamente erradicada.
El agente causal, como se ha dicho, es Clostridium
tetani, germen oportunista no invasivo, grampositi-
Incidencia, puerta de entrada
vo, anaerobio, móvil, flagelado, esporulado, que e incubación
habita en la tierra, y en el intestino del hombre y de Según los datos de la Dirección Nacional de Esta-
los grandes herbívoros. Su forma de reproducción y dísticas del MINSAP publicados en Informed, la in-
de resistencia, que es la espora tetánica, tiene cuer- cidencia del tétanos en nuestro país se comportó
po hemisférico, aparece en uno de los extremos del de la siguiente manera: año 1970, 223 casos; 1980,
bacilo y es muy resistente a todos los antisépticos 26 casos; 1990, 4 casos; 1997, 1 caso, y 1998, 4 ca-
usados de manera habitual en clínica, así como a la sos (2 entre 1 y 14 años y 2 en 15 años y más).
luz, el calor y demás agentes físicos. Esta última Las esporas tetánicas suelen introducirse en el or-
propiedad es de mucha importancia epidemiológi- ganismo a través de una herida punzante contamina-

514
da con tierra, polvo de la calle o heces de animales o en tensión los tendones terminales, si los tienen. Las
del hombre, por medio de desgarros, quemaduras, contracturas fijas, permanentes, progresivas en el
hincadas, pinchazos o inyecciones domiciliarias o tiempo hasta alcanzar su máximo, según la grave-
de drogas ilícitas, infectadas. Pero es necesario re- dad del caso, ocurren en segmentos corpóreos com-
saltar, por la importancia que tiene en la práctica, pletos y afectan tanto a los músculos agonistas como
que cualquier herida, por leve o insignificante que a los antagonistas, por lo cual nunca hay desplaza-
parezca, por superficial que se presente, puede ser miento articular; son, por lo tanto, contracturas esen-
la puerta de entrada de un tétanos grave y hasta mortal. cialmente tónicas.
El tiempo transcurrrido entre la inoculación o El orden de aparición y desaparición de las con-
herida tetanígena y la aparición del primer síntoma tracturas es también típico. En la inmensa mayoría
es de 3 o 4 a 12 o 14 días, aunque se citan casos de de los casos comienzan por el trismo, pasan al cue-
muchas semanas y hasta de años de incubación. llo, aunque no siempre a la faringe; a veces hasta el
cutáneo del cuello, luego toman los músculos de los
Patogenia canales vertebrales, masas lumbares, tórax,
La toxina tetánica (tetanospasmina), una vez libera- pectorales, intercostales, raíces de los miembros y
da, se fija a las terminaciones de la neurona motora finalmente partes distales de éstos hasta llegar en
periférica, penetra el axón y por una vía intraneuronal los casos graves a las falanges. Esta extensión no es
retrógrada es transportada al cuerpo de las células obligatoria en todos los casos y a veces se detienen
nerviosas de la médula espinal y del tallo cerebral, y en cualquiera de sus fases. Siempre es simétrica.
bloquea la glicina, inhibidora neurotrasmisora, y el Actitudes viciosas. Las contracturas descritas pre-
ácido gamma-aminobutírico. Al disminuir la inhi- dominan por lo común sobre determinados grupos
bición, aumenta la frecuencia de descargas de la musculares, los cuales atraen a sus antagonistas, y
neurona motora durante el reposo y se origina la ri- el segmento corporal aparece así deformado de
gidez. Por otra parte, la reducción de la actividad de acuerdo con el grupo muscular que prevalezca, de
los reflejos limita la diseminación de los impulsos manera que pueden aparecer las actitudes viciosas
polisinápticos, los agonistas y antagonistas se resta- siguientes:
blecen en lugar de inhibirse, con la consiguiente pro-
ducción de los espasmos musculares. 1. Opistótonos. Todo el cuerpo está arqueado ha-
cia atrás, hasta el extremo de casi tocarse el
Anatomía patológica occipucio con los talones; es, sobre todo, fre-
Aunque en el tétanos no se producen lesiones ana- cuente en jóvenes.
tómicas características, se describen en los múscu- 2. Emprostótonos o tétanos en bola. Característi-
los la degeneración cérea de índole tóxica y las co de los niños pequeños, por enrollamiento
rupturas fibrilares con hemorragias ocasionadas por del cuerpo sobre el plano anterior.
las contracturas, y en el sistema nervioso, tumefac- 3. Pleurostótonos. Arqueamiento sobre uno de los
ción de las neuronas con cromatólisis y desplaza- costados. Se presenta en raras ocasiones.
miento del núcleo. 4. Ortostótonos. Es el más frecuente de todos. El
cuerpo se mantiene recto, envarado, rígido, aun-
Cuadro clínico que la columna cervical y la lumbar presentan
Existen cuatro formas clínicas de esta enfermedad: cierto grado de opistótonos.
local, cefálica, neonatal por contaminación a través
del cordón umbilical y generalizada. Sólo se descri- Por lo general, los pies se colocan en varo equino.
birá la última, por ser la más frecuente. Todas las actitudes viciosas presentan fases de
Tres síntomas con valor diagnóstico resumen el exageración durante las crisis espasmódicas.
cuadro clínico del tétanos generalizado: las contrac- Espasmos musculares paroxísticos. No son más
turas musculares, las actitudes viciosas y los espas- que exacerbaciones intermitentes de las contractu-
mos musculares paroxísticos. ras tetánicas, a menudo inducidas por estímulos sen-
Contracturas musculares. Los músculos se con- soriales, que se producen a un ritmo de tiempo
traen, se endurecen, aumentan de volumen y ponen determinado según la gravedad del caso, durante las

515
cuales los músculos ya endurecidos se vuelven aún Las contracturas se suelen presentar en innume-
más duros y exageran la actitud a que habían lleva- rables afecciones neurológicas, como meningitis, en-
do el segmento corporal. Se mantienen así por espa- cefalitis, epilepsia, etc., pero en ninguna de ellas
cio de 5, 10 o 15 s, difícilmente durante 1 min o tienen las características descritas, ni la evolución y
más, y luego con rapidez vuelven a su estado ante- el orden de aparición. En todas las hipocalcemias
rior. Este paroxismo alcanza por lo general a todos ocurren contracturas, pero nunca con trismo per-
los músculos contraídos y otros que hasta ese mo- manente ni con la evolución de las tetánicas. La in-
mento no parecían afectados. toxicación por estricnina es un cuadro aparatoso,
Los accesos espasmódicos son breves y muy do- donde se observan convulsiones tonicoclónicas, vó-
lorosos; los enfermos casi siempre se refieren a ellos mitos, etc., pero que en nada recuerdan al tétanos.
como “pinchazos” o “hincones”. En las formas gra- La histeria puede simular el tétanos, pero los signos
ves afectan al mismo tiempo a los músculos respira- de no organicidad, detectados con el examen duran-
torios, por lo cual durante ellos el paciente se torna te el sueño, el estado de los reflejos, etc., traicionan
cianótico, con la cara vultuosa y las venas yugula- fácilmente al pitiatismo.
res y frontales distendidas. Sólo por excepción las
cuerdas vocales sufren espasmos, lo que produce as- Complicaciones
fixia y son capaces de conducir a la muerte. Su au-
Las principales complicaciones son: asfixia por es-
sencia indica un buen pronóstico.
pasmo de la musculatura respiratoria y laríngea, neu-
En los casos más graves suele presentarse el sín-
monía, tromboembolismo pulmonar, arritmia
drome de hiperactividad simpática, que se caracte-
cardíaca y úlceras de decúbito.
riza por hipertensión lábil, hipertermia, taquicardia,
arritmia cardíaca, sudoración copiosa y, en ocasio-
nes, hipotensión arterial y paro cardíaco.
Pronóstico
No cabe dudas de que el soporte respiratorio, la apli-
Exámenes complementarios cación de la ventilación mecánica, la disponibilidad
No hay datos de laboratorio que ayuden al diagnós- de personal experto y de otros recursos asistenciales,
tico del tétanos. El aislamiento de las formas han mejorado de manera extraordinaria el pronósti-
esporuladas del bacilo en la herida no garantiza el co del tétanos. No obstante, éste sigue siendo grave
diagnóstico de certeza, ya que puede formar parte en el neonato y en el anciano. Otros elementos que
de la flora normal del hombre. permiten establecer el pronóstico son:

Diagnóstico 1. Tiempo de incubación. Constituye uno de los


Los datos positivos de diagnóstico son el trismo, las factores más confiables. La experiencia de-
contracturas con las características señaladas y los muestra que el pronóstico resulta tanto más
espasmos musculares paroxísticos. El diagnóstico grave cuanto más corto es dicho período.
diferencial sólo habrá que establecerlo en las for- 2. Rapidez de instalación de los signos clínicos.
mas incipientes y en las localizadas, pues el tétanos Constituye un elemento de gran valor pronós-
en período de estado es inconfundible. tico. El tétanos que se completa en las prime-
Una vez eliminada cualquier causa local que jus- ras 24 h, con trismo absoluto, contracturas más
tifique el trismo, como lesiones del cordal, de la ar- o menos generalizadas y aparición de los pri-
ticulación temporomaxilar, adenitis cervical, etc., su meros paroxismos espasmódicos, es casi segu-
presencia equivale a tétanos, ya que muy pocas afec- ro un tétanos mortal.
ciones lo producen de manera clara y permanente, 3. Ausencia de trismo. Representa un buen signo
lo que ha permitido expresar que puede haber téta- y acompaña por lo general a las formas be-
nos sin trismo, pero no trismo sin tétanos. Sin em- nignas.
bargo, debe recordarse que las fenotiazinas y la
metoclopramida, de uso tan frecuente, pueden Los tétanos parciales o localizados, poco frecuen-
causarlo. tes, son casi siempre curables.

516
Tratamiento dos, con instalaciones adecuadas y personal adies-
trado, pues el tétanos grave requiere del uso de
Como el tétanos, una vez adquirido, no tiene trata-
relajantes musculares, respiradores mecánicos a pre-
miento específico, se hará referencia primeramente
sión positiva intermitente y anticoagulantes. En cual-
a su profilaxis, única forma de evitar el elevado ín-
quier circunstancia, el tratamiento se fundamenta en
dice de mortalidad que tiene esta grave enfermedad.
las medidas siguientes:
Tratamiento profiláctico
1. Inmunoterapia. Inmunoglobulina humana
En Cuba, según el Programa Nacional de Inmuniza- antitetánica, de 3 000 a 6 000 U por vía IM, de
ción, se aplica el siguiente esquema de vacunación una sola vez. De carecer de dicho producto, se
contra el tétanos: 0,5 ml de toxoide tetánico IM, en infiltran en corona y en profundidad, de 40 000
combinación con el toxoide diftérico y la vacuna con- a 60 000 U de antitoxina tetánica, alrededor de
tra la tosferina, a los 2, 4 y 6 meses de edad, y se la puerta de entrada, previa prueba de sensibi-
reactiva a los 15 meses; después, a los 5 o 6 años, se lidad, y 100 000 U disueltas en 500 ml de dex-
administra sólo con el toxoide diftérico. Luego se trosa al 5 %, a pasar en 4 h, durante 2 o 3 días
reactiva el toxoide tetánico a los 13 o 14 años y a seguidos.
partir de ahí, cada 10 años hasta los 55; posterior- 2. Administración de antibióticos. Penicilina cris-
mente se reactivará cada 5 años. A las mujeres em- talina, 1 000 000 UI por vía EV cada 6 h, o
barazadas se les reactiva a las 26 semanas de tetraciclina, 250 mg cada 6 h por la misma vía.
gestación con el objetivo de evitar el tétanos 3. Sedación del enfermo. Pentotal sódico, 1 g en
neonatorum. 500 ml de dextrosa al 5 % graduando el goteo
Si se tratara de un individuo no incluible en el según las contracturas y espasmos musculares.
esquema anterior, el tratamiento variará de acuerdo Algunos autores recomiendan el uso del diaze-
con las posibilidades siguientes. pam, en la dosis de 5 a 10 mg por vía EV, cada 4
o 6 h. Debe recordarse que este medicamento
1. Individuo no vacunado ni expuesto a la infec- en altas dosis puede inducir una acidosis láctica.
ción: Otros aconsejan la cloropromacina, 25 mg por
Vacunación con toxoide tetánico precipitado vía IM o EV, cada 6 h.
por alumbre, 1 ml por vía IM de inicio; repetir 4. Otros cuidados de orden general:
la dosis a las 4 semanas, luego al año y des- a) Alimentación por sonda de Levine; de no ser
pués cada 5 años. posible, acudir a la vía parenteral.
2. Individuo no vacunado y expuesto: b) Cateterismo vesical en caso necesario.
a) Inmunoglobulina humana antitetánica, de 250 c) Eliminación de todo estímulo de cualquier
a 400 U por vía IM, de una sola vez. tipo (ruidos intempestivos, conversacio-
De no disponerse de esta inmunoglobulina, nes, etc.) que pueda desencadenar o exacer-
utilizar antitoxina tetánica, de 5 000 a 10 000 U bar las crisis de espasmos musculares.
por vía IM, de acuerdo con la mayor o me- d) Atención especial al mecanismo respirato-
nor exposición de las heridas, previa prueba rio del paciente y acudir a la traqueostomía
intradérmica. si fuera necesario.
b) Cura local de las heridas incluyendo las me- e) Vigilar las alteraciones del equilibrio hidro-
didas quirúrgicas si éstas lo requieren. mineral.
c) Penicilina G benzatínica, 1 200 000 UI por f) Garantizar la administración de 3 000 calo-
vía IM. rías diarias, como mínimo.
d) Iniciar vacunación. 5. Tratamiento quirúrgico de la puerta de entrada.
3. Individuo vacunado y expuesto: reactivar con Junto con las medidas señaladas, se dedicará el
toxoide fluido, 1 ml por vía IM. mejor cuidado desde el primer momento al tra-
tamiento y la limpieza meticulosa de la herida
Tratamiento de la enfermedad que ha servido de puerta de entrada, con el fin
La experiencia ha demostrado que el paciente de eliminar los tejidos mortificados y los cuer-
tetánico debe ser tratado en servicios especializa- pos extraños que puedan encontrase en ella.

517
65
FIEBRE TIFOIDEA

La fiebre tifoidea es la septicemia provocada por el Etiología


bacilo de Eberth, Salmonella typhi.
La fiebre tifoidea se debe a la entrada y coloniza-
Historia ción de Salmonella typhi en el organismo. Se trata
de un bacilo gramnegativo, de extremos redondea-
Esta enfermedad existió en las edades antigua y dos que se tiñen mejor que la parte central, móvil,
media y se la confundió con otras infecciones, so- provisto de pestañas por toda su superficie, aerobio
bre todo con aquellas en que dominaban la obnubi- habitual y anaerobio facultativo, que crece con faci-
lación o estupor. En 1829, Lowis describió sus lidad en los medios de cultivo ordinarios y posee
hallazgos en 158 casos incluyendo las manchas ro- todas las características bioquímicas del género Sal-
sadas, la esplenomegalia, las adenopatías mesenté- monella, del que constituye el prototipo del primer
ricas, las lesiones intestinales, la hemorragia y la grupo o tifoparatífico.
perforación intestinal. Fue, además, el primero en El bacilo está dotado de tres antígenos: el flage-
emplear el término tifoidea. No obstante, los ingle- lar, de constitución proteica, conocido por antígeno
ses siguieron considerando la lesión intestinal como H; el somático, designado como antígeno O, y el Vi
una complicación incidental del tifus. o antígeno de virulencia; estos dos últimos de cons-
titución glucolípida.
En 1836, Williams Gerhard, de Filadelfia y anti-
guo alumno de Lowis, estableció la primera dife- Epidemiología
renciación clara y definida entre el tifus y la fiebre
El bacilo de la fiebre tifoidea no infecta a los anima-
tifoidea basándose en datos precisos y anatómicos. les, a diferencia de las otras salmonellas, por lo que
Entre los años 1856 y 1870, Budd, médico in- el reservorio lo constituye el hombre enfermo. Por
glés, sugirió que la enfermedad era contagiosa y consiguiente, la ocurrencia de un caso de fiebre ti-
expuso la importancia epidemiológica de su dise- foidea supone la existencia previa de otro enfermo o
minación por medio de las deyecciones de las per- de un portador sano.
sonas infectadas. Pero esta hipótesis no se confirmó Del individuo enfermo o del portador de gérme-
hasta 1885, cuando Pfeiffer aisló por primera vez el nes, el bacilo es eliminado con las orinas y sobre
germen en una muestra de material fecal, aunque el todo con las heces fecales, vías naturales de excreción
descubrimiento del bacilo se le acreditó a Eberth, de éste. La diseminación se lleva a cabo por contacto
quien en 1880 había aislado el microrganismo en directo con dichas excretas o con fomites contami-
nados con ellas, como puede suceder a los convi-
frotes de ganglios mesentéricos y del bazo. En 1896,
vientes (familiares, enfermeras, médicos, etc.), o
Widal descubrió la prueba de las aglutininas en el
mucho más frecuente, de manera indirecta por la
suero de los pacientes. contaminación con dichos desechos, del agua, la le-
Shottmuller introdujo la práctica del hemocultivo che, los alimentos de consumo crudos, las manos y
en 1900; D’ Hérelle descubrió los bacteriófagos los insectos. El contagio directo es sobre todo res-
en 1921, y Woodward y Smadel utilizaron en 1947 ponsable de la endemia y de los brotes familiares, de
el cloranfenicol en esta enfermedad, lo que trans- comunidades cerradas, como cuarteles, escuelas, etc.
formó por completo su evolución y pronóstico. La contaminación del agua potable por material

518
infectante procedente de enfermos con fiebre tifoi- cuanto menos facilidades cuente la población para
dea constituye un problema social. Según la índole la higiene de las excretas, cuanto menos exigente
de la fuente de agua (pozo, manantial, cisterna, acue- sea en la captación, transporte y purificación del agua
ducto, etc.), así resultarán brotes o epidemias de potable, cuanto menos refinados sean los hábitos y
mayor o menor consideración que tienen todos ca- escrúpulos higiénicos personales de la población. El
rácter explosivo, puesto que en corto tiempo se pre- lanzamiento de las excretas a la intemperie o su de-
senta un gran número de casos. pósito en vías fluviales corriente abajo aprovecha-
El consumo de leche contaminada por las manos das; la no pasteurización o ebullición de la leche; el
de portadores de gérmenes o de convivientes con uso de pozos superficiales mal ubicados, de cister-
los enfermos, o por adulteración con agua contami- nas agrietadas y de manantiales que no son más que
nada, es responsable de grandes epidemias si la le- drenajes espontáneos de terrenos contaminados; la
che no se pasteuriza o se hierve.
falta de vigilancia bacteriológica de los empleados
Todos los alimentos que se ingieren sin previa
gastronómicos, etc., son solo algunas de las fallas
cocción son susceptibles de trasmitir S. typhi, como
higiénicas que contribuyen al mantenimiento de una
las ensaladas, cuyos cultivos a veces se abonan con
gravosa endemia o a brotes más o menos significati-
excrementos humanos o son manipulados por por-
tadores de gérmenes; lo mismo las frutas. Es clásico vos de fiebre tifoidea, cuyo grado mide en definiti-
citar las innumerables epidemias producidas por las va el desarrollo cultural de la población.
ostras (ostiones) procedentes de viveros mantenidos La frecuencia de esta enfermedad se ha reducido
en desembocaduras de ríos donde se vierten excretas. en Cuba y en los países industrializados.
Entre todos los insectos, hay dos que por sus há-
bitos naturales de vida están especialmente aptos para Fisiopatología
la diseminación del germen: las moscas y las cuca- La puerta de entrada de S. typhi es casi siempre el
rachas, que llevan a los alimentos o a la vajilla, en- tubo digestivo. El bacilo penetra en la mucosa del
tre sus patas, alas, palpos y antenas, las partículas intestino delgado sin afectar el estómago y se des-
de excretas infectantes. plaza con rapidez hacia los linfáticos, ganglios me-
Además del enfermo, debe resaltarse la impor- sentéricos y, en cuestión de minutos, al torrente
tancia de los individuos sanos portadores de gérme- sanguíneo. Son pocos los datos de inflamación lo-
nes; son por lo general mayores de 50 años y con cal, lo que explica la falta de síntomas intestinales
más frecuencia mujeres que hombres, y debido a su en esta fase, que corresponde al período de incuba-
condición de sanos, se les permite con facilidad el ción de la enfermedad.
acceso a las fuentes de agua, de alimentos, etc., lo
Después de la bacteriemia inicial, el bacilo es atra-
que constituye uno de los factores más decisivos en
pado por los macrófagos y las células monocíticas
el mantenimiento de la endemia tifoídica. A este res-
del sistema reticuloendotelial, en cuyas principales
pecto conviene recordar que la mayor parte de los
formaciones (hígado, bazo y médula ósea) se le en-
enfermos curados clínicamente son eliminadores de
bacilos durante meses y a veces años. cuentra. Se multiplica y surge de nuevo varios días
Es preciso resaltar la extraordinaria frecuencia con después en forma de ondas recurrentes de bacterie-
que las manos constituyen el vehículo diseminador mia, suceso que inicia la fase sintomática de la in-
de S. typhi, al contaminarse con las excretas de los fección. En ese momento el microbio se disemina
enfermos o del portador y luego ponerse en contac- por todo el huésped para infectar muchos órganos y
to con alimentos listos para el consumo o utensilios luego ser eliminado, principalmente por el hígado y
de comer, o con manos ajenas, a las cuales trasmiten el riñón.
los gérmenes y que a su vez serán llevados a la boca, Los bacilos eliminados por la bilis se ponen de
lo que cierra el ciclo de diseminación. También existe nuevo en contacto con las placas de Peyer, donde se
la eventualidad, al menos teórica, de que el bacilo comportan esta vez como antígeno desencadenante
depositado en el suelo se deseque y en forma de en el tejido ya sensibilizado por su primer paso, y
polvo sea absorbido. dan lugar a las lesiones de naturaleza alérgica que
De todo lo anterior se colige que la fiebre tifoidea pueden producir, según su intensidad, la perforación
será más abundante en una comunidad determinada o necrosis de las placas. A esta fase alérgica sigue la

519
de inmunidad, con la formación de aglutininas, etc. La temperatura aumenta de manera gradual du-
La inmunidad es con frecuencia duradera, a veces rante los primeros 5 a 7 días y luego se estabiliza en
de por vida. forma de fiebre remitente o continua entre 39 y 40ºC,
que persiste en estas cifras con muy pocas variacio-
Anatomía patológica nes durante 2 o 3 semanas en casos sin tratamiento.
La anatomía patológica de la fiebre tifoidea se ca- Así y todo, la fiebre alcanza 40ºC desde el primer
racteriza por una proliferación granulomatosa de día en un bajo porcentaje de casos. Al principio, tam-
células mononucleares con formación de masas no- bién hay malestar abdominal, flatulencia y consti-
dulares mal definidas y de elementos reticulohistio- pación. En más o menos las dos terceras partes de
cíticos, sobre todo en los ganglios linfáticos, los pacientes hay tos seca, que de manera ocasional
mesentéricos y en el bazo, junto con una notable es tan importante, que enmascara la naturaleza ge-
hiperplasia folicular reactiva del tejido linfoide. La neralizada de la infección. A veces hay epistaxis en
hipertrofia del tejido linfoide del intestino delgado, las etapas iniciales de la enfermedad. Del 30 al 40 %
en especial de las placas de Peyer del íleon termi- de los enfermos muestran bradicardia relativa (di-
nal, va seguida de necrosis superficial por coagula- sociación pulso-temperatura) y la fiebre persistente
ción, que se esfacela para formar una úlcera, por lo y prolongada provoca debilidad general, por lo que
general limitada a la mucosa y submucosa. La ero- el paciente se encuentra débil y anoréxico. Es co-
sión de los vasos sanguíneos causa hemorragia y la mún el sopor mental y puede haber delirio. Por lo
extensión de la úlcera hacia la muscularis mucosae general hay dolor abdominal con flatulencia intensa
y la serosa conduce a la perforación intestinal. El y el estreñimiento inicial va seguido de diarreas. El
hígado aumenta de tamaño y hacia la tercera sema- eritema característico (roséola tifoídica) es más co-
na se forman áreas de lesiones granulomatosas mún durante la segunda semana y se caracteriza por
focales. La necrosis focal también se encuentra en lesiones pequeñas maculopapulares de 2 a 4 mm de
el bazo, el músculo cardíaco y los folículos linfáti- diámetro, que aparecen en la parte alta del abdomen
cos. La inflamación de la vesícula es común y no es y anterior del tórax. Estas lesiones palidecen con la
raro observar neumonías por Salmonella typhi o presión y sólo duran de 2 a 3 días.
Diplococcus pneumoniae. En algunos informes se indica que las manchas
rosadas se presentan hasta en el 90 % de los pacien-
Cuadro clínico tes, en otros la frecuencia es del 10 % e incluso me-
El tratamiento con antimicrobianos ha convertido el nos. La naturaleza evanescente del eritema y las
cuadro clínico de la fiebre tifoidea, antes por lo ge- dificultades para detectar las lesiones en individuos
neral grave, hiperpirético y prolongado, en un pro- muy pigmentados, explican estas variaciones de fre-
ceso febril breve y bien tolerado. cuencia señaladas en la literatura.
El período de incubación es de unos 10 días, aun- Muchas veces hay hepatosplenomegalia durante
que varía de 3 a 60 en dependencia de la dosis las primeras semanas de la enfermedad. El bazo es
infectante y el estado de la defensa del hospedero. palpable en cerca de las tres cuartas partes de los
Las manifestaciones clínicas y la duración de la pacientes.
enfermedad oscilan de una persona a otra. Las formas
más leves, caracterizadas principalmente por fiebre, Formas clínicas
pueden durar 1 semana, pero quizás se prolonguen Las formas de presentación más comunes son las
hasta 8 o más sin tratamiento. En el paciente que no que se explican a continuación:
es tratado con antimicrobianos, el tiempo medio del Forma gastroentérica. Comienza de manera brus-
padecimiento es de unas 4 semanas. Se inicia en for- ca con vómitos y diarreas, escalofríos y fiebre.
ma insidiosa con cefalea, malestar, anorexia y fie- Forma meníngea. Debe tenerse en cuenta, ya que
bre. La cefalea, casi siempre generalizada y muy en varias ocasiones ha sido el laboratorio o una en-
intensa, es en ocasiones la primera manifestación; terorragia lo que ha puesto en evidencia el origen
también son frecuentes los escalofríos. tifoídico de un síndrome meníngeo completo.

520
Forma de depresión medular febril con síndrome Aglutininas. En el curso de la fiebre tifoidea se
hemorrágico (petequias, hemorragias gingivales), produce un aumento en el título de aglutininas con-
.
anemia y granulopenia de hasta 2 109/L. Este cua- tra los antígenos somático (O) y flagelar (H) de S.
dro del enfermo se confunde al inicio con el de una typhi (reacción de Widal), lo que alcanza un míni-
anemia aplástica o con el de una leucemia aguda. mo durante la tercera semana de la enfermedad. Un
Forma febril inespecífica. Desde la aplicación del aumento del título al cuádruple o mayor en ausencia
hemocultivo en forma sistemática a todos los cua- de inmunización contra la fiebre tifoidea durante
dros febriles sin diagnóstico, el médico ha aprendi- las 4 o 6 semanas últimas, debe considerarse sospe-
do a no sorprenderse de la comprobación de la choso de infección. Tiene valor diagnóstico la aglu-
septicemia tifoídica en procesos infecciosos atípicos tinación a partir de la dilución al 1/80.
con localizaciones o sin ellas, con tal frecuencia, que Las pruebas de aglutinación de látex o coagluti-
esta entidad nosológica debe entrar en considera- nación para el antígeno Vi son por lo general mu-
ción con grandes probabilidades en el diagnóstico cho más efectivas que la prueba de Widal; su
diferencial de todas las pirexias. sensibilidad es del 95 % o más, con tasas muy bajas
Forma del anciano y de la mujer embarazada. de falsa negatividad; sin embargo, estas nuevas prue-
En el anciano la fiebre tifoidea es siempre severa y bas no están disponibles o no son de uso común.
a menudo fatal. En la mujer embarazada amenaza
siempre al feto y produce el aborto o el parto pre- Diagnóstico
maturo. El diagnóstico de fiebre tifoidea puede sospecharse
por el cuadro clínico, pero la confirmación definiti-
Exámenes complementarios va se establece aislando el germen en las heces, la
Hemograma. Durante el curso de la enfermedad se sangre, la orina y a veces en el esputo o exudado
desarrolla una anemia normocrómica que en oca- purulento. Como se explicó, un aumento al cuádru-
siones se agrava por la pérdida de sangre con las plo o mayor del título de aglutininas en ausencia de
heces. La leucopenia y neutropenia ocurren en alre- inmunización reciente del paciente, confirma la pre-
dedor del 25 % de los casos. En la mayoría de los sencia de infección.
pacientes los leucocitos son normales, aunque bajos Como en las primeras etapas el enfermo se obser-
en relación con el grado de fiebre. La leucopenia va muy afectado, con fiebre alta, leucopenia y nin-
.
severa, menor de 2 109/L (< 2 000/mm3) se en- gún signo de localización, el diagnóstico diferencial
cuentra en raras ocasiones. Puede haber leucocito- debe establecerse con muchas enfermedades. Entre
sis si hay perforación intestinal o complicaciones ellas las más importantes son infecciones generales,
piogénicas, así como trombocitopenia. otras salmonelosis, shigelosis, leptospirosis, tuberculo-
Heces fecales. Muchas veces dan reacción positi- sis diseminada, paludismo, brucelosis, mononucleosis
va de sangre oculta durante la tercera y cuarta se- infecciosa, pielonefritis, bronquitis aguda, influen-
manas de la enfermedad. za o neumonía causada por virus o por Mycoplasma
Hemocultivo. Desde el principio de la primera pneumoniae, meningitis o encefalitis, y algunas en-
semana es positivo en un 90 % de los casos aproxi- fermedades no microbianas que se acompañan de
madamente, y al término de la tercera, en un 50 %; fiebre y molestias abdominales, como la enferme-
después de la cuarta semana su positividad es rara. dad de Hodgkin.
Coprocultivo. Es positivo en cualquier etapa de
la enfermedad, pero la máxima frecuencia se encuen- Evolución y complicaciones
tra durante las semanas tercera o quinta. Su ulterior Es frecuente que la fiebre tifoidea marque su curso,
persistencia indica la conversión del paciente en bien con una recrudescencia, es decir, nueva eleva-
portador sano. ción de la temperatura y agravación de los síntomas
Medulocultivo. A veces es positivo después que después de haberse iniciado la defervescencia; bien
los hemocultivos ya son negativos. con una recaída, esto es, la eclosión de un nuevo
Urocultivo. En cerca de un 25 % de los enfermos episodio de fiebre después de varios días de plena
es positivo durante la tercera y cuarta semanas de la convalecencia; o que se presenten recidivas después
enfermedad. de semanas o meses de terminado el proceso. Esta

521
última eventualidad se observa con frecuencia des- (higiene del agua, de los alimentos, de las excretas e
pués del tratamiento con cloranfenicol precozmente higiene personal).
interrumpido. Como medida de orden colectivo, la vacunación
Dos complicaciones son características de la fie- antitifoídica ha dado muestras de extraordinaria efi-
bre tifoidea, a tal extremo que tienen valor diagnós- cacia. Por último, no debe olvidarse el control y tra-
tico. tamiento adecuado de los portadores sanos.

1. Enterorragia por ulceración de vasos impor- Tratamiento de la enfermedad


tantes en las placas de Peyer. Se presenta por Medidas generales. Las medidas terapéuticas de or-
lo general después de la primera semana y es den general conservan toda su vigencia, a pesar de
casi siempre atributo de las formas graves, aun- contarse en la actualidad con antibióticos específi-
que también aparece como primera manifesta- cos. Los cuidados integrales de enfermería son fun-
ción en algunos casos leves. El cuadro clínico damentales y contemplan el criterio de antisepsia al
depende de su intensidad, que puede ser míni- manejar un paciente con una enfermedad que se ad-
ma y modificar apenas el estado del paciente, quiere por vía oral, en la que las heces fecales y la
o fulminante y acabar con la vida de éste en orina constituyen las vías de eliminación del agente
pocas horas. La aceleración del pulso, la pali- causal. Por otra parte, dadas las posibles complica-
dez, la lipotimia o el shock, cierto balonamiento ciones que pueden presentarse, la temperatura, el
del abdomen, y a veces una caída momentánea pulso, la tensión arterial y la frecuencia respiratoria
de la fiebre, son los signos indicadores de esta se tomarán y anotarán cada 3 o 4 h, o según pres-
grave complicación. cripción del médico. Así mismo, se observarán y ano-
2. Perforación intestinal por necrosis de las pla- tarán en la historia clínica de cada enfermo el número
cas de Peyer. Se manifiesta por distensión ab- y aspecto de las deposiciones, la presencia de dolor
dominal, dolor, cese de expulsión de gases y o distensión abdominal, vómitos, hipotermia, alte-
heces, lo que resulta notable si el paciente pre- raciones del pulso y el estado de la diuresis. Ade-
sentaba diarreas; el pulso se acelera, la fiebre más, se tratará de instalarlo en habitaciones claras,
puede descender en las primeras horas y luego ventiladas, protegidas de moscas y otros insectos.
elevarse a mayor altura que antes; la facies se En casos graves se le movilizará en el lecho cada
desfigura, se afila; es el cuadro peritonítico cierto tiempo y se le mantendrá la boca y la lengua
común. La radiografía de abdomen pone de escrupulosamente limpias. El reposo será al princi-
manifiesto el neumoperitoneo. pio absoluto, con movilización gradual según valo-
ración del médico.
Todas las otras eventualidades que alguna que otra Al comienzo, la alimentación debe ser blanda,
vez se ven en el curso de la fiebre tifoidea, tales carente de residuos, con un aporte líquido adecua-
como edema laríngeo, colecistitis, bronconeumonía, do. Se prefieren las comidas pequeñas y fracciona-
flebitis, conjuntivitis, queratitis, neuritis óptica, etc., das. Luego variará con la evolución y el juicio
mejor que complicaciones, es preferible denominar- médico. No se debe olvidar que los requerimientos
las como localizaciones o formas clínicas, ya que su calóricos aumentan entre 10 y 13 % por cada grado
aparición representa el resultado de un curso inusi- de temperatura mantenido por encima de 37 ºC y las
tado de la septicemia tifoídica, pero no una agrava- necesidades de líquidos en un 5,5 % en iguales cir-
ción del proceso que de forma normal ésta sigue, cunstancias.
como se observa en la perforación o la enterorragia. Tratamiento medicamentoso. Incluye el empleo
de drogas específicas e inespecíficas. Se darán ba-
Tratamiento ños tibios y lavados con esponja. Los salicilatos de-
Tratamiento profiláctico ben ser evitados para reducir el peligro de hemorragia
La profilaxis de la fiebre tifoidea se desprende de intestinal. La constipación se trata después del cuar-
cuanto se ha expuesto en relación con su etiología y to día administrando un enema a poca tensión (1 L).
epidemiología. Una sola palabra define la profilaxis: La distensión abdominal, si es acentuada, se com-
higiene, concebida en su más amplio significado bate con una sonda rectal. En caso de excitación e

522
insomnio, se indican 30 mg de fenobarbital 3 veces des para pacientes con toxicidad grave y shock
al día, o 1 cucharada de hidrato de cloral cada 6 h. tifoídico por liberación de endotoxinas.
El cloranfenicol es el tratamiento de elección a cau-
sa de su eficacia demostrada, aunque se han repor- Tratamiento de las complicaciones
tado en años recientes epidemias por cepas resistentes Hemorragia. En esta situación se suspende la vía
a este medicamento. Así, pues, debe hacerse lo po- oral durante 24 h; la hidratación y la administración
sible en cada caso para aislar el microbio y practicar del cloranfenicol serán parenterales, y se indicarán
antibiogramas. Se administra en dosis de 50 a 75 mg/kg transfusiones según la magnitud del sangramiento.
de peso al día, repartidos en 4 tomas mientras dure Perforación. Se valorará con el cirujano la inter-
la fiebre. La dosis no debe sobrepasar de 4 g diarios vención quirúrgica de urgencia y, mientras tanto, se
y habitualmente son suficientes 2 g al día. Si no se añadirán antibióticos de amplio espectro, con prefe-
obtiene la respuesta esperada, hay que valorar la rencia gentamicina y metronidazol en altas dosis.
posibilidad de una malabsorción digestiva del anti- Se deben recordar las aspiraciones, la hidratación y
biótico o que las tabletas se estén eliminando ente- la oxigenoterapia.
ras, en cuyo caso deben triturarse. Otras complicaciones menos frecuentes se trata-
Después se continúa con 25 o 30 mg/kg de peso rán con las medidas específicas de cada caso.
por día, hasta completar el tratamiento durante 14
días. La vía parenteral se emplea sólo cuando hay Criterio de alta epidemiológica
intolerancia gástrica o en pacientes muy enfermos y El alta epidemiológica se dará cuando se obtengan 3
se usará la misma dosis total diaria de 3 a 4 g, que se coprocultivos seriados negativos, en días consecuti-
administrará dividida en 4 dosis iguales. En caso de vos, 3 días después de haber suspendido el trata-
intolerancia al cloranfenicol, se utiliza la ampicili- miento.
na, 6 g al día divididos en 4 o 6 dosis por 2 semanas.
Se han empleado otros antibióticos, como amoxici- Tratamiento de los portadores sanos o crónicos
lina, 4 a 6 g diarios en 4 tomas, y trimetoprim- El estado de portador sano se detecta por medio de
sulfametoxazole (sulfaprim), 8 tabletas, en 2 tomas despistajes epidemiológicos, o si el paciente no reúne
diarias, por 2 semanas. los requisitos para el alta epidemiológica. Se le ad-
Si después del cuarto o quinto día de tratamiento ministrará ampicilina, 4 a 6 g diarios por vía oral.
con cloranfenicol, ampicilina u otros antibióticos, También se han usado combinaciones: ampicili-
persisten la fiebre y la toxemia, están indicados los na o amoxicilina, 100 mg/kg de peso, más probene-
corticosteroides, 100 mg de hidrocortisona o 60 mg cid, 30 mg/kg de peso/día; sulfaprim, 2 tabletas 2
de prednisona diarios durante 4 o 5 días. La expe- veces al día, más rifampicina, 600 mg 1 vez al día.
riencia con el tratamiento esteroideo es que no se Todos por lo menos 6 semanas.
han provocado efectos adversos, aunque existe la Este ciclo puede repetirse varias veces, y de per-
posibilidad de que pueda enmascarar la perforación sistir la positividad de los coprocultivos, se realiza-
intestinal. Así, pues, es mejor reservar los esteroi- rá la colecistectomía.

523
66
ENFERMEDAD DIARREICA AGUDA

Históricamente, las enfermedades diarreicas han


constituido un problema de salud en la edad
SHIGELOSIS
pediátrica y es por eso que el Ministerio de Salud
Pública mantiene un programa eficaz en dichas eda- Concepto
des. Los estudios epidemiológicos realizados en los La shigelosis es una infección entérica provocada
últimos años muestran un incremento evidente de por una de las especies de bacilos del grupo Shigella,
la mortalidad por enfermedades diarreicas en el adul- que puede condicionar la aparición de un cuadro clí-
to y sobre todo en el grupo de 65 años y más, por lo nico agudo, caracterizado por diarreas o heces
que, partiendo de la base de que la cobertura del mucopiosanguinolentas, con pujos y tenesmo rectal,
médico de la familia y de los servicios hospitalarios fiebre, cólicos e hipersensibilidad abdominal, o cur-
permiten una atención calificada a la totalidad de la sar de forma asintomática. Esta enfermedad acaba
población, se elaboró un plan con la finalidad de curando de forma espontánea, con casi ninguna
adiestrar al personal de salud en relación con la pre- letalidad en el adulto, aunque tiene un pronóstico
vención y el tratamiento precoz de las diarreas del menos benigno en los niños cuando no se les impo-
ne tratamiento oportuno.
adulto, así como brindarle elementos de cómo rea-
lizar una adecuada labor educativa con la población Etiología
de riesgo, lo cual debe provocar un descenso de la
Existen cuatro grupos serológicos de Shigella capa-
morbimortalidad por estas causas.
ces de provocar la enfermedad en el hombre: Shigella
Antes de abordar el estudio de este importante
dysenteriae (bacilo de Shigakruse), Shigella flexneri,
capítulo, es necesario aclarar algunos conceptos.
Shigella boydii y Shigella sonnei.
Diarrea. Se llama así al aumento brusco en el Las shigelas son bacilos gramnegativos, cortos,
número o en el volumen usual de las deposiciones o inmóviles, no esporulados, aerobios y anaerobios
al cambio en la consistencia de éstas. facultativos, que con unas cuantas excepciones no
Enfermedad diarreica aguda (EDA). Es todo pro- fermentan la lactasa, pero sí otros carbohidratos, y
ceso mórbido, cualquiera que sea su causa, que tie- producen ácido, aunque no gas. Crecen en medios
ne entre sus síntomas más importantes las diarreas, de cultivo simples a 37 oC. Poseen una estructura
que se acompañe o no de trastornos hidroelectrolí- antigénica compleja, con caracteres comunes respec-
ticos y del equilibrio acidobásico, sin que exceda to al comportamiento serológico de las diferentes
de los 14 días de duración. especies, y la mayoría de ellas comparten los antíge-
En Cuba, las principales causas de EDA las cons- nos O con otros bacilos entéricos.
tituyen la shigelosis y la amebiasis intestinal, por lo
que se procederá a describir sus principales carac- Epidemiología
terísticas y después se precisará la conducta que se La shigelosis es una enfermedad endémica en todo
debe seguir frente a un caso de diarrea aguda. el mundo, pero en particular frecuente en países tro-
picales donde existen hacinamiento y malas condi-
ciones higiénicas.

524
El hombre es el principal portador de este mi- Los ganglios linfáticos mesentéricos, cuando han
crorganismo en la naturaleza y la afección se tras- sufrido invasión por el bacilo, suelen verse tume-
mite de persona a persona, directa o indirectamente. factos y reblandecidos, con presencia del microrga-
Los pacientes con disentería, convalecientes de la nismo en su interior.
enfermedad o portadores asintomáticos, a través de
las manos mal lavadas o los artículos inanimados Cuadro clínico
contaminados son los medios más frecuentes de in- Las manifestaciones clínicas de una shigelosis van
fección. La shigelosis es común en los meses en que
desde una simple diarrea que cura espontáneamen-
predominan las moscas, las cuales transportan los
te, un cuadro gastroentérico agudo, una disentería
bacilos en sus patas hasta los alimentos, al igual que
real con o sin cuadro general tóxico, como el me-
otros insectos, como las cucarachas.
Han existido epidemias de shigelosis relaciona- ningismo, delirio y fatiga intensa, hasta la ausencia
das con leche, helados, otros alimentos y agua con- de síntomas.
taminada por las manos o las heces de personas En sentido general, la shigelosis es de curso be-
infectadas. También se ha culpado de brotes de nigno (hipotóxica) y tiene un período de incubación
disentería bacilar a las shigelas en el polvo. de alrededor de 48 h. Casi siempre comienza de for-
ma brusca, con calambres o cólicos abdominales que
Patogenia se alivian con la defecación y diarrea acuosa, segui-
El intestino grueso del hombre constituye el hábitat da de tenesmo, fiebre que fluctúa entre 37,5 y 40 ºC,
natural de las shigelas, desde donde rara vez inva- y eliminación de heces mucosas que a veces contie-
den el torrente circulatorio a través de los ganglios nen sangre. Las heces sanguinolentas se observan,
linfáticos mesentéricos. sobre todo, al comienzo de la enfermedad (diarrea
Pueden aparecer manifestaciones extraintestina- roja), luego, cuando se han formado ulceraciones
les de la enfermedad, relacionadas con una exotoxina intestinales, se hacen purulentas y se habla entonces
termolábil potente, producida por algunos tipos de de diarreas blancas. Si al comienzo no se observa
shigela, que ejerce un efecto perjudicial sobre el sangre, las heces son de color amarillo claro, mucosas
SNC, afecta al epitelio intestinal, como lo hace la y de reacción ácida, con franco olor a esperma.
enterotoxina colérica, y causa diarrea. La defecación se va haciendo cada vez más fre-
Se han tratado de explicar las complicaciones ul- cuente en número y escasa en volumen, precedida
teriores, tales como dolores articulares, iridociclitis, de fuerte tenesmo, y se repite de 20 a 30 veces, y
conjuntivitis y uretritis (síndrome de Reiter), que en quizás más, en las 24 h. El abdomen aparece
algunos pacientes persisten durante meses con tem-
insuflado, con un colon muy sensible a la presión,
peraturas elevadas, así como distintos tipos de poli-
así como ardor y dolor del canal anorrectal.
neuritis, por la toxicidad, la bacteriemia, reacciones
La pérdida de agua y electrólitos suele ser consi-
de hipersensibilidad y fenómenos inmunológicos.
derable, sobre todo en lactantes y niños; se produce
Anatomía patológica deshidratación grave y acidosis, lo que provoca en
el paciente abotagamiento, ojos hundidos, lengua
La lesión fundamental consiste en inflamación de la
seca y saburral, pliegue cutáneo, polaquiuria con
pared del intestino grueso y del íleon terminal, que
origina necrosis de la mucosa, ulceración superfi- disuria, hipotensión arterial, pulso débil y cuadro de
cial, hemorragias y formación de seudomembranas insuficiencia cardíaca hipodinámica.
(difteroides) en las áreas ulceradas. La seudomem- Las manifestaciones extraintestinales se presen-
brana está constituida por fibrina, leucocitos, detri- tan en distintos sistemas de la economía:
tus celulares, mucosa necrótica y bacterias.
Las úlceras de la mucosa son socavadas y no Piel: erupciones maculosas, petequias, rash
despegan sus bordes, lo que las distingue de las pro- morbiliforme y urticaria.
ducidas por la disentería amebiana. Por rectosigmoi- Sistema nervioso central: cefalea, delirio, tor-
doscopia se aprecia tumefacción brillante o tícolis y meningismo.
sanguinolenta de la mucosa, cuya superficie está Sistema respiratorio: tos, coriza y en ocasiones
recubierta a trechos con membranas difteroides. derrame pleural.

525
Sistema hemolinfopoyético: anemia, trombo- en su comienzo, y las deposiciones abundantes y
citopenia, leucocitosis con desviación izquierda, poco frecuentes.
reacción leucemoide, síndrome urémico-hemo- En definitiva, el coprocultivo es concluyente me-
lítico y CID. La bacteriemia y la septicemia diante el aislamiento del germen infectante.
son muy raras. En la actualidad, dada la relevancia presentada
por el cólera, que se comporta en forma de pandemia,
Exámenes complementarios debe establecerse el diagnóstico diferencial de esta
Hemograma. A veces se halla leucocitosis con enfermedad ante cualquier cuadro diarreico agudo
grave, y descartarse su presencia mediante la reali-
neutrofilia y linfopenia relativa. En casos graves se
zación del coprocultivo en medio de Cary Blair bus-
observa desviación a la izquierda y reacción
cando la presencia del vibrión colérico.
leucemoide.
Rectoscopia. Permite observar una mucosa rectal Evolución y pronóstico
edematosa, tumefacta y brillante o sanguinolenta,
Esta enfermedad tiende a la curación espontánea
con gran cantidad de moco y en ocasiones ulcerada
en 10 a 12 días, con desaparición progresiva del cua-
y recubierta a trechos por membranas difteroides. dro clínico. En niños, ancianos y desnutridos la
Coprocultivo. Permite aislar e identificar la shigela letalidad puede deberse a deshidratación y acidosis
por cultivo del producto obtenido por raspado de la metabólica.
mucosa rectal. Es el único medio para establecer el En ocasiones se presentan complicaciones in-
diagnóstico. testinales y extraintestinales. Entre las primeras se
Título de aglutininas séricas. Se eleva en la mi- encuentran: absceso perirrectal, perisigmoiditis, per-
tad de los pacientes con disentería bacilar, pero de foración del colon, apendicitis, infección bacteriana
ordinario no resulta útil con fines diagnósticos. secundaria con tromboflebitis de la porta y abscesos
Inmunofluorescencia específica. Existen técnicas hepáticos múltiples, y estenosis intestinal. Entre las
para el rápido descubrimiento de shigelas en las he- complicaciones extraintestinales suelen verse mio-
ces, que coinciden en más del 90 % de los casos con carditis, parotiditis, artritis, conjuntivitis y las ence-
los coprocultivos. falomielitis, siempre graves.
Sólo por excepción la enfermedad pasa a la cro-
Diagnóstico nicidad alternando cuadros disentéricos con etapas
de estreñimiento, que llevan al enfermo al adelga-
El diagnóstico debe sospecharse por el cuadro clíni-
zamiento y a la anemia progresiva.
co de la enfermedad y por la existencia de genio
epidémico. Sin embargo, sólo podrá afirmarse ante
el hallazgo del bacilo disentérico en las heces fecales
o en el moco obtenido del raspado de la mucosa rec-
AMEBIASIS
tal, por el coprocultivo. INTESTINAL
Existe el desafortunado hábito de “etiquetar” las
disenterías en general y en principio, como produci-
das por la ameba histolítica. En el cuadro disentérico Concepto
amebiano las deposiciones son menos frecuentes,
La amebiasis intestinal es la infección producida por
menos purulentas y más uniformemente teñidas de
Entamoeba histolytica. Este protozoario vive nor-
sangre. La imagen restoscópica revela ulceraciones malmente como comensal en el intestino grueso,
profundas de bordes socavados, y el hallazgo de las donde es capaz de permanecer durante años, de ahí
formas trofozoíticas de la ameba es definitivo. No la existencia de portadores sanos o asintomáticos.
obstante, debe señalarse que en ocasiones concomi- Los síntomas de la enfermedad pueden estar pro-
tan ambas infecciones. ducidos por la invasión intestinal del parásito, favo-
Se debe establecer, además, la diferencia con cua- recida por causas coadyuvantes, como fatiga,
dros gastroentéricos salmonelósicos, estafilocócicos, desnutrición, frío, parasitismo intestinal y, sobre
colibacilares, etc., por el predominio de los vómitos todo, disentería bacilar o viral, donde origina úlce-

526
ras submucosas y permite la difusión de los micror- directamente con heces humanas utilizadas como
ganismos al hígado y otros órganos del paciente. abono. La contaminación del agua con heces o las
manos de manipuladores infectados, ha sido causa
Etiología de formas epidémicas de la afección. La difusión
Hay cuatro especies de Entamoeba que infectan al fecal directa a veces ocurre en niños o en enfermos
hombre, pero sólo Entamoeba histolytica es capaz mentales.
de provocar el cuadro clínico de la enfermedad. Exis- Al final del embarazo y durante el puerperio, las
ten trofozoítos no invasores del parásito, que en la mujeres presentan particular susceptibilidad, igual
luz intestinal del huésped infectado adoptan la for- que los pacientes bajo tratamiento con citostáticos o
ma redondeada y eliminan su inclusión citoplasmá- corticosteroides. Los portadores de cáncer del co-
tica para formar una ameba prequística, que al lon y colitis ulcerativa idiopática, así como los afec-
madurar posee 4 núcleos resultantes de divisiones tos de disentería bacilar, suelen asociar la infección
nucleares, los cuales al ser ingeridos sufren otra di- a su enfermedad de base.
visión nuclear y liberan 8 amebas uninucleares mó-
viles o trofozoítos; se establece así una población
Patogenia
de trofozoítos en el colon proximal y ciego que se Los tejidos del huésped parecen lesionarse por el
multiplica cada 8 h aproximadamente. Estas formas solo contacto directo con la ameba, al liberarse
no invasoras miden de 10 a 20 µm (micrómetros) de enzimas lisosómicas por actuación de un organito
diámetro y se alimentan de bacterias y células epite- de superficie sensible al contacto. El medio ácido y
liales exfoliadas. la necrosis celular favorecen la penetración de las
Las amebas histolyticas invasoras son más gran- amebas al tejido, donde provocan la ulceración y su
des, pues tienen hasta 50 µm, y se mueven más rápido coalescencia, acompañadas de diarrea o disentería,
por desplazamiento unidireccional de seudópodos. en las que los trofozoítos son arrastrados con el moco
Contienen eritrocitos ingeridos (de ahí el nombre de y algunos eritrocitos en las heces fluidas. Puede pre-
hematófagos) y pocas o ninguna bacteria. sentarse una infección bacteriana secundaria capaz
Las otras especies de amebas son la E. hastmanni, de conducir a apendicitis, perforación, hemorragia
y en ocasiones estenosis, a granulomas amebianos o
E. coli y la E. polecki; son comensales habituales
a la seudopoliposis.
del hombre, pero no poseen poder patógeno.
Se supone que la infección extraintestinal sea
Epidemiología metastásica, aunque ocurre en contados casos por
propagación directa desde el intestino. La forma más
Se ha calculado que alrededor del 10 % de la pobla- común es la hepatitis amebiana o absceso hepático
ción mundial alberga amebas histolyticas, pero esta amebiano, que se abre a través del diafragma y pro-
frecuencia se quintuplica en algunos países tropica- voca un absceso pulmonar o un empiema; son más
les subdesarrollados, donde la pobreza y la falta de raras la pericarditis, el absceso cerebral y la menin-
higiene facilitan su infección. goencefalitis amebiana primaria.
La incidencia es mayor en los hombres que en las
mujeres, muy probable por los hábitos laborales de Anatomía patológica
cada sexo, y tal vez por la misma razón, resulta más Las lesiones de la amebiasis intestinal se encuen-
frecuente en adultos que en niños. tran en todo el colon, aunque son más frecuentes y
Los trofozoítos se destruyen con facilidad en el por lo general se inician en el ciego y el colon as-
medio externo o en el estómago si llegan a ser inge- cendente. Son características las úlceras pequeñas,
ridos. Los quistes, que sólo se originan dentro del parecidas a furúnculos, en la superficie de la muco-
organismo y que son expulsados al exterior junto sa, que por ser más extensas en la profundidad se
con las heces fecales, pueden sobrevivir un mes en asemejan a un botón de camisa.
el agua, aunque mueren por la desecación. En los abscesos de la profundidad pululan los
Los alimentos son el vehículo más frecuente de trofozoítos. Muy pocas veces la pérdida de sustan-
trasmisión, al estar contaminados por moscas y per- cia llega a perforar la pared intestinal. En la amebiasis
sonas infectadas que los manipulan. Las verduras y crónica se añaden los granulomas o amebomas y las
frutas que se consumen crudas suelen infectarse lesiones cicatrizales deformantes.

527
Cuadro clínico ces con fiebre y trastornos generales, se confunden
con tumores, plastrones apendiculares, etc.
La gran mayoría de las personas que presentan he-
ces fecales con E. histolytica no tienen síntomas y
Amebiasis extraintestinal
muchas de ellas permanecerán como portadoras asin- Muchas veces la amebiasis no se limita al intestino,
tomáticas de la infección. sino que a través del sistema venoso portocava se
La invasión intestinal por los parásitos comienza extiende a otros órganos, como hígado, pulmones,
casi siempre entre 1 y 6 meses después de producir- piel, cerebro, etc.
se la contaminación, e incluso mucho más tarde. Amebiasis hepática. Se manifiesta como una he-
La forma disentérica de la enfermedad suele co- patitis difusa, congestiva, con hepatomegalia dolo-
menzar de súbito, pero muchas veces aparece a con- rosa, fiebre y postración; no son raras la ictericia,
tinuación de una etapa variable de cólicos ligeros. deposiciones sanguinolentas, leucocitosis, etc.; el
En el período de estado se presentan grandes cóli- absceso hepático, más frecuente, está constituido por
cos y tenesmo, fiebre, deposiciones mucosanguino- hepatomegalia, abombamiento doloroso de la glán-
lentas con olor muy desagradable y poca materia dula, fiebre, leucocitosis marcada, pocas veces
fecal, en número de 20 a 30 o más al día, y algún subictericia y gran toma del estado general.
grado de deshidratación. Este período es menos agu- Amebiasis pulmonar. Las amebas llegan a los pul-
do que en la disentería bacilar, y la deshidratación mones a través de un absceso subfrénico, a su vez
es menos evidente. La forma fulminante de la enfer- procedente de uno hepático y ocasionan un absceso
medad es muy rara y en ella aparecen megacolon pulmonar, que al vaciarse en un bronquio da lugar a
tóxico, distensión abdominal, vómitos y deshidrata- la clásica vómica de pus achocolatado. A veces las
ción severa. amebas emigran directamente del intestino por la
A la forma disentérica, que dura una horas o muy circulación portocava y originan múltiples abscesos
pocos días, sigue la fase crónica, que es la propia de pulmonares o la muy rara bronquitis amebiana.
la enfermedad y se caracteriza por un cuadro diarrei- Amebiasis cutánea. Adopta la forma de úlceras
co mucopiosanguinolento de variable intensidad, con profundas y dolorosas, que se extienden con rapi-
gleras teñidas de sangre, brillantes, con poco pus y dez. Asienta con mayor frecuencia en la región
escaso material fecal, anunciado por cólicos y se- perianal, en el periné, incisiones de laparotomía y
guido de tenesmo, que se repite de pocas a varias bocas de colostomía. En raros casos se afecta el cue-
decenas de veces al día, por lo general sin fiebre y llo uterino, donde provoca lesiones similares al car-
con estado general conservado durante largo tiem- cinoma. Pueden aparecer lesiones del pene después
del coito anal.
po, aunque a la larga el paciente adelgaza, adquiere
Amebiasis cerebral. A partir de un absceso hepá-
un tinte anémico y terroso y llega a la caquexia si no
tico a veces se asiste al cuadro de un absceso cere-
es tratado.
bral por irrupción de las amebas en el centro oval.
Esta fase casi siempre evoluciona en forma de
En estos casos aparecen los signos de hipertensión
episodios de algunas semanas de duración, que tie-
intracraneal (cefalea, vómitos en proyectil y papile-
nen recidivas con intervalos cada vez más cortos,
dema) y un estado séptico severo con fiebre eleva-
con un examen físico poco revelador, casi reducido da, además de signos de localización neurológica.
a dolor en el marco cólico.
En ocasiones se presentan formas atípicas de la Exámenes complementarios
enfermedad que resultan de diagnóstico difícil. Al- El diagnóstico se basa en descubrir los trofozoítos
gunas son abortivas, en las que apenas se percibe un hematófagos en muestras de heces o en material fres-
síndrome disenteriforme que se extingue con rapi- co obtenido por endoscopia.
dez. Existe también la forma totalmente asintomáti- Heces fecales en fresco. Las heces deben ser re-
ca, al menos durante mucho tiempo, que se confunde cién emitidas y calientes para ver los trofozoítos por
con el estado de portador de gérmenes. En ocasio- microscopia, o estar conservadas en alcohol
nes la primera manifestación de un parasitismo es polivinílico, solución mertiolate-yodo-formaldeído
un absceso hepático o cerebral. Los amebomas, en (MYF) o solución de formol y azul de metileno
forma de una masa abdominal sensible, algunas ve- (F2AM).

528
Heces fecales. Descubre los quistes de ameba en El tratamiento debe basarse en el estado de hidra-
las infecciones severas. tación del paciente y para ello se utiliza una guía
Hemograma. Puede o no existir leucocitosis; con para su valoración, en la cual se dividen en bien hi-
mayor frecuencia se presenta eosinofilia. dratados, deshidratación leve e intensamente deshi-
Radiología. Pone de manifiesto la hipercinesia dratados.
cólica, el aspecto inflamatorio y las imágenes A. Paciente bien hidratado:
ulcerosas. 1. Se incluyen todos los enfermos con diarreas
Rectoscopia. Este examen evidencia las úlceras clasificados dentro del grupo de bien hidra-
en forma de furúnculos que dejan espacios de mu- tados.
cosa sana entre sí cuando las lesiones alcanzan el 2. Se excluyen los mayores de 60 años y aque-
sigmoide. En el raspado de estas úlceras se descu- llos con enfermedades crónicas o inmuno-
bren las amebas. deprimidos con riesgos, como por ejemplo:
Ultrasonido y TAC. Son los métodos más preci- cardiopatías con antecedentes de insuficien-
sos para el diagnóstico del absceso hepático. La pri- cia cardíaca, insuficiencia renal crónica, glo-
mera con una efectividad de un 90 % y la segunda, merulopatías, diabetes mellitus, enfermedad
de más de 95 %. de Addison, hepatopatías, enfermedades
oncológicas, etc.
Diagnóstico
3. Se excluyen además los pacientes que ten-
El diagnóstico de la amebiasis es muy fácil cuando gan sangre en las heces o diarreas de aspec-
la enfermedad está en una de sus fases típicas: to coleriforme.
disentería crónica, absceso hepático, etc. Pero en el 4. Estos enfermos serán atendidos por el médi-
período de comienzo y en las formas atípicas, sólo co de familia, quedan sujetos a un proceso de
la demostración de las amebas asegura el diagnóstico. vigilancia y deben ser reevaluados cada 24 h
Entre las enfermedades con las que hay que esta- en el propio consultorio o en visita a domi-
blecer el diagnóstico diferencial se encuentran en cilio por el equipo de salud.
primer lugar: disentería bacilar, colitis ulcerativa, tu- 5. El tratamiento se basa en la prevención de la
berculosis intestinal, absceso subfrénico y empiema deshidratación, para lo cual se administra-
pleural. rán sales de rehidratación oral (SRO), 120 ml
(medio vaso) después de cada deposición
Pronóstico diarreica. Si desea ingerir más, puede hacer-
El pronóstico varía según que la enfermedad sea tra- lo sin pasar de 4 L diarios. Este tratamiento
tada o no, y si se han presentado complicaciones en se hará en su domicilio.
órganos vitales como hígado, pulmón y cerebro. 6. En el caso de no haber SRO de confección
Cuando es bien tratada la amebiasis intestinal es industrial, se prepararán según la siguiente
habitualmente curable. El absceso hepático, el fórmula: 1 L de agua hervida, 1cucharada
pulmonar y, sobre todo, el cerebral, casi siempre son rasa de sal común, 8 cucharaditas de azú-
graves. car, 1 cucharadita de bicarbonato de sodio y 1
La amebiasis puede conducir a una oclusión in- cucharada de jugo de frutas cítricas.
testinal. 7. No se limitará la alimentación. La dieta con-
sistirá en productos corrientes, con la salve-
Conducta que se debe seguir frente dad de los alimentos muy azucarados o que
a un caso de diarrea contengan muchas fibras. Se recomiendan
Como paso inicial todo paciente con diarrea, de jugos de frutas, agua de coco y caldos.
acuerdo con la política de salud del país y las posi- 8. No se administrarán antidiarreicos ni se le
bilidades reales existentes, debe ser valorado por su realizarán exámenes complementarios.
médico de familia o, en su defecto, por el médico 9. Estos pacientes podrán mantenerse en este
del sector, de donde se desprende que la participa- régimen durante 48 h y, de no haber mejo-
ción activa de éstos es de vital importancia en la ría, serán tratados por el esquema de deshi-
lucha por disminuir la morbimortalidad por diarrea. dratación leve.

529
B. Pacientes con deshidratación leve. sistente en conteo de leucocitos, polimorfo-
1. Se incluyen a todos los clasificados como nucleares, coloración de Gram y búsqueda
deshidratados leves, así como a los bien hi- de protozoarios.
dratados mayores de 60 años, con enferme- 12. Deben ser remitidos al hospital los pacientes
dades crónicas o inmunodeprimidos, diarreas con deshidratación leve que se ajusten a los
con sangre, y los que llevan más de 48 h con criterios siguientes:
diarreas. • Los que a pesar de recibir tratamiento bajo
2. Se excluyen los pacientes con deshidrata- el régimen de ingreso domiciliario empeo-
ción leve que tengan diarreas de aspecto ran su estado de hidratación en 24 h.
coleriforme. • Los que no mejoran después de 72 h de
3. Estos enfermos serán tratados por el médico ingreso domiciliario.
de familia bajo el régimen de ingreso domi- • Los enfermos con diarreas de 7 días de
ciliario. evolución, aunque estén bien hidratados.
4. El esquema de tratamiento se basará en las • Pacientes con enfermedades crónicas que
SRO, el mantenimiento de la dieta y la no tengan un estado general precario y un
utilización de medicamentos antidiarreicos. pronóstico reservado.
5. La hidratación se basará en la fórmula de • Enfermo sin amparo filial ni apoyo social.
1 500 a 2 000 ml/m2 de superficie corporal. 13. Los pacientes remitidos al hospital serán re-
Se administrará la mitad de la dosis en las cibidos en el cuerpo de guardia, donde debe
primeras 8 h de tratamiento. existir un espacio dedicado a la recepción,
6. La cantidad de líquidos y el tiempo de admi- la consulta y el tratamiento de los enfermos
nistración dependen del estado del sujeto y con EDA, dentro de las posibilidades de cada
de las enfermedades asociadas. institución.
7. Los pacientes con diarreas con sangre, por 14. En el cuerpo de guardia, en dependencia del
su frecuencia deben ser tratados como una estado del paciente y del tiempo del trata-
shigelosis. Se les administrará sulfaprim, 2 miento aplicado con antelación, recibirán
tabletas c/12 h por 5 días si hay respuesta SRO o hidratación por vía parenteral.
terapéutica. Si no la hubiera, cambiar al se- 15. Podrán permanecer en el cuerpo de guardia
gundo día por ácido nalidíxico (500 mg), 1 durante 6 h y en caso de mejoría, se egresarán
tableta c/6 h por 5 días. Si tampoco hubiese a su domicilio con una evaluación por escri-
mejoría en 48 h, entonces se debe pensar en to de su estado de hidratación y conducta
una amebiasis e imponer tratamiento con me- seguida para su presentación al médico de
tronidazol (250 mg), 2 tabletas c/8 h por 7 familia o sector. Si no mejora su estado de
días. Es de señalar que siempre se debe tra- hidratación durante este tiempo, debe ser in-
tar de identificar el agente específico. gresado en el hospital.
8. El paciente recibirá tantas evoluciones mé- 16. Serán ingresados los pacientes que cumplan
dicas como sea necesario de acuerdo con su los criterios siguientes:
estado. • Más de 6 h de evolución en el cuerpo de
9. Diariamente, en horas de la tarde, se debe guardia.
realizar una evaluación de su estado de hi- • Enfermedad crónica con gran toma del es-
dratación, pronóstico inmediato y posibles tado general.
complicaciones, de lo cual dependerá el man- 17. Los servicios de Medicina Interna o Geria-
tenimiento del ingreso domiciliario. tría deben tener camas destinadas para el tra-
10. El ingreso domiciliario no debe de exten- tamiento de las diarreas no complicadas,
derse más de 72 h, siempre en dependencia donde se garantizará una atención médica y
del estado de hidratación. paramédica por personal con dedicación y
11. Se realizarán los siguientes exámenes com- experiencia en diarreas. Se deben realizar los
plementarios: hemograma con diferencial, estudios preclínicos necesarios para comple-
así como estudio de las heces fecales, con- tar el diagnóstico. El tratamiento medica-

530
mentoso previamente señalado se manten- Para los pacientes de 60 años y más debe utili-
drá o se reevaluará según cada caso en zarse la fórmula siguiente:
particular. Dextrosal al 5 % 1 000 ml
C. Pacientes intensamente deshidratados: Cloro sodio 24 ml (90 meq/L)
1. Se incluirán en este plan los que cumplen Potasio 3 ml (24 meq/L)
los criterios de deshidratación severa, los que Añadirle 30 ml de bicarbonato de sodio al 4 %
presentan diarreas de aspecto coleriforme o y 2 ml de gluconato de calcio al 10 % si fue-
toxigénico, toma del sensorio, íleo paralíti- ra necesario.
co y shock hipovolémico. 5. En cuanto el estado del enfermo lo permita,
2. Estos enfermos deberán ser atendidos en sa- debe iniciarse el tratamiento con SRO, que
las de terapia intermedia por personal médi- puede concomitar con la vía EV.
co competente y con posibilidad de realizar 6. Se realizarán los siguientes exámenes com-
como mínimo tres evoluciones diarias mien- plementarios:
tras estén reportados de graves, con el apo- • Hemograma con conteo diferencial.
yo de enfermería necesario y normado para • Ionograma (se repetirá de acuerdo con la
este tipo de sala, el cual además de apoyar y evolución clínica).
realizar el cumplimiento de las indicaciones • Hemogasometría arterial.
médicas, debe velar por garantizar un estricto • Creatinina.
balance hidromineral. El tratamiento medi- • Heces fecales: conteo de leucocitos, po-
camentoso se mantendrá o se variará según limorfonucleares, coloración de Gram,
las alternativas que más adelante se señalan. protozoarios, coprocultivo incluyendo
3. Recibirán de inicio hidratación parenteral búsqueda de vibrión colérico.
hasta que su estado mejore; después se conti- • Hemocultivo en casos febriles.
núa con SRO bajo el esquema de 3 000 ml/m2 7. Todo paciente con diarrea de aspecto acuo-
de superficie corporal administrándose un so y abundante debe ser seguido estrecha-
golpe de agua del 25 % del total calculado mente por el peligro de deshidratación y
en las primeras 2 h, el 25 % en las siguien- alteraciones del balance acidobásico, y por
tes 6 h y el 50 % en las 16 h restantes. Este la vigilancia epidemiológica que debe man-
esquema tiene variantes según la especifici- tenerse contra el cólera.
dad clínica de cada caso. Alternativas terapéuticas
4. Como soluciones hidratantes se deben utili-
Una vez corregida la deshidratación e identificado
zar en enfermos de 15 a 59 años, que no ten-
el agente causal de la enfermedad diarreica aguda,
gan contraindicaciones, las siguientes:
de no existir respuesta al tratamiento propuesto ante-
Dextrosa al 5 % 1 000 ml
riormente, se utiliza uno de los medicamentos si-
Cloro sodio 34 ml (120 meq/L)
guientes.
Bicarbonato de sodio 60 ml (30 meq/L)
Para la shigelosis:
al 4 %
• Furazolidona (furodone): 100 mg c/6 h por vía
Gluconato de calcio 2 ml
oral, por 5 días.
al 10 %
• Ampicillín: 500 mg c/6 h por vía oral, por 5
También se usa la solución Ringer-Lactato (so- días.
lución Hartman), cuyo contenido de electróli- • Tetraciclina: 500 mg c/ 6 h por vía oral, por 5
tos es el siguiente: días.
Sodio 130 meq/L
Potasio 4 meq/L Cualquiera que sea el medicamento escogido, la
Cloro 109 meq/L conducta ulterior dependerá de la respuesta clínica
Bicarbonato 27 meq/L a éste y de los resultados del coprocultivo con
Calcio 2,7 meq/L antibiograma.

531
Para la amebiasis: • En caso de ingreso domiciliario, debe darse
• Furoato de diloxamida (Furamida): 500 mg c/8 h, de alta cuando esté 24 h con deposiciones
durante 10 días. pastosas y reevaluarse a los 3 días.
• Diyodohidroxiquinoleína (Diodoquín): 650 mg • Si ha sido atendido en el cuerpo de guardia,
c/8 h, durante 20 días. se dará el alta cuando desaparezcan los sig-
• Clorhidrato de emetina: 1 mg/kg de peso/día nos de deshidratación y debe ser atendido a
IM, sin pasar de 65 mg diarios, por 10 días. partir de ese momento como un paciente con
• Dihidroemetina: 1,25 mg/kg de peso/día IM,
diarrea sin signos de deshidratación.
sin pasar de 90 mg, por 10 días.
• Cloroquina: 150 mg 2 veces al día, durante 21
• En caso de ingreso hospitalario, se dará de
días. alta cuando esté 24 h con deposiciones pas-
• Tetraciclina: 500 mg c/6 h por vía oral, por 10 tosas y se hayan concluido los estudios. Se
días. entregará copia de la hoja de egreso que in-
cluya: conducta seguida y conclusiones diag-
Debe recordarse que la emetina es una droga nósticas para su seguimiento por el médico
amebicida hística de acción rápida, pero cardiotóxica de familia.
acumulativa, por lo que su elección implica riesgos 3. Criterios de alta del paciente severamente
que se deben tener en cuenta. La cloroquina, al igual deshidratado:
que el metronidazol, provoca cierta toxicidad, sobre • Cuando esté hidratado, puede salir de tera-
todo digestiva. pia intermedia y continuar su atención como
El metronidazol se utiliza por vía EV en casos enfermo con deshidratación leve en la sala
graves, cuando existe intolerancia oral.
de Medicina Interna o Geriatría.
El tratamiento de la amebiasis extraintestinal (abs-
ceso hepático o pulmonar, y la amebiasis cutánea)
Pacientes de hogares de ancianos
se realizará con clorhidrato de emetina o la
o impedidos físicos y mentales con atención
dihidroemetina, en igual forma en que se señaló an-
teriormente, seguido de cloroquina, 250 mg c/8 h médica y de enfermería
por vía oral, durante 3 semanas. En caso de intole- En caso de clasificarse como bien hidratados o des-
rancia a la emetina, se debe de usar metronidazol hidratados leves, deben ser tratados en el propio cen-
EV. El absceso voluminoso deberá puncionarse y tro con SRO, según las indicaciones señaladas; se
evacuarse, y para esto será necesario en ocasiones remiten al hospital para su ingreso:
intervenir quirúrgicamente al paciente. • Los severamente deshidratados.
Criterios de alta • Los pacientes con enfermedades crónicas con
riesgo vital, aunque estén hidratados.
1. Criterios de alta del paciente bien hidratado:
• Los desnutridos o con mal estado general.
• Se suspenderá la vigilancia médica cuando
• Aquellos en que a pesar de ser tratados con SRO,
el enfermo esté 24 h con deposiciones pas-
en la segunda evaluación haya empeorado su
tosas.
estado de hidratación.
• Se volverá a evaluar a los 3 días.
2. Criterios de alta del paciente deshidratado • Los que a las 48 h de tratamiento no presenten
leve: mejoría.

532
67
BRUCELOSIS

Concepto Patogenia
La brucelosis es una enfermedad infectocontagiosa Después de penetrar en los tejidos por cualquiera de
producida por bacilos del género Brucella, que se las vías utilizadas para ello, digestiva, respiratoria,
trasmite al hombre casi exclusivamente por los ga- cutánea, etc., Brucella es fagocitada por leucocitos
nados vacuno, porcino y caprino, y tiene un perío- polimorfonucleares y monocitos; de sobrevivir, lle-
do agudo febril con pocos signos de localización y ga a los ganglios linfáticos regionales, de donde pasa
un período crónico asociado a recidivas con fiebre, al torrente sanguíneo si logra vencer esta barrera. En
debilidad, sudores, algias osteomusculares y orgá- la sangre es fagocitada por los polimorfonucleares y
nicas. Su mortalidad es baja y cursa con una macrófagos, quienes la transportan a diversos órga-
reticuloendoteliosis granulomatosa reactiva.
nos como hígado, bazo y médula ósea, donde al
Sinonimia multiplicarse da lugar a la formación de granulomas.
De no tratarse estos granulomas, crecen y supuran,
Esta enfermedad ha recibido distintas denominacio-
con la consiguiente bacteriemia persistente y la po-
nes, tanto en el hombre como en los animales. En el
sibilidad de diseminación por toda la economía.
hombre: fiebre ondulante, fiebre melitensis, fiebre
del Mediterráneo, melitococia, fiebre de Barcelona
y fiebre de Malta. En los animales: fiebre de Bang y
Anatomía patológica
aborto epizoótico. La respuesta celular se caracteriza por la aparición
de células mononucleares y epitelioides, que culmi-
Etiología nan en la formación de granulomas con cuerpos ex-
Las cuatro especies del género Brucella que afec- traños de inclusión y células gigantes de Langhans,
tan al hombre, Br. abortus, biotipos 1, 6 y 9; Br. que jamás se caseifican. Es posible identificar el ba-
melitensis, biotipos 1 y 3; Br. suis, biotipos 1 y 5, y cilo dentro de las células del sistema reticuloendote-
Br. canis, son trasmitidas por vacas, cerdos, cabras lial.
y perros, respectivamente. Son cocobacilos gram- Los órganos más afectados son los ganglios linfá-
negativos, aerobios y no producen esporas. ticos, la médula ósea, el hígado y el bazo. El tejido
Rara vez la enfermedad se trasmite de persona a óseo vertebral y de los huesos largos es asiento fre-
persona, pues se contrae por contacto directo con cuente de los bacilos. Éstos también se localizan en
las secreciones y excreciones, y por la ingestión de testículos, ovarios, meninges y en el endocardio.
leche o sus derivados de los animales citados, por
supuesto, exceptuando el perro. Abunda más en las Cuadro clínico
zonas rurales y es muy frecuente entre los emplea-
dos de los mataderos, veterinarios, ganaderos y la- Dentro de la sintomatología de la brucelosis se des-
bradores. Los niños son más resistentes a la taca el polimorfismo de sus manifestaciones clíni-
brucelosis que los adultos. cas, como resultado de la fusión de dos factores
Los gérmenes penetran a través de pequeñas ero- fundamentales: el establecimiento de hipersensibili-
siones de la piel o por el tubo digestivo. dad de tipo IV y el proceso infeccioso en sí.

533
Forma aguda cócico; y un tercer estadio caracterizado por las se-
El período de incubación oscila entre 5 y 30 días, cuelas radiológicas sin expresión clínica. Tiene buen
aunque varía desde pocos días hasta 6 meses. El ini- pronóstico y responde bien al tratamiento.
cio de la enfermedad puede ser súbito, con escalo- La sacroileítis, más común en el individuo joven,
fríos y fiebre, fatiga extrema, cefalea intensa, se caracteriza por un síndrome doloroso de intensi-
anorexia y pérdida de peso, malestar general y algias dad variable, con irradiación crural o ciática, o loca-
indefinidas. En ocasiones hay diarreas. Otras veces lización en la región lumbar. La coxitis y osteítis
el comienzo es insidioso, con pródromos de males- son menos frecuentes.
tar general, mialgias, dolor en la nuca y cefalea, se- Hepáticas. Consisten en hepatopatías crónicas que
guidos de temperatura de 40 ºC, que desciende por a veces evolucionan hacia la cirrosis.
la mañana con gran sudoración. Esta fiebre intermi- Neurológicas. Se acepta como neurobrucelosis a
tente persiste más o menos entre 1 y 5 semanas y le
las manifestaciones neurológicas y del LCR que
sigue un intervalo de remisión sintomática, pero al
aparecen en el curso de una brucelosis aguda o cró-
cabo de 2 semanas aproximadamente recurre un
nica, demostrada por hemocultivo o por seroagluti-
nuevo brote febril, que se prolonga entre 6 y 9 me-
naciones. Es característico el polimorfismo clínico
ses o más. Aquí la dolencia se acompaña de estreñi-
en esta forma de presentación de la enfermedad. Así,
miento pronunciado.
El 25 % de los pacientes experimenta tos produc- se observan desde alteraciones del carácter sin loca-
tiva y dolores abdominales. La depresión y el in- lización neurológica, hasta lesiones objetivas de pa-
somnio son también síntomas frecuentes. La res craneales, médula, raíces y meninges.
inestabilidad afectiva induce a confundir el cuadro Las otras formas de localización menos frecuen-
con una psiconeurosis. tes son: la respiratoria, la cardiovascular, la geni-
La fiebre, síntoma casi constante (95 a 98 % de tourinaria y la ocular.
los casos), es más bien intermitente, con oscilacio-
nes diurnas desde 36,5 a 40 ºC; a veces es continua. Exámenes complementarios
Se presentan adenopatías y esplenomegalia en la Hemograma. El conteo de leucocitos no excede
mitad de los casos. Un signo físico menos frecuen- .
de 10 000 células por mm3 (10,0 109/L) y se señala
te, pero que siempre que exista la sospecha de una linfocitosis relativa.
brucelosis debe buscarse, es el aumento de la sensi- Eritrosedimentación. Es normal o está ligeramente
bilidad a nivel de la columna vertebral. Pueden existir acelerada.
múltiples lesiones cutáneas, como habones urtica- Exámenes de cultivo. El aislamiento del germen
rianos, eritema nudoso, eritema malar similar al del por hemocultivo, medulocultivo o urocultivo, cons-
lupus eritematoso diseminado, rash escarlatiniforme
tituye la única prueba que garantiza el diagnóstico
o rubeoliforme, etc. Rara vez aparece ictericia (1 %
de brucelosis, pero como no siempre resultan posi-
de los casos).
tivas, hay que acudir a métodos indirectos capaces
de demostrar la presencia de anticuerpos específi-
Forma crónica localizada
cos frente a antígenos de Brucella.
Es la única forma de brucelosis crónica aceptable.
Su diagnóstico sólo está justificado cuando se aísla Prueba de seroaglutinación. Es un medio
el organismo responsable de las lesiones en enfer- confiable de laboratorio. El Comité de Expertos en
mos que han sufrido previamente de brucelosis. Las Brucelosis de la FAO/OMS normó la prueba con un
principales localizaciones son osteoarticulares, he- patrón internacional de suero anti-Brucella abortus
páticas y neurológicas. expresado en unidades internacionales (U); una ci-
Osteoarticulares. La más frecuente es la espon- fra de 100 U/ml (que se corresponde con un título
dilitis, que evoluciona en tres estadios: uno inicial, de 1/80) o mayor, indica actividad de la infección.
con signos clásicos importantes, pero sin signos ra- En la actualidad se cuantifican con mejor precisión
diológicos; es la llamada espondilitis melitocócica las inmunoglobulinas específicas por el método
de Roger; un segundo estadio o de espondilitis ELISA, que tiende a imponerse por su mayor sen-
destructiva, que corresponde al seudo Pott melito- sibilidad y especificidad.

534
Otras pruebas. Además de las anteriores, se utili- Tratamiento
zan la prueba de Coombs, fijación del complemento,
Tratamiento profiláctico
rosa de Bengala, precipitación en gel, hemaglutina- No existe procedimiento inmunizante alguno contra
ción, etc. la brucelosis, pero la enfermedad puede prevenirse
Para las lesiones óseas se acude a los rayos X, mediante la pasteurización de la leche, y evitando la
gammagrafía con radioisótopos, TAC y RMN. ingestión de leche cruda y sus derivados si no han
sido tratados de manera correcta.
Diagnóstico Los ganaderos, veterinarios, matadores, etc., de-
La noción de exposición a animales infectados o a ben adoptar el mayor cuidado durante el ejercicio
los productos de éstos, la curva febril, los dolores de sus labores para evitar al máximo la contamina-
indefinidos y erráticos, y la esplenomegalia, son da- ción.
tos que orientarán hacia el diagnóstico de brucelosis. Hay que hacer todo lo posible por descubrir la
El diagnóstico diferencial hay que establecerlo con infección en los animales que la trasmiten, y supri-
la fiebre tifoidea, el paludismo, la tuberculosis, la mirla en su mismo punto de origen.
mononucleosis infecciosa, la enfermedad de Hodg-
kin y, en general, con todos los procesos capaces de Tratamiento de la enfermedad
cursar con fiebre prolongada, y de los cuales puede Debe administrarse una dieta abundante en proteí-
diferenciarse por el cuadro clínico y las investiga- nas y glúcidos, así como un suplemento vitamínico
ciones de laboratorio señaladas. adecuado.
La forma crónica de la enfermedad habrá que di- Se recomienda la psicoterapia de mantenimiento
ferenciarla de las diferentes osteoartropatías, hepato- con el objeto de evitar las reacciones emocionales
patías y neuropatías, según la forma clínica que adversas, y en ocasiones es necesario el concurso
adopte. del psiquiatra.
En relación con el régimen de antibiótico más
Complicaciones efectivo, no existe consenso en el momento actual.
En ocasiones se presentan verdaderos cuadros me- La Organización Mundial de la Salud plantea como
tratamiento de elección para la forma aguda de la
ningoencefálicos, con todas sus secuelas.
enfermedad el siguiente esquema: doxiciclina, 200
La polineuritis periférica es bastante común, en
mg/día, más rifampicina, 600 a 900 mg/día, duran-
especial la del nervio ciático. Las radiculitis denun-
te 6 semanas. Un buen esquema, con el cual se ob-
cian la espondilitis que las causa, por lo general lo-
tienen excelentes resultados, tanto en los casos
calizada en la columna dorsolumbar, con destrucción
agudos como en los crónicos, es el siguiente:
del disco intervertebral y de la porción adyacente de tetraciclina, 2 g/día por vía oral, excepto en la mujer
los cuerpos vertebrales en contacto con él. De for- embarazada y en el niño, y 2 g de estreptomicina
ma excepcional se producen artritis supuradas, y IM, durante un período de tiempo no menor de 2
nunca artritis deformantes. semanas ni mayor de 4. Si en las primeras horas se
La endocarditis es una complicación grave, pero presentara una reacción de tipo Herxheimer, con fie-
rara. La orquitis es frecuente. bre, debilidad e hipotensión arterial que no cede es-
pontáneamente, hay que utilizar los esteroides.
Pronóstico En las mujeres embarazadas y en los niños se debe
La mortalidad no excede del 2 % de todos los casos, emplear el esquema siguiente: Sulfaprim (tri-
y más del 75 % de los pacientes curan en 3 o 6 me- metoprim + sulfametoxazole), en dosis de trimeto-
ses. Las medidas terapéuticas actuales han reducido prim, 10 mg/kg/día, y sulfametoxazole, 50 mg/kg/
de manera considerable las formas crónicas de la día, durante 6 semanas. Algunos autores recomien-
enfermedad. dan otros esquemas terapéuticos.

535
68
ACTINOMICOSIS

La actinomicosis es una infección bacteriana cróni- Si se le da un corte a una tumoración, aparecen


ca causada por varios miembros del género Acti- masas de micelios unidas a una matriz dura de un
nomyces, que se caracteriza por producir áreas de complejo de proteína-polisacárido rico en sales cál-
lesiones purulentas y fibróticas, que evolucionan cicas, que toman un color amarillo brillante y se les
hacia la formación de fístulas cutáneas. Estas bac- denomina “granos de azufre”.
terias se diferencian de los hongos, entre otros deta- La infiltración evoluciona por brotes. Desde la
lles, porque no contienen esteroles en sus paredes boca se propaga, por agudizaciones sucesivas, a las
celulares y son resistentes a la anfotericina B. amígdalas y al esófago, el oído, a los espacios con-
Actinomyces israeli es la especie que con mayor
juntivos del cuello y tórax, y si desciende, es capaz
frecuencia produce la enfermedad en el hombre,
de llegar al mediastino.
aunque A. naeslundii, A. odontolyticus, A. visco-
Sin tratamiento, esta lesión horada los tejidos,
sus, etc., causan cuadros clínicos idénticos. Acti-
nomyces bovis no es patógeno para el hombre. penetra en la piel y produce fístulas crónicas, en las
A. israeli habita normalmente en la cavidad bu- que a veces es posible encontrar destrucción de hue-
cal y el tracto digestivo del ser humano y en caso de sos (periostitis u osteomielitis).
encontrar alguna solución de continuidad en esas Actinomicosis torácica. El sistema respiratorio
localizaciones, se implanta y, por contigüidad, pro- puede ser afectado directamente por inhalación del
duce la forma clínica más frecuente, la cervicofacial. Actinomyces residente en la boca o bien a partir de
Las bacterias pueden ser aspiradas, lo que da lu- la localización cervicofacial. Suele encontrarse en
gar a la forma pulmonar de la actinomicosis, o de- la base de los pulmones y producir nódulos bronco-
glutidas, lo cual origina la forma abdominal o neumónicos que, al abrirse en los bronquios, forman
gastrocólica. Desde estas localizaciones se afectan pequeñas cavernas envueltas en abundante tejido es-
los músculos y los huesos, e incluso se abre hacia el cleroso.
exterior el foco séptico por uno o varios trayectos Desde el punto de vista clínico, el proceso se ma-
fistulosos. nifiesta al principio con los síntomas de una tra-
queobronquitis (tos, expectoración, etc.). Entre el 30
Cuadro clínico
y 50 % de los casos, el esputo contiene granos
Las vías de invasión antes mencionadas producen actinomicóticos y cristales de ácidos grasos en for-
las tres formas clìnicas más comunes de la enfer- ma de agujas.
medad: cervicofacial, torácica y abdominal. Desde el territorio broncopulmonar la infiltración
Actinomicosis cervicofacial. Es la más frecuente
se propaga a la pared costal y produce, al cabo de
de todas. Por lo común afecta la cara, el cuello, las
semanas, una fístula costal o intercostal, que da sali-
regiones submaxilares y parotídea, y obedece a al-
teraciones intrabucales, como extracciones de pie- da a un pus fétido con granos actinomicóticos.
zas dentarias. Las lesiones se presentan como En algunos casos la actinomicosis toracopulmo-
nódulos duros, leñosos, de manera característica nar adopta una evolución aguda, parecida a la de un
sobre el ángulo del maxilar inferior; por último, se tumor maligno.
ablandan, se tornan fluctuantes y supuran por su Actinomicosis abdominal. Depende de la invasión
centro. a la mucosa del apéndice, colon o recto. Produce

536
metástasis pulmonares y, al igual que las formas an- Pronóstico
teriores, invade la piel y ocasiona una fístula. O sea, La forma clínica cervicofacial implica un pronósti-
que cualquier localización primaria es capaz de pro- co favorable, no así las demás, que cuando son muy
pagarse en todas direcciones. avanzadas y extensas tienen un pronóstico sombrío.

Diagnóstico Tratamiento
La afección se reconoce con facilidad ante la pre- En casos de focos pequeños accesibles, el tratamiento
sencia de Actinomyces en el pus obtenido de fístu- de elección lo constituye la extirpación quirúrgica y
las, abscesos o líquidos de empiema. Las colonias la aplicación local de sulfas y penicilina.
se aprecian a simple vista (los característicos “gra- En las formas profundas e inaccesibles a la ciru-
nos de azufre” en las lesiones ulceradas). gía, se recomienda el uso de penicilina G EV, 10
a 20 millones de unidades diarias durante 1 o 2 se-
No tienen utilidad la inoculación animal, ni las
manas. Continuar después con una fenoxipenicilina
pruebas intradérmicas o serológicas. El estudio ra-
por vía oral en dosis de 3 a 4 g/día durante 6 sema-
diológico pocas veces es específico y plantea difi-
nas más. Otros autores recomiendan el uso del me-
cultades con el diagnóstico de tuberculosis y tronidazol, tetraciclina, eritromicina y cefalosporina,
neoplasia pulmonar. entre otras opciones.

537
69
SEPSIS

Cualquier discusión o análisis de la sepsis necesita • Hipoxemia inexplicable.


que se esclarezca la terminología, y es por ello que • Aumento de los niveles de lactato en el plasma.
aquí se utilizará la del Comité de la Conferencia Con- • Coagulopatía inexplicable.
senso ACCP/SCCM de 1991, que es la más acepta-
da internacionalmente. Hipotensión inducida por sepsis. Presión arterial
Infección. Fenómeno microbiano caracterizado sistólica menor de 90 mmHg o una reducción mayor
por una respuesta inflamatoria a la presencia de de 40 mmHg de los valores de base, en ausencia de
microrganismos, o a la invasión de tejidos normal- otras causas de hipotensión (ejemplo: shock cardio-
mente estériles del hospedero por aquéllos. génico). Es habitual que se solucione mediante la
Bacteriemia. Presencia de bacterias viables en la administración de volumen.
sangre. La de virus, hongos, parásitos u otros pató- Shock séptico. Hipotensión inducida por una sepsis
genos en la sangre debe describirse en forma simi- que se mantiene a pesar de la reanimación adecuada
lar (ejemplo: viremia, funguemia, parasitemia, etc.). con volumen, así como trastornos de la perfusión que
Síndrome de respuesta inflamatoria sistémica incluyen, entre otros, acidosis láctica, oliguria o una
(SIRS). Es la respuesta inflamatoria sistémica a una alteración aguda del estado mental. Los pacientes
variedad de insultos clínicos severos, que se mani- que reciben agentes inotrópicos o vasopresores pue-
fiesta por dos o más de los indicadores siguientes: den no estar hipotensos en el momento en que se
aprecien los disturbios de la perfusión.
1. Temperatura > 38 °C o < 36 °C. Síndrome de disfunción múltiple de órganos
2. Frecuencia cardíaca > 90 latidos/min. (MODS). Es la presencia de más de una función or-
3. Frecuencia respiratoria > 20/min o PaCO2 gánica alterada en un paciente agudamente enfermo,
< 32 mmHg. de forma tal, que la homeostasia no puede mante-
4. Conteo de leucocitos > 12 000/mm3 (>12,0 . nerse sin intervención.
.
109/L) o < 4 000/mm3 (< 4,0 109/L ) o > 10 %
Otros términos que no sean los antes definidos
de neutrófilos inmaduros (segmentados).
deben eliminarse.
Cuando el SIRS es el resultado de un proceso in-
Concepto
feccioso confirmado, recibe el nombre de sepsis.
Sepsis. Es la respuesta sistémica a la infección, La sepsis es un estado patológico causado por la al-
manifestada por dos o más de los indicadores antes teración de la homeostasia a consecuencia de una
mencionados. infección generalizada, las toxinas bacterianas o la
Sepsis severa. Sepsis asociada a disfunción de acción de mediadores inflamatorios.
órganos, hipoperfusión o hipotensión arterial. Las Es conveniente aclarar que cuando ocurre una in-
alteraciones pueden incluir: fección, existe necrosis del tejido y de las células
del exudado (predominan los neutrófilos) con for-
• Hipotensión arterial. mación de pus. Esta colección purulenta se encapsula
• Disminución de la diuresis (< 0,5 ml/kg/h). y da lugar a un absceso, o bien pasan a la sangre los
• Alteración aguda del estado mental. microrganismos o sus toxinas y provocan una sepsis.

538
La colección purulenta referida es el foco infec- producidas por gérmenes anaerobios o por Candida
cioso o séptico, por lo cual para hablar de una sepsis albicans.
debe de existir un foco séptico que se comunique
con la circulación y que el número de microrganis- Epidemiología
mos o la cantidad de toxinas que pase a la sangre Las sepsis se presentan en cualquier época de la vida,
sea abundante. pero están más expuestas las edades extremas. Am-
En el curso de muchas enfermedades infecciosas bos sexos se afectan por igual.
y en algunos procederes (manipulación dental o del En los Estados Unidos constituye la 13ra. causa de
tractus urinario), pasan gérmenes por la sangre de muerte y alcanza una mortalidad entre 40 y 60 %.
manera transitoria. Esto es lo que se llama bacterie- Los factores predisponentes se exponen en el cua-
mia, viremia, funguemia, etc., pues en la sepsis se dro 69.1.
requiere una respuesta inflamatoria del organismo,
que incluye la activación de una serie de mediado- CUADRO 69.1
res endógenos y el inicio de diferentes mecanismos FACTORES DE RIESGO PARA EL DESARROLLO
DE LA SEPSIS
cascada, por lo común autolimitados, pero que en la
sepsis se convierten en arrolladores. Enfermedades: Drogas:
En la toxemia, las toxinas pasan al torrente circu- • Diabetes mellitus • Esteroides
latorio, por lo que los hemocultivos que se realizan • Cáncer • Quimioterapia
no serán necesariamente positivos. • Cirrosis hepática • Dextrán/hespán
Etiología • Enfermedad cardiovascular • AINE
• Enfermedad pulmonar • Antibióticos
Muchos son los gérmenes que dan lugar a una sepsis. crónica
Casi siempre son bacterias patógenas, pero a veces • Obesidad Estados patológicos:
los saprofitos se multiplican de forma exagerada o • SIDA • Shock prolongado
exaltan su virulencia y la producen.
• Alcoholismo • Hipotermia
En general, la incidencia de la sepsis por gérme-
nes grampositivos y gramnegativos resulta similar, • Acidosis
aunque los segundos predominan en las nosocomia- Factores lesionales: • Hipovolemia
les. El incremento en la incidencia de la sepsis se • Traumatismo mayor • Broncoaspiración
atribuye a los factores siguientes: • Lesión térmica mayor • Hipoventilación
• Mayor número de pacientes de edad avanzada • Lesión eléctrica
y de individuos inmunosuprimidos. • Lesión por aplastamiento Complicaciones:
• Mayor utilización de procederes invasivos y de • Sobredosis de drogas • Infección no tratada
los avances tecnológicos. • Cirugía mayor • Coagulopatías
• Mayor uso de agentes inmunosupresores. • Debridamiento inade-
• Manejo agresivo de enfermedades neoplásicas. Factores terapéuticos: cuado
• Incremento del trasplante. • Transfusión masiva • Infección nosocomial
• Inmovilización prolongada • Yatrogenia
Entre los gérmenes gramnegativos se destacan Es- • Soporte nutricional inadecuado
cherichia coli, especies de Klebsiella y Proteus, • Falla en la asepsia y en el
Pseudomona aeuruginosa, Serratia marcescens y lavado de las manos
Enterobacter. Entre los grampositivos se hallan Sta-
• Equipos hospitalarios
phylococcus aureus y S. epidermidis, Streptococcus
pyogenes (grupos A, B, C y G), así como el
neumococo.También Clostridium perfringens y Lis- En esta afección se deben considerar los puntos
teria monocitogenes, entre otros. fundamentales de importancia etiológica, que son:
Hay que recordar que las sepsis polimicrobianas la puerta de entrada, el foco séptico y las metástasis.
son frecuentes en las peritonitis y en los politrauma- La puerta de entrada puede guiar hacia el germen
tizados, y que deben tenerse siempre presentes las causal y así se sospecha la génesis estreptocócica si

539
se encuentra un absceso periamigdalino. En los en- gítico que asienta en los ganglios mesentéricos en la
fermos sometidos a cateterización de venas profun- fiebre tifoidea.
das, el germen más frecuente es Staphylococcus En general, la sepsis por gérmenes gramnegati-
epidermidis. Las infecciones por Pseudomona aeru- vos sigue a una infección en un foco primario del
ginosa son comunes en el medio hospitalario. Des- tracto genitourinario, del árbol biliar, del tracto gas-
pués de un parto, un aborto o un examen urológico trointestinal o de los pulmones. También son fre-
instrumental, es lógico sospechar la puerta de entra- cuentes en pacientes quemados, en portadores de
da en esas localizaciones, lo que pone al médico en enfermedades neoplásicas (leucemias, linfomas), en
condiciones de eliminar dichos focos sépticos. los desnutridos y en las infecciones nosocomiales.
A veces la puerta de entrada se escapa, como Cuando el germen asienta en una vena, se consi-
ocurre con los ganglios tuberculosos que se caseifi- dera que constituye un foco tromboflebítico. Al al-
can, drenan a la sangre y dan lugar a diseminación, canzar los vasos, la infección provoca trombosis; los
y otro tanto sucede con la puerta de entrada intesti- gérmenes se multiplican en este lugar y posterior-
nal, la cual no siempre es evidente. mente llegan al torrente sanguíneo. Esto ocurre en
El paso de bacterias a través de la superficie la otitis, que produce tromboflebitis del seno lateral,
epitelial intacta del intestino es un proceso fisioló- mientras que el plexo vesicoprostático sufre por las
gico que normalmente no ocasiona enfermedad. Una infecciones prostáticas y epididimarias. Las várices
vez que la bacteria alcanza la lámina propia intesti- y úlceras varicosas también son focos sépticos que
nal es fagocitada por los neutrófilos y los macrófa- deben tenerse en cuenta.
gos. Cuando la puerta de entrada se comunica con un
El término translocación bacteriana fue utilizado vaso sanguíneo y vierte en él su producto infectan-
por primera vez por Wolochow en 1966, para des- te, tiene lugar el foco séptico de primer orden. Los
cribir el paso de bacterias a través de la pared intes- gérmenes vertidos se asientan en cualquier parte y
tinal, pero ya Fine, desde la década de los años 50, constituyen un foco séptico de segundo orden. Si a
había demostrado que las endotoxinas podían esca- partir de éste se forman asentamientos a distancia,
par del intestino, llegar por vía linfática a los nódulos tenemos los focos sépticos de tercer orden.
linfáticos regionales y alcanzar el sistema reticulo- Las metástasis sépticas se producen sobre todo
endotelial (SRE), para producir un cuadro de sepsis en los pulmones, los riñones, el hígado o en los hue-
o de shock séptico. Este concepto explica la infec- sos. Provocan edema y hemorragia pulmonar, ne-
ción por bacterias endógenas y la aparente paradoja crosis cortical o tubular renal, necrosis hepática o
de un cuadro clínico de sepsis o de un MODS, sin ulceraciones superficiales del tracto gastrointestinal,
foco séptico. así como trombosis capilar generalizada, con las
Hay que tener en cuenta los focos sépticos, como manifestaciones clínicas correspondientes.
los cavitarios, los de origen linfangítico y los trom-
boflebíticos. Entre los cavitarios se encuentran la Patogenia
sepsis puerperal, la osteomielitis y la pielonefritis. Hasta el momento la patogenia de la sepsis no está
La osteomielitis casi siempre es de origen estafilo- del todo aclarada, pero se sabe que está mediada por
cócico, mientras que en la pielonefritis los gramne- la respuesta inflamatoria del organismo a los gér-
gativos como Escherichia coli y Proteus son los más menes y en ella se señalan tres niveles o etapas: el
importantes. Otras cavidades como los senos peri- evento inicial, los mediadores y las células efectoras.
nasales, son asiento de infecciones productoras de 1. El evento inicial (las toxinas)
sepsis. Desde un foco séptico único o múltiple, las toxinas
Las infecciones de los vasos linfáticos ocasionan de los gérmenes pasan a la sangre. En la actualidad
las llamadas sepsis de origen linfangítico. Tanto las y debido a la frecuencia de infecciones por gramne-
que anidan en las amígdalas como en los parametrios gativos, se estima que la endotoxina o lipopolisacá-
y en los ganglios linfáticos regionales, se encuen- rido es la que inicia muchos de los síntomas, así como
tran en este grupo, al igual que las que asientan en los cambios fisiológicos y las anormalidades bio-
partes blandas tras heridas infectadas, furúnculos, químicas que caracterizan la sepsis. La endotoxina
gangrena gaseosa, etc. Recordemos el foco linfan- es una molécula conglomerada compuesta de hete-

540
ropolisacáridos hidrofílicos y lípidos hidrofóbicos, Papel de las citocinas.Las citocinas son peque-
que posee un peso molecular cercano al millón de ñas proteínas similares a hormonas con múltiples
daltons. Existen tres áreas principales en la endo- efectos biológicos, producidas en particular por los
toxina: la porción polisacárida externa, muy antigé- mononucleares de la sangre y las células fagocíticas
nica, conocida como antígeno O; la porción media, (macrófagos). Existen evidencias de que las citoci-
conocida como región R, que está constituida por nas que pertenecen al grupo de las llamadas “infla-
azúcares y cetodeoxioctanoato; y la porción más in- matorias”—interleukinas α (IL-1, IL-6, IL-8),
terna o core, la región lipídica A, que le confiere la interferón gamma y en particular FNT- α— están
mayor parte de sus actividades biológicas. relacionadas en particular con la patogenia de la
El organismo trata de eliminar las toxinas bacte- sepsis y el shock séptico, pues a ellas se atribuyen
rianas (endotoxinas de gérmenes gramnegativos o las siguientes acciones:
exotoxinas de grampositivos) a través del SRE, por a) Son pirógenos endógenos.
lo que la presencia de éstas en la sangre periférica b) Provocan hipotensión arterial.
precediendo a menudo los hemocultivos positivos, c) Aumentan la permeabilidad endotelial.
representa el agotamiento de la capacidad de acla- d) Causan un efecto citotóxico endotelial.
ramiento del SRE, lo que les permite la invasión del • Favorecen la agregación leucocitaria al en-
sistema circulatorio. dotelio
Lo más importante de estas moléculas es que • Propician la liberación de proteasas y de ra-
desencadenan una violenta respuesta inflamatoria or- dicales tóxicos del oxígeno por los neutró-
gánica a través de mediadores, que se activan con filos.
su presencia. • Disminuyen la trombomodulina, lo que faci-
2. Los mediadores lita la CID.
Algunos de ellos se enuncian en el recuadro. El pro-
blema actual es que se desconoce cuáles son los ini- Sistemas cascada. Papel del complemento. La ac-
ciadores, los propagadores o los “espectadores” de tivación del complemento genera una serie de
la respuesta inflamatoria. En realidad, constituyen péptidos que por sus propiedades biológicas se co-
parte de una serie de mecanismos de defensa que nocen como anafilotoxinas, y de ellas la más pode-
resultan fisiológicamente exagerados y que inclu- rosa es la C5a. Entre sus principales efectos se
yen: mencionan:
a) Liberación de citocinas a la circulación.
b) Activación de los sistemas cascada proteicos • Hipotensión arterial.
del plasma, tales como el complemento, la coa- • Aumento de la permeabilidad endotelial.
gulación y el fibrinolítico. • Inducen la formación de citocinas.
c) Activación de neutrófilos y monocitos. • Estimulación de neutrófilos.
MEDIADORES POTENCIALES DE LA SEPSIS
Sistemas contacto, coagulación y fibrinólisis. Los
sistemas contacto de la coagulación vienen deter-
• Citocinas (FNT, interleukinas).
• Complemento activado. minados por los factores XI y XII, la precalikreína y
• Cascada intrínseca de la coagulación. el kininógeno de alto peso molecular. Sus efectos
• Activación de la fibrinólisis. básicos son:
• Sistema de la bradikinina.
• Eicosanoides metabolitos del ácido araquidónico.
• Sustancia o factor depresor del miocardio.
• Hipotensión arterial por disminución del tono
• Leucocitos polimorfonucleares. vascular.
• Macrófagos hísticos y monocitos. • Aumento de la permeabilidad endotelial.
• Plaquetas.
• Agregación y desgranulación de neutrófilos.
• Histamina.
• Endorfinas.
• Factor activador plaquetario (PAF). La sepsis está reconocida como la primera causa
• Radicales tóxicos del oxígeno. de CID, y ésta contribuye al MODS. El inicio de la
• Enzimas lisosomales y elastasa.
coagulación parece deberse a la interacción de las

541
citocinas FNT e IL-1 con las células endoteliales, Éstos evitan que la perfusión sea adecuada para
mientras que la formación de fibrina induce la acti- cubrir las necesidades metabólicas celulares, con
vación del sistema fibrinolítico. El papel exacto del trastornos en la utilización del oxígeno, acidosis me-
mecanismo de la coagulación y del sistema fibrino- tabólica y muerte celular (Fig. 69.1).
lítico en la sepsis, aún no está bien establecido.
Toxinas bacterianas
Como se observa, los efectos pirógeno, hipoten-
sor, de lesión endotelial y alteración de la permeabi-
Saturación del SRE
lidad vascular, así como de activación de efectores,
resultan comunes entre los mediadores.
3. Las células efectoras (neutrófilos y células endo- Liberación de mediadores
teliales)
Los neutrófilos llegan a la zona inflamatoria median-
Interacción con endotelio y activación de efectores
te la atracción de sustancias quimiotácticas, tales
como las quimioquinas (citocinas quimiotácticas),
los péptidos producto de las vías del complemen- Descamación endotelial Liberan radicales libres O2
to C3a y C5a y la properdina. El daño orgánico me- y proteasas
diado por los neutrófilos tiene como primer paso la
unión de éstos a las células endoteliales mediante Agregados de Liberación de vasoactivos
plaquetas y
las β2-integrinas (proteínas de adhesión leucocita- leucocitos
rias), que poseen el complejo de adhesión CD11- Cambios hemodinámicos
CD18, que interactúa con los receptores endoteliales.
Estos receptores endoteliales son las moléculas de Hipoperfusión celular
adhesión intercelular (ICAM-1) y las moléculas de
adhesión leucocito-endotelio (ELAM-1), cuya acti- Trastornos de distribución y
vidad se exacerba por la acción de las citocinas. Ya utilización del O2
adheridos, los neutrófilos migran al intersticio del
tejido, donde se ponen en contacto con las proteínas Lesión celular y muerte
de la matriz extracelular (fibronectina y laminina),
las que activan su capacidad fagocítica y oxidativa, Fig. 69.1. Alteraciones en la perfusión y daño celular.
con lo que contribuyen a la respuesta inflamatoria
mediante sus productos (colagenasa, mieloperoxi- Trastornos metabólicos y de la oxigenación
dasa, etc.) y la elaboración de especies reactivas del La sepsis es una enfermedad adquirida del metabo-
O2. Todo ello lesiona la membrana y otros sitios de lismo intermedio, producida por agentes infeccio-
la célula, lo que ocasiona su muerte. sos que causan deficiencias en el aporte energético
Por otra parte, al interactuar los mediadores con celular. Desde el punto de vista metabólico se puede
el endotelio vascular ocasionan descamación endo- conceptuar como un estado de hipoxia celular pro-
telial y liberación de la sustancia vasodilatadora óxi- vocado por una perfusión hística inadecuada o por
do nítrico (lo que explica la disminución de la un defecto en la utilización del oxígeno a nivel celu-
resistencia vascular) y del péptido vasoconstrictor lar, por lo que sus manifestaciones no se relacionan
endotelina, los que provocan perfusión hística no de forma exclusiva con las de los órganos y siste-
homogénea (alternan áreas vasodilatadas con otras mas, sino también con la incapacidad de utilizar con
vasocontraídas, con independencia de las necesida- eficiencia los sustratos metabólicos existentes.
des hísticas). Todo lo anterior causa: La sepsis causa un estado hipermetabólico con
1. Cambios microcirculatorios. incremento en la utilización de la glucosa y aumen-
• Reducción del área de intercambio endote- to en la producción de lactato, a pesar de que las
lial para nutrientes y metabolitos. condiciones del transporte del oxígeno a la célula
2. Cambios macrocirculatorios. sean adecuadas y de que en algunos individuos el
• Disminución de la contractilidad miocárdica. consumo de oxígeno celular se haga patológicamente
• Hipertensión pulmonar. dependiente del transporte de éste por la sangre.

542
Cuadro clínico polineuropatía periférica, en la que existe degenera-
ción axonal primaria de las fibras sensitivas y mo-
La forma de comienzo no siempre es igual. En oca-
toras.
siones es aguda y la anamnesis recoge una puerta de
entrada reciente, como ocurre en la sepsis puerperal.
Manifestaciones cutáneas
Otras veces el paciente no puede precisar el inicio
del cuadro, como sucede en la endocarditis infec- En ocasiones aparecen pústulas en cualquier punto
ciosa subaguda. Aunque existe fiebre en algún mo- de la piel, miliares o mayores, que adoptan un as-
mento de la evolución, hay enfermos que llegan pecto penfigoide, lo cual permite en este caso sos-
durante una remisión de ésta, lo que enmascara el pechar el origen estafilocócico de la sepsis.
diagnóstico; no obstante, la fiebre es un dato muy En las infecciones por Pseudomona aeruginosa
importante y ya los autores clásicos distinguían la se presentan lesiones maculares que llegan a formar
sepsis por la presencia de tres síntomas: fiebre, es- placas, a veces negruzcas, que pueden ulcerarse.
calofríos y taquicardia. La ausencia de estos signos Las meningococemias producen lesiones en for-
debe extrañar al médico que sospeche estar frente a ma de roséola hemorrágica, y las estreptococemias,
este cuadro, a menos que existan otros elementos eritemas de tipo multiforme, exfoliativo, nudoso u
capaces de modificarlo. otros.

Fiebre Manifestaciones osteoarticulares


Adopta varias modalidades: alta y con frecuencia En los huesos y articulaciones hacen su aparición
continua en las sepsis linfangíticas; intermitente o metástasis sépticas, particularmente en las estrepto-
remitente en las de origen cavitario y en las trombo- cócicas y estafilocócicas. Las metástasis se presen-
flebíticas. En el tipo intermitente el escalofrío es la tan en forma brusca (en la gonococemia) en una sola
regla, sobre todo al inicio. articulación, con signos flogísticos en los que pre-
Se presenta hipotermia en el 13 % de los pacien- domina el dolor; o son de tipo poliarticular, agudas
tes, en especial en las edades extremas de la vida, en y simétricas. Otras veces se afectan varias articula-
los debilitados crónicamente y en los inmunosupri- ciones en forma migratoria.
midos. Esta manifestación durante las primeras 24 h Los pacientes se quejan de mialgias y hay verda-
del cuadro clínico, resulta de mal pronóstico. deras miositis, y en la leptospirosis son muy carac-
terísticos los dolores en los muslos y las pantorrillas.
Manifestaciones psíquicas y neurológicas El estreptococo y el estafilococo a veces produ-
El sensorio suele estar embotado, como ocurre en la cen metástasis purulentas que afectan el tejido sub-
fiebre tifoidea y en algunas sepsis estafilocócicas; cutáneo o el músculo, y originan celulitis y abscesos.
en cambio, está claro en entidades como la endocar- Además, Clostridium perfringens causa flemones
ditis infecciosa; mientras que en otras se desarrolla gaseosos.
un estado confusional agudo con delirio.
Algunos autores relacionan estos cambios en el Manifestaciones pleuropulmonares
estado mental con alteraciones en la perfusión y en La taquipnea y la hiperventilación constituyen ma-
el metabolismo cerebral. Está demostrado el aumento nifestaciones tempranas de la sepsis, a lo que des-
de la feniletilamina y de su metabolito, el ácido pués se asocia la hipoxia. La compliance pulmonar
fenilacético, en los pacientes con encefalopatía sép- disminuye y también se asocia hipertensión pul-
tica. monar.
Es posible la aparición de una meningitis en el Las manifestaciones del sistema respiratorio son
curso de las infecciones por neumococos y menin- de tres tipos:
gococos. Otras veces ocurre un meningismo, es de-
cir, un síndrome meníngeo clínico pero con líquido 1. Neumonía séptica. Se produce con mayor fre-
cefalorraquídeo normal. cuencia por estreptococos y estafilococos, y se
En algunos casos se encuentran hemiplejías por expresa con el cuadro clásico de una neumo-
embolismo cerebral séptico; en otros los estudios nía, aunque su evolución resulta prolongada y
electrofisiológicos de los nervios demuestran una su resolución es por lisis.

543
2. Infarto embólico. Es aparatoso, pero rara vez En las arterias periféricas ocurren embolias y
afecta el tronco de la arteria pulmonar o una de trombosis con oclusión vascular, lo que origina un
sus ramas gruesas. Al propagarse la lesión hasta cuadro de insuficiencia arterial. Las venas, como ya
la periferia, da lugar a una reacción pleural. se mencionó, suelen ser la causa y, además, sufrir
3. Absceso pulmonar. Suele instalarse tras una de las consecuencias de la sepsis.
las situaciones anteriores, aunque también apa-
rece de manera primitiva. En cualquiera de sus Manifestaciones renales
formas provoca tos intensa con expectoración Los riñones se afectan en distintos grados. A veces
abundante, purulenta y fétida, en forma de se trata de una simple albuminuria, de una hematu-
vómica. ria discreta o de una alteración del sedimento urinario.
En otras ocasiones se produce una glomerulonefri-
tis, una nefritis intersticial o una necrosis tubular agu-
Lo más temido en la sepsis es la instalación de
da que daña severamente la función renal y ocasiona
una insuficiencia respiratoria aguda, como manifes-
una insuficiencia renal aguda. Como el germen cau-
tación de una lesión pulmonar, que puede evolucio-
sal se elimina por la orina, el urocultivo resulta de
nar hacia un síndrome de distress respiratorio agudo
importancia. En las formas graves de sepsis por neu-
(SDRA). mococos, estreptococos y Clostridium perfringens,
a veces ocurre hemoglobinuria.
Manifestaciones cardiovasculares
Hemodinámicamente, la sepsis es un estado hiper- Manifestaciones digestivas
dinámico que se caracteriza por un gasto cardíaco La lengua y la faringe aparecen secas y deslustradas.
elevado, con resistencias sistémicas disminuidas, tí- Los vómitos son reflejos o expresión de una gastri-
pico de los sobrevivientes y de los que fallecen; no tis tóxica; las hematemesis y melena siguen al san-
obstante, los primeros se caracterizan por un retor- gramiento digestivo provocado por úlceras agudas
no de dicho estado a la normalidad, mientras que en de stress. Las diarreas se observan como consecuen-
los segundos esto nunca ocurre durante toda la evo- cia de la irritación intestinal por abscesos interasas
lución. A pesar de este gasto cardíaco elevado, se o por disbacteriosis ocasionadas por la terapéutica.
comprueba una disfunción cardíaca que de manera Sin embargo, no resulta infrecuente la presencia de
habitual se identifica a través de la disminución de íleo paralítico. Los infartos sépticos intrabdomina-
la respuesta a la carga líquida y al soporte inotrópico. les pueden esfacelarse y al liberarse en la cavidad
En muchos pacientes se aprecia una hipertensión peritoneal, originar un abdomen agudo.
pulmonar que sólo desaparece al eliminar el foco No es rara una hepatitis toxinfecciosa, que se ex-
séptico, y que hace claudicar las cavidades derechas presa con una ictericia. En los casos de colangitis
del corazón. ocurren abscesos hepáticos múltiples, lo cual cons-
tituye una temible complicación.
Las metástasis de un foco séptico pueden afectar
el corazón, sobre todo el endocardio valvular y pro-
Manifestaciones de órganos de los sentidos
ducir una endocarditis aguda, que a su vez se cons-
Los ojos resultan ser los más afectados. Se presen-
tituye en foco séptico de segundo orden, desde donde
tan flictenas conjuntivales, o manifestaciones visua-
envía sus metástasis a otros órganos dada su situa- les a consecuencia de trombosis de la arteria central
ción favorecedora para la diseminación de gérme- de la retina. El cuadro puede ser aún más grave y
nes. Aunque la endocarditis que complica una sepsis producirse una panoftalmía purulenta, un absceso
resulta muchas veces un hallazgo necrópsico, la apa- retrobulbar o una tromboflebitis del seno cavernoso.
rición de disnea, palidez o un soplo diastólico, debe
ponernos en condiciones de descubrirla. También son Manifestaciones hematológicas
asiento de metástasis el miocardio y el pericardio. Casi siempre existe leucocitosis con desviación iz-
Las toxinas provocan una miocarditis o el shock, quierda, que en algunas sepsis por gérmenes de la
que a veces constituye la primera manifestación de gangrena gaseosa alcanza reacciones leucemoides.
una sepsis. La presencia de granulaciones tóxicas y vacuoliza-

544
ciones en los leucocitos no es infrecuente. Los lin- menes alcanzan la cavidad pelviana por vía lin-
focitos y los eosinófilos están disminuidos y mu- fática y originan una peritonitis.
chas veces estos últimos desaparecen. En el período 3. Variedad tromboflebítica. Entre los gérmenes
inicial de las sepsis por gérmenes gramnegativos pue- que con más frecuencia la causan, están los
de faltar la leucocitosis y haber una leucopenia con colibacilos, Staphylococcus aureus y Strepto-
neutrofilia relativa. coccus pyogenes. El cuadro clínico es grave,
En algunos pacientes se hallan cifras normales de con fiebre, escalofríos, anemia, tromboflebitis
eritrocitos, pero la anemia es casi una constante, y en los miembros inferiores y a veces metásta-
ciertos gérmenes, como los clostridium, provocan sis sépticas en el endocardio, los pulmones, etc.
un síndrome hemolítico. El shock y la CID son sus entidades acompa-
Las plaquetas disminuyen y en ocasiones se ins- ñantes habituales.
tala una CID.
Habitualmente la médula presenta aumento de Diagnóstico
mielocitos y metamielocitos, aunque ocurren ver- El diagnóstico de sepsis requiere en todos los casos
daderas agranulocitosis tóxicas. que se cumplan los criterios enunciados en la defi-
La esplenomegalia aparece casi siempre, en ma- nición, así como la práctica del hemocultivo para
yor o menor grado. De producirse infartos sépticos encontrar e identificar el microrganismo causal, aun-
en ella, llegan a supurar, aunque a veces éstos son que esto no siempre resulta fácil. Por otra parte, no
causados por trombos esplénicos. Ambos tipos son basta encontrar a veces un hemocultivo positivo,
muy dolorosos a la palpación. pues en muchas enfermedades infecciosas se produ-
cen bacteriemias, y es por ello que se necesitan sig-
Aborto séptico nos objetivos de una infección generalizada.
La incidencia de las sepsis por aborto ha disminui- El hemocultivo debe de realizarse antes de admi-
do de manera notable por el mejoramiento de los nistrar tratamiento específico con antibióticos o qui-
métodos anticonceptivos, la educación sanitaria y la mioterápicos, porque la presencia en la sangre de
institucionalización de la interrupción del embara- estos productos interfiere el crecimiento de los gér-
zo. Sin embargo, se hará una breve referencia a este menes. En caso de que se produzca la administra-
tipo particular de sepsis. ción de antibióticos o quimioterápicos previa a la
La infección en el aborto espontáneo es casi siem- toma del hemocultivo, esto debe consignarse en los
pre localizada, pero en el provocado, se debe a la modelos donde se ordene la investigación, pues así
perturbación de los mecanismos de defensa de los el microbiólogo estará en condiciones de añadir al
tejidos, por un traumatismo físico o químico, más medio de cultivo las sustancias inhibidoras de di-
una evacuación incompleta de los productos de la chos medicamentos; por ejemplo, ácido paramino-
concepción, lo que hace que la infección se extien- benzoico para inhibir las sulfas, penicilinasa contra
da hacia las vísceras pelvianas, el peritoneo y la la penicilina, hidratos de cisteína contra la estrepto-
sangre. micina, etc. También se indicarán cultivos de se-
Entre las variedades de sepsis por aborto se citan: creciones de heridas, de la orina, del propio foco
1. Variedad endométrica. Sus gérmenes causales séptico, etc.
son Streptococcus haemolyticus, los estafilo- En casos de sepsis es muy importante trabajar en
cocos y el colibacilo. Se caracteriza por cóli- conjunto con el microbiólogo y seguir estrechamente
cos uterinos, fiebre con escalofríos y alguna vinculado a él una vez confirmado el diagnóstico,
toma del estado general. A veces se produce para indicar nuevos estudios, y aun después de la
una endomiometritis con esfacelación del múscu- cura clínica del paciente, pues se necesitan por lo
lo uterino. menos dos hemocultivos negativos para dar el alta
2. Variedad linfangítica. Es causada por Strepto- bacteriológica.
coccus haemolyticus y Clostridium perfringens,
los que provocan un cuadro más serio que la Complicaciones
variedad anterior. Invade los parametrios, la Son numerosas las complicaciones que puede pro-
vejiga, el recto y las paredes pelvianas. Los gér- ducir una sepsis.

545
1. Insuficiencia respiratoria aguda. Lo más temi- Toxinas bacterianas
do en la sepsis es la instalación de una insufi-
ciencia respiratoria aguda como manifestación Activación exagerada de los mecanismos de defensa
de una lesión pulmonar aguda, por la posibili-
dad de que evolucione hacia un SDRA, lo que
ocurre entre el 5 y el 40 % de los pacientes. Activación Activación del Activación de Activación del
de factores complemento neutrófilos endotelio
2. Shock séptico. Se presenta hasta en el 20 % de de contacto
los enfermos portadores de una sepsis y su
mortalidad es elevada. Daño endotelial
3. Trastornos de la coagulación. Aparecen trastor-
nos de la coagulación tales como trombocito- Lesión pulmonar Shock S.disfunción Coagulación
penia, CID y fibrinólisis. La sepsis constituye aguda múltiple de intravascualar
la causa principal de CID, y su presencia, diag- S. distress respiratorio órganos diseminada
nosticada por los medios de laboratorio o por- agudo (SDRA) (MODS) (CID)
que tiene lugar una diátesis hemorrágica,
constituye un signo de mal pronóstico. Fig. 69.2. Mecanismo de producción de las complicaciones de
4. Insuficiencia renal. La oliguria ocurre precoz- la sepsis.
mente en algunos casos por depleción del vo-
lumen intravascular o por una inadecuada polimicrobianas o por anaerobios, comparten este
perfusión renal. Con posterioridad se desarro- mal pronóstico.
lla una necrosis tubular aguda. Mientras el foco séptico esté enviando microrga-
5. Síndrome de disfunción múltiple de órganos. nismos a la circulación, se mantendrá la sepsis. Es
El daño endotelial de la sepsis, así como las por ello que su diagnóstico precoz, así como el des-
alteraciones de la oxigenación que se provo- cubrimiento de la sensibilidad antibiótica del ger-
can, constituyen el común denominador para men, favorecen el pronóstico.
que se instale el MODS, que agrava el pronós-
tico del paciente en forma proporcional al nú-
Tratamiento
mero de órganos en disfunción. Hasta nuestros 1. Preventivo
días, si existe disfunción de 3 órganos o más Lo fundamental en muchas entidades es su profi-
durante 5 días, la mortalidad alcanza el 100 % laxis y, en particular para la de la sepsis, algunos
(Fig. 69.2). señalan que el uso de medicamentos bloqueadores
6. Otras complicaciones. Pueden presentarse he- de los receptores gástricos H2, así como de alcalini-
morragias del tracto gastrointestinal e insufi- zantes con el objetivo de evitar la úlcera de stress,
ciencia hepática terminal. favorecen la colonización gástrica bacteriana y el
desarrollo de neumonías y sepsis nosocomiales, por
Pronóstico lo que recomiendan la utilización de citoprotectores
Para establecer el pronóstico de la sepsis, resulta de- no absorbibles (sucralfato, magaldrato, etc.) y evi-
cisivo conocer la virulencia del germen, la resisten- tar los anteriores.
cia del organismo, la topografía del foco séptico y Partiendo del principio de que el intestino puede
la ocurrencia o no de focos sépticos secundarios en ser la fuente de origen de las sepsis con puerta de
órganos vitales como el cerebro, las suprarrenales y entrada no bien precisada, existen investigaciones
el corazón. en que se administra por aplicación faríngea y por
Los ancianos, los malnutridos por defecto, los vía enteral una mezcla de antibióticos no absorbibles
neutropénicos, los sometidos a terapéutica inmuno- (colistimetato, 100 mg; tobramicina, 80 mg, y anfo-
supresora y los que padecen de enfermedades tericín B, 100 mg), para lograr la descontaminación
siderantes, presentan mal pronóstico. Así mismo, intestinal selectiva en pacientes con alto riesgo de
aquellos enfermos en los que se han utilizado de sepsis. Esto sólo resulta efectivo en este reducido
manera indiscriminada los antibióticos, los portado- grupo de enfermos y no debe considerarse una prác-
res de sepsis de origen nosocomial y las sepsis tica para generalizar, a pesar de que con ello se han

546
reducido las infecciones, la sepsis, el shock séptico búsqueda. No se debe olvidar la retirada de solucio-
y la mortalidad; además, los costos en la atención nes o catéteres intravenosos o arteriales posiblemente
han aumentado. infectados, debridar tejidos necróticos y abrir heri-
Está demostrado que un número cada vez mayor das quirúrgicas infectadas, que permitan un trata-
de componentes dietéticos modifican la función del miento adecuado y posibiliten tomar muestras para
sistema inmune, por lo que se considera que poseen estudios bacteriológicos.
un efecto farmacológico. Entre ellos se encuentran En caso de no poder localizar o eliminar el foco
las proteínas, la arginina, los ácidos grasos omega-6 séptico, la supresión de toxinas (destoxificación
y omega-3, el hierro, el zinc y las vitaminas A, C y plasmática) por medio de la hemodiálisis asociada a
E. La “nutrición farmacológica” ha demostrado sus la plasmaféresis, la hemofiltración continua o la
beneficios y es por ello que la utilización de nutrien- exsanguinotransfusión de 2 000 ml para 1 500 ml
tes por vía enteral adicionados con fibra dietética y extraídos, deben de valorarse por sus excelentes re-
glutamina, es otro elemento que ayuda a evitar la sultados después de lograr la estabilidad hemodiná-
translocación bacteriana del intestino a la vía sisté- mica del enfermo.
mica y mejora el estado de la barrera intestinal, lo La neutralización de toxinas mediante anticuer-
que disminuye las posibilidades de iniciarse la sepsis pos, análogos del lípido A, o antibióticos polipeptí-
y algunas de sus complicaciones, además de favore- dicos catiónicos (nonapéptido de polimixín B), se
cer la evolución del paciente séptico. encuentra en fase investigativa.
Lo que siempre se debe recordar para la preven-
ción de las sepsis es el lavado escrupuloso de las
3. Terapéutica antibiótica
manos y el cuidado meticuloso de las vías venosas,
Luego de la toma de muestras para hemocultivo, al
arteriales y de la sonda vesical; al igual que tener
menos desde dos sitios distintos, así como de otros
establecido un programa para el control de las in-
cultivos necesarios, se inicia el tratamiento según la
fecciones nosocomiales.
presunción diagnóstica y los resultados del “mapa
La profilaxis antibiótica se cumplirá acorde con
microbiológico” del centro.
los principios enunciados en el capítulo correspon-
Existe una relativa inefectividad de los antibióti-
diente.
cos (usados en forma convencional) en reducir la
2. Control del foco mortalidad. Se está de acuerdo en que para que los
Existen principios fundamentales que rigen el trata- antibióticos sean efectivos deben ser utilizados pre-
miento de la sepsis y de cuyo cumplimiento depen- cozmente, y debido a la alteración de los comparti-
de la eficacia de éste: mientos y líquidos corporales, y por lo tanto de la
a) Localización del foco de infección. distribución de volumen, éstos deben ser en dosis
b) Identificación del germen causal. superiores a las habituales. No existen evidencias
c) Práctica inmediata del antibiograma. de que la terapéutica con combinaciones antibióticas
d) Localización y tratamiento directo de los fo- sea superior al empleo de un solo agente específico.
cos secundarios. Aunque parece razonable el planteamiento de pre-
e) Institución precoz del tratamiento, con una do- ferir antibióticos bactericidas antes que bacteriostá-
sificación suficiente y una duración adecuada. ticos, la sensibilidad del germen en el medio debe
f) Tratamiento sintomático y medidas generales. decidir la selección. Hay que recordar que los anti-
bióticos desempeñan un papel complementario en
El control del foco de infección sigue siendo la la eliminación mecánica del foco infeccioso.
medida más importante en la prevención y tratamien- El cuadro 69.2 sirve como orientación general para
to de la sepsis. Nunca está de más señalar que si se el inicio de la terapéutica. Luego de establecida la
logra eliminar (casi siempre por medios quirúrgi- sensibilidad del germen a un antimicrobiano, se pro-
cos) el foco infeccioso, con independencia del esta- cederá a instituir el tratamiento específico. En el
do clínico del enfermo, las posibilidades de solución cuadro 69.3 se presentan los antimicrobianos más
del cuadro aumentan en forma notoria, por lo que utilizados en la práctica diaria, vías de administra-
hay que agotar todos los recursos diagnósticos en su ción, sus dosis e intervalo de éstas.

547
CUADRO 69.2 Estafilococo Vancomicina o Cotrimoxazole
AGENTES ANTIMICROBIANOS PREFERIDOS penicilina/penicili- Fluoroquinolona
EN LA SEPSIS, PARA PATÓGENOS ESPECÍFICOS nasa resistente+ Minociclina
rifampicina o
Organismo Agente preferido Alternativa gentamicina
Klebsiella Cefalosporina de Aminoglucósi-
Acinetobacter Imipenem Fluoroquinolona
3ra generación dos
Fluoroquinolona + Ceftazidima o
Imipenem Cotrimoxazole
amikacina o cefepime
Betalactámico- Piperacillín/
ceftazidima Penicilina
inhibidor de la mezlocillín
antipseudomona
betalactamasa Cefepime
Trimetoprim-sul-
Aztreonam
fametoxazole
Fluoroquinolona
(cotrimoxazole
o Sulfaprim) Proteus Cefalosporina de Aminoglucósido
3ra generación Cotrimoxazole
Anaerobios Betalactámico- Clindamicina
Imipenem Penicilina
inhibidor de la Cefoxitín
Betalactámico- antipseudomona
betalactamasa Cefotetán
inhibidor de la Cefepime
Cloranfenicol Cefmetazol
betalactamasa Aztreonam
Imipenem/merope- Penicilina
Fluoroquinolona
nem antipseudomona
Metronidazol Pseudomonas Amikacina + Amikacina +
penicilina imipenem/
Bacillus Vancomicina Imipenem
antipseudomona meropenem
Aminoglucósidos
Ceftazidima
Fluoroquinolona
Aztreonam
Clindamicina
Bacteroides Metronidazol Cloranfenicol 4. Modular la respuesta del huésped
Clindamicina Penicilina
Cefoxitín/cefote- antipseudomona
Las toxinas que exceden la capacidad destoxificadora
tán Imipenem del SRE son las que detonan la respuesta inflamato-
Cefmetazol Betalactámico- ria exagerada del huésped, por lo que se ha tratado
inhibidor de la de neutralizar los mediadores de dicha respuesta con
betalactamasa
anticuerpos anti-FNT y anti C5a, antagonistas del
Candida albicans Anfotericín B + Fluconazol receptor de IL-1 y del PAF, inhibidores de eicosa-
flucitosina
noides (leucotrienos, tromboxano y prostaglandinas),
Clostridium Penicilina G Cloranfenicol antioxidantes, anticoagulantes, naloxona y pentoxi-
Metronidazol
Clindamicina filina; pero hasta ahora no han ofrecido los resulta-
Imipenem dos deseados.
Enterobacter Imipenem Cefalosporina de Los esteroides sólo tienen indicación específica
Aminoglucósidos 3ra generación en las sepsis en los casos de meningitis por Haemo-
Fluoroquinolona Aztreonam philus influenzae en los niños, para disminuir la pér-
Penicilina Cefepime
dida auditiva (dexametasona, 10 a 15 mg/kg/día
antipseudomona
Cotrimoxazole durante 4 días, o metilprednisolona, 30 mg/kg en
Escherichia coli Cefalosporina de Aminoglucósi-
dosis única), y en las neumonías moderadas o seve-
3ra generación dos ras por Pneumocystis carinii del SIDA (metil-
Ampicillín* Imipenem prednisolona, 40 mg c/6 h, o prednisona, 40 mg
Cotrimoxazole Fluoroquinolona cada12 h).
Aztreonam
Penicilina
antipseudomona 5. Terapéutica de soporte
Betalactámico- La sepsis es un estado dinámico que necesita de una
inhibidor de la adecuada vigilancia y monitorización de las funcio-
betalactamasa
nes vitales del paciente, y de las alteraciones meta-
*
Si resulta sensible. bólicas y de la oxigenación que se producen. Es por

548
CUADRO 69.3 Imipenem 50-100 mg/kg/día. EV 6h
ANTIBIÓTICOS MÁS UTILIZADOS +
EN LA PRÁCTICA DIARIA, DOSIS, VÍA cilastatina
DE ADMINISTRACIÓN E INTERVALO DE DOSIS
Aztreonam 50-200 mg/kg/día. EV 8h
Medicamento Dosis Vía Intervalo Amikacina 15 mg/kg/día. IM 12 h
de dosis
Gentamicina 3-5 mg/kg/día. IM 8h
Amoxicilina 30-50 mg/kg/día. VO 8h Tobramicina 8 mg/kg/día. IM 8h
Amoxicilina Estreptomi- 20-40 mg/kg/día. IM 12 h
+ 30-50 mg/kg/día. VO 8h cina
ácido clavu-
lánico Cloranfenicol 50 mg/kg/día. EV, VO 6h

Ampicillina 100-400 mg/kg/día. VO, EV 4h Clindamicina 20-50 mg/kg/día. VO, IM, EV 6h

Penicilina G 160 000-300 000 EV 4h Eritromicina 20-30 mg/kg/día. VO, EV 6h


cristalina U/kg/día. Miocamicina 20-40 mg/kg/día. VO 8h
Penicilina 600 000-1,2 millón IM Mensual. Vancomicina 30-40 mg/kg/día. EV 8h
benzatínica U/día
Teicoplanina 400 mg (primer día), EV, IM
Penicilina G 50 000-1 500 000 IM 12-24 h luego 200 mg/día.
procaína U/día.
Doxiciclina 100 mg cada 12 h VO, EV
Carbencilina 100-500 mg/kg/día. EV 4h (primer día), luego
(Pyopen) 100 mg/día.
Azlocillina 200-300 mg/kg/día. EV 6h Minociclina 100 mg/día VO 12 h
Mezlocillina 200-400 mg/kg/día. EV 4h Tetraciclina 20-40 mg/kg/día. VO, EV 8h
Piperaciclina 200-400 mg/kg/día. EV 4h Norfloxacino 400 mg. VO 12 h
Ticarcillina 200-300 mg/kg/día. EV 4h Ciprofloxa- 500-750 mg. VO 12h
+ cino
ácido clavulá-
nico Ciprofloxa- 200 mg. EV 12 h
cino
Oxaciclina 50-200 mg/kg/día. EV 4h
Efloxacino 300 mg. VO, EV 12 h
Cloxaciclina 12,5-50 mg/kg/día. VO 6h
Ofloxacino 200-400 mg. VO, EV 24 h
Nafcilina 50-200 mg/kg/día. EV 4h
Trimetoprim 5-20 mg/kg VO, EV 6-8 h
Cefalotina 50-200 mg/kg/día. IM, EV 4h
Metronidazol 25-30 mg/kg/día. VO, EV 8h
Cefalexina 20-30 mg/kg/día. VO 6h
Rifampicina 600 mg/día (Tb). VO 24 h
Cefazolina 50 mg/kg/día. EV, IM 8h 600-1 200 mg/día. VO 12-24 h
Cefadroxilo 15-30 mg/kg/día. VO 8h Locarbef 400-800 mg/día. VO 12 h
Cefuroxima 50-100 mg/kg/día. VO,IM, EV 8h Polimixín B 1,5-2,5 mg/kg/día. EV, IM 12 h
Cefaclor 30 mg/kg/día. VO 8h
ello que se hace necesaria una tecnología que res-
Cefoxitina 80-200 mg/kg/día. IM, EV 4h
ponda a las exigencias de la afección, tanto en los
Cefotetam 40-100 mg/kg/día. IM, EV 8h
aspectos diagnósticos como terapéuticos, y de un tra-
Cefotaxima 40-100 mg/kg/día. EV, IM 6h bajo multidisciplinario e interdisciplinario.
Ceftriaxona 50-100 mg/kg/día. EV, IM 8h Las medidas generales como el reposo, y sinto-
Cefepime 1-4 g/día. EV 12 h máticas como la terapéutica con antipiréticos, se in-
dicarán según necesidades del paciente.
Anfotericín B 0,3-1 mg/kg/día. EV 4-6 h
El soporte de órganos comienza casi siempre por
Ceftazidima 50-100 mg/kg/día. EV, IM 8h
el cardiovascular, pues al constituir la sepsis un es-
Cefoperazona 50-100 mg/kg/día. EV 8h tado hiperdinámico, se hace necesario revertir la falta

549
relativa o absoluta de volumen, según los mismos cina radica en el médico al lado del paciente antici-
criterios que se desarrollan en el capítulo de “Shock”. pándose a los acontecimientos y reaccionando e
Sólo se señalará que si las cifras de hemoglobina interactuando con él.
resultan inferiores a 100 g/L, se debe añadir la trans- Por último, el tratamiento sólo se suspenderá tras
fusión de glóbulos hasta alcanzarla. un período de 5 a 7 días luego de la regresión del
Otros aspectos que se deben considerar son el so- cuadro clínico. No debe darse por curado al enfer-
porte nutricional, del medio interno, inmunológico, mo hasta que no se logren dos hemocultivos negati-
respiratorio, renal, neurológico y psíquico del en-
vos consecutivos como mínimo.
fermo. De todas formas, el verdadero arte de la medi-

550
70
CÓLERA

Concepto 1ra. ——————— 1816 - 1823


2da.——————— 1826 - 1837
El cólera es una enfermedad infectocontagiosa gra-
3ra.——————— 1842 - 1862
ve, específica de la especie humana, producida por
4ta.——————— 1865 - 1875
Vibrio cholerae, coma o vibrión colérico, agrupada
5ta.——————— 1879 - 1911
hoy entre las enfermedades reemergentes.
6ta.——————— 1899 - 1923
En el orden clínico se caracteriza por síntomas y
7ma.——————— 1961 - hasta nuestros
signos de deshidratación severa, condicionada por días, en que aún se man-
diarreas con aspecto de agua de arroz (diarrea blan- tienen casos.
ca) y vómitos profusos, que se acompaña de calam-
bres intensos en los miembros inferiores, hipotermia, Cuba fue afectada por la 2da., 3ra. y 4ta. pande-
caquexia y shock, y que evoluciona de forma agu- mias. En la actualidad, la vigilancia epidemiológica
da. Es oriunda de la India y China, de donde se ex- estrecha y mantenida no ha permitido que el cólera
viole las fronteras del país.
tendió a otros países, y decursa por lo general en
Gran parte del mundo fue azotado por la epide-
forma de brotes epidémicos más o menos extensos
mia de cólera que comenzó en 1961 y que afectó
y aun de pandemias.
desde las islas Célebes hasta Corea por el norte; en
Etiología curso al oeste de estas islas invadió el África y luego
el sur y otras partes de Europa. Esta pandemia pudo
El agente causal es Vibrio cholerae, bacilo gramne-
ser controlada en 1975. El agente causal fue identi-
gativo aerobio y encorvado, que fue descubierto por ficado en una estación de cuarentena en Egipto lla-
Pacini en Florencia en 1854; 30 años después fue mada El Tor. Aún en agosto de 1981 se reportaron
redescubierto por Roberto Koch en la India en 1884 en Texas (EE.UU.) casos de cólera producidos por
y en realidad lo creyó un descubrimiento. dicho biotipo: el Tor.
El vibrión colérico tiene una gran movilidad me- El cólera se trasmite sobre todo por el agua, pero
diante su solitario flagelo polar. también mediante alimentos contaminados por he-
ces fecales. Algunos mariscos y peces infectados pue-
Epidemiología den ser causantes de la afección.
Todo parece indicar que desde hace miles de años Un hecho importante que se debe tener en cuenta
hubo cólera en el delta del río Ganges, en Brahma- es el estado de portador crónico, que se produce al
putra, en la India, y aún se mantiene endémico en albergarse los gérmenes en la vesícula biliar, al igual
estas regiones y otras del sudeste asiático. que en la fiebre tifoidea. Quizá esta sea una explica-
En la medida en que el transporte entre las nacio- ción más para entender las endemias y algunas epi-
nes se ha desarrollado, el cólera se ha expandido y demias de cólera.
se han producido varias pandemias que incluso han La susceptibidad varía y es mayor en personas del
afectado a Cuba; se ha mantenido de forma endé- grupo sanguíneo O y en aquellas que presentan hi-
mica en varias naciones del área y se han descrito 7 poclorhidria o anaclorhidria, pues el vibrión coléri-
pandemias de esta enfermedad. co es sensible a los ácidos gástricos.

551
Patogenia pecto semejante al de las heces, de cefalea intensa,
sed y pulso débil, sobre todo las menos graves.
Actualmente se ha comprobado que los vibriones,
La forma grave se ajusta al cuadro clínico clási-
una vez que llegan al intestino delgado (especial-
co, en el que la primera debacle diarreica de más
mente el íleon), comienzan su fase de crecimiento y
de 1 L, con su característico aspecto de agua de arroz,
elaboran una poderosa enterotoxina que ocasiona
en algunas horas produce una gran deshidratación y
hipersecresión masiva de líquidos y electrólitos en
shock. En esta y otras formas clínicas pueden pre-
el intestino, quizás por la activación de la adenilci-
sentarse vómitos no precedidos de náuseas. Las
clasa y con ello de la adenosina 3’5’ monofosfato
orinas son escasas y no tardan en aparecer calam-
cíclico intracelular; por lo tanto, aumenta la veloci- bres musculares. El abdomen se hace blando y
dad de transporte en la luz intestinal, lo que se tra- excavado y casi nunca es doloroso a la palpación.
duce por diarreas copiosas que pueden llegar a 5 o 7 L Los ojos hundidos, nariz afilada, pómulos salientes,
o más en el día, con las características especiales ya piel seca, pulso pequeño y tensión arterial muy baja.
señaladas. No existen por otra parte pruebas con- Todo esto indica la grave deshidratación con pérdi-
vincentes de que esta enterotoxina afecte otros teji- da marcada de electrólitos que padece el enfermo.
dos de la economía, además del intestino delgado. Llama la atención que la conciencia está conserva-
La consecuencia fisiopatológica de todo lo antes da a pesar del cuadro grave.
expuesto es la depleción del líquido extracelular, En caso de mujeres embarazadas, se reporta que
capaz de producir shock hipovolémico, acidosis por hasta un 50 % aborta o se les presenta un parto pre-
déficit de bases y pérdida progresiva de potasio por maturo. Esta forma suele evolucionar con compli-
diarreas. caciones y deparar la muerte; otro grupo evoluciona
mejor a partir del 4to. o 5to. día. Las complicacio-
Cuadro clínico nes son de diferente índole, como bronconeumonías,
Se ha demostrado que las diarreas del cólera son casi gangrena del pulmón, parotiditis, hepatitis, otitis,
isotónicas, con concentraciones de cloro y sodio muy úlceras corneales, trombosis, convulsiones y otras.
parecidas a las del plasma, pero con gran pérdida de
bicarbonato y más aún de potasio. Las graves con- Diagnóstico
secuencias de la enfermedad se derivan de estos he- En las áreas endémicas o durante las epidemias, el
chos, que dan carácter al cuadro clínico. En rigor, se cuadro diarreico acuoso, brusco e intenso sugiere el
pueden considerar 4 formas clínicas: diagnóstico de cólera; sin embargo, en los casos es-
• Asintomáticas. porádicos y leves hay que hacer el diagnóstico dife-
• Leves. rencial con varias afecciones que causan diarreas de
• Menos graves. tipo coleriforme. Así, algunas cepas de Escherichia
• Graves. coli producen enterotoxinas semejantes a las del
vibrión colérico. Tanto la salmonelosis como la shi-
Aunque no se conoce bien el período de incuba- gelosis pueden debutar con cuadros coleriformes.
ción del cólera, se le supone entre 6 h y 5 días. Aquí Otro tanto sucede con las infecciones entéricas pro-
no se incluye, por supuesto, la forma asintomática, ducidas por Clostridium perfringens.
donde el paciente actúa como portador y, aunque El diagnóstico positivo se realiza al descubrir
infectado, no presenta manifestaciones clínicas. mediante el examen microscópico, los bacilos espe-
Las formas leves y menos graves tienen el cuadro cíficos en las heces fecales teñidas con fucsina
clínico de un síndrome diarreico que remeda cual- fenicada al 1 %. También se hace dicho diagnóstico
quier diarrea de otra causa, incluso una gastroente- de forma más segura mediante el cultivo en medios
ritis que produce un cuadro coleriforme, pero la específicos, como el TCBS. El germen puede crecer
evolución es favorable y el proceso cura en pocos en agar Mac Conley. Las muestras de heces fecales
días. A veces se establece súbitamente, con tras- deben obtenerse al principio de la enfermedad y pre-
tornos del estado general y numerosas deposiciones ferentemente antes de 24 h y sin que se hayan sumi-
líquidas blanquecinas; dichas diarreas pueden acom- nistrado antimicrobianos. Se utilizan también medios
pañarse de vómitos biliosos que luego toman un as- como el de Cary-Blair, que mantiene la viabilidad

552
de los cultivos de vibriones hasta 4 semanas. Un La primera está compuesta por vibriones coléri-
método efectivo para lograr crecimiento del vibrión cos muertos de los serotipos Inaba, Ogawa, los
es el sembrado de las heces fecales en agar con sales biotipos clásicos y el Tor. Al componente de células
biliares. enteras se agrega la subunidad B purificada, que es
Es de interés conocer que se observa leucocitosis un componente inocuo de la toxina colérica pero con
.
por encima de 15 109/L (> 15 000/mm3), así como capacidad inmunogénica. Esta vacuna protege has-
ta 3 años al adulto, pero varía en el niño.
incremento de la urea y creatinina en la sangre.
La otra vacuna oral de células vivas, la CVD103
Evolución y pronóstico HGR, está hecha de vibriones coléricos vivos que
han sido tratados genéticamente, para suprimir un
Tanto la evolución como el pronóstico son varia-
gen que codifica la subunidad A de la toxina del
bles, pues dependen de la edad del paciente y de la
cólera. Se han hecho estudios en voluntarios de
rápida aplicación de las medidas terapéuticas. Hasta EE.UU. con diferentes resultados alentadores. Así,
hace pocos años, la muerte sobrevenía en el 60 % de un grupo de voluntarios tuvo una respuesta de anti-
los casos, sobre todo en las fases iniciales, en cuerpos vibriocidas 4 veces superior o más. La pro-
particular en niños y ancianos. Hoy día, cuando el tección contra el vibrión colérico clásico alcanzó
tratamiento se instituye de forma precoz, disminu- entre 89 y 100 %; para el Tor fue entre 63 y 64 %.
yen los riesgos de muerte. En conjunto, contra la diarrea grave fue de un 83 %.
Tratamiento Tratamiento de la enfermedad
Tratamiento profiláctico Todo paciente de cólera debe ser ingresado y aisla-
Las estrechas relaciones de nuestro país con el mun- do (no de forma absoluta) de inmediato. Es muy im-
do, donde una parte importante de éste está subde- portante corregir la deshidratación y consecuente
sarrollada y en la cual el cólera es endémico, obliga hipovolemia, la acidosis y prevenir la hipocaliemia.
a la más estricta vigilancia sobre la referida enferme- La administración amplia y precoz de líquidos es
dad. La profilaxis más eficaz consiste en la erradi- una medida de extrema importancia para lograr una
cación de las causas que mantienen el subdesarrollo, evolución favorable en los enfermos con cólera. La
la miseria y las malas condiciones higiénico-sanita- cantidad necesaria de líquidos está en relación di-
rias de los pueblos. recta con el grado de deshidratación presente.
Una medida destacada para el control del cólera Valdés, a quien casi copiamos textualmente, re-
incluye que el excremento humano sea debidamen- comienda 3 esquemas de tratamiento:
El plan o esquema A para prevenir la deshidrata-
te dispuesto y el suministro de agua, purificada. La
ción:
de beber debe ser hervida o clorada, así como los
a) Aumentar la ingestión de líquidos y tratar de
vegetales, los pescados y otros productos del mar,
mantener la lactancia materna en casos especí-
los que serán cocinados de forma correcta.
ficos.
En cuanto al enfermo, el aislamiento estricto no
b) Seguir dando alimentos, incluso leche, a los
es necesario. niños destetados.
Vacunación. La vacunación parenteral compues- c) Vigilar los signos de deshidratación en los en-
ta por bacterias enteras muertas, tiene un valor limi- fermos.
tado, lo que dio lugar a que la OMS desde 1993
estableciera que dicha vacuna es ineficaz para pre- Los niños menores de 2 años recibirán 50 o 100
venir la propagación del cólera. Su eficacia se calcu- ml (media taza) de sales de rehidratación oral (SRO)
la entre 30 y 60 %. La administración de 2 dosis, después de cada deposición. Los niños de más edad
que es la norma, sólo desarrolla inmunidad después tomarán el doble de esa cantidad y los adultos, las
de varias semanas y reclama de reactivaciones pe- sales a libre demanda.
riódicas. El plan B. Aquí se pretende rehidratar con SRO,
En el mundo se ensayan a largo plazo 2 tipos de las cuales se usarán tanto para corregir la deshidra-
vacunas orales: a) vacuna de células enteras muer- tación como para mantener la hidratación mientras
tas y b) vacuna mutante viva (CVD103 HGR). dure la diarrea.

553
De conocerse el peso del paciente, se deben ad- Se medirán las pérdidas por diarreas y se tomarán
ministrar de 50 a 100 ml/kg de peso. En niños ma- en cuenta para su reposición.
yores de 20 kg y en adultos, las SRO se suministran Lo adecuado de la hidratación se confirma con
según demanda. De no conocerse el peso, dar SRO a frecuentes evoluciones clínicas (pulso lleno, fuerza
libre demanda, pero evaluando frecuentemente el es- muscular, turgencia de la piel, etc.).
tado del paciente, sobre todo si es un niño. No es No está indicado el uso de plasma o expansores
aconsejable prolongar la administración de SRO por plasmáticos.
más de 8 h. Cuando las circunstancias lo indiquen por mejoría
El plan C. Se aplica a enfermos con deshidrata- o por no poderse canalizar una vena, se administra-
ción grave, en shock hipovolémico, inconscientes o rán sales de hidratación oral con sonda nasogástri-
en coma. ca, siempre y cuando el paciente no esté en shock.
La hidratación parenteral será amplia y precoz, Antimicrobianos. El uso temprano de antimicro-
lo que constituye una medida extrema y necesaria bianos orales es adecuado para la erradicación de
para lograr una evolución favorable. Cuando existe los vibriones, pues reduce el volumen fecal en 50 %
hipotensión arterial, debe mantenerse un goteo ini- y detiene las diarreas en 48 h.
cial de 50 a 100 ml/min hasta lograr la aparición de La elección del antimicrobiano debe basarse en
un pulso enérgico y la restitución de la TA, luego se la susceptibilidad del vibrión aislado en la comuni-
regula el goteo. En los ancianos hay que vigilar la dad. Se utilizan:
aparición de signos de sobrehidratación, en particu- Tetraciclina: 500 mg por VO cada 6 h, por 3 días
lar ingurgitación de las venas yugulares y estertores (adulto); en los niños, 50 mg/kg, por día, dividi-
crepitantes en los campos pulmonares. Debe recor- dos en 4 dosis, por 72 h.
darse que el empleo insuficiente o retardado de lí- Doxiciclina: adultos, 1 sola dosis de 300 mg por
quidos puede provocar una insuficiencia renal aguda. VO.
En la hidratación parenteral debe utilizarse con Furazolidona: adultos, 100 mg por VO cada 4 h
preferencia solución de Ringer-Lactato, o una mez- durante 3 días; en los niños, 5 mg/kg/día, cada 6 h
cla 2:1 de suero fisológico y lactato de sodio 1/6 mo- por 3 días.
lar, o suministrar solución de cloruro de sodio al 0,9 %; Cotrimoxazole (Sulfaprim): adultos, 2 tabletas
para reponer las pérdidas de K se añadirá a la solu- (160 mg de trimetoprim y 800 mg de sulfametoxa-
ción que no lo contenga, cloruro de potasio, 10 o 15 zole) cada 12 h durante 3 días; en los niños, 5
meq/L. Este último es muy importante en niños, quie- mg/kg de trimetoprim y 25 mg/kg de sulfametoxa-
nes toleran muy mal las pérdidas de este ion. zole, cada 12 h por 3 días.

554
71
PESTE BUBÓNICA

La peste bubónica, enfermedad muy temible antaño ron de 5 000 a 10 000 personas por día abatiendo al
y conocida también con los nombres de plaga, muer- imperio bizantino.
te negra y peste, causó pandemias que asolaron pue- Del siglo V al XIV hubo calma con respecto a esta
blos de Europa y Asia. Con los avances de la ciencia enfermedad, pero en 1345 estalló una epidemia en
estos hechos terribles ya no ocurren en esa magni- Asia y África, que se extendió a Europa. En 1348,
tud, mas la enfermedad aún existe y se producen año santo, el Papa Clemente VI hizo un llamado a
brotes epidémicos; cerca de nosotros, en Perú, se toda Europa a fin de que se congregaran peregrinos
notificaron en 1995 y 1996 un número considerable en Roma a orar. Entre 1 200 000 peregrinos que acu-
de casos. dieron al llamado papal a Roma, vinieron varios en-
fermos de peste y se desencadenó una epidemia de
Concepto espantosas proporciones, en que murió el 90 % de
La peste es una enfermedad infecciosa propia de los los peregrinos.
roedores y mamíferos pequeños, que se trasmite al Tan cerca como en el siglo XIX, solamente en Eu-
hombre a través de la picadura de diferentes tipos ropa se estima que fallecieron 25 millones de perso-
de pulgas infectadas que fungen de reservorio. En nas de peste bubónica.
el hombre esta afección se caracteriza por un co-
mienzo brusco con fiebre alta, linfadenopatía, su- Etiología
puración de los ganglios satélites, bacteriemia y El germen causal es Yersinia o Pasteurella pestis. Se
postración. trata de un bacilo gramnegativo no esporulado, el
Los ganglios aumentados de volumen y supurados cual se desarrolla tanto en condiciones aerobias como
le dan el nombre de bubónica a la enfermedad. De anaerobias, y que adopta la forma de bacilo, coco u
forma primaria o secundaria puede afectar los pul- ovoide. Esta enfermedad ocurre en roedores salva-
mones y llevar a la peligrosísima neumonía pestosa jes, como ratas, ratones, ardillas, y puede ser aguda,
o peste pulmonar, de pronóstico sombrío. subaguda o crónica, sobre todo en los murinos. La
infección es trasmitida por la picadura de pulgas in-
Breve reseña histórica fectadas, pero la forma pulmonar se trasmite de hom-
Yersinia pestis ha causado 4 grandes pandemias de bre a hombre a través de las vías respiratorias.
enfermedad humana. Entre los factores que han
contribuido en el tiempo a tales desastres, están el Epidemiología
desarrollo natural de los vectores, la sanidad defec- El reservorio natural de Yersinia pestis lo constitu-
tuosa, las guerras y el hambre generalizada. Un ejem- yen los roedores salvajes, sin dejar de considerar a
plo de ello pudo verse en Viet Nam durante la guerra conejos y gatos, así como a las ardillas, de donde las
con los EE.UU., que recrudeció la peste. pulgas se infectan y trasmiten al hombre la enfer-
Bocaccio describe la epidemia de peste ocurrida medad.
en 1348 en Venecia, que costó 100 000 vidas. Armijo En la forma pulmonar el mecanismo es a través
recoge en su curso de Epidemiología el hecho de de las microgotas de peste pulmonar suspendidas en
que los ejércitos de Marco Aurelio y Lucio Verus el aire, provenientes de personas o animales enfer-
fueron destruidos por la peste en el siglo V. Ésta arra- mos con peste faríngea o neumónica, y el descuido
só a Roma, luego de Constantinopla, donde murie- en la manipulación de cultivos en el laboratorio.

555
Esta enfermedad no existe en Cuba y la probabi- Diagnóstico
lidad de su aparición es escasa. No obstante, las re- Al inicio es difícil distinguir la peste de otros cua-
laciones crecientes del país con el mundo obligan a dros graves, como la fiebre tifoidea o el paludismo.
una vigilancia permanente. En 1992 la peste reemer- Hay que diferenciar la forma bubónica de los cua-
gió en el norte de Perú y se extendió a muchas loca- dros febriles adénicos, como la tularemia, la sífilis o
lidades rurales. Incluso en EE.UU. se la observa en el linfogranuloma venéreo. La modalidad pulmonar
algunos estados, tales como Nuevo México, Arizona, se presenta como una neumonía grave y con ella hay
California y Colorado. Además de Perú, se la en- que hacer el diagnóstico diferencial.
cuentra en Brasil y Bolivia. Afecta asimismo a al- El diagnóstico positivo se hace aislando el ger-
gunos lugares de Asia y Europa. men, que puede ser cultivado en la sangre, los esputos
o en material de los ganglios linfáticos obtenido por
Cuadro clínico aspiración. El hallazgo en las extensiones de baci-
los bipolares resulta de gran ayuda.
En el humano la enfermedad aparece en forma de De todas formas, si existe la sospecha de peste, se
peste bubónica o en forma neumónica o septicémica, debe iniciar el tratamiento antes de que se obtengan
lo cual no excluye que la variedad ganglionar afecte las muestras para los cultivos. Se acepta que la muerte
los pulmones. de personas no tratadas ocurre en alrededor del 60 %
El período de incubación es de 2 a 7 días, pero va- entre 3 y 5 días, y con anterioridad en la neumonía
ría desde algunas horas hasta 12 días. El cuadro co- pestosa.
mienza de manera brusca, con fiebre alta (39 a 41 ºC)
acompañada de escalofríos, mialgias, cefalea inten- Tratamiento
sa y postración. Pasado algún tiempo aparecen los Tratamiento profiláctico
ganglios aumentados de tamaño (bubones), coinci- Los familiares (convivientes) y otros contactos de-
diendo o con anterioridad a la fiebre. Los ganglios ben someterse a tratamiento profiláctico tomando
inguinales son los más afectados, seguido de la ca- tetraciclina, 15 mg/kg de peso durante 1 semana.
Hay que eliminar los focos endémicos de roedo-
dena axilar y cervical. Son muy dolorosos y firmes,
res y se establecerá una vigilancia estricta para des-
y pueden supurar a la segunda semana.
cubrir y suprimir las epizootias entre ellos. Cuando
Cuando se produce la forma clínica pulmonar se detecta un caso de peste, se debe combatir la po-
(neumonía pestosa), el período de incubación es más blación de pulgas en la localidad afectada.
corto, 2 o 3 días. La tos se une al cuadro descrito La quimioprofilaxis sustituye a la vacunación en
con anterioridad y comienza siendo discreta con ex- estos momentos y se realiza con sulfadiacina y
pectoración mucosa al principio; con rapidez mues- cloranfenicol: 1 g diario de cada uno mientras la per-
tra puntos de sangre para luego tornarse de manera sona se exponga al riesgo de infección.
uniforme de rosada a rojo brillante y espumosa. Esta
variedad es muy grave y, de no tratarse de forma Tratamiento de la enfermedad
correcta, lleva a la muerte. La aplicación temprana del tratamiento reduce la
En ocasiones la peste bubónica desarrolla una mortalidad al 5 %.
septicemia como colofón fulminante del proceso, con Las drogas de elección son la estreptomicina y la
tetraciclina, aunque son también efectivas el
dolor abdominal, probablemente debido a linfade-
cloranfenicol y las sulfamidas.
nopatías mesentéricas. Esto ocurre en alrededor
En caso de septicemia o neumonía pestosa, el tra-
del 40 % de los pacientes.
tamiento debe instituirse en las primeras 24 h admi-
Otras veces se produce lo que se conoce como nistrando estreptomicina a razón de 30 mg/kg/día,
peste menor, forma benigna que tiene lugar en zo- IM, divididos en 4 dosis, durante 7 a 10 días. Hay
nas endémicas. Se caracteriza por linfadenitis, fie- autores que recomiendan dosis aún mayores.
bre y postración, y cura al cabo de 1 semana. La tetraciclina se utiliza como terapéutica alter-
Las formas faríngea y meníngea de peste no son nativa, a razón de 30 mg/ kg, EV o por vía oral, en 4
excepcionales. dosis diarias.

556
En caso de afectación meníngea, se recomienda ria, debe aislarse al paciente. Todos los contactos de
el uso de cloranfenicol, con una dosis de ataque esta forma clínica deben estar bajo vigilancia médi-
de 25 mg/kg, EV, seguido de 50 mg/ kg, divididos ca y tomarles la temperatura cada 4 h durante 6 días.
en 4 dosis administradas EV o por vía oral. De no ser esto posible, se administrará 1 g de
Se tomarán todas las medidas posibles de asepsia tetraciclina diaria por 6 días.
y, en caso de neumonía pestosa primaria o secunda-

557
72
UN ACERCAMIENTO
A LAS ENFERMEDADES VIRALES
Y SU TRATAMIENTO
Los virus son los organismos más pequeños que rus tipo 1 linfotrópico T-cell, el cual se asocia a la
parasitan al humano y dependen completamente de leucemia y los linfomas. Por otra parte, el de Eps-
las células (de las plantas o animal) para reprodu- tein-Barr se reporta asociado al carcinoma nasofa-
cirse. Están compuestos de una cubierta exterior de ríngeo, el linfoma de Burkitt, enfermedad de
proteína y a veces de lípidos, y un centro de ácido Hodgkin, sarcoma de Kaposi y a otros trastornos lin-
nucleico, de ARN o ADN. En muchos casos este foproliferativos.
centro penetra las células susceptibles e inicia la in- Las enfermedades producidas por virus lento se
fección. caracterizan por períodos de incubación prolonga-
El tamaño de los virus está entre 0,02 y 3 µm, dos, entre las que se encuentran algunas afecciones
muy pequeños para ser observados por los micros- crónicas degenerativas, como la panencefalitis es-
copios de luz, pero son visibles con el microscopio clerosante subaguda (relacionada con el sarampión),
electrónico; pueden ser indentificados por métodos la panencefalitis de la rubéola, la leucoencefalitis
biofísicos y bioquímicos y, al igual que la mayoría progresiva multifocal y otras.
de los parásitos, estimulan la producción de anti-
cuerpos por sus hospederos. Diagnóstico
Varios centenares de virus diferentes infectan a
Sólo unas pocas afecciones virales pueden diagnos-
los humanos y como quiera que cierto número de
ticarse en el orden clínico o epidemiológico; son
ellos han sido reconocidos en fecha reciente, aún
aquellas llamadas enfermedades de la infancia y otras
sus efectos clínicos no están del todo comprendi-
que, por su frecuencia y tipicidad, acceden relativa-
dos. Muchos infectan al hospedero sin producir sín-
mente al diagnóstico.
tomas, sin embargo, debido a su amplia y a veces
En rigor, el diagnóstico requiere a menudo prue-
universal prevalencia, crean importantes problemas
bas serológicas durante la etapa aguda de su instala-
médicos y de salud pública.
ción y en la convalecencia, que en realidad son
Los virus que infectan a los humanos se disemi-
efectivas pero lentas en su determinación diagnóstica.
nan en su mayoría por vía respiratoria y excreciones
entéricas. Se encuentran en todo el mundo, pero su Tratamiento
difusión está limitada por resistencia congénita,
inmunizaciones, haber padecido la enfermedad o por El impacto causado por el VIH y el desarrollo del
vacunación, alguna otra medida de control sanita- tratamiento del SIDA, han motivado la producción
rio, o haber recibido determinada droga profiláctica de una cantidad apreciable de drogas antivirales, que
antiviral. engrosan ampliamente el espectro terapéutico de las
Los virus zoonóticos siguen un ciclo biológico, enfermedades de origen viral.
sobre todo en animales; los humanos son hospede- Al conjuro de la batalla contra el SIDA se han
ros secundarios o accidentales. Se encuentran en producido drogas importantes contra la hepatitis B e
áreas ambientales capaces de favorecer su ciclo anó- incluso otras afecciones tan comunes como las cau-
malo, no humano, de infección, como se ve en los sadas por el virus del herpes simple y el de la varice-
artrópodos. la zoster. También drogas capaces de impedir el
Dentro de las propiedades de algunos está la momento en que los virus o sus partículas se adhie-
oncogenicidad, que se conoce relacionada con el vi- ren a la célula que le sirve de huésped, o de alterar

558
los ácidos nucleicos virales o inhibir el receptor ce- Se recomienda 1 gota al 1% de la solución oftál-
lular o el factor necesario para la replicación viral; mica en el ojo afectado cada 2 h mientras el pa-
incluso, capaces de bloquear de manera específica ciente esté despierto. No pasar de 9 gotas en 24 h
las proteínas codificadas en la célula del huésped, mientras la ulceración corneal no haya desapare-
esenciales para la replicación viral, pero sin afectar cido; luego se continuará con 5 gotas diarias.
el metabolismo normal del individuo.
Foscarnet
Acyclovir Es un compuesto orgánico análogo al pirofosfato
Es un análogo de nucleósido de la purina con activi- inorgánico. Selectivamente inhibe la polimerasa es-
dad contra los herpes virus. Tiene poca actividad pecífica del ADN viral; su uso es efectivo en las
contra el citomegalovirus. Es efectivo per os en la infecciones por herpes y varicela zoster virus que
infección primaria y recurrente del herpes genital y han resistido el uso del acyclovir.
contra el de la varicela zoster y el virus de Epstein- En la retinitis por Cytomegalovirus, una induc-
Barr. ción de este producto con 60 mg/kg 3 veces al día,
Dosis: 400 mg 3 veces al día por vía oral. En los seguido de un mantenimiento de 90 a 120 mg/kg
recurrentes se darán 200 mg cada 4 h por 10 días. EV diarios, resulta efectivo. También se usa en
Como síntomas adversos o indeseables se seña- infiltraciones intravítreo en personas donde se
lan náuseas, vómitos y diarreas. contraindiquen otras vías.
Esta droga tiene efectos adversos y puede produ-
Famciclovir cir retinitis tóxica, sangramiento intravítreo, nefro-
Esta droga inhibe los virus del herpes y de la varice- toxicidad e hipocalemia.
la zoster; tiene una ligera acción sobre el virus de
Epstein-Barr y mínima sobre el de la citomegalia. Ravavirín
En caso de herpes virus genital, la dosis es de 250 Es un análogo de la guanosina, que inhibe la repli-
mg por vía oral 3 veces al día, por 5 días. El trata- cación de ARN y ADN de muchos virus. Tiene ac-
miento debe iniciarse con los primeros síntomas. ción inhibitoria in vitro contra los virus sincitial
respiratorio, de la influenza A y B, herpes virus 1
Penciclovir y 2 y otros; como reacción adversa se señala la he-
Es un análogo fosforilado de la guanosina, que por mólisis que en ocasiones se presenta.
competencia inhibe la polimerasa del ADN de los
virus de los herpes genitales. Se usa en crema para Amantadina y rimantadina
tratar el herpes recurrente orolabial. Ambas drogas se usan contra la influenza A como
profilaxis y tratamiento. Inhiben la penetración del
Velacyclovir virus en las células bloqueando en estadio temprano
Es una sal de acyclovir, activo contra los virus del la interacción del hospedero con aquél.
herpes y de la varicela zoster. Actúa de forma ligera Debe ser utilizado en la fase inicial de la enfer-
sobre el virus de Epstein-Barr y mínima sobre el ci- medad de forma profiláctica en pacientes de 14
tomegalovirus. En realidad, al pasar por los intesti- a 64 años, 100 mg por vía oral 2 veces al día,
nos se convierte en acyclovir. En fecha reciente se mientras dure la epidemia; igual dosis para los
ha descubierto que resulta efectivo en el tratamiento enfermos.
del herpes zoster y de la neuralgia posherpética. Estos productos causan reacciones adversas, pues
Dosis: 1g 3 veces al día por 7 días. afectan el SNC (nerviosismo, insomnio, mareos,
ataxia, etc.), sobre todo la amantadina.
Trifluridina
Este producto es un análogo de la timidina e inter- Gancyclovín
fiere con la síntesis del ADN. Es efectivo en el tra- Es un nucleósido análogo a la desoxiguanoxina, pa-
tamiento de la queratoconjuntivitis primaria y la recido al acyclovir. Tiene actividad contra todos los
queratitis recurrente causada por virus del herpes herpes virus, incluso el citomegalovirus. Actúa inhi-
tipos 1 y 2. biendo la síntesis de ADN viral y debido a esto, su

559
uso debe ser vigilado, pues puede producir arresto o Cytomegalovirus, virus de Epstein-Barr, adenovirus
inhibición medular. Además, es capaz de ocasionar y el del papiloma humano. Se utiliza para tratar la
anemia, rash, fiebre, azotemia, disfunción hepática retinitis por papilomavirus en pacientes con VIH.
y otros. Para inducir la terapia de estos últimos enfermos
se administran por vía EV 5 mg/kg una vez por
Idaxuridine semana, con una dosis de mantenimiento en se-
Actúa por transposición de la timidina, de manera manas alternas.
irreversible, en una nueva síntesis del ADN, lo que Se registran reacciones adversas, que incluyen in-
produce un anormal y no funcional ADN molecu- suficiencia renal. El cidofovir se usa de forma tópi-
lar. Es muy tóxico y debido a esto su uso se limita a ca en el herpes simple mucocutáneo que no responde
la forma tópica de terapia. Hay preparados oftálmi- a la administración oral.
cos para el tratamiento de la queratoconjuntivitis por
el virus del herpes simple. Inmunoglubulinas
La dosis es de 1 gota del producto al 0,1 % por La inmunoglobulina hiperinmune del virus de la
instilación conjuntival cada 1 h durante el día y citomegalia ha logrado la atenuación de la enferme-
cada 2 h en la noche por 5 a 7 días. dad por dicho virus asociada al trasplante de riñón,
La dosis oral es de 1g 3 veces al día. pero no ha demostrado utilidad en la prevención de
los procesos causados por él.
Vidarabine
Este medicamento interfiere con la síntesis del ADN
Interferones
viral y es efectivo en las infecciones por herpes vi-
Los interferones son productos naturales liberados
rus. Es menos susceptible de causar resistencia que
de las células infectadas del hospedero como res-
otros antivirales. Los preparados oftálmicos de este
puesta viral o de otro ácido nucleico extraño. Apa-
producto resultan efectivos contra la queratoconjun-
recen tempranamente después de la infección. Se han
tivitis aguda y la queratitis recurrente causada por
probado interferones logrados de forma recombinan-
los herpes virus.
te en pacientes seleccionados enfermos de leucemia,
Se recomienda el ungüento oftálmico cada 3 h
mientras el paciente esté despierto. Se debe con- sarcoma de Kaposi, papiloma del virus humano y
tinuar dicha medicación por 5 a 7 días después otras virosis respiratorias. Se utilizan también en las
que desaparezca el cuadro clínico. hepatitis B y C.
En pacientes con hepatitis B con criterios ade-
Cidofovir cuados, se emplean 2,5 a 5 millones de U subcu-
Es un nucleósido análogo y en contraste con otros tánea o IM durante 4 a 6 meses, con lo que se
contiene un grupo fosfonato que no requiere la de- logra un mejor funcionamiento hepático e inclu-
pendiente fosforilación viral. Enzimas celulares con- so una mejoría histológica. En la hepatitis C los
vierten el cidofovir en la forma activa difosfatada, resultados son algo inferiores.
que tiene una larga vida media.
Este producto tiene una actividad inhibitoria in Drogas antivirales para el tratamiento de la infec-
vitro contra un amplio espectro de virus, que inclu- ción por VIH
ye los del herpes simple (1 y 2), varicela zoster, El lector las encontrará en el capítulo sobre el SIDA.

560
73
MONONUCLEOSIS INFECCIOSA

Concepto amígdalas. Se multiplica en los tejidos linfáticos lo-


cales y se extiende por vía hematógena a todo el or-
La mononucleosis infecciosa (MI) es una infección
ganismo. Datos recientes sugieren que las células
viral aguda que se caracteriza por fiebre, faringitis
B y las células epiteliales son el reservorio del virus
y linfadenopatías, presencia en la sangre de linfoci-
EB; aunque se elimine de la orofaringe, persiste en
tos anormales y por la aparición en el suero del pa-
las células B incluso en los pacientes tratados con
ciente de elevadas concentraciones de anticuerpos
acyclovir.
heterófilos contra eritrocitos de carnero, y anticuer-
En la superficie de las células B y en las epiteliales
pos contra el virus de Epstein-Barr (EB).
existe el receptor de EBV (CD 21). Cuando la infec-
Etiología ción por el virus EB radica en las células epiteliales,
la replicación implica la producción de viriones;
El virus EB pertenece a la familia Herpes viridae, cuando son las células B las infectadas, una pequeña
presenta un genoma viral constituido por una doble fracción produce virus y el resto, la inmunoglobuli-
cadena de ADN nuclear rodeada por un núcleo na que tienen programada, entre ellas el anticuerpo
péptido icosahédrico que contiene, además, glico- contra los eritrocitos de carnero, el cual se detecta
proteínas. por la prueba de Paul-Bunnell.
Existen dos tipos de virus EB, pero no se distin- En el control de la proliferación de las células B
guen por los tests serológicos comunes. infectadas desempeñan un papel importante las cé-
lulas T supresoras y las NK (natural killer).
Epidemiología La célula B infectada puede comenzar a prolife-
Esta enfermedad afecta principalmente a los niños rar y se produce la transformación neoplásica, lo que
pequeños, adolescentes y adultos jóvenes, a grupos da origen a varias citocinas, como son: la interleuci-
de bajo nivel socioeconómico y malos hábitos de na 1-beta (IL-1beta), IL-2, IL-6, IL-8, IL-10, FNT-
higiene; se obtiene por contacto con secreción oral α y linfotoxinas. Durante la primera semana de
(beso), por diseminación aérea a través de secrecio- infección el número de linfocitos CD4+ aumenta y
nes respiratorias, y rara vez por transfusiones de luego disminuye, mientras que el porcentaje de CD8+
sangre y trasplante de médula; el 20% de los pa- se incrementa, lo que invierte la razón CD4+/CD8+.
cientes infectados por el virus pueden ser asintomá- En un 20 a 80 % de los pacientes con MI se han
ticos. hallado anticuerpos contra el antígeno i de los eri-
El virus EB se asocia a tumores como el carcino- trocitos; la anemia hemolítica que a veces se produ-
ma faríngeo, linfoma de Burkitt, linfoma de Hodg- ce en el curso de la enfermedad se ha relacionado
kin, carcinoma nasal, carcinoma del hígado y con los anticuerpos anti i.
pacientes con SIDA. Los anticuerpos con importancia diagnóstica que
se producen durante la enfermedad son: anticuerpos
Patogenia IgM contra el antígeno de la cápsula (IgM VCA),
El virus penetra en el organismo a través de las se- que es el marcador más relevante; anticuerpo al an-
creciones respiratorias e infecta el epitelio de la tígeno temprano contra el componente D (difusión)
nasofaringe y glándulas salivales; los linfocitos pue- (ANTI-EAD), y anticuerpo al antígeno temprano
den ser infectados directamente en las criptas de las contra el componente R (restricciòn) (ANTI-EAR);

561
además, se encuentra el anticuerpo contra antígenos iniciarse la fiebre, que puede durar desde 2 semanas
nucleares (EBNA). hasta 1 mes; luego se presenta malestar general, ce-
Para diagnosticar una infección reciente prima- falea, faringitis y una exudación blancogrisácea en
ria, se tiene en cuenta la presencia de anticuerpos la úvula y paladar, que persiste entre 7 y 10 días. En
IgM VCA, altos títulos de anticuerpos IgG VCA es- el adolescente suele estar precedida por una lesión
pecíficos, detección de anti-EAD y ausencia de anti- ulcerada en los genitales, lo que constituye la mani-
EBNA. festación inicial.
El anticuerpo IgM EB desaparece entre cuatro La linfadenopatía se presenta en las 2 primeras
semanas y varios meses; en cambio, el anti-IgG EB semanas; es simétrica, indolora, movible, elástica, y
se mantiene por más tiempo. no supura ni tiene signos flogísticos; poseen gran
La determinación de los anti-IgM EB es útil en valor las localizadas en la región cervical posterior
los casos donde la prueba de Paul-Bunnell es nega- para establecer la diferencia con otras formas de fa-
tiva o dudosa para determinar la infección reciente; ringitis; la localización axilar o inguinal es frecuen-
así, en los pacientes menores de 10 años se debe te. Aparece un rash morbiliforme en los brazos y
usar dicha determinación, ya que el Paul-Bunnell es tronco, que dura de 2 a 7 días, y también se describe
negativo porque no se desarrollan los anticuerpos un eritema nudoso o multiforme; la esplenomegalia
heterófilos anti-eritrocitos de carnero. se detecta en la 2da. o 3ra. semana; en ocasiones se
Para diferenciar el linfoma de la MI se utiliza la produce ruptura esplénica espontánea y en otras,
determinación de anti-IgM EB, el cual es negativo hiperesplenismo; el hígado es palpable con menor
en el linfoma; el anti-EAD se encuentra en la mono- frecuencia.
nucleosis asociada a carcinoma nasofaríngeo, y el Esta enfermedad no es común en el anciano y
anti-EAR, al linfoma de Burkitt. cuando se presenta lo hace con síntomas inespecífi-
cos que incluyen fiebre prolongada, fatiga y mialgias;
Anatomía patológica son relativamente raros la faringitis, las linfadeno-
Los cambios patológicos se limitan casi exclusiva- patías, la esplenomegalia y los linfocitos atípicos.
mente a los tejidos linfoides. Existe hiperplasia del
tejido linfático nasofaríngeo y agrandamiento de los Formas clínicas
ganglios linfáticos. El bazo puede estar aumentado Existen muchas formas clínicas según el síntoma
de volumen con adelgazamiento de la cápsula y de predominante, pero es importante conocer las dos
las trabéculas, que aparecen desintegradas por infil- variedades siguientes:
tración linfocítica.
Forma crónica recidivante. Sobre un estado de
Microscópicamente se observa hiperplasia folicu-
astenia, irritabilidad y adelgazamiento, ocurren bro-
lar con proliferación de elementos linfocíticos y
tes febriles, angina, adenopatías y esplenomegalia
reticuloendoteliales en los cordones medulares; el
con prueba de Paul-Bunnell positiva o no.
examen muestra acumulación de linfocitos norma-
Forma febril prolongada. Hay fiebre intermiten-
les y anormales alrededor de las arterias intratra-
te o recurrente y otras manifestaciones de varios
beculares, por debajo de la íntima de las venas y en
meses y hasta de años de duración.
los senos sanguíneos. Estos cambios explican la fa-
cilidad con que se rompe ese órgano. Exámenes complementarios
Se encuentran lesiones en todos los órganos de la
economía, que consisten en acumulaciones peri- y diagnóstico
vasculares de linfocitos normales y anormales, y le- El diagnóstico se basa en el cuadro de fiebre, farin-
siones focales en el miocardio, riñón y SNC. gitis, adenopatías y esplenomegalia, y en el aumen-
to de linfocitos y monocitos, con un cierto número
Cuadro clínico de células atípicas. En la 1ra. semana el conteo de
Varía desde una infección asintomática hasta un cua- leucocitos es normal; entre las 2da. y 3ra. se encuen-
dro clínico manifiesto, o se inicia por una complica- .
tra entre 10 000 y 20 000/mm3 (10 y 20 109/L), de
ción. los que más del 10 % son linfocitos atípicos (células
El período de incubación es de 4 a 6 semanas, linfomonocitarias de Downey) en la sangre periféri-
con posible fatiga y mialgias 1 o 2 semanas antes de ca; las células CD8 predominan entre las atípicas

562
y persisten de 6 a 8 semanas; durante el 1er. mes se de Guillain-Barré y mielitis transversa aguda. Otras
presenta en ocasiones trombocitopenia y neutro- complicaciones neurológicas son neuritis periféri-
penia. ca, parálisis de un par craneal (con preferencia el
Las transaminasas, fosfatasa alcalina y bilirru- VII) y psicosis. En el LCR se halla linfocitosis, con
bina elevadas son índices de alteración de la fun- linfocitos atípicos en ocasiones. La ruptura esplénica
ción hepática; si se produce anemia hemolítica, la ya mencionada es más frecuente en hombres. La
prueba de Coombs será positiva. obstrucción respiratoria alta es rara, pero potencial-
mente fatal; se debe a un agrandamiento masivo de
Diagnóstico serológico las amígdalas por edema faríngeo o por superinfec-
Consiste en la determinación en el suero de anti- ción bacteriana por estreptococos, lo que tiene como
cuerpos heterófilos aglutinantes de los glóbulos ro- resultado un absceso amigdalino; anemia hemolíti-
jos del carnero, la llamada reacción de Paul-Bunnell, ca autoinmune, que aparece durante la 2da. semana,
que es positiva cuando los anticuerpos aparecen en por aglutininas en frío; agranulocitosis, capaz de pre-
la dilución al 1/64 y dudosa al 1/32. sentarse después de 1 año de ocurrida la enferme-
El test que determina anticuerpos específicos con- dad; hepatitis, miocarditis, pericarditis; neumonía (se
tra el virus EB es el que demuestra el anticuerpo señala que la infección por virus EB predispone a la
IgM contra el antígeno de la cápsula (VCA), que infección por Mycoplasma pneumoniae, por altera-
está elevado en los 2 primeros meses de la enferme- ción del epitelio respiratorio que interfiere en los
dad, y el anticuerpo IgG contra el antígeno de la mecanismos de aclaramiento traqueobronquiales);
cápsula (VCA), que persiste durante toda la vida; nefritis intersticial; síndrome nefrótico y vasculitis.
estas determinaciones se realizan mediante inmu- La MI puede asociarse a otras enfermedades como
nofluorescencia indirecta. son: linfoma policlonal o monoclonal, el síndrome
Por el método de ELISA se detecta a partir de linfoproliferativo de cadena X (enfermedad de
la 3ra. o 4ta. semana de iniciados los síntomas el Duncan) e hipogammaglobulinemia.
anticuerpo contra antígenos tempranos (anti-EAD y
anti-EAR). Evolución
A partir de la 6ta. semana son detectables los anti-
cuerpos IgG contra el antígeno nuclear (anti EBNA), En los casos sin complicaciones la fiebre desapare-
que persisten largo tiempo, por lo que al inicio de la ce en 10 días y la linfadenopatía y la esplenomega-
enfermedad es negativo, y cuando se produce la se- lia, en 4 semanas; cerca del 30 % de los pacientes
roconversión es usado como diagnóstico de infec- sufren recidivas febriles con adenopatías y el 1 %
ción no reciente por virus EB. fallece por ruptura esplénica, meningoencefalitis e
Para la identificación de los pacientes con carci- hiperesplenismo.
noma nasofaríngeo y MI, se determina el anticuerpo
IgG contra antígenos del virus EB. Tratamiento
Se debe evitar toda actividad física innecesaria y
Diagnóstico diferencial excesiva, se tomarán medidas de sostén y se usarán
Debe realizarse con las infecciones por citomegalo- analgésicos si fuera necesario. Los corticosteroides
virus, toxoplasma, virus de inmunodeficiencia ad- no están indicados, excepto en los casos de posible
quirida, herpes virus 6 humano y hepatitis viral, y obstrucción de la vía aérea, anemia hemolítica se-
con la reacción de hipersensibilidad a las drogas (áci- vera, trombocitopenia y alteraciones del SNC y car-
do paraaminosalicílico y difenilhidantoína). díaca. Se utiliza la prednisona en dosis de 80 mg el
Las células atípicas se observan también en otros primer día, 40 mg los 3 días siguientes y luego se
procesos como: rubéola, neumonía por virus, vari- reduce de forma progresiva la dosis hasta suprimir
cela, parotiditis, síndrome posperfusión, fiebre tifoi- el medicamento en 7 o 10 días; se puede emplear
dea y tuberculosis. acyclovir, de 400 a 800 mg diarios, por 5 días. En la
actualidad está en estudio el uso de interferón alfa
Complicaciones en dosis de 1 a 10 U/kg/por vía SC, 3 veces/semana.
La muerte por MI es muy rara y cuando sucede, se El empleo de antibióticos está indicado en los
debe a complicaciones. Entre ellas se encuentran: casos en que se asocie un absceso amigdalino es-
meningitis, encefalitis, ataxia cerebelosa, síndrome treptocócico.

563
74
RABIA O HIDROFOBIA

Concepto mayor parte en los países subdesarrollados. Desde


el punto de vista epidemiológico, se describen dos
La rabia es una antropozoonosis, ocasionada por un
formas de rabia: la urbana, trasmitida por perros y
virus neurotropo específico, generalmente trasmiti-
gatos domésticos que no han sido vacunados, y la
do al hombre por la mordedura de animales verte-
brados de sangre caliente infectados por este agente, selvática, propia de los carnívoros salvajes y de los
y que se caracteriza por un cuadro clínico de encefa- murciélagos. El reservorio salvaje varía en los dis-
lomielitis aguda casi siempre mortal. tintos continentes; así, en América se observa prin-
cipalmente en mapaches, mofetas y zorros; en
Historia Europa, a partir de 1992, en murciélagos.
En nuestro país, con la aplicación sistemática de
Esta enfermedad, conocida por la humanidad desde
la vacunación y saneamiento canino, el perro ha sido
las épocas más remotas, fue mencionada ya en el
siglo XIII a.n.e. en el código premosaico de Eshunna. desplazado como la especie más afectada de rabia y
Galeno tuvo conocimiento de ella y aconsejaba la ha sido sustituido por la mangosta (Herpestes auro-
sección inmediata de los tejidos mordidos. punctatus auropunctatus) como el principal reser-
Zulne en 1809 comprobó la trasmisión de la ra- vorio de la rabia. Cuba mantiene su condición de
bia por la saliva de un perro enfermo a otro sano, y País Libre de Rabia Urbana; sin embargo, después
fue Galtier el primero que ensayó la vacunación an- de más de 10 años de ausencia total, se reportaron 6
tirrábica al intentar inmunizar carneros y cabras con casos de rabia humana, 5 producidos por murciéla-
inyecciones intravenosas del virus. Luego Pasteur, gos no hematófagos y 1 por gato silvestre.
en 1884, presentó al Congreso de Copenhague la
técnica de la vacunación antirrábica, que tantos be- Etiología
neficios ha reportado a la humanidad. El virus de la rabia es un rabdovirus del género
En el año 1903, el italiano Negri descubrió los Lyssavirus, que mide entre 100 y 150 µm de longi-
corpúsculos intracitoplasmáticos específicos que se tud, con ARN de filamento único envuelto en forma
encuentran en las neuronas del asta de Ammon de de bala. Es sensible al calor, los rayos ultravioleta y
los animales y personas fallecidas por rabia. a casi todos los detergentes y desinfectantes; sin em-
Desde 1975 hasta ahora se han descubierto 5 ti- bargo, resiste el formol y en condiciones de conge-
pos de virus relacionados con el rábico: el murcié- lación, desecación y putrefacción, suele permanecer
lago Lagos (LBV), el Mokola (MOK),el Duberbhage estable durante algún tiempo.
(DUV), el Komkan (KOT) y el Obodhiang (OBOD). Desde la época de Pasteur se distinguen dos va-
Desde el punto de vista epidemiológico carecen de riedades:
gran importancia, pues el MOK y el DUV sólo en
muy raras ocasiones han guardado relación con una 1. Virus de la calle o natural. Causante de las infec-
enfermedad mortal en el hombre, similar a la rabia. ciones rábicas naturales del perro, el gato, etc.,
y del contagio de las personas en la calle. Tiene
Epidemiología un período de incubación que varía de 10 días
La rabia tiene una distribución mundial y se repor- a varios meses, produce cuadros clínicos furio-
tan entre 35 000 y 40 000 defunciones al año, la sos, paralíticos o ambos, y en el cerebro del

564
animal rabioso se detectan corpúsculos de En la actualidad, algunos autores consideran a las
Negri. inclusiones celulares como productos reactivos cito-
2. Virus fijo o de laboratorio. Es el mismo virus plasmáticos específicos de la rabia, cuya formación
de la calle, pero transformado a causa de dife- se produce al colonizar el virus en la célula nervio-
rentes pases de cerebro de conejo. Esto reduce sa. Estos corpúsculos de Negri no rebasan los 10 µm
el período de incubación de la enfermedad a 6 de diámetro, son bien delimitados y toman una co-
o 7 días, y entre otras de sus características, loración acidófila con la tinción de Gram.
produce la forma paralítica de la afección y no Al iniciarse la dolencia, y en ocasiones más tar-
desarrolla los corpúsculos de Negri en el cere- de, faltan los corpúsculos de Negri en las células
bro del animal inoculado. nerviosas. Por lo tanto, un resultado negativa no sig-
nifica que el animal no padezca la enfermedad.
Patogenia
Una vez que el virus llega al hombre, en la mayoría Cuadro clínico
de los casos por mordedura de un animal infectado, Se divide en cuatro períodos: de incubación, pro-
avanza y se disemina desde la herida hacia el siste- drómico, de excitación y paralítico.
ma nervioso. Período de incubación. Generalmente es de 20
Desde las fibrillas musculares lesionadas en la a 60 días, aunque en las exposiciones graves oscila
región mordida y donde el virus comienza a multi- entre 8 y 12 días. Se han reportado casos con perío-
plicarse, se dirige en sentido centrípeto para invadir dos de incubación de 1 año. Estas variaciones de-
todo el tejido nervioso a través del axoplasma de los penden al parecer de la cantidad de virus introducido
nervios periféricos. Este fenómeno, demostrado ex-
y de tejido afectado, mecanismo de defensa del hués-
perimentalmente, es llamado septineuritis por algu-
ped, distancia que el virus tiene que recorrer desde
nos autores. Del SNC, donde el virus se multiplica
el sitio de la inoculación hasta el SNC, etc.
dentro de la sustancia gris, alcanza a otros tejidos a
Los períodos de incubación breves se presentan
través de los nervios autónomos, incluyendo las glán-
con mordeduras producidas en la cara, los brazos, o
dulas salivales, lo que explica la posterior trasmi-
en heridas múltiples.
sión de la enfermedad por medio de la saliva
Período prodrómico. Dura 1 o 2 días y consiste
infectada.
en fiebre de 38 a 39 ºC, náuseas y vómitos. Una ce-
A pesar de la toma de todo el sistema nervioso,
debe señalarse que el LCR no es invadido y que la falea, un dolor de garganta y una tos persistente no
diseminación hematógena ocurre por excepción. muy bien definida y sin causa aparente, pueden guiar
a la sospecha diagnóstica de rabia. La aparición de
Anatomía patológica hormigueo, parestesias y dolor a nivel del sitio de la
mordedura tienen gran importancia.
Las lesiones que se encuentran en el sistema nervio-
so son en general las de una encefalitis, además de Período de excitación. Su duración es de 1 a 3
lesiones infiltrativas nodulares que son inespecífi- días y se caracteriza por excitación cada vez más
cas y específicas. intensa, sensación de temor y cólera, interrumpida a
Las inespecíficas están constituidas por infiltra- veces por períodos de depresión. El paciente se com-
dos perivasculares y masas de células redondas, al- porta agresivo, aunque no suele atacar a las perso-
rededor de neuronas degeneradas. Las específicas, nas que lo atienden. Poco tiempo después aparecen
de gran valor diagnóstico, son las que Negri descu- contracciones tonicoclónicas y convulsiones, preci-
brió en 1903 y que describió como inclusiones celula- pitadas éstas por los estímulos más insignificantes,
res citoplasmáticas esferoidales, en número variable, como los ruidos de pasos, un teléfono que suena en
que se concentran sobre todo a nivel del asta de la distancia, etc.
Ammon, lóbulo del hipocampo, tálamo óptico, La respiración se hace superficial y el pulso rápi-
ganglios raquídeos y cuernos posteriores de la mé- do y filiforme. Las manifestaciones neurológicas que
dula. No son exclusivas de las neuronas, pues tam- evidencian la toma del SNC son estrabismo, paráli-
bién se las ha encontrado en la córnea de conejos sis facial, nistagmo y parálisis de las cuerdas voca-
inoculados. les, manifestada esta última por ronquera o afonía.

565
A menudo hay exageración de los reflejos profun- con anticuerpos fluorescentes, permite corroborar o
dos, con signo de Babinski y rigidez de nuca. excluir rápidamente, con bastante seguridad y en
El temor al agua o hidrofobia, síntoma que origi- pocas horas, la presencia del virus de la rabia. La
nó el nombre de la enfermedad, es el signo más im- prueba se realiza en la saliva, el exudado faríngeo,
portante y se debe a las contracciones intensas y la piel del cuello o del sitio mordido, etc.
dolorosas de los músculos de la faringe, que se pro- Prueba de seroneutralización del virus rábico. En
ducen al tratar de tragar líquidos. Este fenómeno se los pacientes no vacunados, un aumento cuádruple
presenta al tercer día de iniciado el cuadro clínico y de los anticuerpos neutralizantes del virus de la ra-
se desencadena sólo con ver el agua, inclusive con bia en el suero se considera diagnóstico. Si fue va-
oír dicha palabra. La saliva se le escapa al enfermo cunado, tienen valor títulos en el LCR superiores
de entre los labios, ya que evita deglutirla para no a 1/200.
provocar el espasmo faríngeo, en extremo doloroso.
La muerte suele llegar en una convulsión generali- Diagnóstico
zada, con apnea prolongada. Diagnóstico positivo
Período paralítico. Muy breve (1 día). Algunos El diagnóstico de la rabia no ofrece dificultad, siem-
pacientes que sobreviven al período de excitación,
pre que exista el antecedente de exposición a mor-
llegan a desarrollar una parálisis fláccida generali-
dedura de un animal y haya intensa disfunción del
zada, que casi siempre comienza por la extremidad
SNC, con trastornos serios de la conducta, ansie-
mordida.
dad, gran excitación y delirio, asociada a contrac-
Cuando cesan los espasmos faríngeos, la excita-
ciones musculares espasmódicas de los músculos de
ción es sustituida por depresión, apatía, hiporreflexia
la deglución y del habla. Pero resulta difícil cuando
y coma; la muerte se produce alrededor de los 4 días
no hay franca hidrofobia ni historia conocida de
desde el inicio de la enfermedad, por apnea de ori-
mordedura de animales.
gen bulbar o colapso cardiovascular.
El diagnóstico se confirma con las distintas prue-
En muy raros casos el cuadro clínico se ha pro-
longado hasta 3 semanas o más (rabia crónica de bas de laboratorio y por el hallazgo en el cerebro, en
algunos autores). La literatura reporta tres casos de la autopsia, de los ya descritos corpúsculos de Negri.
pacientes con inmunidad parcial inducida por la va-
cuna, que sobrevivieron con la terapia intensiva. Diagnóstico diferencial
Hay que diferenciar la rabia de los procesos si-
Exámenes complementarios guientes:
Hemograma. Por lo general hay aumento del núme-
ro de leucocitos, que a veces alcanzan hasta 30 . 1. Reacciones histéricas por mordedura de perro.
2. Encefalomielitis alérgica producida precisamen-
109/L (30 000/mm3) con predominio de polimorfo-
nucleares y gran número de mononucleares. te por la vacuna antirrábica. Esta situación pue-
Orina. Puede mostrar glucosuria y albuminuria; de dificultar el diagnóstico de la rabia.
en ocasiones hay oliguria por deshidratación. 3. Tétanos, a veces casi idéntico a la rabia; sólo la
Líquido cefalorraquídeo. El virus rara vez se en- presencia del trismo en el primero sugiere el
cuentra en el LCR; la presión suele estar aumenta- diagnóstico.
da, así como las proteínas, y las células alcanzan 4. Delirium tremens.
hasta 100 o 120 por mm3, con predominio de mono- 5. Intoxicación por los alcaloides de la belladona.
nucleares. 6. Síndrome de Guillain-Barré.
Aislamiento del virus en la saliva. La saliva del
paciente, previo tratamiento en el laboratorio, se Pronóstico
inocula a ratones. El examen del cerebro del animal Hasta el momento actual, la rabia sigue siendo una
con la coloración de Sellers, confirma el diagnósti- enfermedad casi siempre mortal para el hombre. No
co de rabia al mostrar los corpúsculos de Negri. obstante, todo paciente expuesto debe recibir trata-
Detección de anticuerpos fluorescentes. Esta téc- miento de sostén para ayudarlo hasta donde sea po-
nica, que consiste en la comprobación de antígenos sible.

566
Entre los factores que implican un pronóstico fa- 5. Presencia de rabia en la región. Es necesario
vorable, se encuentran las mordeduras producidas considerar el dato epidemiológico de rabia, y
en partes distales, los períodos largos de incubación, el médico que desempeña sus funciones en una
las mordeduras a través de la ropa, y el hecho de localidad determinada, debe asesorarse con las
estar el agredido vacunado previamente. autoridades epidemiológicas de su área de sa-
lud o región, de la tasa de rabia en su comu-
Complicaciones nidad.
Con la aplicación de la ventilación mecánica ha au- 6. Conducta que se debe seguir con el animal
mentado el número de complicaciones, entre las que mordedor. El caso debe ser reportado con ur-
se destacan: la hipertensión intracraneal, secreción gencia a la Dirección de Salud Pública. Hay
inapropiada de hormona antidiurética, arritmias car- que capturar el animal mordedor y observarlo
por un veterinario durante 5 días por lo menos,
díacas, insuficiencia cardíaca congestiva, sangra-
mejor aún por 10 días.
mientos digestivos, sobreinfecciones respiratorias y
Los animales sospechosos no deben sacrificarse
la insuficiencia renal aguda.
inútilmente. Si se va a hacerlo, se le protegerá
Tratamiento la cabeza, la cual se refrigerará y examinará de
inmediato en un laboratorio calificado. Esto
La única forma de tratamiento efectivo en la rabia último es importante, ya que los signos de ra-
es la profilaxis, que descansa en las medidas de hi- bia en los animales a veces no son muy fáciles
giene ambiental, en especial el exterminio de los de distinguir o no se interpretan de forma debida.
perros callejeros, en la vacunación de todos los ani- 7. Tratamiento local de las heridas. Será de in-
males domésticos y en la reducción al máximo posi- mediato y cumplirá los mismos requisitos de
ble de la población de mangostas. asepsia que para cualquier otra herida. Se la-
El médico debe tener en cuenta, cuando en su prác- vará sólo con agua o con agua y jabón, o si se
tica se encuentre ante un paciente mordido por un prefiere, con agua y una sustancia detergente.
animal que escapó o fue matado, o como sucede a Está indicado el uso de compuestos de amonio
veces en que los datos de que dispone en el orden cuaternario, aunque si se emplean, todo vesti-
anamnésico son muy limitados, los aspectos si- gio de jabón tiene que ser removido. No debe
guientes: suturarse una herida sospechosa de estar con-
taminada con el virus de la rabia.
1. Animal mordedor. Los carnívoros, como coyo- Si está indicado el suero antirrábico, éste pue-
tes, gatos y murciélagos, son altamente peli- de administrarse infiltrando la mitad alrededor
grosos en relación con otros animales. de la herida, y el resto por vía EV o IM.
2. Circunstancias que produjeron el ataque del Hay que vacunar al paciente contra el tétanos
animal. Un ataque no provocado es más que si no lo ha hecho, y en caso contrario, reactivar
probable que sea efectuado por un animal ra- su vacunación con toxoide tetánico. Se segui-
bioso. rán las mismas reglas de precaución para ad-
3. Extensión y localización de la herida. El com- ministrar el suero antirrábico que las seguidas
portamiento del cuadro clínico posterior al ata- con el antitetánico, en lo referente a las prue-
que del animal, así como el pronóstico, varían bas de hipersensibilidad.
de acuerdo con la extensión y localización de
la mordedura; así, son graves las heridas en la Profilaxis específica de la rabia después de la expo-
cara y el cuello, y las punzantes y profundas. sición
Los arañazos y las laceraciones o pequeñas Una vez que la rabia humana ha sido adquirida, cons-
mordeduras, se consideran leves. tituye una enfermedad de curso fatal, por lo cual su
4. Estado de vacunación del animal. Un animal profilaxis cobra, como en ninguna otra afección, una
adulto vacunado de forma adecuada con 1 o 2 importancia capital. La prevención de la rabia in-
dosis de vacuna antirrábica, tiene muy pocas cluye dos medidas fundamentales:
posibilidades de desarrollar la enfermedad y, a 1. Control y erradicación de esta enfermedad en
su vez, trasmitirla. los animales.

567
CUADRO 74.1
ESQUEMA DE TRATAMIENTO ANTIRRÁBICO

Estado del animal (vacunado o no vacunado)


Naturaleza del contacto En el momento del Durante el período de Tratamiento
episodio sospechoso observación de 10 días* recomendado

I. Contacto sin lesión. Con rabia. Ninguno.


Contacto indirecto
o ningún contacto.
II. Lameduras de la piel, arañazos 1. Presuntos síntomas Sano. Iniciar la vacunación;
o erosiones; mordedura leve de rabia.** interrumpir el tratamiento
(en las partes cubiertas de si el animal sigue sano
los brazos, del tronco y de durante 5 días.
las piernas).

Con rabia. Iniciar la vacunación; si el


diagnóstico es positivo,
administrar suero y prose-
guir la vacunación.

2. Con rabia, animal salvaje Administrar suero


o que no puede ser sometido y vacuna.
a observación.

III. Lameduras de mucosa; Animal doméstico o salvaje Administrar suero


mordedura grave (mordeduras sospechoso de rabia; o animal y vacuna; interrumpir
múltiples situadas en cara, que no puede ser sometido a el tratamiento si el animal
cabeza, dedos y cuello). observación. sigue sano durante 5 días
en los casos en que sea
posible la observación.

* El período de observación recomendado en este cuadro sólo se aplica a los perros y gatos.
** En las zonas de endemia, todos los casos de mordedura sin provocación previa deben considerarse sospechosos, a no ser que
el análisis de laboratorio (investigación de anticuerpos fluorescentes en el cerebro) sea negativo.

2. Protección de las personas expuestas a altos vacuna, 0,5 ml durante 14 días consecutivos, por vía
riesgos de contraerla. subcutánea en la región interescapular. Para los in-
dividuos que por razones de trabajo corren un alto
Desde el punto de vista inmunológico, la situa- riesgo, se aplicará el esquema siguiente: 3 dosis
ción de la profilaxis de la rabia es “anormal”, toda de 0,5 ml en días alternos y 1 de 0,5 ml al mes de la
vez que implica la inmunización activa del paciente última dosis. Al finalizar este esquema, se debe obte-
después que el virus causal de la enfermedad le ha ner una muestra de sangre para determinar el título
sido inoculado. Es por ello que el tiempo transcurri-
de anticuerpos; de resultar bajo, administrar 1 o más
do tiene gran importancia en el tratamiento de una
dosis adicionales. Se mantienen títulos de anticuer-
persona mordida por un animal rabioso, al igual que
pos con inyecciones adicionales a intervalos de 1
la parte del cuerpo y las circunstancias en que ocurrió
la mordedura, como se verá más adelante. a 2 años. En todos los casos debe iniciarse o reacti-
En Cuba se emplea para el tratamiento preventi- varse la vacuna antitetánica.
vo antirrábico humano, el suero hiperinmune hete- También existe el suero hiperinmune homólogo,
rólogo y la vacuna CRL (Cerebro de Ratón Lactante) que se administra a razón de 20 UI/kg de peso, y la
inactiva. vacuna antirrábica humana de cepas de células
El suero se utiliza, previa prueba de sensibilidad, diploides, que se aplica en 1 dosis inicial y se repi-
a razón de 40 UI/kg de peso de una sola vez y la te 3, 7, 14 y 30 días después.

568
El suero proporcina anticuerpos en etapa tempra- gresarse a la persona y continuar su atención bajo el
na, antes que el paciente elaborare los suyos pro- control del alergista y el clínico.
pios; la vacuna origina inmunidad activa, aunque más
tarde y lentamente, cuando el efecto del suero ya se Indicaciones para una profilaxis específica
va perdiendo. Los anticuerpos aparecen 10 días des- La decisión de utilizar la vacuna y el suero ante un
pués de la primera dosis de la vacuna. paciente determinado, depende de varios factores.
Entre las reacciones locales que se presentan des- Si el animal mordedor se conserva sano desde el
pués de administrar la vacuna, se encuentran hin- punto de vista clínico durante 10 días de observa-
chazón y enrojecimiento en el sitio de la inyección. ción, es que no hubo en realidad exposición a la ra-
Con posterioridad a la 8va. o 10ma. dosis y entre las bia; de ahí la importancia que tiene no sacrificar al
generales, aparecen cefalea, vómitos, fiebre, linfa- animal mordedor y vigilarlo.
denopatía y exantema generalizado. Ante la exposición por mordeduras de animales
Cuando se emplea el suero antirrábico, se deben salvajes o escapados, se impone la vacunación, tan-
tener las mismas precauciones que con el suero to activa como pasiva (vacuna y suero, respectiva-
antitetánico; se señala que la enfermedad sérica apa- mente). Es obvia la importancia que tiene el estudio
rece en un 25 o 30 % de aquellos a quienes se les histológico del animal. En el cuadro 74.1 se indica
administra dicho suero. la conducta que se debe seguir en las diferentes si-
En caso de presentarse alguna reacción a la prue- tuaciones, según el Programa de Control de la Ra-
ba de sensibilidad o durante el tratamiento, debe in- bia en nuestro país, orientado por la OPS.

569
75
FIEBRE AMARILLA

Concepto rencia Sanitaria Internacional en Washington, la ne-


cesaria existencia de un agente intermediario (vector)
La fiebre amarilla (FA) es una enfermedad infec-
para la trasmisión de la FA; y en agosto del propio
ciosa aguda, potencialmente epidémica, muchas
año precisó en la Academia de Ciencias de La Ha-
veces gravísima, producida por un flavivirus y que
bana que tal trasmisor era el mosquito Aedes aegypti.
se caracteriza por fiebre de grado variable, ictericia,
Desde entonces continuó con la prédica de esta ver-
hemorragias y albuminuria en ocasiones intensa.
dad por muchos años.
Historia El gobierno norteamericano, cuyas tropas inter-
ventoras eran diezmadas por la FA en Cuba, envió a
La FA ya era conocida en el continente americano
nuestro país una comisión médica al mando del co-
antes de la llegada de los españoles; los aborígenes
mandante médico Walter Reed para estudiar el gra-
mexicanos la llamaban cocolitze. Fue propagada por
ve problema. Es bien conocido, y en aquel entonces
las Antillas por los indios caribe y causó serios que-
tergiversado, que la comisión sólo después que de-
brantos al conquistador español; éste, a su vez, la
llevó a España y a otros lugares de Europa. Por otra cidió estudiar y poner en práctica lo ya definido por
parte, España y otros países europeos la introduje- Finlay (éste, en prueba de grandeza científica, puso
ron en África en sus quehaceres esclavistas, donde en manos de la comisión todo el material y método
aún persiste. para resolver el problema), pudo obtener el éxito. Es
En Cuba se reportan las primeras manifestacio- también histórico que Reed, sin la menor honradez
nes de FA en 1620, y un poco más tarde, en 1649, se ni ética científica, se apropió del descubrimiento.
produce una gran epidemia en La Habana, la cual Como contraste, un médico norteamericano hon-
se extendió por toda la Isla. Así se mantuvo de for- rado, John W. Ross, director médico de la marina
ma endemoepidémica por más de 250 años. de guerra de EE.UU. en Cuba, propuso al Dr. Finlay
Por ser Cuba un lugar clave en la navegación como candidato al Premio Nobel de Medicina
interamericana y a otros continentes, y su puerto de en 1905.
La Habana importantísima plaza comercial y políti- La verdad pudo ocultarse por un largo tiempo, pero
ca, a través de sus costas se exportó la FA a muchos no siempre, y en 1954, en el XIV Congreso Interna-
lugares donde se desataron grandes epidemias, tan- cional de Historia de la Medicina, Finlay fue reco-
to en América como en Europa; pero después de nocido mundialmente como el genial descubridor del
muchas vacilaciones se implantó la Doctrina Finlay, agente trasmisor de la FA. ¡Honor y gloria eterna a
con lo cual se logró erradicar la enfermedad en to- Carlos J. Finlay!
das las áreas urbanas del mundo.
El gran benefactor de la humanidad, Carlos J. Etiología
Finlay, nació en Camagüey el 3 de diciembre de 1833 La FA, causada por un flavivirus como ya se apuntó,
y aunque ejerció como oftalmólogo a partir de 1857, es trasmitida, según se trate de la modalidad urbana,
no abandonó la investigación, sobre todo del cólera por el mosquito Aedes aegypti, o la rural o selváti-
y la fiebre amarilla. Ya en el mes de febrero de 1881, ca, por el mosquito Haemagogus y otras especies
había comunicado de manera oficial en la Confe- infectadas, ambos por picaduras a monos. La fiebre

570
urbana se adquiere al picar el mosquito a alguna per- En el segundo período o de remisión, la fiebre
sona enferma y trasmitirla por picadura a otra. desciende por crisis, lo cual dura algunas horas; en
este caso el paciente casi siempre evoluciona bien.
Epidemiología En los casos graves el cuadro no cede y se pasa al
Desde 1942 no se ha notificado caso alguno de FA período de intoxicación o tercera fase, donde apa-
urbana trasmitida por Aedes aegypti en América. Se recen los síntomas y signos típicos. La ictericia se
exceptúa Trinidad, donde se reportaron algunos ca- hace evidente, el pulso enlentece y se presentan san-
sos en 1954. gramientos frecuentes, en forma de hematemesis (el
En América, la enfermedad urbana atacó por igual clásico “vómito negro”, que antaño dio nombre a la
durante siglos a hombre y mujeres, sin distingos de enfermedad). La albuminuria es la regla y el cora-
raza. En África aún se registran brotes urbanos, pues zón suele afectarse en forma de miocarditis. Por úl-
es endémica en muchas regiones. En Burkina Faso, timo, se presenta delirio y agitación antes de la
en 1983, se notificaron 286 defunciones, y de 1986 muerte, que ocurre en línea general entre 4 y 6 días.
al 88 surgieron brotes en Nigeria, donde más de 30 000 Los casos moderados acusan un período de con-
personas enfermaron y más de 10 000 fallecieron. valecencia corto y una recuperación sin secuelas.
En América Tropical la FA selvática produce nu-
merosos casos en la parte septentrional de Sudamé- Exámenes complementarios
rica y la cuenca del Amazonas, incluyendo los llanos
de Colombia y las regiones orientales de Perú y Llama la atención que al inicio de la enfermedad se
Bolivia. Se reportan casos esporádicos en todos los observa leucopenia intensa a expensas de los neu-
países del continente americano, desde México a la trófilos, aunque puede presentarse leucocitosis en
Argentina, con excepción de El Salvador, Uruguay los casos terminales. La hemoglobina se mantiene
y Chile. más o menos normal, excepto en los casos muy gra-
En África se la diagnostica en Angola, Zambia, ves y en aquellos con sangramientos. Las plaquetas
Tanzania, Uganda, Kenia, Etiopía, Somalia y el permanecen normales en las primeras 72 h, luego se
Sudán Meridional. observa trombocitopenia. El tiempo de protrombina
En Asia no hay evidencia de que la FA haya exis- y el de coagulación están prolongados. La albumi-
tido. Otro tanto puede decirse de la costa del extre- nuria se observa en el 90 % de los casos. La bilirru-
mo oriental de África. bina se encuentra moderadamente aumentada en la
sangre.
Cuadro clínico
La enfermedad decursa muchas veces asintomática Diagnóstico
o de forma leve, con cuadros febriles bruscos y fu- Se utilizan tres métodos para lograr el diagnóstico
gaces que se interpretan como fiebre de origen des- de certeza:
conocido; sin embargo, cuando se desarrolla el
cuadro clásico, bien sea grave o moderado, se dis- 1. Aislamiento del virus a partir de la sangre del
tinguen tres períodos después de una incubación enfermo.
de 3 a 6 días. 2. Determinación de títulos de anticuerpos neu-
El primer período o de infección dura alrededor
tralizantes, que se encuentran aumentados.
de 3 días y se caracteriza por fiebre, cefalea intensa,
3. Biopsia de hígado por necropsia, donde se ob-
dolor lumbar y en todo el cuerpo, así como postra-
serva una necrosis celular medio zonal.
ción. Los enfermos se quejan de fotofobia, la cara
aparece congestionada y los ojos inyectados. Se des- Tratamiento
cribe una lengua enrojecida en los bordes y gran
saburra central; la fiebre se eleva a 40 ºC y se acom- Tratamiento preventivo
paña de un pulso lento (signo de Fagot). Las náu- Lo más importante es la lucha contra el mosquito
seas y los vómitos son habituales. Los leucocitos Aedes aegypti en las zonas urbanas y la protección
disminuyen y se observa albuminuria. contra los mosquitos en las zonas selváticas.

571
Tratamiento de la enfermedad de heparina en caso de coagulación intravascular di-
Es necesario un tratamiento de sostén para aliviar seminada. Si se presentan vómitos, se usará dimen-
los síntomas mayores. La tendencia a los sangra- hidrinato (Gravinol).
mientos se trata con gluconato de calcio, 1 g EV 1 La fiebre se combatirá con baños de agua fría o
o 2 veces al día con fitonandiona. Puede ser necesa-
compresas. La aspirina está contraindicada.
rio el uso de transfusiones y hay que considerar el

572
76
DENGUE

Concepto El virus se une a las células susceptibles (macró-


Es una enfermedad febril, aguda, de comienzo brus- fagos-monocitos) por dos mecanismos: en el primero
co, originada por un virus perteneciente a la familia se forma un complejo virus-anticuerpo no neutrali-
Flaviviridae, procedente de las regiones subtropi- zante (tipo IgG), que se une a los receptores Fc de
cales y tropicales, que origina epidemias, las cuales los macrófagos y monocitos; el otro mecanismo de
se manifiestan clínicamente de dos formas princi- unión a los monocitos ocurre por la vía de un recep-
pales: la fiebre del dengue (FD) o también llamado tor viral.
dengue clásico, y la forma hemorrágica o fiebre he- El virus se encuentra en la sangre humana des-
morrágica del dengue (FHD), a veces con síndrome pués de 5 o 6 días de la inoculación por el mosquito.
de shock por dengue (FHD/SCD). El vector. En 1906, Bancroft publicó las primeras
evidencias de que Aedes aegypti es el vector de la
Etiología fiebre del dengue; este mosquito tiene las caracterís-
La enfermedad es producida por el virus del den- ticas de ser doméstico, y se encuentra en el hábitat
gue, de la familia Flaviviridae; de acuerdo con la humano; no sobrevive en invierno y se reproduce en
clasificación de Casals pertenece a los arbovirus, y cualquier objeto que contenga agua y que no esté
atendiendo a las reacciones cruzadas de inhibición rodeado de tierra. El radio de vuelo de la hembra es
de la hemaglutinación fue incluido en el grupo B. de unos 100 m y la postura la realiza por la tarde; si
Existen 4 serotipos: DEN-1, DEN-2, DEN-3 y las paredes están lisas, los huevecillos se esparcen
DEN-4. por la superficie, pero usualmente se quedan pega-
Este virus fue aislado por primera vez en 1943 y dos a los lados del recipiente.
se le llamó DEN-tipo 1; en 1945 se aisló el DEN-2, El mosquito hembra se mantiene picando por el
que presenta características antigénicas que lo dife- día y algunas veces de noche, en especial en las ha-
rencian del anterior, y en 1956 se aislaron los sero- bitaciones iluminadas; los machos rara vez se posan
tipos 3 y 4; los serotipos 1, 2 y 3 tienen varios grupos sobre la piel y nunca intentan picar. El mosquito adul-
o topotipos, así el virus DEN-1 posee 3 topotipos,
to no es resistente al frío y para ellos resulta mortal
el DEN-2 presenta 5, el DEN-3 tiene 4, y el DEN-4
la temperatura de 6 ºC, aunque más altas de 43 ºC
presenta sólo 1.
por 5 min también son mortales. Con la lluvia au-
Al estudiar la causa de está afección hay que te-
menta la población adulta de este vector.
ner en cuenta el virus, el vector y el huésped.
El huésped. Se reconocen tres huéspedes natura-
El virus. Está constituido por tres estructuras
les: el hombre, los primates y el mosquito aedes.
proteicas: proteína C de la nucleocapside o proteína
del núcleo, proteína M asociada a la membrana y
proteína E de la envoltura; existen otras proteínas
Frecuencia
no estructurales (NS1, NS2, NS3, NS4, NS5) cuyas La enfermedad ocurre sobre todo en verano, a fina-
funciones no están del todo definidas, y al parecer les de agosto y octubre, por ser ésta la época en que
participan en la replicación viral y tienen importan- existe un alza de Aedes aegypti y A. albopictus; se
cia inmunológica. señala que el sexo femenino es el más afectado.

573
Epidemiología (contra éste) con los que forma complejos inmunes;
los monocitos/macrofágos constituyen la célula diana
Hay varias enfermedades virales de otro origen ca-
del virus del dengue y el mayor número de células
paces de producir un cuadro agudo de fiebre, cefa-
infectadas en el dengue secundario se explica por el
lea, mialgias y erupción, pero sólo el dengue se
fenómeno de inmunoamplificación. Éste se inicia por
presenta en forma de epidemia de carácter súbito y
masivo. Los primeros brotes epidémicos de que se la penetración a través del receptor Fc del monocito
tuvo información ocurrieron en la isla de Java en 1779 del complejo inmune formado por el virus y el anti-
y un año después en Filadelfia, EE.UU. Otros auto- cuerpo heterotópico; en el interior de la célula ocu-
res refieren que la primera epidemia se produjo en rre la multiplicación viral hasta la destrucción de ésta;
Europa (Cádiz y Sevilla) en 1784. los CD4 producen interferón gamma que activa los
La primera epidemia en Cuba ocurrió en el año monocitos, los que provocan niveles elevados de
1782, en la zona de Remedios; en 1827 se tuvo in- FNT-α, IL-1 y factor de activación plaquetaria, que
formación de la primera pandemia del dengue en el después serán liberados por lisis del monocito se-
Caribe y en la costa Atlántica de EE.UU.; la segun- cundaria a la acción de los linfocitos citotóxicos CD4
da (1848 - 1850) incluyó al Caribe y a Cuba. y CD8. Estos mediadores químicos producen un
En La Habana se reportó una epidemia en 1897, aumento de la permeabilidad vascular y se desarro-
con manifestaciones hemorrágicas. En 1977 surgió lla el síndrome de fuga capilar, capaz de llevar al
una en Cuba causada por el DEN-1, con el cuadro shock, a trastornos de la coagulación y, por ende, a
clínico del dengue clásico; en 1981 ocurrió de nue- manifestaciones hemorrágicas.
vo otra epidemia causada por el DEN-2, esta vez Las causas de las hemorragias en el dengue son
con el cuadro clínico del dengue hemorrágico, que las siguientes: diapédesis, trombocitopenia, penetra-
comenzó en la ciudad de La Habana y se reportaron ción del virus en las plaquetas por mecanismos in-
un total de 344 203 casos; de éstos, 1 312 se clasifi- munológicos y anticuerpos que reaccionan con el
caron como graves y 158 fallecieron. plasminógeno.
En 1994 se aisló el DEN-3 en Centroamérica, que Se señala como otro factor capaz de contribuir al
se expandió progresivamente a otros países; en 1997, shock, los niveles elevados de óxido nítrico encon-
el DEN-2 provocó en Cuba un brote que se desarro- trados en pacientes portadores de FHD/SCD. La
lló en el municipio de Santiago de Cuba, en el que muerte de las células diana se produce mediante el
se confirmaron 3 012 casos de fiebre de dengue, 205 fenómeno de apoptosis. Este fenómeno puede ser
de fiebre hemorrágica y 12 fallecidos. No se exten- inducido por la acción directa del virus en diferen-
dió a todo el país por las medidas tomadas para su tes tejidos.
control. Esta teoría secuencial no explica todos los casos:
En América, todos los países, excepto Chile, Uru- algunos pacientes con infección primaria sufren
guay y Canadá, se encuentran infectados por el mos- FHD/SCD y no todos los casos de dengue secunda-
quito Aedes aegyti en estado endémico. rio desarrollan esta forma clínica; esta variabilidad
de presentación se atribuye a factores virales y del
Patogenia huésped.
Las manifestaciones clínicas de FD se producen por Entre los factores virales se ha dado importancia
mecanismos fisiopatológicos comunes a otras enfer- a la secuencia viral; así, el riesgo de sufrir FDH/
medades virales. SCD es mayor durante una segunda infección pro-
Para explicar el cuadro clínico de la FHD o del ducida por el virus de una cepa de origen asiático o
SCD (FHD/SCD) se han postulado varias hipótesis; de los serotipos 2 y 3, que cuando lo es del serotipo 4,
la más aceptada en todo el mundo ha sido la pro- y casi nunca cuando el segundo virus es DEN-1.
puesta por Halstead, conocida como teoría secuen- Entre los factores del huésped, el sexo femenino
cial, que a continuación se explica. es más propenso a la infección, quizás porque las
Cuando un individuo se infecta por un serotipo, amas de casa tienen más probabilidad de ser picadas
desarrolla inmunidad homóloga durante toda la vida por los mosquitos infectados; la presencia de anti-
y heteróloga sólo unos meses. Si es infectado por cuerpos neutralizantes preexistentes proporciona
otro serotipo, desarrolla anticuerpos neutralizantes mayor resistencia; la raza blanca y la asiática son

574
más susceptibles que la negra y del mismo modo los rodillas. Al andar se produce rigidez de las articula-
pacientes con enfermedades crónicas que están con- ciones, lo que ocasiona la marcha de presumido o
dicionadas genéticamente, como el asma bronquial, de dandy.
sicklemia, diabetes mellitus y úlcera péptica; la nu- Entre el 1er. y 2do. días de enfermedad aparece
trición es un factor importante, pues se ha observa- un exantema eritematoso macular o puntiforme en
do que la desnutrición proteico-calórica moderada la cara, el tronco y las extremidades; en ocasiones
o severa disminuye el riesgo de padecer FHD/SCD. se produce un eritema fugaz de la cara, el cuello y el
Debe señalarse que los anticuerpos neutralizan- tórax, que al descamarse suele ser pruriginoso; pue-
tes aparecen varios días después del inicio de la en- den presentarse fotofobia, conjuntivitis y sabor amargo.
fermedad y persisten durante meses o quizás años Al 4to. día por lo general la temperatura descien-
en algunas personas; los anticuerpos fijadores del de, aunque después se eleva de nuevo y se mantiene
complemento se presentan también en forma precoz, de 5 a 7 días; no es rara la bradicardia relativa o
pero no son detectables hasta algunos meses des- taquicardia con hipotensión arterial.
pués, y los anticuerpos inhibidores de la hemagluti- En ocasiones se presentan manifestaciones neu-
nación (AcIH) surgen al mismo tiempo que los rológicas, como somnolencia, afectación de la me-
fijadores del complemento y son fáciles de detectar. moria reciente, agitación y convulsiones, en
Si los anticuerpos neutralizantes se encuentran en dependencia de si la infección es producida por el
concentraciones adecuadas, el efecto biológico será DEN-3 o el DEN-2.
la neutralización del virus infectante, con indepen- Otras manifestaciones inusuales son: hemorragia
dencia de la concentración de anticuerpos inhibidores subaracnoidea focal, parálisis facial periférica, epis-
de la hemaglutinación, y no se produce la inmu- taxis, hematemesis, melena y hematuria que surgen
noamplificación; a la inversa, si disminuyen las con- después de 1 semana de desaparecida la fiebre, por
centraciones de anticuerpos neutralizantes, los lo que se consideran como un síndrome posinfec-
inhibidores de la hemaglutinación presentes cum- cioso.
plen la función de aumentar la infección. La convalecencia es a veces larga y queda una
astenia que dura semanas.

FIEBRE POR DENGUE Anatomía patológica


Por ser esta enfermedad rara vez mortal, la informa-
Cuadro clínico ción se limita a la que ofrece la biopsia de piel en la
zona del exantema. Los hallazgos son edema endo-
También llamado dengue primario o clásico, es
telial perivascular e infiltración mononuclear de va-
usualmente benigno y autolimitado. Existe un pe-
sos pequeños; las petequias se caracterizan por
ríodo de incubación de 4 a 8 días a partir de la pica-
dura infectante. extravasación de sangre sin reacción inflamatoria de
Las características clínicas dependen de la edad: importancia.
en lactantes y prescolares por lo general se presenta
Exámenes complementarios
la enfermedad febril indiferenciada; en los escola-
res y niños mayores las manifestaciones son mode- Hemograma. Hay leucopenia con discreta linfoci-
radas, y en el adulto, el cuadro es el clásico. tosis y desviación a la izquierda, y hemoconcentra-
La afección se inicia de forma brusca con ascen- ción.
so de la temperatura acompañado o no de escalo- Plaquetas. Son normales.
fríos, cefalea supraorbitaria intensa, dolor retrocular, Coagulograma. Es normal.
que se exacerba con los movimientos de los ojos, Eritrosedimentación. Suele tener variaciones sin
quebrantamiento general, náuseas, vómitos, dolor ab- importancia.
dominal (frecuente en el virus DEN-4), anorexia y
sensación de enfriamiento; al día siguiente la fiebre Diagnóstico
puede llegar a 40 ºC asociada a dolores localizados, Se basa en criterios clínicos, serológicos y epide-
sobre todo en la espalda, región lumbar, hombros y miológicos.

575
El criterio clínico está dado por el cuadro clínico Councilman y necrosis hialina de las células de
ya descrito. Kuppfer.
El serológico se sustenta en el aislamiento del vi- En el riñón se han encontrado cambios prolifera-
rus en el suero, o en el material de necropsia. Se tivos ligeros en relación con el depósito de inmuno-
realizan las siguientes pruebas: método de ELISA complejos.
(inmunoensayo enzimático sobre fase sólida), que En la médula ósea se ha observado depresión.
se hace en muestra única (monosuero) o en sueros
pareados para la determinación de anticuerpos del Cuadro clínico
tipo IgG; inhibición de la hemaglutinación con ci- El comienzo es abrupto, con fiebre alta, cefalea, dolor
fras iguales o superiores a 1 280; inmunofluorescen- retrorbitario, vómitos y tos seca; alrededor del 2do.
cia (unión inmunológica de un anticuerpo marcado o 3er. día aparecen las petequias en las extremida-
con fluorocromo a su antígeno homólogo); la reacción des, las cuales no se observan en el tórax; la prueba
en cadena de la polimerasa (PCR). del lazo es positiva, además es posible encontrar
El criterio epidemiológico se basa en la ocurren- equimosis, hemorragias en los sitios de puntura, he-
cia en el mismo lugar y al mismo tiempo de otros patomegalia dolorosa, dolor abdominal difuso y ta-
casos confirmados de dengue. quicardia (si hay bradicardia debe sospecharse una
miocarditis). Cuando la fiebre remite, la temperatu-
Complicaciones ra se hace subnormal y se instalan los derrames en
las cavidades serosas (ascitis, hidrotórax), las mani-
Se pueden producir diversas complicaciones, como
festaciones hemorrágicas, si no se habían presenta-
insomnio pertinaz, mielitis, bronconeumonía, me-
do, aparecen, o si ya existían, empeoran y el enfermo
ningoencefalitis, miocarditis y hepatitis intercurrente.
puede tener hipotensión y shock, sudoración profu-
Tratamiento sa con frialdad en las extremidades y congestión en
la piel. A veces hay síntomas neurológicos, como
Será explicado conjuntamente con el dengue secun- convulsiones y depresión de la conciencia.
dario.
CLASIFICACIÓN DE GRAVEDAD EN EL DENGUE
HEMORRÁGICO
DENGUE SECUNDARIO Grado Clínica Laboratorio

I Fiebre, síntomas generales, Hemoconcentra-


Concepto prueba del lazo positiva. ción, trombocito-
También llamado dengue hemorrágico o fiebre he- penia.
morrágica por dengue / síndrome de shock por den- II Grado I más sangramientos Igual.
gue (FHD/SCD), es una enfermedad endémica del espontáneos.
Asia sudoriental, producida por uno de los cuatro III Grado II más insuficiencia Igual.
serotipos del virus, siempre que exista el anteceden- circulatoria y agitación.
te de una infección previa. IV Grado III más shock profundo. Igual.

Anatomía patológica
Las alteraciones anatomopatológicas incluyen he- Exámenes complementarios
morragias focales múltiples, congestión y dilatación Hemograma. Se encuentra leucocitosis y signos de
vascular generalizada, edema y derrames serosos hemoconcentración (hematócrito igual o superior
(pleural, peritoneal). Al microscopio se encuentra al 20 % por encima del promedio para la edad).
infiltración perivascular de linfocitos y células mo- Coagulograma. Presenta trombocitopenia, tiem-
nonucleares, el tejido linfático muestra aumento de po de sangramiento prolongado, déficit de los fac-
linfocitos, disminución de las células en áreas inde- tores V, VII, IX y X, y fibrinógeno disminuido por
pendientes de linfocitos T, así como linfocitofagia; aumento de su consumo.
el hígado presenta necrosis focal, cuerpos de Transaminasas. En algunos casos están elevadas.

576
Ionograma. Hay hiponatremia. no tiene pérdidas ostensibles de líquidos, ni mani-
Urea. Está elevada. festaciones hemorrágicas o dolor abdominal, se indi-
Proteínas totales. Hay hipoproteinemia. ca tratamiento ambulatorio con medidas antitérmicas
Complemento sérico. Están disminuidos el Clq, utilizando paracetamol (la dosis total no debe exce-
C4 y C5 al C8, con aumento del ritmo catabólico der de 90 mg/kg/día para evitar su hepatotoxicidad),
de C3. o acetaminofén a razón de 500 mg cada 4 o 6 h se-
Electrocardiograma. Hay taquicardia o bradicar- gún necesidad (no usar aspirina). Deben prescribir-
dia, trastornos de repolarización y de la conducción se líquidos por vía oral, incluyendo la ingestión de
auriculoventricular, con bloqueos de 1er. y 2do. gra- SRO; hacer énfasis en su cumplimiento cuando cai-
dos. ga la fiebre y alertar al paciente y a la familia que si
Aspectos imagenológicos. En la placa de tórax se aparecen los signos de alarma, debe acudir ensegui-
encuentra reforzamiento de la trama broncovascu- da al cuerpo de guardia.
lar, signos de edema pulmonar y alveolar, y derra- Si al llegar al centro hospitalario presenta mani-
me pleural bilateral o derecho. En el US abdominal festaciones hemorrágicas con síntomas inespecífi-
se observan ascitis, hepatomegalia y edema peri- cos, se le ingresa de inmediato y se le ordena un
vesicular. hematócrito para detectar hemoconcentración; si hay
signos de deshidratación o shock, se administra so-
Complicaciones lución glucofisiológica a razón de 400 ml/m2 en la
Las principales complicaciones son: hemorragias primera hora y luego se continúa con líquidos a ra-
graves en distintos órganos; intoxicación hídrica zón de 1 500 o 2 000 ml/m2. Otras soluciones que se
yatrogénica (por administración incorrecta de solu- utilizan son dextrosa al 5 % más 75 meq de NaCl,
ciones hipotónicas a pacientes hiponatrémicos); en- lactato de Ringer, acetato de Ringer y soluciones
cefalopatía como complicación de una fiebre salinas; si el shock se prolonga o es recurrente, se
hemorrágica de dengue con CID grave, que puede prosigue con las soluciones ya mencionadas o se
llevar a oclusiones o hemorragias focales; insuficien- utiliza plasma, albúmina o dextrán en dosis de 10
cia hepática y renal agudas, síndrome urémico-he- o 20 mg/kg. No se debe usar glucosa sola.
molítico y miocarditis. Debe darse oxígeno a 4 o 6 L/min y vigilar que la
diuresis se mantenga en 30 ml/m2/h.
Diagnóstico Si la hemorragia es abundante, las plaquetas es-
El diagnóstico se basa en criterios clínicos dados por .
tán por debajo de 100 000/ mm3 (100 109/L), la
el cuadro clínico ya señalado, y criterios serológi- hemoglobina y el hematócrito están normales o ele-
cos y epidemiológicos, que son los mismos descri- vados, hay que recurrir al concentrado de plaquetas.
tos para la FD. Hay que hacer el diagnóstico No se deben usar esteroides.
diferencial con la fiebre amarilla. La acidosis metabólica se trata con bicarbonato
Existen signos de alarma, que al presentarse en de sodio. Si el shock se acompaña de edema pulmo-
un enfermo indican que se debe actuar con rapidez: nar, hay que disminuir el aporte de líquidos al míni-
dolor abdominal intenso o mantenido, vómitos muy mo necesario para mantener la diuresis. En caso de
frecuentes y abundantes, descenso brusco de la disnea y PO2 menor de 60 mmHg, debe emplearse
temperatura hasta la hipotermia con decaimiento ex- ventilación mecánica; si la estasis pulmonar no se
cesivo, y a veces lipotimia e irritabilidad y somno- acompaña de shock, se utiliza furosemida o drogas
lencia, o ambos. inotrópicas: dobutamina o dopamina a razón de 5
a 10 mcg/kg/min.
Tratamiento Otras posibilidades terapéuticas incluyen: surfac-
Al llegar el paciente al hospital se le debe hacer un tante, agentes antioxidantes, pentoxifilina, prosta-
buen interrogatorio enfatizando en el antecedente de glandinas, agentes antinflamatorios no esteroideos,
haber padecido o no la enfermedad en otra ocasión, así como el empleo del óxido nítrico.
si hay otros miembros de la familia con iguales sín- Desaparecidos los signos de estasis pulmonar e
tomas y el tiempo que lleva enfermo. Si acude en hidrotórax, se adecua el aporte de líquidos y de sodio
las primeras 48 h con estado general conservado y según las necesidades. Debe administrarse potasio a

577
razón de 40 meq/m2/día cuando se restaure la diu- • Plaquetas mayor de 50 000/mm3 (50 x 109/L).
resis. • Ausencia de derrame pleural.
Aquellos pacientes con predominio de la afecta-
ción visceral, se tratarán de acuerdo con ésta; si pre- Dengue y embarazo
senta encefalopatía, debe imponerse tratamiento No hay evidencias de que el virus del dengue cause
antiedema cerebral, hiperventilación y tratar las con-
teratogenicidad, abortos o retardo del crecimiento
vulsiones; si presenta insuficiencia hepática, se rea-
intrauterino del feto. Los anticuerpos contra el virus
liza exanguinotransfusión y tratamiento del fallo
hepático agudo. del dengue producidos por la madre infectada, atra-
Drogas antivirales: no se dispone de una droga viesan la placenta y se transfieren al feto, lo cual
antiviral efectiva contra el dengue, pero se men- puede provocar en el niño recién nacido el desarro-
cionan como de posible utilidad la ribavirina más llo de un cuadro igual al del dengue, incluso con
6-mercaptopurina, rimantadina e interferón leuco- manifestaciones hemorrágicas, por agresión de los
citario. anticuerpos a las células inmunocompetentes del
recién nacido.
Criterios de alta La actividad antidengue fue encontrada en el com-
• Ausencia de fiebre durante 24 o 48 h. ponente lípido de la leche humana y en el calostro,
• Mejoría del cuadro clínico. lo que puede ser un protector contra dicho virus en
• Hematócrito estable 3 días después de la recu- el área endémica de infección por éste.
peración del shock.

578
77
INFECCIÓN-ENFERMEDAD POR VIH/SIDA

Concepto recibió en sus inicios varios nombres, tales como:


El síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA) síndrome del gay (homosexual), inmunodeficiencia
es una enfermedad crónica trasmisible de tipo pro- relacionada con el gay, entre otros, hasta que en sep-
gresivo, de causa viral, en la cual se establece una tiembre de 1982 quedó definido el nombre de sín-
relación muy diversa entre huésped y virus, y que drome de inmunodeficiencia adquirida.
al final ocasiona la aparición de enfermedades opor- Esta enfermedad ha generado una gran preocupa-
tunistas o tumores raros. ción desde el punto de vista médico, político y so-
cial, por lo que requiere de la acción conjunta de los
Historia gobiernos y las autoridades de salud, para lograr su
Las primeras descripciones de estos casos se deben control mientras aparezca una cura para ella.
a los reportes de M. S. Gotlied, quien junto a otros El personal de la salud debe mantener una cons-
publicó entre mayo de 1980 y junio de 1981, 5 ca- tante preocupación e incorporar los conocimientos
sos de hombres jóvenes homosexuales, estudiados sobre esta enfermedad, para brindar a los pacientes
en tres hospitales diferentes de Los Ángeles, Cali- una mejor atención médica de forma integral y evi-
fornia, EE.UU., que presentaban neumonía por un tar las lamentables e injustificables reacciones de
germen oportunista, el protozoo Pneumocistis rechazo hacia las personas que portan el virus.
carinii.
En junio del propio año se reportó el estudio de 26 Etiología
casos de hombres homosexuales con sarcoma de Es importante conocer las características de los vi-
Kaposi, solo o asociado a la neumonía antes men- rus que producen la infección-enfermedad por VIH.
cionada o a otros tipos de infecciones oportunistas; Se trata de un retrovirus; éstos son virus de reciente
se establecía así de forma definitiva el comienzo de
descubrimiento (en el pasado siglo XX, década del 80)
una epidemia de la cual desafortunadamente el mun-
y cada vez son más los conocimientos sobre sus efec-
do de comienzos del siglo XXI aún no se ha podido
tos patógenos (cuadro 77.1).
librar.
Los retrovirus son virus ARN que se replican
Era curioso que todas estas infecciones aparecían
mediante un ADN intermediario que depende de la
siempre asociadas a una inmunodeficiencia severa.
Además, resultaba también sospechoso que la ma- ADN polimerasa o retrotranscriptasa proveniente del
yoría de los pacientes eran varones homosexuales o ARN y que se encuentra dentro del virión. Este con-
drogadictos. junto enzimático ( retrotranscriptasa) permite copiar
A finales de 1982, el número de casos con SIDA o transcribir información genética de tipo ARN a
empezó a aumentar de forma alarmante, a medida ADN. Este proceso para sintetizar una partícula a
que se extendía a otros grupos de la población. Los partir de una información genética en forma de ARN,
estudios epidemiológicos indicaban claramente que sólo es atribuible a estos virus, pues lo habitual es
existía un agente infeccioso que la trasmitía por vía que un mensaje genético de tipo ADN se transcriba
sexual y sanguínea. a ARN y éste, a su vez, lo lleve a los ribosomas para
Cuando se tuvieron todos los elementos que se- que se sintetice una determinada proteína (ver Fisio-
ñalaban que se trataba de una nueva enfermedad, patología).

579
CUADRO 77.1 • Capside (cápsula) icosaédrica.
SECUENCIA DEL DESCUBRIMIENTO DE LOS • Externa o envoltura externa, derivada de las cé-
RETROVIRUS Y LAS ENFERMEDADES ASOCIADAS
lulas del huésped, donde se insertan las glico-
Año Retrovirus Enfermedad a que se asocia proteínas en 72 proyecciones externas.

1980 HTVL-I Leucemia de células T del adulto Desde el punto de vista genético, está compuesto
1982 HTVL-II Leucemia de células peludas
por tres tipos de genes estructurales diferentes:
1983 VIH-1 Infección por VIH/SIDA
1986 VIH-2 Infección por VIH/SIDA
1987 HTVL-V Linfoma cutáneo de células T. • Gen gag (gen de antígeno de grupo), que sinte-
1990 Partícula • Enfermedades autoinmunes (síndro- tiza las proteínas del nucleoide.
retroviral me de Sjögren). • Gen pol (de polimerasa), que sintetiza la retro-
humana • Linfocitopenia idopática de células transcriptasa.
intracisternal T, CD4.
• Gen ENV, que sintetiza las glicoproteínas de la
de tipo A
1990 Espumaviridae Enfermedad de Graves. envoltura.

La familia de los retrovirus está dividida en tres La característica más importante de estos virus es
subfamilias, las cuales tienen, desde el punto de vis- la riqueza de genes y proteínas reguladoras, que van
ta de sus acciones biológicas, diferentes caracterís- a condicionar la complejidad de la interacción vi-
ticas. rus-células y, de ahí, la patogenia de la enfermedad.
Los oncoviridae son virus oncogénicos y se ca-
racterizan por infectar las células y provocar su trans- Serotipos del VIH-1
formación maligna y, por tanto, una producción Los serotipos del VIH-1 se clasifican en dos gran-
incontrolada de ellas. Dentro de éstos están perfec- des grupos: el M (main) y el O (outlier). El grupo M
tamente identificados el HTVL-I y el HTVL-II. causa la gran mayoría de las infecciones que se re-
Los espumaviridae inducen una persistente infec- portan en el mundo y se conocen los siguientes se-
ción sin ninguna enfermedad aparente, aunque exis- rotipos: A, B, C, D, E, F, G y H. El serotipo O se
ten reportes que tratan de relacionarlos con algunas reporta en cierta parte de África y tiene el inconve-
afecciones tiroideas. niente de que las pruebas de laboratorio para su de-
Los lentiviridae constituyen otra subfamilia y es tección no son sensibles.
en esencia la que nos interesa, ya que son virus que El serotipo que más circula en Cuba es el B.
producen inmunodeficiencia, pues van a causar la
destrucción de las células que infectan, lenta pero Serotipos del VIH-2
de forma progresiva. Dentro de este subgrupo, los El VIH-2, por ser de menor circulación mundial, tie-
que provocan la enfermedad en los seres humanos ne pocos serotipos: el A, B, C y E. En general, esta
son el VIH 1, descubierto en 1983, y el VIH-2, des- familia de los retrovirus se asocia cada vez más con
cubierto en 1986. distintos procesos patológicos, tales como enferme-
A pesar de ser dos virus diferentes, comparten
dades autoinmunes (síndrome de Sjögren), enferme-
ciertas características biológicas en común, tales
dades neurológicas (paraparesia espástica tropical)
como:
y otras.
• Mismo tropismo celular. Epidemiología
• Igual modo de trasmisión.
• Mecanismos similares de replicación. Como se expuso anteriormente, hasta hoy se han
• Ambos producen estados de inmunodeficiencia. identificado dos virus causantes de esta enfermedad,
el VIH-1 y el VIH-2.
El VIH-1 está formado por una partícula esférica La mayoría de los casos infectados en el mundo y
de 80 a 100 nm (nanómetros), con una estructura en en nuestro país portan el VIH-1, el cual es más agre-
tres capas: sivo que el virus VIH-2. Por eso, el período que me-
• Interna o nucleoide, que contiene el ARN y la dia entre la infección con el virus y el desarrollo del
nucleoproteína con las enzimas. SIDA es más largo en el caso del VIH-2. Sin embar-

580
go, los aspectos clínicos y epidemiológicos compar- ella se mantiene una buena vigilancia epidemioló-
ten gran similitud, por lo que en lo adelante se hará gica. Pero no es posible eliminar por completo la
referencia a ellos de forma conjunta. posibilidad de trasmisión por esta vía, dada la exis-
Una vez identificada la afección, la OMS recono- tencia del período de ventana (corresponde a los pri-
ció 3 patrones epidemiológicos de infección por el meros meses de la infección, en que las pruebas
VIH, los cuales consistían en: serológicas son negativas por la ausencia de
Patrón I: Era típico de países capitalistas de- anticuerpos.
sarrollados; es probable que la difusión de la infec- La drogadicción en nuestro medio no es una vía
ción tuvo lugar en el siglo pasado en la década del 70; de contagio.
existía un predominio de hombres homosexuales y Es importante señalar que el virus del VIH no está
bisexuales y de drogadictos endovenosos. La tras- en el aire, como otros agentes (Mycobacterium tu-
misión a través de la sangre de los hemoderivados berculosis), y es el contacto con las secreciones in-
había sido prácticamente eliminada debido a la pes- fectadas lo que resulta potencialmente contaminante,
quisa del virus en la sangre. Tenía mayor predomi- y sobre esto se toman las medidas de protección para
nio en el sexo masculino en relación con un relativo que el personal sanitario no se contamine.
bajo número de mujeres. Los momentos de mayor trasmisibilidad del VIH,
Patrón II: Estaba caracterizado porque el mayor según la evolución de la enfermedad, son el estadio
número de casos ocurría en personas heterosexuales, inicial (fase aguda retroviral) y la última fase (fase
tenía una proporción similar en ambos sexos y la SIDA), ya que en estos estadios hay mayor viremia
trasmisión perinatal era muy frecuente. y, por tanto, más concentración del agente infectan-
Patrón III: El virus VIH fue introducido proba- te en las vías ya mencionadas.
blemente en los países afectados en el siglo XX a En el cuadro 77.2 se exponen los grupos de estu-
principios o a mediados de la década del 80 y exis- dio de VIH/SIDA en Cuba.
tía un número pequeño de casos que había tenido Trasmisión de la madre al feto o trasmisión verti-
relaciones sexuales con personas de otros países con cal: Ésta incluye tres momentos:
patrones I y II. Cuba estaba incluida en este patrón. a) Último trimestre del embarazo.
También se presentaban casos producidos por la san-
gre y hemoderivados contaminados. CUADRO 77.2
En la actualidad estos patrones ya no se tienen en GRUPOS DE ESTUDIO VIH/SIDA EN CUBA
cuenta, pues de forma general el número de casos
ha aumentado en todas las áreas. El comportamien- Donantes: Todo el que realice una donación de sangre.
Gestante: Toda embarazada en el momento de su captación.
to sexual homobisexual ha venido experimentando
Contactos: Personas que hayan mantenido relaciones sexua-
un incremento muy cercano al heterosexual en to- les con seropositivos.
dos los países, así como el del número de casos por ITS:* Enfermos, contactos, sospechosos y asociados de sí-
uso de drogas endovenosas. filis y gonorrea.
Captados: Por decisión médica ante conducta sexual o so-
También de forma general, la mortalidad por
cial de riesgo.
SIDA ha sufrido una disminución como consecuen- Reclusos: Personas sometidas a régimen penitenciario.
cia del progreso de la terapéutica antirretroviral y el Tuberculosos: A todo caso diagnosticado, se le realiza
uso más racional de la quimiprofilaxis de las infec- serología VIH.
ciones oportunistas que más incidencia tienen en Espontáneos: Personas que solicitan realizarse serología
VIH.
estos pacientes. Nefrópatas: Enfermos con riesgo por su tratamiento.
Las vías de trasmisión descritas en toda la litera- Donantes de órganos y tejidos: A todo donante antes de
tura son: efectuarse el trasplante.
Vía sexual: Representa la principal vía de infec- Hemopatías: Personas que padezcan estas enfermedades.
Ingresos: Pacientes ingresados en los que se sospeche la
ción en nuestro país y en el mundo. Incluye las rela- infección por VIH.
ciones heterosexuales, así como la penetración anal, Emigrantes: Pacientes que viajan a otros países.
vaginal y el sexo oral. Extranjeros: Solicitud por extranjeros que visitan el país.
Uso de sangre y hemoderivados contaminados:
Esta vía se logró controlar en nuestro país y sobre *
Infecciones de trasmisión sexual.

581
b) Durante el trabajo de parto por contaminación por los variados efectos que produce sobre las dis-
en el canal. tintas células, tejidos, órganos y sistemas, en forma
c) La lactancia materna. directa e indirecta, debido a los efectos de la inmu-
nosupresión.
El riesgo de trasmisión al feto varía entre 15 y 25 %, ¿Cómo el virus del VIH produce el SIDA?
pero en la actualidad se puede reducir a un 4 % con El VIH infecta las células con receptor CD4, en
la administración de AZT a partir de las 14 semanas especial a los linfocitos CD4 y los monocitos-ma-
de embarazo, durante el parto y luego durante 6 se- crófagos, lo que trae como consecuencia una deple-
manas al recién nacido, así como la realización de ción lenta y progresiva de dichos linfocitos, a causa
la operación cesárea y la no lactancia materna. de la replicación viral dentro de ellos. El virus se
replica constantemente, lo que en una fase es más
SITUACIONES CLÍNICAS DIAGNÓSTICAS DE SIDA alta que en la otra; se calcula que se producen en-
tre 100 y 1 000 billones de virus por día.
• Candidiasis traqueal, bronquial o pulmonar.
• Candidiasis esofágica. CÉLULAS Y TEJIDOS SUSCEPTIBLES DE SER
• Carcinoma de cervix invasivo. INFECTADOS POR EL VIRUS VIH
• Coccidiodomicosis diseminada (en una localización di-
ferente, además de los pulmones y los ganglios linfáti- Células Tejidos y órganos
cos cervicales o hiliares).
• Criptococosis extrapulmonar. • Linfocitos CD4. • Suprarrenal.
• Criptosporidiasis con diarrea de más de 1 mes. • Monocitos-macrófagos. • Médula ósea.
• Infección por Cytomegalovirus en un órgano diferente • Células dendríticas. • Intestino.
de hígado, bazo o ganglios linfáticos, en un paciente de • Células de Langerhans. • Cerebro.
edad superior a 1 mes. • Células del epitelio intestinal. • Cuello uterino.
• Retinitis por Cytomegalovirus. • Microglia. • Ojo.
• Encefalopatía por VIH. • Progenitores de células • Corazón.
• Infección por virus del herpes simple que causa una úl- hematopoyéticas. • Articulaciones.
cera mucocutánea de más de 1 mes de evolución, o bron- • Riñón.
quitis, neumonitis o esofagitis de cualquier duración, que • Pulmón.
afecten a un paciente de más de 1 mes de edad. • Hígado.
• Histoplasmosis diseminada (en una localización diferen- • Placenta.
te, o además de los pulmones y los ganglios linfáticos • Próstata.
cervicales o hiliares). • Piel.
• Isosporidiasis crónica (más de 1 mes). • Testículo.
• Sarcoma de Kaposi. • Timo.
• Linfoma de Burkitt o equivalente.
• Linfoma inmunoblástico o equivalente
• Linfoma cerebral primario. Los linfocitos CD4 constituyen una subpoblación
• Infección por M. avium-intracelulare o M. kansasii di- heterogénea de células con variadas funciones, tales
seminada o extrapulmonar. como:
• Tuberculosis pulmonar.
• Tuberculosis extrapulmonar o diseminada.
• Infección por otras micobacterias, diseminadas o extra- 1. Función inductora:
pulmonar. Por medio de ésta estimulan:
• Neumonía por Pneumocistis carinii. • La transformación de células B en células
• Neumonía recurrente.
• Leucoencefalopatía multifocal progresiva.
plasmáticas para la producción de anticuer-
• Sepsis recurrente por especies de salmonelas diferentes pos.
de Salmonella typhi. • La maduración de las células CD8 con fun-
• Toxoplasmosis cerebral en un paciente de más de 1 mes. ción citotóxica.
• Wasting síndrome (síndrome de desgaste). • La función supresora sobre las células B y
las células CD8, la que también controlan.
Fisiopatología 2. Función ayudadora o colaboradora (helper):
Éste es sin duda uno de los puntos más discutidos de • Estimulan la producción de anticuerpos por
la enfermedad. En esencia, se está de acuerdo en las células plasmáticas
que la infección por VIH tiene una acción sistémica 3. Función de memoria.

582
Como se ve, los linfocitos CDA desempeñan un ficie del linfocito CD4 y al receptor CD26.
papel importante en la realización de una adecuada Penetra y libera su contenido (proteínas y ARN)
función inmune y es por ello que su disminución al quedar desprovisto de sus capas. Hoy en día
traerá como consecuencia un trastorno de las demás se conoce que el virus necesita unos correcep-
respuestas inmunológicas y, a su vez, una suscepti- tores para su entrada a la célula, como la fusina
bilidad del huésped a infecciones oportunistas y a y el CCCKRS; este último predomina en los
neoplasias raras. macrófagos y favorece una multiplicación más
Son muy variados los mecanismos por los cuales lenta.
se lleva a cabo esta destrucción celular o efecto 2. Conversión de virus ARN a ADN y su “circuli-
citopático. Hay factores, tanto virales como del hués- zación”. En el linfocito infectado el complejo
ped, que favorecen un aumento de la replicación enzimático transcriptasa inversa copia el ARN
viral, tales como: del virus (que tiene la información genética) y lo
convierte en ADN de doble cadena.
• Infección por herpes simple. 3. Integración y transcripción. El ADN viral se
• Parasitismo intestinal. inserta dentro del ADN de la célula y desde
• Pobre ingestión de proteínas. allí dirige la producción de más copias de ARN
• Inadecuada ingestión de vitaminas antioxi- viral.
dantes. 4. Morfogénesis. Otra proteína, la enzima
proteasa, parte las cadenas de proteína virales
• Desequilibrio hormonal.
ensambladas y las divide en proteínas activas
• Abuso de drogas.
individuales.
• Inestabilidad emocional.
5. Ensamblaje y salida. El ARN viral recién for-
• Infección con el virus de la hepatitis B.
mado y las proteínas virales se ensamblan en
• Fenómeno de reinfección por relaciones sexua-
partículas virales infecciosas que brotan de la
les desprotegidas entre personas seropositivas
célula y la destruyen; luego comienza de nue-
al VIH.
vo el ciclo.
• Infección por cepas virales.
La replicación viral varía de acuerdo también con
Se describen varios tipos de células infectantes. la fase clínica. Durante la fase de cuadro agudo
• No inductoras de sincitios. retroviral hay un aumento inicial de la viremia; lue-
• Inductoras de sincitios. go, en la medida en que se desarrolla la lenta e insu-
• Alta/rápida (rapid/high). ficiente respuesta inmunológica (producción de
• Lenta/baja (slow/low). anticuerpos), hay una disminución de la viremia con
un desarrollo máximo de la producción de anticuer-
El fenómeno de formación de sincitio es otro pos, fase que corresponde con la de la infección asin-
mecanismo que contribuye a disminuir la población tomática o de portador asintomático
de células CD4 junto al efecto citopático viral, ya Según progresa la enfermedad, comienzan a dis-
que se produce la fusión de células CD4 infectadas minuir los títulos de anticuerpos y a aumentar de
por el VIH y las no infectadas, lo que trae como forma progresiva la replicación viral; esto se corres-
consecuencia la formación de un sincitio o célula ponde con las fases clínicas de complejo relaciona-
gigante multinucleada, que funcionalmente está con- do con el SIDA y caso SIDA. En este último estadio
denada a su destrucción. la replicación viral es mayor que en los inicios de la
La infección por cepas de alta y rápida replica- enfermedad y hay prácticamente un agotamiento o
ción tiene mayor progresión y más acelerado de- ausencia de anticuerpos.
sarrollo de la enfermedad.
Otro elemento importante son las fases de la re- Anatomía patológica
plicación viral: Las alteraciones anatomopatológicas se agrupan en:

1. Absorción. Fusión e “internalización” del • Las que corresponden a las infecciones oportu-
virión. El VIH se une a un receptor en la super- nistas.

583
• Las que se deben a los tumores raros asociados regiones medulares del ganglio aparece una abun-
a la infección por VIH. dante proliferación vascular acompañada de fibrosis.
• Las producidas por el virus en el sistema inmu- Rash eritematoso maculopapular asociado a la
ne y otros órganos. seroconversión por VIH. Los estudios histopatoló-
gicos muestran un infiltrado de células mononuclea-
Se hará referencia de forma general a las princi- res, sobre todo de linfocitos CD4, y una vasculitis
pales alteraciones que se observan en la práctica linfocítica focal.
diaria. Sistema nervioso. Hay distrofia difusa de los he-
Entre las que producen las infecciones oportunis- misferios cerebrales, sin focos de necrosis; las alte-
tas, están: raciones predominan en la sustancia blanca de los
Neumonía por Pneumocistis carinii. Se caracte- lóbulos frontales y en la sustancia gris del resto del
riza por la aparición de una respuesta inflamatoria encéfalo. Progresivamente es afectado el cerebelo y
pulmonar con trasudado intralveolar y un infiltrado el tallo cerebral.
intersticial a base de linfocitos, macrófagos y eosi- La característica microscópica fundamental con-
nófilos. En los alvéolos suele encontrarse un mate- siste en la presencia de células gigantes multinuclea-
rial proteico con quistes y trofozoítos. La afectación res, resultado de la fusión de los macrófagos en el
del pulmón es casi siempre difusa, aunque con me- sistema nervioso por la influencia del VIH.
nor frecuencia está localizada en un lóbulo. Pueden existir focos de desmielinización con pro-
Macroscópicamente los pulmones adquieren una liferación astrocítica y microglial.
consistencia gomosa. Sarcoma de Kaposi. Es un tumor de origen vascu-
Neurotoxoplasmosis. Es producida por el proto- lar caracterizado por la reproducción de células en
zoo Toxoplasma gondii. Afecta a varios órganos, forma de huso y formación de canales vasculares
como músculo, miocardio, hígado, riñones, páncreas, hendidos de células endoteliales, fibroblastos, célu-
bazo y encéfalo produciendo quistes que son via- las inflamatorias y vasos de neoformación (neoan-
bles durante toda la vida del hospedero. Estos quis- giogénesis).
tes son únicos o múltiples y contienen un material A continuación se relacionan los hallazgos anato-
necrótico, con o sin reacción inflamatoria. mopatológicos encontrados en la experiencia acu-
La reacción inflamatoria consiste en un infiltrado mulada en las necropsias de estos casos en nuestro
de linfocitos, plasmacellen y monocitos, asociado a país: atrofia gonadal, citomegalovirosis, bronconeu-
edema. Junto a las áreas de necrosis hística suelen monías bacterianas, toxoplasmosis cerebral, septi-
apreciarse infiltrados perivasculares de mononuclea- cemia, atrofia suprarrenal, micobacteriosis, linfoma
res y pueden identificarse los trofozoítos. no Hodgkin, criptococosis, neumonía por Pneumo-
cistis carinii, histoplasmosis diseminada, strongyloi-
Sistema inmune y otros órganos diasis y tuberculosis.
Ganglios linfáticos. Constituyen uno de los princi-
pales órganos diana por su gran población de linfo- Manifestaciones clínicas
citos con receptor CD4, y ocasionan el cuadro de El término SIDA es con frecuencia mal empleado,
linfadenopatía generalizada persistente. ya que la infección por el VIH se caracteriza por
En los estadios iniciales de la enfermedad estos una amplia variedad de fases clínicas con sus res-
ganglios están aumentados de volumen de tamaño pectivas manifestaciones y una de ellas es la fase de
variable por la presencia de una hiperplasia folicu- SIDA, que como se verá más adelante, representa el
lar. La población linfocitaria suele ser mixta, sobre estadio final de esta infección.
la base de linfocitos hendidos y no hendidos. Tam- Las fases clínicas de la infección-enfermedad por
bién hay macrófagos e inmunoblastos. Próximo a la VIH/SIDA son:
cápsula ganglionar se encuentra un número elevado
de neutrófilos. I. Infección aguda retroviral o retrovirosis aguda.
Según progresa la enfermedad, se presenta un II. Período de portador asintomático.
cuadro de involución folicular, con repleción linfo- III. Fase de complejo relacionado con el SIDA.
citaria y posterior hialinización del folículo. En las IV. Fase de caso SIDA.

584
I. Fase de infección aguda retroviral es negativa, aunque los antígenos virales sean posi-
Se corresponde con la llegada del virus al sujeto y se tivos.
caracteriza desde el punto de vista clínico por 2 si-
tuaciones: II. Fase o período de portador asintomático
Después de la primera, el paciente pasa a la fase
• Puede ser asintomática, como ocurre en la ma- más larga de la enfermedad, la de portador asinto-
yoría de los pacientes. mático, que en nuestro país tiene una duración pro-
• O es sintomática, en cuyo caso el cuadro clíni- medio de 11,5 años, aunque los nuevos tratamientos
co presenta síntomas muy variados, como se la prolongan cada vez más.
expone a continuación. De forma general puede estar asintomático por
a) Síntomas generales: fiebre, faringitis, linfa- completo o tener un síndrome adénico con las si-
denopatías (cuadro parecido al de la mono-
guientes características: más de 3 meses de evolu-
nucleosis infecciosa), artralgias, mialgias,
ción, con ganglios firmes pero no leñosos, móviles,
anorexia y pérdida de peso.
no dolorosos, sin cambios en la piel que los recubre
b) Síntomas dermatológicos: rash eritematoso
y que ocupan dos o más regiones contiguas.
maculopapular, urticaria difusa y alopecia.
c) Síntomas gastrointestinales: náuseas, vómi- Por lo común se excluyen las adenopatías de lo-
tos, diarrea y ulceraciones mucocutáneas. calización inguinal por la diversidad de causas que
d) Síntomas neurológicos: cefalea, dolor re- las producen, pero cuando son de tamaño importan-
trorbitario, meningoencefalitis, neuropatía te deben de evaluarse junto con las de otras regiones
periférica, radiculitis y síndrome de Guillain- y tenerlas en cuenta, sobre todo en individuos que
Barré. tengan los factores de riesgo para ser infectados con
el VIH. Se llama linfadenopatía generalizada per-
En su mayoría, como son síntomas tan inespecí- sistente y de manera general se considera como un
ficos, es frecuente que médicos y pacientes no les esfuerzo o lucha del sistema inmunológico para ven-
den importancia y a su vez sea difícil determinar cer la infección. Puede o no haber esplenomegalia.
con exactitud la frecuencia de este cuadro agudo. Estos pacientes, aunque asintomáticos, represen-
No obstante, en diferentes estudios realizados se tan un gran problema epidemiológico, ya que a tra-
describen como los más comunes: la fiebre asocia- vés de relaciones sexuales desprotegidas trasmiten
da a fatiga, el rash eritematoso maculopapular y el la enfermedad e infectan a nuevas personas.
síndrome adénico parecido al de la mononucleosis A pesar de estar asintomáticos, continúa la repli-
infecciosa. cación del virus, aunque muy baja, por lo cual no
De forma general, estos síntomas tienen un pe- hay tal estado de latencia o de no replicación; esto
ríodo de tiempo de aproximadamente 6 a 8 semanas se asocia con altos títulos de anticuerpos, por lo que
y no requieren tratamiento específico, sólo sintomá- el diagnóstico en esta fase es serológico.
tico. Mientras más sintomática y duradera sea esta
El principal reservorio del VIH durante esta fase
fase, peor pronóstico tendrá la evolución clínica fu-
es el sistema linfoide, sobre todo los ganglios linfá-
tura del paciente.
ticos y el bazo.
En esta fase hay una gran viremia inicial, y las
células del sistema inmunológico son el principal
órgano diana, por lo que hay destrucción y merma III. Fase de complejo relacionado con el SIDA
transitoria de dichas células. De forma lenta se pro- En la medida en que pasan los años y progresa la
duce una respuesta inmune contra el virus, por lo enfermedad, le sigue la fase llamada complejo rela-
que disminuye el número de partículas virales en la cionado con el SIDA, la cual va a representar una
sangre, pero continúa su replicación en los órganos fase intermedia entre el portador asintomático y la
linfáticos (ganglios linfáticos con preferencia y de caso SIDA o final.
bazo); o sea, que la respuesta inmune inicial no es Aparecen los primeros síntomas o se presentan
suficiente para eliminar el virus. Durante esta fase enfermedades relacionadas con una inmunodefi-
se tiene el inconveniente de que la serología del VIH ciencia subyacente, por lo que estos pacientes ya no

585
estarán tan bien como en la fase anterior, pero los patología, las que con el tiempo se han extendido en
problemas no serán tan serios como en la siguiente. la medida en que los centros para el control de en-
Esta fase se conoce también como SIDA menor o fermedades van reportando una alta incidencia de
preSIDA y clínicamente se caracteriza por distintos una determinada enfermedad asociada a la infección
síntomas: por el VIH. Por lo general, es frecuente que un pa-
ciente en esta fase tenga varias afecciones indicado-
a) Generales: malestar general, astenia persisten- ras de SIDA.
te, síndrome febril prolongado y pérdida de Actualmente, aparte de las enfermedades indica-
peso. doras de SIDA, también se ha incluido para el re-
b) Hematológicos: anemia y trombocitopenia (con porte de caso SIDA a pacientes con conteo de células
síndrome purpúrico o sin él). CD4 < de 200 por mm3, con independencia del esta-
c) Linfadenopáticos: con las características des- do clínico en que se encuentren.
critas anteriormente. Otros autores clasifican la infección por VIH
d) Respiratorios: tos seca persistente. desde el punto de vista clínico en las tres fases si-
e) Digestivos: diarrea. guientes:
f) Dermatológicos: candidiasis oral (heraldo), der- • Fase precoz o aguda.
matitis seborreica, herpes simple recidivante • Fase intermedia o crónica.
(anal o genital), herpes zoster y verrugas geni- • Fase final y de crisis.
tales.
g) Neurológicos: polineuropatía, síndrome ansioso En cada una de ellas se describen los mismos ele-
depresivo y meningitis aséptica. mentos clínicos que ya se vieron con anterioridad.
Es evidente que la primera es la que mejor nos ubi-
La duración de esta fase depende de factores ta- ca en la evolución natural de la enfermedad.
les como:
Examen físico
• Tipo de cepa viral infectante. Las alteraciones que se encuentran en el examen fí-
• Respuesta inmunológica del huésped. sico son de variada naturaleza, pero las más frecuen-
• Tratamiento impuesto, tanto antirretroviral como tes en la práctica clínica y que sugieren infección
de cada una de las situaciones clínicas. por VIH son:
• Tratamiento inmunomodulador (factor de trans- Generales: pérdida del tejido adiposo que llega
ferencia e interferón). incluso a la caquexia.
En la boca: candidiasis oral, leucoplasia vellosa
Durante esta fase hay tendencia al aumento pro- oral y sarcoma de Kaposi.
gresivo de la replicación viral y una disminución de En la piel: sarcoma de Kaposi, herpes zoster, le-
las funciones inmunes del organismo. siones de molusco contagioso y dermatitis seborreica.
En el fondo de ojo: retinitis por Cytomegalovirus
IV. Fase SIDA o caso SIDA y exudados blanquecinos algodonosos.
Es el estadio final de la infección por VIH y se ca-
racteriza por la aparición de infecciones oportunis- Clasificación
tas y tumores raros. Desde el punto de vista Según la clasificación de los centros de control de
inmunológico representa una inmunodepresión se- enfermedades de 1987, se reconocen los cuatro gru-
vera, con una depleción notable del número de lin- pos clínicos siguientes:
focito CD4,, cuyo importante papel en la respuesta
inmune es bien conocido. Hay una alta replicación Grupo I: Pacientes con infección aguda.
viral, favorecida por la debilidad del sistema inmu- Grupo II: Pacientes con infección asintomática.
nológico. Grupo III: Pacientes con el síndrome de la linfa-
Desde el punto de vista clínico se considera que denopatía generalizada persistente.
un paciente es un posible caso SIDA, cuando tenga Grupo IV: Pacientes con enfermedades relacio-
alguna de las afecciones relacionadas en la Fisio- nadas con el VIH.

586
Dentro de estos grupos hay varios subgrupos, que Nueva clasificación de la infección-enfermedad por
se clasifican de la A a la E según las afecciones y las VIH. Nueva definición de caso SIDA.OMS. 1993
alteraciones de laboratorio que concomiten con la Categoría A. Personas asintomáticas, con adenopa-
infección por VIH. El grupo I no tiene subgrupo; tías persistentes generalizadas, con o sin infección
los grupos II y III poseen cada uno 2 subgrupos, A y aguda.
B; y el grupo IV tiene 5 subgrupos, A, B, C, D y E. Categoría B. Pacientes con síntomas, pero que
Esta clasificación, a pesar de usarse en la práctica no forman parte de la categoría C y que correspon-
den a diferentes condiciones patológicas, entre ellas:
clínica, es de tipo epidemiológico y por medio de
• Candidiasis orofaríngea y vaginal.
ella se hacen los reportes de casos a la OMS. Es de
carácter decreciente y una vez que el paciente cam-
• Leucoplasia vellosa oral.
bie de grupo clínico, no regresa al anterior, aunque • Herpes zoster.
mejore. • PTI.
Hoy en día hay otra clasificación realizada en • Angiomatosis bacilar, etc.
1993, la cual tiene en cuenta el conteo de células
Categoría C. Ésta se corresponde con la defini-
CD4 y aspectos clínicos del enfermo, por lo que
ción de caso SIDA en todos aquellos pacientes que
categoriza a éste según el conteo de células CD4
al menos presenten una de las afecciones que se re-
en 1, 2 y 3 (cuadro 77.3), y desde el punto de vista
lacionan en una larga lista y entre las cuales se en-
clínico, en A, B y C (cuadro 77.4). cuentran:
Esta clasificación, a pesar de ser más actualizada,
no se ha podido generalizar, pues no todos los paí- • Candidiasis esofágica y broncopulmonar.
ses disponen de la técnica del conteo de CD4 para • Otras micosis profundas extrapulmonares.
realizarla de rutina, por lo que la OMS mantiene el • Citomegalovirosis generalizada.
reporte de casos por la anterior de 1987. • Sarcoma de Kaposi
• Linfomas
CUADRO 77.3 • Neumonía por Pneumocistis carinii.
CATEGORÍAS DE LABORATORIO
DE LA INFECCIÓN-ENFERMEDAD POR VIH (1993) • Neumonía bacteriana recurrente.
• Tuberculosis pulmonar y extrapulmonar.
Categoría Cifras de linfocitos CD4 • Septicemia por Salmonella no typhi recurrente.
mm3 %
• Otras.
1 > 500 > 29
2 200 - 499 14 - 28 Diagnóstico
3 < 199 <14
El desarrollo de los métodos de laboratorio necesa-
rios para el diagnóstico definitivo de la infección
CUADRO 77.4 por VIH, resultó un gran paso de avance, ya que las
CONTEO DE CÉLULAS CD4,, CATEGORÍAS manifestaciones clínicas, aunque sugestivas, no son
CLÍNICAS Y NUEVOS CRITERIOS DE DEFINICIÓN específicas en ningún estadio de la enfermedad.
DE CASO SIDA (1993)
Es necesario recordar que después de la infección
Categorías según el Categoría clínicas con el VIH se producen una aguda viremia y
conteo de células CD4 A B C antigenemia, pero con una respuesta demorada de
(SIDA) anticuerpos (Fig. 77.1).
Las pruebas de laboratorio que se utilizan para
1. > 500/mm3 A1 B1 C1
(> 29 %) diagnosticar la infección por retrovirus humanos, se
2. 200 - 499/mm3 A2 B2 C2 clasifican en directas e indirectas.
(14- 28 %)
3. < 199/mm3 A3 B3 C3 Pruebas directas
(< 14 %) Estas pruebas facilitan el diagnóstico precoz de la
Caso SIDA. infección, pues permiten detectar la presencia del

587
2. Prueba confirmatoria. Serología western blot.
• Es una prueba que busca anticuerpos, pero
tiene la ventaja de que permite diferenciar
Replicación la respuesta de los anticuerpos contra cada
Anticuerpos parte viral, parecida a una electroforesis de
las proteínas.
• Es específica y sensible.
• Para que sea positiva tienen que aparecer 2
bandas de la envoltura (41, 120, 160) y una
banda del core (17, 24). Pueden encontrarse
otras bandas, pero no son fundamentales para
Cuadro Portador asintomático de SIDA el diagnóstico.
agudo retroviral
• El otro resultado es el patrón de indetermi-
Fig. 77.1. Curvas de viremia y antigenemia y de anticuerpos.
nado, en el que aparecen algunas bandas o
anticuerpos contra el virus, pero no los ne-
virus o de sus constituyentes (proteínas y ácido
cesarios para realizar el diagnóstico. Su im-
nucleico) aun antes de desarrollarse la respuesta de
portancia radica en que estos pacientes
anticuerpos frente a ellos, pero tienen el inconve-
niente de ser muy costosas. Dentro de ellas están: pueden estar en fase de seroconversión y, por
Antigenemia P24. lo tanto, hay que seguir su evolución.
Cultivo viral. Importante. Es el laboratorio nacional del
Reacción en cadena de la polimerasa. SIDA el que da el alta en el seguimiento a
estos pacientes.
Estas dos últimas se utilizan para el diagnóstico 3. Pruebas suplementarias.
de la infección en los niños junto con el western blot, • Radioinmunoanálisis.
por la transferencia pasiva de anticuerpos de la ma- • Inmunofluorescencia.
dre al recién nacido. A pesar de su especificidad no se utilizan
de rutina como método de diagnóstico, pues
Pruebas indirectas se reservan para casos que no estén bien de-
Demuestran la respuesta inmune por parte del hués- finidos por los métodos anteriores.
ped y están basadas en pruebas serológicas para la
detección de anticuerpos en el suero. La presencia Pruebas inmunológicas
de anticuerpos antiVIH, lejos de reflejar una expo- Demuestran el daño que el virus produce sobre las
sición y erradicación inmune del virus en el pasado, células del sistema inmunológico.
significa el estado de portador actual. Conteo de células CD4. Disminuyen según pro-
Las pruebas serológicas son específicas para cada gresa la enfermedad.
retrovirus (VIH-1, VIH-2), por lo que deben de ha-
Conteo total de linfocitos. El valor normal dismi-
cerse de forma independiente.
nuye a medida que avanza la enfermedad.
Estas pruebas serológicas, a su vez, son de varios
Índice CD4/CD8. Normalmente hay más CD4 que
tipos:
CD8 en una proporción de 2 a 1, pero según progre-
1. Prueba de screening (despistaje). Serología
sa la enfermedad esta relación se invierte.
VIH (ELISA o microELISA).
• Es la prueba más ampliamente usada. Electroforesis de las proteínas. Muestra un au-
• Es muy sensible, pero poco específica. mento de las gammagobulinas.
• Un VIH negativo no descarta del todo el es- La β2- microglobulina, el interferón lábil frente a
tar infectado con el virus. ácido y la neopterina. Son sustancias del sistema
• Un VIH positivo no basta para diagnosticar inmunológico cuyos valores se incrementan según
a un enfermo. progresa la infección por VIH.

588
Exámenes complementarios para • Punción lumbar. Para descubrir una infec-
ción del SNC.
el seguimiento evolutivo
• TAC de cráneo. Para detectar un tumor del
de la infección por VIH SNC, así como atrofia cerebral asociada a la
Resulta capital conocer la evolución de la infección demencia por SIDA.
por VIH, pues aun desde la fase asintomática se pue- • Endoscopia. Para detectar una posible
de predecir hasta donde ha progresado la enferme- gastroduodenitis crónica.
dad y, por tanto, el grado de inmunodepresión. Para
ello se utilizan las pruebas siguientes: Complicaciones
Como ya se expuso, la infección por VIH produce
1. Pruebas que miden el nivel de replicación viral. complicaciones en todos los aparatos y sistemas, pero
• Carga viral. Determina la cantidad de ARN los más afectados son el respiratorio, el digestivo y
viral presente en la sangre y se mide en lo- el SNC.
garitmo. Valores > 10 000 o 20 000 copias
(depende del método utilizado), denotan alta Principales complicaciones respiratorias
replicación viral y grandes probabilidades de 1. Neumonía por Pneumocistis carinii. Tos seca,
progresión al SIDA. disnea, fiebre; puede evolucionar hacia una
2. Pruebas de resistencia genotípica y fenotípica. insuficiencia respiratoria. Cianosis, polipnea,
Representan un paso de avance importante para auscultación normal, crepitantes o roncos di-
conocer la eficacia de la terapéutica antirretro- seminados. Hipoxemia, elevación de la LDH;
viral y la posibilidad de seleccionar el trata- rayos X de tórax: infiltrado retículo-granular
miento que más le conviene al paciente, pues parahiliar o moteado inflamatorio que respeta
reconocen desde temprano las cepas resisten- la periferia.
tes al fármaco. 2. Tuberculosis pulmonar. Los pacientes VIH po-
3. Pruebas que miden el nivel inmunológico del sitivo tienen un 50 % de riesgo de desarrollar
huésped frente al virus. una TB mientras vivan; predominan las formas
• Conteo de leucocitos CD4 y anticuerpo P24. extrapulmonares (ganglio, pleura, pericardio,
Según disminuyan, hay grandes probabili- meninges); esputos negativos a la TB; radio-
dades de progresión de la enfermedad. grafía de tórax: las lesiones aparecen con ma-
• Prueba cutánea de la tuberculina (PPD). Hay yor frecuencia en la parte media e inferior de
anergia cutánea según avanza la inmunode- los pulmones.
presión. 3. También sinusitis a repetición.
• Hemograma. Aparece una anemia a medida
que la enfermedad progresa. Principales complicaciones digestivas
• Eritrosedimentación. Se acelera según em- 1. Cuadro diarreico crónico. Las diarreas por le-
peora la enfermedad o el paciente tenga al- sión del intestino delgado suelen ser de tipo alta
guna infección oportunista asociada. (voluminosas, acuosas); distensión abdominal,
4. Pruebas para determinar la repercusión de la gran repercusión ponderal, escasa fiebre, no
infección en los diferentes órganos y sistemas. leucocitos o hematíes en el examen de las he-
• Radiografía de tórax. Para detectar neumo- ces. Hay malabsorción intestinal.
patías inflamatorias y TB. Las lesiones del colon producen un síndrome
• Radiografía de senos perinasales. Determi- diarreico bajo dado por deposiciones pequeñas
na la presencia o no de sinusitis, sobre todo y frecuentes, y dolor de tipo cólico; las heces
maxilar. tienen moco, pus y sangre. Son comunes agen-
• Pruebas de función hepática. Hay elevación tes en nuestro medio Entamoeba histolytica y
de las transaminasas por los medicamentos. Escherichia coli.
• Heces fecales. Para buscar parásitos. 2. Enteropatía por VIH. Diarrea crónica en la que
• Serología (sífilis, hepatitis B, toxoplasmo- no se descubre una causa infecciosa después de
sis, Cytomegalovirus, micológicas). Para de- una evaluación completa del intestino delgado
terminar infección asintomática. en pacientes con infección avanzada por VIH.

589
3. Disfagia. orales aparecen de forma asintomática o pro-
• Causas infecciosas: esofagitis por cándida, ducen dificulad para tragar; la localización
por Cytomegalovirus y por virus herpes gastrointestinal es asintomática o produce he-
simple. matemesis; la pulmonar es la más temida, ya
• Causas neoplásicas: sarcoma de Kaposi y que causa hemoptisis que puede ser mortal.
linfoma no Hodgkin. 2. También linfoma no Hodgkin y linfoma pri-
• Otras causas: úlceras aftosas esofágicas idio- mario del SNC.
páticas.

Principales complicaciones neurológicas


A. Por infección primaria del VIH:
1. Encefalitis por VIH (demencia por SIDA-atro-
fia cerebral).
• Manifestaciones cognoscitivas: alteraciones
de la atención, reducción de la concentra-
ción, trastornos de la memoria.
• Alteraciones motoras: lentitud de los movi-
mientos, ataxia, paraplejía.
• Alteraciones del comportamiento: apatía,
trastornos de la personalidad, mutismo.
2. También meningitis aséptica típica y mielopatía
vascular.

B. Por infecciones secundarias a la inmunodepre-


sión:
1. Meningoencefalitis por Cryptococcus neofor-
mans. Puede ser asintomática; fiebre, cefalea,
Fig. 77.2 a. Tumor de la línea media por papiloma virus en un
signos meníngeos y fotofobia como algo ca- paciente con SIDA.
racterístico. A veces adopta una forma tumoral
(criptococoma).
Exámenes complementarios. Tinción con tinta
china del LCR, cultivo del LCR, antígeno crip-
tococócico positivo en el suero y en el LCR.
2. Neurotoxoplasmosis. La forma clínica más co-
mún es la de un absceso único o múltiple, cefa-
lea, fiebre, signos de focalización neurológica
(hemiplejía, hemiparesia, ataxia, parálisis de
nervios craneales), convulsiones. TAC de crá-
neo con contraste: lesiones nodulares o anulares
múltiples o únicas; LCR: moderada hiperpro-
teinorraquia y discreta reacción celular de tipo
mononuclear; serología antitoxoplasma positiva.
3. También lesiones tumorales por papiloma vi-
rus (Fig. 77.2 a y b).

Procesos tumorales asociados al VIH


1. Sarcoma de Kaposi. Las lesiones son de forma
y color variados (máculas, pápulas, nódulos o Fig. 77.2 b. El mismo paciente de la figura anterior. Nótese la
placas de color púrpura; Figs. 77.3 y 77.4); las destrucción del tabique nasal.

590
• Esplenomegalia.
• Exacerbación de la candidiasis oral.
• Fiebre y sudoraciones nocturnas.

Fig. 77.3. Sarcoma de Kaposi. Lesiones generalizadas en un


paciente con SIDA.

Otras complicaciones importantes que se deben te-


ner en cuenta
1. Wasting disease: síndrome del desgaste o con-
sunción. Pérdida de peso > 10 %; predomina la A
pérdida de masa muscular y se asocia a diarrea
y fiebre.
2. Leucoplasia vellosa oral: placas blanquecinas
en los bordes laterales de la lengua.
3. Herpes zoster multidermatoma: lesiones
vesiculares agrupadas o arracimadas dolorosas,
que siguen el trayecto del nervio.
4. Candidiasis oral: lesiones blanquecinas dise-
minadas en la lengua y orofaringe, que al des-
prenderlas dejan una zona cruenta. También
pueden ser en forma de placas rojas.
5. Dermatitis seborreica e hiperpigmentación cu-
tánea.

Pronóstico
Hay determinados factores que se aceptan como sig-
nos de mal pronóstico en la evolución al SIDA. És-
tos son clínicos y de laboratorio.

Factores clínicos
B
• Exacerbación de las manifestaciones generales. Fig. 77.4. El paciente de la figura anterior. A. Lesiones nodu-
• Disminución del tamaño de los ganglios. lares en los brazos, y B. Lesiones nodulares en las piernas.

591
• Diarreas mantenidas. Medicamentos Presentación Dosis Efectos
• Sinusitis crónica. secundarios
• Gastritis crónica.
Zidovudina Cápsulas de 100, 600mg/d. Supresión de la
• Herpes simple en mujeres. AZT 150 y 300 mg. médula ósea
• Herpes zoster multidermatoma o recidivante. Ámpulas de 10 con anemia y
• Trastornos de la concentración o de la memoria. mg/ml, de 20 ml. neutropenia.
Jarabe, 50 mg por Intolerancia
• Exacerbación de la dermatitis seborreica. 5 ml. gastrointestinal.
Cefalea.
Factores de laboratorio Miopatía.
• Leucopenia. Didanosina Tabletas mastica- > 60 kg Pancreatitis.
(DDI) bles de 25, 50, 200 mg 2v/d. Neuropatía pe-
• Aceleración de la eritrosedimentación.
100 y 150 mg. < 60 kg riférica.
• Anergia cutánea a la tuberculina. 125 mg 2v/d. Náuseas.
• Disminución de los linfocitos CD4. Diarreas.
• Antigenemia por VIH. Zalcitabina Tabletas de 1 tab c/ 8 h. Neuropatía pe-
• Pérdida del anticuerpo P24. (DDC) 0, 375 mg y riférica.
0, 750 mg. Estomatitis.
• Antígeno del virus de la hepatitis B con o sin
daño hepático. Stavudine Cápsulas de15, > 60 kg, 40 Neuropatía
(D4T) 20, 30 y 40 mg. mg 2 v/d. periférica.
• Anemia. < 60 kg,
• Hipergammaglobulinemia policlonal 30 mg
• Interferón sérico ácido lábil (el normal es α áci- 2 v/d.
do estable). Lamivudine Tabletas 150 mg Tiene escasos
(3TC) de150 mg. 2 v/d, o efectos secun-
Jarabe: 300 mg/d. darios.
Tratamiento 10 mg/ml. Jarabe: 2
El objetivo del tratamiento antirretrovirral es dismi- mg/kg 2 v/d.
nuir la replicación del virus, y descansa en los si- Abacavir Tabletas de 300 mg/d. Reacción de
guientes pilares: (ABC) 300 mg. hipersensibili-
Solución oral: dad.
20 mg/ml. Fiebre.
1. Drogas antirretrovirales. Exantema
2. Terapia inmunomoduladora. cutáneo.
Náuseas.
3. Tratamiento de las infecciones oportunistas y Vómitos.
tumores. Acidosis
4. Quimioprofilaxis primaria y secundaria. láctica.
Esteatosis
5. Apoyo psicológico y social.
hepática.

Drogas antirretrovirales
2. Nucleósidos no analógos y mecanismo de acción
Existen dos grupos básicos de medicamentos antirre- en general. Interfieren con el ciclo de vida del VIH
trovirales: imposibilitando su replicación, ya que se adhieren a
una enzima en la célula infectada y detienen la re-
A. Inhibidores de la enzima retrotranscriptasa. plicación del VIH en el material genético de la célula.
1. Nucleósidos análogos y mecanismo de acción en
general. Interfieren con el ciclo de vida del VIH Medicamentos Presentación Dosis Efectos
secundarios
imposibilitando su replicación, ya que se incorpo-
ran dentro del ADN del virus y consiguen así dete- Nevirapine Tabletas de 1 tab/d por Erupción
(Viramune) 200 mg. 14 días, cutánea.
ner su proceso de formación. El ADN resultante es Jarabe: luego 1 tab Hepatitis.
incompleto y no puede generar nuevos virus. 50 mg /5 ml. 2 v/d. Elevación de las
transaminasas.

592
Delavirdine Tabletas de 400 mg Erupción. Todos producen el síndrome de la lipodistrofia,
(Rescriptor) 100 mg. 3v/d. Cefalea.
que se caracteriza por desgaste de las extremidades,
Efavirenz Cápsulas de 600 mg/d Mareos. joroba de búfalo, piel más fina, fatiga, disminución
(Sustiva) 50, 100 y en una sola Insomnio.
de la libibo, hipertensión arterial, hiperglicemia, ele-
200 mg. dosis. Trastornos de la
concentración. vación del colesterol, etc.
Erupción.
Principios del tratamiento antirretroviral
B. Inhibidores de las proteasas y mecanismo de ac- 1. El virus del SIDA tiene una replicación conti-
ción en general nuada, la cual conduce al daño del sistema
Interfieren el ciclo del VIH impidiendo su replica- inmunológico.
ción; actúan en la última etapa de la replicación del 2. Los niveles plasmáticos de ARN de VIH indi-
virus imposibilitando a éste ensamblarse y abando- can la magnitud de la replicación del virus y la
nar la célula infectada. proporción asociada de destrucción de las cé-
lulas CD4, mientras que el recuento de estas
Medicamentos Presentación Dosis Efectos últimas indica la medida en la que el virus ha
secundarios
dañado el sistema inmune.
Indinavir Cápsulas de 400 mg Nefrolitiasis. 3. Dado que los índices de progresión de la enfer-
(Crixiván) 200 y 400 mg. c/8 h. Intolerancia medad difieren entre los individuos, las deci-
gastrointestinal. siones del tratamiento se deben individualizar
Nelfinavir Tabletas de 750 mg Diarreas. en función del nivel de riesgo por la medida de
(Viracept) 250 mg. c/8 h. los niveles plasmáticos de ARN (carga viral) y
Polvo: 50 mg.
el recuento de CD4.
Ritonavir Cápsulas de 600 mg Intolerancia 4. La medida más eficaz para lograr una supre-
(Norvir) 100 mg. c/12 h. gastrointestinal.
Jarabe: 7,5 ml Parestesias.
sión duradera de la replicación del VIH es el
600 mg/ 7,5 ml. c/ 12 h Hepatitis. inicio del tratamiento con combinaciones simul-
(tomarlo de Astenia. táneas de drogas eficaces frente al virus, con
forma esca- Disgeusia. las que el enfermo no haya sido previamente
lonada).
tratado y que no presenten resistencia cruzada
Aprenavir Tabletas de 50 1 200 mg Intolerancia con otros agentes antirretrovirales que hayan
(Agenerase) y 150 mg. 2 v/d. gastrointestinal.
Jarabe: Exantema sido administrados al paciente con anterioridad.
15 mg/ml. cutáneo. 5. Cada uno de los antirretrovirales usados en el
Parestesias régimen de terapia de combinación, siempre
orales. debe usarse según las dosificaciones y los ho-
Aumentan las
pruebas de rarios óptimos.
función hepática. 6. Las mujeres deben recibir terapia antirretrovi-
Saquinavir Cápsulas 600 mg Intolerancia ral óptima sin tener en cuenta si están o no
(Invirase) (gel duro) 3 v/d. gastrointestinal. embarazadas.
200 mg. Cefalea. 7. A las personas con infección aguda retroviral,
Incremento de si se les aplica tratamiento, debe ser con tera-
las transamina-
sas. pia antirretroviral de combinación.
8. Los sujetos infectados por el VIH, incluso aque-
Saquinavir Cápsulas 1 200 Intolerancia
(Fortovase) (gel blando) 3 v/d. gastrointestinal. llos con cargas virales por debajo de los lími-
200 mg. Dolor abdomi- tes perceptibles con las técnicas, deben ser
nal. considerados infecciosos y aconsejarles que
Cefalea.
eviten las relaciones sexuales y el consumo de
Incremento de
las transamina- drogas que se han asociado con la trasmisión o
sas. adquisición del VIH y otros agentes infec-
ciosos.

593
¿Cuándo se debe iniciar el tratamiento antirretro- • Pentamidina, 4 mg/kg/día EV, por 21 días.
viral? • Tuberculosis pulmonar:
Éste es otro punto polémico de la enfermedad, ya • Combinación de: Isoniacida, rifampicina, pira-
que las diferentes escuelas se basan en criterios no zinamida y etambutol.
uniformes; así, hay una controversia entre los que • Síndrome diarreico crónico:
abogan por el tratamiento temprano de la enferme- • Antiparasitarios y quimioterápicos según los
dad y los que lo defienden en la fase tardía o sinto- gérmenes encontrados.
mática. Los criterios más utilizados son: • Antidiarreicos (Loperamida, Imodium), reasec,
1. Todos los casos sintomáticos o con infecciones elíxir paregórico.
oportunistas, independientemente del conteo de • Demencia por SIDA. Atrofia cerebral:
CD4 y de la carga viral, deben ser tratados. • Zidovudina (AZT).
2. Todos los asintomáticos con conteo de CD4 < • Meningoencefalitis por Criptococcus neoformans:
500 células/mm3 y alta carga viral, deben reci- • Fase aguda:
bir tratamiento. • Anfotericín B, 0,7 a 1 mg/kg/d.
3. Todos los asintomáticos con conteo de CD4 < • Fluconazol, 400 mg diarios, vía oral.
500 células/mm3 y baja carga viral, deben ser • Flusitosina, 100 mg/kg/día, vía oral.
seguidos evolutivamente, sin tratamiento. • Itraconazol, 200 mg c/12h, vía oral.
4. Todo paciente que desee recibir tratamiento, • Fase de mantenimiento:
• Fluconazol, 200-400 mg diarios.
con independencia de su estado clínico, inmu-
• Anfotericín B, vía oral.
nológico y de su carga viral, debe ser tratado.
• Neurotoxoplasmosis:
• Sulfadiazina, 4 a 6 g diarios (en 4 tomas) +
Combinaciones de medicamentos recomendadas
pirimetamina, 50 mg diarios + ácido folínico,
• Un inhibidor de proteasas y 2 inhibidores de la
10 mg diarios (6 semanas), o clindamicina,
retrotranscriptasa (nucleósidos análogos).
600 mg c/6 h vía oral + pirimetamina, 50 mg
• Un inhibidor de la retrotranscriptasa (no análo-
diarios (6 semanas).
go) y 2 inhibidores de la retrotranscriptasa
• Sarcoma de Kaposi:
(nucleósidos análogos).
• Cirugía y radioterapia en las lesiones únicas.
Terapia inmunomoduladora • Interferón α intralesional o sistémico.
• Talidomina (disminuye la angiogénesis).
Tiene como objetivo fortalecer y restablecer el sis-
• Quimioterapia sistémica, preferentemente con
tema inmunológico, y se utilizan los siguientes me-
vincristina, bleomicina o doxorrubicina.
dicamentos.
• AZT ( Zidovudina)
• Factor de transferencia liofilizado: (bulbo = 1U) • Wasting disease. Síndrome del desgaste:
1 bulbo subcutáneo o por vía oral, 2 o 3 veces • Suplementos nutricionales.
por semana. • Megestrol acetato (suspensión de 40 mg/ml)
• Interferón (INREC) recombinante α2 β2 : (bul- 800 mg.
bo = 3 millones U) 1 bulbo IM 3 veces por • Dronabinol (Marinol) 2,5 mg, vía oral antes de
semana. las comidas.
• Más recientemente, interleuquina II (IL- 2) EV • Hormona del crecimiento, 0,1 mg/kg diario,
o subcutánea. subcutáneo.
• Testosterona, 200 mg IM cada 2 semanas.
Tratamiento de las principales
• Nandrolona.
enfermedades oportunistas y tumores
• Herpes zoster multidermatoma:
• Interferón intralesional.
• Neumonía por Pneumocistis carinii: • Acyclovir tópico c/4 h.
• Cotrimoxazole (Sulfaprim), 15- 20 mg /75-100 • Acyclovir oral, 200-400 mg c/8 h o EV, 5 a
mg por día, EV; o por vía oral, por 21 días. 10 mg/kg por dosis, c/8 h, disuelto en 300 ml
• Prednisona, 40 mg c/12 h por vía oral o EV. de suero fisiológico a pasar en 1 h.

594
• Analgésicos. Quimioprofilaxis antiPneumocistis carinii
• Candidiasis oral: Primaria:
• Nistatina, buchadas 4 v/día, o chupar óvulos o • Cotrimoxazole, 160/800mg/día, 3 veces a la se-
trociscos 3 v/día. mana, o pentamidina (aerosol) 300 mg men-
• Ketoconazol (200 mg) 1 o 2 tab/día, o sual, o dapsone (100 mg) + pirimetamina (50
• Fluconazol, 200 mg diarios/vía oral, o mg), 2 veces por semana.
• Itraconazol, 200 mg diarios/vía oral.
Secundaria:
Quimioprofilaxis primaria y secundaria • Cotrimoxazole (igual que en la profilaxis pri-
La quimioprofilaxis ha sido otro elemento que ha maria) o pentamidina (aerosol), 300 mg cada
influido en la prolongación de la cantidad y calidad 15 días.
de vida de estos pacientes. Se le llama quimioprofi-
laxis primaria cuando el enfermo no ha desarrollado Quimioprofilaxis antitoxoplasma
aún la infección oportunista específica y, por tanto, Primaria:
se previene la afección. Quimioprofilaxis secunda- • Cotrimoxazole, 160/800 mg/ día, 3 veces por
ria es la que se realiza después que el individuo semana, o dapsone (100 mg) + pirimetamina
desarrolló la infección oportunista específica y, por (50 mg) 2 veces por semana.
consiguiente, su objetivo es evitar la recidiva. Secundaria:
La infección por VIH predispone, a su vez, a • Sulfadiacina, 2 g c/6 h 3 veces/semana; pirime-
múltiples infecciones oportunistas, por lo que es im- tamina, 50 mg 1 vez/semana y ácido folínico,
posible que se puedan desarrollar esquemas de qui- 10 mg diarios.
mioprofilaxis (primaria o secundaria) para todas
ellas. Pero hay algunas que se consideran de impor- Apoyo psicológico y social
tancia, pues han influido en la reducción de la mor- No se puede olvidar la repercusión psicológica de la
talidad de estos pacientes, y son las siguientes: enfermedad en el individuo y que estos estados fa-
vorecen la progresión de ésta según estudios de la
Quimioprofilaxis antituberculosis psiconeuroinmunología.
Primaria: En la medida en que sean atendidos los proble-
• Isoniacida, 300 mg/día durante 9 a 12 meses, o mas sociales de estos pacientes, mayor será su coope-
pirazinamida y rifampicina durante 2 meses. ración con los tratamientos.

595
78
PALUDISMO

Concepto derable declinación de su incidencia). Esto hace que


el paludismo siga siendo como fue, por siglos, uno
El paludismo es una enfermedad infecciosa muy fre-
de los problemas más graves del mundo entre las
cuente en las regiones tropicales del planeta, que se
enfermedades infecciosas. Son varios los factores que
caracteriza por accesos de escalofríos, fiebre y gran
contribuyen a que el paludismo sea considerado como
sudoración, de evolución crónica y recurrente en
una enfermedad reemergente.
países endémicos, con esplenomegalia, leucopenia
• Resistencia del mosquito anofeles a los distin-
y anemia; es producida por la picadura de la hem-
tos plaguicidas y los efectos secundarios de és-
bra infectada del mosquito del género Anopheles, la
tos sobre las personas y el medio.
que trasmite la infestación de una persona a otra
• Aparición de cepas de plasmodios resistentes a
al inocular el agente causal, una de las cuatro espe-
los medicamentos antipalúdicos.
cies de plasmodios que son capaces de infectar al
• Falta de financiamiento para mantener progra-
hombre.
mas de control después del fracaso de la erradi-
Historia cación.
• Encarecimiento de elementos imprescindibles
El paludismo o malaria, como también se le deno- para luchar contra el vector.
mina, es conocido desde épocas remotas por grie- • Conflictos básicos que limitan las acciones de
gos y latinos. La palabra paludismo proviene de control.
palus (laguna), y malaria, del italiano (mal aria), • Uso inadecuado y sin control médico de esque-
por creerse erróneamente que la enfermedad era mas terapéuticos que ayudan a la aparición de
producida por respirar aire contaminado de terre- cepas resistentes.
nos cenagosos. • Migraciones de zonas endémicas a otras de ries-
En Cuba se conoce desde la época colonial y fue go entomológico y ecológico, en zonas urba-
Laverán, en 1880, quien descubrió el agente causal nas y periurbanas.
y lo identificó como protozoario específico de la • Deterioro del saneamiento ambiental.
enfermedad. En 1885 se descubrieron las distintas • Crisis económica y social de los países del ter-
fases del plasmodio y en 1897, la función del mos- cer mundo y los sectores más pobres de las áreas
quito anofeles como trasmisor de la enfermedad. marginadas de los países desarrollados.
A pesar de los resultados impresionantes del
Programa de Erradicación del Paludismo iniciado Todo esto hace que en los últimos años se observe
en 1956 y auspiciado por la OMS, en muchas regiones un incremento de un 13 a un 14 % en el número de
del mundo las dificultades técnicas y socioeconó- casos diagnosticados, en comparación con el año
micas han llevado al resurgimiento de la enferme- precedente, y que más de 1 millón de personas mue-
dad, y a pesar de que en los últimos 40 años la ra anualmente por esta causa. Cada año se diagnos-
situación mundial del paludismo ha cambiado de tican cuando menos 200 a 300 millones de casos.
forma considerable, a partir de la década de los 80
se ha convertido en una afección reemergente (se Etiología y patogenia
considera como tal aquella que resurge después de Las cuatro especies de plasmodios que infectan al
haberse logrado un control que proporciona consi- hombre son: Plasmodium vivax, P. falciparum, P.

596
malariae y P. ovale. El hombre es el único reservo- eritrocitos contienen formas sexuales morfológica-
rio importante del paludismo humano y aunque es- mente diferentes (gametocitos), que no producen lisis
pecies superiores de monos pueden albergar a P. celular y son incapaces de desarrollarse más, a me-
malarie, la trasmisión natural no es común. nos que se ingieran por el mosquito apropiado al
La infección comienza cuando un mosquito chupar sangre con una picadura. Ocurrirá entonces
anofeles hembra inocula esporozoítos de plasmodio, la fecundación en el intestino del mosquito y el cigoto
al realizar una picadura en el hombre para alimen- resultante se enquista en la superficie externa del
tarse de su sangre después de haber picado a otro ya intestino y libera esporozoítos que emigran hacia las
infectado. Este parásito sufre un ciclo evolutivo hasta células salivales para inocular de nuevo al hombre
llegar a la forma infectante para el hombre, la que es cuando el mosquito lo pique.
así inoculada mediante la picadura. Las diferentes especies de plasmodios difieren en
Después de un breve paso por la sangre periféri- su capacidad para invadir los eritrocitos; P. vivax y
ca, estos microrganismos invaden los hepatocitos, P. ovale sólo atacan hematíes inmaduros; P. malariae,
donde inician la fase hepática exoeritrocítica a los seniles, y P. falciparum, aunque prefiere a los
preclínica de la enfermedad. Se produce entonces hematíes jóvenes, puede afectar a toda clase de gló-
un proceso de multiplicación asexual conocido como bulos rojos y causar niveles de parasitemia muy ele-
esquizogonia; cada esporozoíto produce de 2 000 vados, factor que contribuye a la mortalidad de esta
a 40 000 merozoítos y en un plazo de unas 6 sema- enfermedad; sin embargo, la presencia de ciertas
nas esos merozoítos o células hijas (en la mayor parte anormalidades eritrocíticas parece limitar la inten-
de los casos) salen hacia el sistema circulatorio. En sidad de la parasitemia y la morbimortalidad aso-
las infecciones por P. falciparum y P. malariae, la ciada. Esto se ha demostrado en pacientes con células
fase hepática termina en ese momento, pero en las falciformes (drepanocitemia).
otras variedades persiste y puede producir nuevos La transformación falciforme puede también da-
episodios de invasión de la circulación meses o años ñar de forma directa al parásito y hacer al eritrocito
después. deformado más susceptible de ser fagocitado. Es
La fase eritrocítica o clínica del paludismo co- posible un efecto protector similar en la talasemia y
mienza con la unión del merozoíto liberado a un re- en el déficit de glucosa 6-fosfato deshidrogenasa o
ceptor específico sobre la superficie eritrocítica. Este de piridoxal-cinasa. En sujetos con ovalocitosis, la
receptor parece diferir para cada especie de plasmo- protección la proporciona la rigidez de la pared del
dio. En el caso de P. vivax se relaciona con antíge- eritrocito, que dificulta la penetración del merozoíto.
nos del grupo sanguíneo Duffy (Fya Fyb). Los Hay que decir que alrededor del 75 % de la he-
individuos Duffy negativos (FyFy) son resistentes moglobina es ingerida y metabolizada por el plas-
al P. vivax (tal vez por esta razón). modio cuando empieza a crecer.
El sitio de unión para P. falciparum se cree que es Con la estimulación del sistema inmunitario, au-
la glicoforina, una sialoglicoproteína de la membra- menta la circulación de hematíes a través de los cor-
na eritrocítica. dones esplénicos. Los eritrocitos parasitados son
Después de la unión, el merozoíto invagina la forzados a entrar en estrecho contacto con macrófa-
superficie celular, penetra lentamente y aparece gos activados, entonces el parásito intracelular es
como un trofozoíto anular que crece y toma forma destruido por citotoxinas secretadas por los macró-
irregular o ameboide. Luego su núcleo se divide en fagos, o el eritrocito es fagocitado, o se producen
varias porciones para constituir un esquizonte ambas cosas. Las células parasitadas que escapan a
multinucleado; por último, el citoplasma se conden- la eliminación esplénica son destruidas con la espo-
sa alrededor de cada núcleo hijo para formar una rulación, proceso que produce fiebre en el huésped.
nueva generación de merozoítos. El mecanismo causal específico no está claro, pero
Alrededor de las 48 h posteriores a la invasión se cree que esté relacionado con la liberación de un
inicial (72 h en el caso del P. malariae), los eritroci- pirógeno intracelular.
tos se rompen y liberan de 6 a 24 merozoítos, cada Estudios recientes sugieren que la liberación de
uno de los cuales es capaz de iniciar un nuevo ciclo citocinas en el paludismo es un factor central en la
eritrocítico. Con la repetición de este ciclo, algunos patogenia de la enfermedad grave, en la que están

597
elevados los valores séricos de FNT-α y en los que afecta al cerebro, los pulmones y los riñones. El exa-
hay correlación con complicaciones, como paludis- men posmorten en infecciones letales por P. falcipa-
mo cerebral y muerte, aunque no se ha establecido rum, muestra eritrocitos parasitados en los capilares
una relación directa causa-efecto. El interferón del cerebro y otros órganos afectados. En los casos
gamma (IFN-γ) tiene actividad antiparasitaria con- graves hay necrosis tubular aguda, y el hígado, el
tra las etapas exoeritrocitarias del parásito en el hí- bazo y otros sitios están llenos de pigmento palúdi-
gado; sin embargo, no se ha demostrado que el co oscuro que se produce por la fagocitosis de los
FNT-α ni el IFN-γ inhiban la replicación de las eta- eritrocitos parasitados.
pas eritrocitarias sexuales del parásito in vitro. Las otras especies que infectan al hombre causan
Por otra parte, el mecanismo de la respuesta in- parasitemias menores y rara vez la muerte.
munitaria que controla las infecciones palúdicas no
mortales y que al final confiere protección contra la Cuadro clínico
reinfección, no está aclarado. Aunque se ha conocido Las manifestaciones clínicas difieren según se trate
que la función de la célula T es esencial, su meca- de personas previamente sanas o de aquellas que ha-
nismo de acción es incierto. Algunos investigadores bitan en zonas endémicas y que sufren infecciones
sugieren que estimulan células efectoras, probable- frecuentes. En el primer caso se produce la forma
mente macrófagos, que liberan factores inespecíficos aguda de la enfermedad, caracterizada por accesos
capaces de dañar o destruir parásitos intraeritrocita- febriles típicos acompañados de escalofríos de for-
rios o que ayudan a la formación de anticuerpos. ma recurrente, por lo general con intervalos de 48 h
La rareza relativa de paludismo en niños peque- en el caso de la infección por P. vivax y P. ovale, y
ños se ha atribuido al paso trasplacentario de anti- de 72 h en el del P. malariae. En contraste, los pa-
cuerpos IgG, aunque la presencia de éstos no indica cientes con P. falciparum tienen fiebre y escalofríos
inmunidad confiable; los estudios in vitro han de- irregulares y rara vez presentan un ciclo de sínto-
mostrado que son capaces de bloquear la invasión mas como los anteriores.
de merozoítos, inhibir el crecimiento intracelular y El escalofrío es intenso, dura a veces hasta 2 h y
de hacer a los merozoítos y a los eritrocitos infecta- se acompaña de cefalea, zumbido de oídos, pulso
dos más susceptibles a la opsonización. débil y rápido, piel fría y palidez. Estas manifesta-
En el paludismo por P. falciparum esto pudiera ciones se producen por cambios circulatorios dados
producir la curación, pero en las infecciones por P. por vasoconstricción cutánea, que en el caso de la
vivax y P. ovale, las formas intracelulares hepáticas infección por P. falciparum provoca una vasodilata-
eluden las defensas inmunitarias humorales y más ción excesiva con hipotensión.
tarde son capaces de liberar hacia la sangre mero- La fiebre es muy alta (a veces hasta 41 ºC), con
zoítos frescos y mantener la infección por un perío- un ascenso rápido y acompañada de congestión de
do de 3 a 5 años. En el caso de P. malariae se puede la cara y las extremidades, con manifestaciones de
producir enfermedad crónica extremadamente pro- intranquilidad, delirio y hasta coma. Ya se señaló
longada (hasta 53 años en un caso), a pesar de la que puede estar en relación con la destrucción de
ausencia de foco exoeritrocítico persistente, lo que células parasitadas mediante la esporulación o con
se supone que se deba a la supervivencia prolonga- la liberación de un pirógeno intracelular.
da de parásitos circulantes en concentraciones tan La sudoración sigue al estado febril; es una dia-
bajas, que no es posible descubrirlos en frotes co- foresis importante, que moja la ropa de cama y pro-
munes de sangre. Se ignora cómo estos parásitos duce sensación de bienestar y hasta somnolencia.
eluden la destrucción inmunológica. En un experi- En las zonas endémicas predomina la forma cró-
mento con simios, la esplenectomía fue seguida por nica, que se caracteriza por anemia, hepatospleno-
la infección, lo que sugiere que las células T pare- megalia, etc., causadas por las recidivas de la
cen tener función protectora en el bazo. enfermedad.
Hay que tener en cuenta que en un país de gran
Anatomía patológica endemia, los accesos palúdicos pierden tipicidad
Las alteraciones anatomopatológicas en el paludis- porque un sujeto suele tener en un momento deter-
mo grave son las de una afección microvascular que minado diferentes cepas inoculadas.

598
Complicaciones A veces se produce un shock grave, sin causa apa-
rente, por bacteriemia espontánea por bacilos gram-
En el paludismo agudo puede aparecer anemia, que
negativos (paludismo álgido).
con frecuencia es más grave de lo que cabría espe-
La muerte es posible a causa de oclusión de la
rar por la sola pérdida de células parasitadas y que
microcirculación visceral por eritrocitos infectados
se cree sea debida a varios factores, tales como:
por P. falciparum, reflejo de la capacidad del pará-
sito para invadir una gran proporción de eritrocitos
• El secuestro, que hace que se subestime el nú- no inmunes del paciente, y de adhesión selectiva de
mero total de eritrocitos infectados.
estas células al endotelio vascular de capilares y
• Alteración de la eritropoyesis. vénulas poscapilares en todos los tejidos, pero más
• Eliminación de la circulación de células en el cerebro. Esto es más frecuente en niños, emba-
parasitadas y no parasitadas. razadas y pacientes con inmunidad comprometida
• Hemoglobinuria con hemólisis intravascular con parasitemia elevada.
masiva.
• Destrucción de los eritrocitos en el sistema re- Diagnóstico y exámenes
ticuloendotelial de hígado y bazo con prueba complementarios
de Coombs positiva.
La enfermedad debe sospecharse ante toda persona
En el paludismo grave por P. falciparum hay CID, con fiebre, que se encuentre o haya estado en una
que adquiere importancia clínica en alrededor del 5 % zona endémica de paludismo. A cualquier paciente
de los casos. En la mujer son comunes el aborto y el con estas características, que tenga fiebre actual o
parto prematuro. Pero la complicación más temible reciente, con independencia de otros síntomas, debe
es el coma (paludismo cerebral) y su mortalidad es realizársele una gota gruesa, ya que el diagnóstico
de certeza se realiza mediante la identificación de
significativa en esta infección.
los plasmodios en frotis sanguíneos teñidos y fija-
La hipoglicemia es también importante en el pa-
dos con Giemsa. En el frotis grueso se detecta la
ludismo por P. falciparum y se debe a varios fac-
presencia del protozoario y el delgado permite con
tores:
posterioridad diferenciar las especies.
Por su sencillez, especificidad y seguridad, ésta
• La liberación de insulina de las células beta del
es la técnica de diagnóstico más precisa, segura y
páncreas.
fácil. Los resultados se informan de la manera si-
• El consumo de glucosa por la cifra masiva de
guiente:
parásitos.
• El agotamiento de los depósitos hepáticos de Un parásito por campo (+).
glucógeno. De 2 a 20 parásitos por campo (++).
De 21 a 200 parásitos por campo (+++).
Insuficiencia renal. En pacientes con parasitemias Más de 200 parásitos por campo (++++).
masivas se produce la fiebre hemoglobinúrica por
la hemólisis, lo que luego origina insuficiencia re- Si se multiplica por 500 el número de parásitos
nal. La hemólisis sola no debe causar fallo renal, por campo, se obtendrá la cantidad de hematíes
pero es habitual cierto grado de deterioro de la fun- parasitados por mm3 de sangre, lo que resulta útil en
ción de este órgano y aunque el enfermo se recupera la afección de P. falciparum para clasificar el caso,
sin problemas, en otros casos suele aparecer una in- y así tenemos:
suficiencia renal aguda que evoluciona como una Severo: 100 000/mm3 o más.
necrosis tubular aguda. Moderado: entre 50 000 y 100 000.
Edema pulmonar. Se produce por un mecanismo Ligero: menos de 50 000.
similar al de la septicemia bacteriana.
Miocarditis palúdica. Se debe a los trastornos Los frotis gruesos son más útiles que los delga-
circulatorios antes descritos y al secuestro de eritro- dos, porque en estos últimos los eritrocitos pueden
citos parasitados en los vasos cardíacos. sufrir lisis.

599
Como los gametocitos son característicos para el Orina. Suelen aparecer cilindros y proteínas, y
diagnóstico de P. falciparum y evolucionan en ma- en las infecciones graves por P. falciparum, mani-
yor tiempo que los parásitos asexuales, por lo co- festaciones propias de insuficiencia renal.
mún no se encuentran en la sangre periférica de El diagnóstico diferencial del paludismo no com-
turistas en zonas palúdicas o personas no inmunes; plicado, en particular cuando está modificado por el
cuando éstos presentan los primeros síntomas, por estado de inmunidad, debe hacerse con las otras afec-
el contrario, es frecuente la presencia de gametocitos ciones febriles que cursan con anemia, esplenome-
en la sangre de residentes seminmunes de áreas en- galia o hepatomegalia.
démicas con pocos o ningún síntoma. En el trópico, las principales enfermedades con
Otro error es creer que el paciente sólo puede te- las que se debe diferenciar son infecciones del siste-
ner una especie de parásito (casi el 5 % de las perso- ma genitourinario, fiebre tifoidea, absceso hepáti-
nas con paludismo tienen más de una especie). co, hepatitis, dengue, influenza, leptospirosis y
Microscopia de fluorescencia (tinción fluorescente fiebres recurrentes.
con naranja de acridina). Es una nueva técnica para
detectar parásitos de paludismo, que se basa en el Tratamiento
hecho de que los eritrocitos parasitados son menos Tratamiento preventivo
densos que los no parasitados. Se pone la muestra El tratamiento profiláctico del paludismo es de vital
en un tubo capilar preparado con naranja de acridina, importancia y consiste en campañas de erradicación
que tiene el ácido nucleico del parásito y un anti- de la enfermedad y en la administración de medica-
coagulante; después de centrifugada, aparecen los mentos.
eritrocitos parasitados en la parte superior de la capa La estrategia de la Organización Mundial de la
eritrocitaria, debajo de la leucocitaria. Salud descansa en cuatro pilares fundamentales:
Sondas ADN. Se han desarrollado sondas ADN
específicas de plasmodios y de las otras especies, • Diagnóstico precoz y tratamiento oportuno de
que detectan de 40 a 100 parásitos/µL (microlitro) los casos.
de sangre.
• Diseño y aplicación de medidas preventivas se-
Serología (detección de antígenos). Las pruebas
lectivas y sostenibles, que incluyen la erradi-
para antígenos específicos constituyen una alterna-
cación del vector.
tiva a la microscopia. Ya está disponible para la de-
tección de infección por P. falciparum. • Detección temprana de epidemias y su control
Serología (prueba de anticuerpos). Tiene valor y prevención.
limitado. En las áreas endémicas la mayoría de las • Fortalecimiento de las investigaciones básicas
personas tienen títulos de anticuerpos por infección sobre factores ecológicos, económicos y socia-
previa. les que facilitan la persistencia del paludismo
Gota gruesa. Es fácil de realizar e inocua para el en lugares específicos.
enfermo, por lo que se repite varias veces de ser
necesario y con preferencia en los accesos febriles. En Cuba se llevó a cabo la campaña de erradica-
En caso de ser negativas y seguir sospechando con ción de la enfermedad, lo que ha conducido a que
fuerza la enfermedad, se recurre a la inyección de 0,5 no se detecte ningún caso autóctono de paludismo
a 1 ml de adrenalina, con lo que se produce esple- desde febrero de 1968.
nocontracción y entonces se procede a tomar la El estado de alerta permanente ha permitido diag-
muestra. nosticar casos de paludismo en personas que han
Hemograma. Muestra anemia normocítica, a ve- viajado a zonas endémicas y contraído la enferme-
ces leucocitosis transitoria durante los paroxismos dad, lo que constituye el paludismo importado. Su
y luego leucopenia con aumento relativo de mono- diagnóstico precoz y tratamiento oportuno, así como
nucleares. Se puede presentar trombocitopenia y una la vigilancia de nuevos casos que hayan podido ori-
ictericia hemolítica en las formas graves. ginarse en torno a estos enfermos, ha evitado la po-
Pruebas funcionales hepáticas. Están alteradas, sible creación de nuevos focos.
pero se normalizan pasados los primeros momentos En las zonas maláricas la profilaxis está encami-
de la infección. nada hacia las siguientes medidas:

600
1. Tratamiento oportuno y eficaz de los casos agu- 9. Quimioprofilaxis: empleo regular de medica-
dos y crónicos. mentos supresivos para la prevención de la en-
2. Aplicación de insecticidas de acción residual fermedad en personas no inmunes que residan
sobre las paredes interiores de las viviendas y temporalmente o viajen a zonas endémicas
sobre aquellas superficies donde se posa el (cuadro 78.1). Esta quimioprofilaxis se reali-
vector.
zará con fosfato de cloroquina, 500 mg (300 mg
3. Rociamiento de los dormitorios cada noche con
base) 1 vez por semana o diclorhidrato de
insecticida.
amodiaquina, 520 mg (400 mg base), también 1
4. En las zonas endémicas se orientará el uso de
telas metálicas apropiadas en las viviendas, de vez por semana. En ambos casos se mantendrá
mosquiteros, así como de ropas protectoras, durante 6 semanas después de la salida de la
mangas largas, etc. zona endémica si la persona se encuentra en
5. Uso de repelentes de insectos en las zonas des- una donde no existen cepas resistentes a la clo-
cubiertas del cuerpo e incluso en las ropas. roquina. Ahora bien, si se halla en un área en-
6. Relleno y drenaje de charcos, empleo de larvi- démica donde se han detectado cepas resistentes
cidas y control biológico con peces larvívoros. a la cloroquina, se asociará a este tratamiento
7. En el caso de donantes de sangre que regresan pirimetamina-sulfadoxina, conocida con el
de una zona endémica, sólo pueden donar 6 nombre de Fansidar (Hoffman-La Roche), que
meses después si no han recibido medicamen- contiene 25 mg de pirimetamina y 500 mg de
tos antipalúdicos ni manifestado síntomas. De sulfadoxina, también 1 vez por semana, man-
haberse sometido a quimioprofilaxis antipalú-
tenido igualmente hasta 6 semanas después de
dica o padecido la enfermedad, o si estuvieron
la salida de la zona, o mefloquina, 250 mg de
como integrantes o visitantes de una zona en-
démica, sólo serán aceptados como donantes 3 idéntica forma.
años después de suspender la quimioprofilaxis Para prevenir las recaídas por P. vivax y P.
o abandonar la zona endémica. ovale, se emplea el fosfato de primaquina, 26,3
8. Medidas internacionales, como desinfección de mg (15 mg base) diario por 14 días, o 79 mg
aviones, barcos y otros vehículos a su llegada (45 mg base) por 8 semanas comenzando du-
si las autoridades sanitarias lo creen necesario. rante las 2 últimas semanas de tratamiento.

CUADRO 78.1
QUIMIOPROFILAXIS DEL PALUDISMO

Objetivos Fármaco Dosis

Suprimir el paludismo en zonas Fosfato de cloroquina o 500 mg(300 mg base) 1 v/semana, hasta
sin cepas resistentes a la cloroquina. 6 semanas después de salir de la zona
endémica.
Diclorhidrato de amodiaquina. 520 mg (400 mg base)1 v/semana, hasta
6 semanas después de salir de la zona
endémica.
Suprimir el paludismo en zonas con cepas Igual que arriba 25 mg pirimetamina, 500 mg sulfadoxina
resistentes a la cloroquina. + 1 v/semana, hasta 6 semanas después de
Pirimetamina-sulfadoxina salir de la zona endémica.
(Fansidar, de Hoffman-La Roche) o
mefloquina. 250 mg 1 v/semana, hasta 6 semanas
después de salir de la zona endémica.
Prevenir las recaídas por P. vivax Fosfato de primaquina. 26,3 mg (15 mg base) diarios por 14 días
y P. ovale. o 79 mg (45 mg base) por 8 semanas. Co-
menzar durante las 2 últimas semanas de
tratamiento.

601
En Cuba se han orientado las siguientes medidas CUADRO 78.2
para aquellas personas que regresan después de ha- TRATAMIENTO DEL PALUDISMO
ber permanecido en una zona palúdica: Objetivos Fármaco Dosis
a) Regreso definitivo:
• Si viene con un certificado de control, debe Curar la infección Sulfato de quinina o 650 mg 3v/día/
habérsele realizado chequeo antes de su sa- por P. falciparum 10-14 días.
resistente a la Diclorhidrato de 600 mg en
lida del país en cuestión y tomado las 3 pri- cloroquina. quinina + 300 ml de solu-
meras dosis de tratamiento; en tal caso se le ción salina EV
administra el resto de las dosis según el es- en 1 h; repetir
quema de tratamiento radical antipalúdico. c/6-8 h. Máximo
1 800 mg/día.
• Si no trae el certificado de control, éste se pirimetamina + 25 mg 2 v/d / 3
realiza en el Centro Provincial de Higiene y días.
Epidemiología o en el Instituto de Medicina sulfadiacina + 500 mg 2 v/d /
Tropical, y se le indica el tratamiento radi- 5 días.
tetraciclina + 250 mg 4 v/d /
cal en su área de salud. 7 días.
b) Regreso temporal: clindamicina. 900 mg 3 v/d /
• Se le administra cloroquina, 2 tabletas sema- 3 días.
nales durante 4 a 6 semanas; si se prolonga
Curar la infección Fosfato de cloro- 1 g (600 mg
el regreso para la zona endémica, se proce- por P. malariae y quina o base), luego
derá con tratamiento radical. P. falciparum sensi- 500 mg a las
sensibles a la cloro- 6 h y después
En ambos casos, una vez terminado el tratamien- quina. 500 mg/d/
2 días.
to radical, se notificará al Departamento de Higiene
y Epidemiología con nombre y dirección del paciente. Clorhidrato de 250 mg (200
cloroquina. mg base) IM
Tratamiento de la enfermedad o EV c/6 h.
Máximo: 900
Ante un caso sospechoso o confirmado de paludis-
mg/d.
mo, se procederá a su ingreso hospitalario y a la rea-
lización de un examen de gota gruesa. Debe Curar la infección Igual que para el 26,3 mg (15 mg
comunicarse el hecho al centro de Higiene y Epide- por P. malariae y P.malariae + base) diarios
miología por tratarse de una enfermedad de declara- P. ovale. fosfato de prima- por 14 días.
ción obligatoria. quina.
Se procederá a la administración del tratamiento
radical, con independencia del resultado de la gota
trocítica aunque no evita la infección hepática. En
gruesa, el cual tiene la finalidad de la curación y la
el caso de P. falciparum, que no posee fase hepáti-
prevención de su propagación (cuadro 78.2). Se basa
ca, es un excelente gametocida, de ahí la eficacia de
en el empleo de 1 500 mg de cloroquina base duran-
esta combinación en las infecciones por P. malariae,
te 3 días de la manera siguiente:
P. ovale y P. falciparum sensibles a la cloroquina;
pero en el caso de P. falciparum resistente a la clo-
• Cloroquina (fosfato de cloroquina), 4 tabletas
de 250 mg, es decir, 1 g (600 mg base), luego 2 roquina, se emplea el esquema siguiente:
tabletas a las 6 h y seguir con 2 tabletas el 2do.
y el 3er. días de tratamiento. • Sulfato de quinina, 650 mg 3 veces al día du-
• Este esquema se continúa con primaquina (fos- rante 10 o 14 días, o
fato de primaquina), 1 tableta de 26,3 mg (15 • Diclorhidrato de quinina, 600 mg en 300 ml de
mg base) diaria durante 14 días. solución salina EV en 1 h y repetir cada 6 u 8 h
hasta una dosis máxima de 1 800 mg al día; más
Ambas drogas ejercen su acción sobre los game- pirimetamina, 25 mg 2 veces al día /3 días;
tocitos, además, la cloroquina actúa en la fase eri- sulfadiacina, 500 mg 2 veces al día /5 días;

602
tetraciclina, 250 mg 4 veces al día /7 días, Es importante vigilar la glicemia, ya que la hipo-
y clindamicina, 900 mg 3 veces al día durante glicemia es causa común de coma y, por otro lado,
3 días. la quinina y la quinidina estimulan la liberación de
insulina de las células beta del páncreas.
En aquellos pacientes con infección por P. falci- En pacientes con infección por P. vivax y P. ovale
parum resistentes a la cloroquina en estado grave, se debe valorar el déficit de glucosa 6-fosfatodeshi-
que no toleran la vía oral, se emplea la quinidina EV drogenasa antes del tratamiento con la primaquina,
en la dosis de 6,25 mg/kg de quinidina base en 1 a 2 h, empleada en estos casos para evitar las recaídas.
seguidos de una venoclisis constante de 0,0125 mg/kg En algunos casos ha sido necesaria la realización
de quinidina base/min, hasta que la parasitemia sea de hemodiálisis.
inferior al 1 %, o el enfermo tolere la vía oral. Aunque no se dispone en los momentos actuales
de una vacuna contra el paludismo, se trabaja en este
Para los pacientes en estado de coma, la quinidi-
sentido. Como quiera que las tres principales etapas
na EV es también el tratamiento más seguro. El ries-
del parásito en el hombre son antigénicamente dife-
go de efectos tóxicos cardiovasculares por estas
rentes, para obtener éxito sería necesario incluir,
drogas es bajo si se cuantifican las concentraciones
cuando menos, tres antígenos del parásito: esporo-
séricas del medicamento y se practica la vigilancia zoíto, merozoíto y gametocito; de todas formas, una
cardíaca (intervalo QT > 0,6 s o ensanchamiento del vacuna no tiene por qué tener el 100 % de eficacia,
QRS más allá de la anchura basal). y obtener una que limite la magnitud de la parasite-
Se tendrán en cuenta las medidas generales y el mia puede tener un efecto notable en la superviven-
tratamiento de las complicaciones. cia, incluso si no tiene acción en la frecuencia de la
Si la anemia es intensa, es común que se requiera infección por la morbilidad y mortalidad graves que
el empleo de transfusiones de sangre. se relacionan con parasitemias elevadas.

603
79
ALGUNAS ENFERMEDADES PRODUCIDAS
POR DISTINTOS TIPOS DE GÉRMENES
QUE NO EXISTEN EN CUBA
Hay una serie de enfermedades infecciosas produ- específicos de Brugia malayi. Por otra parte, el vector
cidas por diferentes microrganismos (la mayoría de Onchocerca es la mosca negra africana. Dentro
protozoarios, helmintos, treponemas, clamidias, etc.), del insecto, las microfilarias crecen hasta hacerse
que aunque no existen en Cuba —al menos de for- infectantes y luego son inoculadas a un individuo
ma autóctona—, se exponen de forma breve en este sano mediante su picadura.
capítulo por considerar de utilidad su conocimiento
para nuestros futuros médicos, que en algún mo- Distribución geográfica
mento pueden acudir a prestar ayuda a países donde Wuchereria bancrofti es endémica en casi todas las
sí existen. Por supuesto, no es posible describirlas regiones cálidas y húmedas del mundo. En la Amé-
todas, por lo que se ha escogido un pequeño núme- rica Latina se han detectado focos en Brasil, Surinam,
ro de ellas. Se excluyen el cólera y la peste bubónica, Guyana Francesa, República Dominicana y Costa
que ya fueron tratadas. Rica. En Cuba, desde hace muchos años no se re-
portan casos autóctonos de filariasis, pero hay que
mantener la vigilancia, pues existen los vectores y
FILARIASIS se han diagnosticado casos importados. Es común
en África, Asia y las islas del Pacífico. También se
Con este término se designa a un grupo de afeccio- encuentra W. Bancrofti en las zonas urbanas, donde
nes causadas por la infección por gusanos filiformes proliferan los mosquitos vectores.
de la superfamilia de los filáridos. Brugia malayi es endémica en las zonas rurales al
Las filarias invaden los tejidos linfáticos subcu- suroeste de la India, en Asia Sudoriental, centro y
táneos y profundos, y dan lugar a diferentes tipos zonas costeras del norte de China, y Corea del Sur.
de reacciones inflamatorias, agudas o crónicas. Brugia timori se presenta en las zonas rurales de
las islas de Timor y otras, en el sudeste de Indonesia.
Etiopatogenia La especie Loa loa se encuentra prácticamente
Las filarias patógenas para el hombre son varias, sólo en el África tropical, en su costa occidental, y
pero se han señalado como principales:Wuchereria se considera que hay más de 1 millón de personas
bancrofti, Brugia malayi, Brugia timori, Loa loa, enfermas por este parásito.
Onchocerca volvulus y Dracunculus medinensis. La oncocercosis afecta a más de 40 millones de
Las hembras de las filarias liberan embriones personas y es, junto al tracoma, la causa fundamen-
filiformes en los tejidos y en la sangre. Estos ele- tal de ceguera permanente en el mundo. Se le en-
mentos, llamados microfilarias, son muy activos y cuentra en el África tropical y al sur del Sahara.
emigran constantemente, pero más en determinadas También en Guatemala, México, Venezuela y Brasil.
horas. En su tránsito por la sangre o tejidos periféri-
cos son tomados por los artrópodos hematófagos Cuadro clínico y diagnóstico
(mosquitos y pulgas), que son los vectores. Para la mejor comprensión global del cuadro clínico
Los mosquitos Culex, Anofheles y Aedes trasmi- de la filariasis, es necesario recordar que algunas de
ten la filariasis bancrofti, mientras que la mosca ellas deben sus manifestaciones sobre todo a la pre-
Mansonia y el mosquito Anofheles son los vectores sencia de los gusanos en los vasos linfáticos (W.

604
bancrofti, B. malayi y B. timori) o a una reacción Los cuadros agudos duran días o semanas y cu-
alérgica de la piel y el tejido celular subcutáneo (ca- ran de manera espontánea para recurrir al cabo de
sos producidos por Loa loa y Onchocerca), aunque semanas o meses. Al final llevan al cuadro crónico
también afectan las serosas. Si bien es cierto que en y característico de la elefantiasis (Fig. 79.1), por cier-
la etapa de cronicidad la clínica de estas parasitosis to no tan frecuente. La obstrucción crónica de los
se diferencia más o menos bien, hay que tener pre- linfáticos es capaz de ocasionar ascitis, derrame pleu-
sente que todas son dominadas en sus estadios ral y articular, y otros edemas. Es fácil comprender
tempranos por fenómenos agudos de hipersensibili- que la ruptura de dichos vasos diseminados puede
dad en mayor o menor grado, por lo cual en todas se originar ascitis quilosa, quilotórax y quiluria, según
observan manifestaciones comunes, como fiebre, el lugar donde ocurra el accidente. Al igual que en
urticaria, crisis asmatiformes, y gran aumento de los cualquier cuadro de linfangitis crónica, en ésta se
eosinófilos en la sangre periférica. intercalan episodios inflamatorios agudos.

Filariasis linfática
El estudio más detenido de la filariasis llamada lin-
fática, revela que las infecciones ligeras pueden
transcurrir asintomáticas, pero por lo común en las
infecciones medianas aparecen síntomas entre los 6
y 12 meses después de producirse éstas. En la
filariasis por W. bancrofti hay dos formas biológi-
camente distintas: en la primera, las microfilarias
circulan en la sangre periférica por la noche (perio-
dicidad nocturna), con una concentración máxima
entre las 10 de la noche y 2 de la madrugada. En la
segunda forma las microfilarias circulan de manera
continua en la sangre periférica, pero alcanzan su
máxima concentración durante el día (subperiodici-
dad nocturna).
Es lógico pensar que el cuadro clínico se relacio-
na en todo sentido con la toma linfática que se pro-
duce, la cual comienza por una inflamación y va
seguida de obstrucción.
Como expresión aguda de inflamación linfática
(linfangitis), se presenta fiebre de grado variable con
escalofríos, cefalea, vómitos, dolores musculares y
Fig. 79.1. Elefantiasis filariásica (foto tomada de Dermatolo-
fotofobia. Cuando se afectan los vasos periféricos, gía y Sifilología, del Dr. Vicente Pardo Castelló, 1953).
aparece el enrojecimiento, y los trayectos linfáticos
son dolorosos a la palpación. Si se afectan los linfá- Las filariasis linfáticas se comportan a veces de
ticos abdominales, puede haber dolor y otros signos forma atípica, pues los parásitos emigran al pulmón
que hagan sospechar un abdomen agudo. Los y otros tejidos y no se hallan en la sangre. Estos
ganglios regionales casi siempre participan del pro- casos, donde aparece más claramente el cuadro de
ceso e, incluso, a veces la adenitis precede a la lin- broncospasmos nocturnos o infiltrados pulmonares,
fangitis. No son raras las fístulas a expensas de la son capaces de llevar a la hipertensión pulmonar irre-
linfangitis o de algún ganglio supurado; en ocasio- versible.
nes, y sobre todo en el caso de W. bancrofti, se afec- El diagnóstico de la filariasis linfática se sospe-
tan los vasos del cordón espermático y de los cha por el antecedente de exposición y el cuadro clí-
testículos, lo que da lugar a orquitis, epididimitis y nico en su etapa inflamatoria aguda o crónica, aunque
funiculitis. en este último caso tiene poco valor terapéutico. De

605
todas formas, el diagnóstico positivo se hace con el dos por la constante migración del gusano adulto. A
hallazgo del parásito. la infección se le llama también “edema de calabar”.
Las microfilarias son muy difíciles de detectar, La hinchazón se localiza en cualquier parte del cuer-
tanto al principio como en la etapa crónica de la en- po y puede ser de diferente tamaño y acompañarse
fermedad. En los estudios intermedios tempranos, de prurito y dolor.
cuando hay adenopatías, se las suele encontrar con El diagnóstico de la oncocercosis se establece con
mayor frecuencia en la sangre periférica durante la la visualización del parásito. Esto se logra mediante
noche (periodicidad nocturna). el raspado de la piel en un lugar irritado o tomando
Las técnicas de concentración son útiles, sobre una pequeña porción de ésta, que se monta en solu-
todo para descubrir las microfilarias en los derra- ción salina y se mira directamente al microscopio;
mes quilosos, en los hidroceles, etc. Un método que se ven así muchas microfilarias muy activas. Las de
facilita el hallazgo de los parásitos consiste en ad- Loa loa se detectan mediante el examen de la san-
ministrar 100 mg de Hetrazán o similar por vía oral, gre extraída durante el horario diurno.
pues con él se logran muestras sanguíneas positivas
al cabo de 30 a 60 min. Las microfilarias se obser- Tratamiento de la filariasis
van en la gota gruesa, pero más sensible resulta el
Tratamiento profiláctico
filtrado o los concentrados mediante centrifugación
Se deben controlar los mosquitos y las pulgas me-
de la sangre. Algunos gusanos adultos y vivos se
diante medidas adecuadas. El uso profiláctico de
visualizan en los linfáticos mediante el utrasonido;
Hetrazán es dudoso en sus resultados.
sus movimientos observados han sido llamados “la
danza de las filarias”.
Tratamiento de la enfermedad
Los ataques agudos de filariasis se resuelven de for-
Oncocercosis y filariasis ma espontánea, pero el tratar los gusanos adultos o
cutáneas las microfilarias es problemático.
Se cuenta hoy con una droga más o menos efecti-
En general, Onchocerca volvulus y Loa loa son cau- va para Wuchereria bancrofti, Brugia malayi y
santes de lesiones que predominan en la piel y teji- Brugia timori: la dietilcarbamacina (DEC), que se
do celular subcutáneo. administra en la dosis de 6 mg/kg/día y se expende
La oncocercosis, llamada también ceguera de los con los nombres de Hetrazán, Noticine y Banocide,
ríos, es una enfermedad crónica, no mortal, causada la cual hace desaparecer casi todos los gusanos
por una filaria que forma nódulos fribrosos en los
adultos.
tejidos subcutáneos, sobre todo en la cabeza y en
Después del tratamiento a veces reaparecen las
los hombros, como ocurre en América, pero en el
microfilarias, pero pocas, por lo tanto es necesario
África afecta sobre todo la pelvis y las extremida-
repetir éste cada cierto tiempo. En algunos casos
des inferiores.
la presentación de reacciones adversas ha limitado
Estos nódulos, muy característicos del cuadro clí-
su uso.
nico, aparecen en número de 10 a 20 y a veces más
y encierran a los gusanos vivos o muertos, los que En caso de reaparición de las microfilarias, pue-
dan lugar a fenómenos de hipersensibilidad, que se de usarse sal de cocina con DEC, de 6 meses a 2
expresan en la piel por prurito y lesiones erisipeloi- años, lo cual resulta efectivo.
des. En los casos crónicos la piel se liquenifica, y el El tratamiento quirúrgico del linfedema crónico
constante rascado causa las ingles colgantes cuando (elefantiasis) para producir cortocircuitos que favo-
esa región es la pruriginosa. rezcan el drenaje linfático de la región afectada, es
Los gusanos adultos producen microfilarias que efectivo en algunos casos.
emigran en su mayoría a través de la piel, invaden La droga de elección en el tratamiento de la on-
los ojos y afectan la visión en distinta medida, que a cocercosis hoy día es el ivermectín en una dosis única
veces llega hasta la ceguera total. de 150 µg/kg de peso, 1 o 2 veces al año. No debe
La filariasis por Loa loa se caracteriza por edemas administrarse a niños menores de 6 años ni a muje-
localizados y transitorios de origen alérgico, causa- res gestantes o que estén lactando.

606
Cuando se afecta el SNC como enfermedad pri-
TOXOPLASMOSIS maria, se observan defectos neurológicos focales,
tales como pérdidas sensoriales o motoras, parálisis
Es la infección causada por Toxoplasma gondii, que de nervios craneales, anormalidades visuales y con-
origina manifestaciones viscerales variadas y con vulsiones. También se producen síntomas generales
particular relevancia alteraciones cerebrales y propios de este sistema, como confusión mental, fie-
coriorretinitis, y ocasiona la enfermedad de forma bre y coma. En ocasiones ocurre una neumonitis in-
congénita y adquirida. tersticial, que si llega a consolidar, provoca una
insuficiencia respiratoria; además, se señala en este
Etiología marco la miocarditis causante de insuficiencia car-
Toxoplasma gondii es un protozoario que parasita a díaca.
pájaros y mamíferos. Es intracelular obligado e in- La llamada toxoplasmosis congénita resulta casi
vade y se multiplica asexualmente dentro del cito- siempre de una infección primaria de la madre
plasma de células nucleadas. Suele vivir por mucho durante el embarazo. Las mujeres infectadas antes de
tiempo en el tejido muscular y cerebro cuando ad- la concepción casi nunca trasmiten la enfermedad
quiere la forma quística. Se reproduce de forma al feto, a no ser que ésta haya sido reactivada duran-
sexual sólo en el tracto intestinal de los gatos. La te el embarazo por algún proceso inmunosupresor.
ingestión de alimentos contaminados con heces de La clínica de la forma congénita varía desde el
gato constituye una forma común de adquirir la aborto espontáneo a la muerte temprana del feto.
parasitosis. La infección también ocurre al comer Cuando se produce el nacimiento, el cuadro del niño
carne cruda o poco cocida que contiene quistes; esto será severo con íctero, rash y hepatosplenomegalia,
seguido de la tétrada característica de coriorretinitis
se observa con mayor frecuencia al comer cordero,
bilateral, calcificaciones cerebrales, hidrocefalia o
cerdo o carne de res.
microcefalia y retardo psicomotor.
La toxoplasmosis puede ser trasmitida por vía
El pronóstico en estos casos es pobre. Otros ni-
transplacentaria si la madre resulta infectada duran-
ños nacidos con infecciones menos severas o cuan-
te el embarazo, o algún proceso inmunosupresor
do la madre fue infectada en el 3er. trimestre del
reactiva una infección latente previa. Otra forma de
embarazo, nacen en apariencia saludables, pero son
adquirir la infección es por medio de una transfu- de alto riesgo y algunos desarrollan la enfermedad
sión de sangre entera o de glóbulos, o mediante un meses o años después del nacimiento.
trasplante de órgano. En cuanto a la toxoplasmosis ocular, resulta de la
infección congénita reactivada luego de la 2da. y 3ra.
Cuadro clínico décadas de la vida. La retinitis necrotizante y la
Es habitual que la infección sea asintomática, pero granulomatosis inflamatoria de la coroides siguen
puede ocasionar linfadenopatía cervical y axilar. Cuan- al proceso inicial. La recurrencia de la coriorretinitis
do se desarrolla la infección aguda, el cuadro clíni- causa dolor ocular, visión borrosa y ceguera ocasional.
co recuerda al de la mononucleosis infecciosa con
fiebre, adenopatías, mialgia, hepatosplenomegalia, Diagnóstico
faringitis y malestar general; aunque a veces persis- El diagnóstico se hace por la demostración del ger-
te por semanas y meses, casi siempre es autolimitado. men en un frotis, por el cultivo en ratones o por
Existe una forma clínica severa y diseminada, métodos serológicos. Los frotis del sedimento del
hecha de neumonitis, miocarditis, meningoencefa- líquido cefalorraquídeo teñidos con colores de
litis, polimiositis, rash difuso maculopapular, fiebre Wright o Giemsa pueden conducir al diagnóstico.
alta con escalofríos y postración. No es común la El parásito se aísla durante la fase aguda de la enfer-
forma fulminante. Cuando la toxoplasmosis se pre- medad por inoculación al ratón o también cultivan-
senta en enfermos inmunosuprimidos, suele adoptar do algún material logrado por biopsia, pero requiere
una forma clínica severa, tal es el caso del SIDA, mucho tiempo, 5 o 6 semanas, hacer la demostra-
donde se añaden trastornos neurológicos. ción.

607
Tratamiento Etiopatogenia
Tratamiento preventivo Existen cuatro grupos o complejos principales de
Una forma de evitar la enfermedad es no comer car- leishmanias: Leishmania donovani, causante del
ne cruda o poco cocida y hacer un lavado correcto kala-azar o forma visceral de la enfermedad; L.
de las manos después de manejar carne cruda. Hay tropica y L. mexicana, agentes causales de la forma
que ser muy cuidadoso al disponer cualquier mate- cutánea, y L. brasilensis, responsable de la expre-
rial contaminado con heces de gato. sión mucocutánea del morbo.
La quimioprofilaxis se recomienda en casos de También se describen otras variedades america-
SIDA; la combinación de trimetoprim-salfametoxa- nas como la peruana, la panamensis y la guyanensis,
zole es la mejor en la dosis de 20 mg/kg/día, por vía aunque para algunos autores constituyen subgrupos
EV, por 4 días, o la misma dosis por vía oral duran- de Leishmania brasilensis.
te 21 días. Leishmania tropica es la causante del clásico “bo-
tón de Oriente”, “botón de Dehli” o “úlcera de
Tratamiento de la enfermedad Bagdad”, o también leishmaniasis del viejo mundo.
La mayoría de las personas inmunocompetentes no L. mexicana produce lo que se conoce como “úlcera
necesitan tratamiento, a menos que presenten algu- de los chicleros” o “mandíbula de los bosques”, por
na alteración visceral de la enfermedad o síntomas la lesión que provoca a ese nivel.
severos. De todas formas, debe tratarse la toxoplas- Leishmania es trasmitida por las llamadas mos-
mosis aguda del recién nacido, las gestantes y de los cas de las arenas (Phlebotomus y Lutzomyia), las
inmunosuprimidos. cuales sobreviven en los vertebrados que les sirven
No se conoce ningún tratamiento para erradicar de hospedero en calidad de amastigotas intracelula-
la forma quística de la infección. El más eficaz es la res. Estas moscas son infectadas al picar humanos o
combinación de pirimetamina con sulfadiacina para animales. Los reservorios animales incluyen a los
tratar la forma proliferativa. Dosis: pirimetamina, 25 caninos, roedores y otros. La infección se trasmite
a 100 mg/día/3 a 4 semanas, más sulfadiacina, 1 también por transfusiones de sangre.
a 1,5 g cada 6 h por vía oral durante 3 a 4 semanas. Diferentes especies de parásitos se suelen identi-
La pirimetamina es un antifólico capaz de produ- ficar por determinación de isoenzimas o mediante
cir inhibición medular, lo que se minimiza adminis- anticuerpos monoclonales.
trando a la vez leucovorín (ácido folínico), 10 mg
diariamente. Los pacientes con toxoplasmosis ocu-
lar deben ser tratados además con corticosteroides. Leishmaniasis visceral
En las embarazadas agudamente infectadas de-
crece la incidencia de infectación fetal y como
o kala-azar
quiera que la pirimetamina no debe usarse en las Esta enfermedad es causada por parásitos del com-
primeras 16 semanas del embarazo, se puede inten- plejo Leishmania donovani (L. donovani, L. infantum
tar el empleo de spiramycin, de 3 a 4 g/día / 3 a 4 y L. chagasi) y ocurre en la India, China, sur de
semanas. Esta droga es más segura para la embara- Rusia, África, en la cuenca del Mediterráneo y en
zada, pero es menos activa que la combinación esta- varios lugares de Centro América. Los niños y jóve-
blecida. Además, no atraviesa la placenta. nes son muy susceptibles en particular.

Cuadro clínico
La lesión primaria aparece en el lugar donde el indi-
LEISHMANIASIS viduo infectado sufrió la picada por el flebótomo, la
cual es inaparente, pero desde la picadura se dise-
Con el nombre de leishmaniasis se designa desde minan los parásitos por vía sanguínea hacia los
hace años, a las infecciones del hombre causadas ganglios linfáticos, bazo, hígado y médula ósea. Los
por protozoarios flagelados pertenecientes al géne- signos se presentan de forma gradual, entre 2 sema-
ro Leishmania y que producen enfermedad visceral, nas y 1 año después. El cuadro sindrómico clásico
cutánea o mucocutánea. consiste en fiebre irregular, hepatosplenomegalia y

608
pancitopenia, así como hipergammaglobulinemia
policlonal con inversión del índice serina-globulina.
ESQUISTOSOMIASIS
Se produce gran toma del estado general y en casos
no tratados la muerte ocurre entre 1 y 2 años en
O BILHARZIASIS
el 80 o 90 % de los enfermos sintomáticos. En oca-
La esquistosomiasis es una infección crónica causa-
siones se observan casos subclínicos con pocos sín-
da por los trematodos del género Schistosoma. Es-
tomas, la mayoría de los cuales remiten de manera
tos helmintos habitan el sistema circulatorio del
espontánea. En esta misma variedad, hay una mino-
hombre y de animales de los países tropicales y sub-
ría que progresa hasta el cuadro visceral completo.
tropicales, donde depositan grandes cantidades de
Los pacientes que sobreviven a la enfermedad ha-
huevos, muchos de los cuales persisten en el orga-
cen resistencia a nuevos ataques, a menos que su-
nismo humano y ocasionan una reacción inflamato-
fran por otra causa una depresión de su sistema
ria de los tejidos. Los órganos y tejidos que con
inmunitario.
mayor frecuencia se afectan son: pulmones, genita-
Diagnóstico les, peritoneo y mesenterio, hígado, bazo, colon, rec-
to y vejiga.
El diagnóstico del kala-azar se realiza mediante frotis
teñidos con Giemsa, donde se demuestran los pará- Etiopatogenia
sitos, o mediante cultivos de aspiraciones de médu-
Hoy se conocen 5 tipos de schistosomas que infec-
la, bazo, hígado o ganglios linfáticos. En la
tan al hombre: S. haematobium, que afecta el siste-
actualidad existen pruebas serológicas específicas.
ma genitourinario y está muy extendido en el
Por medio de un antígeno recombinante se puede
continente africano; también se le suele encontrar
predecir cuales de los casos subclínicos desarrolla-
en el Medio-Este y en la India. S. mansoni, se halla
rán el cuadro visceral grave y completo si no son
en África y es la única especie que afecta a América
tratados. y el Caribe; se le ve en Brasil, Surinam, Venezuela y
Tratamiento en algunas islas del Caribe. S. japonicum sólo apa-
rece en Asia, sobre todo China y las Islas Filipinas.
Tratamiento preventivo S. mekongo produce la enfermedad en Laos y
La lucha por la erradicación de los vectores y sus Cambodia. Y, por último, S. intercalatum, propio de
reservorios constituye la base del tratamiento profi- África Central. En la actualidad se describen otras
láctico de esta enfermedad. especies no aceptadas por todos.
El empleo de DDT en atomizaciones residuales Los vermes adultos viven y copulan en las venas
contra las moscas flebótomas es una buena medida. del mesenterio o en la vejiga. Algunos huevos atra-
Se procurará poner mayas en puertas y ventanas, así viesan la mucosa intestinal o de la vejiga y pasan a
como usar mosquiteros. El empleo de repelentes fa- las heces y a la orina. Ellos maduran en agua fresca,
vorece la lucha contra esos insectos, más no garan- donde son llevados por personas infectadas y libe-
tiza el 100 % de efectividad. ran miracidios, que se multiplican dentro de deter-
minado caracol y producen miles de cercarias.
Tratamiento de la enfermedad visceral Éstas penetran en la piel de aquellos que se expo-
Las drogas de elección son: Isetionato de pentami- nen, y se transforman en schistosomula, después se
dina, 2 a 4 mg/kg, por vía IM, diarios, o en días convierte en un gusano adulto sexualmente activo
alternos hasta aplicar 15 dosis; anfotericín B, 0,25 en las venas intestinales o en los plexos del tracto
a 1 mg/kg, en infusión lenta diaria o en días alternos, genitourinario, en dependencia de la especie. Los
durante 8 semanas; o compuestos de antimonio huevos aparecen en las heces fecales u orina. Se
pentavalentes en la dosis diaria de 20 mg/kg de peso, calcula que la vida de los gusanos adultos se en-
durante 20 o 28 días, por vía IM o EV. cuentra entre los límites de 3 a 37 años. Debe que-
Los casos de leishmaniasis visceral de la India o dar claro que la infección se adquiere por contacto
América del Sur responden bien al tratamiento, no con el agua que contiene larvas (cercarias), las que se
así las formas africana, mediterránea y asiática. han desarrollado en los caracoles de agua dulce.

609
Cuadro clínico Diagnóstico
Poco tiempo después de la entrada de las cercarias a En las zonas donde la enfermedad es endémica, ésta
través de la piel del individuo, que por una razón u se sospecha ante un enfermo con urticaria recidi-
otra se puso en contacto con el agua que las conte- vante asociada a brotes de cistitis y hematuria o una
nía, se produce un prurito local intenso y a veces hepatosplenomegalia de tipo cirrótico con brotes de
una pequeña pápula que se mantiene por una sema- disentería aguda. El diagnóstico etiológico y defini-
na (prurito del nadador); después hay un período de tivo sólo es posible cuando se descubren huevos de
incubación asintomático que dura entre 4 y 8 sema- esquistosomas en las heces fecales, en la orina o por
nas, lapso que necesitan las cercarias para comple- medio de biopsia de la mucosa intestinal o vesical.
tar su evolución. Las pruebas serológicas son muy sensibles y es-
La enfermedad se inicia de forma aguda, con in- pecíficas. La ultrasonografía es capaz de detectar
dependencia del tipo de esquistosoma. Comienza con huevos.
fiebre elevada remitente, escalofríos, cefalea, vómi-
tos, artralgias, eritemas urticarianos y marcada eosi-
Tratamiento
nofilia. A veces, los huevos ganan el sistema nervioso Tratamiento preventivo
y se produce una mielitis transversa o convulsiones. Se realiza mediante un riguroso control de los viaje-
Esta forma febril es la llamada schistosomiasis agu- ros que entran en el país, donde no existe esta enfer-
da o “fiebre de Takoyama”. medad, pero se debe recordar que sí pudieran
Por lo general, pasados de 3 a 7 meses comienza encontrarse los caracoles susceptibles que les servi-
la fase crónica o de las localizaciones, cuyos sínto- rían de intermediarios.
mas varían según los órganos invadidos y se deben Se hace pesquisaje a aquellos viajeros cubanos
a la respuesta del organismo a los huevos retenidos que provienen de países donde esta enfermedad es
en los tejidos. S. mansoni y S. japonicum afectan la endémica y a extranjeros procedentes de regiones
mucosa intestinal, que se ulcera y da lugar a diarreas endémicas que van a residir en Cuba. También se
impone tratamiento y seguimiento a todos los casos
sanguinolentas. Al progresar las lesiones producen
diagnosticados; por otra parte, se ofrece educación
fibrosis focales, estrechez, fístulas y papilomatosis.
sanitaria a viajeros cubanos que van a permanecer
Si se trata de S. haematobium se originan con fre-
en países donde existe la enfermedad.
cuencia ulceraciones de la pared vesical que causan
De todas formas, se debe evitar escrupulosamen-
disuria y hematuria. Las consecuencias de estos he-
te el contacto con aguas contaminadas.
chos son una cistitis crónica y estrecheses que gene-
ran hidrouréteres e hidronefrosis.
Tratamiento de la enfermedad
A veces se producen papilomas en la vejiga capaces
Se usan tres drogas para su tratamiento:
de degenerar hacia la malignidad. Aquí se observan
Praziquantel. Se administran 20 mg/kg, 2 veces
infecciones secundarias del tracto genitourinario, con
al día (1 sola dosis), para S. mansoni y S. haema-
cierta predilección por la salmonela. tobium, y 20 mg/kg, 3 veces al día (1 sola dosis),
S. mansoni y S. japonicum causan una granulo- para el S. japonicum y S. mekongo. De todas for-
matosis hepática al reaccionar el organismo contra mas, esta droga no afecta la schistosomula en de-
sus huevos, lo que conduce a una cirrosis nodular sarrollo ni tiene efectos sobre las etapas iniciales
periportal difusa. La función de los hepatocitos por de la enfermedad.
lo general no se afecta seriamente, pero sí la circu- Oxamniquine. Es efectiva sólo contra S. mansoni
lación portal y en ocasiones ocurre una hipertensión (las cepas africanas son más resistentes que las
severa en este circuito, de lo que resultan hemate- americanas), 30 mg/kg/día, por 1 o 2 días para la
mesis a veces graves. La hipertensión portal puede africana y 15 mg/kg/ 1 día para la americana.
“desviar” los huevos hacia los pulmones, lo cual Metrifonate. Es usado sólo para el S. haemato-
produce una arteritis focal obliterativa que lleva a la bium. Se dispensa en 3 dosis, que se administran
hipertensión pulmonar y al cor pulmonale crónico. 1 vez a la semana. Es muy barata.

610
PINTA Diagnóstico
Se realiza por la aparición de las lesiones típicas en
Con este nombre se designa a una treponematosis personas que viven en las áreas endémicas.
endémica que se observa entre los indios de Méxi- La prueba de VDRL, así como la determinación
co, habitantes de la América Central, América del de la absorción de anticuerpos fluorescentes del tre-
Sur y el Caribe. No es muy contagiosa y su trasmi- ponema son positivas, pero no distinguen esta en-
sión no está bien comprendida. fermedad de la sífilis.
Los agentes causales son Treponema pallidum,
subespecie endemicum no venérea; T. pallidum, Tratamiento
subespecie pertenue; frambesia y T. carateum. To- La penicilina benzatínica, en dosis de 1 200 000 U,
dos son morfológica y serológicamente indistingui- produce la curación con una rápida desaparición de
bles del Treponema pallidum, subespecie pallidum las espiroquetas. Los niños con menos de 45 kg de
(sífilis). peso recibirán 600 000 U.

Clínica
Pinta produce lesiones limitadas al dermis. Comien- TRIPANOSOMIASIS
zan en el sitio de inoculaciòn como una pequeña
pápula, la cual progresa hasta convertirse en varios Las tripanosomiasis son las enfermedades causadas
meses en una placa eritematosa. Luego se desarro- por protozoarios del género Trypanosoma. La legen-
llan lesiones eritematoescamosas, en particular en daria enfermedad del sueño en África se debe a
las extremidades, la cara y el cuello. Después de al- Trypanosoma brucei, y la de Chagas, a Trypanoso-
gunos meses se presentan placas azulosas simétri- ma cruzi, en América Latina fundamentalmente.
cas en cara, extremidades y sobre las eminencias
óseas. Luego se despigmentan y semejan un vitiligo Tripanosomiasis africana
(Fig. 79.2); puede ocurrir hiperqueratosis en las ma-
nos y los pies. Las lesiones destructivas dejan una Esta enfermedad, causada por protozoarios del gé-
cicatriz. nero Trypanosoma, ocasiona una infección crónica
acompañada de linfadenopatía generalizada y con
frecuencia una meningoencefalitis grave, la cual es
de pronóstico sombrío.

Etiología y patogenia
La tripanosomiasis africana es causada por T. brucei
gambiense en el occidente y centro de África, y por
T. brucei rhodesiense en África del Este; ambas son
trasmitidas por la mosca tsetsé. Los gérmenes lleva-
dos por la picadura de la mosca se multiplican por
fisión binaria y se diseminan por todo el torrente
circulatorio y linfático 1 semana después de la inocu-
lación. Esta multiplicación ocurre hasta que se ele-
ven los anticuerpos específicos producidos por el
huésped, lo cual reduce el número de organismos
infectantes. No obstante, algunos parásitos escapan
a la destrucción inmune mediante un cambio en sus
antígenos de superficie; comienza así un nuevo ci-
clo de multiplicación si la infección no es tratada.
Fig. 79.2. Lesiones típicas de pinta (foto tomada de Dermato- La tripanosomiasis africana se trasmite también por
logía y Sifilología del Dr. Vicente Pardo Castelló, 1953). transfusiones.

611
Cuadro clínico Tratamiento
La enfermedad del sueño rodesiana es más aguda e Tratamiento preventivo
intensa que la gambiense, y capaz de producir la Quizás la mejor profilaxis sea no vivir en áreas en-
muerte en 1 año; por el contrario, esta última varie- démicas. Si esto no es posible, debe establecerse el
dad recurre a veces por períodos más o menos lar- ataque sistemático de los vectores mediante insecti-
gos y en ocasiones cursa de forma subclínica. cidas de acción residual. En lo individual se usará
En el sitio atacado por la mosca se forma una ropa adecuada de color claro, con pantalones largos
pápula entre algunos días y 2 semanas luego de la y camisas también de mangas largas. Se deben apli-
picadura; dicha pápula evoluciona hacia un nódulo car sustancias repelentes en evitación de la picadura
rojizo, indurado y doloroso. Se le conoce como chan- de la mosca tsetsé.
cro tripanosomial, el que desaparece de manera es- La profilaxis con pentamidina, 4 mg/kg IM cada 3
pontánea. a 6 meses, preconizada por algunos como preven-
La próxima fase de la enfermedad se manifiesta o ción de la forma gambiana es riesgosa, pues puede
evoluciona por lo general en meses, sobre todo en causar insuficiencia renal y diabetes.
los nativos, pero también lo hace abruptamente. En-
tonces se registra una fiebre intermitente, cefalea, Tratamiento de la enfermedad
rigidez y edemas transitorios, sobre todo cuando se Al comienzo de la enfermedad, antes de que se afecte
diseminan los tripanosomas por la sangre, la linfa y el SNC, la suramina constituye la droga de primera
la médula ósea. A veces se presenta un rash evanes- línea para las infecciones producidas por el tripano-
cente circinado eritematoso, de corta duración. Este soma rodesiano y la pentamidina, para el gambiense.
eritema se suele ver de 6 a 8 semanas después de la En los estados avanzados de la afección se han
infección. Con frecuencia se encuentra una linfade- obtenido resultados satisfactorios administrando me-
nopatía generalizada. El aumento de tamaño de los larsoprol (Arbosal), en ambas formas de tripanoso-
ganglios del triángulo cervical posterior constituye miasis africana.
un signo que se observa en la enfermedad del sueño La suramina se administra después de una prueba
gambiano; en esta variedad clínica, la toma del SNC de sensibilidad, con 100 mg EV. De no ocurrir reac-
ocurre después de meses o años, pero en la rodesiana ción, es seguida por 1 g EV al otro día, para conti-
se presenta al cabo de algunos meses. nuar con igual dosis en los días 3, 7, 14 y 21, hasta
La afectación del SNC causa cefalea frecuente, una dosis total de 5 g. A los niños, después de la prue-
incapacidad para concentrarse, cambios en la per- ba realizada con 100 mg EV, se les darán 20 mg/kg.
sonalidad, así como lasitud progresiva e indiferen- La pentamidina se dispensa en ámpulas de 250 mg
cia, sueño diurno, hiperfagia, temblores, ataxia y para las vías IM o EV lenta, en días consecutivos o
coma terminal. alternos, hasta aplicar 5 o 10 dosis. Produce hiper-
tensión arterial brusca.
Diagnóstico El melarsoprol es el medicamento indicado en
A veces el diagnóstico es muy difícil en el orden caso de toma del SNC, no obstante ser muy tóxico.
clínico, aunque cuando la enfermedad es aguda y Es capaz de añadir con su toxicidad un cuadro de
con chancro tripanosómico se le sospecha con fun- encefalopatía reactiva y una dermatitis exfoliativa.
damento, sobre todo en zonas endémicas. El diag- Por lo común se recomienda un curso de 3 días
nóstico positivo se hace al encontrar los tripanosomas con 2 a 3,6 mg/kg/día EV, lo cual se repite a las 2
en la sangre, en el LCR y en los ganglios. La mues- semanas siguientes. Con un intervalo de 7 días se
tra obtenida debe examinarse en gota gruesa, donde hace de nuevo el ciclo con aumento de la dosis y 7
se aprecian microrganismos en movimiento. días después se vuelve a repetir. Este medicamento
Las pruebas serológicas, tales como el ensayo es un derivado arsenical del BAL, por tanto, apare-
inmunofluorescente y el test ELISA son útiles. Cuan- cerán manifestaciones tóxicas correspondientes al
do está afectado el SNC, la presión del LCR aumen- arsénico en el riñón y tubo digestivo.
ta, también las proteínas y los linfocitos, y hay una También se recomienda la eflornitina, efectiva
marcada elevación policlonal de la IgM. contra la tripanosomiasis gambiense en sus esta-

612
dios temprano y tardío. Se administra por vía EV, Fase aguda. También llamada enfermedad aguda
400 mg/kg/día divididos en 4 dosis, en un período de Chagas. Ocurre sobre todo en niños y se caracte-
de 14 días, y se continúa con 300 mg/kg/día, VO, riza por el hallazgo de formas del parásito en la san-
por 3 o 4 semanas. gre periférica. Cursa con fiebre recurrente o continua,
linfadenopatía, hepatosplenomegalia, y a veces ede-
Tripanosomiasis ma de la cara y un rash morbiliforme, llamado
chagoma; se observa edema unilateral periocular y
americana o enfermedad palpebral con conjuntivitis y adenopatía preauricular,
que se denomina signo de Romaña; para otros, el
de Chagas signo de Romaña exige que el edema sea en ambos
Es el resultado de la infección por Tripanosoma ojos. Con frecuencia ocurre una miocarditis demos-
cruzi, la cual causa una miocardiopatía crónica, así trada de manera eléctrica y clínica. El 5 o 10 % de
como megaesófago y megacolon. los enfermos con miocarditis y encefalitis fallecen,
pero en una gran proporción de casos la infección
Etiología decursa prácticamente asintomática.
La tripanosomiasis cruzi es trasmitida por diversas Fase latente. Después de pasada la fase aguda,
especies de chinches selváticas; éstas, a la vez que los enfermos pueden albergar por mucho tiempo el
pican, depositan heces fecales que contienen tripo- protozoario T. cruzi en pequeña cantidad y mante-
mastigotes en la piel. Estas formas infectantes entran nerse asintomáticos; sin embargo, debido a un con-
a través de la picadura o atraviesan las membranas trol sistemático o a un examen fortuito se encuentran
mucosas. Entonces los parásitos invaden los macró- con alguna frecuencia signos electrocardiográficos
fagos en el sitio de entrada y se transforman en de afectación cardíaca.
amastigotos, que se multiplican por fisión binaria y Fase crónica. Por lo común, 1 o 2 años y a veces
son liberados como tripomastigotes en el torrente décadas después, el enfermo presentará los sínto-
circulatorio y los espacios hísticos, desde donde in- mas tardíos de la infección, los que expresan daño
fectan otras células. Las del sistema reticuloendote- en el corazón y tracto digestivo sobre todo. Los sín-
lial, del miocardio, los músculos y del SNC son tomas y signos cardíacos varían desde las arritmias
afectadas con mayor frecuencia. hasta la insuficiencia cardíaca congestiva con pre-
El hombre se convierte en reservorio y también dominio derecho. La degeneración del sistema de
otros mamíferos, como perros, gatos, ratas y conducción da lugar al síndrome de Stokes-Adams
armadillos. Debe recordarse que la enfermedad pue- y a muerte súbita por bloqueo cardíaco. El bloqueo
de ser trasmitida por transfusiones de sangre y con- de rama es la alteración más constante en el ECG.
tacto con ella o sus derivados. Se reportan también Las lesiones crónicas del tracto digestivo remedan
contagios por trasplantes de órganos. La vía trans- síntomas de la acalasia esofágica y el megacolon.
placentaria es involucrada. La primera se presenta como una disfagia o regurgi-
tación que a veces provoca una infección pulmonar
Epidemiología por aspiración o una severa malnutrición. El mega-
La enfermedad está limitada al continente americano colon conduce a constipación severa y a vólvulos
y se distribuye en las zonas rurales de México, Amé- intestinales.
rica Central y del Sur. También se la encuentra en Estos pacientes crónicos están inmunosuprimidos,
los Estados Unidos y se calcula que más de 100 000 lo que es capaz de conducir a una reactivación de la
emigrantes que viven en este país están infectados infección original con gran parasitemia y tránsito
de forma crónica. por un segundo estadio agudo.
En algunas partes de América del Sur la cardio- La trasmisión placentaria de la afección da lugar
patía por enfermedad de Chagas constituye la pri- a abortos y enfermedad neonatal crónica, con altas
mera causa de muerte en menores de 45 años. tasas de mortalidad y de fetos muertos.

Cuadro clínico Diagnóstico


Para su mejor comprensión, se señalarán tres fases El diagnóstico positivo se hace demostrando la
de la enfermedad: aguda, latente y crónica. presencia de T. cruzi en el paciente o por pruebas

613
serológicas. En la etapa aguda es posible observar 1. Porque en Medicina Interna muchas afeccio-
parásitos en la sangre periférica mediante el examen nes, infecciosas o no, sistémicas o localizadas,
de gota gruesa o delgada. producen cuadros de conjuntivitis y querato-
En las zonas endémicas se usa el xenodiagnóstico, conjuntivitis u otras alteraciones oculares que
que consiste en hacer que un vector producido en el plantean el diagnóstico diferencial con el tra-
laboratorio y libre de parásitos pique al sospechoso. coma.
De ser positivo, a los 8 o 10 días aparecerán los pa- 2. Por la gran amenaza que pende sobre la visión
rásitos en el tubo digestivo de la chinche. de quienes la padecen, lo cual aconseja cono-
cer este padecimiento y así añadir un conoci-
Tratamiento miento más en el combate contra la ceguera.
Tratamiento preventivo 3. Por el contacto y relaciones de nuestro país con
Se debe educar a la población respecto al modo de el mundo donde el tracoma es endémico.
trasmisión y métodos de prevención. Realizar el ata-
que sistemático de los vectores que infectan las ca- Epidemiología
sas mediante el empleo de insecticidas de acción La distribución de este morbo es mundial. Se pre-
residual. Recomendar el uso de mosquiteros. Deben senta como una enfermedad endémica, con mayor
estudiarse a los donantes de sangre que viven o pro- frecuencia en las comunidades rurales más pobres
vengan de zonas endémicas. La trasmisión por esta en los países subdesarrollados. En las zonas endé-
vía se evita añadiendo 25 ml de violeta de genciana micas, los niños son más afectados que los adultos y
al 0,5 % a cada 500 ml de sangre, 24 h antes de deja grados variables de cicatrices invalidantes.
su uso. Se la encuentra en parte del norte de África, en el
Oriente Medio, en la India y el sudeste Asiático; tam-
Tratamiento de la enfermedad bién en la América Latina y entre los aborígenes
La aplicación de tratamiento en la etapa aguda re- australianos, en las islas del Pacífico y en varias re-
duce de forma rápida la parasitemia, acorta la enfer- giones de Estados Unidos.
medad clínica y logra la reducción de la mortalidad, En aquellas áreas o comunidades donde hay tra-
pero habitualmente no erradica la infección. coma grave causante de ceguera, se producen epi-
La única droga efectiva y que ofrece alguna es- demias de conjuntivitis bacteriana cada 1 o 2 años,
peranza es el nifurtimox, que se administra en la do- lo cual favorece la acción de los factores nocivos de
sis de 10 mg/kg de peso / día durante un período de 2 la infección por tracoma con las consecuencias es-
a 4 meses. Se indican variantes para los niños. peradas.

Etiología
TRACOMA. Dentro del género clamidia se distingue la especie
Chlamydia trachomatis y de ella, los tipos A, B y C
CONJUNTIVITIS son causantes del tracoma clásico, capaz de produ-
cir ceguera que se difunde de un ojo al otro por las
GRANULAR. secreciones oculares o por contacto de las manos
con los ojos, por las moscas o por los artículos de
OFTALMÍA EGIPCIA uso personal contaminados (toallas, pañuelos y
otros).
El tracoma es una conjuntivitis crónica causada por
Chlamydia trachomatis, caracterizada por exacer- Cuadro clínico
baciones progresivas y remisiones con hiperplasia El inicio de la enfermedad es casi siempre lento y
folicular conjuntival, neovascularización corneal y solapado: en los casos leves, los pacientes se suelen
producción de cicatrices en la conjuntiva, la córnea quejar de ligero malestar ocular, lagrimeo, sensibi-
y los párpados. Esta afección corresponde al domi- lidad a la luz, sensación de cuerpo extraño e incluso
nio del oftalmólogo, pero se estudia, aunque some- escasa secreción purulenta en los ojos al levantarse;
ramente, en esta obra por tres razones fundamentales: en los graves con toma de la córnea, la fotofobia es

614
intensa. El tracoma no produce abundantes secre- Diagnóstico
ciones oculares, a menos que esté complicado con
El diagnóstico de tracoma debe ser clínico y en zo-
una infección bacteriana.
nas endémicas constituirá la primera posibilidad que
En el examen físico se observa, al inicio de la se debe plantear en presencia de conjuntivitis folicu-
enfermedad, una conjuntivitis folicular con hiper- lar, sobre todo cuando ésta persiste por más de 3
trofia papilar e infiltración inflamatoria que afecta semanas. No obstante, en los estadios tempranos de
de forma más característica la conjuntiva tarsal su- la enfermedad es posible cultivar y aislar a Chla-
perior. Es importante evertir el párpado superior para mydia trachomatis. La presencia de cuerpos de in-
detectarla. Los folículos son elevaciones como gra- clusión citoplasmática basófilos entre las células del
nos amarillentos que miden de 0,2 a 2 mm de diá- epitelio conjuntival teñidas con Giemsa, diferencia
metro. el tracoma de la conjuntivitis aguda. En ocasiones
La córnea se afecta fundamentalmente en su mi- es necesario hacer el diagnóstico diferencial con la
tad superior. A medida que progresa la enfermedad, conjuntivitis alérgica palpebral en el estado folicu-
se produce cicatrización de la conjuntiva, así como lar hipertrófico, pero la eosinofilia junto a las papilas
vascularización corneal e infiltración leucocitaria; blanquecinas presentes en la alergia, hacen la dis-
estos dos hechos dan lugar al pannus fibrovascular tinción.
denso. La cicatrización de la conjuntiva causa
entropión y triquiasis (las pestañas dirigidas hacia Tratamiento
adentro), que suelen lesionar la córnea y provocar En los casos esporádicos se usará doxiciclina, 100 mg
úlceras cuya cicatrización ocasiona pérdida de la vi- cada 12 h durante 4 semanas. En niños menores de 8
sión. La destrucción de las glándulas lagrimales pro- años y madres lactando o gestantes se dará eritromi-
duce sequedad anormal del ojo por ausencia de cina. En las áreas endémicas se empleará ungüento
lágrimas, lo cual favorece las lesiones por cuerpos oftálmico de tetraciclina o eritromicina, 2 veces al
extraños. día por 5 días de cada mes, durante 6 meses.

615
80
PARASITISMO INTESTINAL

En la actualidad, los autores prefieren evadir el drica y los extremos afilados. Estos parásitos se ha-
término de parasitismo intestinal y sustituirlo por el cen adultos en el yeyuno, y la hembra, que deposita
de enfermedades causadas por protozoarios y hel- unos 240 000 huevos por día, es de mayor tamaño
mintos, por lo que resulta conveniente hacer este que el macho. Los huevos fecundados son elípticos,
elemental recordatorio: los protozoarios son micror- miden alrededor de 35 x 55 µm y tienen una gruesa
ganismos unicelulares con la propiedad de que su cubierta irregular por fuera y lisa por dentro. Al igual
unidad celular posee las funciones metabólicas y que los de otros helmintos, éstos necesitan un perío-
reproductivas necesarias para la vida y la de multi- do de incubación en el suelo para hacerse infestantes,
plicarse dentro de sus huéspedes. Los patógenos para lo que ocurre en 2 o 3 semanas bajo las mejores con-
el hombre son verdaderos parásitos, pues obtienen diciones de humedad y temperatura. Al ser ingeri-
de su organismo protección y alimentos. dos, estos huevos dejan pronto en libertad en el
Los helmintos o gusanos son multicelulares, se intestino delgado a las larvas que contienen, las que
aprecian a simple vista por su tamaño, no se repro- perforan la pared intestinal, ganan la circulación
ducen en el hombre, no causan inmunidad alguna o venosa o linfática y así alcanzan el pulmón, donde
es totalmente insuficiente, y se dividen en tres gru- permanecen 1 semana o más en los capilares y al-
pos: nematodos o cilíndricos; cestodos, planos y véolos. Dichas larvas llegan a los bronquiolos, los
multisegmentados, y trematodos, planos y posee- bronquios, la tráquea y la epiglotis, y entonces son
dores de ventosas. deglutidas; pasan así al yeyuno nuevamente, donde
se desarrollan hasta alcanzar la etapa adulta en 2 o 3
meses. El parásito adulto vive de 1 a 2 años.
ASCARIASIS Epidemiología
La prevalencia global de la ascariasis en los seres
Con este término se designa la infección del hom- humanos es nada más y nada menos que de 1 000
bre causada por Ascaris lumbricoides, un nematodo millones en el momento actual.
cilíndrico de gran tamaño caracterizado por presen- La infección se origina al ingerir los huevos ferti-
tar una fase pulmonar temprana, provocada por la lizados en los alimentos contaminados o al ser lleva-
migración de las larvas a través de los pulmones, dos directamente a la boca por las manos que
seguida de otra fase intestinal prolongada. En los estuvieron en contacto con la tierra, sin antes lavar-
países tropicales húmedos alcanza una prevalencia las. El fecalismo al aire libre ocupa uno de los pri-
superior al 50 %. meros lugares entre las causas de la endemia.
La infección se distribuye por todo el mundo a
Etiología causa de que los huevos resisten mucho la deseca-
El agente causal, A. lumbricoides, es conocido por ción y cambios de temperatura. Pero son los países
la población como lombriz de tierra, lombriz de subdesarrollados o en vía de desarrollo los más afec-
buche o simplemente lombriz. En su etapa adulta tados, dada la carencia de instalaciones sanitarias
mide entre 15 y 40 cm de largo, tiene forma cilín- suficientes, como es de suponer.

616
Cuadro clínico Es muy desagradable la situación que se produce
cuando un parásito adulto migra hacia la orofaringe
La mayoría de los pacientes infectados son asinto-
y la boca.
máticos.
El cuadro puede estar precedido de una erupción Diagnóstico
urticariforme o edema angioneurótico. Muchas de
La presencia del parásito en las heces o su salida
las otras manifestaciones clínicas de la ascariasis se
por otra vía es patognomónica. El análisis de las
deben a la migración de las larvas y los parásitos
heces fecales permite identificar los huevos, que son
adultos. Al pasar las larvas por el pulmón suele pre-
característicos cuando se encuentran fertilizados,
sentarse bronconeumonía con fiebre, signos de pero atípicos y difíciles de reconocer cuando no lo
broncostenosis (sibilancias) y grados variables de están.
condensación pulmonar. En ocasiones, se produce Hay leucocitosis con eosinofilia durante la mi-
tos con expectoración hemoptoica que contiene lar- gración de las larvas, pero ésta disminuye por lo ge-
vas y eosinófilos. neral en la fase intestinal del parásito.
A menudo hay marcada insaturación del oxígeno
arterial, pero casi nunca provoca la muerte. Tratamiento
Todo parece indicar que las manifestaciones pul- Tratamiento profiláctico
monares se deben a una reacción inmunológica del La ascariasis constituye una afección fundamental-
paciente, que incluye la producción de IgE y eosi- mente rural o suburbana, donde predominan las
nofilia. malas condiciones higienicosanitarias.
Cuando los gusanos se hacen adultos, los sínto- Todos los casos diagnosticados deben ser trata-
mas son escasos o están ausentes si se trata de pocos dos. Las audiencias sanitarias resultan útiles y de-
parásitos. A veces sorprende al enfermo la expul- ben dirigirse hacia la conservación de la higiene
sión de un áscaris con las heces o por la boca me- personal.
diante un vómito. Si la parasitosis es mayor, el
enfermo se queja de dolor abdominal, de tipo cólico Tratamiento de la enfermedad
o no. Grandes cantidades de parásitos a veces oca- El medicamento de elección es el mebendazol
sionan obstrucciones mecánicas por apelotonamien- (Vermox), 100 mg por vía oral, 2 veces al día duran-
to, vólvulos o invaginaciones a nivel ileocecal. Estas te 3 días. A las 2 semanas hay que repetir el examen
complicaciones son más frecuentes en los niños. de heces fecales y, si la infestación se mantiene, se
Cualquier factor que facilite el desplazamiento de debe repetir el tratamiento. Recordar su contraindi-
los áscaris, como una enfermedad febril o la admi- cación en la mujer embarazada.
nistración de algunos fármacos, favorece las com- También son efectivos el citrato de piperazina
plicaciones. En su movimiento los parásitos alcanzan (Uricida), que parece actuar como bloqueador mio-
el apéndice ileocecal o los conductos biliares o pan- neural selectivo de la musculatura del áscaris, y del
creáticos y provocan inflamación; se producen así cual se administra una cucharada (15 ml), que con-
apendicitis, colangitis bacteriana seguida de absce- tiene 1,5 g del producto, 4 veces al día, durante 3 o 5
so hepático o pancreatitis aguda. días; y el pamoato de pirantel, en la dosis de 11 mg/kg
Se ha demostrado que los gusanos son capaces de de peso, 1 vez al día, durante 3 días.
atravesar la pared intestinal y causar peritonitis, tanto
aguda como granulomatosa crónica, así como de
abrirse paso a través de una sutura y caer en el peri- ENTEROBIASIS
toneo con graves consecuencias. De ahí que a los
pacientes quirúrgicos se les trata de diagnosticar es- También llamada oxiuriasis, es la infección intesti-
tos parásitos y erradicarlos previo a la operación si nal humana causada por Enterobius vermicularis. Es
el tiempo lo permite. un nematodo de color blanco, de tamaño pequeño,
Se ha señalado la estrangulación herniaria por la que se encuentra en todo el mundo y que se caracte-
presencia de numerosos áscaris. riza por producir gran prurito anal.

617
Etiología Diagnóstico
Enterobius vermicularis constituye uno de los pará- Ante el gran prurito anal surge la sospecha, que se
sitos que pueden ser diagnosticados por el propio comprueba mediante la toma de muestras de las
enfermo o por sus padres, en el caso de niños, al márgenes del ano.
reconocerlos a simple vista. La hembra mide 10 El mejor método diagnóstico que se recomienda
o 12 mm y el macho, mucho más pequeño, sólo 3 consiste en la aplicación a las márgenes del ano de
o 5 mm de longitud. Tanto uno como otro viven en un depresor de lengua de madera envuelto en cinta
el ciego o regiones aledañas de los intestinos. Las adhesiva (scotch tape), con la superficie adhesiva
hembras grávidas migran durante la noche y depo- hacia fuera. Esta cinta se pega después a un
portaobjeto y se examina al microscopio, donde se
sitan unos 11 000 huevos por parásito en el ano y
ven los huevos.
sus alrededores, y luego mueren.
También el diagnóstico se hace al observar los
Pocas horas después de ingeridos, estos huevos
parásitos en las heces fecales del paciente.
se hacen infectantes y maduran en el duodeno al cabo
de 2 o 3 semanas, tras lo cual se instalan en el ciego Tratamiento
y partes adyacentes, donde los gusanos ya adultos Tratamiento profiláctico
fijan la cabeza a la mucosa. La mejor profilaxis consiste en la higiene personal,
La enterobiasis es más frecuente en el niño que lavarse bien las manos antes de ingerir alimentos y
en el adulto y más en la mujer que en el hombre. después de defecar. Hay que tener muy en cuenta el
tratamiento de la familia entera ante un infectado y,
Epidemiología de ser posible, de la colectividad de manera simul-
El hombre se infecta por lo común mediante la in- tánea.
gestión de los huevos del parásito, los que son lle-
vados a la boca desde las márgenes del ano por los Tratamiento de la enfermedad
dedos y uñas contaminadas por el rascado de la re- Todos los enfermos de una familia, y si es posible
ferida región. Se ha comprobado la retroinfección, de la comunidad, deben tratarse simultáneamente.
que ocurre cuando los huevos maduran precozmen- Existen medicamentos efectivos para eliminar el
gusano, pero las reinfecciones son frecuentes si no
te en las márgenes del ano y las larvas liberadas re-
se toman medidas adicionales, tanto en el orden per-
montan un camino retrógrado y ganan el ciego.
sonal como sanitario.
Los huevos contaminan la ropa interior y la ropa
Se obtienen buenos resultados con el pamoato de
de cama del paciente, que también constituyen una pirantel, por vía oral, en dosis única de 11 mg/kg de
fuente de reinfección, junto con los alimentos u otros peso, sin sobrepasar de 1 g. También se utiliza el
artículos contaminados con ellos. El polvo por in- mebendazol, 100 mg por vía oral c/12 h, durante 3
halación puede ser fuente de infección. días. En ocasiones se necesita repetir el tratamiento
varias veces cada 3 o 4 meses.
Cuadro clínico
El síntoma fundamental es el prurito anal, muy cons-
tante y que llega a ser insoportable; da lugar a in- TRICOCEFALIASIS
somnio, irritabilidad, etc.
Al examinar el ano se le encuentra congestiona- La tricocefaliasis, tricocefalosis o trichuriasis es la
do y a veces con un punteado hemorrágico. En oca- infección intestinal del hombre ocasionada por el
siones se presentan diarreas flemosas. Se han parásito Trichuris trichiura, un nematodo de color
reportado casos de apendicitis por enterobios, pero rojizo que se caracteriza por la invasión de la muco-
hoy en día esto constituye un hecho raro en nuestro sa del colon por parásitos adultos. Se calcula que
país. También se reportan, mediante la migración alrededor de 500 millones de personas en el mundo
por vía aberrante, de uretritis, vulvovaginitis y peri- están infectadas, aunque muchas veces de forma
tonitis. asintomática.

618
Etiología Tratamiento
El tricocéfalo adulto mide alrededor de 40 mm de Tratamiento profiláctico
longitud y la mayor parte de su cuerpo es filamento- Hay que luchar contra las causas que originan y
sa. Este filamento termina en un pequeño abulta- mantienen las parasitosis en línea general, hacer
miento, lo que lo asemeja a un látigo. El parásito educación sanitaria y practicar la higiene personal
adulto incrusta profundamente su extremo anterior en lo particular.
en la submucosa del colon.
La hembra deposita de 3 000 a 7 000 huevos al Tratamiento de la enfermedad
día, los que tienen forma de barril o de pelota de El tratamiento de elección es el mebendazol
fútbol americano; miden 20 x 50 µm y son de color (Vermox), 1 tableta de 100 mg 2 veces al día duran-
pardo dorado o marrón, con paredes gruesas y te 3 días, ciclo que se repite de estimarse necesario.
translúcidas. Se ha utilizado con éxito el albendazol y la iver-
Estos huevos se hacen infectantes luego de incu- mectina.
barse durante 3 semanas en el suelo. Al ser ingeri-
dos se transforman en larvas, las que anidan en las
vellosidades del intestino delgado. Después de va-
rios días llegan al intestino grueso, donde maduran
NECATORIASIS
en 2 o 3 meses y viven de 4 a 8 años. Y ANQUILOSTOMIASIS
Cuadro clínico
Se denomina uncinariasis o enfermedad ocasionada
Cuando la infección es ligera, por lo general no pro-
por gusanos ganchudos, a la infestación causada tan-
duce síntomas. La abundancia de parásitos afecta
to por Necator americanus como por Ancylostoma
en diferente medida las mucosas colónica y rectal.
duodenale, dos nematodos fusiformes de color
La infección generalizada, aunque más frecuente
herrumbroso o blanquecino, que se caracterizan por
en los niños, se ve también en adultos, incluso sin
referirnos a las invasiones masivas que suelen de- producir anemia microcítica hipocrómica como sig-
tectarse en algunos enfermos de hospitales psiquiá- no primordial cuando la invasión parasitaria es abun-
tricos. dante. Éstos son los gusanos ganchudos que con más
Se presenta dolor abdominal de tipo cólico, frecuencia parasitan al hombre y por sus múltiples
diarreas y un síndrome disentérico. Las náuseas no semejanzas se estudian juntos.
son excepcionales, ni tampoco el prolapso rectal
cuando los parásitos invaden masivamente dicha
Etiología
región intestinal. Es frecuente la anemia con su cor- Tanto N. americanus como A. duodenale miden,
tejo sintomático. cuando son adultos, alrededor de 1 cm de largo, aun-
Algunos autores estiman que la presencia de T. que el primero es algo menor. Habitan en la parte
trichiura favorece la disentería. También se han alta del intestino delgado, incluso el duodeno, a cuya
descrito peritonitis y apendicitis causadas por tri- mucosa se adhieren y chupan sangre.
cocéfalos. Cada parásito extrae de 0,2 a 0,3 ml de sangre
diariamente, pero por la imperfección de su boca,
Diagnóstico que derrama sangre al succionar, así como por su
El diagnóstico se establece por el descubrimiento continuo traslado a otras partes de las mucosas mien-
de los característicos huevos en las heces, hecho que tras deja sangrante el sitio ocupado con anteriori-
resulta fácil cuando existe gran invasión. Sin em- dad, ocasiona una pérdida adicional de sangre que
bargo, cuando las infecciones son ligeras se hace provoca anemia al paciente si la ingestión y absor-
necesario utilizar técnicas de concentración. ción de hierro es inferior a las pérdidas.
Se recomienda contar los huevos, pues se ha es- Tanto la hembra de uno como del otro gusano
tablecido que la presencia de menos de 10 000 hue- deposita entre 15 y 20 mil huevos cada día, los que
vos por heces fecales no explica o justifica síntoma no pueden distinguirse entre sí, y son eliminados con
alguno atribuible a los tricocéfalos. las heces fecales.

619
Las larvas maduran con bastante rapidez (48 h) y Cuando los parásitos se establecen en los intesti-
viven en el suelo por espacio de varias semanas con- nos, se originan síntomas variables, desde molestias
servando toda su potencialidad infectante. Cuando epigástricas hasta un síndrome de malabsorción in-
se presenta la oportunidad, atraviesan la piel del testinal, demostrado por examen histológico y prue-
hombre, se introducen en el sistema venoso y as- ba de absorción de la D-xilosa. Otros autores ponen
cienden hasta los pulmones, entran en los alvéolos y en duda este hecho.
ganan el árbol respiratorio hasta la faringe, donde Las manifestaciones fundamentales de la enfer-
son deglutidas y llegan al intestino alrededor de 1 medad se relacionan con la anemia ferripriva, cau-
semana después de haber perforado la piel. sada por la pérdida crónica de sangre por los
Casi siempre entran por los pies descalzos, pero mecanismos antes expresados.
es posible que las larvas asciendan por el tallo de las Los niños tienen en ocasiones anemias intensas,
hierbas y penetren por la piel de las piernas a una graves, que los llevan a la insuficiencia cardíaca con-
altura mayor, a veces a 1 metro de las plantas de los gestiva. Aunque no se llegue a este extremo, en los
pies. cuadros crónicos mantenidos sí suele verse hipode-
Los parásitos adultos viven de 2 a 5 años y más sarrollo físico, mental y sexual.
en los intestinos. Necator dura menos que Ancylos- El resto del cuadro clínico dependerá del grado
toma. de anemia, que se refleja como lasitud, falta de aten-
ción, etc.
Epidemiología
Según cálculos, más de 1 000 millones de personas Diagnóstico
están infestadas por estas dos uncinarias, pero por El examen microscópico de las heces fecales, de
suerte, la cantidad de parásitos infectantes no es manera directa o por técnicas de concentración, de-
abundante. muestra los huevos de uncinaria. A menudo con esta
Ancylostoma duodenale fue llamado uncinaria del comprobación basta, pues ambos parásitos respon-
Viejo Mundo por encontrársele entre los mineros de den de forma casi similar a los mismos medicamen-
Europa, pero también existe en África del Norte y tos. No obstante, conviene conocer la cantidad de
Medio Oriente. No deja de verse en la India, Japón huevos eliminados a fin de determinar la carga de
y China. gusanos que invade al paciente, lo que se consigue
Necator americanus, llamado uncinaria del Nue- mediante la técnica de Stollo de Braver.
vo Mundo, se le encuentra en el sur de EE.UU., pero La anemia presente es microcítica hipocrómica,
predomina en las zonas tropicales de África, Asia y con hierro sérico bajo, pobre concentración de he-
América Latina. Si bien es cierto que una tempera- moglobina corpuscular y una alta capacidad de fija-
tura entre 23 y 33 ºC proporciona las condiciones ción del hierro. La albúmina sérica habitualmente
ambientales óptimas para transformar los huevos en está disminuida.
larvas filariformes infectantes, también el descuido
sanitario, el fecalismo al aire libre y la ausencia de Tratamiento
calzado en grandes zonas de los países subdesarrollos Tratamiento profiláctico
contribuyen en gran medida al mantenimiento, de- Al igual que en muchas parasitosis, ésta puede evi-
sarrollo y expansión de esta parasitosis. La infec- tarse o controlarse mediante acciones sanitarias
ción se adquiere además por la ingestión de larvas globales acometidas en particular por los organis-
infectantes. mos del estado.
Es recomendable en todos los casos no andar des-
Cuadro clínico calzo.
En el sitio de entrada de las larvas se produce eritema,
edema y prurito, que puede ser intenso y persistir Tratamiento de la enfermedad
varios días, sobre todo en el caso de N. americanus. El medicamento de elección es el mebendazol, 100
Son más frecuentes las lesiones en los pies, entre los mg por vía oral 2 veces al día durante 3 días. Tam-
dedos, como ya se apuntó. A veces hay tos y fiebre, bién se utiliza el akendazol (Zenter), levamisol
como expresión de invasión pulmonar. (Ketrax) o el pamoato de pirantel (Antiminth).

620
su pared y gana los vasos sanguíneos, que lo llevan
ENFERMEDADES a los músculos estriados. Aquí se transforma, des-
CAUSADAS pués de 3 o 4 meses, en una vesícula ovoidea o
cisticerco, forma en la que se mantiene viable en-
POR TENIAS tre 1 y 3 años. Ingerido este quiste junto con la car-
ne cruda o mal cocinada, se desarrolla la tenia adulta
Las tenias (cestodos) son parásitos planos, segmen- en el término de 2 meses.
tados y hermafroditas, que se encuentran en dife-
rentes vertebrados y se diferencian de otros gusanos, Epidemiología
entre otras cosas, porque no poseen sistema digesti- La teniasis se ve en países donde se acostumbra a
vo y absorben los nutrientes a través de toda su su- comer carne de res cruda o a medio cocer. Los princi-
perficie. Se adhieren a la mucosa intestinal por su pales focos endémicos (prevalencia mayor del 10 %)
extremidad cefálica o escólex, por detrás del cual se están en el Cercano Oriente y en el centro y este de
extiende el cuello, corto y estrecho, y seguidamente África. En menor cuantía se encuentra en América
los segmentos o proglótides. Éstos maduran y, a su del Sur, Europa y Asia.
vez, son rechazados hacia atrás por nuevos progló- En Cuba resulta rara en la actualidad.
tides que se originan a continuación del cuello. Cuan-
do los segmentos alcanzan la gravidez expulsan gran Cuadro clínico
cantidad de huevos, los cuales son muy semejantes
Muchas veces la enfermedad es asintomática. Los
entre las distintas especies de tenias y por ello éstas
pacientes se quejan de epigastralgia, a menudo poco
se identifican mejor mediante el estudio de los ca-
intensa, y diarreas variables.
racteres morfológicos del escólex.
Es clásico el síntoma, manejado por el pueblo, de
Las tenias que mayor interés ofrecen al hombre
son Taenia saginata, T. solium, Hymenolepis nana, aumento marcado del apetito. Otras veces hay in-
H. diminuta, Echinococcus granulosus y Diphyllo- somnio, nerviosismo, anorexia, pérdida de peso, es-
bothrium latum, pero por su mayor incidencia e im- tado nauseoso e irritabilidad.
portancia sólo se estudiarán T. saginata y E. Se señalan los síntomas y signos inflamatorios
granulosus. agudos relacionados con el bloqueo por el parásito,
o parte de él, de los conductos cístico y colédoco, y
Teniasis del apéndice ileocecal.

Es la infección del intestino humano por T. saginata, Diagnóstico


cestodes que vive adherido a la mucosa yeyunal por El diagnóstico se hace al descubrir los proglótides
medio de 4 ventosas y se caracteriza por ocasionar
en las heces fecales o al ser éstos expulsados en for-
síntomas ligeros o a veces ninguno, así como por la
ma aislada. Los huevos también se detectan en el
expulsión de proglótides grávidos con las heces
excremento o en las márgenes del ano, como en el
fecales o solos.
caso del oxiuro, y se recogen con el mismo método
Etiopatogenia del celofán adhesivo aplicado a un depresor de lengua.
Para diferenciarla de la T. solium hay que acudir
El parásito adulto habita en el yeyuno, donde es ca-
paz de vivir por más de 20 años. Mide de 3 a 5 m de al estudio anatomopatológico de los proglótides o a
longitud y su escólex posee ventosas con las que se la hibridización del ADN.
adhiere firmemente a la mucosa. Bien desarrollado,
el parásito posee entre 1 000 y 2 000 proglótides.
Tratamiento
Los huevos, dentro del proglótide o fuera, miden Tratamiento profiláctico
alrededor de 30 x 40 µm. La mejor y quizás la única profilaxis efectiva es la
Una vez depositados en el suelo, los huevos son cocción de la carne de res en forma adecuada. Una
ingeridos por el ganado bovino u otros herbívoros. temperatura de 50 ºC durante 5 min resulta suficien-
Pronto el embrión es liberado en el intestino, invade te para destruir los cisticercos.

621
Tratamiento de la enfermedad yoría de los quistes se desarrollan en el hígado, al
La niclosamida (Yomesán) es muy eficaz como cual invaden de forma progresiva. Suelen provocar
tenicida, en la dosis total de 2 g. Se presenta en ta- metástasis.
bletas de 0,5 g, de las que deben masticarse 4 juntas
y tragarlas con un poco de agua como dosis única. Epidemiología
Se describen pocas manifestaciones colaterales. Echinococcus granulosus tiene como principal hués-
Como tratamiento alternativo se recomienda el ped definitivo el perro y como intermediarios más
praziquantel, en dosis única de 10 mg/kg de peso. frecuentes las ovejas, las vacas y, el más importante
de todos, el hombre. Muchas veces la infección se
Equinococosis produce en la niñez, en aquellas regiones en que se
pastorea o acarrea el ganado vacuno y caprino con
En algunas teniasis el hombre constituye el huésped
perros, como ocurre en muchas partes de África,
definitivo del parásito, como ocurre con Taenia
Medio Oriente, Europa Central, Sudamérica, Aus-
saginata, pero en la equinococosis el hombre es el
huésped intermediario (la enfermedad es causada por tralia y Nueva Zelanda. También se encuentra la in-
las larvas de dicho parásito), ya que el perro, el lobo fección en muchas regiones de EE. UU. y Canadá.
y otros caninos son los huéspedes definitivos. Echinococcus multilocularis es menos común,
Los tejidos del humano se infectan con las larvas pero se le ha localizado en Europa Central, algunas
de Echinococcus granulosus o E. multilocularis, y regiones de Europa del Este, Canadá y Alaska, y en
esto ocasiona lo que se conoce por equinococosis. extensas zonas de EE.UU.
El primero de los gérmenes produce lesiones
quísticas expansivas en algunas vísceras y el segun-
Cuadro clínico
do da lugar a lesiones invasivas, más graves, de ca- La clínica del quiste hidatídico depende de su tama-
rácter destructivo. ño y localización, y los síntomas que se producen se
relacionan con el daño mecánico que el crecimiento
Etiología del tumor ocasiona al desplazar y comprimir los te-
El hombre se infecta después de ingerir huevos de jidos. Algunos pacientes albergan sólo 1 o 2 quistes
equinococos eliminados por perros infectados. que crecen con lentitud, alrededor de 1 cm por año
El gusano (tenia) es pequeño y mide entre 2,5 y llegan a alcanzar hasta 20 cm, pero un número
y 9,7 mm de largo, presenta una cabeza provista de considerable de enfermos presentan múltiples de
ganchos y ventosas, un cuello y tres proglótides: el ellos.
más cercano al cuello es inmaduro; el intermedio, El hígado se afecta con mayor frecuencia (50
maduro, y el último, grávido. Los huevos de estos a 70 %) por constituir el primer filtro o barrera al
parásitos, muy parecidos a los de Taenia saginata, tránsito hemático de los gérmenes; no obstante, la
alcanzan el intestino del hombre, salen los embrio- lentitud con que crecen los quistes permite que por
nes y lo atraviesan, circulan en la sangre y se desarro- espacio de lustros no se generen síntomas o signos.
llan en cualquier tejido del organismo. Se conocen Puede entonces aquejar el paciente dolor en el hipo-
dos especies bien definidas de equinococos: E. condrio derecho o descubrirse un tumor hepático con
granulosus y E. multilocularis. Algunos autores des- la palpación. En algunos casos se produce obstruc-
criben dos especies más, patógenas para el hombre: ción biliar e ictericia.
E.oligathus y E. vogeli. La enfermedad hidatídica del hígado se complica
E. granulosus causa la clásica enfermedad seriamente cuando se rompen los quistes, lo que a
hidatídica, constituida por quistes únicos o múlti- veces ocurre cuando se palpa o percute con brus-
ples, de tamaño variable y de crecimiento por lo quedad; se produce entonces un cuadro de fiebre,
común lento. Dentro de un gran quiste puede haber prurito, urticaria y shock anafiláctico fatal.
otros más jóvenes producidos por una capa germi- Si los quistes asientan en el pulmón (20 a 30 % de
nativa que tapiza el interior de aquél. los casos), constituye un hallazgo radiológico la
En la especie E. multilocularis, son los pequeños observación de una imagen densa, redondeada, “tra-
roedores los huéspedes intermediarios fundamenta- zada a compás”, en uno o ambos campos pulmona-
les, y el hombre lo es con poca frecuencia. La ma- res. El pulmón derecho es el más afectado. En

622
ocasiones la lesión pulmonar se acompaña de tos y se encuentran la giardiasis, la tricomoniasis, la
hemoptisis. coccidiosis y la balantidiasis. De éstas, se describirá
Si el quiste es cerebral, no es posible diferenciar- la giardiasis, por su frecuencia y mayor relación con
lo de otra masa intracraneal que ocupe espacio. la Medicina Interna.
La toma renal se revela por hematuria, y la ósea, La giardiasis es la infección del hombre por el
por una fractura patológica. protozoario Giardia lamblia, que parasita el duode-
La variedad producida por E. multilocularis se no y el yeyuno, y desarrolla un cuadro de dolor, dis-
presenta como un tumor hepático que crece con len- tensión abdominal y diarreas.
titud y da lugar a ictericia y signos de hipertensión
portal. Etiología
Giardia lamblia (G. intestinalis, G. duodenalis), el
Diagnóstico agente causal de esta afección, es un parásito
El cuadro clínico ayuda poco al diagnóstico. Una flagelado en forma de pera, con dos núcleos, los que
imagen radiográfica pulmonar trazada a compás en le dan el aspecto de una cara con dos grandes ojos
zonas endémicas sugiere el diagnóstico. La gamma- cuando se le observa en el microscopio. Tiene gran
grafía hepática, ecografía y la TAC, ante la sospecha, movilidad, pero acostumbra fijarse a la mucosa in-
tienen gran utilidad, al igual que la ultrasonografía, testinal mediante una placa ventral que posee. Exis-
pues confirman la presencia de líquido en la lesión. te en forma de trofozoíto o quística.
Las pruebas serológicas, como la hemaglutinación Los niños son más susceptibles que los adultos a
indirecta, de inmunofluorescencia indirecta o de esta parasitosis, y la gastrectomía, hipoacidez, pan-
ELISA pueden aclarar el diagnóstico. creatitis crónica, inmunodepresión y el homosexua-
En la localización cerebral hay que acudir a la lismo masculino favorecen dicha susceptibilidad.
TAC y a la RMN.
Epidemiología
Tratamiento G. lamblia se encuentra distribuida por todo el mun-
Tratamiento profiláctico do (cosmopolita), con predominio en los llamados
Se debe evitar el contacto con perros infectados y países en vías de desarrollo, por sus precarias con-
extremar la higiene personal ante la necesidad de diciones higienicosanitarias y en aquellos grupos
tenerlo con estos animales. poblacionales expuestos a mayores riesgos, como
los escolares, inmunodeprimidos, viajeros, etc.
Tratamiento de la enfermedad Los parásitos se enquistan cuando pasan por el
Se considera el albendazol como el tratamiento me- colon, y estos quistes constituyen la forma infectan-
dicamentoso más eficaz, en dosis de 400 mg 2 veces te del microbio, que se trasmite por la vía fecal-oral.
al día durante 12 semanas. Por lo regular, deben re- Se han descrito epidemias de giardiasis por trasmi-
petirse varios ciclos. sión hídrica y con menor frecuencia, por alimentos
Otros autores recomiendan el mebendazol (40 mg/ contaminados.
kg/día) dividido en 3 dosis por 6 a 12 meses.
El tratamiento quirúrgico es el indicado cuando
Cuadro clínico
el quiste crece muy rápidamente o cuando produce A menudo la infección es asintomática, pero otras
conflictos de espacio. veces aparecen síntomas variados, como náuseas,
flatulencia, dolor epigástrico, dolor abdominal de
tipo cólico y diarreas acuosas, las que se tornan
semisólidas, fétidas y voluminosas después de va-
GIARDIASIS rios días. Esto se acompaña de pérdida de peso. Todo
este cuadro tiende a curar solo en varias semanas,
Dentro de las infecciones causadas por protozoarios, sobre todo en los niños, pero cuando la giardiasis se
existen algunas llamadas menores, dado su variable hace crónica, pueden presentarse síntomas y signos
cuadro clínico y la poca repercusión orgánica que a que expresan malabsorción intestinal para los car-
menudo producen. Entre estos estados infecciosos bohidratos, las grasas y vitaminas liposolubles. Se

623
describe intolerancia a la lactosa y deficiencia de heces fecales o cuando se encuentran trofozoítos del
disacaridasa. No suele haber invasión extraintestinal, parásito en el examen de las heces diarreicas.
aunque se produce urticaria sin eosinofilia y artritis También puede lograrse por medio del sondaje
reactiva. duodenal o la biopsia de la mucosa de esta porción
El mecanismo patogénico que explica estos fenó- del intestino. En la actualidad se emplean pruebas
menos no se conoce bien; sin embargo, se ha postu- serológicas, como imnunofluorescencia y ELISA;
lado el bloqueo mecánico de las microvellosidades esta última se prefiere por su alta sensibilidad y es-
por los parásitos, alteraciones de la conjunción de pecificidad.
las sales biliares inducidas también por éstos, tras-
Tratamiento
tornos de la motilidad intestinal e invasión de la
mucosa yeyunal. Por otra parte, se ha observado que Tratamiento profiláctico
aquellos pacientes con malabsorción intestinal se- Las mejores medidas son el aseo personal y la ebu-
vera y giardiasis, también tenían una colonización llición del agua de tomar.
yeyunal intensa por enterobacterias, lo que permite
Tratamiento de la enfermedad
suponer que dichas bacterias cooperaron al daño de
Una giardiasis sintomática o asintomática siempre
la mucosa y con ello a la malabsorción. En ocasio-
debe tratarse, cuando no existan contraindicaciones
nes las biopsias yeyunales realizadas a enfermos con
al uso de los medicamentos disponibles.
giardiasis, han revelado aplanamiento de las micro-
Las drogas de elección son: clorhidrato de
vellosidades.
quinacrina (Atebrina), 100 mg por vía oral, 3 veces
al día, después de las comidas, durante 5 días; y
Diagnóstico
metronidazol, 500 mg 3 veces al día por 5 días. Como
Debe sospecharse frente a todo cuadro brusco de alternativa, tinidazol, 1 dosis única de 2 g, y la
diarrea acuosa, maloliente y afebril, y frente a un furazolidona, 100 mg 4 v/día durante 7 días.
síndrome de malabsorción. En las mujeres embarazadas, sólo si se trata de un
El diagnóstico de giardiasis se realiza mediante cuadro grave, se utilizará paromomicina, 10 mg/kg,
la observación de los quistes de G. lamblia en las 3 veces al día durante 7 días.

624
81
LEPTOSPIROSIS

La leptospirosis es una enfermedad infecciosa co- En 1972 se recibió en el Instituto Nacional de


mún en el hombre y en los animales, causada por Higiene, Epidemiología y Microbiología una aseso-
numerosos microrganismos diferentes (serotipos) ría de la OPS/OMS, con el objetivo de establecer
desde el punto de vista antigénico, pero iguales desde técnicas de laboratorio para el cultivo de Leptospira
el morfológico, pertenecientes al género Leptospira y el estudio serológico de la leptospirosis, y en
y que tienen un alto grado de especificidad antigé- 1978 se crearon las condiciones para prestar el ser-
nica, lo que constituye la base de su clasificación. vicio de diagnóstico en todas las provincial del país.

Historia Etiología
En 1883, Landouzy fue el primero en reconocer y Los agentes causales de la leptospirosis son micror-
describir la leptospirosis humana como una entidad ganismos del género Leptospira. Las leptospiras son
clínica distinta. Tres años más tarde, Weil observó
gérmenes filiformes de 6 a 15 µm de longitud (va-
varios pacientes con fiebre, ictericia, hemorragias e
rían desde 4 hasta 49 µm) y de 0,25 µm de espesor,
insuficiencia hepática o renal; desde entonces, esta
con espirales estrechas a todo lo largo de su cuerpo;
forma de leptospirosis se conoce como enfermedad
por lo general presentan uno o ambos extremos do-
de Weil, que se caracteriza por una gravedad y mor-
blados en forma de gancho y movimientos ondula-
talidad poco comunes. En 1917 se logró aislar el
dos (vistos en el ultramicroscopio), por lo que poseen
germen patógeno.
una extraordinaria movilidad que les asegura un alto
En Cuba, desde 1868, el Dr. Francisco Navarro y
poder invasivo.
Valdés sospechaba la leptospirosis, al exponer en
su Tesis de Doctorado que la fiebre grave de los Las leptospiras son resistentes al frío, pero se des-
países cálidos no era la fiebre amarilla, sino una truyen en 30 min a la temperatura de 50 a 55º C; son
enfermedad icterohemorrágica, precedida por fie- muy sensibles a la desecación y a la acción de los
bre, que padecían algunos individuos radicados en rayos solares, y perecen en un medio ácido. Las con-
lugares pantanosos en ciertas épocas del año. diciones más favorables para que sobrevivan fuera
En 1910 se desarrolló un brote de la enfermedad del reservorio son las aguas estancadas o las corrien-
de Weil entre los trabajadores que construían el al- tes de agua de curso lento, la reacción neutra o lige-
cantarillado de La Habana. ramente alcalina con temperaturas entre 22 y 30º C y
En 1945, Márquez Soler y Curbelo presentaron el la no exposición a la luz solar directa. Con estas con-
primer caso confirmado de leptospirosis, cuyo diag- diciones, las leptospiras pueden mantener su viru-
nóstico comprobaron serológicamente aglutinando lencia durante varias semanas.
el suero del enfermo hasta el titulo de 1/64 000 con El género Leptospira comprende 23 serogrupos y
antígeno de Leptospira icterohaemorrhagiae, y me- más de 180 serotipos (cada serogrupo tiene varios
diante la inoculación al curiel, observaron leptospiras serotipos). De los 23 serogrupos, los más frecuentes
en los cortes de hígado y en la orina de dicho ani- son: icterohaemorrhagiae, canicola, autumnalis,
mal, que murió. hebdomadis, australis, grippotyphosa y pomona.

625
Epidemiología que el agua dulce, en particular la contaminada por
orina de ratas, es vehículo de la leptospirosis.
La distribución de la leptospirosis es mundial, sin
En caso de que los gérmenes lleguen al estóma-
embargo, la más amplia variedad de serotipos se
go, son destruidos por el jugo gástrico.
encuentra en las regiones tropicales y subtropicales
o en las de clima cálido con precipitaciones fluvia- Patogenia
les abundantes y una rica fauna de roedores, tanto
Después de penetrar a través de la piel o mucosas,
en zonas urbanas como rurales, pero más en estas
las leptospiras invaden el torrente circulatorio, se
últimas. En muchos países donde la enfermedad ha
difunden por todo el organismo y producen las ma-
tenido un comportamiento endémico, se ha obser-
nifestaciones proteiformes de la enfermedad.
vado un incremento de la incidencia en los últimos
No se conocen todavía factores específicos que
años. En Cuba esto se produce a partir de 1991. Las
modifiquen la virulencia de las leptospiras. Se sabe
provincias de Cienfuegos, Camagüey, Holguín, Cie-
que el anticuerpo específico para leptospiras aumenta
go de Ávila y Las Tunas informan las mayores
la eficacia del aclaramiento de los parásitos en la
tasas.
sangre, al estimular la opsonización y, por lo tanto,
La leptospirosis es una zoonosis; el microrganis-
mejorar la fagocitosis. Datos clínicos e histológicos
mo se mantiene en la naturaleza trasmitiéndose de
en la leptospirosis del hombre y animales, sugieren
animal a animal y su cadena epidemiológica termi-
que el poder patógeno depende en parte de alguna
na, salvo rarísimas excepciones, cuando ocurre la
enzima, toxina u otros metabolitos elaborados por
infección humana.
las leptospiras que se destruyen o que son liberados
El reservorio natural de las leptospiras está repre-
por estos parásitos después de su lisis. También se
sentado por una amplia variedad de animales infe-
ha señalado la posibilidad de que una endotoxina
riores, y aunque casi todos los mamíferos suelen
sea la causa, en parte, de la acción patógena de las
infectarse y trasmitir la enfermedad, los roedores
leptospiras.
constituyen el reservorio más importante. En varias
Una característica notable de la leptospirosis es
partes del mundo se ha inculpado a ratas, ratones
la diátesis hemorrágica, y muchos investigadores han
silvestres, perros, chacales, armadillos, erizos,
atribuido la hemorragia a la desaparición de la
murciélagos, zorros, conejos, cabras, gatos, cerdos,
trombina sérica, a trombocitopenia o a ambos fac-
canguros, cobayos y ganado en general, como tras- tores.
misores de la infección. También se han aislado Las manifestaciones hepáticas de la leptospirosis,
leptospiras en reptiles y aves. incluyendo la ictericia, es casi seguro que resulten
La trasmisión al hombre tiene lugar por contacto de una lesión hepatocelular, pues la hemólisis no es
directo con la sangre, la orina y los tejidos y órga- un fenómeno constante, y no se ha observado estasis
nos infectados de los animales, o bien por exposi- biliar intrahepática o extrahepática, ni morfológica
ción a un ambiente contaminado por leptospiras. El ni clínicamente. La insuficiencia renal, causa impor-
hombre representa el elemento accidental, casual o tante de muerte en los pacientes con leptospirosis,
terminal de la cadena epidemiológica, ya que la tras- se atribuye a una nefritis intersticial; sin embargo,
misión de persona a persona resulta rara y sólo por la hipoxia contribuye mucho en la patogenia de la
excepción ha ocurrido a través del coito; sin embar- disfunción renal en este trastorno. La distribución
go, cuando tiene lugar en una gestante, puede pro- focal de las lesiones renales sugiere una relación con
ducir la infección fetal por vía transplacentaria, lo trastornos del riego sanguíneo. La oliguria reversi-
que provoca abortos, partos prematuros y muy raras ble observada con frecuencia en el curso de la
veces formas congénitas de la enfermedad. leptospirosis, es muy probable que tenga que ver con
Después de la exposición a los animales infecta- la disminución del riego sanguíneo renal, el que re-
dos o al suelo contaminado por las leptospiras, estos sulta de la hipotensión y el déficit de líquido extra-
microrganismos atraviesan pequeñas fisuras de la celular.
piel o mucosa, incluyendo la conjuntiva, la nasofa- Las leptospiras se aíslan con frecuencia en el LCR,
ringe y la vagina. La trasmisión a través de la piel que por lo demás arroja pocas alteraciones, por lo
intacta ha sido puesta en duda. Se ha comprobado que parece que la presencia de aquellas en las me-

626
ninges origina una reacción mínima. Como esta re- y células plasmáticas. Los signos pulmonares inclu-
acción sólo tiene lugar después que se ha desarro- yen neumonitis hemorrágica localizada en placas
llado el anticuerpo, se ha supuesto que la meningitis difusas.
en la leptospirosis es un reflejo de una reacción an-
tígeno-anticuerpo. Este mecanismo de hipersensibi- Cuadro clínico
lidad también puede explicar la ausencia de El período de incubación suele ser de 7 a 13 días,
pleocitosis en las primeras etapas de la participa- con un promedio de 10. La infección leptospirósica
ción meníngea, el brusco comienzo del cuadro al se manifiesta de forma súbita por un síndrome febril
final de la primera semana de la leptospirosis y el de 4 a 7 días de duración, cuyo curso clínico varía
buen pronóstico de los pacientes que han sufrido según los casos, pero que en general es bifásico, o
participación del SNC. sea, que tiene dos etapas.
La primera etapa o fase septicémica se caracteri-
Anatomía patológica za por el desarrollo de un cuadro infeccioso agudo.
En los pacientes fallecidos con afección hepática El comienzo de los síntomas es brusco, con fiebre
(síndrome de Weil), compromiso renal, o ambos, los precedida de escalofríos que asciende rápidamente
cambios macroscópicos incluyen hemorragia y teji- hasta alcanzar temperaturas de 39 a 40º C, con sen-
dos teñidos de bilis. Las hemorragias varían desde sación de gran quebrantamiento corporal. Esta fase
las petequias a las equimosis, y son difusas, pero en dura entre 4 y 7 días. La mejoría sintomática y la
particular manifiestas en: músculo esquelético, ri- defervescencia coinciden con la desaparición de las
ñón, suprarrenales, estómago, bazo y pulmones. leptospiras en la sangre, LCR y demás tejidos. En-
En el músculo esquelético hay cambios focales seguida aparecen anticuerpos contra leptospiras y
de necrosis y necrobióticos que se consideran bas- esta respuesta inmune indica el comienzo de la se-
tante típicos de la leptospirosis. Las biopsias en eta- gunda etapa o fase inmune del trastorno, que dura
pa temprana de la enfermedad demuestran hinchazón de 4 a 30 días. Predomina la leptospiruria, que con-
y vacuolas, seguidas de hialinización. Se han en- tinúa durante 1 semana o hasta 1 mes, y que por lo
contrado antígenos de leptospiras en estas lesiones general no se modifica con la terapéutica antibióti-
por la técnica de anticuerpos fluorescentes. ca. La meningitis y las manifestaciones hepáticas o
La lesión renal en la fase aguda se halla sobre renales, cuando existen, tienen su intensidad máxi-
todo en los túbulos, y va desde dilatación de los tu- ma durante esta fase de la enfermedad.
bos contorneados distales hasta degeneración, ne- Leptospirosis anictérica. El 90 % o más de todos
crosis y ruptura de la membrana basal. Siempre hay los casos de leptospirosis son anictéricos y por este
edema intersticial e infiltración celular de linfoci- motivo quedan muchas veces sin diagnóstico.
tos, neutrófilos, histiocitos y células plasmáticas. De El comienzo de la fase septicémica de la
haber lesiones glomerulares, consisten en hiperpla- leptospirosis anictérica es brusco, anunciado por fie-
sia del mesangio y fusión por focos de los pies de bre, malestar, cefalea, mialgias y en ocasiones pos-
los podocitos, que se consideran cambios no especí- tración y colapso circulatorio. Durante 4 a 7 días
ficos. son manifiestos el escalofrío, la fiebre remitente, la
Las alteraciones microscópicas en el hígado tam- cefalea y el dolor abdominal. Algunos pacientes con
poco son diagnósticas y no guardan relación con el leptospirosis anictérica no muestran una enferme-
grado de trastorno funcional. Los cambios incluyen dad bifásica, sino que después de la 1ra. semana ya
núcleos dobles y tumefacción turbia en las células quedan asintomáticos.
hepáticas, disrupción de los cordones hepáticos, La segunda fase de la forma anictérica se caracte-
agrandamiento de las células de Kupffer y estasis riza por fiebre y cefalea. Se han señalado casos de
biliar en los canalículos biliares. delirio, alucinaciones, conducta psicótica e incluso
Los cambios en el cerebro y las meninges tam- tendencia suicida; anorexia, náuseas, vómitos, es-
bién son mínimos y no tienen valor diagnóstico. Se treñimiento, diarreas y hemorragia gastrointestinal.
han registrado, asimismo, datos microscópicos de En el examen físico, durante la fase septicémica
miocarditis, que comprenden hemorragias focales, se demuestra hipersensibilidad muscular a veces
edema intersticial e infiltración focal con linfocitos generalizada, pero los músculos de pantorrillas,

627
raquis, región lumbosacra y abdomen son los más La participación cardíaca es rara, pero cuando
afectados. La hipersensibilidad y rigidez de la pared existe se presenta en forma de insuficiencia conges-
abdominal sugieren a veces un abdomen agudo. tiva y colapso cardiovascular.
Otros signos y síntomas de la fase septicémica de
la leptospirosis anictérica incluyen linfadenopatía Exámenes complementarios
generalizada, deshidratación, sufusión conjuntival, Hemograma. La mayoría de las veces se observa
hepatosplenomegalia, exantemas cutáneos (a veces una franca neutrofilia; con relativa frecuencia se
maculopapulares); faringitis, artritis, parotiditis, . .
encuentra una leucocitosis de 12 109 a 18 109/L,
orquitis, epididimitis y otitis media. Es común la y en ocasiones se detectan conteos entre 20 109 .
taquicardia y en ocasiones hay arritmias cardíacas. .
y 40 109/L, con neutrofilia casi absoluta. Cuando
La principal manifestación de la fase inmune de existe, la anemia es normocítica y normocrómica,
la leptospirosis anictérica es la meningitis, que se con cifras de hemoglobina entre 70 y 110 g/L.
caracteriza por pleocitosis del LCR. Durante la 2da. Coagulograma. Es normal, aunque a veces la
semana de la enfermedad se comprueba una reac- actividad de la protrombina plasmática está dismi-
ción meníngea en el 80 % de los pacientes. Se han nuida.
observado cefalea, vómitos y rigidez de nuca, y en Eritrosedimentación. Está acelerada.
casos muy raros, edema de la papila, espasticidad, Orina. Existe albuminuria, cilinduria (cilindros
parálisis de nervios craneales, crisis convulsivas,
hialinos, granulosos y pigmentarios), hematuria y
radiculitis, trastornos visuales, mielitis y síndrome
piuria. En caso de íctero hay bilirrubinuria.
de Guillain-Barré.
Urea y creatinina. Pueden estar elevadas desde el
Leptospirosis ictérica (síndrome de Weil). Este
principio, cuando existe descompensación renal.
término se emplea para definir una forma de
Transaminasas. Están poco elevadas, al igual que
leptospirosis que tiene una expresión clínica distin-
la fosfatasa alcalina
tiva, pero que no es específica en relación con la
Bilirrubina. En los casos en que existe ictericia
etiología serotípica. Además de los síntomas y sig-
hay un brusco aumento, con predominio de la bilirru-
nos antes señalados en los pacientes con enferme-
bina directa.
dad anictérica, el síndrome de Weil se distingue por
Proteínas plasmáticas. Hay una moderada hipo-
perturbación de la función hepática y renal, colapso
proteinemia con hipoalbuminemia e incremento de
vascular, hemorragias y graves alteraciones del es-
las globulinas alfa-1 y alfa-2.
tado mental.
Líquido cefalorraquídeo. Se encuentra una
Lo esencial en esta forma clínica es la ictericia,
que al igual que la hiperazoemia es a veces muy in- pleocitosis con predominio de linfocitos; la glucosa
tensa; en ella no se observa el curso bifásico de la y los cloruros son normales y hay una discreta ele-
enfermedad, y la mortalidad, a pesar de un trata- vación de las proteínas.
miento de sostén adecuado, fluctúa entre 5 y 15 %. Pruebas serológicas. Son las más utilizadas en
Hay hepatomegalia en el 25 % de los casos, dolor muchos países. Existen varios tests de diagnóstico
en el hipocondrio derecho y colecistitis no calculosa. inmunológico, macroaglutinación, microaglutina-
Los síntomas atribuibles a trastornos de la fun- ción con antígenos muertos o vivos y ELISA de
ción renal, por lo regular sólo se observan durante serotipos específicos, que es el más sensible y capaz
la leptospirosis ictérica. La oliguria y la anuria se de detectar la infección en sus inicios.
presentan en fase tan temprana como el 3er. día de Otras pruebas. Las leptospiras se aíslan en la san-
la enfermedad, pero son más comunes después de gre en la 1ra. semana, en la orina en la 2da. y en el
la 1ra. semana. Los pacientes con hiperazoemia se LCR en la 3ra. semana.
dividen en dos grupos: los que tienen disminuido el Estas técnicas microbiológicas no se utilizan como
riego renal y una buena respuesta a la administra- medio habitual de diagnóstico. También existe el cul-
ción de líquidos, y los que tienen ya una necrosis tivo para aislamiento de las leptospiras en medios
tubular aguda y no reaccionan a la administración especiales (Fletcher, Karthops, Stewart o EMJH
de éstos. [Ellinghausen-Mc Cullough-Johnson-Harris]).

628
Diagnóstico 5. Protección de los alimentos y abastecimiento
de agua.
El diagnóstico positivo se realiza por los aspectos
6. Adecuada higiene de las viviendas.
clínicos y epidemiológicos, el cultivo de leptospiras
7. Prohibición de la natación e inmersión en aguas
y las pruebas serológicas.
sospechosas de estar contaminadas.
El diagnóstico diferencial hay que hacerlo con:
hepatitis viral, fiebre amarilla, ícteros obstructivos 8. Vacunación contra la leptospirosis. El nombre
y hemolíticos, pielonefritis aguda, glomerulonefri- comercial de la vacuna es Vax-Spiral. Dos do-
tis aguda, necrosis tubular aguda, dengue, meningo- sis de 0,5 ml con un intervalo de 6 semanas,
encefalitis, influenza, fiebre reumática, sarampión, por vía IM.
fiebre tifoidea, tuberculosis, paludismo, neumonitis,
toxoplasmosis, septicemias, brucelosis, mononucleo- Tratamiento de la enfermedad
sis infecciosa, fiebre hemorrágica epidémica, etc. Medidas generales. El enfermo debe guardar repo-
so absoluto en cama y la dieta será blanda, con aporte
Complicaciones suficiente de proteínas, hidratos de carbono, vitami-
Algunas complicaciones no son más que los pro- nas y minerales.
pios síntomas de la enfermedad agravados. Las más Los analgésicos, sedantes y antipiréticos se indi-
importantes, que pueden poner en peligro la vida carán según la necesidad.
del paciente y ocasionar la muerte son: el síndrome Antibióticos. Se ha comprobado, clínica y expe-
hepatorrenal con deshidratación y colapso, la atro- rimentalmente, la eficacia de altas dosis de penicili-
fia aguda del hígado y la meningoencefalitis hemorrá- na administradas dentro de las 48 a 72 h siguientes
gica; son menos graves la iritis, la parotiditis y la al inicio de la afección. Se utiliza la penicilina cris-
bronconeumonía. talina, 10 000 000 UI por vía EV, en dosis fraccio-
nadas cada 4 h durante las primeras 48 o 72 h.
Tratamiento Pasadas las 72 h, se continúa con 1 000 000 UI
Tratamiento profiláctico cada 4 o 6 h por vía IM durante 3 a 5 días más. En
Comprende una serie de medidas como: caso de alergia a la penicilina, se usará cefaloridina
(Ceporán), 1 g cada 4 h por vía IM o EV, o te-
1. Divulgación a la población para la prevención traciclina, a razón de 500 mg de entrada, seguidos
y lucha contra la leptospirosis. de 250 mg cada 8 h, por vía EV por 24 h, y luego 250
2. Protección de los trabajadores agrícolas y ex- a 500 mg cada 6 h por vía oral, durante 6 días. La
puestos mediante el uso de guantes y botas im- tetraciclina está contraindicada si hay evidencia de
permeables. fallo renal.
3. Control de roedores. Otra posibilidad terapéutica es la eritromicina, a
4. Drenaje adecuado de terrenos inundados y zo- razón de 250 mg cada 6 h durante 5 días.
nas pantanosas. Corticosteroides. Están contraindicados.

629
82
MICOSIS PROFUNDAS O SISTÉMICAS

Los hongos son microrganismos eucariotas, por lo curación o la muerte del paciente, puesto que no exis-
que poseen una membrana nuclear simple; su nú- ten datos que permitan afirmar la posibilidad de tras-
cleo contiene varios cromosomas, sus paredes celu- misión de hombre a hombre. Sólo algunos son
lares son rígidas y están formadas de manera considerados contagiosos, como los dermatofitos u
fundamental por mananoproteínas, glucano y quitina, hongos cutáneos, en especial aquellos que producen
y poseen ergosterol en la membrana citoplasmática. tiña tonsurante; sin embargo, algunos de estos hon-
Estos elementos y la capacidad de reproducirse gos han sido aislados también en el suelo.
sexual o asexualmente, los diferencian de las bacte- Los mecanismos por los cuales éstos se implan-
rias. tan en los tejidos, con proliferación y formación de
De las más de 100 000 especies existentes, sólo lesiones, son en su mayoría oscuros, aunque algo se
cerca de 100 poseen capacidad patógena para el conoce al respecto. Parece que algunos hongos de-
hombre. ben su acción patógena a la elaboración de toxinas.
Las enfermedades producidas por estos micror- Otras veces, como ocurre con la criptococosis
ganismos se denominan infecciones micóticas o sim- (torulosis), la causa del problema es la producción
plemente micosis y de acuerdo con su localización
de una cápsula que afecta con preferencia al SNC y
se dividen en superficiales y profundas o sistémi-
ocasiona desorganización celular.
cas. Las primeras son aquellas causadas por hongos
Casi todas las infecciones micóticas difieren de
de poca capacidad invasora y que afectan casi siem-
las bacterianas: primero, por su larga evolución, y
pre las estructuras más superficiales de la piel y sus
segundo, por su pobre o nula respuesta a la acción
anejos. Interesan en particular al dermatólogo; sin
de los antibióticos usuales.
embargo, casi todos los hongos patógenos son ca-
paces de producir lesiones dermatológicas con in- Etiología
vasión o no de otros tejidos. Las micosis profundas
comprenden aquellas enfermedades por hongos que A continuación se relacionan algunas micosis pro-
invaden estructuras profundas, con repercusión ge- fundas, con su agente etiológico:
neral. Estas formas son las que interesan al internista.
La mayoría de los hongos que producen enfer- Micosis Agente etiológico
medades micóticas profundas o sistémicas son Histoplasmosis Hystoplasma capsulatum
saprofitos. Viven en los suelos, sobre todo en aqué- Blastomicosis Blastomyces
llos enriquecidos por materias orgánicas, y tienen norteamericana
la facultad de persistir en estas condiciones sin ne- Coccidioidomicosis Coccidioides inmitis
cesidad de la intervención de un ciclo parasitario en Criptococosis Cryptococcus neoformans
el animal o en el ser humano. Esporotricosis Eporotrichum schenekii
El hombre puede infectarse de manera acciden- Cromomicosis Phialophora
tal, ya sea por la vía aérea o a través de una puerta Aspergilosis Aspergillus
de entrada en la piel. Cuando los hongos infectan a Candidiasis Candida albicans
un individuo, empieza un ciclo que termina con la Zigomicosis Mucozy rhizopus

630
No se mencionan los dermatofitos porque casi Muchas enfermedades provocadas por hongos son
siempre producen micosis superficiales. adquiridas por inhalación de esporas que se desarro-
Constituyen un dato etiopatogénico importante los llan y se encuentran libres en la naturaleza, las que
cambios favorables a la proliferación de los hongos pueden ser fragmentos de micelios unicelulares que
saprofitos que ocasionan los estados de inmunode- reciben el nombre de clamidosporas, o bien cuerpos
presión de sobra conocidos, así como el uso de anti- esféricos colocados en el extremo del filamento
bióticos en grandes cantidades por mucho tiempo. micélico, llamados cinidios.
Estos antibióticos anulan la flora normal antagonis-
ta de los hongos, los cuales encuentran así la forma Procedimientos diagnósticos
de proliferar exageradamente; otras veces exacer- en Micología
ban su virulencia cambiando de forma y estructura. El diagnóstico biológico de las micosis se logra de-
Como ya fue señalado, la infección es en ocasiones mostrando en los productos sospechosos (pus,
exógena, es decir, que el agente causal ha sido ad- exudados mucosos, etc.) la presencia del hongo, pero
quirido del suelo, de las excretas de animales conta- sin olvidar las mayores precauciones asépticas, pues
minados, de la vegetación, en fin, del ambiente. el polvo de las habitaciones, laboratorios, etc., con-
tiene hongos dispersos que, al contaminar los culti-
Aspectos patológicos e inmunológicos vos, portaobjetos, etc., pueden motivar el craso error
generales de tomar como agente patógeno lo que es sólo un
En general, las micosis no son difíciles de diagnos- hongo de contaminación ambiental accidental.
ticar, ya que los diferentes cuadros clínicos, una vez Examen microscópìco. El examen microscópico
conocidos, permiten su identificación; sólo es omi- directo es la técnica más sencilla y simple usada en
tido el diagnóstico cuando deja de pensarse en la micología médica para el diagnóstico de un hongo
enfermedad. determinado; la observación directa de un hongo en
Cuando el hongo penetra en el seno de los teji- tejidos y exudados, sobre todo cuando se encuentra
en abundancia, conduce de la mano al diagnóstico.
dos, causa reacciones inflamatorias que pueden ser
Tanto el pus como el esputo y líquidos de exudados,
abscesos simples (como ciertas blastomicosis) o pro-
se colocan en una lámina, se les añaden algunas go-
ducciones granulomatosas nodulares, llamadas go-
tas de hidróxido de potasio al 10 % y se cubren con
mas micóticos, constituidos por un centro supurado
un cubreobjetos; luego se calienta la lámina ligera-
rodeado de polimorfonucleares, células epitelioides,
mente con la finalidad de clasificar y hacer más fá-
macrófagos y algunas células gigantes. Cuando la cil la detección del hongo en cuestión. En el caso
micosis ocasiona grandes tumores inflamatorios in- del líquido cefalorraquídeo, la muestra se centrifu-
tegrados por la acumulación de filamentos micelia- ga y se examina el sedimento. Los especímenes he-
nos entrecruzados (llamados granos), se denomina matológicas se manejan de la misma forma en que
micetoma. Estos micetomas no tienen tendencia a se hace para otros tipos de investigaciones.
remitir y representan una lesión bastante caracterís- Hay hongos que se detectan con facilidad, dadas
tica de las micosis. algunas de sus particularidades. Por ejemplo,
A pesar de las diferencias estructurales y de ciclo Cryptococcus neoformans se demuestra en el LCR
vital entre bacterias y hongos, ambos producen le- coloreando su cápsula con tinta china. Las tinciones
siones anatomopatológicos (granulomas) y clínicas de Gram se utilizan para detectar Hystoplasma en
similares, por lo cual el diagnóstico de certeza de una muestra de médula.
una micosis rara vez es posible hacerlo, excepto Métodos de cultivo. Este proceder requiere la ha-
cuando la presencia del hongo sea demostrada en bilidad y la experiencia de un micólogo.
los exudados o tejidos sospechosos. El método más usado es el de la siembra en el
Como factor importante en la patogenia de estas medio de Sabouraud de glucosa-agar, e incubación
infecciones se encuentra la hipersensiblidad, en la a temperatura ambiente. Por supuesto, no todos los
que el paciente presenta una acentuada reactividad hongos crecerán en este medio de cultivo; por esto,
local, e incluso general, a la inyección intradérmica el internista debe comunicar al micólogo su sospe-
del microrganismo causal. cha diagnóstica ante un hongo determinado, para así

631
seleccionar, tanto el medio apropiado como la tem- des, inmunosupresores o citotóxicos, que tienen com-
peratura de incubación. Estos cultivos por lo gene- promiso de la inmunidad celular
ral necesitan de 5 a 6 semanas y no deben reportarse
resultados negativos sin haber transcurrido ese tiempo. Fisiopatología
Inoculación a animales. La inoculación a anima- La infección se produce por inhalación de los mi-
les no ha dado los resultados más deseables, tanto cronidios de Hystoplasma capsulatum, que a la tem-
por la gran variedad de especies susceptibles, como peratura corporal se convierten en la forma de
por la muy dudosa correlación entre las lesiones levadura y son fagocitados por los macrófagos. En
encontradas en el humano y en los animales. En ge- los pacientes con inmunidad normal hay contención
neral, los procedimientos de inoculación a animales de la infección por una serie de mecanismos, como
están fuera del campo del laboratorio clínico. respuestas vasculíticas, formación de granulomas,
Métodos inmunológicos. Con excepción de la necrosis caseosa, aumento de los ganglios regiona-
prueba de aglutinación de látex positiva para antí- les y calcificación. En los sujetos con alteraciones
geno criptococal en la sangre y en el LCR, y un títu- de la inmunidad celular el microrganismo se dise-
lo positivo de anticuerpo fijador de complemento mina en los macrófagos del sistema reticuloendote-
en el suero o en el LCR para coccidios, las demás lial, presente en todas las vísceras.
pruebas serológicas no son útiles para el diagnóstico. La fibrosis mediastínica y la histoplasmosis ocu-
Biopsia. La mayoría de los hongos pueden ser lar parecen estar mediadas inmunológicamente y son
identificados, cuando por medio de la biopsia se les la consecuencia de una respuesta hística exagerada.
encuentra en los tejidos que invaden. En los casos de diseminación los macrófagos, inclu-
yendo los de la sangre periférica, están llenos de le-
vaduras y los granulomas, mal desarrollados.
HISTOPLASMOSIS Cuadro clínico
Hay tres formas clínicas básicas de la enfermedad:
Es una micosis profunda de distribución mundial
la forma aguda pulmonar, la crónica pulmonar y la
causada por Hystoplasma capsulatum, un hongo
diseminada.
dimorfo que tiene zonas endémicas en varios luga-
La forma aguda es asintomática o remeda un cua-
res del mundo, en especial en las Américas, cuya dro de influenza. En los casos de exposición intensa
vía primaria de adquisición es la respiratoria y que suele desarrollarse una enfermedad difusa, hipoxia
afecta a diversos órganos de la economía, como pul- e insuficiencia respiratoria aguda. En general, remi-
món, ganglios linfáticos, bazo, médula ósea, suprarre- te en unos 10 días sin dejar secuelas o a veces unas
nales, piel y aparato gastrointestinal. En Cuba se calcificaciones puntiformes en el pulmón y los ór-
reportó el primer caso en 1958 por el Dr. Julio ganos afectados. La diseminada es propia de pacien-
Sanguily y col., y en el año 1962, el primer brote de tes con inmunodepresión, y en dependencia del grado
la enfermedad. de ésta, presentará una cuadro de gravedad varia-
ble, con fiebre, adenopatías, hepatosplenomegalia,
Epidemiología pancitopenia e insuficiencia suprarrenal. La radio-
En las zonas endémicas, a los 20 años el 80 % de la grafía de tórax es normal o muestra una neumonitis
población está infectada. Hystoplasma capsulatum intersticial.
se localiza con facilidad en las deyecciones de aves En la forma crónica de la enfermedad no hay tras-
y murciélagos en sus zonas más frecuentadas. En tornos del aparato inmune y predominan las lesio-
las áreas endémicas hay micronidios aerolizados que nes locales, como úlceras de la orofaringe, sobre los
actúan como contaminantes aéreos y causan la ma- síntomas generales, como fiebre y pérdida de peso,
yoría de los casos esporádicos. No se trasmite de que se confunden con un carcinoma. En una tercera
persona a persona y la infección no confiere inmu- parte de los casos puede haber hepatomegalia y es-
nidad, por tanto, pueden ocurrir reinfecciones. En plenomegalia. La pancitopenia es rara y la muerte
los últimos años, Hystoplasma capsulatum ha ocurre por insuficiencia suprarrenal. La histoplas-
emergido como un hongo oportunista en pacientes mosis pulmonar se parece a la tuberculosis pulmo-
con SIDA o sometidos a terapéutica con corticoi- nar, pero su curso es más ondulante. Hay una fase

632
de neumonitis y luego el desarrollo de cavidades. En caso de enfermedad crónica cavitaria progre-
En esta fase son características la disnea y la he- siva persistente, con cavidades mayores de 2 mm,
moptisis. se utiliza anfotericín B, en dosis total de 2 a 2,5 g, y
Hay una forma crónica por respuesta excesiva ketoconazole, 400 mg/día por 3 a 6 meses, o itraco-
inflamatoria, que causa mediastinitis y engloba ór- nazole en dosis de 200 a 400 mg/día, por 6 a 9 me-
ganos vecinos. ses.
Todos los pacientes con afección diseminada de-
Diagnóstico ben ser tratados, al igual que aquellos que presenten
Los estudios para el diagnóstico varían en parte, se- alteraciones inmunológicas por el uso de corticoi-
gún el síndrome clínico que se aborde. En casi to- des, drogas citotóxicas o por SIDA, con presencia
dos los casos se basa en demostrar a H. capsulatum de esta forma de la enfermedad. El fármaco de elec-
por cultivo o por estudios histopatológicos de los ción es el anfotericín B, 2 a 2,5 g como dosis total, e
órganos afectados. La prueba de histoplasmina es itraconazole, 200 a 400 mg diarios por 6 a 12 meses.
útil para los estudios epidemiológicos, pero no se Se debe instituir terapia de mantenimiento de por
recomienda para el diagnóstico clínico por el eleva- vida en los pacientes con SIDA y el tratamiento de
do número de positividad que arroja en personas que elección es itraconazole, 200 mg c/12 h.
residen en áreas endémicas. En los casos de fibrosis mediastínica y en la histo-
Los cultivos del esputo sólo son positivos en plasmosis ocular no está indicado el tratamiento
un 10 a 20 % de los pacientes con la afección pul- medicamentoso.
monar primaria. En los crónicos la positividad es En los síndromes obstructivos de órganos medias-
mayor, pues llega hasta el 60 % en aquéllos con tinales está señalada la cirugía.
cavitaciones pulmonares; en muchos de ellos el frotis
de esputo es positivo.
Las pruebas serológicas son positivas en la mi- CANDIDIASIS
tad de los casos y un título de fijación del comple-
mento elevado en un enfermo con alteraciones (MONILIASIS)
radiológicas sugestivas, es un elemento a favor del
diagnóstico. Son micosis limitadas por lo regular a las capas su-
El diagnóstico definitivo de histoplasmosis cró- perficiales de la piel o mucosas, y cuyas manifesta-
nica se realiza por frotis del cultivo, estudios histo- ciones clínicas son aftas en la boca, intertrigo,
patológicos o material obtenido por broncoscopia. vulvovaginitis, paroniquia y onicomicosis. A veces
En la histoplasmosis diseminada depende de la se forman seudomembranas en el esófago, estóma-
demostración de levaduras intracelulares mediante go o intestino. La diseminación hematógena es pro-
estudios histopatológicos o un cultivo positivo de pia de sujetos con inmunodepresión, en especial del
médula ósea, sangre, ganglios, piel, hígado o pul- brazo celular del aparato inmunológico. En este caso
món. Se deben estudiar la sangre y la orina por ra- puede producir lesiones de órganos o en las próte-
dioinmunovaloración en busca de antígeno de sis, sobre todo valvulares cardíacas.
Hystoplasma capsulatum, que puede ser un marca-
dor sensible de histoplasmosis diseminada. Etiología y epidemiología
Hay más de 150 especies conocidas de monilias y
Tratamiento Candida albicans es el patógeno que con más fre-
La mayoría de los pacientes con histoplasmosis pri- cuencia se encuentra en el hombre. Hay otras espe-
maria no requieren tratamiento antimicótico, ya que cies clínicamente importantes, como son C.
en ellos la enfermedad es autolimitada. tropicalis, C. parapsilosis, C. krusei, C. seudotropi-
En la afección primaria grave se recomienda an- calis y C. guiller mondi.
fotericín B por vía EV, en dosis de 1 000 mg como Los microrganismos del hongo tienen dos carac-
dosis total, y ketoconazole oral, 400 mg/día por 3 terísticas comunes: formas de levadura pequeña (es-
a 6 meses, o itraconazole oral, 200 a 400 mg/día féricas de 4 a 6 µm), que se reproducen por
por 3 a 6 meses. gemación, y seudohifas (seudomicelios), que son

633
cadenas de levaduras alargadas separadas por secundaria a una afección o a tratamiento pre-
constricciones. En los líquidos y tejidos corporales dispone a la candidiasis profunda (candidemia
se observan células en gemación y fragmentos de o candidiasis invasiva).
seudohifas. La alteración anatomopatológica característi-
La candidiasis ocurre en todo el mundo y es parte ca en la candidiasis visceral, la constituyen los
de la flora normal humana de la boca, el tubo diges- microabscesos entremezclados con tejido nor-
tivo y la vagina. Los hongos viven en equilibrio con mal. Hay infiltración primero de neutrófilos,
otros microrganismos del cuerpo, pero la acción de seguidos de histiocitos y células gigantes y, en
diversos fármacos, como antibióticos y corticoides, algunos casos, una respuesta granulomatosa. En
o de trastornos como diabetes e infección por VIH, pacientes con trastornos inmunológicos seve-
alteran dicho equilibrio. ros la reacción inflamatoria es mínima. Es po-
C. albicans suele convertirse en un patógeno y sible observar levaduras y seudohifas mediante
causar infección mucocutánea o profunda. Las otras tinciones especiales, como ácido peryódico de
especies productoras de enfermedad del hongo resi- Schiff o metenamina argéntica de Gonori.
den con mayor frecuencia en el medio ambiente y
objetos, y llegan al cuerpo desde fuentes exógenas, Cuadro clínico
por lo que se les considera patógenos oportunistas.
La enfermedad tiene tres formas de manifestarse:
La candidiasis mucocutánea y profunda se ha con-
infecciones mucocutáneas, candidemia y candidia-
vertido en la afección micótica oportunista más fre-
sis de órganos profundos.
cuente en los últimos años, debido al uso profiláctico
La candidiasis orofaríngea se manifiesta por pla-
y terapéutico de potentes antibióticos, inmunosupre-
sores, medicamentos citotóxicos, prótesis valvula- cas exudativas de color blanco cremoso, como cua-
res o articulares, dispositivos intravasculares, como jos en la lengua, mucosa bucal, paladar u otras
catéteres y sondas, trasplantes de órganos y la temi- superficies. En realidad, son seudomembranas que
ble y progresiva epidemia de SIDA a nivel mundial. dejan al ser desprendidas una superficie desnuda,
dolorosa y hemorrágica. La queilosis en los ángulos
Patogenia y anatomía patológica de la boca se presenta sobre todo en los sujetos mal
Hay varios componentes importantes del sistema de nutridos y con poca higiene. La esofagitis se evi-
defensa del huésped, cuya alteración puede explicar dencia casi siempre por odinofagia, a veces como
la infección: una extensión del proceso en la boca y, si se produ-
ce sola, es sugestiva de infección por VIH. La can-
1. Una barrera tegumentaria intacta, incluyendo didiasis gastrointestinal es propia de pacientes con
piel y mucosas, evita la invasión por microrga- cáncer y puede ser fuente de diseminación.
nismo. Las posibilidades de adherencia, cuyo El intertrigo afecta las superficies calientes y hú-
mecanismo no está claro, explican la patogeni- medas, como axilas, ingles, pliegues glúteos y los
cidad de estos gérmenes. mamarios en la mujer. La paroniquia es una tume-
2. La pérdida o alteración de las barreras natura- facción enrojecida de la base de las uñas, a veces
les por catéteres, sondas, quemaduras o ciru- causada por especies de Candida; también se en-
gía abdominal, son factores que predisponen a cuentra onicomicosis, aunque ésta es producida con
la forma profunda de la afección. mayor frecuencia por otras especies de hongos su-
3. La alteración de las principales defensas celu- perficiales, como el Trichophyton o Epidermophyton.
lares, como los leucocitos polimorfonucleares, La vulvovaginitis es la infección mucocutánea
monocitos y los linfocitos, actúan como seg- más común en la mujer, en especial por el uso de
mento celular de la defensa del organismo. No antibióticos, diabetes y embarazo. La balanitis en el
está bien definido el comportamiento de los hombre se adquiere por contacto sexual. La cistitis
macrófagos hísticos. La disfunción de células es muchas veces provocada por la cateterización
T predispone a la enfermedad mucocutánea vesical.
(candidiasis orofaríngea) o esofágica en perso- Se considera que hay candidemia cuando varios
nas infectadas por VIH, y también a la enfer- hemocultivos son positivos para especies de Candi-
medad mucocutánea crónica. La granulopenia da, con manifestaciones clínicas o sin ellas.

634
La frecuencia de candidemia ha sido mayor en La peritonitis por monilias ha emergido como un
los últimos años por la aparición del SIDA y de pa- serio problema de la cirugía gastroduodenal y en los
cientes inmunocomprometidos por las modernas te- pacientes que han recibido un traumatismo del ab-
rapéuticas a que son sometidos los enfermos en las domen.
salas de terapia, los trasplantes de órganos, diálisis,
catéteres endovenosos, etc. La mortalidad por can- Diagnóstico
didemia de todas las especies es alta, entre 40 y 80 %. En las lesiones mucocutáneas el diagnóstico se hace
La candidemia produce una enfermedad locali- por el aspecto clínico y el examen de montaje hú-
zada de órgano (ejemplo, candidiasis ocular) o de medo de hidróxido de potasio o frotis teñido con
múltiples órganos, en un 20 a 40 % de los casos. En Gram del material obtenido por raspado o con esco-
situaciones de localización visceral es más común billa. En los pacientes con esofagitis debe obtenerse
la presencia de una afección subyacente, como material de raspado o biopsia para comprobar por
leucemia, neutropenia, etc. histopatología la invasión mucosa por Candida. Los
Los órganos son afectados localmente o por me- hemocultivos deben hacerse, pero sólo son positi-
dio de una siembra hematógena. La infección ocu- vos en el 50 % de los casos, por lo que el diagnósti-
lar a veces se produce como resultado de una co de certeza depende de la histopatología. Tienen
operación o de una instrumentación ocular al im- utilidad para el diagnóstico: TAC, ultrasonografía,
plantar lentes. toracentesis, artrocentesis y la biopsia de órganos.
La candidiasis renal puede ser ascendente a partir La lisis por centrifugación es una técnica moderna
de una cistitis causada por el hongo, pero es más sensible que se debe indicar para los hemocultivos
frecuente la infectación hematógena. de hongos cuando hay sospecha de candidemia.
La candidiasis hepatosplénica es más común en
las enfermedades hematológicas malignas, en espe- Tratamiento
cial las leucemias. En los pacientes con infecciones mucocutáneas son
Las neumonías por Candida son de presentación eficaces los diversos preparados tópicos de nistatina,
rara (Fig. 82.1). clotrimazole, miconazole, econazole y ketoconazole.
La miocarditis es frecuente en la candidiasis di- En la actualidad tiende a usarse en las vulvovagi-
seminada y debe sospecharse si hay prótesis valvu- nitis la dosis única de estos preparados en forma de
lares cardíacas o catéteres permanentes endovenosos. pesarios vaginales. En casos resistentes debe em-
La candidiasis diseminada se puede complicar con plearse, además, el medicamento tópico de forma
meningitis y microabscesos cerebrales. prolongada o por la vía oral. El fármaco de elección
en la candidiasis mucocutánea crónica es el
ketoconazole, 200 a 400 mg diarios y seguir de for-
ma indefinida. Los pacientes con VIH y candidiasis
mucocutánea responden con menor rapidez. Aun-
que el fluconazole es más eficaz en enfermos con
SIDA, está apareciendo resistencia con frecuencia,
por lo que se ha sugerido como opción terapéutica
el uso del itraconazole. En casos refractarios al
fluconazole, se usan dosis bajas de anfotericín B.
En la candidemia deben tomarse medidas tera-
péuticas básicas importantes:
1. Retirar el catéter si es la causa.
2. En los pacientes con tromboflebitis, resección
quirúrgica del segmento venoso.
3. Todo enfermo con candidemia debe recibir tra-
tamiento de quimioterapia antimicótica.
• A los pacientes con candidemia no neutro-
Fig. 82.1. Marcada infiltración en un paciente con una candi- pénicos, darles gluconazole, 40 mg diarios
diasis pulmonar. por 14 días.

635
• Los casos con inmunodepresión deben ser alrededor de un 90 % de aquellos en que dos de las
tratados con anfotericín B, 0,5 a 0,8 mg/kg/ tres condiciones siguientes estén presentes: conteo
día, por 7 a 14 días. de granulocitos en la sangre periférica < 500/mm3, tra-
• Los enfermos con candidiasis diseminada con tamiento con altas dosis de glucocorticoides e histo-
toma de órganos localizados o múltiples, de- ria de tratamiento con citostáticos, así como
ben recibir anfotericín B (2 a 3 g) combina- ciclosporina.
do con flucitosina, 75 a 125 mg/kg/día. La aspergilosis invasiva es una complicación oca-
• Pudiera ser útil el fluconazole, después del sional del SIDA.
anfotericín B y la flucitosina. En caso de exposición masiva, la inhalación de
• El tratamiento preventivo debe requerir ma- esporas en pacientes atópicos origina diversas reac-
yor atención, dado el incremento nosocomial ciones de hipersensibilidad tipo I y III. Aspergillus
de estas infecciones. Hay que vigilar la du- acostumbra colonizar en un árbol bronquial dañado,
ración de los catéteres intravasculares; los ya sea por quistes broncógenos, cavernas tubercu-
subclavios deben cambiarse cada semana. losas o bronquiectasias, y al crecer forma, junto con
fibrosis, moco y restos celulares, una masa denomi-
nada aspergiloma o pelotas de hongos.
ASPERGILOSIS La infección por Aspergillus se caracteriza por-
que las hifas invaden los vasos sanguíneos y produ-
cen trombosis, necrosis e infartos hemorrágicos.
Es una micosis oportunista potencialmente letal cau- Las personas sanas que inhalan abundantes espo-
sada por cualquiera de los miembros del género ras de Aspergillus sufren una neumonitis aguda di-
Aspergillus, del que se conocen como 600 especies, fusa, que cura de manera espontánea; se detectan
de las cuales sólo una decena produce infección en granulomas epitelioides con células gigantes y zo-
el hombre. Aspergillus fumigatus es la causa más nas piógenas en el centro que contienen hifas. En
común de aspergilosis y es el responsable del 90 % pacientes inmunodeprimidos la infección puede ori-
de estas infecciones; también Aspergillus flavus, ginar necrosis sin granulomas.
Aspergillus niger y otras especies pueden provocar
la enfermedad. Este germen es un moho con hifas Cuadro clínico
septales de 2 a 4 µm de diámetro, termófilo, capaz
Esta entidad afecta sobre todo el oído externo, los
de crecer a temperaturas superiores a 50 ºC, que po-
senos paranasales, los bronquios y los pulmones,
sibilita su desarrollo en restos orgánicos, calentados aunque aparece en múltiples lugares del organismo.
por reacciones de fermentación bacteriana. Existen varias formas clínicas principales de presen-
tación:
Patogenia y anatomía patológica
Formas alérgicas: En personas con antecedentes
La infección suele presentarse después de la inhala- de asma bronquial ocurre la aspergilosis broncopul-
ción de grandes cantidades de esporas de micelios monar alérgica, como respuesta del huésped frente
de Aspergillus. Las más comunes especies de este al germen. Se caracteriza por la presencia de asma
hongo que causan enfermedades en el ser humano grave, infiltrados pulmonares bilaterales y bron-
son ubicuas en el medio ambiente. En ocasiones se quiectasia. En pacientes no atópicos la inhalación
produce implantación directa en la piel, la córnea, masiva de los aspergilos origina varias horas después
el oído o en una válvula cardíaca protésica. de la exposición una alveolitis alérgica extrínseca,
La inhalación de esporas de Aspergillus es muy caracterizada por disnea, tos seca, fiebre y mialgias.
común, pero la enfermedad es rara; esto es debido Aspergiloma y colonización extrapulmonar.
al papel decisivo de los macrófagos alveolares y los Aspergillus coloniza en cavidades preexistentes de
neutrófilos frente a Aspergillus. Los macrófagos in- cualquier causa. A nivel pulmonar y con preferen-
gieren y destruyen las esporas, mientras que los cia en los lóbulos superiores, produce el aspergiloma
neutrófilos impiden el crecimiento y la disemina- o micetoma, que es una forma no invasiva de la enfer-
ción de las hifas, y producen la lisis de los micelios; medad. Coloniza, además, en los senos paranasales y
por ello, la invasión hística por los aspergilos se pre- conducto auditivo externo; con menos frecuencia
senta casi exclusivamente en inmunosuprimidos, en afecta el ojo, la piel, las uñas y el esófago.

636
La hemoptisis es la manifestación más peligrosa nóstico radiológico se dificulta, pues se presentan
del aspergiloma y se presenta en el 60 % de los ca- infiltrados pulmonares difusos, imágenes nodulares
sos; si coincide con una tuberculosis activa, el ries- únicas o múltiples, abscesos con cavitación, neumo-
go de hemorragia pulmonar masiva es muy elevado nía lobar o una imagen triangular propia del trom-
y causa una mortalidad mayor de un 25 %. boembolismo pulmonar.
Aspergilosis invasiva. Se produce un cuadro ful- Radiografía de senos paranasales. Es posible que
minante asociado a diseminación extensa hacia ór- aparezca la imagen radiopaca del aspergiloma.
ganos vitales, en particular el aparato digestivo y el TAC y RMN. Muestran una masa sólida de tejidos
SNC. blandos que empuja la pared del seno etmoidal o la
La aspergilosis pulmonar invasiva se manifiesta pared interna del seno maxilar.
de forma aguda con fiebre e infiltrado pulmonar re- Niveles séricos de IgE e IgG (precipitinas) espe-
sistente al tratamiento antibiótico; en esta fase pue- cíficas del hongo. Aparecen elevados.
den aparecer formaciones nodulares. La enfermedad Hemocultivo. Rara vez es positivo.
comienza por invasión local de los tejidos y progre- Cultivo en medio de Saboureaud sin ciclohemida.
sa hasta la formación de vasculitis por micelios. Esta Debe aislarse la misma especie de Aspergillus en
vasculitis, junto al taponamiento de los vasos pul- varias muestras de igual procedencia, excepto en la
monares, da lugar a un síndrome clínico que se ase- forma invasiva, donde la positividad de una sola se
meja a la embolia pulmonar con fiebre, dolor en considerará significativa.
punta de costado, disnea y hemoptisis, acompañado Biopsia con cultivo de pulmón, senos paranasa-
de la típica imagen radiológica triangular; si la in- les, bronquios o cualquier otro sitio afectado.
fección progresa, las lesiones evolucionan hacia la
formación de abscesos con cavitación, neumonía Diagnóstico
lobar o múltiples infiltrados distribuidos unilateral El diagnóstico se basa en los elementos clínicos des-
o bilateralmente. Cuando la infección se controla, critos y los exámenes complementarios, con la de-
es frecuente la formación de cavidades. mostración del germen responsable.
Las embolias sépticas se presentan como un epi-
sodio isquémico arterial agudo y producen un acci- Tratamiento
dente vascular encefálico, un síndrome de
Aspergilosis broncopulmonar alérgica: en la fase
Budd-Chiari o una necrosis papilar renal.
aguda se utiliza prednisona, 1 mg/kg/día, hasta que
En varones de edad media afectados de bronqui-
el infiltrado desaparezca. Se continúa durante 2 se-
tis crónica o tuberculosis pulmonar inactiva, ocurre
manas con 0,5 mg/kg/día, y luego con esta misma
a veces aspergilosis necrosante crónica, que origina
dosis en días alternos.
lesiones fibrocavitarias en uno o ambos vértices pul-
En los pacientes con formas graves que no res-
monares, con deterioro progresivo del estado gene-
ponden a los glucocorticoides, se usará el itracona-
ral, pérdida de peso, fiebre, sudoración nocturna,
zole, en dosis de 200 a 400 mg/día, durante varios
expectoración purulenta y leucocitosis.
meses.
Entre otras formas raras de aspergilosis se encuen-
Si se presenta hemoptisis grave (superior a 500
tran la endocarditis, la enfermedad invasiva local, ml/día), se practica la resección quirúrgica.
el pie de Madura, endoftalmitis hematógena en los El tratamiento del aspergiloma sinusal es la extir-
adictos a drogas parenterales y la bronquitis invasiva pación quirúrgica.
del SNC. Cuando existe colonización superficial en piel,
fosas nasales y oídos, se aplicará nistatina en forma
Exámenes complementarios
tópica.
Estudio citológico del esputo o lavado bronquial. En la aspergilosis invasiva el fármaco de elección
Suele mostrar las hifas características. es el anfotericín B, en dosis de 1 a 1,5 mg/kg de
Radiografía de tórax. Se observa una imagen peso/día, solo o asociado a la 5-flucitosina, 150 mg/
radiotransparente en media luna, que rodea a una kg/día, o la rifampicina.
masa circular variable con los cambios de posición. Si existe aspergilosis invasiva en enfermos no
En otras formas de aspergilosis pulmonar el diag- neutropénicos: itraconazole, 200 mg 2 v/día.

637
Las infecciones por Criptococcus neoformans dan
CRIPTOCOCOSIS lugar a focos pulmonares, a partir de los cuales se
O TORULOSIS produce la diseminación hematógena, que al tomar
el cerebro provoca de inicio lesiones de aspecto
mucinoso y con posterioridad granulomas, y peque-
Cryptococcus neoformans o Torula histolytica pro- ños quistes mucoides, con formación de racimos de
duce una micosis sistémica distribuida en todo el criptococos en las áreas perivasculares de la corteza
mundo. Constituido por células esféricas o elipsoi- y en la sustancia gris, en los ganglios basales, y en
dales que miden de 4 a 20 µm de diámetro, está ro- menor cuantía en otras áreas del SNC. En la mayo-
deado por una cápsula gelatinosa gruesa (su rasgo ría de los casos crónicos es típica una densa arac-
más característico) compuesta por un polisacárido. noiditis basilar.
Su reproducción es por gemación y en fecha recien- Las lesiones pulmonares se caracterizan por una
te se ha descrito una fase sexual denominada Filo- intensa inflamación granulomatosa.
baisidiella neoformans. La criptococosis fue una Los criptococos son mejor apreciados en los teji-
enfermedad más bien rara hasta la aparición del sín- dos con tinción de metenamina de plata o ácido
drome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), el peryódico de Schiff.
que ha incrementado el número de casos y origina-
do grandes cambios en el cuadro clínico y tratamien- Cuadro clínico
to de esta micosis. Las manifestaciones clínicas más frecuentes se de-
Este microrganismo crece con facilidad a tempe- ben a la afectación del SNC, los pulmones, la piel y
raturas de 37 ºC y se conocen cuatro serotipos (A, B, en menor proporción de otros órganos.
C y D), de los cuales los A y D resultan patógenos La mayoría de los pacientes tienen una meningo-
para el hombre. encefalitis en el momento de realizarse el diagnósti-
co; ésta es la forma clínica más frecuente y resulta
Patogenia y anatomía patológica
fatal sin el tratamiento adecuado. Por lo general se
El hongo se encuentra en los suelos, sobre todo en presenta como una meningitis o meningoencefalitis
los abonados con deyecciones de palomas, y contie- de causa subaguda o crónica y en ocasiones como
ne por lo común los serotipos A y D del Criptococ- lesiones ocupantes de espacio (criptococoma). Los
cus neoformans; la infección se adquiere por enfermos con meningitis suelen tener un curso
inhalación del hongo y se considera muy poco pro- subagudo o rápidamente progresivo: la muerte ocurre
bable su entrada por otras vías, tales como la piel, entre 2 semanas y varios años después de un ataque
las mucosas y las lesiones traumáticas. sintomático.
Los animales, en particular los gatos, pueden ad- Las manifestaciones tempranas incluyen: cefalea
quirir el criptococo, pero no lo trasmiten a otros ani- progresiva durante semanas, inestabilidad para la
males ni a humanos. marcha, demencia e irritabilidad, visión borrosa y
Existen factores predisponentes muy bien defini- fiebre de grado variable. Durante un tiempo pueden
dos para la adquisición de la enfermedad, dentro de faltar los síntomas clínicos de meningitis. La cefa-
los cuales están el SIDA o portadores del VIH, pa- lea y la fiebre son los más comunes; el papiledema,
cientes a los cuales se les trasplantaron órganos só- las alteraciones del nivel de conciencia, los sínto-
lidos, terapia con glucocorticoides, sarcoidosis, mas focales, las convulsiones y la rigidez de nuca
insuficiencia renal crónica y linfoma. El principal sólo se presentan en un 20 a 30 % de los casos. Las
mecanismo de defensa contra el hongo es la inmu- parálisis de nervios craneales, en su forma típica
nidad celular, de cuya intensidad depende la mayor asimétrica, tienen lugar en la cuarta parte de los ca-
o menor susceptibilidad del hombre frente a la in- sos. Con la progresión de la infección aparece el
fección; este mecanismo tiene más importancia que coma y otros signos de compresión cerebral.
la virulencia del hongo y el papel desempeñado por La infección pulmonar es asintomática en la ma-
los macrófagos y los neutrófilos. En los enfermos yoría de los casos, pero en otras ocasiones produce
inmunodeprimidos en grado extremo, apenas se apre- manifestaciones tales como: dolor torácico en el 40 %,
cia la respuesta inflamatoria. tos en el 20 %, o manifestaciones propias de un

638
derrame pleural. Los pacientes con SIDA u otras alte- criptococomas son indistinguibles de otras lesiones
raciones inmunitarias graves a veces siguen un curso ocupantes de espacio.
fulminante, con disnea intensa y distress respirato- Biopsia. Muestra el criptococo encapsulado. En
rio del adulto. los pulmones hay una intensa inflamación granulo-
Las lesiones de la piel se presentan en el 10 % de matosa. Los criptococos son mejor apreciados en los
los pacientes y casi siempre traducen una infección tejidos con tinción de metenamina de plata o ácido
diseminada; cuando preceden a los síntomas de me- peryódico de Schiff.
ningitis, ayudan a realizar el diagnóstico temprano
de la enfermedad. Las pápulas, pústulas o úlceras se Diagnóstico
localizan típicamente en la cabeza y el cuello. La presencia de fiebre y dolor de cabeza en pacien-
En un 4 % de los casos aparecen lesiones osteolí-
tes con SIDA u otros factores de riesgo, como in-
ticas, que por lo común presentan un absceso frío.
fección por VIH, hacen pensar en la posibilidad de
Exámenes complementarios una criptococosis, aunque es necesario realizar el
diagnóstico diferencial con la toxoplasmosis, linfoma
Punción lumbar. El LCR es claro con aumento de la
del SNC, tuberculosis, histoplasmosis, neoplasia del
presión, pleocitosis a expensas de mononucleares,
pulmón u otras causas de neumonía aguda bilateral,
hiperproteinorraquia e hipoglucorraquia.
como la producida por Pneumocistis carinii.
Cultivo del microrganismo en medio de Sa-
boureaud (LCR, sangre, orina o esputo). Resulta Tratamiento
positivo en un plazo de 7 a 10 días.
Demostración histológica. En las muestras de El tratamiento de elección ha sido siempre el anfo-
LCR, sangre, orina o esputo. tericín B, solo o combinado con flucitosina.
Coloración con tinta china del LCR. Permite vi- Terapia habitual. Anfotericín B, en dosis de 0,3
sualizar el criptococo en más del 50 % de los pa- mg/kg/día, por vía EV, con flucitosina, 150 mg/kg/
cientes sin SIDA y en más del 90 % de los infectados día, por vía oral, repartidos en 4 tomas, durante 6
con VIH. semanas o hasta llegar a la dosis de 1,5 g de anfote-
Técnica de aglutinación con látex. En el LCR, ricín B.
esta prueba tiene una especificidad y sensibilidad Después de la epidemia del SIDA, la flucitosina
mayor del 90 %. En muestras de suero el porcentaje resulta mal tolerada por su toxicidad hematológica,
de positivos es menor y existen falsos positivos. Los por lo que se utiliza el tratamiento sólo a base de
títulos altos de antígeno son un índice de mal pro- anfotericín B, en dosis de 0,6 a 1 mg/kg/día, duran-
nóstico y su disminución o normalización sirven te 8 semanas o hasta 3 o 4 semanas después del últi-
como control de la respuesta al tratamiento. En los mo cultivo negativo.
pacientes con SIDA estos títulos están muy ele- El fluconazole, en dosis de 400 mg/día, ha resul-
vados. tado menos eficaz que el anfotericín B y se reserva
para enfermos menos graves o refractarios a este
Otros estudios último.
Radiografía de tórax. Puede aparecer una imagen Para el tratamiento de los pacientes con criptoco-
seudotumoral, con masas o nódulos pulmonares úni- cosis y SIDA, ver el capítulo correspondiente a esta
cos o múltiples, infiltrados pulmonares unilaterales última enfermedad.
o bilaterales, neumonías segmentarias, derrame pleu- La disminución de los títulos de antígeno para el
ral y adenopatías. criptococo, da la seguridad de una terapéutica
TAC del cerebro. Es normal en la mitad de los exitosa. Aproximadamente entre el 50 y 70 % de los
casos, pero en otros muestra alteraciones inespecífi- pacientes sin SIDA con criptococosis, resultan cu-
cas, como ligera atrofia cortical o discreto aumento rados con la terapéutica mencionada.
del tamaño ventricular. Las formas pulmonares en los enfermos sin fac-
RMN. El patrón más característico es la dilata- tores de riesgo no requieren tratamiento, pero si es-
ción de los espacios de Virchow-Robin. Los tos factores existen, se utilizará el anfotericín B.

639
83
ANTIBIÓTICOS

En el suelo, en el estiércol y en el agua habita un se evita su uso indiscriminado y caprichoso (ver epí-
número enorme de bacterias, mohos, actinomicetos grafe “Política de antibióticos”).
y otros microrganismos que mantienen de forma Hoy existen centenares de productos, cada uno de
permanente diversas relaciones recíprocas. Éstas ellos con sus características químicas propias y de
pueden tener carácter de ayuda (simbiosis), cuando acción beneficiosa, pero capaces todos ellos de pro-
las sustancias químicas formadas por un microbio ducir en el paciente reacciones secundarias, efectos
son útiles a otro, o, por el contrario, ser de tipo anta- colaterales, sensibilizaciones, resistencia y respues-
gónico (antibiosis), cuando el organismo de una es- tas orgánicas que en ocasiones agravan el estado del
pecie es inhibido por otro durante su convivencia. enfermo. Por ello resulta necesario su conocimiento
Ya al inicio del desarrollo de la Microbiología, pleno y su utilización basada en experiencias cien-
Pasteur había observado relaciones de antagonismo tíficas, así como educar a los pacientes que poseen
entre gérmenes de distintas especies, pero fue conceptos erróneos, tales como: “toda fiebre requie-
Metchnikoff quien tuvo la idea de aprovechar este re siempre de un antibiótico” o “los más novedosos
y caros son los mejores y más potentes”, acerca de
fenómeno para impedir el desarrollo de microrga-
que esto no es cierto.
nismos patógenos y utilizó las bacterias acidolácti-
cas de la leche ácida para inhibir el desarrollo de las Breve reseña histórica
bacterias nocivas que habitan en el intestino del
A continuación se hace un pequeño bosquejo de la
hombre. Es así como la historia de la antibiosis y de
antibioticoterapia desde Fleming hasta nuestros días,
las sustancias antibióticas se remonta al siglo XIX.
aun a sabiendas de que se cometerán omisiones in-
Fueron numerosos los científicos que se dedicaron
voluntarias por motivo de espacio.
a este estudio, entre los que se encuentran Manasein,
Palotebnov, Gane, Gracia, Dat, etc.; sin embargo,
• 1929. Fleming descubre la penicilina.
el interés por el estudio de estas sustancias se • 1936. Comienza el uso de los sulfamidados.
incrementó de forma extraordinaria al quedar de- • 1941. La penicilina se aplica en la práctica.
mostradas por Fleming las propiedades curativas de • 1944. Waskman descubre la estreptomicina.
la penicilina, al descubrirla en los cultivos del moho • 1947. Se descubre el cloranfenicol en Venezue-
Penicillium notatun. Originalmente se obtuvo de una la a partir del Streptomyces venezuelae.
mezcla de penicilinas conocidas como F, G, K y X, • 1948. Aislamiento de la primera cefalosporina
aunque los mejores resultados se lograron con P. en la salida de un desagüe en las costas de
chrysogenum, del cual se pudo aislar la penicilina G. Cerdeña.
A partir de este momento y luego de su aplica- • 1952. Aislamiento de la tetraciclina.
ción clínica en 1941, el arsenal terapéutico en la lu- • 1957. Se descubre la kanamicina, en Japón.
cha contra las infecciones se ha multiplicado y • 1967. Descubrimiento de la gentamicina.
reforzado con un armamento de extraordinario va- • Década del 70. Introducción de otros amino-
lor, sobre todo cuando se utiliza de forma racional y glucósidos (tobramicina y amikacina).

640
En la actualidad hay cuatro generaciones de cefa- grave, que pone en peligro la vida del enfermo y su
losporinas establecidas y conocidas. actuación debe ser aún más enérgica.
En la década de los 80 aparecen las fluorquinolo- En todos los casos se ha de tener presente el mapa
nas y hoy ya existen varias, entre otras, ciprofloxa- microbiológico del lugar donde se encuentra y co-
cino, norfloxacino, enoxacino, lomefloxacino, nocer que los resultados de los cultivos hay que in-
ofloxacino, plefloxacino y trovafloxacino. terpretarlos teniendo en cuenta el cuadro clínico y
En 1984 se introduce el ácido clavulánico, que la evolución del paciente. Además, no debe olvidar-
unido al ampicillín, la amoxicilina o la ticarcillina, se que el uso de antibióticos combinados o medica-
las hace más efectivas frente a algunas bacterias pro- mentos de amplio espectro exponen al enfermo a
ductoras de betalactamasas. mayor riesgo de reacciones adversas y a que los mi-
También novedosos son los carbapenémicos (imi- crorganismos se hagan más resistentes.
penem, mezopenem), los monobactámicos (aztreo-
Antibiótico
nam, tigemonam y carumonam) y los nuevos
Cuando se va a hacer referencia al antibiótico, hay
macrólidos, que son bacteriostáticos y bactericidas
que tener en cuenta, en primer lugar, la vía de admi-
en dependencia de la concentración y del tipo de
nistración, que dependerá de la gravedad del enfer-
germen (azitromicina, claritromicina, miocamicina, mo, ya que en el caso de que su vida peligre se
rokitamicina, roxitromicina, josamicina, etc.), los impone la utilización de la vía EV; por el contrario,
que tienen sobre todo una excelente utilización por donde no ocurre esto es preferible la vía oral, sobre
vía oral. todo hoy, en que existe una gran variedad de pro-
ductos que administrados por esta vía resuelven in-
Concepto numerables situaciones.
Los antibióticos son sustancias químicas produci- La dosis que se va a utilizar resulta de capital
das por diferentes especies de microrganismos que importancia, por lo que es necesario abandonar de
incluyen bacterias, hongos, actinomicetos, etc., o que una vez y por todas la práctica anticientífica de pres-
son sintetizadas por métodos de laboratorio, que cribir sin conocer la dosis en miligramos por kilo-
suprimen el crecimiento de otros gérmenes y even- gramo de peso y el tiempo de vida media, pues esto
tualmente los destruyen. permitirá un intervalo de dosis que garantice nive-
les sanguíneos adecuados durante el tratamiento. Las
Consideraciones generales complicaciones de los productos se exponen en otro
Para hacer un uso correcto de los antibióticos ante acápite, pues tienen que ser conocidas por el médi-
todo proceso infeccioso, se deben tener presentes co que indica un antibiótico.
los tres elementos participantes: el germen infectante, La penetración del antibiótico en los tejidos y lí-
quidos orgánicos debe también tenerse muy en cuen-
el antibiótico y el organismo atacado (huésped), lo
ta; por ejemplo, las penicilinas y cefalosporinas de
que se conoce como el triángulo de Davis.
tercera generación atraviesan bien las meninges si
éstas están inflamadas. Por otra parte, fármacos li-
Germen infectante
posolubles como rifampicina, cloranfenicol, cipro-
Un tratamiento antibiótico será eficaz si es posible
floxacino y metronidazol, entre otros, llegan bien
aislar el agente causal de la infección o si se puede al LCR.
identificar su sensibilidad a los antibióticos; ambas Por último, no olvidar el costo de los antibióti-
cosas son válidas, sin embargo, cuando el médico se cos, pues los más modernos son casi siempre los más
enfrenta a un paciente, por lo general no dispone de caros.
ninguna de ellas. Es por esta razón que en su elec-
ción inicial, la mayor parte de las veces éste tiene Huésped
que valerse de un “adivinar con acierto” y actuar de Cuando se va a escoger el antibiótico, hay que tener
inmediato, ya sea guiándose por una tinción de Gram en cuenta el estado fisiológico y metabólico del en-
si es posible, o porque al conocer el sitio de la infec- fermo.
ción piensa en el germen o los gérmenes posibles Si se produce hipersensibilidad a una familia de
capaces de estar produciéndola, o porque ésta es tan antibióticos, habrá reacción a los miembros de la

641
misma clase. De hecho, hasta un 7 a 10 % de pa- suficientes para inhibir el desarrollo bacteriano; ellos,
cientes con alergia a la penicilina, harán reacción además, producen el llamado efecto posantibiótico,
cruzada cuando se les administra una cefalosporina que reduce la necesidad de mantener niveles
(anillo betalactámico), sobre todo si la reacción de inhibitorios de forma permanente. Otros fármacos
hipersensibilidad fue del tipo I, o sea, mediada por con efecto bactericida rápido y efecto posantibiótico
la IgE, que produjo anafilaxia, urticaria, angioede- son las fluorquinolonas y los carbapenems (imipe-
ma, edema laríngeo o broncospasmo. nem, etc.); de ahí que modernamente se plantee dar
La mayoría de los antibióticos atraviesan la aminoglucósidos en dosis suficiente, pero con inter-
placenta y alcanzan niveles elevados en el tejido fe- valos de administración amplios (dosificación pul-
tal; otros se secretan en la leche materna, de forma sada), con lo que también se reducen sus efectos
tal, que la madre que amamanta no debe utilizar pro- tóxicos sobre el riñón y el VIII par craneal.
ductos que puedan ser riesgosos para su hijo.
De igual forma, el prematuro y el neonato tienen Niveles hísticos y en líquidos orgánicos
inmadurez de sus sistemas enzimáticos, lo que pue- Los factores fundamentales que intervienen en el
de producir hemólisis si hay déficit de la enzima glu- paso de un antibiótico desde el suero hacia el com-
cosa 6-fosfato deshidrogenasa al administrar, por partimiento extravascular son su peso molecular, su
ejemplo, cloranfenicol o sulfamidados. Por otra par-
hidro o liposolubilidad y el grado de unión a las pro-
te, hay fármacos que se depositan en cartílagos y
teínas.
huesos, como las tetraciclinas y quinolonas, lo que
La concentración de un antibiótico, por ejemplo,
retrasa el crecimiento óseo.
en el LCR, en el curso de una infección de las me-
Farmacocinética ninges por lo general es mucho más alta que en el
líquido normal; o sea, que hay situaciones especia-
Absorción
les que alteran de una forma u otra la penetración de
Una mala absorción de un antibiótico que se admi-
los antibióticos en los diferentes tejidos; es por ello
nistra por vía oral es causa de mala disponibilidad,
que en este tipo de infecciones se tiende a conside-
esto es, escasa capacidad para alcanzar niveles tera-
rar como sensibles las bacterias que son inhibidas
péuticos en infecciones extraentéricas, además de
por concentraciones séricas del antibiótico y no por
problemas de intolerancia gastrointestinal. Para la
mayoría de los antibióticos que se administran por la concentración en los líquidos, por ejemplo, infec-
vía oral, la ingestión de alimentos disminuye o re- ciones urinarias.
trasa su absorción, que se reduce también por la exis-
tencia de una gastrectomía, el uso de antiulcerosos, Metabolismo y excreción
así como en el paciente geriátrico. Los antibióticos en sentido general pierden activi-
dad al ser metabolizados, aunque en ocasiones al-
Concentración en el suero gún metabolito sigue siendo activo frente a un
Antes de hablar de los niveles séricos es necesario microrganismo. A veces el antibiótico es destruido
conocer el concepto de vida media. Se llama vida (betalactámicos) y en otros casos es conjugado con
media plasmática al tiempo en que la concentración glucurónidos a nivel de los hepatocitos, y pierde su
del antibiótico tarda en reducirse a la mitad; aque- actividad, como es el caso de las fluorquinolonas.
llos muy fijados a las proteínas o con pobre elimina- Los antibióticos se excretan por vía biliar o renal,
ción, tienen una vida media más prolongada. esta última glomerular o tubular. En aquellos que se
Parece bien demostrado que los niveles séricos eliminan por vía glomerular, la excreción sufre dis-
de un antibiótico betalactámico deben mantenerse minución en pacientes con insuficiencia renal. Es
por encima de la concentración inhibitoria mínima muy importante conocer esto último, ya que, por
(CIM) en infecciones graves; este criterio es válido, ejemplo, en un enfermo con un filtrado glomerular
además, para los macrólidos, que tienen capacidad en 45 ml/min la semivida del antibiótico puede au-
bactericida lenta. mentar en 2 o 3 veces los valores normales; por ello
Los aminoglucósidos son diferentes y tienen un las modificaciones que hay que realizar y que se ex-
efecto bactericida rápido, y tiempos cortos serán plican más adelante.

642
Clasificación I. Agentes que inhiben algún paso en la sínte-
sis de la pared celular de las bacterias; aquí
Atendiendo a su mecanismo de acción, los anti-
se encuentran los betalactámicos (penicilinas
bióticos se clasifican como se presentan en el cua-
y cefalosporinas), vancomicina y fosfocina.
dro 83.1:
CUADRO 83.1
ANTIBIÓTICOS Y QUIMIOTERÁPICOS
ESTRUCTURA QUÍMICA

Betalactámicos

Penicilinas Cefemas Penemas

Acil-amido penicilinas Cefalosporinas Carbapenemas


• Penicilina G. • Cefalotina. • Tienamicina.
• Penicilina V. • Cefaloridina. • Imipenem.
Análogos a penicilina V • Cefazolina. Monobactámicos
• Feneticilina. • Cefalexina. • Aztreonam.
• Propicilina. • Cefadroxilo. Clavamas
Análogos a penicilina G • Cefacetril. • Ácido clavulánico.
• Clometocilina. • Cefatrizina. Otras
• Azidocilina. • Cefamandol. • Sulbactam.
Estables frente a la • Cefuroxima.
penicinilasa estafilocócica • Cefaclor.
• Meticilina. • Cefotaxima.
• Nafcilina. • Cefoperazona.
• Oxacilina. • Ceftriazona.
• Cloxacilina. • Ceftazidima.
• Dicloxacilina. • Cefonicida.
Aminopenicilinas • Cefixima.
• Ampicilina. • Cefpodoxima.
• Amoxicilina. • Moxalactam.
• Betacina. Cefamicinas
Carboxipenicilinas • Cefoxitina.
• Carbencilina. • Cefotetán
• Ticarcilina.
Sulfopenicilinas
• Sulbenicilina.
Sulfoaminopenicilinas
• Suncilina.
Acil-ureido penicilinas
• Azlocilina.
• Mezlocilina.
Amido penicilinas
• Mecilinama.

Aminoglucósidos Macrólidos Fenicoles Quimioterápicos de síntesis


aminociclitoles
• Estreptomicina. • Eritromicina. • Cloranfenicol. Imidazoles
• Kanamicina. • Oleandomicina. • Tianfenicol. • Metronidazol.
• Neomicina. • Roxitromicina.
• Aminosidina. • Claritromicina.
• Gentamicina. • Diritromicina.
• Tobramicina. • Azitromicina.
• Sisomicina. • Josamicina.
• Espectinomicina. • Diacetil-midocamicina.
• Amikacina. • Rokitamicina.
• Netilmicina.
• Apramicina.

643
(cont...)
Tetraciclinas Epóxidos Lincosamidas Nitrofuranos
• Tetraciclina. • Fosfomicina. • Lincomicina. • Nitrofurantoína.
• Clortetraciclina. • Clindamicina.
• Oxitetraciclina.
• Doxiciclina
• Minociclina.
• Metaciclina.
• Clomociclina.
Glicopéptidos Polimixinas Quinoleínas
• Vancomicina. • Colistina. • Nitroxolina.
• Teicoplanina. • Polimixín B.
Rifamicinas Terraminas
• Rifampicina. • Metenamina.
• Rifamida.
Peptólidos Bencilpirimidinas
• Micamicina. • Trimetoprim.
Glúcidos Naftiridimas
• Novobiocina. • Ácido nalidíxico.
• Enoxacino.
Esteroides Cinolinas
• Ácido fusídico. • Cinoxacino.
Ácidos seudomónicos Piridopirimidinas
• Mupirocina. • Ácido pipemídico.
Quinolonas no fluoradas
• Micoxacino.
• Tioxacino.
Quinolonas fluoradas
• Norfloxacino.
• Ofloxacino.
• Ciprofloxacino.
• Pefloxacino.
• Lomofloxacino.
• Temafloxacino.
• Difloxacino.
• Trovafloxacino.
• Tosufloxacino.

II. Agentes que afectan la membrana celular, carbohidratos bacterianos, como la nitrofu-
donde se hallan las polimixinas. Estas drogas rantoína.
actúan tanto sobre las bacterias inactivas V. Quimioterápicos que actúan como antime-
como en aquellas que se están multiplicando. tabolitos por inhibición competitiva; a este
III. Antibióticos que inhiben algún paso de la grupo pertenecen las sulfamidas y el trimeto-
síntesis proteica (síntesis y replicación del prim.
ADN y ARN polimerasa) o de los ácidos VI. Antibióticos que forman complejo con el
nucleicos. En este grupo se encuentran: ami- magnesio: novobiocina.
noglucósidos, macrólidos, cloranfenicol, VII. Quimioterápicos que forman quelatos con
lincosaminas, tetraciclinas, rifamicinas, áci- los iones inorgánicos, como la nitroxolina.
do nalidíxico y las nuevas fluorquinolonas. VIII. Los antibióticos, según su efecto sobre las
IV. Quimioterápicos que inhiben enzimas in- bacterias, se dividen en bacteriostáticos y
dispensables para el metabolismo de los bactericidas, lo cual depende de si inhiben

644
el crecimiento bacteriano o si, por el con- una infección en este lugar. Hay tres grupos según
trario, producen la lisis de las bacterias. Esta su capacidad para atravesar la barrera hematoen-
clasificación no es del todo exacta, por cuan- cefálica. Uno cuya penetración es adecuada, con in-
to depende del tipo de germen y de la con- flamación o no de las meninges; otro que atraviesa
centración del antibiótico; sin embargo, su bien dicha barrera si las meninges se encuentran in-
conocimiento resulta útil, ya que por lo ge- flamadas, y un último grupo cuya penetración es mí-
neral la asociación de un bacteriostático con nima a pesar de que haya inflamación y cuyo uso no
un bactericida retrasa la acción del último es recomendable.
y, además, hay situaciones donde es impres-
cindible utilizar bactericidas, por ejemplo: PENETRACIÓN
sepsis generalizada, meningoencefalitis bac-
Adecuada con o Adecuada sólo Mínima a pesar
teriana, endocarditis infecciosa, etc. sin inflamación con inflamación de inflamación

Según estos elementos son bactericidas los beta- Trimetoprim Penicilina G Estreptomicina
lactámicos, los aminoglucósidos, los glicopéptidos Sulfamidados Tetraciclinas Gentamicina
Metronidazol Ampicillina Tobramicina
y las quinolonas, y bacteriostáticos, las lincosaminas, Cloranfenicol Fosfomicina Eritromicina
los macrólidos, las tetraciclinas y las sulfamidas, en- Rifampicina Oxaciclina Anfotericín B
tre otros. Pirazinamida Ciprofloxacino Ketoconazole
Etambutol Pefloxacino
Situaciones especiales Isoniacida Aztreonam
Amikacina
Una de las situaciones especiales que se presentan Cefuroxima
es el uso de antibióticos en la mujer embarazada, Ceftriazona
por los posibles efectos que éstos son capaces de Ceftazidina
Cefotaxima
producir en ella, el feto o en el recién nacido a tra- Cefoperazona
vés de la leche materna. Se dividen en relación con Cefoxitina
la embarazada en tres categorías: Vancomicina

1. Los que pueden ser considerados seguros, don- Pacientes con insuficiencia renal
de se encuentran los betalactámicos y la eritro- Estudio muy especial merece el uso de antibióticos
micina.
que a veces son necesarios en enfermos con afec-
2. Los que deben utilizarse con cuidado (amino-
ciones médicas o quirúrgicas de naturaleza renal,
glucósidos, clindamicina, quinolonas, sulfami-
pero que son nefrotóxicos.
dados y metronidazol), sólo si son en extremo
La nefrotoxicidad de un antibiótico y su elimina-
necesarios.
3. Aquellos que están formalmente contraindica- ción por vía renal (glomerular o secreción tubular)
dos: cloranfenicol, tetraciclinas, estelato de eri- son términos distintos. Existen antibióticos muy
tromicina y trimetoprim-sulfa (cotrimoxazole nefrotóxicos, pero que no se eliminan por el riñón y,
o sulfaprim). por tanto, no es necesario una reducción de sus do-
sis en la insuficiencia renal; otros, por el contrario,
El cuadro 83.2 muestra el daño que pueden pro- no son tóxicos para el riñón, pero sus dosis deben
ducir en la madre y en el feto, y su excreción por la ajustarse por eliminarse parcial o totalmente por el
leche materna. Como se aprecia en él, casi todos se riñón.
excretan en mayor o menor grado por la leche ma- Cuando es necesario hacer ajustes, la dosis ini-
terna, dato que siempre debe tenerse en cuenta. cial debe ser la misma establecida para función re-
Otro aspecto de interés resulta la penetración de nal normal, con el objetivo de alcanzar niveles
los diferentes tipos de antibióticos en el SNC (atra- séricos adecuados; luego las modificaciones se de-
viesan la barrera hematoencefálica), ya que con esos ben hacer aumentando el intervalo entre las dosis o
conocimientos es posible elegir de forma científica conservando éste, pero disminuyendo la dosis del
cuál es el más adecuado en un paciente afecto de producto.

645
CUADRO 83.2
RIESGOS POTENCIALES DE ALGUNOS ANTIBIÓTICOS EN EL EMBARAZO

Antibiótico Madre Feto Leche materna

Considerados seguros
Penicilinas. Alergia. ——— Poca excreción.
Cefalosporinas. Alergia. ——— Poca excreción.
Eritromicina. Alergia. ——— Poca excreción.

Uso cuidadoso
Aminoglucósidos. Ototoxicidad y nefrotoxicidad. Tóxico al VIII par. Moderada excreción.
Clindamicina. Alergia y colitis seudomembranosa. ——— Poca excreción.
Quinolonas. —— Depósito en los cartílagos. ?
Sulfamidados. Alergia. Kernicterus. Hemólisis. Moderada excreción.
Metronidazol. Discrasias sanguíneas. ? Moderada excreción.

Contraindicados
Cloranfenicol. Anemia aplástica. Síndrome del bebé gris. Moderada excreción.
Tetraciclinas. Hepatotoxicidad. Afectación en dientes y huesos. Moderada excreción.
Eritomicina (estelato). Hepatotoxicidad. ——— Moderada excreción.
Trimetoprim/sulfa. Vasculitis. Antagonismo de folatos. Moderada excreción.
Efecto teratogénico.
Kern icterus.

Alargar el intervalo es más cómodo y sencillo para pocos en los que las dosis deben ser modificadas en
el médico. La disminución de la dosis debe hacerse caso de insuficiencia hepática. En su gran mayoría
de acuerdo con el aclaramiento de creatinina, ya que éstas se modifican si aquella concomita con una in-
los fármacos que se eliminan de forma intacta por suficiencia renal.
vía glomerular guardan relación con la de la creati-
nina. Una fórmula útil es la de Cockroft-Gault, que Uso correcto de los antibióticos
se expone a continuación: No existe una regla única ni una fórmula mágica
para la correcta utilización de un antibiótico, por-
ClCr:
.
Peso en kg (140 – edad en años) que el antibiótico ideal no existe, ya que ninguno
.
72 creatinina (mg %) está exento de peligros, pero resulta útil el conoci-
miento de lo que se mencionará más adelante para
En las mujeres los resultados se multiplican lograr un empleo lo más acertado posible. De ahí
por 0,85. las siguientes reflexiones:
Hay que tener en cuenta que el paciente geriátrico 1. A la hora de seleccionar un antibiótico el mé-
tiene niveles bajos de creatinina en el suero, debido dico debe conocer y tener en cuenta las carac-
a la disminución de la masa muscular; sin embargo, terísticas de la flora microbiana en el sitio de la
la filtración glomerular se encuentra también redu- infección, porque en ese momento no posee
cida entre un 35 y un 50 % para enfermos entre 60 datos que le señalen el germen en cuestión (cul-
y 90 años de edad. Además, se debe tener cuidado tivos u otros estudios).
con las personas obesas, en las que hay expansión 2. Debe ser cuidadoso, además, en la no utiliza-
del volumen del líquido extracelular. ción de fármacos con igual mecanismo de ac-
ción, así como conocer las diferentes familias
Pacientes con insuficiencia hepática de antibióticos con el objetivo de no combi-
Por último y no por menos importante, se hará refe- narlos.
rencia al uso de antibióticos en la insuficiencia he- 3. No es bueno realizar cambios del producto an-
pática. Diversos antibióticos se metabolizan en el tes de las 72 h de prescrito, a no ser que la con-
hígado y tienen excreción biliar; sin embargo, son dición clínica del enfermo así le exija.

646
4. Es imprescindible la realización de cultivos, puede ser tan fatal como una prolongación inade-
los que servirán posteriormente como un arma cuada del tratamiento. Si bien es cierto que una amig-
muy valiosa. dalitis aguda o una neumonía neumocócica curan
5. Es también importante utilizar antibióticos con en un lapso de 7 a 10 días, hay situaciones como
los que uno esté familiarizado, sin olvidar su tuberculosis, endocarditis infecciosa, osteomielitis,
toxicidad (sobre todo los de amplio espectro) y pericarditis bacteriana, fiebre tifoidea, meningoen-
efectos adversos (cuadro 83.3). cefalitis bacteriana o artritis séptica, entre otras, don-
de es necesario mayor tiempo de administración para
CUADRO 83.3
PRINCIPALES EFECTOS ADVERSOS DE ALGUNOS
lograr resultados satisfactorios.
ANTIBIÓTICOS
Fracaso del tratamiento
Antibiótico Efectos adversos Antes de considerar que un antibiótico no es eficaz
Penicilinas. Hipersensibilidad, anafilaxia, en una sepsis determinada, conviene revisar las po-
diarreas, leucopenia, trombocitopenia, sibles causas que entorpecen o impiden su acción,
nefritis, convulsiones. como son:
Cefalosporinas. Hipersensibilidad, anafilaxia, diarreas,
citopenias, aumento de aminotrans- 1. Dosis o tiempo de administración insuficien-
ferasas. te o intervalo de dosis no adecuado.
Aminoglucósidos. Nefro y ototoxicidad, fiebre, bloqueo 2. Fármaco elegido no apropiado para la sepsis
neuromuscular. en cuestión; por ejemplo, penicilina en una
Cloranfenicol. Intolerancia digestiva, anemia infección nosocomial.
aplástica, fiebre, neuropatía periféri- 3. Infecciones no producidas por bacterias o pro-
ca, síndrome del bebé gris. ceso no infeccioso, como vasculitis o linfoma.
Eritromicina. Intolerancia gástrica, fiebre, diarreas, 4. Aparición de cepas resistentes.
estomatitis, hepatitis colestásica, fle- 5. Déficit en el drenaje de colecciones purulentas
bitis.
o no extracción de cuerpos extraños presen-
Quinolonas. Intolerancia gástrica, insomnio, cefa- tes.
lea, alteraciones visuales, depósito en
6. Efectos secundarios, tales como fiebre medi-
cartílagos.
camentosa.
Sulfonamidas. Hipersensibilidad, anafilaxia, síndro- 7. Alteraciones de los mecanismos de defensa
me de Stevens-Johnson, cristaluria,
hepatitis, citopenias. del huésped.
8. Oclusión arterial que impide la llegada ade-
Tetraciclinas. Intolerancia digestiva, fotosensibili-
dad, depósito en huesos, hepatotoxi-
cuada del antibiótico.
cidad. 9. Secuestro óseo.
10. Bacteriemia por catéteres endovenosos u otro
tipo de prótesis, o embolia pulmonar.
6. Una pauta recomendada ante una enfermedad 11. Anormalidades anatómicas u obstrucciones en
grave que pone en peligro la vida del enfermo, algún sistema de drenaje.
es la asociación de un betalactámico con un no 12. Efecto no óptimo por pobre penetración
betalactámico (por lo general un aminoglucó- (desactivación o disposición atípica).
sido), hasta que las evidencias clínicas o mi-
crobiológicas nos hagan pensar de una forma Resistencia antibiótica
determinada. En estos momentos todos los microrganismos han
desarrollado mecanismos de resistencia a los anti-
El uso de antibióticos profilácticos aparece más bióticos y la mayor parte de ellos se originan en las
adelante. Es necesario mencionar que en algunas bacterias de la flora normal del hombre.
situaciones el tratamiento debe prolongarse por en- La resistencia tiene un carácter genético y, por
cima de lo que se denomina tiempo clásico, hecho tanto, una bacteria resistente propaga esta situación
este que debe conocerse, ya que una interrupción a sus descendientes. Ésta produce en 24 h más

647
de 1 000 millones de descendientes. La resistencia contra gérmenes gramnegativos (aminoglucósidos,
no heredada puede adquirirse por incorporación de aminociclitoles, monobactámicos, etc.).
genes exógenos procedentes de otras bacterias re- Por último, existe un tercer grupo que cae en la
sistentes; de ahí que ya adquirida se hereda con alta categoría de antibióticos de amplio espectro, como
estabilidad. La incorporación de genes exógenos se las cefalosporinas, macrólidos, quinolonas y tetra-
hace mediante la conjugación sexual entre bacterias, ciclinas, entre otros, efectivos contra gérmenes gram-
por trasmisión de resistencia por medio de virus positivos y gramnegativos.
(fagos) y por incorporación directa de ADN de bac-
terias resistentes muertas. Los genes de resistencia Antibiograma
constituyen unidades modulares (transposomas) ca- El objetivo del antibiograma es realizar una predic-
paces de insertarse en distintas moléculas de ADN, ción sobre la posibilidad del éxito terapéutico que
lo que amplía su capacidad de diseminación en el se logrará alcanzar con el uso de un determinado
mundo microbiano. antibiótico en un paciente en el que se ha obtenido
Otro mecanismo de resistencia intrínseca es la
el o los gérmenes causantes de la infección. Éste es
expulsión de una cantidad de antibiótico a partir del
el objetivo primordial para los clínicos; pero para
compartimiento intracelular. La membrana celular
los microbiólogos y epidemiólogos resulta impor-
de las bacterias gramnegativas (lipopolisacáridos)
tante aportar datos sobre la resistencia microbiana
tiene una permeabilidad limitada; esto reside en pro-
en una comunidad dada, o quizás para conocer nue-
teínas especiales conocidas como porinas, que apor-
vos mecanismos de resistencia.
tan canales específicos a través de los cuales circulan
El antibiograma clásico se realiza por métodos
sustancias al espacio periplásmico y, por último, al
interior de las células, lo que hace que haya resis- de difusión con discos de papel absorbente estéril,
tencia intrínseca de las bacterias gramnegativas a las que están impregnados con una concentración de-
penicilinas, eritromicina y vancomicina, y de la terminada de la droga que se va a probar. El método
Pseudomona aeruginosa al trimetoprim. es rápido, fácil de realizar y permite conocer conta-
También la bacteria es capaz de codificar un nue- minaciones.
vo producto resistente que sustituye al blanco origi- La OMS recomienda una técnica por difusión en
nal. Ya se han obtenido betalactámicos con actividad la que se utiliza un inóculo estándar (método de
bacteriana mínima que se adhieren de forma irreversi- Kirby y Bauer), que permite discriminar tres cate-
ble o inhiben a las betalactamasas; estos compues- gorías de respuesta:
tos son sulbactam, tazobactam, ácido clavulánico y
otros. • Sensible. Significa que la infección causada por
La resistencia es también el resultado de otras la cepa ensayada es probable que responda a la
enzimas que acetilan los grupos amino y fosforilan dosis recomendada del antibiótico para este tipo
o adenilan los grupos hidroxilos de los aminoglucó- de infección y especie infectante.
sidos. El médico debe conocer los perfiles de resis- • Resistente. No son del todo inhibidas por con-
tencia de los gérmenes patógenos y su ambiente centraciones dentro de límites terapéuticos.
inmediato, y así estará en condiciones de elegir el • Intermedia. Incluye cepas que pueden respon-
fármaco en cuestión y la duración del tratamiento. der a dosis extremadamente elevadas.

Estudios microbiológicos Los métodos de dilución en tubos permiten cono-


La tinción de Gram mantiene su vigencia y utilidad, cer la CIM, representada como la menor concentra-
siempre y cuando por las características de la sepsis ción de la droga que inhibe el crecimiento bacteriano.
se realice un estudio directo que proporcione una Existen pacientes con una buena evolución clíni-
gran ayuda a la hora de escoger el antibiótico que se ca de su cuadro infeccioso, pero que sin embargo
va a prescribir (LCR, absceso, etc.). presentan un antibiograma donde hay un mecanis-
De acuerdo con esta técnica se divide a los anti- mo de baja resistencia; es lo que se conoce como
bióticos en dos tipos: contra gérmenes grampositi- resistencia críptica, o sea, que tienen una CIM
vos (penicilinas, lincosaminas y glicopéptidos) y anormalmente alta, aunque sea de forma escasa.

648
La evolución del enfermo de forma satisfactoria vorecer la aparición de infecciones por gérmenes
no puede ser sustituida por el mejor y más acabado oportunistas.
de los antibiogramas. La sensatez y el buen juicio Lo fundamental en este tipo de enfermo consiste
clínico decidirán. en medidas de asepsia y antisepsia, movilización
Por último, se hará referencia a la actividad bac- precoz, aspiración de secreciones con todos los cui-
tericida en el suero, prueba útil que permite deter- dados requeridos, etc.
minar la capacidad antimicrobiana del suero del Sin embargo, la literatura médica actual sí preco-
paciente. Más recientemente han aparecido pruebas niza el uso de antibióticos profilácticos en las situa-
de tipo bioquímico (cromatografía y radioinmu- ciones que se mencionan a continuación por su
noensayo), que son complejas y de resultados irre- probada eficacia; éstas son:
gulares.
1. Lesiones cardíacas susceptibles de producir
Terapia combinada una endocarditis infecciosa.
Su efecto es más amplio, sobre todo cuando se trata 2. Infecciones recurrentes por Staphylococcus
de infecciones graves, pero nunca será de rutina y aureus.
estará basada siempre en un criterio médico. 3. Contactos de pacientes con enfermedad me-
La combinación debe ejercer un efecto aditivo o ningocócica.
sinérgico, ya que en ocasiones las combinaciones 4. Cistitis recurrente por Escherichia coli.
favorecen la colonización por hongos. 5. Cirugía ocular.
Las ventajas y desventajas de este proceder se 6. Cirugía limpia cardíaca, vascular, neurológi-
resumen de la forma siguiente: ca y ortopédica.
Ventajas 7. Cirugía colorrectal.
• Uso en infecciones mixtas y graves (abscesos 8. Cirugía sucia (ruptura de vísceras y heridas
traumáticas).
hepáticos, pulmonares, cerebrales, intrabdomi-
9. Trasplantología.
nales, Tb pulmonar,etc.).
10. Neutropenias y otros procesos hematológicos
• Tratamiento del shock séptico.
malignos.
• Para lograr un aumento de la actividad antibac-
teriana. Interacciones de algunos antibióticos
Desventajas
con otras drogas
• Mayor toxicidad.
• Posibilidad de antagonismo. No sería posible abordar todas las interacciones de
• Aumento del costo. los antibióticos existentes en la actualidad con otras
drogas que pueden estar utilizando los pacientes, por
Empleo profiláctico de los antibióticos lo que sólo se hará referencia a aquellas que se con-
sideran de más valor.
Aunque ya se hizo referencia al peligro de la utili-
El uso conjunto de los aminoglucósidos con cefa-
zación de los antibióticos para “proteger”, no es
losporinas, en especial las de primera generación (por
posible negar que su uso profiláctico ha logrado cier-
ejemplo, la cefalotina), aumenta la toxicidad (sobre
to éxito, sobre todo en el campo de la cirugía, donde todo la auditiva) de las primeras; lo mismo ocurre si
ha sido posible la realización de operaciones que el paciente está utilizando el diurético ácido etacrí-
antes del descubrimiento de los antibióticos estaban nico.
condenadas al fracaso. Sin embargo, el empleo de El empleo concomitante de anticoagulantes ora-
estas drogas de forma profiláctica en pacientes con les con metronidazol, sulfas o cefamandol, puede
enfermedades cerebrovasculares, procesos neoplá- incrementar la actividad anticoagulante, por lo que
sicos con algunas excepciones y otras afecciones, es necesario controlar al enfermo a través del TPT
no representa ventaja alguna en la prevención de Kaolín.
infecciones intercurrentes, ya que la mayoría de ellos, Los compuestos digitálicos unidos a las tetraci-
a pesar del tratamiento con antibióticos, terminan clinas o a la eritromicina, producen aumento de la
sus días presa de un proceso séptico, además de fa- toxicidad de la digital.

649
En pacientes diabéticos que usan sulfonilureas de Esta política debe partir de la correcta selección
cualquier generación, hay que tener mucho cuidado del producto específico para el tratamiento de una
si se prescribe cloranfenicol o sulfas, ya que incre- determinada infección, tanto del paciente aislado
mentan la actividad hipoglicemiante de esos com- como de la comunidad; elección que requiere estar
puestos. actualizado de los nuevos conocimientos científico-
técnicos en este campo, ya sea de los fármacos como
Las tetraciclinas no deben indicarse junto a
de las infecciones que se van a tratar y sensibilidad
antiácidos o sales de hierro, porque ocurre una dis-
o resistencia de los antibióticos. Debe ser, por tanto,
minución en la absorción del antibiótico.
racional, juiciosa y controlable (patrones de pres-
Por último, es bueno destacar que la utilización cripción, dispensación y uso en la comunidad).
de metronidazol en pacientes que ingieran o puedan En primer lugar, hay que tener la información so-
ingerir bebidas alcohólicas, produce una reacción de bre su empleo; más del 90 % del consumo total de
tipo disulfiram (efecto antabuse), que a veces es fatal. estos productos se realiza en el medio extrahospita-
lario. En segundo lugar, se debe conocer la etiología
Política de antibióticos de la infección y la resistencia a los antibióticos.
Además, tener una correcta información sobre indi-
Los antibióticos no son productos de consumo, su
caciones, prescripción y efectos secundarios; acer-
utilización entraña la transformación de la ecología tada selección, así como correcta dispensación y total
local y, por tanto, representan una responsabilidad jerarquización; educación detallada en la comuni-
social; de ahí que la política de antibióticos debe ir dad, de mucha importancia; información actualiza-
encaminada a una adecuación entre el uso y el con- da a los profesionales de la salud, y mecanismos de
sumo de ellos y las necesidades de la población. evaluación y control.

650
BIBLIOGRAFÍA

1. ACHARYA, G et al: “Treatment of typhoid fever: Organización Panamericana de la Salud, 1997


Randomized of a three-day course of ceftriaxo- (Publicación Científica: No. 564): 1–462.
ne versus a fourteen-day course of chloramphen- 12. BENNETT, J. E.: “Aspergilosis”, en Harrison´s:
icol”, Am. J. Trop. Med. Hyg., 1995: 52: 162. Principles of Internal Medicine, 14 th ed.,
2. AL-SHAMAHY, H. A. y WRIGHT, S. G.: “Enzime- McGraw-Hill Book Company, New York, 1998.
linked immunoabsorbent assay for brucella 13. -------------: “Criptococcosis”, en Harrison‘s:
antigen detection in human sera”, J. Med. Principles of Internal Medicine, 14 th ed.,
Microbiol., 1998, Feb.: 47(2): 169–72. McGraw-Hill Book Company, New York, 1999.
3. ARCHER, G. L. Y POLK R. E.: “Treatment and pro- 14. BERKEC, S. et al: “Agranulocitosis as a compli-
phylaxis of bacterial infections”, en Harrison’s: cation of acute infectious mononucleosis”, Med.
Principles of Internal Medicine, New York, Preg. C., Jul.–Aug., 1998: 51(7–8): 355–8.
McGraw-Hill, 14th ed., 1998, vol 1: 856–68. 15. BITTENCOURT, P.; TREVISOL, C.; SANDER, J.W.A.S.;
4. ARIZA, I.: “Brucelosis”, en Farreras-Rozman: Me- SILVADO, C.S. Y WITTIG, E.O.: “Ketoconazole in
dicina Interna, 4ta imp., Madrid, Clamades SL, the treatment of cryptococcosis of the central
1998, vol. 2: 2312–17. nervous system”, Neuropsiquiatr., 1991, Jun.:
5. A RKILA , E.; J. S EPILA ; E. L AURAKAINEN Y J. 49(2): 208–10.
SNANPHA: “Peritonsilar abscess associated with 16. BOES, M.; PRODENS, A.P.; SCHMIDT, T.; CARROLE,
infectious mononucleosis”, J. Otorhinolarying, M.C. Y C HEN , J.: “A critical role of natural
1998, May–Jun.: 60(3): 159–63. immunoglobulin M in immediate defense against
6. AUJARD, Y. et al: “Guide Pratique de L’Anti- systemic bacterial infection”, J. Exp. Med., 1998:
biotherapie D’Urgence en Pediatrie”, 5ta ed., 188(12): 2381–6.
Laboratoires Roussel, París, 1997: 16–17. 17. BONIFAZ, A.; ROMERO F. DE LA PAZ, M. Y ARAIZA,
7. AYALA, I.; FORS, M.E.; PUENTES, J. Y MAS M.: J.: “Criptococosis y su diagnóstico de laborato-
“Nuevo medio de cultivo para el aislamiento de rio”. Lab. Acta, 1996, Abr.–Jun.: 8(2): 37 – 43.
leptospira SP”, Rev. Cubana Militar, 1998: 27(1): 18. BOSEH GARCÍA, R.J. Y ARCE CALVO, M.F.: “Der-
44–48. matosis escamosa y eritematodescamativas”, en
8. BAQUERO, F.: En Plan de formación en Enferme- Bosch García, R.J. y Herrera Cebalbs, E.: Tras-
dades Infecciosas. Módulo III. Antimicrobianos. tornos mucocutáneos en el SIDA. Claves diag-
Ed. Médica Internacional, S.A., Madrid, Espa- nósticas y terapéuticas, España, Drug Farma.,
ña, 1991: 11–16, 23–35. 1997: 51–66.
9. BARTLETT, J. G.: 1997. Pocket Book of Infectious 19. CABRERA HERRUZO, R.: “Infecciones en UCI”, en:
Disease Therapy, Williams and Wilkins, 8va. ed., Prevalencias de las infecciones nosocomiales en
1997: 133–36. los hospitales españoles, Proyecto EPINE (5
10. BEMBIBRET, R., Y LÓPEZ, T.: “Leptospirosis en años), Barcelona: EPINCAT, 1995: 293–314.
cuidados intermedios”, Rev. Cub. Hig. Epide- 20. CAUMMIES, E.; SANTI, C.; FÉLIX H.; BUCAIRE, F.;
miol., 1998: 36(2): 113–15. DANIS, M. Y GENTILINE, M.: “Signes cutánes de
11. BENNESON, A.: Manual para el control de las en- la dengue. A propois de trois de cos”, Bull Sue
fermedades trasmisibles, 16 ed., Washington, Path. Ex., 1993: 86: 7–11.

651
21. CLEMMONS, K.V., Y STWEVENS, D.A.: “Compar- virus induced apoptosis in mouse neuroblastome
ison of fungizone, amphotec, ambisone and cells”. J. Virolog., 1996: 70(6): 4090–96.
abelcet for treatment of systemic murine cryp- 35. DESPRES . P.; FRANKIEL, M.P.; CECCALDI , P.E.;
tococcosis”, Anticrob. Agents Chemoter., 1998, DUARTE DOS SANTOS, C. Y DEUBEL, V.: “Apoptosis
Apr.: 42(4): 899–902. in the mouse central nervous system in response
22. Cuba. Ministerio de Salud Pública: Programa to infection with mouse neurovirulent dengue
de Prevención y Control de la Rabia, Ciudad de viruses”. J. Virolog., 1998: 72(1): 823–29.
La Habana, MINSAP, 1998: 7–47. 36. DISMUKES WILLIAMS, E.: “Histoplasmosis”, en
23. CUNHA, B.A.: “Fever of unknown origin in the Cecil: Tratado de Medicina Interna, 20ª Ed., Ed.
1980”, Arch. Intern. Med., 152, 1992: 51. McGraw-Hill Interamericana, 1998, cap. 348:
24. CREPIN, P. Y AUDREY, L.: “Intravitam diagnosis 2094–97.
of human rabies by PCR using saliva and 37. DONALD, B.L.: “Emerging and reemerging in-
cerebrospinal fluid”, J. Clin. Microbil., 1998, fections: the societal variables”, Internat. J.
April: 36(4): 1117–21. Infec. Dis., 1996: 1: 59–62.
25. CHAMIZO, H.A.; CRUZ, R. Y BARROTO, R.: “Estu- 38. DOI, S.A.; TAN, S.T.; LIAM, C.K. Y NAGANATHAN,
dio geoepidemiológico de la leptospirosis huma- K.: “Cryptococcosis at the University Hospital
na en Cuba”, Rev. Cub. Hig. Epidemiol. 1996: Kuala Lumpur”, Trop. Doct., 1998, Jan.: 28(1):
34(1): 15–22. 34–9.
39. DOTRES MARTÍNEZ, C.: Actualización del progra-
26. CHAN, D.M.Y SHAIO, M.F.: “Production of inter-
ma de prevención y control de la infección
leukin – 1 (II – 1) and II – 1 inhibitor by human
intrahospitalaria, La Habana, Dirección Nacio-
monocites exposed to dengue virus”, J. Infect.
nal de Epidemiología, 1996: 27–35.
Dis., 1994: 170: 811–17.
40. EDANTE, Y.; BARUCH, Y.; LATCHER, J.; FURMANE,
27. CHEN, H.H.; LEU, C.Y.; LEE, P.I.; LEU, K.H. Y
E.; BARLAN, I. Y ASEY, N.: “Severe cholostatic
HUANG, L.M.: “Mononucleosis syndrome and
jaundice induced by Epstein–Barr virus infection
coincidental human herpes virus 7 and Epstein–
in the elderly”, J. Gastroenterol. Hepatol., 1998,
Barr virus infection”. Arch. Dis. Child., 1998,
Aug.: 13(8): 82–4.
May: 78(5): 479–80.
41. EDWARDS, J.E. JR: “Infection caused by Candida,
28. CHEON, J.E.; KIM, M.Y. Y LEE, J.S.: Thoracic ac- Actinomyces and Nocardia species”, en Stein,
tinomycosis: CT findings radiology, 1998, H. Jay: Internal Medicine, 4ta. ed., St. Louis,
Oct.: 209(1): 229–33. Missouri, Mosby, 1994: 2227–34.
29. DAILY, P.D.: “Antivirals Drugs”, en: The Merck’s 42. ERNST, M.E.; KLEPSER, M.E.; FOUTS, M. Y MA-
Manual, 17 ed., New Jersey, 1999: 1127–35. RANGOS, M.N.: “Tetanus: pathophisiology and
30. DALE, C.: “Fiebre de origen desconocido”, en management”. Ann Pharmacother., 1997, Dec.:
Cecil: Tratado de Medicina Interna, 20ª ed., vol 31(12): 1507–13.
III, Ed. McGraw-Hill Interamericana, 1996: 43. FAR, R.W.: “Leptospirosis”, Clin. Infect. Dis.,
1769–73. 1995: 21: 1–8.
31. DARRAS, J.C.; LUCET, J.C.; LAISBY, J.P.; CHOCHI- 44. FLORES DE APODACA, Z. et al: “Candidiasis eso-
LLON, C.; CASALINO, E.; LOLY, V. et al: “Invasive fágica en pacientes con SIDA. Estudio clínico y
pulmonary aspergilosis in AIDS”, Pathol. Biol., epidemiológico”, Rev. Cub. Med. Tropical IPK,
París, 1998, Jun.: 46(6): 416–17. 1997: 49(3): 174–80.
32. DAVIS CHARLES, E.: “Trypanosomiasis”, en Kelley 45. FORTHAL, D.N. Y LANDUCCI, G.: “In vitro reduction
Textbook of Internal Medicine. 2nd Ed, Philadel- of virus inefectivity by antibody-dependent cell-
phia, Lippincoat, 1992: 1528–32. mediated immunity”, J. Immunol. Methods,
33. DENSEN, P.; WEINBAUM, D.L. Y SANDE, M.A.: 1998: 220(1-2): 129–38.
“Basic principles of infections disease”, en Stein, 46. GALLARDO PÉREZ, M.A. Y HERRERA CEBALLO, E.:
JH: Internal Medicine, 4th ed., St Louis: Mousley “Piel e infección por VIH”, en Bosch García,
Year-Book, 1994: 1788–91. R.J. y Herrera Ceballos, E.: Trastornos muco-
34. D ESPRES, P.; FLAMAND, M.; C ECCALDI, P.E. Y cutáneos en el SIDA. Claves diagnósticas y te-
DEUBEL, V.: “Human isolates of dengue type 1 rapéuticas, España, Drug Farma., 1997: 11–21.

652
47. GLYNN, J.R. et al: “Infecting dose and severity T-cell mediated lysis”, Int. J. Cancer, 1998, May:
of typhoid fever: analysis of volunteer data and 76(5): 694–701.
examination of the definition of illness used”, 61. J ANEWAY , C H ., A.; T RAVERS , P.; H UNT , S. Y
Epidemiol. Infect., 1995: 115: 23. WALPORT, M.: “The immune system in health and
48. G UBLER , D. Y C LARK , G.: “Dengue/Dengue disease. Host defense against infection”, en
Hemorrhagic fever: The emergence of a global Immunobiology, 3ra.ed., London, Churchill
health problem”, Emerging Infectious Disease, Livingstone, 1997: 1–9, 52.
1995: 1: 55–57. 62. J ONES B., R OBERT : “Chlamydian Infection
49. Guideline for HIV Medical Evaluation and (Trachoma)”, en Kelley: Textbook of Internal
Preventive Care for Adults, Ed. Phisician, 1999 (2). Medicine, 2da Ed., Philadelphia, Lippencoat,
50. GUZMÁN, M. Y KOURI, G.: “Advances in dengue 1992: 1470 71.
diagnosis”, Clin. Diag. Lab. Inmunolog., 1996: 63. KAHN, J.O. Y WALKER, B.D.: “Acute Human
3: 621–27. Immunodeficiency Virus Type 1 Infection”, New
51. GUZMÁN, M. et al: “Dengue en Nicaragua. Rein- Eng. J. Med.,1998: 339(1): 33–39.
troducción del serotipo 3 en las Américas”, Bol. 64. KAI HOK Y BOS, R.: “Lucha contra los vectores
of Sanit. Panam., 1996: 121: 102–9. del dengue”, Singapur, historia de un éxito, Foro
52. H EALSTEAD , S.B.: “Dengue”. Rev. Infect. Mundial de la Salud, 1997: 8(1): 105–8.
Dis.,1998: 6: 275–88. 65. KARCHMER, W.A.: “Terapéutica antimicrobiana”,
53. ----------------: “Pathogenesis of dengue en Cecil: Tratado de Medicina Interna, McGraw-
Hill Interamericana (Ed. Ciencias Médicas, La
challenges to molecular biology science”, Rev.
Habana), 20a ed., T.3, 1998: 1799–1812.
Infect. Dis., 1998: 239: 476–81.
66. KAZURA, W.J.; Freedman, D. y Salata, A.R.:
54. HENNESSY, T.W. et al: “A national outbreak of
“Filariasis and tropical eosinophilia”, en Kelley:
salmonella enteritidis infections from ice cream”,
Texbook of Internal Medicine, 2da ed., Philadel-
N. Engl. J. Med., 1996: 334: 1281.
phia, Lippencoat, 1992: 1546–49.
55. HERRERA BASTÓ, E.; PREVOTS, D.R.; ZÁRATE, M.L.;
67. K ING , C.: “Enfermedades helmínticas”, en
S ILVA , J.L. Y S EPÚLVEDA , J.: “First reported
Bennett, C. y Plum F., Cecil: Tratado de Medi-
outbreak of classical dengue fever at 1700 meters
cina Interna, McGraw-Hill Interamericana (Ed.
above sea level in Guerrero state, México”, Amer.
Ciencias Médicas, La Habana), 20ª ed., T. – 2,
J. Trop. Med. Hyg., 1998: 46(6): 649–53.
1998: 2217–40.
56. HESSAIN, M.A.; MAESAKI, S.; KAKEYA, H.; NODA, 68. KING H, CHARLES: “Schistosomiasis”, en Kelley:
T.; YANAGIHARA, K.; SASAKI, K. et al: “Efficacy Textbook of Internal Medicine, 2da. ed., Phila-
of NS-718, a novel lipid nanosphere-encapsula- delphia, Lippencoat, 1992: 1559–61.
ted amphotericin B, against cryptococcus 69. KNOCKAERT, D.C. Y VANNESTE, L.J.: “Fever of
neoformans”, Antimicrob. Agents Chemother, unknown origin in the 1980”, Arch. Intern. Med.,
1998, Jul: 42(7): 1772–5. 152; 1992: 51.
57. HOSPENTHAL, D.R. Y BENNETT, J.E.: “Flucytosine 70. KURASAWA, T.; IKEDA, N.; SATO, A.; INOUE, T.;
monotherapy for ctyptococcosis”, Clin. Infest. ISHIDA, T.; OKAZAKI, M. et al: “A clinical study
Dis., 1998, Aug.: 27(2): 260–4. of pulmonary cryptococcosis. The Study Group
58. IVANOFF, B. et al: “Vaccination against typhoid of respiratory Mycosis in Kyoto”, Kansensho-
fever: present status”, Bull World Health Organ, gaku Zasshi, 1998, Apr.: 72(4): 352–7.
1994: 72: 957. 71. LEE, L.A. et al: “Increase in antimicrobial-resis-
59. IWAMASA, T. et al: “Epidemic and non-epidemic tant salmonella infections in the United States
Kaposi sarcoma. Diagnosis, staging and treat- 1989 – 1990”, J. Infect. Dis., 1994: 170: 128.
ment”. Critical reviews in Oncology/Hematolo- 72. LÓPEZ, D.L.: IL-2 en ruta a la erradicación del
gy, 1996: 24: 153–63. SIDA ahora, 1999, Feb. – Mar.: 9–12.
60. JAGER, M. et al: “Epstein–Barr virus infected B 73. LOZANO DE LEÓN, F. et al: “Fiebre de origen des-
cell of males with the X-linked lymphoprolifer- conocido: Actitudes diagnósticas”. Medicine,
ative syndrome stimulate and are susceptible to 1998: 7(77): 3558–66.

653
74. LYNCH, D.A.: “Imaging of asthma and allergic recruits in Israel: preliminary assesment of
bronchopulmonary mycosis”, Radiol. Clin. N. vaccine effect”, Scand. J. Infect. Dis., 1998:
Am., 1998, Jan.: 36(1): 129–42. 30(3): 263–4.
75. MANUEL, R.J. Y KLIBBLER, C.C.: “The epidemiol- 88. MIYAMOTO, N. et al: “A case of adult chronic
ogy and prevention of invasive aspergillosis”, J. active EB virus infection asociated with
Hosp. Infect., 1998, Jun.: 39(2): 95–109. prolongued hepatitis after the occurrence of
76. MALIK, G.M.: “Early clinical response to different infectious mononucleosis”, Nippon Sho Kakibyo
therapeutic regimens for human brucellosis”. Am. Gakkai Zassbr, 1998, Aug.: 95(8): 905–9.
J. Trop. Med. Hyg., 1998, Feb.: 58(2): 190–7. 89. MOELLERING, R.C.. JR. Y ELIOPOULOS, G.M.: “Prin-
77. MARIANNEAU, P.; CARDONA, L.; EDELMAN, L.; ciples of anti-infective therapy”, en J.H. Stein’s:
D EUBEL , L. Y D EPRESS , P.: “Dengue virus Internal Medicine, St Louis, Mo, Mosby-Year
replication in human hepatoma cells activates Book Inc., 4ta. ed., 1994: 1800–22.
NF-Kappa B which in turn induces apoptotic cell 90. MULVEY, M.A.; LÓPEZ-BOADO, Y.S.; WILSON, C.L.;
death”. J. Virolog., 1997: 71(4): 3244–49. ROTH, R.; PARKS, W.C.; HEUSER, J. et al: “Induc-
78. MARR JOSEPH, J.: “Leishmaniasis”, en Kelley: tion and evasions of host defenses by type 1-
Textbook of Internal Medicine, 2da. ed., Phila- piliated uropathogenic Escherichia coli”,
delphia, Lippencoat, 1992: 1525–27. Science, 1998: 282(5393): 1494–7.
79. -----------------: “Toxoplasmosis”, en Kelley: 91. MUÑOZ, B. Y VILLA, L.F.: Manual de Medicina
Textbook of Internal Medicine, 2da. ed., Phila- Clínica. Diagnóstico y terapéutica, Ed. Díaz de
delphia, Lippencoat, 1992: 1535–37.
Santos SA, 1993, Madrid, España, 377–427.
80. MARTÍNEZ, E.: Dengue y Dengue hemorrágico,
92. MYSKOWSKI, P. Y WHITE MANY, H.: “Fungal dis-
Ed. de la Universidad de Quilmes, Baires, 1998:
ease in the immunocompromised host”, Infec-
1–269.
tious Disease in Dermatology, 1997: 15(2): 301.
81. MARTÍNEZ MACHÍN, G. et al: “Aislamiento, iden-
93. NADRE, D.: “Familiar and new aspects of Eps-
tificación y tipificación de levaduras en pacien-
tein-Barr virus infection”, Ther Ume Sch., 1998,
tes VIH positivos con candidiasis oral”, Rev.
Jun.: 55(1): 52–6.
Cub. Med. Tropical IPK, 1997: 49(3): 174–80.
94. NALLY, A.; RAJONDINO, J.; GÓMEZ, M.; GONZÁ-
82. MARTÍNEZ, R.; CRUZ, R. Y LÓPEZ, C.: “Algunas
LEZ, A. Y SPINA, J.C.: “Valor de la tomografía
consideraciones sobre el comportamiento de la
leptospirosis humana en Cuba”, Rev. Cub. Med. computarizada en el estudio de la aspergilosis
Trop., 1993: 45(1): 32–41. pulmonar”, Rev. Argent. Radiol., 1997, Jul.-
83. MARTÍNEZ RAMÍREZ, A. Y MARTÍNEZ FLORES, M.: Sept.: 61(3): 165–71.
“Prevalencia de la infeción nosocomial y uso de 95. NAVARRO, M.; DOMINGO, C.; GALLEGO, M.; ROIG,
antimicrobianos”, Rev. Med. IMSS, 1995: 33(1): J.; MARISCAL, D. Y MARÍN, A.: “Chronic necro-
33–7. tizing pulmonary aspergillosis: infrecuent form
84. ------------------: “Perfil epidemiológico de la in- of aspergillosis”, Enf. Infecc. Microbiol. Clin.,
fección nosocomiaL: 15 años de experiencia”, 1998, Apr.: 16(4): 175–8.
Rev. Med. IMSS, 1995: 33(3): 307–11. 96. OREM, J.; MPANGA, K.; HABYARA, E.; NAMBAYA,
85. MASSANARI, R.M. Y WENZEL, R.P.: “Hospital A.; AISU, T.; WAMUKOTA, W. et al: “Disseminated
infection control”, en Stein, J.H.: Internal Med- aspergillus fumigatus infection: case report”,
icine, 4ta. ed., St Louis: Mosby-Year Book, 1994: East. Afr. Med. J., 1998, Jul.: 75(7): 436–8.
1822–9. 97. OZSABIN, H.; VON-PLONTA, M.; MULLER, I.; STEI-
86. M C C ORMICK , B.A. et al: “Transepithelial NERT, H.C.; NADAL, D. Y LAUENER, R.: “Succesful
signaling to neutrophils by salmonellae: a novel treament of invasive aspergillosis in chronic
virulence mechanism for gastroenteritis”, Infect. granulomatous disease by bone marrow trans-
Immun., 1995: 63: 2302. plantation, granulocyte colony-stimulating fac-
87. MIMOUNI, D.; GDALEVICH, M.; MANDEL, Y.; HAIM, tor, mobilized granulocytes and liposomal
M.; ASHKENAZI, J.; SCHEMER, J. et al: “Meningo- amphotericin B”, Blood, 1998, Oct.: 92(8):
coccal polysaccharide vaccination of military 2719–24.

654
98. PAHISSA, A.: “Tétanos”, en Farreras-Rozman: 110. SCHRODEN, J.M.: “Epithelial peptides antibodies”,
Medicina Interna, 4ta. reimp., Madrid, Clama- Biochem. Pharmacol., 1999: 57(2): 121–34.
des, SL, 1998, Vol. II: 2312–17. 111. STENGER, S. Y MODLIN, R.L.: “Cytotoxic T cell
99. PARDILLO MORALES, A. et al: “Histoplasmosis responses to intracellular pathogens”. Curr.
de forma seudotumoral”, Rev. Cub. Med., 1993: Opin. Immunol., 1998: 10(4): 471–7.
32(3): 179–82. 112. TIRELLI, V.; ERRANTE, D.; CARBONE, A.; GLOGHIN
100. PERDIGÓN CASTAÑEDA, G.; VALLE SÁNCHEZ, A.; A. Y VACCHER, E.: “Malignant tumors in patients
MARTÍNEZ MATOS, R.; CASTRO MARTÍNEZ, G. Y with HIV infection”, Critical Reviews in
HERNÁNDEZ VENEGAS, M.A.: “Imágenes atípicas Oncology/Hematology, 1996: 24: 165–84.
en aspergilosis pulmonar. Presentación de un 113. TOBÍAS, J.D.: “Anesthetic implications of te-
caso,” Rev. Inst. Nac. Enferm. Respirat., 1996, tanus”, South Med. J., 1998, Apr.: 91(4): 384–7.
Abr.- Jun.: 9(2): 141–4. 114. TORRES LUNA, A.; SIERRA LÓPEZ, A. Y VAQUÉ
101. PÉREZ, A.J. Y VILLAVERDE, A.B.: Pautas para la RAFART, J.: “El problema de las infecciones no-
atención clínica de las personas infectadas con socomiales”, en Prevalencia de las infecciones
el VIH o enfermos de SIDA, Cuba,1995. nosocomiales en los hospitales españoles, Pro-
102. PETER, J. Y RAY, C.G.: “Infectious mononucleo- yecto EPINE (5 años), Barcelona, EPINCAT,
sis”. Pedritr. Rev., 1998, Aug.: 19(8): 276–9. 1995: 7–54.
103. PETERSDORF, R.G.: “Fever of unknow origin: An 115. VALDÉS, L. et al: Enfermedades emergentes y
old friend revisited”, Arch. Intern. Med., 1992: reemergentes, MINSAP, La Habana, 1998:
152: 21–22. 233–43.
104. PUZZILLI, F.; SALVATE, M. Y RUGGERI, A.: “Intra- 116. -----------------: “Enfermedad rábica”, en En-
craneal actinomycosis in juvenile patients. Case fermedades emergentes y reemergentes,
report and review of the literature”,. Childs. MINSAP, La Habana, 1998: 204–14.
Nerv. Syst., 1998, Sep.: 14(9): 463–6. 117. VALDÉS GARCÍA, L.: “Peste Bubónica”, en En-
105. RAVELO, R.; PEÑA, A. Y PEÑA, C.: “Complica- fermedades emergentes y reemergentes,
ciones neurológicas y psiquiátricas de la infec- MINSAP, La Habana, 1998: 264–68.
ción por el VIH”, Médico Intercambio, 1997: 118. ----------------: “Fiebre Amarilla”, en Enferme-
16(8): 452–57.
dades emergentes y reemergentes. MINSAP, La
106. RENON, A.; VARGAS, A.R.; RAMÍREZ, J.E.; AGUI-
Habana, 1998: 228–32.
LAR, N. Y RODRÍGUEZ, T.: “Diagnóstico y trata-
119. ----------------: “Cólera”, en Enfermedades emer-
miento antimicrobiano aplicado a un grupo de
gentes y reemergentes, MINSAP, La Habana,
pacientes atendidos en el Hospital Docente
1998: 152–76.
“Amalia Simón”de Camagüey durante el pe-
120. VANCOTT, J.K.; CHATFIELD, S.N.; ROBERTS, M.;
ríodo comprendido entre enero–diciembre de
HONE, D.M.; HOHMANN, E.L.; PASCUAL, D.W.
1995”, Revista 16 de Abril, 1996: No. 191: 3 –9.
et al: “Regulation of host immune responses
107. ROSENKRANZ, A.R.; COXON, A.; MAURER, M.;
GURISH, M.F.; AUSTEN, K.F. et al: “Impaired by modification of salmonella virulence genes”,
mast cell development and innate immunity in Nat. Med., 1998; 4(11): 1247–52.
Mac-1 (CD11 b/CD18, CR3)- deficient mice”, 121. VAQUÉ RAFAT, J.: “Factores de riesgo”, en Pre-
J. Immunol., 1998: 161(12): 6463–7. valencia de las infecciones nosocomiales en los
108. SAENZ GONZÁLEZ, M.C.; RODRIGO SÁNCHEZ, N. hospitales españoles, Proyecto EPINE (5 años),
Y V ALERO , L.F.: “Infecciones nosocomiales Barcelona, EPINCAT, 1995: 7–54.
múltiples en un hospital universitario”, Med. 122. VASCONCELOS, P. et al: “A large epidemic of
Clin. (Bare), 1991: 97: 366–8. dengue fever with dengue hemorrhagic cases
109. SAKA, T. et al: “Interferon alfa therapy for clinic in Cerra State, Brazil”, Rev. Inst. Med. Trop.,
active Epstein-Barr virus infection. Potencial Sao Paulo, 1995: 37: 253–55.
effect on the development of lymphoprolipher- 123. VAUGHN, D.W.; GREEN, S.; KALAYANARROJ, S.;
ative disease”, J. Peditri. Hematol. Oncol., INNIS, B.L.; NIMMANNITY, A.S. et al: “Peak den-
1998, Jul.-Aug.: 20(4): 342–6. gue 2 virus titer early in secondary infection

655
correlates with plasma leakage. Abstracts of the and significance for oral applications”, Crit.
45th. Annual Meeting of the American Society Rev. Oral Biol. Med., 1998: 9(4): 399–414.
of Tropical Medicine and Hygine”, Am. J. Trop. 126. W EINSTEIN , R.A.: “Nosocomial infection
Med. Hyg., 1996: 55(2): 125. update”, Emerg. Infect. Dis., 1998: 4(3): 416–20.
124. WAKIGUCHI, H.; HISAKAWA, H.; KUKOTA, H. Y KU- 127. WULFF, A.E.: Neuropatías periféricas en la in-
RASHIGE, T.: “Serodiagnosis of infectious mo-
fección con el VIH SIDA ahora, 1999, Febre-
nonucleosis in children”, Acte Pedia. J. P. N.,
ro-Marzo: 18–20.
1998, Aug.: 40(4): 328–32.
125. WEINBERG, A.; KRISANAPRAKORNKIT, S. Y DALE,
B.A.: “Epithelial antimicrobial peptides: review

656

También podría gustarte