Una fosa séptica es un artilugio para el tratamiento primario de las aguas residuales domésticas. En ella se realiza la separación y transformación físico-química de la materia orgánica contenida en esas aguas. Se trata de una forma sencilla y barata de tratar las aguas residuales y está indicada (preferentemente o en algunos casos exclusivamente) para zonas rurales o residencias situadas en parajes aislados. Sin embargo, el tratamiento no es tan completo como en una estación depuradora de aguas residuales. Las fosas pequeñas pueden tener una sola cámara pero, en general, es preferible que tengan dos. Los sólidos contenidos en las aguas vertidas irán al fondo (cienos) y en la superficie flotarán grasas y espumas. Hasta un 50% de los sólidos que se acumulan en el tanque se descomponen; el resto se acumula como lodo en el fondo y debe ser retirada cada cierto tiempo (cada uno o dos años) y transportada a un lugar donde pueda ser tratada totalmente. Y… ¿para qué sirven? El uso de fosas sépticas están diseñadas para contener los desechos de una vivienda antes de ir al drenaje. Sólo se permite su uso en localidades rurales o urbano marginales que no cuenten con la red de alcantarillado o que éstas se encuentren alejadas de la localidad, resultando muy costosa su conexión. Las aguas residuales que no vayan a un sistema de cloacas, con alcantarillado y posterior tratamiento municipal, deben ser tratadas en una fosa para que con el menor flujo del agua, la parte sólida se pueda depositar liberando la parte líquida. Una vez hecho eso, determinadas bacterias anaerobias (especie de gusanitos) actúan sobre la materia orgánica de las aguas residuales descomponiéndose en sus componentes inorgánicos (materia inerte), y convirtiendo parte de los sólidos en materia soluble en el agua. Esta descomposición es importante, pues reduce la cantidad de materia orgánica, y en cerca del 40% la demanda biológica de oxígeno que se precisa para este menester, y así el agua puede devolverse a la naturaleza con menor perjuicio para ella. El diseño de una Fosa Séptica depende del número de usuarios, la cantidad de agua usada por individuo, la temperatura promedio anual, la frecuencia de bombeo y las características de las aguas residuales. El tiempo de retención debe ser de 48 horas para alcanzar un tratamiento moderado. Tipos de fosas sépticas. Las fosas sépticas pueden ser de muchos materiales, tradicionalmente eran simples pozos excavados en la propia tierra, los cuales estaban lo suficientemente alejados de la vivienda como para evitar olores. Posteriormente las fosas sépticas se comenzaron a realizar de ladrillo enfoscado y posteriormente de hormigón. Este tipo de fosa séptica siguen estando vigentes y suelen dar buen resultado, aunque su construcción es más complicada que otros sistemas más económicos y flexibles como las fosas de de fibra de vidrio o PVC que se presentan en varias formas y tamaños, son más livianas y por lo tanto, más fáciles de transportar. Este último grupo de fosas sépticas, son las que denominamos prefabricadas y hay una amplia variedad de tipos y tamaños en el mercado. Existen tres tipos principales de fosas sépticas para el tratamiento de aguas negras en sistemas individuales: Fosas sépticas de concreto, estas son las más comunes. Fosas de fibra de vidrio, las que cada vez se usan más ya que son fáciles de llevar a los lugares “de acceso difícil”. Fosas plásticas/de polietileno, las que se venden en muchos tamaños y figuras diferentes. Al igual que las fosas de fibra de vidrio, estas fosas son livianas, de una sola unidad y pueden llevarse a los lugares “de acceso difícil”. Todas las fosas deben ser herméticas para evitar que el agua entre o salga del sistema. Aplicación de la ozonización en el tratamiento de aguas: descripción y funcionamiento La ozonización es ampliamente utilizada en el tratamiento de las aguas, tanto potables como residuales. Permite la eliminación de compuestos tanto orgánicos como inorgánicos, reduciéndose el TOC, olor, color, sabor y turbidez de las aguas, así como compuestos refractarios (sustancias tóxicas y compuestos farmacéuticos). Aunque es necesaria su generación “in situ” (mediante “descargas eléctricas silenciosas”) y su coste inicial es alto, es un potente desinfectante debido a su alta reactividad y poder de reducción. La ozonización se incluye dentro de los Procesos de Oxidación Avanzada (AOPs), que se definen como “procesos de oxidación que implican la generación de radicales hidroxilo en cantidad suficiente para interaccionar con los compuestos orgánicos del medio”. La molécula de ozono es una forma alotrópica triatómica del oxígeno termodinámicamente inestable, descomponiéndose espontáneamente a oxígeno. Es un oxidante fuerte, segundo después de los radicales hidroxilo libres, capaz de participar en numerosas reacciones químicas con sustancias inorgánicas y orgánicas. Las reacciones con ozono se pueden producir por dos mecanismos: las reacciones directas son reacciones son muy selectivas, atacando a dobles enlaces y algunos grupos funcionales; y las reacciones indirectas son consecuencia de la acción de los radicales hidroxilos resultantes de la descomposición del ozono en el agua. El método más ampliamente utilizado para la generación de ozono para el tratamiento de aguas son las descargas en corona, o también conocido como “descargas eléctricas silenciosas” (Figura). Consiste en pasar oxígeno en forma gaseosa a través de dos electrodos separados por un dieléctrico y un hueco de descargas. Se aplica un voltaje a los electrodos, causando que un electrón fluya a través del hueco de descargas. Esos electrones suministran la energía para disociar las moléculas de oxígeno, produciéndose así la formación de ozono. La ozonización se puede efectuar de forma no catalítica o catalítica. En el primer caso, la ozonización de realiza en medio alcalino para aumentar la velocidad de descomposición del ozono, incrementando así la velocidad de generación de radicales hidroxilo. La generación de radicales hidroxilo puede ser aumentada con la adición de peróxido de hidrógeno (H2O2), ampliando la concentración de los mismos en el agua. En el segundo caso, la actividad catalítica está directamente relacionada con la capacidad de descomposición de ozono disuelto y la consiguiente generación de radicales hidroxilo, aunque el mecanismo implicado en la ozonización catalítica es aún motivo de discusión. Los principales catalizadores que se utilizan en ozonización son los óxidos de metales de transición (manganeso, titanio, aluminio), metales u óxidos soportados (cobre u óxido de titanio sobre alúmina), carbón activo (GAC) y sistemas mesoporosos, como los silicatos MCM o SBA. El tratamiento de aguas mediante ozonización presenta una serie de ventajas y desventajas que se resumen en la siguiente tabla:
VENTAJAS DESVENTAJAS
J Facilidad de producción L El ozono es altamente
de ozono desde aire u oxígeno corrosivo y tóxico. por descargas eléctricas. L El coste inicial del J Facilidad de reacción equipamiento es alto, y los con compuestos orgánicos e generadores requieren mucha inorgánicos debido a su alta energía. reactividad y potencial de L El ozono debe ser reducción. generado “in situ” por problemas J El ozono reduce el TOC, en el almacenamiento y color, olor y turbidez del agua transporte. tratada. L La vida media del ozono J El ozono oxida hierro, en el sistema de distribución es manganeso y sulfuros. de 25 minutos a temperatura ambiente, con lo que la J El uno de los ozonización no asegura la desinfectantes químicos más limpieza del agua potable, eficientes, ya que requiere un siendo necesario añadir cloro. tiempo de contacto pequeño. J En ausencia de bromo, L Se forman DBPs en no se forman DBPs. presencia de bromo, aldehídos, cetonas, etc. J Ozono es más efectivo que cloro, cloroaminas y dióxido L Son necesarios filtros de cloro para la inactivación de activados para la eliminación de virus, Cryptosporidium y carbono orgánico biodegradable. Giardia.
Las principales aplicaciones de la ozonización en el campo del tratamiento de aguas:
ü En el caso de las aguas potables, el ozono es típicamente empleado en una pre- desinfección para el control de algas e inactivación de bacterias y virus, y como pre- oxidación y/o oxidación intermedia de la materia orgánica e inorgánica para eliminación de compuestos que proporcionan sabor, olor y color al agua. Además, es utilizado para la eliminación de la turbidez, iones metálicos y reduce los niveles de trihalometanos (THM) y precursores orgánicos relacionados. ü En el tratamiento de las aguas residuales, el ozono se emplea en la desinfección (reutilización), oxidación de compuestos inorgánicos (eliminación de sustancias tóxicas como el cianuro), oxidación de compuestos orgánicos (oxidación parcial del TOC y sustancias tóxicas) y la eliminación de partículas. ü Actualmente, la ozonización también es empleada para la eliminación de contaminantes emergentes (compuestos farmacéuticos, POPs, PTBs, PPCPs…) Ósmosis inversa. Ósmosis inversa es una tecnología de purificación del agua que utiliza una membrana semipermeable para eliminar iones, moléculas, y partículas más grandes del agua potable. Para lograr la ósmosis inversa se aplica una presión para vencer la presión osmótica, que es una propiedad coligativa producida por diferencias de potencial químico del solvente, un parámetro termodinámico. La ósmosis inversa puede eliminar muchos tipos de elementos suspendidos en el agua, incluyendo bacterias, y está utilizada tanto en procesos industriales como para la producción de agua potable. El resultado es que la disolución es retenida del lado presurizado de la membrana y el solvente puro puede pasar al otro lado. Para lograr la selectividad, esta membrana no debe dejar pasar iones o moléculas grandes a través de sus poros (o agujeros), pero debe dejar pasar libremente componentes más pequeños de la solución (como las moléculas solventes). En el proceso normal de ósmosis, el solvente se mueve naturalmente de una área de baja concentración de la disolución (alto potencial hídrico), a través de una membrana, hacia un área de alta concentración de la disolución (bajo potencial hídrico). La fuerza que ocasiona el movimiento del solvente es la reducción en la energía libre del sistema cuándo la diferencia en la concentración del solvente en cualquiera de los lados de una membrana es reducido, generando presión osmótica debido a que el solvente se mueve a la solución más concentrada. La ósmosis inversa es la aplicación de una presión externa para invertir el flujo natural del solvente. El proceso es similar a otras aplicaciones de tecnología con membranas. Sin embargo, hay diferencias claves entre ósmosis inversa y filtrada. El mecanismo de extracción predominante en la filtración por membrana es la exclusión por tamaño, por los que el proceso teóricamente puede siempre conseguir una eficacia perfecta independientemente de la presión y la concentración. La ósmosis inversa aplica difusión, haciendo que el proceso dependa de la presión, el índice de flujo, y otras condiciones.1 Si se aplica una presión en el lado de la solución concentrada, se conseguirá reducir su flujo en la membrana; pero si se incrementa dicha presión, el flujo de agua remitirá. A este proceso se le denomina presión osmótica. Si se aplica más presión de lo esperada por la presión osmótica el agua pasará a una solución todavía menos concentrada. De esta forma, conseguirá atravesar la membrana al ser más diluida. La ósmosis inversa generalmente se utiliza para la purificación de agua potable a partir de agua de mar, extrayendo la sal y otros efluentes de las moléculas de agua. Procesos de membranas para el tratamiento de aguas residuales Los procesos de membrana son procesos de difusión física de partículas en el agua. Funcionan debido a que determinadas clases de membranas permiten el paso a través de ellas de partículas con unas características particulares, mientras que impiden el paso de aquellas que no poseen esas mismas características. Actualmente existen muy diversas clases de membranas, que permiten el paso de unos solutos u otros en función de su naturaleza, carga iónica o tamaño. Los principales son: Electrodiálisis Electrodiálisis reversible Ósmosis inversa ELECTRODIÁLISIS. Consiste en la eliminación de iones cargados eléctricamente y que se encuentran disueltos en el agua. Para llevar a cabo esta eliminación se introduce en el agua alimento un par de electrodos de distinta carga eléctrica de manera que los iones disueltos serán atraídos por los electrodos de distinto signo al suyo propio. Por este procedimiento se logra desplazar los iones de un lugar a otro de la disolución. Es fundamental el empleo de membranas selectivas aniónicas y catiónicas alternativamente para que el agua alimento vaya perdiendo iones negativos y positivos tras su paso por la zona de separación. Lo interesante es colocar las membranas alternativamente de tal modo que en unos canales se concentren los solutos, en un agua que se denomina concentrado, y en otros canales circule el agua alimento que va perdiendo poco a poco sus contaminantes hasta salir del proceso con una concentración de sales muy baja. ELECTRODIÁLISIS REVERSIBLE En este caso se alteran periódicamente las polaridades de los electrodos de manera que los flujos de agua cambian temporalmente de sentido, pasando a recibir agua depurada aquellos conductos que transportaban el concentrado y al revés. Este método elimina el riesgo de formación de precipitados, incrustaciones y obstrucción de las membranas, ya que el cambio periódico del sentido del flujo del agua colabora en la limpieza de conducciones y membranas, además de evitar la aparición de limos y otros depósitos en la planta. OSMOSIS INVERSA La ósmosis inversa aprovecha el procedimiento por el cual, a través de una membrana semipermeable se tienden a igualar los potenciales químicos de dos diluciones situadas una a cada lado de la membrana, y lo hace funcionar al revés. Consiste en el bombeo del agua cargada con iones disueltos a un tanque en el que se le somete a una presión contra una membrana. Durante el proceso se transfiere agua de un lado a otro de la membrana, quedando los iones en el agua alimento de tal modo que se genera un concentrado en el agua que no ha pasado a través de la membrana y un caudal depurado con el agua que si ha pasado a través de la membrana. El concentrado que se genera debe ser eliminado del contacto directo con la membrana para evitar que la concentración de iones vaya aumentando y llegue a precipitar sales en la superficie de la membrana, lo que provoca una pérdida de efectividad del proceso y un incremento de los gastos de mantenimiento. Igualmente es importante llevar a cabo tratamientos previos para evitar obstrucciones. Como resultado estándar, la ósmosis inversa devuelve un 80% de agua depurada y un rechazo del 20%. Estación depuradora de aguas residuales FUNCIÓN PRINCIPAL Una E.D.A.R tiene como función principal recoger las aguas residuales de una población o industria, y después de ciertos tratamientos y procesos, la devuelve a un cauce receptor como un río, embalse, mar, etc. Se puede definir el agua residual como la combinación de los residuos líquidos procedentes de residencias, instituciones públicas, establecimientos industriales y comerciales, a los que pueden agregarse, eventualmente, aguas subterráneas, superficiales y pluviales. CLASIFICACIÓN DE LAS AGUAS RESIDUALES 1. Aguas residuales domesticas (ARD): Son las provenientes de las actividades domésticas como lavado de ropa, baño, preparación de alimentos, limpieza, etc. Estas aguas presentan un alto contenido de materia orgánica, detergentes y grasas. 2. Aguas Lluvias (ALL): Originadas por el escurrimiento superficial de las lluvias que fluyen desde los techos, calles, jardines y demás superficies del terreno. Normalmente son muy contaminadas debido al arrastre de basura y demás materiales acumulados en la superficie. 3. Residuos líquidos industriales (RLI): Provenientes de los diferentes procesos industriales. Los RLI pueden ser alcalinos o ácidos, tóxicos, coloreados, etc, su composición refleja el tipo de materias primas utilizado dentro del proceso industrial. 4. Aguas residuales agrícolas (ARA): Provienen de la escorrentía superficial de las zonas agrícolas. Se caracteriza por la presencia de pesticidas, sales y un alto contenido de sólidos en suspensión. OBJETIVOS DE LAS E.D.A.R ~ Eliminación de residuos, aceites, grasas, arenas y sólidos sedimentables. ~ Eliminación de compuestos con amoniaco y fósforo. ~ Transformar los residuos retenidos en lodos estables y velar porque sean utilizados correctamente. ¿PORQUE QUE SON NECESARIAS LAS E.D.A.R? Las E.D.A.R son necesarias para evitar los siguientes efectos: · Tapizamiento de la vegetación aledaña a los cauces receptores con residuos sólidos que lleva el agua residual como plásticos, utensilios, restos alimenticios, etc. · Acumulación de sólidos sedimentales en suspensión en el fondo y las orillas del cauce. · Alto consumo de oxigeno disuelto en el cauce por descomposición de materia orgánica y compuestos con amoniaco; causando así, la formación de malos olores. · Entrada de grandes cantidades de microorganismos patógenos. · Contaminación química. · Aumento de eutroficación por la presencia de fósforo y nitrógeno. Si las aguas residuales no son tratadas correctamente y llegan a los cauces receptores, se producen los efectos anteriores; por estas razones es muy importante la presencia de las E.D.A.R, siendo estas una fuente de salud y empleo absolutamente necesaria. GRADO DE CALIDAD DE LAS E.D.A.R El grado de calidad de una depuradora se analiza según los siguientes aspectos: · Sólidos o materia en suspensión: Se trata de materia sólida, orgánica o inorgánica, de tamaño mayor a 1μm. La mayoría son atraídos por la gravedad, por lo que son fácilmente separables cuando el agua residual se mantiene en estanques con elevado tiempo de retención de agua residual. · D.B.O.S (Demanda Biológica o Bioquímica del Oxigeno): Mide la cantidad de oxigeno necesario para que los microorganismos del agua estabilicen el agua residual en un periodo de 5 días (normalmente). Cuanto mayor sea el valor, menor calidad tiene el agua. · D.Q.O (Demanda química de Oxigeno): Oxigeno equivalente que se necesita para estabilizar la contaminación del agua. · Nitrógeno: Predominan las formas de nitrógeno amoniacales (amonio-amoniaco), nitrógeno orgánico, nitratos y nitritos. Entre menor cantidad mayor calidad del agua. · Fósforo: Puede encontrarse como fósforo total o como ortofosfato disuelto. Entre menor cantidad mayor calidad del agua. TRATAMIENTOS EN LAS E.D.A.R Los tratamientos se clasifican en los que se encuentran en la línea del tratamiento del agua y los que se encuentran en la línea de los fangos generados. LINEA DE AGUA 1. PRETRATAMIENTO El pretratamiento pretende eliminar del agua residual componentes voluminosos y abrasivos que son añadidos al agua en la red de saneamiento y en los puntos de inspección, que por ningún motivo pueden llegar a las unidades donde se realizan los tratamientos. Se utilizan los siguientes dispositivos: · Pozo de gruesos: Retiene sólidos pesados grandes. · Desbaste de gruesos: Retiene sólidos grandes flotantes. · Desbaste de finos: Retiene sólidos flotantes pequeños. · Desarenado-Desengrasado: Retiene las arenas, aceites y grasas. · Balsa de Homogeneización: Si los caudales son muy dispares, esta puede instalarse para igualar los caudales que vamos a meter en la instalación. 2. TRATAMIENTO PRIMARIO El tratamiento primario pretende retener una buena parte de los sólidos en suspensión que lleva el agua residual. Se utilizan varios métodos: · Decantador primario o laguna anaerobia: Se emplea la gravedad terrestre para que sedimenten los sólidos sedimentables. · Flotador por aire disuelto: Por especiales características, es mejor separarlos por medio de este método. · Tratamiento químico: En algunas ocasiones se potencia el tratamiento con la adición de reactivos de manera que aumenta la formación de sólidos sedimentables a partir de sólidos coloidales o disueltos. En otras es necesario proceder a la neutralización del pH del siguiente tratamiento. 3. TRATAMIENTO SECUNDARIO El tratamiento secundario es un tratamiento biológico que persigue transformar la materia orgánica del agua residual en materia celular, gases, energía y agua; también se retienen sólidos en suspensión y sólidos coloidales. · Procesos biológicos de una etapa: Este tratamiento presenta un único tipo de proceso. Existen varios tipos de procesos biológicos de una sola etapa: 1. Procesos de cultivo en suspensión bajo condiciones aerobias: En este los microorganismos se mantienen en suspensión, de forma individual o formando agregados más o menos grandes y homogéneamente repartidos. Existen tres tipos: - Lagunas de estabilización, lagunas facultativas. - Lagunas aireadas artificialmente. - Fangos activados. 2. Procesos de cultivo fijo o biopelícula fija bajo presencia de condiciones aerobias: Los microorganismos se asientan sobre un material soporte formando una biopelícula que tapiza el soporte. Existen tres tipos: - De medio no saturado (Lechos bacterianos, tratamientos por riego y aplicación al terreno). - De medio saturado, inundado o sumergido (De lecho particulado, de lecho estructurado). - De medio intermitente sumergido (Contactores biológicos rotativos). · Procesos biológicos de dos etapas: Presenta un conjunto de procesos dispuestos en serie, claramente diferenciados, formados por la conjunción de dos de los anteriores. 4. TRATAMIENTO TERCIARIO El tratamiento terciario persigue reducir los sólidos en suspensión y la parte orgánica asociada, reducir la demanda biológica de oxigeno (DBO) y la demanda química de oxigeno (DQO) solubles, reducir el contenido de fósforo y/o nitrógeno, eliminar microorganismos patógenos, eliminar detergentes o tóxicos biodegradables. Se utilizan varios métodos: · Filtración: Como medio de filtración se pueden utilizar arena, gravita antracita o una combinación de ellas. · Coagulación y filtración · Air Stripping · Nitrificación-Desnitrificación · Absorción por carbón: Se utiliza para eliminar la materia orgánica residual que ha pasado el tratamiento biológico. · Cambio ionico · Desinfección LINEA DE FANGOS 1. ESPESAMIENTO Pretende eliminar parte del agua que llevan los fangos cuando salen de los tratamientos del agua. Se utilizan varios métodos: · Espesador por gravedad · Espesador de flotación · Centrifugadora 2. ESTABILIZACIÓN Pretende eliminar los problemas sanitarios que produce un fango cargado de microorganismos y formas de resistencia patógenos; también pretende disminuir la materia orgánica del fango hasta valores que no provoquen sistemas sanitarios. Se utilizan los siguientes métodos: · Digestión aerobia · Digestión anaerobia · Estabilización química · Incineración 3. DESHIDRATACIÓN Persigue quitar agua al producto final, consiguiendo un grado de sequedad al mismo que los hace paleable y transportable hacia otros destinos. Se utiliza: · Sacos filtrantes. · Eras de secado · Filtro banda · Filtro prensa · Centrifugadora · Tamices prensadores · Hornos de secado. PRINCIPALES PROBLEMAS EN LAS E.D.A.R En los fangos activos, la depuración biológica la llevan a cabo enormes cantidades de microorganismos que se agrupan en flóculos, estos en su mayoría son bacterias heterótrofas que utilizan la contaminación orgánica para formar biomasa celular nueva y reproducirse. Los flóculos biológicos después de salir del reactor biológico se separan del agua depurada en el decantador secundario. La cantidad de flóculos que entran en el decantador es muy grande por lo que cualquier interferencia por sobrecarga hidráulica, cambio de densidad del flóculo, corrientes de convección, o interferencias biológicas hace que este flóculo se fije del decantador o bien ascienda a la superficie, quedando allí retenido por la contención de flotantes. Si la cantidad de filamentos es alta y el proceso de depuración es por fangos activados podemos encontrarnos con dos tipos de problemas biológicos: · Esponjamiento filamentoso o Bulking: Los filamentos interfieren en la compactación del flóculo en el decantador secundario. · Espumamiento biológico o Foaming: Los microorganismos filamentosos producen una espesa espuma coloreada (en colores del blanco al marrón) y en muchos casos abundantes flotantes en decantación secundaria. La frecuencia de aparición de estos dos problemas biológicos, juntos o por separado, obliga a utilizar la observación microscópica como método de detección de estos microorganismos. Actualmente los microorganismos filamentosos se identifican en base a características morfológicas rápidas. Algunos microorganismos filamentosos son: · Bacillus · Beggiatoa · Cianobacterias · Flexibacter · Haliscomenobacter hydrossis · Hongos filamentosos · Microthrix parvicella · G.A.L.O (Organismos parecidos a Gordona amarae) o N.A.L.O. (Organismos parecidos a Nocardia amarae) · Tipo 0041 · Tipo 0092 · Tipo 0211 · Tipo 021N · Tipo 0411 · Tipo 0581 · Tipo 0675 · Tipo 0803 · Tipo 0914 · Tipo 0961 · Tipo 1701 · Tipo 1702 · Tipo 1851 · Tipo 1852 · Tipo 1863 Floculación. La floculación es un proceso químico mediante el cual, con la adición de sustancias denominadas floculantes, se aglutinan las sustancias coloidales presentes en el agua, facilitando de esta forma su decantación y posterior filtrado. Es un paso del proceso de potabilización de aguas de origen superficial y del tratamiento de aguas servidas domésticas, industriales y de la minería. Los compuestos que pueden estar presentes en el agua pueden ser: Sólidos en suspensión. Partículas coloidales (menos de 1 micra), gobernadas por el movimiento browniano. Sustancias disueltas (menos que varios nanómetros). Proceso. El proceso de floculación es precedido por la coagulación, por eso se suele hablar de los procesos de coagulación-floculación. Estos facilitan la retirada de las sustancias en suspensión y de las partículas coloidales: La coagulación es la desestabilización de las partículas coloidales causadas por la adición de un reactivo químico llamado coagulante el cual, neutralizando sus cargas electrostáticas, hace que las partículas tiendan a unirse entre sí. La floculación es la aglomeración de partículas desestabilizadas en microflóculos y después en los flóculos más grandes que tienden a depositarse en el fondo de los recipientes construidos para este fin, denominados sedimentadores. Los factores que pueden promover la coagulación-floculación son el gradiente de la velocidad, el tiempo y el pH. El tiempo y el gradiente de velocidad son importantes al aumentar la probabilidad de que las partículas se unan y da más tiempo para que las partículas desciendan, por efecto de la gravedad, y así se acumulen en el fondo. Por otra parte el pH es un factor prominente en la acción desestabilizadora de las sustancias coagulantes y floculantes. La solución floculante más adecuada a la naturaleza de los materiales en suspensión con el fin de conseguir aguas decantadas limpias y la formación de lodos espesos se determina por pruebas, ya sea en laboratorio o en el campo. En la minería, los floculantes utilizados son polímeros sintéticos de alto peso molecular, cuyas moléculas son de cadena larga y con gran afinidad por las superficies sólidas. Estas macromoléculas se fijan por adsorción a las partículas y provocan así la floculación por formación de puentes interpartículas. Tipos de floculación. Floculación iónica. Mediante la floculación iónica se modifican las moléculas disueltas en un fluido mediante la acción de los llamados floculadores iónicos, que son los elementos materiales compuestos por tubos de acero inoxidable, plata o cobre, que conectados en su extremo a polos de corriente directa, positiva o negativa, generan la actividad iónica. Los floculadores iónicos sumergidos en el fluido producen un campo eléctrico de baja intensidad con actividad iónica constante, que incrementa la energía de los electrones de enlace; entonces, los átomos que componen las moléculas diluidas en el medio sufren un cambio en su estructura que las lleva a su forma más elemental, confirmando la teoría electrolítica de la disociación. Desbaste. Los objetivos en este paso son: Proteger a la E.D.A.R. de la posible llegada intempestiva de grandes objetos capaces de provocar obstrucciones en las distintas unidades de la instalación. Separar y evacuar fácilmente las materias voluminosas arrastradas por el agua, que podrían disminuir la eficacia de los tratamientos posteriores. Esta operación consiste en hacer pasar el agua residual a través de una reja. De esta forma, el desbaste se clasifica según la separación entre los barrotes de la reja en: Desbaste fino: con separación libre entre barrotes de 10-25 mm. Desbaste grueso: con separación libre entre barrotes de 50-100 mm. En cuanto a los barrotes, estos han de tener unos espesores mínimos según sea: Reja de gruesos: entre 12-25 mm. Reja de finos: entre 6-12 mm. También tenemos que distinguir entre los tipos de limpieza de rejas igual para finos que para gruesos: Rejas de limpieza manual Rejas de limpieza automática Tamizado. Consiste en una filtración sobre soporte delgado, y sus objetivos son los mismos que se pretenden con el desbaste, es decir, la eliminación de materia que por su tamaño pueda interferir en los tratamientos posteriores. Según las dimensiones de los orificios de paso del tamiz, se distingue entre: Macrotamizado: Se hace sobre chapa perforada o enrejado metálico con paso superior a 0,2 mm.. Se utilizan para retener materias en suspensión, flotantes o semiflotantes, residuos vegetales o animales, ramas,... de tamaño entre 0,2 y varios milímetros. Microtamizado: Hecho sobre tela metálica o plástica de malla inferior a 100 micras. Se usa para eliminar materias en suspensión muy pequeñas contenidas en el agua de abastecimiento (Plancton) o en aguas residuales pretratadas. Los tamices se incluirán en el pretratamiento de una estación depuradora en casos especiales: Cuando las aguas residuales brutas llevan cantidades excepcionales de sólidos en suspensión, flotantes o residuos. Cuando existen vertidos industriales importantes provenientes principalmente del sector alimentario (residuos vegetales, de matadero, semillas, cáscaras de huevo,..). Los tamices suelen ir precedidos por un desbaste de paso entre barrotes de 10-50 mm. Según el paso de malla del tamiz. Vamos a desarrollar ahora los tipos de tamices: Macrotamices rotatorios: Se utilizan con aguas residuales poco cargadas. Consiste en un tambor cilíndrico de eje horizontal, en caso de que el nivel del agua varíe relativamente poco, o como una banda rotatoria sobre cadenas sin fin, cuando los niveles del agua sufren grandes variaciones. El tamiz va a estar parcialmente sumergido. El agua entra por el interior del tambor y sale al exterior quedando retenidos en las paredes internas del tamiz los residuos a eliminar. El tambor va rotando. En la parte superior del tambor los residuos van siendo eliminados mediante unos chorros de agua que los hacen salir al exterior. El paso de malla está entre 0,3 y 3,0 mm. La pérdida de carga es pequeña entre 0,2-0,5 m. Tamices de autolimpieza, estáticos o rotativos: Los tamices estáticos llevan una reja constituida por barrotes horizontales de acero inoxidable, de sección triangular. La inclinación sobre la horizontal disminuye progresivamente de arriba a abajo, pasando de unos 65º a unos 45º. El agua entra por arriba y pasa a través de los barrotes, mientras, la materia retenida va resbalando por el tamiz y saliendo al exterior donde se almacena en contenedores provisionalmente. Así obtenemos sucesivamente la separación, escurrido y evacuación de las materias sólidas. Los tamices rotatorios están constituidos por una reja cilíndrica de eje horizontal con barrotes de sección trapezoidal, la cual gira lentamente. El agua cae por arriba entrando en el interior del tamiz, en tanto que la suciedad queda retenida en el exterior y son evacuadas a un contenedor provisional por medio de un rascador fijo. El paso de malla es de 0,2-2,0 mm. Las pérdidas de carga son elevadas, del orden de 2 m., lo que obliga la mayoría de las veces a un bombeo suplementario. Tienen el problema añadido de ser sensibles al atascamiento por grasas coaguladas. Tamices deslizantes: Son de tipo vertical y continuo. El tamiz lleva a lo largo de él una serie de bandejas horizontales solidarias a la malla. En estas bandejas quedan retenidos los sólidos siendo eliminados en la parte superior por un chorro de agua a contracorriente. El paso de malla es de 0,2- 3,0 mm. Las tareas que debemos realizar en este punto son: Limpiar los tamices de las posibles obturaciones que se hayan podido formar. En las de tipo mecánico debemos realizar las tareas de mantenimiento recomendado por el fabricante Dilaceración Su objetivo es triturar las materias sólidas arrastradas por el agua. Esta operación no está destinada a mejorar la calidad del agua bruta ya que las materias trituradas no son separadas, sino que se reincorporan al circuito y pasan a los demás tratamientos, por lo que este paso no se suele utilizar, a no ser que no haya desbaste, con lo que si es necesario incluirlo en el diseño y funcionamiento de la planta. Pero, a veces, aunque haya un desbaste previo, se suelen utilizar dilaceradores para tratar los detritus retenidos en las rejas y tamices, siendo después vueltos a incorporar al agua bruta. Consta el dilacerador, de un tamiz tipo tambor que gira alrededor de un eje vertical provisto de ranuras con un paso entre 6-10 mm. Los sólidos se hacen pasar a través de unas barras de cizalladura o dientes cortantes donde son triturados antes de llegar al tambor. Se homogeneizan en tamaño y atraviesan las ranuras, saliendo por una abertura de fondo mediante un sifón invertido, siguiendo su camino aguas abajo. Esta operación está muy cuestionada y actualmente casi ha desaparecido de la mayoría de las instalaciones. Primero, no es lógico mantener o retornar al proceso aquellos sólidos que pueden eliminarse por desbaste o tamizado, ya que lo que hacemos es empeorar la calidad del agua residual que va a ser tratada posteriormente. Segundo, en la práctica, esta operación presenta varios inconvenientes: La necesidad de una atención frecuente debido a que se trata de un material muy delicado; el peligro de obstrucción de tuberías y bombas provocada por la acumulación en masas de las fibras textiles o vegetales unidad a las grasas; y la formación de una costra de fango en los digestores anaerobios. Las tareas a realizar son las que siguen: Vigilar las posibles obstrucciones de las tuberías. Reponer los dientes del tambor, en caso de rotura. Vaciar la poceta de los sólidos que pueden estar retenidos. Todas estas operaciones las debemos de realizar con la maquina desconectada. Desarenado El objetivo de esta operación es eliminar todas aquellas partículas de granulometría superior a 200 micras, con el fin de evitar que se produzcan sedimentos en los canales y conducciones, para proteger las bombas y otros aparatos contra la abrasión, y para evitar sobrecargas en las fases de tratamiento siguiente. En caso de que sea necesario un bombeo, desbaste y desarenado deben ir antes de éste. Pero hay veces que es conveniente situar el bombeo previo al desarenado aun a costa de un mayor mantenimiento de las bombas. Esto ocurre cuando los colectores de llegada están situados a mucha profundidad, cuando el nivel freático está alto, etc. Los cálculos teóricos para el diseño de un desarenador están relacionados con los fenómenos de sedimentación de partículas granuladas no floculantes. Las velocidades de sedimentación se pueden calcular utilizando diversas fórmulas: de Stokes, en régimen laminar de Newton, en régimen turbulento de Allen, en régimen transitorio A cualquiera de estas fórmulas hay que aplicarle una serie de correcciones que tengan en cuenta: La forma de las partículas o factor de esfericidad La concentración de sólidos en suspensión, si sobrepasan el 0,5% La velocidad de flujo horizontal En la siguiente tabla podemos comprobar como varía la velocidad de sedimentación en función del diámetro de la partícula:
Diámetro partíc.(mm) Veloc. sedimentación (m/h)
0,150 40-50
0,200 65-75
0,250 85-95
0,300 105-120
En cuanto al cálculo de las dimensiones de un desarenador:
Su superficie horizontal se calcula en función de la velocidad de sedimentación de las partículas de menor tamaño que deben retenerse y del caudal máximo que circulará por el mismo. Su sección transversal es función de la velocidad horizontal de flujo deseada. Los desarenadores se diseñan para eliminar partículas de arenas de tamaño superior a 0,200 mm y peso específico medio 2,65, obteniéndose un porcentaje de eliminación del 90%. Si el peso específico de la arena es bastante menor de 2,65, deben usarse velocidades de sedimentación inferiores a las anteriores. Pero en esta operación eliminamos también otros elementos de origen orgánico no putrescibles como granos de café, semillas, huesos, cascaras de frutas y huevos.., que sedimentan a la misma velocidad que las partículas de arena y cuya extracción no interesa. Este problema se evita con el llamado Barrido o Limpieza de Fondo. Se explica por el hecho de que existe una velocidad crítica del flujo a través de la sección, por encima de la cual las partículas de un tamaño y densidad determinadas, una vez sedimentadas, pueden volver a ser puestas en movimiento y reintroducidas en la corriente. Teóricamente, para partículas de 0,200 mm de diámetro y peso específico 2,65, la velocidad crítica de barrido es de 0,25 m/s aunque en la práctica se adopta a efectos de diseño una velocidad de 0,30 m/s. Con esta velocidad se considera que las arenas extraídas salen con un contenido en materia orgánica inferior al 5% Desaceitado-desengrasado. El objetivo en este paso es eliminar grasas, aceites, espumas y demás materiales flotantes más ligeros que el agua, que podrían distorsionar los procesos de tratamiento posteriores. El desaceitado consiste en una separación líquido-líquido, mientras que el desengrase es una separación sólido-líquido. En ambos casos se eliminan mediante insuflación de aire, para desemulsionar las grasas y mejorar la flotabilidad. Se podría hacer esta separación en los decantadores primarios al ir provistos éstos de unas rasquetas superficiales de barrido, pero cuando el volumen de grasa es importante, estas rasquetas son insuficientes y la recogida es deficitaria. Si se hacen desengrasado y desarenado juntos en un mismo recinto, es necesario crear una zona de tranguilización donde las grasas flotan y se acumulan en la superficie, evacuándose por vertedero o por barrido superficial, y las arenas sedimentan en el fondo y son eliminadas por uno de los métodos que desarrollamos en el apartado anterior. En este caso, las dimensiones del desarenador son diferentes, siendo los parámetros principales: Carga Hidráulica menor o igual a 35 m3/m2/h a Q máx. Tiempo de Retención 10-15 min a Q medio Caudal de aire introducido 0,5-2,0 m3/h/m3 de desengrasador Los desengrasadores separados del desarenado son aconsejables cuando se busca una mayor calidad del agua o cuando el agua proviene de ciertos tipos de industrias: Petroquímicas y refinerías de petróleo producen gran cantidad de aceites, los mataderos producen gran cantidad de grasas, etc. Para este caso, el desengrasador se calcula para recibir una Carga Hidráulica menor o igual a 20 m3/m2/h. Las grasas y flotantes extraídos de los desengrasadores unidos a los flotantes extraídos en la decantación primaria suelen tratarse posteriormente en un concentrador de grasas donde se desprenden de su contenido en agua. Podríamos deshacernos de las grasas y espumas en una digestión anaerobia junto a los fangos ya que son en su mayor parte residuos orgánicos. Pero esto no es recomendable, ya que presenta el inconveniente de favorecer la formación de costras en el digestor. Las grasas concentradas se almacenan en contenedores especiales y posteriormente pasan a vertedero. También se podrían incinerar en caso de existiese en la planta un horno de incineración de fangos o para tratamiento de fangos. Las tareas a realizar son: Mantener en perfecto estado las rasquetas de limpieza superficial, y en caso de deterioro, sustituirlas. Vigilar el nivel de los contenedores de grasas para su vaciado. Mantenimiento normal de los equipos según fabricante. Podríamos decir que esta es la zona con mas riesgo de resbalón por la gran cantidad de grasas que puede haber depositado en el suelo y barandillas. Preaireación Sus objetivos son varios: Mejorar la tratabilidad del agua, en cuanto que esta llega séptica, contaminada, a la depuración. Control de olores. Mejorar la separación de las grasas. Favorecer la floculación de sólidos. Mantener el oxígeno en la decantación aun a bajos caudales. Incrementar la eliminación de DBO5. Evitar los depósitos en las cámaras húmedas. La preaireación se utiliza en: Cabecera de instalación En los desarenadores, incrementando el tiempo de retención y la capacidad de aireación. En los canales de distribución a los decantadores primarios. Los principales parámetros de diseño son: El tiempo de retención varía según el objetivo que se pretenda: La disminución de los olores y la prevención de la septicidad implican un tiempo mínimo de 10-15 minutos. La floculación efectiva de los sólidos necesita, aparte de la adición de ciertos productos químicos, un tiempo de retención de 30 minutos. Para la reducción de DBO será de 45 minutos. Los caudales de Aire necesarios para los distintos objetivos son difícilmente calculables, y se basan tanto en la calidad del A.R. como en las características físicas del tanque y en la sección transversal del mismo. El factor predominante es la necesidad de mantener la adecuada turbulencia en el tanque para que su contenido se mantenga en suspensión y no se produzcan sedimentaciones. Esto se consigue suministrando una cantidad de aire mínima entre 2-6 l/s/m del tanque teóricamente. En la práctica se deben suministrar 0,8 m3 aire/m3 de agua residual. Métodos de preaireación Son dos principalmente: difusores y aireadores mecánicos: Los difusores se clasifican en: Porosos: Con forma de disco o de tubos. Construidos de SiO2 (óxido de silicio) o de Al2O3 (óxido de aluminio), pueden ser de tipo cerámico o estar construidos sobre una masa porosa con ligazón cerámica. No porosos: de tipo boquilla, orificios, válvulas... Los de tipo boquilla y orificios están construidos de metal o plástico, tienen aberturas anchas y sueltan unas burbujas más grandes que los difusores de tipo poroso. La cantidad de difusores requeridos se calcula determinando la cantidad total de aire necesario y dividiéndolo por el caudal medio recomendado para cada difusor. Normalmente este caudal es de 1,9-7 l/s/ difusor. La distancia entre difusores es generalmente de 250-600 mm. La aireación mecánica se consigue mediante: Turbinas Aireadores de superficie. Las tareas que realizaremos serán: Comprobar que el caudal de aire insuflado es el adecuado. Reparar y cambiar los difusores deteriorados. Mantenimiento de equipos. Sedimentación En términos de tratamiento de aguas residuales la sedimentación consiste en la separación, por la acción de la gravedad, de las partículas suspendidas cuyo peso específico es mayor que el dell agua. Es una de las operaciones unitarias más utilizadas en el tratamiento de las aguas residuales. Los términos sedimentación, clarificación y decantación se utilizan indistintamente en Latinoamérica. Esta operación se emplea para la eliminación de arenas, de la materia en suspensión en flóculo biológico en los sdimentadores secundarios en los procesos de lodos activados, sedimentadores primarios, de los flóculos químicos cuando se emplea la coagulación química, y para la concentración de sólidos en los espesadores de lodos. En la mayoría de los casos, el objetivo principal es la obtención de un efluente clarificado, pero también es necesario producir un lodo cuya concentración de sólidos permita su fácil tratamiento y manejo. En el proyecto de diseño de sedimentadores, es preciso prestar atención tanto a la obtención de un efluente clarificado como a la producción de un lodo concentrado. En función de la concentración y de la tendencia a la interacción de las partículas, se pueden producir cuatro tipos de sedimentación: discreta, floculenta, retardada (también llamada zonal), y por compresión. Es frecuente que durante el proceso de sedimentación, ésta se produzca por diferentes mecanismos en cada fase, y también es posible que los cuatro mecanismos de sedimentación se lleven a cabo simultáneamente. Tratamiento de agua por carbón activado. La filtración por carbón activo se emplea en la industria azucarera, química, farmacéutica, refresquera, etc. así como en el tratamiento de aguas, debido a su gran capacidad de adsorción de diversos elementos, sumado a la posibilidad de limpieza del lecho filtrante con gran facilidad y rapidez, así como a la capacidad de regeneración del mismo. En el ámbito del tratamiento de aguas en específico, estos procesos se emplean para depuraciones de agua subterránea, purificaciones del caudal final de las estaciones de tratamiento de agua potable, decloraciones del agua, depuración de aguas para piscinas, refinamiento de las aguas residuales tratadas, etc. El carbón activado es un material poroso, preparado por la carbonización y activación de materiales orgánicos, especialmente de origen vegetal, como madera, el carbón mineral, y cáscara de coco entre otros, con el fin de obtener un alto grado de porosidad y una importante superficie intraparticular. La elevada superficie específica facilita la absorción físicas de los gases y vapores de mezclas gaseosas o sustancias disueltas en líquidos. Se compone en un 75-80% de carbono y un 5-10% de cenizas, físicamente se presenta en polvo o en granos. Existen varios tipos de carbón activo según la materia prima, tipo de activación y la duración del proceso de activación, pero, en cualquier caso, se caracteriza por su pequeño y homogéneo calibre y su estructura interna, formada por un gran número de poros de tamaños similares que puede alcanzar una superficie interna entre 500 y 1.500 m2/g. Estos poros se dividen según su tamaño en macro poros, con un radio mayor a 25 nm, meso poros, entre 25 y 1 nm y, micro poros, con radio inferior a 1 nm. Lecho de carbon activado Los lechos de carbón activo se instalan en columnas de filtrado, con o sin presión, siendo la función desarrollada por éste la de filtrado final, en combinación con filtros de arenas, actuando como adsorbente o, individualmente, actuando como filtro mecánico y adsorbente. Adsorción La adsorción con carbón activo consiste en retirar del agua las sustancias solubles mediante el filtrado a través de un lecho de este material, consiguiéndose que los oligominerales pasen a través de los micro poros, separando y reteniendo en la superficie interna de los gránulos los compuestos más pesados. Este proceso retiene sustancias no polares como aceite mineral, polihidrocarburos aromáticos, cloro y derivados, sustancias halogenadas como I, Br, Cl, H, F, sustancias generadoras de malos olores y gustos en el agua, levaduras, residuos de la fermentación de materia orgánica, microorganismos, herbicidas, pesticidas, etc., todo ello sin alterar la composición original del agua, respetando los oligominerales y sin generar residuos contaminantes. Por otro lado, los compuestos residuales derivados de procesos de cloración y ozonización son catalizados y pasan a formas reducidas inofensivas. En este caso, es recomendable emplear carbón de gran dureza, como los procedentes de hueso de aceituna y cáscara de coco, aunque también existen procedentes de hulla, lignito, madera, etc., obtenidos todos ellos a partir del calentamiento a temperaturas extremas en ausencia de oxígeno. El tipo de filtro de carbón activo requerido depende principalmente de la calidad del agua y del objetivo de depuración planteado. Existen dos tipos básicos: abiertos o cerrados a presión. En ambos casos, para una misma calidad del agua filtrada, la actividad del carbón activo depende de su propia naturaleza y de la temperatura en el interior del filtro. Su funcionamiento es muy simple, consiste en introducir el agua por la parte superior de una columna que contiene el carbón activo para que, mediante la acción de la gravedad o una presión artificial, circule hacia abajo y se recupere a través de un sistema de drenaje inferior. Durante este filtrado, el lecho va acumulando sustancias que cada cierto tiempo es preciso retirar. Limpieza del lecho El sistema más simple, pero no completamente eficaz de limpieza del lecho filtrante es el contra-lavado con agua (comúnmente llamado retro-lavado), mediante el cual se produce un arrastre de partículas y una expansión del lecho de aproximadamente un 20%. Además, según la cantidad y tipo de sustancias retenidas, será preciso, cada cierto tiempo, regenerar el carbón mediante la oxidación de la materia orgánica, etc. En estos procesos se destruye una pequeña cantidad del carbón activo que deberá ser sustituida a futuro. ¿Qué es el Intercambio Iónico? El intercambio iónico es un proceso de tratamiento de agua utilizado generalmente para el ablandamiento o desmineralización del agua, aunque también es utilizado para remover otras sustancias del agua en procesos tales como la desalcalinización, desionización, y desinfección. ¿Pero de qué se trata exactamente el intercambio iónico? El intercambio iónico describe un proceso químico específico en el que iones disueltos no deseados son intercambiados por otros iones con una carga similar. Los iones son átomos o moléculas que contienen un número total de electrones que es igual al número total de protones. Hay dos grupos diferentes de iones, los cationes, que están cargados en forma positiva, y los aniones, que están cargados en forma negativa. Tenemos que agradecerle a Michael Faraday por estos nombres, que provienen de la atracción de los cationes hacia el cátodo y de la atracción de los aniones hacia el ánodo en un dispositivo galvánico. Remoción de Contaminantes Iónicos Esta atracción es utilizada para eliminar contaminantes iónicos disueltos del agua. El proceso de intercambio tiene lugar entre un sólido (resina o zeolita) y un líquido (agua). Durante el proceso, los componentes menos deseados son intercambiados por otros considerados más deseables. Estos iones deseables son los que se cargan sobre el material de la resina. En el intercambio de cationes durante el tratamiento de agua, los iones cargados positivamente que entran en contacto con la resina de intercambio iónico son intercambiados con los iones cargados positivamente disponibles en la superficie de la resina, generalmente sodio. En el proceso de intercambio aniónico, los iones cargados negativamente son intercambiados con iones cargados negativamente en la superficie de la resina, generalmente cloruro. Varios contaminantes — incluyendo a los nitratos, fluoruros, sulfatos y arsénico — se pueden remover mediante el intercambio de aniones. Estas resinas pueden utilizarse solas o en conjunto, para eliminar los contaminantes iónicos del agua. Si una sustancia no es iónica, como es el caso del benceno, entonces no podrá ser removida por medio del intercambio iónico. El Intercambio Iónico en el Tratamiento del Agua Potable En forma reciente ha comenzado a incrementarse el uso de resinas de intercambio iónico para la producción de agua potable. Se han diseñado resinas especiales para tratar diversos contaminantes realmente perjudiciales, como el perclorato y el uranio. Hay diversas resinas diseñadas para estos propósitos, como la resina de base fuerte / anión fuerte, que se utiliza para eliminar nitratos y percloratos. También hay perlas de resina que se pueden utilizar para el ablandamiento del agua. Recarga de Resinas Los materiales con las que están fabricadas las resinas tienen una capacidad finita de intercambio. Cada uno de los sitios de intercambio se agotará si se le da un uso prolongado. Cuando ya no sea más posible intercambiar iones, la resina deberá ser recargada o regenerada para restaurar sus condiciones iniciales. Las sustancias utilizadas para ello pueden ser el cloruro de sodio, el ácido clorhídrico, el ácido sulfúrico, o el hidróxido de sodio. El regenerante gastado es la sustancia principal que queda como remanente del proceso. Contiene no sólo todos los iones removidos, sino también los iones extra del regenerante y también tendrá un alto nivel de sólidos totales disueltos. Puede ser tratado en una planta de tratamiento de aguas residuales municipales, aunque su descarga deberá requerir supervisión. La eficiencia del intercambio iónico para el tratamiento de agua puede verse limitada por la incrustación de minerales, por la obstrucción de las superficies, y por otros problemas que contribuyan a la contaminación de las resinas. Los procesos de tratamiento como la filtración o el agregado de productos químicos pueden ayudar a reducir o evitar estos problemas. Mercado de las Resinas de Intercambio El mercado mundial del intercambio iónico, que fue estimado en U$S 1,54 billones en 2014, se proyecta que será de U$S 2,46 billones hacia el año 2022, esto representa una tasa de crecimiento anual compuesta de aproximadamente un 6 por ciento en ese período, según información aportada por Stratistics MRC, una empresa de investigación de mercado con sede en Maryland. Sus analistas ven que una creciente demanda de la energía nuclear y del aumento de la rigurosidad de las normas ambientales le darán impulso al mercado, que continúa en crecimiento. Esto se ve particularmente en los mercados de la generación de energía eléctrica y del tratamiento de aguas residuales, y también en la región del Asia – Pacífico. La industria necesita encontrar nuevas aplicaciones para la tecnología, para poder seguir experimentando un continuo crecimiento. Decantadores La decantación es un método físico para separar componentes de distinta densidad situándose el más denso en el fondo del decantador por gravedad y quedando el agua clarificada en la superficie. La adición de coagulantes y floculantes favorece el proceso de decantación. En el tratamiento de aguas residuales urbanas e industriales el decantador es un elemento fundamental ya que mediante el mismo podemos separar y concentrar los fangos así como los sólidos presentes en el agua residual mediante un proceso de decantación física. Por lo general un decantador suele incluir una campana tranquilizadora interior para favorecer la decantación, un vertedero Thompson perimetral con el objetivo de romper las espumas formadas y retener los materiales sólidos, y finalmente, conexiones de entrada, salida y vaciado. El dimensionado de un decantador se realiza a partir del caudal de agua a tratar y las características siendo los parámetros fundamentales el tiempo de residencia, el diámetro del decantador, altura total del decantador, altura del cono, diámetro interior del cono y ángulo del cono. Finalmente, un espesador de fangos nos permite disminuir los costes de explotación de la propia depuradora. También es posible tanto para agua potable como para agua residual el uso de decantadores lamelares. El empleo de lamelas con una inclinación adecuada facilita la separación de los sólidos en una menor superficie de instalación. El empleo de un floculante y/o coagulante facilita la separación de los sólidos en suspensión presentes en el agua. Para hacer efectiva la mezcla del producto químico así como la formación adecuada de los flóculos. Hidritec emplea mezcladores estáticos acompañados de cámaras de floculación o tubos floculadores.