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1.

El padre de los monstruos


INTERIOR- COLECTIVO LÍNEA 5- DÍA

Desde el fondo del colectivo se ve a Osvaldo parado al


costado del conductor, tiene una remera negra, es oscuro
de piel tipo el Taco, tiene una campera de jean crota y
pantalones crotos, está tomado de uno de los caños del
colectivo, hay una persona poniendo monedas en la máquina
de boletos, están vacíos los dos primeros asientos de la
derecha y uno de la izquierda. Después los otros asientos
están ocupados por diferentes personas. Ricardo nuestro
protagonista está mirando sentado del lado de la derecha
(en los asientos de a dos, del lado del pasillo. Tiene un
traje negro y pelo castaño corto. (Solo se lo ve de atrás)
(1)

OSVALDO
Señoras y señores, disculpen las
molestias, me llamo Osvaldo. Padezco
de E.P.M, una enfermedad hereditaria
que me ha cerrado todas las puertas
laborales.

Osvaldo comienza a pasar por las sillas, se lo ve de


espaldas, extendiendo una mano, y la otra como metiéndola
en el bolsillo de su campera. (2)

OSVALDO
Su moneda es una gran ayuda. Si bien
el Estado me da los remedios, con mi
mujer, que es desocupada, debemos
mantener a una niña.

Osvaldo se va acercando a Ricardo que lo mira con cara de


extrañeza de haberlo reconocido y extiende una mano hacia
el cartón que ha sacado de su bolsillo Osvaldo. (3)

OSVALDO
Aquí está mi historia clínica por si
alguno quiere ver que no chamullo…

RICARDO
Disculpa, ¿puedo?

Osvaldo le tiende el cartón con una sonrisa ambigua,


rosando lo siniestro, y Ricardo lo toma y lo mira aún con
más extrañeza. (4)

OSVALDO
Cómo no, papá. Agarra sin miedo.
2.

El rostro de Ricardo muestra un gran espanto, su piel se


torna blanca, mete una mano en su bolsillo del traje
mientras le entrega el papel nuevamente a Osvaldo. (5)

RICARDO
To… to…ma… gracias.

Osvaldo sigue con la misma expresión siniestra y sus ojos


parecen mostrar un brillo raro mientras toma el cartón y
extiende la mano para recibir unas monedas que está saca
Ricardo de su bolsillo. (6)

OSVALDO
¿Está bien, don? ¿Pasa algo?

RICARDO
Un bajón de presión, nada más. Toma

La mano de Osvaldo se cierra como una garra al tomar las


monedas, de cerca se puede apreciar que su mano tiene
cuatro dedos que le falta el meñique. (7)

OSVALDO
Gracias, mejórese.

Ricardo totalmente pálido mira hacia la ventana, la


persona que está del lado de la ventanilla le abre la
ventana, Osvaldo sigue pasando por las sillas que están
más atrás y una señora le da unas monedas. (8)

SEÑOR DE AL LADO
Le abro un poco.

RICARDO
Gra… cias.

OSVALDO
Muchas gracias.

Osvaldo saludando al conductor mientras baja por la puerta


de adelante en la parada. (9)

OSVALDO
Gracias, capo, nos vemos.

EXTERIOR- CALLE- DÍA

El colectivo sigue su recorrido por Rivadavia. Se ve por


una de las ventanillas a Ricardo que sigue totalmente
paralizado. (10).

El colectivo abre sus puertas en la parada de la plaza


Flores y se ve a Ricardo descender como zombi (11).
3.

Ricardo se queda parado por un segundo, mientras el


colectivo se va. (12)

Ricardo sale corriendo desesperado y choca a una señora,


la gente lo mira sorprendida (13).

Ricardo frente a una puerta de una casa la abre, con las


llaves, desesperado. (14)

INTERIOR-CASA DE RICARDO-DÍA

Ricardo abre la puerta con fuerza e ingresa desesperado a


un pasillo estrecho. (15)

RICARDO
¡Carla, agarra a los chicos que nos
vamos a la mierda!

Ricardo cierra la puerta con fuerza y frente a él aparece


una mujer de unos cincuenta y cinco años con ropa de casa
con cara de susto. (16)

CARLA
¡Pero qué pasa, te volviste loco! ¿A
dónde nos vamos?

RICARDO
¡No te puedo explicar ahora, puta
madre, llama a los chicos!

Ricardo avanza por el pasillo a lo que es un espacioso


comedor con fuerza mientras que Carla lo toma del brazo
para frenarlo. Allí hay un gran modular, una mesa grande
con cinco sillas, dos sillones y una tele. También se
pueden ver entre el modular una puerta abierta a un lado
que es la cocina y al otro otra cerrada. También se puede
observar en la otra un ventanal enorme que da acceso a un
patio. (17)

CARLA
¡Ricardo, me estás asustando! ¿Qué
pasa? ¡Explicame, ya!

RICARDO
¡Chicos bajen ya! ¡Nos vamos de
viaje!

Ricardo se dirige hacia un modular para abrir un cajón.


Carla pone una mano delante del cajón (18).

CARLA
¡Qué vas a agarrar! ¡Vos te volviste
completamente loco!
4.

Los chicos salen de la puerta cerrada están con un


uniforme de colegio, uno tiene alrededor de unos catorce
años y el otro unos ocho, el de catorce es rubio y de ojos
celestes, el otro es castaño y de rostro parecido al
padre, ambos observan atónitos como Ricardo abre con
fuerza el cajón empujando hacia atrás a Carla y dentro de
aquél hay un revólver. (19)

RICARDO
¡La puta, saca la mano porque lo
haces tan difícil!

CARLA
¡Ay!

HIJO MAYO
¿Papá qué pasa?

Una niebla empieza a nublar la casa. Ricardo toma el


revólver poniéndoselo al costado de su cabeza como para
prepararse para apuntar. (20)

RICARDO
Ya es tarde, están acá…

Por el ventanal entra por debajo un líquido negruzco y


espeso. Los chicos se aferran al padre que apunta a esa
cosa que está ingresando a la casa (21).

HIJO MENOR
¡Papi, qué es eso, tengo miedo!

RICARDO
Unos horrendos viejos conocidos.

Ese líquido comienza a tomar la forma de cuatro


alienígenas a lo T-mil. Ricardo abre fuego contra una de
las figuras (22).

RICARDO
¡Hijos de puta, qué carajo quieren,
pagué mi deuda, no jodan más,
termínenla con su peste!

Una de las figuras cae. Las otras ya recobran mejor forma


y detrás de ellas el líquido sigue ingresando y se van
formando otros seres. Ricardo sigue disparando
retrocediendo con los niños abrazados a él y Carla está
arrastrándose también hacia atrás mientras que los bichos
avanzan. (23)

CARLA
¡Ricardo, qué diablos es esto!
5.

RICARDO
¡La puta madre, deja de preguntar
estupideces y anda hacia la puerta!

La puerta de entrada también está infesta de estos


alienígenas. Están atrapados. Ricardo está sin balas,
detrás de los alienígenas que se le están por acercar
tendiendo las manos hacia sus hijos se ven tres caídos.
Los niños están apretados a Ricardo sin querer mirar y
Carla está acurrucada debajo de la mesa tapándose la cara
con las rodillas y la cabeza con las manos. La actitud de
Ricardo sigue siendo desafiante a pesar de no tener balas
rebolea el arma con autoridad (24).

CARLA
¡Dios mío! ¡Esto es una pesadilla,
no es real, no es real, no es real!

RICARDO
¡Apártense, basuras, no se los van a
llevar son míos, entienden míos!

Cuatro alienígenas toman a los niños mientras que otros


dos estiran sus manos y largan una especie de humo de
ella. Las manos se parecen mucho a la de Osvaldo lo mismo
que los ojos. Este humo le produce como somnolencia en el
rostro de Ricardo. (25)

RICARDO
¡Qué hacen hijos de…!

HIJOS A DÚO
¡Papaaaaaá!

Ricardo cae, los alienígenas toman a los niños. Carla


desesperada intenta salir de debajo de la mesa para ir a
ayudarlos (26).

HIJOS A DÚO
¡Mamaaaaá!

CARLA
¡No se lleven a mis nenes!

Carla gatea hacia los alienígenas que están volviendo a su


esencia de líquido negruzco tanto ellos como a sus hijos.
(27).

CARLA
¡No, mis hijos, no se los lleven!

Todo se convierte en líquido y solo quedan los uniformes


en el suelo con los zapatos, Carla se sigue arrastrando
hacia el sitio en donde están lar ropas. (28).
6.

CARLA
¡No se los lleven!

El humo de la habitación comienza a disiparse, el líquido


se va por debajo del ventanal. Carla está abrazando las
ropas y Ricardo está volviendo en sí. (29).

CARLA
¡Por favor, no se los lleven!

Ricardo se acerca a abrazarla. Ella mira fijo hacia


adelante con lágrimas en los ojos y furia (30).

RICARDO
Me cagaron, me habían jurado que no
iba a suceder más, que con Osvaldito
bastaba.

CARLA
Osvaldito murió a los tres años, no
se lo llevo nadie… a mis nenes sí…
se los llevaron esos…

Ricardo intenta abrazarla y Carla lo rechaza con furia.


(31)

RICARDO
Osvaldo no murió. Yo no soy quien
parezco ser, te amo, me adapté a
este mundo elegí este cuerpo, pero
ellos roban mi prole, ellos…

CARLA
¡Cállate, si tenés que ver con esa
locura agarra tus cosas y no vuelvas
más!

Ricardo se para frente a ella con impotencia, ella sigue


sentada en el suelo mirando el ventanal y grita furiosa.
(32)

RICARDO
Amor… yo te amo… es solo esa peste…
esos…

CARLA
¡Andate, estás loco! ¡Voy a llamar a
la policía si no te vas! ¡Cómo
explico esto!

Ricardo se va hacia el pasillo donde está la puerta de


calle mirando hacia Carla que sigue sentada meciéndose y
mirando el ventanal (33).
7.

CARLA
¡Es una pesadilla! ¡Se llevaron a
los nenes! ¡Cómo explico esto si es
una pesadilla!

INTERIOR- SUBTE LÍNEA A/VAGÓN –DÍA

Un vagón atestado de gente. En él se puede observar a


Ricardo sentado en uno de los asientos de madera del lado
de la ventanilla y de espaldas a la puerta, a un costado
está una señora, delante de él un niño con su padre. Se ve
por la ventanilla que el subte está arribando a la
estación de Acoyte (34).

CUADRO
Cuatro años después…

El vagón se detiene en la estación de Acoyte. Ingresa


gente y un cuerpo con la misma ropa que tenía Osvaldo al
subir al bondi, pero no se le ve la cabeza, ingresando
detrás de la espalda de Ricardo. (35)

HOMBRE
Señoras y señores, disculpen las
molestias, me llamo Pablo. Padezco
de E.P.M, una enfermedad hereditaria
que me ha cerrado todas las puertas
laborales.

El rostro de Ricardo se transmuta a dolor se toma con una


mano del pecho y gira lentamente el rostro hacia el
costado. (36)

PABLO
Su moneda es una gran ayuda. Si bien
el Estado me da los remedios, con mi
mujer, que es desocupada, debemos
mantener a una niña.

Pablo es el hijo mayor de Ricardo. Lo mira a Ricardo con


los ojos de los alienígenas y extiende el mismo cartón que
antes había tenido Osvaldo y se lo da a Ricardo (37).

PABLO
Aquí está mi historia clínica por si
alguno quiere ver que no chamullo.
Aquí tiene si quiere ver, papá.

Ricardo sostiene el papel en la mano en él se ve la foto


de sus tres hijos raptados y la de él (38), su cuerpo
tiembla. (39)
8.

PABLO OFF
Se encuentra bien, don.

El cuerpo de Ricardo se convulsiona, tiene un ataque


cardíaco. La señora que tiene al lado lo toma del cuerpo
(40).

SEÑORA
¡Ayuda, un médico, ayuda, el señor
está teniendo un ataque!

Se observan los ojos de Ricardo con expresión de terror.


(41).

Pablo está en su naturaleza alienígena observando


sonriente (42).

Toma de arriba del subte. Pablo se va por el pasillo del


subte para bajar en Púan mientras que la gente se amontona
sobre Ricardo que está muerto en la silla. (43)

FIN

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