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Auditoría ambiental

Ensayo

La gestión medioambiental en las empresas como ventaja competitiva

Nombre: Lizbeth Nuñez

Grupo: 691

Introducción

La gestión ambiental empresarial, es un factor crucial que influye decisivamente tanto en la imagen
corporativa de la empresa como en la calidad del producto, en el costo de la comercialización y en la
competitividad. Las empresas cada vez más enfocan su gestión a la satisfacción de los clientes como
objetivo primordial ante las amenazas de la competencia.

La gran mayoría de las empresas reconocen que tienen una preocupación eficaz por el ambiente. Unas
veces por convencimiento propio y otras por la presión de la opinión pública o de la legislación, las
actividades industriales y empresariales se ven obligadas a incorporar tecnologías limpias y a poner
medios para evitar el deterioro del ambiente.

En los últimos años ha aumentado el número de empresas que se ponen objetivos o tienen programas
en cuestiones de medioambiente. La finalidad, en bastantes casos, no es solo cumplir con la
legislación ambiental sino colaborar en la mejora de la situación y la preservación del entorno ya que
la gestión ambiental empresarial es un proceso dinámico de gran relevancia que posee un efecto
positivo en las ventajas competitivas de las organizaciones.

Desarrollo

La empresa como sistema abierto está formado por un conjunto de elementos relacionados entre sí,
está en continua relación con su entorno, siendo influido por este pero a la vez influyendo en él. Pero
los efectos que la empresa genera en su entorno no son sólo de carácter económico y social sino
también de carácter medioambiental.
Es necesario que la Economía de la Empresa defina una visión más amplia de la empresa como
sistema abierto teniendo presente que la empresa contribuye al deterioro del medio ambiente por tres
razones:

• Consume, como parte de sus inputs, recursos naturales escasos a un ritmo que supera sus tasas de
regeneración.
• Genera, como parte de sus outputs, emisiones contaminantes y residuos a unos niveles superiores a
las tasas de asimilación de la propia naturaleza.
• Al comercializar los productos desarrolla actividades de marketing que pueden fomentar
(consciente o inconscientemente) un consumo excesivo por parte de la sociedad, dando lugar a nuevos
consumos de recursos naturales y nuevas emisiones y residuos.

Una gestión ambiental correcta y un compromiso claro con el desarrollo sostenible de las empresas,
puede y debe transformarse en una fuente importante de ventajas competitivas (de aquí el concepto
de eco eficiencia, cada día más extendido) frente a los competidores de vislumbrar el futuro desde un
presente en que cada vez es más evidente para la sociedad la importancia de respetar el medio
ambiente en nuestras prácticas empresariales.

Podemos crear ventajas competitivas tanto en costes como en diferenciación derivadas del uso
responsable y eficiente de los recursos, lo que evita despilfarros y exceso de residuos y, por tanto,
costes; así como por la orientación en prevención frente a la más habitual en corrección de
desequilibrios ambientales generados –que por supuesto tenemos que atender si los provocamos (“el
que contamina, paga”, es una de las máximas legislativas sobre este tema)-. Esto sin tener en cuenta
que en ocasiones la certificación a través de ISO 14001 puede ser una imposición de un cliente, un
proveedor, o para la participación en algún concurso.

Por la vía de la diferenciación y de los ingresos podemos conseguir ventajas con la implantación y
mantenimiento, desde la convicción, de un sistema de gestión ambiental. Son ventajas asociadas a la
mejora de imagen, marca como consecuencia de ser una entidad respetuosa con el medio ambiente y
comprometida con el desarrollo sostenible de nuestro entorno. Además, el medio ambiente ofrece
oportunidades específicas como consecuencia de la creciente sensibilización ambiental de las
personas, con la aparición de un número creciente de los llamados “consumidores verdes”,
especialmente sensibles al contraste de las prácticas respetuosas con el medio ambiente de sus
proveedores; o los “productos verdes”, productos ecológicos cada vez más demandados por la
sociedad.

Conclusión

La gestión medio ambiental que debe cumplir la empresa es un compromiso real con la sociedad en
la que se desarrolla y con el medio ambiente, ya que gracias al entorno podemos realizar varias
actividades que nos permiten subsistir, pero hay que tomar en cuenta que los recursos que tomamos
para la producción e industrialización salen de las fuentes del medio ambiente y que si no tenemos
conciencia del daño que le hacemos al entorno, pronto nos quedaremos sin recursos y sin fuentes de
vida. Por lo cual el compromiso social debe enfocarse en la preservación de los recursos naturales y
las empresas deben implementar prácticas respetuosas para salvaguardar el medio ambiente, creando
ventajas competitivas ya que en la actualidad es mejor vista una empresa que tiene responsabilidad
social y con el medio ambiente lo que es positivo y crea ventajas competitivas.

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