Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Azucar y Simulacion
Azucar y Simulacion
EVAPORACION
Se comprende por evaporación, a la operación unitaria, en la cual se lleva a
cabo el aumento de concentración de una solución de un líquido, que se
denomina solvente, y uno o varios solutos sólidos disueltos en dicho solvente,
los cuales son prácticamente no volátiles a la temperatura de operación, la cual
es la temperatura de ebullición del solvente, a la presión de operación. Esta
separación se realiza por medio de la adición de calor a la solución, para
llevarla a la temperatura de ebullición, de modo que el solvente se volatilice y
los solutos permanezcan en la solución, de modo que aumente la
concentración de los mismos.
La evaporación de líquidos, como proceso físico, es solo un aspecto particular
de la transmisión de calor. Se utiliza este proceso para la separación, por
ebullición, de una parte del líquido contenido en una disolución o suspensión.
El calor necesario para ello puede proceder de: cualquier medio de calefacción.
Cuando este medio es el vapor de agua condensante, el aparato se llama
evaporador, y la evaporación se estudia separadamente como operación
básico. La clasificación de la evaporación dentro de la ingeniería química
responde al empleo de aparatos especiales y métodos particulares. En una
operación de evaporación se concentra una solución al eliminar disolvente por
ebullición. Por lo general, el producto deseado es la solución concentrada, pero
en algunas ocasiones, el producto principal es el disolvente evaporado. Es
posible continuar la concentración hasta la saturación de la solución y más aún,
hasta que el soluto precipita como un sólido cristalino. En realidad, el proceso
de evaporación es equivalente a una separación en una sola etapa. Sin
embargo, los componentes se separan en forma tan definida que con
frecuencia se olvida la composición del equilibrio. En aquellas aplicaciones en
las que la fase vapor constituye un producto valioso, este equilibrio puede ser
importante. A pesar de la multitud de procesos de velocidad que ocurren, el
ingeniero interesado en estas operaciones casi siempre puede considerar el
proceso completo en términos de transferencia de calor del calentador a la
solución. Este paso controla la velocidad total y se analiza con mayor facilidad.
Las contribuciones de los otros procesos de transferencia tienen un efecto
menor sobre la operación total. Además, se conocen tan poco, fuera de las
escasas compañías que contienen evaporadores, de la mayor parte de los
detalles en el diseño, que no existe razón para tratar aquí más que los
balances de calor y material, y la formulación simple de la velocidad de
transferencia de calor a través de la superficie de calentamiento.
EQUIPOS DE EVAPORACION
Concentración
La concentración, de la solución es un factor fisicoquímico muy importante en
el proceso de evaporación, porque es la que determina otros dos elementos
fundamentales de la transferencia de calor, como lo son la capacidad calorífica
de la solución, la otra, que no es tan obvia, es la elevación del punto de
ebullición de la solución, puesto que, según se definió el soluto es no volátil,
entonces el punto de ebullición aumenta, con lo cual se requiere una energía
adicional, que la necesaria para evaporar agua.
Elevación del punto de ebullición
Cuando se disuelve un soluto no volátil, en un solvente, la presión de vapor del
solvente, decrece. Como consecuencia, el punto de ebullición aumenta, pues
se requiere más energía para que la solución, alcance una presión de vapor
igual a la presión del sistema. Este aumento, puede correlacionarse con una
forma lineal, para las soluciones diluidas.
Solubilidad
Todo sólido, posee una solubilidad máxima en agua, para esto, se debe tener
en cuenta que existe una región, denominada la región de saturación, para la
solución que se está evaporando. Si se pasa de esta zona, se llega a la región
de sobresaturación, donde la precipitación o cristalización es casi inevitable,
por lo que se debe considerar, en el proceso si es factible alcanzar una
determinada concentración, de lo contrario, se tendría la cristalización dentro
del evaporador, y dependiendo del tipo, esto, podría interrumpir su operación.
Presión y temperatura
Estas dos características van estrechamente ligadas, puesto que, la presión de
operación, determinará el punto de ebullición a trabajar, por ende la
temperatura. De esta cuenta, que, de acuerdo con el modelo experimental de
Classius y Clappeyron, si se disminuye la presión del sistema, la temperatura
de ebullición disminuirá, esto de acuerdo a un modelo exponencial negativo, de
la misma forma, si aumenta la presión del sistema, así aumentará la
temperatura de ebullición y por ende la energía requerida por el sistema, de
esta cuenta, que se debe trabajar, para minimizar costos, con equipos de
vacío, que permitan el mayor aprovechamiento del vapor vivo que se alimenta
al evaporador.
Sensibilidad térmica
Es indispensable, tomar en cuenta la sensibilidad térmica del fluido a evaporar,
pues esta determinará la temperatura máxima a operar, de modo que al fijar la
temperatura y la concentración, se ha definido ya la presión de operación, por
lo tanto, la sensibilidad térmica, juega un papel indispensable en los procesos
de evaporación.
Formación de espumas
Esta situación se presenta básicamente en soluciones que contienen
sustancias orgánicas (ácidos grasos, etc.) y que se traduce en un gran
problema de arrastre de líquido, ya que la espuma sale del evaporador junto
con el vapor que se produce durante la operación.
Capacidad calorífica
La capacidad calorífica de una masa determinada es la cantidad de energía en
Joules (o BTU) que esta requiere para aumentar un grado centígrado (o
Fahrenheit) por unidad de masa, es decir por kilogramo o libra, dependiendo
del sistema de unidades que se utilice.
Presión de vapor
La presión de vapor, es una propiedad de los líquidos, que determina la
presión que formará, en un sistema cerrado, el vapor del líquido a una
temperatura establecida.
LA EVAPORACIÓN EN LA FÁBRICA DE AZÚCAR
Tanto la fabricación como la refinación del azúcar crudo de caña requieren
evaporar el agua presente en la solución de azúcar a fin de obtener un
producto final cristalino. La evaporación se lleva a cabo en dos etapas:
La primera se lleva a cabo en una estación de evaporación a fin de concentrar
la solución. Y la segunda en un tacho de vacío para cristalizar el azúcar de la
solución.
La primera etapa se efectúa por lo general en evaporadores de múltiple efecto
para obtener una economía térmica, y la segunda en recipientes de simple
efecto para permitir controlar durante la cristalización del lote las variables
condiciones de temperatura, presión absoluta y sobresaturación.