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Para comenzar a hablar acerca de la arquitectura contemporánea en México primero hablare de el

nacimiento de esta en el mundo primero que nada cabe aclarar que el termino de arquitectura
contemporánea se refiere a la arquitectura moderna, no a la arquitectura de la Edad Moderna
(1492-1789), sino la arquitectura de la Edad contemporánea (1789 en adelante). Se podría decir por
esto, que la arquitectura de siglos anteriores al actual en su tiempo eran modernas, pero ahora se
les denomina de otras formas, por lo que la arquitectura moderna, o contemporanea es identificada
como la arquitectura nacida y realizada en la segunda mitad del siglo XX, y la realizada en el siglo
actual es decir, el siglo XIX es considerada o identificada como postmoderna.

ANTECEDENTES Y CARACTERÍSTICAS DE LA ARQUITECTURA CONTEMPORANEA

Arquitectura contemporánea. Del mismo modo que el arte contemporáneo, a partir de un rechazo
de los estilos históricos del siglo XIX, aparecieron los principios de la arquitectura contemporánea
que nació de una ruptura con los revivals. La arquitectura en el último tercio del siglo XIX seguía
aferrada a los estilos del pasado, basándose en sistemas de composición, técnicas y materiales de
la tradición académica, como el uso de los órdenes clásicos, bóvedas y columnatas que formaban
parte de la sintaxis clasicista.

Frente a ello, la nueva arquitectura propuso otros principios estéticos basados en el empleo
consecuente de las nuevas técnicas y materiales industriales, como el hormigón, el acero laminado
y el vidrio plano en grandes dimensiones.

La arquitectura contemporánea, cuyas primeras manifestaciones aparecieron en varios centros


durante la segunda mitad del siglo XIX, se consolidó a gran escala en Estados Unidos, como
consecuencia de la Exposición Internacional de arquitectura moderna organizada por el Museo de
Arte Moderno de Nueva York en 1932, donde se acuñó el término International Style. El purismo
racionalista de los primeros tiempos se fue replanteando paulatinamente, y desde la década de
1970 se ha mantenido en constante revisión, incluso rechazando a veces los postulados del
movimiento moderno o International Style.

Durante las segunda mitad del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX, se fuerón desarrollando
avences tecnológicos en los materiales y en las formas de construir que hicierón que el estilo
contemporáneo se fuera formando poco a poco, como por ejemplo: En el terreno de la tecnología,
el Crystal Palace de sir Joseph Paxton, un enorme espacio para exposiciones temporales construido
con ocasión de la Exposición Universal de Londres en 1851, representó un notable avance en el
desarrollo de la arquitectura contemporánea, realizado enteramente con elementos prefabricados
de acero y cristal, su belleza debía ser algo secundario. Sin embargo, una de las ideas persistentes
de la arquitectura del siglo XX es la creencia, compartida por arquitectos e ingenieros, de que la
belleza reside en la claridad estructural y en el uso coherente de los nuevos materiales. Otro ejemplo
es, La invención del ascensor en Estados Unidos, unido a la carestía del suelo edificable, alentó la
posibilidad de construir edificios en altura. Para ello se inventó un sistema reticular de acero una
especie de rejilla tridimensional a la que se añadieron suelos, ventanas y muros como simples
cerramientos. El prototipo de rascacielos de oficinas tomó forma en Chicago en torno a 1890 y se
difundió rápidamente por otros lugares. Todo esto siguió a pesar de que en estos tiempos
dominabán otros estilos arquitectónicos como el Art Noveau que apareció en la década de los 1890,
o el Art Deco en los años entre 1920- 39.
*La Bauhaus

En Alemania y en Austria investigaciones semejantes condujeron al establecimiento de un estilo


moderno. Especialmente influyentes fueron las innovaciones de dos arquitectos austriacos: Otto
Wagner, que enfatizó la función, la textura del material y la claridad estructural, y Adolf Loos, que
propugnó el uso de las formas geométricas. Estos y otros esfuerzos por encontrar un lenguaje para
la nueva era industrial se fundieron en la personalidad del arquitecto alemán Walter Gropius,
nombrado director de la escuela de arte de Weimar tras la Primera Guerra Mundial. Junto a su
colega Adolf Meyer, Gropius, que se había formado en el estudio de Peter Behrens, se había
destacado ya por sus proyectos modélicos de fábricas.

La escuela de Weimar, con la denominación de Bauhaus, se trasladó con posterioridad a Dessau,


donde los nuevos edificios (1925-1926) supusieron la codificación definitiva de los principios del
movimiento moderno: ventanas horizontales, muro-cortina de vidrio, disposición racional y diseño
global de todos los elementos. Al siguiente año se consolidó a escala internacional con las
Weissenhof Siedlung (viviendas obreras) cerca de Stuttgart, dirigidas por Ludwig Mies van der Rohe
(otro discípulo de Behrens que en 1930 tomó el mando de la Bauhaus, sucediendo al arquitecto
Hans Meyer) y en las que participaron varios arquitectos europeos.

Esta temprana versión de la arquitectura contemporánea contó con un programa social, derivado
de la crisis económica que vivió Alemania tras la Primera Guerra Mundial y de la gravísima carestía
de viviendas en los grandes núcleos urbanos. Durante la breve República de Weimar (1919-1933),
los gobiernos socialistas de muchas ciudades abordaron estos problemas, al igual que numerosos
arquitectos progresistas, como lo atestiguan los Siedlungen (barrios obreros) de Viena, Berlín y
Frankfurt.

Desde este punto de vista, los arquitectos con inquietudes sociales emplearon los materiales
industriales y rechazaron los materiales caros y exóticos, tratando de aprovechar las cualidades
expresivas que brindaban las técnicas económicas. Con las estructuras de acero, por ejemplo, los
muros se convirtieron en delgadas membranas, en ocasiones transparentes gracias a los
cerramientos de vidrio (muro-cortina). Ya no era necesario que los muros y la tabiquería
coincidieran con los pilares, o que las esquinas de los edificios fueran sólidas para resistir el empuje
de fuerzas de los elementos sustentados. Se eliminó el principio de simetría y se controlaron con
escrupulosidad las proporciones. Los edificios debían responder a sus necesidades programáticas
de acuerdo con un sistema proyectual racionalista.

Finalmente y a pesar de todos los aportes que se realizarón gracias a La Bhauhaus en 1933 los nazis
accedieron al poder en Alemania, y la Bauhaus, símbolo de la vanguardia alemana, fue clausurada.
Sus miembros se disgregaron. Gropius y Mies se exiliaron a Estados Unidos.

*Le Corbusie

La otra gran aportación al movimiento moderno partió de Francia. Las primeras manifestaciones
habían pasado más o menos inadvertidas en Francia, Inglaterra y Estados Unidos, dominados
durante las décadas de 1920 y 1930 por el Art Déco.

Durante la década de 1920, Le Corbusier proyectó una serie de viviendas unifamiliares, estas obras
muestran los principios de la nueva arquitectura: planta principal separada del suelo sobre pilotis,
planta libre, sin subordinaciones respecto a la estructura, utilización de ventanales horizontales por
los que penetra abundante luz y disposición de terrazas ajardinadas que permitan desarrollar la vida
al aire libre. Realiza una serie de propuestas urbanísticas innovadoras que apuntan a la resolución
del problema de la vivienda obrera mediante el planteamiento de casas fabricadas en serie y de
ciudades organizadas en altura.

Después de la Segunda Guerra Mundial, Le Corbusier estaba explotando todas las posibilidades
plásticas del hormigón armado como material de construcción. En lugar de seguir los métodos de
cerramiento habituales en los rascacielos, consistente en ligeras membranas montadas sobre
estructuras invisibles, Le Corbusier hizo de nuevo énfasis en la expresividad de los cerramientos,
concibiendo el edificio como un objeto esculpido, por lo tanto, uno de los precursores en la
explotación de las posibilidades estructurales y formales del hormigón armado fue el maestro de Le
Corbusier. Le Corbusier también ejerció gran influencia a través de sus escritos, como el libro Hacia
una arquitectura (1927), que recoge varios artículos sobre su pensamiento arquitectónico.

ARQUITECTURA MÉXICANA CONTEMPORANEA

Para llegar a lo que se podría definir como arquitectura contemporánea en México, el país tuvó que
pasar por diversas etapas aún con esto la percepción de lo que es contemporáneo es bastante
variable, puesto a que las necesidades requeridas por la sociedad también lo son y la percepción de
las sociedades e incluso de cada persona son muy diversas, y esto ha provocado que el estilo
contemporáneo no se defina con unas características establecidas, pues en este estilo se terminan
combinando características diversas de distintas corrientes no solo artísticas, si no también
ideológicas, por lo que creo necesario mencionar las diferentes etapas por las que pasó el país para
que se comenzara a realizar una arquitectura contemporánea mexicana.

*Hannes Meyer en México

En 1938 Mayer vino a México con el motivo del congreso internacional de arquitectos . En la Escuela
de arquitectura la Academia de San Carlos, dictó dos conferencias en las cuales expuso sus teorías
en cuanto al funcionalismo y la tendencia hacia una arquitectura social. En 1939 regresó a México,
esta vez junto con su familias, debido a una invitación de Lázaro Cárdenas para que permanecierra
indefinidamente en el país como profesor del Instituto Politecnico Nacional. Participó en algunos
proyectos de planificación y urbanismo. Finalmente se suspendierón los cursos impartidos por
Meyer por diversos motivos.

*Tendencias funcionalistas
El sesgo “izquierdista” que el gobierno mexicano pretendió dar a la política nacional, la incomodidad
social manifiesta en el proletariado por la falta de seguridad económica y de prestaciones y la
evidente inquietud de algunas personalidades intelectuales y artísticas del país por establecer una
“lucha de clases” propició, entre muchas otras cosas, que los conceptos de la nueva arquitectura
social propuesta por Meyer, fueran incorporados poco a poco, por algunos arquitectos mexicanos.
Sin embargo aquellos fueron asimilados de dos maneras distintas: En una, la influencia de
arquitectos tales Frank Lloyd Wright, Ludwig, Mies Van De Rohe y Walter Gropius, llevó a la creación
de obras arquitectónicas en las cuales la “economía” se entendió solamente como desnudez de
ornamentación, estandarización de vanos y a un de ciertos espacio interiores como baños,
vestidores, cuartos de servicios, alacenas, etc., y cierta estandarización también en el empleo de
materiales: cantera, concreto y tabique aparente. E n contraste , los espacio concebidos para dichas
obras fueron generosamente amplios y en ocaciones excesivamente iluminados y ventilados por
enormes ventanales acristalados.
Muchos edificios de departamentos para las clases alta y media fuerón construidos también por
esos años siguiendo estos criterios.
El otro punto de vista fue aquel dentro del cual el concepto de “economía” fue empleado en todos
lo aspectos posibles de la arquitectura. Economía en los materiales empleados, por su
estandarización., economía en los acabados al dejar los materiales aprentes, ecom¿nomia aun en
los procedimientos constructivos, economía en sistemas de iluminación natural mediante la
utilización de blocs de vidrio en algunos muros, lo que permitia únicamente la iluminación del
espacio interior, no asi una ventilación eficaz., economía en la dimensión de los espacios, ya que es
apartir de estos años que las áreas habitables y de circulación fueron haciéndose mas y mas
pequeñas., economía a un en la lotificación de los fraccionamientos de la época. Por desgracia pocos
fueron los arquitectos que adoptaron este tipo de “funcionalismo social” por convicción o
conciencia de clase, antes bien fue utilizado como pretexto para lograr una mayor especulación no
solo del espacio arquitectónico sino aún de lo urbano de materiales de baja calidad, lo que les
permitio tener mayores ganancias. Abrió la posibilidad de la especulación espacial y de la mala
calidad de la vivienda bajo la bandera de una arquitectura “social”.
*Dos décadas de

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