Biografía de Ángel Tornati Costa

Nació el 12 de enero de 1917 en el Sur de Italia, su padre abandonó a su

madre desde que tenía 4 años, así que ella era el único sustento de su hogar.

A duras penas pudo estudiar en un colegio estatal debido a la precariedad

económica, pero ni siquiera pudo completar la secundaria; en el colegio se
mostraba como un niño muy ingenuo pero empeñoso de hacer las cosas
bien.

Cuando salió del colegio tenía que buscar algún trabajo para poder ayudar a
su madre, al no encontrarlo empezó a robar; dado a que su barrio era muy
pobre habían chicos que también se le unían aunque pocas veces tenían éxito
para hacerlo ya que no eran nada habilidosos.

Algunas veces cumplía con pequeños trabajos por los cuales le pagaban, con
eso al menos podía aportar algo al hogar.

Mientras el tiempo avanzaba, Ángel ya tenía forjado un grupo de amigos con

los cuales pasaba bastante tiempo; Ángel les propondría hacer una banda y
realizar acciones delictivas, ellos aceptarían.

Estos amigos se hacían llamar el Jama y el Serafini; Tornati pasaría a tomar el

nombre de “el Ganso” y juntos los tres formarían la banda Martillo, que no
sería tan conocida hasta el momento en el que intentaron robar en el
negocio de un funcionario público; por este hecho fueron sentenciados a tres
años de prisión por intento de robo agravado.

En realidad Tornati nunca tuvo la habilidad para robar, solo lo realizaba por
los apuros económicos que pasaba y, aunque no siempre resultaba con éxito
sus fechorías, le alcanzaba para poder sobrevivir y apoyar a su madre y ,
cuando a veces estaba a punto de ser atrapado, era capaz de escapar usando
los medios que tenía.

Después de salir de prisión conocería a María, que a futuro sería su esposa;

ella era amiga de Serafini, se vieron por primera vez en una fiesta de barrio.
Desde un principio Ángel quedaba sorprendido con la personalidad de María
que era muy imponente y seria, así que intentó cortejarla por mucho tiempo
hasta que ella lo aceptó como novio; cuando ya estaban comprometidos ella
cambió su forma de ser, empezaba a desconfiar mucho de él, tanto que a
cada rato intentaba buscarlo, sabiendo aún que él salía en las noches a
intentar robar; aun así, contrajeron matrimonio religioso ya que se querían
mucho.

Después de un tiempo de convivir con ella y dándose cuenta que con simples
robos no alcanzaría para sostener su hogar, Ángel Tornati comenzaría a
planear un robo más ambicioso: robar en la casa señorial del asesor de
ayuntamiento, por lo cual le empezó a hacer seguimiento durante 10 días y
hallar un momento oportuno para entrar a su casa.