Buenos días estimada profesora y compañeros.

Quizás suena difícil abordar este tema sin que tenga un gusto a cliché o que suene como el típico
discurso emotivo, motivacional, pero haré el intento de que no sea así

Todos soñamos o queremos ser alguien en la vida, ya sea por estabilidad amorosa, económica o
por simple hobbie o competitividad más que nada por el miedo a la vergüenza o la deshonra. Pero
pensando fríamente esto muchas veces nuestras posibilidades se estrechan por algo tan simple
como lugar geográfico, clase socio económica o costumbres familiares.

Y de ahí me surge la sencilla pero a la vez compleja pregunta de ¿vale la pena estudiar algo que no
nos gusta solo por querer ser alguien en la vida?.. Y permítanme que me desligue y de una opinión
más personal del tema, pero cuando me surgió la idea sobre la cual decantar en un simple discurso
no quise ser menos y hacer notar esta inquietud que empieza con el simple juego de niños
diciendo quiero ser doctor, futbolista o actor, permítanme recalcar el quiero ser una pregunta que
estos últimos 4 años nos ha hecho apedazar nuestra cabeza y decir que queremos ser en nuestro
futuro, o en algunos casos más desafortunados a que podemos llegar a aspirar en esta fugaz vida.

Sinceramente creo que es necesario plantear esto ya que estamos en el culmine de nuestra
educación media y mas de alguno de nosotros debe tener una crisis existencial sobre qué hará con
su futuro, ya que creo que la mayoría reiteradas veces ha pensado en esto, o ha escuchado la
típica frase de “No me dio el puntaje para lo que quiero estudiar” generando un repudio y estrés
inmenso hacia esto, el saber que una prueba estandarizada es quien decide nuestro futuro
muchas veces es impactante-

Pero quizás pasamos matándonos estudiando, posteriormente trabajando, solo por dinero y al
cabo de nuestra vida nos preguntamos ¿valió la pena pasar todo nuestro tiempo siguiendo
órdenes, haciendo una extensa rutina o simplemente buscando una estabilidad en esta vida?.. Es
curioso ver como una amplia malla de carreras técnicas y universitarias se nos hace tan estrecha y
que te critiquen por no querer seguir con lo que llamamos entre comillas lo típico, dejando de lado
tus sueños.

Es difícil en esta sociedad entender que lo que la gente piense no es un impedimento para lograr
una meta o un objetivo ya que cada uno de nosotros no es una maquina o un robot, somos libres
de pensar y hacer lo que queramos al punto de tomar nuestras propias decisiones.

El saber de qué la felicidad va más allá de un título, un puesto en el trabajo o mucho dinero, que
es algo que no se encuentra en la montaña más alta del mundo o en el fondo del mar ya que es
algo que se encuentra dentro de nosotros, el disfrutar siempre de lo que hacemos, el llegar a viejo
y tener mil historias que contarles a nuestros descendientes, el hacer todo lo nos propusimos de
jóvenes creo que es algo impagable.

Aún estamos a tiempo de poder elegir que queremos de nuestro futuro, estamos a tiempo de
saber que quizás una prueba no defina quien somos ni menos lo que seremos, que la sociedad no
es una barrera y la moral no es una ley, el poder decidir qué hacer y cómo hacerlo.

Aunque a algunas personas se le haga imposible el poder comparar a un médico con un pintor, a
un ingeniero con un cantante o a un abogado con un deportista, ya que la sociedad muchas veces
infravalora nuestro esfuerzo y el de muchas personas sin saber cuánto le costó llegar hasta donde
está.

Que muchas veces la vida nos pondrá obstáculos sobre lo que queramos hacer, que más de alguna
persona nos desalentara solo por no quieres hacer lo mismo que todos o en el peor de los casos
no compartir sus mismos principios, tenemos que entender que la base de nuestro futuro se crea
en la fe, no hablo de la típica fe sobre algún dios o alguna cultura religiosa si no de la fe sobre
nosotros mismos, el creer que somos capaces de poder llegar muy lejos fijándose un objetivo no
importa lo lejano que sea.

Cabe señalar que cuando tome la decisión de escribir este discurso fue una intención más allá de
una nota, fue con el anhelo de poder darles a conocer mi punto de vista de un tema el cual está
presente a diario en nuestra vida y compartir mi opinión sobre qué es lo que debemos hacer
cuando termine este año y si su elección es lo que los hace feliz es lo correcto, que una tradición
familiar no puede impedir su preferencia sobre lo que quieren estudiar o hacer, con esto no quiero
decirles que no estudian, ni menos que creen una ideología anárquica contra la sociedad solo me
doy por pagado con que más de alguno de ustedes se haya orientado sobre qué es lo que hará
cuanto termine este año y que cada uno de ustedes se fije algún objetivo o alguna meta hacia su
futuro el cual forjaran con gran afán, sin ninguna idea más que añadir eso es todo.