Está en la página 1de 28



  

 

Año 6. Número 28 
Junio - julio 2010   ­
€
Precio por ejemplar ‚‚ƒ „… 
G. 3.000 ‚ †ƒ„‡… …

Poemas de Ramiro
Domínguez, Premio
Nacional de Literatura

Dónde están los


desaparecidos
Es probable muchos
paraguayos, jóvenes
especialmente, desconozcan
quien fuera Buenaventura
Cantero, sin embargo, a
millares de compatriotas
ese nombre resulta agrio
y despreciable.Este
personaje siniestro ejerció
la dirección política del
entonces Departamento
de Investigaciones de
la Policía stronista y
falleció en abril sin decir
dónde enterraron a los
desaparecidos.

Encuentro con poeta


uruguaya en la UNIBE
SILVIA PRIDA, una de
las voces más destacadas
de la poesía actual
hispanoamericana,nos
visitó para participar de
varios eventos culturales.
Durante la Feria del Libro
de la Unibe
Marité Zaldívar. S.O.S.tenerse. Madera tallada torneada y vidrio.

está con el desarrollo en la diversidad cultural


Junio - julio / 2

Ramiro Domínguez
Premio Nacional de Literatura
La mariposa herida Cómo habrás de pintar

Obras publica- Espejismo celeste eran sus alas. Para pintar, combina en la paleta,
das: Volaba en el perfume de las flores Con sombra y luz, dolor, misterio y ansias.
Fingiendo devaneos por sus galas. Y con las perspectivas de tu lienzo
Zumos (1962),
Salmos a deshora Y jacintos y calas prolonga el alma.
(1963), Ansiaban regalarle sus amores.
Interroga a la noche con tus óleos:
Ditirambos para
flauta y coro Un rosal, encendido de corolas, Bésala en los matices de la fronda.
(1964), Miraba en el espejo de un estanque Y pulsando la lira de sus penas
Las cuatro fases
La envidia de enfermizas amapolas. Gusta su idioma.
del Luisón (1966), –Y el viento alzaba en olas
El fluido cristal de aquel estanque–. Haz reír al cristal en altas notas
Los casos de Pe- Con la diafanidad de un sueño puro.
rurimá (1969),
Vio el rosal la embriagada mariposa. Y que grite la mar en la rompiente
Mboi yaguá Y, huido que hubo el viento, abrió sus alas, Cuando el crepúsculo!
(1973),
Buscando los cien labios de una rosa.
Itinerario poético Mas ella, artificiosa, Deja el falso rubor de primavera,
(1985), Interpuso una espina entre sus alas. Y te dará sus ruinas el otoño.
Deslumbres ¡No tanta luz! –observa la agonía
(1994), Rasgóse un ala el raso de valía, Que puebla el Cosmos.
Poesía completa Y cerróse la otra, temblorosa,
(1996), Como cierra una flor en agonía. Haz un prisma de escarcha y de rocío
y dos obras tea- Cayendo al agua fría Para descomponer la luz del día.
trales: Del estanque, la muerta mariposa, Otro de caridad, con que desdobles
Cantata heroica
La humana risa.
a Pedro Juan Así, mi amor ayer revoloteaba
Caballero y Buscando el corazón del ser amado. Y sufre, delicada y hondamente!
Fantasía. Pero el desdén que pronto cosechaba, Satisface tus ansias de misterio!
Sin alas me dejaba, Más gozaron con llanto que con risa
No pudiendo rehacer lo ayer andado. Leandro y Hero.

RAMIRO DOMINGUEZ (Villarrica, Paraguay, 1930). casos de Perurimá, el empujón incesable del poeta, genitor
Poeta, antropólogo, ensayista, profesor universitario y doc- y filial a la vez, encumbra el admirable testimonio universal
tor en derecho. Es seguramente el más intelectual de la ge- de una comunidad, un tiempo y un destino, para honra del
neración del 50 por la profundidad temática sus obras que propio autor y privilegio de nuestra lengua”
abarcan desde la estética literaria hasta el más riguroso En un reportaje para estas páginas -10 de abril de
planteamiento sociológico y antropológico. Fue integrante 1994- Ramiro Domínguez, sin cerrar los ojos a la realidad
de la recordada Academia Universitaria del Paraguay que nos decía “En este momento el país es un espejo roto. A
cumpliera tan importante labor cultural en difíciles años de pesar de todo, algo auspicioso surgió cuando el sector po-
nuestra historia. Sus primeros poemas aparecen en “La pular campesino marchó hacia Asunción. Eso demostró
Estrella”. Cuando en 1985 Alcándara Editora daba a luz el que existe una rebeldía palpitante y vigente. Creo que lo
libro “Itinerario poético” de Ramiro Domínguez, apuntaba más positivo fue la actitud de la “Pastoral Social” por ha-
cuanto sigue: “Como lluvia abierta hacia el suelo nutricio, berse dejado llevar de las manos. (...) Allí tenemos cómo la
la poesía de Ramiro Domínguez -nacido en Villarrica en Iglesia en conjunción con la religiosidad popular es capaz
1930- extiende su contenido y sus formas en círculos cre- de hallar la forma y reciclar y reformular la propia evan-
cidos, persiguiendo una visión abrazadora de la tierra y el gelización. En esto los demagogos quedaron en agua de
pueblo, su suave y roja tierra del Giuairá, la tácita laceria borraja al querer capitalizar esa fuerza poderosa de la co-
de su gente; de tal suerte, desde los textos inaugurales munidad campesina. Lo que más se sintió fue el espíritu
de Zumos y Poemas del exilio hasta el canto lleno de Los comunitario, el oréva”.
Junio - julio / 3
SUMARIO
Ramiro Domínguez, Premio
Alberto Buenaventura Cantero
Nacional de Literatura
Alberto Buenaventura Cantero
2
No se animó a decir dónde en-
no se animó a decir dónde
enterraron a los terraron a los desaparecidos
desaparecidos 3
Feria del Libro de la UNIBE:
Encuentro con Es probable que muchos paraguayos,
poeta uruguaya 4 jóvenes especialmente, desconozcan a
Pequeñas y grandes historias. Buenaventura Cantero, quien falleció
El paso tardo de los el lunes 11 de abril del corriente año.
dominadores 5 Sin embargo, a millares de compatriotas
Zona Secreta. ese nombre resulta agrio y despreciable
Rompiendo límites y por lo que significó en vida Buenaven-
apártandose de la retórica 6 tura Cantero, personaje siniestro que
Cuatro módulos para el 2010: ejerció la dirección política del entonces
Literatura y creación en la
UNIBE 8 Departamento de Investigaciones de la
Falleció Premio
Policía stronista.
Cervantes de Literatura 9 Escribe:
Escribe: Victorio
Victorio V. Suárez
V. Suárez (*)
La comadrona, cuento Aristas de criminalidad y brutalidad sin
de Griselda Torres 10 límites adornan la trayectoria del comisario
Santiago Dimas Aranda 13 Cantero. Y no es para menos, se constituyó en el servidor imprescindible
El bosque crece. Un del torturador más cruel que conoce la historia de nuestro país: Pastor
“viejo libreto” que Coronel. En esos menesteres de ruindad, bajeza y alevosía, Buenaven-
no pierde vigencia 14 tura Cantero dirigió la banda de verdugos que por tantos años atormen-
El hombre y el equilibrio taron, mataron y persiguieron a propios y extraños. En ese contexto, fue
con el ecosistema 15 el eje de la escuela de los suplicios donde se consagró incansablemente
a perfeccionar el sistema represivo ofreciendo sus instrucciones per-
El periodo de la
Independencia 16 versas a la caterva de delincuentes que operaban en el Departamento
de Investigaciones. De ese horno donde Cantero oficiaba de Satanás
El contrato, cuento
de Delfina Acosta 20 emergieron Lucilo Benítez (Cururu Piré), Juan Martínez (Mariscalito),
Camilo Almada Morel (Sapriza), Agustín Belotto, Víctor Martínez, Laspi-
Importante espacio en
na, y tantos otros que aún siguen caminando tranquilamente por nues-
El Ateneo 24
tras calles sin que la Justicia los haya alcanzado.
Rata de biblioteca 25 Murió Cantero, se silenció llevando como el secreto mejor guardado
el paradero de tantos desaparecidos. Su bestialidad manifiesta pudo
STAFF
Dirección General y Redacción
más, por eso nunca abrió la boca, no se animó a decir dónde enterraron
Lic. Victorio V. Suárez a Agustín Goiburú, Miguel Ángel Soler, Derlis Villagra, Octavio Gonzá-
vvs544@yahoo.com.ar lez, Carlos Mancuello, Amílcar Oviedo, Benjamín y Tato Ramírez Villal-
Columnistas:
ba, o de aquellos que fueron víctimas del Operativo Cóndor: Antonio
Lita Pérez Cáceres, Irina Ráfols, Maidana, Cástulo Vera Báez, Federico Tatter, y otros inmolados en las
Delfina Acosta, Griselda Torres, mazmorras policiales de la dictadura. De igual manera, capón y abyecto,
Gabriel Ojeda, Vanessa Sandoval, Ricardo
Pavetti, Genaro Riera Hunter, Brian Gines
Cantero jamás respondió por la muerte en torturas de Mario Schaerer
Prono, Juan Carlos Da Costa, Martín Rolón y otros luchadores que die-
Corresponsal en España ron sus vidas para que este país resurja de la degradación. A esta breve
Vicente Peiró Barco
nota mueve una sola intención: no olvidar a quienes amparados por la
Marketing y distribución impunidad cometieron los peores crímenes en nuestro país. Y ojalá, esa
Silvia Duré tríada de terror: Camilo Almada Morel, Lucilo Benítez y Juan Martínez,
Coordinación y producción
Rosa del Rocío Villalba
ablanden sus podridas conciencias y nos digan de una vez por todas,
Amelia Guiomar Villalba dónde enterraron a los desaparecidos.
Diseño gráfico
Cecilia Rivarola
(*) Escritor y poeta.
Impresión Vicepresidente de la Sociedad de
QR Producciones Gráficas Escritores del Paraguay.
Junio - julio / 4

Feria del Libro de la UNIBE

Encuentro con
SILVIA PRIDA, una de las vo-
ces más destacadas de la poesía
poeta uruguaya
actual hispanoamericana, de
nacionalidad uruguaya, llegó
al Paraguay para participar
de varios eventos de carácter
cultural. Fue en el marco de la
Feria del Libro que organizó la
Universidad Iberoamericana en
la última quincena de abril.

SILVIA PRIDA nace en Montevideo, en el año 1949.


Ha ejercido por largos años el magisterio de la literatura y
simultáneamente se ha dedicado a la escritura poética. Su
obra está compuesta por cuatro poemarios, de cuya lectura
se desprende la constatación de una voz lírica que evoluciona
y encuentra su cauce propio y original. Poemas abolidos de
1988, Donde habita la luna de 1992; Poemas del haz y del
envés, de 1995, y Asedio a la ternura, de 2003, son los libros
en los que ven la luz sus versos.
Su último poemario, Asedio a la ternura, de 2003, nos
introduce en la etapa purgatorial. Evidencia un estado de
transición. La opacidad de la visión infernal da paso a una
visión más transparente y prometedora de una futura etapa,
paradisíaca, que se anuncia pero que no se evidencia, en la
que la poetisa podrá presentarse remozada, reconciliada,
equilibrada y serena.

En ese contexto, Silvia Prida participó En el local de Fausto Cultural, ofreció


de las actividades a través de una lectura una charla sobre el proceso creativo de su
poética, además de un par de conferencias poesía. De esta manera, se abrió un intere-
sobre la poesía uruguaya y las mujeres en sante diálogo cultural con escritores nacio-
la escritura de su país. Igualmente, man- nales. La llegada de Silvia Prida se produ-
tuvo encuentros con escritoras nucleadas jo a través de una invitación cursada por la
en EPA, el Taller de Literatura de la UNIBE Universidad Iberoamericana, con el apoyo
y los directivos de Fomento del Libro y la del Taller de Literatura de la UNIBE y Fausto
Lectura. Cultural.
Junio - julio / 5

PEQUEÑAS y GRANDES H I S T O R I A S

El paso tardo de los dominadores


(Mezquindades, miserias y grandezas del Bicentenario)
“Como un suspiro lejano llega el viento perfumado”
(Juan Torres y Dionisio Valiente, Vergel Luqueño) Ricardo Pavetti*

historiográficos; otros, 24,5%, son po-


“La historia es sólo un aspecto de el gobierno) en esta situación históri- litólogos, médicos, sociólogos, quími-
la conmemoración del Bicentenario”, co-concreta en que atraviesa el país. cos, filósofos, filólogos, etc., del 35%
es una frase muy divulgada en el ám- Entonces, pues, según la convenien- de los redactores no se sabe de qué
bito intelectual, acuñada no sabemos cia -y ajustes de intereses mediante-, formación provienen, dicho esto sin
por quién. Ha sido transcrita entre las se procedió a ningunear (como dicen ofender.
comillas, porque así se la repite en los los mexicanos) a la historia como cien- Se sabe, se sabe muy bien, que
programas radiales y televisivos, y en cia -y a los mismos historiadores-, del la historia no es de los historiadores,
los periódicos de Asunción. Esa as- né-gocio de aparatar unas “historias”, exclusivamente. Pero la construcción
pectualidad otorgada a la historia, a la para no dejar pasar los 200 años del del conocimiento histórico es compe-
historia como ciencia y como historia inicio de la llamada Revolución de tencia de quienes se han preparado
misma, en fin, es lo que pre-ocupa, al Mayo. El mismo 14 de mayo ha sido para dar sentido histórico a los proce-
menos a algunos. Revela una actitud borrado no sólo de la “historia” sino de sos, coyunturas o acontecimientos pa-
escapista, de los grupos hegemóni- los hábitos calendáricos. Así fue cómo sados. Un gran estadista liberal, de la
cos, ante la dimensión conflictiva de se procedió a la eliminación de la fe- primera mitad del siglo XX, decía que
lo social-histórico. Refleja una abierta cha que, según los documentos fun- la historia era el filón más explotado
crisis hegemónica, que encubre otra dantes de la República, debería ser del Paraguay: tenía razón. La historia,
crisis, la que es abiertamente revo- recordada por y para siempre. como el fútbol, está en la conciencia y
lucionaria. Esta crisis abiertamente en la boca de todos, y eso está bien.
revolucionaria puede, pues, estar pre- LA CASI AUSENTE HISTORIA: Lo que llama la atención, en la
figurando una verdadera catástrofe PREFERIDOS Y NEGADOS referida Colección, además de la disi-
social-cultural. En el trajín, casi desenfrenado, de metría y disimilitud notorias en el nivel
Sólo la emergencia de una nueva los emprendimientos editoriales, no se de los colaboradores, es que se ha en-
historia, todavía soterrada, una histo- perciben indicios de algún avance que comendado la redacción de dos pro-
ria no lineal y no evolutiva, intermiten- revele, o pueda revelar, una evolución cesos axiales de la historia paraguaya
te, discontinua y hasta espasmódica significativa en la composición de los (casi 100 años: 50 del siglo XIX y 30
(Grüner)2, es la que se está gestando textos históricos. Se está transitando, del XX) a profesionales de otro fora-
en Paraguay. Esta aseveración no es una vez más, por la vía de las reim- men y fornalla, muy respetables y con-
un mero profetismo, para percibirla presiones (desde los albores del siglo fiables, por cierto, en abierto desprecio
sólo basta tener presentes esos tres XX ya se hicieron más de cinco de los a investigadores locales.
momentos lógicos, delineados por documentos de la Revolución de la Un resentido y rencoroso “viento”
Sartre, al reelaborar a Lefebvre: a) Independencia), de los clásicos de la ha hecho beber el envenenado vino
descripción fenomenológica, de ob- historiografía paraguaya y de trabajos del destierro a confiados historiadores,
servación basada en la experiencia y de diversa índole. En lo que aparecía que esperaban, anhelantes, el “llama-
en una teoría de la historia; b) el re- como novedad, como enfoque actua- do”. Para ellos, va la recomendación
curso analítico-regresivo, que retor- lizado, se terminó por imponer a los de leer el Manual para trepar hacia las
na sobre el pasado, al que se busca autores de recientes investigaciones, “alturas” y encaramarse a los puestos.
definir, datar y periodizar sus etapas y un estilo periodístico-ensayístico, sim- En el capítulo dedicado a los historia-
cambios; c) el recurso progresivo-sin- plote y sin altura. dores, se señala un seguro camino
tético, que se mantiene en lo histórico “No me amparaba ningún cielo para alcanzar la fama (el Manual no
genético, pero que efectúa una vuelta extranjero/ no, alas extranjeras no me garantiza el logro del prestigio) y su-
del pasado hacia el presente, que bus- protegían./ Estaba entonces entre mi perar ansias. Esa senda “triunfal” se
ca re-definir lo último, de una manera pueblo/ y con él compartía su desgra- inicia, indefectiblemente, en las redac-
más determinante que en la fase ini- cia”. Estos versos de Anna Ajmátova, ciones periodísticas, igual que hace
cial. Recién en este punto se pueden escritos en 1961, que inician su Ré- 110 y más años; conocidos y famosos
formular los aspectos tendenciales quiem (1935-1940), tan llenos de ese escribidores o escofinadores del pasa-
con vistas al futuro. poder simbolizador que tienen las pa- do -y hasta algunos colegas-, la transi-
La historia es, fundamentalmente, labras, sirven para comprender la acti- taron con singular provecho.
impulso hacia el futuro. Quienes así no tud de quienes se manifiestan huéspe-
lo quieran entender, se encuentran en des del otro lado del espejo, de los que * Profesor universitario, doctor en histo-
la senda de la perdición oscurantista, sólo saben mirar a través de ventanas ria con maestría en Letras.
de la ceguera intencionada que se va extranjeras. 1 Con este verso de una popular polca,
a causar al 80% de la población del De la veintena de volúmenes, el autor de estas líneas saluda a los jóve-
Paraguay, comprendida en la franja cuya aparición programa la Colección nes investigadores, constructores de un
etaria que cubre la de los treinta años El Lector-ABC, sólo un 18,5% de los nuevo discurso histórico: el desarrollo de
para abajo. autores son de formación inicial en la historia como ciencia, el porvenir de la
Los grupos dominantes, hegemó- historia; un 22% tiene formación li- misma en Paraguay, desde ahora está en
nicos, siempre supieron perfectamen- gada al pensamiento y a la escritura sus manos.
te que había historia, hasta que los históricos: antropólogos, abogados, 2 Las ideas que predominan en este pá-
mismos llegaron al “poder” (digamos economistas, de reconocidos méritos rrafo pertenecen a este autor.
Junio - julio / 6

ZONA SECRETA
Rompiendo límites
y apartándose de la retórica
Escribe: Victorio V. Suárez

rece entender que para decir PARA ALCANZARTE


mucho no hace falta escribir Para hurgar
demasiado, para llegar a tocar en tu velada claridad,
la epidermis del alma ocurre es necesario
lo mismo. El tono de este poe- alcanzar primero
mario se ajusta a la economía tu esquiva desnudez,
del lenguaje, en ese sentido, atrapar tu aroma
ejercita la proyección hacia la que elude mi aliento,
esencialidad, sin descuidar los y entre espasmos cerebrales
detalles estéticos que emergen entregarme
para reforzar los versos. ...y tocarte.
Sin lugar a dudas, en Zona
secreta hay una nueva poesía FRAGMENTO VITAL
rompiendo los límites y apar- Nada es mío...
tándose de la retórica. Se tra- Ni este cuerpo
Zona secreta se titula este ta de una expresión de since- que es del polvo.
libro de Gloria Marecos, poeta ridad y compromiso que mide Ni estos recuerdos
que ha dado muestra de estar la realidad y los sueños desde que son del tiempo.
en posesión de un lenguaje de- una vara de ecuanimidad para Ni siquiera mi alma
purado que la lleva a dilucidar llegar al lector. Cada poesía de que es crisálida
mediante la palabra justa los Gloria respira desde el primer incubándose tibia
furtivos territorios que transitan verso su destello sutil, su pro- en la garganta de Dios.
el alma humana. En poemas fundidad rotunda y su amal-
Nada me pertenece.
antológicos que aparecieron gama de probabilidades, sin
O tal vez sí...
en sucesivos libros del Taller exacerbación ni transgresiones
apenas este instante,
íntimo, frágil, fugaz...
de Literatura de la Universi- abusivas.
Y en esta pizca vital
dad Iberoamericana, Gloria ha Gloria Marecos, destacada
de miríada inconsciencia,
expuesto una propuesta se- en las artes plásticas y en la
apresuradamente
cuencial de singular cuantía y poesía, es una apreciable re-
...ámame.
frescura. Sin lugar a dudas, su presentante de la nueva poe-
quehacer simboliza el proceso sía paraguaya, entendió como da en la calidad expresiva. Se
reconfortante de una voz que muchos otros poetas de esta puede afirmar que este primer
fue consolidándose a través promoción de consolidación libro, luego de las publicacio-
de los años para afirmarse hoy democrática que la lectura sis- nes colectivas y en pareja con
en este poemario, valioso por temática, el equilibrio, el traba- otro poeta que ha realizado,
los contornos que presenta en jo constante y la abertura del aparece enhorabuena, pues se
cada oferta poética. diafragma creativo, son bue- trata de un excelente material
Gloria Marecos forma par- nos indicios para lograr una de lectura que surge para enri-
te de una promoción que pa- voz propia y una obra sintetiza- quecer la bibliografía nacional.
Junio - julio / 7

SECRETAMENTE SIN MANZANAS


En la espesura de los sueños Bajo las ramas
me invento... de mi árbol del Edén,
me borro... tu sombra de Adán
me reinvento adormece su bestia
y me vuelvo a borrar. y se torna predecible.
Me extravío Yo te miro desde lejos...
en una selva de signos Me gusta acecharte
donde ya no existo en silencio y a distancia.
para que existas. Y juro que te amaría
Y me desgasto... con fervor de amante.
y me consuelo, Pero... ¡lástima!...
porque bajo las sombras No me quedan manzanas
de esta travesía, para tentarte.
secretamente
...somos dos. IMPURA POESÍA
Cuando me acomodo
DESEO FELINO en la grieta sísmica
Tengo ganas y atrapante que
de soñar felino, entre tus párpados se abre,
de jugar al gato no soy yo
en vigilia, la que me veo,
de conciliar ni eres tú
el instinto gatuno al que miro.
con los pliegues Ya no somos
de la noche. el ojo que busca,
De buscar sino la mirada
en la piel que se torna filosofía
de los tejados y nos modifica.
un espacio Ya somos metáfora,
para el tacto somos historia.
y la mirada. Y tal vez... impura poesía.
De alborotar
la luna llena
con las uñas abiertas
y maullar... maullar...
largo y supino,
la esperanza de
nunca amanecer.

Gloria Marecos, poeta de Iberoamericana marcó en cier- bra y qué dirección va tomando
voz intensa y medida, raspa los ta forma el sendero de Gloria su palabra en estos días tem-
niveles y sensaciones huma- Marecos, sería injusto no atri- pestuosos que vivimos. A todas
nas; la pasión, el amor, la cons- buirle las inmensas cualidades las cosas Gloria responde con
ternación, la rebeldía social y la que desarrolló para manejar su la poesía, y ésta no escatima
búsqueda de Dios para refugio poesía en medio del esfuerzo y para hacernos ver la semblan-
o protesta configuran su ca- la visión continuamente eman- za de una poetisa que sabe en-
rácter artístico. Si bien el Taller cipadora. A estas alturas, Glo- sanchar los colores del alma y
de Literatura de la Universidad ria sabe para qué sirve su pala- la vida.
Junio - julio / 8

Cuatro módulos para el 2010


LITERATURA Y CREACIÓN EN LA UNIBE
A partir de la segunda quincena de marzo, la Universidad Iberoamericana iniciará el plan traza-
do por el Taller de Literatura, cuya dirección está a cargo del poeta, escritor y periodista Victorio
V. Suárez, vicepresidente de la Sociedad de Escritores del Paraguay. Las inscripciones ya están
abiertas y son gratuitas, a fin de facilitar la participación de los interesados que desean ensanchar
sus conocimientos y prácticas en los diversos géneros literarios. Las actividades se llevarán a cabo
todos los sábados de 10 a 13 horas.
Para este año, se desarrollarán cuatro módulos espe-
cíficos de copioso contenido: 1. Literatura Paraguaya (1);
2. Creación Literaria; 3. Ensayo Literario; 4. Literatura Pa-
raguaya (2). La primera parte abarcará el estudio del pro-
ceso inicial de la literatura paraguaya, desde el punto de
vista histórico y social: periodo colonial, proceso indepen-
dentista, hasta finales del siglo XIX. El segundo módulo
de Creación Literaria incluye el estudio de las grandes co-
rrientes que se dieron en el campo de la literatura y que tu-
vieron sus influencias en Paraguay, a esto acompañará la
creación literaria propia de los integrantes del Taller, bajo
tareas de análisis y discusión. El tercer módulo presenta
al Ensayo como un género de la literatura que merece ser
aprendido para el desarrollo intelectual y el razonamiento
sobre contenidos de interés cultural. La última parte se Primer grupo del Taller dirigido por Victorio Suárez
cierra con Literatura Paraguaya (2) que impulsará la ex-
ploración, investigación y comprensión sobre la literatura La idea es que los participantes tengan abundante in-
de nuestro país, desde la década del 60 hasta nuestros formación sobre los temas propuestos, a fin de ampliar el
días. Es decir, desde la consolidación del sistema stronista panorama literario, guiados a través de un sistema meto-
en Paraguay, hasta su caída después de casi 35 años; dológico sencillo y participativo.
se tocará, además, todo el proceso de transición que se A un quinquenio de funcionamiento, el Taller de Lite-
dio posteriormente. Historias, procesos, obras literarias y ratura de la UNIBE ha dado a conocer sistemáticamente
escritores, desfilarán en un marco programático amplio cinco libros como productos de la elaboración de sus in-
sobre la realidad de la Literatura Paraguaya. Tras la culmi- tegrantes. Un hecho destacable es la aparición constante
nación de cada módulo los integrantes del Taller tendrán la de nuevos integrantes, quienes no colisionan con los in-
posibilidad de realizar encuentros con importantes poetas, tegrantes de mayor permanencia en el Taller, gracias al
escritores y críticos nacionales, quienes ofrecerán sus ex- planteamiento plural y solidario impuesto como sistema de
periencias generacionales y hablarán de sus obras. trabajo colectivo.
Junio - julio / 9

Falleció Francisco Ayala


Premio Cervantes de Literatura
FRANCISCO AYALA. Escritor espa-
ñol nacido en Granada en 1909. Terminó
la secundaria en Madrid y comienza si-
multáneamente (1922-1925) las carreras
de Filosofía y Letras y Derecho en la ca-
pital española. A los dieciocho años escri-
be su primera novela: “Tragicomedia de
un hombre sin espíritu”. En 1928 trabaja
intensamente y colabora para las afama-
das revistas: Gaceta Literaria y Revista de
Occidente. Ese mismo año aparece su se-
gunda novela, “Historia de un amanecer”.
Luego de tres años da su primera novela
vanguardista, “El boxeador y un ángel” e
“Indagaciòn de cinema”. Entre 1930-1031,
Ayala viaja por Alemania para estudiar.
Publica “Cazador en el alba” y se casa en
Berlín con Etelvina Silva Vargas. A su re-
greso recibe el grado de Doctor por la Uni-
versidad Central. Durante la guerra civil
española vive los acontecimientos al lado
de los republicanos, antes de la toma del
poder por Franco, viaja a Francia y luego
se traslada a América, específicamente en
Buenos Aires, donde colabora en La Na-
ción y la revista Sur. Enseña sociología en
la Universidad Litoral y se dedica intensa-
mente a crear. De allí sus obras: “Diálogo
de los muertos”, “La campana de Huesca”,
“El hechizado”, “Razón del mundo”, “El
pensamiento vivo de Saavedra Fajardo”,
“Oppenheimer”, “Los políticos”, “Una doble y otras inconveniencias” (1966), “Obras narrativas
experiencia política”, “España e Italia”, “Histrionis- completas”, “La estructura narrativa” (1969); “El jar-
mo y representación”. En 1945 se traslada a Río de dín de las delicias” (que recibe el Premio de la Críti-
Janeiro y publica su Tratado de Sociología; Ensayo ca Española), “El lazarillo reexaminado” (1971). Ente
sobre la libertad y Jovellanos. De vuelta a Buenos los años 1972-1976 se incorpora como profesor del
Aires, en 1947 funda la revista “Realidad”. Aparecen Brookyn College, de Nueva York, donde finalmente
sus obras “Los usurpadores” y “La cabeza del cor- se jubiló. En 1982 publlica el primer volumen de su
dero”. Entre 1950-1956 se traslada a Puerto Rico, obra “Recuerdos y olvidos” y “Del paraíso desierto”.
donde se dedica a la docencia universitaria. Publica Un año después recibe el Premio Nacional de Narra-
una importante cantidad de obras y funda la revista tiva por “Recuerdos y olvidos” y es elegido Académi-
“La Torre”. En 1956-1960 fija residencia en Nueva co de Número de la Real Academia Española, a la
York, donde se dedica a enseñar en importantes que ingresa con un discurso titulado “La retórica del
centros de estudios. Asimismo, da a conocer “Muer- periodismo”. En 1987 la ciudad de Granada le con-
tes de perro”, “El escritor en la sociedad de masas” cede la Medalla de Oro. Luego (1988), se le otorga
y “Tecnología y libertad”. Tras veintiún años de au- el Premio Nacional de las Letras Españolas y recibe
sencia de su tierra natal, regresa a España y escribe el tìtulo de Doctor honoris causa por la Universidad
“Experiencia e invención”. Luego vienen otras obras: Complutense de Madrid. En 1990 recibe el Premio
“El fondo del vaso” (1962), “El as de bastos”, “Rea- de las Letras Andaluzas. Posteriormente, en 1991
lidad y ensueño”, “El problema del liberalismo”, “De le conceden el Premio Miguel de Cervantes de las
este mundo y el otro” (1962), “De raptos, violaciones Letras Españolas.
Junio - julio / 10

La comadrona
S iempre viví en este lugar. Hasta se podría
decir dentro de estas 4 paredes. Soy la se-
gunda de 4 hermanas, todas nacidas bajo los elabo-
rizadas por ser seres sentimentales, arruinaron la
guerra sometiéndose a la voluntad de ellos. Ésa era
mi concepción de la razón de las cosas, al menos
rados rituales de Ña Evangelina, en este catre con en este lugar. Por supuesto, nuestros pensamientos
patas de madera con edad casi como para contar carecían de racionalidad en estas y otras cuestiones.
más historias que yo. Se puede decir que los que En este alejado rincón del mundo no habría de
nacemos en este rincón tan apartado del mundo sólo importar la guerra en Irak, los movimientos de la
venimos por un fugaz paso para oler la tierra, o tal bolsa de Nueva York ni las últimas tendencias de la
vez para dar continuidad a la sufrida estirpe de nues- moda; ¿Valentino había lanzado una nueva colec-
tro apellido con el objeto de perpetuar la existencia ción haute couture, exclusivamente en homenaje de
del linaje. la diva del cine Julia Roberts…? Pues nada de eso
No me pregunten, al conocer mi historia, cómo era relevante para nuestros oídos.
no había dicho nada para sublevarme, para librarme Desde niñas incursionábamos en el trabajoso
de yugo que me aprisionaba, porque la ignorancia arte de la complacencia masculina, a temprana edad
es tan o más aprisionadora que las cadenas que aprendíamos las labores cotidianas en la cocina, en
sujetan al reo. Lo más probable es que aquello que el hogar, y más tarde el oficio oculto de dejar al pla-
despertaba mis ansias de liberación era superado cer a un lado en cualquier actividad posible de ser
ampliamente por algún defecto genético que acalla- gozosa (incluso en el lecho matrimonial) y someterla
ba mis gritos. al deseo varonil en cuanto a frecuencia y modalida-
Mi madre afirmaba derrotada: “Azucena, la kuña des se refería.
ko peichante´ara voi, ñande kuña royu ko múndope Nunca se nos fueron expuestos los puntos ne-
ro servihaguante” -la frase habría de resonar en mis gativos de tanto desconocimiento acerca de nuestra
adentros hasta el día de hoy-. En la guerra del po- naturaleza, claro que las consecuencias no tardan
der, en el principio de los tiempos, habían ganado en llegar en la vida del campo. El sabor amargo que
más batallas los hombres, y las mujeres, caracte- deja una vida perdida, una oportunidad negada, un
deseo prohibido.
En fin, las nuevas ge-
neraciones de este joven
siglo tampoco habrían de
saborear la dicha de la sa-
tisfacción. Sólo en una cosa
éramos las damas, jóvenes
y no tan jóvenes, libres de
expresar nuestras mentes:
el bordado. Se había con-
vertido en una cita los mar-
tes por la tarde, luego de la
misa en el templo, el acto
de jugar con la imaginación,
cosiendo cuanto ser se nos
ocurriera en las extensiones
de género de ao po´i que la
municipalidad se encarga-
ba de proveernos. Nuestros
diseños plasmados en blan-
cos lienzos se cotizaban con
el precio de la seda genuina,

Obra de E. Collar
Junio - julio / 11

ya que habrían de convertirse luego en ostentosos empecinarse en conquis-


manteles sobre los cuales los más acaudalados y tarme. Al comienzo, el re-
poderosos posarían las vajillas de plata con brillo ar- cordatorio constante de su
gentino, y las copas de cristal y las novias más agra- intención al pasar frente al
ciadas habrían de utilizar el género con las tramas rancho de ida y vuelta de la
hechas por nuestras dos manos para convertirlos en chacra mientras mi madre,
vestidos de bodas. mis hermanas y yo reali-
En nuestro pequeño paraíso llevábamos una zábamos nuestras eternas
existencia normal. Pero estoy dejando estas pala- labores domésticas.
bras a quien quiera oírlas con el propósito de apren- Pero en el campo es
der de los errores, y desahogar las penas y congojas distinto, no existen las lar-
que me produce mirar mi vida pasada desde aquí. gas conquistas románticas
Escribe: Griselda Torres
Nunca asistí a la escuela, y aprendí a escribir los shakespearianas, y la mu-
números del uno al cinco durante las citas secretas jer ha de saber, que donde
con mi entrañable y cómplice amiga Rosa. Ella asis- el hombre pone el ojo, pone la bala, y ha de conse-
tía a la escuela del pueblo, de donde me comunica- guir la consigna: en un caluroso día de diciembre,
ba algunos de sus conocimientos en nuestras largas cuando todos asistimos a la fiesta en honor a nuestra
charlas y sesiones de juegos. También me enseñó a santa patrona habría yo de comprobarlo.
escribir correctamente mi nombre, hasta hoy recuer- Me vestí con mi túnica más alegre; me había
do haberlo hecho cada vez con la mano temblorosa, puesto mi prenda con flores de diversos colores,
como la de aquel que tiene miedo de ser descubierto lavé y peiné mi cabellera oscura y la adorné con un
en flagrancia. kyguá con piedras brillantes de fantasía. Seguimos a
Luego de unos años, Rosa fi-
nalizó la secundaria y se alejó de
nosotras, especialmente de mí, y
en unos años la vi convertida en
maestra, pasaba delante de nues-
tro rancho con su impecable traje
azul ida y vuelta a la escuela en la
que trabajaba.
Nuestros días se sucedían
entre automatismos diarios de las
sesiones de aseo de la ropa, del
cuerpo, de los animales, la costu-
ra, la misa, y luego todo de vuelta.
Pasaron primaveras enteras hasta
que el signo carmesí irrefutable del
comienzo de la vida reproductiva
(la más ferviente meta) se presen-
tó ante mis ojos. Mi madre me ha-
bía dicho entonces: “Nde rasy jave
nde membýma´ara”.
Cada mes ese suceso se pre-
sentaba como señal no sé de qué
ni para qué, pero al llegar nos sen-
tíamos hasta avergonzadas de
padecerlo –tal como una enferme-
dad contagiosa– y nos aislábamos
para que nadie descubriera nues-
tro bochornoso mal.
La Tierra había completado 16
veces su vuelta alrededor del sol
cuando la atención de un hombre
se había posado en mí. Él, empe-
ñado en cazar la presa, habría de
Junio - julio / 12

la imagen de la homenajeada por tierra y por agua, silio que separaría a mi primogénito por primera vez
como todos los años, y luego del sacrificio anual a y para siempre de la matriz que lo acogió por nueve
cambio de alguna promesa la fiesta seguía en la pla- meses.
za del pueblo. Debí haberme dado cuenta de que Con tiernos masajes efectuados por la matrona
alguien atisbaba la mirada por mi inusual elegancia. y el estímulo de su dulce voz que decía: “Eñeha´a
Las mujeres nos juntábamos bajo un árbol en es- che íja, osetama” resistí la labor y completé la proe-
pera de que algún caballero con aires de galán nos za, expulsé a un pequeño ser cubierto por humores
invite a movernos al son de la música interpretada sanguinolentos y exclamando como quien dice a gri-
por la banda municipal. Mientras algunas estaban de to pelado que había salido victorioso del viaje de mis
suerte y visitaban primero la pista de baile (por su- profundidades al exterior. Era una niña, y la llamaría
puesto bajo la atenta mirada de la chaperona) algu- Jazmín.
nas esperábamos a que el turno fuese nuestro. La comadrona retiró la sustancia que cubría sus
Así llegó él; acicalado como para el día de su ojos y la envolvió en sábanas inmaculadas, y me
boda y oliendo a una fragancia que no pude reco- ofreció un brebaje que me haría recuperar las fuer-
nocer, pero de carácter masculino. Acepté bailar una zas gastadas. Completó el servicio con el cambio de
pieza y luego nos sentamos a conversar, o mejor di- mi vestidura manchada y con el encargo de que a la
cho, a responder lo que él quisiera preguntarme. No mañana siguiente, sólo a unas horas de distancia,
pasó mucho hasta que sin saberlo accedí a acom- no me sentiría enferma o convaleciente. Sucumbí al
pañarlo en la busca de más bebida para aplacar el sueño debido al cansancio sin prestar atención a la
calor, en el camino al destino prefijado ocurrió lo im- pequeña persona a mi lado que demandaba el néctar
previsto. de mis senos. Mi madre la colocó de manera que yo
Se abalanzó sobre mí colocándome de espal- completara mi sueño y ella su saciedad.
da sobre la tierra seca y deshidratada. Levantó de Desperté con los primeros sonidos de la mañana
un tirón mi vestido floreado y en un instante caí en y me incorporé en mi lecho con las molestias propias
la cuenta de que no tenía las de ganar cuando pre- del evento reciente. La pequeña Jazmín dormía aún.
sionaba mis brazos contra el suelo. Su sexo rígido Me adentré en mis faenas; me coloqué en cuclillas
me había penetrado y cual bestia iracunda se mecía con los pies descalzos y la palangana aporreada por
sobre mi abdomen completando la hazaña. Cuando los años enfrente. Comencé el habitual fregado de
hubo terminado lo que quedaba de ese momento era las prendas, ese día fregabas las sábanas estigma-
un dolor inimaginable en mis partes. Se repuso y me tizadas con el fluido de mis venas, frotándolas con el
extendió su mano en ofrecimiento de ayuda, yo no jabón en pan y luego refregándolas por la madera con
lo miré, no le dirigí palabra, no pude emitir sonido. ranuras. Prendas viejas, ancianas, casi harapientas.
Giró su cabeza ya dirigiéndose al destino original y Al coger la segunda pieza me sentí desfallecer.
me propinó un seco: “Te queda bien ese vestido con Experimenté el desfallecimiento de mis piernas, solté
flores”. la sábana. Caí sentada al suelo húmedo del rocío de
Los meses habían pasado, y la entrañas deman- la madrugada y no comprendí mi situación, hasta que
daban alimento, por lo que mi osamenta se acentuó una ola de calor bajó por mis piernas, y comprobé
por sobre la piel; me volví escuálida y sin color. Mi al elevar el atuendo repuesto por la comadrona mi
madre nunca expresó su descontento, supongo que fluido vital se escapaba por entre mis partes, como
mi estado constituía uno de mis deberes como mujer, un caudaloso río en donde se había librado una con-
y a eso correspondía su falta de reproches. Ignoraba tienda sangrienta, aquella batalla habría de perderla
lo que crecía dentro de mí pero al mismo tiempo, la yo. Me extinguí entre suspiros, ni siquiera en ese mo-
idea de repetir la historia de mi ascendencia con mi mento pude clamar por ayuda, perecí en el lecho pro-
primogénito (especialmente si era una niña) me ate- veído por la naturaleza, mientras la única prueba de
rraba, lo reconozco ahora, no lo deseaba. mi existencia yacía impasible en un precario cuarto.
Una noche en la que el suelo demandaba sacie- Desde aquí veo a mi pequeña Jazmín corretear
dad, descubrí que mi camino hacia lo inevitable se por el rancho, recibir de mi madre las mismas ins-
iba acortando. En mis prendas observé una mancha trucciones que mis hermanas y yo recibimos durante
escarlata, me dirigí a mi madre y le dije: “Oguahema mucho tiempo. Realiza las labores cotidianas en la
che seña”. cocina, en el hogar, y más tarde se iniciará en el ofi-
En ese instante comenzaron los dolores, los cio oculto de la renuncia de la satisfacción. Pero…
calambres que se sentían como púas en la cintura, ¡para qué estamos las mujeres si no es para servir,
mientras mi madre, mis hermanas y Ña Evangelina Azucena! Así es como se perfila nuestro destino,
completaban los ritos ancestrales del arte de parir: desde las entrañas hasta la muerte…. ¿Verdad? O
calentar agua, colocar sábanas limpias, elaborar un tú qué piensas…
alimento fortificador para la puérpera, afilar el uten-
Junio - julio / 13

SANTIAGO DIMAS ARANDA


P oeta, narrador y dramaturgo pertenecien-
te a la Generación del 50. Nació en Villa-
Fragancia de raíces*
rrica, Paraguay, en 1924. Pasó su infancia Porque viva lo que el sueño forja,
en medio de la imponente magia del Yvytyru- me perdura en los ojos
su y la calidez humana de una sencilla pobla- el niño enamorado que te plasmó en la sangre,
ción rural. Terminó sus estudios secundarios
en la capital del Guairá. A causa de las pre-
Perulero.
siones del gobierno de Higinio Morínigo, tuvo
que trasladarse (como tantos exilados) a la De un amor eclosionado en tus auroras,
ciudad de Buenos Aires, donde llevó ade- vengo,
lante estudios técnicos. En la capital de la presencia genesial,
República Argentina publicó su primer poe- sueño pretérito,
mario “Sangre de tierra y luna” (1960). Volvió
al país y dio a conocer en 1970 su libro de mano que timbra en el portal del otoño.
poesías “Antología del silencio”. Cabe apun-
tar que en 1973 edita en colaboración con Desde unas tardes de remansos fragantes,
Hedy González Frutos “Catorce testimonios pez dorado vienes navegándome.
de la poesía paraguaya”. Un año después Ala rota en el cielo de la infancia.
aparece su poemario “Metal es la fragancia”,
que salió a luz en Buenos Aires bajo el sello
Voz detenida en la raíz del hombre.
de Ediciones Criterio. En 1976 obtiene el pri- Libélula paralizada en la orilla del tiempo.
mer premio en el Concurso Hispanidad, por
su novela “La pesadilla”. Esa misma justa Con mi caballo de palo y mi rebenque malva
literaria también le otorga el tercer premio atrapando en mi camisa teruterus y calandrias
por su obra “El amor y su sombra”. Ambas allá quedé,
obras fueron editadas posteriormente. En el
año 1983, bajo la rúbrica de Ediciones Taller, junto al mar de pajas rojas
aparece su libro de poemas “Fragancia de en cuyas playas imprecisas
raíces”. En 1994 Santiago Dimas Aranda da guiñan ojos de pedernal viejas luciérnagas,
a conocer su tercera novela, “Medio siglo de moradoras de dudas y derrotas,
agonía”. Su más reciente aporte literario lle- de agonías con el sol a cuestas
va como título “Vida, ficción y cantos” (1996),
se trata de una excelente colección de poe-
y las noches metidas en las vértebras.
mas y relatos perfectamente identificados
con nuestro tiempo. Más allá de las publi- Allá
caciones señaladas, el poeta Dimas Aranda mis demorados pasos,
sigue escribiendo incansablemente. En ese en la inmóvil arena de los caminos truncos,
sentido debemos mencionar que tiene una sin más testigos que los días anónimos
importante cantidad de obras inéditas en los
más variados géneros literarios. Algunos crí-
arracimados
ticos estiman que las obras de Santiago Di- bajo un turbión de pájaros.
mas Aranda fueron silenciadas injustamente
por la burguesía intelectual de nuestro me- Allá,
dio. No obstante, no caben dudas de que su soledad mía,
voz combativa pudo más que la indiferencia libertad de mis lágrimas,
de algunos, pues ha llegado a conquistar el
reconocimiento de aquellos que gustan de la bajo el urunde-y, capital de mi origen,
palabra encendida que no elude encarar la con jolgorio de niños en las células
realidad ni las injusticias sociales. Al respec- y trinos minerales
to, en una entrevista, el poeta Dimas Aranda tornando a la simiente.
había señalado: “El papel del escritor de to-
dos los tiempos es orientar, reflejar honesta-
mente los fenómenos de su tiempo y si tie-
Allá quedé
ne oportunidad, acompañar solidariamente con la oreja pegada a la aurora
a las masas en su lucha por un proceso de y los ojos en la última estrella,
ascenso cultural y social. Creo que el escri- exhumando las voces que crearon
tor no debe ser un combatiente o un político, mi nombre
sino un ser auténtico, con sensibilidad y con de la nada.
voz multitudinaria”.
*Del libro “Fragancia de raíces”, Ediciones Taller
Junio - julio / 14

EL BOSQUE CRECE
Un “viejo libreto”
que no pierde vigencia
1

El relato titulado “La lujuria de Maruja” de Victorio V.


Suárez de su libro Fantasmas Peregrinos (Relatos)
es una historia de un matrimonio con aires de rutina e
ingratitudes. En mi lectura en este relato se habla de
un “viejo libreto” que no pierde vigencia: la grandiosi- Genaro Riera Hunter
Agape Psicoanalítico Paraguayo
dad que una mujer siente por un otro que se le cruza
en una esquina cualquiera. El brillo borra la ilusión de
su pareja Benjamín.
mún una hija, lo que no significa reacomodar feliz-
2 mente el don de ella a Benjamín. Su insatisfacción
subsiste. No quiere ser pura madre.
“La lujuria de Maruja” encierra un cotidiano de la vida
amorosa de una mujer. La escritura elegante y meta- 5
fórica de Victorio V. Suárez ayuda a aproximarnos a
captar que el “mete saca, mete saca” masculino no es Maruja, en este relato, muestra el lugar de un mari-
ninguna joya. La idealización fálica de Benjamín sólo do: tú no debes darme ninguna pérdida de goce. De-
condiciona la idealización de una identidad: formar un cepciones y desilusiones van siempre trabajando en
complemento que regulariza y rebaja una diferencia. esta virulenta proclama, en un matrimonio que busca
Buscar refrenar en la penumbra a un partener sólo igualdad de goce por cualquiera de los cónyuges.
logra eclipsarle.
 6
3
El amor cobarde, asustadizo, siempre está presente
En el relato no encontramos vértices sustanciales, en la relación matrimonial. Es el personaje Marcelo,
por decir así, que revelan algunos “divinos detalles”, luz agalmática inicial de Maruja, quien canta la exac-
al decir de J.A. Miller, de la vida erótica de Maruja, titud en este relato, así dice el varón: “yo no quiero
pero sí salta la historia secreta del engaño, los sue- acelerar nada”. Ella no quiere otra cosa que el amor
ños de un no solo rutinario “mete saca”, una desmen- capullo. Tanto él como ella están descolados frente a
tida o un contra-dicho de la concordancia fálica del este deseo, independientemente de la forma del des-
modo masculino. enlace, muy fálica por cierto, que tiene este relato. El
desenlace inesperado, para Maruja, permite conside-
4 raciones sobre este punto.

Maruja desilusionada y también hipnotizada, desilu- 7


sionada de ser siempre la misma, impuesta por el
otro e hipnotizada por la posible diferencia de ser ella Así, “Pasó el tiempo igual que la efímera presencia
misma, una otra para el otro. Ellos sólo tienen de co- de Marcelo y Benjamín en la vida de Maruja”.
Junio - julio / 15

El hombre y el
equilibrio con el ecosistema
Escribe: Brian Gines*

discrepancia, ya que hay algunos que


indican que el deterioro de la naturaleza
es causa de factores geológicos y del
propio actuar del proceso evolutivo de
la tierra, considerando los periodos gla-
ciales ocurridos en la historia de nuestro
ecosistema, pero lo que les veda credi-
bilidad a este grupo de investigadores,
Obra de Gustavo Oliva Dhalquist

liderados por personalidades como el


ministro del ambiente de Irlanda, Sammy
Williams, quien tiene la hipótesis de que
los cambios climáticos son causa del sol,
es el hecho de que el 90% de la comu-
nidad científica garantiza con resultados
convincentes que los desastres naturales
sí son causa de la humanidad. El panel
intergubernamental del Cambio climático
de la ONU apuntó el año pasado que los
efectos del calentamiento de origen an-
tropogénico tendrían repercusiones sobre
los sistemas físicos y biológicos, así como ratificaron en un
El hombre desde sus incipientes aires ha tomado de la congreso realizado en París, que el proceder del ser hu-
naturaleza los elementos necesarios para su superviven- mano es causa del calentamiento global, confirmando esto
cia, convirtiendo a su entorno en recursos aprovechables. con una cantidad de 28.000 trabajos. Asimismo corrobora-
Considerar al hombre como ajeno a la naturaleza, re- ron que esta situación no obedece a ningún ciclo natural.
presenta una idea mal interpretada, ya que el hombre en El mismo grupo informó que hace 125.000 años el planeta
esencia es la naturaleza, lógicamente cohabitando con de- experimentó una situación circunstancialmente igual, pero
más seres que componen la compleja trama de la vida en la cual obedeció a otros agentes.
la tierra. Pero si es sorprendente como la humanidad está No existen dudas referentes a que el desarrollo eco-
enjuiciada a auto destruirse. Es por esta razón que es ne- nómico apresurado es uno de los factores cardinales del
cesario asimilar cuál es la relación del ser humano con su deterioro de nuestro ecosistema; aunque si se hubiesen
ambiente, enfocando principalmente el detrimento degene- realizado planes con estrategias medioambientales a tiem-
rativo del mismo. po adecuado esto no hubiese acaecido.
Al hablar del deterioro de la naturaleza a causa del ser El hombre es la naturaleza, toda acción contra ésta
humano, la ciencia topa varios inconvenientes que hacen trae resultados recíprocos. La humanidad debe aplicar una
nebulosa la posibilidad de redactar una respuesta concisa conciencia colectiva que conlleve al mejoramiento del es-
e inapelable. Indubitablemente el ser humano ha marcado tado actual de nuestro ambiente. La naturaleza no está a
colosales pautas en un tiempo muy corto, lo cual lo acre- nuestra disposición, ya que nosotros somos la naturaleza.
dita como uno de los principales causantes, o tal vez el El ciclo conforma una retroalimentación que precisa ser en-
causante principal. Mas en este punto intervienen varios cauzada con la elaboración de proyectos de envergadura
aspectos que caben subrayar. Entre esos el hecho que no- social, y la aplicación de los mismos acompañada de una
toriamente los niveles de gases de efecto invernadero han conciencia colectiva. La humanidad debe decidir entre el
aumentado dramáticamente, en un lapso de un siglo de ac- existir o el fin.
tividad, acentuando efectos a partir de la cuarta década del Aprendamos a cultivar el presente, cavilando simple-
siglo pasado, continuando las consecuencias peyorativas mente en que no es un regalo de la historia, de la evolución,
al ambiente con el peregrinar de los años, hasta nuestra sino que el préstamo del futuro.
contemporaneidad. Es hora de civilizar al hombre con relación a su natura-
Resultados al inadecuado actuar de la humanidad son leza, con relación a su coexistir.
variados, desde el smog fotoquímico causado por sustan- Albert Einstein había expresado que El mundo es un
cias como el azufre, hasta el calentamiento global, el cual lugar peligroso. No por causa de los que hacen el mal, sino
es resultado de la miscelánea de todos los deterioros del por aquellos que no hacen nada por evitarlo.
ambiente. En la comunidad científica existe una relativa * Integrante de la Academia Literaria de la Unibe
Junio - julio / 16

Un poco de historia, dos episodios trascendentales

EL PERIODO DE LA
INDEPENDENCIA
En los albores de la independen- bien se fijó para el 25 de mayo, cuyo Supremo de la República. De ahí en
cia paraguaya (1810), cabe mencio- jefe iba a ser Fulgencio Yegros, los más ya no fue permitida actividad po-
nar que España estaba en guerra y la hechos se adelantaron, pues el 14 de lìtica alguna. Francia creía que ante el
corte portuguesa se habìa refugiado mayo de 1811, bajo el mando del capi- peligro de la restauraciòn del virreina-
en Rio de Janeiro. José Bonaparte tán Pedro Juan Caballero los complo- to habría que sacrificar todo, inclusive
tenía a su cargo la penìnsula ibèrica, tados obligaron al gobernador Velaz- la libertad individual.
hecho que motivó la sublevaciòn de co a dimitir. Ese trascendental suceso
los españoles en 1808. Precisamente, se cumplió el 15. Para el 16 se formó
ese desequilibrio motivó el avance de el gobierno provisional, donde partici- FORMACIÓN DE LOS PARTIDOS
la influencia inglesa en las indias occi- paron: Velazco, Valeriano Zevallos y POLÍTICOS TRADICIONALES
dentales, y como punto esencial, el 25 Gaspar Rodríguez de Francia, gestor
de mayo de 1810 una Junta tomò el intelectual de la revolución libertado- Mientras se libraba la batalla de
poder en Buenos Aires, prevalecièn- ra. El 9 de junio de 1811 Velazco fue Piribebuy, aquellos que actuaron en
dose por el vacío de poder dejado por destituido definitivamente, y se formò contra del gobierno de Francisco So-
Fernando VII, que fue apresado por el nuevo gobierno a través de la 1a. lano López en el exilio fueron ayuda-
Napoleón Bonaparte. Se organizó un Junta Gubernativa, que estaba presi- dos por la diplomacia del Brasil para
Congreso general para decidir sobre dida por Yegros e integrada por Fran- formar un nuevo gobierno, constitui-
la organizaciòn del antiguo virreinato. cia, Caballero, Xavier Bogarín y Fer- do por Cirilo Antonio Rivarola, Carlos
Entonces la Junta de Buenos Aires en- nando de la Mora. Lo más importante Loizaga y José Díaz de Bedoya, que
viò un representante a Paraguay, pero fue la negociaciòn llevada a cabo por quedó constituido el 15 de agosto de
fue rechazado. No obstante, Bernardo Francia ante Belgrano, el 12 de octu- 1869. Una de las primeras medidas de
de Velazco convocó a representantes bre de 1811, tratado por el cual Bue- ese gobierno fue decretar fuera de la
del clero, comerciantes, militares, nos Aires reconoció la independencia ley a Solano López, y, “para siempre
propietarios y el Cabildo para hacer del Paraguay, la idea federal quedó arrojado del suelo paraguayo, como
valer cierta adhesiòn a la causa de la sepultada de esa manera. En esos asesino de su patria y enemigo del
Junta argentina. Ante la mención del avatares la Junta paraguaya trató de género humano”, y aunque parezca
Consejo de Regencia (24/VII/1810) y mejorar las condiciones econòmicas, mentira, la bárbara medida agregaba
el pacto de amistad con la Junta de educativas y culturales del país. Pero también “contribuir cuanto esté de su
Buenos Aires, José Gaspñar Rodrí- Buenos Aires no cesaba en su inten- parte para la completa victoria de la
guez de Francia levantò su voz para ciòn de atraer al Paraguay hacia la República y de los Gobiernos aliados
decir que “Paraguay no es patrimonio Federaciòn que amenazaba con el acreedores de nuestro cordial agra-
de España ni es Provincia de Buenos “bloqueo econòmico” a Paraguay. La decimiento, prestándoles decidida co-
Aires, el Paraguay es independiente firmeza de Francia desalentò aque- operación contra el tirano López” (1).
y es una República”. La Junta bo- lla proppuesta traída por un emisario A pesar del manoseo de la sobe-
naerense encargò entonces a Ma- de Buenos Aires, Nicolàs de Herre- ranía del Paraguay y la falta de reco-
nuel Belgrano una expediciòn militar ra, así el 12 de octubre se proclama nocimiento de los países extranjeros
contra el Paraguay. Los paraguayos la Primera República de América del del engendro gubernamental impues-
acudieron en masa. El 19 de enero de Sur: Paraguay. Se crearon -al estilo to por los brasileños, López seguía
1811, Belgrano y los suyos batallaron romano- dos cónsules a turnarse en combatiendo ya casi agotado por las
en Paraguarí sin conseguir resulta- el mandato: Francia y Yegros. De esa desigualdades numéricas y armamen-
dos, pues habìan retrocedido hacia el forma se concretó la ruptura definitiva tistas de las fuerzas aliadas. Cierta-
sur. Belgrano capituló definitivamente de la corona y de la afanosa Buenos mente, la franca declinación de López
en Tacuary el 9 de marzo del mismo Aires. creaba una verdadera competencia y
año. Aquellas campañas militares die- El verdadero director de la esce- avalancha para conquistar espacios
ron confianza a los paraguayos y ya na polìtica a partir de ese momento de poder. En los primeros días del
no dudaban de que defender la patria, fue Gaspar Rodrìguez de Francia, mes de febrero de 1870 López había
la identidad nacional incipiente, que- quien el 3 de octubre de 1814, a pro- llegado a Cerro Corá con apenas 500
brantada, pero fuerte. El grito de la in- posición de Mariano Antonio Molas, soldados, que debieron enfrentar a
dependencia ya no se hizo esperar, si fue declarado por cinco años Dictador nada menos que 4.500 brasileños di-
Junio - julio / 17

rigidos por el general Antonio Correa presidente, no era del agrado de las
da Cámara. El fin de la guerra contra fuerzas brasileñas de ocupación ni de
la Triple Alianza llega el 1 de marzo sus diplomáticos. Esa misma noche,
de 1870. De esa forma se había cerra- Cirilo Antonio Rivarola y Cándido Ba-
do una etapa de la historia de nuestro reiro, con el apoyo brasileño, desco-
país y se abrió otra de intensos aje- nocieron el nombramiento recaído en
treos políticos sobre las ruinas, el es- Facundo Machaín. La Convención,
panto y la ocupación de las potencias reunida el 1 de setiembre, para evitar
extranjeras. La catástrofe fue terrible, su disolución tuvo que sancionar el
pues de aproximadamente 1.300.000 golpe de Estado, dejando sin efecto
habitantes sólo quedaron 200.000, en aquel nombramiento y designando
su mayoría adultos, mujeres y niños. presidente provisional a Cirilo Antonio
Todo había que reconstruir. Todo Rivarola; al día siguiente fue aún más
estaba arruinado, que aquella des- lejos: anuló el diploma de convencio-
gracia motivó la compasión mundial nal del Dr. Machaín, por haber acep-
hacia nuestro país. Una de las pri- tado la designación como presidente
meras medidas fue la convocatoria a provisorio de la República.
elecciones para constituir una Con- En el mes de octubre quedó san-
vención que fuera capaz de hallar cionada la nueva Constitución, donde
una nueva organización política para se establecía que el Estado quedaba
la República. El 27 de julio de 1870 organizado en tres poderes en perfec-
se creó la comisión redactora de la to equilibrio. La soberanía residía en
Constitución compuesta por Facundo el Congreso constituido por dos Cá-
Machaín, Juan José Decoud, Juan maras. El Poder Ejecutivo quedaba
Silvano Godoi, Salvador Jovellanos bajo el poder de un Presidente de la
y Miguel Palacios. Al respecto, el Dr. República y cinco ministros, sujetos
Efraín Cardozo nos recuerda: “En la a juicio político. La Justicia quedaba
sesión del 31 de agosto fue aceptada para ser administrada por un Tribunal
la renuncia de los triunviros José Díaz Superior y las magistraturas estable-
de Bedoya y Carlos Loizaga, y se pro- cidas por la ley. Indudablemente, la
cedió a la designación de Facundo nueva Constitución era contraria al ré-
Machaín como presidente provisio- gimen anterior y abrazaba los ideales
nal de la República, en substitución liberales de la época. El 25 de agosto
del Triunvirato. Machaín, el nuevo de 1870, Cirilo Antonio Rivarola inau-

LIBRERÍA EDITORA

Intercontinental
Junio - julio / 18

gura el primer periodo presidencial. dad de su existencia, procedimos a Soler, Francisco Soteras, Antonio Za-
Antes de transcurrir un año tuvo difi- una formal declaración de que desde yas, Avelino Gacete, Felipe Torrents,
cultades con el Congreso, que destitu- la fecha queda instalado dicho centro, José Goiburú e Ignacio Ibarra (Voca-
yó al ministro de Hacienda, Juan Bau- bajo la denominación de “Centro De- les).
tista Gill. Entonces Rivarola disolvió el mocrático”, con los propósitos y fines Los integrantes del antiguo Club
Parlamento, dando el primer golpe de que se establecerán en el acta defini- del Pueblo, para contrarrestar la or-
Estado. tiva de la constitución. ganización de sus contrincantes se
En realidad, los verdaderos veri- “Y para que conste, firmamos la reagruparon rápidamente bajo el li-
cuetos políticos llegan con la vigencia presente acta, fecha ut-supra. Ciri- derazgo del Gral. Bernardino Caba-
de dos agrupaciones establecidas:1- lo Solalinde, A. Taboada, Rafael A. llero. Tras algunas gestiones de rigor
El Gran Club del Pueblo y, 2-El Club García, José M. Fretes, Emilio Caba- se ajustan los detalles y surge la de-
del Pueblo. Ambas nucleaciones ñas, A. Zayas, Ignacio Ibarra, Manuel nominación de Asociación Nacional
desembocarían más adelante en Ávila, D. Candia, R. Soler, Florencio Republicana, cuya acta expone lo si-
los principales partidos políticos del Quintana, M.I. Mora, Vicente F. Espí- guiente: ”En la ciudad de Asunción, a
Paraguay: colorado y liberal. El Dr. nola, A. Echanique, Juan Cirilo Men- los 25 días del mes de agosto de mil
Cecilio Báez, uno de los fundadores doza, José de la Cruz Ayala, José A. ochocientos ochenta y siente, reuni-
del liberalismo paraguayo había ma- Alfaro... dos los ciudadanos que suscriben, y a
nifestado: “Desde que se realizaron Asimismo, otro documento de la indicación del General D. Bernardino
los primeros trabajos para constituir el época atestigua lo siguiente:”En la Caballero y proposición del Sr. José
gobierno provisorio, se diseñaron los ciudad de Asunción, a los 10 días de Segundo Decoud, resolvieron cons-
bandos políticos que estaban destina- julio de 1887, por cuanto el Pueblo tituirse en agrupación política con el
dos a luchar por la posesión del po- Paraguayo en su constitución política laudable objeto de ocuparse prefe-
der. Denominábase el uno “Gran Club ha acordado a los ciudadanos, entre rentemente en todas las cuestiones
del Pueblo” y el otro “Club del Pueblo” otros derechos como el de la libertad de interés público que interesen la
(...) “El primero era presidido por el Dr. de prensa y el de la palabra, el de la prosperidad y el engrandecimiento y
Facundo Machaín y componíase prin- reunión y declarando asimismo invio- la felicidad de la patria, así como de
cipalmente de los jóvenes que habían lable la ley electoral, a fin de que estos propender al afianzamiento de las li-
vivido en el extranjero durante el go- medios que se consideran los más efi- bertades públicas, consagradas por la
bierno de los López y de los hombres caces puedan establecerse para los carta fundamental de la República, y
que habían militado en la “Legión Pa- actos de los gobiernos, no solamen- con el fin de dar la forma convenien-
raguaya” durante la guerra de la Triple te una barra a sus avances posibles, te a este pensamiento se procedió a
Alianza. El segundo, reconocía como sino también un medio de ilustrar a nombrar una comisión provisoria de
jefe a Cándido Bareiro y componiase los mismos en el examen y resolución redactar el programa y Estatuto de
principalmente de los ciudadanos que de las cuestiones de su competencia la Asociación. A moción del Sr. J. C.
en la misma época habían hecho la que afecten los intereses de la comu- Vera, fueron electos por aclamación
campaña del Paraguay en los ejér- nidad e intervenir espontánea y libre- para componer dicha comisión los se-
citos de López”. Cabe apuntar que mente en la formación de los poderes ñores Bernardino Caballero, Higinio
entre los afiliados del Gran Club se del Estado que deban encargarse de Uriarte, José G. Granados, Santiago
encontraban Facundo Machaín, José los destinos de la república” (...) “Y Cardozo, Juan G. González, José Se-
Segundo Decoud, Benigno Ferreira, teniendo presente la necesidad senti- gundo Decoud, Angel Benítez, Juan
Juan J. Decoud, Juan Silvano Godoi, da de un tiempo a esta parte de una Crisóstomo Centurión, Remigio Mazó,
S. Jovellanos y otros. Entre los del agrupación semejante, nos los abajo Esteban Rojas, Miguel Alfaro, Guiller-
Club figuran Cándido Bareiro, Adolfo firmantes nos hemos reunido espon- mo de los Ríos, H. Carvallo, Z. Sama-
Saguier, Bernardino Caballero, G. Se- táneamente y constituimos por reso- niego y Jaime Peña.
rrano, Juan B. Gill, etc. A la agrupación lución unánime una sociedad política El 11 de setiembre de ese mis-
que integraban éstos se le llamaba que denominamos Centro Democrá- mo año en el teatro Olimpo (hoy Mu-
también “El Petit Club López”. Si bien tico, para hacer uso de los derechos nicipal) se produjo la magna reunión
se buscó fusionar a ambas agrupacio- que nos acuerda la Constitución Na- donde se aprobaron los estatutos del
nes, tal intento no fue posible por los cional y las leyes de la República en Partido Colorado.
ideales verdaderamente antagónicos la forma que se determinará en los
que diseñaron ambas agrupaciones estatutos respectivos”. Posterior a la guerra del 70 y a
en sus programas políticos. Para el 24 de julio del mismo año comienzos de la formación de los par-
El verdadero origen del Partido los liberales se reunieron en una terce- tidos, las campañas políticas fueron
Liberal se debe a la agrupación de- ra asamblea y en ese acto aprobaron virulentas. Haciendo un breve recuen-
nominada Centro Democrático. Tras los estatutos del partido y eligieron las to tenemos que en el mes de enero
dos Asambleas consecutivas aparece autoridades de la siguiente manera: de 1874 estalla una revolución enca-
un documento que reza cuanto sigue: Antonio Taboada (Presidente), Pe- bezada por el general Bernardino Ca-
“Nos los abajos firmados, reunidos en dro V. Gil (Vicepresidente), José de la ballero, quien entró en Asunción con
la casa de la calle Asunción No, 1 del Cruz Ayala (Secretario), Favio Queiro- un ejército triunfante conformado por
día sábado 2 de julio del año 1887, a lo (Prosecretario), Bernardo Dávalos ex combatientes de la guerra grande.
las 7 y media de la noche, con el ob- (Tesorero), Cirilo Solalinde, Mateo Co- Aquella aparición de Caballero en la
jeto de establecer un centro político, llar, Ildefonso Benegas, Cecilio Báez, arena política marcaría el inicio de
convencidos de la imperiosa necesi- José Caminos, Juan Aponte, Víctor algo que ejercería durante toda su
Junio - julio / 19

vida: la lucha política. Comenzó ejer- provisional y se convirtió en el actor el primero en devolver los trofeos de
ciendo el cargo de ministro del Inte- político más importante desde 1880 a guerra a los vencidos. Argentina tam-
rior, bajo la presidencia (1871-1874) 1886. poco endureció su postura, llévese
de don Salvador Jovellanos, quien El 25 de noviembre de 1886 había en cuenta que numerosas protestas
por imposición del gobierno brasileño asumido la primera magistratura de la se dieron en importantes ciudades
había seguido en la Presidencia de nación el general Patricio Escobar, argentinas que se negaron a comba-
la República (tras afrontar tres revo- fue un gobierno que tuvo sus etapas tir contra Paraguay. Eso de llevar la
luciones). Luego, Caballero ocupó el históricas, pues en 1887 se creó el guerra hasta las últimas consecuen-
cargo de ministro de Justicia, Culto e Consejo Superior de Educación y se cias venía de manera más fuerte del
Instrucción Pública, bajo el segundo dictó la ley de enseñanza obligatoria. Brasil, Pedro Segundo quería a toda
periodo constitucional que llevó a la Asimismo, se creó el Banco Agrícola y costa la cabeza de López. El famoso
presidencia de la República a Juan algo muy importante para la vida insti- Conde d´Eu, yerno del emperador,
Bautista Gill, quien apeló a la fuerza tucional, fue indudablemente la cons- quiso ser héroe en la guerra y lo que
para sostener su mandato, sin em- titución de los partidos políticos. hizo fue sólo perseguir a un hombre
bargo, fue asesinado por los herma- Como ya hemos mencionado, los que estaba en franca retirada, se lo
nos Godoi. Tras la muerte violenta primeros partidos tuvieron su origen involucra directamente con el terrible
del Presidente, llegó al cargo Higinio tras varios acontecimientos de carác- incendio del hospital de Piribebuy, lle-
Uriarte (durante su mandato hubo una ter político. En esa coyuntura de los no de heridos de guerra.
matanza en la cárcel pública, donde primeros años de posguerra debemos En la vida política del país entre
murieron Facundo Machaín y muchos destacar que entre las secuelas la- los clanes militares siempre apare-
otros prisioneros), con quien Caballe- mentables de ese periodo quedan las cían a la par los jefes civiles que casi
ro siguió ocupando los mismos cargos injerencias de los ocupantes en la vida siempre inspiraban para algún golpe
ya designados. Después había con- interna de la nación paraguaya. Como de Estado. Ese fue el panorama que
quistado el poder don Cándido Ba- se sabe, el Brasil ocupaba zonas cer- dominó gran parte de nuestra historia,
reiro (1878-1880). Durante este man- canas a Asunción; la Argentina, por su casi desde la fundación misma de los
dato fue asesinado el ex presidente parte, mantenía un control desde el dos partidos políticos tradicionales: la
Rivarola. Tras la muerte de Bareiro, Chaco, y Uruguay un contingente me- Asociación Nacional Republicana y el
se produjo una maniobra por parte de nor, y fue el país que actuó de manera Centro Democrático o Partido Liberal..
Caballero, quien fue electo presidente más amistosa con Paraguay, pues fue

Juan de Salazar 310 c / Artigas


Telef. 226 242 / 224 455 (R.A.)
www.icpa-gz.org.py
Asunción • Paraguay

Cursos para niños, jóvenes y adultos


Horarios: MAÑANA, SIESTA, TARDE y NOCHE

Metodología profesional
Aprendizaje eficaz y comunicativo con excelentes materiales didácticos
Certificados de alemán internacionalmente reconocidos
Centro de autoaprendizaje
Acceso gratuito a la Biblioteca-Mediateca
Asesoramiento sobre cursos de alemán en Alemania
Beca anual
Actividades culturales
Informaciones e inscripciones en Secretaria de Enseñanza
Lunes a viernes: de 13:30 a 19.00 horas
Sábados: de 8:00 a 11.45 horas
Junio - julio / 20

EL CONTRATO
A Elisa, vestida de luto entero, como correspon-
día, pues venía de enterrar a su padre en el
cementerio del pueblo, le llegó una anticipada alegría
padre. Tomaban el mate de la mañana en el patio de
los azafranes, y los perros se lamían las patas junto
al brasero con aquella pereza animal que tiene cier-
al golpear con la aldaba la puerta de su casa. Es- to aire de realeza. Algunas chispas de los carbones
cuchó ladrar a los perros. Sólo para oírlos, le venía convertidos en brasas alcanzaban su rostro, sin em-
el propósito de dar golpes y más golpes. Golpes de bargo, ella no se daba cuenta. Sólo sabía que estaba
quien sabe que lo dejarán entrar porque la puerta se contando a su padre la historia de la mosca, de aquel
compadece (más tarde que temprano, pero se com- díptero atrapado y sometido a encierro por la miste-
padece) del mendigo, del vecino insomne, del foras- riosa casa de la chimenea y el humo azulado. Y a
tero perdido en la noche de frío y de tormenta, cuan- medida que hablaba, que redondeaba las frases, que
do Zeus envía un rayo y el trueno empieza a galopar. intentaba buscar una explicación en torno al misterio,
Siguió golpeando. Era como si la casa ladrara, dis- que recuperaba el aliento y volvía a contar, era como
puesta a clavar sus colmillos y sus alfileres en el des- si la mosca buscara salir de aquel cuadro grande y
conocido que se atreviera a meter el polvo o el lodo húmedo por su boca. Pero su padre no dijo nada.
de la calle en su recinto. Con dos vueltas de llaves se Sorbía la bombilla lentamente con una expresión lisa
introdujo en el interior; una vez que estuvo adentro y ausente en la cara. Ella insistió, y mientras insistía
empezó a sacarse el luto. Y el luto fue colgado de escuchaba su voz tomando lentamente distancia de
un colgadero de seis escarpias, doblado y guardado ella hasta que se le hacía cada vez más difícil y más
en un cajón de la cómoda, arrojado en una esquina, enredado ir tras sus palabras.
junto a otros zapatos, y convertido en una pequeña Alguna vez nos ha pasado un susto mayúsculo,
pelota al caer en la gaveta destinada a las medias de un hecho inexplicable, algo que hubiéramos desea-
seda. Al cerrar y guardar su abanico en el cajón de do contar al instante a alguien que nos creyera en el
un viejo escritorio, no solamente cerró el despliegue momento. Pero luego, al contárselo a los demás, al
de colores de la bailarina de flamenco con la mantilla tratar de conservar en su estado de huevo fresco la
de adelfas y rosas sobre sus hombros, y el chusco historia contra natura que nos ha tocado vivir, hemos
de camisa a lunares que rasgaba una guitarra, sino sentido al cascarón rajarse lentamente y a la yema
que también tuvo la sensación de haber cerrado to- escurrirse por nuestros dedos, dejándolos sucios,
dos sus suspiros. viscosos, pegajosos. Quienes nos escuchan, con la
Estaba sola, con sus treinta y nueve años, y incredulidad y la confusión subidas a sus ojos ante
aquellos muebles de porte antiguo que eran su su- nuestra expresión nerviosa, nos dejan en estado de
prema compañía. Por ejemplo aquel cuadro enorme, vergüenza; caemos en la cuenta de que nuestros
de firma borrosa, un poco inclinado y enfermo de hu- “confidentes” están a un paso de tratarnos de menti-
medad. En él se veía una casa blancuzca largando rosos y fabuladores. Finalmente, muy desorientados,
humo por la chimenea; un camino delgado pero im- ya ni sabemos si en realidad ocurrió o no “aquello”
paciente, de tierra roja, parecía invitar al contempla- que empezamos contando con la voz inflada de pa-
dor de ocasión para que se dejara llevar por él. Ah..., sión y de entusiasmo, y el rostro rojo, encendido,
dejarse llevar. Elisa había observado una tarde que iluminado. Y nos damos por vencidos. La casa y los
una mosca de alas ligeramente verdosas (la única, la muebles con cierto aire victoriano le pesaban a Elisa.
misma de la sala), la mosca que acostumbraba pa- Observó su pierna coja, fruto y castigo de una polio
sear por las salvillas de oro y por los candelabros de mal curada. Miró sus viejos zapatos de charol, y así,
plata, iba y venía por el cuadro, por la copa del soli- en conocimiento de su pobreza, se puso a pensar.
tario árbol del paisaje, por las tejuelas, por el humo Cuánto pensó dentro de su pobreza. Se le presen-
azulado, casi lueñe, de la chimenea, por la firma tó en la mente la fiambrera vacía. Observó el cofre
ilegible del artista, y hasta por la pieza de madera sobre la mesa donde solía colocar las llaves de la
pintada que hacía de marco, pero evitaba el camino. casa y algunas monedas de níquel. ¿Habría tal vez
El cielo azulino, sí. El camino de tierra roja, no. Mas algún dinero dentro de él? La posibilidad de encon-
luego, resistiéndose a avanzar, intentando inútilmen- trar monedas en esa caja con cerradura de bronce
te levantar vuelo, luchando con estoicismo contra su iluminó sus ojos verdes. Le vino el recuerdo de ha-
destino de mosca en una vieja aunque valiosa obra berse levantado la noche anterior, durante el velorio,
de arte, fue por el camino que llevaba a la oscura para guardar el cofre, temerosa de un robo; lo tomó,
puerta de la casa. Y ésta se la tragó. El insecto había lo abrió, y su vaciedad le cayó con tristeza polvorienta
desaparecido. Recordó haber contado la historia a su sobre sus ojos.
Junio - julio / 21

Recordó que no había manteca, ni lentejas, ni para desligarse de una pre-


arroz, ni sal, ni limones en el árbol del patio. Y para sencia incómoda, indesea-
echar a rodar un castigo sobre la penosa situación, ble, propensa a las pústu-
los perros la observaban fijamente, y ella se sentía las y a la tos nocturna, que
culpable de sus grandes ojos fijos, hasta que no pudo la vieja muera pronto, cosa
más y les ordenó que se fueran al fondo a buscar que casi nunca ocurre.
un gato que no existía, gritando “¡¡¡michi, michi, mi- Elisa había vendido al
chi!!!”. Ah... Pero le vino a la memoria la figura del escribano Pablo Álvarez
escribano Pablo Álvarez, un hombre flaco, de som- su casa, sus muebles y de
brero muy a propósito de la elegancia masculina, y alguna manera, su propia
de ojeras profundas, que parecía estar lejos de sus persona, por una suma im-
veintinueve años. Dentro de dos días él vendría a su portante. El contrato esta-
casa para quedarse a vivir bajo su techo definitiva- ba firmado. Hasta hicieron Escribe: Delfina Acosta
mente. Y ella tendría, conforme a las estrictas cláusu- bromas ácidas. “¿Quién de
las del contrato, el dinero de la venta de su casa y de los dos morirá primero?”, dijo Elisa. Y el escribano
sus muebles. Ocurre a veces, que cuando una mujer le deseó vida eterna, frotándose la risa con el dedo
solitaria se vuelve anciana, se ve en la necesidad de índice. Era un tic.
ofrecer su vivienda a un extraño, con ella adentro, Con suspiros de satisfacción y el rostro reflejando
hasta que se muera. La anciana en cuestión guarda señales de haber dormido profundamente la noche
el dinero de la venta para pagar sus gastos, que no anterior, Pablo Álvarez se presentó ante ella, en el
son muchos, ciertamente, pues un guisado de judías día previsto, que tenía un fuerte olor a humedad des-
sin sal o mandiocas fritas le caen bien, y las velas pedido por la flora. En el fondo del patio los perros
de cera son siempre demasiadas para alguien que ladraban. El escribano le pasó la mano larga y mo-
se vale cuanto puede de la luz del crepúsculo para jada por la lluvia, y le pidió un perdón desmedido, y
buscar broches, agujas, pinches, estampas religiosas ella le dijo, inclinando ligeramente la cabeza, que no
y cosas perdidas, y el jabón es un lujo aparte porque se preocupara.
la ropa que lleva puesta todavía le dura y le seguirá Después de algunas zonceras más que se di-
durando; además los lavados con jabón echan a per- jeron para agasajarse, y de cerrarse el pago, Elisa
der las mangas y los puños de las prendas de vestir. fue a su cuarto, una pieza distante donde estaban
Es común que el comprador de la vivienda aguarde, ubicados su lecho, una mesa pequeña con patas de
Junio - julio / 22

hierro, un ropero de luna, una cómoda y algunos ob-


jetos con olor a herrumbre colocados sobre un mue-
ble de grandes entrepaños. Se sentó en el borde de
la cama, abrió la bolsa llena de fajos de billetes de los
grandes, y empezó a contar. El escribano se dirigió a
la biblioteca, que a partir de ese momento pasaría a
ser su gabinete. Silbaba diferentes canciones, y ca-
minaba distinto y raro, que era su manera de expre-
sar su contento inmediato.
Al cabo de una semana (las decisiones se toman
generalmente siete días después de una mudanza),
el hombre le comentó a Elisa, con voz afectuosa, casi
tanteadora, que deseaba vender aquel candelero de
madera de ébano para comprar un sillón giratorio.
Ah... Elisa no podía permitirlo. A la luz de ese velador,
y con la sola compañía de un grillo que la molesta-
ba, pero al que no se decidía a matar (porque podía
aplastar a las cucarachas, pero a los grillos no), ha-
bía descubierto el placer lúdico de la lectura: “Las mil
y una noches” y “Madame Bovary”. Después vinie-
ron más tomos y libros: “Don Quijote de la Mancha”,
“Fortunata y Jacinta”, “Misteriosa Buenos Aires”, y
también más grillos. “Yo se lo compraré”, le dijo con
un tono rotundo. Y el escribano se quedó asombrado
y con la boca cerrada. Reclinado contra la ventana
que daba a la calle, observaba cómo ella, tratando
de disimular su cojera, con un rebusque que lo intri-
gaba y lo desorientaba, se iba para el fondo. No tenía
recuerdo de su rostro. Le pasaba a menudo que re-
visando papeles, folios y otros documentos, para en- cosa. Un guisado de arroz, un simple caldo, un hu-
trar en los detalles de los trámites de tal o cual caso, milde plato de lentejas... Soy un distraído comensal
no se fijaba en la cara del cliente sentado frente a él; venido del campo. Elisa sonrió. La simpleza de su
sólo le llegaba su respiración cargada de aflicción, su conversación le caía bien.
silencio respetuoso, o su voz ansiosa preguntando Y entonces se animó y le contó que una vez tuvo
cuándo estaría resuelto el caso. Elisa regresó con un un novio con saco de gabardina y zapatos con piel
apuro desmedido. Le pagó lo que valía la lámpara. de tortuga, que venía a su casa los días de visita, o
Negocio cerrado con billetes nuevos. Con un senti- sea martes, jueves y sábado, y no se quería ir. Ya
miento animado la prendió. Y fue como si su rostro estaban las casonas de enfrente sumergidas en la
también se prendiera. pastosa oscuridad nocturna, y los pájaros chistaban
El escribano la miró largamente. Y vio en su ros- en la enramada, pero él seguía sin querer moverse,
tro amable, sonriente, permiso para hablar. Pero se descansando en el sofá. Y le confesó al escribano
contuvo. Razón tenía su primo Joaquín, cuando le que la situación le molestaba, porque es motivo de
decía, mientras fumaban y caminaban en dirección a chisme en un pueblo pequeño que los novios no se
cualquier parte, que le costaba hablar porque era un quieran retirar de una casa decente a la hora de la
educado crónico. luna en punto. Cinco días después, el escribano, que
“Para Elisa”, venida de algún sitio lejano y eje- ya conocía la debilidad de Elisa por los muebles, le
cutada por alguien que luchaba contra el piano para comentó así, con la confianza que ella le inspiraba
que no se notara el calamitoso estado de desafi- por hacer tan fácil cualquier conversación, que le
nación del instrumento, fue la excusa. - ¿Le gusta vendería el tapiz del tigre colgado de la pared. Nece-
la música? - ¿Se refiere a la música clásica, como sitaba una nueva máquina de escribir. La tecla “a” es-
aquélla? - No. Quiero decir la música en general. taba ya carcomida, y le salía un ojo pequeñito como
Alguna vidalita, un tango, lo que mejor salga de las un punto en el papel. El animal miraba con no sé qué
teclas o de las cuerdas. - Pues sí. Claro que cuando de indefensión en los ojos al hombre de la escopeta.
cocino, no suelo escuchar la radio, pues los boleros Pero sólo Elisa caía en la cuenta del peligro que la
me dan vuelta la cabeza, y echo la sal en la olla como bestia corría, y de su eterna necesidad de escapar,
si lloviera, y el estofado no lo quieren comer ni los pe- de correr, de ser parte de la misma velocidad, para
rros de la calle. - ¿Cuándo tendré el gusto de probar perderse en el follaje espinoso, tupido y húmedo de
un bocado preparado por sus manos? No pido gran la selva del Amazonas y no volver jamás al tapiz. Los
Junio - julio / 23

demás no veían lo que ella. Antes, cuando venían si la casa hubiera tomado partido por ella, le entraba
sus tías de Buenos Aires, echaban una mirada seca, el extraño pensamiento de que ellos eran un matri-
de paso por la obra, tocaban la seda del paño, res- monio en crisis. Ah..., ella y aquellos pájaros de plata
pondiendo a un gesto automático, y mientras una dentro de una pajarera enorme, y el espejo redondo
desliaba ruidosamente un caramelo de menta o de y corredizo, y la estatua de Adonis en perfecto estado
café, y la otra hacía pequeños ejercicios de respira- de conservación, y el tapiz con la figura del hermo-
ción, porque decía estar cansada del largo y penoso so e imponente tigre, y aquella reproducción de “Los
viaje, pedían con voz postiza y exagerada a su pa- girasoles”, de Van Gogh, y esas abstracciones artís-
dre, que las llevaran al patio para tomar un tantito ticas que pasadas por el análisis y la explicación de
de sombra y desplegarse en las reposeras. A veces un experto sólo para él, seguirían siendo un absurdo
pensaba que aquella habitación llena de objetos de para su comprensión. Simulando cansancio pasó a
arte sofocaba a las tías y a otras visitas que a me- lo de Elisa. Tomaron mate. De vez en cuando la mira-
nudo aparecían, pues su padre poseía una selecta ba. Y ella, dándose cuenta de que la miraba, le pre-
colección de té. Y cada pieza artística tenía su ánimo. guntaba nerviosa, si el mate estaba en su punto, y él
Sobre todo el tigre. La mujer acabó trasladando casi le contestaba que sí, y Elisa, de pronto, con los ojos
todas las obras a su pieza. Y el escribano fue trayen- arrasados por las lágrimas, le contó que la noche an-
do muebles apropiados para una oficina a la sala y a terior, un hombre mató a su mujer, y luego se suicidó.
su gabinete. Y Elisa, caída la noche, mientras oía la El matrimonio había comprado hace tres años una
radio, se ponía a hacer cualquier cosa. Esa cualquier casa con una anciana adentro. Ah..., suspiró ella. Se
cosa comenzaba, a veces, con el intento de recordar quedaron en silencio. Y ese silencio de hormiga se
dónde había dejado la aspadera, y como no le venía iba desdoblando, alargando, desenrollando, corrien-
el recuerdo, buscaba entonces, para conformarse, do como agua, como vino de tinaja tumbada, pues
dos gemelos de su saco marino, que sí sabía en qué ambos se morían por hablar. Por decir lo mismo. Lo
sitio se encontraban. Y él en lo suyo, y ella en sus que les iba comiendo el cerebro. Lo que les calentaba
cosas, sentían, a ratos, que se debían una pavada la lengua. Pero luego se dieron cuenta, que a través
de conversación, y la charla venía por el viejo camino de ese mismo silencio tan callado, iban nombrando,
que casi siempre viene, pues se ponían a hablar dale repitiendo, como con golpes de tambor que llaman a
que dale de los demás, y hablando de los demás, le guerra, la palabra muerte. Pasó un largo rato y Eli-
vino a Elisa, una tarde, el recuerdo de la viuda de sa habló, y era que se quedaba encantada con sus
Fleitas, doña Ángela, que se había quedado sola propias palabras cuando le decía a Pablo que se iría
con su alma, pues la señorita Aurora Paredes, quien muy lejos, porque no quería ser la causante de su
había comprado la casa con la viuda adentro, había desgracia. Un ave surcaba el cielo. ¿O era un mur-
muerto. La primera en descubrir el cadáver no fue ciélago? El escribano se quedó mirándola. Estaba
doña Ángela, como se podría esperar. El perro de la bella con esa expresión de pena. Atardecía y la luz
casa, un labrador de pelaje negro, se había largado se iba filtrando por última vez, a través de la clara-
a aullar. Y algunos vecinos, despertándose en plena boya, en la habitación donde estaban los muebles
medianoche, se pusieron a arrojar piedras y casco- y los objetos artísticos. Una luciérnaga, que parecía
tes hacia cualquier parte, pues no sólo el perro de una bella aparición, hizo un giro en el aire y luego se
doña Ángela se soltaba en ladridos sino también los dirigió hacia ella, y él quiso salvarla de aquel cocuyo
animales de la vecindad, que se estaban acabando hermoso, resplandeciente, con un movimiento de la
de enterar de la tragedia y cumplían en avisar. Doña mano derecha. Rozó sus largos cabellos trigueños y
Ángela tuvo que levantarse, sin entender todavía qué Elisa cerró los párpados. Si no fuera por eso, y por la
hacía estando de pie. Alguien golpeaba fuertemente noche que ya se avecinaba y empezaba a respirar a
las manos en su portón. Era la señorita María Con- través del frescor del jazminero; pero sobre todo, si
cepción, una mujer viejecita, de ojos achinados y de no fuera porque algunas gotas de lluvia estaban em-
manos llenas de pecas. Le dijo que pasara. Y una pezando a caer, Pablo Álvarez no se hubiera atrevido
vez que entró en la casa, la mujer se dejó llevar por el a tomar ese rostro triste entre las manos y a besar
labrador. Allí estaba Aurora Paredes, con su camisón esa boca. Estuvieron así... Y se quedaron callados.
blanco de seda inglesa y su maquillaje de geisha sin No fuera que la palabra tomara una forma, un sonido,
sacarse, muerta sobre el piso. un color, un alargamiento incapaz de estar a tono con
Pero Elisa cambió de tema. Y le hizo una broma. la noche. Elisa notó, de pronto, a la luz de la lámpara
Y otra broma más, pues la primera no fue entendida central, que aquella vieja mosca que había quedado
del todo. Esas cosas suelen pasar, ¿no es cierto? atrapada hace tiempo en la casa gris del cuadro, sa-
A la mañana siguiente, el escribano vio a la mujer lía repentinamente de su encierro siguiendo el vuelo
ir y venir, haciendo no sé qué cosa. Elisa se puso de un moscardón. Ah..., la libertad de los insectos.
a cantar mientras pasaba un trapo húmedo por sus Algo que no acababa de entender del todo le decía
muebles. A veces, cuando la veía así, con casi todo que aquella era una buena señal, un mensaje de la
el mobiliario de la sala llevado a su habitación, como providencia para Pablo y para ella.
Junio - julio / 24

IMPORTANTE ESPACIO EN EL ATENEO


Lunes de “BOSQUE CULTURAL”
Literatura, Música y Psicoanálisis
Considerando los escasos lugares permanentes para las discusiones culturales,
vemos la necesidad de instalar un espacio cultural de debate y de gozo artístico-
literario-musical. Con el propósito de llenar en alguna medida este vacío, deseamos
dar apertura a los Lunes de “BOSQUE CULTURAL”, para congregar a artistas,
escritores y público en general, en torno a temas nacionales de nuestra cultura que
marcan la identidad y la idiosincrasia paraguayas.

OBJETIVOS
1. Fomentar encuentros culturales mensuales (Literatura-Música) abiertos a artis-
tas, escritores y público, para dar recreación a las obras de nuestros artistas.
2. Auspiciar encuentros para que los nuevos valores de la literatura y de la música
encuentren un ambiente propicio donde pueda debatirse el horizonte creativo
nacional.
3. Fomentar la formación de un público preferentemente joven que se motive y
disfrute de las letras y de las artes, dando espacios de estudio crítico y creativo.
4. Colaborar a través del apoyo solidario a la cultura con la formación e instalación
de una conciencia cultural para la paz.

CALENDARIO: Todos los últimos lunes de cada mes, a partir de mayo, a las 20 horas, en Ateneo
Paraguayo, Ntra. Sra. de la Asunción casi Humaitá, estarán en vigencia los “Lunes de BOSQUE
CULTURAL”.

PRIMER ENCUENTRO (lunes 31/05): “Manuel Ortiz Guerrero y José Asunción Flores”.
Comentaristas: Aurelio González Canale y Manuel Martínez Domínguez.
Moderadora: Lucinda Barrientos. SEGUNDO ENCUENTRO (lunes 28/06): “Emiliano R. Fernández”.
Comentaristas: Mario Rubén Álvarez y Genaro Riera Hunter.
Moderadora: Gloria Marecos.

TERCER ENCUENTRO (lunes 26/06): “Homenaje a Elsa Wiezell”.


Comentaristas: Lourdes Espínola y Victorio Suárez.
Moderador: José Félix Carrillo.

Organiza
ATENEO PARAGUAYO
Asesor Literario: Victorio Suárez.
Asesor Musical: Manuel Martínez Domínguez.
Idea y responsables
del Proyecto: Gloria Marecos y Genaro Riera Hunter.
Apoyan
Guarán (Gestión Cultural), Taller Literario UNIBE, Poetas Callejeros, Sociedad Paraguaya de Es-
critores, Escritoras Paraguayas Asociadas (E.P.A), PEN-Club del Paraguay, Ágape Psicoanalíti-
co del Paraguay, Comuna Cultural, Grupo de Arte Nueva Impresión, Revista Arte y Cultura,
Revista Tatarendy (Psicoanálisis y Cultura).
Junio - julio / 25

rata de biblioteca
cho que decirnos cuando esa fusión trae una obra del artista plástico En-
logra el prodigio de elevar la palabra rique Careaga. Los autores que esta
a picos verdaderamente admirables. vez representan a la poesía paragua-
El prólogo del poemario nos dice ya contemporánea son: Josefina Plá,
cuanto sigue: “Si la actual estructura Hérib Campos Cervera, Augusto Roa
estética exige la precisión del idioma Bastos, Oscar Ferreiro, Elvio Ro-
para cumplir su cometido, no cabe mero, José-Luis Appleyard, Ricardo
ninguna duda de que Corazón de ar- Mazó, José María Gómez Sanjurjo,
cilla cumple con creces, a lo largo de Ramiro Domínguez, Rubén Bareiro
sus páginas, esa faena. Desde el pun- Saguier, Carlos Villagra Marsal, Luis
to inicial deambula su ternura poética María Martínez, Esteban Cabañas,
de refulgente sinceridad. Cada verso Gladys Carmagnola, Jacobo Rauskin,
de Aníbal Romero Sanabria se ajusta William Baecker, Víctor Casartelli,
a la luminosidad del espacio y expone Renée Ferrer, Susy Delgado, Victorio
con mesura un lenguaje evocador, de V. Suárez, Mario Casartelli, Lourdes
parámetros espontáneos. Espínola, Joaquín Morales, Ricardo
Eficacia de sintaxis con aromas par- de la Vega, Fernando Pistilli Miran-
ticulares sellan el andamiaje del poe- da, Shirley Villalba. Vende SERVI-
mario cuya proyección de frágiles LIBRO.
destellos cotidianos tiene el oficio de
abrir confesiones y palpar estaciones
sobre “el péndulo que se agita”.

Aníbal Romero Sanabria. Corazón


de arcilla. Poemas y pensamien-
tos. UNIBE, SERVILIBRO. Junio
1010, 175 páginas.
El autor del poemario es conocido en
ámbito docente y literario por ejer-
cer el magisterio desde hace muchos
años, y también porque ha publicado
significativos libros que tienen que
ver con la cultura de nuestro país,
especialmente sobre las caracterís-
ticas esenciales del paraguayo en el Revista TRILCE de poesía: crea- Justo Pastor Benítez. La vida soli-
contexto de la cultura popular. Esta ción y reflexión. No. 25. Apareció taria del Dr. Gaspar Rodríguez de
vez, nos presenta un libro de poemas en el 2009, con 50 páginas. Francia. Dictador del Paraguay.
cargados de toques frescos que pro- Excelente publicación cuya dirección Biblioteca Bicentenario No. 4;
vienen de la experiencia directa, ava- está a cargo de Omar Lara. Este nú- 2010. Asunción-Paraguay, 227 pá-
lada acertadamente por la traducción mero está dedicado a la poesía para- ginas. Distribuye y vende SERVI-
al guaraní de los poemas, trabajo que guaya de hoy y la selección estuvo a LIBRO.
estuvo a cargo del poeta Feliciano cargo del Premio Nacional de Litera- Lúcida reedición de un verdadero
Acosta. En ese sentido se puede decir tura, Jacobo Rauskin, quien actual- clásico de la historiografía de nuestro
sin cortapisas que la interpretación, mente se desempeña como director de país. Se trata de la obra de uno de los
la metáfora, las imágenes que des- la Biblioteca del Centro Cultural de la más dignos representantes intelectua-
filan en el libro fueron captadas con Ciudad de Asunción. La publicación les de la Generación del 900: Justo
exactitud por el traductor, hecho que se realizó en el marco de ASUN- Pastor Benítez, quien a lo largo de su
eleva al libro como un material de CIÓN, CAPITAL AMERICANA DE vida se destacó como trabajador cul-
suma importancia, que aparece en el LA CULTURA 2009. La diagrama- tural, historiador, político, periodista
momento justo para decirnos que la ción y edición de la revista estuvo a y, por sobre todo, humanista que supo
poesía en español y guaraní tiene mu- cargo de Marcela Capra y la portada transmitir sus conocimientos a las di-
Junio - julio / 26

versas promociones del Paraguay. Como entu- Milda Rivarola. Vagos, pobres &
siasta estudioso de la historia nacional, el autor soldados. Domesticación estatal del
no resistió la tentación de realizar una importante trabajo en el Paraguay del siglo
investigación para dilucidar la personalidad del XIX. Asunción-Paraguay, 138 pági-
Dr. Francia, quien a lo largo de su vida trabajó nas, 2010. EDICIONES SERVILI-
plenamente para la consolidación de la naciona- BRO.
lidad, ya sea como patriota o figura controvertida Milda Rivarola, especialista en estu-
que, desde luego, tiene hasta nuestros días nume- dios sociales, abre un panorama para
rosos defensores y detractores. En la contratapa el estudio de la situación del trabajo
del libro leemos algunos conceptos sobre el ma- en el siglo XIX, es decir, los sistemas
terial que fueron escritos por el filósofo Adriano laborales en ese antiguo Paraguay con
Irala Burgos. El mismo nos dice: “La bibliografía trazos, en ese periodo, de mayores cri-
sobre el dictador Francia se enriqueció notable- sis y cambios, tal como afirma la au-
mente con la investigación de la brillante pluma tora. Si bien, los historiadores clásicos
de Justo Pastor Benítez. En el siglo pasado ya el novecentistas de nuestro país incursio-
Dr. Cecilio Báez había señalado claramente la naron en el estudio de las relaciones de
importancia del Dr. Francia en la línea nacional, trabajo en nuestro medio, el soporte que
y en tal línea de pensamiento se sitúa el autor de ofrece Milda en su trabajo resulta francamente importante por la rigu-
este libro cuando nos presenta el cuadro de la rosidad investigativa y el desarrollo temático sereno que encierra el
época, el ambiente psíquico y social que sirvió libro. En ese contexto, en la presentación del material la autora señala
de atmósfera a lo que llamamos época francisca. más allá de los avatares: “En ese territorio roto, en esa sociedad des-
Este volumen es un estudio de esclarecimiento y garrada por historias truncas, renacerían a fines del siglo XIX las cla-
profundización que también tiene que ser consi- ses laboriosas, bajo obras políticas, obedeciendo lógicas económicas
derado dentro de los parámetros fijados por la fe- diferentes. Ni esta nueva ruptura fue completa, ni este renacimiento,
cha de su publicación. Hoy, quien quiera estudiar desmemoriado. Pero esto es otra historia”. En la contratapa de Vagos,
a Francia debe conocer a fondo como jalón fun- pobres & soldados. Domesticación estatal del trabajo en el Paraguay
damental la obra de Justo Pastor Benítez. Fran- del siglo XIX, el sociólogo José Carlos Rodríguez nos indica a modo
cia, hijo de portugués como ahora lo sabemos, de comentario: “El trabajo es el protagonista de esta historia que re-
tenía obsesión de crear el Estado paraguayo para memora los orígenes del Paraguay, aunque no desde la figura unívoca
que la República hiciera su camino de presencia del poder –tema obsesivo de nuestra historiografía, literatura, quere-
histórica”. llas y afinidades– sino desde los múltiples rostros del trabajo.

Tenemos los mejores


libros paraguayos

SERVILIBRO
Edición, distribución y venta
Plaza Uruguaya: Pabellón “Serafina Dávalos”
25 de Mayo y México • Asunción - Paraguay
Telefax: (595-21) 444 770 • e-mail: servilibro@gmail.com
www.servilibro.com.py
A C E P T A M O S T O D A S L A S T A R J E T A S D E C R E D I T O
Junio - julio / 27

Firma de Convenio entre FAUSTO CULTURAL


y la ASOCIACIÓN GUYRA PARAGUAY
La Asociación Guyra Para-
guay, es una organización de la
sociedad civil sin fines de lucro
que trabaja en la defensa y pro-
tección de la diversidad biológi-
ca de nuestro país, con el fin de
asegurar que las futuras genera-
ciones puedan conocer muestras
representativas de la riqueza na-
tural del Paraguay. Fausto Cultu-
ral es una institución que se dedi-
ca desde hace años a la edición
y venta de libros infantiles con
diversas temáticas pero, sobre
todo, enfocados a la difusión de
las costumbres y cultura paraguayas. Estas insti-
tuciones aprovechan la ocasión de la celebración
de la Semana de la Biodiversidad, para celebrar un
convenio que tendrá por objetivo principal realizar
un relanzamiento de las publicaciones de la Aso-
ciación Guyra Paraguay y disponerlas al público,
para que de esta manera los estudiantes, maes-
tros, profesionales de diversos ámbitos y artistas
tengan la oportunidad de acceder a estos valiosos
materiales que sintetizan la rica biodiversidad del
Paraguay.
Entre las publicaciones de la Asociación Gu-
yra Paraguay podemos destacar: la primera Guía
para la Identificación de Aves del Paraguay, La
Guía para la Identificación de 60 Serpientes del Nuevo lanzamiento:
Paraguay, la Guía de Patos del Paraguay, el libro Independencia del Paraguay
de Áreas de Importancia para la Conservación de
las Aves del Paraguay (IBAs del Paraguay) y el li- de la serie Iconografía histórica
bro foto-documental de San Rafael, entre muchas del Paraguay
otras. Rotafolio ilustrado
Guión Jorge Rubiani
Ilustración: Juan Moreno
Junio - julio / 28

Premios
Eliodoro Cardozo
y Cooperativa
Universitaria Ltda.
El jueves 3 de junio, a las
19:00 horas, en el Salón
Auditorio de Casa Matriz
de la CU (4º piso), tuvo PREMIO ELIODORO CARDOZO PREMIO COOPERATIVA
1. Zulma Zuelí Zeballos Gamarra UNIVERSITARIA LTDA.
lugar la entrega de pre-
2. Paloma Elizabeth Ayala Cáceres 1. Margarita González Silva
mios Eliodoro Cardozo y 3. Eliana Belén Insaurralde Franco 2. Alma Beatriz Ramos Meza
4. Alejandro I. Yaluff Colmán 3. Sandra Concepción Martínez M.
CU, a 16 alumnos egresa-
5. Sandra Katherine Sanabria Durañona 4. Alba Jazmín Génez Martínez
dos de la Educación Esco- 6. Paola Mercedes Ramírez Maciel 5. Mario Hernán Battaglia Samaniego
7. Verónica Beatriz Torres Insfrán 6. Miguel Ignacio Martínez Griffith
lar Básica y a 14 alumnos
8. María José Araujo Campuzano 7. Shirley Tamara Forcado Vera
egresados de la Educación 9. Ricardo Enrique Bueno Knoop 8. Ana María López Fariña
10. Mario Nery Osmar Franco Robledo 9. Carolina Margarita Bobadilla C.
Media, que alcanzaron
11. María Cristina Pavón Samaniego 10. Joanna Mariela Benítez Cristaldo
100% en sus calificaciones. 12. María Cecilia Gavilán Cardozo 11. Aldo Jesús López Ortiz
13. María de los Angeles Echagüe Pérez 12. Natalia Jazmín Cubila Servín
A continuación, presenta-
14. César Alejandro Riveros Chávez 13. Arturo Daniel Giménez Benítez
mos la lista de ganadores 15. María Vanesa Espínola Rolón 14. Herminia Fabiola Báez Vera
16. Sergio Eduardo Zorrilla Rivas
de cada premio
 

También podría gustarte