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UNIVERSIDAD ABIERTA PARA ADULTOS

(UAPA)
PRESENTADA POR:
MELISSA NATHALI ULLOA REYES

TAREA NO.2 DE:


HISTORIA DE LA CIVILIZACION MODERNA Y CONTEMPORANEA
ENTREGADO A:
LIC. JOSE ALEXANDER PICHARDO

MATRICULA:
14-3699
CARRERA:
EDUCACIÓN MENCION CIENCIAS SOCIALES.
SANTIAGO DE LOS CABALLEROS
REPUBLICA DOMINICANA
Introducción.
El ensayo siguiente trata sobre los procesos que se llevaran a cabo para que Estados
Unidos y los países latinoamericano lograran sus independencia, también veremos lo
que fue la Revolución Industrial y la influencia que tuvo esta en el desarrollo de la
economía y la industrialización de los países europeos en primer lugar y luego en el
resto del mundo, así como se trata lo que fue la Revolución Francesa y la influencia de
esta en el idealismo político de esa época y el cual sirvió como base para el desarrollo
político de los siglos posteriores al surgimiento de esta.

Desarrollo.

La hoy poderosa nación de los estados unidos de Norteamérica, tuvo su origen en los
territorios que los ingleses colonizaron en la costa atlántica de América del norte (desde
comienzos del siglo XVII), donde habían logrado establecer trece colonias, las mismas
que fueron incorporadas a los dominios del imperio británico. A fines del siglo XVIII
(1776), dichas colonias, por medio de sucesivas guerras contra Inglaterra, consiguieron
emanciparse del dominio anglosajón. La independencia de los Estados Unidos de
Norteamérica, es uno de los acontecimientos más importantes de la Historia moderna,
no solo porque sirvió ella de ejemplo a las colonias hispanoamericanas que aspiraban
también su liberación, su emancipación, sino, fundamentalmente, por el preponderante
rol que el país de Washington desempeña en los destinos del mundo en los tiempos
contemporáneos.
Características.

Estas colonias formadas, mayormente, por gente culta de credo protestante, gracias a
su espíritu eminentemente laborioso como a las inmensas riquezas del territorio,
consiguieron en pocos años progresar grandemente, a la vez que su población
experimentó también considerablemente crecimiento.
Disfrutaban de autonomía política, es decir, que eran, prácticamente libres e
independientes. Hacían uso de sus libertades y derechos y, asimismo, cada colonia
elegía a sus propias autoridades, a la vez que resolvía sus propios problemas, aunque
en nombre se hallaban bajo el dominio de Inglaterra, la misma que se hacía
representar por un gobernador en cada una de ellas. Tenían, pues, por supremo anhelo
vivir en un ambiente de paz y de libertad para, así, poder desarrollarse y practicar
libremente sus creencias políticas y religiosas. En busca de ello, justamente, fueron los
primeros inmigrantes (“Los padres peregrinos” – 1620) quienes abandonaron Inglaterra
al implantarse en esta nación la persecución religiosa y el despotismo real, y, después
de cruzar el Atlántico, se establecieron en la costa este de América del Norte.

Guerra de la independencia. La prosperidad de las trece colonias se vio alterada


cuando Inglaterra, escasa de recursos, impuso tres gravámenes económicos a dichas
colonias, a saber:
1. Dispuso que las propias colonias deberían pagar los gastos que ocasionaron el
ejercito ingles destacado en ellas.
2. Creo, asimismo, el papel timbrado (papel sellado) para el uso en los contratos.
3. Estableció finalmente el impuesto del té.
Tales medidas no solo originaron la protesta unánime de parte de los habitantes de las
trece colonias, sino que decidieron estas romper definitivamente todo nexo que los
ligaba a la Madre Patria. Fue en el primer congreso de Filadelfia (1774), al que
asistieron, en condición de delegados, patriotas eminentísimos como Jorge Washington
y John Adams, que solicitaron la abolición de todas aquellas leyes que imponían
contribuciones a las colonias sin el consentimiento previo de estas, fieles a la inviolable
tradición inglesa: “que no existe impuestos sin la aprobación de los que deben
pagarlos”. Reclamando para sí las mismas libertades y derechos de que disfrutaban los
ingleses del Viejo Mundo. El gobierno respondió con medidas de fuerza y con el envío
de más efectivos militares, originando encuentros como el de Lexignton, favorable a los
colonos provocando asi estas series de conflictos lo que sería la independencia de los
Estados Unidos de América el 4 de julio de 1776.
En el medio siglo transcurrido desde la declaración de independencia de Estados
Unidos, en 1776, hasta el hundimiento del poder español en Perú, en 1824, todo un
continente se liberó de la tutela colonial. La emancipación latinoamericana, en
particular, fue precipitada por la intervención francesa en la península Ibérica. En
América, como en la propia España, el sometimiento de las instituciones monárquicas a
José I les privó de legitimidad y surgieron nuevos poderes locales.
Entre 1804 y 1828 proclamaron su independencia una docena de Estados americanos.
El primero en hacerlo fue Haití, tras una sangrienta insurrección de los esclavos
negros, que puso fin al dominio francés. En la América española, la independencia se
consolidó tras prolongadas guerras, en las que resultaron decisivas las campañas del
argentino José de San Martín y el venezolano Simón Bolívar. El último bastión del
imperio español fue Perú, donde la guerra quedó decidida en 1824, aunque la
guarnición española del Callao resistió hasta 1826. Brasil se separó de Portugal en
1822. Algunos de los nuevos Estados se fragmentaron luego a su vez, como ocurrió en
la Gran Colombia en 1830 y en las Provincias Unidas de Centroamérica en 1839.
Uruguay, que había sido ocupado por los brasileños en 1821, logró su independencia
en 1828.
El movimiento independentista estadounidense fue un modelo para los criollos en
América del Sur. Si los norteamericanos habían logrado liberarse de Inglaterra, la
mayor potencia del mundo, los sudamericanos pensaron que les iba a resultar fácil
independizarse de una España débil. No obstante, la influencia ideológica fue muy
ambivalente. Primero porque a la mayoría de los criollos no les gustaba el federalismo
de los Estados Unidos. Bolívar era un centralista férreo y la mayoría de los caudillos del
movimiento independentista eran también centralistas. Segundo, los criollos también
veían con recelo el sistema político liberal de Estados Unidos.
En pocas palabras Todas las grandes transformaciones ocurridas en la historia han
tenido en el fondo causas económicas. Así, tanto en los Estados Unidos como en los
países de Hispanoamérica, los grupos económicos surgidos querían romper los lazos
de dominación y opresión de las metrópolis, Gran Bretaña y España respectivamente.
La lucha económica era por romper con los monopolios que les imponían aquellas
monarquías colonialistas.

Entonces las luchas por la independencia de los pueblos americanos, del norte y del
sur, eran por alcanzar la Libertad, la soberanía y la igualdad, para que los pueblos
oprimidos alcancen la capacidad de autogobernarse sin tutelas de las oligarquías
europeas. El triunfo de la revolución de las 13 colonias norteamericanas sobre el
poderoso y más grande imperio colonialista de la época, Gran Bretaña, demostró que
sí era posible que los pueblos oprimidos y subyugados de Latinoamérica alcanzaran
también su independencia del colonialismo español que ya estaba en franco declive.
La Revolución Industrial o Primera Revolución Industrial es el proceso de
transformación económica, social y tecnológica que se inició en la segunda mitad del
siglo XVIII en el Reino Unido, que se extendió unas décadas después a gran parte de
Europa occidental y Norteamérica, y que concluyó entre 1820 y 1840. Durante este
periodo se vivió el mayor conjunto de transformaciones económicas, tecnológicas y
sociales de la historia de la humanidad desde el Neolítico, que vio el paso desde una
economía rural basada fundamentalmente en la agricultura y el comercio a una
economía de carácter urbano, industrializada y mecanizada.

A principios del siglo XVIII, Gran Bretaña o Francia eran países con poca población. La
esperanza de vida no superaba los 30 años. La mayoría de los habitantes trabajaban
en el campo produciendo poco alimentos. Las ciudades eran pequeñas y también
producían poco. El comercio era de poco volumen y los transportes eran rudimentarios.

La baja productividad del trabajo hacía que la producción y el consumo por habitante
fueran escasos. Existía un estancamiento económico ya que la riqueza era inferior a la
población. A finales del siglo XIX Gran Bretaña y Francia habían aumentado su
población gracias a la bajada de mortalidad. Una minoría trabajaba en el campo pero
su producción era alta. La gente había emigrado a la ciudad para trabajar en la
industria produciendo así bienes a gran escala. El comercio era voluminoso y las
mercancías se transportaban en ferrocarriles o buques a vapor. Todo esto provoco que
aumentara la producción y el consumo por habitante, creciendo así la riqueza por
encima de sus poblaciones.

La Revolución Industrial marca un punto de avance o cambio en la historia,


modificando e influenciando todos los aspectos de la vida cotidiana de una u otra
manera. La producción tanto agrícola como de la naciente industria se multiplicó a la
vez que disminuía el tiempo de producción. A partir de 1800 la riqueza y la renta per
cápita se multiplicó como no lo había hecho nunca en la historia, pues hasta entonces
el PIB per cápita se había mantenido prácticamente estancado durante siglos. Por
primera vez en la historia, el nivel de vida de las masas y la gente común experimentó
un crecimiento sostenido.

Las mejoras agrícolas significan que un número cada vez menor de campesinos es
suficiente para alimentar a toda la población. Una parte cada vez mayor pasa a trabajar
en el sector industrial. La industria también incrementa su productividad, de manera
que un número cada vez menor de obreros es capaz de producir todos los bienes
industriales. Ello hace que parte de la población deba buscar empleo en actividades
que no son industriales ni agrarias conocidas como servicios.

Las causas que motivaron la expansión de los servicios fueron el aumento de su


demanda gracias a la revolución demográfica y a la mayor renta per cápita. Se
demanda algunos servicios tales como educación, sanidad o recreo. Los ingresos
permitían a las familias obreras que sus hijos pudieran asistir a escuelas públicas,
contratar los servicios de un médico o disfrutar de espectáculos de recreo. El consumo
por obrero de educación, sanidad o diversiones era muy pequeño.

La burguesía y las clases medias sí que demandaban muchos servicios y muy caros.
Sus altas rentas les permitían tener criados, chóferes o jardineros, educar a sus hijos
en colegios religiosos, enviarlos a la Universidad o disfrutar de servicios tan lujosos
como restaurantes, hoteles...

La mayor demanda de servicios incrementó su oferta y fue posible por dos razones:
una mano de obra disponible para trabajar en los servicios y la existencia de capital
para invertir en ellos.

El logro más importante de la Revolución Industrial fue que originó por primera vez en
la historia un crecimiento económico sostenido. Este crecimiento es el resultado de la
acción conjunta de cuatro factores.
Primero: el crecimiento económico requiere una mano de obra abundante y con alto
grado de formación y especialización en el trabajo.

Segundo: el crecimiento económico necesita de una constante reinversión de capital.


Una parte de la renta nacional debe, pues, ahorrarse y reinvertirse para asegurar una
mayor capacidad de producción.

Tercero: la incorporación de nuevas tecnologías contribuye de modo decisivo al


crecimiento económico porque eleva la productividad del trabajo. Nuevas máquinas,
movidas primero con energía hidráulica y luego con vapor, revolucionaron la
productividad de los obreros textiles desde el siglo XVIII.

Cuarto: el crecimiento económico requiere de instituciones que lo favorezcan. El Estado


fomentó el crecimiento económico mediante inversiones de capital o promulgando
leyes favorecedoras de las empresas capitalistas.

Todos estos acontecimientos catalogan a la Revolución Industrial, como uno de los


episodios históricos más importantes y de mayor influencia en la historia de la
humanidad marcando un antes y un después en la historia.

La Revolución francesa fue un conflicto social y político, con diversos periodos de


violencia, que convulsionó Francia y, por extensión de sus implicaciones, a otras
naciones de Europa que enfrentaban a partidarios y opositores del sistema conocido
como el Antiguo Régimen. Se inició con la autoproclamación del Tercer
Estado como Asamblea Nacional en 1789 y finalizó con el golpe de estado
de Napoleón Bonaparte en 1799.

La Revolución Francesa fue el cambio político más importante que se produjo en


Europa a fines del siglo XVIII, sirvió de ejemplo para otros países y promovió la
democracia en el mundo. La influencia de la Revolución Francesa fue enorme. El
gobierno, la economía y las relaciones sociales fueron modificados en Francia, en gran
parte de Europa y el mundo. Sus ideas y sus hechos repercuten todavía en la
actualidad. Nuestras ideas de libertad, democracia, derechos y deberes; nacieron de
este conflicto europeo de finales del siglo XVIII.

La Revolución Francesa fue un enfrentamiento social y político, que sacudió a Francia


y otras naciones de Europa que enfrentaban el sistema del antiguo régimen basado en
la monarquía.

Inició cuando el Tercer Estado, institución que representaba las mayorías, se reveló y
tomó el poder en 1789. La revolución finalizó con un golpe de estado de Napoleón
Bonaparte en 1799; esta revolución derrotó al absolutismo del rey y estableció un
nuevo régimen donde la burguesía, y las masas populares fueron la fuerza política
dominante.

El 26 de agosto de 1789, la Asamblea Constituyente aprobó un documento que


contenía las ideas políticas de la burguesía el cual fue la Declaración de los Derechos
del Hombre y del Ciudadano. Éste documento fue redactado a fin de proporcionar un
marco previo a la redacción de una constitución en los primeros momentos de la
Revolución Francesa.

Uno de los acontecimientos con mayor alcance histórico de la Revolución Francesa fue
precisamente la declaración de los Derechos del hombre y del Ciudadano. En su
doble vertiente, moral (derechos naturales inalienables) y política (condiciones
necesarias para el ejercicio de los derechos naturales e individuales), condiciona la
aparición de un nuevo modelo de Estado, el de los ciudadanos, el Estado de Derecho,
democrático y nacional. Aunque la primera vez que se proclamaron solemnemente los
derechos del hombre fue en los Estados Unidos (Declaración de Derechos de
Virginia en 1776 y Constitución de los Estados Unidos en 1787), la revolución de los
derechos humanos es un fenómeno puramente europeo. Será la Declaración de
Derechos del Hombre y del Ciudadano francesa de 1789 la que sirva de base e
inspiración a todas las declaraciones tanto del siglo XIX como del siglo XX.

Este documento es uno de los fundamentales de la Revolución francesa (1789-1799)


en cuanto a definir los derechos personales y los de la comunidad, además de los
universales. Influenciada por la doctrina de los derechos naturales, los derechos del
Hombre se entienden como universales. Aun cuando establece los derechos
fundamentales de los ciudadanos franceses y de todos los hombres sin excepción, no
se refiere a la condición de las mujeres o la esclavitud, aunque esta última seria abolida
por la Convención Nacional el 4 de febrero de 1794. Sin embargo es considerado un
documento precursor de los derechos humanos a nivel nacional e internacional. No fue
hasta que Olympe de Gouges, en 1791, proclamó la Declaración de los Derechos de la
Mujer y la Ciudadana que las mujeres entraron en la historia de los derechos humanos.
Conclusión.

Después de investigar y analizar dicha actividad nos podemos dar cuenta que, el
proceso de independencia de los Estados Unidos dio inicio a lo que fue una serie de
revoluciones por parte de las colonias que estaban bajo el control absolutista de las
monarquías en toda América, esto con el fin de alcanzar su libertad como estado para
desarrollar su propia economía y política. También podemos logramos comprender y
apreciar lo que fue la Revolución Francesa así como la Revolución Industrial, el cual
fueron dos hecho que cambiaron el rumbo de la humanidad tanto en lo económico,
como en lo político, lo social, lo religioso y lo cultural, ya que se establecieron nuevas
ideas que cambiarían para bien la situaciones de crisis económicas y políticas de ese
entonces.

Bibliografía
http://rpp.pe/mundo/estados-unidos/influyo-la-independencia-de-estados-unidos-en-peru-y-
latinoamerica-noticia-976351

http://mihistoriauniversal.com/edad-moderna/independencia-de-los-estados-unidos/

Revolución de Estados Unidos. https://www.youtube.com/watch?v=8Zjpl220XbY

Revolución Francesa. https://www.youtube.com/watch?v=SzdcRYLHKpo

http://www.mercaba.org/FICHAS/Historia/consecuencias_de_la_revolucion_f.htm

Revolución Industrial. http://html.rincondelvago.com/antecedentes-y-desarrollo-de-la-primera-


revolucion-industrial.html

http://docum.x10.mx/nat/revolucionindustrial.htm

https://es.wikipedia.org/wiki/Declaraci%C3%B3n_de_los_Derechos_del_Hombre_y_del_Ciudadano

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