La noche era fría, por las callejuelas de Londres se escuchaba el sonar muy denso de unos

zapatos, el aterrador Jack el Destripador había pasado de moda y cómodamente se podía

andar de nueva cuenta por las noches, sin embargo a aquella persona que andaba a pasos
lentos no le importaba en lo más mínimo, salió del callejón izquierdo para unirse a la calle
principal, no muy lejos de aquella intersección se encontraba una lámpara y recargada junto a
esta una silueta femenina enfundada en un atuendo sencillo pero de tela completamente fina,
cuando la luz asomo aquel ser que dejaba atrás el callejón se pudo notar a un hombre de tez
completamente blanca, ataviado con finas prendas de su época, camisa rematada en amplios
holanes , chaqueta a media pierna decorada finamente, pantaloncillo largo, en su cabeza un
lujoso sombrero se posaba; a un gesto indico a aquella dama que lo siguiera, lo que ésta
acepta sin más gesto que un leve movimiento de cabeza asintiendo, anduvieron largo tiempo
así, él delante de ella andando a paso tranquilo, enredándose en las inmensas calles y
pequeños callejones de la Londres Industrial, cuando por fin se detuvo aquel ser y la guió a un
sitio desconocido, abriendo una puerta accesaron ambos, ella detrás de él sin más sonido que
el sutil sonar de sus zapatos, por ese andar se podía decir que ella calzaba tacones y el botines,
sin embargo no se podía observar más, pues la neblina pronto los cubrió por completo.

Era alrededor de la media noche cuando detuvieron su andar, se encontraban, por lo poco que
se pudo observar debido a la neblina; en un cementerio de la nutrida Londres, él aparto de su
cabeza el sombrero y saludo por fin a aquella dama quien se sentaba justo en una tumba, de
un modo cordial aquella dama respondio amablemente, aquel saludo fue un tanto
desconocido para oídos normales, pero por lo que se podía apreciar parecía ser mucho muy
común en ellos, sin embargo en lengua común prosiguió aquel ser a hablar diciendo las
siguientes palabras:

1837 marco el inicio de un gran cambio, si yo lo vi fui testigo de aquel pequeño inicio, por
aquel entonces recién me encontraba llegando a aquel nuevo mundo… si un nuevo inicio una
nueva etapa comenzaba largo fue el tiempo que anduve vagando sin rumbo fijo hasta que me
llamó la atención aquel lugar, aquella ciudad llena de muchedumbre, barro, cuyo rey en
épocas de antaño se la había pasado construyendo y destruyendo, aquel donde un tipo
Napoleón según dijeron trato de conquistarlo.

Oh si recuerdo cuando la vi aquella figura delicada, grácil y demasiado acentuada, soberbia,

altiva y orgullosa. Causo que la sangre en todo mi ser comenzara a hervir. Sentí deseo por ella
pero pronto me controle pues a su alrededor un sequito de hombres la seguían, jovial
perfecta, no podía dejar de admirarla, la noche de la fiesta paso pronto para mi, por desgracia,
al salir de aquel sitio me encontraba completamente sediento... nadie pudo calmar mi ser,
nadie pudo satisfacerme… anduve vagando aún más pronto supe que aquella mujer que tanto
deseaba se trataba de ella, si la reina.

El silencio volvió a hacerse presente, sin embargo pronto terminó con una ligera lluvia que se
hizo notar comenzando a empapar a aquellos seres, sin que esto fuese molestia para ambos,
aquel hombre alzo un poco más la voz y continuó hablando.

Sí déjame contarte como fueron nuestros orígenes, déjame decirte como comenzó todo… es
hermoso, o mejor dicho fue hermoso, hoy estamos en una época de decadencia, has llegado
hasta aquí con el único afán de seguir esta partida activa… ¿No te parece una estupenda idea?
… Si lo sé, es la mejor de las ideas, no se me pudo haber ocurrido otra mejor en esta situación,
oh… no, no olvidare detalle alguno, pierde cuidado en eso… Aún recuerdo aquellos grandes
viajes a caballo a la luz de la luna

Soltó pues una carcajada y pronto un estruendo se hizo notar, elevando el rostro el caballero
menciono sutilmente.

El cielo parece favorecernos para esta mascarada. No temas … a un no muerto estar aquí es
algo natural, ¿Los árboles? Oh el viejo roble del fondo es mi favorito si gustas iremos allá… ¿Si?
Perfecto andando que el tiempo apremia mientras déjame comenzar a decirte como fue que
llegamos a ser importantes.

Al terminar su línea aquellos seres se pusieron en marcha ella en silencio, el animoso

comenzando a hablar, una vez llegado a aquel viejo roble y debajo de este un mausoleo ambos
subieron a sus ramas y él continúo diciendo

Quizá el año no comprenda bien… Estando muerto es difícil contarlo, pero al parecer era el
año de 1840, decidido en buscar la satisfacción que la sed por ella habia generado en mí, me
aparte de los suburbios londinenses para acudir al campo, Oh si el bello campo donde el
ganado anda vagando libre, llegue a un ducado, y pronto comencé a entablar amistad con el
duque…. ¿La casa? Ah sí… la familia Cavendish exquisita sangre por cierto, pero poco sacio mi
sed, William... sí recuerdo que ese era el nombre del lord, pronto comenzó a tener mayor
influencia gracias a mis consejos, poco a poco se hizo de alto renombre dentro de la noblesa
londinense … ¿Cómo? Ah… solo hizo caso a mis consejos, yo … yo quite de su camino a la
mayoría de sus enemigos, fue fácil recuerdo, ninguno opuso resistencia, muchos diran que fui
domesticado, pero ¿Por qué no un trato que me llevaría al final hasta ella? Sabía que en
Londres ella crecía haciéndose mucho mas exquisita, delicada reliquia que habia de probar,
creo que nunca he sentido tanto deseo por alguien que por ella, no temas, esa sed ya paso,
¿Cómo? Lo descubrirás pronto. Oh si te decía, no nos desviemos del tema, este caballero
comenzó a tener importancia, tanto en negocios como en títulos nobiliarios, solo te dire que
gracias a mí volvieron a tener mayor presencia en la cámara de los lores que un antecesor de
ellos tuvo… ¿Quién? Ah ese fue el Cuarto Duque de Devonshire.. Sí el ducado ya te lo he dicho
la familia también, en parte nos debemos a ellos a los Duques de Devonshire y a la familia
Cavendish ¿Exquisito no crees?, continúo no me extravío, oh querida perderme en tus dulces
palabras es fácil.

Guardo silencio unos momentos quizá para recordar o quizá para crear mayor curiosidad en su
interlocutora, con ingrata sonrisa vuelve a hablar.

Luego que el señor Devonshire fuese uno de los mas imponentes en ésta zona de Inglaterra,
nos dirigimos a Londres una calurosa noche, según mencionó él, viajamos por la noche,
dormíamos en el día, me alago el que tomara mis costumbres; llegamos aproximadamente el
cinco de diciembre de 1848, el viaje no duro tanto como se esperaba, por las noches me
adelantaba para que mi señor estuviese a salvo… ¿Tonto? No querida, eso fue lo mas lógico
que pude haber hecho, eso trajo a mi la oportunidad de un intercambio de sangre a cambio de
vida… Luego de nuestro arribo, mi señor Devonshire fue llamado a la asamblea de los Lores,
ahí no pude llegar, sin embargo cuando retorno a casa él dijo LA GRAN EXPLOSIÓN y comenzó
a explicarnos de lo que se trataba, así pues nos dimos a la tarea de idear la obra perfecta, por
ese entonces un jardinero se había unido como sirviente de la residencia en el campo y
haciendo caso a mis palabras obtuvo grandes logros con las plantas… ¿Un vampiro jardinero?
Es lo mas cómico que he escuchado esta noche. No querida él era humano, completamente
humano…No, él no esta en la cofradía…. El genio y talento de este hombre más las ideas de un
arquitecto y las mias dieron como resultado … Si lo has adivinado… El Crystal Palace …
¿Magnifico cierto?.... La gran explosión tuvo su cede…. Y ahí… Ahí fue donde la vi una vez
mas… hermosa, exquisita, bella, divina, la mejor y más perfecta creación que aquel que nos
maldijo pudo haber hecho.