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JOSÉ BARRAGÁN BARRAGÁN

RAÚL CONTRERAS BUSTAMANTE


JUAN JOSÉ MATEOS SANTILLÁN
ARMANDO SOTO FLORES
FERNANDO FLORES TREJO

TE ORlA
DE LA
��

CONSTITUCION

Cuarta edición

EDITORIAL PORRÚA
AV. REPÚBLICA ARGENTINA l'i
MÉXICO, 201 O
Primera edición: 2003

Copyright© 2010

ÍNDICE
Esta edición y sus características son propiedad de
EDITORIAL PORRÚA, SA de CV 8
Av. República Argentina 15 altos, col. Centro, Pág.
06020, México, DF BREVE PREFACIO DE LA SEGUNDA EDICIÓN XV
www .porrua.com

PRÓLOGO DE LA CUARTA EDICIÓN XVII

Queda hecho el depósito que marca la ley


INTRODUCCIÓN . . . . . . . XIX

Derechos reservados
UNIDAD 1

SOCIEDAD, ESTADO Y DERECHO

1. 1 . Sociedad . . . . . . . . . . . 2
1.2. Estado . . . . . . . . . . . . 5
ISBN 978-970-07-7538-8 1.2.1. Sobre el origen del Estado. 5
1.2.2. Los elementos componentes del Estado 6
1.2.2.1. La población. . 6
1.2.2.2. El territorio . . . . 7
1.2.2.3. La organización . . 8
1.2.2.4. La idea de soberanía 8
1.2.3. Los fines del Estado 9
1.3. Derecho 12
1.4. Resumen . . . . . . . . 14

UNIDAD 2

CONCEPTO Y UBICACIÓN
DEL DERECHO CONSTITUCIONAL

2. l. Concepto y elementos de derecho objetivo 15


IMPRESO EN MÉXICO 2.2. Caracteres del Derecho Constitucional 16
PRINTED IN MEXICO 2.3. El concepto del Derecho Constitucional 22

VII
VIII �DICE !�DICE IX

2.3.1. Carl Schmitt . . . . 22 UNIDAD 5


2.3.2. Karl Loewenstein . . 22
VERTIENTES IDEOLÓGICAS
2.3.3. Manuel García Pdavo 23
2.3.4. Ignacio Burgoa. . . 24
DEL DERECHO CONSTITUCIONAL
2.3.5. Felipe Tena Ramírez 25
2.3.6. Daniel Moreno Díaz . 26 ."i.l. Introducción 63
2.3.7. Pablo Biscaretti Di Rufia . 27 ."i.2. ÜI"Ígenes del constitucionalismo moderno 64
2.3.8. Segundo V. Linares Quintana. 28 ."i.2.1. Juan sin Tierra . . . . . . . . 64
2.3.9. Mario de la Cueva. 29 5.2.2. La tradición hispano mexicana . 67
2.3.10. André Hauriou . . 30 ."i.2.3. Prolegómenos, hechos y logros de la Revolución francesa 68
2.3.11. Maurice Duverger. 31 5.2.4. Declaración de los derechos del hombre . . . . . . . . 73
5.3. Contenido liberal. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 75
5.3.1. El constitucionalismo libei-al derivado de la Constitución
francesa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 77
UNIDAD 3 ."i.4. Estados Unidos de América. Su independencia y sus documentos

CONCEPTO DE CONSTITUCIÓN jui"Ídicos básicos . . . . . . . . . . . . . . 79


."i . ."i. Constitucionalismo social: aportación de México . . . . . . . . 85

3.1. Concepto material v formal de Constitución 35


3.2. Concepto de Constitución . 36
3.2.1. Ferdinand Lassalle 36 UNIDAD 6
3.2.2. Carl Schmitt . . 36
3.2.3. Hans Kelsen . .
PODER CONSTITUYENTE
38
3.2.4. Hermann Héller 39
6.1. Presentación 89
3.2.5. André Hauriou . 41
6.2. El oi"Ígen . . . . . . . . . . . . . . . . . 90
3.2.6. Manuel García Pelayo 42
6.3. Concepto e importancia del poder constituyente 92
3.2.7. Otros Autores 44
6.4. La soberanía como fundamento del poder constituyente 93
6.4.1. Tesis de Rousseau y de Sieyes . . . 98
6.4.1.1. Juan Jacobo Rousseau . . . . . . . 98
UNIDAD 4 6.4.1.2. Emmanuel Joseph Sievcs. . . . . . 102
6.4.2. La soberanía ante los Constituyentes mexicanos . 105
CLASIFICACIÓN DE LAS CONSTITUCIONES 6.4.2.1. 108
La soberanía en el México Colonial . .
6.4.2.1.1. De Cádiz al Acta Constitutiva de la Fe-
4. l . Según su formulación o forma jurídica . . . 50 deración . . . . . . . . . . 108
4.1. l. Constituciones codificadas o escritas . 50 6.4.2.1.2. El Constituvente de 1856-1857 . 115
4.1.2. Constituciones dispersas o no escritas 51 6.4.2.2. Congreso Constituyente de 1916-1917 116
4.2. Según su reformabilidad . . . 52 6.4.3. Otros autores. . . . . . . . 117
4.2.1. Constituciones rígidas . 52 6.4.3.1. Carl Schmitt . . . . 117
4.2.2. Constituciones flexibles 53 6.4.3.2. R. Carré de Malberg. 119
4.3. Según su origen . . . . . . . 54 6.4.3.3. Hans Kelsen . . . . 121
4.3.1. Constituciones otorgadas. 55 6.4.3.4. Hermann Héller . . 122
4.3.2. Constituciones impuestas 56 6.4.3.5. Ignacio Burgoa Orihuela. 123
4.3.3. Constituciones pactadas . 56 6.4.3.6. Felipe Tena Ramí1·ez 126
4.3.4. Otros orígenes . . . . . 56 6.4.3.7. Jorge Carpizo Mac GI-egm 129
4.4. Clasificaciones de Karl Loewenstein 57 6.4.4. Historicismo empírico mexicano . 1 31
4.5. Üti·a clas-ificación 60 1 6.5. Asamblea constituyente, órganos o poderes constituidos y sus di­
ferencias . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 134
ÍNDICE ÍNDICE XI
X

6.6. Asamblea constituyente y órgano legislativo ordinario 135 8.3.1.3. William L. Marbury . . . 200
6.6.1. La soberanía ante la globalización . . . . . 136 8.3.1.4. Jorge Carpizo . . . . . 201
6.6.2. Regionalización. . . . . . . . . . . . . 138 8.3.1.5. Ignacio Burgoa Orihuela . 201
6.6.3. ¿crisis de los Estados o crisis de las Teorías sobre la so- 8.3.2. Tesis que sostienen la reformabilidad ilimitada de la Cons­
beranía?. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 139 titución . . . . . . . 202
8.3.2.1. Ulises Schmill . . . . . . . . . . . . . . . 202
8.3.2.2. Felipe Tena Ramírez . 203
8.3.2.3. René Carré de Malberg 205
UNIDAD 7
8.4. Diversos sistemas de reformabilidad constitucional 206
SUPREMACÍA CONSTITUCIONAL
8.4.1. El principio de reformabilidad en el Derecho Constitucio­
nal Comparado . . . . . . . . . . 206
7.1. Antecedentes de la supremacía constitucional . . . . 145 206
8.4.1.1. Estados Unidos de América.
7.2. La supremacía constitucional y el orden jurídico estatal 151 208
8.4.1.2. Cuba . . .
7.3. Pirámide kelseniana de jerarquía normativa . . . . . 154 208
8.4.1.3. Nicaragua .
7.4. Supremacía constitucional en el Estado Federal . . . 159
8.4.1.4. España 210
7.5. Posible contradicción entre leyes constitucionales y tratados 165
8.4.1.5. Italia . 212
7.6. Inviolabilidad de la Constitución 172
8.4.1.6. China . 214
7.7. Tendencias actuales . . . . . . . . . 174
8.4.2. Reforma Constitucional. Referéndum, iniciativa popular
y plebiscito. . . . . . . . 216
8.4.2.1. Referéndum . . . 216
UNIDAD 8 217
8.4.2.2. Iniciativa Popular .
REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 8.4.2.3. Plebiscito . . . . 219

8.1. Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . 179


8.2. Poder revisor de la Constitución . . . . . . . . . . 182
8.2.1. El Poder Revisor a través de Nuestra Historia UNIDAD 9
Constitucional . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 184
DERECHOS DEL HOMBRE
8.2.1.1. Constitución Política de la Monarquía Española
del 19 de marzo de 1812 . . . . . . . . . . . 184
9.1. El concepto de los Derechos Humanos . . . . . . . . . . . . 225
8.2.1.2. Decreto constitucional para la libertad de la Amé­
9.2. Aporte de Inglaterra a la Carta Magna. . . . . . . . . . . . . 230
rica Mexicana sancionado en Apatzingán a 22
9.3. Análisis de la declaración de los Derechos del Hombre y del ciu­
de octubre de 1814 . . . . . . . . . . . . . 186
dadano de 1789 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 232
8.2.1.3. Constitución Federal de los Estados Unidos Me­
9.4. La declaración universal de los Derechos del Hombre de 1948 234
xicanos. Decreto de 4 de Octubre de 1824 . . . 187
9.5. Terminología y adopción en las Constituciones de México . . 237
8.2.1.4. Las Siete Leyes Constitucionales del 29 de di­
9.6. Garantías sociales en la Constitución . . . . . . . . . . . 240
ciembre de 1836 . . . . . . . . . . . . . . 190
9.7. Derechos difusos como tendencia constitucional contemporánea 242
8.2.1.5. Bases de Organización Política de la República
9.8. Clasificación de los derechos del hombre . . . . . . . . . . 244
Mexicana del 13 de junio de 1843 . . . . 191
9.8.1. Derechos económicos, sociales y culturales o de "Segun-
8.2.1.6. Acta Constitutiva y de Reformas de 1847 . 193
da Generación" . . . . . . . . . . . . . . . . . . 247
8.2.1.7. La Constitución deiS de febrero de 1857 . 193
9.8.2. Derechos de la "Tercera Generación" o derechos difusos 248
8.2.1.8. La Constitución del 5 de febrero de 1917 . 195
9.9. Suspensión de garantías, estado de sitio y estado de urgencia . 249
8.3. Alcance de la revisión constitucional . . . . . . . . . . 198
9.10. Protección administrativa de los Derechos del Hombre . . . 251
8.3.1. Tesis que Limitan la Reformabilidad Constitucional 198
9.11. Protección jurisdiccional de los Derechos del Homb1·e . . . . 255
8.3.1.1. Carl Schmitt . . . . . . . . 198
199 9.11.1. En el pensamiento de Mariano Otero y la consagración
8.3.1.2. José María del Castillo Velasco
200 del Amparo en la Constitución de 1857. . . . . . . . . 255
8.3.1.2. Mauricc Hauriou . . . . . .
XII ÍNDICE ÍNDICE XIII

9.11.1.1. Los derechos humanos en el Acta de Reformas 11.4.5. Facultades atribuidas a las entidades federativas. 301
y sus subsistema de protección . . . 255 11.4.6. Facultades prohibidas a la federación . . . . . 301
9.11.1.2. El Amparo en la Constitución de 1857 257 11.4.7. Facultades prohibidas a las entidades federativas 302
9.11.2. En la Constitución de 1917 . . . . . . . . . 258 11.4.8. Facultades coincidentes 302
11.4.9. Facultades coexistentes . 302
11.4.1O. Facultades de auxilio . . 303

UNIDAD 10 11.4.11. Facultades concurrentes . 303


11.4.12. Facultades implícitas . . 303
FORMAS DE ESTADO
11.4.13. Naturaleza jurídica de los estados miembros de la unión 306
11.5. Importancia del Distrito Federal . . . 308
10.1. Concepto y clasificación de Formas de Estado . 261 11.5.1. Antecedentes históricos . . . 308
10.1.1. Conceptualización de Formas de Estado 265 11.5.2. El Distrito Federal en México. 308
10.2. Clases de Formas de Gobierno. . . . . . . . 267 . . . 311
11.6. La garantía federal . . . . . .
10.2.1. Clasificación de las formas de gobierno de acuerdo a
Aristóteles . . . . . . . . . . . . . . . 267
10.2.2. El gobierno mixto de Polibio y otros autores 268
UNIDAD 12
10.3. Clases de Formas de Estado . . . . . . . 269
10.3.1. Estado centralista o unitario . . . . . . . 270 FORMAS DE GOBIERNO
10.3.1.1. Concepto y características . . . . 270
10.3.1.2. El Estado Central o Unitario en México 270 12.1. Concepto de Forma de Gobierno . . . . . . . 315
10.3.1.3. Confederación . . . . . . 271 12.2. La Monarquía . . . . . . . . . . . . . . . 317
10.3.1.4. Uniones de Estados . . . . 273 12.2.1. Las formas monárquicas de 1812-1823 . 322
10.3.2. Uniones Reales y Uniones Personales 273 12.3. La República . . . . . . . . . . . . . . . 325
12.3.1. Proceso de formación de la república en México. 328
12.4. Lo Federal como Forma de Gobierno 333
12.4.1. Los hechos históricos 335
UNIDAD 11
12.4.2. Las formas jurídicas. . . . 340
FEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO 12.5. Sobre la democracia . . . . . . . 349
12.5.1. La democracia representativa. 351
11.1. Tesis explicativas del Sistema Federal . 277
11.1.1. Alexis De Tocqueville 278
11.1.2. Calhoun y Seydel 278 UNIDAD 13
11.1.3. Jellinek . . 279
11.1.4. Wilson
EVOLUCIÓN DEL DERECHO
279
11.1.5. Jean Dabin. 280 CONSTITUCIONAL MEXICANO
11.1.6. Hans Kelsen 280
11.2. Surgimiento del federalismo en los estados unidos de América 282 13.1. Presentación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 357
11.3. Adopción y características del federalismo mexicano 287 13.2. Organización del México independiente . . . . . . . . . . . . 359
11.4. Sistema Federal Canadiense . 294 13.3. Constitución de Cádiz de 1812 y su influencia en la Nueva España. 361
11.4.1. Prolegómenos . . . . . . . . . . . . . 294 13.4. Constitución de Apatzingán de 1814 y sus decisiones político-ju-
11.4.2. Características . . . . . . . . . . . . . 295 rídicas fundamentales. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 366
11.4.3. La distribución de facultades entre la Federación y los Es- 13.5. Plan de Iguala, los tratados de Córdova de 1821 y sus ideas fun­
tados . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 297 damentales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 369
11.4.3.1. Esfera de competencia. . . . . . . . . . . . 297 13.6. Constitución Federal de 1824 y las ideas fundamentales de los
11.4.3.2. Distribución de competencias entre la Federación constituyentes . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 372
y las Entidades Federativas. 297 13.7. Leyes constitucionales de 1836 y las bases orgánicas de 1843 . 376
11.4.4. Facultades expresas . . . . . . . . . . . . . . . . . 300 13.7.1. Las bases orgánicas de la República mexicana 1843. 382
XIV ÍNDICE

13.8. El liberalismo y la Constitución de 1857. . . . . . . . . . . . 385


13.8.1. El Plan de Ayutla reformado en Acapulco. . . . . . . . 392
13.9. Leyes de Reforma, su trascendencia e influencia en el régimen ju-
rídico mexicano . . . . . . . . . . . 399
13.1 O. El Congreso constituyente de 1916-1917. . . . . . . . . 408
13.10.1. Antecedentes . . . . . . . . . . . . . . . . . 408
13.10.2.La ley sobre ocupación y enajenación de terrenos
baldíos de Porfirio Díaz . . . . 414
13.10.3.El campo y la revolución de 1910 415
13.10.4.Los intereses petroleros . . . . 418 BREVE PREFACIO
13.10.5. Postulados principales . . . . . 419
13.10.6.El decreto de 6 de enero de 1915 422 DE LA SEGUNDA EDICIÓN
13.10.7.El proyecto de artículo 27 presentado por Carranza 422
13.10.8. La iniciativa de la comisión. 423
13.10.9.La educación en 1917 . . . . . . . . . . . . . 427 La evaluación de la presente obra conduce a la ineluctable conclu­
sión que alfara de su vasto y rico contenido cuya temática rebasa lo que
BIBLIOGRAFÍA 435 aparentemente indica su título: Teoría de la Constitución. En otras pala­
bras, la temática que abordan en ella distinguidos maestros comprende
aspectos de carácter histórico, filosófico, sociológico y evidentemente
jurídico del constitucionalismo en general y el mexicano. Basta repasar
su exuberante índice para corroborar este aserto, mismo que eleva a di­
cha obra al rango de Tratado de Derecho Constitucional que, además,
abarca el tratamiento de los "Derechos del Hombre". Puedo afirmar
que la sustancia epistemológica de tan importante instrumento didácti­
co no sólo lo avala como un elemento de estudio sino como libro de
consulta para la investigación de cuestiones atañederas al Derecho
Constitucional. Por consiguiente, a él deben acudir los estudiantes de
esta disciplina así como los cultores jurídicos a título de abogados, jue­
ces y maestros. Las calidades reseñadas, y otras excelencias de la aludi­
da obra, me inducen a felicitar a los autores de las diversas "unidades"
temáticas que comprende por la solidez de sus conocimientos expuestos
con sabiduría y elegancia. Considero que esta segunda edición de tan
ingente labor académica corrobora su trascendencia en el mundo del
Derecho. Prueba de ello es que su primera edición se agotó en un corto
espacio temporal, lo que indica su acogimiento colectivo indiscutible
que demuestra su prestigio.

Enero de 2005
IGNACIO BURGOA ÜRIHUELA
Maestro Emérito de la Facultad de Derecho de la UNAM

XV
PRÓLOGO
A LA CUARTA EDICIÓN

Las Constituciones de los Estados han sido objeto de estudio desde la


antigüedad. Para entender los fenómenos normativo y político, se han
ido diferenciando los campos de trabajo. Con todo, subsisten puntos de
contacto que con frecuencia hacen borrosas las fronteras entre ambas
disciplinas. Puede decirse que lo que varía no es el objeto del conoci­
miento, sino el método adoptado para procurarlo.
El grado de complejidad de esos métodos se puede apreciar si ad­
Yertimos que existen por lo menos tres grandes conjuntos doctrinarios
cuvo úmbito de incidencia es convergente: la teoría del Derecho, la teo­
ría del Estado v la teoría de la Constitución. Incluso si deseamos limitar
nuestro campo de exploración al estudio de la Constitución, tenemos
que adoptar al menos cuatro diversos enfoques: historia del derecho
constitucional, derecho constitucional nacional, derecho constitucional
comparado y teoría de la constitución. El nivel de especialización es
mayor todavía en los Estados compuestos, donde se estudia asimismo el
derecho constitucional local, con sus variantes históricas, comparativas
v positivas. Ademús, en cada una de esas disciplinas es posible adoptar
métodos de trabajo diferentes, por lo que el haz de posibilidades para
conocer el fenómeno normativo que identificamos como Constitución es
en extremo variado.
Ahora bien, para incursionar en esa madeja de datos y de análisis y
entender los procesos constitucionales, es imprescindible disponer de un
apoyo teórico. Esta obra, que resulta de la armoniosa colaboración entre
cinco distinguidos profesores de la Facultad de Derecho de la UNAM,
ofrece esos instrumentos que facilitan el estudio de la Constitución. José
Barragán Barragún, Raúl Contt-eras Bustamante, Juan José Mateos San­
tillán, Fernando Flores Trejo y Armando Soto Flores son experimenta­
dos catedráticos, conocedül-es profundos del derecho; en esta obra asu­
mieron la ardua emp1-csa de presentar de una manera clara, accesible v
.

actualizada, un amplio panorama de la Teoría de la Constitución.

XVII
XVIII PRÓLOGO A LA CUARTA EDICIÓN

Todo lector interesado en la materia encontrará aquí la información


pertinente y la orientación metodológica necesarias para adentrarse en
el estudio de los sistemas normativos que le interesen. Para examinar el
derecho constitucional de un estado de la federación, para analizar un
sistema constitucional nacional, para revisar una etapa histórica deter­
minada, para entender la estructura y el funcionamiento de una institu­
ción, esta obra es un auxiliar valioso.
Por todo lo anterior, dejo aquí una efusiva congratulación a los au­
tores por su bien logrado esfuerzo y por el éxito que han obtenido con
esta obra que corrobora la nueva edición que el lector tiene en sus manos.
INTRODUCCIÓN

Ciudad Universitaria, octubre de 2009


Con sincero agradecimiento a los estudiosos del Derecho y demás públi­
DIEGO VALADÉS
co lector que ha hecho posible la necesidad de publicar esta cuarta edi­
Miembro del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM
ción -revisada y actualizada-; la presentamos a su consideración.
Este tratado, se ajusta a los Planes y Programas de Estudio aproba­
dos por el Consejo Técnico de la Facultad de Derecho de la UNAM; y ha
sido una herramienta útil y eficaz para los estudiantes de la licenciatura
y posgrado de la materia de todo el país.
Cuando los autores nos propusimos trabajar para publicar lo que
habían sido nuestros apuntes para impartir clases, ideas para generar
debates y herramientas metodológicas para facilitar nuestras cátedras,
nunca imaginamos que llegaríamos a publicar, en tan breve tiempo,
una cuarta edición.
Aunque la Teoría de la Constitución no está sujeta a los avateres
frente a los cambios que la realidad social genera como lo padece la
legislación ordinaria, los autores hemos hecho una nueva revisión cui­
dadosa, para procurar ofrecer a nuestros lectores una versión sintética,
pero actualizada, de la rica doctrina que conforma el Constituciona­
lismo.
Este trabajo conserva la intención originaria: cinco doctores en De­
recho, profesores experimentados de la materia, con diversas -y hasta
a veces divergentes- opiniones e ideologías, que expresan su pensa­

miento dentro de un ámbito de libertad y buscando generar motivar la


discusión y el análisis doctrinario.
Este no es un libro de texto. Aunque se apega a los programas ofi­
ciales de estudio, siempre anheló ir mucho más lejos. Es la síntesis de
muchos míos de experiencias docentes, políticas, de servicio público y
de investigación académica, que han sido acumulados por sus creadores.
Deseamos agradecer de manera muy especial al Doctor Diego Vala­
dés, reconocido jurista y político mexicano, el que haya aceptado hacer
la presentación de esta cuarta edición. Su participación enriquece a

XIX
XX INTRODUCCIÓN

esta obra y constituye un honor para los autores que un constituciona­


lista con su reconocido prestigio, avale nuestro trabajo.
De igual manera, a nuestro editor, Don José Antonio Pérez Porrúa
nuestra gratitud por su apoyo y confianza editorial.
Por último, los autores deseamos hacer patente nuestro agradeci­
miento a la maestra Sandra Laura Macías Reyes, por su dedicación y
minucioso empeño en colaborar con nosotros en la revisión y compila­ Unidad 1
ción de las participaciones.
Esperamos que esta nueva edición de nuestro esfuerzo que hoy po­
Sociedad, estado y derecho
nemos en sus manos, contribuya a lograr que los temas doctrinales del
Derecho Consitucional se divulguen y se logre que su conocimiento
haga a la sociedad contemporánea más participativa en el control y la JosÉ BARRAGÁN BARRAGÁN'
vigilancia del poder político, así como más demandante del respeto de
sus derechos y garantías constitucionales.

Atentamente.

Los AUTORES Tomemos esta primera unidad de nuestro programa como si se tratara
de una breve introducción sobre cómo contempla, o cómo es considera­
da la sociedad, el Estado y el Derecho por parte de nuestra disciplina
del Derecho Constitucional, pues, como bien se sabe, dichas tres mate­
rias (Sociedad, Estado y Derecho) al mismo tiempo pueden recibir defi­
niciones desde el punto de vista de otras ciencias, como son la Sociolo­
gía, la Antropología, las ciencias políticas y administrativas y, desde
luego, el resto de las ciencias jurídicas.
Por regla general, las ciencias del Derecho siempre han sido plan­
teadas y desarrolladas, casi por definición, en términos muy amplios y
extensivos, de tal manera que se obliga al estudiante de Derecho a to­
mar muy en cuenta no sólo los enunciados de las normas, que son muy
valiosos en sí mismos, sino también los hechos de la vida real y los fe­
nómenos de la realidad, porque son estos hechos y fenómenos de la rea­
lidad los que le dan, no sólo el contenido a muchas normas jurídicas,
sino también su verdadera razón de ser y su significación y sentido.
Por tanto, si bien es cierto que el Derecho Constitucional considera
Y defin e a la sociedad, al Estado y al Derecho desde un punto de vista
diferente a como la Sociología, o las ciencias políticas los definen, no es
menos cierto que ese mismo Derecho Constitucional nunca deja (o no
debe dejar) de tomar en cuenta las enseñanzas y las teorías que dichas
otras ciencias sociales pueden elaborar sobre lo que es un objeto común
del conocimiento.

'
Doctor en Derecho. Investigador de Carrera Y Miembro del Sistema Nacional de
Investigadores Nivel III.
2 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN soCIEDAD. ESTADO Y DERECHO - J. Barragán Barragún 3

1.1. SOCIEDAD ,.0),Et;: éstas tienen una organización estable y perfecta que recibe el
nombre de rroAtTEta y estas organizaciones pueden ser estudiadas. Por
De esta manera, la sociedad para el Derecho Constitucional, no es
eso la obra de Aristóteles lleva el título de rroAtTEta.
otra cosa más que una población, o una colectividad (sociedad, comuni­
La doctrina de la Iglesia católica, primero a través de los llamados
dad, pueblo o población) perfectamente organizada, asentada en un te­
Santos Padres de la Iglesia (grandes autores, filósofos y teólogos, grie­
rritorio preciso y determinado (es decir, con unas fronteras bien defini­
gos y latinos) y después a través de los Teólogos medievales, como San­
das y respetadas por los países limítrofes). Esto es, la sociedad que
to Tomás, harán hincapié en que el ser humano, además de tener una
toma en cuenta el Derecho Constitucional, es un pueblo histórico deter­
naturaleza sociable, tiene inteligencia o razón. De ahí que también se
minado y organizado. Un pueblo capaz de auto-gobernarse libre y sobe­
p u eda definir el hombre como un animal rationalis, o como un animal
ranamente; capaz, por tanto, de darse libremente su forma de gobierno
y sus leyes fundamentales; capaz de darse una Constitución, cuyo estu­ racional que vive en una sociedad o en una comunidad.

dio va configurando nuestra disciplina del Derecho Constitucional. El hombre político de Aristóteles; el hombre sociable de los roma­

Todo esto es la sociedad para el Derecho Constitucional. nos; v el hombre racional de la doctrina de la Iglesia permitió no sólo el

Se trata de una idea muy precisa; una idea que, naturalmente, se hallazgo de su naturaleza gregaria, o sociable, sino también los hallaz­
construye sobre los elementos, bien conocidos y estudiados por esas gos de sus grandes y personalísimas prerrogativas de la inteligencia o la
otras ciencias sociales, ya mencionadas, como son el elemento de la na­ razón, así como de la voluntad, de donde, a través del razonamiento
turaleza sociable del ser humano, en cuanto individuo de la sociedad; el metafísico se llegará al valiosísimo atributo de la libertad, de la justicia
elemento de sociedad como grupo familiar, grupo de paterfamilias; gru­ v de la ética.
po tribal, etcétera; y los elementos relativos a los sistemas de interac­ Esta es la tradición, estas mismas ideas son las que se citan al po­
ción dentro de la sociedad. nerse a debate en 1812 (fecha de la Constitución española) el artículo 3,
La idea de sociedad que más interesa al Derecho Constitucional es, que definió la soberanía nacional, o el poder público que tiene el pue­
hablando en general, la misma idea que ya desarrolló Aristóteles en su blo, así como en el debate de aprobación del Acta Constitutiva Mexica­
conocido libro La Política, en donde se define la naturaleza del ser hu­ na de 1824, al discutir el tema de la soberanía también.
mano, como un ser sociable, que no puede vivir aislado, o sin la ayuda En ambos debates, por ejemplo, el mexicano Guridi y Alcocer decía
de otros seres humanos. Igualmente en dicho libro se desarrollan los di­ que por pueblo soberano debía entenderse a los habitantes asentados en
versos agregados sociales que se forman a partir de esa naturaleza polí­ un territorio dado. Por tanto, habla de un pueblo ya organizado, o ca­
tica, que es la palabra usada por Aristóteles, hasta formar precisamente
paz de auto-gobernarse, pero asentado en un territorio independiente y
el agregado mejor, o el más perfecto, como es la rroAt�. que muchos au­
libre de toda dominación externa. Un pueblo plural, como son las socie­
tores traducen como Estado Ciudad.
dades modernas. Un pueblo capaz de darse un gobierno propio, unas
Los autores latinos, que asimilan fuertemente la cultura griega, son
leyes fundamentales propias, o capaz de darse una Constitución, que es
los que traducen la obra de Aristóteles con los títulos que después pasan
lo que se enuncia en esos dos preceptos de 1812 y 1824; y es lo que se
al español sin modificación alguna. La Política, La República. Mientras
enuncia en el artículo 39 de la Constitución vigente de 1917 en México.
que la voz rrÓAt� la traducen como civitas, de donde se deriva la voz es­
Se trata de un concepto de sociedad proveniente de la doctrina ela­
pañola de ciudad o de Estado-Ciudad. En cambio, las voces griegas que
borada por los creadores del Derecho de Gentes españoles, italianos,
definen al hombre como Zóo� rroAtTtKÓ� (animal político), se traducen al
franceses y alemanes. En particular en el debate de 1812 se citan abun­
latín como anima! sociabilis. Y los teólogos y los filósofos cristianos lo
dantemente a los autores españoles de la llamada Escuela Jurídica
traducen como animal rationalis.
Española, como son Francisco de Vitoria; Francisco Suárez, De Soto y
Bien, las voces originarias griegas, por supuesto, que expresan muy
bien lo que quería decir Aristóteles, quien solamente destaca el carácter muchos más.
esencial del ser humano, q ue es un animal gregario, que por naturaleza Como vamos a ver en los siguientes pasajes tomados del debate se
tiende a formar agregados, como la familia, etcétera. Y estas voces for­ rep iten mucho estos conceptos, estas ideas; v se habla indistintamente
man, por su lado, digámoslo así también, una gran familia de voces. De de un pueblo organizado, de una sociedad � rganizada, de una nación
esta mane1·a, el se1· humano es un ser rroAtTtKÓq, Y por eso vive en las organizada, o de una comunidad perfecta.
4 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN sOCIEDAD. ESTADO Y DERECHO - J. Barragán Barragán S

Los hombn?s se constituyen en sociedad cuando por común consentimiento Además decíamos que el componente de la sociedad, así entendida,
se congregan en un cuerpo político mediante un vínculo de sociedad, es el individuo. Y, como todos sabemos, el individuo, el ser humano, o
... que todos los príncipes legítimos lo son por consentimiento del pue­ la persona humana, no solamente es el centro del Derecho, sino que es
blo, que por derecho natural le es concedido al pueblo la potestad de hacer el sujeto por excelencia del Derecho. Es también el titular de todas las
las leyes. libertades, de todos los derechos y garantías.
Un célebre Vázquez de Menchaca hubo también en tiempos de Felipe 11,
el cual en una obra dedicada a este Rey, tm·o ánimo para decirle que el
pueblo, conservando siempre su soberanía, puede recobrar sus de1·echos
1.2. ESTADO

primitivos, y quitarle al Rey la facultad de hacer leyes, aun cuando se la hu­


iCómo definir lo que es el Estado? iCuándo aparece el Estado en la
biese concedido. Nada diré del padre Juan de Mariana, porque todos saben
Historia? No es fácil dar respuesta a estas preguntas, porque de hecho
hasta qué punto llevó esta doctrina suya de que del pueblo reciben los reyes
su potestad. Omito citar otros escritores nuestros de la primera nota, que existen muchas ideas y muchas doctrinas sobre el particular planteadas
aCI'editan ser esta doctrina recibida en España antes que la propagasen los por la Teoría política; por las diversas corrientes filosóficas; y por la
publicistas extranjeros.1 teoría pura del Derecho, por no dejar de mencionar las teorías positivis­
Le imprimió (al hombre) el autor de la naturaleza, dice elegantemente tas sobre el Estado.
San Juan Crisóstomo :-.· Santo Tomás, dos principios: el uno, que como ani­
mal sociable apeteciese natural y justamente vivir en comunidad o compa­ 1.2.1. SOBRE EL ORIGEN DEL ESTADO
ñía de sus semejantes: el otro, que en una comunidad perfecta era necesa­
rio un poder. .. no se puede negar por ser conforme al derecho natural del No hay mucho consenso entre los especialistas sobre el origen del
hombre, el que haya una potestad pública civil, que pueda regir y gobernar
Estado. Algunos autores, como Kelsen, incluyen en la definición de
a toda la comunidad perfecta.2
Estado los problemas de su origen. De esta manera, por ejemplo, se
Son todos comentarios tomados del debate ya mencionado. Sin afirma que, en esencia, el Estado es la misma organización de la socie­
duda estos textos nos ofrecen la mejor definición de lo que es una socie­ dad y que, por ello, siempre que se pueda hablar de una sociedad orga­
dad para el Derecho Constitucional. nizada, se podrá hablar de la existencia del Estado. De hecho, todos los
Eso es la sociedad para la Constitución española de 1812; lo mismo autores reconocen una gran antigüedad al nacimiento de las doctrinas
que para la Constitución mexicana de 1824; y, sin duda, para la vigente sobre el Estado.
de 1917. Por sociedad entendemos al pueblo soberano, asentado dentro De esta manera se citan las teorías de los filósofos griegos, entre los
del territorio patrio; también entendemos al conjunto de los habitantes cuales sobresalen las teorías de Aristóteles y de Platón; se recuerda
asentados en ese mismo espacio territorial; también abarcamos a cada la forma en que se habla del Estado entre los epicúreos y los estoicos de la
uno de dichos habitantes, sociables por naturaleza, gregarios y capaces cultura romana; se habla de la idea del Estado en las fuentes jurídicas
de formar familias y grupos sociales intermedios, como son las pobla­ del Derecho Romano; en las fuentes del pensamiento cristiano y, en un
ciones indígenas, las comunidades todas, los municipios y los Estados
sentido más amplio, del pensamiento medieval; así como se habla de las
mismos que forman la Federación mexicana y, en consecuencia, el gran
ideas del Estado moderno, a partir del Estado de Maquiavelo o Bodino,
Estado mexicano. Todas estas cosas son objeto de estudio, muy impor­
de Hobbes o de Spinoza, de Montesquieu o Rousseau, de Kant o de
tantes, del Derecho Constitucional mexicano.
Fichte, de Schelling o de Hegel, de Marx, de Seydel, de Gierke, de Jelli­
La sociedad así considerada como pueblo soberano; como pueblo
nek, de León Duguit, de Carré de Malberg y tantos otros.
organizado y constituido, puede ser llamada Estado, el cual conforma,
Con todo, los orígenes del Estado constitucional son relativamente
como lo veremos enseguida, una gran parcela, o casi toda la materia recientes. El Estado, que es el objeto del Derecho Constitucional, nace
del Derecho Constitucional.
en el momento en que se aprueba su organización jurídica a través de
la Constitución quedando así el Estado sometido al Derecho. Por ello se
1 En Diario de las Cunes Cul!.llilll."t!lll<!.> de Cúdi:. Imprenta de Genaro García, Ma­ habla de Estado de Derecho. Lo importante del Derecho Constitucional
drid 1 R74 (en adelante D.C.C.) sesión del 7 de octubre de 1811, p. 2011, en palabras del es que está dedicado al estudio de las estructuras constitucionales del Esta­
diputado eclesiástico Joaquín Lorenzo Villanueva.
do; está dedicado al estudio del sometimiento de los órganos del Estado
2 D.C.C. sesión del 29 de agosto de 1811, p. 1722.
6 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN soCIEDAD. ESTADO Y DERECHO - J. Barragán Barragán 7

al Derecho; y está dedicado al estudio de su formación histórica (prime­ me nte diferenciado de otras naciones o pueblos de la comunidad in­
ra constitución) y su posible evolución constitucional. ternacional.
El Estado es, desde otro enfoque, una entidad a la que se le recono­ La población es, pues, un elemento esencial del Estado. Ahora bien,
ce personalidad jurídica, tanto en el campo del Derecho Internacional cua ndo se hable de un Estado federal, como es el caso de México, se
cuanto en el campo del Derecho interno. Una entidad de carácter públi­ debe recordar y se debe precisar que la población no es elemento defi­
co, sometida al Derecho como cualquier otro sujeto, que puede asumir nitorio de lo federal, ni de la Federación. Esta no tiene, como esencia­
diferentes formas de organización. Un Estado unitario se organiza de les, ni al elemento población ni al elemento territorio. Los habitantes
manera diferente a como lo hace un Estado federal. del Estado mexicano, no son habitantes federales, sino habitantes mexi­
México se declara independiente en 1821. Hasta entonces y desde canos. Lo Federal en México es una forma de gobierno, como lo esta­
1519 lo que ahora corresponde al Estado Mexicano, había venido sien­ blece el artículo 40 de la Constitución ahora vigente; y no es una forma
do una colonia del gran Imperio español. Con todo y pese a que no fue de Estado, como se afirma comúnmente.
sino hasta 1821 que se alcanza la independencia, hubo presencia de 21 Desde el punto de vista poblacional. México es un gran mosaico de
mexicanos en las Cortes españolas de Cádiz de 1810-1813. Y estos mexi­ pueblos, de comunidades y, por ello, de lenguas y culturas. Formamos
canos colaboraron a la creación y transformación de aquel imperio en una comunidad nacional mucho más compleja y plural de lo que se
una monarquía constitucional con la aprobación de la Constitución de afirma en el artículo 2 reformado de nuestra Constitución, ya que ahí
Cádiz en 1812. También se produjo el movimiento insurgente en 1810, solamente se habla de las poblaciones y pueblos aborígenes.
que proclamó el Decreto Constitucional o Constitución de Apatzingán
1.2.2.2. El territorio
de 1814. Finalmente, después de ciertos contratiempos y desechándose la
idea inicial de crear un imperio, el Congreso Constituyente de 1823-1824 El territorio es otro elemento esencial del Estado. Es el asiento de la
resolvió organizar a México como una república federal, aprobando su población considerada dentro del Estado. El territorio precisa el ámbito
Acta Constitutiva el 31 de enero de 1824. espacial al que se extiende la soberanía estatal. Es el ámbito de la vali­
dez normativa, en palabras de Kelsen.
1.2.2. LOS ELEMENTOS COMPONENTES DEL ESTADO La importancia del territorio como componente del Estado es mani­
fiesta, no sólo frente a terceros países de la comunidad internacional,
Aunque tengamos diferentes nociones de lo que es el Estado, cierta­
sino también hacia el interior. El territorio representa, además de un
mente existe mayor consenso acerca de los elementos que componen al
espacio de validez normativa, la propiedad inmueble y la riqueza de los
Estado. Estos elementos son la población, el territorio, una determina­
suelos y los subsuelos, incluida la llamada zona económica exclusiva,
da organización y el poder o soberanía.
reconocida por el Derecho Internacional. Es decir, el territorio determi­
na la vigencia del Derecho estatal sobre personas y cosas. Pero también
1.2.2.1. La población
determina la oponibilidad frente a terceros países, para exigir respeto,
El diputado tlaxcalteca, Guridi y Alcacer, a las Cortes españolas de así como para ofrecer colaboración, asistencia, relaciones consulares y
Cádiz de 1810-1813 definía a la población como el conjunto de habitan­ diplomáticas, así como las mejores condiciones para el tránsito de per­
tes asentados en el gran territorio de lo que entonces era el Imperio es­ sonas y de cosas.
pañol. Después, el mismo Guridi y Alcacer en noviembre de 1823 decía Tenemos en nuestra Constitución vigente varios pasajes regulado­
que el pueblo de los Estados Unidos Mexicanos comprendía a todos los res del territorio. El artículo 42, por ejemplo, precisa lo que abarca y
habitantes que componían esos diversos territorios desde Nuevo México co mprende; el artículo 43 enumera cuáles son las partes que integran
al Norte hasta Chiapas al Sur. la Feder ación, que son 31 Estados y un Distrito Federal; y antes, en el
El elemento poblacional, por tanto, como componente del Estado, artículo 27 consagra la propiedad originaria a favor de la nación (no
abarca a todos los seres humanos que lo integran, al conjunto de in­ del Esta do), así como se expresa lo relativo a la zona económica exclu­
dividuos que permite, por ejemplo hablar de una representación par­ siva, concepto que entraña como sabemos, el ejercicio de facultades
lamentaria cuantitativa; y abarca también la idea de una población soberanas de carácter económico a favor del Estado mexicano en este
organizada y que se muestra unida en cuanto nación o pueblo, perfecta- caso.
8 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN SOCIEDAD, ESTADO Y DERECHO - J. Barragán Barragán 9

1.2.2.3. La orgarzi;::acióll estos los contenidos que, de hecho, encontramos en los textos constitu­
cionales que la definen.
A partir de algunas teorías positivistas, se ha venido insistiendo en En efecto el artículo 3 de la Constitución de 1812 definió la sobera­
considerar como otro elemento esencial del Estado, la idea de organiza­
nía de la siguiente manera:
ción, lo cual se exterioriza en la aceptación de que la facultad de nor­
Art. 3.-La soberanía reside esencialmente en la Nación, y por lo mismo
mación jurídica, así como el poder de ejecutar dichas normas sean ejer­
pertenece a ésta exclusivamente el derecho de establecer sus leyes funda­
cidas por los órganos del Estado mediante los procedimientos previstos
mentales.
en tales normas.
A esta idea de organización se le suele dar diversos alcances y con­ Sin variar los conceptos, incluso enriqueciéndolos, la Constitución
tenidos, de manera que se extiende hasta los Estados autocráticos de mexicana de 1917, ahora en vigor define la soberanía en los siguientes
tipo histórico, lo mismo que a los Estados modernos democráticos. Se tC·rminos.
dice que la idea de organización expresa el vínculo jurídico-político uni­
Art. 39.-La soberanía nacional reside esencial y originariamente en el
ficador de la realidad estatal. Esta idea sirve para definir al Estado
pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para beneficio
como al conjunto de órganos y procedimientos expresamente estableci­ de éste. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o
dos en las normas (o aceptados de manera consuetudinaria) mediante modificar la forma de su gobierno.
los cuales se ejercen las funciones para la producción y ejecución de las
normas dentro de la estructura de la vida social. 1.2.3. Los FINES DEL E STADO
Incluso hay autores que, como Kelsen, llegan a identificar al Estado
con el Derecho, como una (exigencia) del planteamiento de la teoría Sabemos que existen muchas teorías explicativas y, en su caso, defi­
pura del Derecho. nitorias del Estado, sin duda acordes con los tiempos históricos en que
fueron elaboradas. Ahora podemos preguntarnos ¿para qué sirve el
1.2.2.4. La idea de soberanía Estado?
No siempre se da contestación a esta pregunta. Lo peor es que no
Otro de los elementos, citado por los autores, constitutivos del Esta­
do es la idea de soberanía, la idea de poder. Como bien sabemos, exis­ siempre se le puede dar contestación, sobre todo, cuando algunas de

ten muchas voces para expresar esta idea. En lengua latina se usan las esas importantes teorías identifican Derecho y Estado (léase teoría pura
del Derecho).
voces, que luego se repiten mucho, de imperium, de auctoritas, de vis
coactiva, de potestas, de facultas. Estas voces latinas se les encuentra Bien, sin negar la complejidad del Derecho y de sus definiciones y
sin negar la complejidad del Estado y de las teorías que lo explican o
realzadas con algún adjetivo, muy expresivo, como summa potestas,
máxima auctoritas, máxima potestas, summum imperium, que señalan definen, podemos insistir en la idea del Derecho como medio y en la
ide a del Estado como persona moral, de carácter público. Ello aunque
el grado de superioridad absoluta que tiene ese poder: la más grande de
todas las potestades; la máxima autoridad; el mayor poder de todos, sólo sea para hablar con mayor comodidad de los fines del Estado.

etcétera. Es decir, no negamos la teoría que define al Estado como organiza­


ció n; ni las teorías que lo consideran como un conjunto de órganos y
Por otro lado, es muy difícil encontrar unanimidad sobre lo que es y
procedimientos a través de los cuales se producen las normas y se pre­
significa la soberanía, o el poder público, sobre su sede; sobre su objeto,
\ ie ne su ejecución, sino que deseamos aclarar que el Derecho, en defi­
etcétera. Con todo, se acepta comúnmente que se trata de un elemento
nitiva, debe distinguirse de los órganos que lo producen v de los proce-
esencial del Estado que se traduce en la capacidad jurídica que tienen .
dimient os que lo ejecutan.
los órganos del Estado de ejercer coerciblemente, mediante determina­
dos procedimientos, las tareas de producción y de ejecución de las nor­ . Todo el Derecho emana de la única fuente que posee la capacidad
Intrínseca de producirlo, que es el pueblo soberano (artículo 39 consti­
mas jurídicas que regulan la convivencia social y las relaciones mismas
tucional, que habla de la soberanía popular). El pueblo soberano es la
con el Estado.
De manera más sencilla, la soberanía cosiste en la c a pa cidad que
� nica fuente originaria del Derecho, de manera que es solamente a pm·­
tir de la imposibilidad material del pueblo mismo de ejercer ese poder
tiene un pueblo para auto-gobernarse; para decretar la forma de gobi er­
s ober ano por sí mismo, cuando para el ejercicio de la soberanía se
no que más le acomode; o para establecer sus leyes fundamentales. Son
10 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN soCIEDAD. ESTADO Y DERECHO - J. Barragán Barragán 11

piensa en crear órganos, en quienes depositar ese ejercicio tanto para la siderados como ideales a alcanzar. Por eso, Garrido Falla comentando
producción de las normas jurídicas cuanto para su ejecución. De mane­ este artículo afirma:
ra que el Estado, al menos el Estado de Derecho, nace precisamente
Frente a la curiosa afirmación de que donde hay Estado, hay ordenamiento
como organización a raíz de estas consideraciones de la soberanía po­ jurídico y, por ende, hay derecho que conduce inevitablemente a la inutilidad
pular de corte constitucional. de las aspiraciones constitucionalistas, hay que afirmar la obvia idea de que
El Estado de Derecho, o el Estado para el Derecho Constitucional sí el Estado puede no estar sometido a derecho; y esto es lo que desgraciada­
es una organización creada por la Constitución, diferente esencialmente mente ha ocurrido durante la mayor parte de la historia de la humanidad.4
de lo que es la soberanía popular, la cual reside en el pueblo y se insti­ Así es que el Estado es Estado de Derecho cuando realiza la idea de de­
recho limitando jurídicamente su actividad y el poder de que dispone para
tuye para su beneficio en palabras del artículo 39 constitucional. Y el
desarrollarla. Hasta el punto de que incluso para la teoría pura del derecho
Estado, en cuanto tal, es concebido por el mismo Derecho como una
en qué Estado y Derecho se identifican, el Estado de Derecho debe aceptar­
persona moral de carácter público, a la que se le encomienda el ejerci­
se como una expresión con un valor cualificado.5
cio del poder pero para beneficio del pueblo.
Los fines del Estado tienen que ver con este último mandato de la Quizá por ello, se indica que España es un Estado social y democrá­
soberanía, el beneficio del pueblo. De manera que el Derecho en manos tico de Derecho. En México no tenemos esta clase de enunciados. Pero
del Estado se instituye como un medio, o un conjunto de medios a tra­ volviendo al tema de los fines del Estado, la misma Constitución espa­
vés de los cuales se alcanza dicho beneficio para el pueblo. Más aún, el ñola los va enunciando y precisando en otros muchos pasajes, como los
Derecho, en cuanto idea de orden, en cuanto puede ser considerado un siguientes: en su preámbulo, se dice que:
bien en sí mismo, puede ser y es ya la realización de un fin concreto del
La nación española, deseando establecer la justicia, la libertad y la seguri­
Estado. Cuando, por ejemplo, el Estado inculca la inviolabilidad de la dad y promover el bien de cuantos la integra, en uso de su soberanía, pro­
Constitución, o el principio de la legalidad, es porque considera que esa clama su voluntad de:
norma fundamental, o que dicho principio es ya un bien en sí mismo, Garantizar la convivencia democrática dentro de la Constitución y de las
digno de todo aprecio, sin duda, digno del más alto aprecio en un Esta­ leyes conforme a un orden económico y social justo.
do de Derecho. Consolidar un Estado de Derecho que asegure el imperio de la ley como
expresión de la voluntad popular.
Existen otros muchos fines concretos a alcanzar por parte del Esta­
Proteger a todos los españoles y pueblos de España en el ejercicio de los
do, ayudándose del Derecho. La Constitución mexicana vigente, por
Derechos Humanos; sus culturas y tradiciones, lenguas e instituciones.
cierto, fuera del artículo 39, ya no menciona cuáles otros sean o deban
Promover el progreso de la cultura y de la economía para asegurar a to­
ser los fines del Estado. En cambio, otras Constituciones modernas, dos una digna calidad de vida.
como la española de 1978, ya se ocupan, no sólo de esclarecer algunos Establecer una sociedad democrática avanzada; y colaborar en el forta­
extremos de doctrina sobre este particular, sino también de precisar los lecimiento de unas relaciones pacíficas y de eficaz cooperación entre todos
fines que se le encomiendan al Estado. los pueblos de la tierra."6

Por ejemplo, hablando de doctrina, se afirma en su artículo primero El Estado velará especialmente por la salvaguardia de los derechos eco­
nómicos y sociales de los trabajadores españoles en el extranjero y orienta­
lo siguiente:
rá su política hacia su retorno.7
Art. !.I.-España se constituye en un Estado social y democrático de De­ Se reconoce el derecho a la protección de la salud. Compete a los pode­
recho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico res públicos organizar y tutelar la salud pública a través de medidas pre­
la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político.3 ventivas y de las prestaciones y servicios necesarios. La ley establecerá los
derechos y deberes de todos al respecto. 8
Como se aprecia, se habla de los valores superiores del ordenamien­
to jurídico. Valores que están por encima de las reglas del Derecho.
4 ldem, p. 25.
Estas se inspiran en aquéllos; éstas tienden a realizar esos valores, con-
1 lbidem.

6 Véase GARRIDO FALLA, Fernando, Comentarios a la Cmzstituciórz, ya citados, p. 17.


3 Véase en GARRIDO FALLA, Fernando y otros. Comentarios a la Co>lstituci<íll, Civitas, 7 ldem, p. 781.
Madrid, 1985, p. 23. 8 ldem, p. 788.
12 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN '-OCII:IJAD. ESTADO Y DERECHO .1 l.la11 a;"in l.larra�ún 13

Los poderes públicos fomentarán la educación sanitaria, la educación fí­ El Derecho, visto con perspectiva histórica, es una formidable es­
sica y el dcporte .4 Asimismo facilitm·án la adecuada utilización del ocio.10 tructura constituida por diversos sistemas de conductas y diversos mo­
l. Los poderes públicos promoverán y tutelarán el acceso a la cultura, a dos de obrar del hombre que vive en sociedad y de la sociedad que vive
la que todos tienen dcrecho.
org anizadamente. El Derecho es un orden, o pretende serlo y un siste­
2. Los poderes públicos promoverán la cicncia v la invcstigación científi­
tiW coactivo, que permite hacer cosas, por un lado, pero por otro, tam­
ca y técnica cn beneficio del interés general. "11
hiL·n prohíbe hacer cosas.
Los poderes públicos promoverán las condiciones para la participación
El Derecho es un conjunto de reglas. La regla, por su parte, puede
lib1-c y eficaz de la juventud en el desarrollo político, social, económico v
-.cr una expresión de la voluntad. que permite o prohíbe hacer una
cultural.12
cosa; �-. por otro lado, puede ser una expresión del conocimiento. Las
Los poderes públicos realizarán una política de previsión, tratamiento,
rehabilitación c integración de los disminuidos físicos, sensoriales y psíqui­
�tsignaturas de la Carrera de Derecho pueden estudiarse pensando en
cos, a los que prestarán la atención especializada que requicran y los ampa­ conocer cuál es el mandato (o el acto de voluntad) contenido en cada
rarán cspecialmente para el disfrute de los derechos que este Título otorga una de las reglas del Derecho. Pero también pueden estudiarse pensan­
a todos los ciudadanos.11 do en conocer la racionalidad, o la inteligencia de los enunciados en
Los poderes públicos garantizarán, mediante pensiones adecuadas y que se formulan dichas reglas, enunciados que las ciencias del Derecho,
periódicamente actualizadas, la suficiencia económica a los ciudadanos orcknan v sistematizan.
durante la tercera edad. Asimismo. y con independencia de las obligacio­ El Derecho Constitucional es una de esas asignaturas de la Carrera
nes familiares, promoverán su bienestar mediante un sistema de servicios de Derecho. Tiene por objeto el estudio de la Constitución. La Constitu­
sociales que atenderán sus problemas específicos de salud. vivienda, cultu­
ción es la norma jurídica por excelencia, la cual expresa la voluntad
ra y ocio.14
uJacti\ a del soberano, del pueblo soberano. En esta norma se exteriori­
;.a la organización y el funcionamiento del Estado, así como los princi­
1.3. DERECHO p ios v los valores de la convivencia social; las libertades v los derechos
. .

del individuo y de grupos sociales protegidos.


Para completar el desarrollo de esta primera unidad, nos resta ha­
La norma constitucional nos indica cuáles son los órganos del Esta­
blar del Derecho. ¿Qué cosa es el Derecho?
do, así como cuáles sean los procedimientos de producción y ejecución
El alumno al llegar al Derecho Constitucional ya puede contestar
de las normas jurídicas. La norma constitucional. en todo caso, expresa
muy bien esta pregunta con alguna de las definiciones que ya le han
también v sobre todo el Derecho a que están subordinados y sometidos
dado en otras materias, desde las definiciones que nos mandan guardar
dichos órganos tanto en la producción cuanto en los procedimientos de
en la memoria, como las del Ulpiano, repetidas en lengua latina, hasta
L'jecuciún de las normas jurídicas. Se puede afirmar, parafraseando la
las definiciones más sencillas de algún autor moderno que compara las
doctrina positivista de Kelsen que Derecho y Estado Constituyen una
normas jurídicas con las normas de los juegos de mesa, por ejemplo.
sola forma de vida, una sola realidad cultural al identificarse en un úni­
El Derecho, en esencia, es un medio, o un conjunto de medios, crea­ co s i stema lógico-normativo, manteniendo sus diferencias.
dos por el hombre, que siempre ha podido usar el ser humano en su de­
Nosotros insistimos en que el Derecho es un medio, o un conjunto
sarrollo como ser individual, como ser inteligente y sociable. El Dere­
de medios puestos al sen·icio del Estado para la obtención del bienestar
cho es una creación de la inteligencia, no importa que hoy, al igual que
' el progreso que se haya propuesto alcanzar el pueblo soberano. Esto
ayer y que siempre, sea una creación imperfecta, o no se vea mucho lo es el D erecho, considerado desde la fuente originaria que lo produce: el
de la creación inteligente. Pero, en esencia, es un medio que, en efecto,
l�ue blo. Es decir, el Derecho no es otra cosa que lo expresado por el ar­
puede dársele buenos y malos usos. ticulo 39 de nuestra Constitución al hablar de la soberanía.

. La soberanía radica originaria y esencialmente en el pueblo y c on­


Siste, en esencia, en la capacidad que tiene ese mismo pueblo para
4 Idc111, p. 7'}2.
10 1hide111. auto-gober-narse: es decir para dar·se un gobierno, para determinar su
11 Vé·ase GAKKlll<> FAllA. Fernando, Cmnnllarios a la Cml.\litucitln, ya
citados. p. 801. organización y funcionamiento; para darse sus leyes fundamentales;
12 Jde111,
p. 384.
P rec isando que, en todo caso, el poder se instituye para beneficio del
n Jdc111, p. 83 7.
m ismo pueblo. Esto es lo que dice el artículo 39 constitucional.
14 ld<'lll, p. 843.
14 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

1.4. RESUMEN

Esta unidad puede ser considerada como una especie de introduc­


ción al estudio del Derecho Constitucional, de manera que al recordar lo
que es la sociedad, lo que es el Estado y lo que es el Derecho, en general,
solamente se busca definir el marco de referencia de nuestra asignatura.
La sociedad es definida en función de su propia organización, como
un pueblo capaz de auto-gobernarse. Es decir, como un pueblo asenta­
Unidad 2
do establemente en un determinado territorio, capaz de determinar la
forma de organización política que más le convenga; capaz de instituir
Concepto y ubicación
órganos y procedimientos de creación y ejecución de normas jurídicas; del Derecho Constitucional
capaz de organizarse en Estado libre e independiente, a quien se le en­
comiende la realización de los diversos fines que le sean inherentes o
propios. RAúL CoNTRERAS BusTAMANTE'
El Derecho Constitucional se ocupa del estudio de la Constitución,
en cuanto manifestación de la voluntad soberana del pueblo. Dicha Cons­
titución, entre otros elementos, o entre otras materias, regula la forma
en que se crean los diversos órganos del Estado y los diferentes procedi­
mientos de producción y ejecución de las normas jurídicas.
Como sabemos, existen varias ciencias sociales que, entre sus obje­ 2.1. CONCEPTO Y ELEMENTOS
tos de estudio, tienen los importantes temas de la sociedad y del Estado. DE DERECHO OBJETIVO
Varias ramas del Derecho inclusive examinan el tema del Estado. Así
pues, es conveniente que el lector, como siempre, trate de sumar cono­ Como señala el Diccionario Jurídico Mexicano, para la inmensa ma­
cimientos, tomando muy en cuenta esos diversos apuntes proporciona­ yoría de los juristas, "el derecho constituye un conjunto -orden, siste­
dos por las ciencias de referencia, a fin de entender mejor y comple­ ma- de normas o disposiciones de cierto tipo, al cual denominan dere­
mentar la idea ya expresada del Derecho Constitucional sobre los temas clw objetivo para distinguirlo de otros usos o sentidos de la palabra
expuestos en esta unidad. derecho". El predicado objetivo se utiliza para diferenciar -u oponer el
orden jurídico al derecho subjetivo (en el sentido de permisiones o recla­
mos jurídicamente justificados)" .1
El término derecho objetivo, se utiliza como sinónimo de orde11 jurí­
dico e igualmente se asocia o identifica con la idea de derecho positivo,
es decir, como norma. Rafael de Pina, lo define como "el conjunto de
las normas que forman el sistema jurídico positivo de una nación".2
Derecho subjetivo, consecuentemente, es el derecho considerado
como facultad de uno o varios individuos. Facultad resultante de la
norma.

Doctor en Derecho, UNAM. Cated1·ático titular de Derecho Constitucional por opo­


sición abier
ta de la Facultad de De1·echo de la UNAM .v Catcd1·ático en la División de Estu-
dios de Posgrado
de la misma Institución.
1 Diccio11ario Jurídico Mexica11o. Instituto de Investigaciones Jurídicas. 6". L'd., Po­
rrúa y UNAM, México, 1993, pp. 1020 y 1021.
2 DE PiNA, Rafael. Diccio11ario de Derecho. 22". ed., PmTúa, México, 1996, p. 238.

15
16 JFORÍA DE LA CONSTITlJCil)N Y R. Contreras Bustamante
co:-.;CFPTO UHICACIÚN - 17

El derecho objetivo es la norma que autoriza, que inYiste, que facul­ la fig ura de la Constitución, como "la expresión del límite hasta donde
ta; mientras el derecho subjetivo es la facultad o permisión jurídica­
ha llegado la conquista revolucionaria, porque en ella han quedado con­
mente fundamentada.
sagrados los triunfos de las fuerzas de la libertad sobre las del despotis­
Siguiendo este orden de ideas, se ha dicho que el Derecho Constitu­ Significa someter al poder del Estado dentro del ámbito del
mo"".'
cional es un dereclzo ohjeti\'0, toda Yez que de él se desprenden todas las
DL·recho.
demás ramas de la Ciencia Jurídica. El autor ecuatoriano Rodrigo Bmja afirma, que las ideas generado­
Si bien es cierto que existen ramas jurídicas mucho más antiguas
ras del Constitucionalismo, esquemáticamente, se pueden resumir en
que el propio Derecho Constitucional, dentro del Estado contemporá­
cinco. Nos permitimos citarlas, puesto que pueden servir además, para
neo -resultado de la adopción del Cmzstitucionalisnw como filosofía
entender el objeto y fin del Derecho Constitucional.
jurídico-política comúnmente aceptado por la casi totalidad de los paí­
l. La transformación del Estado, fundado en la pura arbitrariedad,
ses, jerárquicamente la Constitución es la Ley Suprema; y, por lo tanto,
en un Estado de Derecho; desapareciendo la antinomia entre so­
ninguna norma puede contradecir ni ir más allá de lo que dispone la
berano y súbdito.
misma norma constitucional. 2. Consagración del principio de la soberanía popular, o sea, con­
La Constitución es la norma que precede, es decir, es dereclzo objeti­ versión en favor del pueblo, del concepto de la soberanía que du­
vo y por lo tanto, las demás ramas del Derecho son facultadas para de­ rante muchos años fue patrimonio exclusivo del rey.
sarrollarse, su tratamiento en la norma constitucional constituye una 3. Sometimiento del pueblo, pero no a un poder de pura domina­
función normativa derivada, es decir, son derecho subjetivo, lo que cons­ ción, sino a normas de Derecho, convertidas por el mismo pueblo
tituye la primacía o supremacía del Derecho Constitucional respecto de en imperativos éticos que permitan la sana convivencia social.
las demás ramas de la Ciencia Jurídica. 4. Imposición de un sistema de libertades al poder del Estado, que
garantice la libre acción de los individuos y salvaguardarles una
2.2. CARACTERES suma de derechos personales, frente al Estado.
DEL DERECHO CONSTITUCIONAL 5. Promoción de un régimen de seguridad jurídica. Este destacado
concepto implica, que los individuos adquieran certidumbre y
Antes de entrar al análisis del concepto del Derecho Constitucional confianza en la aplicación recta y efectiva del derecho en todos
y sus diversas interpretaciones hechas por distintos autores, nos referi­ los casos.'
remos primero a sus caracteres entendiéndose por este enunciado, a los
Para el profesor de la Universidad Autónoma de Madrid, Antonio
rasgos distintivos de nuestra materia de estudio.
Colomer Viadel, "el Constitucimwlismo no es una teoría política que
El nacimiento del Derecho Constitucional, como disciplina jurídica
describe el poder ni el comportamiento político. Es una doctrina que
autónoma, data de fines del siglo XVIII y principios del XIX. Según el
sei1ala como debe ser el derecho positivo y como debe aplicarse e inter­
profesor argentino Pablo A. Ramella, "las primeras cátedras se impar­ preta rse para alcanzar el estado
de Derecho".o
tieron en Ferrara, Italia, enseñadas por Giuseppe Campagnoni di Luzo.
Seg ún este autor hispano, el Derecho Constitucional tiene una triple
Después, hicieron lo mismo en Pavia, Boloña y en París; y es precisa­ dimensión: la primera, una perspectiva
jurídica basada en la evolución
mente en territorio francés donde la materia cambia de nombre de De­ �istórica-constitucional de las instituciones jurídicas y el desarrollo
reclw Público, por el de Derecho Constitucionaf".l Ideol ógi co v
axiológico de los sentimientos v emociones que llegan a de­
El surgimiento de las primeras Constituciones y su propagación ha­ c� ntarse en .
la idea de la Constitución; la segunda, una dogmática jurí­
cia diversos países, estuvo inducido por una corriente filosófico-política, dtca que
mediante la técnica interpreta, describe y analiza el derecho
que se conoce como "Constitucimzalisnzo , que dio origen a los llama­
"

dos Estados de Derecho, cuya característica sobresaliente es la sumisión


4 BORJA. Rodri
del gobierno a las normas jurídicas, es decir, la institucionalización de go. Daecho Político v Cmislilucimwl. t·'. reimp . . Fondo de Cultura
Econ ú n1ic
a. México. 1992. p. 308.
_
' fde1n. p. 310.
l R·\MLLLA. Pablo A. /Jereclw Cullsliluciollal. 3". ed.. Ediciones Depalma. Buenos Ai­ ° COLOMER VtADEL. Antonio. Es!udios conslilllcimwles. Instituto de Investigaciones
Jurídica
res. 1 <J86. p. l. s. UNAM. México. 1994. p. 17.
18 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN l O N C E PTO Y UBICACIÓN - R. Contrl'ras Bustamantl' 19

establecido mediante la Constitución; y la última, una perspectiva que Es decir, las normas constitucionales al regular la conducta externa
indague sobre los caminos de superación de crisis jurídicas y acarree del hombre, crean efectos vinculatorios frente a quienes se despliega,
elementos para la evolución jurídica "mejorativa", mediante la cual ent rañando a la "bilateralidad". Igualmente, son "imperativas" o "autár­
"pueda llegar a ser cierta la añeja afirmación de los clásicos de que: el <[llicas" -como las califica Burgoa-, porque se sobreponen a la volun­
hombre es la medida de las cosas".7 tad de los sujetos cuya conducta encauzan de manera obligatoria, y por
La Constitución, como objeto principal de estudio del Derecho lo tanto, deben de considerarse también "/¡eten5nomas , al ser impues­ "

Constitucional. es el producto de la creación de la sociedad, que sinteti­ tas por una voluntad superior, que es la del Estado.
za la historia de un pueblo, que toma lo que le fortalece como nación y Consecuentemente, la coercitividad deviene de la capacidad que las
prohíbe los elementos fácticos que le han herido -para tratar de evitar normas jurídico-constitucionales tienen, para hacerse obedecer contra y
su reproducción-; que procura interpretar su sociología y psicología sobre cualquier actitud que se oponga o las contravenga. Esta capaci­
social para formalizar sus costumbres, tradiciones, formas de ser y mo­ dad coercitiva, aunada a los sistemas de auto-control constitucional, las

dos de querer ser; traduciendo todo ello en una Ley Fundamental que hace por tanto, también gozar de la característica de la "inviolabilidad".
garantice imperativamente su contenido. El autor español Ignacio de Otto, complementa a nuestro parecer,

La jerarquía suprema de la Constitución solo puede entenderse la concepción que diferencia a las normas constitucionales del resto de

como derivación de un principio filosófico fundamental: el de la Sohera- las normas jurídicas ordinarias. Supremacía y positividad, son en su opi­

11Ía Popular. Efraín de Polo Berna!, considera que la concepción subli­ nión, dos rasgos distintivos de las normas constitucionales.
La supremacía de las normas constitucionales, se constituye a partir
mizada de la norma constitucional. "nos lleva a la despersonalización
de la jerarquía entre las disposiciones jurídicas, es decir, se identifican
de la soberanía y a la afirmación de la Constitución como suprema" .s
por la relación que guardan con las demás, por la superioridad respecto
Según Feliciano Calzada Padrón, el concepto ideal del Derecho
a la legislación, de toda creación normativa y de todos los actos de apli­
Constitucional, debe establecerse mediante una serie de condiciones.
cación de la misma. "Todo lo que esté incluido en la Constitución o se
En primer término, se entiende que las normas constitucionales deben
inclu\'a en el futuro, tiene esa cualidad" .11
ser una premisa de justicia, y que indispensablemente implica la instau­
Por lo que toca a la positividad, la entiende como una sustitución
ración de un orden, para consecuentemente encarnar el valor de la
radical a los criterios e ideas que en la antigüedad daban preponderan­
seguridad.
cia al Derecho: ya no es la moral ni la historia lo que prefigura normati­
Agrega Calzada, que el Derecho Constitucional tiene como finalidad
\ amente el contenido del ordenamiento jurídico, sino que basta con que
específica "la limitación de determinados poderes del Estado y de sus
esté establecido en el interior del ordenamiento constitucional. La posi­
auxiliares, mediante actos que entrañan efectos bilaterales; de modo
tividad significa consecuentemente que lo constitucionalmente vigente
que las normas constitucionales refuercen una forma de vida plasmada no tiene límite algun9, ni temporal, ni social ni material.
en un orden institucional".� La etapa de integración internacional y la globalización que vive el
El Derecho Constitucional, como rama importante de la Ciencia Ju­ mundo de nuestra época, está poniendo a prueba al Derecho Constitu­
rídica, nos dice Ignacio Burgoa, está integrado "como un conjunto de cional. Algunos autores predicen catastróficamente la desaparición del
normas cuyos atributos esenciales concurrentes son la hilateralidad, la Estado Nacional -y por ende la organización jurídica constitucional­
imperatividad y la coercitividad. Estos atributos distinguen a la norma motivo por el cual, tratamos de buscar alguna opinión calificada al

jurídica de las demás normas de conducta humana" .10 respecto.


El catedrático emérito de la Universidad de Friburgo, Alemania,
Conrado Hesse -quien asimismo fue Magistrado
del Tribunal Constitu­
7 ldt!l/1, pp. 20\ 21. cional de ése país- sostiene que
de Dereclw Constitucional. 1 ". ed., PorTÚa, México, una vez creada la Unión Europea, no
H PoLo 8ER�AL, Eh·aín. :\lanzwl
le cabe duda de que
1985, p. 3. "el Derecho Constitucional no llegará completa-
9 CALZADA PADRo�. Feliciano. Dercclw Constituci()/wl, !·'. ed., Hada, México, 1990,
p. 145. 11
10 Mexicano. 6a. ed . PotTúa, México, 98S, DE Ono, Ignacio. Derecho Constitucional. Sistemas de Fuentes. 2". reimp., Ariel,
BuR<;oA, Ignacio. Derecho Constitucional
.

p. 19. Barcelona, 1 99 t, p. 1 S.
20 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN co-.:CEPTO Y UBICACIÓN - R. Contreras Bustamante 21

mente a disolverse hasta el extremo de ser reducible a mero episodio de bernados acepten como moralmente imperativo el contenido de la
la historia constitucional" .12 Con independencia de la transformación Constitución.1l
que en el futuro llegue a tener la Unión Europea, su existencia presu­
La mayoría de los autores constitucionalistas omiten tratar uno de
pondrá siempre la de los Estados miembros y, con ello, la de sus res­
los aspectos básicos del Derecho Constitucional; y que precisamente, le
pectivas Constituciones.
lbn su categoría científica, que son sus fuentes. El Derecho Constitucio­
De esta manera, durante la progresiva integración del modelo euro­
nal es una rama joven dentro de la Ciencia Jurídica, que tiene un carác­
peo -sin duda, el más avanzado- asistimos a una creciente concor­
dancia del Derecho Constitucional Nacional y Derecho Comunitario, ter llexible, que lo interacciona con la Ciencia Política, la Teoría del
Estado, la Sociología, entre otras, pero se debe establecer que como
como una concertación del Derecho Constitucional propio de los Esta­
dos-miembros, en las cuales comienzan a apuntar signos de un "Dere­ todo derecho, debe de analizarse de acuerdo a la metodología jurídica.
Rodrigo Borja, sostiene que son dos, substancialmente, las fuentes
clzo Constitucional Común Europeo".
Después de hacer estas actuales apreciaciones sobre el futuro de
del Derecho Constitucional: la ley -la de categoría superior o constitu­
cional, así como las leyes ordinarias dictadas con referencia a la propia
nuestra materia de estudio, Hesse penetra al fondo del tema y nos dice
Constitución- y; la costumbre.14
que el Derecho Constitucional goza de una singularidad que lo diferen­
Jorge Carpizo, 1' resume de manera más integral -a nuestro pare-
cia de otras ramas jurídicas, no sólo en función de sus tareas y objeto;
cer- a las fuentes del Derecho Constitucional que son:
estas peculiaridades esenciales, son básicamente cuatro:
a) La Constitución;
a) Por .'íU rango o primacía. El Derecho Constitucional no puede ser
/J) La costumbre;16
derogado ni reformado por leyes ordinarias; ninguna disposición del or­
e) La jurisprudencia;
denamiento jurídico ni acto estatal puede contradecirlo; y todos los po­
d) Las leyes que reglamentan preceptos constitucionales; y,
deres públicos -incluido el Legislativo- están vinculados por la
e) El derecho constitucional comparado. (Que actualmente es estu­
Constitución.
diado en Europa a veces hasta como un sustituto de la materia del De­
h) La clase de sus reglas, de carácter abierto y vinculante. La Consti­
recho Constitucional).
tución no es un sistema cerrado y ovni-comprensivo, es un ordenamien­
to abierto, que permite tomar en consideración cambios técnicos, eco­ En esta época de la globalización, habrá indefectiblemente que
nómicos y sociales, adaptarse a la evolución histórica a través de la agregar como otra fuente imprescindible, a los Tratados Internacionales
reforma, con lo cual se asegura con ello un requisito fundamental de su suscritos por un país y debidamente ratificados conforme a su marco
propia existencia y eficacia. constitucional.
e) Su validez, como garantía inmanente. El Derecho Constitucional Y ya que a metodología jurídica nos referimos, resulta congruente
se diferencia de otras ramas jurídicas en que, no existe instancia que regresar a la consulta obligada del maestro Burgoa, 17 quien establece
pueda imponer su observancia: el Derecho Constitucional tiene que ga­ tres distintos métodos de investigación del Derecho Constitucional:
rantizarse por sí mismo, lo cual supone la existencia previa de una con­ l. El lógico-jurídico de inte rpreta ción.-Para desentrañar los princi­
figuración que esté en condiciones de asegurar en lo posible tal garantía pios y precisar el sentido, alcance y operatividad de las normas
inmanente. constitucionales.
d) Su capacidad para imponerse a la realidad social, su efectividad.
ll
Las normas constitucionales deben ser capaces de configurar y formar ldelll, pp. 6-9.
14 .
B OR.JA, Rodngo.
las circunstancias de la realidad histórica, pues cuanto más asuman las op. Cll., pp. 313 V 314.
.

h '
_

l\RP!I.o, Jm·ge. Estudios Constituciollaln. 2a. ed., La Gran Enciclopedia Mexicana,


.

fuerzas y tendencias de cada época, mejor se podrán desplegar sus UNAM, México. 1983, p. 288.
efectos. Para ello, es menester que tanto dirigentes políticos como go- 16 El
maestro Daniel Moreno agrega a la costumbre, el concepto "las tradiciones", ar­
gumentando
4ue éstas tienen una mayor influencia en los países de Constitución flexible;
asunism
o incluve a la Duclrina. MoRENo DiAZ, Daniel. Derecho Collsliluciunal Atexicmw.
12 BRL'JllA, MAIIIOFLR. v()(,LL, I!LSSE, l!ti'DE. Almwal de Uereclw Cunslilucional. Insti­
2"· cd., Pax-Me.x, México, IY73, pp. 20 Y 21.
tuto Vasco de Administración Pública. Marcial Pons, Ediciones Juddicas v Sociales, Ma­
17 BURGOA, Ignacio. up. cil., p.
drid. IYY6, p. 14. 28.
22 TEORÍA DE LA CONSTIT!ICI(lN co"iCEI'TO Y U H I C AC I ClN - R. Co11t1Tra' Hu,tama11te 23

2. El l z istórico. -Para comparar las normas con las que las prece­ sus manifestaciones y resultados, con lo cual establece una Cratología o
dieron y evaluar la evolución constitucional. Ciencia del Poder.
3. El crítico valorativo.-Que considere los aspectos social, político El Estado Constitucional y por ende, el Constitucionalismo, se resu­
y económico del ser, modo de ser y querer ser del pueblo o na­ men en el hecho de un acuerdo de la comunidad sobre una serie de re­
ción de que se trate; y los juzgue a la luz de las teorías filosóficas, l..'.las lijas, que obligan tanto a los dcte11tadores como a los destillatarios
políticas, sociales y económicas. �kl poder, como el mejor medio para dominar y evitar el abuso del po­
der político por parte de los gobernantes. Ese mecanismo organiza a las
2.3. EL CONCEPTO DEL DERECHO CONSTITUCIONAL reglas en un documento formal: la Constitución. Es decir, Loewenstein
ddine al Derecho Constitucional como el mejor instrumento para con­
2.3.1. CARL SCHMITI trola r el uso del Poder Político.
Generalizando dentro de la Teoría Constitucional, Loewenstein con­
Para el maestro alemán Carl Schmitt, el Derecho Constitucional se
sidera como elementos fundamentales e irreductibles de toda auténtica
entiende como una consecuencia de la existencia de la Constitución
Constitución:
misma. Según su particular punto de vista, el surgimiento de la Consti­
La diferenciación de las tareas estatales y su distribución entre di­
tución germana de Weimar en 1919 -dentro de la corriente de influen­

\ ersos órganos del Estado o detentadores del poder, para evitar la


cia del Estado liberal-burgués- creó la necesidad de erigir una Teoría
concentración del poder y generar la autocracia.
o Ciencia de la Constitución, como resultado de una tendencia inevita­
• El establecimiento de mecanismos de coordinación entre los di­
ble del mundo occidental. Es decir, podemos inferir que para este nota­
versos detentadores del poder. Frenos y contrapesos, como dispo­
ble tratadista, el Derecho Constitucional es aquél que se encarga, conse­
sitivos para la limitación del poder político.
cuentemente, del estudio de la Constitución.
• La conformación de procedimientos para la resolución de conOic­
En 1927, en su "Teoría de la Constitución",18 este autor dice que
tos y bloqueos entre los diferentes detentadores del poder autóno­
cualquier hombre, entidad u objeto, se encuentra de alguna manera en
mos, para que no lo hagan por sus propios medios y sometan el
una "constitución", pero para la materia de nuestro estudio, esa palabra
proceso del poder a una dirección autocrática.
se debe limitar a la "Constitución" de un Estado, es decir, a la unidad
• El método racional de reforma constitucional, para la adaptación
política de un pueblo.
pacífica del orden normativo a las cambiantes condiciones socia­
les y políticas para evitar la ilegalidad, el uso de la fuerza o en
2.3.2. KARL LOEWENSTEIN
caso extremo, la revolución.
Por último, la Ley Fundamental debe de contener un reconoci­
Este autor, también de origen alemán, publicó a fines de los años

miento expreso de ciertas esferas de autodeterminación indivi­


cincuenta, otra obra intitulada en español "Teoría de la Constitución",19
dual, o sea, derechos individuales y libertades fundamentales, así
que aportó un enfoque novedoso al análisis de la materia constitucional.
como los recursos legales que garanticen su protección frente a
Aunque su método de estudio se aleja del ámbito riguroso de lo jurídi­
los detentadores del poder.20
co-normativo y se acerca más al de la Ciencia Política, la posición de
este investigador del constitucionalismo, resulta imprescindible para
2.3.3. MANUEL GARCÍA PELAYO
poder conceptualizar y comprender en su justa medida, la importancia
que la sociedad contemporánea ha dado a la Constitución. E ste autor español, hace un profundo análisis respecto al concepto
Como premisa fundamental de su teoría, destaca que es el fenóme­ del Derecho Constitucional
y al elemento individualizado que le da su
no del Poder la clave para comprender a la sociedad estatal. El poder objeto de
político debe ser conocido, observado, explicado y valorado en cuanto a
C
estudio, que es la onstitución, partiendo básicamente de una
crítica al
aspecto racional-normativo clásico. Esto es, si bien acepta que
el D erecho
Constitucional es la "ordenación de las competencias supr·e-
1H SUIMilT, Carl. Teoría de la Cu11slilllción. 1·'. reimp .. Alianza Editorial. Madrid,
1 YY2, p. 3.
19 LoEWENSTEIN, Kad. Teoría d<! la Conslitucióll. Aricl, Barcelona, 1 Y82, pp. 23 y ss. 20 Lor.wE:-<STEIN, Karl. op. cit., pp. 153 y 154.
24 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN ( o:-.:CEI'TO Y lJI31CACI(JN R. C ontrn'" Bu,tamante 25

mas de un Estado", dice que esta ciencia no se agota en ellas. El Dere­ de conducta, cuvos atributos esenciales concurrentes son: la hilaterali­
cho Constitucional vigente "no es la pura norma, sino la síntesis de la d(/(1, la imperatil·idwl v la coercitil'idad.
tensión entre la norma y la realidad como la que se enfrenta".�1 El maestro Burgoa opina, que aunque parezca tautológico, debe de­
Según este autor hispano -quien en la parte final de su vida presi­ cirse que el Derecho Constitucional, es aquel que se encarga del estudio
dió el Tribunal Constitucional de su país, al fin del franquismo v la de la Constitución.�� Pero no de la Constitución in abstracto, como un
reinstauración del constitucionalismo- el estudio del Derecho Consti­ L·nte ideal, carente de juridicidad; ni como un conjunto de principios
tucional se desarrolla mediante las disciplinas siguientes: deontológico, sin consagración positivo-normativa; sino del análisis de
l. Derecho Constitucional Particular.-Cuyo objeto es interpretar, una Constitución específica, particular de un Estado determinado.
sistematizar y en ocasiones, criticar a las normas jurídico-consti­ En su objeto de investigación, radica la diferencia entre el "Derecho
tucionales vigentes de un Estado determinado. Se trata pues, de Con stitucional" y la "Teoría Constitucional", pues en tanto que ésta últi-
una de las disciplinas que integran la jurisprudencia de un orden trata de formular y explicar determinados principios, que pueden
11w
jurídico positivo dado.
tL'ilL'r o no acogida en alguna Constitución en concreto, aquél, según di­
2. Derecho Constitucional Comparado.-Su misión es destacar sin­
jimos, analiza la existencia de un cierto orden jurídico constitucional.
gularidades y contrastes del estudio teórico entre las normas jurí­
El estudio de una Constitución, debe comprender a todas sus dispo­
dico-constitucionales de varios Estados.
siciones, agrupándolas sistematizadamente en diversas instituciones o
3. Derecho Cmzstitucimzal Gerze ra l.-Es una especie de Teoría Gene­
materias. Por ende, la comprensión didáctica del Derecho Constitucio­
ral del derecho constitucional democrático-liberal. A diferencia
nal debe abarcar todas esas instituciones o materias que en la Constitu­
del Comparado, aquí no se busca destacar singularidades o con­
ción se encuentran normadas o previstas -de modo fundamental o bá­
trastes, sino solamente notas generales y comunes durante un
sico-, ponderándolas únicamente como contenido de las disposiciones
tiempo dado o bien, de un sistema determinado.
constitucionales respectivas.
El origen y formación del Derecho Constitucional, como ciencia au­ Según Burgoa, la metodología que debe emplearse en el estudio del
tónoma y sistemáticamente ordenada, tiene lugar -en opinión de este Derecho Constitucional, o sea, en el análisis de una Constitución deter­
autor- hasta entrado el siglo XIX, con la cristalización del Estado Cons­
minada, consiste en el examen de los conceptos y principios generales y
titucional, concretamente motivada por la transformación fundamental
abstractos que ésta utiliza -como tópicos de la Teoría del Estado y de
de la estructura jurídico-político tradicional de las sociedades antiguas,
la Teoría Constitucional- para después ponderarlos desde el punto
que dieron pie a la configuración del Estado contemporáneo; y, para
de \ ista de su consagración normativa en cierta Ley Fundamental.
ello, a su juicio, contribuyeron los siguientes factores:
l. La proliferación de Constituciones escritas;
2.3.5. FELIPE TENA RAMÍREZ
2. La necesidad de establecer conceptos explicativos y reglas de
interpretación;
En sus estudios, el maestro mexicano hace un detallado recorrido
3. Consecuentemente, la exigencia de crear una teoría que unificara
hist(Jrico para describir el origen y evolución del Derecho Constitucio­
la pluralidad normativa, mediante criterios axiológicos.
nal. En el úmbito internacional, destaca que fue en Italia -antes que en
ningún otro país- donde se fundaron las primeras cátedras de la mate­
2.3.4. IGNACIO BURGOA
ria. En México, Tena Ramírez concede a Ignacio L. Vallarta y a Emilio
El autor del Prefacio de la segunda edición de este libro y querido Rabasa, la mús alta imestidura en cuanto a sus aportaciones al consti­
t ueio nalismo nacional.
maestro nuestro, Don Ignacio Burgoa, sostenía que el Derecho Consti­
tucional es una importante rama de la Ciencia Jurídica -o sea, de la Resulta muv interesante su posición metodológica para tratar de
distinguir al Derecho Constitucional de la Teoría del Estado, refiriendo
disciplina cultural- que estudia al Derecho como conjunto de normas
que L'sta última se ocupa del anúlisis doctrinal de la materia estatal en

21 GARC!:\ Pl·JA\<J, J\lo.utul'l. /Jt'!"t.'chu Cun:-.tituciollal C(nnpanulu. )·'. l'd .. Alian/a Edito­ 22 Bt"J«
,·ial. Madrid. 1 ')L) l. pp. 19 v 20. ;oA, l�nacio. "i'· cit., illtroducci<íll, pp. 26 v 27.
26 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN co;-.;CEI'TO Y UBICACIÓN - R. Contrl'ra' Bu,tamantl' 27

lo general, pero que excluye en su método lo referente al estudio indivi­ Al igual que el español García Pelayo,27 subdivide nuestra materia
dual del Estado. para su estudio en: Derecho Constitucional Particular, Co111parado v Ge-
"Pues bien, dice Tena, la doctrina individual y específica de deter­ 11,nd; solo que en cuanto a lo que se refiere al Derecho Particular, difie­
minado régimen de Estado, es el Derecho Constitucionai"Y re un tanto, pues Manuel García establece que, para su apreciación, el
Tena, sostiene que el Derecho Constitucional no puede ser nunca ubjcto de esta disciplina es interpretar, sistematizar y criticar a las nor-
formalismo puro, sino el común aliento jurídico de cada pueblo, la ex­ 111as constitucionales vigentes de un Estado determinado, para integrar
presión más alta de su dignidad cívica, el complejo más íntimo de su una especie de jurisprudencia de un orden jurídico positivo dado. El
historia. No puede concebirse sino en cuanto aspiración concreta de IllL'xicano, en cambio, limita el objeto de su estudio, únicamente al aná­
cada pueblo a ejercitar su soberanía, conforme a principios que tienen lisis \ sistematización de las fórmulas jurídico-políticas básicas de un
un mínimo de generalidad, como son la democracia, la representación, Estado particular, es decir, el análisis y estudio de los sistemas constitu­
la división de poderes, los derechos fundamentales de la persona. El cionales de cada país por separado.
Derecho Constitucional es la técnica de la libertad. "Es el derecho del Destaca igualmente, como metodología de estudio del Derecho
Estado, cuando el Estado es de Derecho". 24 Constitucional -coincidiendo en ello con las posiciones teóricas eu­
Coincidiendo con otras tendencias europeas, nos dice que no es po­ ropeas- a los métodos histórico, jurídico, así como también, al socio­
sible recluirse en el formulismo de los textos, sin emplear el análisis so­ lógico.
ciológico e histórico, para descubrir el significado real de la Constitu­
ción por debajo de su estructura formal. 2.3.7. PABLO BISCARETII DI R U FIA

2.3.6. DANIEL MORENO Díaz Este jurista italiano, en su obra "Introducción al Derecho Col!stitu­
ciuuul Co111parado", hace una diferenciación novedosa sobre el concepto
El maestro Moreno Díaz, sustenta que en primer término, hay un del Derecho Constitucional.
acuerdo general en ubicar al Derecho Constitucional como rama del Establece que existe un "Derecho Constitucional Ge11eral" que cons­
Derecho Público, y que su finalidad es la constitución política y social titme un capítulo específico de la Teoría General del Derecho, destina­
del Estado. Respecto a la institución estatal afirma que se trata de "una do a comprender en sus esquemas dogmáticos una serie muy amplia de
organización que pretende asegurar la convivencia de un conglomerado instituciones de los más diversos ordenamientos positivos. Asimismo,
humano y su supervivencia como una comunidad" .2' distingue a las "Ciencias del Derecho Constitucional Particular", estima­
Señala que si coincidimos en ubicar al Derecho Constitucional den­ das como relativas a un único ordenamiento estatal. Esto es, Biscaretti
tro del sistema de la normatividad, se trata de un conjunto de normas da el rango de "Ciencia" al estudio individual y ex profeso de cada
que tienen por objeto la organización del Estado y el funcionamiento de Constitución de cualquier Estado en particular. Por último, aclara el
sus poderes y agrega: "Derecho Constitucional es una disciplina que es­ concepto de la "Ciencia del Derecho Comparado" como "una de las cien­
tudia la estructura del Estado y fundamentalmente, su Constitución, cias jurídicas, cuyo objeto es el estudio profundo de los ordenamientos
aunque ésta, que es la Ley Fundamental, no contenga de un modo for­ constitucionales de los Estados".28 Es decir, considera a este género
zoso todos los preceptos básicos, sino que hay un vasto complejo de comparativo poseedor de un estricto método de investigación, y por lo
normas, que aunque tienen como base la Constitución, no forman parte tanto, una ciencia jurídica autónoma o sea, una especie de "Ciencia que
de ella" .2�> estudia u la:·; Ciencias Constitucionales Particulares".
El método comparativo, resulta aceptable para cumplir cuatro fina­
.
hdades: 1 ". para
alcanzar los lineamientos dogmáticos de la Teoría Ge­
2' TE'A RA�lÍREZ, Fl'lipl'. !Jcreclw Cmzs!ilucimwl .\/nicww. 18«. ed., Porrúa, México,
neral del
1983, p. 79. Derecho de manera completa y satisfactoria; 2. para lograr
una mejor
24 !dc111, p. 80. interpretación y valoración de las instituciones jurídicas del
2' El maestro Moreno Díaz precisa más adelante que el Derecho Público Sl' refiere a
la cosa pública, es dl'cir, w relacimw cmz las reglas u:lati1·as a la "rgwzi:acirúz del l:'stado,
cull .'>U jÍIIICÚJilllnlÚ'Il/U y cu11 lo.'> .\en·icio.... ¡níhlico....-; y que
en contr apo�iciún, el Dci·ccho 27 GARCÍA-PELAYO, Manuel. op. cit., pp. 20, ss.
DíAZ, Daniel, "1'· cit., p. 1. ZR BiSCARETI'I DI RUFFIA, Pablo. hllroducciún al derecho crmstlfucimwl ""'"l'arurlu.
l'ri\ ado atiende el inll:rés de los particular·es. MoRENO
la. ed., Fondo
2" lrlcll/, p. 2. de Cultura Económica, México, p. 79.
28 TUJRÍA DE LA COI\;STITUCI(JN I'I"O Y l!BICACI(JN - R. C<>nlnTas Buslamanlc 2Sl
co'\CF

ordenamiento nacional; 3. para proporcionar un buen conocimiento de Para Linares Quintana, el Derecho Constitucional debe servii- de
leyes e instituciones de países similares por sus estructuras, que induzca ¡1·1r111ula que equilibre el interés social o estatal, con el interés del
a imitarlas, pero sólo después de haber realizado las reformas necesa­ ¡11di' iduo.
rias impuestas por las diversas situaciones particulares del Estado que El Derecho Constitucional, y por ende la Constitución, deben esta-
las adopte; y por último, 4. tratar de alcanzar la ambiciosa meta de la bkccr las bases que regulen los riesgos entre un régimen absoluto de
"unificación /egislati\·a", como está ocurriendo contemporáneamente en LkrL·chos individuales sin limitación alguna y un sistema también e:xtre-

la Unión Europea. 1110 de derechos sociales que restrinjan la libertad hasta hacerla desapa­

Para lograr estas finalidades, es preciso allegarse del conocimiento rccL·r. Ni el interés individual se debe oponer al de la colectividad; ni la

de factores políticos, históricos, económicos y sociológicos, es decir, la de111ocracia social y económica se pueden contraponer y excluir a la de-
111m_-racia política. El absolutismo individual, desemboca en anarquía y
Ciencia Constitucional, sea particular o general, debe usar aportaciones
caos; , la omnipresencia y omnipotencia del Estado, crea un clima pro­
de las "ciencias 110 jurídicas". Entre estas disciplinas, menciona princi­
palmente a la Ciencia Política para identificar cómo se ejercita el poder picio al totalitarismo."

en la realidad de una sociedad humana en particular; a la historia de


2.3.9. MARIO DE LA C UEVA
las doctrinas políticas, para conocer las concepciones y programas
de acción de algunos de los ordenamientos constitucionales; y por últi­ El insigne jurista mexicano -quien fuera director de la facultad de
mo, incluye también a las sociologías del derecho o de la política, así Derecho de la UNAM- hizo una serie de precisiones invaluables respec­
como a la filosofía del derecho, a la historia constitucional, a la historia to a los orígenes del término Derecho Constitucional, para efecto de
política, así como aquellas de carácter específico sobre las instituciones ubicar debidamente a nuestra materia, dentro del ámbito de la Ciencia
políticas y los partidos políticos, incluyendo la historia administrativa. 2Y Jurídica.
En primer término, establecía que la acepción Derecho Cmzstitucio­
2.3.8. SEGUNDO V. LINARES QUINTANA nal procede de la corriente interpretativa francesa que quiere decir "De­
rcclw de la Constitución o Dereclzo Contenido e1z la Constitución". Los
Para quien fuera el Director del Instituto de Derecho Constitucional autores españoles hablan de "Derecho Político" como un concepto sinó­
y Político de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de Buenos Ai­ nimo ,. a su vez, los constitucionalistas alemanes, emplean la expresión:
res, en su obra "Teoría e Historia de la Constitución", el Derecho Consti­ "Dcrcclw del Estado". De la Cueva considera que ambos términos son
tucional tiene como finalidad el establecer la garantía de la libertad y la demasiado amplios, pues significan el derecho de cualquier organiza­
dignidad del individuo, mediante la sumisión o acomodación del Esta­ ción político-esta tal, o si se quiere, se refieren al derecho de una forma

do, íntegramente considerado, al Derecho.10 cua lqu iera de Estado Una definición tan laxa beneficiaría igualmente a
.
El constitucionalismo de nuestra época, o sea de la era atómica los estados absolutistas
o totalitarios .
-como la llama el maestro argentino- sólo puede ser un constitucio­ En cambio, el concepto Derecho Constitucional, como ciencia que
e � tudia la Constituc
nalismo social, que encare al hombre, no como un individuo aislado, ión, ubica de mejor manera nuestro campo de estu-
diO ..,. cl nd Isis.
··1· · La e onstJtucwn, segun este autor, tiene dos acepciOnes:
·
· · - - - ·

sino en cuanto y en función de miembro de la comunidad.


es Si
·· noni
, ·mo de realidad,
En otros términos, el constitucionalismo ha de ser social, en el sen­ y quiere decir, la manera concreta de ser de
una unidad
tido de que han de equilibrarse armónicamente los intereses sociales e estatal; pero además, se define como norma jurídica funda­
me n tal Y compre
individuales, pero en modo alguno para desembocar en el allanamiento nde los principios básicos de la estructura del Estado y
las relac¡· .
ones de este
, con 1 os part1cu
. 1 ares, o sea , estas mterpretacwne
.
de los valores supremos del Derecho Constitucional: la libertad v la dig­ . s
e on stn
uyen la base de lo que se conoce con
nidad del individuo. el nombre de Estado de
Derec/zo.

29 !dnn. 88 v 8<J. il
LI'-'ARES QUINTANA, Segundo V. Twtado
Hl LINARES QtJINTANA. Segundo V. Teoría e Historia C<mstitucimwl. Tomo 11, Alfa, Bue- r01110 de la CiellCÚI del Derecho Col!stituciollal.
l. Alfa, Buenos Aires. 1 <JS3,
nos Aires, I<JS8, pp. 320-327. p. 343.
30 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
1 1 ¡'CFI'T
O Y LIBICACIÚN - R. Contrnas Bustamantc 31

De la Cueva establece que únicamente el derecho sirve como funda­ p<1ra las investigaciones del Derecho Constitucional, el tipo de sociedad
mento del Estado de Derecho contemporáneo, cuya esencia radica en la qtiL' prioritariamente nos interesa, es el Estado.
subordinación del poder al orden jurídico y por lo tanto, en el Derecho Para incitar a los integrantes de una sociedad a actuar de alguna
Constitucional descansan una serie de ideas v principios constitutivos, 111a11era determinada, existen fundamentalmente dos medios de acción
en lo que podría denominarse como Constitucionalisnw. En consecuen­ p o lítica : la persuasión, que es la influencia sobre la voluntad humana
111cdiante la palabra o por escrito- para transmitir ideas o necesida­
cia, el término Derecho Constitucional pretende significar el ordena­
__

Lks \ generar una conducta deseada. El otro medio, es el de la coerción,


miento normativo del Estado que realiza la idea del Estado de Derecho.
qtiL' es una potestad del Estado, quien tiene el monopolio del uso legal
Al analizar la relación entre Derecho Público y Derecho Constitu­
ck ]a fuerza, para constreñir a la conducta humana al cumplimiento de
cional, De la Cueva sostiene que si bien el Derecho Constitucional con­
u 11mandato.
tiene los principios fundamentales del Derecho Público, por otra parte,
El l'IZcuwlranziento jurídico de los fenómenos políticos, no es de nin­
goza de una auténtica autonomía, toda vez que las normas que crean,
l!Ullél manera una tarea fácil, puesto que este autor galo considera que
estructuran y facultan al Estado y sus órganos así como las que fijan los
�,isten tres razones fundamentales: la violencia, que es inherente en las
derechos fundamentales del hombre -por citar algunos ejemplos- son
relaciones políticas; segundo, porque aparte de ello, la vida política se
exclusivas del ámbito constitucional y nunca pueden confundirse con
caracteriza por una espontaneidad y un poder de evolución considera­
las esferas administrativas, penales o procesales, ni con ninguna otra
bks; \ finalmente, porque "los preceptos del Derecho Constitucional se
especialidad. dirigen a actores políticos particularmente poderosos, que no siempre
Es decir, el Derecho Constitucional proporciona las bases genera­ obedecen las reglas establecidas"." Sin embargo, dado que la variedad
les y establece los límites de las demás ramas particulares del Derecho de opiniones no debe detener la acción, el Estado debe aspirar a buscar
Público.12 consensos mayoritarios y no la unanimidad.
André Hauriou, diferencia en beneficio de nuestro objeto de estudio,
2.3.10. A N DR É HAURIOU al Derecho Constitucional de la Ciencia Política. Nos dice: "la Ciencia
Política tiene, pues, por objeto el estudio de los hechos, de los fenóme­
Este francés, hijo del también prominente jurista y politólogo Mau­
nos políticos en sí mismos, y por sí mismos, mientras que, al Derecho
rice Hauriou, sostiene que el objeto del Derecho Constitucional se pue­
Constitucional le corresponde, como hemos visto, el encuadramiento ju­
de definir como "el encuadramiento jurídico de los fenómenos políti­ rídico de estos fenómenos. En resumen, la Ciencia Política es una cien­
cos".11 Su misión es "la de organizar, en el marco del Estado-Nación, cia descriptiva, mientras que el Derecho Constitucional es una ciencia
una coexistencia pacífica del poder y de la libertad" .14 IWnnativa".'o
Los fenómenos políticos, advierte, son relaciones interhumanas en
el marco de la sociedad organizada, y pueden abordarse a partir de tres 2.3.11. MAURICE DUVERGER
planos diferentes: el reconocimiento total del hombre por el hombre
mismo, en primer término; la determinación de lo que es bueno para la El maestro, politólogo y jurista francés, dice que la superficie de la
.
tierra estú div
sociedad; y, por último, el de las relaciones entre dirigentes o gobernan­ idida en naciones v cada una de ellas cuenta con institu­
tes y gobernados.
ciones gu bern

amentales que co stituyen un Estado. Las instituciones
Siguiendo la tendencia actual europea, se acerca más en su análisis políticas así definidas, se estudian con un enfoque particular que se
hacia la Ciencia Política, pero profundiza en tratar de desentrañar la anali�:aba anteriormente en las Facultades de Leyes europeas, bajo el tí­
relación de las normas de derecho con los factores políticos y sus conse­ tulo de "Dereclw Constitucional", pero según su parecer, actualmente
cuencias. Nos dice que los fenómenos políticos son los que se refieren a esa asignatura recibe el nombre de "Dereclw Constitucional e llzstitucio­
la conducción de los hombres que viven en sociedad, pero aclara que nes Políticas ".17 Ello significa, que va no se debe limitar el anúlisis a las

,,
12 lhidenJ, p. 27.
DE LA Ct'E\'A. Mario. Teoría de la Collstilllciríll. Porrúa, México, 1982, pp. 1-33.
11 HAt'Rllll', An<h·é. !Jereclw Coll.,titucimwl e fllstitucirm<'.' Políticas. 2·'. eJ.. Ariel,
Bar­
1
1: lhide111,p. 38.
Dl'\'EK<;FR, Mauricc. ln.'ilitucú>11C."' Política....- v /Jercciiu Cun.'ititucuHud.
celona, 1980, p. 2 1. Sl. o
,n 2" Rl'itnprc-
Para México, Ariel, Barcelona. 1992. p. 23. .
14 !del/(., p. 41.
32 TEORÍA DE LA CONST!Tl'CI(>N l !l'-.liTTO Y U B ICACJ(>N R. CuntllT'" Bu,talllanll" 33

instituciones establecidas en la Constitución v los textos que las com­ ¡ucit'>n: el Derecho Constitucional es, en este caso, el que se aplica a las
pletan, sino que se debe también estudiar el funcionamiento concre­ in;.tituciones políticas. Cuando existe Constitución, el Derecho Constitu­
.1K
to e incluir en ese estudio las instituciones de hecho no previstas en los L·io1Jal suele desbordarla ampliamente"
textos, ya que en muchas ocasiones lo rebasan e incluso dominan Después de analizar ampliamente los diversos enfoques de estos

ampliamente. L·onnotados juristas, trataremos de elaborar algunas conclusiones a l


Dmerger, dice que Derecho Constitucional, "es la parte del Derecho rL''-!K'clO.
que regula las instituciones políticas del Estado". Incursionando de pla­ En primer término, debemos comprender que todas las sociedades

no en la Ciencia Política y en un enfoque sociológico, menciona que la humanas son diversas, como resultado lógico de que se integran por in­

noción de derecho es inseparable de la noción de cultura v se debe en­ dil id uos, que la naturaleza, de manera caprichosa, ha creado diferen­
L·i�tdamente. El hombre tiene que compaginar dos tendencias naturales:
tender que precisamente la cultura es para ellos un conjunto de mode­
su indi1 idualismo, que casi siempre exacerba su egoísmo,'" que lo em­
los de comportamiento o "roles", de un grupo social. Esto es, son las ac­
puja a ser independiente, original, a creerse superior a los demás, sen­
titudes y acciones que desempeñan los miembros de un grupo social en
tirse libre, etc., y por el otro, la necesidad de conformarse en ser un
cada situación dada.
cnlL' social -z.uun politicón, como diría Aristóteles-, como obligación
Las normas jurídicas, y con mayor razón las constitucionales, se
irrenunciable para poder subsistir, reproducirse, evolucionar, etc., pero
distinguen por varios conceptos de las demás. En primer término por la
que lo somete a reglas de comportamiento social, jurídico, ético, moral
"obligación" que reposa no sólo en coacciones sociales externas o san­
o religioso, aún más allá de su propia voluntad.
ciones, sino en la adhesión interna a la norma, porque los individuos la
Consecuentemente, todas las sociedades humanas son diferentes.
consideran valiosa. Dentro de un sistema de valores, jurídicamente esa Inllmen en ello las costumbres, la historia, el clima, la raza, etc. Obvio
consideración se debe fundamentar en la equidad y la justicia. En se­ es que, cuando las sociedades evolucionaron y se perfeccionaron para
gundo lugar, el derecho se debe definir por la naturaleza especial de las conformarse en los Estados contemporáneos, las diversidades no
sanciones que se aplicarán en caso de violación a la misma, debiendo el desaparecieron.
Estado además disponer de los medios para hacer respetar su decisión Resulta por todo ello, de la mayor importancia, poder generalizar
(tribunales, jueces, policía, etc.) Por último, el Derecho se define por en el estudio de la concepción social, que el hombre y la sociedad mis­
una tercera característica: el modo de elaboración de las normas y por ma han creado a lo largo de toda su historia: el Derecho.
el hecho de que siempre son dictadas por la autoridad pública. El Derecho ha constituido, desde su creación, el mejor instrumento
El Derecho Constitucional aparece como la base fundamental del racion al para resolver pacíficamente las controversias entre los
hom­
Derecho. La Constitución o Ley Suprema, es un texto jurídico superior br es. Después, la sociedad perfeccionó su organización
política, al po­
dn establecer un pacto, un contrato
a todos los demás, que se derivan de él y gracias a él, poseen validez. El social, que regule las relaciones
entr e los detentadores y los destinatarios
Derecho Constitucional -agrega el francés- supone que los gobernan­ del Poder -parafraseando a
Loe\\enstein- a través del
tes son hombres ordinarios, sometidos a la ley como todos los ciudada­ instrumento jurídico más evolucionado: la
Constitución.
nos (esto solamente sucede en los Estados democráticos), o sea, el con­
Es la Constitución quien crea las bases para la paz ,. la estabilidad
cepto Constitución, va más o menos ligado al de "pacto" o "contrato
soci al; para hacer
social". posible la existencia de la justicia; par¡1 el control y la
del ensa de los particulares frente al uso abusivo del poder. Mario de
Diferencia dos clases de Constituciones: la Constitución-Ley, que
l a Cue\ a
dice que el constitucionalismo es una tendencia a subordinar el
son aquellas que imponen obligaciones y limitaciones, tanto a goberna­
dos como a los gobernantes; y las Constituciones-Programa, que defi­
nen un proyecto ideal o simulado v no contienen obligaciones jurídicas
:'
'"
ld<'l/1, p. 2LJ.
Jor!!e Sale"¡! llc·lú recuerda
que Tom:" llohhc·' -el autor del l.<TI<ii<ÍII. L'n el 'i-
en sentido estricto. gl 0 \\
ll- COihideraha
al hombre como un 'L'I' anti,oc·ial por naturaleza; dL·,conliad
o;
Finalmente, nos dice el maestro francés, "no hay que oh·idar que el �goí,ta; dominado por ,us instintos; enc·mi¡w del
lwnli)J'L" nii,nio: "'el li<J111hn· nm1u luhu
e/ ¡l�nn
concepto de Derecho Constitucional no conesponde exactamente al de p hr c". S:\YF(; IIELl', JorgL'. /nstituciune.-., de lJcrcciJu Cun.\llfucunltd .\lc.uclluu, 1.�. l'd.,
01.1·ua.
Constitución. Existe un Det-ccho Constitucional aunque no haya Consti- Mé·xico, ILJH7. p. ·'l.
34 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

Poder al Derecho;40 para la división de las funciones públicas y el auto


control gubernamental; así como para garantizar la soberanía popular
en los asuntos domésticos, como también la de la nación, frente a los
demás Estados.
El reto para tratar de definir al Derecho Constitucional, rama joven
de la Ciencia Jurídica, consecuencia natural de la consolidación de la
convicción de adherirse al Cmzstitucimwlismo y constituirse como Esta­
dos modernos, regidos por una Constitución, de parte de la casi totali­
Unidad 3
dad de los países contemporáneos, es afrontado por los tratadistas des­
de diversos puntos de vista.
Concepto de Constitución
Loewenstein, Biscaretti, Hauriou y Duverger -como ha quedado
señalado- acercan al Derecho Constitucional hacia la Ciencia Política;
RAúL CoNTRERAS BusTAMANTE.
lo relacionan íntimamente con conceptos meta-jurídicos como el poder,
los fenómenos y las instituciones políticas, para crear la impresión de
que la Constitución es más un fenómeno producto de la política, la his­
toria y la sociología, que del Derecho.
Sin embargo, si aceptáramos separar a las normas constitucionales
de sus categorías jurídicas, de sus valores filosóficos fundamentales,
como son las aspiraciones de justicia, equidad, legalidad, así como de
3.1. CONCEPTO MATERIAL Y FORMAL
lograr el equilibrio entre el orden y la libertad; por ejemplo, y si ade­
DE CONSTITUCIÓN
más, desproveyéramos a las mismas normas fundamentales de la im­
peratividad, bilateralidad, coercitividad, positividad y supremacía, El jurista francés, André Hauriou, sostiene que en un sentido
muy
seguramente el resultado sería la desintegración de la sociedad, la desa­ amplio. el concepto "Constituciú11" puede entenderse como
el conjunto
parición del Estado, la anarquía, el caos. de reglas nuís importantes que rigen la organiza
ción y el funcionamien­
El Derecho es la mejor garantía social para la convivencia, por to del Estado.1 En el mismo orden de ideas,
debemos concluir que nos
ende, el Derecho Constitucional es un concepto indisoluble de la idea esta mos refiriendo al hecho de que es inconven
iente aceptar la existen­
del Estado. cia del Estado, si éste no posee forzosam
ente una Constitución.
Definir a la Ciencia Jurídica que estudia a todos éstos fenómenos, En términos generales, podemos afirmar que
todos los países tie­
nos lleva necesariamente a coincidir con la aparentemente más sencilla ne n, en sentido material, una
constituciúrz, una manera de estar consti­
manera de delinearlo, con la cual concuerdan Burgoa, Schmitt, De la tuidos, pero únicamente
aquellos que cuentan con una Constitución es­
Cueva, García Pelayo, Tena Ramírez y la mayoría de los autores consul­ crita, la detenta
n también desde el punto de vista formal. "Todo país
tados: Derecho Constitucional, es aquel que se encarga del estudio de la tiene una constitu
ción en sentido material, pero únicamente los países
Constitución, el que define la concreta manera de ser de ww nación, me­ con Constitu
ción escrita la tiene desde el punto de vista formal"
.2
diwzte wz e11[uque particular y específico; el que se conce11lra e11 el análi­ El término "Constitución" en
sentido material, se aplica a la organi­
sis jurídico sistematiz.ado de la Co11stituciún de wz Estado deten11inado. zació n polí
tico-estatal propiamente dicha, es decir, en un sentido
en el
que se debe
vislumbrar el objeto o la materia de las reglas constit
ucio­
nales. y no
su forma.

Doctor en Derecho. UNAM. Profeso


r de Carrera Titular de Derecho Constit
Por Oposición ucional
Abiel"la de la Facultad de Derecho de la UNAM
d y Catedrático en la División
e Estudios de Posgrado de la misma Instituciún.
1 HAURIOU, André. op. cit., p. 352.
4" DE LA CuEVA, Mario. op. cil., p. S. 2 CARPIZO, Jorge, up. cit., p. 290.

35
36 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN l l l'l EPTO DE CONSTITUCIÓN R. Contreras Bustamantc 37

En sentido fónnal, la palabra "Constitución", se aplica al documento tk alguna manera en una "constitución", y todo lo imaginable puede te­
que contiene las normas relativas a la estructura fundamental del Esta­ llL'r u na "constitución"." Luego entonces, hay que limitar el término a
"Co11,¡itucióll del Estado", que significa entonces: unidad política de un
do, como organización política regulada en un documento de promul­
gación solemne, mediante un procedimiento especial y superior, siendo
pueblo. si se refiere a un Estado particular o como la sitllació11 total de
considerada también como Lev Fundamental o norma de normas.
fu 111zidwl -' ordel!acióll políticas, cuando se trata de explicar una forma
'

c-.¡x·cial ,. concreta de la existencia estatal, en lo general.


3.2. CONCEPTO DE CONSTITUCIÓN Schmitt, considera 4 conceptos de Constitución: el absoluto, el rela­
¡i1·u. el posili\'0 y el ideal, que en síntesis consisten en:
3.2.1. F ERDINAND LASSALLE
u) Ll Concepto Absoluto. Se refiere a determinada comunidad como
EL filólogo, filósofo y abogado egresado de las Universidades de un todo unitario, como la concreta ma11era de ser resultante de cuai­
Breslau y Berlín, contemporáneo de Carlos Marx, pronunció en 1862 LJUÍL'l' unidad política existente.
dos conferencias magistrales. La segunda de ellas, dictada ante el Club Este concepto lo subdivide a su vez en cuatro distintas acepciones:
de Ciudadanos de Berlín, el 16 de abril, la intituló: cQué es ww Consti­ a. 1) Co111o unidad política v ordenación social de w1 cierto Estado.
tución?, la cual ha sido reeditada a lo largo de los tiempos, debido a su Es el punto de convergencia del orden social. Aquí la Constitución no es
importancia. un sistema de normas jurídicas, sino el ser de la comunidad, en concre­
Lassalle definió a la Constitución de un país, como la szmza de los ta L·xistencia política. El Estado no tiene una Constitución según la que
{actores reales de poder que rigen en ese país. Para este alemán, la ver­ se forma y funciona la voluntad estatal, sino que el Estado es Constitu­
dadera Constitución no es el documento escrito, ni un pacto jurado en­ ción. Si se suprime esta Constitución, cesa el Estado; si se funda una
tre el pueblo y un rey, como tampoco es simplemente la Ley Fundamen­ Constitución nueva, surge un nuevo Estado.
tal proclamada en un país.
a.2) Co111o Fonna de Gobierno o una manera especial de ordenació11
Aunque acepta que la Constitución debe tener fuerza de ley, por lo
pofílica \'social. Aquí tampoco la Constitución es sistema de preceptos
tanto, "debe ser también una ley",' pero no una simple ley, sino la Ley
jurídicos, sino una fomza u status, que afecta a toda la comunidad, a
Fundamental del país. Pero advierte que existe algo, una fuerza activa y
toda la organización comunitaria y determina la manera de ser de la
determinante que influye sobre esa y todas las demás leyes de una
comunidad. El Estado es una República, es una Monarquía, Aristocra­
nación.
cia o Democracia.
Cada alteración que desequilibre a estos factores, necesariamente
producirá cambios constitucionales, puesto que "cuando la Constitución a.3) Co111o el principio del devenir dinámico de wza unidad política o
escrita no corresponde a la constitución efectiva, se produce un cambio !itu::.a \'energía. La Constitución no es estática, sino dinámica, evoluti­
va, por ser vida, por ser el resultado de intereses contrapuestos, que
inevitable"4 y no es posible que se mantenga vigente.
día a día, conforman la unidad política. La Constitución es una fl.wr::.a
Contundentemente concluye que "los asuntos constitucionales son
actit•a.
en primer lugar, no cuestiones de derecho, sino cuestiones de fuerza".5
a.4) Co111u regulación legal fundamental, como nonna de nomzas.
A� uí la Constitución no es una actuación del ser, ni tampoco del deve­
3.2.2. C ARL S CHMITI
ntr diná mico,
sino algo normativo, un simple deber ser. Pero no se trata
El maestro alemán sostiene que el término: "constitución" tiene una de leyes o normas particulares, sino de la lev de leves. La Constitución
.
corno nor ma funda
-

amplia diversidad de sentidos, pues "todo, cualquier hombre y cualquier mentaP


objeto, cualquier establecimiento y cualquier asociación, se encuentra

' LISSAI.I.F, Fcrdinand, r:Qué " St fi\IITr


es llllll Collstilllciál1? 2". cd., Ediciones v Distribuciones , Carl. Tt!oría dt! la Col!stituciáll. 1·'. Reimpn"ión, Alianza Editorial, Ma­
dn. d,_ E'P<ll1a,
Hispánicas, México, 1989, p. 32. 1992, p. 29.
4 ldt!lll, p. 67. ' ldt!lll, pp. 29-36.

' ldt!lll, p. 78.


38 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN i'.i'TO DE CONSTITUCIÓN R. ConliTra' Bll,lamanll' 39
Cl 1,;¡

b) El co11cepto relativo. Aquí la atención se centra en la lev constitu­ forma determinada por otra norma de categoría superior, que
da en la
cional concreta, sujeta a características externas y accesorias, llamadas conlig_ura el fundamento inmediato de validez de la primera. Este pro­
jcm11ales.� l
·L·-,. o representa espacialmente una relación de supra a subordinación.
'

Constitución en sentido relativo, significa pues, la ley constitucional La Constitución, es la norma fundadora básica, hipotética en ese
en particular, atendiendo a un criterio formal, es decir, no interesa la sL·ntido, fundamento de validez suprema, que establece la unidad de
importancia de las normas que contenga esa Carta Magna, sino que por �·sW relación de producción y coordinación entre las normas jurídicas
el hecho de estar esas reglas en el Código Supremo, esos preceptos tie­ de un Estado. Es el estrato superior jurídico positivo del orden normati-
nen la categoría de constitucionales. n1 estatal.
Lo jón11al de una Constitución, no se circunscribe únicamente a lo Distingue entre dos conceptos a la Constitución. La Constitución en
escrito, puesto que ese hecho sólo le concede demostrabilidad y mayor _,e1uido nwterial, designa a "la norma o normas positivas que regulan
estabilidad, sino que requiere proceder de un órgano competente y ser 1a producción de las normas jurídicas generales. Esa Constitución pue­
co11ve11ida. La Constitución sería un pacto escrito. Asimismo, una refór­ de hab er sido producida por vía de la costumbre, o por un acto a ello
nza dificultada, que formalmente otorga al texto constitucional cierta dirigido, de uno o varios individuos, es decir, mediante un acto legisla­
" .111
garantía de duración y estabilidad. ti\ o
La Cmzstitució11 en sentido fomzal o escrita, es el documento deno-
e) El concepto positivo. Schmitt, define aquí a la Constitución como
minado "Constitución", que no sólo contiene normas que regulen la le­
decisión de conjunto sobre el modo y la forma de la unidad política.9
gisla c ión , esto es, la producción de normas jurídicas generales, sino
La Constitución, en sentido positivo, surge mediante la decisión po­
también normas que se refieren a otros objetos políticos importantes,
lítica del poder constituyente. La Constitución es una determinación
así como disposiciones según las cuales, las normas contenidas en ese
consciente que la unidad política -el Estado- precisamente a través
documento -la Constitución- no pueden ser derogadas o modificadas
del poder constituyente, adopta por sí misma y se da a sí misma. Son
como simples leyes, sino bajo condiciones más difíciles, mediante un
determinaciones, decisiones fundamentales, que afectan al mismo ser
procedimiento especial.
social: son los principios rectores del orden jurídico.
Por lo tanto, Kelsen sostiene que materialmente, la Constitución
d) El concepto ideal de Constitucióll. La lucha entre los partidos po­ debe contener: las normas que regulan la producción de normas jurídi­
líticos genera una terminología particular, donde cada uno de ellos cas ordinarias de un Estado, es decir, la legislación estatal; la determi­
puede llegar al extremo de negar el nombre de Constitución, a toda nación de los órganos facultados para llevar a cabo dicho proceso
aquella que no satisfaga sus intereses ideológicos. Son los diferentes -"sean leyes u ordenanzas"-; 11 la autorización a los tribunales que po­
idearios que sostienen los partidos políticos. Así, cada uno reconoce drán juzgar las leyes; los órganos que habrán de aplicarlas; un catálogo
como verdadera Constitución aquella que corresponde a sus particula­ de derechos y libertades fundamentales; y, un sistema que la proteja, que
res principios. le permita invalidar actos o leyes que la vulneren, así como para que sólo
pueda ser modificada o suprimida, bajo condiciones más difíciles.
El maestro alemán concluye, que el concepto ideal actualmente do­
minante de Constitución en el mundo contemporáneo, es el que sostie­
3.2.4. HERMANN HÉLLER
ne el Estado liberal-burgués de Derecho: protección ciudadana contra
el abuso del poder del Estado. Este profesor alemán concibe a la Constitución del Estado desde
tres puntos de vista
:
3.2.3. HANS KELSEN
u) La Constitució11 como Realidad Social. Cuando la realidad social
de una comunidad adquiere ordenación y forma, de especial manera,
Este autor alemán, sostiene que debido al carácter dinámico del De­
aparece
recho, una norma vale en tanto y en la medida en que ha sido produci- concretamente la existencia del Estado. Esa ordenación, que


s lde111, pp. 37-44. KELSEN, Hans. Tt!oría Pura del Dcreclzo, 8". ed., Porrúa, México, t YYS, p. 232.
11
'' ltle111, pp. 4S-S7. lhide111, pp. 233 y 234.
IFORL\ lll: LA lOt'<STITl 'CIO\: lll ( 0'-STITL:CIO'- R. lon\ILT<" llll'laJJJaJJ\l' 41
40 ¡il'-ll 1'1\l

Constitucional. existe para sen·ir a una continuidad histórica \'


procura mantener de manera an{tloga en el futuro a la cooperación de lki'L'L·ho
la sociedad, es lo que Héller llama "Constitucú!n, cn el scntido dc la �i�tL' ill Út ica tk· la organización de una sociedad.
·

ciencia dc la rcalidad". L1 orden v la sentencia en el Estado de Derecho, deben basarse en


La Constitución normada por el derecho conscientemente estableci­ b ordL·nanza de la lev; v esta, a su n·z. en la Constitución, debido a que
do v asegurado, es la "Constitucicúz Or.t:wzi:.wla" . El Estado no puede ser b unidad \ ordenación de la conexión de acción organizada del Estado
concebido ni como sociedad ni como comunidad exclusivamente. Su lev rL·quiL'I'l' un sistema de supra a subordinación, dicaces.
tkcisi\·a de formación -Constitución- es ciertamente su organización; ¡ Lthrú Constitución jurídica objetivada, cuando ésta sea referida
pno no solo por medio de ella crece considnablemente su valor de l.011-;t�IIltL'nleniL' al sujeto humano y sea constantemente actualizada por
L'lccti\·idad social. sino que sin ella no tiene, en general. existencia. Di­ lo� holllhrL·�- 1'
cho de otra manera, sin Constitución no hav Estado.
e! ( 'uusiitucir!n Lscrita o For111al. Significa la totalidad de los pre­
Enuncia dos elementos básicos para el derecho: la IUmluilidad, que
t·cplo� j urídicos fijados por escrito en el texto constitucional. Este texto
puede ser jurídica o extra jurídica, impuesta por la costumbre, la moral,
tklK· �mnonizar con la Constitución material y debe ordenar fundamen­
la religión, la urbanidad, la moda, etc.; v por el otro lado, la 1/0111/lllivi­
talmentL' los órganos v funciones del Estado. Las lagunas constituciona­
dad. Con bastante frecuencia, el uso social. la realidad no normada o
k" deber cubrirse con la tradición. la conveniencia política, la situación
normada extra-jurídicamente, se revela más fuerte que la norma estatal,
de pmkr \ la conciencia jurídica.14
pero la 110nnalidad tiene que ser reforzada �· completada por la norllla­
ti\•idwl para crear una "Constitución Nomzada ".
3.2.5. ANDRI� HAURIOU
Con frecuencia, las normas constitucionales, se presentan como un
querer y un deber ser, opuestos a la realidad y al ser social. como una Como lo seiíalamos al inicio del presente Capítulo, este autor fran­
disposición nueva con respecto al orden social ya existente. Precisa­ cé s . rdiere como sinónimo de Constitución al conjunto de reglas nuís
mente en el hecho de que la constitución política de una comunidad, se inz¡wrtilll/es de un Estado, que rigen su organización y funcionamiento.
vea influida de manera consciente y según un plan, por una creación Pero com iene detenernos un poco en una aseveración importante que
autoritaria de normas -en este intento de una normalización general realiza: "Todo Estado. por el hecho de existir, posee forzosamente una
para el territorio, por medio de una legislación central- radica la esen­ Constitución".1' Esto significa que existe un binomio inseparable entre
cia del Estado moderno. l os concL'ptos de Estado-Constitución, que quiere decir que en nuestra
Las relaciones reales que crean las normas de la Constitución, no
época contempor{mea, sólo existirá una Constitución, cuando se refiera
pueden impedir que en épocas de crisis, el poder prácticamente del más a la Le\ Fundamental que regule la vida de un Estado determinado;
v al
fuerte se imponga para realizar la necesaria unidad del Estado.12
mismo tiempo, únicamente se podrá aceptar la
existencia de un Estado,
h) Constituci(Jil Jurídica Dcstacwla 11 Ohjctivada. Héller hace una si C·stc SL' rige por una Constit
ución.
crítica a dos de los principales exponentes del constitucionalismo: a S iguie n do este mismo orden de ideas, Hauriou dice que "el estable­
cimiento de
Hans Kelsen, porque considera al Estado y a la Constitución como un una Constitución, expresa el deseo de organización racio­
nal del Estado",
deber ser exclusivamente; así como también a Carl Schmitt, quien se­ puesto que "solamente cuando la Nación toma concien­
cia de sí mism
gún Héller pretende eliminar de la Constitución toda normati\·idad. a, de su unidad v de su fuerza, exige la exposición
explícit
La Constitución del Estado jurídicamente normada -nos dice el g
a de los principios que re ulan la organización v el funciona­
lllicnto de
maestro alemán- es también expresiones de las relaciones de poder, los podnes políticos, al propio tiempo que los principios que
�onsagra
tanto físicas como psíquicas. Las normas constitucionales, tienen la fun­ n los derechos propios de los indi\·iduos, su puesto en la socie-
ción de procurar vigencia a una normalidad a la que se reconoce valor ad, sus relacionL'S con el estado, etc.".1"
positivamente, o sea, a la conducta que enmarca la Constitución, no
\
obstante el cambio de tiempos v de personas. La dogmática jurídica del 1
lhtd"'"· pp. 27ti.-28Y.
1 4 "-l.lil.K, llernwnn. "!'- ni.. pp. 28'1-2'18.
1,
12 n 1p .. Fondo de Cultura 1111 Ki<>l. Anlh·é·. "!'- <11 . . p. Yi2.
llu 1 LK, llcn11ann, teoría del L.'>tadu, 7'1• rci Econórnica,
1" ldnll, pp. 347 y 348.
:\lé·,in>. 1'181. pp. 2b7-27t'..
42 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÚN 43
(tl '.l FI'TO DE CONSTITUCI(JN R. Contrcras Bustamantc

Para este jurista, hay dos clases de Constituciones: la Cmzstituciún L'l presente en función del pasado; y por consecuencia, del ser de ayer
Política, que regula precisamente la organización y funcionamiento de tklwmos extraer el deber ser de hoy y del mañana. Este concepto es el
los poderes públicos; v la Constitución Social, que establece o recuerda rL·sultantc del pensamiento conservador, que se antepone al liberal y el
las bases de vida en común dentro de la sociedad estatal, al tiempo que �1utor afirma que la Constitución de una nación no es producto de la ra­
regula la naturaleza de las relaciones entre ciudadanos y el propio Esta­ s ino la consecuencia de una pausada transformación histórica en
;t.lll.

do. "Cuando se piensa en la Constitución de un Estado, generalmente b que a menudo se encuentran elementos irracionales. Así pues, una
no se considera más que su Constitución Política. Pero, en muchos as­ Conslilución es el resultado de actos parciales, de usos y costumbres.
pectos, la Constitución Social es más importante, porque interesa más a
e) Cmzccpto Sociológico. Entiende a la Constitución como una forma
la vida de los ciudadanos".17
ck sLT, v no de deber ser. Este método no considera, en contraposición
al concepto histórico, que sea la Constitución resultado del pasado. La
3.2.6. MANUEL GARCÍA PELAYO
Conslitución misma -según el enfoque sociológico- no es pura nor­

Para el maestro español, el Estado se organiza mediante la Consti­ mali\ idad, sino inmanencia de situaciones, factores económicos y es­
tución, para asegurar la convivencia pacífica y la vida histórica de un truc\uras sociales del presente, a las que debe adaptarse el deber ser.
grupo humano mediante el logro del monopolio de la violencia, con lo En lo que respecta al Derecho, la concepción racional gira en torno a la
cual, el Estado se manifiesta como una unidad de poder. validez; la historia sobre la legitimidad; y la sociológica lo hace sobre la
En virtud de que el Derecho Constitucional surge de una determina­ vigencia.
da idea de la Constitución, crea una tipología respecto a su concepto,
Finalmente, García Pelayo opina que de los tres conceptos expresa­
sobre la base de la pluralidad de formulaciones que se le hacen.
dos, sólo el Racional-nomzativo ha tenido una importancia decisiva
García Pelayo concibe a la Constitución desde varios aspectos:
para la formación de la Ciencia del Derecho Constitucional, pero le se­
a) Concepto racional normativo. Imagina a la Constitución como la ñala como grave deficiencia que abandona las consideraciones axiológi­
sistematización exhaustiva de las funciones fundamentales del Estado y cas v políticas, para ceñirse exclusivamente al aspecto normativo.20 Vis­
de las competencias e interrelaciones de sus órganos. La Constitución to así, el Derecho Constitucional sólo se refiere a una parte de la
es pues, un sistema de normas. La Constitución no es solamente expre­ Constitución, y quizá a la menos importante, pues se elude hacer refle­
sión de un orden, sino que ella misma es la creadora del orden. xiones filosóficas, políticas, históricas, etc.; y para la comprensión de
Reconociendo a Kelsen como la expresión más radical de este pen­ las normas, deben extenderse los análisis necesariamente a las situacio­
samiento, sostiene que "el concepto racional normativo supone una es­ nes socioeconómicas, políticas, entre otras, que conforman la realidad
pecie de deificación de la Constitución", 1� puesto que concibe que la so­ social.
beranía está encarnada en la Constitución, porque si soberanía implica Esta finalidad interpretativa no debe ser extraña del enfoque forma­
mandar sin excepción, poder crear leyes y poseer todas las facultades lista, pues precisam
ente la norma es -por definición- "un deber ser", y
de mando, es claro que la Constitución es soberana. no un "te¡¡
er que ser". García-Pelayo dice que la realidad no es creada
Dentro de este concepto, sugiere únicamente incluir a la Constitu­ Por la ley; no es ni siquiera organizada por ella, sino a la inversa: la ley
es expresió
ción expresada jurídicamente y en forma escrita, "pues sólo el Derecho n de la realidad, pero no única ni total, sino simplemente
uno de los
escrito ofrece garantías de racionalidad frente a la irracionalidad de la elementos de la realidad.
costumbre" y "sólo la precisión jurídica escrita ofrece seguridad frente Act ualmente, en la vida cotidiana
del Estado contemporáneo, la
funció
a la arbitrariedad de la administración" .1" n política y en cierto modo, la legislativa,
la jurisprudencia, las
��taciones de las estructuras federales, los
h) Concepto Histórico-Tradicional. Considera a la Constitución como � Ion de
partidos políticos, la desvia­
poderes hacia el Poder Ejecutivo, cte.,
son acontecimientos que
una situación puramente histórica, de modo que sólo podemos explicar ran sfor
man radicalmente una Constitución, y son inintelig
con s¡'de . ibles a toda
ración que se mueva en el puro y estricto ámbito legal.
17 !de111. p. 349.
1 H GARC1A PU.AYO. Manuel. up. cil., pp. 36 y ss. 20
19 !de111, p. 39.
ldem, pp. 55-78.
DE LI'TO DE
l l ¡'l
44 TEORÍA LA CO�STITUCIÓN CONSTITUCIÓN R. Contreras Bustamante 45

3.2.7. OTROS AUTORES Dando un enfoque más político y social que jurídico, Ferrando Ba­

día se adhiere a la posición de otros autores y define a la Constitución


Otro autor español, Juan Ferrando Badía, considera que un enfoque
L.01110 "1111 sistema de 1zomzas jurídicas, escritas o 110, que pretende regular
estrictamente constitucionalista de lo "político", resulta insuficiente,
/os 11s¡JL•ctus jimdmnentales de la t•ida política de wz puehlo ".24
pues la realidad política de la sociedad y sus interdependencias de otros
Para el ecuatoriano Rodrigo Borja, la Constitución es "el conjunto
supuestos y estructuras económico-sociales, desbordan el campo estric­
dL' normas jurídicas fundamentales que pretenden modelar la sociedad
tamente jurídico, el prescrito por la Constitución.21
política \ que regulan la organización, funcionamiento y atribuciones
Si se aspira a tener un conocimiento real del régimen político de un
determinado país -dice el autor hispano-, se tiene que considerar no Lkl poder, así como los derechos y obligaciones de las personas" .2"
Rodrigo Borja, dice que "actualmente no se concibe otra forma de
sólo su aspecto constitucional o jurídico, sino también su funcionamien­
organizar a las sociedades políticas que no sea mediante un documento
to, su aplicación: teoría y práctica de la realidad política de ese Estado.
sokmne que regule la convivencia social, el mando político y los dere­
Ello no obedece al menosprecio del enfoque jurídico-constitucional,
chos \ deberes de las personas. Ese documento solemne es la Cunstitu­
contenido en el "texto legal" de la Ley Fundamental, pero hay que com­
ci<!11, \ al conjunto de sus principios y sus normas se llama Derecho
plementarlo con el estudio de las fuerzas políticas y demás influencias
Constitucional". 2"
condicionantes de las instituciones políticas.
Por su parte, el autor alemán, Conrado Hesse dice que: "la Consti-
"La Constitución puede enmascarar el régimen de que se trate tras
tución contiene, por regla general, las normas jurídicas que caracteri­
una armadura de conceptos. El desfase entre lo que dice la Constitución
zan los órganos supremos del Estado, establecen la forma de crearlos,
y la realidad suele ser menor en los regímenes pluralistas y democráti­
cos que en los regímenes socialistas y autoritarios" _22 sus relaciones recíprocas y sus áreas de influencia, además de la posi­

La Constitución de cada Estado presenta modalidades muy diversas ción fundamental del individuo respecto al poder estatal" _27 Las funcio­

y su contenido varía notablemente, sin embargo, pese a las diferencias nes de una Constitución en la vida de la comunidad -agrega- funda­

existentes, los pilares fundamentales sobre los cuales se edifica la es­ mentalmente, son dos: la formación y mantenimiento de la unidad

tructura de una Constitución, son uniformes. política, así como la creación y preservación del ordenamiento jurídico.
Por regla general -concluye el mismo autor- el objeto de una "La Constitución es el plan estntctural hásico, orientado por detennina­
Constitución es por un lado, la consagración de los principios de filoso­ dus priucipius dotadores de selllido, para la {onna jurídica de una comu­
fía política que servirán de guía para la acción de los órganos del poder n idwi"Y·

público; y del otro, la organización del ejercicio del poder en el Estado, Efraín Polo Bernal, cita básicamente los tres conceptos más
es decir, las reglas del juego de la vida institucional a que se deberá su­ c onocidos:

jetar la comunidad estatal. L/ cuucepto racional nomzativo, para el cual, la Constitución funda­
Esto lleva a considerar que cada Constitución debe contener una mentalmente debe contener: a) la garantía de los derechos individua­
parte "dogmática" y otra "orgánica", dentro de las cuales se contendrán le s ; h) la división de poderes, que sirve a la efectividad de aquellos; y,
tres tipos de normas: 1) las declaraciones de derechos; 2) las reglas re­ e) otros, agregan a la soberanía.
lativas a la organización del Estado; y 3) las reglas ajenas a esa organi­
zación.21
ci o iur·ídico
v político en 4ue SL' tendrán que desarrollar las relaciones políticas entre am­
bas <:slntl'turas.
21 FEKRASllll BADÍA, Juan, L_,tructum flllt:nw d<' la Cmlstituci<jll. Su diluímica-" Facto­ 24 Ihulcm, p. 22. Concretamente, el autor coincide con la definición del también espa­
J 1\ti.\LZ
_

nol ,
rn, 2". cd., Tiran! lo Blanch, Barc<:lona, España, 1 Y90, p. 13. DI.PKM .·\, en su obra "Regímenes políticos contemporáneos", Madrid, l Y74,
p. IOY.
.

22 !df!lll, pp. 17 \' 18.


21 Jhideill, p. 22. Según <:1 autm·, las estructuras políticas se dividen L'n "estructuras de 2'
BOR.I.\, Rodrigo, op. cit., p. 320.
"" BORJ
los gobcrnant<:s" v en las "estructuras de los gobernados" y ambas se complementan a tra· .\, Rodrigo, Lllciclopedia de la Política, Fondo de Cultura Económica, México,
y(·s de sus respcci inJS roles sociales. Las csti·ucturas políticas de los gobernados se hallan 19'!7. p. 230.
.:7
íntimamente unidas con <:1 knónwno dd cambio u dinámica política, v precisamente por 'X
BRENDA, MAIIIOFER, VoGEI., HESSE, HIEDE, up. cit., p. 2.
ello, es 4u<: considera fundamental 4ue una Constitución d<:tcrminc formalmente el cspa- - ldl.'lll' pp. 5 \' 6.
46 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN DE CONSTITUCIÓN - R.
co-.;CEPTO 47
Contreras Bustamante

El concepto histórico tradicional, que define a la Constitución, no ciuual cuando se "establezca una estructura de poder político supremo
simplemente como creación de un acto único y total, sino de actos par­ qUL' impida la concentración del mismo en una sola persona o grupo y
ciales, reflejos de situaciones concretas, que responden al carácter ra­ que. a l mismo tiempo, asegure a los ciudadanos que sus derechos se ha­
cional de cada pueblo. van garantizados. La Constitución es Ley Fundamental porque el Esta­
�lo fundamenta ahora en la ley".33
SL'
El concepto sociológico, que describe a la Constitución como la ma­
Según estos profesores hispanos, la Constitución tiene tres funcio­
nera de existir de un pueblo o de una nación. Para ésta última concep­
IlL'S: la uor111ativa, como Ley Suprema y originaria, constitutiva de la je­
ción, del Derecho importa básicamente su vigencia; para el concepto
rarquización de las demás normas ordinarias del Estado -por ello cali­
histórico tradicional: la legitimidad; y, para el racional normativo; su
fican a la Constitución como una superrey-; la sociológica, puesto que
validez.29
es un elemento conformador de la realidad social. La Constitución no
Para Jorge Sayeg Helú, desde el punto de vista material, la Cons­ es sólo norma, también es dinámica real que va traduciendo en formas

titución simplemente es: "el conjunto de normas jurídicas fundamen­ jurídicas, los cambios que se producen en la legitimación del poder, en
tales, escritas o no escritas, que establecen la estructura esencial del los cambios estructurales de la sociedad y en virtud del resultado de las
Estado".30 relaciones institucionales del Estado. Por último, la fwzción política que
El maestro colombiano, Gaspar Caballero Sierra, sostiene que "las "conlleva la definición de los principios en que se funda la unidad espi­
ritualy política de una comunidad. Pero a la vez sirve para definir la
democracias modernas encuentran su fundamento en una norma supre­
ma, legítimamente instituida, que fundamenta el ejercicio del poder es­ unidad del orden constituido, estableciendo las pautas de equilibrio en­

tatal y actúa como marco de referencia y directriz del mismo".3I Re­ tre poderes sociales". 34

cuerda que fue precisamente en 1786, cuando se creó la Carta Política Para el Doctor de Harvard, Lief H. Carter, 35 la Constitución es un
Norteamericana, cuando se utilizó el término "Constitución", para des­ instrumento que ayuda a "constituir" la identidad política nacional. "Es

cribir al "acto solemne determinador de la estructura fundamental y del una fúente primaria de lo que es general e integrador del hombre, una

poder organizado en el ámbito de una sociedad estatal". vida de intereses comunes".

Caballero sugiere abandonar los antiguos conceptos relativos al


tema y circunscribirse a entender a la Constitución como una auténtica
norma de normas, toda vez que "no puede entenderse a la Constitución
en el sentido de que su carácter normativo resulte ilusorio." Además
-añade el colombiano-, actualmente una Constitución no se debe res­
tringir a señalarle los límites y competencias de su accionar al poder
público, sino que debe ir mucho más lejos y tiene el deber de crear un
orden político, social y económico para la nación. Es decir, no se debe
circunscribir únicamente en definir lo que el Estado debe ser, sino que
tiene que delinear el programa de lo que el Estado debe hacer.32
Para los autores españoles Rafael Ruiz Manteca, Javier Fernández
López y Antonio-Rafael Hernández Olivencia, el concepto de Ley Fun­
damental no es necesariamente sinónimo de Constitución, toda vez que
refieren que en la antigüedad han existido diversas disposiciones jurídi­
cas con esa connotación. Solamente habrá Lev Fundamental Constitu- ------- -

ll
RüiZ
MANT
2Y
PoLO BERNAL Efraín, op. cit., pp. 3-5.
,
.
7�o-Rafael, lntroduECA, Rafael, FERNÁNDEZ LóPEZ, Javier v HERNÁNDEZ
ccióll al Derecho y Derecho CUitstittlt_-imzal, Trolla,
ÜLIVENCIA, Anto-
Madr·id, España,
SAYEG HELÚ, Jorge. op. cit., p. 24.
30
94, p. 151.
'1 CABALLERO SIERRA, Gaspar y A N ZO LA GIL, Marcela, Teoría ConstituciUita/, Temis,
;� lbidem, p. 151.
J\ • ° CARTER H., Lid, Derecho Collstituciolla! Contempor
Santa fe de Bogo tá, Colombia, 1995, p. 3. áneo, La Supr·ema Corte y el
32 Ide111, p. 1 O. rte de la Política. Abcledo-Perrot, Buenos Atres, Argentma 1995, p. 79.
Unidad 4

Clasificación
de las constituciones

RAúL CoNTRERAS BusTAMANTE.

Clasificar a las Constituciones resulta, sin duda, uno de los retos más
difíciles de la Ciencia Constitucional, debido a un hecho incuestionable:
ninguna Constitución es igual a otra.
Si aceptamos lo que dice Carl Schmitt,1 que la Constitución debe
ser un fiel re fl ejo de la situación concreta del conjunto de la unidad po­
lítica Y ordenación social de un Estado determinado; y al mismo tiem­
po, estamos de acuerdo que la realidad social de un país nunca es igual
a la de otro, entonces tenemos una enorme tarea al tratar de encontrar
puntos comunes entre diversos textos constitucionales.
La premisa inicial de nuestro análisis parte de la advertencia teóri­
ca de que ninguna Constitución es idéntica a otra. Cada Ley Fundamen­
tal será particularmente
descriptiva de sus propias circunstancias políti­
�as, sociales, culturales, económicas, etc.; luego entonces, deberemos
Inferir que a
lo que debemos proceder ahora, es a tratar de encontrar
alguna s
analogías, coincidencias o semejanzas, que nos permitan orde-
nar s¡'sten1 . .
a t'Izar y cata 1 ogar para r·mes pract1cos, a 1 as e onst1tucwnes,
'
· · ·
.

desde diYe
rsos puntos de vista.
J orge
e . (a¡·pizo se pregunta: (por qué el empeño de clasificar a las
on st nuciones? Y responde: primeramente porque este ejercicio resulta
�--

s· . . •
Doctor en Derecho, UNAM. Catedrático titular de Derecho Con�titucional por upo­
diCJon abieJ·ta de la Facultad de Derecho de la UNAM y
10' �e. Po�grado de la misma Institución.
Catedrático en la División de E�tu·

S< IIMtn, Carl. op. cit .. p. 6.

49
so TEORÍA DE LA CONSTITUCit)N
Cl .\SIF
ICACIÓN DE LAS CONSTITUCIONES - R. C on t rnas Bustamante SI

muy útil al Derecho Comparado puesto que permite comprender a pri­ complementarias adicionales, que aunque no están incluidos en el texto
mera vista las notas sobresalientes del sistema político de un país; y en Cllnst itucional, forman parte de la Ley Suprema de una nación.4
segundo, "porque tiene una importancia política que nos lleva de la Una mención especial debe hacerse al hecho de que los Estados que
mano a plantearnos el problema de qué tipo de Constitución es mejor" 2
hétll adoptado una forma federal o compuesta, necesariamente se rigen
nll'diante Constituciones escritas: "no se concibe ni se explica una Fe­
4.1. SEGÚN SU FORMULACIÓN O FORMA JURÍDICA Lkrac ión sujeta a prácticas consuetudinarias y a interpretaciones jurí­
dicas".; La relación de ca-soberanía que se finca entre un gobierno ge­
La mayoría de los tratadistas constitucionales coinciden en un pri­ neral y las entidades federativas miembros de un pacto federal; y la
mer criterio simple para clasificar a las Constituciones, el que se atiene compleja distribución de competencias en el ámbito territorial que se
a su forma, a su presentación material. Es decir, catalogar a las Consti­
produce cuando se constituye un ente federal, exigen como característi­
tuciones contenidas metódicamente en un documento formal y diferen­
ca esencial, estar ordenadas por un estatuto orgánico preciso y, conse­
ciarlas de aquellas que no lo están. Desde este punto de vista, las Cons­
cuentemente, escrito.
tituciones se clasifican en:

4.1.2. CONSTITUCIONES DISPERSAS O NO ESCRITAS


4.1.1. CONSTITUCIONES CODIFICADAS O ESCRITAS
Dice el maestro Karl Loewenstein, que "un Estado sin Constitución
Cuando una Constitución se condensa y expresa por escrito, me­
escrita no es en absoluto un Estado carente de constitución".6 El hecho
diante normas sistematizadas, precisas y solemnemente promulgadas,
de que algunos países -como Inglaterra- hayan desdeñado la codifica­
se estará dentro de este género.
ción de sus preceptos constitucionales en un documento único y especí­
La mayoría de los Estados modernos han adoptado este formato de­
fico, no significa que carezcan de un orden fundamental.
bido a las ventajas que ofrece, puesto que es garantía del principio de
El producto de los usos y costumbres de algunos Estados que se re­
legalidad el dejar correctamente expresados los términos inequívocos
gulan bajo la práctica del derecho consuetudinario, se articulan me­
de los derechos y garantías que se reconocen a los gobernados en el tex­
diante leves, convenciones, declaraciones de derechos, sentencias, trata­
to de la propia Ley Suprema.
Asimismo, una Constitución escrita o codificada permite visualizar dos, etc., pero no existe un texto específico que compile a sus normas

con claridad que leyes gozan de supremacía constitucional y cuáles co­ supremas. Sin embargo, a través de la tradición constitucional de que

rresponden al ámbito legal ordinario, lo que da como resultado el fun­ gozan, se encuentran arraigados en la conciencia de su pueblo.
damento formal de validez y permite establecer la jerarquía de leyes. Son normas fundamentales que no se han originado en un momen­
to dete rminado, sino que encuentran su génesis, por lo general, en la
El maestro español, Manuel García Pelayo, advierte que las reglas
claras y la precisión jurídica escrita, ofrece seguridad frente a la arbi­ costumbre; son producto de una evolución social y política, están com­
trariedad de la administración: "sólo el Derecho escrito ofrece garantías puestas por una variedad de estatutos y decisiones jurídicas.
de racionalidad frente a la irracionalidad de la costumbre" .3 Este sistema permite que coexistan con el mismo carácter supremo,
Aunque conviene advertir que la clasificación de si un texto consti­ dive rsos instrumentos jurídicos que datan de mucho tiempo atrás y que
se ha n venid
tucional está codificado o disperso no debe ser tomado de manera lite­ o recopilando de distintas épocas. Prueba de ello -volvien­
ral o rigurosa, puesto que toda Constitución tiene una parte escrita y do a la Gra
n Bretaña- es que además de los usos y costumbres, siguen
otra no. Además, es importante no olvidar que cualquier Constitución te niendo
vigencia plena los siguientes instrumentos jurídicos: "la Magna
se complementa con la costumbre, la jurisprudencia y -en nuestra épo­ C una del
monarca Juan Sin TieiTa (1215), la Magna Carta de Enrique III
ca ampliamente- con los tratados internacionales, que son documentos 0225 ), el Act o( Settlement (170 1 ), el Bill of' Rights (1689), Tlze Parlia-
escritos y dan lugar a una serie de normas reglamentarias y prácticas
� Al respecto, se sugiere revisar· el texto del artículo 133 de nuestra Constitución.
2a. ed .. Instituto de Investigaciones Jurí­ ' LA-.;z DURET, Miguel. Derecho Collstituciollal S"- Edición,
2 CARPIZO, Jorge. J:swdios Col!stituciolll1les, Mexicww. Editorial Conti­
nental,
1983, p. 414. México, 1959, p. 7.
dicas, UNAM, México,
' GARCÍA PELAY(J, Manuel, op. cit., p. 139. 6 LOEWENSTEIN, Karl, op. cit., p. 207.
ii'ICACIÓN DE LAS CONSTITUCIONES - R Contrna' Bu,tamante 53
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN ti.-\S
52

nzent Act ( 1911), el Representa/ion of tlze People Act ( 1918) y el Estatuto rantía de permanencia, situación a la que los juristas franceses han de­

de Westminster (1 931). 7 ..,¡ l.! nado como superlégalité constitll!ionnelle".9


, En algunos casos, los sistemas constitucionales previenen la existen­
La Constitución consuetudinaria se forma por un conjunto de dispo­ ·

siciones normativas basadas en prácticas jurídicas y sociales de repeti­ cié! de un órgano específico o la actuación del órgano legislativo común,
pero con ciertas exigencias y solemnidades especiales, que en cualquier
ción uniforme y constante, cuyo actor principal es el pueblo mismo. A
c�1so. se denomina Poder Constituyente Pennanente o Poder Revisor, crea­
diferencia de la Constitución escrita, no se resuelve en un todo normati­
do de manera ex profesa para tal efecto por la misma Constitución.
vo único, sino que la observancia que establece, se funda en la concien­
La reforma constitucional es un procedimiento delicado. Significa
cia popular que se ha integrado por instrumentos legales que han de­ )a n eces idad de alcanzar nuevos consensos entre los llamados por Lasa­
mostrado su utilidad a lo largo del tiempo.
lle: jlictores reales de poder",10 lo cual no es fácil. La concepción de
conlormar al ejercicio revisor de la Constitución como un proceso com­
4.2. SEGÚN SU REFORMABILIDAD plejo -v en ocasiones, sumamente difícil- estriba en la intención de
asegurarle estabilidad y firmeza a los preceptos constitucionales. Se bus­
que sea reflejo fiel de la reali­
Una buena Constitución será aquella ca hacer de la Ley Fundamental una norma jurídica dura, fija, sin posi­
ar, así como un instrumento efi­
dad del núcleo social que aspire a regul bilidad de alteración más que según el método prefijado o por ruptura
Como toda obra humana, cual­
caz para su conducción en el futuro. re\ ulucionaria.
o tendrá que adecuarse a los La rigidez de la reformabilidad constitucional es en ocasiones criti­
quier Constitución es perfectible
ad social. cada. pues ese conjunto de precauciones se opone a la necesidad de
dinámicos cambios de la misma realid
Karl Loewenstein- que sos­
Aunque existen opiniones -como la de mutabilidad -urgente y eficaz- que a veces demandan los cambios so­
en un documento se adapta a ciales. toda vez que los procesos de reforma establecen trámites que la
tienen "que una Constitución contenida
s de una enmienda constitucional hacen demasiado dilatada. (plebiscito, referéndum, quórum especial,
las transformaciones no sólo a travé
itucional, las reglas convenciona­ etc.).
formal, sino también con el uso const
las instancias gubernamentales, el
les y la interpretación a través de
4.2.2. CONSTITUCIONES FLEXIBLES
icación atiende principalmente
parlamento y los tribunales" .S esta clasif
que las propias leyes fundamenta­
al proceso de reforma constitucional La Constitución flexible es aquella que se puede modificar mediante
Constituciones según los trámites
les permiten. Procura agrupar a las el procedimiento legislativo ordinario sin diferenciarse de la ley ordina­
legal, esto es, en base a las carac­
que deben cumplirse para su reforma ria, es decir, no se requiere ningún órgano especial, sino del legislativo
ntos y órganos facultados común para que pueda ser modificada. Se caracteriza porque viene de
terísticas de los requisitos, procedimie
ón a su texto. la mism a fuente de las leyes ordinarias, y, por consiguiente, puede ser
poder llevar a cabo cualquier modificaci
tituciones se clasifican en: anulada u reformada por el mismo órgano y de la misma manera que
De acuerdo a este enfoque, las Cons
dichas leyes.

4.2.1. CONSTITUCIONES RÍGIDAS Maurice Duverger,11 menciona como una posible ventaja de este
.
tipo de Con
stitución, el hecho de que con el sistema que genera no pue­
Será rígida aquella Constitución, escrita, cuya reforma exige de h aber contradicción entre la ley y la propia Carta Magna, "pues una
procedimiento especial o agravado. ::y , ns
� _ _ � .

que ont radice la Constitu ón es, en realidad, una l y que modifica

Manuel García Pclayo las define como "aquella que para su re Cu _
tituciOn. _
Una constituciOn flexible no tiCne, _ _
. as1, nmguna supeno­
exige un órgano y unos métodos especiales, distintos de los que se pre­ fldad sobre la ley ordinaria".
12
cisan para establecer y reformar las leyes ordinarias. La Constitución
ocupa así una situación privilegiada, posee formalmente una mayor ga-
)()Y GARUA PEi.AYo. Manuel. op. cit., p.
.
131.
lASALLE Ferdinand. op. el/., p. 35.
,
11 DUVERGER ' Mauricc. op. cit., p. 174.
7 BoRJA, Rodrigo, Den:clw Polílico ,. Cmzstiwcimwl... op. cit., p. 324. 1>
- lt mz.. p. 175.
l
8 LOEWENSTEIN, Karl, op. cit., p. 20.8.
54 TEORÍA DE LA CONSTITUCI Ó N
I FICAC IÓ N DE LAS CONSTITUCIONES- R. Contrcra' Bustamantc 55
C L AS

Conviene precisar que existen muy pocas Constituciones flexibles. La mayoría de los tratadistas constitucionales, 15 coinciden en que,
En materia de reformabilidad, la mayoría de los países han preferido
�L,,,ún
el origen de la creación de una Constitución, puede resumirse en
.:--
.

diferenciar entre el Poder Constituyente -sea originario o revisor- y


]a s igu iente clasificación:
los órganos constituidos, en este caso, de índole legislativo. De esta for­
ma, resulta más congruente el principio de superlegalidad colzstitucio­
4.3.1. CONSTITUCIONES OTORGADAS
llal, cuando se diferencia claramente una reserva de poder supremo a
un órgano especial, sujeto a procedimientos excepcionales y solemnes, Son Constituciones Otorgadas aquellas que tienen el carácter de Ley
para que pueda realizar la alteración o modificación de la Constitución,
Suprema, supuestamente como resultado de una concesión que hace el
en lugar de dejar esa tarea en manos de los poderes constituidos, es de­
titular del poder político. La mayoría de los tratadistas coinciden en se­
cir, creados por ella misma.
ñalar que usualmente esta clasificación se refiere al caso de que un rey
Sin embargo, desde este punto de vista, este tipo de clasificación
0 monarca, por gracia hacia su pueblo, le otorgue una Carta Magna,
debe de estudiarse con cuidado, porque si lo que se pretende es analizar
mediante la cual, de manera voluntaria, él mismo acota sus facultades,
el grado de estabilidad y firmeza que tienen las Constituciones, el méto­
concede contrapesos de poder a otras instancias -principalmente los
do de reforma que se observe en un país -sea rígido o flexible-, no ne­
de carácter parlamentario-; y queda subordinado al mandato de la
cesariamente indican el grado y la frecuencia en que se alteran los tex­
propia Constitución.
tos constitucionales.
Como ejemplo, tenemos la Carta Constitucional de Luis XVIII, del 4
La Constitución británica es por antonomasia el arquetipo de las
de junio de 1814, que a sugerencia del inefable ministro Talleyrand y
flexibles, sin embargo, mantiene reglas y principios desde la Carta Mag­
ante el temor del resurgimiento de un nuevo movimiento revoluciona­
na hasta nuestros días, debido a usos y costumbres formados lentamen­
rio, se concluyó que no era posible vivir sin limitar el poder real. Enton­
te y sin fecha precisa de gestación. En cambio, Constituciones rígidas,
como la nuestra, que presupone un proceso de reforma agravado, a la ces el monarca recurrió al subterfugio de dotar de una Constitución a

fecha solamente no ha sido reformada en 35 de sus 136 artículos, a lo su pueblo; Constitución otorgada que tiene apariencia de que es dádiva

largo de poco más de noventa y dos años.13 del rey a sus gobernados.
Pero, en nuestra época, podemos equiparar a esta clasificación a los
Ello se explica por "el espíritu reposado y hasta cierto punto conser­
lineamientos que se disfrazan de Constitución y que emiten las instan­
vador del pueblo inglés, que ha convertido en meramente teórica aque­
cias de poder que resultan triunfadoras después de una irrupción vio­
lla flexibilidad, ya que en la práctica sus instituciones políticas han de­
mostrado tener mayor rigidez que la de los pueblos gobernados por lenta al gobierno en un país determinado -léase Golpe de Estado-
y
constituciones rígidas" .14 que tie ne como fin aparentar un reencauce al
orden legal y procurando
congraciarse con la comunid
ad internacional.
Los detentadores del poder por vía de la fuerza, saben
4.3. SEGÚN SU ORIGEN que en nues­
tr os día s es
intolerable el mantenimiento de gobiernos dictatoriales y
Las causas o circunstancias que generan el nacimiento u origen de prefieren volun
tariamente conceder algunas garantías a la población
una Constitución son muy variables. Históricamente, los procesos de Para disimula r su
presencia hegemónica. Francisco Franco, en España
construcción o transformación de un Estado son distintos entre una Y Augusto Pinoch
et, en Chile, utilizaron con éxito este recurso de conce­
realidad social y otra. La adhesión de una sociedad estatal al Constitu­ der voluntari
amente algo de poder a la población a través de estatutos
cionalismo -es decir, regir su futuro orden social mediante una Ley denomin
ados de carácter constitucional para mantenerse al frente de
Fundamental- puede provenir de decisiones de poder que se hayan sus resp
ectivos gobiernos, de origen de facto
.
motivado o tomado desde diversos aspectos.
li
S e sugiere ver. entre otros. BoRJA,
F
. ·
. .
Rodrigo, op. cil., pp. 330 v 331; CALZADA PADR(JN,
ll clrcranu. lJereclw Constilucimwl, liarla, México, 1'1'10. pp. 136
Los 35 artículos que per·manecen sin reforma, es decir, que conservan su redacción
Dercr·/¡n y 137; MoRENO, Daniel.
Crm.,tilucional 2". ed., Pax-México, pp. 13
originaria desde 1917, son: 7"; 8"; 9";11 "; 12"; 13"; 15"; 23°; 186> ,64"; 68";71"; 75°; \' 14; \', SAYH; llu.t•. Jorge, Jns!ilucin­
nes de .
128"; 129"; 132"; y 136". Derecho Cmzslill lcimwl Mexicmw ... op. cit . p p.
80",81"; 86"; 87", 91"; 118"; 120"; 121"; 124"; 125"; 126"; . 2S v 26.
14 BoRJA, Rodrigo. op. cit., p. 330.
CACI(JN DE LAS CONSTITUCIONES - R. ContJTJ·a, llu,tamantl' 57
1 l \:-;JFI
56 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

4.3.2. Constituciones Impuestas 4.4. CLASIFICACIONES DE KARL LOEWENSTEIN

Las Constituciones Impuestas, surgen cuando es el pueblo precisa­ Karl Loewenstein considera que los criterios de clasificación ante­
mente quien le impone al detentador del poder, condiciones y preceptos riorme nte descritos son anticuados y muestra claramente la necesidad
legales de carácter supremo, para que rijan jurídicamente al país y for­ Lk otros criterios más orientados a la sustancia y a la esencia de la
zándolo a adoptar este tipo de estatuto legal que limita su potestad. Constitución.
Un ejemplo de tal situación, sucedió con la Constitución de Cádiz, La primera clasificación de este autor es la siguiente:
que se creó en 1812 y sirvió para reorganizar a los españoles en contra a) Constituciones originaria .,. y Constituciones derivadas
.

de la invasión napoleónica; y que, Fernando VII, una vez restituido en Scrú originaria la Constitución que contenga un principio funcional
el poder decretó su derogación. Ello obviamente despertó indignación y 110\ cdoso, \·erdaderamente creador y por tanto "original" para el proce­
poco tiempo después, en 1820, se vio obligado, no por libre voluntad, a so del poder político y para la formación de la voluntad estatal.
jurar obedecerla. La reinstauración de la vigencia de la Constitución "La expresión de constitución "derivada" o "derivativa" designa un
Gaditana fue, sin duda, una influencia determinante para la consuma­ tipo de constitución que sigue fundamentalmente los modelos constitu­
ción de la independencia de México y el nacimiento del nuevo Estado cionales nacionales o extranjeros, llevando a cabo tan sólo una adapta­
federal. ción a las necesidades nacionales" Y
Locwenstein opina que las constituciones originarias son relativas y
4.3.3. CONSTITUCIONES PACTADAS absolutamente poco frecuentes, puesto que a lo largo de los años ha ha­
bido poco espíritu inventivo en la creación de leyes fundamentales, lo
Son Pactadas, las Constituciones que se producen por efectos de la
que tiene su razón de ser en el carácter fundamentalmente conservador
lucha de clases, aportando ideas y principios varios grupos sociales, es­
del hombre político, que es por lo tanto adverso, a rupturas violentas
tipulando o pactando todos en someterse a una común Ley Suprema.
con el pasado.
Bajo la teoría del pacto social -por ello también se les denominan con­
El autor alemán sostiene que experimentar con novedades constitu­
tractuales- se pueden derivar de consensos entre detentadores y desti­
cionales suele ser muy peligroso, por lo que solamente movimientos re­
natarios del poder -como diría Loewenstein-; entre grupos revolucio­
volucionarios sociales en gran escala son apropiados para producir
narios, entre representantes de entidades y provincias, etc.
nuevas formas constitucionales.
Como tipos originarios de constitución, Loewenstein dice que entre
4.3.4. OTROS ORÍGENES
los más importantes ejemplos de Constituciones originarias, se pueden

Existen en opinión de diversos tratadistas algunas otras modalida­ considerar:

des en cuanto al origen de una Constitución. Algunos se refieren a las • El parlamentarismo británico;
Constituciones originadas por voluntad de suberwzía popular, que son • El sistema constitucional americano del presidencialismo;
aquellas que son producto de un acto de soberanía popular, es decir, las • El constitucionalismo francés en 1793, que produjo el tipo de go­
que encuentran su origen en la soberanía del pueblo y tienen como bierno de asamblea;
Las constituciones napoleónicas, que introdujeron el cesansmo
fuente de poder al propio pueblo, al cuerpo electoral, a la ciudadanía.

plebiscitario;
(Ejemplo, las dos Constituciones federales mexicanas del siglo XIX).
Otra clasificación que usualmente encontramos en la teoría consti­ • La carta francesa de 1814, que montó la monarquía limitada

tucional. son las Cmzstitucimzes ratificadas, como lo fue la de Estados constitucionalmente con base legitimista; y
Las constituciones rusas "soviet" de 1918 y 1924, que rompieron
Unidos, que después de ser expedida por el Congreso de Filadelfia fue

totalmente con la tradición constitucional de occidente y atribuye­


adoptada por las nuevas entidades federadas o la de Alemania, que en
ro n a los consejos de t ra ba j ado res v campesinos el papel decisivo
el momento de la reunificación de los Estados orientales, después de la
en el proceso del poder.
caída del Muro de Bedín, decidieron ratificar la misma Ley Fundamen­
tal que les había sido decretada po1· los países ganadores después de la
Segunda Guerra Mundial, en lugar de crear una nueva. 1" Lot-.\\1·:'<'-ITIN, Karl, o¡>. cit., pp. 20<J Y 210.
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN .-\SIFICACIÓN DE LAS CONSTITUCIONES - R. Contreras Bustamante 59
58 CJ

Otra clasificación de las Constituciones que propone Loewenstein es: 111ismo de parte de quienes lo detentan. De acuerdo con esto, las Consti­
pueden ser de tres tipos: Nomzativa, Nominal y Semántica.
b) Cmzstituciorzes ideológico-programáticas y Constituciones utilitarias tuci ones
El jurista alemán aporta otro criterio digno de ser tomado en cuen- c.!) Constitución Nonnativa
ta para la clasificación realista de las constituciones, en base al análisis En lugar de analizar la esencia y el contenido de las Constituciones,
de su contenido ideológico, dice que cabría establecer una distinción L'l c riterio del análisis ontológico radica en la concordancia de las nor­
entre las constituciones cargadas ideológicamente o con un programa mas co nstitucionales con la realidad del proceso del poder. Su punto de
filosófico y, por otra parte, constituciones ideológicamente neutrales o parti da es la tesis de que una Constitución escrita no funciona por sí
puramente utilitarias. misma, una vez que haya sido adoptada por el pueblo, sino que una
Todas las constituciones del final del siglo XVIII y principios del XIX Constitución es lo que los detentadores y destinatarios del poder hacen
están necesariamente teñidas de ideología liberal; esta influencia se ma­ de ella en la práctica, es decir, es importante el análisis del medio social
nifiesta latentemente en la distribución de tareas estatales a varios de­ , político donde la Constitución tiene que valer.
·

tentadores del poder, respectivamente controlados, y abiertamente con Loewenstein opina que para que una Constitución sea viva, debe ser
la inclusión en el documento constitucional de un catálogo de derechos dectiYamente vivida por destinatarios y detentadores del poder, tiene
fundamentales. que ser observada lealmente por todos los interesados, y estar integrada
Loewenstein agrega que muchas de las recientes constituciones son en la sociedad. "Para que una Constitución sea viva, no es suficiente que
tan conscientemente ideológicas, "que casi se podría decir que una Cons­ sea dlida en sentido jurídico. Para ser real y efectiva, la Constitución
titución no parece estar completa cuando no está imbuida por todas tendrá que ser observada lealmente por todos los interesados y tendrá
partes de una determinada ideología. Estas Constituciones son frecuen­ que estar integrada en la sociedad estatal. y ésta en ella".20

temente verdaderos catecismos políticos más que indicaciones mate­ En este orden de ideas, sólo cuando las normas de una Constitu­

riales para el desenvolvimiento racional del proceso gubernamental" . 17 ción, dominan el proceso político o, a la inversa, el proceso del poder se

Un conocido ejemplo -agrega- es la Constitución mexicana de 1917, adapta a las normas de la Constitución y se somete a ellas, podemos ha­
blar de una Constitución normativa.
por su expresa orientación hacia un orden social, que califica de "tipo
" 8 El maestro alemán ejemplifica este tipo de Constitución haciendo
socialista .1

una par·áfrasis figurada "la constitución es como un traje que sienta


En cambio las constituciones utilitarias o ideológicamente neutrales
bien y que se lleva realmente".21
se proponen, sin ningún tipo de influencia doctrinal, ofrecer un cuadro
funcional, puramente materialista, destinado a regular sin intenciones c.2) Constitución Nominal
ideológicas declaradas u ocultas, el mecanismo del proceso guberna­ Loewenstein sostiene que "el carácter normativo de una Constitu­
ción no debe ser tomado como un hecho dado y sobreentendido, sino
mental dentro del cual las fuerzas sociales y políticas de la comunidad
que deberá ser confirmado por la práctica".22 Una Constitución puede
deberán enfrentarse en libre concurrencia.
ser calificada de nominal, cuando a pesar de ser jurídicamente válida,
La última clasificación de Loewenstein en su obra "Teoría de la
la diná mica del proceso
Constitución", que al mismo tiempo es la mayormente estudiada, es la que político no se adapta a sus normas, entonces la
Constitución carece de realidad
intitula: existencial.
Lo que la Constitución nominal implica es que los presupuestos so­
e) Clasificación Ontológica .
Ciales Y económ
"La existencia hoy de una Constitución escrita no implica, en abso­ icos existentes en el momento actual operan contra una
c � ncordancia absoluta entre las normas constitucionales y las exigen­
luto, ipso {acto una garantía de distribución y, por lo tanto, limitación
Cias del proceso del poder.
del poder", 19 surge pues la necesidad de desentrañar verdaderamente si
Debido a que quizá la promulgación de la Constitución fue prema­
una Constitución cumple con su cometido de institucionalizar la distri­ tura o a
que la realidad social aún no lo permite, pero en el caso de esta
bución del ejercicio del poder político y, por consiguiente, el control del
�--

20
lOEWENSTEIN, Karl, up. cil., p. 217.
17 Jdun. pp. 211 y 212. ¿1 lhidem.
IH 22
J/Jide111, p. 212. ldem, p. 218.
IY Jdc111, p. 213.
60 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN ICACIÓN DE LAS CONSTITUCIONES- R. Contt-cr<" Bustamante 61
ti \SIF

clasificación, se debe estar frente a una decisión política de buena vo­ t<IL·iones impuestas a las instituciones gubernamentales en sus relacio­
luntad, de parte tanto de los detentadores como de los destinatarios del J1L'S con los ciudadanos, no se respeta en lo general y a veces es letra
poder, de que tarde o temprano la realidad del proceso del poder co­ 111uL·rta. A pesar de todo, justifica Duverger, pueden invocarse los prin­
rresponderá a lo establecido en el texto constitucional. cipios establecidos en tales Constituciones, como un método para resis­
La función primaria de la Constitución nominal es educativa; su ob­ tir 0 enfrentar al poder cuando una dictadura se vuelve menos opresiva
jetivo es en un futuro más o menos lejano, convertirse en una Constitu­ \ categó
ricamente sentencia: "Es mejor una Constitución-programa que
·
ción normativa y determinar realmente la dinámica del proceso del po­ ninuuna Constitución".2�>

der en lugar de estar sometido a ella.


Para continuar con el símil, Loewenstein agrega: "el traje se cuelga
cierto tiempo en el armario y será puesto cuando el cuerpo nacional
haya crecido".23

c.3) Constitución Semántica


Esta Constitución es la que siendo plenamente aplicada, su realidad
ontológica no es sino la formalización de la existente situación del po­
der político en beneficio exclusivo de los detentadores del poder fáctico,
que disponen del aparato coactivo del Estado.
Mientras la tarea original de la Constitución escrita es limitar la
concentración del poder, dando posibilidad a un libre juego de las fuer­
zas sociales de la comunidad dentro del cuadro constitucional, en este
tipo de Constitución semántica, el proceso es inverso, la dinámica so­
cial, restringe su libertad de acción y es encausada en la forma deseada
por los detentadores del poder. En lugar de servir de limitación del po­
der, la Constitución es aquí el instrumento para estabilizar y eternizar
la intervención de los dominadores fácticos de la localización del poder
político.
Para demostrar el efecto que realmente produce una Constitución
semántica, el alemán concluye que de acuerdo al ejemplo anteriormen­
te utilizado "el traje no es en absoluto un traje, sino un disfraz".24

4.5. OTRA CLASIFICACIÓN

El maestro francés, Maurice Duverger, aporta otra interesante clasi­


ficación. Argumenta que se han diferenciado dos clases de constitucio­
nes: las Constituciones-Ley, que son aquellas que imponen obligaciones
y limitaciones estrictas a los gobernantes y se aplican de manera efecti­
va; y las Constituciones Programa, de alcance más débil, que "definen
un proyecto ideal o simulado y no contienen obligaciones jurídicas en
sentido estricto".25 Es decir, la parte referente a las obligaciones y limi-

2.1 1 hidem.
24 Jdem. p. 2 I 9. 26
lde
zs DuvERGER. Mauricc. up. cit . 28.
. m, p. 29.
Unidad 5

Vertientes ideológicas
del Derecho Constitucional

JuAN JosÉ MATEos SANTILLÁN'

5.1. INTRODUCCIÓN

Para algunas corrientes contemporáneas el fenómeno constitucional


puede ser estudiado en sentido amplío, interpretación que nos conduce
a concebir la idea de que en tanto exista una sociedad organizada esta­
ble, existirá una serie de normas que definirán la estructura de dicha
organización social, en este sentido puede encontrarse una correlación
que equipare el concepto de Constitución a la idea de una norma funda­
mental de organización escrita o verbal, de ésta forma podemos encon­
trar \a liosos ejemplos como las constituciones de la Grecia Clásica o
como nos indica la mayor parte de la doctrina mexicana, el caso de
Juan sin Tierra y la Carta Magna de Inglaterra.
A los ejemplos anteriores nos permitiríamos añadir, siempre en la
.
Interpretación
más amplía, la experiencia española en la materia, como
Podrían ser las Siete Partidas de Castilla o los llamados Fueros de Ara­
gón por citar
simplemente dos ejemplos de nuestra tradición jurídica.
Frente al estudio amplío del proceso histórico evolutivo de las cons-
.
htucion"s
. encont ramos una tendenCla
�. , .
. mayontana . que nos 11eva a una
I nt e rpr "
t·ac10· n forma 1 de d'1ch o proceso, de ta1 suerte que nos rem1te a
·
� · ·

dos orí
genes concretos, pm· un lado, al movimiento constitucionalista
que se
dio en los Estados Unidos de América a raíz de la independencia

eh • Mae,tro en la División de Estudios de Posgrado, así como, en la Facultad de Derc-


0 de la UNAM.

63
64 TEORÍA IJF LA CONSTIT\JCIÚN \JI< i!F'iTF
S IDEOLÓGICAS DEL DERECHO CONSTITUCIONAL J. Mateos Santillún 65

de las trece colonias de América del Norte y por otro el pensamiento


\ arse en España hasta el siglo XIX, si bien inició su declive en el siglo XV,

enciclopedista que sirvió de prolegómeno a la Revolución Francesa v su


c1111 e l descubrimiento de América y la concreción y predominio del po­
dl·r rea l sobre el feudal, cabe mencionar que el feudalismo como siste-
consecuente movimiento constitucional, el cual comienza con su famo­
sa declarac ión de los derechos del hombre y del ciudadano, a los que 111�1 de producción sobrevivió en Europa hasta el advenimiento de las
n·\ o lu c iones liberales.
s implemente agregaríamos el impacto que tuvo en el mundo hispano,
En el feudalismo se daba la división del territorio del reino en feu­
particularmente en el latinoamericano, la invasión napoleónica a Espa­
dos. como recién se ha dicho, y donde el señor feudal tenía dominio so­
ña y como consecuencia la creación de la Constitución de Bayona y en
bre la tierra y las personas que la habitaban, no obstante, estos señores
especial la Constitución de Cádiz.
a su \ ez, dependían de otros señores más poderosos o incluso del rey,
Completa la unidad, el estudio del llamado constitucionalismo so­
cabl'la de la monarquía.
cial, que se estudia frente al constitucionalismo liberal que caracterizó
Para efectos prácticos debemos señalar que el sistema feudal bien
al pensamiento decimonónico y alguna visión crítica del constituciona­
pudiera ser entendido como el extremo opuesto del sistema monárquico
lismo contemporáneo desde la perspectiva del neo institucionalismo.
absoluto, algo así como enfrentar totalitarismo y anarquía, no porque la
monarquía o el feudalismo se caractericen por ser formulas que nos in­
5.2. ORÍGENES duzcan necesariamente a un escenario previamente establecido, sino
DEL CONSTITUCIONALISMO MODERNO porque el poder del rey varía de extremo a extremo, es decir, en el siste­
ma feudal de la alta edad media, el poder del rey se encuentra limitado
5.2.1 JUAN SIN TIERRA por el ejercicio del poder de los señores feudales, en tanto que en la
edad moderna, el poder real se transforma en absoluto por no tener con­
El abordar un tema tan complejo como la naturaleza y contexto de
trapesos.
la Carta Magna, implica necesariamente una serie de reflexiones que
Para entender el papel que juega una constitución en un sistema
nos permiten ubicar el sentido de esta constitución inglesa, en medio de
como el feudal, es necesario diferenciar los distintos grados que alcan­
un contexto cabal, cuestiones que en conjunto nos conducirán a vislum­
zaron las formas feudales en los principales reinos de Europa, de esta
brar el sentido de una monarquía constitucional y en especial el papel
forma el feudalismo nace en Francia y es en dicho reino donde alcanza
de la Constitución.
maYor fortaleza, al grado que el poder regio es casi un poder virtual
Antes de abordar el tema en su sentido histórico, debemos advertir
frente al poder de los feudales, incluso, cuando el rey intenta reclamar
que la carta magna de 1215 admite en cuanto su valor formal como
sus derec h os, facultades y prerrogativas como derivaciones del poder
constitución algunas discrepancias ante las diversas escuelas jurídicas
imperial, la nobleza y el clero lo enfrentan con el argumento que el po­
que abordan su estudio, pues quienes estudian la materia en sentido
der de los nobles deriva de la misma fuente que el poder real, y en con­
amplío la ubican como una verdadera constitución, en el más amplío
s ecuencia, sus prerrogativas son tan sagradas como las del rey. 1
sentido de la palabra, en tanto que quienes siguen un criterio formalista
Ing laterra y España imitaron el feudalismo
francés y su caracteriza­
suponen que no tiene todos los requisitos que debieran tener para con- Ci. o, n adq uirió
particularidades que los diferencian del modelo imitado,
siderarla como tal. en el caso
español, los autores que le estudian coinciden en que el esta­
Sin embargo, más allá de la polémica sobre su clasificación, la Car- d_� Permanente de guerra frente a los moros,
generó una mayor cohe­
ta Magna de Juan sin Tierra constituye un documento de gran interés Sion �oc
ia] que se puede observar en la necesidad
de aglutinarse entor­
histórico, por su contenido, por sus i mplicaciones y efectos en el pensa­ no a la
figu ra regia, aún cuando en la misma España cabe diferenciar
miento anglosajón y universal. � nt re el feu
-

dalismo atemperado que se dio en Castilla y León, del feuda-


de
Debemos señalar que la Carta Magna inglesa se dio en el año lsmo
nüis activo que se dio en Aragón
zada por el llam a­ y del prototipo francés que impe­
1215, es decir, en plena Edad Media, etapa caracteri ra en Cata luña.
una poliarquía en la que
do feudalismo, concebido pOI- algunos como
un reino se dividía en un conjunto de feudos,
al f n:nte del cual existía un

del feud alis mo se encuL·nti-a en la crisis d :llcic/opediu lfnin-rsu/ Ilustrada l:'uropeo Alllericunu, Espasa Calpc, XI M a-
señoL El punt o d e pai-tida nd 1'111. tomo
.

o de vista político puede obser- p. 1133.


del bajo im pedo romano y desde el punt
"iTES IDEOLÓGICAS DEL DERECHO CONSTITUCIONAL - J. Matem Santillán
66 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN \ ¡ RliE 67

En Inglaterra el feudalismo tuvo características especiales que se broke. quienes en un principio solicitaron al rey les concedieran los de­
agudizaron básicamente porque con el reinado de los Plantagenet, el
rL·chos contenidos en la Carta Magna, sin embargo, Juan sin Tierra con­
poder monárquico se concentró en forma tal, que se puede percibir,
silkro que firmar tal documento le transformaría de rey en vasallo.4
una clara tendencia hacia el absolutismo, en detrimento del modelo feu­
·

Ant e la negativa del rey, los barones se proclamaron un ejército de


dal que anteriormente habían impuesto los monarcas germanos.2 El in­ ' de su Santa Iglesia y entraron en Londres el 24 de mayo con el
Dios
tento de absolutismo iniciado por Enrique II (1154-1189) enfrenta a los bcnL·plácito del pueblo. El9 de junio de 1215, en la pradera de Runnye­
nobles sometiéndoles a nuevos impuestos, a la Iglesia sujetándola a las Jkad. a orillas del río Támesis y a 8 Km de Windsoc se firmó la Carta
constituciones de Clarandon, mediante las cuales la iglesia se subordi­ ¡\hw:na de Inglaterra ratificada por los herederos al trono de Inglaterra
naba a los agentes reales y puso inspecciones, que generaron un profun­ has�a los estatutos reformados de Eduardo I en 1298.
do descontento que se concretó en el enfrentamiento entre la nobleza y No bien Juan sin Tierra tuvo oportunidad de rehacerse, rompió su
el rey, donde finalmente prevaleció el poder real, sin embargo, no per­ juramento y acudió al Papa para que lo eximiese de su obligación, los
duro gran tiempo la hegemonía real, los hijos de Enrique II se caracte­ barones tomaron las armas apoyados por el rey de Francia y combatie­
rizaron por una serie de defectos que produjeron nuevos enfrentamien­ ron al rey Juan hasta su muerte en 1216. Cuando Enrique III. hijo de
tos, el sentido aventurero y temerario de Ricardo Corazón de León Juan sin Tierra subió al trono, ratificó la Carta Magna para que perma­
quien gobernó de 1189 a 1199 y la pusilanimidad de Juan sin Tierra, neciera desde aquellas épocas en el derecho público de Inglaterra. 5
rey de 1200 a 1216 generaron la oportunidad para que los nobles reba­ Para efectos de nuestro estudio, puede decirse que la Carta Magna
tieran el poder absoluto que intentaba detentar el rey. significó una verdadera constitución para Inglaterra en un sentido am­
Las luchas europeas se agudizan con los gobiernos de los hijos de plío, toda vez que a lo largo de sus 63 artículos encontramos una serie de
Enrique II pues el reinado de Ricardo se caracteriza por ser eminente­ derechos que servían a la nobleza o al clero o a los burgueses, por un
mente militar y las tendencias absolutistas, sin el respaldo adecuado, lado , v por otro, establecía una serie de principios que servían para re­
generaron una profunda inconformidad en el interior de Inglaterra, de gular el ejercicio del poder público, es decir, aun cuando de manera de­
esta forma se encontró en medio de un conflicto europeo, en el cual sordenada, encontramos una parte orgánica y una dogmática en el cuer­
Juan Sin Tierra se alió con los güelfos de Alemania y los reyes de Fran­ po de su texto, sin que con esta afirmación pretendamos equiparar la
cia apoyaron a los Honenstaufen, donde prevalecieron los intereses de figura de las constituciones modernas a la multicitada Carta Magna en
estos últimos con Otón IV y el rey Juan.1 un sentido estrictamente formal, aún cuando materialmente persiguen
La derrota de Bouvines condujo a Juan Sin Tierra enfrentar el con­ fines similares con una metodología parecida.
flicto interno en condiciones precarias, con un grupo de aliados diez­ En cuanto al contenido de la Carta Magna, podemos encontrar a lo
mado por la derrota y en un ambiente de molestia por los nuevos im­ largo de sus 63 artículos una serie de principios entre los que destacan
el principio de libertad a favor de la Iglesia, todas las libertades para los
puestos que se cobraron para sostener la guerra en el continente.
La lucha unificó a los nobles, el clero y los habitantes de los burgos, h? mbres libres, una delimitación de las obligaciones feudales, estable­
Cieron que ya no podían existir impuestos sin la aprobación del consejo
frente a los intentos absolutistas del monarca, desde 1213 se había reu­
de los nobles, base del Parlamento inglés. En cuanto al derecho penal, se
nido un consejo de nobles con la finalidad de redactar un documento en
el que se establecieron los derechos de la nobleza frente al rey lo mismo
�stabl�ce que ningún hombre libre puede ser privado de la vida o propie-
que los derechos de los aliados, el clero v la burguesía; de esta forma, ?
a , smo
mediante sentencia judicial y conforme a la letra de una ley que
as¡ lo estip
después de una serie de reveses en Europa y frente a la presión de los ule.
barones, la monarquía cedía espacios paulatinamente.
La Carta Magna fue impuesta al monarca Juan sin Tierra por los 5.2.2. LA TRADICIÓN HISPANO MEXICANA
nobles de Inglaterra, entre los que se encontraban el arzobispo Esteban
Como hemos observado, en el escenario feudal de Inglaterra los
Langton, Roberto Fitz-Walter, Eustaquio de Vescy y Guillermo de Pan· equ i. lib r
ios políticos entre los actores sociales se racionalizaron y con-

2 PlRt'��L Henri, 1/iswria de l:·uropa. desde las ún•asi<me., al siglo Xl'l, FCE Sa.
5
4 E ncic/opedia
reimp., México, IlJ8S, p. I87. Universal Ilustrada, op. cit., tomo XI, p. 1421.
PiRRENE H., op. cit., p. 179
' Jhid<!lll. .
VIFS IDEOLÓ<dCAS DEL DERECHO CONSTITUCIONAL J. Mat<·m Santillün 69
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN \'l K ¡JF
68

a, de la misma forma, en el resto


de Jll ) (>
del imperio nos conducen a un sistema dual del ejercicio del poder
cretaron en la llamada Carta Magn
servi rá y ello permite la generación de las condiciones propias para la
adera revolució n juríd ica que 11·1hlic o
Europa. al amparo de una verd
de parte aguas a la Edad Media
y nos permitirá ubic ar a la Alta Edad �.,istcncia de una constitución del reino, si se permite hablar de una
lleva- constitución
en una acepción amplía del vocablo, de suerte tal, que para
Edad Med ia, se da un descubrimiento teórico que
Media y la Baja
l!a r�1 11t izar sus derechos, los feudales recurrieron a diversas manifesta­
prácticas.
rá consigo grandes implicaciones
a sus ídicas tendientes a limitar el poder en un ámbito de respeto a
ubre en el Nort e de Italia, los reyes enviaron :·iom·s jur
Cuando se desc
desv ia­
un nuevo sistema jurídico que se los factores reales de poder del reino, como fue la nobleza feudal. el cle­
asesores y estudiantes a buscar
juríd ica ro­ ro , los burgueses, adoptando en cada país o reino características espe­
osiano y abrazaba la línea
ba de la tradición romana de teod
idad de fortalecer la figura del rey frente cíficas. como fue el caso de la Carta Magna de Inglaterra, las Siete Par­
mana de Justiniano con la final
la del emperador romano. tidas de Castilla o los Fueros de Aragón.
a los feudales y equiparada con
as
formación teórica surgirán figur Así como una de las principales características políticas de la Edad
Como resultado de esta trans
de
de Castilla o los fueros en el reino Media es el feudalismo, la Edad Moderna se va a caracterizar por un
como las Siete Partidas en el reino
as juríd icas en las que se esta­ proceso inverso a la división de poder que caracterizó a la Edad Media,
ron norm
Aragón, en ambos casos, se crea
enía
men te la estru ctura del poder en el reino, es decir, cont de suerte que el análisis de los factores políticos de la edad moderna,
blecía clara
cara cterí stica s y atrib u­ nos conducen a observar el crecimiento ilimitado de la monarquía fren­
establecían las
una parte orgánica en la que se
siste ma juríd ico para te al poder de los nobles, la iglesia y los burgueses.
y los nobles y un
ciones que tenía el rey, la iglesia
de los hom bres del reino y que se protegían en Cas­ Será precisamente esa declinación del poder feudal a favor del cre­
tutelar los derechos
según
en cuatro magníficos recursos, cimiento del poder real una de las razones que nos explicarán las cau­
tilla por vía del amparo, dividido
equiv alent e sas que se dieron para que se fuera gestando la Revolución Francesa,
el recurso de manifestación
nos narra José Barragán,6 o por
rior, al que se sumaban las llam como pasaremos a explicar.
al habeas corpus inglés, pero ante

Guill én,7 sin olvidar la figura del "Just Luis XIV de Francia reinó de 1643 a 1715, es decir 72 años, su rei­
letras según nos explica Fairen
dif1
regulaba, entre otras cosas, las nado estuvo lleno de contrastes, por un lado puede señalarse que enca­
cia de Aragón" juez medio que
form a, en mi pers onal opin ión, si bezó un gobierno despótico y por otro, bajo su mando Francia alcanzó
esta
cias entre el rey y los nobles, de
se pued en enco ntrar perfe ctas un gran desarrollo e importantes victorias militares, sin embargo; para
se estudia con detalle la materia
as
la Cart a Mag na Ingle sa, las Siete Partidas Castellan efectos de nuestro trabajo simplemente nos concretamos a señalar que
lencias entre
de verd ader as cons u­ durante el reinado de Luis XIV, la nobleza feudal francesa perdió prác­
s ellos el valor
los Fueros Aragoneses y dar a todo ticamente todo el poderío que le caracterizó durante la Edad Media, a
aún cuando bien pudi eran enco
tuciones en un sentido amplío c � mbio, el monarca instituyó un sistema centralizado en extremo que
tal calif icati vo en un sentido formal.
objeciones para darle giraba en torno a la figura real y que tiene su mejor descripción, céle­
bre frase de Luis XIV "el Estado soy yo", divisa que caracteriza perfec­
5.2.3. PROLEGÓMENOS, HECHOS
tamente la
Y LOGROS DE LA REVOLUCIÓN FRANCESA dimensión de la monarquía absoluta.
L uis XV de Francia gobernó de 1715 a 1774 fue bisnieto de Luis XIV
o anterior, se debe de establ Y no tu vo el
Tal y como sostuvimos en el punt brillo de su bisabuelo, bajo sus 59 años de reinado se acre­
icio centó la
división del poder o del ejerc deuda pública en perjuicio de grandes sectores de la población
una correlación directa entre la
siste ma de gobi erno , esto � ue se vier
cíficas del on afectados por los excesivos gastos que se reflejaron en el sis-
poder y las características espe o
del pode r públ ico, com rna tnbutar
del ejercicio io francé s a grado tal. que la miseria se extendió por el rei-
en un escenario fragmentado del no, n
surg en al inte rior
os de poder que e medio de un sistema monárquico absoluto sin contrapesos rea-
fue el feudalismo, los equilibri l es · ·

8 � Ituac10n que condujo al reino a un proceso de descomposición que


. -

e VIo ag
'

lo., cuatro recursos de ravada a la muerte del rey.


a� cmtsidcraciollO .>u/m.'
BARRAGÁN BARRA<;Á:-;, José. Algzm .
Guadalajara, 2". cd. Guadalajara, Lui X
0
das. Uni,· crsid ad de h s VI de Francia accedió al trono de Francia en 1774 y gobernó
paro ,-,·,�ulw/os por las siete parn s a
co, 2000. los juicios de lllll{Jaro, u
: � 1 791, fue nieto de Luis XV y recibió un trono en condici ones pre-
c rias
7 rAIREN GliiLL(.N, Vícto
r. Atuecedell/t!S Arag<meses de deb'I do a 1 as cond'ICiones socJoeconomicas en que se enco ntraba
· ,

México, 197 1.
· ' ·
TES IDEOLÓGICAS DEL DERECHO CONSTITUCIONAL J. Matms Santillán 71
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN \ l· R 11 ¡:>;
-

70

sión la expresión de Luis XV Ahora bien, la nobleza no solo dejo su papel protagónico en manos
sobre todo si se valora en su justa dimen que tuvo que enfrentar una variable económica que habría
io". del I"L'-'· sino
cuando sostuvo "después de mí, el diluv rle a una crisis en la que cedería su poder a una clase social en
expue sto tenem os algun os eleme ntos que nos permitirán des­ de ¡k\ a
Con lo la burguesía, entre las múltiples razones que nos explican este
ución Francesa y los hechos scL·nso;
cribir las causas que generaron la Revol
a
contramos que el concepto de riqueza se modificó y ya no bas­
¡· elemento para entender el \irajc. en
que le precedieron, de esta forma, el prime propietario de la tierra para ser rico, sino que se empezó a ge­
social que vivió Francia durante
taba SL'r
complejo proceso de descomposición a nueva forma de valorar la tierra, nos referimos a la riqueza
nL·rar un
XVI. es relativo a la pérdida de
el gobierno de Luis XIV, Luis XV y Luis que sumada al papel que desempeñó el comercio y la indus­
mobiliaria
rquías absolutas, de tal suerte
contrapesos que caracteriza a las mona tria a raíz de los grandes descubrimientos geográficos generaron una
forma irresponsable, es decir so­
que el ejercicio del poder se afecta de nuc\·a fuerza a la que nunca se sumo la nobleza continental europea.
reyes solo admitían como supe­
bre toda norma, en este escenario, los Derivada de la concentración del poder y como explicación paralela
separaban de toda obediencia je­
rior a Dios directamente, con lo que se 0 comple
mentaria de la inadecuada distribución de la riqueza, tenemos
pueblo.
rárquica ante la Iglesia, los nobles y el a la figura de la corrupción, que jugó un papel determinante en la de­
El ejercicio del poder sin contr apeso s conduce al abuso más tarde o gradación social de Francia, que la condujo a la Revolución.
ia se sintieron omnipotentes,
más temprano. cuando los reyes de Franc Un factor explicativo de cómo se expandió la idea de la revolución
en la Edad Media desapareció y
el papel que había jugado la nobleza es el relativo al papel que jugaron los intelectuales en la difusión de una
.
los nobles se convirtieron en cortesanos nuna concepción de la vida, se abandonan las concepciones tradicio­
s privil egiad o la importancia del papel que
Hasta este punto hemo nales v se gene1·a una nueva visión existencial por vía de variables filo­
sin emba rgo no debemos olvidar que
jugaba la nobleza frente al rey, sóficas y de un movimiento llamado enciclopedismo.
la histor ia de Francia. Desde
Iglesia jugó un papel primordial en El papel que jugaron Montesquieu, Voltaire y Rousseau, junto a
cierto la reforma protestante
tiempos de Cario Magno y si bien es otros menos famosos como Condillac y Condorcet y dos destacados en­
al clero católi co en Francia,
renacimiento no afectó directamente ciclopedistas como Diderot y D'Alambert fue determinante para generar
la influencia del protestantismo
bién es cierto que al paso de los años una nueva ideología que habría de servir de base para la difusión del
que jugaban la Iglesi a protest pensamiento revolucionario.
el reino se hizo evidente por el papel
presiones que ejercía la lg La complejidad de la situación convirtió a Francia en un verdadero
frente al rey, que se diferenciaba de las
an, y más aún, las implicaciuu� polvorín, cuya explosión generalmente suele atribuirse a los errores del
Católica frente a los reyes que le seguí
el ánimo de los intelectuales gobierno de Luis XVI quien ante la presión social adoptó una serie de
que tuvo el pensamiento protestante en m edidas tendientes a mejorar el ambiente social, tales como la aboli­
de la revolución.
enciclopedismo y posteriormente ción de to rtura, la
una variable notoria entre el modificación del sistema tributario y comercial, así
En los aspectos económicos existe co mo unas
a de administración ce mejoras liberales, sin embargo, el rey mostró una debilidad
tema de administración feudal y el sistem
que dejar á un profundo i ��e no había caracterizado a sus predecesores, de esta forma, ante la pre­
zada de la monarquía absoluta, misma Sio n amb ió
que a partir de ese momento .: a los ministros Malesherbes y Turgot, por Necker, quien co­
en las regiones periféricas del reino, ; eh el error
o de poder. Pero las tra � político de publicar los estados financieros del país y evi-
transforman en lugares remotos del centr en cia r la
ineptitud de la corte, lo que le condujo a salir del gobierno.
las derivadas del sistema poi
maciones económicas no paran en La sustitución
a dos ámbitos distintos como de Necker no fue la idónea y la situación continuó
como la recién enunciada, se extiende :!r av ndose al
.á grado que se recurrió de nueva cuenta a Necker para
de comercio como resultado de
industria y el cambio en los sistemas �Cio nar el problema económico que aquejaba el reino.
eos que condujeron a la conq de· o Luis XVI se
distintos proyectos imperiales europ J :o�ve ncer por su ministro que lo complejo de la situación político
nía por las distintas potencias de la econo
de América, Asia, África y Ocea mlca se
.
. encontraba en a convocatona a Cortes Generales, como
d
sfo
do y su comercio, con las tran '
suce
ca, que se repartieron el mun Ia. en la Francia medieval 1 y no acontecía desde
en dicho la última vez que
se
que cons ecuentes, r eun,er
nes comerciales e industriales
le fuer on
on en 1614.
ante y en co
día
arquía fue preponder
cenario, el papel de la mon li�y en día queda claro que la solución era equ i voc ada si se
n los monarcas fuero tan
n significativas, a
preten­
las ventajas que obtuviero s var los intereses del rey, pues si se mira el problema con el debi-
erioridad sobre los nobles.
permitieron una clara sup
72 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN \ ¡
R
¡¡¡-�TES IDEOLÓGICAS DEL DERECHO CONSTITUCIONAL - J. Matt""' Santillán 73

do cuidado, puede apreciarse que en toda la vida de la monarquía abso­ 5.2.4. DECLARACIÓN DE LOS DERECHOS DEL HOMBRE
luta no se recurrió a los Estados Generales porque el rey reunía el po­
L; no de los fines de la Asamblea Constituyente fue precisamente for-
der de dichos estados en su persona, de suerte tal que la convocatoria a
Cortes Generales simplemente hizo evidente lo que el reino suponía, la 111�1r una constitución, desde un principio juraron los diputados del Ter­

debilidad política de Luis XVI. CL'r E s t a do que no se separarían hasta alcanzar su objetivo. Meses des­

También hoy en día la neo-institucionalistas sostienen que el siste­ puL'� L'l 4 de agosto de 1789 se dio un paso fundamental en la lucha

ma electoral afecta al sistema de partidos y la conjugación de ambos co11tra el absolutismo al abolirse los privilegios de la nobleza; el 26 de

modificará al sistema de gobierno, de esta forma cobran relevancia dos a"osto de 1789 se aprobó mayoritariamente la llamada "Declaración de

medidas que se tomaron para reunir a las Cortes, por un lado se esta­ lt:s lJL'r c chos del hombre y del ciudadano" que se consagraron en los si­
bleció que el estado llano, es decir, la representación del pueblo tendría guientes 17 artículos:
el mismo número de diputados que los otros dos estados, la nobleza y el Art. l.-Los hombres nacen libres e iguales en derechos y las distincio­
clero. m·� sociales no pueden fundarse más que en la utilidad común.
Después de la elección la composición de los Estados Generales que-
Art. 2.-El objeto de toda sociedad política es la conservación de los de­
dó de la siguiente forma, de 1130 diputados en total:
rL·chos naturales e imprescriptibles del hombre. Estos derechos son la liber­
291 del clero,
tad. la propiedad, la seguridad y la resistencia a la opresión.

• 270 de la nobleza,
Art. 3.-El principio de toda soberanía reside esencialmente en la na­
• 578 del Tercer Estado, el pueblo.
ciún. Ningún individuo o corporación puede ejercitar autoridad que no

Tradicionalmente en un esquema gobernado por un rey fuerte, polí­ L'mane expresamente de ella.

ticamente hablando, la votación se hacía por ordenes, es decir, el valor Art. 4.-La libertad consiste en poder hacer todo aquello que no daña a
individual de cada diputado no era determinante al final de la cuenta, otro: por tanto el ejercicio de los derechos naturales del hombre no tiene
sin embargo, en la sesión inaugural del 4 de mayo de 1789 se pretendió otros límites que aquellos que asegw·an a los demás miembros de la socie­
hacer una modificación substancial al procedimiento legislativo, se vo­ dad el goce de los mismos derechos. Estos límites sólo pueden ser determi­

taría por diputado, en lugar de ser por ordenes, de esta forma el peso nado� por la ley.

de la asamblea de diputados se alteraba fundamentalmente, ya no era la Artículo 5. La ley no tiene el derecho de prohibir sino las acciones noci­
nobleza y el clero frente al pueblo, eran 561 diputados frente a los 578 ' as a la sociedad. Todo lo que no está vedado por la ley no puede ser· impe­
diputados del estado llano, situación que condujo a la fractura de asam­ dido ' nadie puede ser constreñido a ejecutar lo que ella no ordena.
blea en virtud de la oposición. Ar·t. 6.-La ley es la expresión de la voluntad general. Todos los ciudada­
El 17 de junio de 1789 el estado llano se declaró Asamblea Constitu­ nos tienen el derecho de concurrir
a su formación personalmente o por re­
yente, es decir, reasumió su soberanía frente al rey, acorde a las anti­ presentantes. Debe ser la misma
para todos, sea que proteja o sea que casti­
guas tradiciones y en consecuencia de las recientes teorías expuestas en gue. Todos los ciudadanos siendo
iguales a sus ojos, son igualmente
ad misibles a todas las
el libro "El Contrato Social" de Juan Jacobo Rousseau. dignidades, cargos y empleos públicos, según su ca­
pacidad, sin
ningún otra distinción que su capacidad y su talento.
El gobierno intento limitar los trabajos de la Asamblea sin conse­
guirlo y la situación empeoro para el rey pues el 22 de junio de 1789 el An. 7.-Ningún hombre
puede ser acusado, arrestado ni detenido sino
en los casos
rey aceptará la mayor parte de las peticiones populares, sin que tal res­ determinados por la ley con las formalidades prescritas por
ella. Aquellos
puesta satisficiera al estado llano, en tales circunstancias el rey ordeno que soliciten, expidan o hagan ejecutar órdenes arbitrarias,
deben ser
a los diputados de la nobleza y del clero que no habían participado, se castigados; pero todo ciudadano llamado o arrestado por
la ley
debe de
obedecer al instante, y al resistirse se hace culpabl
integraran a la Asamblea. e.
La agitación popular se hizo inconfrontable, el 14 de julio de 1789 Art. 8.-La ley no debe de establecer más penas que las estr·ictas v evi­
el p ueb lo se encamina a la bastilla y l a toma, hito histórico que la poste· dentemente necesarias, y nadie puede ser· castigado sino en vinud de una
r·idad tomó como la fecha de inicio de la Revolución Francesa. k v establecida anteriormente al delito y lega l men t e aplicada.
74 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
\"!!<!lENTES IDEOLÓGICAS DEL DERECHO CONSTITUCIONAL J. M,llcos Santillán 75

Art. 9.-Debiendo todo hombre presumirse inocente mientras no sea de­


clarado culpable, si se juzga indispensable arrestarlo todo rigor innecesario
Fueros de Aragón, ni tampoco debemos olvidar que muchos de esos
1ri n cipios ya se encontraban en las constituciones particulares de los
para apoderarse de su persona debe ser severamente reprimido por la ley.
b.;ta dos que conformaron la Unión Americana y en la misma Constitu­
Art. 10.-Nadie debe ser molestado por sus opiniones, aunque sean reli­ ciún de los Estados Unidos de América de 1787.
giosas, con tal que su manifestación no turbe el orden público establecido El pueblo no se conformo con la Declaración de los Derechos del
por la ley. ho111bre v del ciudadano, los ánimos continuaron encendidos de forma

Art. 11.-La libre comunicación de las opiniones y de los pareceres es un


que a principios de octubre de 1789 se dirigió la multitud a Versalles de

derecho de los más preciosos del hombre: todo ciudadano puede por tanto donde condujeron al rey a Paris.
En cuanto a las corrientes en que se dividió la Asamblea Constitu­
hablar, escribir y estampar libremente, salvo por la responsabilidad por el
abuso de esta libertad en los casos determinados en la ley. yente en esta primera etapa, encontramos al grupo de los jacobinos, el

Art. 12.-La garantía de los derechos del hombre y del ciudadano nece­
de loscordeleros y los fevilants. Luis XVI pronto se dio cuenta que las
circunsta ncias le eran cada vez más adversas, esto se hizo patente de di­
sita una fuerza pública, esta fuerza es, por tanto, instituida en beneficio de
versas formas, a grado tal llegó la situación, que ya no bastó su inten­
todos y no para la utilidad particular de aquellos a quienes es confiada.
ción de apoyar la constitución, antes huyó de París hacia Montmendy,
Art. 13.-Para el mantenimiento de la fuerza y para los gastos de la ad­ sin que pudiera alcanzar su objetivo pues fue descubierto en Varennes y
ministración es indispensable una contribución común, que debe ser repar­ conducido a París.
tida entre todos los ciudadanos en razón de sus medios. El 14 de septiembre de 1791 el rey aceptó la Constitución, el 25 de
septiembre de 1792 la familia real fue destituida y se proclamó la Repú­
Art. 14.-Todos los ciudadanos tienen el derecho de comprobar, por si
blica. el rey juzgado por delito de traición fue decapitado el 21 de enero
mismos o mediante sus representantes, la necesidad de la contribución pú­
de 1793.
blica, de consentirla libremente seguir su empleo y determinar la cualidad,
La creación de una constitución no calmó los ánimos, tampoco lo
la cuota, el método de cobro y la duración.
haría la muerte del rey, los problemas económicos de Francia intenta­
Art. 15.-La sociedad tiene derecho para pedir cuenta de su administra­ ron resolverlos incrementando los impuestos y la situación degeneró en
ción a todos los empleados públicos. un baño de sangre. La constitución de 1791 tuvo una vida efímera,
sin
embargo, más allá de los excesos, la lección que nos legó la Francia
Art. 16.-Toda sociedad en la cual la garantía de los derechos no está ase­ re­
volucionaria en su lucha contra el absolutismo dejó profunda
gurada, ni determinada la separación de poderes, carece de Constitución. huella en
la humanidad.
Art. 1 7 .-Siendo la propiedad un derecho inviolable y sagrado, nadie El artículo 16 de la declaración de los derechos del hombre y del
puede ser privado de ella, sino cuando la necesidad pública, legalmente jus­ ciudadano creó una
corriente constitucional que perdura hasta nuestros
tificada lo exija evidentemente y a condición de una justa y previa días; una
constitució n debe de contener las garantías que aseguran los
indemnización. derechos de
los hombres y una parte orgánica en la que se establece la
forma en
El rey no acepto sancionar la declaración, sin embargo su texto se que se encuentra dividido el ejercicio del poder público.
incluyó en la Constitución que se juró el 14 de septiembre de 1791.
En cuanto al contenido de la declaración, por lo demás muy elo­
5.3. CONTENIDO LIBERAL
cuente, simplemente nos concretamos a señalar algunos aspectos rele­
vantes: en principio que es manifiesto su espíritu iusnaturalista, que se C uan
advierte en cuanto a la manifestación genérica de que todos los horn­
�al contedo se estudia el papel que desempeñaron en la historia univer­
mporánea la Revolución Francesa y la independencia de las
bres nacen libres e iguales, en cuanto a la innovación que representaron
�ece Colonias de Norteamérica, encontramos un factor común, la lu­
c
a de un pueblo frente a una monarquía, como toda lucha, requirió de
bien puede afirmarse que muchos de los principios expuestos, ya se en­
contraban en las antiguas tradiciones jurídicas de pueblos como Ingla­
�-na serie de justificaciones que en el caso francés se sintetizaron en la
orm ul
terra, que inició un camino de equilibrio de poderes entre el rey y el a "libertad, igualdad y frate r n i da d.
"

parlamento a partir de la promulgación de la Carta Magna o de la olvi­ . !\hora bien, el sentido libertario de las luchas generó una concep­
.
Clo
da da tradición española, r epr es entada en la s Siete Partidas o en loS n filo
sófica concreta, que se expresa en el sentimiento del hombre
TEORÍA DE LA CONSTITlJCIÓN \, !I.S IIJEOUHdCAS DEL DERECHO CO�STITLCIO:\AL J. Matt·o� SantiiLin 77
\1 1, ¡¡!
76

esta realidad, en un reclamo lorma los derechos de propiedad se vincularon a la concepción de


frente al Estado y como consecuencia de L'� [.1
.._

uales, está percepción de la h os de las personas por un lado v de la libertad por el otro, de
de libertad para regular los destinos individ lo� l k rL· c
especulaciones filosóficas a u d d i\ a un concepto de propiedad liberal.
vida nos conducirá inexorablemente de las lo L �
n

l. el cual, a su vez sirve de re­ E11 c uanto a los derechos a la seguridad y a resistir la opresión,
las realidades de un sistema jurídico libera
.SL' \· inculan a h concepción liberal \' es precisamente esa idea
ferente a un sistema político; el liberalismo. l�lll l 1 1ll
· ·.11 ' o
o

origen en el iusnaturalis­ la
qu e ¡ os conduce a su concepción complementaria, si por un lado mi
El liberalismo de los siglos XVIII y XIX tiene
¡

e frente a la vida, pues la li11l'rtad termina en cuanto existe un individuo afecte, por otro lado la
mo, en razón directa de la posición del hombr
funda menta l para explic ar el derecho que tiene libL·rt�1d de los demás termina donde empiezan mis derechos de esta
voluntad será un factor
o, este pensamiento se d form�1 o.L' \ incula el concepto de seguridad a la idea de libertad y encon­
cada hombre a formar su pmpio destin
acorde al llamado iusnaturalism o racion alista. tra111us el liberalismo clásico.
y el iusnaturalismo racio- En cuanto al derecho de resistir la opresión, interpretado acorde a
La vinculación entre la concepción liberal
os conce ptos que se vinculan a una las concepciones liberales nos conducirá a una idea restrictiva del Esta­
nalista se manifiesta en divers
o rousse aunian o jugará un papel un do frL·nte a un concepto amplío de individuo, es decir, en el iusnatura­
forma de vida, así el pensamient
Franc esa, en tanto que sostiene
pe! determinante en la Revolución lismo L'l fin del Estado se restringe a buscar la felicidad o bienestar ge­
suerte que para forma r el pacto
el hombre es libre por naturaleza de neral. de suerte que cuando el gobierno desvía su camino, el individuo
d natura l por lo que
cial cede sus derechos y permuta su liberta se enctiL'ntra en el caso de resistir la opresión, opresión que es precisa­
na libertad civil. mente una circunstancia antagónica del concepto de libertad, de esta
os del hombre v del
El contenido de la declaración de los derech forma L'n el liberalismo vamos a encontrar una idea muy concreta, el
tamen te en su artículo
dadano es elocuente en su articulado, concre papel del estado debe de ser muy limitado para dar espacio a que la so­
ción iusnat uralista del
gundo, se define con toda precisión la ocupa ciedad se desempeñe en un amplío ámbito de libertades individuales.
sostien e "El objeto de
samiento revolucionario francés, cuando
derech os natura les e
sociedad política es la conservación de los 'i.3.!. EL CONSTITUCIONALISMO LIBERAL DERIVADO
·

condu ce a un punto
criptibles del hombre ... " está afirmación nos DE LA CONSTITUCIÓN FRANCESA
nte jurídic a se estima
vante para el análisis jurídico, en esta corrie
a, esto es, que son Para abordar el impacto que tuvo en el mundo occidental la revolu­
los derechos son inherentes a la persona human
a, posición contra ria al ción francesa y sus manifestaciones
riores e independientes de la norma jurídic jurídicas plasmadas en los textos
crea derech os. En la constituciona les, es necesario
tivismo que sostiene que es la norma la que recordar que fue precisamente la revolu­
ce lo que ya pe ción francesa
cepción iusnaturalista la ley simplemente recono el punto de referencia para dividir la Edad Moderna y la
que se compl ement a con la concep ción de Edad Contempo
al individuo, visión ránea, la evocación de dicha circunstancia no es mero
capricho.
popular. si recordamos que la referencia para dividir la Edad Media de
relevante que se a Moderna
Con lo expuesto queremos subrayar el papel
� fue el descubrimiento de América. En nuestra opinión, sin
o enciclopedista . .
a la persona como ser humano en el pensamient .
IOtent·¡¡·
' ¡·es·tar .r mportancra a mnguno de 1 os dcree hos concretos, p1enso
ación de los derechos que su trasc
cés, pensamiento que se reflejará en la declar ende ncia se debe más a los efectos que generaron en
el
to de las ideas que destact mundo Y
hombre y del ciudadano, como complemen como lo transformaron.
orientación iusnaturalista
mos en el párrafo anterior, establece la el descubrimiento de América
�cm se dio fin al feudalismo y se for
a que se complementa talec �o 1 a .
pensamiento revolucionario francés, mism f1gura del re�·. en razón directa
.
-

de múltiples causas políticas


"estos derechos son la libertad, que co
la definición de los derechos titulados la mentamos anteriormente y a las económicas
que desequilibraron
a la opresión". Como balan/a p 1'
propiedad. la seguridad y la resistencia o rtr ca a favor de 1 a f'rgura real, que en el escenan
o

e ar o colonial
o

la libertad, y está
·

derecho invoc ado será acte r·tzo


apreciarse, el primer . 1-a Edad Moderna, genero, una gran .
·

nqueza a favor de los


a
los derechos en el l
.

s teYes
.

alidad, el eje de todo de ¡.as pn .


no es una mera casu
,

nupa 1 es potencias europeas y en consecuenua .


como la capacidad de "poder hacer se creo
. . . · ,

Una nue
mo es la liber·tad. entendida va concepción existenc
ial. Si traemos a colación el significado
y como lo define el artículo 4 de la que tuv
aquello que no daña a otro; tal o en la humanid
ad el descubrimiento de América, es porque el
der echos del hombre y del ciudadano,
ticitada declaración de los
78 TEORIA DE LA CONSTITUCIÓN \ l 1' ¡¡¡:\TES IDEOLÓGICAS DEL DERECHO CONSTITUCIONAL - J. Mateo' Santíllán 79

impacto de la Revolución francesa es equiparable en cuanto a sus con­ El ejemplo francés cundió pronto por el mundo, los Estados Unidos
secuencias y transformaciones. habían establecido un catálogo de derechos humanos o garan­
t!L' no
Por principio debemos recordar que en la Edad Media predominó
políticamente el feudalismo, que en la Edad Moderna el predominio fue
Jas qu e les protegiesen en el cuerpo de su Constitución original corri­
oicron su posición inicial en el año de 1791, el 15 de diciembre; cuando
la realeza y que con la revolución francesa encontramos el enfrenta­ ron al texto original las primeras 1O enmiendas constitucionales.
(.1- rL·�a
�"' ...
miento entre la realeza y la clase burguesa, enfrentamiento en el que sa­ El pensamiento francés pronto se extendió a otros países europeos,
lió victoriosa esta clase social que hasta ese momento no había figurado Napoleón Bonaparte impone la Constitución de Bayona, do­
en Espaiia,
como clase dominante, pero a partir de ese momento iniciará una ver­ ento similar a la Constitución Francesa inspirada en Sieycs, como
cum
dadera transformación de la humanidad en un doble camino, en el polí­
es natural. los españoles rechazaron la imposición y crearon una pro­
tico, el liberalismo y en la economía el capitalismo. pia. después claro está de tener que resistir la invasión napoleónica.
La complejidad política de la revolución francesa se hace manifiesta Respecto a la Constitución de Cádiz de 1812 es menester señalar
en el estudio histórico de sus hechos, pero también puede explicarse a que fueron sus diputados los primeros que se auto calificaron como di­
la luz de sus documentos constitucionales, estudiados como la expre­ putad os liberales, también es necesario señalar que si bien es cierto, sus
sión jurídica de una aspiración filosófica que habría de tener conse­ críticos la tachan de afrancesada y sus defensores le encuentren raíz es­
cuencias que trascenderían las fronteras de Francia y la época en la que paúola, nos parece evidente que se encontró influenciada por el pensa­
se crearon para transformarse en verdaderos paradigmas de la miento de moda de la época, el francés y el norteamericano.
Contemporánea. Desde nuestra perspectiva la Constitución española de Cádiz debe
Existe un largo debate sobre si el pensamiento francés influenció de ser estudiada como el eslabón de una cadena, pues la monarquía o
independencia de las trece colonias norteamericanas o si fueron Imperio español contaba con dominios más allá de la península ibérica,
las que sirvieron de ejemplo para la revolución francesa, en lo pe como eran los reinos americanos en los cuales la Constitución gaditana
considero que el pensamiento es universal, y que no es se transformó en constitución para todos los colonos.
propia de esta época de globalización o mundialización, la trasc En cuanto al movimiento constitucionalista hispanoamericano es
cia de las ideas, lo que varía es la velocidad de las comunicaciones, claro que el pensamiento francés y el pensamiento norteamericano (in­
esta forma el enciclopedismo francés abreva el pensamiento hu cluso el pensamiento de Cádiz) estuvieron presentes en todos los consti­
anterior para influenciar a los hombres de su generación y posteriores. tuyentes que se crearon a razón de la caída del imperio español y la
La revolución francesa es simplemente un punto de referencia en consecuente independencia de las repúblicas latinoamericanas.
complejo proceso de evolución ideológica que se manifestará no solo En el caso de México, cuando se debatió la forma de República en el
constituvente de 1823-1824, quienes impulsaron la República Central in­
lo político y en lo económico sino en todos los ámbitos de la vida, e
vocaban consta
son los culturales en el más amplío sentido del término, sobre la que ntemente el pensamiento de Rousseau, en tanto que los
f deralistas
generó una verdadera revolución jurídica que habría de concretar � sostuvieron una teoría distinta pero aún más, algunos cons­
htu entes mexica
iusnaturalismo racionalista en una nueva teoría de la Constitución. � nos de 1917 se auto proclamaron jacobinos por su
La concepción constitucional francesa quedó expuesta con r d
a i cali smo en memoria de los radicales franceses que impulsaron el
tberalismo
en el artículo 16 de la Declaración de los derechos del hombre y .
Como puede apreciarse el impacto del Constitucionalismo francés
ciudadano, que sostenía: . '
S e d10 en todo
el mundo occidental, bien sea en la tradición roma-
Toda sociedad en la cual la garantía de los derechos no está asegurada, n o-germa. mca,
. .
b ten fuera en la tradición anglo-sajona.
determinada la separación de poderes, carece de constitución.

Lo expuesto nos conduce a un principio constitucional que ha 5.4. ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA.
durado, toda constitución debe de tener como mínimo una parte SU INDEPENDENCIA
la
nica donde se establezca entre otras cosas la forma e gobierno,
d
Y SUS DOCUMENTOS JURÍDICOS BÁSICOS
mismos así como una p
sión de poderes y las facultades de los
que se estipulen con claridad L
fundamental llamada dogmática en la t a historia de Estados Unidos presenta una serie de aspectos inédi­
Os
ga¡·antías que protegen a los derec
hos humanos. en
la historia de la humanidad que se corroboran con la s i mple
80
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN \ ¡J< ¡¡¡:_'TES IDEOLÚGICAS DEL DERECHO CONST
ITUCIONAL J ..'\1ateo� Santillán 81

su independen­
apreciación de la velocidad de su desarrollo a partir de En cuanto al sistema político cabe señalar que muv pronto las com­
a su ascenso como primerí sima potencia uni­
cia del 4 de julio de 1776 J<l1-1ías colonizadoras aceptaron el derecho de representación de los co­
versal en la segunda mitad del siglo XX, el fenómen
que hacer
o puede
algunas
atribuirse a
referencias,
L n os . En 1618 la London (Virginia) Companv "impartió instrucciones a
la casualidad, para comprenderle habrá o oh L· r n a dor que había nombrado en el sentido de que los habitantes li­
nte destaca r la necesidad
sin embargo, antes de abordarlas, es importa
mundo y en especial en
bn·-. ck las plantaciones habrían de elegir a sus representantes porque
de estudiarlas debido al impacto que tiene en el
]ahor�trún de común acuerdo con el gobernador y un consejo elegido...
nuestro país.
los docu- A p�1rtir de entonces quedó aceptado de manera general que los colonos
Contra lo que se pudiera suponer cuando escuchamos en
América y en tcní<�n daecho a participar en su propio gobierno."�
mentos ingleses sus referencias a las colonias del Norte de
Lt participación de los colonos en la toma de decisiones públicas
españoles
los documentos españoles sus indicaciones sobre los reinos
sentido opues­ fue LI'L'Ciendo paulatinamente al paso de los años, hasta el momento en
en América, la realidad nos conduce exactamente en un
, al menos esa es la definició n oficial que SL' condicionó todo tipo de tributaciones a la aprobación de los re­
to, los reinos español es en América
, donde se ejerció prcsen!élntes de los colonos.
que recibieron, en la práctica fueron meras colonias
Como puede apreciarse las condiciones anteriores a la declaración
que limitaro n entre otras cosas el co­
una serie de políticas restrictivas
de independencia de los Estados Unidos de América son notoriamente
s del capital peninsu lar, la fabri­
mercio, que se subordino a los interese dis t i ntos a los que ocasionaron la revolución francesa o la independen­
los monopo lios español es,
cación de barcos y de puertos en beneficio de cia de México, en las trece colonias podemos afirmar se encuentra pre
las onerosa s
lo mismo que la agricultura y la ganadería sin olvidar sentL' una clara vocación democrática, entendida está, como la partici
gas con que se gravó a la minería, eje principal de la econo
pación de los ciudadanos en la toma de las decisiones públicas.
novohispana. A los datos expuestos debe agregarse que los intentos de confedera­
un
En contraste las colonias del norte en la práctica enfrentaron ción de las colonias tuvieron antecedentes muy definidos como cuando
mente distinto, Inglater ra se encontra ba dem
norama absoluta el 29 de mavo de 1643 a 1648 en plena guerra civil
en Inglaterra, las
potencia en
ocupada en sus tareas para consolidar su posición de colonias de la Nueva Inglaterra se encontraron aislados,
de forma que
consolid arla como para distraerse en ad
censo y posteriormente pa ra C\ itar cualquier intento de ser
atacadas se confederaron Plymouth
atlántica en el Norte de América .
trar sus colonias de la costa Y Massach usett, Connecticut y New Haven,
la confederación concluyó
les ofreció la oportun idad
En estas circunstancias la realidad cuando la región se convirt
ió en propiedad de la colonia.10
en los reinos hispano ameri
ejercer una serie de prácticas vetadas En 1697 W illiam Penn propuso desde Pennsylv
ania la creación de
para
de esta forma cada colonia va a construir sus propios puertos una asamblea de
representantes para todas las colonias, propuesta que
ind
merciar entre sí y después con Europa, las colonias del Norte no encontró
ceo en el resto de las colonias. Para 1754 se piensa de
i nue­
por sus circunstancias geográficas desarrollaron un esquema va cuenta
en la unidad a fin de enfrentar las guerras contra
los indios y
s que les los franceses,
así como la pesca, el comercio y la fabricación de conserYa Benjamín Franklin propuso el Plan de la Unión de
Alban
se f. Y donde se
mitieran enfrentar las circunstancias climáticas, en el sur pedía al Parlamento inglés autorización para
la creación de
agrícola con desarro llo preponderantem ente de cul un G ra n
la producción Consejo y la presidencia de un gobierno genera
los esta l, donde todos
como el algodón, el tabaco y el comercio. dos conservarán su autono
mía, el Plan de Franklin no fue apro­
Hofstadter bado por
Según nos narran los doctores Wood Gray y Richard Inglaterra ni por alguna de
sus colonias
la in dependenc .
pago de los impuestos era realmente virtual: ia de las trece colonias de Norteamérica es
Por Carlos descrita
das eran Pcrevra como resultado de un movim
Técnicamente los propietarios v las compañías estableci a
P nsivo ·x · iento econó mico ex-
de sus tierras, m . : .
c. pansiOn tata 1 mente d'rstmta
. .
rios del rey, pero solo hacían pagos simbólic os a cambio .
a 1 as expenencras f rancesas o
·

exrcan
ba al rey cada año dos puntas de a, si hemos sostenido
por ejemplo, Lord Baltimo re entrega en líneas anteriores, para el año de 1763
x ------
cha y William Penn dos pieles de castor.
y
lO /hlift:llt, p. 19.
Reseña de la llistoria Norleiliii<Ticmw. l>o[( . MoYANo PAHISSA Ángela y VELASCO MÁR()UEZ Jesús,
x GRAY. Wood v Jlofstadter, Richard. llca J. EllA Doc/1/11('11/u de su hi,toria

de infonnación de los Estados Unidos,


EUA.
. ¡JI·.'\ !l·S IIJEOLÓGICAS DEL DERECHO CONST!Tlll!O�AL J. Mate"' Santilbn 83
82 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN \TK

movimiento que ya se había iniciado, pues desde abril de


las circunstancias político económicas de Inglaterra dieron
un giro que ·¡do lk un

a la postre será clave en la historia del mundo, el 7 de octubre de ese \'77; L'l segw 1do Congreso Continental había creado un ejército con
_
de sie­ \Vashmgton como comandante.
año se firmó el tratado de París, con el que se dio fin a la guerra GL·n L'
r g
ra pero con graves deu­ l)L·spués de la Declaración de Independencia se expidieron las reso­
te años, lo que dejó libre de conflicto a Inglater
o variar la L'S lk mayo de 1776, donde se invito a las colonias a organizarse
das, razón por la cual el Parlamento inglés consideró oportun l ucioiJ
de los colo­ autor i dad popular y romper con la corona.
política colonial a lo expuesto se debe agregar que el avance baio la
pueblos indios :\ 1m·d iados del año 1776 existía un proyecto para crear una gran
nos hacia el oeste generaba constantes conflictos con los
con una proclama publicada en 1763 y que violada sistemát
·

icamente, ra ción, después de amplios debates se presentó a la opinión de


Conklk
de 1774, de 1777 y fue hasta el primero de marzo de
condujo a la expedición de la Ley de Québec del 22 de junio
nias en noviembre
las colo
el oeste. los estados ratificaron "Los artículos de la Confederación"
ley que afecta el proceso expansivo de las colonias hacia !781 cuando
y el esta­ compuL·sto por trece artículos en donde se confederaban las trece colo­
Con ambos factores, la restricción expansiva por un lado
nunca ha­ nias , formaban los Estados Unidos de América, las colonias se trans­
blecimiento de una política fiscal efectiva, las colonias que
el peso del colonial ismo resintieran el proyecto británico, form �mm en Estados, cada uno tuvo su soberanía, libertad e indepen­
bían sentido
se suceden una serie de impuest os, el del azúcar de 1764 dencia. c o n un propósito de alianza para la defensa común.
de esta forma
y la Ley del Timbre de 1765, los impuest os generan una gran inco Los art í culos de la confederación no respondían a las necesidades

midad que desembocó en la reunión de 3 7 delegados que


representa que los Estados confederados tenían que enfrentar, por ejemplo, el Con­
en el llamado Congres o de la Ley del Timbre greso general no tenía facultades para enfrentar la deuda pública pues
a las trece colonias
dos el 19 de octubre de 1765 acordar on declarar que el parlame nto carecía de autoridad para imponer tributos, situación que fue creando
nto imperial y en consecu encia no podía la necesidad de replantear el esquema gubernamental.
glés no era un parlame
ner tributos a las colonias. Los legislativos de New York en 1782 y Massachussets en 1785 soli­
Los británicos decidieron gravar las exportaciones citaron que se convocara una convención para revisar los artículos de
s, he
para lo cual reforzaron las aduanas y las guarniciones militare la Confederación. En una reunión que se efectúo en la residencia de

que generaron la resistencia de las colonias y el enfrenta miento entre George Washington, donde acudieron representantes de 5 estados, Ale­

ejército inglés y los colonos en Boston en 1770. xander Hamilton de New York describió los inconvenientes para gober­
os
Los conflictos generaron la revocación de todos los impuest nar que se encontraban en los Artículos de la Confederación, como re­

nos el impuesto del té, mantenido simbólic amente como signo de sultado de todos los intentos se formó la
Convención Constitucional de
funcionó del 25 de mayo al 16 de septiembre de 1787,
colonos
nio imperial. sin embargo, la suerte estaba decidida, los Filadelfia que
con el apoyo de Francia bajo la presidencia
aceptaron siquiera el impuesto del té, de George Washington.
había
España enfrentaron y derrotaron a Inglaterra, un gigante .
El debate para la creación de la constitución
fue rico en ideas y po­
lanzado
en el Norte de América. en cuanto a planteamientos, en el plan Virginia se proponía, el
Entre los documentos relevantes que nos explican las causas
de 2_9 de m a o, un
v

independencia encontramos un folleto de Thomas Paine llamado ' llvo nac1· ona 1 d.1v1ejecutivo
1
'd'd
nacional, una judicatura nacional y un legisla-
.
o en dos camaras, compuesta por d 1putados y sena-
·

sentimiento común" y publicado el 1 de enero de 1776, y· c numero sena. proporcional a la población. Frente a1 plan
·

docume nto en d o res . t 1'0 .


.
ión definitiva pll�ngin1a. Edmund Randolp William Patterson proponían el llamado
que se expresa claramente la necesidad de una separac y
Inglaterra. de N ueva Jersev
La declaración de independencia adoptada el 4 de julio
de con . un
a cláusula que elsería cual
·
inclinaba por sostener la confederación
se
de gran utilidad, misma que señalaba:
redactada por Thomas Jefferson y Benjamín Frankli
n, se divide en Todas las ey
derech os huma nos, Virt d s aprobadas por el Congreso de Estados Unidos en
l e
secciones, y un preámbulo donde se aluden los Ció�
delas facultades que le confieren los artículos
de la Confedera­
declaración que describe 27 agravios sobre
los que se funda la todos los tr·atados
usión se proclama el ro l::stadyos que concierte y ratifique la autoridad de los
n1'dos de Amenca . .
dos
dad de indep endiz arse y en la concl U tendran fuerza
.

de lev suprema en los esta-


definiti vo. ac0 P ar i t c ul res ... y el
a j
poder
udicial de los di-versos estados deber·á
declaración de independencia no l11odar
Es importante señalar· que la se a ellas en sus decisiones, a pesar de lo que en contrario
interpretarse como un llama do para el l evantamiento sino como
J. l\latcm Santillún
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
84 SS
\1 R l !
l'SlES IDEOLÓGICAS DEL DERECHO CONSTITUCIONAL

puedan disponer las leyes de los estados particulares"11 planteamiento Para finalizar nuestro análisis sobre los documentos básicos de los
que será la base norteamericana del principio de supremacía constitu­ E�t�1dos Unidos de América es necesario subrayar dos ideas, por un lado,
cional. b L ' i st L· ncia de constituciones particulares de cada uno de los Estados
'

El enfrentamiento entre los intereses de los Estados grandes frente


Jll'' ios a la Constitución general cuya naturaleza es realmente trascen­
a los intereses de los estados pequeños generó el rechazo del plan Virginia
y del plan de Nueva Jersey. El papel que desempeño Benjamín Franklin
�kntal en muchos aspectos, como sería la "Declaración de los derechos
Jcl buL'll pueblo de Virginia" cuyas aportaciones a la lucha por la rei­
fue determinante para resolver el enfrentamiento, pues propuso el lla­
,·indicación de los derechos humanos es notable.
mado Gran Compromiso o transacción de Connecticut, que se adoptó La se gunda idea que deseo abordar es la relativa a la gran influen­
16 de julio y en el cual se resolvió el problema del equilibrio de fu cia que el movimiento de independencia de los Estados Unidos de Amé­
en el Congreso General adoptando las siguientes medidas, la cámara rica , sus prácticas constitucionales ejercieron en los pueblos hispanoa­
.
representantes se integraría a base de un criterio del número de mcri L·anos, particularmente en México, donde siempre fueron
tantes por Estado y en el Senado la elección sería de dos miembros rdL'IL'!lCi;• para adoptar el Acta Constitutiva de la Federación Mexicana,
estado, electos por la legislatura del Estado, de esta forma los Estaaos sin quL' esto signifique que simplemente copiamos la constitución
con mayor población se verían favorecidos con una mayor norteamericana.
ción en la cámara de representantes y los Estados pequeños se
equilibrar en el Senado. S.S. CONSTITUCIONALISMO SOCIAL:
El siguiente problema que se presentó en cuanto a la rep APORTACIÓN DE MÉXICO
fue como debían de ser representados los esclavos negros y el monto
El mm imiento constitucional de los siglos XVIII y XIX se vio caracte­
sus contribuciones, problema que resolvieron al establecer que cinco
ri z ado por una concepción liberal clásica que no significo otra cosa que
clavos negros contarían como tres ciudadanos libres, electoral y tri
el triunfo de la clase de los burgos frente a la nobleza y el rey, de suerte
riamente. El 17 de septiembre se aprobó y firmó la Constitución.
que el ascenso de la burguesía impactó el pensamiento liberal y estable­
La lucha entre federalistas y anti-federalistas entendidos estos
ció la premisa de que todos los hombres somos iguales, concepto que
mos como partidos de la confederación fue muy disputada, en el p
prevaleció hasta el inicio del siglo XX, cuando se agudizaron las contra­
ideológico el pensamiento federalista quedo magistralmente exp
dicciones propias del capitalismo salvaje en el ámbito social de las eco­
por Alexander Hamilton, James Madison y John Jay en un conjunto
nomías independientes, mismas que generaron una enorme concentra­
artículos periodísticos, publicados entre octubre de 1787 y agosto de 1 ció n
de la riqueza en una pequeña oligarquía frente a una inmensa
Entre el 7 de diciembre de 1787 y el 9 de enero de 1788, cinco pob reza d e grandes sectores de la población.
dos ratificaron la constitución federal, New Hampshire fue el Países como México se encontraron inmersos de pronto en las con­
estado en ratificarla, con lo cual se reunía el requisito para su t di c c io n es
�� enunciadas, pero simultáneamente sujetos a una vincula­
Los últimos estados en adherirse fueron Carolina del Norte y Cion eco
nómica dependiente de los Estados Unidos y de Europa que se
Island. com ple
mentaba con una franca inducción ideológica hacia el liberalis­
En 1791 se incorporaron al texto constitucional las 1 O primeras mo, situació �
n que si bien creaba contradicciones en los países desarro­
miendas, en las cuales se regula la relación entre el ciudadano y el ll ados. t
ambién había generado un pensamiento articulado de los gru­
der federal y que bien puedan ser tomadas en cuenta como una ve Pos de· (J\)¡· , ¡· · 1 · ·
e¡ os v campesmos rente a cap1ta , s1tuac!On que se encontro
1
· · •
.

rn uv di.st· · · ·
dera Declaración de Derechos del Ciudadano. . <� nte de 1 cap1ta 1 Ismo Impuesto en nuestro pms, d onde ademas
·

d
· ·
·

En cuanto a su integración en la constitución norteamericana e e �� !


renta r un capitalismo tardío los grupos sociales no tenían la edu­
observarse elementos tomados de los artículos de la Confedera
ción r:;cion o cohesión social para enfrenta¡· las leves
de la ofcna v la de­
a
como influencia de conceptos del Plan de Virginia y de Nueva Je fa nda. de fon11a que se pmdujo un pmfundo desequilibrio entre los
Ctorcs
ea r Cd 1 es de poder que cond LIJO a una n:al'd
· ··
1 a d mequitativa que
u s a ba pro ¡·
· · · ·

ll MoRISON Eliot, CoMMAGER, Hcnry Stcele y lEUCIITENBURc; William Eduard, undos agravios . a la mayona. .

Historia de los l:'stados U>lidos, za. Rcimp., México. 1993, p. 1 S7. No quc¡·emos decir que el liberalismo clásico sea una mala teoi'Ía,
86 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN \ l K JIF\ITES IDEOLÓGICAS DEL DERECHO CONSTITUCIONAL
- J. Mateos Santillan 87

sin embargo, el ejercicio ideal del sistema se da cuando todos los facto­ En cuanto al artículo 3 constitucional, que la inmen
sa mayoría de
res de la producción se encuentran capacitados para mantener los equi­ lo� tratadistas consideran un elemento fundamental en la concepción
librios que conduzcan a un verdadero escenario de libertad y no simple­ del nuevo constitucionalismo social, me permito señalar que en lo per­
mente a esquemas de realidad virtual. sonal. después de observar la evolución de la materia educativa a lo lar­
Es precisamente el papel de la Revolución Mexicana y su manifesta­
;,0 del siglo XIX debemos señalar que todos nuestros
constituyentes de
ción jurídica, la Constitución, el punto de referencia crítica para
A pauingán, del 24, del 36 y del 57, incluso Maximiliano y los
Porfiristas
tu\ieron la misma idea, la educación debe de ser la piedra que sirva de
prender un nuevo camino en el Constitucionalismo universal, nos
base a la transformación social.
camas en las constituciones liberales clásicas, derivadas del ejemplo
Francia y los Estados Unidos se hace énfasis en el desarrollo de los
rechos individuales frente al Estado, y el gobierno se reduce a un
de árbitro absolutamente neutral en el libre juego de los factores
producción, es decir, el constitucionalismo se orientaba a mantener
esquema donde el gobierno reducía su papel al de un gendarme y las
yes constitucionales se orientaban a procurar el libre juego e
en un marco de garantías individuales que protegían derechos
te individuales.
El movimiento constitucionalista de 1916-1917 dio un giro i
tante al pensamiento clásico y generó una nueva concepción del
tucionalismo, es decir el constitucionalismo social.
En la visión del constitucionalismo social que tiene como punto
partida la Constitución Mexicana de 1917, se dio un gran viraje
cuanto a la extensión y naturaleza de los derechos que se deberían
tutelar en la constitución y particularmente en el papel que debería
gar el gobierno en el equilibrio de los factores de producción, i
randa al planteamiento constitucional una nueva concepción, la
da democracia social, que definían nuestros constituyentes como
gobierno de la sociedad por las clases populares y para el beneficio
las mismas clases".
Está nueva concepción quedo plasmada en el artículo 27 de la
titución cuando se nacionaliza el territorio nacional. se crea una
de propiedad social de la tierra llamada ejido, y se inicia una poi
social de restitución a los pueblos e individuos despejados que
de conducir a una gran reforma agraria contrapuesta al latifun
improductivo a que nos había conducido una mala interpretación
liberalismo clásico manipulado por los intereses dominantes del
rismo.
El artículo 123 de la Constitución nos presenta una nueva e

ción de las relaciones obrero-patronales, el gobierno deja de ser un


espectado r o instrumento al servicio de la clase patronal y se trans
ma en un factor de equilibrio entre los factores productivos.
Unidad 6

Poder constituyente

JuAN JosÉ MATEos SANTILLÁN.

6.1. PRESENTACIÓN

Para desarrollar los contenidos de la Unidad 6 del programa de es­


tudios de la materia Derecho Constitucional 1, he recurrido a la consul­
ta de fuentes directas en la mayoría de los casos, y sólo por excepción, a
fuentes indirectas, cabe aclarar que he procurado presentar las opinio­
nc·s de los diversos autores respetando en lo posible sus ideas.
En cuanto a las corrientes que estudian la soberanía y el constitu­
yente, es menester señalar que añadimos a las más conocidas: el pensa­
miento español que tuvo vigencia durante la etapa colonial en México,
así como, el estudio de la corriente que siguieron los constituyentes de
1824, hoy en día prácticamente olvidada. También añadimos al progra­
ma un punto relativo a uno de los problemas de actualidad, la sobera­
nía ante la mundialización o globalización.
Como resultado de lo expuesto, los estudiosos del tema tendrán
oportunidad de observar, cuestiones que en apariencia no tienen impor­
tancia, resultan a la postre factores que nos sirven para explicar opinio­
nes de aspecto semejante pero en realidad opuestas.
Las diferencias en las teorías francesas en relación a las españolas,
en a pariencia
son mínimas, por esa razón, cuando cayeron en el olvido
las seg undas,
se pensó erróneamente que los constituyentes de 1824,
h a bían invocado el pensamiento francés.

• Maestro en la División de Estudios de Posgrado, así como. en la Facultad de Dere­


cho de la UNAM.

89
')0
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN J't ¡pFR CONSTITUYENTE - J. Mateos Santillán 91

De esta forma, el desarrollo de la unidad nos brinda la oportunidad Señor de las cosas de cada uno, de manera que las pudiese tomar a su vo­
luntad; sino tan solamente, por algunas de la-; t·azones, que de suso son dichas.
de confrontar las principales corrientes doctrinarias frente al pensamien­
to de los Constituyentes mexicanos que debatieron el tema y las fuentes Este párrafo de la Segunda Partida Ley 11, nos brinda varios aspec­
documentales que sostienen el sentido originario de las concepciones
tos. por un lado, establece que el poder del Rey sólo tiene un fin lícito,
mexicanas, dicho de otra forma, doctrina frente a derecho positivo. quL' no es otro sino defender el bien común, o en la fórmula castiza de­
kntkr derechamente el pro comunal de todos, es decir, no se permite
6.2. EL ORIGEN una defensa "torcitera" como se diría en aquellas épocas, o torcida, o al
111arg:en del derecho como diríamos hoy en día y un segundo elemento
Es claro que el derecho mexicano tuvo como punto de partida el de­
qUL' el tema nos obliga a destacar y que impone límites al Rey en cuanto
recho español, así como, éste último encontró su principal inspiración a que éste, no es dueño o señor de las cosas de los particulares y que no
en el Derecho romano-germánico, y aun cuando no es esta obra el sitio puede ejercer su poder arbitrariamente sobre la comunidad sino en los
adecuado para revisar las tesis griegas o latinas que pudieran servir de
casos que la ley le faculta o como se indica en castizo, " ... por algunas
antecedente a los estudiosos de la soberanía y del constituyente; resulta de las razones, que de su uso son dichas."
fundamental para el debate sobre los alcances y origen del concepto so­ Si vinculamos lo expuesto en la Ley 1, con lo sostenido en el frag­
beranía, la existencia de una serie de preceptos que fueron derecho po­ mento de la Ley 11, nos lleva a la idea de limitaciones en el gobernante
sitivo novohispano y que mucho nos ayudarán a entender nuestros ante­ ante una comunidad que lo hizo Rey y de donde emana su autoridad, es
cedentes doctrinarios. decir, nos encontramos claramente ante un pacto social de la comuni­
Hoy en día, la mayoría de los doctrinarios mexicanos sostienen que dad que nombra rey y le limita, teoría absolutamente opuesta a la tradi­
nuestro artículo 39 constitucional, tuvo como fuente de inspiración el ción francesa, en la cual, los reyes, se consideraban elegidos directa­
pensamiento francés, en nuestra opinión, la cuestión nos obliga a buscar mente por Dios.
mayores elementos de juicio en el derecho positivo español para for­ Pero la Ley 11 de la Segunda Partida va más lejos y añade:
marnos una mejor opinión sobre los orígenes de nuestro pensamiento.
Este poder ha el Señor, luego que es escogido de todos aquellos que han
Muchos años antes de que Rousseau escribiera el Contrato Social o
poderío de lo escoger, o de la mayor parte; seyendo fecho Rey en aquel lu­
que Juan Bodino sentara las bases para que se estructurara el pensa­
gar, onde se acostumbraron a fazer antiguamente, los que fueron escogidos
miento francés, Alfonso X, el rey sabio, quien gobernó en Castilla de 1252 para emperadores.
a 1284 y cuya obra, las Siete Partidas, elaboradas entre 1256 y 1265,
No hay duda, el Rey era electo o escogido por unanimidad o por la
debe considerarse parte aguas y ejemplo del derecho de su época, esta­
mmoría, la Ley de Castilla y León es reiterativa, el poder del Rey ema­
bleció en la Segunda Partida, Ley 1, la siguiente norma referente al Rey:
na de la comunidad, aún cuando no debemos olvidar que estamos citan­
... e a el pertenece, segund derecho, el otorgamiento que le fizieron las gen­
do textos del siglo XIII, muy distantes de la tradición democrática occi­
tes antiguamente de governar, e mantener el Imperio en justicia. dental del siglo XXI, y debemos entender que los representantes de esa

El párrafo es claro y categórico, la comunidad, el pueblo, las gentes, c omunidad eran los nobles e hidalgos castellanos.
son el poder que inviste al Rey, dicho de otra forma, el poder de los re­ Antes de citar la Ley X de la Segunda Partida, debemos recordar
que las Siete Partidas tuvieron vigencia
yes o gobernantes proviene directamente de la comunidad o pueblo, en el México colonial y aún du­
rante much
que es en esta concepción la fuente de la soberanía. os años del México independiente, hasta antes de la promul­
gación de los primeros
La Ley 1 recién citada, se complementa con lo expuesto en la Se­ Códigos federales en la segunda mitad del siglo XIX
gunda Partida Ley 11, relativa a los alcances y uso que debe hacer del Y ca be recordar que su vigencia en la etapa independiente se limitaba
a todo aquello
poder el gobernante, cuando establece: que no se opusiera a la Constitución mexicana, también
debemos
recordar que en la etapa virreina! el texto de las Siete Partidas
Ca maguer los Romanos. que antiguamente ganaron con su poder el seño­ se estu
diaba en todas l as universidades, donde acudieron los mexica­
t·io del mundo, fizieron Emperador, e le otm·garon todo el poder e el señorio
nos que a la postre
que avían sobre las gentes, para mantener, e defender derechamente el serían constituyentes en Cádiz y en el Constituyente
de 1823-24.
pro comunal de todos, con todo esso non fue su entendimiento, de lo fazer
92 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN ¡•()IJFR CONSTITUYENTE J. Mateos Santillán
-
93

De regreso al texto de la Ley X de la Segunda Partida, nos encontra- c:tnces del Poder Constituyente, cabría agregar que las polémicas sobre
mos el siguiente fragmento: L'l te m a se han dado prácticamente desde la aparición del concepto.
A partir de la aparición del vocablo pouvoir constitumzt formulado
...que si usase mal de su poderio, en las maneras que de suso diximos en
esta lev, que! pueden dezir las gentes Tyrano, e tornarse el Seiiorio, que era por Emmanuel J. Sieyes en su obra "¿Qué es el Tercer Estado?"' de 1788,

derecho, en torticero, assi como dixo Aristoteles, en el libro que fabla del �L' han escrito múltiples definiciones del concepto, dentro de los cuales
Regimiento de las Cibbades, e de los Re�mos. L-itaremos la de Carl Schmitt:

Cuando el Rey abusaba del poder y actuaba contra derecho, el pue­ Poder Constituyente es la voluntad política cuya fuer·za o autoridad es ca­
paz de adoptar la concreta decisión de conjunto sobre modo y forma de la
blo lo podía calificar de tirano y transformar los títulos apegados a de­
propia existencia política.2
recho en un gobierno torcido o contrario a derecho, este bello fragmen­
to nos sirve para refrendar por un lado, la superioridad de "las gentes" En la Enciclopedia Jurídica Omeba encontramos la siguiente defi­
sobre el Rey, superioridad que se manifiesta en la facultad de nombra­ nición:
miento y en la facultad de destitución; facultades que en su conjunto re­ El poder constituvente consiste en la suprema capacidad y dominio
del
presentan la idea de la soberanía originaria del pueblo, plasmadas no en pueblo sobre sí mismo, al darse por su propia voluntad una organizaci
ón
la Doctrina, sino en la Ley, de suerte tal que, si tomamos en cuenta que política y un ordenamiento jurídico; esa voluntad es una voluntad
política
Rousseau publicó su Contrato Social en 1762, existen 500 años de anti­ que se convierte en voluntad jurídica mediante la Constitución y
se caracte­
cipación en la concepción española, concepción que evolucionaría al riza como aptitud y cualidad de la función perteneciente al pueblo
de darse
una norma constitucional que es, a la vez, expresión de unidad política
paso de los siglos, y cobraría esplendor con hombres como Francisco y de
organización de la Sociedad y del Estado.3
de Vitoria, Francisco Suárez, el Padre Mariana y una pléyade de pensa­
dores que sirvieron de inspiración a los constituyentes de Cádiz y a los Las definiciones expuestas nos llevan a señalar la necesidad de esta­
constituyentes mexicanos de 1823-24. blecer un vínculo explicativo entre los conceptos Poder Constituyente y
Cabe advertir que no es posible equiparar el gobierno de los reyes la base legitimadora del ejercicio del poder público, esto es, la sobera­
españoles de los siglos XIII, XIV o XV, con el poder que alcanzaron los re­ nía. De ésta suerte, constituyente y soberanía, se entrelazan de tal forma
yes de la Casa de Austria en los siglos XVI y XVII y menos aún con el rei­ que para explicar el primero necesariamente debemos acudir al segun­
nado de los Barbones del siglo XVIII, éstos últimos familiares directos de do. Lo expuesto no viene sino a complicar nuestro objeto de estudio,
la Casa reinante en Francia y creadores del despotismo ilustrado. dado que para explicar el concepto de soberanía, existen muchas co­
rrientes y autores, generalmente vinculados a explicaciones fundadas en
6.3. CONCEPTO E IMPORTANCIA sus experiencias nacionales y en las diferentes épocas en que aparecen,
DEL PODER CONSTITUYENTE pues para citar el ejemplo de Francia, son notables las diferencias entre

autores como Rousseau y Sieyes, y las de éstos con los teóricos de la


El Poder Constituyente, es un tema de importancia capital para la
globalización de la actualidad.
elaboración de una teoría constitucional congruente con los postulados
básicos que caracterizan a las sociedades democráticas occidentales.
6. 4. LA SOBERANÍA COMO FUNDAMENTO
El tema, en apariencia simple, se complica por la cantidad de teo­
DEL PODER CONSTITUYENTE
rías que se han desarrollado con el afán de explicarlo, y no podría ser
de otra forma si se toma en consideración la magnitud de la cuestión, Como dijimos en párrafos anteriores, para explicar la naturaleza
que no es otra sino la legitimidad del ejercicio del poder público. De del Poder Constituyente, es menester vincular su estudio al concepto de
ésta forma, el concepto de Poder Constituyente y las atribuciones del so b era nía, sin embargo, esta terminología tan clara a partir de la época
mismo, tendrán variables notables según sea la teoría con la que se pre­
tenda explicarlo. SIEYES, Emmanuel J., C:C)ll<' es e/ /erccr J:"s[(u/"J
· UNAM. México. llJ83.
A l o largo de las siguientes líneas se intentar·a exponer algunas de Sut,\11TI", Cad. Teuríu de la ConslilllcÍ<)n, Alian.-:a
l. Madrid. llJlJ6, p. lJ3.
Editoria
las diver·sas curTientes que se han creado para definir· la nat ur al e za y al- 1 Véase voz "poder constituyente" en Lllcicl"p<'
dia l11rídica. ÜMEBA T.IV. p. 33.
94 TEORiA DE LA CONSTITUCIÓN ¡•(l!lER CONSTITUYENTE J. Mateos Santillán
-
95

de la revolución francesa, no lo es tanto cuando se estudia la historia compleja e inestable situación política que rodeó a la Revolución Fran­
occidental anterior a dicha revolución, pues si bien tenemos pruebas de Ll·sa v que generó grandes debates sobre la legitimidad de los órganos
la existencia de actos equiparables a los del Poder Constituyente creado lk autoridad y la titularidad del ejercicio del poder público o soberanía.
por SIEYES, también es cierto que las diversas sociedades de la antigüe­ Las teorías de Juan Jacobo Rousseau se vieron enfrentadas al pensa-
dad se dieron ordenamientos jurídicos mediante ejercicios de organiza­
111iL·nto de Emmanuel J. Sieyes quien como mencionamos en líneas an­
ción política equiparables a las concepciones del Poder Constituyente
tL·riores creó el vocablo constituyente como adjetivo calificativo del po­
de nuestros días, claro está, sin que estas formas primitivas de consti­
lkr capaz de generar una constitución para lo cual expresó la siguiente
tuirse o de constitución tengan exactamente el mismo significado que
ilka:
hoy en día tienen, no obstante lo cual, resulta significativo observar en
los estudios de Aristóteles diferencias precisas en la Grecia Clásica en­ En cada una de sus partes la Constitución no es obra del poder constituido,
tre los conceptos constitución y ley, y una diferencia sutil entre Poder sino del poder constituyente. Ninguna clase de poder delegado puede cam­
Constituyente y Poder Legislativo;4 la misma diferencia puede estudiar­ biar nada en las condiciones de la delegación.7

se en la historia de los fueros españoles o de las constituciones inglesas Como puede apreciarse, Sieyes nos presenta con gran claridad la
donde en la etapa medieval surgen los fueros y la Carta Magna como
diferencia entre poder constituyente y poderes constituidos, cabría
resultado de las luchas entre la Corona y la nobleza, dichas normas se
agregar que siempre dentro de la tradición románica de la representa­
elaboraron con fundamento en un poder superior al de los reyes, preci­
ción, de ésta forma puede percibirse como equipara los poderes consti­
samente como normas que regulan y limitan la actuación de los reyes.
tuidos a una representación ordinaria y el constituyente a una represen­
De lo expuesto cabe desprender que en España, Inglaterra, Francia
tación extraordinaria:
y Alemania, por sólo citar a los países más representativos de diversas
épocas, se dieron diferentes formas de evolución del concepto soberanía Este cuerpo de representantes extraordinarios reemplaza a la nación en su
y en consecuencia del papel del Rey y las Cortes, de forma tal que, entre independencia de todas las formas constitucionales. No es necesario aquí
la caída del Imperio Romano y la Edad Moderna, cada país conformó tomar tantas precauciones para impedir los abusos del poder, puestos que
experiencias y teorías propias que al paso de los años y de los siglos, estos representantes no son diputados más que para un solo asunto y única­
mente por un tiempo determinado. Y yo digo que ellos no tienen que some­
sirvieron de retroalimentación para la elaboración de nuevos argumen­
terse a las normas constitucionales sobre las cuales han de decidir. . 8
tos que serán determinantes para la Ilustración francesa del siglo XVIII,
.

momento en el que encontramos realidades nacionales diversas con El pensamiento de Sieyes refleja por un lado los temores
de la épo­
puntos de referencia comunes. ca, muy próxima al absolutismo de los
reyes de Francia, en donde la
Autores como Carré de Malberg,' se preocupan por explicar las di­ preocupación fundamental, una vez
resuelto el problema de la legitimi­
ferentes evoluciones del ejercicio del poder entre Francia e Inglaterra, dad, reside en tratar de separar
el papel de crear la constitución, del rol
Carl Schmitt6 nos explica el pensamiento alemán distinto de los anterio­ de aplicarla, pues podría
suponerse que si voy a ejecutar la constitución
res, sin embargo, del análisis de la evolución de las tradiciones euro­ Y adicionalmente voy a
crearla, existe la tentación de elaborar una
peas vinculadas cada una de ellas a su propia historia, se desprende co nstituc
ión muy cercana a mis intereses personales y lejana del interés
la necesidad de replantear la historia de las instituciones mexicanas a la general, de
esta forma existe una primera separación de poderes entre
luz de nuestra historia y nuestros vínculos con España y Estados Uni­ el Po der
Constituyente y los poderes constituidos.
dos, para de esta forma intentar entender nuestro presente. En la misma línea del pensam
iento de Sieycs sobre el poder consti­
No obstante lo expuesto, es menester estudiar la tradición francesa tuvc nte
se desprenden tres razonamientos fundam
para explicar el origen del concepto Poder Constituyente y su vincula­ entales para su carac­
terizaci
ón:
ción con el concepto de Soberanía, para lo cual es necesario recordar la
Primero, el constituyente no se
somete a la Constitución porque a

él le corresponde elabor arla.


4 Íde111. p.
36.
° CARRF DE MALHERt;. Raymond. Teoría Ge¡¡era/ de/ JO.,wdo. UNAM-FCE. México. !998,
7 StEYts. up. cit.. p. 109.
p. 870.
0 ScHMlTI". Carl. op. cit., p. 95. K lde111, p. 113.
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN ¡•¡ lllER CONSTITUYENTE J. Mateo' Santillún 97
96 -

• Segundo, al constituyente no deben afectarle las formas positivas Sería un error -y por cierto un er-ror antidemocrático- el tener por nor­

que regulan a los poderes constituidos. ma absoluta y definitiva de la Democracia estos métodos del siglo XIX. La

• Tercero, el constituyente ocupa el lugar de la Nación cuando se \ oluntad del pueblo de darse una Constitución puede sólo demostrarse me­

trata de formar la Constitución y por lo tanto es independiente. diante el hecho, y no mediante la observación de un procedimiento norma­
ti\ amente regulado. Y claro está que tampoco puede ser enjuiciado a base
En el pensamiento de Sieyes el poder constituyente es una expre­ de leves constitucionales anteriores o en vigor hasta el momento.11
sión de la soberanía que se manifiesta al interior de un país con el pro­
pósito de elaborar sus normas fundamentales, para lo cual cabe señalar Como puede apreciarse, esta segunda posibilidad para convocar un
que existen al menos tres tipos de circunstancias en las que puede ser Cong:reso Constituyente genera interpretaciones muy distantes que en
convocado el poder constituyente. llll!Cho tienen que ver con las experiencias nacionales de cada autor y
La historia de México nos lleva a recordar el hecho de una Colonia con su ideología, lo cual nos lleva a recordar las diversas concepciones
o reino dependiente que alcanza su independencia y con ello reasume ckl derecho y las implicaciones interpretativas que conllevan, pues por
una soberanía que no había ejercido durante siglos, y mediante dicha ejemplo, para los positivistas no puede existir explicaciones supra-cons­
reasunción de soberanía, con el más alto grado de legitimidad, convoca titucionales o al margen del Derecho, en tanto que en una concepción
a un Congreso Constituyente, que en el caso mexicano, elaboró no sólo iu;,naturalista o sociologista, pueden admitirse valores supra-constitu­
la Constitución Federal de 1824, sino que adicionalmente, e incluso an­ cionales que llevarían el estudio de la legitimidad al terreno de las con­
teriormente, creó un documento fundamental llamado Acta Constitutiva cc¡Kiones de soberanía.
de la Federación Mexicana, mismo que sirvió de base para la Constitución. Un tercer escenario se da cuando el congreso constituyente se con­
Una segunda posibilidad, también vinculada a nuestra historia, se
\oca con apego al proceso constitucional establecido en la constitución
da cuando la convocatoria al Constituyente es resultado de una trasgre­
\·ig:ente, con el propósito expreso de modificarla y en su caso sustituirla
sión al orden dentro de un Estado constituido y que al triunfo del movi­
por un texto nuevo. Esta hipótesis nos presenta reflexiones polémicas
miento revolucionario o del golpe de Estado, el grupo victorioso convo­
como las planteadas en el punto anterior, pues para algunos autores,
ca a un Congreso Constituyente.
como Carré de Malberg el nuevo constituyente se encuentra vinculado
Esta segunda posibilidad abre una gran polémica entre los estudio­
a l anterior:
sos de la materia, polémica que nos servirá para ejemplificar los extre­
mos a que puede conducirnos una particular perspectiva doctrinal, y Pero cualesquiera que sea la importancia de este cambio constitucional, sea
sobre todo, cuan alejados pueden estar uno del otro. total o sea parTial, habrá de operarse según las reglas fijadas en la misma cons­
Para R. Carré de Malberg,9 cuando se refiere a la hipótesis de un ti1ución que se trata de modificar.12
movimiento armado que triunfa y convoca a un constituyente, éste se
reduce a una cuestión de hecho y deja de ser una cuestión de derecho, En tanto que para autores como C. Schmitt la cuestión tiene un ca­
rácter diametralmente
en cuyo caso: opuesto como puede apreciarse en la referencia
que hicimos de
dicho autor en el punto anterior.
Hay que abandonar, pues, esta primera hipótesis, en la cual la devolución Y
Las posiciones de ambos autores nos remiten
el ejercicio del poder constituyente no están regidos por el derecho, pues en necesariamente a en­
contrar la
la ciencia del derecho público no hay lugar para un capítulo consagrado a naturaleza del poder constituyente, pues para Carré de Mal­
berg en
una teoría jurídica de los golpes de Estado, de la revolución y de sus efec­ realidad el poder constituyente al estar sujeto a la constituci
ón
tos. Y por consiguiente, conviene fijarse únicamente en un segundo caso,
anll'rior,
viene a ser un poder constituido, en tanto que la posición de
que es el de la reforma pacífica, regular, jurídica en una palabra de la Sc hlllitt
nos presentan un constituyente independiente con atribuci
1 ones
Constitución vigente. 0 muy cer c a
na s a las expuestas por Sieyes.
En una posición doctrinal opuesta, Carl Schmitt señala:

11•, ,S < 11\1\Tl Carl, op. cit.. p. 1 OO.


- CARIÜ' DE MALBFR<;. up. cit.. p. 1173.
� CARRE llL MALBI·.R<;. op. cit.,. pp. 1172-1173.
10 Jhidl'lll.
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN !'< ¡JJFR CONSTITUYENTE J. M,llcos Santillún 99
98
-

6.4.1. TESIS DE ROUSSEAU Y DE SIEYÉS Pero el orden social constituye un den.:cho sagrado que sirve de base a to­
dos los demás. Sin embargo, este derecho no es un derecho natural: está
as opmwnes que sostienen
En líneas anteriores presentamos algun fundado sobre convenciones. 13
cuencia desatan grandes polé­
puntos de vista encontrados y en conse Para Rousseau la más antigua y única sociedad natural es la fami­
corriente genera un gran interés
micas, el aspecto doctrinario de cada
lia. p e ro, incluso en ella, los hijos no se mantienen unidos a sus padres
las posiciones nos lleva a una
académico, sin embargo, lo alejado de lk ma ne ra indefinida, por lo que tienden a buscar su independencia, no
observar que la interpretación
reflexión necesaria en el sentido de obstante, la familia es el primer modelo de sociedad política, donde el
puede generar graves errores
conceptual de vocablos fundamentales padre es la imagen del jefe y los hijos del pueblo, "y todos, habiendo na­
pción de la realidad en nues-
de interpretación constitucional, y de perce cidos l ibres, no enajenan su libertad sino en cambio de su utilidad. Toda
tro país. la dife rencia consiste en que, en la familia, el amor paternal recompensa
o de dos clásicos univer-
A continuación estudiaremos el pensamient al padre de los cuidados que prodiga a sus hijos, en tanto que, en el esta­
refiero a Juan Jacobo Rousseau
sales en el análisis de la soberanía, me do. es el placer del mando el que suple o sustituye este amor que el jefe
no siente por sus gobernados."14
y a Emmanuel J. Sieyes.
En el punto de las primeras sociedades Rousseau se deslinda del
6.4.1.1. Juan ]acabo Rousseau p ensa mi e nto de Grocio y Hobbes, a quienes acusa de equiparar su pen­

de Rousseau a partir de samiento al de Calígula y establece que los hombres no son naturalmen­
Pocos autores han alcanzado la celebridad
fama, los más prolijos estudios te i g ual es, razones por las cuales explica que la fuerza no nace del dere­
su obra "El contrato social", y con la
cho, y que ningún hombre tiene por naturaleza autoridad sobre sus
s, que no falta quien piense
de su obra, su prestigio alcanzó tales nivele
semejantes.
pactistas en su celebérrima
que Rousseau fue el creador de las tesis Para abordar su concepto de pacto social, Rousseau explica que los
dar que parte de su obra se
obra, sin embargo, es conveniente recor hombres en estado natural llegan al punto de encontrar una serie de
a su vez aprovechó el conoci­
funda en las tesis de Juan Bodin o, quien obstúculos que impiden su conservación en el estado natural, lo que los
a Española como Francisco
miento de los autores de la Escuela Clásic obliga a s u m ar sus fuerzas para superar las resistencias que enfrentan
en su momento participaron
de Vitoria y Francisco Suárez, mismos que por lo que expresa:
Santo Tomás de Aquino, otros
del movimiento escolástico generado por
Encontrar una forma de asociación que defienda y proteja con la fuerza co­
son: Marsilio de Padua y Gui­
autores medievales que abordan el tema mún la persona y los bienes de cada asociado, y por lo cual cada uno,
que el pactum uniuonis fue
llermo de Occam o Althusio, quien señala . uniéndose a todos, no obedezca sino a sí mismo y permanezca tan libre
poder, de suerte que la so­
creado por el pueblo, que es la fuente de todo como antes. Tal es el problema fundamental cuya solución da el Contrato
el príncipe simplemente la
beranía pertenece al pueblo mientras que SociaL 1"

usufructúa. Rousseau continúa explicándonos que las cláusulas del contrato so­
Hobbes quienes abordan
No hay que olvidar autores como Grocio y cial se encuentran determinadas por la naturaleza del acto, y que no
vista y a quienes Rousseau
la temática desde sus singulares puntos de �ueden modificarse porque se harían inútiles, de la misma forma que
refuta desde su obra. Ja más fue ro n
enunciadas formalmente, no obstante lo cual, la violación
le ningún mérito al célebre
Con lo expuesto no pretendemos restar de di chas
normas conduce a su ruptura y con ella, cada individuo recu­
eaU .
lecer que la obra de Rouss
ginebrino, simplemente deseamos estab Pe ra su libertad natural. El número de cláusulas del contrato social se
pciones pactistas.
es un eslabón más en la cadena de conce redu c e a
un a :

del pensamiento de Rou
A continuación presentamos una glosa
en la concien­
impacto que generó 11
seau, cuya importancia radica en el .. Rocs�EAU, Juan Jacobo. t.'/ Cml/ra/u Social, Cokcción Sepan Cuantos 113, Porrúa.
que le sucedieron.
.

M�XJ<·o, p. 3.
cia de todas las generaciones
, (en
a que el hombre nace libre Y que, sin embargo 14 lde111, p. 4.
Rousseau, estim
esta situa ción establece: 1' lde111, 9.
explicar p.
su época) vive con cadenas, para
100 TEOR ÍA DE LA CONSTITUCIÓN ¡•J)IJLR CONSTITUYENTE J. Matcos Santillan
101
-

... la enajenación total de cada asociado con todos sus derechos a la comu­ Para sostener la indivisibilidad de la soberanía, Rousseau establece
nidad entera, porque, primeramente, dándose por completo cada uno de ],1 niisma razón que sostuvo para la inalienabilidad, "porque la voluntad
los asociados, la condición es igual pa¡·a todos; v siendo igual, ninguno tie­ "-" 1:'-cneral, o no lo es"1� y separa los conceptos voluntad general y vo­
L
ne interés en hacerla onerosa a los demás.16 luntad de todos, la primera atiende al interés común, la segunda atien­

Cabe señalar que será precisamente esta cláusula única de la teoría d L· al interés privado.
E n cuanto a los límites del poder soberano establece:
de Rousseau uno de los puntos más importantes y a la vez polémicos de
... el pacto social da al cuerpo político un poder absolut
la Teoría del Contrato Social, pues los particulares renuncian a sus de­ o sobre todos los su­
\ os. Es éste mismo poder que, dirigido por la volunta
rechos a favor de la voluntad general que se denomina ciudad, repúbli­ d genei·al, toma, como
\a he dicho, el nombre de soberanía.20
ca, cuerpo político, Estado, etc.
Una vez que establece Rousseau las características del Contrato So­ Posteriormente se precisa que "cada individuo enajena,
mediante el
cial, se refiere a la soberanía, de suerte que establece una asociación pado social, poder, bienes y libertad"21 pero sólo en la parte relativa
a
que implica el compromiso recíproco y público de los particulares en la importancia que tengan para la comunidad, y concluye que el
pacto
una doble relación, "como miembro del soberano para con los particu­ social establece igualdad entre los ciudadanos en obligaciones
y dere­
lares y como miembro del Estado para con el soberano"17 de suerte tal chos de suerte tal que las cesiones de los particulares, para
Rousseau,
que, el principio de derecho civil según el cual nadie puede obligarse resulta un cambio ventajoso de independencia natural por
seguridad.
Al referirse a la ley, Rousseau señala que por el pacto
consigo, no opera pues en el pacto social, donde el individuo se obliga social se crea el
cuerpo político y que por medio de la ley se le da movim
ante el todo social del cual parte. iento y voluntad.
Las leyes establecen derechos y deberes y son condic
De lo expuesto se desprende que el cuerpo soberano está formado iones de la Aso ­
ciación de individuos, el pueblo sumiso a las leyes,
por la suma de los individuos, sin embargo, cabe la posibilidad de que debe ser su autor, el
problema es encontrar la forma de que el pueblo
un individuo pueda tener una voluntad contraria a la voluntad general, construya sus leyes,
dicha construcción queda, según Rousseau,
en cuyo caso, todo el cuerpo social debe obligarle a respetar dicha vo­ en manos del legislador al
cual considera un hombre extraordinario
en el Estado y define en las si­
luntad general, porque la multitud de individuos constituye un solo
guientes palabras:
cuerpo en el que reside la soberanía. De esta forma existe una transi­
Si debe serlo por su genio, no lo es menos
ción del estado natural al estado civil mediante la cual el hombre pierde por su cargo, que no es ni de ma­
gistratura ni de soberanía, porque constituy
su libertad natural, vinculada a la fuerza, a cambio de la libertad civil y endo una república, no entra en
su constitución
.22
la propiedad de lo que posee, circunscrita a la voluntad general y a la
posesión. Líneas adelante reitera:
Rousseau dedica el libro segundo de su Contrato Social, al estudio El q u e dicta las leyes no tiene,
pues, o no debe tener ningún derecho legis­
de la soberanía, en él establece una serie de características como que la lativo, y el mismo pueblo, aunque
quiera, no puede despojarse de un dere­
soberanía es inalienable e indivisible para lo cual señala que la voluntad cho que es inalienable . . 23 .

general sólo puede ejercer las fuerzas del Estado cuando su único fin es
Para Rousseau existen
cuatro tipos de leyes:
buscar el bien común. En cuanto a la inalienabilidad de la soberanía
l. Leves fundamentale
s o políticas, regulan la relación del sobera
sostuvo: no
con el Estado, el cuerpo socia
l consigo mismo.
Afinno pues, que no siendo la soberanía sino el ejercicio de la voluntad ge· 2. Leyes civiles, regula
n la relación con los miembros del cuerp so­
o
neral, jamás deberá enajenarse, y que el soberano, que no es más que un cial entre sí y con el cuer
po social entero.
ser colectivo, no puede ser representado sino por el mismo: el poder se
transmite, pero no la \·oluntad.1 � 14 lhidem.
20
p. 16.
ld<'lll,
21
10
RtJL:ssEAu, Juan Jacobo, El Co11trato Socia l op. cit.,
lhidl.'lll. 22 p. I7.
ldnn, p.22.
17 RotJSSLAl!, Juan Jacobo. 1:"1 Colltmto Social, up.cit., P· IO. 21
lhidem.
1� lc/1!111, p. I4.
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN - J. Mateos Santillán 103
102 !'lllli'R CONSTITUYENTE

3. Leyes penales, establecen la sanción de todos los demás. po rnístico.24 En relación a la influencia de Suárez sobre Sieyes es im­
4. Usos, costumbre y opinión, para Rousseau las más importantes
po rta n te que emplea la voz voluntad común de éste, en lugar del térmi­
de todas por ser manifestación directa del cuerpo social. , oluntad general empleado por Rousseau.
no
A continuación presentaremos algunos rasgos distintivos de las
De lo expuesto se deduce que la constitución del Estado es obra del
pueblo, quien debe de reunirse periódicamente de acuerdo a la ley en principales ideas de Sieyes.
Para Sieyes la base de las sociedades humanas es la libertad, donde
asambleas ordinarias y extraordinarias. Para Rousseau los diputados no
L'l hombre es propietario de su persona y de sus bienes, de donde se de­
pueden ser los representantes del pueblo pues son únicamente sus co­
ri' an los derechos del hombre. Junto a los derechos nacen los deberes y
misarios, mismos que no tienen facultades para resolver nada definiti­
vamente, sin embargo, el poder ejecutivo si puede ser representativo, de dl· la correlación de ambos se deriva el orden social.
De esta forma Sieyes afirma que los derechos del hombre son ante­
suerte que los depositarios del poder ejecutivo no son dueños del pue­
riores a todo, y no se pierde nada al entrar en sociedad. "Al contrario, el
blo, sino funcionarios que pueden ser nombrados y destituidos cuando
le plazca al soberano y su función es obedecer, para evitar la usurpa­ gran objeto de la asociación política es dotarlos de una más sólida ga­
;.<.llltía, situándolos bajo protección de la comunidad".2s
ción del poder es importante la celebración de asambleas periódicas,
De lo expuesto se desprende que: los derechos de los ciudadanos no
para sostener el pacto social y votarse si es voluntad del cuerpo sobera­
deri,an ni de la sociedad ni de la ley, sino al revés, la ley y todo tipo de
no sostener la forma de gobierno y si deben mantenerse en el gobierno
autoridad, además de deber su razón de ser a la protección de los dere­
los funcionarios que se encuentran en él, con lo que Rousseau establece
chos de los individuos, son posteriores a los mismos. Con lo anterior
que no existe ninguna ley fundamental que no pueda revocarse, inclui­
do el mismo pacto social, por la voluntad general de los ciudadanos. Sieves retoma las máximas del iusnaturalismo y declara los derechos
humanos anteriores a las creaciones sociales como la ley y el Estado.
6.4.1.2. Emmamwl Joseph Sieyes La positividad de los derechos en el Estado es la garantía de su ejer-
cicio, dado que los derechos naturales lo abarcan todo, agrega:
Pocos autores han influido tanto en el pensamiento universal con­
temporáneo como el Abate Sieyes, de quien puede afirmarse logró un Y esto nunca se repetirá lo suficiente frente a las pretensiones de los funcio­
mayor impacto práctico en las instituciones occidentales que las con­ narios del Establecimiento público, quienes, abusando de la confusión de
cepciones del mismo Rousseau, contenidas en el "Contrato Social". Las lenguaje, parecen dar a entender que no abríamos conservado otros dere­
chos que aquellos que la ley expresamente autoriza.26
diferencias básicas entre ambas giran en torno a la titularidad de la so­
beranía, pues Rousseau impulsó la idea de la soberanía popular, en los Sicves ubica la Declaración de los Derechos del Hombre como prin­
términos explicados con anterioridad, en tanto que Sieyes concibió la cipio de derecho natural que se encuentran por encima del constituyen­
idea de soberanía nacional. te Y del legislador ordinario, en tanto que la constitución positiva esta­
Así como se aprecia en Rousseau la influencia de Althusio, Bodino, blece las garantías de aquellos en cuanto derechos positivosY
Gracia, entre otros; de Sieyes debemos de tomar en consideración su for­ Ante el problema del ejercicio soberano directo en una comunidad
mación inicial con los jesuitas, hecho que le introdujo en el pensamiento grande en población y territorio, Sieyes brinda dos
soluciones: la prime­
escolástico de la Escuela Clásica Española, lo mismo que a Badina, de ra, efec t u ar
asambleas parciales; la segunda, nombrar diputados para
esta forma, su conocimiento de Vitoria, Suárez, Vázquez de Menchaca, una asamblea
central. Con esta última idea enfrenta a Rousseau en
etc., le sirven para leer y criticar a Helvetius, Hobbes, Gracia, Montes· cuanto este
afirma que la voluntad no puede representarse.
quieu y Rousseau, de quienes se valdrá para construir sus ideas. Sicyes considera el sistema representativo el más favorable, para lo
Una de las grandes diferencias entre Rousseau y Sieyes estriba en cual recom i
enda un sistema de representación indirecta en segundo
que la obra y vida del primero transcurren en una época anterior a la � -.

Revolución Francesa, en tanto que el segundo vivirá la revolución, cues·


24
. E nctcl
. opedia Jurídica ÜMEBA up. cit., p. 49
tión que le servirá para retroalimentar sus conoci m i e n t os. ., ,
S lEYES, Emmanucl J., Escri/<Js V Discursos "" la Rn·olucÚ)Il,
e onsti
. Centro de Estudios
Cuando Sieves habla de la sociedad civil, lo hace de una manera t•tcionales, Madrid, 1990, p. 236.
26
muy amp lia, co �ple mentando aspectos que faltan en Rousseau en cuan· ldnn, p. 237.
27
to a la naturaleza del cuerpo moral, al q ue Suárez denominaba cuer· lhidem.
104 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN ¡•llilFK CONSTITUYENTE - J. Matcos Santillán 105

grado (asambleas primarias de cuyas reuniones se formará la asamblea 11Jinoría, siempre tratando de evitar que la mayoría se transforme en ti­
nacional). Los diputados no deben ser portadores de un voto fijo y pre­ r�\11ía. para evitar lo cual se debe diferenciar entre Constitución y ley,
determinado, más bien, deben tener poderes amplios para llegar a acuer­ wl \ como Sieyes lo explica:
dos y aproximar posiciones, sin embargo, los poderes no deben ser ili­ E�ta \·oluntad previa debe formar parte esencial del acto y la m·ganización
mitados y sólo pueden circunscribirse a la misión específica que les en­ por separado, de cada uno de ellos, esto es, en la Constitución. La Constitu­
cargaron sus comitentes. cit'ln en efecto, es una lev fundamental anterior a toda lev aprobada por la
La cosa pública no es ni puede ser propiedad privada de ningún in­ 1na Yoría y obedecerla y soml'te¡·se a ella debe formar parte del compromiso
,

dividuo ni familia, en caso contrario nos encontramos frente a una primordial de todo miembro del Estado30
usurpación.
DL' lo expuesto se desprende el valor fundamental de la constitu­
Para satisfacer las necesidades comunes de la sociedad es necesario
cit.JJl, pues en lo sucesivo la simple mayoría aprobará las leyes, que
crear un Establecimiento público compuesto de cosas y personas que
siempre se encontrarán sometidas al mandato y límites constituciona­
deban su creación a la voluntad nacional.
les. razón suficiente para evitar los abusos de la mayoría.
Para Sieyes la primera división de poderes debe establecerse en los
Una diferencia más entre Rousseau y Sieycs la tenemos en la crítica
siguientes términos:
qm· realiza el segundo del carácter ilimitado de la soberanía popular
En efecto, los poderes públicos deben ser divididos, limitados y organiza­ pues para él, admite dos límites.
dos; en una palabra, constituidos, para cumplir con su destino. Si un cuer­
l. La soberanía se haya reducida a los límites del poder político.
po pudiera constituirse por sí mismo o reformar su Constitución, pronto
2. El pueblo votando unánimemente en el acto constitutivo, no pue­
cambiaría de naturaleza, lo invadiría todo y devoraría sus propias criatu­
de ejercer una soberanía peligrosa, pues los individuos poseen su
ras. Así la división de poderes más necesaria a establecer es la del Poder
veto personal.
Constituyente y los poderes constituidos.2s

Agrega que el despotismo debe ser constitucionalmente imposibili­


Sieyes agrega una siguiente división entre poderes y afirma que el
tado antes que permita aprobar una sola ley por mayoría.
legislativo debe dividirse entre el Jefe del Estado, el Senado y la Cáma­
Sieves redondea sus opiniones sobre los límites de la soberanía se­
ra de Diputados, sin que ninguno pueda arrogarse la titularidad del po­
ñalando que los legisladores deben ser perfectamente libres en sus opi­
der legislativo que no pertenece sino a los tres en conjunto. Cabe seña­
niones, sin que puedan ser juzgados por ella, no obstante, la Constitución
lar que en el pensamiento de Sieyes las ideas expuestas en estas líneas
"ha de atribuir a la fuerza moral y física de la masa, o a una representa­
pertenecen a una segunda época, posterior a sus ideas de 1791, con las
ción de esa fuerza"11 los elementos para controlar y evitar que las leyes
cuales guardan diferencias evidentes.
Las diferencias entre Sieyes y Rousseau no quedan sólo en el ámbi­ vulneren la constitución. Con lo expuesto Sieyes sentó las bases de los

to de la representación, sino que parten del origen o fuente del poder; modernos tribunales constitucionales, mismos que tienen la misión de

es decir, la soberanía y sus límites, pues si para Rousseau los hombres inte r p reta r la constitucionalidad de las leyes al margen de los poderes
enajenan su libertad bajo la dirección de la voluntad general, para constituidos.
Sieyes, el hombre no se asocia para entregar ni su libertad ni sus dere­
chos naturales.29 6.4.2. LA SOBERANÍA ANTE LOS CONSTITUYENTES MEXICANOS
Nos explica Sieyes que el acto de asociación exige la unanimidad de El pen samiento de Rousseau
. y el de Sieyes, representan en la histo­
los asociados, pero que el resto de las cuestiones concernientes a los in­ na u niv
ersal y particularmen te en la historia de Francia el enfrenta­
tereses de la sociedad puede no ser unánime, por lo que se establece la miento
entre los conceptos de soberanía popular frente a las concepcio­
ley como voluntad de la mayoría de los asociados. nes de
soberanía nacional, las diferencias son evidentes, pues en la
El despotismo, es la reunión de todas las partes del poder político Y C on c
e p c i ón
francesa los conceptos pueblo y nación generaron dos teo-
conduce a la tiranía, por lo que la voluntad social dividida en mayoría Y

lll
ldenz, p. 248.
2x !de111, p.241. 11
ldenz, p. 2SO.
2" SIEYi,s. Emmanuel J., l:"scrito., v Discursos de la Revolución, op. cit., p. 247.
CONSTITUCIÓN ¡•UIJF R CONSTITUYENTE J. Mateos Santillán 107
106 TEORÍA DE LA
-

rías francamente distantes en cuestiones como la representación, tal y ¡0nnó en un conjunto de narraciones generalmente ajenas a la realidad
como quedó asentado en líneas anteriores. Sin embargo, en los inicios , c·o n el fin de justificar la actuación de los hombres en el poder. Los
del siglo XXI los retos de la transformación institucional que conllevan �-�unbios que ha vivido México en el pasado reciente y la alternancia en
los fenómenos de la globalización y el impacto de la caída de la Unión c·l poder con un grupo diferente al otrora partido hegemónico, nos ofre­
Soviética, la reunificación de Alemania, la transición a la democracia cc·n la oportunidad, por no afirmar que nos obligan, a reencontrar nues­
española, la caída de los sistemas de partido único o dominante en la tr�1 historia y nuestras instituciones, en un contexto universal que nos
Europa del Este etc., en cuyo contexto general debe estudiarse la alter­ reclama una revisión Institucional profunda.
nancia democrática en México, han obligado a los llamados teóricos del En México desde los años setentas algunos investigadores, empren­
neo-institucionalismo a dar un nuevo sentido a la Historia, tal y como lo dic·ron un replanteamiento histórico de nuestras instituciones con una
expresa Jurgen Habermas en su obra "Más allá del estado nacional": ml'lodología objetiva e impecable, revisar críticamente nuestra historia,

Para aprender de la historia no podemos echar a un lado ni reprimir los a la luz de las fuentes directas, es decir, de los documentos originales
problemas no resueltos; tendremos que mantenernos abiertos a las expe­ sobre los que se escribió la historia, procedimiento seguido por los Eu­
riencias críticas, pues de otro modo ni siquiera podremos percibir los acae­ ropeos años después. Lo expuesto nos permite reflexionar sobre el con­
cimientos históricos como desmentidos, como evidencias del fracaso de cepto de Soberanía en México y el origen de la teoría en que se fundó el
nuestras expectativasY
actual artículo 39 constitucional.

En Alemania, la escuela de Heidelberg, lo mismo que en España y Si acudimos al Diario de los Debates del Constituyente mexicano

el resto de Europa, enfrentan el cambio institucional con un replantea­ de 191 7 y estudiamos el tema de la soberanía, nos encontramos la si­

miento de la Historia, con una historia crítica, que los obliga a reconsi­ guiente exposición en el dictamen sobre el proyecto de artículo 39 que

derar algunos aspectos vitales para comprender la transformación se correspondía en el 39 de la Constitución de 1857:
institucional: El concepto de soberanía es esencialmente histórico, dice George Jellineck,
en su obra El Estado moderno y su derecho, y, efectivamente, su formación
Si la historia en general vale como magistra vitae, habrá de serlo a fuerza
ha tenido diversas etapas ...
de instancia crítica ante la que, o contra la que, fracasa lo que hasta ahora
habíamos tenido por correcto a la luz de nuestra herencia cultural. Enton­ Paralelamente a este movimiento se iniciaba por los tratadistas de dere­
cho público, quienes, con Jean Bodin crearon con su significación especial
ces la historia actúa como instancia que nos invita no precisamente a imita­
ciones, sino a revisiones.33
la palabra soberanía, para indicar (super omnia) el más alto poder huma­
no; \ posteriormente, debido a la labor filosófica del siglo XVIII, concretado
Los alemanes replantearon su historia ante dos factores que así los en sus postulados esenciales en la célebre obra de Juan Jacobo Rousseau, el
obligaban, por un lado su derrota en la segunda guerra mundial con la contrato social, la soberanía, esto es, el poder supremo, se reconoció a los

división política que sufrieron, y por otro, el impacto cultural que gene­ pueblos. Esta concepción sirvió de base, como lo hemos dicho en un princi­
pio, a todos los regímenes políticos que se reformaron radicalmente por la
ró la caída del muro de Berlín y la consabida unificación alemana, en
gr·an revolución francesa de 1789 en que invariablemente las constituciones
España, después de Franco, se encontraron con una historia parcial
políticas escritas que comenzaron a darse las naciones revolucionarias tam­
que en realidad era una simple explicación de partido de un contexto bié n por aquél gran movimiento, consagraron el dogma de la soberanía po­
totalmente diferente, el resto de los países del Este Europeo, enfrentan pular de tal manera, que es considerada hasta la fecha como la base esen­
problemas similares para entender en primera instancia, y enfrentar cia l de los regímenes democráticos.34
como consecuencia, el cambio.
El problema comienza cuando para buscar el sentido de la Sobera­
En México las circunstancias no son muy distintas, desde el fusila­ .
Oia en
México nos remontamos al estudio de las Crónicas de los Deba­
miento de los líderes del partido conservador en 1867 en el Cerro de las tes d el
acta constitutiva de la federación mexicana, efectuados durante
Campanas, la historia de México fue escrita por las plumas o bajo loS
e l C on
stituyente de 1823-1824 y leemos con sorpresa la expresión del
intereses del grupo dominante, de suerte que la historia oficial, se trans· �-

. 14 /Jiariu de lus debates del Cu11gresu Cunstituve11te


12 Habermas Jürgen, Mús al/ú del l·:stwlo Nacimwl. FCE. México. p. S l. Ctern . 1'116-1'117. T.!, sesión de 26 de di-
bre de 1916, p. 963.
.ll lde111, p. 4'1.
108 TEORIA DE LA CONSTITUCIÓN
¡>(lllER CONSTITUYENTE - J. Mateos Santillán
109

Diputado José Mariano Marín, Diputado por Puebla en la sesión del S 1�1do Tlaxcalteca Miguel Guridi y Alcacer, quien fue diputado a las Cor­
de diciembre de 1823: (L'S de Cádiz en 1810-1812 y posteriormente fue diputado constituyente

Que la doctrina contraria nos conduce inevitablemente a la monarquía ab­ L'Il 1823-1824, con el honor de ser el primer presidente del constituyen­
soluta pues bastaría que un solo hombre legislara, gobemara v administra­ te qu e elaboró la Constitución de 1824. Guridi, tuvo un papel protagó
ni­
ra justicia, con la que hiciera lo que tuviese por conveniente y acertado. L 0 cuando se discutió en el Constituyente de Cádiz el tema de la
Sobe-
Que contra esto, no vale la autoridad de Rousseau, cuvas doctrinas, que 1�1nía, en el Constituyente mexicano sus intervenciones fueron
aquí se han leído, son contradictorias y obligan a decir que es loco, por­
ckterminantes, con lo expuesto simplemente queremos destacar la in­
que después de presentar el cuadro magnífico de los derechos del hombre,
l!ttL'l1Cia del constituyente gaditano, sobre el constituyente mexicano en
hace que éste se despoje de todos a disposición de la sociedad, quedando
el tema de la Soberanía, sin menoscabo de la idea sobre que en el Cons­
así 1-cducido a la esclavitud. Que la voluntad genet·al ha sido reconocida en
tiempo de los gobiemos absolutos, en cuya comprobación leyó dos pasajes titmente de 1824 se discutieron ampliamente las tesis de la soberanía
de Suárez y Belarmino que la reconocen, y que aún los defensores de los de Rousseau y la misma concepción norteamericana de la Soberanía en
monarcas absolutos apelan a ella para sostener los supuestos derechos de un Estado Federal. Antes de abordar el tema quisiera simplemente ha­
éstos!35 cer una advertencia sobre la interpretación histórica de estas corrientes
en el sentido de que simplemente deben estudiarse con los principios
De lo expuesto se desprende una terrible contradicción entre los de
la t.:·poca y que no es correcto tratar de interpretarlas aplicando el baga­
Constituyentes de 1917 que afirmaban que el Constituyentes de 1823-24
je cultural de nuestros días.
se había basado en Rousseau y los Constituyentes de 1823-1824, que
El Artículo 3° del Acta Constitutiva de la federación
como se expresó en líneas anteriores, llegaron a afirmar que Rousseau decía:
estaba loco, y se remitían a los autores de la Escuela Clásica Española La Soberanía reside radical y esencialmente en la nación, y por lo mismo
para sostener sus tesis, tal y como lo hicieron Badina, Sieyes y el consti­ pertt:nece exclusivamente a ésta el derecho de adoptar y establecer por me­
tuyentes de Cádiz en 1810-1812. dio de sus representantes la forma de gobierno y demás leyes fundamenta­
Antes de hablar sobre la importancia y trascendencia de la confu­ les que parezca más conveniente para su conservación y mayor prosperi­
sión quisiéramos precisar que las Crónicas de los debates del Constitu­ dad, modificándolas o variándolas según crea convenirte más.36

yente de 1823-1824, permanecieron extraviadas por muchos años, Conviene destacar que en las Cortes de Cádiz, cuando se discutió el
suerte que su publicación en 1974, debe considerarse un parte aguas en tema de la soberanía, lo mismo que en México, se rechazaron las teo­
la investigación institucional en México, pues sin las crónicas de refe­ rías de Rousscau, como queda expuesto en las palabras del Diputado
rencia, los errores, no sólo del Constituyente de 1917, sino en
Joaquín Lorenzo Villanueva en la sesión del 7 de Octubre de 1811, cita­
de la doctrina mexicana, sobre puntos tan relevantes como la so das por José Barragán Barragán:
o el federalismo, generan conclusiones diametralmente opuestas a las
. que sin perjudicar en nada el origen divino
que se fundan en los documentos originales. de la autoridad del Rey, pue­
de decirse que la recibe de sus mismos
súbditos. Y esta doctrina no la he­
La gravedad de lo expuesto nos obliga a presentar los puntos rele­ mus mendigado de extranjeros; la
enseñan sabios teólogos y publicistas es­
vantes del debate sobre la soberanía en 1823-1824 y las consecuencias pañole s de los mejores tiempos, como Alfonso
de Castro, que de su libro De
que conllevan en la interpretación constitucional mexicana así como los f!ofcs!ate legis poenalis dice que todos los príncipe
s legítimos lo son por
antecedentes del México Colonial. consentimiento del pueblo,
que por derecho natural le es concedida al pue­
blo la potestad de hacer
las leyes, y que la ley es la recta voluntad del que
6.4.2.l. La soberanía en el México Colonial hace las veces del pueblo:
y esta opinión la halla él compatible con que ven­
ga de Dios la Autoridad del
que hace las veces del pueblo.
6.4.2.1.1. De Cádiz al Acta Comtitutiva de la Federación
Un célebre Vázquez de Mench
aca hubo también en tiempos de Felipe 11,
P or principio de cuentas debemos mencionar que el principal el cual en una obra
dedicada al Rey, tuvo ánimo para decirle que el
pueblo,
pulsar del concepto de Soberanía que se impuso en México fue el consen·ando siemp
re su sobet·anía. puede recobt·ar sus derech
os primitivos,
Y quitarle al Rey la facultad de hacer leye
s, aun cuando se la hubiese conce-

>S Cró11icas del Acta CUilstillllit•a de la Federación. Cámara de diputados XLIX


tura del Congreso de la Unión. México, Sesión de 7 de Diciembre de 1823, p. 243. '6 ld<'lll, p. 27.
110 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN 'l ¡JlER CONSTITUYENTE J. Mateoo Santillán 111
J
-

dido. Nada diré del padre Juan de Mariana, pm·que todos saben hasta que ¿Reside todavía en ella la Soberanía?
punto llevó esta doctrina suya de que del pueblo reciben los reyes su potes. En absoluto, diría Rousseau:
tad. Omito citar otros escritores nuestros de la primera nota, que acreditan
Digo que reside, pero de diferente manera. Constituida la nación conser·ya
ser esta doctrina recibida en España antes que la propagasen los publicistas
en sí lo que es inseparable de toda perfecta comunidad ciYil, que es el po­
extranjeros.17
der radical para gobernarse y establecer quien la gobierne, siempre que lle­
En el mismo contexto del Constituyente de Cádiz, Guridi y Alcacer g_ue el caso de que falte la persona o per·sonas constituidas por la nación
aborda el tema de la Soberanía desde su perspectiva etimológica como para su gobierno.40

la autoridad que está por encima de los demás individuos y propone Para demostrar la anterioridad de la tradición española sobre la
que el texto constitucional español emplee el termino radicalmente o el
francesa el diputado Mejía repite en la sesión del 29 de Diciembre de
de originariamente para señalar que el origen de la Soberanía tiene
18 lll la frase tradicional de sometimiento de los reyes en Aragón al ac­
como raíz a la Nación y expresar que una nación no deja la Soberanía
ceder al trono y jurar la ley fundamental del reino:
por una persona o cuerpo moral, en clara contravención a Rousseau o
Hobbes, sin embargo, su propuesta no fue escuchada en Cádiz, pero sí "Nosotros que cada uno de por sí somos iguales a vos, y todos juntos muy
,uperiores a vos",41 que no tiene otro sentido que el de establecer que el po­
en México, donde el texto señala "La Soberanía reside radical y esen­
der real emana de la comunidad, la cual se encuentra, en su conjunto, por
cialmente en la Nación". El proyecto de artículo 3° en Cádiz fue una
encima del Rey.
glosa de la definición de Vitoria y era el siguiente:
Con lo expuesto simplemente quiero dejar sentada la existencia de
Art. 3.-La Soberanía reside esencialmente en la Nación, y por lo mismo
una tradición hispano mexicana muy olvidada en nuestro país, pero
le pertenece exclusivamente el derecho de establecer sus leyes fundamenta­
les, y de adoptar la forma de gobierno que más le convengaY fundamental para explicar el concepto de Soberanía que ha prevalecido
en México desde 1824 y si se me permite, desde la vigencia de la Consti­
Después de acalorados debates, los españoles aceptaron el proyecto, tución de Cádiz, en la época de la Nueva España en 1812 y durante la
menos la parte relativa "de adoptar la forma de gobierno que más le etapa colonial a la luz de las Siete Partidas.
convenga", nos explica Barragán que fue más por conveniencia política, En el Constituyente mexicano de 1823-1824, el debate sobre el con­
que por distanciarse del concepto teórico, sostenido por los clásicos es­ cepto de soberanía fue motivo de álgidas controversias, pues se estima­
pañoles y la escolástica, a los cuales se refirieron para señalar que con ba que de dicho concepto se derivaba la forma de gobierno que había
la Soberanía radica en la comunidad perfecta, como lo sostuvo el obis­ de regular la república, de esta suerte, en fechas anteriores al debate
po de Calahorra en los siguientes términos: formal, se inició la polémica sobre el titular de la soberanía, como pue­
de a p rec i arse desde el momento en que la Comisión de Constitución
... que en una comunidad perfecta era necesario un poder a quien pertene·
ciese el gobierno de ella misma, porque el pueblo, según sentencia del sabio presentó el proyecto de Acta Constitutiva, en contra del cual, el Diputa­
d o Mangino presentó en la sesión del 19 de noviembre de 1823 un voto
de los Proverbios, quedaría destruido faltando quien gobernase. De aquí
se deduce ser una propiedad que dimana del mismo derecho natural del P articular que contenía su idea sobre la soberanía en los siguientes
hombre esta potestad de gobernar, y que antes de elegirse determinada términos:
forma de gobierno reside dicha potestad en la comunidad o congregación La Soberanía reside esencialmente
en la reunión de los estados que compo­
de hombres... 34 nen la Nación mexicana; y
la faculta de hacer ejecutar y aplicar las leyes
'crá ej.• Tcid a por los cuerpos
Para enfrentar las tesis de soberanía francesa e inglesa, el diputado y personas que se designen esta Acta y en la
Constitución42
Constituyente Lera, afirmó en la sesión del 29 de agosto de 1811:
De la lectura del voto del Diputado Mangino se desprende la in­
Pero constituida ya la nación y elegida la forma de gobierno.
fl uencia que en su pensamiento ejerció la teoría sobre la soberanía en

17 BARRAGÁN BARRA<.ÁN, José, TelllUS del Lihera/is111o Gwlitww, I nsti tu to de Investiga·


0 .
4 1/dem, p.42.
ciones Jurídicas, UNAM, México, p. 36. 4
1H 1 BARRAG.\N BARRAGAN, José, Temus del Lihera/isnw
Jdem, p. 37. Gwlitmw, op. cit., p. 45.
4
14 Jde111, pp. 38 a 40. 2 Crónicas del Acta Constitutiva op. cit., p. 108.
112 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
J'OJJER CONSTITUYENTE - J. Mateo; Santillán
113

los Estados Unidos de América, y que a su vez generó una vigorosa res­
lucran aprovechados por los habitantes de la regió
puesta por parte de los diputados constituventes, como se aprecia en el n, y segundo, que los
t'-obcrnantes debían surgir de la comunidad
y no ser impuestos desde el
Voto particular del Diputado Carpio quien se pronuncia a favor de una L·L·ntro.
Soberanía Nacional y no en los Estados del 21 de Noviembre de 1823.41 El problema fundamental de lo expu
esto radica en que hoy en día al
En contra de los argumentos que sostenían la soberanía de los Esta­ 111a rgen de la riqueza de los planteamientos
del debate, gran parte de
dos (Mangino) y la Soberanía nacional (Carpio) el Diputado Becerra, Jo� intelectuales mexicanos pretenden
explicar los alcances del concep­
veracruzano, formuló un voto particular en el que cita literalmente to de Soberanía mexicana, con los argumentos de la
minoría, olvidando
fragmentos de la obra de Rousseau para sostener que la voluntad gene­ �a� bondades y generosidad de los argumen
tos sobre los que se edificó
ral es indivisible y pronunciarse por el Centralismo.44 El 2 de Diciembre ]a Nación mexicana.
de 1823 el Diputado !barra afirma, que la mayoría del constituyente no Al momento de la discusión del artic
ulado, correspondió al diputa­
opinaba como el Diputado Becerra.4' do Ramos Arizpe explicar el contenido del artículo
En respuesta, el Diputado Bustamante se pronuncia en contra del
1°.
Dijo que la comisión consideraba por nació
sistema federal, lo que suscita la respuesta del Diputado Llave de Vera­ n al territor-io
y los habitantes...
cruz, quien afirmó: En un sentido igual se pronunciaron
los diputados Gordoa, Berrue­
Que la voluntad general está decidida y sensiblemente manifestada por las cos \ Zavala y dicho concepto fue el que
se aceptó en aquel constituyen­
provincias de Jalisco, Zacatecas, Oaxaca y Yucatán, v aun por las de Pue­ k de 1824.
bla, Tlaxcala y otras; y las demás que no han hecho un pronunciamiento Después de la definición de nació
n resulta conveniente resaltar que
como aquéllos, tampoco han contradicho, y antes bien se han explicado por el concepto de Soberanía del proy
ecto mexicano era una copia litera
el sistema de gobierno federaJ.4b l
del provecto que se presentó en
Cádiz, lo cual debe atribuirse, sin
duda,
a la importante labor de los dipu
Como puede apreciarse, el debate doctrinario en 1823 se daba en tados Ramos Arizpe y Guridi cuyo
pa­
pel en ambos constituyentes debe
función directa de proyecto de nación que cada uno de los diputados te­ calificarse como sobresaliente.
El Artículo 4° del proyecto de
nía, de esta forma, quienes se inclinaban por la República Central, abra­ Acta Constitutiva (3o en el Acta apro
bada) fue discutido en la ­
zaron el pensamiento de Rousseau, en tanto quienes buscaban el siste­ sesión del 1 o de Diciembre de 1823
donde se
vertieron los siguient
ma federal. se adhirieron a las teorías de la Escuela Clásica Española, y es argumentos.
El Diputado Guridi y Alcac
el pensamiento de los Estados Unidos de América, así se encontraron er dijo "que desde que fue individuo
la comisión de de
en la mesa de las discusiones las principales teorías sobre la soberanía constitución en las Cortes de Espa
ña propuso se dijese
que la soberanía resid
que se deban en la época, incluso, si se insiste en la preponderancia de e radicalmente en la nación, para expli
car no sólo
que la soberan
las tesis francesas, debe considerarse un mayor acercamiento a las teo­ ía es inenajenable e imprescriptible
, sino el modo con
que se halla
rías de Sieyes que las de Rousseau. en la nación, pues que ésta conserva
la raíz de la soberanía,
sin tener
su ejercicio" _47
Lo expuesto por el Diputado Llave nos ofrece una versión contraria
La prop uesta de
a las tesis centralistas, si se considera que éstas auguraban futuras gue­ des Guridi y Alcacer fue aceptada por
pués de lo cual la Comisión,
rras civiles si se adoptaba el federalismo pues decían, que México se es­ el debate se centró en criticar los
es encialm adverbios radical y
ente como lo hizo el diputado
taba dividiendo por el sistema federal en tanto que los Estados Unidos el artícul Godoy o considerar redundante
o como lo hizo el dipu
se habían integrado 13 colonias dispersas en una, por el mismo sistema. tado Castillo.
Para defender
la posición de Guridi y Alca
Lo valioso de la opinión de Llave radica en que nos demuestra que con­ A.:1. 1Pe expuso cer, el Diputado Ramos
tra la opinión de los centralistas, el federalismo fue impuesto por las d " ... que la comisión había puesto de
,�tas Y pr propósito las inme­
ecisas consecuencia de la
provincias con dos fines hoy en día vigentes, que los recursos regionales l11as e n Sobe raní a nacional , para gravadas
los ánimos de los mex
Prendi d icanos, a fin de que nunca pue
dan ser sor
os por los déspotas
de los . Que consistiendo la Soberan
41 !de111, p. ll2. dLTechos de los individu ía en la suma
44 !dem, p. os que componen la nac
!55. ión, es visto que
4' !de111, p. !83.
4° C•·ónicas del Acta Constitutiva op. cil., p. 206. 47 Ihidem.
114 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
¡•nllFR CONSTITUYENTE - J. Mateos Santillán

115
a sólo ésta compete esencialmente la Soberanía y que no la puede ena­ El artículo se aprobó en los térm
inos propuestos por
jenar. Que el expresar que las leyes se dan por medio de los represen­ el Diputado
.\ l a rt í nez .
tantes de la nación, es porque los pueblos no pueden hacerlo por sí mis­ De lo expuesto debemos sacar las
siguientes afirmacione
mos, y es preciso que observen el sistema representativo, que les s que nos
�L·r:u1 de gran utilidad para confrontar el
debate de 1824 con la
conserva sus derechos, librándolos al mismo tiempo de los horrores, de doctri­
n:1 mexicana del siglo XX.
los tumultos y de la anarquía, que se pone exclusivamente para que na­ 1. Durante el debate sobre el
concepto de Soberanía que
die pretenda tener parte en las leyes, como sucedió en tiempo de don se habría
de adoptar, se desecharon las
tesis de Rousseau y las nor
Agustín de lturbide que tanto estrechó al congreso por el veto en la teameri­
canas.
Constitución".48 2. El titular de la soberanía en
México, es la Nación, ente
ndida ésta
El debate sobre las atribuciones del soberano, se vio pronto conta- com o el pueblo sobre el territor
io, concepto que difiere de
las te­
minado con los intereses políticos y regionales pues el Diputado Cañe­ sis de Sieyes y se acerca a las
tesis de la Escuela clásica
española
do, solicitó se suprimiera el artículo porque si se adopta la forma de go­ que sostenía que la soberanía
residía en la comunidad.
bierno federal. "... cada estado es soberano, como se asienta en un 3. El único titular de la sobe
ranía es la Nación (en el
sentido ex­
artículo posterior"49 citó el ejemplo de la primer constitución de los puesto en el punto anterior
) por lo que la Federación
y Estados
Estados Unidos en que establecieron su federación y no habla de sobe- simplemente son formas de
gobierno, mediante las cual
es la na­
ranía de la nación. ción ejerce su soberanía.
El diputado Vargas sostuvo la idea que los Estados Unidos se ha- 4. En México el gobierno es
representativo, es decir, fund
a su poder
bían unido estando separados, pero que en México estando unidos, se en un mandato que le con
fiere la nación mexicana.
distribuiría el poder en los estados. "Que llamar soberanos a los estados 6.4.2.1.2. El Constituvent
e de 1856-1857
es porque a ellos compete exclusivamente todo lo respectivo a su go­
Durante el Constituyente de
bierno interno y esto no se opone de modo alguno a la Soberanía de la 1856-1857 el debate entre los
dos Arriaga y Barrera se Diputa­
centró, en sí, la titularidad
nación".50 de la soberanía que
correspondía al pueblo,
como sostenía el primero,
El Diputado Martínez propuso una nueva redacción del artículo lo hacía el segundo o a la nación, como
, sin que a esta discusión
los siguientes términos. deba dársele el alcance que
tiene en Francia
el debate entre soberanía
nacional y soberanía popu­
La soberanía reside radical y esencialmente en la nación y por lo lar, pues los con
stituyentes mexicanos sim
plemente buscaban un térmi­
pertenece exclusivamente a ésta el derecho de adoptar y establecer por no que explicar
a con mayor claridad los fine
la soberanía s del artículo y al titular de
dio de sus representantes, la forma de gobierno y demás leyes , como lo expresó el Dip
utado Arriaga en la sesión del
les, que les parezcan más convenientes para su conservación, mayor septi embre
de 1856:
9 de
peridad, modificándolas y variándolas, según ct-ca convenirle másY
que no vda la nación
sino al pueblo en la soberaní
· · ·

La comisión aceptó la propuesta del Diputado Martínez y el los actos mu a de los estados y en
nicipales. s 1
do Barbabosa estuvo de acuerdo, para el Diputado Rejón faltaba
De igual form
a se discutió si era más
el concepto soberanía y le parecía redundante el artículo, Cabrera mente, propio el adverbio radical­
como se expresaba
ba conforme con el artículo y Marín expuso que la soberanía no es que orig en el Acta Constitutiva
y sostenía Barrera
inalmente, como sost
visible en sus objetos " ... y así lo que mira al gobierno interior de los Partes p enía el proyecto. El artí
culo se votó en tres
ara finalmente señ
alar:
tados, se confía a ellos mismos sin que nadie más se mezcle en ellos
La soberanía
por eso respecto de ese objeto se les llama soberanos" Y nacional reside esencial
y originariamente en el Pue
Poder público blo. Todo
dimana del pueblo y
ttene se instituye para su ben
en todo tiempo eficio. El pueblo
el inalienable derecho
48 Ihidt:lll. de su gobi de alterar o modificar la form
erno. a
49 Jhid.:m. ------
'>O Crónicas del Acta Conslitutiva up. cit . . Jhid.:m. S.J
'1 Ihid.:m. Df!reclws del Pueh
dos lu M.:xicww. Articulado Constitu
'2 Ihidt:lll. dei Congre cional, T:Vl. Cúmara de Diputa-
so de la Unión, México, 1985 pp.
39-18.
116 ¡•t ¡JJFR CONSTITUYENTE - J. Mateo' Santillán 117
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

Cabe destacar al respecto que el debate de 1856-57, en realidad no s e 6.4.3. ÜTROS AUTORES
modificó el sentido del concepto de soberanía que se estableció en 1824.
Así como pueden apreciarse diferencias entre los diversos autores
6.4.2.2. Co11greso Co11stituve11te de 1916-1917 L'il un país sobre el tema de la soberanía y las facultades del poder cons­
titli\L'nte, también pueden apreciarse de nación a nación, en líneas an­
El 26 de diciembre de 1916 se leyó el dictamen sobre el proyecto de

tL·ri JrL'S estudiamos la tradición francesa y la española, con las variables
artículo 39 de la constitución, que finalmente corresponde al de igual
qliL' hemos presentado, sin embargo, es menester señalar que en Ingla­
número en el texto aprobado.
terra se da una evolución constitucional diferente, generalmente carac­
Del dictamen resaltamos en líneas anteriores el párrafo en que la
tL'I"ilada por una lenta evolución de sus costumbres, en la cual puede
comisión vinculaba nuestra tradición a los conceptos de Juan Jacobo
a p r L-c iarse de manera paralela una lenta evolución institucional, carac­
Rousseau, razón suficiente para no repetir la cita literal y simplemente
!L'ri;:ada desde 1295 por la representación de la Cámara de los comunes
retomar la idea. Una segunda característica del debate es, que en él se
con personalidad propia, que actúa en conjunto con otras dos fuerzas;
acepta que en 1916 se encontraba en crisis el concepto de soberanía po­
lo:-- barones y la corona, de forma que el constituyente se caracteriza
pular en su contenido y en su aplicación, por lo cual, y para salvar las
por la concurrencia de los tres. De Inglaterra puede decirse que no ha
objeciones posibles, la comisión sostuvo en su dictamen:
impuesto límites al poder parlamentario, a diferencia del resto de Euro­
...pero en México, menos que un dogma filosófico es el resultado de una pa \ América.
evolución histórica, de tal manera, que nuestros triunfos, nuestras prosperi­
dades y todo aquello que en nuestra historia política tenemos de más levan­ 6.4.3. l. Carl Sclzmitt
tado y de más querido, se encuentra estrechamente ligado con la soberanía
Según referimos al inicio de este trabajo, Carl Schmitt definió al Po­
popular. Y la Constitución, que no tiene por objeto expresar los postulados
der Constituyente como: "la voluntad política cuya fuerza o autoridad
de una doctrina política más o menos acertada, si debe consignar los ade­
es capaz de adoptar la concreta decisión de conjunto sobre
lantos adquiridos por convicciones, que constituyen la parte vital de nues­ modo y for­
ma de la propia existencia política, determinando así
tro ser político.'4 la existencia de la
uni dad política como un todo"."
El artículo 39 de la Constitución fue aprobado sin discusión por Despu és de definir al poder constituyente Schmitt aborda el proble­
unanimidad de 169 votos, del dictamen se debe rescatar una idea que ma de la titularidad del Poder constituyen
te, para lo cual rememora la
empezaba a declinarse desde 1916, la separación entre los conteni tradició n de los monarcómano
s calvinistas de que el poder viene de
constitucionales, y las explicaciones y críticas doctrinarias que du dios, acto seguido explica que
Sieyes desarrolló la doctrina de la Nación
el siglo XX presentaron una verdadera contradicción metodológica, pues como sujeto
del Poder Constituyente y aprovecha la oportunidad para
tratan de explicar en su gran mayoría instituciones que se edificaron explicar que
prefiere el concepto Nación sobre el de pueblo porque "es
principios del siglo XIX, con teorías que se elaboraron en el siglo XX más expresiva e induce
menos a error. Designa al pueblo como unidad
es,
críticas que pueden afectar al pensamiento de Rousseau o el de Siey Polític a con
capacidad de obrar y con la conciencia de su singulari­
pero que no son las adecuadas para valorar el pensamiento mexicano. dad política
... La doctrina del Poder constituyente del pueblo presupone
la volu
El artículo 39 de la Constitución, no ha sufrido reforma alguna ntad consistente de existencia política,
y, por tanto, una Nación".'"
de 1917,es idéntico al texto constitucional del mismo numeral en Para Schmit, el poder
constituyente no se vincula a formas jurídicas
y Proce
Constitución de 1857 y presenta pequeñas variables de precisión dimientos pues se encuentra siempre
en estado de naturaleza.
En el co
ceptual en relación al texto del Acta Constitutiva de la Federación nstituyente descansan las facultades y compet
encia constituidas
y acom
cana. Con lo expuesto, simplemente deseo resaltar que existe una .
odadas a la Constitución, sin
embarg o, Schmit t, siguiendo a
S1cve . . ·
s s a ¡·Ir ma . .
de antecedentes que nos lleva directamente de las Siete Partida
· .
que el constituvente no puede constitU irse nunca con
arreg
Constitución de Cádiz :v de ésta, a las constituci one s fede1·ales de 1 lo a 1·a Const"t i UCJon, pero e 1 pue blo o N acwn ·
-------
· · ·
· · es siempre 1a fuente
1857 y 1917.
''
'" S lil.\trn Carl,

op. cit., pp. 93-94.
'4 Diario de los debates del Ccmgresu Cullstituyente 1916-1917, up. cit., p. 963. lde11z, p. 96.
CONSTITUYENTE J. 119
p(liJI· R
118 TEORÍA DE LA CONSTITUCiÓN - Mateo' Santillán

de toda fuerza que nunca subordina su existencia política a una formula. f¡) Asamblea (Convención) que proyecta. La asamblea formula un
ción definitiva, '7 con lo que se separa del mismo Sieyes cuando al aplicar provecto de Constitución o leyes constitucionales, con un referén­
sus racionamientos sobre el caso francés expresa su oposición a los p ro. dum u otro procedimiento que somete el proyecto a la voluntad
cedimientos de la época de la revolución para lo cual cita a Redslob: de los ciudadanos con derecho a voto.
e) En el caso de una Federación. La constitución puede ser some­
Con la doctrina democrática del Poder constituyente del pueblo (que se di­
tida a la aprobación del pueblo de los Estados miembros.
rigía contra la Monarquía absoluta existente). ligó Sieyes la doctrina antide­
d) Plebiscito general. Cuando cualquier propuesta se somete a la
mocrática de la representación de la voluntad popular mediante la Asamblea
nacional (ni por el pueblo. ni por el rev). Hubiera sido· lo democráticamente
n)luntad del pueblo.

consecuente dejar que el pueblo mismo decidier·a, pues la voluntad consti­ Cabe agregar que para Carl Schmitt el pueblo nunca se transforma
tuyente del pueblo no puede ser representada sin que la democracia se
en aut oridad, incluso, ni en la llamada democracia directa, pues siem­
transforme en Aristocracia. '8
pre es algo más que un simple órgano del Estado.
Como se aprecia claramente, el profesor Schmitt objeta la teoría de
la representación y además nos explica que la organización de una mi­ 6.4.3.2. R. Carré de Malherg
noría también puede ser sujeto del Poder constituyente, con lo cual el Para recordar el tema del poder constituyente, al cual considera de
Estado adopta la forma de Aristocracia u oligarquía que de alguna ma­ capital importancia junto con Duguit, se plantea la teoría del órgano, en
nera son variables de una dictadura.
virtud de que el órgano puede ser un individuo o un conjunto de indivi­
En cuanto a la Actividad del poder constituyente se caracteriza por
duos "cuya voluntad se erige en Voluntad del Estado por el estatuto or­
los siguientes elementos. 'Y
gánico de la colectividad nacional"MJ de lo cual se deriva que los órga­
l. La actividad del poder constituyente, no puede sujetarse a un pro­
nos del Estado provienen en esencia de la Constitución.
cedimiento, ni a bases constitucionales anteriores o en vigor has­
La relación soberanía-órganos del Estado es descrita por Carré de
ta el momento.
Malberg en los siguientes términos:
2. El pueblo manifiesta su poder constituyente por expresiones de
su voluntad hacia el modo y la forma de la unidad política. En el sistema de la soberanía nacional, particularmente, toda persona lla­

a) El pueblo, aun cuando titular del poder constituyente, no es mada a concurTir a la formación de la voluntad estatal desde el simple ciu­
uadano-clector hasta el monarca constitucional, recibe su competencia fun­
una instancia organizada, sin embargo, tiene la capacidad para
cional, no va de un derecho personal, sino de una vocación creada por el
decir sí o no a las cuestiones fundamentales de su existencia.
estatuto de la nación. Y de modo general, el órgano no ejerce un poder pro­
h) El pueblo se manifiesta como opinión pública.
pio, sino la potestad de la nación estatizada. En principio, únicamente la
La voluntad constituyente del pueblo es inmediata, anterior y superior a la nación, unificada y personificada en el estado, es sujeto de la potestad pú­
constitución preexistente. blica; pero la Constitución es el conducto por el cual esta potestad, en lo
que se refiere a su ejercicio, se comunica a los diversos órganos estatales.
4. En las democracias modernas se practica la llamada asamblea De hecho, v en derecho positivo, todo poder que se ejerce en el Estado tiene
nacional constituyente democrática, elegida por sufragio univer· su origen en una ucvolución hecha por la Constitución.1,¡
sal y admite variables:
De lo expuesto se desprende un problema para la posición de Carré
a) Asamblea nacional que acuerda y despacha. Se elige de forma
M
d�- alberg, pues si la nación se personifica en el Estado y la Constitu­
democrática con la comisión de acordar el texto de las leyes Cion es
el conducto para comunicar facultades a los distintos órganos
Constitucionales y expedirlas para que entren en vigor por acuer·
do de la mayoría, sin que haya lugar a un referéndum sobre el
� �
el E sta o. el problema se traslada a la pregunta ¿quién debe elaborar

proyecto aprobado. t
\ConstJtución? Que se traduce a ¿en quién reside el poder constituyen-
e . Para responder a dichas interrogantes se emplea una reOexión que
...._,,

'7 !dl.!lll' p. 97.


0° C\Rtü: tn. MAt.Bt-:Rt., up. cit., p. 1161.
"' lhidl.!lll. 61
'" Sc!IMITI Cad, op. cit., pp. 99 a !03. lhidc111.
120
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN ¡•<lil\:R CONSTITUYENTE - J. Matl'm Santi1
l ün 121

la que lo
remonta el problema a la Constitución primitiva del Estado, 6.4.3.3. Hans Kclsen
la volun­
originó, y procede de una fuente de fuera del Estado, sino de Un autor de referencia obligada por el impacto que sus teorías pro­
de Mal­
tad de individuos, voluntad constituyente, que opinión de Carré
dt�ie ron en México, es Hans Kelsen, aún cuando hay que mencionar que
prima­
berg es la "verdadera voluntad soberana" es decir, la "voluntad
,kdica pocas líneas al poder constituyente. Para Kclsen, el Estado no es
ria constituyente" ."2 hombre o un conjunto de hombres, "es un orden bajo cuyo poder es-
1111
so-
De esta forma explica el autor francés el sentido originario de la los hombres".""
1j11
del Estado y en poder de los indi­
beranía, situada primitivamente fuera Kelsen recuerda que históricamente se hablaba de la soberanía del
el
viduos, tal es el planteamiento de partida que evoluciona cuando re'\ \ después de la soberanía popular, él sostiene que la atribuye al
de ór­
hombre se asocia, con lo que, en su opinión, la crítica a la teoría [>,tado. De esta forma, la soberanía es una atribución del Estado y por
ju­
gano de Estado carece de valor, pues debe aceptarse que el estatuto wnto no puede ser una atribución de un ser natural, sino que es "una
rídico originari o del Estado es obra de los individuo s y no depende de
propiedad del orden jurídico que se suponga como válido o sea como
vez que
ninguna organización ni orden jurídico preexistente, pero una \ igente" con la característica de que sea supremo, es decir, que no acepte
colectivid ad nacional expresa su
se elabora la primera constitución, la otro orden superior. Por lo tanto, la soberanía debe estudiarse como un
nte en la consti­
voluntad mediante ciertas reglas establecidas previame problema de relaciones entre dos órdenes normativos.
cuestión de
tución, y las decisiones soberanas ya no son, en el Estado, Debernos recordar que en esta corriente, la validez o vigencia de las
Estado,
voluntades individuales, sino cuestión de voluntad unilateral del normas individualizadas, encuentran su razón de su vigencia en la ley
no se excluye el constituy ente, pues el cambio de cons­ del Estado, la cual se deriva, a su vez de la Constitución, de esta forma
de esta situación
titución no significa el cambio, renovació n o modificac ión de la colecti­ se crea una pirámide en cuya cúspide se encuentra la Constitución, de
vidad, ni se crea una nueva nación. cm a \ igencia se deriva la vigencia del orden legal, por lo que puede de­
De esta suerte, para Carré de Malberg se dan dos hipótesis de cam- cirse que un orden es supremo o soberano, cuando no ésta subordinado
bio constitucional. a otro orden, "cuando su norma fundamental no pertenece a otro orde­
l. El que se realiza de manera violenta. namiento, lo cual quiere decir que esta norma fundamental no tiene ra­

... en la cual la devolución y el ejercicio del poder constituyente no están re­ zón de \alidez o vigencia que sea común a otras normas"."7

gidos por el derecho, pues en la ciencia del derecho público no hay lugar Cuando se plantea la cuestión de cuál es el fundamento de validez
para un capítulo consagrado a la teoría jurídica de los golpes de Estado, de de una constitución, se afirmará que es la Constitución precedente y así
la revolución y de sus cfectos.63 sucesivamente hasta llegar a la primera constitución, a la cual se deno­
mina constitución en sentido lógico jurídico, "para diferenciarla de la
2. En caso de reforma constitucional total o parcial pacífica, debe
constitución positiva que originaria y primeramente se funda en ella a
de operarse según los preceptos establecidos en la constitución
la cual llamaremos constitución en sentido jurídico positivo"."�
que se trata de modificar, "de tal modo que la Constitución nueva
Kel sen nos explica que la norma fundamental es la base del Estado
nace en cierto modo de la antigua y la sucede, encadenándose
Y de su soberanía, razón por la cual es esencial, para la norma funda­
con ella sin solución de continuidad.M
mental, determinar el órgano supremo de producción de ulteriores nor­
De lo expuesto, debe concluirse con las teorías de Carré de Mal­ mas. de suerte que "el Estado, en su unidad y con su soberanía aparece
berg, que el poder constituyente, en la medida que proviene de la cons­ como orden supremo sobre el cual no existe otro alguno más alto"."Y
titución, es en cierta forma un órgano constituido, �· que "incluso puede En esta corriente, el Estado sólo puede ser soberano cuando concu­
rren
decirse que, propiamente hablando, no existe órgano constituyente: en dos consecuencias.
el Estado no hay más que órganos constituidos"."'
hf> L'
"''·L�F-.; , Han�. Colllfh'IUJin de Teoría (;cneral del l:'stado, Editora Nacional. México.
1 '!Ko.
p. 136.
"2 Jdc111, p. 1162.
nl
Jdc111, p. 117:l.
'-

,
: lde111, p. 137.

"4 CARR(. DI'. MAI.BER<., o¡>. cil., p. 1174.


ldclll, p. 13'!.
"''
" ' !dc111, p. 117S. lhidl'l/1.
122 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN ¡•(}!lFR CONSTITUYENTE -J. Mall'os Santillán 123

l. Que no hay sobre él ningún orden jurídico, ni siquiera el derecho ]ns quehaceres, como sostiene Kelsen, que vacía de toda realidad al
internacional. Eo.tado y lo considera sólo "validez deontológica del Derecho".7'
2. No puede haber Estados soberanos junto a él "Si se quiere per- Héller niega el valor del normativismo puro de Kelsen y sus segui­
manecer en las tesis de una multiplicidad de comunidades jurídi­ dnrL'S, lo mismo que se contrapone al "poder sin norma" de Schmitt, se­
cas coordinadas entre sí y designadas como Estados que también �ttll el cual la Constitución vale por la voluntad política existencial de

sean soberanos junto a él, entonces debe renunciarse a la sobera­ ��� c reador, de lo anterior desprende el siguiente razonamiento:

nía como propiedad del Estado".70 :'\lo existe Constitución política alguna que, cabalmente como status real, no
sea a la vez, un ser formado por normas, es decir, una forma de actividad
De lo expuesto se deriva una definición de constitución en un senti­
normada. además de una forma de actividad meramente normal.76
do material amplio: "una norma o un conjunto de normas que regulan
la creación de otras"71 en sentido estricto, se emplea el precepto para El poder constituyente es la voluntad política que mediante su poder
"designar los preceptos que regulan la creación de las normas jurídicas \ aut oridad puede determinar la existencia de la unidad política en todo.
de grado superior y, en particular, la creación de las normas generales .De suerte que la población sin normatividad no tiene ni voluntad de de­

llamadas leyes"72 de esta forma la constitución es el primer impulso po­ cisión, ni poder de acción, ni autoridad. Lo mismo que la normatividad
sitivo para la creación del derecho, de lo cual se desprende la diferencia requiere de autoridad, entendida como "un prestigio que se basa esen­
entre legislación constitucional y legislación ordinaria. De dicha dife­ cialmente en la nota de continuidad, en la tradición y permanencia".77

rencia se desprende la diferencia entre poder legislativo y un poder an­ Para Héller, la legitimidad de una constitución va más allá de que
terior a él que es el poder constituyente, creador del legislativo.73 su origen, se funde en preceptos jurídicos positivos que tengan validez
En cuanto a los órganos representativos Kelsen sostiene: "La teoría con anterioridad, de igual suerte, es necesario que "una Constitución,

de la representación, esto es, la concepción de que el parlamento mo­ para ser Constitución, es decir, algo más que una relación fáctica e ines­

derno es un órgano secundario del pueblo, el cual se considera como table de dominación" se sostenga sobre principios éticos de Derecho.

órgano primario del Estado, y de que en el parlamento sólo puede ha­ Después de criticar los extremos en Kelsen y Schmitt, Héller concluye:

llar expresión la voluntad del pueblo, es una ficción política que tiene La cxistcncialidad y la normatividad del poder constituyente no se hallan,
por objeto conservar la apariencia de soberanía popular".74 cicl"tamentc en oposición, sino que se condicionan recíprocamente, un po­
De lo expuesto, se desprende que realmente para esta corriente, der constituyente que no esté vinculado a los sectores que son de decisivo
solo existe la idea del constituyente originario, refiriéndose al primero, inllujo para la estructura de poder, por medio de principios jurídicos comu­
pues los posteriores serán simplemente consecuencias de un orden nor­ llL's, no tiene poder ni autoridad y, por consiguiente, tampoco existencia.78

mativo previo, principios que chocan fuertemente con el concepto histó­


6.4.3.5. Ignacio Burgoa Orihuela
rico que ha prevalecido en todos los constituyentes mexicanos, tal Y
como se demostró en líneas anteriores. Maestro universitario por más de cincuenta años, sus teorías han te­
nido un gran impacto
en la concepción jurídica mexicana, cuando nos
6.4.3.4. Hennmm Héller explica la soberanía
y el poder constituyente aborda el tema refiriéndo­
se a la equiv
ocidad del término Soberanía, en virtud de las diversas
En una posición contraria a Hans Kelsen y a Carl Schmitt, Her­
acepciones
que se ha dado al vocablo en diversas épocas de la historia,
mano Héller, alemán, explica que el Estado es una unidad real, en el
Y Partic ularmente, en las
sentido de ser lo mismo que toda organización, una conexión real de diversas corrientes que intentan explicarlo
des·pues d e Bodin
o y Rousseau.
-

efectividad que actúa como unidad de modo causal. La unidad real del
El Maestro Burgoa organiza
Estado no debe equipararse a la unidad de ordenación regulatoria de en su obra a las diversas corrientes
agru pá
ndolas por autores, de modo que aglutina
dentro de los partida-

7° KEL�EN, Hans, Co111pe11dio de Teoría Ge11eral dell::'stado, up. cit., p. 141. 7'
71 Ide111, p. 191. 70 ihU.ER, J-lennann. Teoría del l:"swdo, FCE. México, 1998, p. 303.
77 ldem , p. 321.
72 Ihidciii.
71 Ide111, p.191.
7� fdem, p. 352.
Estado, op. cit., p. 213. ldu11, p. 353.
74 KELSEN, Hans. Culllfh'll<lio de Teoría Ge11eral del
124 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN J'l ¡¡JFR CONSTITUYENTE - J. Mateo' Santillán 125

rios de la Soberanía depositada en el Estado a "Bluntschli, Jellinek, prl·scntantes para actuar en un sentido determinado, por lo que conclu­
Esmein, Bielsa, De la Cueva, Serra Rojas y otros autores que sería pro­ ' e c it ando a Duguit:
lijo citar"7Y con la idea de que el poder soberano radica en el pueblo o
El Estado es, pues, la nación soberana representada por mandatarios res­
nación y que el poder del Estado es diferente, cita a Sánchez Viramon­ ponsables. Se dice que el Estado es el titular de la soberanía y esto se puede
te, Aurora Arnaiz y él mismo. Quienes hacen radicar la Soberanía en la ckcir para facilitar el lenguaje, pero es absolutamente exacto. El titular de
Sl
constitución, y cita a Kelsen, Linday y Tena Ramírez. Y concluye con la Soberanía es la nación persona.
quienes la niegan, como Duguit y Friedrick.
En cuanto a si el poder constituyente es distinto de la soberanía, el
Me parece particularmente interesante la exposición de Burgoa, en
doctor Burgoa nos explica que el término poder entraña fuerza y el cali­
la medida que nos presenta con claridad las grandes corrientes que es­
liL;tti\·o constituyente implica la finalidad de ese poder que se manifies­
tudian a la Soberanía, porque cada una de ellas sirve para fundar una
ta L'll la creación de la Constitución, de lo que se deriva que el poder
explicación distinta del Derecho y del Estado.
const ituvente es una potencia encaminada a establecer un orden consti­
Para Burgoa la Soberanía radica en la nación o pueblo, "en sentido
t m ional dentro del cual se organice el pueblo. 84
sociológico", y añade, "como grupo humano real coherente", que se da
De lo expuesto se deriva que el poder constituyente debe ser "supre­
una organización jurídica y política la cual crea al Estado como perso­
mo, coercitivo e independiente". Y explica la supremacía como el deber
na moral.�0 actuar sobre los otros poderes de la comunidad, su coercitividad como
Como puede observarse, el Maestro Burgoa maneja como sinóni-
la !acuitad de someter a tales poderes, y su independencia en no estar
mos los conceptos nación y pueblo, lo que me parece un acierto, si se subordinado a fuerzas extremas o ajenas al pueblo. De lo expuesto se
estudia desde la perspectiva de la tradición constituyente mexicana, y desprc·ndc que el poder constituyente "es la soberanía misma en cuanto
no como lo plantea el maestro francés Carré de Malberg, cuando expli­ que tiende a estructurar primaria y fundamentalmente al pueblo me­
ca, en la tradición de su país, las notorias diferencias entre la Soberanía diante la creación de una Constitución en su sentido jurídico positivo, o
nacional y la Soberanía popular. La nación se otorga una estructura ju­ sea, como un conjunto de normas de derecho básicas y supremas".85
rídico política que se expresa en la Constitución, sin que se admita inje­ Con lo anterior, Burgoa sostiene que si la soberanía reside en el
rencia de ninguna potestad distinta de la nación o al interior de la mis­ pueblo, sólo al pueblo o nación pertenece el poder constituyente, de lo
ma, razón de la cual se desprende la calidad de soberano, entendida quL· se deriva una serie de atributos, que, pertenecientes a la nación, de­
ésta como el poder que no admite otro poder sobre de él.81 ben caracterizar también al poder constituyente, como son, la inaliena­
Burgoa nos explica que la autodeterminación, que es una expresión bilidad, la indivisibilidad y la imprescriptibilidad, no obstante lo cual,
de la Soberanía, "en el fondo entraña una autolimitación", lo cual se su poder debe ejercitarse apegado a la ética y en apego a su finalidad,
debe a que al darse una estructura jurídico-política, "esta estructura crear un orden jurídico fundamental o Constitución. 86

que es normativa, supone como toda norma una limitación, es decir, se­ En cuanto a la titularidad del ejercicio del poder constituyente el
Doctor Burgoa sostiene
ñalamiento de límites"�2 a continuación nos dice que la Soberanía es un que es imposible física y psicológicamente que
el conjunto
atributo del poder del Estado, entendido éste como la forma en que se social se dé una Constitución, por lo que debe depositarse
su ejerci
organiza un pueblo. cio "en un cuerpo compuesto de representantes populares, que
se denomi
Para Burgoa "el poder público que desempeña el Estado a través de na Congreso o Asamblea constituyente y cuya única misión
consiste
en elaborar una constitución a nombre del pueblo" de lo que se
sus órganos" no es soberano pues no puede modificar los principios bá·
� csprend
e una distinción entre el cuerpo representativo y el poder cons-
sicos que le norman, de suerte que la nación es la titular originaria de .
1J tu.\'ct1t'
e propiamente d'IC h o,
la Soberanía que por medio de un mandato específico faculta a sus re· . .
e 1 cuerpo es e 1 organo a qUien
' se conf'ta e 1
eJercic io,
el poder constituyente es la fuerza o actividad soberana de

7'' Bt'R<;OA 0Rllll'ELA, Ignacio. /Jcrcclw Cons!Í/IICÚJII<li .\lcxicww. l'otTÚa, MéxicO,


'" [)¡ <.tTJ, Leon, citado por Bt•R<;oA O.
2000, p. 242. Ignacio, op. cit., p. 246.
80 XI Bi'l«;oA O., (vnacio.
b op. cit., p.248.
K'.
Jhidnn. p. 244.
Hl fhitft:lll, p. 24'i.
fdt:lll, p. 249.
""
s2 ldelll, p. 251.
!hidt:lll.
126 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN CONSTITUYENTE - J. M<tteos Santillán
l't JJli'R 127

darse una constitución, de lo que deriva la relación que existe entre la De lo expuesto, concluye Tena que la realidad se impone a la ficción
asamblea constituyente y el pueblo como expresión de legitimidad del on personas físicas las que detentan la soberanía en la doctrina
\ que s
primero, sin la cual, la constitución sería espuria o ilegítima. Tampoco e u ro pea.
debe confundirse el poder constituyente con la faculta de reformar la De las teorías europeas, nuestro autor pasa a la experiencia de los
constitución. 87 b ; tados Unidos de América, a la cual llama americana porque según su
diL·Iw la adoptaron los principales países del continente. En esta hipóte­
6.4.3.6. Felipe Te11a Ramíre;:,
si� se destituye a los gobernantes de la soberanía "y se la reconoce origi­
Para este distinguido constitucionalista mexicano, el tema de la So­ nariamente en la voluntad del pueblo, externada por escrito en el docu­
beranía "pertenece por su naturaleza a la teoría general del estado"88 y !liL'IllO llamado Constitución".
es precisamente con el tema del poder constituyente con el que inicia su Tena nos explica que en el sistema federal americano "no tiene cabi­
obra de derecho Constitucional Mexicano.
da la soberanía del órgano, de los gobernantes o del Estado, ni en
Tena nos introduce a la cuestión del Poder Constituyente con una suma, ninguna persona física o entidad moral que desempeñe funciones
amplia reflexión sobre lo polémico del concepto Soberanía y la gran va­
d e gobierno puede entenderse, en este sistema, como jurídicamente ili­
riedad de significados que se le dan al vocablo, en ocasiones hasta con­ mitada ". ' ) 1
tradictorios. En cuanto al origen, nos dice que se gestó a finales de la De lo expuesto se desprende, para el caso mexicano, que los pode­
Edad Media para justificar el predominio del rey sobre la iglesia y los res públicos creados por la Constitución no son soberanos, ni en su re­
feudales, y sostiene "Bodino definió por primera vez al Estado en fun-. lación con los otros poderes, ni en su relación con los individuos, dado
ciones de su soberanía" como suprema voluntad, atributo sobre el cual que se derivan de la Constitución.
se fundó el absolutismo justificado por las teorías de Hobbes. "El Esta­
:\ tale s órganos no les es aplicable, por tanto, el atributo del poder soberano
do soberano se identificó con su titular y el rey puedo decir que el Esta­
que la doctrina europea coloca en el órgano a través de la ficción del Esta­
do era él".xY
do. Ni siquiera es propio hablar de una delegación parcial o limitada de la
Los doctrinarios que influyeron en la revolución francesa traslada­
Soberanía, repartida entre los órganos, porque en este sistema, y hasta aho­
ron la soberanía del rey a un nuevo titular, al pueblo, momento a partir ra, soberanía y límite jurídico son términos incompatibles, así ideológica­
del cual se genera una confusión que agravó la confusión sobre la natu­ mente como gramaticalmente.92
raleza, atributos y significados.
Tena concluye que una vez que el pueblo ejerce la
De la doctrina europea se derivan dos características del poder so­ Soberanía, ésta
reside en la Constitución y complem
enta su idea con el siguiente pensa­
berano, independencia y supremacía, la primera se relaciona con el ex­
miento: "Advertirlo así es el hallazgo
de Kelsen" después de lo cual se
terior y la segunda se refiere a la soberanía interior. adh iere a las consider
aciones del Maestro austriaco para sostener.
Para el interés del Maestro Tena, dos son los problemas que atraen
su atención, la titularidad y el ejercicio jurídico del poder soberano, la Sólo un orden normativo -dice-
puede ser soberano, es decir, autoridad
suprema, o última razón de
respuesta de la doctrina europea según nuestro autor es que la titulari­ validez de las normas que un individuo está au­
tot·izado a expedir con
dad corresponde al Estado, para enseguida señalar que el Estado es una el carácter de mandatos y que a otros individuos es­
l{tn obligados a obedecer.Y3
ficción y subsiste la pregunta de quién ejerce de hecho la soberanía. Los
europeos, nos dice, llegarán a la conclusión de que fatalmente el poder De lo
expuesto por Kelsen deriva Tena Ramírez que
debe ejercerse por órganos. �� la expres la constitución
ión de la Soberanía, que la Constitución signific
la, Po
a suprema-
r ser la más
Este titular es el órgano u órganos en quienes se deposita el eje1-cicio actual alta fuente de autoridad y primacía por ser la cúspi­
de de la
y permanente del poder supremo, es decir, los gobernantes.Y0 pirámide de las leyes, de
donde emana el principio de legalidad
que tra
smite a los poderes púb
licos.
-----------

87 Ihidmz. p. 254. YJ
sx TENA RAMIREZ, Felipe, Dat!c/10 Cmzsliluciuna/ Mexicmzo, PmTúa, México, 1976, p. l. ldnn, p. 7.
Y2
SY Jdem, p. 3. l Tt·. .\IA RAMÍRFZ, Felipe, . . . .
Y Dereclzo Cmzs/zluczmzul .\lc.ucww. "1'· cil., p. 8.
''0 Jdem, p. S. ldenz, p. 9.
128 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN 1,, 1¡ 1FK CONSTITUYENTE - J. Maten> Santillán 129

Al momento de explicar la naturaleza del poder constituyente, esta El Maestro Tena establece que el Poder Constituyente tiene límites
corriente establece una clara diferencia entre éste y los poderes consti­ dl· índole histórico y sociológico, como son los factores reales de poder
tuidos, desde su origen, hasta sus funciones. En cuanto al origen, el al interior del Estado y en ámbito externo del Derecho Internacional.
constituyente es anterior, y crea la constitución, después de lo cual de­ L�t Soberanía interior tiene como nota característica a la supremacía,

saparece; en cuanto a las funciones, el constituyente no gobierna, sólo cit l· a m bio, la Soberanía exterior es un comparativo de igualdad.
expide la norma fundamental que servirá para fijar los términos y lími­
6.4.3.7. Jorge Carpiz.o Mac Gregor
tes en los que gobernarán los poderes constituidos, sin que éstos últi­
mos puedan alterar la ley que los creó y sus competencias, de ésta for­ El Doctor Jorge Carpizo es un investigador representativo de los
ma, todo acto legislativo contrario a la constitución es nulo, según las tr abajos que se han desarrollado en el Instituto de Investigaciones Jurí­
ideas de Hamilton en el Federalista. dica� dc la UNAM y aborda el tema de la Soberanía con una explica­
Desde su perspectiva metodológica, el maestro Tena critica el con­ ción histórica orientada hacia Francia, de suerte que, para ellos, Bodi­
cepto de Soberanía expuesto en los artículos 39, 40 y 41 de la constitu­ no es un autor fundamental en su explicación, la cual concluye, en este
ción, pues según su parecer, el ejercicio de la Soberanía no puede re­ punto afirmando:
caer en órganos constituidos como lo son la Federación y los Estados y Podemos concluir que para Bodino el soberano es quien efectivamente go­
se explica en los siguientes términos: bierna, ya sea un príncipe, un grupo, o el pueblo.�'

Es en esos artículos 40 y 41 donde se introduce en nuestra Constitución un Un segundo punto de reflexión para Carpizo es sobre la titularidad
léxico espurio, bajo doctrinas incompatibles con la organización de los po­
de la Soberanía, la cual explica por autores, dc forma que describe d
deres, que sobre la base de facultades estrictas establece la técnica total de
amplio y en ocasiones contradictorio panorama de la doctrina, para
la Constitución.�4
concluir con una afirmación categórica:
Los conceptos del maestro Tena son tan duros, que realmente nos
En una teoría democrática no existe ninguna otra posibilidad: el titular de
merecen una respuesta metodológica que se contraponga a los efectos
la Soberanía es el pueblo, ya que, como se ha dicho, la libertad es al hom­
que generan en nuestro país. bre lo que la Sobe1·anía al pueblo, en su esencia misma, y aquí se encuentra
1°. Las opiniones del Maestro Tena presuponen que el concepto de el mérito del pensamiento de Rousseau.�6
soberanía mexicano proviene de la influencia del modelo norteamerica·
En consecuencia examina rápidamente las principales ideas de
no, lo cual no es correcto si se Ice con atención el debate sobre la Sobe·
Rousscau, con lo cual establece su línea teórica; de Bodino a Rousseau,
ranía del Constituyente mexicano de 1823-1824 que presentamos en Jí.,
Y con Rousseau afirma: "La única forma de gobierno aceptable a la dig­
neas anteriores.
nidad humana es la democracia.�7
2°. El concepto de Soberanía mexicano de 1824 y 1857, lo mismo
Después de establecer las características de la Soberanía interna y
que el de 1917, que simplemente retoma lo anterior, se dan en una con·
1� Sobe ranía externa, pasa a las críticas al concepto de Soberanía, ana­
cepción filosófica y una corriente absolutamente distintos al positivismo hzando autores como Preuss, Garncr y Politis hasta llegar a Duguit,
Kelscniano, que al momento de los constituyentes de 1824 y 57, n i si· �elsen \ Laski. De Duguit destaca el problema de algunos hombres que
quiera había nacido, de lo cual se infiere que, resulta absurdo explicar
1111Ponen su voluntad por la fuerza a los demás, lo que llevaría a admitir
la soberanía mexicana delimitada en el siglo XIX, con métodos que na· que existen
hombres superiores a otros, o la existencia de un dios, de
cieron muchos años después. suerte que
al no poder explicar la voluntad soberana, "se pronuncia en
3°. Si se estudia el concepto de soberanía a la luz de los razona· c ontra
de la Soberanía". De Kelsen retoma su predicción acerca de que
mientas que se expusieron en nuestros constituyentes, se verá que existe
un marcado divmTio entre éstos y algunas corrientes doctrinarias, que lJ::; '
C.\Ri'JZo MAL GREGoK. Jorge. L,llllJio, Cull\titucirmale.,, UNAM-Ponúa, Mé·xicn,
intentan explicarlos posteriormente. 19
'JY, p. 4YS.
"'
'!7 fclelll, p. 496.
44 Idem, p. 10. lclenz, p. 498.
130 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
J'llili·R CONSTITUYENTE - J. Mateos Santillán 131

el mundo llegaría a tener un orden jurídico internacional, universal y El poder constituyente consiste en la facultad de decisión sobre la organiza­
justo, con valor por encima de los estados, y concluye: ción jurídico política de la comunidad; en otras palabras, es la atribu­
L·it'lll de estructurar libremente una Constitución, de construir un orden
En otros párrafos agregó que la noción de soberanía debía de ser radical­
Jll rídico. 100
mente extirpada y que debía desaparecer del diccionario del derecho inter­
nacional.9� Carpizo no coincide con la división entre poder constituyente origi­

De Laski retomó la idea de que no puede existir paz en el contexto nario \" poder constituyente derivado que hacen algunos autores, pues
de los Estados nacionales, de suerte que debía existir una organización una cosa es el constituyente, y otra es el órgano que creó para reformar
internacional que se encuentre por encima de ellos. 1a Constitución.
Para contrarrestar las opiniones anteriores, Carpizo retoma los ar­ El titular del poder constituyente es el pueblo, lo cual sirve de base

gumentos de Hermann Héller, en el sentido que no se contraponen So­ para construir "un derecho constitucional de la libertad y para la libe11ad".
beranía y derecho internacional. De esta forma los Estados soberanos
La diferencia entre poder constituyente y poderes constituidos, radica
coexisten y ninguno tiene supremacía sobre los otros. en que mientras el poder constituyente es un poder de origen, los poderes
Así el Dr. Carpizo nos explica el valor actual de la soberanía, al ma­ constituidos son derivados de la Constitución; el constituyente es un poder

nifestar que el concepto no nace de una teoría, sino de una realidad y creador de todo el orden jurídico, los constituidos son creados.

expresa que Soberanía es sinónimo de libertad, independencia, poder El poder constituyente es ilimitado, los poderes constituidos son li­

constituyente, pueblo, autodeterminación y del principio de no interven­ mitados; el poder constituyente tiene una sola función, los poderes
ción, es preciso manifestar en este punto, mi coincidencia con los plan­ constituidos poseen múltiples funciones; el poder constituyente no go­

teamientos expuestos por el Dr. Carpizo en el sentido de que: bierna, los poderes constituidos son creados para gobernar.
El Dr. Carpizo distingue los conceptos asamblea constituyente,
Queda claro que la Soberanía es completamente antagónica a cualquier
asamblea proyectista y poder constituyente, de forma que el poder cons­
forma o modalidad de imperialismo o colonialismo. Soberanía es libertad
titm ente es el pueblo, la asamblea constituyente es una representación
interna y externa del pueblo constituido en Estado.
"designada por el pueblo con un objetivo específico: discutir y aprobar
La Soberanía es la defensa de los pueblos pequeños y débiles frente una Constitución" .101 Las asambleas proyectistas son electas por el pue­
a los grandes y fuertes. La Soberanía en estos momentos de la historia blo para redactar un proyecto de Constitución que se sometería a la
es el baluarte de los Estados frente a las dos superpotencias y potencias aprobación del pueblo mediante referendo.
que desean dominar e imponerse al mundo... ".99
Después de estudiar el concepto de Soberanía en la obra del Dr. 6.4.4. HISTORICISMO EMPÍRICO MEXICANO
Carpizo, abordaré sus reflexiones sobre el Poder constituyente; parten
de la diferencia entre función, acto y órgano constituyentes, así como Esta corriente aborda los temas de la soberanía y el constituyente
las diferencias entre poder constituyentes y poderes constituidos, para desde una metodología multi-causal, en la que puede apreciarse un re­
lo cual estudia de Sieyes a Mauriece Hauriou, Schmitt, Héller, Kelsen, planteamiento histórico, que se conjunta con aspectos sociológicos y ex­
Ulises Schmill, Sánchez Agesta, Sáchica, Linares, Quintana, Quiroga �licaciones jurídicas que surgen de la interpretación de las fuentes de
Inves tiga
Lavíe y Bidart Campos. De los cuales deriva una serie de razonamien· ción directa, de esta forma, si se pretende estudiar la naturale­
za Y el o
tos, por ejemplo, coincide con la idea de que el poder constituyente se rigen del concepto de soberanía, esta corriente nos remitirá a la
lectura
encuentra dentro del campo de ser de la sociología, pero, es el punto de de las Crónicas de los debates del Constituyente mexicano de
1823-1824, las
partida del derecho constitucional moderno, después de lo cual cuáles, como ya se expuso en líneas anteriores, duraron
tan tas -
establece: décadas olvidadas.

100
'JS !dnn. p. SOO. !dem, p. 569.
lO(
lN CAKPIZO MA< GKE<;oR, Jorg:c, L.'iludio_\ Collstituciunales, op. cit., p. 505. ldem, p. 573.
132 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN 1,, ¡pFR CONSTITUYENTE -J. Mateos Santillán 133

Al remitirnos a los debates de 1824, nos encontramos que éstos nos Nos qui valemos tanto como vos, v podemos mas que vos, vos elegimos re

conducen por un lado al Constituyente de Cádiz y por otro lado a la tra­ con estas :v estas conditiones entre vos:.· nos, un que mande mas que vos.10·'

dición jurídica española. El pensamiento iusnaturalista parte de la base que las comunidades
De esta forma, y contra lo que sostiene la inmensa mayoría de la
J¡unw nas se forman de manera natural, la familia, clanes, tribus y pue­
doctrina mexicana, con base en los debates de 1823-1824 se refuta las
blo� - planteamiento aristotélico- cuando esta corriente se plantea el
teorías que sostienen que el concepto de soberanía popular prm·iene de
p ro ble m a de cómo nace el poder político, la respuesta es de la comuni­
Francia o de Estados Unidos.
d�1d. entendida como la necesidad de administrar lo común.
El planteamiento metodológico es muy simple, las fuentes hablan De la existencia de la comunidad arranca el razonamiento iusnatu­
por sí, son información que se explica a sí misma y nos lleva a estable­
ralista. el cual nos divide el concepto en dos; comunidades imperfectas
cer vínculos o conductas que se derivan de ella misma, de suerte que, la , ¡K·rkctas, la diferencia entre ambas clasificaciones se encuentra en
única forma para corroborar una hipótesis histórica, es acudir a un ma­
q ue las imperfectas, no pueden por sí solas, resolver plenamente sus ne­
nejo inteligente de información, es decir, las versiones más directas po­
cesidades, en tanto que la comunidad perfecta es aquella que por sí
sibles, de los hechos o actos que estemos investigando.
misma, es capaz de alcanzar los fines de la vida humana.
En esta corriente cabe destacar la presencia de investigadores como
Siguiendo el pensamiento iusnaturalista, llega un momento en la
José Barragán que a partir de los debates de Cádiz y el constituyente
comunidad en que toma el acuerdo de nombrar autoridad, lo que signi­
mexicano de 1823-1824 establecen una cadena causal en el pensamien­
fica el tránsito de una comunidad natural a una comunidad política que
to iusnaturalista que nos conduce de Aristóteles a Cicerón, a Occam, a
se deriva de una fuerza interna de la comunidad que nace del grado de
Santo Tomás a Vitoria, los cuales si bien es cierto difieren sobre el mi­
desarrollo social. La diferencia básica con Rousseau, es que para Vito­
gen último de la autoridad; si es Dios, la naturaleza o la comunidad,
ría. la autoridad nace de la comunidad, y no del pacto social.
coinciden en cuanto a que el origen de la autoridad política nace de la
comunidad y se traslada al individuo o individuos que reciben la inves­ L'l sublato communi iure positivo et humano nonsit majm- ratio ut protestas

tidura de autoridad. illa sit in uno quam in altero, necesse est ut lpsa communitas sit sibi suffi­

Para explicarnos la forma en que se establece el nexo causal entre ciens ct habeat potestatem gubernandi se.104

Vitoria, Suárez, y el resto de los clásicos españoles con la escuela fran­ Otra diferencia fundamental entre la teoría francesa de Rousseau y
cesa de Badina, Rousseau, Sieyes, nos explica: el pensamiento español, radica en que para los segundos la soberanía es
Es un hecho indiscutible que la Iglesia universal y especialmente la españo­ dekgable en su ejercicio, pues el poder innato de la soberanía se expre­
la, vida a expensas del Concilio de Trento, un concilio hispánico por exce­ sa en la capacidad de la comunidad para nombrarse un príncipe, auto­
lencia, dominado por las doctrinas de Francisco de Vitoria, por su pro pia ridad o gobierno, sin que por ello enajene nada. De esta forma, las fa­
autoridad, v por la presencia de un buen número de sus mejores discípulos. cultades de los gobernantes, de la autoridad, forman parte de la
Pues bien, de Trento ha estado viviendo la Iglesia, repito, hasta los concilios soberanía de la comunidad, la cual puede cambiar de forma de gobier­
Vaticanos; v en materia de Seminarios y Universidades hasta el Vaticano 11: no e n todo tiempo.
esto significa que la formación recibida en dichas Universidades y Semina­
Uno de los elementos más importantes del pensamiento español, se
rios era la escolástica.102
encuent ra en la idea
de que la subordinación a una comunidad más am­
Si se toma en cuenta que Badina fue novicio carmelita, y que Sieyes pl ia no priva de la soberanía a la comunidad, idea contraria a las teo­
estudió en su juventud con los jesuitas y después concluyó sus estudios ría� de Bodino y de Hobbes, implícitas en el pensamiento de Rousseau
en un seminario católico, se desprende que ambos conocían el referente cuando habla
de la cesión que hacen los individuos de sus libertades a
español, esta suposición se robustece cuando al leerse la obra de Bodi· favor el
d propio contrato social.
no, se observa que al hablar sobre la soberanía cita en términos castizos De las expresiones anteriores se deriva el pensamiento de Barragán
la tradicional fórn1Uia de sometimiento a la ley fundamental, por parte cuando aborda el tema del poder constituyente:
del rey de AI-agón:
lO\
fde/11. p . .34 .
104 V
102 BARRA<;ÁN BARRA<;AN, José, up. cit ... p. 31. ITORIA, Francisco d e. e·tta do por J ose, B arragán B. up. cit., p. 34.
134 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN CONSTITUYENTE J. Mateo' Santillán 135
¡•(lili:K
-

El poder constituvente se comporta de conformidad con el sentido que se le i dad �· sus facultades sólo admiten los mismos límites que la sobe­
1111111
se caracteriza por un procedimiento de
r,1n . la asamblea proyectista
hava dado a la idea de la sobet·anía popular. Por tanto, si la soberanía po­ íél
pular se concibe como algo pe.-teneciente al pueblo, como algo que radica 0
dn� instancias, después de la elección de los miembros de la asamblea,
reside en el pueblo, como un poder que, en parte se puede delegar, y en
pri!llera, elaboración de un
proyecto de constitución, segunda, aproba­
parte se reserva a fa\·or del mismo pueblo, el comportamiento final de la del proyecto por el pueblo por medio de un referéndum, la aproba­
citín
asamblea que dicta una Constitución tendrá que ser congruente con estos de la comunidad implica la aprobación del soberano.
cit1n
matices de dicha soberanía.10' Para explicar la naturaleza de la asamblea constituyente debemos

formar dos grandes grupos;


primero, los autores que la consideran
Como puede apreciarse, el centro sobre el que gira toda explicación
como la representación del poder constituyente que son en general to­
del Estado o la constitución es el concepto de soberanía, el cual varía
do:- los que sostienen la idea de que la soberanía se encuentra en la co­
según se admita como válida determinada corriente, de esta forma, las
como poder
diferencias que sostiene Barragán, entre las lecturas que se puedan ha­ munidad, nación o pueblo y en consecuencia se le tiene
constitu vente y diferenciado de los poderes constituidos; segundo, los
cer a la teoría románica de la representación, serán fundamentales para
autores que opinan que la soberanía se encuentra en el orden normati­
explicar los alcances del poder constituyente, la constitución, y los po­
vo, para quienes, después del primer constituyente, todas las demás
deres constituidos.
asambleas constituyentes deben entenderse como poderes constituidos
en rela c ió n a la constitución que les precede como lo
explica Carré de
6.5. ASAMBLEA CONSTITUYENTE, Malbcrg, Kelsen y Tena Ramírez.
ÓRGANOS O PODERES CONSTITUIDOS
Y SUS DIFERENCIAS
6.6. ASAMBLEA CONSTITUYENTE
Hemos llegado al punto de realizar una serie de diferencias que se Y ÓRGANO LEGISLATIVO ORDINARIO

deriven de los conceptos, las tesis y las corrientes expuestas en páginas


De la misma forma que en el punto anterior nos remitimos a diver­
anteriores, aun cuando debemos admitir que, como se prueba a lo largo
sas explicaciones sobre la naturaleza del poder constituyente y la asam­
de este trabajo, existen una gran cantidad de explicaciones o definiciones
blea constituyente, en este punto seguiremos el mismo procedimiento,
para cada autor, las cuales pueden llegar incluso a ser contradictorias.
pues a lo largo de todo el trabajo hemos diferenciado a los poderes
De esta forma me permito recomendar a los lectores, acudir a las
constituventes de los poderes constituidos.
páginas anteriores para realizar precisiones sobre algunos conceptos en
Sobre la naturaleza de la asamblea constituyente hemos visto en lí­
un autor en particular, pues a continuación presentaremos simplemente neas anteriores que pude explicarse según la corriente que se sostenga,
generalidades.
como un órgano constituyente o constituido, lo que sí queda como una
Poder Constituyente. Pueden encontrarse varias definiciones, algu·
concepción general, es la tendencia a diferenciar las naturalezas de la
nas al inicio del tema, otras en Carl Schmmitt, en Carpizo o Barragán asam blea
constituyente y el órgano legislativo ordinario, diferencias que
etc., sin embargo, me parece correcto diferenciar entre la potestad, fa· PUed en percibirse a partir de las explicaciones de Sieves v que encon-
. . .
cultad o poder constituyente, como atributo inherente generalmente traran
matices en todos los autores.
aceptado del pueblo (incluso, los autores positivistas reconocen que en A grandes rasgos podemos señalar como características de la asam-
el origen, antes de la primera constitución, la potestad radica en el pue· blea e onst. · ·
Ituyente que tiene 1 a funcwn
· ·
de crear 1 a constitucwn, en re-

blo) y la asamblea de individuos que se eligen para formar, o crear Prese ntación del pueblo y en ejercicio de la Soberanía, para después de
·

constitución a la que se denomina asamblea constituyente, cabe agre gar l ra


�g r su objetivo desaparecer (históricamente los Constituyentes de Cá-
que para algunos autores asamblea constituyente y poder constituyente diz- v ·
. m exica no de 1823-24 gobernaron).
son sinónimos. La Asamblea Constituvente
. admite variables como lo es En contraposición se dice que los órganos legislativos ordinarios
la Asamblea proyectista, la asamblea constituyente es un grupo de re· son Poderes constituidos en relación a la Constitución, de la cual ema­
presentantes electos por el pueblo que actúa en representación de la co- nan, Y
a la cual no pueden modificar libremente como legislatura ordi­
nar ia,
están creados para gobernar, pero se encuentran limitados por la
constituci
"" BARRACiÁN BARRMiÁN, José, 1:::1 poder revisor de la Cmzslilución. p. 51,
inédito. ón.
136 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN 1,, 1¡11 R CONSTITUYENTE - J. Mateo' Santillán 137

Existe una instancia intermedia entre el poder constituyente y los �¡\ nwmento de estudiarse nos conducen a divergencias substanciales,
no ,;ólo con el constitucionalismo tradicional, sino entre ellas mismas.
poderes constituidos, me refiero al poder revisor de la constitución que
no puede alcanzar el rango de constituyente por las limitaciones que le l n�1 diferencia fundamental entre la ingeniería constitucional de Gio­
son inherentes, pero que definitivamente tiene la facultad de revisar y J
\ �1n li
Sartori y el enfoque histórico-empírico del Dieter Noh len, radica

modificar la constitución, cuestión que le diferencia del órgano legislati­ eJl que Sartori desarrolla sus investigaciones en base al método de dere­

vo ordinario. cho comparado, del cual deriva una generalización empírica para fun­
cLuncnt ar sus conclusiones sobre que el sistema semi-presidencial es el
6.6.1. LA SOBERANÍA ANTE LA GLOBALIZACIÓN Illl'Jor sistema de gobierno. Para Nohlen, las comparaciones sólo son
\ úl i da s en cuanto admitan un conjunto de factores explicativos entre los
Una de las características que predominan en los inicios del siglo XXI quL· destacan los sociales y los procesos históricos, de suerte que el mé­
es la vertiginosa evolución tecnológica, que nos impide siquiera asom­ todo obligado es multi-causal. y la copia del instituciones de una reali­
brarnos de las innovaciones en el ámbito de la electrónica, la cibernéti­ dad a otra diferente fracasan.
ca y la tecnología en materiales, por no citar sino algunos de los cam­ Por lo expuesto, de nueva cuenta debemos reiterar lo señalado a lo
pos que más se han desarrollado en los últimos cien años. larL'.O de este trabajo, según sea la corriente que abracemos, será el
En el campo de las humanidades los cambios se dan a ritmos dife­ pu�·rto o las conclusiones a las que arribemos.
rentes, sin embargo, la desintegración de la Unión Soviética, la caída En lo personal no creo que el cambio institucional en un país pueda
del Muro de Berlín, y en general la posición unipolar del sistema políti­ darse simplemente con base al derecho comparado, pues si tal fuera la
co-económico, producen escenarios de reflexión altamente influidos por simpleza del éxito, bastaría copiar la constitución Suiza, la Alemana o
la transformación tecnológica que se traducen en cambios a los méto­ la Francesa, para transformar México, como esto no es sino el camino
dos clásicos de análisis. mú>- directo al fracaso, opino que en plena época de globalización, cada
En la actualidad resulta común escuchar que el concepto de sobera­ país debe buscar en sus tradiciones y en su realidad los caminos del éxito.
nía se encuentra en crisis, en lo personal opino que nos debemos pre­ En el caso de México, es necesario hacer un replanteamiento histó­
guntar (qué concepto de soberanía está en crisis?, pues debemos recor­ rico profundo, que se vincule posteriormente a la incidencia de factores
dar que los conceptos varían de corriente a corriente y de autor a autor, internos v externos que generalmente se soslayan en aras de la imita­
de modo que, bien estudiado el problema, podríamos afirmar que no es ción extra-lógica de preceptos e instituciones absolutamente ajenas a
correcto que el concepto de soberanía se encuentre en crisis, sino que nuestra realidad.
en realidad son algunos modelos teóricos explicativos los que se han Como quedó expuesto en líneas anteriores, parte de la doctrina me­
visto rebasados por la realidad, en otro sentido, bien pudiera señalarse xicana se divorció de la realidad histórica y se casó con las corrientes
qu e se fueron poniendo en boga al paso de los años, de tal forma, que
que el concepto de soberanía siempre se encontró en crisis, frente al co­
lonialismo o al neocolonialismo, que crearon imperios como el romano,
en la actualidad nuestro primer problema para abordar la mundializa­
ción o globalización es recuperar la identidad de nuestras instituciones,
el español, el francés, el inglés y más recientemente, en la etapa neoco­
Pues com o se verá en líneas posteriores, parte de las propuestas
lonial, el norteamericano.
neo-institucionales nos conducen a soluciones que se acercan mucho a
Desde el punto de vista del llamado neo-institucionalismo es necesa­
nu c s tras tradiciones y que hoy son respuestas para afrontar los escena­
rio replantearse las viejas cuestiones del constitucionalismo tradicional.
_

nos de la globalización.
del cual sólo se retoman algunos elementos y se generan grandes dife­
Cabe advertir que al proponer un replanteamiento historicista, no
rencias, particularmente en el ámbito metodológico, que derivan en la
desea mos
separación del viejo institucionalismo y el nuevo institucionalismo, que formular una teoría determinista que sostenga al cambio
CüllJo un
difieren en el valor que asignan a orden institucional, pues para los pri­ factor condicionado de manera absoluta por el pasado, sino
Sitnp lem
meros es el valor fundamental que explica el desarrollo democrático, en ente que la historia es más que una simple cronología de suce­
sos,
es la concatenación multi-causal de una serie de hechos que gene­
tanto que los segundos aplican un modelo más sociologista con una ma­
raron una realidad, misma que si bien no determina el p1·esente o el fu­
yor gama de factores explicativos.
t o
El neo-institucionalismo, nos presenta varias corrientes que mantie­ ur si nos sirve de factor explicativo del p1-csente y como elemento a
,

Consid
nen ent1·e sí dife1·encias fundamentales en el terreno metodológico, que ei·ar para el futuro.
138 NSTITUYENTE Mateo' Santillán 139
pllJlLI< CO
- J.

Lo expuesto me sirve para afirmar que no es que México tenga una c,11acterísticas diferentes de región a región, de suerte que la experien­
realidad Kafkiana, sino que más bien los métodos explicativos de la rea­ ropea es distinta a la norteamericana, por no citar sino los ejem­
cia L·u
lidad son inapropiados. De la misma forma no puede explicarse la re. plo:-- más cercanos.
gionalización europea de igual manera que la articulación de Canadá y La explicación de las diferencias es un tema muy complejo del cual
México a los Estados Unidos de América. ¡1kmente retomaremos que los europeos aglutinan países con desa­
�·i ¡n
Cuando Jürgen Habermas se plantea la pregunta iAprender de qué
rrollos más o menos homogéneos y que bien pudieran agruparse en
historia?106 en realidad nos recuerda la obligación de formularnos la sarrollados, desarrollados y menos desarrollados, en el caso de
nHI\ de
misma pregunta en México a la luz de la alternancia democrática, pues AnlL't ica del norte, tenemos a una gran potencia en torno de la cual se
la caída del muro de Berlín y la consecuente reunificación de Alemania
adhieren dos países con economías dependientes.
son equiparables en términos neo-institucionalistas a la caída del sistema El proyecto norteamericano puede observarse con claridad a la luz
de partido hegemónico, que prevaleció en nuestro país a partir de 1867, del pensamiento americano10x que expresa por boca de personajes como
después del fusilamiento de los principales líderes del partido conserva­ Jdkrson , Madison, Hamilton y Adams sus aspiraciones hegemónicas
dor, y que con la excepción del periodo revolucionario, prevaleció a lo
mismas que se sintetizan en la doctrina Monroe de 1822, conocida por
largo de siglo XX. De esta forma la historia oficial simplemente se trans­ concepto "América para los americanos" y que evoluciona a media­
su
forma en el medio para justificar las acciones de un gobierno en aras de dos del siglo XIX a la doctrina del "destino manifiesto". La historia euro­
proyectos autoritarios muy lejanos de los intereses de la comunicad, im­ pea de los últimos siglos nos remite a un escenario distinto, un conjunto
puestos generalmente desde el extranjero, ante los cuales exaltar o bo­ de potencias que se confrontaron regularmente por la hegemonía conti­
rrar un periodo de nuestra historia no representa ningún obstáculo o nental. sin que ninguna de ellas pudiera alanzada plenamente, o mante­
escrúpulo.
nerla mucho tiempo, siempre en un contexto de rivales continentales te­
Un verdadero replanteamiento histórico, que conjugue en su análi­
rribles. De lo antes dicho se desprende una notoria diferencia en los
sis factores sociopolíticos, económicos, militares y jurídicos nos lleva a
fines regionalizadores, en Europa, ser competitivos y cohesionarse; en
explicaciones diametralmente opuestas a las tesis oficiales, tales razona­
América, consolidar la hegemonía de los Estados Unidos en el marco de
mientos nos sirven para explicar que el concepto de soberanía mexica�
un gran mercado regional.
na, ha sufrido los embates de diferentes gobiernos a través de los inte�
De antemano admito que son muchos los argumentos que faltan
lectuales a su servicio, de forma tal que se ha buscado imponer
para redondear el tema, sin embargo, mi preocupación al abordarlo es
teorías que favorecen la concentración de poder en el gobierno, al qutf simple mente señalar que no es posible equiparar o imitar extra-lógica­
descaradamente confunden con el Estado o en las tesis que sostienen
mente las realidades europea y americana.
que la soberanía se encuentra en el orden normativo, olvidando que di­
En cuanto a la posición soberana de los Estados nacionales euro­
cho orden normativo, en el escenario de partido hegemónico es, en mu­ p eos v americanos, esta también varía, sin embargo, me contentaré con
chas ocasiones resultado de la simple usurpación de la voluntad popu�
:ecordar las posiciones de Estados Unidos y de México ante el derecho
lar por medio de los más diversos procedimientos.107
Internacional, pues para nuestros vecinos del norte su constitución y
sus pr inc
ipios se encuentran absolutamente por encima, en tanto, que
6.6.2. REGIONALIZACIÓN Para México, y todos los países dependientes, la realidad subordina el
orden nor
Es claro que el proceso de globalización o mundialización se en· mativo interno, a los intereses internacionales.
cuentra avanzado en algunas regiones geográficas y en algunas mate·
rias, en tanto que en otras su evolución es diferente, de esta forma nos 6.6.3. iCRISIS DE LOS ESTADOS O CRISIS
permitiríamos señalar que el camino de la globalización pasa primero DE LAS TEORÍAS SOBRE LA SOBERANÍA?
por la etapa de la regionalización, la cual, es preciso señalar, prese nta Un an
b álisis objetivo de la realidad nos conduce a señalar que la so­
eranía
de los países dependientes de todo el planeta se encuentra en
lllb HABERMAS Jlii·gen, op. cit., p. 191. ----

107 Para mavor información sobre el tema puede consultarse MAncos SA�TILLÁN, tox
" Para mavor información sobre el tema consulte MATEOS SANTILLAN, Juan José·. L/
José. "Los fraudes electm·ales en el siglo XIX, una leeción para el siglo xxt , Revista 1
''lla<fu de Guwlalupe-Jlidalgu a la /u� de la pre11sa de su época. Te sis doctoral, UNAM, 1994.
ca Jaliscie11se, Universidad de Guadalajara, Año 4, núm. 10, 1994.
140 TEORÍA DE LA CONST J'< 11, ¡-K CONSTITUYENTE - J. Maleo' Santillán 141

crisis, pero áñadiré que esto no es ninguna novedad histórica, pues L·�t ilo de panhelenismo griego o de la comunidad de países árabes; sin
países independientes-dependientes, en un pasado más o menos L tiL' L'l pueblo de cada parte integrante de este tipo de confederaciones
te, en general, fueron colonias que se encontraban bajo la hegemonía d� �'l. Lksprenda de su derecho inmanente de ser depositarios originarios
una potencia colonizadora. Y hoy en día, se ven impulsados a formar un
Lk la soberanía.
nuevo orden internacional de conformidad con los intereses, reordena.: Como puede apreciarse, el concepto de soberanía no se encuentra
dos, de las antiguas metrópolis. en crisis, la regionalización o mundialización en todo caso, representan
Lo que no puede percibirse tan claramente, es que países como los un nm·vo estadio o peldaño en la forma de gobernarse que se dan los
Estados Unidos vivan una crisis práctica o teórica de sus principios so­ di�tintos pueblos, las federaciones y confederaciones son las alternati­
beranos ante el fenómeno de la regionalización y una eventual globali. ' a� de la integración más acordes a las concepciones de las democra­
zación, sin embargo, autores como Robert Dahl se plantean: ciét� occidentales desarrolladas, donde, paradójicamente, el concepto
ori�inario de soberanía mexicano, es la mejor respuesta para mantener
En 1990 un gobierno para el mundo es, lo admito, una idea fantástica, pero·:
un'� identidad y tradiciones, que pueden perfectamente ser compatibles
no lo parecerá dentro de un siglo. Ni parecerá entonces extraño preguntar
con los proceso de integración mundial.
si tal gobierno puede o debe y hasta qué punto, ser democrático, y como
� Finalmente creo menester reiterar que existe una gran diferencia
podría scrlo109
cntrL' lo que significa un proceso de regionalización integral, como el
El mismo autor nos sugiere que el mundo no podría gobernarse europeo, donde los procesos de integración bien pueden equipararse a
una democracia directa, por lo cual presenta como respuesta alte una confederación y en consecuencia el párrafo anterior tiene pleno va­
va de gobierno un sistema federal: lor; a la vinculación que se da en el Norte de América, donde la gran
Las ideas federalistas democráticas dan por sentado que debe haber potencia hegemónica que son los Estados Unidos establecen una rela­
estadios de gobiernos "democráticos"; que el "pueblo" con derecho a ción asimétrica con Canadá y en mayor diferencia con México. A grado
bernar" en un estadio es un subconjunto de "el pueblo" con derecho a tal, que el control político y económico que ejercen tiende a anular toda
bernar en un estadio más inclusivo; y que los derechos y obligaciones de posibilidad de manifestación soberana, pues la equiparación más cerca­
pueblo" en varios estadios están incorporados en un sistema de na no es la Confederación, sino el Imperio, en una posición típicamente
mutuas.110 neocolonial o si se prefiere, el colonialismo del siglo XXI.

Lo interesante del pensamiento de Dahl radica, en que, sin


nérselo, nos remite a las ancestrales tesis sobre que la soberanía
en la comunidad básica, la cual puede adherirse a otra comunidad
yor o un conjunto de comunidades semejantes, sin que por ello dej e
ser soberana, tal y como lo expresa el texto de todas las constitucion�i
federales mexicanas que sostienen la soberanía de los Estados y de
Federación en el ámbito de sus competencias.
Un ejemplo cercano a nuestras tradiciones jurídicas y a nuestra
tura es el español, en cuya experiencia podemos observar que por
lado, en medio de las tendencias globalizadoras, se adscribe a la Com1
dad Europea y suscribe el Tratado de Mastrich para concretar la regí�
nalización pero, simultáneamente, de autonomía a las distintas comuill­
dades que integran la Corona, sin que ello signifique la transformacióll
de las formas tradicionales del Estado español, sino que, más bien,
establece un nuevo nivel de gobierno, una especie de confederación

109 DAHL. Robcrt Alan, ¿Después de la Revolución?, Gedisa, España, 1994, p. !OS.
110 Ibidem, p. 110.
Unidad 7

Supremacía Constitucional

ARMANDO SoTo FLOREs·

El h om b re forma su cuerpo normativo con el fin de regular la conducta


contingent e del mismo para encausada a un fin, que es el comporta­
miento constante; como ordenes normativos podemos encontrar mu­
chos, pero el jurídico es el más importante para la vida social, debido a
que asegura su cumplimiento en forma coactiva, con él se regula la con­
vivencia humana, la cual cubre las deficiencias naturales del hombre y
permite su procreación y mej oramiento, por lo que es tarea del orden
normativo el coordinar la conducta humana, de esta forma se desarro­
lla el orden normativo, primariamente para encausar la conducta con el
fin de preservar a la sociedad de las posibles contingencias, y posterior­
�ente para mej o r ar el entorno de vida; pero ese orden debe tener prin­
Cipios rectores
que señalen su origen y las características a que se tie­
ne� que someter las regulaciones derivadas de ellos, el cúmulo de estos
Pnncipios se
ve reOeJ·ado en una constitución ' a la cual se le puede con-
cePtuar c m :
o o

El in�tnuncn
to escrito en que ha convenido el pueblo... como la norma ab­
soluta d"
� acc1· on
·
· · · para todos 1 os departamentos v funuonanos
· .v decision · · de 1
Gobiern ·
o · · Y en oposicion
· · · a 1 a cua 1 cua 1 q ·
Uier 1 ev o norma d
• e cua 1 qUier
· de-
Partanw nto o
funcionario del Gobierno o aún del pueblo mismo serán • ' •

completamente nulos.
1

e
de J)• Ma ,.,tro por oposicion de Derecho Constitucional Teoría Política de la Facultad
re ch o .v
� de la UNAM.

� l'owCooLFY, A Tratisc on the Constitutional Limitations which Rest upons the Legislati­
er of
the States of the me ican Union, 3 ( 1868); citado por Schwar·tz Bernan.l en
A r

143
DE
144 TI'ORÍA LA CONSTITUCIÓN :-;l pKE\IACÍA CONSTITUCIONAL - A. Sot o Flore, 145

En este tenor, podemos percibir que la constitución es la suprema dn el cabal y eficiente cumplimiento de las tareas encomendadas por el
ley de la nación, la cual prescribe normas de decisión que son obligato­
constituyente como representante de la voluntad soberana popular,
rias para las autoridades y habitantes de un estado, de esta forma se
L'li\ o fin es la regulación para un adecuado comportamiento del hombre
concibe a la constitución como la ley fundamental que limita a los p o­
l·n· la cosa pública satisfaciendo así las deficiencias que la naturaleza
deres del gobierno así como al pueblo mismo, pues en ella se encuen­
humana tiene implícitas.
tran, siguiendo la tesis de Schmitt, las decisiones políticas fundamenta­
les, en las que podemos encontrar tanto a las autoridades como órganos
7.1. ANTECEDENTES
rectores de la conducta humana que obligan a los particulares a aten­
DE LA SUPREMACÍA CONSTITUCIONAL
der las normas de un país, así como los derechos individuales que limi­
tan a ciertos requisitos y circunstancias el actuar coactivo por parte de Debido a la importancia de la Supremacía Constitucional dentro del
los órganos del estado.
orden jurídico mexicano, consideramos pertinente estudiar sus antece­
De esta forma, encontramos a la Supremacía Constitucional como dcnies en las diversas constituciones que han existido en nuestro país,
una característica fundamental de la Constitución, pues el concepto de como parte de una evolución del derecho constitucional y su consolida­
supremacía implica en sí un elemento que se encuentra por encima del ción como origen y rector de las autoridades que conforman el estado
resto de los integrantes de un sistema, por lo que dentro del ordena­ mexicano.
miento jurídico el principio de supremacía constitucional nos remite a Al respecto, la Constitución de Cádiz de 1812, no estableció una dis­
ubicar a la Constitución en la cúspide del conjunto de ordenamientos posición expresa en la que se reflejara el principio de supremacía de la
jurídicos de una nación. Constitución respecto de las demás leyes y actos emanados de la autori­
Paralelamente al principio de supremacía constitucional, debemos dad; sin embargo, disponía que las autoridades y los gobernados (art. 7)
observar que al ser la Constitución la norma suprema de un sistema ju­ estaban obligados a respetar y cumplir las disposiciones constituciona­
rídico, tiene como consecuencia ser la norma primaria de dicho siste­ les, lo cual nos lleva a inferir que se consideraba a este documento
ma, es decir, ser el punto de referencia del cual se desprenden las de­ como supremo y por encima de los poderes constituidos; respecto al
más leyes y actos que conforman el sistema legal de una nación; es por Rev. lo consideraba inviolable y no sujeto a responsabilidad, sin embar­
ello que en la propia Constitución deben establecerse los medios jurídi­ go, establecía la mención de que actuara en sus atribuciones conforme
cos para defender su observancia, con el fin de que se cumplan cabal­ a la Constitución (arts. 169 y 170).
mente las disposiciones que ella establece. Dentro de la lucha por la Independencia, célebre fue el Decreto
Con relación al concepto de Supremacía Constitucional, el maestro Constitucional para la Libertad de la América Mexicana, conocida
Jorge Carpizo Mac Gregor señala: como la Constitución de Apatzingán de 1814, la cual en lo relativo al

De este concepto de supremacía constitucional derivan dos principios: a) de principio de Supremacía Constitucional, estableció en su artículo 237:
legalidad, conforme al cual todo acto contrario a la constitución, carece Entretanto que la Representación nacional, de que trata el capítulo antece­
de valor jurídico, y b) cada órgano tiene su competencia que no es delega· <.knte, no fue re convocada, y siéndolo, no dictare y sancionare la Constitu­
2
ble, salvo en los casos que señale expresamente la propia constitución. L'iún permanente de la Nación, se observará inviolablemente el tenor de este
decreto, \' no podrán proponerse alteración, adición ni supresión de ningu­
El señalamiento del maestro Carpizo respecto a la Supremacía
no de los artículos en qué consiste esencialmente la forma de gobierno que
Constitucional refleja la teoría kelseniana y constituye la esencia del Pr e scribe. Cualquier ciudadano tendrá derecho para reclamar las infraccio­
principio referido, con sus implicaciones jurídicas, útiles para dar certe·
nes que notare l
za jurídica no solo al gobernado, sino también a la propia autoridad,
..

Este es el primer anteceden


manteniendo así el equilibrio de los poderes constituidos y garantizan te nacional en forma explícita
y clara de
u re
s p m acía en un documento jurídico, todavía no constitucional, pero
que reflej
a la primera idea de jerarquía de una ley u ordenamiento,
Los Poderes del Gobiemo Vol. 1 (Los Poder·es Federales y Estatales), tr·aducido por José y
Juan Olloqui Labastida, UNAM. Facultad de Derecho, México, 1966, p. 24.
1
2 CARI'IZO MAc-GREGOR, Jm·ge. t.'stwlius Cul!stilllciullales, UNAM, Instituto de Invesú· .. Tr-.-.A RAMÍREZ, Felipe. Leves Fundame11ta/es de ,'vféxicu, 1808-1997,
Mexico 20" ed., Porrúa,
gaciones Jurídicas, México, 1980, p. 292. , 1997, p. 57.
146 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN :--t PREMACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Flores 147

que posteriormente se verá reflejado en las disposiciones constituciona­ a la Constitución o a las leyes, haciendo esta declaración dentro de cuatro

les nacionales. meses contados, desde que se comuniquen esos actos a las autoridades

Dentro del Acta Constitutiva de la Constitución de 1824, encontra­ respectivas.


III. Declarar en el mismo término la nulidad de los actos de la Suprema
mos que no se contempló dentro de su articulado en forma expresa, al­
Corte de Justicia, excitado por alguno de los otros dos poderes, y solo en el
guna disposición referente al principio de Supremacía Constitucional;
caso de usurpación de facultades .. . 6
sin embargo, el Acta Constitutiva en su artículo 24 contempló respec to
de las Constituciones de los Estados que: Como podemos observar, el Supremo Poder Conservador, entre sus
facultades más importantes, esta sin duda el de llevar a cabo el control
Art. 24.-Las Constituciones de los Estados no podrán oponerse a esta
constitucional de los actos de los otros poderes, lo que lleva implícito el
acta ni en lo que establezca la Constitución general: por tanto no podrán
principio de supremacía constitucional, pues todo actuar de los poderes
sancionarse hasta la publicación de esta última.4
keislativo, ejecutivo y algunos del poder judicial podía ser anulado por
Mientras que la Constitución del mismo año dispuso en su artículo és� e. por lo que se puede inferir que el Supremo Poder Conservador,
161 fracción III y 163 que: hacía las veces de Tribunal Constitucional, pero es bueno hacer notar
que sus miembros si bien juraban cumplir la Constitución, no tenían
Art. 161.-Cada uno de los Estados tiene obligación: ...
III. De guardar y hacer guardar la constitución y leyes generales de la responsabilidad alguna como puede observarse del texto del artículo 17
Unión, y los tratados de hecho o que en adelante se hicieren por la autori­ de la Segunda Ley Constitucional que establecía:
dad suprema de la federación con alguna potencia extrajera.
Art. 17.-Este supremo poder no es responsable de sus operaciones más
Art. 163.-Todo funcionario público, si excepción de clase alguna, antes 4ue a Dios y a la opinión pública, y sus individuos en ningún caso podrán
de tomar posesión de su destino, deberá prestar juramento de guardar esta ser juzgados ni reconvenidos por sus opiniones.7
constitución y el acta constitutiva. 5
Respecto a las también centralistas Bases de Organización Política
En lo relativo a Las Siete Leyes Constitucionales de 1836 que esta­ de la República Mexicana de 1843, tampoco establecieron disposición
blecían un régimen centralista, encontramos que tampoco estipulaba un expresa que reflejara el principio de Supremacía Constitucional, solo
artículo expreso en donde hiciere notar la Supremacía Constitucional, establecían la obligación de que los habitantes de la República obede­
sin embargo, obligaba a los mexicanos, en virtud del artículo 3 de la cieran a la Constitución, las leyes y las autoridades (art. 8), así mismo,

primera ley a observar lo dispuesto en la constitución y las leyes, así respecto a los poderes, disponía que cumplieran con la Constitución y
las leves , mientras que en el artículo 201 establecía:
como obedecer a las autoridades; y respecto de los órganos de gobier­
no, los obligaba a observar lo dispuesto en la Constitución e incluso a An. 201.-Todo funcionario público antes de tomar posesión de su desti­
través del Supremo Poder Conservador, en el que sus miembros debían no ó para continuar en él, prestará juramento de cumplir lo dispuesto en
prestar juramento de guardar y hacer guardar la Constitución de la Re­ estas bases. El Gobierno reglamentará el acto del juramento de todas las
pública, según lo establecido en la Segunda Ley, artículo 9; dentro de la autoridades.8

misma ley, el artículo 12 disponía:


En cuanto al restablecimiento del régimen federal, a través del Acta
Art. 12.-Las atribuciones de este supremo poder, son las siguie ntes: C o nsti tutiva y de Reformas, que reinstauró la vigencia de la Constitu­
_
l. Declarar la nulidad de una ley o decreto. dentro de dos meses después Ció n de 1824 con las respectivas reformas que dicha Acta consignaba,
de su sanción, cuando sean contrarios a artículo expreso de la Constitu· enco ntramos
ya establecido el principio de Supremacía Constitucional
ción, Y le exijan dicha declaración o el supremo poder Ejecutivo, o la alta de una manera nítida, al establecer la referida Acta que:
Corte de Justicia, o parte de los miembros del poder Legislativo, en repre·
sentación que firmen dieciocho por lo menos. An. 20.-Sobre los objetos cometidos al Poder de la Unión, ningún Esta­
II. Declarar, excitado por el poder legislativo o por la Suprema Corte .d
e do tiene otros derechos que los expresamente fijados en la Constitución, ni
Justicia, la nulidad de los actos del pode¡· Ejecutivo, cuando sean contrartol

: ldmz. p. 210.
1 TENA RAMíREZ, Felipe. Leye s Fundamentales de México, 1808-/997, op. cit., p. 211.
4 Idem, p. 158.
H ldem, p. 435.
5 Idem, p. 191 y 193.
148 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN �¡-pREMACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Flores 149

otro medio legítimo de intervenir en ellos, que el de los poderes generales Esta Constitución, y las leyes de los Estados Unidos que se expidan con
que la misma establece. arreglo a ella, y todos los tratados celebrados o que se celebren bajo la au­
toridad de los Estados Unidos, serán la suprema ley del país y los jueces
Art. 21.-Los Poderes de la Unión derivan todos de la Constitución, y
de cada Estado estarán obligados a observarlos, a pesar de cualquier cosa
se limitan solo al ejercicio de las facultades expresamente designadas en
en contrario que se encuentre en la Constitución o las leyes de cualquier
ella misma, sin que se entiendan permitidas otras por falta de expresa res-
Estado.11
tricción.
No podemos dejar de mencionar que desde la Constitución de 1857,
Art. 22.-Toda ley de los Estados que ataque la Constitución ó las leyes
generales, será declarada nula por el Congreso, pero esta declaración solo SL' omitió por el Constituyente Revisor adecuar dicho texto, en virtud de
podrá ser iniciada en la Cámara de senadores. que señalaba que " ...los tratados hechos ó que se hicieren por el Presi­
dente de la República, con aprobación del Congreso, serán la ley supre­
Art. 23.-Si dentro de un mes de publicada una ley del Congreso gene­
ma de toda la Unión... ", situación que no fue congruente con la reforma
ral, fuera reclamada como anticonstitucional, ó por el Presidente, de acuer­
de 13 de noviembre de 1874, fecha en la que se reinstaló el Senado de
do con su Ministerio ó por diez diputados, ó seis senadores, ó tres Legisla­
turas, la Suprema Corte, ante la que se hará el reclamo, someterá la ley al la República, pues debemos recordar que al inicio de la vigencia de la
examen de las Legislaturas, las que dentro de tres meses, y precisamente en Constitución del 57 esta solo contemplaba el sistema unicameral y con
un mismo día darán su voto. dicha reforma, se estableció un sistema bicameral.
Las declaraciones se remitirán á la Suprema Corte, y esta publicará el Dichas modificaciones a la Constitución del 57, fueron elaboradas a
resultado, anulada la ley, si así lo resolviere la mayoría de las Legislaturas.9 tra\ és de una Convocatoria para la elección de los Supremos Poderes
La Constitución Política de la República Mexicana de 185 7, es sin Federales, emitida por Juárez en 1867, pero llevada a cabo por Fernan­
duda uno de los documentos constitucionales más destacados que ha te­ do Lerdo de Tejada, cambiando la estructura y facultades del Congreso
nido nuestro país; reflejó el principio de supremacía constitucional en de la Unión.
su artículo 126, de una manera no muy atinada; estableció: Mediante una Circular de esa Ley de Convocatoria, se señalaron los
argumentos de las reformas, y al respecto se indicó:
Art. 126.-Esta Constitución, las leyes del Congreso de la Unión qu�
emanen de ella y todos los tratados hechos ó que se hicieren por el Presi: ... se ha hecho la objeción, de que en dos cámaras, una puede enervar la
..

acción de la otra. Esta objeción era de bastante peso, cuando se necesita­


dente de la República, con aprobación del Congreso, serán la ley supre�
ba avanzar mucho para realizar la reforma social. Ahora que se ha consu­
de toda la Unión. Los jueces de cada Estado se arreglará á dicha Constitu�
mado, puede considerarse un bien, como se considera en otros países, que
ción, leyes y tratados á pesar de las disposiciones en contrario que pueda
la experiencia y práctica de negocios de los miembros de una cámara, mo­
haber en las constituciones ó leyes de los Estados.10
dere convenientemente en casos graves, algún impulso excesivo de acción
i�
Nos refiere el maestro Jorge Carpizo que el artículo antes menc en la otra.
·

nado fue transcrito literalmente de la Constitución de los Estados


Uni! Sobre ese punto, los Estados-Unidos han presentado recientemente un

dos de Norteamérica quedando de esa forma en la Constitución de


1857 ejemplo digno de considerarse. Con motivo de la intervención extranjera en
, sal: México, la cámara de representantes de los Estados-Unidos votó varias ve­
redacción que fue retomada por el Constituyente de 1917; la cual ces por unanimidad, algunas resoluciones que, si hubieran llegado á ser le­
mos�
vo una modificación de 1934 a la que más adelante nos referire ves, habrían podido causar una guerra de aquella nación con la Europa.
continuó vigente, pasando a ser el artículo 133 de nuestra actual E�a guerra hubiera podido complicar gravemente la guerra civil en los
titución. Est ados- Unidos. El senado suspendió constantemente el curso de aquellas
del
Es por ello que consideramos pertinente transcribir el texto res oluciones. Sin duda, hizo un bien á los Estados-Unidos, y acaso lo
hizo
tículo VI. segundo párrafo de la Constitución de los Estados U también a México.12

ilustrar de mejor manera la atinada observación que realiza el


Carpizo: 11 HA\IILTUN, A; MADISON, J. y JAY, J. l-.'/ Federalista, 11·aducido po1· Gustavo R. Velas­
co, Fo
ndo de Cultura Económica, México, 19'57, p. 394.
12 TENA RAMíREZ, Felipe. Leyes Fundamentales de México, 1808-1997, op. cit., p. 691.
9 Idem, pp. 474-475.
10
Idem, p. 627.
150 TEORIA DE LA CONSTITUCIÓN �t'I'REMACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Florl's 151

Por esa razón se decidió hacer la división de facultades entre el Se­ cada Estado se arreglarán a dicha Constitución, leyes y tratados, a pesar de
las disposiciones en contrario que pueda hacer en las Constituciones o leyes
nado y la Cámara de Diputados; de esta forma, se modificó el artículo 72
de los Estados.1"
constitucional, referido a las facultades del Congreso General, en el
cual, fueron adicionadas dos apartados, el A) para las facultades exclu­ Cabe destacar que la modificación, respecto a la adecuación del tex­
sivas de la Cámara de Diputados y el B) para las facultades exclusivas to a lo dispuesto por el artículo 76 fracción I de la misma Constitución
del Senado, cuya primer fracción señaló: L·�tablcció una corrección en cuanto a la técnica de redacción del pre­
L·L·pto, al establecer que los tratados debían ser celebrados por el Ejecu­
B. Son facultades exclusivas del Senado:
l. Aprobar los tratados y convenciones diplomáticas que celebre el Eje- ti\O, suprimiendo la terminología de "hechos y que se hicieren", por la
cutivo con las potencias extranjeras." dL' "celebrados y que se celebren"; y salvo la corrección antes mencio­
nada, la modificación no alteró en forma sustantiva el fondo de dicho
Por tal motivo el texto del artículo 126 de la Constitución del 57 era
precepto, en consecuencia siguió en vigor el mismo principio de supre­
incongruente con dicha reforma; a pesar de ello, su texto fue integrado
macía constitucional.
en los mismos términos a la Constitución del 17, la cual a su vez, con­
templaba nuevamente como facultad exclusiva del Senado ahora en el
artículo 76 fracción I la de que esta cámara aprobara los tratados inter­ 7.2. LA SUPREMACÍA CONSTITUCIONAL
nacionales y convenciones diplomáticas que celebre el Ejecutivo de la Y EL ORDEN JURÍDICO ESTATAL
Unión, situación que hasta la fecha continúa vigente.
Por ello, la Constitución Mexicana de 19 17 adoptó su artículo 133, El concepto de Supremacía Constitucional, debe entenderse como:
retomando la concepción que la Constitución antecesora había postula­ aquella cualidad que posee únicamente la Constitución como norma ju­
do respecto al principio de Supremacía Constitucional, del que se re­ rídica, al ser el punto de partida de legitimidad de todo el orden jurídi­
dactó un artículo en contenido igual en la Constitución de 19 17, pero co de un país o territorio determinado.
que sólo cambió su nomenclatura, pues en el texto de la nueva Constitu­ La Constitución, es producto de un acto soberano del pueblo para
ción y salvo algunas palabras, pasó a ser el artículo 133; cuyo texto ori­ instituirla como Carta Fundamental de un orden jurídico, es por ello
ginal estipulaba: que implica dos condiciones que son: la de Poder Constituyente como
portador de la voluntad soberana del pueblo y en consecuencia autor de
Art. 133.-Esta Constitución, las leyes del Congreso de la Unión que
emanen de ella, y todos los tratados hechos y que se hicieren por el Presi­
la Constitución; y como producto de éste, los Poderes Constituidos, los
dente de la República, con aprobación del Congreso, serán la ley suprema cuales adquieren sus facultades de un documento superior constitutivo
de toda la Unión. Los jueces de cada Estado se arreglarán a dicha Constitu­ de ellos, que es la Constitución.
ción, leyes y tratados, a pesar de las disposiciones en contrario que pueda La Constitución es suprema por ser la expresión de la voluntad so­
haber en las constituciones o leyes de los Estados.14 berana del pueblo, realizada a través del Congreso o Asamblea Consti­
tu\ente; la cual, es fuente u origen de los poderes que crea y organiza;
Sin embargo, no fue sino hasta el 18 de enero de 1934 cuando el
los mismos, no pueden ir más allá de su norma creadora,
texto del artículo 133 Constitucional quedó adecuado a lo dispuesto por lo que implica
que sea superior a ellos.
la propia Constitución en lo relativo a las facultades exclusivas del Se­
La Supremacía es necesaria porque se requiere de una norma fun­
nado, para quedar de la siguiente forma:
damentadora de todas las demás leyes y normas conformadoras
que del or­
Art. 133.-Esta Constitución, las leyes del Congreso de la Unió n den jurídico, esa es la Constitución; ella obliga a
m a, ce­ todos los demás orde­
emanen de ella y todos los Tratados que estén de acuerdo con la mis
namientos a seguirla en todo su contenido,
ob a­ a no contravenida, a
lebrados y que se celebren por el Presidente de la República, con apr respetarla por ser la
es de ley de mayor jerarquía. Una Constitución es supre­
ción del Senado, serán la Ley Supi-ema de toda la Unión. Los juec
l11a por ser fundamental y es fundamenta
l por ser suprema.
ll
Ide111. p. 703.
14 TENA RAMiREZ, Felipe. Leves Fundamentales de México, 1808-/')97, 20a ed., op. cit., 1' GliTIÉRREZ S. Sergio Elías v RIVFs S. Roberto, La Ccmstilllci<1>z klexicmza al final del

p. 93 l. Siglo XX, 2" ed., Editorial Las Líneas del Mar, México, 199S, p. 413.
152 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN �1 pKEMACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Florex 153

La Constitución se encuentra por encima del Estado, por encima de perior determina la producción de la norma de ni\cl inferior, se plantea el
los órganos constituidos y por encima de los individuos considerados problema del conflicto normativo, dentro de un orden jurídico, en formas
di\Trsas, sea que se trate de un conflicto entre normas del mismo nivel, o
aisladamente, puesto que como pueblo, al ser el titular de la soberanía,
de un conflicto entre una norma de nivel superior y una norma de nivel
está por encima de la propia Constitución que en el artículo 39 le reco­
inferior.18
noce el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su go­
bierno, conforme a su voluntad y atendiendo los intereses que estime Esos conflictos se resuelven por supuesto mediante la aplicación de
convenientes. lo estip ulado para esos casos por la norma suprema del sistema jurídico
La Constitución, como cúspide de todo ordenamiento jurídico, hace qLJL' se trate; sin olvidar que en caso de ser normas promulgadas por un
fluir el principio de legalidad en los poderes públicos, de seguridad jurí­ 111io.mo órgano referente a una misma materia, en tiempos diferentes, el
dica de los actos de autoridad, de constitucionalidad en todas las actua­ problema se resolverá con el principio !ex posterior derogat priori.
ciones realizadas por los poderes constituidos. El maestro Felipe Tena Ramírez considera que la supremacía de la
Ahora bien, si seguimos los postulados de Hans Kelsen, el orden ju­ Constitución responde a la expresión soberana del pueblo para crear
rídico estatal es: esa carta fundamental. Sin embargo, el autor considera que al estable­
cerse esa Constitución, el ejercicio de la soberanía pasa a ser deposita­
...un orden jurídico cuya validez está limitada a determinado espacio: el
da en ese documento, se traslada hacia el papel constitucional:
llamado territorio del Estado, y que es tenido por soberano, es decir, como
no subordinado a ningún orden jurídico superior.16 El pueblo, a su vez, titular originario de la soberanía, subsumió en la Cons­
titución su propio poder soberano...
Ese orden jurídico estatal se crea con fundamento, base o fuente en Lo expuesto nos lleva a la conclusión de que la Soberanía, una vez que
una Constitución, entendida como norma suprema o fundante, según el pueblo la ejerció, reside exclusivamente en la Constitución y no en los ór­
Kelsen, dentro de ese orden normativo: ganos ni en los individuos que gobiernan...
Así es como la supremacía de la Constitución responde, no sólo a que
La función de esta norma fundante básica es fundamentar la validez objeti­
C·sta es la expresión de la Soberanía, sino también a que por serlo está por
va de un orden jurídico positivo, es decir, de las normas implantadas me­
encima de todas las leyes y de todas las autoridades: es la ley que rige las
diante actos humanos de voluntad en un orden coactivo eficaz en términos
lnes v que autoriza a las autoridades ... supremacía dice la calidad de su­
generales; es decir, interpretar el sentido subjetivo de esos actos como su
prema, que por ser emanación de la más alta fuente de autoridad corres­
sentido objetivo.17
ponde a la Constitución; en tanto que primacía denota el primer lugar que
El llamado orden jurídico estatal se compone de diversas normas, L'ntre todas las leyes ocupa la Constitución.1�
no situadas en un mismo nivel, sino escalonadas jerárquicamente, par­
El principio de supremacía constitucional siempre ha sido aceptado
tiendo de la norma suprema, la Constitución. De la Supremacía Consti­ en el constitucionalismo moderno, es por ello que tiene aparejado el
tucional se deriva la legitimidad y validez de todas las demás normas
concepto de control de la constitucionalidad, que estos no son más que
inferiores; todas deben obedecer los principios constitucionales y nunca
mecanismos de carácter jurídico para preservar la constitucionalidad
contravenidos, pues de lo contrario, sufren de invalidez, previa declara­ en los actos emitidos por los poderes constituidos y que actúan cuando
ción de la autoridad encargada de llevar a cabo la protección constitu­ el orden constitucional es violentado, reparando la infracción cometida
cional contenida en el mismo documento. a L'\tc.
Ahora, el hecho de que el orden jurídico sea un orden escalonado El principio de supremacía constitucional se desarrollo desde que
de normas y que existan de muy diversa especie y contenido, ocasionará se presen
taron las constituciones escritas, siendo la primera de estas la
en algunos momentos, conflictos de leyes: Nt rtcamericana, dentro de su �·a referido artículo VI, y es importante

senalar que
Como la estmctura del orden jurídico es una constr-ucción escalonada de los alcances de este principio se señalaron en el caso Mar­
normas recíprocamente supra v subordinadas, donde la nor·ma de nivel su- ?urv vs. Madison, en el que el Juez Marshall al hacer una interpretación
JUnsd iccional dispuso:

lo KEI.�FN. Hans. Teoría Pura del Derecho. traducción de Roberto Vernengo, sa ed


IX
.•

UNAM. México, 1986, p. 207. f<fc111, p. 215.


17 !de111, p. 210. 1'' lENA RAMÍREZ, Felipe. IJcrcclw Ccmstitucimwl Alcxicww. 30" ed .. 19'!6, p. 11.
154 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
�� ¡•KEI\IACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Flores 155

Es una proposición demasiado clara pat·a ser controvertida que la Constitu. Es preciso aclarar que cualquier fundamento de una norma nunca
ción controla cualquier acto legislativo ¡·epugnante a ella; de lo contrario, la
p!Ll\ ic nc de un órgano o autoridad que las pueda establecer, sino de la
legislatura podría alterar la Constitución por una ley ordinaria.
Entre esas alternativas, no hay término medio. O bien la Constitución es
t�tL"tdtad de la cual es investida esa autoridad para crearlas.
El sostener la fundamentación de una norma en otra superior nos
una ley suprema, que se encuentra por encima de todo lo demás y no es
modificable por medios ordinarios y. como los demás actos, es alterable a
]k\ a ría hacia el infinito en la escala de normas; sin embargo, Kelsen lo
gusto de la legislatura. Si la primera parte de la alternativa es verdade ra , rcsttL'lH' estatuyendo una norma suprema, la cual debe ser presupuesta
entonces un acto legislativo contrario a la Constitución no es ley; si la últi­ , 110 subordinada a alguna otra norma:

ma parte fuera exacta, entonces las constituciones escritas serían tentativas


Como norma suprema tiene que ser presupuesta, dado que no puede ser
absurdas de parte del pueblo ilimitable por su propia naturaleza.
impuesta por una autoridad cuya competencia tendría que basarse en una
No es tampoco indigno de ser observado que al establecer lo que debe ser
norma aún superior. Su validez no puede derivarse ya de una norma supe­
ley suprema del país, la misma Constitución es primeramente mencionada; y
rior, ni puede volver a cuestionarse el fundamento de su validez. Una nor­
no las leyes de los Estados Unidos en general, sino sólo aquellas que han sido
tna semejante, presupuesta como norma suprema, será designada aquí
dictadas en consecuencia de la Constitución, tienen aquel rango.20
nlllJO norma fundante básica.22
Esta interpretación establecida por el juzgador norteamericano es
Esa norma fundante básica es la Constitución, la cual es fuente co­
sin duda la expresión más fiel del principio de supremacía constitucio­
mún de validez de todas las normas pertenecientes a un mismo sistema
nal y significa un pilar fundamental para la comprensión de su exten­
u orden jurídico; el hecho de que muchas normas encuentren su funda­
sión y esencia, es lo que hace de la Constitución una norma fundante y
mento o validez en una misma norma fundante básica, ocasiona que
reguladora del actuar gubernamental, reflejándolo en un estado de de­
recho que implica la garantía para el gobernado de ejercer sus derechos pertenezcan o conformen un mismo sistema u orden normativo, con las

y cumplir sus obligaciones de acuerdo a la voluntad general expresada diferentes materias de las cuales se integran.
en la Constitución. Otra de las características de las normas, la cual le da pertenencia a
determinado sistema normativo, es de que esas normas deben producir­
se c on forme a la norma fundante básica .
7.3. PIRÁMIDE KELSENIANA
A4uello que constituye la unidad de un orden jurídico es la idea de
DE JERARQUÍA NORMATIVA
una norma fundamental que presuponga hipotéticamente todo conoci­
El problema del orden jerárquico normativo se planteo desde la miento jurídico. Esta norma representa la validez de las normas que
Edad Media, cuando San Agustín y Santo Tomas establecieron tres gra­ pertenecen a un mismo orden jurídico, pero no determina su contenido,
dos en la escala de leyes: la ley de Dios, la ley natural y la ley humana. sino las facultades para su creación.
El célebre autor austriaco Hans Kelsen realiza en su obra: Teoría
U na norma jurídica no vale por tener un contenido determinado; es decir,
Pura del Derecho, un estudio interesante sobre la jerarquía de normas
no \ale por que su contenido pueda inferirse, mediante un argumento de­
de un orden jurídico, ya sea estatal o internacional.
uuctivo lógico, de una norma fundante básica presupuesta, sino por haber
Primeramente, comienza con la fundamentación de validez de una
�ido producida de determinada manera, y, en última instancia, por haber sido
norma, la cual la encuentra en otra norma de jerarquía superior, que le producida de la manera determinada por una norma fundante básica pre­
otorga ese carácter de validez: �upuesta. Por ello, y sólo por ello, pet·tenecc la norma al orden jurídico, cu­
El fundamento de validez de una norma sólo puede encontrarse en la vali­ ya� normas han sido producidas conforme a esa norma fundante básica.21
dez de otra norma. La norma que representa el fundamento de validez de Al ser la Constitución el punto de partida del orden normativo, esta
otra es caracterizada, metafóricamente, como una norma superior en rela­
repr esen ta la unidad y armonía a seguir por el sistema jurídico lo que
ción con una inferior.21
:� �r�duce en el pri �cipio de fundamenta�id�d constituci��al: media�te
_
ua] la Constttucton
. debe guardar en SI misma un eqmhbno de pnn-
20
La Con�titución de los Estados Unidos de América anotada con la jurisprudencia. ---------

editorial Guillermo Kraft. Buenos Aires, 1 Y4Y, Tomo l. p. 627; citado po1· Elisur Arteag8
22
Constitucional. Editorial UNAM, 1 YY4, México, ld<'ll/, p. 202.
Nava en su obra Derecho
p. 18. 21
21
KELSEN. Hans. Teoría Pura del Derecho, op. cit., p. 201. id"'''· p. 205.
156 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN -.l pREMACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Flores 157

cipios generales y excepciones a ellos, con la finalidad de que el sistema 110rma fundamental; de acuerdo con lo anterior. corresponde a la Cons­
normativo que de ella se desprende sea un todo armonizado. titución el estrato superior jurídico la cual el jurisconsulto austriaco la
Puesto que la norma fundante básica es el fundamento de validez de todas Lkfi nc en dos acepciones:
las normas pertenecientes a un mismo orden jurídico, constituye ella la uni­ Por constitución se entiende aquí. la constitución en un sentido material, es
dad dentro de la multiplicidad de esas normas. Esa unidad también se ex­ decir: con esa palabra se designa la norma o normas positivas que regulan
presa diciendo que el orden jurídico es descrito en enunciados jurídicos la producción de las normas jurídicas gener·ales ...
que no se contradicen.24 De la constitución en sentido material. corresponde distinguir la consti­
tución en sentido formal, esto es, el documento denominado "constitución"
Al desprenderse el sistema normativo de la Constitución que en sí
que. como constitución escrita, no sólo contiene normas que regulan la le­
misma no guarda contradicción, las normas que se desprenden de ella
gislación, esto es, la producción de normas jurídicas generales, sino tam­
no deben rebasar lo estipulado por la misma, es por ello que al explicar bién normas que se refieren a otros objetos políticamente importantes. así
la estructura lógica de los diversos ámbitos normativos dados, Kelsen como disposiciones según las cuales las normas contenidas en ese docu­
llega a la construcción escalonada del orden mismo. De esta forma, es­ mento, la ley constitucional. no pueden ser derogadas o modificadas como
tudia las relaciones entre esos órdenes, manifestando que de existir su­ ;.imples leyes, sino sólo bajo condiciones más difíciles mediante un procedi­
puestas contradicciones entre ellos, estas son resueltas mediante la in­ miento especiai.27
terpretación del orden jurídico establecido, de tal manera que el
Su fundamento se deriva de que fue impuesta por autoridades cons­
derecho tenga una totalidad plena de sentido.
titu\cntcs reconocidas para el efecto, es decir, para crear la Constitu­
Como la estructura del orden jurídico es una construcción escalonada de ción (poder constituyente), para imponer normas y crear un orden jurí­
normas recíprocamente supra y subordinadas, donde la norma de nivel supe­ dico. Por supuesto que ese rango de autoridad constituyente se adquirió
rior determina la producción de la norma de nivel inferior, se plantea el pro­
por decisión soberana del pueblo al cual se le impondrán las normas.
blema del conflicto normativo, dentro de un orden jurídico, en formas diver­
El siguiente nivel lo constituyen las normas jurídicas generales pro­
sas, sea que se trate de un conflicto entre normas del mismo nivel o de un
ducidas por vía legislativa o consuetudinaria. A estas normas jurídicas
conflicto entre una norma de nivel superior y una norma de nivel infe rior. 25
generales de carácter secundario, les llama legislación, y su producción
Al respecto el maestro vienés afirma que la solución de los conflic- se encuentra regulada por la Constitución a través de facultades que
tos debe atender a la interpretación de la estructura del orden normati­ ella confiere a los órganos encargados de dicha producción.
vo y en caso de ser aplicables los principios de !ex posterior deroga! prio­ Esas normas jurídicas generales se promulgan por escrito, resultan­
ri; o bien, de acuerdo con la alternatividad que normas de un mismo tes de una imposición consciente para establecer tales normas; o bien,
nivel jerárquico establecen, o de acuerdo a las condiciones y limitantes
existen sistemas jurídicos en los cuales se contempla que cuando una
que una norma impone sobre a otra para su aplicación:
costumbre es llevada a cabo por un período prolongado del tiempo se
Mas como el conocimiento del derecho, como todo conocimiento, tiene que convierta está en una norma obligatoria establecida en la Constitución
pensar conceptualmente su objeto como un todo dotado de sentido, tratan­ como un hecho productor de normas.
do de describirlo en oraciones no contradictorias, parte del supuesto que
los conflictos normativos que aparezcan dentro del material normativo que le Las normas jurídicas generales producidas por vía legislativa son normas
conscientemente impuestas, es decir, normas promulgadas por escrito. Los
es dado (o más correctamente: que le es propuesto) pueden y tienen que ser
disueltos por vía de interpretación.26 actos constitutivos del hecho de la legislación son actos de producción de
normas, de instauración de normas; es decir, su sentido subjetivo es un de­
De esta forma Kelsen explica, la jerarquía normativa al decirnos ber ser. La constitución erige ese sentido subjetivo en un significado objeti­
que un orden jurídico está integrado de normas de derecho ubicadas ei1 vo. el hecho de la legislación es instaurado como un hecho productor de de­
distinto plano jerárquico, las cuales deben atender a lo dispuesto por la. r·echo. Pero la Constitución puede también establecer como hecho creador
de derecho un hecho consuetudinario específicamente caracterizado . .. 28

24 !dem. p. 214.
2' KELSEN. Hans. Teoría Pura del Derecho, op. cit.. p. 215. 27 ldem. pp. 232-233.
26 2H
Jdem. p. 215. ldem, p 235.
158 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN ;, l pREMACÍA CONSTITUCIONAL - A . Soto Flore' 159

El siguiente escalón es el de la ley y la ordenanza reglamentaria. En rrir a su aplicación aún en contra de la voluntad del individuo; es por
este nivel se comprenden las normas jurídicas generales hechas por ór­ L·\lo q ue el orden coactivo es una herramienta del sistema jurídico, para
ganos administrativos (reglamentos), o por el gobierno mismo, por hacerse cumplir y con base en él podemos distinguir una norma jurídi­
mandamiento de la Constitución, dice Kelsen. c�t de otro tipo de normas cuyo cumplimiento es potestativo de su
El otro escalón lo integran tanto el derecho sustantivo como el dere­ lk;,ti natario.
cho formal, es decir, los derechos civil, penal, mercantil, etc. y los dere­ Conforme a la pirámide kelseniana, las normas jurídicas se encuen­
chos procesales de cada materia del derecho. tr�1n escalonadas en estratos jurídicos, las de abajo tienen su validez en
Este Derecho de Forma es constituido por las normas generales que 1a norma jurídica inmediata superior, hasta llegar a la fundamental, la
regulan la organización y actuación de los organismos judiciales y ad­ Constitución. En ellas se dan relaciones de supra-ordinación, de subor­
ministrativos, como son los Códigos de Procedimientos Civiles y Pena­ dinación, e incluso de coordinación.
les; mientras que el Derecho de fondo, material o sustantivo son normas La Constitución se considera la norma fundante básica. La su­
generales que determinan el contenido de los actos judiciales y adminis­ pra-ordinad a es la Constitución y las relaciones de subordinación y
trativos los cuales son el Derecho Civil, Penal y Administrativo; pero de coordinación se dan en la diversidad de las leyes ordinarias, reglamen­
su conjugación se deriva una disposición concreta aplicable a un caso tos \ normas individualizadas que componen el sistema jurídico.
particular, que es la observancia específica del derecho en los casos
concretos: 7.4. SUPREMACÍA CONSTITUCIONAL
EN EL ESTADO FEDERAL
También se suele pensar, por lo común, cuando se habla de las normas
aplicables por esos órganos sólo en el derecho civil, penal o administrativo,
Dentro de todo lo concerniente a la supremacía constitucional, es
de fondo (material), aún cuando el derecho civil, penal o administrativo de
momento de estudiar sus alcances dentro del Estado Federal.
fondo (material) no pueda ser aplicado sin que se aplique simultáneamente
Debemos considerar al federalismo como una forma de organiza­
un derecho formal, es decir, el derecho que regula el procedimiento para
efectuar el acto judicial o administrativo en el que se aplica el derecho civil, ción del Estado en la cual conviven dos jurisdicciones; una que es la fe­
penal o administrativo de fondo (material). El derecho de fondo y de forma deral aplicable a todo el territorio de la nación; y la otra considerada
está inescindiblemente entrelazado. Sólo en su enlace orgánico configuran estatal o local, la cual solo aplica al territorio de la entidad federativa
el derecho regulador de su propia producción y aplicación. Todo enunciado correspondiente. Ambas tienen atribuciones de igual jerarquía, pero di­
jurídico que describa en forma completa a este derecho tiene que contener ferente competencia, y se encuentran sometidas a la Constitución Políti­
tanto el elemento formal como el material29 ca; por lo que la una no es superior a la otra, en base a ello se les deno­

Aquí se comprenden las normas que pasan de ser generales a ser in­ mina órganos coextensos o coexistentes.

dividuales en razón de la aplicación concreta que se hace al caso con­ Respecto del federalismo, el maestro Felipe Tena Ramírez resalta la
importancia de establecer una jerarquía normativa en este sistema debi­
creto. Puede ser el contenido de un acto judicial o administrativo; la
do a que:
sentencia judicial o una resolución administrativa.
Luego entonces, conforme a los principios establecidos por Kelsen, La distribución de facultades entre los dos órdenes (llamado el uno "fede­
podemos esquematizar que la jerarquía de leyes se conforma de la si­ ral" por antonomasia y el otro "regional" o "local"), es en sí misma de tras­
guiente manera: cendencia para la vida del país, pues esa distribución debe resolver el pro­
Nosotros colocamos a los Tratados Internacionales por encima de blema de la conveniencia de que cada una de las facultades ingrese a una u

las Leyes Federales v las Constituciones Locales debido a ciertas razo­ ot¡·a de las jurisdicciones. Una vez hecho el reparto de competencias por la
lev suprema, todavía se presentan numerosos casos en que toca al intérpre­
nes que explicarem�s en uno de los siguientes puntos del capítulo.
te decidit· a cual jurisdicción corresponde un acto concreto de autoridad.10
Así mismo, incluimos como último estrato de la pirámide al orden
coactivo, el cual forma parte de las características de las normas jurídi­ La Fede1·ación es una forma de Estado que comprende los supues-
tos
cas, pues en caso de incumplimiento de alguna de el las, se puede recu· Siguientes.
·

lu
2" KELSEN, Hans. Teoría Pura del Derecho, op. cit., p. 24 1 . TFNA RAMÍREZ, Felipe. Derecho Co11stitucimw/ Mexica11o, op. cit., p. 1 O l.
160 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN :-;l ¡•KEMACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Flores 161

l. Un grupo de entidades (federativas) reunidas en torno a un pacto por la vía jurisdiccional o política que cada orden constitucional concreto y
e s pec ífico establezca.31
en común de índole federal.
2. Dichas entidades conservan un grado de autonomía gubernativa
(gobierno local) dentro de su delimitación territorial.
3. La creación de un gobierno federal que es representativo de la ci­
tada unión.
l. Constitución.
4. La convivencia entre la autoridad federal y la local.
2. Tratados Internacionales.
De esta forma, encontramos que en un Estado Federal, por su natu­
raleza, existen dos ámbitos de gobierno de igual jerarquía, subordina­ 3. Leyes Ordinarias.

dos a las disposiciones establecidas en el Pacto Federal; es decir, la 4. Reglamentos.


Constitución; es por ello, que dentro de un Estado Federal debe existir
S. Normas Jurídicas Individualizadas
por igual el principio de supremacía constitucional adecuado a las ca­
6. Orden Coactivo.
racterísticas intrínsecas a esta forma de Estado.
Al ser México un Estado Federal, contempla su Constitución en el
artículo 133 el principio de supremacía constitucional que establece:

Art. 133.-Esta Constitución, las leyes del Congreso de la Unión que Además, la Constitución posee en su contenido los elementos esen­

emanen de ella y todos los tratados que estén de acuerdo con la misma, ce­
ciales del pueblo mexicano, sus aspiraciones, sus derechos, obligaciones
lebrados y que se celebren por el Presidente de la República, con y finalidades; también organiza los poderes del Estado y sus responsabi­

ción del Senado, serán la Ley Suprema de toda la Unión. Los Jueces lidades.
cada Estado se arreglarán a dicha Constitución, leyes y tratados, a pesar Para entender claramente el artículo 133 Constitucional, la Supre­
la� disposiciones en contrario que pueda haber en las Constituciones o ma Corte de Justicia de la Nación ejerciendo su facultad de intérprete
yes de los Estados. de la Constitución ha establecido la jurisprudencia siguiente:

De la interpretación literal del texto citado, se podría SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN
que tanto la Constitución, como las leyes del Congreso de la Unión,
NO\ena Época. Instancia Pleno. Fuente Semanario Judicial de la Federa­
los tratados internacionales, en su conjunto representan la Ley ción \ su G aceta. Tomo: X, Noviembre de 1999. Página: 46.
ma de la Unión; dicha interpretación es errónea como consecuencia
TRATADOS INTERNACIONALES. SE UBICAN JERÁRQUICAMENTE POR ENCIMA DE LAS
la inadecuada redacción que el texto constitucional sugiere, pues LEYLs FEDERALES Y EN UN SEGUNDO PLANO
RESPECTO DE LA CONSTITUCIÓN FEDE­
ta ser una copia del artículo VI de la Constitución de los Estados RAL. - P ersistenteme nte en la doctrina se ha formulado la interrogante
respecto
a la jera r uí
dos de Norteamérica. q a de normas en nuestro derecho. Existe unanimidad respecto de
que la c o n s tituc
Es por ello que el Doctor Ignacio Burgoa Orihuela resalta la i ón Federal es la norma fundamental y que aunque en principio
la "'"!)res
·

" n " . .. seran


IO . 1 a Ley Suprema de toda 1 a .
U mon...
" " parece m d'1car que
' ·'

tancia de la Constitución como norma suprema de todo arde no so lo la


Carta Magna es la suprema, la objeción es superada por el hecho de
jurídico al exponer: que las lev
es deben emanar de la Constitución y ser aprobadas por un órgano
constitu
La Supremacía de la Constitución implica que ésta sea el ord ido, como lo es el Congreso de la Unión v de que los Tratados deben
tar de es­
"cúspide" de todo el derecho positivo del Estado, situación que la acuerdo con la Ley Fundamental. lo que. claramente
indica que solo la
Co_n s tit
ución es la Ley Suprema. El problema respecto
en el índice de validez formal de todas las leyes secundarias u a la jerarquía de las de­
�as nor·m
as del sistema, ha encontrado en la jurisprudencia v en la
que forman el sistema jurídico estatal, en cuanto que ninguna de ellas . .
drsr111lds .
· doctrina
solunones, entre las que destacan: supreman.a del derecho ·

oponerse, violar o simplemente apat·tat·se de las disposiciones constitu� federal

nales. Por ende, si esta oposición, violación o dicho apanamiento se


u·an, la ley que pt·ovoque estos fenómenos carece de "validez formal", 9"
11 Bl'f{(iOA ÜRIIIl'ELA, Ignacio. !Jer<'clw Cmtstitucimwl A1l'.ticww. ed., PoiTúa, Mé·xi­
co, 19'14 p. 359.
do susceptible de declararse "nula", "invál id a", "inoperante" o "ine ,
162 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓII¡ �� ¡•REMACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Flores 163

frente al local y misma jerarquía de los dos, en sus variantes lisa y llana, y con ."i. Circulares, Oficios.
la existencia de "leves constitucionales", y la de que será ley suprema la que sea
6. Normas Jurídicas Individualizadas.
calificada de constitucional. No obstante, esta Suprema Corte de Justicia con si­
7. Orden Coactivo.
dera que los Tratados Internacionales se encuentran en un segundo plano inme­
diatamente debajo de la Ley Fundamental y por encima del derecho federal y el En cuanto a la ubicación de las leyes federales y locales en un plano
local. Esta interpretación del artículo 133 constitucional, deriva de que e stos
ck igualdad jerárquica, debemos atender a lo dispuesto por el artícu­
compromisos internacionales son asumidos por el Estado mexicano en su co n­
lo !24 constitucional, que a la letra dice:
junto y comprometen a todas sus autoridades frente a la comunidad internacio­
nal; por ello se explica que el constituyente haya facultado al presidente de la Las facultades que no están expresamente concedidas por esta Constitución
República a suscribir los tratados internacionales en su calidad de jefe de Esta­ a los funcionarios federales están reservadas a los Estados.
do y, de la misma manera, el Senado interviene como representante de la vo­
Lo establecido por el precepto referido se explica debido a que den­
luntad de las entidades federativas y, por medio de su ratificación, obliga a sus
autoridades. Otro aspecto importante para considerar esta jerarquía de los tra­ tro del Federalismo se desenvuelven dos órdenes jurídicos distintos

tados, es la relativa a que en esta materia no existe limitación competencia! en­ esencialmente: el federal y el estatal o local, en donde se podría argu­

tre la Federación y las entidades federativas, esto es, no se toma en cuenta la


mentar que conforme a la desafortunada redacción del texto del artícu­
competencia federal o local del contenido del tratado, sino que por mandato ex­ lo 133 constitucional las leyes federales están por encima del orden lo­
preso del propio artículo 133 el presidente de la República y el Senado pueden cal. Pero las palabras del artículo citado no corresponden con la
obligar al Estado mexicano en cualquier materia, independientemente de que realidad jurídica, puesto que solo la Constitución es la Ley Suprema.
para otros efectos ésta sea competencia de las entidades federativas. Como con­ Ahora bien, de acuerdo con el artículo 124, debe señalarse que no existe
secuencia de lo anterior, la interpretación del artículo 133 lleva a considerar en suprL·macía entre el orden federal y el local, siendo iguales jerárquica­
un tercer lugar al derecho federal y al local en una misma jerarquía en virtud mente, en consecuencia se les concibe como órganos coextensos.
de lo dispuesto en el artículo 124 de la Ley Fundamental, el cual ordena que Del texto del artículo 124 Constitucional, podemos desprender que
"Las facultades que no están expresamente concedidas por esta Constitución a
rige para llevar a cabo la distribución de competencias entre los órga­
los funcionarios federales, se entienden reservadas a los Estados." No se pierde nos federales y los estatales, por ello podemos afirmar que lo dispuesto
de vista que en su anterior conformación, este máximo Tribunal había adoptado
en la primera parte del artículo 133 Constitucional no establece una su­
una posición diversa en la tesis P.C/92, publicada en la Gaceta del Semanario
perioridad de las leyes federales sobre las locales, pues a la luz de nues­
Judicial de la Federación, Número 60, correspondiente a Diciembre de 1992,
tra realidad jurídica, en caso de existir un conflicto entre una ley o acto
página 27, de rubro: "LEYES FEDERALES Y TRATADOS INTERNACIONALES. TIENEN LA
" estatal con una ley o acto federal, no será un conflicto de jerarquías, sino
MISMA JERARQUÍA NORMATIVA. ; sin embargo, este Tribunal pleno considera opor­
tuno abandonar tal criterio y asumir el que considera la jerarquía superior de de distribución de competencias, pues como el texto del artículo 124
los tratados incluso frente al derecho federal. constitucional establece que las facultades que no se encuentren expre­

Amparo en revisión 1475/98. Sindicato Nacional de Controladores de Tránsito Aéreo. samente reservadas a los funcionarios federales, se entenderán reserva­
JI de mayo de 1999. Unanimidad de diez votos. Ausente: José Vicente Aguinaco Alemán·
das a los estados.
Ponente: Humberto Román Palacios. Secretario: Antonio Espinoza Rangel. Ahora bien, la forma de garantizar esta supremacía, se encuentra
El Tribunal Pleno, en su sesión privada celebrada el veintiocho de octubre en curso. co n tenida en las figuras conocidas como los medios de control Consti­
aprobó, con el número LXXYII/1999, la tesis aislada que antecede: y determino que lavo­ tucion
al.
tación es idónea para integrar tesis jurisprudencia!. México, Distrito FederaL a veintiochO Estos sistemas son de forma directa
y de manera difusa. Se presen­
de octubre de mil novecientos noventa \' nueve. tan de
for ma directa, cuando tienden a la protección
de los principios
í c �ns ag
De la interpretación que esta tesis expone y siguiendo la jerarqu a rados en la Constitución a través de medios estrecham
normativa básica efectuada por la doctrina, podemos desprender que la � J o n a do
s con tal objetivo. Se presentan como controle
ente rela­
s difusos, cuando
jerarquía de normas en nuestro sistema jurídi co es la siguiente: e un a u otra forma redundan en el
respeto de la Constitución, aún
cuando
l. Constitución. su objetivo en sí mismo no sea tal.
2. Tratados Internacionales. De esta forma, tenemos que dentro de
los medios de control Consti-
tuci o na
3. Leyes Federales y Leyes Locales. 1 d.1recto, se comprenden:
4. Reglamentos.
164 �� ¡•RFMACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Flores 165

a) La desaparición de poderes en los términos del artículo 76 7.S. POSIBLE CONTRADICCIÓN


ción V constitucional por parte del senado respecto de las ENTRE LEYES CONSTITUCIONALES Y TRATADOS
dades de la República, cuando se rompe el orden constituci
Co menzaremos el presente apartado explicando en qué consisten
h) La facultad investigadora de la Suprema Corte de Justicia de
b� leves constitucionales, las cuales son una expresión de la doctrina
Nación en caso de violaciones graves a una garantía indivi
Jlll''icana que se ha encargado de interpretar el artículo 133.
o de hechos que violen el voto público (art. 97 Constitución).
Al respecto, la doctrina siempre ha interpretado una igualdad jerár­
e) Juicio de Amparo, en contra de violaciones a las garantías
quica en las leyes que ha emitido el Congreso de la Unión ejerciendo las
·

duales (arts. 103 y 107 Constitución).


facu ltades que le confiere el artículo 72 de la Carta Magna; sin embar­
d) Controversia Constitucional, por invasión de esferas entre
go, una corriente de doctrinarios ha vertido ideas importantes relativas
tres niveles de gobierno (art. 1 OS fracción 1 Constitución).
; establecer categorías en las leyes expedidas por el Congreso.
e) Acción de Inconstitucionalidad, cuando exista con
El maestro Mario de la Cueva citando a Mariano Coronado formula
entre una disposición de carácter general y la Constitución
la teoría de la existencia de una jerarquía en las leyes emanadas del
1 OS fracción. 11 Constitución).
Congreso de la Unión al decir:
O Juicio Político, en caso de que los servidores públicos
En cambio, en sus comentarios a la Constitución de 1857, Mariano Corona­
gan las disposiciones constitucionales (arts. 108 a 11O \....onsuru
do colocó el párrafo siguiente: las Leyes del Congreso de la Unión que ema­
ción). nan de la Constitución "son las reglamentarias que desarrollan algún pre­

El control difuso se encuentra integrado por: cepto del Código político."32

a) Protesta de los funcionaras de cumplir y hacer cumplir Continúa el maestro exponiendo que del párrafo citado de Corona­
Constitución (art. 128 Constitución). do se desprenden dos tipos de leyes emanadas del Congreso de la
h) Apego por parte de los jueces estatales a la Constitución, Unión, que son:
ello implique desobedecer las leyes de su entidad (art. 133 A. Las que emanan en forma material y formalmente de la Constitución.
tución). B. Las que solo emanan formalmente de ella.

En este último medio de control existe una supuesta co De las primeras, el maestro de la Cueva expresa:
(hay que recordar que la Constitución es un todo y que no puede Algunas de las leyes que emite el poder legislativo constituyen el desarrollo
traponerse a si misma) de esta disposición y las establecidas para el de l os preceptos constitucionales, esto es, son el cuerpo y el alma de la Cons­
cio de amparo. titución que se expanden, determinando, precisando y diciendo con la ma­
vor claridad y en todos sus detalles, lo que son y lo que significan el cuerpo
En este caso particular el problema no es sencillo, tenemos por
v el alma de la ley fundamental, o lo que es igual: son normas que hacen
parte que un Juez cuando es nombrado, debe protestar el respetar Y
exp lícito el sentido pleno de los textos constitucionales, son, por decirlo así,
cer respetar a la Constitución Federal según el artículo 128, así
la Constitución misma, fuerza viva que se desarrolla siguiendo sus leyes in­
el artículo 133 le impone la obligación de apegarse a la ternas para explicar a los hombres todo lo que es, pero sin salirse nunca ni
aunque ello implique desobedecer las leyes de su entidad, en tanto de su cuerpo ni de su alma, sin transformarse en lo que no cs ... esas nor­
mas son la Constitución misma en movimiento y en acción son su vida dia­
contrarias con el Pacto Federal.
ria, su actuar constante sobre las realidades sociales.33
Por otra parte, la Constitución establece en los artículos 103, 1
y 107 la facultad al Poder Judicial de la Federación para controlar .
Coi ncidimos con lo expresado por el maestro de la Cueva, pues si
bien es cierto
constitucionalidad de los actos de autoridad, siendo tarea esta de que las leyes emanadas del Congreso de la Unión en su
dores especializados, en este sentido, la Suprema Corte de Justicia generalidad deben cumplir con todo lo dispuesto por el artículo 72

sus facultades de intérprete de la Constitución ha establecido la ·

I an c ia de l a segunda parte de lo d i spue s to en su artículo 133. 12 CUEVA, Mario de la. Teoría de la Constitución, 4a ed., México, Porrúa, 1990, p. 113.
11
"

ldem, pp. 113,114.


167
166 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN �� ¡•RFMACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Flores

Constitucional relativo a su creación, no debemos dejar de lado que es El acto jurídico regido por el Derecho Internacional que entraña el acuer­

diverso el contenido de cada una de esas normas, y más si encontramos do de voluntades entre dos o más sujetos de la comunidad internacional,

que en el texto de la propia Constitución encarga al órgano legislador principalmente estados, con la intención lícita de crear, transmitir, modi­

expedir leyes en donde se desarrollen los principios de una decisión po­ licar, extinguir, conservar, aclarar, certificar, detallar, etc., derechos y obli­
� a c ione s .3b
lítica fundamental que ella establece. Por ello, nos atrevemos a afirmar
que las leyes constitucionales son aquellas que desarrollan un principio
Desde el punto de vista internacional, el artículo 133 constitucional
fundamental que la nación como titular del poder soberano plasmó en que se refiere al reconocimien­
111�1neja la doctrina monista nacionalista
la Constitución a través del Congreso Constituyente. Internaciona l en el ámbito interno, ubicándolo
to \ \·alidez del Derecho
En esta tesitura continúa el maestro Mario de la Cueva exponiendo al de las leyes constitucionales; de acuerdo
en un plano jerárquico igual
que existen tres categorías de leyes constitucionales, las cuales son: García, el artículo 133 constitucional debe
al maestro Carlos Arellano
A. Leyes Orgánicas: Estas son las que determinan la estructura, darle supremacía a los Tratados
ser reformado, pues según él, debería
atribuciones y funcionamiento concreto de los órganos estatales. la doctrina
Jntnnacionales sobre las disposiciones internas, siguiendo
B. Leyes Reglamentarias: Son aquellas que desenvuelven y concre­
moderna adoptada por muchos países.
tan las normas constitucionales a fin de precisar los derechos y
El artículo señala:
deberes de los hombres y facilitar la aplicación de los principios
A. La jerarquía de las normas del sistema jurídico mexicano.
abstractos y generales.
B. La subordinación de leyes ordinarias federales a la Constitución.
C. Leyes Sociales: Son las que desarrollan los principios de la de­
C. La Supremacía de la norma jurídica interna constitucional sobre
claración de derechos sociales que está compuesta de preceptos
la norma jurídica internacional contenida en un tratado interna­
que son a la vez principios pragmáticos y normas de acción; ade­
cional.
más contemplan un mínimo de derechos y beneficios de una cla­
D. Indica la mayor jerarquía de la norma jurídica internacional so­
se sociaJ.34
bre las normas de los Estados de la República.17
Estos grupos de leyes se distinguen del resto de las emanadas del
Para el maestro Arellano García, el precepto debiera contener la
Congreso de la Unión porque éstas últimas establecen disposiciones
obligación expresa del Ejecutivo y el Senado para apegarse a la Consti­
para regular diversas situaciones que se presentan en la vida cotidiana
tución cuando se celebran Tratados Internacionales; en consecuencia,
de la nación y que su observancia es inmutable en cualquier Estado.
debiera señalarse la sanción a esos poderes por la falta que pudieran
Sin duda, los dos grupos de normas proceden del mismo órgano y se elabo­ cometer. Este artículo sólo es norma hacia lo interno, porque fija váli­
ran por un mismo procedimiento, pero las diferencias apuntadas crean una damente el orden jerárquico de las normas jurídicas, pero no tiene vali­
jerarquía material a favor del primer grupo, pues mientras sus normas son dt:z en lo internacional pues va contra el principio pacta sunt servanda.
la explicitación de las ideas elevadas por el pueblo a la categoría de princi­ Lo expresado por el maestro Arellano García, atiende a la moderna
pios, normas e instituciones fundamentales, las normas secundarias simple­ doctrina producto de una dinámica económica, política y social de ín­
mente son el ejercicio de una atribución destinada a la regulación de un do!t: internacional; sin embargo, aún se conservan las fronteras y la es­
cierto tipo de relaciones entre los hombres...15 tructura estatal, por lo que continúa vigente el concepto de soberanía al
in!l'rior, entendiéndola como la facultad de un Estado de fijar su régi­
Una vez que hemos determinado la diferencia que existe entre las
normas constitucionales, del resto de las normas expedidas por el Con­ n1t:n i nterno sin que exista injerencia del exterior; en consecuencia, de­

greso de la Unión, pasaremos a explicar los Tratados Internacionales, bt:mos estudiar la validez de los Tratados Internacionales a la luz de
nu estro sistema jurídico de esta forma si atendemos solo el orden in­
para que de esta abordemos el probable conflicto que se pueda presen­
tar entre estas figuras; así, un Tratado Internacional es:
ter no, el Tratado

es fue te formal del D
erecho, pues genera normas ju-

le
34 Cfi·. C U EVA, Mario de la. Teoría de la Co11stilllció11, 4" ed., México, Por-rúa, 1990, AREI.LA�o GARlÍA, Carlos. Prima Curso de Daecho hllenwcimzal Príhlico, 2" ed., Po­
p. 114. rt·úa. México, 1993, p. 632 .
.ls
Idem, p. 115. 17 C(r. ARELLANO GARCÍA, Carlos. Primer Curso de Derecho hrtenzacimwl Príhlico, op. cil.,
Pp. 9S y 96.
169
168 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN . SI ¡•KFI\IA CÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Flores

rídicas de carácter general y abstracto. Pero respecto de los Tratados, No debe perderse de vista que cada precepto abre una serie de posibilida­

puede darse un desconocimiento interno por contravenir una disposi­ des, todas las cuales expresan su espíritu, y que de ellas escoge el legislador
la que le parece más adecuada, sin que esa elección se convierta en un tabú
ción constitucional, aunque persiste la validez legítima como obligación
intocable a menos de modificar por los procedimientos respectivos la nor­
contraída por el Estado mexicano en el Derecho Internacional.
ma superior.40
No desconocemos que se ha usado la idea de la soberanía para otorgar al
Estado la potestad de pasar sobre sus obligaciones, pero creemos -y así lo Partiendo de la premisa que los tratados internacionales operan en
hemos sostenido en diferentes ocasiones- que la soberanía es la potestad el sistema jurídico interno en el momento de su aprobación, nos seña­
de un pueblo para decidir su destino sin intervención de ningún otro poder, b L'l maestro Mario de la Cueva que de acuerdo con la jurisprudencia
más no la de violar sus obligaciones y los derechos de los demás pueblos; norteamericana, al entrar en vigor el Tratado Internacional se puede
claro está que el tratado que en alguna forma restrinja la soberanía del
demandar su aplicación ante los tribunales, lo cual de acuerdo a ese de­
Estado no se cumplirá, pero ello se debe a que está en contradicción con recho una ley posterior derogaría una anterior.
una norma de rango superior.38
Pero continúa el maestro de la Cueva estudiando sistemáticamente
Toda la supremacía de la Constitución sobre los Tratados se reduce la posible contradicción y manifiesta que:
al orden interno, al derecho constitucional, pues en el ámbito externo, La posibilidad de que un tratado modifique una ley constitucional es una
el internacional, el Tratado aprobado debe ser cumplido. cuestión espinosa: cuando el poder legislativo es unicameral, el mismo ór­
Conforme a lo anterior, la jerarquía normativa se estructuraría como gano expide la ley y ratifica el tratado, lo que hace suponer que se propuso
sugiere el maestro Carpizo retomando las ideas de Mario de la Cueva: modificarla. Pero cuando los órganos son distintos, como en el caso de
nuestro derecho constitucional, no parece posible la modificación, pues si
Pues bien, Mario de la Cueva tomando esa idea de Coronado -que no es
muy clara- piensa que el orden jurídico mexicano se clasifica así: l. Cons- la constitución ordena que las leyes reguladoras de las atribuciones del po­
·

titución Federal, II. Leyes constitucionales y tratados, Ill. El derecho fede­ der legislativo sean aprobadas por las dos cámaras, no puede el senado mo­
ral ordinario y el derecho local...39 dificar unilateralmente la norma que aprobó en coordinación con la cáma­
ra de diputados, por que rompería la unidad legislativa; así lo resuelve
Pero pueden surgir controversias entre un tratado internacional y
expresamente el artículo 72 inciso "f" de nuestra Constitución: "En la dero­
una ley constitucional, en donde debido a la redacción del artículo 133
gación de las leyes se observarán los mismos trámites establecidos para su
las iguala jerárquicamente, dejando en este caso a las leyes no constitu� lormación."41
cionales expedidas por el Congreso de la Unión en un tercer plano en
nuestra pirámide normativa. De igual forma, el conflicto puede presentarse por la expedición de
Sobre la posible solución que se presente al conflicto de estas nor� una ley de carácter constitucional que contraríe las disposiciones esta­
blecidas en un Tratado Internacional, en donde la problemática se plan­
mas, debemos precisar el espíritu de ellas, debido a que si una ley cons·
tearía de la siguiente forma:
titucional desarrolla el espíritu del Constituyente en una decisión funda�
mental dentro del Estado, a primera vista parecería que si otra nornul Pem no podemos admitir que una ley del congreso derogue las normas
cual fuere la contrariara, estaría atentando contra el espíritu constitu· contenidas en un tratado: ni los 89 y 76 que autorizan a los poderes federa­
yente y como consecuencia, contra la Constitución, pues la extensión de les para celebrar tratados, ni el 133 que los declara parte de la ley suprema
esta sería la ley constitucional. de toda la Unión, ni otro alguno, autorizan al Congreso para desconocer las

Sin embargo, es errónea la acepción anterior, debido a que si se obligaciones legítimamente contraídas; por lo tanto, puesto que el Estado

atentara contra la Constitución al contradecir una ley constitucional. mexicano solo puede actuar por procedimientos jurídicos y en ejercicio de
las atribuciones que le confiere la Constitución, concluimos en la imposibi­
pues si así fuera, el Constituyente no hubiera encomendado esa tarea al
lid ad jurídica de romper las obligaciones ... las partes contratantes se obli­
órgano legislativo constituido y la hubiera plasmado en la Constitución:
gan a aplicar en la vida nacional las normas pactadas, o expresado en otra

38 CUEVA, Mario de la. Teoría de la-Con stitución, 4" ed., op. cit., p. 124.
39 CARPIZO MAC·GREGOR, Jorge. Estudios Constitucionales. UNAM, Instituto de Investi• 4° CUEVA, Mario de la. Teoría de la Ctmstitución, 4a ed., op. cit., p. 121.
g aciones Jurídicas, México, op. cit., p. 28. 41 ldem, p. 124.
170 TEORÍA DE LA CONSTITUCiÓN �� ¡>REI\IACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Flores 171

fórmula: la modificación del tratado como derecho nacional significa el La primer regla que plantea el Maestro Quiroz, se refiere a que de­
desconocimiento de una obligación internacional legítimamente adqu¡. bL·1nos analizar si tanto el Tratado Internacional como la ley constitu­
42
rida . . .
cional se encuentran acordes a la Constitución; una vez que hayamos
Ante la conflictiva planteada, no podemos aplicar de forma estricta \L·rificado su congruencia con la norma fundamental, debemos atender
,d contenido de ambos documentos, para verificar cuál de ellos se ape­
el principio de derecho que dispone que una ley posterior deroga una
�a c o n mayor nitidez al espíritu constitucional; para ello, recomienda
anterior, es por ello que dentro de la doctrina se han desarrollado di­
versas opiniones respecto a cómo resolver estos posibles conflictos. Al
:J no solo se estudie el contenido de ambos documentos, sino también
tiL'
�e debe analizar la exposición de motivos y los debates que se presenta­
respecto el maestro Carpizo señala que:
ron en torno la aprobación de dichos documentos, esto con el objetivo
Nosotros consideramos que un tratado anticonstitucional no se puede apli­ de \ erificar cual fue la postura que prevaleció y se adecuó de mejor for­
car en el orden interno, ya que la Constitución es la suprema y los tratados ma a lo dispuesto en la Constitución, así como verificar la voluntad de
se encuentran en escaño inferior y además por que podría ser una puerta
las partes en la celebración del tratado para aprobarlo.
abierta a la autoridad para toda clase de violaciones, así en un tratado se
Si a pesar de lo anterior no se logra discernir en cuanto a que docu­
podrían vulnerar los derechos del hombre. Como la desaplicación del trata­
mento debe aplicarse, por ser el más indicado de acuerdo al texto cons­
do trae consecuencias y trastornos al país o países con los que se celebró...
creemos que un país al celebrar un tratado debe examinar que no exista titucional, propone el maestro Quiroz que, se aplique una segunda regla
para ello traba en el derecho constitucional del otro, y esto respondería a la de técnica jurídica en la que se atendería a que la norma posterior dero­
idea de que cuando uno contrata necesita conocer la situación jurídica de ga a la norma anterior, siempre y cuando esa norma posterior no oca­
la otra parte... sione responsabilidad internacional para el Estado mexicano; al tenor
...Ya hemos asentado que un tratado anticonstitucional no se puede apli­ de esta norma tendríamos que reflexionar si el Congreso de la Unión le­
car en el orden interno. Desde el punto de vista externo tampoco lo debe gisló con posterioridad a la expedición de un Tratado una Ley que con­
aplicar el estado aunque caiga en responsabilidad y lo que debe hacer en
tra\ iene a dicho tratado, por lo que es necesario reflexionar que un Tra­
estos casos es denunciarlo o por algún otro método jurídico acabar con el
tado Internacional no puede ir en contra de una ley constitucional,
monstruo que no tiene base constitucional para poder subsistir.43
debido a que esta es producto de la aprobación del Congreso de la Unión,
Coincidimos con lo expuesto por el Doctor Carpizo respecto a que que como ya sabemos, se compone de dos cámaras, la de diputados y la
ningún tratado que contenga disposiciones contrarias a la Constitución de s enadores, mientras que un Tratado Internacional es aprobado entre
debe ser observado en el ámbito jurídico interno, ni en el exterior por el Ejecutivo y la cámara de senadores; en este caso, partimos del su­
las autoridades mexicanas; pero consideramos que aquellos funciona­ puesto de que el Tratado Internacional fue aprobado conforme a la
rios que celebren y aprueben los tratados internacionales, deben hacer­ Co nstitución y no contiene disposiciones contrarias a ella, de igual for­

lo con estricto apego y conocimiento de la Constitución y congruente­ ma, la ley constitucional, no contiene disposiciones que rebasen el ám­
bit o constitucional, así que ante este problema, debe aplicarse la ley
mente con los principios rectores del Derecho Mexicano, para evitar las
constitucional en el ordenamiento jurídico interno, mientras que no po­
posibles contradicciones de aquellos con éste.
drá dejar de reconocerse el propio tratado por parte de las autoridades
Sin embargo, lo expresado por el maestro Carpizo no establece una
mexicanas en sus relaciones con la comunidad internacional.
solución amplia al problema planteado, pues sólo hace mención de la
invalidez de un Tratado Internacional respecto de la Constitución, pero En caso de que las reglas anteriores no solucionen el conflicto plan­
teado, el autor propone una tercera regla, en la que se observaría que la
al presentarse una probable contradicción con las leyes constituciona­
no rm a específica prevalezca sobre la más genérica, basándose en el
les, que como ya vimos, se ubican en un plano jerárquicamente igual. Al
respecto el maestro Enrique Quiroz Acosta desarrolla una serie de re·

rgumento que se debe aplicar aquella norma en la que se contemple
e. fo rma
más detallada y específica una situación aplicable al caso
glas para dar solución al problema planteado.
concreto. 44

42 Idem, p. 123.
41 CARPIZO MAc GREGOR Jorge. Estudios Collstitucionales, UNAM, Instituto de Investí· 44 Cfr. QUIROZ AcosTA, Enrique. Lecciones de Derecho Constitucio11al, Tomo l. Porn·�a.
México, 1999. pp. 118-120.
gaciones Jurídicas, México, op. cit., pp. 34-35.
172 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓ!I{
�� I'RFMACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Flore'
173

Coincidimos con lo expuesto por el Maestro Quiroz Acosta respecto De acuerdo con lo que establece
el Doctor Burgoa:
a las reglas para solucionar los posibles conflictos que se presenten en.
Fácilmente se advierte que el princ
tre una ley constitucional y los tratados internacionales, pero añadiría­ ipio de inviolabilidad constitucio
nal no
L'Stá reñido con el que proclama
mos nosotros que al encontrarnos con una congruencia de las leyes el "derecho a la revolución" que
corres­
ponde al pueblo como potestad
constitucionales y los tratados internacionales con la Constitución, al natural de su misma implicación
· dinámica,
pues no debe olvidarse que "invio
aplicarlas al caso concreto debemos dar preferencia a aquella que otor­ labilidad" no entraña "insustitub
ilidad" de
la constitución.47
gue mayores derechos y garantías a los destinatarios de la norma, des- ·

prendiéndolo de que nos encontramos en un Estado de Derecho, en el El artículo expresamente se refiere a la


suspensión de su vigencia
cual el constitucionalismo moderno sirve entre otras muchas cosas 111L·diante una rebelión o trastorno público, algo distin
to del significado
como un medio para limitar el poder de la autoridad, garantizando al dL· la revolución. Una rebelión implica una reacción
violenta contra el
gobernado un mejor ejercicio de sus derechos, por lo que uno de los 6.. sistema de gobierno y contra la Constitución
vigente en el momento de
nes a perseguir de cualquier Estado es garantizar el óptimo csL' movimiento; la rebelión, es alzarse
en armas por solamente una
de los derechos de su población, pues los individuos son el motivo o fraL·ción del pueblo, inconforme con su gobierno.
zón de ser de la autoridad de mando del Estado, siendo entonces las El hecho de ser únicamente una fracción
de todo el conglomerado
mitaciones que el propio Estado se fija, las condicionantes del popular, implica que esa lucha no es
apoyada por la mayoría y por tan­
individual, y en este caso, donde se contengan mayor cantidad de to. no es legítima. En un movimiento de revolución
, la ideología es por
chos para el gobernado, es la norma que debe prevalecer. supuesto, apoyada por la mayoría del pueb
lo inmiscuido, lo cual, legíti­
ma a todas luces esa lucha
:
7.6. INVIOLABILIDAD DE LA CONSTITUCIÓN
la Constitución es "inviolable"
frente a cualesquiera movimiento
s que,
sin ser auténticamente revol
La llamada Inviolabilidad de la Constitución se contiene en el ucionarios, la desconozcan, suspe
ndan o reem­
placen por un "status" político
Noveno, artículo 136 constitucional, que a la letra dice: difere nte. En otras palabras, toda Const
itu­
ción, ante las aspiraciones popu
lares, frente a la vida social en
Esta Constitución no perderá su fuerza y vigor, aun cuando por alguna constante
L'\ olución, es evidentem
ente susceptible de abolirse y de
belión se interrumpa su observancia. En caso de que por cualquier ser sustituida por
otra. Y es que una Const
itución, que hipotéticamente se supon
no público se establezca un gobierno contrario a los principios que ella e como fruto
de la voluntad popular
expresada a través de sus representa
ciona, tan luego como el pueblo recobre su libertad, se restablecerá ntes (congreso
o asamblea constituyen
observancia, y con arreglo a ella y a las leyes que en su virtud se te) no debe encadenar al pueblo hasta
el extremo de
que siempre se vea obliga
expedido, serán juzgados así los que hubieren figurado en el gobierno do a ceñir su vida a sus mandamien
tos, o sea, a
somete rse a los
nado de la rebelión, como los que hubieren cooperado a ésta.4s principios jurídicos, políticos, filosó
ficos, económicos o so­
ciales que en un mome
nto determinado puedan oponerse
Este precepto salvaguarda cada una de las partes de la Constituciól a la evolución na­
cional y a los sentimien
tos de justicia.48
y del propio Estado de Derecho.
El tema de la rebelión se instituyó porque la historia ha señalado
En consecuencia, en
un movimiento de rebelión, quie
vorecid nes se ven fa­
triunfo de grupos minoritarios los cuales han establecido os parcialmente, adquieren
un poder ilegítimo, sin apoyo real
una us urp , es
contrarias a los intereses mexicanos, esto en razón de la falta de ación del poder; en ese caso
castigo , la propia Constitución ordena el
ciencia de los derechos de soberanía correspondientes al pueblo. a tales actos; no así el
movimiento de la revolución,
un derec el cual es
Según Hans Kelsen, una Revolución es: ho de los pueblos que va más
en na allá de la Con stitu ción . Es más,
u Carta Fundamental, no es posi
... en el sentido amplio de la palabra, que abarca también el golpe de t el ble establecer de manera explíci­
do, es toda modificación no legítima de la Constitución -es decir, no �, derecho del pueblo
Cional a la revolución porque un doc
umento constitu­
da conforme a las disposiciones constitucionales-, o su reemplazo por no puede prever den
tro de sí su propia causa
--- de destrucción.
4;
4s Co11.stitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. op. cit., p. 143. Bt'RGOA ÜRIIIUELA, Ignac
4� io. Derecho Constitucional Mexicano,
46 KELSEN, Hans. Teoría Pura del Derecho, op. cit., p. 218. lhide111. op. cit.. p. 387.
174 TEORÍA DE LA CONSTITUCiÓN
�� !'RFMACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto Flores 175

Para el maestro Ignacio Burgoa, inviolabilidad significa: Primeramente definiremos lo que es la integración, según el Banco
Se afirma que la Constitución es "inviolable" porque solo puede ser que. ltttL·ramericano de Desarrollo:
brantada, desconocida o reemplazada mediante el ejercicio de dicho poder
Es un status jurídico en el cual los Estados entregan algunas de sus prerro­
cuyo titular es el pueblo, toda vez que no es sino el aspecto teleológico d� gativas soberanas, con el fin de constituir un área dentro de la cual circulen
su soberanía. "Inviolabilidad", por ende, significa la imposibilidad jurídica libremente y reciban el mismo trato, las personas, los bienes, los servicios y
de que la Constitución sea desconocida, cambiada o sustituida por fuerzas los capitales mediante la armonización de las políticas correspondientes y
que no emanen del poder constituyente o por grupos o personas que no ex. bajo una égida supranaciona!.51
presen la voluntad mayoritaria del pueblo.49
La entrega de esas prerrogativas soberanas, siempre vistas en ma­
Solo son dos los casos establecidos por la Constitución para el su.
nos de los Estados Nacionales, pero ahora cedidas a instancias suprana­
puesto de suspender la vigencia de su contenido; el primero, el caso de
cionales, obligan, de suyo, a redimensionar a la supremacía constitucio­
la rebelión. El otro caso en que se dejan de aplicar temporalmente dis­
nal. puesto que ya no puede poseer la Constitución de un país esa virtud
posiciones constitucionales es el señalado en el artículo 29, el cual versa suprema, ya existe un ordenamiento superior a la carta fundamental y
sobre la suspensión de las garantías individuales.
ese es el derecho proveniente de un Tratado reconocido por los Estados
Como sabemos, esa inviolabilidad en nuestros días y con nuestros
que formen parte de esa integración. Entonces, quien adquiere ese ran­
gobernantes se ve precisamente violada a diario y sin cortapisas; lo ha­
go de supremacía, es el documento base de ese proceso integrador.
cen de manera sistemática, gobernantes y autoridades cualesquiera. El
Esos Tratados Constitutivos de Comunidades reconocen expresa­
resultado de ello es la lejanía del pueblo en su Constitución y en sus
mente la jerarquía superior del Derecho que se desprende de ese instru­
instituciones:
mento, sobre las constituciones nacionales de los estados miembros
El pueblo mira a su constitución como un texto bíblico que no entiende, asignantes.
pero que sabe, sin embargo, que es un símbolo necesario que es preciso ve· Por supuesto, existe una modificación en la pirámide normativa tra­
ncrar y que su cumplimiento tal vez a nadie realmente obligue, pues quie· dicional, trasladando la punta hacia niveles "supranacionales" y colo­
nes son las primeras en incumplir, son las autoridades."0 cando en segundo término el contenido de las Constituciones de cada
Estado firmante.
7.7. TENDENCIAS ACTUALES El Derecho comunitario o supranacional, producido por esos ins­
trumentos es de una naturaleza especial, distinta del derecho interna­
En la realidad moderna, con el auge del fenómeno llamado Globali­ cio nal, que exige sean cumplidos sus propios parámetros:
zación, han sido trastocados innumerables conceptos, dogmas y doctri­
... el derecho comunitario ... se impone frente a las normas de derecho in­
nas; es el caso de la Supremacía Constitucional.
terno, cualquiera que sea su rango, lo que quiere decir, lisa y llanamente,
Los procesos de integración de los cuales hemos sido testigos, nos
que se impone aún frente a la norma constitucional interna; en segundo lu­
demuestran las transformaciones de las ideologías tradicionales, ade­ gar; las normas comunitarias no requieren de normas de recepción de de­
más de la correspondiente generación de nuevos paradigmas y pensa­ recho interno para ser aplicables en el ordenamiento de cada uno de los
mientos. El caso de la Unión Europea, cuyo proceso de integración es el países comunitarios; asimismo, son normas cuyo destinatario exclusivo no
más avanzado a nivel mundial, modificó el derecho tradicional. en fun­ son los estados, sino que son directamente eficaces también frente a los ciu­
ción de los adelantos de unificación de esos países. dadanos que pueden alegadas frente a la actuación (o inactividad) de los
Ese proceso de unificación que lleva más de 50 años, fue pri mera­ poderes públicos de su propio Estado, que han quedado obligados por ellas
mente aceptado por unos cuantos Estados desarrollados para que, des­ desde el momento en que entran en vigor . "2 . .

pués de tres ampliaciones de la integración europea, sean ahora 25 lOS Además de lo anterior, debido a las finalidades de la integración, las
países conformantes de la Unión Europea. no rmas
comunitarias quedan fuera de las Constituciones Nacionales,

44 Ide111,
p. 386. �
op. cit.,··
Factores para la integración de América Latilw, México, I 9 76, p. 45.
so
·

MARTÍNEZ DE LA SERNA, Juan Antonio. Derecho Cunstituciunal Mexicano,


. '2 LúrEz BASAGUREN, Albet·to. "¿Réquiem por la Constitución' El ordenamiento cons­
ltt
p. 45. ucional en la integración comunitaria" Civitas Europa, España, marzo de !999, p. 12.
176 J'REMACÍA CONSTITUCIONAL - A. Soto !'lores
�1 177

puesto que el régimen jurídico y los objetivos son meta constitucional es.
n1anos sobre el derecho interno. Es el caso de Colombia, cuyo artículo 93
A pesar de eso, el derecho comunitario se introduce en los Estados Nao. Lllnstitucional lo señala expresamente.
cionales por medio de sus constituciones. Así también, muchas naciones latinoamericanas han establecido en
En ese proceso integrador, no se exige la subordinación total y ab. �11s respectivas constituciones, la posibilidad de crear una Comunidad
soluta de las Constituciones Nacionales para beneficiar la Unión; es ·
Latinoamericana de Naciones, siguiendo el ejemplo europeo, lo cual,
más, son necesarias esas constituciones para acercar ese proceso a cada pro\ oca redefiniciones tanto jurídicas, como políticas, sociales, cultura­
ciudadano europeo, pues el camino se lleva paulatinamente y por medio ' por supuesto, económicas.
les
de las cartas fundamentales de los estados: .Por todo lo anterior, convocamos a la comunidad jurídica del país a
... debe permitir la progresiva adaptación de los textos constitucionales al analizar las nuevas tendencias, los procesos novedosos y las corrientes
estadio de integración, evitando la concurrencia de la situación paradójica innoYadoras del Derecho, las cuales han ofrecido paradigmas acordes
de la existencia de (cada vez más numerosas) normas constitucionales váli. al proceso de Globalización de la sociedad y de toda su actividad.
das que carecen de aplicabilidad como consecuencia de la asunción com� A nuestro entender, esas serán las tendencias del próximo siglo,
tcncial por parte comunitaria, vaciamiento constitucional que pone en jue­ a\ anzando, según el tiempo, en la integración cada vez más amplia y
go la propia legitimidad constitucional como norma de integración política profunda entre los países del mundo.
suprema... es necesario un proceder de doble vía en la integración europea;
en la que se combinen la dimensión interna y la dimensión supraestatal del
proceso, pues éste solo puede avanzar si es vivido más intensamente por el
ciudadano desde su propia Constitución.53

La presencia de las Constituciones en el desarrollo de la integraciórl ·

es indispensable, es el único camino por el cual se puede desarrollar eS.i


tos conceptos comunitarios, por medio de las cartas fundamentales:

La (relativa) pérdida de la supremacía de la Constitución en el proceso


integración supranacional, por tanto, no puede significar la degradación
la misma a una posición subalterna, sino que la integración
debe realizarse sobre la base de la materialización de los principios
de la legitimación constitucional, dando, simultáneamente, satisfacción
las exigencias de la integración comunitaria.54

Todo ello conllevará a la creación de un nuevo Derecho, la decaden·


cia de valor de algunos conceptos y de algunas figuras como las cons� ·

tuciones nacionales, así como de muchos de sus contenidos orgánicos:

Sea como consecuencia de los efectos de la Globalización, o sea com �


soltado de las grandes comunidades que se formen, las estructuras inte
de los Estados Federales no tendrán más jerarquía que formas de distribll-'
ción administrativa en el mejor de los supuestos.55

De hecho, en tiempos modernos, es reconocido por muchos


del orbe, la supremacía de Tratados Internacionales de Derechos

53 Jdem, p. 20.
'4 Jdem, p. 22.
55 Antonio. Ensayo sobre la declinación de la Supr·emacía ConstitUC�
SPOTA, Alberto
nal y del Federalismo como consecuencia de la Globalización y de las Grandes
dades Político Econ ómicas, en La Ley, Argentina, abril 10 del 2000, p. 1.
Unidad 8

Reforma de la Constitución

ARMANDO SoTo FLOREs·

8.1. INTRODUCCIÓN

Desde los primeros tiempos, el Derecho ha estado íntimamente vin­


culado con el hombre; en efecto, desde que el homo-sapiens se convirtió
en sedentario y entró en contacto con otros hombres, el derecho se en­
contraba ya relacionado con el ser humano.
A medida que fue avanzando el conocimiento humano, en esa mis­
ma dimensión progresó el Derecho. De esta manera, tenemos en la ac­
tualidad noticias de normas jurídicas precarias, pero normas al fin, has­
ta encontrar un elaborado Derecho Romano. De lo anterior, se pueden
advcrtir varias características principales del Derecho, su evolución, su
adaptación al momento histórico, así como su amoldamiento a las con­
diciones sociales de un contexto determinado.
Estas notas distintivas, son las que hacen del Derecho un instru­
mento útil, valioso, que nos permite catalogarlo de único, al poder re­
Producir el entorno social en el contexto jurídico. Esta posibilidad se
denomina de
retroalimentación entre lo social y lo jurídico, en el cual
se a
dapt a el contenido de las normas de derecho a la realidad imperan­
te; sobre
el particular, García Máynez considera este contexto bajo la
.
deno mmae10 . - n de fuentes rea 1 es como:

Los factores y elementos que determinan el contenido de tales normas.1

Maestro de Derecho Constitucional v Teoría Política de la Facultad de Derecho de


1 .

a U:-;AM.
1 LARliA MÁYNEZ, Eduardo, Introducciótz la ¡,;sllulio del Derecho, Porrúa, México,
1
99s_ p. 51.

179
180 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN I·ORMA DE LA CONSTITUCIÓN A. Soto FlorL'' 181
1,1
-

Por su parte, Villoro Toranzo estima que: 111;1\'or excelsitud del ser humano como la justicia, el bien común, la se­
Las fuentes materiales (que algunos auto1-cs prefieren llamar "fuentes rea­ ,,11ridad jurídica y la paz.4
,...
les") se pueden reducir a dos: Una que es conocida por medio de la razón y Todo ello, nos conduce a aquilatar la utilidad de las disposiciones

que llamaremos "ideales de Justicia", y otra que en alguna forma está vin­ jurídicas, y a concluir que sin ellas, la vida del hombre en sociedad se-
11;¡ caótica, si es que fuese posible. Ahora bien, además de lograr tales
culada a la experiencia y que llamaremos "circunstancias históricas".
El contenido del Derecho es el resultado de dos coordenadas: la de los propósitos, el derecho requiere, para seguir siendo un instrumento de
ideales de Justicia que son el fruto de las aspiraciones sociales más eleva­ ut ilidad, de un proceso de constante renovación, que lo haga responder
das del espíritu humano, v la de las circunstancias históricas, que son el a las necesidades del entorno social y para ello, resulta indispensable
conjunto de particularidades a que se halla sometido el hombre por su ljllL' las disposiciones de derecho se reformen, modifiquen, en sí que se
condición de ser corpóreo, situado en un tiempo y en un espacio deter­ L·�tablezca un proceso jurídico que le dé al derecho las características
minados.2 Lk estabilidad y cambio. Este proceso, por regla general, no se da de
manera simple, se requiere de un laborioso camino, previsto en las pro­
Como puede apreciarse, el contenido de las normas de derecho, so­
pi;�s normas jurídicas, que constituye sin duda el elíxir de la vida del
bre todo las de orden constitucional, se encuentra determinado por las
dl'IL'ChO.
necesidades de la realidad social reflejada en el contexto jurídico. Sin
Ahora bien, uno de los tópicos más debatidos en la Teoría Constitu­
embargo, esta adaptación no sería posible sin el dinamismo jurídico,
c io n a l y que continúa siendo una fuente inmanente de singular estudio
que por un lado permita la conjunción de las normas de derecho al en- '
es. sin lugar a duda el relativo a la Reformabilidad Constitucional.
torno social, y por otro, sugiere la forma de convertir esa realidad so­ La temática sobre este principio es amplísima. No es mi intención
cial en jurídica, a través, de la creación normativa, por medio del órga­ en L'sta obra jurídica realizar un estudio exhaustivo ni totalizador acer­
no facultado para ello. ca de tan interesante problemática; el objetivo toral de la misma se cen­
Así, Hans Kelsen destacado exponente de la Escuela Austriaca esta­ tra en ofrecer una panorámica de la Reformabilidad Constitucional,
blece lo siguiente: destacando sus aristas más trascendentales.
En primer término, quisiera dejar asentado que la Reformabilidad
...la norma en cuestión es la básica que sirve de fundamento a un sistema
Constitucional representa un principio básico de esta materia, es decir,
de naturaleza dinámica. Sus distintas normas no pueden ser obtenidas me­
diante una operación intelectual, partiendo de la forma básica. Esta última es analizada y estudiada por la totalidad de los constitucionalistas y se
simplemente establece una determinada autoridad que puede, a su vez, acepta como un pilar básico del Derecho Constitucional, un valladar in­
conferir la facultad de creación normativa a otras autoridades. Las normas franqueable sin el cual no podría tener existencia, ya que, a través del
de un sistema dinámico tienen que ser creadas mediante actos de voluntad rderido principio, es posible amoldar de manera eficaz los preceptos
por aquellos individuos autorizados al efecto por una norma de grado más constitucionales al entorno social que así lo exige. De poco serviría un
alto, semejante autorización implica una delegación. La facultad de crear derecho fundamental, si a través de sus normas no pudieran operarse
normas es delegada por una autoridad en otra; aquella es la más alta, ésta los cambios que la sociedad requiere, y de ser así, su contenido se vería
es inferior. La norma básica de un sistema dinámico es la regla fundamen­
rebasado por las necesidades ingentes de la realidad social, nulificándo­
tal de acuerdo con la cual han de ser creadas las demás normas del siste­ se de esta manera su utilidad pragmática.
ma. Una norma forma parte de un sistema dinámico si ha sido creada en la
Debo apuntar, como lo señalamos en párrafos anteriores, que el di­
forma establecida en último término por la norma básica.1 namismo es una nota esencial del derecho, circunstancia que también
Como puede apreciarse, el dinamismo jurídico entendido en las esaplicable a una de sus partes medulares: El Derecho Constitucional,
connotaciones anteriores, permite que las normas de derecho lleven im· que vivifica a todos los demás ordenamientos y le sirve de base y funda­

plícito un sentido de realización teleológica que conjuga los valores de mento. Por otro lado debe destacarse igual � ente que el Prin � ipio de
Relormabilidad Constitucional es universalmente aceptado, que se en-

2 V! LLORo ToRANZO, Miguel, ln!mducciáll al Es!udio del Derecho, 3" ed., Porrúa Méxi·
co, 1978, p. 157. Ldu1·, Radbruch, Carlvle, Sobre el pat·ticular, consultar la obra Los fines del Dere­
1 KELSEN, Hans, Teoría General del Derecho y del Estado, UNAM, 1988, p. 132. cho. De los UNAM, 1975
.
¡<l 1 t>
KMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores 183
182 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓ
!if

Respecto del órgano establecido por el referido artículo, el maestro Felipe


cuentra inmerso en la inmensa mayoría de las constituciones de todo el
Tena Ramírez nos comenta:
orbe. Esta circunstancia obedece a la misma necesidad de instrumentar
La separación en el tiempo del Poder Constituyente, autor de la Consti­
normativamente el más alto nivel jurídico y los más caros ideales socia.
tución y de los Poderes constituidos, obra y emanación de aquel, no presen­
les que deben estar contemplados en la Carta Magna.
ta dificultad; en el momento en que la vida del primero se extingue, por ha­
ber cumplido su misión, comienza la de los segundos. La diferenciación
8.2. PODER REVISOR DE LA CONSTITUCIÓN teórica tampoco es difícil de entender: el Poder Constituyente únicamente
otorga facultades, pero nunca las ejercita, al contrario de los Poderes cons­
Reformar nuestra Constitución implica: cambio, modernidad, ac­ tituidos, que ejercitan las facultades recibidas del constituyente, sin otor­
tualización, no podemos obligar a las futuras generaciones a sujetarse a l;{trselas nunca a sí mismos.
,
esquemas que tal vez en otros tiempos correspondieron a la realidad ,
Pero hemos llegado en nuestro estudio a un punto en que ya no resalta
pero que ahora ya no cumplen con esos objetivos. Una reforma es posi­ con la misma nitidez la separación en el tiempo y en la teoría del Poder

tiva cuando es fruto de un análisis reflexivo, serio y profundo, cuando Constituyente frente a los Poderes constituidos. En efecto, el artículo 135

ha sido consensada entre los actores políticos y sociales y cuando es in­ establece un órgano, integrado por la asociación del Congreso de la Unión
\ de las legislaturas de los Estados, capaz de alterar la Constitución, me­
dispensable para el avance de una Nación.
diante adiciones y reformas a la misma.
Todos los anteriores puntos los garantizan los sistemas adoptados
Ese órgano tiene que participar en alguna forma de la función sobera­
para modificar la Constitución y en lo único que parece haber unanimi­
na, desde el momento en que puede afectar la obra que es expresión de la
dad es que no puede ser mediante un proceso ordinario o flexible, a la
'-Oberanía.
Constitución no se le puede dar el trato de una ley ordinaria. Si hace­ Su función es pues, función constituyente. Y como por otra parte, se tra­
mos un análisis de los sistemas de reformas a la Constitución vamos a ta de un órgano que sobrevive al autor de la Constitución, cuya vida se ex­
encontrar una gran diversidad: por una sola cámara, por dos, en legis­ tinguió con su tarea, consideramos que merece por todo ello el nombre de
Poder Constituyente Permanente.s
laturas diferentes, con las legislaturas de los estados, tratándose de una
federación y así indefinidamente; lo cierto es que en todas o en casi to­ Sobre el órgano citado abunda el maestro Tena Ramírez, en rela-
das las Constituciones del mundo encontramos un Poder Revisor de la ción a que:
Constitución.
La presencia del Constituyente Permanente a la par de los Poderes consti­
En la Historia del Derecho Constitucional encontramos invariable­
tuidos, requiere ser explicada y justificada dentro de un régimen que, como
mente a una institución del derecho fundamental que los doctrinarios la
el nuestro, descansa en la separación de las dos clases de Poderes, lo que
han denominado como: constituyente permanente, constituyente deriva­ da a la Constitución su carácter de rígida.
do, constituyente revisor, constituyente reformador, constituyente deri­ Ciel'tamente no hay en el caso que estudiamos, confusión de Poderes en
vativo, en fin, que su denominación nos indica su propósito, que es el un solo órgano. El Congreso Federal es Poder constituido; cada una de las

de llevar a cabo cambios, adiciones, en sí, reformas constitucionales. legislaturas de los Estados también lo es. Pero eso acontece cuando actúan

Esta institución constitucional la encontramos plasmada en el ar­ por separado, en ejercicio de sus funciones nm·males; una vez que se aso­

tículo 135 de nuestra Constitución Política de los Estados Unidos Mexi­ cian, en los términos del al'lículo 135, componen un órgano nuevo, que ya
no tiene actividades de Poder constituido (es decir, de gobernante), sino
canos que a la letra indica:
únicamente de Poder constituvente...
.
La presente Constitución puede ser adicionada o reformada. P �ra que lcl Adicionar la Constitución o reformarla por cualquiera de los medios que
adiciOnes o reformas lleguen a ser parte de la m1sma, se reqwere qu � . ·
han quedado indicados, en eso estriba la competencia del Constituyente
1 drvt-
Congreso de la Unión, por el voto de las dos terceras partes de os JO Permanente. Quiere decir, en consecuencia, que dicho Poder no tiene facul­
· '·

aproba ¡
duos presentes acuerde las reformas o adiciones v que éstas sean tad para derogar totalmente la Constitución en vigor, sustituyéndola por
d la
' �

das por la mayona de las legtslaturas de los estados. El Congreso e


· , .

Unión o la Comisión Permanente, en su caso, harán el cómputo de los


' TU<A RAMiREZ, Felipe. Derecho Cmlstitucimwl Mexica11o. 1 Y". ed. Porrúa. México.
de las legislaturas y la declat·ación de haber sido apmbadas las adiciones
1983, pp. 45 y 46.
reformas.
184 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN KEHlRMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores 185

otra, pues esa facultad no puede incluirse en las únicas que tiene el Consti­ Art. 376.-Para hacer cualquiera alteración, adición o reforma en la
tuyente Permanente, como son la de adicionar y la de reformar, las cuales Constitución será necesario que la diputación que haya de decretada defi­
se ejercitan siempre sobre una ley que existe y sigue existiendo.6 nitivamente, venga autorizada con poderes especiales para este objeto.

El Poder Revisor de la Constitución como lo comentamos en renglo­ Art. 377.-Cualquiera proposición de reforma en algún artículo de la
Constitución deberá hacerse por escrito, y ser apoyada y firmada a lo me­
nes anteriores, en el caso de México, tiene una conformación específica
nos por veinte diputados.
en donde participan el Congreso de la Unión y los Congresos de las
Entidades Federativas, es importante señalar, que la excepción reside Art. 378.-La proposición de reforma se leerá por tres veces, con el in­

en que la Asamblea Legislativa del Distrito Federal no participa en la tervalo de seis días de una a otra lectura; y después de la tercera se delibe­
rará si ha lugar a admitirla a discusión.
iniciativa ni en la revisión de las reformas constitucionales aprobadas
por el Congreso de la Unión, esta es una de las asignaturas pendientes Art. 379.-Admitida a discusión, se procederá en ella bajo las mismas
que tiene el Constituyente Revisor en nuestro país, pues nos parece ab­ formalidades y trámites que se prescriben para la formación de las leyes,

surdo que los representantes de la entidad federativa política y econó­ después de los cuales se propondrá votación si ha lugar a tratarse de nuevo
en la siguiente diputación general; y para que así quede declarado, deberán
mica más importante del país no tengan el derecho de participar en el
convenir las dos terceras partes de votos.
proceso reformatorio de nuestra Ley Fundamental.
Art. 380.-La diputación general siguiente, previas las mismas formali­
dades en todas sus partes, podrá declarar en cualquiera de los dos años de

8.2 .1 EL PODER REVISOR sus sesiones conviniendo en ello las dos terceras partes de votos, que ha lu­
gar al otorgamiento de poderes especiales para hacer la reforma.
A TRAVÉS DE NUESTRA HISTORIA CONSTITUCIONAL
Art. 381.-Hecha esta declaración, se publicará y comunicará a todas las
8.2.1.1. Constitución Política de la Monarquía Española provincias, y según el tiempo en que se hubiere hecho, determinaran las Cor­
del 19 de marzo de 1812 tes si ha de ser la diputación próximamente inmediata o la siguiente a esta,
la que ha de traer los poderes especiales.
La Constitución Gaditana de 1812, representa un documento de in­
negable trascendencia histórica con repercusiones mundiales, ya que Ar·t. 382.-Estos serán otorgados por las juntas electorales de provincia,

fue una de las primeras Cartas Magnas que limitó el Poder del Rey, es­ aii.adiendo a los poderes ordinarios la cláusula siguiente:
"Asimismo les otorgan poder especial para hacer en la Constitución la
tableciendo lo que en doctrina se denomina Monarquía Censtitucional,
reforma de que trata el decreto de las Cortes, cuyo tenor es el siguiente:
es decir, la forma de gobierno en que el soberano tiene que adecuar su
(aquí el decreto literal). Todo con arreglo a lo prevenido por la misma
conducta a las normas supremas sin poder ir más allá de lo que estaS Constitución. Y se obligan a reconocer y tener por constitucional lo que en
disponen. su virtud establecieren.
Respecto de la Reformabilidad, la Constitución de Cádiz preceptuaba:
Art. 383.-La reforma propuesta se discutirá de nuevo; y si fuere aproba­
da por las dos terceras partes de diputados, pasará a ser ley constitucional,
v como tal se publicará en las Cortes.
TÍTULO X
De la observancia de la Constitución Art. 384.-Una diputación presentará el decreto de reforma al Rey para
v modo de proceder para hacer variaciones en ella que le haga publicar y circular a todas las autoridades y pueblos de la Mo­
narquía.7

CAPÍTULO ÚNICO
La manera en que se redactó el artículo 375, se puede interpretar
Art. 375.-Hasta pasados ocho años después de hallarse puesta en en dos sentidos: Uno cuando establece que: "Hasta pasados ocho años ...
tica la Constitución en todas sus partes, no se podrá proponer
�Jt,r,.dón,; no se p
odrá proponer alteración ni reforma en ninguno de sus artícu-
adición ni reforma en ninguno de sus artículos.

lJ . . 7 Las Constituciones de México, Comité de Asuntos Editoriales del H. Congreso de la


6 Jdem. pp. 46 y 47. nton. México 1989. pp. 433-434.
186 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
Ki·:F ORMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores 187

los". Esto nos hace pensar que para reformar la Constitución en trato, CAPÍTULO XXI
debían pasar esos ocho años, pues de lo contrario no era posible refor­ De la obsen;ancia de este decreto
ma alguna; y otro, que se desprende cuando eliminamos la palabra
Art. 237.-Entretanto que la Representación nacional, de que trata el ca­
"Hasta" para dejar solamente "Pasados ocho años ... no se podrá propo­
pítulo antecedente, no fuere convocada, y siéndolo, no dictare y sancionare
ner alteración ni reforma en ninguno de sus artículos". Y de acuerdo a
la Constitución permanente de la Nación, se observará inviolablemente el
esto, interpretamos que solo durante los primeros años podrán presen­
tenor de este decreto, y no podrá proponerse alteración, adición ni supre­
tarse reformas a la Constitución; después de ese tiempo ya no se admiti­
sión de ninguno de los artículos, en qué consiste esencialmente la forma de
ría ninguna.
gobierno que prescribe. Cualquier ciudadano tendrá derecho para reclamar
Encontramos una similitud entre la Constitución de 1812 y la vigen­
las infracciones que notaré.9
te, específicamente en sus artículos 382 de la primera y 135 de la se­
gunda; por lo que se refiere al número de votos que se requería para El maestro Mario de la Cueva al respecto señala lo siguiente:
que las reformas propuestas llegaran a ser parte de la misma Constitu­ El ya citado artículo 237 reconoció el principio que afirma la necesidad de
ción, pues en ambos casos se establece que para que dichas reformas reformar las constituciones, pero no señaló ni el órgano ni el procedimien­
sean aprobadas, se necesita el voto de las dos terceras partes de los di­ to para que pudieran efectuarse las modificaciones. Creemos dado los tér­
putados, de los individuos presentes; y en la de 1812, esto último no se minos en que está redactado el proceso, que correspondía al Congreso ej e r­

contempla, lo que nos permite pensar que la aprobación de reformas cer la función reformadora, siguiendo el procedimiento previsto para la
legislación ordinaria.10
podrá darse por otros medios, sin que fuera necesaria su presencia en
la sesión. Es conveniente señalar que interpretando el artículo 23 7 puede pen­
El proceso de reformas que se contemplaba en la Constitución sarse que en dicha norma, el legislador deja una brecha a fin de que pu­
Cádiz, Miguel de la Madrid lo resume de la siguiente manera: diesen presentarse reformas, siempre que no versaran sobre la forma de
. . . se sigue el principio de que hay que establecer un complicado gobierno que dicha Constitución prescriba.
para las reformas constitucionales con el objeto de preservar lo más
el texto constitucional original, mínimamente, tres diputaciones 8.2.1.3. Constitución Federal
en el sistema de Cádiz de reformas constitucionales: la que conocía de de los Estados Unidos Mexicanos.
iniciativa y la turnada a la diputación convocante, y, por último la Decreto de 4 de Octubre de 1824
ción propiamente reformadora. Es interesante señalar, también, el
Consumada la Independencia en el año de 1821, el Congreso que
pío que se deduce de este sistema, de que la diputación reformadora
ser una diputación especialmente facultada.8 descon oció a Iturbide tomo decisiones para la configuración de la vida
política e independiente de México. En primer lugar, el establecimiento
8.2.1.2. Decreto constitucional del Federalismo como forma de Estado que hasta la fecha se conserva
para la libertad de la América Mexicana
Por nuestro país; igualmente, la expedición del Acta Constitutiva de
sancionado en Apatzingán a 22 de octubre de 1814 enero 31 de 1824, y finalmente, la promulgación de la Constitución Fe­

Debemos considerar que la Constitución de Apatzingán es la deral de los Estados U nidos Mexicanos de 4 de octubre de 1824.

ra Carta Magna elaborada por la fracción insurgente que luchaba Esta Carta Magna dedicó el título séptimo y último de la misma, a
re gular lo
dadamente por lograr la independencia mexicana, pero no inherente al Poder Revisor de la Constitución, impidiendo
afirmar que sea la primera ley fundamental mexicana, sim que se hicieran modificaciones a la misma antes de 1830. Con posterio­
rida
porque no existía la nación mexicana. d, las Legislaturas de los Estados y el propio Congreso podrán efec­
Con relación a la temática del poder revisor de la Constitución tua r m
odific aciones a los textos supremos. Cabe destacar que eran irre­
cha carta contemplaba lo siguiente: fo rmabl
es los artículos relativos a "Libertad e Independencia de la
..____ _

8 OE LA MADRID HURTADO, Miguel, Elementos de Derecho Constitucional, !CAP, � Las C01zstituciones de México, op. cit., p. 62.
México, 1982. p. 259. 1° CUEVA, Mario de la, Teoría de la Constitución, ¡a_ cd., Porrúa, 1982, pp. 134 y 135.
188 TEORÍA DE LA CONSTITUC i ¡ oRMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores 189
K

Nación Mexicana, su religión, forma de gobierno, libertad de imprenta Es interesante observar lo establecido por el artículo 166 de la
y división de poderes supremos de la Federación y de los Estados". constitución de 1824 cuando señala: "Las legislaturas de los Estados po­
Respecto de la Reformabilidad la Constitución Federal de 1824 drcín hacer observaciones, según les parezca conveniente, sobre deter­
disponía: nlinados artículos de esta Constitución y del Acta Constitutiva; pero el
congreso General no las tomará en consideración sino precisamente
TÍTULO VII el aii.o de 1830".
Al respecto uno de los juristas más importantes del siglo XIX, Emilio

Ra basa, comenta lo siguiente:


SECCIÓN ÚNICA

De la observancia, illlerpretación y refonna


Apenas publicada la Constitución, las legislaturas de los Estados comenza­
de la constitución y acta co1zstitutiva
ron a proponer enmiendas, sin las cuales tenían por imposible el gobierno
Art. 166.-Las legislaturas de los Estados podrán hacer observaciones, de la nación. Había afán de intervenir en lo más alto de las funciones públi­
según les parezca conveniente, sobre determinados artículos de esta consti­ cas; ningún empeño de prestigiar la Ley fundamental; los Estados, recono­
tución y de la acta constitutiva; pero el congreso general no las tomará en cida su soberanía, tendían a ser señores; tras el desprestigio de la soberanía
consideración sino precisamente el año de 1830. nacional y la banca rota de la fuerza, se buscaba la inconsistencia de la Ley
suprema, con lo que ya no había nada de qué hacer un ídolo, si el pueblo
Art. 167.-El congreso en este año se limitará a calificar las observacio­
era ignorante, o nada que respetar y en que fundar las propias garantías, si
nes que merezcan sujetarse a la deliberación del congreso siguiente, y esta
era bastante culto para atender a su propia conservación.12
declaración se comunicará al Presidente, quien la publicará y la circulará
sin poder hacer observaciones. De acuerdo a los señalamientos hechos, creemos que el Constitu­
yente al elaborar el artículo 166, motivo de este análisis, empleo la pala­
Art. 168.-El congreso siguiente, en el primer año de sus sesiones ordi­
bra observaciones en lugar de reformas, limitando a las Legislaturas de
narias, se ocupará de las observaciones sujetas a su deliberación, para ha­
cer las reformas que crea convenientes; pues nunca deberá ser uno mismo los Estados, en el sentido de que estas solo debían de guardar y de ha­
el congreso que haga la calificación prevenida en el artículo anterior, y el cer cumplir lo que se establecía en el Acta Constitutiva y en su caso, hacer
que decrete las reformas. las advertencias que consideraran pertinentes sobre las faltas o errores
que notasen en la misma.
Art. 169.-Las reformas ó adiciones que se propongan en los años si­
Del contenido del artículo 168 se desprende que las observaciones
guientes al de 30, se tomarán en consideración por el congreso en el segun·
de las Legislaturas de los Estados debían ser estudiadas por el Congre­
do año de cada bienio, y si se calificaren necesarias, según lo prevenido en
so, para que éste a su vez elaborara las reformas convenientes. A todas
el artículo anterior, se publicará esta resolución para que el congreso si·
luces, nos damos cuenta de la rigidez del procedimiento constitucional
guiente se ocupe de ellas.
para llevar a cabo reformas a la Carta Magna de 1824; se requería para
Art. 1 70.-Para reformar ó adicionar esta Constitución ó la acta consti· tal decto, que hubieran pasado seis años, contados a partir de la vigen­
tutiva, se observarán además de las reglas prescritas en los artículos ante­
cia de aquella, para que las propuestas de reforma fuesen tomadas en
riores, todos los requisitos prevenidos para la formación de las leyes, á ex·
co ns ideración.
cepción del derecho de hacer observaciones concedido al presidente en el
Para terminar con el análisis del Poder Revisor de la Constitución
ar·tículo 106.
Federal de 1824 el maestro Mario de la Cueva nos indica:
Art. 1 71.-J amás se podrán reformar los artículos de esta constitución Y
de la acta constitutiva que establecen la libertad é independencia de la na� Los caracteres señalados sugieren algunas observaciones: a) El poder refor­

ción mexicana, su religión, forma de gobierno, libertad de imprenta, Y divi� mador se integraba con las legislaturas estatales como órgano iniciador y
con el congreso federal como cuerpo decisorio e impositivo. h) El Presiden­
sión de los poderes supremos de la federación y de los Estados.
te de la República no participaba en el proceso de reformas; su interven­
Dada en México a 4 del mes de Octubre del año del Señor de 1824, ción se limitaba a publicar las resoluciones del congreso. e) La Asamblea
de la independencia. 3o. de la libertad y 2o. de la feder·ación.11

12 RABASA, Emilio, La Cmzstitución v la Dicllldura. (Estudio Sohre la Orgwzi�ació11 Po-


lítica
11 de México), 6". ed., Porrúa, México, I 982, p. 8.
'

Las Co11stitucio11es de México, op. cit., p. 92.


190 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN 1{1 FORMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores 191

Constituyente quiso que el poder reformador actuará rellexiva :v responsa­ En 1835, el gobierno se determino a acabar con el sistema federal. El Con­

blemente. d) La par·ticipación del pueblo se reducía a elegir los diputados y greso, que, delimitarse a reformar la Constitución legalmente, debía, según

senadores que debían decidir sobre la reforma, lo cual lógicamente, le per­ los preceptos de esta, iniciar las modificaciones y dejar a la legislatura si­
mitía seleccionar a los que postularan como programa la aprobación o de­ guiente la aprobación necesaria para su adopción, encontró tardío y emba­
negación de la rdorma.u razoso el procedimiento, y tuvo por más fácil declararse Constituyente para
dar una carta nueva de todo a todo. La Asamblea, que tenía su origen y sus
8.2.1.4. Las Siete Leyes Constitucionales títulos de legitimidad en la Constitución de 1824, usurpa poderes que ni le
del 29 de diciembre de 183614 han dado sus electores ni proceden de aquella ley, destruye la constitución
\' dicta la de 1836. Su base es, pues, la más original que pueda darse: un
La Séptima Ley Constitucional utiliza el término variaciones para
golpe de Estado Parlamentario.'"
señalar el tiempo y la forma en que podrán hacerse modificaciones a la
ley fundamental. De los seis artículos que comprende esta ley constitu­ Quizás lo que valga la pena recalcar en esta Constitución conserva­
cional, el 2o, 3o. y 4o. se refieren específicamente al proceso de reforma dora .v centralista de 1836 es sin duda alguna la aparición de un cuarto
constitucional. '' poder denominado supremo poder conservador cuya participación en el
En el artículo 1°, se establecía la prohibición de hacer alteraciones proceso de reformas constitucionales era fundamental ya que a dicho
a la Constitución dentro de los seis años siguientes. Como se puede ob­ poder le incumbía decidir sobre la consumación de la reforma.
servar, se seguía con la práctica utilizada en la Constitución de Cádiz
8.2.1.5. Bases de Organización Política
de 1812 y la Constitución de 1824, al establecer un término para poder
de la República Mexicana del 13 de junio de 1843
iniciar reformas.
En cuanto de las disposiciones relacionadas con las variaciones que Al respecto, estas bases establecen por cuanto al procedimiento de
después de pasado el término de seis años pudieran hacerse a la Consti­ reformas a los preceptos fundamentales, lo siguiente:
tución de 1836, cabe destacar, que el supremo poder conservador pue-
de dar o negar la sanción a las reformas constitucionales (art. 12, pá­ TÍTULO XI
rrafo X de la Segunda Ley). Es importante destacar que la facultad para
De la obseliJancia y refomza de estas bases
iniciar leyes corresponde al supremo poder ejecutivo, a los diputados y Art. 202.-En cualquier tiempo podrán hacerse alteraciones o reformas
a las juntas departamentales. (Art. 26 párrafos 1 y 111 de la Tercera Ley), a estas Bases. En las leyes que se dieren sobre esta materia, se observará
que deben escuchar el dictamen de la mayoría de las juntas departa­ todo lo prevenido respecto de las leyes comunes, sin más diferencia que

mentales. (Art. 28 de la Tercera Ley). Asimismo, el artículo 29 también para toda votación, sea la que fuere, no se han de requerir ni más ni menos
dt: dos tercios de votos en las dos Cámaras. El ejecutivo tendrá en estos ca­
de la Tercera Ley crea la Comisión de Peticiones compuesta de nueve
sos la facultad veinte del artículo 87.
diputados, para tomar en consideración las iniciativas. Si un proyecto
se insistiere después de renovada la Cámara de Diputados, con la apro­ Disposiciones relacionadas:
bación de las dos terceras partes de los miembros presentes de ambas
Art. 87.-Corresponde al Presidente de la República.
Cámaras y la mayor parte de las Juntas Departamentales, ya no necesi­
XX. Hacer dentro de treinta días, observaciones con audiencia del conse­
taban de la sanción del supremo poder conservador y se publicará sin jo a los proyectos aprobados por las cámaras, suspendiendo su publicación:
ella (art. 38 de la Tercera Ley). Por último, se establece en el artículo 17 Ese término comenzará a contarse desde el mismo día en que los reciba. Si
párrafo 11 de la Ley Cuarta, la atribución del Presidente de la República d proyecto aprobado fuere reproducido, el gobierno podrá suspenderlo con
para iniciar todas las leyes y decretos que estime conveniente, de acuer­ audiencia del consejo, hasta el inmediato período de sesiones, en que co­

do con el Consejo. n·esponda que las Cámaras puedan ocuparse del asunto, dándoles aviso de
t:sta resolución dentro de igual término. Si fuere reproducido por los mis­
Al respecto, Emilio Rabasa manifiesta:
mos dos tercios de ambas cámar·as, el gobierno lo publicará. Cuando los
tr· einta días de que habla este artículo, concluyan estando ya cerradas las
de la, Teoría de la Cullstitucióll, 4". ed., PoiTÚa, 1990, p. 136.
11 CtiE\'A, Ma1·i o
14 Las Cmzstitucimzes de México 1814-1989, H. Cong eso
r de la Unió n, México, !989,
1'
Talleres Gráficos de la Cámara de Diputados, pp. 99, 103 y 122. RABASA, Emilio, La Cmzstitucióll v la Dictadura, up. cit., p. 9.
192 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN ¡z¡FORMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores 193

sesiones del congreso, dirigirá el gobierno a la diputación permanente las 8.2.1.6. Acta Constitutiva y de Refonnas de 1847
observaciones que hiciere, o el aviso que debe dar. Pasado el referido térmi­
No obstante la expedición de dicho documento, el Federalismo re­
no, sin practicar nada de lo prevenido, se tendrá por acordada la sanción, y
lb cobraba fuerza y vigor y así, el Congreso Extraordinario Constituyente
la ley o decreto se publicará sin demora
prom ulgó el 21 de mayo de 184 7 el Acta Constitutiva y de Reformas,
Una de las características fundamentales de estas Bases es que en
que· plasmaba en sus numerales 28 y 29 la posibilidad de reformar la re­
cualquier tiempo podrán hacerse alteraciones o reformas. Aquí ya no se
ferida Acta, mediante dos tercios de la votación de las Cámaras o de los
establece un término para que pudieran proceder las reformas. Es más,
Congresos sucesivos, prohibiendo expresamente la reforma sobre diver­
señala que se seguirá el procedimiento prevenido para cualquiera otra,
so� principios torales:
sin más diferencia que la votación de dos tercios de votos en las dos Cá­
maras. Y del artículo 87 fracción XX, en su parte final se le da facultad Numeral 28.-En cualquier tiempo podrán reformarse los artículos del
acta constitutiva, de la Constitución federal y de la presente acta, siempre
al ejecutivo para que dentro de treinta días haga las observaciones per­
que las reformas se acuerden por los dos tercios de ambas cámaras ó por la
tinentes, con audiencia del Consejo pudiendo suspender su publicación
mavoría de dos congresos distintos é inmediatos. Las reformas que en lo
de los proyectos aprobados por las Cámaras.
sucesivo se propusieren, limitando en algún punto la extensión de los pode­
Respecto de las disposiciones relacionadas con esta materia se debe
res de los Estados. necesitarán, además, la aprobación de la mayoría de las
tener en consideración lo establecido por los artículos 53 al 65 que se
legislaturas. En todo proyecto de reformas se observará la adición estable­
refieren al procedimiento legislativo, pudiendo destacar lo siguiente: La
cida en el artículo anterior.
facultad de iniciar leyes corresponde al Presidente de la República, a
Numeral 29.-En ningún caso se podrán alterar los principios que esta­
los Diputados y a las Asambleas Departamentales en todas las materias
blecen la independencia de la nación, su forma de gobierno republicano re­
(art. 53). Toda iniciativa de ley se presentará en la Cámara de Diputa­
presentativo popular federal y la división tanto de los poderes generales,
dos (art. 55) de lo que se deduce, siempre será Cámara de origen; apro­ como de los Estados. 17
bados los proyectos en la Cámara de Diputados, pasarán a la de Sena­
dores para su revisión (art. 56) lo que la convierte en Cámara revisora; 8.2.1.7. La Constitución del 5 de febrero de 1857
para la discusión de una ley o decreto se necesita la presencia de la mi­
Es de singular importancia conocer el texto del proyecto que presen­
tad y uno más del total de los individuos de cada Cámara y, para su
tó la Comisión de Constitución, y que tiene características tan especiales
aprobación se requiere la mayoría absoluta de los presentes. En la se­ que motivaron un interesante debate; el texto original del artículo 125
gunda revisión se requiere los dos tercios de la Cámara iniciadora (Art. del proyecto decía:
58). Aprobado un proyecto de ley o decreto, pasará al Presidente de la
República para su publicación (art. 59), dentro un término de seis días Art. 125.-La presente Constitución puede ser adicionada o reformada.
Mas para que las adiciones o reformas lleguen a ser parte de la Constitu­
a partir de su sanción (art. 60). Los demás artículos nos dan cuenta
ción. se requiere que: Un Congreso por el voto nominal de dos terceras
también de la forma en que se llevará el proceso de elaboración de la Partes de sus miembros presentes acuerden que artículos deben reformar­
ley y la forma en que se publicará (art. 61 al 65).
se; que este acuerdo se publique en los periódicos de toda la
República
Las Bases de Organización Política de la República Mexicana, se­ tres meses antes de la elección del
congreso inmediato; que los electores
gunda Constitución de corte centralista expedida el 12 de junio de 1843, al veri ficarla, manifiesten si están conformes
en que se haga la reforma.
es sin duda alguna una de las leyes fundamentales o quizás la única en ·

c·n cuyo caso


lo harán constar en los respectivos poderes de los diputados;
donde se estableció un procedimiento ordinario para su reforma,
l� que el nuevo congreso formule las reformas,
y estas se someterán al voto
vt­
realidad es que el mismo Congreso actuaba como constituyente re del pueblo en la elección inmediata.
Si la mayoría absoluta de electores vo­
toS tar·e en favor de las reformas.
sor a diferencia de las Constituciones que hemos analizado en p un el ejecutivo las sancionara como par-te de la
anteriores. constitución.1H

1" Las Cmtstitucimtes de México. op. cit., p. 147. 17 Las Co11stituciones de México. o . cit.,
p . 154.
p
1' TFNA RAMíREZ. Felipe, Leves Fzmdame11tales de México, Porrúa, México, 2000, p. 613.
194 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
¡<!YORMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores 195

El artículo fue impugnado y devuelto a la comisión por considerar espíritu de la votación que parecía referirse a las dos terceras partes de
que era muy lento el medio que se proponía para modificar la Constitu.
]os miembros del Congreso.
ción, se decía también, que en la redacción del artículo se confundía la Sobre la Constitución de 1857 Ramón Rodríguez opina:
democracia pura con el sistema representativo, pues habiendo el pueblo
En todas las que en México han regido antes de la de 57, se consignaban
elegido a sus representantes, no habría necesidad de recurrir a él p ara
varios preceptos inmutables, y en algunas se fijaban períodos durante los
que decidiera sobre la reforma o no de alguna parte de la Constitución. cuales no podían ser reformadas. Todos sabemos la triste suerte que co­
Posteriormente, la Comisión presentó un nuevo proyecto que a la letra rrían y los resultados que produjeron tales constituciones.
señalaba lo siguiente: Los autores de la de 1857, aleccionados por la experiencia e ilustrados
por la filosofía, prescindieron de los errores en que habían incurrido nues­
La presente constitución puede ser adicionada o reformada. Para que las
tros antepasados, y declararon, que la Constitución podía ser reformada o
adiciones o reformas lleguen a ser parte de la Constitución, se requiere que
adicionada sin más requisitos, formalidades ni restricciones, que los que
un Congreso, por el voto nominal de las dos terceras partes de sus miem­
fuesen bastantes para comprobar que las adiciones, reformas o enmiendas
bros presentes, acuerde las reformas o adiciones y que estas sean aproba­ propuestas, son adoptadas por la mayoría del pueblo y de los Estados.
das por la mayoría absoluta de los electores que han de nombrar al Congre­ En virtud de tan sabio y justo precepto, nadie puede, sin incurrir en la
so inmediato, quien hará el escrutinio y la declaración.19 indignación y en el desprecio público, promover motines ni desórdenes con
d pretexto de mejorar nuestras instituciones políticas.22
El maestro Mario de la Cueva señala al respecto lo siguiente:
Durante el Constituyente de 1856-1857, el jurista José María Igle­
La diferencia con el artículo original consistía en la supresión del requisito
de la publicación, así como la intervención de un segundo congreso, pero sias elaboró algunas reflexiones denominadas Cuestiones Constituciona­

se conservaba el sometimiento de lo resuelto a la decisión del pueblo. Por les, obra que fue compilada por el Dr. Javier Moctezuma Barragán y
lo tanto, en los dos preceptos, el congreso federal era un simple cuerpo pro­ publicada para la UNAM en 1996, en dicha obra se señala lo siguiente:
yectista, quedando reservada al pueblo la categoría de poder decisorio e
Dos son, pues, los caracteres distintivos de una buena constitución: el pri­
impositivo. 20
mero, la estabilidad, el segundo, la reforma. A primera vista parecen con­
tradictorias, porque lo sujeto a modificaciones no permanece en una situa­
Posteriormente resultó un nuevo proyecto que fue aprobado por 67
ción inalterable, y puede cambiar enteramente el aspecto. Son, sin
votos contra 14 cuyo texto se estableció en el artículo 127 quedando
embargo, conciliables ambos extremos, y en la conciliación consiste cabal­
la forma siguiente:
mente la habilidad de los legisladores. La estabilidad conviene al conjunto
La presente Constitución puede ser adicionada o reformada. Para que de la obra, de manera que debe adoptase como regla fija la de no variar
adiciones o reformas lleguen a ser parte de la Constitución, se requiere que¡ nunca de un golpe la constitución del país. La reforma por el contrario
el Congreso de la Unión, o el voto de las dos terceras partes de sus indivi··· debe ser parcial, lenta, meditada. Así se logrará que la Constitución sea
duos presentes, acuerden las reformas o adiciones, y que estas sean aproba­ siempre acomodada a las exigencias públicas sin que jamás llegue a dejar
de existir.23
das por la mayoría de las Legislaturas de los Estados. El Congreso de
Unión hará el cómputo de los votos de las legislaturas y la declaración de
8.2.1.8. La Constitución del 5 de febrero de 1917
haber sido aprobadas las adiciones o reformas.21
Originalmente Venustiano Carranza presentó ante el Poder Consti­
Posteriormente la comisión de estilo cambio el vocablo presentes
tuyente su
proyecto de ley fundamental y específicamente Carranza ha­
después de la palabra individuos; el maestro Mario de la Cueva
blaba de reformas a la
en su libro Teoría de la Constitución que tal cambio quizás modificó Constitución de 1857, el proceso para reformar
la Con
stituci ón correspondió originalmente al artículo 131 que a la le­
tra el proyecto señalaba:
19 Historia del Congreso Extraordinario Co11stituvetlle 1856-/857, Imprenta de --------
Cumplido, Tomo 11, p. 590.
))
2° CUEVA, Mario de la, op. cit., p. 138. -- RODRÍGUEZ, Ramón, Derecho Co11stilllcional, UNAM, México, 1978, p. 706.
21
CUEVA, Mario de la, El Constitucionalismo Mexicano, Publicaciones de la Facult� 23 Cuestiones Co11stitucionales, op. cit., pp. 152 y 153.
de Derecho, UNAM, 1957, p. 1323.
197
196 TEORÍA DE LA ,,�.,0�·�· ¡ül oKMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores

La presente Constitución puede ser adicionada o reformada. Para que Unión hará el cómputo de los votos de las legislaturas y la declaración de
adiciones o reformas lleguen a ser parte de la Constitución, se requiere haber sido aprobadas las adiciones o reformas.
el Congreso de la Unión por el voto de las dos terceras partes de sus Está a discusión. iNo hay quien haga uso de la palabra? Se reserva para
duos presentes, acuerde las reformas o adiciones, o que estas sean sll \'Otación.2b
das por la mayoría de las legislaturas de los estados. El Congreso de
Con posterioridad el Diario de Debates menciona el procedimiento
Unión hará el cómputo de los votos de las legislatur,as y las dec
de \ otación señalándose textualmente lo siguiente:
de haber sido apmbadas las adiciones o rcformas.24
(Se procede a la votación.)
En apariencia los dos artículos, el 131 del proyecto y el 135 aproba
El C. Secretario: Los artículos anteriores fueron aprobados por unanimi­
do por el constituyente son iguales. Sin embargo, presumimos que la
dad de 154 votos, con excepción del 123 que fue aprobado por 148 de la
comisión de corrección y estilo adecuó en definitiva el texto del artíc afirmativa contra 6 de la negativa que corresponde a los ciudadanos Céspe­
u.
lo, ya que con el número 135 quitando la letra (o) por la (y) en la si­ des, Fajardo, Ibarra, Leija, Palma y Rodiles Saúl, y de 128, que se aprobó
guiente frase " ...o que estas sean aprobadas ... "por " ...y que estas sean por 153 votos de la afirmativa contra el del ciudadano Zavala Pedm R.
aprobadas..." - El C. Presidente a las 10:45 P.M. Se levanta la sesión pública para
Es importante mencionar que en la 54a. Sesión Ordinaria cele umstituirse el Congreso en sesión secreta.27
en el Teatro Iturbide la tarde del domingo 21 de enero de 1917,
El artículo 135 Constitucional solamente ha sufrido una adición al
diendo el diputado Luis Miguel Rojas de la segunda comisión, presentó1
párrafo último del citado precepto que fue promulgado por el entonces
dictamen entre otros, sobre el Título Séptimo, de las Reformas al artf,.,_
Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos Gustavo
lo 133 de la Constitución, dicho dictamen razonaba lo siguiente: Díaz Ordaz y publicada en el Diario Oficial de la Federación el 21 de

La Comisión ha recogido el artículo y se ha permitido incluirlo en el octubre de 1966, fue con el fin de incluir a la Comisión Permanente
ro 132. como órgano facultado para intervenir en el procedimiento reformato­
Los dos siguientes, que forman los Títulos Séptimo y Octavo del rio de la Constitución, con el objeto de declarar el cómputo de los votos
to, no necesitan fundarse, pem son iguales al Código de 1857 y han de l as Legislaturas y de que han sido aprobadas las adiciones o reformas.
en nuestra Constitución. Por todo lo expuesto, la Comisión se permite
Del contenido del artículo 135 podemos señalar:
poner a esta Honorable Asamblea los artículos siguientes ....25
l. El poder revisor de la Constitución está integrado por el Congre­

La redacción del artículo 133 es idéntica al proyecto presentado so de la Unión y por las Legislaturas Locales.
Don Venustiano Carranza, y que en el futuro, de forma definitiva 2. El procedimiento se inicia indistintamente en la Cámara de Dipu­

ría el numeral 135. Finalmente, por considerarlo un dato histórico tados o en la Cámara de Senadores.
suma importancia, en la 62a. Sesión Ordinaria celebrada el jueves 25 3. Quien tiene la facultad de iniciar el proceso legislativo de confor­
midad con lo que establece nuestra ley fundamental es el Presi­
enero de 1917, se leyó en definitiva la norma constitucional en
dente de la República, los Diputados y Senadores y las Legislatu­
señalándose lo siguiente:
ras de los Estados.
El título séptimo, de las reformas a la constitución, artículo 133, dice:
4. Se requiere una mayoría de las dos terceras partes de los indivi­
La presente Constitución puede ser adicionada o reformada. Para
duos presentes, que por supuesto exista quórum de asistencia y
las adiciones o reformas lleguen a ser parte de la Constitución, se
posteriormente, los Congresos Locales den su voto afirmativo por
que el Congreso de la Unión, por el voto de las dos terceras partes de los
mayoría y finalmente, el Congreso Federal o la Comisión Perma­
dividuos presentes, acuerde las reformas o adiciones, o que estas sean
badas por la mayoría de las legislaturas de los Estados. El Congreso de
nente realicen el cómputo de los votos de las Legislaturas y la de­
claración de haber sido aprobadas las adiciones o reformas.

24 Los Dert!clws dt!l Put!hlo .\lt!xicww. Aféxico a tral'és dt! sus Cmtsliluciones, 2"
VIII. PorTúa. México, 1978, p. 981. Diario de los Dehales del Congreso Consliluveme
. de 19/6-/917, op. cil., p. 701.
27
2' Dia rio dt! los Dt!halt!s dt!l Congreso Consliluveltle de /916-/917, Edición Ibídem.

Cámara de Diputados, México, 1989, p. 546.


198 TEORÍA DE LA CONSTITUCiót( 199
¡<! ¡ ORMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores

Es importante recalcar en el presente caso que el titular del P oder procedimiento especial con condiciones más difíciles. Mediante las condi­
Ejecutivo no puede vetar las reformas constitucionales en virtud de que ciones de reforma dificultadas se protege la duración y estabilidad de las le­

el Poder Constituyente Revisor esta sobre los Poderes Constituidos. \l'S constitucionales y se aumenta la fuerza legai.28

El maestro Miguel de la Madrid Hurtado señala que en Carl Schmitt


8.3. ALCANCE DE LA REVISIÓN CONSTITUCIONAL
encont ramos al teórico del Derecho Constitucional más importante de

Dentro de la Teoría Constitucional existen posturas opuestas pa rcia} un g.rupo que afirma que el poder revisor de la Constitución es limitado,

y totalmente sobre los alcances que tiene el Poder Revisor de la Cons


el Lual no puede derogar a la Constitución e inclusive, no puede alterar­
ti­
la: al respecto señala lo siguiente:
tución, algunos juristas consideran que el Constituyente Permanen
te
pueda revisar, reformar o cambiar totalmente el contenido de la ley las decisiones políticas fundamentales solo tienen que ser reformadas
fundamental, existe otro sector, el cual señala que solo puede hacer re­ por el poder que las adoptó, que las emitió; en consecuencia debe ser el po­
formas o cambios parciales, y finalmente, existe una corriente doct rina­ der constituyente originario, cuyo titular es el pueblo mismo, el que esté fa­
ria que señala que en la propia Constitución se pueden establecer los cultado en forma exclusiva para modificar las decisiones políticas funda­
mecanismos jurídicos para reformar totalmente a la Constitución. !llcntales, ya sea para alterarlas, para derogadas o para adicionarlas.2Y
En fin, encontramos en la doctrina puntos de vista diversos en tomo
El maestro Miguel de la Madrid agrega que:
a las limitaciones o ausencia de estas del poder reformador de la Cons­
titución. Lo que es claro, es que el responsable de elaborar una nueva el poder revisor de la Constitución no es ilimitado, solo tiene facultades
Constitución o de reformarla, se encuentra sujeto a los diversos factores para reformar o adicionar las leyes constitucionales, o sea los preceptos
de poder, a los grupos de presión, por supuesto, a las diversas corrien­ concretos que expresan en detalle las decisiones políticas fundamentales,
tes ideológicas y, porque no señalarlo, en el mundo contemporáneo a pero este poder no está facultado para tocar la obra exclusiva de la sobera­
las presiones del capital nacional y de las empresas transnacionales. nía. El poder revisor de la Constitución no es auténticamente un poder
Limitado o ilimitado el poder reformador de las Constituciones y es­ constituyente porque no realiza facultades constituyentes: estas consisten,
pecíficamente el Constituyente Revisor establecido en el artículo 135 de precisamente en la adopción o revocación, o alteración de las decisiones
nuestra Constitución, los cuestionamientos que los juristas se hacen son políticas fundamentales.30
diversos; ¿Puede el constituyente revisor modificar la forma de gobier­
no o la forma de estado?, ¿Existe la posibilidad de que el constituyente
8.3.1.2. José María del Castillo Velasco

revisor modifique la esencia de nuestra ley fundamental? y, finalmente Entre los autores mexicanos, respecto al tema de reformas constitu­
¿A través de reformas, adiciones o modificaciones, se puede crear una cionales, tenemos a José María del Castillo Velasco, sostiene que las re­
nueva Constitución?; estos y muchos cuestionamientos más se dan den­ formas o adiciones a la Constitución deben ser adecuadas a la conve­
tro de la Teoría Constitucional, por lo que a continuación vamos a ana· nienci a pública, que no destruyan la Constitución, sino que a través de
las refo
lizar y a reflexionar en torno a las diversas corrientes doctrinarias sobre rmas se vea el espíritu primitivo de la Constitución. El poder re­
formador,
los alcances de la revisión constitucional. no puede mediante reformas o adiciones, destruir la Consti­
t ución.ll

8.3.1 TESIS QUE LIMITAN Al pensamiento em �tido or José Ma ía del Cas�illo Velasco se ne
_ � : _ �
E .�dio _
Rabasa y Recasens S1ches, es dec1r, son part1danos
LA REFORMABILIDAD CONSTITUCIONAL de la hmtta­
Cion del
poder revisor contemplado en la Constitución.
8.3.1.1. Carl Schmitt ....._

2K
El ya clásico Carl Schmitt comenta: S li!M!IT Carl, Teoría de la C01rstitucián, Editorial Nacional, México, 1981, p. 18.
2Y
. DE LA MADRID HURTADO, Miguel, E/enii!II/Os de Derecho Collstituciolla/, Instituto de
Reforma dificultada, como característica formal de la Ley C C
ap�; Ilación Política del PRI, México, 1982, p. 264.
La nota formal de la Constitución o indistintamente de la Ley C 31 f de111, p. 266.
na!, se hallará en que los cambios constitucionales están sometidos a fde111, p. 267.
200 TEORÍA DE LA ¡d HIRMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores 201

8.3.1.2. Maurice Hauriou En un segundo párrafo, Marbury insiste en la idea de que el pueblo nor­
teamericano no quiso ni pudo querer un poder reformador que pudiera
El jurista Mario de la Cueva nos señala: destruir a alguno de los estados:

"Hauriou es uno de los últimos defensores del constitucionalismo indiv¡. No es concebible que el pueblo, al conferir a la legislatura de las tres

dualista, al que se propuso convertir en un orden intangible. De este proPó­ cuartas partes de los estados el poder de hacer enmiendas de la constitu­

sito 11uye su idea central, según la cual, por encima de la Constitución, aun ción, hubiere entendido que autorizaba la adopción de cualquier medida

de la escrita y rígida, se eleva una especie de súper legalidad constitucion al 4ue a pretexto de enmendar, produjera el efecto de destruir, en todo o en

que no es precisamente lo que está escrito en la Constitución, "sino los p nn: pal'te, a alguno de los miembros de la Unión perpetua.33

cipios fundamentales del régimen, es decir, todos los principios del orden .
8.3.1.4. Jorge Carpizo
individualista que están en la base del Estado y los principios de las liberta.
des individuales contenidas en las declaraciones de los derechos de la épo. El constitucionalista Jorge Carpizo, en su obra, nos señala con cla­
ca de la revolución". ridad y precisión respecto de la naturaleza y alcance del poder revisor
La tesis del maestro francés reposa sobre la idea de los derechos indiVi-
de la Constitución, lo siguiente:
·

duales del hombre y del ciudadano y de su reconocimiento por el pueblo


que los declara e impone al Estado. Pero si esos principios incluido el de ... que las decisiones fundamentales no pueden ser reformadas por el poder

la separación de los poderes, que apareció en los años de la revolución revisor, sino únicamente por la voluntad directa del pueblo, y que sí en
México se suprimiera o cambiara la idea de una decisión, el orden jurídico
como la garantía indispensable y única de los derechos y sin la cual no
mexicano actual se transformaría en uno nuevo, o sea, que la Constitución
puede haber Constitución, según dice el párrafo dieciséis de la Declara.
de 1917 desaparecería y surgiría un nuevo Código Supremo.34
ción de 1789, son intocables aun para el pueblo, ¿no estamos frente a
taciones del Poder Constituyente, las que, como tales se imponen tambiéll, Con el espíritu crítico, comenta Carpizo:
al poder revisor?"32
La Constitución de Querétaro en nuestros días ha sufrido una incontenible
8.3.1.3. William L. Marbury manía de reformas, algunas innecesarias. Pero, algunas de esas modifica­
ciones, han sido a decisiones fundamentales: a las garantías individuales, a
El maestro Mario de la Cueva nos da una referencia del pensamiemo-; las garantías sociales, al principio de la división de poderes, al sistema re­
to constitucional norteamericano por lo que respecta a la corriente pi-esentativo, etcétera.35
tacionista y nos señala lo siguiente:
Finaliza Carpizo diciendo:
Los profesores estadounidenses no son afectos a discutir los
Basados en las ideas apuntadas concluimos que las reformas llevadas a
constitucionales en un terreno preponderantemente especulativo, sino
cabo por nuestro poder revisor a las decisiones fundamentales de la Consti­
prefieren usar los datos y elementos que sirvieron de base a su Consu•­ tución de 1917, son validas y constitucionales por haber sido hechas a la
ción. Dentro de esta perspectiva, y con motivo de algunas enmiendas forma y no a la idea misma de la decisión fundamentai.36
a la Constitución por el poder reformador, el profesor William L.
escribió un artículo en el año de 1919, en el que propugna por las lliDlUI"­ 8.3.1.5. Ignacio Burgoa Orihuela
nes de la función reformatoria.
El maestro emérito Ignacio Burgoa Orihuela señala lo siguiente:
Sus ideas pretenden ser una interpretación auténtica del pensamiento
los constructores de la Constitución: Doctl'inalmente, casi todos los autores están contestes con la idea de que
Puede establecerse con toda seguridad como premisa, que en la las at¡·ibucioncs que la Ley Fundamental imputa a los poderes legislativos,
ción del poder de reformar la Constitución no se incluyo el poder de fede rales y locales, en el sentido de llevar a cabo reformas y adiciones a la
w
truirla. El propósito del "pueblo de Estados Unidos" al adoptar la con"u Constitución, de ninguna manera equivalen a la posibilidad jurídica de alte-
ción, según se expresa en su preámbulo, fue "formar una unión ------·

perfecta" de los estados, más perfecta de lo que era la "Unión perp ll


14 ldem, p. 155.
que habían fundado originalmente bajo los Artículos de Confederación.
l' CARPIZO, Jorge, La Constitución Mexicana de 1917, UNAM, México, 1969, p. 339.
)
ldem, p. 339.
16
32 CUEVA, Mario de la, Teuria de la Constitución, op. cit., p. 152. ldem, p. 343.
!{!FORMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flore' 203
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
202

el ói-gano revisor de la Constitución tiene competencia para adicionada


ales v característicos y,
rar a esta substancialmente en sus principios esenci o reformarla. Una Constitución es adicionada cuando se agrega un nuevo
de s autoritarias engen­
menos aún abrogada, pues siendo aquellos entida precepto de ella o sin agregar, alguno o alguno de los existentes sufre una
destru van, sin destruirse ellos
dradas por ella, es ilógico y absurdo que la modificación por el aumento por una o más disposiciones. La reforma de
mismos.37 una constitución puede revestir dos aspectos: la de la supresión de una o
Respecto de la posibilidad de modificación de los principios torales \arias disposiciones o la sustitución de ellas por un texto diferente.w
de una Constitución, establece Burgoa su opinión en los siguientes
Respecto del numeral 135 de la Carta Magna Mexicana, manifiesta:
términos:
el artículo 135 Constitucional establece la competencia para reformar o
... la modificabilidad de los principios esenciales que se contienen en una
adicionar la Constitución y ésta competencia no se encuentra limitada por
Constitución, o sea, de los que implican la sustancia o contextura misma
ningún otro precepto constitucional, ya que se da de modo ilimitado.40
del ser ontológico y teleológico del pueblo, y la facultad de sustituir dicho
m-denamiento, son inherentes al poder constituyente. Por ende, sólo el pue­
8.3.2.2. Felipe Tena Ramírez
blo puede modificar tales principios o darse una nueva Constitución. Ni el
congreso constituyente, cuya tarea concluye con la elaboración constitucio­ Dentro del Derecho Constitucional Mexicano encontramos a uno de
nal, ni, por mayoría de razón, los órganos constituidos, es decir, los que se los juristas más destacados del siglo XX, consideramos que su obra jurí­
hayan creado en la Constitución tienen semejantes atribuciones. Suponer lo
dica es un clásico en el que hemos estudiado la mayor parte de los abo­
contrario equivaldría a admitir aberraciones inexcusables, tales como la de
gados de este país; por esta razón y muchas más es fundamental citarlo
que el consabido poder no pertenece al pueblo, de que la asamblea consti­
en \ irtud de que el maestro Felipe Tena Ramírez elaboró una serie de re­
tuyente, una vez cumplida su misión, subsistiese, y de que los órganos exis­
tentes a virtud del ordenamiento constitucional pudiesen alterar las bases flexiones originales en torno al Poder Constituyente, a los Poderes Cons­
en que éste descansa sin destruirse ellos mismos. 38 tituidos y a lo que él llamó el Poder Constituyente Permanente.
Por supuesto queda claro que en sus definiciones Tena Ramírez se­
Con el Doctor Ignacio Burgoa concluimos la cita de varios juristas
ñala las diferencias y la naturaleza jurídica y política del Poder Consti­
mexicanos y extranjeros que consideran que el Poder Constituyente re­
tmentc y del Constituyente Permanente; bástenos recordar lo que nos
visor es un poder limitado que no puede tocar los principios fundamen­
indica:
tales de la Constitución; sin embargo, coincidimos con el Doctor Jorge
Carpizo, en el sentido de que a pesar de las limitaciones que se despren­ La separación en el tiempo del Poder Constituyente, autor de la Constitu­
den en el propio artículo 135 y por supuesto de la propia teoría consti­ ción, v de los Poderes constituidos, obre y emanación de aquel, no presenta
tucional, la realidad es que la historia constitucional de México específi­ dificultad; en el momento en que la vida del primero se extingue, por haber
camente nos demuestra que el constituyente revisor ha modifica do, cumplido su misión, comienza la de los segundos. La diferenciación teórica
adicionado y reformado algunos de sus principios fundamentales entre tampoco es difícil de entender: El Poder Constituyente únicamente otorga
los que podemos mencionar: el municipio, las relaciones entre la iglesia facultades, pero nunca las ejercita, al contrario de los Poderes constituidos,
y el estado, el régimen de propiedad, la no reelección, entre otros. que ejercitan las facultades recibidas del constituyente, sin otorgárselas
nunca a sí mismos.
8.3.2 TESIS QUE SOSTIENEN Pero hemos llegado en nuestro estudio a un punto en que ya no resalta
LA REFORMABILIDAD ILIMITADA DE LA CONSTITUCIÓN con la misma nitidez la separación en el tiempo y en la teoría del Poder
Constituyente frente a los Poderes constituidos. En efecto, el artículo 135
8.3.2.1. Ulises Schmill establece un ói-gano, integrado por la asociación del Congreso de la Unión
ifiesta Y de las legislaturas de los Estados, capaz de alterar la Constitución me­
s Schmill Ordóñez, man
El destacado Constitucionalista Ulise diante adiciones y reformas a la misma.
no revisor de la Constitución, Y
su punto de vista en torno al órga ---

s en los siguientes términos:


con precisión sus característica lY .
S CllMILL 0RDO:\/Ez, Uliscs, �:_·¡ Sistema de la ConstituciÚII Mexicana, za. ed., Textos
t.J .
01�C I.sitarios, Librci-ía Manuel PorTúa, México, 1971, p. 145.
·'7 BuRGOA ÜRIIIUELA, Ignacio, Derecho Constitucional, Por-rúa, México, !982, P· 0 lde111, p. ISO.
38 !dem, p. 372.
.,
204 TEO R Í A DE LA CONSTITUCIÓN ¡{1 I'()RMA DE LA CONSTIT!ICI<)N A. Soto Flore·, 20S

Ese órgano tiene que participar en alguna forma de la función soberana, 8.3.2.3. ReiiL; Carré de lvlalberg
desde el momento en que puede afectar la obra que es expresión de la
Carré de Malberg en su obra clásica, Teoría General del Estado, ti e ­
soberanía.
Su función es, pues, función constituyente. Y como, por otra parte, se IIL' u na postura en el sentido de que el Poder Revisor tiene la capacidad
trata de un órgano que sobrevive al autor de la Constitución, cuya vida Lk reformar parcial y totalmente la Constitución y señala expresamente
se extinguió con su tarea consideramos que merece por todo ello el nombre In siguiente:
del Poder Constituyente Permanente.41
Por ot¡·a parte, el cambio de Constitución, aunque sea radical e integral, no
La nitidez con que nuestro autor nos explica la conformación y la indica ni una renovación de la persona jurídica Estado, ni tampoco una
diferencia que existe entre el Poder Constituyente, Poderes Constituidos modificación esencial en la colectividad que en el Estado encuentra su per­
y Poder Constituyente Permanente, nos deja en claro que para reformar ;.onificación. Mediante el cambio de Constitución, no se sustituye un anti­
nuestra ley fundamental se requiere un procedimiento especial de ca­ guo Estado por una nueva individualidad estatal.4'

rácter rígido, pero lo interesante es hasta dónde puede llegar el Consti­


Malberg nos indica también lo siguiente.
tuyente Permanente en el proceso reformatorio de nuestra ley funda­
mental; por supuesto, nuestra historia constitucional del siglo XX nos Así pues, el poder constituyente no tiene porque ejercerse aquí con objeto
indica que ha ido más allá de lo que los teóricos de la rigidez absoluta de fundar de nuevo la nación v Estado, sino que simplemente se limita a
pudieran permitir, pero lo cierto es que una cosa es la teoría constitu­ darle a un Estado, cuva identidad no se modifica v cuva continuidad tam­
cional y otra la realidad de nuestro país. poco se interrumpió por ello, una nueva forma o estatutos nuevos.44
Ahora, vamos a conocer otro pensamiento del maestro Tena Ramí­
Agrega Carré de Malberg que:
rez, en donde nos deja claro su postura en torno a las limitaciones o ili­
mitaciones del Constituyente Revisor, al respecto nos señala: Esta reforma puede ser más o menos extensa; puede tenCI· por objeto, bien

... no nos queda sino admitir que el órgano constituyente del artículo 135 es te\ isar la Constitución en algunos puntos limitados, bien derogarla y

el único investido de plenitud de soberanía para reformar o adicionar en reemplazarla totalmente. Pero cualquiera que sea la importancia de este
cualquiera de sus partes la Constitución mexicana. Por vía de reforma o dé cambio constitucional, sea total o parcial, habrá de operarse según las re­
adición, nada escapa a su competencia, con tal de que subsista el régimen glas lijadas por la misma Constitución que se trata de modificar y, en efec­
constitucional, que aparece integrado por aquellos principios que la con­ to, desde el momento en que se hace atracción de la revolución y de los

ciencia histórica del país y de la época considera esenciales para que


exista golpes de estado, que son procedimientos constituyentes de orden extraju­
una constitución. El sentido gramatical de las palabras no pueden ser be· rídico, hav que reconocer que el principio de derecho que se impone en
rrera para dejar un pueblo encerrado en un dilema sin salida. No se puede un�t nación organizada es que la creación de la nueva Constitución sólo
expedir formalmente una nueva Constitución, pero si se puede darla de he-. . puede ser regida por la Constitución antigua, la cual, en espera de su dero­
cho a través de la reforma. El poder nacional de que habla Rabasa no gacit'm, permanece aún vigente; de tal modo que la Constitución nueva
de expresarse sino por medio del Constituyente del artículo 135, él es su nace en cierto modo de la antigua v la sucede encadenándose con ella sin
gano, su voz, su voluntad.42 solución de continuidad.4'

De las reflexiones del maestro Tena Ramírez pudiéramos


Asimis mo, León Duguit se une a este grupo y considera que el po­
ÍPI"lll
concluir que su postura es intermedia, en el sentido de que se reqt• der re\ isor de la Constitución puede hacer modificaciones parciales o
un órgano especial para llevar a cabo reformas o adiciones a la ley
en aún to tales así como cambiar la forma de gobierno.�(>
damental, pero también es claro que su postura es firme y radica l
sentido de que el Poder Constituyente revisor no tiene límites Y 4<
e AKKI· U!'. M·\LHFKr;, Raymond
reformar cualquier apartado de la Constitución. Teoría general del Estado, Facultad de Derecho-L:�AI\t
y For
441do de e ultura :
Economrca. Mexrco, 1998, p. 1170.
"'fdcll!, p. 1173.
41 TENA RAMiREZ, Felipe, Derecho Crmstitucimwl Mexica11o, 4 0¡>. cit., pp. S2 v 53.
"
1983. pp. 45 y 46. Cfr., DE LA MADRID HURTADO, Migue\, up. cil., p. 269.
42 Idem, p. 58.
206 TEORÍA DE LA CONSTITUCió,ltt( ¡.tEFORMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores
207

8.4. DIVERSOS SISTEMAS sario, el Congreso propondrá Enmiendas a esta Constitución o, a solicitud
DE REFORMABILIDAD CONSTITUCIONAL de las Legislaturas de dos tercios de los diversos Estados, convocará una
Convención para que se propongan las Enmiendas; en cualquiera de los ca­
En este apartado, vamos a reflexionar en torno al principio de la sos, las enmiendas serán válidas por todos conceptos como parte de esta
Rcformabilidad Constitucional en el Derecho Constitucional Compara.
Constitución, cuando sean ratificadas por las Legislaturas de las tres cuar­
do. Nuestras naciones han adoptado sistemas constitucionales para en.
tas partes de distintos Estados o por Convenciones en las tres cuartas par­
frentar los nuevos tiempos, ante esos retos, y esos cambios, nuevamente
tes de los mismos, de la conformidad como uno u otro Modo de Ratifica­
se hace necesario que exista una adecuación de la Constitución a la rea.
ción que sea propuesto por el Congreso; a condición de que ninguna
lidad y si esta cambia, lo ideal es que esta lo haga al mismo tiempo, 0
Enmienda que se pudiera hacer antes del Año mil ochocientos ocho llegue
más aún, se adelante; por lo que es necesario contar con instrumentos
a afectar en Modo alguno a la primera y cuarta Cláusulas de la Novena
ágiles y modernos que hagan posible estos cambios con prontitud y efi.
Sección del Primer Artículo, y de que ningún Estado, sin su consentimien­
cacia. Como recordamos, la primera Constitución escrita, como actual.
to, sea privado de su igualdad de Sufragio en el Senado.47
mente la conocemos, fue la norteamericana y esta respondió a necesi­
dades muy específicas de la naciente nación del norte: Contar con un
Derivado del artículo anterior, se colige que la Constitución de los
.

esquema mínimo para gobernar a un pueblo sobreponiendo a cualquiel'


Estados Unidos de América es de carácter rígido, ya que establece un
análisis teórico el concepto de libertad. Esto dio origen a una Constitu­
ción esquemática, en la que no hay grandes declaraciones sociales o cte proc edimiento especial diverso del ordinario para que sus textos pue­
derechos humanos, recordemos que estos últimos son parte de una se­ dan ser reformados.
rie de enmiendas; esto se explica por el espíritu pragmático del Las enmiendas pueden ser propuestas por el voto de dos terceras
sajón lo que da como resultado que haya pocas enmiendas. partes de cada Cámara del Congreso o por una Convención Nacional
En el caso de las Constituciones Latinoamericanas el proceso fue com-ocada por éste, a solicitud de las dos terceras partes de las legisla­
ferente, en primer lugar por el espíritu latino, lo que nos llevó hacer turas de los Estados. Para que se vuelvan parte de la Constitución, las
nuestras constituciones, no solamente un esquema de gobierno, sino
enmiendas deben ser ratificadas, es decir, aprobadas por las legislatu­
daderos proyectos de nación, en ellas se plasmaron las aspiraciones
ras de las tres cuartas partes de los Estados o por convenciones realiza­
los pueblos. En segundo lugar, las fuentes de nuestros sistemas const
das en esa misma proporción de aquellas.
cionales son de tres tipos: la norteamericana, la española y la indígena,
que dio como origen constituciones programáticas, cayéndose a veces en La Constitución no establece límite de tiempo para que los Estados
exceso de la regulación constitucional y consecuentemente que existiei1 r a ti fiquen una enmienda propuesta, sin embargo, los Tribunales han es­

y aún exista una gran cantidad de reformas a nuestras Cartas Ma� tablecido que las enmiendas deben ser ratificadas en un plazo razona­
Si hacemos un análisis de los esquemas de reformas a la Const1tll ble �- que el Congreso debe decidir lo que ha de entenderse por razona­
ción vamos a encontrar una gran diversidad por lo que a ble. Desde principios de este siglo, la mayoría de las enmiendas
vamos a citar fundamentalmente las características de Reforma
Propuestas han incluido el requisito de que la ratificación de rigor ha
tucional en los Estados Unidos de América, Cuba, Nicaragua, de obtenerse dentro de un plazo de siete años.
Italia y China.
Los forjadores de la Constitución dificultaron deliberadamente el
Proceso de adopción de las enmiendas. El Congreso ha considerado
8.4.1 EL PRINCIPIO DE REFORMABILIDAD
rnás de 7,000 enmiendas pero solo ha aprobado 33 y las ha sometido a
EN EL DERECHO CONSTITUCIONAL COMPARADO
los Estad
os. De estas últimas, únicamente han sido ratificadas 26. Sola­
8.4.1.1. Estados U11idos de América rne nte la enmienda 21 fue ratificada por convenciones estatales; todas
las demás
fueron ratificadas por las Legislaturas de los Estados.
Constitución de los Estados Unidos de América

At·tículo V 47 Adaptado con autoJ"ización de TIIE WORLL> BOOK ENCYCLOPEDIA, Copnight 1 Y86
.
Enmiendas a la Constitución. World Book, Ine. p. 40.
Toda vez que las dos tercet·as partes de ambas Cámaras lo j uzguen
208 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores 209

8.4.1.2. Cuba La iniciativa de reforma parcial corresponde al Presidente de la Repúbli­


ca o a un tercio de los representantes ante la Asamblea Nacional.
Constitución de la República de Cuba La iniciativa de reforma total corresponde a la mitad más uno de los Re­
presentantes ante la Asamblea Nacional.
CAPÍTULO XII
Ref'onna Constitucional Artículo 192.-La iniciativa de reforma parcial deberá señalar el o los
artículos que se pretenden reformar con expresión de motivos; deberá ser
Artículo 141
enviada a una comisión especial que dictaminará en un plazo no mayor de
Esta constitución sólo puede ser reformada. total o parcialmente, por la
sesenta días.
Asamblea Nacional del Poder Popular mediante acuerdo adoptado, en vota­
El proyecto de reforma recibirá a continuación el trámite previsto para
ción nominal. por una mayoría no inferior a las dos terceras partes del nú­
la formación de la ley. La iniciativa de reforma parcial deberá ser discutida
mero de sus integrantes.
en dos legislaturas.
Si la reforma es total se refiere a la integración y facultades de la Asam­
blea Nacional del Poder Popular o de su Consejo de Estado o a derechos y Artículo 193.-La iniciativa de reforma total seguirá los mismos trámites
deberes consagrados en la Constitución, requiere, además, la ratificación fijados en el artículo anterior, en lo conducente a su presentación y
por el voto favorable de la mayoría de los ciudadanos con derecho electo­
dictamen.
¡·al. en refrendo convocado al efecto por la propia Asamblea."48
Al aprobarse la iniciativa de reforma total. la Asamblea Nacional fijará

El artículo relativo de la Constitución de la República de Cuba nos un plazo para convocatoria de elecciones de Asamblea Nacional Constitu­

da la pauta para establecer que se trata de una Ley Fundamental de ca­ yente. La Asamblea Nacional conservará su mandato hasta la instalación de

rácter rígido, ya que se previene un procedimiento diverso del ordinario la nueva Asamblea Nacional Constituyente.

para modificarla. Mientras no se apruebe por la Asamblea Nacional constituyente la nueva

La Carta Cubana admite su reforma de manera total o de forma Constitución seguirá en vigencia la presente Constitución.

parcial. Tratándose de esto último, la Asamblea Nacional de Poder P� Artículo 194.-La aprobación de la reforma parcial requerirá del voto fa­
pular por mayoría calificada (dos terceras partes) de la totalidad de s� \ orable del sesenta por ciento de los Representantes.
integrantes puede efectuar la correspondiente modificación integránd� En el caso de aprobación de la iniciativa de reforma total se requerirá dos
se así al resto de la Carta Magna. :.1 tercios del total de Representantes. El Presidente de la República promulga­
En cambio, si la reforma es total. que en nuestro concepto equivale' rá la reforma parcial y en éste caso se podrá ejercer el derecho al veto.
a una auténtica abrogación, o se encauza sobre alguno de los rengloneS
141� Artículo 195.-La reforma de las leyes constitucionales se realizará de
constitucionales contemplados en el segundo párrafo del numeral
a• acuerdo al procedimiento establecido para la reforma parcial de la Consti­
se solicita además de la mencionada mayoría calificada, una ratific
ción mediante referéndum, también calificado debido desde luego , a lÍ tución, con la excepción del requisito de dos legislaturas.49

trascendencia de la medida. Esta ley fundamental se caracteriza porque fue aprobada durante el
Gobierno de los Sandinistas, siendo Presidente Daniel Ortega Saavedra,
8.4.1.3. Nicaragua la cual fue aprobada por la Asamblea General el 19 de noviembre de
1986 y el mencionado Presidente ordenó su publicación el 9 de enero
Constitución Política de la República de Nicaragua
de 1987.
CA PÍTULO III La Constitución de Nicaragua, dedica un capítulo expreso a las dis­
Reforma Constitucional Posiciones relativas a la reforma de la Carta Magna de lo que se infiere
ar la
Artículo 191.-La Asamblea Nacional está facultada para reform gran importancia que se le presta.
cialmente la presente Constitución Política y para conocer y resolv er Cabe señalar, que la Constitución en comento: puede ser reformada
de una manera total o parcial, correspondiendo en el primer caso, es
la iniciativa de reforma total de la misma.
------

48 Editorial de Ciencias Sociales, calle 14, No. 4104, Playa, Cd. de La Habana, 4" La Gaceta, Diario Oficial, Managua 9 enero 1987, Biblioteca de la Embajada de Ni­
Caragua, pp. 61
Biblioteca de la Embajada Cubana de México. p. 57. y 62.
210 TEORÍA DE LA CONSTITUCiÓN
F1 1 ORMA DE LA CONSTITLICI(Jr-.; A. Soto Flort·, 211

decir, la reforma total únicamente a la Asamblea Nacional, sin injeren. 3. Aprobada la reforma por las Cones Generales, será sometida a referén­
cia del Poder Ejecutivo. dum para su ratificación.
Para ambos casos (reforma total o parcial) se establece el misrno
Artículo 169.-No podrú iniciarse la reforma constitucional en tiempo de
procedimiento a seguir, sin embargo, se exige una mayoría calificada de
guerra o de \'igencia de alguno de los estados previstos en el anículo 116.'0
los integrantes de la Asamblea para que pueda efectuarse la reforma to­
tal, situación que la Constitución Nicaragüense hace equivalente a la España es uno de los países que cuenta con una importante tradi­
abrogación de una Constitución y a la instauración de una nueva Carta L·it.lll constitucional v desde luego, existe una marcada influencia en la
Fundamental. ki!islación de nuestro país, recordemos la valiosa Constitución Gadita­
Para que la reforma total o parcial pueda llevarse a cabo, es indis­ Jl�l expedida por las Cortes el 19 de marzo de 1812.
pensable que sea aprobada por dos Legislaturas. Como se puede apre­ En la actualidad, la reciente Constitución Española, vino a regir un
ciar, la Constitución de Nicaragua establece importantes exigencias para Cdillbio dinástico a raíz del derrocamiento del régimen franquista, dán­
reformarse. dok un sesgo de democratización sumamente importante.
Por lo que corresponde a la Reforma de la Constitución Española,
8.4.1.4. Espmza C·;,ta puede ser parcial o total; en este último caso, se requiere aproba­
citín de las dos terceras partes de los miembros de cada Cámara y se
Constitución Española rocede a la disolución del Legislativo. Los nuevos integrantes de dicho
p
Poder, deberán ratificar la decisión anterior y someter a referéndum la
TÍTULO X
consiguiente reforma. Como puede observarse, en este caso la reforma
De la Refémna Constitucional
total de la Constitución se encuentra llena de importantes requisitos que
Artículo 166.-La iniciativa de reforma constitucional se ejercerá en los deben colmarse para que proceda, estableciendo, sin duda, elementos de
términos previstos en los apartados 1 y 2 del artículo 8 7. índole popular para que la decisión sea lo más democrática posible.
En caso de reforma parcial, los proyectos deberán ser aprobados
Artículo 167.
l . Los proyectos de reforma constitucional deberán ser aprobados por por las tres quintas partes de los integrantes de cada una de las Cámaras
una mayoría de tres quintos de cada una de la Cámaras. Si no hubiera Y e11 caso de no lograrse, por falta de acuerdo entre estas, una comisión
acuerdo entre ambas, se intentará obtenedo mediante la creación de una de composición paritaria de diputados y senadores la podrá establecer.
Comisión de composición paritaria de Diputados y Senado1-es, que presen­ El punto dos del artículo 167 transcrito, previene un procedimiento
tará un texto que será votado por el Congreso y el Senado. sucedáneo para la aprobación que estimamos adecuado.
2. De no lograrse la aprobación mediante el procedimiento del apartado Igualmente, para darle visos de democracia, obra el referéndum
anterior, y siempre que el texto hubiere obtenido el voto favorable de lama­ cuando una décima parte de los miembros de cada Cámara lo solicite.
yoría absoluta del Senado, el congreso, por mayoría de dos tercios, podrá
Como puede apreciarse, los procedimientos de reforma de la Cons­
aprobar la reforma. ' ti tució n Española buscan brindar un sesgo de participación democráti­
3. Aprobada la reforma por las Cortes Generales, será sometida a
refe¡
ca, a tr;wés de la institución del referéndum, lo que resulta adecuado
quinct
réndum para su ratificación cuando así lo soliciten, dentro de los
c ual: desde el punto de vista de participación popular y la convierte en una
a su aprobación, una décima parte de los miembros de
días siguientes
C arta Fundamental, trascendente en el ámbito reformatorio.
quiera de las Cámaras.
En torno a la Constitución Española, comenta Eduardo Espín:
Artículo 168. J
par CÍIJ1
l. Cuando se propusiera la rC\'isión total de la Constitución o una La Constitución dedica el Título X (art. 166-169) a regular dos distintos pro­
Prime ra del 'I'Í· cedimientos de reforma. Ambos pmcedimientos son de carácter rígido, esto
que afecte al Título preliminar, al Capítulo segundo, Sección
tulo 1, o al Título 11, se procederá a la aprobación del p1·incipio por es, distintos :v mús complejos que el procedimiento legislativo ordinario.
de dos tercios de cada Cámara, a la disolución inmediata de las
v
Denominaremos al pnJCedimiento de ITforma constitucional contemplado

2. Las Cúmaras elegidas debe1:ún ratifica,· la decisión v proceder al


a
dio del nuevo texto constitucional, que deberá se1· aprobado por mayorí
'"
Ministerio de Asuntos Exter·ior·es, Oficina de Información Diplomática, Madrid,
1 Y7Y.
dos te1·cios de ambas Cámaras. Pp. 1 1:; V 116.
212 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flore'
213

en el art. 167 como procedimiento ordinario y al regulado en el art. 168 No da lugar a referéndum si la ley ha sido aprobada en la segunda vota­
como procedimiento agravado, precisamente por su carácter extremada­ ción por cada una de las dos Cámaras con la mayoría de los dos tercios de
mente rígido. sus componentes.
La existencia de dos procedimientos, de diverso grado de rigidez, evi­
Artículo 139.-La forma republicana no podrá ser objeto de revisión cons­
dencia que la Constitución ha optado por agravar el procedimiento de re­
titucional. 52
forma para poder modificar determinados aspectos esenciales del sistema
antes que imponer límites materiales a la reforma, esto es, antes que excluir La Constitución Italiana vigente establece una interesante fórmula
d�}erminadas cuestiones o precept�� de la posibilidad �� reforma. Est� <?P­ tratándose del principio de reformabilidad.
CJOn parece responder a la conVIcciOn de que la exclus10n de toda postb tli-
Se requiere que el proyecto o iniciativa de reforma sea sometido a
dad de reforma de ciertos contenidos constitucionales no es una barr era discusión y en su caso a aprobación en cada una de las Cámaras, por
eficaz para impedir cambios políticos, que suele ser la pretensión, un tanto dos veces consecutivas, con intervalos no inferiores cada uno a tres me­
ingenua, de tales cláusulas de intangibilidad. Es precisamente en las cues­
ses. Como puede observarse, esta medida es sui generis, pues establece
tiones esenciales donde, llegado el caso, la acción política puede impon erse
una doble vuelta legislativa, a la vez fija un espacio temporal prudente;
por encima de las vías constitucionales, haciendo inútiles las previsiones
trata de garantizar que el proyecto de reforma constitucional sea anali­
del constituyente. Por ello, en la Constitución Española, la posibilidad de la
zado de manera completa, adecuada y bien pensada, estableciendo ésta
reforma está abierta incluso para los aspectos más relevantes del sistema
las condiciones.
constitucional, lo que, como mínimo, puede servir para encauzar la posible
Por otro lado, la iniciativa deberá ser aprobada por una mayoría ab­
transformación del régimen y contribuir a evitar actuaciones de hecho. Por
soluta de los componentes de cada Cámara en la segunda votación, lo
otra parte, incluso desde una perspectiva puramente formal las cláusulas de
que sin duda trata de asegurar un análisis adecuado y un convencimien­
inmodificabilidad suelen ser ineficaces. Como la propia transición española
to mayoritario en alto grado.
a la democracia ha demostrado, tales cláusulas no pueden impedir la susti•
La Constitución de Italia previene el caso en que la iniciativa deba
lución global de un sistema político por otro de principios opuestos (en el
caso español, de un sistema autoritario por otro de carácter democrático)
ser sometida a referéndum, cuando dentro de los tres meses de su pu­

con respecto formal de los procedimientos de reforma.51


bl i c a c ión, lo solicite una quinta parte de los miembros de una Cámara ó
500.000 electores o cinco Consejos Regionales, dándole un sesgo de in­
8.4.1.5. Italia dudable participación ciudadana y popular.
Advierte, no obstante lo anterior, que no se someterá el proyecto a
La Constitución de la República Italiana referéndum si la ley ha sido aprobada en la segunda votación en cada
una de las Cámaras por mayoría de las dos terceras partes de sus inte­
Promulgada el 27 de diciembre de 194 7 entró en vigor el 1o. de enero de 1
grantes, salvedad que se justifica plenamente.

SECCIÓN Il
Asimismo, el constitucionalista italiano Paolo Biscaretti di Ruffia
Revisión de la Constitllción Leves Constitucionales señala:

También la Constitución italiana (artículo 138) adoptó


Artículo 138.-Las leyes de revisión de la Constitución y las demás para la reforma
constitucional un procedimiento agravado: configuránd
constitucionales serán adoptadas por cada Cámara con dos sucesivas olo, según los casos,
de dos maneras:
beraciones a intervalos no menores de tres meses y se aprobarán por
cíODi l. En línea general, "las leyes de reforma de la Constitución
ría absoluta de los componentes de cada Cámara en la segunda vota y las leyes
de constitucionales" son aprobadas por cada
Dichas leyes se someterán a referéndum popular cuando, dentr o una de las Cámaras con dos deli­
mbrOS benll'iones sucesivas, con intervalos
tres meses de publicación, lo solicite una quinta parte de los mie no menos de tres meses, requiriéndose,
Rel!ional sin embargo, la mayoría absoluta
una de las Cámaras, o quinientos mil electores o cinco consejos para la segunda deliberación de cada Cá­
mara. Si, además, la segunda
La ley sometida a referéndum no se promulgará mientras no sea deliberación ha sido adoptada en cada Cáma­
ra por lo menos con dos
por la mayoría de votos válidos. tercios de mayoda (de los componentes de las
......__

51 EsPíN, Eduardo, Derecho Constitucional, Tiran! lo Blanch Derecho, Valencia, 52 Documento consultado directamente en la Biblioteca de la Embajada
de¿·ICJ· de Italia el 5
ña, 1991. pp. SO y 5 l. e mbre 1991, pp. 179 y 180.
214
TF<lRÍA DE LA CONSTITUCIÓN t<FFORMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores 215

presuponi�ndo­ 5. Decidir el nombramiento del Primer Ministro del Consejo de Estado a


Asambleas), el procedimiento debe considerarse con cluido,
la misma opinión ; propuesta del Presidente de la República Popular China y, a propuesta del
se, iw·is ct de iure, que tambi�n el cuerpo electoral es de
del t�rmino Primer Ministro del Consejo de Estado, el nombramiento de los Viceprime­
v las mie\·as normas deben, por tanto, promulgarse, dentro
usa su poder de ros Ministros del Consejo de Estado, los Consejeros de Estado, los titulares
acostumbrado, por el Presidente de la República (v sólo sí
Asamblea). de los Ministerios, los Presidentes de las Comisiones, el Auditor General y
reenvío v tendremos aún una tercera deliberación en cada
ión de las Cámaras el Secretario General del Consejo de Estado;
2. En el caso, en cambio, que en la segunda aprobac
dos tercios (aunque ob­ 6. Elegir el Presidente de la Comisión Militar Central y decidir el nom-
no se hava alcanzado la mencionada mayoría de los
ntes de la bramiento de los demás integrantes de �sta a propuesta de su Presidente;
teni�ndose la absoluta, es decir, la que se ¡·diere a los compone
s sin demora (pa¡·a que lle­ 7. Elegir el Presidente del Tribunal Popular Supremo;
Asamblea), las normas relativas serán publicada
das; ya 8. Elegir al Fiscal General de la Fiscalía Popular Supremo;
guen a conocimiento de la opinión pública), pero no serán promulga
miembro s de cada 9. Examinar y aprobar el plan de desarrollo socioeconómico del país y
que, dentro de los tres meses siguientes, un quinto de los
s, podrán re­ los informes sobre su ejecución;
Cámara, o quinientos mil electores, o cinco Consejos regionale
la consecue ncia de que estas 1 O. Examinar y aprobar los presupuestos del Estado y los informes sobre
quedr que sean sometidas a rcfer�ndu m. Con
definitivo si no han su ejecución;
normas no serán promulgadas y publicadas de modo
do, por 1 l. Modificar o anular las decisiones inadecuadas que haya adoptado el
obtenido en el referéndum la mayoría de los votos válidos (excluyen
m en cues­ Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional;
tanto, del cómputo las papeletas en blanco o nulas). El referéndu
de una condición suspensiv a (por 12. Ratificar la creación de provincias, regiones autónomas y municipios
tión parece, por esto, asumir la función
as, como directamente subordinados al Poder central;
tres meses) de la eficacia de las normas constitucionales (formulad
que se presenta como verdadero 13. Decidir sobre el establecimiento de zonas administrativas especiales
es costumbre, por las Cámaras) , más bien
realidad, de un así como sus estatutos;
elemento constitutivo (Mortati) de su formación (tratase, en
ados casos y 14. Decidir sobre las cuestiones de la guerra y la paz,
referéndum facultativo, que se puede exigir sólo en determin
aprobadas res­ 15. Ejercer otras funciones que correspondan al órgano supremo del po­
que no distingue, de modo alguno, la eficacia de las normas
iento agravado anterior, que der del Estados4
pecto a las emanadas con base en el procedim

es más simple)."3 Cabe señalar en principio, que de manera normal y acostumbrada,


la ubicación de la reformabilidad constitucional se contiene en la parte
8.4.1.6. Clzi11a
final de las Cartas Magnas, ya sea como un capítulo expreso o dentro
del contexto de disposiciones finales. Sin embargo, como nota curiosa,
Constitución de la República Popular China
el principio de reformabilidad constitucional regulado en la Carta Chi­
CAPÍTULO IIl
�a. se coloca dentro de las facultades de la Asamblea Popular, que es el
Organo Supremo del Poder del Estado, como menciona el numeral 57
Eslntc/ura del Es!adu
del propio ordenamiento.
Apanado l. El artículo 62 confiere esta importantísima facultad, en primer lu­
Asamblea Popular Nacional. gar, a la citada Asamblea en tanto que el precepto 64 previene el proce­
Permanente dim iento para efectuar la reforma.
Artículo 58.-La Asamblea Popular Nacional v su Comité
ejercen el poder legislativo del Estado. El citado procedimiento resulta poco complicado, puesto que la re­
forma debe hacerse a propuesta del Comité Permanente de la Asamblea
Anículo 62.-La Asamblea Popular Nacional ejerce
0 por más de una quinta parte de los diputados que la integran, debién­
ciones:
dose aprobar por las dos terceras partes de la multialudida Asamblea.
l. Reformar la Constitución;
Como se aprecia, la fuerza de la Asamblea convierte este procedi­
2. Supe1·visar el cumplimiento de la Constitución;
civil, las leyes mien to en exclusivo de la misma, al ser el Ó rgano Supremo de China,
3. Elaborar y reformar el código penal, el código
básica s; con stituyéndose un monopolio sobre el mismo, situación que pudiera
cas del Estado v otras leyes
te de la República Popular
4. Elegir el é ¡·esidente ·\. el Vicep1-esiden
'4 Collslilucióll de la República Popular de Chilla, ¡a_ ed., Lenguas Extranjeras, pp. 43,
'' o CollsliiLiciollal, Tecnos, 1 Y73, pp. 276 y 211. 4S 46 y 47.
13JscARI·.Trl DE RliFFIA, Paolo, Dacclz
216 TEORiA DE LA CONSTITUCIÓN · RMA DE LA CONSTITUCIÓN
J'i iO - A. Soto Flore' 217

rei1ejar un desequilibrio entre los poderes ya que, ni el Ejecutivo, ni el obl igatorio para las normas de jerarquía constitucional y con caracte­
Judicial tienen injerencia en éste. rísticas más complejas para casos de revisión total de una Constitución.
El origen histórico del referéndum está estrechamente entrelazado
8.4.2 REFORMA CONSTITUCIONAL. Lon el de la moderna democracia y el de la soberanía popular, ya que en­
REFERÉNDUM, INICIATIVA POPULAR Y PLEBISCITO LliL'lltra su razón de ser sólo cuando por estar arraigadas las ideas que
i 1 n pl i can estas últimas se han creado las condiciones que hacen facti­
Quiero iniciar este apartado con la reflexión del maestro Mario de
hks su aparición y aplicación.
la Cueva al finalizar su capítulo sexto denominado: La Reforma de las El término referéndum proviene del siglo XVI, y contiene una remi­
Constituciones en la cual señala: nisL·encia de los comienzos estrictamente federales del gobierno de dos
Un breve apunte para concluir: (No es ya el momento de que se p iens e en
lk los cantones actuales de la Confederación Suiza: El Graubúnden y
entregar al cuerpo electoral mexicano la decisión última sobre las adiciones \'alais.
v reforma de su Constitución, de esa ley fundamental que le significó las El referéndum tal y como actualmente es, reviste el carácter, muy
guerras de reformas y del imperio y la Revolución de 191 0' ¿o se s ig ue cre­ modificado, de legislación por el pueblo. Realmente sólo conserva de su
yendo que no hemos alcanzado la suficiente madurez política?'' -� origen el nombre.
�·
La versión moderna del referéndum aparece teóricamente elabora­
Referéndum, Iniciativa Popular y Plebiscito entre otros, son sin
da proporcionada, junto con el resto de su ideario republicano, por
duda alguna procedimientos jurídico-políticos, para ejercer el poder po­
v

los pensadores de la Revolución Francesa. El referéndum es hoy una


lítico de la población en las reformas parciales o totales de una Consti­
institución eminentemente americana.
tución, como es el caso de Italia, Cuba, España, Guatemala y Nicara­
Con el fin de darle mayor claridad al análisis sobre el referéndum
gua, entre otras naciones que en 'iUS leyes fundamentales se establecen
me permito citar el artículo 141 de la Constitución de la República de
estos mecanismos de democracia semidirecta para lograr modificacio­
Cuba en donde se establece esta figura:
nes en sus constituciones políticas.
Artículo 141.-Esta Constitución sólo puede ser reformada, total o par­
8.4.2.1. Referéndum cialmente, por la Asamblea Nacional del Poder Popular mediante acuerdo
adoptado, en votación nominal, por una mayoría no inferior a las dos terce­
Por lo que hace al Referéndum, es el acto por el cual el pueblo o el ras partes del número de sus integrantes.
cuerpo electoral. en su sistema democrático aprueba o rechaza de los Si la reforma es total o se refiere a la integración y facultades de la
representantes constitucionales legales, una reforma o adición constitu­ Asamblea Nacional del Poder Popular o de su Consejo de Estado o a dere­
cional; en este sistema el cuerpo electoral desempeña actividades cons­ chos v deberes consagrados en la Constitución, requiere, además, la ratifi­
titucionales, dando lugar así a un sistema de semi-representación, en el cación por el voto favorable de la mayoría de los ciudadanos con derecho

que si bien, se respeta el derecho del pueblo a participar en las funcio­ electoral, en refrendo convocado al efecto por la propia Asamblea."'

nes públicas a través de sus representantes, este queda circunscrito o li­ Con este ejemplo de Derecho Constitucional Comparado nos queda
mitado exclusivamente a decidir sobre las cuestiones consideradas Dlús claro en qué consiste el referéndum.
como más importantes, o que reclaman el procedimiento por su tras·
cendencia y originalidad. 8.4.2.2. Iniciativa Popular
Puede adoptarse el referéndum como obligatorio con relación a la
Por lo que hace a la Iniciativa Popular, vinculada con el proceso re­
autoridad en cuestión, cuando la norma constitucional se lo impone
.
formatorio de la Constitución, conviene señalar que esta es una de las
para dar valor a su resolución, o puede ser facultativo, si se establece e� expresiones mús importantes de la Democracia Constitucional, es decir,
alternativa con otro medio de ratificación, o si la convocatoria está condi"i de a 4 uella forma de gobierno en la que los ciudadanos participan en el
cionada a que un númem de representantes lo solicite. Los Estados qu� gobierno de la comunidad política en forma inmediata. Consiste en la
adoptan el referéndum, en su generalidad lo e st a ble cen con carácter de

'o Editorial de Ciencias Sociales. calle 14, No. 4104. Plava.


. Cd. de La !!abana, Cuba.
" CUEVA, Mario de la, Tt:uría dt: la Cullstitucióll, up. cit., p. 174. Biblioll'ca de la Embajada Cubana en México. p. S7.
218 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN !HTORMA DE LA CONSTITUCIÚN A. Soto Flor,., 21Y

facultad que se reconoce al cuerpo electoral o a una parte de este para El esquema que presenta la Carta Magna del Perú, condensa la po­
promover reformas de normas constitucionales. o;ibilidad de que los tres poderes inicien leyes, restringiendo al Poder Ju­
En el Diccionario Jurídico Mexicano elaborado por el Instituto de dicial a promover reformas únicamente sobre administración de Justicia.
Investigaciones Jurídicas de la UNAM, la investigadora Monique Lions, Este panorama conlleva también a que la iniciativa popular consti­
seúala lo siguiente: tu\e una fórmula para principios del procedimiento reformatorio, como

Mediante la Iniciativa Popular en vez de ejercer un simple control a poste­ lo previene en el texto en comento.

riori, los ciudadanos pueden orientar en cierta medida la actividad guber­ En lo tocante al procedimiento de reformas, el proyecto debe ser
a p robado por una Legislatura y ratificado por la siguiente, para que
namental.
En la práctica, la iniciativa se ejerce mediante el depósito de un proyecto !L'llga plena eficacia.
firmado por un número determinado de electores, pendiente a solicitar la Como nota distintiva, debe hacerse notar que la Constitución del
adopción de una ley, su abrogación o la revisión de la Constitución. De ne­ PL-rÚ consigna que el proyecto de reformas no es susceptible de observa­
garse el Órgano Legislativo a dar curso al proyecto así presentado, se cele­ L·ión por el Ejecutivo, lo cual genera una indudable preeminencia del
brara una consulta popular; si la mayoría de los ciudadanos adoptan el re­
LL·gislativo en este orden.
ferido provecto, el legislador tendrá que inclinarse, y se aplicará la ley o la
En nuestro país, la Iniciativa Popular no ha sido contemplada en el
reforma así aprobada. Por otra parte, la eficacia del procedimiento es va­
orden nacional y aunque algunas entidades la han normado, carece en
riable, según la iniciativa sea "formulada" (redactada en forma de un verda­
dero proyecto de ley) o "no formulada" (una simple indicación general del rL·alidad de importancia.
texto por adoptar o de la reforma por realizar)Y Como todas las formas de democracia directa o indirecta, la inicia­
tÍ\ a popular encuentra al menos en teoría muchas ventajas: Su conse­
En el Derecho Constitucional Comparado encontramos algunos
cm·ncia con la teoría de la soberanía popular; se corrigen abusos y de­
ejemplos de Leyes Fundamentales en donde se encuentra establecida la
saciertos de los gobernantes; evita la dictadura de los partidos, mejora
Iniciativa Popular; en el presente caso me permito citar lo que establece
la educación popular y evita cambios avanzados sin debida justificación.
la Constitución Política del Perú que al efecto seúala:
8.4.2 .3. Plebiscito
Constitución Política del Perú
Dentro de las vertientes que un régimen democrático caracterizado
TÍTULO VI por la igualdad, libertad y solidaridad en la relación del gobierno, en­
Reformas de la Constitución contramos la antigua pero vigente figura del plebiscito, como una for­

ma de manifestación de la sociedad civil frente a un planteamiento del


Artículo 306.-Toda reforma constitucional debe ser aprobada en una
primera legislatura ordinaria y ratificada en otra primera legislatura ordi­ g obiern o todo esto encuadrado en un sistema semidirecto o semirepre­
,

naria consecutiva. sentativo.

El proyecto correspondiente no es susceptible de observación por el Po­ Efectivamente, desde la antigua Roma encontramos esta figura, la
der Ejecutivo. cual era considerada como fuente del
Derecho Romano, debido a su na­
La aprobación y la ratificación requieren la mayoría de los votos del nú­ lurale;.a, pues las decisiones
votadas en los "concilia p/ehis" tenían vali­
mero legal de miembros de cada una de las Cámaras. dez, por lo que se consideraba que:
La iniciativa corresponde al Presidente de la República, con aprobación
Lo" plebiscitos eran las decisiones tomadas de la plebe
del Consejo de Ministros; a los Senadores y Diputados; a la Corte Suprema, en los concilia plc­
h¡, sobre la proposición de un tribuno, v que se aplicaban
por acuerdo de Sala Plena, en materia judicial; y de cincuenta mil ciudada­ desde luego a
L·!la sola. Pe m a pal'lir de la ley 1 /oncnsia,
nos con firmas comprobadas por el Jurado de Elecciones."58 en 468, regían lo mismo para los
P<�tricios que para los plebeyos. Desde entonces son VLTdaderas leves, \'
. . los
lL':\tos les dan en genLTal e �ta calificaci
ón. ''J
'7 1Jiccio11ario Jurídico Mexica11o, Instituto de Investigaciones Juddicas, UNAM, MélÚ•
co. 1982, pp. 116-117.
'H Impreso en "GRAFITRAL", S.C.R.L. Las Esmeraldas 127-129, Balconcillo, Embaja· ')lJ P!·.lll, EU!.!.L'Ill.', Tratado é:/cntellla! de /Jert'c/¡u
Ruii!Uilo, Editora Nacional Edinal,
da de Perú, p. 53. México, 1 Yól, p � 42.
220 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN J<l H>RMA DE LA CONSTITUCIÓN A. Solo Flor,., 221

De esto desprendemos el hecho de ser una consulta a la población JilCn, por lo que una nación debe tener lo que José López Portillo
sobre una propuesta formulada por su gobierno para ejercer el mismo, "wnifestaba:
·:i:
es decir, tiene esa propuesta una incidencia directa sobre la población, -;, Políticamente hablando, no hay más que una sola voluntad, la General, mo­
por lo que es un mecanismo necesario el realizar la consulta a fin de dalidad del querer individual, común a representantes v representados que
que determine el rumbo que se va a tomar sobre la cuestión planteada. coinciden en los intereses y fines de toda organización política. Los repre­
Pero como todas las figuras antiguas que se hacen presentes en sentados no tienen \'oluntad como tales que después transmitan al repre­

nuestra vida política, han evolucionado, se han actualizado de acuerdo sentante, ni este tiene voluntad autónoma v distinta."2

a la forma que son percibidas en un punto de la historia, así, la disyun­ Para conservar ese equilibrio en las voluntades de gobernantes y go­
tiva se presentó en nuestro Estado Moderno con la representación que
lwmados estos deben permanecer en una constante comunicación, in­
un ser humano hacía por los otros, como nos indica José López Portillo
tL·rcambiándose información con el fin de hacer un eficiente y duradero
y Pacheco,
�,
cjL-rcicio del gobierno, preservándose entonces las instituciones estata­
Alguna \·oluntad individual tiene que representar el centro de decisión del k:-,, v entre las formas más eficientes para tener esta comunicación se
poder de todos, y resolver sobre la paz y la seguridad, opinaba Hobbes. Sus encuentra el plebiscito.
actos no son suvos: representan la intención y los propósitos de todos. Por
Por plebiscito podemos entender entonces, las resoluciones tomadas
eso, ninguno, en concreto, puede modificarlos u objetarlos, fuera del propio
por e l pueblo a pluralidad de votos, lo que representa a actos de volun­
soberano."0
tad popular, mediante los que el pueblo exterioriza su opinión sobre
Al parejo de la figura de representación, surgieron problemas por la un hecho determinado en la vida política. Es conveniente no confundir
naturaleza misma del ser humano, siendo éstos inevitables, quedando el esiL' concepto con el de Referéndum, pues entendemos a éste último
sistema en un punto muy vulnerable por parte de los gobernantes, es como el acto de someter al voto popular y directo, las leyes o actos ad­
decir, el abuso del poder, lo que causa un desequilibrio total en la socie­ ministrativos con el fin de ratificar por el pueblo lo que votaron sus re­
dad, tal y como lean Jacques Rousseau exponía: presentantes.
Así como la voluntad particular actúa sin cesar contra la general, así tam­ De ésta forma podemos desprender que al ejercer la figura del plebis­
bién el gobierno ejerce un continuo esfuer-zo contr·a la soberanía. A medida cito, estamos frente a una pregunta en cierta forma arbitraria, respecto a
que este esfuerzo aumenta, la constitución se altera, v como no existe otra un asunto de gobierno para obtener su aprobación, lo que implica un
voluntad de cuerpo que resistiendo a la del príncipe mantenga el equilibrio,
juego de la opinión pública, una manifestación de consentimiento por
r·esulta que tarde o temprano ésta oprime a aquella, pertw·bando el contra•
parte del gobernado, se encausa la fuerza pública a la toma de decisio­
to social. Tal es el vicio inherente e inevitable que desde la aparición del
nes por parte del poder público, por eso el autor colombiano Gaspar
cuerpo político tiende sin descanso a destmirlo, como la vejez y la muerte
destruyen al fin el cuerpo humano."1 Caballero Sierra dice que:

Se e ntiende por plebiscito la pregunta de carácter político o de interés ge­


El problema estaba planteado, pero era inevitable, por eso la histo­
neral, realizada por el gobernante a los gobernados, cuya decisión tiene
ria reservó un lugar importante a la teoría de Emmanuel Sieyes, quien
fuerza \'inculante u obligatoria para el gobernante.6l
afirmaba que el Tercer Estado representaba todo, de lo contrario, pen·
sar en una democracia pura como forma de gobierno, con las magnitu· U na vez determinado el concepto de plebiscito, es conveniente fijar
des que las naciones han adquirido, es realmente imposible. . algunas diferencias de esta institución con la de Referéndum, pues a pe­
Entonces, es necesario encontrar una congruencia de voluntades sar de la similitud en ejercicio de éstas figuras, su finalidad es substan­
entre gobernantes y gobernados, de lo contrario el equilibrio se V� cialmente distinta.
perdiendo poco a poco hasta que es imposible continuar con ese régl·
"'
- L<JPEZ P<JKIII.LO y PACHElO José·. c;,;l/('_,¡s .\' Teoría Gel/eral del Lstwlu Alodenw, Mi-
gue� Ángel Porrúa,
00 LúP!'I. Portillo Y PACIIEUJ José, G<'llesi., v Teuríu Ge11eml dd /:'.,!iulu .\todenw, México. 1976, p. 582.
Ángel Pon·!m, México, 1976, p. 570. nl CAUALI.ERO SIERRA, Gaspar Y ANZO LA Gu Marcl'la. Teoría Ccmstitucimwl. Tl'mis,
61 RoussEAU Jean-Jacques, El Cmllrato Suciul, SARPE, Madrid, 1983, pp. 134 y !35. Santa Fe de Bogotá, 1995, p. 160.
222 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN - A. Soto Flores 223

A pesar de que ambas figuras someten a la consideración de la po­ ;;L·rYir de bastión político para acciones distintas a las del planteamiento
blación un proyecto, en el caso del referéndum versa sobre reformas de
original, sin embargo, sabiendo encausar ésta figura para que cumpla
tipo constitucional o normativas o sobre la expedición de nuevas consti­ ;;us auténticos fines, es digna de tomarla en consideración para tener un
tuciones o leyes; mientras que el plebiscito es sobre una pregunta o pro­ "istema más cohesionado con el sentir popular respecto de las acciones
puesta genérica para que el gobierno en turno legitime una acción.
de gobierno.
Otra diferencia es que el referéndum permite una mayor facultad de
decisión al gobernado, pues puede calificar positiva o negativamente
normas e instituciones de carácter permanente, mientras que el plebis­
cito es más restringido y solo se aplica a decisiones eventuales, inmedia­
tas y controvertidas, brindando el resultado una legitimación a dichas
decisiones.
Por lo que implican las facultades que conceden estas instituciones,
considero que la figura del referéndum está inserta en un régimen de
instituciones sólidas con un perfil totalmente democrático, mientras que
el plebiscito es una figura que puede manipular la opinión pública legi­
timando decisiones no estudiadas a profundidad.
En base a lo anterior, podemos concluir que en nuestro sistema
constitucional se pueden implementar figuras como las antes estudia­
das, ya que tendrían una buena utilidad en nuestro sistema, vinculando
de una manera permanente a la población en los asuntos de gobierno
responsabilizándonos todos de ésta tarea; figuras como la iniciativa po­
pular son importantes, pues mantienen el contacto directo con los órga­
nos legislativos haciéndose sentir el clamor de las organizaciones sociales
y en general de todos los gobernados, siendo analizadas las propuestas
por los representantes para implementarse total o parcialmente de acuer­
do con las implicaciones que tenga. ,
También considero que la figura del referéndum puede implemen­
tarse de forma efectiva en nuestro sistema constitucional, ya que a tra­
vés de ella se puede reflejar de una forma real el sentir de la población
con la producción legislativa y sobre todo en los momentos en que se
trata de modificar la Constitución, pues en ella se condensan los valores
fundamentales de una nación a través de los poderes constituidos Y se­
ría conveniente que las modificaciones que afecten directamente a la
comunidad en las reformas legales o constitucionales, sean ap robadas
en última instancia por el órgano al que van destinadas, es decir a 1�
población, claro, debe hacerse una regulación muy especial de ésta 6,
gura para no permitir una distorsión de las funciones e institucio�
que rigen nuestra vida cotidiana.
Respecto al plebiscito, conside1·o que es una figura con una
tancia relativa, de acuerdo a la forma en que se presente, pues la
güedad de los asuntos que se plantean a través de ésta figura se
dan ap1·obaciones con consecuencias no muy planeadas,
Unidad 9

Derechos del hombre

JUAN JosÉ MATEos SANTILLÁN'


RAúL CoNTRERAS BusTAMANTE ..

9.1. EL CONCEPTO
DE LOS DERECHOS HUMANOS

La época presente está caracterizada, sin duda, por la trascendencia


d e los derechos humanos. La evolución jurídica, a lo largo de la histo­
ria. ha recapitulado que el reconocimiento de la protección de la liber­
ta d \ de la dignidad humana debe ser el fin supremo de todo Derecho.
Su concepción filosófica es muy extensa, variada y hasta contradicto­
ria. Existen corrientes del pensamiento que los consideran como dereclzos
1Wlum/es, aludiendo a una postura teórica iusnaturalista, que sustenta
la ex istencia de un conjunto de derechos preexistentes y supra-jurídicos,
es decir, anteriores y superiores a las leyes; y que, por lo tanto, son
P ri cipios universalmente válidos que tienen todas las personas que
n

�xi"ten, estén o no plasmados en las leyes, puesto que son anteriores e


Incluso superiores al Estado.
Dentro de esta misma ideología, también se les denomina como de­
recllus
iluw/us u originales, los cuales son aquellos derechos que no re­
quieren condición alguna para su existencia, ya que nacen con el indivi­
duo mism
o.

Y.3. Y.S, Y.6, 9.10, 9.11.


Y . ! , Y.2, 9.4, 9.7, 9.8, 9.9.

225
226

"Históricamente, la garantía de la dignidad humana se encuentra


estrechamente ligada al cristianismo", 1 pero para la corriente doctrina­
TEORÍA DE LA CO'\STITUCIÓN


�-
¡11 RITIIOS DEL 110:\IBRE J . .\latt·o, Sa n t i \ Li n R. Conllt'l<h IJ¡¡,tamallic

1 �tJJIL' gran parte del siglo XX, el principal tema de debate entre el capi­
t�dismo \'el socialismo. La caída del "Muro de Berlín", así como el des­
227

ria iuspositi1•ista, que se basa en puntos de vista diferentes, es insosteni­ tlllli'Ollamiento de la Unión Soviética v la presencia de un mundo
ble el carácter innato de los derechos, pues a lo largo de muchos sigl os iLkológicamente bipolar; ha permitido el fortalecimiento de esta con­
el respeto a esos derechos humanos ha sido inexistente, sobre todo du­ Ll·¡JL·ión individualista, por medio de la premisa de que la dignidad hu­
rante las épocas, entre ellas el colonialismo, a los ciudadanos se les con­ Jil�lll<t sná mejor garantizada bajo condiciones de mayor libertad que

sideraba como súbditos, sin derecho alguno. d L · J l t ro de un orden de mavor seguridad.


Desde la perspectiva iuspositi1•ista, los derechos humanos son los El concepto de dereclzos lzunumos, es un término redundante, sin
que están reconocidos por la ley, principalmente por la Constitución de e111bargo, se acuña a la comunidad internacional en 1945, a partir de la
un Estado. Sin el reconocimiento de estos valores por el orden jurídico, lir111�t de la Carta Fundacional de las Naciones Unidas, en San Francisco.
no serían más que enunciados de principios filosóficos v morales, pero Las últimas tendencias, han preferido utilizar la idea de dereclzos
carentes de validez real. ¡iuulunze/l!ales del lzonzhre, ya que esta denominación tiende a una con­
Para fundamentar esta posición, se ejemplifica con el hecho de que cqJLiún filosófica más precisa. Hablar de derechos fundamentales, par­
durante siglos la esclal'itud -que nulificaba la libertad y la dignidad de te Lk que los derechos del hombre son los primeros, es decir, la base y
quienes la padecían- fue una institución como el matrimonio, la adop­ el lundamento de donde emergen los otros derechos existentes. Así, los
ción o la compraventa, perfectamente legal y legitimada por sociedades derechos fundamentales son aquellos de cuya esencia derivan todas
que la consideraron un atributo de propiedad de los estratos sociales las demás facultades, por lo que se les considera, son derechos núcleo.
dominantes. ¿Dónde quedaban pues, los derechos innatos y superiores La denominación de dereclzos finzdmnelltalcs tiene hoy un cierto ca­
de los esclavos? ráctLT oficial, toda vez que está utilizada en la Carta de las Naciones
Los derechos del ho111hre v del ciudadano, son un término que surge Unidas del 26 de junio de 1945, Preámbulo y artículo primero, número 3,
durante la Revolución Francesa de 1789, con la declaración del mismo así como en posteriores documentaciones mundiales.2
nombre. En ésta, se habla de derechos naturales e innatos, distinguién­ El carácter fundamental de los derechos humanos está evolucionan­
dose de los derechos ciudadanos que son aquellos que se adquieren, do \ ertig:inosamente, debido a que la sociedad moderna -básicamente
realizan y ejercen dentro de una comunidad social, como lo son los de­ la del mundo occidental- va no se conforma con la simple vida en li­
rechos políticos. Su gran aportación es que invirtió el orden de la l egiti­ bertad, sino que exige prof�mdizar en más valores.
midad de la soberanía en la titularidad del poder político, quedando ya La idea de la dig11idad lzunzmza, definida como "la capacidad abs­
determinada por la voluntad popular y no por la sangre de los reye s ni tract<t \' potencial del ser humano para realizarse como tal",1 se ha con­

por voluntad superior de Dios, sino por el hombre mismo. Por lo tanto, Vertido en un factor indisoluble del concepto de los derechos fundamen­
en el sentido de la Declaración Francesa, los derechos políticos son de- tales. E l Estado debe garantizar no sólo un régimen de libertades, sino

rechos naturales que se adquieren con la calidad de ciudadanos. tambiC·n, los medios para que se compagine la libertad individual con la
Al triunfo del liberalismo, sur ge la concepción de los derechos i�d�­. Propi a \ida en sociedad. No basta enunciar v reconocer un amplio catá­

l'iduales, sobre la base de que la capacidad de los hombres para decidl � logo de dcrechos
si el Estado no crea los n;edios para hacer posible su
por sí, o sea, su libre albedrío, debe ser absolutamente respetado por e ejercicio.
Estado. Para el liberalismo, las facultades del hombre como individuo Y La

su dignidad como ser humano, no deberían ser asunto de la incumben


­ caci(Jn dign idad del ser humano es una exigencia cualitatiYa en la apli­
\
ejercicio de sus derechos. Su libertad indi\·idual únicamente
cia del Estado.
�erú posible ejercerla disfrutarla dentro de una comunidad libre, en
v
n Y la OndL· no se le menos
La gran disvuntiva entre la libertad individual frente al orde cabe su sustanti\·idad.
- f do-
� ·

coerción -cuando estos realmente procuran un bien comun- u e ,


cj � A1 \:\J-o·z LLDLS\1:\, iVlario, IAJ'> /Jcu·cluJ.., ffll!lltl/ ()...,, .'>ll
l decloruc{()n ll!Ú\'tT'>lll \!u rt'lu­
r;�l ·lltc
.t:,uuulan con el L·_..,/tldo, Tc�i� prok·�ional, E....,L.lll'i<.t DtTL'L·ho
1 !3Rt '1>·\, l'nlL''lo . . \lwuuil de JJereclw Coll.,tirucu!llil/,
[n,lilulo Vasco de A.
nah,ucoc, dl' dl' la lllti\·tT:--.idad

Sociale,, Madrid, España,


Mé·xico, I<J8:1. pp. 11-16.
¡¡·aci(lll PúhlicJ. Marcial Pon,, Ediciones Jurídicas \
p. 1 17.
Bto-.,ll·\, Uf!. C/1., p. 12:1.
228 TEORÍA DI; !li R.ECIIOS DEL HOMBRE J. Mat'''" Santilbn R. Contre1·a, Bu,tamante 229

En países desarrollados como Alemania, el concepto de derechos so­ ¡K·rmitirá la práctica de la ortotanasia como método para que enfermos
ciales fimdalllelztales, que comprenden valores como la vivienda ade­ tL·rminales mueran sin sufrir en la agonía.
cuada, la seguridad social. el derecho al trabajo o a la información, son Una vez precisadas algunas de las diferentes acepciones termino­
entendidos como "garantía de las bases en que se asienta la existencia ¡,igicas existentes, se citarán algunas definiciones del término más acep­
individual".4 Esto significa que esta segunda gene1·ación de valores, im­ t�tdas:
plican acciones del Estado para poder concretar el programa contenido Para el autor español Antonio Trove! y Serra, los derechos humanos

en ellos. Es decir, son obligaciones sociales que se le imponen al Esta­ �on "privilegios fundamentales que el hombre posee por el hecho de
�L·rlo, por su propia naturaleza y dignidad. Son derechos que le son in­
do, para que éste a su vez, oriente su futuro desempeño y determine ta­
ltL'rentes y que, lejos de nacer de una concesión de la sociedad política,
reas que impliquen organización, medios, procedimientos y reglamenta­
han de ser consagrados y garantizados por ésta".'
ción, que hagan posible mejorar los estratos de vida de la sociedad estatal.
El maestro Rafael de Pina, consideraba que "los Derechos Humanos
La concepción de un Estado Social viene a ser la respuesta al indivi­
�on aquellos que corresponden al hombre por su propia naturaleza,
dualismo, puesto que su filosofía sostiene que no debe ser excluyente la
como fundamentales e innatos, tales como los de propiedad, libertad,
valoración de los derechos fundamentales en contra de la participación
seguridad y resistencia a la opresión, formulados en la Declaración
del Estado, sino por el contrario, son mutuamente dependientes. El
Francesa de los Derechos del Hombre y del Ciudadano y los llamados
Estado ya no debe ser visto como el enemigo potencial de la libertad
derechos sociales.
sino como su ddensm· y protector. Asimismo, sin la adopción plena de
· Estos derechos se afirman como anteriores y superiores al Estado,
derechos sociales fundamentales, los derechos individuales -por muy
por lo que los gobernantes se encuentran en absoluto, obligados a man­
tutelados que estén- ya no son garantía para procurar, por sí mismos,
tenerlos, respetarlos y garantizarlos.b
la dignidad humana. La incorporación de los valores sociales dentro de
El Doctor Jorge Carpizo, ha sostenido que los derechos humanos
la esfera de los derechos fundamentales los robustece; y ello redunda,
son "los derechos inherentes a la naturaleza humana, sin los cuales no
sin duda, en favor del fortalecimiento del Estado mismo.
Los derechos fundamentales o como se les denomine, constituyen se puede vivir como ser humano y que el Estado está obligado a respe­

actualmente la más amplia gama de valores universalmente ���-·�,:¡......,. tar, proteger y defender y que son susceptibles de ser violados por una
autoridad o por cualquier otro agente social con el consentimiento ex­
-aunque no siempre respetados o interpretados de manera u
preso o tácito de una autoridad".7
que generación alguna, a lo largo de toda la historia de la
haya podido gozar. Nunca había existido una concepción similar, Jorge Castán Tobeñas, proporciona otra definición de los derechos
humanos y afirma que "son aquellos derechos fundamentales de la per­
pecto a la igualdad, la libertad, la equidad, la democracia,
sona humana tomada en su aspecto individual y social, que por su pro­
popular, entre otros, como la que afortunadamente ahora disfrutamos.
pia naturaleza (corpórea, espiritual y social) le corresponden y por lo
A pesar de que en muchos países del orbe, la concepción y el
ta nto le deben ser reconocidos y respetados por todo poder y por toda
to de estos valores todavía presentan serios rezagos, en el mundo
dental -y principalmente en los países más desarrollados- el catatoK� norma jurídica".H
de derechos fundamentales es tan amplio, que muchos de esos Karl W. Deutsch, establece que "en la definición y cumplimiento
Por parte del Estado de los derechos humanos estarán las pruebas cua­
no se usan y sectores sociales importantes ni siquiera saben qué
litati nt s de su actuación. En la medida que los garantice y los haga va­
con su libertad.
l �r se estará frente a un Estado con mayor legitimidad en base a su sen­
Existen avanzados y novedosos conceptos como la dignidad de
tid o de justicia
niños, el respeto a la no manipulación genética, la "privancy" del social. La autoridad y la lealtad definen nuestros deberes
nal
cho norteamericano -que es en pocas palabras, el derecho perso
permanecer apartado de la sociedad y al reconocimiento de una TKO\TL SEI<KA. Antonio, Lm /Jcreclzos 1/wnwws. Tecnos, Madrid, 1 968. p. 1
Y
1.
íntima y propia en el hogar- la autodetc¡·minación para una 0 Rafael \ Di·. PI�A VARA, Rafael . /Jiccimwriu de /Jercchu, 8·'. ed. . Porrúa,
DL Pi"'A,
México, 1 979, pp.
digna, que en México ya se aprobó la Ley de Voluntad Anticipada,
221 v 222.
7 CAKPIZO MM Gi<EGoK. Jorge. B reve Cuteci."""
.mine /u., /Jcreclw., 1/unwtws, (iaceta
de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, México, Año l. Tomo l. No. 2, 1990.
p. 18.
4 lhi<l.:m. p. H CASTAN ToBÜIAS, José, Los Derechos del llomhre, 2". ed.,
97. Reus, Ma d rid. 197ó.
2:10

hacia el gobierno; v si cumplimos tales deberes no deberemos esperar


que se nos den las gracias por ello... lo mismo se aplica a los
derechos.
TFORIA IJE LA CONSTITUCIÓN


1
!ll'.Rf'CHOS DEL HOMBRE J. Maleo' San1illún R. Conlrera., Bu,laJnanle

bre, sino de conformidad con la ley y mediante el juicio de sus pares, de


b misma forma, se abolían los tradicionales castigos de mutilación y
231

es un privilegio ni un regalo. ltJrtura para los cazadores furtivos y se sustituyeron por multas v pena
Lo que nos corresponde por derecho no
dL' cárcel y en caso extremo, la expulsión del reino.
Debemos tomarlo sin darle las gracias a nadie, ,. ejercerlo siempre que
De igual forma encontramos en la Carta Magna el derecho a resistir
sea necesario"."
por las armas las decisiones del rey que se encontraran fuera de la ley.
Para el profesor universitario mexicano, Carlos Quintana Roldán,
humanos son "el conjunto de prerrogativas que salvaguar­ Como puede apreciarse, es evidente que en la tradición anglosajona
los derechos
b Carta Magna significó un límite al poder real y en cierto sentido tam­
dan la vida Y la dignidad de los seres humanos v que los criterios valo­
rativos de la cultura y de la civilización moderna atribuven a todos los
hiL·n para el poder de los señores feudales, de tal suerte que bien obser­
0
integrantes de la especie humana sin distinción alguna".1 \ ada debe estudiarse como resultado de la confrontación entre el rey y
los nobles, con un importante juego de la iglesia, que derivó en los be­
9.2. APORTE DE INGLATERRA A LA CARTA MAGNA m-licios antes expuestos para la sociedad.
Con un escenario semejante, en los reinos de Castilla y Aragón na­
El descubrimiento al norte de Italia del Diges/u, generó una verda­ L.L'n procesos normativos cuya tendencia bien pudiera equipararse a la
dera revolución jurídica en Europa, no tan solo dio pie a los movimien­ experiencia inglesa, pues en ambos reinos, en el mismo siglo XIII, sur­
tos de los glosadores y pos-glosadores, sino que significó el tránsito, del giL-ron en Aragón los famosos "Fueros de Aragón", cuyo sentido es el
sistema jurídico romano de Teodosiano, al sistema jurídico romano de mismo de la Carta Magna inglesa, en cuanto a que ambos buscaban ra­
Justiniano. cionalizar los conOictos propios del feudalismo que enfrentaban los in­
Con lo expuesto, simplemente queremos dejar sentado que en el si­ tereses del rey frente a los de la nobleza. En el caso que nos ocupa, sur­
glo XIII, Europa vidó un conjunto de conmociones normativas que sir­ ge la figura del "Justicia de Aragón", 11 como un juez medio, cuyo papel
ven de frontera entre la Alta Edad Media y la Baja Edad Media, con lo
fundamental es el juridicializar los conOictos y en consecuencia, se le
que queda claro que el sistema político dominante era el sistema feudal.
dota del llamado "recurso de manifestación", que no es otra cosa que la
Tradicionalmente, la doctrina mexicana hace referencia a la Carta
manifestación aragonesa del Amparo Castellano y del Habeas Corpus
Magna de 12 15, concedida por Juan sin Tierra a los ingleses, como un
Inglés.
documento fundamental para el estudio de las libertades humanas, pues a
En la experiencia castellana encontramos una evolución feudal si­
lo largo de su Preámbulo v de sus 63 cláusulas, establece --entre otras­
mila r en cuanto la creación de una norma que tuviera un papel equipa­
el rec�nocimiento de la libertad de los hombres libres, pues como se ha
rable a una constitución contemporánea; y la respuesta fueron las "Siete
dicho, el sistema feudal predominaba y en consecuencia los hombre s de
Partidas", del Rey Alfonso X, el Rey Sabio, en cuyo texto encontramos
los feudos estaban sujetos a un vasallaje característico del sistema polí­
cuatro recursos de amparo12 tendientes a garantizar un conjunto de de­
tico dominante, sin embargo, en esta materia, se limitaron y definieron
rechos o mercedes que favorecían a los hombres libres.
las obligaciones feudales, lo cual significó para la época un verdadero
Corno puede apreciarse, a lo largo del siglo XIII encontramos una
avance y un freno para el autoritarismo sin límites.
se rie de experiencias, en las
que se enfrentó la nobleza a los reyes, en el
En materia fiscal se estableció el principio que los tributos sólo po­
marco de la lucha por el poder en el feudalismo, los resultaos
dían aplicarse con el consentimiento de la nación, argumento que mu­ de la lu­
cha f ueron diversos, como variadas
chos siglos después sirvió de bandera a las trece colonias del Norte de eran las circunstancias que los mo­
tivaron, sin
embargo, queda claro que en la tradición inglesa, lo mismo
América, para su guerra de emancipación.
que en la española,
En la Carta Magna encontramos el principio de que no se prend�­ P
la Carta Magna, los Fueros de Aragón y las Siete
ría, encarcelaría, ni se privaría de lo que poseyera a ningún hombre b- artidas, constituyen verdaderos ordenamientos jurídicos que buscaron

11
'' DEL'ISl 1 . Fondo de Cultura Económica, EspaiiA. Para Inavor infonnaciún pueJc con!'\tdtar.....c FAIKL:\ Gl!LLL\J, Víctor,
1 Karl W. l'olílicu \' Gohienw, Anlccedenlc.•;
Arugr,llcw, de 1;,_, Juicios de A111pwo, IIJ.lJNA:\1, Mé.xico, 1Y71.
.

1 Y70, p. 24 l.
1/wiiWlUS, 12 VL·asc 8,\KKACJÁ!\1 BARRAGÁN, Josl·. A!�u1uJs con.•.;idcracionc."> ....-uhn:
10 ÜliiNTANA Rm.UAN, Cario' y SAHillO PENICIIE, Norma, Lkreclws los cuatro recurso.\'
de Uliifhlro re ulados p or las siete partidas, 2". eJ .. U. de G., 2000.
Mé·xico, 1YY8, p. 23. g
232 TEORÍA DF LA CONSTITUCIÓN ¡JI RFCIIOS DEL HOMBRE J. Mate"' Santill:u1 R. l'"u1I-er;" Bu,talllantc 233

limitar el poder real y terminaron por establecer un conjunto de garan­ lk los demás, sin omitir que los límites de cada derecho deben estar de­
tías para hacer efectivos los derechos de los hombres libres. tL·rminados por la ley.
En el Artículo 5", se establecen limitaciones a la ley, cuando se sos­

9.3. ANÁLISIS DE LA DECLARACIÓN tiL"ilC que la legislación sólo puede prohibir las acciones nocivas a la so­
DE LOS DERECHOS DEL HOMBRE L iL·dad, lo cual se complementa con el principio de que todo lo que no
Y DEL CIUDADANO DE 1789 l·�tL' prohibido por la ley está permitido, estos principios se complemen­
t an con el Artículo 6", que señala que la ley es la expresión de la volun­
La Revolución Francesa tiene un especial significado en la evolu­ tad general.
ción de los derechos del hombre, pues aunado al hecho de la presencia En el Artículo 7" se establece el principio de legalidad en materia
de la burguesía como nueva clase social hegemónica, debemos estudiar ¡Jl' n al : nadie puede ser "acusado, arrestado ni detenido sino en los casos
en el pensamiento francés una nueva percepción del hombre frente al dl'lcrminados en la ley y con las formalidades prescritas por ella" prin­
poder público. cipio que se complementa con los numerales 8" y 9", que señalaban el
El 4 de agosto de 1789, la Asamblea Constituyente francesa, declaró principio de no retroactividad de la ley y el principio de todos somos
la abolición de todos los privilegios -lo cual hacía efectiva una de las inocL·ntcs, en tanto no seamos declarados culpables.
premisas del movimiento revolucionario-, la de igualdad, que acompa­ Los Artículos 1 O y 1 1, establecieron la libertad de opinión y la liber­
ñada por las de libertad y fraternidad, habrían de caracterizar de mane­ tad de imprenta. En el Artículo 12, se indica que la fuerza pública se en­
ra inmortal el sentido de la revolución. CliL'Jltra al servicio de la sociedad, por lo que debe ser sostenida por las
Si bien es cierto, como ya hemos dicho, que en la tradición inglesa
contribuciones de los ciudadanos. 11
y en la española encontramos una serie de experiencias que deben vin­
Los Artículos 14 y 15, reconocen derechos a los ciudadanos, para
cularse a la evolución de los derechos del hombre, también resulta
verificar la aplicación de las contribuciones y pedir cuenta a todos los
cierto que el caso francés es el que mayor impacto generó en la lucha
empleados públicos sobre sus manejos administrativos.
del ciudadano frente al poder público. De esta forma, el 26 de agosto
El Artículo 16, establecía dos principios: por un lado, el que los de­
de 1789, la Asamblea Constituyente votó -casi de manera unánime-la
rechos debían estar asegurados mediante garantía; y por otro, la exis­
famosa Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, com­
tencia de la división de poderes. Sin la existencia de ambos principios,
puesta por 17 artículos, en los que se reconocen un conjunto de dere­ el artículo señalaba que la sociedad carecía de Co11stitución.
chos, que a continuación describimos. Por último, el Artículo 17, establecía el principio de la inviolabilidad
En el Artículo 1 ", se sostiene que los hombres nacen libres e iguales; de la propiedad privada y el extremo de lo que hoy conocemos como ex­
El Artículo 2", declara que el objeto de toda sociedad política es "la propiación, por causa de utilidad pública
con la condición de "justa y
servación de los derechos naturales e imprescriptibles del hombre" e in� Pre\ ia indemnizaci
ón".
mediatamente enuncia: la libertad, la propiedad, la seguridad y la resis• Como puede apreciarse, uno de los aspectos fundamentales que
tencia a la opresión. debe atraer
nuestra atención, es la reincidente tendencia a invocar los
El Artículo 3", complementa los dos primeros, al señalar que la derechos
humanos corno derechos naturales, v la conclusión es eviden­
beranía reside en la nación, por lo que si entendemos que el sobe te:� finales del siglo XVIII, predominaba el p�nsamiento iusnaturalista
es el que está por encima de todos, para decirlo con mayor sencillez, r�cional en Francia; v en consecuencia,
los antecedentes de declara-
la
que manda, entonces se rompe aquella teoría francesa del poder Ció n . .
.
comento, deb en ub1carse en 1 a evo 1 uc1on
·
en
·' de esta cornente
·

bl
llevó a Luis XIV a sostener "El Estado soy yo". En cuanto se afirma filoso'¡··ICO-JUri'd"!Ca.
· ·

que el poder público derivaba de Dios h �¿a el Rey, la declaración


Tampoco debemos olvidar, que el pensamiento Inglés había
se desa-
estudio rompe este principio e involucra a la sociedad dentro del rroll·ado por .
senderos diferentes, pero que muchas de estas garant1as se ,

cepto Nación .v en consecuencia despoja al Rey de la soberanía y la e n_co


ntraban reconocidas en su sistema j uddico.
Ni que decir del pensa­
lada precisamente a favor de la propia sohera11ía 11acio11al. I11Ien
to norteamei-icano, que tanto
en la Constitución de 1774, como en
El Anículo 4", define que la libe i·tad "consiste en poder hacer ......___ _

aquello que no dafle a otro"; y con ello, establece que el límite de los 11
rechos natw·a1es de un hombre termina donde empiezan los de Artículo t 3 de la Declaración.
234 ¡ >1 RH IIOS IJEL 110:\lllRE
23'i
TEORÍA DE LA CO:-.JSTITUCIÓJil .1 . .\idt<·o, Santilbn R. l<ll>llLTa' Bu>t<unantc

la Constitución particular de algunos de los Estados que integraron la La Declaración Universal de los Derechos Humanos
consta de 30
federación, ya contaban con declaraciones similares a la francesa. ,11tículos, que procederemos a sintetizar.
El primero, seiiala que los hombres nacen libres e iguales
en digni­
9.4. LA DECLARACIÓN UNIVERSAL d�ld v derechos,�· que deben comportarse fraternalmente. El artículo 2",
DE LOS DERECHOS DEL HOMBRE DE 1948 �L· ;;ubdivide en dos fracciones, la primera, que nos indica
que todo ser
J¡u111ano goza de los derechos v libertades proclamados en la
declara­
Si bien, la Declaración francesa de los Derechos del Hombre y del
L itill. sin excepción; la segunda fracción, indica que no
hay distinción
Ciudadano de 1789, se ubica como expresión de un movimiento liberal in­
quL' pueda efectuarse con base a consideraciones jurídicas,
políticas o
dividualista promovido por la burguesía, la Revolución Mexicana de 1917
i1JtLTI1acionales, que afecten a una persona con motivo de la naturaleza
instaura una segunda generación de derechos: los Derechos Sociales.
ckl país del que dependa.
Esta segunda era de las concepciones filosóficas en materia de dere­
El Artículo 3" establece que todo hombre tiene derecho
chos humanos, consistió en agregar a la igualdad que enarbolan los de­ a la vida, la
libL·rtad y la segurid ad. En el 4", se prohíbe la esclavit ud; en el
rechos individuales, a la equidad, que idean los derechos de clase o de 5",
b tortura v las penas crueles o denigrantes; por su parte, el 6" se1í.ala
grupo, para que se conforme un frente común entre entes débiles -po­
quL' todo ser humano tiene derecho al reconocimiento de su persona
lítica, social o económicamente hablando- cuando se confrontan con li­
seres poderosos.
dad jurídica.
El Artículo 7" establece la igualdad ante la ley; el 8" establec
Después, al finalizar la Segunda Guerra Mundial, encontramos dos en dos
cuestiones fundamentales para la promoción y protección de los Dere­ prL·ceptos: que toda persona tiene derecho a que en la normatividad
de
chos Humanos. Por un lado, la firma de la Carta de las Naciones Uni­ un país \' que se establezcan las garantías que la amparen en tribunale
s
das; y como consecuencia, el 1 O de diciembre de 1 948, se aprobó en Pa­ competentes contra actos que violen sus derechos fundame
ntales. En el
rís, la llamada Declaración Universal de los Dereclzos Humanos, por 48 9", se prohíben las penas arbitrarias; asimismo, el 1 0" reconoc
e el dere­
votos y 1 O abstenciones. Pudiera parecernos rara la abstención de la cho las personas a ser juzgadas con justicia por
·.� un tribunal indepen­
URSS, de Polonia, Rumania y Yugoslavia, sin embargo, si se observa diente e imparcial.
con cuidado la cuestión, la internacionalización de los derechos huma­ El Artículo 11 ", cuenta con dos fracciones, la primera, señala
el de­
nos en manos de un organismo como la ONU fue vista como un riesgo recho de todo individuo a que se presuma su inocenci
a en tanto no se
político. pruebe su culpabilidad; y la segunda,
se refiere a que nadie puede ser
Hoy en día, queda en clara la existencia de una crisis del concepto condenado por leyes con efectos retroactiv
os, ni que la pena sea mayor
Estado-nación como atributo de las entidades soberanas, y las grandes qliL' la que estaba establecid
a en la lev al momento de cometer el delito.
potencias, al amparo de la concepción de que los derechos humanos Por otra parte, el Artículo 12" es .
rela tivo al derecho de no ser objeto de
son universales, !o han utilizado como bandera y pretexto para alcanzar in j e rencias
arbitrarias en su vida y el 13", que cuenta con dos fraccio­
objetivos o ventajas particulares, y bajo el argumento de su defensa, han nes, establece la
libertad de tránsito de los ciudadanos v el derecho a
hecho la guerra a aquellas naciones que se han opuesto a sus inte rese�. salir de su
país, así como la de elegir el lugar para su r sidencia. �
Sin embargo, más allá de las consideraciones de política internacio­
El Artículo 14" señala el derecho de
nal y del intervencionismo militar que busca justificaciones, es claro
pedir asilo, con la excepción de
quienes sean
un perseguidos por delitos comunes; el !5° nos señala el de­
que la Declaración Universal de los Derechos del Hombre cumple recho a
d e 1 0S tener una nacionalidad; el 1 6" reconoce el derecho
cometido histórico claramente determinado, la universaliza ción a casarse a
Partir de
d '
¡ciOn 1
aes una edad núbil, sin restricciones por motivo de raza,
derechos humanos y su protección. De esta forma, a los tra religión o
·

nacion
·

ayo­ alidad, así como el derecho a fundar


catálogos de derech�s humanos que se encuentran insertos en la m el 111atr
una familia, indicando que
ones imonio debe verificarse sólo median
ría de las constituciones, hay que agregar el cúmulo de convenci �·len to
te el libre -v pleno consentí-
afirm a rse de los cónvuges.
firmadas por los distintos estados-nación: bien pudiera
El Artículo 17" habla del de1·echo
hov en día existen dos grandes fuentes de protección de los de:-��ha. de propiedad individual v colecti­
humanos, por un lado, las provenientes del derecho inten10, y por Va; L:i 18", de la libertad de pensamiento v religión
; el )l)" de la libertad
las que se derivan del derecho internacional. de opinión _v de expresión; el 20" la libei· t ad de asociac
ión; el 2 1" el de-
236 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN ¡Ji'RECIIOS DEL HOMBRE -J. Mateos Santillún 1 R. Contreras Busta111ante 237

recho a participar en el gobierno de su país, el derecho de elegir a sus 9.5. TERMINOLOGÍA Y ADOPCIÓN
autoridades mediante sufragio universal y secreto. EN LAS CONSTITUCIONES DE MÉXICO
El Artículo 22" se refiere a la seguridad social y a la satisfacción de
En los primeros años del siglo XXI tenemos la oportunidad de re­
los derechos económicos y culturales inherentes a la dignidad de la per­
sona humana. El 23", en cuatro fracciones, se refiere al derecho al tra­ plantear una serie de postulados doctrinales que no cuentan con un ver­
Lbdero sustento documental y cuyas afirmaciones se han transformado
bajo, a su libre elección, al principio de que a salario igual por trabajo
en creencias que se repiten de un autor a otro, sin el menor análisis crí­
igual. a una remuneración equitativa que le asegure una existencia dig­
tico. El caso de los derechos humanos en el Acta Constitutiva de la Fe­
na, y el derecho a sindicalizarse. Por su parte, el numeral 24" previene
Lkración Mexicana y sus consecuencias en la Constitución Federal de
sobre el derecho al descanso, al tiempo libre y a las vacaciones pagadas.
1824, nos brinda la oportunidad de ofrecer un ejemplo de estas afirma­
El Artículo 25°, se refiere a que toda persona tiene derecho a un ni­
ciones comúnmente aceptadas que nos inducen al error.
vel de vida adecuado, que le genere a él y a su familia niveles aceptables Es habitual escuchar que la gran mayoría de la doctrina sostiene
de bienestar, alimentación, vestido, vivienda, asistencia médica, y servi­ que e n la Constitución Federal de 1824, no existió un catálogo de dere­
cios sociales necesarios; así como seguro de desempleo, enfermedad, in­ chos humanos y que simplemente se expresaron -de manera aislada­
validez, viudez, vejez, la maternidad y la infancia tienen derecho a cui­ __¡ algunas libertades con ese rango. Esto nos puede conducir a suponer
dados especiales y todos los niños, sin importar si nacieron dentro o que a los Constituyentes del 24 no les preocuparon los derechos huma­
fuera de matrimonio, tienen derecho a igual protección social. nos. Nada más falso, los constituyentes del 24 eran federalistas en el
Por su parte, el Artículo 26" se refiere al derecho a la educación, sentido más amplio del término y consideraron que el catálogo de dere­
que debe ser obligatoria y gratuita cuando menos en los niveles elemen­ chos humanos debería ubicarse en el ámbito de la soberanía de los
tales y fundamentales; el acceso a la educación superior debe ser en Estados que conformaron la Nación.
función de los méritos individuales y que los padres pueden escoger el De esta suerte, si observamos el contenido de cada una de las Cons­

tipo de educación de sus hijos. tituciones de los Estados de esa época, podremos observar porqué todas
El Artículo 27" se refiere al derecho de las personas para participar ellas, sin excepción, cuentan con un capítulo relativo a los derechos hu­
manos. De esta forma, es evidente que la lectura que se debe hacer para
libremente en la vida cultural de la comunidad, el 28", proclama la ne�
hablar de los derechos humanos en nuestra primera Constitución Fede­
cesidad de crear un orden social e internacional en que se hagan efecti·
ral, es precisamente reconocer que en aquel Estado Federal, los dere­
vos los derechos establecidos en la Declaración en estudio. De igual ma7
chos humanos deben ser estudiados en los dos niveles normativos: el de
nera, el Artículo 29" indica que la persona tiene deberes respeto de � la Co nstitución Federal y el de las Constituciones de los Estados en su
comunidad; y , finalmente, el 30" señala que la Declaración Universal. conjunto, puesto que lo contrario implica un desconocimiento muy gra­
no puede interpretarse en el sentido de permitir que nadie, realice acd.¡ ve de l federalismo mexicano
.
vidades tendientes a la supresión de cualquiera de los derechos Y libeX'r Como resultado, el camino que falta por estudiar es muy grande y el
tades proclamados en la propia Declaración. reto p rincipia por recapitular todos los derechos humanos expuestos en
e
Como puede apreciarse, si se toma en consideración el valor qu las dive rsas Constituciones locales con el fin de entender la amplitud y
inte rn a 1'Imites
derecho v las convenciones internacionales cobran en la vida

.
de los derechos fundamentales en el sistema federal de 1824.
.

derJ
un país, � e podrá percibir una profunda preocupación en las mo En las Siete Leyes Constitucionales de 1836, encontramos un esce­
los
sociedades occidentales, encabezadas por los Estados Unidos Y nario diferente. El
modelo federalista se abandona para abrazar el mo­
' ..l�rPr.... delo centralis
ses de E uropa Occ1"denta 1, por establ ecer un marco mm1mo
·
d e ta, la consecuencia es inmediata: se derogan los documen­
a favor de la persona humana, que le permitan una existencia �os co nstitucionales federales y también el conjunto
de Constituciones
decorosa. Sin embargo, más allá del sentido ideal de la Ocales. Como consecuenci
a de estos hechos, se trasladan los distintos
del individuo, existe una realidad que hace nulos en una buena Catálogos de derechos humanos
de las Constituciones locales, a la nue­
del planeta los postulados expuestos y los reduce a meras aspi Va Constitución Centralista, de esta forma, en esta primera mitad del si­
buenos propósitos. gl o XIX el dilema consistió en observar la conveniencia de ubicar los de-
Jl
238 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN IJERECHOS DEL HOMBRE - J. Matcm Santillún 1 R. Contrcra' Bu,tamantc 239

rechos del hombre, en la competencia de las Entidades Federativas o en En noviembre de 1842 se presentó un Segundo Proyecto de Consti­
la competencia del Gobierno General. tución, cuyo título II se denominaba "De los habitantes de la República,
Es menester señalar que todos los documentos constitucionales de �us derechos y obligaciones", para en el título III establecer un catálogo
la primera mitad del siglo XIX se encuentran inspirados en la teoría ius­ de derechos bajo el nombre "Garantías individuales", en cuyo artículo
naturalista, corriente que inspiró la declaración Francesa de los Dere­ 13" podemos encontrar la oportunidad para hacer una referencia im­
chos del hombre y del ciudadano; así como el movimiento de los dere­ portante para nuestra materia, pues sostenía: "La Constitución recono­
chos humanos en el constitucionalismo norteamericano del siglo XVIII. Le en todos los hombres los derechos naturales de libertad, igualdad, se­
En cuanto a la terminología nos permitiremos citar algunos ejem­ !2tiridad y propiedad, otorgándoles en consecuencia, las siguientes
plos que se emplearon en las constituciones locales entre 1824 y 1835 � arantías". Como puede apreciarse en un lado se reconocen los dere­
,
la Constitución de Chiapas en su capítulo II del Título 1 hablaba de los :-hos naturales del hombre y como complemento se establecen garantías
derechos y deberes de los habitantes de Chiapas, en Chihuahua el Títu­ o medios que les hagan valer.

lo II se dedicaba a los derechos y obligaciones de los chihuahuenses, en Como todos saben, ninguno de los tres proyectos fue aprobado y el

Durango la Sección II se refería a los derechos y obligaciones de los du­ sig uiente texto Constitucional fueron las Bases de Organización Política
Je l a República Mexicana del 15 de junio de 1843, en cuyo articulado el
ranguenses, en Guanajuato se hablaba primero de los guanajuatenses y
título II se denomina "De los habitantes de la República" a lo largo de
de los ciudadanos guanajuatenses, para después abordar el tema de las
sus artículos se establecían los derechos de los habitantes de la Repúbli­
obligaciones y derechos de los guanajuatenses, como puede observarse,
ca Y en el título 11. "De los mexicanos, ciudadanos Mexicanos, y dere­
encontramos una constante en todas las constituciones locales; todas
chos y obligaciones de unos y otros" se complementa el cuadro de los
contienen un catálogo de derechos y obligaciones de los habitantes y de
derechos.
los ciudadanos en el que reconocen, un conjunto de derechos humanos
Contra lo que comúnmente se piensa, el texto del Acta de Reformas
y ciudadanos a sus habitantes muy amplio, como puede servirnos de ejem­
de 1847 nos presenta el verdadero parteaguas de la preservación de los
plo el artículo 15 de la Constitución de Durango de septiembre de 1825
derechos del hombre y por su importancia nos reservamos su explica­
que establecía que el estado garantizaba el goce de sus naturales e im­
ción para efectuarla con todo detalle en el punto 9.11 de este trabajo.
prescriptibles derechos a sus habitantes y concluía "y los demás inalie­
En la Constitución Federal de 1857, el título 1 se refiere a los "dere­
nables que por naturaleza les competan, aunque aquí no se especifiquen
chos del hombre" y el contenido del artículo 1 o nos menciona que "El
ni enumeren".
pueblo mexicano, reconoce que los derechos del hombre, son la base y
cio­
En la Constitución Centralista de 1836 la primera ley Constitu objeto de las instituciones sociales. En consecuencia declara que todas
habit ante s
nal, hablaba de "Derechos y obligaciones de los mexicanos y las leves y todas las autoridades de país, deben respetar y sostener las
mexic an o
de la República" y su contenido especificaba los derechos del garantías que otorga la presente Constitución" de lo expuesto se vuelve
bién
por un lado y los derechos del ciudadano mexicano por otro; tam a desprender la idea de un conjunto de derechos naturales que recono­
ech os
se hacía referencia a que los extranjeros gozaban de todos los der ce la Constitución
y en consecuencia se establece un conjunto de garan­
naturales. tías para
hacerlas efectivas, no omito señalar que el título 1 de la Consti­
le iJll•
La vida de la Constitución del 36 fue efímera, desde 1840 se tu ción del 57 constaba de un catálogo de 29 artículos.
tralistaS
pugnó fuertemente, sin embargo, la lucha entre federalistas y cen El texto de la Constitución de 1917 nos presenta variables en cuanto
dio oportunidad a la existencia de diversos proyectos, el primero
de 1842 ¡ al texto
de la Constitución de 1857, por principio cabe señalar que el
establecía en el título 1, un artículo (7") con 15 fracciones que
llevaba e "
�0ll1bre del capítulo 1 es el de "Garantías individuales", en lugar del
nombre de "Garantías individuales".
La minoría de la Comisión emitió su propio proyecto
de Consti
: Derechos del hombre" en el texto del artículo 1° caben nuevas diferen­
ci as, p
ues el anículo 1" en 1917 sostenía "En los Estados Unidos Mexi­
1 se llama c n s
ción, de corte federalista v en el encontramos que el título � o todo individuo gozará de las garantías que otorga esta Constitu­
uales" Ció n" de lo cual se desprende una variable, la Constitución de 57
"De los habitantes de la República y de sus derechos individ
"De los derecho s reconoce los derechos naturales del hombre y otorga un conjunto de ga­
que en su sección segunda, bajo el nombre
les", se enunciaran los relativos a la libertad personal, propieda
d, r�nhas para hacerlas efectivas, en la Constitución de 17, no hav men­
Ció n de ese reconocimiento de derechos del hombre y simplem� nte se
ridad e igualdad.
240 THJRÍA DE LA CONSTITUCIÓN
f i>ERECIIOS DEL HOMBRE J. Mateo' Santillán R. Contrcra' Bu,tamante
241
- 1

pasa al concepto de que la Constitución otorga garantías, el problema


De la misma manera que evolucionó la terminología, también evo­
de la lectura del texto constitucional en los términos de 191 7 es que,
\ ucionó la concepción de los alcances de lo que la materia de los dere­
con el advenimiento del positivismo, doctrina que sostiene la suprema­
l·hos humanos debería de proteger, pues en el constitucionalismo liberal
cía del orden normativo como fuente de derechos, en contraposición
dL' los siglos XVIII y XIX, encontramos una clara tendencia para consa­
del iusnaturalismo doctrina que sostiene la existencia de derechos hu­
�rar un conjunto de derechos de filiación individualista, es decir, predo­
manos anteriores y por encima del orden normativo, la interpretación
nlina el pensamiento liberal individualista, o sea el liberalismo clásico.
constitucional se complicó, pues no falta quien confunda garantías indi­
Correspondió a México el honor de generar una verdadera revolu­
viduales y derechos humanos y en consecuencia sostenga que nuestra
ción jurídica mundial en el campo de los derechos humanos, puesto que
Constitución otorga los derechos humanos, en lo personal considero
que el problema se resuelve desde una perspectiva histórica, si toma­ L"ll 191 7 incorporó un nuevo impulso al derecho al sumar a los tradicio­

mos en cuenta que desde 1842 y en 185 7, se reconocen los derechos na­ nales derechos humanos un nuevo conjunto de elementos llamados De­

turales y se otorgan las garantías para su cumplimiento y que en 1917 rL·chos Sociales.
simplemente otorgan esas misma garantías, no obstante el problema Con el paso de los años se generalizo en el Constitucionalismo del
persiste, pues derechos y garantías son dos caras de una misma mone­ si�lo XX la adopción de un conjunto de derechos sociales en las Consti­
da, las garantías sirven para proteger los derechos tuciones de todo el mundo, particularmente después de la 2a Guerra
Mundial.

9.6. GARANTÍAS SOCIALES EN LA CONSTITUCIÓN En el caso mexicano, el artículo 3° relativo a la educación, el artícu­
lo 27 relativo a la propiedad del territorio nacional y el 123, relativo al
El Derecho Constitucional desde sus orígenes surgió como un intento trabajo, forman un capítulo separado del resto de los derechos tradicio­
de limitar la actuación de los poderes públicos frente al individuo, y es nalmente tutelados en el marco del constitucionalismo liberal clásico o
precisamente en ese marco, cuando cobra relevancia la protección de un individual, pues su contenido implica características peculiares, se trata
conjunto de derechos de la persona que se materializa, mediante la ins­ de derechos de prestación, que se encuentran sujetos a las posibilidades
trumentación de garantías jurídicas que permiten hacerlas efectivas. económicas de la realidad.
Hasta este momento, hemos hecho particular énfasis en la perspec­ En cuanto a la naturaleza y alcances del capítulo social de nuestra
tiva filosófica iusnaturalista, como marco general en el que se desarr� C onstitución, puede consultarse la Unidad 13 de esta misma obra, don­
lla el surgimiento de la revolución francesa, la independencia de los
de se analizan en el punto 13.9 con toda amplitud los puntos relevantes
Estados Unidos de América y la evolución del sistema británico, pues
del debate del constituyente.
por principio se considera que existen determinados derechos que son
Cabe advertir que a principios del siglo XXI existen diversas tenden­
inherentes a la persona humana y en consecuencia su reconocimiento cia s, por un lado, autores como Giovanni Sartori, sostienen que resulta
no depende de las normas jurídicas, pues son previos al pacto social o a
supcrf1 uo introducir en el texto constitucional un conjunto de postula­
la creación de la Constitución según apunta John Locke. dos relativos a los derechos humanos, puesto que en la medida que
Desde la revolución francesa, que incluyó el texto de la Declaración
av anza el Derecho Internacional, en esta época de mundialización o
de Derechos del Hombre v del Ciudadano en la Constitución y las 10
- gl obalización del Derecho, cada día existen más países que han firmado
primeras enmiendas a la Constitución de los Estados Unidos, aprobadas
una gran cantidad de tratados internacionales y convenciones sobre de­
en 1791 (Bill of Rights) se ha extendido la costumbre hasta nues �
rech os
días, de que las constituciones incluyan una parte dogmática caractetl• humanos, que generalmente son más extensos y ambiciosos que
las nor·
zada por un conjunto de definiciones y garantías de los derechos funda" mas constitucionales de cada país y como consecuencia, Sartori
concluye que son
mentales. redundantes los catálogos de derechos insertos en las
Cons ti
Ahora bien, del reconocimiento jurídico de los derechos tuciones Contemporáneas.14
que surgen históricamente en un momento de pr·cdominio ius También cabe agregar, que hoy en día se habla de los "derechos de
Solid ari
ta, se pasa a la actualidad donde adoptan otra terminología, derP.CJl"' dad", o derechos humanos de tercera generación.
fundamentales o libertades públicas, se transita de esta forma,
concepción típicamente iusnaturalista a un concepto positivista.
14 SARTORI, Giovanni, Ingetzieria Constitucional Comparada, FCE, México, 1 YY4, p. 212.
242

9.7. DERECHOS DIFUSOS COMO


TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
� [ll'RECIJOS DEL HOMBRE - J. MaiL'os Santillán R. Conlrcras Buslamanll'

Las Constituciones de muchos países han abierto espacio para la


243

TENDENCIA CONSTITUCIONAL CONTEMPORÁNEA L·onsagración jurídica de estos nuevos valores sociales, denominados
"i/1/l.'l'OS derechos" o "derechos de la tercera generación" o "derechos de so­
El avance que ha tenido la concepción de los derechos fundament a­
!uluridad". Se distinguen de los derechos llamados sociales o colectivos,
les al considerarlos como derechos núcleo, requiere -para su disfrute­ por el hecho de que no existe una relación jurídica de grupo ni de clase
de elementos complementarios que enriquezcan la esfera jurídica de los -como sucede con el caso de los sindicatos de obreros o campesinos,
seres humanos. Ha llevado a considerar como indispensables algunos colegios de profesionales, cámaras empresariales, etcétera- sino que se
valores modernos como el derecho a disfrutar de un medio ambiente conforman para su ejercicio y defensa, de conglomerados dispersos,
adecuado, el derecho a la salud, el respeto a los patrimonios históricos, "como ocurre con los consumidores, los afectados por la contamina­
arquitectónicos y culturales, el respeto al derecho de los consumidores, citín, los interesados en defender el patrimonio cultural y artístico, los
etcétera. que se oponen al deterioro de las zonas urbanas o pretenden su mejora­
"
Estos "intereses supraindividuales", 1 s rebasan los límites de la teoría miento .17
individualista clásica, puesto que precisamente se habla de una condi­ Se ha cuestionado, no obstante estar insertos en los textos constitu­
ción de "indeterminable", respecto de los sujetos de esos derechos. Se cionales, si estas nuevas concepciones son verdaderos derechos o se tra­
trata de bienes indivisibles, que se convierten en el núcleo en torno de ta simplemente de compromisos políticos, filosóficos y dogmáticos, de­

un bien de la vida, a los que todos los seres de nuestra especie deberían bido a la problemática de la posibilidad de su accionar jurídico, esto es,
de la dificultad que se tiene para ejercer acciones jurisdiccionales para
poder acceder por el sólo hecho de ser, precisamente, humanos.
El concepto de interés común, viene a revolucionar la idea del inte­
recurrir, de acuerdo a los criterios individualistas tradicionales, cuando
se presenta una afectación directa a la esfera jurídica de determinada
rés general que anteriormente correspondía a la administración pública
persona; así como también, por la falta de legitimación procesal de la
defender como única y legítima representante. Ahora, ese monopolio
colectividad para hacer valer el interés particular.
que tenían las autoridades gubernamentales se ha hecho extensivo a la
No se puede desconocer que muchos de estos nuevos valores son
actuación popular para la defensa de sus intereses colectivos, ya no
compromisos políticos que se asumen constitucionalmente para enalte­
son de uno o varios, sino de todos los que conviven en un medio deter­
cerlos y generar una acción de cambio acelerada, para conducir a la co­
minado, enmarcando verdaderos intereses de la sociedad, porque la le­ lecti\idad hacia esa meta anunciada. Pero para que ello no quede en
sión de uno, sólo constituye -ipso {acto- una agresión a la colectividad sólo en mera definición discursiva y doctrinal, se han venido creando
entera.

acciones administrativas para hacerlos efectivos.


María del Pilar Hernández Martínez, sostiene que "los intereses di­ El Estado y por ende todas las instancias de gobierno son los prime­
fusos se distinguen por los sujetos y no por su objeto" .16 Esta pertenen- ramente obligados a respetar y a hacer valer un derecho difuso consti­
an
cia difusa, que corresponde a muchos seres en común que coparticip ;t tucional mente tutelado, por ser de interés general la observancia del
d el
en un mismo interés por lograr evitar la degradación y destruc�ión �( Precepto. Es por eso, que se han venido instituyendo nuevos órganos de
:
dad de carúcter público, altamente especializados, "que en los últimos lustros
medio ambiente, extinción de las especies, mejoría de la cah
de ga- ·; �an proliferado en muchos países" .18 En nuestro país, podemos ejempli­
vida, respeto a la dignidad humana y en general, toda una serie
n la preo- ·�. ficar con las Procuradurías Federales del Consumidor y la de Protec­
rantías que no se limitan al momento actual, sino que incluye
eras, se ci ó n del
cupación de la sociedad por el futuro de las generaciones venid Medio Ambiente, como organismos dedicados específicamente
de na tu· a l a vigil
ancia de sus respectivos derechos difusos.
ha venido traduciendo en auténticas garantías constitucionales
Las sociedades modernas han venido aceptando la habilitación legal
raleza política. de las llamadas organizaciones no gubernamentales (conocidas común-

1' Vi LLEGAS MoRENo, José Luis, La Tutela Jurisdicci


á11 de los f11tereses Difusos Y Co� ¡-
Católica de .,.. .<�h•l'll6 ' hx·ZM1UDIO, 1-léctot·. 1-.'stlllliu., Jurídico., en tonw a la Constilllcián
tit•us, Una aproximación. En la revista Tachirense de la Universidad ,\/cxicww de /')17
en su Se¡>tuagt'si1110 Quinto A11íver.\l1río, UNAM, México,
No. S, Venezuela, 1994, p. 100. 1992, p. 181.
!11tereses IX FERNÁNDEZ SEGADO, Francisco, La Tille/a de los intereses difÍisus,
1" l-IERNÁNDEZ MARTÍNEZ, María del Pilar, Meca11ismus de Twela de los Revista Chilena de
Derecho, vol. 20, Santiago de Chile, 1993, pp. 252-255.
sus v Colectivos, 1". ed., UNAM, México, 1997, pp. 95 y 96.
244 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN JJERECHOS DEL HOMBRE - J. Mateos Santillán ; R. Contreras Bustamante 245

mente como "ONG's"), que pueden instar de manera jurídica y procesa} El establecimiento de las garantías sociales en la Constitución Mexi­
en la defensa de derechos o intereses difusos, como si se tratara de po. ca na de 1917, -que fue la primera Carta Magna del mundo que los ins­
testades propias. Además, existen acciones populares, que se presen tan tituyó, aunque no suele ser reconocido por la mayoría de los juristas in­
de manera ex profesa cuando alguna comunidad se siente vulnerada en tL·rnacionales- luego en Rusia y la de Weimar, Alemania, alcanzaron
alguno de estos intereses o derechos difusos, que si bien no se realizan a11os después, el reconocimiento de la propia Organización de las Na­
por los conductos procesales establecidos, políticamente sus manifesta­ ciones Unidas, y dio origen al Derecho Social y a su necesaria inclusión
ciones logran influir en el sentido de las decisiones gubernamentales doctrinaria dentro de la Teoría Constitucional en el capítulo de las ga­
cuando estas son legítimas. "Se trata, desde luego, de una garantía c C:. rantías ciudadanas.
lectiva en la medida en que el actor popular pretende la defensa de inte­ La tendencia que existe actualmente hacia la inclusión constitucio­
reses colectivos, y no personales".1Y nal de los derechos llamados de 'Tercera Generación" o "Derechos Di/Íl­
"
La Constitución mexicana recoge actualmente una variedad de de­ sos (explicados en el inciso anterior de este capítulo), ha obligado en
rechos difusos, como el derecho a la salud, el derecho a disfrutar a un consecuencia, a modificar los criterios para la catalogación de los dere­
medio ambiente adecuado para su desarrollo y bienestar o el que tiene chos fundamentales; coincidiendo la mayoría de los autores modernos

toda familia a disfrutar de vivienda digna y decorosa, que se establecen en agruparlos en tres grandes apartados, de acuerdo a su concepción y

en los párrafos cuarto, quinto y sexto, respectivamente, del artículo 4° aceptación, a lo largo del tiempo.
'�
de nuestra Carta Magna, por ejemplo. Derechos de "Primera Generación ". -Corresponden a esta clasifica­
Se reconoce el derecho a la salud, que no sólo implica el ser atendido ción, el grupo de garantías individuales clásicas que doctrinariamente
médicamente en caso de enfermedad o urgencia, sino también el accesO son consideradas como "núcleo" de las sucesivas generaciones de dere­
a la medicina preventiva y a la educación para la salud. Otro derecho chos v que contienen derechos civiles y políticos de los individuos. "Son
cada día más importante para la humanidad en general y del individuo aquellas normas que garantizan a los seres humanos, en cuanto a indi­
en particular, es que el disfrute de un medio ambiente sano y ecológica.: . viduos, el goce de bienes jurídicos básicos de la persona humana, esto
mente equilibrado; y además, una alta aspiración social consistente en cs. l a vida, la libertad, la igualdad, la propiedad y la seguridad" .20
el compromiso de todas las instancias sociales para procurar que t� .)
Siguiendo la anterior definición, los derechos humanos se clasifican
las familias mexicanas puedan llegar a alcanzar una vivienda digna. principalmente en esos rubros de derecho, pero vale la pena aclarar
La misma tendencia está presente, por lo que hace al derecho al que son a la vez conectados y complementarios entre sí. En base en lo
sarrollo, cuando la propia Constitución establece, en el primer párrato·' que establece nuestra Constitución, de manera sucinta, nos permitimos
del artículo 25, que: "Corresponde al Estado la rectoría del desarrollo citar los derechos fundamentales que nuestro sistema jurídico reconoce,
ordenados en esos grandes apartados:
cional para garantizar que mediante el fenómeno del crecimiento econQ¡;
mico y el empleo y una más justa distribución del ingreso y la A. Derechos de Igualdad. Goce de las garantías que establece la Cons­
titución para todo individuo (art. 1 °.); prohibición de toda discrimina­
permita el pleno ejercicio de la libertad y la dignidad de los i
" ción motivada por origen étnico o nacional, género, edad, capacidades
grupos y clases sociales, cuya seguridad protege esta Constitución.
difere ntes, condición social, condiciones de salud, etc. (último párrafo
d e] mismo art. 1 °.); igualdad jurídica del hombre y la mujer (art. 4".);
9.8. CLASIFICACIÓN
derecho a la información (art. 6°.); proscripción de títulos de nobleza o
DE LOS DERECHOS DEL HOMBRE
cualquier prerrogativa u honores hereditarios (art. 12°.); restricción al
a de so n1etimi
En el pasado, la clasificación de estos derechos se enfocab ento de juicios con apoyo a leyes privativas y en tribunales es­
y procu Peciales (art. 13".) el impedimento a la existencia de fueros (mismo art.
nera esencial y única, al aspecto individual del ser humano ;
an en base 13" ; el
agrupar a las garantías que las Constituciones establecí .) derecho a la nacionalidad, así como, el de adquirir la ciudada­
grandes rubros: igualdad, libertad, propiedad y seguridad. ní a (arts. 30°. y 34°., respectivamente).
-------

IY 20 ARÉVALO ÁLVAREZ, Luis Ernesto, El Concepto Jurídico v la Gé11esis de los Derechos


DA SILVA, José Alfonso, Cursos de Direito Constitucimwl Positivo, 9". ed., .
Editores, Sao Paolo Brasil, 1993, p. 404. 1-/¡llllullos, 1 " . ed .. Universidad Iberoamericana, Plantel Golfo Centro, México, 1997, p. 75.
246 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓ
N r [Ji·RECHOS DEL HOMBRE -J. Maleo' Santillún R. Contrcras Bustarnantc 247

B. Derechos de Libertad. En este apartado, nuestra Constitución c on. in,estigar y perseguir delitos; así como que la imposición de penas es
templa un amplio catálogo de garantías: prohibición de la esclavitud l·:-.:clusiva de la autoridad judicial (art. 21°,); la prohibición de penas in­
(art. 1" ., segundo párrafo); derecho a decidir libremente el número y es­ lamantes, inusitadas y trascendentes y la pena de muerte, lo determina
paciamiento de los hijos (art. 4"., párrafo segundo); libertad de trabajo
L'l a rtículo 22". constitucional; y la garantía de que nadie puede ser juz­
(art. 5".); prohibición de cualquier contrato, pacto o convenio que me­ �ado dos veces por el mismo delito y que ningún juicio criminal podrá
noscabe la libertad, proscripción o destierro (art. 5"., párrafos quinto y
ll'ller más de tres instancias, se dispone en el numeral 23°.
sexto); libertad de pensamiento y expresión de las ideas (art. 6".); liber­
tad de imprenta (art. 7".); libertades de asociación y reunión, con fines
9.8.1. DERECHOS ECONÓMICOS.
pacíficos (art. 9".); derecho a poseer armas en el domicilio, no reserva­
SOCIALES Y CULTURALES O DE "SEGUNDA GENERACióN"
das para las fuerzas armadas (art. 1 0".); libertad de tránsito y del e sta­
blecimiento del domicilio (art. 11 °.); "libertad de intimidad, que co­ Las luchas sociales a finales del siglo XVIII y de todo el siglo XIX, se
rresponde a dos aspectos: inviolabilidad de la correspondencia e invio­ cifraron en alcanzar un principio: la igualdad. Pero no el concepto de
labilidad del domicilio (art. 16".)";21 libertades de conciencia y de culto i�ualdad universal que hoy disfrutamos, sino lisa y llanamente la igual­
(art. 24°.); la prohibición de monopolios y estancos (art. 28°.); las pre­ dad entre gobernantes y gobernados. En tales épocas, en muchas latitu­
rrogativas de votar, ser votado y para tomar las armas en defensa de la des subsistía aún la esclavitud, el coloniaje, la discriminación de dere­
República (fracciones 1, II, y IV del art. 35".); así como, la potestad de chos políticos a la mujer y muchas otras diferencias.
afiliarse libre e individualmente a los partidos políticos (arts. 35°., frac­ El Constitucionalisnzo logró algo que se veía difícil de consolidar: el
ción III y 41".).
cambio de titular del principio de la soberanía, para arrebatárselo a los
C. Derechos de Seguridad Jurídica. En este aspecto, las garantías cons­
monarcas y sus gobiernos, y trasladarlo a la potestad popular. El go­
titucionales son: derecho de petición (arts. 8". y 35°. fracción V); irre­
bierno dejó de ser un mandamás, para transformarse en simple manda­
troactividad de la ley, privación de derechos únicamente mediante pro­
tario y representante de los designios del pueblo.
ceso seguido conforme a las formalidades legales, prohibición de
El gobierno dejó de ejercer el poder de manera discrecional y auto­
aplicación de analogía o mayoría de razón en juicios penales (garantías
ritaria; y, a partir de la aparición de las Constituciones, se sometió a lo
previstas en el artículo 14".); la prohibición de extradición de reos polí­
dispuesto en ellas, pudiendo hacer sólo aquello que les esta expresa­
ticos (art. 15".).
mente autorizado.
Los principios de legalidad y de autoridad competente, proscripción Una vez lograda la concepción del sometimiento por igual a la ley
a la celebración de actos de molestia personal, a la familia, domicilio, entre "detentadores y destinatarios del podcr"Y la contienda ideológica
papeles o posesiones, sino mediante mandamiento escrito, fundado Y se dirigió hacia una teoría basada en la justicia social, que permitiera a
motivado, aprehensión sólo por autoridad judicial, términos para la de­ la sociedad resolver o aminorar las diferencias sociales que emanan de
tención en averiguaciones previas, cateas sólo por mandato judicial; (to­ un trato equitativo entre fuertes y débiles; o bien, entre ricos y pobres:
das ellas están garantizadas en el numeral 16°.); la prohibición para ha­
la <'ifll idad.
cerse justicia por propia mano, el derecho a la administración d.e
Se ocuparon las Constituciones del principio del siglo pasado por
justicia y la abolición de prisión por deudas de carácter puramente el­
ami norar las injusticias surgidas del exacerbado tratamiento igualitario,
vil, quedan establecidas en el artículo 17°.
Los aspectos relativos a la prisión preventiva sólo para delitos
que PUesto que se concluyó que el Estado debería crear normas e institucio­
ctar· ne s que dieran tratamiento desigual y compensatorio a los desiguales
merezcan pena corporal (art. 18°.); las garantías y términos para di
de la sociale s.
se auto de formal prisión (art. 19".); las garantías del inculpado Y
ina­
víctima u ofendido en procesos del orden penal (art. 20°.); la determ Implican un hacer por pal'le del Estado. en cambio las garantías indi\'idua­
ción de que sólo el ministerio público y la policía a su mando p
ueden les, representan ¡ximor·dialmente una abstención del propio Estado.2l

22
CARP!zo. Jorge. l::studios Constitucio11ales. 2". cd . .
21 UNAM. La Gran Enciclopedia. Térn1inos que Kad Loe\Vcnstcin utiliza a lo largo de todo .'-!ll /Jcrcclto Ccnt:-;titucionul."
2l
México. 1983. p. 432. CA!<l'IZO. Jorge.op. cit . . p. 436.
248 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN DERECHOS DEL HOMBRE - J. Makos Santillán 1 R Contreras Bustamante 249
.

Rodolfo Lara Ponte, define a las garantías sociales, como: Las características básicas de esta clase de derechos son su carácter
colectivo -general. no de clase o segmento social- e intemporal y, al
Los derechos humanos de carácter colect ivo, destinados principalmente a
los sectores de la estructura social económicamente débiles, quedaron des­ igual que los demás tipos de derechos fundamentales, "tienen un objeti­
de la redacción original de la Constitución de 191 7 en los artículos 3, 27 \O en común: el bienestar y la dignidad de los seres humanos"Y
y 123. sus contenidos están destinados a la educación, la propiedad, con Otro tipo de variantes en la clasificación de estos llamados derechos
sus modalidades y al trabajo y la previsión social, respectivamente.24 difusos, la refiere el maestro Carlos Quintana Roldán: "son los de géne­
ro. particularmente referidos a la mujer y su protección; derechos de
Además de las garantías sociales en materia de educación y las
las minorías o de ciertos grupos que requieren especial atención y pro­
cuestiones agrarias y laborales consagradas en los artículos antes men­
tección por su posición en la sociedad: como derechos del niño, del an­
cionados, se debe adicionar a ellas a las garantías dispuestas por los ar­
28
ciano, de los indígenas, de los minusválidos, de los enfermos, etc."
tículos 1" y 2°. constitucionales -de reforma reciente, pues data de oc­
.

tubre del 2001-, que reconocen y garantiza el derecho de los pueblos


indígenas a su libre determinación y autonomía para decidir sus formas 9.9. SUSPENSIÓN DE GARANTÍAS,
internas de convivencia y organización social, económica, política y cul­ ESTADO DE SITIO Y ESTADO DE URGENCIA
tural, así como en muchos otros aspectos; y lo dispuesto en el artículo 41°.
De conformidad con el tópico constitucional, como observa Manuel
constitucional, respecto de los partidos políticos, que configura de ma­
Martínez Sospedra, existen dos formas generalmente concebidas para
nera legal a organizaciones de ciudadanos de interés público para gene­
interrumpir la vigencia de las garantías y, en su caso, de los derechos
rar vínculos -por medio de la libre asociación política- y reconoce a
humanos: la dictadura constitucional y los llamados estados de excep­
estas instituciones que aglutinan a la ciudadanía, para la defensa de
o estados excepcionales. Ambas figuras, por ejemplo, existen en la
ci(JII,
programas, ideas y principios y les faculta su participación en los pro­
\ig:enteConstitución Francesa: la dictadura constitucional (art. 16°.) y
cesos electorales para poder acceder al poder público.
El Estado, no sólo reconoce el derecho ciudadano de asociarse en
el estado de sitio (art. 36°.). La Constitución Mexicana, en cambio, sola­
mente autoriza la suspensión de garantías en el artículo 29, ya que en
pos de la defensa de sus derechos políticos y participar en las cuestiones
su último artículo, el 136, establece que "esta Constitución no perderá
públicas, sino que está obligado legalmente a respetar su campo de acción.
su fuerza y su vigor, aún cuando por alguna rebelión se interrumpa su

9.8.2. DERECHOS DE LA "TERCERA GENERACióN"


observancia".

O DERECHOS DIFUSOS
Existen diversas técnicas para decretar la suspensión de garantías y
para regular los estados excepcionales. En algunos sistemas, se hace in­
A partir de la segunda década del siglo XX, se perfilaron dentro del ll:rvenir al parlamento o cuerpo legislativo (véase los artículo 55 y 1 16
Constitucionalismo "nuevos afluentes de la relación Estado-sociedad Y de la Constitución española), además de poder contar con una ley espe­
el reconocimiento de otras responsabilidades".2s cial sobre esta materia. En otros paises, las decisiones se toman desde
Estos nuevos valores, los define el maestro Cipriano Gómez Lara, la esfera del Poder Ejecutivo, dando, o no, aviso al cuerpo legislativo.
como "derechos sociales, que se manifiestan en el contexto de la colecti· En un estado de cosas normal, las libertades nunca deben ser afec­
vidad o de la propia humanidad en su conjunto, en cuanto a su supervi· tadas por medidas de suspensión. Solamente cuando sobrevengan suce­
vencia, sanidad v disfrute de la vida sobre la tierra: como el derecho a sos extraordinarios, que pongan en grave conflicto a la sociedad, que no
la paz, derecho �
la conservación ecológica, derechos colectivos de loS Puedan dichos acontecimientos ser afrontados satisfactoriamente por el
26
consumidores, derecho de refugiados, de minorías étnicas, etc.".
li-,ta Unive¡·sitaria de Derecho Procesal. no. 4, Universidad Nacional de Educación a Dis­

24 LARA Po�TE, Rodolfo. Los Derechos Hwnmws en el Co11stitucionalismo Mexicano• tanci a, Madrid, España, 1990.

1". ed .. UNAM, México, 1993, p. 174. •


27 BRUWN Wuss. Edith, /11 filintess lo fúture ge11erutio11s: flltenwtimwl La\\', Ccmmtmt

2' PoNTIFES MARTÍNEZ, Arturo v PoBLANO CHÁVEZ, Daniel, Los Derechos AdministraN· i'atrinumv wul [11tergellerati011lll Equit v, The United Nations Unive1·sity, Tokyo, Japan,
' .
¡•os del homhre v del ciudwlmw, po.�ihilidades de aplicaciú11 <'11 AJéxico, 1" . ed., INAP, . l'J 9 pp. 96-97.
t: ,
co, 1993, p. 94. 2H QUINTANA RoLDÁN, Carlos F. Y SABIDO PENIUIE, Nm-ma, Derechos llwmmos, Porrúa,
26 GóMEZ LARA, Cipr·iano, La protecció>l procesal de los derechos fimdamelltales, en México, 1998, p. 19.
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN J. Matcos Santillán ¡ R. Contrcra> Bustamant c
250 DERECHOS DEL HOMBRE -
251

Estado haciendo uso de sus recursos y de sus medios ordinarios, se po­ Repetimos que se debe relacionar el al"tículo 29 con estos artículos
drá hacer uso de las facultades especiales que previene la propia Cons­ citados, entre otros muchos que pueden verse involucrados, según la
titución para, por vía de excepción, poder incluso suspender libertades naturaleza de cada uno de los casos de excepción.
y garantías o Derechos Humanos. De ahí el nombre que la doctrina les Pues bien y pese a la apertura de los supuestos previstos en el ar­
da de estados excepcionales, en cuyo supuesto, caben las referidas sus­ tículo 29, queda muy claro cuál es el procedimiento a seguir para poder
pensiones de derechos humanos. suspender las garantías que fuesen obstáculo para hacer frente, rápida
Tales suspensiones de los derechos humanos, pueden ser decretadas , fácilmente, a la situación.
para todo el territorio nacional o para una región o parte circunscripta Dicha suspensión solamente podrá hacerse por iniciativa exclusiva

del mismo. Igualmente, las suspensiones pueden abarcar a alguna, a al­ del Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, de acuerdo con los ti­
tulares de todas y cada una de las Secretarías de Estado y también con
gunas o a casi todas las garantías individuales o libertades y derechos
el Procurador General de la República; pero con la aprobación del Con­
humanos. En cada supuesto se deberá precisar uno y otro extremo, es
e:reso v, en sus recesos, con la anuencia provisional de la Comisión Per­
decir, si se suspenden en todo o en alguna parte del territorio nacional;
;nane �te, si dicho Congreso está en período de receso, existiendo la
y precisar cuál o cuáles son las garantías, las libertades o los derechos
obligación de reunirse de inmediato para poder ratificar la autorización
que se afectarán por la suspensión.
correspondiente.
Los casos, en particular, en los que se justifique declarar los estados
Sin duda, para precisar los pormenores de la suspensión de garan­
excepcionales, por regla general, se deberían encontrar enunciados, uno
tías, así como de las medidas a emplear, se deberá tomar en cuenta cada
a uno, en las propias Constituciones. Sin embargo, con frecuencia, esta
caso. Desde luego, los supuestos casos de invasión requieren la movili­
determinación es imprecisa y trata a los estados de excepción de mane­ zación inmediata de las fuerzas armadas, y aún de la reserva nacional;
ra muy vaga, o empleando expresiones muy genéricas y hasta indeter- mientras que los casos de alteración de la paz pública, los de emergen­
minadas. cias causadas por alteraciones y las catástrofes provocadas por el medio
Esto es lo que sucede en el caso mexicano. En efecto, las previsio- ambiente requerirán de medidas apropiadas a cada emergencia. En
nes del artículo 29, que se ocupa de regular esta materia, son muy am- . suma, corresponde al Congreso autorizar de manera formal todo lo re­
plias, genéricas e indeterminadas. Dicho artículo menciona los casos: . ; lativo a la suspensión de garantías tomando en cuenta la naturaleza y
a) de invasión del territorio nacional; demás circunstancias del evento de que se trate. La suspensión será
b) de perturbación grave de la paz pública; y siempre por tiempo limitado y solamente afectará a las garantías abso­
e) el de cualquier otro -caso- que ponga a la sociedad en grave peli�' lutamente indispensables para hacer frente a la situación.
gro o conflicto. Mención aparte merecen las contingencias de carácter sanitario. La
fracción XVI del artículo 73 constitucional, establece un procedimiento
En este artículo caben, pues, todos los estados de excepción de carácter excepcional.
bies, que a juicio del Titular del Poder Ejecutivo y la aprobación del
Dice que en "caso de epidemias de carácter grave o peligro de inva­
gislativo, se consideren pertinentes.
por sión de enfermedades exóticas en el país", la Secretaría de Salud podrá
Por la enorme generalidad de las previsiones mencionadas,
dictar las medidas preventivas indispensables, a reserva de ser después
artículo
tipo indeterminado que se consagra, es manifiesto que el sancionadas por el Presidente de la República.
para su uso, debe relacionarse con muchos otros artículos de la
es
tución y muy especialmente con el 89, que habla de las facultad
moviliza r a 9.10. PROTECCIÓN ADMINISTRATIVA
mendadas al Ejecutivo Federal (como la facultad de
re so DE LOS DERECHOS DEL HOMBRE
las facultades del Cong
fuerzas armadas); con el 73, que enlista
dec
la Unión e incluye las relativas a la autorización para una l A unque no siempre se aclara explícitamente, los reconocimientos
salud pública , egales de
de guerra; así como las de carácter sanitario y de Derechos del hombre siempre han venido acompañados de la
tiem po
ra; así como con el artículo 129 que proh íbe al ej ército en Probación de diferentes medios, también legales, para su protección. D e
h
alq uier maniobra que no sea ech o, las declaraciones, acorde con la etapa histórica en la que apare­
paz, salir de sus cuarteles y realizar cu
Cen , s
on declaraciones más bien incompletas. Esto sucede con la fran-
ti"ictan1ente castrense.
252 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
,, Jli'RECIIOS DEL HOMBRE - J. Mateo, Santillán R. Cont•·n'" Bu,tamantL' 253

cesa de 1789; con los derechos y libertades incorporados a la Constitución Los sistemas de recursos formales ante los tribunales administ
rati­
española de 1812; con las breves referencias, o declaraciones conteni­ han alcanzado un rápido y muy perfeccionado desarrollo en los
paí­
\ tlS

das en el Acta y Constitución mexicana de 1824, y con las así mismo -,L'S europeos como Francia, Alemania
, Italia, España. Se trata del desa-
muy lacónicas declaraciones contenidas en cada una de las Constitucio­ 1 rollo de una muy bien elaborada doctrina del Derecho Administ
rativo,
nes estatales de la Federación mexicana, publicadas a partir de noviem­ LJllL' tiene por objeto general el estudio de la Administración Pública, la
bre de 1824. Inclusive, ahora mismo las declaraciones de nuestros vi­ rL·gulación de las relaciones entre Administración Pública y los Particu­
gentes textos constitucionales siguen adoleciendo del mismo defecto, es lares. Y que, en particular, se ha ocupado de desarrollar la justicia ad­
decir, todavía pueden ser consideradas declaraciones incompletas. nlinistrativa, como un conjunto de recursos de protección del particular
Es cierto que, los medios para proteger los derechos enunciados en 1 rL·nte a los descuidos o los abusos de dicha Administración.
dichas declaraciones, ahora mismo todavía pueden ser considerados En México, ciertamente el desarrollo del Derecho Administrativo
medios o sistemas de protección insuficientes. Sin embargo, entre los Lomenzó hacia mediados del siglo XIX, de manera parecida a como se
medios mejor conocidos y desarrollados, son éstos que caen bajo la ex­ luL-ron impulsando los estudios sobre esta misma materia en España y
presión genérica de protección administrativa de los Derechos del hom­ \arios otros países europeos. En nuestro país, aparece la obra clásica de
bre, medios que van desde los antiguos instrumentos de protección TL·odosio Lares; incluso aparecen otras obras de Derecho Constituc
io­
otorgados por los reyes de la Edad Media (como eran los privilegios es­ nal. que siguen una metodología muy parecida a la metodología em­
critos y salvoconductos reales, las cartas de amparo, o los amparos para pleada en las obras sobre Derechos Administrativos.
pedir merced al Rey del Derecho Castellano; la firmas, las contrafirmas, Ahora bien, mientras que en los países europeos los estudios del
De­
los recursos de agravios del Derecho Aragonés; las figuras diversas del rL·cho Administrativo fueron creciendo hasta lograr una gran perfección
llamado ombudsman, entre otros muchos ejemplos), hasta la creación en materia, por ejemplo, de recursos administrativos, en México, en
de los modernos sistemas de recursos y acciones del moderno Derecho cambio, el instrumento que se perfecciona es el juicio de amparo.
Y este
Administrativo, incluidas las figuras de las Comisiones de Derechos Hu­ es el motivo por el cual el desarrollo del Derecho Administrativo,
no ha
manos, las procuradurías sociales, entre otros muchos ejemplos que se alcanzado esa misma perfección así lograda en dichos países
europeos.
pueden citar. En todo caso, debe revisarse la conveniencia de permitir
recursos admi­
Como todos sabemos, los Derechos Humanos son sagrados, deben nistrativos para proteger garantías y derechos, cuando
luego se permite
ser inviolables. Su violación debe ser combatida siempre. Y dicha viola­ acudir al juicio de amparo. Quizá lo mejor fuera, bien o
hacer de los re­
ción proviene, por principio de cuentas, de las mismas autoridades, las cursos administrativos, instancia firmes y definitiv
as; o bien suprimir
cuales están obligadas a respetar aquellos derechos que exigen respeto, dichos recursos administrativos y permitir acudir
al juicio de amparo
como es el caso de las libertades de la personalidad, de las garantías de desde un principio y así ganar tiempo y recursos
económicos.
la libertad, de la integridad física, inviolabilidad de domicilio, de corres­ Como lo estudiará el lector en su momento, o como ya lo
habrá es­
pondencia y demás derechos de posesión y de propiedad. Autoridades, tudiado, los tribunale
s administrativos no forman parte de la jurisdic­
además, están obligadas a otorgar una respuesta positiva de satisfac­ ción ordinaria. Por
regla general, se trata de tribunales adscritos a la
ción, como es el caso del derecho a la salud y los derechos de la seguri­ misma Administración,
ante los cuales se plantean los diferentes recur­
dad social, el derecho a la educación, entre otros muchos. sos en contr
a de toda clase de actos o de omisiones violatorias de esta
Pues bien, el individuo, para hacer respetar estas libertades, cuando clase de Derec
hos Humanos.
la autoridad las quebrante; o para obtener la acción positiva de satisfac· Los sistemas de protección del tipo
de juicios de amparo se han de­
­ sarrollado
ción, que la autoridad no le ha proporcionado oportunamente; se dispo , tanto en épocas históricas del pasado (los encontramos en
Las Siete Partida
nen de ciertos sistemas de medios de protección administrativa. Entre s) cómo en la etapa del Estado moderno, o Estado de
re· Derecho.
estos sistemas de medios de protección se enumera a los sistemas de Esta clase de sistemas se adscriben más propiamente al Dere­
cursos formales ante los tribunales administrativos, llamados
de justicia administrativa; así como los sistemas de las llamadas proc
U .. cho Constitucional que al Dei-echo Administrativo. Pero son muy útiles
Y eficaces para proteger al partic ular frente a los
t ció abusos de la Adminis­
m
radurías sociales; y algunos otros instru ent os de configuración �a n. Son sistemas, por otro lado, adscritos
a la jurisdicción ordina­
cial. como los juicios de amparo para combatir actos administratiV� ria, es decir, al Poder Judicial, o a la llamada ju
sticia de protección
constitu
viola t orios de derechos humanos; las visitas de cárceles; o los indultoS· cional.
254 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
DERECHOS DEL HOMBRE J. Mateos Santillán i R. Contreras Bustamante
255
-

Estos recursos de amparo o juicios de amparo hablando en general


9.11. PROTECCIÓN JURISDICCIONAL
resultan ser medios muy eficaces para combatir desde las detenciones
DE LOS DERECHOS DEL HOMBRE
arbitrarias, hasta el retiro de licencias, cancelación de permisos y con­
cesiones. Hablando en general, insistimos, pueden ser medios más efi­ En México predominó históricamente la protección jurisdiccional
caces, rápidos y económicos que el uso de los sistemas de protección de de los derechos humanos y esto se originó en función del papel que jugó
la justicia administrativa. Como todos sabemos, se trata de unos recur­ L'l amparo como instrumento jurídico, para garantizar la Constituciona­
sos que provienen, entre otras fuentes, de Las Siete Partidas, pese a que lidad y legalidad de los actos de autoridad, sin embargo, la historiogra­
muchos tratadistas del Juicio de Amparo quieran seguirlo regando. fía de ésta evolución dejó de lado algunos aspectos del proyecto origi­
Los sistemas de las procuradurías sociales también tienen orígenes nalmente planteado por Otero y sus vinculaciones con el Amparo.
remotos, como la procuraduría de indígenas del Derecho Indiano; la
procuraduría de pobres; las procuradurías agrarias y las laborales a fa­ 9.11.1. EN EL PENSAMIENTO DE MARIANO OTERO
vor de los trabajadores del Estado. Incluso, dentro de estos sistemas ca­ Y LA CONSAGRACIÓN DEL AMPARO EN LA CONSTITUCIÓN DE 1857
bría enumerar a las Comisiones de Derechos Humanos, así como a las
Tradicionalmente la doctrina mexicana reduce el papel de Mariano
magistraturas del tipo del ombudsman.
Otero al de "Federalizador del Amparo" o al de patrocinador de la rela­
Por último, hemos mencionado también otros medios muy especia­
¡¡, idad de la Sentencia de Amparo, nada más parcial y distorsionado,
les de protección administrativa, como son las visitas de cárceles, los in­
pues basta fijar la vista en dos documentos: El voto particular del Dipu­
dultos y, más en general, los sistemas de supervisión y de contraloría; o
tado Mariano Otero, y su consecuencia, el Acta de Reformas de 1847,
los recientes sistemas de protección de los derechos políticos de votar y
para percatarnos que la posición e tan insigne jurista, frente al proble­
poder ser votados para cargos de elección popular y la protección de los
ma de los derechos humanos es totalmente distinta a la que comúnmen­
mismos derechos de los militantes al interior de los partidos políticos.
te se considera.
Las visitas de cárceles se remontan al Derecho medieval y, muy en
Cabe señalar que el Acta de Reformas de 1847 debe ser estudiada
particular, a los orígenes del Estado de Derecho en España y en México
en el marco de la guerra contra los Estados Unidos de América y de
(Cortes de Cádiz de 1810-1813). Siguen en vigor, a pesar de que ya nin­
esta forma se entenderá con claridad que más que una nueva Constitu­
gún juez, ni ningún tribunal las practica y a pesar de que el no hacer es­
ción, significó un sistema complejo de protección para la población y el
tas visitas está tipificado como un delito contra la libertad de las perso­
territorio mexicano ante los intereses norteamericanos.
nas. Las visitas de cárceles son el medio más eficaz y directo que tienen
El Acta de Reformas de 1847 es en suerte, el más formidable siste­
los jueces para proteger a los detenidos y a los sentenciados contra toda
ma de protección que la Constitución y los mexicanos hayan tenido ja­
clase de abusos de las autoridades y funcionarios del servicio peniten­
más, el sistema se dividía en cuatro subsistemas; a) de protección al fe­
ciario. Se trata de un sistema de protección administrativa depositado deralismo, b) de protección de los derechos humanos y ciudadanos e)
en las manos de los jueces. de protección Constitucional y d) de responsabilidades. 1
1,
Como se puede apreciar, la protección administrativa abarca un sin
Por la naturaleza de nuestro trabajo me concretare a explicar dos,
número de sistemas y de medios que pueden usarse a favor de los Dere­
el rel ativo a los derechos del hombre y el relativo a la protección
chos Humanos. Así mismo, vemos que ciertos sistemas de protección. Constitucional.
como los juicios de amparo, como las Comisiones de Derechos Huma­
nos, de hecho pueden usarse con mucha eficacia en el campo de la pr':; 9.11.1.1. Los derechos humwws en el Acta de Refomzas
tección administrativa, conjuntamente con el uso de los recursos adiill· · _v sus subsistema de protección
nistrativos; en sustitución de estos e, incluso, para pedir la revisión df
Hemos dicho y ahora reiteramos, que la explicación básica de la na­
las resoluciones emitidas por dichos Tribunales Administrativos, en tural eza del Acta
de Reformas de 1847 se encuentra en el intento de es­
xico se puede hacer uso del juicio de amparo, que es un magnifico tab lecer
un sistema de protección jurídica para la Nación Mexicana, en
trumento para combatir toda clase de actos o de omisiones de sit u a ción de crisis frente a una guerra de expansión. En cuanto a la pro­
administrativo. A continuación se exam ina más en detalle este te cción de la población como elemento de la Nación, según las tesis de
de protección jurisdiccional, por el juicio de amparo. la época, se tenían dos opciones: la francesa o nortea ericana, que
m
256
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN DERECHOS DEL HOMBRE - J. Mateos Santillán 1 R. Contreras Bustamante 257

consistía en hacer un listado de los derechos humanos e incluirlos en la e) Por el artículo 25 del Acta de Reformas se estableció el amparo en
Constitución, y la española, concebida desde la Constitución de Cádiz materia administrativa y contra leyes, como puede apreciarse, nos en­
de 1812, donde se sientan los principios generales para la defensa de contramos frente a tres premisas diferentes, y a la vez complementarias
los derechos humanos en la Constitución y se remite a una ley constitu­ que requerían cada una su propia ley reglamentaria, con lo que Otero,
cional, con el mismo rango que la constitución, la enumeración y des­ �eparaba el sistema de protección de los derechos humanos del Amparo.
cripción de los mismos. El problema que agrava la interpretación correcta del diseño de Ote­
De esta forma, los Constituyentes de la de 1847, se inclinaron por el
ro, es que jamás se reglamentaron los artículos 4° y so del Acata de Re­
sistema español en razón de la premura con que trabajaban, ante los
formas y el Amparo, tuvo que integrarse a la Constitución de 18S7 para
ataques norteamericanos en contra de nuestro país.
�er reglamentado hasta 1861.
De esta forma, la lectura del Acta de Reformas nos conduce a dos
En cuanto al papel que jugaba el Amparo en el sistema de Otero,
artículos, el 4° que señalaba:
cabe señalar que, era un papel complementario, pues existían las accio­
Por una ley se arreglará el ejercicio de estos derechos, la manera de probar nes de inconstitucionalidad contra leyes locales (Artículo 22), las accio­
la cualidad de ciudadano y las formas convenientes para declarar su pérdi­ nes de inconstitucionalidad contra leyes federales (Artículo 23), y el am­
da o suspensión. El ciudadano que haya perdido sus derechos políticos, paro (Artículo 2S); las acciones de inconstitucionalidad contaban con
puede ser rehabilitado por el Congreso General.
efectos generales y estaban en manos del poder legislativo, en tanto que,
Así como en el Artículo 4° se regulan los derechos ciudadanos o po- las sentencias de amparo, tenían efectos relativos de protección para
líticos, el Artículo S0. Se refería a los derechos del hombre: quién había solicitado el amparo, "sin hacer ninguna declaración gene­
ral respecto de la ley o del acto que lo motivare", principio conocido co­
Para asegurar los derechos del hombre que la Constitución reconoce, una
múnmente como "fórmula Otero" o de la relatividad de la sentencia de
ley fijará las garantías de libertad, seguridad, propiedad e igualdad, de que
Amparo.
gozan todos los habitantes de la República y establecerá los medios para
hacerlas efectivas.
9.11.1.2. El Amparo en la Constitución de 1857
Lo expuesto nos conduce a entender que en 1847 se separó lo relati·
Como se puede observar en el punto anterior, el sistema ideado por
vo a los derechos del hombre de la cuestión de los derechos ciudadanos,
Otero, era muy amplio y ambicioso, sin embargo, las circunstancias de
pero fundamentalmente nos deja ver que se debieron crear dos leyes
la guerra lo hicieron imposible, a lo que se debe sumar los problemas
constitucionales, una reglamentaria de los derechos humanos y otra d� que surgieron cuando un grupo de 11 diputados federales impugnó la
los derechos civiles, con el agregado que deberían contener los medioS Constitucionalidad del Tratado de Guadalupe Hidalgo, con el que Méxi­
para hacerlas efectivas, es decir, se debieron crear una serie de recur� co perdió más de 2 millones de Km2 de territorio y se provocó un grave
sos o juicios especiales, destinados a proteger los derechos humanO!t conOicto legal y constitucional que anularon los postulados de Otero.
por un lado y los derechos ciudadanos por otro. En 1854 Antonio López de Santa Anna, deroga el Acta de Reformas y la
En la actualidad se ha generalizado la idea de la existencia del ant• Constitución federal, con ello, el sistema Otero se destruyó.
paro, como un sistema de protección jurisdiccional de los derechos del Los constituyentes de 18S7 contaron con más tiempo para elaborar
hombre, si Icemos con atención los artículos 4° y so del Acta de Refor·
l a Constitución, lo que les permitió elaborar un catálogo de Derechos

mas, se verá que ésta apreciación era parcialmente distinta en 1847


Humanos, cuya protección se confió al Amparo, una vez que se dese­
charon l as acciones de Inconstitucionalidad y los sistemas específicos
como a continuación se explicar:
de protección de los derechos humanos y ciudadanos, que se encontra­
a) Por el artículo 4° se ordenaba la creación de una ley
ban en el Acta de R e formas de 1847.
na!, para arreglar el ejercicio de los derechos ciudadanos.
De esta forma, el Amparo recibió una doble responsabilidad, ser
b) Por el artículo 5° del Acta de Re fo rmas, se pensaba en un .
Instrumento de protección de los de re c hos humanos y medio de control
legal que:
Para que las autoridades se mantengan en el ámbito de sus compete n
• Fijara las garantías de libertad, seguridad e ig ua lda d. ­

• Estableciera los medios para hacerlas efectivas. cias constitucionales Y legales, así, desde 1857 hasta la creación de la
258 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
DERECHOS DEL HOMBRE - J. Mateo' Santillún 1 R. Contrera' Bu,tamallle
259

Comisión Nacional de Derechos Humanos, predominó en México el sis­ • El amparo casación sólo procedía por violaciones al procedimien­
tema de protección jurisdiccional de los Derechos Humanos. to cuando se afectaran las partes substanciales del mismo y se de­
jara sin defensa al quejoso.
9.11.2. EN LA CONSTITUCIÓN DE 1917 • En caso de amparo contra sentencias definitivas en materia civil,
sólo procedía cuando la sentencia fuera "contraria a la letra de la
Cuando observamos la sencillez con que se redactó el Amparo de
Ley aplicable al caso o a su interpretación jurídica, cuando com­
los Artículos 101 y 102 de la Constitución de 1857, no deja de sorpren­
prendía personas, acciones, excepciones o casas que no han sido
dernos, a primera vista, la complejidad de los Artículos correlativos objeto de juicio, o cuando no las comprenda todos por omisión o
que en la Constitución de 1917 fueron el Artículo 103 y el Artículo 107, que negativa expresa".
regulaban las controversias Constitucionales y el Amparo respectiva­ • En los juicios penales procedía la suspensión provisional de la
mente, sin embargo, la explicación no puede ser más simple, el texto sentencia definitiva.
del Amparo en la Constitución de 1857 debe vincularse, cuando menos, • En los juicios civiles sólo procedía la suspensión provisional si el
a dos factores, por un lado, el corte liberal clásico de la Constitución y quejoso daba fianza.
por otro, el hecho de que el único antecedente federal vigente que venía • El amparo contra sentencias definitivas se interponía directamen­
del Acta de Reformas de 1847, no había sentado grandes precedentes o te ante la Suprema Corte.
La autoridad responsable sería consignada en caso, de no acatar
experiencias, en tanto no existió siquiera una ley reglamentaria, que

la suspensión del acto ordenado por el juez.


ampliase sus alcances y en consecuencia, mostrara sus virtudes y sus
• En caso de que se conceda el amparo y la autoridad responsable
defectos.
repitiese el acto o tratar de eludir su ejecución, sería separado de su
Las circunstancias para 1917 eran totalmente diferentes, por princi-
cargo y consignada ante el juez de distrito correspondiente.
pio, se abandonó la concepción Constitucional liberal clásica y se adoptó
• Cuando los alcaldes y carceleros no recibieran copia autorizada
el pensamiento de un Constitucionalismo social que dejaba atrás no
del auto de formal prisión, debían informar al juez y en caso de
sólo los grandes principios individualista aislados, para combinarlos con no recibirla en las siguientes 3 horas, tenían obligación de poner
un conjunto de postulados sociales, de igual forma varió la técnica cons­ en libertad al detenido.
titucional, pues los constituyentes de 1916-17, más allá de las críticas.
Como puede apreciarse, la técnica seguida para la redacción es di­
adoptaron una técnica constitucional diferente y presentaron algun�
ferente y en 1917, se eleva a nivel Constitucional un verdadero regla­
artículos con tal complejidad, que bien pudieran equipararse a un �
mento del Amparo.
queño reglamento, tal fue el caso de los artículos 27 y 123, sin exc luir eJ
caso del amparo que en el texto del artículo 107 original contaba co�
XII fracciones, de suerte que, en su texto, puede percibirse que el ampa,
ro evolución de una manera significativa entre 1857 y 1917. l

El texto del artículo 103 de la Constitución de 1917, es prácticaf',


mente el mismo que el artículo 101 de la Constitución de 1857, la dife:
rencia luego está, en el texto especifico del amparo que para 1917 ya
contenía diversos principios que se consagraron a lo largo de los
años de evolución que existen entre uno y otro texto.
El artículo 107 en 1917 establecía los siguientes principios:
• Los juicios se seguirían a instancia de parte agraviada.
• La sentencia es relativa, es decir, sólo se protege a quien se
ra, sin que se permitan efectos ge neral es al amparo.
• En 1917 existe el amparo casación o amparo contra resol
jurisdiccionales, en 1857 no se permitía.
r�

Unidad 10

Formas de estado

FERNANDO FLORES TREJO.

1 0.1. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN


DE FORMAS DE ESTADO

Este es uno de los conceptos más antiguos tanto en la Ciencia Políti­


ca como en la Teoría del Estado; así como en el Estado mismo. La for­
ma estatal puede ser estudiada desde diversos puntos de vista entre los
cuales se encuentra el sociológico.
Bajo esta perspectiva debe entenderse por forma del Estado una es­
pecial estructura del mismo, es decir, el equilibrio que presenta un
btado determinado en el orden político para lograr el mejor sistema de
sinergización social.
Efectivamente, tanto en el orden social como político se cumple el
proceso social de sinergia o armonía de todas las fuerzas y factores so­
c iales, lo anterior debido a que este proceso sinérgico presenta un as­

��: pecto dinámico y otro estático. En cuanto al aspecto dinámico, explica­


mos que constituye una fuerza directora y renovadora a la vez de las
'

estructuras e instituciones sociales. En el orden jurídico, el agente diná­


...
,-_¡

mico, se presenta como una fuerza que interviene en el progreso y reno­


vación de las instituciones jurídicas, a través de un proceso de supera­
ción constante.

En el orden estrictamente político, también el agente dinámico ha


tenido como función constante actuar sobre las estructuras o formas del

• Doctor· en Derecho y catedrático por oposició n de la Universidad Nacional Autóno-


01a de México.

261
,
,

262 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN FORMAS DE ESTADO - F. Flores Trcjo 263

Estado, para lograr nuevas formas de equilibrio en los distintos re­ Ahora bien, la Forma de Estado en nuestra percepc10n, igualmente puede

gímenes políticos. Por virtud de ese agente dinámico se logran sólo for­ ser visualizada bajo una óptica jurídico-política para lo cual resulta conve­
niente precisar algunos conceptos que son afines con este contexto.
mas de equilibrio inestable; que sólo durante una cierta época la estruc­
Inicialmente resulta obligado efectuar una referencia al Estado cuyo sur­
tura alcanzada representa la forma sinérgica que en el orden político
gimiento, existencia y finalidades se encuentran íntimamente vinculados
cumple con un fin determinado.
con el contexto social como refiere Max Weber.1
El Estado, en cuanto a sus formas se ha manifestado a través de la Uno de los antecedentes iniciales del Estado lo encontramos en la anti­
historia como la estructura social máxima que ha ido realizando en gua G1-ecia lugar en el que se desanollaron las denominadas ciudades-esta­
cada colectividad, la forma de equilibrio y armonía de los distintos inte­ do que constituyeron una incipiente organización político-social, en la que
reses y valores de la convivencia humana. los ciudadanos elegían a una elite de 1·epresentantes quienes se encargaban

Las estructuras que en el orden social se constituyen, se transfor­ de llevar a buen recaudo las finalidades que les encomendaba la sociedad.

man desde el punto de vista jurídico en las instituciones políticas o esta­ En una etapa posterior, durante la época medieval, el entorno polí-
tales. Es decir, toda forma o estructura social cuando alcanza un deter­ tico se caracterizó por la pugna del poder entre la iglesia, el rey y los
minado estado de permanencia tiende a manifestarse en el orden jurídico, señores feudales sin que podamos afirmar que se hubiera generado un
mediante una institución política. En otras palabras, origina una forma desenvolvimiento de la institución estatal. No obstante, como conse­
de Estado que resulta en el medio jurídico empleado para mantener cuencia de esa lucha nació el Estado como institución, mencionándose
dentro de la mayor permanencia posible aquel equilibrio que constituyó por primera vez dicho vocablo con un significado jurídico-político en la
la estructura social alcanzada de una época dada. obra, "El Príncipe" de Nicolás Maquiavelo. Las palabras iniciales de
Relacionando la función del Derecho en sus relaciones con el Esta­ esta obra se refieren a que todos los Estados o son Repúblicas o son
do, con los aspectos dinámico y estático que presentan respectivamente Principados.
los factores y productos sociales, el Derecho en su aspecto de actividad En la época moderna el Estado tuvo una significativa evolución ya que
normativa teleológicamente consciente de sinergia social integral, de­ como menciona Aurora Arnáiz2 representó el paradigma universal de orga­
sempeña el papel del agente dinámico que va logrando determinadas nización en el entorno político y jurídico al tiempo de fundamentar su con­
estructuras o instituciones ya que el Estado se manifiesta como el as­ tenido ético. No obstante lo anterior durante las tres décadas más recientes
pecto estático por constituir en un momento dado la estructura social se ha mencionado con insistencia que el Estado se encuentra en crisis y que
máxima, la institución jurídica soberana, que regula la forma de organi­ tiende a desaparecer como fórmula organizacional,3 sin embargo, hasta la
zación política de una colectividad determinada. fecha se ha conservado como una institución que representa un modelo po­
Desde el punto de vista general, todo Estado es una forma de es­ lítico-jurídico permanente, que es perfectible, pero que continúa en la cima

tructura social pero a su vez esa estructura puede revestir distintas for­ de la estructuración social.
En este orden de ideas, estamos ciertos que el Estado como institución y
mas como: la autocracia o la monarquía. Constituyen formas que en lo
esquema de organización político-jurídica prevalecerá en el tiempo, en vir­
político implican un equilibrio de fuerzas y factores sociales, que en una
tud de que alberga y conserva la cohesión social ya que se amolda al com­
época histórica determinada, lograron sinergizarse para constituir l a es·
plejo y disímbolo andamiaje que la sociedad reclama a la vez que se acopla
tructura de una colectividad. a las condiciones específicas de cada sociedad.
De esta suerte, en el concepto de Forma de Estado interviene no Ahora bien, bajo la óptica conceptual el Estado puede ser considerado
sólo el proceso general que en orden sinérgico alcanza una estructura bajo distintas perspectivas:
determinada, sino que también interviene un dato jurídico, a efecto de
que la estructura social alcanzada se organice desde el punto de vi�ta
1 WEBER. Max, Economía .\' Sociedad, Fondo de Cultura Económica, México, 1969,
constitucional, lato sensu bajo las formas de democracia o autocracia, Tomo 1, p. 26.

monarquía o república. 2 ARt\ÁIZ AMil;o, Aumra, Ética v Estado, UNAM, México, 1975, pp. 44 y ss.
.
1 Al efecto consulta1· la opinión de Elías Díaz en su artículo "La Cdtica a la Teoda
Entendida así la forma del Estado tiene una connotación sociológt· Mcca!licista y Extincionista del Estado", dentm de la obra Memoria del P1·imer Congreso
ca-jurídica. l t
n cmacional de Teoría del Estado. UNAM, México, 1981, p. 63 así como el artículo de
C,·istine Buci-Glucksmann, p. !55 Y e l de Hécto1· González U1·ibe, p. 309.
264 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN H)RMAS DE ESTADO - F. Flores Trcjo 265

Así, la Ciencia Política estudia la estructura de los órganos funda­ privada hasta una compleja sociedad controladora compartida por el Esta­
mentales del Estado; la forma como el Derecho los define y caracteriza; do y los particulares. Sin embargo solamente puede existir una persona ju­

y, la relación que mantiene lo que la doctrina tradicional denomina, los rídica que se identifica como Estado, no puede por ende, existir duplicidad

elementos del Estado. en la persona del Estado. Asimismo, es una persona suprema al identificar­

Desde otro punto de vista, la Sociología Política como interdiscipli­ se como la persona jurídica máxima respecto de la cual ninguna persona
puede encontrarse en un plano de superioridad. Igualmente es omnicom­
na científica analiza los diversos factores que caracterizan al Estado ya
prensiva porque abarca o comprende a todas las personas físicas o no físi­
que existe un conjunto de elementos materiales y sociales que intervie­
cas sin importar su nacionalidad, patrimonio, nombre o denominación, et­
nen en la consideración de las instituciones políticas.
cétera, ya que todas ellas se encuentran bajo su ámbito de influencia.
Ahora bien, dentro del plano jurídico diversos autores han externa­
Asimismo, debemos considerar que el Estado cuenta con diversos ele­
do su punto de vista acerca de lo que es el Estado, así Hermann Héller4
mentos como señala Burgoa: 11 La población esta se presenta, prima {acie
sostiene que es"la estructura de efectividad organizada en fonna planea­
como un conglomerado humano radicado en un territorio detemúnado .... El
da para la unidad de la decisión y la acción".
territorio éste no es solo el asiento pemzanente de la población ... sino que es
Por su parte Reinhold Zippelius5 siguiendo la concepción de Héller,
factor de influencia sobre el gmpo humano que en él reside, modelándolo de
estima que el Estado es "una estructura de acción, jurídicamente organi­
muy variada manera... poder soberano, orden jurídico fundamental o Consti­
;:.ada".
tución, poder público y gobierno.
Andrés Serra Rojas6 expresa que: "El Estado es un orden de convi­ Bajo este contexto debemos considerar que el Estado tiene a su cargo
vencia de la sociedad políticamente organizada". una misión esencial, que consiste por un lado en ser el depositario de la te­
Rafael Rojina Villegas7 contempla al "Estado como la sociedad jurl­ leología social, es decir es la entidad recipiendaria de las finalidades de la
dica y políticamente organizada". sociedad, por otro, es el encargado de llevar a feliz término las finalidades
En la actualidad el Estado es concebido por algunos estudiosos sociales para lo cual se encuentra dotado de poder y estructurado con un
como una conquista cultural tal y como lo expresa Peter Haberle.8 conjunto de órganos que realizan las funciones correspondientes para arri­
Para nosotros, el Estado aparece como una persona jurídica titular bar eficazmente al logro de la finalística social.
de derechos y de obligaciones, de acción interna e internacional, al Con base en lo anterior podríamos proponer una definición jurídica del
tiempo que se muestra como una estructura constituida por un conjun­ Estado como aquella persona jurídica colectiva suprema y omnicomprensiva
to de órganos. Y cuyos elementos esenciales lo constituyen la población, el territorio, el gobier-
110, el poder soberano y la constitución, al tiempo de ser el encargado de reali­
En efecto, el Estado es una persona jurídica no física. En palabras de Gar­ ;:ar adecuadamente las finalidades sociales.
cía Máynez10 sería denominada persona colectiva o para otros constituirla
una persona moral. Sin adentrarnos en la semántica más idónea, lo ante­
1 0.1.1. CONCEPTUALIZACIÓN DE FORMAS DE ESTADO
rior significa que el Estado constituye una entidad jurídica creada por el or­
den normativo, dotada de personalidad propia y que se caracteriza por ser
Al inicio de esta temática manifestamos que el propósito inicial es el
única, suprema y omnicomprensiva.
de definir las Formas de Estado para lo cual, además de precisar los
Así es, dentro del ámbito normativo jurídico existen diversas personas no
conceptos pretéritos, se requiere distinguir entre Formas de Estado y
físicas, morales o colectivas, desde una sociedad anónima de naturaleza
Formas de Gobierno.
Efectivamente, resulta común incluso doctrinalmente la confusión
4 HELLER, Hermann, Teoría del Estado, Fondo de Cultura Económica, México, 1968, entre ambos conceptos ya que, se alude indistintamente a cualquiera de
p. 255. las dos entremezclándolas en las clasificaciones respectivas.
'i ZIPPELIUS, Reinhold, Teoría General del Estado, UNAM 1985, p. 53.

6 SERRA 7
RoJAS, Andrés, Teoría General del Estado, Porrúa, México 1964, p. 1 1
. Estamos ciertos que la diferencia primaria radica precisamente en
l a d iferencia que existe entre el concepto de Estado y el de Gobierno. El
7 RüJINA VtLLEGAS, Rafael, Teoría del Estado, Porrúa, México 1968, p. 102.
8 HÁBERLE, Peter, El Estado Constitucional, UNAM, México, 2001, p. l. Estado como señalamos previamente, es una persona colectiva única,
Y En relacióncon esta temática se sugiere consultar la obr·a de GoNZÁLEZ
LOMBARDO, Francisco, Historia del Derecho y del Estado, L imusa, México, 1975.
10 GARC Í A MÁYNEZ, Eduardo, Introducción al Estudio del Derecho, Porrúa, 11 B U RGOA ORIHUELA, Ignacio, Diccionario de Derecho Constitucional, Garantías v
-

1977, p. 278. Amparo, Porrúa, México, 1984, p. 147.


266 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN r
l
FORMAS DE ESTADO - F. Flores Trcjo
267

suprema y omnicomprensiva; en tanto que el Gobierno es el conjunto de Gobierno se incluyen la monarquía, la república y la democra
cia como
de autoridades del Estado. regímenes "puros".
El Estado es una institución pública dotada de personalidad jurídi­
ca, es una entidad de Derecho. En el plano kelseniano, es la totalidad
del orden jurídico sobre un territorio determinado, en la unidad de to­ 10.2. CLASES DE FORMAS DE GOBIERNO
dos sus poderes y titular de la soberanía. En cambio el gobierno, es el
conjunto de órganos del Estado que ejercen las funciones en que se de­ 10.2.1. CLASIFICACIÓN DE LAS FORMAS DE GOBIERNO
sarrolla el poder público que pertenece a la entidad estatal, y en su DE ACUERDO A ARISTÓTELES
acepción dinámica se revela en las propias funciones que se traducen
El ideal de las formas puras de gobierno es el interés general, el
en múltiples y diversos actos de autoridad. Estado y Gobierno no pue­
bien público de una sociedad.
den confundirse, ni, por ende, sus correspondientes formas.
La mejor de las formas puras de gobierno es la democracia o poli­
Como se deriva de lo anterior, el Estado es la entidad suprema y so­
!eia que mira con mayor perfección al bien de la comunidad.
berana, en tanto que el Gobierno constituye uno de los elementos del
El problema relativo a las formas de gobierno y a las formas de
Estado, es parte del mismo y por ende diverso de éste.
Estado fue entrevisto en sus generalidades por el pensamiento helénico,
De igual manera es necesario expresar que a la forma de Estado
tanto en la descripción de las formas políticas existentes en aquélla épo­
atañe la organización del poder público con referencia al territorio o las
ca, como en la especulación que de las mismas se hizo por el pensa­
demarcaciones territoriales por las que se compone el país. Asimismo,
miento filosófico, en la obra histórica de Herodoto "Los nueve libros de
le incumbe la organización del poder público, por medio de la del imita­
la Historia", como en Platón en su obra ejemplar "La República".
ción de competencias y con referencia al territorio o a las demarcacio­
Por su parte Aristóteles realizó un interesante estudio de más de 50
nes territoriales por las que se compone el país; en tanto que a la For­
constituciones, describiéndolas y enjuiciándolas en los principios comu­
ma de Gobierno le concierne la conformación de los órganos del Estado
nes que las dominaban.
para el adecuado ejercicio de las funciones públicas.
Aristóteles consideraba que las formas de Gobierno requerían ser
De esta manera las Formas de Estado hacen referencia a las distin­
clasificadas en dos grupos importantes:
tas maneras de estructuración de la división o desplazamiento de com­ l. Las formas puras o perfectas;
petencias, sin aludir a las distintas formas en las que se pueden confor­ 2. Las formas impuras, degeneradas o corrompidas.
mar los órganos soberanos. Las formas puras o perfectas son:
En cambio las Formas de Gobierno se refieren a la conformación A. La monarquía: que es el gobierno ejercido por una sola persona;
de los órganos encargados de ejercer las funciones soberanas así como B. La aristocracia: que es el gobierno ejercido por una minoría se­
la relación que estos guardan entre sí, como afirma Luis Izaga.12 lecta y,
Matizando estos conceptos Alessandro Groppali13 asevera que "las C. La democracia: que es el gobierno ejercido por la multitud o ma­
Formas de Gobierno consideran los modos de formación de los órganOS Yoría de los ciudadanos.
esenciales del estado, sus poderes y sus relaciones mientras que las For· Las formas impuras, degeneradas o corrompidas: son aquellas formas
mas de Estado son dadas por la estructura de éstos y se refieren a las de gobierno que desvirtúan sus finalidades sirviendo intereses o propó­
relaciones que se establecen entre pueblo, territorio y soberanía, según sitos particulares. El gobernante olvida o pervierte su misión y hace del
que se concentren y funden en un orden estatal único o estén descentra• Pod er público un instrumento de sus intereses egoístas.
"
!izadas en los varios órdenes estatales de que resultan constituidas · d6 Estas formas impuras son:
Bajo este contexto podemos señalar que las principales Formas A. La tiranía: que no es otra cosa que la degeneración de la mo­
Estado son la federal y la central o unitaria; y en cuanto a las Fo rmai narqu ía;
B. La oligarquía: o forma corrompida de la aristocracia; y
12
!ZAGA. Luis. Elementos de Derecho Político, Bosch, Barcelona, 1999. Tomo Il, P· 1. C. La demagogia: que también se llama la oclocracia, que es una de­
1.1 GROPPALI. Alcssandro, Teoría General del Estado, EJEA, Bs. As . ¡ 965, p. 212.
. generación de la democracia.
268 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN HlRMAS DE ESTADO - F. Flores Trejo
269

El pensamiento de Aristóteles fue más lejos al considerar formas de En el capítulo primero del "Espíritu de las leyes", Montesquieu16 in­
gobierno mixtas, que ya habían sido analizadas por el pensamiento pol(. troduce modificaciones fundamentales a la teoría de las formas de Go­
tico de su época y que él se encargó de sistematizar. bierno de Aristóteles.
Afirma este autor:
10.2.2. EL GOBIERNO MIXTO DE POLIBIO Y OTROS AUTORES
Supongo tres definiciones o mejor dicho tres hechos, a saber: que el gobier­

La influencia de las instituciones políticas helénicas fue manifiesta' no republicano es aquél en que el pueblo, en cuerpo o sólo parte de él, ejer­

en el pensamiento romano. ce la potestad soberana; que el monárquico es aquél en que gobierna uno

Con su gran sentido de la realidad los romanos practicaron una for­ solo, pero con arreglo a leyes fijas y establecidas; que, a diferencia de éste,

ma de gobierno mixto. El poder se dividía entre el pueblo y el monarca el despótico es aquél en que uno solo, sin ley ni regla, lo dirige todo a vo­

o entre una aristocracia y el pueblo, en un proceso de cambios políticos luntad y capricho. La República en donde el pueblo en cuerpo, ejerce el po­

en que la constitución pasara del reino a la tiranía, a la democracia y der soberano, es una democracia. Si el poder soberano está en manos de

después la monarquía para que de este modo continuara el mismo parte del pueblo, se tiene una aristocracia.
"En los Estados populares, es decir, en las Repúblicas democráticas, se
desenvolvimiento.
necesita el resorte de la virtud. La moderación es el alma de los Gobiernos
Polibio, es el expositor del gobierno mixto o forma constitucional
aristocráticos; más entiéndase que me refiero a la que está fundada en la
que combina el poder monárquico, el aristocrático y el poder democráti­
co, representados por el Consulado, el Senado y los comicios. El gobier­
�"' virtud, no a la que nace de la cobardía o pereza del alma". Y agrega, "en
·-::·· cambio en las monarquías la política produce las mayores cosas con la me­
no mixto es ideal y evita los perjuicios de las otras formas de gobierno. nor virtud posible".
En la teoría del gobierno mixto se esboza un régimen de coordina­
ción de funciones, sin preeminencias de uno sobre otro, coordinando
10.3. CLASES DE FORMAS DE ESTADO
sus actividades sobre la base de equilibrio y de igualdad.
El pensamiento de Aristóteles influyó notablemente en el pensamien· Inicialmente y bajo una perspectiva sociológica, es dable clasificar a
to político de Roma, señalándose que tanto Polibio como Cicerón admi­ las Formas de Estado atendiendo al tipo de Estado continente. Una
tieron la clasificación y los caracteres de las formas de gobierno mixto.
clasificación sociológica de las formas que el Estado se ha presentado
La teoría de la forma mixta de Gobierno se manifiesta en el pensa­
conforme a su evolución histórica, y de esta suerte distinguimos los ti­
miento político medieval en Santo Tomás, en Suárez y en Dante.
pos de Estado religioso, Estado político, Estado de derecho y Estado
Contemporáneamente, Jellinek14 considera que las formas de Go­
econ ómico.
bierno son la monarquía y la república y para Kelsen15 la aristocracia Y
En estas formas exclusivamente sociológicas de la organización del
la democracia.
Estado, se determina el concepto de forma tomando en cuenta la clase
Monarquía y República es la división fundamental, pero ambas pue­
de solidaridad social predominante. A la solidaridad religiosa, corres­
den ser subdivididas, y de este modo es factible lograr todas las distin·
ponde la forma de Estado religioso, a la solidaridad política la forma de
ciones posibles en la organización del Estado. Así, la existencia, Y 1á
Estado político, a la solidaridad jurídica, la forma de Estado de derecho
manera en la que se manifiesta la representación popular, la organiza·
ción y ejercicio del gobierno, las relaciones de éste con los demás órgs.. Y a la solidaridad económica, la forma de Estado Económico.

nos del Estado, entre otros, constituyen aspectos que se entrelazan de Ahora bien desde un punto de vista político-jurídico puede aseverar­
se que existen dos formas
diversa forma, de tal suerte que cada Estado puede caer dentro de estatales: el Estado Centralizado o Unitario y
serie de categorías, sin que todas reunidas sean capaces de dete el E stado Federal.

con exactitud cuál es su naturaleza desde todos los puntos de vista.

14 JELLINEK. Gcorgc, Teoría Getteral del Estado, Editora Nacional. Montevideo, 1 lñ MoNTESQUIEU. Chadcs de Secondat, Del Espíritu de las Leves, Sarpc, Madrid, 1984,
p. 132. Pp. 3 5 y SS.

1 'i KELSEN, Hans, Teoria General del Derecho Y del Estado, UNAM, México, 1998, p. 1

270 TEORÍA DE LA CONSTITUCiÓN FORMAS DE ESTADO - F. Flores Trcjo 271

10.3.1. ESTADO CENTRALISTA O UNITARIO Durante esta etapa el Centralismo estableció un rígido sistema de
centralización de funciones a través de los diversos órganos, especial­
10.3.1.1. Concepto y características
mente del Poder Ejecutivo quien acaparó las atribuciones y ejerció un
El Estado Centralista es una Forma de Estado que implica la existen­ poder de mando sumamente férreo.
cia de un órgano que canaliza de manera exclusiva el poder y lo ejerce
de manera directa a través de decisiones respecto de sus subalternos que 10.3.1.3. Confederación
son los denominados Departamentos, quienes se encuentran constreñi­ La Confederación puede ser conceptualizada como una alianza, liga,
dos a acatar las decisiones que emanan del Departamento Central. unión o pacto entre algunas entidades y más comúnmente entre nacio­
El Estado centralista o unitario presenta homogeneidad del poder,
nes o Estados.
es decir, las funciones estatales tienen una sola organización nacional
En su acepción de Unión de Estados, la Confederación se ha refleja­
aunque se admite que en ciertos casos por razones de eficiencia admi­
do tanto en las alianzas temporales que han tenido propósitos comer­
nistrativa, se permita la desconcentración de las funciones administrati­
ciales o bélicos, como en aquellas que se han establecido con propósitos
va y jurisdiccional.
más vastos y complejos, por un periodo ciertamente amplio.
La desconcentración de referencia resulta, en cuanto a la función
Como ejemplos del primer tipo de confederaciones puede citarse a
administrativa, en una distribución de los órganos de gobierno en dis­
la Liga Aquea durante la antigüedad. En la Edad Media, a la Liga
tintas circunscripciones usualmente denominadas departamentos o pro­
Anseática y a la Santa Alianza o el Eje Roma-Berlín-Tokio, durante los
vincias, pero dichos órganos están subordinados al órgano central. En
tiempos modernos. Como muestras del segundo tipo de confederación
cuanto a la función jurisdiccional se traduce en una distribución de los
pueden encontrarse en asociaciones de naciones más permanentes,
tribunales con distinta competencia territorial.
Es digno de subrayarse, que la principal característica del Estado como lo fueron la Confederación Norteamericana antes del surgimiento
centralizado, es que sus órganos de gobierno pueden estar desconcen­ de la Federación, así como la Sociedad de las Naciones o la Common­
trados, pero no descentralizados, es decir, los órganos de gobierno "lo­ \vealth Británica.
cales", aun y con competencia territorial, no son autónomos. La confederación sin duda, representa el punto de mayor descentra­
lización dentro de las modalidades del Estado unitario, la Federación
10.3.1.2. El Estado Central o Unitario en México de menor o mayor descentralización o viceversa, cuando se le ve desde
el punto de vista del estado unitario. En este orden de ideas, existe un
El 15 de diciembre de 1835 el Presidente interino Miguel Barragán,
número importante de diferencia entre los dos géneros más próximos:
expidió las denominadas Bases Constitucionales en la que se estableció
la federación y la confederación. Así, la Confederación pertenece al ám­
el régimen centralista. El artículo 3° no obstante que no establecía de
bito del contexto internacional, mientras que la federación es una forma
manera explícita dicha Forma de Estado, suprimió el hasta entonces
de Estado.
existente régimen federalista. Por su parte el numeral 8° prevenía que: -;·

Por otro lado, la Confederación se origina en un pacto entre esta­


"El territorio nacional se dividirá en Departamentos, sobre las bases de .{
dos libres y soberanos que permanecen como tales, mientras que la
población, localidad, y demás circunstancias conducentes". , ;:
Con apoyo en dichas Bases, la primera Constitución Centralista lla· Feder ación surge de una Constitución y no supone la supervivencia en

mada Leyes Constitucionales de 1836, previno en la Sexta Ley la d ­ �� su seno de estados auténticamente libres y soberanos. Por lo general,

sión de la República Mexicana en Departamentos, los cuales se subdtVl• los Estados que integran una Confederación pueden separarse de ella,

día a su vez en distritos y éstos en partidos. mientras que las entidades federativas no pueden hacerlo, sin provocar
Asimismo, la segunda Carta Fundamental Centralista, las Base5 una secesión.

Orgánicas de 1843 establecieron en el numeral 4° la misma división pO" Asimismo, la Confederación supone la existencia de órganos confe­
lítica que su antecesora, aunque agregó a la división departamental, las derales, temporales o permanentes, que atienden las funciones que se
les han encomendado,
municipalidades.17 pero siempre subordinados a los gobiernos de
los est ados confederados, por su parte la Federación supone el surgi-
111Jento de un gobierno distinto del de las entidades federativas, que no
17 SENADO DE LA REPÚBLICA, Documentos Hist óricos Constitucionales de las
Amwdas Mexicanas, México, 1965, Tomo 1, pp. 223 Y ss.
está subordinado a ellas, al contrario de lo que sucede en la Confedera-
Tl 1
j�
272 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
'

FORMAS DE ESTADO - F� Flores Trcjo


273

c1on. Igualmente, en la Confederación no surge una nueva nacionali. Tampoco sufre restricciones la soberanía de los Estados, pues éstos
dad, además de la que tienen los nacionales de los estados confederados
continúan el ejercicio pleno de sus derechos. El acto inicial de la inde­
en tanto que en la Federación existen, por lo menos teóricamente dos: 1� pendencia de los Estados Unidos de Norteamérica fue la formación de
nacionalidad federal y la de las entidades federativas. Adicionalmente una Confederación de las Trece Colonias Iniciales, que se unían para
es viable precisar que en la Confederación, sus órganos no pueden ex­ asegurarse de su independencia de la Gran Bretaña y hacer un frente
pedir normas generales o leyes, o ejecutar normas concretas como las común respecto de la Corona Inglesa.
sentencias que afecten a los nacionales de los Estados confederados en
forma inmediata, sino que sólo pueden hacerlo a través y con el consen­ 1 0.3.1.4. Uniones de Estados
timiento de sus respectivos gobiernos; en contraste, en la Federación Podríamos señalar que existen Uniones de Estados que se rigen por
existe una distribución de competencias, de manera que dentro de su
el Derecho Interno y Uniones de Estados que se regulan por el Derecho
ámbito el gobierno federal puede emitir normas generales y ejecutar Internacional. Las primeras tienen que ver con la Forma de Estado Fe­
normas concretas, en forma inmediata y sin previa autorización de los deral que se analizará en la siguiente unidad, en cambio las Uniones de
gobiernos de las entidades federales y viceversa. Estado de índole internacional encuadran en un contexto distinto en
Otro criterio para diferenciar entre la Confederación, la federación ,irtud de que son creadas a través de Tratados, o por conducto de Actos
y el estado federal, es propuesto por K.C. Wheare18 quien explica que: U nilaterales, pero con consecuencias internacionales.
en una confederación los órganos de la misma se encuentran subordi· Lo que caracteriza a cualquier unión de Estados es que se estable­
nados a los gobiernos de los estados confederados, mientras que en una cen órganos colectivos con competencia en asuntos comunes.
federación, el gobierno federal, y los gobiernos de las entidades federa· Seara Vázquez19 afirma que: "las uniones de Estados en sentido pro­
tivas están coordinados. Finalmente, en el caso del estado unitario, al pio (diferentes de las uniones administrativas, aduaneras, etc.) son de dos
revés de lo que sucede con la confederación, los órganos de la misma se tipos: unión personal y real. Coinciden ambas en una característica: tener
encuentran subordinados a los gobiernos de los estados confederados; un jefe de Estado común, pero hay entre ellas diferencias importantes".
mientras que en un federación, el gobierno federal, y los gobiernos dt;
las entidades federativas están coordinados. Finalmente, en el caso del 1 0.3.2. UNIONES REALES Y UNIONES PERSONALES
estado unitario, al revés de lo que sucede con la confederación, los go­
La Unión Real es el ejemplo de un Estado compuesto que se carac­
biernos de las entidades locales se encuentran subordinados al gobierneS
teriza por un régimen de diversos Estados de tipo monárquico que tie­
central. La teoría de Wheare viene a confirmar la de H. Kelsen, en � �
nen un solo Rey y disponen
de órgano comunes de gobierno. Así por
sentido de que confederación, federación y estado unitario son divers � ejemplo, Carlos V de España era al mismo tiempo Emperador
� en Espa­
formas de organización estatal. atendiendo al grado de centralización ña y Rey de Alemania.
descentralización de los órganos de gobierno y de las facultades que se El propio Seara Vázquez contempla que la Unión Real "es una
otorgan a los últimos". llnir)¡z t'U!zmtaria de
dos Estados soberanos que se unen bajo el mismo
Ahora bien, en la forma de Estado denominada Confederación de --:� ·�
nzunarca para dar lugar al
nacimiento de una sola persona intemacional.
dos, estamos en presencia de varios Estados que han decidido fo� La unión real se caracteriza
además por el abandono que hacen los Esta­
una Unión, pero sin desaparecer ni formar una entidad superior a el i: � dos sohermws
que la fomzan de una parte de sus prerrogativas a la Unión,
La Confederación tiene como base un Pacto interestatal para re .1 que se encarga de la
gestión de los asuntos comunes permaneciendo las
zar determinados propósitos, principalmente de carácter defensivo. Otras de
ntro del dominio de los Estados miembros, que continúan sien­
de
facultades de la Confederación no pueden extenderse más allá �0 soberanos. En realidad hay una gran
analogía entre la unión real y
practicado, ni implica intervención en los asuntos propios de un a co nfede
ración de Estados. De la unión personal se distingue por ser
soberano. l11ucho
más estrecha y además como consecuencia del carácter volunta-
...__
__

18 Diccionario Jurídico Mexicano, Voz Confederación, UNAM-Porrúa, México,


1" SEARA V ÁZQUEZ, Modesto, Derecho lnternaciuttal Público, Porrúa, México, 1986,
Tomo IV. P. 223.
274 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

rio de su creación, por la posibilidad de ser disuelta libremente. Podemos


r FORMAS DE ESTADO - F. Flores Trejo

la Organización de las Naciones Unidas, ha suscitado vivas reac


275

ciones
citar como ejemplos de uniones reales: Suecia y Noruega (1815-1905), de estos pueblos.
Austria y Hungría (1867-1918), Islandia y Dinamarca 1918-1944), que Finalmente podríamos decir que, tanto la práctica como
la doctrina
ofrecía una serie de particularidades muy interesantes, y los Países Ba­ in ternacion ales han configurado tres formas distintas de Unio
nes de
jos e Indonesia (acuerdos 1937 y 1949) que podía considerarse, también Estados constituidas sobre la base de la desigualdad de las partes
aso­
L·iadas: el Protectorado, la Protección y el Cuasi-protectorado, teniend
por algún tiempo, como una unión real. El contenido de las distintas o
Lomo nota común todas ellas que un Estado débil se pone bajo la pro­
uniones reales que hemos citado, no es idéntico en todos los casos, y las
tección de un Estado más fuerte, sin que se diluya la personalidad jurí­
diferencias son a veces bastante profundas. Actualmente, no hay ningún
dico-internacional de aquél.
ejemplo de uniones reales".
Por su parte en la Unión personal, un Tratado Internacional define
la existencia de un monarca para diversos Estados, pero sin órganos co­
munes. En esta forma de Estado cada uno de los Estados mantiene su
propia organización soberana y se administra de acuerdo con sus pro­
pios intereses y con entera independencia del otro.
Bajo este contexto, la unión personal surge cuando el juego de las le­
yes de sucesión lleva al mismo monarca a ocupar el trono de los dos paí­
ses. Los Estados conservan su personalidad independiente sin que pueda
hablarse de la Unión como sujeto propio del derecho internacional.
La Unión Personal según Seara Vázquez se caracteriza por: ·:.·
'
l. Tener el mismo jefe de Estado, que siempre es un monarca, aunque
haya una excepción a esto último, en el caso de Bolívar, que en 1825, fue
presidente simultáneamente de Colombia, Bolivia y Perú, y de 1823 a 1826,
de Colombia y Perú;
2. Ser de carácter accidental basada únicamente en el juego de las leyes
de la sucesión y,
3. Ser temporal. Como ejemplo de uniones personales pueden citarSe!
Prusia y Neuchatel (1707-1857) Gran Bretaña y Hanovcr (1714-1837), Ho"
landa y Luxemburgo (1815-1890), Bélgica y el Congo (1885-1908). Actuaf¡ ,

mente no hay ningún ejemplo de unión personal.

En la actualidad podríamos citar como fórmula de este tipo rl


dC!
Uniones de Estados a la Unión de los Estados Árabes o Liga Árabe. De&r,
d�
de los inicios del siglo pasado, diferentes grupos árabes han pretendi
la formación de un Imperio árabe, que reúna a todos los pueblos ára

sobre la base de una Constitución y organización de tipo militar.
Su organización parte del Protocolo de Alejandría de 7 de oc....h...
de 1944 y el Pacto de la Unión Árabe firmado en el Cairo el 22 de
zo de 1945.
Hasta nuestros días ha sido la siempre inestable la reunión de
nos países árabes alentados por sus problemas territoriales. La
tución del Estado de Israel bajo los auspicios del mundo interm•c•u• ...
, ,

Unidad 11

Federación como forma


de estado

FERNANDO FLORES TREJO'

11.1. TESIS EXPLICATIVAS DEL SISTEMA FEDERAL

En el capítulo anterior se analizó el concepto e importancia del


htado Federal bajo la denominación de Estado compuesto. Toca el tur­
no de estudiar diversos aspectos que consideramos trascendentales en
lomo al Federalismo, pretendiendo que al finalizar se perciba una vi­
sión "globalizadora" de su entorno.
Por diversas referencias históricas podemos afirmar como lo hace
Jorge Carpizo1 que "Grecia conoció la institución jurídico-política deno­
minada Confederación, y como ejemplos se pueden citar la Liga Jónica,
la Confederación Beócica, la Confederación Peloponésica y la Liga Ati­
codeliana. Pero el Estado Federal nació en 1787 al promulgarse la
Constitución de los Estados Unidos de Norteamérica. Varias son las di­
ferL·ncias entre la Confederación y el Estado Federal, pero entre una de
las más
importantes se puede subrayar que en tanto la Confederación es
una asociación de Estados soberanos, sometida a las normas del dere­
cho inte
rnacional, en el Estado Federal sólo hay un Estado soberano (el
Pueblo, y no varios pueblos soberanos) y todo su orden jurídico está en­
cuadrado en la
constitución Federal".

Doctor en Derecho v catetlrútico por oposición de la Universidad Nacional Autóno­


ma de México.
1 CARPIZO MAC GREGOR, Jorge, La Cmrstituci<}¡¡ A/exic<lllll de 1917, UNAM, México,
1 'JRo. p. 231.

277
.,

278 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN FEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flores Trejo


279

11.1.1. ALEXIS DE TOCQUEVILLE Esta aseveración les permitió concluir que las competencias Fede­
rales no son más que competencias delegadas por los Estados y ejerci­
Más que un autor que aporte elementos para desentrañar el origen das por ellos, de lo cual se derivan dos consecuencias:
del Federalismo, el mérito de Tocqueville2 estriba en haber sido el divul­ l. El derecho de anulación y,
gador de la nueva estructura estatal. 2. El derecho de segregación.
En efecto advirtió que en América existía un esquema estatal nove­
doso que se manejaba en una doble vía: 11.1.3. JELLINEK
l. Por un lado, los Estados federados soberanos, los cuales dentro
Este autor3 define al Estado Federal como "un Estado soberano
del ámbito de su competencia eran la instancia decisoria su­ for­
uzado por una variedad de Estados". Sin embargo, estos Estados no
prema; son
2. Por otro, una instancia diversa: la Federación, que era también soberanos a pesar de que la Constitución les atribuye a los órganos
de
dentro de su competencia, la instancia suprema. esos Estados una participación mayor o menor en la soberanía, es
de­
cir, en el ejercicio del poder. Los Estados particulares son Estados, úni­
Así, la soberanía se encontraba bifurcada ya que una parte de ella camente, dentro de la esfera en que están libres del poder Federal.
correspondía a la Federación y otra parte a las Entidades Federativas. Para Jellinek el Estado Federal es el único soberano, pero los miem­
Por ello afirmó que en Norteamérica existían dos gobiernos completa­
bros de esa unión sí son Estados porque poseen derecho de dominación
mente separados y casi independientes. Uno de estos gobiernos era el
' en ciertos límites también cuentan con libertad
de acción.
que correspondía a las veinticuatro pequeñas naciones soberanas que
En síntesis la teoría del autor alemán postula que la Federación es
en conjunto integraban la Federación, la que a su vez era soberana.
el único Estado soberano, pero sin negar a los miembros de ella la ca­
Las explicaciones anteriores son el motivo por el cual a esta teoría
racterística de Estado.
se le llama de la cosoberanía, ya que tanto la Federación como las Enti­
dades Federativas son soberanas dentro de su competencia, es decir,
11.1.4. WILSON
poseen una parte de la soberanía.
Este tratadista afirma que al crearse la Constitución Federal Nor­
1 1 .1.2. CAL H O U N Y SEY D EL teamericana y por ende la aplicación del Federalismo, se deseaba una
unión débil y no se pretendía sacrificar la autonomía de los Estados
Analizamos simultáneamente los puntos de vista de estos auto res
ya
partic ulares.
concreta: justific ar la
que la teoría de Calhoun persiguió una finalidad La idea de la importancia de los Estados miembros fue substituyén­
Sey­
separación de los Estados del Sur de Norteamérica; y la teoría de dose por el concepto de nación, la cual triunfó definitivamente cuando
del tuvo también una meta: defender a Baviera contra el Reich. los Estados del norte vencieron a los del sur, creándose la convicción de
ranía,
El fundamento de estas teorías es la indivisibilidad de la sobe que era imposible la segregación de un miembro de la unión.
dos no
de lo que concluyen que si la Federación es la soberana, los Esta En efecto el concepto de nación como unidad permitió formar un
os la Fe•
,
existen. No obstante a la inversa si los Estados son los soberan vínculo de solidaridad e identidad entre hombres de pensamientos, cos­
Federal no tumb res, religiones, lenguas y razas, tan disímbolas.
deración no lo es. Bajo esta tesitura concluían que el Estado
puede tener existencia. En opinión de Carpizo4 el concepto de nación de Wilson es el mis­
Afirmaron que el Estado Federal no podía subsistir en virtud de mo que fue expuesto en 1939 por Crossman, como "Un pueblo que vive
resultaba necesario atribuir la soberanía a uno de los dos ámbitos: a bajo un único gobierno central lo suficientemente fuerte para mantener
su independencia frente a otras potencias" .
Federación o a los Estados, inclinándose en favor de los Estados.

3 1ELLINEK, Jorge, Teoría


2 Tocut:EVILLE, Alexis de, La IJ<!IIIO<Tacitl e11 A111áica. Planeta Agostini, Madrid, 1 Ger�eral del Estado, Editora Nacional, Buenos Aires, 1960,
P. 130.
Tomo 1, p. 293.
4 Op. cit., p. 235.
280 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

Bajo este contexto se mira al Estado Federal como dos Estados'


r FEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flores Trejo 281

introduce su teoría de los tres círculos estatales que denota un avance


como dos gobiernos, para percibir que el Estado es un solo gobierno significativo en la explicación de este contexto.
pero doble, es decir, la naturaleza del Estado Federal es ser un gobier : Considera que en el Estado Federal hay que distinguir tres elementos:
no doble. l. La Constitución en virtud de la cual se establece la unidad del or­
El planteamiento que realizó Wilson es de sumo interés pues y a n o den total, y esta Norma Suprema es válida en todo el territorio. O
se considera al Estado Federal como dos Estados ni como dos gobier­ sea que el Estado Federal es la personificación de la constitución;
nos, sino como una unidad formada por dos partes distintas pero no 2. El orden jurídico Federal, y
separadas. 3. El orden jurídico de las Entidades Federativas.
El Estado Federal no está dividido sino que conforma una unidad Siguiendo su pensamiento, la Constitución divide la competencia
como cualquier otro Estado. De esta manera el gobierno es el único que L'ntre la Federación y las Entidades Federativas, y estas dos esferas son
está segmentado bajo un ámbito de competencias, uno de los cuales co­ tírdenes parciales delegados.
rresponde a la Federación y otro a los Estados particulares. Así, el Estado Federal u orden total posee órganos propios como el
poder revisor de la Constitución, que no es órgano ni de la Federación
11.1.5. lEAN DABIN ni de las Entidades Federativas sino del Estado Federal, es órgano de la
totalidad.
El profesor Dabin5 es quien proclama la teoría del Estado Federal
De esta forma, la unidad del Estado es la Constitución pero la es­
como una forma de descentralización del poder. tructura de esa ley fundamental es diferente: en el sistema Federal la nor­
Parte del supuesto de que los Estados particulares no son sobera­
ma suprema crea dos órdenes subordinados a ella pero que entre sí es­
nos, aunque en el Estado Federa! los Estados miembros designan algu­ tún coordinados. Lo anterior significa que esos órdenes el Federal y el
nos titulares de la autoridad Federal. de las Entidades Federativas existen por mandato constitucional y ellos
En este orden de ideas, Dabin asegura que el sistema Federal es un no pueden contravenir las disposiciones de la ley creadora que les otor­
régimen complejo "en que hayamos combinadas dos soluciones enlaza- ga su competencia y expresa lo que el orden Federal puede realizar y lo
das con dos aspectos diferentes de la teoría del poder: por una parte, lJUe las Entidades Federativas pueden efectuar.
una solución de descentralización muy amplia en beneficio de las colec­ En efecto, creemos con Kelsen que la Constitución no sólo crea a la
tividades componentes; por la otra, una solución de participación de las ,
1> Federación y a las Entidades Federativas sino que establece lo que pue­
colectividades mismas en el gobierno del Estado Federal". ..
' .· den realizar.
Lo que caracteriza al Estado Federal, es una gran descentralización Por otro lado, dentro de la esfera de competencia de las Entidades
política, la cual emana de la Constitución que es obra del pueblo Y con Fede rativas se encuentra la atribución de otorgarse su propia Constitu­
posterioridad el pueblo es quien atribuye las competencias Federales Y ·.'{, ción para organizarse libremente en su régimen interior que desde lue­
-�t
"-.-�

las locales. go no puede ser contrario a las normas de la Constitución general.


·;( No obstante, las Entidades Federativas son autónomas porque po­
Un Estado Federal puede tener una gran centralización administra·
\) seen un margen libre de actuación dentro del marco señalado en la nor­
tiva, por ello la nota de descentralización administrativa no es caracte·
rística del Estado Federal. l1la cúspide de ese orden jurídico.
Así, las autoridades de las Entidades Federativas no se encuentran
subordinadas a las Federales, sino que dentro de su competencia son
11.1.6. HANS KELSEN
libre s.
El afamado jefe de la Escuela Vienesa del Derecho�> afirma que la Como puede apreciarse, existen varias posturas que pretenden ex­
nota esencial del Estado Federal es la descentralización, sin embargo plicar la naturaleza jurídica de la Forma de Estado Federal. Estimamos
que cada una de ellas ha aportado algún elemento que ha sido útil para
ca racterizar al Federalismo.
'iDABIN, Jcan. Ductri11a Ge11eral del Estado, México, 1988, pp. 360 y ss.
" KELSEN Hans, Teoría Gc11eral del Derecho y del l::stado, UNAM, México, Estamos ciertos que el Federalismo implica en primer lugar una
pp. 360 y SS. Forma de Estado que lleva imbíb ito un acuerdo de los Estados para
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
.,, FEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flores Trejo 283
282

Gobierno Federal y punto de partida de todas las elaboraciones poste­


coalig arse y crear un ente distinto de jerarquía superior que es la Fede­
ración, al tiempo que se origina una esfera dual de competencias, guia­ riores. Se confiaban los asuntos de interés común a un organismo cen­
da por ésta última, quien determina las facultades que habrán de arro­ tral integrado por un presidente que designaría la Corona y un Gran
garse en dichos ámbitos, dejando a las Entidades Federativas una Consejo elegido cada tres años por las asambleas coloniales precisándo­
autonomía interna y pretendiendo en todo tiempo la permanencia irres­ se que los asuntos de carácter local corresponderían a las colonias.
tricta de la Unión a través del Pacto Federal. Sin embargo, este Plan no fue aceptado por las Asambleas Colonia­
De esta manera podemos afirmar que las características de un Esta­ les porque consideraron que no debían ceder en ninguna forma la facul­
do Federal son las siguientes: tad de fijar impuestos y tarifas que el plan otorgaba al órgano central.
l. Existe un acuerdo de los Estados para unirse y crear un nuevo Por otro lado el Parlamento inglés expidió varias leyes gravando
ente jurídico de jerarquía superior. con impuestos el comercio colonial, lo que provocó oposición y reavivó
2. Una Constitución que crea dos órdenes delegados y subordina­ el argumento de los impuestos sin representación. El problema se plan­
dos, pero que entre sí están coordinados: el de la Federación y el teó en términos estrictamente constitucionales. Las colonias no se
de las Entidades Federativas. consideraban representadas en el Parlamento inglés que establecía los

3. Las Entidades Federativas gozan de autonomía y se otorgan su impuestos, porque ellas no elegían miembros de la Cámara de los Co­

propia ley fundamental para su régimen interno. munes, por lo tanto, los colonos rechazaban en su calidad de ingleses.
Por iniciativa de la Cámara de Massachusetts en octubre de 1765 se
4. Se establece un Pacto indisoluble que permite la conservación del
reunió en Nueva York el Primer Congreso Intercolonial de Tendencias
régimen Federal.
Revolucionarias, que censuró la Ley del Timbre, surgiendo la idea de la
defensa de los derechos comunes de la Colonias por parte del represen­
11.2. SURGIMIENTO DEL FEDERALISMO tante de Carolina del Sur.
EN LOS ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA Sobre el particular resulta ilustrativo el siguiente pasaje de El Fede­
ra!ista:9
idea moderna del
Coincidimos con Wheare7 en el sentido de que "La
Unidos de América".
sistema Federal ha sido detenninada por los Estados Nada es más cierto que la indispensable necesidad de un gobierno, y no
ericano represe nta una menos innegable que al instituirse éste, en cualquier forma que sea, el pue­
En efecto, creemos que el Federalismo norteam
gi­ ;f
cional. Cronoló blo debe cederle algunos de sus derechos naturales a fin de investirlo de los
trascendente aportación a la ciencia jurídica constitu
camente asevera Felipe Tena Ramírez8 "ella precedió a las demás; ideo­ 1. poderes necesarios. Bien vale la pena, por tanto, considerar si conviene

lógicamente, ganó y conserva la primacía por la pureza de


las líneas Y por

el vigor de su vida. El Federalismo de los demás países que han


adoptado el
-,.
/�l
·�·
'>'
más a los intereses del pueblo de América el constituir una sola nación bajo
un gobierno Federal, para todos aquellos objetos de carácter general, o di­
vidirse en confederaciones separadas, confiriendo a la cabeza de cada una
norteame­
sistema, se mide por su aproximación o alejamiento del modelo de ellas los mismos poderes que se le aconseja poner en manos de un único
imitar de-.
ricano. Lo dicho tiene especial significación para nosotros, que al gobierno nacional. Un firme sentido del valor y los beneficios de la Unión
rumbo s".
liberadamente aquel sistema, le imprimimos nuestros propios indujo al pueblo, desde los primeros momentos, a instituir un gobierno Fe­
r su unión
Las colonias se vieron en el caso de unirse y de fortalece deral para defenderla y perpetuarla. Lo formó casi tan luego como tuvo una
co ntr a In·
a fin de presentar un frente común y vigoroso en su lucha existencia política, más aún, en los tiempos en que sus casas eran pasto del

glaterra. fuego, en que muchos de sus ciudadanos sangraban, y cuando al extenderse


tantes de la guerra y la desolación dejaban poco lugar para las tranquilas y madura
Así, en 1754 se reunió en Albany un Congreso de Represen
el llamado investigaciones y reflexiones que deben siempre preceder a la constitución
las Asambleas de Siete Colonias. Allí se presentó y adoptó
. Deb e señ · ; de un gobierno prudente y bien equilibrado que ha de regir a un pueblo li­
Plan de Unión de Albany, cuyo autor fue Benjamín Franklin
�·
·

prog ma
ra bre. No es extraño que un gobierno instaurado bajo tan malos auspicios, re­
larse que éste es considerando como el primer y original sultara en la práctica muy deficiente e inadecuado a los propósitos a que
debía responder.
7 N orteamericano, dentro de la
Cita do por J.A .'C. Grant, El Constitucionalismo
El ConstilLicionalismo a Mediados del siglo XIX, UNAM, México, 1957, Tomo 1, pp. 691
9 HAMILTON, A; MADISON, J. Y ]AY, 1. El Federalista, Fondo de Cultura Económica, Méxi­
8 TENA RAMÍREZ, Felipe, Derecho Constituc ional Mexicano, Porrúa, México, 1 co, 1998, p. 7.
p. 102.
284 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

El pueblo americano ha mantenido por tanto tiempo y sin variación


bre la importancia de conservarse fii·memente unido bajo un gobierno Fede­
so­

ral, dotado de poderes suficientes para todos los fines generales y nacionales.
r

·�-
1 UlERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flore' Trcjo

\os tratados.
No obstante, bajo este nuevo esquema, los Estados continuaron pro­
285

1 iiud de los Estados para que éstos hiciesen efectivos la ley nacional y

Proveer a la propia seguridad.


porcionando a la Federación la ayuda de sus mecanismos administrati­
\ os y siguieron soportando una parte importante de la carga de la apli­
Cuando Inglaterra pretendió castigar a Massachusetts, las demás
colonias hicieron causa común con ésta y a instancia de Virginia, los L·;Kión de la ley nacional.
Aquella Convención presidida por Washington fue en verdad una
Delegados de doce colonias se reunieron en Filadelfia, el S de septiem­
bre de 1774, para formar el Congreso Continental. asamblea de los hombres más notables de los Estados.
Pronto se esbozaron dentro de la Asamblea dos tendencias principa­
Dicho Congreso era una Asamblea Nacional que asumió la direc­
les: la de los Estados de mayor extensión y la de los Estados de pequeña
ción de la guerra y aconsejó a las colonias adoptar los gobiernos que en
e:xlcnsión territorial. Los primeros presentaron el Plan de Virginia, por
opinión de los representantes del pueblo, puedan conducir mejor a la
el que se proponía la creación de un poder nacional con sus tres ramas
felicidad y a la seguridad de sus electores. Ocho de las colonias que prin­
clúsicas, de las cuales la legislativa estaría dividida en dos cuerpos, de­
cipiaron a llamarse Estados habían adoptado Constituciones y Georgia
signados sus miembros proporcionalmente a la población y con faculta­
y New York continuaron la misma tendencia en 1777. des para legislar en todo lo que quedara fuera de la competencia de los
Massachusetts, que al principio había regresado hacia el estatuto E:, lados.
bajo el cual había funcionado de 1691 a 1726, adoptó una nueva Consti­ El Plan de New Jersey propuesto por el segundo bloque, contenía
tución en 1780. Connecticut y Rhode Island que se habían autogoberna­ un artículo que iba a ser la piedra angular del sistema, al instituir la su­
do, se conformaron con proseguir bajo sus cartas coloniales. prcnwcía del derecho Federal expedido de acuerdo con la Constitución, la
Así empezó a originarse la idea de que dentro de una misma organi­ nulidad de las leyes de los Estados que se le opusieran y la competencia
zación constitucional podían coexistir dos o más legislaturas coordina­ de los tribunales para declarar dicha nulidad.
das entre sí. con competencia distinta y suficiente cada una ligadas to­ El tercer Plan conocido como la Transacción de Connecticut, reco­
das por la Constitución, lo cual significaba un contexto teórico del gió del Plan de Virginia la representación proporcional al número de
Federalismo. habitantes, pero únicamente para la Cámara de representantes. Por
Para 1776 se presentó ante el Congreso Continental un Proyecto de otro lado acogió del Plan de New Jersey el voto igual para los Estados
Artículos de la Confederación y Unión Perpetua el cual no se aprobó dentro de la otra Cámara, el Senado. De este modo nació un bicamaris­
hasta noviembre de 1777 y que prevenía la ratificación de los Estados, mo propio del sistema Federal, en el que una Cámara representaba di­
rectamente al pueblo y la otra a las Entidades Federativas.
entró en vigor para 1781.
Para el éxito del sistema faltaba que el Congreso tuviera el control Como complemento del sistema en la revisión de la Constitución así
corno en sus reformas, tendrían que intervenir además del Congreso,
de las contribuciones; que existieran como poderes Federales el ejecuti­
las legislaturas de los Estados o convenciones de los mismos. Así fue
vo y el judicial y que el desacato por los Estados a las disposiciones Fe­
co mo la Asamblea de Filadelfia, con sentido práctico e intuición políti­
derales contara con suficiente sanción.
ca , salvó la pugna entre lo regional y lo nacional.
·
En 1787 se reunió en el Palacio del Estado de Filadelfia una Con
os d e la La novedad del sistema consistió en que un gobierno general, ejerci­
vención Federal que, bajo el pretexto de enmendar los artícul do directa mente sobre los súbditos y no por mediación de los Estados,
Co�­
Confederación, iba a crear una genuina Constitución Federal. E l desplazaba dentro de su propia esfera limitada a la autoridad de éstos,
C onsU·
greso Continental propuso a los Estados para su discusión una
los Pero al mismo tiempo los Estados conservaban su gobierno propio y di­
ón,
tución Nacional que fue denominada Artículos de Confederaci recto en todo
lo no otorgado al gobierno nacional por la Constitución,
cuales se ratificaron y entraron en vigor en 1781. la c ual
cen· de esta forma prevalecía y unificaba.
Como los poderes que por virtud de éstos se daban al gobierno
eció un Al respecto resulta pertinente citar nuevamente un pasaje de El Fe­
tral demostraron ser inadecuados, la nueva Constitución establ der(dista10 que
sistema Federal más adecuado bajo el cual el gobier no central tenía alude a este planteamiento:
propios órganos ejecutivos y actuaba directamente respecto de los
viduos, lográndose supei"ar la dependencia del gobierno cent ral a la
10 Op. cit., p. 35.
i['j

r
1:1

286 TEORÍA DE LA CONSTITUCió


N fEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flores Trejo 287

Se puede definir a la república confederada sencillamente como una r eu. ·:( En primer lugar, debe recordarse que el gobierno general no asumirá todo
nión de sociedades o como la asociación de dos o más estados en uno solo. el poder de hacer y administrar las leyes. Su jurisdicción se limita a ciertos
La amplitud, modalidades y objetos de la autoridad Federal, son puramente
discrecionales. Mientras subsista la organización separada de cada uno de
puntos que se enumeran y que conciernen a todos los miembros de la
república.
l¡l
los miembros; mientras exista, por necesidad constitucional, para fines lo­ La segunda observación que hay que formular consiste en que el objeto
cales, aunque se encuentre perfectamente subordinada a la autoridad gene­ inmediato de la Constitución Federal es asegurar la unión de los trece Esta­ 1¡ 1!
I·al de la unión, seguirá siendo, tanto de hecho como en teoría puesta, lejos dos primitivos, cosa que sabemos que es factible, y sumar a éstos los otros
de significar la abolición de los gobiernos de los Estados, los convierte en Estados que pueden surgir de su propio seno, o en su vecindad, lo que no
partes constituyentes de la soberanía nacional, permitiéndoles estar repre­ hay razón para dudar que sea igualmente viable. Los arreglos indispensables
sentados directamente en el Senado, y los deja en posesión de ciertas partes por lo que se refiere a esos ángulos y fracciones de nuestro territorio situados
exclusivas e importantísimas del poder soberano. Esto corresponde por en la frontera noroeste, deben dejarse para aquellos a quienes la experien­
completo con la noción del gobierno Federal, y con todas las denotaciones cia y los futuros descubrimientos pondrán al nivel de esa tarea.
racionales de esos términos. En tercer lugar, el intercambio a través de toda la nación quedará facili­
tado por nuevas mejoras. Por todos lados se acortarán las carreteras.
Una de las más importantes características de la Constitución de los
La cuarta y más importantes de estas consideraciones se refiere a que
Estados Unidos fue la aplicación del principio de Federalismo a una área como cada Estado, de un lado u otro, estará en la frontera y se verá, por lo
grande, que aumentaba rápidamente su tamaño y su población. tanto, inducido, al atender a su protección, a hacer algún sacrificio en bien
La Constitución Norteamericana no sólo sentó la estructura del go­ de la de todos en general, así también los Estados más alejados del centro de
bierno nacional y del sistema Federal sino que, a través de la adición de la Unión y que con ese motivo compartirán en menor grado los beneficios
una Declaración de Derechos a favor de sus habitantes, procuró limitar comunes, estarán al mismo tiempo en contigüidad inmediata con las nacio­
el alcance de la actividad del poder público y los procedimientos que nes extranjeras y necesitaran consiguientemente en mayor grado, en ciertas
habrían de seguirse para la manifestación del poder gubernamental. ocasiones, de su fortaleza y recursos. Puede resultar molesto a Georgia o a

Así, como garantes de la Constitución aparecen los tribunales como los Estados de nuestras fronteras occidentales o nordorientales, mandar re­
presentantes a la sede del gobierno; pero les parecería aún más angustioso
un medio de impartir vida a tales garantías y para asegurar el funciona­
luchar solos contra un enemigo invasor o sufragar sin ayuda todos los gas­
miento del sistema Federal.
tos inherentes a las precauciones que la proximidad de un peligro continuo
Las colonias norteamericanas en su lucha por alcanzar un derecho
puede exigirles. Por tanto, si la Unión les produce menos beneficios que a
propio, recogieron otro concepto: Un estatuto es nulo si es contrario a
los Estados más próximos, desde ciertos puntos de vista, en otros aspectos
los principios del derecho natural, v debe ser considerado como nulo por desprenderán de ella mayores ventajas, manteniéndose así el debido equili­
los tribunales. Esta doctrina se e�pleó para anular legislación colonial, brio en todas partes."
así como para reforzar argumentos contra la validez de las Navigation
Acts, de ls Stamp Act y contra el uso de órdenes de cateo utilizadas para
11.3. ADOPCIÓN Y CARACTERÍSTICAS
aplicar leyes inglesas impopulares.
De esta manera, puede asegurarse que el Federalismo norteameri­
DEL FEDERALISMO MEXICANO :,�¡
,'

cano nació de un compromiso entre aquellos que percibían la necesidad Siguiendo el criterio de Hermano Héller12 somos de la opinión que
de unión y los que insistían en una norma interna propia. la adopción de una Forma de Estado es una decisión Fundamental. En
La distribución de facultades entre los dos órdenes (llamado el uno esta tesitura, el establecimiento del Federalismo en nuestro país signifi­
"Federal" por antonomasia y el otro "regional" o "local"), es en sí rnis­ ca un hecho trascendental desde diversas ópticas como la política, la
ma de trascendencia para la vida del país, pues esa distribución debe social y desde luego la jurídica.
resolver el problema de la conveniencia de que cada una de las faculta• Sobre el particular existen dos posturas principales que son ex­
des ingrese a una u otra de las jur isdi c ci on es . cluyentes entre sí, ya que sostienen puntos de vista diametralmente
Resulta ad-hoc la siguiente cita de El Federalista: 11 0Puestos:

11
Op. cit., pp. 54 y 55. 12 HELLER, Herman, Teoría del Estado, Fondo de Cultura Económica, México, 1988.
288 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN FEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flores Treja 289

l. Una teoría postula que los orígenes del Sistema Federal Mexicano La base de sustentación principal de esta teoría radica en la adop­
se encuentrwz e11 las diputaciones provinciales: 11 ción del régimen Federalista aunque siguiéndose el proceso inverso al
Esta interesante argumentación jurídica, estima que la Constitución acontecido en los Estados Unidos, ya que después de tres siglos de Colo­
de Cádiz expedida por las Cortes el 19 de marzo de 181214 estipuló que niaje, lo unido decidió compenetrarse en un sistema federativo que
el rey nombraría en cada provincia un jefe superior y que "en cada pro­ aportaba varias ventajas.
vincia habría una diputación provincial para promover su prosperidad". Por otro lado, la adopción del Federalismo de conformidad con esta

Este sistema se extendió a la América Hispana. Siete diputados form a­ corriente doctrinaria, se ve reflejada en la traspolación de las institucio­
nes esenciales de gobierno instauradas por la Carta Magna Federalista
ban cada diputación provincial y eran designados por el pueblo en vota­
Norteamericana. Así, tratándose del Legislativo Federal, la Constitu­
ción indirecta.
ción Norteamericana contempló un sistema bicamarista integrado por
Además, cabe precisar que el territorio de la Nueva España se divi­
una Cámara de Representantes y otra de Senadores que eran nombra­
día para efectos electorales y de la propia división política en Parro­
dos por las Legislaturas de los Estados y por ende, representantes de és­
quias, que era la extensión territorial menos extensa, Partidos que re­
tos. El Ejecutivo Federal compuesto por un Presidente y un Vicepresi­
presentaban una circunscripción de mayor espacio y las Provincias
dente y el Poder Judicial conformado por una Suprema Corte de
mencionadas. Justicia, Tribunales de Circuito y Juzgados de Distrito.
Este nuevo sistema de gobierno que implantaba la Constitución de La composición anterior fue adoptada de manera integral por el
Cádiz abolía la persona del virrey. Constituyente de 1824, de conformidad con esta doctrina.
El jefe político en la Ciudad de México que, de hecho reemplazó al Cabe recordar que durante los últimos días del Imperio de Iturbide,
virrey, carecía de jurisdicción sobre los jefes políticos de Guadalajara, nuestro país se encontraba dividido en provincias independientes. Cada
Mérida, San Luis Potosí, Monterrey o Durango. Cada provincia gozaba una de esas provincias se auto-gobernaba, el jefe político se convirtió en
de una independencia completa con respecto a las demás. ejecutivo y la diputación provincial o alguna asamblea, en legislativo. En
La implantación de las diputaciones provinciales tiene singular im­ tales condiciones, el gobierno central no existía en esos días en México.
portancia, pues ellas acostumbraron a las provincias a tener su propio A la caída de Iturbide las tendencias ideológicas se unificaron para

gobierno y a regirse conforme a sus aspiraciones y necesidades. adoptar la Forma Republicana de gobierno, pero respecto de la forma

Por lo anterior, esta postura doctrinaria sostiene que con base en la de Estado, existían intereses encontrados ya que unos deseaban la im­
plantación del Centralismo y otros el Federalismo.
organización territorial que contemplaba una triple circunscripción, asf
El 28 de mayo de 1823 se presentó al Congreso un "Plan de la Cons­
como en la división política para elegir Diputados a las Cortes de Cádiz,
titución Política de la Nación Mexicana", cuyos principales autores fue­
el constituyente primigenio de nuestro país dio lugar al Federalismo
ron José del Valle y Fray Servando Teresa de Mier. Dicho plan que por
Mexicano. cierto no llegó a discutirse, declaraba que la nación mexicana era una
2. La otra propuesta teórica en tomo al Federalismo estima que el Cons­ Rep ública Representativa y Federal, pero no abordó la temática en tor­
tituyerzte de 1824 puso sus ojos en la dirección cardinal norte y consideró no a la soberanía de los Estados miembros, idea que las provincias
como modelo a seguir, la Fomza de Estado Federal concebida e instaura­ creían esencial.

da por los Estados Unidos de Norteamérica: El 12 de junio de 1823 el Congreso convocante, emitió su voto por
la forma de República Federal que dice:!'' "El soberano Congreso cons­
Según esta postura, Norteamérica apasionó a nuestros primeros
tituvente, en sesión extraordinaria de esa noche, ha tenido a bien acor­
constituyentes ya que se trataba de una joven nación en la que se vefa
dar que el gobierno puede proceder a decir a las provincias estar el
brillar la libertad. Los hombres que deseaban el Federalismo se unieron
\oto de sus soberanías por el sistema de república federada, y que no lo
en un grupo especie de partido que con el tiempo se denominó liberal.
ha declarado en virtud de haber decretado se forme convocatoria para
el nuevo Congreso que constituya a la nación".
11 Paradójicamente la autora norteamericana LEE BENSON, Nettie, sostiene este crite"
l'io, en su obra La /JipulaciiÍII PnJI'illcial v El Federalismo Mexicano, México, 1955, p.
20.
-
14 Ccmslilllciátr de Cádi�. Promulgada por las Cot·tes el 19 de marzo de 1812, Madrid. 1° FLOR ES TREJO, Fe1·nando, EsiUdio Constilllciorwl del Poder Judicial Federal, UNAM,

1819, p 25. México, 1979. p. 279.


290 TEORÍA DE LA CONSTITUCiÓN r �-�
FEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flores Trejo 291

José Barragán16 ha demostrado que a través del movimiento de 1823 Dejemos por Dios las necias preocupaciones y advirtamos que en nada pug­
de las diputaciones provinciales de Jalisco, Michoacán, San Luis Potosí .
na a nuestra Santa Religión el que nos constituyamos bajo el sistema de Re­
Querétaro, Zacatecas, Guanajuato, Puebla, Oaxaca y Yucatán, el siste- pública. Este gobierno sólo mira al establecimiento de unas leyes análogas
ma Federal fue exigido para nuestro país. a nuestras costumbres y situación y nada tiene que hacer con los dogmas y
Los hechos señalan que el movimiento Federalista de las enton ces disciplina eclesiásticas. República es Colombia, y es católica. Monarquía es
provincias fue natural, sin la imposición del centro. Considerando el Inglaterra, y es protestante.

caso de Jalisco el Manifiesto de la Diputación Provincial contenía ele­


El ministerio más importante, el de Relaciones Exteriores y Gober­
mentos dignos de consideración para definir el sistema Federal como
nación, a cargo de Lucas Alamán, mostraba abierta animadversión ha­
los siguientes:
cia el Federalismo.
l. Cada provincia se convierte en un Estado independiente.
Los anti-federalistas quisieron tomar la vía de una República Cen­
2. Esta independencia se manifiesta en órganos de gobiernos pro­
tral. la cual en su consideración sintetizaba mejor que ningún otro siste­
pios, la diputación provincial se transforma en Poder Legislativo
ma de gobierno la unión de religión, costumbres, idioma y comercio
y el jefe político superior en gobernador.
con que México había contado.
3. Por ser independiente, al estado le compete promover su prospe­
ridad y fortuna internas. Para desmentirlos, no hubo mejor pluma que la de José Joaquín

4. La Federación es un pacto que se concretaría en el Acta Constitu­ Fernández de Lizardi, quien expresó:18

tiva de la Federación. República central es aquella forma de gobierno en la que reconociéndose


5. El objeto de la Federación es ejercer de común consentimiento en una Provincia el foco de la soberanía de todos los estados de una nación
ciertos atributos de la soberanía, principalmente la defensa mu­ en la corporación que los representa, ésta les impone con la autoridad más
tua y el aseguramiento de la paz pública. absoluta, las leyes generales y particulares, dejándoles dependientes en
todo su poder. (No es eso? Así me lo parece, le contesté. Pues con razón,
Este manifiesto de 1823 explica sin duda, la legitimidad de su pro­
replicó el loro, los estados de Jalisco, Zacatecas, San Luis, Oaxaca, Duran­
nunciamiento por el sistema Federal.
go, Valladolid (Michoacán) y todos los demás detestan esta clase de repúbli­
No obstante, las provincias no podían olvidar que ya existía un Con­
ca, pues no es otra cosa que una monarquía enmascarada. (Qué había ga­
greso General que las representaba y que podía decidir cualquier otra J
-':::e: nado tu patria si después de tantos y tan costosos sacrificios había que
,,,

forma de gobierno. Sin embargo, las provincias no les reconocieron ese


quedar otra vez sujeta a una metrópoli, depósito del lujo, de la ambición y
derecho, y en el citado manifiesto se adoptó el concepto de representa­ el despotismo, que llena de los humos de arte la sacrifica para satisfacer el
ción política como mandato expreso de sus electores. orgullo de unos mandarines absolutos y de unos cuantos ricos aristócra­
Por otra parte el manifiesto de Jalisco prescribió la igualdad natural tas? ... Bien se podía decir en ese caso, que había mudado de tiranos, pero
de las provincias, concepto con el que se encontraban familiarizados los no de servidumbre. Dime ahora (qué entiendes por república federada?
diputados ante las Cortes de Cádiz, quienes lo aplicaron a través de la Entiendo, le dije: una alianza que hacen todos los estados libres entre sí,

creación de las diputaciones provinciales. con la que conservando cada uno su soberanía respectiva, se hacen libres e
independientes unos de otros; y al mismo tiempo unidos entre sí, que no
De esta forma, la República Federal norteamericana y la monarquía
forman sino una nación soberana, obligándose todos por el pacto Federal a
española eran los paradigmas a seguir; el término medio que las consti·
concurrir en cuanto puedan a la libertad y felicidad general de la Patria y
El
tuía, el gobierno republicano centralista, no era un modelo cercano. a la particular de cada uno de ellos.
Despertador,17 periódico Federalista publicado en Guadalajara, de dicÓ
Podemos apreciar que el pensamiento de Lizardi plantea la teoría
un párrafo para desmentir los ataques a la República:
de la cosoberanía, asumida más adelante por Alexis de Tocqueville.
Las ventajas del sistema Federal fueron desde un principio aprecia­
16 BARRAGÁN BARRAGÁN, José, Introducción al Federalismo, UNAM, das y se resumían en aquella época de l a siguiente manera:
pp. 129 y SS. •

17 Consultado en la obra de GONZÁLEZ ÜROPEZA, Manuel, El Federalismo UNAM, Méxt"-


'
f
co, 1995, p. 24. 18 Consultado en la Obra de GoNZÁLEZ ÜROPEZA, Manuel, op. cit., pp. 25 y ss.
292 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

1. El sistema Federal es más fácil de gobernar ya que cada Estado


dicta sus propios actos de gobierno y los habitantes no tienen que
·r.· ·
'

'f
.
FEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flores Trcjo

lo 5° la adopción de la Forma de Esta


IY

declaró que la Federación se integ


do Federal. En el artículo 6° se
raba por20 "Estados independie
293

ntes, li­
trasladarse al centro de la República para arreglar sus asuntos. hres y soheranos, en lo que exclusivam
ente toque a su administración
2. La multiplicidad de autoridades a nivel Federal y de los Estados, y
gohiemo interior". Finalmente en el
numeral 7° se enumeraron los
aleja la posibilidad de que los trastornos y revoluciones hagan Esta­
dos de la Federación.
presa fácil al país, pues al fragmentarse la autoridad, resulta difí­ Posteriormente el Congreso expi
dió el 4 de octubre de 1824
la que
cil que un facineroso controle o engañe a todos los poderes de to­ �cría nuestra primera Constitución:
la Carta Federal de 1824 que
desde
dos los Estados. luego estableció el Federalismo como
Forma de Estado.
3. El Federalismo dificulta el abuso del poder, pues toda su ciencia Sin embargo, la difícil situación
del país fue atribuida indebida
­
y naturaleza consiste en la división y subdivisión de los poderes. mente al Federalismo, por lo que en
1837 se substituyó la Carta de 1824
Este argumento se adelanta al actualmente sostenido de que el por la primera Constitución centralista
llamada Leyes Constituciona­
Federalismo es una expresión que encuentra su causa en el prin­ les, preservándose está Forma
de Estado a través de las Bases
Orgáni­
cipio de división de poderes, cuya manifestación horizontal o en cas de 1843.
la misma esfera de poder consiste en la clásica división de los de­ El descontento hacia la reciente
Carta Magna creó un ambiente
partamentos del poder: Legislativo, Ejecutivo, Judicial. Mientras hostil en la república. Los Federalist
as no descuidaron ninguna oportu­
que su manifestación vertical, inspirada en los mismos principios, nidad para tratar de derrocar al régim
en espurio.
se expresa en distintas esferas: Federal, estatal y municipal. El 4 de agosto de 1846 estalló el
pronunciamiento de la Ciudadela
4. El sistema Federal propicia el desarrollo intelectual, industrial y organizado por el general Salas
y Gómez Farías, su principal band
era
comercial del estado pues debe depender tan sólo de sus propios fue la reunión de un nuevo Constituy
ente. Santa Anna regresó de Cuba
,
recursos y no del centro del país. Al requerir autoridades propias, donde se encontraba exiliado y expu
so sus ideas que ya eran Federalis­
éstas deben provenir de su propio medio, pues no puede tolerarse ta. El general Salas de acuerdo con
Santa Anna expidió el decreto de
22
que sean allegadas de una figura del centro del país, por lo que la de agosto del 46 donde se resta
bleció la vigencia de la constitució
n Fe­
institución se mejora para los futuros gobernantes de los estados. deral de 1824, y se convocó
a una Asamblea que expresaría la
voluntad
5. La Federación no es débil para afrontar las agresiones exteriores, nacional.
ya que la defensa común está centralizada y no deja a los estados El 6 de diciembre empezó a celeb
rar sesiones nuestro nuevo Consti­
federados indefensos ante las invasiones. tuyente y emitió el "Acta
Constitutiva y de Reformas", sancionada
el 18
6. Aunque hay aspectos comunes, el Federalismo es el único sistema de mayo de 1847, jurad
a y promulgada el 21 de ese mes y
año. Dicho
de gobierno que contempla un respeto por las diferencias especí· documento repre
sentó de nueva cuenta la vuelta al Feder
alismo que re­
ficas de cada estado, al ser atributo de su soberanía el legislar so­ cogía los principios
esgrimidos por la Carta Federal de
1824.
bre las materias de su competencia, de la manera que mejor les El sistema de república Fede
ral subsistió hasta el año 1853, en
que otra vez hizo acto el
parezca.
de presencia la figura del dictador
Santa Anna.
Los hombres estaban cans
En nuestra opinión pensamos el origen de nuestro Federalismo en­ ados de la tiranía de Santa Anna
contento era , el des­
cuentra sus raíces en la Carta Magna Norteamericana. general. El primero de marzo
de 1854, el coronel Villa­
rreal expidió
En efecto, si bien el Constituyente de 1824 no realizó una imitación el Plan de Ayutla, y el once de
ese mes la guarnición de
Acapulco
extralógica de la Constitución Norteamericana, creemos que la adoptó aceptó, aunque adicionándolo, el
manifiesto. La lucha fue ar­
·

dua pero el
como modelo para establecer la Forma de Estado Federal lo que se e� dictador fue vencido, y el 9 de
·
agosto de 1855 abandonó el
País.
rrobora con la instauración de las instituciones Federales contenidas en
dicho documento fundamental.
Independientemente de la escogitación de cualquiera de las anteri� IY
SENADO DE LA REPÚBLICA. Doclllllt!ll
los Hisróricus
res posiciones doctrinarias, el 31 de enero de 1824 se aprobó el Acta A
nnwlas Mexicanas, México, 1965, Tomo 1, p. 121.
Cu11slilucimwles de las
Fuer:as

Constitutiva de la Federación Mexicana, estableciéndose en el artícU- 20 Op. cit., p. 121.


·fl 1

294 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN FEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO F. Flores Treja


295
-

El 16 de octubre de 1855 se expidió el decreto convocatorio para in­ nistro y, por recomendación de éste, a los demás miembros del Gabine­
tegrar una Asamblea Constituyente, y el 18 de febrero de 1856 se inicia­ te. El primer ministro debe tener la confianza de la Cámara de los co­
ron las sesiones de la Cámara que expidió la Constitución de 185 7. munes ante la cual es responsable el Gabinete.
Tanto los conservadores como los liberales aceptaron el Federalis­ Ottawa, es la capital y al mismo tiempo la residencia del gobierno
mo como la única solución posible de pacificar el país, lo que se actuali­ de Canadá, aunque a diferencia del sistema norteamericano, no consti­
zó con la promulgación de la Lex Fundamentalis citada en el párrafo tuye un distrito Federal. Es parte de la provincia de Ontario y no es ca­
anterior. pital de la misma. Se rige por las leyes de Ontario y constituye un muni­
cipio electo por sus habitantes, encabezados por el alcalde (mayor). El
11.4. SISTEMA FEDERAL CANADIENSE gobierno Federal no tiene control sobre la capital en ninguna materia
que sea de jurisdicción provincial o municipal. Sin embargo, tiene po­
11.4.1. PROLEGÓMENOS der para expropiar tierra.
El gobierno Federal creó la Comisión de la Capital Nacional con el
Previamente al análisis del sistema Federal establecido por el pue­
objeto de administrar sus propiedades en Ottawa, elaborar planes y
blo canadiense, estimamos conveniente precisar algunas características
apoyar el desarrollo, conservación y mejoras de la región de la capital
de este importante país.
nacional.
La Forma de Gobierno adoptada por Canadá es la de una monar­
La ciudad de Ottawa tiene un alto grado de autonomía. Sin embar­
quía constitucional. En 1982 fue proclamada una nueva Acta Constitu­
go, al rebasar la capital Federal el territorio estrictamente de Ottawa y
cional cuyo contenido sigue siendo básicamente el mismo del Acta de la
abarcar otras municipalidades, principalmente Hull, en Quebec, se han
América Británica del Norte (186 7), que equivalía a una Constitución
realizado diversos planteamientos para crear un gobierno territorial si­
no escrita. Sin embargo, a este documento se ha agregado ahora una
milar a un distrito Federal, separando a esta región de las provincias de
Carta de Derechos y Libertades.
Ontario y Quebec y constituyendo un gobierno especial Federal, sin que
El país se rige también por una Constitución no escrita como son las
desaparezcan los municipios.
tradiciones jurídicas y las actas parlamentarias y legislativas. El Estado
tiene tres órganos: el Ejecutivo, representado por la reina británica
como jefe del Estado quien a su vez está representada por el goberna­
11.4.2. CARACTERÍSTICAS
dor general, al cual nombra por cinco años por recomendación del go­
Ahora bien en lo atinente al sistema Federal canadiense, según Ma­
bierno; el Parlamento (Federal) compuesto por el Senado (104 miem­
rio de la Cueva21 existen dos criterios para la determinación de las com­
bros designados por el gobernador general, incluyendo dos, agregados
petenc ias correspondientes a la Federación y a los Estados:
en 1975, como representación de los territorios) y la Cámara de los Co­
. �.. a) El seguido por el sistema norteamericano y,
munes (282 miembros elegidos por voto popular).
b) El concebido por el sistema canadiense.
En lo inherente al Poder Judicial, se encuentra encabezado por la
Corte Suprema de Canadá (integrada por nueve miembros), la Corte De conformidad con el primer sistema, corresponde la competencia
Federal y las Cortes Provinciales. original a los Estados integrantes y la delegada a la Federación. Esta
El Parlamento tiene una duración máxima de cinco años, pero el delegación existirá en tres casos:
gobierno puede disolverlo antes de cumplirse ese plazo y convocar a 1. Cuando la Constitución conceda expresamente una facultad ex­
nuevas elecciones. Los parlamentos provinciales funcionan de manera clusiva a la Federación;
parecida, con un teniente gobernador que representa al gobernador 2. Cuando se conceda por la Constitución una facultad a la unión
general. sin afirmar que es exclusiva, pero prohibiendo simultáneamente
Teóricamente la reina por medio del gobernador general. es la su-
� �
prema autoridad pero e Poder j� cutivo en r� alidad es ejercido ex.cl � su ejercicio a los Estados miembros;

sivamente por el ConseJO de Mm1stros o Gabmete, encabezado por .


21 CUEVA, Mario de la, Teoría de la Constitución, Porrúa, México, 1982, pp. 79 y ss.
primer ministro o premier. El gobernador general nombra al primer Jlll•
296 TEORÍA DE LA CONSTITUCióllt

3. Cuando se conceda determinada facultad a la Unión, que sea in­


fl /-
FEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO � F. Flores Treja

11.4.3. L A DISTRIBUCIÓN DE FACULTADES ENTRE


LA FEDERACIÓN Y LOS ESTADOS
297

compatible con su realización por cualquiera de las Entidades


federativa.
11.4.3.1. Esfera de competencia
De manera que toda facultad no concedida a la Federación se en­
Si el Estado tiene que operar necesariamente mediante una estruc­
tiende reservada los Estados integrantes, aclaración expresa introduci­
tura orgánica y los órganos realizan las funciones inherentes para al­
da en la Constitución norteamericana por la enmienda X.
L"anzar las finalidades encomendadas por la sociedad, resulta necesario
El segundo sistema, el Canadiense, utiliza el método contrario. En
L·stablecer el ámbito de facultades o de atribuciones que les correspon­
efecto establece los efectos inversos al sistema postulado por Norteamé­
rica al preconizar que las atribuciones no delegadas expresamente a los ck n, respetando varios principios como los siguientes:
l. Dos órganos no pueden tener atribuida la misma facultad;
Estados se entienden reservadas a la Federación. Por razones naturales
2. Debe existir una jerarquía de atribuciones siguiendo en todo mo­
lo anterior explica porque Canadá evolucionó de Estado Unitario a
mento la jerarquía de las normas aplicables;
Estado Federal.
3. El órgano que tiene atribuida una facultad de mayor jerarquía,
A nivel Federal la Constitución Canadiense incluye en la misma for­
puede realizar una de menor jerarquía;
ma como lo hace para un nivel provincial o estatal, un elemento prove­
4. Tratándose del sistema Federal mexicano, la facultad que no está
niente del derecho usual constitucional británico, las llamadas conven­
conferida de manera expresa a la Federación se entiende reserva­
ciones de la Constitución.
da a las Entidades Federativas.
Una característica común de estas constituciones provinciales es
que carecen de un carácter constitucional formal o de un texto único que Asimismo, debe considerarse que la competencia se encuentra ca­
corresponda a la Constitución. Las unidades territoriales original� l�
racterizada por ser irrenunciable. Efectivamente, el titular del órgano
•�

que fueron unificadas en 186 7 para formar la Confederación, principia� no puede renunciar a ejercer su competencia en el momento de que se

ron como colonias británicas ya sea por colonización o en un caso al trate aunque en cambio bajo ciertas condiciones puede delegar al titular

menos por conquista militar. La práctica constitucional británica nunca


de algún otro órgano subordinado el ejercicio de esa competencia.
Mayores obstáculos existen tratándose de la avocación, es decir, de
entrevió la posibilidad de tener una sola ley. Las Constituciones Provin·
la posibilidad de que un órgano jerárquicamente superior pueda absor­
ciales entonces son un mélange de convenciones constitucionales britá·
nicas recibidas o heredadas y del constitucionalismo británico del Com·
ber las competencias de un órgano inferior.
Por otro lado, la competencia de los órganos se presume de tal ma­
mon Law; de estatutos constitucionales elaborados por las propias
nera que, salvo casos en que manifiestamente no puedan ser competen­
legislaturas provinciales; de decisiones judiciales de Tribunales Cana-:­
te s, habrá que probar la incompetencia del órgano respectivo.
dienses (incluyendo aquí Tribunales Provinciales y Federales); de deci�
siones plenarias.
11.4.3.2. Distribución de competencias
No existe sin embargo, nada que impida a cualquier legislatura pro­
entre la Federación y las Entidades Federativas
vincial el solicitar a sus propios Congresos la adopción de un instrU·
mento constitucional formal o una Constitución que rija a la Provincia
A causa de la diversidad de los orígenes del Federalism
o en cada
País es posible que éste sea
para el futuro. No hay impedimento hacia una Provincia para cambiar diferente en cada Estado que lo ha adopta­
do, en consecuencia,
su propia Constitución. . la esfera dentro de la cual puede operar cada uno
de los poderes
La confusión o ambigüedad sobre si las facultades residuales de
g� varía de acuerdo a las circunstancias de tiempo y lugar.
múltipl es Y la rg .. Existen métodos distintos que determinan la
bierno son Federales o provinciales, ha conducido a distribución de los po
ie rJ_lof deres estatales
mente sostenidos conflictos entre el Gobierno Federal y los Gob entre la Federación y los Estados. El primero consiste en
"
i68 ' en u m e rar detalladamente las atribuciones de cada uno; otros
de las Provincias. Estos conflictos entre las Provincias y la Federac se basan
han sido algunas veces solucionados por negociaciones y transaccion� en una enumeración parcial. El primero de éstos enuncia las
atribucio­
políticas, pero demasiado a menudo han terminado en largos y nes del poder Federal, dejando las no mencionadas en
el ámbito compe­
pleitos ante los tribunales. tencia! de las Entidades Federativas en tanto que, el segundo, emplea
la
298 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN FEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flores Treja
299

metodología inversa al detallar las atribuciones de las Entidades Fede­ ral correspondiéndole al artículo 124 su regulación. Realizando una
rativas y derivando las atribuciones no mencionadas al orden Federal. interpretación conjunta, se infiere que el constituyente mexicano imple­
De esta forma resulta evidente que deben colocarse dentro del ám­ mentó lo que los norteamericanos trataron de evitar, la limitación más
bito interno del Estado Federal aquellos asuntos que interesan conjun­ rígida al poder Federal. buscando así una mayor garantía de la conser­
tamente a la Nación, en tanto que, las materias de orden local que intere­ \ ación de las facultades de las Entidades Federativas.
san sólo al Estado respectivo, deben ser de la competencia de las Entidades. En resumen, los sistemas Federales resuelven la distribución de
En el ámbito internacional el orden Federal debe ser quien ejerza competencias entre la Federación y las Entidades Federativas, de dos
dichas atribuciones internacionales, entre las que se encuentran el dere­ formas: 1) el sistema seguido por los Estados Unidos de América y tal
cho de declarar la guerra, el de legación activa y pasiva y la celebración vez por la mayoría de las constituciones Federales mediante el cual se
de Tratados Internacionales. Jeja la competencia residual a las Entidades Federativas y a la Federa­
La primera resulta indiscutible como facultad del Estado Federal, ción aquello que la Constitución Federal le faculta o, 2) la situación in­
inclusive una buena parte de las constituciones Federales consignan ex­ versa, es decir, la competencia residual para la Federación, y a las Enti­
presamente ésta prohibición a los Estados salvo casos de suma urgencia dades Federativas únicamente aquello que expresamente le señale la
y con aviso inmediato al Presidente de la República. Constitución Federal, que es el sistema canadiense.
En lo atinente al derecho de legación, todas las constituciones Fede­ El artículo 121 de la Constitución Mexicana se ocupa del estableci­
rales coinciden en adjudicarlo al gobierno Federal exclusivamente. miento de las bases sobre las cuales se deberán aplicar en las diversas
El derecho de concertar Tratados presenta una solución doble: la Entidades Federativas, las leyes, actuaciones administrativas y resolu­
primera de ellas prohíbe terminantemente a los Estados la celebración ciones judiciales expedidas por las autoridades de las otras Entidades
de Tratados. La segunda es menos frecuente y permite, aun cuando en Federativas. El texto a que aludimos dice lo siguiente:
forma muy restringida, la celebración de Tratados a los Estados con
En cada Estado de la Federación se dará entera fe y crédito a los actos pú­
Estados extranjeros.
blicos, registros y procedimientos judiciales de todos los otros. El Congreso
La solución en la Constitución de los Estados Unidos de América en de la Unión, por medio de leyes generales, prescribirá la manera de probar
el sentido de que las facultades no concedidas a la Federación, ni prohi� dichos actos, registros y procedimientos, y el efecto de ellos.
bidas a los Estados-miembros se entienden reservadas a éstos fue intro;
Este precepto que regula las relaciones entre las Entidades Federa­
ducida por la enmienda X, cuyo texto es el siguiente: "Los poderes no del
tivas ha sido criticado por algunos autores, entre otros José Luis Siquei­
legados a los Estados Unidos por la Constitución, ni negados por ésta J
ros23 en el sentido de que se trata de una mala traducción del precepto
los estados, están reservados a los estados, respectivamente, o al pue:
blo". Según Joseph Story,22 cuando esta enmienda se presentó, se P�
relativo de la Constitución de los Estados Unidos de América, la cual
contemplaba en el artículo cuarto, sección 1 lo siguiente:
puso la inserción de la palabra "expresamente", entonces se hizo obser.:
var que resultaba inviable encerrar a un gobierno en los poderes Entera fe y crédito será acordado en cada Estado y a los actos públicos, ar­
expresos, por lo que es preciso admitir ciertos poderes implícitos si no chivos y procedimientos judiciales de los otros Estados. Y el Congreso pue­
se quiere que la Constitución descienda a los más minuciosos detalles. de, por leyes generales, determinar el modo de que tales actos, registros y
De esta manera, la proposición fue rechazada, pues "el único objeto de procedimientos se probarán, y los efectos de ellos.

esta enmienda es de impedir toda interpretación que tendiese a atribuir al Según Siqueiros, los conceptos Public Acts,
' Proceedings y Records
Congreso otros poderes de los que han sido acordados". del texto inglés, traducidos
como actos públicos, registros y procedi­
En México, en cambio, el Constituyente de 1857 incluyó en el al"' mientos, no resultan muy técnico
s en nuestro lenguaje constitucional.
tículo 117 la palabra expresamente, sin que existiera una ratio legis U na traducción más técnica y apegada a
la connotación jurídica de
explicara su inserción. Dicho precepto fue trasladado por el Con5
los conceptos
referidos por la sección 1 a del artículo IV de la Constit
ción no rteame u­
yente queretano de 1917 bajo el mismo texto, aunque en distinto ric a n a , podría ser "leyes" , "resoluciones judiciales" e "ins-

22 STORY, Joseph. Com tario sobre la Constitución Federal d los Es ad s


en e t o 23 SIQUEIROS, José Luis, Sfntesis de Derecho Internacio nal Privado. UNAM. México. 1961,
Imprenta la Universida d. Bueno s Aires, 1888, Tomo l, p. 104. P. 32.
300 TEORÍA DE LA CONSTITUCió� iFDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flores Trejo 301

cripciones", vocablos más precisos y de significación más definida en la presa: las atribuciones que se consignan en el artículo 73, y h) las prohi­
terminología jurídica de nuestro país. biciones que tienen las Entidades Federativas: artículos 117 y 118.
Por los antecedentes descritos, es dable aseverar que el artículo 124 Resulta claro que las primeras 29 fracciones del artículo 73 son fa­
de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos adoptó el L"tdtades expresas en las que se previenen las atribuciones encargadas al
sistema norteamericano respecto a la distribución de competencias en. Congreso de la Unión.
tre la Federación y los Estados, es decir, la competencia de origen co­ La última fracción, es decir, la fracción XXX del numeral citado
rresponde a las Entidades Federativas y la delegada a la Federación. L·ontempla las facultades implícitas que abordaremos más adelante. Las
Por ello resulta concluyente el principio de que las autoridades Fe­ lacultades implícitas son aquellas que el Poder legislativo puede conce­
derales sólo pueden realizar las atribuciones que la Constitución les se­ Lkrse a sí mismo o a cualquiera de los otros poderes Federales como
ñala, y que las demás facultades corresponden a los Estados miembros !l1edio necesario para ejercitar alguna de las facultades explícitas.
que actuarán de acuerdo con las Constituciones locales. En este sentido Tena Ramírez24 señala los requisitos indispensables para que sea
posible el uso de las facultades implícitas al afirmar lo siguiente:
se observa que únicamente la Constitución Federal es la encargada de
1. La existencia de una facultad explícita que por ella sola sea impo­
establecer la distribución de competencias.
sible ejercitarla;
Es importante señalar que el antecedente de nuestro artículo 124 :,.
2. La relación de medio a fin entre una y la otra;
Constitucional es el equivalente de la Carta Magna norteamericana. Sin
3. El reconocimiento por el Congreso de la Unión de la necesidad
.

embargo el constituyente de 1857 le agregó a dicho precepto la palabrá


de la facultad implícita y;
"expresamente", la cual no existe en el correlativo de los Estados Uni­
4. El otorgamiento de esta facultad por el Congreso al poder que de
dos de Norteamérica.
ella necesita.
Al decir el artículo 124: "Las facultades que no están expresamen�
te ..." separó los medios de una finalidad común a México y a Norte­ 11.4.5. FACULTADES
américa. En los dos países, paulatinamente se ha ampliado la esfera de ATRIBUIDAS A LAS ENTIDADES FEDERATIVAS
competencia de la Federación. En México el procedimiento ha consisti�
do en reformas constitucionales, en Estados Unidos en las llamadas fa­ De acuerdo con el artículo 124 todo lo que no corresponde a la Fe­
cultades implícitas. deración es facultad de las Entidades Federativas, con excepción de las

La propia Constitución establece una serie de hipótesis jurídicas, asf prohibiciones que la misma Constitución establece para los Estados.

como de efectos en lo atinente a las esferas de competencia en el Estado En este orden de ideas las Entidades Federativas gozan de autono­
!
mía interna respecto de la implementación del Poder Público, mani­
Federal, las cuales podemos clasificar de la siguiente manera:
l. Facultades atribuidas a la Federación.
fiesto en las tres funciones relativas: legislativa, ejecutiva y judicial, de
2. Facultades atribuidas a las Entidades Federativas. conformidad con las bases establecidas en el numeral 116 de la Consti­
3. Facultades prohibidas a la Federación. tución Federal, e igualmente para establecer organismos de carácter
4. Facultades prohibidas a las Entidades Federativas (hasta aquí autónomo tal y como se previene en las constituciones del Estado de
clasificación es la propuesta por Bryce). Veracruz y de México.
5. Facultades coincidentes.
6. Facultades coexistentes. 11.4.6. FACULTADES PROHIBIDAS A LA FEDERACIÓN
7. Facultades de auxilio.
Se puede pensar que resulta superfluo que la Constitución le niegue
8. Facultades que emanan de la jurisprudencia, ya sea expresamente una facultad a la Federación, si con el solo hecho de no
o adicionando la anterior clasificación. otorgársela se le está negando. No obstante creemos que desde una óp­
ti ca teórica puede presentarse el caso de una facultad que se encuentre
11.4.4. FACULTADES EXPRESAS
Vedada a la Federaci ón.

Las facultades atribuidas a la Federación, lo que ésta puede


zar, se encuentran enunciadas de dos diversas maneras: a) en forma 24 TENA RAMiREZ, Felipe, op. cit., p. 1 16.
302 TEORÍA DE LA CONSTITUCiÓN
fl FEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flores Trejo 303

Tal es d caso dd artículo 131 Constitucional que a la letra contempla: 11.4.10. FACULTADES DE AUXILIO

Es facultad pri\·ativa de la federación gravar las mercancías que se impar. Son aquellas en que una autoridad ayuda o auxilia a otra por dispo­
ten o exporten o que pase de tránsito por el territorio Nacional. así como
sición constitucional.
reglamentar en todo tiempo \' aún prohibir, por motivos de segut·idad o de
la circulación en el interior de la República de toda clase de efectos, cual­
11.4.11. FACULTADES CONCURRENTES
quiera que sea su procedencia; pero sin que la misma Federación pueda es­
tablecer, ni dictar, en el distrito Federal, los impuestos v leves que expresan Son aquellas que no están exclusivamente atribuidas a la Federa­
las ft·acción VI v VII del artículo 1 1 7.
L·ión , ni prohibidas a los Estados y cuando la primera no actúa las Enti­
dades Federativas pueden realizarlas; pero si la Federación legisla so­
11.4.7. FACULTADES bre esas materias, deroga la legislación local al respecto.
PROHIBIDAS A LAS ENTIDADES FEDERATIVAS El argumento para justificar la existencia de las facultades concu­
n·entes estriba en que las Entidades Federativas no pueden encontrarse
Estas prohibiciones pueden ser de dos clases: las absolutas y las re­
permanentemente bajo la expectativa de que la Federación intervenga.
lativas. Las absolutas se refieren a aquellos actos que jamás podrían
Mario de la Cueva25 afirma que en México no existen las facultades
realizar las Entidades Federativas. En contraposición, las relativas son
concurrentes y basa su aseveración en los artículos 16, 40, 41 y 103 cons­
aquellas inherentes a los actos que en principio están prohibidos a los
titucionales.
Estados, pero con la autorización del Congreso Federal sí los pueden El artículo 16, dice que: "Nadie puede ser molestado en su persona,
realizar. familia, domicilio, papeles o posesiones, sino en virtud de mandamiento
El artículo 117 establece las prohibiciones absolutas. "Los Estados
escrito de la autoridad competente, que funde y motive la causa legal
no pueden en ningún caso ... "; el artículo 118 establece las prohibicio­
dd procedimiento..."
nes relativas. "(Los Estados) tampoco pueden, sin consentimiento del El distinguido tratadista señala que los particulares tenemos el de­
Congreso de la Unión ... " recho de conocer qué autoridades pueden regir nuestro comportamien­
to y estas autoridades sólo pueden ser las que están autorizadas por la
11.4.8. FACULTADES COINCIDENTES ley fundamental para tal efecto.
El artículo 40, indica que la acción de las Entidades Federativas
Son aquellas que tanto la Federación como las Entidades Federati­
está limitada a su régimen interior y no en la esfera nacional.
vas pueden realizar por disposición constitucional.
El artículo 41, autoriza a los funcionarios locales a realizar determi­
De esta forma previene la Constitución que "La Federación y los
nados actos de acuerdo con su Constitución, la que tiene que concordar
Estados, en los términos de ley, podrán convenir la asunción por parte
con la general de la república, y las materias no consignadas en los có­
de éstos del ejercicio de sus funciones, la ejecución y operación de
digos supremos locales, son asuntos sobre los cuales las autoridades lo­
obras y la prestación de servicios públicos, cuando el desarrollo econó­
cal es son incompetentes.
mico y social lo haga necesario. Los Estados estarán facultados para ce­
Por tanto, al no existir estas facultades en nuestro orden jurídico,
lebrar esos convenios con sus Municipios, a efecto de que éstos asuman nu nca el derecho Federal quiebra al local.
la prestación de los servicios o la atención de las funciones a las que se
refiere el párrafo anterior". 11.4.12. FACULTADES IMPL Í CITAS

La fracción XXX del artículo 73 Constitucional previene la facultad


11.4.9. FACULTADES COEXISTENTES
que tiene el
Congreso "Para expedir todas las leyes que sean necesarias
Son aquellas que una parte de la misma facultad compete a la Fed

ración y l a otra a las Entidades Federativas. 2' Citado por Jorge CARP!Zo en su obra La Cmzstitució11 Mexicana de /917, up. cit.,
Pp. 2'i5 y 256.
304
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
'�
·�-�
1 EOERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flore' Trcjo 305

a objeto de hacer efectivas las facultades anteriores y todas las otras El primer supuesto contempla la consecuencia de que la facultad
concedidas por esta Constitución a los Poderes de la Unión." implícita no es autónoma, pues depende de una facultad principal, a la
Nuestra fracción XXX tuvo como antecedente directo a la Constitu­ que está subordinada y sin la cual no existiría.
ción de 1857, y aunque casi pasó íntegramente a la Constitución actual, El segundo requisito presupone que la facultad explícita quedaría
una diferencia la tenemos en la supresión de la palabra "propias" como inútil, estéril, en calidad de letra muerta si su ejercicio no se actualizara
calificativo de la palabra "leyes". por medio de la facultad implícita; de aquí que surge la relación de ne­
Según opinión de Lanz Duret:2b "tal cosa no tiene explicación algu­ L·L·s idad entre una y otra.
na, pues estudiando con detenimiento el Diario de los Debates del Cons­ El tercer elemento implica que el Congreso de la Unión admita la
titu�·ente de Querétaro, se encuentra que la omisión de la palabra pro­ necesidad de la facultad respectiva.
pias, fue hecha sin darse cuenta o sin derecho alguno, porque el texto El cuarto requerimiento significa que ni el Poder Ejecutivo ni el Ju­
fue votado en su integridad y en términos exactamente iguales al de la dicial pueden conferirse a sí mismos las facultades indispensables para
fracción XXX del artículo 72 del Código Político de 57". emplear las que la Constitución les concede, pues tienen que recibirlas
Creemos pertinente advertir lo que en nuestra opinión no es del ckl Poder Legislativo; en cambio, este poder no sólo otorga a los otros dos
todo cierto, es decir, que la supresión haya sido realizada "sin derecho", las facultades implícitas, sino que también se las da a sí mismo."
puesto que si el constituyente no tuviere derecho ¿a quién cabría éste? Tena Ramírez28 opina que si el jurista mexicano acude a las faculta­
En realidad la intención del autor en cita se refería a que el constitu­ des implícitas es con el objeto de justificar en forma constitucional la
yente sin causa o sin fundamento omitió dicho vocablo. existencia de cierta ley para cuya expedición no tiene el Congreso Fa­
En este orden de ideas, las facultades implícitas son las que el Po­ cultad expresa.
der legislativo puede concederse a sí mismo o a cualquiera de los otros Pensamos, sin embargo, que el jurista no tiene necesidad de justifi­
dos poderes federales como medio necesario para ejercitar alguna de car un procedimiento o una ley anticonstitucional ya que el papel del
las facultades explícitas. jurista es el de defender la Constitución en vez de buscar pretextos a las
Bajo este contexto creemos conveniente resaltar que la fracción \ iolaciones que sufra la Carta Magna.
mencionada no autoriza nuevas facultades al Congreso, sino que se re­ En esta tesitura el Poder Legislativo está facultado para crear aque­
fiere a las denominadas facultades explicativas, es decir, facultades que llas leyes que sean necesarias para hacer efectivas las facultades expre­
hagan efectivas las atribuciones consignadas en las 29 fracciones ante­ sas que por determinado motivo no puedan ser acatadas en la práctica
riores y otras funciones ya expresadas en el Código Supremo. por faltarles algo, pero que implícitamente dan a entender lo que les
Lo que el Congreso puede realizar según la fracción XXX , es vivifi- hace falta, y es aquí donde a objeto de hacer efectivas las "facultades
car las otras 29 fracciones, pero no puede crear ninguna facultad autó­ anteriores" o sean las expresas, deberá ser aplicada la fracción XXX del
noma de las enunciadas. artícu lo 73.
e se �
Tena Ramírez27 enumera cuatro requisitos necesarios para qu ·'
En nuestra opinión la palabra "necesarias" comprende el poder que
pueda hacer uso de las facultades implícitas: X tiene el Congreso de expedir las leyes que fueren necesarias y conve­
impo- )f
l. La existencia de una facultad explícita que por ella sola sea nie ntes para el ejercicio de dichas facultades, debía ceñirse a la adop­
sible ejercitarla; .,
.,.. ció n de las medidas absolutamente indispensables para obtener el fin de
2. La relación de medio a fin entre una v la otra; aquellas que sean consecuencia natural de las facultades expresas.
esidad
3. El reconocimiento por el Congreso d � la Unión de la nec
"A objeto" significa que la ley expedida con base en la fracción XXX ,
de la facultad implícita y deberá tener como
motivo el que pueda hacerse efectiva determinada
4. El otorgamiento de esta facultad por el congreso al poder que
facultad expresa.
ella necesite.
Una de las críticas que más se ha encaminado en contra del uso de
las facultades implícitas, consiste en que por medio de ellas el Poder
Cond�
20 LA!'>OZ DURf'T, Miguel, /Jcri!clw Conslilllcicma/ Mexicww, Compañía Editorial
nental, México, 1<J68. pp. 165-168. '"
27 Op. cil.. p. 161. • Op. cil., pp. 116-117.
...

306 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN i-EDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO F. Flor''' Trl'jo 307

Legislativo, haciendo uso indebido de las mismas adquiera un poder Creemos que una vez conformado el Pacto Federal los Estados esta-
desmedido. blecen un compromiso que presenta las siguientes características:
El concepto anterior es rebatible, ya que la doctrina, encabezada l. Es irrevocable.
por Felipe Tena Ramírez preconiza el seguimiento de ciertos requisitos 2. Es permanente.
que precisamos líneas arriba, para que sean empleadas las facultades 3. Es absoluto.
implícitas, y una vez acatados los mismos, se impida el abuso de estas
No obstante lo anterior, en 1915, durante la Revolución Constitu­
facultades.
L·ionalista el Estado de Oaxaca reasumió su soberanía, y posteriormente
Objetivamente el uso que las facultades implícitas pueden y deben
cuando sobrevino el Plan de Agua Prieta, en 1920, el Estado de Sonora
tener, nos podemos preguntar: (por qué no se lleva a cabo la aplicación
imitó a Oaxaca, levantando el estandarte de la soberanía local frente a los
de dicha fracción, y con qué se le substituye?
Poderes Federales.
La respuesta sería que la falta de uso se debe a que los vacíos que
El proceder de estas Entidades Federativas indudablemente resulta­
existen en la Constitución se tratan de llenar por medio de las reformas
ba contrario al Pacto Federal y desde luego violentaba los principios
constitucionales.
elementales del Federalismo ya que los Estados coaligados sellan con su
No todo vacío constitucional puede ser llenado con una facultad im­
anuencia, la permanencia de la Unión.
plícita, sino solamente los semivacíos constitucionales, puesto que para
Ahora bien, esta especie de interdicción fincada a los Estados, no
que actúe una facultad implícita es imprescindible que exista una facul­
carece de efectos ni está privada de sanción. En cualquier tiempo, si
tad expresa, de donde se deduce que no es un vacío absoluto sino relati­
una Entidad Federativa se organiza o actúa contrariamente a los esta­
vo y precisamente estos últimos son de los que se ocupan las facultades
blecimientos de la Carta Magna Federal los Poderes de la Federación
implícitas.
pueden desconocer el orden político establecido en dicha Entidad, y en
caso de resistencia derrocar inclusive mediante el uso de la fuerza a las
11.4.13. NATURALEZA JURÍDICA
autoridades locales ilegítimas.
DE LOS ESTADOS MIEMBROS DE LA UNIÓN
La confirmación de que nuestra Constitución no ha considerado
corno Entidades soberanas a los Estados, se impele no solamente en la
Con base en el recorrido histórico que hemos realizado es permisi­
forma de gobierno que les impone, sino deriva de su organización polí­
ble afirmar, que la Federación no nació de un pacto político celebrado
tica, fijándoles como característica esencial de su régimen la división
entre los Estados integrantes. En efecto, el origen de la Federación no de
poderes y determinando claramente el número de éstos así como la de­
se localiza en un convenio entre Entidades que previamente hubieran
no minación particular que deben adoptar los titulares
adquirido su soberanía y su independencia ya que simplemente no exis­ de los mismos.
De esta forma, la Constitución no se concretó a
tían dichos Estados. exigir un gobierno repu­
o blicano y representativo para los Estados, sino
México como incipiente Estado Soberano, contaba con un gobiern estableció además que
uía conta ran con un Poder Ejecutivo,
único, con legislación uniforme, con la misma religión, constit una cuyo titular sería precisamente el Go­
bern ador y que existiera
sola Nación. Al emanciparse y conquistar sus derechos como pueblo so­ un órgano legislativo para evitar que las facul­
4 tades propias
berano optó en su primer Congreso Constituyente, celebrado en 182 de éste se sumaran a las del Gobernador.
por el régimen Federal. Las Entidades que surgieron de este ord
en Conforme al artículo 124,2Y los Estados tienen amplísim
o campo
Para desarrollar actividades
creado por la Constitución de 1824 son los Estados y debe considerárse· sociales, culturales y políticas de manifies­
do
les como partes integrantes de un cuerpo político, es decir el Esta
ta importancia
para todos sus habitantes, puesto que, según dicho pre­
cepto,
mexicano, y no como partes asociadas por virtud de un pacto. . las facultades que no están concedidas por la Constituc
ión a los
de secesión, es decif fun cionarios Federal
Los Estados como tales no tienen el derecho es se entienden reservadas a los Estados.
de separarse cuando lo estimen conveniente, o cuando juzguen que
1 J
Constitución ha sido violada, para recuperar su "independencia " o " 2" Al re s ecto consultar la obra de Edu rdo
p a RUIZ, Derechu Cunstituciunal. Edición
sumir su soberanía". �'ac�imilar de 1902. UNAM, México, 1978,
pp
. 381 y 382
.
308 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓ!I( ¡FDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flores Trejo 309

11.5. IMPORTANCIA DEL DISTRITO FEDERAL rritorio que actualmente tiene y en el caso de que los poderes Federales
se trasladen a otro lugar, se erigirá el Estado del Valle de México con
11.5.1. ANTECEDENTES HISTÓRICOS los límites y extensión que le asigne el Congreso General".
Como puede derivarse del texto anterior, la Carta Magna Federal
El Distrito Federal constituye la circunscripción territorial que sirve L·ontempla varios efectos en relación con el Distrito Federal. Inicial­
en los Estados Federales como sede o lugar de residencia de los Pode­ Jlll'Ilte preconiza una sinonimia entre la Ciudad de México y éste últi­
res Federales o de los órganos del gobierno Federal. En efecto, se presenta una identidad entre ambos, uno (Distrito Fe­
JllO.
El primer Distrito Federal que existió en el mundo, fue creado al es­ deral) va de la mano de la otra (Ciudad de México).
tablecerse la Federación de los Estados Unidos y recibió el nombre de Igualmente el Distrito Federal se constituye en la sede de los pode­
Distrito de Columbia. Uno de los motivos que propició su creación radi­ Federales, la Carta Magna establece de manera precisa que en ese
rL'S
có en la inconveniencia de que en un mismo territorio ejercieran juris­ lugar se asentarán éstos; el Legislativo, el Ejecutivo y el Judicial. Por tal
dicción los órganos Federales y los locales. Ante ello, Virginia y Mary­
motivo es que la sede parlamentaria, es decir, el Congreso de la Unión
land efectuaron cesiones territoriales y con ello se creó el referido
�e localiza en el Distrito Federal; asimismo el Ejecutivo Federal despa­
Distrito, en el cual solo tendrían jurisdicción los poderes Federales con
cha en la Ciudad de México y la Suprema Corte de Justicia realiza su
exclusión de cualquier otro.
!unción en el territorio distrital.
La propia Constitución consigna la posibilidad de que se trasladen
11.5.2. EL DISTRITO FEDERAL EN MÉXICO
ck lugar los poderes Federales fuera de los límites territoriales del Dis­
En nuestro país, la Constitución de 1824 estableció como facultad trito Federal y en ésta hipótesis, se podría llegara a conformar el Estado
del Congreso Federal la de elegir un lugar que sirviera de residencia del Valle de Anáhuac, siguiendo los derroteros que establezca el Con­
a los supremos poderes de la Federación y ejercer en su Distrito laS greso de la Unión.
atribuciones del Poder Legislativo de un Estado. El 18 de noviembre Bajo este contexto, la fracción VI del artículo 73 facultó al Congreso
de 1824 se declaró a la Ciudad de México como sede de los poderes de la Unión para legislar en todo lo relativo al Distrito Federal. El texto
Federales. original de este precepto prevenía:
Con las Constituciones centralistas de 1836 y 1843, el territorio diJ , El Congreso tiene facultad:
lo que había sido el Distrito Federal pasó a formar parte del Departa+·
VI. Para legislar en todo lo relativo al Distrito y Territorios Federales,
mento de México.30 ¡ sometiéndose a las bases siguientes:
El Acta Constitutiva y de Reformas de 1847 al restablecer el Federay Primera.-EI Gobierno del Distrito Federal estará a cargo del Presidente
lismo, reinstauraba al Distrito Federal bajo el territorio de la Ciudad eJ., de la República, quien lo ejercerá por conducto del órgano u órganos que
México. La Carta Magna Federal de 1857 enunció dentro de las partef determine la ley respectiva.
integrantes de la Federación al Estado del Valle de México, que se
��crrP_<UJ El órgano que se escogió para llevar a cabo las instrucciones del
ría en la Ciudad de México. Esta Constitución facultaba al r Presidente de la República, fue un Gobernador.
para llevar a cabo "el arreglo interior del Distrito Federal"
Venustiano Carranza expidió el 13 de abril de 1917 la Ley de Orga­
do cargos de elección popular. nización del Distrito y Territorios Federales. Conforme a los linea­
Con el triunfo de la Revolución y la promulgación de la
mie ntos de la Constitución, esta ley establecía que el Municipio Libre
énau
ción de 1917, se consolidó la institución del Distrito Federal previ
Política sería la base de la división territorial y de la organización política Y
se su situación jurídica en el artículo 44 de la Constitución
admi nistrativa del Distrito Federal. El gobernador del Distrito era nom­
los Estados Unidos Mexicanos que establece textualmente lo _

brado y
es de removido libremente por el Presidente de la República y depen­
La Ciudad de México es el Distrito Federal, sede de los Poder diente de
rá del éste.
unión y Capital de los Estados Unidos Mexicanos. Se compond
Asimismo prevenía que los intcg1·antes de los Ayuntamientos serían
designados mediante elección popular directa y se renovarían por mi­
30 Así lo señala Alfonso NoRIEGA CANTÚ en su obra, El Pe>!samie>lto Conservador
tad c
Consen•adm-ismo Mexicatw, UNAM, México. 1993, Tomo 11, p 170. ada año. La división m uni c ip a l que se había venido utilizando se
310 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

respetó provisionalmente y permanecieron vigentes los reglamentos que


no se opusieran a la Constitución.
,� FEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flores Trejo

El Poder Judicial del Distrito Federal se deposita en el Tribunal Su­


311

perior de Justicia y en el Consejo de la Judicatura.


El Ayuntamiento de la Ciudad de México se integró por veinticinco Como se advierte, ésta resultó ser una reforma de suma importan­
concejales, y en las demás municipalidades del Distrito Federal por cia para el Distrito Federal, que quitó en buena medida la "capitis de
quince cada uno.
minutio" que venían padeciendo los capitalinos.
La primera autoridad local era el Presidente Municipal.
El 28 de agosto de 1928 se introdujo una reforma a la fracción VI
del artículo 73 de la Carta Magna Federal mediante la cual se propor­
11.6. LA GARANTÍA FEDERAL
cionaron nuevas bases para la organización político-administrativa del
La garantía Federal se refiere principalmente a la protección que la
Distrito Federal y se suprimió el Municipio, quedando el gobierno a
Federación debe otorgar a las Entidades Federativas y se concretiza de
cargo del Presidente de la República, quien lo ejercería por conducto
manera toral en dos hipótesis:
del órgano y órganos que determinara la ley respectiva. Para tal efecto,
el 31 de diciembre de 1928, el Congreso de la Unión expidió la Ley
a) Los Poderes de la Unión tiene la obligación de proteger a las Enti­
Orgánica del Departamento del Distrito Federal. dades Federativas contra toda invasión o violencia exterior; y

El Departamento del Distrito Federal se creaba con base en la re­ h) La misma protección les otorgará la Federación en los casos de
forma al artículo precitado, para que a través de ésta Dependencia se sublevación o conflicto interior, si esta ayuda le es solicitada por la legis­
realizaran las funciones gubernativas. Este órgano de Gobierno se en­ latura local o por el ejecutivo cuando el congreso del Estado no se en­
contraba encabezado por el Jefe del Departamento quien era nombrado cuentre reunido.
y removido libremente por el Presidente de la República.
Esta garantía encuentra su punto de partida en la sección IV del ar­
Se implementaron igualmente los Delegados y los Subdelegados, ya
tículo 4° de la Constitución Norteamericana que preceptúa:31 "Los Esta­
que el Distrito Federal se había dividido en Delegaciones y Subdelega­
dos Unidos garantizan a cada Estado de esta Unión una forma republi­
ciones. Existía también el Consejo Consultivo, integrado por personas
que pertenecían a diversos sectores activos de la población. Sus faculta­ cana de gobierno y protegerán cada uno de ellos contra la invasión, y a

des eran principalmente de asesoramiento, consulta, denuncia, revisión pedido de la legislatura o del ejecutivo, cuando la legislatura no pueda
ser convocada, contra la violencia doméstica."
e inspección.
Al trasladar todas las funciones del gobierno del Distrito Federal Y Del texto anterior se aprecia que las hipótesis consagradas en el nu­
de los Ayuntamientos en que se dividía el Departamento del Distrito Fe­ meral citado abarcan las enumeradas líneas atrás y otra hipótesis adi­
deral, desapareció el régimen municipal en el Distrito Federal. cio nal, ya que también se garantiza a las Entidades Federativas una for­
El 29 de diciembre de 1970, se expidió otra Ley Orgánica que apun­ ma Republicana de Gobierno.
talaba las funciones del Departamento. Una nueva ley se expidió el 29 Según la estructura del Estado Federal norteamericano, la garantía
de diciembre de 1978. de la forma republicana es esencial al sistema; y lo mismo podría pen­
Ahora bien, el 22 de agosto de 1996 se publicó en el Diario Oficial sarse en el caso de México, ya que de conformidad con los artículos 40
de la Federación una trascendental reforma a la Constitución General 11 S existe identidad de decisiones fundamentales entre la Federación Y
Y
respecto del Distrito Federal, concretamente en el artículo 122. las Entidades Federativas, y una de éstas es precisamente la Forma Re­
Dicha reforma tuvo tintes democratizadores ya que los integrantes
publicana de
Gobierno.
de los Poderes Legislativo y Ejecutivo distritales, serían electos median·
Históricamente el artículo 34 del Acta Constitutiva de 1824 expresó
te votación popular directa.
e­ que la Constitución y la propia Acta garantizarían a las Entidades Fede­
En este orden de ideas, actualmente la Asamblea Legislativa se int
rativas la Forma de Gobierno
gra por legisladores denominados Asambleístas, los cuales res ultan . del Acta y a su vez los Estados quedarían
n pro­ Com prometidos a mantener el Estado Federal.
electos según los principios de mayoría relativa y representació
porcional, cada tres años.
El Ejecutivo Local se deposita en un Jefe de Gobierno
Al respecto consultar la obra de Ben1ard Sc!IWARTZ. Los Poderes del Gohienw.
11

electo por votación directa cuyo período dura seis años. UNAM. México 1966.
312 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN FEDERACIÓN COMO FORMA DE ESTADO - F. Flores Trejo 313

Este planteamiento se trasladó a la Constitución de 1824, ya que el gobernador y la legislatura, y cada uno de ellos deseaba el apoyo Fede­
Acta fue parte de la misma y la tesis fue confirmada por el artículo 161-1 r al en la contienda.
de la mencionada Constitución. En 1874, entre los nuevos artículos constitucionales se estableció el
Sin embargo, la garantía de la Forma Republicana fue suprimida en que actualmente es la fracción VI del numeral 76 que faculta al Senado
la Constitución de 185 7 y es imposible conocer la razón de tal omisión, para: "Resolver las cuestiones políticas que surjan entre los poderes de wz

ya que el artículo en cuestión fue aprobado sin discusión el 11 de no­ c,rado cuando alguno de ellos ocurra con ese fin al Senado ... "

viembre de 1856 se aprobó por unanimidad. Así, la Entidad Federativa se debe dirigir al Presidente de la Repú­
En la Constitución de 1917 tradicionalmente se ha comprendido blica solicitándole la intervención de la fuerza Federal. Esta situación
dentro de los preceptos que establecen los casos de intervención del go­ responde al hecho de que el Poder Ejecutivo es el Jefe del Ejército y de
bierno Federal en los miembros, tres hipótesis fundamentales: la Armada, y es quien puede disponer de ellos para la seguridad interior
a) La protección de las Entidades Federativas en contra de toda in­ ' defensa exterior del Estado Federal.
vasión exterior, caso en el cual la intervención Federal puede ser oficiosa; Existe además la posibilidad de intervención del Gobierno Federal
h) La ayuda contra toda rebelión interna, violencia doméstica, siem­ en las Entidades Federativas, pero esta situación se debe realizar de
pre que la legislatura lo solicite, o el ejecutivo cuando aquélla no estu­ manera verdaderamente excepcional.
viere reunida; y Creemos que la garantía prevista en la fracción a) facultaría a la Fe­

e) La garantía de la forma Republicana de gobierno; deración para intervenir en aquella Entidad Federativa que no repre­
senta la forma de gobierno que la Constitución establece para todos ya
Respecto a la primera hipótesis los poderes de la Unión que los Estados deben mantener la identidad de principios fundamenta­
obligación de proteger a las Entidades Federativas contra toda invasión les con la Constitución Federal. En nuestro país el artículo 115 establece
o violencia exterior. En este contexto, la intervención de los poderes Fe­
expresamente que los Estados deben adoptar para su régimen interior la
derales es de oficio. Tan pronto como tengan noticia de la invasión o
Forma de Gobierno Republicano, Representativo, Popular, teniendo como
ataque exterior, debe tomar las medidas conducentes, es decir, no es
base de su división territorial y de su organización política y adminis­
necesario que este auxilio sea solicitado por la entidad federativa.
trativa el Municipio Libre.
Opina Tena Ramírez32 que este enunciado resulta superfluo en una
Asimismo, consideramos que la garantía de Gobierno Republica­
Constitución Federal porque las Entidades Federativas carecen de per­
no representa la única forma admisible y permitida por la ley cúspide
sonalidad internacional, y por tanto ninguna de ellas puede ser objeto del orden jurídico para preservar el orden Federal y la Constitución
de un ataque aislado por alguna nación extranjera. El ataque a una por­ General.
ción del territorio nacional, ya sea entidad federativa o territorio bajo El tratadista argentino Juan A. González Calderón33 la agrupa en
jurisdicción Federal, es un ataque al Estado Mexicano como tal, en su dos categorías: "Una es la intervención que llamaré reconstructiva, y otra
unidad, y no a una sola parte de él. es la que llamaré ejecutiva. La primera tiene lugar cuando está subverti­
En relación con el segundo planteamiento, la Federación protege a da la forma republicana de gobierno y es necesario que el poder Fede­
las Entidades Federativas en caso de sublevación o conflicto interior, si ra l lleve su acción suprema a tal o cual provincia donde aquélla sucede
esta ayuda le es solicitada por la Legislatura local o por el Ejecutivo, Para restablecer y garantizar dicha forma de gobierno. La segunda tie­
cuando el Congreso Estatal no se encuentre reunido. ne lugar cuando ocurre alguno de los otros casos previstos por el ar­
La primera diferencia con la otra hipótesis salta a la vista: tratándo­ tículo 6°: invasión exterior, derrocamientos de las autoridades constitui­
se de <;onflicto doméstico, la Federación no debe intervenir de oficio sino das por sedición o invasión de otra provincia, en los cuales el poder
debe ser llamada por la Legislatura Local o en su caso por el Ejecutivo. Federal debe cumplir los mandatos de la Constitución que lo obligan a
Este segundo supuesto tuvo gran apogeo entre 1869 y 1874 puesto Proceder en el sentido que ellos determinen: repeler la invasión exter­
que en siete ocasiones las Entidades Federativas solicitaron la interven· . na, o, a requisición de aquellas autoridades provinciales, sostenerlas o
el
ción de los Poderes Federales aunque se trataba de conflictos entre restablecerlas".

32 Op. cit. p. 163.


. 13 Citado por Jorge CARPIZO, Estudios Collstituciullales, UNAM, 1980, p. 118.
r,
-1
314 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

Por su parte, Carlos Sánchez Viamonte34 precisa: "Una intervención


Federal en las provincias es, siempre, un acto de soberanía nacional y
consiste en la imposición de la voluntad que emana del cuerpo orgánico
de la nación referida a una de sus partes componentes".
Deduce el autor precitado,1' cinco cualidades que deben reunir to­
das y cada una de las constituciones de las provincias:
1° Estar dictada bajo el sistema representativo republicano; Unidad 12
2° Estar de acuerdo con los principios, declaraciones y garantías de
la Constitución nacional;
Formas de Gobierno
3° Asegurar su administración de justicia;
4° Asegurar su régimen municipal;
S" Asegurar la educación primaria. JosÉ BARRAGÁN BARRAGÁN.
Asimismo debe:
1 o Garantizar la forma republicana de gobierno;
2° Repeler invasiones externas;
3" Sostener las autoridades constituidas, ante el peligro de sedición
interior o invasión de otra provincia;
12.1. CONCEPTO DE FORMA DE GOBIERNO
4" Restablecer las autoridades constituidas depuestas por sedición
interior o por invasión de otra provincia.
La mayoría de los autores acostumbran presentar el estudio de las
formas de gobierno después de hablar de las formas de Estado y, casi
siempre, bajo el mismo capítulo o rubro. A modo de ejemplos, véase en
Biscaretti cómo lo que él llama primera parte de su libro Introducción
u! Derecho Constitucional Contemporáneo (Fondo de Cultura Económi­
ca, México, 1996, p. 113.) está consagrada al estudio de: "Las formas de
Estado y las formas de gobierno contemporáneas"; y véase a Ignacio
Burgoa en su conocido libro Derecho Constitucional Mexicano (Porrúa
S.A., México, 1996) cómo sin duda es correcto plantear así el estudio de
ambos temas, debido a su profunda vinculación. Las formas de gobier­
no se hallan en el ámbito de cada una de las formas de Estado. Las for­
mas de Estado se suelen definir y clasificar a partir de los elementos
4ue se citan como esenciales del Estado, a saber, territorio, gobierno y
población. Las formas de gobierno, en cambio se hallan, como decía­
rn o s, en el ámbito de cada una de las formas de Estado consideradas.
Biscaretti examina por separado las formas de gobierno en un Estado
de democracia clásica; las formas de gobierno en un Estado socialista; y
las formas de gobierno del Estado totalitario.
Las formas de gobierno que se hallan en un Estado democrático clá­
sico son:

14 SA�t HEZ VIA�to�·¡ E. Carlos . \lwuwl de lJerecilo Constituciunu/,


. Kapclusz, Buenos
Aires, I<JS<J, p. I<Jll. • Doctor en Der·echo. Inn·stigador ck Carrera .v Miembro del Sistema Nac·ional ck
lrnestigadores Nivel 111.
" 0¡>. cil., pp. 100 a 102.

3IS
316 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN '·., .. HlRMAS DE GOBIERNO - J. Barrag<tn Barragún
317

• La forma de gobierno constitucional pura, ya sea monarquía o re­ por la forma republicana. Después hablaremos de la democracia y, por
pública. En este último caso tenemos la forma presidencial. último haremos el examen de lo federal, como forma de gobierno.
• La forma de gobierno constitucional parlamentaria, que también
puede ser monárquica o republicana. 12.2. LA MONARQUÍA
Y la forma de gobierno constitucional directora), se refiere sólo a
una república: el directorio francés de 1795, o el directorio suizo. De acuerdo a su etimología, de origen griego, la monarquía hace re­
krencia a un Estado regido o gobernado por un monarca, así como al
Según se aprecia, la anterior clasificación, tomada del libro ya cita­
territorio de dicho Estado. La monarquía es una forma de gobierno en
do de Biscaretti, resalta la presencia de un órgano que traza la direc­
L'l que el poder supremo reside en un príncipe, rey o monarca con arre­
ción de la política general, ya sea que hablemos de un Jefe de Estado,
�lo a las leyes.
rey o presidente; de un gabinete, o de un directorio. La monarquía, como forma de gobierno, se muestra a lo largo de la
La forma de gobierno constitucional republicano puro abarca a la
historia con muchos matices. Así, los politólogos y los filósofos hablan
forma que se adopta en Estados Unidos, los países de América Latina y
de una monarquía absoluta cuando toda la soberanía reside en el mo­
otros muchos países de Asia y de África. Se caracteriza fundamental­
narca; y de una monarquía constitucional cuando existe un Estado
mente en que el presidente concentra las funciones de Jefe de Estado,
constitucional y se consagra la teoría de la división de poderes, de tal
Jefe de gobierno y Jefe del partido mayoritario. Sobra advertir que se
manera que el monarca sólo representa al poder ejecutivo y el ejercicio
accede al poder previas las elecciones correspondientes. de este poder se encuentra regulado en dicha Constitución.
En los Estados Unidos se consagra esta forma de gobierno desde la Se habla también de monarquías de derecho divino, por afirmar
aprobación de su Constitución el 17 de septiembre de 1787, la cual en­ que los monarcas reciben su inmenso poder de la divinidad. Y se habla
tró en vigor el día primero de enero de 1789. Es el documento constitu­ de monarquías hereditarias, cuando la sucesión en la corona está vincu­
cional más antiguo que aún tiene vigor en la actualidad. En México e s a lada a una determinada familia; y de monarquías electivas, cuando son
partir de la aprobación del Acta Constitutiva del 3 1 de enero de 1824 y electas por el pueblo o por sus representantes. Agustín de Iturbide en
la posterior constitución del 4 de octubre de 1824. México intentó ser electo por los diputados que componían el llamado
Las formas de gobierno, que se hallan en un Estado socialista, son primer Congreso Constituyente mexicano la noche del día 18 de mayo
difíciles de clasificar. De hecho, Biscaretti y otros autores, prefieren de 1822. Cabe precisar que las monarquías electivas son muy raras y
)�
examinar por separado el proceso de formación y desarrollo del gobier­ �:
tienen carácter transitorio: es decir, o se trata de una monarquía en
)'
no de la Unión Soviética, así como el gobierno de las restantes repúbli­ proceso de formación; de una monarquía en decadencia; o de una repú­
cas, que ahora conocemos, algunas de las cuales se encuentran organi­
..�
..-.· blica vitalicia que irá evolucionando en busca de la democracia.
zándose como lo hacen las democracias constitucionales clásicas. Los tratadistas distinguen varias clases de esta forma de gobierno, o
Por último, en este breve planteamiento relativo al concepto de lo hablan de las diferentes modalidades que pueden ofrecerse de un Esta­
que entendemos por forma de gobierno, que aquí se ha definido de ma­ do a otro y de una etapa histórica a otra. Desde la forma de gobierno
nera descriptiva, la Constitución mexicana vigente, al hablar de la sobe­ Pura o buena, hasta el extremo de la forma de gobierno de un tirano.
ranía y de la forma de gobierno, introduce un elemento nuevo, que sue­ A ristóteles habla de cinco formas monárquicas diferentes. Habla de
le pasar ignorado por la mayoría de los tratadistas y que tiene que ver aquella forma que busca el bien común y de aquella que busca el interés
con lo federal. Personal o de familia y del tirano que se impone por la fuerza o en con­
En México, pues, según reza la leyenda del capítulo primero del ti­ tra de sus súbditos (Política, lib. III, cap.
IX). De una monarquía que
tulo segundo de nuestra Constitución y como luego se precisa en el ar­ Permite el desarrollo de la democracia y de aquellas formas absolutas
tículo 40, la forma de gobierno es republicana y federalista. En México, que concentran todo el poder en el monarca.
lo federal no es forma de Estado como afirma la mayoría de la doctrina, Santo Tomás, que sigue fielmente la teoría aristotélica, caracteriza
sino que es forma de gobier·no por mandato expreso constitucional. l a forma monárquica como una personificación de la autoridad, de un
A continuación, pasamos al examen particular de las principales for­ monarca que tiene la pleni tud del poder, que encarna la ley. Habla del
mas de gobict·no comenzando por la forma monárquica; siguiendo luego riesgo de convertirse fácilmente en un tirano y acepta la necesidad de
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN FORMAS DE GOBIERNO - J. Barragán Barragán 319
318

alidad como formación de la monarquía. El despotismo se funda en el temor y se go­


su poder, calificando esta mod
impedir que el rey abuse de
a Teológica la. Ilae, q. 105
, a. 1). bie rna sin ley ni regla, es una corrupción de la monarquía (El espíritu
monarquía templada (Sum de las leyes, cap. VII, lib. XI.).
los gobe rnan tes se suje ten a los man­
Santo Tomás recomienda que También leemos que Montesquieu, hablando de la Historia de Ingla­
erno es aque lla
que la forma mejor de gobi
datos de la virtud y asegura terra, dice que unas monarquías son electivas y otras hereditarias y que
Estado y man­
esté colocado a la cabeza del
en que un solo gobernante un as monarquías han ejercido el poder soberano de manera absoluta,
varios magis­
d, donde asimismo existan
de conforme a la ley de la virtu
de la virtud y esto es, sin compartir ese poder, mientras que en otras monarquías el
n con él. según la misma ley
trados inferiores que gobierne poder soberano se comparte con otros cuerpos, como el parlamento: es­
na parte en el
s los ciudadanos tengan algu
en donde, por último, todo tas monarquías son calificadas como templadas.
os.
elegibles para todos los carg
gobierno como electores y Se suele decir que en Inglaterra desde antiguo se consolidó la mo­
apar ece la teor ía de Maq uiavelo, quien
Pero, frente a esta corriente, quía constitucional; mientras que en Francia antes del año de 1789
del prin cipa do, que es una expre­ nar
alidades
habla de las diferentes mod prevalecía la monarquía absoluta, al igual que en España hasta la reu­
comprendió
monárquica, de manera que
sión más amplia que la voz nión de las Cortes generales y extraordinarias de 1810-1813, las cuales
civil com o las ecle siás tica s.
tanto las formas de gobierno mos, de promulgaron la famosa Constitución de 1812.
elo se mue stra part idario por la monarquía, diría
Maquiav Resumiendo, se puede recordar con George Jellinek, que lo caracte­
ir, lo pueden
nes tienen el derecho de eleg
carácter electivo, porque quie elegir al rístico de una monarquía es la encarnación que hace el monarca del
cho de sufr agio para
tienen el dere
ejercer libremente. Quienes pero , otras Estado, él es el Jefe del Estado y representa el poder del Estado. Ade­
de la aris tocr acia ,
miembros
príncipe, unas veces, son los ía y de la más, como sabemos, prevalece el principio de la sucesión hereditaria,
defe nsa de la tiran
lo hace en
veces, es el pueblo, el cual lo mismo que el principio de la ausencia de responsabilidad jurídica
aristocracia. a mo­ para el rey.
e tres modalidades de la form
Bodino, por su parte, distingu seño­
o legít ima . En la form a Como ejemplos históricos de monarquías, los autores mencionan a
ica y la real
nárquica: la señorial, la tirán bien es y las monarquías orientales, como las que hubo en Egipto, Mesopotamia
se erig e en seño r de
de conquista,
rial, el príncipe, por derecho ilia a sus o en China; las monarquías homéricas de la Grecia primitiva; las mo­
ía un pad re de fam
como gobernar
personas y gobierna, dice,
monarca en narquías romanas de los primeros tiempos, y las de sus grandes impe­
form a tirán ica, Bodino destaca el abuso del
esclavos. En la
real o legítima rios; las monarquías feudales de Europa; así como las subsecuentes mo­
s y de sus bienes. La forma
perjuicio de las personas libre
la natu rale za, respeta Y narquías, apoyadas en las clases sociales llamadas estamentos. Todavía
ece las leyes de
es aquella en que el rey obed ibió su fa­ España se intentó reunir Cortes por estamentos, a raíz de la invasión
Bod ino escr
s obedecen a su rey.
en
quiere a sus súbditos y ésto .
la República, en el año de 1576
de la Península Ibérica por los ejércitos de Napoleón y a raíz de haber
mosa obra, Los seis libros de cons idera­ sido tomado preso el rey español, Fernando VII (1808). Incluso, Agustín
l que sus coetáneo s que son
Francisco de Vitoria, al igua
ñola (Francisco de Iturbide pretendió erigirse Emperador con el apoyo de unas clases
la gran Escuela Jurídica espa
dos como pertenecientes a in­ soci ales que él todavía llamaba estamentos.
preferencias,
o, etcétera) al hablar de sus
Suárez, De Soto, Belarmin can a, Hacia 1812, fecha de promulgación de la Constitución española ex­
a republi
árquica es mejor que la form
siste en que la forma mon p or ­
en el pueblo, Pedida por las Cortes de Cádiz, la Nueva España con la Nueva Galicia,
del poder del monarca está
pero precisa que el origen a m os la Península de Yucatán, las llamadas Provincias
pueblo, dirí internas de Oriente y
"per homines": a través del
que el rey recibe el poder ular Provincias internas de Occidente formaban
la sobe ranía pop parte del gran Imperio es­
bases de la teoría sobre
nosotros, sentando así las cia lY Pañol y, por ello quedaron subordinadas a dicho ordenamiento legal.
radica esen
ia de la soberanía, la cual
y la relativa a la sede originar No será sino hasta el año de 1821 cuando se alcance la Independencia,
:
originariamente en el pueblo. forma de g� Propósito iniciado por nuestros héroes nacionales desde 181 O.
clasificación doble de esta
Montesquieu formula una a rnO"
otros, y la form La Constitución de 1812 dispuso que el gobierno de aquella gran
uica buena, diríamos nos
bierno: la forma monárq
el rey gobierna se ú le­
g n Nación fuera una monarquía moder·ada hereditaria, es decir, una mo­
la. En una monarquía,
nárquica despótica o ma uía es narquía constitucional, subordinada a la voluntad popular. El Artículo 3,
se funda la monarq
el principio en que
yes fijas y establecidas: as las actuaciones se en efecto, había puesto la sede originaria de la soberanía en la Nación,
virtud pol ítica y tod
honor, que encarna la El despotismo es un
a definiendo a la Nación como la reunión de todos los españoles de am-
liber tad po lítica.
en a la
en esa virtud y co nduc
UCIÓN FORMAS DE GOBIERNO J. Barragán Barragán 321
TEORÍA DE LA CONSTIT
-

320
Decimocuarta: hacer a las Cortes las propuestas de leyes o de reformas
Nación ya no podría
ndo, además, que esa que crea conducentes al bien de la Nación, para que deliberen en la forma
bos hemisferios, precisa
(Art. 2).
a familia ni persona. prescrita.
patrimonio de ningun stitución, en él se hiz
o
inado el rey a la Con Decimosexta: nombrar y separar libremente los secretarios de Estado y
Pese a quedar subord rar
después de consag del despacho.
utar las leyes. Esto es,
sidir la potestad de ejec es
poder, el rey, no sólo
isión del ejercicio del
nueva teoría de la div del pod er
Por otro lado, como ya no era rey absoluto, además de estar sujeto a
ositario
que además es el dep
·

Jefe del Estado, sino , la ley, tenía limitaciones formales y expresas, muy importantes, según el
s y mu y importantes facultades
to de mucha artículo 172, como las siguientes:
(art. 16). Goza por tan ape go
sus ministros y con
ente, ayudándose de
cuales ejerce directam Artículo 172.-Las restricciones de la autoridad del Rey son las siguientes:
la ley. Primera: no puede el Rey impedir, bajo ningún pretexto, la celebración
t. 168), de manera que
del rey es sagrada (ar
Con todo, la persona s re�t de las Cortes en las épocas y casos señalados por la Constitución, ni sus­
a sus ministros, quiene
sus actos se traslada penderlas ni disolverlas, ni en manera alguna embarazar sus sesiones y de­
responsabilidad por del rey dad as
órdenes
tes o Congreso, de las liberaciones. Los que le aconsejasen o auxiliasen.
ponderán ante las Cor
). Por lo mismo se estableció Segunda: no puede el Rey ausentarse del reino sin consentimiento de las
las leyes (art. 226
tra la Constitución o
cumplimiento a las Cortes; y si lo hiciere, se entiende que ha abdicado la corona.
sona pública podía dar
ningún Tribunal ni per ). ,
o ministerial (art. 225 Tercera: no puede el Rey enajenar, ceder, renunciar, o en cualquiera ma­
del rey que no llev aran la firma del refrend
nes es, como ya hacíamq�� nera traspasar a otro la autoridad real, ni alguna de sus prerrogativas.
son muchas e important
Las facultades del rey : Si por cualquiera causa quisiere abdicar el trono en el inmediato suce­
ículo 171, las siguientes .
des tenía, según el art
notar. Entre esas faculta sor, no lo podrá hacer sin el consentimiento de las Cortes.
compete al Rey sancioDI
de la prerrogativa que Cuarta: no puede el Rey enajenar, ceder o permutar provincia, ciudad, vi­
Artículo 171.-Además o principales las
as, le corresponden com lla o lugar, ni parte alguna, por pequeña que sea, del territorio español.
rá las leyes y promulgad
Quinta: no puede el Rey hacer alianza ofensiva, ni tratado especial de co­
des siguientes rucciones que crea
retos, reglamentos e inst mercio con ninguna potencia extranjera sin el consentimiento de las Cortes.
Primera: expedir los dec
ución de las leyes. Sexta: no puede tampoco obligarse por ningún tratado a dar subsidios a
ducentes para la ejec inistre pronta y
en todo el reino se adm ninguna potencia extranjera sin el consentimiento de las Cortes.
Segunda: cuidar de que
Séptima: no puede ·el Rey ceder ni enajenar los bienes nacionales sin
damente la justicia. paz, dando después
rra, y hacer ratificar la consentimiento de las Cortes.
Tercera: declarar la gue
Cortes. Octava: no puede el Rey imponer por sí directa ni indirectamente contri­
ta documentada a las los tribunales civiles
y
nom bra r los magistrados de todos buciones, ni hacer pedidos bajo cualquier nombre, o para cualquier objeto
Cuarta:
Consejo de Estado.
nales, a propuesta del militares.
que sea, sino que siempre los han de decretar las Cortes.
os los empleos civiles y
Quinta: proveer tod Novena: no puede el Rey conceder privilegio exclusivo a persona ni cor­
dos , y para todas las
a todos los obispa
Sexta: pre sen tar par propuesta del Con
sejo poración alguna.
patron ato , a
ticos de real
y beneficios eclesiás Décima: no puede el Rey tomar la propiedad de ningún particular ni
Estado. rreglo a corporación, ni turbarle en la posesión, uso y aprovechamiento de ella; y si
toda clase, con a
ores y distinciones de
Séptima: conceder hon en algún caso fuere necesario para un objeto de conocida utilidad común
leyes. erales. tomar la propiedad de un particular, no lo podrá hacer sin que al mismo
y nombrar los gen
ejércitos y armadas,
Octava: mandar los a com o más tiempo sea indemnizado, y se le dé el buen cambio a bien vista de hombres
ribuyéndol
la fuerza armada, dist
Novena: disponer de buenos.
venga. as y comerciales
con las Undécima: no puede el Rey privar a ningún individuo de su libertad, ni
relaciones diplomátic
Décima: dirigir las es. imponerle por sí pena alguna. El secretario del despacho que firme la or­
ministros y cónsul
r los embajadores,
potencias, y nombra la moneda, en la que
se den, y el juez que la ejecute, serán responsables a la Nación, y castigados
la fab ric aci ón de
Undécima: cuidar de como reos de atentado contra la libertad individual.
busto y su nombre. los fondos destinados a
cada
r la inversión de Como se indicaba, se trata de una verdadera monarquía moderada.
Duodécima: decreta blica.
ministración pú Pero además hereditaria. Todo lo relativo a la s ucesión está minuciosa-
los ramos de la ad eglo a las leyes.
ia: ind ulta r a los delincuentes, con arr
Decimoterc
322 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
1 HJRMAS DE GOBIERNO - J. Barragan Barragún 323

mente regulado en esta Constitución, desde la cuestión de quién debía Meses más tarde, por el Tratado de Córdoba, firmados ahora por
ser el llamado a la sucesión, hasta el papel de la regencia, que debía es­ lturbide y Juan O'Donojú, se piensa ya en la independencia total de Mé­
tablecerse durante la minoría de edad del heredero o heredera, incluso ,ico respecto de España y se establece la forma de gobierno monárqui­
el matrimonio del rey debía ser aprobado previamente por las Cortes, co, constitucional moderado (art. 2) y se reiteraban los llamamientos a
de manera que, en caso de casarse sin el debido permiso, se entendía ocupar el trono a Fernando VII, a su hermano, el infante don Carlos; al
que abdicaba a la corona (art. 172, duodécima limitación). infante don Francisco de Paula; a don Carlos Luis y sólo si ninguno de
Aunque nunca se suele hacer la observación, esta monarquía creada los anteriores lo aceptaba, las Cortes del imperio mexicano tendrían la
o regulada por la Constitución de 1812, da la impresión de ser o estar libertad de designar al emperador.
muy próxima del presidencialismo, o mejor dicho el presidente mexi­ Este acuerdo entre Iturbide y Juan O'Donojú volvía a ocuparse de la
cano se dibujará como el rey español de esta época, pero sin derechos necesidad de nombrar una junta provisional de gobierno y, en su caso,
sucesorios y con responsabilidad personal, como veremos páginas más a una regencia, en los mismos términos en que lo prevenía el Plan de
adelante. Iguala. En efecto, se creó la junta, que conocemos como Soberana Jun­
Este régimen monárquico estuvo en vigor en lo que ahora es Méxi­ ta Provisional Gubernativa, la cual quedó instalada formalmente el día
co hasta la proclamación de su independencia en 1821. Más allá de esta 2 8 de septiembre de 1821 y se integró la regencia también, la cual será
vigencia de la forma monárquica, cabe insistir en que la figura del pre­ presidida por el propio Iturbide.
sidente mexicano, tanto el histórico de 1824, cuanto el actual se dibuja De hecho, la Junta tuvo un comportamiento parecido a una asam­
aceptando completamente el modelo del monarca español de la Consti­ blea constituyente, pues asumió la plenitud de la soberanía, llegando a
tución de 1812, sin derechos hereditarios y con responsabilidad perso­ ejercer facultades soberanas, sin duda justificadas por el evidente vacío
nal, como ya queda dicho. de poder existente en esos momentos, en los que México se declaraba
independiente de España y en los que en la misma España se volvía a
12.2.1. LAS FORMAS MONÁRQUICAS DE 1812-1823 proclamar la vigencia de la Constitución de 1812 por virtud de un golpe
de Estado, que obligó a Fernando VII a regresar a la senda constitucio­
Como hechos importantes para la historia de México, se suelen citar nal (Trienio Liberal español 1820, 1821 y 1822). Precisamente estos
al llamado Plan de Iguala de 24 de febrero de 1821, al Tratado de Cór­ acontecimientos de España explican el por qué se hacían los llamados
doba del 24 de agosto del mismo año de 1821; al decreto de instala­ al mismo Fernando VII para que se trasladara a México, un poco a
ción del primer Congreso Constituyente mexicano del 24 de febrero imagen de la monarquía portuguesa que sí aceptó trasladarse a Brasil.
1822; así como al pretendido imperio Iturbidista, que se ubica dentro Por otro lado, la Soberana Junta Provincial Gubernativa tiene el en­
de las fechas ya señaladas. Todos estos hechos, recogidos en los docu­ cargo de convocar la elección para reunir a un Congreso Constituyente,
mentos mencionados, hablan de un propósito común, como fue el inten­ lJLH: se ocupara de la elaboración de la Constitución del nuevo imperio.
tar organizar al mismo país, México, bajo la forma de un gobierno mo­ Por eso es que dentro del mismo contexto político, esta asamblea, deno­
nárquico. minada Congreso Constituyente Mexicano, al quedar instalada el día 24
El llamado Plan de Iguala, que firma Agustín de Iturbide, preparan­ de febrero de 1822, volverá a repetir que se adopta para su gobierno la
do la declaración de Independencia de México respecto de España, es­ monarquía moderada constitucional con la denominación de imperio
tablecía la base relativa al gobierno monárquico templado por una l1Jexicano y que dicha asamblea formularía el llamado a ser coronado
Constitución análoga al país (Base 3). A continuación sé hacía un llama­ emperador precisamente a las personas mencionadas en el Tratado de
do especial a Fernando VII v. en su caso, a los miembros de su dinastía Córdoba.
o de otra reinante, para oc �par el trono mexicano, "para hallarnos con Así pues, de una o de otra forma, se insiste en querer hacer de Méxi­
un monarca ya hecho y precaver los atentados funestos de la ambición co, o del gran Anáhuac un verdadero imperio.
(Base 4). Sin embargo y más allá de estas formalidades, y por lo que ya sabe­
Más adelante, en la Base 8 y mientras Fernando VII aceptaba venir rnos que aconteció, aquella asamblea de 1822 estuvo dominada por di­
a México, se pensó en crear una junta y una regencia "mientras llega el Putados republicanos, abiertamente contrarios a aceptar a monarca al­
emperador". Y para el caso que no viniese Fernando VII, se autorizaba guno. Por tanto, las disputas y desavenencias entre esta mayoría del
a buscar a algún otro candidato para recibir la corona. C onstituyente e lturbide no tardaron en aparecer.
324

a
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

Entre otras cosas, Iturbide, sabedor de que ninguno de los llamados


ocupar el trono del Imperio mexicano vendría realmente a México, no
r
�.-�··
r
HJRMAS DE (;OBIERNO - J. Barragán Barragán

Las Bases fueron rubricadas por el emperador, según el refrendo de


su ministro José Manuel Herrera y contenían las normas relativas al
325

disimulaba su ambición personal por llegar a ser coronado emperador funcionamiento de la propia Junta. En este documento, que está fecha­
con la autorización del Constituyente. Por su parte, este Constituyente do el día 2 de noviembre, el mismo día en que se instaló dicha Junta, se
abiertamente se opuso, desde el primer momento, a tal ambición, pero k encomienda la convocatoria de una nueva asamblea constituyente
para evitar el enfrentamiento con Iturbide, decidió no ocuparse del que reemplazara a la que había sido disuelta.
asunto. Ni siquiera se preocupó por ir elaborando el proyecto de Sin embargo, las cosas se precipitaron ahora también y pronto se
Constitución. determinó que la misma Junta debía aprobar una especie de Constitu­
Iturbide, mal aconsejado, precipitó las cosas de manera que la no­ ción, denominado, como ya se mencionó, Proyecto de Reglamellto Provi­
che del día 18 de mayo de 1822, menos de tres meses de instalado el sional Político del imperio mexica11o, que lleva la fecha del día 1 O de
Constituyente, interrumpió su sesión y se presentó con un cuerpo arma­ noviembre.
do para arrancarle por la fuerza la aprobación favorable a su persona La Junta puso a debate este proyecto. Se discutió primero en lo ge­
de la nominación de emperador. neral y se aprobó en lo general y se puso a debate en lo particular, ar­
La presencia de Iturbide y su cuerpo de ejército en el recinto del tículo por artículo, pero nunca llegó a aprobarse en contra de la doctri­

Constituyente produjo la natural zozobra. El libro de Actas refiere que na que lo acepta como verdaderamente aprobado. Esta doctrina

la mayoría de los diputados optó por abandonar la sesión; que otros es­
·
confunde la votación aprobatoria en lo general, con la aprobación defi­

taban a la espera en las oficinas administrativas, como hoy diríamos, de nitiva que nunca se dio porque la reacción en contra de Iturbide pudo
más. Sus propios generales, enviados para sofocar la rebelión de Santa
manera que solamente una minoría permaneció en el salón de sesiones
Ana en Veracruz, son los firmantes del Acta de Casa Mata, que no es
y fue esta minoría quienes accedieron a otorgarle el nombramiento de­
, .
otra cosa sino un ultimátum a Iturbide, para que se reinstale el Congre­
seado a Iturbide, contra la opinión de Giuridi y Alcocer, por ejemplo �t
jo_ so disuelto y para que abandone la capital, deponiendo las armas y se
quien levantó su voz sobre las proclamas de la tropa para recordarle al
dispusiera a ir al exilio.
propio Iturbide que él, al menos, no traía poderes bastantes para nom­
El Congreso se reinstala el 7 de marzo de 1823. Un día antes se ha­
brarlo emperador.
bía disuelto la Junta Nacional Instituyente sin aprobar el Proyecto de
Ya conocemos el resto de la historia del enfrentamiento de lturbide
Reglamento y vencida por los acontecimientos adversos a lturbide. Des­
y el Congreso. Las actitudes personales de Iturbide, que pronto hizo los
pués, el día 8 de abril, el propio Congreso decretó la nulidad jurídica de
preparativos propios de su coronación y quien acentuó la embestida
hecho y de Derecho de la coronación de lturbide y de sus demás actua­
contra los diputados republicanos, se extremaron: se ordena hacia fina­ ciones. Así y aquí terminaron las aspiraciones de quienes quisieron que
les de agosto la detención de estos diputados; el Constituyente se decla­
México se convirtiera en un gran imperio a raíz de declarar su indepen­
ra en sesión permanente hasta que, el 30 de octubre del mismo año de
dencia de España. Y aquí comienza la aventura federalista, es decir el
1822, fue disuelto.
proceso de formación de una república y las exigencias para que se
Para estas fechas, primeros días de noviembre, ya se había nombra­
adoptara el federalismo en México.
do un nuevo cuerpo colegiado, la llamada Junta Nacional lnstituyent�,
compuesta por personas que, en su gran mayoría, eran afectas a Iturbl­
de. Entre los oponentes estaba otra vez Guridi y Alcacer, obispo de
12.3. LA REPÚBLICA

Tlaxcala.
La república, como forma de gobierno, se contrapone a la forma
apro­
La encomienda de la nueva asamblea no era otra sino la de monárquica. La soberanía, en este caso, reside en el pueblo y este deci­
barle la Constitución del imperio, que el Congreso disuelto no l e �
qu d e, cuando es pequeño y se puede, ejercer el poder de manera directa:
Herrer a, Tofl•
dar. Los consejeros de Iturbide, su ministro José Manuel democracia directa; o bien ejercer el poder a través de unos represen­
vaball
bio González, Antonio J. Valdés y Ramón Martínez de los Ríos, lle tantes que
son electos por el pueblo: democracia representativa.
ya preparadas unas bases sobre las cuales se organizaría antes q ue
Históricamente se decía que la soberanía popular era la nota carac­
ico terística de una república frente a una forma monárquica. Sin embargo,
die la misma Junta, y un Proyecto de Reglwnetzto Provisional Polít
imperio mexicano. corno hoy en día aún en las monarquías, la soberanía es popular, tal vez
"'"1

326 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN FORMAS DE GOBIERNO - J. Barragán Barragán 327

la nota diferenciadora sea la ausencia de un rey v su sistema sucesorio. m ente por los autores cristianos como Hincmaro de Reims, Ockam,
A veces, los autores contraponen la monarquía, como el gobierno de una Juan de Paris, Santo Tomás, Francisco de Vitoria, Francisco Suárez, De
sola persona, y la poliarquía, como el gobierno de muchas personas. Soto y los demás tratadistas de la conocida Escuela Jurídica Española.
Desde el punto de vista histórico, la teoría política explicaba la for­ Son, repetimos, autores cristianos que, reconociendo que la divinidad
ma de gobierno republicano como la genuina formulación de la sobera­ L'S el origen último de todo poder (en latín se emplean las voces de auc­
nía popular frente a la idea de un emperador, como encarnación de la ruritas, imperium, potestas.) este poder se transmite a los gobernantes:
divinidad, o de un rev absoluto que encarna igualmente la suma del po­ fh'r homnies, o populo feacente, es decir, a través de los hombres, o por
der soberano, mismo que se transmitía por los mecanismos sucesivos una acción popular.
hereditarios. Con frecuencia, en este tipo de comparativos, el presiden­ En esta tradición debe situarse la obra de Badina, quien estudió con
te, o la magistratura más elevada de una república es al mismo tiempo los padres Carmelitas, dominaba perfectamente el latín y conocía bien
el titular del poder ejecutivo (en la teoría de la división de poderes) y la no sólo el español, sino también las costumbres jurídicas de algunos de
de Jefatura de Estado. El titular de este cargo es necesariamente res­ los reinos españoles, como el de Aragón. En efecto, este ex novicio car­
ponsable de sus actos de gobierno y su nombramiento siempre tiene ca­ melita, al hablar precisamente de la soberanía popular, cita las palabras
rácter temporal. castizas y sagradas con cuya fórmula los aragoneses le recibían el jura­
La forma de gobierno republicano se ha personificado o se ha apli­ mento al rey. Con esta cita Badina destaca la necesidad de someter el
cado de muy diferentes formas, que van desde las formas simples de inmenso poder del rey al Derecho y a la justicia: nos qui valemos tanto
pueblos que se han gobernado a través de una asamblea abierta, llama­ co111o vos y podemos mas que vos, vos elegimos re con estas y estas condi­
da Cabildo abierto o Consejo en la literatura jurídica española; llamada rioues entra vos y nos, un que mande mas que vos (Libro 1 cap. VIII).
Eclesía en una etapa de la cultura griega; hasta las formas más comple­ Para Badina el origen último del poder es Dios, pero ese poder lo
jas de las Poleis, estudiadas por Aristóteles; la república romana de Ci­ reciben los gobernantes "per homines", a través del juramento que le to­
cerón; y las repúblicas parlamentarias de nuestro tiempo. maba el pueblo aragonés a sus monarcas, por decirlo con la fórmula del
Las repúblicas son formaciones históricas. Unas veces, emergen lu­ ejemplo citado por Badina.
chando contra los abusos de los emperadores y los reyes. Otras veces, Los autores de la Escolástica, como Francisco de Vitoria, todavía
las repúblicas se forman impulsadas por un conjunto de circunstancias hablan de dos tipos de repúblicas, según que pueda gobernarse libre­
de diferente naturaleza que terminan creándolas. mente, o bien según que esté subordinada a otra república. De confor­
Las monarquías del periodo en que se sitúan las narraciones de Ho­ midad con esta distinción, existe la república libre e independiente, o
mero devinieron en las repúblicas estudiadas por Aristóteles. El gran no sujeta a ninguna otra y la república que, pese a gozar de una gran li­
imperio español de comienzos del siglo XIX, gracias a un conjunto de bertad e independencia para autogobernarse, definitivamente está sub­
circunstancias históricas, complejas y de naturaleza diversa, se des­ ordinada a un poder superior. En latín Vitoria a la república libre e in­
membró en todas y cada una de las repúblicas latinoamericanas: entre dependiente le llama respublica perfecta et integra; mientras que la otra
esas circunstancias, cabe destacar la invasión de Napoleón a la Penín­ cla se es una respublica subiecta alicui extra se, et non integra. (república
sula Ibérica; ciertos movimientos sociales y de insurgentes en algunas subordinada a otra más allá de su voluntad y no integra).
de sus colonias; lo mismo que la difusión y la prevalencia de las teorías Esta clasificación de perfecta e integra está tomada de una idea so­
sobre la soberanía popular. ciológica previa, atribuida a un grupo social bien organizado, es decir,
Un autor clásico es, sin duda, Aristóteles. Su obra que en lengua a la llamada comunidad perfecta e integra, que es aquella comunidad

griega lleva el nombre de rroAE"'· fue traducida a la lengua latina corno s oci al que es capaz de autogobernarse libre e independiente, y que, por
Respública y al español como La República. Se trata de un estudio ma r tanto, es una comunidad que no depende de otra.

nífico acerca de la organización y funcionamiento de las rroAE"' de a


Sobra precisar que para estos autores escolásticos, una comunidad
Grecia clásica, un estudio que le permite llegar a la formulación de sUS Perfecta e íntegra, que es aquella que puede escoger libremente la for­
teorías sobre esta materia. Los romanos, Cicerón entre otros, traducen, tna de gobierno que más le convenga, muy bien podrá optar por una
glosan y comentan con éxito la obra aristotélica. f orma de gobierno republicano o por una forma de gobierno monárqui­
Una de las bases esenciales de las teorías griegas y latinas es e
l co. En todo caso, una Y otra forma debían quedar vinculadas a la ley
tema del poder o de la soberanía popular, que será captado perfecta· Positiva.
'
328 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
·� FORMAS DE GOBIERNO - J. Barragán Barragán
329

Esta es la doctrina que se consagró en el artículo 3 de la Constitu­ Después, sobrevinieron los procesos de autodeterminació
n en Esta-
ción española de 1812, que optó por la forma de una monarquía cons­ dos libres e independientes de Jalisco, de Zacatecas, de Oaxa d
ca y
titucional y ésta es la misma fórmula que contiene el artículo 3 9 de la catán, que consumaron sus transformaciones entre los mes d , e u­
es e febrero
vigente constitución mexicana, que opta desde 1824 por la forma repu­ a agosto de ese mismo año de 1823. En otros lugares, como en Mich
oa­
blicana presidencial. cán, Veracruz, Guanajuato o San Luis Potosí, estos procesos fueron
acallados por la presencia de un ejército obediente a México, como
di­
12.3.1. PROCESO DE FORMACIÓN cen las crónicas.
DE LA REPÚBLICA EN MÉXICO Todo esto finalmente terminó planteando la necesidad de optar por
una república federal, necesidad valorada por el propio Congreso reins­
Aunque sea muy brevemente toca ahora explicar el proceso de for­
talado, quien la secundó, como sabemos, emitiendo su famoso voto fa­
mación de la república mexicana. Ya vimos en páginas atrás cómo fra­
\ orable en esta forma de gobierno republicano y federal. Además, acep­
casaron los intentos por implantar en México la forma monárquica.
tó convocar a unas nuevas elecciones para la reunión de una nueva
Tanto el Plan de Iguala, como el Tratado de Córdoba, la Soberana Jun­
asamblea constituyente y decretó su propia disolución para el día 30 de
ta Provisional Gubernativa y el mismo Constituyente formalmente pen­
octubre de 1823, fecha en que comenzaron las sesiones preparatorias
saban en la creación de un gran imperio. Iturbide, precipitándose siem­
para instalar al llamado segundo Congreso Constituyente. Y fue esta
pre, no contribuyó nada para garantizar estas formalidades, o, tal vez,
la fuerza de los republicanos, terminó por imponerse después de la caí­ nueva asamblea la encargada de aprobar, primero, el Acta Constitutiva

da de Iturbide. de los Estado Unidos Mexicanos y, luego, la Constitución, terminando así


El proceso de formación de la república mexicana comienza con las la organización y el funcionamiento de la república federal mexicana.
aspiraciones legítimas de los propios políticos republicanos, como Fray Es ahora, en las sesiones de esta segunda asamblea cuando se dis­
Servando, quien no tuvo miramientos para expresarse ante el mismo cuten los pormenores relativos a la soberanía nacional y a la forma de

Iturbide, ya autoproclamado emperador, como un convencido y fervien­ gobierno republicano, popular y federal.
te republicano. Quizá por esta fe republicana, la mayoría de los diputa­ El debate sobre la soberanía se planteó y se desarrolló sobre los
dos del primer Constituyente, pese a la previsión expresa de la ley de mis mos conceptos y las mismas ideas debatidas en Cádiz. Guridi y Alco­
convocatoria para reunirse en dos salas (una reservada para la nobleza cer, diputado a las Cortes de Cádiz, recordó dicho debate y recomendó
naciente mexicana) optó por sesionar en una sala al estilo republicano Y :� que se adoptara una fórmula que ya había propuesto a los españoles. El
popular. ·/'¡'
' diputado por Tlaxcala quería introducir en la fórmula sugerida la idea
:t
Estos mismos republicanos decretaron honores para nuestros hé­ relatiYa al carácter en que la soberanía reside en la nación, es decir, la
roes patrios, los héroes insurgentes, que habían sido aniquilados por idea que denote que esa soberanía está enraizada en el pueblo de mane­
Iturbide y, pese a las protestas de éste, nunca aprobaron el nombra· ra originaria, y la idea de que esa raíz siempre permanecerá en el pue­
miento de emperador; nunca apoyaron los festejos para la coronación; blo, sin que pueda cederse nunca ni trasladarse a nadie, en contra de la
nunca fueron favorables para la formación anhelada de una Constitu· teoría de Rousseau.
Así es cómo se aprobó la siguiente redacción del ar­
ción imperial. En suma, derrotado Iturbide, se reinstalará el Congreso tículo 3 de la Acta Constitutiva:
el día 7 de marzo de 1823 y entonces sí, se comenzó a trabajar sobre
Artículo 3.-La soberanía reside radical y esencialmente en la Nación, Y
cómo organizar a México, como república. ·

por lo mismo pertenece exclusivamente a ésta el derecho de adoptar y esta­


Esta tarea no fue nada fácil. Para empezar y debido a las luchas in·
blece¡· por medio de sus representantes la forma de gobierno y demás leyes
ternas, los representantes que habían venido al Constituyente de 1822 fundamentales que le parezca más conveniente para su conservación y ma­
on
desde Guatemala, Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica fuer vor prosperidad, modificándolas o variándolas, según crea convenirle más
pidiendo permiso para regresar a sus países de origen, porque éstos ha1
Según se aprecia, tenemos la misma redacción del artículo 3 de la
bían resuelto ser libres e independientes de México. El último en abaD1
Con stitución española de 1812, pero reforzada con ese adjetivo vigoroso
donar este Congreso fue José Cecilia del Valle, un hombre muy
muy prudente, quien había servido de mediador entre el Congreso Propuesto por Guridi y Al cac e r; la soberanía reside radical y esencial­
suelto y el propio Iturbide. lñente en la nación.
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN FORMAS DE GOBIERNO - J. Barragán Barragün 331
330

Por nación se entiende ahora, lo mismo que en 1812 y como lo ex­


plica el propio diputado Tlaxcalteca en una y otra ocasión, a toda la po­
blación asentada en el territorio de referencia. La nación es igual a una
población organizada política y territorialmente hablando. Anículo 1 71.-Además de la prerro­ Artículo 11 0.-Las atribuciones del
Esta idea grandiosa de la soberanía nacional, desde su definición gativa que compete al Rey sanciona1·á presidente son las que siguen:
acepta la secuencia lógica relativa al ejercicio de la soberanía, ejercici ¿ las leyes y promulgarlas, le correspon­ I. Publicar, circular v hacer guardar \
que se encomendará a sus representantes. El poder reside en la nación, den como principales las facultades las leyes y decretos del Congreso Ge­
pero se ejerce por medio de sus representantes. U na expresión fecunda siguientes.
neral.
y afortunada, que se enunciará mejor en el subsecuente artículo 5 de la Pri111era: expedir los decretos, regla­ II. Dar reglamentos, decretos y órde­
misma Acta: mentos e instrucciones que crea con­ nes para el mejor cumplimiento de la
ducentes para la ejecución de las Constitución, acta constitutiva y leyes
Artículo 5.-La Nación adopta para su gobierno la forma de república
leves. generales.
representativa popular federal.
Segunda: cuidar de que en todo el rei­ III. Poner en ejecución las leyes y de­

He aquí juntas y vinculadas las ideas mayores del Estado moderno; no se administre pronta y cumplida­ cretos dirigidos a conservar la inte­
de la mente la justicia. gridad de la federación, y a sostener
la idea relativa a la sede de la soberanía, la idea relativa al sistema
relativa a la forma de gobierno ,, Tercera: declarar la guerra, y hacer ra­ su independencia en lo exterior, y su
representación democrática y la idea
que asu­ tificar la paz, dando después cuenta unión y libertad en lo interior.
que se escoja. En este caso, la opción es a favor de un gobierno
federal. Nótese bien y documentada a las Cortes. IV. Nombrar y remover libremente a
ma la forma de república represen tativa popular
forma de Cuarta: nombrar los magistrados de los secretarios del despacho.
ya no se pierda de vista cómo también lo federal en México es
todos los tribunales civiles y crimina­ V. Cuidar de la recaudación, y decre­
gobierno y no de Estado como erróneam ente sostiene la doctrina.
les, a propuesta del Consejo de Estado. tar las inversiones de las contribucio­
Más adelante se recoge la teoría de la división del poder, para su Quinta: proveer todos los empleos civi­ nes generales con arreglo a las leyes.
acalo­
ejercicio precisa el artículo 9. Así es cómo, después de un largo y les y militares. VI. Nombrar los jefes de las oficinas
iniciado hacia el día 20 de noviemb re de 1823 y terminad o
rado debate, Sexta: presentar para todos los obispa­ generales de hacienda, los de las co­
mitad del año siguiente , cuando se debatía el texto de
hacia la segunda dos, y para todas las dignidades y be­ misarías generales, los enviados diplo­
a
la Constitución, se aprobó el que el supremo poder ejecutivo recayer neficios eclesiásticos de real patrona­ máticos y cónsules, los coroneles y
Uni­
en un solo individuo, que se denominará presidente de los Estados to, a propuesta del Consejo de Estado. demás oficiales superiores del ejército
ncia.
dos Mexicanos y se consagrara también la figura de la vicepreside Sépti111a: conceder honores y distincio­ permanente, milicia activa y armada,
nte en
Así nace en México el sistema presidencial, apoyado inicialme nes de toda clase, con arreglo a las con aprobación del Senado, y en sus

una vicepresidencia. leves. recesos, del consejo de gobierno.


popular VII. Nombrar los demás empleados del
México emerge, pues, como una república representativa Octava: mandar los ejércitos y arma­
identif ica. No das, nombrar los generales. ejército permanente, armada y mili­
federal, consagrándose el sistema presidencial que nos v

en una grave No¡•cna: disponer de la fuerza armada, cia activa, y de las oficinas de la fede­
dejamos de reconocer que hoy en día México está sumido
2002). distribuyéndola como más convenga. ración, arreglándose a lo que dispon­
crisis, no sólo económica, sino también política (año
as pro­ Décima: dirigir las relaciones diplo- gan las leyes.
Hemos impulsado los cambios, seguimos anhelando reform
incluSO 111áticas y comerciales con las demás VIII. Nombrar, a propuesta en terna
fundas de nuestras estructuras fundamentales, cuestionán d ose
ncialista Potencias, y nombrar los embajado­ de la Cone Suprema de Justicia, los
la concepción y la práctica tanto de nuestro sistema preside res, ministros y cónsules. jueces y promotores fiscales de circui­
cuanto de nuestro sistema federalista.

or lo que mira al tema presidencialista veamos cómo el p
:esiden : Undécima: cuidar de la fabricación de to y de distrito.
l a moneda, en la que se pondrá su X. Disponer de la fuerza armada per­
mextcano nace con la configuración que se le da al rey espa
nol e � busto y su nombre. manente de mar y tierra, y de la mili­
rel auva a
Constitución de 1812 con la diferencia, que ya advertimos, cia activa, para la seguridad interior y
no
la responsabilidad personal del presidente (el rey es sagrado y defensa exterior de la federación.
parecid o ent re
ponsable) y al carácter hereditario del poder real. Del
espa ñol de da cue nta la sim ple
presidente mexicano y el rey 1812
uc n
paración de sus respectivas atrib io es Y r e stricci ones. Veamos:
332 TEORÍA DE LA CONSTITUC!ÓII(
f'
ff• i·ORMAS DE GOBIERNO - J. Barragún Barragán 333

Duodécima: decretar la inversión de XIV. Dirigir las negociaciones diplo­ to de conocida utilidad común tomar la objeto de conocida utilidad
general,
los fondos destinados a cada uno de los máticas. y celebrar tratados de paz, propiedad de un particular. no lo po- tomar la propiedad de un
panicular 0
ramos de la administración pública. amistad, alianza, tregua, federación drá hacer sin que al mismo tiempo sea corporación, no lo podrá
hacer sin
Deci111otercia: indultar a los delincuen- neutralidad armada, comercio y cua � indemnizado, y se le dé el buen cam- previa aprobación el
Senado, y en sus
tes, con arreglo a las leves. lesquiera otros; más para prestar o bio a bien vista de hombres buenos. recesos, del consejo de gobierno, in­
Decimocuarta: hacer a las Cones las negar su ratificación a cualquiera de l"udécillla: no puede el Rey privar a demnizando siempre a la
parte intere­
propuestas de leyes o de reformas que ellos. deberá preceder la aprobación ningún individuo de su libertad, ni im- sada a juicio de hombres
buenos elegi­
crea conducentes al bien de la Nación, del Congreso General. ponerle por sí pena alguna. El secreta- dos por ella y el gobierno.

para que deliberen en la forma pres- XIX. Cuidar de que la justicia se admi­ rio del despacho que firme la orden, y IV. El presidente no podrá impedir
las
crita. nistre pronta y cumplidamente por la el juez que la ejecute, serán responsa- elecciones y demás actos que
se expre­
Decimosexta: nombrar y separar libre- Corte Suprema, tribunales y juzgados blcs a la Nación, y castigados como san en la segunda pane del artículo
38.
mente los secretarios de Estado y del de la federación, y de que sus senten- reos de atentado contra la libertad V. El presidente, y lo mismo el
vice­
despacho. cias sean ejecutadas según las leyes. indi\'idual. presidente, no podrá, sin permiso del
Congreso, salir del territorio de la Re­
pública durante su encargo y un año
después.

Artículo 172.-Las restricciones de la Artículo 112.-Las restricciones de las


Insistimos en que el parecido es muy grande. Ahora bien, el rey es­
autoridad del Rey son las siguientes: facultades del presidente, son las si-
pañol gobernaba apoyado en una Junta de ministros y, desde luego, en
Primera: no puede el Rey impedir, bajo guientes: la acción de cada ministerio, quienes rinden cuentas ante las Cortes. El
ningún pretexto, la celebración de las l. El presidente no podrá mandar en presidente mexicano gobierna con el apoyo directo de cada Secretario.
Cortes en las épocas y casos señalados persona las fuerzas de mar y tierra, sin Nunca se ha formalizado jurídicamente la Junta de Gobierno y, aunque
por la Constitución, ni suspenderlas ni previo consentimiento del Congreso Ge­
tenemos excepciones, la regla práctica es que nunca rinden verdaderas
disolverlas. ni en manera alguna em- neral, o acuerdo en sus recesos del con­
cuentas al Congreso, más allá de las citas protocolarias y nunca respon­
barazar sus sesiones y deliberaciones. sejo de gobierno, por el voto de
den por los actos ilícitos del presidente, o dicho en otras palabras, el re­
Los que le aconsejasen o auxiliasen. terceras partes de sus individuos pre­
frendo jamás produce los efectos constitucionales que le son propios.
Segunda: no puede el Rey ausentarse sentes; y cuando las mande con el re­
del reino sin consentimiento de las Cor- quisito anterior, el vicepresidente se Todavía cabe destacar otra particularidad más y es la relativa a que
tes; y si lo hiciere, se entiende que ha hará cargo del gobierno.
la mayoría de las facultades del presidente mexicano, lo mismo que las
abdicado la corona. Il. No podrá el presidente privar a nin­ del rey español, son ejercidas indispensablemente con la colaboración
a de sus respectivas asambleas populares.
Quinta: no puede el Rey hacer alianza guno de su libertad. ni imponerle pen
ofensiva, ni tratado especial de comer- alguna; pero cuando lo exija el bien Y

cio con ninguna potencia extranjera sin seguridad de la federación, podrá arres­
e 12.4. LO FEDERAL COMO FORMA DE GOBIERNO
el consentimiento de las Cortes. tar, debiendo poner las personas arr s­
ta y och o
Séptima: no puede el Rey ceder ni ena- tadas, en el término de cuaren Para empezar, tomemos el manual de Derecho Constitucional que
del tribuna l o jue z ·.,

jenar los bienes nacionales sin cansen- horas, a disposición tenga mos más a la mano y veamos cómo, por
regla general, al estudiar
timiento de las Cortes. competente. el federalismo invariablemente se hace al amparo de un capítulo que
ocupar
Décima: no puede el Rev tomar la pro- III. El presidente no podrá habla de las formas de Estado. Se nos dice muy explícitamente que exis­
� particular ni
piedad de ningún parti ular ni cm·po- propiedad de ningún ten Estados unitarios y Estados federales y se insiste en que la base de
poración, ni en la pose sión;_)
ración, ni turbarle en la posesión, uso turbarle
si en esta clasificación no es otra más que la misma contraposición de una y
y aprovechamiento de ella; y si en al- uso o aprovechamiento de ella; y
n caso fuere para un Ot¡·a cl ase de Estado. Así lo fede ra l en sentido estricto, para estos auto­
gún caso fuere necesario para un obje algú necesario, ,

res, es u n a simple forma de Estado. Veamos.


T.''

334 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN FORMAS DE GOBIERNO - J. Barragán Barragán 335

Ignacio Burgoa en su libro Derecho Constitucional Mexicano, en cua­ De manera, pues, que para el maestro Tena Ramírez "el sistema fe­
lesquiera de sus muchas ediciones, por ejemplo en la séptima edición de deral, como nos dice en otro párrafo, no es sino una forma de gobierno,
1989, estudia el tema del federalismo en el capítulo quinto, páginas una técnica para organizar los poderes públicos". Por esta razón, le de­
401-464, que intitula precisamente Las Fomzas de Estado, ocupándose dica todo un capítulo al examen de ésta materia, intitulado La forma de
aquí mismo del federalismo mexicano a partir de la página 421. gobierno, de la página 101 a la 124, de la vigésimo séptima edición,
Jorge Carpizo y Jorge Madraza, igualmente conocidos por todos, México, 1993.
han escrito muchas páginas sobre Derecho Constitucional. Por ejemplo, Nosotros hacemos nuestro el planteamiento de Tena Ramírez y lo
veamos lo que señalan en su Derecho Constitucional, un manual editado tomamos como base de estas reflexiones. Creemos que es un plantea­

por el Instituto Federal Electoral, México 1993, en la página 91 bajo el miento muy firme, entre otras cosas, porque todos los enunciados lega­
les que existen al respecto dicen que lo federal en México es una forma
epígrafe de 1.4 El Régimen Federal, donde dicen textualmente:
de gobierno, sin que, por otro lado, exista texto alguno legal que autori­
El artículo 40 constitucional expresa que México es un Estado federal y que ce a calificarlo como una forma de Estado. Veamos con detenimiento
dicho Estado está constituido por Estados libres y soberanos; pero unidos
este planteamiento, haciendo referencia a los hechos históricos, en pri­
en una sola Federación. La tesis que asienta nuestro precepto constitucio­
mer lugar, para, en segundo lugar, examinar las formas jurídicas.
nal es la teoría de Tocqueville, es decir, la cosoberanía: tanto la Federación
como los Estados miembros son soberanos. 1
12.4.1. LOS HECHOS HISTÓRICOS
A continuación los autores mencionados se refieren a las contradic­
ciones aparentes ("parece") entre el artículo 40 y el 39: ya que el prime­ Los hechos mandan. En las clases de filosofía nuestros maestros

ro admite la cosoberanía, mientras que el segundo la rechaza al preci­ acostumbraban a recordarnos el peso del viejo aforismo: contra {acta
11011 sunt argumenta: es decir, contra los hechos no existen los argumen­
sar que nada más hay una soberanía y es la que reside en el pueblo.
tos. Los hechos no se demuestran por los sistemas de la argumentación.
¿cómo resuelven los autores citados ésta contradicción? Muy sencillo:
Los hechos se explican y se reconocen.
concluyendo en que "las entidades federativas no son soberanas sino
Nosotros, en varios de nuestros libros, hemos tratado precisamente
autónomas". Más adelante los autores completan su planteamiento ase­
de explicar los hechos que dan nacimiento al federalismo mexicano, como:
gurando que "La regla para la distribución de competencias en el Esta­
Introducción al federalismo mexicano: la formación de poderes en 1824,
do federal mexicano sigue el principio norteamericano".2
editado por la Universidad Nacional Autónoma de México, en 1978 y
Sin embargo, no todos los autores siguen ésta misma doctrina de
reimpreso por la Universidad de Guadalajara, en 1994; Principios sobre
los maestros citados. Felipe Tena Ramírez, por ejemplo, mantiene una el federalismo mexicano, editado por el Departamento del Distrito Fede­
teoría diferente, pues para él, el federalismo mexicano "es ante todo un ral, en 1984; El pensamiento federalista mexicano: 1824, editado por la
fenómeno histórico", que debe ser examinado de manera particular to­ Universidad Autónoma del Estado de México, en Toluca, en 1984; His­
mando en cuenta la forma en que fue adoptado por México. Igualmente toria del Senado, en tres tomos, de los cuales somos autores del tomo
insiste en que se trata de un sistema "de distribución de facultades entre primero, relativo al proceso de creación de la institución aparentemente
los dos órdenes (llamado el uno federal por antonomasia y el otro regio­ más federalista, el Senado, editado en México, en 1987, por la misma
nal o local)". Más adelante, en la nota 29 de la página 126 precisa que: H. Cámara de Senadores.4 Además, han aparecido muchos otros artícu­
los siempre sobre estos mismos temas, tanto para publicitar documentos
Para nosotros, el reparto de competencias, es decir, una distribución clasifi­
cuanto para explicar los procesos mismos, todos de carácter histórico.
cada de facultades entre órganos de poder, de ninguna manera cabe enten:
dedo como un fraccionamiento de la entidad sociológica llamada nación 01
Nadie, que conozca medianamente el período histórico, que va des­
de 181 O hasta 1824, se atrevería a sostener la mentira, que recogen mu­
del orden jurídico nacional que a ella corresponde.3
chos libros, de que el federalismo mexicano es exactamente igual al fe­
deralismo norteamericano, salvo en que ellos por el federalismo se
1Véase en su libro Derecho Constitucional, ya citado, la p. 91.
2 Véase la misma obra citada.
3 Estamos citando su conocido Derecho Con stitucional Mexicano, vigésima séptima 4 Este mismo libro fue publicado de manera independiente con el título Proceso his·
edición, México, 1993. lórico de fí:mnación del Sen ado mexic ano, México, 2000.
336 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

'•
FORMAS DE GOBIERNO - J. Barragán Barragán
337

unieron y México por el federalismo se desunió. Y no se atrevería a sos­ :deo al norte hasta la frontera con Panamá al sur. Para ello se convoca
tener esa mentira por la sencilla razón de que no existe ningún hecho,
al llamado primer Constituyente mexicano, integrado con representan­
absolutamente ninguno, acaecido durante esa larga etapa de 181O a 1824, tes de toda esa inmensa, rica y variada extensión de tierras. El último
que se parezca en nada a los hechos sucedidos en Norteamérica duran-
diputado centroamericano, que pidió permiso para retirarse de aquel
te su proceso de independencia y de formación federalista.
Congreso, fue José Cecilia del Valle, hondureño, gracias al cual se nego­
Porque los hechos son diferentes, el federalismo mexicano no se pa­
ció la abdicación de Iturbide, su salida pacífica de la capital del país y
rece en nada al federalismo norteamericano. Por esta misma razón, los
su destierro a Londres.
estudios, tan preciosos y abundantes sobre el federalismo estadounide n­
¿Qué parecido guardan estos hechos, narrados en cualquier libro de
se, no necesariamente sirven para, sin más miramientos, explicar el fe­
historia, con los hechos acaecidos en los Estados Unidos?
deralismo mexicano. El mismo Tena Ramírez, incluso al referirse al
Y justamente entre estos hechos, protagonizados por Iturbide, el
ejemplo norteamericano insiste en la importancia del factor histórico a
Congreso disuelto por Iturbide, primero; el Acta de rebelión de Casa
fin de ver cómo se adapta a México dicho federalismo. s
\1ata contra Iturbide y otra vez el Congreso reinstalado, nace el movi­
Vaya como ejemplo la institución del Senado, cuyo proceso de for­
miento hacia el federalismo mexicano.
mación nosotros hemos estudiado con el detenimiento necesario y el
Digámoslo otra vez, el federalismo mexicano, como proceso históri­
manejo de la fuente histórica correspondiente para concluir, como lo
co, se inició el primero de febrero de 1823, que es la fecha del Acta de
hacemos en el libro que acabamos de reseñar, que no se guarda rela­
Casa Mata; y comenzó este movimiento por la propia fuerza interna de
ción alguna con la institución norteamericana, más allá del uso del mis­
todos y de cada uno de los puntos de dicha Acta, que no era otra cosa
mo nombre y el hecho de haberse resuelto que fueran dos los represen­
más que un ultimátum a Iturbide, y una especie de programa críptico
tantes de los Estados, sistema vigente hasta que recientes reformas han
que sólo la historia tenía que descifrar de todos y cada uno de los pasos
aumentado el número total de senadores a 128: dos electos por el voto
del proceso de formación del federalismo mexicano.
directo; un tercero electo a favor de la primera minoría partidaria; Efectivamente, todo se reduce a hechos históricos sencillos de na­

'
mientras que los 32 senadores restantes, serán electos según el princi• rrar: entre los puntos del Acta de Casa Mata estaba el de la inmediata
pio de representación proporcional mediante el sistema de listas vota­ reinstalación del primer Congreso Constituyente, disuelto por Iturbide a
das en una sola circunscripción plurinominal nacional. fines del mes de octubre de 1822. La reinstalación tuvo lugar el día 7 de
Otro ejemplo puede ser el del proceso de creación y, lo que es más marzo de 1823, como se dice en su Diario de Sesiones.7
valioso, el funcionamiento, durante más de un cuarto de siglo, de la Su• ¡¡,· También se exigía, en la misma Acta de Casa Mata, el que este Con­
·1.:
prema Corte de Justicia, a la cual se le habilitó para que sustituyera a la greso, recién reinstalado, procediera a convocar a una nueva Asamblea
vieja Audiencia virreina! de la ciudad de México; o el hecho de que su Co nstituyente.
primer reglamento fue uno de 1813, dictado para el Supremo Tribunal He aquí la gran paradoja: el Congreso reinstalado no quiso acatar,
de la Constitución española de 1812. en principio, este punto del Acta de Casa Mata y precisamente por opo­
ano
El parecido, por citar un ejemplo más, entre el presidente mexic nerse a elaborar la mencionada convocatoria, procedieron varias Dipu­
del Acta Constitutiva y Constitución de 1824, o el de 1857, o el de 191 7! tacio nes Provinciales, primero, a negarle el apoyo y la obediencia a
men tt¡
con el rey de la Constitución de 1812, es más que casual, es literal Iturbide por haber disuelto al Congreso; segundo, a adherirse al Acta de
el mismo.6 , C asa Ma ta; tercero, procedieron a reunirse en Puebla, a fin de elaborar
do �
Pueden citarse muchísimos otros ejemplos. No hay nada pareci ell as m ismas la referida convocatoria; cuarto, ante la negativa del Con­
gu ste.
1turbide en la historia de Estados Unidos. Pues bien, guste o no gre so para auto-disolverse, le retiraron su obediencia; y quinto, varias
Iturbide proclamó y consumó la independencia; con lturbide se de es tas Diputaciones Provinciales iniciaron un proceso interesantísi­
vo
por unos instantes la idea del Gran Anáhuac, que iría desde Nue mo de auto-transformación en estados libres independientes y soberanos.

S Véase su Derecho Constitucional Mexica>w


, ya citado. 7 Una de las mejores fuentes de información
l de todos estos hechos son precisamente
6 Véase a Manuel: "El rey en la Constitución de Cádiz: una
MARTÍNEZ SosPEDRA, 0' i1hros
de Actas y Dzano de Seswr1es, que nosot¡·os hemos reimpre
so facs1mila•·mente en
l 9so a
i s del Depa•·tamento de Historia
narquía p•·esidencialista", en la Revista �.'stud o tl·a vés de l a UNAM, bajo el título de Actas constituciona
les mexicanas: 1821-1824,
de la Facultad de Filosofía, Zaragoza, España,
1975, pp. 225-252. de los cuales se han reimpreso 10 volúmenes.
'1
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN FORMAS DE GOBIERNO - J. Barragán BarTagún 339
338 '

s al proceso de ta. hasta que el segundo Constituyente les ordenó su inmediata transfor­
Estos hechos, es decir, todos los hechos relativo
ciones Provinciales en Estados son, Jllación en Estados, expidiendo al efecto una hermosa convocatoria, a
auto-transformación de las Diputa
nada, absolu tament e en nada, se pare­ lin de poder estar en condiciones de aprobar, con las solemnidades del
no sólo maravillosos, sino que en
s norteamerica nas y su pro­ caso, el Acta Constitutiva del 31 de enero de 1824.
cen a los hechos sucedidos entre las colonia
He aquí, citados como ejemplos, los hechos que llevaron a Centro
ceso de federación.
ente conoci­ América a ser lo que comenzaron a ser desde 1823; que llevaron a Mé­
Lamentablemente estos hechos aún son muy escasam
con una \ico al federalismo. No los olvidemos. Mucho menos los despreciemos,
se inició
dos. Por ejemplo, apenas sabemos que ese proceso
diciendo cosas tan extremadamente inexactas como aquella de que el
su volunta d al res­
consulta a los municipios, preguntándoles cuál era kderalismo mexicano es una nueva creación de la Constitución; o aque­
, y en la región yuca­
pecto, como se hizo en lo que era la Nueva Galicia lla otra de que la soberanía estatal no debe tomarse en serio, porque a
; pero también en Quetza ltcnang o, Guatemala, y León,
teca, y en Oaxaca lo sumo los Estados son autónomos.
Nicaragua. Si los enunciados constitucionales, como los que hablan de los más
ncia de los ca­
Incluso, para comparar el hecho y resaltar la importa �agrados principios, entre los que está el de la soberanía (art. 39); el de
l, como se hizo años antes en San­
bildos abiertos del municipio colonia la existencia de Estados libres independientes y soberanos (arts. 40 y 49),
cabildo s iniciaro n un inte­
ta Fe de Bogotá, en Neiva o Mariquita, cuyos a muchos les suenan a palabras huecas e insinceras, ello no es debido a
libre y soberana
resantísimo movimiento de auto-transformación que los hechos históricos hayan perdido su vigencia, sino a que todos
dictándose sus propias constituciones municipales.8 los demás enunciados, como los relativos a los derechos humanos, son
voto favorable de
En suma, nuestro federalismo se consolida con el igualmente palabras huecas, por causas ajenas también a los anhelos
enteras en Estados
los municipios para la transformación de regiones del pueblo mexicano, o por causas históricas que tienen su propia y pe­
al Estado de Jalis­
libres independientes y soberanos, dando nacimiento culiar explicación, muy relacionada, por cierto, con el presidencialismo,
que a Yucatá n y Oaxaca ; al igual que nacie­
co y de Zacatecas; lo mismo uno de los fenómenos más perturbadores del federalismo mexicano y de
nacen a partir de junio de 1823,
ron los países centroamericanos. Todos toda la vida nacional.
so Constituyente,
muchísimo antes de que se reuniera el segundo Congre La auto-constitución en Estado libre independiente y soberano de
día 30 de octu­
el cual comenzará sus sesiones preparatorias el mismo Jalisco, en junio de 1823, o la del Estado de Zacatecas, la de Yucatán o
voluntad, uno de los
bre en que se estaba auto-disolviendo, contra su Oaxaca, por mencionar algunos ejemplos, que pertenecen a las mismas
entaria de México, su fechas, es algo más que un formalismo de papel, sobre todo si recorda­
Congresos más esforzados de la historia parlam
mos que Jalisco y Zacatecas le hicieron frente con sus fuerzas al ejérci­
primer Constituyente. 9

de hechos escuetos, to, que desde el centro se despachó para "sofocar su rebelión", vencién­
En esta sucesión de hechos, y nada más que
se parece a la etiología dolo, aunque esta batalla se haya llevado a cabo sobre una mesa de
provistos de su propia etiología, que en nada
mericano, está la sepa­ negociaciones en Lagos de Moreno.
que provocó la formación del federalismo nortea
de la idea del gran iiil
­ Todavía, en este brevísimo repaso de acontecimientos históricos, de­
ración definitiva de Centro América. Separación
biéramos aquí recordar cómo existe una continuidad, no sólo de la le­
perio iturbidista.
ible de otras varias gislació n expedida por las Cortes españolas de 1810-1813,y con ella la
Y está también, por otro lado, la posición entend
alis- Pervivencia de algunas instituciones políticas, como sucede con la figura
siempre a la idea feder
Diputaciones Provinciales, que se opusieron de] Jefe Superior Político, sino también la persistencia de instituciones
coloniales, según sucede con la Audiencia y la institución municipal.
libres, independiente s Y sobe­
8 Para el estudio del proceso de autodeterminación en unOII Por ejemplo, respecto de la supervivencia de la legislación gaditana
rminación de alg
ranas de las provincias, así como respecto del proceso de autodete
ión, como el de Leiva , o el �e � Podemos remitir al lector al primer tomo de la conocida colección de
municipios hasta el punto de darse su propia Constituc l eyes de los autores Duhlán y Lozano, en donde efectivamente vienen
ión .
.
nqu1ta, en lo que era el Remo de la Nueva Granada, véase:
el acta de confederac
de las provi nci as uJ1I'" lll uchísimas de estas disposiciones, porque, según se aclara en la intro­
día 27 de noviembre de 1811 de Santa Fe de Bogotá, en "Congresos
rdo Posa da¡
das" en Biblioteca de Historia Nacional. volumen XXIII, recopilac ión de Edua
ducción, o advertencia, están aplicándose todavía en el México de en­
Imprenta Nacional. Bogotá, Colombia, 1924. pp. 1 y ss. to nces; así mismo podemos recordarle al lector que apareció en la im­
9 Véase el estudio pormenorizado de estos
procesos en BARRAGÁN BARRAGÁN,
Prenta de Galván, en el año de 1829, un tomo consagrado a recopilar
ss.
lntroducció•1 al federalismo, ya citado, p. 115 y
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN FORMAS DE GOBIERNO J. Barragán Barragán 341
340
-

forma lo cual, llevado al área jurídica, significaría que la existencia del


aquéllas leyes españolas que se declararon vigentes después de consu­
hombre es anterior a las normas por las que se va a conducir.
mada la independencia.
Respecto de la pervivencia de la figura del Jefe Superior Político, En otras palabras, si bien es muy cierto que algunos territorios fede­

podemos mencionar que existen varios casos en donde solamente se rales fueron creados desde la voluntad del poder revisor de la Constitu­
produce el cambio de nombre, llamándolo ahora gobernador del Estado L·ión, otros muchos han tenido su existencia y su forma peculiar de ser,

pero sin que se produzca ni siquiera un cambio en la persona que esta­ L'sto es, su existencia con todas y cada una de sus prerrogativas de liber­
ba desempeñando dicho encargo: así vemos que Quintanar, que es el úl­ tad, independencia y soberanía, con bastante antelación a la existencia
timo Jefe Superior Político de lo que fue la Nueva Galicia, continuará de la norma general.
desempeñando las mismas funciones, pero ahora por virtud de un de­ Así pues, la forma jurídica, que fue la primera en el tiempo en este

creto del Congreso Constituyente del Estado, con el nombre de Gober� · proceso histórico de formación del federalismo mexicano, tal vez fue el
nadar. Esto mismo le sucedió a Múzquiz en el Estado de México. \oto del primer Congreso Constituyente aceptando que hubiera una Fe­
Continuando con éstos ejemplos, debemos recordar que las Audien­ deración, que era lo exigido por algunas Diputaciones, ya constituidas
cias, en los lugares en donde las había, sencillamente se transformaron en Estados, y algunas otras que estaban en proceso de su auto-transfor­
en los nuevos Tribunales Superiores de los Estados. Sobra advertir que mación. Este voto lleva fecha del día 12 de junio de 1823 y decía:
la institución municipal siguió subsistiendo, no sólo en México, sino en El soberano Congreso constituyente, en sesión extraordinaria de esta no­
todos los territorios de las antiguas colonias españolas. che, ha tenido a bien acordar que el gobierno puede proceder a decir a las
provincias estar el voto de su soberanía por el sistema de república federa­
12.4.2. LAS FORMAS JURÍDICAS da, y que no lo ha declarado en virtud de haber decretado se forme convo­
catoria para nuevo Congreso que constituya la Nación.
No menos decisivos para el proceso federalista mexicano que los
Otras formas jurídicas, muy importantes, fueron las limitaciones ex­
hechos históricos, brevemente ejemplificados en las páginas que antece�
den, fueron y son las formas jurídicas, pero vistas éstas no con presas y terminantes puestas sobre el pliego de poderes con que llega­

sino como lo que fueron y son realmente, es decir, como hechos ron muchos diputados al segundo Congreso Constituyente Mexicano, el
cual inició sus sesiones preparatorias el día 30 de octubre de 1823 y se
cos también.
Una Constitución, como la vigente de 1917, o como la de 1857 y declaró legítimamente instalado el siguiente día 7 de noviembre del
mis mo año.10
anterior de 1824, independientemente de su valor formal, el valor
Las limitaciones en cuestión decían sencillamente que tales señores
privilegia Kelsen por así decirlo, tiene otros valores, como pueden
se�
diputados nada más tenían poder de representación para constituir al
los históricos, los políticos y los sociales. Una Constitución, decía
Sevilla Andrés, es hija de su tiempo. país bajo la forma de una Federación. No podían ser más categóricas
Más aún, nosotros afirmaríamos con Diez Picaza, maestro estas limitaciones.
anq
en Valencia, y con otros muchos destacados juristas, como el mexic En Yucatán la limitación fue decretada por el mismo Congreso
Rolando Tamayo, que la Constitución de un pueblo está vinculada Constituyente, por decreto del día 11 de septiembre de 1823, cuyo ar­
tíc ulo 2 decía:
su vida real, con su organización real, con su comportamiento
co, aún en los casos en que ni siquiera dicho pueblo se haya podido Art. 2.-Que ver-ificada la elección se autorice a los diputados electos con
un documento formal. el poder, cuya fórmula prescribe la citada convocatoria, incluyendo en él,
'-'•�
El propio Rolando Tamayo, que no es nada sospechoso de anUA como cláusula esencial pronunciada por la voluntad general, la de que sólo
niano, ha estudiado estupenda mente esta temática en su libro pueden constituir a la Nación en forma de gobierno republicano, represen­
(;IU•�
ción al estudio de la Constitución, editado por la Universidad Na tativo y federal.

Autónoma de México en 1989, fecha del libro que tenemos a la


meno
La norma jurídica, como regla general, es posterior a los fenó
10
Para un estudio de estas limitaciones véase BARRAGÁN BARRA<;AN, José, flllroducciáll
al (edera/is1110, ya citado. pp. 153 y ss.
históricos: los filósofos suelen comentar que primum est esse quam
ter esse, esto es, l a exi stenci a es primero que el ser de una
.'f

FORMAS DE GOBIERNO - J. Barragán Barragán


342
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN 343

En Michoacán o Valladolid, las limitaciones fueron decretadas por con Panamá, estaba en proceso de definición: Chiapas, por ejemplo,
tomó su rumbo hacia la mexicanidad a fines de ese año de 1823. Por
su junta electoral bajo la denominación de Instrucciones, de manera
ello, el federalismo mexicano, al contrario de lo que se afirma, unió lo
que su artículo 1 o decía lo siguiente:
que quedaba de una inmensa extensión territorial en descomposición
Art. l.-La provincia de Valladolid está toda pronunciada expresa y ter­ política completa y que tan sólo tuvo, como ideal, la creación de un fa­
minantemente por el sistema de gobierno popular representativo federado, buloso imperio, que Iturbide no supo consolidar.
y bajo de esta forma y no de otra alguna quiere y debe ser c onstituida. La Federación, en cuanto acuerdo o pacto de voluntades, nació con
el Acta Constitutiva, como sucede con todas las entidades, que el Dere­
Las limitaciones impuestas por Jalisco y Zacatecas, que para éstas
cho crea como personas morales. Pero no nace la Nación mexicana, ni
fechas estaban ya constituidos en Estados libre independientes y sobera­
nos, se fijaron, entre otros documentos, en el convenio celebrado en La­ el Estado mexicano, por virtud de esta Acta.
gos de Moreno con los comisionados del general Bravo el día 1 O de La Nación mexicana o el Estado mexicano no es producto del Cons­
tituyente que aprueba el Acta, sino que es producto de hechos y decisio­
agosto de 1823, en donde leemos textualmente:
nes políticas de diversa naturaleza: la Nación mexicana tiene su propio
Los artículos adicionados de la ley de convocatoria señalados con los nú­ proceso histórico de formación, que comienza con las Actas de Inde­
meros 1 o y zo deben quedar en todo su vigor y fuerza, para que los diputa­
pendencia, pues hubo varias en esa región del gran Anáhuac de 1821;
dos del futuro Congreso no puedan constituir a la Nación como entiendan con la reunión del primer Constituyente y el intento de formar un gran
que le conviene; sino bajo el sistema de república federada conforme a su imperio; pero también con el proceso de desincorporación del referido
voluntad general. ideal imperial por parte de las mismas Diputaciones Provinciales, que
habla de lo fede­ lo intentaron formar, dando pie a los procesos de formación de estas
Notemos bien cómo en todos éstos documentos se
de forma de gobiern o, incluid o el documento Diputaciones en Estados libres y soberanos, tanto por el rumbo de Cen­
ral siempre bajo la idea
ra que, en lugar de una federac ión, se estaba troamérica cuanto por el rumbo del altiplano y el extremo norte.
yucateco en donde parecie
de Estado s A nosotros, pues, nos queda muy claro que el proceso de formación
inculcando una confederación
relevancia no puede de la Nación mexicana, del Estado mexicano, es un proceso esencial­
Con todo, el ejemplo más explícito y de mayor
llamad a Acta Constit utiva de la Federa­ mente diferente del proceso de adopción de la forma unitaria, que to­
ser otro sino la forma jurídica
Sin duda, la forma jurídica más im­ maron los países centroamericanos, después de los escarceos federalis­
ción del día 31 de enero de 1824.
e, la de mayor rango dentro de la je­ tas, y es esencialmente diferente del proceso de adopción de la forma
portante de todas, la más solemn
tiempo y formal mente superior a la federal que realizó México.
rarquía normativa, anterior en el
e de 1824) y que debía Nos queda tan clara esta distinción que, precisamente por ella, con­
Constitución que luego vendría (el 4 de octubr sum ado el proceso de federalización, es decir, aprobado el Pacto de
exposición de motivos con
acomodarse al Acta. No en vano en la breve
est Unión, el Acta y las Constituciones posteriores, incluido el texto de la
se decía que: primum
que se presentó al pleno el proyecto de Acta de 1917, dejaban abierto el proceso de formación de la Nación mexica­
cto
debía formalizarse el a
esse quam taliter esse, esto es, antes que todo, na, aceptando la eventual
que el discutir (lo que se hará incorporación a su Unión de alguna otra Na­
de la existencia misma de la Federación
s especí ficos de la o:�aniz
a¡ ció n, como nos previene el artículo 73, fracción l.
en el proyecto de constitución), los detalle d e.
siguiendo los prinCipiOS éA dónde queremos llegar? Queremos llegar a la conclusión obvia:
ción y funcionamiento de dicha Federación, la Federación, lo federal no es más que el resultado y el efecto jurídico
Acta fundacional. bre­ de lo que subyace como elemento esencial del acuerdo explícito de vo­
una Constitución a
Esta Acta, que se presenta bajo la forma de do­ l un tades, que todos conocemos y llamamos pacto federal.
n
de federación. Es u
viada, es nada más y nada menos que el pacto rl ns:
a Todo s los pactos, que tienen por objeto crear entidades distintas a
la voluntad de los Est
cumento por medio del cual se formaliza l as personas, tienen el carácter de ficticios, no en el sentido de falsos,
de
constituirse bajo la forma
que ya existían con anterioridad, de sino en el sentido de que son ficciones jurídicas, como se dice desde el
federación. D e r e cho Romano. La expresión ficciones jurídicas se encuentra en los
federación evidentemente. Más
Antes de esta Acta no había - __.,.,..
textos latinos como (icta iuris, cuya traducción apropiada es la siguien­
a ni Naci ón, toda vez que la gran
casi diríamos que no habí te: cosas que son hechas por el derecho o creaciones del derecho. Por tal
sta, desde Nuevo México hasta la
del intento de imperio iturbidi
344 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

motivo, las entidades, creadas por medio de estos pactos, reciben el nom­
bre de entidades morales, es decir, no corpóreas como lo es el ser hu­
mano, como lo es la Nación, como lo es el Estado, como lo es el munici­
' FORMAS DE GOBIERNO - J. Barragán Barragán

vertido en el catalizador más potente de las tendencias unionistas y cen­


tralizadoras a lo largo de la presente centuria.
Tanto es así que, en estos momentos, puede reconocerse, sin exage­
345

pio, etcétera. rar, que el Estado mexicano, pese a su forma federativa, aparece mucho
Por eso el Acta Constitutiva se llamó así, y por eso mismo fue suscri­
más centralizado que los países unitarios que han sido siempre fuerte­
ta por todos los diputados en su carácter de representantes de sus res­
mente centralistas, como Francia y no digamos España y su proceso de
pectivos Estados, tal como puede apreciarse en la versión original que
regionalización.
se conserva en el Archivo General de la Nación, reproducida en muchas
Esta permanente confusión entre la entidad federal mexicana, y el
ocasiones facsimilarmente, tal como lo hicimos nosotros en nuestro li­
Estado mismo, o la Nación misma, ha conducido a muchos estudiosos a
bro Crónicas del Acta Constitutiva y de la Constitución de 1824, editado
los exudados cerebralistas, como los llamaría Unamuno, de pensar que
por la H. Cámara de Diputados, México, 1974.
en México puedan existir dos Estados soberanos, uno federal y los Esta­
La entidad, pues, que creó dicha Acta, es una entidad moral o ficti­
dos miembros de la Unión: he aquí el origen de la teoría de las dos so­
cia, en el sentido de que es una creación del Derecho, que nunca debió
confundirse con lo que es la Nación mexicana, ni con lo que es el Esta­ beranías, planteada desde noviembre y diciembre de 1823 en el Congre­

do mexicano, tal como se confunde en los criterios de algunos de nues­ so mexicano y, por tanto, doce años antes que Tocqueville. He aquí
tros constitucionalistas, lo mismo que en muchas de sus innumerables también el absurdo de su planteamiento actual. 11
reformas de los textos constitucionales, por ejemplo del vigente de 1917. Este planteamiento erróneo y absurdo no debe conducirnos, como
Como bien sabemos, la Nación y, en su caso, el Estado tienen enti­ hacen algunos autores, al desconocimiento de la soberanía de los Esta­
dad corpórea, porque constan, entre otros, del elemento de la territoria­ dos miembros, para salvar el principio doctrinario de la soberanía del
lidad y de la población. En cambio, ninguna de las entidades creadas Estado federal, sino sencillamente a reconocer que la entidad federal,
por el Derecho tienen, como esenciales, ni al elemento territorial ni al creada por el Acta Constitutiva o Pacto de Unión, no debe confundirse
elemento poblacional. Desde luego que, en cuanto personas morales por ni con lo que es la Nación, ni con lo que es el Estado mexicano.
comparación con la persona física, necesitan no sólo una sede o domici­ Esto es, debe llevarnos a releer dicha Acta y, sobre todo, el debate
lio, sino también una voluntad y, de hecho, todas las personas morales, que suscitó esta problemática, para entender que México emerge en el
llámense sociedades, asociaciones, sindicatos o federaciones, tienen su plano mundial como Nación soberana, es decir, como Estado libre in­
domicilio y su voluntad, conforme lo ordene su propia norma de creación. dependiente y soberano, como lo son el resto de Estados de la comuni­
Así ocurre con la entidad llamada federalismo mexicano, que siem­ dad internacional, tal como vemos que lo están declarando los primeros
pre ha tenido un domicilio, (que puede cambiarse cuando el Congreso artículos de esta misma Acta; y que la federación es nada más lo que
lo decida) y una voluntad. El domicilio o sede ha sido siempre, des­ une a dichas entidades internas. Veamos:
de 1824, la capital de la Nación. Ahora bien, para formar su voluntad,
algo fabuloso, se echó mano de la teoría de la división de poderes Y se Artículo l.-La Nación Mexicana se compone de las provincias com­
prendidas en el territorio del virreinato llamado antes Nueva España, en el
precisó que esa voluntad no se formalizaría en una asamblea general,
que se decía capitanía general de Yucatán, y en el de las comandancias ge­
tal como acontece en las sociedades y asociaciones, sino en la existencia
nerales de Provincias internas de Oriente y Occidente.
de tres poderes, exactamente conforme a la teoría clásica, como los po­
deres de un Estado. Artículo 2.-La Nación Mexicana es libre e independiente para siempre,

He aquí lo que ha confundido a nuestros estudiosos. Opinan, deján · de España y de cualquier otra potencia; y no es ni puede ser patrimonio de
or ninguna familia ni persona.
dose arrastrar por las sencillas apariencias, que la entidad federal, p

formalizar su voluntad al amparo de la teoría de la cl sica divisi ó n d � Artículo 3.-La Soberanía reside radical y esencialmente en la Nación, Y
poderes del Estado, de hecho y de Derecho es una misma cosa que e por lo mismo pertenece exclusivamente a ésta el derecho de adoptar y esta­
Estado. blecer por medio de sus representantes, la forma de gobierno.
ele ·
Y sobra añadir que esta falacia se ha convertido, no sólo en el
stas en gen eral, '
mento de la discordia entre nuestros constitucionali y, ll
Véase, a mayor abundamiento, de BARRAGAN BARRAGAN, José, Prir�cipios del Federa­
e ntre los estudiosos d e nuestro federalismo, sino que, además se ha c o n• -"
lismo /824, e Imrod ucciór� al federalismo me.xicmw, ya citados.
Me.xicar�o:
346 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN ,,
·>·· FORMAS DE GOBIERNO - J. Barragán Barragán 347

Artículo 5.-La Nación adopta para su Gobierno la forma de República Con la simple supresión de esta palabra, pasamos de un gobierno
representativa popular federal. federal, de una federación compuesta de Estados libres independientes

Artículo 6.-Sus partes integrantes son estados independientes, libres y v soberanos, a un gobierno centralizado y unitario, que dividió política­
soberanos, en lo que exclusivamente toque a su administración y gobierno mente el territorio nacional en departamentos, todo ello sin que se afec­
interior, según se detalle en esta Acta y en la Constitución General.12 tara para nada lo relativo a la idea de Nación, o a la idea de Estado.
Más adelante, en julio de 1840, sobrevino la reacción por la vuelta a
La elocuencia de estos enunciados es muy superior a la arbitraria
la restauración del federalismo y se hace un pronunciamiento enérgico,
interpretación de nuestros constitucionalistas: ahí están perfectamente
a impulsos, entre otros, de Valentín Gómez Farías. En esta ocasión se
diferenciadas las ideas; ahí está el concepto de Nación; el del Estado, y
fracasó y en medio de los problemas políticos, que todos conocemos,
las ideas relativas a la forma de gobierno; ahí está lo federal reducido a llegamos a los proyectos de 1842, conocidos, uno como proyecto de la
un problema de distribución y de organización del poder público en mayoría y el otro como proyecto de la minoría.
México, exactamente como lo estudia el maestro Tena Ramírez, un po­ Es decir, aquella Asamblea recibe de la Comisión de Constitución
der que es uno en su concepción filosófica, que es uno en su raíz y ori­ dos proyectos, en lugar de uno solo, por existir una profunda división
gen (porque dimana de la voluntad popular), que es uno por su sede y entre sus integrantes. En el fondo la división era motivada principal­
por su fuente de legitimación, que está en el pueblo, pero que se distri­ mente por la palabra federal, de manera que el proyecto de la mayoría
buye, para su ejercicio, en dos órdenes jurisdiccionales diferentes y, no la incluía al enunciar la forma de gobierno; mientras que el proyecto
dentro de cada orden, el poder es delegado a los respectivos órganos, de la minoría se pronunciaba a favor de la forma federal, por ello es
empleándose para ello la teoría clásica de la división de poderes. que el artículo 20 de este proyecto decía que "el gobierno de la nación,
Por otro lado, cabe insistir en que lo dicho por el artículo 5 del Acta es el sistema republicano, representativo popular federal".
es exactamente lo mismo que dicen todos y cada uno de los posteriores Ahí están ambas propuestas: un proyecto formula un gobierno uni­
proyectos de constitución y textos constitucionales, de carácter federa­ tario y el otro establece la forma de gobierno federal. Ahí está perfecta­
lista, que hemos tenido durante el siglo pasado y el presente, incluyendo mente planteado el problema de lo federal en México, que nunca se

por tanto el texto vigente de 191 7, según pasamos a ver. pensó como forma de Estado, sino como una técnica, en palabras de

Como es natural, en la Constitución del 4 de octubre de 1824 se re­ Tena Ramírez, para distribuir las facultades de gobierno, no obstante

petirán los mismos principios que ya había consagrado el Acta, la cual, que podamos encontrar diferencias muy grandes entre la forma de go­

sobra decirlo, sirvió de base para elaborar dicha Constitución y perma­ bierno federal de 1824 y la forma de gobierno unitario y centralizado de
1835 y 1836.
neció vigente aún después de promulgada la referida Constitución. En
Después de estos dos proyectos, se hizo el encargo de redactar un
efecto, en su artículo 3 se dice:
tercer proyecto, que pretendía conciliar ambos extremos, en noviembre
Artículo 3.-La nación adopta para su gobierno la forma de república, de 1842. En este tercer proyecto se recogió la tesis del proyecto de la
representativa, popular federal. mayoría, es decir, se decidió la adopción de la forma de gobierno "re­
presentativa popular", rechazándose la forma federal.
Por la reacción centralista de 1835 y 1836 se buscó, ante todo, una
Un año más tarde, en 1843, tenemos las Bases, cuyo artículo prime­
reforma sobre la forma de gobierno vigente hasta entonces. Esta fue la
ro volvía a repetir la preferencia por la forma de gobierno unitaria, y
intención de la convocatoria del Congreso de 1835 y ésta fue, en esen­
estaba redactado de la siguiente manera:
cia, la afectación trascendental que se enuncia en las Bases constitucio­
nales de la República mexicana, suscritas en la ciudad de México el 23 Artículo l.-La Nación mexicana, en uso de sus prerrogativas y derechos
de octubre de 1835, en las que, como dice la Base Tercera, el sistema como independiente, libre y soberana, adopta para su gobierno interior la
forma de república representativa popular.
gubernativo de la Nación es el republicano, representativo popular, es
decir, se suprime única y exclusivamente la palabra federal. Nada más claro: la idea de nación, que es una, que es libre y que es
independiente y sober ana, no se discute. Lo que, en todo caso, está a

12 Véase en BARRAGAN BARRAGAN, José: Crónica de la Acta Constitutiva, ya citada, en


donde, en efecto. se reproducen el texto original manuscrito, así como el original impreSO· por e l gob i erno unitario en v ez del gobier no f ederal.
discusión y a debate es la forma de gobierno, optando en esta ocasión
D

TEORiA DE LA CONSTITUCIÓN FORMAS DE GOBIERNO - J. Banagún Barragún 349


348

Luego de ésta insistencia por una forma de gobierno unitario vino 12.5. SOBRE LA DEMOCRACIA

la reacción federalista de 1847. Estamos ahora ante el documento lla­


El tema de la democracia, es un tema que viene a completar la ex­
mado Acta de Reformas de dicho año, denominado así porque se conci­
plicación que se suele dar acerca de la forma de gobierno republicana,
bió como un documento solemne para restablecer la vigencia de la Acta
aunque no sólo de esta forma sino también de la forma monárquica mo­
Constitutiva del 31 de enero de 1824 y la Constitución del 4 de octubre
derna que está también sujeta, como sabemos, al juego democrático.
del mismo año, tal como lo decía el proyecto:
La palabra democracia sólo significa poder popular y, por ello, se le
III. Que el Acta Constitutiva y Constitución federal, sancionadas en 31 de puede vincular con la república. El pueblo, en efecto, puede participar
enero y 4 de octubre de 1824. forman la única Constitución Política de la de muchas maneras en el ejercicio del poder soberano que tiene. Una
República. de esas formas de participación es la de ejercer el poder de manera di­
recta (república directa) a través de asambleas populares, como sucedía
A partir de ésta fecha, pasamos a la Constitución de 1857, lo mismo
entre los griegos, como lo es el cabildo abierto o los concejos en los mu­
que a la Constitución vigente de 1917, en las que se repiten exactamen­
nicipios españoles, colombianos, o mexicanos que, debido a las circuns­
te los mismos enunciados, considerando lo federal como una forma de
tancias, se ven forzados a tomar decisiones fundamentales.
gobierno, tal como lo expresa el artículo 40 del texto en vigor:
En otros supuestos, el poder popular es controlado por un pequeño
Artículo 40.-Es voluntad del pueblo mexicano constituirse en una repú­ grupo de personas, muy poderosas por su dinero (y aparece la aristo­
blica representativa, democrática, federal. . 13
.
cracia). Mientras que también abundan los ejemplos del ejercicio del

Por tanto, si lo federal, si la entidad federal es lo que dicen los tex­ poder popular a través de diversos sistemas de representación. El pueblo
es el soberano, pero no puede gobernar de manera directa, así que ejerce
tos arriba citados, resulta claro que a la entidad federal solamente se le
su soberanía a través de unos órganos, electos popularmente, que ejer­
usa como una forma para distribuir el poder público del pueblo mexica­
cerán el poder en representación del pueblo. De esta manera aparecen
no, de la nación mexicana, que es la única depositaria de la única sobe­
los parlamentos, las Cortes, o los Congresos, que son las formas más ge­
ranía que pueda existir: la soberanía popular.
nuinas de la representación popular, ya se trate de una república parla­
Efectivamente, los problemas particulares de adoptar una u otra
mentaria o presidencialista, ya sea una monarquía parlamentaria.
forma de gobierno (entre las monarquías y las repúblicas, o entre las
Tratando de profundizar algo más en el análisis de la democracia,
formas unitarias, unitarias-regionales, o las federalistas) son problemas
cabe destacar por separado los dos elementos que la componen: el ele­
que, supuestas las circunstancias históricas de cada caso, tienen que ser
mento poblacional o pueblo y el elemento poder. Algunos autores llevan
resueltos no por la Nación entera, sino por una legítima representación
la idea de población a la esencia de la idea del Estado, para decir que el
de ella, llamada Asamblea Constituyente, según lo expresa el artículo 3
Estado está formado por el elemento poblacional, por el elemento po­
del Acta, ya citado; o el artículo 39 de la vigente Constitución. der o soberanía y el elemento del territorio. De esta forma, estos autores
De conformidad con lo dicho, el federalismo mexicano, en cuanto
hablan de la democracia como una forma de Estado.
forma de gobierno, ha venido cambiando, iy hay que ver en qué for ma!
Nosotros no llegaríamos a afirmar que la democracia sea una forma
desde aquel año inicial de 1824 hasta el día de hoy. Más aún, precisa­ de Estado, porque la voz Estado es muy equívoca y, desde luego, no
mente por ser lo federal una simple forma de gobierno tuvo lugar la siempre que hablemos de un Estado se podrá afirmar que exista la de­
reacción o el cambio por una forma unitaria a la altura de 1836, sin que mocracia por el solo hecho de existir el Estado. Desde luego que la idea
por este cambio se modificara el ser de la nación o del Estado frente a de pueblo, población v, más aún, la idea de poder o de soberanía son
la comunidad internacional. ideas complejas y hast a pueden llevarnos a equívocos.
Como quiera que sea, la democracia es una institución política que
se como fundamentojurl­
sir·ve para tomar en cuenta las diferentes maneras del ejercicio del po­
13 En nuestra opinión. este
texto no permite ni puede tomar rnO
por volun tad del pueblo'", así co der soberano po r parte de un pueblo organizado y capaz políticamente
es un Estado federal
dico para afirmar '"que México iden tidad que el
l es una misma de tomar decisiones fundamentales.
el sentido de que lo federa
hacen Carpizo y Madmzo en an Bur oa y otros:
nto jur ídic o , como piens g
ser fundame
Estado. Así como tampoco puede La soberanía, en esencia, se traduce en la capacidad efectiva que
e Estado, si con ello se insiste en coll"
entre las formas d
para incluir lo fede•·al mexicano tiene un pueblo, o una comunidad perfecta e íntegra para auto-adminis-
o c on el Es tado mismo.
obiern
fundir lo que son fm·mas de g
350 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN ' fORMAS DE GOBIERNO - J. Barragán Barragán 351

trarse. Esta es la idea de poder que Aristóteles reconoce a los pueblos El artículo 39 de la vigente constitución mexicana dice:
griegos de su tiempo; ésta es la idea de poder que se consagra en los li­
Artículo 39.-La soberanía nacional reside esencial y originariamente en
bros jurídicos romanos; ésta es la idea de poder que profesan los esco­ el pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para benefi­
lásticos de los católicos incluidos los españoles (Escuela Jurídica Espa­ cio de éste. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar
ñola); y ésta es la idea de soberanía que recoge el artículo 3 de la o modificar la forma de su gobierno

Constitución de 1812, o el artículo 39 de la Constitución mexicana en Una vez constituido el Estado de Derecho, o una vez aprobada la
vigor. respectiva Constitución, se pueden apreciar ya los alcances de los siste­
Por decir lo mismo con algunos ejemplos: Francisco de Vitoria defi- mas de la representación democrática y las formas en que se resolvió la
ne así al poder soberano en su versión latina: participación del pueblo en las tareas de gobierno, incluyendo, si fuera

. . . sublato communi iure positivo et humano, non sit maior ratio ut potestas el caso, las modalidades de dicha participación.
illa sit in uno quam in altero, necesse est ut ipsa communitas sit sibi suffi­ La referida Constitución española de 1812 consagró la forma de go­
cicns et habeat potestatem gubernandi se. bierno monárquica (monarquía limitada y subordinada a la Constitu­
ción) hereditaria e irresponsable. También consagró un sistema de elec­
Se trata de un pasaje tomado de su tratado De potestate civili. La
ciones populares de carácter indirecto para elegir a los diputados.
esencia de la soberanía consiste pues en esa capacidad que tiene una co­
La Constitución mexicana de 1824, por su parte, aprobó la forma
munidad para auto gobernarse, o para auto administrarse, que es la ex­
republicana, con un presidente y un vicepresidente. Además siguió muy
presión usada en otro pasaje (. .. respública habet ius se administrandi). de cerca el modelo de las elecciones para diputados establecido desde
En los supuestos en que un pueblo, o una comunidad en la termino­ 1812, aunque adaptado a la forma federal, que aquí se consagró.
logía escolástica, no tenga esa capacidad, ello se deberá a que esa co­ Debemos recordar, por último, que los sistemas democráticos se
munidad ni es perfecta ni es íntegra, porque depende de otro poder, al han venido mejorando: el voto se ha reconocido también a la mujer, la
que está subordinada. presencia de partidos políticos ha contribuido a enriquecer las formas
La democracia nada más hace referencia "a la comunicación de la de la participación ciudadana. Incluso, la pluralidad aceptada, abundan
potestad civil de la sociedad a los gobernantes que han de ejercerla. De las modalidades de esa participación, bajo temas como los de una de­
ahí la consecuencia de la traslación del poder desde la comunidad, en mocracia cristiana, una democracia social y las tradicionales formas de
que originariamente reside, a los príncipes y gobernantes"; en palabras los partidos socialistas y comunistas; o bajo las modalidades del refe­
del mismo padre dominico. réndum, de las iniciativas populares de ley, de las consultas populares,
El ayuntamiento de México, con Primo Verdad, o el ayuntamiento etcétera.
de Santa Fe de Bogotá en sesión de cabildo abierto, al tratar el tema de
la ocupación de la península ibérica por los ejércitos de Napoleón, deci­ 12.5.1. LA DEMOCRACIA REPRESENTATIVA
dieron reasumir los atributos de la soberanía y se declararon pueblos li­
Hoy en día, la democracia se ejerce por medio de las diversas for­
bres, independientes y soberanos. De hecho, las circunstancias les serán
mas y fórmulas de representación. Es decir, el pueblo, que es el sobera­
favorables y así aparecerán las primeras Constituciones municipales en no y quien conserva siempre por definición, su prerrogativa soberana,
lo que ahora es Colombia. De hecho México, lo mismo que Colombia Y ejerce el poder a través de sus representantes. Así es cómo una teoría
los demás pueblos continentales, antes unidos al imperio español, gana­ muy conocida desde la antigüedad, como es la delegación del poder o el
ron su independencia total. Este es el juego y el papel de la soberanía. ... ejer cicio del poder por terceras personas, que actúan por representa­
La democracia solamente se refiere a las formas de participación del ció n, cobra mayor importancia y se incorpora al Derecho Público, para
pueblo en el ejercicio de esa soberanía. organizar y legitimar los sistemas de la representación democrática.
El artículo 3 de la Constitución española de 1812, decía: El poder soberano, reside en el pueblo o en la nación de manera ra­
dical o esencialmente. El pueblo conserva siempre esa prerrogativa, sin
At·tículo 3.-La soberanía nacional reside esencialmente en la nación, Y
pm· lo mismo le pertenece exclusivamente el derecho de establecer sus leyes cederla nunca, en contra de Rousseau, sino que simplemente acepta que
fundamentales, y de adoptar la forma de gobierno que más le convenga. dicho poder sea ejercido por unas corporaciones o poderes y por unos
' 'i.

352
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
. --·�
FORMAS DE GOBIERNO - J. Barragán Barragán 353

representantes que, por el régimen consagrado del Estado de Derecho ción nacional. Dichos partidos políticos son, en estos momentos, el úni­
'
quedan sujetos al acatamiento de la ley y a la rendición de cuentas. co medio del acceso al ejercicio del poder por parte de la ciudadanía,
Los dos extremos, el de la sujeción a la ley y la rendición de cuen­ en expresión del citado artículo 41 constitucional.
tas, son propiedades o características del mandato histórico y de la re­ Bien, regresemos a la idea de que el poder se instituyó para benefi­
presentación popular moderna. La ley se concibe como la genuina ma­ cio del pueblo, que es en donde reside dicho poder y a quien le pertene­
nifestación de la voluntad popular y su obediencia o principio de ce necesariamente. He aquí el principio último de la legitimación del
legalidad es incuestionable. La responsabilidad o la rendición de cuen­ ejercicio del poder; he aquí el enunciado que define, o debe definir la
tas por el mismo hecho de ejercer el poder a nombre de otro, el pueblo, moral pública de quienes nos gobiernan; he aquí la motivación profun­
es igualmente incuestionable. da, y la que nunca debe faltar, de cada una de las actuaciones de quie­
La teoría de la representación abarca a todas y cada una de las cor­ nes, por ello, se denominan servidores públicos.
poraciones que componen los órganos estatales y a cada una de las per­ No en vano, el artículo 50 de la misma Constitución vigente, esta­
sonas que los integran. Sólo en los regímenes monárquicos, el extremo blece que la Cámara de diputados se compondrá de representantes de
de la responsabilidad no aplica al rey, porque no ejerce, propiamente la nación. Es decir que, pese a la muy importante mediación de los par­
hablando, poder alguno, o porque, ejerciéndolo, la responsabilidad de tidos políticos, los representantes no debieran buscar sino el interés de
su ejercicio la asume personalmente el ministro que refrenda sus actos. la nación y por ese mismo interés emitir sus votos. En este caso y para
De hecho, los enunciados de la soberanía popular suelen incluir defender a la nación se les reconocen ciertas prerrogativas que de otro
esta idea de la delegación del ejercicio. El artículo 41 de la Constitución modo no se justificarán, como es la de no poder ser reconvenidos por
de 1917 lo indica muy bien. las opiniones que viertan en el ejercicio de sus cargos, o su inviolabili­

de dad parlamentaria.
Artículo 41.-El pueblo ejerce su soberanía por medio de los poderes
la Unión, en los casos de la competencia de éstos, y por los de los Estados, Evidentemente la idea de la democracia representativa admite mu­
en lo que toca a sus regímenes interiores. chos matices y modalidades. Entre las modalidades más importantes a
destacar en México están, además de las tendencias naturales de cada
ese
Por su parte el artículo 39 insiste en la idea necesaria de que uno de los partidos políticos, la modalidad de seguir hablando de una
ejercicio se instituye para beneficio del pueblo.
representación institucional para la Cámara de Senadores.
El artículo 5 de la Acta Constitutiva del 31 de enero de 1824 (Artícu-
�:i
En efecto, en México se ha dicho siempre que el Senado representa
lo 4 de la Constitución Federal del mismo año), reconocía las
mismas
. -:
'(>
.·...
a las Entidades locales y no a la población, no obstante que eran, hasta
ideas de la siguiente mantera: hace poco, todos electos por el voto popular. Últimamente, sin embar­
república ·�
Artículo S.-La Nación adopta para su gobierno la forma de ·::
go, y después de varios ensayos, se determinó aumentar su número a
representativa popular federal. 128, de los cuales dos por cada Estado son electos por el voto popular,
limitado, mientras que los otros son electos por el principio de la primera mino­
Por ello es que la encomienda es temporal, o por tiempo
del Le­ ría y por el principio de la representación proporcional. Los Estados
decretándose la renovación constante de los poderes, al menos
es libres,
son 31 más el Distrito Federal. Con todo, debido a lo contingente de la
gislativo y del Ejecutivo, la cual se hará mediante las eleccion
de la Constitu· fórmula, puede suceder que un Estado llegue a tener hasta 5 diputados.
auténticas y periódicas, según lo expresa el artículo 41
de la demo­ (Qué tan democráticas y que tan representativas sean las fórmulas
ción. Tal renovación, sin lugar a dudas es, la esencia misma
media nte las cuales se compone la Cámara de Senadores? (Qué tan ne­
ser libre, perso­
cracia representativa. Sobra decir que el voto tiene que cesario es el conservar esa Cámara ahora mismo cuando siempre ha es­
haya tenido
nal e intransferible, secreto y directo, aunque en el pasado tado e n las últimas décadas mediatizada por los intereses partidistas?
graves limitaciones.
representativa sB ¿y qué tan alejados están los partidos políticos de una verdadera repre­
Asimismo debemos recordar que la democracia sen tación de los intereses de la nación?
os políticos, reconocidos mu·
perfecciona por la presencia de los partid
Méxic o, como entidades de interés pú Por último, las democ racias r e p re sent at i vas importan responsabili­
chas veces, como sucede en
promo ve r la participación del pueblo en dad por el ejercicio del poder. La responsabilidad es esencial al sistema
que tienen la encom ienda de
uir a la integración de la de representación. Sin responsabilidad, el ejercicio del poder se vuelve
vida demo c rática y la de contrib
r��r�N>
'
354 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN FORMAS DE GOBIERNO - J. Barragán BaiTagán
355

arbitrario y despótico y se le desvincula por completo de su sede origi­ constitutivas de delitos; si no se ha hecho nada en ningún
juicio de am ­
nal y de su genuino titular, el pueblo. paro, generalizando el ejemplo, en los últimos cien años,
es manifiest o
En México, el poder se ejerce, sin sujeción alguna al principio de lo débil que es, lo impracticable que es nuestro sistema de
responsabili­
responsabilidad. Incluso, se pueden cometer graves violaciones a la ley dad por el ejercicio del poder, en cualquiera de sus moda
lidades: res­
sin que traigan consecuencias jurídicas de sanción y de castigo. ponsabilidad política; responsabilidad por juicio político;
responsabili­
El ejercicio del poder debe estar, en primer lugar, sujeto a la res­ dad penal v, desde luego, también la responsabilidad civil.
ponsabilidad política, así genéricamente considerada y no sólo a la res­ En resumen y para terminar, recordemos que la demo
cracia repre­
ponsabilidad por juicio político, que es otra cosa, muy importante si se sentativa es una exigencia de la soberanía popular que se
actualiza ante
quiere, pero también casi imposible de practicarse. la imposibilidad del ejercicio directo por el pueblo del poder.
Significa
Los altos funcionarios, federales y estatales, cuando menos deben que el pueblo delega el ejercicio de su soberanía en sus represen
tantes;
responder políticamente de todos sus actos, aunque se trate de actos le­ que estos deben ser electos por los mecanismos de la democracia;
signi­
galmente ejecutados, aunque no sean contrarios a la ley. Deberá bastar fica también que la representación tiene que instituirse para beneficio
una moción de censura de parte de la opinión pública y, sobre todo, de del pueblo; debe estar sujeta al principio de la legalidad y deben todos
y
las asambleas de representantes para provocar la renuncia inmediata al cada uno de los representantes rendirle al pueblo cuentas rigurosas por
cargo. L'l ejercicio de sus encargos: Ojalá se restableciera el famoso juicio de
En México, debiendo existir y debiéndose practicar, nunca ha existi­ residencia para todos los servidores públicos, sujetos ahora a rendir las
do esta clase de responsabilidad política. El presidente mexicano, que respectivas declaraciones patrimoniales.
con sus actuaciones de finales de diciembre de 1994, causó daños graví­
simos a la economía nacional y a las economías particulares, aún sin
discutir la legalidad de esos actos, debió renunciar al instante, en cuan­
to se produjeron dichos daños. Ni siquiera se habló de la responsabili­
dad por juicio político, dándose precisamente uno de sus supuestos de
procedencia.
Claro está, se puede alegar que México no se rige por las reglas del
sistema parlamentario, entre las cuales está el voto de la censura, etcé­
tera. Eso es cierto, pero de este extremo a la ausencia completa de esa
responsabilidad hay un abismo que no puede justificarse.
Los Secretarios de Estado son responsables de los actos del Presi­
dente, por virtud del refrendo. ¿Alguna vez se les ha hecho efectiva?
Nunca, puede decirse que nunca. Y vamos a citar el ejemplo de lo que
ocurre en los juicios de amparo. ¿se presentan juicios de amparo con­
tra actos presidenciales? Muchos. ¿se declaran procedentes muchos de
ellos? Sí, también son muchos los amparos declarados procedentes.
¿por qué se decreta su procedencia?
La respuesta es muy simple: porque el juez de amparo advirtió Y ve­
las
rificó la existencia de la violación de la Constitución en perjuicio de
?
garantías del quejoso. ¿Estas violaciones importan responsab ili d �d
viola ctó n
Claro que sí importan responsabilidad, como cualquiera otra
a las leyes. ¿Alguna vez en los últimos cien años se ha sancionado a al­
de
gún Secretario de Estado por firmar un acto presidencial violatorio
la Constitución?
e
Si no se hace nada ante esta clase de responsabilidad, que puede s r·
penal, debido a que algunas violaciones a las garantías individuales �.non.
Unidad 13

Evolución del Derecho


Constitucional mexicano

JuAN JosÉ MATEos SANTILLÁN.

13.1. PRESENTACIÓN

La vida de México nos presenta la oportunidad de contemplar una


serie de factores internos y externos que han influido en su historiogra­
fía, de suerte que si tratamos de explicar los motivos que llevaron a
nuestro pueblo a tener la concepción histórica que prevalece hoy en
día, tendremos que buscar una explicación política de los hechos que
motivaron a los historiadores oficiales a describirnos una historia
maniqueísta.
Esta apreciación se refuerza cuando al estudiar el siglo XIX en Méxi­
co, nos percatamos que mientras existieron dos partidos, el liberal y el
conservador, existieron dos historias, en las cuales, cada bando tenía
sus propios héroes y villanos, que naturalmente eran contrarios a los
que sostenían sus enemigos políticos.
De esta forma, los conservadores celebraban el 27 de septiembre,
fecha de la consumación, como día de la independencia, en tanto que,
los liberales festejaban el 16 de septiembre, fecha del inicio de la revo­
lución, como día de la independencia, para los conservadores el gran
héroe de la independencia era su consumador; Agustín de Iturbide, en
tanto que para los liberales el héroe era el iniciador; Miguel Hidalgo.

• Maestro en la División de Estudios de Posgrado, así como, en la Facultad de Dere­


cho de la UNAM.

357
3'i� TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateos Santillán 359

Los liberales buscaban una república federal. los conservadores una Lo expuesto nos sirve de marco para señalar que intentaremos ex­
república central. los primeros buscaban como aliado a los Estados plicar la evolución de nuestro derecho constitucional, a la luz de las
Unidos, en tanto que los segundos preferían a Europa como socia, los fuentes históricas; no de la opinión de los diversos grupos que partici­
héroes para unos, eran los malos para los otros, de forma que, todas las paron en la lucha por México.
virtudes estaban de lado de quien escribía la historia y todas las traicio­
nes. errores y defectos del lado contrario. 13.2. ORGANIZACIÓN
Cuando en 1867 se fusila en el Cerro de las Campanas a los líderes DEL MÉXICO INDEPENDIENTE
del partido conservador, México inicia el camino del partido o grup o
hegemónico en el poder, con lo cual, se termina con la doble visión de Para explicar la organización que se vivió en el México de los pri­
la historia v pasamos a una etapa donde los buenos son los ganadores y meros años de la Independencia, es necesario recordar que de 1521 a
los malos los que perdieron. 1821 nuestro país se encontró sometido a la Corona española, la cual,
Hov en día, en pleno siglo XXI, es menester replantear nuestra histo­ concedió al Virreinato de la Nueva España el rango de reino, aún cuan­
ria, pasar del banco y negro a los matices, de suerte que nuestros estu­ do en la práctica, se le trató como a una Colonia, situación opuesta a la

dios no pretendan calificar a las instituciones históricas con las reglas del norteamericana, donde las trece colonias vivieron como auténticas rei­

día de hoy, ni endiosar a los héroes patrios para que parezcan santos. nos, aun cuando nominalmente era colonias.

La conformación pluripartidista de los poderes federales y locales La comparación de los pasados coloniales de los Estados Unidos y

del México de los inicios del tercer milenio, nos obliga a reconsiderar México, es un requisito fundamental para explicar, como, los primeros
pasaron en menos de tres siglos, de ser un conjunto de colonias, a con­
muchas de las verdades oficiales que no fueron otra cosa, sino simples
siderarse como la primera potencia del planeta, en tanto que, nuestro
explicaciones de partido.
país, después de ser la joya más importante de la Corona, se vio someti­
La historia del constitucionalismo mexicano se encuentra enmarca­
do a un conjunto de presiones que le condujeron a ser desmembrado y
da claramente en los escenarios descritos; los buenos: liberales y federa­
perder más de la mitad de su territorio, incluida la población que en él
listas; los malos: conservadores y centralistas. Cuando vistos con objeti­
se encontraba.
vidad son simplemente seres humanos, con sus virtudes y defectos, y
La Independencia de México se da por la conjunción de factores in­
eso sí, con proyectos político-jurídicos distintos.
ternos y externos; dentro de los primeros debemos recordar el efecto de
Con las reflexiones antes expuestas, podemos observar la Indepen­
las reformas borbónicas: una serie de medidas que lastimaron las con­
dencia de México a la luz de la confluencia de factores internos y exter­
diciones de vida de los novohispanos, desde los criollos hasta las castas;
nos que se conjugaron para generar los hechos históricos de todos co­
la reforma administrativa, que implantó el régimen de intendencias de
nocidos, el inicio y la consumación de la Independencia, con una
1786 en detrimento del antiguo sistema virreina!, con el propósito de
variable significativa en la ponderación de los factores, pues hoy en día
modernizar y hacer más eficiente la hacienda pública y el sistema pro­
resulta evidente que la Independencia de México se debe en mayor me­ ductivo; la expulsión de los jesuitas: columna vertebral sobre la que se
dida a la caída y desmembramiento de la monarquía española, -des­ cohesionaba la población que habitaba la región noroeste del virreinato
pués de la invasión francesa de 1806-, que a las condiciones adversas
v que sostenía el impulso catequizador pro español en un vasto territo­
que prevalecieron en la Nueva España, y que generaron entre otros rio, prácticamente deshabitado y bajo un control político precario; la
efectos, el desplazamiento de los criollos. . imp lantación del libre comercio, tuvo efectos importantes entre los gru­
No pretendo decir tampoco, que toda nuestra historia debe exph­
Pos de comerciantes, que después de siglos de comercio monopólico tu­
carse desde el ángulo de los factores externos, y omitir sin escrúpulo el vieron que enfrentar escenarios comerciales menos ventajosos.
s
impacto de la implantación del libre comercio o la forma de pago a lo Durante años se pagó a los mineros con una parte de las ganancias
mineros, por no citar sino unas cuantas medidas españolas de alto im­
que se obtenían de las minas, cuando se cambió el sistema de pagos de
pacto en la Nueva España. sa lario, el impacto económico sobre las clases trabajadoras fue signifi­
Considero que actualmente se dan las condiciones idóneas para ob­ cativo y aumentó el malestar social. Cincuenta o sesenta años antes de
jetivizar las re fl e x iones históricas, más allá de nuestras preferencias la proclamación de la Independencia se inició un deterioro general y
políticas. Paulatino de los niveles de vida de las clases bajas lo que sumado al ma-
360 TEORiA DE LA CONSTITUCIÓN

!estar de los criollos, generó una combin ación explosiva, a la que s e


sumó el problema de la sequía que azotó al país entre 1808 y 181O.
J
.>:\'
'
EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateo' Santillán

Al panorama anterior, hay que agregar en el ámbito externo que:


España no reconocía nuestra independencia; que, los Estados Unidos e
361

Los motivos internos se complementan realmente con los externos, Inglaterra tenían intereses sobre nuestros territorios; que, los intereses
pues hombres como Fray Melchor de Talamantes, sostuvieron como L'Xtranjeros tenían su representación en las logias masónicas, la yorqui­
causas para lograr la independencia de una colonia, que ésta fuera más na con influencia pro norteamericana, la escocesa con influencia pro
poderosa que la metrópoli, que la metrópoli fuera conquistada por otra L'Uropea.
potencia, que la metrópoli cambiara de religión o que no se preocupara Como puede observarse, el panorama político económico al mo­
del bienestar de la colonia, entre otras, las ideas de Talamantes nos lle­ mento de la consumación de la independencia; era extremadamente di­
van de nueva cuenta a comparar a México y los Estados Unidos, de lícil, los yorquinos formarían el partido liberal, los escoceses crearían el
suerte que bien estudiado el esquema económico mexicano, puede apre­ partido conservador, la lucha se dio desde el primer día, cada partido
ciarse un control directo desde España en todos los ámbitos económi­ tenía un proyecto distinto desde la forma de gobierno, hasta las alianzas
cos; bajo la premisa de proteger los intereses peninsulares ante una internacionales. La lucha no se hizo esperar, cuando sesionaba el pri­
eventual competencia de las colonias, lo que generó un sistema agrario; mer constituyente mexicano, Agustín de Iturbide movió a los grupos en
lo mismo que el ganadero prácticamente de autoconsumo y para satis­ L'l poder para que lo proclamaran Emperador, lo que generó la animad­
facer la demanda de aproximadamente seis millones de habitantes en ' ersión de las provincias, que se autoproclamaron Estados, y en conjun­
un territorio de más de cuatro millones de habitantes. to con el Plan de Casamata del general Echavarri, derrocaron al Empe­
La marina mercante, la armada y los astilleros para grandes barcos rador, y convocaron al segundo constituyente que tuvo la tarea de crear
eran prácticamente españoles, por lo que el comercio obedecía exclusi­ el Acta Constitutiva de la Nación y la Constitución Federal de 1824, sin
vamente a los intereses peninsulares; la pesca y los astilleros, no fueron embargo, antes de continuar, debemos regresar para observar algunos
actividades muy desarrolladas. Los Estados Unidos de América, por el de los documentos que precedieron a nuestra primera Constitución
contrario, desarrollaron un proyecto económico industrial en las colo­ Federal.
nias del norte, en tanto que al sur, se estableció un proyecto agropecua­
rio, de forma que se complementaban mediante el comercio y la pesca, 13.3. CONSTITUCIÓN DE CÁDIZ DE 1812
los impuestos fueron meramente simbólicos hasta el momento que los Y SU INFLUENCIA EN LA NUEVA ESPAÑA
ingleses quisieron establecer un sistema impositivo, que fue el pretexto
que finalmente dio motivo para la independencia de las trece colonias. La Constitución de Cádiz fue un magnífico documento que se carac­
Con lo expuesto simplemente deseamos sostener la idea de Don terizó por su liberalismo, factor que habría de conducirle finalmente a
Carlos Pereyra cuando afirma que: la independencia de los Estados la destrucción, en una España en que prevalecían los intereses conser­
U nidos de América se da como resultado de un movimiento económico ' adores, y las tendencias monárquicas.
interno de carácter expansivo; en tanto que; la Independencia de Méxi­ Para entender la Constitución de Cádiz, es menester recordar que
co, se explica como parte de la desintegración del Imperio Español. España vivía la más grave crisis política, económica y militar de su his­
Las ideas expresadas nos conducen de nueva cuenta a Talamantes Y toria, desde la fundación de la monarquía bajo el reinado de los Reyes
nos sitúan en dos escenarios diferentes, los Estados Unidos llegan a su Católicos en el siglo XV, dado que Napoleón Bonaparte solicitó permiso al
independencia por ser iguales a la metrópoli que los tenía dominados, Rey de España para atravesar con sus tropas el territorio español y de
en tanto que México adquiere su independencia bajo la premisa de que esta manera poder atacar al reino de Portugal; el Rey español con inge­
su metrópoli recientemente había sido conquistada, lo expuesto no ten­ nui dad concedió el permiso para el tránsito de las tropas extranjeras, y
dría relevancia si no nos sirviera para entender la situación que tuvo se encontró ante la fatalidad para su reino, de que Napoleón simple­
que enfrentar nuestro país al momento de su independencia; un sisterna l11ente acantonó sus tropas en España y se declaró su conquistador. A lo

agrícola y ganadero precarios, una marina mercante y una armada, lo exp uesto debe agregarse que, poco antes de la declaración de conquista

mismo que astilleros prácticamente inexistentes, el sistema económicO napoleónica, los barbones Carlos IV que había abdicado a favor de su
giraba en torno a la minería, concretamente la plata, actividad que con hijo Fernando VII, entt-aron en conflicto con el pretexto de la sucesión,
la revolución de independencia se vio seriamente afectada, con los con­ es decir, saber quién era el legítimo Rey de España, para lo cual, nom­
secuentes efectos económicos para el país. braron árbitro a Napoleón en un acto de inaudita candidez que los llevó
f
362 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateos Santillán 363

a caer prisioneros de Napoleón y después a la abdicación a la Corona puso en serios aprietos a la Junta, al extremo de que a mediados de 181 O
de la Monarquía española. se teme la caída definitiva de España.2
La abdicación del Rey español no fue aceptada por una gran mayo­ Los pueblos de la América Española veían con profundo interés los
ría del pueblo español, como tampoco lo fue la Constitución de Bayona, sucesos de España, por un lado Napoleón les ofreció mediante mani­
pueblo que con base en la tradición de la escuela clásica española refu­ fiesto de 18 de septiembre de 1809 ayudarles a obtener su independen­
tó las pretensiones francesas de anexarse a España y su Imperio, auto­ cia, tal y como apoyó a las colonias inglesas para obtener su indepen­

res como Vitoria, Suárez, Vázquez de Menchaca, el Padre Mariana, en­ dencia de la Gran Bretaña con el establecimiento de un comité francés

tre otros, sostuvieron siglos antes que Rousseau que la soberanía residía en Baltimore, un segundo elemento externo de influencia era el papel
que jugaban Inglaterra y los mismos Estados Unidos de América ante la
en el pueblo, el cual, nunca la perdía, y a esto llamaron pactum societa­
ocupación francesa de España, pues esta circunstancia, les prometía
tis, ahora bien, el pueblo soberano tenía el derecho de darse una autori­
grandes beneficios militares y comerciales.
dad o Rey, de suerte que, nombrado el Rey, el pueblo conservaba la so­
Las Cortes de Cádiz, al igual que las antiguas cortes españolas se
beranía, lo que no impedía que se diera un segundo pacto, es decir, el
consideraron la legítima representación del reino, sin embargo, para su
pactum subectionis.
constitución se abandonó el antiguo sistema de representación por esta­
La ocupación francesa generó una reacción generalizada contra
mentos y se creó un complejo sistema de votación indirecto que conser­
Napoleón, a quien niegan incluso, el calificativo de conquistador toda
vó algunos de los rasgos históricos a fin de garantizar la sobrerrepre­
vez que, la ocupación de España se dio por engaño.
sentación peninsular sobre la de las provincias.
En cuanto a la abdicación del Rey se declaró nula, pues se sostuvo
Las Cortes de Cádiz se reunieron el 24 de septiembre de 1810 jura­
que existía un pacto entre el Rey y el reino, mismo que se ratificaba por
ron la constitución el 19 de marzo de 1812, y la promulgaron el 28 de
un juramento, y este hecho creaba un vínculo que no podía disolver el marzo de 1812; a ellas acudieron diputados de todos los reinos y pro­
Rey sin el consentimiento del pueblo, razón que nos permite entender el vincias americanas, lo que incluía a los diputados de la Nueva España.
hecho de que al no aceptarse la renuncia al trono de Fernando VII, se Existe polémica en cuanto el número de diputados novohispanos
consideró que el pueblo reasumía el poder con fundamento en las tesis que acudieron a Cádiz, aun cuando nos inclinaremos por la referencia
de la Escuela Clásica Española, y en consecuencia, se encontraba en que hace José Barragán por lo detallado de sus investigaciones sobre el
ocasión de ejercer directamente la soberanía. tema, nos refiere que asistieron 22 diputados contabilizando a los pro­
El pueblo español en la península ibérica y en las provincias ameri­ pietarios y a los suplentes, dentro de los cuales predominaban los ecle­
canas reasumió su soberanía y lo hizo en ocasiones solo, y en ocasiones siásticos, cuyos nombres citaremos en líneas posteriores.3
de acuerdo con las autoridades de suerte que, constituyó juntas, a las El Constituyente Gaditano, lo mismo que los primeros constituyen­
que calificó de Supremas o Soberanas en virtud de que no admitían au­ tes del México independiente, se ocuparon de funciones legislativas or­

toridad superior y particularmente porque, ejercían la soberanía en di narias adicionales a su tarea de crear .el texto constitucional.

nombre propio y no por delegación.' En la Nueva España, la Constitución de Cádiz fue jurada el 30 de
sep tiembre de 1812, el maestro Tena Ramírez nos relata que fue sus­
El movimiento creador se extendió por todas las provincias y reinos
españoles, de suerte que para alcanzar sus fines de resistencia, deciden pendida por el Virrey Venegas y restablecida en alguna de sus partes

unirse federativamente a fin de constituir una gran junta. Por Calleja.4 Al recuperar la libertad Fernando VII uno de sus primeros
a Propósitos fue restaurar el antiguo sistema absolutista español, razón
El 25 de septiembre de 1808 se constituyó un Gran Juez la "Junt
ara Por la que desconoció la Constitución de Cádiz, en mayo de 1814, sin
Central Suprema y Gubernativa de España e Indias" que adoptó p
su tratamiento el de majestad y para su presidente el de alteza. .
acatada por toda España Y casl 2 lhidem.
La Junta Central fue reconocida y
león 1 Para un estudio más amplio sobre el tema se recomienda ver BARRAGÁN BARRAGÁN,
por toda América, sin embargo, la contraofensiva que efectuó Napo
José. Juicio de Residetzcia e>l el origen del juicio de amparo mexicww, Valencia 1972. tesis
Para obtener el grado de Doctor en Derecho. Editada Universidad de Valencia.
1 GARCÍA GALLO, Alfonso, Manual de Historia del Derecho Españo l. Tomo J. AGES.A, 4 TENA RAMíREZ, Felipe. Leyes Fundamentales de México 1808-1882, Porrúa, México,
Madrid 1984 p. 856. 1982 p. 59.
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:;i.f

364 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateos Santillán 365

embargo la vigencia de la Constitución de Cádiz fue restablecida en por los méritos. En mi particular opinión, esta desafortunada disposi­
España y en México a raíz del levantamiento del General Riego e n con­ ción avivó los ánimos encendidos por el deseo de independencia que se
tra del Rey, de suerte Fernando VII la juró en marzo de 1820, en la \ivía en la América Española. Si los españoles hubieran concedido la
Nueva España el Virrey la juró el 31 de mayo de 1820. igualdad jurídica a todos los habitantes de la Monarquía, es probable
No debemos olvidar que al momento de la independencia continuó que las circunstancias hubieran variado.
vigente por mandato el Plan de Iguala, y varias de sus leyes, concreta­ Después de la parte orgánica, la Constitución de Cádiz contiene una
mente las de materia penal y civil, sirvieron como legislación federal amplia regulación de las facultades de las Cortes y de su forma de elec­
mexicana hasta la creación de los primeros códigos federales mexica­ ción, en 140 artículos, que van del 27 al 167, los diputados gaditanos
nos de esas materias, alrededor de la séptima década del siglo XIX y du­ establecieron un verdadero sistema electoral donde se regulaba el modo
rante los debates de la Constitución de 1917, cuando se discutía el en que habrían de formarse las Cortes.
artículo 27. se hizo patente, por parte de los Constituyentes, que las El sistema electoral español: era un sistema electoral indirecto, que
principales regulaciones agrarias a principios del siglo XX provenían de tenía como base las juntas electorales de parroquia, el segundo nivel se
la tradición española. Al paso de los años, ante el olvido de estudiar encontraba en las juntas electorales de partido y el tercer nivel se en­
objetivamente las tradiciones españolas, se ha llegado al extremo de contraba en las juntas electorales de provincia.
pretender que los españoles copiaron el liberalismo francés, que imita­ El título IV, dividido en siete capítulos que, incluían del artículo 168
ron a Rousseau y al resto de los clásicos franceses, lo cual es absoluta­ al 241 se refiere al Rey, cuya persona se considera sagrada e inviolable
mente falso y puede corroborarse fácilmente con la lectura del Diario \ no estaba sometida a las responsabilidades, se establecen las reglas
de Sesiones. que se seguirían en la sucesión de la Corona, de los casos en que fuera
En los debates del Constituyente Gaditano se distinguieron un gru­ necesaria la figura de la regencia por la minoría de edad del Rey, de
po de diputados mexicanos por su elocuencia, su firmeza y la calidad de la familia real y del príncipe heredero. En el mismo título se regulan
sus intervenciones, nos narra Barragán que los 22 que participaron fue­ las atribuciones y responsabilidades de los siete secretarios del des­
ron: Beye, Cárdenas, Cauto, Munilla, Foncerrada, Lastiri, Gordoa, Güe­ pacho, destacándose el artículo 225 que establecía que sin el refren­
reña, Guridi, Terán, Maldonado, Maniao, Mendiola, Moreno, Obregón, do del secretario del despacho nadie estaba obligado a obedecer las ór­
Pino, Pérez, Ramos Arizpe, Robles, San Martín, Sabariego, Uria, sus denes del Rey, o el artículo 226 que establecía "Los secretarios del
participaciones en la definición del concepto de soberanía, en la defen­ despacho serán responsables a las Cortes de las órdenes que autoricen
sa de los derechos de los americanos, y en general en su participación contra la Constitución o las leyes, sin que les sirva de excusa haberlo
dentro de las corrientes más progresistas de la época. Muchos de esos mandado el Rey".
diputados, años después fueron constituyentes en México, donde logra­ El capítulo VII del título IV, se refería a las características del Con­
ron alcanzar varios de los objetos que no pudieron obtener en España. sejo de Estado.
La Constitución de Cádiz no contiene un catálogo o listado de dere­ El título V relativo a los tribunales y a la administración de justicia
chos humanos como la francesa, sin embargo, si se estudia con deteni­ en lo civil y en lo criminal, resulta particularmente interesante pues es­
miento el texto de sus 384 artículos, nos percataremos que nos encon­ tableció principios aún vigentes hoy en día, como el relativo a que nadie
tramos ante una Constitución de corte liberal, que además de establecer puede ser juzgado sino por tribunal competente, (Art. 247) nadie podía
una monarquía constitucional (Art. 14 ) en contraposición de la monar­ ser preso sin que precediera información sumaria del hecho y manda­
quía absoluta que prevaleció hasta antes de la invasión napoleónica, a miento del juez por escrito, (Art. 287) se prohibieron el tormento Y los
lo largo de su texto va a contener una gran cantidad de derechos huma­ apremios, (Art. 303) etc.
nos y sus correspondientes garantías. El título VI establecía la forma del gobierno interior de las provin­
En contraposición y como un grave defecto, que causó la animad­ cias y de los pueblos, en cuanto a éstos últimos se decía que serían go­
versión de los diputados americanos, y su enfrentamiento con los dipU· bernados por un ayuntamiento, que se compondría de un alcalde, regi­
tados peninsulares, quedó el artículo 22 que limitaba el derecho de ciu­ dores y el procurador síndico (Art. 309).
dad o como hoy en día se conoce, la ciudadanía, "a los españoles que Para el gobierno de las provincias se establecía que el Rey nombra­
"
por cualquier línea son habidos y reputados por originarios de África ría un jefe superior en cada una de ellas, pero lo más relevante fue que
esto, aún cuando se les daba la oportunidad de obtener la ciudadania se estableció en el artículo 325 que en cada provincia habría una dipu-
366 TEORÍA DE LA CONSTITUCiÓ
N EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXI CANO - J. Mateos Santillán 367

tación llamada provincial, encabezada por el jefe superior y formada de


sivas de Rayón, a convocar un Congreso en Chilpancingo, para lo cual
siete individuos electos por las juntas de partido. Natie Lee Benson ,s lanzó la convocatoria el 28 de junio, cabe señalar que a pesar de sus jus­
hizo una valiosa investigación sobre el destacado papel que las diputa. tificaciones, López Rayón asistió al congreso y prestó juramento el 4 de
ciones provinciales jugaron en la independencia de México y en la for­ noviembre de 1813.
mación del federalismo mexicano. En el reglamento para el Congreso se estipuló que los individuos de
El título VII se refería a las contribuciones, el título VIII a la fuerza la Junta serían integrantes del Congreso, Oaxaca elegiría al suyo y Tec­
militar, el título IX a la instrucción pública y el título X a la observancia pan lo mismo, el congreso decidiría por las demás provincias, ocupadas
de la Constitución y la manera de reformarla. por los realistas, nombrando a los suplentes. Los militares con nivel de
coronel en adelante decidieron entre los cuatro capitanes generales: Ra­
13.4. CONSTITUCIÓN DE APATZINGÁN yón, Verdusco, Liceaga y Morelos, quien sería generalísimo, y por lo
DE 1814 Y SUS DECISIONES mismo, encargado del Poder Ejecutivo, obtuvo el cargo Morelos.
POLÍTICO-JURÍDICAS FUNDAMENTALES El 14 de septiembre de 1813 se instaló el Congreso en la parroquia
de Chilpancingo, tras un breve discurso de Morelos, se leyeron los Sen­
A la muerte de Hidalgo, Ignacio López Rayón, que a la sazón se en­ timientos de la Nación y la lista de integrantes del Congreso. Al día si­
contraba en Saltillo, se dirigió al centro de la República para luego en­ guiente el Congreso nombró a Morelos generalísimo.
caminarse a Michoacán, lugar en que, el 19 de agosto de 1811 instaló El Congreso asumió diversas tareas, entre las que se encontraban la
en Zitácuaro la Suprema Junta Nacional Americana, encargada de go­ Declaración de Independencia y la Constitución, la primera fue procla­
bernar a la Nueva España en nombre y en ausencia de Fernando VII.6 mada el 6 de noviembre de 1813 y fue firmada por Quintana Roo, He­
La Junta fue encabezada por López Rayón y la complementaban José rrera, Bustamante, Verdusco, Liceaga, Ortiz de Zárate y López Rayón,
María Liceaga y José Sixto Verduzco, éste último, además, representaba aun cuando se debe consignar que éste último deseaba consolidarla
a Morelos en dicha Junta. bajo el nombre de Fernando VII.
Desde los primeros momentos de la Independencia, cuando Hidalgo Morelos pretendía establecer el Congreso en Valladolid, pero en su
llegó a Guadalajara el 26 de noviembre de 181 O y formó un gobierno,
intento de ocupar la ciudad fue derrotado por lturbide en Puruaran.
en el que López Rayón fungió como Ministro de Estado y Despacho, se
Matamoros fue hecho prisionero y fusilado, Morelos tomó la decisión de
tuvo presente la necesidad de formar un congreso con representantes
nombrar a Rosains teniente general, lo que no fue bien visto por los mi­
de diversas provincias. 7 litares, que no aceptaban que un civil ocupase el cargo, como conse­
La idea de conformar un congreso tuvo que enfrentar los problemas
cuencia el Congreso reunido en Tlacotepec, destituyó a Morelos y se
que las circunstancias bélicas le oponían, lo mismo que las desavenen­
hizo cargo del poder ejecutivo. Antes de partir de Tlacotepec el Congre­
cias de los integrantes de la Junta Nacional.
so decidió aumentar el número de integrantes, elegidos por el mismo
En su proyecto de Constitución Rayón proponía cinco individuos Congreso a falta de ejecutivo.
para la Junta, Morelos optó por reunirlos en Chilpancingo y que la pro­
Las condiciones militares llevaron al Congreso a trasladarse a Urua­
vincia de Oaxaca eligiera el so vocal entre los suyos, después de reunida
pan, luego a la Hacienda de Santa Efigenia, de Puturo a Tiripitio, de los
la Junta se intentaría limar las asperezas. Nos cuenta Lucas Alamán
Laureles a Apatzingán, huyendo de los realistas, sin dinero, alimento es­
que Rayón deseaba como so vocal a Jacobo Villaurrutia, pero que en
caso, guardia sin armamento de consideración, la situación era tan pre­
realidad solo quería hacer tiempo, 8 lo que llevó a Morelos, ante las eva-
caria que "las sesiones se tenían bajo los árboles", lo que exponía a los
integrantes del Congreso a continuos riesgos y los sujetaba a las mayo­
LEE BENSON, Nattie, La diputación provincial y el federalismo mexicano, El ColegiO
5 res privaciones, "rara vez recibían algún prorrateo en reales, que nunca
de México, UNAM, México, 1994. excedía de cinco o seis pesos: dábaseles ración de víveres, lo mismo que
6 TENA RAMÍREZ, Felipe, op. cit., p. 23.
a los soldados de su escolta, que eran ochenta hombres desnudos y de­
7 DE LA TORRE DEL VILLAR, Ernesto, La indepetzdencia de México, FCE, México, !994,
sarmados, pues no tenían mas que cinco fusiles que servían para dar la
p. 84.
8 ALAMÁN, Lucas, Historia de México, Col. Clásicos de la historia de México, FCE. guardia... haciendo vida en común, alojándose en chozas que encontra­
México, 1985, Tomo 111, p. 551. ban, y por no tener ésta capacidad bastante, las sesiones se tenían bajo
1.fF.
.;.•

368 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN 369


EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateos Santillán

los árboles, pues siempre en medio de tantas penalidades, continuaban Los individuos del gobierno eran electos en sesión secreta del Con­
en el desempeño de sus funciones".� greso a pluralidad absoluta de votos, en tanto que, también correspon­
En esas condiciones se elaboró la Constitución de Apatzingán, san. día la nominación de los cinco individuos que componían el Supremo
cionada el 22 de octubre de 1814. Constitución provisional, para en tan. Tribunal de Justicia al Congreso.
to la Nación se liberaba de los españoles y se diera una permanente. Adicionalmente y en el marco de la más pura tradición española, la
El 22 de octubre de 1814, se sancionó en la Ciudad de Apatzingán Constitución de Apatzingán establecía la figura de un Tribunal de resi­
el Decreto Constitucional para la libertad de la América Mexicana, el 22 dencia compuesto de siete jueces electos por el Congreso en suerte, en­
de diciembre de 1815 Morelos muere fusilado en San Cristóbal Ecatepec. tre los nombrados por las provincias, el papel fundamental del Tribunal
La Constitución de Apatzingán se componía de 242 artículos, cuen. de residencia era conocer privativamente de las causas de los indivi­
ta con una parte dogmática que comprendía del artículo 1 al artículo 41,
o duos del Congreso, del Gobierno y del Supremo Tribunal de Justicia.
en ella se establecen como principios o elementos constitucionales, la
religión católica como religión de Estado, la definición de soberanía se 13.5. PLAN DE IGUALA,
establece como la facultad de dictar leyes y darse la forma de gobierno LOS TRATADOS DE CÓRDOVA DE 1821
que más le convenga a la Nación y radica originariamente en el pueblo Y SUS IDEAS FUNDAMENTALES
y su ejercicio en la representación nacional compuesta de diputados.
La Constitución de Apatzingán establecía la representación supleto· En México nos esforzamos por caracterizar al movimiento de inde­
ria en caso de que no pudiera efectuarse la elección correspondiente y en pendencia como una acción continua que se inicia en 181 O y concluye
el artículo 9, refrenda un principio que desde el siglo XIII contenían las en 1821, con lo que se trata de exaltar la figura de Hidalgo, Morelos,
7 partidas, el título de conquista no legitima los actos del conquistador, Allende, Aldama, entre otros, sin embargo, la versión conservadora de la
esto para preservar a la nación frente a otras naciones, en tanto que, historia nos ofrece una explicación que disocia los movimientos de
para preservar a la nación de los ataques internos, el artículo 10 califi· iniciación y consumación en dos procesos diferenciados que mantuvie­
caba a los ataques contra la soberanía del pueblo como "delitos de lesa ron un vínculo existencial muy tenue mediante la existencia de un mo­
nación". \imiento guerrillero muy regionalizado, que se dio a la muerte de More­
Los artículos 13 a 17, regulaban la calidad de ciudadanos y los ar­ los y Mina.

tículos 18 a 23, establecían las características de la ley. En el capítulo V Las palabras de Iturbide ante el Congreso en 1823 nos dejan en cla­
de la parte dogmática, se establecieron los derechos de igualdad, segu­ ro esta versión de la historia que nos ofrece la posibilidad de entender

ridad, propiedad y libertad de los ciudadanos en tanto que; el artículo 41 que en su origen, la independencia de México es un movimiento de ma­

establecía las obligaciones del ciudadano. sas acaudillado por unos cuantos criollos, en tanto que, la consumación

En cuanto a la parte orgánica, llevaba el título de: Forma de Go­ es un movimiento de criollos al interior del ejército español, que enca­

bierno, en ella se encontraban desde las provincias que conformaban la bezó Agustín de Iturbide quien se caracterizó en la etapa anterior, por

América Mexicana, pasando por la división de poderes que se haría


ser un despiadado persecutor de insurgentes.

en tres corporaciones: el Supremo Congreso, el Supremo Gobierno Y La versión de la historia liberal realza el papel de los grupos Insur­
gentes en la consumación de la independencia, la versión conservadora
el Supremo Tribunal de Justicia, con sus correspondientes atribucio­
la minimiza, lo cierto es que, en el Acta de Independencia de México,
nes y sistema electoral, muy semejante al que estableció la Constitución
de Cádiz. no aparece la firma de Vicente Guerrero ni de los principales líderes in­

La base para las elecciones la constituían: las Juntas Electorales de surgentes y sí en cambio la de los hombres que representaban a los fac­
tores reales de poder de la época.
Parroquia, que a su vez integraban con sus compromisarios o electores
a las Juntas Electorales de Partido, que elegían a un elector de partido; Nos parece que las versiones históricas de liberales y conservadores
no responden cabalmente a la objetividad, pues a lo largo del siglo XX se
que a su vez, se integraba a una Junta Electoral de Provincia en cuyo
Pretendió, en otro extremo, menospreciar el papel de Iturbide como
seno se elegía a los diputados.
consumador de la Independencia.
El Plan de Iguala nos ubica en un punto medio, la fuerza indiscuti­
� Ihidem, Tomo IV, p. 117. ble de Iturbide y la presencia regionalizada pero sistemática de Guerre-
370 TEORfA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateos Santillán 371

ro; la debilidad de España frente a los intereses norteamericanos y eu­ La finalidad del Plan de Iguala era alcanzar la independencia sin
ropeos representados en las logias masónicas; los intereses peninsulares derramar sangre, meta que alcanzó el Plan de Iguala.
frente a los intereses criollos, en general, una situación compleja de in­ El 24 de agosto de 1821, se reunieron en la Villa de Córdova el se­
tereses contradictorios donde la conjura de la profesa jugó un papel de­ ñor Don Juan O'Donojú, teniente general de los ejércitos de España y
finitivo, en virtud de que uno de los conjurados, Agustín de Iturbide, fue Don Agustín de Iturbide, en su calidad de primer jefe del ejército impe­
nombrado jefe del ejército realista que habría de combatir a las tropas rial mexicano de las tres garantías.
insurgentes en 1820. En la reunión se ponderó la situación que imperaba en México,
Iturbide, hombre astuto, asumió el mando del ejército, no para donde existía el ejército de las tres garantías para salvaguardar la inde­
combatir a los Insurgentes, sino para dirigirlo contra la propia España pendencia y sólo quedaban por el antiguo gobierno las plazas de Vera­
y consumar la independencia, de suerte que, para tal efecto convocó a cruz y Acapulco, desguarnecidas y sin medios de resistir un sitio bien
Guerrero, a los jefes realistas, al alto clero, a las Cortes e incluso al mis­ cstablecido.10
mo Rey, por lo que, levantó dos actas durante los primeros días del mes En la reunión de 24 de agosto de 1821 se firmó un documento por
de marzo de 1821, cabe aclarar que, a la segunda acta se incorporó el duplicado que llevó el nombre de Tratados de Córdoba, contiene 17 ar­
Plan de Iguala cuya promulgación se verificó el 24 de febrero de 1821. tículos entre los que destaca:
Resulta relevante observar como un grupo de mexicanos deseaban • El artículo 1 reconoce la independencia de México y en el segun­
o

nombrar a Iturbide teniente general de las fuerzas armadas mexicanas do, se establece que el gobierno del Imperio mexicano sería mo­
pero él rehusó al nombramiento. nárquico constitucional moderado.
Dentro de los aspectos relevantes que caracterizan al Plan de Iguala • El artículo 3° establecía el orden de personajes a quien se invita­
encontramos en los 23 artículos que lo componen, los siguientes prin­ ría para reinar en el Imperio mexicano, en primer lugar fue Car­
cipios: los IV, en caso de no admisión, Fernando VII, en caso de no ad­
La religión católica sería la religión de Estado, el país se declaraba misión su hermano D. Francisco de Paula; por la no admisión D.
independiente pero abrazaría la forma de gobierno de monarquía cons­ Carlos Luis, infante de España y por no admisión el que las Cor­
titucional a cuyo frente se proponía la presencia de Fernando VII o tes del Imperio designaren, un requisito particular se asentaba en
cualquiera de su dinastía, y en caso extremo, de cualquier dinastía rei­ el artículo 4, el cual establecía que la Corte del Emperador se es­
nante, con la idea de "precaver los atentados funestos de la ambición" tablecería en la Ciudad de México.
(Art. 4). • El artículo 6 instituía que, se nombraría conforme al espíritu del
El gobierno transitorio lo habría de desempeñar una junta guberna­ Plan de Iguala, una Junta compuesta por los primeros hombres
tiva hasta la llegada del Rey, sin embargo, si Fernando VII resolvía no del Imperio por sus virtudes, por sus destinos, por sus fortunas en
acudir a México, la Junta o la Regencia gobernarían en tanto se resolvía número bastante considerable "para que la reunión de luces ase­
quien debía ser Rey de México. gure el acierto en sus determinaciones, que serán emanaciones de
Como garante de la seguridad nacional se sostenía al llamado ejér­ la autoridad y facultades que les conceden los artículos siguientes".
cito de las tres garantías. • Para entender el papel que habría de jugar Iturbide en su carrera
Al clero y a la burocracia se les respetaban sus fueros y empleos, res­ hacia el papel de Emperador hay que observar que los Tratados
pectivamente, en lo jurídico, el artículo 20 sostenía: "Mientras se reúnen de Córdova establecieron del artículo 6 al 17 un complejo meca­
las Cortes, se procederá en los delitos con total arreglo a la Constitu· nismo para el ejercicio del poder público, en el artículo 8 se nom­
ción Española". bra a Juan O'Donojú integrante de la Junta provisional gubernati­
Y finalmente el artículo 23 establecía la naturaleza del Congreso a
va, en el 9 se establece que la Junta tendrá un presidente que
que debía convocarse:

Como las Cortes que se han de formar son constituyentes, deben de s


erel� 10 Diario Político Militar Mexicano 3 de sep. 1821. Cfr. GARCÍA, Genaro, Documentos
gidos los diputados bajo este concepto. La Junta determinará las regla sYe lii.>tóricos Mexicanos, Tomo IV, Comisión Nacional de Estudios Históricos de la Revolu­
' ción Mexicana, México, 1985.
tiempo necesarios para el efecto.
'
372 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateos Santillán 373

podía ser nombrado entre sus integrantes o fuera de ella, pero sus trabajos con la presencia de ciento dos diputados, que desecharon
que sería nombrado por la pluralidad absoluta de sufragios. el sistema de dos salas, propuesto por Iturbide y aprobado por la Supre­
• El artículo 11 instauraba que una vez nombrado el presidente de ma Junta Provisional Gubernativa.
la Junta, ésta designaría una regencia compuesta de tres personas El primer constituyente confirmó el 25 de febrero de 1822 a todas
"de su seno o fuera de él, en quien resida el poder ejecutivo, y que las autoridades del país según las leyes vigentes, que no eran otras que
gobierne en nombre del Monarca, hasta que empuñe el cetro del la legislación española y, en especial la gaditana.
Imperio". El 27 de febrero de 1822 se aprobó que, el Congreso adoptara el re­
• El artículo 13 contenía la obligación para la Regencia, de que una glamento de la Suprema Junta Provisional Gubernativa, en tanto no se
vez designada procedería a convocar al Congreso Constituyente a expidiera el propio, lo cual no ocurrió sino hasta el 25 de abril de 1823.
que hacía referencia el artículo 24 del Plan de Iguala. Como se La suerte del Primer Congreso Constituyente Mexicano se decidió
quería evitar el principio de acumulación de poderes, los Trata­ cuando tuvo que enfrentar las pretensiones absolutistas de lturbide,
dos de Córdova establecieron que el poder ejecutivo se deposita­ quien la noche del 18 de mayo de 1822 con apoyo de la parte del ejérci­
ría en la regencia y el legislativo en las Cortes, sin embargo, para to que le era leal y la población de la Ciudad de México, se proclamó
evitar que la regencia acumulase los dos poderes antes de la inte­ Emperador de la América Mexicana.
gración del Congreso, la junta provisional desarrollaría interina­ En respuesta, durante la sesión del 19 de mayo de 1822, el diputado
mente el papel de poder legislativo.
Miguel Guridi y Alcacer expresó que los poderes de los diputados esta­
El artículo 15 concedía el derecho a los europeos avecindados en
ban muy limitados y no podían sancionar las aclamaciones del ejército

México y a los americanos avecindados en España, para decidir


\ del pueblo de la Ciudad de México, postura que es seguida por los di­
sobre su nacionalidad. Con excepción de los empleados públicos
putados San Martín, José Ignacio Gutiérrez, Terán, Anzorena y Francis­
o militares notoriamente desafectos a la independencia de México.
co Rivas entre otros, quienes sostienen que la soberanía radica en el
En el artículo 17 Juan O'Donojú se compromete a la retirada de las pueblo y no solo en la población de la Ciudad de México, además de
tropas españolas de la Ciudad de México para evitar un baño de sangre que, los representantes de las provincias tenían poderes limitados.'2
innecesario. -,- La proclamación de lturbide fue aprobada por 77 votos a favor y 15
en contra, aun cuando cabe subrayar que, no se daba el quórum necesa­
13.6. CONSTITUCIÓN FEDERAL rio. El enfrentamiento entre parte del Congreso y el Emperador fue en

DE 1824 Y LAS IDEAS FUNDAMENTALES aumento, le negaron el atributo de soberano. Los diputados que simpati­
DE LOS CONSTITUYENTES ;_aban con el Imperio impulsaban las ideas de Iturbide, los que estaban
en contra fueron presionados y amenazados de muchas formas, finalmen­
Al momento de la consumación de la independencia de México te, el 26 de agosto de 1822, Iturbide decide detener a todos los diputa­
en 1821 se creó la Suprema Junta Provisional Gubernativa que tuvo
dos sospechosos de conjurar en su contra y el 30 de octubre de 1822 di­
como base los postulados del Plan de Iguala con la misión específica de
suelve el congreso y con los diputados que considera le son afectos crea
convocar a Cortes Constituyentes determinando reglas y el tiempo nece­
la Junta Nacional Instituyente, que sesiona del 2 de noviembre de 1822
sario para el efecto. 11
al 6 de marzo de 1823, y entre cuyas tareas se encontró la elaboración
La convocatoria a Cortes Constituyentes fue objeto de múltiples Y
del "Proyecto de Reglamento para el Imperio" que fue aprobado por 21
muy encontrados debates, sin excluir, por supuesto, las presiones que
votos y rechazado por 1 7 votos.
realizaba Iturbide en su doble carácter de Presidente de la Junta y de la ·

Las diputaciones provinciales permanecieron a la expectativa hasta


Regencia para imponer un escenario favorable a sus intereses.
el momento que, lturbide se proclamó emperador, a partir de ese mo­
El 6 de febrero de 1822, se nombró a la Comisión que se haría car­
go de la instalación del Primer Congreso Constituyente, el cual inició mento se generalizaron las protestas mismas que se sumaron a las que
provenían de parte del ejército que se oponía a las pretensiones de Itur-

11 BARRAGÁN BARRAGÁN, José, bllruducció11 al federalismo, Universidad de Guadalaja·


ra, México, 1994, p. 3. 12 Ihidem p.84.
EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateos Santillán
374 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN 375

bide y que se concretaron el 1 de febrero de 1823 con el llamado Plan


o
dice imitamos extralógicamente el federalismo. En la Nueva España
de Casa Mata. existieron no solo divisiones políticas administrativas, audiencias diver­
La rebelión de Casa Mata, tuvo el efecto de vencer a las tropas de sas y capitanías que coexistían con otro tipo de divisiones, sino que ade­
lturbide, simultáneamente, las provincias se proclaman estados libres y más existían fuertes intereses regionales perfectamente diferenciados de
soberanos. los intereses de la Ciudad de México.
Los rebeldes de Casa Mata se fijaron dos metas, la primera reins­ De esta forma queda claro que, el federalismo mexicano fue im­
taurar al Congreso que recién había disuelto Iturbide, la segunda, que puesto por los Estados de la federación y que el segundo Congreso
el Congreso reinstalado convoque a un nuevo constituyente tal y como Constituyente Mexicano, convocado a raíz del triunfo del movimiento
lo expresa el artículo 2 del multicitado Plan. de Casa Mata, simplemente aceptó lo que era la voluntad popular ma­
El maestro José Barragán13 nos indica que, fue la diputación pro­
yoritaria, aún cuando no única, para desgracia de nuestro país, que con
vincial de Jalisco la primera que se pronunció en contra del gobierno
el pretexto de la forma de gobierno central o federal, tuvo que enfrentar
de lturbide y se proclamó a favor de la creación de una gran federación
una serie de guerras civiles que la debilitaron y condujeron muy lejos
mexicana, razón que expresó en el "Manifiesto que hace la diputación
del lugar a que aspiraron nuestros antepasados.
provincial del Estado Libre de Jalisco, del Derecho y conveniencia de su
No es mi deseo negar la influencia norteamericana en el federalis­
pronunciamiento en República Federada" .14
mo mexicano, creo que ésta es manifiesta, pero también lo es que los
El ejemplo de Jalisco fue seguido por otras provincias, que reasu­
constituyentes de 1823-1824 tuvieron presentes los ejemplos alemán,
mieron su soberanía y se proclamaron Estados Libres Independientes y
colombiano, suizo, francés, entre otros y de manera muy destacada el
Soberanos, con anterioridad a la creación de la Constitución Federal,
ejemplo español, de donde se deriva el concepto de soberanía popular,
consta que hicieron lo mismo que Jalisco, es decir, se proclamaron
Estados Libres Independientes y Soberanos: Yucatán, entonces abarca­ pues no debemos olvidar que varios de los más destacados constituyen­

ba a los actuales Estados de Campeche y Quintana Roo; Oaxaca; Mi­ tes de 1823-1824, también participaron destacadamente en la elabora­
choacán que se extendía aparte de lo que actualmente es el Estado de ción de la Constitución de Cádiz, como fue el caso de Miguel Guridi y
Guerrero, Querétaro y Zacatecas, que incluía en su territorio al actual Alcacer y el de Miguel Ramos Arizpe.
Estado de Aguascalientes. El Congreso Constituyente Mexicano de 1823-1824 tuvo un doble
Es importante detenernos un momento para examinar la cuestión, papel, por un lado formular las normas supremas de la nación y de ma­
pues si tomamos en cuenta la declaración previa de independencia y nera simultánea crear la legislación ordinaria. En cuanto a las normas
reasunción de su soberanía que hicieron los Estados mencionados, que­ supremas, el 31 de enero de 1824 se promulgó el Acta Constitutiva de la
da claro que el famoso discurso de Fray Servando Teresa de Mier al que Federación Mexicana y el 4 de octubre de 1824 se promulgó la primera
se conoce como el discurso de las profecías, no es sino una brillante Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos. Ambos docu­
pieza de oratoria pues en él auguraba la guerra civil en caso de que se mentos tuvieron la calidad de textos supremos y coexistieron con el
adoptara la República Federal como forma de gobierno, la respuesta in­ atributo de supremacía, tal y como lo expresó el constituyente Juan Ca­
mediata a Fray Servando está en que, si el Congreso hubiese adoptado yetano Gómez de Portugal en el Congreso Constituyente el 26 de agosto
la forma de gobierno centralista, la guerra civil se hubiese iniciado en de 1824 al sostener:
ese mismo instante, pues los Estados que habían reasumido su sobera­
No, señor, el Acta constitutiva no puede dejar de subsistir, aún dada que
nía la hubieran defendido con las armas.
sea la Constitución. Si ha habido y ha de haber federación es por el Acta
Tampoco es correcto pensar que la Nueva España era una unidad
Constitutiva; quítese ésta, y con sólo ampliar un poco más las atribuciones
monolítica inseparable e indivisible, como se ha repetido con gran fre­
de los poderes generales, vino abajo todo el sistema. La Constitución no
cuencia para diferenciarnos de las 13 colonias del norte, de quien se pude confundirse con el Acta, ni ésta con la Constitución. Por el Acta es que
los pueblos han pactado gobernarse por un sistema federal, y han reconoci­

13 p. 148.
lhidem
do la independencia y soberanía de los diversos estados que hacen la gran
BARRAGÁN BARRAGÁN, José, Principios sohre el federalismo mexicano: 1824, DDF, Co­
14 federación; y por la Constitución esencialmente no se hace otra cosa que di­
lección cívica nacional, No. 12, México, 1984, p. 1 1 l. vidir los poderes generales, y detallar sus atribuciones.
376 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
., EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIO NAL MEXICANO � J. Mateos Santillán 377

El día que falte el Acta Constitutiva, las atribuciones de aquellos poderes Una visión tan maniqueísta no puede sostenerse en pleno siglo XXI,
generales se extenderán por una órbita tan grande como todo el Anáhuac y hombres como el distinguido maestro universitario Alfonso Noriega
acabó la federación. Cantú así lo percibieron hace décadas, e iniciaron la tarea de revalorar
El Acta Constitutiva de la Federación constaba de 36 artículos en algunos acontecimientos vinculados al partido conservador.15
ellos se estableció la forma de gobierno federal y la religión católica La constitución centralista del 36 tuvo una lógica que sus detracto­
como religión única, se aceptó que los Estados de la federación fueran res le han querido negar y que se encuentra en el contexto socio político
libres, independientes y soberanos en su régimen interno, se contempló que prevaleció desde el momento de la independencia hasta 1836.
la división de poderes en legislativo, ejecutivo y judicial, aún cuando se En lo político debemos recordar que México vivía un escenario bi­

remitió al texto constitucional el establecer las características y atribu­ partidista con proyectos político económicos divergentes, de suerte que

ciones que deberían tener cada uno de ellos. El gobierno particular de cuando hablamos del partido liberal, inmediatamente acuden a nuestra
los Estados también fue objeto de regulación y se debe subrayar la ge­ mente las ideas que asocian en lo económico un proyecto nacional vin­
neralidad de sus características, concluye con un capítulo de Prevencio­ culado a los Estados Unidos de América y en lo político una forma de
nes Generales. gobierno federalista, si por el contrario, la referencia la hacemos de los
De la Constitución Federal de 1824 se debe resaltar su acendrado conservadores, entonces lo económico se vincula a Europa y la forma
espíritu federalista, de suerte que hoy en día, cuando el centralismo se de gobierno es centralista, de esta forma el bipartidismo mexicano de
ha impuesto en la práctica, es difícil entender que en 1824 los Estados los primeros años de la independencia adoptó la forma más peligrosa
de la federación legislaban en materia de derechos humanos, en educa­ para el bienestar de la nación, pues los proyectos político económicos
ción y en general en prácticamente todos los ámbitos de la vida cotidia­ tan divergentes, pronto enfrentaron a los grupos en constantes guerras
na, pues la federación tenía facultades extremadamente limitadas, casi fratricidas.
nulas si se les compara con las que acumula hoy en día. En aquellos A los mexicanos que nos tocó vivir los últimos años del siglo XX y los
tiempos de la vigencia de la Constitución de 1824, las facultades de los primeros del siglo XXI nos resulta difícil comprender la magnitud de la
poderes federales se restringían prácticamente a las relaciones interna­ lucha entre federalistas y centralistas, pues nos correspondió vivir un
cionales, la defensa nacional, la hacienda pública federal y la adminis­ sistema que en teoría se autocalificaba de federalista, pero que en la
tración de los territorios federales. práctica y aún a la letra de múltiples normas es un sistema centralista,
En contrapartida el margen de maniobra de los Estados de la fede­ mucho más centralista incluso, nos atrevemos a afirmar, que el sistema
ración era muy amplio, incluso hoy nos causa asombro observar como que rige en países con forma de gobierno central, bien sea repúblicas o
algunos Estados, al conformar su poder legislativo tenían Cámara de incluso monarquías.
Senadores local y Cámara de Diputados local. El federalismo que caracterizó a la constitución federal de 1824 acep­
tó la soberanía de los Estados en su régimen interno, entendiéndose que
el régimen interno de las Entidades Federativas era inmenso si se le
13.7. LEYES CONSTITUCIONALES DE 1836
compara con las escasas atribuciones de la federación, para que se en­
Y LAS BASES ORGÁNICAS DE 1843
tienda, lo contrario al marco legal que vivimos en la actualidad, el terri­
Pocos hechos históricos han recibido tantos y tan acres ataques torio nacional era más del doble de lo que es hoy en día, la población
como las Siete Leyes Constitucionales de 1836, la explicación de tal en­ era de alrededor de 1 O millones de habitantes y el marco legal muy fle­
cono resulta relativamente lógica si atendemos al hecho que la explica­ xible, súmese lo expuesto a las diferencias políticas y económicas de las
ción histórica que prevaleció a lo largo de la segunda mitad del siglo XIX diversas regiones y nos encontraremos con un escenario político difícil
y de todo el siglo XX fue la que sostuvieron los archirrivales del partido v muy criticado por los diversos factores reales de poder de la época,
conservador: los liberales, quienes a su triunfo, después de 1867, se en­ que veían en la poca población y en la flexibilidad de las instituciones
cargaron de escribir una historia de partido con una marcada tendencia políticas sendos factores de debilidad.
maniqueísta, los buenos eran ellos, los liberales, los héroes, por el con­
trario los malos, los culpables de todas las desgracias patrias eran los
1' Cfi·. NoRIEGA CANTlJ, Alfonso, El pensamiento cotzsen•ador v el consen•adurismo en
conservadores. Atéxico, UNAM, vol. 2, México, 1972.
378 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL M EXICANO - J. Mateas Santillán 379

Una de las lecciones más graves que debemos retomar hoy en día es Con lo expuesto en líneas anteriores simplemente deseo subrayar
la relativa a la política de población que se siguió entre 1824 y 1836, que la Constitución Centralista de 1836, conocida como las Siete Leyes
pues eran los Estados quienes formulaban sus propias leyes, el propósi­ Constitucionales, merece ser estudiada al margen de los prejuicios que
to era simple, a semejanza de los Estados Unidos de América, había que le rodean.
incrementar la población de la República en base a la colonización de Es importante recordar que la situación política del país era delica­

los inmensos terrenos que se encontraban prácticamente baldíos en da, pues precisamente en la primera elección para relevar de la presi­
dencia al General Guadalupe Victoria, tenemos que enfrentar un primer
todo el norte del país, de suerte que, parte de las expectativas de desa­
golpe de Estado, pues con el levantamiento de la Acordada, se descono­
rrollo nacional se fundaban en la inmigración de extranjeros católicos y
ció la elección que las legislaturas de los Estados habían realizado en la
laboriosos que hicieran productivos los territorios despoblados.
persona del General Manuel Gómez Pedraza, y por vía de las armas se
Los Estados formularon sus leyes particulares en la materia y nos
impuso una nueva elección en la que salió electo el General Vicente
parece de particular interés el caso del Estado de Coahuila y Texas que,
Guerrero como Presidente de México.
con fundamento en su Constitución, expidió una ley de colonización
La caída de Gómez Pedraza y el ascenso de Guerrero provocaron
cuyo artículo 1 O expresaba:
una serie de movimientos militares que desembocaron un desconoci­
Si alguno o algunos capitulantes en razón de las familias que hayan intro­ miento y posterior magnicidio de Guerrero, el golpe de Estado de Bus­
ducido deban adquirir conforme al artículo anterior mayor terreno que el tamante y su posterior derrocamiento y particularmente en la designa­
de once leguas cuadradas, se les concederá, pero tendrán obligación de ción de Antonio López de Santa Ana como Presidente de México. A
enajenar el exceso dentro de doce años, y de no verificarlo, lo hará la auto­ contexto tan convulsionado debe agregarse que durante la administra­
ridad política respectiva vendiéndolo en pública subasta, y entregando a sus
ción del Vicepresidente Gómez Farías se llevó a cabo una serie de refor­
dueños el producto líquido, deducidos todos los costos de venta.
mas que afectaban al clero, la educación y al ejército por lo que la reac­
Lo relevante de la cuestión radica en que los colonos que llegaron a ción contra el Vicepresidente fue directamente proporcional a la
Texas, eran norteamericanos, no necesariamente católicos, que se aco­ magnitud de los agravios que recibieron los grupos descontentos, quie­
gieron a la legislación de población coahuiltexana y que adquirieron te­ nes no se conformaron con regresar las cosas a su estado original con

rrenos superiores a las once leguas cuadradas, de suerte tal que para el apoyo de Santa Anna, sino que para 1835 alcanzaron la mayoría en
el Congreso General y propiciaron la Reforma constitucional en un sen­
1836-37 tendrían que abandonar gran cantidad de tierras que ocupaban
tido opuesto al liberal de Gómez Farías.
conforme al artículo lO recién citado, lo expuesto coincidió, para des­
La posición de Gómez Farías también generó la división de los libe­
gracia de México, con los proyectos de cambiar la Constitución General
rales en dos grupos, uno autocalificado de moderado y el segundo cono­
de la República y la forma de gobierno, a lo expuesto debe agregarse
cido como el partido de los puros, la mayoría liberal se aglutinó en tor­
que desde la época de la presidencia de Jefferson, Mr. Livingston opina­
no a la fracción moderada, sin embargo, la mayoría del Congreso quedó
ba que Texas les pertenecía a los Estados Unidos supuestamente porque
en manos del partido conservador.
formaba parte de la Luisiana, consta incluso que los Estados Unidos in­
De gran relevancia para entender la Constitución Centralista del 36,
tentaron comprar en dos ocasiones el territorio texano a México y sus res ulta el análisis de las elecciones de 183 5, puesto que como se ha
propuestas fueron rechazadas.16 dicho, las condiciones político económicas que prevalecían desde el
Con lo expuesto, deseo dejar en claro que en mi opinión la separa­ ascenso a la presidencia del General Guerrero eran críticas, por lo que
ción de Texas obedece más al hecho que los colonos de Texas se encon­ desde esas épocas se hablaba de la necesidad de una reforma consti­
traban próximos a perder sus tierras, como recién se expresó, que a la tuc ional.
indignación que pudiera generar en su ánimos, el cambio de forma de Para diciembre de 1834 Juan Gómez de Navarrete propuso que la
gobierno. elección del Congreso sirviera como referéndum popular para aprobar
o desaprobar la reforma constitucional con la modificación de la forma
REJóN, Manuel Crescencio, "Obsen•aciones del diputado saliente contra los Trata­
16 de gobierno incluid a.
dos de Paz, firmados en la Ciudad de Guadalupe el 2 del próximo pasado febrero" Perió­ Al respecto debemos recordar· que lo s dos grandes pensadores de la
dico el Mmlitor Republicano México 12 de mayo de 1848. p. 2. época eran por un lado Emer de Batel y por otro Emanuel J. S ieye s , l as
.,
380 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO J. Mateas Santillán
-
381

tesis de Sieyes referentes al poder constituyente son de sobra conocidas ción contraria que se concretó en la reforma del sistema federal y la
hoy en día, sin embargo, en 1835 era simplemente una opinión tan sóli­ creación de una nueva Constitución.
da como la de Batel quien sostenía que si bien era cierto que el poder Al paso de los años podemos observar que una de las objeciones
Legislativo no puede cambiar la Constitución, la Nación puede conferir­ fundamentales que se hacen de las Siete Leyes Constitucionales es pre­
le ese poder mediante un mandato expreso, tal y como lo sostenía Gó­ cisamente, negarles legitimidad por no ser producto de un poder consti­
mez de Navarrete. tuyente en sentido estricto.
En marzo de 1835 se reunió el Congreso de la Unión electo con el Los aspectos destacables de las Siete Leyes constitucionales son va­
mandato específico de cambiar la Constitución, salvaguardando exclusi­ rios, por principio debemos recordar que:
vamente tres principios: la libertad, la religión y la independencia. • La primera ley constitucional: consiste en un catálogo de los dere­
En la Cámara de Diputados y en la de Senadores se consideró que chos y obligaciones de los mexicanos y habitantes de la República;
el origen de los problemas que aquejaban al país se encontraba en el fe­ • La segunda ley constitucional: se refirió a la organización de un
deralismo, en contraposición la minoría en las Cámaras pensó que la supremo poder conservador, poder que los liberales se encarga­
mejor forma de solucionar los problemas del país se encontraba en per­ ron de satanizar al grado de que se perdió la objetividad de su
feccionar el sistema federal. estudio, de esta suerte, resulta extremadamente difícil sostener
Entre los argumentos que esgrimió la Comisión de Constitución que el poder conservador era simplemente un tribunal constitu­
para reformar el sistema federal se encuentran los siguientes: cional semejante a los que se crearon bajo el auspicio de las teo­
Si los preceptos de las constituciones se amoldaren a las costumbres de los rías de Hans Kelsen.
pueblos, ellos durarán, mas les serán útiles, mas si por el contrario se quie­
Dentro del dictamen con que se presentó el Poder Conservador en-
ren amoldar las costumbres a los preceptos escritos, aquellos prevalecerán
contramos las siguientes razones que le fundamentan:
sobre éstos, ellos caerán en desuso y su olvido, después de haber servido al­
gún tiempo de objeto de infracciones y motivo de persecución y de castigo. Tampoco basta para una buena constitución organizar bien, en lo especula­
De semejantes constituciones se ha dicho y puede decirse, con verdad, tivo, los poderes sociales, procurando igualar sus pesas para que ninguno
que sólo son pliegos escritos de papel, sin más fuerza que la que quiere dar­ gravite con más fuerza que el otro: es necesario además, que haya balanzas,
les el gobierno mientras le conviene y le dejan poder bastante para hacerlo. y balanza arreglada, en donde contrapuestos hagan nacer el equilibrio.
De aquí es que la bondad de la Constitución es relativa siempre; que la Solo hábitos muy arraigados en los pueblos pueden suplir la falta de esa ba­
excelente para un país es pésima para otro; y que la que ha podido subsistir lanza para algún tiempo, más o menos largo, según sea mayor o menor la
en los Estados Unidos del Norte, que adecuada a los habitantes inveterados fuerza de la costumbre, pero donde esa faltaba es absolutamente necesario
de aquellos pueblos, trasladada a nuestro suelo haya sido planta enferma Y establecer aquella.
sin vigor. 17
Aún cuando estos principios teóricos no estuvieran generalmente recibi­

La reforma del sistema de gobierno generó inconformidad en los dos y acreditados, la propia experiencia nos debería bastar para convencer­
nos de que en vano organizaremos entre nosotros los poderes legislativo,
Estados, como es el caso de Texas, ya descrito, y el levantamiento del
ejecutivo y judicial, lo mejor que nos fuera posible, por medio de restriccio­
gobernador Francisco García Salinas de Zacatecas, cuya derrota militar
nes y trabas establecidas para cada uno, sino arbitramos un modo de que
condujo a su Estado a ser dividido y perder el territorio que hoy en día
sean efectivas esas trabas, y cada poder se circunscriba a sus límites consti­
ocupa el Estado de Aguascalientes. tucionales.18
Al interior del Congreso la lucha que se dio sobre los alcances de las
facultades del Congreso para reformar la Constitución fue amplia, Se­ El papel fundamental que se asignó al Supremo Poder Conservador

nadores como Guadalupe Victoria, Bernardo Couto y Luis G. Cuevas, es semejante al que hoy en día desempeñan los Tribunales de Constitu­

entre otros, sostenían la idea de que las juntas electorales no tenían fa­ cionalidad e incluso a las atribuciones que en materia de la resolución
cultades para conceder al Congreso de la Unión la facultad de reformar de las Controversias Constitucionales y las acciones de inconstituciona­
totalmente la Constitución, la mayoría del Congreso sostenía una posi- lidad tiene la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

17 18
A.G.N. Historia. vol. 560 cxp. XII foja l. Ibídem.
382 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateos Santillán 383

• La tercera ley co11stitucional: regulaba al poder legislativo que se que reconocía la independencia de Texas, mismos que fueron denuncia­
depositaba en un congreso general compuesto de una Cámara de dos y tachados de nulos por el presidente interino don José Justo Corro,
Diputados y una Cámara de Senadores, una objeción que se hace razones más que suficientes para que perdiera la presidencia, su suce­
con frecuencia a las Siete Leyes es la relativa a que los individuos sor, Anastasia Bustamante, enfrentó los problemas con Francia y las lu­

que aspiraban a un cargo popular, debían contar con un capital chas internas con mala fortuna, de tal suerte que para principios de 1839

que produjera determinada renta anual, la cual variaba en rela­ se rehabilitó a Santa Ana, quien hizo eco de los diversos grupos que es­

ción directamente proporcional con el cargo a que se aspirara, taban en contra de la Constitución en calidad de presidente interino y

pues en cuanto fuera más alto el puesto, más alto debería ser el convocó al Supremo Poder Conservador para que declarase cual era la

capital que se tuviera. voluntad nacional y se pudiera modificar la Constitución del 36 antes

• La cuarta Ley Constitucional: se refería a la organización del Su­ del tiempo que ella prefijaba.

premo Poder Ejecutivo cuyo mandato se extendía a ocho años y Para julio de 1840 los federalistas encabezados por Valentín Gómez

regulaba cuestiones del consejo de gobierno y del ministerio. Farias dieron un golpe de estado que fue reprimido rápidamente por el

• La quinta Ley Constitucio11al: se refería al Poder Judicial que se general Gabriel Valencia, días antes, el 30 de junio, se presentó un pro­

ejercía por una Corte Suprema de Justicia, por Tribunales Supe­ yecto de reformas a la Constitución de 1836, uno de los principales ob­

riores de los Departamentos y por Juzgados de Primera Instancia, jetos de ataque era el Supremo Poder Conservador, que para esas fe­
chas, había demostrado sus limitaciones y defectos.
los Ministros eran electos de la misma forma que la elección del
Entre el 8 de agosto de 1840 y el 9 de septiembre del mismo año, se
Presidente de la República.
proclamaron tres movimientos revolucionarios contra el presidente
• La sexta Ley Constitucional: se ocupaba de la división del territo­
Bustamante, acaudillados por los generales Paredes Arrillaga, Valencia
rio de la República en departamentos y la séptima se refería a la
y Santa Ana respectivamente, quien en un intento por salvar la situa­
forma de variar las leyes constitucionales.
ción ideó convocar a un congreso nacional extraordinario con el fin es­
Como dato de interés podemos observar que no obstante el régimen pecífico de reformar la Constitución.
establecido era el de República Central, el papel que jugaban los depar­ El 28 de septiembre de 1840 se firmaron las Bases de Tacubaya con
tamentos, equivalentes de nuestros Estados en el sistema federal, era el apoyo de Paredes, Valencia y Santa Ana, quienes desconocían a Bus­
protagónico y de gran importancia para el desenvolvimiento de la vida tamante y convocaban a un nuevo Congreso investido de amplias facul­
de la República. tades para modificar la Constitución.
En el proyecto de reforma constitucional de 1840 destaca el voto
13.7.1. LAS BASES ORGÁNICAS
particular presentado por Don José Fernando Ramírez quien propuso
DE LA REPÚBLICA MEXICANA 1843
que el control constitucional no estuviese en un cuarto poder, como era
el caso del Supremo Poder Conservador, sino que esta facultad se tras­
Es prácticamente unánime la opinión de los diversos autores sobre
ladara a la Suprema Corte de Justicia.
las dificultades que tuvo que enfrentar la vigencia de la Constitución de
Al triunfo del movimiento que sostuvo las Bases de Tacubaya se
36, los problemas se presentaban en el orden internacional así como al
pospuso la realización de la reforma constitucional que reclamaba la
interior de la República, la sucesión de Texas era una herida que desan­
Nación, sin embargo, las bases no establecieron definiciones previas Y
graba al erario y la obsesión por recuperar nuestra provincia afligía a
estipulaban que sería el próximo Congreso quien quedaría facultado
los corazones de los nacionalistas mexicanos, los intereses expansionis­
tas de Francia se hicieron patentes en la llamada guerra de los pasteles para constituir a la Nación.

de 1838-1839 la animadversión de los liberales, moderados y puros con­ El 1 O de diciembre de 1841 se publicó la Convocatoria para la con­
formación del Congreso, las elecciones se verificaron el 1 O de abril de
tra la República Central y las críticas de los mismos conservadores pro­
1842, los resultados fueron semejantes a los de la elección de 1835, el
dujeron un escenario de crisis política, los gobiernos tenían vidas efíme­
ras, los gabinetes presidenciales eran aún más efímeros. Partido liberal dividido en moderados y puros eran minoría frente a los
Antonio López de Santa Ana fue capturado en plena campaña de conservadores, aun cuando no en la proporción que hubiese deseado
Texas, después de lo cual firmó los llamados Tratados de Velasco en los Santa Ana.
384 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO -J. Mateos Santillán
385

Sin estar plenamente satisfecho de los resultados electorales, Santa nio de 1843, su vigencia fue breve, la Nación mexicana habría de en­

Ana obligó a los diputados recién electos a jurar las Bases de Tacubaya frentar pocos años después, a los Estados Unidos de América.

y se declaró en contra del sistema federal. Los proyectos del 42 y el voto particular de la minoría, son antece­

El 1O de junio de 1842 iniciaron las sesiones del Congreso. La Comi­ dentes de gran importancia para la historia jurídica de nuestro país y
ameritan el estudio detallado y metódico de los juristas de nuestro país,
sión de Constitución se formó por: Antonio Díaz Guzmán, Joaquín Ladrón
como no es este el sitio indicado para realizar un análisis profundo de
de Guevara, José Fernando Ramírez, Pedro Ramírez, Juan José Espino­
la riqueza de sus contenidos, me concretaré a recordar que el título IX
sa de los Monteros, Mariano Otero y Octaviano Muñoz Ledo, 19 como re­
del primer proyecto, relativo al control constitucional, como diríamos
sultado de los trabajos se elaboraron dos proyectos, uno de la mayoría y
hoy en día, o a la Conservación, como se intituló en su época, estable­
otro presentado por la minoría como voto particular.
cía que el control constitucional correspondía a los supremos poderes
No debemos olvidar como parte del escenario político que el Estado
y a los Departamentos (entidades equivalentes a los Estados de la Fede­
de Yucatán proclamó la reasunción de su soberanía plena y que formó
ración).
alianza ofensiva defensiva con los texanos en contra de México.
En caso que la Suprema Corte se excediera en sus atribuciones la
Cuando el proyecto de la mayoría de la Comisión se sometió a la
Cámara de Diputados declaraba la nulidad de sus actos, cuando la con­
consideración del pleno, no obtuvo la aprobación correspondiente por
ducta inconstitucional provenía de un acto del ejecutivo, era compe­
lo que devuelto a la Comisión, ésta tuvo que formular un nuevo proyec­ tencia del Senado anular sus actos, la Suprema Corte de Justicia po­
to que se presentó el 3 de noviembre de 1842, este nuevo proyecto pre­ día anular por una ocasión los actos del ejecutivo contrarios a la
tendía flexibilizar la posición del primero y adoptar algunas de las ideas constitución y leyes generales, los gobernadores podían anular las órde­
que los federalistas expresaron en su voto particular, de esta forma, en nes que fueran contrarias a la Constitución Política del Departamento
tanto que en el Congreso se negociaba o intentaban hacerlo con la fina­ que gobernaban.
lidad de aproximar las distancias que separaban a liberales y conserva­ El voto particular de la minoría que firmaron Juan José Espinosa de
dores, los grupos de poder, particularmente la iglesia impugnó acre­ los Monteros, Octaviano Muñoz Ledo y Mariano Otero en el título X
mente los proyectos, posición seguida por Santa Ana y la fracción del de su proyecto fue el mismo proyecto que habría de engrandecer a Ote­
ejército que encabezaba, de forma simultánea algunos departamentos ro cuando lo presentó como voto particular en el Congreso de 184 7 y
solicitaron la disolución del Congreso, acto que se logró con el apoyo de con él se elevó a rango constitucional el amparo.
las tropas de los generales Valencia y Bravo, éste último en funciones El segundo proyecto, aún cuando de corte centralista, nos presenta

de Presidente. un catálogo muy completo de derechos humanos y civiles con un título

Desaparecido el Congreso, el Presidente Bravo designó ochenta no­ especial dedicado a las garantías individuales, separando éstas, en ga­
rantías de igualdad, de libertad, seguridad y propiedad.
tables para que integraran la Junta Nacional Legislativa con el fin ex­
preso de formular las bases constitucionales que regirían en la Repúbli­
ca, es menester señalar que federalistas prestigiadísimos como Don 13.8. EL LIBERALISMO Y LA CONSTITUCIÓN DE 1857
Cayetano Portugal, rehusaron formar parte de la Junta.
Tal y como se politizó durante muchos años la historia de los movi­
Como es natural, el procedimiento que se siguió para la formación
mientos y constituciones conservadoras al grado de que se les juzgara al
de la Junta tenía el propósito tácito de quienes le nombraron de apro­
margen de la objetividad y la razón, el movimiento liberal padeció las
bar todas las propuestas que les formularan quienes les habían designa­ mismas deformaciones pero en sentido opuesto, después de la desapari­
do, por lo que no debe sorprendernos que la mayoría de las votaciones ción del partido conservador con el fusilamiento de sus líderes en el Ce­
se encaminaron a la aprobación sumisa, no ya de las bases para la for­ rro de las Campanas en 1867, la historia nacional se volvió monocro­
mulación de una Constitución, como era el propósito original, sino que m ática y el movimiento liberal prácticamente se transformó en un
formularon una nueva Constitución que llevó el nombre de Bases dog ma y sus militantes en seres a los que se atribuyen virtudes casi de
Orgánicas de la República Mexicana y fueron publicadas el 14 de ju- sa ntos sin defectos ni errores.
A lo largo y ancho del país, durante muchos años, he preguntado a
IY
grupos universitarios, (quié n firmó el Tratado de Guadalupe Hidalgo?
TENA RAMÍREZ, Felipe. op. cit., p. 303.
�V

TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO J. Mateos Santillán 387
386 -

Tratado con el que perdimos más de la mitad del territorio que tenía­ Como hemos referido, el malestar contra el partido moderado se

mos en 1824 y la respuesta uniforme es culpar a Santa Ana de la firma transformó en planes, asonadas y revoluciones, la hacienda pública es­

de dicho documento, aun cuando el documento fue firmado por Manuel taba en bancarrota, los 15 millones de pesos que recibió el gobierno
0
de la Peña y Peña.2 como compensación por media nación se habían esfumado en un pro­
Una equivocación tan grande y generalizada viene simplemente a yecto bancario que había fracasado, el ejército norteamericano amena­
ratificar la afirmación de Goebbels, Ministro de propaganda de Hitler zaba nuestras fronteras, su gobierno incumplía el Tratado de Guadalu­
en el sentido de que una mentira que se repite un millón de veces, s � pe-Hidalgo y las invasiones de indios nómadas empujados por el
transforma en una verdad popular. ejército norteamericano a nuestras tierras eran en extremo comunes,
Los liberales a su triunfo en 1867 destinaron todos sus esfuerzos esto, porque los gobiernos de Norteamérica querían variar de nueva
por editar su verdad de la historia, la historia vista por los intereses de cuenta las fronteras, el ejército mexicano se encontraba abatido, la
su partido, historia que sirve de justificación de nuestras culpas y para cuestión del Istmo de Tehuantepec era de máxima importancia para los
atribuírselas al enemigo derrotado, al perdedor, a quien ya no puede Estados Unidos, lo mismo que la Mesilla y la Baja California, los parti­
defenderse. dos seguían en terrible y enconada disputa, en fin, la derrota del 47 pre­
De esta forma surgieron obras como "México a Través de los Siglos" sentaba sus primeros efectos.
que sirvieron para que generaciones enteras formaran su criterio y para Es en este marco que la nación mexicana vuelve sus ojos a Santa
que se repitieran sus contenidos en textos y escuelas. Ana, con la ilusión de ser fuerte y resistir el incontenible avance de
Hoy en día, a principios del siglo XXI la tendencia universal es re­ nuestros vecinos a nuestras posesiones. Y como no iba a ser así, si San­
plantear la historia, lo hacen los alemanes después de la reunificación, ta Ana se había retirado de México en el 48 con el aura de guerrero que
la
lo hacen los países del ex pacto de Varsovia después de la caída de desea continuar la contienda contra el violador de la nación, si ahora
mexicano s, des­
Unión Soviética, tenemos la obligación de hacerlo los no comprendemos esto es porque nos han deformado la verdad históri­

pués de la caída del sistema del partido hegemónico. ca y es común que actualmente la mayoría de los mexicanos culpen a
y vi­
No quiero que simplemente cambiemos lo blanco por lo negro Santa Ana de la firma de Tratado de Guadalupe-Hidalgo y hagan de
son de­ Pe!l.a y Pe!l.a un héroe, con una calle llevando su nombre en el centro de
ceversa, los conservadores no son unos santos, como tampoco
de los liberales , todos son simplem en­ la ciudad de México, y una Corte Suprema adorando su memoria, pero
monios, lo mismo se puede decir
y defectos. los mexicanos de aquellas épocas, más enterados de lo que pasaba en
te seres humanos, con sus correspondientes virtudes
superar sus calles, tenían una versión diferente de las cosas, al menos hasta
El siglo XXI debe brindar a los mexicanos la oportunidad de
mono cro­ 1853. Fue un gobierno federal, liberal, moderado, quien dio la espalda
los dogmas, de aceptar que la vida es policromática y no solo
por ha­ a los Californios y a los habitantes de Nuevo México, quien no sólo ven­
valor
mática, que nuestros héroes, no dejan de serlo, ni pierden
estu­ dió dos millones trescientos mil km2, sino que prácticamente los regaló
é el
berse equivocado en algo, este es el sentido con el que abordar e incumplió su deber de defender a la federación.
dio de la Constitución de 1857. El elegido para cambiar tal estado de cosas, Antonio López de San­
reforma como
Las corrientes liberales explicaban el movimiento de ta Anna, artífice de nuestras más grandes derrotas, (La Angostura, Ce­
lo cual es metodo­
consecuencia inmediata de la Revolución de Ayutla, rro Gordo, Padierna, San Jacinto, etc.) asumió la primera magistratura
ón
r que la fracci
lógicamente correcto, aún cuando es más exacto señala en condiciones muy especiales.
ntes a las qu e se
de los puros del partido liberal impulsó medidas semeja Con lo expuesto simplemente quiero subrayar que la opinión públi­
ó m ez
vicepresidente G
habrían de tomar en 1857 desde el gobierno del ca veía con ojos muy críticos a las administraciones liberales, que esa

Farías en 1833-1834. época de 1853 la figura de Santa Ana adquirió dimensiones de héroe,
mente algunas de las
Para entender el Plan de Ayutla abordaré breve del hombre que por los agravios recibidos enfrentaría a los Estados
circunstancias que le antecedieron. Unidos y lavaría el honor de México.
Al momento de asumir el Poder Santa Ana intentó formar un ejérci­
to de 90 mil hombres con veteranos suizos y belgas como sargentos,
20 Vé
ase el original que obra en el Archivo Histórico Diplomático de la Secretaría de
Relaciones Exteriores. además de lO ó 12 regimientos de soldados europeos, para enfrentar a
?

388 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO J. Matcos Santillán
-
389

los Estados Unidos, como se publicó en el periódico "El Universal" el 17 siones norteamericanas, entonces no se hubiesen perdido los territorios
de abril de 1853. que se perdieron ni se hubieran firmado tan afrentosos tratados.
Los propósitos de Santa Ana no encontraron eco en Europa pero sí El Tratado de la Mesilla vino a significar la corroboración de que
alarmaron a los Estados Unidos, quienes por medio del gobernador de en 1848 la soberanía mexicana no sólo se había extinguido en más de la
Nuevo México William Carr Lane ocuparon el territorio de la Mesilla mitad del territorio nacional, sino que, la parte que se conservó ya no
que los Estados Unidos reclamaba para ellos, porque supuestamente era plena ni absoluta, sino dependiente de la nación del norte, pasemos
midieron mal el despojo que nos hicieron en 1848, y necesitaban esos a explicar porqué.
138 mil km2 para tender un ferrocarril de costa a costa. Los Estados La Mesilla era un territorio que México no deseaba vender y que sin
Unidos declararon estar al margen de las acciones de Lane, pero n os embargo vendió, no es muy difícil pensar que más que el dinero fue el
enviaron un embajador para comprar la porción invadida y si se podía,
temor de otra guerra la verdadera causa de tal desprendimiento y ese
algo más.
hecho implica una negativa al concepto de que México mantenía la titu­
De esta forma Santa Ana se encontró frente a los Estados Unidos,
laridad de su plena soberanía en 1853.
de espaldas a Europa y con la presión de los liberales, declarar otra
La pérdida que nos impuso el Tratado de la Mesilla no sólo fue te­
guerra por la invasión sin el ejército de 90 mil hombres y el apoyo euro­
rritorial, sino que en el artículo 11, se hicieron nulas las estipulaciones
peo significaba una derrota segura y se ponía en entredicho la viabili­
del artículo XI del Tratado de Guadalupe-Hidalgo en el sentido de pre­
dad de la existencia de la nacionalidad mexicana, por lo que optó por el
venir las invasiones de las tribus bárbaras a territorio mexicano, así
peor de los caminos, negociar la venta de los 138 mil km2 invadidos.
como una serie de responsabilidades que adquirió para remeditar tales
El 30 de diciembre de 1853 se firmó el Tratado de la Mesilla, como
exceso en caso de que se dieran.
se le conoce en México, la compra de Gadsden, como se le conoce en
La cuestión del istmo de Tehuantepec viene a ser otra mácula sobre
Estados Unidos.
la soberanía mexicana, por un lado, México se comprometía a no poner
El caso es que, en 1848 y 1853 una voluntad superior obligó a la na­
obstáculo al tránsito de mercancías, ni personas, sobre el Istmo de
ción mexicana a aceptar una serie de deshonrosas capitulaciones, con­
Tehuantepec "y que en ningún tiempo se impondrán cargas por el trán­
trarias al derecho de gentes, contrarias a la voluntad general, y la na­
sito de personas y propiedades de los ciudadanos de los Estados-Uni­
ción nada pudo hacer.
dos, mayores que las que se impongan a las personas y propiedades de
Así es que, un ejército invasor derrotó en 184 7 al ejército mexicano,
otras naciones extranjeras".
con tal facilidad, que logró que se nos impusieran en 1848 una serie de
Como puede notarse, con el Tratado de la Mesilla se limita la sobe­
condiciones tan vergonzosas, como la de perder más de la mitad d el te­
ranía nacional mexicana en el sentido de poder tomar decisiones que
rritorio incluidos bienes y personas.
pudieran convenirle sobre su propio territorio y subordina tal capaci­
El problema se transforma en tragedia cuando en 1853 nuestros
dad a la voluntad de un Estado diferente, razón más que suficiente para
conquistadores nos imponen una nueva vergüenza, el Tratado de la Me­
afirmar que con el Tratado de la Mesilla se sometió la soberanía mexi­
silla, en ambos casos estábamos en las premisas de defender nuestra so­
cana a los Estados Unidos.
beranía incluso con las armas y ello no hubiese parecido indigno a nin­
guna otra nación, al contrario, indigno fue no defenderse. Debemos interpretar en el mismo sentido el hecho de que México
renunciaba a solicitar pasaportes a los extranjero
Es precisamente esa falta de valor para defender la soberanía nacio­ s que transitaran por
el Istmo de Tehuantepec, bajo cualquier bandera, y si
nal la gran culpa que el pueblo mexicano de su época lanzó sobre la es­ ello no pareciese
de suficiente monta, México es reducido a un protector
palda de Antonio López de Santa Ana, después de haberle honrado al ado por el ar­
tículo VIII del Tratado de la Mesilla.
extremo de hacerle su "Alteza Serenísima".
La experiencia le decía a Santa Ana que el partido liberal podía vol­ Como se ve, el Tratado de la Mesilla iba contra la soberanía mexica­
na, y ningún gobierno, ni el de Santa Ana,
verse en su contra, aún en plena guerra, de la misma forma, no pocos tenía facultades para suscri­
mexicanos deseaban anexarse a Estados Unidos. bir un pacto así, no restándonos de moment
o sino calificar de nulo al
Un ejército incapaz de cumplir con su responsabilidad histórica, Tratado de la Mesilla, por ser contrario a
la soberanía mexicana, y por­
pues resulta claro que si se hubiese tenido poder bélico, ya no digamos que el gobierno de Santa Ana no tenía facultades para hacer
la venta de
para invadir Estados Unidos, sino para repeler enérgicamente las inva- territorio nacional.
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCION AL MEXICANO - J. Mateos Santillán 391
390

Hasta este momento pudiera pensarse que hemos querido defender Debemos destacar que tales imputaciones contienen un marcado
la figura de Santa Ana, si así lo hemos hecho, no ha sido con otro pro­ acento antiestadounidense, por constituirse en una acusación contra nues­
pósito que el de calificarle adecuadamente, en palabras de la Constitu­ tros invasores que habían faltado a las estipulaciones de un solemne
ción de Apatzingán: como reo del delito de "lesa nación", o en términos tratado.
más actuales como "traidor a la patria". Otro considerando de incalculable valor para nuestro trabajo fue el
El hecho que Santa Ana cobrase por puertas o ventanas, no lo hace último, mismo que expresaba:

sino precursor de los modernos mandatarios que a fin de sostener al Y por último, atendiendo a que la independencia nacional se halla amarga­
Estado, cobran impuesto predial, si se trata de carros pudiéramos decir da, bajo otro aspecto no menos peligroso, por los conatos notorios del par­
lo mismo de las tenencias y ni que decir de las medicinas. En cuanto a tido dominante levantado por el general Santa Ana; usando de los mismos
su inclinación por los honores y las galas, hemos de confesar que tales derechos de que usaron nuestros padres en 1821 para conquistar la liber­
tad, los que suscriben proclaman y protestan sostener hasta morir si fuere
defectos los han tenido muchos presidentes del siglo XX y la historia y el
necesario, el siguiente plan.
pueblo, no les ha volteado la espalda de la manera que se hizo con San­
ta Ana. Lo expuesto nos lleva a dos caminos, por uno se puede percibir cla­
Y no es para menos, Santa Ana en 1853 despertó las expectativas de ramente la frustración de algunos mexicanos en contra del líder que ha­
todas las clases sociales mexicanas en el sentido de creer factible la de­ bía jurado conservar la integridad nacional y vendió parte del territorio
fensa de la soberanía mexicana ante el extranjero y el Tratado de la Me­ patrio, por el otro, nos encontramos que los mexicanos de California,
silla vino a demostrar que sus actos, distaban mucho de los sueños que Texas y Nuevo México fueron expulsados de sus tierras por los nortea­
había despertado. mericanos, la justificación, no tenían documentos que acreditaran su
Anteriormente hemos referido el Tratado de la Mesilla, como un propiedad sobre las inmensas tierras que poseían, la razón, muchos
acto contrario a la soberanía nacional, ahora estudiaremos las faculta­ grupos eran señores de estas tierras desde tiempos inmemoriales, siglos
des que decía tener santa Ana para firmarlo. antes de la llegada de los españoles y en consecuencia, sus formas de
No habían pasado sino dos meses de la firma del Tratado de la Me­ propiedad no se ajustaban a los preceptos romano-germánicos que ca­
silla cuando el Coronel Florencia Villarreal, en el pueblo de Ayuda, dis­ racterizaron la dominación española.
trito de Ometepec, en el entonces departamento de Guerrero, proclamó Como hemos dicho y corroboran los críticos de Santa Ana, éste te­

el llamado "Plan de Ayutla" el 1 o de marzo de 1854. nía proyectado levantar un ejército de noventa mil hombres así como
El Plan de Ayutla debemos entenderlo como la inmediata respuesta traer varios regimientos suizos y franceses a fin de defender la sobera­

de los liberales contra Santa Ana, por haber firmado el Tratado de la nía nacional, de la misma forma entraba en sus planes buscar alianzas

Mesilla y haber faltado a la palabra empeñada de defender la soberanía con los países europeos a fin de garantizar la integridad territorial me­
xicana, en nuestra opinión, ésta podía ser la razón invocada de "..que la
nacional. Nuestra apreciación la fundamos en el 6° considerando del
Plan aludido que a continuación reproducimos: independencia nacional se halla amargada.. " la otra alternativa pudiera
ubicarse en la pretensión de formular una revolución a fin de garanti­
Que debiendo conservar la integridad del territorio de la República, ha ven­
zar a su triunfo la defensa de México, en una guerra reivindicatoria de
dido una parte considerable de ella, sacrificando á nuestros hermanos de la
sus territorios ocupados o por la conformación de un ejército poderoso
frontera del norte, que en adelante serán extranjeros en su propia patria,
que garantizara la integridad en riesgo.
para ser lanzados después como sucedió á los Californios.
Los hechos que hemos de relatar posteriormente nos llevan a pen­
El considerando reproducido nos lleva no sólo a corroborar que el sar que la primera hipótesis formulada es la de mayor peso, razón que
gran pecado que se imputó a Santa Ana fue el hecho de haber firmado nos lleva a ver en el Plan de Ayutla un nuevo episodio en la larga guerra
el Tratado de la Mesilla, sino que también, corrobora las tesis expresa­ iniciada entre la lógica yorquina y el rito escocés, continuada por los li­
das en los capítulos procedentes en relación a la trágica suerte de los berales y los conservadores, en la que la destacaba entre las causas ge­
mexicanos que vivían en California y que fueron expulsados de su tie­ neradoras del conflicto, la orientación de las alianzas políticas que cada
rras, en flagrante violación del Tratado de Guadalupe-Hidalgo y que la Partido quería dar a sus programas de go bier no, siguiendo unos el ca­
historia recoge como la guerra de los "californios". rnina de los Estados Unidos y los otros el c amino de Europa.
EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO J. Mateos Santillán 393
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
-

392

En su juventud sirvió de mozo de caballos al General Vicente Guerrero, y a


El resto de los considerándoos de este primer plan se orientan a cri­
este caudillo debió el dominio sorprendente que llegó adquirir en las mon­
ticar las políticas de Santa Ana, en relación a las contribuciones, a la
:.'.
tañas del Sur.21
falta de respeto de las libertades públicas, a que faltó a su compromiso
de no entregarse a ningún partido, que gobernaba de acuerdo a su vo­ De la otra cabeza de la revolución de Ayutla, Don Ignacio Comon­

luntad caprichosa, y muchas otras acusaciones de este tipo. fort, se dijo que era favorito de Álvarez y que a ello debía sus puestos de

El Plan de Ayutla desconocía a Santa Ana como presidente de Méxi­ administrador de la aduana de Acapulco y ministro de guerra de Don

co en su artículo 1°, y en su artículo 3°, confiaba al personaje que en­ Juan, razones más que suficientes para vincular a ambos al partido libe­
ral y a la lógica yorquina, como pasaremos a ver.
cumbrara a la presidencia, "amplias facultades para atender la seguri­
En la versión de las reformas de Acapulco, al Plan de Ayutla, nos
dad e independencia del territorio nacional".
encontramos que desaparecen las actitudes anti-norteamericanas, como
El artículo 4° del Plan de Ayutla declaraba: "...que la nación es y
lo son las acusaciones relativas al problema de los californios, pues en
será siempre una, sólo indivisible él independiente".
.;

su segunda versión ya no se hace ninguna alusión a los mexicanos per­


De igual forma el artículo 5 del multicitado Plan que nos ocupa sen­
didos en sus propias tierras. Los liberales en el primer considerando de
taba las bases para el regreso a la forma de República representativa
las reformas de Acapulco dan por sentada una premisa, Santa Ana ven­
popular, dejando al ejército, en el artículo 6°, el deber de apoyar el "or­
dió "sin necesidad una parte del territorio".
den y las garantías sociales".
Y es precisamente esta acusación contra Santa Ana, la que debe re­
Finalmente, en el artículo 9° se invitaba a los Generales Nicolás
vertirse en contra de ellos, pues si bien es cierto que, Santa Ana vendió,
Bravo, Juan Álvarez y Tomás Moreno, para encabezar las fuerzas liber­
lo hizo sin ningún fundamento legal que le permitiera tal extremo, ra­
tadoras zón más que suficiente para afirmar que los de Ayutla desviaron la aten­
ción de el punto principal para México, declarar ilegítimo el Tratado de
13.8.1. EL P LAN DE AYUTLA REFORMADO EN ACA PU LCO
la Mesilla, y en lugar de tal extremo, convalidan los actos de Santa Ana

La comparación del Plan de Ayutla con las reformas sufridas por él en beneficio de los Estados Unidos al afirmar que, Santa Ana vendió
"una parte del territorio de la República", cuando lo que debieron de
mismo en Acapulco el 11 de marzo de 1854, nos obliga a serias reflexio­
hacer fue simplemente declarar nulo el Tratado de la Mesilla.
nes; en apariencia se hacen modificaciones intranscendentes a la ver­
Comonfort que había sido acusado por Santa Ana por haber traicio­
sión de Ayutla, sin embargo, las reformas de Acapulco son de extrema
nado a México, según consta en el oficio de 3 de marzo de 1854 de la
importancia para mostrarnos las limitaciones del partido liberal para
Secretaría de Estado y del despacho de Hacienda y Crédito Público, que
defender la independencia plena mexicana.
señalaba:
Desde los primeros años de vida independiente se dio en nuestro
país una terrible guerra entre las logias yorquinas y escocesa, siendo la Que se le separó de él por traidor, cuyo crimen está ya manifiesto, y sufi­
cientemente comprobada la justicia con que el gobierno obró.
primera fomentada por los Estados Unidos de América a través de su
embajador en México Samuel R. Poinssett, a esa logia se atribuye el gol­ De esta suerte, Comonfort y Álvarez, se adhieren al Plan de Ayutla
pe de Estado que encumbró a Guerrero después de la elección constitu­ limando las asperezas que dicho Plan hubiese podido contener contra el

cional de Gómez Pedraza como segundo presidente de México, hecho aliado tradicional y protector natural del partido liberal Mexicano: Los

que habría de arrastrarnos a terribles guerras que concluyeron con la Estados Unidos de América, pues el Plan de Ayutla, ataca dos aspectos,
muerte de Guerrero y el regreso al poder de Gómez Pedraza en 1832, por un lado, reconocimiento de que los Estados Unidos han comprado
con el apoyo y reconocimiento de la mayoría de las legislaturas legalmente el territorio nacional, cuando lo que hemos escrito demues­

estatales. tra exactamente lo contrario y por otro lado, significa un ataque al inte-
Para 1854 Acaudillaba las fuerzas surianas Don Juan Álvarez, quien
estaba llamado a ser el motor, el alma, de la revolución de Ayutla, de él 21 PEREYRA.
Carlos, "Documentos inéditos o muy raros para la historia de México",
T. 11, México Librería de la viuda de Ch. Bourct 1905 p. 101.
se dijo:
394 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO J. Matcos Santillán
395
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rior del Estado mexicano, un verdadero ataque contra el partido con­ Esta fuera de duda que el destino de nuestra raza es extenderse sobre el

servador y contra su caudillo Santa Ana. continente de Norteamérica.

Así que, no resulta gratuito el viraje de Plan de Ayutla una vez que El planteamiento expansionista no puede ser más claro y, sin em­
llega a manos de los líderes liberales, las leyes de Reforma también se bargo, lo mismo que Polk once años antes, su referencia es a Norteamé­
vincula íntimamente a estas razones, sin embargo, estudiaremos la Ley rica, prueba de ello es que las intervenciones europeas en centro y Sud­
Lerdo por separado. américa en la época son muy comunes y la actitud norteamericana es
La revolución de Ayutla llevó a los líderes al poder con apoyo nor- simplemente expectante, el coloso aún no es lo suficientemente fuerte
teamericano dado que, las revoluciones sólo pueden hacerse con armas, para enfrentar a Europa más allá de su fronteras y de su zona de máxi­
y que a los Estados Unidos no podía interesarles ningún movimiento ma seguridad.
que afectara sus intereses o denunciara la nulidad de sus adquisiciones. Las leyes de Reforma y la Constitución de 1857 desencadenaron
En 1856, después de constantes presiones del gobierno liberal, Ja­ una vez más las viejas rencillas, la ley se esgrimió como un arma contra
mes Gadsden deja el cargo de embajador norteamericano en México y los enemigos políticos, de la misma forma que los conservadores la usa­
es substituido por John Forsyth. ron en 1836 y 1853.
La causa liberal, contrariamente a lo que pudiera pensarse hoy en Comentamos con anterioridad que el partido liberal en 1857 era dé­
día, se encontraba muy débil en aquellas fechas, lo que despertó los in­ bil y las leyes de Reforma más la Constitución de 1857 significaban una
tereses del nuevo embajador Forsyth, quien intentó aprovechar las cir­ dura prueba por superar, su vigencia tendría que ganarse por vía de las
cunstancias en beneficio de su país. armas.
Las leyes de Reforma no tuvieron el beneplácito general ni el presti- Los liberales siguieron el camino tradicional de su partido, la políti­
gio que llegaron a tener después, al contrario, fueron objeto de profun­ ca económica de Miguel Lerdo de Tejada se orientaba claramente hacia
das críticas y de graves desavenencias sociales. los Estados Unidos, los liberales moderados observaban con preocupa­
Juan Álvarez ocupó brevemente la presidencia y fue substituido por ción las estrategias de los liberales radicales. Lerdo inició trámites para
Ignacio Comonfort, de quien adicionalmente diremos que como Sena­ que, los norteamericanos le proporcionasen recursos a México de la si­
dor estuvo a favor del Tratado de Guadalulpe-Hidalgo, cosas de la histo­ guiente forma, el préstamo se haría por 15 millones de pesos, de los
riografía, quien vendió 138 mil km2 es hoy en día ejemplo de traidores, cuales, tres servirían para que los norteamericanos cubrieran sus recla­
en tanto que, quienes "cedieron" más de 2 millones 300 mil km2 sólo son maciones contra México, con cuatro millones se pagaría a los Ingleses y
responsables de los golpes de mano que dieron a sus correligionarios. llegarían 8 millones a las arcas del gobierno liberal.
En 1856 la crisis era enorme, la revolución de Ayutla costó dinero, La política liberal radical era concreta, iniciar un proceso de inte­
teníamos deudas anteriores con Estados Unidos, Inglaterra, Francia, gración con los Estados Unidos que desembocase posteriormente en la
España, etcétera. Nuestro sistema productivo no producía por proble­ anexión, los liberales moderados no deseaban ceder territorio nacional
mas estructurales así como por la inestabilidad política. de nueva cuenta, visto estaba que la voracidad norteamericana no tenía
México necesitaba recursos y no tenía garantías que ofrecer a quie- límites y el simple rumor de que cederían territorio sería la ruina del
nes le prestaran, sino su territorio. partido liberal.
En 1857 ascendió a la presidencia James Buchanan quien inmedia- El 17 de diciembre de 1857 Comonfort se dio un autogolpe de Esta­
tamente ofreció dinero a cambio de territorio, entre 12 millones de pe­ ·do, desconoció la Constitución de 185 7 y pretendió ser factor de unidad
sos y 15 millones, según los causes de la negociación, por todo Baja Ca­ nacional, sin embargo, sus proyectos fracasaron en virtud de que el 11
lifornia, Sonora y parte de Chihuahua, la anterior no fue sino una de las de enero los conservadores se pronunciaron en su contra y los liberales
múltiples proposiciones en tal sentido. no se ocuparon por defenderle.
Los mensajes presidenciales al Congreso de los Estados Unidos La renuncia de Comonfort dejó al frente de la presidencia y del par­
siempre nos muestran las intenciones norteamericanas durante el si­ tido liberal a Benito Juárez, quien tomó como bandera la Constitución
glo XIX, así lo fueron las expresiones de Monroe en 1822, Polk en 1847 Y de 57, en el bando contrario se reputaba presidente Félix Zuloaga al
la de James Buchanan el 7 de enero de 1858, cuando señaló: frente del partido conservador, am bos se disputaban el reconocimiento
396 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO J. Mateos Santillán
397
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de gobierno legítimo; en lo interno por vía de las armas, en lo externo Los moderados buscaban restablecer la Constitución de 24, los puros
por conducto de sus diplomáticos. buscaban expedir una nueva,23 la lucha sobre el tema fue ardua.
Cuando el embajador Forsyth trató de aprovechar la circunstancia Uno de los aspectos de mayor interés sobre la lucha entre modera­
de que el 22 de marzo había reconocido al gobierno conservador, y en dos y puros, radica, como lo narra el maestro Tena Ramírez24 en que,
consecuencia consideró justo cobrar el servicio solicitando territorio aún cuando vencieron en la votación los moderados después de un gran
mexicano, Luis G. Cuevas, viejo negociador del Tratado de Guadalu­ debate durante la sesión del 4 de septiembre de 1856, en la práctica el
pe-Hidalgo y a la sazón Secretario de relaciones Exteriores del Gobier­ empuje y la enjundia de los puros impusieron su proyecto.
no conservador contestó: El S de febrero de 1857 se juró la Constitución, el 11 de marzo de 1857
se promulgó. El Presidente Comonfort que había jurado la Constitución,
¿Quiere usted Sonora? La sangre americana derramada sobre su frontera
se percató que los conservadores y la iglesia estaban en contra de la
justificará que se apodere de ella ... ¿quiere usted algún otro territorio?
Envíeme poderes para presentar un ultimátum por los varios millones que Constitución, que los liberales moderados, no se encontraban satisfe­
por concepto de atracos y daños personales debe México a nuestro pue­ chos, es decir, la inmensa mayoría de la nación mexicana no estaba de
blo ... ¿quiere usted los tránsitos por Tehuantepec? Diga a México. La natu­ acuerdo con la nueva Constitución, razón por la que se verificaron una
raleza ha colocado en tus dominios el camino más corto entre los dos océa­ serie de pronunciamientos en contra de la vigencia de la Constitución,
nos, tan necesarios para el comercio mundial. Tú no lo abres, ni permites que condujeron a que el 17 de diciembre el General Zuloaga pronuncia­
que otros lo abran para satisfacer las necesidades de la humanidad. No se
ra el Plan de Tacubaya, al que se adhirió el Presidente Comonfort el 19
te puede permitir jugar al perro del hortelano. Entréganos lo que pedimos,
de diciembre de 1857. La suerte estaba echada, los puros habrían, los
a cambio de los beneficios que nos proponemos conferirte, o sencillamente
puros habrían de enfrentar a la Nación mexicana, la clave del resultado
lo tomaremos.22
estaba en las alianzas internacionales.
Como puede apreciarse, al separarnos de la historia oficial, nos en­ Respecto de la Constitución de 1857, el título 1 establece un catálo­
contramos con un panorama más crudo de la realidad y una visión dis­ go de los derechos del hombre, acción que ha merecido el reconoci­
tinta de nuestras realidades, sin pretender justificar la unión del Estado miento general, termina la parte dogmática tres secciones destinadas a
y la iglesia, tampoco debemos olvidar que en su momento la religión se los mexicanos, a los extranjeros y a los ciudadanos mexicanos, destaca
utilizó como un factor de unidad nacional y de defensa frente al extran­ en la Constitución del 57, la separación entre la iglesia y el Estado.
jero, con lo expuesto simplemente quiero sostener que la vida nos mues­ La parte orgánica de la Constitución del 57 va del artículo 39 al ar­
tra cuando menos dos aspectos de un mismo fenómeno aun cuando nos tículo 128, en relación al concepto de soberanía cabe señalar que, se

queda claro que la gran pregunta que debemos formularnos es, ¿a substituye el concepto de Nación por el concepto del pueblo como titu­
lar de la soberanía con el propósito de hacerlo más preciso.
quién favorecieron nuestras distensiones y guerras civiles? Realmente la
Se mantiene la división de poderes en tres, sin embargo, a diferen­
forma de gobierno o la religión de Estado justificaron perder más de 2
cia de la Constitución de 24 que dividía el poder legislativo en dos Cá­
millones 400 mil km2 de territorio, con riquezas infinitamente superio­
maras, la Constitución del 57 depositó el poder en una sola Asamblea o
res a las que conservamos en los menos de dos millones de km2 de terri­
Cámara denominada Congreso de la Unión. La elección de diputados
torio que conservamos.
era indirecta en primer grado.
El 16 de octubre de 1855 Juan Álvarez convocó la conformación de
El Senado mexicano se reinstauró hasta 1874, el Poder ejecutivo se
un Congreso Constituyente con fundamento en el Plan de Ayuda ratifi­
depositaba en el Presidente de los Estados Unidos Mexicanos y su elec­
cado en Acapulco. ción era indirecta en primer grado y sus faltas temporales o absolutas
El Congreso se reunió en la Ciudad de México el 17 de febrero de las cubría el presidente en turno de la Suprema Corte de Justicia, aún
1856, su conformación se realizó fundamentalmente sobre la base del cuando en el segundo supuesto se tenía que proceder a efectuar una
partido liberal, donde los moderados predominaban sobre los puros. nueva elección.

22 CUEVAS Luis G. Citado por José Fuentes Mares. Juárez. los Estados Unidos y Europa, 23 TENA R.AMIREZ, Felipe, op. cit., p . 596.
Grijalbo, México 1991, p. 83. 24 Jbidem.
398 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO J. Matcos Santillán
-
399

De esta forma las diferencias con la Constitución de 24 son eviden­ 13.9. LEYES DE REFORMA,
tes, en virtud de que, la de 24 establecía la figura de vicepresidente y la SU TRASCENDENCIA E INFLUENCIA
de 57 no, otra diferencia es que la de 24, cuando establece como debe
EN EL RÉGIMEN JURÍDICO MEXICANO
ocuparse la presidencia provisional, indicaba que se formaba un triun­
virato en el que participaba el Presidente de la Corte y dos individuos La relación Iglesia-Estado en el México independiente se vio carac­
más, en tanto que, la de 57, como se ha dicho establecía como substitu­ terizada por un conjunto de enfrentamientos en diversos frentes.
to directo él y único al Presidente de la Suprema Corte. Desde el momento mismo de la independencia y con particular inte­
Una diferencia notable entre las Constituciones de 24 y la de 57 se rés se peleó por la educación, entendida ésta como el mecanismo por
encuentra en la composición de la Suprema Corte de Justicia, pues en excelencia para control ideológico de la sociedad y como fenómeno pa­
la primera se integraba por once ministros y un fiscal, en tanto que ralelo y complementario, adoctrinamiento que se daba en los templos.
en 57 eran once ministros propietarios, cuatro ministros supernumera­ Los momentos estelares de la lucha se dieron en 1834 con la vicepresi­
rios, un fiscal y un procurador general, como puede apreciarse se incre­ dencia de Valentín Gómez Farías y durante la vigencia de la Constitu­
mentan 4 ministros supernumerarios y la figura del Procurador General
ción de 1857 y de las Leyes de Reforma, sin que con ello se pretenda ol­
de la República.
vidar que el carácter laico o libre de la educación dio pié a grandes
Sin embargo, una de las mayores diferencias de la Constitución del 57,
debates en la época de Porfirio Díaz como presidente, durante el Cons­
en relación a los textos anteriores, es que va a establecer el control de la
tituyente de 1 7 y aún hoy en día el debate continúa.
constitucionalidad y el amparo en manos del poder judicial, lo que ge­
Si lo ideológico fue motivo de disputa, lo económico no lo fue me­
neró una interesantísima polémica entre el Diputado Ponciano Arriaga
nos, pues mediante la Ley Lerdo de 25 de junio de 1856 y con la Ley de
y el Diputado Ignacio Ramírez, el primero a favor del texto que se im­
Nacionalización de Bienes Eclesiásticos de 12 de julio de 1859 se limitó
puso, el segundo a favor del sistema que Otero impulsó en el Acta de
la propiedad del clero.
Reformas de 1847, donde había un control de la constitucionalidad
En un terreno que mezcla lo ideológico y lo económico encontra­
mixto, pues se entremezclaban el control del poder legislativo en unos
mos las Leyes de Reforma que buscan la secularización de algunas acti­
supuestos y en otros el control jurisdiccional.
vidades o sacramentos que tradicionalmente correspondían a la iglesia
Esta diferencia y el sistema de propiedad de corte liberal individua­
y que en ese momento de la Reforma, se transformaron en un acto civil,
lista que se estableció en el artículo 27 de la Constitución y que repre­
sentó la elevación de la Ley Lerdo a texto constitucional, son en mi opi­ como la Ley de Matrimonio Civil de 23 de julio de 1859.

nión los más graves errores de la historia jurídica de nuestro país, En mi opinión personal, el momento clave para el inicio del movi­

errores que hoy en día seguimos pagando, pues al establecerse que nin­ miento de Reforma lo encontramos en la expedición de la Ley de Desa­

guna corporación civil tenía capacidad de adquirir o poseer propieda­ mortización de Bienes de Manos Muertas de 25 de junio de 1856, cono­

des, a quienes se despojó de sus tierras fue a los municipios, a los pue­ cida por el nombre de su autor, Miguel Lerdo de tejada con el nombre
blos y particularmente a los pueblos indios, que equiparados a una de Ley Lerdo.
corporación civil por no tener títulos de propiedad individuales, perdie­ La finalidad de la Ley Lerdo no la buscaremos en las mil justifica­

ron sus tierras a favor de unos cuantos, a lo largo del porfirismo, lo que ciones que se escribieron desde el momento de su publicación y que se
generó el latifundismo, la revolución, el rezago agrario y la ruina de los siguen repitiendo hasta la fecha, recurriremos a la opinión de un distin­
indios mexicanos. guido liberal juarista, que llegó a ser Ministro de Relaciones Exteriores
Para desarticular cualquier tipo de defensa jurídica contra tales ex­ del gobierno del presidente Juárez, Don Manuel María de Zamacona
tremos, se concentró en la Corte, un poder federal generalmente sub­ quien nos ilustra sobre el tema cuando afirmó por la vía diplomática di­
ordinado a hombres como Porfirio Díaz, el control de la constituciona­ rigiéndose al encargado de negocios de México en Washington en 1861:
lidad.
A propósito de este asunto debo recomendar a Usted, que con toda la dis­
Negar los defectos de la Constitución del 57, es no querer entender
creción posible tome informes y los transmita a este ministerio sobre los
el origen del problema indígena en México. términos que sería practicable negociar con los banqueros y capitalistas de
400 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO J. Mateas Santillán
401
-

los Estados Unidos, un empréstito desde uno hasta diez millones sobre la zapatista de "la tierra es para quien la trabaja", sin embargo, en las con­
garantía de terrenos baldíos, o el derecho del gobierno en la empresa de diciones del México de 1856 la medida no puede ser más contraria.
Tehuantepec, o de los valores procedentes de la nacionalización ...25 Los indios trabajaban sus tierras comunalmente y los pueblos ha­
cían lo mismo con las tierras municipales, no obstante continuaban
La palabra de Zamacona es esclarecedora, la desamortización de
constituyendo corporaciones civiles que no podían mantener sus pro­
bienes de 1856 y la nacionalización del 59 tuvieron por finalidad adqui­
piedades y un aspecto aún más importante, la pobreza de las grandes
rir garantías para contratar empréstitos con el extranjero, la desamorti­
masas mexicanas les impedía acceder a las posibilidades de comprar
zación significó adicionalmente recursos para pagar las deudas contra­
bienes inmuebles; de esta forma la medida se encaminó a favorecer a
tadas con motivos de la revolución de Ayutla, para pagar la deuda
los extranjeros que tuviesen capitales para invertir donde los mexicanos
interna y muchas otras poderosas razones.
no podían.
Se generalizó entre la población mexicana la creencia que la Ley de
El artículo 5°. Es categórico para solucionar el problema de los te­
Desamortización de Bienes de Manos Muertas, se encaminó a despojar
rrenos de las comunidades indígenas y de los municipios:
al clero de sus bienes a fin de reactivar la economía de la época, lo cual
no es correcto si se atiende el texto del Artículo 1°. Artículo 5°.-Tanto las urbanas, como las rústicas que no estén arrenda­
das a la fecha de la publicación de esta ley, se adjudicarán al mejor postor,
Artículo 1 o.-Todas las fincas rústicas y urbanas que hoy tienen o admi­
en almoneda que se celebrará ante la primera autoridad política del
nistran como propietarios las corporaciones civiles o eclesiásticas de la Re­
partido.
pública, se adjudicarán en propiedad a los que las tienen arrendadas, por el
valor correspondiente a la renta que en la actualidad pagan, calculada Por el Artículo 5°. Se podían vender todos los bienes indígenas y
como rédito al seis por ciento anual. municipales al mejor postor, principio liberal que en una sociedad agra­
ria pre-capitalista como la mexicana de mediados del siglo XIX necesa­
El texto es claro, inconfundible, la medida menciona incluso prime­
riamente iba a conducir a una inexorable concentración de la riqueza
ro a las corporaciones civiles que a las religiosas; no hay error posible,
en manos de unos cuantos, acumulaciones llamadas latifundios.
no hay posibilidad que un hombre como Miguel Lerdo se hubiese equi­
Las excepciones del Artículo 8° fueron las siguientes:
vocado, la Ley Lerdo se dirigió contra los indios, contra los municipios
y contra la Iglesia, si el ataque se hubiese dirigido contra el clero, cual­ Artículo 8°.-Sólo se exceptúan de la enajenación que queda prevenida,
quier jurista mediano hubiese encontrado la forma que su impacto no los edificios destinados, inmediatamente y directamente al servicio u objeto
fuese a perjudicar al municipio ni a los indígenas, si alguna duda que­ del instituto de las corporaciones, aún cuando se arriende alguna parte no

da, el artículo 3° la disipa: separada de ellos, como los conventos, palacios, hospitales, hospicios, mer­
cados, casas de corrección y de beneficencia. Como parte de cada uno de
Artículo 3°.-Bajo el nombre de corporaciones religiosas de ambos sexos, dichos edificios podrá comprenderse en esta excepción una casa que esté uni­
cofradías y archicofradías, congregaciones, hermandades, parroquias, ayun­ da a ellos, y la habiten por razón de oficio, los que sirven al objeto de la ins­
tamientos, colegios, y en general todo establecimiento o fundación que ten­ titución, como las casas de los párrocos y de los capellanes de religiosas.
ga el carácter de duración perpetua o indefinida. De las propiedades pertenecientes a los ayuntamientos, se exceptuarán
también los edificios, ejidos y terrenos destinados exclusivamente al servi­
El término ayuntamiento nos aclara lo relativo a los terrenos comu­
cio público de las poblaciones a que pertenezcan.
nales municipales de que estaban dotados todos los pueblos desde la
época colonial y el término congregación puede entenderse en el senti­ Por ejido español se entendían las vías de paso de ganado Y los lu­
do de grupo religioso o de reducción o congregación de indios figura gares de recreo, en 1856 no se tenía el mismo concepto que en la actua­
colonial. lidad sobre los servicios públicos por lo que el impacto de la Ley Lerdo
La desamortización de bienes vista como una medida en la que los en el patrimonio municipal fue considerable, lo mismo diremos del pa­
arrendatarios tuvieran acceso a los bienes que trabajaban bien pudiera trimonio indígena.
ser considerada una medida revolucionaria, semejante a la perspectiva Por el Artículo 9°. Se estableció el término de tres meses para la ad­
judicación y re mat e , contando a partir de la publicación de la ley en la
25 ZAMACONA, Manuel María de, "La labor diplomática de D. Manuel ma. de Zamaco­
cabecera de partido, si en dicho plazo el inquilino no ejercía su dere­
na"', México, AHDM, SRE, México 1928, p. 154. cho, el Artículo 1 O i nd icaba que perdería su derecho a favor del suba-
402 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO Mateas Santillán
- J. 403

rrendatario o en su defecto de quien hiciere la denuncia, en los quince presas agrícolas industriales o mercantiles; todas las adjudicaciones se
días siguientes, en caso contrario se procedía a la adjudicación del bien asentarían en escritura pública y los escribanos deberían avisar directa­
por el sistema de almoneda pública al mejor postor. .<
mente al Ministerio de Hacienda de todos y cada uno de los movimien­
El Artículo 11 señalaba: tos que realizasen en la inteligencia de que si fallasen, se les aplicaría
Artículo 11°.-No promoviendo alguna corporación ante la misma auto­ una multa entre cien y doscientos pesos o cárcel a la primera, el doble a
ridad dentro del término de los tres meses el remate de las fincas no arren­ la segunda y suspensión de un año en la tercera.
dadas, si hubiere denunciante de ellas, se le aplicará la octava parte del El Artículo 30 señalaba:
precio, que para el efecto deberá exhibir de contado aquel en quien finque
Artículo 30.-Todos los juicios que ocurran sobre puntos relativos a la
el remate; quedando a reconocer el resto a favor de la corporación.
ejecución de esta ley, en cuanto envuelvan la necesidad de alguna declara­
En el Artículo 12 se indicaba el caso de cuando la adjudicación se ción previa para que desde luego pueda procederse a adjudicar o rematar
hiciese a favor del arrendatario, no se podía descontar ninguna canti­ las fincas, se sustanciarán verbalmente ante los jueces de primera instan­

dad por guantes, traspaso o mejoras; en tanto que cuando se adjudicase cia, cuyos fallos se ejecutarán, sin admitirse sobre ellos más recursos que el
de responsabilidad.
el bien al que subroga, pagaría de contado al arrendatario los guantes,
traspaso y mejoras, que la corporación le hubiese reconocido previa­ Lo expuesto nos demuestra el interés gubernamental por reactivar
mente a la ley. la economía mediante procedimientos que pudiéramos calificar como
En caso de remate, al mejor postor, se descontaría del precio de los sumarios.
impuestos, el pago para el arrendatario, siempre que le estuviese reco­ El impacto de la Ley Lerdo fue terrible, la gran mayoría del pueblo
nocido expresamente. de México no tenía recursos para invertir, los bienes de las comunida­
Por el Artículo ZO de la Ley Lerdo se estableció que los arrenda­ des indígenas y municipales quedaron a merced de los capitalistas inte­
mientos indefinidos se podían renovar a voluntad de los propietarios resados, en perjuicio de las grandes mayorías nacionales para mayor
cada tres años, por el Artículo 21 se especificó por los compradores gravedad, el Artículo 11 del Reglamento de la Ley de Desamortización
que adquirieron bienes con fUndamento en la Ley Lerdo podían enaje­ incluyó a las comunidades y parcialidades indígenas como sociedades
narlas libremente, así como dividirlas y venderlas según se estipula en civiles que no podían poseer tierras, lo que significó un verdadero cri­
el Artículo 22. men legal con el que las comunidades indígenas perdieron su personali­
Por el Artículo 24 se estipuló: dad para poseer sus tierras, pues nunca reclamaron individualmente lo
que les correspondía comunalmente, ni tuvieron la capacidad de defen­
Artículo 24.-Sin embargo de la hipoteca a que quedan afectadas las fin­
cas rematadas o adjudicadas por esta ley, nunca podrán volver en propie­ der sus derechos legalmente por lo que fueron despojadas y ante sus re­
dad a las corporaciones, quienes al ejercer sus acciones sobre aquéllas, sólo sistencia, aniquiladas.
podrán pedir el remate en almoneda al mejor postor, sin perjuicio de sus Los excesos de la Ley Lerdo llevaron a que el 1 7 de septiembre de
derechos personales contra el deudor. 1856, se indicara que los bienes nacionales no estaban incluidos en los
bienes desamortizables.
Con lo expuesto se restringía en forma absoluta la capacidad de
El amparo en 1857, no es sino reflejo de la corriente general. pues
comprar de las corporaciones a favor de personas físicas, argumento
el constituyente de 1856-57 sintetiza el sistema Otero en los Artículos
que se confirma en el Artículo 25:
101 y 102 de la Constitución promulgada en 1857, con ello, se derogó el
Artículo 25.-Desde ahora en adelante, ninguna corporación civil o ecle­ Artículo 23 del Acta de Reformas de 1847 mediante el cual una ley in­
siástica, cualquiera que sea su carácter, denominación u objeto, tendrá ca­ constitucional podía ser declarada nula con efectos generales.26 En el
pacidad legal para adquirir en propiedad o administrar por sí bienes raíces, ámbito agrario la tendencia fue semejante, puesto que en lugar de expe­
con la única excepción que expresa el artículo 8°, respecto de los edificios
dirse una disposición general que impidiera el despojo de los terrenos
destinados inmediatamente y directamente al servicio u objeto de la
indígenas, terrenos comunales, terrenos que les pertenecían cientos de
institución.

Se estableció un sistema en los Artículos 26, 27 y 28 a fin de que las 26 MATEOS SANTILLÁN, Juan José, "La verdadera fórmula Otero", Revista Jurídica Jalis­
corporaciones pudieran invertir en propiedades particulares o en em- ciense Universidad de Guadalajara, No. 3, septiembre-diciembre 1997, pp. 79-126.
404 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

años antes de la llegada de los españoles y que por obra del gobierno
'
��
EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateas Santillán

La guerra de Reforma significa mucho más que el enfrentamiento


405

emanado del Plan de Ayutla les fueron "desamortizados", equiparando a entre los liberales y los conservadores, encabezados por Benito Juárez y
las comunidades indígenas con las sociedades civiles, mercantiles y reli­ Miguel Miramón, la guerra de Reforma debe estudiarse como un esce­
giosas, sin embargo no hubo nunca ninguna disposición general, juris­ nario alterno de la guerra de sesión norteamericana, donde los intere­
diccional o administrativa que garantizase los derechos indígenas, sino ses europeos jugaron un papel decisivo.
unas cuantas resoluciones para que se repartiesen entre la comunidad Para estudiar la guerra de Reforma habrá que adicionar a las peri­
las tierras que les pertenecían y de esta forma ya no fueran considera­ pecias con sabor de epopeya que tuvo que enfrentar Juárez que le con­
dos corporaciones. dujeron a abandonar la Ciudad Capital para huir a Guanajuato, Guada­
El diputado constituyente Isidro Olvera presentó al congreso consti­
lajara, Colima y Manzanillo donde se embarcó el 11 de abril de 1858, el
tuyente el 7 de agosto de 1856 un proyecto de "Ley Orgánica sobre el
4 de mayo de 1858 arribó a la Ciudad de Veracruz, donde instaló su go­
Derecho de Propiedad" que intentaba limitar los excesos a que estaban
bierno y resistió el sitio de los conservadores.
llevando las adquisiciones exorbitantes de tierras a favor de unos cuan­
Lo que autores como Cué Canovas, Fuentes Mares, Marcela Terra­
tos, en virtud que la situación amenazaba la tranquilidad nacional y
zas y otros distinguidos historiadores de épocas relativamente recientes
"que es notoria la usurpación que han sufrido los pueblos de parte de
han aportado al estudio de la guerra de Reforma, es la vinculación de
varios propietarios, bien por la fuerza o por otras adquisiciones legales;
cada uno de los grupos contendientes que tuvo con las potencias de la
que esta usurpación ha sólido extenderse hasta el fundo legal y el agua
época, pues los conservadores solicitaron dinero a Europa por vía del
potable de las poblaciones"Y
Tratado Mont-Almonte.
La iniciativa de Isidro Olvera no prosperó y peor aún, el 5 de febre­
Sin intentar regatear méritos a los liberales de la Reforma, bien pu­
ro de 185 7 apareció publicado en la Constitución de esa fecha el si­
diéramos atribuir el éxito final de la contienda a la acción directa e in­
guiente texto del Artículo 27:
directa de los norteamericanos para preservar sus intereses, toda vez
La propiedad de las personas no puede ser ocupada sin su consentimiento, que Juárez se encontró sitiado en Veracruz entre las tropas del General
sino por causa de utilidad pública y previa indemnización. La ley determi­
Miguel Miramón y los Buques Marqués y Miramón de filiación conser­
nará la autoridad que deba hacer la expropiación y los requisitos con que
vadora, pero la intervención de la armada norteamericana el 6 de mar­
ésta haya de verificarse.
Ninguna corporación civil o eclesiástica, cualquiera que sea su carácter, zo de 1860, en el fondeadero de Antón Lizardo decidió la suerte de la
denominación u objeto, tendrá capacidad legal para adquirir en propiedad guerra de Reforma, consideración aceptada por la mayoría de los histo­
o administrar por sí bienes raíces, con la única excepción de los edificios riadores contemporáneos.
destinados inmediata y directamente al servicio u objeto de la institución. Cuando el Wave, el Indianola y el Saratoga detienen a los barcos
conservadores, capturan a su tripulación y la envían a Nuevo Orleáns, los
El artículo 27 de la Constitución de 185 7 convalida la Ley Lerdo y
conservadores pelearon y perdieron ante las tropas norteamericanas.
sus efectos, razón que da lugar al levantamiento general del país, enca­
El apoyo indirecto consistió en recursos económicos y pertrechos
bezado por los conservadores y apoyado por el clero y los despojados
por la Ley Lerdo, lo que dio pie a la Guerra de Reforma en cuyo ínter, de guerra para cambiar definitivamente el rumbo de la historia de
México.
el 28 de enero de 1858, el presidente Félix Zuluaga promulgó una ley
que anula la Ley Lerdo. Si los conservadores recurrieron a Europa, los liberales negociaron

El enfrentamiento de los conservadores, la derogación de la Ley con Estados Unidos el Tratado Me. Lane-Ocampo.

Lerdo y de la Constitución de 1857, condujeron a que el 12 de julio de El Tratado Me. Lane-Ocampo decidió la surte de la guerra de Refor­

1859 el presidente Juárez manifestara nacionalizados los bienes del cle­ ma según hemos relatado, su texto sólo es posible entenderlo en el con­

ro para que entraran al dominio de la Nación. texto de la extrema necesidad de quienes pensaban que la única salida
viable para la crisis crónica que ha vivido México desde 1821 es la de
cambiar nuestra soberanía por la condición de protectorado de alguna
27 ÜLVERA. Isid ro, Derechos del Pueblo mexicano, México a través de sus constituciones,
3". ed., México, Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, México 1985, Tomo IV, potencia, aspiración de liberales y conservadores que hubo de fracasar
pp. 27-42. en el momento de elegir a la potencia protectora.
406 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO -J. Mateas Santillán 407

Del Tratado de Me. Lane-Ocampo destaca el artículo 1 o por medio ble, sin embargo es necesario hacer patente la creciente presencia de
del cual se ampliaba el artículo 8 del Tratado de la Mesilla y se cedía a los intereses norteamericanos en evolución de la vida de México; para
perpetuidad a los Estados Unidos, sus conciudadanos y bienes, el dere­ finalizar este punto, deseamos reiterar un factor de máxima importan­
cho de tránsito sobre el Istmo de Tehuantepec de uno a otro mar por cia para la comprensión imparcial de la historia de México, el triunfo
cualquier camino existente o por existir. de las armas liberales en la guerra de Reforma se fundó en el apoyo de
Por el Artículo 6°, México concedía paso a los Estados Unidos para los Estados Unidos de América.
sus tropas, abastos y pertrechos militares sobre Tehuantepec; de Guay­ Lo interesante de resaltar el apoyo norteamericano para los libera­
mas a Nogales u otro punto que conviniera a los Estados Unidos en su les estriba en que, la búsqueda de apoyo conservador en Europa como
territorio, a la mitad del precio ordinario. una medida compensatoria.
En el Artículo 7°, México cedía el derecho de vía o tránsito a través La mayor parte de las leyes de Reforma las expidió el presidente
de territorio nacional de Camargo y Matamoros en Tamaulipas, por vía Juárez en Veracruz,28 y la ley de secularización de hospitales, también
de Monterrey, hasta Mazatlán en Sinaloa; de Nogales u otro punto a la ley sobre extinción de comunidades religiosas las expidió en la Ciu­
Guaymas por cualquier vía que existiera o llegase a existir. dad de México.
Por el Artículo 2°, los Estados Unidos ratificaban su derecho a pro­ Las leyes de Reforma se componen fundamentalmente de las siguien­
teger el Istmo de Tehuantepec, derecho garantizado por el Tratado de tes disposiciones:
La Mesilla pero con una redacción diferente, que facultaba a los Esta­ • Manifiesto del Gobierno Constitucional, a la Nación, de 7 de julio
dos Unidos a intervenir en la protección del Istmo sin necesidad del de 1859.
permiso mexicano, cuestión contenida en el artículo 5° del Tratado que • Ley de Nacionalización de los Bienes eclesiásticos de 12 de julio
literalmente señalaba: de 1859.
• Ley de Matrimonio Civil de 23 de julio de 1859.
Sin embargo, en el caso excepcional de peligro imprevisto o inminente para
• Ley Orgánica del Registro Civil de 28 de julio de 1859.
la vida o las propiedades de los ciudadanos de los Estados Unidos, quedan
autorizadas las fuerzas militares de dicha República para obrar en protec­ • Ley sobre el estado civil de las personas de 28 de julio de 1859.
ción de aquellas, sin haber obtenido el consentimiento previo, debiendo re­ • Decreto -que- Declara que cesa toda intervención del clero en
tirarse dichas fuerzas al cesar la necesidad de su empleo. los cementerios y camposantos de 31 e julio de 1859.
• Decreto -que- Declara que días deben tenerse como festivos y
Afortunadamente para México no hay necesidad de entrar al estudio
prohíbe la asistencia oficial a las funciones de la Iglesia de 11 de
de la constitucionalidad del Tratado Me. Lane-Ocampo, pues el tratado
agosto de 1859.
fue discutido en el Senado de los Estado Unidos en dos ocasiones, la
• Ley sobre libertad de Cultos de 9 de diciembre de 1860.
primera el 28 de febrero de 1860, la segunda el 31 de mayo, sesión en
• Decreto - Quedan secularizados los hospitales y establecimientos
la que fue desechado, las dos principales consideraciones para su re­
de beneficencia de 2 de febrero de 1861.
chazo fueron que por un lado, el precario equilibrio Norte Sur se vería
• Decreto - Se extinguen en toda la República las comunidades de
afectado, pues el sur se favorecería ampliamente con los derechos de
religiosos de 26 de febrero de 1863.
paso adquiridos, en tanto que el Norte vería en peligro sus intereses en
virtud que un eventual libre comercio entre México y Europa dañaría Como puede apreciarse, el espíritu de las leyes de Reforma trascen­
seriamente sus exportaciones. El segundo problema fue el racismo, dió la vigencia de la Constitución de 57 y perneó con sus principios al
dado que los norteamericanos del Sur consideraban a los mexicanos constitucionalismo mexicano del siglo XX, aún cuando cabe señalar que
como una raza inferior. en la última década del siglo XX se inició el reconocimiento jurídico de

No analizaremos el proyecto de dividir México en una Confedera­ las Iglesias y otras medidas que rompen, si se quiere en forma leve, los
ción de Estados de Norte y del Sur, ni tampoco continua remos narran­ férreos principios que establecieron las leyes de Reforma.
do las constantes intromisiones norteamericanas en México no obstante
la guerra de sesión norteamericana, en razón de que su número y am- TENA RAMIREz.
28 Felipe, op. cit., p. 633.
plitud implican una investigac ión diferente Y un espacio muy considera-
L
\ ����---------- ..............__________________________________________
408 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateos Santillán 409

13.10. EL CONGRESO CONSTITUYENTE DE 1916-1917


El embajador mexicano reconocido oficialmente por Washington

13.10.1. ANTECEDENTES r� era Ignacio Mariscal, ministro de Lerdo, sin embargo, después de inten­
sa comunicación informa al Canciller Vallarta, porfirista, que si se cum­
·�
A la muerte de Juárez accedió a la presidencia Sebastián Lerdo de pliera antes del 4 de marzo, con el pago mexicano, se evitarían serios
Tejada, quien concluido su período de gobierno fue reelecto, lo que ge­ riesgos que amenazaban la independencia e integridad de nuestro país,
neró la inconformidad de un sector importante del país y su derroca­ pues una contienda con México serviría como catalizador de las tensio­
miento por vía del Plan de Tuxtepec por el general Porfirio Díaz. Lerdo nes políticas norteamericanas.
de Tejada no tuvo problemas para ser reconocido por los Estados Uni­ Ignacio L. Vallarta declara al gobierno de los Estados Unidos por
dos, sin embargo, Díaz tuvo que pagar un alto costo. conducto de su embajador Foster, que México acepta los fallos de la co­
Nos referiremos al reconocimiento de Díaz por los Estados Unidos, misión de reclamaciones en todos sus puntos.
en virtud de que años más tarde, los convenios de Bucareli serán el pago Se comisionó a José María Mata y a Ciro Tagle, para que pagaran
que Obregón deba ofrecer a los Estados Unidos por su reconocimiento. en Washington los 300 mil pesos que México debía, el pago sería a
En noviembre de 1876 Porfirio Díaz entró triunfante en la Ciudad nombre de la República y no del Gobierno.
de México e inmediatamente convocó a la oligarquía mexicana y a los La cuestión del reconocimiento de Díaz nos ofrece una valiosa lec­
representantes del capital europeo para obtener un préstamo por 500
ción sobre como los políticos de Washington suelen influir en nuestro país
mil pesos y de esta forma pagar la "deuda americana" cuyo primer
para conseguir propósitos más allá del derecho internacional, en 1877,
abono, después del fallo de la Comisión Mixta, se debería hacer antes
además de los pagos, los Estados Unidos deseaban alejar de la frontera
del 15 de marzo de 1877 (la Comisión falló a favor de los Estados Uni­
a Juan N. Cortina, el nombramiento de un jefe militar de renombre, con
dos 4 millones 75 mil pesos).
fuerzas suficientes, para en combinación con su homólogo norteameri­
Porfirio Díaz tuvo que enfrentar graves dificultades para lograr el
cano, establecer medidas para controlar el contrabando, el abigeato, las
préstamo voluntario que requería, al no reunir la cantidad necesaria
creó un impuesto general extraordinario sobre todos los capitales supe­ incursiones bárbaras etc. Hoy en día Clinton o Bush emplean el narco­

riores a cien pesos, por única ocasión. tráfico o la deuda externa para justificar sus intromisiones. 30
De Díaz, recordaremos sus paradojas, pues su bandera para acce­ Para junio de 1877 el gobierno de Díaz fue reconocido prácticamen­
der al poder fue la "no reelección" y después ocupó la presidencia por te en todo el mundo, en esas circunstancias es el gobierno de los Esta­
más de 30 años, criticó severamente a Lerdo por los impuestos extraor­ dos Unidos el único que no le ha otorgado el suyo, en ese contexto el
dinarios, y él los impuso más altos, como puede apreciarse por este se­ pensamiento de Vallarta es categórico cuando expresa:
gundo caso, los gobernantes mexicanos de fines del siglo XIX preferían
...cree el gobierno de la República que es indecoroso solicitar como gracia
perder el consenso de sus comitentes, que enfrentar el enojo de los un reconocimiento que se le debe por justicia.31
norteamericanos.
Ignacio L. Vallarta, Secretario de Relaciones Exteriores de Díaz, in­ Las palabras de Vallarta nos llevan a una comparación involunta­
tenta que algunos bancos le confieran un préstamo, sin embargo, no lo­ ria, la diferencia entre la diplomacia mexicana del porfirismo y la de
gra que esto suceda sino hasta que, recurre a Antonio Escalante, quien Álvaro Obregón o la de Zedilla o Fox, Porfirio Díaz logró su reconoci­
reúne 200 mil pesos.29 miento en base al esfuerzo tesorero y talentoso de hombres como Igna­
En tanto Díaz sufre por conseguir el dinero para el pago del abono, cio L. Vallarta, del papel de los diplomáticos posteriores, es notoria su
el embajador de los Estados Unidos en México, John W. Foster, declara docilidad manifiesta al grado de modificar el papel de México ante los
que no reconoce otro gobierno que el de Lerdo. La opinión de Foster Estados Unidos, que ha ido perdiendo la presencia que un día tuvo, no
fue respaldada por el Departamento de estado norteamericano que con­ obstante que siempre nuestra independencia y soberanía han estado en
sideró prematura un reconocimiento oficial en esos momentos. juego.

29Cosio VtLLEGAS, Daniel. Historia moderna de México, El Porfiriato, Hermes, Méxi­


3° Cfr. Periódico La Jornada de 6 de mayo de 2001. primera plana.
co, 1963, vol. S, p. 4. 31 VALLARTA, L. Ignacio citado por Cosio VILLEGAS, Daniel, op. cit., p. 34.
410 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateos Santillán 411

Antes de continuar es importante recordar que antes de la Revolu­ Problema paralelo en una sociedad agraria, desgarrada por cons­
ción Mexicana, nuestro país era eminentemente agrario, de suerte que tantes guerras civiles e invasiones extrajeras desde su nacimiento era la

la riqueza se concentraba en la tierra, como complemento, la plata pri­ falta de recursos, y es claro que en una sociedad agraria, como la mexi­
mero y después el petróleo, fueron los factores sobre los que se desarro­ cana del siglo XIX, la riqueza está en la tierra, así como en una sociedad

lló la economía de nuestro país. dependiente de una metrópoli neocolonialista la riqueza se encuentra
De esta forma el análisis de los antecedentes de la Constitución de 1917 íntimamente vinculada a los intereses internacionales hegemónicos.
y en consecuencia lógica, del movimiento que le generó se encuentran De esta forma el Artículo 27 Constitucional en sus versiones de 1857
vinculados como todo en la vida de México, al juego de los factores in­ y 1917 tuvieron finalidades contrapuestas y en consecuencia sus efectos
ternos de poder y su relación con los factores geopolíticos o externos, internacionales fueron diferentes. El artículo 27 en la Constitución de

que generalmente gravitan con más peso en el ánimo de nuestros go­ 1857, obedece a una lógica liberal clásica en una sociedad pre-capitalis­

bernantes al momento de tomar decisiones. ta, en tanto que en 17 sus rasgos sociales son inequívocos.

Dentro de los factores internos que generaron un escenario sociopo­ Como antecedente íntimamente vinculado al factor agrario encon­

lítico de crisis extrema, que creó el clima propicio para que explotara la tramos las políticas liberales en materia de colonización, cuestiones que
en conjunto con las Leyes de Reforma nos explicaron las circunstancias
revolución mexicana, encontramos la situación del campo, cuyos efec­
de la revolución de 191 O.
tos o manifestaciones llenan nuestros libros de texto, y de cuya veraci­
El 20 de julio de 1863 se expidió la Ley Reglamentaria del artícu­
dad existen pocas objeciones, no obstante, donde sí diferimos de las
lo 72, fracción XXIV de la Constitución del 57 dictada por el presidente
versiones oficialistas es en las causas, pues si bien es cierto que, el lati­
Juárez, llamada "Ley de ocupación y Enajenación de Terrenos Baldíos",
fundismo improductivo generó la concentración excesiva de la riqueza
mediante la cual se definió como baldíos "todos los terrenos de la Repú­
y en consecuencia la extrema pobreza de las mayorías, también es cier­
blica que no hayan sido destinados a un uso público por la autoridad fa­
to que, el origen del problema se encuentra en la Ley Lerdo, pues no
cultada para ello por la ley, ni cedidos por la misma a título oneroso o
debemos olvidar que todos los municipios mexicanos anteriores a 1857,
lucrativo a individuo o corporación autorizada para adquirirlos."
contaban con terrenos comunales aledaños llamados "ejidos", destina­
Cuando los norteamericanos ocuparon California y Nuevo México,
dos a la recreación y al paso del ganado, "dehesas" terrenos comunales
en 1848, descubrieron que sus propietarios no tenían documentos que
de pastoreo y "propios" terrenos para ser explotados en beneficio del
acreditaran su propiedad, por lo que legalizaron sus despojos requirien­
ayuntamiento,32 el conjunto de los bienes "municipales" era considerable. do a los mexicanos sus papeles para acreditar su propiedad o el aban­
Las propiedades de los grupos indígenas también eran considera­
dono de sus tierras, con esta acción se expulsó a miles de mexicanos de
bles, bien fuera porque, las habían conservado desde etapas anteriores sus tierras en California y Nuevo México, años después, la definición
a la conquista española, bien fuera que las hubieran recibido por el sis­ juarista de baldío sigue los mismos pasos norteamericanos, pues el con­
tema de congregaciones o reducciones, calculándose que para los pri­ cepto juarista de terreno baldío, incluirá en su definición a todas aque­
meros años de la independencia 18 millones de hectáreas cuadradas llas propiedades que se encontraron en manos indígenas antes de la
eran propiedad comunal indígena, la extensión de los terrenos naciona­ conquista y en manos de gente, que, no obstante poseer sus terrenos
les y baldíos también era significativo en virtud de la baja densidad po­ por generaciones, no había obtenido títulos sobre su propiedad.
blacional en el México del siglo XIX, razones que a la postre nos condu­ Los habitantes de la República tenían derecho para denunciar hasta
cirían a soluciones no necesariamente ideales. 2500 hectáreas de terrenos baldíos y por la extensión las denuncias se
El problema de la falta de población en el siglo XIX intentó ser supe­ hicieron principalmente en el Norte, sin embargo, es el artículo 9o de la
rado por vía del capital humano extranjero, mediante políticas de colo­ Ley de Colonización de Juárez la base sobre si habrían de edificarse las
nización que, indefectiblemente nos llevaron a fracasos de extrema gra­ fabulosas fortunas porfiristas, en virtud de que nadie podía oponerse a
vedad, como el caso de Texas. que se deslindaran sus terrenos y se verificara la legalidad de sus títulos.
Es menester señalar que, con el fin de dotar a algunos grupos indí-
. . . . genas o mejor dicho de despojarlos ' se emitieron algunas circulares en
32MARGADANT S Guillermo Floris ' Introducctón a la Htstona del derecho mextcano,
s•. ed .. Eofinge. Mé ; ico 1982, p. 71. el ocntido de que oe expidiecan esccitucao paca legaUzac la poseoión de

1 ..
412 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateo; Santillán 413

algunos grupos indígenas, principio que por su relatividad, más bien El problema central de las compañías deslindadoras radicó en la
significó una excepción a la aplicación general de la norma. forma de pago que se encontraba en el mismo artículo 1 o del decreto
El 3 1 de mayo de 1 875 se expidió un decreto sobre colonización que nos ocupa en su fracción VI que señalaba:
mediante el cual se autorizó al ejecutivo para que provisionalmente, en
VI. La de que por habilitar un terreno baldío, con los requisitos que exige la
tanto se expidiera la nueva ley de la materia, iniciase la colonización
fracción anterior, obtenga el que llene estos requisitos, la tercera parte de
por medio de compañías deslindadoras, compañías de capital privado. dicho terreno o de su valor, siempre que lo haga con la debida autorización.
Si atendemos la letra del artículo 1 o de dicho decreto, es claro que
los mexicanos de la segunda mitad del siglo XIX intentaban poblarMéxi­ La forma de pago fue terrible, pues el Artículo so del mismo ordena-
miento hablaba de obtener terrenos colonizables y el Artículo 9° de la
co con el sistema que siglos antes dio tantos frutos en Norteamérica,
Ley de Baldíos de 1 863, comentado anteriormente, les autorizaba para
donde empresas como la Compañía de Virginia o la de la bahía e Mas­
deslindar terrenos ocupados y verificar la legalidad de los títulos de
sachussets colonizaron y formaron verdaderas colonias en la época an­
propiedad, con lo que las compañías deslindadoras interpretaron que el
terior a la Independencia, y cuyo éxito fue tal, que sirvió de base para la
decreto de 3 1 de mayo de 1 875 les facultaba para revisar las tierras
subsecuente expansión norteamericana.
ocupadas con anterioridad, sobre todo las que les gustaban, y declarar
Estas compañías mexicanas tenían como objeto colonizar los in­
baldíos los terrenos cuyos títulos no satisfacían los requisitos de ley a
mensos terrenos baldíos mexicanos, la finalidad de dichas compañías se
los ojos de las compañías deslindadoras, quienes declaraban baldío el
definió en el Artículo 1 o del que a continuación reproducimos sus frac­
rancho o la hacienda que les interesaba e inmediatamente reclamaban
ciones I y III:
la tercera parte para venderla a los ricos de la región.
l. La de otorgar a las empresas: una subvención por familia establecida Los beneficios obtenidos por las compañías deslindadoras fueron
u otra menor por familia desembarcada en algún puerto: Anticipo con un enormes, lo mismo puede decirse de las ganancias obtenidas por los
rédito equitativo, hasta de un cincuenta por ciento de dicha subvención grandes terratenientes que se apoderaron de los terrenos baldíos o no.
venta a largo plazo y módico precio pagadero en abonos anuales, de terre­ Tal es el efecto de las imitaciones extralógica y del desconocimiento
nos colonizables, previa medición, deslinde y avalúo: prima por familia in­ de la historia; primero, Texas, después, las compañías deslindadoras.
migrante: exención de derechos de puerto a toda embarcación que trans­ El 1 5 de diciembre de 1 883 se promulgó el decreto de la Ley de Co­
porte a la república diez o más familias de la raza indígena establecida en
lonización esperada desde el año de 1 8 75, que varió muy poco el conte­
las colonias de inmigrantes: prima por familia mexicana establecida en las
nido del decreto de esa fecha.
colonias de la frontera.
La Ley de Colonización de 1 883 estableció en su Artículo 1 o la facul­
III. La de otorgar a los colonos: la naturalización mexicana y la ciudada­
tad del ejecutivo para deslindar, mediar, fraccionar y valuar los terre­
nía en su caso a los naturalizados: suplemento de gastos de transporte y de
nos baldíos o en propiedad nacional que hubiere en la República, con el
subsistencia hasta un año después de establecidos, de útiles de labranza y
de materiales de construcción para sus habitaciones: adquisición en venta a fin de obtener terrenos para establecer colonias, el límite máximo de la
bajo precio, pagadero a largo plazo por abonos anuales, comenzando a ha­ adjudicación de terrenos para un individuo serían 2500 has. Y podían
cerlo desde que termine el segundo año de establecidos, de una extensión ser cedidos a colonos extranjeros o nacionales en tres posibilidades:
determinada de terreno para cultivo y para casa: exención del servicio mili­ l. Venta al precio del avalúo, en abonos pagaderos a 1 0 años con
tar y de toda clase de contribuciones, excepto las municipales; de toda clase un año de gracia.
de derechos de importación e interiores a los víveres, instrumentos de la­ 2. Venta al contado o en plazo menor al anterior.
branza, herramientas, máquinas, enseres, materiales de construcción para 3. A título gratuito (hasta 1 00 has.) en cuyo caso el título de propie­
habitaciones, muebles de uso y animales de trabajo, de cría o de raza, con dad se le expediría después de haber sembrado más de 1 O% du­
destino a las colonias, y exención también personal e intransmisible de los de­ rante 5 años consecutivos.
rechos de exportación a los frutos que cosechen: correspondencia franca
de porte con su país natal o antigua residencia, por conducto del Ministerio de A los colonos se les daban facilidades y exención de impuestos por
Relaciones, o por medio de sellos especiales; premios y protección especial 10 años.
por la introducción de un nuevo cultivo o industria. Por el Artículo 12, l os inmigrantes extranjeros que acudiesen aMé­
xico con fundamento en la Ley d e Colonización tenían la opción de con-
414 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO J. Mateus Santillán
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415

servar su nacionalidad o aceptar la mexicana, no obstante en ambos ca­ El anterior precepto jurídico significa una verdadera contradicción
sos quedaban sujetos a las decisiones de los tribunales mexicanos en relación al espíritu de las leyes de colonización, pues si éstas tuvie­
(Artículo 13). ron una precaria justificación para elevar la productividad mexicana, el
Las compañías deslindadoras extranjeras serían consideradas como Artículo 7° rompe lo anterior, lo mismo que el Artículo 8° que legaliza
mexicanas (Artículo 26) y siempre deberían contar con domicilio y re­ las enajenaciones de las compañías deslindadoras que se hicieron en
presentantes con amplios poderes en México. demasía, agregándose "ni la nación podrá en ningún tiempo reivindicar
los terrenos así enajenados, por sólo esta circunstancia" con lo que se pre­
13.10.2. LA LEY SOBRE OCUPACIÓN tendió evitar el desmembramiento posterior de los latifundios que se eri­
Y ENAJENACIÓN DE TERRENOS BALDÍOS gieron de manera tan fraudulenta.
DE PORFIRIO DÍAZ El Artículo 1 oo señalaba que las demasías y las excedencias así
como, los terrenos baldíos en posesión de una persona podían ser ad­
El 26 de marzo de 1894 Porfirio Díaz expidió su Ley sobre ocupa­
quiridos por denuncia o por composición, esta última si la posesión era
ción y enajenación de terrenos baldíos, en la cual mediante al Artículo 1o de 20 años o más, composición tan típica del México-novohispano.
dividía los terrenos nacionales bajo la siguiente clasificación: Por el Artículo 42 los poseedores de demasías gozaban de una reba­
l. Terrenos baldíos. ja del 66% en el precio de su terreno si querían legalizado, y los de ex­
11. Demasías. cedencias y baldíos con más de 20 años de posesión del 50% siempre y
111. Excedencias. cuando contaran con título traslativo de dominio, lo cual se extendió
IV. Terrenos nacionales. por un plazo de un año (Artículo 43) después del cual, las demasías, ex­

En el Artículo 2° se retoma la definición de baldío emitida en tiem­ cedencias y baldíos fueron denunciables.

pos de Juárez, se definen las demasías como los terrenos en exceso den­ Por el Artículo 45 se estableció el "gran registro de la propiedad en

tro de una propiedad con título primordial con límites señalados en el la República", registro que sería público y la inscripción voluntaria, sin

título pero confundido en su totalidad con la extensión titulada. Exce­ embargo, todas las propiedades inscritas serían consideradas como

dencias eran los terrenos poseídos por 20 años o más, fuera de los lin­ "perfectas, irrevocables y exentas de toda revisión".

deros que señala el título primordial. De la misma forma se reguló el funcionamiento del registro y se

En el Artículo so se declara que son nacionales y baldíos todos aque- mantuvo la prohibición e incapacidad jurídica de las comunidades y
corporaciones civiles para poseer bienes raíces.
llos terrenos que no hayan sido legalmente enajenados; así como aquellos
que, una vez denunciados fueron abandonados.
13.10.3. E L CAMPO Y LA REVOLUCIÓN DE 1910
Con el Artículo 6° de la Ley de Díaz, se facultó a todo habitante de
la República, mayor de edad, para denunciar terrenos baldíos, demasías En puntos anteriores observamos como la legislación mexicana a
y excedencias en cualquier parte del territorio Nacional. partir de 1856, se orientó a favorecer los intereses hegemónicos trasna­
El Artículo 7o nos demuestra que una vez acaparados los terrenos cionales y nacionales.
mexicanos en unas cuantas manos, la responsabilidad de ocuparlos, sem­ Es notorio que, en la medida que el capitalismo norteamericano se
brarlos y en general hacerlos productivos se hizo contraria a los intere­ fortalecía, sus intereses económicos se incrementaban en su zona de
ses de la burguesía criolla, razón por la cual simplemente se declaró: máxima seguridad, México, sin embargo, las inversiones extranjeras no
patrocinaron un desarrollo análogo al de los países avanzados y nuestro
Artículo 7°. Cesa la obligación hasta ahora impuesta, a los propietarios y
país continuó como una economía agraria dependiente, con un inci­
poseedores de terrenos baldíos de tenerlos poblados, acotados y cultivados;
y los individuos que no hubieren cumplido las obligaciones que a este res­
piente desarrollo industrial de tipo maquilador.
pecto han impuesto las leyes anteriores a la presente quedan exentos de Las condiciones sociales propiciadas por la legislación agraria de
toda pena, sin necesidad de declaración especial en cada caso y sin que la corte liberal, condujeron al campo mexicano a una situación extrema­
nación pueda en lo futuro sujetar a inquisición, revisión o composición los damente difícil; pues por un lado los campesinos del centro y sur del
títulos ya expedidos, ni mucho menos reivindicar los terrenos que éstos, por país se habían depauperado por la pérdida de sus tierras mediante los
la falta de población, cultivo o acotamiento. sistemas que describimos anteriormente, y por otro lado nuestro país
416 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO J. Mateos Santillán
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417

fue teatro, una vez más, de la rivalidad económi ca europeo-norteame­ poderosas fuerzas cuya oposición despertó fuera del país: las de importan­
ricana. tes grupos económicos en los Estados Unidos. En su esfuerzo por detener lo
El régimen de Porfirio Díaz fue un aliado incondicional de los gran­ que llegó a considerar como una invasión de inversionistas norteamerica­
des terratenientes, lo cual se hace evidente con su legislación agraria, nos, Díaz comenzó a volverse hacia las potencias europeas, invitándolas a
invertir en su país y a desafiar en él la supremacía norteamericana. Cuando
las comunidades indígenas y los pueblos perdieron sus tierras por diver­
esta invitación fue atendida se convirtió en uno de los principales escena­
sos procedimientos legaloides ante unos cuantos individuos que concen­
rios de la rivalidad europeo norteamericana en América Latina.
traron la riqueza en unas cuantas manos.
Si Díaz esperaba fortalecer su propia autoridad al desafiar la influencia
El problema de las compañías deslindadoras se agravó cuando a
norteamericana, cometió un gran error de cálculo. Los intereses norteame­
partir de 1880, el gobierno mexicano inicia una campaña constante para ricanos, al sentirse agredidos, le retiraron su apoyo y comenzaron a buscar
la construcción de vías férreas, de esta forma, terrenos otrora de poco un aliado más amable entre sus enemigos. Al provocar el resentimiento
valor, se transformaron en regiones con un altísimo valor comercial que norteamericano antes de obtener apoyo suficiente entre los europeos para
despertó la codicia general, en perjuicio de los dueños inmemoriales de contrarrestar sus efectos negativos, Díaz puso en marcha otro proceso que
esos parajes que fueron desposeídos por las compañías deslindadoras o a la larga le costaría caro. 33

por los grandes hacendados, que denunciaron aquellas tierras como


El principal inversionista europeo en México durante el siglo XIX fue
baldíos en virtud de que, sus dueños no tenían títulos primordiales o
Inglaterra, tal y como lo visualizara Jefferson un siglo antes, sin embar­
vendieron por una miseria sus tierras.
go, a fines del siglo XIX y principios del XX, la cuestión estaba a punto de
Parte significativa de esas compañías deslindadoras eran extranje­
revertirse y la postura del presidente Díaz le enfrentaría a los intereses
ras, concretamente norteamericanas, con lo que acapararon una terce­
norteamericanos.
ra parte de todos los terrenos que deslindaron, lo que les produjo gran­
En opinión de Katz el ejército mexicano del porfirismo era muy dé-
des beneficios, aun cuando la política de colonización del siglo XIX deba
bil en virtud de que Porfirio Díaz:
calificarse como un gran fracaso.
Es fácil percibir el desarrollo norteamericano en base a un adecua­ En vista de la larga historia de pronunciamientos militares temía, evidente­
mente, más al ejército que a los levantamientos populares.34
do proceso de colonización iniciado a partir del siglo XVII y que en siglo
XIX les sirve para poblar aceleradamente los terrenos que conquistaron La opinión de Katz nos aporta una verdad relativa, pues si bien es
en 1848, decimos que es fácil percibir la colonización por el número de cierto, la historia del siglo XIX nos muestra una constante lucha entre
colonos y la composición étnica de la población, sin embargo en el caso fracciones del ejército, también es menester observar que éstas se die­
mexicano el fenómeno es muy diferente, el número de colonos extranje­ ron básicamente en la etapa bipartidista, cuando México fue teatro de
ros que inmigraron al país apenas es percibible, en cambio el proceso las luchas hegemónicas entre Europa y los Estados Unidos. Después de
de acumulación de riqueza nacional, en aquellos momentos en la tierra, la salida de las tropas francesas de México por convenio con Estados
es notorio. Unidos, este último país reivindica su hegemonía en México y si no se
La acumulación de riquezas en manos de unos cuantos no fue un anexó su territorio fue porque así lo consideró más oportuno, sin em­
fenómeno exclusivamente económico, también puede percibirse la acu­ bargo, la falta de un ejército importante en México debe atribuirse más
mulación de poder político en forma paralela, el federalismo pleno al impacto que significaría para los Estados Unidos ser vecino de una
de 1824, pierde paulatinamente sus características en la medida que potencia militar que pudiese reclamar para sí, los derechos históricos
avanza el porfirismo, al grado que la soberanía estatal se transforma en que le corresponden.
una mera ficción, lo mismo que la autonomía municipal, con la figura La causa del derrocamiento de Santa Ana en 1854, fue su interés
de los jefes políticos y la imposición de presidentes municipales a capri­ por conformar un gran ejército, esa fue la última ocasión que México
cho de los caciques. intentó edificar un medio que defendiera su soberanía. Porfirio Díaz
�:!
A las causas internas de malestar habrá que sumar los aspectos ex­ -��:. nunca intentó construir un ejército que significase riesgo para los inte-
ternos, Friedrich Katz sostiene después de una meticulosa investigación:

El régimen de Díaz no fue derrocado únicamente por las múltiples fuerzas 33 KATZ, Friedrich, La guerra secreta en México, 7". Reimp., Era, México 1991, p. 40.
cuya hostilidad suscitó dentro de México, sino también debido a las muy 34 ldem p. 47.
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN J. Mateas Santillán
418 EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - 419

reses norteamericanos y ésta fue una arma de dos filos, pues si bien es La Ley del petróleo de 1901 cometió el mismo error que la Ley de
cierto gobernó durante más de treinta años sin importunar a los nortea­ población coahuiltexana de 1825, pues estableció que las franquicias
mericanos, en el momento que intentó contraponerse a su proceso de petroleras durarían 1 O años, que si hacemos cuentas se vencerían
expansión económica, no tuvo elementos de defensa, lo cual dejó en cla­ en 1911. Y sucedió algo parecido a lo de Texas, solo que en lugar de
ro que los alcances de la soberanía mexicana son limitados y su exten­ una guerra civil de independencia tuvimos que enfrentar la ira del capi­
sión abarca exclusivamente hasta antes de afectar los intereses nortea­ tal internacional que sumada a las condiciones de extrema pobreza de­
mericanos o el amplio concepto que ellos tienen de seguridad nacional. rivadas de una desigual distribución de la riqueza dieron como resulta­
do la Revolución Mexicana.
13.10.4. LOS INTERESES PETROLEROS

13.10.5. POSTULADOS PRINCIPALES


El territorio mexicano fue el principal objetivo de los intereses nor­
teamericanos hasta el fin de la guerra de secesión norteamericana, en A las consideraciones de tipo político-económico vistas en el punto
adelante, su política se guió por intereses muy diferentes, para ilustrar anterior debe agregarse, la crisis del sistema político electoral que pre­
nuestra afirmación citaremos las palabras del embajador norteamerica­ valeció a lo largo de la dictadura porfirista, y que en conjunto genera­
no en la Gran Bretaña, Walter Page, el 19 de marzo de 1914: ron graves contradicciones económicas y el descrédito absoluto del sis­

Acogerán de la manera más cordial vuestras inversiones en todas partes de tema electoral y del sistema de partidos.
América, bajo la condición de que no se empleen para dominar al país en En estas condiciones, al triunfar el Plan de San Luis proclamado
cuestión. La Doctrina Monroe, como ustedes saben, sólo significa una cosa: por Don Francisco l. Madero, las expectativas del país por un cambio
que los Estados Unidos preferirían que ningún gobierno europeo se anexe radical son muy amplias, sin embargo, el deterioro del gobierno made­
más países en el Nuevo Mundo. En otros tiempos sólo había un recurso me­
rista fue vertiginoso y se dio en el peor escenario posible para de demo­
diante el cual un gobierno extranjero podía adquirir territorios, que consis­
cracia mexicana; el ejército de Porfirio Díaz seguía incólume, el mundo
tía en conquistar directamente el país. Ahora existen maneras mucho más
se encontraba a la víspera de la primera guerra mundial, lo que ocupa­
refinadas de conquistar países.35
ba a la diplomacia y grupos de inteligencia de las potencias en la bús­
Lo expuesto nos permite observar que a los Estados Unidos no les queda de alianzas y recursos para la guerra, cuestiones que ponían a
interesaba ya el sistema colonial caracterizado por el control directo de México como un factor estratégico importante por su posición como
los territorios conquistados, simplemente habían iniciado la etapa del tercer productor de petróleo en el mundo, el movimiento maderista des­
neocolonialismo y en consecuencia su atención se centraba en el con­ pertó las expectativas populares y no se apreciaba cambio alguno, razo­
trol económico de nuestro país, control que equilibraban por vía el con­ nes en su conjunto que ubicaron al gobierno de Madero entre los intere­
trol político. ses de las potencias en el ámbito externo y en medio de la lucha de los
Porfirio Díaz intentó aprovechar los intereses económicos de Euro­ campesinos y obreros frente a la oligarquía mexicana, el resultado fue
pa en nuestro país, con la finalidad de crear un escenario de equilibrio natural, el golpe de Estado de Victoriano Huerta que generó o dio inicio
entre Europa y los Estados Unidos, sin embargo, sus planes se vieron al movimiento que encabezó Venustiano Carranza y que bajo el Plan de
frustrados cuando el papel del petróleo empezó a cobrar importancia Guadalupe de 26 de marzo de 1914 adoptó como bandera la reinstaura­
como factor estratégico de la producción con el advenimiento y evolu­ ción de la Constitución Mexicana de 185 7.
ción de las máquinas de combustión interna. Resulta relevante señalar que si bien es cierto, el movimiento cons­
El enfrentamiento entre Sir Weetman Dickinson Pearson de nacio­ titucionalista surge con la idea de reinstaurar la Constitución del 57, tal
nalidad inglesa y el estadounidense Edward L. Dohenay tuvo efectos Y como se desprende de las palabras del diputado Constituyente Luis
para el gobierno de Díaz, pues ambos buscaban su apoyo para hacer Manuel Rojas en la sesión del 13 de diciembre de 1916, que él mismo
más grandes sus ganancias. presidía, cuando en presencia de Carranza y para refutar las palabras
del diputado Francisco J. M úgica durante el debate sobre la educación
35 Page Walter citado por Friedrich Katz, op. cit., p. 2 I O. expuso:
'l.
'
420 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateos Santillán 421

Creo, además señores diputados, que la resolución que en esta vez tome el De esta forma, el problema del México agrícola de la época consis­
Congreso Constituyente servirá para que, tanto en la República entera, tía básicamente en la excesiva concentración de la riqueza y en la extre­
como también en el exterior, se formen idea clara de cuál va a ser en reali­ mada pobreza de una gran mayoría de mexicanos.
dad la obra de esta Asamblea, y del color que tendrá la Constitución de 1857, Este es el marco en que debemos estudiar el debate que sobre el ar­
reformada en Querétaro.36 tículo 27 Constitucional se libró en el Constituyente de 1917; sin olvidar
que, para esa fecha ya existía una constante en los diversos programas y
Hemos presentado las palabras del diputado Rojas como una prue­
planes que se lanzaron desde antes y durante la revolución. El progra­
ba de que un grupo de diputados afines al Partido Liberal Mexicano de ma del partido liberal mexicano fechado el 1 o de julio de 1906 en la
Venustiano Carranza buscaban la aplicación del texto constitucional del Ciudad de San Luis Missouri, Estados Unidos, incluía una serie de me­
57 reformándolo para hacerlo eficiente en su aplicación. didas agrarias a fin de dotar de tierras a quien lo solicitara, así como, la
Frente al grupo liberal de Carranza, se erigió un bloque de diputa­ creación de un banco agrícola para los agricultores pobres, hablaba del
dos calificados de radicales o jacobinos que representaban un conjunto repartimiento de las tierras de los funcionarios enriquecidos bajo la
de ideas progresistas de tendencia social y que respondían políticamen­ dictadura.
te a los intereses del General Álvaro Obregón. Francisco l. Madero en el Plan de San Luis de S de octubre de 1910,
La tendencia del grupo mayoritario que era el jacobino, se concen­ denunció los abusos que se hicieron con motivo de las leyes de baldíos y
tró en dar respuesta a los grandes problemas nacionales estableciendo a el despojo de los bienes de los pequeños propietarios y de los indígenas,
nivel constitucional un conjunto de artículos de corte social, frente a por lo que, ofreció la restitución de las tierras a sus propietarios origi­
ellos, el proyecto liberal de Carranza elaborado por los diputados Luis nales, restitución que no llevó a cabo y motivó la revolución zapatista.
Manuel Rojas, José Natividad Macías, Félix Palavicini y Alfonso Cravio­ El 28 de noviembre de 1911 fue proclamado el Plan de Ayala; en su
to parecía una tímida luz que palidecía ante los fragorosos argumentos articulado se estipuló que los propietarios originales de la tierra fueron
de los radicales. despojados, por lo que, habría de expropiar tierras a efecto de dotar a
El Constituyente de 1916-1917 intentó dar respuesta a los principa­ los pueblos y ciudadanos de México.
les problemas que aquejaban al país, de tal forma que la cuestión agra­ Como puede observarse existe una tendencia generalizada por re­

ria reflejada en el Artículo 27 Constitucional, además de sus contenidos vertir los efectos de la concentración de la tierra en unas cuantas ma­

estrictamente agropecuarios, debe entenderse como un intento extraor­ nos, así como, la inclinación por figuras como la expropiación por cau­
sa de utilidad pública para llevar a cabo los proyectos. No obstante,
dinario de redistribución de la riqueza en un país preponderantemente
dicha tendencia que podemos calificar de unánime, lo que variaba eran
agrícola.
los grados que debería alcanzar la medida; así como, los procedimien­
Para 1917, México se convierte en el tercer productor de petróleo
tos a manera de ejemplo, podemos citar el Plan de Santa Rosa de fecha
en el mundo, con una producción de SS millones de barriles aproxima­
2 de febrero de 1912 en el que se estipula en el punto 2 que se decreta­
damente, la nacionalidad de las empresas que controlaban la explota­
ría por causa de utilidad pública la expropiación del territorio nacional.
ción y comercialización del combustible alcanzaba el 97% en manos ex­
nacionalización diríamos nosotros, que el gobierno sería el propietario
tranjeras, de los cuales el 65% era norteamericano, el 30% inglés y el
de las tierras, las cuales rentaría a los particulares.
7% holandés.
El proyecto de Ley de Pascual Orozco de 25 de marzo de 1912 ha­
La explotación de petróleo se incrementó notablemente durante la
bla de la repartición de los terrenos baldíos y nacionales, así como, de
revolución pues en 1911 se exportaron 900 mil barriles aproximada­
la expropiación de las tierras no cultivadas a los grandes terratenientes.
mente, en tanto que para 1917 la cantidad se incrementó a 46 millones El proyecto de la ley agraria presentado por Luis Cabrera el 3 de di­
de barriles, de la tenencia de la tierra ya hemos delineado el panorama, ciembre de 1912 nos habla de dotar de ejidos a los pueblos por vía de la
al cual sólo cabría agregar que en la medida que avanzaba la revolu­ expropiación de los terrenos que históricamente les correspondían.
ción, los terratenientes mexicanos procuraban vender sus tierras a espe­ El proyecto de ley agraria presentado por Pastor Rouaix y José Inés
culadores norteamericanos a precios irrisorios. Novelo de 15 de diciembre de 1914, declaró de utilidad pública que los
agricultores fueran propietarios de terrenos suficientes para satisfacer
36 Diario de los debates del Congreso constituyente, Tomo 1, p. 643. las necesidades de una familia, la fundación de pueblos en los antiguos
422 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateos Santillán 423

latifundios y colonias agrícolas en terrenos fértiles, establecían el límite El proyecto carrancista contenía una declaración formal de que la
de la pequeña propiedad ganadera en 2500 hectáreas. propiedad privada no podía ser destinada al uso público, sino mediando
una indemnización y por causa de utilidad declarada por la autoridad
13.10.6. EL DECRETO DE 6 DE ENERO DE 1915 administrativa, pero la expropiación la haría la autoridad judicial en
caso de inconformidad. El texto del proyecto estudiado mantenía las
Las condiciones generales del país, así como, la evolución de las cir­
restricciones formuladas desde la época de las Leyes de Reforma al cle­
cunstancias que rodearon a la revolución, unificaron el reclamo del re­
ro, en lo relativo a su capacidad para adquirir bienes raíces.
parto de los latifundios constituidos entre 1857 y 1915, de esta forma,
La cuestión de los ejidos y las dotaciones de tierras se reservaba
Venustiano Carranza no podía abstenerse de la tendencia general y le
para ser discutida en una ley reglamentaria subsecuente, sin ninguna
encargó a Luis Cabrera un proyecto de ley, que a la postre debía de
disposición categórica en la Constitución.
convertirse en ley constitucional y a la vez daría la pauta a los nortea­
El espinoso asunto del petróleo se trataba de una manera muy favo­
mericanos para inmiscuirse, una vez más, en los asuntos de México.
rable a los intereses de las compañías petroleras al señalar "las socieda­
Por su importancia nos referiremos a su contenido:
des civiles y comerciales podrán poseer fincas urbanas y establecimien­
• El artículo 1 o declaró nulas todas las enajenaciones de tierras he­
tos fabriles o industriales, dentro y fuera de las poblaciones; lo mismo
chas en contravención de la ley de 25 de junio de 1856, todas las
que explotaciones mineras, de petróleo o de cualquier otra clase de sub­
concesiones, composiciones o venta de tierras, aguas y montes he­
stancias que se encuentren en el subsuelo, así como también vías fé­
chas por autoridades federales, de diciembre de 1876 a 1915, que
rreas u oleoductos; ... "
hubiesen invadido ilegalmente los ejidos y demás terrenos de los
A los bancos se les facultaba para imponer capitales sobre propieda­
pueblos, rancherías, congregaciones o comunidades; todas las tie­
des urbanas y rústicas de acuerdo con las leyes que al efecto se
rras afectadas por autoridades locales que se encontraran en el
expidieran.
caso anterior.
Como puede observarse, Carranza suscribió un proyecto que defini­
• Art. 2°. Se respetarían las divisiones hechas por los vecinos de un
tivamente no llenaba las expectativas de los grupos revolucionarios, es
pueblo, ranchería, congregación o comunidad, salvo solicitud en
decir, no era congruente con los grupos internos, en tanto que respon­
contra de dos terceras partes de los vecinos.
• Art. 3°. Se expropiarían los terrenos necesarios para dotar a los día a los intereses extra-nacionales dominantes, sin embargo, el consti­

pueblos que carecieran de ejidos, por falta de títulos; imposibili­ tuyente de 1916-1917 no era mayoritariamente favorable a Carranza,

dad de identificarlos o porque se hubieran vendido. sino que desde el debate del Artículo 3° Constitucional se demostró el

• El Art. 4o creaba una comisión nacional agraria, una comisión lo­ predominio de otras tendencias.
cal agraria para cada Estado o territorio y los comités particula­
res ejecutivos que se necesitasen. 13.10.8. LA INICIATIVA DE LA COMISIÓN
• En el Art. so se subordinaban los comités particulares ejecutivos a
La tarde del jueves 25 de enero de 1917, se presentó una iniciativa
la comisión local agraria y éstas, a la comisión nacional agraria.
del Artículo 27 constitucional suscrita por los diputados Rouaix, Adame,
• Por el Art. 6° se estableció el procedimiento para la entrega de so­
Pastrana, Chapa, Álvarez, Macías, Del Castillo, Ibarra, De los Ríos, Te­
licitudes de restitución y en los subsecuentes artículos describió el
resto del procedimiento. rrones, De los Santos, De la Torre, Dorador, Zavala, Enríquez, Gutié­
rrez, Martínez de Escobar y Martí.

13.10.7. EL PROYECTO DE ARTÍCULO 27 La exposición de motivos de la iniciativa nos ilustra sobre la natura­

PRESENTADO POR CARRANZA leza de la propuesta, en ella encontramos la opinión de algunos diputa­
dos en el sentido de la relevancia del Artículo 27 como el más importan­
Si analizamos la tendencia histórica y después observamos el pro­ te de todos los de la Constitución, cuestión respetable, aun cuando muy
yecto de artículo 27 de Carranza, podemos observar ciertos rasgos libe­ debatible, que sin embargo, nos alecciona sobre el ambiente de la época
rales que francamente no llenaban las aspiraciones de los constituyen­ y sobre las características agrarias predominantes en el México de
tes del 16-17, ni muchos menos del pueblo en general. aquellos tiempos.
424 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO -J. Mateos Santillán 425

Acto seguido nos describe la evolución que tuvo el concepto de pro­ • La propiedad privada plena individual o colectiva.
piedad en México a partir de la experiencia y antecedentes coloniales • La propiedad privada restringida, de tierras poseídas en comunidad.

de la Nueva España, de esta forma se hizo resaltar el concepto de pro­ • Las posesiones de hecho.
piedad originaria en manos del rey, centro absoluto de propiedad, due­ • La iniciativa propuso un Artículo compuesto por tres párrafos ini­

ño de las personas y de los bienes de sus súbditos, de tal forma que el ciales y catorce fracciones:
En el primer párrafo se declara que es propiedad originaria de la
carácter de la propiedad en esa época es calificado según la iniciativa

Nación el territorio nacional, el segundo se refiere a la expropia­


como precario.
ción por causa de utilidad pública y el tercero a la capacidad para
A continuación se denunció, que a partir de la independencia se
adquirir el dominio directo de las tierras y aguas nacionales.
adoptó una legislación civil incompleta que produjo una reacción con­
• Es en la fracción I donde se declara que es prerrogativa de los
traria a la tradición hispano-mexicana en beneficio de algunos grupos
mexicanos y sociedades mexicanas adquirir el dominio de tierras
sociales poderosos: "Ese mal se agravó de la Reforma en adelante ... ",
y aguas o combustibles minerales, acto continuo se estableció el
nos dice la iniciativa para a continuación detallar los efectos de las Le­ derecho del Estado para concesionar dicho dominio a extranjeros
yes de Reforma y de baldíos en la población mexicana; señalando que: que renunciaran a la protección de sus gobiernos en lo que a di­
"había sido el efecto de haber adoptado sin discernimiento, la legisla­ chos bienes se refiriera.
ción europea". • La fracción 11 ratificó los Leyes de Reforma en lo relativo a los
Como puede observarse estamos ante un ataque contra las doctri­ bienes de las Iglesias.
nas liberales del siglo XIX, que impuestas en un medio ajeno al de su • La fracción III se refería a la posibilidad de las empresas de bene­
origen, generaron efectos muy diversos a los de sus lugares de naci­ ficencia, investigación, enseñanza, ayuda recíproca y cualquiera
miento, como diversas eran las circunstancias sociales y políticas de otra análoga para adquirir bienes raíces exclusivamente para su

quienes las imitaban. objeto, también podían imponer capitales sobre bienes raíces en

El propósito de la iniciativa era anudar la legislación futura y la co- plazos que no excedieran los diez años.
La fracción IV contiene una verdadera reforma agraria que reco­
lonial, dicho en palabras de la iniciativa que a continuación señalaba:

noce la propiedad colectiva de los condueñazgos, rancherías, pue­


... no pretendemos hacer una regresión, sino al contrario. Por virtud de blos congregaciones, tribus y de más corporaciones de población
existir precisamente en dicha legislación colonial el derecho de propiedad
que guardasen el estado comunal, se reconoce dicha propiedad y
absoluta en el rey, bien podemos decir que ese derecho ha pasado con el
establece que en lo futuro se dotará a los grupos mencionados
mismo carácter a la Nación.
con tierras.
De esta forma el linaje y la intención del Artículo 27 constitucional • La fracción V intentaba limitar la compra de tierras por las cor­
queda magistralmente descrito, estamos ante un acto de soberanía ple­ poraciones mercantiles, industriales, mineras o petroleras, que
na, ante una nacionalización del territorio que como se explicó no im­ por su potencialidad económica pudieran dedicarse a especular
"

plica ninguna novedad, sino la reinstauración de una añeja tradición. con la tierra, restringiendo su capacidad de adquirir a la exten­
En relación a la vigencia de la legislación colonial en 1 91 7 la inicia­ sión estrictamente necesaria para el cumplimiento de su objeto.

tiva nos la describe al sostener: • La fracción VI facultaba a los bancos para imponer capitales so­
bre propiedades urbanas y rústicas, pero no podían ser propieta­
... las leyes ignoran que hay condueñazgos, rancherías, pueblos, congrega­
rios sino de los bienes enteramente necesarios para su objeto
ciones, tribus, etcétera; y es verdaderamente vergonzoso que, cuando se
directo.
trata de algún asunto referente a las comunidades mencionadas, se tienen
• La fracción VII excluía a cualquier otra corporación de las que
que buscar las leyes aplicables en las compilaciones de la época colonial,
no estuvieran incluidas en las fracciones 111, IV, V y VI para tener
que no hay cinco abogados en la República que conozcan bien.
propiedades raíces, salvo los destinados al cumplimiento del obje­
La iniciativa señalaba que su proyecto reconocía tres clases de dere­ to de la institución.
chos ter rito ri a les : • La fracción VIII es la que mejor nos demuestra los fines de la Re­
volución mexicana, en ella se declaran nulos todos los actos que
426 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Matcos Santillán 427

desde la Ley Lerdo afectaron a condueñazgos, rancherías, pue­ Y aún agregaríamos a las palabras de Múgica lo cuestionable que
blos, congregaciones, tribus y demás organizaciones que existieran incluso hoy en día continúan siendo los "justos títulos" de conquista y
es estado comunal, las cuales serían restituidas a sus propietarios colonización. De esa forma expulsaron los norteamericanos a los mexi­
originales. A los antiguos latifundistas sólo se les reconocerían canos de California, Nuevo México y Texas, de esa forma los liberales
cien hectáreas de tierras como límite máximo de sus propiedades. sembraron la semilla que habría de culminar en la revolución mexica­
• Ante los excesos de liberalismo clásico, en México se recurría a na, Múgica expresó una frase común en aquella época:
una nueva concepción social de la tenencia de la tierra.
Si para que se haga justicia estorba la ley, abajo la ley.39
• La fracción IX facultaba a la nación para regular la propiedad
privada atendiendo a la necesidad de lograr una distribución más Después de la intervención de Múgica se discutió de nueva cuenta
equitativa de la riqueza pública, esto sería la base para fraccionar la fracción V, pues el resto del artículo no fue ya objeto de debate algu­

los latifundios existentes y la dotación de terrenos en diversas no, salvo la intervención del diputado Ibarra para proponer se estipula­
rá en la Constitución la facultad de la federación para aplicar impues­
modalidades.
tos, cuestión que no prosperó.
• Para finalizar nuestras reflexiones sobre el 27 Constitucional nos
El inciso ( de la fracción VII establecía privilegios para el ejército
concretaremos a señalar que una de las grandes dudas que des­
constitucionalista y el magisterio, se trasladó a los artículos transitorios.
pertó el tercer párrafo de la fracción VII, que fue recibido con
El Artículo 27 de la Constitución de 1917 fue aprobado por unani­
aplausos, fue la relativa a ¿quién indemnizaría?, Cepeda Medrana
midad de 150 votos.
volvió a cuestionar: "¿Quiénes son los que deben indemnizar?
¿Los infelices que vuelven después de cincuenta años a sus tierras
13.10.9. LA EDUCACIÓN EN 1917
o el gobierno?"

Inmediatamente señaló, que los propietarios no aceptarían papel Un debate de gran trascendencia por su significado político, fue el

moneda y que el gobierno no tenía monedas. que se dio en torno al Artículo 3° de la Constitución de 1917, relativo a

Múgica aclaró, en caso de usurpación de propiedades por medio de la Educación, el grupo de Carranza sostenía un proyecto liberal clásico

la fuerza, éstas serán devueltas a sus dueños sin ningún requisito. en cuanto a que en las escuelas particulares la educación fuera libre,

El diputado Medina calificó de retroactiva la fracción y el diputado frente a la posición de los radicales que se empeñaban en que la educa­

Colunga le refirió con detalles como a partir de la Ley Lerdo fueron ción fuera laica en todas las escuelas.

despojadas las comunidades y las tribus, el diputado Múgica trajo a co­ Al margen de las razones educativas en debate debemos considerar,

lación el ejemplo, de como se había extendido la hacienda de la Saute­ que el debate sobre la educación fue el primer gran debate del Congre­

ña en Tamaulipas donde "ocupa las dos terceras partes"37 y añadió que so, al cual acudió el presidente Carranza el 13 de diciembre de 1916,40

aún invadía el Estado de Nuevo León, la Sauteña se formó por malas para observar como perdían sus diputados las votaciones en los aspec­
artes al decir de Múgica, por medio de actos con apariencia de legales, tos trascendentales.
y agregó: En 1857, con la Constitución Federal, el principio del liberalismo
mexicano llegó a su máxima expresión en materia educativa ya que, en
Es bien sabido que el origen de nuestras propiedades es enteramente falso,
el artículo 3° de dicha Carta Magna, se indicaba lacónicamente. "La en­
como si dijéramos, porque tanto los naturales como los mestizos que poco a
señanza es libre", para continuar el mismo texto remitiendo a la ley se­
poco se fueron posesionando de la propiedad territorial de la nación des­
cundaria el deber de señalar cuáles profesiones requerían título para su
pués de la conquista, no tenían más título para proceder que el consenti­
miento de los reyes de España, que les daban como merced... de esa mane­
ejercicio y éstos con qué requisitos se deberían de expedir. Al ámbito
ra, ninguna colonia, ningún pueblo, ninguna tribu, dispuso en un principio de los estados quedaba reservada la facultad de fomentar la educación, de
de documentación...38 acuerdo con el principio de que lo que no se reserva expresamente a la
Federación, es competencia de los estados.

37 ldem p. I 117.
18 lbidem 3Y Diario de los debates del Congreso constituyente. p. 1 118.
40 Jdem p. 637.
428 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO - J. Mateas Santillán 429

El debate en el Constituyente estuvo marcado por una tendencia li­ donde encuentran eco en el Primer Congreso Nacional de Instrucción
beral, aunque Diputados como Joaquín García Granados expresaron su Pública (1889-1890) sitio en que, maestros como Justo Sierra, Enrique
temor que la educación cayera en manos de "los jesuitas y el clero", y C. Rébsamen, Luis E. Ruiz, Manuel Cervantes Imas y mucho otros, re­
temía una educación fanática. Sin embargo, prevalecieron los concep­ tomaron los principios de la instrucción primaria obligatoria, gratuita y
tos liberales clásicos, como del Diputado José María Mata: "Si el Parti­ laica. En dicho congreso se rechazó la opinión de los maestros Miguel
do Liberal ha de ser consecuente con sus principios, tiene el deber de Serrano y Ramón Manterola, liberales clásicos, de apegarse al artículo
quitar toda traba a la enseñanza", o la del Diputado Guillermo Prieto, 3° de la Constitución de 1857, así como, el extremo presentado por el
que consideraba a la instrucción "como base de la libertad" asentando que diputado Adolfo Cisneros Cámara quien pretendía que la educación fue­
"los pueblos embrutecidos deben sufrir gobiernos tiranos". ra laica para todos, obligatoria para todos y gratuita para todos.
Poco duró el concepto liberal clásico en la materia educativa, el 15 Durante el Segundo Congreso Nacional de Instrucción Pública
de abril de 1861, el Presidente Benito Juárez intenta controlar la educa­ (1890-1891), se destierra de la educación el Sistema Lancasteriano en el
ción con una ley sobre la materia que junto con la ley de Instrucción que, los alumnos más adelantados enseñaban a los que les seguían y se
Pública del Imperio de Maximiliano en 1865, nos presentan las siguien­ implementa el modo simultáneo. Se dice que la gratuidad de la educa­
tes premisas: el sistema político-económico era liberal tanto para Juá­ ción exige a las autoridades que provean de útiles a los alumnos de las
rez como para Maximiliano, en tanto que en lo educativo la corriente escuelas primarias oficiales. Todas las entidades deben establecer
positivista se imponía, puesto que con la famosa "ley de los tres esta­ Escuelas Normales.
dos", lo único verdadero era la ciencia. Esta doctrina encontró campo A partir de 1888 se reforma la ley de Instrucción Pública para el
fértil en México, puesto que la participación del clero a favor de la cau­ Distrito Federal y la educación primaria se divide en elemental y supe­
sa conservadora era pública y los liberales pronto hicieron suya la co­ rior, de las cuales la elemental correspondía su mantenimiento a los
rriente que negaba al estado religioso o metafísico todo valor, pues sólo Municipios y la Superior al Ejecutivo Federal, en tanto se prohibía a los
lo científico, podía aceptarse en materia educativa. Lo paradójico es miembros del clero su intervención en las escuelas superiores.
que Maximiliano, en el ámbito educativo, en vez de ser liberal, se hace Durante todo el porfiriato se mantuvo el federalismo en la educa­
positivista y, por consecuencia, con esa doctrina anticlerical lo que ge­ ción y a lo más que se llegó consistió en que el Ejecutivo Federal fuera
nera, entre muchas otras cosas es, su caída. quien se hiciera cargo de la Educación Pública en el Distrito y Territo­
A la restauración de la República, Juárez, el 2 de diciembre de rios Federales (1891).
1867, publica la Ley Orgánica de la Instrucción Pública en el Distrito Con un esquema federal sólido, influenciado por el positivismo, se
Federal, destacando los siguientes elementos: llega al siglo XX y pocos años después a la Revolución Mexicana. Es du­
Juárez, en perfecta concordancia con ideales federalistas, respeta la rante el año de 1912, en diciembre, cuando el Sr. Diputado Félix F. Pa­
competencia de los estados en la materia educativa y, él como Presiden­ lavicini ante la Cámara de Diputados, expresara: "en nuestro régimen
te, se concreta a Gobernar la materia educativa en el Distrito y Territo­ federal no puede existir el ministerio de Instrucción Pública; es más, en
rios Federales. ninguna federación del mundo existe un Ministerio de Instrucción Pú­
En lo relativo a las Escuelas de Instrucción Primaria, éstas eran gra­ blica como aquí", a lo que añadiremos que el Ministerio aludido por el
tuitas para los pobres y obligatoria desde la edad de cinco años para todos. diputado Palavicini tenía exclusiva jurisdicción sobre el Distrito y Terri­
Se crean las escuelas preparatorias (Art. 8), con Gabino Barreda. torios Federales.
Año y medio después, el 15 de mayo de 1869, el Gobierno de Juárez ex­ Años después, durante el Congreso Constituyente de Querétaro, la
pide otra ley de Instrucción Pública en la cual respetaba el federalismo cuestión educativa, vuelve a ser objeto de análisis y lucha. El proyecto
y suprimía, al influjo de las concepciones de moda (las positivistas), la del presidente Carranza presentaba el mismo esquema liberal de 1857 y
enseñanza de la religión, con lo que la educación elemental adquiría los la primera Comisión de Puntos Constitucionales encabezada por el Dip.
rasgos de laica, obligatoria y gratuita. Lo anterior genera el enfrenta­ Federal Francisco J. Múgica, retomaba los conceptos positivistas de
miento en la educación, entre liberales clásicos y los positivistas puesto educación antirreligiosa y por ende laica. Los conceptos de gratuidad
que, para estos últimos, la libertad era algo poco científico; sin embar­ de la educación oficial, obligatoriedad y federalismo, no estaban a dis­
go, estos los mismo predominaron y su influencia se nota en México, cusión, pues era común su aceptación en ambos bandos, en congruen­
desde las leyes de Instrucción Pública de Juárez, hasta el Porfirismo, cia con la tradición del siglo XX. En cuanto a la relevancia de la materia,
430 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO J. Matcos Santillán
431
-

nos basta citar las palabras del Diputado Múgica: "Ningún momento,
Las escuelas primarias particulares sólo podrán establecerse suje­
señores, de los que la revolución ha pasado, ha sido tan grande, tan pal­
tándose a la vigilancia oficial. "En los establecimientos oficiales se im­
pitante, tan solemne como el momento en que el Congreso Constituyen­
partirá gratuitamente la enseñanza primaria".
te, aquí reunido, trata de discutir el Artículo 3° de la Constitución de los
Como se ve, se mantienen las constantes decimonónicas en la Cons­
Estados Unidos Mexicanos". En el bando contrario existía coincideRcia
titución del 17. Por un lado, el federalismo, la obligatoriedad y gratui­
en este punto, pues el C. Diputado Luis Manuel Rojas, contestando al
dad de la educación pública y por otro, el Estado regulando la educa­
Gral. Mújica expresó: "ha tenido en cambio singular clarividencia al ha­
ción; lo que generó un conflicto, pues si la educación es laica no es
blarnos de una gran verdad: la suprema importancia de este debate".
libre, y extender lo laico a las escuelas privadas fue el centro de nuevas
La lucha entre liberales y positivistas fue de gran magnitud. El Dip. Ro­
tempestades.
jas aducía que por técnica jurídica la sección de garantías individuales
No contento con los acontecimientos, el 20 de noviembre de 1918,
(entre las que se encuentra la Educación) era la de limitaciones a la au­
el Presidente Carranza se propuso reformar el Artículo 3o de la Consti­
toridad a favor del individuo, en tanto que la obligatoriedad se refería al
tución General, donde se excluía a la educación privada del laicismo.
individuo, y por lo tanto esta cuestión debería ser tratada, como lo pro­
Las cámaras no discutieron dicho proyecto y, en abril de 1920, se lanza
ponía el presidente Carranza en el Artículo 31 del proyecto de reformas,
en donde se expresaba la obligación de todos los mexicanos de ir a la el Plan de Agua Prieta, lo que genera la caída de Carranza, la posterior

Escuela. Dentro de los términos generales que fija la Federación, puede legislatura obregonista dejó en el olvido la iniciativa de Ley, cerrándose

cada estado reglamentar el precepto a su gusto, por lo que en nuestro con esto un capítulo en la Historia de la Educación Mexicana.

particular juicio, los conceptos centrales de la materia educativa, como Otro de los temas que ocuparon la atención de los constituyentes

lo son su gratuidad, obligatoriedad y el que nos ocupa, su calidad de Fe­ por su trascendencia social fue el del trabajo regulado en el artículo 123,

deral, no tuvieron otra discusión que la de ver en qué lugar de la Cons­ que fue leído, discutido y aprobado en las sesiones que se efectuaron el

titución se deberían colocar; por lo que el centro del debate, se reduce a día 23 de enero de 1917.
lo laico, es decir, a la magnitud de la intromisión del Estado en la mate­ El proyecto original de Carranza que se insertaba en el artículo so.

ria educativa, pues la facultad de que cada entidad regule la materia fue fácilmente rebasado a lo largo de diversas sesiones en las que evolu­
implica la intervención del Estado. Para aclarar este punto nos remiti­ cionó un proyecto de bases sobre la legislación del trabajo que se pro­
remos de nueva cuenta, a las palabras del Diputado Rojas, quien expresó: ponía como reforma al artículo so de la constitución de 18S 7, mismo
"De manera que la diferencia es muy sencilla: el precepto del Primer que fue presentado el 13 de enero de 1 917.
Jefe dice que la enseñanza será laica cuando se trate de establecimien­ En la sesión de 23 de enero de 1917 la comisión propuso que se incor­
tos oficiales, y la comisión quiere que también sea laica en los estableci­ porara a la Constitución una sección que llevaría por nombre "Del Tra­
mientos particulares". bajo y de la Previsión Social", mismo que fue aprobado por 163 votos.
En cuanto a la influencia de la mayoría del Congreso Constituyente Entre las conquistas reflejadas por el texto constitucional encontra­
de 1916-1917, ésta se encuentra perfectamente descrita por las palabras mos la jornada máxima de ocho horas, la prohibición del trabajo para
del Diputado Mújica: "pero sí puedo decir al Honorable Presidente de la los niños menores de 12 años, por cada día de trabajo habría uno de
Comisión, que en cuestiones de Pedagogía, las ideas más modernas han descanso, se estableció que el salario mínimo de un trabajador debería
evolucionado paralelamente al criterio positivo". ser suficiente para satisfacer sus necesidades normales como jefe de fa­
Finalmente, se impusieron las concepciones positivas y el texto del milia, se estableció la participación de utilidades, el pago de igual sala­
Artículo 3o aprobado fue el siguiente: "La enseñanza es libre; pero será
rio a trabajo igual, la prohibición de embargo, compensación o des­
laica la que se dé en los establecimientos oficiales de educación, lo mis­
cuentos sobre el salario mínimo, que el salario debía ser pagado en
mo que la enseñanza primaria, elemental y superior que se imparta en
moneda legal, se establecieron principios de seguridad social a cargo de
los establecimientos particulares. Ninguna corporación religiosa, ni mi­
los patrones, así como la responsabilidad de éstos en los casos de acci­
nistro de algún culto, podrán establecer o dirigir escuelas de instruc-
dentes de trabajo. Se estableció el derecho de los trabajadores a formar
ción primaria".
sindicatos, el derecho a la huelga de los trabajadores y el de paro de los
432 TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
EVOLUCIÓN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL I\IEXICANO J. �latL'o' Santillán
433

patrones, se prohibió que las deudas de los trabajadores se hicieran ex­


nacimiento de persona lidad jurídica a las agrupaciones religiosas, el
tensivas a la familia.
impedimento de los ministros de culto para partici par en política, ne­
El artículo 123 de la Constitución también estableció el concepto de
gándoseles el voto activo y pasivo, así como, el derecho de asociación
patrimonio familiar y bienes inalienables aún cuando remitió a una ley
con fines políticos, a las agrupaciones políticas se les prohibió usar en
secundaria su precisión, se estableció asimismo el concepto de previ­
sus títulos o denominaciones palabras que les vincularan a cualquier re­
sión popular con el establecimiento de cajas de seguros populares de di­
ligión, y muchas otras medidas que refrendaba n la vigencia de las leyes
versas índoles, así como se consideró como causa de utilidad social la
de Reforma en cuanto a la relación Iglesia-Estado.
formación de sociedades cooperativas encargadas de la construcción de
viviendas para los trabajadores.
Como puede apreciarse, el capítulo del trabajo fue uno de los gran-
des logros del Constituyente de 1916-1917.
Puede considerarse después del análisis de los contenidos sociales
de la Constitución de 1917, su vocación popular o social es innegable, y
rompió los cartabones del constitucionalismo clásico del siglo XIX.
U na tendencia clara del Constituyente de 1916-1917 es su vocación
por hacer efectivo el federalismo, federalismo que se vio muy vulnerado
durante la etapa porfirista, lo que generó una concentración excesiva
del poder político en unas cuantas manos generalmente muy vinculadas
al poder económico, de esta forma, cuando en 1917 se establece la figu­
ra del municipio libre como base de la administración pública de los
Estados y a los Estados como base de la división política federal, inten­
tándose una redistribución del poder político al interior de la Repúbli­
ca. Desafortunadamente no pudieron prevenir nuestros constituyentes
fue que: así como, es importante que el poder público se divida vertical
y horizontalmente para su ejercicio, guarda la misma importancia la es­
tructuración del sistema de partidos y sistema electoral en cuanto a su
incidencia sobre el sistema de gobierno, más claro, la división del poder
público en Ejecutivo, Legislativo y Judicial, lo mismo que la división en
tres niveles de gobierno que son el federal, el estatal y el municipal no
pudieron en su conjunto evitar el centralismo que propició el sistema de .{

1
partido hegemónico que prevaleció en nuestro país a lo largo, práctica­
¡
mente, de todo el siglo XX.
Donde definitivamente existieron grandes coincidencias es en el mar-
cado acento anticlerical que prevaleció en los Constituyentes de 185 7 y
1917, pues si atendemos los grandes debates y los estudiamos cuidado­ ·�.
.;:
samente observaremos una clara tendencia a separar las actividades del �
Estado y las de la Iglesia, como se aprecia en el debate del artículo 3°,
en que prevaleció la educación laica, o en el del 27, en que se mantuvo
la prohibición impuesta a las sociedades eclesiásticas de poseer bienes,
limitaciones que se hicieron patentes en los artículos 24 y 130 consti­
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Esta obra se terminó de componer, imprimir y encuadernar
el 15 de enero de 201O en los talleres de
Castellanos Impresión, SA de CV,
Ganaderos 149, col. Granjas Esmeralda,
0981O, Iztapalapa, México, DF

La tipografía de este libro se realizó con


fuente Dutch823 BT en cuerpo
de 10/12, caja de 28 x 45 picas.

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