Está en la página 1de 1

TRATAMIENTOS

Terapia ocupacional:
Dispositivos de ayuda/asistencia funcionales

Los AFOs no están indicados para su uso durante la deambulación porque por lo general limitan
los movimientos compensatorios necesarios para la deambulación eficiente, añaden peso que
puede comprometer la deambulación, y hacen que sea difícil levantarse del suelo. Durante la
última etapa ambulatoria, un KAFO con rodilla bloqueada podría prolongar la deambulación, pero
no es esencial. Durante la etapa inicial ambulatoria, un dispositivo de movilidad manual de peso
ligero es conveniente para permitir que el niño pueda ser empujado en ocasiones, cuando la
demanda de movilidad de larga distancia excede a la resistencia. En la última etapa ambulatoria,
es necesaria una silla de ruedas manual ultra ligera con asiento y espalda sólido, con capacidad
para soportar la simetría vertebral y la alineación neutral de las extremidades inferiores, con
reposapiés abatibles. En la etapa inicial no ambulatoria, una silla de ruedas con asientos
personalizados y funciones reclinables podría servir de paso a una silla de ruedas eléctrica. A
medida que va disminuyendo la deambulación funcional, se recomienda una silla de ruedas
eléctrica. Cada vez más, los rehabilitadores médicos recomiendan asientos y componentes
eléctricos personalizados para la silla de ruedas eléctrica inicial, incluyendo reposacabezas, asiento
y espalda sólido, soportes de apoyo lateral, inclinación y reclinación eléctrica, asiento eléctrico
ajustable en altura y reposapiés elevador eléctrico (con reposapiés abatible para facilitar los
traslados). Algunos recomiendan sillas eléctricas que permitan estar erguido. Modificaciones
personalizadas adicionales podrían incluir un cojín para aliviar la presión, guías de cadera y
aductores de rodilla plegables. Al disminuir la fuerza de las extremidades superiores, es necesaria
la remisión a un especialista en tecnología de asistencia en rehabilitación para la evaluación de un
equipo alternativo o de control de acceso a su entorno, tales como sistemas de control con el
contacto de la lengua, activación de un detector, apuntar con infrarrojos o selección con la mirada.

Otras adaptaciones en el final de la etapa ambulatoria y en las etapas no ambulatorias podrían


incluir una bandeja elevadora con pajita adaptada, bolsa de agua manos libres, y/o plato mecánico
(indicado si la mano no puede ser llevada a la boca o si la fuerza del bíceps es de grado 2/5), cama
eléctrica ajustable con cojín o colchón de alivio de presión, equipamiento para el baño y la ducha,
dispositivos de traslado, entre ellos un ascensor hidráulico para el paciente, grúa de techo
(elevador), sábanas deslizantes y otras opciones de control del entorno

También podría gustarte