Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
RETOS Y EXPERIENCIAS
EDUCACIÓN EN
VALORES
RETOS Y EXPERIENCIAS
Autora principal
Dra. Cs. Nancy Chacón Arteaga
Coautores
Dra. C. Marta Güemez Junco
Dra. C. Marta Cossío González
Dra. C. Olga R. Cabrera Elejalde
Dra. C. Yara L. Cárdenas Cepero
Dr. C. Luis Abreu Mejías
Publicaciones Acuario
Centro Félix Varela
La Habana, 2015
Cuidado de la edición: Lisel Bidart Cisneros
Diseño de cubierta: Raúl Martínez Hernández
Composición y realización: Carlos F. Melián López
ISBN: 978-959-7226-20-8
Todos los derechos reservados. Las opiniones expresadas en esta publicación no son
necesariamente compartidas por el Centro Félix Varela o por la Federación de Mujeres
para la Paz Mundial, Capítulo Japonés.
Publicaciones Acuario
Centro Félix Varela
Calle 5ª # 720, esq. a 10, El Vedado,
Plaza de la Revolución, C. P. 10400,
La Habana, Cuba.
Presentación • 11
Introducción • 13
1. ¿Por qué hablar de ética en estos tiempos de cambios de paradig-
mas? • 15
1.1 Cultura ética, educación moral y en valores • 18
1.2 La Dimensión Ética de la Educación • 20
1.3 Sobre la educación moral y en valores de nuestros niños • 23
2. La cooperación pedagógica para contribuir a la educación en valo-
res • 27
3. La educación bioética en la enseñanza de las Ciencias Naturales • 37
4. La dimensión ética de la cultura económica en la profesionalidad peda-
gógica • 43
4.1 Algunas vías para contribuir a la formación de los valores de la cultura
económica en los estudiantes • 49
5. Un proyecto en acción. La Profesionalidad del docente y el enfoque
ético, axiológico y humanista en la formación de maestros • 51
5.1 La integración en el proceso formativo. Un problema a resolver • 55
6. El método de identificación afectiva en la formación moral y de valores
de los estudiantes de carreras pedagógicas en las escuelas de práctica
preprofesional • 61
7. Algunas estrategias para contribuir a la educación en valores en la es-
cuela • 67
8. Apuntes para una concepción de la educación en valores para la escue-
la cubana • 81
Bibliografía • 117
Créditos principales de los coautores •121
Antes quisiera yo que se desplomasen, no digo yo tronos de emperadores,
los astros mismos del firmamento, que ver caer del pecho humano
el sentimiento de la justicia, ese sol del mundo moral
José de la Luz y Caballero1
1
Tomado del libro Don Pepe de Rafael Esténger, Editorial Alfa, La Habana, 1940, p. 90.
2
O.C., T. 20, Editorial Ciencias Sociales, La Habana, 1975.
PRESENTACIÓN
Yuriko Matsumoto
Directora del Proyecto de Servicios Internacionales en Cuba.
Federación de Mujeres para la Paz Mundial, Capítulo Japonés
INTRODUCCIÓN
El libro recoge los resultados pedagógicos teóricos y prácticos que los au-
tores han obtenido en la actividad científica por la vía de los proyectos de
investigaciones de equipos multidisciplinarios de docentes, de las diferentes
carreras y facultades de las universidades pedagógicas cubanas, en este caso la
Universidad de Ciencias Pedagógicas «Enrique José Varona» de La Habana
y la Universidad de Ciencias Pedagógicas «José Martí» de la provincia de
Camagüey.
El centro o hilo conductor del texto está en el desarrollo de la ética apli-
cada a la educación, como un área especial de la dimensión ética de todo
fundamento y práctica educativa, la cual tiene sus particularidades al penetrar
no solo el proceso formativo en la institución educacional a todos los nive-
les, sino que por las características de su objeto, la moral y los valores están
presentes en la vida misma de las personas en la sociedad, y por ello ejercen
también sus influencias, a veces como variables no controladas en el proceso
educativo. Estos aspectos conceptuales y sus relaciones se abordan en el Enfo-
que ético, axiológico y humanista, el cual se amplía y enriquece en la medida
en que penetramos en su lugar y papel en la actividad pedagógica. En este libro
se da una muestra de algunos ejemplos del tratamiento de la educación en va-
lores y del desarrollo de la profesionalidad de los docentes en la formación de
profesores con este enfoque.
14 Introduccón
Objetivo general
Valorar los retos y las perspectivas de la Educación en valores que asume la Pe-
dagogía como ciencia, ante la necesidad de una visión más integradora, interdis-
ciplinaria, participativa, de cooperación y dialógica, que exige la profesionalidad
pedagógica del maestro en el proceso formativo de las nuevas generaciones,
como ciudadanos de bien en las condiciones que caracterizan la época en el
siglo xxi. Se tienen en cuenta las experiencias y resultados de proyectos de in-
vestigaciones de los autores y de los propios participantes.
1
2
Intervención de Hugo Chávez Frías el 17 noviembre 2003, sobre Educación Ciudadana
en Venezuela.
3
Martí Pérez, José: Ob. Cit. T. 19, pp. 375-376.
¿Por qué hablar de ética en estos tiempos de cambios de paradigmas? 17
cia pudieran encontrar hoy día, el tiempo y el valor necesarios para considerar
honesta y objetivamente su situación y las tareas que tienen por delante y si
actuaran en consecuencia, acrecentarían considerablemente las posibilidades de
dar con una solución sensata y satisfactoria a la peligrosa situación internacional
presente».
Los valores humanos, son universales siempre y cuando respondan a los
intereses genéricos de los seres humanos, cuando estos intereses se quiebran y
dividen a partir de lo material, los valores expresarán significados acerca de lo
bueno y malo según los intereses y aspiraciones a que responden, sobre todo, si
estos son de carácter económico y político. Por lo tanto, lo más importante para
la educación y el(la) maestro(a), es defender la formación de valores humanos
universales en correspondencia con la memoria histórica nacional y universal,
así como las mejores tradiciones culturales, patrióticas y ciudadanas, que nos
caracterizan como nación.
Rescatar esos valores donde se encuentren deprimidos, formarlos, desarro-
llarlos, promoverlos, entre otras acciones educativas, es la responsabilidad social
que tiene hoy la escuela en cualquier parte del mundo; para asumir este reto,
los educadores deben estar preparados y elevar su profesionalidad pedagógica,
transformar su desempeño profesional y sus modos de actuación para cubrir las
expectativas de la pertinencia social y la calidad educativa de nuestra gestión, en
ello hay mucho que hacer y un camino largo por donde andar. En ese camino de
cambios de paradigmas hacia la necesaria integración de lo común identitario
en la diversidad multicultural de los pueblos latinoamericanos y caribeños, se
inscribe la contribución del fomento de la educación ética y en valores, con una
esencia emancipadora, libertaria, y endógena del desarrollo de las potencialida-
des humanas para la prosperidad y sostenibilidad del crecimiento armónico de
nuestros países.
En la realidad de la Revolución cubana, conscientes de los peligros que
nos amenazan, hemos aprendido las lecciones del pensamiento revolucionario
cubano, desde nuestros padres y madres fundadores hasta la actualidad, quienes
nos dicen que el conocimiento y la moral, son atributos esenciales de los seres
humanos para la consecución de los fines, teniendo muy en cuenta los medios
que se emplean para alcanzarlos. A continuación dos fragmentos del pensa-
miento martiano ilustran la presencia de importantes principios de la pedago-
gía de todas las épocas:
instrucción. Las cualidades morales suben de precio cuando están realzadas por las
cualidades inteligentes.»4
• Principio del vínculo dialéctico entre la educación y la época, cambiante e
histórico-concreta.
• Principio del carácter activo de la educación en la relación de la aprehensión
del conocimiento y la vida práctica, cuyas necesidades son el motor del de-
sarrollo de las fuerzas productivas, la ciencia y la tecnología.
«Al mundo nuevo corresponde la Universidad nueva.
A nuevas ciencias que todo lo invaden, reforman y minan nuevas cátedras.
Es criminal el divorcio entre la educación que se recibe en una época, y la época. Edu-
car es depositar en cada hombre toda la obra humana que le ha antecedido: es hacer a
cada hombre resumen del mundo viviente, hasta el día en que vive: es ponerlo a nivel
de su tiempo, para que flote sobre él, y no dejarlo debajo de su tiempo, con lo que no
podrá salir a flote; es prepararlo para la vida».5
4
Ídem.
5
Martí Pérez, José: Ob. Cit., p. 281.
6
Engels Federico: Anti Duhring, p. 116.
¿Por qué hablar de ética en estos tiempos de cambios de paradigmas? 19
7
El término de Dimensión ética de la educación, aparece tratado por la autora en el fo-
lleto elaborado para la formación experimental de los Profesores Generales Integrales,
publicado por Pueblo y Educación en el 2000, en él se abordan las ideas esenciales del
enfoque ético, axiológico y humanista aplicado a la educación en sus conceptos claves.
Posteriormente en el 2002 se hace una edición de un texto más amplio donde la au-
tora incorpora artículos de los doctorantes del proyecto de Ética y profesionalidad que
asesoraba y que amplían la concepción del enfoque ético, axiológico y humanista; final-
mente en el 2006 se publica una tercera edición del texto con formato de libro, donde
se renueva la estructura de los capítulos y los contenidos del enfoque ético, axiológico y
humanista y sus aplicaciones en los aportes de los coautores en sus tesis de doctorado.
22 Dra. Cs. Nancy Chacón Arteaga
Pedagogía como ciencia rectora del proceso educativo, afronten múltiples retos,
uno de ellos es la forma fragmentaria con que aún se concibe tanto en la teoría
como en la práctica pedagógica este complejo proceso, de carácter multidis-
ciplinario, interdisciplinar y multidimensional, en el que intervienen muchas
variables y factores tanto internos como externos comprometidos –al menos en
lo formal y normado– con el propósito esencial de la educación integral de las
nuevas generaciones.
El tratamiento intencionado y explícito de la dimensión ética de la educa-
ción como un contenido nuclear de la Pedagogía de todos los tiempos, puede
contribuir a principios reguladores internos del proceso educativo tales como:
la coherencia, la direccionalidad, la intencionalidad y la sistematicidad, los que
requieren hoy más que nunca la convergencia de la palabra y la acción como
base del prestigio moral del maestro en la integración del complejo proceso de
instruir y educar a nuestros niños y jóvenes, que como dijera José Martí en su
concepto de educar, los prepare para la vida. Lo anterior nos permite integrar las
ideas que explican qué entender de esta idea y su complejidad:
La dimensión ética de la educación, es un concepto cuyo contenido expresa el
lugar y el papel que tienen las ideas y concepciones éticas de la cultura de la épo-
ca, el sistema de la moral y los valores morales vigentes, en el proceso educativo,
como fundamento ético-axiológico del fin y esencia de la educación, presente
en la dinámica entre el ser moral o la moralidad practicada en la convivencia
social y las representaciones del deber ser y el ideal moral, a que se aspira en los
modelos educativos y que le imprimen una proyección valorativa y de regula-
ción moral hacia el desarrollo humano como idea de una tendencia del progreso
humanista en el proceso formativo.
A su vez, en la dimensión ética de la educación, se revelan las interinfluen-
cias y relaciones morales que se producen entre las personas, agencias y actores
educativos en los diferentes escenarios y contextos de la educación, con sus
particularidades de manifestaciones en las cualidades morales de dichos sujetos
(docentes, estudiantes, familia, comunidad), en la subjetividad o mundo interior,
en la educabilidad y sensibilidad humana, en la actitud y las relaciones ante lo
que nos rodea, la comunicación, en la resolución de los conflictos morales y las
normas presentes en la elección del acto moral, concretada en los modos de ac-
tuación y los comportamientos asumidos, los que dicen del grado de educación
moral de la persona y su cultura ética.
somos sus padres, abuelos e incluso maestros, y por ende en ellos –como dijo
José Martí en su revista La Edad de Oro– está la «esperanza del mundo».
En esa esperanza se cifran los anhelos de que al crecer ellos sean mejo-
res que nosotros, más cultos, educados y preparados para desempeñarse com-
petentemente en su trabajo. La educación está en la base de este crecimiento
humano, en particular de la moral y los valores morales, que ocupan el centro
de la calidad de la persona, empezando por sus sentimientos y cualidades que lo
distinguen en sus relaciones, la forma de expresarse en la comunicación con su
familia, y el trato con los demás.
No podemos olvidar que la moral es una importante esfera de la regulación
y la autorregulación consciente de las actitudes y del comportamiento huma-
no en la sociedad y que la autoconciencia moral de cada persona permite la
valoración de todo lo que sucede tanto en lo personal como a otras personas,
lo que acontece a nuestro alrededor o en el mundo. Esta valoración es la que
proyectamos en nuestros puntos de vista y juicios valorativos, los que siempre
tendrán el sello personal de nuestra mirada, subjetividad e intereses, aspectos
inherentes a la esfera de la moral, donde los valores personales organizados en
escalas jerárquicas juegan el papel de orientadores no solo de la valoración, sino
de la actitud y el comportamiento que asumimos ante los hechos o circunstan-
cias de la vida cotidiana.
Es por ello que la educación moral y de los valores morales inherentes como
brújulas orientadoras, están en la base de toda educación y es un aspecto inte-
grador de los conocimientos y habilidades con su aplicación en la vida práctica,
en el cómo obrar, qué comportamiento elegimos ante los conflictos o dilemas
que se presentan en el día a día.
La familia tiene un papel singular en la educación moral de los niños des-
de antes de su nacimiento, los acompaña día y noche en lo que es esa «escuela-
hogar», de la que forman parte las costumbres y las normas, los sentimientos
y afectos expresados en el lenguaje, así como las formas de la comunicación y
de relacionarse, que son esenciales, pues constituyen modelos que por exce-
lencia primero imitan los niños y luego poco a poco interiorizan como suyos
propios, y aplican en su moral; así será cómo se expresan y se comportan en la
escuela, con sus compañeros, maestros, en la cuadra con sus vecinos o en los
lugares públicos.
Obviamente estamos ante un problema nada sencillo pues se trata de los
seres humanos y de su educación moral, proceso que transcurre en el contexto
de la sociedad y en el que intervienen múltiples factores e influencias, en una
época impactada por el desarrollo científico y tecnológico, donde hay quienes
piensan que este tema no hay que tomarlo muy en cuenta y que es un asunto de
la vida privada de cada persona. Nada más lejos de la verdadera importancia que
¿Por qué hablar de ética en estos tiempos de cambios de paradigmas? 25
8
Martí José: «Ismaelillo», Obras completas, T. 16, p. 15.
2
LA COOPERACIÓN PEDAGÓGICA
PARA LA EDUCACIÓN EN VALORES
12
Ídem: 10.
13
Delgado Díaz C. J. Ob. Cit.: 126.
40 Dra. C. Yara L. Cárdenas Cepero
ser analizada desde los objetivos y los contenidos de los programas de las dife-
rentes disciplinas y asignaturas, requiere considerar cada una de las categorías
didácticas y la relación entre estas.
La educación bioética se ha estado desarrollando en la Universidad de Cien-
cias Pedagógicas «Enrique José Varona» en diferentes asignaturas del área de las
Ciencias Naturales, en la asignatura Geografía General se elaboró un software
para contribuir a desarrollar una cultura científica en los estudiantes del Curso
Pre-médico, desde la educación bioética, también se confeccionó un material
de estudio complementario de la asignatura Geografía de Preuniversitario y
su metodología, para que pueda ser analizado, reflexionado y debatido por los
estudiantes, además se diseñaron estrategias para desarrollar diferentes temas
geográficos tales como la relación de la ciencia, la tecnología y el desarrollo, con
la calidad de vida y sus impactos en los países del Tercer Mundo.
En este sentido, también se construyó una concepción integradora y
desarrolladora del proceso de enseñanza-aprendizaje de las Ciencias Natu-
rales desde un enfoque ciencia, tecnología y sociedad en su articulación con
el enfoque ético, axiológico y humanista de la educación, desde la educación
bioética, como una alternativa didáctica de las emisiones televisivas de las
clases de Química y de Biología para la enseñanza preuniversitaria.
Desde hace varios cursos se desarrollan alternativas y estrategias didácticas
en la enseñanza de diferentes asignaturas y disciplina, biológicas y químicas,
tales como Biología Celular y Molecular, Fisiología, Genética Ecológica, Quí-
mica General, Historia de la Biología e Historia de la Química.
Resumiendo, se puede decir que las acciones realizadas por como parte
del proceso de introducción de resultados científicos relacionados con el en-
foque ético axiológico y humanista, han permitido su articulación con el enfo-
que ciencia, tecnología y sociedad para la formación integral de la personali-
dad de los estudiantes y la profesionalidad pedagógica en su ascensión ética y
bioética, proporcionándole al docente una mejor preparación en su desempe-
ño profesional pedagógico, para educar en el sistema de valores de la Revolu-
ción cubana y asumir el reto de las transformaciones que requiere la escuela
en la actualidad.
4
15
Chacón N.: Dimensión ética de la educación cubana, 2006, p. 9.
16
Ídem: 137.
44 Dra. C. Olga R. Cabrera Elejalde
17
Martín-Barbero J.: «La crisis de las profesiones en la ¨sociedad del conocimiento¨».
2002, pp. 177-182. Disponible en: http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.
jsp?iCve=105117941014
La cultura económica en la profesionalidad pedagógica de los docentes para ... 45
20
García Ramis L.: Gramma, año 17 / No. 296, La Habana, 24 de octubre de 2013. Dis-
ponible en : http://www.granma.cubaweb.cu
48 Dra. C. Olga R. Cabrera Elejalde
• Ineficiencia.
• Corrupción.
• Estereotipos raciales y de género.
• Manipulación psicológica.
• Exclusión.
• Autoritarismo.
• Desconocimiento de las competencias y éxitos de los colegas.
• Celos profesionales.
En el plano psicológico:
En el aspecto moral:
Leninismo e Ideario Martiano, que reciben todas las carreras de las Universida-
des de Ciencias Pedagógicas.
Impacto en la actividad científica estudiantil: Presentación de trabajos
relacionados con la Ética y la cultura económica en jornadas científico-estu-
diantiles, eventos científicos y en el concurso Oro Nuevo que convoca la Oficina
del Programa Martiano, resultaron ganadores cinco trabajos, uno de ellos ha
tenido continuidad en un curso de Martí y la Psicología que trabajan alumnas
ayudantes junto a profesores en el tercer año de la Facultad de Ciencias de la
Educación.
Impacto en la práctica docente: Los estudiantes de Psicopedagogía, valo-
raron las experiencias de los docentes de la escuela donde realizaron la práctica
de familiarización en cuanto a la utilización de la obra martiana en el proceso
pedagógico, y aplicaron el diagnóstico socioeconómico de los estudiantes que
les permitió caracterizarlos a partir del contexto social y la composición clasis-
ta, incorporando estos elementos al trabajo investigativo final de la asignatura
Ética e ideario martiano.
Impacto en el proceso de enseñanza-aprendizaje: La utilización de la
tecnología educativa en el debate de películas y documentales, de canciones y
la interpretación de textos, así como la navegación por las multimedias: Ética
y valores I y II, Fidel: Ética y valores y Cultura económica y valores, elabora-
das por los miembros del proyecto de investigación, favorecieron la motiva-
ción por los temas de la ética y la cultura económica y estimuló la reflexión
ideopolítica.
Valoraciones de los estudiantes: Mediante la aplicación de la técnica de
lo positivo, lo negativo y lo interesante (PNI), los estudiantes valoraron que la
asignatura permitió ampliar su cultura general integral y comprender mejor
la ideología de la Revolución cubana, reconocieron lo novedoso de algunos
temas relacionados con Martí, que no solo despertó el interés por investigar
su vida y obra, sino que además aprendieron cómo hacerlo y aplicarlo a la
especialidad y a la profesión, valoraron positivamente la visita a los museos.
Resultó interesante y emocionante apreciar los documentales de los primeros
años de la Revolución cubana, etapa que no vivieron.
Resumiendo, se puede plantear que:
Una concepción clara y precisa de la introducción de resultados científicos
en la práctica educativa requiere de hacer vivir la teoría en su vínculo con la
práctica de la vida cotidiana y de la profesión, así como su articulación con el
ideario martiano y las tradiciones revolucionarias del pueblo cubano, contribu-
yen a la formación de valores universales-profesionales, y dentro de ellos los de
la cultura económica.
5
UN PROYECTO EN ACCIÓN.
LA PROFESIONALIDAD DEL DOCENTE Y EL
ENFOQUE ÉTICO, AXIOLÓGICO Y HUMANISTA
EN LA FORMACIÓN DE MAESTROS
Una de las características que tiene la concepción actual del trabajo científico
por proyectos en la universidad es la integración de recursos y esfuerzos para
la búsqueda de respuestas y soluciones a problemas complejos de la práctica
educativa, multifactoriales y multidimensionales, los que requieren de enfoques
multidisciplinarios e interdisciplinarios, así como de la cooperación entre los
profesionales de un centro o de varias instituciones.
Para el logro de estos empeños en la formación, es necesario tener en cuenta
la concepción sobre la profesionalidad pedagógica, la que es trabajada desde
los años noventa del pasado s. xx en sus variaciones de contextos y escenarios
socioeconómicos-educativos, hasta la actualidad, reformulándose sus dimensio-
nes para la necesaria contextualización ante los retos y las exigencias, a fin de
cumplir con eficiencia en cada etapa ante la sociedad y la familia cubana, en la
formación de maestros y sus desempeños en la educación en las escuelas.
Este acervo teórico práctico acumulado acerca de la profesionalidad pe-
dagógica ha permitido que hoy pueda verse como un valor compartido en el
sistema de estos valores que presiden la Estrategia Maestra de la Universidad y
derivar un trabajo más coherente hacia el interior de los procesos sustantivos de
la formación y entre los propósitos del proyecto con las estrategias de cada fa-
cultad, los modelos de egresados de las carreras y su concreción en los proyectos
educativos de las diferentes instancias.
52 Dres. Cs. N. Chacón, M. Güemez, O.R. Cabrera, L. Abreu
Este autor enfatiza en que la dirección de los procesos sociales sobre la base
de los valores, significa incorporar la dimensión humanista en el sentido más
amplio de la gestión, y que en su sentido ético contrarresta los riesgos siempre
21
Abreu Mejías Luis. Por nuevos caminos en la dirección sindical. Ciencia y valores. 2006, p. 47.
Un proyecto en acción. La profesionalidad del docente y el enfoque EAH en la... 53
22
Mendoza Portales L. Cultura y valores en la obra de José Martí. Tesis doctoral. La Ha-
bana 2005.
Un proyecto en acción. La profesionalidad del docente y el enfoque EAH en la... 57
El método propuesto, actúa como un modelo vivo que permite valorar los
principios morales, la ética pedagógica y la preparación política e ideológica de
los educadores por sus estudiantes. Estos maestros ejercen, desde su accionar en
la comunidad sociocultural escolar, una influencia estimulante sobre los estu-
diantes en formación al inspirar que estos últimos sientan admiración, respeto
o cierta afinidad que los obliga a actuar del mismo modo por su alta instrucción
y el accionar que ejercen en la enseñanza de los estudiantes en formación y en
los alumnos de la escuela.
Al utilizarse este método de la identificación con los educadores destacados
de la escuela, reconocidos por los estudiantes que junto a ellos trabajan y en mu-
chos casos bajo su tutoría de formación pedagógica, prevalece la relación entre
lo instructivo y lo educativo en aras de mejorar la motivación y actitud hacia
la profesión, por lo que se ejerce una influencia en lo cognitivo y lo afectivo, es
decir en los sentimientos y la voluntad de los estudiantes en formación, con el
objetivo de formar cualidades positivas y minimizar los rasgos negativos en su
conducta.
Con la aplicación de este método de identificación moral no se excluye la
utilización de otros métodos educativos de forma simultánea los que necesaria-
mente se complementan, tales como:
• El diálogo.
• La persuasión.
• La exigencia ante el cumplimiento del deber.
• La enseñanza para el aprendizaje activo, problematizador, valorativo, parti-
cipativo, aplicativo, cooperativo, con creatividad e independencia y vínculo
con la realidad escolar.
• La exhortación a las acciones positivas que irradian los educadores destaca-
dos, según el deber ser de cada situación de comportamiento y compromiso
con la comunidad escolar.
El diálogo que sostienen los educadores destacados y los estudiantes en
formación pedagógica, refleja las experiencias vividas por ambos, el amor a la
profesión, las convicciones revolucionarias y en ocasiones también la crítica
y la autocrítica como instrumentos de perfeccionamiento moral y de insatis-
facción con la realidad existente en la escuela, impera el respeto por el otro y
la humildad con la que refiere sus experiencias vivénciales como educador, ello
permite dejar a un lado la pasividad y buscar soluciones creativas en beneficios
de todos, transformándose la realidad escolar en un espacio de armonía y una
atmósfera moral orientadora y de comprensión mutua, que da lugar a los valo-
res y cualidades positivas. El lenguaje que se emplea en el diálogo es coherente
al coincidir la palabra con la acción, es hacer coincidir lo que se dice y se hace,
El método de identificación afectiva en la formación moral y de valores de ... 63
es claro, sencillo y respetuoso de las opiniones pues entre ellos existe afecto y
llegan a acuerdos justos para un mejor desarrollo de la práctica educativa que
transcurre en la escuela. El método de la identificación moral de los estudiantes
de pedagogía con los docentes como educadores destacados, es además, una for-
ma de enaltecer a estos maestros y a la profesión, ellos son los paradigmas en el
proceso de enseñanza-aprendizaje y de la formación de los futuros profesiona-
les de la educación. Es también una vía para elevar la autoestima de los educa-
dores jubilados que se incorporaron a la docencia ante la necesidad de docentes
que tiene la enseñanza, y los que están en ejercicio, que tanto han aportado por
el proyecto de justicia social del Estado cubano.
E. Báxter en la conferencia impartida el 12 de marzo del 2009 en la Uni-
versidad de Ciencias Pedagógicas «José Martí», sobre el tema: Educar en va-
lores: labor del docente y la importancia de su ejemplaridad, incita a la utilización
del método del ejemplo personal, al respecto señaló: «[…] el método por
excelencia para educar en general y formar valores en particular es el EJEM-
PLO PERSONAL; se requiere en los momentos actuales, potenciar más los
modelos positivos, que con su labor diaria a veces imperceptibles realizan los
docentes, desde los lugares más apartados del territorio hasta en las zonas más
pobladas de nuestro país».
En la aplicación del método de identificación moral de los estudiantes de
Pedagogía con los docentes como educadores destacados, se aplica la elabora-
ción por parte de los estudiantes la elaboración de un registro biográfico de es-
tos, por medio de diferentes métodos y técnicas investigativas, en particular del
método etnográfico o antropológico. El método educativo se relaciona armóni-
camente con los métodos de aprendizaje al promover la indagación científica,
búsqueda parcial, heurística y la observación. Entre los procedimientos utiliza-
dos está el explicativo, argumentativo, analítico, deductivo, sintético, indagativo,
valorativo, demostrativo.
Entre los medios están el lenguaje como forma comunicativa, los docu-
mentos (expediente laboral del educador, cartas, diplomas, reconocimiento), las
fotografías, relatos, pinturas, dibujos, los esquemas, poesía, las canciones. Es
necesario destacar que en la presentación de estos medios se implica tanto a los
estudiantes en formación como a los alumnos de la Secundaria Básica.
Los relatos reflejan el accionar de los educadores contemporáneos desta-
cados en la vida cotidiana sociocultural de la comunidad, que en ocasiones se
hacen acompañar de fotos y documentos de valor histórico.
La fotografía, como los documentos, son representaciones gráficas, que acre-
ditan la veracidad de lo relatado, como medios ilustrativos, facilitan la asimila-
ción de los conocimientos y la formación de sentimientos de identidad y perte-
nencia. La fotografía es un signo visual no lingüístico, que propicia información
64 Dra. C. Marta Cossío González
• Cualidades morales que posee el educador que son admiradas por los edu-
candos.
• Breve caracterización del profesor.
• Datos del profesor tales como:
• Nombres y dos apellidos
• Fecha de nacimiento y lugar ( municipio, provincia)
• Breve síntesis de la vida escolar y nivel de escolaridad alcanzado.
• Motivaciones que lo llevaron a ejercer la profesión de profesor.
• Datos laborales:
• Escuelas donde laboró, cargo que ocupó.
• Datos de valor histórico.
• Tareas que ha cumplido en apoyo a la comunidad donde vive.
• Cargos y tareas desempeñadas en las organizaciones políticas y de masas.
• Reconocimientos recibidos.
Relatos del profesor:
En el diálogo sostenido con los educadores se recogen los relatos, los que refle-
jan las experiencias vividas, el amor a la profesión, los valores que caracterizan a
los profesionales de la educación y las actividades desarrolladas en las que existe
una correspondencia entre la palabra y la acción, entre lo que dice y hace.
Se define el relato del educador como la narración de un hecho o aconte-
cimiento de interés cercano a la escuela, a la profesión pedagógica, en el que se
refleja el contexto donde interactúa, contado por uno de sus miembros que ha
sido personaje directo de las acciones que narra o ha estado vinculado al hecho
por relaciones afectivas, se expresan los sentimientos generados por la actua-
ción, como resultado se obtiene el juicio valorativo sobre el sujeto, la comunidad
escolar o social implicada.
7
medios de influencias sociales, los sujetos formadores, las vías y los métodos de
formación de valores.
Dentro de los factores se encuentran las condiciones del contexto macroso-
cial y del micromedio en que se forma y se desenvuelve el individuo, su situación
de clase, las condiciones socioeconómicas de su seno familiar, sus condicio-
nes de vida, las características de la comunidad en que vive, la comunicación y
normas de convivencia familiar, el nivel cultural y hábitos de educación, entre
otros. Además condiciona incluso el proceso de reajustes y cambios internos
(en el orden jerárquico) de la escala de valores individuales, que se producen en
determinados momentos trascendentales de la vida personal o social y que le
imprimen un sello personalizado a las cualidades morales en su manifestación.
En el sistema de medios de influencias sociales, la familia y la escuela, ocupan el
lugar cimero en la formación de valores y cualidades personales y en particular
morales, en los niños y jóvenes.
Es en el seno familiar en el cual, desde que el niño nace, se trasmite la
significación social que tienen los sentimientos, las actuaciones, los hábitos y
costumbres correctas (aceptados socialmente), e incorrectas (no aceptadas), se
le enseña el sentido de lo que es bueno y lo que es malo, cómo comportarse en
sus relaciones con los familiares y en la convivencia con los vecinos, el barrio, en
los lugares públicos y social en general, es en ese contexto donde el niño o joven
asimila el valor del respeto y consideraciones a tener en cuenta en sus actitudes y
relaciones con las personas y con el mundo en el que vive; deberes estudiantiles,
amor a la patria, relaciones con la naturaleza (cuidado del medio ambiente, de la
flora y la fauna, animales afectivos), respeto a las reglas urbanísticas, observan-
cia de la legalidad y leyes ciudadanas, entre otras. En la literatura científica se
recogen seis modelos generales de la Educación Moral, asociadas a los modelos
psicopedagógicos de la enseñanza-aprendizaje, los que se fundamentan en di-
ferentes concepciones sobre la formación de valores, estos son:
Marque con una cruz las características del comportamiento del estudian-
te, según la frecuencia de manifestación en el momento de iniciar el control
sistemático de la observación, así como las modificaciones que se producen en
los mismos en los momentos de efectuar los cortes periódicos del control, cuyo
lapso de tiempo es determinado convenientemente por el observador.
expresiones que se correspondan con los valores que pretendemos formar, entre
muchas otras, según la creatividad del maestro y sus propios estudiantes.
Estos talleres pueden contribuir además a desarrollar la valoración y la au-
tovaloración como mecanismos importantes para la autorregulación y la forma-
ción de la autoconciencia. Cada dimensión a trabajar en forma de taller tendrá
una dosificación de tiempo libre según el fondo en el horario de que se disponga
y las vías de la instrumentación del mismo.
Proyecto de Estrategia curricular de ética
en la formación de maestros
La estrategia curricular de ética, da respuesta a las carencias y necesidades for-
mativa de los estudiantes de carreras pedagógicas, aspecto que de una u otra
manera entra a formar parte de los objetivos del Modelo del egresado de los
planes de estudio D, de todas las carreras solo que de forma implícita y poco
intencionado.
Ante las limitaciones que en el conocimiento de la Ética existe en la for-
mación docente desde los planes de estudios anteriores, es necesario que esta
estrategia incluya la preparación por diversas vías de los docentes formadores
para el desarrollo de su profesionalidad y puedan contribuir con mayor efecti-
vidad a este propósito educativo en la formación de los profesionales que deben
cumplir su encargo social con apego a la ética, la moral y valores humanistas de
la profesión y de nuestra sociedad.
Objetivo general:
• Contribuir a la educación ético-moral y en los valores propios del humanis-
mo de la profesión del maestro, que estimule la profesionalidad para cum-
plir con el encargo social de educar a las nuevas generaciones.
Objetivos específicos:
• Promover acciones concretas en el proceso formativo con la aplicación in-
tencionada del enfoque EAH y su manifestación en la esfera de actuación.
• Desarrollar una ética profesional basada en el respeto a la dignidad humana,
la práctica de la solidaridad, la cooperación pedagógica en el trabajo, con los
estudiantes y los factores sociales con quienes interactúan.
Direcciones estratégicas:
1. Proceso formativo.
• Componente académico.
• Actividad estudiantil científico investigativa.
• La práctica laboral.
Estrategias para contribuir a la educación en valores en la escuela 79
23
Hay cubanos que, aun siéndolo con tales razones, no quieren ser cubanos y hasta se
avergüenzan y reniegan de serlo. En estos la cubanidad carece de plenitud, está castrada.
[...] [S]on precisas también la conciencia de ser cubanos y la voluntad de quererlo ser.
[...] [E]sa plenitud de identificación consciente y ética de lo cubano. [...] Pienso que
para nosotros los cubanos nos habría de convenir la distribución de la cubanidad, condi-
ción genérica de cubano, y la de cubanía, cubanidad plena, sentida, consciente y deseada;
cubanidad responsable, cubanidad con las tres virtudes —dichas teologales—, de fe,
esperanza y amor. (Tomado del libro Moralidad histórica, valores y juventud. Editorial
Acuario, La Habana, 2000, de la autora Nancy Chacón Arteaga).
82 Dra. Cs. Nancy Chacón Arteaga
En Cuba existe una tradición cultural histórica que está asociada a una
profunda concepción de Revolución desde la forja de la nación, que tiene en
sus propias raíces lo mejor del pensamiento ético universal, del cristianismo,
de la ilustración francesa de los s. xvii y xviii y sus redimensionamientos, a la
luz del pensamiento independentista latinoamericano y caribeño, como el de
los próceres Bolívar, Hidalgo, San Martín, Sucre, entre otros, cuyas influencias
cristalizaron en los valores estructuradores de la conciencia nacional tales como:
el sentido de la patria y el patriotismo, los ideales del amor a la libertad y la
soberanía nacional, la justicia social y la unidad nacional.
Tal como preconizó Cintio Vitier en su obra Ese Sol del mundo moral. Apun-
tes para el estudio de la historia de la eticidad cubana, una eticidad ha acompañado
al proceso histórico cubano en toda su amplitud, épocas y esferas de la vida
social.
En el estudio sobre la «Moralidad histórica: premisa para proyectar la ima-
gen moral del joven cubano a formar», realizado por la autora Nancy Chacón
Arteaga (tesis doctoral en Filosofía, 1996), se enfatiza en la relación ética y
política como una regularidad del desarrollo histórico de la ideología revolucio-
naria, que tiene una continuidad en los valores e ideales de las diferentes gene-
raciones de cubanos que lucharon en cada época histórica por su concreción en
la transformación de una realidad social de justicia y dignidad plena del hombre
y que llega a su colofón con el triunfo de la revolución el 1ro. de enero de 1959.
Estos ideales se sustentan en un amplio sistema de valores morales aglu-
tinados por la tríada de la dignidad humana, la intransigencia ante todo tipo
de dominación extranjera (como contenido del antimperialismo) y la solida-
ridad, orientadores del sentido del deber y la responsabilidad de las genera-
ciones de cubanos que han luchado por hacer realidad tales ideales políticos,
morales y jurídicos (raíces del civismo), desde las gestas independentistas del
s. xix, en su continuidad histórica y articulación con las doctrinas de Marx,
Engels y Lenin, hasta las batallas de nuestros días por una sociedad socialista
próspera y sostenible.
24
Martí Pérez José: «Maestros ambulantes», Ob. Cit, T. 8 pp. 288 – 292.
Apuntes para una concepción de la educación en valores en la Escuela cubana 83
25
Castro Ruz Fidel. Discurso por el Centenario del inicio de la Guerra de Independencia,
La Habana, 1989.
84 Dra. Cs. Nancy Chacón Arteaga
• Las elevadas exigencias y expectativas que tienen los jóvenes, las familias, las
instituciones culturales, científicas, militares o empleadores en general del
país, acerca del resultado formativo del egresado de cada uno de los centros
escolares, es la medida o pone a prueba la pertinencia social de las insti-
tuciones educacionales, la calidad del proceso educativo en la correlación
que incluye la profesionalidad de los maestros y/o docentes,26 su eficiencia
y efectividad, en el cumplimiento de las finalidades y objetivos propuestos
en cada nivel.
• La articulación de la escuela, con el fortalecimiento de la participación de
la familia y de su papel como principal responsable de la educación de sus
hijos y con las potencialidades de la comunidad, abriendo su espectro de
interacciones a partir de un currículo contextualizado, flexible y abierto a
las interinfluencias educativas, que la hagan ser un centro en el que los estu-
diantes quieran estar en él, se sientan motivados y disfruten los aprendizajes
diversos que lo hagan el centro cultural más importante de la comunidad.
26
Ver «Concepción de la Profesionalidad pedagógica» en Dimensión ética de la educación
cubana, y en Martí y Fidel en el código de ética del educador cubano, por Pueblo y Educa-
ción 2006 y 2013 respectivamente, trabajada por la autora Nancy Chacón Arteaga.
86 Dra. Cs. Nancy Chacón Arteaga
En la secundaria básica:
A) la formación de una base cultural general –fin cultural–), B) la formación de una alta
conciencia moral y cívica –fin ético–), C) la indagación y orientación de las vocaciones
–fin económico–).28
27
Chacón N. Moralidad histórica, valores y juventud, 2000.
28
Mensaje Educacional al pueblo de Cuba, la Habana 1960. Edición Centro de Estudios
Martianos. Habana, 2008.
Apuntes para una concepción de la educación en valores en la Escuela cubana 87
corto, ya se había cumplido el Programa del Moncada. Se dictó en ese año la ley
de Nacionalización de la enseñanza.
La ampliación de los servicios educacionales, la Reforma Universitaria
en el año 1962 y el célebre discurso del Che: «El socialismo y el hombre en
Cuba» de 1965, marcan pautas para el desarrollo educativo, en particular la
formación de una conciencia revolucionaria sobre la base de una nueva moral
y valores socialistas.
Durante los setenta, etapa de la institucionalización, se produjo la confor-
mación de la nueva superestructura de la sociedad socialista cubana y una con-
solidación de la ideología en el arraigo de una moral revolucionaria de carácter
colectivista, del trabajo socialista, más generalizada y asumida por la sociedad.
Se realizó el Primer Congreso Nacional de Educación y Cultura de 197l,
donde el magisterio cubano fue muy crítico al señalar las dificultades que tenía
la educación y manifestó su compromiso para cumplir con el encargo social de
educar a las nuevas generaciones.
En el I Congreso del Partido Comunista de Cuba en 1975, se definieron
la naturaleza y el fin de la educación cubana en las Tesis y Resoluciones, con-
cretada en la educación comunista, integral y multifacética de las nuevas gene-
raciones, se explicaron las diferentes direcciones educativas que la integran. El
congreso partidista fue la antesala del inicio del perfeccionamiento de todo el
sistema educacional, que implicó una profunda revolución.
Se introdujo el desarrollo del principio de la vinculación del estudio con el
trabajo como base de la educación integral de los estudiantes, por lo que apare-
ció una amplia red de centros internos en todo el país: «Escuelas en el campo»,
para las educaciones media básica y media superior, así como la aparición del
plan «La Escuela al Campo», entre las múltiples formas en que se aplicó este
principio.
La formulación por el Comandante Fidel Castro de los principios, normas
y valores del contenido de la ética y la moral del maestro cubano, los principios,
normas y valores del deber ser de un educador revolucionario, se reflejaron en
la graduación del IX Contingente de maestros Manual Ascunce Domenech el
7 de julio de 1981.
A mediados de los ochenta se manifiesta la contradicción entre la moral del
deber ser en la construcción de la nueva sociedad y la aparición de las tendencias
negativas de carácter pequeño- burguesas (ostentación, lucro personal y privile-
gios, en el contexto de un cierto «igualitarismo» en las condiciones económicas
de inflación), así como los errores cometidos en la economía, ante lo cual se
apeló a la lucha por parte del Partido y gobierno a partir de un análisis crítico
y autocrítico de la situación existente y la toma de conciencia de tales errores,
se tomaron medidas de «rectificación» y se apeló al trabajo político ideológico,
88 Dra. Cs. Nancy Chacón Arteaga
Castro Ruz, Fidel. Aula Magna 17 noviembre. Consejo de Estado. La Habana, 2005.
29
«¿Es que las revoluciones están llamadas a derrumbarse, o es que los hombres pueden
hacer que las revoluciones se derrumben?¿Pueden o no impedir los hombres, puede o no
impedir la sociedad que las revoluciones se derrumben? Podía añadirles una pregunta
de inmediato. ¿Creen ustedes que este proceso revolucionario, socialista, puede o no
derrumbarse?... lo han pensado alguna vez? ¿Lo pensaron en profundidad? (pp. 50-51).
¿Puede ser reversible un proceso revolucionario?, ¿cuáles serían las ideas o el grado de
conciencia que harían imposible la reversión de un proceso revolucionario? Cuando los
que fueron de los primeros, los veteranos, vayan desapareciendo y dando lugar a nuevas
generaciones de líderes, ¿qué hacer y cómo lograrlo? Si nosotros al fin y al cabo, hemos
sido testigos de muchos errores, y ni cuenta nos dimos». p. 58.
Apuntes para una concepción de la educación en valores en la Escuela cubana 91
30
Libro Educación Moral, 1988.
94 Dra. Cs. Nancy Chacón Arteaga
31
Libro Formación de valores morales. PROMET, 1999.
Apuntes para una concepción de la educación en valores en la Escuela cubana 95
32
Libro Moralidad histórica, valores y juventud, 2000.
33
Algunos resultados sobre estudios de la profesionalidad pedagógica.
96 Dra. Cs. Nancy Chacón Arteaga
Fundamentación de la concepción
Educación en valores y formación de valores, dos enfoques de un
complejo proceso de crecimiento humano
Ver autores filósofos cubanos como Zaira Rodríguez Ugido, J. R. Fabelo Corzo, Rigoberto
34
Pupo Pupo, Luis López Bombino, Nancy Chacón Arteaga, Lissette Mendoza Portales.
Apuntes para una concepción de la educación en valores en la Escuela cubana 99
que hemos llegado hoy.» «[P]ero la voluntad del revolucionario no se detiene jamás ante
lo que concibe posible, y es un problema de voluntad, es un problema de firmeza, es un
problema de convicción, es un problema de confianza [...]Revolucionarios son aquellos
que las conciben con la inteligencia y las realizan con la voluntad [...] porque no es
revolucionario [...] quien comprende teóricamente un problema y solamente de una
manera teórica, sino quien es capaz de llevarlo a cabo de una manera práctica, de una
manera real. [...]» «El revolucionario es un hombre que tiene una conducta limpia, un
espíritu de sacrificio a todo tren, que entrega su vida, su esfuerzo, su energía, sus horas
de sueño, sus horas de descanso [...] todo lo entrega para trabajar para los demás [...]
y vive muy feliz [...] con ese mismo ardor cada revolucionario defenderá la obra que es
su obra [...].» «El revolucionario actúa bien, modestamente, sencillamente, consciente-
mente, pacientemente [...]. Puede hacerse revolucionario únicamente, por la persuasión,
por la razón y por el ejemplo». (Castro Fidel: Ideología, conciencia y trabajo político, Ob.
cit., pp. 267-268, 244, 243, 242. Tomado de Chacón Arteaga Nancy. Moralidad histórica,
valores y juventud. Libro, Editorial Acuario. La Habana 2000).
Apuntes para una concepción de la educación en valores en la Escuela cubana 103
Principios sociológicos
1. Carácter multifactorial de los valores y del proceso de su formación
Los valores como parte de la vida espiritual e ideológica de la sociedad y del
mundo interno de los individuos, reciben las influencias y las incidencias o
impacto de múltiples factores del contexto de la realidad social tanto del ma-
cro como del micromedio social en que las personas nacen y se desarrollan.
De todos los factores sociales que interactúan con la esfera de los valores, el
factor económico (de última instancia) es el determinante. Este determinis-
mo no es fatalista, pues los valores se erigen como ideales que orientan la
actividad de los individuos hacia actitudes transformadoras de la realidad.
2. Dialéctica de lo objetivo y lo subjetivo
La naturaleza espiritual e ideológica de los valores se expresa en forma de
concepciones, sentimientos, puntos de vista, ideales, cualidades y actitudes,
las condiciones objetivas en que viven las personas.
En este sentido los valores son una manifestación subjetiva (construcción
interna por el sujeto en forma de principios, normas, escalas de valores,
convicciones), de las condiciones materiales de su existencia (situación so-
cioeconómica, posición de clase, medio familiar, calidad de vida), las que
generan en el individuo las necesidades, los intereses, motivos e intenciones
de sus relaciones, de su actuación y en buena medida aportan el matiz de la
significación social positiva o negativa que tienen los hechos o fenómenos
para la sociedad y para el propio individuo.
Esta dialéctica de lo objetivo y lo subjetivo, abarca los tres planos en que
pueden analizarse la dinámica y contradicciones que se da en la esfera de los
valores (Fabelo Corzo, J. R, 1995) y las contradicciones existentes en esta
esfera tan compleja: el plano objetivo (sistema de valores histórico-sociales
vigentes), el plano subjetivo (valores del individuo), el plano objetivo- sub-
jetivo de los valores institucionalizados por la clase en el poder.
Apuntes para una concepción de la educación en valores en la Escuela cubana 107
Principios pedagógicos
1. Relación de la política, la ideología y los valores en el proceso pedagógico.
La educación como institución y proceso social responde al sistema político
imperante y a los intereses ideológicos de la clase dominante, como tal for-
ma parte de la organización política y la superestructura de la sociedad.
La política educacional de un país es una derivación y concreción de la po-
lítica de la clase en el poder, que se plasma en un sistema de concepciones,
fundamentos teóricos e ideológicos y de acciones encaminadas a la forma-
ción de las nuevas generaciones, atendiendo a un modelo de sociedad y de
personalidad.
108 Dra. Cs. Nancy Chacón Arteaga
Consideraciones finales
Consideramos que la Pedagogía ha avanzado en los fundamentos teóricos y
metodológicos que aborda el complejo proceso de la Educación en valores, que
va desde las tempranas edades, hasta los propios docentes en su formación per-
manente y su profesionalidad, sin embargo, aún se necesita escudriñar en los
aspectos multifactoriales e interdisciplinarios que se entrecruzan en la horizon-
talidad de este proceso y que tienen junto a los conocimientos y las habilidades
para operar con ellos, a los valores morales y de las ciencias, los que por lo ge-
neral son aglutinadores de la diversidad de tipos y sistemas de valores, escalas
y preferencias jerárquicas, para asumir una orientación y una actitud valorativa
ante el mundo en que se convive entre los seres humanos y con la naturaleza,
en la que cada persona se inserta con un sentido propio de la vida, autoestima,
autodeterminación y autorregulación responsable, como bases de la formación
ciudadana a la que todo país y sistema educacional aspira, respecto a sus nuevas
generaciones. En esa visión cada vez más integradora del proceso formativo, el
enfoque ético, axiológico y humanista hace junto a otros, una nueva aproxima-
ción a su esencia.
BIBLIOGRAFÍA
• Abreu Mejías Luis: Por nuevos caminos en la dirección sindical. Ciencia y Va-
lores. Editorial David, La Habana, 2006.
• Acosta, J.R y M.C González: El escenario postmoderno de la bioética, en
Acosta, José Ramón (editor científico). Bioética. desde una perspectiva cu-
bana. 1era. Edición. Publicaciones Acuario, La Habana, 1997.
• Báxter Pérez, E.: Educar en valores: Tarea y reto de la sociedad. Pueblo y Edu-
cación, La Habana, 2007.
• Buenavilla Recio Rolando: Historia de la Pedagogía en Cuba. Editorial Pue-
blo y Educación, La Habana, 2005.
• ————: Influencias educativas: factores objetivos y subjetivos. Dialéctica
de su desarrollo. Material digital. Universidad de Ciencias Pedagógicas, La
Habana, 2010.
• Cabrera Elejalde Olga R.: «La superación profesional para la apropiación
de la cultura económica por los docentes de la Facultad de la Educación
Media Superior». Tesis doctoral, Instituto Superior Pedagógico «Enrique
José Varona», La Habana, 2006.
• ————: (compiladora y guionista). Multimedia: «Cultura económica y
valores». Cesofte. Sello Editor EDUCACIÓN CUBANA, MINED, 2010.
• Cárdenas Cepero, Y.L.: «Alternativa pedagógica para la educación bioética
en el proceso de formación moral de los estudiantes de la carrera de Licen-
ciatura en educación, en el área de Ciencias Naturales». Tesis en opción al
grado científico de Doctor en Ciencias Pedagógicas, Universidad de Cien-
cias Pedagógicas, La Habana, 2006.
• Cárdenas Cepero y L. Pino García: «Hacia la Educación Bioética en el
Sistema Educativos en Proyectos Comunitarios». Materiales complemen-
tarios. Universidad de Ciencias Pedagógicas, La Habana, 2006.
• Castro Ruz Fidel: Acto celebrado por la Sociedad Espeleológica de Cuba,
en la Academia de Ciencias el 15 de enero de1960. Disponible en: www.
cuba.cu/gobierno/discursos/
118 Bibliografía
• Castro Ruz Fidel: Discurso por el Centenario del inicio de la Guerra de In-
dependencia 1968. En Ideología, conciencia y trabajo político. Editora Política,
La Habana, 1989.
• Cátedra de Ética: Cultura económica y desempeño pedagógico profesional.
Editorial Pueblo y Educación, La Habana, 2009.
• Colectivo de autores ICCP: Pedagogía. Editorial Pueblo y Educación, La
Habana, 1998.
• Comité Central. Partido Comunista de Cuba: «Programa Director Nacio-
nal para el reforzamiento de los valores en la sociedad cubana». CC PCC,
La Habana, 2007.
• Cossío M: «Metodología para la educación moral profesional de los es-
tudiantes de carreras pedagógicas en la microuniversidad». Tesis doctoral.
UCP «Enrique José Varona», La Habana, 2012.
• Chacón Arteaga N: Formación de valores morales. Propuestas Metodológicas.
Editorial Academia, La Habana, 1999.
• ————: Moralidad Histórica. Valores y Juventud. Publicaciones Acuario,
La Habana, 2000.
• ————: Dimensión Ética de la Educación Cubana. Segunda edición corre-
gida y ampliada. Editorial Pueblo y Educación, La Habana, 2006.
• ————: Martí y Fidel en el código de ética del educador cubano. Editorial
Pueblo y Educación, La Habana, 2013.
• Chacón, N. y L. Abreu: «Educación en valores en la formación permanente y
en el trabajo sindical: experiencia cubana. Curso 28 de pedagogía 2007». Ór-
gano editor Educación Cubana, Ministerio de Educación, La Habana, 2007.
• Chacón Nancy, et al: Multimedia: «Ética y educación en valores». Volumen
I. Cesofte, Sello Editor de la Educación Cubana, La Habana, 2005.
• ————: Multimedia: «Ética y Educación en Valores». Volumen II. Ce-
softe, Sello Editor de la Educación Cubana, La Habana, 2007.
• ————: Multimedia: «Fidel: Ética y valores». Cesofte, Sello Editor de la
Educación Cubana, La Habana, 2007.
• ————: Educación, Ciencia y Conciencia. Editorial Pueblo y Educación.
La Habana 2008.
• ———— y Ulloa H. Educación Moral. Editorial Ciencias Sociales, La Ha-
bana, 1988.
• Chávez J, Suárez A y L.D. Permuy: Acercamiento necesario a la Pedagogía
General. Editorial Pueblo y Educación, La Habana, 2005.
• Chávez, J. y E. Báxter: La educación en valores y la relación con la evaluación
de su calidad. Editorial Pueblo y Educación, La Habana, 2008.
• García Ramis L.: Granma, año 17 / No. 296, La Habana, 24 de octubre de
2013. Disponible en : http://www.granma.cubaweb.cu
Bibliografía 119