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SIRENAS

Lo que ms amas te traicionar,


por lo que amas penders de la cruz,
lo que amas te hundir en la desgracia,
tal es la ley de las sirenas.
Pero no amar por temor es cobarda,
no amar por orgullo es vanidad.
Por eso ama y olvida que amaste.
Vive el presente porque el maana
tal vez nunca llegue: el maana era hoy.
Te sientes solo y muy traicionado,
mas la nica traicin verdadera
fue la de ti para ti mismo
Por haber marchado tras tu ilusin.
No tienes derecho al lamento es depreciable,
no tienes opcin al insulto es vanidad.
Entiende el momento que vives
y apura de un trago la copa que te ofrece el instante
porque el tiempo la estrellar en la pared
muy poco despus.
Ama si quieres y olvida que fue.
Las sirenas as lo han dispuesto:
sigues el contorno de tu ilusin dibujado en su voz
y naufragas, renuncias a eso
y eres t el vencedor.
Ulises de ti mismo, torna a tu patria ms recndita y tuya;
conqustate, porque t eres el botn por lograr.
No hay ms Penlope que t solo aguardando a que
vuelvas;
toma otra vez posesin de tu sino,
s nuevamente el dueo de ti.
Navegas ya fuera de ti persiguiendo a tu ensueo
y naufragas,
permaneces anclado en ti mismo y nada te alcanza
a hundir.
Y sin embargo, ama, ama.
No amar por temor es cobarda,
No amar por orgullo es vanidad.
Grandeza no es el nunca haber escuchado el canto de las sirenas,
grandeza es tener el valor de orlas y de no ir tras su voz,
es cruzar el infierno y salir.
Olvida que las sirenas cantaron
la belleza no es sino la atraccin del abismo
y olvida tambin la tempestad que te agita:
t eres ms fuerte que ella.
Has dejado atrs la tormenta,
la soledad y el silencio quedan enfrente de ti;
dispones de una ruta claramente trazada
nadie podra desearte una suerte mejor.
As pues, que tengas buen viaje y adis.

Uwe Frisch.

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