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Clasificación:
o Familia: Cichlidae
o Subfamilia: Tilapiinae
o Genero: Symphysodon
o Especie:
Symphysodon discus
(Heckel, 1840)
Disco común
Disco verde
Disco marrón
o Dorsal: VII - IX / 26 - 31
o Anal: VII - IX/ 26 - 31
o Pectorales: II / 7 - 9 / III - IV
o Pélvicas: I / 5
o Caudal: ramificada I / 5
Tamaño:
Symphysodon aequifasciata haraldi sobre los 12 cm.
Symphysodon discus sobre los 20 cm.
En los últimos años es muy habitual encontrar en los establecimientos que venden
peces de acuario ejemplares de disco con colores distintos a las especies
tradicionales. Esto es debido a que en los grandes criaderos donde se reproduce al
disco, sobre todo en Singapur, se está enriqueciendo la alimentación de los peces
con productos formados por carotenos artificiales. Estas sustancias estimulan la
coloración brillante y maravillosa del pez dotándole en muchos casos de nuevos
tonos de color. El aficionado que adquiere estos bonitos ejemplares ve con tristeza
como día a día su precioso pez va palideciendo y perdiendo los bonitos tonos que
tenía cuando lo compró porque la alimentación con potenciadores del color debe
ser continua para que éste se mantenga y desde luego no se trasmite a su
descendencia.
Se debe elegir un acuario grande, de unos 200 litros, donde se pueda mantener un
grupo de jóvenes peces disco sin problemas de espacio. Una buena plantación,
sobre todo con plantas de hojas lanceoladas como las echinodorus, y una
cobertura vegetal de la superficie del agua por plantas flotantes como los
helechos. Para conseguir la coloración del agua y el equilibrio del pH se puede
filtrar con turba.
o Temperatura: 27 - 28 ºC
o Dureza: 6 - 7 ºDH
o pH: 6,8 - 5
Cortejo reproductivo:
Todo comienza días antes cuando empieza a aumentar la tensión entre todos los
habitantes del acuario. Los machos comienzan a nadar hacia las hembras con las
aletas vibrando frenéticamente. Las aletas más oscuras y demostrando
manifestaciones hostiles de agresividad contenida. Las hembras palidecen y
adoptan la postura de sumisión inclinándose hacia abajo. Pueden incluso
prenderse por la boca, como suele ocurrir en las demostraciones de dominancia
dentro del comportamiento social normal.
Comienzan a limpiar un lugar plano y poco iluminado, una raíz o piedra lisa. Los
intrusos son expulsados con violencia y no se permite a ningún pez acercarse a la
zona elegida para la puesta.
Sobre el anochecer suele comenzar el desove. Los huevos van siendo depositados
por la hembra en hileras desde abajo hacia arriba y el macho los va fecundando
acto seguido. La cantidad suele oscilar entre 150 y 300 huevos por puesta.
Es conveniente que los peces estén solos en el acuario y que se les moleste lo menos
posible. También, se recomienda mantener la luz encendida. Una pequeña luz
encima del acuario hasta que los pequeños alevines superen los 2 cm. de longitud.
Estas precauciones son necesarias para evitar que los progenitores devoren la
puesta sobre todo si se trata de padres primerizos. En este primer momento es
necesario que el agua esté ligeramente oscurecida para evitar la proliferación de
hongos y que la conductividad esté entre 120 y 200 microsiemens para que los
huevos no sean destruidos por efecto de la diferencia osmótica.
Están cubiertos en su ecuador por una delgada capa de mucus que facilita su
adherencia. De la membrana del huevo salen dos hilillos de unos 32 micrones de
longitud y 0,3 micrones de grueso. Los huevos son de una dimensión regular, de
forma ovoidal, de 1,4 mm. de largo y 1,2 mm de ancho.
Los alevines suelen nacer a las 60 horas a una temperatura de unos 28 a 30 ºC. Es
decir, la tercera mañana después de la puesta es el momento del feliz
acontecimiento.
Tres pares de glándulas en la cabeza. De estas glándulas sale una sustancia muy
consistente que forma un hilo para sujetar al alevín. Forman racimos agitando la
cola de acuerdo con el nivel de oxígeno del agua. Si el nivel de oxígeno disminuye
de forma radical el alevín llega a retorcerse tanto que puede llegar a romper el
hilo y caer al fondo del acuario. Los padres atentos suelen recogerlo y volver a
situarlo dentro del racimo de sus hermanos. Si no es así, es conveniente que
nosotros realicemos esta operación con una pipeta.
Una vez que los pequeños peces reabsorben las reservas del saco vitelino, deben
comenzar a alimentarse de forma exógena y obtener su comida del exterior. Aquí
radica uno de los atractivos de la reproducción de este maravilloso pez. Los
alevines si quieren sobrevivir se tienen que alimentar durante unos 14 días de una
secreción mucosa que desprende la piel de los padres. Hacía los 10 o 12 días se
deben empezar a suministrar nauplios de Artemia salina para que los alevines
comiencen a capturar estas pequeñas presas coincidiendo con la disminución en la
secreción de la sustancia nutritiva. A los 15 o 20 días hay que retirar a los padres.