Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Domingo Villamil
ENRIQUE.- ¿Ya viste manito?, ¡Estas si son viejas!, ¡No como tus hermanas!,
por unas de éstas… ¡hasta robaba! … hummm (se acaricia los genitales) ¿te
imaginas haciendo el paso de la muerte… o el salto del tigre?
MANUEL.- ¿Y serán de verdad? Porque la neta, no creo que existan esos forros
por aquí. Pinches gringos cabrones, allá no tienes que pagar para poder ver
esos canales de playboy, ¿no has visto en la tele que viejotas sacan? ¡Quien
fuera gringo! (se rascan frenéticamente la cabeza).
ENRIQUE.- En serio que sí. El otro día un cuate me platico que en los estados
unidos todos los chavos de prepa ya le hacen al tru, tru con las chavitas.
MANUEL.- Es que allá si son más abiertos, no que aquí, le pides las nalgas a
una vieja y mínimo te deja de hablar, o peor tantito te echan a sus jefes,
(pausa). ¡Que chingon seria vivir como los pinches gringos! ¿No crees?
ENRIQUE.- Seguro. El otro día leí en una revista que hay unos productos para
que las viejas luego, luego aflojen. ¿Como la ves?… oye… ¿Qué tal si
compramos uno?
MANUEL.- No mames güey, eso no es cierto, el otro día mi primo encargo una
madre de esas, disque para que te crezca más el asunto y ya mero se queda
para cuidar escuelas de señoritas, además son rete caras esas chingaderas, lo
que debelaríamos hacer es comprar el libro que vimos en el mercado, de cómo
seducir a las chavas, o de hipnotismo, eso si ha de servir.
ENRIQUE.- Pues yo no sé, pero algo tenemos que hacer para conocer viejas
que quieran ponerle, porque las pirujas cobran recaro y aparte están
retegarras.
ENRIQUE.- ¡Hay perro! ¡Que guardadito te lo tenias!, ¿como le vas hacer con
ella, si estas todo prángana? No creo que quiera contigo o ¿si?
1
Prof. Domingo Villamil
MANUEL.- Eso sí, pinche suerte, debería haber una forma para dejar de estar
jodido.
MANUEL.- Pues ya qué, pero antes echemos unas carreritas haber quién
acaba primero (se ponen de espaldas al escenario, sacuden frenéticamente sus
manos, voltean y muestran envases de refresco agitados).
Salen del escenario por un lado y aparecen por el contrario, ahora vestidos con
ropas sucias de cal y con gorros de albañil? Cargando botes de lámina
ENRIQUE.- ¡O! pos yo no sabía hacer otra cosa y nadie quería dos chalanes en
el mismo sitio.
ENRIQUE.- Mejor cállate, que ahí viene su amiga hay que escondernos.
2
Prof. Domingo Villamil
CRISTINA.- Pero no creo que tenga algo de malo, todas las demás muchachas
lo comentan muy seguido, debe ser interesante
VIRGINIA.- Mi mamá dice que eso es malo y además es pecado mortal, no, no,
yo no quisiera acabar en el infierno por eso.
CRISTINA.- Pues una amiga me contó que se siente bonito cuando lo haces,
hasta estrellitas la hizo ver su novio y que no tiene nada de malo hacerlo.
VIRGINIA.- No sé, mi mamá dice que esas cosas son para personas pecadoras.
MANUEL.- ¿Cómo la ves mi chavo? No, si yo las huelo y éstas dos ¡apestan!
Voz.- Haber a qué hora, pinches huevones, qué paso con la arena (ambos le
mientan la madre al tipo que les grita y salen corriendo)
VIRGINIA.- Mamita, ¿serias tan amable de poder satisfacer una duda que
tengo?
3
Prof. Domingo Villamil
MAMA.- ¡Niña! ¡Por Dios! ¿Qué cosa preguntas?, ¿cómo se te ocurre preguntar
semejante barbaridad? Dios de mi vida, ¿Qué he hecho para merecer esto?
¿Será tal vez castigo divino por no haber asistido al rosario de las 7? … ¡claro
que si! ¡Niña pecadora!, nunca me vuelvas a ofender con semejante pregunta,
acaso no te he brindado la mejor educación moral y religiosa, en este mismo
momento te vas a confesar y oras 100 rosarios completitos, pero ya niña.
MAMA.- Pues aleja de ti todo pensamiento insano, pues sólo las pecadoras
piensan en eso, o ¿acaso quieres ser como esas malas mujeres que deambulan
por las calles? Anda, dime y en este momento, dejaras para siempre de ser mi
hija
ENRIQUE.- Y ahora ¿cómo le vamos a hacer para acercarnos a ellas y que nos
hagan caso? Sobre todo que quieran salir con nosotros.
ENRIQUE.- Hay Manuel, cuando piensas en tus ondas, hasta me das miedo.
ENRIQUE.- Seguro que aquí es, me cae que tú y tus pinches ideas, un día me
van a matar.
4
Prof. Domingo Villamil
MANUEL.- ¡Ya cabrón! Van a pensar que tienes miedo, órale chíflale a la
señora.
CLOTILDA.- ¿Quién anda ahí?... ¿Qué se les ofrece jóvenes?, ¿a qué se debe el
honor de su visita?
MANUEL.- Pos nada, que aquí mi amigo quiere una consulta, ¿Cómo ve? ¿Nos
puede atender?
CLOTILDA.- Muy bien, muy bien, comencemos por saber que nos dicen las
cartas (saca una baraja y empieza a leerles las cartas) hummm… está claro, si
aquí lo dice todo, veamos, observen, la muchacha está dispuesta, si claro (ellos
se muestran incrédulos) si ustedes las convencen de que caigan. Miren, lo que
tienen que hacer es conseguir unos chones rojos de la mamá de una de las
chamacas, ponerlo a serenar bajo la luz de la luna con un vaso de agua de
cilantro, la cual tendrán que regar cuando sea luna llena por el mismo lugar
que pasen; ¿de acuerdo? Tiene que ser de esta manera, ¿me entienden? Con
eso es más que suficiente.
CLOTILDA.- Claro que si, si no, no funciona, se los tienen que robar.
ENRIQUE.- Pos ya que con tal de probar esos pollitos soy capaz de cualquier
cosa… hasta de matar, ¿me escuchas? ¡Hasta de matar! (mesiánico).
5
Prof. Domingo Villamil
MANUEL.- ¿Cómo vamos a conseguir eso que nos pidió la señora? No veo la
forma de conseguirlos, sólo que te metas a su casa y los saques de su cajón.
ENRIQUE.- Está bien si no quieres no lo hagas, pero cuando me veas por ahí
con ese forrito, hasta envidia te va a dar y vas a querer que te presente chavas
y vas a quedarte como güey, nada mas viendo. ¿He?
ENRIQUE.- Anda vete, cobarde, no hace falta gente como tú en este negocio
de los padrotes.
ENRIQUE.- Decimos que es para que bajen los precios del mercado.
6
Prof. Domingo Villamil
ENRIQUE.- Nos vamos volados para hacer lo que nos dijo la señora, ¿de
acuerdo? Pues vamos a darle a este asunto.
TRINIDAD.- Qué bueno que sea una madre comprensiva y ante todo que se
tengan tanta confianza, que una pueda estar atenta, informada, a propósito, le
recomiendo le recomiendo este libro es lo último es orientación familiar, es del
señor Cuauhtémoc, el que escribió el Churrito Restirado y Juventud Acalorada.
Se los recomiendo, no sabe el bien que les va a hacer leerlo, ya se los hice leer
a mis hijas 100 veces, ¿cómo ve Santita?
SALE DOÑA TRINIDAD Y SE QUEDA SOÑA SANTA, A LEER UNA REVISTA PARA
DAMAS.
SANTA.- (Suspirando) ¡hay Dios! ¡Pero qué cosas hacen para las niñas que se
portan bien! ¡Pero mira qué cosotas! Achhhh!!! ¡Hay se me olvidada! Tengo
una cita con las damas de la vela perpetua, bueno después las seguiré
leyendo. (Sale, entran por el otro lado enrique y Manuel).
MANUEL.- (De puntitas) Pinche vieja quién la viera con sus revistas y eso que
se da sus baños de pureza que si no.
7
Prof. Domingo Villamil
ENRIQUE.- (Sacando una vela grande de rara forma) ¡hay tomas! Mira nada
más lo que encontré, ¿vas a Querétaro?
ENRIQUE.- Ya están aquí, mira nada más qué bonitos y tiene otro más suaves,
¿Qué tal si nos los llevamos?
MANUEL.- No manches déjalos ahí… espera, creo que ahí viene alguien,
escóndete, ¡es la vieja loca! (apurados buscando donde esconderse
SANTA.- Por poco dejo el regalo para el padre barandal, qué cosas, pero
¿dónde lo dejé? A ver por aquí debe estar (encuentra tiradas sus revistas) pero
si yo no las deje ahí ¿habrá entrado alguien?
SANTA.- ¡Hay Dios! Pero qué es esto, hay, hay (estos le empiezan a bailar
sugestivamente, al momento que uno de ellos saca un látigo y lo hace sonar,
santa se lanza sobre ellos con intensiones de acabárselos de un mordisco,
después del forcejeo salen corriendo despavoridos).
VIRGINIA.- Y eso fue todo lo que le dije, pero me puso una que parecía yo
campanario de la catedral.
CRISTINA.- Yo que pensaba que tu mamá, era más moderna que la mía,
porque a mí de plano ni me contestó nada, sólo se puso roja y me cambio la
plática.
VIRGINIA.-La verdad no sé porqué se ponen así cuando uno les pregunta algo
así, por que la mera verdad no creo lo que dicen las revistas.
CRISTINA.- Ahí dicen puras faroladas, disque una chava le aflojó a su novio por
que le había prometido casarse, ¿tú lo harías nada más por casarte?
8
Prof. Domingo Villamil
VIRGINIA.- Yo creo que eso está mal, imagínate hacerlo sólo para saber que se
siente y casarte, ni madres, hay perdón pero es cierto ¿sabes qué he pensado?
Que si lo haría, pero todo depende de la forma en que me lo pidan o ¿no?
CRISTINA.- Si, por que hay cada cuate que parece que viene de la montaña
todo lo quiere a la fuerza o con su “órale”, “vamos hacer aquellito”, y no sé
que más jaladas sacan.
VIRGINIA.- Es que de plano hasta para eso son bien nacos, yo no puedo decir
que nunca lo voy hacer, pero como te digo si me lo saben pedir pues adelante.
ENRIQUE.- Te fijas bien lo que vas hacer, no vayas a salir con tus pendejadas
de siempre.
9
Prof. Domingo Villamil
ENRIQUE.- Vas a ver que si, ninguna mujer se resiste a una serenata.
ENRIQUE.- Pues fácil como le hacen todo los cantantes de moda, que no son
unos chingones de primera, una grabación y ¡listo!
ENRIQUE.- Pues tú, ¿quién más?, o ¿tengo que mandar al más pendejo de
aquí?
ENRIQUE.- Es por tu culpa güey, ven acá, pedazo de burro, espera que te
alcance y te voy a poner tus madrazos (sale corriendo tras él, mientras
Cristina sale tras Manuel con una escoba).
ENTRA ENRIQUE A DARLE TREMENDA FAJADA QUE HASTA PARECE SALIR HUMO
DE AMBOS.
10
Prof. Domingo Villamil
ENRIQUE.- Entonces qué mi Reyna, cuando nos comemos ese pollito antes de
que enfríe.
ENRIQUE.- Has de querer que me muera como el cautín, ¿verdad? Órale, ¿qué
tanto es tantito?
ENRIQUE.- Pero, ¿qué tienes que pensar? Anda, dime ya que sí, no vas a
perder nada, o qué ¿ni eso puedes hacer por mí?
VIRGINIA.- No se trata de eso, si no que… no sé, que tal si pasa algo y luego
no lo podemos remediar, ¿Cómo ves? Mejor espérate. (Aparecen por ambos
lados Manuel y cristina, vestidos uno de ángel y otro de diablo, simulando ser
coincidencias).
CRISTINA.- ¿sabes qué? Haz lo que quieras, yo me voy a echar al plato a este,
de tanto insistir hasta a mí se me antojo (se lanza sobre Manuel. Salen ambos
por el mismo lado del escenario, de donde salen volando sus prendas de
vestir… y otras más).
11
Prof. Domingo Villamil
VIRGINIA.- ¡Qué bueno que todos pensarán como tú! Y que no se acaloren, por
eso siempre mete uno la pata, conozcámonos y disfrutemos el tiempo juntos,
sin apresurarse, nada va a pasar.
VIRGINIA.- ¿Qué?...
ENRIQUE.- No te vas a escapar, un día de éstos caerás, con todo y tus buenos
consejos. (Se besa y salen abrazados, Manuel muestra una tira de condones y
guiña el ojo al público mientras se cierra el telón).
FIN
12