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LA TRAICIÓN DE

LOS RECUERDOS

ARVIN RABIN DRANAK S.


Si alguna vez escribí,

fue por que escribía de ti,

por que escribía para ti.

Pero hoy ya no importa

como quisiera que mis palabras

te alcanzaran por última vez.

Que mi mente te recordara,

como te recuerda este llanto.

Que mis manos tocaran de nuevo tu voz

y no fueras mas…

lo poco en lo que te volviste con el tiempo

el triste reflejo del amor visto de espaldas

de la agonía impávida

Buscando una batalla perdida.


PREFACIO

Nunca soñé con escribir,

siempre soñé con quererte

con inventarme....

Inventarnos y reencontrarnos,

querernos y escribirnos,

leer tu espalda, escribir tu mano

Nunca soñé con escribir

y esta noche

te estoy cantando
I.

Tus palabras enmudecen al verte,

mis ojos ciegan ante tu paso,

mi corazón respira a cada silencio tuyo,

mis pulmones laten sin detenerse

como no se detiene el ondear de tu aroma.

Mis palabras no sirven,

mis ojos enmudecen,

mis manos claudican

y mis piernas te siguen.

La desesperación me atrapa ,
la noche me arropa,

tu recuerdo se fuga

y tu aroma se escapa.

Yo te juro vida mía ,

que aguardare,

que cualquier noche esperare.

A que tomes entre tus pies

descalzos de andar y sufrir

las aves y abraces a tu lado los mares.


II.

Alegorías, bailen…

que mi alma esta de luto.

almas, dancen …

que mi corazón marchita.

Sueños, rían.

luces, brillen.

poseía… vive,

corre ,

respira.
Que hoy soy tu,

y tu eres nadie.
III.

Bailen Velas

y canten gaviotas

lloren nubes

y rujan olas.

La mar se achica

y el infinito se ve mas claro

aunque distante.

pero yo aquí sobre tu quilla

La luz ultravioleta

aun marca el destino


y la ventanas se amplían

pero tu aroma es mas lejano

pero claro

Tu y yo solos

solo me dejo mecer por ti

guiar por ti y amar por ti

se que no me dejaras volver

por que ya vivo atado a ti

A la gran profundidad de tu alma

adornada de vida tambaleante

como el mal del marino


pero ahora soy parte de ti.

La historia de ayer termina

en donde empiezas tu

en la arena que bordea tu piel

¿ cuando volverá?

Sirena escondida

canto apagado,

vida acotada

¿Donde se esconderá?
Tu marea termina donde

empieza el mar,

tu locura adornada de corales

y tu alma vestida de olas

No se cuando despertara
IV.

Ya no quiero esconderme.

quiero emerger de nuevo,

vagar sin rumbo fijo sobre ti

sobre tu piel,

piel de agua y sal

Caminar las olas de la esperanza,

probar tu aroma salado

y hundirme en tus secretos

llenar mis pulmones de tu alma

y soñar.
Estoy de nuevo aquí…

viendo la inmensidad de tu cuerpo

y lo infinito de tu rostro

las estrellas son distintas

pero las velas deben izarse y vivir.


V.

Esta noche los relojes huyen,

las manecillas mueren,

el tiempo se vence.

Se cierran las puertas,

se apagan farolas,

los cristales se estrellan

y los recuerdos galopan.

Solo.

recostado en esta buhardilla

de tu recuerdo.

Mirando hacia el cielo


de un techo que no protege

que no cuida que no abraza.

Tu recuerdo es vivo,

como aquel invierno de París.

En el que cruzamos nuestras almas,

entre la pálida nieve

que iba salando tu mirar

Como aquellos surcos

de dolor en que los ángeles caen

en que los sueños despiertan

y la muerta acrecienta.
Han callado las estrellas,

han gritado las nubes

y el dolor es eterno.

Silencio de muerte

el que acompaña tu estela.

Y las manecillas andan,

se abren las puertas,

se prendes las luces,

sonríen las farolas

y esta noche como todas

las noches no he dormido nada


VI.

Soledad.

llévame a los claros parajes del alba,

amplia la luz que enmudece en la ventana

estrecha,

compra mis sueños

y vende mi pensamiento.

Arrastra…

fuera de este lecho las migas de amargura,

cubre mi cuerpo de esperanza efímera

y expulsa mi mente de mi alma.


Abre…

El paso de mis palabras a su corazón,

toma mi mano y enmudece mis ojos.

el destino es incierto y la muerte cercana.

soledad

escapa

esta noche escapa de mi.


VII.

Sálvame

corro

me escapo

me escondo.

Sálvame

respiro

grito

desespero.

Luz no te veo

no te escucho
no te hallo

Sálvame

muero

exhalo

Sálvame

vuelo

desvanezco

Sálvame

escapo

caigo
aun estoy despierto
VIII.

Por que la mar ha callado,

los marinos huido

y Las redes arreado.

Las gaviotas descansan.

los silencios gritan

y los corazones palpan.

Tu mirada desvaría,

mi mente me engaña

y mi sueño me espía.
Las estrellas se caen,

la tierra emerge

y los presos claudican.

Los héroes huyen,

los cuarteles vacían

y las postales extravían.

La noche me atrapa

y el día ahora

guía.

Inmóvil
si…

estoy inmóvil

Y el cielo

con su aves

en vigía
IX.

Por ti mis noches cambian

mis sueños son eternos

las lagrimas secas

la vida momentánea

Sueño vivo y muero

Por ti

la carne se carcome

se sala

se pudre
Por ti

ella vive

renace

se acaba

Por ti

el sol apaga

la luna calla

y las estrellas mueren

Pero esta noche

sueño

vivo
muero

Me pudro

me salo

revivo

encarno

y muero por ti
X.

Muerte, eres muerte.

sola incierta desconsolada

quemada entre tonos negros

de un oscuro soñar.

Veo mi vida

y no apareces,

muerdo mis labios mudos

y grito sin escuchar.

Muero

he muerto y tu esta allí


pero mi cuerpo pálido

e inmóvil ya no mas
XI.

Madre

esta noche pienso en ti

las palabras me detienen

me agobian me carcomen

Los silencios me atacan

me fulminan

como quien fulmina

el alma de un muerto condenado

Las palabras no brotan

las miradas entristecen


y los cuerpos marchitan

Pero esta noche

pienso en ti

y mudo de luz y ciego de ruido

Vuelvo a ti

al amor mas puro

madre
XIII.

Las líneas de mi mano

hablan de tristeza y desolación

es lo único en lo que puedo creer

Las líneas me hablan de ayer

cuando era completo

y no había mas

Pero sin ti

me siento perdido

solitario y muerto
Pero es el destino

que viene en las líneas de mi mano…

esta noche dime

que no es verdad
XIV.

Esta noche se hace mas tenue,

el aroma de la luz ultravioleta de tu cuarto

oscuro,

pero el aroma persiste.

Tu imagen se difumina,

entre espíritus andantes y lagrimas de muertos

que suplican el nuevo adiós.

Las noches son eternas,

las sombras tan tenues,

tu ...

Levantada como imagen de mujer de Lot,

impávida y muda,
seca en la sal de tus labios

que obligan a beber mas de ella.

Y yo sediento de ti,

ciego de tu aroma

y hambriento de tu imagen,

solo digo adiós.


XV.

Esquiando en sal…

la sal de tu cuerpo que trae mi memoria

sal que seca mi vida

sal que me llena de amargura.

Esquiar en sal …

en la que tu no vives

y yo existo

sal blanca sal.

Sal que seca el momento

en que para ti

ya no existo.
XVI.

Ella afilando mi vida

siendo médium del adiós

mi silencio grita y mi voz calla

espejo de un amor visto de espaldas.

Luna amarga de sabor cansado

miel de labios que traicionan

profeta desarmada de futuros

agonía de creyentes sordos

Lo que extravié en la vida ella busca

encuentra
maneja

vende

mata

Inútil silencio

escucha mis palabras mudas

hasta encontrarme

mi razón cede

El dolor existe

la locura vuelca en razón

pero es ella
la que oculta, la que vende , la que mata

Mientras yo

con mi caminar en círculos

eso es la duda

la tortura

eso es Ella

La que sin decir nada

una noche

en una sola noche

dice adiós
XVII.

Días callen

estrellas marchiten

flores reluzcan

muerte nace

Piel seca

miradas vacías

cuerpos vivan

sonetos duerman

Corazones detengan
pulmones vean

cabellos caigan

sonrisas lloren

Poesía muere

canciones callen

recuerdos huyan

y tu solo tu

vive
XVIII.

Barco hundiendo la mar océano

las profundidades te abrazan

las sirenas te arropan

y de tu cuerpo enamora la arena

Te abraza

te arropa

pero eres un barco

y su amor te da pena

Pena de angustia

pena de no ver
mas cielos

mas estrellas

pena de frenar tu navegar

No sabes respirar bajo las olas

y ellas no se mecen en tierra

amor condenado

mecido en la amargura de lo imposible


XIX.

Esta noche la libertad

libertad que grita tu alma

libertad que sueñan tus labios

libertad que acarician tus ojos

Esta noche la libertad

libertad que piden mis manos

libertad que no encadene mis alas

libertad que no silencie mi canto

Esta noche la libertad

libertad que no apague los sueños


libertad que termine el encierro

libertad que nos permita amar


XX.

Hoy me pare en un péndulo

agache la mirada y estabas allí

como una hoja

arrastrada por el rumor del agua

Verde y a la vez tan seca

viva y tan triste

únicamente mecida por un

leve soplo de viento

Me senté en el péndulo

y te observe volar
como vuelan las aves al viento

sin rumbo sin aliento

Ligera y frágil

rígida quebradiza

como huyen las estrellas

ante la tormenta

Brinque del péndulo

solo para darme cuenta

que el viento no es viento

era solo tu aliento lo que impulsaba mi tiempo


XXI.

De la prisión de tu cuerpo

a la libertad del hospital

así caminan los muertos hoy

enamorados de tu alma

aferrados a tu piel

Solo veo volar los platos

el ruido explota en mis oídos

los autos pierden el camino

y las aves caen del cielo

Así es el camino al hospital


después de soltar tu piel

de liberarme de tus ojos

de sangrar silencio y hiel

Ahora las manecillas detienen

los pianos cantan

las aves corren

y las sirenas callan

De la prisión de tu cuerpo

a la libertad del hospital

mi cuerpo desciende sin final

y solo pienso en escapar


La libertad me asfixia

no puedo respirar

no soy nada no sueño nada

lejos de la presión de ser


XXII.

Quiero nacer toreando

sin partir plaza

en los ruedos de tu aroma

sin brindar toros

a tu imagen ya perdida

Quiero crecer toreando

respirar el clamor a vida

en un par de chicuelinas

acariciar tus astas

que me abren las heridas


Quiero vivir toreando

y jugar la arena

que me lleva hacia la muerte

renacer en cada quite

de un par de banderillas

Quiero sentir toreando

con las zapatillas plantadas en la arena

con la muleta cosida a mi muñeca

y vivir tu cuerpo al quite por manoletinas

Te quiero amar toreando

mientras arremetes con tus pitones


a mi corazón en carne viva

mientras pruebas mi pasión

con mi cuerpo que se arrima

Quiero olvidar toreando

mientras te cito al tercio

a la suerte suprema

y te acercas al volapié

que va descubriendo mi pena

Quiero agonizar toreando

sin toros Isleros

que hieran más mi cuerpo


sin Lupes Sino

que me inciten a chiqueros

Quiero morir toreando

con el vestido

en sangre por el coraje de la suerte

y caer tendido a tu lado

en tu ruedo... que fue un ruedo de muerte


XXIII.

Buscando la estela de tu aroma

atravesando el aura que el amanecer deja

siguiendo tu efigie solitaria

así me encuentro yo

Persiguiendo el rumor de tu cabello

no hay abandono que soporte tu lejanía

andando ciego por el camino que otros han

pasado

así vago yo

Te escuchare a lo lejos como un suspiro


como aquel que mueve las olas de los vendavales

que soportan los cascos marchitos

de tanto navegar

Y moriré yo

asistiendo a tu exclamación

de auxilio a la soledad

de nuestro ajeno navegar


XXIV.

La noche ha callado

las sombras han cedido

mi mano ha caído

tu piel he perdido

Las estrellas cantan poco a poco

las nubes enmudecen su andar

el cielo impávido anda

tu sonrisa ha callado

La vida ha cambiado

mis ideas terminado


los sueños han huido

y la gente sucumbido

Las musas huyen

los gorriones duermen

y cierro la puerta

la única puerta de tu santuario


XXV.

Quiero naufragar en el farallón de tu costa

envolverme en los brazos de tu viento

respirar el aliento de tu cuerpo

sumirme en la inmensidad de tu recuerdo

Quiero nacer y morir contigo

convertirme en uno con el calor de tu abrigo

huir por las largas llanuras del alba

consumirme en el silencio de tu alma

Quiero triunfar en tu mareas

reconocer cada una de tu gaviotas


abrir las alas y saltar al vacio de tus abismos

encontrarme contigo y soñar en nosotros mismos

Quiero nadar hasta hundirme en tus mejillas

beber las lagrimas que emanan tus colinas

quiero naufragar en el farallón de tu costa

y amarte tanto como te amo desde el primer día

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