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Secretaría de Redacción:
Estamos sorprendidos y halagados por la trasmisión de “boca
Úrsula C. Basset
en boca” que esta recibiendo nuestra publicación.
Hemos tenido una muy buena aceptación a la circunstancia de
Colaboradores:
que nuestros suscriptores además de la publicación tienen acceso
Paola Amestoy
por Internet a mas de 900 fallos de familia y a algo mas de 500
Cecilia H. Bonaverdi
artículos de doctrina.
María Cecilia Burgos Baranda
Hoy continuando con nuevas mejoras presentamos una nueva
Carina Inés Comito
diagramación que hace mas atractiva la lectura y permite captar
Natalia I. Comito
Ma. de los Ángeles Ghía Salazar rápidamente los distintos tópicos tratados.
Jorge Nicolás Lafferrière El lector encontrara en este numero temas cuyo tratamiento
Clara Minieri no es muy frecuente pero que son de rigurosa actualidad, como
Alejandro Molina (h) es por ejemplo la comunicación que nos hiciera llegar el doctor
Ana María Ortelli Martinez Alcobendas, acompañados por importantes trabajos
Analía G. Pastore con temas necesarios para la labor diaria, como es el caso de las
Diego Maximiliano Pignataro seis prestigiosas notas de jurisprudencia que generosamente han
Verónica Polverini escrito para nosotros sus distinguidos autores.
María Angélica Sánchez del Río Ya estamos preparando el numero del mes de marzo y tene-
Natalia Torres Santomé mos en cartera nuevas colaboraciones que estimamos de mucho
Agustín Sojo
interés.
Muchas gracias por la calida recepción que ha recibido esta
Diseño y Diagramación publicación y será pues hasta marzo.
Luciana Plataroti

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CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA 1


COMUNICACIONES
CONTORNOS DE LA CURATELA PROVISORIA Y DE LA CURATELA A LOS BIENES
Julio A. Martínez Alcorta 3

mayoría de edad a los 18 años


Agustín Sojo 5
SUMARIO

JURISPRUDENCIA
ALIMENTOS: ALIMENTOS A CARGO DE LOS ABUELOS:
NATURALEZA DE LA OBLIGACIÓN
Octavio Lo Prete 8
COMPETENCIA: JURISDICCIÓN PERPETUA EN JUICIOS DE FAMILIA
María de los Ángeles Ghía Salazar 10

DIVORCIO: PLAZO DE SEPARACIÓN DE HECHO QUE TRANSCURRE


DURANTE EL JUICIO
Claudia Mariela Flores Larsen 13
SOCIEDAD CONYUGAL: RESPONSABILIDAD POR DEUDAS DEL CÓNYUGE
Teresa Vedoya 15
TENENCIA: ACUERDO DE PADRES Y EL DERECHO DEL MENOR A SER OIDO
Verónica Polverini 18

TENENCIA: EL IMPEDIMENTO DE CONTACTO COMO CAUSA


DEL CAMBIO DE TENENCIA
Cecilia Hebe Bonaverdi 20

SUSCRIPCIONES
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Mayoría 18 años que transc
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2 CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA


CONTORNOS DE LA CURATELA
PROVISORIA Y DE LA

COMUNICACIONES
CURATELA A LOS BIENES
Julio A. Martínez Alcorta

En la práctica tribunalicia he visto una innu- De este modo, el ordenamiento jurídico le ase-
merable cantidad de veces que durante el trámite gura de una forma sui generis la defensa en juicio
de los “juicios de insania”1, se produzca una pre- a quien muy probablemente no esté en condicio-
ocupante confusión entre la curatela provisional nes de defenderse precisamente por su estado de
y la curatela ad bona2. Probablemente, ello ocu- salud mental. Sin embargo, ello en modo alguno
rra por tratarse de un proceso especial –yo más le impide al interesado que pueda presentarse
bien diría especialísimo– que contiene una serie en juicio con su propio patrocinio letrado pues-
de notas típicas que habitualmente son ajenas to que, como lo indica claramente el art. 140 del
para el abogado que no se encuentra familiarizado Código Civil, el sujeto sigue siendo capaz6. Por lo
con la temática. Por tal motivo, si bien ambas tanto, ambas formas de defensas son distintas y
curatelas pertenecen al género de “curatelas es- paralelas. Pueden coincidir o no en los planteos
peciales”3, como son especies distintas, conviene defensistas, pero será la primera necesaria bajo
distinguirlas. pena de nulidad y la segunda, en cambio, contin-
Interpuesta ya la denuncia ante el juez com- gente.7
petente, ora dentro del encuadre del art. 141 del De ninguna parte del sistema legal se despren-
Código Civil, ora en el del artículo 152 bis, inciso de que la representación que le otorga la ley al cu-
1º o 2º, y con los recaudos previstos en el art. 624 rador provisorio sea extensiva a todos los actos de
o 625 del CPCCN; en el auto de apertura a prue- la vida civil, entre ellos, la intervención en otros
ba de la causa el magistrado procede a nombrar juicios distintos al proceso de declaración de in-
a un abogado independiente4 para que ejerza las capacidad o de inhabilitación. Por tal motivo, “[c]
funciones de curador provisorio del denunciado uando la demencia aparezca notoria e indudable”,
en los términos del art. 147 del código de fondo. los arts. 148 y 471 del Código Civil prevén la de-
Este curador ad litem5, como lo ha denominado la signación de un “curador interino a los bienes” o
doctrina especializada, tiene la misión de repre- un interventor en la administración de los bienes
sentar al presunto demente o inhábil durante la del enfermo. La curatela a los bienes se regirá en-
sustanciación del proceso en orden a defender su tonces analógicamente por los arts. 488, 489 y 490
capacidad civil. de dicho corpus e ingresará al trámite judicial de
la mano del art. 629 de la ley adjetiva como una
medida cautelar propia de este proceso atípico.
Sentado lo anterior, queda despejado que no
1
Expresión impropia para denominar al proceso de incapacita- sólo se tratan de dos curatelas distintas la ad litem
ción. Al respecto, ver Cifuentes, Santos, Rivas Molina, Andrés y de la ad bona, sino que además pueden recaer en
Tiscornia, Bartolomé;. Juicio de insania – Dementes, sordomudos e
inhabilitados; 2da. edición actualizada y ampliada; Ed. Hammurabi, personas diferentes. Al mismo tiempo, que para
Buenos Aires, 1997, pág. 23. ejercer la curaduría a los bienes no es necesario
2
A su vez, esta figura mayormente es asociada al derecho suce-
ser abogado por cuanto que la ley no lo exige8.
sorio.
3
No me refiero exclusivamente a las previstas en el art. 397 del
Código Civil.
4
Puesto que así lo dispone el art. 626, inc. 1º del CPCCN por
tratarse esencialmente de una defensa técnica. En el ámbito de la 6
Principio a su vez receptado en el art. 627 del CPCC.
Ciudad de Buenos Aires, los jueces cuentan con la lista de auxiliares 7
Ob. cit., págs. 346 y 347.
de la justicia que lleva el Colegio Público de Abogados de la Capital 8
Para el caso de que requiera presentarse en juicio en represen-
Federal a efectos de seleccionar un profesional idóneo. tación de su curado deberá, en caso de no ser abogado matriculado
5
Es un circunstancial de lugar figurado cuya traducción al cas- en el lugar del tribunal, contratar el correspondiente servicio profe-
tellano es “con relación al litigio” o “para el litigio”. sional.

CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA 3


Más aún, muchas veces ocurre que la curatela presentación diferenciadas por referirse a objetos
ad bona recae en la persona que eventualmente distintos pero a un mismo sujeto.
será designada como curadora definitiva –gene- Cuando el curador provisorio se atribuye en
ralmente un pariente del enfermo que no suele su actuar una representación más extensa que la
COMUNICACIONES
ser letrado–, por lo que termina operando aqué- explicada, se corre el serio riesgo de violentar de-
lla como un anticipo de ésta. Con la designación rechos fundamentales de la persona que paradóji-
de un curador a los bienes, el denunciado como camente se dice querer proteger. Tampoco quiero
demente queda con su capacidad civil de hecho exagerar este punto de vista, es decir, como bien
desplazada y será su curador ad bona quien lo re- dice Arianna, el curador provisorio debe tomar
presente para el ejercicio de sus derechos. contacto directo con su representado y peticionar
A pesar de ello, corresponde señalar que las las medidas de resguardo de la persona cuando
funciones del curador definitivo y las del curador se requieran9 ya que la esencia de esta institución
a los bienes no son idénticas puesto que las de éste está empapada de un profundo humanismo. En
son más acotadas ya que el art. 488 del código las este punto neurálgico, en mi opinión, reside la
circunscribe a los “actos administrativos de mera diferencia entre un mero defensor técnico y un
custodia y conservación”, aunque en la práctica curador provisorio.
suele comportarse como un curador definitivo. Sin dudas, la designación de un curador defini-
Asimismo, su función finaliza también cuando tivo –una vez dictada la sentencia– como la de un
eventualmente asuma el cargo dicho curador de- curador a los bienes –como providencia cautelar
finitivo. durante la sustanciación del proceso, reitero– son
Por otra parte, desde un punto de vista técnico, medidas muy invasivas en la vida de los seres hu-
no debería admitirse la designación de un cura- manos porque les impiden continuar ejerciendo
dor a los bienes durante la sustanciación del juicio por sí sus derechos. En consecuencia, la necesidad
por declaración de inhabilitación. Sobre la base de recurrir a dichas herramientas jurídicas deberá
de la congruencia, encuentra su fundamento en ser evaluada por los jueces cuidadosamente para
que dicha figura legal no presupone la existencia no atropellar las capacidades conservadas de cada
de la “demencia” que sí exige la medida cautelar persona, cuyo valor es inconmensurable.
en cuestión. Además, no puede cautelarmente in-
capacitarse al sujeto que eventualmente se inhabi-
litará en la sentencia definitiva. Recordemos que
la inhabilitación civil no acarrea la incapacidad Bibliografía
absoluta, sino que conlleva sólo una restricción a
la libre disposición de los derechos patrimoniales. Arianna, Carlos A., El curador provisorio, en
En caso de que se requiriese la conformidad para “Derecho de Familia. Revista Interdisciplinaria
tales actos durante el trámite del juicio, y de que de Doctrina y Jurisprudencia” nº 31, Julio/Agosto
se vea la conveniencia de que precautoriamente lo 2005, Ed. Lexis Nexis.
asista al denunciado un curador, no veo obstáculo Cifuentes, Santos, Rivas Molina, Andrés y
alguno para que el juez efectúe una designación Tiscornia, Bartolomé, Juicio de insania – De-
cautelar de un curador asistente a dichos fines en mentes, sordomudos e inhabilitados, 2da. edición
virtud del art. 232 del CPCCN. actualizada y ampliada, Ed. Hammurabi, Buenos
Sintetizando lo expuesto, la figura del curador Aires, 1997.
provisorio o ad litem en principio se circunscribe Famá, María Victoria; Herrera, Marisa y Pa-
al juicio de insania para la defensa de la capacidad gano, Luz María. Salud mental en el derecho de
civil del enfermo. Su función subsiste hasta tanto familia, Ed. Hammurabi, Bs. As., 2008.
se dicte sentencia y, en su caso, asuma el cargo
de curador definitivo quien haya sido designado. Voces: abogado - curatela - familia
En cambio, la curatela interina a los bienes es una
medida cautelar tendiente a resguardar el patri-
monio del presunto insano cuando notoriamente 9
Arianna, Carlos A., El curador provisorio, en “Derecho de
no se encuentre en condiciones de seguir gestio- Familia. Revista Interdisciplinaria de Doctrina y Jurisprudencia” nº
nándolo. En otras palabras, son dos ideas de re- 31, Julio/Agosto 2005, Ed. Lexis Nexis, pág. 4.

4 CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA


MAYORÍA DE EDAD A LOS 18 AÑOS

COMUNICACIONES
Agustín Sojo 1

El 22 de diciembre de 2009 salió publicada en el bo- consiguiente quede exceptuado de prestar alimentos.
letín oficial, la ley 26.579 que reforma el código civil Aunque la conceptualización de recursos suficientes
reduciendo la mayoría de edad a los 18 años al mis- seguramente surgirá de la praxis judicial nos parece que
mo tiempo que se mantiene la obligación de prestar en principio debe tratarse de situaciones excedentarias
alimentos a los hijos hasta la edad de 21 años. Como y no sería adecuado imponer al hijo el sacrificio de sus
consecuencia de ello se deroga expresamente la posi- posibilidades de desarrollo educativo o de capacitación,
bilidad de emancipar a los hijos menores por habilita- en pos de auto alimentarse.
ción de edad. La expresión no excluye los recursos financieros del
Como es habitual los nuevos textos plantean ini- alimentista mayor de edad. Con recursos financieros nos
cialmente algunas dudas y el de la reducción de la referimos no sólo a las sumas de dinero que éste pueda
edad a los 18 años no esta exento de ello: tener sino también a la posibilidad de solventar su sub-
sistencia con un crédito. Sin embargo, se podría desna-
¿Cuál es la extensión de la obligación turalizar la obligación alimentaria si el padre pretende
alimentaria? imponer al hijo un anticipo de herencia o un crédito a
El nuevo art. 265 del C. Civil determina que “la obli- mejor fortuna para evitar la obligación alimentaria.
gación de prestar alimentos a sus hijos con el alcance
establecido en el artículo 267, se extiende hasta la edad ¿Quién cobra la cuota alimentaria?
de veintiún años, salvo que el hijo mayor de edad o el Desde que los padres pierden la representación le-
padre, en su caso, acrediten que cuenta con recursos su- gal de los hijos cuando éstos alcanzan la mayoría de
ficientes para proveérselos por sí mismo.” edad, no hay razón alguna para que la cuota alimenta-
El artículo 267 contiene la obligación alimentaria ria no le sea pagada al hijo.
amplia que los padres tienen hacia sus hijos menores y Con relación al pago hecho a la madre cabe re-
que se extiende a todo lo que el niño necesita. Ello se cordar que “el mandato tácito resulta no sólo de los
contrapone a aquella obligación más acotada que el art. hechos positivos del mandante sino también de su
372 establece para los alimentos derivados del parentes- inacción o silencio, o no impidiendo, pudiendo hacer-
co a la cual nuestra jurisprudencia había recurrido para lo, cuando sabe que alguien está haciendo algo en su
fijar alimentos a favor de los hijos mayores de edad. nombre” (art. 1874 C.Civil).
Sin embargo, la nueva norma no pone en la misma De manera tal que el hijo que tiene conocimiento
situación a los alimentistas mayores, desde que el ali- del pago que el padre realiza a la madre y, pudiendo
mentante puede acreditar que el hijo cuenta con recur- impedirlo no lo hace, no podría pretender que el pa-
sos suficientes para proveerse los alimentos por sí mis- dre pague dos veces. La naturaleza de la obligación
mo. Cuando el hijo es menor de edad no está obligado tampoco le permitiría pedir rendición de cuentas a la
a trabajar para solventar sus propias necesidades. Por el madre, quien sin embargo quedaría obligada a solven-
contrario, a partir de los 18 años el padre puede acredi- tar las necesidades del hijo mayor de edad.
tar que el hijo cuenta con recursos suficientes para con- Para mayor seguridad el padre debería notificar al
seguir un trabajo que permita solventar todo o parte de hijo mayor de edad sobre los términos de la obligación.
sus necesidades.
Así la extensión de la obligación estará acotada a aque- ¿La madre que presta vivienda al hijo puede recla-
llo que el alimentista no puede proveerse por sí mismo. mar la coparticipación del padre?
¿Qué son “recursos suficientes”? Cuando una madre tiene a los hijos mayores de edad
viviendo bajo su techo tiene mayores gastos (los alimen-
La norma incorpora la posibilidad de que el padre tos, el espacio que ocupa, los bienes que utiliza y los ser-
acredite que el hijo cuenta con recursos suficientes y por vicios que consume). Todo ello conforma una verdadera
prestación alimentaria en especie con la cual debe car-
1
Abogado (UCA), especialista en derecho de familia (UBA),
gar generalmente la madre.
licenciado en administración de empresas (UCA), docente de dere- La madre que esté a cargo del cuidado de sus hijos
cho de familia y sucesiones (UCA y UBA). menores puede contar con una cuota alimentaria a

CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA 5


cargo del padre que ayude a afrontar no sólo los gastos ¿La falta de afecto o gratitud del hijo permiten
directos del niño, sino también parte de los gastos co- rechazar el reclamo de alimentos?
munes del grupo conviviente. Sin embargo, desde que el
hijo puede cobrar por sí la cuota alimentaria ésta parti- La reforma nada menciona sobre este aspecto que
COMUNICACIONES
cipación se pierde. queda entonces comprendido en la mayor edad y plena
Cuando el padre cumple su obligación hacia el hijo capacidad del hijo para obrar sin restricciones. Nuestro
no parece razonable exigirle un doble pago. A la madre ordenamiento no contiene norma alguna que haga cesar
le queda la posibilidad de restringir los consumos del el derecho alimentario de los hijos menores y el derecho
hijo hasta el límite de lo que corresponde, para que el alimentario derivado del parentesco sólo cesa por algu-
mismo pase a solventar sus propios gastos con la pen- na de las causas de desheredación.
sión que recibe del padre.
¿Es excepcional el matrimonio de los hijos
¿El hijo está obligado a vivir con sus padres? menores de 18 años?
La nueva redacción del art. 275 determina que los El Código Civil admitía el matrimonio de los meno-
hijos menores no pueden dejar la casa de sus progeni- res de veintiún años desde que alcanzaran los 18 años
tores por lo que los hijos mayores si podrían hacerlo. (conf. ley 26.449). Bastaba el asentimiento de los padres,
Sin embargo no se advierte que el hijo pueda cargar quienes sólo podían fundar su negativa en las razones
a sus padres el mayor costo de su independencia cuan- previstas por el art. 169 del C. Civil. Aquí el matrimonio
do ésta no tiene razón de ser. Es que una cosa es el no era excepcional sino que eran los padres los que de-
derecho a fijar su domicilio y otra muy distinta cargar bían invocar y acreditar alguna de las razones taxativa-
dichos gastos a sus padres cuando éstos han ofrecido mente previstas por ley para impedir la celebración del
un lugar en la vivienda familiar. matrimonio. Si el matrimonio se celebraba sin autoriza-
Distinto sería el supuesto en que razones justifi- ción no podía cuestionarse la validez pero había ciertas
cadas impongan al hijo mudar su domicilio, en cuyo sanciones civiles para los contrayentes.
caso no parecería intempestiva la voluntad del hijo Por haberse reducido la mayoría de edad este sistema
que presenta este gasto como necesario y acorde con debería aplicarse a los menores de 18 años para quienes
la condición y fortuna de sus alimentantes. la ley preveía la dispensa judicial con carácter excep-
cional. Se superponen dos sistemas en cierta forma in-
¿Los padres están obligados a tener compatibles: el juicio de disenso donde los padres deben
al hijo bajo su propio techo? acreditar razones para oponerse al matrimonio y la dis-
pensa judicial donde el menor debe justificar las razones
Aunque la obligación alimentaria comprende la vi- que permitan al juez apartarse excepcionalmente de la
vienda no se ha impuesto a los padres la obligación de ley que le prohíbe contraer matrimonio.
que esa vivienda sea la propia de los padres. En conse-
cuencia nada impide que los padres se nieguen a tener ¿Puede salir del país sin autorización
al hijo mayor de edad bajo su propio techo en la medi- de los padres?
da en que puedan darle uno acorde con su condición y
fortuna que satisfaga las necesidades del alimentista. Aunque la resolución 2895-1985 de la Dirección
Nacional de Migraciones prohíbe la salida de los meno-
¿Pueden invocar la protección del art. 1.277 res de 21 años, entendemos que el mayor de dieciocho
del C. Civil? años no necesita de autorización alguna para viajar al
exterior, puesto que aquella restricción se fundaba en su
El asentimiento conyugal es requerido para la dis- menor edad.
posición del inmueble que fue sede del hogar con- El art. 5 de la ley que reforma el Código Civil deter-
yugal en el que habitan hijos menores o incapaces. mina en este sentido que “toda disposición legal que
De allí que los mayores de 18 años no se encuentran establezca derechos u obligaciones hasta la mayoría de
comprendidos dentro de la restricción. Sin embargo edad debe entenderse hasta los dieciocho años...”.
no hay que olvidar que alguna jurisprudencia ha ex-
tendido excepcionalmente la indisponibilidad de los
inmuebles cuando resultaba necesario garantizar el Conclusiones
cumplimiento de una prestación alimentaria.
Hemos repasado algunas cuestiones que trae la nue-
va capacidad que tienen los mayores de 18 años. Quien
¿Extienden la responsabilidad civil a sus padres ha cumplido 18 años tiene plena capacidad para todos
y a los establecimientos educativos? los actos de la vida civil y no se encuentra restringido de
modo alguno en su capacidad.
Tanto la responsabilidad civil de los padres (art. 1.114 Por ello los mayores de 18 años podrán también
Cód. Civil) como la de los establecimientos educativos realizar operaciones bancarias, obtener registro para
(art. 1.117 Cód Civil) está prevista para los menores de conducir, salir del país , vivir solos, celebrar contrato de
edad, por lo que no cabría extender la responsabilidad locación y administrar sus bienes. Ningún sentido tenía
por hechos ocurridos con posterioridad a la entrada en que la norma prohibiera aquellos actos que los padres
vigencia de la ley. siempre permitían.

6 CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA


Como contrapartida cesa la responsabilidad civil de Queda a los padres enfrentar el desafío de formar a sus
los padres por los hechos de sus hijos mayores de 18 hijos con valores que se arraiguen antes y perduren para
años, se les permite donar todos sus bienes y celebrar toda la vida.
cualquier tipo de contrato, inclusive de juegos de azar.

COMUNICACIONES
No faltarán tampoco aquellos que abandonen el cole- VOCES: CAPACIDAD – MENORES- ALIMENTOS – MATRIMONIO
gio en su último año o incluso antes si viene retrasados. PATRIA POTESTAD.

LEY 26579
Sanción: 02/12/2009 7. Haber sido autor, cómplice o instigador del homicidio do-
Promulgación: 21/12/2009 loso de uno de los cónyuges.
Publicación en el Boletín Oficial: 22/12/2009 8. La privación permanente o transitoria de la razón, por
Vigencia: 01/01/2010 cualquier causa que fuere.
9. La sordomudez cuando el contrayente no sabe manifestar
El Senado y Cámara de Diputados de la Nación Argentina re- su voluntad en forma inequívoca por escrito o de otra manera.”
unidos en Congreso, etc. sancionan con fuerza de Ley: “Artículo 168: Los menores de edad no podrán casarse entre
MAYORÍA DE EDAD sí ni con otra persona mayor sin el asentimiento de sus padres, o
de aquel que ejerza la patria potestad, o sin el de su tutor cuando
ARTÍCULO 1º - Modifícase el Código Civil en los artículos ninguno de ellos la ejerce o, en su defecto, sin el del juez.”
126, 127, 128, 131 y 132 del Título IX, Sección Primera del Libro “Artículo 275: Los hijos menores no pueden dejar la casa de
I; el artículo 166 inciso 5) y el artículo 168 del Capítulo III del sus progenitores, o aquella que éstos le hubiesen asignado, sin
Título I, Sección Segunda del Libro I; los artículos 275 y 306 licencia de sus padres.
inciso 2) del Título III, Sección Segunda del Libro II; el artículo
Tampoco pueden ejercer oficio, profesión o industria, ni
459 del Capítulo XII, Sección Segunda del Libro I, los que que-
obligar sus personas de otra manera sin autorización de sus pa-
dan redactados de la siguiente forma:
dres, salvo lo dispuesto en los artículos 128 y 283.”
“Artículo 126: Son menores las personas que no hubieren
“Artículo 306: La patria potestad se acaba:
cumplido la edad de DIECIOCHO (18) años.”
“Artículo 127: Son menores impúberes los que aún no tu- 1. Por la muerte de los padres o de los hijos;
vieren la edad de CATORCE (14) años cumplidos, y adultos 2. Por profesión de los padres en institutos monásticos;
los que fueren de esta edad hasta los DIECIOCHO (18) años 3. Por llegar los hijos a la mayor edad;
cumplidos.” 4. Por emancipación legal de los hijos sin perjuicio de la sub-
“Artículo 128: Cesa la incapacidad de los menores por la sistencia del derecho de administración de los bienes adquiridos
mayor edad el día que cumplieren los DIECIOCHO (18) años. a título gratuito, si el matrimonio se celebró sin autorización;
El menor que ha obtenido título habilitante para el ejercicio de 5. Por adopción de los hijos, sin perjuicio de la posibilidad
una profesión puede ejercerla por cuenta propia sin necesidad de que se la restituya en caso de revocación y nulidad de la
de previa autorización, y administrar y disponer libremente de adopción.”
los bienes que adquiere con el producto de su trabajo y estar en “Artículo 459: En cualquier tiempo el Ministerio de Meno-
juicio civil o penal por acciones vinculadas a ello.” res o el menor mismo, siendo mayor de DIECISEIS (16) años,
“Artículo 131: Los menores que contrajeran matrimonio se cuando hubiese dudas sobre la buena administración del tutor,
emancipan y adquieren capacidad civil, con las limitaciones por motivos que el juez tenga por suficientes, podrá pedirle que
previstas en el artículo 134. exhiba las cuentas de la tutela.”
Si se hubieran casado sin autorización no tendrán hasta la ARTÍCULO 2º - Derógase el inciso 2) del artículo 264 quá-
mayoría de edad la administración y disposición de los bienes ter del título III, Sección Segunda del Libro I del Código Civil.
recibidos o que recibieren a título gratuito, continuando respec- ARTÍCULO 3º - Agrégase como segundo párrafo del artí-
to a ellos el régimen legal vigente de los menores.” culo 265 del Título III, Sección Segunda del Libro I del Código
Artículo 132: La invalidez del matrimonio no deja sin efec- Civil, el siguiente:
to la emancipación, salvo respecto del cónyuge de mala fe para “La obligación de los padres de prestar alimentos a sus hijos,
quien cesa a partir del día en que la sentencia pasa en autoridad con el alcance establecido en artículo 267, se extiende hasta la
de cosa juzgada. edad de veintiún años, salvo que el hijo mayor de edad o el pa-
Si algo fuese debido al menor con cláusula de no poder per- dre, en su caso, acrediten que cuenta con recursos suficientes
cibirlo hasta la mayoría de edad, la emancipación no altera la para proveérselos por sí mismo.”
obligación ni el tiempo de su exigibilidad.” ARTÍCULO 4º - Se derogan los artículos 10, 11 y 12 del Ca-
Artículo 166: Son impedimentos para contraer matrimonio: pítulo II, Título I, del Libro I del Código de Comercio.
1. La consanguinidad entre ascendientes y descendientes sin
ARTÍCULO 5º - Toda disposición legal que establezca de-
limitación.
rechos u obligaciones hasta la mayoría de edad debe entenderse
2. La consanguinidad entre hermanos o medio hermanos.
hasta los DIECIOCHO (18) años, excepto en materia de previ-
3. El vínculo derivado de la adopción plena, en los mismos
sión y seguridad social en que dichos beneficios se extienden
casos de los incisos 1, 2 y 4. El derivado de la adopción simple,
entre adoptante y adoptado, adoptante y descendiente o cón- hasta los VEINTIÚN (21) años, salvo que las leyes vigentes es-
yuge del adoptado, adoptado y cónyuge del adoptante, hijos tablezcan una edad distinta.
adoptivos de una misma persona, entre sí, y adoptado e hijo de ARTÍCULO 6º - Comuníquese al Poder Ejecutivo.
adoptante. Los impedimentos derivados de la adopción simple DADA EN LA SALA DE SESIONES DEL CONGRESO AR-
subsistirán mientras ésta no sea anulada o revocada. GENTINO, EN BUENOS AIRES, A LOS DOS DÍAS DEL MES
4. La afinidad en línea recta en todos los grados. DE DICIEMBRE DEL AÑO DOS MIL NUEVE.
5. Tener menos de DIECIOCHO (18) años. REGISTRADA BAJO EL Nº 26.579 - JOSÉ. J. B. PAMPURO. -
6. El matrimonio anterior, mientras subsista. EDUARDO A. FELLNER. - Enrique Hidalgo. - Juan H. Estrada.

CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA 7


ALIMENTOS
ALIMENTOS A CARGO DE LOS ABUELOS:
JURISPRUDENCIA

NATURALEZA DE LA OBLIGACIÓN
por Octavio Lo Prete

Tribunal: Capel. CC Azul, sala II, 30/04/2009, “Y. J. D. c./ T. A. D. y T. M. A. s/alimen-


tos. Embargo preventivo”
Hechos: Una mujer, representando a sus dos hijos menores, demandó alimentos a los
abuelos paternos de éstos, habiéndose rechazado la acción en primera instancia por
considerar el Tribunal que el padre de los niños es el principal obligado y que faltó
probar que no contribuyera o que careciera de bienes para responder, encontrándose
además en trámite un proceso de alimentos en su contra, con sentencia favorable a la
reclamante, pero aún incumplida. El Tribunal de Alzada confirmó el pronunciamiento,
aunque se valió de otra argumentación, puesto que –sin perjuicio de la imposibilidad
paterna de cumplir– lo cierto es que devenía obligación de la madre justificar su propia
insuficiencia de recursos o la imposibilidad de procurárselos, extremo que no acreditó.

FALLO
En la materia que nos ocupa “se hace indispensable evitar formalis-
mos excesivos”, esto es, si no se vislumbran posibilidades de éxito en el
proceso de ejecución de sentencia no puede requerirse el cumplimien-
to de dicha etapa “a los fines de obstaculizar el progreso de la preten-
sión que en los presentes actuados se ha dirigido contra los abuelos”.
Ello no obstante, “media otra circunstancia que impide el acogimiento
de la demanda en autos”, y es que la actora debió probar “su propia
insuficiencia de recursos o la imposibilidad de procurárselos”, recaudo
“que se encuentra ausente en el sub caso, al desprenderse de las actua-
ciones que la actora posee recursos que le han permitido asistir a sus
hijos”. Los valores de los ingresos de la actora “son de cierta magnitud,
por lo que, en principio, permitirían afrontar las erogaciones destina-
das a la asistencia de los menores”.

NOTA requisitos para su procedencia (art. 370) y un alcan-


ce más limitado que los alimentos debidos por los
La constitucionalización de los tratados sobre obligados principales (art. 372, comparándolo con el
derechos humanos ha generado, necesariamente, art. 267). Por otro lado contamos con las prescripcio-
nuevas interpretaciones en múltiples materias del nes de la Convención sobre los Derechos del Niño,
derecho interno, público y privado, que buscan iden- siendo relevante en el tema alimentario –además
tificar si éste se adecua o bien si está en pugna con las del principio genérico según el cual en toda medi-
normas internacionales a las que el Estado se obligó. da concerniente a los niños se atenderá a su “interés
En materia de obligación alimentaria entre pa- superior” (art. 3, inc. 1)– el reconocimiento que for-
rientes nos hallamos, por un lado, con las disposicio- mulan los Estados Partes en punto a que todo niño
nes del Código Civil que fijan su carácter subsidiario tiene derecho a un nivel de vida adecuado “para su
o sucesivo (un orden de prelación, art. 367), ciertos desarrollo físico, mental, espiritual, moral y social”

8 CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA


(art. 27, inc. 1), siendo “responsabilidad primordial” imposibilidad de procurarse recursos para satisfacer
de los padres u otras personas encargadas –claro que las necesidades de los alimentados, ello no implica
dentro de sus posibilidades y medios económicos– forzosamente que quien reclama deba agotar ciertos
proporcionar a los niños las condiciones de vida que pasos formales que el sentido común indica que se-

JURISPRUDENCIA
sean necesarias para dicho fin (inc. 2), añadiendo el rán inútiles. De ahí que, si las circunstancias del caso
mismo artículo concretamente que se tomarán las muestran que ulteriores diligencias contra el proge-
medidas necesarias para asegurar el pago de la pen- nitor o progenitora no llevarán resultado positivo y
sión alimenticia “por parte de los padres u otras per- sólo redundarán en una mayor dilación del proceso,
sonas que tengan la responsabilidad financiera por el pueda admitirse la pretensión contra los abuelos.
niño” (inc. 4). Como se aprecia, el alcance de la pres- El fallo dictado por la Cámara Civil y Comercial
tación alimentaria en la Convención es más amplio, de Azul se enrola en esta posición, por considerar
puesto que debe comprender –reiteramos, siempre irrelevante –incluso contrariamente a lo dictamina-
dentro de las posibilidades económicas del obligado– do por la Asesora de Incapaces– el hecho de que no
la satisfacción de diversas dimensiones que hacen al se haya instado el trámite de ejecución de sentencia
desarrollo del niño, siendo dudoso que fije, por otro contra el progenitor, condenado en la causa prin-
lado, “subsidiariedad” alguna en su pago. Aunque cipal, toda vez que de las constancias agregadas se
tampoco es claro que fije, sin más, “simultaneidad”, desprendía que tal incidente no tendría éxito alguno.
porque el primer inciso –como aludimos– habla de Empero, el Tribunal concluye confirmando la deses-
responsabilidad “primordial”, concepto que sin em- timación de la demanda contra los abuelos, mas no
bargo no reitera el inciso cuarto. por los argumentos esgrimidos en primera instan-
Debe tenerse en cuenta que recientemente la Cor- cia (carencia de acreditación de aportes o recursos
te Suprema recordó que la jerarquización de los tra- del progenitor, paso necesario para que se habilite
tados ha tenido la virtualidad, en algunos casos, de la vía contra los parientes sucesivos) sino precisa-
ratificar la protección de derechos y garantías ya pre- mente porque la actora no pudo justificar su propia
vistos en nuestra Carta Magna de 1853; en otros, le insuficiencia de medios o la imposibilidad de procu-
ha dado más vigor; y en otros realiza nuevas procla- rárselos. Los autos informaron que la madre poseía
maciones o describe alcances de los mismos con más recursos que le habían permitido asistir a sus hijos
detalle y precisión (Cf. Fallo “Arriola”, 25.08.2009, (era titular de un comercio de venta de alimentos,
Considerando 21). Vale decir, deberán prevalecer los con ingresos anuales de “cierta magnitud”).
derechos y garantías reconocidos en los tratados si La solución a la que arribó el Tribunal nos parece
es que ostentan una mayor amplitud que la asignada acertada, conforme a la normativa constitucional y
por el derecho interno. legal aplicable. El interés superior del niño se atendió
Así las cosas, cabe señalar que la exégesis acerca del porque en definitiva las necesidades de los menores
impacto de la Convención en la cuestión bajo análi- venían siendo cubiertas, aun a costa del mayor sacri-
sis no ha conllevado resultados unívocos. En efecto, ficio de la madre. No está de más apuntar, acaso, que
si bien hay mayor coincidencia en que la “subsidia- los abuelos paternos accionados –desde antes de ini-
riedad absoluta” ya no puede sostenerse, lo cierto es ciado el proceso– venían brindándole ayuda econó-
que mientras la mayoría de los precedentes jurispru- mica a su nuera. Queda pues el interrogante de des-
denciales, sin dejar de lado su naturaleza subsidiaria, entrañar los motivos por los cuales los abuelos fueron
admiten una flexibilización de los requisitos para demandados, si en los hechos colaboraban y además
la procedencia de la acción contra los abuelos (una la madre tenía medios para sustentar la crianza de
suerte de “subsidiariedad relativa”), otros fallos más sus hijos. Dicho al pasar, la mayor presencia de los
aislados se inclinan hacia la postura en virtud de la abuelos, en “tiempo, dedicación y ayuda económica”,
cual el nuevo orden constitucional torna inaplicable es un dato insoslayable de la realidad que vivimos,
en la especie el art. 367 del Cód. Civil, de lo que se por varios factores que no es del caso analizar ahora.
sigue que la obligación alimentaria de los abuelos (o La solidaridad familiar crece en este aspecto.
en su caso de otros parientes) es “directa” o, cuanto En suma, creemos que aquí –como siempre– las
menos, “simultánea”. “circunstancias del caso”, ayudaron a distinguir. No
A decir verdad, el criterio de “flexibilizar” las exi- da lo mismo que uno de los padres en los hechos sol-
gencias venía siendo acogido por la jurisprudencia, vente (o pueda solventar) los requerimientos de sus
quizás más tímidamente que ahora, incluso antes hijos que ninguno de los dos lo haga o pueda hacer.
de la ratificación de la Convención y obviamente de Tampoco cabe parangonar la situación que se gene-
su jerarquización constitucional. Si según la ley ci- ra a partir de un padre alimentante que incumple el
vil el carácter subsidiario exige justificar (respecto pago de la cuota en forma pertinaz que aquella que
del obligado principal y de quien reclama) tanto la se verifica en caso de que falte a su obligación sólo
falta o insuficiencia de medios económicos como la esporádicamente, ni la situación de un progenitor

CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA 9


(sea quien ostente la tenencia o el otro) con un ingre- Para leer más
so mínimo o sin ingresos o con trabajos aislados con
la de otro cuya paga sea más holgada o que trabaje Otra nota a este fallo: Sojo, Lorenzo A., “La obligación alimen-
en relación de dependencia, ni de suyo un contexto taria de los abuelos, ¿subsidiaria o simultánea?”, ED,234-336.
JURISPRUDENCIA
de desocupación con uno que brinde posibilidades Otras notas a fallos o artículos doctrinarios en revistas: Álvarez,
laborales ciertas, etcétera. Osvaldo O., “Obligación alimentaria de los abuelos”, ED, 171-
Pareciera a primera vista que el “interés superior” 344; Morello, Augusto M. y Morello de Ramirez, María S., “La
obligación alimentaria de los abuelos ante la Convención sobre
exige habilitar y hacer lugar sin más a los reclamos
los Derechos del Niño”, JA, 1998-IV-1092; Miguez, Agustín A.,
contra los abuelos. Nos parece que ello no es así, que
“La obligación alimentaria de los abuelos”, DJ, 1999-I-1997; Be-
el interés radica en constatar la efectiva satisfacción drossian, Gabriel, “Características y alcances de la obligación ali-
de las necesidades de los menores (en su mayor alcan- mentaria debida por los parientes de los menores de edad”, LLC,
ce posible, de acuerdo a la Convención) y, en caso de 2001-990; Morello, Augusto M y Morello de Ramirez, María S., “La
que no estén cubiertas, en indagar –sumariamente– prestación de los alimentos por parte de los abuelos”, JA, 2005-
las circunstancias particulares en que ello ocurre, para IV-66; Sosa, Toribio E., “La obligación alimentaria de los abuelos:
luego decidir. Claro que ínterin, si se dilatase la cues- subsidiariedad subjetiva y relativa”, LL, 2006-A-605; Bíscaro, Bea-
tión y permanecieren sin atender las demandas de triz, “Alimentos a cargo de los abuelos. Principio de solidaridad de
los niños, podrán fijarse cuotas provisorias contra los la obligación”, JA, 2006-I-21; Harari, Sofía, “Alimentos a cargo de
parientes más cercanos, puesto que estamos hablando los abuelos: ¿subsidiarios o directos?”, RDF, 2006-II-27; Cataldi,
de un derecho básico e impostergable. En otras pa- Myriam M., “Obligación alimentaria de los abuelos”, RDF, 2007-
labras, queremos expresar que cada situación deberá II-97; Raganato, Claudia G. y Bruno, Federico M., “¿Es subsidiaria
resolverse con máxima prudencia porque este tipo de la obligación alimentaria de los abuelos a favor de los nietos me-
nores de edad? Un fallo novedoso en la materia”, RDF, 38-230;
procesos no hacen sino ahondar los conflictos, yendo
Villagrán, Santiago, “La constitucionalidad de la subsidiariedad de
en contra –en definitiva– del interés superior del niño.
la obligación alimentaria de los abuelos”, ED, 230-1122.
A nuestro juicio debe evitarse el criterio según el cual
la subsidiariedad contraría “en sí” las prescripciones
de la Convención. Voces: Alimentos - Tratados y convenios

COMPETENCIA
JURISDICCIÓN PERPETUA
EN JUICIO DE FAMILIA
por María de los Ángeles Ghía Salazar

Tribunal: CApel. CC Paraná, sala I, junio 26-2007, causa nº 8-6243

Hechos: La sala I de la Excma. Cámara de Apelación en lo Civil y Comercial Departa-


mental de la Ciudad de Paraná resolvió dirimir la contienda negativa de competencia
en materia de régimen de visitas –planteada entre dos Juzgados de Familia y Minori-
dad– asignando la misma al Juzgado de Familia y Menores Nº 2 por cuanto ante dicho
Tribunal tramitaron actuaciones sobre alimentos, considerando conveniente que sea un
mismo juez quien tome conocimiento de ambas cuestiones.

10 CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA


FALLO
“Las cuestiones de competencia deben ser resueltas, en principio, de
acuerdo a la ley pues en ello está comprometido el orden público. Sin

JURISPRUDENCIA
embargo, advierte Morello, son ‘los hechos afirmados en la demanda’ los
que resultan determinantes de la competencia. Pues bien, no obstante
que –en principio–, del informe del Juzgado de Familia Nro. 2 surgiría
que la pretensión cautelar de “suspensión del régimen de visitas” respecto
de un hijo menor de las partes no se encuentra debatido en modo alguno
en el juicio de alimentos que entre las mismas partes allí tramita, resulta
claro que la conexidad de alguno de los elementos de ambos procesos
(sujetos, objeto y causa), puede virtualmente plantearse en cualquier
momento. Ello torna necesaria la continencia de todos los aspectos bajo
el conocimiento del mismo juez. No es casual que el inc. 7 del art. 3ro.
de la ley 9324 asigne en un mismo ítem la competencia al Juzgado de
Familia y Menores cuando se trate de ‘atribución del hogar conyugal,
guarda, régimen de visitas, alimentos y litis expensas’. Si a ello se aúna
que la propia parte peticionante de la cautelar la vislumbra o advierte
como una ‘incidencia’ del juicio principal de alimentos –y de hecho am-
bas cuestiones pueden llegar a interrelacionarse o influenciarse recípro-
camente–, parece inclusive hasta conveniente que sean del conocimiento
de un mismo juez”.

NOTA nado magistrado por vía de conexidad. La norma


sobre reglas especiales está contenida en el art. 6º
A los fines de analizar el fallo que se comenta, re- del CPCCN, y en sus similares de provincia. La ra-
sulta procedente realizar algunas aclaraciones preli- zón de estas reglas complementarias o suplementa-
minares en lo que refiere a la cuestión del desplaza- rias es determinar del modo más preciso cuestiones
miento de competencia que, en última instancia, es incidentales y procesos y procedimientos ligados a
lo que se plantea en el presente caso. otros, con fundamento en la conexidad. La conexi-
El fenómeno procesal por el cual un juez incompe- dad consiste entonces en la relación, comunidad o
tente por el territorio, la materia, las personas, el mon- enlace entre dos ideas o cosas, y representa la inter-
to o el turno, es competente, sustituyendo a quien, de dependencia entre las pretensiones 3.
acuerdo con los hechos subsumidos en el derecho co- En el fallo, la propia actora fue quien promovió
rrespondía intervenir, se denomina “desplazamiento su pretensión –suspensión del régimen de visitas–,
de competencia”. De las cinco instituciones que produ- como un incidente del juicio anteriormente iniciado
cen el desplazamiento o lo autorizan y lo reglamentan contra el mismo demandado –alimentos–, alegando
–limitándolo a la vez– la que nos interesa en este caso justamente la conexidad existente entre ambas cues-
en particular es el denominado forum connexitatis 1. tiones.
El forum connexitatis surge de la existencia de ele- He aquí el primer punto sobre el que corresponde
mentos comunes en las acciones o en los procesos detenerse. ¿Se da el supuesto de conexidad que sos-
–sujetos, objeto y causa– aunque no todos autorizan tiene la actora de acuerdo con lo dicho hasta ahora?
la acumulación de acciones o de procesos y por con- Consideramos que sí. Ello por cuanto no sólo los
siguiente el desplazamiento de la competencia 2. sujetos son los mismos en ambos procesos, sino que
Así, existe una serie de reglas especiales, trata- además, el objeto de dichas pretensiones, si bien es
das por el Código Procesal, conforme a las cuales distinto, refiere a dos de los tantos efectos que deri-
ciertas materias, de manera autónoma o combinada, van del divorcio y, por tanto, necesariamente vincu-
vienen a caer dentro de la competencia de determi- lados entre sí.

1
Podetti, J. Ramiro, Derecho Procesal Civil, Comercial y Labo-
ral, Tratado de la Competencia, Ediar, 1993.
3
Enrique M. Falcón, Tratado de Derecho Procesal, Civil y Co-
2
Idem. mercial, Parte General de la Demanda, Rubinzal Culzoni, 2006.

CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA 11


Al respecto, cabe señalar que la jurisprudencia ha es el que previno en las actuaciones por alimentos y
destacado en forma reiterada la conveniencia de que consideramos que éste es el motivo detonante para
toda la problemática relativa al mismo grupo fami- esclarecer el conflicto de competencia suscitado, por
liar tramite ante un único tribunal: “Resulta necesa- contar con la totalidad de los antecedentes que per-
JURISPRUDENCIA
rio que sea un único magistrado quien intervenga en miten la continuidad del criterio en la apreciación
las cuestiones de una misma familia, finalidad que de los hechos y derecho alegados.
se logra con la radicación del nuevo proceso pro- “La conexidad se configura en supuestos en que
movido ante el juez que previno en los otros asuntos la materia litigiosa, introducida con posterioridad a
que tramitan las partes” 4. la radicación de la causa originaria constituye una
“La conexidad consiste en la vinculación existen- prolongación de la misma controversia de suerte tal
te entre dos o más procesos o pretensiones, derivada que sea menester someterla al Tribunal que previno
de la comunidad de uno o más de sus elementos, para permitir la continuidad de criterio en la valora-
cuando además de ser común el factor subjetivo, lo ción de los hechos y derecho invocados, conforme al
son otro u otros, originando un desplazamiento de principio de perpetuatio jurisdictionis” 8.
competencia de modo de someter todas las cuestio- A modo de conclusión podríamos decir que
nes o procesos conexos –de tramitación simultánea compartimos el criterio predominante en cuanto al
o no– al conocimiento de un mismo órgano juris- desplazamiento de la competencia por razones de
diccional” 5 . conexidad a favor del juez previniente, no sólo por
Asimismo, a los fines de la aplicación del forum la importancia de una unidad de criterio valiosa por
connexitatis no es imprescindible que el expediente el trabajo que la sustenta de todo un equipo: juez,
precedente aún se encuentre en trámite, pues no se asesor de menores, asistentes sociales, etc. –sino
trata de un supuesto de acumulación de procesos, además por un criterio práctico de economía proce-
sino de competencia por conexidad, basada en la sal –valioso desde las dos caras de un proceso: la Jus-
perpetuatio jurisdictionis. Con ello se busca, más que ticia y el ciudadano común que en ella se ampara.
la proximidad del material probatorio, la persisten-
cia de un mismo criterio en cuestiones vinculadas,
que tienen origen en los mismos hechos 6. Para leer más
La perpetuatio jurisdictionis parte de la premisa
de reconocer la conveniencia de reunir en un solo
Podetti, J. Ramiro, “Derecho Procesal Civil, Comercial y
tribunal todas las cuestiones vinculadas o que se
Laboral, Tratado de la Competencia”, Ediar, 1993; Falcón,
originan en torno a un mismo elemento o relación
Enrique M., “Tratado de Derecho Procesal, Civil y Comer-
jurídica, que de otro modo podrían ser de compe-
cial, Parte General de la Demanda”, Rubinzal Culzoni, 2006;
tencia de otros tribunales 7.
Carnelutti, Francisco, “Sistema de Derecho Procesal Civil”,
Esclarecida esta cuestión, debemos ahora pensar
tomo II, Uthea Argentina, 1944; Kielmanovich, Jorge L., Los
cuál será el criterio para determinar el juez compe-
principios del proceso de familia, LL 2005-III-1028; CNCiv.,
tente en ambas cuestiones.
Tribunal de Superintendencia, Expíes. Nº 997 del 28/12/1988;
La actora sostuvo que resultando su pretensión
Nº1077 del 30/05/1989; Nº 1082 del 01/06/1989; Nº 4968 del
una cuestión incidental respecto del juicio anterior-
09/03/2000; CNCiv., Sala A, febrero 1 de 1994, LL 1994-E-704-
mente radicado ante el Juzgado de Familia y Meno-
,”Flores, Julio I. c. Mato, Francisco”; CNCiv., Sala E, 26-3-80, E.D,
res Nº 2 –sobre alimentos– correspondía a este juz- 87-661, Nº 12; CSJN, 27/12/1990, LL 1991-C- 252;DJ 1991-2-
gado entender en el nuevo juicio. 296, “O., C.H. c. D., A.”
Sin embargo, no compartimos este criterio.
Como ya se ha adelantado, el mencionado Juzgado

4
CNCiv., Tribunal de Superintendencia, Expíes. Nº 997 del
28/12/1988; Nº1077 del 30/05/1989; Nº 1082 del 01/06/1989;
Nº 4968 del 09/03/2000.
5
CNCiv, Sala A, febrero 1 de 1994, LL 1994-E-704, Flores, Ju-
lio I. c. Mato, Francisco.
6
CNCiv, Sala E, 26-3-80, E.D., 87-661, Nº 12.
7
Kielmanovich, Jorge L. “Los principios del proceso de fami- 8
CNCiv, Sala A, mayo 31-1993, García de Márquez, Amparo
lia”, LL 2005- III-1028. c. Márquez, Jorge H. y otro, LL 1994-E-705”.

12 CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA


DIVORCIO
PLAZO DE SEPARACIÓN DE HECHO

JURISPRUDENCIA
QUE TRANSCURRE DURANTE EL JUICIO
por Claudia Mariela Flores Larsen

Tribunal: C. N. Civ., sala E, 05/05/2009, “D., A. B. vs. C., A.”


Hechos: La sentencia dictada por el juez de 1ª instancia consideró que en el caso
existía confesión de los cónyuges que permitía tener por acreditada la causal de divor-
cio por separación de hecho sin voluntad de unirse, y en virtud de ello hizo lugar a la
demanda de divorcio interpuesta por el actor.
Apelada la resolución por la parte demandada, afirmando que el plazo exigido por el
art. 214, inc. 2º del Cód. Civil no se encontraba cumplido al momento de promoverse la
demanda, el Tribunal de 2ª instancia hizo lugar al recurso, entendiendo que no existía
confesión de los cónyuges al haber negado la demandada estar separada desde la
fecha pretendida por el actor. Por tanto, no habiendo transcurrido los tres años exigidos
por la norma citada, revocó la decisión de grado, y desestimó la demanda entablada.

Cita del fallo


“... el requisito exigido por la ley debe encontrarse cumpli-
do ab initio, toda vez que los hechos determinantes de la ac-
ción de divorcio deben acaecer antes de que éste sea solicitado”.

Nota divorcio vincular, cuando la intención de las mismas en


tal sentido es definitiva.
El fallo anotado aborda la cuestión del momento en Otra postura 2, por el contrario, afirma que el pla-
el cual debe encontrase cumplido el plazo de tres años zo debe estar agotado en su totalidad al momento de
de separación requerido por el art. 214, inc. 2º para que iniciarse la demanda, siendo ésta la posición adoptada
pueda decretarse el divorcio vincular de los cónyuges, por la Sala E de la Cámara Nacional Civil en el fallo
existiendo discrepancias al respecto, tanto en nuestra comentado.
doctrina como en la jurisprudencia. A fin de abordar el tema planteado, considero nece-
Para una postura 1, basta con que el plazo esté cum- sario analizar tres cuestiones que a mi criterio resultan
útiles para encontrar una solución al caso, éstas son: la
plido al resolver, admitiendo la posibilidad de que el
oportunidad en la cual se configura la causal en análisis,
mismo se complete en el transcurso del proceso de di-
la motivación del legislador al sancionar la norma, y la
vorcio.
aplicación de los principios jurídicos del derecho de fa-
Se sostiene al respecto que el cumplimiento del plazo milia, en especial el principio de matrimonialidad.
durante el proceso encuadraría en el hecho sobrevinien- En primer término, cabe tener en consideración que
te constitutivo que prevé el art. 163, inc. 6ª del CPCCN el juicio de divorcio donde se invoca la causal del art.
o equiparables en las normativas procesales provinciales 214, inc. 2º, tramita por las normas del proceso de cono-
(art. 163, inc. 6º del CPCC Salta). Entienden asimismo cimiento ordinario, por lo que la demanda debe ajustar-
que ni el art. 214, ni el 204 del Cód. Civil, al cual éste se a lo dispuesto por el art. 330 y sgtes. del CPCC.
remite, disponen que el plazo debe estar cumplido al Por consiguiente, y como recaudo previsto por la
demandar, y que existiría un excesivo ritualismo si se norma procesal, en la demanda tendrá que alegarse la
exigiese a las partes interponer una nueva demanda de existencia de la causal objetiva en análisis, la que nece-

Méndez Costa, Wagmaister, Santos y otros.


1 2
Vidal Taquini, Mazzinghi, Morello, Podestá y otros.

CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA 13


sariamente deberá estar configurada al momento de in- Además, dicho plazo permitirá a los cónyuges con-
terponerse la misma. tar con un tiempo de reflexión, en el cual puedan ana-
El supuesto previsto por el art. 214, inc. 2º del Cód. lizar las causas que llevaron a la crisis, y de ser posible
Civil, exige para su invocación el cumplimiento de intenten una conciliación, o confirmen que la ruptura
tres recaudos: separación de hecho, falta de intención
JURISPRUDENCIA
es irreversible.
de unirse y plazo; recién allí queda configurada la cau- Compartiendo lo expresado por Bueres y Highton,
sal que habilita el planteamiento de la acción. “se quiere evitar que un distanciamiento ocasional en-
El cumplimiento del mentado requisito temporal tre cónyuges..., pueda servir –sin más– para consoli-
deberá ser probado durante el proceso, caso contrario, dar judicialmente esa situación de hecho a través de
el divorcio no podrá decretarse, encontrándonos ante aquellas acciones. De aquí la exigencia de plazos más o
una pretensión que, al decir de la doctrina, no resulta menos largos que aseguren que tales alejamientos son
idónea o jurídicamente posible 3. El cumplimiento del expresión de la ruptura irremediable de los vínculos
plazo al momento de accionar es, entonces, una con- afectivos que constituyen el substrato de la unión ma-
dición de proponibilidad o de admisibilidad formal y trimonial porque, a medida que transcurre el tiempo,
material de la demanda 4, siendo su observancia nece- se van diluyendo las expectativas de un avenimiento
saria e ineludible. (...) el propósito de la ley es dar estabilidad al matri-
Inclusive, en ciertos supuestos en los que la falta monio exigiendo plazos de cumplimiento certero que
de transcurso del plazo surgiere de manera evidente –por un lado- aseguren la observancia de un período
y manifiesta en la demanda, podría ésta ser rechazada efectivo de reflexión favoreciendo el avenimiento y –por
in limine, de conformidad a lo estipulado por el art. el otro- permita presumir que la intención de separarse
337 del cód. procesal, evitando el riesgo de un proceso es firme y duradera” 8.
tramitado con fallas básicas, ante la presentación de Finalmente, y conforme a lo dispuesto por el art. 16
una demanda que resulte inhábil, irregular o impro- del cód. civil, si una cuestión civil no puede ser resuelta
ponible 5. por lo que la norma expresamente dice, ni por el espíritu
En segundo lugar, atento a que el art. 214, inc. 2º de la ley, es necesario que el juzgador acuda a los princi-
nada dice acerca del momento en el cual debe estar pios generales del derecho. Dichos principios, sin duda,
cumplido el plazo señalado, resulta necesario efectuar deben guiar todo quehacer judicial.
una interpretación que tome en cuenta los motivos En el derecho de familia rigen principios específicos,
que llevaron al legislador a establecerlo. tales como el de superior interés del niño, el de reconoci-
En materia de divorcio, nuestro legislador tomó miento y protección a la familia y el de matrimonialidad,
como fuente el Código Civil Español, de Costa Rica y este último de importancia en la cuestión analizada.
Código Francés, entre otros, que prevén dicha causal El principio de matrimonialidad, derivado del de
de divorcio fundada en la falta de cohabitación pro- reconocimiento y protección a la familia, “propugna
longada de los cónyuges, que hacen presumir el fraca- promover la fundación de la familia en el compromi-
so matrimonial. so matrimonial, en concreción tanto del principio más
Como lo afirma Vidal Taquini, “la permanencia en general de su protección integral, como del principio ju-
el tiempo de una separación de hecho es la demostra- rídico de resguardo del interés familiar...” 9. El principio
ción de una definitiva ruptura de la vida en común y de matrimonialidad proyecta sobre la familia, áreas de
un fracaso del matrimonio que queda evidenciado de regulación que son interés del Estado, y se refuerzan con
manera objetiva, y es lo que lleva a la legislación con- la imperatividad especial del orden público.
temporánea a la admisión de esta causal” 6. Los principios de reconocimiento y protección a la
Nuestro legislador, consciente de las importantes familia y el de matrimonialidad, inspiran nuestro or-
consecuencias jurídicas que del divorcio se derivan –ex- denamiento jurídico familiar, buscando brindar pro-
tinción del vínculo y de los derechos y deberes emergen- tección y fortalecimiento a la familia y a la estabilidad
tes del matrimonio– quiso asegurar, a través del inexo- matrimonial. De los mismos, se deriva la necesidad de
rable cumplimiento del plazo, que existe una quiebra adoptar en todos los casos la solución que en mayor y
conyugal definitiva y no sólo un conflicto temporal. De mejor medida resguarde el matrimonio y garantice su
lo contrario, lo hubiera dejado al arbitrio judicial 7. conservación, atendiendo a sus caracteres de unidad y
estabilidad.
Por ello, parte de la doctrina que niega la posibilidad
3
Palacio, Lino Enrique, Derecho Procesal Civil, Tomo IV, de que el plazo fijado por el art. 214, inc. 2 se cumpla
Abeledo - Perrot, Buenos Aires, 2005, pág. 290.
4
Morello, Augusto M., Cómputo de tiempo en la separación
durante el curso del proceso, sostiene que ésa “no puede
de hecho, DJ, t. 2005-2, p. 15.
5
Lagomarsino – Uriarte, Separación Personal y Divorcio,
Editorial Universidad, Buenos Aires, 1991, pág. 305
8
Bueres, Alberto J. – Highton, Elena I, Código Civil y nor-
6
Vidal Taquini, Carlos H., Matrimonio Civil, Ley 23.515, Co- mas complementarias. Análisis doctrinario y jurisprudencial, Tomo
mentario de los artículos 159 a 239 del Cód. Civil y demás normas I, Parte General. Familia. Ed. Hammurabi. Buenos Aires. 1995, pág.
vigentes, Ed. Astrea, Buenos Aires, 2000, pág. 388. 941 y 943.
7
Podestá, Andrea I., ¿Hay que esperar el plazo de separación
9
Arias de Ronchietto, Catalina Elsa, El vínculo jurídico
de hecho del art.. 214, inc. 2 del Cód. Civil para iniciar la acción de paterno-filial y familiar por adopción, hoy, artículo publicado en El
divorcio vincular?, DJ, t. 2004-1, p. 488. Derecho, 22/08/07, Nº 11.824, Año XLV).

14 CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA


ser la solución de la ley argentina porque ella se inspira pretación es la que contempla la intención del legislador
en el principio del favor matrimonii y de no del favor al sancionar la norma, y los principios vigentes en la ma-
separationis o divortii” 10. teria, en particular el principio de matrimonialidad.
Asimismo, cabe señalar que las cuestiones de familia
son de orden público, por encontrarse comprometido el

JURISPRUDENCIA
interés de la sociedad, por lo que lo atinente a su cons- Para leer más
titución, efectos, anulación, separación personal y di-
vorcio, no queda sujeto a la autonomía de los cónyuges. Doctrina:
Ello, por cuanto el matrimonio no es un típico contrato - Bueres, Alberto J. – Highton, Elena I, Código Civil y normas com-
de derecho civil que se origina, surte efectos y se disuel- plementarias. Análisis doctrinario y jurisprudencial, Tomo I,
ve conforme lo pretendan libremente los esposos. No Parte General. Familia. Ed. Hammurabi. Buenos Aires. 1995.
rige aquí el principio de libertad contractual. - Mazzinghi, Jorge Adolfo, Tratado de Derecho de Familia, Tomo III,
Así pues, la admisión de una demanda de divorcio “Separación Personal y Divorcio”, La Ley, Buenos Aires, 2006.
presentada antes del cumplimiento del plazo legal, im- - Palacio, Lino Enrique, Derecho Procesal Civil, Tomo IV, Abe-
portaría vulnerar lo estipulado por la normativa vigente ledo-Perrot, Buenos Aires, 2005.
en la que está interesada el orden público, otorgando - Lagomarsino – Uriarte, Separación Personal y Divorcio, Edito-
primacía a la voluntad de las partes, por encima de las rial Universidad, Buenos Aires, 1991.
disposiciones del derecho de familia y de sus principios - Podestá, Andrea I., ¿Hay que esperar el plazo de separación
rectores, en una cuestión tan trascendente como es la de hecho del art. 214, inc. 2 del Cód. Civil para iniciar la
disolución del vínculo matrimonial. acción de divorcio vincular?, DJ, t. 2004-1, p. 485.
En conclusión: el efectivo cumplimiento del plazo Fallos: CNCiv., Sala 02/08/2004, D.J., 2005 – 2 – 15; CNCiv.,
de separación de hecho sin voluntad de unirse pre- Sala I, 2/05/02, E.D. 201-503; CNCiv., Sala D, 22/12/04, D.J.,
visto por el Cód. Civil al momento de demandar, es 2005-I-519; CNCiv. Sala A, 2/08/04, D.J. 2005-2-15, menciona-
un presupuesto necesario para intentar válidamente la dos en sitio WebRubinzal jucciv 3.1.1.12.r2.
acción, toda vez que las disposiciones en materia de
derecho de familia son de orden público, y dicha inter-
Voces: divorcio - familia - matrimonio - orden público
Ob. Cit. Nº 6, pág. 943.
10
plazo

SOCIEDAD
RESPONSABILIDAD POR CONYUGAL
DEUDAS DEL CÓNYUGE
por Teresa Vedoya

Tribunal: CNCiv., sala H, 25-08-2009, Exp. Nº. 15369/1994


Hechos: El juez intimó a la viuda del deudor hipotecario fallecido a integrar en autos
la deuda no satisfecha con el producido de la subasta y dispuso su inhibición general
de bienes.
La Sala H revocó la resolución atacada.
Fundamenta su decisión en los art. 5 y 6 de la ley 11.357, señala la falta de prueba
aportada por el acreedor respecto al destino del mutuo –necesidades del hogar, edu-
cación de los hijos o conservación de los bienes comunes– y explica los alcances del
asentimiento dado por la señora en el mutuo hipotecario.

CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA 15


FALLO
“Del dato precedentemente relacionado se deduce que la obligación
de restituir el dinero dado en préstamo al cónyuge premuerto no ha
JURISPRUDENCIA
sido asumida ni afianzada por la esposa […] La solución la aporta la
ley 11.357 en sus arts. 5 y 6. El primero de ellos sienta el principio de
irresponsabilidad de uno de los cónyuges por las obligaciones contraídas
por el otro…Por su parte el art. 6º establece la excepción a tal pauta…
La carga de la prueba del carácter de la obligación recae sobre el acree-
dor, quien deberá demostrar –por la vía y forma pertinente- que su cré-
dito está comprendido en el art. 6º de la ley 11.357 para poder dirigir su
reclamo contra la cónyuge que no contrajo la obligación”.

NOTA Consecuentemente me pregunto: ¿Cómo saber


qué bienes integran el patrimonio de cada cónyuge?
El fallo en análisis revoca la resolución de primera En principio y siempre que exista, por el título de
instancia que intima a la viuda del deudor hipotecario propiedad.
a integrar el dinero faltante para satisfacer la deuda, y De ahí la importancia de la correcta inscripción
decreta la inhibición general de bienes de la misma. dominial ya que será el título el que defina quién
Cabe aclarar que el mutuo hipotecario fue suscrip- administrará y dispondrá de ese bien, y qué deudas
to por el Sr. R. H. O. y su mujer –Sra. G. E. H.– solo garantizará.
asintió en los términos del art. 1277 y que el inmueble Con respecto a los bienes cuyo origen no pudiera
hipotecado era de titularidad del Sr. R. H. O. determinarse o la prueba al respecto fuera dudosa,
La Sala H de la Cámara Nacional de Apelaciones son de administración conjunta de los esposos; por
en lo Civil hace una correcta interpretación de la ley lo que tanto los acreedores de uno como los del otro
en lo atinente a la responsabilidad de los cónyuges cónyuge pueden ir sobre esos bienes, aunque sólo
por las deudas hacia los terceros acreedores, y re- sobre la mitad de los mismos. 2
vierte la sentencia del a - quo. Ahora bien, respecto a las deudas, es muy claro el
Contrariamente a ello entiendo que el fallo de art. 5 de la ley 11.357 cuando establece que los bienes
Primera Instancia incurre en la anacrónica idea de propios y gananciales de un cónyuge no responden
que a la cual entre cónyuges existe algún tipo de por las deudas contraídas por el otro. La única sal-
sociedad. vedad la constituyen los frutos de los bienes propios
Siguiendo esa idea, innumerables pronuncia- y gananciales que sólo responderán por las deudas
mientos llevaron a embargar el 50% del inmueble de antes descriptas.
titularidad del cónyuge in bonis, a rechazar tercerías Es decir, la clasificación del bien como propio o
de dominio iniciadas por el cónyuge no deudor, y ganancial ninguna incidencia tendrá respecto a los
muchas otras situaciones contrarias a la ley. 1 acreedores, atento a que los mismos sólo podrán
Según lo normado por los arts. 1276 del Código perseguir los bienes que se encuentren inscriptos a
Civil y 5 y 6 de la ley 11.357, cada cónyuge tiene nombre del cónyuge con quien contrajo la obliga-
la libre administración y disposición de sus bienes ción –sean propios o gananciales–, y no podrán per-
gananciales y propios, y cada uno responde por las seguir los bienes del no deudor aunque sostengan
deudas por él contraídas. que son gananciales.
La excepción la establece el art. 6 de la ley 11.357 Todo esto me lleva a concluir que durante la vi-
al decir que el cónyuge no deudor responde con gencia del matrimonio el régimen imperante nada
los frutos de sus bienes propios y gananciales, por tiene de “sociedad conyugal”. No existe unidad de
aquellas deudas contraídas para la atención de las masas, sino todo lo contrario. Encontramos bienes
necesidades del hogar, la educación de los hijos o la gananciales de la mujer, gananciales del marido,
conservación de los bienes comunes. propios de la mujer y propios del marido. Asimismo
Es decir que durante la vigencia del matrimonio, la administración es separada y por lo tanto la res-
los cónyuges poseen patrimonios separados. ponsabilidad también.

2
Sambrizzi, Eduardo A., “Régimen de bienes en el matrimo-
LL 1998-D-876 y JA 1999-I-737, entre otros.
1 nio”, Ed. La Ley, 2007, Pag. 20.

16 CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA


En el régimen originario la masa de gananciales forma la masa común a dividir, participando los
se formaba al momento de la celebración del matri- cónyuges de los gananciales adquiridos por el otro.
monio (existía una sola masa de gananciales, cuya Otros como Borda, Spota, Belluscio, Cambias,
administración la tenía el marido). Zannoni y Méndez Costa adoptan la expresión de

JURISPRUDENCIA
Luego de la ley 17.711, y conforme al actual art. régimen de comunidad, algunos de ellos le agregan
1276 del Cógido Civil la masa de gananciales no se “de administración separada”. 7
forma al momento de la celebración del matrimo- Los primeros sostienen que no se puede hablar de
nio, sino recién a la disolución del régimen, a los régimen de comunidad ya que durante el matrimo-
fines de dividirse por mitades (conf. art. 1315 del nio existe la separación de bienes, y sólo al momen-
Código Civil). Diferencia esencial para caracterizar to de la disolución se forma la masa a partir, único
al régimen, pues el momento en que se constituye la elemento que no alcanza para configurar la “comu-
masa común determina la existencia de uno u otro nidad”.
régimen. 3 Mientras que los segundos sostienen que habrá
Consecuentemente, hasta que no esté disuelto el comunidad siempre y cuando haya partición de una
vínculo matrimonial por divorcio, muerte, ausencia masa común –sin importar el momento en que se
con presunción de fallecimiento; declarada la nuli- forme– sin ser requisito la unidad de administra-
dad del mismo por buena fe de ambos o de uno de ción y responsabilidad, ni la jefatura del marido.
los cónyuges; decretada la separación de bienes o la En conclusión, y sin perjuicio de la denominación
separación personal, no existirá entre ellos masas co- que se le dé al régimen patrimonial del matrimonio,
munes. Sólo operada alguna de estas circunstancias lo claro es que no existe sociedad conyugal confor-
y en consecuencia disuelto el régimen, se formará la mada por los cónyuges, sea como persona indepen-
masa de gananciales –conf. Art.- 1315, C.C.–. diente de ellos –patrimonio y responsabilidad pro-
En palabras de Josserand: “Los esposos no habían pia– o bajo la vieja concepción de administración
llegado a ser asociados más que cesando de ser espo- y responsabilidad por parte de uno de los cónyuges
sos o separándose”. 4 obligando al otro.
Afirma Vidal Taquini “No se puede seguir dicien- Lo mencionado me conduce a afirmar que cabría
do que el régimen es de comunidad. Hacerlo no es una modificación de la designación del título II de
mas ni menos que crear un mito de una comunidad la Sección Tercera que dice “De la sociedad conyu-
(sociedad conyugal) que ha desaparecido”. 5 gal” y normas concordantes, a efectos de contribuir
También sostiene Guaglianone: “La pretendida al esclarecimiento del funcionamiento del régimen
personalidad de la sociedad conyugal ha quedado patrimonial del matrimonio, no tanto respecto a
definitivamente aniquilada y descartada. Más aún: abogados y magistrados sino teniendo en cuenta la
no existe ahora sociedad conyugal como modo equí- confusión general que existe en la población respec-
voco de designación para una masa de bienes des- to a este tema.
personalizada, porque también se ha desvanecido en
gran parte esa unidad, para consolidarse cada vez
con mayor fuerza una pluralidad de patrimonios,
Para leer más
apenas posible en el Código de 1869, pero ya patente
en el texto de 1926”. 6 Vidal Taquini, “Régimen de bienes en el matrimonio”, Ed. Astrea.
Con respecto a la calificación del régimen patri- Sambrizzi, Eduardo A., “Régimen de bienes en el matrimonio”,
monial del matrimonio, parte de la doctrina propo- Ed. La Ley.
ne hablar de régimen de “participación en los adqui- Azpiri, Jorge O., “Régimen de bienes en el matrimonio”, Ed. Ha-
ridos” –Néstor Solari y Vidal Taquini entre otros– ya mmurabi.
que manifiestan que durante la vigencia del régimen
hay separación de bienes y luego de disuelto éste se VOCES: SOCIEDAD CONYUGAL - TERCERO - LEGITIMACIÓN

3
Solari, Néstor E., “El régimen patrimonial del matrimonio”,
DJ, 02/05/2007.
4
Josserand, Derecho Civil, t. III, vol. 1, nº 6 ter. 7
Belluscio, El régimen matrimonial de bienes, LL, 131-1458,
5
Vidal Taquini, Carlos H., “Régimen de bienes en el matri- Manual, T. II, p. 20. Spota, Alberto G., Sobre las reformas al Código
monio”, Ed. Astrea, 1990. Civil, p. 55, Tratado, t. II, vol. 2, p. XV. Méndez Costa, María J.,
6
Guaglianone, Régimen, t. II p. 145. “Derecho de Familia”, Ed. Rubinzal Culzoni, P. 421.

CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA 17


TENENCIA
ACUERDO DE PADRES Y EL DERECHO
JURISPRUDENCIA

DEL MENOR A SER OIDO


por Verónica Polverini

Tribunal: CApel.CC Concordia, sala I, 6-3-09, “S., P. A. c. G., J. A. s/tenencia”


Hechos: El progenitor de una niña de cinco años apela el auto que homologa el
acuerdo sobre tenencia celebrado por las mismas partes con patrocinio letrado en
audiencia judicial. El único agravio expresado es la falta de escucha de la niña acerca
de la tenencia convenida a favor de la madre. La Cámara de Apelaciones de Concordia
confirma el interlocutorio con doble fundamento: a) la inexistencia de agravio para el
quejoso que voluntariamente suscribió el acuerdo cuya homologación ahora ataca; y
b) la efectiva escucha de la niña, aun sin recaudos formales, y pese a la oposición del
mismo padre.

FALLO
“Por dos razones la querella deviene inatendible. La primera, porque
como la apelación supone la existencia de un agravio nacido a la luz de
algún yerro plasmado por el juzgador es de toda evidencia que dicho
déficit no está concretado habida cuenta de que –en el caso– el crite-
rio judicial quedó desplazado por el acuerdo voluntario suministrado
por las partes ante su presencia y de los letrados que patrocinaron la
celebración del acto. La restante, porque si bien en teoría puede com-
partirse el ensayo del quejoso –dicho esto en el sentido de que hoy
día los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a ser informados,
escuchados y tenerse en cuenta lo que dicen, sienten o piensen so-
bre los asuntos con entidad de afectarlos; ello, en consonancia con la
Convención Internacional de los Derechos del Niño incorporada a la
Constitución Nacional y la ley nº 26061–, no es menos cierto que la
realidad concreta de la especie muestra la sinrazón del planteo. Si no
véase el prolijo dictamen del Ministerio Pupilar –cfr. art. 59, CCiv.; que
compartimos por resultar fiel reflejo de las acreditaciones allegadas a
esta pieza separada– donde con claridad hace ver que fue el propio
quejoso quien puso las causas obstativas que ahora motivan el alza-
miento. Esto es, que al menos en cinco oportunidades no permitió que
su niña sea entrevistada por el Equipo Interdisciplinario del Juzgado
de origen y en otras que sea escuchada por el Sr. Juez a quo; amén de
constarle a la Sra. Defensora de Menores –aunque las piezas no luzcan
incorporadas– que ‘en reiteradas oportunidades’ tanto ella como el Sr.
Juez a quo y los equipos técnicos escucharon la opinión de la menor al
tomar contacto con ella”.

NOTA I.
Un breve pero interesante fallo de la Cámara de El primero de ellos es la consideración sobre si
Apelaciones de Concordia, permite enhebrar reflexio- resulta apelable la homologación de un acuerdo pro-
nes sobre tres aspectos en debate en el derecho de fa- puesto por las mismas partes, cuando no ha existido
milia y en el derecho procesal de familia. retractación ni modificación anterior a la sentencia ju-

18 CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA


dicial que lo recepta y lo convierte en ejecutable. Universal del 20 de noviembre de 1959, así como pro-
Recordemos que homologar es autorizar, permitir, fusos antecedentes doctrinarios y jurisprudenciales,
facultar o darle valor legal al convenio celebrado por establecieron esta jerarquía superior del interés de los
las partes. Así la doctrina define “homologar” como hijos. Baste para ello recordar el art. 17.4 del Pacto de
acción y efecto de confirmar y aprobar el juez ciertos

JURISPRUDENCIA
San José de Costa Rica que con la expresión de máxi-
actos y convenciones celebrados por las partes, para ma firmeza sostiene “…se adoptarán disposiciones
hacerlos más firmes, ejecutivos y solemnes. 1 que aseguren la protección necesaria de los hijos, so-
Por lo tanto, la parte que ha formulado el acuerdo bre la base única del interés y conveniencia de ellos”.
con debida asistencia letrada iría contra sus propios Resulta evidente que la validez de los convenios en-
actos si se muestra quejoso frente a la resolución ju- tre adultos estará sujeta a esta norma de orden público
dicial que da valor al propio contenido que proponía, constitucional. Sobre esta base, el art. 263 del Código
sin que medien cambios en las circunstancias fácticas Civil estableció la facultad judicial de objetar estipula-
o jurídicas entre esa propuesta y la homologación. ciones de los acuerdos celebrados por las partes en el
marco de la separación o el divorcio “cuando afecten
el bienestar de los hijos”.
II. En suma, cuando las partes ponen a considera-
ción judicial acuerdos en los que se encuentran afec-
En segundo término, es necesario aclarar una con-
tados intereses de los hijos menores de edad, el acto
sideración secundaria de la sentencia cuando sostiene
que el criterio judicial quedó desplazado por dicho de homologación exige la intervención necesaria del
acuerdo voluntario suministrado por las partes y por Ministerio Público y lleva ínsita la confrontación de
los letrados. lo convenido con el interés superior de los niños. No
En realidad no se trata de un desplazamiento o va- en vano el Diccionario de la Real Academia Española
ciamiento del contenido material del acto jurisdiccional, define homologar, dicho en relación con la autoridad,
sino de una asunción por este último del contenido pro- como “contrastar el cumplimiento de determinadas
puesto por las partes. Ni la participación de los letrados especificaciones o características de un objeto o de
anula el clásico principio de “el Juez conoce el Derecho”, una acción”.
ni la mera conformidad de las partes obliga al Tribunal.
Ante todo porque existe también una tercera par-
te esencial en representación de los niños, que es el III.
Ministerio Público, órgano apropiado según el art.
12 de la Convención sobre los Derechos del Niño, e De este principio general del interés superior del
institución de la legislación de fondo según el art. 59 niño deriva naturalmente la necesidad de escucharlo
y concordantes del Código Civil. Y además porque el cuando se trata de cuestiones que atañen a su vida.
contenido del acuerdo debe ser conforme al orden pú- Este tema incorporado en el art. 12 de la Convención
blico familiar, concepto que incluye el interés superior sobre los Derechos del Niño y arts. 2, 3 inc. b), 24 y 27
de los niños de rango constitucional y constituido hoy inc. a) de la ley 26.061, ya estaba prefigurado en el art.
en día en un principio fundamental rector supremo 264 ter del Código Civil reformado por la ley 23.264.
en la temática. Ha dado motivo a ríos de tinta últimamente con for-
Justamente, la intervención necesaria del Ministe- mulaciones a veces más ideológicas que prácticas.
rio Público, tanto en su rama fiscal como en la espe- El fallo viene a colocar un ladrillo en el sólido muro
cífica de defensa de menores de edad, hace referencia de la sensatez sobre el cual debe elevarse toda cons-
a estos intereses. Por algo enseñaba el maestro Carn- trucción jurídica razonable. El padre se había agra-
elutti que “...lo que decide es la importancia social del viado, quizás para justificar un deseo de retractación
interés de cuya tutela se trata, o, más exactamente, la posterior sobre el acuerdo, porque no existía el acto
existencia de un interés público en cuanto a su tutela formal, volcado en acta judicial, de escucha de su hi-
y, por tanto, su conexión con un interés público tras- jita de 5 años. Esta actitud venía orlada por ir contra
cendente. Cuando ese presupuesto exista, la acción no sus propios actos, porque la sentencia recuerda que en
puede confiarse o por lo menos no puede confiarse ex- varias oportunidades se había negado y opuesto a la
clusivamente a la parte o a sus sustitutos. Por ello se ha misma escucha de la hija que ahora requería.
creado un órgano adscripto a su ejercicio, que recibe Pero lo valioso del fallo, que es un aporte serio en
el nombre de Ministerio Público”. 2 la cuestión, radica en haber admitido que la escucha
En materia de niñez, no sólo la Convención sobre puede ser dada sin formalismos judiciales, ajenos to-
los Derechos del Niño, sino la misma Declaración talmente a la mentalidad infantil. Una cosa es sostener
que la garantía de escucha no está supeditada a una
edad o madurez determinadas, y otra muy distinta es
1
Moreno Rodríguez, Rogelio, “Diccionario Jurídico”, Ed. LA
afirmar que estos parámetros no deban ser considera-
LEY, p. 387.
2
Carnelutti, Francisco “Sistema de Derecho Procesal Civil”, dos en el modo de ejercicio de un derecho que trocaría
Tomo II, n° 144 a, Buenos Aires, Argentina, 1944, UTEHA. entonces en carga procesal, con la rígida exigencia de

CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA 19


sometimiento a formas jurídicas ininteligibles para un Lo contrario es convertir en una carga procesal so-
niño de corta edad. En este sentido, es clara la letra del bre la criatura lo que en realidad es un derecho que
art. 3 inc. d) de la ley 26.061 que dentro del concep- emana de su condición de sujeto prevalente y de la
to de interés superior del niño impone el respeto a su dignidad de toda persona humana que debe ser respe-
JURISPRUDENCIA
“edad, grado de madurez, capacidad de discernimien- tada en sus condiciones particulares de desarrollo.
to y demás condiciones personales”.
Triste es ver actas redactadas en clásicos términos
cuasi notariales suscriptas con el garabato de un niño Para leer más
de jardín de infantes, como modo formal de cumpli-
miento del mandato constitucional de escucha. Debe- Sobre el rechazo de homologación de acuerdos en materia de fami-
mos agradecer a los camaristas de Concordia que nos lia, entre otros muchos: Sup. Corte Bs. As., 10-06-2009, “G., S. N. y
recuerden en una sentencia que el niño puede ser res- otro”. C. Nac. Civ., Sala M, 5-5-1993, “F., M.”, JA 1994-I-642.
petuosamente oído por el Tribunal o por el Ministerio Sobre orden público en materia de familia: Conen, Cristián y Or-
telli de Biscotti, Ana María, “La autonomía de la voluntad en las
Público, con modos informales o a través de perso-
nal especializado de ambas instituciones, y que basta relaciones personales de familia”, LL 2004-B, 1065. Mizrahi, M. L.,
la mención o referencia que los magistrados hagan a “Autonomía de la voluntad y decisiones de los padres respecto de
dicho conocimiento para que el recaudo legal se en- sus hijos menores”, LL 2003-F, 1146. Guahnon, Silvia, “La intromisión
cuentre satisfecho. del Estado en los procesos de familia”, LL 2002-E, 1005.
Especial hincapié hace el Tribunal en las reitera- Sobre el derecho del niño a ser oído y su participación en el proce-
das oportunidades en que la Defensora de Menores so, entre otros muchos: C. Nac. Civ., sala B, 19-3-2009, “K., M. y otro
tomó contacto con la niña, pues es este modo a tenor v. K., M. D.”. C. Nac. Civ., sala I, 4-3-2009, “K., M. y otro v. K., M. D.”.
de la parte final del art. 12 de la Convención sobre los Sup. Corte Bs. As., 2-05-2002, “S. de R., S. R. c. R., J. A.”.
Derechos del Niño no sólo el más adecuado sino el
jurídicamente necesario para incorporar la opinión Voces: vistas y traslados - familia - tenencia de
independiente del niño en el proceso. hijos - h0mologación - proceso - patria potestad

TENENCIA
EL IMPEDIMENTO DE CONTACTO COMO
CAUSA DEL CAMBIO DE TENENCIA
por Cecilia Hebe Bonaverdi

Tribunal: Juzgado de Primera Instancia de Familia N° 1 de Trelew, 16-09-2009, “G., F.


c/ F., M. s/Incidente de modificación de custodia”, Expte. N° 525/2009.
Hechos: El Sr. F. G. promueve demanda de modificación de custodia de su hijo F. D.
G. F. –de dos años de edad– contra la madre M. F. Alega que la misma incumplió el
acuerdo homologado sobre comunicación entre padre e hijo por lo que fue sancionada
con la imposición de astreintes y condenada con la pena de seis meses de prisión en
suspenso por encontrársela penalmente responsable del impedimento de contacto.
Pese a ello, el día en que se debía materializar la medida cautelar –que disponía que
el niño pasaría el fin de semana con su padre–, la Sra. M. F. se trasladó con su hijo a
otra localidad. Por su parte, la Sra. M. F. peticiona la suspensión del régimen de comu-
nicación –“para proteger la integridad psicofísica de F.”– alegando que el Sr. F. G. no
es apto para mantener un contacto con su hijo –sin que el mismo sea supervisado-, e
indicando, también, que pertenece a la religión “Daime” –que no ha sido reconocida en
nuestro país a partir de la práctica del consumo de ayahuasca, lesiva para la salud–.

20 CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA


FALLO
El Juez Martín Benedicto Alesi atribuye provisoriamente la tenen-
cia del niño F. a su padre, Sr. F. G., hasta tanto recaiga sentencia defi-

JURISPRUDENCIA
nitiva, y fija una audiencia para acordar el régimen provisorio de co-
municación materno-filial. Expuso que “… la postura de la accionada
es inadmisible al no haber arrimado a la causa –como lo exige la juris-
prudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos en el precedente
“Palau Martínez c. Francia”– ningún elemento concreto y directo que
demuestre la influencia de la supuesta práctica religiosa del padre sobre
la crianza, educación y protección del hijo…el “medio” elegido – la mo-
dificación provisoria de la custodia– es proporcionado al ser conducente
para alcanzar determinado “fin válido” –el derecho de padre e hijo a
mantener relaciones personales (conf. arts. 7, 8, 9 y 18 de la CDN, arts. 7
y 11 de la ley 26061; arts. 264 y sig. del Cód. Civil)–. En ese examen que-
da de relieve que el cambio de la tenencia no puede ser reemplazado por
mantener la situación de hecho, dado que la guarda actual de la madre
no es objetivamente idónea para favorecer el vínculo parental según ha
quedado evidenciado luego de más de un año de insistirse con distintas
medidas, sin que se vislumbre ninguna alternativa de cambio factible…”
(Ver texto completo en www.elderecho.com.ar/EDFA).

NOTA del juez debe centrarse en determinar –en cada caso


concreto– la incidencia de dicha práctica religiosa para
Como bien sabemos, el derecho de visitas o de “ade- el desarrollo psicofísico y emocional del niño, como así
cuada comunicación y supervisión de la educación” –se- también, y de manera fundamental, la idoneidad del pa-
gún se menciona en el art. 264, inc. 2 del Código Civil– dre para cumplir el rol paterno, con independencia de
del padre o madre no conviviente respecto del hijo cuya sus preferencias religiosas, sexuales, etc.
guarda ha sido otorgada al otro progenitor, consiste en el En el art. 206 del Código Civil, la “idoneidad” es
derecho de mantener un contacto personal y directo con utilizada como parámetro a tener en cuenta por el juez
el menor que permita el mantenimiento de la integridad en el momento de otorgar la tenencia a alguno de los
de la relación paterno-filial, mediante la conservación padres cuando no existe acuerdo entre ellos –y se trate
de la unión más plena que las circunstancias del caso de niños mayores de cinco años–, ya que para los me-
permitan. Este derecho de raigambre constitucional (re- nores de esa edad establece una preferencia a favor de
conocido en los arts. 7, 8, 9, 10 y 18 de la Convención la madre –salvo causas graves que afecten el interés del
sobre los Derechos del Niño, ratificada por la Ley 23.849 menor–. A nuestro entender, esta preferencia debería
e incorporada a nuestra Constitución Nacional a través desaparecer ya que en el transcurso de los últimos años
del art. 75, inc. 22) no es sólo de titularidad de los padres, hubo una transformación de la composición familiar y
sino, por el contrario, es recíproco y correlativo, siendo de las funciones de sus miembros que generó que los
un derecho también del hijo, que le permitirá conservar padres dejen de ser meros proveedores y que las madres
las relaciones materno-paterno-filiales fundamentales se incorporen al mercado laboral, cambiando, de esta
para su desarrollo y formación integral. manera, sustancialmente la participación de los prime-
En la sentencia objeto de este comentario el juez Ale- ros en la crianza de los hijos. Por esta razón, debe existir
si realizó un pormenorizado análisis de las diferentes igualdad entre el hombre y la mujer en cuanto al ejerci-
circunstancias alegadas por la demandada –madre del cio de sus roles parentales, debiendo los jueces adoptar
niño– y demás constancias existentes en la causa, para decisiones –en el caso concreto– teniendo en cuenta la
luego resolver, de manera criteriosa, el cambio de cus- idoneidad de los padres y el “interés superior” en que
todia a favor del padre. Para así decidir consideró que deberá apoyarse cualquier decisión al respecto, dejando
el interés superior del niño se alcanzaba procurando el de lado pautas discriminatorias.
mantenimiento del adecuado contacto con su progeni- En el caso en análisis, el a quo entiende que la actitud
tor y, teniendo en miras el logro de ese “interés superior”, obstruccionista de la madre se encuentra por demás de-
resolvió lo necesario para poder alcanzarlo. mostrada, dejando en claro las diferentes instancias en
Adentrándonos en los argumentos esgrimidos por la las que se intentó un cambio que finalmente no pudo
demandada, coincidimos con el a quo en cuanto a que la lograrse. Por ello, se cree que el accionar que se cuestio-
sola invocación, realizada por la madre, de la pertenen- na constituye una causa grave que afecta el interés del
cia del padre a un grupo religioso no puede configurar menor, lo que provoca que la preferencia materna quede
un impedimento razonable para menoscabar el derecho en un segundo plano. Y, sin preferencia vigente, la te-
de comunicación entre éste y su hijo, ya que se debe par- nencia deberá otorgarse al más idóneo, que sin dudas
tir del criterio básico de la no discriminación. La tarea es el que entiende que su hijo ya sufrió un daño con la

CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA 21


consumación de la ruptura de la pareja parental –como bución de la custodia y en el ejercicio de la autoridad parental. Su
consecuencia de la separación personal, el divorcio o la vinculación con los derechos fundamentales de padres e hijos”,
separación de hecho– y evita que uno nuevo se le gene- LNBA 2006-2-133; Makianich de Basset, Lidia N., “Derecho de visitas.
re, permitiendo el contacto y la adecuada comunicación Régimen jurídico del derecho y deber de adecuada comunicación
con el progenitor no conviviente.
JURISPRUDENCIA
entre padres e hijos”, Hammurabi, 1993 y “Nuevos horizontes en un
De esta manera, y mediante un razonamiento sensa- viejo tema”, RDF 2003-26-101; Moreno, Gustavo D., “La eliminación
to, el juez consideró que prolongar el status quo no hacía de la preferencia materna en el cuidado personal de niños y niñas
más que facilitar el enquistamiento de una situación que, de corta edad”, RDF 2000-16-119; C. Apels. Comodoro Rivadavia,
a todas luces, es contraria a derecho, y debe modificarse, sala A, 16/06/2009, “M., R. A. v. J., J. L”, Lexis N° 70055245;
procurando, de ser posible, la menor carga de agresiones Husni, Alicia - Rivas, María F., “Algunas reflexiones respecto de los
a la psiquis del niño. impedimentos de contacto con el progenitor no conviviente”, RDF
Compartimos los fundamentos esgrimidos para deci- 2000-17-219; Blanco, Luis G. - Gavotti, Alicia M. - Polakiewicz, Marta,
dir la modificación de la tenencia, entendiendo que con “Interés del menor: Derecho de comunicación (visitas)”, JA 1993-
la misma se restituye el derecho y bienestar del niño, ya I-871; G. Caplan, “Aspectos preventivos en salud mental”, Capítulo
que se logra la plena participación de ambos padres –y X; Camps, Carlos E. - Nolfi, Luis M., “El Ministerio Público y la efec-
no sólo de la madre– en su crianza, educación y protec-
tividad del derecho de los menores cuyos padres están separados
ción integral, siendo éste el fin que justifica los medios.
a mantener contacto con ambos progenitores”, JA 2000-I-654;
Fernández, María J., “Orientación sexual del progenitor y su inciden-
Para leer más cia en la guarda y régimen de comunicación con los hijos”, RDF
2002-23-170; Solari, Néstor, “Régimen de visitas y cuestiones sus-
Taraborrelli, José N., “Régimen jurídico del derecho y deber de citadas”, LLC 2007; Bikel, Rosalía, “Vicisitudes de la responsabilidad
adecuada comunicación entre padres e hijos (Aspectos civiles parental a partir del proceso de divorcio. Tenencia y régimen de
y penales)”, JA 1997-I-869; Juzg. Civ. y Com. San Martín, n. 2, visitas”, RDF 2003-26-25.
3/5/1995 – “S. D. v. S.”, con nota de Susana Szylowicki, “Los
jueces en función pedagógica. El caso ‘Sofía’, RDF 1996-10-154;
Chechile, Ana M. - López, Cecilia, “El derecho humano del niño a Voces: familia - Tenencia de hijos - Visitas - Patria
mantener contacto con ambos progenitores. Alternativas en la atri- potestad

Ofrecemos a nuestros suscriptores un extracto de la nota a fallo publicada en El Derecho. El texto


completo de la misma se encuentra disponible en familia.elderecho.com.ar

EL CAMBIO DE TENENCIA COMO REMEDIO EN CASOS


DE IMPEDIMIENTO DE CONTACTO SU CORRECTA IMPLEMENTACIÓN

por Carlos Díaz Usandivaras y Adriana Parada

[...] En la sentencia comentada, se analizan dos de los Nuestra legislación ha ido evolucionando con rela-
criterios usualmente utilizados al momento de decidir: ción a la atribución de la tenencia en relación con la edad
a) la preferencia por la madre en los supuestos de niños de los niños. El viejo art. 213 del Código Civil, según el
menores de cinco años y b) el mantenimiento del “status criterio que impuso el codificador, establecía: “Los hijos
quo”. Cabe aclarar que estos criterios legales en cuanto menores de cinco años quedarán siempre a cargo de la
al otorgamiento de la guarda son aplicables a falta de mujer”. Dicha directiva resultaba imperativa para el juez,
acuerdo entre los padres. no existiendo posibilidad de apartarse de la misma.
2.1. Menores de cinco años: se presume que la madre Resulta importante destacar el acierto de Vélez
es la más idónea para cuidar a niños pequeños . Se ha Sarsfield al desestimar el factor “culpa en el divorcio”
considerado que en los primeros años de vida la aten- como criterio orientador. En la nota al art. 213, Vélez
ción de la madre es imprescindible y casi insustituible . Sarsfield, sin duda adelantado a su época, se percató
En los EE.UU se ha llamado a esta presunción la de una clara diferencia entre la pareja parental y la
“Tender Years Doctrine” . La mayoría de los Estados conyugal y dice: “Nada tiene que ver las relaciones del
han eliminado esta presunción a favor de la madre, marido y la mujer con la conducta probable que uno u
por ser violatoria de la igualdad ante la ley establecida otro observarán con sus hijos”. Y el codificador, antici-
en la 14ª Enmienda de la Constitución y al discrimi- pándose a las directivas de la Convención de los Dere-
nar por motivos de género. chos del Niño, introduce ya en su nota el concepto de

22 CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA


“mejor bienestar de los hijos” ¡120 años antes!, como por el transcurso del tiempo. Se parte del supuesto que
criterio rector a la hora de otorgar la tenencia en el cualquier modificación a esa situación importa inelu-
supuesto de hijos mayores de cinco años. diblemente sufrimiento para los hijos. Se ha estableci-
El art. 76 de la Ley de Matrimonio Civil, eliminó el do en forma reiterada que debe evitarse todo cambio
“siempre” y dispuso que: “Los hijos menores de cinco a menos existan motivos de peso que lo justifiquen.

JURISPRUDENCIA
años quedarán a cargo de la madre”. La reforma al art. Se privilegia la estabilidad al mantener la situación
76 introducida por la ley 17.711, introdujo la salvedad existente . Es decir que se da preferencia a quien ha
de “Salvo causas graves, los hijos menores de cinco tenido al hijo bajo su cuidado. Lo cierto es que, en los
años quedarán a cargo de la madre”. En su actual re- casos de divorcios controvertidos, es probable que los
dacción, el art. 206 del CC, párr. 2º, establece la prefe- niños cuya tenencia está siendo discutida por sus pa-
rencia por la madre salvo causas graves que afecten el dres, hayan convivido muchos años con el que ejerce
interés del menor. la guarda de hecho. Esta cristalización en el tiempo de
Se produjo entonces una evolución desde la rigidez una situación hace que los jueces sean reacios a mo-
originaria del art. 213 del Código Civil en virtud del dificar la tenencia, especialmente si los progenitores
cual la tenencia de los hijos menores de cinco años viven alejados y el cambio de tenencia pueda significar
se otorgaba siempre a la madre, a la paulatina consi- un cambio en el “centro de vida” de los niños. El “cen-
deración de otros factores que pueden llevar al juez a tro de vida” se refiere al entorno del niño, su barrio,
apartarse de dicha directiva. donde está la escuela, sus amigos y familiares.10 No
Las “causas graves” deben poner en peligro la sa- obstante ello, no debe sostenerse el status quo si éste
lud física y psíquica de los menores, sosteniendo la fue adquirido ilegítimamente.11
jurisprudencia que la vida escandalosa de la madre, el Resulta impecable la argumentación en el fallo con
adulterio, concubinato, los malos tratos y el abandono relación al valor que reviste el status quo en el caso
de los hijos son algunos de esos motivos que autorizan particular. En la resolución el juez realiza una valo-
a otorgar la tenencia al padre. Más recientemente se ración real acerca de los beneficios del cambio de la
fue abriendo paso el criterio de otorgar la tenencia a situación de hecho y aporta los motivos que justifican
aquél de los progenitores que fuere proclive a favore- el cambio. Por último, a la luz de lo establecido por la
cer el contacto del hijo con el otro puesto que se ha CDN, resuelve que es en el mejor interés de ese niño la
entendido que la obstaculización del contacto consti- modificación del status quo ya que la prolongación del
tuye la “causa grave” a la que hace referencia el art. 206 mismo, dada la conducta reticente de la madre, impor-
del CC. Así lo ha valorado el juez en la sentencia que ta la vulneración del derecho del niño a “. . .mantener
se comenta puesto que, a su criterio, dicha conducta relaciones personales y contacto directo con ambos
evidencia una clara falta de competencia para tener el padres de forma regular” (art. 9, inc. 3, CDN).
hijo a su cuidado. Esta postura ha sido expresamente Considera el juez que no debe confundirse daño
legislada en varios estados en EE.UU. con mera molestia. El cambio no resulta de por sí per-
De todos modos, a la luz de los tratados internacio- judicial y sólo cabría mantener la situación existente
nales con jerarquía constitucional, la preferencia por la si su modificación resultara intolerable y causara una
madre, en los supuestos de hijos menores de cinco años, perturbación seria al niño más allá del natural padeci-
ya no puede ser sostenida válidamente. La Convención miento que implica una modificación de su entorno.
de los Derechos del Niño no establece ninguna prefe- Interpreta, asimismo, que cabe mantener la situación
rencia. Por el contrario, el art. 18 dispone que el Estado de hecho ante “paridad de idoneidad de los progenito-
debe garantizar el compromiso de ambos progenitores res” situación que, afirma, no se da en el caso. Por últi-
en la crianza y educación de los hijos y anteponer su in- mo, sostiene que lo perjudicial para ese niño no es mo-
terés superior a cualquier otra consideración . Se coloca dificar el status quo sino, por el contario, mantenerlo. Es
en igualdad de condiciones a ambos padres en la crian- en el mejor interés del niño, en el caso concreto, cambiar
za y educación de sus hijos preservando el derecho a la la situación de hecho existente.
igualdad del hombre y la mujer. En este último sentido, En definitiva, en cualquier decisión que se tome en
el art. 206 contraría lo dispuesto por los arts. 5 y 16 de la relación con un niño debe tenerse en cuenta primor-
“Convención sobre la Eliminación de todas las formas dialmente su interés superior . Ahora bien ¿qué debe
de Discriminación contra la Mujer” . entenderse por superior interés del niño en un conflicto
En definitiva, la primacía de la madre no tiene carác- familiar? Claramente, poder conservar “las relaciones
ter absoluto y cede ante la comprobación de que, en el familiares de conformidad a la ley sin injerencias ilíci-
caso concreto, dicha elección no atiende el interés su- tas.” (Convención sobre los Derechos del Niño, art. 8,
perior del niño. Éste es el criterio adoptado en el fallo inc. 1º). Por ello en la citada convención los Estados fir-
en análisis. En síntesis, no corresponde una aplicación mantes se comprometen a “respetar el derecho del niño
automática y en abstracto de lo contenido en la norma, que esté separado de uno o ambos padres a mantener
en cuanto determina que los hijos hasta los cinco años relaciones personales y contacto directo con ambos pa-
quedarán con la madre, sino que debe ponderarse en el dres de forma regular...”. Lamentablemente, durante el
caso concreto si eso es en el mejor interés del niño. proceso de divorcio los padres se muestran, en muchas
2.2. Status quo: existe un principio generalmente ocasiones, incapaces de preocuparse por el interés de sus
aceptado en materia de tenencia de menores que im- hijos en medio de una verdadera batalla por la tenencia,
pone no innovar en situaciones de hecho consolidadas régimen de visitas y alimentos. [...]

CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA 23


5. Cambio de Tenencia compasión o la moderación pueden sugerir, que son
decididamente desaconsejables. Ellas pueden hacer que
Luego de aplicarse astreintes, el aumento del monto todo quede en una valiosa sentencia, de cumplimiento
de las mismas, la advertencia a la madre del cambio de imposible.
tenencia en caso de proseguir con sus actitudes obstruc- 6.2. De cómo debiera implementarse el cambio de te-
JURISPRUDENCIA

cionistas, la citación a la madre a una audiencia a fin de nencia: desde el punto de vista psicológico, el cambio de
hacerla desistir de su actitud, fracasadas todas estas ins- custodia puede considerarse una interdisciplinaria me-
tancias y descartada la utilización de la fuerza pública, el dida terapéutica y por lo tanto temporaria, si el cuadro
juez decide el cambio de custodia a favor del padre. con ella se modifica sustancialmente. El tal efecto tera-
Destaca que el cambio de tenencia sólo procede en péutico se basa en cuatro aspectos fundamentales:
casos excepcionales y considera que el supuesto que se 1º Interrumpir el proceso de adoctrinamiento, pro-
plantea en el expediente es uno de ellos. Es también una gramación, o lavado de cerebro que padece el niño por
muestra de sensatez el no haberse dejado sugestionar acción del progenitor alienador y sus allegados, a veces
por un informe psicológico desprovisto de confiabilidad hasta de profesionales; que tiene como objeto “demoni-
y muy hecho a medida. zar” la imagen o representación interna que él tiene de
Luego de evaluar los distintos recursos de los que dis- su otro progenitor.
pone para hacer cumplir la sentencia y confrontarlos te- 2º interrumpir la relación de sometimiento y domi-
niendo especial consideración por la proporcionalidad nación de la voluntad del niño que le impide el libre
entre el medio elegido y el fin buscado, concluye el juez ejercicio de su derecho a amar a ambos progenitores,
que no dispone de ninguna otra alternativa para asegu- convirtiéndolo en un títere del progenitor alienador.
rar el derecho de ese niño a tener relaciones personales 3º Restituir el contacto “real” con el progenitor aliena-
con su padre. Sostiene, por otra parte, que la modifica- do, de tal modo que la realidad imponga su verdad, rec-
ción será beneficiosa para el niño puesto que la guarda tificando gradualmente la imagen distorsionada por la
actual no es apta para alentar el vínculo parental. maniobra alienatoria.
A la hora de evaluar los eventuales perjuicios que 4º Restituir el orden jerárquico, el poder y la autori-
podría sufrir el niño ante el cambio de tenencia, señala dad estructuralmente distorsionadas tanto en lo familiar
el juez que sólo cabría abstenerse de modificarla si ello como en lo jurídico.
lo colocara en una “situación intolerable”. Decide, por Estos cuatro pasos requieren para su óptimo cumpli-
el contrario, que el cambio de tenencia sólo produciría miento algunas condiciones:
eventualmente una perturbación al niño, daño menor 1º Un trabajo interdisciplinario de un juez, y un tera-
con relación al bien que se persigue: restablecer el con- peuta familiar especializado en SAP.
tacto con su padre. En este sentido, hay una prolija eva- 2º Que la primera jugada la haga el juez que es quien
luación de las características personales del progenitor tiene el imperio de la ley y el que ordena el cambio de
al que le atribuirá la tenencia provisoria, que lo mues- tenencia, en el contexto de un proceso de mediación te-
tran como alguien apto para su función parental. Por rapéutica interdisciplinaria. En ella el juez debiera ser,
otra parte, impresiona como impecable el tratamiento además, el responsable del encuadre terapéutico y de su
de la difícil problemática religiosa. cumplimiento, dado que se trata de una terapia coactiva
Por ello decide el cambio de custodia a favor del y no optativa.
padre. No es aconsejable diluir el proceso con otras terapias
o intervenciones hasta lograr la solución definitiva.
La interrupción del contacto del niño con el progeni-
6. Co-terapia con el juzgado tor alienador y todos sus afines debe ser interrumpida,
6.1. El Dr. Alesi no hace mayores referencias a aspec- en todos los medios de comunicación momentánea-
tos psicológicos, pero todo el desarrollo está orientado mente, en forma absoluta, hasta que se logre revertir
por una natural concepción psico-antropológica que totalmente el cuadro de SAP. De lo contrario se alarga
nos muestra una inclinación espontánea a la interdis- penosamente el procedimiento. Por esta razón creemos
ciplina. que es prematuro el intento de fijar un régimen de visitas
El caso es un evidente cuadro de Alienación Paren- para la madre.
tal, no es todavía un Síndrome de Alienación Parental, Durante este proceso el único responsable por el
porque por su edad el niño no tiene una participación niño deberá ser el progenitor alienado, supervisado por
activa. La tendrá, sin duda, si esta sentencia judicial, de el equipo interdisciplinario, constituido por el juez y el
importantes efectos “sanadores”, no se cumple. terapeuta.
Es destacable, que el Dr. Alesi se haya limitado a eva- Recordar que estamos ante un proceso grave, de grado
luar los hechos sucedidos y no haya caído en la tenta- “Severo” en el que resultan totalmente inútiles los inten-
ción, frecuente en estos casos, de tomar medidas “por tos de terapias de revinculación, que son muy útiles en los
las dudas” o en previsión de posibles futuros hechos, grados leves o moderados de Alienación Parental.
pronosticados por la parte alienadora. Sólo así podemos conseguir abreviar este duro y di-
De todos modos, la única crítica que se puede for- fícil proceso y lograr restituir al niño el vínculo con am-
mular a la sentencia es de índole práctica y técnica, en bos progenitores, y aun muchas veces, superada la crisis,
cuanto a la factibilidad y utilidad del procedimiento, restituir la guarda al que fue progenitor alienador, ahora
por motivos psicológicos. Hay ciertas medidas que la en otra actitud muy diferente.

24 CUADERNO JURÍDICO DE FAMILIA

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