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Sábado, 17 de julio
de 2010
El perseguidor
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VÍCTOR CONDE EL VUELO DE ÍCARO
“Yo soy Víctor Conde Poemas de Lucía Donadío Copello
y Víctor Conde soy yo”
la entrevista de Coordinación
EDUARDO GARCÍA ROJAS CORIOLANO GONZÁLEZ MONTAÑEZ
150 AÑOS DE
GUSTAV MAHLER
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2 El perseguidor Sábado, 17
de julio de 2010
- Fue difícil meterse en la cabeza de su pro- trata de una historia de terror y su reacio a cierta mitología porque lo vemos
tagonista. ambiente es gótico al estar ambientada en Cuando cuentas una desde el mismo punto de vista que los per-
- A mí siempre me ha gustado escribir
sobre mujeres. El tercer nombre del empe-
el siglo XIX. Transcurre en las islas Hébri-
das, que se encuentran muy próximas a
historia da igual el sonajes de la obra de Miguel de Cervan-
tes. Pero esa percepción está cambiando
rador, la primera novela de la serie Multi-
verso, su protagonista es una joven. Me
Escocia, y algunos de los personajes que la
protagonizan son históricos, gente que
género al que porque hoy la mayoría de los que nos dedi-
camos a escribir hemos recibido otra edu-
encanta escribir de mujeres, aunque eso existió de verdad. recurras porque en el cación y percibido otros referentes.
no quiere decir que ellas se lleven todo el - El terror ya lo había tanteado con su - Y cómo se lleva lo de ser el único escritor
mérito en mis historias. novela Naturaleza muerta. fondo siempre canario dedicado en exclusiva al género.
- ¿Qué pretendió contar con esta trilogía? - Ahora mismo y dentro de la novela de - Hay más gente que está haciendo
- Una historia de gente que busca un terror se ha producido como un revival escribes sobre lo cosas. Y aunque mi nombre sea el que más
lugar en el universo en el que poder cobi- zombi que está vendiendo muy bien. suene en la actualidad no quiero ser el
jarse. Han perdido su hogar y no saben Naturaleza muerta fue mi primera novela mismo. El traje que único. Hay escritores jóvenes de aquí pero
donde refugiarse ni donde encajar. Ese es de encargo y me la propusieron en la también de allá que están comprometidos
el común denominador de estas tres nove- Semana Negra de Gijón los editores de viste la novela, el con el género y que necesitan que las edi-
las: son viajeros a la fuerza, gente sin Dolmen para su colección de terror. Y la toriales reparen en ellos porque la verdad
casta. verdad es que me picó la curiosidad por- género, es eso, un es que contamos con una generación
-Y de estas tres novelas ¿cuál le resultó la que tenía ganas de explorar el género por- emergente que es muy potente.
más complicada de escribir? que se trata de uno de mis favoritos. Esta
traje. La realidad te - Y usted, mientras tanto, continúa escri-
- La última quizá por su extensión --qui-
nientas páginas-- y por tratarse de una
novela se ha vendido bien. Y ello pese a
que pienso que es una historia extraña
influye aunque las biendo con pseudónimo.
- Al principio recurrí al pseudónimo en
novela coral en la que todos ellos tienen
sus propias existencias. A la hora de escri-
dentro del género porque su acción se des-
arrolla en el Metro de Madrid con un
historias se repitan respuesta al miedo que tiene todo escritor
joven que empieza ante el fantasma del
birla recuerdo que tuve que hacer muchos grupo de personas que están ahí atrapa- porque así ha sido fracaso. Vamos, que recurrí a él por si mi
malabarismos, fue muy complicado. dos. El desencadenante de la acción tiene carrera literaria no funcionaba y dedi-
- ¿Y en qué se inspira un escritor de nove- connotaciones bíblicas que se entienden siempre desde que el carme a otras cosas. Afortunadamente,
las de anticipación? cuando lees la novela, aunque avanzo que logré colarme y hasta hoy la cosa me está
- Cuando cuentas una historia da igual la plaga obedece a una profecía del Apoca- hombre es hombre. saliendo bien, así que conservé a Víctor
el género al que recurras porque en el lipsis. Conde.
fondo siempre escribes sobre lo mismo. El - ¿Le molesta que cierta crítica continúe En mis novelas no - Luego será publicando como Víctor
traje que viste la novela, el género, es eso, mirando con lupa a los escritores que profe- Conde.
un traje. La realidad te influye aunque las sionalmente se han dedicado a este tipo de aparece España - Sí, continuaré publicando mientras
historias se repitan porque así ha sido historias? pueda como este nombre por el que ya soy
siempre desde que el hombre es hombre. - Es un género que tradicionalmente porque cuando conocido en este mundillo, el de Víctor
En mis novelas no aparece Canarias ni siempre se ha tomado a burla en España. Conde.
España porque cuando escribo literatura En el mismo Don Quijote se hace una sátira
escribo ciencia ficción - ¿No será usted víctima de un trastorno
de ciencia ficción dejo volar mi imagina-
ción y me voy muy lejos.
de las historias de Caballería, ese tipo de
novelas que años más tarde inspiraría a
mi imaginación vuela bipolar?
- Por el momento tengo muy claro una
- ¿Está trabajando en una nueva novela?
- Sí, y para la gente de Minotauro. Se
Tolkien y que lo hizo tan grande. España
desde la época del Quijote ha sido un país
muy lejos cosa, y es que yo soy Víctor Conde y Víctor
Conde soy yo.
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DEL SENSUALISMO Y
LA MUERTE. 150 AÑOS
DE GUSTAV MAHLER
Dedicado a Ofelia Quaintrelle
TEÓFILO RAMÍREZ
M
i cuento de hadas, La can-
ción del Lamento (Das Kla-
gende Lied), está termi-
nado”. La frase, Ofelia,
figura en una carta escrita
por Gustav Mahler en noviembre de 1880
a su amigo Emil Freund. Qué sugerente
sentencia, un lamento considerado como
un cuento de hadas, y sin duda también al
contrario, un claro ejemplo de esos juegos
dotados de sensibilidad paradójica hacia
los que, lo sabes muy bien, siento una irre-
sistible atracción. Se me olvidaba, se trata
del título de una cantata hoy desconocida
para casi todos; fue la primera composi-
ción que el joven Gustav realmente sintió
como suya.
Hace unas horas he caminado por una
calle adoquinada que bien pudo ser reco-
rrida por el propio Mahler, Ofelia, y he sen-
tido la necesidad de referirme a él, de
escribirte acerca de su música tan idiosin-
crásicamente personal como... dudo sobre
el calificativo a utilizar: Extravagante,
intensa, complejamente inadecuada,
decadentemente sentimental, intelectual-
mente provocadora... Qué puedo decir, la
pedantería de mis palabras me perturba
incluso a mí, y sin embargo en este caso -
permíteme semejante afirmación- sólo
mediante una máscara de exceso se llega a
la verdadera esencia de una actitud artís-
tica muy meditada. La música de Mahler
finge a menudo una acumulación excesiva
de elementos para acabar destilando una
original mezcla de sensualismo y poética
de la muerte que suele provocar grandes
fascinaciones o incontestables rechazos.
Puede que me equivoque, que el fingi-
miento no exista y que la sobreabundan-
cia de elementos resulte inevitable, una
consecuencia de las peculiaridades del
lenguaje musical postromántico heredero
de la escuela neoalemana, tal vez sea así.
Sin embargo en Mahler afloran un pensa-
miento estético sólido, una preocupación Gustav Mahler. / DA
El perseguidor 5
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Alma Schindler. / DA
por las relaciones entre el arte y la condi- gua, en un territorio eslavo que ya empe- mático director se convierte en un perso- enfermedad cardiaca-; dos años después
ción humana –al fin y al cabo se trata de zaba a encontrarse incómodo bajo la naje del folklore urbano de la ciudad –el nacería Anna, escultora que vivió hasta
un amante de Dostoyevsky y de Mozart- corona austrohúngara. De creencias pan- mote de “el mono judío” dará paso a “el 1988. El de Mahler y Alma fue un matri-
que se revelan en general más ricas y teístas, él no practicaba la religión de su dios Mahler” o simplemente “dios” monio convulso, lleno de momentos de
poliédricas que las, con cierta frecuencia, familia, otro motivo de extrañeza y de cuando se refieren a él en los círculos cul- euforia y decepción fruto de dos persona-
pretenciosas construcciones intelectuales exclusión, ahora entre la propia minoría turales- mientras sus composiciones lidades tan marcadas como diferentes.
de la escuela wagneriana, las cuales avan- judía. siguen teniendo una acogida estricta- En enero de 1908 Mahler debutó como
zan a menudo sorteando peligrosamente Parece claro el origen de su familiaridad mente minoritaria. En 1900 se hace cargo director del Metropolitan Opera House en
el riesgo de convertirse en delirantes obje- con la muerte, la sensación de vacío, de también de la Filarmónica, cuyos músicos Nueva York. Algún tiempo después se
tos musicales de cartón piedra. pérdida y a la vez el apego al mundo de los se quejan reiteradamente del estricto régi- haría cargo también de la nueva Filarmó-
Por supuesto ya lo sabrás, el pasado juegos infantiles, a las historias de fanta- men de ensayos que planifica. Nunca lle- nica de la ciudad, un calco de su actividad
siete de julio se cumplieron ciento cin- sía, las canciones y las láminas que confi- garán a un entendimiento definitivo, y en vienesa. Los viajes entre Europa y América
cuenta años de su nacimiento en Kaliste guraban un refugio colorido y amable. 1907 Mahler abandonará sus cargos en se suceden, el agotamiento físico se hace
(Bohemia). Fue el segundo de doce her- Tampoco resulta un misterio de dónde Viena. Invitado a una cena organizada por patente en ambos esposos, pero es Mahler
manos, fruto de un matrimonio desgra- viene el sentimiento de ser siempre un un profesor de la Universidad en noviem- el que está gravemente enfermo. Morirá
ciado y mal avenido. Su padre, fabricante extraño, un extranjero, el camarada bre de 1901, conoce allí a la hija del pintor hospitalizado en Viena el dieciocho de
de licores, era aficionado al consumo de errante que vaga por sus canciones. Emil Schindler, Alma Maria. La llamaban mayo de 1911, acompañado de Alma. Sus
los mismos y de carácter colérico; su En septiembre de 1875 Mahler es admi- “La Bella de Viena”; hermosa y de perso- últimas palabras fueron: “¡Mozart,
madre, hija de un jabonero, era tierna y tido en el Conservatorio de Viena. Tam- nalidad arrolladora (su vida y su papel en Mozart!”.
apacible, refugio emocional para un niño bién comienza a cursar poco después estu- el contexto artístico del momento mere- Te preguntarás, Ofelia, por qué asocio
enjuto, tímido e hipersensible. Cinco de dios de Historia del Arte en la Universi- cen una carta en un futuro cercano exclu- su música a una poética del sensualismo.
sus hermanos murieron antes de los cinco dad. La ciudad vive un momento de ebu- sivamente para ella, Ofelia, no puedo des- No encuentro un término mejor para lo
años, otro a los doce, por ello su hermana llición artística -paralela a su descomposi- cribirlos en apenas un par de líneas), Mah- que sugieren numerosos rasgos de su len-
Justine jugaba “a los muertos”, tendién- ción social- deslumbrante. Literatura, ler cree sentir que es la interlocutora per- guaje: El tratamiento armónico de las
dose inmóvil en una cama rodeada de música, pintura, filosofía, en cualquiera fecta para él y para su música, la corteja. obras, a menudo sustentado por un cro-
velas. Otro de sus hermanos, Otto, se sui- de estas, y de otras, disciplinas, aparecen En 1902 se casa con la joven de veintidós matismo exacerbado; los jirones de
cidó a los veintidós años frustrado por nombres referenciales, obras que hemos años, quien enseguida queda embarazada música popular que afloran en un tejido
considerarse un mal compositor. comentado tantas veces, Ofelia, en noches de su hija Maria –moriría a los cinco años, sinfónico desgarrado: Sombras de cancio-
Judíos de lengua alemana, los Mahler de alcohol y rosas. de nuevo la muerte infantil en la familia y, nes infantiles, una trompeta ejecutando
formaban parte de una minoría doble- Cinco años más tarde, en 1880, inicia la por añadidura, al músico se le detectaría a toques de cuartel, ritmos de baile noc-
mente despreciada, por religión y por len- carrera de director de orquesta que le dio los pocos días de la tragedia una grave turno, ecos de tiovivos adivinados entre el
fama en vida: Cassel, Praga, Leipzig, bullicio de una tarde festiva; los ecos
Budapest, Hamburgo serán, por citar las orientalizantes de melodías cuya ascen-
más significativas, las ciudades donde dencia hebraica queda disimulada para
Judíos de lengua cimentará su prestigio. En vacaciones se
Parece claro el origen oídos poco atentos bajo una tímbrica
retira al campo y compone; el resultado orquestal de sello inconfundible... He
alemana, los Mahler son sinfonías y canciones consideradas de su familiaridad dicho sensualismo, pero tal vez debería
como obras demasiado extravagantes, en decir también sensualidad. Se atisba en su
formaban parte de el mejor de los casos, por crítica y público. con la muerte, la obra una marcada fascinación por lo car-
En 1897 llega una oportunidad crucial: Es nal que se superpone a su inclinación
una minoría propuesto para dirigir la Ópera de Viena, sensación de vacío, de hacia la elucubración estrictamente racio-
un cargo de enorme prestigio social y nal y asimismo una atracción por la cul-
doblemente artístico, mucho más entonces que ahora; pérdida y a la vez el tura popular y la expresión artística de la
significaba un indiscutible cambio de sta- calle, por las manifestaciones cotidianas
despreciada, por tus. Algunas fuerzas vivas de la ciudad se apego al mundo de de la modernidad que penetran la tradi-
opusieron, no era un puesto para un judío. ción más o menos académica.
religión y por lengua, Aconsejado por Johannes Brahms, entre los juegos infantiles, Pensándolo bien, creo que a quien más
en un territorio otros conocedores de su credo panteísta,
se bautizó. Como católico fue al fin acep- a las historias de recuerda Mahler es a Thomas Mann; lo
digo no sólo aprovechando la lectura de
eslavo que ya tado -una demostración de sofisticada
fantasía, las alguna carta entre ambos, sino por la sen-
sualidad mencionada, la morbidez, la for-
hipocresía social que sin duda te divertirá-
empezaba a aunque Cosima Wagner, viuda del com- canciones y las midable potencia intelectual, la perpleji-
positor y notable antisemita, utilizó todo dad admirativa ante la capacidad de
encontrarse su poder e influencia para retrasar en lo láminas que seducción de la cultura popular, el deca-
posible el nombramiento “de un circunci- dentismo como actitud bajo un disfraz de
incómodo bajo la dado” para tan noble función. configuraban un cierta respetabilidad burguesa, la memo-
Puntilloso, exigente, autoritario, exqui- ria de los juegos y los silencios infantiles,
corona sito y estudioso sin descanso –“lo más refugio colorido y la desmesura de algunas obras, la impre-
importante de una obra es lo que no está sionante empatía hacia el ser humano a
austrohúngara en la partitura” le gustaba decir-, el caris- amable veces camuflada de distancia.
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POEMAS DE LUCÍA
DONADÍO COPELLO
(DE Sol de estremadelio)
Mi padre Patios
Ventana
de domingo Mi padre De los patios y sus aristas misteriosas
lleva siempre emergen las criaturas, las sombras, los recodos,
A veces su vestido de joven soñador, allí donde naufrago como un barco entre la arena,
se agota su rostro de extranjero allí donde me siembro como un ancla en el océano,
la nube abrió mis ojos a esa aquí donde me pierdo como una hoja
en la colina, cuota permanente de nostalgia que regresa a su rama.
y el ojo que lame mi piel,
alejandrino su voz buscando en dos
teje un collar idiomas las fronteras
de grises de un mundo que siempre
de tarde quiso abarcar,
de domingo, sus ojos embebidos en
y la voz las vetas de un madero
se escabulle buscan un puerto de luz Ausencia
por las rendijas para la incertidumbre,
del horror, sus sueños de edificios ¿De qué está hecha la Ausencia?
y las manos bullían en su cuerpo
no hallan clamando tierra De buscarte en la extensa
un nido en el oleaje del tiempo, cumbre de las noches e
que las cante, sus manos ancladas inventarte en los
y la tristeza a la vida son aleros del día,
crece un surco alquimia de infancia
como de sol arrollada al
sol de para borde de la
mañana, mis noches. Espera
encandilando
el rojo
que trenza
la urdimbre
desbocada,
en la ventana NOTA BIOBIBLIOGRÁFICA
repetida Lucía Donadío Copello nació en Cúcuta. Es antropóloga de la Universidad de Los Andes. Hizo un Diplomado en
de un Literatura del Siglo XX en la Universidad de Eafit y participó en el Taller de Escritores que dirigió Mario Escobar
en la Universidad de Antioquia.Actualmente es la directora del Grupo Literario Letras de la Universidad de Eafit
domingo y del Taller Literario para Adultos Mayores de la Biblioteca Pública Piloto en Medellín. Ha publicado algunos
cualquiera. poemas y cuentos en revistas y en los libros Arca Voces y Ojo de Agua del Grupo Literario Letras. Dirige su pro-
pia editorial Sílaba Editores y forma parte del equipo de redacción de la revista Odradek.
El perseguidor 7
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Martes
Por tu casa
nido de los martes
han desfilado las voces
más amadas,
saliendo de los libros
traspasan las fronteras de la noche,
invaden las llanuras del día,
transitan la orilla firme del recuerdo,
cruzan con nosotros la agenda del misterio
y vuelven a dormir entre sus lechos blancos,
hasta que tocan cualquier día
la puerta de los ojos
y regresamos al recodo de los martes,
sumidos en velos nocturnos
y aromas de vino,
luces encendidas
en el faro de los años,
susurros al roce de los ojos
sobre el continente de
voces que nos unen.
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E
n un artículo el espléndido compleja. Si alguien comenzara a hablar reconocen, porque las han vivido y denun-
escritor senegalés Boubakar de la economía, la sociología o la litera- ciado, las catástrofes africanas, pero que
Boris Diop señala, con una iro- tura europea como un todo fácilmente sin- no se resignan a gimotear sobre las ruinas,
nía bastante irritada, que la tetizable cualquiera se lo tomaría como las angustias y las desgracias cotidianas.
imagen neocolonial de África una zafia imbecilidad o como una broma Los asuntos de los cuentos de Chima-
continúa repitiendo estereotipos imbéci- intolerable. En cambio se habla de África manda Adichie son comunes a la genera-
les que no solo representan una grotesca -cientos de millones de kilómetros cuadra- ción anterior – las fricciones entre la
falsedad, sino también una forma de opre- dos, miles de años de historia, un océano modernidad y la tradición, los sueños
sión simbólica. “No sé cómo explicar”, de lenguas y grupos étnicos, niveles de anhelantes de la emigración, el impacto
viene a decir, “que la mayoría de los afri- desarrollo disímiles y hasta contrapues- en los individuos de los cambios sociales,
canos no tratan con elefantes, ni persi- tos, una nebulosa inabarcable de símbolos el papel de fortaleza y debilidad de las
guen ni son perseguidos por rinocerontes, y mitos, leyendas y creencias religiosas, mujeres – pero la perspectiva es diferente.
ni agitan sus lanzas vibrantes en las verdes narradores, poetas y autores teatrales- con La diferencia consiste en descubrir, preci-
praderas”. Por el momento la reivindica- un desparpajo que rezuma una ignorancia samente, lo que de común tienen las des-
ción de Boubakar es inútil. Ya lo han visto satisfecha de sí misma. ¿Qué cabría pen- venturas de sus criaturas de ficción con
ustedes en los videoclips del reciente Mun- sar de alguien que, preguntado por litera- cualquiera, sin perder de vista jamás sus
dial de Fútbol de Sudáfrica: un niño negro tura europea, citase al gallego Manuel orígenes. No son tan distintos los días y las
juega al fútbol con un elefante. Es sorpren- Rivas y al albanés Ismael Kadaré como si noches de un inmigrantes nigeriano en
dente que no hayan colado a Tarzán como fueran vecinos idiomáticos, literarios o Nueva York que las de un inmigrante turco
árbitro, waka-waka, un Tarzán liado con espirituales? Pues similar operación se en Berlín. No se trata, por tanto, de con-
Shakira para aumentar las audiencias. El realiza constantemente al hablar y valorar vertir la infelicidad, los conflictos identita-
imaginario neocolonial sobre África parte a escritores africanos. Esta liliputización ble, porque prescindiendo de cualquier rios o las violencias de la Historia en lite-
de una lectura occidental que solo se codi- semántica de la cultura africana es otra jerga científica o académica, la escritora ratura programática, sino en explorar esas
fica a través de metáforas apocalípticas forma de lacerante malentendido, un sín- conseguía denunciar eficazmente las situaciones a través de una literatura
(violencia étnica, genocidios, hambre, toma de gandulería intelectual y, muy a ignorancias mutuas que destruyen cual- abierta al mundo y que no se concentra
militarismo ensangrentado, pútrida mise- menudo, un estilo condescendiente de quier posibilidad de intercomunicación instrumentalmente en la denuncia, sino
ria) y que en la compasión, en la solidari- arrogancia supuestamente empática. cultural, convierten en invisibles a pue- en la capacidad expresiva de la escritora.
dad emocional, no encuentra un estímulo Como si África pudiera mostrarse (y blos y culturas y pueden llevar a un escri- Ciertamente los relatos de Algo alrededor
de compresión, sino la manera más eficaz entenderse) en la palma de una mano. tor (a un escritor africano) a carnavalizar de tu cuello no tienen la potencia narrativa
de impedir la misma. En el fondo, como Desde hace unos meses ha conseguido su propia identidad. Hace pocas semanas de las novelas de Chimamanda Adichie y
sentencia Boaventura de Sousa Santos, una amplia popularidad en el canal you- ha llegado a las librerías el último libro de desprende un ligero aroma a copos de
Europa solo registra en África las realida- tube una conferencia dictada en Estados Chimamanda Adichie publicado en espa- avena de taller literario de Yale. Pero
des que confirman sus nostalgias -intactas Unidos por la joven escritora nigeriana ñol, Algo alrededor de tu cuello, traducido muestran inmejorablemente el creciente
en su cinismo o impregnadas de mala con- Chimamanda Ngozi Adichie y titulada Los por Aurora Echeverría y editado por Mon- universo ficcional de una de las escritoras
ciencia- del colonialismo. peligros de una sola historia. Se trata, dadori. Una delicia para los que no cono- anglófonas más inteligentes y talentosas
África es una realidad densa, extensa y desde luego, de una conferencia memora- cen aun a la escritora nigeriana, pero una de la actualidad.