Estaba claro que tenia que terminar con Derek, pero en verdad quería terminar con él,

no me hacia a la idea, no podía estar separada de él, recuerdo que en nuestra primera y
hasta ahora única pelea el no hablarnos nos resulto imposible a los dos, ni siquiera
cumplimos dos minutos cuando ya estábamos disculpándonos el uno con el otro ¿Como
lograría poder terminar una relación de tres años en solo un día? Tenia que hablar con
Lena y con urgencia, seguramente estaría en su casa, escabullirme de la cocina a mi
cuarto no era una tarea difícil-solo tenia que salirme por la puerta de emergencia,
subirme al árbol, arrastrarme por la rama adecuada hasta mi cuarto… o simplemente
podía salir como la gente civilizada y subir las escaleras hasta mi cuarto- no, no podía
hablar con Lena sobre Iker y yo, mientras Derek estuviera aquí, termine con los trastes y
me dirigí a la sala con los muchachos, para mi sorpresa estaban sentados en el sillón de
tres, de lado izquierdo Derek y de lado derecho Iker, dejando el espacio de en medio
vacío, en cuanto Derek me vio fuera de la cocina, dio pequeñas palmaditas al asiento
que quedaba libre, a regañadientes me senté en medio de los dos, en cuanto estuve a su
alcance, Derek me tomo en sus brazos.

Después de un largo rato escuchando atentamente sobre las aventuras que Derek había
tenido en Canadá, Iker decidió que era momento de dejar a la feliz pareja descansar,
Derek se despidió desde el sillón y yo acto seguido me deshice dulcemente del abrazo
de Derek y me decidí a acompañar a Iker a la puerta.

-Regreso en un momento- le dedique una sonrisa a Derek y me eche a correr a la puerta.

-Regresa con él, conozco por donde queda la salida-Con un nudo en la garganta Iker
logró pronunciar esas palabras tan hirientes tanto para él como para mi.
-Sabes, debería dejarte ir solo, pero tenemos que hablar-Logre decir.
-No hay nada de que hablar, ya todo se dijo-
-Pues yo creo que no, así que hablemos afuera-
Él no dijo nada, simplemente se limito a dejarme seguirlo, al llegar a su auto apreté el
paso, me adelante y antes de que pudiera abrir la puerta, lo detuve en seco.
-Iker te amo- ¿Como es que me salieron esas palabras tan descaradamente?
-No mientas Anny, tu solo amas a Derek y esta bien, no importa-Bajo la mirada
-Iker, es en serio, te amo, pero debes de entender que Derek fue el que se animo
primero-
-Si Anny, eso lo entiendo, lo que tu no entiendes es que yo sacrifique mi felicidad por
ustedes dos-Iker tenia una mirada lejana, pero se notaba el coraje en ella.
-¿De que estas hablando?- No comprendía lo que decía.
Al terminar de decir esto, se recargo en la defensa de su auto, no resistí mas y lo abrace,
hundí mi cara en su pecho e hice todo lo imposible por no llorar

-Mira Anny ¿tu crees que no le dije a Derek que me gustabas desde un principio?, se lo
dije, pero para mi sorpresa también le gustabas a él, teníamos un trato mucho, mucho
antes de que te conociéramos y tenia que cumplirlo, así que le deje el camino libre, trate
de buscar a alguien mas, pero simplemente no podía, todas las chicas con las que salía
me recordaban mucho a ti, así que desistí en mi búsqueda, el primer año de su noviazgo
fue difícil para mi, pero después el se iba por largos periodos, dejándome a mi, el
camino libre, la primera vez que salimos pensé que era inútil, lo mencionabas a cada
rato, pero después de unos cuantos meses de estar saliendo, supe que me darías una
oportunidad, ya no lo mencionabas con tanta frecuencia, a pesar de que iba y venia, tu
lo tomabas con calma, íbamos al cine, a bailes, a exposiciones, pasábamos el mayor
tiempo posible juntos…-
Suspire ante los recuerdos, éramos tan felices juntos, no podía seguir así, Derek nunca
estaba, pero si estaba Iker y vaya que deseaba con todas mis ganas poder ser suya lo
desee tanto que me aparte de sus brazos, no deje que terminara su historia, porque yo
sabia muy bien como se sentía, yo sentía lo mismo.
-¿A donde vas Anny?-Grito Iker a mis espaldas
Al escucharlo gritarme, eche a correr a mi casa, recordando el beso que nos habíamos
dado esa misma tarde, no pude mas, entre a la casa, respire profundamente y me
encamine a la sala.
-¿Todo bien Anny?- me pregunto Derek en cuanto me vio
-Si, es solo que…-no podía imaginar que haría esto, pero tenia que hacerlo- tenemos
que hablar Derek y de algo muy serio-

Derek se puso de pie, me tomo de la mano y me llevo tiernamente a mi cuarto, él y yo

sabíamos que estaba alterada, lo que el desconocía era la razón, al entrar a mi cuarto
inmediatamente me senté a la orilla de mi cama, Derek imito mi gesto, suspire y
comencé mi larga historia.
-Derek…-me costaba encontrar las palabras adecuadas para comenzar y dar fin a esta
relación- mira, no puedo seguir con esto, no te diré lo clásico que se dicen todas las
parejas “no eres tu soy yo”-al terminar de decir esto, Derek se puso de pie, me tapo la
boca con su dedo índice y se marcho de la habitación.

En cuanto cruzo la puerta de mi cuarto, solté en llanto, me hice un ovillo en mi cama y

roge por no romperme en mil pedacitos, necesitaba a alguien y con urgencia, levante la
bocina del teléfono, comencé a marcar y al tercer timbrazo me contestaron.
-Familia Burgos, ¿Quién habla?-
-Con Steven por favor-
Espere unos cuantos segundos y por fin escuche su voz
-Steven, ¿Quién habla?-
-Steven…soy Anny, crees poder venir…-no pude terminar la frase, tenia un nudo
atorado en la garganta y mi amigo lo detecto en seguida.
-Estoy ahí en 10 minutos Anny, ten calma-

Y colgué el teléfono, sabia que aunque estuviéramos muy enojados, éramos amigos y el
estaría conmigo cuando mas lo necesitara. Me senté de nuevo en la cama, esta vez en el
centro, abrace mis piernas y recargue mi cabeza en las rodillas, voltee a ver la ventana,
quería salir, necesitaba salir, me sentía atrapada en un sueño del cual no podía despertar,
pero unos golpes en la puerta de abajo me regresaron a la realidad.
Al abrir la puerta creía que mis ojos me jugaban una mala broma, pero no era así, ¿hace
cuanto que había hablado con Steven?, creía que era él, pero para mi mala suerte mi
mejor amigo no estaba del otro lado de la puerta, el que ocupaba su lugar era mi casi
exnovio Derek –Digo casi, porque técnicamente no me dejo terminar con él- no lo pensé
dos veces y lo invite a pasar.

-Perdón por regresar Anny, pero tenia que escuchar lo que tenias que decirme, se que
terminaras conmigo, se que encuentro cruce esta puerta para marcharme definitivamente
buscaras refugio en los brazos de Iker, pero aun así, quiero saber que me dirás, como
terminaras conmigo-
-Derek…yo…-las palabras no me salían, le quería decir que no era cierto lo que me
decía, pero sabia que le mentiría, así que me limite a verlo a los ojos y lo siguiente que
salio de mi boca, me sorprendió tanto que desee que no hubiese regresado-Derek en
verdad que me das lastima, ¿regresar solo para saber como terminare contigo?, eres
patético, por esa sencilla razón prefiero a Iker, además tu me dejas cada que puedes, te
vas por dos meses a quien sabe donde, a hacer quien sabe que, yo no quiero un novio
así, Iker a estado conmigo cuando mas lo necesito, él sabe como la eh pasado este
ultimo año, en cambio tu simplemente te marchas, me hablas por teléfono cada que
puedes y por tiempos muy cortos y el único que habla eres tu, ni siquiera me preguntas
como estoy, así que hazme el favor de irte, lamento cortarte justo antes de cumplir 3
años juntos, pero es lo mejor- lo empuje a la salida, le cerré la puerta en la cara y me
derrumbe sobre la misma.

A los pocos minutos golpearon de nuevo la puerta, creyendo que era Derek, me limpie
las lagrimas de la cara, respire profundo, y con mi peor cara abrí la puerta y grite a todo
pulmón- ¡Largo de aquí!- pero para mi sorpresa no era Derek quien estaba afuera, sino
Steven.

-¿Para eso me llamas? ¿Para corredme de tu casa a gritos?-Steven emprendió la huida,

pero lo tome del brazo justo a tiempo.
-lo siento tanto Steven, creía que eras…-me costaba tanto decir su nombre y una vez
mas en esa noche, me solté a llorar, Steven no pudo ante tal escena, me abrazo
fuertemente y me llevo al interior de mi casa.
-¿Que ha pasado Anny? ¿Por qué lloras?-
 Capitulo 3

-Derek, se fue-
-Anny, Derek se va a la semana que llega a la ciudad, que es lo que te sorprende-
Yo negué con la cabeza, no me refería a la partida de la cual ya me había hecho a la
idea.
-No, Derek y yo… Derek se fue-
Solo con decir estas palabras Steven entendió a lo que me refería, me abrazo aun más
fuerte, me beso la frente, y comenzó a tararearme una canción –la cual yo no conocía-
Después de largas horas de silencio, por fin deje de llorar, Steven alzo mi cara y se dio
cuenta de que al menos ya estaba lista para hablar.
-¿Qué fue lo que pasó exactamente Anny?-
-Yo solo… quería que… es que justamente esta tarde…- me quede callada, inhale aire
hasta que la cabeza me dolió y exhale, y volví a tratar de contar mi historia- Iker y yo
nos vimos esta tarde, nos besamos, Derek llego, comimos, Iker se fue, me quede con
Derek y cortamos-
-Haber Anny, ¿cortaron porque Derek te vio besando a Iker?-
-No, Derek no nos vio besarnos, simplemente esa fue la gota que derramo “mi” vaso, tu
y yo sabemos cuanto me gusta Iker y no pude mas, no quería seguir con este engaño con
Derek y hoy en la tarde me di cuenta de que no era lo mismo, al menos no para mi-
-Hay Anny, no se que decirte corazón, sabes que cuentas conmigo y si quieres me
quedare contigo esta noche, necesitas un hombro en el cual llorar y lo entiendo, solo
dime una cosa, ¿le dijiste la verdad a Derek?-

Después de haberle explicado con mas calma como habían estado las cosas y todo lo
que le había dicho a Derek justo antes de que él llegara, sentí culpa, culpa por haber
terminado con Derek -a pesar de que sabia que hacia lo correcto-me llevaría tiempo
asimilarlo, culpa por darle la razón a Derek –aun sin decirle nada, ambos sabíamos que
él tenia razón, iría corriendo a los brazos de Iker- era un moustro, esa era la única
conclusión a la que llegaba.
Estaba cansada de tanto llorar, todo me daba vueltas y Steven tenía bastante sueño, nos
encaminamos a mi habitación, a lado estaba la habitación de huéspedes, ahí se alojaría
Steven, pero no estaba preparada para pasar esa noche sola y sabia que mi amigo lo
entendería.
-Steven, ¿Puedes dormir conmigo esta noche? No quiero estar sola cuando el llanto
regrese-
Steven me miro a los ojos y vio en ellos la tristeza, puedo jurar que también pudo ver
que me sentía un completo moustro.
-Claro nena, me quedare contigo esta noche, para eso están los amigos-

En cuanto puse la cabeza en la almohada caí en un sueño profundo, que solo duro hasta
las 3 de la madrugada, y no pude dormir mas, me senté en la cama con cuidado,
tratando de no despertar a Steven, mire hacia la ventana, vi la luna, y no pude mas, salí
del cuarto, me dirigí al baño, me lave la cara y fui a la sala, me recosté en el sofá y me
dispuse a ver una película, después de unas cuantas horas logre volver a conciliar el
sueño.

-Anny, despierta, es hora de levantarse corazón- Ese era Steve

-¿Qué hora es?-
-Son las 7 Anny, tienes clase en una hora-
¡Rayos! Me dolía la cabeza, tenia mucho sueño y no sabia que día era, no podía recordar
nada de lo que había pasado el día anterior, sabia que me dolía algo, pero no
comprendía con claridad que era hasta que por fin desperté completamente, me senté tan
deprisa que me maree, pero aun así no me importo, necesitaba un apoyo y lo primero
que se me ocurrió fue pegar las piernas al pecho y recargar mi cabeza en las rodillas.

-Anny, no puedes seguir así cariño- Steven me tomo de la mano y me puso de pie.
-Déjame, no iré a la escuela hoy-
-Claro que no señorita, usted ira a la escuela y no se hable mas-
-No, no iré- infantilmente me tire de nuevo al sofá, sabia que iría a la escuela,
simplemente quería poder tener mas tiempo para asimilar las cosas. Cuando voltee a la
mesa, el desayuno ya estaba servido, incluso había comida para poder llevarme a la
escuela ¿Qué haría sin Steven? No lo pensé dos veces y lo abrace, olvide mi pataleta y
trate de borrar los recuerdos del día anterior, pero mi mente no me ayudaba en nada.

-Subiré a darme un baño de cinco minutos y bajo a desayunar-

-Claro corazón, pero recuerda que tienes el tiempo medido-
Steven parecía mi hermano mayor, siempre había cuidado de mi, incluso cuando decidí
dejar la casa de mis padres el se vino a vivir conmigo una semana para poder
desempacar mis cosas y decorar la casa, era un gran amigo.

Cuando salí del baño me puse lo primero que encontré en mi closet, unos jeans negros,
una camiseta blanca y mi sudadera gris, no tenia tiempo para peinarme así que
simplemente me desenrede el cabello y me coloque una diadema y baje a desayunar,
para mi sorpresa Steven ya había terminado de desayunar y estaba lavando sus trastes.
-Anny, creo que tendrás que ir desayunando en el camino- Grito Steven desde la cocina
-Si, ¿te paso a dejar a tu casa?-
No me había percatado que Steven ya se había bañado y tenía puesto ropa limpia –
Pantalones de vestir caqui, un suéter de lana blanco que se le adhería muy bien al
cuerpo, Steven era mi mejor amigo, pero aun así no le quitaba lo guapo, media 1.80 era
musculoso, iba todos los días al gimnasio de la universidad, cabello rubio, ojos color
miel, tez blanca, era un chico mono-
-¿De donde sacaste esa ropa?-
-La traje ayer, previniendo que me pidieras quedarme contigo-Ese era Steven, siempre
al pendiente de mis necesidades.
-Ya veo que tu piensas en todo, en fin, ¡Vámonos!-

Al llegar a la universidad deje a Steven en la entrada

-Te acompaño a aparcar el auto-Steven obviamente no quería bajarse
-Es que me estacionare lejos, no quiero ver a Iker-
Steven me entendía muy bien, así que tomo rápidamente su mochila del asiento trasero
y se bajo, no sin antes darme un beso en la mejilla y desearme un buen día, sabia que al
finalizar las clases me mandaría un mensaje para acordar donde nos veríamos y así
asegurarse de que llegara bien a casa. Logre aparcar a unos 50 pasos de mi facultad,
sabia que Iker no estaría rondando esa zona, al menos no a esa hora, el entraba a las 9
así que tenia buen tiempo para escabullirme. Unos golpes en mi venta interrumpieron
mi plan de escape.

-Hola Anny, ¿como estas el día de hoy?

¡Demonios! Derek ya le había contado nuestra ruptura.
-Hola Iker –Salí del auto- muy bien gracias, y tu ¿Qué tal te encuentras el día de hoy?
-De maravilla
-Me alegro, en fin, ¿hablamos luego? Voy retrasada para mi clase.
-Claro Anny, te estaré esperando.
No dudaba de aquellas palabras, sabia que él seria lo primero que viera al salir de la
clase del profesor Dávalos, apreté el paso y me aleje de Iker lo mas rápido que pude.
Al entrar al aula, me di cuenta de que el profesor todavía no se encontraba, tome mi
asiento rápidamente.

-Hola Anny, te ves agitada hoy, ¿Qué tienes?-

Esa era Nina, mi compañera de algebra y francés, era simpática, era muy bonita, media
escuela babeaba por ella, pero Nina no tenia tiempo para chicos, era mas alta que yo,
por lo menos cinco centímetros, su piel parecía hecha de leche, era chapeada, labios
pronunciados, ojos azules, cabello negro lacio ligeramente abajo del hombro, era de
familia acomodada -todos nos preguntábamos que era lo que hacia ahí-, la chica bien
podría ser modelo, pero en vez de eso se conformo con tenerme como amiga y de hecho
era su única amiga.
-Rompí con Derek-
Al terminar de contestarle el profesor Dávalos entro en el aula y mando a callar a todos
y así empezó su clase, de igual manera termino, fue la hora mas corta de toda mi vida,
lo maravilloso de la clase es que había logrado comprender todo, al recordar lo que me
esperaba afuera, desee que ese salón tuviera salida de emergencia.

-Y bien, ¿Por qué cortaron?- Insistió Nina

-Fue por…- No basto terminar la frase, ya que termino sola cuando Iker me grito desde
la puerta.
-Ya veo, nos vemos en francés, no se te olvide que hoy desayunamos juntas-
-Nina, sobre eso…- Y no me dejo terminar, ya que antes de que pudiera cancelarle
hecho a correr a su siguiente clase, no tuve que hacer lo mismo, ya que tenia hora libre,
de hecho tenia dos horas sin hacer nada, tendría que ir a buscar a Steven.
-¿Cómo estuvo la clase Anny?- Pregunto Iker al mismo tiempo que me recogía los
libros.
-Bien, fue fácil-
-¿Quieres ir a la cafetería?
-Es que tengo que verme con Steven, quedamos que me acompañaría a mi casa y no
dejamos dicho a que hora nos veríamos- Trate de tomar mis libros mientras le
respondía, pero fue inútil.
-¿Por qué no le mandas un mensaje de texto?-
-Me quede sin saldo- Mentí
-No se hable mas, toma el mío- Acomodo los libros y mi mochila de modo tal que su
mano izquierda quedara vacía y así poder sacar el celular.
-Gracias- No tenía escapatoria.

Rápidamente comencé a escribirle un mensaje de texto a Steven.

-Háblame a mi celular, Iker conmigo, ayuda!-
Antes de entregarle el celular a Iker, borre el mensaje enviado.
-Gracias- Volví a decir
-Cuando quieras, ahora si podemos ir a la cafetería ¿O gustas ir a otro lado?-
Sabia que el quería estar a solas conmigo y yo no podía darle esa opción, así que
respondí rápidamente.
-La cafetería esta bien para mi-
-De acuerdo, entonces vayamos a la cafetería-

Iker llevaba mucha prisa por llegar a la cafetería, o al menos eso pensé, en el camino no
me dirigió la palabra, pero al ver que estábamos a punto de llegar a nuestro destino, Iker
apretó el paso y se planto enfrente de mí.
-Anny, ¿Podemos ir a un lugar más privado?
¡Rayos! Sabia que tenia que enfrentarlo, pero no quería hacerlo tan pronto y menos con
la ruptura de Derek tan fresca.
-¿A dónde pretendes que vayamos?- Trate de responderle lo más fría que pude.
-Pensaba que podríamos sentarnos en las áreas verdes, bajo un árbol, ¿Qué te parece?
Estaba dispuesta a decir -¡No!-, pero cuando abrí la boca, me sorprendí al escuchar mis
propias palabras.
-Claro, me parece bien-
Esto no estaba bien, yo lo sabia, pero al parecer mi boca no estaba en sincronía con mis
pensamientos desde anoche, creo que se había peleado con mi sensatez o algo parecido,
-Tendré que ir a terapia-pensé.
Iker me alejó lo más que pudo de la civilización, tomamos asiento bajo un árbol,
corrección, yo tome asiento, Iker se limito a dejar mis cosas a mis pies y se recargo en
el tronco del árbol, dio un gran suspiro, volteo a verme y solo se limito a decir.
-¿Podrías esperarme un momento?-
¿Pensaba dejarme sola en aquel lugar? ¿Qué no se suponía que la finalidad de venir a
este lugar era para hablar? Claro, se había acobardado, planeaba dejarme sola y fingir
una inesperada llamada de emergencia, por otro lado eso me facilitaba las cosas,
-Claro- Logre decir, en cuanto se diera la media vuelta me marcharía.

Al estar a solas, me día cuenta que en verdad necesitaba reflexionar, ¿Qué es lo que
había pasado anoche? ¿Por qué había terminado de esa manera con Derek? Tenia
muchas preguntas y un lugar cómodo, así que me acosté en el pasto y cerré los ojos, los
recuerdos del día anterior me atormentaban, pero tenía que repasar con claridad todo lo
que había dicho y hecho, sobre todo si quería arreglar las cosas con Derek. Estaba a
punto de marcharme cuando de pronto vi a Derek acercarse a mi.

-Hola Anny- Era Derek -se escuchaba triste-, no dude ni un segundo eh inmediatamente
me puse de pie, mareándome por segunda vez en esa mañana.
-Derek…yo…-No podía hablar, había tantas emociones fluyendo en ese momento,
tristeza, sorpresa, arrepentimiento, dolor.
Derek dudo un segundo, pero después me abrazo, me sentía tan vacía, pero ahora tenía a
Derek en mis brazos o mas bien él me tenía a mi entre los suyos, pero daba igual,
estábamos juntos y teníamos que hablar, tenia que aclarar lo que había pasado ayer. Así
que me aparte de sus brazos tiernamente, lo tome de la mano y lo lleve hasta donde hace
pocos minutos me encontraba acostada, nos sentamos y yo me recargue en su hombro.

-Derek… yo… ayer… fue un error… no quería… es solo que-

-No tienes que explicar nada Anny, ayer fuiste muy clara y lamentablemente no puedes
borrar tus palabras-
-Lo se Derek y no pienso borrarlas, se que lo que dije fue cruel, pero sabes que aun así
tenemos que hablar de ello-
-¿Por qué Anny…?- Se le corto la voz al tratar de pronunciar las palabras.
-Sinceramente, todo fue por Iker- No podía seguir mintiéndole, ya no, tenia que admitir
mis errores.
-Sabía que no debía dejarte con él, siempre lo supe, pero confiaba tanto en los dos-
¿Acaso sus palabras eran afiladas navajas? ¿Cómo era posible que dolieran tanto?
-Derek, siempre hubo algo entre Iker y yo, pero tu siempre me has gustado más. –
¿Acaso era eso verdad? Quizá siempre quise a Iker, quizá el era… ¡No! Derek era el
indicado lo sabia, pero si así era… ¿Por qué ya no sentía esos choques eléctricos cuando
me tocaba?
-¿Qué hice mal Anny?
-Quererme, fue lo único, fuiste un gran novio, comprensivo, quizá te distanciabas, pero
por mas que me repetía que te entendía, me sentía sola.
-¿Te sentías sola? ¡No me vengas con eso Anny! ¿Crees que yo no me sentía culpable
por dejarte?
No podía soportar sus palabras, porque sabia que eran ciertas, ambos sufríamos la
distancia. Pero la diferencia es que él aun así me amaba y yo mientras tanto había
encontrado abrigo en los brazos de su mejor amigo. Por cierto, ¿Dónde estaba? ¿Él
había organizado esto? ¿Algo más de culpa?

-Lo siento Derek, siento mucho lo que te hice, todo, incluso el hecho de cruzarme en tu
vida. -Lo mejor era marcharme limpiamente, recogí mis cosas, pero él me tomo por el
brazo.
-¿Qué fácil es huir no crees? Mientras dejas un desastre a tus espaldas, tú simplemente
te das la vuelta y esperas a que se componga solo.- ¿Cuánto más podía lastimarme?
-Sabes que no es verdad Derek y me duele esto tanto como a ti, pero como tú dijiste, las
palabras de ayer no se borraran y mucho menos será fácil borrar estos últimos 3 años, si
crees que correré a los brazos de Iker, pues no es así y la verdad me duele que me
conozcas tan poco.
-Si no es así, entonces ¿Por qué aceptaste esta cita?
-La acepte porque también quería hablar con él, decirle la verdad… ¿Por qué debo darte
explicaciones? ¿De que sirve? ¿Arreglara algo entre nosotros? ¿Me creerás?
Me solté como pude, lastimándome un poco –dejando las marcas de sus dedos en mi
brazo- y eche a correr, no quería voltear atrás, no sabía si me seguiría, lo más probable
era que no, pero aun así quería tener esperanza. Llegue al ajetreo de las clases – ¡Por fin
a salvo! Pensé.
-¡Anny! ¿Qué paso? ¿Dónde estabas? Se suponía que nos encontraríamos en…- Steven
se tomo un minuto para analizar mi rostro. -¿Qué ha pasado Anny?-
-Nada- Sabia que Steven no me creía ni pizca, pero tampoco me obligaría a contarle que
tenía.
-Anny, si no quieres decirme que te pasa, aprende a mentir mejor-
-Lo intentare la próxima vez.- Bromee, lo tome del antebrazo y lo conduje a la banca
mas cercana. -Esta bien, el caso es que vino Derek, bueno primero Iker y después Derek
y hablamos y dijimos cosas que no y ahora ya no me importa si regresamos o no,
tampoco pienso salir con Iker, al menos no por ahora, se que no es justo, al menos
debería darle una oportunidad, es que me siento tan…-
-Anny por favor, no puedes seguir así, mira ya falta poco para el fin de semana y me
encargare de localizar a Lena, saldremos los tres y arreglaremos este asunto- Prometió.

Capitulo 4

Caminamos a nuestra siguiente clase, historia -la única que teníamos juntos-, Steven no
soportaba a la profesora Nayeli -sinceramente nadie en su clase la soportaba, salvo unos
cuantos, y yo pertenecía a los alumnos que la soportaban-, Steven siempre se quejaba de
camino a clase –o al menos los días que nos encontrábamos-, pero en esa ocasión se
limito a caminar en silencio, él me entendía muy bien.

Legamos al aula con mucho tiempo de sobra –éramos los primeros-, tome mi asiento –
para nuestra mala suerte, no nos sentábamos juntos-. En cambio yo solía sentarme con
el fantasma de Dana –rara vez asistía a clases-, es una chica solitaria, viste de negro, y
en una de las escasas ocasiones que asistió a clase, pude verle cicatrices en los
antebrazos, trate de acercarme, de intentar ser su amiga, pero ella no estaba dispuesta a
poner de su parte, así que desistí. Me sentía tan mal por esa chica, pero ahora no tenia
cabeza para preocuparme por ella, primero tenia que poner mi vida en orden, para poder
arreglar la de los demás.

Sin embargo ese día, Steven se sentó a lado mío, al ver que ponía sus cosas sobre la
mesa voltee a verlo.

-¿Qué pretendes?- Le pregunte

-Sentarme con mi amiga la antipática, gracias-
-Y dejar a tu novia, no te preocupes, estaré bien-

Steven se sentaba con Courtney una chica de complexión y estatura media, rubia de ojos
azules, la chica era guapa, pero era sencilla, no era la clásica chica fresa que se
contoneaba por el campus, luciendo una mini falda y un top, con la etiqueta de “zorra”
en al frente, ella no era de esas, en cambio vestía jeans deslavados, playeras de tirantes y
caminaba como cualquier chica -moviendo la cadera disimuladamente-, era muy
agradable, socializaba muy bien con todos –Las mujeres no terminaban por tragarla,
pero yo junto con otras cuantas, éramos la excepción- Steven quería andar con ella,
moría por ella, pero no se animaba a pedirle que fuera su novia.

Yo sabia muy bien que Courtney también quería tener algo serio con Steven –vale, toda
la clase lo notaba, eran bastante obvios-, pero ambos eran tan penosos que no se decían
nada, uno de estos días intervendría en su relación, soltaría toda la sopa por ambos lados
y haber como la cocinaban, pero hoy no estaba de ánimos como para ser cupido. Sin
decir mas nada, acepte que Steven se sentara conmigo, pero solo seria por ese día, a
partir de mañana empezaría con la operación amorosa, o al menos eso esperaba.

El día transcurrió como cualquier otro, después de clases pase a recoger a Steven que
para mi sorpresa estaba besando a Courtney –Adiós operación amorosa- pensé, de
camino a mi casa, Steven empezó a contarme como le había pedido a Courtney que
fuera su novia, tuve que fingirme interesada en su platica, me alegraba que por fin
fueran novios, me alegraba bastante, pero no tenia ganas de escuchar sobre amor en esos
momentos, no después de lo que había pasado entre Derek y yo. Y pensar que ahora
cada quien seguiría por su lado, ¿Acaso podía seguir torturándome más? ¿Cuánto tenia
que pasar para que pudiera superarlo?

Al llegar a mi casa Steven se ofreció a preparar la comida, yo subí a dejar mis cosas y a
darme una ducha, pero antes de que subiera el primer escalón, tocaron el timbre.

-Yo abro- le grite a Steven.

Al abrir la puerta me encontré con Iker.
-Hola Anny, ¿Puedo pasar?-
-Claro- le conteste y una vez que tomo asiento le comente –Pensaba subir a tomar una
ducha, ¿Quieres quedarte a comer?- Iker solo asintió –Por mas que me negara a hablar
con él, tenia que hacerlo ¿Y que mejor momento que este?

Subí corriendo las escaleras, deje mi mochila y me dirigí al baño con una nueva muda
de ropa, al bajar las escaleras Steven platicaba cómodamente con Iker y decidí unirme a
ellos.
-Entonces Anny no sabe nada….- Ese era Steven
-¡Anny, que rápida eres!- Iker interrumpió a Steven
-Hummm...... supongo, pero ¿Qué es lo que no se?- Steven estaba a punto de soltar la
sopa pero Iker lo tuvo que interrumpir bruscamente –Steven me acaba de decir que
rompió uno de tus platos- Al parecer era verdad porque Steven empezó a disculparse
inmediatamente.
-No te preocupes, solo fue un plato, hablando de platos ¿Ya esta lista la comida?, me
muero de hambre-
-Si, ya esta lista, te estábamos esperando- Contesto Steven.
-Iré por los manteles- Me escape a la cocina preguntándome que era lo que no sabia,
¿Tenia que ver con lo que Iker me había confesado la noche anterior? Que era lo que
realmente quería decir con aquellas palabras y ¿Por qué se había escapado en la
mañana?
-¿Quieres que te ayude?- Me sobresalte al escuchar la voz de Iker tan cerca de mi,
cuando me voltee estaba tan cerca que podía besarlo.
–Ya iba camino a la mesa, no te apures Iker puedo sola- Tenia la necesidad de salir de
ahí, no podía permitirme estar tan cerca de Iker, no debía dejar que esto se me saliera de
las manos una vez mas, sabia que a quien amaba era a Derek así que ¿Por qué Iker
seguía poniéndome nerviosa? ¿Por que con el sentía los choques que se suponía debía
hacerme sentir Derek?-

Salí con paso dudoso de la cocina, Steven me interrogaba con la mirada, sabia que era
tiempo de terapia grupal, pero no era el momento, así que con la frente en alto salí de la
cocina, coloque los manteles y tome mi asiento, Steven inmediatamente comenzó a
servir lo que había preparado y comimos en silencio.

El primero en querer entablar una conversación fue Steven.

-Entonces… ¿este es tu último año en la universidad Iker?-
-Si- Iker no sintió la necesidad de seguir una conversación y yo agradecí eso, después
Steven se dio por vencido y otra vez regreso el silencio incomodo.
Tenia que decir algo, no podía dejar las cosas así, además tenia que saber porque Iker
me había dejado con Derek, ¿ese había sido el plan inicial?
-Iker –Iría al grano, no podía darle vueltas al asunto- ¿Por qué me dejaste con Derek?-
-Creo que…. Iré al baño- Logró escaparse Steven.
-Anny… yo… -Suspiró- Al principio quería hablar contigo, mis intenciones eran que tu
supieras que yo te daría el tiempo necesario para que pudieras asimilar tu ruptura con
Derek, pero cuando entraste a clase me encontré a Derek y me pidió, mejor dicho, me
rogó que le diera una oportunidad de hablar contigo antes de que yo me llevara la gloria
y mira Anny, no es la primera vez que le concedo el honor de dejarme en segundo lugar,
el día en que te pidió que fueras su novia, yo tenia planeado hablar contigo, saber si
tenia una oportunidad y si no la tenia luchar por ella, pero llegó Derek y me pidió ser el
primero, él pensaba que no tendría oportunidad y siendo sincero yo pensé lo mismo, por
eso lo deje, deje que se llevara a la chica que mas amo, mis sueños, mis ilusiones, mis
deseos, ¿Crees que ah sido fácil para mi verte a su lado todo este tiempo? –No sabía
que contestarle, no tenia ni idea, pero Iker no esperaba una respuesta mía, así que
prosiguió- Anny… yo solo quería estar a tu lado y la única forma era siendo tu amigo,
así que eso fue lo que hice, todo iba bien, nos llevábamos muy bien y después me di
cuenta de que tú sentías algo por mi, no sabía que tan profundo era, pero sabía que tenía
un espacio en tu corazón y lucharía por él, las salidas, los bailes, las fiestas todo se
convertía en una oportunidad más, pasar más tiempo a tu lado, pero tú estabas
perdidamente enamorada de Derek, estaba a punto de darme por vencido cuando le
ofrecen a Derek trabajar en el extranjero.

Pero solo era por temporadas, se iba un mes y regresaba una semana, así estuvimos
durante un año, después te diste cuenta de que necesitabas a alguien a tu lado, que te
ayudara y te apoyara en momentos cruciales y de pronto llega mi momento, íbamos y
veníamos como si fuéramos pareja, bien podíamos hacernos pasar por novios, pero
todavía pensabas en Derek, fui paciente y obtuve mi recompensa, de pronto dejabas de
mencionarlo, te sentías mas feliz y segura a mi lado y te empiezas a fijar en mi como
una posibilidad, un nuevo novio, te lo planteas durante meses hasta que por fin decides
que salgamos, pero no como amigos. ¿Y que es lo que paso? Aparece Derek de nuevo,
se queda por más tiempo y mi oportunidad desaparece.
-Iker, yo… quiero… quería…- ¿Qué es lo que quería? ¿Qué tenia que decirle? Yo
también lo esperaba a él, pero Derek llegó primero, si Iker hubiese dicho… ¿que
hubiera pasado? ¿Saber esto cambiaba algo? ¿Qué sentía por Derek?- Iker yo, bueno –
Suspire, tenia que soltarlo todo- Tu lo dijiste, salimos pero no como amigos, te
equivocaste en la parte en que me empezaste a gustar, siempre me has gustado, desde el
primer día que te vi, es solo que Derek me dijo primero y te das cuenta de que si
hubieses llegado antes… más bien si no hubieses dejado que Derek se me acercara,
nada de esto hubiera pasado, no tendría que estar debatiéndome entre lastimar a Derek o
lastimarte a ti, cosa que no quiero, Iker, significas mucho para mi, en poco tiempo te
convertiste en alguien muy importante para mi, ayer tenia planteado cortar a Derek en
cuanto regresara de su viaje, decirle la verdad de una forma sutil, pero a final de cuenta
de lo termine diciendo y de la peor manera debo admitir, y esta mañana apareces
tratando de hablar conmigo y ¿Qué es lo que haces? Vuelves a cederle el paso a Derek,
¿Crees que fue justo? Pues no Iker, las cosas terminaron mal y todo porque ¡Maldita
sea! ¡Te has convertido en mi mundo! -¿Qué es lo que acababa de decir? Ya no podía
seguir engañándome, era la verdad, pero ¿Era prudente que Iker lo supiera? mejor dicho
¿Era prudente que se lo dijera en ese momento? En fin, ya no podía regresar el tiempo,
Iker sabia todo la pregunta era ¿Cómo iba a manejarlo?
-Anny, si eso es verdad, ¿Por qué…?-Se había atorado con las palabras- Es decir porque
lo dijiste hasta ahora, ¿Por qué no me esperaste? Si es que te gustaba tanto, ¿Por que no
esperaste a que te pidiera que fueras mi novia? ¿Por qué aceptaste a Derek?
-Iker… te espere por meses, nunca dijiste nada y de pronto llega Derek, así que decidí
intentar algo con él, pero yo sabia que en cuanto tu me dijeras que sentías algo por mi
cortaría a Derek, pero eso no paso, te conformaste con vernos juntos, después yo
aprendí a querer a Derek, vamos, seamos sinceros no lo ame, lo quería demasiado, pero
no lo amaba, esa es la diferencia que los separa a ti y a Derek.

Me pare de la mesa y me dirigí a mi cuarto, en las escaleras me encontré a Steven, el

cual muy caballerosamente se quito de mi camino y detuvo a Iker antes de que lograra
alcanzarme, sabia que Steven hablaría con Iker, y por un momento no tendría que
preocuparme por interrupciones indeseadas en mi cuarto. De pronto sonó el teléfono,
conteste desde mi cuarto
-¡Bueno! –No estaba de buen humor y fuera quien fuese interrumpía mi deprimente
confesión.
-¡Anny. Linda! ¿Eres tu?-
-¡Lena!- ¿En verdad podía ser ella? Tenia que ser ella, en estos momentos la necesitaba
más que nada, no es que Steven no estuviera haciendo bien su trabajo como mi mejor
amigo, pero vamos Lena era mujer y me entendía. Lena parecía mi psíquica, siempre
me llamaba cuando mas la necesitaba.
-Nena, como estas, hace rato hable con Derek y bueno… ¿Qué ah pasado? ¿Cómo
estas?-
-¡Ay Lena, la versión corta seria que corte con él y estoy en planes de ser novia de Iker,
pero no se que hacer, estoy desorientada, quiero a Derek, vamos cumpliríamos 3 años,
pero tu sabes lo que siento por Iker, tu… bueno ahora él también lo sabe.-
-Ok nena, voy a tu casa en este preciso momento, llevare muda de ropa para una
semana, ¿tienes cuarto disponible?-
-Este… el caso es que Steven llego ayer y ya no me quedan cuartos, pero…-
-De acuerdo no importa compartiré cuarto contigo, estaré en tu casa en 15 minutos
Anny, tranquila y por favor no llores ¿de acuerdo?-
No alcance a contestar, Lena ya había colgado el teléfono al terminar de hablar, ¿como
es que tenia tan buenos amigos? Era un monstruo, había lastimado a dos hombres que
me amaban y mis amigos aun así seguían a mi lado, a lado de un monstruo devora
corazones.

Me recosté en mi cama cerré los ojos y cuando había logrado despejarme tocaron la
puerta de mi cuarto e interrumpieron mi concentración.
-¿Anny, puedo pasar?-
-No, Iker quiero estar sola.-
-Anny, es que debemos hablar, no podemos dejar esto así, yo te amo y al parecer tu
también, ¿Que mas tenemos que hablar? Por favor déjame entrar.
-No, Iker lárgate, no tenemos nada que hablar, lo que dije fue un error.- No lo había
sido, él y yo lo sabíamos, pero eso no impidió que Iker sufriera por aquellas palabras.
Se abrió la puerta de mi cuarto, abrí los ojos y me gire para lograr ver a Iker.
-¡No Anny, sabes que no fue un error, sabes que fue verdad!- Trataba de convencerse a
si mismo en lugar de convencerme a mi.
-No Iker, fue un error y lo sabes, tu y yo no pode….- Me quede a mitad de la frase, Iker
me había tomado por los brazos para poder ponerme de pie y me beso, pero me beso en
serio, había tanta furia en sus labios, dolor amor, pasión, quería ser consolado y así
mismo consolarme, por un momento trate zafarme de sus brazos, pero era inútil,
deseaba con tantas ganas ese beso que terminamos fundiéndonos, caímos en la cama,
pero eso no nos detuvo, estábamos a punto de… ¡No!, tenia que parar esto, ¿pero en
verdad quería pararlo? Seguimos besándonos hasta quedarnos sin aire, por fin logramos
alejarnos uno del otro, con la respiración agitada por las emociones, se deslizo a un
costado mío y trato de respirar con normalidad, la cabeza me daba vueltas, quería mas,
sabia que quería, ahora lo sabia con claridad, Iker, Iker, Iker, no lograba dejar de repetir
su nombre, lo necesitaba, necesitaba sus labios, su amor, su pasión, su dolor, su furia, lo
necesitaba a él, solo a él.

-Y bien Anny, ¿Sigues creyendo que fue un error?- Logro formular su pregunta entre
jadeos.
Yo solo me limite a negar con la cabeza, me gire y trate de besarlo una vez más, pero en
esta ocasión el me detuvo.
-Anny, tienes que tomar una decisión, se que no debí besarte, que eso te confunde mas,
pero necesitaba hacerlo, quería saber que pasaría, así que lo mas justo seria que
habláramos y me refiero a los tres.
En ese momento no pensaba con claridad quería a Iker, pero al pronunciar las ultimas
palabras tuve que aclarar mi mente, me aparte de Iker, me levante de la cama y me
dirigí a la sala, donde Steven me esperaba pacientemente.
-Ya le eh llamado Anny, ahora creo que debes estar sola, regresaremos como a las 8 ¿de
acuerdo?, Lena vendrá conmigo, necesitas aclarar las cosas con Iker y Derek, recuerda,
a las 8 estaremos aquí para cualquier cosa.
Se puso de pie y se marcho, en cuanto abrió la puerta pude ver a Lena con una maleta
bastante grande, Steven se la recibió y la lanzo al sofá mas cercano, después cerro la
puerta tras ellos.
Era hora de soltar la bomba, matarnos a los tres o ver que tan resistentes somos a la
radiación de la verdad y el amor.