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La minera promueve o retarda el crecimiento econmico?

Esta pregunta es abordada por


diversos autores desde perspectivas tericas y de estudios de casos.
Por qu Amrica Latina qued rezagada en el desarrollo econmico en el perodo de
posguerra, con respecto a pases que tambin basaron el crecimiento econmico en los
recursos naturales desde principios del siglo XIX?
William Maloney plantea que las causas del bajo desempeo de Amrica Latina en el siglo
XX y su marcado sentido de dependencia pueden encontrarse en la resistencia a la adopcin
de innovacin tecnolgica, lo que tendra su origen en profundas races histricas. La ms
importante de ellas fue y sigue siendo una deficiente capacidad de aprendizaje nacional,
exacerbada durante la posguerra por la poltica de desarrollo orientada hacia el interior.
Jeffrey Sachs y Andrew Warner propugnan la tesis de la maldicin de los recursos: los
pases con abundantes recursos naturales tenderan a ser economas de altos precios y tal
vez por ello, seran proclives a quedar rezagados en trminos del crecimiento en base a las
exportaciones. Sachs y Warner concluyen que, casi sin excepcin, el crecimiento
econmico de los pases en desarrollo, abundantes en recursos naturales, se vio estancado
desde comienzos de los 70.
Graham Davis y John Tilton concluyen que hay muchos pases que aprovecharon sus
recursos naturales para el desarrollo econmico, entre ellos Gran Bretaa, Alemania, y los
Estados Unidos, y en tiempos ms recientes, Australia, Canad, Botswana, Chile, Malasia,
Per, los Pases Bajos, y Noruega; pero tambin hay un importante grupo de pases en que,
efectivamente, la minera retard el desarrollo econmico. Ejemplos de estos son la
Repblica Centroafricana, la Repblica Democrtica del Congo (ex Zaire), Guinea, Nger y
Sierra Leona.
La recomendacin que surge de los que proponen la maldicin de los recursos es que los
pases en desarrollo no deben invertir en dicha explotacin, por lo que presionan a
instituciones financieras internacionales y a gobiernos a adoptar esta poltica de negacin.
Segn Davis y Tilton, parece aventurado, si no peligroso, recomendar a los pases que
renuncien a aprovechar sus recursos.

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