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TEMA 15

Obstáculos de la misión universal


(Hechos 15, 1-2)

Cristo nos liberó para ser libres. Manténganse, pues,


Firmes y no se sometan de nuevo al yugo de la esclavitud (Gal 5,1)
 ENLACE  OBJETIVOS
 Hemos descubierto en el tema  Profundizar en el conocimiento de la
anterior que el encuentro personal comunidad cristiana primitiva para
con Cristo tiene el poder de aprender de ella a no caer en la
transformar, incluso al más grande tentación de abandonar la misión
pecador en un gran testigo y universal.
anunciador de Jesucristo, como fue
el caso del apóstol san Pablo, cuya
dedicación fue a la misión universal
 Descubrir que la conflictividad que
( para todos). afrontan a veces las comunidades
cristianas, tiene solución únicamente
desde la búsqueda de espacios de
 Vamos ahora a descubrir cómo esa escucha, de encuentro, de diálogo y de
misión a todos (no sólo a los judíos) discernimiento de lo que “el Espíritu
quiso ser impedida por muchos. Sin dice a las Iglesias”
embargo, por más obstáculos que se
opongan a la misión sin exclusiones,  Escuchar de nuevo la invitación a ser
la guía del Espíritu Santo puede constructores de comunidad y a no dejar
superarlos, ayudando a encontrar de anunciar el gozo del evangelio “hasta
soluciones acordes a cada situación los confines del mundo”.
y a cada época o cultura.
Desarrollo del tema
Palabra:
 Después de catorce años subí de nuevo a Jerusalen con Bernabé y llevamos también a Tito. Subí
motivado por una revelación y en conversación privada con los principales dirigentes, les
presenté el evangelio que anuncio a quienes no son judíos, no sea que, al inicio como ahora, me
esté esforzando inútilmente. Pero ni siquiera Tito que estaba conmigo, siendo griego, fue
obligado a circuncidarse a pesar de los falsos hermanos que vinieron a entrometerse para
coartar la libertad que tenemos en Cristo Jesús y convertirnos en esclavos. Pero ni siquiera por
un momento nos dejamos someter, para que la verdad del Evangelio permanezca en ustedes.
 Los dirigentes principales por su parte, aunque no me importa hasta qué punto lo fueran,
porque Dios no tiene en cuenta la apariencia del ser humano, no me impusieron ninguna otra
cosa. Por el contrario, reconocieron que me fue confiado el anuncio del Evangelio a los no
circuncidados, tal como a Pedro a los circuncidados, a mi me hizo apóstol de los no judíos.
Santiago, Cefas y Juan, considerados columnas de la Iglesia y reconociendo la gracia que me fue
dada, nos dieron la mano a mi y a Bernabé en signo de comunión, para que nos dirigiéramos a
quienes no son judíos, y ellos, en cambio, a los circuncidados. Sólo nos dijeron que
recordáramos a los pobres, lo cual me he esmerado en cumplir.
 Gálatas 2, 1-10
Escuchemos con oídos de discípulo
1. No poner obstáculos a la misión
 En la iglesia siempre ha habido quienes se oponen a la misión universal (Jesús es para
todos). El problema había empezado bien pronto, con la cerrazón ( incapacidad para
comprender algo por ignorancia o prejuicio) de los judíos que se habían convertido,
pero que no permitían que los no judíos se convirtieran a Jesús, si antes no se
convertían al judaísmo. El impacto de estos fue muy negativo a la actividad misionera
de Pablo y Bernabé, que estaban misionando precisamente a los no judíos, a los
gentiles (paganos) anunciándoles que Cristo los salvaba sin que se hicieran judíos. Se
produjo una gran tensión. La situación era desestabilizadora y amenazante. Sobre
todo por la división que se estaba causando.
 Para la Iglesia de hoy, el Papa Francisco nos advierte: “me duele mucho comprobar
cómo en algunas comunidades cristianas, y aun entre personas consagradas,
consentimos diversas formas de odio, divisiones, calumnias, difamaciones, venganzas,
celos, deseos de imponer las propias ideas a costa de cualquier cosa”. (EG 100).
2. Obstáculos internos y externos a la Iglesia
 Los obstáculos para la misión universal los encontramos fuera de la Iglesia:
relativismo, consumismo, indiferencia, etc. Pero, también, hay obstáculos
dentro de la Iglesia misma. Como dice el Papa Francisco: “pueden advertirse
en muchos agentes evangelizadores, aunque ore, una acentuación del
individualismo, una crisis de identidad y una caída del fervor. Son tres males
que se alimentan entre sí (EG 78). Los evangelizadores están cansados o se
han acomodado a “hacer siempre lo mismo”.
 Hay quienes se oponen a la misión de Jesús, porque con sus actitudes cierran
la puerta a quienes son o piensan diferente. Esto sucede a través de críticas,
juicios, burocracia, legalismo y otras actitudes que impiden el encuentro con
Cristo de los alejados. Pero “la Iglesia está llamada a ser siempre la casa
abierta del Padre. A menudo nos comportamos como controladores de la
gracia y no como facilitadores. Pero la Iglesia no es una aduana, es la casa
paterna donde hay lugar para cada uno con su vida a cuestas (EG 47)
Evaluemos desde el Evangelio
3. Los no judíos aceptan la fe
 En el año 48 ó 49 D.C. la Iglesia ya había sufrido sus primeras persecuciones. En las
diferentes comunidades, de la predicación del Evangelio en las Sinagogas se pasó al anuncio
a los paganos, que Dios también llama a la fe. Esta novedad de apertura a otros que no eran
judíos desencadenó una controversia: algunos judíos afirmaban la necesidad de la
circuncisión para la salvación.

 Las comunidades se fueron formando con personas de toda condición: varones y mujeres,
ricos y pobres, judíos y gentiles. Es decir, la Iglesia se extendió más allá de Palestina, y se
predicó a los paganos, que aceptaron la fe. Pablo y Bernabé fundaron las iglesias entre los
gentiles sin someterlos a la Ley de Moisés. Los que seguían aferrados al judaísmo dijeron
que Pablo y Bernabé estaban equivocados al hacer eso. Pero la verdad es que “la Iglesia no
nace aislada, nace universal, una, católica, con una identidad precisa, abierta a todos, no
cerrada; una identidad que abraza al mundo entero, sin excluir a nadie. A nadie, la madre
Iglesia, cierra la puerta en la cara, ¡a nadie! Ni siquiera al más pecador, ¡a nadie! Y esto por
la fuerza, por la gracia del Espíritu Santo. La madre Iglesia abre, abre de par en par sus
puertas a todos porque es madre” (Papa Francisco, Regina Coeli, 24/05/2015).
4. La salvación no viene de la circuncisión
 Pablo, Bernabé y los otros lideres defendían que no había que hacerse judíos
para hacerse después cristianos. En la ciudad de Antioquia de Pisidia, Pablo
predicó este mensaje: “En cambio aquel a quien Dios resucitó no
experimentó la corrupción. Sepan, entonces, hermanos, que por medio de
Jesús se les anuncia el perdón de los pecados. Y en todo lo que no pudieron
llegar a ser justos por la Ley de Moisés. Ahora, en cambio, todo el que cree
en Jesús recibe la condición de justo” (Hch 13, 37-39)
5. Judíos convertidos a Jesús, no paganos convertidos al judaísmo

 Se trataba de un problema importante, porque afectaba a la salvación. Una


cuestión en la que no podía haber descuerdo entre los creyentes. Se trataba
de algo que afectaba al núcleo mismo del cristianismo, por lo que había que
llegar a un criterio obligatorio para todos. Se llegó a la conclusión de que,
tanto judíos como paganos, se salvaban por su conversión a Cristo y que, por
tanto, los paganos no tenían porqué hacerse judíos, para después hacerse
cristianos.
 Jesús no dice a los Apóstoles que formen un grupo exclusivo, un grupo de
élite (minoría selecta). Jesús dice <<Vayan y hagan que todos los pueblos
sean mis discípulos>> (Mt 28,19). San Pablo afirma que, en el Pueblo de Dios,
en la Iglesia, <<no hay ni judío ni griego>> (Gal 3,28). De allí una exhortación
del Papa Francisco: “Me gustaría decir a aquellos que se sienten lejos de Dios
y de la Iglesia, a los que son temerosos o a los indiferentes: ¡El Señor también
te llama a ser parte de su pueblo y lo hace con gran respeto y amor!” (EG
113).

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