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LA VELA

DE LA ADORACIÓN
“LAS 7 VELAS”
LA ADORACIÓN

“La respuesta de la mente, el corazón y el alma al conocimiento


de la grandeza y la gloria de Dios". (John Piper)

“El centro de la vida cristiana, donde la mente, el corazón y la


voluntad se rinden a Dios en sumisión y alegría". (John Stott)
LA ADORACIÓN

"La adoración es nuestra respuesta a la revelación de quien es Dios y lo que


ha hecho." - R.C. Sproul

"La adoración es la respiración del alma. Es nuestra respuesta natural a la


grandeza de Dios." - Louie Giglio

"La adoración es una actitud del corazón que expresa nuestra reverencia,
amor y devoción hacia Dios." - Billy Graham

Adorar a Dios es brindarle nuestro amor, reverencia, servicio y devoción.


LA ADORACIÓN – “EN ESPÍRITU Y VERDAD”

La adoración es una expresión de alabanza desde lo más hondo de nuestros


corazones. La adoración es una actitud del espíritu. Es de adentro hacia
afuera. No se finge, debe practicarse “en verdad”.

23 Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán
al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores
busca que le adoren. 24 Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en
verdad es necesario que adoren. (Juan 4:23-24)
LA ADORACIÓN – CONGREGACIONAL

Los momentos de adoración congregacional no reemplazan toda una


vida de adoración, pero son el fruto y reflejo de ella.

“De ti viene mi alabanza en la gran congregación” (Salmo 22:25);


“En la gran congregación te daré gracias; entre mucha gente te
alabaré” (Salmo 35:18);
“He proclamado Tu fidelidad y Tu salvación; no he ocultado a la gran
congregación Tu misericordia y Tu fidelidad” (Salmo 40:10).
LA ADORACIÓN – CONGREGACIONAL

Nuestra adoración congregacional testifica que Dios es más poderoso


que cualquier otra cosa para unirnos en la verdad, a pesar de nuestras
diferencias y contextos.
“Después de esto miré, y vi una gran multitud, que nadie podía contar, de todas
las naciones, tribus, pueblos, y lenguas, de pie delante del trono y delante del
Cordero, …10 Clamaban a gran voz: «La salvación pertenece a nuestro Dios que
está sentado en el trono, y al Cordero» (Apocalipsis 7:9-10)
LA ADORACIÓN – COMO ESTILO DE VIDA

- La adoración como estilo de vida del creyente tiene que ver con aceptar
que Jesús es (mi) Señor y con someterse a las enseñanzas de la Palabra.
- El Dios en que creemos se refleja en la forma en la que vivimos.

“Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, os


ruego que cada uno de vosotros, en adoración espiritual, ofrezca su
cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios. 2 No os amoldéis al
mundo actual, sino sed transformados mediante la renovación de vuestra
mente. Así podréis comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena,
agradable y perfecta.” (Romanos 12:1-2)
LA ADORACIÓN – COMO ESTILO DE VIDA (UN
EJEMPLO)

Haz del sitio donde estás tu lugar de adoración a


Dios. Abraham era un hombre de tienda y altar.

18
Abram, pues, removiendo su tienda, vino y moró
en el encinar de Mamre, que está en Hebrón, y
edificó allí altar al Señor. (Génesis 3:18)
BENEFICIOS DE LA ADORACIÓN

• Fortalecidos en nuestra relación con Dios.


• Renovados en nuestra fe.
• Edificación de la iglesia, reforzará la unidad.
• Capacitados para vivir vidas que reflejen el amor de
Dios y por tanto de testimonio al mundo.
CONCLUSIÓN

El Espíritu de Dios se está moviendo y quiere llevarte a buen puerto. ¿cómo


estarán nuestras velas?
Podemos elegir desplegarlas o no, siempre podemos poner excusas, podemos
elegir leer nuestra Biblia o no leerla, podemos elegir orar o no orar, podemos
compartir el evangelio o callar, discipular o dejar que cada uno lleve su carga,
podemos servir o cruzarnos de brazos, podemos comprometernos con la iglesia
o vivir como llaneros solitarios, podemos adorar a Dios o buscar sustitutos y
adorar cualquier cosa…”
CONCLUSIÓN

Pero si queremos llegar a buen puerto os animo a desplegar


las velas de: La Palabra, la oración, el evangelismo, el
discipulado, el servicio, el compromiso con la comunidad y
la adoración.
Dios quiera que despleguemos nuestras velas para su Gloria.

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