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Yacimientos Arqueológicos
CRONOLÓGICO:
según las grandes
etapas culturales con
fases y periodos:
paleolítico, neolítico,
mesolítico... También en
relación con las culturas:
Sumeria, Acad, Egipto,
Grecia, etc...
FUNCIONAL:
Se distinguen los de hábitat y
las necrópolis. En los de hábitat
se realizan las actividades
comunitarias como comer y
relacionarse. Al principio
apenas dejan huellas (huesos,
útiles, ceniza), pero con la
evolución se hace más
complejo (tiendas con ramas).
Con la urbanización el nivel de
complejidad es enorme y se
diversifica: urbano, rural,
concentrado y diverso
LAS NECRÓPOLIS:
rendían culto a los
difuntos, al principio son
simples fosas que se
hacen más complejas; hay
enterramientos de
incineración o inhumación,
colectivos o individuales.
TIPOS DE YACIMIENTOS
ARQUEOLÓGICOS
En cuanto al tipo de actividad realizada, los hábitats
son los más importantes y numerosos. Aunque sus
restos fueron dejados accidentalmente.
Los enterramientos y necrópolis, los más
variados. Los cementerios fueron construidos a
conciencia para durar, y por eso su contenido de
información es mayor que el de los poblados.
Otros tipos de yacimiento ya son menos
importantes, como los sitios de matanza, los lugares
ceremoniales, etc.
Tipológico:
según su
situación
topográfica: al
aire libre, en
cueva, valle...
YACIMIENTOS MUSEALIZADO
Se trata de un sitio
arqueológico puesto en
valor y delimitado,
parcialmente reconstruido y
con un itinerario marcado y
señalizado para permitir la
visita con información sobre
el propio yacimiento
arqueológico
PARQUES ARQUEOLOGICOS
Con el tiempo, las evidencias del pasado son sepultadas, por la tierra, basura, escombros o la propia
vegetación que de manera natural va ganando terreno a lugares abandonados por el ser humano que allá
por donde pasa, deja su huella de una manera u otra. Posteriormente la Arqueología entra en acción.
Hay que tener en cuenta que a lo largo de la Historia el modelo de hábitat se ha ido modificando y
mientras que los primeros grupos humanos sedentarios ocupaban abrigos o cuevas para resguardarse,
con el tiempo se fueron adaptando tipos de construcción rudimentarias con materias primas, como
madera o piedra, con las que se construían casas en el exterior hasta llegar a los edificios modernos de
hoy en día. Casas de madera se quemaban fácilmente y se derrumbarían con gran asiduidad. En
ocasiones, esas construcciones eran abandonadas y terminaban por derruirse por sí solas.