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EXPRESIÓN VISUAL

UNIDAD 3 DIBUJO

Temas Rostro y retrato

Lcda. Julia Coronado Pin


INICIO DE ACTIVIDAD

3.2.4 Dibujar figura, cabeza y rostro humano


3.2.5 El retrato
3.2.6 Historia del retrato
OBJETIVO

Aprende las bases del dibujo de la figura humana y conoce la historia y


tradición del retrato
EXPRESIÓN VISUAL

UNIDAD 3 DIBUJO

Tema 3.2.4 Dibujar figura, cabeza


y rostro humano

Lcda. Julia Coronado Pin


En este punto es importante considerar las proporciones. Las proporciones son
definidas como las relaciones medibles y comparables entre cosas que pueden ser
distintas o semejantes por lo tanto determinan la relación entre las diferentes partes
que pertenecen a un mismo cuerpo. La figura humana al igual que todos los demás
objetos está sometida a las leyes de la perspectiva: se debe procurar que las
proporciones tengan relación con la posición relativa del sujeto que estamos
dibujando.
Es necesario tener una idea general de las formas básicas del dibujo: esfera,
cilindro, cono y cubo. Se puede representar los volúmenes de las partes del cuerpo
humano como un conjunto de cilindros a los que necesariamente afectará la
perspectiva más o menos, siempre dependiendo de la distancia a la que esté de la
denominada "Línea del horizonte".
Las Figuras de Palo
• Usar figuras de palo es un método eficaz para dibujar la proporción adecuada del cuerpo.
• simplifica la estructura ósea del cuerpo con proporciones adecuadas.
• Agrega versatilidad al dibujar la figura humana en acción.
• este método consiste en "construir" el muñeco final a partir de la figura de palo, la cual actúa como un marco, con
círculos que representan las articulaciones, así como una cruz o líneas que representan los rasgos faciales
• la figura de palo debe ser fácil y rápida de dibujar.
• Estas figuras se dibujan con trazos lo más ligeros y finos que puedas
para que sean fáciles de borrar o imperceptibles una vez finalizado
el dibujo.
• Una vez esbozada la figura de palo, se comienza a agregar formas
simples a la estructura de palo
• Formas geométricas como rectángulos y cuadrados en forma de
cubos de diversas proporciones son ideales para el torso, el cuello y
la pelvis.
• Formas tipo cilindro se pueden usar para partes más largas del
cuerpo, como brazos y piernas.
• El resultado es una figura básica de "maniquí", simplemente
Proporciones para definir la altura
del cuerpo
El método más utilizado es el de las 8
cabezas. Este método consiste en dibujar
ocho cabezas que representarán las
proporciones ideales del cuerpo
humano. Este método te ayudará a
medir las diferentes partes del cuerpo.
Luego de proporcionar, traza la figura
básica de palos y figuras geométricas.
El Torso
Después de la estructura inicial generalmente se comienza
dibujando el torso, que incluye la caja torácica, el abdomen y la
cadera. La razón de comenzar a dibujar la figura humana a
partir de esta parte, es que el torso dicta toda la posición del
cuerpo. A partir del torso y las caderas, dibujar la cabeza y las
extremidades se vuelve mucho más sencillo.
Puedes elegir entre dibujar la caja torácica y el abdomen como
dos partes separadas o como un todo. Lo que dictará tu elección
es la postura
El abdomen
Una vez que tengas el torso dibujado, procede a dividir la caja
toráxica del abdomen con una línea curva. Esta línea curva
cruzará el centro del torso. En el extremo superior marca el final
del esternón y la parte inferior del pecho. A los costados indica
el lugar en el cual dibujarás las costillas flotantes.
En la parte superior del torso, también dibuja otra curva. Ésta
definirá la ubicación de la clavícula. Sobre la clavícula dibuja
una elipse, que definirá la ubicación del cuello. Presta atención
al ancho de las partes del cuerpo en relación al torso que
dibujaste. En cuanto a las proporciones, una cabeza es
generalmente la distancia entre la base del cuello y la línea
inferior del pecho.
Las Caderas
Por lo general, la manera más sencilla es
dibujarlas junto con la entrepierna como si el
muñeco llevara un traje de baño corto o ropa
interior masculina. Este truco simplifica el
proceso creativo y hace que las cosas sean más
fáciles de entender.
En cuanto a las proporciones, la distancia desde
el ombligo hasta el área de la entrepierna
equivale a otra cabeza.
Hombros y Brazos
Para trazar los hombros de forma simple puedes comenzar
dibujando un par de esferas en forma de huevo. Lo importante
al hacerlos es, de nuevo, que mantengas tu atención en las
proporciones de largo y ancho de los hombros en relación a las
otras partes de cuerpo.
Para el área de los bíceps y tríceps dibuja un cilindro para cada
brazo. Esta figura geométrica se volverá más angosta en la parte
inferior, justo donde se conecta al codo.
Los brazos generalmente terminan por debajo de la altura de la
cadera y ahí comienzan las manos.
Las Piernas
Para dibujar las piernas traza para cada muslo un cilindro
grueso (o no tan grueso, acorde a la proporción del personaje
que intentas retratar). Dicho cilindro servirá para conectar las
caderas con las rodillas. De la misma manera que dibujaste los
brazos, estos tubos se volverán más estrechos en el área
inferior donde el muslo se conecta con la rodilla. Cabe destacar
que la región inferior de la pierna debes dibujarla de acuerdo
con la posición de la figura. Las proporciones para esta sección
de la figura serán de dos cabezas de distancia desde la
entrepierna hasta la parte inferior de las rótulas.
Las Manos
Dibujar las manos podría ser un desafío. Ya sea que estas se encuentren abiertas con los dedos
extendidos parcial o totalmente o por el contrario, en el caso de que las manos se encuentren
cerradas en forma de puños, las manos siempre pueden ser un reto. En un texto futuro
abordaremos el dibujo de las manos con mayor detalle, por ahora solo las mencionaremos
brevemente.
El Pie
La manera en que dibujas los pies, específicamente los dedos,
dependerá del ángulo del dibujo. Si es una vista frontal,
comienza dibujando el dedo gordo del pie en el lado interior de
la punta de cada pie. A partir de ahí, debes colocar el resto de
los dedos de los pies en sucesión.
Recuerda que el dedo índice del pie es casi tan largo como su
hermano mayor. Luego, a partir de este dedo debes dibujar los
otros 3 en sucesión. Dibuja cada uno más corto que el anterior y
uno detrás del otro.
En cuanto a representar los pies casi de lado, el único dedo del
pie completamente visible será el grande. Los otros cuatro serán
apenas visibles detrás de su hermano mayor.
El escorzo
Es el efecto visual o ilusión óptica que hace que
un objeto o una distancia parezcan más cortos
de lo que realmente son porque están girados
hacia el espectador. Además, en las imágenes
los objetos generalmente no se escalan de
manera uniforme: un círculo a menudo aparece
como una elipse y un cuadrado puede aparecer
como un trapezoide. Aunque el escorzo es un
elemento importante en el arte donde se
representa la perspectiva visual, también se
produce en otros tipos de representaciones
bidimensionales de escenas tridimensionales.
Algunos otros tipos en los que puede producirse
escorzo incluyen dibujos en proyección paralela
oblicua.
En pintura, el escorzo en la representación de la
figura humana se perfeccionó en el
Renacimiento italiano, y la famosa pintura de la
"Lamentación sobre Cristo muerto" de Andrea
Mantegna (1480) es una de las realizaciones
más conocidas de una serie de obras que
muestran la nueva técnica, que posteriormente
se convirtió en una parte estándar de la
formación de los artistas.
Dibujar el rostro
Similar a dibujar la figura del cuerpo, la
cabeza también tiene su propia proporción
llamada proporción facial. La razón es que la
proporción facial ayuda en la colocación de
los rasgos faciales. Esta proporción sirve para
así evitar el error (o hábito) de hacer que los
ojos estén demasiado cerca o que la nariz sea
demasiado grande. Así como en el cuerpo la
cabeza es una buena medida de referencia en
el rostro, también debe usarse un elemento
modular de referencia. Un elemento muy
utilizado para este fin es la medida de un ojo.
El ojo está conformado por una esfera
situada en la cavidad orbitraria, cubierta
por los párpados. Las formas visibles de
los globos oculares son la esfera sobre la
que se observa el iris y la pupila Estos se
cierran y se abren a voluntad con la ayuda
de músculos en forma de anillo que
rodean este órgano visual.
Si al dibujar se piensa que los ojos se mueven al mismo
tiempo, es bajo el riesgo de dibujarlos bizcos cuando esta
no es la intención.
Sonrisa: Al igual que las cejas, querrás dibujar una línea
arqueada simple, las esquinas hacia arriba, para definir la línea
central de la boca y luego dar forma a los labios superior e
inferior a esa línea. Si bien la forma del ojo no cambia, agregar
una o dos líneas pequeñas en las esquinas exteriores para
insinuar las arrugas sutiles de la risa, le agregará expresión ya
que cuando sonríes, tus mejillas se levantan.
Orejas: Dibujar los detalles de las orejas al igual que
sucede con la boca y la nariz, será un asunto de
estudio a través del dibujo y mucha observación
Añade los últimos detalles Aquí se comienza a borrar las
líneas estructurales y se acentúan las líneas de expresión,
rasgos y expresiones.
EXPRESIÓN VISUAL

UNIDAD 3 DIBUJO

Tema 3.2.5 3.2.5 El retrato

Lcda. Julia Coronado Pin


Un retrato (del latín retractus) es una pintura o efigie principalmente de una persona. También se
entiende por retrato la descripción de la figura o carácter, o sea, de las cualidades físicas o morales
de una persona. La primera definición de retrato es aquella que se refiere a la expresión plástica
de una persona a imitación de la misma, lo que ocurre en la pintura, la escultura y la fotografía. En
un retrato predomina la cara y su expresión. Se pretende mostrar la semejanza, personalidad e
incluso el estado de ánimo de la persona. Es generalmente una imagen compuesta de la persona
en una posición quieta.
La segunda acepción sería esa descripción que se hace de las cualidades de una persona o
personaje (ya sea en 1era, 2da o 3era persona), dentro de una obra literaria. En términos
literarios, se conoce como retrato la descripción minuciosa y extensa de un personaje,
presentando sus cualidades físicas y morales en un mismo enfoque: una fusión de la prosopografía
(la descripción de los rasgos físicos de una persona, de su apariencia externa.) y la etopeya (la
descripción de rasgos psicológicos y de carácter de una persona, así como de sus costumbres). El
retrato escrito a menudo da una visión profunda y ofrece un análisis que excede lo superficial.
Existieron artistas que practicaron ampliamente y de manera casi
exclusiva el retrato y civilizaciones enteras que rechazaron el retrato
como «figura tomada del natural» (como el arte griego arcaico y
clásico). La presencia o ausencia del retrato fisonómico en
determinadas civilizaciones (aun contando con medios artísticos
suficientes para producirlos) no es una simple cuestión de gusto hacia
una u otra forma artística, sino que intervinieron condiciones mentales
e ideológicas particulares que se reflejaban en el desarrollo y las
condiciones de la sociedad en la que operaron los artistas.
Los retratos cumplen diferentes funciones. Para estudiar la historia del retrato es necesario comprender las tipologías del retrato:
Retrato intencional: En ningún caso plasman la realidad facial o características fisionómicas específicas de sujeto retratado, es
practicamente nominal.
Retrato simbólico: A este tipo de retrato se le conectan una serie de valores que unen la imagen al individuo, a menudo en el
ámbito religioso
Retrato tipológico: Si bien la representación aún no se parece al sujeto individual, están presentes una serie de elementos que
circunscriben la representación genérica a una cierta categoría de individuos, facilitando la identificación (por ejemplo, atributos
particulares, descripción del vestuario, objetos relacionados con el sujeto o su clase social, etc.)
Retrato fisonómico: Se compone a su vez de dos estratos relacionados: la representación de los rasgos somáticos y la búsqueda de
la expresión psicológica del individuo. En el primer estrato se grafica una individualización del personaje a partir de la imitación de
los rasgos individuales, sin otro artificio. En el segundo estrato, se busca fijar en la efigie un juicio moral sobre la persona retratada,
eligiendo una actitud particular que fijar, un gesto, una expresión.
Retrato de reconstrucción: El artista no ha visto al sujeto e intenta, sobre la base de las informaciones que posee y su sensibilidad,
recrearlo, sea en la fisonomía, sea en la psicología, según el concepto que se ha formado sobre esa personalidad determinada. Es
el caso típico de los retratos de grandes personajes del pasado de los cuales no se ha transmitido la imagen (de Homero a los
Apóstoles). Puesto que tales imágenes son fruto de la invención y las circunstancias del tiempo en que se realizaron, es frecuente
que por la misma personalidad histórica se tengan retratos reconstruidos muy diferentes.
Historia del retrato
El retrato como expresión artística aparece en el siglo V antes de Cristo sobre las monedas de
los reyes persas. El uso se expandió sobre todo desde la muerte de Alejandro Magno. Alcanzó
un desarrollo considerable durante la época romana.
Los primeros retratos de la historia fueron esculturas. Los cráneos humanos encontrados en
Jericó, donde los rasgos se recrean con yeso y los ojos con conchitas, manifiestan la voluntad
de reconstruir la persona del difunto, pero son retratos plenamente intencionales, en cuanto
que están ligados a esquemas del todo genéricos, a pesar del auxilio de la estructura ósea
subyacente. Seguramente las primeras representaciones humanas tenían las implicaciones
mágicas y sagradas hacia las que se representaban.
La creencia de que la imagen se une indisolublemente con aquello que retrata y que
permanece por ejemplo en el ámbito negativo, como en aquellos ritos que se reservan a las
imágenes de los adversarios tratamientos funestos, según supersticiones aún vivas en los
retazos de civilización campesina y pastoril.
Antiguo Egipto
• teniendo plenos medios técnicos, evitó la producción de retratos fisonómicos, al menos durante la mayor
parte de su historia artística.
• Muchas figuras indicaban, a través de la aposición de diversos nombres, personajes diversos,
comprendidos los retratos de los soberanos, en los cuales el nombre tenía un valor significativo que valía
por los rasgos fisonómicos, mientras que no faltan ejemplos de soberanos representados como toros o
leones.
• El realismo se veía como algo bajo y contingente, adaptado a las escenas de la vida cotidiana de las
clases inferiores.
• El retrato «tipológico» permanece en auge, aunque con algunos acentos de diferenciación fisonómica
debida al particular procedimiento de los escultores de elaborar a partir de máscaras en yeso modeladas
con relieve en creta con los rasgos del difunto
Egipto (Imperio Nuevo)
• tras la reforma religiosa de Amenofis IV, se produjeron en Egipto auténticos retratos fisonómicos, con
acentos psicológicos, como los numerosos retratos de Akenatón y Nefertiti.
• Este paréntesis se cierra de repente con la vuelta a la tradición y a los retratos por «tipología». Durante la
tardía dinastía saíta (663-525 a. C.).
• Se produce una nueva vuelta al retrato verídico, pero es una adecuación fisonómica superficial, ligada
más al virtuosismo técnico que a la presencia de valores que expresar.
• Tras la conquista griega, el retrato egipcio perdió las características propias para entrar en la corriente
helenística. Aún así, dentro de la escultura cabe el autorretrato.
• El primer artista del que se conoce el nombre es el escultor del faraón egipcio Akhenatón Bac (hacia el
1365 a. C.), si bien se cree que los autorretratos son tan antiguos como el arte rupestre.
Mesopotamia
• hasta la época sumeria hay una producción genérica de retratos «intencionales» (distinguibles solo por el
nombre impreso) y «tipológicos» (en los que se distinguen algunos atributos de una clase de individuo).
• Eran parecidos a los de Egipto, pero dotados de mayor libertad ideológica que caracterizaba a la
sociedad de la época.
• Entre las mejores obras que han sobrevivido se encuentran algunos retratos de soberanos, impregnados
de un esquematismo que pretendía evidenciar ante todo la majestad del soberano y su refinamiento, por
ejemplo, el de Hammurabi (1728 - 1686 a. C.) de la que queda su cabeza en el Louvre: un bulto
redondo, caracterizada por una excepcional plasticidad del rostro, con las mejillas hinchadas, la boca
pequeña y otros elementos que revelan una intención fisonómica.
• Durante la posterior dominación asiria, particularmente dura, la tendencia a la fisonomía desaparece
completamente, volviendo a modelos fijos distintos solos por la inscripción del nombre, carentes incluso
de los atributos tipológicos.
Mesopotamia
La dinastía aqueménida (en persa antiguo: Haxāmanišiya) fue la que reinó en el Imperio persa, desde que la
fundase Ciro II el Grande, tras vencer a Astiages, el último rey de los medos (550 a. C.), y extender su
dominio por la meseta central de Irán y gran parte de Mesopotamia. 550 a. C.
• Solo en el período aqueménida (558-480 a. C.) se produce una nueva humanización de las efigies reales.
• el verdadero paso adelante se da en la producción de monedas, quizá obra de artistas griegos, que desde
finales del siglo V a. C. presentan retratos fisonómicos que parecen manifestarse precozmente respecto a
la propia Grecia.
• No está claro aún si las diferencias observadas entre los retratos presentados en unas y otras monedas,
junto con algunos atributos del poder (gorro, bigote, barba) se deben a reales divergencias fisonómicas a
menudo a las diversas manos que se ocuparon de la acuñación, en cualquier caso.
Mesopotamia
La dinastía aqueménida (en persa antiguo: Haxāmanišiya) fue la que reinó en el Imperio persa, desde que la
fundase Ciro II el Grande, tras vencer a Astiages, el último rey de los medos (550 a. C.), y extender su
dominio por la meseta central de Irán y gran parte de Mesopotamia. 550 a. C.
• Solo en el período aqueménida (558-480 a. C.) se produce una nueva humanización de las efigies reales.
• el verdadero paso adelante se da en la producción de monedas, quizá obra de artistas griegos, que desde
finales del siglo V a. C. presentan retratos fisonómicos que parecen manifestarse precozmente respecto a
la propia Grecia.
• No está claro aún si las diferencias observadas entre los retratos presentados en unas y otras monedas,
junto con algunos atributos del poder (gorro, bigote, barba) se deben a reales divergencias fisonómicas a
menudo a las diversas manos que se ocuparon de la acuñación, en cualquier caso.
Grecia
• Es en la civilización griega donde se produce la creación de un auténtico retrato fisonómico
• Se conoce la retratística griega sobre todo por las copias romanas.
• el retrato griego tiene como punto de partida el ámbito religioso, pero a diferencia de las civilizaciones
orientales, los griegos no tenían intermediarios con la divinidad, sino una relación directa y humana.
• Las primeras estatuas humanas son el kurós y la kore
• El uso del retrato (escultórico) sirvió para representar a los oferentes de un santuario o a un difunto sobre
su tumba de manera impersonal, simbólica, como la de las estelas funerarias del período arcaico (hasta
el 480 a. C.).
• En las inscripciones emergió progresivamente el concepto de representación individual como obra de
arte: de los nombres de las personas que representan o de sus palabras en primera persona, se pasó a
añadir los nombres de los escultores para llegar a la dicción más destacada de «estatua de, imagen de» o
«mnena (recuerdo) de.»
• Las representaciones eran genéricas, como se ve en la de los estrategas y para los atletas existían las
estatuas «icónicas», donde se especificaban algunas características físicas como la altura o la edad, pero
la representación personal estaba ausente.
• El único retrato de la época que se puede llamar fisonómico, si bien no aún realista a causa de la
idealización, es el de Platón de Silanión, conocido gracias a copias de la época romana.
• Verdadero retrato fisonómico (mediados del siglo IV a. C.): aunque no se sabe cuál es el ejemplo más
antiguo: un herma de Temístocles que ha llegado a través de una copia de Ostia, realizada en vida hacia
el 480-460 a. C., o la imagen de Pausanias rey de Esparta (464-460 a. C.) o las obras en gran parte
desconocidas de Demetrio de Alopece.
• La tradición tardía narra que Fidias fue criticado por haber insertado su autorretrato en la decoración
escultórica del Partenón, individualizado por los estudiosos en la figura de Dédalo, de marcada
individualidad, aunque cercano al centauro de la metopa.
• El retrato aparece en el siglo V a. C. sobre las monedas de los reyes persas. El uso se expandió sobre
todo desde la muerte de Alejandro Magno.
La gran personalidad de Lisipo y las cambiantes condiciones sociales y culturales hicieron que se
superaran las últimas reticencias hacia el retrato fisonómico y se llegase a representaciones fieles
a los rasgos somáticos y del contenido espiritual de los individuos en época helenística, como
puede verse en los retratos de Alejandro Magno. A Lisipo o sus seguidores se atribuyen los
retratos de Aristóteles, el reconstruido de Sócrates del tipo II, el de Eurípides de tipo «Farnesio»
en los que está presente una fuerte connotación psicológica coherente con los méritos de la vida
real de los personajes.
Entre los siglos II y I a. C. se desarrolló ampliamente el retrato fisonómico, no reservado sólo a
soberanos y hombres destacados, sino también a simples particulares. Se difundieron el retrato
honorífico y el funerario. El arte del retrato floreció en las esculturas romanas, en las que los
retratados demandaban retratos realistas, incluso si no les favorecían. El origen de estos retratos
está probablemente en la época helenística. en el arte romano se distingue entre el retrato
honorífico público y el privado, ligado al culto de los antepasados.
El uso de las efigies de los antepasados se remonta al inicio de la república. Pero tales imágenes no eran aún
del estilo realista típico de la época de Sila, verdadero momento de separación con el retrato helenístico. La
exasperación de la realidad en el retrato romano, el llamado «retrato romano republicano» comenzó a
principios del siglo I a. C. y duró hasta el Segundo Triunvirato (432-32 a. C.), período que coincide con una
fuerte exaltación de las tradiciones y la virtud de los patricios, contra el movimiento de los Gracos y el
avance de la fuerza de la plebe hasta la guerra Social (91 - 88 a. C.). Se asiste en definitiva a una toma de
conviencia del valor de la gens, que se refleja en los retratos. El estilo de estas obras es seco y minucioso,
reflejando la piel estragada por el paso del tiempo y las duras condiciones de la vida tradicional campesina.
El arte de la época de Augusto se caracterizó por el auge del clasicismo. En el retrato se produjo una fusión
del tipo oficial y del tipo privado, a través de la concepción neoática que veía en la representación una
sobria idealización que fuese superior a la esfera de la contingente cotidianidad del realismo. La dualidad de
los tipos de retrato se reflejan en el ejemplo de dos retratos de Vespasiano, uno expresivamente vulgar (Ny
Carlsberg Glyptotek) y otro de aristocrática intelectualidad (Museo Nacional Romano, n.º 330). Con Trajano
se consumó la fusión entre el retrato privado y el público. En la expresión del soberano se acentúa la actitud
del hombre de mando militar, la energía, la resolución, pero el retrato sigue siendo humano, real. Durante el
siglo IV, el retrato cedió terreno en favor de la idealización del aspecto del retratado. Basta comparar los
retratos de Constantino I el Grande y Teodosio I. El retrato continuó desarrollándose en proporciones
considerables en la época romana.
Edad Media, los intereses de las representaciones hicieron desaparecer nuevamente el arte del retrato.
La mentalidad cristiana tendía a negar la importancia de la individualidad de las personas, prefiriendo
el símbolo, por lo que se daba el retrato tipológico. Al estar ausente un elemento «burgués» que
infundiera valores laicos de afirmación del hombre en cuanto a tal, en la sencillez de su existencia
terrenal, la necesidad de fijar las auténticas fisonomías se desvaneció inexorablemente.
Debe esperarse a la Baja Edad Media, cuando reapareció en la escena europea una especia de
burguesía, para ver el regreso de los fundamentos humanísticos y racionales que permitieron la
producción de retratos, el retrato también se siguió realizando en las monedas. Probablemente tales
condiciones se habían verificado ya en la corte de Federico II Hohenstaufen, pero no se han
conservado testimonios seguros de retratos.
El más antiguo retrato fisonómico realista de un personaje viviente tras la época clásica fue el Retrato
de Carlos I de Anjou de Arnolfo di Cambio (1277). Los retratos realistas reaparecieron en Borgoña y
Francia. Durante el Quattrocento italiano se hicieron efigies en medallones como monedas. La
costumbre de la efigie en medallón fue inaugurada por Pisanello en 1439.
Renacimiento,
• fue un período significativo en la evolución del arte del retrato por el renovado interés
hacia el mundo natural, el hombre y la expresión clásica del arte romano.
• El retrato tuvo así una importante función social, tanto esculpido, a través de bustos o
cabezas, como pintado.
• Tuvo notable difusión el retrato de busto hasta las espaldas, sobre todo en Florencia
(Mino da Fiesole, Andrea del Verrocchio) y en Nápoles (Francesco Laurana).
La fotografía de retratos
• sólo surge hasta el siglo XIX, debido a la creación de la cámara oscura.
• Hasta entonces, los retratos habían sido un servicio artístico exclusivo para la
aristocracia, pues estos tenían los medios para contratar a un pintor.
• Nicéphore Niépce, desarrolló un proceso químico que le permitió retener
imágenes por medio de uso de la cámara oscura. Fue de esta manera como logró
capturar la primera fotografía después de ocho horas de exposición.
• Las primeras personas en ser fotografiadas fueron cadáveres, pues eran los únicos
humanos que podían permanecer quietos por largas horas. Los fotógrafos tenían
sillas especiales que ayudaban a los modelos a mantener la posición.
• Cuando la tecnología se desarrolló más, las personas importantes y sus familias
iban a los estudios de los fotógrafos para retratarse.
Con el surgimiento del Daguerrotipo la fotografía de retrato se popularizó y se
extendió a otras esferas de la sociedad. El tiempo de exposición había pasado a ser
de 30 segundos y se podían reproducir una mayor cantidad de imágenes con una
sola toma, en alguos estudios se llegaron a tirar más de 500 placas al día. La
reducción en el tiempo de trabajo del artista hizo que los costos del mismo también
disminuyeran, volviéndose en un medio mucho más accesible. El estilo de estos
trabajos tempranos reflejaba las dificultades técnicas asociadas a esta tecnología, así
como la estética de los tiempos. Los sujetos se solían sentar delante de fondos de
color liso, y se iluminaban con la tenue luz de una ventana, o como mucho con lo
que se pudiera conseguir a través de espejos.
Ya para finales del siglo XIX, surge la posibilidad de tomar fotografías con mucho más
detalle y por fuera del estudio de fotografía, dando paso a la fotografía a color y
luego a la fotografía digital en el siglo XX. Haciendo de la fotografía de retrato una
actividad comercial y artística muy importante. Hoy por hoy el acto de retratar es
común tanto a nivel profesional como amateur debido a la masificación de la
tecnología digital que ha provisto de una cámara a todos a través de los telélefonos
móviles; sin embargo cuando se requiere de um retrato de calidad profesional
(equipos de producción, manejo de técnicas de iluminación, cámara profesional y
post-producción) y se manejan los presupuestos que esto implica, se contrata a un
fotógrafo profesional, ya que aunque la cámara es un artefacto evidentemente
diseñado en base y en función del sentido de la vista y mientras más se ha
automatizado la fotografía mayor provecho ha obrtenido la humanidad, es la
mediación de un humano, más aún si maneja los artilugios, la que le agrega esa aura
intabgible que hace de algo una obra de arte.
CIERRE DE CLASE
Taller Moodle
• Realiza 2 dibujos de las proporciones del
cuerpo humano utilizando los métodos de la
figura de palo y el de las 8 cabezas,
• detalle las estructuras de cada uno, hasta
dónde llega cada parte, etc.
Nota: es válido acotar otras consideraciones de
estos métodos adicionales a las presentadas en
clase.

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