Está en la página 1de 16

GESTIÓN DE

CALIDAD TOTAL
Catedrática: Msc. Ing. Diana Trejo
Objetivo
■ Identificar los mitos sobre la calidad que obstaculizan su correcto desarrollo en las
organizaciones.
MITOS DE CALIDAD
Mitos de calidad

■ Son concepciones erroneas que tiene la organización y que hay que cambiar para que la
implementación de un sistema de gestión de calidad sea efectiva dentro de la empresa.
MITO 1: “La calidad es costosa”
■ Sin importar qué tan bajos sean nuestros precios y cuánto respaldo tengamos, si la
calidad de los productos o servicios desciende por debajo del mínimo que el cliente
espera, igual lo perdemos.
MITO 2: “La calidad da trabajo”
■ Sí, tal vez. Pero arreglar continuamente las fallas que podríamos haber prevenido da
mucho más trabajo. Y eso sin contar otras consecuencias, como perseguir clientes
insatisfechos para intentar recuperarlos, o tirar material a la basura y tener que reponerlo
con urgencia (a un mayor costo), o mantener altercados permanentes con los empleados
porque asumimos que “tienen la culpa” de los errores.
MITO 3: “La calidad es para grandes
empresas”
■ Cuando los recursos son muy escasos, como ocurre en las pequeñas empresas, debemos
asegurarnos más que nunca de evitar el desperdicio por todos los medios.
MITO 4: “La calidad agrega
burocracia”
■ Es más. Cuando trabajamos en calidad descubrimos que:
Los procedimientos bien diseñados permiten hacer el trabajo en forma predecible,
programable y segura, para garantizar entregas a tiempo y productos sin fallas los
formularios racionalizados facilitan el trabajo y aseguran que no nos olvidemos de nada
importante. El registro de esas actividades permite saber quién hizo qué, cuándo y cómo,
para pedir cuentas cuando llegue el momento y dar apoyo si es necesario.
Por tanto, la única conclusión posible es que un sistema de gestión de la calidad
adecuadamente diseñado no sólo no es burocrático, sino que es la mejor opción empresarial
si lo que se busca es mejorar la rentabilidad en forma sostenible.
MITO 5: “Mis clientes nunca se
quejaron”
■ Una pequeña corrección: tal vez esas quejas nunca llegaron a sus oídos. Pero eso no
significa que no hayan ocurrido.
MITO 6: “Lo que hago funciona: ¿por
qué mejorar?”
■ la calidad no sólo tiene que ver con los productos o servicios que la empresa entrega al
cliente, sino –mucho más importante– con los resultados de ese trabajo para el bolsillo
del empresario, porque de eso depende la supervivencia y la salud del negocio.
MITO 7: “Mis empleados no
obedecen”
■ Quien mejor conoce el trabajo y sus dificultades es la gente que lo hace todos los días.
■ Si quiere que un procedimiento se cumpla, deje que lo diseñen quienes realizan el
trabajo, con su ayuda (no al revés).
■ De este modo está iniciando el camino hacia el sueño de cualquier empresario, pequeño,
mediano o grande: que los equipos se autogestionen y requieran la mínima
supervisión posible.
MITO 8: “Mis empleados no entienden
la calidad”
■ A la gente le gusta hacer las cosas bien y si tiene oportunidad de mejorar, lo hace de
buen ánimo.
MITO 9: “No tengo tiempo para hacer
calidad”
■ Cuando gestionamos la calidad en forma sistemática podemos crear alarmas que nos
indiquen cuándo algo anda mal y por qué, con tiempo suficiente para tomar acciones
eficaces.
MITO 10: “Mi empresa es demasiado
pequeña”
■ ¿Qué tan pequeña es “demasiado” pequeña? ¿Cinco personas, tres, dos, UNA? Incluso
un profesional que ni siquiera tiene un asistente puede obtener jugosos beneficios de la
gestión de su propia calidad.
FIN DE LA
PRESENTACIÓN

También podría gustarte