IMÁGENES PINOCHO

PINOCHO
PINOCHO
LA GRANJA
 CUENTO INTANTIL: EL BALON DE NAVIDAD

¡Es Navidad, es Navidad!, grité mientras bajaba las escaleras de la casa para ir hacia el árbol y ver los
regalos que este año había obtenido. Vi muchas cajas de colores llamativos, rojo, azul, verde, mis colores
favoritos.
Abrí cada uno de los regalos y todos eran justo lo que había pedido. Volteé y vi a mamá y papá bajar las
escaleras, salí corriendo para alcanzarlos y los abracé. ¡Feliz Navidad!, me dijeron. Mamá se quedó
conmigo, viendo los nuevos juguetes que obtuve por portarme bien durante todo el año, pero papá fue a
la puerta. ¡Llegaron!, nos dijo a mamá y a mí.
Como era tradición de todas las navidades, los abuelos y los tíos vendrían a casa para festejar juntos y
luego saldríamos al parque a pasear. Pasaron las horas y todos parecían divertirse, pero papá dijo que ya
sería la hora para salir.
Antes de salir por la puerta, fui a buscar uno de los regalos que más me habían gustado: un balón de
fútbol. Cuando salimos, nos dirigimos a un parque que quedaba cerca de la casa, toda la familia se reunió
y nos estábamos divirtiendo mucho. Yo jugué fútbol con mis tíos pero, en uno de los partidos, la pelota se
fue hacia el otro extremo del parque.
Fui tras ella y vi a un niño tomarla. ¡Es mía!, le dije. Él la soltó y se fue alejando, me sentí mal por gritarle,
así que me acerqué a él. ¡Feliz Navidad, lo siento!, le comenté. El niño solo me miró y pude notar que
estaba triste. Le pregunté por su familia, por lo que haría esta navidad, pero no respondió.
Al ver el balón de fútbol solo se me ocurrió entregárselo, pensé que eso lo haría feliz. En casa tendría más
juguetes esperándome, este niño no tendría ni uno. Me miró y con una sonrisa en el rostro me dijo
“muchas gracias”