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Lección 5 para el 30 de Abril de 2011

Aarón, el hombre privilegiado


 Fue comisionado por Dios para
acompañar a Moisés
(Éxodo, 4: 27-30)
 Fue el portavoz de Moisés ante
Faraón (Éxodo, 7: 1)
 Por el poder de Dios convirtió la
vara en serpiente y el agua del
río en sangre (Éxodo, 7: 10, 20)
 Junto a un selecto grupo, subió a
la montaña para ver a Dios
(Éxodo, 24: 9-10)
 Fue elegido Sumo Sacerdote
(Éxodo, 28: 2-3)

Nosotros, como sacerdotes, tenemos el privilegio de


disfrutar de las bendiciones de Dios (1ª de Pedro, 2: 9)
Aarón, el hombre pecador
Nosotros, aunque somos sacerdotes,
pecamos y nos arrepentimos; y, aún
así, Dios nos sigue considerando sus
sacerdotes.

Aunque al principio
Al construir el intentó eludir su
becerro de oro, Su posición de líder culpa, Aarón se
transgredió el hizo más grave su arrepintió y Dios le
segundo pecado. otorgó el honor del
mandamiento. sumo sacerdocio.
El sumo sacerdote actuaba
como mediador entre la
humanidad caída y un Dios
santo.
En su labor, representaba a
Jesucristo, nuestro gran
Cada creyente, Sumo Sacerdote.
como Para ello, debía representar
representante en su ministerio la santidad,
de Jesús en la pureza y la consagración,
este mundo, diferenciándose así del resto
debe reflejar el del pueblo.
carácter de
Jesús en su
vida.
Éxodo, 28: 39 La túnica blanca era una
túnica de lino. Con
referencia a esta túnica,
Josefo escribió: "Esta
vestimenta llega hasta los
pies y se ciñe al cuerpo;
tiene mangas apretadas a
los brazos”
(Antigüedades iii. 7. 2)
Esta túnica tenía un cinto
“de obra de recamador”
(hecho con un bordado
artístico)
La túnica blanca
representaba la Túnica
perfección del carácter y blanca
la santidad de Jesús.
Éxodo, 28: 31-35

El manto azul o manto del


efod se ponía sobre la
túnica blanca y en su orla
llevaba una línea de
granadas y campanillas
intercaladas.
Era un símbolo de la Manto
justicia (Isaías, 61: 10) azul

Túnica
blanca
“Las "campanillas" eran de oro puro (cap. 39: 25), y
estaban dispuestas en forma alternada con las
"granadas". Podían ser oídas por el pueblo cuando el
sumo sacerdote ministraba dentro del santuario (cap.
28: 35). El tintineo de las campanillas hacía que los
que rendían culto supieran que él estaba oficiando en
favor de ellos en la presencia de Dios, y los instaba a
con sus pensamientos y seguirle
sus oraciones, mientras él llevaba a cabo las diferentes
partes del ritual sacerdotal. El sonido de las campanillas unía al sacerdote y a
la congregación en el culto. Si el sumo sacerdote hubiese intentado realizar el
servicio del santuario sin llevar el manto con sus campanillas, hubiera roto ese
vínculo de comunión y el pueblo hubiera quedado separado de su intercesor.
Su ministerio se hubiera convertido en un procedimiento vano, sin razón de ser.
Para destacar la importancia de este eslabón entre el pueblo y su
representante, el castigo del descuido era la muerte (vers. 35). Las campanillas
y las granadas nos recuerdan que por fe nosotros podemos entrar
confiadamente en el "Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo" para
obtener el perdón de los pecados (Heb. 4: 16; 10: 19). Por fe también nosotros
podremos oír el sonido desde el santuario que dirigirá nuestra mente y nuestro
corazón hacia arriba al lugar donde Cristo está sentado a la diestra de Dios
para hacer intercesión por nosotros (Rom. 8: 34; Col. 3: 1-3; Heb. 8: 1, 2; CS
480)” Comentario Bíblico Adventista, sobre Éxodo, 28: 34
La mitra era de lino y sobre
Éxodo, 28: 36-38 ella llevaba una lámina de La mitra y la
lámina de oro
oro con la inscripción
“Santidad a Jehová”.
Ésta era la máxima que
debía regir toda la vida,
tanto del sacerdote como de
aquellos que le miraban.
Representaba la completa
consagración a Dios.
“Como aquel que os llamó es santo, sed
también vosotros santos en toda vuestra Manto
manera de vivir; porque escrito está: Sed azul
santos, porque yo soy santo” (1ª de Pedro, 1: 15-16)

Túnica
blanca
Las piedras
Éxodo, 28: 5-14 de ónice
La mitra y la
lámina de oro
El efod y su cinto eran
“obra primorosa” hecha
con oro, azul, púrpura,
carmesí y lino torcido.
Dos piedras de ónice en los El efod y
el cinto
hombros unían sus dos
partes. Sobre ellas estaban
escritos los nombres de las
12 tribus de Israel.
Su labor principal era Manto
sostener el pectoral del azul
juicio.

Túnica
blanca
Las piedras
Éxodo, 28: 15-30 de ónice
La mitra y la
lámina de oro
Estaba compuesto de los mismos El pectoral
materiales que el efod. Era de grosor del juicio
doble porque tenía que sostener el peso
de las doce piedras con los nombres de
las tribus de Israel y dos piedras El efod y
el cinto
“Urim y Tumim”.

Estas dos piedras servían para consultar a Dios


y conocer Su voluntad. Es por eso que el
pectoral recibe el nombre de “pectoral del
juicio”. Manto
azul

Túnica
blanca
Cuando Aarón se presentaba
ante Dios llevaba sobre sus EL PECTORAL DEL JUICIO
hombros los pecados de todos
los hijos de Israel (cuyos
nombres estaban grabados
sobre las dos piedras de ónice)
para interceder por ellos.
Igualmente, llevaba sobre su
corazón a cada hijo de Israel
(representado en cada una de
las doce piedras del pectoral),
mostrando ante Dios la
compasión que sentía por cada
uno de ellos.
Apelando a la justicia y a la
misericordia divinas, Aarón
solicitaba ante Dios el perdón
de los hijos de Israel.
Jesucristo, nuestro Sumo Sacerdote, intercede ahora por nosotros ante el Padre.
Él lleva sobre sus hombros el pecado de cada uno de nosotros y nuestro nombre grabado
sobre su corazón misericordioso.
Dios nos ama y está deseando que vayamos a Él para vestirnos con el manto de su justicia
y darnos poder para vencer las tentaciones, así como Él lo hizo.

“Por lo cual debía ser en todo semejante


a sus hermanos, para venir a ser
misericordioso y fiel sumo sacerdote en lo
que a Dios se refiere, para expiar los
pecados del pueblo. Pues en cuanto él
mismo padeció siendo tentado, es
poderoso para socorrer a los que son
tentados” (Hebreos, 2: 17-18)

“por lo cual puede también


salvar perpetuamente a los que
por él se acercan a Dios,
viviendo siempre para
interceder por ellos” (Hebreos, 7: 25)

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