el día de campo de

don Chancho

(Keiko Kasza)
 Era un día perfecto
para ir de paseo al
campo. Don chancho
se arregló con
esmero, quería visitar
a la señorita cerda e
invitarla a pasar el día
en el campo.
Espero que diga que sí,
pensó don chancho, y
para impresionarla
decidió llevar una flor
que había encontrado
por el camino.
 Rumbo a la casa de la
srta Cerda se encontró
con su amigo lobo,
cuando el lobo supo del
día de campo le dijo:
¿puedo darte un
consejo?, lleva mi
hermosa cola de lobo
Te das cuenta, ahora
te ves mucho más
audaz , a la señorita
cerda le va a gustar,
le dijo el lobo.
Después se encontró con
su amigo leon y le contó
de su día de campo,
¿ puedo darte un buen
consejo? Ponte mi
hermosa cabellera
 Te das cuenta,
ahora pareces
mucho más
valiente, a la srta
cerda le va a
encantar.
 Después se encontró con su
amiga la Cebra. Cuando Cebra
supo del día de campo le dijo:
¿puedo darte un consejo?
Ponte mis hermosas rayas.
Te das cuenta, ahora te ves mucho más elegante, a la srta Cerda le va a gustar, dijo la cebra.
Don chancho estaba muy agradecido.
 Finalmente llegó a la
casa de la Srta. Cerda y
golpeó la puerta
Buenos días , vengo a invitarla a un día de campo- dijo don chancho.
La Srta. Cerda lo miraba con terror
¡que horror! – gritó. Que monstruo tan horrible, si no te vas
inmediatamente llamaré a don chancho y él se hará cargo de ti!.
Don Chancho dio media vuelta y corrió a devolverle la cola a Zorro, la melena a León y las
rayas a Cebra. Después fue nuevamente a casa de la señorita Cerda y golpeo a la puerta.-
Buenos días. Vengo a invitarte a un día de campo. Le dijo.  - ¡Chancho!. Gritó ella-. ¡Qué
gusto me da verte!. Hace apenas un instante había un monstruo horrible  aquí. ¡Claro
que me encantaría acompañarte al campo!  Durante todo el camino la señorita cerda
habló del monstruo que la había visitado.  Don Chanco la escuchó atentamente pero
guardó muy bien su secreto.  ¡NO dijo ni pío! ¿Cómo iba a desilusionar a la señorita
Cerda?.