II Unidad

VARIABLES
AFECTIVAS
 INTRODUCCIÓN
Las dificultades del aprendizaje
académico aparecen frecuentemente
asociadas con variables de tipo
emocionales.

Sin embargo, no todas las personas

presentan las mismas dificultades, ni
ellas tiene el mismo origen.
En algunos casos los trastornos emocionales
son previos a las dificultades del aprendizaje,
y contribuyen a potenciar su impacto negativo
sobre el desarrollo psicológico.

En otros casos, en cambio, son consecuencia

de los problemas escolares y de la manera
equivocada como los alumnos, padres o los
profesores enfrentan el fracaso académico.
 En ambas situaciones, constituyen
un lastre que disminuye la
capacidad para solucionar las
dificultades y lograr un mejor
rendimiento, aumentando también
las dificultades en las relaciones
interpersonales.
 AUTOESTIMA

AUTOCONCEPTO

AUTOCONCEPTO
ACADÉMICO
AUTOESTIMA
 AUTOESTIMA
Es el valor que concedemos a la imagen que
tenemos de nosotros mismos, en otras palabras,
el cariño que nos tenemos por ser como somos.
Aceptando los propios logros y limitaciones.

Una persona que se siente sin confianza en sí

mismo, sin la sensación de quererse y de ser
querido dificilmente podrá lograr un nivel de
desarrollo adecuado en cualquier faceta de su
vida.
Autoconcepto
 Autoconcepto
La imagen que uno tiene de sí
mismo y que se encuentra
determinada por la acumulación
integradora de la información tanto
externa como interna.
 Autoconcepto
Así como me veo y pienso que las personas
me ven...

...así mismo me comporto y me muestro al

mundo.
 Autoconcepto Académico

Es la percepción que una persona tiene de

su valía como estudiantes. Se forma a
partir de las experiencias y de los
comentarios y apoyos que recibe de las
personas de su entorno.
Autoconcepto Académico
Autoconcepto Académico

El autoconcepto académico influye

sobre el rendimiento y viceversa; esto es,
un alumno que confía en sus aptitudes se
esforzará por conseguir buenos
resultados y esos buenos resultados
contribuirán a fortalecer la imagen de
buen estudiante.
 Por un lado, tanto el autoconcepto,
como la autoestima, permiten, de alguna
manera, resumir el sentimiento general
de bienestar de una persona.

El autoconcepto se revela como un de

las variables fundamentales del
desarrollo personal y social de los
individuos.