Hildegard Von

Bingen
Realizado por: Valerie Ortega, Gian Franco Loo, Adrian Rosas y Eva
Estévez
 BiOGRAFÍA
Hildegarda nació en Bermersheim, en el valle del Rin, durante el verano del año 1098.

​Fue la menor de los diez hijos y por eso fue considerada como el diezmo para Dios.

Fue dedicada por sus padres a la vida religiosa y entregada para su educación a la condesa
Judith de Spanheim,y por tanto,la instruyó en el rezo del salterio, en la lectura del latín

Desde niña, Hildegarda tuvo débil constitución física, sufría de constantes enfermedades y
experimentaba visiones. El monje Teodorico de Echternach se consignó el testimonio de la
propia Hildegarda, donde dijo que desde los tres años tuvo la visión de «una luz tal que mi
alma tembló».

La fama de santa y profetisa que llegó a tener la abadesa fue tal que, en 1150, A los pocos
meses de ser levantado el entredicho,el 17 de septiembre de 1179, a los 81 años de edad murió
Hildegarda.
Aportes en el campo filosófico
Escribió una obra extensa que incluye nueve volúmenes
sobre las ciencias naturales. En ambos textos describe el
mundo natural. Rescató a Pitágoras y a ella se deben
muchas ideas cosmológicas del pensamiento judeo-
cristiano. Es la primera mujer erudita cuya obra
teológico-filosófica en latín.

Su pensamiento dice que el hombre ha de conocer los

caminos de la vida, tanto buenos como malos, para elegir
cuál quiere recorrer, porque Dios ha hecho al hombre
libre, a fin de que sus actos sean loables o condenables, y le
ha otorgado su razón para que conozca la verdad y el
bien.
 Trascendencia
•Hildegarda es venerada por las Iglesias
que conforman la Comunión anglicana.
Se la celebra el 17 de septiembre.
•Sus obras fueron legadas a la posteridad
gracias al interés de los monjes. Entre
ellas: Riesencodex.
Sus obras religiosas que destacan son:
Scivias, Liber vite meritorum,•y Liber
divinorum operum.
aplicación
Ante los embates del Maligno, el hombre ha de conocer los caminos de la
vida, tanto buenos como malos, para elegir cuál quiere recorrer, porque
Dios ha hecho al hombre libre, a fin de que sus actos sean loables o
condenables, y le ha otorgado su razón para que conozca la verdad y el
bien.

Durante la vida diaria, una persona tiene la libertad de escoger entre una actitud buena
o mala, dependiendo de cómo la persona se oriente en la vida, si la persona realiza
buenos actos, se guiará por el camino de luz, de lo contrario seguirá en un camino lleno
de dificultades y malas esperanzas.