Víctimas

en contexto del estallido social

Valentina Farías
Xavier Martel
Pedro Quiroz
Contexto nacional

En la actualidad Chile se ve atravesado por una crisis social producida por

un colapso colectivo en una parte importante de la población, la cual vio
durante años como las malas prácticas desde los gobernantes e
instituciones que supuestamente los representan, permanentemente
buscaban el beneficio personal o de privados, dejándolos fuera de una
tutela estatal que garantice una situación digna en las condiciones de vida
Posible explicación de la crisis desde la concepción
psicológica de un contrato social
Desde la psicología de los sujetos involucrados y los postulados de Rousseau en
tanto a el contrato social, es posible hipotetizar que en la población chilena se rompió la
voluntad de los sujetos por vivir en el orden social establecido puesto que dejaron de
sentir y o vivenciar que aquellos esfuerzos y aportes a la sociedad tanto económicamente
como comportamentalmente, es decir siguiendo un actuar dentro de la norma, ya no
están siendo compensados con una retroalimentación por parte del estado que logre
solventar lo que la población considera como sacrificios por vivir en sociedad, es decir se
produce un sentir que lo aportado no es proporcional con lo recibido. Lo cual por
supuesto conlleva aspectos como frustración e impotencia frente a lo injusto
El rol del Estado
La ampliación de las funciones del Estado lo convierten en blanco de duras críticas no solamente
en el ámbito económico, sino que también en su rol de prestador de servicios tales como la educación, la
salud, el transporte, etc. Pese al carácter democrático de las elecciones de los gobernantes, la
ciudadanía se ha vuelto en contra de aquellos quienes fueron elegidos por una mayoría, en especial en
contra del ejecutivo. Los partidos políticos, por su parte, han tenido un papel más bien estéril a lo largo
del proceso, pues el movimiento social no se abandera con ninguno de ellos y han sido criticados debido
al pobre apoyo que han prestado a la ciudadanía, incluso aquellos que conforman la oposición.

Respondiendo solamente de manera parcial y con poca profundidad a las demandas sociales, el
Estado se ha centrado en generar medidas represivas tales como el decreto del estado de emergencia y
la promulgación de leyes que penalicen las manifestaciones.
Estado de derecho
Dentro de la criticada constitución política de Chile de 1980 y las leyes de la
república se encuentra configurado el Estado de derecho, el cual se refiere - básicamente- a un
Estado en el que toda acción y/o persona se encuentra sujeta a los códigos y leyes vigentes.

A simple vista Chile podía jactarse de regirse por un Estado de derecho, pero las
manifestaciones del último tiempo han denunciado el carácter anticonstitucional de muchas
acciones del Estado, como la poca atención prestada al cumplimiento de tratados
internacionales de derechos humanos por parte del Estado y las Fuerzas Armadas y de Orden , o
el pobre interés del Estado por el bien común y la realización espiritual y material de los
integrantes de su comunidad nacional.
Represión policial

Ante las multitudinarias manifestaciones la respuesta del estado ha sido cubrir

los territorios con efectivos policiales que se han encargado de reprimir a la gente,
muchas veces sin seguir un protocolo que respalde sus acciones, lo cual ha
provocado una gran cifra de víctimas en manos de carabineros y militares en el
periodo de estado de emergencia

Principalmente se han conocido casos graves de violación a los derechos

humanos.
Violación a los derechos humanos
¿Qué se entiende por víctima?

Todas las personas que hayan sufrido daño físico, psicológico, material o
menoscabo de sus derechos fundamentales como consecuencia de una acción
u omisión que viole la legislación penal vigente o producto de un hecho
traumático

Las víctimas pueden ser de carácter individual o colectivo y se califican en

diferentes tipos: directa e indirecta, de riesgo o vulnerable
Tipos de víctima
● Víctima directa ● Víctima indirecta:
Corresponde a los familiares o
Es la persona que directa y
personas que tengan una relación
explícitamente ha sufrido un daño o
inmediata con la víctima. Así como
perjuicio a su persona o su patrimonio
también a las personas que hayan sufrido
daños al intervenir a la víctima en peligro
o al prevenir la victimización.
Tipos de víctima
● Víctima de riesgo: ● Víctima vulnerable:
Persona que posterior al daño que
Persona con mayor probabilidad de
ha sufrido, queda excesivamente afectada
ser víctima. En el contexto de crisis
psicológicamente debido a su precariedad
social, algunas víctimas de riesgo pueden
emocional. En el contexto nacional, éstas
ser los manifestantes de primera línea
son las personas que padecen de
trastornos mentales o que recientemente
hayan sido expuestas a un estrés
importante
 Tipos de víctima en el contexto nacional actual

● Víctimas directas: ● Víctimas indirectas:

Toda persona lesionada tanto física Familiares y personas dentro del

como psicológicamente a raíz de
mecanismos de represión estatales, Toda
persona cuyo patrimonio haya sido afectado
por acciones criminales como saqueos
durante el desarrollo de movimientos
sociales, desde PYMES hasta Holdings
círculo vincular cercano a las víctimas
directas mencionadas previamente, que
vean menoscabado su ritmo de vida
cotidiano o estabilidad psicológica
Tipos de víctima en el contexto nacional actual
● Víctimas de riesgo:
Actualmente cualquier transeúnte
del espacio físico en el cual se produzcan
enfrentamientos entre manifestantes y
fuerzas represoras, estén involucrados de
forma directa o no.
● Víctimas vulnerables:
Toda persona con secuelas
psicológicas a raíz de haber sufrido algún
tipo de agresión, por ejemplo personas con
lesión ocular, heridas de perdigón,
detenidos, torturados, etc.
Otro ejemplo son las víctimas de la
dictadura militar en Chile han re
experimentado vivencias traumáticas que
traen consigo emociones negativas como el
miedo, la pena o la rabia.
 Victimación:
La victimación se refiere al proceso en que una persona sufre las consecuencias de un hecho
traumático o delictivo que tiene trascendencia social y supone una ruptura en la trayectoria vital. Se
clasifica en tres tipos:

● Victimación primaria → Entendido como el proceso por el cual una persona sufre de modo
directo o indirecto, daños físicos o psíquicos derivados de un hecho delictivo o acontecimiento
traumático.

● Victimación secundaria → Referido a aquellos impases que sufre la víctima durante el proceso
penal y enjuiciamiento

● Victimación terciaria: → Entendido como aquellos daños que sufre el victimario posteriormente a
Victimización en el contexto actual

En la actualidad podemos referirnos a procesos de victimización primaria y

secundaria. El primero ha sido experimentado en primera persona por la víctimas, y
el segundo, puede referirse a la tergiversación de la información dada por los medios
de comunicación masiva en donde se tiende a estigmatizar o disminuir la veracidad
de los hechos ocurridos, posicionando a la víctima en una condición desfavorable
Desvictimización

Referido a los procesos los cuales mediante intervención y asistencia social, se

intenta reparar y reconstruir aquellos aspectos dañados en el sujeto durante la
victimización

En relación al contexto nacional, queda pendiente el desafío de establecer

políticas públicas orientadas a la reintegración y reinserción de las víctimas, es
necesario que sean reconocidas socialmente con el objetivo de desestigmatizar y
prevenir su victimización
Criminalidad en el contexto social actual
Criminalidad entendida como el conjunto de todos los hechos antisociales cometidos
contra la colectividad, desde lo jurídico apunta hacia el conjunto de infracciones de fuerte
incidencia social cometidas contra el orden público.

Es posible hacer una doble interpretación acerca de quienes resultan ser aquellos que
incurren en conductas punibles en el desarrollo de los movimientos sociales actuales.

Por una parte aquellos sujetos que realizan vandalismo, saqueos y perturbaciones del
orden público, los generalmente conocidos como encapuchados. Mientras que por otra parte los
miembros de las fuerzas policiales represivas que han actuado constantemente con fuerza
desmedida y bajo un criterio más que cuestionable en su participación
 El problema de las víctimas sin agresores
Un ejemplo típico de una víctima sin agresor son
aquellas afectadas por catástrofes naturales, o todos
aquellos casos en los que no existe un responsable humano
para la agresión. En situaciones así la responsabilidad suele
caer sobre el Estado por no haber sido capaz de evitar o
prever la desgracia.
Como mencionamos anteriormente, la criminalidad en
el contexto actual suele recaer sobre los denominados
encapuchados o sobre los efectivos policiales, y el problema
de esto radica en la dificultad para identificar al agresor en
cualquiera de ambos casos. Es prácticamente imposible, pues
ambos sujetos utilizan sus propios mecanismos para ocultar
su identidad.
La segunda parte del problema radica en que
el Estado no se ha hecho responsable en ninguno de
los casos de forma contundente, aun cuando se ha
solicitado su intervención.
En el caso de la agresión por parte de la policía
las acciones se han limitado a restringir el uso de
ciertas municiones, mientras que en el caso de los
saqueos y similares la solución ha sido proponer
bonos para las Pymes afectadas.
¿Qué hacer cuando no hay agresores y el
Estado no se hace cargo de manera efectiva?
Juicio público de la criminalidad y lo transmitido
por lo medios masivos de comunicación

Durante este tiempo se ha mostrado principalmente desde la televisión una dura crítica a
las manifestaciones buscando generar repudio a las personas que ejercen el legítimo derecho a
protestar en la vía pública y se ha logrado, puesto que existe una percepción ampliamente
generalizada de marginalización hacia los manifestantes a través de un proceso
sistemáticamente selectivo, es decir se decide evidenciar como criminal lo que resulta funcional
para el sistema actual, puesto que la amplia variedad de delitos de cuello blanco, rara vez se les
da tanto énfasis en la televisión abierta, aun cuando sus daños a los bienes jurídico universales
en proporción son por mucho más graves que los de los manifestantes
Cifra negra de criminalidad en el movimiento social

Cifra negra → Entendida como aquella distancia estadística que existe entre la criminalidad
registrada de forma oficial y la ocurrida de forma real .

Es de conocimiento público el que las cifras de víctimas producto de la represión policial

entregadas por las autoridades e incluso por las instituciones responsables, no se acercan a lo
potencialmente ocurrido en su totalidad. Esto sumado a que ha existido constantemente un
interés por disminuir el perfil de las vulneraciones a los derechos fundamentales de las personas,
lo cual incluso incurre en un acto de revictimización a aquellos que fueron dañados por las
fuerzas represoras del estado. No asi lo ocurrido con las pérdidas y conteos de bienes materiales
de privados, cifras las cuales han sido sobre difundidas en los medios masivos de comunicación,
evidenciando la selectividad a la hora de realizar los cálculos estadísticos de los afectados
durante las movilizaciones sociales.
Proceso de socialización implicados en criminalidad

Dentro de lo tan ampliamente criticado socialmente como lo es la figura del “lumpen”, es decir
aquel sujeto marginal, considerado delincuente incluso en ocasiones a priori, es necesario
realizar un análisis desde los procesos de socialización en los cuales se desarrollan dichos
sujetos, puesto que en la gran mayoría de los casos, se encuentra la presencia de un círculo
cercano de infancia y adolescencia sumamente saturado por violencia y delitos, son niños
sename, son personas que en su mayoría no tienen aspiraciones de realización académica, ya
que nunca lo conocieron o dentro de sus elementos vinculares nunca fue un aspecto a
potenciar. Es por esto que uno de los objetivos de este material didáctico es justamente abrir
esa interrogante, acerca de si estos individuos tan duramente criticados tienen un porcentaje
mayoritario de responsabilidad en el desarrollo de las conductas criminales o simplemente
siguen un patrón preestablecido por el funcionamiento del sistema neoliberal.