FACULTAD DE CIENCIAS DE LA ADMINISTRACIÓN

CARRERA PROFESIONAL DE ADMINISTRACIÓN DE EMPRESAS

RESUMEN DEL LIBRO “EL PRÍNCIPE”

 CATEDRA: Gestión de la calidad

 CATEDRÁTICO: :

Lic. ALEJANDRO ANIBAL AGUIRRE ROJAS

 ESTUDIANTES: HUIZA QUINTE, Lizbet

PACHECO CALSINO, Marlon

PAUCAR PEREZ, Thalía

TUNQUE ESTEBAN, Walter

VILLOSLADA YANCE, Génesis

SEMESTRE: VIII-B
 CAPÍTULO I:
CAPÍTULO II:
DE LAS DISTINTAS CLASES DE ´PRINCIPADOS Y
DE LOS PRINCIPADOS HEREDITARIOS
DE LA FORMA EN QUE SE ADQUIEREN
Los principados pueden gobernarse y conservarse:

se menciona acerca de los

principados que reinaban a los Los principados hereditarios no siempre hacen cosas
Estados.
diferentes, por el contrario continúan con la línea de trabajo
que se ha venido desarrollando durante años anteriores. Los
¿porqué muchas veces solo habían principados que se desarrollan de esa manera son fáciles de
durante muchos años de gobierno la
descendencia de una misma familia? conservar por han venido siendo pasados durante
generaciones.

Hereditarios Nuevos
 CAPÍTULO IV:
CAPÍTULO III: POR QUÉ EL REINO DE DARÍO, OCUPADO POR
DE LOS PRINCIPADOS MIXTOS ALEJANDRO, NO SE SUBLEVÓ CONTRA LOS
SUCESORES DE ESTE DESPUÉS DE SU MUERTE

Cuando el principado no es enteramente nuevo, sino miembro

¿Cómo sucedió que hecho Alejandro Magno
añadido a un principado antiguo que se posee de antemano
dueño de Egipto y del Asia Menor en un corto
número de años, y habiendo muerto a poco de
haber conquistado esos territorios sus
Dificultad: Los hombres cambian con gusto de Señor, creyendo
sucesores, en unas circunstancias en que
mejorar; y esta creencia los impulsa a tornar las armas contra
parecía natural que todo aquel Estado se
él; en lo cual se engañan, pues luego la experiencia les enseña
rebelase, lo conservaron?
que han empeorado.

Forma de gobierno
Luis XII, rey de Francia, ocupó rápidamente a Milán, y
rápidamente lo perdió; y bastaron la primera vez para Por un príncipe
Por un príncipe que
arrebatárselo las mismas fuerzas de Ludovico Sforza; porque asistido por nobles
elige de entre sus
los pueblos que le habían abierto las puertas, al verse que, no a la gracia del
siervos, a los ministros
defraudados en las esperanzas que sobre el bien futuro habían señor, sino a la
que lo ayudarán a
abrigado, no podían soportar con resignación las imposiciones antigüedad de su
gobernar
del nuevo príncipe. linaje, deben la
posición que ocupan.
 CAPÍTULO V:
DE QUÉ MODO HAY QUE GOBERNAR LAS CIUDADES O
PRINCIPADOS QUE, ANTES DE SER OCUPADOS, SE
REGÍAN POR SUS PROPIAS LEYES

No era bueno que los habitantes de los

La forma de conservar un estado
pueblos vivieran con libertad porque de
en ese entonces se podía dar de
tres maneras: esa manera no se acostumbrarían al
sometimiento del nuevo gobierno y se
 Primero destruyendo todo lo que
correría el riesgo de que pudieran
hay en él.
 Habitando en su interior. generar una rebelión lo que afectaría al
 Finalmente estableciendo una serie nuevo gobernado ya que podría ser él
de leyes bajo las que se regirá el
(nuevo gobierno) el que termine
pueblo
derrotado.
 CAPÍTULO VI:
DE LAS SOBERANÍAS NUEVAS QUE UNO ADQUIERE CON SUS PROPIAS ARMAS Y VALOR

• Para lograr los objetivos se tiene que apuntar más alto a este
• Los que por medios semejantes llegan a ser príncipes no
adquieren su principado sin trabajo, pero le conservan
fácilmente; y las dificultades que ellos experimentan al
adquirirle dimanan en parte de las nuevas leyes y modos que les EJEMPLO:
es indispensable introducir para fundar su Estado y su seguridad
Convenía que Rómulo, a su nacimiento,
no quedara en Alba, y fuera expuesto,
para que él se hiciera rey de Roma y
fundador de un Estado de que formó la
patria suya. Era menester que Ciro hallase
a los persas descontentos del imperio de
los Medos, y a éstos afeminados con una
larga paz, para hacerse Soberano suyo.
Teseo no hubiera podido desplegar su
valor, si no hubiera hallado dispersados a
los atenienses.
 CAPÍTULO VII:
DE LOS PRINCIPADOS NUEVOS QUE SE ADQUIEREN CON LAS FUERZAS AJENAS Y LA FORTUNA

COMPRÁNDOLO O Darío hizo varios príncipes que debían

tenerlas por su propia gloria, como
HACIÉNDOLO DAR POR
también por su propia seguridad.
FAVOR

PRÍNCIPE
Francisco, de simple particular que él
era, llegó a ser duque de Milán por
medio de un gran valor y de los
recursos que su ingenio podía
suministrarle.
A SABER, CON EL VALOR
O FORTUNA
Alejandro VI quería elevar a su hijo el
duque a una grande dominación, y veía
para ello fuertes dificultades en lo
presente y futuro.
 CAPÍTULO VIII:
De los que llegaron al principado por medio de maldades

se eleva por una vía malvada y detestable al principado, presenta la historia de dos ejemplos
suyos: el uno antiguo, y el otro moderno. Me ceñiré a citarlos sin profundizar de otro modo
la cuestión, porque soy de parecer que ellos dicen bastante para cualquiera que estuviera
en el caso de imitarlos.
El segundo cuando un hombre llega a ser príncipe de su patria con el favor de sus
conciudadanos. siciliano
Agatocles
Un príncipe debe, ante todas cosas, conducirse con sus gobernados de modo que ninguna
casualidad, buena o mala, le haga variar, porque si acaecen tiempos penosos, no le queda
ya lugar para remediar el mal; y el bien que hace entonces, no se convierte en provecho
suyo. Le miran como forzoso, y no te lo agradecen.

Oliverot de
Fermo
 CAPÍTULO IX:
Del principado civil

Vengamos al segundo modo con que un particular puede

hacerse príncipe sin valerse de crímenes ni violencias
intolerables. Es cuando, con el auxilio de sus conciudadanos,
llega a reinar en su patria. Nabis príncipe entre los espartanos
En cuanto al principado, se promueve su establecimiento por el
pueblo o por los grandes, según que el uno u otro de estos dos
partidos tienen ocasión para ello. Cuando los magnates ven
que ellos no pueden resistir al pueblo.
Pero el que llega a la soberanía con el favor popular se halla
sólo en su exaltación; y entre cuantos le rodean, no hay
ninguno, o más que poquísimos a lo menos, que no estén
prontos a obedecerle.
Por otra parte, no se puede con decoro, y sin agraviar a los
otros, contentar los deseos de los grandes.
 CAPÍTULO x:
Cómo deben medirse las fuerzas de todos los principados

Pueden sostenerse los príncipes por sí mismos, cuando

tienen suficientes hombres y dinero para formar el
correspondiente ejército, con el que estén habilitados para
dar batalla a cualquiera que llegara a atacarlos. Necesitan
de los otros, los que no pudiendo salir a campaña contra los
enemigos, se ven obligados a encerrarse dentro de sus
muros y ceñirse a guardarlos.
 CAPÍTULO XI: CAPÍTULO XII:
LOS PRINCIPADOS ECLESIÁSTICO TIPOS DE EJÉRCITO: LOS EJÉRCITOS MERCENARIOS

Las tropas se integran por gente que esta

Para la adquisición no se necesita dispuesta a dar un servicio a su nación pero debían
gozar de buena posición ni de mucha de cuidarse de la sed de ambición sobre todo de
fortuna, únicamente necesita de los soldados mercenarios, puesto que son los que
reconocimiento por su labor más tienen más deseos de Poder y podrán en un
espiritual, con en el caso de los papas futuro traicionar fácilmente. Pero a la ves en la
que ejercían el poder por medio de la guerra son sanguinarios y no tienen compasión
ideología y que por mas de mil años alguna por la vida humana, es entonces cuando
manipularon y dominaron los pueden en batalla alcanzar un gran numero de
principados, les creaban a la victorias debido a esta razón.
población un cierto temor divino y
una sanción religiosa. Entonces se
dice que hicieron su voluntad, papas
que intervenían en la política de los
principados como es el caso de
Alejandro VI que dividió el territorio
de las colonias.
 CAPÍTULO XIII:
LOS EJÉRCITOS AUXILIARES, MIXTOS Y PROPIOS

Los soldados mercenarios fueron los que

constituyeron el ejército francés cuando expulsan
a los ingleses del territorio franco, que por más de
100 años habían estado establecidos en Francia,
la unión para la liberación consto de que todos los
pobladores de Francia formaron un gran ejército
con el que fueron derrotando poco a poco a los
Ingleses hasta lograr que estos salieran de
territorio franco.
 CAPÍTULO XIV:
DEBERES DE UN PRÍNCIPE FRENTE AL EJÉRCITO
ESPECIALMENTE LOS PRÍNCIPES, SON LOADOS O
El príncipe no ha de tener otro objeto,
ni abrigar otro propósito, ni cultivar
otro arte, que el que enseña, el orden y
la disciplina de los ejércitos, porque es
el único que se espera ver ejercido por
el que manda.
CAPÍTULO XV:
CUALIDADES POR LAS QUE LOS HOMBRES, Y
CRITICADOS
Los príncipes, por hallarse colocados
a mayor altura que los demás, se
distinguen por determinadas
prendas personales, que provocan la
alabanza o la censura. Según el
interés con el que desempeñen la
función pública.

La guerra se justifica en el propósito con

el que se llevo a cabo, el príncipe tiene
que pensar la situación de tal manera
que solo declare la guerra en casos
necesarios o de interés.
 CAPÍTULO XVI:
DE LA PRODIGALIDAD Y DE LA AVARICIA
Según el autor se sigue insistiendo en la
necesidad del príncipe de transmitir a otros la
idea de que él cuenta con virtud
Un príncipe así acostumbrado a
proceder consumirá en tales
obras todas sus riquezas y se
verá obligado, si desea
conservar su reputación, a
imponer excesivos tributos, a
ser riguroso en el cobro y hacer
todas las cosas que hay que
hacer para procurarse dinero.
Lo cual comenzará a tornarlo
odioso.
CAPÍTULO XVII:
DE LA CRUELDADY LA CLEMENCIA; Y SI ES MEJOR SER AMADO
QUE TEMIDO, O SER TEMIDO QUE AMADO.
Para exponer el cómo deben ser empleadas durante el
ejercicio del poder tanto la crueldad como la compasión,
las cuales debe ser administradas de forma correcta por
el príncipe.
Así mismo, expone sus comentarios
sobre la importancia de ser un líder
amado, o por el contrario si es mejor
ser temido, llegando a la conclusión de
que el príncipe debe en todo momento
generar en sus súbditos, de forma
simultánea, el amor y el temor, como
forma de proteger su posición.
 CAPÍTULO XVIII: CAPÍTULO XIX:
DE QUE MODO LOS PROMESAS DE QUE MODO DEBE EVITARSE SER DESPRECIADO Y ODIADO.

Pensando también que el príncipe es un ser

Así mismo, dentro de la virtud
debe exponer y mantener el humano, el cual comete errores, y en ocasiones
Príncipe, se encuentra sobre debe tomar decisiones que no dejan a todos ser
todo el valor de la palabra
dada. felices, Maquiavelo toma un capítulo de su obra
para explicarnos a los posibles príncipes como
evitar que el odio sea un sentimiento que nazca
En sentido, el autor de la obra
Maquiavelo explica al soberano hacia él, pensando nuevamente en que todo
las estrategias que puede seguir príncipe debe ser amado por sus súbditos.
para en todo momento cumplir
con lo dicho, o como no quedar
mentiroso aun incumpliendo lo
Para ser respetado, el príncipe, tiene necesariamente que
prometido.
ser bueno y querido por los suyos. Un príncipe debe
temer dos cosas: que se le subleven los súbditos y que lo
ataquen potencias extranjeras. En el interior estarán
aseguradas las cosas cuando lo estén en el exterior.
 CAPÍTULO XX:
SI LAS FORTALEZAS, HAY MUCHAS OTRAS COSAS QUE LOS
PRÍNCIPES HACEN CON MUCHA FRECUENCIA SON ÚTILES O NO

Continuando con la lista de consejos para el príncipe, o

quien desee mantener el poder, Maquiavelo entra
entonces al terreno de que tan útiles o no son las cosa
que un príncipe hace diario, incluso aquellas referidas al
ámbito bélico. Los príncipes para poder
conservarse acostumbraron a
construir fortalezas que fuesen
Un príncipe nuevo al que le es rienda y freno para quienes se
más necesario adquirir fama, la atraviesen a obrar en su contra.
fortuna le suscita enemigos y Las fortalezas son útiles si en
guerras en su contra para poder unas ocasiones favorecen y en
darle la oportunidad de que las otras perjudican. No hay mejor
supere y pueda elevarse a mayor fortaleza que el no sr odiado por
altura. el pueblo.
CAPÍTULO XXI: Cómo debe comportarse un príncipe/para
ser estimado
Grandes empresas y ejemplo de raras virtudes.

• FERNANDO DE ARAGÓN.

Hallar medidas sorprendentes el lo que se refiere

a la administración.
• BERNABÓ DE MILAN

Ser capaz de ser enemigo o amigo franco.

• ANTIOCO

Ser amante de la virtud y honrar a los que se

distingan de las artes.
CAPÍTULO XXII: De los secretarios del príncipe

La elección de los ministros, será buena o mala según la cordura del príncipe.
La primera opinión que se tiene del juicio de un príncipe se funda en los hombres
que lo rodean si son capaces y fieles, cuando no lo son, no podrá considerarse a un
príncipe que el primer error lo cometa en esta elección.
Para que el príncipe mantenga constante la fidelidad de un ministro, debe pensar en
él, así pueden confiar unos en otros.
CAPÍTULO XXIII: Como huir de los aduladores

* Un príncipe debe preferir un tercer modo: rodearse de los hombres de

buen juicio de su Estado, únicos a los que dará libertad para decirle la
verdad. Debe interrogarlos sobre yodos los tópicos, y fuera de ellos no
escuchar a ningún otro.
* Un príncipe debe pedir un consejo siempre que él lo considere
conveniente y no cuando lo consideren los demás. Y si pide consejo a más
de uno, los consejos serán siempre distintos y a un príncipe que no sea
sabio no le será posible conciliarlos.
CAPÍTULO XXIV: Porque los príncipes de Italia perdieron
sus estados

Se observa mucho, más celosamente a conducta de un príncipe nuevo

que la de uno heredero, si los hombres la encuentran virtuosa, se
sienten más agradecidos y se apegan más a él que a uno de linaje
antiguo.
El príncipe tendrá la gloria de haber creado un principado nuevo y
haberlo mejorado.
Si se examina el comportamiento de los príncipes de Italia, se
encontrará en primer lugar , en lo que refiere a las armas una falta
común a todos. Unos tuvieron un pueblo por enemigo, y el que lo
tuvo por amigo no supo asegurarse de los nobles.
Estos príncipes en épocas de paz nunca pensaron que podrían
cambiar las cosas, cuando se presentaron tiempos adversos, atinarían
a huir y no a defenderse.
CAPÍTULO XXV: Del poder de la fortuna de las cosas
humanas y de los medios para oponérsele

Un príncipe que hoy vive en la prosperidad y mañana en la desgracia se

debe a que confía ciegamente la fortuna. Es feliz el que se concilie con su
manera de obrar con liándole de las circunstancias.
Los hombres para lograr el fin que se proponen proceden de manera
distinta: con cautela, con ímpetu, por violencia o por astucia. Dos que
actúan de distinta manera obtienen el mismo resultado y de otros dos
que actúan d igual manera uno alcanza su objetivo y el otro no.
No existe hombre lo suficientemente flexible como para adaptarse a
todas las circunstancias.
El hombre cauto fracasa cada vez que e necesario ser impetuoso. Que si
cambiase de conducta junto con las circunstancias.
La fortuna varia y los hombres se empeñan en proceder de un mismo
modo, serán felices mientras vayan de acuerdo con la suerte, e infelices
cuando estén en desacuerdo con ella.
CAPÍTULO XXVI: Exhortación a liberar a Italia de los
bárbaros

Después de meditar en todo lo expuesto, las circunstancias son propicias para que un
nuevo príncipe pueda adquirir gloria, y si se encuentra en ella cuanto es necesario a un
hombre prudente y virtuoso para instaurar una nueva forma de gobierno, por lo cual se
honraría a sí mismo, haciendo la felicidad a los italianos.