Los alumnos deben tener voz en la toma de decisiones; debemos
convivir democráticamente fomentando la responsabilidad individual y colectiva en torno a la clase, permitiendo y facilitando la participación de todo el alumnado en la toma de decisiones sobre todo lo que afecta a este entorno.
Inteligencia Emocional en la Educación, Euroinnova, España, 2016