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¿Qué es el Barroco?
Surge en una época donde existían muchas tensiones entre países católicos y protestantes, entre las monarquías
parlamentarias y las absolutistas. Se desarrolla en Europa Occidental y en algunas de sus colonias de América,
especialmente Latinoamérica, constituyendo el escalón entre el manierismo y rococó.
Su origen se ubica específicamente en Italia, en el período Seicento, primordialmente en Roma, la sede pontificia,
lugar donde el arte se utilizó como propaganda para difundir la doctrina contrarreformista. Se hizo particularmente
popular en Francia, España y Austria.
Por mucho tiempo, el término barroco fue utilizado de manera despectiva para hacer referencia a lo caprichoso,
recargado y engañoso. Fue para el siglo XIX que la palabra barroco se revaloriza y se comienza a utilizar no solo para
hacer referencia al período, sino para denominar cualquier tendencia artística que fuese en contra del clasicismo.
El arte y la arquitectura barrocos tienden a ser muy extravagantes y muestran movimiento, tensión, emoción y un uso
dramático de la luz y la sombra.
Dado que el periodo barroco coincidió con el Renacimiento italiano, no es una sorpresa que los dos movimientos
compartieran algunas similitudes estilísticas. Tanto los artistas del Renacimiento como los del Barroco emplearon el
realismo, colores intensos y temas religiosos o mitológicos, mientras que los arquitectos que trabajaban en ambos
estilos favorecían el equilibrio y la simetría. Sin embargo, lo que diferencia al estilo barroco de su contraparte
renacentista es su opulencia, una característica presente tanto en su arte como en su arquitectura.
Esta etapa se identificó por un cambio en la forma en la que se concebía el arte, impactando en numerosas áreas del
saber y de la cultura, entre ellas la literatura, las bellas artes, la arquitectura, entre otras.
PINTURA
Si bien los temas e incluso el estilo pueden variar entre las pinturas barrocas, la mayoría de las piezas de este periodo
tienen un elemento en común: el dramatismo.
En la obra de pintores famosos como Caravaggio y Rembrandt, su interés en la teatralidad se materializa en intensos
contrastes entre la luz y la sombra.
Caravaggio, ‘La vocación de San Mateo ‘ (ca. 1599 o 1600) Rembrandt, ‘La ronda de noche' (1642)
Artistas barrocos como Gentileschi, Poussin y Rubens
lograron una mayor sensación de dramatismo a
través del movimiento. A menudo, la acción en sus
cuadros estuvo inspirada en cuentos de la Biblia e
historias de la mitología clásica.
ESCULTURA
Bernini, ‘Éxtasis de Santa Teresa' (1647–1652) Charles Le Brun, fuente de Apolo en los Jardines
de Versalles (1668-1671)
Arquitectura
Se caracteriza por la preferencia de plantas arquitectónicas en forma de óvalo y por la búsqueda de la sensación
de movimiento y sensualidad, así como de grandeza, dramatismo y contraste.
Uno de los mayores representantes italianos fue Gian Lorenzo Bernini (1598-1680).
INTERIORES
Al igual que el arte de esta época, los interiores barrocos transmitían un interés por una estética exagerada. Los
muebles y otras piezas de arte decorativo frecuentemente presentaban diseños estampados que recuerdan al
follaje en espiral, así como otros elementos inspirados en el mundo natural. De forma similar, los putti—
motivos ornamentales en forma de Cupido—adornaban comúnmente tapices y pinturas en los techos.
Otro de los aportes de la música en este tiempo fue el nacimiento de la ópera, un espectáculo cantado que
contaba con recursos de diferentes disciplinas. Aunque tuvo sus orígenes en el teatro griego, la ópera fue
desarrollada a finales del siglo XVI. La obra La Dafne (con libreto de Ottavio Rinuccini y música de Jacobo Peri)
fue escrita en 1597 y es considerada la primera ópera.
Se toma como final del período barroco en la música la muerte del compositor alemán Johann Sebastián Bach
en 1750.
No menos importante, el barroco fue el responsable de la invención de la orquesta, aunque para entonces se
trataba de una orquesta más pequeña de las que conocemos actualmente.
La creatividad de la música barroca no se limitó a las características del nuevo lenguaje musical.
Numerosos géneros musicales fueron creados en el barroco, tales como la ópera, el oratorio, la cantata, la
sonata, el concerto grosso y la suite.
La ópera fue impulsada por el compositor Claudio Monteverdi. Integraba el arte teatral con el canto, y se
componía esencialmente de recitativos y arias para solista, coros y una obertura instrumental.
El oratorio también está asociado al canto de un relato, pero este no se escenifica. Los relatos de los oratorios
son religiosos, de allí su nombre. Por su parte, la cantata es una forma musical destinada a ser cantada, ya
temas religiosos, ya temas seculares, la cual combina números instrumentales con recitativos, arias y coros.
En cuanto a la música instrumental, la sonata se destinó a la exposición de uno o más instrumentos solistas,
mientras que el concerto grosso significó el inicio de la música orquestal. A esto se añadió la suite, una sucesión
de piezas para danzar, normalmente estructurada en cuatro movimientos.
Literatura
Si durante el Renacimiento reinaba un espíritu de
optimismo y fe en la capacidad humana para el progreso,
con la llegada del Barroco esa llama se apaga.