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CRISIS

El 11 de septiembre de 2001, cuatro aviones fueron secuestrados por miembros de


al Qaeda para atentar contra edificios emblemáticos de Estados Unidos. Se
produjeron 2.996 muertes, siendo el mayor ataque terrorista estadounidense de la
historia. Además, hubo cientos de fallecidos en los años posteriores debido a las
enfermedades causadas por las miles de toneladas de escombros tóxicos derivados
de la caída de las Torres Gemelas.

Cuando un país sufre un ataque terrorista se produce una crisis que tiene muchas
derivadas. Entre ellas, la política, la económica, la social, etc., y también la relativa a
la comunicación. Esto hizo que la lucha contra el terrorismo se convirtiese en el
objetivo principal de Estados Unidos y sus aliados en occidente.

A nivel político, este atentado supuso un cambio en las políticas de seguridad


nacionales y una intensificación en los esfuerzos de Estados Unidos en su Guerra
contra el Terrorismo, de manera que llevaron a cabo una invasión en Afganistán con
el objetivo de derribar al régimen talibán, que acogía Al-Qaeda.

Los ataques terroristas tuvieron un gran impacto en la economía estadounidense, la


cual venía sufriendo secuelas de crisis anteriores. Los principales afectados fueron
los índices bursátiles de Nueva York de manera que las autoridades tuvieron que
suspender las cotizaciones hasta el 17 de septiembre. Las acciones que sufrieron
una mayor caída fueron las aerolíneas y las aseguradoras, sin embargo, éstas se
recuperaron rápidamente llegando en noviembre a alcanzar los niveles previos al
atentado.

Además, el ataque también supuso un gran golpe para las empresas cuyas oficinas
estaban situadas allí y para los pequeños comercios situados en Manhattan o cerca
del Pentágono. En Nueva York la actividad turística y la ocupación hotelera se situó
por debajo del 40% en las siguientes semanas.

Cabe destacar que este atentado también tuvo consecuencias en los países
occidentales, provocando una sensación de inseguridad entre la población. Esto
llevó a muchas personas a evitar los sitios muy concurridos, como por ejemplo los
centros comerciales. El turismo y el comercio se vieron influenciados por este
suceso.

No obstante, también hubo algunos sectores que se beneficiaron de esta situación,


como son la industria militar y los fabricantes de equipos de seguridad. Esto se debe
a que los gobiernos y las empresas hicieron inversiones para reforzar sus sistemas
de seguridad y en armamento más sofisticado.
Si comunicar una crisis de cualquier índole resulta un ejercicio complejo con el que
no siempre se logran los objetivos previstos, hacerlo cuando hay un atentado tiene
una dificultad aún mayor.

https://theconversation.com/las-consecuencias-economicas-del-11-s-167732

https://insightreports.iese.edu/lecciones-del-11-de-septiembre-operaciones-en-tiem
pos-de-crisis/

https://www.ufv.es/wp-content/uploads/2019/04/P%C3%A1ginas-desdeEstudios-in
terdisciplinarios-3.pdf

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